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Full text of "Comedias de Don Pedro Calderon de la Barca"

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■  A         / 


K  y  o 


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I 


^ 


:\ 

COMEDIAS  ESCOGIDAS 

|  DE 

i    DON  PEDRO  CALDERÓN 

DE  LA  BARCA. 

TOMO  SepUfíDO;    -.;.-.. 


CON  LICENCIA. 
Madrid,  Imprenta  de  Outmúa  r  CóM*A$XJk 


;.»*;;>.,•.       \c 


jx,/  \  '■?  w  > 


•Li? ^VitZ-V*  <.---;.  J>  -m  v  V-v/vynl  4V.V.'o,' 


t 


EL  ASTRÓLOGO  FINGIDO. 


-fi 


PERSONAS. 


ÍXwi  Juan. 
Don  Antonio. 
Don  Diego. 
Don  Carlos. 
Leonardo  ,  viejo. 
Morón. 
Doña  Marta. 
Doña  Piolante. 

.ooiteWíí.iríu^  •_» ; ;* . . .   ."  t  i  ~i 

Quite  ría ,  criada. 
Ota/les  ,  escudero. 

'Xa  escena  es  en  MajUrid. 


ACTO  PRIMERO, 

ESCENA  PBIMEá'A.'      •' 


SAÍÁ'S'é'Í^SA    DE   llOailBO.' 

tíoHa  Mária  y  Beatriz. 

>/    t Doña  Mari*.    ¡*.  .     A 
¿  Di  me  /»y  •  pas¿»ta  n  gatáirf  • '"  '• * 

,  ".    ñtatritx  .  o.'.  p.fn  .  o 

A  to4o:£o»nto  miraba',"    ,,,r'    f 
á  un  misino  tiempo  causa$a;  •  *:í 
afnon*>.y  énv*dtá*4lon  JutrnMt      'i' 
Llevaba  un  «vertido  airoso  ¿-  » •  ;S 
sin  guainioioo  ,  ni  bordado  ;      I 
y  con  lo  lúe n  ¿asonado, 
no  hizo,folfca  lo- costosa. - 
Mucbaa  (plumas»  que  llevadas  "* 
del  viento*,  nwnparéci*  M  '    "• 
que  volarrdoii  Joan  qutffe  wí  !•  ;  ~ 
Botas  f  y í4*puelí|i  icWí^dá'sJ- 
Con  esto,  y  con  su 'buen  taifcv  'f 
sin  quitar  drtu  rentan  a 
la  vistaq  taqué*  ta  maftahu  1  ¡ 
dos  veces <p*ad  Jan caite;  ,      - .  » •  ^ 
*  r  Dofi* Haría* >  i«     *  i¿  b 
Por  nV'plndnra  qne  baa  hébbo)  * 
Beatriz,  tomaleaüe  diaftiattte.  i** 

-JieatüU. 
Justo  será  -que me  espante 
de  ver  agriado  en  tu  pecbv;  •  ■'»  •, 
traWntuo  cosas  de  amor.    • ' 


sino  son  albricies  yí 

de  ver  que  don  Juan  se  va; 

DoñaMari4.\  . 
Diferente  es  el  rigor 
que  siento»  ;     \-, 

Beatriz. 

Pues  ta  hejrmojnre* 
porque  amor  se  satisfaga 
tan  bien  las  pinturas  paga* 
escúchame  otra  pintura. 
Al  tiempo  «pie  y  a. dejaba 
la  calfedonJuan,  en.trá  ' 
en  ella  don  Diego*  y  yo  f 
como  en  Ja  ventana-  tetaba, 
le  vi.  en  un  ca|»tiotal9     •♦  • 
que  informado  de  di  el  viento-*  t 
dejaba,  ser  elemento  f 
por;ss£  tan  bello,  animal. 
Con  las  nianos  oonfirsnaba 
el  freno  tanta  enmonta  , 
qu*<ei#owicoa  la  boca  tacna»    ' 
á  cuyo  compás  dancabaw  >  • 
¡Si  le  yieiraa  *  que  brioso, 
sacó  el  br*ifcí  ¡qué  .gafa*  . 

.  Dato*  Muría 
HajbleOM»  de  dan  Juan,  - 
y  deja  aqnase  enfadoso,   i 
¿  Si  se  había  partido  ya  , 
ByAfal  ¿Sabes  dendfc¿qé«  .    • 
¿si  xoadivi;  presta?!    :   •  . .  n 
.  Bsatíri*. 

<  <  ;  No  «¿3  •     • 

¿  mas,  qué  caidndo  te  des- 
que se  vaya >  si  ha  do¿>  a&e«v    .  j 


jcftorá,  qoe  te  fta  *#?»!««« 

y  que  solo  ha  nmrécido 
despreuot  V  y  drtttag»***?    ..;-». 
Vayase,  y  íim  ttasvefos. 
]K>dr4  báctrlbs  rearstentia.,     r.,., 
qoe  es  muerte  4e  iftntfrr  1*  ausencia » 
adonde  ¿afronto»  h»Jos. 

•     Bufia  ñfárú».  .,r 

yétame  que  Jos  «enojos  ^ 
qoe  hasta  inoro  fee  ¿asístalo.*     * 
no  los  hayas  «soawúftdo 
en  el  Manto  de»  mis  ojo*.      •     »  '" . 
}Ay  Bea^ffer*  amiga  mía  2 
no  sé  iftfno  btfbiars,  no  *€ 
como  decirte  qoe  »m¿.  f 

á  don  Joan  ,  desde  aqoel  di*        .4 
qoe  conocí  su  afición  9  /  . 

aonqoé  constante  ven,d  ,.  > 

mi  pepa,  porque  temí  \ 

la  opinión  de  mi  opinión  % 
qne  «n  hombre  oon  solo  habla*  # 
es  mas ,  (]  qué  feotl  deshonra !  )f 
bastante  á  quitar  La  i  honra, 
qoe  mochos*  n».  pueden  dar» 
¡Mas  qué  designa*' forlón*  ., 
qne  ana  lengón  pbngfr  mengua* .: 
en  mil  honro  s,  y  total  lenguas   . 
nú  poedah  4araoia  ortnl  ¡¿ 

Yo  temerosa  de  ver 
pdblicd  mí  úesubrtor  v ,        ,.    .. .  '? 
pose  silencio  en  mt  amor  , 
mas  fue  silencio  en  mofar; 
poes  hoy  la  ausencia  provoca 
á  qoe  salgan  mis  enojos 
en  lágrimas  á  los  ojo*» 


í 


y  en  ansfi*»*  la  Jfoca.   .  *  -•  m 
»    Beatriz.  "      X 

Si  en  aas««€¡a«.:t*<declarasf  «•> 
lo  mismo  te  sodechcra  <  ,  ,  / 
con  don  Diego  f-.si  ¡él  se  f  iferm  j 
"  ¡Dofia  Mafia  .  .  •  -p 
Mal  en  mi  daS  ai*  para  a,  ,:>.!>* 
pues  cnaitto  UP^telcnaioñ 
de  don  Joan  mi  pecha  enciende  J 


tant*4on  Diego  <ia ofende*' 

«-„ 

At*á**z-  . 

r 

*  En  tu  amor  y  en  til  elección 

'  >  y 

dos  novedades  me  ofreces:'* 

querer  al  de  mertd*  fama,    ■ 

v*\ 

x  hacienda  ,  y  oabieaa  *  danta  • 

.io» 

1  de  comedias  me  parece»;  ' 

'*      * 

que  toda  mi  «vid»'  vi 

-,M                N 

en  ellas  aborrecida*  : 

fi"í 

al  rico  ,  y  favorecido  : 

i«r 

al  povbr* ,  dotute  iadvérti 

»    fl 

$tT  ti  o  rabie  impropiedad      . 

..r.  ^ 

pues  si  las  comedia»  son 

»  «o 

una  viva  imitación  v 

MÍ 

que  reí  rata  la  verdad- 

'     u 

de  lo  «mismo  «Job  «acede  s    * 

"'i 

á  «tfn  pobre  verle  estimar  9    - 

.   cry 

¿como  se  po«de  imitar  , 

li*> 

si  ya  sucede»  nb  puede  í 

£*7¿  Otaftt*; 

Otuñex. 

t  / 

Don  Juan  detAfedrano  pide 

'-Í 

licencia»  para  besarte 

MT 

las  roanos*.  ■■•  -  " 

f 

«*••          BeulrU.    • 

r 

•  Y  visite  á  hablarte 

.  »; 

anlcs  de  itse*;^  <   .  .. 

11  > 

¿Quien  lo  inopia  f      (O 

EStíENA  ft.  ■* 

Doña  María  4  Beatriz  y  don  Juan? 

«••••'•  JDoh  Juan.  > 

Con  licencia  me -atreví 
á  entrar  donde  ardiendo  están   " 
dof  sdfef.   :-  { " !  *  .  * 

JDoffcr  M*rHa. 
«*-'•'    ¿  Señor  do*  Juan  ,    * 
espuelas,  y  ftttímas  ? 

{'--       >  Don  Juan.  l 

'•'      -     «f 
que  no  me  bastó  H*var  * 

es^aélas  para  correr ;  '       "; 

y  así,  hube  menester 
las  «pluma»  p'afa  Votar: 
qfte  *]aieft  ausentarse  fnteritá  ^ 
del  sot,  bien  fes' que^^réscrniá»;" 
que  ha  de  Valerse1  declamas.  *  * 
i  Dota  María.  *  l;:  ;  ! 
¿Qué  nandjrtrM  *  '       ' 

4    Átin  ¡fti&ñ.  '■'  * 

'^^(Efccdchá  atenta.1 
Sí  á  quien  ¿¿'titfJéiUá  ,  ó  se  mntre9 
«Hriencía  ae'-WpéVJitaf  '   '        '  *  < 
de.  hablar  ^b+^áfcn  té,  y  mtiefto, 
licencia  don^ótfn4 W  ^d*r¿ 
*   inoerfiJ  i  idr'iúé  vfvé'  ausente" •'  * 
de  *f ;J  ausewte',  'porqfce  vive  : '  ^n 
muerto  eir  tú  gracia  ;  que  jutítáfc 


(i)     Fase  Otoñe*? 


10 


tu  mi  víáp  •,  y  muerta  asisten; 
En  fin  ,  por  di  ti  as  a  vea 
que  be  de  hablarte,  y  bas  de  oirméV 
mis  libertad]»  .perdone* 
y  mis  disculpas  admite.  • 

$ne  te  quise  habrá  áot  años,     '** 
(  sí  me  muero  ,  no  te  admires  f 
^pues  fue*  mi  culpa,  el  quererte  t  ; 
que  confiese  que  te  quise  ) 
tantos  ba  que  á  tus  dos  soles  .  ;> 
«las  de  cera  previnef 
mas  si  á  tuvojeye  s#  hielan  t 
si  á  tus  rayos  se  derriten  ¿    ,  .. , 
¿  que  mucho  que,  tanto  fuego 
abrasado  me  derribe 
¿Jas  ondas, de  mi  Ututo  ..  , 

que  un  mar  de  lagrimas  finge?.. 
Dos  papeles  te  escribí, 
bien  sabes  tú  cuan  humildes,     t 
porque ,  á  no  serlo  ,  np  fueras  , 
hijos  de  un.  amor  tan  firme* 
Engañada  loa  tomaste  i  „ 
pero  tú  ,  que  iguales  mides 
ingratitud ,  y  belleza  9 
callando  me  respondiste» 
Ün  dia  que  á  tu.  jardín 
'OT4*  **wvidq  seguirle,  -> 

y  entrar  en  $,ft  porque  el  cajnft) 
„  *tr«i(¡m¡eMo*r  j^rfnüe ¡r 
entre  sai  flores  te  vi  .  ., 

con  ial  belleza »  que  hiciste  ,,., 
competencia  á  ¿u  hermosura,  .  , 
y  .ventaja  á  *us  matices*  , 

Corrida  naturaleza 
da  sus  pinceles  sutiles f 


ii 


¡perdió*  la  esperanee  *  hiendo 
que,  imitarse  era  irapoüble  , 
y  dijo  ?  pues  ya  no  puedo 
excederme ,  «o  me  estimen  * 
que  ya  no  tengo  que  hacer  ,       *' 
después  que  eje  asombro  hice* 
Un  jazmín  tu  niao  herniosa    / 
robaba ,  y  él  apacible 
rindió  sus  flores  al  suela-, 
porque  tas  plantas  las  .pisen  t  '• 
y  dijo  ,  viendo  que  oíanos 
blancura ,  y  olor  compiten  , 
quita  á  mis  hojas  Jao  ¡flores  f 
y  tus  manos  fio  me  quito»}       ■•* 
pues  es  lo  mismo  tener 
tus  manos,  «Jué  mis  jaasninca»   ' 
Aquí  me  acuerdo ,  que  yo 
llegue;  turbado  i  decirte) 
que  estimases  mia  déseos  t 
no  sé  bien  que  más  te  dige 
de  un  firme  amor ,  pero  sé 
lo  que'  tii  me  respondiste  , 
que  fue ,  qoe  «ronca  te  viera. 
¡  Brava  respuesta  i  |  Terrible 
sentencia !  j  Ingrato  precepto!    • 
¡Cruei  rigor  !  {'Hado  itrfélioi ! 
T  viendo  al  fin»  éjue  eenn  vann 
q«A  un  kltsdicbedpl  porfié 
contra  *n  estrella:  f  qncea  biek 
queí  te  ofcedefcoa  ,  •  y  me  privo 
de  verte ,  pues  tu  lo  (quieres?  • 
porgue  «n  mis  destficoM  míreo 
el  est*e*to  de  obetttarcia  '  : 

á  qoejkga  un  amar  irme  5 
magaajsi  4  Janato  weffartp 


tí 


2  áenrir  él'  gran  Friip*  f  f 

que  el  cielo  mil  «ios  guarde  ¿  . • .» 
donde  mi  valor  imite  '•  '*  % 

de  mis  nobles  ascendiente» 
tantas  victorias  insigne».  -.«* 

Bien  $4  que  imposible  es 
vivir  sin.  tí ,  mas  previne 
un  imposible  de  amor 
vencer. con  otro  imposible.         / 
Quédate -coi*  Dios,  y  al  cielo 
le  ruego,' que  apenas  pise» 
de  FJandés  *a»  tierra  ,  cuando 
la  primer  bala  f  que  tira 
el  enemigo,  me  acierte;  •  -     ••     ' 
ai  quien  desdiebado  vive  ••"♦ 
puede  morir,  y  hay  algún*     '  • 
muerte  para  el  infelice.  ' 

Mas  yo  te  doy  mi  palabra  9      '>  l 
que  si  el  ciclo  me  permite'  •* 

dicha  \  y  por  ella  meresco* 
algún  lagar,  que  acredite    •-•       » 
la  sangre' que  me  acompaña* 
que. ha  de  ser  para  servirte. 
T  si -en i  tanto ,  nuevo  dueño     '  ; 
¿ata*  rece- mas  felice, 
ruego  al  cielo  ,  que  le  gotea.»  ;  •: 
por  tantos  aillos  ,  que  imites/   f 
la  edad  del  sol  *  sin  que4eng**;< 
saloi  un  >in«Unta>  de  eclipses . '  \    » 
Tú  le  quieras  ,/y.  'él  te  adore)-  a» 
para  que. en  Iba  dos  envidie- .*   >f> 
enrins  gustos  lo.  que  quiero^»      ( 
y  en  los  «nyoéilo.  que  quise    *  !♦ 
Y  cuando- mas  ¿fácilmente     -p  « 
de  aqnea^a verdad  te^lvkkaf  :/t 


habrá  quieta  mas  té  roertfcca,    '■ 
pero  no  qaie.n  mas  te  esticue.     • 
Con  esto  *  señora  ,  á  Dios  9 
que  mi  libertad  no  pide  v  ..» 

por  saber  que  ya  I  a.  tiene, 
licencia  para  partirse. 
Doña  Marta. 
Don  «Juan  ,  espera  ,,  detente  f      i 
mientras  procuro  romper  ; 

las  prisiones  á  un  secreto  v 
4qtiíKiAautos  afios  guardé  ^ 
pero  es  tanta  la  vejígüenaa 
que  tengo ,  que  al  pardeer   . 
un  laso  la  lengua  o  p  rióte»   .       > 
Y  !*  gavganta  un  cordel. 
Muda  la  voz»  torpe *l  Ubi*, 
temo*  y  dudo ;  ^¿  mas  pon  qué     •>' 
temo  y  dudo,  si  ai.fi «.¡somos  : 
él  setíreto,  y  yo  uipgfei»?. : 
¡Ay  de  miique  no  sé  coma     ;  t 
empiece  á  hablarte  ¡j  HA«jf  <  . 
como  decir  quelite  quise  ,*.... 
don  Juan,  que  te , quise, tyeaV 
desde  el  diasque. eu (sapada  „  •.->, ■* 
tomé  cWprame*a.Bfepet.  .  ,1 -.  ,.     í 
¿Mas  qué  viiod^invsuáinPf  :■;.;.    . 
Iq  que;  aiaé  ,  sufra  »  y  «a(U^     k  i : 
ai  yo  en  m>  t>"*P¡<W;4*fceq*.,  .    > 
no  tu^nif rasque  Hftftceajftots  «.,  t„-> 
Mas  hoy  que>*noibefjümLi|fceohft 
ini»ar*1ri'tfc#VjOfta;e6*tjMi;  si  my.r. 
que  mientras  ro*»  epAinufe»  ^o 
rebien  la /coa  jtías-ipqdtr  «jifp  ».**  i* 
pwMbtJfcifft* X  í^rlWW'frjf* :   -  : 
aale,  por  <iue*y  *»<*,**  t¿*ini>  u.--u 


í% 


A 


tft 


de  mi  ingratitud  quejoso» 

ni  dndoso  de  mi  fe. 

No  fue  d  *lme  tan  ingrata 

como  la  apariencia  fue  , 

que  en  la  amor  he  parecido , 

pero  no  he  sido  cruel. 

De  mi  silencio  la  cansa 

ba  sido,  don  Joan,  temer  , 

(perdóname  cate  temor, 

ai  es  que  te  ofendí  con  él ) 

que  tengo  honor»  que; soy  mobkf 

y  qué  ya  la  opinión  es 

tan  dincit  de  ganar, 

cuanto  fácil  de  perder  | 

y  no  hay  desdicha  mayor  * 

que  .rendir  una  mugar 

el  alto  honor  que  la  ilustrar 

á  la  lengua  descortés ; 

no  de  aquel  que  ha  merecido 

su  grada,  sino  de  aquel 

amigo  poco*  leal  9 

y  criado  nada  fiel* 

En  fin,  «Me  recelar, 

este  dudar,  y  temer  $ 

biso  en  mi  cobarde  amor 

aquel  pasado-  desden. 

Mas  ya  q«e  rompió  «1  silencio  r 

comoipa4ab*a  me  des, 

como  noble,  que  ni'  amigo**        * 

B¡  criada  ba  de  saber 

aqueste  amor  f  paaa-  hablarnos  ^ 

ocastoéts'misaaté, 

si  es  que  la  partida  taya 

puede**  don  Juan  ,  sospondar, 

Será  anisar  st«ff atar i% 


¡le  este  amor  BVatrie,  de  quita' 
fio  lo  que  de  roí  misma, 
porque  su  siten  ció  sé: 
y  sino ,  viéndote  ir, 
ya  por  consuelo  tendré 
haberte  dicho  mi  amor  f 
porque  te  vayas  con '4. 
T  nO  me  agradezcas ,  no, 
don  Joan ,  él  quererte  bien  t 
porque  soto  ci  declararme 
me  tienes  que  agradecer. 

Don  Juan. 
Déjame  que  agradecida, 
el  alma  ponga  á  tus  pies, 
que  responda  cotí  callar, 
porque  empiece  é  obedecer. 
T  plegué  á  Dios  que  con  esU 
acero ,  que  al  lado  ves  , 
y  en  cuya  crttí  jtorrgo  ahfra 
la  mano ,  muerte  me  dé 
á  traición  el  mas  amigo, 
si  quebrantare  la  ley 
del  secreto ,  y  ofendiere 
de  tu  amor  la  firme  fe». 
Las  espuelas ,  y  lar  pluma* 
dejo,  que  fueran  ,  diré 
las  espuelas  pératfr  ; 
las  plomas  par*  Voi<ven, 
Mas  con'  to¿¿,  por  cerra* 
Taboca  áf  Wlgo?  croe*, 
que  de  toan'  piensa*  mal» 
y  de  hadaba  mVn  ,•  < 

en  la' cásá  de  Oír  amigo*       '  ,- 
con  gran  secreto  estare* 
unos  diar;Íae$o  ptof&» 


1% 


16 


¿.enfermedad  *»»T¿»      .    i        . 
por  dar  color  á  ia  vuelta* 
si  mi  dicha  .puede  hacer , 
que  hoy  se  acuerden  en  Madrid; 
de  quien  ae  ha  partido  ayer. 

Dona  María* 
Pues  con.aquesa  palabra 
»  á  babiarmeesta  noche  ven ,  ,    ; 
y  sin  pararte  en  la -calle  y 
entra  en  el  portal ,.  que  en  él 
Beatriz  estará  advertida  , 
don  Juan  ,  de  lo  que  ha*  .de  hacer : 
no  repárenlos  vecinos  j 

de  verte-  en  la.  calle  f  qne  ,  t 

es  un  mal  intencionado  , 

de  toda' la  vida  juca,  '      .   ', 

lodoso,  saben,;  ¿  qué  mucho  j  ¿ 
ai  hay  vecino  q»e;Por  ver, 
lo  que  pasa,  «n  una  noche  r  ;,  , 
no  se  acuesta  en. todo  uu  mes?; 
£n  la  reja  estará  uu  lienao;  ^ 
esta  la  seña  ha  de  *er  f  •  .  r*  • 
si  hay  ocas,ion}  pfiro  advierte  u 
que  vengas  sola  ,\  z\   .       . 

»   :     Donjuán*  .    K 

,  Se#-  ^ . 
el  ave  que  rom  ge  el  viento  f       ^ 
con  una  $ie<ka  en. un  pie,  .      . 

y  otra**»  «1. p?^»4 advirtiendo -., 
que  soy  vJgUauierty  p*h  -    M  rj*** 

¿De  este  co^cer tado.a mor ,  .      r 
díf  Beatnia,  «^  ,U.  parece  $  . 

(Jue  justMUftli^  ♦$»?«*    i  € „ .. . , 


17 
tanta  fineza  »  y  favor 
don  Juan  >  que  es  noble,  y  discreto , 
como  galán.  * 

Doña  María. 

Tú  has  de  ser,        ■  ^ 
Beatriz,  la  que  has  detener 
t  la  llave  de  este  secreto : 

mi  vida  f  y  alma  te  fio  * 
bien  sé  que  segura  quedo* 

litatriz. 
Desecha  y  señora ,  el  miedo  » 
que  ofendes  el  honor  mió.  t  v 

ESCENA  III. 
Doña  María ,  Beatriz ,  don  Diego  y  Aforan. 
'  Morón, 
¿A  qué  llegas?  4 qué  procura 
tu  amor?  ¿qué  intentas? 
Don  Diego. 
•'.■■•'.  '    Intento 

saber  ¿i  al  atrevimiento'  - 
se  le  sigue  fa  ventura. '**  ' '  » ^ 
Perdóneme  tu  nertnosura , 
si  atrevido >  y  descortés    "  -*;      i 
¡tongo  en  tu  casa  los  pies';' 
que  yo  en  esta  contingenta'    * 
no  quise  pedir  licencia  y;  •'  <  "     ' 
aporque  tú  no  me  la  des. 

Doña  Ufaría.    «  '         J 
El  haberos  escuchado  ,      '■''  '     ' 
señor  don  Diego ,  no  ha  sido 
por  soto4  haberos  oido,    -"'  *      i 
sino  por  haber  pensado 
que  responderos ,  y  he  estado 
dudosa  ¿mirando  esta  • 

2       * 


J 


18 


fcw 


osadía  tan  molesta; 
porque  como  no  temia 
tal  libertad  ,  *no  tenia 
prevenida  la  respuesta. 
Decisme  que  en  mis  rigores 
mayor  gusto ,  y  gloria,  bailáis  ; 
.  y  porque  no  le  tengáis, 
estoy  por  daros  favores* 
Si  los  desprecio*  mayores 
hoy  son  los  mas  lisonjeros , 
dejaré  de  aborreceros ; 
pues  solo  por  no  agradaros  , 
no  os  déjate",  por  dejaros  t 
y  os  querré  f  por  no  quereros, 

ESCENA  IV- 
DicftQS,  mtnoé  doña  María* 

Morón* 
¿  Esto  lufres  ?  ¡  Vive  Cristo  , 
señor  9  que  no  la  sufriera  9 
si  la  Diosa  Venas  fuera  1 

Don  f>iego* 
] Qué  mal  mi  pena  resisto! 
I  Has  visto ,  Moi'on  ,  has  visto 
la  ciega  resolución 
de  una,  activa  condición  f 

Beatriz. 
Harto  hago  yo  de  mí  parte, 
mas  es  imposible  amarte.  ■ 

lt;    .        Don  Diegg. 
¿  No  sabré  yo  la  ocasión  ?# 

Beatriz.       , 
El  ^haber  así  nacido 
„  soberbia  ,  y  desvanecida. 


1* 

'<  Don  Diego* 
Aunque  me  cueste  la  vida ,    ' 
pondré  mi  amor  en  olvido : 
tú,  Beatria  ,  une  al  fin  has  «ida 
á  quien  ne  debido  mas  f 
toma  esta;cad?<ia. 

Beatriz.  >$ 

¿Das 
las  prisiones  ?  \  En  qué\  aprieto  ' 
se  va  poniendo  eJ  secreto  f 
como  vé  que  libre  estás ! 

'  Morón* 
Una  república  había 
que  al  médico  no  pagaba  9 
señor,  hasta  que  sanaba  > 

el  enfermo  $  y  si  moría  »       •        » 
tiempo,  y  cuidado  perdía: 
y  esta  ley ,  tan  bwn  fundada , 
á  nuestro  intento  aplicada, 
digo,  que  de  amor  que  muere, 
el  alcahuete  no  espere 
tener  derechos  en  nada. 
¿La  cadena  la  das  ? 
Don  Diego» 
Sí. 
Beatriz. 
Quitándote  las  prisiones, 
en  el  alma  me  las  pones  ; 
y  fia  9  seuor,  de  mí. 

Don  Diego*  ' 

Ya  no  es  tiempo,  porque  aquí 
se  despide  mi  mudanza 
de  una  loca  confianza  ; 
.á  Dios ,  malogrado  empleo, 
necio  amor ,  loco  deseo  v 
* 


A 


20 


v 


que  hoy  morís  con  la  esperanza; 

ESCENA  V. 

Beatriz  y  Uforott, 

¿Yo  qué  tengo  de  decir? 
I  despediréme  también  ? 

Beatriz. 
Si.  ya  no  me  quiere*  hknj 
bien  te  puedes  despedir. 

Morón*  K 

1to  tras  irii  amo  he  de  ir f 
cuando  él  amare  amaré» 
que  im  criado  siempre  fué  , 
en  la  tabla  de  amor  f    •  ! 
contrapeso  d«l. señor*  > 
*A  Dios.. 

f ,  Beatriz» 

Bien  pagas  la  fe, 
que  me  debes. ... 

Morón. 

§¡  quisieras  *. 
Beatriz  ,  que  asistiera  á  Verte  ¿  , 
fu  hubieras  becho<d¿\suerte 
que  este  imposible  vencieras  , 
entonces  tú  me  t atieras 
aquí  de, noche,  y  de  dit*    .,        •% 
.  Beatri*.    ,.,   ,  » 

No  quiso  la  suerte  mía,/, 
porque  á  mi  desdicha  escede,, 

i,                 Morón. 
Yo  sé  que  una  moza  puede 
á  veces  mas  que  una  tiaj 
yo  se  4a*  ni  una  razón    , 
digiste.   ,  :  „ 


Beatriz. 
Yo^st  qti«  sí  c  ! 
y  aun  tú  lo  vieras  si  aqttf 
te  dígerW&asion     *   !  '''  *•  n 
que  estoj-Jba  su  prehensión  f 
pero ,  por  ser  fuerza,  cajlo. 

Puesto  lió  h¿' Üe  proc* AM©  >'  *  • 

'    «jwifr  por  decirlo  mueres  i»'   •  *  -•• 

tan  libera] ',  c|oé  atm  no'  qm'eres 

que'nJe'cue*te*elpregun*allo.  •  ' 

t '  i  Mas*  di»,  qué- tatusa  la  oMiga;? 

■*••••-"     Btmrtz.    •»  r" 

Mi  señor  erf'fel «que viene: 

basta  decir  qúé'la  tíeifé  ;*'  'r    •'   »* 

sin  que  la  causa  te  diga. 

•'^  *   v  Mm*on>     "   *  .    ..   •#»"; 
¿  Luego  en  vano  es  q*r  prosiga 
aqueste  fn*ettt<^ 

Beatriz.     >'■ 
•  -:    ••  Jamas  •>,..!•! 

de  ni  boca  lo  sabrás.    "   •  ><• 

■Morvm  *  v  1 

Pues  de  tí  lo*  he  de  saber.  y 

¿No  sirves  ,  'y  ere»  mugen  ?  •     i> 

Beatrit,,  -  ¿<  .' •    . 

Sí.  •'   •  -»•    V  , '■    ..'bb:?  , 

Móróri.   •  •>  <";'1  -•• 
<      '  Pues  ff  tóe  lo  dtafo, 

■«;»  I »   yvti  i  • 

,  0  inrv/:    •  r-     *,;r         •  -jí.<:    .  f,«'«'J    ,;  , 
«  •  '  »''<'    *  *  ■•'  »     •  '»    i  -»;  >   (••»        ■  j  I   i  i 

t  -  ^. ..;-.. .ii   *  .L  í:   :-a  tí  i'tjir.   .'    .i  t 


*c 


J 


S3 


ESCEÑA  VI,  v 

Decoracioh  ^*  c^he; 

Don  Juan  ¡y  don  Cario*  en  trage  de  noche* 

Don  Juan. 
Importa, en:  fia  para  un.  .honroso  efecto 
el  quedarme»  .'Madri4m  con  tal  secreto, 
que  ai  á  va*  no  os  bailara  ,. 
por  no  fiarme  de  otrp,,  ,no  querrá. 
La  vosNhajde  correr  queja  he  partido  , 
y  en  vuestra  casa  quedaré*  escondido* 

..  Don  Cortos» 
4 Son  zelos  de  Violante?.    ., 

.  .  Don  Juan*    ; 
No,  Carlos,  mas  altivo ,  y  arrogante 
sube  roí  pensamiento  ;..,.'., 
de  Violante,  ni  amor!f,nj  iek>«  siento : 
basta  decir ,  cuando  de  vos  me  fio » 
don  Carlos ,  que,  le  importa  al  honor  mió 
esta  resolución. 

Don  Caries. 

Yo  onagradeaco 
la  confianza  i.f.  desde  aquí  os  ofrezco 
con  pecho  nuble  ,  y  alma  agradecida 
mi  casa  ,  hacienda  9  espada  ,  pecho ,  f  vida  , 
ein  saber  que  os  obliga  i 
que  un  amigo  ku>!  q<M¿er,a  q«e  TO*  diga  9 
sino  lo  que  él  quisiere. 

Don  Juan* 
Ahora  falta ,  porque  no  me  espere  , 
que  entréis  en  casa  de  Violante  bella  « 
y  le  digáis  que  yo  me  fui  sin  vella  ; 
porque  viendo  la  prisa  del  partirme  9 


33 

*1ma  no  tuve  para  despedirme; 
que  yo  la  escribiré ;  so  casa  es  esta  , 
entra*}  %  qoe  por  ir  solo ,  he  de  dejaros  i 

Don  Carlos* 
Dadme  licencia  para  acompañaros. 

Don  Juan% 
Impórtame  el  ir  solo. 

Don  Carlos. 

Pues  no  quiero 
porfiaros»      - 

Don  Juan*         " 
A  Dios. 

ESCENA  VIL 
Don  Carlos. 

Jamas  espero 
entender  tan  notables  confusiones : 
todo  ea  discursos,  é  imaginaciones; 
ai  bien  no  es  menos  la  memoria  mía, 
ocupando  el  amor,  de  una  porfía 
rigurosa  9  y  cruel   ¿Bella  Violante, , 
cuando  seré  tu  declarado  amante  ? 
Cuando  pensé  que  ya  don  Juan  me  daba; 
ocasión  con  su  ausencia ,  y  que  esperaba 
á  declararme ,  mi  fortuna  escasa 
le  tiene  ausente  dentro  de  mi  casa  ; 
mas  ella  me  dirá;,  si  á  hablarla  llego  * 
lo  que  tengo  de  hacer ,  que  amor  ea  ciego. 


J 


24 


ESCENA  VIII. 

SAIA  SH  CJfSA  DB  ViOtAKTE. 

Don  ¿arlos  ,  doña  Violante  y  Quittriál 

Don  Carlos. 
Menos  que  con  uu  regado 
de  don  Juan,  no  me  atreviera 
á  haber  llegado  hasta  aquí 
antes.de  pedir  licencia. 
Doña  Piolante. 
Vos  la  tenéis  para  entrar  9 
señor  don  Carlos  ,  sin  ella 
,  en  esta  casa :  ¿  inas  dónde 
queda  don  Joan? 

Don  Carlos. 

I  Donde  queda 
preguntáis  ?  ¿á  dónde  va? 

Dona  Piolante. 
\  Ay  de  mí !  ¿  luego  ya  es  cierta 
su  .partida?  > 

Don  Carlos. 
Aquesta,  tarde 
■  me  mandó  que  yo  viniera 
á  despedirle  de  vos-; 
que  fue  tan  grande  la  priesa 
de  partirse ,  que  no  tuvo 
lugar.,  aunque  no  es  t  aquesta  •  ; 
la  mayor  disculpa  suya; 
pues  no  veros  en  su  ausencia  , 
fué  por  no  ver  advertido 
la  gloria  de  quien  se  ausenta  t 
y  al  despedirse  de  vos 
cerrar  los  ojos  es  fuerza , 


es 


q«  Ho  os  viera  ,'si  os  dejara, 
ó  no  os  dejara  y  si  os  viera. 

Doria  Piolante, 
¿Es  posible  que  tu  Viese  \ 

tan  mala  correspondencia 
don  Juan  ,  q««  aun  palabras  colas 
no  quiso  que  le  debiera  ? 
Si  esto  hiciera  una  muger 
con  un  hombre,  ¿qué  dijera,    < 
sino  que  era  fácil ,  vana  , 
'mudable,  inconstante,  y  necia? 
I  Pues  qué  hemos  de  ser  nosotras  , 
si  ellos  mismos  nos  enseñan  ? 
Siempre  la  ocasión  es  suya  , 
y  siempre  la  colpa  es  nuestra.  i 
Perdonadme  que  hable  así. 

Don  Carlos.  ' 

Son  tan  justas  vuestras  quejas, 
que  ellas  propias  os  disculpan  , ' 
cuando  pensáis  que  os  condenan. 
i  Qué  haya  hombre  tan  descortés , 
ó  tan  necio,  qué  se  atreva        *» 
á  hacer  agravio  á  este  amor,     ' 
J  desprecio  á  esta  belleza  ? 
Vive  Dios ,  que  si  don  Jnati        *     ' 
no  fuera  mi  amigo,  fuera  * 

donde  está  ,  solo  i  decirle , 
Violante,  dé  la  manera  ':  ' 

que  os  había  de  estimar?  ' 

;nas  creed  ,-  que  en  esta  áuseticrá 
quedo  yo  para  serviros  ,  '  ' 
que  en  mí  la  amistades  deudo  y 
y  mirad  que  me  mandáis. 

Doria  Piolante. 
Que  os  dejéis  ver ,  porgue  ten  ja 


S6 


can  quien  hablar  de  don  J«uut« 

Don  Carlos.       *     - 
To  agradezco  la  licencia  , 
y  por  serviros  |  la  acepto. 
¿  Poderoso  amor  ,  qué  intentas  f 
Don  Joan  ausente  es  mi  amigo  « 
Violante  presente  es  bella: 
no  sé  que  han  de  hacer  de  mi 
la  amistad ,  y  U  belleza. 

ESCENA  IX. 
Dona  Piolante  y  Quiteria. 

Doña  Piolante. 
I  Quiteria ,  qué  dices  de  esto  f 

Quiteña. 
Que  me  huelgo  de  qne  veas 
de  tu  amor  el  desengaño  9 
y  del  suyo  la  esperiencia. 
No  tomaste  mis  consejos  9 
que  á  fé  que  ahora  tuvieras 
mas  oro  v  y  menos  amor  * 
mas  joyas  ,  y .  menos  quejas. 
I  Qué  vá  que  estás  tan  perdida  j 
que  te  vas  de  tierra  en  tierra 
como  mnger  desdichada  ? 

Doña  Piolante: 
Aquí  has  de  ver  mi  firmeza  , 
que  ha  de  hacer  qne  yo  le  espere 
libre,  y  soya,. basta  qne  vuelva  j 
porque  halle  el  ejemplo  en  mi 
la  lealtad  9  y  la  nobleza. 


ESCENA  X. 

DBCO&ACIOH  DB  CALLK. 

2)o»  Jum  y  Beatriz  á  la  puerta. 

'Beatriz. 
Sal  presto ,  que  ya  amanece  , 
y  no  hay  nadie  que  te  vea. 

Don  Juan. 
¡  Qué  tan  velos ,  Baatria;  ,  sea 
el  tiempo !  no  *ne  parece 
que  ha  un  hora  que  anocheció  j 
y  presumo  que  envidioso 
de  mi  gloria  el  sol  hermoso  t 
mas  temprano  .descubrió, 
entre  nubes  de  oro \  y  grana, 
los  reflejos  f  ó  quien  dora 

sus  lágrima*  **  a,I^or*• 
Beatriz. 

I  Requiebros  á  1*  mañana  ? 
,  Vei#  presto. 

J)on  Juan, 

l  Ay  soerte  mi*  ! 
¿qnién  creeirá  en  tanta  ventora* 
qoe  es  la  noche  mas  oscura 
para  mí  el  mas  claro  dia  ?         Voz: 

Beatriz. 
Ved  lo  que  *n  el  mundo  pasa , 
y  que  es  honor  ;  p*r  no  bablalle 
con  escándalo  en  la  calle-, 
le  entramos  dentro  de  casa. 
Cuando  miro  estas  honradas, 
pienso  que  en  su*  fantasías 
vuelven  las  caballeras 


Á 


23 


de  las  historias  pasadas. 
Dama,  que  tus  vanidades 
te  hicieron  impertinente, 
ama  al  uso  de  la  gente , 
deja  singularidades. 

ESCENA  XI. 

Beatriz  M  don  Diego  y  Morón* 

Morón. 
Aquesto  Beati'i*  nie  dijo.  •      ••    • 

Don  Diego. 
¿Qué  (Tayas  de  darme  ocastoa «> 
con  tas  razones ,  Morón  ?  • 

Varjos  efectos  colijo.  .:, 

¿No  lo  pudieras  saber  ? 

.   Morón., 
Si  su  amo  no  viniera, 
pienso  que  roe  Iq  dijera , 
que  Beatriz  es  .muy.  muger , 
y  nada  me  negará ¿  .,..'; 

porque  es  ley  en  las  mu  genes.,    •' 
contarás  cuanto  supieres. 

Don  Diego. 
<A  la  puerta  sujya  esté.        ...   ;>  . 
üloron.    .  '..* 

¿  Tan  de.  mañana  ?  por  Ojos ;  . .  \ 
nHíe  á  decirlo  fia  madrugado. 

Don  Diego.       ,     < 
Llégate  allá  sin  cuidado;        ..,.,    , 
y  pues  nonosvip  á  los  dos,       -', 
yo  te  esperare; en  la  esquina   ..  .? 
de  ^st  a  calle.     .  .    > 

Moro/i. 


99 

mientras  voy*< 

ÉSCÉKA.  XM. 

%     Beatriz  y  Morón* 

Beatriz. 

¿  Galán  ,  á  donde 
tan  de  mañana  camina?        ' 
Morón. 
.  A  buscar  e)  arrebol » 
que  en  tsos  ojos  perdí ; 
pues  por  solo  bailarte  á  tí, 
mr.  levanto  con  el  sol.  , 
i  Qué  bay  de  nuevo  ? 
Beatriz. 

Todo  es  viejo 
cuauto  pasa  por  acá. 
Morón. 
I V  tju  señora  está  ya 
tomando  mejor  .consejo  ? 
¿  ó  estase  honrada  y  terrible? 

Beatriz. 
¿  Tú  vienesme  á  perseguir? 
¿  cómo  tengo  de  decir 
que  el  quererles  es  imposible  ? 

Morón., 
Callando  tú ,  en  conclusión  * 
Wngo  ,  Beatriz  ,  á  pensar 
que  yo  no  soy  je  fiar, 
é  ella,  no  tiene  ocasión; 
porque  si  ocasión  tuviera  ¿ 
¿qué  ocasión  pudiera  ser  » 

impasible  de  saber  ? 

Beatriz. 
Yo  f  Mqron  >  te  lo  dijera  % 


-i 


30 


si  me  juraras  aquí 
tenerme  siempre  secreto. 
Morón. 

Y  yo,  Beatriz»  lo  prometo, 
á  fé  de  gallego  i  di.     , 

Beatriz. 
Pues  has  de  saber  ahora , 
que  mi  ama  quiere  bien. 

Morón. 
I  Quedo  ,  Beatriz  ,  dime  ,  á  quién  t 

Beatriz. 

Y  mejor  diré ,  que  adora 

á  un  caballero  ,  á  un  don  Juan 
de  Medrano,  gentilhombre 
de  cierto  señor  ^  \iü  hombre 
*  tan  pobre  como  gafan. 
Aqueste  ahora  ha  fingido 
que  á  fl  andes  Va  á  ser  soldado  ; 
y  es  mentira  ,  qm*  ha  quedado 
en  una  casa  escondido 
de  un  don  Carlos  de  Toledo  ;  ' 
que  todo  rae  lo  contó 
esta  noche**  porque  yo 
aer  su  secretaria  puedo- 
Esto,  al  fin  de   noche*  pasa  ; 
y  si  en  la  ventírna  está 
un  lienzo  blanco ,  que  es  ya 
nuestra  seña  ,  se  entra  en  cas** 
bajo  yo  ,  y  por  una  puerta  , 
que  piensa  que  está  clavada 
el  viejo,  le  doy  entrada, 
á  tales  horas  abierta. 
Llega  al  jardín  ,Ndonde  tiene 
una  reja  el  aposento 
de  mi  señora ,  y  contento 


toda  lá  noc.be  entretiene 
con  mil  finezas ;  después 
vuelve  á  salir  muy  quedito;    . 
y  solo  de  este  delito 
somos  cómplices  tos  tres : 
de  modo,  que  si  tú  das 
noticia  de  esto  á  cualquier»  t 
y  se  «abe  luego..,* 

Morón. 

Espera 9 
que  no  quiero  saber  n) as, 
De  algún  músico  civil 
tu  relación  me  parece , 
toque  le  dan  mil  porque  empiece, 
y  porque  acabe  cien  mil. 
¿  Mas  este  es  el  santo  honor  , 
que  tan  caro  nos  vendía  ? 
¿cuantas  con  honor  de  dia 9 
y  de  noche  con  amor , 
habrá  con  puerta  cerrada  f 
pañuelo ,  Beatriz ,  zaguán  f 
jardín  f  ventana  ,  y  don  Juan  f 
La  Chirínos  fuera  honrada; 
mas  la  honrada  ,  vive  Dios», 
que  ha  caído. 

BtatrU. 
«  Quiero  entrar  , 

no  tenga,  que  sospechar. 
Esto  para  entre  los  dos» . 

Morón* 
Fuerte  cosa  es  un  secreto  ;. 
mucho  es  no  haber  retentad* 
el  tiempo  que  le  ha  pallado, 
ni  vida  está  en  grande  aprieta 
ti  no  lo  digo  8  advertid. 


31 


82 


esto  que  se  ba  dicho  ahora  * 
mátenme  |  si  de  aquí  á  un  faoraV 
no  se  contare  en  Madrid. 

.   ESCENA  XIII. 

Morón  jr  don  Diego* 

Don  Diego*, 
A  qae  se  fuese  esperaba  f 
á  tus  acciones  atento » 
por  solo  fiacer  á  los  ojos 
adivinos  del  suceso.  * 

l  Qué  tienes  ?  ¿  qué  ha  sucedido  t 
¿qué  te  dijo?  ¿qué  hay  de  nuevo  í 

Morón, 
Beatriz ,  yo  pruebo  á  callar ; 
mas  vive  Dios  que  uo  puedo.    - 
Señer  9  gran  mal  hay. 
Don  Diego. 

I  Pues  cómo  ? 
I  qué  ha  sucedido  ?  ¿  qué  es  esto  ? 

^         Morón» 
No  te  lo  puedo  decir , 
y  por  decirlo  rebiento ; 
que. aunque  el  secreto  sea  aanto'f 
yo  no  guardo  á  san  Secreto. 
Aquí  para'  entre  los  do*; 
aquel  pobre  caballero , 
don  Juan  de  Medrano  t  aquel    *• 
que  apenas  te  daba  celos  , 
aquel  -qiie  dijo  que  á  Flandes     4 
iba  i  y  se  quedé  encubierto 
en  la  corte  |  y  en' la  casa 
dfc  don*  Carlos  de  Toledo  ,  ' 

.  es  llamado,  y  escóndelo  $ 


no  puedo  decir,  que  un  lienzo , 
puesto  eo  la  rejo  de  noche; 
es  seuaj ,  que  está  diciendo  ,' 
que  entre  encl  portal ,  adonde , 
le  espera  Beatriz; ;  y  luego, 
por  una  peguena  puerta  . 
"de  un  palio,  que  sale  á  un  huerto, 
entra  hasta  una  reja  baja  f 
que  allí  cae,  del  aposento 
de  dona  María  de  Ayala; 
que  parlan  hasta  el  lucero, 
debe  de  hacer  mas  de  un  aAp. 

Don  Diego.  '' 

No  digas  mas  ,  calla.  ¡  Cielos  ! 
¿alguno  creerá  que  son 
tales  las. penas  qne  siento, 
que  la  menor  viene  á  ser 
en  mi  desdicha  los  zclos? 
No  siento  que  á  don  Juan  quiera, 
y  le  admita ;  solo  siekte 
que  hiciese  soberbiamente 
de  mí  tan  loco  desprecio. 
Si  cuerdamente  culpara 
mi  atrevido  pensamiento, 
y  con,  cortés  Juzarria  k 

castigara  mis  deseos , 
yo  callara  ,  yo  sufriera  ; 
peto  con 'tantos  estrenaos 
de  honrosas  estimaciones, 
de  arrogantes  devaneos , 
de  soberbias  altiveces,'  ' 

ni  sufrir ,  ni  callar  puedo. 

Morón. 
Don  Antonio  es,e*te. 

■  •  i 


33 


34 


Don  Diego.    ' 

'  MWá  ' 
•i  sale  á  Misa ,  qué  quiero 
irla  siguiendo  á  li  Iglesia. 

Morón.  V 

¿  Pues  qué  piensas  hacer ?  ' 
Don  Diego. 

Pienso, 
sin  darme  por  entendido  ,  '       ' 
volver  á  mi  araórprimero, 
y  llegar  á  hablarla  ahora 
con  mayor  atrevimiento ; 
que  á  muger  de  quien  se  sabe 
alguna  flaqueza  ,  es  cierto 
que  líega  Á  hablar  el  galán 
ain  aquel  cortés  respeto 
que  antes  tuvo;  porque  piensa, 
teniendo  su  honor  en  raen 95., 
oue  el  favor  que  aj. otro  hito f 
se  le  debe  de  derecho, 

Morón.     .    . , 
Aquí  volveré  á  buscarte.    t 

ESCENA'  XÍY. 
Don  Diego  y  étki* Antonio. 

MU       I... 

Don  Antonio. 
Besóos  las  manos ,  don  Diego.. 

Don  D%eeo. 
10  las  vuestras.  ^  . 

Don  Antonio, 

¿  Qué,  tenéis . 
que  estáis  tan  triste ,  y  suspensor 

Do^ñ'  Diego* 
No  sé  que  tengo*  * 


"  "  *  ^Mál  tíidé  :>  /i' 
en  preguntároslo,  viendo'  *  "  *' 
esta  catteyy'esíásVé^a's.  t4':<  u 
¿  Hay  algo  9  amigo ,'  ¿é  ntíeVd?  ;r 

Dún  fatigo. 
Muchas  ¿osas. 

*  r  JJo/i  Antonio,  '"  '   -  '    ' 

JDo/i  JW¿^¿.     ■"  *"  L  < 
Dejadme,  jorque' rito  puedo 
decirlas? :     "    •* 

B&n  Antonia    '    £j' '  * 
¿Pues  ¿mi t 
bok  $f}e¿ó} 

IaS  dijera ;  si  el  secreto 
no  viniera-  ¿Utiftfaetfdado, 

'     tion  AMonio.   ';'■''    '   ,c 
Muy  sc¿úr&iés*á  en  mi  pedio';  i 
y  el  no  dccfr-tótfo  ya  » 
será  ofensa  ;  y  vrW*el*cAé!b-'¿!  >   ? 
de  no  habtert^en  tttf  vida. 

•  '       •   ¿  BdAÉiego.       . 
Pues,  do*  Antonio;  £s  ^itétto't 
aquipára  iénfre  fas  dÓsV  *'  W  \ 

Decid^tfWé(iyd  lo  fcroirfé*\tf,,v  •'* 
•  *n'&dk  ®fl?gd?infr  »MP  \ 
Que  a^ét^^Ju'ai^  de7  Medrad 
n<y  fatfiáfclt4tf¿e* ,  «como  diente9 
muestras  ^WWÍáis}  y  cóbrt;^  f' • 
pues  se  fia*ty»Aiam>  eafcM>»#f*  ' 
en  casa  de-4*efrtró*  amigo 
don  Caifó*»¿Ilité*wkrcre >W»]!K 


#• 


36 


Ea  sido ,  powfl$$*  <%*  »*«• 
que  con  inny  grande  silencio 
entra  embosado,¿n  la.  cas,* 
de  doña  María'  lío  puedo    _ 
pasar  de,aa,uí.,  ;  r!  <:  ' ,  .•  ^ 

Don  Antonio.  . 
Yo  sabré] 
ti  aqoeso  es  verdad  m«y  presto  j 
que  4pn  Carlos  yjene  allí , 
y  él  me  lo  dirá^       \ 

.:       Don  Diego.  t.  . 

~~  /  L        Yo  espero.    .. 
á  esta  parte  retirado*  ,       Retirase,: 

escena.  &. 

Bichos  y  don  Carlos* 

,  Don  4rtio#¡o*  .:  ;< 
Don  Carlos ,  buscándoos  vengo 
para  un  negocio  ^portante. 

Don  Garlos-, . 
¿Quf.  gandáis  ^  7  . 

..b.#°ft  ¿rtMM-  .a«i  <•'. 

.  .  ¿  $abejt&  si  es  cierto  , 

porque  meimjprVlid  sajarlo,, 
si  está  don,  Juai^  dejjffedráno 
en  vuestra  casa  encobijo,    , 
y  que  habrá  ma»  4*(t¡res  *ño$ 

en  el  ft9¿&Mírf  °  ¿¿tanjlío  un  i«mi  , 
Miren  po^4do„nda¿He^a  .;.  ;  .  flp. 


1  saber  qtfílíí  Storfó  ■ 

su  partida.  Aunque  no  Vtifeó %l¿ 
licencia  parfe  decirlo, 
con  vos0  tio^sV  entiende  esos 
f  ¿4ttf  para*  entregos  doS,  ftí'P 
coant6ükKéís  ^^d^s^grVcí, 
que  no  se  fué ,  que  quedó 
en  mi  casa ,  y  que  encubierto 
entra  en  su  casa ;  esto  habrá 
mas  de  tresusSos  y  medio» 

Don  Antonio. 
Idos  con  Dios. 

Don  Carlos. 

El  os  guarde.         vase. 

ESCENA  XVI. 

Don  Antonio »  don  Diego,  y  Morón. 

Don.  Antonio, 
Verdad  ha  sido ,  don  Diego  , 
cuanto  pensáis ;  ya  él  sabia 
todo  su  amor. 

Morón. 

Esto  es  hecho  j 
ya  va  á  Misa. 

Don  Diego. 
,    .     Idos  con  Djos, 
que  hablarla  en  la  calle  quiero, 
por  solo  ver  en  que  par* , 
su  favor ,  y  mi  desprecio. 

Morón.  -  "     *' 

i  En  eso  te  determinas? 


TPl' 


¿p 


oii*»id»     .  *   *»'p  y  «  j.;-c»  i  i  •  '• 

¿/dr.iJ      .    *  ;  *»?c*j  ur.  ft:»  i?  i» 

.©¡í* .  ■         ;^ííc  ¿vi"  ^h  *  »u 
.c¡..".iv  V    t\  \jL 

r                                                          '      .  'O!»  ♦    ffiV  >  •      '   t 
«*2\tW              .^f)  !«:'/■  ¿».    leí 


k. 


.1-   /£¿>3T 

«'V'"''     I     •»»    <  I*»*'*    fifí    i    /.I"  *•'       , 

«í.Íííó  l     *:  \  ■;  eí*   íí'íij  o.i:j     j 

_.,.'-.  ■■'".   .a  . 

^í«  » ;.vi:r;,S  »j  oes  n^  ?, 


39 

AC£p  $^GUNpp: , 

ESCENA  PRIMERA. 

DeCOKAGÍO*    J>JS   CAH*. 

Don  Diego*  Morón,  jr  Qtmftt*;  y  detras  doña  Ma~ 
riqjrnUtatf**  •  con  mantos. 

Don  Diego, 
Ya  que  Mb  por  vuestro  amante, 
meYeceWjjor  criado 
aqueste  lugar. 

'  '    '  "tíoña'Mariá."   '* 

'      ¡Qup  enfadó !_         | 
DO  he  de  pasar! adelanté^ '  ♦ 

sino  volveos. 

J0o#p  Diego, 
'""  '   'Quando  hiere        , 
]a  Haniá'eV Viento t  se  hace 
una  ave  í/ü^de  ella  nace, 
un  Fénix  que' "en  "ella  muere; 
y  sin  que  *éuM  riesgo  tema  t  *' 
mariposa  iluminada , 
áe  aquel 'íuegó  enamorada  % 
cercos  hace  ,  hasta  que'  quema 
las  alas  del  tornasol ; 
así  anda  mi  amor  ciego,  '    \ 
como' sombra  de  este  fuego, 
haciendo  cercos  al  sol; 
que  háslá  abrasarme  porfía' 
esta  pena ,  esté  rigor. 

"  Dona  María. 
Mirad  que  es  necio  el  amor* 


40 


qui  §m**n  descortesfor       -  r.r/ 
¿  Cuando  de  aquesta  amorosa 
locara ,  jque  estoy  mirando ,    " 
dejareis  el  tema  ? 

Don  Diegj. 

Cuando  * 
dejéis  vos  de  ser  hermosa. 

Dotia  María.  >-     K   v.'A 

Bku»  pudiera  en  tal  locura    '• 
quitaros  con  escarmiento, 
mi  honor  el  atrevimiento*       ', 
"que  os  ha  dado  mi  hermosura^ 

Morón. 
Este  honor  me  ha  de  matar  p  \ 

l  mas  qué  cosa  tan  cansada. 
es  una  muger  honrada!. 

Doña  María, ...        ,.   '* 
De  aquí  no  haheis  4e  pasar; 
pues  citando  el  soJ  mismo  fuera 
el  que  mirarme  intentara , 
solo  mi  vista,  eclipsara 
su  luz  x  y  no.  se  atreviera,    -j 
á  mirarme  sin  cíesdeii. 

,  Morón. 

£1  sol  no  ,  pero  la  luna  ap< 

si  t  entre  las  doce,,  y  la.  una. 

*     Doña:  Maria*^  „   »  _ 

Cuanto  ma&ui)  hombre  tá  quien 
de  ninguq  modo  estimara  ,         ^ 
aunque  mas  altivo  fuera  * 
lio.  ppr,a  que  me  siguiera  > 
pero  para  que  tocara 
solo  un  chapín  de-m¿¡¿  pies* 

Don  Diego,  t  r 

Mucho  mi  paciencia  temo  a  */*• 


oyénoo  un  tan  loores  tremo.    ."J 
V  /  Dofí^f  María.  ' 

No  me  bagáis  ser  descortés, 
que' pasará  de  desprecio 
el  castigo.  Beatriz  f  vamos.       .  ** 

2)o/i  Úiego. 
Ya  no  importa  que  seamos        ', 
vos. descortes.,  y  yo,  necio  :        "* 
escuchad ,  si  np  queréis'. 

Ya  pasa  de  necedad^ 
y  liega  á  ser  libertad. 
Don  Diego 
Es  fuerza  quVme  escuchéis, 
que  siendo  pleno  é¿  amor, 
,  es  fuerza  darme  un  oido 
á  mí ,' pues  habéis' c^ído  * 

despacio  al  competidor;  r% 
qne  si  en  la  justicia  mía  '    * '  "*. 
hien  informada* no'  estáis  ,  '  ' 

será  bien  que  ,n¿>s  pigajs  v 
á  él  de  noche,  á  mí,  de  dia. 
lío  quiero  yo  que  á  asé  fin         l 
haya*,  lienzo  por  sena}  ,    , 
Beatriz  que  Ka  je, al  portal  9 
'reja  que  caiga  ai  jardín  ,    '   ' 
puerta  ,  al  parecer  ,  cerrada  9 . 
galán  que  está  ausente  y  vienev 

Morón. 
¡Qué  linda  memoria  liene  !       ■  «ap. 
no  se  le  ha  olvidado  nada. 

Do¡}  Diego 
Pero  quiero  ,  pues  se  humaua 
el  honor  qué  encarecéis 
tanto ,  qué  me  despreciéis 


4* 


mas  honrada  .y,  menos  yapa. 

No  me  ofenden  ,  no»  por  Díos. 

los  desprecios  de  nonor  llenos  ;. 

mas* no  le  ec tiara  yo  menos.  '"' 

á  no  encarecerle  vos,  v 

No  es/nóñrá  ía, vanidad; 

que  no  esta  en  encarecerla 

la  virtud  *  sino  en  tenerla; 

y  en  lo  que  he  dicho,  culpad 

vuestra  lengua* ,  la  miá  no, 

si  lo  dicho  se  as  "acuerda  .  ., 

pues  si  vos  fuerádes  cuerda  f 

no  fuera  tan  necio  jo ; 

de  vuestro  desprecio  fue       .     ~ 

la  culpa  y  no  de  mis  selos. 

Do¿a  María. 
¡Qué  es  esto  que , escucho  f  cielqs!       ap. 

;;  .^orp/i.         '"  ;[ 

¿Seifftr.  qu¿'ha|s  hecho?       '     n 
t>on  í)iego.  . 

■  :  -'";  '■■■"  /m¿s¿\ 

*Dofia  Tvlar\a.       „,...!  > 

¡  Ay  de  mí !  ¿que*  es  lo  que  hp  pidof     q 
¿ya  que  tengo  qiie  esperar^       , 
ai  esto  b.e(  llegado  ¿rescachár(?   ^ 
Tú.  Beatriz,  td  me  has  vendido. 

Beatriz. 
¿Yo ,  señora  r  Vi  ó  hice  tal. 
¡Qué  bien  aquesto  temía!  '    ap* 

Doña  María. 
Mal  haya,  amen /quien  se  fia 
de  criadas.      *."  *      ' 


Escudero. 
¡  Pesia  tal !  ap. 


esto  va  como  ha  de  ir. 


¿Qué  la  has  dicfro*?         :. 

... ....  y!u  i      Pon  x>hm-> 

t:*?e$&wc¡adp, 

w!oso,y  ¿esea^a/lo,  f 
ya  no^la  pude  wfirir.,,; 

.  .    Moro^,,  •.  .1. 

La  pobre  Beatriz;  Ip,  paga*  . 

JDoñaM[aríf$.  lt    ,  . 
¿  Si  solo  Id  lo  Jb$¿  sabido  ,      x 
%  ..quién  deqrselo  ha  poftd*? 
Morón.  ]  m> 
No  sé,  por  Dio*  f  como  haga  . 
.  ?.  Mffa  ¿kcttl P»f}a  «q ui\ 

l(.       bon. Diego.  ^  í( 
.      Sácame ,  por  I)ios ,.  Mo^on  a 
&\\*fr  6rand«  cpnfujaicHi 
con  a^gyna  industria.  lJ 

me  falta  hpy  púa  mentira, 
no  sobrándome  otra  casa  ., 
iodo  el  añp?  ¿ 

--  \      .  '.ftjgaffti* 
estás. 

.  f  .  pona  Hfari#.  > 

-i    Por  tí^ittíame.,  ;  ,:l 

Beptrt^    ;  ■     r 

Mira.* 
ftW*.    .  .... 

Vive  Dios  ,  que\  ppx  ahora  ,  q»a 

que  no  hay  otra,  jia.rfe  fer-vir,. 
To  lo  Fengo  de  elegir  f 
auntm?  me  wates>  StAéra^  ,    r 


16 


44 

no  tiene  Beatriz  la  culpa 

¿e  esta  zelosa  pendencia  ,      •'  0  j 

porque  en  Dios  ,  y  en  mi  conciencia  f 

su  ignoráneia'la  disculpa. 

Sabe,  pues  /  que  mi  señor  ,      '* 

este  que  présente  ves,     ■     *•  *■"* 

on  "grande  astrólogo  es ; 

puedo  deát  ,tjel  mejor1    ' '       .   :  •* 

que  se  conoce  én  Espaua. 

Don  Dié%o. 
El  dirá  mil  disparates.    -  lt     *^. 
¡Ah  Morón!    v 

"••!    aforo/ii   "  '  •/•*  '^ 

Aunque  riré 'mates. 
De  esta  ciencia  tan  es t rafia 

\  tuvo  <ii  Italia- maestro  •  "l  '**c " 
el  tiempo  que  en  ella  estttVtl/* 
A      que  en  estas  cosas  no  habof  ÍU)J       , 
otro  mas  sutil;  y  diestro. 
Tenia  ti  ir  familiar  amigo  f 
qne  todo  'se  lo  cdti taba  jr'c    '"* 
porque l con  "el  diablo  hablaba  ;*' * 
como  pudiera  contigo;"*0  ' "Kii 
Don  Dftgo. 
¿Mira  /Morón  ,  lo  que  dices. 

Moro*¿  ':,;;1 

Siempre 4á  verdad  t¿  enfada; 
mas  no  ha  dé  quedar  culpada 
la  Beatriz  de  las  bea trices. 
Aqueste  «n  fin'  le  enseñó 
los  planetas,  y  los  signos. 
.v.*  e  •  •*•    Don  Die^o.  "  (]  <V*:T 

El -dirá  toil  áesatínbs.    '    •    *:  P 
-*  Morón.  -,r 

J  4  «aíá  nochero*  mostró      * 


4$ 

unrbombrc ,  y  me  dijo  :  atora 
va  á  hablar  con  dona  María 
este  ,  que  tai  astrología 
lo  mas  oculto  no  ignora  : 
y  yo  en  un  espejo  vi  :  i 

un  jardín  ,  á  donde  estaba  , 
y  allí  una  rongcr  hablaba 
con  él ,  aunque  no  la  oí 
lo  que  dijo  ;  esto  es  verdad. 

Don  Diego.  \   • 
Pues  ya  que  estoy  descubierto , 
para  que  sepáis  lo.  cierto 
de  questa  ciencia  escuchad. 
En  la  corte  de  Filipo, 
villa  insigne  de  Madrid, 
gran  metrópoli  de  España, 
de  nobles  padres  nací, 
á  quien  dios  naturaleza.    , 
•  tan  liberal  f  y  feliz  • 
la  hacienda  ,  como  la  ¿angre ,   , 
indignas  de  hallarse  en  mi : 
Crecí  inclinado  á  las  avocas , 
y  letras,,  sin  preferir 
nunca  el  valor  al  ingenia  t 
que  uno  altivo,  otro  sutil, 
con  la  espada  t  y.  con  (a  pluma 
compitieron  entre  sí  *    , . 
midiéndose  siempre 'iguales 
al  ve/M&r,  y  al  escribir..      >.,,;  0 
Apenas ,  ppes  ,  sobre  ,e¿  Ubio ,  ;» 
tuve  el  RTMnero  perfil*] ..,  ...     ;, 

cuando  en  eKarmada.fí^HaIU.   , 
al  Mediterráneo  di. 
Si  hice  algo  ,  lo  .que  ni*»   . 
puede  la  fama  4tcir.4 


>4 


% 


porque  en  la  mas  noble  tenga*' 
la  propia  alabanza  es  vil.     J 
Llegué  á  Ñapóles  ,  «donde    *  « :    • 
por  ventura  conocí  • 

á  Porta  ,  de  quien  lá  fama' 
roe  di  jó  alábanlas  mil.  '  '  - 

Este ,  á  quien!  no  reservtf    ' 
dudoso  suceso  el  fin, 
porque  sü  ciencia  tenia 
presente  lo  por  venir ; 
á  quien  planetas ,  y  signo! 
en  sus  astirolábiós  vi         '    ' 
tan  obedientes ,  que  nunca' 
le  pudieron  encubrir    -         - 
el  mas  inconstante  efecto? 
¿qué  mucho,  si  desde  allí1  '  : 
tasaba  de  cuantas  luces      •    ' 
consta  el  celestial  aa-Gr  t 
t)e  aquesto  tomó  ocasión 
el  vulgo  para  decir  *' 

que  tenia  familiar 
secreto;  mas  no  es  así, 
que  el  vulgo  ninguna  acción  [   : 
admira',  sin  añadir;' 
que  la  verdad  mas  desnuda  '' 
viste  de  afelio  matiz».       •     '  •  •  - 
Aquí  le  conocí  ¡  hunca        '  •       - 
le  conociera1 !  y  jarqui  '    -  ■  • ;s 

é  fue  fuerza  0e  nti  estrella,  "■ 
ó  de  mi  Roerte  infeliz  t  ¡  •'  r.  f¡  i  /* 
ó  fue  mi  .desdicha  solo,  i  i  •  *'  ".** 
tan^inclfaadbnfe  v<  •« »  »l  '*  •*  ? 
á  su  ciencia ,  como  éí  ««¿»  ••' 
á  mi  inetín'acto&a  ;  y»  asi;  ¡  '  •'•  " 
luimos  los  do»  tan  turiigos  r    '^¿ 


que  nV  acertaba  á\  vivir 
uno  sin  otro.  Duró' 

dos  Jiios,  que  estuve  alíi,  * 

.     ').'•••    •    .    i  > ; 

aquesta  amistad  ;  y  en  estos.  ., 

<         M     ,.         #   ■>':;  .i.j.í    ■  í 
con  estudiar,  y  asistir, 

llegué,,  no  sé  sí  a  saber, 

estpy  por  decir  que  si , 

la'ástrologiá  tan  hién , 

que  piidicra  cójmpe'tir  '        j 

con  él  mismo  ¿  á  quien  mil  veces 

envidia  ,  jr  espanto  áí  ' 

En  este  tietopo^en.vídibsos  ,, 

que  qVrisíérori  destucirV 

so  opinión ,  Je  denunciaron  9 

diciendo  de  él  i  v  lie  mí    - 

esto  de  los  familiares-  ' 

y  aunque  salimos  ed  tíñ 

libres  de  aquella  prisión  , 

no  lo  pudimos  salir 

-  de  la  sospecha  cbmun  ; 

pues  poV  quitar  áesde  allí 

el  escándalo,  mandaron 

no  pudiésemos  decir 

nada  qne  ños  preguntasen. 

Yo  que  en  tonce*.  advertí 

el  poco  fruto,,  y  la  mucha 

sospecha  que  conseguir 

pude  ,  por  no  vecina  éh  otra 

ocasión ,  siempre  encubrí 

lo  que  sabía  :.por  ¿sto  "  ' 

nunca  has  oído  áecir 

que  eVá  Astrólogo,  «hasta,  ahora  f 

que  despreciado  dé  tí', 

como  pudo  el  mas  humilde 

hombre ,  el  Ws  tajo,  ¿í  mas  vil ; 


w 


* 


de  tus  desprecios  la  causa  fr  n 
y  de  mí  desdicha  el  fin , 
por  no  preguntarla  4  otro  y  "  , 
Ja  quise  saber  de  mí. 
Y  anoche  con  ese  loco , 
que  se  atrevió  á  descubrir 
tan  gran  secreto  (  ;  mal  haya 
quien  se*fta  de  hombre  ruin!) 
hallé  el  paño,  hallé  la  reja, 
hallé  la  puerta,  el  jardín, 
hallé :.M...  pero  ya  no  puedo» 
no  puedo  pasar  de  aquí. 
¿Si  llego  á  hahiarte  zeloso, 
como  pude  resistir  . 
tus  desprecios /  y  mié  zelos  f 
Perdona ,'  si  me  atreví 
á  tu  honor  ,  á  tu  respeto  9 
que  mal  se  pueden  sufrir 
desdenes  de  enamorado :         t     ; 
y  pues  que  fio  de  tí 
este  secreto ,  aunque  seas  . 
muger;  sabe  desmentir 
la  opinión  que  las  acusa 
de  fáciles  ;  pues  aqúi , 
por  verme  ya  descubierto ', 
y  disculpada  á  Beatriz,  ' 

ha  sido  fuerza  contarte 
como  lo  supe,  y  lo  vi. 

Morón, 
Esta  es  la  verdad.' 

Beatriz» 

¿Señora,' 
jamas  ois té  decir  , 
que  era  Astrólogo  don  Diego; 
otras  veces?. pues  yo  sí.    * 


4» 

Sofia.  Mario» 
I  Ay  de  |ní  l  ¿que  puedo  hacer  ? 

.    Beatriz,  :> 

Quéjate  ahora  de  roj , 
y  di  qne  yo  te  he  vendido. 

t Hk€&tz¿~  •  »¿ 

No  he  visto  t  por  san  Crispí n, 
hombre  mus  sáitfo  en  mi  vid*.  - 

jEJo/i  Diego.  ' 

4  Qué  te  parece  ?  crp.  a  Morón* 

Morón, 

Que  asi      ,  ' 
lo  has  fingido  ,  que  yo  mismo 
Casi ,  casi  lo  creí. 

Itoña  Marta. 
Señor  don  Diego  ,  no  quiero 
tener  dé  vos  que  temer,  - 
si  al  respeto  considero 
que  á  una  principal  muger ;     *r 
debe  un  noble  caballero  ; ,      ,  ^ 
y  quien  tan  bien  conoció  ..  r  .  L.  , 
la  fuerza  de  las  estrellas , 
bienverá  en  sus  luces  f  belfas  V;a.¿ 
que  no  puedo,  torcer  yo 
lo  que  dispusieron  ellas.     ,uyji  z 
Solo  un  con-sueJotine  dais  » 
que  es^ertsga  »oMe>  y  discreto; 
pues  con  esto  asegura»  «„  ?¡¡,  j 
mi  honor ,  y  ^u^^rp  secreto;,, 
y  mira4  qué,  me  mandáis. 

¿Quitn  no  pqede.  appjicar, 
como  fra  4^  poder  «vukUií  ?,.  -A 
El  cielo  ps^üaidS:;  .,.     ,  -  *.„  \ 


SO 


Dona  Marta. 

Távos 
dé  vida.  ' 

Morón. 
Cuerpo  de  Dios , 
aqueste  es  modo  de*  hablar. 

Beatriz.. 
Si  él  no  te  digera  aquí 
la  verdad  tan  claramente....... 

Dona  ^íaria. 
Nunca  de  tí  lo  creí. 

Beatriz. 
Estaba  al  fin  inocente; 
volvió  la  verdad  por  mí.  - 

ESCENA  If. 

Dichos  y  Leonardo. 

Leonardo. 
Hablando  en  la  calle  está 
con  un  hombre ?  ¿quién  será, 
que  en  la  callé  ía  detiene  f 

Dbña'  Marta; 
Mi  ^padre ,  don  Diego  ;.  Viene. 

Don  Diego. 
¿Iréme? 

•;     DóXaMáriá. 
\  oi  ;■;  --..:       No  imf>é¥*a  ?af 
pues  nos  ha  *¡4t4.  **' V»  l: 
;uJ;   :-;    £¿o /fardó  *      ;« 
,t         .  ..i      Ya  llega  : 
dudoso:  ¿Qú^Wes'^quf? 

*         Bufia  Mátiár 
Nunéá>4«'V<*r«Ud  te  niego. 
Para  que  te  rifcé  de  ftri  f 


'  / 

hablaba  *t<*e3*r  don  Diego  >     ; 

que  nw  recadó -me  traía     ¿ 

de  mi  prima  y, porque  estando 

*r  au  cas*  *A  otro  día  , 

de  varias  cosas  tratando»  .  - 

me  dijo  ,.  queco  «tocia, 

un  grande  Astrólogo ,  á  quien 

preguntó  «q.  nacimiento ; 

y  aunque  creerlos  no  es  bjen., 

quise  ta  ¿u¿  ¿casamiento  ,  .t 

ver  el  efecto  también ;  "*  ':  ' 

que  e)  seüor  don  Diego  es 

el  Astrólogo  mejor  r 

que  se  conoce,.  .       , 

JEfat  Diego» 
s    *•  .~i  ..     Tus  pies 
beso  po.r.  tanto  favor» 
que  no  es  justo,  que  me  dea 
tal  npmbre.  .*  :"-  -.* 

Leonardo*    ,  ..... 

.    Muchos  hah^bidol^ 
que  en  estudio  tan  dudoso  - . ,.,  -r 
aqueste,  nombre  ban  tcni&|  V li- 
mas es  tan  dificultoso  , 
que  pocos  le  han  merecido-!  ,  „f 
ningunp  al  fin  ha  llegado 
á  estudio*  *&**  peligroso?,  t,  -     ;  t 
vos  \ enedme  por  criado » " 
que  á  los  frotabas  ingeniosos 
les  soy  muy  aficionado*     . 
También  yo  en  mi  mo&daS], 
si  he  de  deciro*  verdad  9 
alguna^ttcisajestnduS^  .  ..    oi;>i/f  i 
y  con  desloa,  .pequé 
eu  esta  curiosidad.    ....      v  u  .>  K 
*  t. 


Sí 


$2 


Don-  <5Átié$  de  Rocattatt  t •'<   u  !l 
me  enseñó  en  tiempos  atrás» 

Marón*    •     ; 
Por  Dios  qtíe  «1  viejo  no  ignora  %     ( i  ) 
y  no  nos  faltaba  mas*; 
que  te  exa-mtnase  «faora.  - 

'»  :  Don  fiiigó.  *¿  *■  •  . 

Si  el  me  pregunta ,  atr ¿pella     d  Morón. 
m  i  a  ti  tención ,  por  que  no!  •  Sé  * 
nombre  de  signo  ,  ni  estrella, 
y  mil  locaras  diré. 

1  *  Leonardo*'  -  '■ •  ' 
Esta  es  mi  casa,  y  ien  «11»' 
os  suplico  me  veáis*'  •  ••'    *  '! 

Mirad  vos  que  ro*  mandáis  ¿ 
que  yo  os  he  de  obedecer/  ? 
p*»l,  '"Leonardo*. 
%  Suplicóos  que  os  dejei's  vt*Tf  l       : 
que  quiero  que  me  digáis 
algo  de íá  Suerte  mia  * 
y  que  tratemos  lo*  dtfa¡ 
un  poco  de  astrológfa.  ; 
*       •  Don  Drégol     • 
Yo  vendré  á  veros  ;  á  Dios* 

*■•      Leonardo  s  •    ,,¿-         r 

El  os  guarde:  ven  Mari»/  *-1 '  i  í; 

«  ■•      •  .^   i«  }  •••  :h*in   *•  '*    ' 

<••-<>  -ESCENA  IHÍ*"i  ¿      i* 

,ZXon  Diego  r  Morón. 

,  UÜ4tn>  ¿Mogo* ...  -»  »  •  •  i  .i 
¿  Fué  ron  sé  ?  «dame  4«tt  bnacos  *  .; 


i  )     -4  don  Diego*    ."••&)  «orí  uj  A.i¿^ir> 


*8 


que  tA  en  aquesta  ocasión 
me  has  restañado  r  Morón  f 
de  aquel  Argel.  r  .  _ 

morón, 
■n-    '"Le*  abrazos 
estimo  $ '.ptoro.  :qtiisterfi  %n r  *M u A. 
agrataefatadé  eb  £»vot>'  a.i  ■-p  . 
i  nue me*¿ddo»tfra*  »  safios»,  "p  > 
algo,  que  a*ra*o  no  íucray  á  la 
«  -  •  '&on >jDiégo*  it.uit.ii  .JI 
Toma  esta  ¿»rt jja  v  t*i>ti.i«  •«-><»«.% 
que  haceode<la»iuz  desecó*  ■  uo:»  - 
porque  fingiste*  tan  biesu  «I  >ho 

No  lo  ayudaste  >tu-  mal;  :»i:  ;  •«« 
qaa  4e  suerte' Jo  ¡pintaste-'  i»  orre  ' 
todo;,  >4jüew«do  estuvieran  m  i» 
advertido  j  lo» creyera  :  rHir»'roq  ^ 
¿  aiond*  ¿«Paria  te  ñauaste j  up 
'  y  con  Main  ta>  l>rp redad  ¿  ¿  "'Jb„««l 
que  aun  iraTrgínaria  adariarafo'í 

Morp^Jy 'lar, -bueña  líwntir*  "h-íír 
est4Q9iiip»TebeniTeTdadw>:  <  iti<*n> 

Y. luego  haber ei*coíntraj3U>  >h:  q 
á  quien- 4?w  presto?  hf-creay  *     »* 

No  hay*  cosa  como  «qué »¿eaü  Ufo 
también  el-vifejo  engáftqclo?  •'.<•(•{ 
por  Asttófogó  ine  tienes  >.v'¿,íoií 

Si  ,.*l«*rg}  el  vm |o  ¿sopiuitl  10T 
algo,  buen*  baria  ¡fuera. 
Aquí  do*  Antonio  vichar*  i^l. 


54 


[tA!SCENAIV. 


Dichos  f  don  Antohioi 

ce-e.  Don  Diego. 
Antes  que  me  pregunte i$ 
que  ha  habido,  os  he  debutar 
<  que,s¿  que  os  baWsfiitaholgar) 
el  sunes*.  que:  sabréis*  r: «t> 
Hablando  á  do&a  Moría, 
soberbia ,  m«  respondía  >  •*  ~ 
como  «siearfpre  ;  peno»jM> 
con  la  neJosa  parfia^t,  i  ?    :      ; 
que  hizo  en  mí  %tán  bajo  efeto  f 
no  pudiéndolo  sofair,*  ,    ;  o\  <  '>' 
me  determiroéá  decir  .         .  -.  7> 
de  su  amafiado  eL  secreto,;       í 
y  porque  ítta  no  s»j>ies*  i   •  •,      .* 
quienlfnKta  «a.aeoitado-.a.lna*  % 
le  dige  á  llorón  y  ^uftiftHi  ii«  >  ^ 
una*  ¿mim  tira  fingieaemi  i' >•• 
él  dijo,  que  yoisabia.* 
siendoteneato  siajifgrinAa^^  i. 
cuanto  páaaba  ent-efontqndof '•  •» 
y  que  por  la  *»t«élogfa 
pude  n%Mt.á  «aberKl  ;»i  v, '>'   ' 
el  aecneJhBLíqneí.la'.adJniifa.í»'»: -.Á    ». 
Mala  ,  ó  buena  iaunrtntira  9 
ella  l«4fcegóíá<c«<e»4.?t..  *?gi»  o*' 
porq«efy»le  di  cóterb  nv<*.  .'* 
notable  ¿su  fingimteéít^A  ':    í 

Dan  vintenio. 
Por  B¡*»*estréntjuIo  cuenta,  ". 

Pues  njaffaüia.l¿  mt|ofitb  iu¿  --. 


LlegóVlue$o  elpadfe  ,  á  qui^n-, 
por  disculparse,  contó  ,  / 

como  era  astro  lo  jgo  yo, 

Don  Antonio.  ,  t|> 

l Creyólo  el  viejo?  '     .•  i 

n    .  v  ja  robien* 
El  queda  {ñas  engañado  t    t     .   ^ 
pues  me  clij^  que.  le  viera        '    " 
muy^esp^o,  por<yie  qra,  }[  ;T  ^ 
*  hombres  de, .ingenio  inclinado*, 
Lo  que  falta,  afrpra  es,        .,    <•  T 
que  en  toda^  conversación 
se  di  la  le  esta,  opinión  ; 
porque  si  ac^sp  después  ^ 

de  alguna  persona  sabe  m. 

que  he  merecido  .alcanzar 
este  nombre^  *  sera  echar 
á  la  mentira^  otra  llave.     .* 
Publicadlo  vos  ,  y.  así . 
sin  temer, e}  c^nagüp. 
tendrá  mas^uer^a  el  engaño. 

Don  Antonio. 
Eso  de)ádmelqv^¿tt>. 
yá  Mbroi*,(  o^e  vive  Dios, 

al  mundo ,  no  es  menester 
mas  que  coyarl^^xjos.      \ 

*W Y  que  W**r**Mi  dividida»^  iu  a 
como  los  de/pandfideros  , 
seremos  dos  pregoneros; 
y  yo  iré  dando  alaridos, 
como  un  médico .,  que  iba 
diciendo  por  el  lugar ; 


S4 


Í6 


ÍHáy  enfermo^  que  'curar?        * 
sí,  pues  ¿con  voz  altiva  * 

diré  :  ¿  No*  ha  jr  ipígo  perdido?      ' 
~  que  para  hacer"  parecer 
cnanto  se  puede  perder , 
un  astrólogo  ha  venido» 

Don  Diego* 
Si 4  l  más  luego  qué  he  de  hacer* 
ai  todos  estos  se  juntan , 
y  mil  cosas  me'  preguntan,  ? 

JMoron.  ' 
Lo  qne  todos  ,  responder 
una  vez  sí,  y  otras  no,, 
sea  de  gasto  ,  ó  de  pena,  ' 
Dios  se  la  depare  buena. 
¿Rúes  qué  ástrótoco  acertó 
en  ¿osa  alguna*? 

''  Don  Diego  '    ;  '* 

1   '  Advertid         t: 

que  os  espejo. 

Dorí  Antonio.  '  '* 

'  •  Yo  seré       '    '  '*1' 
vuestra  fama.      .  '*  ^  ' 

'Morón. 

Y  yo  daré,  ,:  r 

cuenta  hoy  á  medio  Madrid* 

Don  (7orfós  con  u** pkitfride  carí^. 
*   ííon  Carlos.  '    ' 

¿Habrá  en  el. ;mtt'iMlp  nacido 
quien  quiera*  comi>  yb  quiero  !J  ' 
que  soy'galáli»  «y 'tercero'; 
ni  amado  ,  ni  aborrecido, '.    :  '.  •' 


teñiré'  don  Joan  ,  y  Violante, 
&f  varios  discursos  sigo , 
por  ser  a  milite  ,  y  amigo , 
ni  soy  amigo ,  ni  amante.         '  > 
Estas  cartas)  «jue'él  escribe 
desde  casa ,  be  de  fingir  •*'* 

que  acabó  dé  i*éeibír  * 
de  Zaragoza';  si*  ¿i  viV* 
en  sú  pedio'í  yo;  Veré  '_ « 

ii  ar  kerlasVen  despojos 
el  alma  sale  á  ios  ojos ,    -    \ 
y  mas  cuerdo  callaré  *  t 

"m\  amor:  pero' si  al  tomar 
las  cartas  ¿  ¿t  tafrda  en  vdlas,» ' 
miraré  su- olvido*  eacllas, 
y  me  podre*  Vkcterar.  •' 

Ayude  anVof  iní  osadía  , 
ya  nué'ratf  fcc%ftt*o  estoy.         -1 

.  ESCENA  VI. 

Don  Carlos y<dop.  Antonia*     , 

JDdrf JihioMió.    '  ' 

¿No1  es  tonvCartoá?  si;  aquí* doy 
principUv  á*1a:  industria  •  mía. 
¡Jesús  !  ¡  Jesu*l*nd  creyera" 
que  ón'hotabre  pudiera 'haber ,' 
<fue  t«l  M«gara*á  saber.      •       (> 
\,     .-  &>A'QafiMos.  *  ■•> " 

¿  Tente  ,  dotf  >Artíonio ;'  espera  ,! 
¿  qué  tienes  >•  ■••»;«••  l 

*•  ÍHfn»¿Mdrtw.  [  » 

- •'•••<?Nb'iíé,' 'por  -Dios  ;•"• 
ven  go  absorto  ¿ '  Jf  •  ¿ihn  irado  s  * 
de  ver*«  •'«»"■'••    •*'*  *  -  •  •,t',t : ' 


SI 


i% 


¿Di,  qué  te  ha  pasado}* 
Don  ¿jntanio* 
¿  Estamos  solqs  los  dos  ? 

,  Don  Carlos. 
Si. 

Pues  habéis  de  saber  , 
que  en  don  Diego,  aquel  amigo 
que  habréis  visto  andar  conmigo  9 
acabo  ahora  de  yer 
el  prodigio  roa*  estrado* 
que  se  puede  (¡no  hay  que  hablar) 
tnel  mondo ,  imaginar, 

Qvn  Carlos. 
Ya  deseo  el  desengaño. 

Dqn  entorno. 
Este  hombre  q¿ie.aqn¿.vei         7 
tan  humilde  9  tan  modesto » 
tan  reportado^  y  compuesto, 
el  hombre  mas.  docto  es 
que  tiene  la  astróloga. 
En  este  punto  lo  ?j,t, 
afinque  él  tiene  para  mi  < 
gran  ramo.  de.  hechicería ;      .       -    ' 
conmigo  ¿e  declaró 
esta. ^arde ,  y. me  ha  contado     ; 
cosas,  que  £  mi  m*  .han  pasada, 
*  conmigo ,  y  que  Piosf  y  yo 
las.  salmos  solamente. 
No  sé  como, pudo  s«r-,  ... 
que  41  lo  Megaat^  á  aajber : 
en  dos  rasgos  4*  repente 
hizo  ja  figura^  ajlí , 
teniéndome  á  mí  delante  (  , ,     . 


59 


como  «ii  menos  de  tita  instante. 
.<  .    Do/1  Carloá. 

I  Don  Diego  de  Lona  ? 

Don  Antonio,  .    • 

;  Sí. 

Don  Cortos 
En  mi  vida  le  be,  hablado  t 
sino  es  qna  vez  9  ó  dos  4  - 
y  en  estas  solas,  por. Dios, 
no  sé\b**n  queaíne  me>há  dado, 
>  qwj  aunque  no  Gastrología  , 

que  esto  era  muctukaaber  , 
v  en  4.be>echade  de  ver.,,  r 
\.  que  era  hombre  sjae  sabia : 
l  pero  qué  es  tan  omínente?  ' 
-    Don  Antonio. 
,    Un.  d*a  te  he  de  lleva*,, 
que  díte  me  ba  de  eaaeftar * 
una  xnager  que  «ata  ausente  r 
y  estofes  Jo  men*>s  qué  41  hace  9 
florqua  si  verdad; te  ¿raito , 
be  visto  hablar  «m* retrato  ;  . 
qwe^e puesto  ,  €arl<*  *  nace     \ 
tan  la  confusión. 

>.Oon'Ctítl*s;[ 

¡Que"  escucho! 
.^•cpmso'es  oferto  f  •>:-•' 
Don  Antonio. 

..    '  ^     1  tan  cierto*/ *" 
que  fuera  lo  rotániO/un  muerto. 

t  o -DonGárloní    •» 
Ho  Liaren  &  en  verle  ratocho* 

¿feto  Amonio. 
Tu  le  hablaras.,  y  iv**áa! 
que  es  verdad<lo*quJaift4  difo. ■    - 


J» 


que  nrt  4roy  sin  declararme* 

Doña  Violante. 
Lee.      (Jm«  te  llore  amenté  es  bien »     '  ; 
y  presenta- Jw.te  goce  ; 
porque  nunca  Se  conoce 
hasia  qae  se  pierde  ,  el  bien. 
No  leo  mas*  porque  pasar 
no  puedo  d«  aqüi.,  Rompe  el  popel* 

Don  Carlos. 

Leyendo ,  op. 

rasgó  el  papel ;  ya  voy  viendo 
que  me  puedo  declarar» 
Si  acabado  de  leer 
tantas  pellas  derramáis,      V,  • 
dichosamente  mostráis 
qiH',b4y  lágrima»  de  placer. 
¿Que  causa, turbó  la  gloria! 
que  en  Uluí  abrasado empleo 
partida  eficdua'-aulea  veo?    - 

•  Do\a  Piolante. 
Una  pasada  .u*e.moria 
pudo )  Car-Ios,,  é Migarme. 

Don  Carlos-  '   •    "  í 

La  ¿nemúiria  la  entristece  ;e  op» 

segunda  ve*  me  parece  % 

que  me  voy  sin  dn- lararme,  s 
Yo  cojdqo  «l  necio  habré  sido*    , 
que  pensando  l isoaijear,. 
suele  decir  un  pesar; 
y  yo  u ir- pasar  he  traído, 
cuando  «pense*-  que  traia 
una  ftsonja.  ¿Tan  vivo 
está  tu  amar? 

Doña  Violante. 
>  '     U»  recibo  $ 


Carlos ,  mayar  alegri»  , 
que  cuando  so  ausencia  siento : 
por  ver  á  don  Juan ,  no  hubiera 
cosa  que  yo  no  emprendiera. 

Don  Carlos. 
No  es  dificultoso  intento.  '•* 

Doña  ¿Solante. 
i  Cerno  t 

Don  Carlos.  í? 

Algún,  hombre  pudiera 
enseñarte  á  don  Joan  hoy , 
de  la  suerte  que  yo  estoy. 

Doña  Piolante. 
2  Oh  cuanto  lo  agradeciera  \     '" 

Don  Carlos. 
Mal  camino  mis  desvelos  ap. 

hkn  tomado  de  olvidar,, 
que  no  la  tengo  de  dar 
gusto  que  me  pague  en  zelos: 
dCéde  el  principio  lo  erré. 

Doña  Pialante. 
I  Es  verdad  lo  que  me  dice  9 
Carlos  f  tu  voa  t 

Don  Carlos.  '  * 

|  Qué  mal  hice !  '     ap. 
pero  yo  lo  enmendaré : 
várame  la  ciencia  aquf 
del  otro,  que  me  contó 
don  Antonio.  'Sf  9  «pues  yo 
boy  •*  Wn  hombre  tío  nocí  f 
que  en  tu  casa  te  hará  ver „ 
aunque  don  Juan  esté  a«sé»t*,¡ 
al  misino  don  Juan  presenta»    ■'■ 

Dbhé  Piélante. 
i  Eso  cómo  pueda  ser  f 


i 


i* 


k. 


&*ntQofio$.  y 

Porque  es  de.  ciencia  un  abismo^ 
yp  sé  que  le  én.s£i¡af¿  a 

de  la  Suerte  que  *\\$  **tá. 

.  Z)owa  Violante*      / 
¿  Al  mismo  don  Juan? 

Al  mismo  s 
no  es  posible  qpfjlovjta  • 
qqe  el  que  de  .ftsta  suert^  v?S* 
cuerpo  lawtásUca.es,*  > 

que  se  retrata  en  ideaj  ^       j 

nías  veráslf.  de  U  fuerte 
que  está  si  4¡e,qu¿e*£S  *&r«  , 

Del  niodo'iqup.pufda  3CC>  «*• 

don  Jua/i ,  B^e  Mfe»^  ae  Wte' 
¿  Y  quiéu  e-sfc  bombee  ps  ? 

;  Moa  Carlos. 

Ya  con  U  ^e*4ad .^sptro  <??•      - 

engañarla;  Uu  ca.b*|kro» 
que  no  ba£f„por  interés      t      I  \ 
aquesto  ,  sino  por  gusto.  t    .         » 
Lindamente,  lo  h<i  $*i«cndado.  apy 

Viv/s^viaicajle  jiel  Prado  ; 
roas  es  p*a*aj&vw»tftiini*»td  -      j 
t\  verle  así»  poique  asombra  #  *  ' 
aunque  ta;n  fácil  ,|>a«¡ece,  •  u 

pen  «a  r  ,qne  ^4ef pqw  t*<  pf »v*eé  , .    . 
una  faotaaine,, **«#*»  sombra,.  .    i 

Ajtfww  tqnür*»  ft*Ue»o  <  •-• 

á  e*ajn.in«c.eft  *tt  aiis*nci*  .   «  l¿ 
tan  peligrosa  es  pe  Reacia. 
¿  Cómo  se  ilanu^í.  i.  t         .     .  d  i 


6* 


■  >  í; 

(1     M. 


Dar*  Carlos. 

Don  Dieg9 
de  Lona. 

Doña  Piolante. 
¿Eso  puede  ser? 
M)oj9  Carlos. 
Con  Dios  o*  pode»  quedar , 
que  yo  os  quiero  dar  lugar.  * 
para  que  tnabeis  de  leer. 

ESCENA  VIII.     '. 

Doña  Piolante  y  QuUertdí 

■  f  ••-,•.-     ■•»•  .?• 

i  DefaFiolanie. ,  n  n<»iq  :.\ 

Dame  sin  tardanza  alguna,;  ¿  ,,¡  .•  ■  ,i 

el  manto;  ?,  i.  -:.  , 

•  !  Quiteña.  ,  ,.i  ,.#     ,:> 

con  ¿1?         •:  •  .   .     ■         -.  A,¿  0.i  - 
;    Xhna  Piolarte.  \ «rT ..»  :  i;ff,  . 
.  '.»,To»Uaujo>de,u€r.>ltir|(,|,B  .\  ft, 
hoy  &  don.  Diego,  eV  Uinft,  .,■•;.-  r>|  ..;', 

¿Sinconofiatfo?.  t     .  4 ..  Mr,,.)./f   rím 
.      Doña,yiola,nt0r\  ,...n--..w   »í> 
'    ¿<Mi*»POTM  ¿  ,  ,r 
que  si<*balWo«*f        m,t  .f:r»n  i¡;* 
por  fuerza  será  corte**,;,  ,  f,  ,  < _M1,n  Y 
fde  pensamiento*  acorta,  ,,,,  fl.i:H]f  t  ', 
'  :  tQuitieria*        .,  a-ñu«p'¿;  > 
Tu*  dwfl&fita*  wán   .,,  [,bi,wi,  , 
que  todo-  c*  mentiras  lpeg(f*,n  ,  r 
*!,:.        ./     Qofa.rioiarHe.    íy,  .,,  ,  %;,   * 
Bueno  es  eso  ¿si don  Djego.u;  ,  .,  , 
quiere,  yo  **?&* 4on.  J«an.   ,  .V*.  o; 
t      * 


j 


/ 

66 


'  ESCENA  IX. 

Sala  bu  casa  aa  don  Díego. 
Don  Antonio  j  dpn  Diego» 

4  .   '   Dor*  Antonio*  ' 

Astrólogo  wceknté     »•• 
«oís,  divulgado  >a  de  ^gwiAe  o*  gesto  : 
en  Madrid  no  he  hallado 
hombre  alguno,  á  «(ufen  nó  le  haya  contad» 
mil  cosas T  sea  j«stof,ó,npnsea  justo  ; 
por  Dios  f  don  t>¡ego ,  que  el  mentir  es  gusto- 
Al  punto  que  de  vosW  aparté,  luego 
fui  á  la  caía  del  )**g&V  "'  :I  '         * 
dfgelo  á  dos  mirones ,  .<»»"»"•       l 

que  es  lo  misma  llamaos  á  pregones. 
SalHte'ílrf,  i  ^títréme  en  los.  cor  rales 
de  las  Comedias  ,  donde  '  '  •  ".    » 

la  mas  oculta  cosa ñb  lie  ateo nde : 
pasé  adelante^  *  aquellas 'enítro  esquinas 
de  la  calle  «l*btó/:>*  «**«*>• 
á  quien  por  nombre  WJiado 
una  discreta  dama ,  mekrtfcle*^  -     * 
de  varones  ilt»r*eVi  primero  , 
fní  á  fiante*!**  **\'Y  habia 
allí  quien  por  Astroidgo  c»? tenia  ;   ,. 
y  como  sino  fo*ft,on  i:  ín       :  ' 
yo  quien  me^^  todos*  lo  Mipkr* , 
(  ¿  á  quién  esto  né>*atfnvífti  ?  ) 
*  por  verdad  me  CoiíWaiW«Hl  iftttitfrá  : 
mas  lo  me*ft*de  todo  wa  tuerto  'i 
sino  que  entré  Vn> tos  -trucos,  donde  estaba 
nn  hombreare  contaba  <•••«•<  / 

cosas ,  (&&  W-  ÜíiWa  Visto    -.  » 


•    <J7 
hacer :  no  sé  t  por  Dios  ,  como  resisto 
la  risa;  no  podiendo* 

sufrido ,  empecé  á  hablar  ,  contradiciendo , 
de  tantos  disparates  enfadado : 
levantóse  enojado , 
díoééndéme j  Si  usted  no  le  conoce, 
yo  sí  muy  bien,  y  sé  lo  que  aquí  digo 
de  buen  original ,  porque  es  mi  amigo. : 
Tanto  una* -novedad  "Madrid  esfuerza  f 
que  mi  mentira  i  a  cref  por  fuerza. 

'  Dohs  Diego. 4 
Bien  lo  habéis  ponderado. 

:<  ¡ESCENA   X.  «v 

Dichos  y  Morón. 

Moran.     x 

4  ...  \  .     Una.sefara  u 

de  angostó  talle  ,  y  de  cadera  ancha , 
con  mas  cañas  ,  que' carro  de  ía  Mancha 9 
á  quien  el  manto  sol6  deja  fuera 
un  ojo ,  que  le  sirve  de  lumbrera,    ' 
dice  que  hablarte. quiere. 

1    •  Don  Diego. 

I  Muger  ?  ¿  quién  puede  ser  1 
Don  Antonio* 

Sea  quien  fuere  j 
di  que  entre. 

\  Morón. 

Ya  está'dentro  de  la  sala;  ' 
%        Dóh'biego. 
Por  Dios  9  que  la  fachada  no  es  ianf  mala; 


j 


69 

ESCENA  XI. ' 

Dichos  t  doria  Violante  y  Quitcrfa. 

Doña  Violante. 
¿Quién  es  de  ustedes  ei.  señor  don  Diego? 

Don  Diego. 
Yo  soy »  señora ,  que  á  ofrecerme  llego 
á  esos  pies ,  si  merecen  obligaros 
mi*  deseos. 

Doña  Piolante. 
Solo  quisiera  hablaros.. 
Don  Antonio. 
Pies  yo  despejaré.  Desde  aquí  quiero 
\saber  que  encanto  es  este.  Retirase. 

ESCENA.  XII. 

Don  Diego  9*  doña  Piolante  y  Quiteria.  , 

Don  Diego.   . 
v  '  Lo  primero 

sentaros  ha  de  ser  t  y  descubriros. 

'         '  Doña  Violante. 
Por  cansada  rae  siento ,  y  por  serviros 
mg  descabro. 

Don  Diego.  ,     ^ 
No  es  bien  que  cielo  tanto 
tenga  oculto  la  noche  de  ese  manto: 
aunque  en  luces  tan  bellas  ,  f 

ante  el  sol  se  eclipsaron  las  estrellas  9 
no  sé  cual  de  las  misa  levantarme 
podo  á  tanto,  favor. 

Doña  Violante. 

Con  escucharme  f 
sabréis  mi  pensamiento» 


Don  Aiego. 

Ya  01  escucho  ,  decid. 

Dona  Violante* 

Ejtadme  atenta» 
Amorosas  estrenos 
no  será  bien  qué  causen 
vanas  admiraciones ' 
á  hombre  que  tanto  sabe; 
mayormente  ,  quien  pudo 
con  ingenio  tan  grande 
merecer  que  la  fama 
en  dulce  tos  le  alabe.  ,    - 

Así,  pues,  confiada 
que  puedo  declararme , 
como  muger,  á  un  noble , 
y  á  un  cuerdo ,  como  amante \ 
me  atreveré  á  deciros 
la  causa  <de  mis  males  , 
que  en  lágrimas  f  y  quejas 

v  rompiendo  el  pecho  salen. 

Yo  quise  bien ,  yo  quiero  ~ 
diré  me  ¡oír ,  que  tarde 
olvida  «filien  bien  quiere, 
ni  es  posible  que  pasen 
por  el  amor  los  ái%$  , 
los  años ,  las  edades  ; 
que  como  amor  es  glorias , 
sus  glorias  son  instantes. 
Yo  quiero  aun  caballero , 
no  os  alabo  sus  partea , 
que  no  importa  deciros 
mas  de  que  supe  amarle. 
Al  fin  de- muchos  días 
me  dejó,  y  se  fue*  á  Plantas; 
que  son  de  un  firme  amor. 


70 


los  desengaños  tales,  * 

Aquesta  carta  suya  t  -•;.*' 

he  tenido  esta  tarde  , . 

|nWft*fiero »  y  testigo 

de  su  ausencia  bastante ,  '. 

á  defender;  la  vida ;t 

que  quisieron  quitarme 

pasado*  gustos  «-siendo 

ya  presentes  pesares.. 

Nació  de  esto  un  deseo.  > 

de  yerle;  no  os  espante,  . 

pues  sois  cnerdo ,  y  discreto  ¿ 

los  estreñios  que  nace 

una  muger  que  .quiere;, 

que  en, las  antigüedades. 

me  previenen  disculpa»  , 

hechos  mas  admirables. 

Supe  que  sois  tap.  sabio, 

que  con  ingenio,  y  arte  t 

esta  dificultad 

es  para  vos  muy  fácil. 

Así  f  pues  a  si  os  obligan 

los  es t remos  que  esparcen 

lágrimas  por  la  tierra  % 

suspiros  por  el  aire ; 

por  triste ,  por  rendida  , 

por  mu^er,  por  amante  r< 

merezca  ver  ,  senór*  . 

6  don  Juan  esta  tarde»  • 

fian  J)is$Q: 
¡'Qqién  en  el  inundo  ha  pisto      ,    vp% 
suceso  semejante !  t.  if 

No  seque  hacer  Señora,    .  ,.■      '. 
no  es^  ra$on  que  -os  engalle, 
quien,  serviros  desean.;  .  >  <,  > 


71 
y  aqueso  no  es  Un  fácil 
como  á  vos  os  parece , 
ni  astrólogos  lq  hacen  ; 
porque  representar 
á  la  vista  la  imagen  % 

de  un  hombre  que  está  ausente, 
es  magia  ,  y.  castigarle 
podren  á  quien  Ja  hiciere,  , 
si  alguno  hay  quejo  alcance, 
porque  esa  es  una  ciencia 
que  ya  no  sabe  nadie. 

Daña  Violante*     , 
No  llegara  yo  á  hablaros  ,    . 
señor ,  sin  iníor  mar  me 
de  que  sabéis  hacer 
cosas  mas  admirables. 
S)  teméis  et  secreto , 
muy  bien  sabré  guardarle  »  .  ,  » 

aunque  oiuger. 

Don  Hiego. 
Señora  , 
por  Dios,  que  el  escusarme, 
no  es  sino  no  saberle. 

Doña  Violante* 
Otras  dificultades 
mayores  habréis  bechp , 
que  yo  he  estado,  esta  tarde 
con  horah¡re,  que  os  ha  visto  ,<  . 
hacer  prodigios  grandes. 

Don  Diego*         ■.<,-. 
I  Que*  bravamente  aprieta !    A,      ;jap* 
así  habré  de  librarme,         • ,!  ,.  /. 
porque  aq»¿  yo  no  pierda    ' ,  ■ 
la  opinión  ,7. ella  calle,     .j  •  .1    .It 
Pues ,  aeüora ,  la  causa   . .-> 


r 


7i 


de  no  determinarme  9  '    v 

ba  «ido  pon  estar 

esa  persona  en  Flandes? 

y  si  hay  mar  de  por  medio, 

no  es  posible  alcanzarle 

los  oonjaros ,  porque  ellos 

no  peuetran  los  mares  i 

•i  por  acá  estuviera ,  ' 

aun<  püiüera  ensenarle ; 

pero  en  Flandes  no  puedo) 

con  esto  perdonadme. 

Doña  flotante. 
Si  advertís  las  rasónos 
que  ten¿ro  dichas  antes  t 
fueron  qoe  i  Flandes  iba» 
mas  no  que  estaba  en  Flandes  % 
él  está  en  Zaragoza  i 
no  hay  como  disculparse 
ahora. 

Don  Diego* 
Vive  Dios  t  ap. 

qoe  es  apretado  lance. 

Doria  Piolante. 
Si  saber  para  esto 
el  nombre  es  importante  % 
es  don  Juan  de  Medrano. 

Don  Diego. 
Aun 'por  aquí  enmendarse       "  4 
mi  confusión  pudiera. 
No  paséis  adelanté/ 
que  muy  bien  lo, sé  iodo* 
Así  he  de  asegurarme.  ap* 

Si  es  el  que  yo  imagino, 
no  ha  dos  meses  cabalas 
que  está  ausente. 


'     Dona  Fiolante. 
♦         Es  verdad. 
Don  Diego* 
Como  juréis  guardarme  * 
el  secreto ,  m^  atrevo 
esta  noche  á  llevarle 
i  vuestra  casa. 

Doña  FioUmte. 
Y  yo 
os  juro  de  guardarle  9 
siendo  mi  obligación  * 

de  mi  silencio  llave* 

Don  Diego*  % 

J  Morón  ?  Sais  Morón. 

Morón* 
j  Señor  ,  qué  ei  esto  t 
Dom  Diego*. 
Ün  lindo  cuento.  Treime 
tinta  y  papel.  ¿Tendrás 
ánimo  para  hablarle?.  (0 

Doña  Fútante. 

Animo  tengo»  «• 

Morón. 

Áq»t       <••» 
está  el  recado. 

Don  DiegOé   * 
.  Dame 
esa  cartera ,  y  vete.  Fase  Morón* 

Ahora  es  importante 
que  escribáis,  •   > 

DoñaVManteH 

Tfotad  vos.  .   Escribe. 


i  i  )     Fase  Morón  y  vuelve  Á-talir. 


WP 


Don  Juan ,  ya  sé....       • 
Zfa¿0  Viólame. 

Adelante.  ' 
.    Do*  Dtefr* 
Adonde  estáis  ,  venid  . 
aquesta  noche  á  hablarme» 
ó  iré  ciond*  cata»  voa    . 
á  descubrir  maldades. 

Dofta  Piolante* 
Ya  está  puesto.' 

Don  Ditgo*  •.-»•. 

Firmad 
w  vuestro  nombre.       •  «7» ' 

JE>o£a .  Violante. 

<' '    x    Violante.  'Firmo. 

Don*  Diego. 
Con  esto  podéis  iros  , 
y  esta  noche  «aperadle  f 
i)       que  yo  sé  que  i*á,á  veros,      ..    .  . 
Do/ka  Violante. 
.  Don  Diego  ,  el  cielo  os  guarde.  \ 

¡Qué  hoy  don  Jqaiv  he  de  verte!  *} 

¡Hay  djcfra  semejan  te  ! 

ESCENA  XIII. 

Don  Diego ,  Don  Antonio  y  florón* 

Den  D*e%a.  ¿ 

l  Habeisla  escuchado  ? 
Don  'Antonio. 

v  i.   Sí. 

Don  Diego* 
¿Y  habéis  visto  otro  suceso 
mas  gracioso»?  ,., 


Dm^A^fonio^  ? 
»  Yo  05  confieso 

que*  ya  <  perdido  jne  vi  -  '*    . 

de  risa ,  cuando  os  cogió 
•en  lo  del  mar.    '    *' 

-Don  Diego., 
¡  Qué  segura  '  *; 

vino  de  mi!      .  -.,  ..  ,  . 

.  Moren,  .  /;, 

I¿a  .ventura  •» 

toda  estuvo  jen  qne  nombró     .    > 
á  Don  Juan ;  ¿  y  goe.  has  de  hace?  t 

,    .  [Don  Diego*  .  ,  . 

Por  la  reja  de  la  calle 
este  papel  has  de.  e;chaUes.  T 

porque  si  el  le  llega  á  ver  ,  ;* 

viendo  público  el  secreto, 
por  fuerza  á  su  casa  irá 
aquesta  noche ,  y.  tendrá 
nuestra  burla  lindo  efecto. 

Morón* 
¿Piensas  que  -comedia  es  , 
que  en  ella  de  cualquier  modo ,   » 
que  se  piense  ,  sale  todo?  , 

¿  Si  le  lee  y  no  va  después  ? 

Don  Diego, 
Mil  disculpas  habrá;  en  tanto    ;i. 
mudarnos  loi  dos  podemos  9 
para  que  á  la  vista  estemos 
de  lo  que  para  el  encanto.       Vanu. 


«< 


ESCENA  Xflf. 

Sala  su  casa  db  dow  Ciato*. 

Don  Carlos  jr  don  Juan* 

Don  Garlos.  ' 
Díle  la  carta ,  mostró  ' 
al  tomarla  un  sentimiento 
de  tristeza  ,  y'd«  contento  ; 
de  donde  conozco  yo 
que  os  quiere  hiten  ,  y  pagará 
inal  una  fe  tan  segura 
en  tan  perfecta  hermosura. 

Don  Juan. 
Vos  >  don  Carlos ,  no  miráis 
que  las  perfecciones  bella t  ' 
en  la  hermosura  mayor 
no  dan  lugar  al  amor , 
ti  le  niegan  las  estrellar- 
en vano  Violante  espera 
premio  á  fineza  tan  rara. 

*  Don  Carlas'. 
Según  eso /no  os  pesara 
que  un  amigo  la  quisiera. 

Don  Juan. 
No  sé  que  hiciera  en  rigor , 
ni  si  me  diera  desvelos; 
que  suelen  soplar  los  zelos 
Jas  cenizas' ,de  un  amor. 

Don  Carlos.' 
¿No  os  ¿ansa  melancolía 
)a  soledad  que  pasáis? 
Don  Juan. 
La  soledad  que  miráis 
es  mi  mejor  compañía. 


Don  Capíes. 
.¿Qué,  a)  fin  iudie  ha.  de  saber 
la -causa  que  preso  os  tiene? 

Don  Juan..  . 
El  callarla  me  conviene; 
creed  9  si  pudiera  ser  , 
rompiendo  tan  gran  .secreto, 
saberlo  en  el  mundo  dos, 
el  ano  fuérades  y  os: 
mas  ,  como  amigo,  os  prometo 
c^ue  no  lo  puado  contar. 

Don  (¿arlos.  < 

La  confianza  es  graciosa,       «li- 
cuando no  anda  otra  cosa 
tan  pública  en  el  logar> 
Por  daros  la  compañía 
«jue  estimáis ,  quiero  dejaros    : 
soló.  ^  Vau*t 

ESCE1Í\XV. 
'  '       Don  Juan. 


iT? 


* 


t  ,  i  Con  qué  be  de  pagaros 
tanto  amor?  Vén  y  noche  fria  / 
estiende  el  velo  -que  dio 
en  triste  funesto  empeño  , 
negros  sepulcros  al  sueño; 
muera  el  sol,  y  viva  yo.  (  i ) 

i  Mas  que  es  esto  f  <¿  no  es  papel 
al  que  está  en  el  suelo  ?  $/. ' 
¿  Quién  pudo  traerle  aquí  f v 
Veré  lo  que  dice  en  él. 

Lee.  '   Don  Juan ,  ya  %é  dónde  estáis  , 

•  ■  ■■■■ 

{  i  )     Echante  un  papel. 


j 


y¡9 

penid  esta-  tooéhe  d  ocrme. 
¿Vela  c!  'pensamiento  ,  4  ¿tierme?  ' 
¿Ojos ,  qué -es  lo  que  miráis? 
Violante  Fa  filena  dice  : 
lio  duda-  Carlos  contó 
que  estaba  rn  su  casa  yo; 
¡  hay  suerte  más  infelice! 
i  Qué  Carlos  me  lia  descubierto  ! 
Sí ,  bien  clafo  me  ha  mostra'do 
q*e  está  inuy  enamorado 
de  Violante*;  esto  es  lo  cierto*/ 
y  aun  él  me  trajo  el  papel. 
i  Qué  pena  ámí  pena  iguala?* 
porque  dentro*  de  esta  sáía     * 
nadie  ha  entrado* sino  es  él. '' 
¿Qué  puedo  hacer?  si  no  voy 
á  vella  9  mas  arrtevida  , 
•    de  mi  silencio  ofendida  9 
publicará  donde  estoy : 
pues  si  ya*' sé  fia  de  saber 
que  estoy  encubierto  aquí, 
mejor  lo  sabrá  de  mí ; 
*  qoe  de  rdodó  sabré1  hacer  9 
que  quede  mas  engaitada 
con  lo  que  la  he  de  contar, 
que  es  muy  fací?  de  engañar  ' 
la  muger  enamorada. 

ESCENA  XVI. 

SAtf  XV  CA«A  DB  VjOLAKTB, 

Doña  Piolante,?  Quiteña  con  luz  en  una  bujia. 

Qui  feria. 
¿Es  posible  que  has  creída, 


que  baya  da  Ve»fr$  casa 
en  esta  noche  don  Juan, 
y  no  creas  que  te  engaña 
tic  deseo?  ¿Cómo  puede 
venir  quien  de  leguas-  tantas 
boy  te  ha  escrito?  - 

Doria  Violante* 

Necia  es  lis: 
¿quieres  tú' con  tn  ignorancia 
poner  límite  á  las  ciencias, 
que  tanto  poder  alcanzan? 
Como  no  haya  mar  en  medio,* 
eso  es  cosa  averiguada  , 
que  vendrá,  mas  no  don  Juan9 
sino  sombra  que  retrata* 
al  mismo ,  de  la  manera 
que  allá  estuviere. 

.   ■  ■       ^  .  ■*'*.   --  I-    . 
Quiteña. 

"   l  y  fluf  Mcli. 
de  verle  así?.   .      ,  ' 

>  ,y    ;       Dona  Violante. 
Sojo.  verle; 
y  na  me  preguntes  nada, 
si  4°  «abes  que  es  amor: 
que  ya  sé  que  ba y  muchas  damas 
que  se  entretienen  en  ver 
en?  que  .los  ausentes  pasan. 

Quittria. 
¿Y  cuando  fuera  posible 
el  verle  ¿  no  te  ea usara 
miedo  pensar  que  era. sombra f 

Doña  Violante: 
'  Ningún  temor  nie  acobarda  % 
animo  tenga. 


» 


«r 


QúUeria. 
Yo  no. 
Doña  Piolante. 
Mira  que  á  la  puerta  llaman} 
toma  eaa  1»*,  y  *brc  presto.     - 

Quiteria. 
La  color  tienes  turbada : 
¿  bas  creido  qae  es  don  Juan  ? 

Doña  Piolante. 
No  lo  creo ;  pero  acaba* 

Quiteria. 
Yo  voy  á  abrir.  .  Va$t. 

Dona  Violante. 

,  ¡  Qué  no  intenta 
telosa ,  y  desesperada 
una  muger !  ¡qué  de  cosas  . 

sabe  prevenir  quien  ama!     . .   , 
no  bay  al  amor  imposibles  , 
todo  lo  vence,  y  lo  allana» 
como  es  ¡Dios.  ^  .        í} 

Sale  Quiteria- 

*  ¡Jesús  mil  veces! 
Señora,  verdad  es  clara 
el  encanto  (muerta  vengo); 
don  Juan  era  el  quV  llamaba     ' 
á  nuestra  puerfa 

Doña  Fiolante. 

¿Qué  dices f 
Quiteria. 
Que  está  dentro  de  laaalav  •   •  ■> 
Dona  notante.  • 

Hasta  ahora  mas  valiente  * 
y  mas  animosa  «staba ; 
-  ma«-  ya  en  saber*  que  es  don  Jma 
--estoy  medrosat  y  turbada» 


81 

...  .  ,<dB$GE«A*XYH;-*.  ¡'  ».. 

Dichas ,  r  don  Juan. 

,  '  * 

Don  Juan» 
Violante,  dame  los  brazos. 

Doña  VicHartU* 
Espera,  don  Juan  ,  aguarda; 
detente  ,  don  Juau  ,  espert.  '"  '  > 
Doú  Juan.  '■  *; 

¿  Despaes  d»  ausencia  tan  larga 
de  esta  suerte  me  recibes  ?  "l  •  •  f    ' 
l  Y  de  esta  suerte  me  pagas  •  ■ :  •  •  •  i 
venir  á  verte  no  mas  f 

Quitcria.  i 

Bien  claro  nos  desengaña  ,        •   » 
que  viene  no*  mas  de  á  verffe.       * 

Don  Juan» 
¿  Qué  dices  ?  :  ( 

Doña  Fiolante.  { 

¡Estoy  turbada! 
el  cuerpo  me  cobre  un  yelo , 
y  t\  corazón-  se  desmaya.      \,  ^  ¡ 
Don  Juanr  ya  veo  que  viene* 
¿  verme  de  donde  estabas  ,         r 
vuélvete  presto,  que  á  mí 
haberte  v(itio  me  basta. 

Don  Juan.    .  ,  i . .    ..  / 
Si  por  mi  fingida  .ausencia 
;  astas,  Violante,  enojada, '   .      ; 
escáchame  las  disculpas.  ^v; 

Do.fta.fiolant* 
■Jfi|  pitnjo  qtfe^ttanes  hartas  | 
Vete  9  y  déjame.  :     ¡i  ¿í>  '/  ; 

Doatfuan\ 
.     »k»,  SiiUtoy 

6 


1 


82 


sn  MadriA  por  ciertas  causas....;  y 

c    Doña  Piolante'. 
Ya  sé  las  causas  que  son, 

'  ZJo/i  Juan. 

Sí  en  este  papel  me  llamas ... 

Quileria. 
¿Quién  se  le  llevó  tan  presto? 
aquí  algún  deinyooio  anda. 

,    u       DojU*  rioltutfe 

Yo  te  Manijé  por  pensar 

poderle  hablar*  moa  «»•  tas****  - 

mMmbacipu  ,  que  no  puedo  i     -  / 

bien  verás  que  no  fue  fal^a 

mi  volpntad,  poes  <|Aie  b«fc>  t  ^   . 

diUgsjwU*  ¿an  eslrauas. , 

Don  Joaní 
Ya  sé  que  tus  diligencias 
han  sabukXtoáfitó  pasa-; 
por? «so  vertió  yo 4 "verte. 
« •      '  <  ÓaHertw*    " 
¡  Qué  bien  dic^s*! >q«e  fa  cansa  * 
del4»a>ber  venido-,  l^c  •  *     *  ,: 
tu  diligfeftttta.  •       **'*>  >l  '    •'  ' '    - 
£fci**¡J^o7í*>f1íl  'jJ-        v 
;-    IWlfrstfihiy  i;*ü    • 
vuélvete,  y  ééféW*  Vía. 

*'J!  #6*  ¿tóitfct-  ; --í  -'  V  ■*- 
¡  Qué  btefe  fingí*  qm  4et  4ng«ftti* ! 
Dame  los- twfeW*.      .-f  "i:i«! i.i-v. 

t>*¿    ...  v^.l^s  b|a«^f     RkCirándo*. 

¡Ay  de  ttlí!  .itf.i-.v-   %  . 

X  'Detéutc  y  aguarda.   . 


Doña  J^Mante. 
Cerrada  eftnht  aposento 
estaré ,  ua&ia  j^ue  te  vaya*» »        (  i  ) 

-jbob-  Joan»  _  * 

Cerró  la  puerta ,  no.  quiso  - 
satisfacción,  porque  airaba 
de  ver  que  estaba  en  Madrid  » 
ninguna-  respuesta  aguarda.  * 
¿Quiteña? 

Quittri*.  s 

Señor ,  detente. 

Don  Juan*. 
¿Dime9.qúé  ha  sido  la  causa...... 

Quiteria.    :   -V 
¡Mas  qué  he  de  pagarlo  yo }  ./ 

Don  Juan.  :        '  . ' 
De  su  enojó  ?  '' 

Qultertn. 

lío' sé  nada;        -    fc 
vuélvete,  y- déjanos  ya, 
sombra  ,  ilusión  ,  ó  fantasma.       (  a  ) 

Don  Juari.' 
¡Hay  suceso  mas  notaWé»4"  tuí' 
l  hay  confusión  raras  estrada  ! 
¿quién  vio  tantas  turbaciones» 
penas,  y  desdichas  tanrta'rf v  {"  J 
Carlos  la  culpa  ha  tenido»'  !~  '* 
Carlos  ha  sido  la  causa.       «  sx'''y 
l  A  «¿uién  he  de  responder ,     , 
ai  aun  mismo  tiempo  me  Hastía  * 
con  mil  quejas  un  ántígo,  *'^' 
con  mil  aeios  aira  dama  ? 

*  .  i  •  ••^•ATLi ^ 


Si 


( i  >     Éntrate ,  y  citrra  lápuirt^ 
(a)     Mntraéi  hu/end*     i, 


«* 


<;>  ACTO  TEfoCÉRO. 

ESCENA  PBIM£RA. 
Sala. encasa  dkLiqhard*. 
Doña  María,  don  Juan, y  Beatriz* 

Don  Juan. 
i  Pues  no  me  darás  los  brazos  ,  :t 
siquiera  por  bien  venido  ? 
i     ,     Doña  María. 
'  Si  9  clon  Jua.fi ,  puesto  qué  han  sido 
del  alma,  y  la  vida  latos..    .     .} _  ."" 

Don  Juan. 
Dichosa. U  ausencia  fue  , 
si  por  fin  de  su  rigor, 
y     v  xner^gp  tanto  favor.  s¿ 

Doña  Marta. 
Mas  mereces  tá. 

Don  Juan.  v 

'  tío  sé 
como  jne  atreva  á  pedir, 
usando  de  esta  licencia ,  > 

otro ,  que  supla  esta  ausencia*     > 
.      Do  a  Marta.  ,,  .    , 

¿  ££mp«  don  Juan-  ?  con  decir 
lo  que  te  Agrada.  .> 

Donjuán.  -,l#  ,  j 

Seüora y 

dame  es¿.ciniArpendiente  .,.. 

de  tu  cuello  j  j^rcj^  aírenti ,    •   ¿ 


8S 
al  Iris  qne  «Tanta &>ra.         (  j) 

La  joya  da'rte  imagtaot»  '•  *1  < W 

Bon  Jtáak. 
La  cinta' pido  no  mas. 

.    /tollo  Haría.         •   '*» 

Tómala  asi, -<}tie  vendrá*   *:  "    i 

empeñada  ifc|>  calofrío  j        rJí ' 

pues  de  to  Vuelta  fi¿gída^{v>  uí* 

el  dia  llfgdí  fefczrv    .         -    'i    •:••» 

que  jo  esperaban  .••!>;.   :> 

%<:./       H  i  Don  Juan.     '•»  V'",- 

*.í».:.jfBeatrÍBf       '  '  -J 

no  me  das  la  bien»  venida  •£•    -V 

*  Btaifix.        -">  rf-':  i 

j  Es  hora,,  »r*or ,  de  ver^e !r  •  '<{ 

«    '   <:    Dou  JUan.    -•♦'  "5;  i*» 

Bien  ,  Beatria  f  >bás  pregnntKdé*  ' 

¿  no  me  ha*  4is*o',  y  rae  haá  hallado 

todas  Jas  ndcfees  t  ••  ..  •  ■*> 

«         •  Doña  Mafia*     »   i    x.  i* 

.  .  r r  Advierte  .    ;  ' 

hien  lo  qne  na»  de  fingir  y 

y  de  lo  qne  nos  convierta; >'-¡ 

porque  ya  tai  padre  viene*  ! 

.    -   til        :.»         v 
ESCENA  II.    .  »-         : 

f)ickós  jr  Leonardo. 

,  .   ..  Do*  Juan. 
Xo  sé  lo  qne  he  de  decírr    » 
Dame  mil  veces  tus  píes.    • 


JiJ     Ddlt.unáfoax 


j 


8t 

ttU'4«9NfllM  héWkwfof'   >  ~  oí) 

he  de  tener  *legftáp2L 

y  aun  pienso  que  fué  él  perdeüJj 

porcteuer  el  fuiste  té  ellaii  * 

Leonardo 
¿Tale*  estreñios*  María f y  -     ' 
¿Qué  joya  era?  ■ 

.  •  i  Daña  Mari*. 

Era  el  Cupido        N 
de  diamantes  .'• »  7 

Leonardo* 
•V.         .*■-»■        .  ¿Q«  eso  pasa? 
busquese  en  todsnlacasa;    *    •.• ' 
y  si  seiba^iere  perdido  ,> 
snas  joyas  tienes  »  en  quien  -  »    • » 
valor ,r y  ariete  acrisola,  ■  .  ;•••> 
ponqué, no  estaba  ^eSU  «ola*  .   «.  í 
Dtwo<  Mantaui  «i-,  >  ,,;ií 
Esta  sola  quise  fetén* 
*V&  !    i . r t '  Leon+rda    )\;  ,-r.r  <)\ 

Tanto  tn  pech*  sintió 
.*  ^    que'  te  ptidieae  tí  al  tar  é « ; .  i   ><      ?  ¡ 
qae  no  roe  has  dadojagar 
para  qae  lo  sieota<ryoj>  -.  ,.{ 

y  a  tanto  tu- Danto  enliga, 
qae  porgarte  gusto  ,  luego 
.  lie  de  buscar  á  don  DfcgQV     i  >  sl 

qae  de  la  joya  me  diga* 
x  Beatriz: 

¿Vés  lo  kjue  has  querido  hacer 
(       con  los  estrenos  qué  has  hecho? 
Sí  él  *  a  á  don  Diego ,  sospecho 
que  todo  se  ha  de  saber.  :   » 

Daña  María. 
¡Hay  ota*  peala  !-¡  hay  tafcsv  cruel  jad 


Je  estrella  siempre  enemiga ! 
{qué  solo  en  mi  atavio  diga    > 
un  astrólogo  verdad !  i 

Sale  Leonardo.' 
Aquesto  se  me.  olvida  - 
Beatriz  ■ 
Tn  padre  vuelve, Wñora. 

Leonardo* 
¿Dime ,  María  ;  á  qué  hora        * 
esta  joya  te  faltó  ? 

DéñékMaruá. 
Entre  once ,  y  doce. 
-'  '  Leonardo. 

Así  goce 
to  edad ,  y  te  llegue  á  ver 
casada  ,  que  he  de*  saber 
quien  la  tienen  Entre  once  y  ¿oca* 

.1;....      ESCENAIV.    ■■ 

Morón  |  ou¿  detiene*  a  Beatriz. 

t  >;    .    ,.  Horon-  <  • 
A  saber  vengo.,  Beatrú ,  .         (. 
pues  te  importa.,  cuanto  pasa 
á  dom  Joan  encesta  casa  ,  ,  ,      -> 
que  es,  dar  mas  vivo  matiz 
á  to  engaño,  y. mi  disculpa, 
con  que  lo  sepa  don  Diego  ; 
mas  esto  acredita  luego 
<|ue  tu  no  tuviste  culpa* 

Beatriz.    ' 
Hds  de  saber  que  ha  venido        í 
hoy  de  camino,  y  por  dar 
á  enerar  en  casa  lugar  •  ? 

unas  cactaa  ba  fp^idoj  .1 


•fr 


i 


90 


ana  y&fn ';  «pt  to4f*  -    .% 

doña/  ¿arfe  i  don  Juan*     •  '    ; 
hoy  á  preguntadle  van       > 
á  don  Ditlg»  quien  la  hurtó: 
avísale  porque  diga  9         '•-rrA 
al  pregón taaaefoY  quien. 

Morón.    •        '  -;r   'iT 

Digo  qué  dwe*  mu  y,  bien  $ 

á  esto  d  ser  mpger  te  obliga;  ' , 

«SCttí  A  V. 
Sai,a  bw  c^a*  ng  sos  Díbgo. 
Don  Diego  y  dpnx  Antonio.  f  ¡ 

Don^Bhsgo.  » 

*  Huyendo  vengo  de  mí ,  •   v 

qne  no  sé  en  que  confusión 
me  habéis  puesto  $  don  Antonio* 

■\   Doy  Antonio.  .  • 

En  la  que  dijisteis  vos! 
¿Vos  mismo  no  «re  dijisteis  9 
que  esteipdfése  HqqeHa  yo*  f    >.  >k. 
•    JDort  Diego.  "  :  í 

Sí ,  mas  lió  qué  publicarais 
que  era  mago  encantador 9        '•> 
sino*  a*tf*Mt>go  lio  mas.  >     •  •    ' 

U<wi  Antonio.      ■  •    r  '» 
La  fama  crete  *éloa  ;  •  ••*    , 

¿mas  sepamos ,  de  qué  o«  pesa  * 

JD0/1  Diego. 
De  que  no  4>  a  y  hombre  ,  á  quien  dio" 
duda  cualquiera  suceso, 
que  por  ruego ,  &  por  favor  , 
no  me  venga  .i  preguntar 


di 

el  fin  dattfffele»t!«fe  - 
,r  Don  Antonio.   ■ 
¿ ¥•  aqueso  os  «ufad*  t*»tof><    • 

DonDw&*>< *»•»    ' 
Como  sin  oerfasa^fof 
la  res[feieat*  f  toja»  laifo» l 
1     que  en  sacft4¿efloV>«Hi;-ftnWt 
han  ¿¿  forjarte  de  asar  ,    ■"<• 
•      ■    \    .  DomArUamm. 
¿Pues  qué*  astrrtogecacetftd 
cosa  tpie  dije? dtavsed        »••       » 
que  el  mejor  éel  ñauado  sois , 
que  vos  os  saWr*f«*5eW'^H©#'     ' 
'  l  Pudo  inrber  cuesto*:  m*jor 
que  aquel  de  doña  Violas***  ?     ; 
Mi^adeoa»o*ocadi6V 
~y  veréis  «com«  -os-  balgajs»  *   • 

<Dom  Dí*#p* 

No  puedo  alegrarme  yo,  •  * » 

cuando  á-un  potito»  «a*  atormentan 
desdenes,  aelattvy  amor; 

y  ESCENA  VI. 

Dichos  |  doria  Piolante  r  Quíleria  con  mantos* 

t .  .     Quiéerio.     Vi 
Señor  rdoo  Diego»  pSMfldaso» 
l)ablp£0*  quiete. 

Don  Antomo\  .  f 

Por  Dio»» 
que  si  viene  á  <coats«kfrroa  f 
que  llega  á  breo*  .eeáaion. 
. ,-»       Id  ,  áortoólda;»*  q«*  #s  Naaua. 
.    ¿)<va  JPiegav 
Dejad  las  buclas*  . 


A 


Yo  soy 
la  q%e  os  busca  9  y  la  que  vienf 
tolo  á  quejarse  de*  tos. 

Hor  2>iV¿*.  > 

¿  Vos  tenéis  queja  de  mi?    » • 

,        Xfcwlo  Violante.  ,» 

Si  don  Jua»  no  se  ausentó,  :. 
si  estaba  en-  Madrid  don  Juan  | 
¿  decidme ,  por  qué  raion 
yos  no  ne  desengañasteis?    -    > 

Don.  Diego 
£Poe*  poje  «abarlo  yo?  > 

Si  dije  qu*  á  vuestra  casa 
•  iria'como  en  visión »     x      i      •» 
y  después  os  41evo>  él  mismo  *    '• 
seual  es  que  toe  mayor, 
y  mas  poderosa 'fuerza 
la  del  encanto.  * 

Doña  Violante. 
^     Razón 
es  esa  é  que  yo  no  hallo 
respuesta  ;  y  puesto  que  estoy 
desengañada  9  os  suplico .     . 
deis  remedio  á  mi  dolor. 
Don  Joan  está  enamorado 
de  una  dama?*  que  ocasión  i    -  < 
fué  de  quedarse  en  Madrid  %  •  >t 
un  su  amiga  me  contó 
Nesto ,  y  dice  que  en  secreto 
casados  están  tosidos.  *  •  ;» 

Don  Diego.  >> 

¿Esta  muger  qué  pretende?  . 

Dm%a  Violante. 
Pues  vuestro  estadio  alcanzó     * 


n 


tal  fuerce , que  te  aborrezcan 
puede  hacer. 

jDo/i  Diego, 

i  Pluguiera  á  Dios ! 
Doña  Violante.  s   -^ 

Haced  que  mas  tío  se  quieran ; 
que  se  olviden  ,  y  el  rigor 
de  los  celos  los  abrase ; 
mueran,  pues  muriendo  eitoy. 

Don  Diego. 
Bueno  es  poner  en  mí  muño         ap* 
la  cara  de  mi  dolor, 
y  pedirme  i  mi  el  remedio 
del  mal  que  padeaoo  yo  ;  •' 

porque  me  deje ,  me  importa 
engaitarla,  que  si  doy 
otra,  respuesta  ,  en  su  vida 
ha  de  dejarme.  Mintió  > 
Violante  y  tu  amor  9  tus  lelos     '  „ 
mintieron  ,  que  la  ocasión       •    • 
de  estar  don  Juan  en  Madrid 
fuiste  tu,  y  él  se  quedó , 
por  selos  que  de  ti  tuvo.  « 
Si  un:  amigo  te  contó  v) 

otro  amor  ,  mintió  el  amigo  p 
concierto  fue  de  lo»  dos : 
vete  9  y  ríve  satisfecha 
que  te -adora.     . 

.  Doña  Violante  i 
,  Yo  lo  voy  > 

con  Ai  respuesta.  ¡  Felice  r 

quien  tanta  venturav<viól 


«$jF 


J 


ft 


ascENA  m 

Don  Antonio  y  don  Diego.' 

Don  Antonio 
¿Y  quá  la  habeia  respondido 
á  9li  pregunta  molesta  l 

Don  Diw 
Con  equívoca  respuesta 
oréenlo  ¿uy*  he  síde* 
Díñela  i  que  U  quería 
don  Juat»,  y  la  despreciaba, 
por  aolo  ver,  ai  le  amaba » 
y  aquella  «aperiencáa  bacías 
coa  esto^si  ladeaprecia,  * 
•  ha  de  pensar  que  la  quiere; 
y  ai  algún  favor  U  hiciere» 
mas  engañada,  y  ama  necia, 
ha  de  pensar  que  «a  amor, 
y  cnu  ealo  no  vendrá 
á  darme  la  muerte.     , 

Don  Antonio* 
Ya 
tenemos  otro  mayor* 
Cuando  á  Carlos  sutil  «tente-    » 
conté  vuestra  astroiogíav 
le  dige  que  le  traerla 
á  ver  uua  ¿ama  ausenta 
á  vuestra  casa ;  y  de  snefft» 
desea  ♦  don"  Diego»,  verás  f 
que  el  muareporounoceroit 
y  yo  padeaco.la  muerta/."  -*»'  • 

■  .  Don  Diitgo*   . 
Mirad  si  uno  solo  así 
o»  cansa  ,  lo  que  serán 
tan  toa  juntos.  ■   •  * 


Dicho*  x  don  1Oatfosi 

Don  Carlos* 

Aquí  están,    .  k  «n?« 
los  dos  |  venturoso  fui. 
Se$or~don  Diego»  yo  soy  ■, 

un  muy  grande  aficionado 
vuestro,  y  quien,  mas  ha  estimado 
serviros,  ,  ,    .  ,    , 

Don  Zbsff*. 
Muy  cierto  estoy 
que  tengo  esa  obligación. 

.  Don  Carlos.  .  t  . 

Aunque  pudiera  valerme 
de  amigos ,  quiero  atreverme» ,\ 
fiado  solo  eu  razón. 
Un  día  á  Ja  dama  vi     »  t 

de 'ton  amigo;  y»  hice  mal 
de  rendirme,  aunque  leal 
mi?  misma  pasión  vencí. 
Los  ojos  fueron  despojos, 
del  alma  sin  guato  mío» 
porque  es  un  cierto  al  ved  fío 
do-{M»r  sí  este.de*  loa  ¿jos. 
No  fue  amistad  verdadera 
la  suya;  y  yo,  pa>r  ten** 
venganza,  quisiera  b*©er_- 
que  le.  olvide  -$  y  que  •»*  quiera* 
Aquesto  vengo  4  peditos  , 
y  esto  hafeis  de  h*ter  aq#¿¿  _'.. 
tendréis  un  e«fiUva««n  mi 
eterno.  .  .,íí„  ... 

DottDie§a  /  t  .,.;.  ,     , 
¥•  ha  dcaerfigoav^^.v^y 


H 


j 


M 


y  haré  de  inerte  #  cjtrt  6»  quiera 

esa  dama ;  proseguid 

vuestros  amores ,  servid  , 

que  aunque  altiva  ,  ingrata  t  j  fiera 

esté  los  primeros  días , 

á  muy  pocos  os  prometo»    '       l 

que  yendo  haciendo  su  efecto ¿ 

le  tengan  con  tas  porfias* 

Don  Corto». 
To  esperaré ,  hasta  vencer 
este  imposible  de  amor. 

.ESCENA  IX.  .  > 

~  Don  Diego  y  don  Antonio.     % 

Don  Diego. 
¡Hay  ignorancia  mayor! 
¿  qué  esto  se. llegue  á  creer  , 
sin  mirar  que  es  fingimiento»? 

.    Don  Antonio. 
¿Pues  en  lia,  qué  respondiste 
á  don  Carlos  ? 

Don  Diego. 
¿No  lo  ois te? 
pues  hice  el  mismo  argumento 
con  Carlos  «  que  con  Violante* 
Dígele ,  que  su  porfía 
siguiese ,  que  yo  le  haría 
después  venturoso  amante» 

Don  Antonio. 
¿Y  cómo  saldréis  de  aquif, 

>.     Don  Die%e~ 
Porfiando  aicansará 
el  favor,  y  me  dará 
todas  Ui  gracias,  a  mi  |  : 


pero  bendito  ¿ea  Otos;  1  liti 
que  libre  un  nato  me  vé©  »•  •■'» 
de  necio*  j  aun  rio  lo  fcreo. 

•  »  '                          •  ■  • 
'  .    ESCENA  Xw .»• 

4  'Dichos  jr  Leohardá.^ 


97 


Lpenardo* 
Auqqqe  eatéu  judíos. 1«4  ¿04.  ¿  r 
hablarle  aquí  solicito.       : .  • 
Büscág^pos.  \engo. 

^     Dop  Dieta.  r,i 

se  cansó!,     ^  »  ^        r..i  »)>■;•>  r. > 

;    ,  '   Zhn.¿to(owo±A  i    \  -i 

M*s  que  por<>««*0  o^ 

lie  dijo  ¿no  «%dy,ben^ittt.ii^;  *,, 

¿Señor ,  pues,  qué  ine.  majidaiéf 
¿  bay  efl  ^iué., pueda  seftjritt6i?d¿ 
,  '    t.  Li$nardó*      :,  2,  L:t 

lo  be  <de  bace*  ,flso  ¿  «y -d*  jando- 
loa  cumplimiento»  ptottjót,  v  ^ 
aabreyM  4ou;>J)iego  í  q^ncohefhrvj 
uoa  joya,  #  foa  pei,dia>  ü  i  j 
«ii  mi  caja;, que  por  g«*to  f,„> 
ma&r  que  por  ^alor  ,  loveatinMií 
quisj^ra^que  n^dijerais  ^ 

donde  .asta  >  yrasf  oa  suplico,»  .  , 
que  me  estudiéis  toa  cuidada  , 
ésta  figura-       .  Y 

;  Hase  visto:  k..:.  dpü 
confusión  ^mo  la  toía! 
Si  algún  $  táftutifo  unjo  ,' 
7 


j 


99 


será  impostóle  que -deje   • 
de  averiguarse,;  pendido-         «  . 
estoy  *  que  el  bnce.es  fereaao? 
pero  sin  causa  me  aflijo, V 
pues,  con  nadie  importa  menos  ' 
la  opinión ,  que  he  pretendido, 
que  con  Leonardo ;  esta  tea 
toda  la  verdad  Ks  digo  í 
y  q«#  no  sé  ciencia  alguna  *  ' 
que  ei  quedará  agradecido  / 
a!  desengaño  í  mas?  quierto' 
perded  del  crédito  mió  t 

oifaa  ¿¿ganar  á  un  viejo  noble; 
en  esto  me  determino.) ' 
Señor  Leotfardo,  escuchad ; 
yo  <tto*e 'algunos  principios 
de  astPé4ogífc  ,  es >érd4d t  v  ; 
de  donde  Idtné'  mótiVo 
pauat«B*Poplft|oit  iIJi  *'UJ  ' 
acr«d¿M*d«  amigo* p  -    .*•' 
tpdos  dicen  q*e  kMé, 
j*r*  itingW*  lo  %é  vi*&;»<;     ' 
y  es  verdad,  powhd  i*  tirito  ' 
conj^  a  Jgo«a  t*£ne  tficho.  - 
porqtíe  entonces  ttb  fmpbttó 
con  pee»  ca*sft  frtfgirlfrf 
utas  fcoyi  que  ya*  fíq|ii  Toras  * 

-porque  ftfr penséte' qutf'  estimo    ,x 
ina*"fe  opfirSonVqa*  «í  trataros; 
vemí»dv  l&  verdad  *©♦  digo/ 
Yo  rio  sé  de  astroíogfa f 
tanto  i  que  pttéda»  deeiros     * 
Q>  esa  foya. 

Xvando~y<f  * 


93 
jamas  bublerA  edicto 
noticia  de  q*¿e  vos  sois  v 
bombre*  áéct&\  babero*  iU\<y". 
babkr  c©tf;fáfcr¿iP  humildad/  ? 
baátiá  jterár  tí abe*  «reído1  '»''   'V 
que  ttfe$l>lftftefcfcK<<f  ['A  *" '  :_ 

qué  iw'**  tfad*.  t  »*•*  «  cbi.c  i4 

os  acredita  «fftBJj^í^oiq  »b 

asi  <&íto'l¿rio*^<*3afe§frV'' 
«í^^o^W^^^iicVygíífóSt  »»M» 
íruelvá  por  étMf  *'a#tMHglf  y  'ÍO 
ilo  **>bo*erSÍfP  *"«*  ólf'.l-onp 
JDo/í  Antonio.  Eí°Í  fií / 
«*ft*ltak"$rist0j  ap. 

cjüO  le^i'e^r&liW  vie^o. 

&  yo  habieoa  jne^jdo 
ese  nombre*  Jo  os,  digerí     •  ^  ' 
^lílVfeflSifv"  ^  ,«vo-wU  t  cuiUai 


ío. 

;  <>Ot#a  f ve»  digo*,*  ioq mí 
que  si&áttiéisitttátáte^W  o^ 
os  alabajtoHrvj  «ifcifti*fiu>  obut 
esa  b^tfttfad^rttaWtctetfetd^b 
qee  ebé#o«i»brt^tfé  ^  #í  díjb»  ** 
que  mtt§  §ab*3*«B<<<f  qii&J$i*fti>f 
pues  JfegtfUi  éátfríHo^cfaMfci  '»"q 
Y  v«hrtem<faré<tttresnV««t*^  'if* 
era  la  joVa  IjfflnCtipido»'  oianíl 
de  diaflWWI**,:¿.:.¿'-i-.a.:,MÍ  16  * 
* 


100 

qii^  quiere  ipntgriiit  «A  jarcio*  t 

¿  Cómo  tengo*  de  detir,  v; 

qae  en  mi  vida  no  b«  ¿ajutb»  ,- 

si  son  los  planetas.  ;SÍe$e»#r.:. 

ni  ai  son  4oce\4os¡  signos  , 

si  el  jto^iaGoqgaarneccn , 
<  si  anda  el  sol  porf  **  egipcio» 

.   por  U  eclíptica  r  á.por  dónde  ?    . 
\  ,ir„  •   Ltamardo. 

Don  Diego,»  aunque  ba^eu .o/aerido 

de  propósito,  ¡gajo-c»?  a  * :  i  r:>s  ;i.i  v 

.verfcfl.enWo,  ba>eu'4¡c^9t_/. 

qtíe  también  yo^lffftaaft  un  »ofp. 

Olvidóme  d^i^|)n  T.-íj  E7. ..-  / 

qoc  faltó  entre  on«pe^HI  4<WI  <>n 
,1a  joya.  /     -..^    ?((\ 

j  fin.  qné  l*bev¡  t*V>  i  s  :  p  " 
ine  pusisteis  don  Anl^nio ! 

Dicho»?  toorortliiu  h¿£¿ ^¿¿#.  J?*Vf«  «fw^ 

Importante  es  rt  j*ftso  ; 
yo  lleso^Soton*  e^ucbaV 
todo  caattftifaa  sucedido-  l     !     » 

eí  ,(fl?lf  **»**  an^íwiaiifdSMí     •} 
%do4^iian.«  wi.*as*4»*  aM*.   „  ., 
por  ¿¿yor  Je  tttowfc  Cupido  > 
de  d¡*9J»an*r*t  coi*  st<  pacte*  /   . 
fingía  haujftrsel¿:perdid0.i  »,    , 
y  él  también  fingió  venir     •     - 


\ 


i  busaaYle  de  ¿amino  , 
cdn  unasearfa's. 

t  '  -Dd»!  Diego. 

••*»  •      '  ;  ¡Morón,  J 

á  qué  buen  tienrpo  baá  venido! 
Perdonadme- que  un  cariada'         * 
la  respíiestfr  ime  ha  traído  * 
de  mi  WfcátfOque  me  importa.      r 
Leonardo.  l 

Disculpado  estáis  conmigo;         '* 
¿  pero  qilé  me  respondéis 
de  esotro  ?  ' 

Don  Ditgo. 
Yo  he  pretendida'     '' ' 
disimular  hoy  con  vo*  -'      » 

mi  estadio ,  por  rio  deciros'  '       * '* 
Cosas  qoe  óVbáh  de  pesar; 
mas  puesto  «jue  habéis  querido/   '■ 
^  saberlo,  yo -esta- mañana  '  i» 

toda  la  figura  he  visto;    "  '  '  '  ' '  '* 
que  su  prima  me  avisó 
de  como,  le  babia  pérdrrfo. 
<Un  hombre,  que  en  vueslraca^aj 
boy  vestido  de  camino 
ba  entrado,  tiene  la  Joya  ; 
y  pues  tantd  buhéis' querido 
saberlo  ,*  Úé  me  culpáis  ,  V         •    {' 
si  os  pesare  dé-  lo  dicho. 

Leonardo. 
¡  Lo  que  la  necesidad  qpjf 

hace!  aqueít  hcímbtc  que  vino   '    * 
de  Zaragoza  ;  ese*  bnrtd  r  '  *},í 

la  joya ;  ¡  mas  que  mal  biso  ».  ¿ 
naturaleza  en  poner 
en  aqutt-iálra  este  vicio  $% 


A 


102 


He  de  buscare;  y  tararí*}  f     •  i 
aunque  con  otro  ¿deajguiq        «   . » 
para  pedirla  f  sin  que  «i 
(    .eche  de  ver  qn*  he  sabido 
su  flaqueza,  $  papa  eafe     . 
Habrá  trescientos  rcaiaipos»; 
¿  Veis,  don  Piafo*  $oj*p.  ya, 
nunca  me  enfado,  ¿5ii4¡g4        . ., 
una  vea  /este  h«n>b|VB  sabe , 
es  cierto :  ab^ra  c*  jann^c* , :    ,    ' 
que  vais  á  verme  asta,  noche  f 
que  habéis  (Je  cenar  conmigo*  Fas** 

Yo  ire^  á  serviros  ,tsen>r. 
¿Don  Antonio  $  bebéis:  oído  * 
cuento,  cqrae  es|e  en  Ja  vida? 

Don  síntefrio* 
A  lÍfflP*9  lte<$ó.«fca,ví*o  ,    ...        „, 
que  si  n^,  ejy^j*  apretaba     ' 
notablemente.      \  \  , K  , 

-  •   x 

.|SCENAX¿(..4 
Dori  0¡é¿6  f  don  Antonio ,  'Morón  y  Ótaftez. 

por  esta,  parte  (Jon^Ejig^, 

allí  mi  señqr^e^»!^  ñ  .,-    ,     (,   > 

P^bravq  aprjftto  salí;    :•..•/•>;. 

pensaroien^^ftjp^irlft^^.,,--  .,,-. 
la  joya.?;.:  |4,:  .  ...  r   ,..sl¡     G>.  j 

•B&roq-r'»  i.:i¡»/:'ir!..ii 

Et  enredo- e«  lin/Jof^  .  ,   „.. 


si  el  le  prendetpojr  ladronv 
ó  por.  yerno,  que  es  lo  arisne>¡  ;; 
pues  de  la  hacienda  ,yh  vid*  * 
entrambas  apn  enemigos.  •    / 

OterU*. 
El  es ,  yo  llego»  Sefinr. 
don  Die^o ;  por  quien  se  dijo : 
lo  de,  ó  que  lindo  don  Die4o%-    ?» 
pues  sois  ol:don  Qiago  tiaday    i  : '' 
é  suplicaros  me  Atrevo      »»•  •»!       ^ 
no  poco,  por  b*ber  sido 
criado  dietüna  señora  » 
que  vos  a» ai*;,  y  yo  sirvo.  •■»•- 

Zfa/i  Diego* 
Ta  os  conozco;  ¿quéquercU»"'?  ,\ 
fcuen  Or»ueii¿  ,.    -.fi- 

QtaTiez* 
•     Yo-  be  vivfido 
macho  tiempo  muy  reglado, 
con  cqya  cueuta  be  podido , 
para  pasar  mi  vejez  *  . 
juntar  algafedlntrilto)    "  <r  .-""• 
quisitreiiraienV la  montada,  ) 

y  por.  tnmer  tos  peligros-*   •  '  •»* 
que  á  un  hombre,  y  mat  *#n  dinero  9 
suceden  eh,  loa-  daroinos , 
y  por  ahorrarme  la  «bita  ; 
humildemente -os  euplieoV  <•  < >  *    )•  * 

vque  me  enviéis 4  mi  tierra, 
por  encanto  9  pues  yo  he  «ido  •  *  S 
que. llegaré v  ai  queréis ,  -    '  .»  « I  < 
«a  un  instante  muy  chicos     \  %  •  ■* 

Don  Diego.'  „    |i>#t 

vEsto  solo  me  ialtaba.     ,.  x*p*:' '  'f 


i 


iffl 

Eaje  tttéfttito  v  6  este<hccluco  • 
¿  mim*  ¿oca,  áe$or;: 
y  así  pbr.  merced  te  pido  -  - 
me  le  remitas  á  mí. 

.    Dots  Diego* 
Id  alípqoio  á  pee  vínicos, 
que  ¿sU  noche  habéis  de  ir  \ 
Morola  estará. advertido    . 
de  lo  que  ha  de  hacer*  •  • 

StñoVf 
de  este  Morón  no  ,me  fio. 

Don  &iep>r. 
¿P«ifg  atreyerase.á.  hacer 
mas  dje  lo  que  yo  le  digo >  R 

.  JSGENA  JMI. 

r  Morón  jr  Otañez. 

Morón.  , 

Macho  me  pesa. por  vyo*    . 
feacer,  «ada.;  a>a*,y*4?e  viste* 
c[ue  he  de  obedecer  por  Coerza 
,  fi^miamo. . "   '  .  '  '.'*■  , 

••'CVifíf^  »   .    .. 
Vut$  y»  digo, 
que  no  1*>  habei*  dje  perder, , 
r        Morón.   .       *      • 
?af  flKfc  Meamos  ¿nvgos;    • 
y  lo  que  ahora,  habéis  4e<  tacer  > . 
es  ,  poneros  de.  camíso,  .'..«>  i-  •  •< 
'        botas  v  y  espuelas  ;  si  acaso 
tenéis  algún  papahígo* 
llevadle ,  que  esmeuester  ' .  - 


¿caminar  con  grande  abrigo»    t        , 
porque,  en  las  sierras  de  Aspa     ^  4 
tace  temerario  frío :.  .   v .  , 

aunque'vos  en  esta  vida  .    « 
ibas  veces  habéis  temida'  ,} 

aspa  ,  y  fuego  ,  que  aspa ,  y  nieve.       '-, 

Qtañezi  / 
Mentís  ,  que  no  soy  judío.  v       () 

En  fin,  si  aquesto  ha  de  ser, 
del  «iodo  que  os  significo,  .     s 

habéis '^e  estar  a  la  puerta      (  "r 

de  vuestro  jardfn,  en  Hilo 
'   de  las  doce. 

Otañez. 
Pues  yo  voy 
i 'prevenirme. 
'  *       Morón. 

'-\  Por  Cristo  ?  ap. .  í 

que  esta  vez ,  viejo  avariento, 
*n:  la"  trampa  habéis  caido. 

;  '     ESCENA  XIV.   ,      ,     '  '     '  \ 

SAI*  XV  CASA  X>B  SOp  JüAK. 

Son  Juan  y  después  Leonardo. 

bon  Juan, 

trlegó  el  felice  día 

del  fin  dichoso  de  la  pena  rafa ,  •  ** 

pues  ya  seguro  puejlo.  t 

ver  á  mi  bien  ,  sin  que  me  cansen  miedo 

W«él»B  &  Leonardo  ,  ,    ¿ 

coya  amistad  hacer  «eterna  aguardo» 


105.  .         - 

Sale  fyonardo. 
El  es ,  tiemblo  de  lia  blalle ; 
i  qué  un  mozo  de  esta  cara  t  y  de  este  talle 
hiciese  tal !  A  no  tener  María 
la  gasto  aquí,  por  vida  saya,  y  mía, 
que  no  a*  la  pidiera,  y  he  tenido 
«de  mirarle  rubor  ;  por  entendido 
lio  me  he  de  dar  de  que  él  la  hartó..  To   Tengo 
don  Juan ,  fraseándoos. 

Don  Juan. 

.        '  Desde  aa^uí  me  tengo 
por  dichoso  4  sí  ha  sijd o  '   ' '    , 

para  mandarme  ,  porgue  agradecido, 
ftl  favor  ,  he  deseado 
serviros,  .<..*..      ^ 

Leonardo. 
¡Qué  cortés!  ¡qué  bien  pablado!    apx 
¡gran  lástima  es,  por  cierto /     *    '  l  _ 

que  veneno  tan  vil,  esté  encubierto 
«n  tan  hermoso  vaso  Í 
To  be  venido,  don  Juan^  vamos,  al  caso  ,• 
buscándoos  (  ¡ciego  estoy  l )  porque  he  sabido' 
que  una  joya  ten*^  gu*  hoy,  se  ba  perdido 
en  mi  casa.  ¡  Turbadlo,  ,  ap* 

qué  presto  su,  deliro  ba  ^^esadp  J;  \ 

Don  Juan. 
\  Cielos ,  qué  ¿s^o^u^lje  oidoj.         ^f. 

Leonardo. 
No  digo  yo  que  vo*  Mwsrtenido 
«uJpa  ,  sino  es  aquella  »  «■.,'       '-y  . 

mano  de  .quien  ia  ¿i* beféis. . .  , 

Don  Juan."*  «^'"V  '  /'•'  -¡ 
(AiíAiU   ií\:  ;n.~  on  f"|>  #»;.;  .  r»-iti  u.«  s  í  » '    ■ 

«s  la  mil!,:  ..,_,..     •  %<¡. 


10? 

•í*Hmf4+-  "•  •  •-.'!'  

No  dudo/  ,-..•..    ,  ,  : 

don  Joan  ,  qoe  quien,  la  dio,  darla  ñapado; 
vos  estáis  disculpado,.        ..<,,'.      ..,, 
pues  al  fin  la  totnaattja  tngaftad*. ..  ,      .j;.,. 
Así  un  error  tan  $rav<£  .        •    qp.    .       •  j#, 
la  pretendo  clorar. 

,j.:,  ..  ;    jpqa  JiMif*  •  f -f  .   i. 

f  odo  U»  «abe  ,  0/?. 

zeloso  viene  ;  mas  por  £>ios(>,War/a , .  •  •• , 
qoe  aquí,  toda  la  fulpj  fra  d*t*er  mía,  .      ,•. 
Señor.....  .* 

Leonardo.  .       í 

Yo  no  pretendo»  '     r  •    » 

flon  Joan,  satisfacían,  n.   u 

I)on  pifian,  '  .<    ...,» 

Dártela,  entienda  »     • 
para.qae.de  tu- engaño»  •  ,, 

llegues  con  rai  verdad  al  desengañas, 
la  joya  yo  la  tengo,   . 
que  esta,  discoidal  que, ahora  te  prevengo* 
HO  es,  para  n\{  ;  yo  \iq  sido  t.       r»  l 

solamente,  señor  f quien  ha  Unid»   •.'.,. 
Colp*t  ft««;t«  ha  engañado  '   / 

quien  te  dijo  que  nadie  me  la  ha  dado* 

.    .      fAonarjdOf  ,  / 

fanto  sn  error  le  ciega» .  ap.  .  ■' 

que  ie:le.t pncubro,  y.q  ry  «H  ■*>  ta  niegan 

Yo  solo. 

Leonardo. .    .        ,    ,•  ,i.  .. 
Don  Juan  «.«nira 
^ffqe  yo  l^;*^  pa«yvhiei>.     - 
Don/van*  ^ 
]  A  quito  «s>  #4n>Mr*  :.*'  «p*r»ct  > 


¿or 

que  él  renga  i  disculparme! 

luego  el  mejor  camino.es  declararme. 

Señor,  pues  has  sabido 

quien  la  joya  me  dio  f <  mas  advertido 

sabrás,  que  ba  muchos  días 

que  con  piedad  oyó  las  quejas  mías : 

yo ,  coma  babrás  oído , 

aunque  pobre ,  señor  v  soy  bien  nacido.. 

Leonardo. 
Disculpas  son,  forzosas , 
mozo  fui  |  no  me  espanto  de  esas  cosas. 

Don  Juan* 
Pues  que  mi  bien  dispones  t 
por  quitarnos  de  tales  ocasiones^   '  s 

bonra  la  humildad  mía  - 
con  tu  hija,  señor,  doña  María ; 
y  casará  con  esto 

la  ocasión ,  que  en  tal  lance  nos  ba  pues  16. 
Tü  mismo......  .    •'  •>•  ¿  '  '  ..,.„:    ¡ 

Leonardo.  ! 

i      '  Foco  4  poco  ¿       •'•  .'•■ 

don  Juan.  Este  hombre  es  toco*    '      op. 
por  que  éf  ladrón  nfc  st9  , •  '  '"* 

quiere  que. yo  le  case  ( ¿  hay  quien' tal  crea?), 
con  mi  hija.  ¡Y  quf  presto'  •  -   - 

dijo ,  que  la  ocasión  tiesa  con  esto ! 
Vete  cuando  quisieres  ,  ■'%-*.' 

que  el  basarte  con  mi  hija  no  lo  esperes, 
don  Juan ,  yb  te  proffifeid.  * 

Don  Juan. 
¿A  tu  bija  ,  señor  ? 

Leakiéréox 

Basta'  el  secreto-     :  *V*tt( 

Don  Juan. 
¿  Pue*TN£omo  me  ha  Nfejad*  :i  '  ¡ 


Leonardo  así  9  despnea  á&  haberme  dado 

ocasión  qqe:  p)díesv  ? 

¿ Dísela  yo 9  para  qn<  asi  se  fuese? 

¿Cómo,  ai  ya  s*bia7  ' 

tarden  la  joya  mediad  .y. quien  la  tenia, 

no  remedia  ana  daños.? 

De  on  engaño -nacjefon  mil  engaños» 

.    'éscéwa  XV...     ,; 

jpon  Ju^n  >  ¿wfc»  Piolante  y  QuiUria. 

....    ífo#a  Violante. 
Señor  don  Joan  -,  no  ércia  , 
qoe  aunque  podo  en  tai  violencia 
faltar1  la  correspondencia , 
pudiese  la  cor  testa  : 
tarifcten  la  voluittad  Vnm  " 
je  acabó  ;  más  no  por.  eso 
os  olvido  f  pues  confiesa- 
que  os  quise»    ■  .N  .« ....  ' "  . 

,  Dok  Juan.. 

'. ..    .       Esto  mei  faltó      o/p. 
abo ra  9  para  .'que  yo 
de  una'  vea  perdiese  et  seso.     .  \ 
Jtyfandáiame.que  en  vuestra  tasa 
no  entrase  9  yo  be  obedecido  f  • 
por  estar  roa»  encendido 
otro  /fuego  qué  toe  'abrasa  : 
corrió  eh  tiempo1 ,  el  gusto  pasa ; 
¿si  vos  misma  me  ñu  asi  dais 
I  que  no  os  vea  ,  qué  os  quejáis  t         s         1 
)si  os  obedezco  ?     N 

Doña  Violante. 
f  Qué  bien 
sabei»  fingir  ua .desden! 


J 


no 


¡.hiKr 


*  JÚon  Juan.  -  u    - 

Mirad  si  algo  W  mandáis, . 

Doñm  Piolante.        '  r   ' 

Solo  que  no  me  mdstreis  ,;  * 

«Mar  aquí  coo  degusto  ;     :  ^        •' 
pues  yo  sé  que  tenéis  gusto ' 
de  verwe:ttfandéme  veis  :-«'*"  •■'* 
pues  me  amáis  ,  pues  me  queréis  »   _ 
ya  es^l*  enWeitf {  sobrada. 

,    í) orí  Juan.  y   nn^ 

Estáis  i  por  Dios"  ,  engañada  f 
que  después  que  otroaol  vi  > 
sois  f  Violante,  partí  joaf    - 
:  la  «osa  toas  oWidajda* ,.-      •- 

'"    SStíENA  JtVt 

¿Hase  visto »« »n»  W'fca: oids) •«•    - 
en  uu  hombre  enartio*^do>->  $'- 
desprecio  tan.  flaarl- Candado  * 
»i  desden  taro  bieti  fingido  ? 

Antes  presumo,  ique  ha  «sido*;  i 
verdad  >' cuando  á  mirar p  Urgoir 
que  ea  un  ea^asiovta»  ckfgn*  <k. 
te  quieres  asegura*,  i  ■>  '*•  q 

Duna- Piolante,  .  ¡    . .¿ « * 
¿PtMS  «ato*  p,o«lejM**rí*    "■  " 
,  si  rae  lodija  don  Hiego»?     ^  •*« . 

*■-  Quiltria         <  >.    i»..- 
lio  que  yo  he  visto  .,.  es  «fue  aquí 
hiao  tan-  AotáWi»  eacesa. 

Daña!  Piolante* 
¿Pues  v&l«£*o*  todo  eso».   ■  « 


í 


4li 


se  va  muriendo  por  mí.  ,       € 

'  Quíieria. 
¿  A  eso  te  persuades  ? 

1     Doña  Piolante, 

Si.  < 

Con  aquel  desden  prolijo  } 

mas  me  alegro  ,  gue,  ine  allí  jo. 

Quiterial   t  .  .  N, 
'  Mira  "que  el  tiempo  se  moda. 

Doña  Piolante. 
¿£sto  puede  tener,  duda  9 
ai  don  Diego  me  Jo  dhof 

•'    éscen^  xvri; 

Dichas  y  don  Catlos. 

Si  tu  los  hermosa  sigo, 
escucha ,  farmos^^folji n te,       v 
oye  un  declarado,  amante, 
que^ha  sido  encubierto  amigo  : 
aunque  hoy  mis  penas  digo, 
testigos  fueron  los^c^elps      ,     v .... 

-  de  que  lloré  mi*  desvelos. 
Dona  Violante. 
Don  Juan ,  con  ypnganza  estrada  t 
engaftase  quien  fi«Mfr.t  v 

téngamelos  qui^n;da.seloa«. ; 
A  parios  he  de  fingir/  ,    _.,   ap* 
que  quiero  y  para  probar  ' 

si  telqs  «s«\  saben  cUu'#  .    * 
como  se  saben  pe^ir. 

Don  Carias*   . 
S\  no  me  atreví  á  decir,        .,, . 

¡   mi  afición  ,  fue,  por  temer. 


ix* 


M* 


Doña  riotyntt. 
Bien  la  aupé*  conocer, 
si  pagarla,  no  he  sabido»  r     , 
porque  no  le.  es  permitido        * 
declararse  una  müger ; 
Carlos,  vergüenza,  y  respeto  t 
tuvieron  la  lengua  muda.  , 

*  thn  Carlos, 
Ya  del  hechizo  ,  sin  duda  ,       ap. 
se  va  mostrando  el  efecto. 

fioña  rielante* 
La  vida  9  y  alniá  os  prometo  ,• 
Carlos  9  cuando  á  tanto  fuego 
turbada  a  abrasarme  llego.       FasSj 

Lton  Carlos. 
Al  fin: /la  supo. obligar*,. 
4  mas  esto  pudo  faltar  , 
si  me  lo  dijo  don  í>iego  ?.     4     , 

■     tíñcúiiéáüi'  de  Jarme. 


Ütáñcz  nUty  galán  cóHbaítíé  f  t&iitias)  y  desput? 
•  •***'•     Moroñ.    ""*  n   i'     " 

.-\~  .      *      "_  ' 

.  r  ••  •  -Mr/-  Dttiftez*  J'  >'1 
Á  Dios  t<  Madrid ;  d*»  está  vA  • 
no  pieW volver  á  verte", """  ; 
ijoe,  va  á  boseal1  buena  muerte  ' 

quién  ftfvo'mafa  veje*. 
¡Mas  como  tarda  Morón!     *   /  ( 

Morón. 
Ta  estoy  a^ur^  ¿  venís  ya' 
prevenido?  '    '  '' 


„,  Ofapez.     .        ;;    . 
'Todo  estáV    ' 
¿mico  *  ,j>pesto  en  razón. 

Morón. x* 
\  Qué  cavaígadura  os  tengo! 
/      \  *    Otañez.  '  .  .   ) 

río  entendí  que  hasta  esie  aia 
mozos  de, diablos  había  , 
como  de  muías. 
■*  '  Morón.  A  •  i 

.  Prevengo  , 
íjne  aunque  mucho  ruido  oigp¡is 
de  voces  muy  lastimosas  ,  , 

de  abullidos*.  y, de  otras  cosas, 
ni  os  turbéis,  tni    lo  temáis  , 
que  no  es,  nada  :  ahora  tapaos^ 
con  ese.  gabán  muy  bien  i   . . 
y  yo  las  ojos  también  ¡  t> 

OS  vendaré;  arretozaosi      ,      t  } 
con  mucho  brío .  eáo  sí : 
la  n\fúíL  está  aquí.,  saltad,    .,_,;.  v 
#.    ,  Ol<f~ez.         ,    :'.     .,'. 
c.Cho*  demonio.,  \    (i  ).    ! 

Maroñ.   tt   ,  , ^j 

Ahora  tomad 
esa  rienda  ,  y /porque  a  sí 
vais  mas  seguro,  yo  quiero 
ataros  contra  la  silla.   ,,4,)kV* 

Otañez-     . 
Tened  dé  q&  pobre  mancilla^ 
no  ateisjt^fl.tüer.te,,    t     ,  í/.««.j 
Vi,#fW-     ...  «i  -ju^í' 
Escudero, 


*¿i? 


(i)     Ponese  d  caballo  tn  un  ba^co,^ 


114 


que  por  t*o*  aires  va*.....  , 

Otanez. 
Ya  siento  que  voy  volando, 
que, la  voz  se  va  quedando. 

Morori. 
Camina  con  Barrabas.  (  i  ) 

ESCENA  XIX, 

Dcihos  ,  don  Juanjr  doria  Marta. 

Doña  Mario* 
¿<Jué  mi  padre  te  pidió 
la  joya? 

Don  Juan. 
'     A  enojo  tan  fuerte 
nrtf  disculpas  ie  previne  , 
todas  á  efecto  de  hacerme 
culpado  ,  porque  quedases   < 
en  su  concepto  inocente. 

Otañe*. 
Que  paso  y  sin  duda  ,  ahora 
por  algún  lugar  parece , 
porque  en  el  viento  he  escuchado 
hablar  á  diversas  gentes. 

.     ,  ESCENA  XX. 

Dichos  jr  Beatriz  asustada.    . 

Beatriz.    « 

¡A^  señora /roí  Señor     <  :     i   : 
con  el  convidado' vieWet1 '     - 
¿qué  hemos  de 'facer? 


(i)     Retirase  junto  al  />tfí:o. 


íiS 

•  í)orla  Marta. 

¿  Nó  p*dn¿¿  * 
llevarle  táá  mi  retrete? 

Beatriz, 
No ,  que  .y*  *stá  en  el  jardín. 

»  <■"  Dona  Mar  tai 
Pues  fueran  ¿ora  esconderte 
detrás  dé  aquellos  jazmines,  (i) 

'   ESCENA  XXt 
•  Dichos  >  don  Diego  i  ¿oñ  Antonio  t  Leonardo  f  Morón. 

>    Don  Die%ó. 
Agradable  vista  ofrece 
este  jardín;  bien  ¡e  adorné 
con  su  hermosura  esta  fuente  ¿ 
y  esta  fresca  galería. 

Ota  et. 
Ya  es  otro  lugar  aqueste, 
pues  de  las  que  oí,  no  ba  macho ¿ 
son  las  voces  diferentes» 

Don  Diego. 
Mocho  roe  alegro  de  veros 
con  salud  ,  señora. 

Doña  María.  x 

Siempre 
para  serviros. 

ESCENA  XXIÍ. 
ífccAoij  4,'ff¿  piolante  y  don  Cario*.       x 

Don  Carlos. 
Aguarda.      ,.  - 


(i)     Escóndese  don  Juan.        r  lt„|  .,  i 


j 


as 


Dona  Piolante; 
afa'br  d¿  entrar. 

Leonardo*    '  \ 

¿  Qué  ruido  és  e«e  ? 
.u  Don  Antonio,   ■. 

¿Qué  es  lo  que  intentas  ,  Violante? 
.    Dona  Violante  . .      •  *¿ 
i  j       No  te  capante*  de  que  entre      ., 
así  ,  Leonardo,  en  tu  casa  j 
porque  si  licencia  tiene 
en  los  hombres  el  engaño, 
''  y  el  desprecio  en  las  mucres  4 
yo  vengo  siguiendo  a.  un  hombre  ¿ 
que  es  el  ÍJne  á»lu  bija  Quiere  ,  ^ 
y  está  dentro  de  td  casa 
escandido  ;  de  esta  s«et*e 
quiero  avisarte  ,  intentando 
que  tu  por  los  dosHe  vengues. 
,''      Qtiiñcé.        .'  . 
, rJla»J*  ates  son  las  ti  01  asds*  * 

que  prevenidas- «ie  tiene 
Morón  ;  no  hay  d«  4ue  espantarme* 

&■  -i  •     Leonardo.    -I 

Un  hombre  en  iu¿  cá$á?  i*  .       ; 
'  Do/i  l)Í£go*\ 

u\    .  Tente, 

señor.  •  •.  «:  / 'fií.  :  ••■  j 

Zeo/ínrc/o. 
Ño  í&eAiía  'Heredar 

O  tañe  z. 
Estas  son -las  coVifftsíones ; 
.    ninguna  ni  \  pecho-  He  me. 

Bufia  Violante  * — r 

ti  hombre  está  *ta ¿toWüftf*  • 


\/j 


,  Leonardo. 

¿Atado?  ¿qué  encanto  es  este? 

¿  hoifcbfe'aqoír  ¿  qoié»  ptlefle  afir  ? 

f  -.»•'?•   ,         •  •  ni  -  .••<> 
J9o/i  Carlof.     ,  ,  , 

Ya  están  rotó*  tos  cordel* il»  ;.  j 
<  v;  —      QturÍBz.  •     -  '   'í 

Ya  he  alegado.  ¡0  patria  :mfa !    i 
deja  que  -tu  tierra  bese.  ■  "-  i?'  ,  í   • ' 

Leonor dh. 
¿Qué  es'esto,  Otaüeaf    .  •>- m» '  íl 

,    •  Oiaftez.        ♦  «       r   / '     * 
.*■*•?"  í-    i     ¡  Jesús  !> 

I  pues  t4  también  ,  señor  f,  vienes 
á  las' montanas?  ¿á  qufS?    f>«.  [ 
¡Oi^an,  y  qu¿  feowrada  gente!,' 
Todos  estainos^ácá.1  ;?     •  <  oí 

Figurilla  de  bufete,  »¡  I    Tí; 

en  Madrid  estáis.  ".      • 

"*•'■    •  OtaXét. 

«    :      "it!    .n  >3W  DlOS  >  orrjr»T  t 

que  es.  verdad.  ¡  Jesoi  mrtveeeii 
■  '•  «v  *  Leonardo*'  •»  «»l/r't.tp 
Detrás*  de  aquéllos  j*znwiies>  un 
bay  álg»4ew*'|i  decidí ,;  qfréMgente'f 
Donjuán'  < •  *»n->¡ »  t»t 
Si  es ,  seiWn,  jiar'a  vendarte , 
re  adido  átus-pies  me  tienes. 
YO  soy  qoien  pudo  escondió  ni 
estar^aquí.  '  f   -  r  '-'?' 

-  .    '•••"<     Leonardo  ,         '   •     í, 
»  ¿  Pues  qué  quiere»  f 
,¿no  te: bastó  la  de  hoy  f     .  \  '  '¿ 
que  hurtarme  otra  joya  quieref  2 


111 

4 


iis 


I 


Doria  Fiolatite¿ 
9»! be:  de  entrar. 

Leonardo.-  •  \ 

¿  Qué  raido  és  ese  ? 
•  i:  Don  Antonio.   \ 

¿Qué  es  lo  que  intentas ,  Violante? 
.    Doña  Violante*  < 

t  ]       No  te  espantes,  de  que  entre 
así  ,  Leonardo,  en  tu  casa ¡ 
porque  si  licencia  tiená 
en  los  hombres  el  engaño»     ^ 
y  el  desprecio  eu  las  mügéres/ 
yo  vengo  siguiendo  a.  un  hombre  ¿ 
que  es  el  ¿Jne  álu  hija  tjuiere  ,  ^ 
y  está  dentro  de  tú  casa  , 

escandido  ;  de  esta  suerte 
quiero  avisarte,  intentando 
que  tú  por  los  dos>te  vengues. 
f ' .  -       OiarlcJ.  '  »  \ '<» 
« 'jUsJtotés  son  lastimosas  y  ? 

que  prevenidas- trie  tiene 
Morón  ;  no  hay  de.  que  espantarme* 

fcx  i  •     Leonardo.    •  •  -i  •  •      ¿ 
Un  hombre  en  mi  casa*.?  \¿t.  .     } 
'  'Don  Diego* s. 

*'.,.     '<  Tente, 

señor.  ■■•.  S^rvfc  :n.-..j 

Xco/jnr</o. 
Ño  ti¡e4te  cle^iedar 

O tañe  z. 
Estas  son  fas  con  Fusiones; 
ninguna  mi  pécho-Hemc. 

-■    ■  '    "        Daña  Violante,  -—  -    r: 

Un  hombre  esfA'áiato'aijftí*  • 


^/y 


«v» 


t  Leonardo. 
¿Atado?  ¿qué  éncanío  es  este? 
¿  hoifcb¿e,*aqmT  ¿  quién  piéíe  ¿<r  ? 

Donyarlof.  ,j  ;,.., 

la  están  rotos»  tos  cordélese   .    j    . 

<  t;    •--      Qt&ñez.  ;    ■  '  •} 

Ya  he  >Hegado.  ¡O-  patria  mia !    ¿ 
deja  que  -tu  tierra  bese.  ■  -•  r,  •  ,  ; 

Leonardb. 
¿Qué  es 'ésto  ,  Otaneaf    ,  -»;>i'  'I 
,  •  •  Otaftez.        ♦         '   { 
.-*•?:'  !*•     t     |Jekus!> 

¿  pues  ,tú,  también  ,  jeftor  t  vienes 
á  las'  mo*itañas?¿á  qufS?  ■•  |>  •    f 
¡Oi^an,  y  qui  toowrád*  gente!,. 
Todos  es  tamos  i  acá.1  ';*  -.•«•ó* 

.  vMiron. 
Figurilla  de  bufete,  <;  L/íj 

en  Madrid  estab. 

•■:f:   •  Otahét. 
,  •  •     '  m  >  í    .11  ¡5W  Dios  >  omí«T ;, 
que  es»  verdad,  p  Jcsu¿  mi*' vecetü 
;  •••♦.•  *  Leonardo» >   »  Mamiip 
Detrás* dé  aquéllos  ja&mviits  >  raí 
bay  algjMen  ?ü  decid  vqtié(gefifeeif 
/)o/i  Juan.    « '.ii'i »  i»t 
Si  es,  sent»*,  jiaña  Vendarte, 
rendido  á'tu9»p¡¿9  me  tienes. 
Yo  soy  qoieof  pudo  escohdjdVnT 
estar^aquí.  '  í    <  '  '••;-' " ' 

.  .    '  •  • '  í     Leonardo*  ,         »    •    m 
•  ¿  Pues  qué  q  ulerea  r*     ■ 
,¿no  te: bastó  la  de  hoy  f  .  .  !  '  U 
que  hurtarme  otra  joya  quieres  2 


til 


i 


y  se  lo  .dije,  I  'Violante. 

v  ^ .     .      Lvloron, 
Muy  lindo  secreto  es  estel' 

pon  Antonio, 
|  Qué' frió  os  habéis  quedado  f 
Don  Diego, 
t     J  Alguno  obligarme  puede 
¿  mas  que  á  no  adivinar  f 
pues  yo  jpro  eternamente 
de  dejar  mi  astrología 
Esta  boda  seceleore, 
para  que  con  Su  contento 
supla  las  faltas  ,  que  tiene 
un  Astrólogo  fingido, 
$\  tantas  perdón  merecen,. 


I 


.» 


T 


/ 


421 

Mi  Astrólogo  fingida.         , 


N 


o  hay  atonto  por  trivial  y  estéril  que  parezca  que 
no  sea  interesante  en  la  |>  I  uta  a  de  un  escritor  como 
Calderón.  La  declaración  do.  un  secreto  amproso ,  fia- 
do a  la  discreción  de  una  criada  ,  ha  producido  u-na  de 
las  comedias  mas  agradantes  y  graciosas  f  y  que  mas 
acreditan  el  talento  cóinfco  y  el  ingenio  (inagotable 
de  so  autor.  Beatriz  descubre  á  Morón  loé  amores  de 
su  ama  doña  Maria  con  don  Juan  de  Mediano,  y 
Morcón  'se<  tó/cnenta  á  don  Diego  ,  amante  desdeñado 
de  doña  Maria/  La  encuentra  en  la  calle  y  picado  de 
sos  desaires,  la  revela*  el  secreto  que,  solo  sabia  Béa* 
tria.      i-.i»  ,'.,..    v-  /.     , 

Es  fuerza  que  me  escuchéis , 
que  siendo  pleito  de  amor  y 
es  fuerza  daroeaa'  oido*  -  'i-.      ¡ 

•   a    •  á  mí  ,  pues  habéis  oido  •  •    1  . 

despacio  ai  competidor;  -  •     í ■•  •   <•  -,  \ 

■  •     que  si  en  la  justicia  aria 

bfen  informad*:  no  estáis ,       t>  .•»<*;••' 
..    , será'  bien  que<hw oigáis   •  ..!•.■: 

a  ¿I  de  noche,  i  mí  de  día.  f 

No  quiero  yo  éjue  ¿  ese  fin 
•  >  .    baya  lienzo  por-sénat,  - 
Beatriz  que  bajé  ai  portal  , 
■  >  reja  que  caiga  al-  jardín  , 
'.>    puerta,  at  parecer  ,  cerrada  ,  • 

gafen  que  está  ausente  y  viene  ¿ce  - 

Rofta  María  sospecha  foayrdia tamenfe  de  Beatriz,  y 
la  reprende  con  severidad  j  y  Morón  para  disculpar-? 
la\fingé?qpe  su  amo  es  Astrólogo.  a 


122 

Señora; 
90  tiene  Beatriz  la  cnlpa 
de  esta  celosa  pendencia , 
porque  en  Dios  y  én  mi  conciencia  ¿ 
a  o  ignorancia  la  disculpa. 
Sabe,  pues,  que  mi  seikor, 
este  que  presente- ves, 
un  grande  astrólogo  es; 
puedo  decir  e^  mejor 
que  se  conoce  en  España.  x 

•   Don  Diego  confirma  lo  que  dice  su  criado,  7  refiera 
con  tales  circunstancias  ana  estudios  en.  esta  ciencia 
que  no  solo  se  lo  hace  creer  á  dofta  Maria,  sino  ¿a-ca* 
bien  á  su  padre ,  que  llega   al   tiempo  que  están  .ba-» 
blando.  La  revelación  ,  pues ,  de  Beatriz,  es  el  funda- 
mento de  la  intriga  ,  ynendonde  principia  la  acción 
de  la  comedia.  Para  dar  mas  apariencias  de  verdad 
al  embuste  de  Morón  ,  lo  cuenta  don  Diego  confiden- 
cialmente á  su  amigo  don  Antonio,  este  ¿don  Car- 
los con  el  mismo  sigilo,  y  en  breve  tiempo  se  espar- 
ce por  Madrid  la  fama  del  astrólogo  y  el*  secreto' de 
los  amores  de  dqña  María  y.  don  Juan.   £1  aumento 
que  adquiere  progresivamente  esta  noticia,  pasando 
de  boca  .en  boca.,  es  muy    verosímil    y    muy  cómico. 
Beatriz  no  dice  i  Morón  el,  tiempo  que  llevan  los  a- 
raores  de  su  ama  :  pero  Morón  le   refiere  i   don  Die- 
go que  debe  de  l^abcr  má*  eU  un  afin.*  don '-Diego  aña- 
de uno  mas  t  don  Antonio  «¿tro»  y  don  Garlos  no  deja 
por  su  parte  que  quede  ai»  aumento.  Todas  estas  es- 
cenas son,  graciosas*  No  i©  es  menos   la  ^elación  de 
don  Antonio  contando  á    don  Diego,  la    rapidez,  con 
que,  se-  ha  difundido  la'  fama  de  so  ciencia   astroló- 
gica.; , 

Los  lances  ¿  queda  lugac  esta  ficción  y  el  00a*» 


) 

•  .  la* 

promiso  en  que  se  vé*  don   Diego  para  contestar  á 
Jos  que  solicitan  su  favor  son  muy  interesantes:  pe- 
ro el  mayor  mérito  de  Calderón  consiste  en  la  com- 
binación de  la  fábula,  qije  prdporciorta  el  astrólo- 
go sin   violencia   ninguna  los    medios  para  salir   de 
sns  «paros.  Véanse  las  escenas   en  que  se  presenta 
Violante,  la  aparición  de  don  Juart  á -quien  cree  en 
«Zaragoza.  &c.  Esta  disposición  luce  mas  en  la  escena 
*n  qne  Leon-ardó  \p  rue+a  qifé  le  diga  el  paradero  de 
Ja  alhaja"  <ju>  ha  perdido  Hü  bija'   Don  Diego  ya  no  U<k 
ne  otro  recurso  que  con'^eáar,"su,  ignorancia  ;    pero 
Leonardo  lo  atribuye  á  tnboVstia  y  se  confirma  mas 
en  el  concepto '  que  M:  formado  de  la  sabiduría  -del 
astrólógb/ J&U  lescetía  *s  róay  graciosa  y  la  llegada 
de  Morón  mny  6  por  tu  na  'También  es  muy  cómica* 
la  etoénaoXtV  del  úHiímo  aciden  -que  el  mismo  Leo- 
nardo reconviene  á  don  Juan  ,  y  este  juzga  que  ha> 
sabido  sus  amores  con  joña  María. 

Señor,  pues  has  sabido 

quien  la  joya  me  dio,    mas  advertido 

sabris ,  que  ha  muchos  diaa 

que  con  piedad  oyó  las  quejas  mias  : 

yo  ,  como  habrás  oido , 

aunque  pobre,  Señor,  soy  bien  nacido. 

Leonardo. 
Disculpas  son  forzosas; 
mozo  fui,  no  me  espanto  de  esas  cosas. 

Don  Juan, 
Pues  que  mi' bien  dispones, 
por  quitarnos  de  tales  ocasiones, 
honra    la  humildad  mía, 
con  tu  hija ,  Señor  ,  dona  Marta  , 
y  cesará  con    esto 
la  ocasión  que  en  tal  lance  nos  ha  puesto. 


PERSONAS. 


Don  Juan  de  Toledo» 
Don  Diego. 

Don  Pedro. 

i 

Chacón ,  criado  de  don  Juart* 
Cines  i  criado  de  don  Diego. 
Leonor  i  dama. 
*    Don  Luis  j  padre  de  Leonor* 
Beatriz ,  dama. 
juana ,  criada. 
Inés  ,  criada. 
Alguaciles  y  Rondé* 
Cuatro  soldados. 


la  escena  es  en  Madrid. 


f 


DAR  TIEMPO  AJL  TlEMÍ>0. 


.¡,:...l*:  i:s ...  ...  ...  ¡j 


iii 


•donde  la  dejé  &  tascarla  ? 

Chacón. 
Una  bpbef  ia  (  perdona  ¿         / 
que  no  hallo  nombre  que  darla 
mas  decoroso  \  pensé-        7 
que  harías,  saliendo  de  casa 
á  estas  horas  4  ya:&oii  dps.; 

Don  Juan. 
La  otra  di.  "  ■ 

Chacón» 

Que  te  persuadas 
á  que  una  dama  en  la  Corté, 
discreta  ,  hermosa  ,  y  bizarra  ,  ' 
-   esté  tan  fina  en  ausencia, 
que  de  tí  s^  acuerde^ 
Jpon  Juan* 

'         Calla ,         : 
•  villano,  que  vive  él  cielo, 
que  te  mate ,  si  roe  hablas    t 
en  qué 'se  pudo  mudar 
muger ,  que  lágrimas  tantas 
vi  librar  en  mi  partida.        ''    '  • 

Chacón. 
Yo  taníDÍen  ;  pero  repara, 
que  lágrimas  dé  muger 
no  son  penas  ,  sino^alhajas  p 
que  para  servirse  de  ellas, 
las  tiene  como  en  el  arca  ; 
a  b  re , '  y  1 1  ó  raí ,  cí  e  r  r  a  f "  y  r  iél    * ' ' 
Di>n  jumn\"  \  * 

Presto  verás*que*te  engañas  »- 
*  y  que  Leonor'no'es  muger, 
sino  ^eidad'sónérank.  '  ''  {> 

Sí  aei'áy  pero;  trásí  ¿áV '       '  "  ? 


127 
no  has  visto  en  tries  meses  carta. 
,  Don  Juan 

i  Qué  felicito ,  s¿,  desde  el  dia 
que,  la  sentencia  ganada         >     i 
del  pleito  á  que  fu»,  no  be  estado 
nunca  eu  un  logar»  i  cansa      *. 
de  tomar-fas  posesiones         »..•  £> 
del  mayorazgo ,  que  se  halla 
perdido  ?  Ven  ,-  y  veris 
con  que*  fineza  me  aguarda. 

Chacón.  i  -     » * 

Ta  son  tres  la»  bober ¡as , 
y  no  es  la  menor ,  que  vayas 
*     confiado  i  en  que  á  estas  boPaSfJ 

no  esté  Leonor  acostada , 
v      y  sa: padre  recogido.  ^    .     . 

1    Don  Juan, 
Cóti  llegar  á4u!  ventana» 
y  hacer  en  ella  to  sena , 
(cumplido  habré  con  mis  ansfrfs. 

Chacón, 
ía  son  cuatro, 

Zfe*  /tfáii.       •  .    -♦  / 
Necio -es-tásj  (i) 

'  no  me  obligues  á  que  haga 
un  disparate  contigo. 

Chacón.  '    > 

Por  mayor  no  doy  dos  blancas»' 
{ Jesús  mil  vetes !  Cof •  •  ? 

Don  Juan*  ; 

¿  Que  es  eso  ? 
'     -l    Chacón, 
■  •-  -Caer,  si  el  aso  no  me  engaña»     -  -   --  — 

«  ■  ■         i         ■    t       ■      ■         iki»ih'i      ni  »~*immm 

£  t  )*     Do?*  sin  ffnpujon,i         .  fc.      ^  y 


128    - 

.««i  ¿arapifta  de  ledo* 
porque  está  iría  que,  mata  #     < 
y  eatce  líquido  *  y  cu»  jado  * 
ni  es  bebida  4  ui  es  vianda» 
t  ■•:  Dta#  Juajti..     . 

A  lab  luz  de  acuella  tiftn^a  i 
es  de  una  fuente  U  zanja.  » 

CkQVO!}*        .  (O 

Pues  bario  es,  «purgando  tanto 
la  tal  fuente  4  «*ta*  tí* o  mala.    ( 
la  calle. 

t)on  Juan.  . 
Entra  á.  sacudirte 
ea^el  portal.de  asa  ca¿a. 
Chafan.,  .-i 
Por  Dios  ,  aunque  Jné,*a¿udft 
mas,  que  moza,  mal  ni  andada* 
no  me  faecodii-é^el  polvo,         ('$) 

A$*a,  ya,         * 

.     Chatón? 
Mientes,  picana,        { 
que  esto  no  es  *£uav 
(  1  >  .  .•  jPp»  «/w*/j. 

~     .1  ¿tí^é  ba^of 

Cheéot}...  , 
l  Que*  ba  de  s.er  ?  jftse  á  mi  almaj 
«»sjM.de<  Madrid  prfpUa*t 
que.ftnjes  fuero*,  ,n*cesaj-jaav    ,,  • 
¡  Vive  Cristo  ,I.%^.« .» .  J* 

rt   .    No  dea  voces. 


t  Su xi  ■    11    ii.    ,    i    .   "ij    |> 


g  ooiwg  mojado  ^-gr  con  poioo*  - 
'     (  a  )     Al  irse  retirando ,  fc^oq  .agua  de  arribp*  ; 


12» 
Chacón, 
i  Cómo  tío  f.  tuerca  ,  bergtnU»  . 
fci  etes.kotaW»  sal  aquí.  . 

:  •  &ori  Juan. 
tío  eV  barrio  aloróles ,  é*üa. 

Chdcnn. 
Calle  un  limpio. 

.    .  ; Qué  cansado! 
Vuélvete  Vola  todo  á  cas*., 

Chatón.     .' 
¿Asi y  )r  so)o*  y  á  estas  horas? 

t)on  Juan. 
Si  ,  que  tío  quiero  que  vayas 
conmigo  así/ 

Chacón. 
''     Lo  que  haré 
será,  y*  que  aqoí  me  baila 
este  fracaso*  llamar 
donde  me  den  tttta  capa, 
que  á  guardar* dejé,  con  otra* 
albajillas  de  importancia.        "^ 

í)on  Juan.      .    . 
¿Mas  que  es  en  casa  de  aquella 
señora  ,  cuya  criada  , 
si  bien  roe  acuerdo »  querías 
antes  de  ir  ? 

Chacón. 

No  sino  el  alba. 
boh  Juan 
Pues  bueno  es  tener  de  una 
-  picara  tu  confia ma ,  ~ 

y  querer  que  no  la  tenga 
yo  4e  una  principal  datnaY 


i3a 

Chacón 
tájame  llegar  ,  s'v.v&a   '       "  «  % 
que  mi  Joauilla  «ie  aguarda 
mas  fina  ,  que  á  i)  Leonor  , 
haciendo,  que  á  un  silvo  **tlga*   /     (  t  ) 

ESCENA"  II. 

'  Dichos  y  una  criada* 

'  Criada. 
¿Eres  tu?  -:,'...  f 

CJiaco/i. 
V   .  jMUra  qiut  prcsia!   V. 

ío  soy.  ^ 

,    fr    Criada.  ^      ~ 

Albricias  ,  que  na,{U    t       . 
nuestra  ama  entendió,  porque 
ha  andado  muy  tpug«r  Juaua :    _ 
toma  f  y  gózale  n>il  ai)osif, 
y  hazle  cristiano  inauaiia  t  » 
que  ha  sido  «1  warU*  ferrjbje.      .    (  a  ) 

,   •    Chaeon.       t,  ,.N  ;.     ,,  ,. 
Oye.  '     .  .'.  ,  M.      .•,,,  <fcJ 

Criada- 
..  A  Dios,  á  Díos.        x    Vas: 
Chacón- 

Aguarda. 

ESQENA   111.:  .tü  .; 

J)on  Juan  y  £hacon. 

Don  Ji^an^ 

1  Qué  „te  ,ha  dado  ?  /        ** 

(  i  )      Silva  ,  y  splc  a  la  puerta  Juana. 

{  a)     j?¿/¿  un  nina  cnyuvltfi ¿v  <¿¿ffra  apriesa» 


Un»  criatura^ 
que  *n  Tezcdc.iarmt  otra  capa  , 
viendo  ¡quetesta  tiene  ya 
pcrdidftt«Lj»ie4o,á  las. ¿lanchas  t 
la  aplicó  par*  mantillas  r 
y,ej  l«r,pwir<,;que  al  entregaría  , 
*l£  ¡»W«  albricié  y  y  dice  «,         •> 
que  ha  andado  muy  muger  Jaána. 

t  ••.  •-.«,. /Job  «/«añ» «  ti 

¡Y  comftiqttc  ha; audacia!  t>ie«  • 
la  experiencia. lo  declara.    ».   ,»  »'. 

,  •      ."i  f  >£ÍMcan.     .  .  i     ;  j    ' 
¿  Qué  tafite  ¿fóo*  ,  habrá 
que  ya  de  l*«¡tr«*.4altai? 

,  ?;!  ¡r    D<m  Ji&n*  <    .v  . ,,  i 
Trece  in«ses,,.u   r        >v  t. ,,  „  ( 

¿Trece  meses  f 

pues  voy>»á  ©cj*ar  eti  la  tZfafcjar 

q«e  caí;no  ^qierp  hijo-  ti>-jnr 

trecemesina  enmi©a*av  .M<p  ob 

t        •     D*n  J&mmr.runro  *  r.txt 

Tente ,  que*  hq  ves!  crjatiahdrfd  ,  u  p 

aitf^     echar,  i;  perder  4n  ajmia.  . .;,;>  uu 

.  Chacón* . 

¿  Y  echar  < a  ¡perder  un  cuerdo  >  a 

una^tfa^.Mteqa,  ,:ií,r!'  :I9 

es  cris¿i*n4a¿?  .«  •        »*•,', wn     ít 

,  •«,..,  .  í  Ya  ne  tiifgo 
de  consentirte  que  haigas  »...'..,? 
tan  grande  inhuioanidad.   .    :>: 
Chacón.  -i  • 

«tu       ¿No  es  peor  hacWan»  tofvat*; 


¿ai 


132 


viH  humanidad*.  $ue  yo 
una  inhumanidad? 

Don  JTiWi-    •'   • 

*'   <Ba«tB', 

>  qae  no  lo  be.  de  (permitir,  •• 

Cha****:   T 
Pnes  ya  que  de  esto  t<*<jaiwa«  , 

'  espera  ,  que  aqttf  ba  U  esquina;        ( 
Tía  dt  vivir  ana  santa'         ,    P 
comadre  mía ,  y  deudos  , 
qae  siempre  sabe  d«*  amias 
queacotaodar,  y'edto  pb«4*  *     < 
cuidar  de  ella  basta  mañana t 
y  aun  hasta  el  dia  ¿el 'jaldo.     ; 

*  -    Dtíñ  iftífl^."'»  -  ' 
Pues  vé  v otando  qfrtaisca ría  i 
y  ni  ira  que  voy  iras  tfy    "     -' 
para  ver  á  quien/la*  encargas. 

■;  -  -i  WtatSñ. 
tfcniid?,  «1  ttfe-dMÉawsFno1,  '■''  ' 
venid  9  qué  yo  o^rioypalabr*  > 
de  que  mí  venga  atar  sear 
mas  campa  wtda  venganza, 
queiiau  da  i  aqwel  vein  ticuatro- 
de  Córdoba  r  ó  de  Granad**         •     Fase*. 

Donjuán. 
EsiMtflafr  cosas  suce^n " r 
en  Madrid  ,  y  pot  *s*ra«n%a  t      ♦ 
no  molestan  tanto-,  ce>n*o  » »    •  * 
por  lo  que  iq*l»me* dilatan 
llegar^  aflojar  (  Leonor , 
los  umbrale»  dfcrttf&sa?'  '' ';    ?> 
¡O  si  tVWata*  dtenosov        '   r 
que  por  la  reja  escuchara 


133 


•)  •     -i  •  *      Ya  q*eá%r*'7v 

mi  tremece9H»0  en  guarda 
per  esta  tfocfae. 

•     &onUwan*        * 
Pues  vamos , 
antes  que- otro*  esHorvo  haya  , 
aJ  centro  dond*  ya  f  1141*01}. 
delante  mis  esperanzas. 

\  $SCÉfcA  IV. 
Bichos  y  cw&trv  soldados» 
"Soldado  t. 
fl  id  algos  ,  «jotro*  soldados        '   i 
muy  hombres  de  bien.... 

Chacón.  .  í 

Ta  escampa. 
Soldado  a.  '    -    T 
Ta  ven  el  f rio  que  hace , 
)ian  menester  una  capa. 

Don  Juan..    >  ,;    ;n¡¿ 
Yo  también  U  he  menester. 

•t  'Chiicon.  * 
Yo  daré  la  mia4 barata, 
solo  con  que  vuesarcedes 
hallen  por 'donde*  tomarla; 

,;      Sblda&V.t  .  •«".    'r 
No  alborotéis  acalle, 
•  !ni  fien  dfe  sW  arrogancia»  9:      '     ^  n 
que  no  le*  es ttfH}  bien. 

1  ChbcOft.  l  ••'  »■ 
¿  VuesarceAés ,  camárardaY, 
-aconsejan  ,  ó  capean  ? 

Soldado  4*        '  *    ' 
- 1 Cuerpo  de  tal ,  lo  que  garlan  l 


134 

Don  jan*. 
Ahora  lo  veri n  mejor.  \t} 

Chacón* 

i  Qué  va  que  mí  ¿eaealabran  , 

según  ando  de  dicboao? 

i 

ESCENA  V. 

Dichos,  don  Pedro  ,  don  Diego  jr  Gini*. 

v  Don  pedrp. 
Allí  son  las  cuchilladas. 

-'' •»        Don  Diego. 
Lleguemos  por  «i  pode  moa 
-    estorbar  una  desgacU..  » 

Ginés. 
Paa. 
.'  •"'  Io<*w.    • 

Ténganle. 

Soldado  i. 

Aquí  no  ba  jr  9 
tino  apelar  ¿  las  plantas. 

.■ü  .,•    :       ♦     , 

ESCENA  VI. 

Ho/i  Juan ,  don  Pedro ,  don  Diego  ¡  Chacón  y  Ginés; 

Don  Pcdrol  . 
Teneos ,  puedan  huyendo,  (i) 

/  .  Don  Juan*^  ,; 

Si  bare^queá  nú,  honor  Je  basLia  9 
que  á  quien  por  .Ucapa,  viene  f 
vuelva  huyendo  sin  Ja  capa  ¡ 
el  socpfifr  o$  agracbafOvr  '  ^ 

—         a  '  !    ''' "    '    '     t   •■     '  .11  - 

(i)     Sacan  lis  espada*  jr  r\ncn.  ' 

(*)     Detienen*  A  don,  Juan. .    •  x 


•juedad  con  Días. 

Chacón* 

Si  se  fardan  > 

enbair,  por  vida  del  uí 

trecemesino  >  y  de  Juana  »  < 

según  estoy  de  furioso,  » 

que,  huyera  yo,  / 

ESCENA  VH.  ! 

Don  PepVo;  4on  Diego  j  Gin¿$. 

,Don  Pedro,. 

Buena  traía.         ' 
dt  hombre. 

Don  Diego. 

T  mejor  desenfado, 

Don  Pe4ro.  '  \ 

J?oe#  estajs  de  vuestra  casa    , 
tan  cerca_,  ¿  fuereis  quedaros  f. 

Don  Diego. 
Antea  .que  á  acostarme,  vaya  , 
quisiera  dar  una  vuelta 
*  ¿aballe  de,  una  dama.  " 

Don  Pedro. 
¿  Queréis  que  vaya  <qon  vos  ? 

.?.  «i  „ Don  Diego. 
No,  que  no  e.s  mj.dícha  tanta, 
<*my*y*  i  V¡vsgo  ,  .porque     • 
ni  raftj  escuchan  *jú  roe.  habla  a: 
con  solo  pasar  la  calle., ¡, 
se  divierte  mi  esperanza, 

Don  Pedro; 
Con  grande  recato- andáis 
conmigo. 


135 


m 


Don  Díégóé  "» 

Mafo  es  desgracia 
qua  Itcató,  pues  no  tengo 
en  mi  amor,  qu¿  fiaros  nada.' ' 
Una  daipá  galanteo  9 
tan  hervía ,  como  ingrata  y  '• 
y  estoy  tan  á  loa  principios,    , 
que  la  mayor  circunstancia, 
que  puedo*  deciros  ,  es  y 
que  he  de  introducir  mañana,- 
por  industria  de  Gmés , 
una  criada  eu  su  casa. 
¿Ved  que  tendré ,  poes  no  tengo 
hasta  ahora  una -criada 
de  mi  parte?  '* 

'   Ginés. 
Ni  aun  aquesa 
debes  de  querer  que  haya  9 
pues  no  me  has  dado  esta'  noche 
fugar  de  llegar  á  hablarla.     :  j 

Don  Diego, 
Poco  se  pierde  en  un  dia.  ^ 

Don  Pedro. 
Puesto  qué  ir  solo  os  agrada» 
id  con  Dios: 

Don  Diego.  > 

Qüedtfécon  Dios. 

•       Gtfié*.  '  .,;i 

¿ En  qué  Hpbré  parado,  Juana», 

:d  suato  con  que  quedaste         < 

esta  tarde  ?       -  ■  •    » 


137 

J)on  Pedro»      l       *     • 

1  Albricies,  alma , 

c.?  i  ^pteieoge  a  Beatriz  segura; 

pues  no  va  d#n  Diego  a  casa, 
*      y  poeV¿  lograr  siquiera-  -         ) 
un  pupto  mis  esperanzas.    .1 
j  Qué  cobarde*  wo  los  pasos 
-  íTdét  que-  es  »*W« »  enendo  a*d*  «, 
(•;      de>toi#on  !  digelp  yo*  •'■•■» 

que  idolatrando  *  su  hermana , 
su  sombra  tiemblo  f  áfcinque  bien 
le  está  el  temor  i  rois^ansias  • 
pues  por  110  darle  en  ta  calle 
sospecha,  si  e»  elfo*  me  halla,  » 

el  mismo  temor  se  atreve  f  •      ¿ 
á  hacerme  la  puerta  franca: 
bien  pod**-  seguro  f  pues  f 
UatttorJ  ■  •        •..♦,.., 

;í.rr  .;  |.       BSCENAWC    ... 
Don  Pedro ,  don  Juan  y  Chacón. 

*  ! '       Zton  Juan, 
A  fHBe»  gradas  , 
que  hemos  podido  llegar , 
á  pesar  de  pena*  tfentas , 
á  laie«lled*B«?ii«!ri 

Gfoav&w  •  •  .  "■•*» 

¿  Y  biétt  ,  ée  Hegen ,  .qutf  secase 

»    (    '  9oafoan.  *>  •  .         •■* 

Si-  respondíate-  *-  fo  *eña-r  — •— 

-  V  v  fe  <£"(&»,  Cihjac»n^  derbablurla  ;i  a     w  ) 


Í8S 

•i  no  responde,  U  dicha 
de  saber  *q  be  eitá  acostada  9 
y  que  nada  la  ^  es  vela 
en  mi  ausencia. 
..-.       '      Chatón; 

•  ¿  Purt  o^rtagnardas?. 
e  •  '      •     Xhú  Joan*  -•  ;q 

Que  se  aleje  un  hombre,  ¿¡a*.   { 
ahora  ia  calle  pasa.        *'i..q  na 

?  Chacón.         *  ; 

•  ¿  Qué  e*  que  se  aleje  f  antes  pienso 
4jne  se  acero ,  y  <jue  se  para,  ú      (?) 

J:.'  BSCBNA     X.     •  .    „ 

'pichas  ¿Inés. '    \ ^  ?>',f 

»  Dóh  \huxn.    -       <  ..  •». 

¿Escacha,  no  llamar   »  <*\.'.iv  i>       * 
Chacen*       •>  >■■  i  i  *. 
,    •     •  ,  -    r.-SIy....,  ..-,;• 
y  no  es  ¿1  por  quien  se  cttttA.fl 
que  en  vano  llama  á  la  puerta 
.  quien  no  ba!  llamado  *n  el  alma  j 
pues  le  han  abierto/' 
'      •*'/'••"     '  TnisV    *   •■-'  ^vl 

•  ¿Erestd? 
„  DanPedr<x.  l- 

Síf  yo  ¿oy.    f  ..;  ...... 

,         Inés.    .     ....<>,  ¿ 

¿En  qué  ¿reparas,  C    ¿ 
entra  ,  que  esta  i»?1  señora 
,  quejosa  de  rverqne?  tardas   \   (  ^ 

tanto  esta  noche.,  qtie  está 

— "^—     i         i  i—i.',  wi    ii  »     »      ».l      li      íi'i       n  i  i  i    i  -i  -,    i     ,    ,       un———— 


tf9 

mi  sefíor  fui^ra  d,c  c«u.r,  f   (i)       ' 

ESCENA  -Ja. 

,  Don  Juan  y  Chacón.       :    é 

Don  Juan,  "''  • 

LV¡ve  Üios  i  que  há'  entrado  dentta 

Chúáin. 
No  ha  entrado.  .'s 

DanJuark 
:¿'"  ¿Por  qué  me  engata*? 

Chacón.    y-  í 

Porque  Leonor  no  es  muger, 
sin»  deidad  soberana  j  ' 
y  no  había  de  abrir  á  otro, 
mu'geV  <iuí  lágrimas  tantas 
\i  llorar  á  tu  uartida. 
Z/o/j  Juan, 
¿Ahora' de  barias  hablas ? 
La  puerta  echaré  en  eT  suelo; 

Chatón.  V 
Peor  es  esto  que  k  zanja^  ,      i.: 

Advierte ;'-  Dctiénel; 

.». r»j.»'*       Don  Jaan.f..'\  \ 

No  hay  que  advertir ¿ 
perdidas  mis  esperanzas  f 
piérdase  todo."       ••''•-.       > 
«  Chacón. 

¿  Que"  emienda» 
con  furias,  y  con  habatas 
desde  la  calle  ?    * 

t  jDo/7  Juan*  >  •  i 
•  Si  es  noble , 


fru.. 


(  i  )     Sntransé  cerrando  la  puetUb  . 


í')  ocasionarte  tfqtfe  salga.'  '  *  * ,: 
Chacón 
Pues  hai  para  eso  la  arfa  , 
con  que  tomarás  vénganla* 
dándole  la  pesadumbre  ,  , 

,  que.  él  te  ¿a  \  pues  cosa  es  clara  , 
que  tendrá  de  tí  los  zelos* 
-,      que  tienes  de  él.  j     n  ,  '¿ 

¿to#t  «/it?jt. 
c  Bien  reparas  t 

temblando  llego. 

.         .  .-  »   .   1f  :    q 

ESCENA,  XIL 
Dkha*  9  don  Diego  y  Ginés.  A[ 


Ginés. 

¿  En  efecto^   A  ^  • 
$u  padre  era  el  que  llegaba!      4 
Doja  Diego. 

SI.  5 

Ginés.  ,   -i      / 

¿  Tan  tarde  estaba  fuera  ? 
*  '  JDc/n  /M<?£o. 

Como  eso  hará  mi  desgracia. 

Ginés  ^  # 

¿Si  te  conoció? 

¿fon  IWe^o.  J 

No  sé;  L 

pero  yo  tan  cara  é  cara 
llegué  á  conocerle  á  él , 
~*q«e  no  dudo  y  que  me  hay*  ^ 
conocídé.  '  . 


141 

«¿*&.  r 
¡  Estrado  empeño !         (  t  ) 
Don  Die%o. .  , 
f    1*6  es  este  menor ,  aguarda  • 
¿  no  llama  un  hombre  á  mi  reja  ? 

2?o/i  Pedro.  (a) 

lengo  de  saber  quien  llama. 

.    Btairii. 
<Qué  te  importa  ?  sea  quien  fuere. 

Don  Juan. 
Que  «en  Ja  calle  bay  guien  le  aguarda, 
decid  á  ese  caballero.  * 

Don  friego.  . .   r 

¿  Y  el  marco  de  la  ventana 
v  cerrar  t  y  abrir  no  has  oído  ?     > 
¿  Pues  qué  espera  |  pues  que  aguarda 
nti  valor ,  ,que  .esto  consiente  ?  ¡ 
Muera  quien  nú  honor  agravia.         (3) 
Caballero  ^esas  párede* 
tienen  dueño  que  las  guarda  p 
y  que  sabrá  defenderlas. 

Chatón. 
.fttro  moro  qqe  llegaba. 
¡Abf  mugeres,  quien  os  quiere' 
°na  9  J  mil  veces  ,  mal  haya!  . 
t  -  ;  . .  Don  Juan.  "  x 

A  eso,  y  á  todo,  mejor 
sabrá  responder  k .espada.         (4) 
Chacón. 
K  ^ebr>  es  ttftfc,  *iw  Oíos*  \.\ 


(  i  >     Llama  oirá  vet  4on  Juan.        s 
(a  )     Abriendo  y  volviendo  á  cerrar. 
~K*  V  ~¿*FgB  sacando  la  espada. 
(  4  )     Riñen ,  y  Qinái  flama  d  fe  puerta^ 


!\ 


que  el  agua  v*  4  ?t  »«  ir  •■  a6ua* 

Abrid  aquí  ♦  y  sacad  luces, 

DpnDtefr.  '■ 

¿Picaro  f  para  qué  llanas?     : 
¿  no  basto  yo  por  ni  solo  ? 

Chacón.  "   ^ 

El  llama  como  en  su  casa* 

Inés  dentro.  -*'  <> 

De  mi  señor  es  la  voe, 
«    *      y  «A  la  callé  hay  cuchílladai.  •    * 
Dentro  BcatHt* 
Vé' volando' ,  y  sada  luces. 

'  Don  ]i)ón.  v  * 

Gente  viene,  y  luces  sacan»      *p. 
ÍL:  no  ser  conocido  importa.         *  • 
Esto  no  es  iolver  fa«  espalda » 
x  siüo  fiar  á  mejbr  ,l 

ocasión  mis  esperánta*. 
Hiryé,  Chaco  a. 

Chacón.  ' 
x  EsO  haré 

yo  de  bonísima  gana.         FanÉc*  . 

*'".  t)ón  Diego.  ■*    v;      *'* 

Alcanzarlos  tengo ,  aunque 
el  viento  los  dé  sus  alas.         (  *  ) 

'"  f     .    ■   ESCENAXHL    •  •    ?:i 

Inés  con  luz  t  y  fitatric  deteniendo  á  dOft  Ptdr* 

~'   * "      ■     JáéatrW  "',"'      ~ 

¿Qué  e*  loque  intentas?  ] 


^  i  )     J*a  <*>"  # %*  *r¿*  •*•••*' 


,    ttbnlPedro. 

¿V.    ■.  ,,       ,  Salir., 

Beatriz.    !) 
Advierte.'....  '  ' '   '"* 

"  \  Don»  Pedro.       '  "     VV 

v  §ü£,tai 
Beatriz. 

.'  ■  .  Repata. . 

que  yo  i¿o  tengo  Ja  cúípa  f      v 
ni  sé  que  es  esto. 

t>on  Pedro.  ^ 

¡  Ah  tirana"! 
¿  No  lo  sabes  ?  pue's  yo  sí. 
*';  '  Inés. 

¡Quien  vló  confusiones  lanías!^ 

V':   '    ^JDoii'Ptóro.-      U 

Esto  es  ,  que  ¿I' que  con  lÍ'scña  * 
á  esa  hora  á  tus  rejan  llama  t 
llegó  á. ocasión  ,  que  tu  hermano 
pudo  verlo ,  y  los  dos  sacan , 
sagun  el  lance  Jo  dice,    •     .-i«fl  * 
á  tu  puerta  las  espadas.;  ui^iw  * 
y  pues  eres  tal  „  que  tienes 
uno  en  la  calíe  ,  otro  en  casa , 
la  parte  que  á  roí  -me  to$a 
'^    también  saldré  á  sustentarían      ' 
.   Beatriz. 
^    Advierte  lo  que  aventuras     .     J 
%tt    «n  que  ahora  á  la  calle  saigas  \  . 
estando  en  ella  mi  hermano. 

Inés.  (  f 

Y  tan  cerca ,  si  no  engañan        l 
los*  pasos',  que  sube  ya.  r 

Beatriz.        ,   . 
Pues  retírate  a  esa  cuadra.' 
*0 


&' 


14* 


Don  Peéfc. 
No  }>or  ii  *  sitio  por  mí* 
lo  baré*  ;  porque  rae  acobarda 
inás  sé  ir  don  tttego  mi  aiqi^oj 
tjüé  tai  enemigo  qtiied  té  ámá. 

ÉSCfiNA  xiv. 

Dichos  >  don  Í)Íego  jr  (}ihéit 

Don  Diego*. 
*  tío  pttdé  alcanzarle. 
BeatrU. 

Cielos*  ¿^ 

dad  *Ji?ato  á  mis  palabras 
t&ruiáno  ♦  seütn* ,  ¿  qué  es  esto? 
¿  o^üé  te  ha  suce^u  ?, 

<P<wa  X>Xtk^. 

t .        ,  ,  Nadal* 

,  -i.  Beaírii.  •  < 

¿  Píies  <jué  caos*  te  ha  obligad* 
á  Védif  así  ? 

ÍJrtAi  Diego. 
*  La  causa 

feinguria  ha  sido   ¡  Av  de.  mí!      *    ap. 
Ipuriendó  estoy  'por  callarla  i 
y  muriendo  por  decirla  ;  ,  . 
qiie  «» ii  sospechas  de1  honra  f  y  fama* 
se*  desluce  quien  las  dice  ¿ 
y  se" ofende  «lúién  Jas  calla  ; 
pero  filtre'  los  dos  es  Iremos  ^       . 
toriíaíídó  eí  infdiomis  ansias  ¿    f 
4)áré  lo  mejor  *  qué  es  ¿ 
ni  decirlas t  ni  callarlas* 


14? 

bichos  *  menos  Inés  y  ÍZIH&;    * 

Cielos  j  la  suerte. está  jéchadá. 

Diaá  bá  que, 4  tus  u.mb.raléá  <t 
encuentro  de  noclpe  yarjaj    ,  N 

aoínbfasjjup  tendrás  la  fci))p&,   ¡»  I 

iá  f  sino  a^a  a,'  criada  ^        #  /f  V 
tí  aro  está  :,^\ata.  prudente^ ,  . 
r  >,£♦;  rediría  -t  y  enmendaría,;  ,,'„', 
)>orque  si  de>áqiiq5tle  aviad 
electo  íni  yoá,.ÍMX,|aca  ¿,     ,,.,,., 
lo  que  noy  fMgo,det  ésta  .acerté*  <f 

lo  diré  delira  ¿anana.  ,•  [, 

frwiri*.  ,      ,, 

v     &  *»  escrúpulos  de  honor.        t¡¡£¿ 
ae  culpa  j  quien,  ae  acobarda  , 
esfuércese  ía  ,v.oj  íni  a  f     ,  . ;  « ^ 
para  ^ue  «¿.satisfagan       .,  (.     I() 
don  Pedro*  y  íni  herma  he » ¿  ^¿tjt¡ttnp#¿ 
Quién  te  oyere  tan  preñadas 
razones  hablar  Conmigo,  t)|  l(f.,.v 
pensará  que  he  dado  causa,  u  <p  f 
#   para  escuchar  tantas  necia*L.,  „,> 
Misteriosas  amenosas;       ,  ,    ,    { 
ai  td  vienes  á  esta  hora 
.ide  feMcjar.á  ta  dama»       ...:  (),  r 

í  déí  juego,  y  por  ventora 

»■(««)  ..QuÜV  i*  toa  4  iaáf  ,póhcia  sobré  un  bufetr 
£  9dn$4  tila  /  Ginés. 


i  t  te  base%£**jW  ***<#*  9M&íá^i$jfO»  , 
no  con  falsedad  uie  r  i  fias  ; 
que  ni  yo',4ii  4n*f»*eViihlas  f      - 
h émps^ado  la^^ipn.  ^ 

Aunque  mas  esfuerzos  haga  y         ap» 
'        e*toy  temblando  Nd¿  tbiedo. 

*b       Don  Diego .  »l  t  «ui»»3 
No  hable»  con  sotorlna  tanta, 
ni  roe^dhcVfrnvl'la»  culpa**/  '*  ^ 
que  tú  bienes  j  no'fté  hsgaa  ♦4>4,':i 
qu«f;i irritada1  la" paciencia  f  ''«¿loe.      y 
hoy  de  sus  f  imites  sái^a  ;    ,,f«uí 
porque  si  llego' á^vefr  »        -J GÍ:> 
que  he^sto  tirf'Wbtóbréi^irtJilIfcna 
á  tu  !*)&•,- qtfé'hti  escuchada. ***t 
el  *uido  de  la  *¿Mato*      '•  5,í  **w 
par  ?de  dentro />o4Mé  se*  '•*■»  ■<•* 
que  la  vo¿  énl  la*  ^ar¿aií4a    ••*>  ** 
enmudecida  ,  prdsigi 
•fe&n  Jo  ae'iVias  esta  dtfg*.       Uhimpuua. 

«  cvwsu    BeWfti.        i  ':     '   '  « 
¿Tú  la  daga  para  W:f:  •  ' '•  * 

que  eres  mi  hermatfo  Vejmray*- *¿ 
•*^•l^*■^Ü0n,  ÍW£o;  i>o  raí'marido.      «••* 
**  ÍM  ■' Dnn'Dirgo.  t{? 

Todo  lo  soy  rn  «mi'cásá1}  '*  *•*    '  < 
y  pora^e'irtefarW'tefrSH  *        ^  \ 

fuera*6tfá'ive«  <íé  la  <*«*)««  Y     *'*1    . 
habrá  de  seYloMri  fíechro.    •'    :(.t»> 
'Do*  Ped**?  '••  '  '  **  •« 
Eso  no,  q«é  háry  qoiffri'l*  güárá». 


•^Tl — STTíJTí  T/r  daga  don  Diegos  BtuliU  'hujt9ym 
*uz  ,  riñen.  ..  '  -*•••*  V  *•*»  »***  -  * 


-feas  qu*¡»^i4#t*téáré 
*n  ella  y  en  tí  venga  112a. 

te  guardaré  las  espaldas. 

matrús 

Mal  podrí  ,  Vutf'átf'teáflO*  hvQ  j 
muevo  un^ttv&tftpik  cada  planta 

>"••'•     iMn  Pedro. 
Yá  Beatrié  tfaM6,7%f*  «M*it  *t 
iré  ,  «fa  *éi«e*  Ifc.car**  **'  -     e 
porque,  pued&t&Hin 'mismo  tiempo  9 
tUMánWafé*  m\  g*»«i»rW 

Zfon  Viepfc^fiifés^é  Inés  con  fas, 

¿Con  quién  <4fi*a?  ) 

{«i:.b  19  r>  .-  )    <  En  laxstUtrT*' 
no  hay  nadfc y  séñowti  *;*,.  »;»>•* 

ven  ,  Ginés  j  tu  esa  luz  mata  , 
que  el  «iV¿<fó&  <fe'Í*  «dfc. 

El  diablo  que  patean  ella. 

« *  -      -  -<  •-  ,^»Tiíí;J  ') 


14* 


bon  Peitó. 
No  jwr  M  i  siiío  por  míe 
lo  haré  ;  porque  íñé  acobarda 
teas  ser  don  Diego  mi  aityi^o* 
tyiié  mi  fenémigo  qüicd  té  ámáé 

ESCENA  XIV. 
bichos  >  doií  bicqó  y  (¡ihitt    . 

JDon  Diegé. 
ftd  ptidé  alcanzarle. 
ÉéatrUi 
1         ■  Cielos*  ¿p* 

dad  aliento  á  mis  palabras 
fié  r  lío  a  no  *  seúoy  ,  ¿  qtíé  es  esút? 
4  t¿üé  W  ha  suceolicto  ?  . ,  •    f 

Don  ¿4táK<*.      . 
(...        ,  •  .Nada".* 

,  ...  Beairii-    >' 

l  Pues  qué  causa  te  hd  obligacld 
á  vtíüir  así  ? 

2jor>  Diego. 
*  La  causa 

foinguria  bal  sido    ¡  A  y  de.  mí  í  ap. 

ttiiiríeiuld  estoy  'por  callarla  ¿ 
y  muriendo  por  decirla;  ,  - 
que  éu  sosp<(has  dé  hoftraj  f  fama¿ 
se*  desluce  quieii  las  dice  i 
y  se'ófeiide  quién  jas  calla  ; 
pero  élitro  los  dos  est remos  t      { 
tomáfíáo  eí  medio  íriis  ansias  *   « 
íaré  lo  mejor  j  qué  es  # 
&¡  decirlas»  ni  callarlas* 


jtyui  fe  Mi »•?  i*oi  te**,.- j   ( 1 ) 


l     Itir  » 


fiií 


% 


¿KcÁos  *,  menos  Ín$sjrtiriH&;    ' 

,     ífr/a;  *Vro.    ..     \,  \*j. 
Cielos  *  la  s^rté.esU  ¿echad*. 

_,r\-.     jBort  Dit&i;     n¡,¡¿ií  . 
Días  ha  qup.á,  tus  u^^rajea  ,, 
encuentro ; de  húctye  ya. ría*  ,      v 

¿uraibras ;  juo  tendrás  la  uj)p*¿,  /4 
iá,  sino  %|$#M  fcf íáda  ^  '  /f /f 
tí  aro  ésta  :  ivaía  prudente,,  . 
.d|;  reiría  i  y  enmendarla;  ,,  t  ', 
JK>rque  si  de,aque($t)e  avisó 
fetecto  mi  yo^.^iaca»,  .,,..,., 
lo  qué  boy  #gó(jde  ésta  .s^rje*.,, 
Ío  áiré4«>t>tra  mañana.  .  ' 

.'v.     Si  tm  escrúpulo*  de.  noñ.or        fá< 
sé  tulpa  i  quien,  se  acobarda  $ 
esfuércese  la  ,v.oj  mía  ¿    :,  .  j  yr 
para  íque  $é*  satisfagan       .M    .  o  , 
don  Pedro*  y.nvi  hermano  í  qft|jk¡éfiipfc 
Qiiién  te  oyere  ian  preñadas 
razones  hablar  conmigo  t)¡  ,,f../f 
pensará  que  he  dado  cauaa^,  ((    , 
para  éséuthar  tantas  necias L,  il(j 
misteriosas  amenazas;  ,..,    j 

¿i  tn  vienes  á  esta  hora 
.ide  festejar, á  tu  dama*       ....  „,  f 

Í  del  juego,  y  por  ventará  

*  .  i'Mir 


»  XO  aQv&P  l*  lu*  4  loes  ,  ponda  sobré  un  bufet*,  A 

£9dn$é*llafGinés.  I 


La  primera  • 
«fi^SÜo  ¿rali 


152 

Dices  bien  ,' aquí  te  aparta.       r?*| 

Jbpn  Pedro.  I 

ra  obligación  **     r 

trance  es  la  datnaj    ,. 

y  así  ,  seguirla  me  toca  f 

que  no  dudo  que  á*  mi  casa       ^ 

irá  ¿  irá lerse  de  m i.     '  ^^ 

t>on  Juan. ,  t~ 

Sin*  Vernos  ,  ya  el  hombre  ,)»ajaj ' 

la  calle. ;.  yeiíid  ahorai  » 

*,  ^        Chacón.  ¿ 

É/fSerV,  frjue  aíui  otro  falta.,     n 

JDo/i  Diego. 

Sin'fáber^pór  dónde  van  , 

tras  ellos  voy  ;  luces  altas  , ' 

guiad  mis  pasos,  m  hay  alguna, 

que  influya  hojn rosas  venganzas. 

*    Don  Juan*  j 

pr  dos'partes.van.. 

Beatriz*    .  .* 

%rn.-.        .  r.i.      ,  f-     •    ••«»  i<5 

,  Solo  eso      ^    v 

debo  £  mi  suerte  con ,1  rana  ,     t; 
que'  $s%3  que  losados  se  di  vician;  i 
porque  de  los  dos  estaba  f       '**' 
^en  cualquiera*  de  fós  dos 
pendiente  boi^or ,  Bv,¡tda:f,y'fama. 

fiera,  injusta  ,  aleve  ,  ingrata  , 
de  mis  ansias'%bvcuaia*ar  , 
*  l  agw't  #>l  tffif ". ■■  h  ¡i'  ■<  n»f  , 

(  i  )  Retírame  al:ifre<liq.4el' teatro,  puniéndola  d 
sus  espaldas  tp&iie  4on^e^a,,^ue,gp  <fcw  Qicgo  ,  y  uno 
eclia  por  una  pai  '*4V0ftt^¿><rjfej; ..  +*  „£ 


Fase. 


4&> 

-feas  qutt?1fatéJPttátí&i 
«n  ella  y  en  tí  venganza. 

te  guardara  las  espaldas. 

Mal  podr¿  ,  fyitídfr'MJnW  hüQ  J 
muevo  uo«%WÍH^Vii  cada  planta, 

íftfti  Pedro. 
Y'ú  Bt-alri£  ¿aK6,?t* A  «M*»*  v*r 
iré,  ^ftfélvettft  car» ^  ^  .  ■.•* 
porque,  pueda^émir  mismo  tiempo 9 
tUMántfoafé'ft  faí'i  géferilartat 

.  «anftfe<«VI-.».  *  ...i 
Don  DiÉffafi&^.Inéi  fW«*. 

¿Bfofe  k&e&to4e»v;Uaidor:|i3 
Inés.     *¿  ic-i  'jj^a  * 
¿Con  quién  titfttftf.) 

no  hay  nadfoy  Mftorji  -  .  !••  u»o 

▼en  ,  Ginés }  tu  esa  luz  mata, 
que  el  eiV¿f1fe  <&4*«*& 

El  diablo  qué*  pateen  ella. 

f  k  *•      »-.  -  ,,->•»  ,!!,J  ') 
'  :«  •<'  •    ••■»!•       ;,t'"i  i»  -* 


152 

•:       «...    flwJfcwv-' v  •-..■..-  « 

Dices  bien  ,  aquí  te  aparta,.  ,    .f\  t  j 

jfto«  Pfdro,  f| 

La  primera  obligación  (, 

en  <oÜó  ¿rapicé  es'ja  dama  f 
y  así ,  seguirla  me  toca  9 
que  no  dudo  que  ¿  mi  casa       ^ 
iráí  valerse  de*  miv  ^"¿ft 

t>on  Jjuah.  \    ,    f 

Sin*  v¿fnos  ,  ya  el  hombre  ¿aja; ' 
la  calle. ;.  venid  añora.  .  > 

*  Chacón.  .   ■    >t 

C/pei^a ',  hue . aá¿  otro  falta,,  (  n 

-Dow  Di?$o>  * 
S¡n%bér,,pór'  dónde  van',    " 
tras  ellos  voy  ;  luces  altas  , 
guiad  mis  pasos,  si  hay  algnnaf 
que  influya  honrosas  venganza^. 
*  *"  í)on  Juan*  ^  ,  j 

Fpr  dos'pfei  tes.van.. 

,    l    Beatriz*   .  •> 

*  i      .    .  Solo  eso    (       N 

debb^'raf'suerlte  contraria,  ,    ■ 
ijfíiVÍ ¿V  que  1  os  'dos  se  di v idan  • 
porque  de  los  dos  estaba, 
en  cualquier  de  íis  dos 
pendiente  fcoqOT, ^^aíf,ytfama. 

*,;.A(MHf^<'    ■•    1    >íob 

fiera,  injusta  ,  aleve  ,  ingrata  , 
de  mis  ansias*%tf'cMUr  , 


ftf**. 


(  i  )  Retírame  aljgketfiq.yM  teatro ,  poniéndola  d 
sus  espaldas  tp&x¿e  ¿<wt  J?<*4nfl#^W  d^m  Uiego  ,  j  uno 
ec*ha  por  una  porte  jfc&&1p&PtrftK¡,1  *>  »ij* 


fcor  acudir  -t  Iw-aiwiaj  y 
oyéndote  no  es  posible,  i 

,'que^alor  al  pecho  falta.  '5 

Beatriz. 
¿Quién  eres  ,  hombre. /qot  «¿lis 
aquí  á  doblar- mw'.^Les gr acias  9 
en  vez  ó^vímh pa carias  ? 

Ztafo  Juan.*        ••■•*« 

.r«íi«..     *    Soy, 
pue$*m-nri  poder  te  hallas, 
quien  de  a  quesos  dos  que  dices 


:«3 


tornad  jus^a  venganza  t- 

.~*fc 

hurtándote»  á  ¡sim»  deseos. 

;  * 

Beatriz.  : 

Mirá^M»    >i   : ;;.     •  .  t  ■••'     l 

;> 

¿ton  Juan,   »     • 

•  /  r 

Ven -conmigo,  y  calla.        (i  ) 

/ESCENA  KIX. 

'  Dichas  y  la  Ronda» 

«  ...  j.  j 

1           v                            .'    \ 

alguacil. 

La  juncia r  caballeros. 

...     Chacón. 

'  '"f 

Esto  solo  nos  ¿altaba. 

>.:<AJguaci\* 

.    m!,1 

¿Quién* sor fl,  >  ¿. 

t     t«  ■* 

i         *->•*&  Beatriz*  > 

»¡  Ay  de.mi.inff 

..* 

lUcoI 

i                 ita>  Jww- 

^Jn  forastero ,  4pie  .acaba  : 

(  i  )     ¿toándola  por  fuerza  ,  sale  la  Ronda  ,  pone* 
se  Beatriz  ¿(Maf  ikfe<l<WW  ocultándola, 


j 


¿54 


de  tpeaj-M  >|»<-ft*  ^^ 

Alcacil, 
4  Y  quién  es  aqnett*  dftKtf     .> 

¿IgtíÚCÜ. 

¿A  dftfpdevQ 
i  esta  hor*  coa  e*U? 
Chacón. 
'    i  -        A  c«»|,     '  •        .  V 
-    *7««. 
4 Pues  epmo  cpsi  la  justicia  ■  '*"- 

¿  hablar  se  pona  <U  chanta  f  '■] 

Ckácon.  :% 

Cfctar  suelo  algunas  yeeea  f  f1| 

y  quise  decir-  á  casaC 
aguacil 
I  Cómo  sabremos  que  es.— 

.     Bealrlz. 
{Hay  muger  mas  desdichada^ 

yélguacii. 
Muger  saya  ? 

1  Chacón, 

'  Con  creerme  1      '  ¿ 
pues  yo  que  lo  diga  basta, 

Í//10. 
Mejor  será  i{o*  lo  digiT 
en  la  cárcel,  <|ue  alterada  *» 

toda  esta  calle  ,  esta  ñocha 
I»  habido  mil  cuchilladas* 

Don  Juan. 
Vnesarcede»,  caballero*  i 

adviertan..»*  

Alguacil.  *      (  *>v 

Mo  hablen  pakba>|  - 


iSS 

lino  vengan  cdn  noiotroi. 

\        Donjuán. 
Que  es  rifcor »  y  *¡oo  tratan 
de  b»crr|o  por  cí>rt*«a  t 
la  Win...»  t •.. 

¿fon  Juan* 

<       Aáicfa¡lU*M     (i) 
r  Chacón.  ^     t 

Ta  van  tres  veces  con  esta ; 
Cantantes  somos,  de  espadas  9 
que  con  cualquier  niayqrdomo 
tuelftide  nuevo  la  danaa. 

Don  Junn. 
Unid  t  señor»  *  qn>  ninguno 
04  seguirá. 

-BeotrU: 
,1         j  Ay»  desdichada ! 
¿dendt  iré  yo,  que 'no  encuentre 
riesgts,  penas,  y  desgvacks  ?         Fase, 

Toé0g, 
Resistencia  9  t»tsi*teiiQÍt¿ 
DonJli&m  ^i 
Té ,  donde  «jwfci^^uc  vaya  f 
tifo»*. 

i>  •••  Ótateos. ''"¡'  '"  •     *  i' 
G*actei  á  £>io«t 
que  algo  q<**  #a)eaHébieii  mandas.  Fa*tw 

.  ',  el  '       Jbdbsy    •'••■• 
Favor  aqoí  é  to^stta'av  ' 

'(itD  n»«iV    'Dttft  j«dM».  ;,«    ■       ■•; 
Ta  que  filos  dd  áqú<  se  «largan', 

■■y»       tf.fii  !-m? —  'ii  '...'»  r     '        tí       '       ■■■ 

(  i  )     Sacan  las  ctf/tttfftjtl  ••>.-•       .    / 


& 


no  hrfA  a^cSffo^nü  I  m1,°f  « 


•i  volando  no  me  alean  ¿a  a.       Vatéi 

'*•  Alguaéil.  '      ° 

Mientrrfs  que*  vamos  tras  él'# 


usted  escriba  la  causa.    *  v* 

~  ESÍ3ENA  XX.* 

£,}        -  Saia  ek»  casa  be  don  Luis*       / 

Don  Xwú  /w  «na  puerta ,  y  Leonor  con  ypa  Jum    qu* 
pone  sobre  un  bufete*'     '  . 

i  •  •  •  Xhn*Hws*.      .  •> -.  hjj> 

¿  Có  raa  «jo  >Jei  bas .  recogido-  «i  •.  o  #  v 
siendo  tan.. Wr^e? 

«•  .    •  >:.i  I*fnp*  ■     >•  ,  L'i.if 
Seffop.fiJ^.ü  *«¿ 
como  no  su&e'mtomor ,  ' 

que  no  babiendo  tjiyenido, 
vine*  recoja  y  porque*  futra  *f).i.'  f>  \ 
,%ú\     vie.ndo.en  tí  es¿a,  novedad #¿f  \t 
descansar  mi.  v^ltfbtad  , 
queja  queide  *tti.tuv.iera>  )<:<•( íl 
mi  mismo  amor,   *    < 

, « >m»-i  ^ipothlm?.  •    .  •. ,  .vf 
Dios  te  gnjivdpp 
que  á  fe  que  tapaba  bien 
esa  (¡nezavptel  quieto.;) 
.\\J\  .  tláími: melien^.U»  tarde-.,. le  «wp 
fuera  de  casa. A.*l Anidado, 
hija  ,  es.qbéiteago1  de  Aí;c  v>vi/i 
porque  aljfay  »<*J*«y  otro  en  m?, 
.sino  sol*  «J  (dexfcunfcstado.^rp  cY 
,-..  -l  EluguierA.Dios.-iio.  le  hubiera,   .  -4pf-  — 

y  quisa  le  averjfMfca^  -        ,*>*£     (  i  > 


m 

ai  el  que  á  m{.(l]<$4  9  esperara  v 

.^    *  W  M  reconociera^  lti  ,t  ; 

Pide  ausente  un  debido  ni  i  o    >%  d'JLeonor» 

la  memoria  <Je  mi  hacienda , 

y  no  dudo  que  .pretenda 

lo  «mismo:  ya  se  laenyiqj     .      . 

y  en  a  justar  los  papeles  , 

con  quien  va  á  verjte^  gasté 

mas  tiempo  del  que  pensé. 

">l-  '  Leonor. x    • 

¡  Ay  hados ,  siempf*  crueles         ap. 
para^í  I  '••...,.,  i 

,  Qon  Luis., 
l  Qój&o  ,  tan  muda  , 
no  rtHppn^?r,L..  > 

Leonor,  ,, 

>  Porgue  yo 
en  esasr  materias  .no 
debo  fealí lar,  puedes  sin  duda > 
que  con  un  sello  QnjJa-  boca 
me  han,  de  bailar  #  por., conocer r 
que  á  tí  toca  dispone*  „ 
y  á  mí  obedecer  m£  toca. 
Jv4?.  inielica  de.  mí  L  t    ,      fl^.  :  , 
jqué  al  rejré*  de  la  ion  siente     * 
el  alma !  ¡  ay  perdido  ausente  l 

!     Don  /«?/*&  o  ■    .'         >4 
Bien  creo  ;.>,í.o¿,mas  llaman?  .,  f   (*í 
« t,    .       »   ¡¿canon.' .  f 

,  o  i  •  »,»*  -»l'ii;q    •  *  5*»  * 

2  A  estas  hora*),  quién. será?      , 


1*1         •    .*    r '    ;..     •;     *.  .       •••'   II*» 

(3)     Llamar^  dent^q^z  gj¿a:j  rt.  •  .,,„> 


m 


que  la  4a{a  t*f>*  ttíí  "totfi 

sacó;  mi, amante,  que  atento     ' 

estaba  á  todo ,  salió  '  .  "■■  ? 

matando  la  luz  y  aporque         •**-  "* 

xi  o  le  conociesen  ,  fue  * 

sin  duda ;  .y  viéndome  yo    '  '■  '  > 

eu  lance  tan  «empeñado,  - 

sola  á  la  ctilfo  sálf ,'  i 

donde  encontré  j...:.  pero  aqtff 

es  el  daéirlo  escusado ; 

pues  soto  basta  decir  ,  •  * 

que  dejando  alláá  los  (Jos  f 

vengo  á  vnierme  de  vos,  *; 

por  llegará  discurrir  * 

en  fortuna  tan  efccása ,  '      t 

que  en  ninguna  parte  puedo"     t 

parecer  yo  tan  sin  miedo  ,:"       ñ 

señor,  como  en  vuestra  casa';    * 

que  aunque  pudiera  buscar  '  ■'■  y- 

la  del  dueño  que  elegí,  >y  *") 

no?  ha  de  ■decirse  de  mí , 

que  á  los  dos  pude  dejar  '  V 

riñendo ,  y  que  fui  á  ampararme  , 

de  quien  quizá' traer  podía  ;/ 

baíiada  en  la  sangre  mía  ''* 

la  mano  que  había  de  darme; 

y  que  en  riesgo  semejante  s 

mi  obligación  olvidé ,  til'    •    * 

ni  qtm  mi  casa  dejé  *'**  ' }  ? 

por  la  casa  de  mi  amante:'  °**  •  * 

A  la  vuestra  me  he  venido/1"'   r* 

primera  por  mi  'decoro1,  '  tt0^  !<* 

y  luego  porque  no  ignoro  >  °l  OJ* 

«fue  (le  mi  pena  movido  ,    ki  ,*)UP 

podrei*  Vos  terciar  en  ella  ^ J "  s  * 


para  qne  venga  mi  hermano 
'  cu  un  remedio  tan  Mano, 
como  mejorar  mi  estrella. 
Esto  "á  vuestros  pies  rendida, 
una  ,  "y  mil  veces  ,  se¿)or  , 
pido  ;  doleos  de  mi  honor, 
primero  que  de  mi  vida; 
pues  es  tan  justo  mi  intento  , 
que  de  vos  solí»  amparada , 
de  aquí  he  de  volver  casada 
á  mi  casa  ,  ó  á  un  con  ven  lo.    . 

Don  Luis. 
Quejoso  ,  y  agradecido 
á  un  mismo  tiempo,  Beatriz, 
con  vuestro  llanto  i  u  feliz 
"  me  dejais  :  la  queja  ha  sido  ,  * 
de  que  con  trances  de  amor 
tan  empegados,  vengáis 
á  casa,  áonde  miráis 
mas  bien  tratado  el  honor 
de  una  hija  sin  estado  ; 
y  agradecido  de  que 
me  eligieseis,  para  que 
fuese  yo  Vuestro  sagrado*; 
y  así,  en  partes  dividido, 
pues  tjue  ya  la  queja  os  di , 
os  daré  el  favor  ,  que  en  mí 
confiada  os  ba  traído. 
Y  puesto  que  el  dia  ya 
con  su  continua  belleza 
á  vencer  la  sombra  empieza, 
no  detenerme  será 
Lien,  que  para  tal  cuidado  , 
lo  mas  presto  es  lo  mejor: 
recógete  tu ,  Leonor ,  • 

11 


161 


162 


que  mala  noche  has  pasado , 
que  yo  á  hablar  á  vuestro  hermané 
voy  ,  y  á  decirle  que  estáis  , 

en  mi  cásá  ,  y  que  intentáis 
dar  á  ese  amanté  la  mano  ; 
pero  yá  que  he  de  llévalle 
estas  nuevas  ,  será  hieri 
llevarle  él  nombre  también. 

'  tteatriz. 

íermitid  que  ahora  le  calle: 
decidle,  que  es  caballero 
eri  sangre  á  los  dos  igual  4 
noble;  ilustre  <  y  principal  * 
qtfe  és  el  reparo  primero. 
Y  ásentaidá  ésta  opinión  i 
errores  dé  voluntad 

suplan  la  comodidad; 

pero  no  la  estimación  i 

porque  si  airado  conmigo 

sobre  esto  ,  dice  que  no  / 

lio  quiero  haber  hecho  yo 

de  un  amigo  un  enemigo. 
Don  Luis. 

Qué  replicar  no  faltara  , 

si  yo  argüiros  quisiera  , 

que  el  callar  de  esa  maiiera^ 

es  necia  finesa*  fara  ; 

peroraste  que  le  lleve 

quedar  aquí  f  que  después 

habréis  de  decir  q fríen  es  : 

y  en  tatito  ,  qué  espacio  hrev* 

gasto'  en  esto  ,  recogida 

con  mí  hija  quedareis  t 

$egur a*  de  que  estaréis 

amparada,  y  defendida, 


-  jrá  que  á  vaíeros  de  mi 
Venisteís. 

Beatriz. 
Dadme  los  pies. 
Don  Luis. 
Alzad.  *      '    f 

¡Leotíbr. 
Veri  conmigo  i  pues  ¿ 
£  mi  coarto.  *    Fase  Beairiii 

ESCENA  XXI*.  ■    4 
•  \  Don  Luis  que  detiene  á  ¡Leonor* 

Don,  Luis* 
Escucha. 

Leonor» 

Di. 

Don  Luis. 
,  Ya  Ves ,  bija  ¿  lo  que  pasa 
á  quien' da  necios  oídos 
á  pensamientos  perdidos  $ 
mira  fuera  de  sil  casa 
una  muger  ¿  que  ha  venido  , 

buscándonos  por  sagrado  ;  < 

mira  un  amanté  empeñado  9, 
mira  un  hermanó  ofendido , 
y  mírala  á  ella  en  efecto 
á  riesgo »  por  un  error  / 
de  perder  vida ,  y  honor. 

Leonor. 
Ecta  bien  ;  ¿  pero  á  que  efecto 
de  esa  sn  rl«  hablas  conmigo? 

/  I)o#i  -¿i/is. 

No  te  muestres  enojada , 
que  no  lo  digo. por  nada  ; 


164* 


pero  por  algo  lo  digo*.  "  ***  *  '  (  f  ) 

ÉSCfcNA  XXIIÍ. 
Leonor. 

Sin  duda,  que  la  porfía        -        * 
que  tiene  (louDWj^b,  berra  a  ti  o 
de  Beatriz,  pasando  tn  Vano 
-  »w  calk  de  noche  ,  y  dia,  »¿ 

donde  con  afectos  tales 
repite  al  -vltfnto  sus  quejas, 
que  es  girasol  de  ni  is.t  rejas, 
estatua  de  mis  umbrales  ; 
en  tni  padre  ha  despertado 
alguna  imaginación, 
puesto  que  no  acaso  son 
los  avisos  que  me  tía  dado. 
¡Ay  i  11  leí  ice  de  mi  ! 
que  lejos  va  su  recelo 
de  la  verdad  ;   pues  e4}  cielo 
aabe  ,  que  mítica  le  di 
ocasión  alguna  ;  "bien  ,' 
que  nó  en  vano  mtí  previene  , 
pues  de  quien  guardarse  tiene , 
aunque  no  sabtvde  quien. 
¿Cuando,  cielos,  será  el  día         J 
que  vuelva  á  diSii  Juaü  á  ver?    - 
que  yo  sola  Jyude'ser::  •  ' 

en  la  grande  monarquía    '  ,J 

de  amor  ,  cu /o  imperio  alcanza 
todir  la  naturaleza,'  > 
el  traaon  de  la  firmeza"',  •    ,k* 

el  baldón  de  la  mndanza  , 


(  i  )     Fase  dcrvtoóQ  *a  fjqevlpÍKLbicrUi* ' 


.1, 


$>\n  nunca -.apagarse  en  mi 
incendio  que  arde,  y  no  í brasa, 

.;•..  i  nt,   *»\ 

ESCENA  XXIV. 

*  'Leonor  ¿.don  Juan  y  Chactih. 

Don  Juan*      ...  ;*/í 
¿En  fin  ,  es  rsto  la  casa 
donde  la  dejaste?  x-O  • 

.  Chacpn*  , 

.  ;        ,  ,,»•!•'  Sí. 

Pues  ya  que,  atwchc  no  puda  \» 

mi  ftuffimifQtp  apurar  f/ft*  entrando, 

lodo  el  veneno  ;tl  pesar  *  ,;.¡  ¡-Í 

ya  con  el  día  n<*  Judo,    .   .  t  r* 

sin  hacer,  repapo  t»  nada  j  r  •  } 

entrar  donde  ef>lá  atrevido,      Y  (  i  ) 

.        ,_       .  „JfOttQr,  ,    .)     ' 

Don  Juan  ,. fifi*  fren  venido»  / 
t..  .;,.    Ikm  Juan.      ..  '.    »  j 
Y  tú  ,  LqonQA%.vmal  hallada.   ,  K 

,  .Leonor.  .  | 

Mal  merecen  tai*  esquiva  f        r 

.    fau  necijo. estilo  grosero  ,         m 
el  amor  con  qut'te  espero,      *t 
la  fe  con  qup  tcr  recibo.        <    , 
¿Tú  al  fi»n  de  tan  largos  plazos, 
.como  IJor^n  mis  enojos,  j     .   , 
vuelves  *in  gusto  á  mis  ojos, 

,    y  sjn, car h)p  á  mis  bw<>s  ?    . , 


(  J  )     Vu^ fyWK £»*lc, 


J 


165 


&on  Juan.' 
Deten  la  vos  al  labio,, 
la  acción  al  brazo  deten. 

'     Leonor. 
Don  Juan  r  mi  senor^  ni  bj*n«. 

Don  Juan, 
Mi  mal,  mi  muerte,  un  agravio. 

Leonor. 
¿  Qué  es  esto  ? 

J)on  Juan. 

¿  Qué  me  preguntas  ; 
vil  cocodrilo,  «ngaiosa 
airona  f  que  cavtelosa,  f 

•halago  ,  y  peligro  juntas?  .     -' 
Si  preguntándote  á  tí 
tu  falso  estilo  traidor  ,     . 
puedes  saberle»  mejor  :  < 

•  ma»  ya  que,  traidora  t  aquf    K 
das  i  entender  qhe  Jo  ignoras  ^ 
y  con  falsedades  tantas-, 
parabienes  qne  me  cantas, 
son* ekeqaias  que  me  lloras;    * 
yo  lo  diré  ,  no  porque 
presumo  que  no  Jó  sabes  $ 
mas  porque  en  penas  tan  gravea 
sepM  \é  que  yo  lo  sé. 
I  Puede  negarme  eT  adrado 
<de%eké  fingida  apariencia  ,     , 
que  te  has  muda  do  f n  mí  ausencia? 

<  Leonor.' 

Veriad  es-fiue  me  he  mudado 'f 
l  pero  qué  agravio  te  he  hecho 

en  mudarme  ?   _        

Don  Juan, 

4 «a br* tenido,  }     <  J> 


1«7 
fio  «ligo  yo  que  habrá  sido 
noble  /pero  el  mas  vil  pecho, 
descaro  de' confesar 
á'un^bomDie  ,  que  ya  engañó, 
que  es  verdacj  que  se  mudo? 

Leonor. 
¿Pues  por  qué  lo' be  de  riegan  ,, 
si  es  verdad... 

Qiqcon. 

¡Qué  bofetada f  '     a/?. 
.JLcot'for. 
Que  mé  iñude?... 

'Chacoj\. 

¡  Que^cafcbeta '!  a/* 

1  Leonor, 

por  mejorar.... 

Chacón* 
•     '  *  ¡  Qué  puñete ! "  '•     p¿>. 

Leonor, 
(ComodidacJ? 

Chacón. 
i  Qué  patada  !        frp» 
JDo/*  Jf/a/i.  ví 

Según  :íso  (f| y¿  estoy  loco!)    .* 
'tampoco  negarás1 ,  no  $  s 

que  alguien  anoctic  HatnÓ       "     •* 
farde  á  tu  puerta  r 

'     *  '  Leonor.  •> 

.  m.wi  *•  tampoco. 
.«   -  > 

kQqh  Juw 

l  Y  iaroliieri  (  ; áiy  Dios'!*)  qfce'  4  quien 
llamó,  al  instante  que  oyeron 
como  llamaba  ,  le  abrieron, 
me  confesarás?. 


168 


-Leonor^*    #       . . 
También. 
Don  Juan. 
Pues  no  quiera  el  sufrimiento 
de  mi  zelosa  pasión, 
que  hagas  tú  la  confesión, 
>  que  yo  sufra  el  tormento. 
t  pues,  ni  el  alivio  das 
de  negar  ,  porque,  siquiera 
CS4P  plazo  mas  viviera  , 
"  oyendo  ese  engaño  mas  ; 
quédate,  ingrata  „  tirana,    .     - 
falsa,  eleve  ,, cautelosa  ,  J 

a  aria  ,  mudable  ,  engañosa  , 

-  fiera,  injusta  ,  al  Uva  ,  y  vana, 
que  ya  no  quiere  mi  amor,      r«r 

,       decirte  lo  mas  que.  hutfo  , 
,-,     Por  "P  decirte, que  estuvo,  , 

á  mi  cargo  tu  temor: 

cuando  de  tu  casa  huyendo       ^ 

ven  ib  te  donare  hoy  te  hallé. 
.qr         !  Leonor. 

JJso  solo  negaré  ,    ^ 

porgue  eso  splo  no  e,nt¡^n^p.    , 

¿Yo  de  mi  casa  salí  ? 
v    l  riesgos  ,  ni  peligros  yo  ? 

-  <  Don  Juan. 

¿  Pues  no  ceñiste  a  esta  ? 
Leonor, 

No. 
1         'Don  Jetan.   , 
ir.  ¿Pues  tu  c^^a.es  esjt,a?í     ,  •  *» . 
u  fcano*},    ;  ¡ 

. ..'       -    'Sí«     ..-, 

¿No  le  escribí  q*e.wm.e  ha-bia    f 


L-Í69 


Se  esotra  cm»  vjnMJÜado  f 

^t-  que  se  fa-  había,  dejado  •*  •"  *   * 
á  ana  grande  axniga  mía  ?.     ■ 

Ella  es: -Mas  esto  que  voy 

á  decir  ,  no  es  bien  prosiga  ¿     ) 
sin  que  de  que  no  se  digat 
"palabra  me  des. 

«  Don  Juan. 

'  'Si  doy. 

Lcpn»r.  t 

fyfís  ella  es  á  qujea  pa*ó 
anoche  no.*ó  que  empello 
con  su  hetwan.0 ,  y  con  el  dueSo 
otyue  piara  es  poso,  «Kgi.ór.  .  j 

Reconoce  .esta*  pa  redes  , 
y  si. ¿odio  «o  la.oJ«ic&a$.,\  , 
señas  verás,  c^ufloidas, 
de»  quien  infirmarle  infecta  i  Y 
de  que  lu  duda  e«  error. 
oL' ¥ó*  vivo  aquí. ,  .  \     ■  O  <, 

DonJu+fh  i  r 

.      t  ,    No  prodiga»,    f. 
Leonor  mia-i  4»i  n»e  digas 
>oi/. .  inas..  palabra  ea  tai  fatfov-í  *.     \ 
porque  cuaudo  y<fcjq<>  viera 
senas  de  wrdad  ta#.  clara,,      .  ^ 
si  á  tí  misiua  Jo^«*cucUara  | 
por,  re  i  misino  lo.  creyera  ; 
con  tal  «©v^adprftfnjado,;      r 
que  yo  soUfnetftCi.fmisido    . 
dichoso  ftik> babee  ?ab¥^>f     .  "*  + 
que  su,d*ma  *e)hitiJMlda.iJojt  *    v 
*      pare  el  seitl>tTOÍ«tiit0  .é|  i>aya  *.„.; 
pues  ya  ej*§jttto4°  fiE^:,/) 


J 


*70 

Chacón.  "     • 

|  Ah  in*(|er*a ,  quien  os  quiere^ 
una  ,  y  mi|  veces  mal  haya ! 

.    Pi*n  Junn- 
Chacón  ,  oye  el  dcfeengaSo  9 
ai  e«  que  014  v"*a  apetece».    • 

Chacón. 
¿Yo  no  loNdige  rail  veces, 
y  que  todo  serta  engaño  > 
cuando  tu  furia  tirana 
culpaba  su  proceder? 
porque  Leonor  lio  es  ffiugeT  t  ' 
sino  deidad  sotara  fia. 
í  Dort  Jltítn.  ^ 

v  Claro  esté;  y  puesto*  *¡ué  ha  «ida 

dicha  la  peta  a  pasada, 
seas  ,  Leonor ,  bfyn  hallada.' 

Leono*.'  '> 
Tftó,  don  Joan ,  triol  venido.  > 

.O»»  Juan. 
¿  Qué  es  esto  ?  ¿  Tan  presto  el  labio 
trueca  el  tfgtaüo^en  desden  ? 
Leorior ,  nVi  cielo  ,  mí  bien.... 

;-    lieófíor:     '  T 

Don  Joan  ,  *»*  fbuefte,  mi  agravio, 

1       *    f)on  Juan. 
¿Pues  qué  eá  esto?     ' 
i     *  * '•>  •  >Ltonor. 

'  '  Sé*  tjttfen  soy  t-    ? 
y  ofendertttfe  de'  q«e  así  • 

áé  hay*  tenido*  fte'ftí  •  •., 

vil  concento  ;  Citando  estoy  *    ."• 
á  oosta  dehyUWrJstefcft*',  ;> 

ansies ,  y  penbHda'nVsv    -l  «    *'T      • 
exattfhatfdo  vW<hdes¡, 


171 
y  acrisolando  fineta*. 
¿  Yo  á  otro  amante  había  fie  abrir 
la  puerta  ?  ¿  yo  ca  átelos  a/,  , 

falsa!  aleve,  y  engañosa? 
¿  yo  de  mi  casa  salir  ? 
Don  Juan, 
•    Agravio  que  no  ofendió , 
110  fue  agravio,,  pues  peor  fue pa 
que  tu  mudanza  creyera, 
y  no- la  sintiera  yo  •' 

La  carta  que  me  escribíate, 
Leonor,  bo  la  recibí;'  ■ 
y  asíf  á  la  vasb  me  luí 
donde  primero  viviste  {  \ 

y  donde  fue  e*  qwe*  llamó , 
lo  primero  que  encontré.       .    ;i 
ijhncon. 
*  '  »$&' fue-*>4|jue  f>  rimero  fue*   ••  <  ? 
caer  en  una  Botija  yo.      , 
;•< ,,  .         •  A  ■  .'  ~  rDbn  Jumn.  -     *"»í 
Luego  qufc  le  abrieron  vi- 
('  la  puerta.     •  -/•  ♦   »..      •       *«••! 
»  '  ~ '  •  •  fChaetin,  •    '  •  r.       »» 

'  , '!  Tvinrbiéu  fo  niego  f 

penque  io  que  vimds  Niego,  «  •» 
iue  un  agu/t  va  rmbtir  mt.       •    » 
#*•  &bn  tftJtíttS  r 

D#¿poH  don  f|  «tetatfajrí   a  *,«7 
llegué  á  la  r-ej»*.-.*'.* 

.^Ava V.VAV  r- ; Cfla***., ■  rf * -•*•..  t. 'í 

qof  ^»|ru*»  eo'ie»m»poi*Mi4  » 

roe  nació*<fl*1r*fce*neai«»«  ••  .1 

**"  "**" ■         — •       ■  'jtJoft  i/tt&n* —  —  --"■• 

Dando  la^rifeK*  *  &  talte* v  '  ¿     (  «  ) 


( 


«2 


\{  salir  un*-  muger/  >, 

i : .  •  Chacón» 

Que  hubimos  de  defender         ..* 
de  la  justicia.  .   • 

i>of>  Juan*  . 
Su  talle  ,  ^ 

su  afición,  y  su  congoja, 
i-que  eras. tú  me  persuadió.    .  .,  . 
;  Chacón.  •  •■» 

Y  defendiéndola  yo 
á  la  ¿¡ombrn  de'  U  hoja  ,  (I 

con  ella  l|<fei]Á  basta  aquí. 

Dan  Juan.      .     .    .  / 
Pues  si  viniendo  tras  ella ,     .   t 
en  la  «cas «  t  Leonor  bella,.  •    .  •• 
don  ella. entró  te  bailé  á  tí  f  , 
¿qué  mucho  que  desatento 
te  haya,  visto ,  y  te  haya  habljglo  ? 
-    Lo  que  se. «dice  enojado  ,  \    > 

lisonja  es,  so  sentimiento  ; 
desairea  qve.el  pundonor        r\¿ 
llora  r  el  cariño  agradece.;     ,  rl(  x  ) 
quien  mas  siente*  ita as  merece  ; 
y  pues  no< ha f, duelo  en  amor, 
después  de  ttm;  largos  plafte*»^ 
como  lloran  ^is  enojos ,    :,  VJt 
vuelvo  ^  Leonor  *  ¿tus  ojos  , 
vuelva,*}  tcarift»  &  tus  fcratqta 
Chacón*  •  i^j-.U 

Eaf  señora  ,  fa:«sqnivo  Detiéntla. 

deja,,!  hm y»  bqéfello  primero 
del  a  mor'íCQn  que,-**  espero  *rt»  * 
la  fe  coa  ¿juele-i recabo;.  .';íí 

Ví*\>    TI-   '  1 -~— — — »— — *- 

(  i  )     YénáoMMÜ  tr&:  tfifuL[      aá.a 


^3 

■   Léonbh  'ii 

fío  haré  la) ,  porque  ofendido  •  i 
me  tiene  su  siurazó*i : 
¿  a  ¿les  de  oírme  ,  era  razón    .    i 
culparme  ?  en  toda  mi  vida 
me  verá  alegre  la  cara. 

Don  Juan» 
Mi  Leonor,  mi  bien,  mi  cielo, 
mas  te  injuriara  un  recelo, 
cuando  menos  te  injuriara. 

Loanor. 
Don  Juau,  mi  padre  está  fuera, 
y  es  fuerza  que  ha  de  venir 
muy  presto  ;  para  argüir 
si  mejor  fuera  ,  ó  no  fuera  t 
no  es    esta  buena  ocasión :        con  desden. 
vuélvete,  que  yo  te  oiré   • 
después  ,  y  yo  me  veré 
en  si  fue,  ó  no  fue  razón.  ( i  ) 

Don  Juan,  * 

No  iré  ,  s'u\  que  mi  atrevido 
error  perdonado  hayas. 

Leonor. 
Ahora  bien  ,  porque  te  vayas , 
seas  ,  don  Juan  ,  bien  venido.  (a) 

_  Don  Juan. 

¿Por  qué  n*ifc  vaya  no  mas?  ^ 

Leonor. 
Y  porque  estoy  con  cuidado.  (3}. 

Don  Juan. 
Yo  me  iré  f  desconfiado 

(  i  )      Ponesela  delante 

(2)      Abrázale  con  desden.  / 

(  3  )     Yéndose  cada  uno  por  su  puerta* 


174 

de  no  obligarte  ¡artas  • 
mai  coauráleme  una  cosa. 

i  Leonor,  \ 
¿Qué  es¿  si  decirla  te  agíáda? 

Don  Juan. 
Ño  te  pierda  de  culpada  ¿ 
f  piérdate  dé  quejosa. 


m 


ACTO  SEGUNDO. 

ESCENA  PRIMERA. 
Decoración  de  calle. 

Don  Pedro  por  un  lado ,  y  d#ii  Diego  par  otro. 

Don  Diego. 
¡Habrá  hombre  mas  infeliz ! 

Don  Pedro, 
¡Habrá  hombre  mas  desdichado? 

Don  Diego. 
¡Que  rio  taya  una  ingrata  hallado! 

Don  Pedro. 
¡Qué  rio  haya  hallado  á  Beatriz! 

Don  Die%ó. 
Sin  duda  que  la  siguió 
el  que  su  vida  guardaban 

Don  Pedro. 
Sin  duda  en  la  caíle  estaba 
el  que  á  su  reja  llamó. 

Don  Diego 

Y  él  de  mi  la  habrá  ocultad* 
prudentemente  advertido. 

t  Don  Pedro. 

Y  él  dichosamente  ha  sido 
ijuien  consigo  la  ha  llevado, 

Don  Diego. 
¿Mas  don  Pedro  no  es  aquel? 

Don  Pedro. 
¿  Pero  no  e*  aquel  doa  Djegtff     * 


J 


tfc 


Don  Diego. 
Temeroso  á  verle  llego. 

Don  Ifcdro* 
Receloso  Ilpgo  á  éh    ' 

Don  Diego. 
Porque  imagino  que  es  ya- 
á  todos  mi  ofensa  clara. 

'   Don  Pedro. 
Porque  temo  que.  en  mi  cara 
leyendo- su  ofensa  está. 

Don  Diego. 
¡Qué  cobarde  e¿  un  honrado t    • 
cuando  se  mira  ofendido  l 
1       ,       ..  Don  Pedro. 
I  Quí  cobarde  un  noble  ba  sido  9 
cuando  se  .mira.. culpado! 

Don  Diego.  l 
Mienta  mi  pena  inhumana»       #  ; 

Don  Pedros 
Finja  mi  desasosiego.  -    ' 

¿Tan  detnartana,  don  Diego?     ' 

Don  Diego» 
¿Don  Pedro,  tan  de  mañana? 

"     Don  Pedro. 
A  seguir  be  madrugado 
imatiama,  por  pensar 
que  fuera  la  bábia  de  hablar :      : 
mas  no  habiéndola  encontrado j  r 
salió  mi  esperanza  vana, 
salió  burlada  mi  fe. 

Don  Diego. 
Muy  otra  mi  pena  fue.  .    ' 

Don  Pedro. 
¿  íues  qué  ba  habido  ?4 


177 

fion^Dúgo. 
:,  >  ;  Que  *  mi  bermanaA..í. 
Don  Pedro. 
¡  Ay  de  mí !  ¿qué  irá  á  decir  ?         <m» 

•  Don  Diego.  .  \ 

La  lia  dado  ,tfiU  noche  tal 
accidente,  que  mortal     .w    ^  '^ 
La  estado ,  y  por  acudir   < 
á  su  remedio,  be  salida 
6  basca  rie  yo  el  doctor 
de  mas;  fama  ,  que  el  amo?  .  .  ' 
con  que.;  siempre  Ja  be  querido  9. 
t #ó  me  permitió  á  .na  criado,  k  .  t 
üar  esta  diligencia» 
Así  de  su  injusta  ausencia-  •■     qp» 
<,f4es*elac  pienso-,  el  cuidado,  ,--.  ,y: 
que  puede  el. no, verla  darf     ,.  í  i 
creyendo  que  no  «ala  buena*.,'. 

Don  Pedro. 

Mucbo  siento  vuestra  pena. 
Sin.doda  ¡  fiero  pesar  !\  , , ,  r;<;  fla> 
que  cuando  sal/  tras  ella,f.IIrai    ^ 
y  la  calle  en  que  ifr«  erré, 
n  él  dio  con  ella.,  porque    .<  #(  .•!/, 
pudiese  vengarse  de  el) a;    ,,„,>» 
pues  decir  que  está. mortal, 
JtquejJJlclA  á  buspar  remediof  /v 
todo  es  honestar  los  med(p«  ¡  ,)rr 
de  su  m;*e)ci«i;¿qoé  bar4,e^M 
coi^fojjwn,  para  librarla;?    flJ  u„f 
pues  de  naeyOtlo  hedejiúfch  •  .\> 
en;  albricias,  ,;qne.  np  ba.sidó,  ¡  ^  vj 

otro^joifnpuda  o^qUa^a. ,  ,,..,.  ;Íg 

Justo  es  eljdajMjoajtjpt.,  :,  10.,  y 
12  m 


178 

i 


'•'íaríitói  que  no'eiVby  en  mí* 

'      t\        ESCENA  II.ftll  .1   .....       ' 
bichos*  dofí  Juan X  Chacón* 
i'  .    Úon  Juan.  í'í'í.     ^ 
¿No  son  ello*?  -i  ••  •,■  ,-n 

>&h<%eart¿  ,«-;•■•     i 
&tiM>i<,*k 

Son  fcedtfo  >  atn  jge  don*  Diego r> 
taücho  «¿rad  etico  q««4ea  '     »  »» 
i  a  ii  k  *MJiróm*444<a»pojeI  1tettfe| 
que  mi  amistad  ©fefld^réi  *• 

•"¡feo  pueda  ,  cotí  qtftefrtütf*  vea  «• 
antes  qtie  a  oiró  «-y.  pqéáitíaft  sida 
tan  imitóles  *ttrc' cuidado*  j  •   ;    >'  J 
¿eai*4tfsdos  avuyt'bieti  hittadosv 

1f  tos  t  don  Juan  f  frien  venido* 

*-'*  '^Bon-Bfcgtr.-  ••<    •       .M 

*£sforzaro*,  eóttztahY     fit  ü^i  2 

y  disimula  f  «onMéttfe.  Ji»  -1  '  '•    i» 

'y,iDórt  Pffér&>  --"-  ••:  * 

Alma,  aíenUV^  qué  ta«vfeit««  1»  0 

don  Juan  á  rtM*  *<t&a%tériV- 

Aulftjitf -ffe'v'épaá  ;é¿  (^  ^lg&do^ 
me  pftB>'dé,qlfle  Vagáis1»  «**  -:J,f 
¿ñ*o*S$kHt  ^\ afeite  Mfltftft»  "  "« 
tan  peníife!rit**é  Gfr^u4tted9V''-> 
que  pfcHrttoi^Wélv,  '  »  '»*■  .*•»* 
es  t&Hk&*t1á9MI  iftr»  f4*)«ttlll*" 
->  mas  ytfi'itotivté  ¿taftcftW*'*  t-:ic 
y  por  si  el^áWri*flh¿»  ¿uj.- 


179 
logar  no'  per  mí  tedar 'roer ,  ■/  •  ¡  -  h" 
aabefl  que  ,roe«  mudé  aquí  ,.«.- 
por  sí  se  «rfrecto  (•;  a  y  de  mí  I)  .  , 
algo  que  poder  níandarme.  <•?  •  t> 

;        EfiCEJNA.IIL  . ,  ,  ¡, 

Do/i  Pedro , 'don  Juan  y  CHacpn*f 

..JfoMíJuqn.  ,,  IU.,  ,. 
¿  Don  Diego,  (¡cyié  «es  lo  qu*  4  oír;  llego!)  ap. 
vive  en  caMdf  J*qnor.fc.\,y{n  ¿ 
Su  hermana.?.,»  pero  mejor,  j.  , 
es  callar.  ¿  Qné¡  ttrae  don  D>ga> . 
que  parece,  que  algún*  grave  .k» 
dolor  tiene?  •    • r» 

I  D*a  Pttfro.        .    .  „.  , 
/    Y  tan  cruel  f    .(i, 
qpfc baat^  é, matarme  de  él .  .       i 
la  parte  que  á  mi  me  cabe,.  >  ( ..> 
¡Ay  dan  ¿u*n,l  que  bebéis  Uegado 

en  ocasión  ♦  v,f ve  Dios, 

que  batíais. roo, riendo  á  los  dos». L 
de  tan  coqlraj'iQ- cuidado,  _:¿,.   ,[> 
que  ua*  i  niel  ja*  deidad  bella,  0ua     v 
boy  entre  loa  dos  **  llalla  , 
•^w  él  emp^afr -en  .matajla  r.  M  ^f:l/:  * 
yo  obligado' á.defeftdella.  •.„;,.  a 
Yf  áferafcrfisi.  q««  me  vi*     ,.<,;.  cz  ^ 

en<una;pe9Aitaj»ir.&ra.9  ••  ?  ;t  •  j, 
que  de  cuaVqUtfitf  fi&ra         ,«,    f,i^¿ 

la  poca,  ye.ntw.ra  lona;   u.ilb 

lo  que  harévconMdet;ad» 
llegando  voa  a  locas  ion  *        -nfT  j, 
que  viene. a  ha«e**«  «ItcrioflMfiíio 
lo  que  erajjueo^iida^   l.,,     ji  íu 


Beatriz  •*»  hermana  es,  la  ¿ama  i 
yo  ,  aunque  él  ignora  v  por  quiéa 
padece  el  mortal  desde»  ,    . 

de  su  .vida  ,  y  d«s  su  fama. 
Anoche  nos  sucedió 
un  empeño,  q de  ahora  fuera 
muy  largo,  si  os  le  dijera. 
Su  hermano  entonces  llegó,  '    ^ 
y  aunque  de  mi'  defendida  , 
.''..    'traía  quitarla  1a  Vida : 

i  cqyo  efecto  y  buscando    •  ' 

mil  modos  ,"  fingiendo  está 
accidentes,  con  que  ȇ    ' 
los  escándalos  4 em p!a nao- 
de  su  muerte:  y  siendo  así  ¿ 
que  con  mi  vida,  su  vida,         • 
ha  de  quedar  defendida; 
Jo  que' habéis  de  hace*  por  mi^  • 
es,  con  alguna  pasión  *  * ••  ^ 

charle  tm  instante- ítíér a  j 
para  que  de  *sta>  manera 
1*  tenga  mi  ¿onrusion/        •* 
de  sacarla  del  a  prieto' j-  S 

que  sft  vida  ha  áme'n  atados  >*■"* 
«  Don  Juan.'  >••'*.  ■  ti 
Miren  por*  dónde  he  llegado  •  >  ap. 
á  saber  todo*  et  setcrtto ^  :  '  «  «w 
sabiendo  «tí  UA<  brt*v*¿ins4*n4e  f*  ■- 
quien  ba  sidoy  por' mi  error  ,  «'i 
l#— la  huéspeda  'de-  Leóntyt  ♦•  '!r 

el  hermanos  crileltf»auvte.  1 

iJDoW1 Pértó'  •'  -  ,.  "1 
4  Pues  cómo  ta w<diic*t ido  f  •*  f  - 
~cxraiftte4*iito  ttnprfo  >oisy   *  * 


m 


sej*f  vuestro*  a  ntfgo  don  pvt;o>jr 
70  tambjew  ¿daiíJuan  ,'ia»M>y>; 
y  «en  wn  ¡aT-ad*  iiimm  ,  pac*  kojr  t 
*  valferjaie >d* ¡vés- llego**  i<* ti  ni 
No  es  bacw  tpaícéo«S  hacer 
esto  j  pifes  d*  «inri gb'á  ¿migo*  i 
,  vi-  4  de '  to  as  vd-'  ni  a  a  tcontní  go  n  .#< 
l.i  pMadi  decante  rmriger.''  wn 
Ella  Díiíatrpírki j>ar  ini^  n>  0/1/ 
duélaos  su  «v*d&.,sy\su  honor. 

,  r:>  .-i    >Don  junn.  ••"■»  onu.D 
|  Quién  .**í  ctrnfwsioii'TOoyor  !o  it  «p. 

Si  diajo  ¿  dote  JtedroAaquí  , 
que  *>!•  éri  sti  vasa  no  «stái,  o'f 
/  es  .obligarme  á  decir     •->  u«*  «:.ái 
donde  rs.tá<*  qwe*s  üo  cumplir 
la  palabra  i^a»  idf  *y*     ni  *<■> » j  O 
á  Leonor*;  y  aunqui?  estopfaeraf 
lo  qbe  minos  importara*  -<•''  i 
es  decirle  (  cosa  es  clara  >  e*»L»q 
de  quien  .teW)  de  manera, 
q«*  ttícitndo,  £o  ñii  amor  , 
y  él  sus  afectos-  siguiendo  , 
es  dan»  ton  to^to  'el  «strgioaajo  "  ft 
(i  )     en  la -casa  deXeWorv/  (»M  °» 
pues  en  ia^VftHUwdfctyalle  t 
cuando*  se  va|ade  «11^»  ,  f  .•»«»  .T 
jio<es  justo  ;  ba ^a'  un  mee)io»aqfaf , 
q«*  lo  diga  ,  ybqüe  lo  oalUv  (<*d 
Don  Poér*yrafsniqoe'  hayiaisi  culpado 
en  lance,  tan <¿Hgu roso/,  :   '    ■»  V 
viéndoos  vos  tan  cuidadoso»  jh». 
:  -**ri»*-4-  raí  tan  descuidado »        — 

presto  me  dftkuioarei?  t  v  'J     <  *  ) 


182    ^ 


en  atuendo  ifbé  t*n$rkn?T  * 
si»f*'Poir  ébojaniarc  precisay^ 
;cpín a  Vos  la  üwpónew? 
p^ed  no»  tppe¿r*qia*#ta}pcfcaw>s '. 
.    en  librar  $  Boa* maibeifar.    * 

•»<"»  •'   Borntinéroi?  <\         •? 
¿G^nm  f  ai  ip*?rieaa)o»'de-ell»^  ' 
«on  ¿¿ti  -cientos  y  sdi>  tan  ¿Jaros , 
qoe  de  su  hf*maratt>*bperim*áa 
\ive  en  ^uerte^aaí  apeaba  i    ;  1 

.ifu««.<!    Honf  JSfMWi.ua  r.o<«i' i  .i    . 
Como  ella  tio>.*stá.*]i  su  casa  9 
n  o!  aaiparriragoViaii  ■  y  fet».  a      }\ 

Yo  ¿üsuo  ahora  tic  ha  «ido  f.>  • 
que  en  casa  *  y'^ñfepma  éefi.  <« 
•3Íf,jrti:i3  <D0m'\fur>(ii  '  \     F> 

Oíros  motw^iaawtVéi'I*;'^  &l 
^na1q«frio>J»;aff0j¿iitgid0»f>  <J  ¿ 
¿  Vos  queréis  v*r  *t.e*¡*s<  ?  ,-í 
pues  yedl«.  v<n  )  ^'v  ' .       i 

,  fY"><.rjEtoii  pcdttd. jt '•'•<>■ 

t  ■:*..-""•.  <D*ci<J  *;£or:  Dios,  i 

,  -  Ii » • .  2>frfi  Jiucm'i  r.  « i  n  '  •  / 
Eno^aeiy»  .nd.v<ty*o»o *<».,'>  - , 
cuando  ves-  os  Aáis  #er  «aj.  r.»  im  ,  (  i  ) 

Tened  ,  qpc-ar  ása{pu;adoV.  ;..<;  v 
,  l jM'enr>«t>uer  no icltl dé<\a+  *\*)céo » tr 
hoy  del  ara  cuidad?  «  f*p(;piffc<ie»!> 
ohficjfoftdaról^de^ofnaiGtyéaéoU  .»  l 
Y  es  tal  el  aegopcfoflpd  p:v  •  i  m  ♦ 
qu^oaaÍ«jYmas  hlfetiz  io«:':í'  ;¡  # 

, 1  i,Im  .'iin.jr.-iti  iiÁ>  'un  ti»íi<"n  r  ■ 

Quiere  ir$$ ?. dtAtáwfeL  ,&\  o¡6^-¿ 


¿si  no  wtá^ciuij^cairu, 

á  doude^tiii  es¿á>  ^.^  ^ 

ir*  «#«*/*<««•,   ,  Piif|r  ¿ 

Eso  eslfl  nv^y^iiQ  ¿£  ,  .,  ,,    t| 

Zfa/i  Pudro,     t   „ 
¿  Pues  no  S^HÍ»\cu^o  pasa  ? 

Saber  que  Rp^t^pusu  casa  , 

Eso  es  decfr»^  ftUft  M¿  hpmJWf 
'  que  todo  el  fltygivfre,  .    ;,  ,  ( 
de  mi  mal^ilf^^v^ino,  sé 
hasta  a^fa  ^.an,*  «J  n^tae* 
que  hizo  ^  scu¿  ala  rej%n    ,  - 
y  con  q¥^en  fiflp  ¿espu^s,,,,  or 
au  bermMd^  o^ta. 

.  .ov. .K\  >  .0   No  es; 

JT  de  esa  segu^ ^eja  ¡  .  .,„  r>j 
puedo  •^fflCM?*l&         . 
IDe^°T-*:BHP..^  ,a  Primera  j 
pues  aman^nyo,  M  era 

«U^fcA^  llamó,  ,t.<í 

Habladm^ííja^,  pqr  p¡pt5i(     t<i 

'  Est0  *f  MW9&9  »°  .^  .     '  r   r.l  oT 
A      .        ,..fl»*^.  ....    ,bi 

Amigos  sernos  lps^osf  ,  ,  ..r) 
J !  por^-jde  C%paa  uaa¿s?  /f 
Advenid  t  que  deslucís  y' 

dos  cosas  que  m,*  ,d*cis  ,  '     ' 
^fMfl^W^caliaií* 


183       \ 


vi84 


\*'*  * '     jDáríMto :*  ! ' '» 

¿Daisme  licencia  que  yo 
á  quien  me  preguntó  á  mi 
lo  qué  vos  na*  fiáis  aqtfí,  l 

pneda  decírselo  ? 

'    •         Jtyi  Pedro.  * 

No. 

Don  y**». 

.Pues  sacaos  la  consecuencia!     ( 
porque  quien1  de*  mí  lid 
« estotro  ;  4«  m  poco '  d  í(5 
para  decirlo  licencia.  \  * 

'  '   Don* Pedro.  \ 

«Apuraros  mas  no  es  bten. 
¿  Vos»  aseguráosme*  "a  qnl  r 

que  no  es! i  en  so  casa  t  ' 

-Do*  Jtiáh.-" 
<  >  -  «  -   Sí. 
i*'  Do*  Pedro. 

Ni  otro  1*  oc«1ta*u;  *  < 

Don'  Juan.  '    *■ 

,!  También.      ,f 
•      Don  Pédto:  \  "  } 

Pues  aunque  en'  parte  me  deja" 
vuestra  amistad  t*bn  tail  susto*, 
en  albricias  de' dos  gusto*  * 
gracia  os  bago  de  una  queja. 
1  Don  JÜaA 

To  lo  admito  ,  y/  consolado 
id  9  pues  catlo  lo*  qué'aé,,  t 

de  qu¿  también    callaré  ' 
lo  qué  vos  me  h  abéis  fiado; 
Ven ,  Cbaco  n . 

'   Chacón. 

Ya  vojr/lrai  tlf 


porque  viene  aquí  Gio&  ,   •'   ;«1f 
7  quiero  liábale    * 

ESCENA)  IV. 
Chacón  i  y  Ginés  muy  triste* 
■\v»  !.i-  Qinés,  \ 

.?Ay4emí! 
Chacón»   .  .  < 

¿  Ginés ,  am%o?  • 
*•  '••  f:  *  :  ^GiM$. 
v  v  .  .  *  ¿  Chacón  f 

perdona',  que  la  estrañeza         '' 
dé  una  pena  y  una  tristeza, 
no  permite  a)  corazón 
d>4*bo&os. parapetarte    -  •    '      :» 
Ja  bien  venida.        •  \ 

Chacón. 
;— •  ¿QuÁha  babtto? 

jqné  tienes?  ¿que"  ba  sucedido  f 
'i'i'Giné*.  < '-  •' 

Solo  ¿t^po^e'4Wl$>  .* 

»m  dolor,,  6a toas vCbacon,    •  .» 
que  ayer  alegro  vivía  »  <   « 

con  «presumir  *que>  tenia- 
en  mi  casa  suee*i4n'V  •     -•         > 
tal,  cual ,  y  ya  éeiooiii«       ;  '. 
de  eata^iebar     cr.» . 
^Chücim. 

4  De  qué  4uertef 

£l  trincó  caW  advierte 

del  primogénito  mió. 

Juana1,  electa  motará  i¿uien  •** 


m 


1*8 


no  h*?rWff»ww]i*m^ 


La  quise. 


¡Ojos  que  lal  oyen  !  '       ap. 

rnatoéuiJ 

Chacón.'  ' 
\  Ojda*  que  tal  ven  t         *£»• 


•'»  t.  (finés. 

Estaba ».       \A 

jChaceflM  ü  ,    •  n  D\ 
¿Qut>te  has  turbado  f 
':  :  fiinés. 

No  bailo,  diga*  4Vma»  ,  .      '  r  t 
, .    *t<..£kmtíovt  .       •  .,»  ,ii 
,■  ..••<  .»:«.    i  ¿Puf «mí     * 
dónde  estiomi) cinta,  qut«»  b 
la  gala  de  ese  tocado í/  .«.  ...  «1 

?Dfc*s  bien*  ,,elu  cinta  estaba  j 
yi^JMstUildftideij^lvti»;;.;  ?  srp^ 
yo  anoche ,  .ñagaza be r 
en  que  su  «ficifttii  ftetfftl»*  ».  .1,  ¿ 
mi  a/w  ao\me  dwí  J#g4r. ;  t<  ;f»i 
una  amig^yicowajtógef*.,.  .mp 
suya,  do  wHia4»pr1t#fvcera.p  ,  .-> 
oyó  en  Ja  caJÍU^lvar^,  .,  ííf 
y  pensa>i¿0V|Ub  A^ria  ,  •  ■>  l,.x 
yo,  al  primero  (\mpatf***;  *b 

El  Oh»Q  ^di<5.      i  ;;1 

.  Gkapúm  ;.   .         ,  • » 

Fui  muy  {<;*&  teHwiuería, ,  ....  t 


¿W*v> 

¡Y  como  que  tere í      •*•*•     •*  T 

,           •    Chacón^  C 

•Pues  no.  > 

Qiné*.  :  < 

Vive  Dios  ,  que  si  supiera 

quien  es,  mil"  muertes  k  dierají 

Chacón.       ';• 

2  Qué  bien  bicé  eh  hó  *ér  yo!  » 

Bascárale,  y  nVí  turpr,  fc 

donde  quiera  que  le  hallara,     ) 
el  corazón  le  quitara.' 

¿  El  niño  no  era  mejor  ?%  - 

i  Carga,*  con  .#4  JWjo  ?,  j  Ab  cruel ! 
GhacóriS 
'  ^tmV[acíc0B  rattyo  *b  quejas  , 
q  uisiero  «Babor  y  qq  é\  d» jas »    • . 
para.opittffc' cargé  eoi*i¿li2.f  «   ; 
pues  no  ser  de  gusto  arguyo, 
irse  por  táGU/4f  lügalr ,, 
oyendo  un  hombre  llana r 
un  niño,  que  no*  ¿rá  suyo. 
Mas  si  eso  es  tk  «e&imiento  9 
yo  báró.*.*  •»  >•  •'«    i*»»  t «  .- 

jQvéff     ^   ■'■  .> 

«r }Ghat9it-<\  .( 

>  'Qña  donde  ©1*4 
sepas.  .  »> 

.-.  0¿*¿s. 
cv   ¿Cómo  sor,  podra  ?     *  ;¿ 


3«7 


m 


Chhcoñ. 
Fácilmente,  escucho  atento* 
Yo  tengo  airintHiio  amigo  » 
tallado ,  prudente  ,  y  fiel  t 
grande  astrólogo  t  y  ai  á  él 
todo  el  anceso  le  digo  f 
lo  sabrá,  sin  discrepar 
un  minuto  *  verdad  es , 
que  será,  fuerza  ,  Ginés  , 
que  algo  se  le  baya  de  dar. 

Ginés.  .f 

Alma  f  y  vida  le  daré*. 
Bástale  luego ,  y  en  pruebt 
esta  sortija  le  lleva.  - 
/  r         Chacón.  ..T 

T  como  que  llevaré. 
Ginés. 
-  •  Presto  tas  nueva*  esperó»       !  V 
Chocan* 
Pues  que  me  agravian  loa  úot\ 
bonra-mia»,  juro  *"  Dios*,  >    u  ;• 
qqe  babeisi  de  valer  dinero.       \ 

.ESCENA  V¿    .,i  «>,  •£ 

Don  Z>iV^o ,  j  después  Ginés. 

,  .  ,  Don  Diego.  'A 

Tanta  mi  vergüeña*  est  .  .     .*/ 
qne  encerrado'  be  de  morir  , 
sin  atreverme  á  .salir 
qne  nadie  me  vea.  ¿Ginés, 
,  de  dónde  vienes  ?     ' 

Ginés.  ,-,    ;<& 

Señor, 
nó  me  rtitat,  porque  véng* 


i» 

ét  servirte* 

Don  XKtg*. 

¿En  quéf 
Giné*. 

Ya  tengo 
á  Juana  en  cas  de  Leonor , 
donde,  tus  partes  hará. 
Dor  Diego. 
Calla ,  calla  ,  no  prosigas » 
al  ya  en  tu  vida  me  digas 
nada  de  gasto ;  poes  ya 
no  ba  de  haberle  para  mí. 
Perdone ,  perdone  amor , 
qne  todo  soy  de  mi  honor  $ 
y  ya  que  ana  veE  lo  fui,  - 
dos  veces  inicias  fuera  f 
si  tan  superior  pesar 
dejar»  al  alma  logar  9 
donde  otra  pasión  cupiera. 

Ginéé. 
Poes  á  ¿esar  que  tu  pena 
esto  no  hubiera,  aliviado ,  i 

no  se  hubiera  levantad*,        .    . 
que  en  verdad  ,  qoe  no  está  btttaá. 

Don  Diego*  i 

¡  Que , no  sepa  donde* «^ria,-    ..-  -so 
ni  aquel  amante  quién  es ! 

l'<'GiriiMKt 
Si  entre  el  alboroto  Inés 
buyo  ,  qóe  es  quien  1*  sabia  , 
¿de  quién  saberlo  procuras? 

Don  "Diepf. 
Mira  que  be  dicho  qu«-  está  *      T       ;; 
mala  Beatrí* y  poique  ya  .    ^ 

que  lo  callen  mis  idearas ,-  '  * 


lfcfr 


no  lo  publique  tu  labio*  \  ••!• 

.-  Giñér.  ' 
Siempre  leal  te  serví. 
xDon  Diigo, 
¿  Llama*  á.la  puerta  ? 

Gihé**  •    ' 

Sí. 

DvnDUgxK 
Mira  quién  es¿  ¡  Oh  .  oñ  agravió* 
qué  cobarde  «s  !  ¡  qué  traidor  ! 
todo  lo  asusta,  y  lo  altera. 

Giréés. 
Por  esto  j  el  que  está  ahí  fuera 
es  el  padre  de  Leonor. 
,    Den  Diego* 
l  El  padre  de  Leonor  ? 
Guata 
tV-.      »         Sí.  .' 
1   *>  D*n  Diego.  ,  .  .:  * 

Sin  duda  me  conoció 
auochejio  roas  que  yo  * 

he  menester,  afeo na> aquí,, 
es,  que,attrc*de  mi  ofendido >  ,,c 
,ft(xdnb  jde  «uifaon o r  me  pida  » •    •,,. 
cuando  los  tiene  mi  Vida 
de  otro»  á  i  ajoten  yo  no  los  pido* 

:♦<»♦;      ■»*;..!       •.   .  i 

ESCBNAVI. 

.     ,\..l    .  :•-        .       i  •;«.   .,>)' 

t  .  Jteft0«ijr>  da«  /***•       ;    1 

<  -i  »  ••      l 

#*»  JUtfo . 
Tendfett.á  gran  «aove  dad,      ,.:£ 
.    señor  don  Diego*  q«e  venga. .  <i 
yo  a  v^Uajros.  •    .  ^ 


n:  *   Don  &}¿#é.  »>. 

•  f*  ¡lias  dichas, 

y  «Aira  tan  grandes' cotoo>estat  * 
afrfttfir*  á  quiea  tot>*  la»  aguarda) 
la  hacen,  lina»  ¿Más  toga  ^        j  - 
Giitfá  j  aquí :  {tertiótíadine 
qtie  Os  rccib»  en-'estaf  'jííeia  f 
*  q¿e'}>ot  áei<  este  iu  cuarto  9 
y  estai«  mi  béruvaná  riftispnest*» 
suplicónos*  pnntfs  «dtatro* 

•  •  Don  Lufa.  •  p 
Bien  prudente  *»  tá  advertencia!   a/>. 
huelge**  tfe  bafeé*ia>  oído.  7 

Sahe  «ineYaltt  a#«é¥aí  i       r<fcp  Qinés. 

ESGfiNA  VIL 

Don  Lui$  y  don  Diego, 

£'"'  Don.if¿d$mt    - 

Anoche  os  busqué.  -,.,., 
•Dmnltiegri.iif  ■ 
«;'  <•    >.%.f**de 

prevé  n  i  o.  dicho .  como.  fs¿*  j 
y  así  ,  no  n»e  e&Juve  en  caiftt 
DottljHÚx 
*¿>Pues  Jfooaio  o^drjé  -4nt  eti«u 

*.■•■  i^bjw^p,  „  ;. 

A  saberlo  y**, os  ¿Mlcára. 

¡ Quién  vi*,  confusión,***  W«r* !       o/>. 

Materia,sv««Aor/dprt^ieí^i  . 
del  {¡ftter,  e^,9uieUj  proJ&»H  •      . 
sustentarlas  ©omptijfctyft,, 
«on  tan  «sa^ñda*,»  ampias  ,t     i 


192 


qwnoM  tfáU»,**1  que 
hayan  «fo'aoaUr,  Por  ft«««  t 
é  yeraS***».*»  9uietl  ,a*  ^*fv 
¿en  quien  U*.^  wpkiwn*,, 
«ero  cuando  *«*«  respeta,,        .;, 
que  se  U»  piP'de^í  moverla.,  » 
es  bar  hombre,  de  ,i*  is  canas,    • 
de  mi  aa**r« ,  y  de  mía  j»  renda*  # 
.parece  f  que  encomendada 
llevan  «o  *  que  «J/ccncí* , 
que  hace  trataJMe  el  horror, 
jino  apacible  U  ofensa 
Esto  viene* ,p*to*  !^' 

j  Pluguiera*  Dio*  f  «o  aupiev*  ¿ 
yo  en  1©  que  viene  *  parar  i 

"Don  Lu**. 
En  facilita^  mi  lengua       , 
términos  con  qufc  oViros  v 
que  permita»  que  no  oa  eren  ' 

decirme  ,  que  mi  aenor*    :'  rn:  * 
doña  Beatrk  adofcac*; 
cuando' vengo  de  su  parte, 
dejándola  yo  muy  buena       >  •••< 
en  mí  caá*  con  Leonor.  -     { 

Don  üitgo. 
Ya  es  «sto'de  otra  mtWM*  >    '^ 
¿  En  vuestra  <¡a«a  *atri*  f 

Don  Xhía*  "•  %k  . 

ÍEo  mi  ca*a ,  porgue  ella  "      V  i 
es  tan  cuerda, Han  prudente, 
tan  advertida,  y*l**U,       '  ';* 
que  hian  elección  de- la  mia,       » 
así  como  faltó  de  esta. 
No  di^y o ,  que  disculpa    : 


/ 


aabefVcon  cátisa ,  6  sin  telilla   . 
vuestra  col  er-a  irritado, 
ni  que  vas  coa  la  ira  ciega 
os  destémplasete  tampoco? 
pero  al  fin,  cosas  «orno  estas  j '<■ 
que  de  una  parte,  y  de  otra 
«no  fácfoefr'se  sujetan, 
ni  ero  «Da  ál  uso  del  juicio  y  -■• < 
ni  en  vos  ai  de.  la  prudencia-;   • 
ya  sucedidas,  no  hay  cosa   '    i«f 
como  acudir  coií^ presteza       -¿ 
al  reparo  que  las  calla  > 
y  no  ai  golpe  que  las  cuenta*.  »  * 
£1  que  no  llega  á  saber, 
que  el  honor  de  un  aire  enferma  ¿ 
«s  días  dichoso  t  que  honrado  ; } 
pero  el  que  sin  culpa  llega '  •  ':> 
á  saber  que  hay  accidentes1      '  * 
en  su  honor,  y  los  remedia  ¿  :> 
mas  honrado* es;  que  dichoso: 
y  en  estas  dos  diferencias  ¿ 
ninguno  lo  es  mas  *  porque     '  ( 
«igualmente  airosos  quedan ;       í 
el  uno,  porque  lo  ignora  ¿ 
y  el  otro ,  porque  lo  enmienda/ 
En  fin  ,  lleguemos  aT  caso'  ; 
Doña  BeatHz  es  tan  cuerda 
(  ya  lo  di j«* )  que  ya  que  hubo  '* 
de  dejar  tíhtida  ,  y  ciega         ''    ' 
su  casa ,  se  fué  á  Ja  mía  ;  •  l 

porque  y  oía  dricíro»  venga, 
que  sin  cjüe  liada  supláis 
xién  estimación  (  porque  e»ta¿     * 
«i  es  plática  tjoe  ella  usará j       > 
ni  medió' tyfae'jfo  eligiera  )•>  u*  4 
14 


«tí 


J 


tt* 


perdflacjs  no  sé  ya*  ye?«>..  ' 
de  amo?.  tan.ípra^p.ea, e4U# 
que  restaura  eu  cajjdad. 
lo  que  pierde  en  conv^nie^nfiaj. 
Este  es  el  caso  *  en,tre.aborat . 
el  juicio  de.  quien  Je.,in$dia.    A  ., 
Si  boy  en  tértoin^s*  dojí  Diego  # 
vuesjr>  .elección  estuviera*..     , 
lo^uííeio.r.fupr^  mejq|ií,.    ,  ,      . 
pero  guando  lio  hay,  defensa^* 
para  qMe  1*>  <lu*  >'á  e$l4>..  r  > 
.    sucedido,  *nq  suceda^    (  ¡k, 
no  kH  £°sa  corTÍ?  engañarse 
uno  así  misxn,o,,y.que.sc^  .  , 
.:  Jft  íttt*  oVe  la,  vo^in&^ljt , .     i 
pori|u,íí  no,  lo  baga  )a,t#erz,a¿. 
del  OfcaJ  ftl  .4íif<?9S,¿  y -AW»  „"     , 
Cuando;  prosigue  ella  uaesma  *   . 
que  ¿si  úg  vuestro  rencor 
su-  rendimiento  iip.  llega, 
á  dispensar, et^fi. iec,il| 
posteaba  >  humilde  *(  y  sujeta  , 
por  jnftí,,.  á  vuestros  pie,*,  ps:  pide,* % 
que  solo>;le.  d^i.S;  Ucencia   f  , 

para  elegir  ¿*'  un  convento   .    - 
.  por  APgoilttira-  una  celda. 

'  :>v.     Don  {tyVgq.,,.  .      ~ 
,  Se^fi,|lQp  Luí.  t  v.OjdsJjtíoido, 
con  desea  d^a^ue^e^.j    .... 
herrnauasjje.uu  W?ft°.Earla 
la   pregunta  %  y. la  «^tW1*^*,  :, 
pero  habiendo  óqt  Sf  i;  Jlfia^  •*:« 
la  una^.y  sien^^lft^Mia,  vuestra 
claro  esiá.,  q»e  #¿  cQuí^marUs^ 
han  d^  dUopar  ¿y^^e^ia  ... 


{Xnsfafe  no  pueden  unirse*    - 

en  metáfora,  d?  cuerdas,  • 
la  que  templa  lu  cordura , 
Con  la  que  el  dolor  destempla! 
perQ  ya  que  mitigado  *      . 
y  no  en  poca  parte.  t  deja 
arbitrios  para  que  elija 
lo  mejor  ,rauv  mal  hiciera  . 
en  no  hacerlo ,  pues  no  hallara 
disculpa  >  si  en  tanta  pena 
se  desbocara  el  enojo  i 
K  «te  o  ié  Arfóle  vos  la  rienda. 
A  mi. hermana  *  lo  primero 
es  justo  que  la  agradezca  ^ 
ya  que  sü  ¿asa  dejó  * 
que  la  dejó  por  la  Vuestra. 
Y  asi  en  albricias *  don.  Luis  * 
de  una  elección  tan  discreta  , 
quiero  pagarla  con  otra  $    •      1 
tnaa  digo  mal,  que  es  la  mesma; 
pues  si  ella  de  vos  se  Vale ,         j 
yo  tambieu  »  y  en  competencia*  * 
tuya*  á  vuestras  plantas  pongo» 
bonor  >  fama  y  vida »  hacienda  i.  •' 
\oáo  es  vuestro  ¿  nada  mió;, 
id  ,  y  de  cualquier  manera     / 
que  vos.,  señor  ,>  dispongáis 
la  plática*  vengo  én  ella  * 
como  antes  que  la  voz  corra  »  , 
Beatriz  á  su  casa*  .vuelva.         , .? 
Trátese  con  el  decoro 
igual,  y  drtgno  á  stís  prendas,  . 
el  estado  que  ella  elija  ; 
que  á  precio  que  no  se,  tntiendí 
que  falta  ¿Beatriz  de  casa  , .  . . 
\      '     * 


idS 


19$ 


ni  que  á  mi  disgusto  intenta 

tomar  estado »  y 6  quiero  > 

anticipar  la  licencia.  <  >  1 

Mas  debajo  del  pretesto * 

que  en  calidad, -en  noblesa? 

en  {tanto,  en  estimación  > 

un  átomo ,  ««a  apariencia 

no  he  de  dispensar;  porque 

en  tocando  esta  materia , 

importará  macho  menos , 

que  lo  perdido  se  pierda, 

que  lo  por  perder  ¡  que  un  xlafto  ; 

é  se  olvida  *  ó  se  consuela  , 

ó  se  acaba  con  la  vida  j 

mas  no  cuando  «1  daño  queda 

vinculado  en*  una  casa  , 

á  ser  de  su  sangre  herencia* 

Don  Luis. 
Una  ,  f  mil  vuces  los  brazos 
;  ne  dad  ,  que  *de  otra  manera     • 
estilo  no- hallo  con  que 
tai  valor  os.  agradezca  ; 
quedad  con  !>¿oj*f  que  no  veo 
la  bora  de  llegar/ con  nueva       * 
de  tanto  gusto ¿ 

Don  Diego.  i 

-Esperad, 
que  por  la  quietud  siquiera     '     t 
del  ptnsamietité  de  «u  triste  ,    * 
Mtná  justa  piedad  sepa, 
ya  que  la  finesa  hace  ,    •  .  '' 

po**  quien  hace  la  üneift*'  ■  * 

Don  Luís. 
IVueis  ratón  ;  mas  no  puedo     * 
deci  rio  y*  i  que  discreta  -  t» 


197 


Beatriz  lo  calla  ,  por  no 
empeña  roa  eu  la  ofensa, 
hasta  kt  resolución  ;  ». 
y  supuesto  que  es  tan  cuerda  9 
yo  «abré  quien  es ,  y  al  punto 
volveré  con  la  respuesta. 
,  •  Don  Diego. 

¿No  aera  mejor  que  vaya 
yo  con  vos  para  saberla  ? 

Don  Lais. 
No,  que  hasta  estar  informado 
yo  de  todo  ,  no  quisiera , 
que  quien  á  Beatriz  parece 
digno »  á  vos  no  os  lo  parezca , 

y  estando  en  mi  casa 

Don  Diego.    > 

Oíd, 
no  prosiga  ii,  fuera  de;  ella 
me  quedaré. 

Don  Luis. 
£n  eso  haced 
vnestro  gusto.  Fase* 

Don  Diego. 

¿Quién  creyera 
.  que  el  que  juagué  que  venia 
cargado  de  honrosas  quejas  , 
á  darme  por  su  honor  muerte  , 
á  dar  vida  á  mi  honor  venga  ? 

ESCENA  VIH. 
Sala  eu  casa  ds  Lioxoi* 

Leonor  •  Beatriz  y  Juana. 
Leonor. 
Mucho  |  Beatriz ,  me  peta  % 


198 

(  que  ya  que  mi  «mistad  tanto  intercü 
hoy  en  tu  compañía , 
la  triste ,  la  mortal  melancolía 
que  padeces,  sea  parte 
á  deslucirme  el  bien  de  consolarte,. 
Trata,  pues  es  en  vano, 
esperar  siempre  lo  peor;  tu  hermano » 
de  mi  padre  advertido, 
lio  dudo  que  prudente  •• 

darle  el  estado  intente 
que  á  todos  está  bien  ,  con  qne.  habrá  sido 
el  pasado  disgusto 

tercero  felicísimo  del  guato*  ? 

No  siempre  viene  el  día 
de  parte  del  pesar.  •>  x 

;  A  y  Leonor  mía! 
que  aunque.,  á  despecho  de  mis  dicha* ,  ere* 
que  puede  ser  que  sea , 
como  dices  ,  tercero 
el  disgusto  del  gusto»  no  lo  espero,, 
si  doy  crédito  á  una 
presunción,  hija  a!  fin  de  mi  fortuna. 

Leonor. 
¿Pues  qué  temes  ahora? 
Beatriz. 
Que  el  ¿lueuo  qut  ha  de  serlo  ¡ay  de  mí!  Ignora 
donde  eatoy  ♦  y  quedando  persuadido   > 
á  que  un  aleve,  uu  falso,  un  atrevido, 
que  á  mi  reja  llamó,  sin  culpa  mía, 
ser  mi  amante  podía. 
¡  O!  el  cielo  le  destruya 
con  el  podar  de  toda  la  ira  Súy^a  , 
dándote  mas  fatigas, 
que  padezco  por  <JL      .  •    •* 


'  199 

Leonor. 

'•  No  me  lo  digas. 

Beatriz.    '  "    T  '   *  "' 
¿Qué  te  va  á  tí  en  que  alivie  *»  rs  'pasiones  f 

Leonor. 
{fócenme  estremecer  las  maldiciones.  ' 

JScatriz. 
Estará  sospechoso 
de  presumir  ,  en  vano  ,     .       ' 
*jue  pude»  por  el  miedo  de  nií  hermano  y 
irme  á  valer  de  quien  está  zcloso ; 
.  y  como  á  este  dudoso 

concepto  ¡  ay  Dios.!  la  presunción  entregue, 
cuando  la  nueva  llegue 
de  que  viene  don  Diego 
en  nuestro  casamiento  ,  podrá  ciego 
liacer  reparo  *  en.  cuyo  trance  advierte 
cnal  es,  Leonor,  mi  desdichada   suerte; 
pues  aun  de  lo.  mejor  que  me  suceda  f 
apelación  £  mis  desdichas  queda." 

.  t      Leonor. 
No  queda  ,  pues  el  da  140 
resulta  en  uno ,  y  otro  desengaño. 

Beatriz* 
Si  tú  ,  Leonor ,  quisieras  ,  /  ' 

finesas  á  finezas  añadiendo, 
hacer  una  por  mi,  fácil  pudieras 
vencer  el  mal  de  que  me  ves  muriendo, 

Leonor.  . 
Servirte  solo  es  lo  oate  yo*  pretendo.' 

Beatriz.      ^ 
Fue*  dame 


Leonor* 
¿Qué? 


i 


20Q 

Licencia 
ele  que  un  papel  le  escrita  ,        ^    . 
porque  dudando  donde  estoy  no  ▼iva*' 
•  Leonor%. 

~"Sí;  i  mas  quien  ha  de  hacer  la  diligencia  ¿ 
ai  ves  qae  ana  criada» 
que  es  la  -qae  ir  puede  fuera  solamente  t 
hoy  vino  á  casa,  y  es  inconveniente 
tan  presto  hacerla  sabedora  ? 
Beatriz. 

En  nada, 
repara  quien  cjesea : 
yo  la  hablé  ya,  y  cota  o  ella  gusto  vea 
en  tí ,  dice  qae  irá  donde  le  diga. 

Leonor. 
Tu  pena  mas,  qae  tu  amistad ,  me  obliga; 
haz,  (o  que  tú  quisieres.  , 

Beatriz. 
No  amiga  ,  esclava  soy,  mi  dueño  eres» 

Leonor. 
Ven  ,  daréte,  Beatriz ,  mi  escribanía» 

Beatriz. 
¿Juana  ?*  '  * 

ESCENA  IX. 

Dicha*  y  Juana. 

Juana. 
¿Se.nprainia  ? 
•»-  i*  Beatriz.  x       \ 

Ta  la  licencia  tengo.  Van&e  las  dos»    , 


■    ESCENA  X. 

Juana ,  y  después  don  Juan  y  Chacón* 

jt 
Juana.  .  -   ; 

Dárae  el  papel,  verás  que  presto  vengo, 
que  ya,  que  roe  ha  traído 
Ginls  aquí  por  su  amo  ,  justo  ha  sido; 
que  también  á  su  ama 
sirva  ,  supuesto  que  ella  también  ama ; 
Y  una  ,  y  tftra  porfía  ' 

afectas  son  á  la  prebenda  mía. 

Don.  Juan. 
Entra  primero  tú,  delante  pasa,  (  i  ) 

hasta  sober  sí  está  dou  Luis  en  casa.  N 

Chacón* 
Allí  esta!  sola  una  criada. 
Dan  Juan- 

,  De  ella 
puedes  saberlo. 

"  Chacón. 

I  Oye  usted  doncella  ?  . 
¡pero  qué  es  lo  que  veo!    - 
mentí  como  un  sacrilego. 
.  Juana* 

E,l  deseo  t         ap. 
6  sombras  finge,  6  mi  ventura  ha  sido. 
Sea$9  Chacón,  mil  veces  bien  venido,, 
donde  un  alma  te  espera  enamorada. 

Chacón* 
Tú ,  Juana ,  seas  mil  vece*  mal  bailada. 

( i  )  Salen  cómo  recatándose  ;  hablando  desde  la 
puerta  ;  don  Juan  se  queda  en  ella  y  Chacón  llega  d 
Juana*         \    ' 


303 

Juana* 
Mal  merece»  eaülo  tan  trotero 
clamor,  y  la  ie  con  que  te  espero* 
;  ¿Tu' roe  hablas  de  esa  suerte  ? 
¿  Ah  mi  bien  ,  mi  señor  ? 
Chacón. 


k 


l  Qué  es  esto  f 


Mi  mal,  mí  muerte. 
'-.Juan*. 


Chacón*  .  *     < 

¿Q«é  preguntas? 
ai  eres  qn  cocodrilo  ,  una  sirena* 
que  para  mayor  pena,        > 
trecemesinamente  á  un  tiempo  juntas 
traición ,  y  bálago  ;  «as  núes  no  barruntas 
lo  que  es  esto  ,  y  &qgiendo  que  lo  ignoras  f 
exequias  cantas ,  parabienes  Horas,  - 
yo  lo  diré  :  ¿  puedes  negarme  ,  ingrata  y 
falsa  ,  aleve ,  cruel,  fiera  ,  mulata  ; 
(  perdona  el  consonante  , 
cargúeme  de  razón v  paso  adelante) 
lo  que  en  tu  misma  casa  á  mí  me  pasa  ? 

i  Juana. 

¿  En  qué  casa  f  Chacón  ,  si  esta  es  mi  casa  ? 

Chacón* 
4  Ksta  es  tu  cas*  f 

Juana. 

Desde  que  te  fuiste, 
por  vivir  en  tu  ausencia  sala,  y  triste, 
quitada  de  ocasiones , 
de  malas  lenguas,  y  murmuraciones, 
dejé  la  que  tenia  ; 
criada  soy 'de  Leonor. 

t  Chacón. 

I  Ay  Juana  mía! 


se» 

perdona,  que  los  velos  ' 

duelo  no  tienen  ,  aunque  tienen  duelos; 
llega  ,  señor,  oirás  el  mas  entraño  9 
el  mejor ,  el  mas  dulce  desengaño. 

Juana.  '"   .'  * 

¿De  eso  tratas  ahora  ?  •    ?  •     i    *. 

Chacón, 
¿He  de  tratar  de  reto  de  Zamora? 
Seas ,  ó  Juana  ,  el  ¿asto  despedido, 
bien  bailada.'  * 

Juana* 
Tu  seas  mal  Venido. 
Otaca  n. 
I  Tal.  pronuncia  tu  labió'?     '         '      ' 
jAh  mi  Juana  í  ;  Ah  mi  bien! 
Juana. 

Mi  mal;  tni'grrfvío. 
Chacón. 
¿Qué  es  esto? 

Juana.  > 
Ser  quien  soy,  verme  ofendida. 

ESCENA  XI. 

Xfichas  y  Leonor.  '■ 

Leonor. 
Toma  ,  Juana ,  el  papel  ,  vé  por  tu  vida  , 
qae  porque  mq  saliese  ella,  acá  fuera  , 
yo  te  le  ti,aigd.  Dale  el  papel.        \ 

<  t  Don  Juan. 

Espera  y 
que  antes  que  Juana* con  él 
vaya  doade  tú  la  envías,  j 

baa  dt  ver  las.  ansia*  mías 


A 


204 


lo  que  contiene  el' papel.  (  i) 

Leonor 
¿Siera  prepon  migo  cruel, 
don  Juan,  siempre  sospechoso» 
recatado,  y  temeroso, 
cuando  juzgo  que  previenes' 
mas  fino  obligarme,  vienes 
á  ofenderme  mas  zeloso  l 

Don  Juan. 
Leonor,  aunque  mi  alvedrio 
tenga  de  ti  confianza  , 
ha  de.  temer  tu  muda  nía 
el  poco  mérito  mi%. 
Yo  de  tí  no  desconfío , 
de  qnien  desconfio  es  de  mij 
y  supuesto,  siendo  así, 
que  á  mi  me  temo ,  y  no  i  élg 
tengo  de  ver  el  papel. 

Leonor. 
I  Le  has  de  ver  ?  pues  oye. 

Don  Juan.  ' 

DL 
Leonor, 
Aqueste  papel  no  es  mió , 
ni  yo  le  escribó,  ni  sé 
lo  que  eñ  sí  contiene ,  aunque 
ves  qué  soy  la  que  le  envió: 
yo  de  tu  mano  le  fio ; 
mas  con  esta  condición  t 
que  si  lees  solo  un  renglón, 
de  nuevo  me  he  de  ofender; 
y  «i  le  vuelve*  sin  leer  % 
creeré  la  satisfacción  ^  ' 


(  i  )     quiere  tomarle,  jr  tita  le  retira. 


205 

que  tienes  te  fui  *  de  suerte 
,q«e  estar  de  nuevo  ofendida, 

ó  de  nuevo  agradecida  , 

«n  tu  mano   pongo.  Dasth. 

Don  Juan. 

Advierte 

que  es  un  examen  muy  fuerte , 

una  esperieiuua  muy  nueva , 

y  muy  rigurosa  prueba 

poner  al  que  está  mortal 

en  los  labios  el  cristal  , 

y  decirle  que  no  beba. 

Darme,  Leoaor,  ei  papel 

*  que  en  mi  mano  le  vea, 

y  mandar  que.no  le  lea, 

es  precepto  tan  rruel  , 

como  fuera  darle  4  aquel» 

qwe  ya  en  la  prisión  desmaya ,  i 

pisando  la  última  raya 
de  la  vida  su  aflicción, 

Ja  llave  de  la  prisión, 

y  decir  que.no.se  vaya. 

'v«r  que  á  una  criada  le  das,    \ 

J  no  ver  á. quien  le, envías,  „   . 

*er ,  que  á  mi  mano  le  fias , 

para  volverle  no- mas,  ,     .     ; 

lo  mismo  es,  si  ^e*ta  estás   '  * 

á  conditíon  tan  severa , 

que  si  desde  la.  ribera 

al  qu<  ahogarse  miraras        j>. 

una  tabla  k-  arrobas  .  * 

<4a -lev  de  que  no  la  asiera/ 

Lo  mismo  es  decirme  aquí  ir  t(tt 

que  no  es  tuy¿  ,  y  pretender 

queílo  que  yo^ufdo  ver, 


EMHÍ 

sin  ver  ,  lo.cre,a  Je:*f#     , 

qne  si  di  que  ardiendo  (¡  ay  á^,  mi!  ) 

en  un  incendio  tirano  , 

le  Disuadieras  en  vano 

á  que. el  luego  no  apagara  * 

esperando  que  llegara 

á.  socorrerle  otra  mano. 

Y  *sí,  aunque  lidien,  Leonor*  - 

en  tan  estraño  precepto , 

de  «na  parte  tu  respeto, 

de  otra  parte  mi  temor; 

perdona  ,  que  fuera  error  f 

que.  yo  morir  me  dejara  , 

sin  qme  del  cristal  probara  , 

sin  que  la  prisión  rompiera, 

sin  que  a  la  tabla  me  asiera  , 

y  sin  que  el  fuego  apagara. 
Lee,     Porque  no  presumáis  de  mi  *  fu*  ™  de"ú 
hacer  siempre  lo  mefot ,   sabed  que  donde  .meajas 
recerme  a»»ehe>fueén  easu rde  Uonori  en  ella.... 

No  hay  que •  le*f  mas  ;  y  si  yo  f 

que  no  te  ofendía  creyera  , 

todo  esto  dicho  U  hubiera 

é  quien  Beatriz  K>  escribió. 

v  ■-  Leonor. 

^¿Ew  fin  ,  no  te  encané? 
i.  5   •     Btín  Juan. 

.  No. 

¿  Luego  Ingrato'  eres  ? 
Don  Juan. 

,  ;       SOJ  fitl/ 

toma  el  papfcí.        ,  l 

.Leonor* 


*i  verte  quieto.  ,.    .  **' 

ESCENA  XIl. 

bichos  j  don  Luis.      '  ' 

Don  Luis. 
Yo  si. 
Si'".   ti       Uonor,  t  H \ 
i  Ay  mfelice  de  mi  i      ,  ^ 

.« :  •  Don  Juan.. 

¡Quién  vio  Janee  ma*  cruel!        ^é   , 

r     .  Don  Luis, 

¿Qué  es  esto  >  señor  don  Juan  ? 
¿Vo*  en  mi  casa?  ¿  qaé  w  esto? 
¿  Leonor «  enojada  .^? 
¿  porfiarlo  uno .,v  otro  sintiendo? 
Pfcftí*??*  »o.lo  fHfcais,      , 
que  pues  he  Helado  á  tiempo 
quee^paprl ^qe.lo  #$a  , . 
de  él  lo  sabré.    .'',', 

■   Don  jpan.., 
t ••"  fcYo.eatoy  muerto!       «^. 

.c;-  •  Zewor,'  '    ' 

I  Yo  confusa  I     ....     ,  ¿„ 

cu.  ¿Y^,  turbada! 

Chqcofi. 
to  t  si  la  verdad,  confieso  ,         '       apt 
esto#  aliona, .jcooiq i.fwando 
tengo  much/sin^p.njied'o" 

,    '  . .»  Lepijor.^ r 

de  «quese  j^J  ftf.JfrIot 


a/?. 


J 


sos 


!W 


favor  aquí. 

Don  Juan, 

¿Qué  preteiidé  t 

decir  Leonor  ? 

Chacón, 

Algún  cuento. 
Leonor* 
Beatriz  te  escribió  á  su  amante , 
•*    tjue  será  ese  caballero  ¿ 

que  yo  no  He  visto  en  mi  vida, 

V  •   **     ni  sé  quien  es  ;  él  sabiendo 

.       por  él  f  que  está  aquí  Beatriz, 
t raido  de  sus  alectos  ,   ■ 
dice,  que  fea  de  entrar  á  hablarla; 
y  porque  se  lo  defiendo  , 
diciendole  que  es  enfeaño 
(  por  lo  que  yo  á  mi  me  debo  ) 
para  convencerme'  él , 
mé  daba  el  papel  ¿  á  efecto 
de  que  Je  leyera  yo  ; 
y  así  roe  estaba  diciendo : 

V  '   toma  el  p*pel :  á  que  entonces 

l  yo  el  papel  ?  ni  vefle  quiero  j 
t-espondí  dándole  al  airé.    •'    -'\ 

Don  Luis 
Lo  que  dices  tú,  es  lo  mesmo 
que,  dicen  papel  y  acción. 

Leonor.  *  *    * 

Ahí  verás  que  yo  no  miento*     * 

Chacón. 
Y  como  ,  así  las  verdades 
son  de  todas  las  del  pueblo.'    i ¿ 

Don  Luis* 
Por  cierto  ,  señor  don  Juan  ¿ 
:»>of.nb  Ealfcflrana'ádo  cuercto* 


ai  en  atn&erl»  ¿  eatra*  <i>oi 
tú  mi' casa,  ni  en  poner»» o 
en  demandaron  Leonbf]<  *.  * 

i  v !*  '.',  ?     ¿toa  Juan.  •<  ;>  *■".  «t 
Señor  f  %m  »raor /,  ai  i  d«sv*to<< 
>n  amar  á  Beatriz ,  es 
j»ato,  y.U        •,  .  ...:Ts 

/  Disculpas  no  quiero 
ai  ¿  to<fc>  lo  que  pudiera 
estendtir' mi*  sentimiento)';  n<>2 
porque*  ti  efecto  noes  -    '  «•  i 
ya  do  n*  «dad  todo  e»  duelo  *-» 
y.  más  ,  c*aodo  de  enmendar  »•! 
«  #ra  to>  \pk  d  i  s  g  o  s*os  v«  es  t«r  o$*'  •  *  i 
Para  «I<<ftn>  de  'vuestras  hoéa*<¿ 
de  hablen  á  «do»  Diego  veugoy 
él  responde  tan  prudente  i      { 
tan  advertido,  y  o  tentó*, 
que  olvidáSX  dfeK  degusto, 

so,.o  Jyta  4eJ  ,rwpd»° .-.  ud 

en  su  honor ;  y  aunque  dudaba 
/       en  solo  safcef  fei**)  dueño 
que  ett£tó"Bi»fttriz ,  tenia. 
en  sangre  me  redimiente  ^«i»S 
que  igualasen  §  lá,  su>a;    - 
< ©drj,: y*  >( íenWv&s ¿|. sugeto f 

en  qoie^i.ttfi  fcattfitaoW^ífi'  x 
quedan  ^«dóa*  sus  regirte*  {>  "l  ( 
como  en  qttieh  g»a¿  la  altiva 
sangre 'ilu'st  fe  de'  Totead  í*1  «"* 
no  I&T  que  Peptfi-ár  ;t  y .  Wj  '* 
á  de^irtó  a?  Bea-trit  WI^JUmS 
por  ¿édUr*  yuia*  albrtefeaj"1'  » 
y  ^l^ne^a^^dfe  <TéJtf&«  »•  **> 
14 


209 


210 


toda  •*  pena  aotbadaí:  •  . 
vo*  esperad  ,  que  al  «omento 
á  doa  Di*w  llamar*  v    <  • 
para  que  alegre,  y  contento » 
hermano  ,  y  amigo  oa  hable. 

Leonor, 
¿Tan  presto  quieres  todo  ea«>- 
a tropelía r  ? 
c  Don  Luis. 

Estas  cosa:» 
son -mejor  cuanto  mas  presto» 
no  veo  la  hora  de  ecfe«i>    . 
de*  jtU-daaa  tan  .o|»u**to*>  .   < 
lances  a  raí  condiciona  .  ; 

muy,  bueno  9  tja  verdad  ,  es  esto  9 
^>eoAOit »  par* .  év  ¿eoatota  •  • 
véanse  aJIá  cbs  fias,  setal » ' 
y  su  «amor. 

,  otJBSCBNA,  WH, ¡  p'f,  •". 

Dichos ,  mcAos'ddh  £uik. 

,.,      J)op.¿u&if*t 
.     j  A  y  l^iípc.aHat     > 
¿que  J*a*  hecho ?t     ,.  n...,,,;..  a?> 
.  .        Leonor-    , : »  ^ ,        , 
,.  ¿Qiué  lififjr  ^b<y  hfcho? 

valerroe.de  uma,d»$eé»f  Jtftf;.. 
y  la  «ji^qJpa  a»r  ^«imia/.ffr*   ., 
fi'/íll,.     iponjuftn..    ..,  .     .    , 

Aon  e{  r/fWfcqar.fAU»','.. 
**  IpKtvBorqnf  en  *aj¡<-p&a  .  ,< 
Beatna.,4  yérmele*,  ípraosp  , 
«Jfciíj^que  «9  *<W.?J  4^*9       " 
de  su  ao^r¿  jf  cu^a  {iHW*f  : 
f  1  *      *     .  " 


boy  por  tf  émtfr  *1  serlo  , 
es  rriptfy**toe  i  tratar 
co  n  d ó  n r  tm'»  **  cmí  m iéttf o  j. :  -  • 
y  en  roa  tercian  pasada    , 
</*«  fro4e  *fc**Hr.      .;■.'/ 

.  "j&M/iew.     "' 
«  .       *".  íf  l      '    -    Todo  e.«to 
puede  er*m*n4tir«ei  don  Jiftfa* 

.•y-ii-iDdnJkañ.  •  *  • 
¿Con  cjoi?     >v  í 

o.Íjí..:    Leonor,  'i    *»    i 

Con  dar  tiempo  «1  tirapo. 
Veté  1á'tttit«s  que  t41os  salga»  J 
uv.ytdéjaroott  *»f.  .    .  # 

Den  Juan. 

MaJ  puedo  ■  .¡t¿ 
yo  en  tanto*»fo»go.  dejarle. 

Leonor. 
En  yendo  te- 14,  no  hay  riesgo. 

•*  ■  "Don  Juan, 
t ¿£¿mo ',  si  don  J-uIs  á  nff'c 
nombra ,  y  BcajtrÍB  á  don  Pedro, 
puede  dejar  de  quedar 
cátodo  el  lance  descubierto  , 
y  resultar  contra  tí  .4    ú      / 

la  presunciour  det'empe&O? 

V  "         Leonor. 
No  viéndote  á  ti  9  es  cnestion  \ 

de  nombre  esa  ;  y  en  efecto,   . 
.  dar  tiempo  ai  tiempo  te  importa.; 
Don  Juan*       j 
A  mi  pesar  tatolwdeECO. 

'Chacón. 
Salgamos ,  señoree  aquí, 
una  por  una* . 


i 


814 


-    ■  nli  i  ni.      f  íiflnfn'itiri  J    ti 

i— — — ^— pw»  1 1  mi  1 1  immmmmmmmm ni 

ACTO  TERCERp, 

ESCENA  PWME^A. 
Sala  bh  CAaA.n*»ow  Luii, 

ChnéoW¡?  áúfi  JhtaAH  ta  puerta.* 

¡#    .      Chacón.  . 
Ya 'don  Luis ,  y  ffcatrjt,  vienen.  ¡ 
hacia  esta  parle     ;  r 

Don  Juan^ 

Chaco}n.%  ,     .  ,f,  .  ^ 
¿  Qué  ¿ia.  de  dt^irjei  JUo^qi^ 
de  habernos  ido  ?,       , 
f  .^  fion  Jupa.  , 

Oye  atento. 

ESCENA  II. 
Dichos  ,  don  Luis  y  Beatriz. 

Don  Luis, 
Esto  dijo  vuestro  hermano 
prudente  ,  advertido  ,  y  cuerdo; 

y  aunque  pudiera  ,  señora 

doña  B  atriz  ,  mi  respeto 
ofenderse  de  que  vos  f 
tan  de  las  puertas  adentro 
de  mi  casa  ,  hayáis  escrito  t 

que  venga  este  caballero g 

os  lo  perdono  ;  porque 

bago  en  perdonarlo  menos 


2ir 


..,.  flflc.qnfrtanrtn  ,<n1n-e*to  f  ■  -    .-^_     N 
'¿é  liará*  mejor  la  deshecha 

dar  efe Tíaoerse  doa  Jaau  ido. 

i.Pr  ha  tjwfcaw* ,  w^«»4^í  o 

allí  esta  en  gran  puridad 

con  Beatriz  hablando  el  viejo, 

dotf  Jiíaií  íscon'dído  aquí'*  '  !  b     '" 

á  nuestra  puerta  don  Diego,'   ~'0 

Leonor  en  óbft^afcion* 

de  decfrseljn'tidó  enredo , 

Chacón  zelosoY'culpaola. 

yo  ;  ¿  faii'~ric*ede*s  todo  eitfrY  ''   ■  } 

pues  en  qué  para  "verán  V*'      '     * 

solo  con  dar  Win  po  al  tiempo, 

.11  /  '     ■    * 

*W\  *  •  * 

«.fit.fii  .>.i  í  ».        /  í»{Ü»  ♦*'«•/! 

•  oLi'.ií-  v  f  •  í   '•      '    r*  ,y.t«i1,uM« 

fi.  m»-    ,  -•  •  -  r  mi r.  '/ 

YJ  *  ,?*,i  ¡/i     ,  ' «  »*■    ít    mVji 

t  n»v  «»■  »•    *     "?  t   !..iV'.« 

%     Oi)ti«!i'*  '*'      '  '!   -f!  '  »    •'*> 

,  0J0  ».-»*••■         '   ,  *  •->  ií'i  "h 

^t.M.-Ií      •»  •>  r^ir  ,   vt-p 

eiTf»'i»  •;   .    m  í  mq  el  ?.o 

con » Al  i/¿  lí.AvoV*a«|  Ü9  DJCii 


l 


214 


i  mi >  íiii  i  ff  tifiiiiijtm_^ji_ 

ACTO  TEftCEEK). 

ESCENA  FWMB?A» 
Sala  bh  casa,. WT  don  Luil» 

Cha&ri>f  á\tn  JbtafiH  Ta  puerto.* 

Chacón.  «     •         • 
Ya  'don  ¿u¿ ,  y  %atrji;  vienen.  .. 
bacía  esta  parle.  "ív 

0o/i  /"Afi^ 

Chacón. tj  ,,.,,,         •, 

de  habernos  ido  ?.       ; .   .    .. 

Oye  atento. 

ESCENA  II. 
Dichos ,  Jo/i  ¿ufr  /  Beatriz. 

Don  Luis. 
Esto  dijo  vuestro  hermano 
prudente  ,  advertido  ,  y  cuerdo; 
y  aunque  pudiera  ,  señora 
dona  Beatriz  ,  mi  respeto' 
ofenderse  de  que  vos  f 
tan  de  las  puertas  adentro 
de  mi  casa  ,  hayáis  escrito  t 
que  venga  este  caballero* 
os  lo  perdono  ;  porque 
hago  en  perdonarlo  menos 


2iS 


i  tos  f  que  á-fl»  ^   :    ~ 

Beatriz»  '  *>  J  ttO  ^ 

HfF,  tenor  f 
escrihf  fbffopel  f  diciendo  f 
que  eJB'VQmfcrs  cara...  '     :v 

<  '•  Dan  LuiSé  •  i       *i 

.    >i    •  E*li  bien..     ?, 

Beatriz;  •    ,  .    ».  .* 

Porqire  supliera  «!  ütoierto 
de  mi  elecoidn,  nóf  pensar*     •>     .  r 
que  yo  pudiera. ...v.  •    '» 

JDó/f  Zw/>.  i; 

En  efecto  o 

ya  él  cató  áqttf ,  y  en  1*  calle 
vuestro  hermanó,  que  en  sabiendo 
quien  es,  es  fuer**  que  admita  ;    / 
de  so  honor  *el  fttefoe  mfedib  ?    •;    t 
cotí  que  á  viii-stra'  cúéz  hoy 
volvereis  gustora,    ♦.  ,  /  ; 

.  vBe*toiz.  •  <  .<» 

»••>'■  .    mM* 
úñ  guarde;  quehorror,  y  vida 
he  de  i«bf*sáe  -qnCí  os  debo.',     '  iH 

To  he  de  serviro*' ¿IiéoMr  ju  «  <  ¡ 
d  o nde  teotéiiqtiel  >  oafeottero  ■  <v  .t  r.  • .  i  a 
que  quedé  tqatft  x    i  -«  * 

,  o it /.'«•«  •  •'  '  •'    ..    "*i  •»  »f>  i 

\«;.;r¡»  ;E8CIJMA»  Ifl^ ii   eic.t 

Dichos  »  Leonor  r  Jwna.  v 

.o(J^O*«r?     ...    <   v  >.Í>M.   ¿ 

,'Ma  q«id>era 
de«ir?]e>4}ú»«dfi}a<  huyendo!      ,  >  m.Q  ; 
de  volvejQyuuiiWr^jVfrt^i:  .^  «„ij 


i 


SUS. 


fct 


Don  LuftA\  *-••»  ,  *~r  i 
¿Qué  dijo  ?       r«M.  . 
,  •    '  Leonbr/ 

tttjo  resuelfd ,         t  * 
que  aunque  él  i  ver  á<  Be  atril      :*' 
habia  venido  ,i>o\ái«fccto 
de  tratar  con  tanta  priesa  , 
señor  ,  de  su  casamiento  ; 
porque  hasta  estar  su-iemor  ;     ,r* 
informado,  y  satisfecho)         <    •  ••;* 
de  quien  era  el  que  «Haitiana       *<  f» 
á  su  reja  ,  estando  <él4entro 
de  su  c»áa  y  tío  pensaba 
tratap'Ae  segumtos,  fea«fiHoBif->  •  •  •  / 
«fnrieUo  ¿ligase  á  Rsatrta.f!  ■■  • 
y  á  tí.t  iqltic  vá  de:  tí.  huyendo 9      T» 
por  n*>.  ha  Man '4«***to '««Mitigo,   -b 
\c.:  vBeatriti  .ov  «    ;       .  «»> 
¡  Ay  Leonor  ,  no  jbm*  ▼«!#>  fueron  ' 
rtis  temores;  áVqftfaáA  quiera 
que  fueseyuVasÉrtaya  el  cielo! 

*hh  v  , /podrir  f»np  ;ofu-.»ití  *.o 
El  bien.fnealeí*  B«a>tHts<ffai«y  )  i  ul 
áer  muy  grandeucfebaJltro  j 
pero  ri¿  cantil  fiua^'  iv  ♦.!>  ■  <!  <  Y 
ni  ceumigo  hacino  dad  picáérdo.(Hi<  1> 
Z/o/i  Ji/attiyí-  óLm«¿)  -iip 
¿Qué  te  parece  el  engaño, 
para  ir  d a iidtfftiAHijitftdH tiempo  ?. 

-o  -fihacon.    :  ,  .  _ 

Yo  con  lo  der  primer  ais  y 
¿  nada  ,  señor  pafeieiédo. 

c^'£h*f>  luis 
¡Que  «so  óV|*i\  ^u»|cajíáWfléftfR9Qlf*»:'>'»% 
tras  él  iráV'*í^fy*^'1*««ft*',o/  »w 


de  mi  casa  ,.7rd*|ft£:hftlor : 
,  m$s  ¿  dónde  voy  ?  que  dan  Uilgp 
-^VjfaMJ^cafleUtá'cSlterandó     '  ' 

la  respuesta,  y,  s\  Uitkfevo 
el  nombre;  X  U.vjé..aalirtt  n.-i/í  ;'I 
es  prcpisQ  ir  al'pofmtnta      <       -p 
á  "buscarle  f  aJ»orQsa'4o<  |  -    •* 

r^^ter  o^uicn,  ea.r .jUea  tyerro  f  i  t  >. 
no  estando  íde,  fPl'fW.;!:  .  .  i  ^ 
esotro  ei». el. *;as#n)i«ya¿o;  ■  -  i 
pues  dejarJftrfJfydegjrifi  -.  '••■» 

cuando  él,espffarAal*rl*'tv 
será  pOTicrI*#?i(JgMfcy#P>   <  »«  *    •" 

sospechante  £tte«,ye*n*kntQ  „ # 

y  mas  v¿«ndo|a.#iv  nal  casa. |. 

¿  Quién  roe  J*a  ipAÜdoÁ  mí  en  esto 
de  a n(J*r«e  SlOüenl^ve  mocitos  ,     » 
ajnstando  amor,  y  &tk>4¿  .,  .:  ■•»; 

Señor,  si  yo  krt&iera  dado 
la  ocasión  ,  qftftii¿>  *Htf&  ,  ¡  ay  cielos! 
yri?iy*fnu>na  entra  en  esta  sala ; 
de  solo.i»ú*f)fc^<ltMoi#-ii'f  m  <.st 
pues  ya  fcabeüt'tVAs  «pifen  es  , 
decídselo* ;'•  aaefcnaeSnos  fc;  oú  : .    ♦»  ♦  O 
lo  piribfiipftl  ^a>4a.-nh«Aa!»i'jb  I*  *up 
que  en  e9elu0.jp*  «M|o£feEca;  •  .hú 
á  desengañante fip«l**'v«it;M>».  I»  y 
paran)tsf4«r  ?a¿«iffffc¡a> v»  <  t  •»•  «"*»' 
sé  qi^taiiQOüfecfnt  pairte  .:>  .Kd  v 
*   la  poca  cul¿*if,tt¿4¿fl»$Q.  vm(*  •»«  í» 
(  ioiiián  l»  sotitsí)  et,S  -»L  ) 
....*io* 


2«'l 


j 


.♦v> 


tener  notieiaV   "'  ^  * 

.<■..  :  t  •  :, «.  jbcmé: 

•<    Calla  aliora. 

¿  Prend*'  ptfrdfd*  tenemos '  •  •  ** "  p 
,  aobre  primer  diaf  *>  »»«p 

Don  Qicgo.         •  ••  ''•-> 
•;•".  -•'»  *?  --«l.  í  A  buscar  •«-  »*p  • 

vamos  á  VioiíJtrán  ;  y  p««st»q  .' 
á  sus  pifa  ,  veréis  cfikc  bago  *  :  ••• 
la  que^tf  Agradecimiento.  •  <  t 
Don  Luis.  ■  .•  .1  >*im> 
Tened ,  «fti*  driles  <^ue  los  dos  '•  l 
cara  á  cara  babieú  en  esta*,  ;  '  " 
es  bieff  %|in*adda^fp  v»ya  *  •  *•  .-.v 
yo  á  ha¿larl*y  qae  los  terceros 
a  jos  I  ata  flbejbt*  laspacpsi  •  •"♦■   V  i    „ 

De  mis  acciones  40i¿dae5o. 

u       •  r ».•/'■•  *  ..-i    « Drf/ínJQatfW.   ♦••»•» ti «■(>% 

Pues  venid*  «MWmf  é  fó  largo1,  -  N 
porque  basta  a*w>r«a,  Yio  sabiendo 

<\*  qae'le  bufeftrtft>$<de  "paa  ¿ '  mWV¿ 
se Vccatar^de» tteros,  »•  »•''«»  ♦>»p 
como  ofendtdeV  fisto  fea  */*.: 

por  hablarlo  Jp© primero. '•*•  ♦  **&  ^  " 
Seg«Mm«fp««v. » .'  »•       'i     ü!:  «  >tip 
(•uní.»  r.l  n»i. »  '  iipit:»  i'Hf 

ESCaWA-.V,..!-iv,.Umsa 

2>oi3  iI^ft^ovi^Xdoiior^^rMftV^  i 
Don  ¿Ifapv 


hallar  mis  noble»  deseos 
N      honor,  y!VSda,í.^itóiíeS 

*UmV!!estra  ca?a  »  nae  es  centro 
^•^lajVáaVy'reéfonVat^rf,         -  \ 

de  sos  gloria*?  v  .»  ^ 

iapi.   i'luLeénoti  uu  ■!,•>; 
«.-   .Neo*  oti tiendo ¿> 
ni  se  porque  Wdtofs  : 
f  nosamiopedíré  espaVa,  p  ,*>*  piWto?  , 

^o¿  ,n  Uni*,ÍDjrír».t.  - :  „.,    ¿  * 
No  os  deis  p»ri  desentendida  , 
qptí ara  es'¿  no  ,/ mi?  amor,  ¿a  n:  necio , 
qoe.no  h*ya.i4bi4o  d&íee      t,  , 
4ieafctaa><r  «n  lawKj  tropo..,  .> 
cotuo  sabgs.qus^  adoro. 

¡Qué  escacha  i  ,  ,»-, 
*ií>  '    \    vChacom  íí  u.tl  ;    .,\,í| 
oUiüiusu*,  v  \^  w.n/Tia-p  tW/ala  ef  festo, 
como  mi  prenda}  pttfdúW-     f.f 

Y  pnes  el  hado  ba  depuesto.... 

¿Qué  ha  de.haber  dispuesto  el  hadof 
idosdeaqu¿  *•"*;*<.  ™*  * 

Qué  temfe»aV|iJ¿ 
que  por  encoutaatcme  anoche 
don  Luis,  me  hablaVa  en  sus  «elbs¿ 
no  me  habl¿>»tÍMkvtji  mi  honor: 
ttuy  bnn  prometerme  puedo  f 
«rV#  me^opaip  i»is>dJcha»j  *;ip 
puesta  i  parí  |p  nuniwutengo  ¡  / 
«1  fatlDeBójiideftift^a^^.^    4;¡> 


J 


m 

y  (1  que  v*r  ftftetr  qoe  eíft  qtitáro. 

-•*••*'        t  .  i 

ESCENA  VI. 

Leonor  ,tfdpa  Juanf  Chacón  jr  J^ana. 

Cf tacan.  *        ..j     >L 
¡  O ,  lo  qué  hé  de  ti  a  be  r  aquí 
4c  icios  y  de  mas  zeloa ! 

tLtbnor:  •  V  i.í 

¿Qué  fcqrá  <  |ayude¡iní? )  cqn  dBftson , 
*  quién  sin  ¿tU^stu*»  ciego? 
t    ■   •  ••  •  iGJé*am¡    :  •'   ^o'c; 
,  c*.. -Juana  ^niocboí  hay >  qnc  rrafctajn 
vamos  *  tomarilos  pues  loa,  .vp 
que*e«ie  ei  dé  tul  nano  ,  n»  «ai*. 
^^i  *  ¡fttane.  0>     í  .10 
Otro  día  n<to*Vtor«ines.  /^om. 

Chacón/'  -  >  '«  »9¡ 
Pues  joro  á  Dios,  que  otro  día 
t   i«*ia>óV  Vi*r  en  nuestro  encuentro 
la  roas' reoiri*  batalla  r  .j 

de  loa  partes  y  4o*  medoi. 

...>-    ,-}.     :    .    ;    ,,...    -    . 

ESCENA  <VII. 

Z>o/i  Juan  /•  Ltonori 

Don\Juaa. 
¿LejMiMrfv..,  ..„(• 

£ci*itair.  •     - 

,».V  «i  i)  Ajiudri  m/(  í 

;*••        •    ••.  uDoim  Juost. 

«  '  -*■  '.«,.»:..  Yamal  /.,.:r 
que  tai  pádtev?i  «/»•  don  Dief*> 
vao^ái  buM&ome  ti  pensando  *«•.-•] 
que  y*«aeyi^  Jhe¿iúft4aed«|  i- 


•'  223 
Btttriz  piensa,  que  el  qtiejstevo 
aquí,  es  su  *ma|*e  don  Pedro; 
4o«f  IVdro  es  a^igo^mio, 
*  quien  yo  caJlé  ej,  secreto;  / 

de  mudo  ,.  que  á  todo*. chairo 
hoy  por  euemigftg  UwgQ, 
Lo  que  reaul^  dft  todo  f 
•«,  quedar  14  por  lo  menos 
seguí  a  >  conque  ;no  jmpa.it*      , 
quedado  culpado,  „pu««<0;  .  ;., 
que  nunca  podre*  *lecir  / ' 

I,oaue.We  tuyp  aquMefttro;  *  • 
pues  siendo  ají,  fla«  yo  s*lo 
t*p,y:;el  aiar  ,.  jr  e|  encuentro  f 
y  dar  tirapo  a| ^iupo  bft  sida 
k^M«a  de  *ufio  e^ Jo,,.  , 
^.pVQCtí^ré^^owor,.        .....í 

^jrKV*"**  Vempo  a),  tiempo, 
que  ttjn«unp1  me  talle;  a  Dios,  . 
« •  -  £#>?<?*■• , ;     f 

iAJl4?n  Jm»  U"f .  ahuese  esfueno 
quieres  que.  yo  n*  J^eatjenda  y. 
J  aunque  na  quieras ,  lo  entiendo* 

Hartp  es,  qMe  tuíen^DdM.1a|íf , 
cuando  te  culj>p  ofrq  afecto 
0>rte  por  desentendida..,     ,  ,  , 

Los  cielos....   •  ..  ,  >  .  .  r§  . 

«  om^t »  -Aquí  no  hay  cielos; 

a*  9M  «M  «MWaWV"***     -.•  '? 
ktea(u>  oifla^  |a^,¿^R<|  M< 
que  eres  quien,  e^s ,  y  no 


%c.*.ti¿  •    *•>  ^r«R"    ;  *•*;..  <a 

iu  :    i    ■       ;Eeow.        • ;  "'?* 

Tan  m^ltf  es  ,  don  3 tuto  >b 

pedir  un  atoante,  zelos       M,t'  ¿ 

siiiMXttstorivcómó'no  :' 

pedirlo*  can  ¿Ha  "I    '  r* 

•     >Don  Juan. '   '        '*  l 

.  »'■  "•  "•   '       Lncgo,    k'  *  ' ' 

descftridá*t*'tf»y  !Leí>iior ;  «  "  •'  -í  6 

ya  caMto*'4**'l»"<tVftgoV  "L*' 

x  ^••••i^ifdr  •     ••  "  ■; 

Si }  •utto'iid  que  yti  la  he  fifodd.' 
■    ••    ••/  Mhn  t/atañ  '■  '  '  '  I 

picea  m^V  %»>ii  ,  j>oriftn*  aqdfélfo 
W^wic^d^árioc^,  y  ir  '   '    C 
tu  padre  á*  bu's&tHe  ,  ha'ciPadd  { 
honor  lo  tytfcéf  juzgó  a^rávioY 
d*«if  :'- '/  «na¿  qué  importa  'éittf  ? 
élue'qUie.iVV  /ta!ló  sabe**  H,P 
á  Dios,  á  Didfc V  pirque  pienso 
oí;  que  si...l"iéa3"J¿o  pietfso'ríáda'si 
*  i)ios>  LfanVrv  •{'  '   •'   :» 

.yL,.  ,:.*t     ..i  ,  '*lkónor:x      '*  lUj-  y. 
«  Si' primero, 

^         ,  no  rae  oyes  V  hd  :has  de  iHél"  '* 
<      *    Dbn  Jüáñ.'    "h  ;:u:> 
NooireW^    ^    -.  !/¡  ;,Ji"u 
£*t*ftar\ 
¿Por  qué?        "'^  £oJ 

%  ?.c '  /•  j  » i><<  '  n  i ;  • : •  Jorque  temo  » 
ai  fe  oñ^V^í^'D^dé  ére>r«  ;•* 
y  haré  nttif^riál  si  tecre*."'^ 
'■■•  '.'JElftfidr  '.  '','1'  ""T 
l  Qéé  <**£*>€#<&  traa  !**£*,* 


que,  la  quieran? 

Don  Juan*  *   ' ;, 

.  ¡  Qué  argumento 
tan  de  todas  !  ser  queridas 
no  es  culpa  |  y.e3#<porque\vemos 
que  son  queridas,  y  no 
que  ocasión  dan  para  serlo* 

Leonor.  ' 

To  no  la  be  dado.  •    » 

Don  Juan. 

Eso  basta* 
.>  Leonor  t, 

No  Karst  a ,  que  has  de  creerlo. 

Don  Juan.  ,,¡  * 

Leonor ,  tu  padre  está  fuera  9 
y  «a  fueraa  que  >*pga  presto; 
don  Diego  vendrá  con  él  > 
y  Beatriz  está  aquí  dentroi 
ya  ves  que  jjo  es|ocasioa 
ahora  de  detenernos : 
yo ,  yo  roe  veré  en  si  acaso 
tengo  razón,  ó  no  Uugo. 

Leonor. 
Esas  son  palabras  miasv 

Don  Juan. 
Buenas  serán  ,  por  lo  menos  f 
que  eres  muy  discreta  tú. 

.    Leonor.  .  * 

No  lo  soy  ,  mas  ,1o  parezco 
esta  vea»  bien  á  mi  costa. 

Don  Juftn. 
¿En  qué  ?  -) 

.    Leonor 

En  sentir  como  «lento/ 
1S 


i 


*2¿ 


Don  Jttofi*  '  * 

¿Tu  sientes?     v 

Leonor. 
..      Sí.. 

Don  Juan.   '     v 
.    ¿  Qué  ? 

Leonor.  •'  * 

£1  disgasto 
que  llevas.  •  f 

DonJuan\ 
.  Si  yo  le  llevo  , 
¿  qué  tienes  tá  que  sentirlo  ? 

Leonor» 
Macho. 

Don  Juan. 
Nada,  es  lo  mas  cierto.; 

Leonor. 
No  es,  qoe  yo.. i.* 

Don  Jetan.  ' 

1  Qué  tú 

Leonor. 

Constante 
siempre.... 

Don  Juan. 


Nunca  firme., 
Leonor. 


blasonar 

<         ®on  Juan.?  • 

Puede*  decir...*. 
Leonor. 

Que 

2toi  Juan. 
,r,:-.  •  .  .    Cuando * 


/ 


Puedo 


ni 

Leonor. 
Te  amo.     -•'  ' 

Don  Juan, 

Tí  pierdo. 
Leonor, 
Deja  hablar. 

Don  Juan. 
Deja  sentir. 
Los  dos. 
Yo,  td'j  mira  ,  sí '. 

<     ESCENA  VIII. 

Dichos  y  Beatriz, 

< 

. '  Beatriz. 

¿Qué  escoto? 
Do«  Juan. 
Leonor  lo  dirá  j  que  yo      ¡ 
'  ni  quiero ,  ni  sé  ¡  ni  puedo.         j^ase, 
x , Leonor*        .    * 
Yo  sí  ,,yo  te  lo  diré  , 
que  puedo  ,  que  sé «  y  qué  quiero  3 
sabrás  ,  j  áy  Beatriz  !  que  tú, 
por  darme  vida,  me  has  muerto. 

Beatriz. 
4Y0? 

Leonor, 
Sí. 

Beatriz, 

.  ¿Cómo  ? 
Leonor,       ■.    I 

Escucha  atenta  9 
que  á  ambas  importa  saberlo: 
yo  t  Beatriz... 


J 


22r  -    .  . 

ESCENA  IX. 
Btatriti  Leonor,  jr  don  Luis  alborotado, 

Don  Lu&. 

I  Beatriz  ? 

Beatriz. 

I  Señor  F 

Don  Jmís. 
A  hablar  i  este  amante  .voesjtró 
voy,  como  veis,  vuestro  hermano 
""    siempre  mis  pasos  siguiendo  j 
y  habiendo  ahora  en  la  calla 
engafiádole ,  diciendo    '   J 
que  vaelvo  por  un  papel  9 
á  solo  deciros  vuelvo  y. 
que.  yole  divertiré  f 
dándole  algún  tiempo  al  tiempo^ 
para  que' podáis  en  tanto 
\  ya  taque  os  culpaba  ¿  os  ruego  ) 
satisfacerle  prudente 
de  aquellos  -pasados  celos  , 
.  que  le' llevaron  de  aquí;  ;   4 

y  así,  con  todo  el  esfuerzo 
.«posible  la  diligencia 
haced  ,  porque  no  lleguemos 
á  hablarle  ,  sin  que  él  esté  r:        x 
1  antes  de  vos  satisfecho  ; 

porque  si  habiéndome  dicho 

don  Juan  ,  cuando  .entró  aquf  dentro  t 

que  v¡no*|jor  vosy  ahora  ti 

se  vuelve  atrás 

,  ' '  ''  Beatriz,  r 

'  No  os  entiendo  ;. 

l  i  qué  don  Juan  me  decís  .'■ 


que  satisfaga?  «  .    »      '  ■'• 

'•.-*.-  Don  Luis.    l 

,  t  •  Eso  es  bueno  ;     . 

¿  &  qué  -doa*  Juan  ha  de  ser  ?    / 

.  í  «  Eeonor.  ! 

Todo  es*á;  ya  descubierto.  #/?. 

Beatriz. 
.  ¿  No  Im  de  preguntarlo?,  si  r     A 
no  ]o  sé  ? 

'Z)of?  Luís.** 
Mejor  es  eso ; 
do*  Juan  s»V Todfldo. .  i y¿ 
Beatriz* 

»   ¿Pues 
quiéuí  es  don  Juan  de:  Tétedo \\ 
porqoe  yo  no  -le  conozco  ? 
,     •'    •«"  ■   Don  Luis!   V  «  l  ' "  ' 
Rare/isrrie  perder  el  «eso1.'  •  ••  »  « 
¿Don  Ju  a  n~de  Toledo  no  es 
el  qu«  yo  encontré  aqorf  áenfíoi, 
de  vuestro  pfcjwl  llamado? 

•  <  ''    «*     A  Beatriz. 
Quecos  equivocáis  sospecha,  ^  » 
ó  qué.  le  tenéis  por  olro  %.  :>     >  * 
porqne  se  llama  don  Pedro 
EnriquIsQ- J 

Don  Luis. 
Muy  bueno  fuera 
engañarme  yo ,  por  cierto  , 
y  fui  fe  migo  de  su  padre  •         ^ 
desde  que  era  niño  tierno» 

•  Leonor» 
Esto :  va  malo.  ^p, 

»    •    Beatrim* 


.22S 


i 


230 


del  que  yo  escribf  *  .        , 

Don  Luis. 
.   j  ...  •  Del  mesmo  » 

y  del  roeamo  que  á  baanór 
aquí  daba  el  papel  vuestro : 
.sanad  si  puede  ser  oirá*-.  »»'. 
Leonor» 
Aquí  es  .menester  remedio!.   •  '    ap* 

ESCENA   X. 

Dichos  y>  Juánmii  !. 

i*     Beatriz* 
l  Jufrnfa  ,  á.  quiéirdi&te  el.  papel  ? 
<•  ,  .  .       Dun  Luis.   .  \  .  •  •• 
Ved  lo  que  en  mi?»3*  teng;o , 
no  os  vuelva  yeíá  hallar  ei*  elle. 

,.,  ,  lt       Leonor.        r 
C*W#  *  quién  le  diste? 

.  ,•*    A  su  dueño  ^ 
eu  ^tfaisma  cas*,,que.t    ,,  . 
me  digiste.  ,   :       -i-.j  j    .1 

OiW*   sJ*eatrw\  .,,    .  .        ., 
¿  Es  ciertOrf. 
/Juanas 
s.w  í  - 1<  •       .  ,  A         Cierto. 
f  ~    Leonor,. 

¿Quién  \q  duda,?  flues  é*l¡  yi«©  . 
aquí  coa  Pl  ;p»pcli  n*e$UM>* 

Pues, «o  se  llama  dcdli  Jqa#i  f  - 
y  padecéis  ajgun  yerro  , 
sino  dou  fydUQ  f  señor. 


23i 
napjftti&i  ,  *...••  .,( 

J?«r^er<  ro&'etftcuj^im-iCAt*  :.  .  ,  y 
ven  acá;  L*>p*Qry  ¿tno  :vistf<    ,^ 
que  ,1*  hab|é ,  y^tóe  ,baWó ,  n^  haciendo 
n/>v  edad  el  co>n,octM\le  ?,    .     , :    ,  i» 

•  *v  ,  ..      o.X<m«0#f.»  i »  •.  ♦}  -»tp 
Sí ,  sepor,.  íj.jí  oí    .).•>;.»  ..-.,«]  y 
Víl ..  •;.  JDwIms.  •.-.....  ti 
¿  Pues  eómo,pu«do  ,  ;.  x 
ya  engañasgNj  ucvl 

¿Y  mientras  en^réjfljl^,  dentro  ¿ 
no  te  dejó  dicho  á,  tí 
lo  que  tú  digiste,?     .  _ 

Leonor. 

'*'   '"'  iSs  cierto  ; 
y  q*ie.  si  ¿1  mismo  no  fuera  y  *  ^ 
no  piidiera  y$  Sarorlo. 

Don  Luis.  !  '* 
Claro  está.  *':  l¿  *"  a 

4 1    •  ?     '  No  VsTá  móy  vtXíxo , 
4««*bebnor.....:  ,l!'  ":/  '"    ,:  "h 
«'  "'    *    ¿Snhk  '     !Í 

*  "■    r  •'  J   :Ma1olva  esto.  '  r     ap. 

P.r¡m«ro  soy  VdV  qtfe'  nadie  ,  •    ' 

té^Wrga'ndo  á  e«tda  es t remos  «'i' 

¿  sabes  Ta  verdad  ?ÍHl      '    '"!  '• 

i?\  .u.  .'     .     -XeoñbK1  '       ''*  ''hi 

Si  sí, 

jtfnve  latstaltt^djcicndo;      ; 

yo  la  diré ,  pues  me  4a*     . . ,  ,1 


23* 

la  licencia  para  elíó" : 
y  es ;  scilor  ,  que  habiendo  vistb 
•n  don  Juan  aquel  recelo  , 
i     "quiere  ahora  elegir  al  otro, 
,  de  quien  tiene1  don  Juan  setos/ 
que  fue  el  qtteilaAió  á  la  reja  ; 
y  pues  es  este  tu  intento , , 
Beatriz ,  «O  sea  engañando 
á  mi  padre.    "     ^  * 

ÜonLmis.  *".. 

Eso  es  lo  cierto  v 
queríame  dar  Vjde  hacer  , 
viendo  en  don  Juan  tal  desprecio  9 
á  costa  de  mi  paciencia* 

'  'JCfonor* 
Ella  lo  estaba  diciendo. 

.  ,.».  ./.i    Beatriz.    .      i.  ,•     •  t 
4*9?     •'  •  '."  '•       •"  '  '  - 

Sí  * 

Don  Luis.  .»...', 

Xa,  <dl«ntrtf  en  mi  casa¿ 
f.,yiél  es  el.ijuf  ,ya  yo  tengo 
dicho  á  vuestro  hermano  ijy,élf 
ba  de  ser,  vjyen.  Jps  cielos, 
^    vuestro  e>J^*9  »;•  así  tratad  , 
Beatriz,  que.  e¿té  .satisfecho 
cuando  le.  I^atyeroos  ,  y  ved  ,•  /f 
qqc.  lo  raas^qjje,  yo  bacep  puecjo,, 
.  és'para  que  1?  Jbabjqis  anjkSf 

irle  dando  tiemgo\al  tiempo.  Vhuí 

v    Beatriz. 
I  Ah  Leonor  f  que  td  bien  sflblss 
la  verdad  I     '»  <  -    A  -  í 


233 


JLeonor*  , 
f   Yo  lo  confieso.        /  •  i 
.      Beatriz 
¿Ates  por  qué  no  la  decías? 

■Leonor.  ^ 

Porque  do  me  estaba  á  cuento.  ^ 

Beatriz. 
I  Y. -el  culparme  á  mf? 
Leonor. 

Porqjué  ; 
también  yo  era  primero. 
•    '       *Bealr¿Zr.  I 

Pues  sepa  Ja.  otra 

Leonor.  K  ' , 

<  v  Conmigo 

ven,  sabrás  i  todo  el suceso, 
mientras  lomamps  los  mantos¿ 
Beatriz.  l    •  > 

¿  los  mantos  ?v  >• 
íí  .  :».   A  ;  Leonor  • ' 

\  í- 1>  •Si.'-  '•*       •  * 

.Beatriz, 
^.■i*'  '  •  ¿  Y  á  qué  efecto? 

«  .      •  «'*  .  »Z#©/tor. •"* 

A  efecto  f.  pue»  que  roí  padre  •  ¿ 
nos  da,  logar  paira*. esto ,  •  :* 
de  ir  yo  contigo, •Beatriz.         { 

JBvatriz. 
¿A  qué?  ."-.• 

, .   Leonor, 
, .   .  •    !.  r  A  deshacer  un  yerro* 
..  •  .Beatriz.-   *  •   •¿v^ 
¿  Qué  yerro  ? 

Leonor. 

tf  ú  le  sabrás. 


J 


234 


Beatriz. 

¿Cuando-  he  de  saberle  ? 
Leonor, 

Presto* 
Beatriz. 
¿Cómo?     -  '  .  .    i 

Leonor. 
Viiii*i*cUr  conmigo.:  .>     . 
Beatriz. 
1 1  Donde  ? 

Leonor*.         ■  v« 

Donde  yo  te  llevo. 
Beatriz.  •    >    ;    »>'« 
Dime  .,  ■•      ..  V 

,"'•..;    %  Leonor. 

,  Tiempo:  no' p+rdamos  9  -** 
mira: o,.uc  ¿i'  le  pwrdemos,  •■  <  >< 
HO  podremos  dftrje.... 

Beatriz.* -i.  -'.:i  e.  -T  ^ 
.-.:.  . ...  ;    ¿A  qaié*n 
tiempo  hemos,  dte  dar  ? 
XeoiM»r. 
'  Al  tiempo  | 

que  hemos  menester,  Beatriz, 
para  enmendare!  ©qi pedo»  j   -  A 
de  los  zelos  de  don  Juan  j 
y  el  engaño-de*  don  .Pedro;, 

Yo  también  se  le  daré  1  •  :•;•   '  ;, 
á  todos  estos\«ikreios , 
cpiei  paas.*|i>e:irie  ecttan  de  casa  » 
ya  por  decirifcrjtábicnto* 


235 

<     -ESCENA-  XI.'  ;'  •■ 

r  ''  *  Decoración  ¿É  calib. 

Don  Pedro.    '    *         J 

M.4  cleaca  »«»««.  deadkkado , 

roaj¿un  jníVUa  •psirga, 

pues  dondequiera,  que  llega  ,   • 

encuentra  cen  JUi cuidado: 

y  es,  qne  siempre  acoró  panado 

de  la  causa  en  f|ue  él  s,e  ceba, 
'  siempre  l¿  paríce  nueva  ,     • 
•<  presumiendo  al*  em'on  tralla  , 

que  es  alK-doníeJa^liaUa  f 

y  es.  aHí  donde  laiAte^a* 

Dígalo  yo,  que  ea.U  calle, 

ni  en  casa  es  pxttiWe  jadiar 

la  espalda.de  mi  pesar 

rostro  á  rostirá  uedaianconéraMe 

«ton  pnei  f  hiendo  ai  a  pu»r alie,     . 

don  Juan  toda  pneaunjii^ei  f 

4aii  Diego  todp,  ¿bastonea ,  • 

don  lÁrte  todo  dfligriicias., 

Beato»;  toda  (  ¡  ay4e  [oú  i  )  ausencias  , 

y  yo  todo  conflusjuMfr'S.  ^ 

¿  Qué  qwrrá  aec^hafcm^ido  , 

([ftia  ,*¡enip*e  i  Jar.flfr*.  be  andado  ) 

dorf  Luis,  adonde  encerrado, 

grande  plática •'ba.UrtuJ o 

con  dow  <PleS°  ?  ¿  na!^r  s.a'jJo 
los  dos  de  su  casa  ,  y  luego" 
quedarse  fmera  dan  Diego, 
>   basque  dpsfaes  entrón 


i 


m 


^ 


de  donde  i  salir  volvió' 
.conloa)  tpjs,  y  afn  sosiego, 
uno  ^  y  otro  platicando  f 
_  ver  i&((ue  entrambos  junto*  Tan 
hacia  en  casa  dé  don  Juan , 
é  coya  puerta  mirando, 
parece  que  están  dudando 
sobre  jsí  es  ella ,  6  no  es  ella  f    " 
/  No  te  pido  ,  injusta  estrella  » 
en  la  pena  que  'me  das  ,  , 

remedio  ,  dame  no  mas  * 

el  alivio  de  sabella. 

ESCENA.  Xlt 
Don  Pedro ,  don  Luis  y  don  Diemoi. 
Don  Diego»  > 

Esta  .p%  4»  -don  Juan  la  casa*    * 

Don  Luis. .  •,      • 
Notable¡  priesa  tenéis.        •  •       t 
Don  Diego*        .}    • ! 
•JNo .  08  -  espante ,  pues  sabéis .      'i 
cuajn  de  est  reino  é  es  tremo  pasa  ¿ 

£  ser  pródiga  de  escasa  (  ..  . ; 
ib  i  fortuna  :  entrad  á  bablaUe  * 
que  no  veo  la  hora  de  dalfce  * 
gracias  del  que  agravia  fue»       i 

Don  Luis*        J  •  ' 
Retiraos  ,  que  .yo  entraré.     .  v  , 
{       ¡Plegué  4  Dros~q«e  no  le  hallo! :         op. 

ESCENA  XIII, 

v   Don  Diego  y  dan  Pedro, 

.  ,     .    Don  Pedro*  ;» 

Solo  don  Diego  ha  quedado  $     i  49 


ea ,  apofentdfc  Wpeclias ,  °F  *    ; 
de  ana  vez  .todo  el  veneno» 
Habiéndoos  con  Canta  pena 
•dejado,  jitahfni  amistad . b  .  *  s.-    \ 
auí're  ,  que  á  veros  no  vuelva: 
¿  decid  ,  como  mí  señora 
doña  Bcatrit  eilá? 

Don  Diego.  * 

1  Buena  j 

porque  el  accidente  ha  ido 
mejorando  á  toda  priesa; 
tanto,  que  ha  dado  lugar f 
que  para  que  se  divierta  , 
en  cas  de  su  grande  amiga 
peonar  esta  tarde  ir  pueda : 
.  y  creo  de  la  visita 

(cúrese  en  salud  la  ofensa,         .      ap, 
por  si  acaso  ha  entendido  algo  )T 
que  hay  mayor  misterio  en  ella , 
de  que  pienso  que  me  deis' 
muy  presto  la  norabuena. 

"Don  Pedro. 
Decirme  entero  el  pesar  f 
y  el  gusto  ,  áori  Diego  ,  á  medias , 
N  no  es  partido  igual*  ¿  QoOa  habido  > 
que  ahora  tan  alegre  os  tenga  9 
Y  antes  de  ahora  tan  triste?    „ 

Don  Diegp. 
Sueederme  no  pudiera 
cosa  de  mas  dicha  ,  mas 
guato  |  ni  mas  conveniencia». 

.  Don  Pedro* 
¿Cómo?  '; 

Don  Diego.  y  , 

Don  Lujé  ya  stfbeia  '  » 


( 


S3t 


cuanto  mi  aimf*»*  profesa,* 
por  la  qne  tnvo  á  mi  padre, 
y  cuanto  es  d4  Leonor  bella 
Beatriz  amiga. 

Don  Pedro. 
Si  sé. 

Don  Dit^o. 
Pnes  como  Jos  dos  desean 
siempre  mi  aumento  *  han  tratado 
dar  estado  á  Beatriz. 

Don  Pedro. 

Sea       < 
para  bien  ,  porque  elección 
snva,  V  aceptación  vuestra  * 
claro  es  que  será'  acertada : 
saber  el  l>l»z  quisiera* 
que  mereció  tanta  dicha, 
para  que  en  mi  un  criado  tenga. 

Don  Diego. 
Don  Juan  de  Toledo,  ved  ' 

si  es  justo  alboreo  verla 
empleada  en  caballero 
de  su  sangre  ,  y  de  sus  prendas, 

Don  Pedro* 

Si  por  cierto. 

Don  Die%o. 

Perdonad , 
don  Pedro,  y  dadme  licencia 
de  quedar  solo,  qué  estoy 
esperando  una  respuesta  , 
que  «*  ha  de  traer  don  LuiS, 
y  no  quien»  que  me  vea 
acompañado 

Don  Pedro- 

Los  cielo» 


239 


os  guarden. 

Don,  Diego* 

A  Dios. 
Don  Pedro. 

i  Qué.  fuera 
yo  tan  bárbaro  ,  tan  necio  , 
que  al  oír  de  su  boca  me  sin  a  , 
que  sabia  que  tío  estaba 
en  su  casa ,  y  que  no  era 
posible  decir  á  donde 
por  entonces  ,  no  cayera 
*eo'  que  saber  sus  secretos 
^an  por  menor ,  era  fuerza 
qne  aJJá  pn  sil  pecho  tuviese 
alguna  .traición  cubierta  !  <  . 

¡Quién,  pudiera  en  dos  mitades 
buscar  á  un.  tiempo  á  él,  y  á  ella  j 
á  él  para  darle  la  muerte ,  9 

y  á  ella  para  darla  quejas  t 
que  es  como  nobles  zelosos 
de  dama ,  y  galán  .se  vengan  ; 
tnas  ya  que  á  los  dos  no  puedo 
buscar  á  un  tiempo*  no  quieraj} 
mis  zelos,  que*  de  mi  digan  y 
^     que  ea  dos  iguales  ofensas , 
primero,  que  de  la  espada  » 
eché  mano  de,  la  lengua  ; 
en  qnUafldose  de  «quí, 
44«u^  á  buscarle  la  vuelta. 

ESCENA  XIV. 

Doü  Diego. 

:,r>     Mucho  se  tairda  don  Luis, 

sin  Inda  habla  en  la  .materia  ;  . 


A 

J 


é4tr 


no  sabré*  encarecer  cnanto 
aleare  estojr,  de  qne  sea  « 
ya  que  hubiese  de  caer 
o ii  otrodueiie  mi  queja  , 
don  Juan. 

ESCENA  XV. 

JPo/1  Diego  y  don  Juan* 

Don  JUan. 
Si  puedo  en  mi  casa 
entrar  »  sin  que  alguien  roe  ve*y 
yo  me  oca  liaré  de  todos;     #• 
porque  tiempo  el  tiempo  tenga  - 
para  vencer  los  engaños , 
yá  que  los  zelos  no  veuaa. 

Don  Diego* 
¿  Don  Jnan  ? 

Don  Juan. 

¿  Don  Diego  ? 
Don  Diego. 

¡Qué  baea 
encuentro !  . 

Don  Juan. 
.    l     ^  ¡  Mejor  dijeras      .  .*     ap. 

qué  mal  atar!'  t 

*  Don  Diego. 
•  •        Aquí  agoarjfo 
aecharme  á  fas  'planeas  Vuestras  , 
por  las  honras  que  don  Luis 
me  ha  dicho  que  hacer4  desea 
vuestra  amistad  á  mi  casa. 

.    Don  Juan- .  t 
l  A  qué  mala  ocasión  Jlega  ,        r.     api 
•obre  iniázeJoa*  sai  engaño  i  ...-. 


233 


. .  ¿AMO*.  „ 

r.    Yo  lo  confieso.        .* '  ^ 
BeatrU 
Jpjaes  por  qué  no  la  decías? 

\Leonor„  A 

Porque  no  me.  estaba  á  cuento.;, 

Beatriz. 
¿  Y.' el :  colpa  r» e  á  m  f  ? 
•Leonor* 

Porqué  ; 
también  yo  era  primero. 

'       Beatriz/* 
Pues  sepa  la.  otra*.... 

Leonor»  < '  . 

.    . .  \  Conmigo 

ven  ,  «abrís «todo  el  «ucesó, 
mientras  iotnamps  los  mantos* 
Beathijf.  v   m 

¿I*os  mantos ?v  •■ 
í..  ,ij   A  ;  Leonor. ' 

\  \  f>  •Sí.'-         '  «••     •  it 

,  W'*'  ¿  Y  á  qqé  efecto? 

<  .      .  «'T  .  »¿#©nt>r.    '  "':» 

A  efecto  ,  pues  qwe  mi  padre  •  4 

líos  da,  logar  porra. esto»  >> 

de  ir  .yo  contigo,»  Be  a  tris.      •   { 

¿Btairiz. 
¿Aqué?  •  • 

,  •   Leonor* 
<  ..- .       :,íA  uVshacer  un  yerro* 
v*  :  Beatri*»**  ■*  '•.    ¿\ix' 
¿  Qué  yerro  ? 

Leonor. 

Tú  le  sabrás. 


I 


á  vuestros  pie¿t  wm\ 

,  Es4o  t»  fuerza,  |      qp. 

mejor  es  que.dcMna  v<« 
su  engaño  *  y  .mi?  ,su¿UiS^epa. 
Do u,  Diego,  anotes  jqvftjjoqueoiai 
en  tan  sagrada  >*n*4erJ4„,. 
como  la  de,  vue&tno  Jiohor  9  . 
cr.  que  :tsJto  á  todo  ¿iM'osewa».. 
tengo  que  habJar,Q^.eA¡QU*4,» 
y  en,  intWmá<iuh>Q3  de,  ftlla:t    »  . 
verejs  si.  os  estafa  !)ieji¿, -.,   .   ¡  -• 
que^  vplvamps  á  JtaM&p  4e  <0ftta> 
,    #,        .    fía/* Dic&b  .., 
Pues  decid.         ,,..«•. 

t  Do/*  7«4<V»»   i  •  .  . .     ;  . 

Y t>  tengan**  *2osf 
que^  sirvo  á...«.««  . .  i..        ,  a 

%u     ESCENA  XXk*     • 
'WHchos'Sy  Ü&ri1  Litis.    ''   l 

•    j:,;  MMVijhioiVf udíera 

te¿RC/-aJrp»  todo.^dia  í,  , ,  i  ..».„-, 
mas  yo>os  peiruV*0t>(|ft  pgn*  ...  ,  > 
del  esperar  porul*¿i|,tai|p*%'i  ,.}  .{ 
convenidos  ,  de  roaise&aj**.  k*iyjo 
que  so  bremos. I  $s  ¿soferos. 
r --,,.•    &onxpicgo. 

que  ante*  do^  JufliiL*wtc^Pft¡#|f  ¿ 
que<Driwn<;r.o  qrt*  á^j  «flftgf  M 
tiene  otra  cosa  en,  íju^Íí a¡b( arroje  ; 
y  pues  i&fafitWtWfíteimWtt 


le  oiréis .  también»  Proseguid  y  > 
«'¡•.que  no*  hay  cosa  ^qoe  na  pueda 
sabec  don  L¿m<  <     ¿»  -.- 

•y  ..•    .     i.Don  Jí/m* 

«    . . ,.     <  .Es  verdad  f  ••       \, 
lino  solamente  esta.:         o/», 
pero  aunque  lo  sea  ,  de  mí 
¿jvo3  el  tiAtarioines»  fuerza  $     : 
y  pues  no  *ey  hambre  yo' 
que  tengo  de  hacer  ausencia» 
ó  yo  os  buscaré  ,  ó  buscadme.  ¿ 

Don  Diego 
$¡  estamos  aquí,  imprudencia 
aera  buscarnosi  después. 

.  Dan  Juan» 
No  será,  porque. aunque  pueda 
\>  ,ir*afcferto  .¿bn  Luis  ,  no  quiero 
que  de  mi  hopa  lo  **p»«    •>   *.  ; 

rP»  -.r.  KSCENA,  XVII.   ..  «.i 

'Don  Diefajr' dqn  tuii.     L 

DoniDiego*  .,:  t,\:% 
Ta  vay  <tras  vo*  •  .       ..-.*•; 

J)0fr  Lui$.       rrj    •  >l\ 

Deteneos* 
.i    Dan. Diego*  . 
¿Vos  queréis  que  me  detenga  f 

»   Don\Lui$..  i 
Sí,  qne  en  naaterias  de  honor, 
mas  ha  de  hacer  la  prudencia  9 
que  no,  la  tolera. 
.*.  t      .    .  Don  D/>*0. 

«  Hambre 
Une  á  decirme  «na  vea  tteg**/  . 


242 


£4* 


qué/  ha  mntibovatto*  que  *trW 
á.ini  hermana;  que  ¿tinque  df>  ella 
no  dijo  el  nómbrenle  dijo 
la  acción  antes  que  Ja  lengua; 
¿se  ha.de  ir  de  esta  suerte? 

•Don  Luir.  *•  ¿ 

•  •-••  .s¡, 

y  aunque  él  no  quien*  que  sepa 

yo  la  causa  f  ya' la* •sé*1'  -      \  i. 

Don  Diego*  '  V 

¿Vos?  •   -/  > 

Z)d/t  Zuic.. 

1/   ;    S/.      *"     •     •  >•>  ••  ;       ¿ 

'    Dor*>Úietfi+  •"••»* 

¿Qnéas? 

««)•"«■»  ••*    ;Jto/i  ¿jet'»*:  *¿   "  -  # 

«.  i»í;   .        ,  ;••:.    'Par  ^rldá  ?ue»tr* 9 
q  ue  Dome  1  a*  pttfgun  tds  •£•  *  '» '  1' 
y  que  mi  amistad  os  deba 
no  ir  tras  mi/á4A^d^  voy  tras  ¿1 , 
que  «o  os  traeré  Ja  Respuesta.       Vate. 

Don  Dfcgo. 
¡Hay  ho«b^viba«  &  feliz  !     * 
¡ó  aleve!  ¡ó  tirana  t}#  fiera/* 
hermana !  po>r  tf»».»k 
.       .    •  J 
ESCENA  X\IIl. 

Don  Diego  l^GinZs  j  Juana» 

%  '  ou      !    '  '     -•  ■  •  »;     t  •    .« »    /'<*' 

,  .  i    Gincs.     sí»  >  •  .    mi 

;    Salto» />  .    •.  t> 

oye ,  que  hay  invento  que  sepa* 

Don  Die%o. 
¿Qu¿e4?     /  ¿nú  s/./.^jf;  w  síip 


24S 

Juana  te  lo  djráf. 
que  ya  de  casa  la  echan    *-*•;  k 

de  Leonor.  .o\ .. 

,  r  Don  Diego 

-jPues  qué  ha  habido? 
: ,  .  Juana.  \ 

Ser  chismas*  rio  quisiera  ;         '    * 
pero  roas  entré  en  su  casa 
\  á  servirte  é  U  f  que  á  ella. 
Leoncir  no  te  favorece, 
porque  está1  de  amores  muerta     » 
de  un  caballero. 

Don  Diego» 
t  ¿Y  quién  es? 

Juana, 
Don  Juan  de  Toledo.  ' 

Zfcwt  Diego. 
.Cesa, 
que, entra/*  mintiendo,  y  no. qtriepo 
que  en  tpdo  \o  demás  mientas»  • 

:  Juana. 
¡Pluguiera  á  Dios,  que  ese  gusta 
Boy  de  mas  &  mas  tuviera  \ 

sobre  el  pa*  la  rio  ! 

J0o»  Diego,  ► 

.  ¿  Pues  como    "  * 
es  posible ,  que  esto  sea , 
si  ha  de  casar  con  Beatrii 
my  hermana? 

Juana. 

La  historia  es  esa, 
que  entrando  á  ver  á  Leonor  , 
le  halló  su  padre  con  ella: 
y  fingieron  que  iba  4  ve» 


j 


246 


í  Beatriz  »  diciendo  ;  que  er* 
«I  gala,a  qnc  la  tenia  f v 
fuera  de  so  cks*. '  í  -*    *f      •  -.  t 
J>o/i  £/*¿o. 
»      Espera , 
que  de  dos  veces  me  matas  v 
pues  honor,  y  amor  arriesgas  i 
sin  duda  esto  iba  ádfCfrme'»    ' 
y  al  llegar  don  Luis  lo  deja  ;    * 
mas  siendo  así,  ¿  qnilit  ¡  a  y  cielos! 
ya  que  don  Juan  no  ¡d  sea, 
es  d*  Bsatriz  clamante? 

Juana*      '  '' 

El  nombre  no  serna  acuerda. 
¡  Ah  !vsí,   sí,  don  Pedro  Euriquez>* 
$  quien  yo  llevar  debiera 
un  papel.  =  !' .     '  "* 

.  «Mas  no  prosigas»' 
oq«>  vas  dando  mucha»  señas 9     •  » 
y  sega  n  son  todas  matas-,* 
sin  duda  son  toda»  cjcrtas.    . 

c  .  Juana; '  " 

¿  Y  cómo  nne  son?  Y  tanto  9 
si  mejor  quieres  safarlas,  •  •  -■'■■- 
que  aquesta  larde  latt'dos 
disí'naaadas  ,  y  f  ncubicrtas 
han  salido» 

¿  Dónde  van?    < 

JuUNO. 

No,f¿t  pePO*m¡  sospecha 
es  ,  que  á  la  casa  de  alguno 
de  los  dos  ♦  por  decir  ellas 
que  van  i  enmendar  pit  yerro. 


247 
*    x    ^míPíegú.        -T  «> 
f  Ay  ?  que  es  fiorawso  que  mientan  , 
porque  án4«'vatiá  bacer  otro» 
si  á  tanta  GOfcba-le  enmiendan  ; 
si  en  casa  dk¿  do-n  luán  quiero 
espetóp  r  t^roer  ea  faierta      *  •  -   " 
que  en  cas  de  don'  Pedro  vaya  , 
y  de  un»  «ti  otra  se  pierdan  ;  ' 
pues  dejíid  de  r<*mitiUo  '* 

á  tan  cercana  espe  rienda 
no  es  posible. 

ESCENA  XIX. 
Dichos  y  don  Luis* 

Don  Luis. 
'         El  no  parece. 
Don  Diego. 
Y  estimo  q«f«  no  parezca  , 
y  antes,  don  Luis,  o%  suplico f 
que  si  os  -cansaba,  mi  priesa  , 
perdonéis  ahora  roí  espacio;  * 

y  así  en  aquesta  materia , 
aunque  le  halléis* ,  no  le  habléis. 

Don  Luis. 
¿Cómo  no  he  de  hablarle  en  e11a9 
siendo  ya  obligación  ni  i  a  ? 

Don  Diego. 
Si  el  ser  mia  la  hito  vuestra , 
y  o*  jpfrto  n6  la  tengáis , 
¿que  haréis  vos  en  no  tenerla? 

Don  Luis* 
l  Tanta  cólera  primero  , 
y  ahora  tanta  paciencia? 
¿  qué  o»  vi  á  vos,  y  á  vaestra  hermana 


248 


iw 


en  que  yo  mi  juicio  pierda  f  x 

/¿qué  novedad,  hay  •  don  Diego»  ; 
que  aires  el  i  atento;  vuelva? 

Don  Diego* 
No  té  i  mas  yo  lo  sabré, 
y  os  vendré  con  la  respuesta* 

Dan  Luis. 
¿  Ña  será  mejor  que  vaya 
con  vos  á  i  o  formarme  de  ella  ?  N 

Don  Diego. 
No ,  que  no  puedo  decirla 
ya,  ni  vos  podéis  saberla.  Va*9* 

Don  Luis. 
J  Cómo  no  ?  ¡  Viven  los  cielos  , 
que  no  hay  cosa  ,  que  no  pueda 
sabir  yo  ,  y  he  de  saber 
que  variedades  son  estas  ! 

ESCENA  XX. 

Juana  jr  Giaés. 

Juana. 
Gjne"s,  esto  es  hecho';  vamoj 
de  aquí.  ' 

G'tnés. 
Vamos;  mas  espera, 
que  vieue  Chacón  allí, 

Juana, 
¿  Quién  es  Chacón  t  ¡  Estoy  muerta  !      ap* 

Ginés. 
£1  mayor  amigo  mió. 

Juana, .     v 
Ven  acá  ,  no  te  detengas  9 
que  después  podrás  hablarla. 


IMmbt 
Antea  quiero  que  te  vea 
poique  haga ,  habiéndole  tdf 
<    mejor..  • 

.     Juana* 
¿Qué? 

La  diligencia,       t 
del  malogrado  ,  que  este  es 
quien  cuida  de  que  parezca* 

y  ESCENA  XXI. 

Dichos  y  Chacón  con  unpapélico  en  la  mana. 

Chacón» 
.¿Papel  á  mi  una  tapada  ? 
¿qué  será  la  que  contenga? 
porque  como  no  s¿  leer  , 
no  es  posible  que  lo  sepa 
por  mas  veces  que  lo  paso. 

Ginés. 
¿O  Chacón  amigo,  era 
hoja  de  vernos  ? 
,  t  Chacón-, 

¿  Pues  no  ? 
Ginés* 
¿Qué  hay  de  mi  perdida  prenda? 

t  Chacón 

Hay  una  gran  novedad  % 

Ginés»  \ 

¿  Cómo  ? 

f  Chacón; 

Sabrás ... 

Ginés., 

Tente  ,  espera  9 


249 


i 


250 


<jne  qntero  que  lo  alga  Juana, 
por  ser  quien  tanto  toleras', 
que  Chaco»  es  otro  yo. 

Juana. 
Una  servidora  vuestra. 

Chacón* 
Vuesarced  ,  seitora  Juana  , 
por  su  segundo  me  tenga, 

Gin¿$. 
Prosigue  ahora. 

Chacón* 

'  Pigovpuea* 
qua  el  tal  astrólogo  f  apenat  > 
empezó  á  hacer  la  figura, 
cuando  empezó  4  v*r  en  ella  , 
que  la  moca  ,  á  quien  dio  el  ainot, 
encargo  con  grandes  veras,       ;• 
que  al  punto  le  cristianasen. 

Ginés. 
Esas  patabtas  ,  las  tftesma* 
son  que  ella  dice. 
Chacón. 

que  hay  figuras  que  no  mientan. 
Siguiendo  1ba  en  su  astrolabio 
al  nombre,  y  al  vw  quien  era  f 
cátate  aquí  é  un  alguacil  •  - 
que  al  ver  la  figur*  hecha  , 
quiso  llevarle  á  la  cárcel  •  •  : 
porque  tiene  granees  penas 
esto  de  ser  adivino  ;      v 
y  al  fin  ,  porque  no  entre  en  ella  , 
cien  reales  de  plata  voy 
á  buscar  sobre  una  prenda» 
íolo  lo  qué  siento  es, 


¿51 


que  I  1*  6g*ra  no  vuelva  , ' 
porque  escarmentado,  dice,, 
que  en  su  vida  no  ha  de  hacerla. 

Ginés.  / 

j  Ay  Chacón!  pues  e*iu  amigo, 
di  qae  lo  Rentas  mesepa^, 
y  ves  aquí  los  cien  reales, 
que  nq  es  justo  fc|ué  él  los  pierda, 

Chacón.        x         ^ 
No  por  cierto  ;,jpero  y©  ap*  , 

Jos  pondré  en  roí  faltriquera, 

■Ginés,  * 

Ruegaselo ,  Juana  ,  Id. 

Juana, 
Haced  par  toí  esta  fineza. 

Ühacon. 
¿Por  vos  qu*  no  bar¿?  Señores,  ap* 

lio  es  vergüenza  mas  sangrienta 
sacar  la  sangre  del  alma,  . 
que  la  del  cuerpo  ,  qué  es  esjta  ? 

ESCENA  XXÜ.         . 

Dichos  ,y*on  Diego  A  la  puerta. 

i 
Don  Diego*         ,    .  . 
¿Gíne5? 

Ginét*  , 
¿Señor? 
Z>on  Z)j>£o. 
t  Van  conmigo  , 

que  quiero  «na  diligencia 
fiar  de  tí;  Id  te  has  de  estar 
en  e«ta  calle,  y  si  entrón 
dos  mugeres...  pero  ven  9 


J 


2S2- 


que  allá  Jo  dW-,    v 
Ginés.  % 

Aquí  espera. 

.  ESCENA  XXIII. 
Jtiaha  y  Chacón.      .    x 

Juana* 
Mejor  será  que  me  vaya. 

Chacón» 
,  No  strá ;  bien  ves ,  ó  fiera  y 
en  qoe  lance  me  habías  puesto* 
á  no  ser  cuerdo :  y  si  piensas 
que  lo  dejo  de  cobarde , 
no  es  sin  o  fior  que  no  tenga*  i 

capaz  de  vengativa  mia 
mona  %  papagayo  ,  y  dueña ;  .     « 
porque  ¿qniln  ba  de  empeñarse 
en  una  ¿nuger  á  secas  f 
que  en  matándola  á  ella  ,  «stá 
toda  su  familia  muerta.? 
por  esto  lo  dejo  ,  y  porque 
{jjnés  no  es  hombre  de  prendas* 
yo  sí  *  ó  díganlo  sortija  f  . 
y  bolsa ;  y  en  fin ,  no  creas* 
que  yo  estoy  tan  desvalido ,    . 
que  quien  me  ruegue  no  tenga; 
que  una  tapada ,  con  caaos 
de  Carmona  ,  por  mas  señas 
me  dice  en  este  papel , 
que  vaya  esta  noche  á  verla, 
y  ha  de  cenar  á  tu  costa»   • 

Juana. 
Calla  t  infame  f  ingrato ,  cesa  , 
que  uno  es  mudarme  yo ,  y  otra 


SS3 
que  id  el  rwpéto  toe  pierdas  i 
dame  el  papel.'1 

Chacón.   *  , 

i  Yo  el  papel  ? 
jrb  haré» 

:      ^ 
ESCENA  XXIV. 

>¿s    Dichos,  jr  Ginée. 

Ginés. 
I  Qué  cólera  és  esta } 
pero  el  papel  lo  dirá. 
Jttnnv. 
***:]*  So*- lo  diré  ih  a*,  apriesa  :  — 

aqoella  sortija*  mi») 
que  liatUtrohedn  otras  preiidáV, 
tiene  Cbacoo. '    ". « > 

Ginés.  A 

•'  To  fui  quien 
»e  la  dio,  y  annqueicto'sea  a 
tengo  de  ver  el  papel. 
1  *  ,rA  •<"">■•     Chacón. 

Yo  me  bolgaré  >que)le  lea  9 
fW  iaforya. carones;    '*     ••      r 

Lee.     Mar  imu  fias  idúiam  Jferu** 
SeñofiG&#icó'i,  desde  iu  noche  -  que  dienon  d  V.  m. 
aquella  criatura  en  mi  oalte^  na\ha  vutltód  cuidar  de 
ella,  no  mt  obü^ur^d furnia ile^é  <ú  hospital. 

¿Qué  es  aquesto,  falsoiatnige  p        '  ^  | 

Chacón.  i 

Señor  Ginés  ,  Ucé  advierta..*....  ! 

Ginés  '  v  | 

No  'hay  qae  advertir ,  esa  espada 
**<!«*•  Dale  de  cintarazos.      ¡ 


2S4 


¿^ntre  amjgos  pendencia?, 

Ginés.  i 

l  A  mi  estafa»  ? 

Qhaapn.    , 

¿Pues  hay  apaa^ 
de  que  el  bolsillo  la  vuelva  , 
y  la  sorMjPt  y **1  n«to? 

Gi7i¿s. 
Vamos  ,  Juana ,  y  agrádese» 
que  es  un  gallina. 
<  ChacoH* 

■  Si  haré» ,  .-,1  ,> 
Juana. 

Vaya  Ucé  donde,  1*  espera 
para  cenar  mi  aedora. 
t  jtfarimuitos  de  la*  lleras* 

Picaro.  >    ,.?, 

.  Juaha. 
,       Rafa*  .     .•;/»''•     í  ■•: 
Xrfs  ¿os. .     ..    «  t 
Hombrecillo.  J^tfnsa 

t  .         Chocóte  *  ■  ».'    '•     - •£ 
Ve  aquí ,  por  cosas. eotno  e*U% 
pudiera  perderse 'ton  hombre 
sino  tuviera  prode-neia"  •  \\ ••*.*  \     .«1  ».I 
.  ¿  Mas  que  es  aqóello  f  tres  damas.     ,  < 
•  .tapadas  eniCaasUentraii*     ..-\>.^    v)    , 
y  al  cuarto  suben ;  vext'     ..      * -,x  ,^  % 
quien  son»  .  1  .  <. .  O  * 


ESCENA  XXV. 

Chacón,  Leonor  ,  Batirizy  una  criad*. 

Leonor. 
La  verdad  es  esta  ¿ 
yphcstoqaeá  tí  te  toca 
el  queda»  PedroU  S(.0á  # 
y  á  mi  f  que  yo  satisfaga 

ádoa<Juün,deesU  manera, 
solicitando  las  dos 

de  nuestro  engalla  enmienda, 
vé  tu  buscando  á  dt>ri  &dro  , 
que  yo  espero  *q„<  á  que  Vuelvas. 

•  Beatriz. 
Bien  k>  has  disputo ;  conmigo 
ven,  Isabel,^  se  queda 
aquí  Leonor,  ¡O  tos  cielos 
hagan,  qae<áVh'**etiro  crea 
de  sus  zfkw^vétvtod^ 
y  de,mi  amor  la  fineza! 


.t.-i 


ESCfiKA>*;xvI. 

liti.:.  i 

Leonor'  r  Chacón. 

•  ükatfoh.t  ',   <  • 

¿  Dama?,;  á'qvtf  abastáis  ?  si  e» 
á  mi  ♦  no  ten¿atS5V^rpüen¿a  ,  . 
que  fáfcil  soyvy*barato , 
y  no  mi»  habréis  dicho  ajwínaa  • 
que  adoráis  wis  f*éh saín ie utos  f 
cuasalo*  al  pa*to0*  kvorezca. 

•  lxonon.    '•'.-  ,  ..      '    J 
¿D<»*.Ja»a;V4ie4JU3a<4uo  está  cu  casa? 


J 


£S5 

^                              Chacón* 

No  señora. 

Leonor*. 

Pues  es  fueraá 

i       ~«ue  I*  busquéis. 

Chacón. 

1 Y  vos ,  donde 

habéis  de  quedar? 

Leonor. 

/ 

En  estt 

- 

cuadra. 

.    Chacón.  * 

» 

Eso  no. 

Leonor.            { 

¿Por  quéf. 

t                    Chacón.        •»  •' 

*~ 

Porque        -  <: 

/ 

hay  tapada  que  se  lleva 

- 

las  sabanas  por  enaguas # 

1 

el  cobertor  por  poMera  , 

;» 

en  una  manga  un  cotebon*   •> 

/ 

y  un  cofre  en  la  faltriquera* 

Lcarior. 

Id  á  buscarle. 

Chacón, 

Me  holgara 

de  saber  donde»  siquiera 

l*>r  ver ;  si  coa  vos  tenia  • 

su  ¿chaque^convalecencia. . 

i' 

*  Leonor. 

p 

¿Cómo? 

{ 

Chacón. 

•     1 

■<                                 Gomo  dama  de  es* 

J 

tallaxo  i  de  esa  presencia  , 

<  . ._ .  j   »o  htcie/za  mucho: en  .curarla 

^^ 

k 

«le  una  bellaca- dolencia. 

¿Qrá'fetf  tieiitt  ? 

Chacón. 

Tiene  dama. 
~    '  Leonor. 

No  la  haré  yo  competencia  ,       * 
*  que  debe  de  ser  muy  linda.    x 

Chacón, 
Como  vos  no  seáis  muy  fea , 
perderé  por  y  oí  doblado. 

Leonor»  t 

Mal  debéis  de  ésiar  con  ella.      ' 

Ch'icon. 
¿Nunca  oíste  lo  de  tanto  ••      t 
le  quiero  como  rae  cuestas  f 

Leonor* 
4  Pues  qué  os  cuesta  ? 
Chacón, 

No  dormir ,  . 
no  comer ,  no  traer  cabeza  , 
desde,  un  embuste  que  dijo 
un  papel. 

Leonor»  :    •   » 

l  Qué  es  embustera  ? 
Chacón.     ^ 
Muchísimo ;  y  siendo  así 
1  que  es  su  cura  esa  belleza , 
véala  yo  por  mi  consuelo : 
descubrios. 
/  Leonor. 

Norabuena  s 
i  podré  curarle ,  Chacón*  ? 

Chacón, 
X  toa  matarle »  porque  es  ciencia, 
17 


257^ 


í 


25» 


W 


de  los  que  curan.- 
Leonor* 

Bien  yes 
cual  me  has  puesto. 
,     Chacón. 
,  Si  do  hubiera 

con  oxidóte  ,  señora  ,, 
no  hablara  de  esta  manera. 

Leonor* 
Bien  está  t  busca  á  don  Juan, 

y  dile,; .  ¿pero  quién. eutra? 

porque  no  me  vean  ,  haré 
de  esta  cortina  defensa;    . 

'.    ESCENA  !XXVU#      .,    . 

Dichos  y  don  Pedro* 

•        i. 
Don  Ppdro. 

I  Chacón  ? 
j  Chacón* 

O  señor  don  Pedro* 
Don  Pedro. 
¿Y  tu  amo? 

Chacón.  ' 

Ahora/ ha  ido  fuera 
del  lugar* 

Don  Pedro-* 
¿  Drl  lugar  ? 
Chacón, 

Sí. 
*       Don  Pedro. 
Mal  vienen  bodas  f  y  a  usencia f  , 
mas  cumpla  mi  obligación 
,  una  por  una*  .  .. 


fihacon. 

¿Qnt  intenta»? 
Don  Pedro. 
Dejarle  escrito  un  papel, 
que  td  le  Jes  cuando  venga  ,, 
6  le  envíes  donde  está. 
Mejor  es  de  esta  manera  ,  ap. 

que  ata  be  ra  os  de  una  vez  , 
y  que  yo  le  busco  sepa. 

ESCENA  XXVIII. 
Dichos  y  don  Juan,, ,4       ¿ 

Don  Juan. 
No  pude  hallar  á  don  Diego  , 
y  por  'si  él  buscarme  intenta/ 
quiero  que  me  baile  en  mi  caja : 
¿  quién  está- escribiendo  en  ella  ? 
I  Don  Pedro  ,  á  quien  escribía  ? 

Don  Pedro. 
A  vos ;  y  pues  en  presencia 
¿obra  el  papel ,  con  vos  tengo  ¿ 
don  Juan  ,  que  hablar. 

Don  Juan. 

¿  Aqní ,  6  fuera  f 

Don  Pedro. 
O  fuera ,  ó  aquí ,  elegid 
vos  el  puesto  que  os  parezca. 

Don  Juan. 
Para  estas  cosas  ,  según 
perdido  el  color ,  la  lengua 
turbada  ,  mé  habláis  ,  presumo  9 
que  efe  lo  mejor  lo  mas  cerca.    . 
Chacón ,  rete  de  aquí ,  y  mira 
que  te  cortaré  las  piern*s>   '  •    ■ 


J 


260 


si  hablas  palabra.  , 
Cf tacón. 

Una  sola 
decirte  primero  es  fuerza* 

Don  Juan. 
Ni  aun  esa  has  de  decir* . 
Chacón* 

Sabe, , 

que  está 

Don  Juan» 
En  nada  te  detengas* 
Chacón. 

Leonor1 

Don  Juan* 
•  -   Nada  be  ¡de  saber , 
y  oíos  da  Leonor.  Afuera 
.  aguarda.  ' 

•;      ,,  Chacón»,     \  . 

Don  Juan* 

r,i  .  JNo,hahJes,.      -% 

ósejá,^  esta  maiiera.  \  »  ) 

lía  estamos  solos  los  dos*  ^  ,      } 
i  .      -      *  \ 

:.',..,  ESCENA  XXIX. 

Don  Pedro ,  cto/i  Juan % f  Leonor  al  parto. 

•£3v  :      ^ÍWI  Pedro*  » 
Echad  la  llave  á  la  puerta. 
t  .  Don  Juan  *  •  ;   * 
T  despn.es  á  ella  en  e.1  s.uelo. 

Leonor. 
\  Qujén  vio  confusión  como  esta  ! 

j — r— ' .     ■    ''.'      - r— 

(i)     J£ chale  d  empellones,    ........     , 


261 


Don  Juan. 
*  l Qne  es  lo  que  querei*  f '"*     "'  '  *■» 
r  *    -    '  Don  Pedro.  M      '*' 

Mostrar 
cjae  h'abeís  con.  falsas  cautelas',  •» 
mal  caballero,  y  amigo,   '    '     '*' 
tratado  la  amistad  nuestra: 
pues  cuando  de  vos  me  vafgo  ,   '• 
fian  do  os'  mi'  amor  ,  y  mi  pena  ,  ' 
vos  traidoraoionte  amáis 
¿  BinVvizt  y  con  cerleaa*  :i'é        • 
de  que  soy  yo  quien  ía  adora  , 
•"  tratáis  casaros  con  ella. 
Don  Juan. 
Dos  razones  ,' fuertes  ambas', 
hay  paiJa  qué  yo  lio  pueda, 
don  Pedí1©,'  satisfaceros'   i 
de  ese  encaño  ;  la  piíirtt'ra   í: 
es ,  q^ie  emptffiandb  la  espada     ' 
estáis,  y  la  mano  eii  ella, 
á  «ninguno  satisfacen  <    *    '' 

caballeros  dfe  mis  prendas  * 
la  segunda  ¿s,  que  aunque' yo 
,    remitir'  el  duelo1  quiera  , '  ' 

en  fe  de*  nuestra  amistad, 
no  lo  be'  úV  nacer  ,  en  ofensa       * 
de  otra  dama  ,  cuyo  bonor 
-  la : sai ísíacci ota  arriesga  : 
/  y  así  escásemos ;  don  Pedro  , 
de  demandas,' y  respuestas. 
1 '  Don>  Pedro. 

Decís-  bien  ;  y  pues  la  espada 
ba  dehabiar,  calle  la  lengua,  ,       (  i  J 

( i )    Sacan  Idé-eapadas  ,  r ¡Atn ,  y  sale  Leonor. 


j 


262 


w 


£e*nor.-+ 
j  Qué*  cabero  ?  i  ay  de  m.í !  Teneos  9 
.don  Pedro  ;  don  Joan  ,  espera.  \ 
..  r .    .         JDo/i  Juan. 
¿De  dónde  t  muger  ,  veníate 
de  si|  vida  á  ser  defensa  ?     . 

Don  Pedro» 
Mas  fácil  es  de  creer  . 
tenprla.  vos  por  la  vuestra. 

Don  Juan. 
¿Quién  eres  ?  ¿cómo  aquí  estás? 

.  r|í>:  ..X>o/a  Pedro. 
¿  Quién  eres  ?  ¿  y  aquí  que  intentas  f 

Leonor y  ¿ 
A  los  4os  responderé       .     , 
de  una  vez  de  esta  manera,:        4 
pues  viéndDme  ,  á  tí  te  digo» 
quien  soy,,  y  como  aquí  .estoy: . 
y  i  voj  dicie'ndops  .quien  soy,  t 
diré  el  intento  qu^sigoj. 
y  «?»  q*«e  pues  dojí,  Juan,  aquí, . 
cumpliendo  su  obligación, , 
no  pts,  da  la  satisfacción,.., 
que  puede  por  sí  *  y  por  mí; 
yo  atenta, al  silencio  fiel  » 
que  fiajs  de  los  aceros,    .  , 
pretendo,  satisfacer  os  ttí .  <t 
don  Pedro,  por  mí,  y  por  él; 
pues  $1  i  callar  se  obliga  ,  ,  •   .    ,. 
cuando  en  tal  lance  se  halla  , 
por  lo  mismo  en  que  el  lo  calla  9 
me  empina,  en  que  yo  lo.  diga  1    . 
quede  él  airoso  ,  aunque  aqui 
quede  desairada  yo, 
yo  QMatjrfa^Q!  o^&nfe,  { 


¿63 
-    Jfrtn  Jíurit. 
Ni  tilias  de  hacerte. 

¡Lééitnr.     •  «• 

Yo  sí,  •  -■•'•• 
que  siendo  mi  fitogfaiientt 
toda  la  culera*  iitffelfc 
de  Beatriz,  por'iwi>  y  Beatriz 
hable  ,  no  por  tí;  oíd  atento : 
coanta  sospwrbtf  hüf  en  vos  /   "'• 
señor  don  Periw;  es  incierta ,  ' 

Gh*cArrH*ñtro. 
Se4o?*  ánre  esta  puerta. 
JDo/i  Juan* 
¡Vive  el  cielo  K 
«     *  -  Chacoh. 

-   Abve  pof  Dios  , 
lo  que  importa  considera. 

Leonor.  \ 
Mira  que*4.    •   -   ••■  . 
Zto/i  Pedro. 
'  ¿Pdr  qué  no  abrís?        ¿4¿r*« 

ESCENA    XXX. 

Dichos  j  Chacen. 

Don  Juan.  <  - 

jQoé  es  lo  que  quieres  t 
Chatón. 

Don  Luis 
sol»  ya  por  la  escalera  ; 
y  no  dudo  que  baya  oido , 
según  trae  paso**  y  color  9 
— con  la  voces  de  Leonor , 
de  la*  espadas  el  ruido : 


264 

y  aunque  yo  quiera  negar 
que  en  caía  tsíés ,  no.pod*t*f   *'! 
que  abajo  le  haj*  4teJ>o  que 
estás  aquí.. 

¡Q»4-f*»ajr>!  t 

Si  ti  ipe  *yí  f  roi  fia  previene*  :, 

2?o«  ,4utm. 
Si  es  cierto  bu.^p^me  á  mí, 
¿  qné  querrá  4on>L«»is  aquí*  «  •: 
pues  que  ha  Liarme  á  mi  no.  tiene  f 
No  te  asuste*. rir«lJttt4& 
mJ  puedes ,  Leonor  %  «¿perar. 

Y  aun  <Jon  Pedro  ,  por.no  darV  ¡ 
sospechas  que.kubo  otra  espada» 
lambían  pueJe  ]  a^intcli*  ! 
retirarse,  para  que  \ 

sin  tí,  cntreta#t*.ftc  dé 
saiisfacion  por  Be  a  tria»      >    (ji) 

'.    ;     ':  t  -.   escen'a/xjcxi. 

Dichos  y  don  Luis» 

Don  Luis, 
¿  Pensareis  ,  señor  don  Juan  9 
viendo  cuanta,  causa  tengo  9 
que  á  Ji  aclaro*. de  parle  vengo*  , 
de  don  Diego  l  pu,ej  no  van   , 
«ahí  mis  intentos;  error 
pensarlo  os ,  que.  dt  ira  lleno  #     *. 
iio  liabla  en  oj/bdnor  a  gen  o        * 
quien  tyuede  «i>  su  propio  honor : 

■  ■  ■  ■     ■  t — •  ■■■  >i     '■  " ■"> 

(i)     Escóndeme  l^dqs* ,  ,  ,t,  .     , 


26» 
por  lo  que  me  toe*  i  mi  i 
no  por  lo  qoe  toca  á  él , 
os  bujeo. 

-%Don  Juan. 

\  Peua  crael !  a/ft 

Leonor. 
Pues  mi  padre  habla  por  sí, 
sin  duda  raí  vos  oyó. 
Don'  Juan. 
Decirme  t  señor  don  Luís , 
que  por  vos  misino  veáis  v 
roe  <U  que  dudar »  pues  yo 
nunca  os  di,  ni  o»  pude  dar       i» 
á  vos  causa* 

,     .       Don  Luis, 

Si  pudisteis» 
puesto, que  á  mi  os  atrevisteis.    , 
Leonor.  * 

¿Qué  mas  se.  ha* de  declarar  ? 

Dtm  Juan, 
¿Qué  es  esto  qué  por  mi  pasa?  :      ap. 
¿yp  á  vos 'me.  he  atrevido  ? 
J)on  Luis. 

puesto  que  se  atreve  i  mí, 
el  que  se  a  trove  fu  mi  casa: 
y  estando  eu  ella  Bcatrie, 
aouque  euirásedea  por  ella,  * 
fue  ofenderme  el  oientklla.        i 

.  Don  Juan. 
Ya  no  es  tan  iníeü»  úb* 

mi  suerte.'  • 

•.  Don  Lui$. 

¿Qué 'cosa  es, 
habiendo  llegado  á  uahiarme*:  .» 


i 


266 


fct 


Tolver  \é  espalda ,  y  dejarme  9 
grosero  antes  ,  y  después? 
y  asi  aqueste  duelo  es  mío  9 
hablemos  claro,  don  Juan,' 
yo  he  de  saber  donde  van 
vuestros  fines* 

Don  Jvan. 

Pues  yo  fio 
de  vos  todos  mis  desvetos. 
¿  Casarais  vos  con  muger, 
de  quien  llegáis  á  saber  , 
muerto  de  amor ,  y  de  selos  , 
que  esotro  el  que  quiere f 
Don  Luis» 

No. 
Don  Juan. 
I Y  no  queriéndome  á  mi , 
bago  bien  de  huir  de  ella  ? 
Don  Luí*. 

Si: 
¿  mas  qué  culpa  tengo  yo  ? 
Si  yo ,  siendo  vos ,  me  hallara  9 
sin  oilla  t  ni  sin  vella  » 
no  me  casara  con  ella  , 
ni ns  tampoco  la  buscara  ; 
y  mas  en  casa ,  en  que  habia 
decoro  que  aventuar:    - 
y  en  í  n  f  vamos  á  parar 
en  el  fin  de  la  por  fia. 
Yo  en  mi  casa  os  encontré 9 
y  á  don  Diego  dije  ya  , 
que  sois  quien  la  mano  da 
¿  Beatriz :  y  pues  llegué 
é  hacer  el  empeño  yo  » 
•  defttme  también  á  mi  9 


2*7 
¿  no  eatoy  obligad*  f  '    ' 

.    Don  Juan.  * 

Sí. 
V  Don  Lp\$. 

4  Puedo  así  dejarfo  ? 
1  Don  Juan» 
No. 
Don  /.u**.    • 
Pues  mirad  como  ha  de  aer. 
r      »  ,  ;  Zto>/i  Juan.    : 

Tiempo  al  tiempo  importa  dar.  .      ap* 
^Fo  quiero  pojr  v«p  llegar 
mi  se  u  ti  miento  á  ceder  f» 
y  asi  digo,  que  di  ella. 
me  quiere  á  mí ,  desde  luego  , 
por  vos  ,  por  roí,  yl  por  don  Diego, 
estoy  casado  ea*a«Jta> 
,;,'  Don  Luis. 

¿bajsme«sa  palabra?-    , 

,    Dan  Juan*     •  \ 

Pues  yo -á  hablada  volver* , 

y  la  respuesta  ot  daré*  ■>    ,;    £t*i'¿*  dentro. 

Gini*  denéro* 
Tente,  señor*   ,....! 

Dentro  IfeafrY*. 

j  Ay  demÜ  «  '" 
Don  Diogo  dentro. 
No  mefáeteiigas»,  viHaáow 

<A     Z)o«  £*»*•      *  '  • 
¿Qué  ruido.es  esteB  •>• 

Do/i  Juan.  •  • 


i 


26% 


Don  ttiigo  dentro. '       "f  \ 
Déjame  acabar  con  {odas 
mis  desdichas  una  ves. 

,      ESCENA  XXXII..  r  ; 

Diches  y  Béairu. 

Beatriz,  J 

¿No  hay  quién  ampare  mi  vida? 
¡Mas  qué  éa  lo  qoe  llego  é  ver!       ap. 
nías  mal  hay ;  pues  veo  i  don  LuU 
é  donde  á  Leonor  dejé.  '    -  , 

Don  Luis.         v  •  .      '( 
¿  Qué  es  esto »  Beatriz  ? 

/to/i  Juan. 
'*''    ''•<   •  Señora,, 

^qu¿ese*tof    ,  ,  «., .    k  j 

-  Beatriz,  **» 

ficharme  á  esos  pie*, 
que  siena pro  son  mi  sagrado,       y 
y  boy  con  mayor  causa  ,  pues 
por  obedeceros  vine , 
seftor  ,  adonde  me  veis  , 
i  cuya  poeHa  mi  hermano  ?  t  " .'. 
m*  llegó  á  reconocer ,  *j   ..  / 

adelantándome  yof 
míen  I  ras  le  tienen  á  él.    •     >'"'!' 

'Donjuán.     - 
Retíraos  ¿  aqueja  cuadra, 

.  -    Do*  Luis. 
Vos ,  do»  Juan  ,  reconoced; ni  r.  'í  , 
si  Beatriz  os  quiere,  puesto 
que  os  viene  ¿  satisfacer t   •     .  <"N  • 
que  ea  lo  que  la  di  je  yo. 
Beatriz  al  paita. 
¿  Quién*  es  ti  aquí  ? 


269 
Don  Pedro  al  pato. 
Que  temer 
■t>  tienes  ;  yo  estoy  aquí :  ^ 

que  ya  tu  inocencia  sé.  , 

ESCENA  XXXIII, 

Dichos  %y  Ginés ,  Juana  y  Chacón  deteniendo  d   don 
Diego, 

Don  Diego,  v 

Soltad  ,  villanos. 
"  Las  Ires. 

Detente.  - 
Don  Diego. 
I  Dónde  está- una  aleve? 
Don  Luis* 

Ved, 
don  Diego ,  que  estoy  aquí. 

Don  Juan, 
Y  ved  ,  que  estoy  yo  también* 

Don  Diego. 
Porque  estás  tú,  falso  amigo,  . 
aera  mas  fiera  y  cruel 
,     mi  venganza;  que  ya,  ingrato, 
todas  tus  traiciones  sé. 
'  Don  Juan. 

Mejor  sé  las  tuyas  yo, 
•         y  be  de  vengarlas  también.  (1)      ' 

Don  Pedro*  > 

Dejadme. 

Beatriz. 
No  has  de  salir. 
m^^M___L    .i,,  .  -  -  -  ' — ^  ,   —  . 

(  1  )      Riñen  ios  dos  ,y  don  /***  ee  Pone  cn  mtrf/0, 
Bealrit  y  Leonor  detienen  d  don,  Pedro. 


i 


270 


Don  luis. 
TeHed  t  don  Diego  ;  tened  , 

don  Juan  ,  q,uc  con,°  mc  oitaí* 
todos  quedaremos  bien. 
Vos  no  acabáis  de  decir.... 
Don  Juan. 

Don  Luís. 
Que  como  quiera  ser 
esposa  vuestra  Beatriz , 
esposo  suyo  seréis? 

Don  Juan. 
Y  otra  ,  y  mil  veces  lo  digo, 

Don  Luis. 
¿Vos  no  habéis  dicho  también  $ 
que  como  con  ella  case  y 
sos  yerros  perdonareis  F 

Don  Diego. 
Yo  lo  digo  otra  ,  y  mil  veces. 

Don  Luis. 
Luego'  compuestos  os  veis. 
Supuesto ,  don  Juan  ,  que  VOS 
en  casa  6  Beatriz  tenéis  t 
que  es  señal  qué  os  quiere,  puesto 
que  os  viene  á  satisfacer  ; 
y  vos ,  hallándola  en  ella , 
mas  remedio  no  tenéis  , 
que  dejarla  donde  quede  ' 
con  su  marido  5  con  que 
Beatriz  ,  yo  f  don  Juan  ,  y  vos, 
todos  quedaremos  bien. 

t>an  Diego. 
Yo  soy  contento. 

Don  Juan. 

Dé  inerte  , 


«i 

que  si  doy  la  mano  ¿  quien  N 

está  en  mi  casa»  y  en  ella 
•e  queda  por  mi  muger, 
l  no  podéis  tenes  ntngunft 
queja  de  mi? 

Los  dos. 

Cierto  es.  (i) 

Don    Juan. 
¿Daitrae  esa  palabra  ? 
Los  dos. 

Sí. 
Don  Juan. 
¿  Y  perdonarla  ? 
i  *  '  Los  dos. 

También. 
Don  Juan. 
Pues  descúbrete,  Leontr. 

Don  Luis. 
¿ Leonor  ?  ¡ó  aleve  t  ¡ 6  cruel , 
hija  ingrata  ! 

Don  Juan. 
Si  decís , 
á  otro ,  que  este*  solo  es 
el  medio  i  viendo  que  está 
noy  en  mi  casa  ,  J  porqué 
el  consejo  no  tomáis 
para  vos,  que  á  otro  ofrecéis? 

Don  Luis  •  , 
Porque  es  traición. 

Dow  Diego. 

,    Deteneos,  <a) 

don  Luis,  pues  ya  vos  os  veis 

(  i  )     Saca  d  Leonor ,  tapada  ,  de  la  mano. 
( a  )     Pontee  en  medio»  !- 


J 


272  > 

respondido ;  porque  yo , 
que  un»  injusta  hermana  hallé 
j¡n  su  casa ,  soy  quien  debe 
vengarse  en  ella,  y  en  él, 
pues  nó  la  puedo  dejar 
con  su  esposo. 

Don  Pedro. 

Si  podéis,  (i) 

'  que  Beatriz  esposa  es  mía  j 

pues  desengañado  sé. , 
que  ha  sido  su  culpa  el  trueco 
de  una  casa,  y  de  fin  papel. 

Don  Luis. 
Don/Diego,  aquí  no  hay  nías  medio» 
que  hacer  del  pesar  placer.      ' 

Don  Diego. 
Yo  por  mi ,  digo  que  estoy        • 
satisfecho. 

Don  Luis. 
Yo  también. 
Leonor. 
Déjame  besar  tu  mano.  (a) 

Beatriz. 
Déjame  echar  á  tus  pies.       (3)  • 

-  Juana. 
Pues  que  se  vienen  casando  f 
venga  tsa  mano  ,  Ginés. 

(Jfiacon. 
Todos  quedan  bien  ;  roas  yo 
quedo  sin  casar  mas  bien  ; 
y  pues  que  Dar  tiempo  al  tiempo 
■■^— — ■ -      ■        ■  .  •    '     i    ■»— <— 

(  i  )     Sacando  de  la  mano  d  doña  BcairU. 
(  a  )      A  su  padre. 
(  3  )     A  su  hermano. 


f  rttZ  «í  pesar  en  placer  > 

,     los  dcf^t^a^pe^l^^   ... 

tic  yirén  yace  á  vuestro* 

.*•.-"   »•?  <io>  »»     •  •"'-..".?        .  »    <   ' 

*    .  it&  -»:'•         ;           •   .    '    \ 

1      - 

■     -«M    »"i    i  -1            '                        v      •    "     , 

^    *  ,r./v      "                ...,,*,„., 

?.  i !  i  •    *  ,           »    , ;    <  •  i  •«  ;  ?  i  . 

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.'     i, 

473 


ÍS 


$kw  ti$mpt>  (&'  tiempo. 

Una  de  la*  prenda»  mas  admirables  en  don  Pe¿r« 
Calderón'»  es  la  distribución  y  conducta  de  sos  fabo-* 
las.  A  pesar  de  la  complicación  que  resulta  de  loa  in- 
cidentes, que  acumula  en  ellas,  están  colocados  con 
tal  subordinación  que  no  afoscan  la  acción  princi-* 
pal.  No  solo  acredita  en  esta  parte  la  fecundidad  de 
$o  ingenio,  sino  también  el  arte  y  esmero  con  <gae 
trabajaba  los  planes  de  sus  piezas.  Esta  es  ana  de  Jas 
muchas  que  confirman  esta  opinión.  La  mudanza  de 
«asa  que  biso  doña  Leonor  en  ausencia  de  don  Joan* 
es  el  origen  de  la  intriga  y  produce  ana  multitud 
de  lances  interesantes  y  verosímiles.  Don  Juan  vi  * 
la  casa  en  que  vivía  Leonor ,  y  habita  después  doña 
Beatriz:  de  aquí  resulta  su  fuga;  los  zelos,  de  don 
Juan ,  la  sorpresa  de  este  ,  cuando  le  halla  don  Luis 
hablando  con  su  hija  %  el  engaño  de  fingir  que  es  el 
amante  de  doña  Beatriz»  y  los  lances  sucesivos»  que 
aon  el  resaltado  natural  de  los  primeros.  Esta  com- 
plicación la  es  plica  bien  Juana  al  fin  del  acto  se- 
gundo. 

Juana. 
{Brava  trama  se  va  urdiendo  ? 
allí  está  en  gran  puridad 
con  Beatriz  hablando  el  viejo.  % 
don  Juan  escondido  aquí , 
i  nuestra  puerta  don  Diego  »  ^ 

Leonor  en  obligación 
de  decir  segundo  enredo  , 
Chacón  zeloso ,  culpada 
yo;  i  ve_n  acedes  todo  esta f 


r  pnes  en  qnl  para  verán  f 
• c afeólo  ^bn  dar  tiempo  al  tiempo  í 

En  el  iercet  acto  se  aumentan  los  obstáculos  §u4 
lesivamente ,  de  tal  manera  y  con  tal  arte ,  que  no 
dejan  distraer'  al  espectador  hasta  que  llega'  al  -des- 
enlace. Hay  escenas  sumamente  interesantes :  pueden 
citarse  entre  otras ,  la  IX ,  X ,  y  XV  del  segundo  ac- 
to ,  y  casi  todas  las  del  tercero.  Los  caracteres  prin- 
cipales, son  nobles  y  están  bien  desenvueltos.  Todoa 
ellos  cautivan  la  atención ;  pero  están  presentados  do 
modo  que  á  pesar  de  la  situación  de  doña  Beatris  j 
don  Pedro  ,  siempre  sobresalen  don  Juan  y  Leonor, 
que  son  los  principales.  Sí  otro  poeta  menos  inge- 
nioso que  Calderón  hubiera  escrito  esta  comedia ,  sin 
duda  hubiera  tenido  dos  acciones. 

Algunas  de  las  escenas  entre  los  criados  están 
puestas  tínicamente  por  obedecer  la^ley  inviolable ,  que 
habían  establecido  nuestros  antiguos  poetas ,  de  pre- 
sentar al  pueblo  en  todas  las  comedias ,  uno  ó  mas 
per  son  ages  que  le  escitasen  la  risa ,  aunque  se  des- 
truyese el  interés  de  la  situación  mas  patética. 

El  estilo  de  esta  comedia  es  el  propio  de  Calderón, 
y  no  tiene  res  a  vio  alguno  v  del  mal  gusto  que  se  ad- 
vierte en  otras ,  esceptuando  sin  embargo  el  princi- 
cipiode  la  escena  I  del  segundo  acto,  en  que  don  Pe- 
dro y  don  Diego  hablan  á  coro ,  y  sin  verae  ni  oírse 
espresan  ambos  los  mismos  pensamientos;  pero  va- 
riando ingeniosamente  la  espresion. 

Don  Dk%o* 
¡  Habrá  hombre  mas  in feliz ! 

Don  Pedro, 
¡Habrá  hombre  mas  desdichado!       * 


i 


}  Que  no  k*y«  n^a,  íngr*U  (fulíal»  ! 
Z>o/i  Pedro, 

Jbto  f»  invtroAímü  y  4*  mal  {utfft*.  . 


•     i  .  ... . 


•  ; 


^ 


EL  MAYOR  MONSTRUO 

LOS  ZELOS,  - 
TETRARCA  DE  JERUSALEN. 


v  M»ia* 


J 


PERSONAS. 


El  Tetrarcq. 
Octaviano, 
jértsióbula. 
frlipo. 
To¿  orneo. 

Un  f  ¿pitan.     .  >  ,\ 
Polidor o  9  gracioso- 
Maritne. 
\  \Siréhé.-  * 
Libia» 
Arminda. 
Soldados ,  y  Músicos > 


La  mayor  parte  de  la  escena  es  en  Jera  salen. 


277 


<  ACTO  PRIMERO. 

ESCENA  PRIMERA, 

DgcoRACioír  DJt  Mabiha. 

MI  Tetrarca ,  Mariene  t  Libia ,  Serene  y  Filloa. 

Música,     •  • 
La  divina  Mariene , 
él  sol  de  Jerusalen , 
por  divertir  sus  tristetas9 
vio  el  campo  al  amanecer. 
Las  aves ,  fuentes ,  y  flores 
la  dan  dulce  parabién  , 
repitiendo  por  servirla , 
al  airé  una  y  otra  vez  , 
sea  triunfo  de  sus  manos 
'  íó  'que  es  pompa  de  sus  'pies  i 
fuentes ,  sus  espejos  sed, 
corred ,  corred  %  corred  t  • 
r  aves  ,  su  luz  saludad  ,      ■ 

volad,  volad  ; 

flores  ,  paso  prevenid  9  ; 

%¿ividt  vivid.  .      ,    . 

.  r    ,  Tetrafca. 

Hermas  a  Mariene  9  -  -  . , 

á  guien  el  Orbe  de  zafir  previene 
ya  ¿tt he i«an o  asiento,  ¡, 

como  estrella  añadida  al  firmamento  $    •  i 
fio  con  tanta  tristeza 
•  tarbea  el  rosicler  de  tu  belleza  ; 
i  qué  deseas  f  ¿  qué  quiere*? 


! 


278 

¿  qué  envidias  ?  finé  te  falta?  ¿Tá  no  eres  , 
".  -ornada  glori*  xtítáV^  "  •    -  -    ■  • 

Reyna  en  Jerusalen?  ¿  Su  Monarquía  , 
en  cuando  cine  eTsdl  ♦  eá  nar  ^irt*  , 
no  me  aclama  su  ínclito  monarca, 
como  dan  tésfimdaio- 
letras  de  Marco  Antonio  * 
y  firmas  de  Oclaviano?  * 

por  qne"  los  dos  intentan  aunque  en  vano  f 
repartir  el  imperio  t 
que  ditata  y  estiend* ,s«t  emisferio 
desde  el  Tiber  al  ?íilp;  ,,      \ 

y  yo  con  cauto  p«¡cbo  y  doble  estilo ¿ 
¿de  Antonio, «o  duendo.  >v 

'      la  parte ,  porque  asi  turbar  pretendo 
la  paz,  y  que  t*  guerra 
dure ,  porque  después  cuando  la  tierra 
de  sus  huestes  padezca  atormentada  < 
y  el  mar  cansado  de  una ,  y  otra  armada  , 
pueda  yo  declararme , 
y  en  Roma  ,  t*é  mi  lado ,  coronarme  ? 
¿  Tu  hermano  y  Tolomeo  f 
no  son  á  quien  le»  fio  mi  deseo  t      .„ 
y  W  de  mi  alveario;  m 

pues  con  loí  dos  socorro  a  Antonio  envío  f 
Y  en  tanto  ¡  ó  qielo  hermoso  ! 
que  al  triunfo  llega  el  dia  venturoso; 
¿  no  estás  de  mí  aderada ,? 
¿  de  mis  gentes  no  estás,  idolatrada  ?         . , 
¿no  habitas  esta  Quinta,  4 

que  sobre  el  mar  de  Jope,  el cieja  ,™»ta ;?, 
Pues, ao  tan  fácilmente    :   •    y.     . 
se  postre  todo  el  sol  á  un  accidente  \ 
liberal  restitoy*.*»  alegría        ,. ,  r,  ?.  -  - 
su  luz  al  alba ^.esplendor  al  día»     .,    . 


.  «u  fragancia  á  las  flar^s,    .;       ■.  _  ,  ? 

al  cúinpo  sus  colores,       

sus  matices  á  Flora, 

sus  perlas  árla  aurora  , 

su  música  á  las  aves,  . 

mi  vida  á  iní,  .pues  con  discursos  graves   . 

á  zelos  me  ocasionan  tus  (Jételos;  ..,  t 

no  sé  qué.mjrs*  decir,,  ya.dige  zelos.      ,  \ 

Mariene,  .  .  f  ,. 

Tétrica  generoso ,  ,.  ,  t 

mi  dueño  amante,  y  mi. galán  esposo ^   . 
ingrata  al  cielo  fuera  *  J%      ,  , 
y  á  mi  ventura  ingrata,  si  rindiera   .  ,  ,    ., 
el  sentimiento  mió     .  <     /  ,  ..ius 

á  pequeño  accidente  su  alyedrio.  r,  > 

La  pena  queme  aflige,    ..  ..,,, 

de  causa, ;  ay  cielos  !  superior  se  rige ; .         r 
tanto^  que  es  todo  el  cielo  .. -,. 

depósito  infeliz  de  mi  desvelo,  .  ,' 

pues  todo  el  cielo  escribe 
mi  desdicha  ,  que  en  él  grabada  vive   .    .  ,  , 
en  papel  de  cristal  co¡n  tetras  de  oro;   . 
no  con  causa  menor,  mi  muerte  lloro. 

Tetrarca-    , 
Ahora  entiendo  menos  y  jnas  dudo 
el  mió  ,  .y.  tu  dolar  ¿  y  si  es  que  pudo      .      , 
tanto  mi  amor  contigo,  .    . 
hazme  ya  de  tu  mal  f  mi  bien  ,  testigo;  .,.  * 
*epa  Ja  pena  yo,  porque  la  llore, 
y  m>s  tiempo  no  ignore, 
muerte ,  que. .ya  con  ,mis  sentidos  lucha;      ^ 

Nunca  pensé*  decirlo  „  pero  escucha*.  .     t,\  ,; 
Un  doctísimo, hebreo  i::  ■>,...  \  , 

tiene  Jerusalen  ¿  cay  a  deseo 


j 


l382 


por  imagitfacla'Aíclia  »'  * 
6  la  dcsflichra  ,-  ó  Ta  dicW,' 

•'  ya  es  hacer  cara  en  rigor , 
pues  no  hay  desdicha  mayor  9 
que  el  esperar  la  desdicha. 
Con  otro  argumento  yo 
vencer  fo  dolor  quisiera  i 
ai  ventura  acaso  fuera 

:  -la  que  et  Astrólogo  vid  * 
¿  diérasla  crédito  ?  =  no  , 
n¡  la  estimara»,  ni  oy%r>*  ;  -    * 
l  pues  (So rq ere*  én  n«estflás>  Quimeras 
han  de  Vfer  escrupulosas','-    '  *:  * 
las  veíitnras  mentirosas,         '  * 
,las  desdichas  verdaderas  ?     • 
De*  crédito  el  lUhtoigu*!       :  ¿      • 
•  íMaVorfeófnó  atdesdens  '»•  • 
ni  á^úeldudirs  porque  t»s  bt>n¿* 
ni  ts*te*crriia  porque*  es  wat':   f 

•f  lf~B\  éá  irguVnéntó-tál  '  ' 

no  estás 'Satisfecha  ,  torra  ' 
otro,  que  al  discurso  admiraV 
Esta'fireViííila  crueldad, "    -♦   •» 

i  d'HlWeWti^a1,  ó  es  verdad  j  « 
dejémosla  sí^es  fríentiría ,  '  *í  * 
priVfCfo&Aa^fros  aseara --1:*  •*' ''» 
y  aaWqíie,»sV*,vei<dad  ;  ▼fetifo*  >f 
porqíie^íéii'ddtd-,  a'rgt'fy&ftttbs  i( 
que  «y  ^f1 Va  berta  ventura»;  i  u 
ningbnfr'vida  es ;  secura  •  *  *  s  ' 
un  insta^iti»:' tlí aritos  -viven  ,  • 
en  stí'^inetoio'  apercí-ben/  ^  ' 
tan  4córitSdtos  los  alrenfosry  ••* 
que  sei  cd%i^jlfti^por  rtiomentdl 
los  «iVértfepw^tte  reciben. ;      i' 


Yo  f  en  aqueste  instante  no 
sé  si  mü  reventa  ¿qmplí, 
ni  si  la  vi  ya  :  td  *i¿  -    ,  «}.  .  ) 
á  quien  el  cielo  guardó 
par4.ua  monstruo:  luego  yo 
llorar  debería  ignorante  .,   ..  ;r 
mi  fin;  tú  do;  si  .este  instante 
:á.ser  tan  dichosa  vienes, 
que  seguro  el  vivir  tienes  ,     ,;i 
pues  no  está  el  menstruo  delante. 
Y  pasando  ai  fundamento        [ 
de  lo:  qqr  sabes  de  rbí»  . 
¿afano  es  compatible»  di,      .  > 
que,  aqueste  puñal  sangriento < 
dé  en  ningún  tiempo  Violento* 
muerte  á  lo  que  yo  mus  q»ier$  , 
y  $  tí  un  monstruo?  Ver  no  espero 
cosa  de  mí  mas  querida;           >  ' 

luego  amenaza  tu  vida 
ircroel  monstruo  y  este  acero. 
Pues  si  hoy  el  hado  importuno» 
!que  es:  de  los  gentiles»  Di*>s~f  r"  ¡ 
te  ha  amenazado  con  dos 
fines*  f  no  temas  ninguno.:    ><\ 
no  hay  mas  rigoc.para.  el  uno-j, 
que  para  el  otro  piedad  5 
Juego  será  necedad    '  .    s    .         f 
temer  al  rigor. atenta*)*    ,»■  rv 
cuando  es  fuerza. que  uno  mienta, 
'■  que*,  el  ©tro  diga  vitrdad  j  :  "0  { 
y  porque  veas  aquí     •.          ;  »->n 
«como  mienten  Jas.estreHaii,  i  ;> 
y  qde  triunfar  (puedo  de  c)lal  y 
..mic*  el  puñal.  . . 


i 


384 


Moriente    '  '">  •  '•' 
¡Aydemí!     y    * 
tente  f  scSdr 

Tttrarca, 

¿De  que  así 
tiemblas ,  di  ? 

Mor  ¡ene. 
Mi  muerte  advierte 
mirarle  en  tu  mano  fuerte. 
'■•  'Tttrarca.        i 

Pues  parque  no  temas  mas  t 
desde  hoy  inmortal  serás : 
yo  haré  imponible  tu  muerte; ' 
Seat  el  mar,'  éámpp  de  yelo ,    •» 
sea  el  orbe  <de  cristal 
*  de  este  funesto  puñal , 
i  monstruo  acerado  del  suelo  9   ; 
sepulcro.)    (i)  • 

Dentro  Tolomeo.  * 

¡Válgame el  cielo* 
<  •  -       Mor  Une,  ,    .  . 

}  O  que  vos  tan  triste  he  oidó't 
Filipo.     ■  ' 

Ayre  f  y  ajgua  han  respondido' 
rcon  asombro»  ó  con  desmayos 

- •  '      Libia.  . 
El  trueno  fué  de  aquel  rayo    i 
nn  lastimoso  gemido;     > 
.::.,;-:;  c:.      Jflariene. 
¡  Qué  mucho*  que  á  mí  me  asombre 
acero  tan  penetrante  ,  .   r 

que, hace  heridas  en  las  ondas  v 
4  ioi Jjreaianesre.il  los  arres!  ^   " 

'••       -  i     •  ••* 


( i  )     Arroja  el  puñal  al  mar* 


Tetnamm.  '.'  • 
Los  ppqüenóa,  accidentes 
nunca  son  prodigios  grande*; 
acajso-  la  .voz  se.  que'ya  ; 
y  porque  te  desengañes 
iré  á  saber  la. .que.  isa  silfo, 
penetrando  á  todas  partes 
las  entrañas-  de  los  montes  , 
lo*  cóncavos  de  los  mares. 

/.,.., ESCENA  ,11.  . 

Mariene  j- Libia. 

Mariene. , 
Toda  soy  norror.  .. 

Libia,  ,  4 

£1  mar 

es  monumento  incons^ant*   .    t  ¡ 

de  un  mísero ,  qpe  rendido  % 

e^ty^e  sus  espumas  trae.,  } 

Slrene.  , 

Ya  tu  esflpso,  el  g^an.Tetrarca^ 

con  generosas  piedades  ,    \x, 

movidas  al  bajel  ha  oíanlo 
ha  dado  ,pperto  en  ja  mareen. 
:  co  r .    ;  .   Maric/ie*  ...... 

El  puñal, que  fue  corneja,  .-¡,   .,     ,t 
de  dos  esferas  errátiles  , 
harpou  del  arco  del  cie^o  f     ■  - 
clavado  en  un_  homaro  trae* 

c.      Libia. 
Tolomeo  es  ¡  ay  de  mí ! 
mas  \»asta.f>a  ser  mi  amante^ 
para  ser  tan  infelice; 


■a# 


J 


28¿- 

¡  qué  prodigio  tan  notable ! 
¡qué  espectáculo  tan  tris  te!;       í 
f f   •        -  Maricne.  ■>..:•* 

¡Qué  asombro  tan  admirable!  <•• 
vamos  de  »q oí  *  qué  no  tengo-,  '' 
ánimo  tpdra  mirarles  *  ¡ 

ESCENA  III. 

MI  Tetrarca ,  Filipo   y  los  criados  que  traen  d  Tole- 
meo  con  *el  puñal  chavado. 

•* -Tetrarca. 
Ta  del  mar  estáis  seguro , 
i  niel  ice  navegante  , 
así  la  mortal  herida         ">"/:.'  » 
diera  lugar  á  ibis  malea. 

rTol  orneo. 
Detente,  señor,  detente,'      ■•'     > 
este  pufial  rio  me  saques,      "    *■*' 
porque  al  Ver  ha  puerta  abierta*/ 
sus  espíritus  no  exbalen 
ei  alma:  ya  que  los  cielos      — 
enlámente  éu  esta  parte  "-         •>  > 
son  piadüsos  ,  pues  me  danv'  "*  l 
para  verte  /para  hablarte^  *'■* 
tiempo»  no  se  pierda  el  tiempo; 
mi  muerte  y  ta  tuya  sabe. '    f  ■•  - 
^_  *     Tetrarca, 

¿Tolomeo?    ;  M 

Tolomeo. 

Sí  Señor» 
Tetrarca.     °  ° 
Llevadle  de  aquí  y  llevadle 
á  curar.  •'•■"•, 


«87 
Taloneó.      \     f     '  •■» 

AqUtBOJJBOf 

que  cuando  el  rasgo  «s  tan  grande, 
menos,  importa  ini<  vida       -    ^ 
que  la  tuya ;  y  asi ,  antes     •    »*l 
que  aca^be  mi  vpoco  aliento-       ■•  * 
desdichas  que  son  ta«n -grandes  ¿ 
oye  las  tuyas:,  aeüor^  .         in.   / 
y  cuando  helado  cadáver         -  *. 
me  falte,  tiempo  al  decidas  y.  <\> 
al  saberlas:  no ,  te  falte.        .     >  i 
Oct&viano  en  tiehra  y  mar  f  o  7 
ondas  ocupajtdo  y  valles ,   '    -   1 
llegó  á  Egipto,  s a kió  Antonio  *j 
cpa  tu  socorro  £  buscarle  » 
de  Cleopatpa  aoompaftado      »    * » 
en  el  B.ucentot  o«>  na  ve    .       . 
que  labró  para,  él  Cleopatra  ■  •  ,     , 
de  marfiles  y  corajes.:     - 
A  lo*  principio*, fue  sutes tra    "... 
(¡fuente  pena.,  in Quisto  trance!} 
la   fortuna  ;   pero  .  ¡«cuándo  <      > 
estuvo-  firme  lun  ¿notante.!-    -* 
Enojáronse  Jas;  ondas  ,  •  f 

y  el  mar,  Nembrot  de» lo» ayite*, 
montes  paso; «obre  montes  V  :..  _» 
ciudades,  sobre  .ciudades*  •    <  •  1  •  (» 
La  armada  del  enemigo*,  .».•  i*i  u 
como  estaba  Jiacia*  la.  parte   •  >p 
del  puerto  ¿brigada  f  en  él        '» 
quiso,  el JCielo  que  se  ampare.   7 
Mas  la  üikéstra  dividida  t 
deshecha  y  sin  orden  sale 
á  \p  campana  ,del  mar*, 
donde  jnvpcáid*  mi  jaave  f        .->        ,  - 
¿9 


S88 


caballo  fué  ¿«¿bocado , 
que  no  hay  freno  que  le  pare* 
Atormentada  9  en  -efecto , 
desmantelado  el  velamen  9 
loa  arbolea  destroncado* , 
enmarañado*  1oa  .cablea  v    •  • 
y¿r.ayentiat  fia^hnente, 
arena  y  agn*  por  Jastre  , 
á  vifta  ya  de  laaaerras 
de  Jeruaalen  la  grande  , 
fue  mina.  tHa  an  •'  eacollo  -, 
y  aqntf  ama  tabla  á  éot  arrea       N 
repetido»  fué  deHtu  ,  " 

enseñado  £  Mtsr  piedades:'   '> 
¿  Quién  creerá'  que  .la  fortuna  f » 
en  an  hoenferp  qme  s*  Vale     ' 
de  la  piedad  « «n  fragmento  * 
pudiera  bacer  otro  lance  t 
Yo  lo  afirmo;  pues  yo  ri 
de  acero  an  cometa  errante  * 
contra  este  boma  no  bagel  f 
correr  de  ila  esfera  el  ayre. 
Este  v  pues  r  que  de  mi  vida 
tasando  está  lótf  instantes  9 
aolo  el  decir  me  ¡permite 
qne  fu  enemigo  fcriunfap  te 
queda  en  >  Egipto,  »y;  Antonio  * 
ó  rendid*  4 'avaert»  «yaca  $ 
qne  de  AristeVbule  ,  normano 
de  tn  esposa  ,  me*  a* «abe? 
y  ea  ifin.,.  que  tew  cepera  neas 
como  el  bamoiaeedéabaoea» 
Y  ya  qne  de  a*,  desdicha  y 
siendo  el  ¿«do  ,!  tío  *ey  parte* 
dale  tepatero  i  da*  «ría* , 


Aunque  las  jnmf  son  tales ^ 
que  ellas  se  harán  su  sepulcro  f 
pues  tiene  para  labrarle 
Sangre!  y  acero ,  y  podrán 
enternecer  un  diamante,, 
que  aun  Jo*  diamanto  Menudea 
al  acero  y  á  Ja  sangre. 

Teirpriea*    .:  -  . 
Ser  un  hombre  desdichado  < 
todos  han  dicha,  que  es  fácil  * 
y  yú  Jigo  que  es  difícij  f><  < 
porque  es  estudio  omuy  grande* 
aqueste  de  las  desdichas:, 
que  no  le  ha  alcanzado  nadkiv  .: 
Quitadme  es*  asombro ,  ese 
funesto  horror  de*  delante, 
llevadle  donde  le  curen;  - 
y  aqueste  puñal  guardadle  9 
que  importa  saber  que  debo    - 
hacer  de él  t  que  ya  él  me  hace 
tenerle  por  prodigioso. 
jAyKlipo!  hagan,  aUrder 
mis  suspiros  de  mis  penas  * 
mis  lagrimaste  mis  males. 

ESCENA  IV. 

Mt  Téiratcay  Filipg. 

Filipó. 
Señor  v  los  grandes  sucesos  ' 

para  los.  sugetos  grande* 
se  hicieron  *  porque  el  valor 
es  <&  la  «fortuna  examen. 
Ensancha  el  pecho »  que  en  é,l 
cabrán  iodos,  tus  pqseijéa,      }  i 


m 


tk 


sin  que  á  Uitoi  m  i  los  o)o« 

se. asomen.  ^     i  ;.   ■>  !• 

.. .   Txirarca,  •    »••    '"H 
¡  Ay!  que¡nq  tabes »       :   v».  * 
Filipo„caabes  mipena  ,<->  «i.» » 
.pues  quieres- ¿avia:  esa  cárcel.  <> 

..    -JFüipo.    <„  ...  -.:  t;. 

Sí  sé*,  pues  *e%que  has  perdido 

tal  república  de  naVesv  d  »i  ;*  ;•'  •  < 

..i  ...-  '{Petrarca,  i  r  S    »*••»* 

No  es  su,  pérdida  mi  penal;     •   / 

'  ,   -i  •   «■   iiFüipo.      >.>  •».-»•      » 

Serálo  el  núrar  triunfante      .  ¿ 

á  tu  enemiga*;    »  .5  «-u  r>;» 

.  o  Tetrarca.  »   «ir   ¡  •  <■•„* 

,•   i;  !  '    •■     No  Ungo •.-•  - 

miedo  á  las.  Adversidades.  '       'í 

'         f    :•.•;!»•      Fiiipo.  m     :     .;:  .    / 

De  AristÓbulo  tu  hermano v  '«M» 

ni  de  Marco  Antonio  sabes;  >   i 

.«  Tetrarca.  .  «,    '  •  .1  t 

Cuando>»sepá»qiie  mu  rieron  t  .  -'  - 1 

tendeé,  envjdia.á  bien  tan  grande. 

...-.  ...í    Jff/sjAr.  ..■!■•:.,  \?;. 
Los  prodigios  del  puñal 
preñeces  son  admirables,' 

,  Tetrarca. 
Al  magnánimo  varón 
no  hay  prodigio  qtie  le  espante. 
¿o.--  vi-  i*il¡po*\  :ú'.  .  i.  •*»•.-. 
Pues  sh  prodigio*,,  fortunas ¿^ 
pérdifta»  y  advecsidadas'iüjii'  : ; 
210  te  rinden. «i qué  te'<rinde4»  ■<-, 
.     .:  ■  ■>.   ^ 'Petrarca.*    ;il.«  <«.r;4'í 

|Ay!  Füipo^no  te  can*es:<  *¿¿j 


29í 
en  adiyfAiritfV  pn«?fer  7  •*••      t 
que  mientras  no  adivinaras  • !    •> 
el  amor  de  Marieta,     ..  *a)  ic'  $ 
todo  es  discurrir  en  balde. 
Todos  mis  i  ¡fren  tos  s*m 
entrar  con  ella  triunfante 

^-  •  ♦   \   t  »  -,     *  <¡     yi  4-,  |  /    ; 

en  rvomá ,  porque  nó  tenga 
que  envviniia.r.  mMapeAtrá*  nadie. 
¿Porqué  ha  ele  jo^n^elleza  , 
que  no  hajr  otr,a.  ajie^pgnale/,.-* 
(error  del  mérito)  m:tanftbr£«<<r> 
que  hay  otro^qn^^yfyirivtfaie,?,;^ 
Piérdase  Ja  armaba  ^anae£a,:  i   .^ 
el  César ,  An^onip  ^Ue, .,.  ,b 

Aristqbulq,  .Qcjayjan^^  f . .  _,| 
de  un  ppjQ.á.otro,  pojo,  m^nde,.  [ 
con  trági^;  nirevenjfá^?^  „,  •>  .:, 
hoy  losólo*  m  §PPM!Wi.. c  3 
v^!y^,?VRrodig¡o#o,.ac^  ,.  ,d 
á  mi  poder,  que  £  .postrarme  .^f 
nada  ba^sta ,  nada^m porta  ,,  . ,  j[ 
siempre  con  ^ua^aeqityanttef,,^ 
sino  soiaiqenjte  akyer, 


¿£  l 


h 


que  yo  no  he  ?i4p(>^ta,nte.(, 
á  hacer  Reyna  á  Mariene 
del  mundo  f  f  eh*eiWf  arte 
dirás,  y diránlo  todos,   .. 
que  es  locura  :  no  te  espantes , 
que  cuando  áth&r  no  es  locura , 
no  es  amor  •  y  el  mlb'eSÍ  ta A  grande, 
que.  remo  (advierte  FiHpoV     *  "u 
que  pasando  los  WmbraleV    »'-W 
dé  la  vid**,  y  que  llegando1 -'^'"i 
de  la  muerte  á  esotra aparté  p¿-sl 
ha  de  qWdar  en  el  mun^o    '      ^ 


J 


393 

por  un  proAtpo  admírttWr    *  "" 

de  las  fortunas  óVainor^ 

i  Jas  f dtu  ras,  edades;  ' ' 

ESCENA  V,   i 

_  OA^OK  DB  PALACIO,    (        „  . 

Octaviaría.         ' 
Felices  lasante' mía,  '    -% 

pues  de  Ejgiptró  Víctwios'ó';  ,%  ; ; 
dna^o'^kMó^W^o>^(aí•,'',  í!:i;  -"* 
de  Rotaa ,'  dutfiofañroéo  '"  "iri     ' 
de  los  tórráláisaél  4W.  O"   '.'  .' 
Gante  ,  puéfcV  Victoria  i ikt* 
la  fama ,  y  ea  festtañmio:     '" 
de  qae  á  todas 'sV  tfielatíta  , .  v 
sean  tríaofo  dfe  ntf  ptotftV       ,l 
koyQe^á<ra^MarctíiAntOiÍio,f  . 
Presos  $  Tocios  ¿roca  ira     -: 
llevar  mi  hértfic?  ventura l"¿     ' 
porque ,  lidiador'  BfearVcj?  %l'r  ' 
sean  fieras  óVínV  carro 
el  poder  j  Ubermostira.'  r        r 

Octwiano  f  p^^ro^risf^a  f  \injQapitan, 

f  ^luíAfinqae  batano»-  discurrido^  .  „ 
de  Cleopatga  ;el  gran;  palacio)  r 
Hallarla ,  qq  liamos  podido  fí -í: 
ni*  Antonio^,  porque  su  espacio 
laberin^(j)o;i>vo.|ia  sido. 
Solamente  h^mps  .hallado      f  .  ■ 


39* 
á  Aristóbulo ,  ttih*ñ& 
del  que  hoy  en  Jerusalen 
Tetra  rea  asiste  ,  de  quien 
nos  informó  este  criado. 
Tu  contrario  fué  ;  y  as/ ,  •> 

porque  averigoVs  aquí  -  ■> 

sus  designios  ,  Je,  traemos 
de  la  parte  en  que  Je  habernos  I 

hallada :  llega.  : 

Potiddrv. 

\  A}  ét  tai !     ap.  á  Aristóbulo. 
I  Cuál  diablo  nyrm>  tió ,  cuáV 
Cielos  ,  en  engaño!  igual  ? 
¿No  .son  notables  er&ore* , 
qne  otros  viva»  de*  traidores  v 
y  yo  muera  de  leal  ?  *  i ; . 

Ariitákulo. 
Si  así  la  vida  jn*  das»,'       *tn*  d  Polidoró. 
no  temas*  seguro  *4tár¿  a/?. 

que  yo  á  tí  te  1»  ¿are*  r  r 

disimula.  .     .    r 

>  PélkUaróé  ; 

Tofo  haré   ..  - 
basta  qne  no  pueda  in*j». 

Grande  César  Octiaviano^     * 
cuyo  renombra  jasmortal      :       ••  * 
el  tiempo  asegueehufano ,  . 
en  láminas  de  metal  f 
qne  intente  borrar  en  vano; 
no  manches  ,  no »  rigoroso 
los  aplausos  qne  ñafien  ido 
cq'n  vaangre ,  4nfi^*s  aer  piadoso 
-Jifen£c4ar.  con  el  .vencida  9  - .     • 

ser  das  .vece*  victorioso.  - . 


i 


2H 


&hx>tkno> 
Aunque  pudiera  (  ¡  ó  Tal  i  ente      > 
A  ris  tóbalo  J  )  vengarme 
en  tu  vida  dignamente 
de  tí  y  tu  hermano  y  mostrarme 
quiero  piadoso*  y  demente. . .  u  ••  •' 
Alza  te  del  anelo  ,»  y  pues 
el  fin  de  misglorpa*  es  v 

entrar  en  Roma  triunfante:,    --t 
con  Marco  Aoiimlo  delante  , 

:y  con  Cleopatra  ^Aas  pies  ; 
dfme  donde  está  ariqué  nfr  |:  '^  ' 
be  sabido  de  ellos  yo ,  ••  -  .  ;  -  > 
desde , que  aqael  Bacent  oro  »  ■  »'•"  , 
Armada  ntoisti  de  ea»o>* 
de  la  batalla  táltó.  -.  r..  ,i ..»:  o  ;  / 
Poltdwo 

-  Xo  denlos  dos  te  dijera , 


í  ;?£  :^ 


,  ai  yo  de  Ipt-dos  supiera  *.  t>  Ȓ  vu 
pues  por  m  w-  df seamos  i  hallo  fo  "  p 
que  hiciera  mas  en  callallótJ!:  i!» 
yo,  que  en  dgwuNtftió.  hiciera; 
mas  desde < 4 ue /llegué  aquí  9 
nunca  map^ú  l¿s>  dps  vi.-'  \>  filiad 

Qbtáviano* 
Eso  no  eragradtoeV  < >«''  «ín-vu) 
mi  piedad  jyoilsé  de  5 saben  ^-'"^ 
de  ellos  ,  ^ihfeideiaejc  .«si»*  "  » :  1 ' 

,    ola.  tisi**ilf  '»!'  :.«  ííi:í»LÍ  ir» 

.  .ir.v  aCfl/iítfai»  ••!*-  »!*i¿  r>i?p 

>  Sefiqri  r  '■ «  *    •'  "'   ^  " f 

.  n  i Octmeiaqo,     .-uxo^l 

<  ?.,   .  ]  -i  •*  ..  Ai infante  »'{*')  * 

(i )    Entiende  Qctwumú  fre  £vHdw+  es^tirislóbulo. 


Arislobalo  llevad.  <h  fHfr.i  A  •»..-• 
á  an>  tor«erryni  uttiiiistante .  1 
gocé  de,  Ja  claridad  ,m.  ■.,..-.  .■>■,'. 
del  sol  Ha  noche  le  espante;  ..  •'-, 
por  eterna...     -  .».;.  ;j.. 

Polidaro*  ,»••  .        *  •*" 
t     Aq«í.Uegó\,  í  <p. 
tenor ,  de  tu  engaño  el  ña*<.  - 

f '    Aristóbiüa*  ;       • 
Sufre.   ,   i :  •: :»  2  ,*   •  k-  " 

.    Polidoro.r,  .7  :.£ ¡  ;•..-', 
¿Torre  oseara  yof»  ¿  w 
•  ,    :    *  Qctaviaiio*  ,    .  .1 ,  . .  .-.*& 
Llevadle. .:  ..;  .r  ...  ,0  t     . 

.  .   .    ♦PoJ*<faro<     :.»/.  ...  .   * 
f  Ele  dtmmuOy    ..v.        í; 
ain  dada  n*eJ  AriatoWloV»  •• 
a^ue  yo...    ,  ,  .   .  •,  *.L  „:/u./  .-.;  . 
,.;..,.  Capitán*;)  ,\i:<>r  ti.  i 

.JWftfarifc.iT»  / íl .i -5^  >. 

6,         ^aéfeft  cálkr? 
Tive  Baco  ^,qn«  Jbe/deÜkablard  < .. 
¿yo  Principe-?  Mfíy  cira4*.¿>  r'  « 
enganadp »  \jr  4nn  jr ;  «aLpaán?  1. '  -.  u  j 

0Oy.        ;i¿'.  «í  suj»  ñí'U".i  /   *.•  •  i 

Odafilanp.  /  ,  ¿«¡ »••  . . 
«fita  tenéis  o^ue  espora*  > ;  f  • 
y  ese  criado,»  primero»;  i<>  u   <  .»«.: 
padezca  unr  t  o  emento /£ena:^  1: . 
ó  muera dn  ét  de  leo U  ' >«c*Uv,  i- 

.    Polidor.üul  ¿bliViv  -    •• 
l  Q«6  *>a>fcaraíento  ?  mal¿pofi>mál , 
.torre  pi<^c»;  noche  fpiNMWiJ*  .  ;    * 
jarnos;  k'lmi»mH>ymvi)vj  i&  i  .* 


m 


j 


4» 


soy  Aristoso,  no  ! '  • 
Prtáeipoarrado,  seguí* 
decía :  sin  dada  que  algún 
ángel  ri»  4*"tobufó.     >: 

ArUMulo. 

Enfrena  un  poco  ei  Vigor  , 
sabrás  <k  lar  4o*  ,■  stuW  , 
y  de  mi  vos  «dvferttdo,  ''  <  •  • 
oirás  qoe  loa  dos  baír  sido 
funestos  triunfos  de  amor. 
Apenas  rota  sa  armada 
vio  Antonio  i  cuando  li  alada 
nave  ,  haciéndose  á  la  vela  v 
nada ,  pensando  que  vuela  ,» 
vuela  (  pensando  que  nada  { 
pues  con  ligereza  su  día  y 
pea  sin  cscauaa  nadaba*; 
ave  volaba  sin  pluma  9    ••  i 

tan  veloz ,  que  no  le-  ajaba 
un  solo  riso  4  su  espuma. 
A  Ménfit  en  frn  iltgd, 
doiííto  febii&rae  penad 
de  la pfrdftJalyvtioMiBrt  °RÍ,,1  >vi 
á  la  estopan*  del  man ¿"  '  ''•  "  ' 
que  tautas  desdlpba»  yi^> -^       * 
snas  viendo  que  le  seguían      -Y- 
á  Ménfis,  y  .que  i  traías 
de  ;tm  parte  á  >  fortuna^ 
pues  al  orbe  «de-la  Jtwut»  ;  *->  • 
con  ajas;  suyo*  ftisbias  jíu*  r 
lamentando  mal  y  tarda  *       •■■ 
la  pérdida  do  si*,  genfte  , 
.  sin.  que;  áf  ser  dea  pojo  aguarde  y 
•  del  estrom»  da  «aliante*  i 
dio  al  estreno  da  «obatida ; 


29T 
jraes  ciego  y  desetjperádb  9  ' 

a)  Panteón  •  colocado'  » 

á  Egipcios;  Reyes  ,  entró 
y  una  sepaltuife  afcrtf, 
donde  Vivo  y  eniorrodo, 
dijo,  sacando  el'aceró : 
nadie  ha  de  triunfar  primer*/     ' 
de  mf  que  yo  mimo»  aaf 
triunfo  yo  mismoi  de  ml9    • 
pues  yo  mimo1  mota»  y  mneroV  « 
Cleopatra  que  le  segttia  9 
viendo  que  ya  agonizaba  ,  •        '*    ' 
bañado  ,en  au  sangre  frki  f 
cuyo  aliento  ponuacteb* 
mas<,  cuarto  menos  decfti  »•  •' 
muera  y  dijo  t  yo  tamfcieii  r 
pues»  por  piedad  é  pov  nr»  y 
no  cumple  el  amor  con  quien 
Wfga  á  queter  'bnte ,  y  n*ii>á 
muerto  á  lo  quiso  biem>i 
y  asiendo  un  áspid  mor  tai    •  * 
de  Jas  flores  de  un  jarodin  f  ' 

dijo :  si  otro  de  mefál 
dio  á  Antonio  trágió»  ñiáf 
tú  serás  vivopoñar ■'" 
de  mi  peebo,,  aonqtra  sospecho  9 
que  no  morirá*  á  deipeebo 
4e  nn  áspid ,  puetf*nr  rigor 
po  hay  áspid  cotoo  e*  «mor  , 
y  ha  4¡«s  que  estarle  *  mi  i  pecho* 
y  él  con  la.  sed  Venenos*  r' 
hidrópica  raen  tai  bebe,:     ....      , 
cebado  en  Cleopatra  hermosa  9 
cristal  qne  «aprimas*  la  nieve  > 
«angre  que.  vertió)  Ir  rosa*  - 


í 


2W/ 


k 


Yó  lo  vf  tbdOf  pór^Up  '  .    .-  r.'t;í 

esi  como  aquí  llego?  ,  .'•:«. 

el  palacio*  fiíamin-aadtf  ,  •  "  ^ 
á  Aristóbuib  buscando  ,,  •*  ¿<ui  7 
hasta  el  (SepolonOtone  entine*  ^t»n  o  N 
donde  rendido  *1  valor  j  ?^c  *<>!:?> 
y  ella  postrada?  al- dalofr  .  «I  «11..  .1 
yacen  f  porq«ande"este  «serte: 
aun  no. divida* knaaverber  i.'í«u»ii* 
á  des -que  ju^fcaielvamo*.  ov  vurf 

,  ¿jOcAfloáftllOV  ..'IJí:.;.,  .\r) 

Aquí  d\d  flami  ¿spcranaa ¿ 


.r-  ít 


aquí  murid  m\  alabanza  •,  oí. f. f,  u(í 
pues  por  asombrosa»  «fWrte*  *n 
no  ba;de  pasar,, mi.  ven-ganza,^..^ 
los  umbrales  1  de  la-  muertes  7  ju  mr 
Ya  trionáavoáje  «lio»'  nq  espeno^i 
que* yo  solamente:  quiero ] »r ¡n  "  ' 
saber* ,  ¿qué  iaAérito  <ba  obtigadci 
al  Tetraroa  t»  «uñado   «  *,:»si,».i  . 
para  4«e  sañudo,  y  fiero  ¡  <ím'.c  7 
te  envjatfebco^tara  mí?     ..•'  *U  -U 
tffalmioro.-  •    >  i--.  :oj;r> 
Si  tu  esté*  dtcieiido  ¿qat,/    ¿  nsb 
que  es  cuñada*  \|np<es' error*  ¿  ñ* 
XU^e^atarcnttrqne«s,  señar;^  <♦!> 
su  inte»tb?'¡IHies:d¿gb  astf¿  n  *"<;? 
que  lo^oueiátnstoflq  há  obligado V 
es  el  mesme  &f  aata>  stapfe  y  if  1  u 
poe^  soloiime.'liJÜTná  aliviado  ci¡  v 
á  que  ti)  no <das<la tañerte t>;  ,;>  " 
propia  aJbaja-^eJml.cañadoy  1!"  ? 
,  .  -«■».••  wCqarfnm*-'..;  ;■'•  '^«vl-o 
Si  e?amiiiac>s«Tmten«¡Ottj    \*  1  •  • » 
quieres  ^  yode  lia  diré  ,.  ;*  .-'.  5 


este  cofre  les  >q»iíé:  :: 
joyas,  y  papeleas. soa  >     \» 

las'a«e>hayen<¿).    •    -^  ?  —      ; 
Octaoiakú. 

Maestra  á  ver/* 
Cifra  es  deluiajioripoder  N 

su  inestimable  riqueza : 
mas  la  pintada  bcUesvr»  ; 
de  una  estrangerá>muger 
-  'es  la  tnas:  noble , ^y  mejor 
joya  ,  y  la  de  man  Valor. 
No  vi  mas  viva  hermosura;     ' 
que  es  alma.de  la , ¡Sutura. 

Aristóbido.A 
Atento  el  Emjtenador  ap. 

mirabel»  reirá to-  fiíA  : 
?n*as  ¡  ay  fortun3>¿croeH  ,« 

ver  los  pápele»  paisfrs'j  ^       -  ^ 
f  mal  haya  el  hombre  que  fia 
sus  secretos  á  uo  papel!  (1) 

,  Octavian?.  .  fX 

Lee.     £ti  ésto  facción   está  leí  fin  de  'mis  deseos > 
pues  no  espero  para  declárafimM  Emperador  de  Romatt 
sino  que  Octaviano  i  remtídoió  presó*...      x 
¿  <^éj  ten  go.qva, saber  <rtitt*?i     , 

y  pues  *aspeeho«&> estás, 

y  aun  ncon  vencido  oefunigo ,    •' 
mi#ntras  piensen  pa:  castigó  ,  • 

en  una,  torre  estaéí*, 

<  i».  t>     ..    Poftdoro.  >  '-' 

No  son-  buenos*  pensamiento*  »i 

■  ,       'f  ít    Un  l    .    f    1      i*'t    Il1r  n  , 

(  1  )     Saca  Octavian**  dei  ¡tofrecüfa  una  carta  y 
la  Iré.  •  .  "  • ' »   »  L*J* 


j 


300 


andar  s^nsaodo  tormento*  r  -■, 
¿  do  será  mocho  mejor  ,•< 
que  do  castigos,,  señor  f  ,      »  , 
pensar  gustos  *  yfCoatcaUtt*?   .: 

.<Oe¿apia*w. 
Llevadle?  de  aquí. 

...   Escachar 
debes ,  que*. ~..  m 

;    íOctaoiana. 

No  fea  y  que  aguardar* 
Polidore. 
Si  bay.       .      . 

Octaviarte» 
Di, 

Pulidora* 

.  SoJamewte  digo^    1 
que  no  hay. que  esperar  castiga, 
pues  no  me  dejas- hablar.  .:  . 

.ESCENA  VIt  ,     . 

Octaviarlo  ¿  Arislóbulo  y  un  Capiiap* 

Octainono,    *  -a 

Tú  partiría  al  momento  v«    : 

con  gente  y*  armas  f  y  atento.  ., 
á  mi  cetárea  obediencia  v    -•.  •• 
t raeráa  -  pmao  á '  m  i  presencia 
ai  TptrarcjLfque  es  mi  intento^ 
que  como  &  Cesar  me  dé  . 

del  tiempo  que  ha  gobernado 
residenciar:  y  tá,  porque        o"" 
^-aa~electo  f  «rea  criado  y 
:.en  quien  tal  lealtad  se  ve,  - 
darte  libertad  espero ; 


301 
pero  par  tlwc*Ae  quiero  9  a 
que:  y»;  Uberftl  rae  de* 
e>  decirme  .cayo  es,. . 
eatefatraAo» 
.  .1.  .  y     ¿ristóbuto-    .,  •  . 

:  ¿Aquí  muera  '  '       sp.  ¿ 
de  conftmon ;  si  -fe  diga 
qptates  ¿iéiamaria  leobbgo: 
no  deci  faeto  «e  s  mejor « 
¿afile  imposible  su  amar 
al  principio ;  así  consigo 
su  quietad.  Esa  pi atura  9 
sombra  ya  de  una  escultura , 
ceniza  de  ton  rayo  ardiente, 
es  memoria  solamente 
de  una  difunta  hermosura. 

Octaviano. 
4  Muerta  es  esta  mugar  ? 

Aristébu&o. 

Sí. 

Octavjíano. 
¿  Para  qué  ,  amor  ¡  ay  de  mí  1         ap. 
sin  «espera  Asas  la  veo? 

Ari$tót*do. 
Bien  <se  logró  <nfi  deseo. 

Ociarían*.  -*  * 
Libre  estás*,  vete  de  aquí. 

ESCENA  VliL 

Ucicwtano. 

La  muerte,  y  «1  ¿moruna  lid /tiara 
Tuvieron,  sobqecoál  en  mas/finito, 
Viendo  que  á  sus  /harpones  de  -*■»  suerte  i 

Vida  ni.bbej*ad>jytf  segura»  I 


402 

Una  heTwmwr**mep  &trim*f>j  para 
Perficionó ,  donde* su  témate  advierte  ; 
Pero  borrando  tanto  sol'  la*>  muerte  f » 
Triunfó  así  del  amor  y  la  «hetaasara. 

Viéndose  amor1  en  tomes  escedido  / 
La  deidad  de?  ti iwr  lamja'a  apercibe , 
A  qoien  borrar  Ja  muerte  ño  ha. podido. 

Luego  bien  el 'laurel,  amor  recibe  ,•> 
Paes  de  quien  vive  y  muerto  dueño,  ba  sido, 
Y  la  muerte  lo  es  solo  de  quien  vWe, 

.' ESCENA    IX. 

D^coaacioh  d*S*¿va.,  ,   , 

Libia. 

Por  las  faldas  lisonjeras 
de  estos  tkvados  riscos^  . 
que  son  del.  Puerto  \de  Jafa  , 
enanforados  Narcisos  9 
á  divertir  mis  pesares 
\.     melancólica  be  salido,  ¿    ¡.  • 
por  no  escachar  Iqs  agtnos,  . 
pudiendo  llorar  1qs$diíos. 
Sola  estoy ,  ¿alga,  del  «pocho  i, 
en  acentos  repetido** 
mi  dolar.  ;.Ay  Talóme*.!  . 
en  tanto  que  lloro  y  gimo 
desdichas! ¿üjras ,  admite 
este  llanto  que  te  en^vio : 
bastaba  quererte  bien  , 
*paM  que  ¡rigor  iihpio! -ti  ' 

te  snrrdieat  mal  todo-y  :- 
•  *'  tropesaanVen  tus ipeNgrosv 
cuando  «wtorio*o«i  *£  Amate ! 


te  esperaban)  pteho  riiib/  «        » 
dulce  fin  de  tus  amores,  ' 

muerto  has  llegado  y  vencido'!  ¿ 

\     ,fiSCEJiA,X. 

•Y 

Libia  f  Marlene  y  Sis  ene*    ..v 

,  '  „  Sirentt. .»».«.  ,;  ,| 
Gasta  Xenuí  de  esto*,  •montas:*  1 
ai  á  divertí?  lia*  ve  irtdo.  .  :t*> 
eou  la  música  y  las  florea-  '  •  i 
los  ojos  y  los  oi(fc>s  ,  f  ?vf 
la  alendan,  vuelve  y  laxista  '  '»l 
á  ese  b|  tato  cristalino,  •  .  ••  f 
%plW9  ion  flores,  sos  «elagcs,  .  •* 
y  mú¿icas»s  braaiwlosv  .  { 

Marienc. 
Naja  puode  para  roí    .' ...  .  f 

aerviir,,SiEt»e  ,  de  alivio,  r      ¿;  \ 


303¿ 


.; 


.    ESCENA--»!.-.»' 

Dichas,  Filipo y  el  TcharcaL 

Filip*.  .       \ 

Este  es,  «señor  ,  el  puñaJ  9,,\      ,  <1 
que  yauna  ve t  despedido 
de  tu  mano  9  vuelve  á  «Ha. .  ..' 

*;•,/  Tetrarcm: 
-Ya  con  asombro  le  raí' «o     ,  , 
como  á  fatal. instrumento  : 
mas  di,  ¿cómo  sejaa  seaUdo', 
Tolomeo  ? 

Filipo. 
No  es  la  herida 
señor |  de  tanto  peligro. 


204 


como  la  falta  de  sangré. 

Tetrarca. 
¿  ftfatieue  ? 

*  Mitriene. 

.    ¿Esposo  «lio  f 

Tcirarca* 
Girasol  de  tu  hermosura  t 
la  luz  de  tus  rayos  sigo  , 
bien  como  la. flor  del  sol  f  ' 

cayos  zelagm  y  visos  f 
iluminados  á  rayos  f 
tornasolados  á  giros  9 
le  va>  siguiendo  ,  porque 
imán  del  fuego  atractivo* 
le  hallan  su  vista  #  d  su  ausencia]  f 
ya  luciente  ,  y  ya  marchito.        ' 

Maricne. 
Ta  que  del  forgo  le  vales, 
aea  amoc,  ó. sea  artificio,    •  • 
yo  también  ;  pues  como  aquell* 
ave  9  que.tovQ  por  nido, 
y  por  sepulcro  la  llama  f 
enamorando  el  peligró, 
bagel  de  parpara  y  oro,      l 
bate  los  Vemqs  de.  vidrio  ;         i-  '- 
a*í  yo,  4ue  4  tantos  rayoa     « 
%  ida  ,  .muriendo  f  recibo*. i  ;        '> 
basta  que  abrasada  muera) 
Iiie  pareces  que  no  vivo.  r  .'• 

■•    Tetrarea*. 
Dejadnos;  solof.  .    .     , 


30* 

ESCENA  XII.  N     * 

Tetrarco  y  Maricn** 

Tttrarca. 

Ya  f  pues  B 
que  serla  mudos  testigos  ""*-" 

de  mis  lágrimas  y  voces  •-"• 

estos  mares  y  es  los  riscos,  i 

salgan  ,  Mar  ¡ene  herniosa  ,        % 
afectos  del  pecho  mió 
en  lágrimas  á  las  ondas , 
y  á  las  peñas  en  suspiro». 
Este  sangriento  puñal, 
sacre  de  acero  bruñido , 
(que>  no  con  poca  raaon  l 

sacre  de  acero  le  digo , 
pues  cuando  desen tasado 
de  mi  mano  le  despido, 
ton  la  presa  vuelve  á  ella , 
en  sangre  y  horror  teñido  ) 
es  aquel  que  la  dudosa 
ciencia  de  un  astro  previno 
para  homicida  de  quien 
mas  adoro  y  mas  estimo. 
T  aunque  es  verdad  que  constante 
á  peligrosos  juicios  . 

iy>  doy  crédito ,  y  desprecio 
los  contingentes  delirios 
del  hado  y  de  la  fortuna  ,' 
dioses  ,  que  coloca  el  vicio : 
no  sé  qué  nuevo  temor 
en  mi  -pechó  ha  introducida 
verle* Volver  i  nri  man**, 
que  jk  le  temo ,  f  fe  «dmir* :" 


$*; 


y  entre  el  miedo,  y  el  valor, 
va  cobaid^#a¿*trevJcfc>f 
sitiado  dentro  de  roí , 
jdc  quiero  d*r  á  'partido  ;~ 
porque  aunqw^bien1  yo  no  creo 
Jos  acasos,  prevenidos  ,     ; 
no  los  d.udo  ,  que  lio  ignoro,      i4 
que  ese  estrellado  zafiro  »   .  » 

república  de  luceros  ,   -  ,     , 

■vulgo ,de  astros  y  de  signos, ,  •  . 
á  quien  le  sa,be  leer  i 

es  .encuadernado  libro  ,  •  •  .,  > 
donde  están  iftui'sA  ros  alicato»  , 
asentados  por  registra.  I 

Y  así ,  nif  dudando  bje*., 
ni  bien  cjey*u4of  in&agiuo  ,        , 
que  debe  el  .varón  perfecto  . 
i  los  suqcgps  provistos    .     , 
/  darlos  al, crédito  en  una 
parte,  y  en  otra  al  olvido, 
aquí'para;  no. esperarlos.,        , 
y  allí  para- ,pr.ev*uir loa*  ,  » 

pues  wjÍqv  de  las  feslrellaa,  •  , 
por  le>esfde  .su  alvedrío,  ' 
previniéndpsct  a.  ios  riesgos  ,  .  f 
•  puede  l^a^iir  virtud  del  vicio. {  > 
Yo  ,  pues  ,  enUe  dos  .afecto*  ¡¡ 
vacilóle» y  discursivo,   .  ^ 

ni  creyendo  ,  ;u'\  du^andP  ,-  ■  .«.i 
A  puñalj&.Aftfejpjfls  rindo....  •  . 
Tú  eres,  bel^sijn*  h^bsea ,  ,.  0 
la  luz  berilios*  que,4»SO»,r  /«  t 
la  be^^gofisola.^ijo^  í.  ,  .„ 
la  iiuagep..que  aoM  %4wW-íl  •  •»  *■ 
No.  as, :tfa£jj)l*  que^flp  quiera  r  ^ 
« 


3<Pí 

«i  inrotfrfal  aT  (SltípÜ'íW;'"  í 
otra  cosa'  mas  c[üerá  i\ ;"  '  '  •'*  '• 
-tanto 'qüd'iriil  v*ec^0á*i£oV  5  ;  ;j 
que  el  m  a  3?  oí ''monstruo  del  ufando  , 
que  te  amenafcá'á  prodigios,     ' 
es  mi  albor,  pues  por 'quiTrérte* 
á  ta  11  íá*s' cosas*  aspiro  ,' >%'         " 
que  temo  que  él  bá  die  ser"  V 
ruma  tuya  y  blasón  mío. 
Pues'si  lo  que  yo  mas'qüi'eró  / 
«ros  tu" ,  y  el  cíeJó' misino        '  '/ 
no  puede'  hacer  que  no' seaá* 
$\u  báVrar  lo  quc%yaf  frizó, 
tú  eres*á  quien  amenaza '  ",M 
ese  hermoso  basilisco  ,      ' 
que  en  tus  pies*  se 'dteimtila6'"  ' 
entre  (Jos  candidos' lirióái  "' 
Yo  q\Whacer"¡mpoiitbfe  Ij    " 
tu  muer  té ',  cuando  á  t  re  viaV 
arroja  al  mar  él  puñaf;  c 

pero*nabíendt>  una;ve¿  visto"   f 
que  aun  en  él  no  est'á'scguró  , 
pues  yfo'r  casos  esquísítos 
podrá  Megar  donde  estés',  ** 
fiiempre  ignorando 'el' peligro' ;' 
para  mas  seguridad'    ,:' 
tuya  ,  cuerdo  be  prefinido 
que  tú  ,'  arbitro  de  tu  vida,' 
traigas  'tu  unirte' contigo  ; 
que  mayor  felicidad  :  '     - 

nadie*  en  el  mundo  ha  tenido, 
qué'scr,  á    pesar  del  hado,  ^ 

el  juez  de  su  vida  él  mismo. 
La  parca,  que  nuestras  vidas 
tfene  pendientes  de*  un j hilo,     > 


i 


108 


para  qpe,  t\  tqyq  *o  corte 
pone  en  tu.  ma.no  el  cuchi lUfo 
En  tu  mano  está  la  suerte, 
vive  tú  sola  á  tu  arbitrio  f 
pues  si  acercas  el  aliento 
podrás  em,^otarle  el  filo. ,    ,     .  . 
Si  es  verdad ,  ó  ¿i  es  mentira 
el  Hado  i  no  lo  averiguo, 
mas  prevengo  los  dos  males  9 
jtaes  prudente  y  advertido  ,    , 
tí  es  mentira  la  sospecha  ,. 
de  que  la  temas  te  alivios 
al  es  verdad  ,  con  1a  razón 
á  hacerla  mentira  aspiro. 
Luego  mentira  ó  verdad»  . 
para4  todo  prevenido,  t    . 

yo  no  puedo  darte  mas    •   .  . 
qne  tn  vida :  esta  te  rindóV   v  * 
Es t enacero  y  este  amor  t 

son  boy  tas  dos  enemigos  •    , 
pnes  mientras  yo  te  corono 
de  rail  laureles  invictos  , 
triunfa  tú  de  ese,  y  al  fin 
dueño  tú  de  t,u  albedrio  » 
guárdate  tu  vida  tú, 
huye  tú  de  tu  peligro, 
hazte  tú  tu  dnracion  , 
líbrate  tú  tus  designios  t 
cuéntate  tú  tus  alientos  , 
y  vive  al  fin  tantos  siglos ,     , 
que  este  amor  y  este  puñal 
triunfen  de,  muerte  y  olvido* 

\  Ufariens 

Oye  ,  señor  ,  oye  ,  espera  ; 
quef  aunque  abadesco  y  es  tim#  \ 


309 
el  do»  tj w>  i  mil  planta*  pones  9 
ni  Je,  acepto  ni  le  admito, 
que  di*  parpara  di  anchado 
y  entre  florea  escondida  # 
tanto  roe  estremezco  #  tanto 
en  verle  me  aterooi  izo  » 
que  muda  y  helada  creo, 
¿erpe  el  labio ,  el  pecho  frió, 
que  so  v  de  aquestos  jardines 
estatua  de  mármol  vivo. 
Mas  rompiendo  a  mi  silencio 
las  prisiones  y  los  grjHos 
con  que  en  cárceles  de  yelo 
el  tenior  los  ha  tenido» 
qui  ro  declararme  9  y  quiero 
aifcüirte ,  qoe  no  ha  sfdo 
cuerda  determinación  ff 
¿¿•inen  de  tu  amor  indicio 9 
la  que  contigo  has  tomado 
J  ejecutado  conmigo. 
Dejo  á  nna  parte ,  si  es  bien 
el  darse  por  entendido 
boy  mi  amor,  de  qne  yo  se* 
del  tvyo*  sujeto  digno  f 
y  creyéndote  cortes  f  >    - 

pues  por  amante  y  marido 
me  eslá  tan  bien  el  creerlo  v 
en  rot  argumento  prosigo  ^ 
«san  tocar  si  es  bien  ó  mal, 
«tampoco  haberlo  creído  < •»  >  • 
pnés  por  verdad  6  mentira  , 
ya?  tá  en  esta  parte  has  dicho 
que  el  prevenir!.»  es  Cordura  9 
esperarlo  desatino  9 
XproVnkiicia<4taorctY*¿    ... 


i 


<9tt 


tHOrMf)erarlflr  y  ffrevenírlo  ^  *f»  T* 
y  así,  esto  aparte  dejando  f»l  tic 
vuelvo  á  ha  i  argumento-j  dtgo¿ 
Si  ese  sangriento  puñal  >.  ■  r 
es  eLque  cruel  y  esquivo  <  *  .  ■> 
el  hado  e*qui>  a  y  cruel  •  r  • » 
contra  jui  pecho  previno,  '^ 
¿QuieV  te  persuadió  ,  Tetrarc»$ 
quí^n,  te  informó  ,  quién  te  dijo  v 
que  era.  la  seguridad  '♦ 

d«  pii  vida  traer  conmigo  "* 

la  ejecución  de  mi  muerte?  [  >  * 
¿y  qué  podrán,  ser  aungost,  ,...; 
jii  hacer  bue.ua  compañía  •  •>;  ¡> 
la  vyfc  y  el  homicidio?  »  i  u\ 

Si  cste^  «i  suerte  aroenaia  '»  .  ■ 
con  asombros  ,¿  es  arbitrio  » ■ .  •  ¿ 
para, excusar  que. te  encuentren»* 
h ace r ,  q,ue  .a  n  don  u  n  »  ca  m  i  no  1  '  ■  \ 
los  dos,  siguiéndola  Siempre,  * 
el  a6á$4  y  el.  peligro  ?•  •  j  -  '  *l 
¿Fuera  buena  prevención  ;,  >»  ,\ 
en  ti. humano  sentido  4  1  ,  *»f 
para  estorbar  qne.se; a braar  '  iS 
este  supremo  edificio,  .  •  -.»•»»•>  «r 
acora  pallarlo  del  fuego?  <?  '"'*  : 
¿  Fue^aí  acierto  conocido  i.'  -  ♦  •..  » 
para  e,s£jn;s4*,qu-9«áiit' espejó <■<  r* 
no  se  qUjnbCe  ,  junto. á  él  »i*np 
poner  pjedviaa.  eu  que  ditfueqiArot? 
Pues,  piensa  que  esT-esto  intsroojq 
lo  qtfe  intentas  4  pues  iiutemla*  .» 
qu(>  wuflpa  estén  divididos  ••  "*> 
este  puñal  y  e^te  pecho»  •"  ,*•» 
y  han  de  ^eritKiupL'e,  «oémjgofg 


va 

po*  mas  qtlé  ífrfttés'losvéftj  •*'» 
ee^u  ridad  y"  fWI  ig  ro  ;* '  ■        .  /      '* 
\ida  ,  m uerte  é  impiedad,  • 
aomhra  /  luí  ,  virindy  vicio,    » 
homicidio- y  homicida  , :  •      . 

torre,  fue^ó,  piedra  y  vidrio.  <  y 
Ginfteko  tjfre  la  ratón  * 

es tfuerie  f  cufando  advertido,  ' 

dices  que  Vio -*%  ocultarle 
remedio  ,  cuando- le  vimos 
volver,del  mnr'á  tas  manosf    ' 
y  rjtte  «era  gran'  martirio  ,  i 

tcotrneso ,  taiabwn  «star 
dudando  «iertp re  afligido 
un  pecho  ,  quien  será  ahora 
*du*tta"dp<lo¿(Jlatóo*  «ttios; 
pero  entro  apartarte  tanto  , 
que  ignore*  quiCi*" habrá  sido,    * 
y  acercarles  tanto  ,  que 
a>pa  que  viene  conmigo, 
hay  un  medio ,  que  es  ponerla 
con  tal  dueño  y  «n  tal  sitio», 
qoo  lo  sepa  y  no  la  tema.  :' 

Tú  lo  has  de  traer  ceñido ;         «í  - 
pnes  sí  del  juicio  me  acuerdo* ,  .: 
el  .mágico*  no  me  tMjo       .•  • 

que  tií  darías  la  muerte        ..     : 
á  lo  que  nías  has  querido 
'con  <M  ,  sincqfie  con  él  ?    r 

jnoriria  fy  pnes  colijo     • 
que  otro  podrá- aborrecer  , 

lo  que  tú  quieres  , -delito  -    • 

uerá,  echándole  de  tí  ,  • 
tr  armas*  é  tu  enemigo  j 
^wpo<)rá  veíár,á  manos   '-  ••' 

I    •      *       . 


*u 


de  quien  ufe  baya  aborrecida  < 

Y  as/9  señor,  yo  te  ruego  9 

y  así,  señor 9  Ir  suplico, 

que  la ,  alcaide  de  mi  vida  9 

traiga*  el  puñal  con  ligo. 

Con  ese  seguramente 

tabre  que  aquel  tiempo  vivó 

que,  Ui  |e  tiene» ;  que  escuche* 

el  argumentó  te  pido  s 

ó  tu  me  quieres,  ó  no  ;  ( 

ai  me  quieres  no  peligro  9 

pues  i  lo  que  iá  mas  quieres 

no  baa  de  dar  muerte  lá  miaño  i 

ai  no  me  quieres  #  so  soy 

a  quien  arrastra  el  destino 

de  tn  amor  f  y  al  mismo  instante 

de  la  amenázame  libro.  > 

Largo. olvidada  ó  querida» 

mi  seguridad  te  pido  9 

mis  temores  dtfsvanesco  9 

mis  quietudes  facilito» 

mis, deseos  asegu ro  f 

mis  contentos  solicito  9, 

mis  reaeJos  acobardo  r   . 

m%*  esperantes  animo,  . 

cuando,  tq  amor  y  mi  vida 

triunfen  de  muerte  y  olvide. 

Tanto  tu-  vida  deseo  * 

que  á  ser  tu  Alcaide  me  obligo  f 

|  ojalá  Cuara  verdad  » 

no  prevención  cele  estilo  r 

para  que  nunca  nutrieras  1       ,- 

y  asi  á  tus  voces  mowdo*» 

en  tu  nambje.,  dulce. e*po*a§  w 


tegmida  v«  me  lo  cilio,     (ijj 
|  pero  válganme  los  cielos ! 
¿  qué  alboroto ,  qué  caído 
es  este  ? 

\  Mar  i  ene.     \ 

El  cielo  parece 
que  te  bou  de  de  sos  quicios. 

Tctvarca. 

\  Qué  asombro  •  •      .  * 

JMorJcnt* 

¡  Qué.  confusión  ¿ 

ESCENA  XIII. 

Dichos  ,  FUipo  y  Libia*  r 

Señor. 

Seftora. 

Tctrarc*.  ^ 

1  qué  es  esto  ? 

,     ;   Jfariene. 

¿  Qué  es  esto ,  Libia  f 

Zi6fo. 
No  *é  si  sabré  decirlo. 

bilipo. 
Gente  del  Emperador 
Octavia  no,  tu  enemijpr» 
á  Je  rusa  le  n  ocupa  ; 
y  ya  todps  sus  vecinos  f  ; 

sabiendo  que  Antonio  es  muerto  , 
parciales  y  divididos  • . 


(  i  )     Dentro  cajos. 


314 


te  tusca!*  pMT  j^fltittfcY"'-' *  * 
diciendo  á  voces,  qué  has  sídoi 
la  cauáfc  de  síti  *tr aficiones. 

Mar  i  ene. 
j  Ay  de  mí ! 

Tttrar'ca. 
1  ]  Pierdo  él  sentido!"  * 

Mariene. 
Ha  ye,  señor,  ese  monte*    '      » 
sea  tu  sagrado  «silo  , 
porque  mejor  Jas  desdichas 
se  vencen  en  los  principios. 

:    íelrárto.  ' 
¿Qu^ei  hnjr  ?,  viven  Jps  cielos  | 
que  tengo  de  recibirlos. 

Máritne* 

Mira  señor...  *  '"' %t* 

T&rhrca. 

¿Queche  dé  veri 
TlfáHené. 
Qvtt  es  na:  valgo....  / 

Tetrarc<*ym  "M 
^    'Ya  lo  miro. 
'  •'■•'  '        '      Máttene. 
Alborotado.     '  » 

■*  TetrtirtH.  :* 

jpQiié  importa  F 
1  Muríate.*  »    • 
Tu  vid*..;..    .»•'*.»'  r  * 

y  Tetrareat  '  " 

•  MI  vida  Hbro. 
%  o     •»  Matiene 

¿Cómor 

Tetrarcm. 
Poniéndome..,. 


i 


sis 


Mane  ríe. 

¿Donde? 

~ 

%.  *       Tetrprca.. 

Delante  de  ér         '' 

Mariene. 

- 

'Es  delirio.       ' 

Tetrarca. 

No«s.    '«-  •  '",|     '"' 

Marlene. 

.**\A\\x..'           '¿Porreé?    *   •      ' 

"* 

Tetrarca. 

v  Marque  conviene ; 

verás  qtte  su-órgullo  rindo.'     (i\ 

Tétrárca.                  '  A 

A  üíos  f. esposa  ?  que  ya  '  '  \  ' '  '* 

segunda  vea  dan  aviso 

las  cajas.                                    *  '. 

, 

>•'  *  Mariúnii 

,   Tente. 

s^S 

♦      "    Tetrarcik. 

í  Qué*  temes? 

• 

Mar  i  ene. 

Tétto>  señor,  tu  peligro,    '  •    i 

que  vas  solo*    '                   '   ,1,,i  * 

ZTetrarca. 

" 

No  voy  tal':»-    ^ 

tu  vas  ,  señora  ,  conmigo  , 

y  este  acero  ,  que  me  basta , 

ai  es  de  la  mu<<t  le1  ministro;,  *•  * 

á  ser  asombró  del  mundo, 

á  ser  iisryo,  á  ser  prodigio'/      ' J 

»  r" -     "     •••'  '  '  '  ;?í 

(  i  )     VueUen  á  tocar. 


316 


ACTO  SEGUNDO. 

\ 

ESCENA  PRIMERA. 


Salón  ds  Palacio. 


i 
¡ 
Dos  soldados  que  eueigan  un  retrato  de  MarUne. 


Soldada  i. 
Ya  que  en  sus  melancolías;  , 

uo  hay  cosa  que  le  divierta 
snas ,  que  en  varios,  trages  ve;r 
remetida  esta  bel  (esa» 
y  este  es  el  primer  retrato 
de  cuantos  de  la  pequeña 
láuaiua  al  lienzo  pasó         _ 
del  noble  arte  la  «scelencia, 
pongámosle  de  su  cuarto 
sobre  el  marco  de  esa  puerta  f* 
para  que  cuando  entre  y  sajga  . 
á  todas  horas  le  vea. 

Saldada  *• 
Bien  has  prevenido. 

Soldado  t. 
.    .  Poea 

fea  (presto  que  ya  llega. 

Soldado  a. 
Con  la  prisa  que  me.daa,,    , 
fio  se*  si  bien  puesto  queda. 
¡Quiera  Dios  que  no  se  caiga  9 
>eucido  cí  clavo,  ó  fa  cuerda  í 


317 


ESCENA  II. 

Dichos/  Ociaviano* 

Octavia  no. 
Pasta»  tan  desesperada, 
Mque  al  primer  paso  tropista 
en  an  i  oí  posible ,  y  cae 
en  otro ,  queriendo  ciega 
dar  una  esperanza  viva  ' 
en  «na  hermosura  muerta» 
Lien  se  \é  que  no  es  pasión  « 
sino  locura  ,  y  de  tema 
tan  invencible,  que  triunfos» 
aplausos,  lauros  y  empresa* 
no  ta  alivian  »  puesto  que 
ai  todo  ni  parte  sean 
■  á  echar  de  mí  una  a  préñeoslo* 
tan  rebeldemente  necia. 

Soldada  i. 
Como  mandaste  ,  sedo*  » 
que/ en  todo  Méufis  se  hiciera» 
deteste  pequeño  retrato 
Varias  copias  ,  traje-  esta , 
por  ser  la  mas.  parecida,     (i)   ' 

Octaviano. 
Dices  bien  y  pues  no  pudiera 
haberla  mejor  .sacada 
el  pincel  9  cu  suido  corriera 
las  «lineas,  y.  Ib»  bosquejos 
al  I  ¡en 20  desde  mi  idea. 
¿Que  nunca  me. hayas  sabido» 
6  con  maña  6  coa  cautela  , 


( 1  )     Dalcn4r.?>*rat#ipfig**fa> 


*-*- 


j 


ais 


k 


de  Aristobnlo  v  quién  faesa 
alma  de.  deidad,  faií  bella  ? 
Soldqflo  i.    ,      t 
Con  ese  hílenlo  raíl  veces" 
á  la  turre  que  le  «nCierra 
de  guarda  entré,  pera  nunca      !/ 
lo  su***  quede  manera 
Aris lóbulo-  ha  perdido  > 

el  juicio  «  desde  que  en  ella         .  » 
está,  que. es  en  vano  ya  , 

que  á  tiada  en  razón  atienda» 

«  ..  »•      Octavianon    •  í 

¿  Qué  dices?         :    '  ,  » 

Soldado  i. 

*   .  Qne  sal  a  menta         »    ' 

desatinos  diré  y  piensa.  . 

Octavín  no.     . 
Najtne.ejpanto  jay  infelicet. 
si  la  causa  que  le  fuerza        .   ...  v 
a  perder  el  juicio  ha  .sido 
perder  esta  herniosa  prenda, .     i 
l  Gánto  ,cá  eompalible  ¡ó  rara      * 
tildad  !  que  un  delirio  sientan    . 
dos,  entino  porque  te  halle  f    •  * 
y  efjqt  raspo  rque  te  pierda?     <-  s 
¿Qué  mal  hice*,  cuando  necio  9 
de  a  mar2  y  de  so  violencia  ¡¡  .        I 
culpé  á  Antonio,  que  adórase 
i  aqueUa  Gitana  ,  á  aquella         i 
que  en  lea  .teatro»  del,  mondo    - 
hizo  la  mayor  tragedia  ?  ;  . 

¡  Q  n^úé  hiea  .vengada:  e*lá        }  k 
de  ni  i, alli  ves:. y,  soberbia»!  •» 

-para  mayor  trofeo  t 

coa  instruÁeJt.to\9cv  vcoga^      •>  V     ;  i  ) 


31* 
tan  fácil  ¿orno»  un  retrato, 
y  ese  de  una  beldad  muerta,     (i) 
¿  Pero  qué  es  aquesto  ?  ¿  cuando 
triste  pronuncia  mi  lengua 
muerta  beldad;,  me  responden 
las  cajas  y  la  a:  trompeta»  :    •     . 
¿estem  piada»,  i  Si  ¿o»  -  cielos  » 
«i  los  montes ,  si  iaft,  selva» ,     , 
si  los  vientos  y.»*  1«*  mares  9     , 
cuando  mi  voz.  )es;  .acuerda  »   -^ 
de  igual  pérdidaí  la>  ruina ,     .     , 
com  padecidos  xejtbjtftn  .. 
de  esa  difunta  btBtnostfra.  .  >   :f 
repetidas  las  exequias  ?     (») 
Otra  ves,  p¿a4o«P>s  ciqlos , 
suena  el  rumor  de  mas  cerca : 
Ted  quien  tsé^áVor*  caüsá;    ■ 

Soldado  i. 
Mucbo  estrantf  que  las  señas 
no  te  jo.  diga bk,  pue»  es  / 

ceremonia  usada  esta  •    t> 

de  los  bárbaros  Gitano*  ,  > 

siempre  qve.ifendid»  p  presa     • 
al gqna,  Persona  Real    r 
en  su.  Corte  sale  y  enitra*,,    .  t  n 

Qc^atnano.  fr  .,  j.  s 
l  Pues  quien  entra  ó  saje  hoy,  c 
d  preso ,  ó.  rendido;  en,  ella  ? 


(i)     Cajas  destempladas, 
(*)     Fue  he  n  las  cajas* 

21 


J 


320 


ESCENA  IB. 

Dichos  jr  *"*  Capitán»     • 

G*pk*n. 
El  Tetrada ,  é  quien  *¿  díjfc*    ' 
orden  de  que  y*< lebrones v  • 
y  viendo  cnanto  scfptufe  '•' 
Virey  que  por  •<  gsfefefiii*  > 
,  usando  la'Cfcrensonfa 

de  que  con  >*u*  >•  mm*9>  <*e0¿a*  ¿  ■  ' 
y  con  sa4r*'s«:  rebina  ,    ' 
bien  que  ttftf^t&cycftítteata^  ' 
liega  á  Mft*>p4as,'  •  *  •  •  -h  <><••»  '- 
wt  .,  ,  .:,  ?,!  .-'.  «,:;••.. 

Dichos ,  et  Tetrarcfyert.rnediq  desoldados*     (i) 

ver  po3fratf^«s*«é»erbi&V' 

.que  el  alttf'trttftilb  toti'qoe 

Roma  'rfeeib4nde4é*lp  em. 
Quede  él  ttotovy4o*  dfeifiá* 

salgan ,  Patricio  ,  a'Ht'rii£fV{ 
que  po*  sí  la*cáso  Ifti'enofo' 
tras  sí  mir*ccfrnes  lleva  , 
no  quiVrtt  <fute*h*aieiihiádV  ' 
con  txn^émm^tté^^^1  l 
Templad  vos ,  pues  sois  mí  espejo , 
mi  cólera.  (  a  ) 

Tetrarctí. 
Suerte  adversa  ,  ap. 

™ \    "■'  ••■<<_<      i.  .i  i  -. *- 

(i)     Cajas  destempladas. 

(  a  )     Mira  el  retrato  qué  tiene  en  la  man: 


'  321 

¿¿  qu¿  mas  pudo  llegar 
de  tus  ceños  la  influencia?    ... 
Invicto  Octaviano ,  cuyo  - 

nombre  en  láminas  eterna? 
él  tiempo  escriba  i  dictado  .    » 
de  las  plumas  y  las  lenguas,:    ,t  ■ 
á  tus  pies  llego  ofendido , 
porque  para  qtté  Vinieran 
mi  lealtad  y  tai  vaí/pr 
¿  rendirle  esta  obediencia  ,. 
no  era  menester  .que  fuesen 
por*  iní;  que  eí  que  a*  respeta   . 
por  fuerza  *  cuando  por  gusto 
puede  i  á  sí.  ípísmo  se  afrenta  / 
pues  quita  á  la  Voluntad 
lo  que  le  anatje  á  la  fuerza.  .  ., 
Dame  tu  m^njo:  (^  i  )  ¡  Mas  t  cielos 
divinos  i  al  be^r  esta  * 
qué  es  lo  que  en,  la. otra  miro! 
¿Habrá  en  «l.mupdo  quien  fce^a 
dos  venenos  á  dos  manos  ,        ( 
y  aun  mismo  ¿lempo  los  sienta; 
en  los  labios,, y.en;  los ^pjos t  ,       ( a ) 

O^ta^ianó. 
Si  informado  no  estuviera 
de  mi  razón,  ^á.  la  tuya  £ 

bastante  cr^djfp.dpra  ; 
pero  si  son  destempladas 
cíáusulas ,  qife^nq  concuerdan  ¿ 
.  esa  afectada,  humildad         ,  k . 

(  i  )  Al  besa?  una  mano  %  repara  en  él  retrato  que 
tiene  en  la  otra,    > 

(  a  )  Vuelve  Octaviano  la  espalda  ,  jr  el  Teirarca 
te  sigue  de  rodilla*.     .,  ^  , 

*  '•  * 


322 


con  tn  traidora  soberbia  ; 
no  violencia,  no  rigor  * 

la  prevención  te  parezca/ 
que  Con  vasallos  que  son 
de  los  de  viva  quien  venza  , 
fuerza  es  que  la  voluntad  ' 
se  aproveche  de  la  fuerza. 

ttttarca: 
2  Mortal  estoy  \  Dadme ,  dioses  9  ap. 

valor,  que  quizá  no  es  ella. 
¡  Qué' ahora  me  la;  ocultare  ! 
Si 'contra  mi  te  aconseja 
quien  pretende...... J  ' 

OdabUño. 

^Nb1  presumas 
que  mal  advertido  hiciera 
estreñios  ■tales';  :déT tí 
sé  la  ambición  conque  iu  ten  tas 
conspirar  al  sacYo-'Iitipe'rio ,    '■" 
i  cuyo  efecto* iá' guerra 
mantenías  /Manido  í  Antonio  l' 
los  socorros  pátfa  ella.        '  '     ^ 
"  Estas  firmas  fé^cárívencen ,    ' 
^  de  ellas  lo  sé  ;lle^a',. llega  , 

míralas  bien  ,  tu  y  aá  son ; 
míralas/  (V)  ;  ' 

'-  Yá^íroi  Sil  verlas ,*        ap. 
tai  muerte'maVdectai'ada' 
de  lo  que  aun  tii^íniátoo  piensas  j 
gpucs....  yo..".,  sl.,.7.  * 

OMaviáno- 
.,   t  Esa  turbación   " "• , ' 

•    i     '  * '•«  ""-  •         \  '.     '  • 

(  i  )     Saca  unas  cartas  f  paneta*  e/i  el  retrato. 


es  ya  aegnnjja  cyii^cia : 
pero,  quien  4  un  Id u meo 
honró  ,  baja  estirpe  hebrea 
rebelada  de  sus  nobles    ...    .    . | 
Tribus ,  esto,  y  mas  merezca  ¿..^ 
y  así  mieqtras  el  castigo  t  ,.   \ 
á  los  demás  escarmienta  y 
aabe,,7|ue  soY^Qctaviano^  tVj  . 
que  soy  ej  ¿ujco  Qísar,.    it,tl¡ 
de  Boma  ,  y.  e,l  ^M^X-X^H^  - 
humildes,  mis  plantas  b^sají^ 

y  que  4  ¿«ai!1??  contr*  W-fcT  ^ 
con  traiciones,  con  cautela;*.    r 
quieran  conspirar,  negando 
á  mi  poder,  la  obediencia  f<  : 
aeré  yo  quien,  los  corone  ; 

de  laure^,,,  para  que  sean  t        w 
t  con  on  impulso  á  mis,  plantas , 
;  ,  con  una  acción  k  mis  huellas , 
dos  trofeos  de  una.  vez, 
mi  hucpl.i.p  *«.  cabeza,,    .   .  O  ) 

j    ¡  Qué  esto  sscujcjiea  mis  oíaos  t 
y  aquesto  ¡mía,  ojos  vean  #|  . 
sin  que  eJ  dolor  oje  4f»Pf$k>{... 
Yo  he  de  morir ,  cosa  és  cierta,  , 
á  sus  manos ,  ó  á  mis  zelos  ; 
pues  él  á  mis  zelos  muera , 
y  á  mis  manos ,  que  una  vida 
tan  grande,  no  es  bien  se  venda 
á  menor  precio.  (a  ) 


323 


Un.     C.\..V   1M     \s     «*» 


(  i  )     Va&e  Octaviarlo  kdc(a  la  puerta  del  retrato. 
(a)     Al  entrarse  OclaviprtQ  pa  á  herirle^  el  te- 


Í24  / 

Octaviaría. 

¿Qtiiés  estdf 
'  Tetrarcd. 

pesesperada  i  ni  pac  iniciar, 
que  ha  de  cost&rine'el  dtcirla 
aun  mucho  más*  que  ei  bacerla, 

Obtápiahó. 
jTúj'con  el  dein udo  ütf ero '9 
cualdo  yo  la  fes  ¿jalda  vuelta  ; 
y  ciitre  tir  acero  y  ¿al  espalda1' 
esta  hermosa  i magea  puesta  ? 
¿  Turbado  td  ;  yo  Seguró  9 
y  ella  herida  f  ¿Tí  con  muestras 
de  Venganzas;  yo  dé  agravios  f 
y  ella  de  piedades í' ¿puerta 
tú  la  acción  i  fb  vivo  al  riesgo , 
y  ella/  ofendida  ?l  Vite  el|a  f     ' 
\  que  como  4  ilejdaífl'  que  adortr  9 
bien  puedo  este  obsequio  hacerla, ) 
que  es  ¿¿'sacrilego  acero  , 
1  ya  que  borróles  repretenta  9 
el  instrnniéfi  tb  ¡ha"  de  ser  , 
pueS  |6  fue  de  tu  V ¡ofenda  , '-'  ■    (?) 
de,  tu  castigó  ;  Vea  e1!  mundo 
que  el  que  ¿de  agravia  ,  tóe  Wig*f 
í)la.:     "     :'  '  •!'••,■     "    " 


trotea ,  cae  el  retrato  en  medio  de  fo$  dos,  jr  se  ?«** 
da  clavado  en  ¿I  él  panal. 

(  i  )     Quila  el  puftai  de}  retrato,  •••'-*     '  • 


32* 
ESCENA  V. ' 

Dichos  9  ti  Capitán  y  Soldados.1 

Capitán. 
¿Señor? 

Octaviano. 
A  1»  torre , 
¿onde  su  hermano  se  encierra  9 
llevad  también  «1  Tetrarca, 
donde  un  solo  criada  itejtg* 
de  los  que  le  baya*  Mgtúdo* 

Tetrarca.  * 
Cnando  mi.  sepulcro  sea», 
la  vida  debo  á  os  panal» 
yo  le  pagaré  con  «lia. 

Octaoiano. 
Y  yo  la  vida  á,un  retrato ; 
y  pites  que  de  otra  manera 
no  puedo  ,  con  adorarle 
también  pagaré  nri  deuda* 

ESCENA  YI. 

Decoración  de  Cauce** 
Dos  soldados ,  y  Pulidora  paseándose* 

Soldado  i. 
Grande  es  tu  melancolía. 

Polidoro. 
¿Melancolía  decís  y 
vergantonazo  ?  mentís. 

Soldado  i.  ' 
l  Pues  que  es  eso  f  \     . 

Polidoro» 

Hipocondría , 


j 


325 


que  un  Príncipe  comd  yo 
no  había  de  adolecer 
"vulgarmente,  ni  tener 
mal  ,  que  tiene  un  sastre. 
Soldado  i. 


No 


te  enojes  de  eso*    -  - 

Polidoro.  ■  » 

Si  quiero'; 
que  estar  triste  solamente , 
no  es  achaque  competente 
de  nn  Príncipe  prisionero  : 
y  mas  si  se  considera       -  ■ 
la  grande  superchería    . 
con  que  de  moche  y  de  día    i 
me  tratan. 

Soldadoi i     l!   w  X 
•     •'  jDe  qué  manera  ?- 
.•  iPblidoro.,  \    . 

¿De  qué  manera- ¿picaño?  .      > 
¿Qué  Príncipe  se  perdiera  , 
donde  una  infanta  no  hubiera  , 
qué  condoljda  á  su  daño      r 
con  músicas  le  avisara 
desde  el  cabo  del  terrero  y     -»  - 
y  á  pagar  de  $u  ,djnero 
las  guardas  le  sobornara  , 
para  que  una  noche  oscura  y^ 
en  dos  caballos  los  dos  , 
por  parque,  á la  paz  de  Dios  * 
se  fuesen  a  su  aventura  ?  ' ;' ' ' ' 

Soldado  i. 
Si  estuviera  por  áca      ''  *  '"     *  ' 
(así  safcer  algo  ^trato) 
la  Sarna  de  aquel  retrato , 


327 


quizá  ella..., 

x       PóHdwa.        , 

Claro  cst¿ 
que  mirara  por  su  honor  , 
y  caso  que  allá  estuviera  , 
preso  un  infante,  y  ao  hubiera 
tenídole  mucho,. amor  ; 
las  desdichas  acabadas, 
de  esta  mi  prisión  cruel ,  . 
por  no  haberse  idtf  coo  él  , 
la  matara,  yo  á  patadas,.,    •      : 
según  la  adojr o  ,.  y  sospecho , 
que  si 'donde  estoy  supiera  , 
estrafalaria  viniera 
Jor  mí. 
'  Soldado  a. 

Lo  medJo.'está  hecho ; 
porque  yo,  compadecido*, 
aderezo  te  traeré   .  v 
.  de  escribir.,      . 

Soldada*,. 
Yo  un  prepift  \*ti 
al  punto  que  hftya  sabido 
donde  se  ha  de  encamina*1 

la  carta > 

Polidoro. 
¿Qué  dices  ? 
t  ■       •    .  Soldado  i . 

\      BjgO;   .         < 

lo  que  por  tí  á  hacer  me  obligo. 

Pulidor  o. 
Mil  Abrazos  te  he* de  dar  , 
mientas  habiendo  avisado 
y  librádome  mi  daoaá  ,    i' 
te  hago  el  hombre  de  ra.as  fama 


32» 


Soldado  1 4 
No  es  aqaestfavfc  cuidado  ,  ap. 

qwe  tntts  qtie  espero  de  tí 
de  Octáttano  espero ,  pite»         > 
con  eso  sabrá  quién  es 
dtaeüo  del  retrae 

Soldad*  z. 

Aquí 
bay  ya  «de  escribir  recado, 

PoHdoro.  •   • 

¿  Con  so  tío  f á  'y  pletina  ?       < 
Soldado  a.    •  • 
En  él 
se  dice  todo* 

Polidoro.        ... 
|  Hay  papel  ? 
Soleado  a« 
También. 

Polidoro. 

I  Batido  y  cortado  ? 
Meado  a. 
No ,  pero  ej  qoe  bastará* 

Polidoro.  i   '  > 

¿Polvos?     :  •    ' 

Soldado  2.    »       i   ».' 
Polvos  hay. 
'  Polidoro, 

¿Oblea, 
Jacrc  y  sello  ? 

-         Soldados.  ' 

Sí. 
Polidoro. 

Paesea, 
llegadmc  el  bufete  acá; 
la  silla* 


Í29 


Soldado  a. 
..L  Tai  esiálfógada.  (i) 
■  *    i .  Pplidora, 
l  Papel  y  tinta  y  pluma  aquí 
no  hay  ?  ¿  polvos  y  sello? 
• <    Zos  ¿os. 
.'■    .  Sí. 

:      Potidoro, 
Pues  aun  no  tenemos  nada. 
Soldado  i.         . 
¿Qué  falta  i  de  prevenir  ? 

«  •      Poiidoro. 
Lo  mejor. 

Soldado** 
Sepa  qué  fué , 
volando  por  «lio  iré. 
Poiidoro. 
El  que  74  lio  sé  escribí*  i 

Soldado   i. 
Ahora  saje  con  eso  (a) 

«l  tonto. 

-      -  Saldado  a» 
El  loco. 
Soldado  i »     •  •  •  • 

El  menguado. 
-    -  *   *    Pólidoro» 
l Quién  vio  Príncipe  aporreado? 


(i)     Llegan  el  bufete % 
(?)     Le  aporrean. 


ESCENA  TIL. 

Dichos  ,  el  Capitán  y  el  Tetrarca, 

,.    .  Capitán*    4 
Esta  es  la  torre  en.  que  preso 
Aristgbulo  está  :  en  ella 
dejarte  eJ  César  mando. 

'        Soldado   a. 
Gente  en  la  prisión  entró. 

Soldado,  i ..  :   .     .  ' 
No  vean  que  le  a  tropel  la 
nuestro  enojo,  que  han  mandado 
con  respeto  le  tratemos. 

.    •  Soldado  a 
Que  le  servimos  moa  Iremos.    . ;  (i) 

Capitón. 
I  Cónm  tu  Alteza  liar  pasad* 
la  noche  f 

.    )  Polidoro;'.*  r  ,  f 

Mai,..y  j»eor 
la  mañana ,  que  ¿^porrazos 
aquestos  pica  rociaros  (?) 

me  han  muerto.     ;,A 
:•?"":'■...•  .  Vapitan. 

\.    '        ,    Tente,  señor  , 
¿qn¿  haces?     .  .^  ó:.-  .¿í:Vj 
Polidoro, 

Reñir ,  Vive  Apolo  , 
á  manera  de  valiente 
al  uso ,  que  habla  si  hay  gente  9 
y  calla  cuando  eslá  solo. 


(i)      Fingen  que  le  sirven." 
(a)     Dá  tras  los  soldados. 


^  *3£/ 


Capitán. 

Advierte  que- i  estar  •ootftig»  /? 

¡    viene  el  Tetrarca  tu  he^ft&ho;   • 

'■-••'       PoUdéroi 
¿  El  Te...,  qoé  í»  ,  -j. .;>  y:<;    . 

Capitán, 
i:EÍTetrarfcav 

En  vano 
es  ya  escusirsé  el  castigo 
de  haber  tal  engaño  hecho; '    '         ap. 

^Capitán. 
Llegad  ;  bien  podéis  llegar 
conrAristótiulo  á  hablar. 

Tetrarca. 
¡  Que*  miro!  mas  ya  sospecho  ap 

que  ha'y'algun  secreto  aquí,  ' 

pues  con  stf  nombre  no  ignoro 
que  esté  preso  Pólidoro 
para  grande  fin';  y  así^ 
disimular  me  conviene. 
Dame,  en  mis  últimos  plazos, 
Aristó*bulo ,  los  brazos. 

^Pólidoro. 
Borracho  el  Tetrarca  viene:     ^  ap, 
Aristóbrió  me  llama.'   '      ( 

TetrarcaT    "''  "y 
Ya  que  en  mis  penas  el  Cielo 
ao  m>  deja  otro  consueto    ' 
que  vpr  mentida  la  fama   '     ' 
qoé  de  tu* muerte  corrió....' 

Pólidoro.  "' 
Vive  Dios  qué  insiste  én  ello  j         ap. 
I  qué  TuerV  que  sin  sabello    y  ' 
fuese  Aristébulo  yo  ?'  - 


/ 


332 


C*pÜAB. 

Dejarloadolos  e*  bien-, 
qnctahle»  lo*  do*,  puf  s;  es  Jlano  , 
que  á  algun*fecio£>ctaviano 
quiso  que  juntos  tftlep.... 

ESCENA  VJIl. 
Tetrada  fPblidoro. 

,  T¡etrarq*>  r .     ., 
^Estamos  ya  solos?,  ,     , 

¥ol}dor<r. 

■,  ..."  •.;.•.•>..•.! 

2>/rar«iv      _      .,  t 
¿  Qué  es  aquesto  ,  Polidoro  ? 

;      ,         foUdoro.  , 
Un  fingimiento  que  lloro-  -       ' 

¿De  que  suerte? 

Pofidoro, 


Te(rarca.t 


.  Escacha^ 


Polidoro* 
Que  £S,V?  vestido  \*c$%  r 
me  dio  mi  aipo,  es  lo  primero  $ 
que  parece  cabaU*4 ro 
tin  pícf  ro  bien  vestjdp.; 
lo  segundo,  con  fque  el. cija 
que  el  César  triunfa n te  eiitr6# 
y  á  Antonio  ,y  Cleooatr.a  JbalJ^ 
en  su  fatal  boberia  , 
prisioneros  nos  hicieron  t   , 
y  como,  iba  galán  yo  , 
con  la  caja,  en  que  guardó 


earU»  y  joyw,  execro rt  ... 

el  engato  prosiguió ,  :   ,.  ..; 

conque  41  me  Aristofraló*     .      t 
y  yo  le.  Poli&H* ;  •• 
qué.  toe  dtf  él,  .np/AÍ  j:^ie  e^a*; 
mis  ansias «on  jfcfcjál»,;  ciega,    . 
sin  veríaj  we**«,ni  r^i  , , 
en  un  «aUeJen  ¡Noftiega ,  , 
aprendiendo  ¿  gW^Mfe* 

ta  tme.de  aquesjo  ;fcfc*nwdo 
estoy,  á  un  laá>*¿  aparca , 
que  tengo. que  haAla;f<£ói*inigo. 

PoHdora*   . 
Esa  «ila  dicha  jpa*  wa   ; 
de  un  buen  hablador.,,  hallarse 
con  -quien,  no  ledjga  nada, 
y  le  ¿wga  cnanto  «41  diga. 

;  ESCENA  IX.' * 


Ya  que  solo  me  ved', 'sáfgátt '    , 
en  lágrimas  y  suspiros,"    '     ' 
sin  estruendo  'dé  palabras  ,    ' 
á  los  labios  y  á  los  ójóü     '    '    > 
tatf  cautelosas «mis 'áfcsfas , 
que  en  saliendo  de  ella  ¡  aun  no 
la*  eche  menos  é\  <a1tná. '  l!° 
'¿Qné  es  esto,  eíelos  ,Hqtf¿  es  esto, 
jay  de  mí  í  que  por  rúi  pasa? 
que  bien  será  taéne¿té'r , 
que  vuestra  autoridad  valga 
mi  crédito,  porque  es  tal 
el  tropel  de  mis  desgracias, 


qoe  aun  pasando  á  la  esperiencia  9 
se  me  queda- en  la  ignorancia.  .• 
l)e jo  aparte^'  qoe  del  sacro       ' * 
laurel  «piérdala  esperanza  ;        > 
dejo  haberme  convencido  *    • '   '. 
de  mis  designios  mis  Cartas  , 
dejo  el  caá íi'gó1  forzoso 
de  acción  tan  desesperada  9 '  !' '  • 
como  que  á  morir  matando    r  * 
me  despeñase  mi  saña  j 
pues  la  desesperación , 
designios,  y  ambición  paran 
solo  en  pensar  que  ya  tengo      ' 
el  cuchillo  á  la  garganta;  •  '  v 
y  voy  á  qoe  Otro  dolor 
es  tal ,  qué  el  morir  no  basta  l 
para  acabar  con  él »  puesto  - 
queden  «ai  frase  se  adelanta  i    * 
dé  á  la  garganta  él  cuchillo  *»   ' 
pnes  dirá  desde  hoy  mi  patria  , 
que  el  cuchillo  al  corazón 
murió  su  infeliz  Te  Ira  rea  : 
al  cpraaon  djaje  *  y  4¡ge  „,,.,     ; 
bien ,  quejél  es  á  quien,  trajfpaga 
ver  en  poder  de.  Ocla viano^ 
é  Marieue  retratada  f  .  i  ;. 

y  en  dos  partea ,  como  quipn. ,  . 
dice,  que  la  luna  clara    ,.,.... 
de  un  espejo  ,  (si  está  entera  *,..'• 
hace,  un  rostro,  y  si  quebrada, 
dos ;  mosteando  que  en  abuso 
de  supersticiones  varias  v  ,        t 
el  espejo  que  se  quiebra 
siempre  agüeros  amenaza:  . 
y  es  el  mayo»  haber  visto 


¿  Marlene  con  dos  caras. 

Bien  discurro, yo,  que  en  ana 

hermosura  soberana  , 

por  soberana  hermosura 

sola  mente  la  retratan  , 

*in  mas  intención  que  el  serlo, 

ó  la  escelencia  ó  la  gala 

del  artífice  ;  bien  creo 

que  al  verla  el^  no  recatarla 

de  mí  es  ignorar  quien  sea  ; 

que  ser  mi  esposa  y  mostrarla , 

era  cosa  muy  indigna 

para  dicha  cara  á  cara  f 

cuando  no  por  mí ,  por  ella  ; 

pero  todo  esto  no  salva 

ek  que  no  tenga  interior 

afecto  ¡  ay  de  mí  !  de  amarla  f 

quien  no  contento  con  una 

en  la  mano,  otra  en  Ja  sala, 

jura  por  ella  el  haber 

de  tomar  de  mí  venganza. 

Y  pasando  á  que  el  puñal 

en  su  pecho (i)  ¿Mas  qué  cajas 

á  marchar  tocan  ?  ¿  Habrá 
quien  en  esta  triste  estancia 
me  diga  qué  marcha  es  esta  ? 

ESCENA     X. 

Tetrarca  y  Filipo 

Filipo. 

Sí. 


33$ 


(  i  )     Cajas  dentro, 


336 


Tetrarca, 
l  Quién '{ 

Ftlrpo. 
-    Yo,  á  rjuiVo  adelanta 
su  lealtad  á  ser  ,  ¿eiloi  , 
el.  criado  que  se  manda  , 
que  solo  te  asista. 

Tetrarca.  * 

i  O  cuanto 
el  ser  td  quien  me  acompaña 
estimo  ! 

Filipo. 
No  es  leal  el  que 
lio  lo  es  basta  la*  aras  ; 
y  así,  aqueste  breve  tiempo 
que  le  queda  á  tu  esperanza 
de  vida  ;  pues  se  presume, 
que  antes  que  de  Egipto  saiga 
Octaviano  ,  su  rigor 
en  tí  i'jecuie;  ruis  canas  » 
mi  amor  t  mi  fe,   mi  alma,  y  vida 
vienen  á  ver  que  me  encargas. 

Te.trarca. 
¿Tan  breve  y  tan  cierta  es 
mi  muerte  r 

Filipo. 

l£l  <]*itf  su  Jornada 
apresure  ,  lo  adivina. 

Tetrarca, 
l  Cómo  ? 

Filipo. 
Como  hace  la  marcha 
i  .Térusalen  ,  por  s\  hay  f 
mueilu  lúy  novedad. 


Ttirarea  ^ 

Calla, 
Filipo ,  no  me  I*  digas  , 
que. tú  eres  .el  ^ue  me  matas 
autes  que  él 

Filipo.  j^ 

¿  lo  ,  ¿fiíor  ? 
.«  Telraréét, 

,.        Sí, 
|>aes  tú  el  morir  me  adelantos, 
¿  A  Je  rusa  le  ii  el  César  ? 
¿  donde  (  ¡Los  cielos  me  valgan  ! ) 
baile  á  Mariene  viva, 
quien  la  idolatró  pintada  ? 
él  victorioso  ,  yo  Muerto  , 
y  ella  querida  ¿qué  aguarda, 
mi  desesperado  awoj*?      (i) 

Filipo, 
l  Qué  baces  ? .  . 

•  Teirarca. 

Quitarle  la  espada  , 
para  arrojarme  sobre  ella  *  .  A 
que  mas  valor  y  ma*  causa 
tengo  yo,  que  Antonio. 
Filipo 
f  Mira..*    ••  ■ 

Teirarca. 
SI  haré ,  sí  me  das  palabra 
de  hacer  por  mí  una  fineza. 

Filipo. 
tfo  habrá  cosa  que  no  haga. 
yo  por  tí.  • 

»!■■«-   ' — '• — r . 

(  i  )     Quiere  quitarle  la  espada. 


338 


Tetrmrea. 
f  ¿Si  es  prodigiosa? 

¿Hipo.  ' 
Ningún  prodigio  me  espanta. 

tetrarca. 
I  Si  es  terrible  ? 

Filipo. 
Que  lo  sea; 
Tttracca* 
l  Cruel  ? 

Fi7*>o. 
¿Qué  importa  ? 

¿  Temeraria  ? 
JR7i)w. 
Valor  tengo  para  todo. 

Tetrarca. 
¿  Fiera  ? 

Nada  me  acobarda* 
Tetrarca* 
¿  Y  si  es  bárbara  ? 
.Fi/j/m?. 
Tampoco. 
Teirarea. 
Pues  escucha  ;  pero  aguarda  , 
que  es  tal  la  resolución  y 
que  para  representaría  . 
á  ios  teatros  del  mundo» 
como  ,  al  fin  trágica  farsa  , 
pues  hay  recado  ,  quiero  antes  • 
con  escribirla  ensayarla*     (i)   ■■ 


\i\     Pónese  ¿escribir. 


'  v         FWpo.  ;        7 

¿Qué  serj  resolución,  ap. 

que  con  prevenciones  tantas    . 
piensa?  Apenáis  dos  renglones  ., 
escribe  y  cierra  la  carta,    •  .     ♦ 
coandp  í  mí  vuelve. 

Tetrarva.t  , 

.  .     Oye  ahora* 

'  Filipa*.  i 

Si  haré  con  vida  y  con  alma» : . 

Tetrar.ca. 
Si  todas  cuantas  desdichas  f 
si  todas  cuanUs  desgracias 
lia  invenido  la  fortuna 9. 
deidad  de  Jos  hombres  varia  9   .. 
se  perdiera»  ,  todas  juntas    . 
hoy  en  mi  solo  se  bailaran  f 
que  soy  epílogo  y  cifra  j 

de  las  nis&erías  humanas*.    •  ■-  ; 
iío^  que,  ayer  de  Marlene..,       ., 
esposo  y  galán,,  con  ravas-.  , 
nuestras  de  amor  coroué   ;  .    ., 
de  victorias  qji  esperanza  ;         L 
hoy  lloro  agravios  ,  sospechas  » 
temores,  desconfianzas  , 
y  ...  zelo*  iba  á  decir  , 
pero  imaginarlos  basta.   ,  . , 

Yo  K  qu*  nyer  de  Palestina  . 
Gobernador,  y  Tctrarca  y 
no  rupq  ambicioso  en  cuan.Ui     ¡ 
el  sol  dota  ,  y.  el  mar  baüa  ; 
hoy  pobre  ,  triste  y  rendido, t 
entre  dos  fuertes  murallas» 
aprisionándome  el  vuelo  , 
tengo  abatida*  las  alas» 


339 


i 


340 


7o ,  que  del  laurel  sagrado 
•ayer  preténdala*  ramas         '•  » 
Siempre  verdes,  á  pesar' 
de*  los  rayos  q'frelas  guardan;  5 
boy  segur  suya  mi  acero  ' 

veo  que  sus  pompeas  tal**,  ' 

sola  roen  te  por  llegar 
embotado '4  mi  garganta. 
¡Pluguiera  al  bada!  ¡pluguiera 
al  «tifio ,  que  aquf  pararan 
sus  presagios  ,«  y  que  en  mí 
se  desmintiera  la  Vil  grata 
indignación  dé  un  des  ti  rio  t 
pues  muriendo  yo  á'lá  safta 
del  femóle  infausto-,  puidier»    "» 
persuadir,  a*  la  ignorancia  ,    ( 
que,  ya  de'io'que  ntas'tjuise  ' 
eji  cuto  la  arríe  na».     ;  '  * 

j  Mas  ay  trtsté'i:¡.ay  ¡InWiíe  !     • 
que  no'1  soy  yo'  á  quien  mas  ama 
mi  m  fren  a  vida  ¿supuesto  '        * 
que  también* ella  tirana 
me  aborrece  por  ser  mía ; 
y  tío  con  morir  acttb&n  '  ' 
mis  desdichas  ,  qué  inmortales- 
mas  allá  d«  morir  pasan. 
Octaviano'  (  al  prdnttttritfrlo  f  '• 
valor  *y  aliento  rae  faltan  ),•      * 
Octaviano  adora  (¿cómo4' 
Jo  diré  sin  que  me  aflírtia    ' 
dolor  6  dolor?  )  V  adora  * 

¿  MarirrVé  ♦  pintada  • 
dos  veces  la  vi ;  y  dos  veces 
á  él  gentil ,  ph'és  idolatra'         '  : 
una  vez  á  un  so)  sin  ln*¿  <    •  'J 


y  otrar¿w»a  deidad  sin  almt,  - 
¡  Mal  haya  ej  hornee  infeliz  r    • 
otra  y.  w*l  veces,  mal  haya  .   • 
el  hombre,  que  con  oiuger       ,  , 
hermosa  $n  estremo  casa! 
que  no  ha  de  tener  la  propia  :: 
de  nada  ,op¡oion  f  pues  basta 
*er  perfecta  na  poco  en  todo,,  , 
peroc^ft  estreñí  o  en  nada  f    .  ,t 
qu(?  ^s^acmi^Q  la  hermosura,.  . 
t  que  siempre  ¿  riesgo  se  gualda; 
ai  uo  se  depende,  muere  ; 
•i  se  defiende,  se  mancha.  < 

No  i  pues,  mi.  ambición  ,  Iilipo>, 
lio  mi  atrevu).*  arrogancia  , 
no  el^  ser.  parcial  cou  Antonjo,- 
no  mi  poder,  no  mis  arinas  t  ¿ 
trie,  aflija»  me  desespera  ,         ... 
me  precipita  y  roe  arrastra  ,  ; 
sinp  e.|rSjW\d«  Mari»*ue  ,  , 

esposo, ,¡  G  caigan  ,  ó  raigan 
sobre  miliares  y  ru  »ntos! 
aunque,  sjj.  .dp  o>(Vn$a/t  jautas. . , 
el  peso  noine.  derriba.»  ¡ 

no  me  rinde  r  no  me  agraba f..,i" 
el  de  Jos,  montes  .y  mares        •  ,,; 
jjo  me  agoviará  la  espalda:     :  ,:í 
y  así,  viendo. cua uto  á  i us Vanees 
mi  vida  cuenta  la  parra  ,         (>)l 
y  cuajiío  á  brazo  partido       ,,   . 
en  esta  iqhrega  estancia 
Juchando  -estay  de  mi  muerde    , 
con  las  >o.tpfl>ras  y,  fantasmas^, 
viendo,  rn  n^ti  qu«e  apenas  hoy 
en  una  pública  jriafta        .    . ,  .. ,  N 


341 


i 


342 


Uve  tforror  de  la  fortuna  ; 
aeíé  del  amor  venga  ti  «a  , 
cuando  él  sea  \*J  infeliz ! 
(  pues  á  Jerusalen  marcha, 
donde  es  fuerza  que  la  rea  ) 
«n  tálamos  de  oro  y  grana, 
heredero  de  mis  dichas  > 
dueño  de  mis  espera  asas*; 
muero  de  agravios  y  celos  9 
que  matan  ,  porque  no-  matan.' 
Dirásme,  ¿que  que  me  imparta, 
pues  con  1á  vida  ve  acaban 
las  desdichas?  ¡  Ay  Filipo  f 
«fué  11  lo  esa  opinión  engaña  ! 
que  -o mor  en 'el  alma  Vive  ; 
y  si  ella  i  otra  vida-  pasa , 
no  "muere  el  amor,  sin  duda , 
puesto  que  no  muere  el  alma. 
¿  £1  ño*  nace  de  una  estrelía  , 
ya  propicia  ,  ó  ya  contraria? 
¿pues  cómo  faltará  amor, 
mientras  la  estrella  no  falta? 
¿Quieres  ver  cual  es*  la  mía?. 
Pues  si  ¡mdiera  apagarla 
hoy  con  el  último  aliento  , 
lo  hiciera  ,  ponqué  faltara 
del  cielo  ,  y  otro  ninguno  , 
1éñ!'sü  gracia  ó  su  desgracia, 
no  uaciera  como  yo ,  ' 

porque  como  yo  no  amara. 
Y  eu  fin  ,  i  para  qué  discurre    ' 
mi  voz?  i  para  qué  se  cansa f 
Otra  pena,  otro  dolor,  -) 

otro  tormento  ,  otra  ansia 
en  el  corazón  no  llevo , 


348 
sino  sedo  ver  que  aguarda 
Mariene  á  ser  coopta? 
cíe  otro  amor ,  -d«  otra  esperanaa. 
Sea  barbaridad,  ¿eas 
..tacvw  ,  sea  inconstancia  , 
sea  desesperación*-  <,i  •  .♦ 

sca^trenesí ,  sea  rabia  , 
sea  iva ,  sea  letargo;  * 
ó  cuanto  después  «Ms.aftsiaa 
quisieren,  que  todo,  quiero 
que  sea*,  pues  iodo. jevnao'a ,     ' 
como  pou^an  mtó  zeíos  ; 
y  asi ,  pu*s  que  la  palabra 
'*}e,h*s  «lado  de  obedecerme  ,  .  :» 
lia?  lo  que  mi  amor  te  encarga : 
vuelve  á  Jemisalea  ,  vuelve 
á  ja  esfera  soberana 
del  mejor  sol  de  Judea ; 
y  en  dkiéndote.  lá  ¿ama 
qu_e.be  muerto*,  er^»  el  mismo  instante 
coa.  mortal  eclipse  apstga 
á  la  tierra  ,el  mejor  rayo  , 
al  cielo  .la  mejor  llama, 
al  campo  la  mejor  4kwt ,    . 
la  mejor  estrella  al  alba. 
Tolonieo  ,  que  quedó 
por  capitán  de  mis  guardias  9 
y  siempre  á  Marlene1  asiste  ,     ' * 
sin  poder  seguirme ,  á  causa 
de  quedar  convalocteute 
de  aquella  herida  pvsada  ,      .     , 
dará  la  ocasión^  á  cuyo 
fin  ,  para  él  es  esta  carta  : 
de  él  u»  fia  ,  ,pdes  no  dudo , 
previstas  las  circunstancias 


i 


344 


de  qq  •veWHtf ,  6  drtfn'  dogáf:j 
que  él  te  guarde  las  espalda*. 

•  ¿Muera  yo,  y  muera  sabiendo    * 
que  Mariene  soberana 
muere,  con  rt>igo  ,  y  que  aun  -tiempo 
mi  vida  y  la  aivya  acallan  ; 
pero  no  sef* ,  que  yo 
soy  el  que  ar*rif  U  manda  : 
no  me  afeorrecca  e\  insta  irte  , 
qae  pida  al  sirio'  venga****. 
Ño  te  acobarde  lé  borrible 
de  ana  historia*  tan  cstrajna'J-'  * 
que  cu*»4*  trttimftraftr  Unda'    í 
que  kobo 'quién  dejó  por  tn'and* 
un  bomicitii*,  creyendo  •     >  '-r  í 

.  que  asf  aas  pena»  engaña  ¿  <  ?  >" 
que  así  sus  qnijas?  desmiente j  ,; 
que  asi  desdice»  sus  ansia*  f" 
y  que  a  si  ¿enmienda  sai  gelos;  "r 
t>tros  babri'íjwe  4« i  aplauda  i* 
pues  no  b«y  amanteó'  marido  » 
(  salgan  todos  á  esta  causa' ) 
que  no  q  a  ótete  ve*  ante»)  >  !- 
muerta  ,  que  agena  tu  da**a< 

Filipo. 
Bien  quisiera  responderte, 
mas  no  es  posible  9  que  baja 
mucha  geute  á  la  prisión. 
,  Tarareo*       . 
Por  si  vienen  por  mí,  salga.    '» 
mi  valor  ¿.  recibirlos.: 
tú  ,  cobrando  la  ventaja 
que  puedas  » ¿parte  ,  Filipú  t 
al  instante.     ., 


345 


Señor..... 
Tetrarca, 
.      .  $alla,  ,.    . 

que  sé  que  tienes, razo» ,    •  > 

p$ro  i» o.  puedo  escudarla* 

Ni  y©  decirla  ,  que.  IJegsi  > 

ya  la  gente.  ...^ , 

Petrarca.  t 

(-  ,,•  üsíera»  alta»,        ••    ' 

cielo  ,  sol  ♦  lupa,, y.  fsjrellai  f  L  <  í, 
nubes  ,  granUos  y  escarcha*  ,  .  ,  ,  t 
¿  no  hay  un  ,^ayo  para, un  tríjte?.  \ 
pije*  si  ahora:  u-o  los  jga&ta¿  ,  •, 

¿para  cuándo  ,, para. cuindp  •  t 

t%n  |  Júpiter,  tus  venganza»  ?  -       .  , 

ESCENA  XI,       ..•■:!.    "'- 
Decoración  de  Marina. 
jirístóbuto  f  Marlene-,  Damas  y  Soldados» 

'r      Afisfobüfo.      ' 
Dame  otra  ves  lo»  brazo?  , 
porque  coronen  tan. hermosos  laxo»    ,.      f 
hoy  la  esperanza  mia,  •  .  ►!  .  .      » 

M atiene. 
Mi  vida  %  hermano ,  á  te.  valor  se  fia  f  .. 
publiquen  ,  pues  ,  tus,  glp#iaü  f  ,  ,    , 

que  victorias  de  amor  son  mis  victorias.   • 
Ári$tóbu}o.  •.     í 

Ya ^oe. por  la  lealtad,  d«  Polidoro ,  , 

como  te  dige  ,  con  mi  nombre  preso» 
de  uu  infeliz  á  otro  infeliz  suceso »  ! 


i 


«no 

pude  ifegar  dónele  tu  lúa  adoro , 

y  donde  tu  obediencia  y  tu  decoro 

atenta  dignamente 

nuestra  nación  9  de  su  alistada  gente 

Genera!  me  ha  nombrado , 

cum pirré  la  palabra  que  te  he  dado  : 

de  morir  animoso  *     • 

6  traerte  Ijftre  tu  adorado  esposo. 

Mariene* 
|  Oh  ,  cúmplame?*  el  ciefo  ! 

Y  pues  el  campo  de  cristal  y  yeló 
de  aquí  á  Egipto  es  tátf'breve,  » 

N      por  ese  pasadizo  f  que  de  nieve  f  *      '•• 
ó  s¿  encrespa  ,  ó  se  eriza ; 
cuando  el  copete  dé  stf  frente  riza  *  '< 
presto  la  nueva  espero  ' 
de  que  mi  amor  desempeñó  tu  acero. 

¿instábala. 
Si  su  amor  va  conminó , 
fácil  empresa  ,  fácil  triunfo  sigo%  . 

ESCENA  XII. 

Diclws  j  JColomeo* 

•  Tólomeo. 
Ya  el  campo  cristalino 
tanto  pez  de  madera  ,  ave  de  lino  $   ' 
admite  en  sus  esferas  v 
que  parecen  las  ondas  lisongeras  f  '     •  • 
Ocupando  horizontes  , 
una  .vaga  repábüca  de  montes* 

Y  pues  noble  no'r}ué<fo  , 

que  escusa r se  á  tan  alta  facción  pueda  i' 

que,  rae  dea  le  suplico 

licencia .....  .        < 


Mariene. 
Antes^e  oiría  ,  la  replica. 
Capitán  de  mis  guardias  te  ha  dejado 
mi  esposo,  su  palacio  te  ba  fiado  ; 
no  es  asistirme  á  mí  menos  ufana 
facción  ,  que  esotra. 

Aristóbulo. 

Dice  bien  mi  hermana; 
y  pues  el  cargo ,  que  os  quedéis  abona, 
mirad  que  me  miréis  por  su  persona. 

Tolomeo. 
Obedecerte  espero. 

Mariene. 
Y  yo  veros  partir  á  todos  quiero  , 
porque  os  den  para  iros, 
agua  mis  ojos,  viento  mis  suspiros. 

ESfC¿NA  XIIL 
Tolomeo  y  libia, 

.  Libia. 
Permita  la  ocasión  á  mi  deseo 
el  que  de  tu  salud  ¡ó  Tolomeo! 
el  parabién  te  dé;  si  bien  pudiera 
dármela  á  mí  mejor  de  que  no  hubiera 
Mariene  admitido 
la  fineza  de  ir ;  que  hubiera  sido 
doblada  la  dolencia , 
consqjar  un  dolor  con  una  ausencia. 

Tolomeo. 
Agradezca ,  señora  , 
el  favor  toda  una  alma  que' te  adora; 
f  pues  como  á  milagro 
suyo,  mí  vida  á  tu  deidad  consagro, 
cree  que  el  morir  sentía  ,  v 


■k 


348- 

no •  Libia  hermosa  f  no  jorque  moría  $ 
aiuo  porgue  sin  verte  ,  ~ 

pagaba  con  dos  vidas  una  muerte, 

Libia.  I 

Responderte  quisiera :  •■  I 

mas  la  Rey  na  ,  que  ocupa  la  ribera  ,  j 

me  echará  menos;  solo  te  prevengo  y 
¿que  ya  falseada  para  Vernos  tengo 
dei  jardín  esta  llave. 

Tolo  meo. 
Si  ser  amor  ladrón  de  casa  sabe  f 
dame  la  llave  ahora  , 
y  apenas  desdoblar  verás,  señora  , 
la  falda  ,  que  arrogó  la  noche  fría  , 
sobre  la  hermosa  variedad  del  día  , 
cuando  entre  en  el  jardín  ,  y  sean  sus  flore* 
los  testigos  no  mas  de  lus  favores , 
siendo  sus  pompas  bellas, 
ai  flore»  para  ti ,  para  mi  estrellas. 
1  Libia. 

Toma  ;  y  advierte  no  entres,  que  quejosa 
de  tí  Sirena  ,  y  de  mi  amor  zelosa  , 
anda,  hasta....  Mas  no  puedo 

proseguir  ;  á  Dios  ,  pues.  i 

Tai  ame  o. 

Confuso  quedo  t 
oye ,  espera. 

Lilia. 
No  faltes  de  esta  parte, 
que  yo  si  ppedo  volveré  á  informarte* 

ESCENA  XIV.  t 

Tolomeo ,  y  piteo  después  Filipo* 

Totumeo. 
Aunque  en  la  pa¿  me  quedo , 


temer  mas  guerra  en- mi)  sentidos  puedo 

que  tienen  mar  y  tierra  f 

pues  incluyen  mas  guerra      • 

que  tierra  y  mar  el  ansia  y  el  cuidado 

del  que  aquí  aborrecida  y  allí  amado  t 

lidia  con  su  deseo , 

siendo  Sirena  y  Libia.... 

Dentro  Filipo. 

¿  Tolomeo  ? 
Tolomeo. 
¡  Cieloj !  ¿  Llamáronme  ? 
Filipo, 

Sí. 
Tolomeo* 
¿Quién'?  ' 

'  ■  •  •  Filipo. 

Un  hombre  que  ha  Helado  (i) 

en  un  baroo'que  ba  volado 
desde  <*)  mar  de  Egipto  aquí; 
y  que  sin  ser  conocido  - 
de  otr.i ,  á  cayo  fin  cubierto 
el  rostro,  lia  tomado  nuerto 
en  sitio  teas  escondido  , 
á  solas  tiene  que  hablaros: 
Seguidme.  ; 

Tolomeo.  • 
¿No  me  diréis 
quien  sois  t 

c f        • «    ''        Ftii/to. 

.-     •   Después  fo. sabréis.  • 
i  '         Totuma*.-  «. 
¿Quién  vio  sucesos  mas  raros f-  4/?. 

Guiad ,  pues. 


(1)      Sale  cubierto  el  rostro. 


\ 


Filipo. 

'   Sí  baré,  ninguno 
me  ba  de  ver  hablar  con  vos. 

ESCENA  XV. 
Decoración  dh  Sbiya. 

Tolomeo. 
Va  estamos  solos  los  dos  f 
y  el  sitio  es  tan  oportuno .    .  , 
que  es  apartada  lugar. 

Filipo. 
Pues  leed  ese  papel ; 
que  en  viendo  lo  que  hay  en  él 
tenemos  mucho  que  hablar. 

Tolomeo. 
Cada  punto ,  cada  instante, 
añadís  al. corazón 
otra  nueva  confusión. 

<    Filipo. 
Aun  mas  quedan  adelante: 
leed  ,  que  mas  duda  os  espera 
por  piadoso  ó  por  cruel. 

,    Tolomeo. 
Del  Te  tr arca  es  el  papel , 

y  dice 

Filipo. 

De  esta  manera  9 
descubriendo  su  intención , 
lo  que  hay  en  .él  he  de  ver, 
para  ver  quá  debo  hacer* 

Tolomeo. 
Notable  es  mi  confusión. 


W 


3U 


Lee.     A  mi  servicio  eonetone  $ 
á  mi  honor  y  á  mi  respeto  %<    t 
que  muerto  yo ,  con  secreto, 
deis  ia  muerte  d  Marlene*     . 
Hombre ,  que  de  asombros  Meno  ' 
traes  en  carta  tan  sucinta  9  » , • . 
del  rejalgar  de  su  tinta 

.confeccionado  el  veneno  i         •■  < 
si  con  ja  racionaba  sido        \> 
la  de  esta  tenaeridad ,     '    ■      .  } 
y  á  examinar  mi  lealtad,       ,. 
de  parte  suya  has  venido,  ,, 
no  solo  *n  lo.  que  Contiene 
mi  honor  contendrá ,  mgs  .pieiTsa  f 
que  he  de  jbovíf  en  defensa 
de  mi  Reyha  Marlene )     >i  . 

,  y  pues  traidor ,  vive  Dios , 
eres  (que  note  encubrieras»    ,' 
el  rostro  r  si  noble  foep*s),   t  ,  * 
y  estamos  solos  los  dos,*  ;1J.    •»> 
te  tengo  de  hacer  pedazos 

,  entre  «bis  brazos. 

fío  harás  9  (t) 

que  yo.no  esperaba  mas,'  a 

para  darte,  rail  abrazos»  *  * 

Tolomeo*    ;. 
Filipo  (  j  qué  es  lo  que  veo?) 
tú  sospechoso  (  ¡-qué  miro-I}- 
ya  con,  mas  causa  me<a4miro % 
con  mas  r*azon  na  ÍOi£f eo.!    ¡ 


(i)     Descúbrese. 

23 


i 


3S2 


Fdípo. 
El  Petrarca  para  lí    s 
con  esta  carta  me  envía  ,      x 
qoe  de  los  dos  solos  fia 
]a  acción  qoe  contiene  en  *sí  2 
muerto  él  ,  nos  manda  ,que  muera 
Mariené;  pero  ya- 
que de  tu  Valor  está  . 
vista  la  fe  verdadera  r 
quédese  e>  caso  encubierto  f 
que  si  él  vive  estarlo  es  bien  ; 
y  si  acaso  muere  ¿  quién  , 
ha  de  obedecer  4  un  muerto  ? 

Totumeo,  •«  ► 
Dices  *bién,*;  pero  «un  es  mucha 
mi  duda  y  sepa  qué?  es  esto: 
¿  quién  en  tal  furor  le  ha  puesto.  I 

Fílip*. 
Si  quieres  saberlo  escucha  : 
Octaviaito  enamorado, 
de  un  retrato  que.*.. 

Tolomeó* 

Detente  „ 
que  por  aquí  viene  gente. 

Fiiipo. 
A  los  dos  nos  ha  importado 
que  no  me  vean »  y  así ,  ■>  ■ 
por  desmentir  la  sospecha  v 
quédate  á  hacer  la  deshecha  , 
y  vente  después  tras  mí , 
que  en  ese  monte  te  espero  y 
y  mil  prodif  ios  sahraj» 


k 


353 


...  .  .  ESCENA  XVI. 

•     •*  ..  .:  ;•'.■.  •    *'  ■■   * 

Tolomeo  y  poco  después  pirene, 

Toiomeo. 
i  Qué  tenga  que  saber  mas -, 
si  ya  de  lo  que  sé  muero? 
Marlene  era  f  y*  torció 
á  los  jardines  el  paso ; 
y  yo  suspenso  deheaso 
'qtie  me»  ha  sucedido »  no 
sé  de  una  acción  tan  cruel    ' 
•*°  Cuantas  eos**  anticipo: 
vuelvo  á  seguir  á  Filipo  f 
volviendo  á  leer  el  papel.  > 

'"''•  Sirena.  *  i   • 

Decidme  si  por  aquf  "'  •  * 

ha  pasado  MaViene , 
que  en  su  seguimiento...*  pero 
si  hubiera  visto  quien  eres, 
ni  aun  esto  te  preguntara , 
••'¿-»-*-;  ^oi*  ño  hablarte ,  por  no  verte. 

Tóioméo. 
Espera,  Sírehé,  aguarda.    ' 

•'••'   •'       '     $ii*e*e>.    '     'u   '  '  ' 
¿  Para  qv¡f'¿  t ¡r>ítoi  aleve  ,    "¡ 
ingrato ¿'ftlso !,  ín'cónrtante  ? - 1 

TofóiBeo.  *  •    J 

Para  qur  s*pa*V  Sirena;'"  n'  í> 
que  los  bbnVbré^fcdmo  yo  y  ^n 
con  principales'  Wufceré»  Vtt 
bien  pueden1  no  sfer  amantes r¡' 
pero  no  el  no  ser  Corteses* j  "  •' 
yo  por  soldado  no  tuve 
inclinación..,.     * 


j 


354 


t 


S ir  ene. 

Gise,  ceas 

tu  voi ,  que  aun  satisf aciones 
de  ti  no  quiero:      *  y ' 

'  '  escena ¡jKvfl^  ;"1 

Dichos  ,  jr  Libia  /¿I  JttftoV 

i .  ••<.,•;!* 

íipia. 

¡  Qué,  escacho !  |mv  cómo 
lo  dado,  pue?  claramente 
'    dice  que  la  satjsface,  ..,....;.• 
la  qnc  dice  que,  no  quiere 
oir  satisfaciones  l    .•,.,.;,.■ 
Tplornto. .   , 

que  aquesta  ocasión  ofrece  [    , 

el  acaso  de,encGn>tranrmrei, 

jor  mí  mismo  fras.de  o^rme¿  atiende. 

S ¡renté 
No  haré*  tal ,.  ,que  cortesana    . 
yo  también  ,nQ.  quiero  hacerte 
e]  pesar  de^qne  ,no  leas  ,f 

-     el  i»a^el,qu^fi  divierte  J  t  .. 
tan  á  solas  ;,y^fs  bíeu, 
(porque  #fW  ^BflVil^ffv|nOTe  , 
mostrando,  f.qVfcnafo^  nftd*  * 
mis  vautfa^flijo^^tofl  > 
q»\W^  >?Í<^«ll?  í*  hallp  % 
que  leyéndole  ^*  4«Í^  .  ? 


C6CENA    XVm.  v    ! 

Tolomqo  y  Libia» 

•  i*..  Libia.  ,-•  K 
¿Qué  papel,  cicles  ,  será*   >.: 

el  que  la  venga  y  la  ofenda  t  '  > 
iTolérmo.  •  'i.h.íj 
Haces  bien  ,  pues  aunque,  «vuelva 
á  leerle  una:  y*  mochas  vectay  4 
tina  y^urachas  volveré  , 
á  dudan  lo  que  contiene*   •■  ■' 

Libia*  > 

¿Mi  sufr  ¡miento ,  qué  aguarda  I 

•  Tolomeo.  ■  ."  °"    ' 
lee.     ^  m¿  servicio  conviene.** 

Libia. 
Suelta  ingrato.  (i) 

:  i  .  Tolomeo -v 

, .  .  .    :  <  é  Qa¿  «  aquesto  f 
:.    Libia. 
Saber. qqé  papej.es  este,     ', 

Tqlpijuo, 
Pues  no  lo  has  de  saber ,,  trtbiaf 

Libia* 
¿Cómo  no? 

Tolomeo. 
Si  es  que  merece 
algo  contigo  mi  honor  v 
ai  me.  estiro  ds*  si  me  quieres, 
débate  yo  la  fineza  '  '    ' 

de  no  verle.        - 

Libia. 
¿Qué  es  no  verle f 


tit 


<( i  J     l*  ote  el  popel. 


556 


si  lo  <\n*  i  decirte  Tdetvo 

es  que  en  el  Jardín  no  entres  9 

de  cuya  puerta  la  llave 

ni  amor  te  e  ai  regó  imprudente  , 

basta  que  ana  sé&a  mia    , 

te  asegure  de  Strene  ,  •     .  ,    , 

porque  quejosa  de  tí  , 

y  de  mí  celosa,  aneje.  .. 

estaren  él  á  deshoras?  -  . 

¿cómo  ,  di  y  ingrato,  pretendes  , 

¿aliándote  con  Ja  misma}    . 

de  quien  recatarte  debes  , 

dándola  satisfaciones  ,  : 

y  diciendola  que  aqueste 

papel  la  venga  de  U.  y   < 

que  sin  mirarle  la.  deje? 

Tolomco.      •■-  ¿ 
Aunque  tienes  rasoftt  ,  Libia  , 
vive  Dios  ,  que  no  la  tienes  : 
el  papel  ni  á  ella  ni  á  tí 
toca,  y  en  fin  no  has  de  ferie. 

Libia» 
He  de  verle. 

Totomeo. 
Mira.-. 

■  ,«  .    Mfim\ 

,      .    Aparta, 
,  ;  (J:; .  ,      Tolomeo.       a,  t 
Considera....  t       .t  4..  0!  ,>*.., 
Libia.  . ,,/,  w.. 
Quita. 
"      -       Toiometoi. 

no  desatento.... 


3S7 

.         Libia. 

iTát   ,t  Ví      , 
Totame*.   .  . 
■•.-•V   ■..  .         .     Sí.     ..       -- 
(       Libia* 
¡}  De.  qo4¿  sueste  ? 

'-.)>    Tolomeo*        ,  , 

De  esta  suerte, 
¿•fría. 
¿Tá  conmigo  tan  grosero?,    . 

Tolomto.  ...   -  * 

¿Tú  conmigo  tan  aleve (  , 

.    Los  dos* 
Suelta  el  papel,     (i) 

3ESCENA  XIX. 

Dichos  x  Mariene. 

Mariene.  . 

¿Qué  papel? 
Tolomeo. 
¡Grave,  nal! 

Libia. 
¡Desdicha  fuerte! 
Tolomeo 
l  Qué  pudiste  engendrar  f  Libia  9 
sino  áspides  y  serpientes  ? 

Libia* 
i  Qué  mas  áspides  que  selos  ? 

Mariene. 
¿  Pues  qué  atrevimiento  es  este  ? 
¿así  mi  esplendor  se  agravia?    , 
¿  así  mi  sombra  se  ofende  ? 

( i  )     Parten  entre  los  dos  el  papel. 


t 


tii 


l  mi  decoro  se  atontara  f 

y  mi  respeto  se  pierde  ? 

¿En  mi  casa,  y  á  mis  ojos, 

vuestras  acciones  se  atreven 

á  profanar  un  pafacio , 

templo  de  honor  ,  tal;»  q«  á  verle 

el  sol,  no  entrara  álno  entrar 

crin  disculpa  de  que  viene 

á  darle  la  luz  ,*  qué  el  sol 

aun  no  entrara 'de  otra  suerte  ? 

Dame  esa  parte  tá ,  y  tú 

esotra  ,  de  ellas  conviene 

informar  á  mi  recato. 

Tolomeo* 
Que  es  una  vívora  advierte  , 
que  dividida  en  mitades 
con  cualquier  estremo  muerde. 

Mariene 
Yete  til  |  Libia ,  de  aquí. 

Libia* 
Piedad  es  el  que  me  ausente  ,      ap> 
por  no  verla  tan  airada.'  * 

ESCENA    XX. 

•  Tolomco  j  MátUnc^ 

'    Mariene» 
JTá  también  ,  que*  aguardas?  vete. 

Tolomeo. 
Si  por  ventura  han  podido 
mis  servicios  merecerte     • 
*  sola  una  merced  ,  que  sea 
capaz  de  muchas  mercedes , 
rompe  ese  papel,  y  no 
le  leas ,  señora  ;  atiende  , 


3«* 
que  cnanto  por  verle*  ahora  ,    "*^ 
darás  después  por  no  verle.        v] 

Mar  teñe» 
¿Qué  deseo  de  Moger 
se  rindió  al  inconveniente  ? 

Tólomeó.  '' 
El  qae  advertido  de  mí 
sepa  que  á  fin  diferente 
de  que  llegase  á  tus  manos  i 
está  inficionado  ese 
papel  de  un  mortal  veneno        ' 
tan  rigoroso  y  tan  fuerte ,' 
que  matará  á  quien  le  mire ; 
que  es  la  causa  porque  el  leerle 
á  Libia  le  defendía  , 
viendo  que  entre  estos  laureles  - 
era  ella  quien  le  había  hallado  ,  , 

no  siendo  ella  á  quien  previene 
matar  mi.fé  en  tu  servicio , 
que  hay  en  él  algún  aleve  ,    • 
con  quien  se  escribe  Otíta yiano  \ 
y  as/,  que  de  tí  le  eches , 
con  lágrimas  á  tus  pies  f 
te  suplico  humildemente. 

Marienq. 
Quien  advierte  de  un  peligro) 
nunca  suplicando  advierte  ,' 
porque  el  beneficio  manda  , 
y  no  ruega ;  luego  mientes 
que  si  estos  es t remos  haces        v 
cuando  me  acuerdas  los  bienes  9 
l  qué  dejas  que  hacer ,  que  dejas 
cuando  los  males  acuerdes? 
Letra  del  Tetrarca  es , 
con  que  ya  se  desvanece 


J 


360 


¡K 


el  que  fuese  fnyo  ,  y  ya  , 
que  viva  ó  muera  be  de  leerla. 

Tolomeo* 
;Ay  Infeliz  de  ti?        ap. 

Mariene, 
Dice  aparte  de  esta  suerte : 
Muerte  es  la  primer  razón, 
que  he  hallado ,  honor  contiene 
esta,  Mariene  aquí 
se  escribe:  ¡Cielos,  valedme, 
que  dice  mucho  en  tres  voces 
Mariene  ,  honor  y  muerte ! 
Secreto  aquí  9  aquí  respeto, 
servicio  aquí,  aquí  conviene 
y  aquí ,  muerto  jo  ,  prosigue : 
¿mas  qué  dudo?  ya  me  advierten 
los  dobleces  del  papel 
adonde  están  los  dobleces  , 
llamándose  unos  á  otros,     (i) 
Sé,  ó  prado,  lámina  verde» 
en  que  ajnstándolos  lea ; 
A  mi  servicio  conviene  9 
d  mi  honor  y  á  mi  respeto , 
que  muerto  yo  \  hados  crueles  ! 
deis  \  con  qué  temor  respiro ! 
deis  la  muerte  á  Mariene* 
Bien  dijiste  que  era  fiero 
tósigo  y  veneno  fuerte  ,    . 
puesto  que  si  nov  me  mata  , 
por  lo  menos  lo  pretende» 
¿  Quién  este  papel  te  dio  f 

Tolomeo. 
Filipo,  que  con  él  viene 

(i)     Pone  los  pedazos  en  el  suelo  y  júntalos* 


i  de  Egipto ;  per6  señora ,  - 
estar  satisfecha  puedes  i 

de  su{  lealtad  y  la  mía  t  , 
pues  loa  dos,.. 

,  Mariene* 

Otra  vea  mientes , 
que  ni  é\  ni  tú  sois  leales  , 
pues  cobardes,  pues  eleves , 
ó  viva  o  muera  f  no  sois 
como  debéis  y  obedientes 
al. precepto  de  mi  esposo: 
¿quién  mas  es. cómplice  en  este 
secreto? 

Tolomeo.    . 
Nadie ,  señora. 
Murióte»     , 
Pues  mira  lo  que. fe  advierte 
mi  voz;  que  ninguno  sepa , 
ni  FiJipo  f  que  á  entenderle 
llegué  yo. 

TcA&mco*  > 
.Un  marmol. aeré, 

ESCENA  XXI. 

Mar  Une. 

]0  infelja  ana  y  mil  veces 

la  que  se  ve  aborrecida 
de  la  cosa  que  mas  quiere  l 
¿En  qué ,  amado  esposo  mío  , 
en  q«é  mi  vida  te  .ofende  , 
que  te- pesa  de  que  viva 
la  que  de  adorarte,  muere  ? 
¿Quando  yo  tu  libertad 
trato |  jr  á  Imperios  de  nieve 


i 


Sé* 


doySemfrtjtnís  de  ondas,       l  ' 
Babilonias  de  bajeles  ;• 
cuando  en  itii  i  fri  aginados  f  * 
después  qne  vives  ausente  y  -       ; 
adorando  estoy  <«  sombra , 
y  á  mis  ajas  aparente  9 
por  burlar  mi  ¡tontas}*  % 
abracé  el  aire  mil  .veces  ;  ' 

tú  en  una  osen  na  prtajon  , 
funesto  misero  alvergue  ¿  •  *  l  -  ■  * 
en  vez  de  abrasar  mi  imagen;  9 
estar  traz*áá>  rai  muerte  ?      ' 
¿  O  te  quiero »  ó  no  i  ¿  Si  no  • 
te  quiero  9  ¿  no»es  mas  decente 
á  un  noble ,  que  de  muger 
que.  le  olvida  «o  se  acuerde  ? 
Y  si  te  quiero  ,*¿  p<w  <]oé  ,         * 
después  de  muerto*  pretendes 
qne  muera?  ¿No  sabré  yo» 
sin  mandarlo  obedecerte? 
I  Luego  olvidando  ¡ay  de  mí ! 
6  queriendo, -de -un*  suerte 
ofendes  tu  vanidad  9 
ó  mi  gratitud  ofendes  ?» 
Si  del  mundo  el  mayor  Monstruo 
me  está  amenazando  en  ese 
encuadernado  volumen  9    '  •"  •  '■  ■'  > 
mentira  «cui  de  fas  gentes  f;    <*' 
y  tú  me  m-afta*  ;  será 
bien  decirse.de  ti  que  eres.    '•  '.' 
el  mayor  Monáfruo  det' mundo;* 
¡Mas  ay !  qUe  enllégandio  á  este 
término  ,  n<y  sé  que  nuevo  -   •  "' 
espíritu  me  enfurece ;     .-•«.?* 
y  pues  me  tocan  ai  alma  . 


afectos  tan  diferrotes ,.  - 
de  los  mío*. ,  plegué  díñelo,, 
fementido  esposo  alero  f>   .s 
que  el  socorro  que  «te  embio      > 
nunca  á  .tomar  puerto  llegue: 
entre  laí  SifiWfr  jt.Scila»  -   / 

de  Egi  pto ,  á  p¿qu«  le  echen  •     '  < 
lo^aóaóbradofrrOfnbqtes  ♦ 
loa  contrastados  .vaivenes  -. 
de  las;ráfaga#ftde,£oío  f 
ó  los  sepulcro*  JerTeiis? 
No  solo>*».tu>  Ubeatad 
milite >Ber*.ó>:Atiefte>'..     '.    :  * 
irrite  á  Octaviado*  <fue  -        •  «* 
apresurando  tú  ...  4  teníe 
lengua  l  no  su  muefcte.  diga»  9   * ». 
nasta  queéldiga-tafcxi  maertq*  ■' 
que- una.  eos*  #&,*£?>  iqnlen  aoyv 
y  otra  ofanctogme,  éU  \lO  plefen* 
al  cielo!  que  vi$U**¿oia>.  >  <>.  »«;* 
tan  en  su  íayov  navegue»    ;  -,.i',t 
la  armada  ida. iUf  socorro,   •    •  / 
<¡ue  sobre  el  .puerto  deMénfis.  > 
en  tan  grande, es  trecho  ponad- 
la confusión  .da  sus- gentes,, 
que  temerosa  «de  que  • 
<  las  roia&  sus,  niqcos  entren  .    .?• 
¿.sangre  y  fuego,  á  parlidou  >v 
reducidas  ;.m^  le»  ten  tregüen    •■'» 
-vivo  f  para  ¡juera .fn¿s.J>ra*ot...<. 
¿Pero  qué  digo?  suspende 
lengua ,  otra  vea  el  acento  > 
sino  es  que  decir  intentes  , 
á  mis  brazos,  para  que 
Vengativa  «  impaciente 


3#3 


36*4 


cu  ellos  le  baga  pedasos : 
¡  ay  de  raí!  ¡qué  fácilmente 
de  un  estrrmoá  otro  se  pasan 
en  afectos  de  tqogere» 
las  lástimas  a  ser  iras , 
y  los  favores  desdenes  !       •   -  •  - 
De  maceres  dije ;  pero 
dige  mal ,  qa«  etduirse  deben  ' 
las  mogeres  como  yo 
de  lo  coman  de  Jai  leyes  ; 
y  pues  piadosas  en  una 
parte  9  y  en  otra  crueles 
mis  ansias  lidian  ,  en  tanto      "i 
tropel  como  me  acomete 
de  dividido*  afectos  > 
i  de  encontrados  pareceres 
y  opuestas  obligaciones ; 
4¿m*  e!  cíete  fadnstria  r  dense 
anecio. el  hado,  pora  qoe 
tanto  unas  como  otras  temple*  *¿ 
qae  como  espeso  ofendida , 
y  como  Reyna  prudente , ' 
cumpla  con  el  mando,  y  cumpla 
coamigo  f  coa  lid  o  á  ver  lleguen    * 
cielo  t  sol  y  lona  y  estrellas  , 
astros  y  signos  celestes ,  ♦     v 

montes ,  mares  t  troncos ,  plantas  t 
hombres ,  tierras ,  aves  ,  peces ^ 
qoe  como  Reyn*  perdone , 
y  como  mnger  me  vengar. 


46* 


ACTO  TERCERO. 

ESCENA  PRIMERA. 
Decoración  db  Mabik a. 

Suenan  instrumentos  de  música  en  una  parte  9  y  en 
habiendo  cantado ,  suenan  cajas  destempladas  ;  y 
después  de.  los  primeros  versos ,  salen  Octavia- 
,  no,  el  Capitán  y  Soldados» 

Unos*  •  . 
Viva  Octavia  no. 

Música. 

FU>a>  * 

Unos. 

Y  en  los  campos  de  Oriente*..,.. 

Música, 

Y  en  los  campos  de  Oriente*.*» 

Unos.     ~V: 
Ciñan  su  augusta  trente..... 

Música. 
Ciñan  su  augusta  frente*.,*.* 

Unos. 
Sacro  el  laurel ,  pacifica  la  oliva.         (  i ) 

-  Dentro  Mariene* 
La  aclamación  festiva 
convertida  en  lamento 9 
de  mísera  contento  9 
diga  en  mi  ^ena  fiera  , 
que  muera  yo  dpnde  mi  esposo  muera.' 

(  i  )     Tocan  las  cajas  destempladas* 


J 


366 

Dentro  otros, 

~     "A  tierra  i  tierra.  Salva. 

Capitán  dentro. 
H     Marche 
inspirado  el  clarín ,  herido  el  parche , 
á  la  ciudad *en  orden  nuestra  gente. 

Ociada  no. 
Salve  ,  ó  td  Metrópoli  de  Oriente  v 
Jerusalen  divina.  . 

Salve  t  ó  tú  Emperatriz  de  Palestina  , 
*  .y  del.  Asia  señora 4 
"*  "que  en  el  robado,  imperio  del  Aurora 
con  luciente  voz  muda 
el  sol  en  so  primera  edad  saluda. 
Salve  otra  vez,  y  admite 
la  Cesar  ,  cuyo  nombre,  que  compite 
al  tiempo  y  al  olvido ,  ' 

dos  veces  al  laurel  restituido  , 
pisa  tu  arena ;  una 
en  favor  del  poder  y  la  fortuna  ; 
y  otra  ,  po*  mas.  blasones  , 
á  pesar  de  traidoras  sediciones ; 
pnes  cuando  presumías  y 
que  del  romano  yugo  sacudías 
la  cerviz,  con  haber  hoy  enviado*  '  > 
á  Aristóbolo  tanto  leño  atado 
4  librar  tu  Tetrarca : 
yo  como  en  fin  •  caudillo  de  Ja  parca  f 
habiéndole  encontrado  en  el  camino  9 
y  á  fuerza  .del  destino 
dejándole  su  armada   , 
en  las  costas  de  Jafa  derrotada  r 
llego  i  ti  i  donde  intento, 

-  .    qo#  el  primer  escarmiento 
que  tu  muralla  vea  , 


N        361 
de  tn  ?etrarca  la  cabeza  sea  ;  ♦   '•  »  -    , 

á  cuy 9  fin  f  por  mas.  infeliz  suerte.,.  .   , 

su  muerte  dilaté,  pp^que  su  caaerU 
le  d^  terror  .nías  fiero  9  * 

y  mas  el  filo  de  este  infausto  acero  , 
desagraviando  d«  camino  aquella 
que  ofendió  sóbela  na  acidad  bella» 
De  ese ,  pues,  bagel- donde*  ....  > 

mas  le  sepulta  el.  buque,  que  le  esconde ,  ..¿ 
á  tierra  le  sacad  coji  el  criado  , 
que  también  por  habeeme  i  mí.  engaSado  i 
y  que  él  era  Arislóbuta  fingido,»  .    ..-, .  t    *  -, 
ha  de  morir.  (  i  )  ¿ Mas. qué  ¡confuso  r»idd> 
de  músicas  en  una      k  .  \^*t"i       t        •    ■»  ::»  ' 
partera*;  *«túcba.?  ^  Quién,  en  otra  alguna  .: 
«edición  cajas  toca  destempladas , 
repitiendo  encongada?,  \P'| 
allí  con  voz  altiva , 

yilkt  XJteiaviuno  ,*  viva'.      '  '        ' 

.   '-,  -  c   .        ^labiarm.    '       ;     *1^  *    *; 

Y  allí  con  Vóz^sevierV. '..«'  ^v  % 
Maritné. 

T  muera  yo  donde  m*  esporo!  jfluelNur  ,*vf 
$*     , -u  * '      ,    Capitán,  v       f  ,  •■ ->ur  t  .-i 

De  la  ciudad  abvrf^»  .  .-■;•-.     ■•  .  *•  »,*  »•  *t 
.  ¿  tu  aalvas^iacJWvjf.-mcé  dot  puertea*;  •  y    ^ 

que  de  aquí  se  divisáis  V  * 

y  variaa.4le<nioka«hB)mii  ai  otro  amiasjfefr'f 

que  poc  uná^eiJloaxHbgres  el  íestiyo»  i,   n ,  ,u 

Tulgo ,  aclamando  tu  renionvbrc  altivo*  y¿»é 

á  recibirte  sale;    «i-.r  'W\, 

y  ptnqte  ¿Leíanlo  al  fregocijo  iguale, 

*  i  )     Aun  lado  cajas  ,jr  d.tíWfl&Vh,  >j\(l 
"24 


j 


363 

por  otra  ,  negro*  lulos  arrastrando  f 

y  haciendo  las  rouge  res» nuevo  bando, 

salen  tamban  diciendo, 

en  ambos  coros  uno  y  otro  estruendo, 
Todos  y  Música. 

P'iva  Octaviano  ,  viva  f 

y  en  los  campos  de  Oriente 

ciñan  su  augusta  frente 

Sacro  el  laurel ,  pacifica  ta  oliva* 
Marica*. 

La  aclamación  festiva  f 
,  convertida  en  lamento 

«V*  misero  co  riten  to,  * 

diga  de  otra  manera , 
_    qnetiuíera  yo  dónde  mi  esposo  ttuerav  • 

•   j  •  i  •  • »  i 

ESCENA  II. 

Dichos  f  y  Filipo  con  una  fuente  y  en  ella  unas  llau$t 
y  Toiomeo  con  otra  y  en  ella  un  laurel ;  y  par.  la 
atraparte  Mariene y  damaf^  vestidas  de  lutof 
con  un  vela  en  el  rastro*         ,       , 

Teiomeé. 
Pnw  laliddadoflr* tiene-  ■/    -  •  .«.  .  Y 

mas  medio,  aunque  la, atenta  Marlene, 
ftierafi  es  rendirnos:  llega  *    •  '  **•' 

y  to  las -Ha  vea  y  él  4**1*1  e«tr«gav  .-.' 

Filépau  i'     -  r        •      ♦<   . 
En  tai**  leías  del  frn  «fe:  pétoas.tantas  , 
Jei*osalei*r*eísor  f  bv^aé, fas  plan taa  ; 
*••  Uavesf'rinder  .  -  .*  ni  *     .    . 

Tótomeo*  r»'         «   i    • 

*    '<••  ,      ii ;•  ,c-  JTiaü  lasjftl  y  oliva*    • 

Dk¡e*aV*<r*e*».> 

1 . 


36» 

Tódeá. 
Octavíano  viva 
Marlene  y  Música. 
'A  tus  pies  infelice 
llega  también  quien  afligida  dice , 
bien  que  en  cláusula  menos  lisonjera  y 
que  muera  jo  dónde  mi  esposo  muera* 

Gctaviano* 
En  estreñios  tan  raros  t 
que  agradeceros  tengo  y  «jue  estimaros 
á  vosotros 7  mas  no  que  agradeceros  ,       ' 
ni  estiraros  á  y  os  t  Helando  á  veros 
>     con  seüas  tan  funestas  , 

de  mis  aplausos  perturbar  las  fiesta*. 
Marcbe  el  campo.  (  t  ) 

i  r  :'     f     Marlene. 

Primero 
toe  has  de  escuchar.         :>:- 
Oclaviapó. 

>  Si  enternecer  no  espero 

ais  iras  i  l  para  qué  con  ellas  luchas  f       , 

N  Mariene.. ,  .         y 
¿Para  qué  tii  gobiernas  si  no  escuchas? 

Octoviatio.    „  .     ♦     . 

.  Dices  hien  ,  oirte  quiero  *  «ñas  no  ignoro 
que  tampoco  es  respeto  ni  .decoro,,;  „      ;  ■  :* 
que  tapada  escuchart«vhaya ,  sin  verte, 

;.v.  '.  Matieju*    m  \n 

También  tu  dices  bien  ,r  ahora  advierte.      (a) 

.    .   ;i  «T'-J-  OttOViikW-  ' 
j Cielos ,  qué  es  lo  que  veo!; •  r         aps    '  ,  , 
l  de  cuándo  acá  toitt&  tiwrpo  el  doseo  ? 

»■  iOJiufa  eaJ1  j      ■■""•<,>'        "    ""  i      "■  » 

(i)     Vuelve  la  espalda  y  señalé  detiene, 

(  a  )     gui¿*«  45/  i*/o.  ^.^      ,     I  .   .     .       ,)  ^ 


Mariene. 
¿Cielos  \  que'es  lo  que  miro  ?  ^  ap. 

Todo  «-1  aliento  al  corazón  retiro 
al  verme  en  su  presencia  descubierta. 

Orlaviano. 
¿No  es  esta  la  beldad  que  adoré  muerta  ?     qp. 

Suspensa  al  verle  quedo.  ap* 

Octavtano.         > 
Al  mirarla  ni  creer  ni  dodar  puedo,         ap. 

-Tolamco.  * 

¿Qué  es  tremo  es  este.?  ¡ay  infelie!  sin  dula  0/1* 
viene  i  que  el  Cesar  á  «vengarla  acuda 
de  aquel  rigor.  $  N<*  basta  ,  pena  raía',  . 
prosa  á  Libia  tener  desde  aquel  día , 
sino  querer  añora 
descubrir  el  secreto  ?  ■'»•'„?  i 

Fi7¿>». 
f  •  Pues  ignora         újp. 

£  qué  fue  mi  Venida  t  *'  S  "  • 

no  hay  que  temer »  segura  está  mi  vida; 

r »  Martvne.    -  :,<     ■  -;  •'•   '    •- 

Mal  cobarde  me  atienen. '  ap* 

«         -  {rOctaviano.  .  c  " 

Mal  osado  me  anithd  *dp."'      "' 

t'í  ••  .-'        ,    Maritne¿  -r  ■',-* 

Mas ,  ¿  por  qué  me  reprimo  ?  ap. 

(   )       --'"  r  '  OHáMano.  •'•'»   'í  r.-;.¡  .1  T 

¿Pero  porqué  lo  ^tte*  h«  de  estimar  siento  ?   ap. 
Muger  ¿qué  quieren?  '•>  vrr  ,p  i   ,í; 

*  Marlene.'  ■  >¿  o.'-   - ¡« 

«*~ Que  me -estés  atefttOk        •    — 

-*  ' Ottávtuno.  ^  »*  ■>  -*»  *     i  »  ) 
"YQ**  aguardas,  pues?  ^'   •  Va  m^'»»»^     (  •„  ) 


.*.♦.  '  Motiene.    «  .  }f  • . 

.?»•»•»  r  .-í  Escucha.     . 

.  Mucha  es,  jai  turbación*  u». 

,  ■•  Octaviaría* 

Mi  pena  es  jaancna,       «rn. 
paca  la  muerta  ceniza  e¿  viy^  llama.,        / 
«v. ; ...  Mdriane*  '    H  ,.    * 

ínclito  Qéa?ar  ,  $uya  heroica  fama... 

ESCENA  lir.  '.    ' 

Dichos ,  soldado*  con  el  Tetnarca y  Poiidoro. 

->>  ;i;  ,  .  ,  Saldados.    ,         ,  ■ 

-    Con  el  criado  aauí  el-  Te.  icárea  viene*  ..íá.;.* 
'....-•  Te¿i:mcca> .  •  .,'  ■  i 

I  Qué  jqíi*q  !)¿cod  el  César  IVJariene  ?  „:  aj*, 
¿  pues. no  .bascaba  ; cielos!   ,  < 

ir  á  moríc  ,  ¿too,  á  morir  jde  tejoa? 
t/  ,1.;  .  Pulidor  o  <  ,     . 

¿Qué  son  solas?  ¡pluguiera    . .: 
á  Paco  para^mí  aelos  hubiera  , 
y  no  hubiera  un  garrote 
que  anda  de.sde  la  nuez  ha^sta,  el  cogote  fJ. y 
ya  haciéndome  cosquillas, !, 
Octaviaría. 

Su  castiga    -i 
<  .  diré*  después :  prosigue.  / 

Mariene.    .,  ....  %i , 

Ya  prosigo,      .  n 
ínclito  César,  cuya  heroica  fema     ,  r 

al  alcázar  se  el«*va  de  la  luoa>,,   .,  it 

cuando'con  labios  de  metal  te  adama  ¡  ,,  , 
su  Júpiter  ,. y  dios  de.  la  ¿pr^ona  ;      r    .     ¡ 
ai  cuando  ¿\  £  relámpagos  $e  inflama»  . 
.  el  Iría;  le  sereba  ,  en  mi  ira  por  tu  o* 
suerU,iWeoeres^  JúpjUr^^yea!    .,     ; 


i 


372 

y  el  Iris  de  mi  pas  ta  laá/rel  sea. 

Y  pm»a  tu  nombre  en  láminas  se  escribe  9 
que  el  tiempo  que  mas  vuelaVífué'nfa*  corre  , 
ni  coi*  las  torpe»  alas  le  derribe, 
ni  con  las  pfeiitas   trágicas  le  borre : 
vive  piadoso  ^generoso  vive'V  ,""'f' 
y  del  sol  coronada  la  alta  torre 
"   que  al  águila  de^Roraa  le  dio  riidW  '  '     ■    - 
vevá*  triunfar  fy  tjempo  Ji  del  olvido. 

Yo  soy  la  desdichada  Mar  ¡ene  , 
"dijera  bien  lavdes(ficnáda  esposa*    '  x 

de  ese  contra  quien  ya  tu  ceilo  tiene 
blandida  la  cuchilla  Irigoroi*  ;'  !"  •  >  >  v 

si  una  línea  de  purpsjra  detiene 
M  mas  noble  animal  la  mas  furiosa 
acción  ,  deten  tá  el  paso  á  tus  enojes  , 
pues  son  líáifeias''d<*,,pórpüra,TOÍsl  ttjoa** 

Mas  |ay1  que  en  vano- á  tus  piedades  pide 
)a  vida  que  has  de  darme  geneVoso-j 
que  eres  Rey  %  y  mis  de  ser  €tttopa<*ecido ; 
que  eres  valiente  9  y  has  de  ster  píado'sof 
que*  eres  lióme,'  f  has  de  ser-  agradecida; 
que  eres  tá ,  y  has  de  ser  tan  Victofiosor  * 
que  conozcas ,    quealcansá  menos  gloria 
el  «fue  con  Sangre  mancha  la  victoria. 

No,  pues ,  el  que  te  esper*  tíwéfcó  asiento 
construyas  en  cadalso-  duro  y  fuerte, 
no  el  SPHiirTa* daí-ro  en  triste  monumento, 
no  el  faustfo-*u  Ceremonias  de  la  muerte, 
no  la  música '¿ri  'mísero*  lamento  , 
no  la 'felicidad  eít  triste  suerte ,' 
la  gala  en  InWí  en  pena  la'Játegriá  f- 
no  aaabe'mÜÍ  Can  venturoso 'día. 

Entra!  tHutf&hdo  ,   pero  no J  venciendo  ¿ 
entra  ¥entiendo,|iero  iro  ^éág^Udaí1 


373 
que  mas  aplauso  ha»  da  ganar  y  entiendo  , 
perdonando*  .señor,  que  castigando  j 
halle  piedad  la  que  \\<yrá  pidiendo,  ;, 
baile  piedad  la  que  pidió, lloran doj  <r 
y  pues  son  dos,  siquiera  .una  reciba  > 
ó  que  yo  muera »  ó.  que  mi  esposo  viva.' 
•    Tetraree. 

I  Quién  dé  dos  muertes  sitiada  -'  ap. 

vio  su  vida  tan  á  un  tiempo,    * 

qué  negada  ó  concedida  , 

de  cualquiera  suerte  muero?  ^ 

,      Pólidoro. 
¡Hay  tal  Infamia  !  ¡  que  llore 
por  su  marido,  pudiendo 
llorar  por  mí  9  que  á  estas  horas 
mas  de  sentenciado  tengo 
la  cara  que  él  í  ^ 

Octavian^  • 

.     Bien  se  deja  ,      *p. 
Ver,  que.  Ari&tóbolo  al  trueco   . 
del  criado ,  y :  v¿r  que  estaba     .,' 
en  el  retrato  suspenso, 
fingiendo  ser  muerta  ,  quiso      > 
desvanecer  rota  afectos ; 
por  mi*  por  ella. y. por  ¿1 
importa  que  satisfecho 
viva  i  pu*«  ba.de. vivir*  :         ^ 

l  Adonde  bailará  el  ingenio  .  .  „t 
disculpas  para  un  marido»  „{i 
que  es  la  plática  del  riesgo*  ,„., 
que  aun  satisfaciendo  agravia,? 
Mas  no  hablando  con  él «  puedo 
darle  á  él  la  salís  loción.  ,  ; 
Aiaad9  señora  t  del  aueloj     ^  :¡ 


i 


3Í4 


'    y 'tfanqise  és  v«rá*é  qvt  lo  atento  ,* 
enciende  «1  fiewr  de  «¡roa 
el  gasto  de  obleeras: 
mas  no  me  lo  agradezcáis , 
q««  si  una  vida  os  ofrezco* 

..'vm  porque  xvs  debo°uha  vtdii  ¿      •  ••    > 

fiin  saber  á  q«ienila  debo, 
•tu*  Veratro  hermano  ,  entre  o*r*s  Joyas  , 
pe  lidió  esta  retro  te.  >vaastro  ,  -    r 
•  y  sin  saber  cuyo  fuese,        ,  <    :> 
de  ifua  bago  testigo  al  Cielo,      u 
y  á  cuantos  dioses  adoro  ; 
aol$  por  ser  tan  perfecto  ,       ... 
mandé  á  ün  pintor  que  me  hiciese 
de  él  una  imagen  d«  Venus :      ] 
¿sta ,  pues  .  cojls.t  Huida 
ya  una  vez  en  de^ad  9  viendo    . 
un  peligro  en  que  me  hallaba  / 
'   (decir  cual  Fi^se^o  quiero  , 
'••      porque  oWídaré  el  perdón  , 
ai  Ael  delito  me  acuerdo) 
de  él  me.  Kbrdx,  áe  manera,        > 
que  aunque  Venus  fuese  el  dueño 
del  ácáso ,  fuisteis- v»s  t 

del  acaso  el  instrumento;  ■  » 
y  así  eu  términos  pagando  :  r 
el  haberos' intet*pu*slo.  »•  •—  l  _ 
entre  otro  acerO'y  mi  vida  j ;  ,;-' 
be  deshacer  con  vos  lo  m<*sm*  . 
boy  que  os  advierto  interpuesta 
entre -otra  vida  y  mi  acero*  * 
"tfiva  vuestro  espeso,  y  no  '-.' 
acámente  v*va  ^  'pero 
á  su  honor  restituido  j  i% 

ana  vida  me  pedia $  <  '     ;'v 


97S 

y  poty,»*  de  jar  i-rita*** 
vuestros  ojos  de  que  lloren 
otra  vea ,  ni  oiros  ni  veros 
en  mi  vida  (  la  voz  miente ,  ap, 

-  -gn  u  el  tlm**)  perdón  can  cedo 
á  y,ue&iro.  hermano  ,  y  A  cuautot 
en  este  levantamiento  ,    . 
cómplices. fueron  ;  y  en  &n  %, 
porque  ni  al  llanto,  ni, al. ruego 
quede- nada  que  pedirme* 

aun  vuestro  retrajo  o*  .vuelvo* 
quoriSQ  es  decoro  ser  mió  %t 
el  día  qup'ré  que.es  muestro  $     . 
tomad  ,  pues.         JLktede* .         > 
«*  ,.,(...     Mariene. ,     ,,  .         •> 
,  ..        VivAs.tas.  siglos 
'del  FénUí  .  ,    .  ■ 

Tttraro* 
t  t  '   r  -  .2  X  tan  eternos/ .  , 
como  deseará  esta  vida «. 
que  ya^cnmo.luya  ofwtG$*9* 
porgue, «l  ser  dádiva  t,uya 
-r Ja  cerca  el  «mereciinieato f 
á  Mariene,  .      •     n  •    •  • 
'    •}      Mariene»  j  ... 

Felice  , 
dulce  tifoso  9  amado  dueña  v 
el  dia  que  vuelvo  á  ve**te 
en  mis  brazos  :  quien  en  ellos  ; 
*  .mas*  no  (  que  el  de  mi  decoro  áp» 

no  es  el  de  mi  sea  ti  miento. 

.  •  ■••  Tcirarca. 
I  Qué*  dichosos  desengaños  ! 
haber  sáfenlo  el  primer* 
ti  acaso  (1*1  rt trato , 


j 


¿16 


y  el  segando  bailar  acérelo 
aquel  rigor  que  fié  ' 

de  Filipo  y  Tolomeo. 
Tolonuo. 
I  Ya  qué"  tengo  de  temer  ?  Op» 

pues  anda  tan  fina  ,  es  cierto  9 
que  tener  quiere  su  enojo*  ' 
en  la  cárcel  del  silencio ; 
y  luego  dirán  que  no  hay 
tnuger  4|«e  guarde  secreto : 
oaf  me  suceda u  bien 
los  medios  que  leogo  puesto* 
en  I*  Ifbertád  de  Libia  9 
de  que  avisada  la  tengo'  * 
con  el  mismo  que  esta  noche 
ha  de  abrir  el  aposento  , 
para  que  pueda  librarla* 

Qctapiano, 
Mi  tienda  armad ,  que  no  quiero 
entrar  en  Jerosaleo 
basta. que  el  recibimiento 
de  imperial  triunfo  aperciba. 
Hermoso  prodigio  b*llo,  op* 

l  qué  me  sirve  haberte  -hallado  $ 
ai  cuando  te  hallo  te  pierdo  ? 

Marine. 
Hasta  dejarle  en  so  tiendo 
vamos  todos. 

Tttrarca. 

Yo  el  primero » 
como  el  mas  interesado, 
seré  quien  vaya  diciendo  :  f 

Viva  Octaviano. 

Todos  y  Música. 
Fie*.  . 


m 


y  en  lás.úampoñ  4e<9ri¿nt* 
ciñan  su  augusta  frente 
sa$ro  de  laurel ,  patifica  la  oliva  f 
!  fiva  (ktaviano ,  twa- 

\     ESCENA.  IV, 

Pólidoro  y  Soldados» 

Soldado  i . 
¿  Parqué  yo»  ,  paes»  perdonada  .. 
estáis  ,  *jj  su  segnipiiento 
no  «ais,  dándole» «o*  todos,  . 
las  gracia*  t 

PoUdoro* 
,  Porque  ao  quiero  / 

qne,tt»  gran  superchería 
como  conmigo  se  ha  hecho  y   , 
no  ae  hiciera  «vive  Apolo  , 
tío  digo  yo  con  un  «Agro  , 
porp  ni  con  nn  capoq  , 
que  aun  es  niuchisino  menos,   .« 
cuanto  va  desde  ser  hombre  , 
á  solp  em pesar  á  serlo* 

Soldado  i*  » 

¿  Qué  superchcria,  ? 
•¡'.    ,  Poiidaro. 

¿No  fuisteis  «* 
vos  quien  roe  difo  ,.  vinieudp  ,- 
que  venia  á  ser  .ahorcado? 

Soldado  i . 
Yo  lo  dije, 

Pólidoro, 
l  Pues  que  es  dcJlo? 
¿  es  bien  hacerme  caer 
en» falta  con  todo  un  pueblo, 


J 


378 


•que  estaba  ya  convidado  f 
¿  es  juego  de  niños  esto  ? 

*  t  venga  usteü  ,  á  ser  ahórcate  ¡ 
yaya  usted  9  que  ya  está  absueltio  f 
¿Qué  ha  de  decirse  de  mí, 
sino  que  soy  uto  grosero  , 
y  no  val^o  cuatro  cuartos 
para  a  torca  ti  o  ?  Y  fuera  de  esto , 
¿  Qué  ahorcado  no  es  como  un  pino 
de*  oro  9  cu  clcOmun  la  atento'  '•. 
de  las  viejas  que  le  lloran  ?  *   *   » 

'  ¿Está  por  ve*  tara  el  tiempo    " 
para  no  ser  pino  de  oro  -'t 

siquiera  por  no  momento  ? 
jJLo  costé'  que  ¿tenia  hecha 
de  mas  de  cuatuo  mil  geatoaV  '•' 
para  escoger  lbs  que  bahía  ♦ 

de  ir  por  el  c&nthio  haciendo»    r 
qué  be  de  hacer  della?  y  déspoto 
¿qué  dirán  de  roí  los  ciegos  , 
que  la  jácara  tendrán 
escrita  ya  de  mis  hechos  ? 
Ello  he  de  morir  ahorcado  9        ' 
que  mi  honra -es  lo  primero: 
y  así ,  ustedes  no  se  cansen  ,    •  , 

-  que  aunque  les  pese  he  de  hacerlo» 
Pues  luego  es  bobo  el  delito ; 
sino  ,  oid  al  pregonero. 
Esta  es  la  juieicia  á  esta  hombro 
por  Príncipe  contrahecho. 

Soldado  i. 
Ande  el'  menguado. 

Soldado  a. 

<   Este  es.  loco»  j 


PóUdóro.     ' 
Habimos  bien  ,  caballeros  9 
que  po  es  Joco ,  ni  menguado 
quien  tiene  roí  •entendimiento» 

t  Soldado  i. 

Dejarle  para  quien  es. 
Polidoro, 
Han  de  ahorcarme ,  6  sobre  eito 
roe  mataré  con  mi  padre  9 
con  mi  tío  y  con  mi  abuelos 
y  para  satisfacer 
boy  á  todo  el  universo , 
de  que  no  queda  por  mi  t 
á  voces  iré  diciendo : 
Esta  es  la  justicia  á  este  hombro 
|K>r  Príncipe  contrahecho. 

Soldado  i.  t. 

Pues  por  vida.de..». 
?).     Polidoro. 

¿  Qué  ,  me  jura,? 

ESCENA  V< 

J^ic&o*  y  ¿n'stoTmlo. 

Aristóbulo. 
*|  Poliporo ',  pnei  qué  es  ésto*  f   * 

Soldado,  a. 
No  es,  nada.  «1 

<■■■         PóHdorb., 

No  sino  macho.    ■, 
,         Ármatelo.      •  ' 
¿Qaéestdí? 

Polidoro* 
;  Un»  atrevimiento  t 
y  un  ¿esacata  en  *y.  grande,     r 


379 


389 


que  aquí  conloo  sé  ba  hecho  j 
pues  siendo  yo  tu  persona1  f ' 
ahorcarme  quisieron  estos  ,        » 
y  no  prido  sei'á  mí, 
cuando  yo  no  era  yo  raesmOf 
porque  hacia  ¡tu  papel.  |  ' ' 

Aristóbulo. 
Poes  si  conmigo  es  el  duelo  ¿     í 
satisfecho  le  perdono , 
porque  no  te  quejes  dé  ella*  í     * 
¿  donde  está  el  Emperador? 

Soldado  t. 
En  su  tienda. 

Aríétóbuto. 
*  Pues  yoquier*  ^ 

irle  á  agradece*  la  vida 
á  Ja  piedad  de  an-  pecho. 

Poiiéhro:  •  •  * 

Yo  sabré*  do  aquí  adelante 
41  papel '{¡«e  represento. 

ESCENA  VI. 

Salón  se  Palacio.' 

Sí '  Tetrarcaj  Mariene  y  4arnfS» 

■  Te&Karca. 
Después  de  darme  la  vida,  .  .   í 
que  yo  tan#>cu*tá  compro; 
de  los  agraria*  que  callo  9 
de  las' desdichas  que  lloro  , 
torciendo  las  blancas  mano**' 
humedeciéndoos  ojos  9 
turtad*  t*  toz  del  pecho  , 
pálisitf*!  epl«r4ei  rostro»    ,   / 


381 
basta  el  palacio  feas L llegado , 
y  en  él  i  lo  mas  remoto 
de  sos  cuarto»  :  ¿  pues  qué  es  esto? 
mira  .que  es  afecto  impropio 
del  beneficio  cobrarle 
tan  presto:  no  rigoroso 
id  pecho  »  aquel  bruto  sea  , 
que  Viendo  el  velo»  arroyo 
¿V  una  fuente  inficionado 
del  áspid  9  noble  y  piadoso 
la  enturbia  porque  no  beba 
el  caminante  ,  que  absorto 
de  ver  enturbiar  la  plata, 
que  le  brindó  con  sonoro 
acento  é  beber  cristal 
en  penada  copa  de  oro  f 
maldice  al  bruto*  ignorando 
el  favor.),  yo  asi  dudoso , 
no  agradecerá  la  vida  9 
si  con  agravios  la  logro; 
que  c*  turbar  los  beneficios  § 
embozarlos  con  enojos. 

Mar  ¿ene, 
la  bemos  llegado  basta  el  cuarto        ' 
prevenido  x  salios  todos,     (i)    ' 
Tú  ten  me  abirrta  esa  puerta  9 
en  tanto  que  yo  dispongo, 
«errar  esotra. 

Tetrarca. 
¿Fortuna* 
qu^  «testo?  .  . 

Mariene. 
Ya  estamos  solos. 
'■'  i     '  ■  .  .  i 

(  i  )     Fante  la$  darnos. 


382 


*t 


*  *  ¡Petrarca*  •  y  '*  c*   * 

,  i  Qoé  mira*  ?       v 
Moriene. 
Miro  el  puftal, 
que  <lel  reíos  presuroso 
de  mi  vida  fae  el  volante. 

*  Tctrarca.  ,     - 

En  un  peligro  notorio 
de  mi  vida  le  perdí* 
*         M  atiene. 
Pues  «scucha. 

Tetrarca. 

Ya  te  oigo. 
Mar  ¿ene:  ''••.« 

Bien  pensarás  ,  ó  cobarde  '•.  - 
amante  {  6  tirano  esposo*,  '  J 
alevV,*xirttel ,  sangriento  ; 
bárbaro  V  atrevido  y  loco*  /  ■> 
bien  pensarás  ,  que  pedir-  • 
á  aquel  Monarca  famoso',  •'  < 
4  aquel  valiente  Rónirod  ¿  / 
í  aquel  capitán  hertóco y-  -j 

cuya  vida  el  ave  sea , 
*  que  en  sagrado  mauseolo       '  •'  ' 
nace  i  vive¿  dura  y  muere, 
hijo'^  padre  de  sf  propio  ♦  -■'     * 
la  tuyí  comprando  acreció  «  *•* 
de  suspiros  y  sollosoá,     >  >    .    ■+ 
ba  sido  piedad  y  amor 
de  mi  peóüró  generoso; 
pues  no  ha  sido  ,  no  /piedad  ¿  .' 
ni  amor ,  afretó  rabioso 
» y1  venganza  sf  j  porque 
no  hay  otro-estilo ,  no 'hay  otNJ 
camino  de  castigar  .  •  « 


un  ingrato  pecbo  »  coma 
pagarle  con  beneficios »., 
cuando  ofende  con  enojos ; 
que  merced  hecha  á,  un  ingrato  » 
mas  que  merced  ,  es.  oprobio. 
No  ,  pues  »  por  librarte,  no  » 
del  veneno  .rigqro&o        , 
turbé  el  cristal»  apremiando 
piedades  del  unicornio  ; 
aqtes  ,  para  que  le  Debas » 
te  le  enturbia  con  embozos; 
y  al  revés  de  la  piedad   . 
de  aquel  animal  piadoso 
procedí ,  pues  él  cubrió 
el  beneficio  de  polvo» 
y  yo  <Je  halagos  la  ofensa  ;  — 
mira  lo  que  hay  de.  uno,  á  otro, 
que  él  desdora  las,  piedades  , 
y  yo  las  crueldades  doro* 
No  me  diera »  no  »  yengan«a 
verte  morir »  cuando  noto 
que  es  la  muerte  en  los  afanes 
última  Jínea  de  todos : 
verte  vivir,  sí,  ofendido»  , 

aborrecido  y  quejoso ; 
porque.cn  el  mundo  no  .hay    > 
castigo  mas  rigoroso  , 

para  un  ingrato»  que  verse 
olvidado  de  lo  propio   . . 
que  se  vio  amado :  ¿  el  que  llega? 
á  esto  cómo  vive  ?  ¿  cómo  ? 
Fuera  d$  &tp »  por,  mi  misma » 
por  mi  honor,»  por.  mi, decoro f  ; 

ped ít  tu  ( vida »  encubriendo 

las^ausas, conque  me .^qojof   .. 
2& 


383 


J 


Í84 


que  *  abeto  tóñaá  qu  Téri  soy,  ' 
y  quien  eres  fono  solo; 
y  no  por  ganar  con  unof 
kaliia  de  pei'der  con  todoi. 
Tu  vida  per<Jfi!n  efecto, 
porgue  sepas  6,0*  no  ignoró 
que  has  vivido  en  es  I -a  ausencia 
de  mi  muerte  cuidadoso: 
este  papel,  esta  firma 
•  te  convenza  :  ¡con  qué  asombro 
le  mi'ras ,  quedando  viva 
estatua  de' nieve' y  plomo? 
En  mi  ratono  está  ,  no  tiéuéA  ' 
que,  examinar  rVitddióso  • 
Como  vino  á  effa  }  porque    ' 
la  tierra  /  vieíidb  el  adorno   ' 
y»  la  bermosVir'a  que  déte    '        ' 
¿  e»l«  c  i  rafal  ¡no  globo  $      '''         '     - 
que  partí*  la'lciuá  á  giros  ¿'  ' 

que  e^sol-iftiniriia  á  lornos  ¿ 
le  ofreció' de  no  encubrirle:  ' 

nada  en  su  centro,  ni;»*  bólido  ;  *' 
que  vun  los  cielos  ,  ron  ser  c'íeloi  9 
dan  las  ^mercedes  a*  logro 
¿Tu  eres  (  f  Áqui*  de  mi  aliento! 
desaisíy.ádo:?al  primer  so  [Vio  :      '   • 
con  mis  lágrimas  me  árie'go'y  " '»  l 
con  mis  Sus*  pifos  me  abo¿o  )    " 
de  Jerusaleñ  TH'Varda  ?'  ' 

¿íd  ¿rea  rama  de  aquel  tronco  |J' 
íQué  bien  jfcife  aqtnd  t(úe  dice  f  " 
que  eres  bajo*  y*  d fren  toso 
loNumeó  }  ctrfa í  cu  ira*  '     . 

barbará  Vs  !  y tyi*  más  apoyo  ' 
de  mlhvtyimn'j  *{&  Utezéhfr    k 


infames  acornó  alevosos?    ¿ 
¿Qné  fiera-  la  mas  cruel, 
qué  bruto  el  mas  riguroso, 
^qué  pajaro  d  mas  aleve, 
»"qu*?  bárbaro  el  malignólo 
mató  muriendo:  pues  antes 
de  hambres  ,  fieras  y  aves  oigo 
que  mueren  dando  la  vida  ? 
Dígalo  en  bramidos  roncos 
la  vívora  t  que  mordiendo 
Aus  entrañas  ,  poco  á  poco 
se  despedaza  ,  sacando 
muchas  vidas  de  un  aborto. 
D/galo  el  ave  »  qoe  muestra 
el  pecho  en  mil  parles  roto, 
y  por  dar  la  vida  ■,  muere 
desangrada  entre  stís  pollos. 
Dígalo  el  bárbaro  ,  'pues 
que  áJ  peligro  mas  notorio 
espuasto  el  pecho ,  á  su  espalda  ' 
pone  á  su  esposa ,  y  piadoso 
'  es  escudo  de  so  vicia-   - 
contra  la  pluma  y  el  plomo. 
Mas'tií,  mas  que  lodos  fiero ; 
roas: tú,  mas  bruto  que  todos; 
mas  tú ,  mas  bárbaro,  en  fin ,' ; 
no  solo  apenas  ,  no  solo 
favoreces  lo  qué  amas  , 
pero  avaro  de  ios  -gozos , 
aun  muriendo  tío  los  dejas  t 
bien  como  el  codicioso  ¿ 
amante  de  sus  riqueza», 
porqtte  no  las  goce'  otro  * 
maneto  ,  qne  después  de  muerto' 
le  enttér retí  <Cow  Mr  tesoro. 


m 


i 


3S6 


Sapoteo  %  qn€  í««  finesa, 
este  decreto  ,  snpougo 
-  que  fue  coi*  sel  os  ,  que  nada    •  •  * 
quiero  dejar  en  tu  abano; 
¿"quien  muriendo  ,  pues  ,  previne 
avariento  ,  ó  cauteloso',  * 

llevar  desde  aqueste  mundo  ■ 
preveuciones  para  el  otro? 
Si  es  puestra  vida  uua  .flor 
sujeta  al  mas  focil  soplo  1 

de  los  ,aJUrn toa  «Id  austro, 
«le  los  suspiras  del  jiolo  , 
que  en  espirando:  ella  ,  espira    ' 
todo  cuanto  vemos.  ,  .todo    . 
cuanto  goaamo*;  ¿qué  error     . 
dispuso  que  tú  celoso 
prevengas  para  el  sepulcro 
las  riquezas  y  los  gozos? 
¿  Qué  baza  na  de  amor  es  esta  ? 
Y, pues  examino  y  toco,    *  . 

que  podrá  vivir  mi  pecho    • 
mas  seguro  ,  y  mas  dichoso        » 
aborrecido  que  amado , 
desde  aquí  £  mi  cargo  tomo 
el  hacer  que  me  aborrezcas ; 
pqes  aunque  puedo  .con  otro 
medio  huir  de  tí,  y  ,vivir 
en  el  clima  mas  remoto,  ■      . 
donde  el  sol  avaramente     . 
dispensa,  sus. iiayos.r,ojo5f    ,  ♦ 
ú  donde  pródigo  abrasa 
menudas, a genas  de  oro,       «. 
mas  feliz,  si  a.  t{ , y  conmigo  |  t 
n§ )  k*  de  dar.  con  tal . divorcio 
qu«  decjr  al  toando,  ,y  esto  , 


387 
se' quedará  entre  nosotros. 
En  tu  vidV/ní  en  mi??  ida» 
me  has  de  inirar  si#*  enojos  9 
me  has  de  hablar  sin  sentimientos, 
mV-ttasMe'  escuchar  #rn  oprobios  t 
ver  sin  suspiros'  los  labios  ft 
ver  sin  lágrimas  los  ojoqf  , 
y  este  oscuro  vdo'púeíto- 
siempre  delante  del  rostro 9 
estorbará'él  qiie  te-veaV  : 
•íenMo'mMs*  Reales  adorrfos 
eternamente  esté  luto; 
y  en  aqueje  cuarto  solo  * 

Viviré  con  "m ís  tnugeresfc 
guardando  viudez  en  todo  $ 
y  nnniéa'me-e-ntres  en»  él  ^  •■ 
que  por*  los  dioses  que  adoro,  ' 
que  de  Ib  mas  alta  almena         i 
me  átr'tfje'al  sepulcro  undoso 
del  mar,  donde  infelizmente 
me  oculte-'  en  su  centro  hondo.  . 
Y  no'ftae  sigas  j  porque 
te  miró  con  tanto  asombro  9-   ,• 
con  tanto  temor  te  hablo, 
con  te  Ato -pairar  te  oigo  ¿»    " 
que*  pienso  que  ya  m  cumple      » 
de  aquel  j*NÍiciai  ¡o  docto  / 

el  hado;  piles  si  él  me- dijo 
qu$  tu  acero  prodigioso  9  '» 

y'efmdyor  Monstruo  del  ajando 
me  am'cWazan  ,  boy  conotco,  '. 
la*  verdad  ,  pues  si  entras  ikoAro, 
huyendo  del  uno  al  otro,   -        i 
ó  me  ha  de  matar  tu  acero  ,  ¡  ■? 
"-'6  d'  nfcáSr,;  que;  as  d  ^a^or  JVloqstrao. 


3B8 


Yelrarcá.    ."'""' 

{Hasta  aquí  pudo,,  hasta, a^u/. 
llegar  un  hado  cruel!       .    .   .    ,< 
¿El  papel  mismo*, el  papel    i    r 
que  con.FilipQ  escribí  ...       ... 

á  Tulorofo  ¡  *y  <*«  roí"  »-ii;  •     ' 
tiene  Manen«.?  ¿  fiticr4e*.-1 .  :i  . rs  -    - 
dolor  I;  Y  ella  ¡  in¡ui**:a#exto!  > 
de  mi  rÍ£o.r  ofendida*  ■jllSc,1.,  .'}•> 
me  ha  dilatado  la  vida,»,.    > 
por  dilatarme  la  muerte*  -. .,  .;/ 
Ño  m<r  qu^jo  del  rigor;  Jli;;    ... 
con  qué  aqueja  á  los, eje)/}*, 
bien  lo» merecen  mis  zetas,*    ,   ^ 
bien  lo'«frece,wi.aofOJi:..,J  ..  .  , 
maa.t|ué>om«  de  vn, .traidor 
taa.aie,ve  y  tan  cruel :  t  , 

¡  m&a  ay  de  «ni!  que  no  es,de.é) 
la  culpa  ?  qui»  aolo  es  mu.,„. 
que,  esto  ínecece  quien  fia  ,,,. 
'sus  secretos  de  un.  p*pej*    i    ,    } 
Ni  sé  qué„bacer ,  ni  decir.,    „    , 
que  entra  uno  y  otro  pesar,.  ,, 
ya  ni  me  puedo  queja*  ,...r;  .     » 
ni  dejarlo  de  sentir  ? .,  r  ♦,*,>.  :  , , 
desenojarla  es  mentir  jv.  ♦.#  ;  ■ 
aporque!  es  mi. amor  de.,wajaerAt 
mi  pasión  tan  ,dur a  y  fie**!,  *-t 

,  tq*a¿i  en  tanta  coji  fusta»  r.v  V 
hoy  vojvúsra  á  la  prisión.,  v  ,{ 
boy,  al  delito  volviera  {     •'      .<  ,.< 

i '  poique  ellai,  al  fi  u,  *  jiio  Jto»  ide*  **r  t 


de  otro  Huevo  u>Y**ito,.  un,         ., 

que  mi  amorjc  ba,  -de  ofender.* 

£tfuqu¿  no  lo  llegue  á  yer. 

En  parte  giijlo  ipc  ha  dado 

el  que  se  haya  declarado, 

pow  mí  esta  ocasión  ya  , 

sin  escándalo  estará 

i 
siempre  t&ie  cuarto  cerrado. 

Cerra  tefe  por  de  fuera  9 

y  yo  mismo  o  o  entraré 

en  él ,  porque  aun  yo  no  sé 

•i  á  mí  otros  zejo*  me. dieras 

y  sí  hiciera  ,  si  hiciera  , 

pues  si  á  mirarme,  llegara 

en  sus  brazos  »;y  jaqnsára 

que  era  4a  n  dichoso,  allí 

H>e  desconociera  á  m./,  ' 

y5}ue,era  otro  imaginara.        * 

pe  suerte  que  mis  desvelos  $ 

enseñados  á  desdichas  , 

.í**:¿«pan  miedo  4.mi¿  dichas, 

pues  ellas  me  dieran  zelos  : 

¿quién  sou  estos/ desconsudps \ 

quién  es  aqueste  rjgor  , 

cuya  pena,  cuyo  horror  , 

que  no  es,  discurro  prolijo, 

linen^idia  ,  u\  amor,  es  hijo 

de  la  envidia  y  del  amor  ? 

•  ^H^hq  ¿Je  heridos  despojos 

tienes  de  sirena  el,  canto  f 

y  de  cocodrilo  e,l  J I  ajilo., 

de  basilisco  los  ojos,,  c. 

los  oídos  para  enojos 

^«¿á&jjid;  *HC6P  ¥eu  fondo  t 


3» 


i 


330 


siendo  monstruo  *fn  segundó  r 
esta  rabia  ,  esta  pasión   '        '  ' 
de  setas  ,  que  zelós  son    ' 
el  mayor  monstruo  del  mundoi 

ESCENA  VIII.   "'       '   \ 

Tararea  %  Filipo  y  Tolwnf.  x 

FHUpo. 
I  Cómo  te  daré  ,  señor  , 
el  parabién  de*  ter  vida  f  * 

Tctrarca*  ' 

.Viendo  la  tuya  rendida  "» 

/  manos  de  mi  rigor.- 

Filipo.  *     - 

¿En  qué  te  ofendí? 

Tetrarca.  s 

traidor  ,    * 

poco  leal  i  menos  fiel ,  l 

l  qué  hiciste ,  di ,  de  un  papel  '. 

que?... 

Toiomcó. 
'  Ya  mis  desdichas' creo,      ap» 
Filipo.  •'     '   *l 

¿Noera  para  Tolomeo  ? 

Tetrarca, 
Si. 

'    FiHpo.  '   * 

Pues  él  te  dirá  de  él. ' 
Tolomeo. 
Qué  poco  duró  ( ¡  ay  de  mí ! )     api 
el  secreto  en  Ja  muge  r.  í 

•-1     7ty/*drfca.  ' 

Di  tú,  traidor 

Totomeo. 
« '     <  ^    ¿Qaé  he  de  baceir  f      4» 


391 


.-:  :,.*.   •••    Petrarca. 1""-'         •'  T 
Vn  papel  que  te  escribí  f 
¿  qué  es  de  él ? 

?     .  Tolomeo.t  o    ,  ; 
a. .,.,  La  verdad  aquí  ¿y». 

es  la  ^k(julpa  rntí^of .       ,. 
tJna  Dama.... 

2V//*¿ircto. 

■■:,"a,,,,,,'i!'- 

TolomébV**  * 

Señor, 
i  c^ifeh  sirvo  para  esposa...» 

«  —  ^  •lw•¿^cA:,,,,,,,,,  ;7| 

Prosigue.»  "  '   ' ?  '•"'• 

Tolórhéú"  ''  '  s 
'*'*  '    De,mí'aéldsa;:  '  "    '! 
(necios  delitos  dé' a  mor) 
me  le  quitó  .de  la  máno¿r 
y  elia.^  '  ....'.' 

•    Tttrarta\'\  i:;'  i     :'.'' 
"Nt>  prostf£asV¿Of   "  ' 
y  castigue  ese  error  yo.... 

Tente,  señor. 

Tolomco. 
Ta  esperar  aquí  es  en  vano»,      ap. 
la  fuga1  mi  vida  guarde.'-     '  huye. 

FUipo'i 
Huid ,  Toíomeo. 
«      '  '  '   Tetrarca, 
«•v  •  .         ¡  Ah  cobarde  l    " 

si  al  mismo  cielo  te  sabes  ¿ 
campanVscráaUas^ubc*  -'[ 


í 


■  P2 

que  hagan  de  mi  honor  alarde* 

<K  ESCENA  IX, , 

Decoración  dk  Campo. 

Tolomeo  huyendo ,  jr  'FUipo  deteniendo  al  Tctrarca* 

Tolomeo. 
¿Donde  <|e  tanto  rigor 
estaré  seguro  ? 

!...,  .  •       f  Adv^rte 

qne  huyendo  JMf  acero  fuerte  ', 
al  campo  salió,  seuor,»  , 
y  ya  del  Em¿)eivat\or 
hasta  la  ¿i?  mi  a  ba  .llegado. 

.       Tttrarpa,   .  4 
Pues  válgale. ese- sagrado,, 
por  ahora  f  aunque  no  sé% 
cómo  ii n  pun-tp  viviré 
ofendido  $mo  . ven gado* 

ESCENA  X."  " 

Tf  EW  DA  ©  K  OCT  A  Vi  A  WO.' ' 

4  J  VdlómeO '  y  Octaviena. 

Qctaviano.        ...          ,' 
Hambre,  que  turbado  y,  cjego,  • 
robado  el  color  ,    y  puesta 
)a  mano  en  la  espadadoras      •  » 
haber  entrado  en  mi  tienda  9  x, 

cuanta, ti)f¡  mandado  que  lodol 
solo  me  :<fejeu  en  ella  ,, ...., 
con  mía,  jasare»  ,  si  ¿cas^ 


6w 


ti 


c 


393 

i .  . 

al^gajraicion^at^ijrtas  t>  :. 
hvcip  ocasión  has  bailado  ;  .  # 
¿qué  aguardas ?       ;.. 

Jbhmcft  }    •  ;> 

^  Detente,  e/peraf 
qne  fs  lealtad  ,  y. oo  traiciuu  ,  . 
Ja  que  ¿"estp  trance,  mu  fueran,/ 

¿Quién  ere*'1      r   .  . ,..,        ;,  .,., 
j..*  Tplonjeq.  ;       ,  j 

,  .  Soy' un  soldado  y 

hijo  infelí*  de  la,  guerra  <t  ...  >;«, 
que  llegué  por  mis  servicios  ,t) 
Á  ser  capitán  ejí  ella  t  j 

de  las  guardias  del  Tetra  rea  fj 
y  de  Sion  enr^su^auseucia 
gobernado*/ ;  ^,. ■  ,  .,   .    . 

Qctavlano.  } 

¿.Qué  pretendes, ft 

TojlomcíO..  ,  ,    ^ 

Jíomj  vida,  au  nque  .pudiera  9¡t 

la  de  Mariene,  sf,    <         ,  ;k 

que  es  ^iii  señora  y  mi.  Rey»».  y 

Octavia  no. 
Bue.nas  cartas  de  Vavor  t| 

trae,*,*,  di  ,.y  lo  que,  fuere  sea.    ¡ 

Tof  orneo. 
jrO  Libja  "f  cuánto  ej  empeño     ir    a/». . 
de  tu  libertad  roetarri/;sga,      ,, 
pues  por  tí  de  un,  a*  y  erg1  a  4         ^ 
he  de  bacer  «yia  cautela  !  ,  f|    ^    . 
El  Tetrarca  enamorado       t\ 
tanto  de  su  es^sp  bella.  ,,  %    ' 

vivió  ..que  intentó  pasar 
á  la jiráctica  esperiei»c\a  t    t  tJ„  ' 


394 


de  que*  amores  y  privanzas  f 
cuando  sus  aumentos  llegan»  ' ' 
es  do  la  felicidad  '  <* 

decli nación  la  tragedia. 
Viendo,  pues,  que  de  su  muerte 
pronunciada  la  sentencia       "'] 
estaba  ,  y  viendo  que  tú,  **'• 
enamorado  de  verla. 
en  dos  retratos  la  amabas,  ^  '* 
(que  todo  aquesto  me  cuenta 
tjuien  trajo  una  carta)  aleve 
dispuso  mandarme  en  ella    , 
que  yo,  como  quien  aquí       "  ?> 
la  asistía  de  mas  cerca  , 
la 'a  tosigase  y  matase,  "'  y 

cuyos  zetas  de  manera  j  '  '    » 

al  verla  boy  viva  y  contigo,     ** 
crecieron  con  ía  sospecha 
de  que  por  ella  tomaste 
á  Jerusalen  la  vuelta , 
q6e  en  ves  de  que  agradecido) ' 

"'  de  que  su  vida' pidiera 
con  tantas  ansias  ,    Uegtt  * '  '  "■* 
con  ella  á  palacio  ¿penas  , 
cuando  en  un  obscuro  cuarto  \ 
la  encerró ,  y  con  sauVliéra    ' ' 
conmigo  embistió  á  matarme 

14   por'  ño  haberla  hallado  muerta* 
De  ét  es  de  quien  vengo  huyeddo 
a  darte  la  infeliz'  nueva   . ;       '"» 
de  que  RÍIa'riené  est$ 
por  tí  en  tanto'  riesgo  puesta « 
que  no  tiene  de  su  vida  "* 

seguridad  ,  pues  es  fuerza  t     *: ' 
juica  éu  a  Uí encía  lo  manda  t*  •• 


,     ,  30* 

qoe  lo  ejecute  en  presencia,; 

Pues  eres  César,  señor, 
y  tan  generoso  César, 
que  para  vidorras  tuyas 
faltan  plumas-,  faltan  lenguas  , 
del  poder  de  este  tirano 
la  saca  ,  porque  te  deba 
el  sol  su  mejor  Aurora  , 
la. Aurora  .su  mejor  perla, 
la  tierra  &u  inejor  sol  ,  ' 

y  el  cielo  ¿u  ... 

Octaviano» 
O* aa ,  cesa ; 
calla  ,  calla  ,  no  prosigas , 
lio  en 'la  persuasión  me  ofendas. 
¡  Espuesta  Ma nene,  cielos  !  ap. 

I  Y  por  mi  ocasión  e&puesla 
i  tanto  riesgo  ?  ¿  qué  aguardo  t 
No  soy  quien  soy  ,  si  por  ella 
no  pierdo  la  vida  ;  iré 
donde....  Mas  con  mas  prudencia 
lo  lie  de  mirar ;  que  no  es  bicn; 
que  la  información  primera 
me  lleve  tras  si ,  y  mas  Cuando 
no  es  cobarde  la  sospecha         ^ 
de  todos  estos.  Soldado, 
mira  ú  verdad  me  cuentas 

Tolomen. 
Tanto,  que  á  la  misma  torre 
adonde  encerrada ,  presa 
y  afligida  está  ,  señor, 
te  llevare*  á  que  la  veas, 
luego  que  baje  la  noche  * 
de  pardas  sombras  cubierta.' 


j 


Í26 


Ocio  vi  ano. 
¿A  la  mlsiua  torre?  ' 
'  Tolorned: 

SI, 

Jforq«e  yo  tengo 

Octaviano.  ' 

Di  apriesa* 
Tolomeo. 
jPara*qu¿  de  cosas  sirve  -opk 

hoy  mi  amor!  Llave  maestra 
*  de  sus  jardines:  si  acaso     J 
de  ini  lealtad  te  recelas  , 
lleva  tus  guardas  Contigo  * 
y  todo. el  palacio  cerca 
•para  qtic  en  cualquiera  trance 9 
•*    llegando  una  vez  á  verla  , 
como  he*4icbof  en.  su  socorro 
asegures  tu  defensa.  .••  , 

Y  yo  la  vida  de  Libia  ,  Qp% 

jjues  que  no  dudo  que  puesta 
Ja  ciudad  en  coiiíusiou 
podré  ir  á  favorecerla» 

Octavia  no.   (   '    . 
Tan  á  los  reparos  sales  r 
que  ya  nada  dudo;  y  sea, 
en  fin,  lealtad  ó  traición.*..  . 
por  verle*,  Marlene  bella  , 
iré  ,  y  es  á  darte  vida  $ 
quiera  amor  que  lo  agradezca*. 


SD7 

'     4    '  '.ESCENA   Xf.    ' 

{  r 

Habitación  de  Mar?en¿. 

Marlene  %  Sirene  y  mngeres  con  luct*,  que  pondrán  en 
un  bufete  con  azafates* 

Mariene* 
Dejadme  morir. 

Sirene. 
Advierte  ' 
que  esa  pena,  ese  dolor, 
mas  que  tristeza  es  furor, 
y  mas  que  furor  es  muerte* 

Mjriene. 
Es  tan  fuerte 
mi  mal ,  es  tan  rigoroso  9 
que  no  me  mata  de  fiel , 
ain  ver  él , 

que  sur  conmigo  piadoso, 
no  es  dejar  de  ser'  crtfeh* 

Dama  i. 
Ya  que  aborreciendo  el  lecho 
«n  el  jardín  te  bas  eslado   *'         ' 
basta  esta  hora  ,  dé  el  cuidado    * 
Llandas  treguas  al  depecho. 

Mariene. 
Mal  sospecho         .  - 

que  pueda  eí  sueno  aiivíal*  v 

mi  peStti*,'; 

pero  porque  tío  paguéis 
la  culpa  que  no  tenéis  / 
empezadme  á destocar,     (i) 


(  i  )     Recogen  los  adornos  ehlét azafates. 


39» 


Slrenti 
l  Quieres  ,  mié a* ras  desafia 
al  sol  esplendor  tan  bello, 
desmarañando  el  cabella 
de  los  adorno*  del  día , 
"la  voíiüili 
algo  te  divierta  ? 

Mariene. 
No,  . 
porque  yo 

no  quiero  que  rae  mejore 
quien  cante,  sino  quien  llore. 

Sircne. 
Filósofo  bubo  que  bailó 
causa  en  la  naturaleza 
para  aumentar  la  armonía  jj 
al  alegre/la  alegría f 
como  al  triste  la  tristeza. 

Mariene, 
Pues  em  pieza  , 

con  calidad  que  el  dolor     ;    . . 
bagas  mayor.. 

■  .     Sirene, 
Con  una  letra  será,     . 
que  aunque  es  antigua  ,  podará 
conseguir  eso  mejor. 
Ven  muerte  tan  escondida 
que  no  te  sienta  venir  , 
porgue  el  placer  del  morir 
no  me  vuelva  á  dar  la  vida*   , 

Matjiene.        ..>,.' 
Bien  sentida 
y  declarada  pasión: 
¿cuyos  son 
esos  versos? 


Sirene* 
No  lo  ñé , 
porque  acaso  los  bailé 
estudiando  otra  canción. 

Manene» 
Vuélvelos  á  repetir, 
porque  yo  con  ellos  pida.... 

.  Las  dos.      . 
Ven,  muerte ,  tan  escondido, 
que  no  te  sienta  venir» 

Mariene. 
Mas  si  á.  advertir 
llego  mi  ansia  entretenida, 
el  ca^nto  impida , 
que  ya  no  lps  quieto  oír. 

Las  dos. 
Porque  el  placer  del  morir 
nv  me  vuelva  d  dar  la  vida. 

ESCENA  XII. 

Dichas  ,  Octaoiano  y  Tolomeo. 

Tolomeo. 
Pisando  las  negras  sombras 
en  el  silencio  nocturno  , 
el  jardín  has  penetrado , 
al  tiempo  que  al  cuarto  suyo 
se  va  retirando  ella. 
Qctaviano. 
Ya  tus  verdades  no  dudo , 
ni  su  prisión ;  pues  tan  sola 
está ,  y  vestida  de  loto 
todavia  :  tú  á  la  puerta , 
en  tanto  que  me  aseguro 
de  si  es  acaso  ó  malicia , 
ü6 


399 


j 


400 


ftuye, 


pues  menos  ruido  liará  ano, 
roe  espera. 

Tolomeo. 
Sí  haré  teniendo 
la  gente  que  has  traído  á  punto 
para  cualquier  accidente. 

ESCENA  XIII. 

"Dichos ,  menos  Tolomeo* 

Octaviano . 
Tanto  ¿le  verla  me  turbo, 
que  no -sabré  discurrir 
si  esto  es  ya  pesar  ó  gusto. 

MarUne. 
Vuelve,  Si  rene ,  pues  es 
tan  á  mi  intento  el  asunto: 
tú ,  Laura  ,  cierra  esas  puertas. 

Si  rene. 
Obedecerte  procuro. 
Canta. 

y  en  »  muerte  ,  tan  escondida 

Dama  i . 
Y  yo  también ,  pues  acudo 
á  cerrarlas  puertas,     (i) 
Qctoviano* 
.      *  No 

lo  intentes  9  que  es  dolor  sumo  9 
sin  luz  y  sol    quedar  ciego 
dos  veces. 

-"    -       Dama  i. 

j  Que  veo  y  escucho ! 

(  i  )     Llega  á  Qctoviano  ,  41  la  detiene  y   ella 
we. 


401 
¡ay  de  mi  infeliz! 

Marienc. 

¿  Qué  es  eso  ? 
Dama  i 
£1  mal  embozado  bulto 
de  un  hombre  que  ha  entrado  aquí. 

Mar  ¿ene. 
¿Hombre  aquí? 

Octaviano. 

Ya  hablar  no  escaso. 
•  Mariene 
Dad  voces. 

S  ir  ene. 
Yo  no  podré • 
que  aun  como  respirar  dudo* 

Dama   i. 
Ni  yo,  que  apenas  aliento.. 

Dama   a. 
Ni  yo ,  que  medrosa  huyo,     (i) 

,   Mariene* 
Huya  también  yo. 

Octaviano» 

Teneos  #       (a) 
vos  t  y  reparad  el  susto; 
que  días  que  para  enojaros •  «  . 
para  serviros  os  busco. 
i  Mariene 

Vos  f  señor  ,  pues , como  »*...  si',.... 

aquí,...,,  yo 9 cuando.,.» 

Octaviano* 

Quien  pudo 
antes  de  veros  amaros . 

(  i  )     Huyen  las  damas  dejando  caer  los  azafates» 
4  2  )     Desembózase. 


402 


después  de  veros  mal  dudo         * 
que  dejar  de  amaros  pueda. 

Mariene, 
No  son  de  Cesar  Augusto 
esas  razones. 

Octavia  no. 
Si  son  t 
pues  roas  á  veros  rae  indujq  *  ¿ 
vuestro  daño  ,  que  mi  afecto  # 
vuestro  riesgo ,  que  mi  gusto» 
Yo  lie  sabido  que  en  poder 
de  tirano  dueño  injusto'  * 

estáis  espuesta  al  peligro 
de  tan  sacrilego  insulto , 
como  que  obre  ptfrs'u  inano^ 
lo  que  á  la  a  ge  na  dispuso. 
A  poner  en  salvo  vengo 
vuestra  vida.  * 

Marlene. 
£1  Jabí  o  mudo 
quedó  al  veros  9  y  al  oíros 
su  aliento  le  restituyo» 
animada  para  solo 
deciros,    que  algún  perjuro ,    ' 
aletey  traidor  en  tanto  ' 

malquisto  concepto  os  pliso  i' 
mi  esposo  es  mi  esposo  ,  y  cuando 
r  me  mate  algnn  error ' suyo  # 
xio  me  matará  mi  error, 
y  lo  será  si  de  él  hoyo. 
Yo  esHoy  segura  ',y  vos  rnaL 
informado  en  mis  disgustos; 
*  y  cuando-  no  lo  estuviera  , 
matándome  un  ^Niñaí  duro, 
mi  error  no  me  diera  muerte» 


amo  ni  Fatal  influjo; 

con  qae  viene  á  importar  menos 

morir  inocente,  juzgo, 

que  vivir  cuipada  á  vista 

de  las  malicias  del  vulgo. 

Y  a  si, -si,  algún  a  finesa 

be  de  deberos ,  presumo  . 

queja  mayor  es  volveros. 

i'  Octavia  no.  ^ 

Si  haré,  si  .vuestro  discurso 9 
como  salva  mi  primero  •  ,  • «  ■ 
motivo  ,  sal va  el  segundo^ 
Un  retrato  tenia  vuestro ,         n 
á  cuyo  hermoso  dibujo, 

rain  saber  cuyp  era  ,  daba 
mi  humana. adoración  culto: 

j>or  sanear  sospechas  (ya 

lo  visteas.)  sabiendo  ctfyo  , 

fuese  |  ¿>s.le  di ;  y  pues  sirvió 

ya  $n  vuestro  abono,  no  dujlo,. 

que  con  justicia  le  pido., 

"  Mariene. 

No  hacéis ,  que  tenerle  es  uno. 

por  acaso ,  y  otro  es 

por  voluntad ;  y  á  este  puro 

fuego  abrasará  mi  mano. 

ai  en  ella  el  menor  impulso 

reconociera  de  que 

para  volvérosle  tuvo. 
Octaviarlo. 

No  hicierais ,  porque  impidiera 

yo  llegar  al  ardor  suyo, 

estorbando  asi  la  acción,     (i) 


fi  a  )     Quiere  tenerla  fa  mano  r  ^  ella  lo   resiste. 


404 

Mariene. 
Es  atrevimiento  injusto. 

Octaviarlo. 
No  es  sino  justo  deseo 

Mariene. 
Antes  á  los  cielos  jaro  f 
que  con  vuestro  mismo  acero  , 
que  ya  en  mi  mano  desnudo 
está  ,  me  atraviese  el  pecho,     (i) 

Octavia  no. 
Tente ,  muger ,  que  confundo 
mis  sentidos  ál  mirar 
no  sé  que  fatal  trasunto  » 
que  vi  otra  vez. 

Mariene.  ' 
De  ese  pasmo , 
de  ese  pavor  que  en  tí  infundo  » 
el  contratiempo  gozando , 
huiré ,  puesto  el  iracundo 
acero  al  pecho  :  ¡  Mas  cielos*  9 
¿  no  es  el  que  fiero  y  sañudo 
me  amenazar  con  mas  causa 
ya  de  dos  contrarios  huyo,     (a) 

Octaviano. 
Oye  espera. 
•  • 
ESCENA     XIV. 

Petrarca.  ^ 

'  l  Quien ,  ladTon 
-  del'  mismo  tesoro  suyo 

(  i  )     Quita  el  puhal  á  Octaviano ,  que  seré  el  de 
Telrarcá  — 

(  a  )     Arroja  el  puñaf  f  huye  y  Sigúela  Octaciano. 


¿entro  de  su  misma  casa* 
bascó  sus  bienes  por  hurta? 
Hasta  ahora,  la  esclava  hq 
abrió;  ¡qué .triste  discurra 
el  cuarto  á  la  media  lux 
de  escaso  esplendor  nocturno.  f 
que  allí  horrores  late ,  y  mas 
•i  ^  sus  reflejos  descubro 
de  mugeriles.  adornos , 
ajadamente  difusos ,  .    , 

sembrado  el  suelo  !  ¿  qué  es  esto  ? 
no  me  propongas,  discurso  , 
que  bagel  que  hecha  la  ropa 
•1  mar,  padece  infortunios  ; 
que  casa  que  se  despoja 
de  las  alhajas  que  tuvo , 
estragos  de  fuego  corre  , 
pues  ni  la  tormenta  dudo  f 
ni  el  incendio  ignoro  cuando 
entre  dos  aguas  fluctuó  9 
entre  dos  fuegos  me  yelo, 
viendo  que  me  envisten  juntos  , 
para  zozobrar  f  suspiros , 
para  hacerme  llorar ,  humos. 
Estas  arrojadas  señas 
¿  no  son  de  ilustres  9  de  augustos 
faustos  despojos  ?  ¿  Aqueste 
no  es  el  fiero  pañal  duró 
que  registro  de  los  astros 
es  aguja  de  sus  rombos  ? 
¿No  este  el  que  yo  á  Octavian© 
dejé  ?  Sí.  ¿  Pues  quién  le  trujo 
aquí  entre  arrastradas  pompas  ? 
¿Pero  para  qué  lo  apuro , 
si  es  de  los  á>«confiadoa 


40$ 


406 


la  imaginación  verdugo  f 
Tarde  hemos  llegado  ,  zetas; 
tarde ,  tarde ,  pues.no  dudo  , 
que  quien  arrastra' despojos 
habrá  celebrado  triunfos. 
Si  es  dichoso  el  desdichado  9 
qne  siéndolo  no  lo  sapo , 
desdichado  del  dichoso  9 
que  ya  sin  serio ,  lo  tuvo 
por  cierto ;  y  pues  que  me  pone 
*  en  mi  mano  mis  influjos  , 
á  ellos ,  muera  antes  que...... 

Dentro  Octaviarlo. 

Espera  f     * 
aguarda. 

Tetrarca. 
\  Pero  qué  escucho  ! 

ESCENA  XV. 

Tetrarca, ,  Marlene  jr  Octaoiano» 

Mariene. 
Será  en  vano,  pues  primero 

que  logres ¡  Mas  cielos  justos  9 

qué  es  lo  que.  miró ! 
Tetrarca. 

-Turnado  v 
he  quedado. 

Oelaviano. 
Yo  confuso. 
Mariene. 
Y  yo  confusa  y  turbada,     ^ 
pues  entre  dos  daños  ,  de  uno 
doy  en  otro  t  y  ya  no  sé  • 
cual  dejo ,  ni  cual  procuro  t 


407 
cual  pierdo ,  ¿cuál  Solicito  ', 
cual  hallo  y  al  fin  »  ó  cual  basco  ; ' 
pues  siempre  tengo  peligro  , 
cuando  paro  y  y  cuando  hoyo. 

Tetrarca.  : 

Vista  ta  fuga ,  á  tu  honor 
este  pecho  será  muro. 

Oct aviario. 
No  temas,  que  de  tu  vida 
este  pecho  será  escudo. 

Tetrarca. 
Cumple ,  pues  9  lo  que  prometes. 

Octaviano. 
Así  verás  si  lo  cumplo. 

Mar  Une* 
¡  Ay  de  mi !  para*  salir 
de  tan  justo,  ó  tan  injusto 
duelo,  estas  luces  apague.         (  i  ) 

Tetrarca. 
I  Adonde  ,  Cesar  perjuro  » 
te  escondes  ? 

Octaviarlo. 
To  no  me  escondo. 

Tetrarca. 
No  te  encuentro»  aunque  te  busco* 

Mariene. 
Tente,  esposo»  ¡  ay  in felice  \ 

de  mí ! 

Octaviarlo. 
A  mi  violento  impulso 
muere ,  aleve 

Tetrarca. 

Aunque  la  espada 

{  i  )     Apaga  las  lucds. 


40» 

perdí»  con  aqueste  agudo 
puñal  morirás.  (  i  ) 

Mariene. 
i  ¡  Ay  triste ! 

tened  piedad  ,  dioses  justos , 
pues  aquí  muero  inocente. 

Octaviano, 
í  Qué  es  lo  que  oigo ! 

Tararea,      \ 

¡  Qué  escucho ! 
Octaviano. 
.Vengaré  sin  muerte. 

ESCENA  XVI. 

'Dichos  #  Tolomeo ,  Soldados ,  Damas  con  luces » y  su* 
cesivamerite  los  demás» 

Todos. 

Entrad      , 
iodos  i  que  es  grande  el  tumulto. 

Todos. 
Llegad  todas. 

Libia» 
,  A  tan  grande 
estruendo  ,  romper  no  escuso 
mi  prisión. 

Aristóbulo  y  Filipo. 

I  Señor  y  qué  es  esto  ? 
Polidoro. 
No  haber  gozado  el  indulto 
;    Mariene  como  yo.  ' 

Octaviano» 
Dar  muerte  al  hombre  mas  bruto  f 

(  i  )     Encuentra  con  Mariene,?  la  hiere* 


40? 
nías  Bárbaro  f  mas  sangriento  f 
qae  ha  eclipsado  el  sol  mas  puro. 

Tctrarca. 
Yo  no  la  he  dado  la  muerte. 

Todos. 
¿  Pues  quién  ? 

Tetrarca.  ^  v 

N  £1  destino  sayo, 
pues  qae  muriendo  á  mis  zelos  9 
qae  son  sangrientos  verdugos  ,       ' 
vino  á  morir  á  las  manos 
del  mayor  Monstruo  del  Mundo* 

Aristóbulo.  v 

El  mayor  Monstruo  los  Zelos 
son  siempre. 

Tetrarca. 

>  Porque  ninguno 
de  mí  la  venganza  tome , 
vengarme  de  mí  procuro  t 
buscando  desde  esa  torre 
en  el  ancho  mar  sepulcro. 

ESCENA  XVII. 
Dichos  menos  el  Tetrarca* 

Octaviano. 
Seguidle  todos  y  seguidle. 

Tol  orneo. 
Desesperado  y  confuso 
se  arrojó  al  mar. 

Octaviano. 

Retirad , 
aquese  cielo  caduco , 
y  diga  en  su  monumento 
para,  los  siglos  futuros 


i 


410 


el  epitafio:  Aquí  yace, '  ** 
desfigurado  su  bulto, 
la  beldad  mas  milagrosa  9 
muerta  por  celos  injustos. 

Telomeo. 
Libia ,  tu  mano  merezca 
qui|n  al  peligro  se  espaso 
de  libertarte; . 

Libia. 
En  llorando 
de  Marlene  el  infortunio. 

Fiiipo. 
En  que  acaba  la  tragedia  , 
donde  se  cumplió  su  influjo. 

Pohdora. 
Como  la  escribió  su  autor  • 
no  como  le  imprimió  el  hurto 
de  quien  es  su  estudio  echar 
á  perder  otros  estudios. 


v  411 

■    •    El  Mayor  Monstruo  los  Celos. 

llace  ya  algún  tiempo  que  hubiéramos  i  o  seriado  en 
nuestra;  colección  la  ¡presente  comedia  ,  como  una  de 
las  mejores  de  don  Pedro  Calderón;  sino  hubiéramos, 
temido,  con. algún  fundamento,  chocar  desde  losprin-t 
cipios'Con  opiniones  y  preceptos  demasiado  rígido» 
para  juzgar  por  ellos  del  mérito  de  nuestros  poetas 
cómicos  del  siglo  xvn.  Quisimos  que  la  mayor  parte 
de  nuestros  lectores  se  acostumbrase  primero  á  ¿a* 
formas  y  licencias  adoptadas  por  aquellos  escritores, 
y  recibiese  por  este  medio  con  mas  facilidad  esta  tra- 
gedia del  Tetrarca ,  y  otras  creaciones  del  mismo*  gé- 
nero, y  no  de  mérito  inferior,  que  insertaremos  su- 
cesivamente. Es  verdad  que  esta  consideración  era 
del  todo  inútil  {como  lo  serán  sin -duda  nuestros'  jui«* 
cios)  para  algunos  literatos  distinguidos  que  han  es- 
tudiado detenidamente  nuestros  autoras  antiguos,  y 
conocaos  as  bellezas  y  defectos  «mucho  mejor  qué  *n  os-* 
otros.  Si  estos  hubieran  sido  los  únicos  lectores  de 
la  colección  ,  hubiéramos  puesto  al  frente  de  las. co- 
medias ile  Calderón  El  mayor -Monstruo  los  Zolos}  pe- 
ro convencidos  de  que  todos  los  que  no  se  han.  dedi** 
cado  con  atención  á  una  investigación  tan  penosa, 
(y  qoeT  sin  agraviar  á  ninguno,  suponemos  que  com- 
ponen el  mayor  número  )  solo  saben  juzgar  á  núes-* 
tros  poetas  dramáticos  antigaos  con  las  tres  unida- 
des en  la  mano ;  hemos  procurado  evitar  que  se  es*, 
candaliaasen  antes  de  tiempo,  y  nos  acusasen  tal  ve* 
de  parcialidad  ,  de  mala  fe ,  ó  de  temeridad,  cuando 
en  la  -publicación  de  esta  colección  solo  nos  hemos 
propuesto  erigir  un  monumento  á  la  gloria  de  nues- 
tra patria ,  dando  i  conocer,  ó  vulgarizando,  por 


419 

mejor  decir,  las  composiciones  de  nuestros  poetas  có- 
micos ,  despreciadas  ú  olvidadas  casi  enteramente  ha- 
ce ya  algunos  años. 

Nadie  ignora  que  aquellos  ingenios  inmortales, 
prescindiendo  de  Aristóteles  y  de  Horacio  ,  y  consul- 
tando únicamente  el  gusto  del  pueblo  ,  creyeron  con 
razón  é  sin  ella  ,  que  todo  lea  era  lícito  ,  siempre  que 
interesasen  vivamente  la  atención  de  ana  oyentes  ,  y 
compusiesen  versos  enérgicos  y  hermosos.  Confor- 
mes en  este  principia»  y  entregándose  libremente á 
su  fogosa  imaginación  >  fortalecida  con  la  indepen- 
dencia *  produjeron  entre  otras  un  gran-  número  de 
creaciones,  que  apesar  de  las  críticas  mas  rígidas  y 
severas ,  duraran  tanto  como  la  lengua  castellana. 

Calderón  r  que  casi  en  todos  íos  géneros  de  poe- 
sía dramática»  descolló  sobre  sos  contemporáneos,  en 
el  romántico  á  que  pertenece  esta  composición  t  tie- 
ne otraá  dignas  del  mayor  aprecio,  entre  las  cuales 
le  merece  muy  particularmente  la  deJ  Telrarc*.  Para 
juzgar  de  su  mérito ,  es  inútil  decir  que  por  ahora 
nos  «Ui/cUremos  »  como  su  autor  cuando  1»  escribía, 
de  que  existían  reglas  clásicas ;  y  que  dejaremos  para 
otro  tugar  el  examen -d»  los  principios  en  que  se  fon- 
da el  género  romántico ,  y  de  la  consideración  á  que 
es 'acreedor. 

<La  fábula  del  Tetrarca  de  Jerusa!em>  pertenece 
eschisivamente  k  la  tragedia  ,  es  de  suma  artificio,  y 
está  llena-  de  invención  fantástica.  Aquel  vaticinio 
del  astrólogo  hebreo ,  referido  por  Mariene ;  aquel 
puñal  terrible,  instrumento  de  la  fatalidad  »  que  el 
poeta  mantiene  hasta  el,  fin  suspenso  sobre  la  cabeza 
de  los  dos  per  son  ages  principales;  la  acción1  de  arro- 
jarle al  mar  y  clavarse  en  el  hombro  del  náufrago, 
que  viene  á  participará  Herodes  la  derrota  de  An- 
tonio y  da  Cleopatra  ¡  la  partida  de  aquel  4  Egipto» 


415 

los  agravios  que  recibe  ,  sus  setos  al  ver  la  imagen 
de  su  esposa  en  manos  de  Octaviano  ,  su  resol  u  ció  a 
desesperada  de  matarle,  la  caída  del  retrato  que  lo 
impide ,  y  confirma  los  funestos  presagios  que  le  a-  , 
menazan,  y  de  la  cual  resulta  so  prisión  y -el  nudo 
de  la  pieza;  todo  esto  es  grande  ,  magnífico  y  poéti- 
co ;  y  si  no  se  hallan  rasgos  de  esta  especie  en  las  tra- 
gedias tomones ,  se  hallan  en  los  poemas  épicos  mas 
célebres,  que, considerados  filosóficamente  no  son  o- 
tra  cosa  que  tragedias  mucho  mas  estensas  con  éxito 
en  parte  venturoso. 

El  gran  poeta  Calderón  no  tomó  de  la  historia 
sino  lo  que  únicamente  necesitaba  para  desempeñar 
su  objeto ;  y  sin  desfigurar  los  hechos  ni  los  carácter 
Tts ,  ocultó  cuanto  podia  perjudicarle.  De  esta  ma- 
nera consiguió  lo  que  ninguno  de  los  que  trataron  el 
mismo  argumento  y  qoe  fue  hacer  á  sus  héroes  inte- 
resantes y  eminentemente  trágicos*  Herodes  es  el  mo- 
delo de  los  amantes  ideales*  Sentado  sobre  el  trono 
de  Jüdea ,  todavía  no  se  considera  digno  de  poseer  a 
su  esposa.  Mariene ,  dice ,  es  la  producción  mas  per- 
fecta de  la  naturaleza ;  solamente  el  que  sea  dueño 
del  mundo  merece  sn  mano.  Con  este  designio  toma 
parte  en  la  guerra  civil  dé  Bono ,  y  espera  levan- 
tarse sobre  las  ruinas  de  Antonio  y  octavian  o.  Su 
amor  no  se  parece  al  de  los  demás  hombres  ;  es  una 
pasión  esclusiva  que  absorve  todas  sus  potencias  y  y  la 
posesión  de  Mariene  es  el  único  bien  que  desea  y 
siente  perder. 

t  i 

No  y  pues ,  mi  ambición  »  Filípo  , 
no  mi  atrevida  arrogancia , 
no  el  ser  parcial  con  Antonio , 
no  mi  poder 9  no  mis  armas, 
me  aflige ,  me  desespera , 


314 

me  precipita ,  y  me  arrastra , 

sino  el  ser  de  Mariene 

esposo. 

•  •.  >  .  t 
Suft  zetas  tienen  por  consiguiente  un  carácter  par- 
ticular :  no  sospecha  ni  puede  sospechar  de  la  ino- 
cencia y  virtudes  de  su  esposa :  pero  al  oír  que  Oc- 
taviaao  marcha  á  Jerusalen ,  su  amor  arrebatado  le 
inspira  la  resolución  de  matarse,  y  quiere quitarle*la 
espada  á  Filipo  para  ejecutarla,  £1  diálogo  rápido  en- 
tre los  dos  manifiesta  la  agitación  de  Herodes  y  los 
zelos  que  le  devoran.  No  ama  el  trono  ni  la  vida :  la 
idea  de  que  Marlene  podrá  después  verse  en  brazos 
de  Octaviano  es  la  que 'despedaza  su  alma. 

Viendo  ¿  en  fin,  que  apenas  hoy 
'  en  una  pública  placa 

aere*  horror  de  la  fortuna » 
-  será  del  amor  venganza , 
cuando  él  sea  |ay  infeliz!» 
..  4 pues  á  Jerusalen  marcha  f 
donde  es  fuerza  que  la  vea)      .   • 
en  tálamos  de  oro  y  grana      .     . 
..    heredero  de -ni  i*  dichas  , 
dueño  de  mis  esperanzas  f 
muero  de  agravios  y  zelos  dcc. 

Cráé  que  la  pasión  que  le  atormenta  le  ha  de  ¿*-  . 
guir  mas  allá  de-la  vida  :  quiere  arrancar  del  cielo  la 
estrella,  bajo  cuyo  influjo  ha  nacido ,  ¡(ara  que  nin- 
gún mortal- ame  como  4L  '*•** 

¿  Quieres  ver  cual  es  la  mía  ? 

pues  si  pudiera  apagarla 

hoy  con  el. último  aliento  t        •< 


41$ 
t    ,  .jo  hiciera  porqae  fallara 

,  ,del  cíelo ,  y  otro  ninguno  9 
:,  -,j  en. «n  gracia  ó  so  desgracia  9 

no  naciera  como  yo» 
.  *í .'  porque  como  yo  no  amara. 
.  Y  en  fin  ¿  para  qaé  diacarre 
.  :  mí  voz?  ?  para  qué  ae  cansa  t 
» . .  j    otra  pena  ,  otro  dolor , 

,  Otro  tormento»  otra  ansia 
-      en  el  corazón  no  llevo  » 
sino  solo  ver  que  aguarda 
Mariene  á  ser;  empleo 
i .    de  otro  amor »'  de  otra  esperanza, 

o  •     :  •  • 

Encarga  á  FíUpo  que  la  mate  inmediatamente  que 
llegue  i.  so*  .oídos  la  nueva. df  que  &  él  le  han  quita-» 
do  la. vida.,  para  qqe  ningún  mortal  llegue  ,á  pose- 
erla ;  pero  no  quiere  ser  aborrecido  de  la  que  adora y 
ai  un  solo  momento.   ... 

,  No  sepa  que.  yo  {le  dice  á  Filipo) 
soy  el  que  morir,  la  manda  j 
.  , .  «o1  me. aborrezca  el  instante  -  • 
que  pida  al  cielo  venganza» 

Cuando  ella,  después  de  acriminarle  por  sn  resoln-  < 
don  sangrienta  »  se  encierra  en  su  habitación  re- 
suelta á  no  verle  )amás,.Herode*  lo  sufre  con  gusto» 
porque  asi  cree  que  estará  mas  segura.de  los  demás 
hombres,  y  *up  de  él.  mismo.  Últimamente,  luego 
que  la  mata ,  no  sé  queja  de  su  desiino,  ni  se  la* 
menta  de  su  desgracia  :  calla  y  se  arroja  al  mar. 

Esta  rápida  es  posición  hasta  para  manifestar  que 
él  carácter  de  He  rodea  es  profundamente  trágico.»  y 
«que  el  poeta  que  sapo. pintarle. coa  tanta  orig¡najir> 

27 


4Í6 
dacl  y  energía  ,  era  capas  <k  haber  igtníla«Ío ,  por  lo 
menos  #   á   los   clásicos  estratagero»  en 'éste   género, 
aun  sujetándote  &  las  unidades,  si  bü&ie>ra  nacido  en 
tiempos  de  mejor  guato/    •••   '*  ■  •  l  »  *r 

Mar  ¡ene  es  aman*»,  es  esposa,  es1  Rey  na:  nada 
aprecia  en  el  xnamétr  B¡ño;é>He«odes  ;  ferfc  no  le  per- 
dona que  haya»  encargado;  á  otro  que  la  'éjui te  la  vi- 
da si  ¿1  perece.  Su  inteéiteia  y»  su>  VfftaéV  cautivan  la 
atención  de  los  tvpeBttfdtfnes  v  ]f  *a  mueble»  desgracia- 
da arranca  lágrima* 'de<  compasión*  Si  'tifetidmpara  es- 
te carácter  con  «dLdanfairwy  no '  ha  bf&<  ninguno  que 
dude  un  momento  «T^ar  á  Majencia' preferencia. 
Aquella  ,raiinq^  e*  itoul^bfoy  <**  á  Oroitoan  moti- 
vos aparentes  para  dudar  de  su  fidelidad  ;  pero  á 
Yú  esposa'  d^Herodéfeí/ni  érfií  ***  apa  rie^fciirW 'con- 
denan. Es  Vfctitoa  *d«  la  'fáFaflAid :  es  <  aria"  l*eroihar 
digna*  <*el  teatro' g Hegd.  OítiitíartO  *p*«eoe4í£ofmiifr 
p*<\«efto  ^oéidebiéría  j»pé«>^en  lofS  paaage*  píinlcipaléí 
habla  y  obra  con  la  dignidad  ^tópikñ&tihtyaú 
Monarca. 

Algunos^  incidentes  esiai*  'manejado*  c\>n  poco  a- 
cierto.  La  larga  prisión  de  Libia ,  hécesgria  á  Ja  in- 
triga ,  no  se  halla  bas*dnté>tn*rti4ada:1  fif  personage 
y  la  es^edicion  dé  Afftttfbttt* -son  denfcatfatio  episódi- 
cos y  ó*  á  lo  menos  no  están  suficientemente  enlaza- 
'  dos  con  la  áctiian  pf?tícipiil;J,©cssígrkdá  'sob&'niane- 
Tá'eY títeñro  dé1  qué  sTyále  eÍJ£oetrf  para^dctóíbttar  ef 
«rrot-dtt'Hérbdes  y  fe:niúeVte*de  Marteáé/^Es^tfti  re-. 
cursó1'  *Afl  rHMxfihiV  el r deJ  ¿pá^r»  hfe  'tócérpára 
aeseiila«'ái4,u,tíá  tragedia- V  fioíó  pudiera  tolerarse  en 
ht¿  cdíméffias  áb  tapa1  y  e^amfHfcy  lawbíe'á'  tin  gra- 
cioso,"<t«eV ¿pesar*  dé  las  b^brr^ácisjs^u'é'tíiéhé  muy 
tómicíáW  figrVHoS'ásy  dVstirtijfe  ctt  muénás^sírtes  el 
electo/  traficó dé  Táobtfar  •'  • '■  '  ;"  iV-  - ■'•  ,,M     "" 

La*  idlas  y  stírilf mrentó^  qirt  pone  el  iv\ dr  en  bo- 


ca  de  los  principales  personajes ,  serian  admirables, 
sim>  estuviesen  recargados  con  el  peso  de  los  ador- 
nos f  y  se  espresaran  con  menos  ingeniosidad  y  mas 
sencillez.  La  versificación  es  llena  y  robusta.  Él  estila 
en  general  es  mas  artificicioso  que  elegante:  á  veces 
degenera  en  hinchado ,  y  otras  en  conceptuoso.  El 
lenguage  es  puro  y  vigoroso ;  y  en  las  relaciones  de 
aparato  se  hallan  metáforas  é  imágenes  «hermosas, 
otras  atrevidas  ,  y  algunas  descabelladas 

Calderón  no  ha  sido  el  único,  que  ha  tratado    este 
argumento.  Algunos*  estrangeros  le  han  puesto  en  la 
escena ,  y  entre  ellos  el  célebre  autor  de  Mérope ;  pe- 
ro   no   ha  sido  tan  feliz  en  esta  obra  como  en  otras 
composiciones  suyas.  El  juicio  de  Mariamne,   hecho 
por  la  Harpe  f   es  bien  conocido  de  todos  los  aficio* 
nados  á  la  literatura ,    y  nada   podríamos   nosotros 
añadir  á  las  observaciones  de  este  famoso  crítico  •  a- 
^^^•quej^ftr?geíía;icitada/  «*   tiene  e*«e»:'io& 
alguna  con  eí  Tetra fcá  dé  Jeri*sWni.  Entre  nOsbtrM 
Ripoll  Fernandez  de  Urena  escribió  una  comedia  qué 
no  hemos  leído,  con  el  título  de  El Bárbaro  Aséalo- 
niia  jr  Tirano  de  Judea  :  Lozano  y  Montesinos,  au- 
tor de  las  Soledades  de  Ja  Vida,   otra  de  poco  mé- 
rito con  el  de  Herodes  Ascalonita  y  la  Hermosa  Ma- 
riana ;  y  Tirso  de  Molina  la  de  La  vida  y  muerte  de 
Herodes ,  que  aunque  muy  inferior  á  la  de  Calderón, 
no  carece  de  grandes  bellezas,   tanto  en  ponto  á  la 
composición  de  la  fábula ,  caracteres ,  &c. ,  cuanto  á 
la  versificación  y  estilo.  Algún  día  puede  ser  que  la 
insertemos   en   nuestra  colección  ,  y  creemos  que  el 
público  la  verá  con  gusto ,  á  pesar  de  que  su  des- 
enlace es  el  non  plus  ultra  de  las  catástrofes   San- 
grientas ;  pues  acaba  nada  menos  que  en  la  degolia* 
cion  de  los  inocentes. 


J 


CUAL  ES  MAYOR  PERFECCIÓN. 


t 


PERSONAS; 


Don  Félix. 
Doña  Angela.     u 
Don  Luis. 
Doña  Leonor  0 
Don  Antonio. 
Don  Alonso. 
Doña  Beatriz 
Inés. 
Isabel. 
Juana*  ■ 
Moque.  * 
Un  escudero. 


I*  escena  e»  en  Madrid. 


420 


ACTO  PRIMERO, 

ESCENA  PRIMERA. 
Sala  en  gasa  dx  dona  Leonor. 

Doña  Leonor  f  Inés  y  derj.Fcli*. 

Félix*    .     v    »»?•  '  * 
Famosa  tarde  tendrás.  ,  }y  ív 

Leonor»  ,. 

Bien  confieso  que  lo  fuera  ¿  " 
si  yo  de  gusto  estuVíírá. 

Félix.      ■■  *  -  "v  -I. 
¿  Pues  qué  tienes  ?  ,,     jk 

Leonor. 

No  sé  mas 
de  la  necia  pasión  miaf      v' '      - 
de  que  lo  que  en  su  estra3ta»a>  * 
con  causa  fuera  tristeza  ,  ,«My    V. 
sin  ella  es  melancolía  :         .  ,  r  ¿ 
mas  lá,  ¿qué  noticias*  tienes 
para  pensar  ,  que  será 
buena ,  ó  no  ,  la  tarde  ? 
Fcí/ior. 

que  la  disculpa  previenes 

de  darme  por  entendido 

de  quien  las  visitas  son , 

que  hoy  esperas ,  la  objeción 

con  preguntarlo  has  vencido  9 

de  que  contigo »  Leonor  y 

hable  en  esto  ¡  y  mas  si  es  lkíno , 


421 


que  un  acaso  «Offcesaao 
no  es  escrúpulo  «debonor  9 
que  ano  se  pueda,  decil? , 

,  á  -anea,  famtentná»:  oye ,  y  sabrás 
en  qué  fundo  ,  que  boy  teñid  cas 
bien  en  que  te  divertir. 
A  la  IVmétetipgoivtatta 
dia  del  Aage) ,  fui  con  todos  ,    ' 
que  partí  fiesta  en  Madrid  , 
basta  el  4rérsft-  natos  á  otros  , 
en  tu  coche*  que  esta  tarde  9 
á  causa  de  tus  penosos 
accidentes ,  no  queriendo 

i  amaar  <de  sus  ¡desahogos  ,        >  > 
me  lo  preetaátof  <}ue  en  casa 
donde  hay  donas  ,  tos  notorio  f 
queálo*  boinbres ,  tales  días    > 
aun  son  prestados  los  «propios»  » 
Con  dos  amagos,  don  <  Luis 
de  Mendosa  >  y  dos>  Antonio 
de  Ayataj  queseo?  con  quien,    .- 
mas  en,  Madrid -ase  confronto  ,  • 
salí ,  añadiendo  ni  oon curso  f.     . 
ya  que  no  podé  vq  adorno,    t  . 
nn  númeep  v^feteainreas*.,     •  »»-♦ 
si  no  de  lostve^de^estorbo.    '    • 
D/galo  el  efecto  ,  pues  ' 

aferrados  en-  €*♦  golfo  . 
de  tantas  tercenas  líelas  , 
como  le  <surc»n  el  corso , 
doblando  «1  cabo  á  la  puente  ,    • 
hubimos  de  tomar  fondo 
en  el  estrecho ,  que  faace 
su  piélago  mas- angosto , 
,s¿*  tiempo  quede  la  guarda, 


428 


el  orgril*  preitoroaé  -.-..» 

hacia  á  los  Reyes- calla  t 

con  que  fue  ,  Leonor ,  ^forsosOy  * 

que  el  coche  ,  y  el  de  dos  dama*  9 

ai  á  la  metáfora  torno  9  > 

hubiesen  de  soaobrSr 

entre  aquellos  dos  escollos 

de  |a  callada  ,  que  baja  » 

á  la  Tela  ,  en  cuyo  abordo» 

los  dos  coches  enredados  • 

con. la  prisa  de  los  otros  ,         .  > 

*i  ya  no  con  la-  porfia 

de  los  cocheros,  q«e  solo 

su  honra  está  tu  cual  rompe  mas 

aleros  ,  y  guada-polvos  9 

llegaron  hasta  lo  llano ,  > 

donde  en  los  bajo*  de  un  hoyo  » 

dejé  el  nuestro  al  de  las  dama*-. 

un  ege  á  la  rueda*  roto.  .    - 

Si  se  cae  ,  6  no  se  cae • 

quedó  ,  á  tiempo  que  nosotros  ¿* 

arrojándonos  del '  nuestro  f         » 

acudimos  presurosos. 

La  cortina  y  que  tfasta  alUf  {    - 

en  recatados  emboaos  ,  •.  i 

á  media  los  brujuleaba  '"■■ 

las  personas  ai  a  lo*  rostros  9    '  i 

franqueada  con;  el* acaso  9 

dio  lugar  i  que. ¿toboso  ,        :    '> 

notase  de  una  hermosura1    •       » 

el  mas  apacible  asombro         "-> 

En  mi  vida  ,  hermana ,  vi....*    i 

(perdóname,  si  aquí  rompa*  .r» 

fueros  ó. la  urbanidad,       V     jja 

gne  aunque  no  dudo*  ni  igncra:. 


qué  en presendá  de  una  dámai 

ann/que  sea  hermana  ,  es  loco 

d»q«e  á  otra  alaba ;  hay  suceso* 

que  /dispensan  licenciosos, 

mayormente  cnando  está 

tan  recasado  mi  voto, 

que  quedándose  en  licencia 

no  puede  pasar  á  oprobio.) 

Km*  mi  vida  ',  berma oa  ,  v!  , 

vuelvo  á  decir  ,  tan  hermoso 

maridaje  como  hiaerón  , 

mezclando-  pálido ,  y  rojo , 

sos  mejillas:  y  mas  cnando 

al  sobresaltado  asombro 

del  Janee  y  vi  no  sé*  qué 

desmandadas  hebras  de*  oro, 

como  acusándole  al  manto,       ,' 

qoe  abandonase  el  reboso  <, 

la  bosquejaron  á  cercos,  '   ' 

y  dibujaron  á  tornos.       * 

Con  el  susto  la  hermosura 

creció  mas ,  y  mas  si  noto , 

que  lo  parpó  reo  dejó   -    • 

á  Jo  candido  tan  sólo , 

que  solamente  en  los  labios 

se  biso  reacio ,  bien  como 

diciendo:  de  sos  mejillas 

bien  puedo  huir  temeroso  , 

ufas  de  los  labios  no  puedo , 

most raudo  en  unas,  y  en  otros 9 

que  no  era  en  ellas  a  gen  o 

lo  que  en  ellos  era  propio.  * 

l  Mas  para  qué  me  detengo , 

si  aun  ahora  es  culpa  ,  que' absorto 

ella  peligre,  y  que  yo 


4a+ 


íip  acnda.¿  «a»  appeifef anulo?, 
llegué  ai  coche.,  puejb  que  ya  . 
mal  afianzado  en  lwfeomtaej 
de  gente  de  4  pie  ♦  impedí*  . 
que  acabase  de  dar  t#do    .  . 
el  amenaza/lQ  ímeJco  , 
diciendp ;  pues  es  forzoso  »  ¡ .  -  •  > 
seño  ras,  que  vpe^tro  cofcbe 
de  aqnj  no  pase,  y  q«*jdfcotjrO 
hayáis  d^  i*pr,yiros ,  et#e.    . 
merezca  ,ser  .taa  dichoso;    > 
que  ppr.estaf  mas  á  mano» 
le  adpútaife  (¿A  9>>1  «»&f«a 
destcm^La^amante  atrodo*,  -. 
pero  hermoaajnenie.  airosos  , 
despida  elc^r-eciinieuito,  • 
echándomo^del  destrono,         i 
la  culpa,  íío  es.  la  primera 
vez  que  pagana*  posotros 
desmanes  de  los  ¿ocharos  » ■ 
ni  la  primera  tampoco  9 
que  la  hermosura  se  dé  .   i 
por  mal  servida  del  todo,.  • 
La  que  iba  *  Leonor ,  con  ella  9 
con  mas. cortesanos  modos* 
haciendo,  gala  del  susto* 
y  desden  44  alboroto:»    ... 
dijo :  el  no  estar,  caballeros* 
(  seamos,  las  dos.  quien  soma*)  . 
.  ¿  la. vergüenza  de  ser-  v-.. 
de  tantos  vulgares  corros  f 
como  á  ver  el  coche  asi     • 
se  paran  »  blanco  afrentoso,    • 
nos  obliga  á  que  aceptemos 
ofrecimientos ,  que  otorgo  »   .. 


m 

^ff  4*  J%  WtefMa^.  ...... 

que  deben  tan  gflnvtoafr*   ;  7  -  ? 

cabaljeros  4  U»  4afl»as  j.. .  * 

pae^aquí  hay  perdido  solo 

elquedesaconvodados  .i,:   •. 

quedéis  9*leuda  que  yo  pongo 

á  cuenta  de  ser  cqpiaii  ^sai»  ,  . 

qqe  eArfpueu  cebra,  coa  ,njts.;lpfro 

las  jtaiattones  áiqu¿eaj;t%  . 

haxe  Jo: obligado .herejci ;  ,, 

dijo.  p  y  ostentando  .4  m  ¿ieinpo, 

ya  del  arte  en  «1  ader.no , ,, 

ya  en  U  enmienda  4el  acaso  9 

lo  entendido  y  lo  «brioso» 

(  cuandp  aúpela  par  a.cl  garvo  v 

no  tiene,  toen,  pleito  el  rostro.,,) 

pasó  del  estribo  ai  pues  trp <» . 

con  que  hubo  de  baoer  lo  propio 

la  fceraiosa.»  qoa  todavía  .... 

en  podridos  *olüoguios  9    . 
acodándote  deJ  daño, 
se  olvidaba  del  socorro.  <t 
Con  que  «tomando  otra  ve*  . 
vuelta  el  coche  «n  Ao  espacioso 
de  la  Tela  y  las  perdimos 
de  vista,  porque  nosotros „ 
viéndonos  á  pie»  fue  fuerza 
apelar  á  «lo  fragoso 
dtl  Parque,  y  por.  s«:caUada 
al  prado, nuevo.  No  toco 
en  si  quedé ,  ó  no ,  Leonor  9 
ó  con  Unto,  ó  pesaroso 
del  lance,;  pues  si  contento 
digo  i  no  sé  que  penoso 
cuidado  demiento  f  que 


49* 


f 
de  sersalrtmad*  cal  tura/         i 

tea ,  con  aplana»  justo ,  ,~ . 
en  las  bar  lastimen  gasto  9 
en  las  veras  la*  cordura  j       *s  *í 
en  lo  q*e  ¿tienta  ve*  donaire  f»« 
en  lo  que  «dice ^  el  oarifto»;    ..:••» 
en  lo  qte»  ¿viste  *"cl  altflEo>;    ,? 
y  en  todo ,  eafin  |  ti  baen  aárej 
tanto  ,  para^qat  «anclaya      •••  ; 
los  méritos  de  Bea-tríi  ,  '  '• ' 

qne  «h>  "tengo; por  fcMfc        '      *>*• 
solo  en  bét  amiga  soya.  '••'••   »   » 

Aanque  el  'afectólos  cielo*  » •   - 
remitieró» 'á ♦tinüa  estrella,  ^ 
de  parta'deAltgeia  bella.'  '  ,r>  •'' 
estoy  por  pedirte  lelos. 
¿Es  posible» qfce  «0  «ea<     :*'<*  '«•'* 
Angela  4^11**  dabéó  ' 
mayor  intillatfefibá  >    :       •  :    <-q 
••IfcWMrV5     '•  •,'-:}. 

porque  annqa*  berta***  tat?**^ 
la  her»és**W'pa*a  mí  •,»'••■  ' 
no  es  alhaja  ^  arfayortnente'  '  "T 
hermosura  ^íatnWe,  <  •'•  -f 
tan ,á  solas]  qea  *o-V*-'  !  !,í'  '• 
sentidos  quemase»  cahfta  rl 
digan,  berntasa'rae  soy  ,i  '  ''"" 
y  no  ri&sVtalf  ¡«fcea  voy*  '  •  "  '^ 
á  verdona tteae  el  al**a/  "  f 
creyendo  «fue  -es  escKlttira  f'r 
y  ¿tflamant*  la*  epeueiUr+ >  •  »1 
una  faatesina  que  dentro  • 
anda' de  «fuella  betmósora»    ■->' 


42¿ 
Si  habla  ,  es  fod»4<m  enfado)  * 
si  responde ,  con  frialdad  y  '"    <>; 
si  mira  ,  con  vanidad ;  ' 

si  escacha  >,  eoa  desagrado  ; 
con  todas  presuntuosa:;  '  «" ,r :  '- 
tanto  f  que  estrátños  sus  modos, 
par«tte  qu*;  tienen  todos 
la  colpa  toque  sea  feerntofej' 

l  Ves  todo-  éso  ¿  Leonor  ?'pt*& 
todo  eso»y  mas  se  'asegura1" 
afianzado  eir  la  hertoogura'^* 
Ella  de  las*  Jamit*  és  ■  ^  r-  '•«""'' 
la  única  perfección'  rara;* '  <•  ♦-• 
tenga  cualquiera  qué  fuere'  T       • 
todo  lo  que  ella  quisiere  ;  * 
pero  tenga-bueña  c*rV.    •>  '*'     " 
Sobre  herm**a,  en  fin  i  nó'hay  cosa 
que  suplir  ni^ué  refreír  i'1»  '"  'r. 
que  no  llene  una  muge* 
mas  que  becer  que  serhti'mosa; 

Un  tono  que  Inés ,  tal  vezVn'' *  '* 
que  á  la  labor  engañamos  , 
cchv  lo  que  **mBs  y  hablamos  f 
cantor-  Suele    ser  Jueí  •  r«»* 
de  aquesta-  cuestión  podían     *'■' 
mas  dejando  la  cuestión 
quisa-para  otra  ocasión  V  ri'     ' 
si  BeatnVe»  dama  míaV  4  '  ,f  '■* 
y  Angela  tuya  f  empeñados 
los  dos  f  será  bien  no  ignores  , 
pues  partimos  los  amores » 
que  partamos  los  cuidados» 
Yo  i  Beatriz  regalaré , 


$*? 


trata  tú  de  regalar       .     '  '     * 
á  Angela. 

•    Félix.      >  .  . 
,     Si  haré,  á  enriar, 
dulces  voy,  '    i  .     > 

¿eonor.     -  ■    , 
No  hay  para  que** 
lo  quejón  dulces  y  soja 
chocolates  y  bebidas  , 
ya  Jas  tengo  preveaidaa  }      > 
alhajilUf »  que  á  ocaaioa 
de  abrir,  un  escaparate  9      .. 
como  acaso  estea  allá  » 
solo  me.  faltan  ;  y  asi  r 
de  enviarme  tu  amor  trate  » 
como  relojes ,  cajillas  ,    .  ■ 
y  estuches  de  filigrana,  .;• 
^   d^c.nsjal  y  porcelana , 
y  si  algunas  *orti¿illa>r.., 
lasos  y  guantes  quisieres 
añadir ,  por,  eso  cree,^»  . 

jQué? 

.  Leonor*  .  , 
'„,     Que  no  jbi  enójate» 
pues  todo  Jo  que  tú.  hiciere*., 
será  siempre  lo  a*ejo*v 
ti     .  Félix*  .   ... 
Ahora  bíea»  ai  eso  ha. de  ser» 
Leonor ,  voite  á  obedecer*  . 


w 


^  «31 

«<>iJi<'iinff*t;t.  <n..ít   H  l  h  of>  rrrp 

aocLii*)¡/ii¿  •»    . !    v    .í»  -i  •,.(ii-    i 
Doña   Leonor  é  Inf$¿  f  después  doña  Angela  y  do- 
ña Beatrifyp^Wfcgs  ¡?i 'M'/f/ífJ^  /*"»••. 

t9lL     'InéS*    20    807    £    FÜJ 

Al  bajar  del  cofíredbk  pm  im  ¿  / 
en  la  escaler*\1ia/-4sicontrado 
con<t4ft  <tftAtas ,  que  ya 

oJil4|E¿btioH*   f(OÍJtlll,t   «  ) 

£J#cf!tfqa;s4ga¿9T6  eioi  M> 
aabtftiftdbfs'tficojitfcaxloq  X  t  w 
acompañarla*^  M 

.\i»  use  *uQi¿9Ígú0¿x  m  ohi)  i.'! 
oh i<]tfuy:  brth' í of.*í 6  n íí  1 
ftídífei%tí€s';cab*llwoVí '"'  »»  ■»•% 
pues  la  a£áttA^-4t»lfoii«alM  >b 
basta  para  atrevimiento, 
escusar  cl^ác  se¿t»r&I 

en  casa  de  mis  amigas» 
donde  de  visiftt^Vütfgo. 
••.\n  ,25  *r  ./^/¿^E  oncm'í'.lt  i, 

De  cuerdo  %  y  necio ;  átffiWy5  ['} 
dos  cat$fl4nfc  háte^í  aMierW , 
en  no5  abonar*  la  elección  *"  »"* 
en  creeFljJuV  oí  sigo  ,<  '&VUl2¡i?9s 
)  en  creer1, '*fne  si  bt'&fülétiV  "'> 

seria  tan  desatento''', ,r  c<i  '30¿    ,,J 
que  diera  esa1  razónenlas 
á  vuestffó*  jicfctbá  desprecios. 
Hermano  soy  de  ttWnb*?|fju0  h 
que  á  honrar"  Vente;  si  saliendo 
de  éJiS^iifró  Óff  dicha  , 
2  ti 


433 


que  de  ella  al  pato  os  encuentro, 

l  cómo  me  pode,  escusar 

de  hafrer  de  volver  sirviendo©* 

ha9¿axsu  cuarto?  Y  así/    *    . 

puésVé  V*  so  Visí*^  déjb,       - 

ella  á  vos  os  desengañe » 

y  á  mí  me, disculpe*  ;«»♦»  t\.ú  i/* 

¿/  v.v  t  -..wVm  *«*:«>> 
vaya  t  que  aunque  sea  herjHAfe» 
es  también  aliwkttetfto 
de  mis  amigas  i.poMiU  - 
ves  ,  y  noUüM  ♦  lo  dtafafca/MJ --i 

El  cielo  os  ga*r4e.  úQ^  »«•       ^ 
tan  absoluta  el, imperio 
de  la  bermoaura#.qHe*a»ibWÍ|: 
de  lft'floncfll**  aprftWii    -i  «.-..  ; 

5$CRNA  H04.-. 
Dichai  i  rnenoÉ  áÓn'  Fafcri*  * 

¿  Hermano  de  Leopor  es  9  qp. 

cielos  ea¿e  ctJHfeW  f  <,f. ..  u  - 
ojie  des^e,  el  día  ^e):;An^eJ60  R.  , 
tan  en  tame^orja^enjgo.^  „ 

en  p%aJW  %°e  ■c^Hflí  *w* >  ,s 
de  ser  .pasión  ?    <:     ^  f  A,j  tll 

^jEscud<¡rpf.t  ,,,[,      .. 

el  coche  vendrá  ?,   7U,  ,_  , 
._•  J    ;.    Angela.,     ,  .l(  . 
fia  volviendo 


43» 
mi  padre  á  casa »  Mungia  9 
puede  volver.'  ]        } 

Escudero*  ....     ' 

.._      Él  .sereno 
á  esas  ñoras  hace  daño. 

¿Inés?       ;    M     .     .    .  ,      __ 

¿Señor*?  r ¿ 

,  -.:  .^       En  trayendo 
lo  que  embiáre  mi  hermano*,.  ,  . , 
trata  de  ponerlo,  Juego 
/en  algún  escaparate 
del  camarín-  4&  allá  dentro* ;-  .  a  .\ 

Inés. 

£1  caso  es  que  lo  envié.  »* 

Leonor. 

y  mil  veces  ^grtdeaco  r      * 

i  mis  achaques ',  señoras ,« 

la  dicha  de  mereceros 

esta  honra  9  con  que  ya  l    *' 

tan  bien  hallada  con  ellos    *    '   '* 

pienso  vivir  j  que  los  trueque 

de  pesares  á  contentos.  s 

Beátri*.  / 

Del  hallaros  levantada,  . 
hermosa  Leonor ,  me  debo 
una  »  y  muchas  norabuenas.     , 

Angela. 
Yo  no  >  que  todas  las  vengo 
á  pagar ,  por  no  fahtv 

nada  á  nadie.  .. 

*     '         *  '  ' 


434 


Con  tatf  nuevo  *,,l,iJ 
favor ,  siendo  coája  es 
el  gusto  el  mayor  remedio , 
¿qué  mucnó  que  a  mejor  aire 
respiren  mis'&ettfftníentos? 
Pasad  á  vuestros  lugares.  ' '  ,ikí  i 

Beatriz. 
Aquí  me  quedara™"3**  i 

cí'í  «^il  *»'f       ¿Esa 
cómo^mede  Ser?  vi*;.»*..-!  wp  ol 

Angela*,  tdttUuif  á^efitbí1  ¡  •>  M 

¿agtfb. 
Ninguno  hasta?  aft  emanes ->m  i*  j  i,í 

AiujSjtatf  los  cumplimientos 

las  dos  ,  que.á  .mi^o  ¡na/t  toe*,  ~ 

mas,  que  tomar  eTppstrcro^,  ¿ 

Si  ha  de  ae^.,, yo,  .pasará,    j  0»v, 
quede  la  TÍrfft4  fi»-fflfií*9«    '  tí£iéntase. 

¿Cómoestás.?^,,  ,,¿     ,.     ^  ^ 

salud  9  a  Dios  gracias  ..tengo*      , 

Leonor». 

¿  Vos  cómo  estáis  r    ""        '  ' 

v;:,./  an  -  fciryílifc0'*  "*   ^ 
Que  os  hajra  ofendida  ttmb  ^^t 


cu  preguntarlo*  estáis  f 

-i,  »•*■,  4ñ$tla'      -,i  <.¡  ¿ 
i*J#4:¥if?s ^rKdip, ,., ,,,  ,.  , 

gratis  dato,  4  qué  he  de  hacerlo  ? 
4  helo.  4c  ^c^ar  en  la  calle  ?  ;  , ,  - 
i  ..     líeonan*  ■       ,-»  .-.,  J;j 
\  Quéf  bien,  impartido  pela  i . . » t 
í.%V¿  bieu:  asentados  lasos  !   .  ¡> 
por  aquí  ai)4q«ft*l  espejo 
de)  jboiH<£jci Atp  <de  Beatriz, 
Beatriz. 
*  Agravia  le  hacéis  e/o  eso,,  \.  ,  T 
que^ngeja.  aerlo  de  todas        •  r 
cuantas  h^ipuede* .       ,  v,u  ,  t 
fv .  ♦  v  '■»!.  !  i  f»*  Angela.    •  ;•  i    -  •:-  f 
j.     í!    <  fSi  puedo  ,■    jí 
por  si  hablas  «ir  su  ironía  ; 
pero  ahora  qtw  me  acoerdov  ;, 
l  para  qué  tenéis*  hermano  ? 

5  ' "'  Leonor. 

Para  'ffetíéYTO  ctaaulelo'-  r  : "'  T 
de  tener  galán*  , y° es poso  , 
cu  tanto  que- no  lé  tengo.  "  ,,rt 

'  Angela. 

I  Galán  9  hermano  ''9  y  esposo  f1 

.  Leonor.  7 

Sí,  todo  lo  es  Felbf.  h.  :| 

..  Angela.       •,,,.', 
'  ¿Y.  eso   ;ít 
ma¿ ,  ^erroajio ,  esposo,,  y..l|?I- 
**1*°  f  X  Í9Í°  A:  u«.  Mempof   y 
Mocho  «s  P^ra  un  'hombre  solo. 


435 


j 


435 


V 


Dadme  licencia  (  Volviendo4     M  r 
á  la  pregunta  >  qtie  estraSé 
él  ¿fecíir  con  tanto  ceño, 
que  para 'qué  ten^o'hérmáño**  ' 

Angela:        r  '  * 

Nada  que  di¿o  tfe^f  lento  ;      'i 
pues  no  sé  pura  ja^ié  sea 
tener  ua  hermwno  teuMio ,    '  • 
que  se  ande  qut&rlñfcto  coche».. 

» wLéÜMW»'  '• 
Eso  es  lo  que  9*6  <tio  «ntiettáó. 

Yo  sí  rf  *1  AngeMo  diga  f 
testigo  *  que  >pofr  1o  menos  f 
no  me  dejará  mentir  í1  * ":         ' 
pues  sin  querer  > hizo  el  nuestro 
adredemente  "pedazos. 

.•  ¡Leonora  '  •'  »-    *    ; 
l  Sin  querer  |  y  *d<red«  ? 
í„.     ,  .     Angf&ai  -v 

;v    ^        Es  ciertos 
¿  ved  quer.mayor  graseria  ? 

^  ...     fiealrip.   . 
lío  digas  ,  Angela  ►  «fo t       , .  f: . 
que  en  toda  mi  y  ida  ví 
mas  cortesano  ,  y  atento        \  . 
caballero  ,  que  él  anduvo  ; 
y  antes  saber  .a'gr'adesco  f 
que  sobre  vuestro  cárijft>tv    *  "' 
caiga  el  agradecimiento 
de  sVfcrbnde  cortesía  ; 
pues7}  a  'Sú-cídldo  Pf  riesgo   ' ') ' n 
de  ba%ersV  ^üctírádo  el  ebeíe.; 
dejárido  él  íuyo  ¿el  'frfíWeMr4 


4W 
fue  f  pairé  *cjtie  no  acabase     * 
de  caer  ,'qtoé  á  socoYrettios 
HegóyY  quedándose  á  pie  , 
nos  le*  &•••- 

*    Angela-    • 

•  ¿Pues  que*  M«D'«a  eso?... 
•'♦>'»■"   Leonor. 
Dice  bien. 

'  '  Angeta. 
<-;'      ¿Si  iba  yo  allf  ? 
-       Beairlt. 
Claro  *ita"f  por  tf,  por  cierto , 
son  todvs'las  atenciones. 

»  "    Arigeia. 

Mas  no ,  sino  no. 
'¿soltar. 
ITu  ingenio  f-    «*p.  á  Beatriz. 
tu  prudencia  ,  y  to  cordura  v     '* 
BeaUisv  f  **•  entendkniéftrtso 
solo  tolerar  pudiera-  >  i 

esia  vanidad.'  -    ' 

Beoiris:   v 

¿  Qué  -puedo     o/>.  d  Leonor. 
bacer,  si  a)  quedar  sw  padre  >    , 
que  en  Indias  en  én  gobierno 
murió  i  basta  venir  su  bacienda  y 
que  por  instantes  espera» y? 
pues  yw  ha  llegado  6  Sevilla , 
otro  retir4*  no  tengo , •    •       ■ 
que  la  casa  de  mi  tío  i  -■ 
en  cuya  prisión  padezco    i 
aquella  antigua  sentencia  * 
de  ligar  el  vivo  al  muerto*' 

Angela. 
Si  es  murmurar  9  que  por  mí  -' 


i 


481 

no  fue,  tfe»l»¿ltfitfijt$fr'r  ,  »n1 
pues  fk  l*Mr#*;*ie%4flft,  -,  tC1  ,,». 
desde  aquel  i^tante,.ni«sjnp;     ;; 
á  otro  ,  y  tu  bermano.sft  ojióle 
~~       á  todas  borasjos  veo  , 
,.    caoialeQnea  «lli.esquifif  • 
beberse  por  iní  los,  vientos. 

Leonor.     ,*<*,<{  U}\(\ 
\  Qué*  fuera  r  qua  el  otro  faese  0/ 

don  La  id  !  apure  el  veneno. 
No  estraiío  yp  4*  los  dos  , 
llegando  P na  vez  á. vero**» <-.-,,, í:> 
os  adore&j^.qiie  esJrAflft:  ._,, 
es,  que  el  0^4  sea  tan  necio» 
que  no  os  adore. tarabje^.;  ,->:;\'_ 
Angtkt 
.an\.»»JNV  p*r.a  tpdo*  «e  hicieron  ,' 

Leemos,  iguales  la,s  4tft4|chas  »  ¡ 
de  mAnr..á:mis  desprecios,;'.  ... 
alguno  para,,Qqntar  ..¿*h.>¡  (.:.  - 
las  ruindades  de  mi  ¡iK<m<)¡0.>  » 
había  de  qu¿4*r.tÍyo. 
.nono-iV  V    .-.  •     o  ó*»  tfBaairiz, 

I}<ltffa^q4wr,4s  depiffi  ,*  ,-.,...; 
1  .1  '••:•?'  ¿    Angela.  \^>\  ,r»  \    ;, 

«  f ".;.!  «lOfill    l»ft    'lili"  /    '     Bs^ft  o  -i.ii.i 

6  eso tr»  1  -e¡qq ¡ voqué, el i mojttbtyB; 

una  criada,  ♦>  qiwa  de*  oM*»»  c-iJo 
casa  ,  en  qno  sinvié  primero,),,) 
le  conoc¿a>.:ip^  ¿i.)**  «j   r  •*•:  11 -> 

que  estr9t!dQl^9Qinhqe,jn/e¡!aQU£rdof 
un  doas  iBu lanío  de- iTak  ,t%;{  oí, 

Meain*. 
£s:«n:n^bJft|C^ba]|«<;o|^   1  ,/♦  i¿ 


por.  si  le>MrierAS  ii*jae<apiwijo™p 
de  su  buenaotiiocoidnlahagaa,  »  <if> 

Baca  a  ocasión  perdí;  jiaeJoj^  oí 
de  saber  si  e¿\4fa  ■  \ 

V  ■'.!   r  I  ;  >*,  í 

.  •.  . .  \ 


<#• 


Señora 


Jo  que  roí  amo  ha  enviado  y  puesto 
ya  está  en  el  escaparate , 
que  mandaste^  ¿1  "  *l>  ;       .V' ''  *■ 
.     Honor. 
• '"    '        "f a  te  entiendo,      * 

¿Que  á  contar  éSo -te  venga» 

«a  I  •  *.v  .   ¿Pues  yti  q.u£  cuento? 
¿hedfdtoyo'al^de'qtre'  '•  •' "jf 
no  esté  todo  Madrid  Jleno  ? 
¿  pues  á  dofedeMB  uceen  tántóé} 
qué  impértanlas  una*. ó  meaos  ? 
ti.        ...»      *B*cdric.    ^     -•  •>•     N 
Por  tapar  sñs  imberta*  . .  .  au** 
hablar  de  otra»\c«sa  intento*    \w 
¿Es  esadiérnitMavdeuquieit  .  -...-* 
di$)istets.,  si  bien  me.  acuerdo,  » 
que  algunos  raJP4\*u  voa 

os  divierte? >  . ». 

Lqonor.  \ ,  t  j 

Si,  mases?  ,  ,  ¿ 


ttb 


*t  aAttf  nfe'vv'infestr'a»  tibor**; 

que*  para  no  «ses  aqoeHo       ;  t 
de  cantar  albastiBorj  • 

ni  es  primoroso ,» ni  es  diestro 
lo  que  canta;  «*«•• 

Beatriz*      -;  >  i    - 
Pues  la  tarde 
toda  con  vos  é*  festejos  9 
entre  á  la  parte  este  agrado. 
Leonor,  N 

Inés ,  toma  el  ínátru mentó  t 
haz  lo' que  manda  Beatriz. 

A  mi  pesar  obedezco*  ^ 

Canta. 
¿Cual  es  mayor  perfección » 
hermosura  ó.  discreción,  ? 

¿Con  la  hermosura ,  quien  puede 

tener  competencia,  ?  pero 
^^  aue  hacer  caso,  que  al  fin 

todas  soA.cqptaj'  los,  versos. , 
Cania  Inés.  • 

Litigaban  dos  sentidos 
*  sobreganar  Jos  despojos  ■  ■ 

de  una  alma*,  viendo  los  ojos9 
y.  escuchando  los  ordos  ; 

alegada**,  competidos 

cada  ana*  pmlsu-  opinión  , 

cual  es  mayor  .perfección?      .:> 
-  '  l'LeóhoK'  '       *      ". 

¡Que  de  cuantas  letras  *abe>>  <■  * 

huvo  de  escoger  la'  menos 

á  propósito!'  *•  ■•'  » 


441 


|P6r  qüé?:  •••  ,;  '"  Ki 
•"':  ^Léóribr..-  •  mr;UfU 
Porque  sintiera  que  iléél^'  ,7T 
Angela  descottfiára,  , 
imaginando;  6  creyendo  f",: '  'a 
que  puede"  ier  intención.'   '"  * 

'    Beatriz.  *'  .'  * 
Ahora  sabes  el  cuento 
¿el  lóéoYqúe  pre$uhtWn0d,t    *  » 
¿qué  cosa  ¥h  é1  universo"9  "' 
es  la  'toas  üíeH  repartida  ?    "!'P 
respondió:  el  entendimiento, 
porque  cada  uno  está  '        "     * 
con  el  qué  tiene  cotí  tentó :'   '   '* 
no  temas  quíe  desconfie.    ': 

*  ^'  Angela.  "  '        "  ',!> 
Nunca  vi  hlbte:  mas  necio,        ' 

fanla  Inés. 
En  la  iravada  conquista  $ 
la  sentencia  se.  asesta*,  -..-,-  \ 
cuando  en  vista  la  hermosura* 
la  discreción  en  revista  tm 
con  que  ti  oído  .j  la  vistor 
no  desisten  de  lU  acción , 
¿cuatéX  mayor  perfección,    _. 
htrmbiúra  <é  discreción?    ' 

'' " ,rT*   Leonor. 
No  cantes  mas.  PuesTionra*^  ! 
Teñís  mi  casa  ,  pretendo 
que  toda  la  honréis;  venid, 
de  un  jardinillo  que  tengo 
gosarers  e!  poco  adorno* 

'  Éeatris. 
Será  del  aliño  Vuestro. 


J+48 


Si  le  tomata  ,de  .yjq . 
aunque  cmge^>fár^  de  dueño  , 
inejwra^iari^iya^  *„„.,  -     . 

Gasten*?  ají*  lo*  ^n^ps        . 

á  mi  hermoanra^e  atengo.     Fase. 

tan  #b¿i&ada  a)  alacio  ,,n  ,v 

que  hayase,  raqrjr.;?aljapf3Q?  .]  Vatti 

¿  Quien  creerá  t, A9e¿ppf4)|  >  ifádoi  * 

dap  Wi«OT,c*Wrr*9Di.  1»  .    '. 
tan  solo.ppji  el ¡r,ec;ejp  ?#',tr  . 

de  si  era  ó  nó  dou  Luis , 

el  segunda  caballar^  -r ,  a      ,  r 

v, ^SCENA 'V...,  r 

Inés  ,f'%«e  ¿0h  V¿W  á$áfaié\ 

¿Cebúes?,.  .^   #Mti    .  , 

,  <  ,-.     'i  Qu*  .<fr]¡?  que,  quieres  , 
Roque  ^n^ad  viejas  o^ejitro 
á  servirlas  á  esta^damas 
las^i^slj    ;(||f  ,t   ,-,     - 

tono  es,  acueste  azafate  p.    .  ,  .\ 
que  mientras  pasó  ¡i «ero, 
mi  amo  á  la  platería  ,    C    J 
una  joyer^fca^pin^Hesfa,       •> 


á  donde  á  mMtf*<vft}¿ 

para  que'lttHraga  ,  y  temo  9         4 

que^ttrj&r  tifráidoí'  ll  "h»*  <  •*«* 

...  uf)'JDq  9|lfib  Níj'^l1-  9Wp,f0Ü 

pues  aunque  alitt^que  tá  Celia 

volvií  éAWfiVSé  Whé'ilfiljiíVíP  S 

también  vienesí''tfi*á  buen  'tiempo  i 

J  q^írieVíq^f  P  9UP  •  fi(oí*  ** 
.3lc!o||^i¿^b  tatito  ¿*i&q 

•^^éséyo? 
deifiaPííaíW^nic  WnWP  *>»q 

Guantes  ,°  feW,  tíihttft  ¿«So*  *fifc<> 

que  no  discrepa  t*no  de  otro. 

Roque»  * 

Oye.  -***1*  „ 


44* 


Aprisa.        *"        ,  ., 
«no^íWPÍW  ¿coniu*  ->b 

que  dijiste  de  bebidas  ? 

«-1  ¿n¿«. 
¿Pues  á.^lVjé  t^y^^fcati   5 

Raquel 
¿  Bebdas  ¿ «^(»p  irjme  «fiími-ibi^í  *« 
implicaa  eban^om«ator.:^íVi'í»  -i 
¿  pod(áK-«¿ha*  acia:  acá? i; i  o/  •».  p 
cualque  cota?  ..i  íiviíui  t>:>p  / 
*''""&&*.*  *'''>•»  b¡ i i»q  «    *. 

¿  qiter#*ií>a$j  atufe  tMWfóJ"  ''** 
guindas  ó  canela  ? 


J 


** 


Inls,  todo  el  uXftd»  Wtft'-- 
No  9  que  ¿am^jejt  darle  puedo.» 

lie  aloja ,  que  es  JLp.,qu¿  tep&a 
para  antes  del,  chocóla  le. 

del  chocolate  y  de.  {odas 
esas  goj|as  oa  compuso ?■   .  . 
y  me  llenes  un  gra^v**©,, .: 

¿Estas  loco? 

Roque. 

Hacer,  deseo 
«a  regalo  ¡  cual  será    ,  K 
ver  al  chocolate  lleno 
de  guindas  y  de  linVbn  * 
sorbete*?' aloja!      s 

•¿  Inés.  '-'  '"•'   a 
.  Eso 
ser  i  «Ufe  %rafr  peírigufería^ 

Raque». 
Mejdriqna  mejor ;  pues  Jofego 
les  dirás  .á  esas -señoras  **  -  <  ■  , 
que  yo  lassinanos  laalbesoV 
y  que  miren  lo  que.  son. 
sus  pulideces ,  supuesto 
que  este  .«vaso  por  de  fuera , 
su  estómago  qs  por  ^e.  dentro» 


I  >' 


DECOaACIOW  DR  C*ti*«  rni  J[«í 
Boque  f  don  Luisr  don  Antonio. 

¿Roque,  está  &^^icask$  u» 

No  se3op,,.4f||es  corriendo 

á  bascarJ^il4onJjeI4ijo¿:J(  .,.f1  *{ 

que  había  te  Ml*rJ*r>*itttyfr.  ,1 

s.li  ■  \&Pt0&Í0>  -5C-I     .<i  «lint 

Dfle  que  4^nXf|Í9,y^)  _,0  :>h 
le  hemos  buscaj)g.\ 

.  ,         ..>:>^IcniO«l«l|tOliMO 
te  lo  diré  que  Ui-taU*.    (*)ci  i* 

pí?*jnP  e^tá  en  «casa  i;,  t0m*n*OJp 
la  vueltta  dcaqgptffi  esquina.,^ 
Llevarle  de  aquí  .pretendo»  f«^í> 
para  poder  volver  <yot|i  ..{  .  '  ..,il 
por  ver  á  León o*  p,  «npaesAo:  ,,« 
Q^Cuera  Feli^esJá*  #  ,  &„f 
y  desvelarle  pretendo  ¿,  „,,  ,níII 

«liP.Wfo  .€MÍda49  rota;  •.,    >  v  b 
que  qWa  cosa  e^qüft  *i  .afettiaup 
me  lleve  tras  stf*  y  fltr>at    »,     ,.,, 
que  á  las  fin.effa¿,1qne  debo 
falte.  ..  .,:..di:..     T  :o-  vil 


(  i  )     Roque  por  la  izquierda  >  y  donksLuii  y  don 
Antonio  por  la  derecha*.    :.<  j      .  .  ; 

(  a  ]f     &  ««//-a  por  la  detenkai  ;  • 


44* 

Antonio. 

.    ala  plática  volviendo        ,, 

BieaVvA  me  acuerdo 
en  c$iéeigfe«fo«to?  c^  «oupoflj, 


ya  ganada'>p^4tí<*¿en&ii  '»'«;d  ¿ 
H4^bPie*ttaftibr4aák  «¿*d  ™P 
tenéis,  por  4Óu.*A*}n?íento 
de  otra  cá*  W>q4eWrtf&P  f>na 

Eso  es  todo  l**tt*$>puedo 
fónt*ro»¿iWWa!4ciuí;  pues 
•i  lafa^metfc^iJelW',1'*1  oI  H* 
es  todo  lo  que-frtte^pasa  f 

que  tquqlte  feémUsuY*  Ví;,,'/  BÍ 
¿e\wx  éúbtylfekiréaM  •»,:c/'JJ 
hecho  buut**ó>'gfraSo1;!'  ;  '  ir'í 
no  hty'ÉHptf  qOWft»  su  toeW^ 
los  no  me  ai¿rfcsn*é?  mi  «esttfíltó? 
mas  no  es  sttaPltfá*  el  sol'  '  < 
el  que  me;a¥r%stí*V  $úé  ñféttbJ9 
qut'tdtoíé*  ¿tópenos*  SAtéiHy*'? 
ser  su  néftlbr*  *tf  pudiera':       !<1 

De  esos  hipérboles,  llenos  •',J'^t 

i?eprisculos  y- albores  #       

s\iA>  ^  *'niv\e^munda  *>a^h»M^^«>ta;v  ;\  .«voH 
¿  nó  los  deja  remo»  «y*—  •■*,-\  '>*  "^ 
siquiera .pOl^Wy  ?*6eítóréi Vo  ^ 


*   \ 


447 
J  que  nunca  me  pase  i  tni 
esto  de  una  mtigeV  ver¿- 
que  sea  mas  que  ana  muger? 
Btftierta  écasion  me  vi 
en  casa  de  una  señora, 
de.  qu re tv  decían  ,  que  era 
el  Alba  su-  pordiosera, 
y  su*  uwtidíga  la  Aurora. 
A  osearas  quedé  algún  rato, 
y  su  luz  no  toe  alumbró  , 
bas|a  que  en  la  cuadra  entrtf 
nn  candil  de  garavató.      • 
Mirad  ;q«e  sol  tan  civil, 
el  que  arrastrando  despojos, 
no  puede  hacer  que  sus  ojos 
alumbren  lo  que  un  candil. 

*  Luis. 

¿Qué  toda  la  vida  habéis 
de  estar  de  ese  buen  humor  ? 

Antonio* 
¿Fuera  del  vuestro  mejor  ? 

Luis, 
Vos  en  esto  no  tenéis 
voto ,  don  Antonio  ,  que  nombra 
que  se  alaba  que  no  ba  estado 
en  su  vida  enamorado , 
de  bafde  disfruta  el  oembre 
de  racional. 

Antonio* 

ftws  sepamos", 
cnanto  mas  irracional  -    •  • 
es ,  otilen  no  distingue  el  mal  * 
del  bien,  en  que  nos  hallamos.' 
á  los  brutos  superiores  f        ■'■   > 
sino  *ab»er  distinfuir  •<•» 

,<      -w  t  09      /vt 


j 


44» 


el  bien  del  mal. 

Luis* 

Eso  es  ir 

á  filosofías  mayores 
de  las  que  el  caso  requiere  f 
y  no  habernos  de  pasar 
de....  i  quién  dejará  de  amar 
una  hermosura  ? 

Antonio. 

Quien  quiere, 
,  sin  que  ninguna  pasión 
quite  que  coma  y  repose  , 
trotar  cuanto  campar  pose 
la  vita  de  a n  buen  poltrón. 
¿Yo. me  había  de  rendir 
por  el  mas  hermoso  dueño  9 
á  perder  una  hora  él  sueña  I 
¿yo  sacrificarme  á  ir  f 
de  tiernos  suspiros  Heno  , 
al  umbral  de  la  mas  bella, 
donde  mi  cielo  ajea  ella  9 
y  yo  sea  su  sereno  ? 
¿Yo  andar  en  desconfianza 
de  uno  y  otro  devaneo, 
a  justando  .ti  el  deseo 
se  fru6<os*  la  esperanza? 
¿Si  el  afecto  descuidado  •  j 

es  crédito  del  olvido  » 
,a*  rtméfífo  desvalido 
disimulo  drl- agrado  ?•    • 
Y  Cua ndo  uiaj .  á  este  modo        » 
quieran,  callar  mia  d««ve,U>4f 
hételos  aqvi  los  aelu*.,.  ti  .<; 
que  lo  echstn^qiirdfVtAPi&Q*  . 
De  mittémpleos ,  señores , 


449 
mejor  las  mudanzas  van  f 

dance  otro  cierto  y  galán  , 
que  yo  he  de  danzar  florea 
al  compás  de  una  fortuna 
poltrona. 

Luis. 

i  Y  cómo  acomoda! 
el  compás  ? 

Antonio. 

Queriendo  á  todas , 
y  no  queriendo  i  ninguna, 

Luis. 
Amor  de  esas  bizarrías 
orlar  suele  su  laurel. 
Antonio, 
l  Habéis  estado  en  Teruel  f 
¿  conocisteis  á  Maclas  ? 

.     /MIS. 

Mejor  es  irme  que  no 
cansarme  de  ver  reir 
á.  quien  me  mira  morir. 

ESCENA  VIL 
Roqut  $  don  Félix  y  don  Antonio. 

Antonio* 
•  Esperad. 

.  Félix.    • 

Que  aqui  os  dejo 
á  vos  y  i  don  Luis ,  venia 
diciéndome  Roque. 
Antonio» 

S(, 
mas  fuese  huyendo  de  mí. 
Félix* 

¿  Porqué  J 


i 


450 


Antonio; 
Porque  me  reía 
de  un  alto  amor,  en  que  ahora  g 
tierna  mente  enamorado , 
anda  como  embelesado. 
¿Os  acordáis  la  señora 
del  coche  quebrado  ? 
Félix. 

4  Cuál? 
Antonio»  ' 

Ija  candida  beldad  leve, 
que  sierpecilla  de  nieve  , 
i ig recito  de  cristal , 
como  á  negros  nos  trató 
el  día  del  Ángel. 

Fejix.  '    '» 

l  Cielos !    J         apj 
l  qaé  escucho  !  ¿  Y  de  sus  desvejos  , 
qué  os  ha  dicho  ? 

A  ni  orno. 

¿Qué  sé  yol 
aquello  de  que  me  abraso, 
.  con  su  algo  de  girasol  , 
cielo,  ejt relia  ,   luna  y  sol, 
y  lo  demás  que  en  tal  caso 
de  derecho  se  requiere.'        * 
•  Alcancémosle  los  dos  , 
porque  tambiea  os  riajs  vos 
de  ver  que  conloóme  muere 
¿  nía ij os  de.su  pasión  9  ' 

tiernísimo  majadero. 
¡Félix., 
Si  fuera  y  riera  ^  pero..,!  '*      ' ' 
?  :,  ,  '    ituque. 

(isa1!  hay  g^ue  rabias  son*  ap¿ 


451 


Félix. 
Si  no  tuviera  que  hacer 
na  negocio  ,  á  que  volvía 
á  casa :  id  f  por  vida  mía » 
tras  él  vos,  hasta,  saber 
en  qué  parage  se  halla  , 
y  cdiitaréismelo  vos 
después. 

Antonio. 
Norabuena :  á  Dios* 

ESCENA  VIII. 
Dichos ,  menos  don  Antonio* 

Félix- 
¿Quién  vio  tan  nueva  batalla 
como  en  un  instante,  ¡cielos!       f 
en  mi  pecho  ha  introducido  9 
haber  (¡ay  Roque!)  sabido 
que  causa  4Pn  huh  mis  lelo»? 

Hoque. 
4  Cé  |  don  Antonio  ? 

Félix. 

¿A  qué,  di, 
le  llamas  ? 

Roque.  ' 

No  tiene  que  irse 
á  buscar  de  qué  reírse, 
jpues  puede  reírse  de  tí, 

Félix. 
| En  cuánto  ( ;  ay  de  mí! )  empeñado* 
ya  mi  amor  se  considera! 

Roque. 
Has  cuenta  con  la  joyera  i 
y  lo  sabré*/. 


J 


4S2 


Frite.     .     . 
¿Mi  cuidado 
esa  habla  ,  majadero  9 
de  aerí 

Bogue.         \ 
Bien  creo  que  nof 
porque  ese  cuidado  yo 
se  lo  aclamaba  al  platero, 

Félix» 
Calla  ,  loco  ,  y  vén  conmigo, 
que  ya  es  tan  otra  mi. llama t 
cuanto  es  perder  á  una  dama, 
ó  aventurar  un  amigo. 

¡loque. 
J  Qué  poco  cuidado  á  mf 
lo  uno  ni  lo  otro  me  diera! 

ESCENA  IX, 
Saia  bh  casa  de  Lbohoiu  ' 

Don  Luis  é  tnis  con  lux»    , 

Inés. 
¿Sin  que  te  avise,  es. posible     t 
que  á  entrar  basta  aquí  te  atrevas? 

Luis. 
Sabiendo  que  no  está  en  casa 
don  Feli*  ¿  en  qué ,  Inés  bella  p 
el  atrevimiento  estriva  ? 

Iris*     , 
En  no  prevenjr  que  ^ueda        J 
haber  otro  inconveniente; 
mi  señora...,  .  .  „ 

Luis."     \% 
Dílo  apriesa 


453 


In¿s. 
Está  con  unas  a  ni í gas 
de  visita,  y  que  te  vean, 
ya  verás  que  no  es  razón. 

Luis. 
No  roe  pongas  en  sospecha 
de  imaginar  que  Leonor  , 
«Cansada  de  mis  finezas  , 
te  dio  orden  de  que  impidas 
la  permitida  licencia  9 
que  tal  vez  me  concedió. 

Inés. 
No  es  eso  f  y  porque  lo  veas  , 
llega  por  aquesta  parte  , 
donde  en  la  cuadra  se  asientan 
que  caá  al  jardín. 

Luis. 

Ya-  veo  * 

que  es  verdad.  ¡  Cielos !  ¿  aquella       op. 
que  á  la  luz  de  mejor  luz  / 

rayos  á  la  noche  presta  , 
no  es  Angela  ?  ¿  No  es  Beatriz 
su  prima  ?  sí ;  ya  ,  aunque  verla 
siempre  fuera  para  mí 
dicha  ,  no  sé  si  me  pea* 
verla  amiga  de  Leonor. 

Inés. 
No  tanto  ahora  te  detengas  , 
sino ,  pues  ya  las  has  visto , 
vete  presto. 

luis. 

Norabuena* 

Inés. 
Pe*o  no  taigas ,  detente» 


J 


4á4 


LUÍS.  r'.  .  ' 

l  Qué  es  eso  ? 

Inés.      • 

Por  la  escalera 
sube  mi  señor. 

Luis. 
Decirte 
que  vengo  á  buscarle  f  e"s  necia  1 
disculpa  ,  estando  en  el  cuarto 
de  Leonur. 

Inés. 
Pues  aunque  quieras 
entrar  v  yá  ves  qne  noea>    •   • 
posible. 

Luis. 

De  aquesta  reja 
en  la  cortina  roe  escondo.       Escóndese. 

Inés* 
Pernos  hecho  buena  hacienda*    . 

ESCENA  X, 

Dichos  ,  don  Félix  >  noque. 

Félix» 
l Inés ?  i 

Inés, 
¿ Señor  ? 

, .  ,¿  Vino  i  tiempo 

lo  qne  envi¿? 

Iné$. 
.i.-  .-   « i   . ,    Y  de  manera 
rico  ,  adornado, y.pulido  , 
qu%auaqueApgi;lwa  JA.heU*    i 
Caerá  Angela ,  bastara. 


4» 


Ttetix. 
f¿Ylqué  hacen  ahora? 

,lnés. 
En  esa 
cuadra  donde  han  merendado 
¿e  están. 

Noque. 

Y  dínio  ,'  Inés  bella  f 
¿las  damas  tan  lindas  ,  comen? 

Inés. 
¿  Arjueso  preguntas  v  bestia  ? 
¿comer  las  damas  habían  ? 
{qué  indecoro  ,  qué  indecencia! 

Hoque» 
¿Porqué  r  di? 

.         Porque  las  damaf 
tío  comen  aunque  meriendan. 

F¿Ux. 
Con  otro  gusto  (;ay  de  mí!)     • 
desde  esta  parte  estuviera 
adorando,    Angela  hermosa  ,  '  ' 
tu  peregrina  belleza',  t 

ai  no  me  hubiera  asaltado  * 

la  no  pensada 'violencia 
délos  zelos  de  don  Litis, 
Sale  un  Escudero. 
Escudero 
Aiplico  á  usarced  ,  mi  Reina, 
¿mis  señoras  les  diga 
qie  tienen  recado'. 
Inés. 

Ellas* 
de ieron  de  oir  el  coche , 
foque  las  almohadas  dejan  ' 


j 


4*6 

Félix* 
Hacia  esta  parte  me  escondo, 
y  no  quiero  que  roe  vean  ,  ' 
porque  esperando  las  gracias  , 
que  al  paso  estoy  no  parezca. 

Inés, 
Pues  á  tu  cuarto  te  pasa 
mientras  sé  van.  . 

Félix* 

No  quisiera  9 
aunque  ella  no  rae  vé  á  mí , 
dejar  ¡  ay  de  mí !  de  verla 
detras  de  aquesta  cortina.  ( i ) 

ESCENA    XI. 

Dichos ,  doña  Leonor ,  don*  Beatriz ,  Angela,  y  poco 
después  don  Luis  al  paño. 

Leonor. 
¿Félix,  para  que  te  ausentas?, 
que  estas  seftoras  darán 
1         de  irlas  sirviendo  licencia  , 
y  mas  cuando  fuera  culpa  , 
que  los  criados  que  dejan 
á  sus  dueños  en  visita  , 
por  ellos,  Félix,  no  vuelvan, 

Luis* 
La  primera  ves ,  que  vf 
amagado,  el  lance  és  esta  9 
y  no  egecutado. 

Félix. 
Yo. 
me  ausentaba  de  vergüenza 

— : r— — : —  r 

(  i  )     Va  ¿esconderse , /  le  ven  ¡ai damas* 


44t 

%é  lo  mal  que  á  stu  mercader 
habrás  servido   > 

Beatriz 

Aunque  sea 
falsedad  *>  no  lo  será  > 
por  lo  menos  la  respuesta, 
lío  solo  favorecidas  ,* 
y  honradas  vamos  a  mas  llenas 
de  tantos  dones,  que  dudo 
que. desempeñarse  pueda        .   ? 
,  de  sus  mucbos  agasajos  t 

la  poca  fortuna  nuestra:;,, 
si  ya  no.  con  decir  soIq  , 
qne  conocida  la  deuda  , 
en  vuestra  casa  ,  don  Félix  • 
hay  quien.*  deje  el  alma  en  prendas* 

Félix. 
Eso  es  honrar  entendida  / 

á  quien  serviros  desea. 

♦"  Leonor, 
Paro  está. 

Beatriz.    ' 

¡  Pluguiera  al  cielo !        ap. 
v  Angela, 
No  es  en  Dios ,  y  en  .micoficfeBci*  , 
que  tantísima*  de  posas 
nos  hadado*,  que  no  hay  cuenta* 

Beatriz. 
tfo?  habéis  da  pasar  de  aquí, 

/    Leonor.:'        /   *    •> 
Llegar  tengo,  basta  la  puerta* 

;     ■..;."  Beatriz»  ..'»  v 

Señor  don  Félix  ,  qutti*tifi\ 

Jfefór. 
Jttf*v**#a  me  conceda 


i 


4S8: 


de  llegar  hasta  eí  esttivo.  *        "* 

Angela*  * 

Llegad  muy  en  hora  buena  9 
ganarais  vos  este,  y  yó 
perderé  el  de  la  paciencia*  • 

Leonor. 
A  Dios  amiga. 

Beatriz. 

I A  y  Leonor  ! 
I  quien  sin  escucha  pudiera  9 
ya  que  tauto  se  confrontan. 
las  inclinaciones  nuestras  f 
desahogar  contigo  el  alma  ? 

Leonor. 
Yo  procuraré ,  que  tengas    '      » 
'ocasión  de  hacer  por  mí  *  . 
esa  confianza ,  cierta 
de  que  he  de  servirte.  ' 

ESCENA  XII. 

Doña  Leonor ,  Inés  y  ¿on  Luisa 

'    '  -    *    -     Luis. 

Cé, 
téy-LeonoT.  • »    * 

Leonor;  ♦  : 

¿Quién  ¿aqvlf  *  •♦ 
Luis* 

:     Deja 

el  sobresalto :  yo  soy. 

.5  .  ■  Leonor*,  •  >\    > 

¿Pues  don  Luis,  «tomo  ¡  qn¿  penal 

aquí*  xuándo? ' '  Jv  '•    -  y* 

Lula. 
1.  -  .    ;    Ay^rAaviiWM 


ttt  bernian©  impidió"  la  puerta  f  ^  - 
y  para  que  si  volviere, 
á  otra  parte  le  diviertas, 
he  querido  que  no  estés.      .    . 
t         ignorante,  y  que  lo  sepas  ,       »: 
porque  veas,  que  has  de  hacer. 

Leonor.     ,    t   . 
Yoelve  i  esconderte,  que  entra.       (ij 

:  ESCENA  XIIL 

'     Dichos  y  don  Félix, 

FeVtx. 
\  Válgame  ej  cielo  ,  qué  presto  . 
una  dicha  ,  á  quien  debiera 
dar  en  albricias  el  alma» 
viendo  cuan  buena  tercera 
en  la  amistad  de  Leonor 
habían  hallado  mis  penas , 
el  cielo  de  uno  á  otro  instante 
quisó  que  en  pesar  se  vúeíva  V 

Leonor. 
¿  Félix  ,  pues  qué  sentimiento, 
pues  qué  suspensión  es  esa  t 
¿Cuando  esperaba  que  alegra 
tendrías  la  narahuena  , 
en  ocasión  de  lograr  •••*••' 
el  servir  á  quien  festejas , 
tan  triste  y  contuso?  ¿  Qué 
tienes  ?  __ 

•    Félix.'         -'•  •' 
*•         ¿  Qué  quieres  que  tejiga  9 
j  ay  Leonor !  si  no  hay,  ventora, 

(  x  )     Estóndtse  4on  Luis* 


i 


A60 


que  sin  «i  pensión  no  tenga? 
y  esta  es  tal ,  que  me  «ml>araza 
cuantos  alborotos  pueda 
haber  grangeado ;  pues  cuando 
se  me  entra  el  bien  por  las  puertas  j> 
por  las  puertas  á  su  sombra 
se  me  entra  el  mal ;  de  manera  f 
que  no  basta  que  en  mi  casa 
la  dicha  un  instante  tenga  , 
para  que  no  tenga  ¡  ay  triste! 
también  la  desdicha  en  ella, 
enlazadas  de  una,  y  otra. 

Leonor. 
Sin  duda  presume  ,»ó  piensa         ap. 
que  está  aquí  don  Luis.  ¿Poes  qué, 
(¡que  mal  el  temor  se  alienta!)     ap; 
-*p*i  te  sucede  ? 

Feli*. 
No  s¿ 
cómo  á  decirte  me  atreva  f 
que  tu  decoro ,  Leonor , 
no  se  aventure  en  materia, 
tan  achacosa  á  tu  oído  t 
sin  que  se  pase  á  indecencia; 
pero  supla  la  objeción 
el  sentimiento. 

Leonor* 

Estoy  muerta.         ap/ 
Luis. 
j  A  donde  tantas  confusas 
palabras ,  f  tan  suspensas 
irán  á  parar  ? 

Félix. 


Leonor. 

4d 

j  Ay  triste  f 

ap* 

Félix. 

He  sabido... 

Leonor. 
¿  Qué  recelas  í 

Félix. 

Que  don  Luis  de  Mendoza.*.... 

Leonor. 

j  Ay  cielos  $ 

que  mal  ^empiexa! 
Félix. 

ap. 

"Enamorado 

Leonor. 

\  Qué  escucho ! 

ap. 

Félix. 

Pretende..... 

Luis. 

* 

¡  Qué  oigo  !          ap 

>. 

Félix. 

En  mi  ofensa. 

Leonor.  '* 

¿Ti  qué  hay  que  pensar?         ap. 
Luis. 

Aquí 
aro  oí1 ,  y  «mistad  se  arriesgan. 

Félix. 
A  Angela. 

Leonor. 
*  l  Quién  creerá  ,  cielos  , 

que  tales  mis  ansias  sean , 
que  hayan  podido  tener 
á  los*  zelos  por  enmienda? 

Luis. 
Absorto  quedo  ál  oirle :         ap. 
4  peVoquien  f  cíeles  »  creyera  t ' 


4*8 


V 


qne  sean  mis  ansia*  tales  ,  . 

que  á  un  m¡srne  tiempo  me  vean' 

Eelo* ,  que  doy  ,  y  me  dan  , 

persona  que  haga  ,  y  padezca  f  r 

Félix. 

Y  aunque  no  acaso,  Leonor  , 

la  elección ,  porque  esa  fuera 

acusar  mi  amor,  no  puedo 

dejar  de  sentir,  que  vea 

desde  la  orilla  mi  amor 

r 
antes  que  el  mar,  la  tormenta  £ 

antes  que  el  humo,  él  incendios 

antes  que  el  monte ,  la  fiera  ; 

la  «ruina  antes  ,  que  la  mina  ; 

antes  que  la  nube  densa  , 

el  rayo  j  ay  de  mí!  mostrando. 

en  la  amiga  competencia  , 

cuan  «impensados  me  asaltan, 

cuan  improvisos  me  cercan  0 

si  el  nublado ,  sí  el  asedio  , 

el  fuego  ,  el  golfo  ,  la  niebla  9 

,    el  rayo,  la  ruina  ,  el  bruto,, 
el  incendio,  y  la  tormenta.        ' 

t  A  Angela  don  Luis  adora  , 
y  con  Un  grandes  finezas  , 
que  de  día  ,  ni  de  noche 
de  sus  umbrales  se  ausenta.,    . 
Si  me  declaro  con  él , 
¿  qué  razón  hay  que  yo  tenga  § 
que  no  la  tenga  él  ?  Si  dejo 
de  declararme  ,  es  bageza  , 
que  no  esté  doble  con  migo  9 
y  yo  lo  esté  con  él ;  fuera 
4s  que' es  , partido  villano, 
que  yo  que  ipe  ofenda  **»•?; 


y  él  *»>  rfjftftf  le  ofendo  fo  \ 
y  pues  no  es  la  Ves  primera  , 
<|tte  íácftíde  andan  aelos ,  ande 
la  amistad  en  contingencia  , 
qnitémpnos  los  embotó», 
y  lo  que  viniere  venga  ¡ 
mejor  será^de  ana  vea  , 
ó  asegurarla- ¿tt  peVderla. 

ESCITA     XIV. 

,¿C«9fJ   ?¡íff    ir»   •».  »',í;;r»iV 

Entreabra**»»  v*ntan»t    •  •  - 
t  nfdé^  jffctk  hiendo  q<re't)ejft*: 
ni  hermané  la.catMé,  ese  bombra 

» ¿...  JUrf«;»>  -••  ¿>  '• '«;   ; 
t  r  r,«'»J  Leonor  folla , 

oya#«h  ÍJé  ■•  »•*''■.  •  •  ".'uí.:j*»a  . .    ¡» 

¿Qc#  Aasf  «e>deofoft  f.      * 

MilÉdtécfalpas."  '    ,    I        ""•!  / 
c  Xlh  ♦  :     [Leonófi.'  ■'  ■  '  ?»*    *  '• 
5  '»•  ■   ¿  l>oed«  haberla* 
¿  tanta*'4ifjttria* ,  tatttós'    -  . 
agravión;1  tantas  catftefel?    ■ 

Xt/w.  *  l-  >'  •♦'-  ••'«  <- 
Oye  y  y  las  sabrás* 
»'«"»•'    '  Leonor, 

Ni  oirías 
quiero  ,'•  falso  ¿  ni  sa&ertosy      * 
sino»  tfiífe  fe '  Va  y  as  iüfgo 
tan  pana-iieWpre  ,  que  dé  ésta  ' 
30 


4*3 


/W4 


t 


/ 


casa  en  tn  .vida  te.  acgqrdtft»  (.   / 

.  r  .ó..,..„    *LuiS.  -■>  i  y    t  i--    \ 

Has  de  ojcm,c.f  aunque  jao  quisas. 
A.     t  Leonor-,  "-•-•:  ;  » ; 

¿Iriate»*!  te  oigo  f  ,  , .;•/  mi;» 
.  f.:  Luis*  ,i,í-7  ,rp  oí  -^ 
,     . .      .  -    •  9tr  .-  u  ¡A»..r 

Pues  di. 

.vi  x    Xtff*   ;r 

Viéndome  en  mis  penas 
/  tari  srfápen^óV  dod ' Antonia" ^ 
informarse  quiso-de  ellas  9 
y  cono  penas  d«  anw>r  iJj/:í.i^ 
no  h*y,fc>t-r*a  que  la*  ifcsmieaWin  , 
r,  pop  .nü -?•  vjejte  jque  ¿«  G  m  •» :,  t;  -  (l r 
eras  9  Leonor  ,  dueñot-dq  ejlMfr* 
y  por  desviarte  mas  9 
que  de  J{  jtjscrj&pnla  tenga  , 
quise  nombrarle,  otra  dama.. s  ;o 

Calla  ¿e¿}Ja  ¡  cesa ,  cesa^»  - 

falso  ,  aleve  ,  fementido  y 

y  porque  el  que  mi£ntft*.>gt*s;¿¿ 

y  veas  ,  que. antea  que  Fclix  , 

ya  lo^thflbi&'dtáho  ella ; 

¿qué  criada, jes  Ja  q*^ ¡y a,*    «i  ,*; 

tienes  g  n;  a«  .<sasa  n*e*maoJ 

sobornada  ?  . 

Z*4**«       >rí  7  t  t;U 

¿Yo  criada? 

t'io    Leonor. 

En  vaiia .fijojir  intenta?:,  Miiim' 

muy  buejta.boba  enamora*».:  '. 

ella,  m*  Yejiga,r¿  d*  cUa*. .'  1  .  ¿  j 


y  iú  <le  el.U  y  d/tí.  ¿  Inés  9  K    ,     . 
qué  aguardas?  la  puerta  cierra, 
dá  con  ese  fapmbre  *n  la  calle  » 
y  'en  ta  vida  á  abrirle  vuelvas. 

Luis,. 
Leonor  mia , 'mira  ,  mira..,. 
',    .. , .  \    .      Leonqr.  .  ;  „  ; 

Aquí  no  hay  nada  que  vea. 
•  *  .  , »  *  •  *a  d&aaatéV.  \  ■  . 
Yamos  no  vuelva  mi  amo. 

'Ais.  * 
Iteres1;  ^ue1  mis' finezas  -»-v"  i 
te  desenojan.- 

»•      >  Leonor.'  '        •  -  *   * 

,  ry  ia       •-,;.'  i. 

la  poca ,  ó'mjigtitía  enmieñday':' 
que  puede1  tener 'el  que  ll  •L',  ¿ 
dá  celos  con  tíná  necia. 

•  '• '  •"'  ¡;  ,,k-r  -  ••  •  '•••!»    -^ 

,;,(    'i.     Mi'  ,ÍJ    f   ,;; 

.   .  i   r  . ;    t    :    f   .  •    •'     •    > >.  *>* 


465 


m    ,-ví  r::  '  j  ti 


,.t 


466 


ACTO  SEGUNDO, ; 

ESCENA  PRIMERA,         x 

Sala  kh  casa  »*  dojc  Atonto. 

Don  Alonso  leyenda  una  carta ,  y  Juana* 

Alonso. 
I  Qué  ttttB'Afflf1*:?-  Beatria,? 
Juana* .......  ¡ 

Las  dos  9  «enor ,.  asentadas 
á  las  labores  estfn  , 
q»«r,!rta  Y  lasjíewa»t.maílíaii*ii» 
á  estas  horas  las  divierten. 
.    ^'**#fc  ...     . 

Dílas  que  tengo  que  hablarlas  » 
que  á  roí  coarto  pasen :  pero 
no,  mejor  será  que  vaya 
yo  al  sayo  %  y  no  las  estorbe 
la  digna  oca  pación  » Juana  9 
de  la  diversión ,  en  que 
dices  á  estas  horas  se  hallan 
bien  entretenidas. 
Juana. 
Tú 
lo  verás. 

Alonso* 
Aunque  me  engaitas  y 
veré  también  qué  U  boles 
son  e*las. 

-  Juana*  *    / 

Las  de  dos  damas  • 


467 
que  de  entewáfch*  y  "hermosas  '" 
te  precian ,-  «opuesto  que  ambas  9 
«na  el  ingenio  se  afeita 
y  otra  se  estudia  la  cara.  * 

ESCENA  II. 

Aposehto  de  doDía   Beatriz. 

ÜDo»  Alonso  y  doña  Angela  y  doña  Beatriz.  (i  j 

Alonso*  k 

¡O -quien  pudiera  trocar 
tan  opuestas ,  tan  contrarias  ''■ 
inclinaciones  ;  y»  que      v  •* 

fuese  Angela  la  inclinada 
al  aprender  y  Beatriz 
al  parecer ;  mas  qué  vana 
pretensiony  si  hay  superior 
.arbitrio  que  «las  reparta! 
en  cayos  opues&ds  £*nios 
suspenso  quedé  al*  mirarlas. 
.*Y*  'Angela*  ;  ' 

¿Es  posible*  que  no  acabes  * 

de  hacer  esa  trenza  ? 
*  Juana.  - 

¿Si  andas, 
por  mirar  t«A  rodas  luces1 ,        l 
tan  inquieta  ,  qué-  *e;  espantas?» 
•    •  Angela.    •  - 

Noramala  para  tí : 
•  j -que  torpe  y  desaliñada! 

(  i  )  Doña  Angela  estará  ai  tocador-,  Juana  9a 
á  ayudarla ,  y  Beatriz  sentada  en  otro  lado  leyen- 
do un  libro.  ,  »o 


ihft 


ai  {minera  flealacifbte.'   -»  -'•  *.'f> 
f  algo  á.  mí ,  í aera  tu  mana  ;  , 
trca  tocado*/:  aoa  coa  «ale  l    r    *? 
los  que  hoy  ha»  «prado»'  •  •     f    r 
Juana. 
:;   .    '    ;   Aguarda, 
verás  si  tengo  disculpa. 
^         An¿ck*  "• 
¿  Qué  disculpa.,  mentecata  ? 
{  juana.*   '         *  * 
Estarte  viendo  ¿  señora  , 
dentro  de,  tu.  espejo»  y  tanta '"* 
es  ^suspensión ide  ver 
tu  hermosura  f  que  admirada  9  ' 
no  es  posible  que  %t  acierte 
á  servir.  .  -1    ;  •       < 

>    Angela* 
.  Si  esa- es  la  cansa  \ 
•  yerra  otros,  ¿resupo*  mi  cuenta, 
y  tres  mil  #  svtxtes  no  bastan. :  i 
. .;  Juana*  •  *       .  i  "* 
Criadas,  si  ota  no' queréis     ap. 
esto  de  las  noca  majas  ;    --  ,-:•";, 
para  vuestras  -ama»  no  hay,;  •.  > 
medio  como  lisonjearlas. 
. ;    ; ,  -    *  3  Beatriz 
Discreto  amigo,  ¡es ii n  libros 
fqué  á  propésito.que-ha^laí  i=.  ¿ 
siempre  en  lo  qué?.qoi*-ro  yo! 
¡  y  que  á  propósito  caUa-r  «       T 
siempre1  eft  lo'qut.  yo  no  qtáerp  # 

sin  que  puntosa-mahaga-  -.—  -  -  -  - 

y     cargo  de  por\q«te«Jeiélij©\     a  '     \ 
*   ¿  j>or  qué  le.  dejo  !  Jitanife.  \ 
su  condición  ,  tanto  que  a 


469 

'  »  y  con*  H  'mismo,  semblante 
.     #fc  dej*  dejar  ,  si  cansa. 
•; '    j Señor > «tú  estabas  aquí?  •       <       '■ 

•    %      •  *    Alonso»  ■  i  '■-<■    \ 

Sf¿Aéfttritf ,  y  haciendb  estaba 
discurro» V  cri  cuánto*  diera  f 
porque  1* 'suerte  trocara 
aquel  tapejb  á  ese  libro.  : 

Angela.  '»•<"'•" 
¿  Pues  por  qué  ,  señor  f  te  cansas 
de  mís.alifíos?    - 

Alonso,  •'  ':-  • 
í-  ;  Porque5'  ""    • 

verte ,  Angela  ,  estimara 
N  «as  ainiga  de  saber.    "  '  ' 

•    Angela.  •»       - 
¿  Pues  be  de  ser  yo  Letrada  ? 
¿  y  cuand©  hubiera  de  serlo  , 
babria  alguno  en  ¿Espafta , 
que  mejor  parecer  diera  ? 

-.'•/     —     Alonso. 
Para  de  paso ,  esto  basta  s'  . 

á.vleirds^bi<ja  y  sobrina  V'   : 
(  mal  dije  )  digo  ,  que  ambas 
lo*'4pisl  pues  también  tú<eres,  ^ 
Beatriz ;  pedazo  del  alnvat;         '• 
A  veros, digo  ,  he  venido  .   .*'•- 

con  un  cuidado; esta  carta   • 

lo  dirá* mejor  que  ye'; 
prevente  para  escucharla  , 
Beatriz ,  pues  á  tí  te  toca 
el  todo  de  estas  desgracias. 
-  3Ue*    Octaeior+n  cuya  eonfeanta  el  señor  don  Al- 
varo ,  vuestro  lurmano  mayor  y -amigo  mío  ,  ¿eje  la 


470  *     _  ^  _  ■  ^. 

hacienda  que  tino,  dé  /*4fat  por+#Ufft8om  dotla  Bea- 
triz ,  puesto  en  quiebra  t  ha  faltadp  ¿casia'  ciudad ;  y 
aunque  deja  algunos  efectos  ,  no>  tan,  corrientes,  que  na 
necesite  de  macha  diligencia  su  .eoprw&a]  9  remitidme 
poder  ,  noticias  y  papeles  f  para  que  yo... 

No  leo  roas  ,  porque  ma  qujkbr* 

el  coraaon  „.que  sea  tanta,    , 

Beatriz  trio  poca  fortuna  f 

que  lo  ra?f  y  menos  baya* 

de  necesitar  de  otro. 

Beatriz.     ,, . 

No  ,  señor  ,  estreñios  ftftgaa.*   .  , 

que  tu  menor  sentimiento 

será  mi  mayor  desgracia. 

-    -         1, .    •  Alonso:      .  *   , 

¿Cómo  no?  $  Sevilla  ,he  de  ir  # 

que  no  es  para  encomendada 

está  dftigt acia  á  quien  •  ;     . 

le  du«la  nvrnos.  la idlá  .;.>.-. 

de  tus,  aumentos.  . 

i.t-:,  htatrU.     ,o¡  .  .    ...  i 
,    £et»or.„.     (i) 
:  i.Sr-'Alensp.  .»  ¿  '>í>  . 

¿Qué  haces?  deJ  suelo;  levanta.- 
:  i ■  *   »  •      Beatriz»      .j:  ,  ..  .  » 

Se^á  en  taao  9  y  no  me  ¿«ngo-  ' 

de  levantar  de  tus  pU¡nla**t 

sin  que v. besando  tu  man-o**  /   • , 

mtdtftcon  ella  ,pa  lab  r*  nu  n>  » 

de  que  no  te  ba  de  costar     ' 

de  esa,  hacienda  la  cobra»** 

el  menor,  «desasosiego.-  \  ,  5¡'>J  .  •< 

Piérdase;  todo  y  que* nada  #  ;><-•  '•» 

>lM  TI       I,  .  ■      Jg  .  !      —*■■■■■      t  llU     .  f'l   ifcl  í|l  *  1 

< va  )  .  Arrodillase \    ,.  ^  »   '• 


Importa  con  t«  qftjetad  u 
no  e!  quesea:de,sdicba4a  -r 

en  lo  metro» ,  consecuencia ,  ,    , 
de  serjo  en  lo  m*a  se  .haga, 
aventurando ,  senoi?»     *  .¡ 

tu  salad»  tu  edadv  *«*  «anas  .  , 
p0r(o»í>:  que  cuando  á  mi  estafo 
no  le  quede  ptra  esperanza.,  .     > 
para  entrarme  eq  un  con.vejUOr 
mía  pobres  joyuelas  bastan. 
La  mayor  finesa  sea 
el  cuidar  de  ti  yoy 

J*v.    *  •  •        *. 

Alonso* 
t  •  •    *•  •  .-* 

Basta» 

basta  el  ruego  ,  Beatriz  f  que  es 

con  tan  nueva  Circunstancia  9 

que  ruega  uno ,  ó  manda  otro  \ 

pues  «on  las  mismas  palabras  , 

lo  contrario  que  me  ruegas  , 

parece  que  rae  lo  mandas : 

fuei^a  de  que  ea  bien  que  sepas  i 

que  de  esta  quiebra  roa  ajee  uta  i 

no  <pequena  pa  rfe  á>  mi « . . 

que  no. quiero  fué*  obligada 

quedes  al  cargo* dé  ¡todo? 

y  así  v  mientra»  la:  joVnada 

dispongo ,  y  el  .modo-  ajusto 

en:que  ba  de. quedar1  raí  icasa,  ,• 

bien  que  quedando  Xú  en  ella,. 

nadie,  Beatri*  ,,baee  falta;  .     » 

habré  ;de  valerme  de  ¿este  * 

caballero  que  con  tanta 

fineza  en  tí,  da  tu  «padre 

vivas  la*  memorias,  guarda.. 


«i 


m 


h. 


Mucbo  me  £es*f  Beatrtay  *•*  «><* 

por  cierto  J  no  te  faltaba»    <»  "> 

roas  «abofa  que' Mr  pobre  r;'  '    f» 

pero  vive  eo^ctonfianea  -'"  !  ,'*- 

de  que  nó*é  €aKaretao«;  ''  ••'  «•* 

<yo^  y  e*  que  íu  estrella  guarda? 

con  Já  dfcfearde  mi  esputo*  f ,:  "<£ 

fues  no  pudo....         »    •  *  J  £,,I 

*•■«        Btátrit*     »   •  •;  ''  ' 

'      ¿Qué?  — 

Angela.         :  !* 

,    Qae  traiga 

to  remedio  f  *f ,  en  algún 

escudero  die  su  casa. 

ESCENA  111,    -     •♦   > 

BttUtizy  después-  Juana* 

Beatrit.  '    x 

Guárdete  ti  €ielo  9  por  tanto  »• 
favor ;  nev-en  vbih>  fiada  <* 

en  tí  vivo  70%  -»Y  no  en  vano 
quiera*  (¡  ay¡ tnietyEi)  tiran»        {• 
esmerarse  *wi -fortuna , 
basta  ver  á  donde  «alcanfca 
el  sufrimiento  en  oír  pecho  ,'     * 
y  el  sentimiento  >en  un  alma*:  " 
paro  de  muy  bajos  medios   '•     r 
se  vale  esta  vea4 f.  si  trata 
de  acrisolar  mi  paciencia ; 
porque  contra  mi  constancia" 
no  es  el  interés  examen  9 
sin  ver  que  teniendo  armas 


47» 


en  m(  contra»  ln¿  tan  nobles, 

tan  generosa*  é  hidalgas , 

como  mi  propia  memoria  9 

de  Jas^ civiles  se  valga ; 

y  para  qua  dé  «na'  vea       - r-       / 

desengaña  su  ignorancia'*       ••    » 

y  sega  de  cuales  puede  •   '     ■  •  ■  • 

usar  con  mayor  ventaja , 

he  de  acordárselas  todas* 

Yo ,  fortuna,,....  .     .„ 

Juana, 

Una  tapada 
de  buen  arte  ,  al  parecer  , '  A 
afligida  |  lia  entrado*  en  casa  y  ' 
y  preguntando  por  tí , 
licencia  de  hablarte  agtfarda* ; 

Beatriz. 
¿A  raí,   rfjuién  puede  serf  pero 
mugery  y  afligida  ,  basta  i 
díla  q\ie  entre.  ' 

ESCENA  IV. 

Dichas  y  doña  Leonor  con '  manió, 

■,  Leonor». 

¿Podré  hablaros 
á  solas  ? 

Beatriz. 
•   Sí:  salte  Juana t    '■ 
allá  fuera. 

Juana» 

A  que  es  ,  señora.» 
embestidora  ,  apostara 
la  vida. 


j 


474 


^Beatriz;     " 
««   i  Porqué?      '       i  '    * 
<  Juana. 

Porqué  hay    ' 
mil  de  estas  estrafalarias  , 
que  a  titulo  ¿e  limosna  , 

se  estofan  de  lo  que  'estafan. 

,  .       .  ......  i 

ESCENA  V. 

Do/to  Leonor  jr  doña  Beatriz. 

Beatriz» 
Ta  estoy  ¿ola  »  bien  podré'  t 
señora ,  decir  qué  mandas* 

t  Leonor.  . 
Qu(?  me  des  9  Beatrfe ,  los  brazos. 

Beatriz. 
¿  Leonor,  mía  ?  ¿  pues  qu¿  caos* 
bay  que  te  obligue  á  ve  Air. 
de  esta  suerte? 

Leonor. 

Oye ,  y  sabrisla ; 
al  despedirnos  anoche    . 
me  di  jtate  que  deseabas,  ; 
en  fé  de  la  inclinación 
que  se  ha  confrontado  en  ambas  9 
desahogar  \\is  desazones 
conmigo,  y  tan  obligada., 
quedé  á  que  quieras  de  mí 
hacer  esta  confianza  9 
que  no  vi  la  hora  de  verte  ; 
y  como  si  destapada 
á  pagarte  la  visita 
viniera  ,  era  cosa  clara 
que  me  había  de  asistir 


4W 
Angela  9.  de  quien  recatas 
f.tí$  $en4imien¿os ,  y  puesto  ><t<  * 
que  dijiste, que  te  holgaras.' 
que  habláramos  sin  escacha»  •  • 
quise,  habiendo  esta  ¿nañSan*  * 
ido  a\  sacar,  ¿Ja  puerta ,•• 
Beatriz ,  de  Guad atajara    .*. 
un  ve*tidiUo%  dejando'    <  *v<>:  b 
á  la  vuelta  un* .criada  , 
con  quienlssií,,  no  penfort  ?.«*  ¡3 
la  ocasión,  sino  lograr**,     n  *ir« 
aunque  de  paso;  y  asi»  .      .  «j  ! *• 
pues*  no  saben  con  cfuien  habla*;, 
mira  en  qué  puedo  servirte*  •»•  •» 
¿  quéim*:  quieres  r  que*  me  mandas  *' 
fiarte  de  mi  bieja  puedes,  '  , 

y  *'\  cjuierei  que  mis  ansia»,.  »  i 
que  Cambien  de*  anoche  «atá¡«-  .:«,» 
hay  novedad><q«e  mis»  causas)  j •-  t 
quiten  ¡el  miedo  á  las  «tuyas  ^  •  » 
lo  haré,  aceptando  la  pagk^ot»  [ 
«ntefc  que  lar  obligación  ^  .:*  >■>  '  " 
pues  sitenjtni.teraar  re  para*  y  i 
quizá,  fe •  he  menester  toas  :  t  *>< ¡  >  • 
yo  á  tí ,  que  Ui  á  mí.  Esto  dbvita 

que  te  ^igarpor  ahora. - *  lilora* 

■  Beatriz. '       .,  üjm     > 
Ma.s  que  tus  labios  me  callan  , 
tus  ojos  *  «Leonor ,  me  dicen  «i 

.    Leonor. 
¿Pues  qué  esperas,  pues  qbé  «guardas  f 
para,  decirme  tus  penas  y- 
si  me  vés  Jlcirar?  pues  nada? 
te  empeña,  mas  en  decirte*, 
que  el  ves,  que  sabré  llorarla*»   ; 


»7« 


Bmtri*   •<  * 

Aunqa* **  verdad,  Leonor  mía-, 
que  larocásia*  deseaba 
de  ciMiioañcac  contigo 
un  caudado,  se  adelanta  ' 
tanto  tu  pena  4  mi*  penas  /      • : 
qne  he  de  rogarte  me*i  a  gas 
el  favor  de  bailar  primero* 

f  .   Leonor*  <f  ¿'  *    '     • 
Si  es  toariarase  la  palabra    }    -     > 
de  que  «mis*  ansias,  Beatriz  Y        ; 
el  paso  á  Jis-toyas  abran  f ' 
t yo  Ib  JiaTéu  $abrás  <]  ay  triste í) 
que  libté  ^altiva  ^tíi«na  ,• 
barlaaido'iiiiparias'de'afflWr;;..  "* 
¿La  vo*  pareqe  ^mi  eatraftas?    { 
pues,no^atrs1rañé8,j  Beatria,*   r. 
que  sube  dé  contar  n>ts!  varia*  ' 
fortunas:? fciewajbkaa J  • .  *  n 
en  ra>  de  jar  ^de  contadas  ?! 
pues  ¿grtyina  sin  ¿tipo* , 
no  es  manque  cáárpsJ  sin  alina- 
Burktndo  * 'digo  otrauve», •- 
imperios*  de  amor  ^ «tría1  na  f 
altada ty  Übro  vivíai,  o;:t.  ,    • 
Ckando  su.  deidad '¿tiqan*  ¿> 
ofendida  de  q&e  fuese  / 
yo,  \m  Hacendó»  dfe. sos;  armas , 
las  que  contra  otraa  /por  uso, '' 
tomó  contra  mí  en*  venganza. 
Don  Luis  ^^1  mayor  amigo 
de  mi  hermano  »•  con  3a  tritrad* 
que  el  serlo  le  permitía 
á  todas  boraa  en  casa  , 
y  con  el  digno  preicstof 


buscó  faqQ*,$Q#Qi%míÍÍA*p  ,.•  .<j 
las  mu/la*  cifasjScdelatin*»  •  .  j 
N<i  favo»  dificujAosas  *  ,  .  t 
?r*u4jm.heirman«¿nsu  alaban** 
liendre  bablandft^me.quitá'  .»-. 
«1  cuidado  de  i^wÍMrrU*. ...  ,,j 
Dejo  agui*  q#x  vQ((WMst§,,lt? 

**)*t*#Mht*  mp.^fit  aojo ,  :  .«a 
¿que  en  f^eJa.palabj-a    >  . .;,  i, 
'  ^e  cagara í  «mpjtfeeekca* iSp^  ¿, 
en  cuya  tranqu¿U&  blanda 
pazanttatfo,  €nipoja(,<>4e  amo.*; 

M^«^>ptéUgP*,0Ja**tii  ,r.  \v> 
que  los  embate*  >  de  zelos 
levantaron  (a^orjaiau  ,  '  .  :  ^ 
A  Angela  tu  prima,  frtyx*  *      ,.i 
y  no  tan  solo;»*  agravia 
en  la4  pqrt*  d*l  afecto 
i  quiera  tan  ÍlW*A°/¿aM*         T 
¡dftfft**  la  par**  tibien,         .,; 
de  que  mi  befmftjm  la^anaa*:,  ., 
%  ^competencia  temo, ,  ..     ,.., 
que  pa.se  á  mayor,  fies  gracia  .     , 
si  es  que  se  enejen ¿ran(  Jos,  dp*  i 
porque  sé  que,  F;e|j*,  anda;  ;    ..    r 
l^S^pdole^eíile  anoche        a  0[ 
para  decirle  sus  ansias  t 
de  suarje  que. entre,  m^faer  mapa 
y  amante  sobresaltada 
es  fuerza  vivir ,  temiendo 
el  todo  y  la  circaasrtajKia  ;     ,   . , 
y  as*  yf&«oi  surcarte.,  ,  .   #J#t 
pues  como  ladrón^?  ^asa  f      . ,, 


47T 


#fr 


es  fnetot  éa*  tir  á  h  tntrá ;      -    ,J  , 
de  lo  que  p**a  y*ió  pasa»   • 
procures' ^eiHfcrtoVdura  , 
tu  en  tendí mienta  y  tu  m*fta*>  '* 
Haciendo  que  Atfgela  á  en*i<anvbo* 
cierre  el  •  paito  *4  fc*  •*»£>eran*ji ,'  -•* 
desviar  anWsfc*  tapen*?  •  ^«  ■* 
queiá'áostlfnttt  átofenac»       ,     l 
mi  vida  i  ¿jta*  *Je-*w*)qtaier«  <.  «* 
suerte  *oy  ár^tiici»  alcana*  n  y  •* 
ú  de  FeH*  la»  ofensa*  ^  ;' '  '"'■•  * 
ú  de  «fon  Lttís-Jaaimttdattíar.    '»• 

*•''»••'' *  2teitfftf.tr  ":  :■<'-■■»  ::#» 
{  Qtfé  <péto<,¿'&é<gnoir ,-  ine  iaa  i 
en  lo  m«cho^qti«'me,eíaftarg,aaíi 

.  "  Ltoner.  '  :ti  •'"!• 
¿£9  desdéitarievpor  aw  •'  '- '  -¿ 
materia  dé *fla**«?:  '••  <!'¿"A  * 


'JBefttf-i 


i*. 


j 


o; j'.it,  Aguarda,  »"» 
y  verás  ¿ilati4  ál  contrario5;  r  *c 
que  anfé3'<¡-ay  Dios!)  st^stttcharas 
el  discurso  ,  Leoritf  r  mía ,  ""  \  -*. 
en  que  c dando  entraste  estaba  ¿ 
v ¡erara  que  pórstvéVámot' 
sola  de  mano  me  ganas  ,  i  A 
pne*  lo  que  qtiise'  decir  ,  -  •  ! 
lo  mismo  es  o^ie  tú  me  mandas! 

Leonor. 
*t Toes  querrá*  ¿f  discurso  f   ' 

• '  Btfamz  *•      '■•«:' 

•  •  *•  •'**  '''Era,  '•»'  •  *» 
recopilando  desgraciáis ,  *  •*• '  * 
hacer  cargó  á  ntf'fórtvtt*  ¿  ;  •*  '{ 
de  qué  remedio*  se  valg*  °  fcJ    i 


boy  contra  mf  tan  díVÍT¿s  , 
íomo  que  quitado 'me  baya 
la  esperanza  de  que  pueda 
Mlirtdé  e*t*a voluntaria 
cárcel; -donde  mis  respetos 
me  mantienen  de  una  vana 
necia  beldad  prisionera ; 
pues  la  hacienda  que  esperaba, 
de  anoche*  acá  la2  he  perdido , 
podiendo,  si  hacerme  trata 
asnnto«cfe  sus  victorias  f -\ 
usar  de  ma*  nobles  armas. 
Este  era  el  discurso;  ahora f 
parva  que  le  entiendas  ^ falta 
saber'  q«e  armas  eran  estás  t 
¡mas  ay.f  qué  necia  ignorancia! 
pues  cuándo  dije  ,  Leonor  , 
que  ni  desdeña  ni  estrada 
pláticas  de  amor  mi  oido , 
dije  bien  si  lo  reparas , 
que  en  mnar  oaá  fortuna 
estamos  corriendo  erit  tambas.    ' 
Libre?  ratnbien  del  tiramv:       ^. 
imperio  de  amor  ihe  hallaba 
yo,  Iieonor  ,  cuando  trocó    •    * 
en  tornJentas  mis  bonanzas  • 
y  para^que  veas  ¡  ay  triste!  * 
cuanto  encadena  ,  y  enlaza 
un  influjo  nuestra  estrella, 
huve  de  amar  á  quien  amas*  - 
No  te  asustes,  que  don  Felhr, 
sin  mas 'amistad  ni  entrada 
en  mi*  casa  ,  y  en  mi 'pecho  , 
que  sólo-  una  cortesana    "    ■      '  ' 
galantería  ,  tu  que-fcifcíetfon    . 
'  31 


47» 


460 


IW 


lo  medido  en  las  palabra* ¿i  . 
y  lo  atento  en  las  acciones    . 

alarde  ,•  sobre  so  gala, 

de  su  ingenio  y  so  nobles*,,;  . 
es  el  que  (la  vos  me. falta)  ¡ 
me  debió,  el  primer  afecto-,  ,  • 
sin  presumir, que  pasara, 
ni  no  oca .pasar  pudiera*;  *.< 
del  .primer  afecto ,  hasta  /«r, 
que  pepeada  la  vista,    <,:,»,     . 
de  esa  ca,Ue,VÍYa  estatuado.    - 
reconocí  4*  mi  prima  . 
i  el  galanteo.  ¡  Mal  haya   ,••••,: 
pasión  tan  incorregible » 
qne .cuando  quien  es. recata* 
para  que  diga  quien  as,,   . 
es  menester  maltratarla  I    > 
En  finA  viendo  cuanto  viva 
imposible  mi  esperanza  , 
pues  tan  desfavorecida 
el  cielo  quiere  que  nazca 
de  méritos  y  cándales» 
y  todo  9  Leonor  ,  me  falta  f 
lo  que  decirte  quería  , 
era ,  lo  primero  ,  me  haga* 
favor.de  que  esta  pasión 
nunca  4e  %tp  pecho  salga  ; 
pues  mejor  es  que  se  esté . 
oculta ,*que  desairada : 
y  lo.Jegundo*  que  tu 
le  {tifíente*  %  disuadas     .    . 
del  eupmeño  de  mi  prima  , 
pues  razones  {¡ene  hartas» 
que  le  desagraden  de  ella  j 
y  paca  qne,  tolerada.  t .  -. 


vi  vé  yo  |  mira  á  que  bajo    ; 
partido  se  dan  mis  ansias ,  •-• 
qae  «1  no  rerJe  gafen  de  otra  , 
para  consuelo  me  basta. . 

'  'Leonor,  -t 

Una  hermosura ,  Beatriz  9  •  •     ' 
á  las  do*  ofende ,  haya 
contra  la  hermosura  ingenio; 
veamos  quien,  puede  mas.    - 
Beatriz.  > 

Baja 
lá  vez* y  hfrhl eraos  roas  quedo , 
que  está  Angela  en  esa  cuadra* 
r  \     '• 

ESCENA    VI. 

pichas  f  don  Antonio  y  don  Luis, 

.    Antonio, 
l  Qué  á  entrar  óa  atrevéis  ? 
.*'*  >»'     !  • '      Luis. 

que  viendo  que  rio  está  en  caía 
\^  -'don  Alonso  ,  poes  le  he  visto 
fuera,  quiero  á  la  criada 
que  os  dije ,  dar  un  papel. 

.   •      Antonio . 
Pues  yo  me  quedo  á  la  entrada  9' 
para  hacer  alguna  sena, 
si  alguien*  viene.     Retirase. 
Luis. 
Aunque  me  enfada  •'  ap. 
don  Antonio  en  haber  sido 
quien  dicho  á  don  Félix  haya 
—  mi  amor ,  porque  uno  ni  otro 
presuman  |  y  á  que  no  cargan 


481 


432 


.    ( 

donde  fde  donde: laóív  v     ' 
no  «.justo  darme  (k  nada       "¿ 
pqutniendido ,  basta  que  él    .»■• 
te  declare;  á  cuy*  causa     >     :¿[ 
no  be  querido  que 'me  halle 
esta  noche ,  porque  añada  f  \     * 
dando  á  Isabel  un  papel, 
siquiera  esta  circunstancia  f 
de  que  estoy  mas  empeñado,     ,- 
que  él. 

Beatriz. 
Encóbrete :  l  qdiéa  a»4* 
aqní  f 

'  Luis. 
Con  Beatfia  be  dado. 
Leonor '. 
¡  Ab  tirano!  ¿quién  pensara      (ij 
que  aquí  había  yo  de  verte  ? 

Luis.       ■  H 

Quien...  si...  cuando  ..vos....  El  habla  ap. 
Nse  me  ha  turbado  en  el  pecho. 

Antonio*     : 
Turbádose  ha :  ¡  quien  hallara     £a/«. 
disculpa!,  11  f;  t 

Beatriz  t  ■■;  ;» 

¿  Pues  no  decís  # 
•  qué  bascáis  ?  «     •        í 

Antonia.    ,  •  , 

A  nna  críadAi  .  :,-. 

buscando  venimos;  ¿  qué 
el  decirla  qs  embarazar? 

Luis.  ■    -  \    '•   ..  •'. 
¿Qqé  decís?  .      ,  .:  •;, 

—  .       ■    ■     '■  ■ JH     ,■■!'  1IJH     lili  ~ 

(i)     Se  encubro} .         -../..*      .  -:i 


483 


*"    »E1  casó  es     '  M  * 
'(  quiera  Dios-  que  con  bien  fcálfck  )    flp* 
que  en  la  casa  que  servia 
antes  de  estípite  -es  la  casa  i 

de  ana  dett^^d^l  s^&Qr^ 
don  Luis  9  de  ioyas  y  plata 
se  hizo  un  grande  hurtcr,  y  ella 
dijo  i  qiieaqtieltei/mañana 
vio  on  horabré  saiír ,  estando 
asomada  á  ntoi  ventana  ,  ♦  0VI^ 
y  que  le  conocería* , 
ai  levitse.  **       »'    '  /.  >> 

Tmís.  .n  ,, 

¿  Hoinbre^.qué  trazas  ? 

Háser  prendido  un  ladrón  ..  t  •    i 
con  mil  preciosas  alhajas f    ,  >.'i 
y  para  que  reconozca 
*i(  es  el  que' vio»  y  si  de  tantas 
«son  de  su  señora  alguna;  4    .    • ' 
roe  ha  encomendado  la  Sala>t  <  f 
como  oficial  que  soy  de  eUa:,  *  ¿ 
que  wlreq  oír  diento  la  haga.  :> 
£1  señor  don  tuis  corrido  9 
por  ser  criminal  la,  causa  ,-.-!  ••-T 
de  que  vos  sepáis  que  él 
en  la  diligencia  anda  ,    -f    ..• 
que  al  fin  pensó  que  sin  veros 
fuera  posible  el  hablarla  » 
.   se  ha  embarazado  ;  mas  yo  , 
á  quien  na^a  le  embaraza  9 
doy  testimonio  desque 
buscamos  á  la  criada. 


j 


48.4 


Está  bien.,  ,y.  la  jqjue  es 
{  ¿t^if»..fén¿Js*bel?-'' 

,;      ESCENA, Va '  / '; ' !'. 

Vive  Diojt  qyftjo  ha.  .creído,  •  . 

Lu\s.%      . 
Conforme  á  lo  que  la  llama. 

Beatrjz. 
Ponte  el  manto,  que  con  esos 
"•  señores  fuerza  ésqu'e  vayas. 
■*Í*aéet\* 
Pues  yo^  sefib» ai,  tq'iié  culpa   —  • 
tengo  en  que...        » •  •  •  . 

•  Beatriz* .-  •   -,    - 

,-    Tío  digas  nada  fw 
vé  y  ponte  el  manto;  y  lo»  dos, 
'      pu^s  yo  permito  llevarla*,* 

sea  donde  no  ¿engais'  ,  i    * 

que;,  volver  aqorí  6  ¿rascarla*    ' 

Luis.        *i       • 
No  lo, creyó  mucho.  Ved....     • 

Beatriz  " ^ 

No. mas.    ,        ••  ■>: '   *>  f ' 

¡Antonio*'  v 

.  Que  rioso  tros. i.        »'    '* 
Beatriz,        '•-  !  '     '    • 
Basta/  «r*  '» 
que  ha  de  ir  coa  los  dos: 


4%i 

como  r tpritao  mi  rabia'!  °H 

.....        •  ■•.  <  ».,.«  u  ,» 

ESCENAWIII. 
Vichas,  dqn  Félix ,  Roque  %  #  después  doria  Angela.) 

1-;     Roque. 
¿Señor  qué  in lentas  ? 
o  m  !  üaíí*i .  Felixl     *    *•"'«  "' 

¿Si  yo 
•"Je  vi  eftf»ttf"y  vee<  q««  tatidá  f\  . 
porqaé  á  lo<qtie  él  se  atrevió 
no  meWreveré  yo?  '■*'>• 
Hoque*    ' 
«  «' -•"*-'•  ••     »  •  '*     Aguarda, 
qae  aqoí  está  él ,  Don  Antonio, 
y  Beatris,  y  ana  lapada. 

Félix  i     •      * 
Oye,  pnes.  v 

¿DéVnando  acá 
decides  t'ú  á  mis  ¿riadas1!  ¿u  "- 
(        Beatriz  ?  ¿  son  tuya»  ó  mías  ? 
4    Beatriz. 

%  Tuya^  •  •  •  -H.f.,   *.. 

*     '.       Angela     >><•*  -    '  '• 
"    <  •  ¿  Pnes  cómo*  las  mandas  ? 
Beairíñ. 

Como  esos  señores  vienen    • 

por  ella  t  y  es  cortesana 

acettm  ,  qae  por  ella  no 

tengan  qae  volver.-  - 

,       Angela.  , 

.¿v.:\        ,  KSi.táiit* 


i 


48Í 


gente  creyera,  ^que  había  j 
no  •alfeift  descuidada  v 
porque  bpy ;*^lo  mc.laqnt;  oí:,  i 
para  el  gasto  de  mi  casa; 

FeHx.     i 
i  Qué  será  esto?  ..  ,- 

Roque.      K 

¿.Qué  sé  yo? 

<S  •   £*«#,      :  :r  '¿  %Vj  J  > 
|  Qué  beldad  tan  ¿oberana !         ap. 

.     :       Félix. 
¡Qué -peregrina  bermoa***  1  /  *.U^.; 

Si  os  enojáis  de  queAaJtg*;,  n  '»■: 
la  criada  ,  m^jor  es  9     , 
aunque  se  pierda  la  instancia  » 
el  qua  ««os  vamos  sin  :*l|a&  — 

.  j  iúw*>  /  t¿.  "     *   ; 
Decís  bien ,  vamo*. 

Leonor.    .     > ;  .      .  > 
..¡Qué  ansia!  qst 

¿Don  feU**  vos  aquf?>  ;    (*)  * 
*    .       -      *  Felipe,,  ,r  ;  1  vi-:  .    5Í 
-   ¿Pues 
qué  os  admira  \j,  qué  os  ejpant»  , 
ai  vos  estáis,  que  esté  yo, 
y  quipá.con  m«jor  causa? 
l**norx 

Mi  hermano, •<-■ *  <•.  .:    > 

, .    Beairie   ;  .  r  :»•  \.  .j    • 
,  (iYa,e*  otro.et  r,iwge.-     ap. 
¿Don  Félix  aquí?        ,.f»  i*. .   i   * 


l  i  )     ^  instr.balian  á  don  Félix. 


m 

,     íl  Qué  estradas  9 
*t  el  uno  por,  {sajbel , 
que',veng&  el  otro  por  Juana  f 

í •■      :¿áito¡»  •     •    •  :  •» 

¿  Por  qué  mejor  7  ;  ;  --."í 

Félix.  ^       '''*  '^      - 
"Jorque  tengo 
foque  tenéis ,  fcque  añada 
la  oV  *eáiros>  buscámh/, »•■»><*«* 
por  tener-  un* "p&fcbra  v 

qoecfrabfer  era  vos. 

Quién  nW'ouscft 
en  ftarte  tan  ¿ácriíada  y 
Siíd  cómo  amigo  pretende 
que  responda. 

^     .  Antonio,. 

...<:.     ,    ^  Cómo  se  hablan 

los  dos  así ?  ¿Pues *don  Luis , „   • 

dott^Pelix  f  que  es  esto'?  '  * 

Losóos. 

'    ■:•••_■/         Nada. 

Angela.  -    .        .  .    ^ 
¿Que  bueno  será  ver,  cómo 
los  que  se  mueren  ,  se  matan  f. 

^0  tengo  que  b¿V!aroa.  *  -^ 

. ,  .'         Luis. 


■*•! 


que  responderos, 
y  Leonor. 

¡Turbada       *p. 


i 


m 


•'•Ved'f  mirad  •••• 

tfélix.    :  •       •'•  ;* 

Migados ,  que  de  las  damas 
buenas  campañas  no  .son,-  »!A;  v 
los  estrados.       .,A 

c?f;...         ..„  'jbftf. 

Toestro  valor  ?  t     .       {^hi     i 

...  ¿Como  tfs«#K ..^ 
de  estrados  9  y?  ¿encampanas 
«n  mi  casfj  ¿  como  ? 

empeno!  1  , . 

luis.     "  ' 
...  \.  Desdicha  estrada  !         op. 
t1    Beatriz.  %   .  .  Ȓ.  ...i 
l  Muerta  estoy  !   *  .  ,         flp«.: 
Antonio.    ■ 

¿Roque,  qué  es  esto? 
Roque. 
A  esto  |  señor  mió ,  llaman    - 
cuando  pierden  los  fulleros,  -' 
caerse  acuestas,  la  casa.'    ''l|'  '' 

Alonso. 
¿Aquí  taáto  atrevimiento4?1  c^ 
l  nadie  responde ,  ni  habla  ? 

¿qué  es  esto 9  digo  ?  y  qué 

Angela.  '"  V,F 

Yo 


(  i  )     Al  irse  i  sale  don  Alonso.     •  V  * 


lo  diré*  «t-etoátro  pilataasv  " 

*  Beatriz.  ¡  ,.r-r  *t  .    ,     < 
Ella  ha  de  ectaridá  perder,  •• »    a/>. 
•i  lo*  Éfefo  ;á  su  ignorancia.  "•-.■• 
,        ...;  .  '•  angela;  •%.  ••  .  -  i- 
AquesosidosneabalUroS"    : 
enamorador;  me.....  .  '-^ 

,-"'  *f   Btalris.     «>  

-  ?  Aguarda"^ 
que  si ntt  estabas  aqui  >  -'-'^  '• 
¿has  de-saberlo? 

'   *  •  •   •••    Angula*  '..•.* 

Pues  trata'  * 
dificultad  hay  en  que  *  »* 

enamorado*'...      1         ■•  -'♦'-  -  *■ 
•  •   •  t         -  Beatriz.  •;  • 

Sí ,  calla  f 
pues  no  lo  viste.  Señor»  •  •*.    ' 
estando  yo  en  esta  sala», 
que  Angela  estaba  allá  dentro  f 
ftqdesta  mu ger-  tapada 
huyendo  se  entró ,  diciendo  t  - 
que  su  honor ,  y  vida  estaba 
á  riesgo,  y  que  por  muge r        * 
la  favorezca ,  j  la  valga. 
Tras  ella  «sos  caballeros , 
y  los  dos  que  la  acompañan  ¿  •• 
entraron  4  y  por* la  cuenta  >  • 
según  el  lance  declara v, 
el  uno  es  el' que  la  ofende? 
y  el  otro  es  «I  que  la  ampara. 
Páseme  delante  de  ella  ,      '  "l 
y  al  verme ,  sin  que  la  espada 
sacasen  ,  á  .mi  respeto  '■« 

tuvieron  atención  tanta* 


«• 


K. 


que  dt*fr«tfa)  p*eiilJea>S  *a\h  .1 
esa  fiera  ,  e*a,tirat»a 
enen**>*|  áobferaftfe  «.::  « f  •  :   i 
sagrado:  ifervnaatnA  }1*+J»*»  :; 
el  la  asegure,  A  qne  él  otro 
dijo  r  pues. y*  asrguiwla, /•,<-•.<•.. 
queda  ella  9  ahora  pode*M»   ..    . 
los  dos  de  uMesica^emanda 
ajpabif.ieiV.otra  parte 
el  doelo  9  que  ó>,  fea  da|DA4   •  - 
buenas  campañas  «o»  son  . 
los  estrados.  ¿  Pues,  qué  aguarda 
vuestro  valor?  Dijo  el  otro: 
con  que  volverlas  eApakUa* 

quedarse  ella  ,.  y  entrar  14  *. 

íae  uno  9  y*  e*to  es  lo  c¿ue  pasa. 
.  r      Angela. 

I  Oiga  ,  #«é  .no  era.  por  mi 

la  pendencia  ?        .  • 

,  (  .  i,íá ,.    -.   Antonia*   x  •    */i 

..  Aquesta  dama       A  Roque. 

tan, bit*  miau  te  comayo.  r  • 
,:.,'  ..  ,  ,  r  .  Moqup.,  .  -     .   -r  ' 

Y  aun  anejo  r.  , 

AtonsQ.   ■ .  ■    .->>  j 
,  ¿' \    .     Aunque  .afcbasU 

para,  el  supremo  decoro  ,:• 

que  ¿e  k  debe  á  <ini  casa .» • 

haberle  .su  atrevimiento 

sido  es*  f  Beatriz  t  la  causa  f 

el  jrftspeio  que  han1  Unido-     .     ' 

á  tu  persona  ,  roe  ataja 

ronfcha.  parte  de  la  ira*    »*/  ' 
•  Félix.      .  , 

Si  hubiera  de  nueslraisai»* 


4»* 


•ido  elección  ,  por  ser  vuestra  9 
tuvierais  easlqáéTumfirU  ; 
nías  si  el  acaso  ,  ó  el  miedo 
•"*    J    ••   se  la  diérdh  i  esa  ingrata  v'Al  < 
quien  sin  elecchm  elige , 
enoja ,  pero  no  agravia. 

Alonso 
También  aquesta  razap       ,       . 
admito  ,  para  que  haya         ' ' \j -  ' 
Otra  mas  que  rae  disculpe  , 
no  echaros  á  cuchilladas 
de  mis,  nmjí rales.  Señora  9       d  Leonor. 
(  mude  estilo  mi.  templanza  ,  a/p. 

que  de  hombres  á  mu  ge  fes 
son  las  fr.ases  muy  conJtrarjas),. 
de  lances  de  amor  ,  y  zelbs., 
moto  tur,  nada  me  espanta  , 
ya  en  mí  casa  entrasteis ,  ya' 
es  Beatriz  la  que.  os  ampara  , 
á  coya  cuenta  corréis; 
l  ved  9  qué  queréis  que  yA\bfta  % 
ó  que  queréis  hacer  f 
Leonor. 

♦    Luis.  *  •  ■  •      •   • 

A  mí  me  dice  que  vaya  » •: ;> 

con  ella:  ¿quién  será,  cielos  9 
esta  muger  qtie  me  saca  •  :    >'  "\ 

de  igual  trtsVce? «  »   •"■»*. 

Aniomoi     -<¿:-*.;i  n* 
•'    Con  él  vine , 
.-con  él 'he de  ir. 


(  i  )     Vazt  Uepdndou  d*t>  bruto  ú  <dofi'Luis. 


j 


*v 


C*\.    BSGBNÁ»-     .. 

Don  Alonso  »  doña  Angela ,.  dpW  Beatriz  ,  don  jfe~ 
Jí*/*  Roque.      .  ,. 

Alonso. 

Hasta  que  hay* 
alejádose  de  aquí , 
que  no  podáis  alcanzarla  9 
no  habéis  d«  salir. 

Félix.' 

No  taré*. 

* .       j 

pues  él  mandarlo  vos  basta» 

Alonso. 
'Angela  9.  Beatriz  ,  tenadle , 
mientras  que  yo  á  mirar  salga  , 
si  se  ha  perdido  de  vista». 

••ESCENA   ¡¿v 

*  '  'Dicftós  ,  rh/r/jos  don  Alonso» 

FcIíxk 
(  £  Quién,  «vm!,  ni  prontitud  tanta 
en  un  fracaso  •  ni  en  una 
desdicha  atención,  mas  sabia  t 

.1      *  •  m    Roque, 
¿Eso  admitas  ?  ¿qué  moger, 
señor ,  no  nació  dotad»  < 
en  mentira  infusa? 
,  ;  ? ;    /  f  >     Beatriz. 

.     Guerda        «p. 
anduvo  Leonor ,  pues  salva 
«tsercotrocida ,  dando  • 

.    ,  íuecza  al  .engaito*  ,,.»,.  *\     /  i  ; 

f 


Angele. 
,  lQue  nada 

de  cnanto  Ui  viste  viese  !        •  <¡ 

Félix. 
I  Como  rendirá  qtiien  se  halla 
con  poco  tiempo ,  "y  con  dos 
obligaciones  á  entrambas  ? 
Una  es ,  Angela  divina  9 
hacerte  cargo  de  tantas 
finesas ',  como  me  debes  ; 
otra  es  «darle  á  tí  las  gracias  f 
discreta  Beatriz ,  de  tantos 
riesgos»  como  me  restauras: 
y  pues  á  una,  y  á  otra  deuda 
razón  sobra ,  y  tiempo  falta  f  ' : 
supla*  una  ,  y  otra  ,  arrojarme 
igualmente  á  vuestras  plantas  i  ' 
á  tí  |  por  lo  que  me  libras  f 
y  á  ¿í ,  por  lo  que  me  matas.    T 

*'  Angela* 

¿Es  tso  lo  que  os  quedó 
que  decir  á  la  tapada ,  ( 

que  se  fué  con'  otro  ? 
Beatriz» 

Poco 
os  debe  atención ,  que  iguala 
nada  al  agradecimiento. 

>r  .  .,  Félix.*  ,, 

¿Qué  queréis,  ¡si •  hay  quien  le  arrastra? 

Beatriz,  ...... 

¿  Qué  he  de  querer  ?  mas  si.  fue* a 
mi  a  f  yo  la  domeñara  .r 

á  que  lo  primero  fuera 
lo  primero. t  .,».»• 


«94 


fdtír, 

i  ¿Hubiera  traza 

para  eso  ? 

Betítriz. 

.  Querer  quererla, 
Félix. 
¿Y  9  dime,  quererla  basta? 

Beatriz» 
No ,  mas  dispone. 
Félix. 
f  •  .  No  hay 

dispuesta  materia ,  que  arda  ,  . 
si  está  en  otra  parte  el  fuego. 

Beatriz.  » 

Irla  acercando  la  llama. 

Félix* 
Ce  rea  está*  9  pero  no  prende. 

Beatriz* 
Luego  es  con secuencia  clara  9 
que  no  está  dispuesta ,  y  pnea 
disponer)^  f  es  aplicarla».... 

.    Félix. 
Decid  ,  sin  que  mas  os  cueste  9   . 
el  cuidado  de  guardarla  f' 
que  boy  03  quiero ,  sin  teneros 
cuidadosa.  * 

Beatriz.' 
Todo  para    ' 
con  que  me  la' bagáis  ,  don  Félix  9 
de  W  volver  á  ebta  casa  f 
que  no  hay  para  cada  día 
urn tñgaiío',  una  tapada, 
ni  un  desea  dé  la  enmienda 
¿  atrevimientos  <  que  agravian  * 
mas  f  que  imagináis  ¿-no  solo,     l 


6  ella  9  i  Angela  ,  i  su  fama, 
á  mi  tío  ,.^á  fttf ;.  prttio 
á  quien.....  no  sé  á  quien. 

No  vaya 
fftn^taladBda  ;  J*  quien  decís? 

,,  ^■•j&«eni*í^-.,  .>  f .  :.í 

Preguntadlo^-  I*:  papada  i, * 

poes,  aUa-  Id  aabé, qfl«l|fc.  ,v:. 

«f¿ittídál4>      '  -"'    «■'<»'»»*    Oí!     ••  ,» 

(     ¡Diribuqtlralat; 
¿Ella  lo  «abe?  ,.-í   a  q  ,. 

fci.fe»;  -      Beatriz*  \.  ■  > 

■    ..i..     .;i  «•..**  V.. > 

ysi*¿  -./..* 

•  ¿  En.  yooei  contraria*; 
resppnddi? 

*     .-..Sí..'  i'.:   ...    -¿   i 

vFWiitY 

»:  .•        Mal:£odr>i  ,vO 
aín  conocerla.    « 

Beatriz.  .  .  j; 

Buscadla. 

JSo  tó  á  donde.    •  -. 

i'j'»'-      JBéaérU»,. .    j. 
•    JfoT.  tampoco. 

pero  ella....       •!»•       i  :*.  ;      .•*.  , 


4W 


.  J 


32 


495 


ESCENA   XI.t"»    * 

11    Dicho*  jr  don  Alonso* 

Alonso, 
' " •-  Pues  ya  se'tUrptf» 
idos  v  caballero  9  y  ved  , 
ya  qae  fue  1*  prisa  tanta?  '•'  "  "•  * 
que  dio  «fuella  dama  á  M«  9  '•  , 
qae  do  habo  lagar  de  que  bagft 
amistades »  que  debiera  9 
qae  salís  de  aquesta  casa  » 
y  correrá  por  mi  cuenta 
cualquier  disgusto  á  desgracia 
qae  de  este  duelo  resalte. 

Félix* 
To  os  doy»  señor  fT  la  palabra 9 
porque  fué  lance  rifado  , 
sin  empeño  de  importancia  9_ 
qae  por  aquella  muger 
segando  daelo  no  haya* 

Alonso. 
Oid9  dejar  la  que  os  deja 
es  la  mas  cuerda-  venganza : 
id  con  Dios. 

Félix. 
Guárdeos  el  Cielo  s 
l  qué  es  lo  que  llevo  en  el  alma9 
que  con  sentirlo  lo  ignoro  t 

Rotfue. 
¿  Pnes  qué  ha  sido  ? 

Félix» 
Unas  palabras  9 
tan  confusas  á  una  luz  9 
á  otra  las  tan  cortesanas  9 


que  viendo  i  Angela,  el  oirías  • 
me  divirtió  de  mirarla. 

ESCENA  XII. 

Dort  Alonso  9  Beatriz  y  Angela* 

Alonso» 
Si' cerradas  estad  puertas 
estuvieran ,  no  se  entraran' 
acá  tales  alborotos. 

Beatriz* 
Deséuido  fué. 

Alonso, 

No  faltaba 
mas  que  era  andarme  yo  ahora , 
si  tnaj>  el  lance  durara  f 
ajusUndo  duélecitos 
de  melenas  y  tapadas. 
Entraos  las  dos  allá  dentro : 
mas  oye ,  Beatriz. 

Beatriz. 

¿  Qn¿  mandas  ? 

Alonso- 
La  jornada  corre  prisa  , 
ya  ves  que  la  ropa  blanca 
dice  quien  es  cada  uno , 
mayormente  en  las  posadas; 
si  menester  fuere  alguna  , 
te  ruego  esta  tarde  salgas 
á  prevenirla. 

ESCENA  XIII. 
Dichos  y  menos  don  Alonso* 

Beatriz* 

Saldré, 

* 


497 


4MT 


esta  tardepo* .  «^¿▼i«M»Vl'J  ,ül 
Angela?     t,  ,    ,,-»,., 
"    Angela.  -' 
^  S£>,que  sroJbobfcdatwAl 

me  he  quedado  de  saber , 
que  los  une  auna  rauj&er  aiftan;| 
riñen  yor  otra,     (  ,,..,«, 

Beatriz.  .  .,  „> 

¿Qué.  quieres  f 
'como  eso  en  él  mundo  pata:,  -j 
no  hay  sino..,. 

Angela. 

4  Beatriz.    .  ,        ,     . . 

Aborrecer 
á  los  dos.  ,  ,  k.    ,:, 

Angela.  ± 

Desde  mañana  #| 
porque  hoy  tengo  que  hacer  uno» 
laajos  ,  verán  que  no  tratan 
de  mas  que  de  aborrecerlos 
mis  tres  sentidos  del  alma.  •     T 

Leonor. 
Sí,  que  las  cinco  potencias     ...  s 
estarán  muy  ocupadas  ;       ,    ,   .  T 
que  aborrecer  y  hacer  lazos       ^ 
son  dos  cosas  muy  contrarias.   ¿ 

ESCENA  XIV.       -,-,t   ; 

Decoración  ns  Ciilb. 

Doña  Leonor ,  don  Lui*  y  don  Abtonio. 

Leonor* 
Que  me  contoca  no  quiero  ap. 


<fon  tais »  Tc6mftí|píWr¿ r  r  7C  r% 
lomar  elgtéclfeiaio.seV.  ?<VM,j 

Pues  ya  04  *H*víf  cabaUero*  ,  / 
no  habéis  de  pAsaf  de  aquí. 

l  Cómft;.otod*cfeitosr  p»ede>  ,  c-mrt 
n>i  obligaw»n,?H  sin!  «quede  ^()>¿/ 
servidor  á  quien. deM  :..^r.  011    d 
.    haberme  dado  ,.»<*  digo 

la  vida:» \ poique >  e« nena*  ?/u,q 
dádiva,  que  ¿fot  el, h,onorv .;,,. .-« 
'de  «na  dama  ;  y  tÁ.fttftsigOit  ac3 
dejarla  por  **>svegura 
del  riesgo^  que  a  manato 
su  opinión  »/fM»e&j|aiique  no 
fajfricénff^lice  so  hermosura 
del  atrevimiento  m<t*  «;*,..;«,  3nt 
siempre  las  moeres  son 
deudoras  de  la  opinión 
en  cualqróra  desvao ,,  K  i- Jcif 
de  los  hombres^ ¿y:om o  puedo 
condenarme  á  no  saber    *  yi.£>i 
i  quien  lo  he  desagradecer? 

Poco¿conv.en€tda  -quedq>  M:-,  ^.f. 
de  la  ra&QQ-jqut  ma  dais ,.  /.,  7 
(dis/r.a*&r,«nr  v  a  h*m  intento, ...  lap* 
el  habla  yjej  senUmjenJo:)  .,:\r-\ 
pues  vos ,  á  j»í  n#  me,  esla;¡stl  ,r 
en  obligación  iun$una  ;  r  ..  n  f 
que  bal l^ndom-ea^aso  allí r,,  r 
y  empegada*  cuando  vi ,.  .  .^ 
que  en  taq(  desbaba  fortuna 
BeaVfcde,  mí  se  valía  , 
.    ¿que.bice  de.!su:  fingi  ajenjo 


/ 


«00 


el  ayudar  t*  jutato?  ;  T  r.r.U 
[  pues  asi  coéto  «si'hafcit  \  •■•» -f>t 
yo  de  salir itrtP de  a*lí  ? ¡  >  :  *  .» ^rí 
•^  hui*\  J>  '•-.í-  -I  mi 
Sí,  pero  villano  Indicio 
fuera  ,  cuando  el  beneficio '  ' ' '  , 
viene  á  resultar  en»  mí  f 
el  no  agradecerle  yor   -  -■  i:/    • 

Pues  «opuesto  que  queréis 
agradecerle  y '  podréis , '  •  •  «  • ' » 

con  una  acción.    ,  -.«.r.  -♦, 

—  «¿Qoé  es;?      »i   [  •■ 
of  *  .     'Leórtúr*  ím ..    .... 

'•"•   ••  •■•  -i  '*-  •     'Que  no 

me  sigáis  «üftai  c   .: ;   .  . 

Xirfn»  •    ' 

'•    ••  :f   Bso'es  •  » 

haber  ,  seftcfa'f  queridos*. ♦.     . 

':.^T*-;  .   -    £¡eortor¿'  •  •      -   !  ;.í* 

¿Qué?    '.    f  *  r-i-  i;   >.    .!      *     .  , 

-  « ■  >     .  'A-Zafa.---'  ■>»••- 

Que  tel  ácr  desagradecido, 
me  cueste  'el  $cr  deportes; 
pues  si  de  vuestra  1  porfié 
.' *  vencerme',  seffora  «•(intento  , 
falto  al  agradecimiento         •'  ' 
por  ir  á  la  cortesía.  > 
Y  á  dos  afectos  rendido  * 
ya  que  uno  forzoso  és>       ' 
mas  quiero  ser  descortés  * 
que  no  desagradecido!    l  '  • 
i    Quien  sois  ¡  toe  decid  ,  éi  >yav 
I    otro  bien  queréis  hacerme. 


Quwá  ivofm?  p«»#rf ;,  c„  . 

••P* »  B»(?ír^.qwien  jpfe,,  por  IKof  • 

Leonor, t 

Estoy  porque  Jo  sepáis  *    .,  ; 

otro  defecto  á  losados. 

Luis.   .     , 

.      ..  Leonor.  . 

Mal ,  cruel         op* 
pasión  y  cubrirte  he  querido. 
•h*  No  rfVd'de  fementido','.'      f 
falso ,  ingrato  9  aleve  V  infiel » 
roapl^fcíafléro,  v¡lI¿W.i,!í 

''  °«¡ltío  *     LuisV 
La  causa  no  alcanzo. 
.T\*     í;  v,:a  vmc;/.  ,     Leonor.      "' 

,..-.-  i^ífei     • 
queréis,  verla  ? 

'  .  -  .,■,.,«.      Pues  yo  J  -V       c 
soy.  ¡Aytd¿  mi!  mi  hermano,         (i) 

, »    •  •    >    •    ».  i  .     11.  i  * 
Dichos  *  don  FetíKfx$fiqufi> 

Luis,         .::?■? 
4  Quién  vío  empeiSo  mas  cruel  t 

(i)     Al  ¿encubrirse  U  d  su  hermano  y  se  retira 
bastidor.  i»  ... 


tos 

De  aqtfífl0¥o?&r 'tfNMfcK10? 
valercne:  ved  *ffu¿  estoy  viendo 
cuanto  os  palare éofñáf>?  "'"^ 
^¡¡um  h#  JfenWinoaW  «*** 
para  dejar  de"  réftir  , 
me  tengo  &V  *«cttbHr\OÍI  *oU,± 
y  hemdá^é  acabar'  coábt6atK  A<e 
.eotatl  *  oJoaíbb  o  lío 

La  tapada  á  quien  sismo ,  %    ^ . 
don  Luis,  al  ver  cyie  ne  negado* 
á  on  ¿portal  ill  ha  retirado. 

¿  Qué  debo  jbaccr  ahftrft  jpia  otf  <?* 
ha,í^fiPtV?9.tT<; lo-  4^fi  «"«l** 

puesto  qn^^^ftpbpAÜnllPlibín 
á  ano  falto  s>^,^lro  obligo  ? 

¿  Qo^  he  de.-tac*n(  i  válgame  Dios  ! )     tff.; 

entre  F«tMf  y  Leonor  f 

coando  creciendo  vqffe|9t  *:-mijp  | 

á  empeño  de  a$n,<>t  y  &elos 

se  vá  añadieud.oael  i^e  honor? 

Y  pues  loafuáso'fai  estrella 
(0  ,  queotefet^ic*,  stffcr4»#¿¡  .?« 
Roque,  qu^^e  in; poranias 
que  i  macla  as  conocelfa ; 
y  a#llVft^;m¿vv'eas  f «ffifc  A 
ne  cuides  de  ra&'  * 
*  I";   )•)  ¿sin  ifyqüél'  o;v   fi'  if  V  i 

^  --. -.      -.-  -      N*4mhsL--    

la  %.ñ\    •         •  i  •  ..™-«\  \&l¿*.    -•    <*vV>»:A   '  '«> 

vSino  tras  ella  te  vé  »*k° 


i  donde  (¡ufan  4flle.tr 

la  \nm«  *->v  ¡«  «>-••<•  .''.oír*  \1 

<  r.)'.      -:>r  'JRa^tt^i*";  ••  /  ni? 
1.0*19?»:  1'    '•!*  (  iVU  Nqhe  ■•iiBi^er 
yosla^i¿rande  ¿rfig«páa>,  '  <?  oí 
9oaoóiiairtd€í«Mia^dDflencia! 


* 


pane  ir  iras  unía  negar.  *         J> 

•  ••      'FWíJci  ,w  ;ns 

HuéM^rae  hatera  hallado      r  Y 
tan  presto.  ''     "'•       ,,,,;  u  "  ■""* 

A  iWf  ñi  nléfcésa.    :' 

Antonio. 

A  roí  sí  ,  que  de  las  hurtas      a?! 

me  se  pasar  a  las. veras; 

.  "V!  ctucb  fifi j  .'*»•*:  1  f  L 
ninguno  empuñe. la  espada        * 

010  mirar  la  '^uereneja 

que  hay  Va  1  a  sacar lii  t  ctíá'áflo 

«uceden  las  contingencias 

entre, amigos  o  no  amigos.    _ 

O  el  que 'la  sacare  entienda         * 

que  me;b'ahé*'ariaVfo  ieToirí.*6 

1    '-    "1  ,  •  •  '«    , .  *o 

16  no  la  sacaré  «11  esta 
ocasión^ ft  que  babiendo  pido  .  ^* 
que  hay  campañas .  mal  hiciera 
eiV  s^carla^y  pva¿  adonde         ¿ 
Éay  .qujeñ  *nf*ftf 4Í&'°  ínAen*a*  «;-> 

¿Sí^lp,dijet4;qp*.map  pucá>,  ^ 
obligarme  que?uirr4  ella  ? .  .,  ¿¿ 
:*'  ••    •        r.xLki*.  ••       •  •  * 

Pues  gníad  donde  jio  .haya 
testigo  que  lo  defienda. 


A 


40» 


Ni  guiéis  vos  |  ni  vos  sigáis,     ? 
sin  que  prira*rv#iae  advierta  , 
r^in  antes  qué  allá  hable  el  acero., 
lo  puede  «noí  hacfef  4a  iengptap ; 
¿  Qué  «e  ha  ^e  contar  maftaa*'* 
de  que  do*  hombres  que  eran,  i 
amigos  ayer  ,-Jtpy-  riñen , 
y  mas,  por.  coaa  ten  ciega  r -•«.  ?í 
como  el  amor  de  dos  d¿as:?j     .  * 
Pues  para  quefir  deban 
dos  amigos  9  fta.  í*.  ser 
tan  reservada  materia, 
que  á  mas  no  poder  se  esté   ,    ,t 
honestada  por  sí  mcsiui, 
¿Visteis  una  dama  vos? 

T  vendido  á  su  belleza  ,    t  (}  ^  > 
confieso  qne  la  di  rcl  alma..    rj 

Antonia*  t 

¿Pues  5  donde  está  la  queja  t    6 
deque  á  otro,  lo  que  á  vfOJ¡  . 
os  aconteció  ,  acontezca  ? 
¿Tenéis  vos  aleWn  favor?       . 

Ni  amago  de  que  le  tengál  . " 

'    Antonio.  :       :• 

l  Pues  donde  está  la  esperanza  .' 
qué  mas  que  un.  amigo  pesa  ? 
Volved»  necios  i  en  vosotros, 
y  ya  qué  la'  acción  "suspensa  9    \ 
ai  no  capitula-  paces  9 
por  lo  menos  firma  treguas: 
¿decidme  vos,  sois  amigo 
de  don  Félix  ? 


¿M 


LUÍA  I 

<  ?«JÍ   De  manera, 
que  diera? of,ék  oriLividaftj?  -- 

¿Voadé^dtftHbufe?  *<  »*  orvi'-?: 

r^mj.ni-'  •  >«!#!■'*  '  <;—  • 

Nada  precíi  ;':'' 

mas  /que  su  amistad  ,  el  alma. 

t  >  !<••»   i,, 

>  .  Antonio, 

Pues  puesto  qae  el  refyr  fuera 

ya  para  enemigos  t  a  rile i,  * 

y  para^  amigos  apriesa  , 

hayámonos!  razones. 

** 

*ft«W»fiw .quc^i  hubiera  ,„., 

•«btíft  a^m^;.^  Feji;* „ ^  aB 

la  pasión  (¿jal,*,  y*,jpnfi$*j  n^°P* 

tata  rio  ¿prota  taftorj  wj  JIIfp 

de  la  ,m.¡a,  ^esjatiera,;     ,_,•„  .mfi3 

porque  eq jȒ  no.ha.s^o,  ma.5* 

( ¡  que  haya  de  *nwtei\R  Cuenftl,         *!?• 

mas  paguro  el  gusto.,  y^po      ' 

la  obligación 'de  sus  pr^ n^d a slt|i 

que  el  caprino  4&  saber 

basta  dqn4e  la  soberbia  ' 

llegaba  de  upa  hermosura.,     ,„ 

tan  vana. 

\-     ' 

í  »  •  .  Yo.no  pndierJt  ¡.        - 
nun¿a  desistir  lamia,  .  ,  •..,..• 
aunque  supiese  la  vuestra  j 
con  que  fcrgaye  la  ventaja 
que  hay ,  si  bien  se  considera , 
de  amor  á  capricho» 


J 


JSttfel 

.tii-ir*  •  ',Cf    Hay, 
que  nosema1  i  reala Jaqesms ib  anp 

¿Luego  si  no  w*w&<tb  to'-T  ^ 
estáis ,  y  41  lo  cs^  compuerta 

.Eiuííi  \-}  ,  :  *.?*#*'•  -   -.-*£  f  ¿r;!1 

No  esta  9 
que  hay  segundo  dWlo  en  ella*. 

.•>.  i  v  ;i  e  coito»)'.  /.  «i 
Luis. 

Que  siendo  laJc-vtr¿  primera, 

que  aé'ámdr  áú^yneh*síiM6éfcÉT 

de  Ángel*!  tafca^tatttof  ella-'1-* 

•^  tan  dMWéffW^  ñiéto,  '^;" ''  '  * 

que  loa  folVsíoW  Aé'fert*  • ' !  '■  •  '  •  "• 

campañas  ,  me  olrirga1  á  éfüé  ;     r 

nififó  4(¿e  lo  'oiga  efea!  ,♦    <     '    . 

sue  *s0ldT  doy  por qtWrMá 

'  '    Atodniá\%,\ í- 

'  '  '       ;  »'!  "^OWr'  ■-'    í¡ 
quien 'nnnesí ,  dóri  L'6is';  di6  maestras 
de  que  sabia  reñir,     •*-*''*"•   ,:   : 
rrfia  siempreijúeVe  ofrezca; 
mas  quton  s^tóuu  ípinion 
tanlo  como  vos  da 'tuestas0,  ■   t 
deje  £e  •r'efttr*,  qirc  mas»  • 
airoso,  que  el  otrorqnesla,     .    •» 
quien  saben  todosJrjucsafoe     *  • 
reñir ,  y  de  reñir  deja*!    . 


a: 


porque  í^qkm¿  -ftcoinp&uar:  >  '•!  :l 
el  v*ai6r  <á«  la  prudencias*  .  :.:>  i 
.^jajuereislo  mejor  ?  ¿  Aon  Fd¡$^ 
pensarais  vos  que' pudiera 
nqnc»i4jé)««  d«  Reittr'-  ;  .1 

do  a  Luis,  por  .miedo  é  flaqtfcaa  l 
.,    i.  i  Félix:  ....*':  i  7  tí  .j 
T  si  otro  lo  peosáfa , 
le  matara  en  so.  defensa.  /  r> : 

Aniomo*  .  •  >v  ,    •  --i 
¿  Creyérades  vos  ,  4pn  Laii  f 
que  si  «jnja'Iwsa  sintiera 
don  ,FeUp  f  dijera  ot*a  l\ ..  y !.    i 

No  #  de  mogona  manera. 

.  Antonio. 
Pues'  si  uno  no  lo  pensara  t* 
y  si  otro  no  lo  creyera. , 
vive  Dios  ,  que  será  «tí  ttiiitv  ••- 
quien  «o a*  de-  este  duelo ' sienta  ; » 
y  vuélvorae  á  mi  principio ; 
d&ade^sy amistad  no  ha?  tema*, 
finesas  atropelladas    -•  kií  -   •  f 
son  algo  mas  que  finezas.  v 

Sí  á  un.*  ¿fmtgo  no  se  s«fre**}  * 
tal  vez  una  impertinenai^^c  '■    / 
¿  á  qujf  n  se  tía  de  sufrir  ?  Daás 
á  buenas, ¿jt  de  su  estrella 
siga  el  rumbo  el  que  no  pueda 
no  seguirle,  y  el  que  Jlega    • -rr't 
1  á  verse  f  baile  superior    .  ♦    •■  -  •' 
palabra.»  ,.ú 

Zffí*. 

Tened  la  lengua*    - 
palabra  «no  la  be  de  .daiv 


*« 


Iht 


JtídA 

»f.Tnr  -  .*  •*<.!    Hay, 
que  lienirda'iveniírJQqeswxb  3"p 

¿Luego  si  no  e*aA»o¿ffitab  f0V  ^ 
estáis,  y  él  lo.  ?&&£,  compiwata 

.¿iijlíi  b  ,  íí.níW;  r-   -.'«j  ,  ¿rnr 
No  esta  9 

que  hay  según  tío ^inketo  en  ella,» 

Que  siendo  laH'ei  primera  , 

que  •tf'arotfr1  Jfc^/WstolftáT 
de  Angela^  buica4tóél¿tiélla1"ft 
•^  tan  dMWéíftdffy  «¿éír¿,  "v¡"  1  r5  ■ 

q«e  loa  íslVaóW  mHra* ,,f '•  •     ^ 
campañas ,  me  o^irgV  á  éfdé  j     ' 
*&§»  {mV-la'ofgt  «fW'?    «•'•  »•• . 
•«Va        4*^  W'fcKafáfcibftV 

qaeWldtdóy  pior  ^tWrMá        •"* 
In^ff» temor  ,-f  floV^V      '    ' 

i;,.  :■   '     •    «>í  «^J*,  f."      ií 

qtiicn'nnncá  ,  don  Ubié'i  dio  maestras 
de  que  sabia  reñir,     •*i*iCÍ  ,;   : 
riitá  siempre *q^é'*e  ofrezca; 
mas  quien  «üniéttiripinion 
tan  lo  como  voailar^aesWa^  *   t 
deje  de  r*eñiis  qutf  rapa»    r  ' 
airoso  «file  el  otrorqneda  t  •» 

quien  saben  todos «iq be, safoé  ■•* 
reñir  ,  y  de  reñir  deja,,    - 


el  v^*rnÍ«  Ja.  prudencia*: l  i  i.hüi 
. ¿^cretólo , niftio tí  ¿Don  FeK$ >j . 
pensarais  vos  que  pudiera 
nqneandája «  de  teñí*   ;     ;<>\,¡ ••<;'! 
don  Luis  pc^nmiedoó  fla^esa?; 

T  si  otro  lo  petfcaÁVa  , 
le  matara  en  su;  defensa.  /  i  j  :   ■' 
Antonio,} .  M».i  ,    ...a 
¿  Creyérades  vos  r  4pn  Lnii  9 
qpe  si  «i^a  tosa  sintiera    * 
don  ,*?e^  »  dijefa,  otea  f , , . • ?¿- :_    > 

Luis. 
No,  de  nfogñua  manera. 

..  Antonio. 
Pues' sí  uno  no  lo  pensara» 
y  si  otro  no  lo  creyera-, 
vive  Dios  ,  que  será  «41  i*'ln¿  •■- 
quien  «nal  deteste  dnelo  sienta  ;  < 
y  vuelvo  rae  á  mi  principio ; 
dft»de:£ay  amistad  no  hay temí  9 
finesas  atropelladas    ■'  •  m."1  ¿.   .  r 
ton  algo  mas:  que  finezas.  v 

Si  á  un.»  áimtgo  no  se  Mttf^  •  r  . 
tal  vez  una  impertinencia^  '-"/ 
¿  á  quy»n  se  tía  de  sufrir  ?  Dad* 
á  buenas, ¿$  de  su  estrella 
siga  el  rumbo  él  que  no  pueda 
no  saguirle,  y  el  que  Jlega    . ':¿;t 
1  á  verse  ,  halle  superior-  - 
palabra.»  ....  >ai 

XmÍ5. 
Tened  la  lengua*    • 
palabra ,bo  Ja  be  de  dar^ ,  -  ..* 


ítíl 


tío 


V 


donde  vive^o>Jen  ét*lGeU>#rvi    api 
haced  «pst  ti  enigma  entienda,-» 
que  á:e4la  remita  Beatris..'       .-r 

ESCENA  XVII.  :         «* 

Roque  ,  dona  Leonor   é  In¿$  tapabas* 

••    •    Roque.  •     •   i*        f 

Ya  dá  á  la  caite  la  vuelta  t  '  :    t 
alargo  el  paso  á  alcanzarla,      " 
no  entrándose  en  otra  puerta  f 
me  úé  con  el  trascantón. 

¿  Era  hora  de -que  vinieras?      * 
1    >   •    Leonor.         »   •■     ■  -• 
Ven  |  que  hay  mucho  que  contar te^ 

ESCENA  XVIII.       •'    < 
Roque*  z 

'Con  otra  tapada  encuentra  » 
y- mano  á  mano  las  dos 
entran  en  la  calle  nuestra, 
y  aun  en  .nuestra  casa  :  ¿cómo 
es  .esto  ?  Bueno  es  ,  que  tenga    '> 
mi  amo  contratado  ya  , 
que  á  casa  á  buscarle  venga *•    I 
y  me  haga  á.ait  que  la  siga ; 
si  ya  no  es  que  ella  pretenda 
darme  el  trascantón  en  casa  i '  4 
pero  no  *  por  la  escalera 
sube  y  á  la  puerta  llama  ,  í 

cual  pudo, en  su  casa  mesuMU 
Volveré  á  buscar  volando 
á  mi  amo  ^qne  es  bien  seps> .    I 


la  visita  que  Je  aguarda  , 
y  la  soma*  diligencia, 
gua  Ja  ca*a  me  ba  costado» 

ESCENA  XIX. 

4'.  .   "        *  " 

SaJ.A  Sff  CASA  DE  DOÍÍA  LsONOft*:     ' 

Pona  Zeonor  ¿  Inés  quitándose  los  mantos* 

*  ■    Leonor. 
Quítame  eate  manto  aprisa  , 
que  aunque  no  importaría ,  luir* 
el  qofe  mi  hermano  supiera , 
que  fui  en  cas  de  Beatriz , 
importa  que  no  lo  sepa  »    *'' 
por  circunstancias  que  hubieron 
desobligarme  d  que  por  fuerza 
me  amparase  de  un  portal  v 
en  qué  él  me'  n  ¡ó. 
iWa. 
J  Pues  ya  quieta, 

y  segura  estas  ¿  no  puedo 
saber  qué  ba  habido? 
.    Leonor;  '•" 

Q$e  atenta  i 
llegué  i  casa  de  Beatriz  ...  Llaman* 

Mira  quien  llama  á  esa  puerta. 

t  :  Inés  Ni 

Mas  parece  inovacion  • 
v  que  no  relación  aquesta, 
que  «s  ella  misma  ,  señora. 


32 


r 


£>2 


ESCENA  XX, 
Dichai  f  doña  Beatriz  con  manto, 

Leonor*. 
¿Qué  decís  ?  ¿  qué  es  esto ,  bella 
Beatriz?  ¿tan  presto  me  paga* 
la  visita  9  que  aun  apenas 
be  llegado,  cuando  ya- 
te dio  cuidado  la  deuda  ? 

Beatrix. 
Di  jome  ,  Leonor  ,  mi  tio , 
porque  una  jornada  apresta 9 
que  comprase  no  sequé    ., 
prevenciones  para  ella  »   :  * 
mas  dadas  á  mi  cuidado  , 
que  al  suyo ;  y  viéndome  futra 
ya  una  vea  de  casa ,  quise  . 
no  volverme,  sin  que  .sepa 
qué  te  pasó  con  don  Luís ; 
qne  ser  bravo  lance  es  fuerza 
el  que  se  hallase  contigo 
embarazado ,  al  ver  que  eras 
tú  la  que  de  aquel  empeño 
le  sacases. 

Leonor. . 
Aun  no  cesqn  . 
¡  ay ,  Beatriz  mía  !  sucesos  v 
que  mas  á  luz  de  novela 
parecen  imaginados  9 
que  sucedidos;  resuelta     .  . 
á  no  descubrirme  estuve  ,  ( 

porfió  en  que  me  descubriera  ; 
y  á  sus  sinrazones  mas  ,  * 

que  á  sus  razones  {  atenta , 


me  descubrí. 

-         Beatriz. 

I  Qué  diría 
ti  verte! 

Leonor» 
Aun  esa  st  queda 
fin  saber ;  porque  al  instante    ' 
mismo  mi  bernia  no.... 

:      Inés. 
%  ••••*'    Y  el  que  entra* , 

qae  parece  que  tu  voé 
noy  mas  conjura? ,  qae  cuenta. 

Beatriz. 
I  Dónde  podré  retirarme  ? 
que  no  quiero  que'  me  vea  , 
qué*  es  nacer  ron  y*  sospechosa 
mi  venida  ,  sobre  cierta 
plática ,  que  allá  tuvimos 
los  dos. 

'  Inés. 
■   Pues  en  vano  intentas4 
esconderle ,  porque  ya 
te  vio.  Tápase  Beatriz. 

ESCENA  XXI. 

Dichas  t  don  Félix  j  Roque. 

Félix. 
I  Qué  es  H>  que  me  cuentas  ? 
Roque. 
Si  no  me  crees,  vesla  allí. 

Leonor. 
¿En  fin  ,  no  quieres  que  sepa 
que  eres  tú  f 

* 


*14 


W 


Beatrí*. 
No,  por  Dios, 
.  •  Leonor» 

•       Paét 
de  hallarte  aquí  y  sin  que  pueda 
preguntarme  áV  mí  quién  eres, 
cuidado  con  la  deshecha.  > 

Señora ,  ese  caballero  v 

no  vive  aqoí ,  y  bien  pudiera  , 
pues  hay  puerta  én  que  llamar  , 
no  entrarse  hasta  donde...- 

Félix.  i 

Espera, 
y  no  enojada ,  Leonor  , 
te  desasónos  ,  ni  ofendas 
con  esta  dama ,  negando , 
que  vivo  aquí,  que  si  piensas, 
que  es  tomarme  en  tu  decoro 
alguna  libre  licencia  , 
te  engañas ;  y  bien  podías 
tener  hartas  esperienoias 
de  cuanto  mis  atenciones 
pundonorosas  respetan 
.los  umbrales  de  tu  cuarto; 
y  porque  no  solo  queja 
.  formes  ,  pero  aun*  el  euojo 
en  agasajo  conviertas ; 
sabe,  que  a  esta  dama  debo 
la  vida  ,  pues  ti  por  ella  , 
«y  el  ingenio,  soberano, 
de  Beatriz,  Leonor,  no  fuera, 
don  Luis  ,  Angela  ,  su  ptdre  , 
y  yo ,  ten  por  cosa  cierta  , 
nos  hubiéramos,  perdido 
esta  tarde.  > 


J  Qué  fcác'  cuentas  f 

Esto  ea  para  toas  despacio  v 
*que  ahora  basta  que  sepas , 
que  el  venir  aquí  es  la  dicha     ' 
mayor,  que. hay  que  me  acontezca; 
pues  sin  saber  cómo  ,  hoy  solo  x 

vi  entrar  el  bien  por  mi  puerta* 

Leonor.  v 

Siendo  así ,  trueque  el  estilo : 
perdonad  ,  por  vida  vuestra  ,    ' 
el  nó  saber  que  os  estaba        '   ' 
en  tan  generosa  deuda. 

Beatriz» 
Perdonadme  vos  á  raí, 
y  aqueste  agrado  os  merezca 
el  haber  de  recibirle  , 
porque  es  forzoso  ,  encubierta. 
4  Qué  es  esto  ,  Leonor  ? 
,  ¿eonor. 

..  No  *f* 
que  eres  la  papada  piensa   .      .:, 
de  tu  casa. 

Beairts. 

i  Qué  causa  hay 
de  que  por  ella  me  tenga  l 

;  Leonor,  ;       , 

Tampoco  lo  sé,  mas  puesto,-  .,,  '  ¡ 

que  por  tan  claro  lo  atienta,  * 
alguna  tendrá  ;  y  así , 
convenir  con  él  es  fuerza.  . 

Beatriz. 
I Y  4  qui  he  de  decir  que  vine  t 


ií$ 


Leoatfr. 
Jú  *1lá  en  Mi  ingenio  lo  inventa. 

Ahora  f  seftora  ,  mil  y-eee*        ? 

dejad  que  á  las  planta*  vuestra* 

ponga  primero  la-  vi4a  » 

que  0«  debo  f  y  luego. con  <slU 

el  alma  •  de  agradecido 

<te  escusa r  la  dvUgflntja.  / 

de  ir  á  buscaros»  4  cuya 

causa,  mande*  t  fV*$  ,0^  *igniera   - 

este  criado  ;  pu^s  fue    . 

mi  suerte  hoy  tan  lísongera  » 

que  supieseis  vos  mi  casa  9 

al  ir  yo  á  saber  la  vuestra. 

Beatriz. 
Bien  haberte  a  tí  seguido,     ap.d  Leonor* 
y  hallarme  á  mí  se  concuerda. 

FeUx:  f  ' '    .  ' 

¿Decidme  ,  que*  me  mandáis ?    ; 
porque  obedecida  ¿  tenga         '   h 
la  razón  c|e  suplicaros, 
que  me  saquéis  de  una  pena , 
en  queme  puSé  Uéatf  fz  V    '       * 
diciendo  que  vos.,,,.    ,c't '  '"'    "* 
Beatriz. 
V  }      l):   La  lengua 

tenedVq^fe  porque  VeTai¿  f  ' 

que  lo  que  allá 'diría  ella  , 
es  \<P  ijüe  yo  aqua  á  deciros 
vengo  de  su  parte  ,  «és  fuerza 
adelantar  la  razón, 
pero  mas  áola  quisiera.' 

FtU±. 
(alté  tú  allá  fuera  ,  Roque.    ; 


'L£'  '"'••'     Leansr. 
Iné"f ,  allá  dentro  te  entra.    ' 

"  ' '    " ;     Inés.    ' 
¿  ISecreticó  ?  no  en  mis  día*,  ép. 

áin  que  saberlo  pretenda. 

Rogue. 
J  Caso  reservado  á  mí  f         ap. 
no  en  mis  meses ,  sin  que  quiera 
<   alcanzarle. 

Inés. 
Que  sería 
nal  contado.. ..  ■     > 

Roque. 

Qué  errof  fuera*...* 
Los  dos.     • 
El  qae  volviesen  los  mantos  , 
y  no  volviesen  las  puertas. 

ESCENA  XXII. 

Don  Félix  ,  doña  Beatriz  y  doña  ¿eonon 

Beatriz.  . 
Lo  que  Beatriz  o*  diría 
es ,  que  hay  á  quien  ofenda ,    : 
Félix  ,  vuestro  galanteo , 
aun  mas,  si,  que  á  Angela  beHaf 
4  su  padre  ,  y  al  .honor 
de  su  lustre ,  y  su  nobleza ; 
y.  tanto ,  que  traéis  la  vida 
muy  á  riesgo  de  perderla  ? 
bo  porque  haya  Angela  dado  • 
(  que  infamemente  mintiera  )  • 
nunca  ocasión  ,  mas  porque  hay 
tan  locas  pasiones  ciegas, 
que  se  e^n  pedan  ,  donde  ne».     - 


iñ 


J 


«M 


k. 


•aben  en  lo  qnt  se  empellan* 

Un  poderoso  enemigo*  ••.,  t  ,•   j 
tenéis ,  de  tantas  cautelas  v 
que  quiaá  hablando  con  vos 
está',  y  cuando  mas  os  muestra^ 
descubierta  el  alma,  es  cuando 
Ja  tiene  mas  encubierta-  ,       >  ^ 

^Yo  ^  sea  quien  fuere  )  ,s4    .  .      : 
vuestro  riesgo  ,  y  por  sospecha*  » 
que  pueden  tocarme »  en  que 
él  o%  mate,  y  yo  le  pierda  , 
sabiendo  cuanto  es  Beatriz  \     , 
prudente  ,  advertida  ,  y  cuerda  f 
tapada  «.como  .me  hallasteis  • 
me  fui  á  declarar  con  ella • 
porque  su  ingenio  pusiese    .     r 
á  tanto  peligro  enmienda*  ,      , 
Que  no  bastaba,  me  dijo, 
porque  so  prima  «r*  üecia . 
loca,,  vana,  y  tanto,  que 
no  ve  fa  bora  en  que  sucedan 
por  ella  escándalo* ,  que  hacen 
mas,  ruidosas  las  belleaja» j         T 
y  que  asi  viniese  yo 
¿  deciros,  que  ella  os  mega      i 

(   /de  su  parte ,  que  la  hágala 
merced ,  da  que  por  sus  puerta* 
no  paséis ,  que  sentiría 
mas,  Félix  ,  vuestra  tragedia, 
que  el  deslustre  de  su  prima*    . 
Diréis ,  al  valerse  ella 
de  m/,  ¿cómo  escogí  al  otro*  •• 
•teniendo  en  esta  materia 
que  hablar  con  yot  ?  Pero  fácil 
me  parece  la  respuesta  { 


Si3 
con  que  quise  ¿estelar 
para,  con  vos  la  sospecha 
de  la  ¡segunda  intención,  •• 
reservando  para  esta 
ocasión  el  declararme. 
También  diréis,  que  es  muy  nueva 
cosa  hacer  bien  ,  y  guardar 
focara;  pues  no  os  parezca 
qué  no  hay  razón  «.que  si  ya, 
don  .Félix  ,  me  descubriera  , 
acabado  estaba  todo ; 
pues  por  mi  fácil  os:  fuera  ,       ; 
que  supieseis  quien  es  vuestra 
enemigo^,  y  error,  fuera  J 

corar  un  dauo  con  otro;  ^  ■      > 
pues  saber  basta  én  mis  penas , 
que  di  el  aviso  á  Beatriz  r  .    >  1 
y  Beatriz  á  vos. por  señas, 
que  os  pide  que  no  lleguéis  ^ 

ninguna  noche  ¿la  reja 
det(«  ¡vuelca  de  su  calle, 
porque  os  aguardan  «ñ  ella, 
fyflf.esto ,.4  Dios,  y  no  bagáis 
otra  vez,  la  diligencia    - 
de  que  un  criado  me  siga  ; 
fuies;  cuando  el  cuidado  os  mueva 
de  saber  quien  soy  ,•  -Beatriz 
os  lo  dirá  ,  ya  qu¿  ea  fuerza  , 
pues  ella  os  remita  á  mí , 
al  que  yo  os  remita  á  ella. 

ESCENA  XXIII. 

Dichos ,  menos  Beatriz, 

Félix, 
Oíd  y  esperad. ...  •* 


i 


SIS 


•aben  en  lo  que  **  empellían. 

Un  poderoso  enemigo*  •.   |?«   j 
tenéis  9  de  tantas  cautelas  y 
que  quisa  hablando  coa  vos  - 
está  9  y  cuando  mas  os  mue3trs¿ 
descubierta  el  alma,  es  cuando 
)a  .tiene  mas  encubierta-  , 

t  Yo  ^  sea  quien  fuere  )  ,s4    .       : 
vuestro  riesgo  ,  y  por  sospechas  » 
que  pueden  tocarme ,  en  que 
él  os  mate,  y  yo  le  pierda , 
sabiendo  cuanto  es  Beatriz  :     T 
prudente  9  advertida  ,  y  cuerda  f 
tapada  «como  me  bailasteis , 
me  fui  á  declarar  con  ella , 
porque  su  ingenio  pusiese    .     : 
á  tanto  peligro  enmienda*  .   .   , 
Que  no  bastaba  me  dijo , 
porque  so  prima  arev íiecia  y 
loca.,  vana  9  y  tanto  9  que 

no  ve  la  bora  en  que  sucedan 

por  ella  escándalos ,  que  hacen 

maa  ruidosas  las  belleza*  ¿         T 

y  que  asi  viniese  yo 

á  deciros,  que  ella  os  mega      i 

/de  su  parte  9  que  la  bagáis 

merced ,  da  que  por  sus  puertas 

no  paséis  9  que  sentiría 

mas9  Félix  ,  vuestra  tragedia,; 

que  el  deslustre  de  su  prima.    . 

Diréis ,  al  valerse  ella 

de  m/9  ¿cómo  escogí  al  otro*  •. 

•teniendo  en  esta  materia 

que  hablar  con  vos  ?  Pero  fácil 

me  parece  la  respuesta  j 


1>  ACTO  TERCERO. 


S2t 


ESCENA  PRIMERA. 

Decoración  de  Calle. 

Antonio  rmbozado  ,  como  recalándose  9  don  Fe* 
lix  tras  ¿l  ,  y  Roque. 

Antonio, 
No  pongáis  tanto  cuidado 
.  eo  conocerme,  ya  he  dJcjio    ' 
qae  pienso  que. en  este  puesto 
mas  que  os  embaraao  os  sirvo $ 
y  qae  no  es  la  primer  noche* 
que  hablar  á.esa  reja  os  miro? 
no  me  debe  de;  importar  f 
pues  lo  veo  y  no  lo. tapido» 
.    gad,  pues 9  llegad  á. ella, 
que  seguro  estáis  conmigo  " 
mas  que  pensáis.. 

Felfa*    .  .    / 

Caballero  , 
los  reservados  motivos 
de  una  alma ,  no  se  revelan 
facLlinente9  no  os  he  visto 
otra  noche  sino  vs.  i?ata  : 
por  eso  no  he  pretcn  ti  ido 
conoceros  otra  uocht» 
Ya  os  vi,  y  no  puedo  conm 
dejar  de  saber  quien  es 
\  mis  acciones  testigo. 


$22 


Antonio.  ! 


Poca  ii*  os  empelléis ',  yo  soy » 
Don  FctU.         (i) 
Fehx. 
¡  Qué  es  lo  que  miro  ! 
¿Don  Antonio?    • 
Antonio. 
Si. 
Roque. 

¿Esperabas  . 
para  mañana  á  decirlo  ? 
que  he  estado  de  aquello  de 
pendiente  el  alma  de  an  hilo* 

•  Félix.  l 

l  Pnesy  don  Antonio  ,  qué  es  esto  ? 

Antonio. 
JEs  saber  vuestro  peligro  9 
y  statf  que  vos  leí  sepáis , 
qnise  venir  á  usísti ros. 

Félix.  '•  •   ' 

La  finesa  os  égradezco , 
pero  no  el  riesgo  imagino ;' 
pues  no  tiene  inconveniente, 
cuando  i  ninguno  compito  » 
hablar  é  una  dama. 
Antonio 

Basta         ' 
quenfritimulfis  conmigo , 
como  si  yo  ño  supiera , 
que  es  el  ordirtario  estilo 
de  un  amante  cortesano , 
negarse  i  cualquier  indicio 
del  susto,  muy  en  su  duelo 


i 


(  i  )     Descúbrese. 


$23 
el  disimulo  a)  amigo. 

Yo  sé  que  en  aquesta  calle  f 

centinela  de  vos  mismo  f 

esperando  la  invasión 

de  un  poderoso  enemigo , 

estáis  en  vela  á  un  cuidado  r 

ai  desvelado  á  un  carino; 

y  aunque  á  él  le  ignoráis  f  sabéis 

que  en  lo  fatal  del  destino, 

«1  mas  ignorado  riesgo, 

es  el  riesgo  mas  preciso ; 

y  así,  sin  haceros  cargo 

de  que  es  la  amistad  servicio, 

todas  las  noches  he  estado     - 

como  vm. 

Félix. 
Mocho  os  lo  estimo ; 
,  i  mas  yo  enemigo  ?  ¿  yo  riesgo  ?  ' 
¿quien  ,  don  Antonio,  os  lo  ha  dicho? 

Antonio,  >■ 

Si  lo  hemos  de  decir  todo , 
Roque  fue  el  que  me  lo  dijo. 

Félix. 
¿Pues  tú  de  qué  lo  sabias? 

Roque* 
Si  todo  hemos  de  decirlo  f 
de  aquella  dama  tapada  , 
á  quien  seguí,  y  en  tu  mismo 
cuarto  hallaste ,  sin  romperse 
la  tramoya  donde  vino. 

Félix. 
I  Pues  ella  contigo  cuando 
habló? 

Roque. 
Cuando  habló  contigo ¡ 


J 


S2* 


porque  como  me  mandaste, 
que  me  saliese  á  no  oirlo  , 
á  oírlo  me  salí ,  que  en  fin  , 
criados,  dueñas  y  vecinos, 
¿  de  qué  servimos  ,  señor  , 
si  de  acechar  no  servimos? 
Con  téselo  á  don  Antonio  , 
pretendiendo  leal  y  fino, 
te  dcsuadiese  el  empeño ; 
si  él ,  en  vez  de  hacerlo ,  hizo 
la  fineza  de  asistirte, 
disculpando  está  el  delito. 

Antonio. 
Y  bien  disculpado  está  9 
pues  que  el  barrio  recogido 
no  está  ,  y  esta  noche  mas 
temprano  vuestro  amor  vino, 
que  otras  noches  :  haciendo  hora, 
que  me  digáis. os  suplico, 
de  la  noche  al  alba  ¿  qué 
diablos  tenéis  que  deciros  ? 
porque  cuando  vos  hablando, 
estoy  yo  perdiendo  el  juicio, 
y  mas  con  una  señora , 
que  v  á  lo  que  á  todos  be  oído  , 
no  es  la  sabia  Pitonisa , 
si  ya  no  es  que  discursivo 
de  lo  que  visteis  de  dia , 
amante  contemplativo  , 
enamoráis  de  memorial 
que  aunque  es  un  cielo  divino 
lo  lindo  de  su  hermosura  , 
¿qué  importa  si  anochecido 
se  apaga  todo. y  $e  queda 
á  buenas  noches  lo  lindo  F 


Roque. 

2ue  enamore  con  linterna 
as  de  mil  veces  le.be  dicho, 
o*  que  se  traiga  el  lampión 
deSiquis,  y  de  Cupido, 
con  que  maulero  de  amor, 
podrá  aer  que  halle  perdidos 
en  los  .bríos  de  lo  hermoso 
los  trastos  de  lo  entendido. 

r  Feüx*    -  \ 

2  Ay  don  Antonio  !  si-  hubiera 

.   (ya  que  en  los  estrenóos  míos 
para  hablar  esto  con  vos 
rodado  el  lance  se  vino)- 
si  hubiera,  digo  otra  vez, 

;de  esplicaros  ,  de  deciros , 
la  novedad  de  nn  amor 
tan  nuevo  f  y  tan  peregrino , 
que  dudo  que  hasta  boy  en  otro 
ae  haya  escuchado ,  ni  visto, 
no  acusarais  estas  horas ; 
antes  ¡  ay  de  mí !  imagino 
que  las  tasarais  á  instantes  t 
aunque  las  vierais  á  siglo». 
Decirlo  deseo,  y  deseo 
el  callarlo,  porque  miro, 
que  si  lo  digo ,  aventuro 
la  verdad  con  que  lo  digo ; 
y  si  no  lo  digo,  falto 
también  al  pequeño  alivio 

'  de  contarlo  ,  de  manera  , 
que  en  dos  afectos  distintos, 
eir  el  uno  vengo  á  darme 
lo  que  en  el  otro  me  quito. 

Pero  entre  una ,  y  gtra  duda  , 


«2* 


i 


$26 


,  parta  la  voz  el  camino  ; 
pues  el  decirlo  yo  todo  >                ' 
sera  callarlo ,  J  decirlo. 
Bien  os  acordáis  de  aquel 
lance,  en  que  todos  nos, vimos  ~ 
restados  *  coando  Beatriz-           >* 
tan  rara  enmienda  previno, 
pues  no  contenta  con  darma 
la  vida  que  roe  dio ,  hizo.   • 
que  de  intentar  darme  muerte, 
me  dé  la  tapada  aviso*'    ■              x 
Di  jome  f  pues  f  de  su  parta       *  /    , 
aquello  de  un  enemigo 
poderoso  t  á  quien  mi  amor 
ofendía:  agradecido 
la  empecé- á  estar  desde  entonces; 
pero  por  el  caso  mismo, 
que. el  peligro  me  avisó, 
abandonando  el  peligro  ¥ 
vine  aquella  misma  noche f 
que  es  caravana  del  brío  , 
bacer  aprecio  del  riesgo , 
para,  bacerle  desperdicio. 
En  la  calle  estaba,  cuando 
vi  que  entreabierto  un  postigo 
de  esa  reja ,  una  muger 
en  sumisa  voz  me  dijo  : 
¿  Es  Félix  ?  Sí  f  respondí  í 
según  eso  no  os  ban  dicho  * 
prosiguió  ,  que  «o  vengáis , 
Félix  f  de  noche  á  este  sitio  ? 
Antes  de  éso  ♦  dije,  debe 
inferirse  qoe  lo  he  oido  * 
pues  que  quiso  que  viniese  * 
qui^n  que  no  viniese,  quiso. 


En  fin  f  no  perdamos  tiempo  ; 
desde  pequeño  principio 
resultó  de  un  ¡lance  en  otro, 
que  ser  Be  a  trie  averiguo;     . , 
y  «un  no  «sé  de.  qué  pasión    . 
con  ingenioso  designio , 
en  voces  adrede  erradas , 
acertadqs  los  indicios.    ■ 
Con  que  siguiendo  so  genio 
el  imán  de  lo  atractivo  y 
no  es  Ang<la  Qon.i quien  hablo  • 
de  «roche  *  siendo  á  quien  miro 
de  dia  :  ved  4e.»n  amor    • 
el  mas  ciego  laberinto, 
q&e  jamase  supo  ;  pues 
queriendo  cada,  sentido 
hacer  bajndo^de  por  sí  9    t. 
con  opuestos,  desvarios  , . 
si  en  doña  Angela, lo  hermoso 
me  suspenderlo  encendido 
en  doña  Beatriz;  4  una  ,       ,.  ,/ 
Cficif.de.su  Juz  la  sigo»  -  .   r 

todo  el  tiempo  qué  su  luz 
goza  resplandores  vivos  '         .  * 
del  sol ;  á  otra,  todo  el  tiempo, 
que^s  U  flpr  que  en  su  capillo 
se  oculta  ,  basta  que  la  noche,  , 
pundonoroso  el  capricho 
de  que  luce  sin  el  joI  , 
la  hace  en  trémulos  giros 
la  perfeccionen  á  sombras  ,        fc 
sin  iluminarla  á  visos. 
En  cuya  guerra  civil,  .   •  .♦>    U  ' 
ya  lo  dije ,  de  sentidos- 
dentro  de  mi  amotinados , 
3* 


527; 


i 


Í2* 


dia ,  y  noche  4  dos  «sfrto  9 
enamorado  dfc  doi  \ 
de  la  «na ,  si  la  miro'; 
de  la  otra  li  laéigOfc 
llevándose  á  tí»  tiempo 
hermosura,  y  discreción 
(acabemos  de  decirlo) 
si  la  hermosura  los  ojos» 
la  discreción  los  cuidos*  ' 

Antonio,  i 

¿Una  grande. novedad 
pensareis  que  fm  barbel*  dicb»  ^ 
en  que  amáis  á'dw  fe  '• 

•      Félix-   ■         ■       !  ■ 
¿No  lo  es? 

Antonio*. 
No,  que  á  mí  roe  itótaérfiílo) 
mas  de  cuatrocientas  teces-. 

¿  Qué  pobretea  ba  tenitfo* 
en  uua  parte  el  deáéO V  •* 

y  en  otra  parte  el  fcá^ricbof 

Feliaí. 
La  reja  abren. 
«  Antonio» 

Pules4 4fcgadf    '  •< 
qwer  yo  bácia  allí  me  retira    ' 

ESCENA  II. 
*  Dichos  y  Beatriz  d  Va  reja.  - 

Beatriz.,  . 

I  Es  don  Félix  ?> 

Félix. 
.  Y  rendido  .   :  .  ' 


£  la  pena  áe  esperar  ♦    •'      ■ 
casi  llegaba  i  colpar 
tu  tardanza* 

Beatriz 

Nanea  faa  sido 
pena  esperar »  4*0  sí  llena 

de  susjoá  la  posesión 

una  breve  dtt*cie»y  '   n  •'"  ' 

¿por  qué  ha  de  Nafa  irse- peas;  £ 
¿  Contrario  efectoj  no  «» 'Jaste  • 
•q«é  á  ñu*  eatisa  se  Candeda  ,• 
para  que  «rnftírir  S6  pundá 
de  una  pesadumbre iun  gusto  t 

La  gloria,  Beatriz  lv^e  hablarte, 
con  la  esperanza  se  alcanza  , 
luego  tiene  la  esperanza 
la  culpa  en  aquella  parte.jf,.j     - 
que  sentir  toca  al  cuidado 
la  dilación  del  empleo  ; 
luego  es  fuerza  que  al  deseo  ' 
le  dé  la  esperanza  enfado.     , 

el  sol  una  propiedad  , 
lo  diga  én  la  noche  fría,1 
cuanto  mas  vecino  al  día  , 
es  mayor  la  oscuridad. 

"'.    Á  JJeairiz/  '"  ' 
Si  ,  mas  si  llega  á  advertir , 
que  al  mirar  su  rosicler  y 
el  empezar'  ¿  nacer  , 
es  empezar  á  morir";'     •  •    *,J   • 
¿  qué  logra  la  posesión 
del  dia  en  su  lucimiento  ,  'i   ' 
ai  es  preciso ,  qoe  al  aumento 
siga  la  declinación  f 


tor 


í 


*30, 


Auge  es  en  la  astrologfa 

n*  poder  pasar  de  allí, 

y  término  él  hasta  aquí 

es  de  la  filosofo  ; 

luego  la  esmeran»  ma* 

que  la  pftsesion  alca  nía » 

si  cuando  va  la  esperanza,  i 

la  posesión  vyatoe  atrás  i 

y  «jKW^o^á  a*rder  .      i      . 

llega  e4t«»a»©n  tan^rave,       - 

pues.no  ^.admira  hoy  qofc*  safra 

que  toaft»**;leba:de  YieB«  » 

:  .}<•%•  "  Roque.      *  •; .     ": 
¿Has  oido  aquello? 
t-5nr:,B.i  ¿Antonio.*  ■' '*  ' 
f  ^,«o,'g  v         si--..  ."  -«•• 

trr  Roque.  { 

¿Y  diaié,,, 'f>Or  vida  tnia  , 
hablan  *en  aVgara vía  ? 
porque  yo  liada  entendí* 

.     Antonio.  ; 

Sí  deben 'cíe,  hablar  >  mas'  yo    , 
(  estas  horas  solo  entiendo, 
que  me  ¿stoy  de  sed  muriendo  s 
¿  sabes  5  Roque ,  si  hay  ,6  no  , 
por  aquí  una  casa  ,  cu'  que", 
ó  aguas.,  ó  aloja  se  yenda  ? 

Raque    . .   . 
Qae  hay  detras  de  aquella,  tienda 
una  tabernijla  sé. 

Antonio. 
\  Qué  propia  noticia  tuya  !  ¡ 
.,  .    ,.  Roque.  t  t. 

Cada  uno  habla  en  lo  que  alean». 


Félix. 
Macho  os  debe  la  esperanza. 

Beatriz. 
No  os  admire  de  que  arguya 
tan  en  su  favor,  porque 
me  está  muy  bien  en  tenella.  f 

Félix. 
¿Pues  vos  necesitáis  de  éllaf 

Beatriz, 
Y-  aun  de  dos. 

Félix. 
Eso  nó  sé; 
l  de  dos  esperanzas 2 
Beatriz» 

Si. 
.  Félix. 
i  Cuales  son? 

Beatriz. 
Vos  las  sabéis, 
que  amáis ,  y  de  amar  debéis; 
mirad,  Félix,  siendo  así, 
que  la  ha  menester  á  dos 
varias  luces  mi  pesar;  ' 

•i  la  debo  lisonjear.  ^ 

Félix;  *•       •    :  '  ,J 
No ,  qufe  :de  ninguna  rt>s  , 
que  necesitáis,  os  digtf:'"'  '*  s 

Beatriz. 
Mejor  lo  dirá  mí  estrella, 
*y  ¡mejor  Angela' beH&/    :  '-  ""' 


531 


S32* 

ESCENA  BI.    . 
Dichos  ,  doña  Angela  é  Isabel  d  la.  reja. 

Angela. 
I  Quién  la  tóete  á  usted  cpnmigo  ? 
y  pues  estoy  acechando  , 
sin  que  me  cause  fatiga  , 
y  sin  que  á  mi  padre  diga  » 
señor ,  aquí  andan  parlando  : 
háblense  allá,  sin  que  yo 
entre  en  la  dansa. 

BeatrU. 

Tú  aquí  f 
í  cómo  #  Angela  ? 

Angefa. 

Como  sí. 

B*atr\z. 
¿  No  te  «cuestas  ? 

Angela- 

Como  no» 
,  :  fieatrif. 
Bien  ves  c$mo  te  JiQ  PO^ÍO 
en  el  harto,  qne  no  QU  vano, 
en  haber  aqui  vepido, 
te  quise,  ganar  4f  mano 
á  ver  esto.    

.Angela. 

soy  sobre  quien  caen  las,  quejas  f 

Beatriz,   x 
Caballero,  á  aquestas  rejas 
no  se  habla. 

Angela. 

Mal  año  »....  no. 


TFMk. 
Yarnos  de  aquí  j  a  y  infeliz! 

'  ¿nimio* 
i  Qué  hay? 

FeUx. 
Ver  con  la  sombra  pscnra 
á  Angela  con  hermosura  y 
y  con  ingenio  á  Beatriz. 

ESCENA  IV. 

Doña  Beatriz  ,  Angela,  ¿  Isabel. 

Beatriz. 
Ven  td,  y  cierra  esa  ventana. 

Isabel. 
I  Viste  bien  al  hombre  ? 

Angela. 

¿Ypueif 
_¿  no  había  de  verle  ? 

Isabel. 

.  ¿Y  quién  ea? 

Angela 
El  hermano  de  la  hermana.     „ 

Isabel. 
I  Pues  cómo  «elosa  al  vello  , 
no  sentiste  que  hable  así 
con  Beatriz,  quien  te  amó  á  tí t 

Angela. 
Tú  t(enes  la  culpa  de  ello. 

Isabel. 
¿Yof     . 

Angela. 
Sí-9  que  es  muy  fuerte  cosa 
querer  que  me  acuerde  yo , 
si  tú,  mejorada,  no 


533 


; 


«34 


me  acuerdas  que  estoy  se1osi¿ 
ESCENA  V. 
Sai  a  su  casa  bb  Leoho&v 
JDo/fo  Leonor  ,  é  Inés  con  luces. 

Leonor* 
Inés,  no  me  pesa  oír 
so  qoeja;  pero  si  ba  sido 
verse  de  mí  aborrecido , 
lo  que  le  obliga  á  venir 
con  rendimientos-,  ¿  por  qué 
me  tengo  yo  de  quitar  9 
para  volver  á  enfermar , 
la  cura  con  que  sané  t 

Inés. 
Dices  bien  :  pero  f  señora  , 
quien  de  sanar  busca  medios  9 
aborrece  los  remedios 
en  el  punto  que  mejora. 
¿P&r  cuanto  pudiera  ser  , 
que  despechado  dejara 
de  venir  y  te  pesara  ? 

Leonor. 
Yo  ne  te  he  de  oír  ni  ver.* 

•  -n    Inés. 
Mira,  ya  que  mi  señor 
seguro  está  hasta  la  hora , 
que  es  cada  vos  de  la  Aurora 
clarin  que  rompe  el  albor,  I 

no  le  oigas  ni  le  veas; 
mas  deja  que  desde  allí 
pueda  oirte  y  verte  á  tí : 
yo  finjiré  *4a  que  seas 


53S 
sa  oidora  para  él , 
que  soy  yo  la  que  me  atrevo 
á  abrir  la  puerta. 

Leonor. 

No  es  nuevo 
el  Unce. 

Inés. 
I  Hay  mas  de  que  aquel , 
que  le  oiga  de  malagana 
cuando  por  viejo  le  muevo  , 
me  Je  ponga  hoy  como  nuevo  % 
y  me  le  vuelva  mañana  p 
¿  qué  dices  ? 

Leonor. 
No  sé. 
Inés.    • 

¿Voifdí 
presto  si  ¿ño. 

Leonor. 

Qué  sé  yo. 
Inés. 
¿Que  tí  has  dicho  ? 
Leonor* 
Que  sí, 
Inés. 

Un  no  9 
que  se  sabe  que  es  no ,  es  sí.     Fase. 

Leonor. 
Vé" ,  ya  que  pensar  me  deja , 
si  es  cierto  ó  no  el  refrán  sabio, 
de  que  se  duerme  el  agravio 
al  conjuro  de  la  queja. 


i 


ESCENA   VL 
Daña  Leonor  y  al  parlo  lnés%  y  don  Luis. 

Inés. 

Mira  que  no  te  ha  de  oír  9 
ni  ver. 

,     Luís. 

Bastante ,  Iné*s  bella  9 
que  yo  pueda  oírla  y  vella  j 
pues  ai  tengo  de  decir 
la  verdad»  desde  aquel  día 
que  Leonor  se  retiré »      ^ 
á  su  principio  volvió 
la  ignorada  pasión  mía. 

//íes. 
De  un  adagillo  que  á  Espada 
'   añadió  Lope  ,  se  infiere.... 
Luis. 

Inés. 
Quien  piensa  que  no  quiere  , 
el  ser  querido  le  engaña : 
mas  ya  me  vuelvo  á  finjirv 
que  con  ninguno  aquí  hablaba. 
í\o  era  nadie  el  que  llamaba. 

Leonor. 
¿Y  acabóse  ya  de  ir 
ese  necio  que  á  mis  rejas 
,  no  deja  de  porfiar  ? 

Inés. 
Debiéronse  de  acabar 
por  esta  noche  las  quejas > 
que  prevenidas  iraia  , 
y  habrá  ido  á  dar  4  hacer 


otras  nuevas  que  traer 
para  mañana. 

Leonor, 

j  Qué  fría 
cosa  ,  pesada  y  cruel 
es  oír  con  desazón 
los  ecos  de  una  pasión  ! 

Inés. 
Noramala  para  el » 
si  tu  favor  merecía , 
siendo  tú  en  quien- asegura 
el  ingenio  y  la  hermosura 
su  mejor  medianería  ,  •     • 

sin  costa  ríe  en  la  atención 
de  nivelada  igualdad  , 
lo  hermoso  u «a  necedad , 
lo  feo  una  discreción. 
¿Quién  metió  á  la  la)  persona 
en  buscar  caballerías , 
hecho  Infante  Bobalías, 
lá  Infanta  Bobalindona  f 
Tienes  sobrada  razón 
de  enojarte :  mas  ,  señora  , 
él  no  nos  escucha  ahora, 
toma  la  .satisfacción , 
que  te  dá  ,  pues  cosa  es  clara  , 
que  perdón  un  yerro  espera. 

Leonor. 
No  bastara  aunque  me  diera 
tantas  Inés..:.. 

Luis. 
Si  bastara ,     ^ 
sí  tú  quisieras ,  Leonor,     Llega, 
Leonor. 

I  Qué  es  esto  ? 


i 


43* 


Iriis. 

I  Pues  cómo  entraste 
aquí? 

Leonor, 
El  disimulo  baste ,         ' 
traidora  ,  que.... 

Luis. 
Tu  rigor 
no  á  Inés  culpe  sino  á  mí  , 
que  no  tiene  culpa  Inés 
de  mis  despechos ;  y  pues 
tú  no  te  dueles  de  mí, 
dejala  que  ella  se  duela , 
y  no  acuses  su  piedad , 
que  no  dejas  tu  crueldad 
para  nadie ;  yfe  que  apela 
á  tus  plantas ,  Leonor  bella , 
mi  culpa  |  óyeme  en  mi  culpa  9 
no  porque  tengo  disculpa  , 
mas  porque  quiero  tenella. 
Yo.... 

Leonor. 
Señor  don  Luis ,  en  vano 
el. satisfacerme  es, 

y  puesto 

Dentro  Félix. 
Una  luí,  Inés. 

Leonor. 
]  Ay  infelice  !  mi  hermano. 

Inés. 
Como  llave  maestra  tiene , 
,  entrar  pudo. 

Leonor. 

I  Muerta  estoy ! 


Jjuis*  ' 
¿Qué  haré t 
«  í  •'  ••  sFelix* 

t  ¿No  bajas ? 

;  .  .v  '.  .j  //wr'í. 

Ya  voy, 
Leonor. 
Que  te  retires  conviene 
á.  ese  camarina 

Zufo.  *  * 

tuerza  e¿.     (i) 
tnés. 
i  Inventara?  esto  el  demonio  ? 

.  .ESCENA  VII.'      '  {  ' 
Dichos  jr  don  Félix. 

Félix. 
En  mi  cuarto,'  don  Antonio  , 
ton  Roque  esperad.  Inés , 
saca  unos  dulces  ,  y  de  agua 
un  búcaro,  porque  tiene 
sed  un  amigo  qué  viene 
conmigo. 

Inés. 
,        Oiga  lo  <fue  fragua 
la  ¿brtunilla. ' 

Félix. 

I  Leórfor  f 
vestida  i  estas  hora¿  ? 

Leonor. 

Sí, 
¿  pues  cuando  no  me  halla  asi 


^ 


( i  )     Escondes*. 


$40- 


el  día  ,  con  el  temor    x 
de  los  sustos  y  récelos , 
en  que  hasta  volver  me  tienes  ? 
mas  como  siempre  qué  vienes  9 
.  te  entras  al  instante  (¡ay  cielos!  )     ap* 
en  tu  cuarto ,  no  me  ves 
ai  en  vela  ó  dormida  estoy. 

•     Félix. 
Don  Antonio  de  q/iien  hoy 
me  hallo  obligado  ,  jdcspues  \ 

que  ese  loco  le  contó , 
que  yo  enemigo  tenia »         t     ,,;  ^ 
ni  de  noche  ni  de  dia 
me  deja  *  tanjo  debió 
mi  amistad  á  su  amistad ; 
conmigo  a!  umbral  llegó* 
dijo  que  tenia  sejl ;,  yo 
le  dije,  en  mí  cuarto  entrad; 
que  del  de  mi  hermana  ,  Inés  , 
que  siempre  esperando  está  , 
agua  y  dulces  sacará  :  T 

aquesta  la  causa  es 
de  haber  entrado }  y  en  fin ,  , 
si  oyéndome  estas %  ¿  qué  aguardas? 
¿  cómp  en  ir  por  ello  tardas  ? 
Abre  aquese  camarín  , 
daca  un  barro.  . 

fnéSf 
Sí  abriré.     . 


Félix. 


Y  dulces. 


Inés  •  • 
En-Udo  estoy  i 
vete  tú  que  ya  yo  voy* 


S4i 
Félix* 

Abre ,  yo  loa  lie  varé  , 
no  pases  tú  allá. 
••     Inés. 

¿  Hay  mohína         ap. 
como  esta? 

.  Félix. 

¿Qué  sucedió? 
Inés. 
¿  Para  esto  «nos  perdono 
el  lance /de  la  cortina? 
la  lia  ve  se  me  h«-  perdido* 

Félix. 
¿  Has  visto  que  torpe  estás  ? 

Inés. 
No  hallo  la  llave. 

Félix. 
Tá  harás  , 
que  la  a  Va  así  :  mas  que  ruido  , 

dentro  hay'  „(i) 
Inés. 
\  Ay  de  mí ! 

ladrones  d<ben  de  ser. 

•   •  ...   i  . 

ESCENA  VIH. 
Jbicftos  i  menos  Inés. 

Félix*. 
Quien  and»  ep  él  he  de  ver*    ' 

Luis. 
Embarazarélo  así,     (a) 
ya  que  al  sentir  que  iba  á  abrir, 

(  1  )     Quiébrense  vidrios. 

{  I  )     Sale  jr  apagóla  luz  ■> 


por  retirarme  encontré 
con  los  vidrios  que  quebré* 
Félix.. 
\  O  he  de  matar  ó  morir  9 

ó  saber  quien  eres. 

Leonor,  <        > 

\-        '  *  '•  l  Cíelos  ,     ap» 
qué  haré  en  Un  fiero  rigor  f 

¿MIS. 

Toma  la  puerta,  Leonor* 

Leonor* '.  v.»  »    - 
¿  Donde  irán  mt*  desconsuelos    ¡ 
ádar? 

Luis..     . 
Que  á  que1,  no  te  siga 
mé  quedo.  :.♦..-. 

,  r  3BSCENA  IX. 

Don  Félix  i  d¿fii  Luis  al  paño  v  don  Antonio  jr  Ron 
que  con  luce**' 

!  -:.,  HoqfK^ 
Acudamos  'presto 
al  miedo. 

Antonio*-.  ' 
Trae  luz  ¿  qué  es  esto  f 
>V    *       Fe/í*.' 
Mi  desventura  oa  lo  diga  : 
tornad, esa  puerta  »y»n*.i: 
salga  ninguno..  ..-.'. 

i'     Antonio*    :.•«         ■ 
%  .'.  i..  "  •..«.  -  Sí  Jla*é,  . 

-  'Luis. .    .      -  —  -     - 

Mirad ,  don  Anto»io,  ejn.qu*.  .,. ,      ;  i  * 
os  empeñáis ,:qua soy jí«y  •;     >  i, 


S4i 
)  Antonio* 

¿Quien  habrá  en  el  mundo  oído     api 
tan  nuevo  lance  f  qne  pende 
de  ser  mi  amigo  el  que  ofenda  ,  ' 
y  mi.  amigo  el  ofendido  ?  ,  > 

uno  á  mi  favor  espera  9 
otro  á  mí  le  me  declarar 
}  quien  ,  sin  que  á  alguno  faltara  , 
á  entrambos  ¿jgvoreejera ! 

Félix* 
Hombre ,  ya  estoy  contra,  tí  f 
y  en  aquella  puerta«e»4á 
quien  salir  no  os  dejará. 

Roque,  • 

Yo  también  no  estoy  aqsrf  i 
que  siendo  tres  contra  «no, 
si  fin  al  refrán  no  das  , 
á  tu  lado  me  bailarás. 

N  Félix» 

Medio  no  te  queda  alguno , 
sino  el  morir ;  ó  decir 
quien  eres. 

Luis. 
Pues  á  escoger 
me  das ,  el  medio  ba  de  ser.... 

Félix» 
¿Cual  ?. di  presto.     ..    .     • 

¿MIS., 

El  de  morir.  , 
Hacia  don  Antonio,  vqy.  ap,  . 
Que  me  deis  paso  nriyenígp, 

Anlonip.     •  '  •  •         ; 
Ved  si  bay  coR-^we»  vango  vengo  y 
que  bay  oan><qoitnr;cst«y  estoy. 
3S 


i 


«44 


¿a*. 
Fots  «a  t*  tsta  manera*     (t) 

Feíix. 
A  tos  bra«*a  ar  restado 
con  don  Antonio  ha  llegado» 

Roque. 
Y  aun  rodado  la  escalera. 

Tras  ellos,  cielos,  iré 
¡  ay  enemiga  Leonor ! 
á  restaurar  de  mi  honor 
la  parte  qne*queda» 
Roque. 

¿Qué* 
te    toca,*  Roque?  quedarte 
hasta  que  .«de  empeño  igual 
lo  que  pasa  en  el  portal 
diga  la  segunda  parte* 

ESCENA   X, 

Sala  en  casa  dk  non  Alohso» 

J)on  Alonso  jr  doña .  Angela, 

Alonso* 
Mira  $  Angela  ,  lo  que  dices. 

Angela. 
Muy  bien  mirado  lo  tengo} 
y  asi ,  antes  que  te  partas» 
quise  decírtelo  á  efecto 
de  qué  este  cuento  te  lleves 
hacia  alfa;  parque  sospecho         * 
que  oí  decir  que  en  los  caminos 


(a)     Se  entra  wbca*a4o<4t  4on  Antonio. 


suele  hacer  gran  falta  nn  cuento  y 

y  este  de  que  Beatriz  sale 

de  noche  á  la  reja ,  pienso 

que  na  dejará  de  ser 

á  criado»  y  cocheros  9 

(  pues  las  cosas  de  importancia 

tú  no  has  de  tratar  con  ellos  ) 

cnando  no  baya  de  que  hablar  9 

de  algún  entretenimiento. 

Alonso, 
De  que  sea  verdad ,  dos 
grandes  conjeturas  tengo  9 
ser  necedad  el  decirlo , 
y  necedad  el  hacerlo. 
En  Angela  bien  se  vé 
guardarlo  para  este  tiempo  ; 
y  en  Beatriz  9  pues  fue  el  amor 
la  necedad  del  cfiscreto. 
Ven  acá  ,  vuelve  á  decirme , 
¿lo  has  visto  ? 

Angela, 
•  Por  estos  mesmos 
ojos  que  se  han  de  comer* 
mariposicas ;  que  aquello 
de  los  gusanos  ,  señor  , 
no  se  ha  de  entender  con  estos» 

Alonso. 
Disimula»  porque  viene  , 
Beatriz. 

ESCENA    XI. 

Dichos  y  doña  Beatriz. 

tángela. 
Nací,  para  **o.^ 
* 


$46 


¿No  sabes  lo  que  ¿  mi  padre 
le  estaba  abora  diciendo  ? ' 
coro  o  en  ana  reja  ¡tu  oche 
estabas  tomando  el  fresco  9 
y  no  mas.  ¿  No  disimulo     ap, 
muy  bien  ,  señor  ?     • 
Alonso. 

Sí  por  cierto. 
Beatriz» 
Es  verdad  que  anoche  estaba 
á  la  reja  $  pero  á  efecto 
de  que  andaban  por  la  calle 
unas  sombras  y  y  queriendo 
saber  y  señor ,  qué  criada  * 
les  daba  el  atrevimiento, 
que  hay  alguna  que  en  tu  casa 
se  conserva  á  mi  despecho » 
la  reja  abrí. 

Alonso» 
Ese  seria  t 
á  buen  seguro  el  intento  ; 
¿  pero  porqué  esa  criada 
ha  de  estar  ? 

Angela. 

Porque  no  tengo 
otra  yo  que  sepa  hacer 
mas  garambaynas  del  pelo; 
y  eso  importa  mas  que  esotro*" 

Alonso. 
Pon  tú ,  Beatriz,  el  remedio. 
Disimule  yo  mejor y     ap. 
á  pesar  de  algún  recelo, 
que  aun  ha  quedado  en  el  alma. 
Sale* el  ¿atadero. 
_  Ya  |  señor ,  est*  dispuesto 


todo  9  bien  puedes  bajar: 

Alonsos 
Beatriz  ,  á  Dios ,  que  yo  espero 
sacarte  de  ese  cuidado. 

Beatriz. 
$abe  Dios  que  el  que  yo  tengo 
es  tu  salud,,  y  que  solo 
tu  descomodidad  siento. 

Alonso. 
A  Dios y  Angela;  los  brazos 
me  dad  las  dos  ;  los  estremos 
bastan.  Beatriz:  por  mi  vida, 
no  llores. 

Angela. 
To  para  eso 
no  llorara  por  mi  padre ,  ' 
por  esto  diria  el  probé  i  Lio. 

Alonso. 
A  Dios  otra  vez.  Aunque     ap.  ' 
nada  al  escrúpulo  creo j 
mucho  al  escrúpulo  dudo, 
pero  no  es  para  aquí  ésto. 
Abrazadme  vos  ,  Mungia  , 
f  esta  noche  el  aposento     ap.  - 
vuestro  procurad  que  esté , 
sin  que  nadie  lo  vea ,  abierto, 
y  esperadme  en  él. 

Escudero. 

Ya  sabes  r 

'  con  la  fé  que  te  obedezco. 
Alonso. 
Veré  lo  que  hace  esta  noche  ,     ap. 
y  tomaré  y  por  lo  menos  9 
resolución  para  irme  , 
ó  para  yalcrme  medio. 


Í47 


«48 


\  Angela* 

j  Ven  sel 9  lloras  de  veras  t 

Beatriz.  \ 

¿  Llora  alguien  de  barias  t 
Angela* 

Pienso  1 
que  sí;  porque  yo  mil  Veces 
me  suelo  llorar  ri yendo. 

I  ESCENA  XII. 

Beatriz» 

¡Válgame  Dios  9  qae  de  cosas 
concurren  á  un  mismo  tiempo 
á  nn  pensamiento  afligido ! 
dígalo  mi  pensamiento  , 
pues  cuando  por  una  parte 
voy  f  llevada  del  afecto 
de  aqueste  enigma  de  amor  , 
que  le  trato  y  no  le  entiendo 9 
me  sale  fcor  otra  parte 
siempre  Angela  al  encuentro; 
l  pero  qué  mucho  9  qué  mucho  ¿ 
que  aun  no  sepa  lo  que  siento  9 
si  como  nocturno  amor 
de  las  sombras  le  alimento  f 
¡0  cnanto!.... 

ESCENA  XIII. 

Beatriz  y  Leonor» 

Leonor. 
Beatris  y  perdona  9 
si  sin  avisarte  entro  9 
que  hoy  no  piden  atenciones 
las  fortunas  9  que  corriendo 


$41 
Vengo  i  tas  pías  txn  deshecha, 
que.  nuil  este  manto  toapecbo  f 
que  es  Ja  tabla  del  naufragio  9 
tan  acaso  bailada  ¡  ay  cielos ! 
que  es  de  una  vecina  á  donde 
tomé  anoche  el  primer  puerto. 
Mi  alma  f  mi  vida  ,  mi  honor 
á  fiar  de  tí ,  Beatriz »  vengo  ; 
que  no  me  atreviera  de  otra. 

jfra/rí*.  , 

Sosiégate  y  cobra  aliento  : 
¿qn¿  ba  sucedido?  ¿qué  ha  habido? 

Leonor. 
Don  Luis  anoche  (  (yo  ronero!) 
entró  en  mi  casa ;  mi  hermano 
en  ella...  ¡  Válgame  el  cielo  1      Desmáyase: 

Beatriz. 
En  mis  brazos  sin  sentido 
cayó  con  el  desaliento t 
y  la  pasión  que  traía; 
y  aunque  del  grave  suceso 
que  iba  contando  ,  e{  desmayo 
trocó  el  discurso  tan  presto  9 
introducidos  en  él 
Félix  y  don  Luis  ,  bien  temo  , 
que  de  Félix  el  honor 
amancillado  habrá  esto.... 
y  aunque  corre  prisa  y  mas 
corre  la  de  su  remedio: 
Juana,  Juana. 

ESCENA   XIV. 
Dichas  jr  Juana. 
Juana. 
¿Qué  me  mandas? 


t 


5S0 


fcv 


t  •  :  •   '    *    'Beatriz;  -' 
Anda  i  por  4o  vida  ,  presto  » 
ayuda  me  ¿que  á  Leonor 
á  aquesa  cuadra  llevemos , 
que  reservada  á  los  cofres, 
detrás  de  ni  alcoba  tengo ; 
que  íoera  dicha  qae  nadie 
la  viera. 

•  >  Juana, 
Pues  es  á  tiempo  ,- 
que  Angela  con  Isabel 
está  en  el  cuarto  de  adewtro.    . 

Beatriz, 
Algo  suceder  había, 
á  pesar  del  hado  fiero  , 
en  favor* 

Leonor, 
\  Jesús  mil  veces ! 
En  fin  j^y  Beatriz !  riñendo 
á  mi  hermano  y  á  don  Luis 
dejé  en  mi  casa ,  y  (  no  puedo 
proseguir  )  huyendo  de  ella. ... : 

Beatriz* 
Pues  no  prosigas ,  que  luego 
lo  dirás  :  alienta  ahora  , 
y  cobrando  algún  esfuerzo 9 
haz  por  'descansar  conmigo. 

Leonor.        :'<»"     * 
En  vanOf  Beatriz ,  lo  intento  j 
que  el  corazón  á  pedazos      ' 
le  está  quebrantando  el  pecho. 

Beatriz, 
Pues  ya  ella  se  esfuerza  á  ir, 
enciérrate  por  de  dentro 
con  ella  tú",  mientras  yo 


i  la  deshecha  me  quedo 

de  desmejijtír  las  espías 

de  Angela  :  no  ambas  faltemos 

juntas  y  entren  á  bascar  nos  • 

ESCENA  XV.     - 

Beatriz. 

Nadie  la  vio ,  todo  esto 

esjtá  solo  y  algo  en  favor 

(  otra  .vea  á  decir  vuelvo  ) 

en  tanto  tropel  de  penas 

había  de  sucedemos  : 

¡  más  ay !  que  el  favor  es  ano  , 

y  ellas  muchas;  y  aunque  el  cielo 

nunca  deja  los  resquicios 

tan  cerrados  al  consuelo  , 

que  no  pueda  la  esperanza 

acecharlos  entreabiertos  ; 

tañí  tomadas  las  desdichas 

tienen  los  pasos  ,  que  pienso  9 

qu« Jwá  fácil  hallarlos ', 

pero  no  fácil  vencerlos; 

siendo  la  mayor  de  todas , 

que  el  honor  dfi  Félix  puesto 

á  las  censuras  esté  , 

de  quien  sepa  ,  por  lo  menos  r- 

la  pendencia  ;  y  por  k)  mas , 

que  su  hermana  ¡qué  tormento! 

falta  de  su  casa.  Hombre  t 

á  quien  ,  ó  de  mi  hado  el  ceño  , 

ó  de  mi  estrella  el  influjo 

atrajeron  á  mi  afecto» 

desaire  en  su  bonor  ♦  y  yo 

capaz  de  él ,  sin  que.. ... 


i 


¿S2 


ESCENA  XVI. 

Deña  Beatriz  jr  Juana* 

Juana, 

Ya  ha  vuelto 
en  sí ,  y  dice  que  la  veas. 

Beatriz, 
Pues  en  tanto ,  que  yo  entro 
é  verla  ,  y  á  escribir  ,  Juana  ,  . 
dos  letras  ,  ponte  corriendo 
el  manto. 

Juana* 
l  Donde  be  de  ir  i 
Beatriz. 
A  bascar  un  caballero. 

Juana. 
¿Quién  es ? 

Beatriz* 

Don  Luis  de  Mendoza. 
Beatriz. 
Aunque  de  vista  ,  acudiendo  • 
á  esta  calle ,  le  conozco  f 
no  sé  donde  vive. 

Beatriz* 
A  eso 
nos  puede  servir  de  algo 
siquiera  el  conocimiento 
de  Isabel ;  y  así  f  al  descuido 
se  lo  pregunta. 

Juana* 

En  efecto 
no  bay  nal  que  por  bien  no  venga ; 
á  obedeceros  voy. 


$53 


ESCENA  XVIL 

Beatriz. 

Cielos  , 
Félix  restado  9  y  su  honor  f 
y  yo  sabidora  de  ello  9 
¿y  no  tratar  de  enmendarlo? 
Eso  no ,  que  por  mi  mesrao 
pundonor  debo  acudirle. 
Tan  vana  soy  en  aquesto-,* 
que  el  tiempo  de  desairado 
presumo  que  le  aborrezco. 
Y  así ,  Félix  4  donde  quiera 
que  estás  tu  dolor  sintiendo  , 
alienta  ,  vive ,  y  respira  r 
adivinando,  é  sabiendo  , 
que  está  seguro  tu  honor,    .    . 
pues  yo  en  mi  poder  le- tengo.  > 

.    ESCENA  XVIII. 

DsCO  RACIÓN  DE  CALLE. 

Don  Félix  y  don  Antonio* 

Félix. 
No  hay  consuelo  para  roí  9 
don  Antonio»  ni  ha  de  haberle, 
viendo  que  aquel  hombre  ¡  ay  triste ! 
cuando  á  sali*  se  resuelve, 
llega  con  vos  á  los  brazos  , 
y  tanta  fortuna  tiene, 
qae  desasido  de  vos  ,  * 

de  vos ,  y  de  mi  pudiese  , 
tomando  la  calle  ¡  ay  triste! 


SS4 


escapar  tan  velozmente  9 
qae  ni  sé  de  él ,  ni  de  aquella 
ingrata  ,  tirana ,  aleve  ; 
ni  qae  debo  hacer. 

Antortio.        ^ 
lo  si. 
Félix. 
¿Pues  qué  aguardáis? 
Antonio. 

Mirad ,  Félix  9 
la  primera  instancia  9  en  casos 
tan  ásperos  como  este  , 
del  acero  es  \  la  segunda  9 
del  consejo*,  si  la  muerte 
le  (iqbíérades  dado  anoche  9 
desempeñarías  valiente     • 
el  dolor  9  mas.no  el  honor  9 
que  es  el  que  ahora  os  competo 
desempeñar ;  qae  ana  cosa 
es  9  qae  el*  fracaso  me  encuentre  9 
y  otra  /que  le  bosque  yo  : 

y  así  y  lo  qae  me  parece 

es  i  qae  el  dolor  tolerado , 

en  ambas  instancias  muestre, 

qae  andando  restado  en  una  9 

andubo  en  otra  prudente. 

Fuerza  es9  que  quien  es  -se  sepa. 
,  ( |  Quién  decírselo  pudiese  !  ap» 

pero  fióse  de  mí , 

y  fuerza  os  ,.que  Leonor  fuese  9 

clara  ***** ,  de  él  á  ampararse. ) 

Y  siendo,  como  se  debe 

presumir  de  so  dolor , 

en  quien  nada  el  lustre  pierde  9 

lo  efue  os  toca  es*  colorearlo , 


ÍÍS 


ya  lo  dije »  cuerdamente , 

poneros ,  Félix ,  de  parte 

del  dolor ,  y  hasta  que  muestre 

el  veneno  su  malicia  9 

para  que  mejor  recete 

su  antídoto  la  cordura  , 

no  hacer  novedad;  no  os  eche 

nadie  menos ,  ni  repare 

en  vo*  ni  en  semblante ;  alienta 

el  corazón  hacia  fuera , 

aunque  hacia  dentro  rebiente ; 

que  los  estreñios  de  honrado » 

tal  ves  ignorado  ,  advierten  9 

y  si  aprovechan  algunos  , 

dañan  infinitas  veces. 

¿  Qué  hiciérades  sin  dolor 

á  estas  horas  ? 

Félix. 
Me  parece,    ; 
que  de  Angela  la  calle 
pasara ,  porque  tuviese 
su  jurisdicción  el  día, 
hasta  que  á  la  noche  entre 
en  otra  jurisdicción 
el  alma. 

Antonio*  » 

Pues  aunque  os  pesa 
habéis  de  venir  á  ella. 

Félix. 
Porque  se  vea  ,  que  tiene 
ga«as  de  sanar  mi  honor , 
ningún  remedio  desprecie ; 
vamos  ,  aunque  es  tan  costoso  f 
como  que  de  amor  me  acuerde  , 
y  de  él.  me  olvida. 


ÍÍ6 


Anionio. 

No  olvida 
quien  se  acuerda  de  que  siente; 

ESCENA  XIX; 

Dichos  jr  don  Luis  al  paño* 

Luis. 
No  me  bastaban  ,  fortuna  , 
las  confusiones  crueles 
de  no  saber  de  Leonor  9 
ni  dónde,  ni  cómo  fuese, 
jsino  qne  añadirme  quieras 
la  de  que  Beatria  pretende 
hablarme  ?  ¿  qué  rae  querrá  ? 
pero  sea  lo  que  fuere, 
pues  el  papel  dice  9\  que 
seguro  en  su  casa  entre; 
Veré  que  me  manda.  ! 

Félix.  i 

Oid<  '       | 

¿  don  Luís  no  es  aquel  que  viene  j 

hacia  casa  de  Beatriz  ?  i 

y  aun  en  ella  me  parece 
que  entra. 

Antonio, 
l  Qué  intentas  hacer  f 

Félix.  ! 

¿Qué  queréis  que  hacer  intente  ? 
lo  que  hiciera  sin  dolor  ,  j 

al  ver  que  don  Luis  me  ofende*  | 

Antonio. 
I  Don  Luis  os  ofende  í 

Félix. 


«7 
jánionio. 
¿Quién  ,  cielos ,  haberle  puede    •      ap. 
dicho  que  él  es  ?  Ved.... 
Félix. 

Quitad, 
pues  vuestro  consejo  es  este. 
'  ¿  Don  Luis  ?  ¿  Ah  don  Luis  ? 
Luis, 

¿Quién  Uaná? 
Félix. 
Yo  os  llamo. 

¿ni*. 

¡Ay  de  míJ  ¡don  Félix,     0/>. 
y  demudado  el  semblante ! 
¿  Si  don  Antonio  le  hubiese 
dicho  i  que  soy  yo  el  de  anoche  ? 

Antonio* 
Echada  está  ya  la  suerte         ap. 
con  todo  el  resto  á  una  mano. 

¿Qué  mandáis  ? 

Félix. 

Saber ,  que  tiene 
que  hacer  en  aquesa  casa  , 
don  Luis  t  quien ,  ya  que  no  ofrece 
clara  palabra ,  la  da 
á  entender  tácitamente  . 
de  no  entrar  en  ella. 
Antonio. 

Menos  9        ap. 
que  yo  presumí,  sucede. 

Luis. 
Bien  se^vé,  que  don  Antonio  ap% 

no  le  ha  dicho  que  yo  fuese » 
y  bien  ,  cuando  sobresalta 


¿$3 


cualquier  vari  al  delincuente; 
y  £ués  lo  mas  nos  mejora , 
no  lo  menos  nos  arriesgue. 
La  palabra  que  á  Uno  di 
cumpliré  ,  el  valor  se  esfuerce  t 
que  si  vengo  aquí ,  no  vengo 
porque  verá  Angela  piense; 
y  pues  dar  satisfacciones 
'  de  como  un  hombre  procede 
nunca  puede  ser  desaire; 
Beatriz  me  llama  por  este 
papel ;  á  ver  á  Beatriz 
vengo;  y  pUes  ella  no»  tiene 
que  daros  pesar ,  ni  yo 
porque  el  decirlo  recele  ; 
pues  ni  el  secreto  me  obliga  » 
ni  el  escrúpulo  me  vence  9 
tomad  el  papel ,  y  á  Dios. 

ESCENA  XX, 
Dichos ,  menos  don  Luis» 

Félix. 
I  Quién  creerá  ,  que  si  tuviese 
logar  el  corazón  ,  donde 
nueva  pen%  se  alimente , 
se  le  añadiera  esta  mas , 
de  que  Beatriz  ¡  pena  fuerte  ! 
á  don  Luis  escriba  ,  y  llame.' 

Antonio* 
l  Cómo  dice  ? 

Félix. 

De  esta  suerte. 
Lee.      Pues  podéis  ,  sin  que  mi  tio 
os  sirva  de  inconveniente  , 


5# 

señor  don  Luis ,  os  suplico 
vengáis  ai  instante  d  verme  , 
que  me  importa  ,jr  os  importa* 
Don  A  ntonio  #  aunque  deseche 
en  parte  vuestro  consejo , 
no  tengo  de  bacer  en  esté  •  •  -    •* 
lance ,  con  dolor ,  lo  que 
sin  él  «hiciera  ;  que  deje, 
perdonad,  dé  obedeceros.  "■ 

.      »   ..  ■.  .'      Antonio* 
a  Cómo  r 

Félix. 
'    Como  si  yo  hubiese  '  'v 
de  obcar  aquí,  como  obrara, 
entrara  donde  supiese  , 
que  me  ofende  con  Beatriz, 
quien  con  Angela  me  ofende ; 
mas  no  es  bien  que  nuevo  empello 
hoy  nuevo  escándalo  empiece ; 
que  «una  cosa  es,  que  yo  arguya-, 
que  la  palabra  me  quiebre  ,    '    * 
y  otra  ,n  que  le  informé  "j  ay  triste  ! 
en  duelos,  qtie  el  duelo  aumenten  : 
\amos  d¿  aquí  ,  que  no  quiero 
ningún  delirio  me  fuerce  * 

á  errado*  u 

-  Antonio.  * 

-  '    Decís  bien  ,  vamos;     ? 
v>-.v*         .  •    '* 

ESCEIfAXXI. 

t  Dichos  y  Moqué». 

Roque. 
¿Es  hora  de  que  te  encuentre  f 
36 


J 


4*0 


¿Qué  {n*t*i»m?  , 

Pf  Boatri» 

en  casa  4*ptt>n  *■** 
papel*  »  XWfrfo- 

Feteu 
¿DeB«atm?  Oid'f 
pues  nada  hay  que  á  v.<*a  teaerve. 
Lee.     Sin  qm  esperéis  B  ni  la  hora  9 
ni  la  reja ,  entrad  á  vería* 
al  anochecer  A  pU4*ya 
no  c*  mi  ÜQ  inconítctUtntc. 
Con  una*  nv»ma¿  vaaoaaa, 
poco  .  ó  nafe  diferentes,, 
á  mí ,  y  4  don  Luí*  «acribe ; 
con  que  es  fqraoap «  •;«•  cea» 
,    aquel  primero,  motivo 
de  reportarme  prtHtaUOf 
j  vaya  4  «abe*  t  que  •»  eaia» 
supuesto  que,  ya  anochece. 
A  Dio*  quedad r  Va*§* 

1  4fltqnia. 

Id  con.  Dio** 
Agora  tras  los.  óo^  pntre 
á  donde  intente  escondido» 
estar  á  lo  qup  sucede : 
cumpla  yo  mi  obligación  y 
y  venga  lo  que  viniere.        Vast» 

Iioqut. 
Tras  ellos  es  bien  también  , 
que  yo  por  testigo  entra  f 
y  lo  que  viniera  venga. 


Í61 
v  ESCENA  XXII. 

SktA  BU  GASA  DB  DOK  AtONSO.   * 

Don  Luis  ,  doña  Beatriz  ,  y  poco  después  doña  Leo- 
nor al  paño,  (  i  ) 

Luis. 
A  serviros  obediente 
vengo  á  ver  qué  me  mandáis* 

Beatriz. 
Pdn  ahí  esa  lúa ,  y  vete 
donde  peedas  avisarme 
ai  bacía  aquí  Angela  viniere: 
voS  esperadme  á  esa  parte ; 
cé  ,  Leonor  f  eé. 

Leonor. 
'  i  Qué*  me  quieres 

Beatriz. 
Qae  oigas ,  y  no  te  descabras. 

Leonor. 
En  todo  he  án  obedecerte. 

Luis. 
¿Qué  prevención  será  esta? 

Beatriz. 
Señor  don  Luís,  cuanto  aleve     • 
es  el  hombre »  que  á  su  amigo  N 

en  solo  el  gusto  le  ofende, 
vos  lo  sabéis ;  y  sabéis 
A  que  será  en  el  honor.  Este 

principio  asentado,  vamos 
á  que  Riéndolo  don  Félix 


(  i  )     Juana  pondrá  una  luz  sobre  un  bufete  ,  y 
se  marcha. 

* 


J 


563 


y  oes  tro ,  y  siéndolo  Leonor 

mía  ,  á  entrambos  nos  xoinpete 

j»or  él  f  por  ella  f  por  roí , 

y  por  vos  mismo,  que  enmiende 

el  juicio  lo  que  erró  amor ; 

y  así ,  entended  ,'  que  á  ponerme 

de  parte  de  la  razón 

os  llamo ,  y....  Allí  anda  gente; 

en  tanto  f  qne  quién  es  miro ,  V 

retíreos  á  eae  retrete , 

qne  si  ts  quien  sospecho  ,  nada  , 

ni  aun  con  el  tiempo,  se  pierde  i 

pues  lo  que  os  dijera  á  vos  , 

será  lo  que  á  él  le  di jere : 

y  así,  ved  que  hébio  con  ambos.       ( i ) 

Leonor. 
¿Qué  enigma  ,  cielos,  es  este? 

ESCENA  XXIII. 

Dichos  y  don  Félix» 

Félix. 
Sola  está  Beatriz:  ¿  pqes  cómo,  apr 

si  don  Luis,  llamado  v.iene 
de  ella  ,  con  ella  no  está  ? 
mas  no  en  discurrir  me  empeñe, 
ni  darme  por.  entendido.   • 
Perdona  ,  Beatriz  ,  si  á  verte  , 
llamado  de  tu  papel , 
no  vine  tan, velozmente , 
*  como  .quisieran  mis  ansias.         < 

v.    Luis, 
¿  Llamado  de  Beatriz  viene 


(  i  )     Escóndese  dvn  Luis. 


también  don/ Félix  f  ¿qué1  es  esto T 

Leonor,  '  • 

¿  Qué  es  lo  que  Beatriz  pretende  , 
que  á  mi  hermáho  también  llama  ? 

v  ¿  Qué  mandas  ,  pues  ,  y  qae  quieres  f 
<  Beatriz* 

J  Perdido  el  color  ,  la  voz 
torpe  ,  el  labio  balbuciente  9 
á  todas  partes  mirando  , 
uno  dices,  y  otro  sientes  ? 
I  qué  miras  ? 
('  Félix.  r 

Nada. 
Beatriz, 

¿Qué 'buscas? 
Félix, 
No  Sé. 

Beatriz, 
Fuerza,  es  que  recele, 
ai  sabe  algo  de  que  aquí 
Leonor  está. 

Luis, 
El  alma  teme         ap. 
si  es  su  cuidado  pensar 
side  engaño »  y  al  no  verme 
con  Beatriz  f  juzga  que  estoy 
con  Angela 

Feh'x, 

Porque  no  eches 
de  ver  en  mí  ,  ni  un  cuidado  , 
ni  otra  nueva  causa  inventes  ; 
no  admires ,  Beatriz  ,  que  cuando 
el  alborozo  de  verme 
.llamad*  &  tí ,  debiera 


i 


Í64 


.n 


triste  me  traiga  99  dolor. 
.  flli  herma**  <  ¡  Ab  tiran*  akvt  J       <?/>. 
¿aí  voy  á  mentir  ,  qu4  muQbo   . 
qae  de  so  traición  me  acuerde  ? ) 
é  un  accidente  posada  , 
queda  en  manos  áfi  la  muerte» 
y  aun  muerta  p ara  cnnmjgo. 

¿tonar  1 
Nada  en  lo  que  ji  age  miente  f. 
que  es  verdad  muriendo  estoy. 

Luis. 
I  Qué  escacho !  ( ¡  cielo ,  valedme ! ) 
sin  duda  donde  ella  fne 
á  ampararse ,  y  socorrerse  , 
é\  la  halló ,  y  para  matarla 
mas  á  so  salvo  f  accidente, 
va  entablando ,  que  después 
mejor  su  vengafta*  honeste. 

Mucho  de  Un  gran  4«*gr*CJA 
me  pesa ;  pero  consuele 
saber  que  dé  eso¿  achaques 
se  sana  muy  fácilmente, 
si  se  apliqan  los  reendip* 
á  tiempo  ,  y  como  pno  U*§u* » 
la  veréis  mejor. 

Félix.       .      . 

No  sé. 
Beatriz. 
Yo  $U 

Fetim*'  ,1 
^Cpmo?  -T    - 

Beairl*.  ...... 

^«Uaflürte, 


,     < 


Í6Í 
HaUeÉm  f  don  ffeti*  i  dárd , 
que  aunqotev  la  verdad,  don  Félix, 
que  se  tratan  los  achaques 
tan  penoso* •,  fcomo  éste, 
•in  que  empachó  á  quien  los  dice  f 
y  á  quita*  los  escucha  cuesten ; 
con  todo«eo,  cuando  caen 

en  quien  mááf  que  ltt9  lo  siente  t 
no  es4etdoro,  y  antes  és  ' 

dicha  ,'  que  doKendo  empiece1* 
los  remedio»,  i^md  lijay  tttoedioi, 
que  no  «anafe,  sino  duelen. ' 
Males»  pues,  de  amor,  y  honor 
(na  el  ohí0  te  ■avergüenze, 
que  en  mí  se  ha  quedado  el  rayo, 
aunque,  basta  tí  el  trueno  llegue  > 
aon  dbt  realeo  ta!n  con  trapíos, 
que  el  alma*  que  los  padece ,■ 
implicándose  uno  í  otro, 
á  sus  mismas  ansias  riliferé.  • 
Y  son  dos  mates  tan  uno,    ' 
que  si  á  la  eura  obedeten , 
y  se  convienen  ;fel  alma 
mejorada  convalece. 
El  remedio*  del  amor , 
es  considerar,  que  pende 
la  inclinación  dti  un  influjo , 
que  domina',  aunque  no  vente* 
El  del  honor  ,  advertir , 
que  no  hay  venganza  tan  fuerte, 
como  no  tomar  venganza 
ai  hay  otro  fin  que  lo  enmiende. 
Con  que  dé  parte  de  amor, 
é  aquetas  plantas ,  don  Félix  f 
te  suplico  por  Leonor  ¿ 


I?** 


qac  el  pasada  ^oj<r  templeaV  ~? 

•  ^  carros  dorados  Mamaron       -    •» 

i  sus  yerros  9  mayormente      c  >  , 
cuando  Qaeq  sobre  sugeto  y  •       *> 
que  ¿i  tú  elegirle  hubieses  t 

*  zio  Je.eJigieras  mas. noble*  V 
en  los  natu,pab»s  Jijen-e*  t           <>> 
en  los  bienjns.de  fortuna  ..        .  > 

*inas  ripo,.  ilustre,  y  decente,     f 
Siejado  así,  abar*  de rp^rtí 
de  IfCpnar  ¿otra*  y  ,rojt.  veces  >    i 
4  tus  pies  ,  Félix ,  te  pido ,•    ••  •>  . 
^ue4  mires.,  que  considere*  , 
que  no  hay  quien  «e  Veogve,  «amo 
^quedar % bie»  sin  ,qjue,  se  veogue.* 
4  Lo  ruidoso,  de.  Ja  ¿angcéV   , 
4  por  templada  qu*,s*;caeaie , ■  ■  •. 
suena,  á  agracio ;  pergeniando  i 
se  leanq^a^aaa  el  qufrjjliene,     »       4 
por  m^s  que.. co^ra*  ruidoso  ,      <• 
suena  queja,  SQla.n)pn¿e?f,l,  -       i 
y  siendo  asi.  que  ¿i* r* mor.  ■,'      ••■* 
y  honor  lassoay^íev^s 
medicinas  np  te  .aplaques, 
y  estar  mejor  te  parece  »,   .. . 
ofendido  que  quejoso  ->  '  >*  • 

y  vengado  que  ptiurfefete*    ♦     i  { 
(^rsto  es  9  que  sqpa  #a*¿m  Luía     «•/»• 
que  otro  remedio  ¿no,  lieúe:  )  ,  • 
Ja  njne,á  tas  pja nUs  humilde t  . 
postrada  y  wn/lí/UmenAe 
iloió^ljeroica^e^tt  altiva» 
sabrá  en  tus  mane*  ponerte 
á#ty  ejwmifcp.,  poique  ? 
tras  lo  leajiivp.tujjft 


.  567 

lo  ciaHicovfuegOi  y  «a tigre  *  * 
cautertzen  tus  crueles 
an*ias  ,  y  quedes  mejor  , 
cuando  con  esto  lo  quedes* 
Dentro  de  mi  casa  está  , 
de  donde  salir  no  puede;, 
un  caballo  de  mi  tío 
en.  aquella  esquina  tienes  , 
.   prevenidas  estas  joyas 
que  para  ta  fuga  lleves, 
y  esta  pistola  en  id  i  roano ,     (i) 
para  que  de  tí  no- piensen  , 
que  ventajoso  reñiste , 
conque  si  él  te  diere  m inerte 
<      se  la  daré  en  tu  vengarfta  ;    ". 
que  aun  muerto  no  quiero  dejes 
de  quedad  siempre  mejor* 
Mira  á  .lo  que  te. resuelves  , 
pero  no,  no  te  resuelvas,, 
sin  que  yo  otra  vez  te  ruegue, 
que  acudas  ó  lo  mejor. 
De  lu  mismo  honor  te  duele      /  . 
en  tí  y  en  Leonor ,  supuesto ,  '' 
que  cuando  muerto  le  dejes  , 
y  á  tu  casa  vuelvas,,  ya 
,  podrá  ser  que  á  ella  me  encuentres ; 
¿pues  qué  bareis?  buir  forzados 
ella  y*  tú  ;  ¿  será  bien  lleves 
tú  contigo  una  desdicha  , 
y  ella  otra ,  cuando  puedes 
con  no  publicarla  nunca  , 
mejorarla  para  siempre? 
Yo  te  he  pagado  hasta  aquí 

(  i  )     Saca  una  pistola. 


J 


*70 


V 


qtrf  hay  por  *d  f 
Hoque. 

Don  Antonia 
y  yo ,  á  ver  lo  que  os  sucede 
estábamos  á  e&  puerta  , 
cuando  un  hombre ,  al  sentir  gente , 
sacó  la  espada  ,  diciendo.. t. 

Dentro  Alonso.  »i 

Hoy  vengaré  con  tu  muerte 
los  agravios  de  mi  casa. 

Beatriz. 
Mi  lio: '¡desdicha  fuerte! 

ESCENA  XXV. 

Dichos  %  don  Alonso  con  la  espada  desnuda. 

Todos. 
Teneos »  señor  don  Alonso  9 
que  aquí  ninguno  os  ofende. 

f  Angela* 

¿Tan  cérea  estaba  Sevilla, 
que  tan  aprisa  te  vuelves? 

Alonso. 
Todos  rae  ofendéis  ,  y  en  todos : 
me  he  de  vengtfr. 

Beatriz*  . 

Señor ,  tente , 
que  cuantos  están  aquí  , 
á  solo  servirte  atienden. 
Leonor,  sabiendo  que  estabas 
desde  esta  mañana  ausente  , 
á  vernos  vino  esta  tarde: 
su  hermano *l  señor  don  Félix» 
viendo  qu£  ya  era  de  noche, 
para  acompañarla  viene 


por  ella «  y  tsos  señores 
con  él. 

Angela, 
Miente ,  señor ,  miente  9 
que  Leonor  no  ha  estado  acá 
esta  tarde.  { Que  tú  pienses » 
que  bas.de  salirte  esta  vec 
con  los.  engaños  que.  sueles  2 
que  me  ba  reñido  Isabel , 
que  zelosa  no  me  muestre  9 
y  he  de  mostrarme  zelosa. 

Alonso. 
J  Zelosa  ¿le  quien  ? 

Angela, 
De  este  9 
el  primero ,  que  casarse 
conmigo,  señor,  pretende. 

Luis. 
¿Si  casado  con  Leonor 
estoy  ,  cómo  eso  ser  puede? 

Angela» 
Pues  será  de  estotro ,  que 
también  aqui  por  mí  viene. 

Félix. 
I  Cómo  ?  si  yo  de  Beatriz 
soy  esposo  porque  muestre 9 
que  entre  ingenio  y  hermosura  9 
el  que  puede  elegir  ,  debe  y 
si  para  dama  la  hermosa ,  ) 

para  muger  la  prudente. 

Angela. 
Pues  ejlo  ha  de  ser  alguno; 
ya  que  no  hay  otro  9  sea  este. 

Antonio. 
I  De  mí  zelosa  ?  ¿de  cuando 


m 


j 


Í72 


acá; 

Angela. 
De  cuando  ello  fuere* 
<  '  Alonso* 

Caballero ,  que  Eeonor 
á  ver  á  Beatriz  viniese, 
Félix  |Jbr  so  hermana  y  y  que 
se  case  con  Beatriz  Feliz  , 
es  creer  lo  que  está  bien  ¿ 
pero  no  que  se  sospeche  , 
que  á  vos  os  hallo  en  raí  casa, 
y  que  mi  honor  no  remedie; 
dadle  á  Angela  la  mano. 

Antonio. 
¿Yo? 

Félix. 
¿Que*  mal  estaros  puede, 
si  sois  pobre  y  ella  rica? 

Antonio. 

Ahora  bien,  coma  y  rebientep 

echad  esa  mano  acá. 

'    Angela. 

Ahora  bien  ,  tomad. 

>  Alons*. 

Como  eche 
los  escándalos  de  mí, 
anas  que  bien  ó  mal  se  emplee* 

Moque. 
Con  que  dirá  la  comedia  , 
aunque  á  don  Antonio  pese...»   . 

Todos. 
Que  para  dama  la  hermosa  , 
para  mogcr  la  prudente. 


tv 


$73 
Cual  es  mayor  perfección. 


i  ara  probar  el   autor  que  la  discreción  es   mas  po- 
derosa que   la  he r masara   imaginó  dos  caracteres  o- 
puestos ;  el  de  Beatriz,  fea^  ^Ucrela    y  entendida  ,  y 
el  de  Angela  *  be r roo» a  »  pero  necia*;  Tormo  la  intriga 
presentando  á  don  Félix  y  $  don  Luis  enamorados  de 
esta,  y  á  doña  Beatriz  del  primero,   y  distribuya  las/ 
situaciones  de  modo  que  dofta  Angela  quedase   desai- 
rada de  los  dos  sogetos  que  la  pretendían ,  su  prima 
alcanzase  la  mano  de  a«  aman»ter  y  don  Luis  cumplie- 
se á  dona  Leonor  la  palabra  de  esposo   que  la    babia 
dado  antes  de  conocer  á  doña  Angela.  Este  asunto  es 
interesante,  y  está  desempeñado  con  la   ingeniosidad 
propia  del  poe,ta.  La  acción  f  sin  embargo,  es   menos 
ingeniosa   y   no    tiene  tantos  incidentes  como  otras 
comedias  suyas  :  los  amores  de  don  Luis  y  doña  Ltor 
.  jior  están   bien  enlazados  con  el   asunto  principal   y 
contribuyen  al    desenlace.  Tiene  lances   y   situaciones 
snuy  oportunos  y  verosímiles:  véanse  particularmen- 
te  las  ultimas   escenas  del  primer  acto ;  la  VI.   y  si- 
guientes del  segundo-  y  la  VIL  y  VIII.  del  tercero.  No 
se  reparten  con  profusión  en  esta  comedia  ,  como  en 
otras  de  Calderón  v   las  estocadas ,  ni   se   repiten  en 
cada  acto  los  desafios :  el  de  los  dos  amigos ,  don  Fe- 
liz y   don  Luis ,.  no   se   verifica  por  las   acertadas   y 
cuerdas  reflexiones  de  don  Antonio.  La  escena  en  que 
los  reconcilia  es  una  de  las  mejores  de  esta  pieza ;  es* 
tá    bien   imaginada,  y   perfectamente  desenvuelta  y 
dialogada. 

Desde  la  primera  escena  conoce  el   espectador  los 
do»  caracteres  principales ,  pintados  en  pocos-  versos, 


$74 
con  admirable  exactitud  f  por  doña  Leonor.  De  doña 
Beatriz  dice 

'    TS.n  mi  vida   ' 

ví  muger  mas  entendida , 

que  lo  es  la  Beatriz,  testigo  -=- 

sea  con  aplauso  justó  ,  ........   -k 

en'  las  burlas  ,  el  buen  gusto; 

en  las  veras  ,  la  cordura; 

en  lo  que  cuenta ,  el  donaire; 

en  lo  que  dice,  el  carino;  z 

en  lo  que  viste,  ej  aliño; 

y  en  todo  en  fin ,  el  buen  aire  t 

tanto ,  para  que  concluya  ,  ¿ 

los  méritos  de  Beatriz  t 
*  que  me  tengo  por  feliz  0  ' 

solo  en  ser  amiga  suya. 

La  descripción  del  carácter  de  doña  Angela  ,  ade- 
mas de  ser  muy  projNo ,  tiene  una  gracia  tan  fina 
é  ingeniosa  en  la  espresion  que  encanta.  ■     •     * 

v .  La  hermosura  para  mí      •  .  » 

no  es  alhaja  «mayormente       - 
.    hermosura  solamente ,~ 
^   .  tan  á  solas,  que"  no  yi      ..-•?  ,         '":"-    ;  ^ 

.  .  •  .  sentidos  que  roas  en  calma  ' 

digan  i  hermosa  rae  soy,,  • 

.  y  no  mas:  mil  veces. voy  .' 

•^  á  ver  donde  tiene  el  alma  t  '-'■  ■    •* 

creyendo  qoe  es  escultura  , 
y  solamente  la  encuentro 
una  fantasma*  que  de n-tr o  • 
anda  de  aquella  hermosura.  &c.     *  » 

....   Don.Anlonio.es   un  personaje  agradable  y  gr** 


/í.íí  .1;; 


57$ 
cíoso  :  bo  está  enamorado ;  ni  "IflP  lia  estacó  nanea  9  y 
se  burla  de  las  exageraciones  óV  loa  amantes.  Don  Pe* 
dro  Calderón,  que  agotó  su  ingenio  en  la  espresion  a- 
Ja^nbkada  de>esttoá  carÜctéYes  en  muchas  comedias 
a» vial,  parece  ^«e  ^ftiiao  criticar  este  defecto  por  bo- 
a*  4e-  donnAntbnift  Asi  dice  en  la  cacen  a  VI.  del  prí- 
joatr^cto^  •'.    i   '»     •  !    '■'■■'<■ 

,De*e*tO* 'hipérboles,  llenos     ^ 

•de «repásenlos  y  albores',    •    * 

«f  nratodocaiiíado' e5tá¡:       •" 
I»-.:      ^¿**l6^dejtfrferoes  yé-    '  ^    ; 

»  « '-  •  j  siquiera  por  boy  l  Señéfres,0    •  t       - 
^6<,M  ;  ¿qu¿< nunca  roe  pase  á  éqí  •  •• 
♦...      :  t  esto \d«  una^niuger  ver       '  • ''-:•  - 
i  i. ,  .--  que  saalma*  que  una  mngert  - 
m  ;-   .^  £n  ¡esert*  ¡c^ftaf  en  me  W      -*  »* « 

en.  catode¿tfn,li  tftnoraY, ,  *'  ••■  <  * '  »'    • 

de  qafea'décUn  que  íWr 

el'  Albáiua  pordiosera  9        » ; 

y'  ai*  iñentliga,  la  Aurora.   <« 
.  í)  i ;  i    ;  A -oscuras  4}ued¿  algún  rat»',       x 

y  bu  luz!  no  rae' alumbró"  ->  7    • 

hasta  que  en  la  cuadra*  entró    » 

un.  candil. de  garabato.       - 

Mirad  que  sol  tan  civil , 

el  que  arrastrando  despojos 

no  puede  bacer  que  sus  ojos 

alumbren  lo  que  un  candil. 

Y  mas  adelante ,  hablando  de  dona  Angela. 

La  candida  beldad  leve, 
que  sierpecilla  de  nieve , 
tigreeito  da  cristal , 

37 


-«av*q 


-o:'  ; 
-•¿•¡'I 


i.»-: 


i\ 


H6 

conft  (  fregre*  no* Mitán*  i>>  *  .     v/.ob 

.       .   jfdíifcdllAftCtitio.  .»itsr.x-i     -i    ib  "¡*"d    •.- 

El  poeta,  , , Ato   W W$*  4f.  bata**  pintad*' .£  toé 
Antonio  copiígn  pa*ác*er'  in4ftpn»4i#»íte  »y  .kbretdot:**. 
mor,  le  t*%ffW«4á£ft  >49Sfta¿  fe¡fptita/jiaoiietie  4a 
menor  inclinación.  Es   verdad  que   don  AlonW*  «¿ex 
fendiendo  el  pundonor  caballeresco,  y  escrupuloso  de 
aquel  tiempo»  no<  pqdia  pe*^Hjr.Jq*W#H  ,híja  quedase 
sin  marido,  y  debía -.serlo,  <4  ifojga  :b^Jwá>que  se  ha- 
llaba soltero,  entre:Ip*  *ce$, q#*Jb*b¿n*or prendido  en 
su  casa.  Don  Antonio^  en n f  V¿pb  paresia  ^natural  la 
resistencia ,  se  conforma  sin  rf(*gJ|ntidí6puJtad ,  y  es- 
to es  ,  á  nuestro  .parecer.,  u«.£«o«  viptenia,  á  pesar  de 
la  reflexión  que  le  nape  dp^JtaJisi,  mayormente  cuan- 
do el  espectador  p^ra.  b&tfcaj  aquel  ixtosaanto  su  po- 
breza.  El   poeta    ptfo   baht^.aaéieén1*  antes  en  el 
curso  de  la  acción  ,  ,y.  haber  ¿presan  teda  á  tite   perso- 
,  nage  con  alguna  incljpactpn  al  >ibte*»ajp©r  su  necesi- 
dad ,  at  mismo  tiempp  ^ueiindÁfeoejiAéiá  ia  hermosu- 
ra por  su  carácter. ,<Jr.ceiBoa)q^!el-,desanlice  hubiera 
sido  entonces  matt.vejrasiteii  ¿funatoraL  JA  versifica- 
ción es  fácil  y  armoaioaa»  y  ©J  «al¡la>  ta©no&  artificio- 
so ,  que  en  la  comedí*  a»4e  rilo  r:-  «|uizá  ¡sería    la   pre- 
sente una  de  las  queioamp»^  ¿ni «ai juventud. 

,  'n  /o    .1      I    \\>-    9H|1    l't,     .**a 
i      '0  *.  ',.»   i  '  ii.  ''  I"  j.Tlfi    *>ur-    1» 
«    •    •  >   '      »»:  '       '  »  i..d    9b'UK¡    <   it  . 

.,.>  \    .  .  \s  •     ;•  vi  i.rjiiii»»^ 
.x  t../     .f-  ■■',  /    .?'  .  í;ífid\  :.J(...M   •  ■  :  .♦   / 


ÍNDICE 
De  las  comedias  contenidas  en  este  tomo. 

Página; 

El  Astrólogo  Jingído 3 

Examen mi 

Dar  tiempo  al  tiempo ia5 

Examen 374 

El  Tetrarca  de  feruscden. . .  277 

Examen 41 1 

Cual  es  mayor  perfección. . .  418 

Examen. 573 


1 


.r.,i^af:-™..; 

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