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INSTITUTO
CULTURAL
VENEZOLANO
BRITÁNICO
Mc^FLlH
U'l Coj) ■
Juoqif
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RESUMEN
DE LA
geografía de VENEZUELA
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RESUMEN
DE lA
geografía de VENEZUELA
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POft
A«IJIITI1V CODAZZI
FORMADO SOBRE EL MISMO PLAN QDB EL DE B4LBI
T nCUN LOS CONOCIMIENTOS PRÁCTICOS ADQUIRIDOS POR EL ADTOR
EN EL CURSO DE LA COMISIÓN COROGRÁFIGA
QUE PUSO Á SU CARGO EL GOBIERNO DE VENEZUELA
parís
IMPRENTA DE H. FOURNIER Y GOMP'*,
C4LU DS SAIHT-BUaiT , II* 7.
4844.
ADVERTENCIA.
La geografía física es toda obra del autor : solamente para
la clasificación de los vegetales ha consultado la estimable obra
de D. Ramón de la Sagra y las noticias suministradas por al-
gunas otras personas , que están nombradas en su lugar. Por
lo que toca ala clasificación de los animales, ha sido en partq
dirigido por los señores Roulin y Berthelot y por el Museo
Mejicano, de donde ha sacado la descripción de casi todos ellos.
Los escritos de Depons y las apuntaciones del autor han sido
su guia en las noticias que da sobre los vegetales que se culti-
van en el pais. Las descripciones de las costas se han tomado
del derrotero español.
En la geografía política se ha ausiliado con las obras de
Humboldt y Depons , para lo antiguo ; con la de Balbi , para
la etnografía, y con los documentos oficiales, para la organisa-
cion actual.
En la geografía descriptiva de las provincias solo ha consul-
tado para los hechos históricos la obra del señor Feliciano
Montenegro de Colon y alguna vez la geografía de Colombia ;
para las costas el derrotero español.
En fin toda le obra ha sido revisada por los señores Rafael
María Baralt y Ramón Diaz ; y el plan general de ella aprobado
por el señor comandante de ingenieros Juan Manuel Cagigal,
profesor de matemáticas en la academia militar de Caracas , á
quien le fué consultado de antemano.
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RESUMEN
D£ LA
geografía de VENEZUELA
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««•«RAFIA física
SITUACIÓN.
"Venezoek, ^tnadá ea el estremo s^teiiUional de )a América del
Sur, está cómo á la vanguardia de ella. Pertenece á la zona tórrida
por hallarse comprendida enire ^'^ 8^ y -12* 46' de latitud bo-
i^at. Su longitud, con respecto al meridiano de Caracas es de S^
f9^al este y de )><' 43^ al oeste. Otrácas está 69<' 25' al oeste del
meridiano de París y 67" '4' 4^'' oesle de Greenwich.
• * *
FRONTEÍIA0 NAtCRALES.
r • ■ » »
tjM ílnmiMÁ qné la üaturaleea parece 4)aber destinado á Vene-
cuela ><lo son4as %ae le liá trazado la políüca. Una serfe de mon-
U^s»*q\íe céiíred desde eldodel Hacha se unen á las de Ocafia' >
lOHDJ^a y TM' á tmiaterfle ron U üOrdlilfera oriéntefl de los Andes
«!rái^iii08«» La cóhtiovIMtoB' de ^ éordíAoni há6ia el sor, %dsUi
— 2 —
el páramo de Aponte y el de Seja en las cabezeras del Guaya vero»
separa las aguas que Tan al rio Magdalena de las que bj)jan al Ori-
noco y lago de Maracaibo. Las crestas de estas montañjis parecen
indicadas por la naturaleza para partir límites entce Venezuela y la
Nueva -Granada; así como el curso total del Esequibo fori^arla
por la parte opuesta .tina ^'rfirioQ fivi^na^iQrt^^ con la Guayana in-
glesa. Gerraríase esfte «spacSó 4161.^331» déí 5. por los montes que
separando la hoya del Amazonas de la del Orinoco^ y corriendo
basta unirse con el páramo d^ Apante; pareen llamadas á fijar las
fronteras de Venezuela y del Brasil.
• * ' ! Mf ITE$ J«p|¡fTIC¿jS;' ]..''-.'•' * /
Si se ratifica el tratado sobre límites , de ^ 4 de diciembre de
483dj pendiente ayn con la Nueva-Granada j las fronteras oc-
cidentales de Venezuela quedarán fijadas por una línea que se
imagina pasar por los puntos siguientes. El cabo de Chichibacoa á
los 12** I5M5'^ latit. N., 4° 17^ Ah^^ long. Oc. de Caracas/ es el
punto de pir Wa^ : c^ht^por-la .vBÍ(d¡k l|i J9eai63|plíi, d:e Ja Goajira,
atravesando la sierra Aceite y el cerro conocido con el nombre de
Teta de la Goajira : sigue por los montes de Oca á buscar las cum-
bres de las sierras de Perijá, 1 asta' el origen del rio del Oro : por
sus corrientes baja al Catatumbó : atravesando este, sigue por el pié
de las serranías, cortando los .rios Tara y Sardinate hasta el desem-
bocadero del rio de la Grita sobre el Zulia : allí por una pequeña
curva, va á encontrar el ría Güarumite, y matando ¡por >u oiirso
bastía la quebradj^ d^ la Ghina> sube, por e3ta y va á las cabazeras de
1^ de Don^edro^ Por sus aguas abajo llega d rio Tacbir^ qoe $]£-
v^ dé línea l^asta su órj(0^B,«y por la cjma de.la serranía.^eaeocfUf»
la cabezeca del. Nula, cpyo curso es el findevo hasta«frente del i^s-
parramadero del Sararje. Envuelve á oste. por.todajsu periferia, di-
rigiéndose al rio Arauca, cuyas aguas continúan siendo la frontera
hasta el paso del Viento, qiie qued^ á <>*" M^ 20^^ latit. N., y á 2<'
9^ long. Oc. Aquí se imagina una recta al S. que pasa cerca de la
lipMsa. Tám^ojen sos bordes ooold^a^les^ at|!avkiiQfit^;fí& Heta
m^^] iCQi8Ía4e]^ , cort9 lel Vicbada^. -p^ia el ^^^íaFe .^¡(HRca 49?^
)Mm4^ aaoo'Giifasiiiqiiia, el Inirida ep.el ra^a) ilft A^mii«pte6|
^ (^%^Ífí^xo^Mtik% 4e ia Ih^q» Ifopiidüf.i(3BD»aA;eii l«ft<«^^
punto (Uilit. í'*^'S¡0' N., long. 2© 9' Oc), acaba la línea con la
república de la Nae.Ta-,Gr¿Ula(^^, que consta da^^ 6 leguas^ siguien-
do las síiluosidades y contornos principales que demarcan el fin-^
Aw> jdel po9l6ste de )a repiáblicQ^ t :
Xaicoitf6ra oon el iq|perio*dAl Brai^l «empkia eft.aqjMlfPttld y
.eoEce por ¡VTQ iei^reao pafi^$aá« que foffim. Ja sefiaiaoioa d6 las
jlgoas gue caen^en nuestro- lenátotfo hasta ü piedca ó gfopieia áA
fyn^i y sobiia,0l Rio-NegrOi Desale, .cerro, w á Gasear la ailkd del
aaiío Maromea que qoe^a en la iaülad ^"^ ^\ loag. 0<; M^ ñW^ y
^yas aguas en Jaa cceoi^ntes <rfreeeai iOoa.eomii&kaeibn entre toa
nos Gdbabutfi.y Bam. : deade a^aíiíitfe Jü^ Uim. ptr los grujffos de
loa cerros Cia§i^. Imeri, CIjuai y ücHrtttf lat, afrsmaado el cacnlni>
que comunica 4A«v.4ior^ Ifl^ friosrMMrari y .€aal|ííii; .:y |por ím mm
Tapira-pecú ó Tapíra-pecó toma las crestas de ks serranías de Pa*
rima 5 efe «gwite los cerros Putuibiri, Varima, Mashiali, Mereva-
ri y Arirgma, qije sequen á h sierra depacaraima,^ y por esta cor-
dillera basta enccmirar el R'npunimi en 'su desembocadero én el
Esequibo, stgliiendo' por los cerros de Macarapail^ ; aM' es que las
aguas que vierten hacia losados territorios quedaü natotalmente
divididas por las cumbres de las ahuras ya indicadas, las fronte-
ras con^ Árasil , sigtnendo los mas pronunciados contornos de las
sierras ; recolk-eo un espacipde 547 legnos -que feí^man ú lindero '
del sur*
í:n la toca delUupununi (IatiÉ/5? 55' 50'^ y long. & 42' E.) cer-
ca de los cerros áe Macarapati^ etnpíéza lá línea que separa á Vene-
zuela de la Guayana inglesa. Sigue í>or la margen izquierda del *
Esequibo hasta su confluencia con el jCuyuní : por el curso de este
encuentra la boca del rio TuptH^u , cuyas aguas remonta : llega por
allí á las cabezeras del Moroco, t bajándole va á terminar en el
Océano Atlántico frente al cabo Nasau ( latit. T" 55' N., long. 8<>
2/ 45" E. ) , teniendo esta línea un e^cio de 96 legws si se con**
sideran las sinuosidades prindpaies. Esta es la frontera oriental de
la república.
Por el DOPte todas las corvaduras de la costa hasta el cabo Chi-
chibacoa ^ que es un espacio de 260 leguas, distancia absoluta , es
dedr, sin considerar las ensenadas paG0 notables, forman la fron-
tera setentrlonal , bañada por las aguas del Océano Atlántico y del
Mar de las AntíUas;
— 4
DIMENSIONES T SUPERIPICIE.
Con los limites indicados YeBCzuela tiene ana figura mui irre-
gular, y SQS eontomos son de 4 yM^ leguas : su fiarte mas ancha es
desde la tíoea del Guyuní (látit. €» iV, loüg. 8» 56^ E. ] , ha^ta
las eabezeras tdel Táebira ( latlt. V I4^ iong. S^ 59^ O. ), siendo
esta Uoea de 287 leguas. So mayor largo es 225 desde et cabo de
San Romao en la península de Paraguaná (latir. ^2^^VN., Iong.
5^ 7^ O; ),'liasta la piedra del €ucui sobre el Rio-Negro ( latit. ^^
50^ N-, Iong. O». S(K O. }, Calculadas sus leguas cuadradas resultan
53,051, comprendidos los lagos y las islas fronterizas de la costa,
€oya esteufiíonse^ piMide dividir del modo siguiente.
Leguas eMadrada9.
Páramos.. . . . . • 455
Serranías. .••...•, » 8,955 { *
Mesas. ....... 4 . +,3l29
Llanuras, ■■ . . 22,019 {
Lagos. 722
Lagunas y ciénagas. 224
Tercenos anegadizos.. ; . .... . • . • . 2,522 i
Islas 50 i
^otal. . . ^ . 55,951
t , 1 . ,
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* tft'ilIfbréiKíhribfMinMbpr qne llii eiifre esfa 'yfk cáTcuíada ^ el
daron d0 Humboldt^ proviene de que el límite coa la Nueva-Gra-
nada Jo.:topa^aqiid sabio desde el^Dliela, lov toda la or3la iz-
<)uien)a deLOpíooco y Alabapo, y de alguna v&rlacioQ en los valles
df^ Giicu^a y el estremo sobre Rio-Negixr.
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: ' MARES.
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£1 m^r que baoa el territorio de la repúbliStia desde la peBÍnsala
áe la.Goajifa ha^a la Islanle Trinidad, fué llamado antiguamente
niar Caribe, por los indios i& est^ upi^b^e. (||ie. habttattfm algunas
cKe las^ islas de su archipiélago. También se le. llamó Qiar de Golon,
en honor de su Mustre^eseubriéep. Hei og eeúocido por mar de4as
Antillas y y he aqui con qué motivo. Antilla e¿a una tierra fabulosst.
^e las relaciones anteriores al descubrimiento de la América sana-^
labaa-ea el mar del iap»n y que eiertes geó^dos^ eenfundian eoa.
H Atlántida. Toscanelli creyó que la Antiliav(que los portugutsesl'
Ibmaban isla de las Siete Ciudades) estaba separada del Japón pop^-
uina distancia de 2,500 millas. El nombpe^dé Antilia ó Antilla se^-
dio desde luego á una isla que se suponía eniel Océano AllántieOy
yt proJbablemente después de los> viajescde Co|»n cA mismo nonü)rQ'
ftté.aplicadb ¿algunade las grandes, i&lasdescubierias. por éh Bar-
t^Iomé de las Casas dice qf|e los portugueses dab|n con preferen-^
cia ei< nombre de Antilla á la isla £spa3o]a)y.qto lo misntú fiiza'
Amérko Yjeispucci en la reIaCion.de.au.segunda.YÍ^f peco4?Vnem-v
bre d^ tintillas, dado colectivamente á todas Ifis islas del arcbipiéla-
gp americano.^ par^e una creación mndio;ma^ reciente. A los tiem-
pos modernos pertenece tambiea la división de las islas de estear-
c)iipiélago ; en grandes y pequeñas Antillas. Bl mar que esti fuera
(^ los límites arriba indicados /se llamó Océano Atlántico desde
*feja£OLmijI rfíoaptos ,. porqne losqnUgiUííj sijpaalan q^e fu^ra^dei
Afíedilerráneo: y mucho mas allá de las Columnas de Hércules ó Es-
trecho de Giüraltar, existia una grande isla,.á la que habían dido
ei nombre do Aftlántida;. La estension total de la^ costasfdeiVe&e-
z|ielaesd6.260 leguas ;.pero siguiendo aproxifiíadam^te-las^isiauo-
s)dades de loa golfos:, oabosjy penínsulas, ^biija esta vaEuadon
a 522.
Los vientos Aii34o4á9[ nordeste soplan de ^ia^ alternandotde no-
(jhe con los terrales. Los.^rimeros son los vilntosjj^neraleside los
Haft»241iaÉ»^ ywU da elriionifir«derirom«ii^ i^if^cnUii^y W
4Mioeíe»io 69ift hi9 ÉiÍMBas. ipasas qlieies tohéos AUnob. El céí^
h§e finiB&oldA di«e : « Las agiB» cdüiini en etím Jtat^es «háicw «I
«- 00^ eoft ttna rapidi^ igual á la cuarta parte de lá dé fes granl»
# difta li» de SarOjM^ Ei mofimieiitO' del Océane^ o^uestD al de te
c loÉuaoír del flobo ^ m>> está vef<ittniilaiieiite' lifadoi áí este últiiM
« feA¿BU»d^ síae comeo fenroHaeMQHiiidaeiy vientos AU»ios ios; p^-*
c Umsy qm ealaí» f^kmes bi^ de la^ataubfera*, atrauflu el altor
«c fr«9G& émtíoi aUas tajli<»Ml«ft haeia* el deoaéor. A 4a impafoion j;^
cmeesA que «9(06 motM Alistoi^daa á la.«Q|7erficie d¡& losHiaftft'y.
« <febe aÉrMHátse le comeiite ecpikiocsiai' eiffas fwiaeiaueB b»mtef
a no'toB'oBi^eaiK'éciisybiémente ni *6ff rs9ié«riii'en,tueÉ«».of>;*Pir
sus propias observácioDes y las de los mejores naise^ltts ; encoatvé
que la fapidez de la corriente general de los trópicos varia de. 5 i
8 millas en 24 horas ó de 0^5 i i, 2 pies por segundo. En la costa,
según el derrotero de las Antillas , desde Trinidad hasta el cabo de
la Vela, verilea la corriente las islas fronterizas, inclinándose algún
tanto al sur segui^los/^-^wí que forman, y corriendo coa la velozi-
dad de milla y media á corta diferencia , por hora. En las costas de
Guayana hai dos corrienies , una general y otra de las mareas. La
primera tiene por límitq 12 leguas de la costa ó las 9 brazas de fon-
do, desde cuyo punto para (ierra se esperimenta la de la marea que
en la vaciante corre como al nordeste y. en la creciente va para,
tierra. Las mareas no son muí considerables, escepto en el golfo
de Paria ó Triste , donde se elevan las aguas á causa del obstáculo-
que encuentran para salir por las bocas de Dragos. Las cosías de es*
te mar están infestadas de la broma , especie de gusano que roe los
buques , y por esta razón conviene embrear cada' tres ó cuatro me-
ses los que no estén forrados en cobre , sin cuya precaución quedaa
bien pronto inútiles para navegar.
GOLFOS.
€hieo gefffós se fonnaB' encías eestas de te república. & prlnvlpal
69 el de la provhiera de Ikf&oraeaibo, Ifamddo golfo de Yénesuefíi d Saeo»
de^Maraeaibo ; está'feftfrádc^^per tosipettímiMla» Gotfjiiii'y F&n<g«aiiá
y por las eosCÉsée €«V9' y fftaKAíbe , €ietip««dé kr estenslMráífr
540 h €» £1 secando m magdHad es el efe Fark em la praráeiidé
C^uVMOá, IhiBKido por algunos golfo Tnste. Las d^tas occklfBtatoi
de la isÍa!de.TnBÍdad , las raeridíoiiales dA^la península de Paría y
las orieniaiesde la piwiiiGia de Cun^á eoñ las diurnas becas delv
^an Delta del G^ínoee^forman sii circan£eréncia ^ ocupa&do uña es*^
tensioade SOO 1. o. Este golfo tiene una salida al naciente^ sigoieD*
do á lo largo Ja costa meridional de la Trinidad hasta el caboOa-^
lea, y otra -ai norte por las bocas de Dragos. £1 iereero en tamaño
es el golfete abierto de Coro, formado por las costas de aqudla pro^
vittcia y por la península de Paraguaná. Este golfo se couiuniGaE cpji
el de Maracaibo y ocupa 6# Le. El cuarto golfo es el de Carneo : »
está en la próviucia de Cumaná. esceitado entre las costas de.«st»
y l^de lapenínsula de Araya : tiene 22 1. e. El quintó es el peque*,
no de Santafé, formado en las costas de la provincia de Gutnaná, y
solo cuenta dos l.c. * -■
ESTRECHOS.
■ «
Tiene siete.. El de la boca de Dragos entre la Trinidad y el pro-
montorio de Paria y él que se forma entre el Delta del Orinoco y la
punta de ícacos de la misma isla Trinidad, que son las dos entra-
das al golfo de Paria. Los dos canales qué hai entre las islas de la
Margarita , Coche y Cubagua , y entre Coche y la península de Cba-
copala^ sobre la costa de Araya, forman dos estrechos entre las
tierras de Margarita y Cumaná. Otro canal se encuentra ei^e la
costa de Barcelona y las islas Chlmanas en el espacio que separa á
Barcelona de Cumaná. El canal entre la isla de Oruba y el cabo S:
Román ; y úllimamente la Barra de Maracaibo, por lá cual se co-*
munican el golfo y el Jago de este nombre. * ^ ' '
>
' CABOS.
Siete también se cüenjlan , y los tomaremos de naciente á ponien-
te : el promontorio de Paria , el cabo Tres-Pnntas y el de Mala-
Pascua, todos tres en la península/le Parift, provincia de Cuinai|á.
Los cabos Codera y Blanca , en la de Caracas. El cabo de S. Romaa
en la península de Paraguaná , provincia de Cor^, y el de Chichi- .
bacoa en la península Goajira, provincia deMaraj^ibp.
PltMÍN^LAS.
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Siete igualmente se encuentran sobre Ids costas : la penínsüla'de
la Goajíra, cuya mitad, según la nueva división, pertenecí^ á la
NucTa-Granada : la península de Paraguaná y otras dos pequeñas
arenosas en el goffete de Coro, llamadas Punta -Cdman y Punta-
Maragüei, singulares por su figura que imita la de Paraguaná. £1
ínorro de Barcelona y otras dos pepínsntas en Ul provincia de Cnmá-
ná y una llamada Punta-Gorda ^ que encierra el ^olfo de Santafé y
Otra morro de Chacopata que origina la laguna de este nombrel'
Últimamente las dos grandes penínsulas de Araya y Paria.
•>
♦ Costas. *
. • •. . • - , ' ' '
Desde el rio Moroco cerca del cabo Nasftn., en U embocadura 4elr
ría Pomaroír, que se considera actualmente .como el límite, oriental
de nuestra Guayana , basta la Península de Araya en el golíc»- de
Paría, espacio de |201egua93 Itoda la costa es baja y la mafor parle
anegada y cubierta de arboleda , á veees pequeña , á vezes alta y en
grandes espacios ocupada por intrincados manglares , los cpalesr
dan pd.so por distintos canales á las aguas del rio mas grande de la
república , el Orinoco. Sigue la costa meridional y setentríonal de
la península de Pma<; cubierta de serranías altas y rota £re(^en-.
temente por un gran númer<;^ de ensenadas que formaa .distintos
vallecitos regados y fertilizados j[)or los ríos y arroyos que sedes«
prenden de los cerros. La costa seteniríoual de la península de
Araya que se une a la otra^ e$, sin embargo, desigual y presenta
otro aspecto. Sus cerros mas bajos y desprovistos de vegetaeipn , á-
vezes se alejan, á vezes se.interrumpen, se pierden ose avanzan coa
puntas escarpadas que bate la no^r^ mientras que playasárídas se.
interponen ea varías partes. Las.costas meridi^ales de esta nitsma.
península, ofrecen varías Itermo^as ensenadas que sirven de puer»>
tos escelentes dentro del golfo de Cariaco. Las de Cumaná que sir-
ven de barrera merídipnal á este golfo son escarpadas., y las faWas-
de los ceños vienen á. perderse en las aguas, que siempre Jbonan-^»
ciblesen aquel golfo^ pueden considerarse como las de w gcsA
ptMTto. Toda esta costa tíene uQa esleasiun de 405 le^aas. Desde
Guoianá basta Barcelona, espacio^de 24 leguas, hai alguiias.playas
arenosas cerca de aquellas doa ciudades ; y lo denlas^ esiina cesta-
^ ♦() —
destrozada ; presentando varías entradas, én las.qne se» forman
pa^rto6 magnftcos , hermosas enSetiaites y el golfo de Santj^e. Por-
ción de islas al tas y peñasc^>sds avecinan las costas, formando mul-
titud de caúales de bastante foQ<}o. Desde, el morro avaneado da
Barcelona hasta el cabo Codera^qne es una distancia de 57 leguas,
la costa es ée tierra baja ^renojsa-, ribeteada de salinas , aguazales d
terrenos pantanqios. Los ccrritos de Píritu y morro de Uñare se vea
prominentes sobre aijiaellst oosta , y en lejana perfectiva la cordir
Uera qne sirve de límites a las dilatadas llanuras. Desde el caba
Codera basta Pucrto-Cabelb)^esteñsion de 45 leguas^/la costa es
alta, escarpada; los mas elevados cerros se ven confundidos en las
nabes y sus bases empinadas se pierden en el mar, formando ma-
cha» radas ^.ensenada&y puertos abrigados. De Puerto-Cabello hasta
ia Vela de Coro, espacio de kS legua?, la costa se aleja de la ser-
«stía, y iotemenlfe a^uBos grupos de^moncafiás'se presentan como
iMaiW'tii^oáiido al mar en varios puntos. El résto'os (t^reüd bajo^
aifenoso , » veffes anegado^ y cubillo de espesos manglares ,' á vezear
pantaúosé' eon pequeña: arboleda' y entremezclado de ba^as colinasf
áridas y escarpadas (¡m dejan ver á lo lejos la serranía de Coro.
Bna eadena de médanos nne después a la costa la penín^ki de Pa-
Haguaná, en cuyo centro se levanta el eerriio de Santá-Ana. En eP
<Aá)0' S. Reman la eosta- se realza, deprimiéndose luego como una*
CQiínar, que* aunque baja, sirve desabrigo á ks embarcaciones' y^
firma vanos puertos yensenada» : todos los contomos y prolon^
g»d0n'de*8ata^ península abrazan' un espacio de S^ leguas. Continúa
dé9pue» la tíerra baja y árida de la costa de Cbro , sobre la caai se'
vea lo'Mlos unacaééBE*de cerros no mui elevados. Únese esta costat
á los manglares y médanos de la isla da. Zapara , en cuyo punto
oeoidi»Atar desemboca el lago de Hai'aeaibo. Sigue la costa baja y
««Bésa^de la isla de S. darlos y de la peninsuik de la Goajira , y
SDld mas'allá de Cójoro^ se eleva- enferma de espktnada cortada ver^^
tic^meifte. Los grupo» de la sierra de (!bímaiia envían algunas dé'
9Ui iMíúflieaeioiies hacia Punta-Espada y cabo de Chichibacoa, en
donde tairminií el terrhorie - ^ la república. 6Me éffimu troza
consta de94 le^asy toda la^esten^n de M eosta forma un total' dé
9S2'; eatiéttwmereu ella 50 ensenada» y S2' puertos, sin contaf un
B&nef&cotisiderable de fondeáéerusy bspueitos que están d^tro^
dé los grandas' desagüe», el rio Onuoeo y lago de nafaetíbo. Pftfa
mé]^ fBt^ifwdff 'Si^foñna Rb sipúrnta taWa;
w
Bfesa*
mmm
de Us '^ ■
P&OYIROAS.
Guayioa»..
GaniaDá«.««
V argarita. «...^■.•-•.
Carabobo
Coro
ltaracaibo«« ..•••
¡•B«i
4
NOIIBRH
de los puertos principales habilitados
m .
EN CADA PftOFIHCIA.
•^•í»
m^
•
i
Angostura. •* *
Cumaná, Mitjirin, Gfitrla^ Rio- í
Garitta, Carúpanp
Barcelona « . .
Pampatar, Juan-Griego^ ...%..
Guaira, Higi^rote % «..
Puerto^Cabello:
La Vela, Cumarebo, Adíeora. .
Maracaibo.
^«d
TOTiA.
i
TI
S
4
I
32
3
90
a
-.'
8
3
9
1
50
ISLAS.
Soiir|9^ Qnmei^deT'l sih^ contar muitkad^de^isioies' (fue nKlea^
la» misma®' i^s. y la cosía. La principal y mas grande de tedas er*
]a>isla deüapgarita?, que lonna una de-Jas pDOvlnciás de lar^út»
büiia. GeDca d^ ella bai vofios grupos- de iMotes <gi^ parecen tetío»
de' dos estabonee^p^n^gfldsálaigerrania deCadleass tragados por-las
agua». ba»J8las á» 1» costa de 6uayana seiii casi todas uu}resQltttdo
dor^tenrenos at^nmulados por las aguas dBl Orinoco; En las: costas
de'CimaBá' sus isfa» detoolaa que son residuos de lesrenos sumer^
gidos : lo mi«no*ml86de cooJas de la cosia^e Barcelona. Frente á
hkée Caracas^ la isla de la l^toga , varios cayos que la^ lod^any
d Ihraflan Qenliiiáa', panece quo.en otros • tieH^a peiteaedoixHi
éann^p^tenecaa á uaa eaéena solnnarina que desde Wargarifó-so-
pnlM^ liáeia'lassientBts de Coro. Se pedria' admitir aun otra cor^^
dWeM.snliiaarina. pásatela i la de la*c08tá'd& Caracas; y laristo
iqaa Sütontnotkdbaque están en la tni^ia linea de las holandesas
Ddiaifa', Gmazao^y '@Dttlia , badán parte de cHa , acaBando en e^
cahoCüidntiftcoai las^isla» préiamaf á P^íerto^beno «y on> varías
/
QDWMdmy 00 «on fnm desmoronamieoios ec&sfonad4is«|HAr la»
a|;ttas,-así como las 'q^e aveciuaDja costa de Coro. Las islas de la
entrada del lago de^ Maracaibo deben su origen á la^acumulacion
de las arenas tfaidas por el lago y por la mar. *
Cntidro de las islas.
Guayana. . ... . . . . . •*. . 12
Cumaust. .....'....'... "f 4
Margarita. • 7
Barcelona • . • -. -H
Caracas. 7
Carabobo . . . ... 4
Coro ' ÍO
Maracaibo 6
Total., 7f
MONTA^^S.
Merecen compararse entre sí tres grandes sistemas de montanas
que existen en Venezuela ; y vamos á hacerlo.
£1 primero es una ramiGcacion de los Andes granadinos que en
Pamplona se separan y toman rumbos distintos, ün ramo corre al
norte próximamente y se dirige á Ocafia, formando en gran par¿
sus cumbres el límUe ocoideñtal de la república y disminuyéndose •
poco á poco/ se pierde con el noqibre d^síerra de'PeriJá y montea i
de Oca. en la península Goajim. Otro (es l^r^ilGipal) corre en la -
dirección del este nordeste. Es la parte alpina de la república y .
forma una masa compacta y aneba que en sus diferentes alturas^
presenta una serle de páramos escesivamente friois y cimas cQbier- •
tas de nieves perpetuas^ Distante ésta de la marina esta cadena dé
moiítañí^s y se esconden .á igual distancia de la cuiñbre sus basas .
cubierta^ de espo^^ts y desiertas selvas , donde crece espontánea*
mente el iheobroma celebrado que produce el cacao. Desde :e] |Ȏ^
de la serranía el terreno se estiendé con un declive suave y praláo- :
gado hacia el norte hasta las orillas del lago de Maracaibo» Por el
sur se pierde en las orillas del rio. Apure , formando Jos basques y''
las sabanas de la provincia de Barinaií. Nacen en la cumbre deesia'i
elevada serranía rios caudalosos que descienden paratetamente lias* -
4a sñ pié. Alií ea^ieHli á ser niavégahtíff, y ésk presentar rattdhltts
en 8Ú euraO; los unos van á perderse en el Apure, cuyas aguas o^mx^
al Orinoco, mientras que ios otro^ileván to s«y»s ál lago de ]tfá-
racaibo. Toda estagrAa masa se eleva en-aotl^iFo, formando ea^
treflanos y mesas qne el hombre podría aprovechar y que por des-
graeia se luálan aun jaciiltas. Solo^en los valles^eatrates de este
elevada sfsteaia se iy| el pats pobkuio ; y aHí se cnUívan el café ,
las papas, la cebada, el trigo, la mayor fiarte, en fin, de los ce-
reales y legcrmbres denlas zonas t^&filadis. La afidrara inedia de
este sistema de moníi^s es de 'i 8 leguas , sd lar^fo de.95 y ocupa
unaesfeension de '1 .765 1. e»t^ 2^al grade eéuatoriaíl setee una
superficie dé 2.006 de i^al dase.
El ^gundo sisteif a es el de la «ora eestadéra de Yenecuela ,
que cei^ de 'Berquisimeio y ¿n k moáfifia del Altar parece «{ue
se. confunde om el de los Andes. En este punto de intersección
en que los dos sist^nas , per decirlo así , «e penetran, aparecen
^n un completé estado de imstoruo las c«()^ estratificadtts que
forman el tetreno de lá piHiviBcia de Barqjridmelo, visabW so-
bre todo eó^ las c^canías de Aguaobispo en el Tocuyo y Carache,
en Garora y en Duaca.
€oB todo, eete sistema se puede tea^r por absolutamente dis-
tinto, pues ^ compone de cadenas qoe son paraleláis á la costa
del ai&F de las Antillas y -q uef corren ^n la dirección de este á oeste.
La m^% meridional de ellas limita la región de Ibe pastos ¿ los
Uiim$^ que se ésltenáen basta las barraucas d€4 Apure y del Ori-
noco. Su laDg^iBS de -tCj? leguas s€ft)ré una an<^ura m^^ de seis.
£sra cadena se pierde sabré ^el üfiare en peqfu^lis coiiuas , y si-
guiendo la misma d^eccíon , eérca dtel mar y (Mentir á* Bareelo^
4eja une andia aftra para etevarse «asi de repeole y lérmai^ 1« so»-
rania del Seügantin , seguidamente la de*Cuma0¿, y perderse por
¿Itimo sobiré^el galio de te^*. La mas setentrional forma laisoeCa
y stt*vodelaafíreii^dlmier, mé^oe desde ofcabo Gddera hasta fir^te
i Onknaoi, trecho en el eual pareiBe' timada por las. agua&. t)es-
piMs vMvé á levanlaeBe en las pcaiin^las de Aripya y Fam y coQr
.duye en la bbca de los Dfirágoe. Su largo visrbte es de \ OO' legusps ,
su afiehuta«:médiA eóom la anlteriorj £nblerran cetas dos cadenas
•los féHMes4?aites del Tui y^eAránm/ d liermeso^lago de Vffteindli
y los teri^tto^ mas pingCles^dr Bar celoña y ^umaúá*. Sfti es(os:1#-
^•«esHsitpftrt^ «hitó^lafecadaráé Yeiíeaintaf. donde «p cuUlva el caté,
i*4-—
w.
.£ Ja yuca. IiOs,p.ant08;pc«)imQ9Ales de las doa?eadeiiá& aa Hi^ á
.l^^altura de U lefipn.dalo» pásasios íf uniobo siéaos.áJa de las
jüBÍevi^s poppetua^.^ i^jldles beF>inosoa fertUkaios peo* la íaduatria .dei
kfíPffkise y baSados;par ijaeiifielos^ o«ii|mii 4qs flaa£06 del^s' eeii-
'^ps , f{u:fa§ Q«id0fiae.enciíeroaii.to. mimi|MW de la ipablaekui y
4»ilosr.prodacb>s de lafopa^ieimda, eúfma^asteftMonide-^^iidOi. o.
f ,sahre%tiua B|]p6rfiGÍ0.de-0tra& 2,0O(^ de la misma especie^i
• Pna f ere^ra cadena ^ sobmiriiia ,y iparalélai lajeosta'de l^aráeas,
lempira en b Í9la de- Margamta :pat$t aparaeer deapnea en la que
deciii|4^ de la TeirÉiígai; luego en la: pcovincia dé Goro^ últMia&raiite
en el lago de Maracaíbo, donde <mcto^ Tiette m largo abselato
i»Mtí Jegofis y tt«iaíuicliiiFa>in^iavdie cíBoa : la eatensionde sus
^purtes.visibles esde T^k aladradas sahrettBía^8i^rftcÍ0'de2^MO
;4e igual clase/ ► .. . . «•
Paralela á Jas .Qtra«i podi^mjQS auns^uir laaa «al nQrte una «uay-
ta-.ca^cina tamkien^utoarina^iCiifos ptttita6.firainiBcáito6fflaleii á la
.avypecficíe de A^ aguds en, forma de i&la$ é'isll^Q9^^aHa«ados ám Bd-
íífÁveíy -Curadlo y Qmba ; pareíoe Gonciuir en.eabo* Cttiohéthacoa de
la península Goajira. . •
' Ind^p^oÉentede k)si yn .delitos «e^fosasetota «i sUtem» de la
JParima^vqftte es «Iterfiaro-de loa nuestros; Dlatinto de^Uos ]^tta
pDfiÍGion yrC(gi^titl^eB geológiaa, domina sin rivftl &x ia toayaoa
j^tria,.La vaata regi^ que^ocufis^ se puedíg coi^derar come una
isesa eonveía prelan^da de es|e á oeste ^a^.g^^ral y p^co eleva-
ba. En la*^al se levantan de Irecho en trepUom^nlajIas moi esr
lernas, otras <^as y estrechas > todas eUas «separadas ente si por
Jlamtras cubiertas de bosqiQíe ó paía ; algii&at limpias y doscami»-
•4fis,'>eaftto8'aembradaa da palsia'de marichei Sal>re«Bt08 dtfoentes
A^ai209 'se -devaa á y^es gcopos dctii^easigigunt^scasv a«ft amoi»*
(ibauados^ oüa ald^tis y desQcdmiAdamQi]É& .elipamdoa. •éos^cimas ao
Ui^m i losimatias' de las piéi^fteQpetiMSj» iiL^aj(iii«uii)€á de b
•10^0» iría y bonascami dv loa f iramM :;fQoas j^tán <;iMEarl«iií: de
pasninei»; la mdydr pasle'dn|ffoy»taside.«aisliaoíAn. Ctoda$<«il|&
.g^mosatmeiKté Tartádaa «se |yrfiK6nlaii^baj0 latoürna^d^ prámUea^
/«liriisaos, .tosMs arruinadas* Q^MrlifteaokmflBídssIrAlias. Ordíinr»-
Dlí^ta^oa lias^iio Uenaá sus »»tmíeiilof e» eslasjejs^ta. escarpas-
das : salto li^ hAMis»é^/lm:.m9Éim^^QM€ii^ pié>^,ieliiaa m
9«0
— :*■
neifte qae forma la convexidad de la .grao lo^^ t(imando. diferen-
tes d^cclitmes qoB* determinan los obstáculos qtie encnenlrau y
¿bui '^k9r.¿ dif^iotm tdocMiiraB cMiide&al itaiiloni» ^oaerat «de este
suelo levantado. De manera que todos los ríos de esta región sin-
• • • •
guiar estin llenos de raudales 6 saltos de agua que hacen difícil y
peligrosa su importante laagrpmiMt ^
£1 Orinoco recibe la mayor parte de estasag^as f las arrailx^
i»i|sigo al mar : ptras.van á aumentar el curso dal EsejptJÜoo : cuft-
l0fi fiígiiieiido otra <ti]neGÍOB «e picardea m el Rio^Nagro y van :ccni
él al Amazonas. Y como «el primUero^ de estos tres gran^^s canates
naluiales describe un .grande arco de círculo.^ai ¿nnradop de la
mesa, mui bien puede decirse que el .vasto^territorio que abraza el
sistemare la Parint, eomprendiendo^mbíen las Ouayanas estran*
jeras, exímaosla inmensa -^oe Hmfita' por tmi ladeel mar, y por
los otros el Prijioco ^ el Amnóíiat, «njtredBÍ ligados pov-el Casi*
guiara y el Hio-N^gpo. . . v ..
La estension de est^ sistema em el Jeriitojsjo venezolano ^ppr ]<|
que actualmente se conoce , es die 5.404 1. c. sobre una superíiQÍe
áe ^.000. Sus principales sierras son la.de Pacaraima , Mere varí,
Parima y Tafuc^wé qie ieaam Ja liwitra'nHnrfdtoBSfl del pais en
i^na estension de 280 Teguas. ;£n erinterior es(á la.^erra Rinocote
.411a se une á Rpraima , las.de üsopamo y Car^pi» que .se ligan á la:
J^ Yariauuy Maigualida, ooiTieMto ^easi en la mediam'a ék la pro^
vincía ea una extensión de 48d leguas. Existe ademadla sierr;i*de
fmataca, casi paralela á la costa» y en él interior las de rMaraguaca^
Tucamatí, Vadipú, Gucbiveroy Cerbatana, con una muUikud da
masas enormes separadas ^nlre sí. Casi lodo ester,e^cio censar
tuye.una región de bosipes vírgenes. Allí la vegetadott ü^ presenta
m-wa estado pteiti^Oh: elándígena ^aaM semt^salvqe y nobai
iNI^ caminos que fl eaiio dévlos xios.
■i
i"'
^ •
• I
i
\
46 —
«í-
r
TABLA DE LOS PUNTOS MAS ELEVADOS .
DE L06. mffiRUrrSS.SfilTEllAS »B OOKBULBBAS tS TSNEZ0EL4.
i
Es l¿ parte alpina de Venezuela : se compone de las sierras de Mérida ^ Trujillo y
graa parte dé la provincia de Bartiuisimetb : se puede llamar 1^ región de los pára-
mm: principia en las cabeaeits del rió Táchira y termina en lainomaña del Altar
solure el rjo Cojede : su est«n$}on es de 1 ,705 . leguas cuadradas. .
8ierra Nevada.
■uciH^es
Pan 4».Mvic$x^
Santo Domingo
Saladé
3IS1WA DE LA CUMWA COfTiUSB&A DB igSIȖn{LA.
CkMTd Hiera dé la costa y del
interior , ó cerdillen
ma^dkonal dtedé el Co-
jede basta el cabo Co-
dera y** boca del Uñare:
su estension es de 981 lé-
' gna^ cuadradas.
Haigultíu...^..'
Silla
€arf9...
Gaculo. ...<&•...
Gapaya..;
Platilla...
Guaraguaraima.
Picacho de Mir^u
Pao de Zarate..
varas,
^350
3li6
S950
S710
3000
3386
1998
1930
1910
Wieír.
-ittiOO'
|630
3160
32^
1673
1886
.1670
1606
1587
Cadena 'de los dos golfos
Cariaco y Paria 6 cordi-
llera de Bavjselonay Cn*
maná^ desd^ el Unar^
hasia el promontorio de
Paria : su éslension es
de i73 leguas cuadradas.
Tarumifiairi...
UaraTiÚa.x'**
Arrettfpuja....
Bergantín......
CuchlTano
Tristeía
Tucuyucual.....
Guacal
Trea Picachos. .
varas.
3iÍ5l
-SOÍOOr
3079
•1985
1866
1850
1800
1800
1800
\
muir,
4M9
1673
1738
1658
1660
1841
1505
1505
1505
Grupos é islas de la cade-
na submarina éeordille-'
rade Maracaibo, Coro y
Jtf argarí la , desde esta is-
la.basta la sierra de Pe-
rijá : su ostensión es de
750 leguas cuadradas.
I
tfaoijiao. .
Copey. ...
Pertjá
Aceite. . . .
San Luis..
Uision....
Empalado.
Agoaviva..
Pedregal..
aaras.
•46M
1518
1800
1035
1500
860
850
800
879
meir,
1966
1369
1334
857
13S5
719
710
669
751
TABLA DE LOS PUNTOS MAS ELEYADQS
DEL SISTEMA BE LA PARIMA,
QUE OCVPA TODA LA PBOy»CIA DB «UATARA «I CRA BSTIHSION DB 5104 LBGUAI CüABBABAS.
r
PRIMERA DIRECCIÓN
DBL OBIKOCO
7 separación del Casiquiare.
8I1SIIBA PABIM A
Y
KABAGITACA.
PRIHERA INFLEXIÓN
DEL OBINOCO ,
después de sa anión al Guaviare.
SIBEBA8 MAI6UAUDA , CUCHI-
TERO, GDACHIHACARI , CU-
NETA, GUATAPÚ, SIPAPO,
CBRBATARA T 8UAPUBB.
SEGUNDA INFLEXIÓN
DBL OBINOCO,
despoes de su unión con el Apure.
SIBBBA8 PACABAIMA, BIMO-
COTB , CABAPO , IHATACA ,
UPATA.
— ♦• —
La porción del tectítorio venezolana qne mas^ abunda ea bellas
mesas es la de los llanos de Barcelona y una parte de los de Cu-
maná. La príndfales- hi me» de^Goanipa, elenria^SOO faras s«bi9
el nivel del mar y 450 solre el suelo de las sabanas. Un rio nace
Y corre en medio de ella en dirección al nordeste , llevando él
mismo ncNübre de Guanipa. £1 anchóle la mesa es de cuatro á
cinco leguas y su largo de mas de 50 : en alguna^ partes tiene muí
poca anchura; pero se estíende tocando con otras mesas laterales.
De sus escarpados flancos salen 40 rios que se dirigen por dife-
rentes rumbos, llevando sus aguas al' mar de las Antillas, s^ Ori-
noee, al Delta de este y ^ gdü» de Pada. Esta masa está apoyada
por 46 mesas secundarias y adyacentes, que toman los nombres de
los ríos que serpenteaii en sus bases. Algunas se pievden soave-
m/Bnte en la llanura, mientras otras, terminan con bordes bien pro*
nunciados. Las mesasde Uriea, Amana, Tonore-y otras deben con-
siderarse'como partes integrantes de la estensa mesa de Guanipa.
Sus altaras son de 29# á 464 varas, sébue el nivel éd mar,, y de.
458 hasta. 205 »bre el de las llanurasqn^ las amecinaa» Este gran
sistema de mesas originando rios de mucha agua, fué causa de que
en un tiempo se creyese que existia en el centro detestes llanos
una cordillera de montanas que se unía á los cerros de Altagracla
y Bergantín, cuando no habia en realidad sino un gran llano sobre-
puesto á otro mayor, y que debe ser considerado en general como
el manantial y depósito de aguas que alimenta el gran sistema dfer^
los rios de la llanura. Su constitución geológica, que. difiere en
cierto jnodo de la de los llanos propiatnente dichos, contribuye á la
coaservacfOii, y filtracten de las aguas.. Lm terrenos de las mesas ^
general se ooBpoi|eft de uaa arena i^m^a die color cenikientok^ue
reposa sobre la greda que forma casóla totalidad del suelo de los
llanos. Sobrepuestos.^ capas horizontales, son probablemente re-
siduos de aluVioa qjaaen una época antigua se encontraban unidos.
Las aguas pluviales tan abundantes en la estaciona lluviosa, pene-
tran prontamente esta masa de arena, y allí se conservan en la esta-
ción de sequedad. Esía acumulación de aguas subterráneas es la
que permite esplicar, cómo un manantial^ llamado morichal, ^pé"
ñas vJsiUfia. saUenda da ua gpy^ji d^l^d^^
«
•tf
corre por aqnel terreno are&oso^ un Tolúmen cada vez mas consi-
d^able. Y cómo cuando se creería ver desaparecer este arroyoelo,
%ra por«^l efecto de k evaporación en un clima que constantemente
tiene una temperatura de 28<» del centígrado, ora por la absorción de
lattena, se te al contitrio, que á me<Hda que se aleja de los atasca-
Mfiros y tremadales ^ se aumenta de tal manera, que uno de aqne-
Sos manaatíftles que apenas merece el nombre de moncha!, á las 42*
teguas se faneé un- rio navegable para pequeñas embarcaciones. Sl¿
gttieDdk) el ciirso^e uno de estos airroyos, se reconoce que el ter-
ZOM) arenoso en-^e reeorre le suministra constantemente el agua
que filtra eSa mas ó meaos abundancia llegando x;on mucha ar-
dua callea mui divíct^, suave al tacto y que da á estas aguasf un
eoior blanquecino.
En ks ttanoins aHas-de la provínéia de Cbrácas, se eleva un grupo
de cerrítos , que tienen los nombres de Titiríjí, Macho, Magdalena
y Tofu^pano. Batees el mas elevado y solo 4iene 5-10 varas sobre
el nivel del mar, y 200 sobre las sabanas : de allí se original) vallas
mesas que sedifígen bada el Orinoco con los nombres de Requena ,^
Acacai, Baoríneses , Mereyal, Mmana y Chivata , cada una de mas
de 45 legtts ée largo eon un ancho de una ó dos. SlHS costados es-
V. tan generalmente en Horma de barranca que nombran farallones y
se elevan 70 varas "sobre la Iláimra, que tiene 490 sobre el nivel'
del mar.
Ea lapcovtecta de Guanana hai una gran mesa que pcvpa pre*-
ctaamente las saAianas en donde loa capuchinos catalanes teni(m
can, tedas sas 50 misimKS llamadas del Caroní. Está encerrada e»*
te eidedinne meritt>ñardé la sierra Imataca y un terreno éscar-
puiOf ddl»etid náee erria^Tumári, qoe despides reeorre toda h
mesa ppr su medianik. Este terreno está ^vado 552 vanftr sobre
éí nivk del mar y acabm de drcundar la mesa por el naciente los;
grvpos de 4i^ech»a , Gnas^ti y Nmia, y per el poniente los cerri-
ios que se eslíenden desde Slmta Clara hasta S. Ünto^o, dividiendo
las aguas del Cffivat de las dd Yumari. En este espacioso terreno ,
que tiene mas de 20 leguas de ancho y otro tanto de largo ^ se ele-
van multitud de cerros qjue hermosean el paisaje,
Hai ademas 42 mesas en eCns parajes de la república, cuyos de-
talles se encontrarán en la descripción de las diferentes provincias
á que pertenecen.
--20 —
METÉOROS.
No tiene TOÍcanes el territorio de YeneAielü. Iai|iloiNamente se
lia dado, por algunos misioneros el nombre da yolean de la Esme*
raída á unas llamas qae á la entrada ó salida de la estadon de las
«guas se suelen ver sobre el cerro del Duida. Esta luz cambiado
lugar, viéndose ya en uno ya en otro punto de la cima de la mcm-
tana. Humboldt cree que este fenómeno puede provenir de emana-
ciones gaseosas é inflamables que desde una gran profundidad sa-
len á la atmósfera por entre las hendeduras de las peñas. Iguales
llamas salen de la roca Guaraco, que está frente al Duida sobre la
margen izquierda del Orinoco^ cerca de la separación del Casi-
quiare.
' En la gruta del carro Cuchivano , en la provincia de Gumaná j
se ha observaído el mismo fenóm^o y también en las llanuras de
aquella provincia y las de Barinas, donde una llama que corre por
sobre la paja de la sabana sin quemaría , es conocida oón el nombre^
de luz del tirano Aguirre^ y stlpone la gente ignorante que es el
alma de aquel mal hombre , que vaga por allí sin descanso.
Otro fenómeno luminoso conocido con el nombre de farol de
^Maraeaibo^es una luz que todas la$ noches se ve del lado del mar,
coíno en el interior del país , á mas de 40 leguas de distancia. El
sitio en que este fenómeno se presenta es un terreno cubierto de
bosques > pantanoso é inhabitado en las orillas del Zulia y ^tcsl
de su boca. Es como un relámpago continuado, y su posición tal ,
< que situ^o casi en el meridiano de !a boca del lago de«Maracaibo ;
dirigo'á los nave^ntes como un ktvo,
tJitimameqte , en la cueva» del cerríto de Monai en In provincia
de Trujillo , haí tufos inflamables que espantan á los que no los
conocen , poniendo fuego á una mezcla gaseosa que está constante-
mente acumulada en la parte superior de la caverna.
HOYAS HIDROGRÁFICAS Y RÍOS J>RliVClPAI<ES.
La estructura de los Andes de laNiieva Granada, su ramifica*
cion en Venezuela , la cordillera meridional del sistema de te costa
-^ 24 —
de Caracas y la configoracioo del dilalado de la Parima , formSfn
una inmensa hoya que ocupa la mayor parte del territqríOy estén-
dijpndose dentro deldeia república veciqa de la Naeva Granada.
£1 máximan de depresión de la boya está en Venezuela y lo recor«
re so principal rio^, el Orinoco. Este es el canal natural para co-
municarse de un estremo á otro del país, y sus grandes tributa-
ríos facilílan á largas distaneías otros canales no menos interesan-
tes, mientras que el brazo del Casiquíare, arrojándose bácia Rfa<-
TiegrO; abre aquella yia famosa que conduce al Amazonas y propor-
ciona una dilatada navegación hasta el (He de los Andes de' Pasto,
de Quito , del P«rú y de Bolivia.
' Por todas partes desciende de los cerros y cordilleras muche-
dumbre de rios que riegan los valles, refrescan los llanos , hume-
decen las selvas , y ramiñcándosc de diversos modos, fertilizan un
suelo favorecido por la naturaleza. Nacen y corren 4047 riós én el
éstenso territorio de Venezuela , sin contar con«doce mui cauda-
losos que bi^an de la Nueva Granada y caen al Orinoco. Este re-
cibe 456 : desembocan directamente al mar 250 :-caen al golfo y
lago de Maracaibo 420 : alimentan el lago de Valencia 22 : desa-
guan al golfo de Paria 90 , al dí Cariaco 54 : lleva el rio Cuyuni al
Esequibo OT, y conduce el Rio-Negro al Amazonas 56. Por lo es-
puesto se percibe que la geografía física debe dividir el terreno en
' ocho hiyas hidrográficas con los mismos nombres de los i:pcipiea-
tes respectivos. ,
• HOYA DEL ORINOCO.
La descripción de esta grande lioya á la que pertenecen otras mui
^considerables , no puede hacerse con precisión y claridad sino prin-
Gipiai^o desde el origea del Orinocp, y siguiéndolo en su curso por
este gran valle. Solo así podia darse una idea general de la eonfi-
gurupion hidrográfica de un suelo virgen y salvaje , en su mayor
parte desierto y desconoeidi^
.Por los redentes viajes de M. Sehomburgck, se sabe positiva-
Bienté*que las cabezeras del Orinoco no e^n donde se habia acos-
' tumbnido situarlas. £1 nombre de un río Varhna que cae á otro
Uaiopado Parima con el cual, le confundían , ha»do tal vez la causa
de aquel error. Estos ríos van ambos á formar el rio Branco , y son
m brazo mas oecidantal y mas grande. Cerca, pues, de las cabeze-
— M ••
véÜA Pawaa )iAe MUwiiie si pftciBitgalo4el Oraioeo » ea el !»■
gar ea que la<«Mra JPamja se une á k de Tajj^apieó 6 Tapki^eeá.
Sepia las aítiuns de las otn¿ sienas medidas en el sistema de rntrnt-
tanas de la Parima , la did poato ea qoe nace ^ Orinoco no pnede
eseedec de 4900 taras sobre' el aivel del mar. £i Orínoeo perma*
neee descaiUNádo 4esde so naeimiento hasta el raudal de Ooadiai^
bos, ^^'que l^s embarcaciones no (peden pasar de este ultimo
pmiio,; ^0 atendiendo á la peca agua que se encuentra antes dd
raudal y en el raudal núsmoj no debe suponérsele hasta sdU ur
corso deicoas de 25 leguas^ comj^endiendo las Tueltas del rio. £1
primero que llegó á aquel punto fué el Capitán K^jtn Francisco ftH
YadiUa, comandante que fué del Castillo de S** Carlos, próúma-
mente á mediados del siglo XYIII. Mas abajo del saudal y sigoiendQ
«1 curso del Orinoco tiene este menos escollos, y sigue su primexa
dirección del oeste noroeste hasta la Esmeralda, recorriendo 44
Jl^uas. Allí endei^^za al poniente por espacio ile 7 leguas , hasta el
.pupto en que despide nu brazo hacia Rio-^Negro. Los decUtes quet
tienen de la sierra Parima y de la de Tapirapicó y Unluran ^n k
causa verdadera de que el Orinoco. siga esta dirección que es la
mi^ma que trae desde su origen. Cn medio de dosdecüYes hidro-
gráficos que se hallan fin sentido opuesto , se ve que está la mayoar
profundidad en donde corre el recipiente ccostun^ el Orinoco. £1
uno de estos decUvessc dirige de noite á sur^ y está fbrpadopor
las sierras Parima , Mei , Curichana y Maravaca , ocupando 650 1.
c. por las cuales corren diez ríos, do^ principales que son el Ocamo
y el Pa<Iamo. El otro declive de sur á norle está formado por Jas
sierras Parima , Tapirapicó , Unturan y una débil altura que arroja
esta úllkna sierra y eoQchiye«obre el Orinoeo cm el eerro Pava y
roea Guaraeo. La esl^isíande este declive es de 550 1. e. ¿lorrfla
por^l otros diez ries^ el prin^pal delQs,C]:yiles es el Ha vaca. Bn
el panto, pues, de la oálebre bifurcaelon del Orínoeo, este tieae
deearso 75 leguas y ^a enriquecido feen el emé^4e agía qve le
han tributado 20 rios prinqipales , ó iBej6r»diehd^ em Inda el agua
que cae ataahoaente en una estaEision de 4050 1. c. : una lancera
parte de estas ^igvas va á ftio^Negí» por d brazo Casiquiá^e. Ella
separaren -se e£eetúa en un terreno elevado selo ¿57 varas sobre
el nivel del mar, en ktil. ^"^ ^ y h)ag. O"" b&^ al ^sle del naádlstio
de Caracas. El aaoho dd Ortaoeo es de^^ftOO v«ras y el éel Caaí-
^iaoscte 110 ; Jatprefaiiylidad mayor dé a^aaltes de 40 piea yda
DeJijrenu^ffGasiqíiiare para examidlirlo en Jtej^fir éé lite-B|qjH»y
al OMtevoroesle, y dMfnies fi^erüftras 2i al wr-noroeste. Si>s4e«»-
díT« lo aeoofitaiL, «n en jta «Sarfor 4eprMioa oofre éf rio : ri*€to«>
dm 4e laÉsfdkofdt tes» «i cdiffm éñ vüi eaHaii ^ee á f«e«l té*
(pwtekmrta dAimnle «la séhoi; ^eptraarib ^ trflMiBioi
éel AliÉ^p» éeüwM Orinoco , ; «IT esta Ufiea no liai «tro« eem»
tonniM iaMlta , ettya «tÉMÉflm «á dé 4M )«giM ctfaáMdit. 0
deeiíiire4telaéfro0ba«s«d4e ana lief a lffinBada{N$ri#s cerros *Gi»-
Mfa, iMtammmti, M^vtvmí , Yao y NetÉi , y por tos de Qite«e<»
T^ta , Man^paea y fhiída. Sa ladiaadoft <ei easi de aorte á «ar y
por «Ha omneía diez fio» y dtiea loalldsiquetaa á «frmr al Orioavo
lasag«»T«ea9id»s«aiiaae6láDaioiide 94ftl. c; 'd prlaelpal d»
«ates é^mtgjSm as «1 Cmmsmmmsi.
Gaaad» al OHaoce tl^a «trea 4e la boca dd, tia Vaalmari c^
«ayor de li» tritartarlas ^ne deidaadea *deia parte taartdiaaai da
la Parte»^) ,laeroe diveetmoN«6ál imaímMb por to tagaae, laqpa*
Mdo dartaméÉte del dMfit^ reiisa^ y corta de la aemmk ¥aca«>
nad y de it^ eo^atradedhé ééi^ de la ealjpa que laedki catre el
Oriaaeo y el 4tá^po. Por eela |Mfrte redbe al OHnaca etto^eüía
las aguas de dor casas que recofea la de «ii>eii[^aeto éa 40 1. ic« ,
al paao q«e for diofueslo le aaea lis aguas.de to groada lioyá del
Yentiiari, fenaada fw laaaenaalae Miigaaiiida, GaanMfÉí, Vadij^
Yacaaiari^ CbífoHa , da a«a |iáfee , y de la>atm fNir las de Cari-
diiani , ^hiwpmo ^ Caaof a , CaeÉmñacitfi y í^wk, e«ta lioya
aciqya im espado de ISOt^i. «.^ eíeaÉode las oadas mrteaat Ori^
Doeo par medíoHe dos rios y dsB aaiaa. Las a^aas qaa eaea ea-al
lasto de afael grande eqvado toma» 44<«bs qae ao» tttlHttam&
4d VaateacL
La faRMNi fraide ioiaiiea del Oiteaoo se eéseláaieai'saeaB*
«ueaoáaaoB el «mfme : talit; 4^ 4^ 90^^ ta#l. í^ V i^'^ O.^á
27S viras eelMe ^ mvei del mar. IHf el OmMwa é«la!al^(MiV
ragaa de leaéndias , se preseata después de ana earso de 195 legaas^
«OB el ^Q aaMnea de égna qae le baa 'stiaitoisirado 44 riasy
^Mtídaddecüai; ^9i»&íis eea toda elifaa^iae cae ea aM «aiper-
ide de $4M 1. c. da Jas eaaleí ya asi;úi dedaoMas^Mt perla
— 24'—
piH6 qaeewTcspoDde i\n agaasque y«b per d G^Müiare al
4e0aet)[e de Rio-Negro.
El Gttavíarc y que nace de la falda oriental de los Án des de Saa-
«iafé, oerca de S. Juan de los Llaoos^ báck la Seja y el para*
lao de Aponte, tiene un corso de "200 leguas, calculando por las
.sinuosidades un tercio ñias de la distanda directa. Si se atiende á
las muclias yertientes que recibe , se observa que recoce las aguas
que caen sobre la superficie tle 5,600 leguas cuadradas pertene-
etentes á la Nueva-Granada. En el territoríe nuestro reúne Its aguas
de un deelive de sur á uOTte^lTamiado por la colina. b«Ja que costea
el Oriooco y que se une al cerro Maguasi. Desde este punto , un
terreno lijeramente elevado sigue dividiendo las aguas que van á
Kio-Negro , de las que caen al Guaviare , pasando por el estred^)
de Yavita y Pimichin y realzándose en los cerros Guatavi y Cuna-
piari, de donde desciende después al raudal de Manuerico sobre el
hiírida. Esta boya, ó mejcnr dicho , declive, que solo acarrea aguas
negras y transparentes, está sangrado por siete rios, siendo los
principales el Inírida y el Atabapo : allí es en donde se pueden for-
Bdar diversos canales de conaunicaeion, desde estos rios basta Ato-
lero. Las aguas que caen en esta ostensión de 800 1. c, las recibe
el Guaviare con aumento de las que suministran iOO 1. c. del ter*
Titorio granadino , conducidas por el Inírida ; de manera que al
«ncontrarse el Orinoco con el Guaviare lleva ^tc último toda el
agua que cae en una.niperfieie de 4,800 1. c.
Examinemos ahora la naturales^de los tres declives que son la
causa de esta gisande inflexión dé dos podarosas corrientes.
: La cordiüwa lejana de los Andes de la Noeva-Granada, cuyas
cimas se aproximan á la región de las nieves perpetuas, no se eleva
•de repente como un moro sobre un plano horizontal; al contrario,
esta gran masa desoansa sobre bi»es estensas y ^tfstenidas por ter>-
renos altos mas ó méúos íncUnados , cuyos dédives , como una es-
planada, se pierden insensiblemente á larga distancia. El agrupa-
• miento que forma el sistema de k Parima eleva sus mazixos mas ó
menos prismáticos, sobre una llanura ba|a comparativamente á las
Jlanuras de los Andes : sus declives son mas cortos en razón de su
menor altura, y llegando á determinada distancia, encuentran con
el declive opuesto de la coitliUerado la Nueva-Granada. La línea de
intersección de esto» dos planos, iaclinados, en<la cual está el máxi-
mun de la depresión del terreno , debe naturalmente hallarse mui
/ íj- - j^ — -• i
~ 25 ^
•
lejos de los Andes y nmi cerca de las faldas barrancosas de la Pari-
ma. Las aguas acumQla4as en aquella depresión de^ terreno son
4acgo impelidas IjjifÜA el norte por un tercer deo||re que aunque
débil ^ es suficiente para separarlas vertientes deiOrihooo de las
que van á tributar sus aguas al pofleroso Amazonas.
J^pues que las aguas del Guaviare se unen á las del-Oriopoo,
signen al norte la linea trazada por «Ja naturaleza. El Orinoco ya
con doble volumen de agua se abre paso por los terrenos mas ba«
JOS, desImySndo.y rompiendo cuanto^encuentra; así es que algunos
oeg^itos qife se elevan en la orilla izquierda de este río; pertttMcen
al sistema de la Parima que le demora á la ¿tra banda. Esta dispo*
' sidon del terreno es cansa de que los mayores desaguaderos que
«caen al Orilleó sean los que recibe del pontéate ; pótque viniendo ■
de partes lejías, recogen nfftyor cantidad de agua que aquellos
que bajando de la f^ima se encuentran lu^go con el Orinoco que
rodea Ja básenle esle sistema, describiendo uiía línea casi semicircu-
lar. Si el curso del río no fuera interrumpido en su nueva dirección
por otros declives y pudiese constantemente seguirlo; iría ádesem*
' bocar á la mar por Pilerto^CabelIo. Pero á 58 leguas de su unión
con el Guaviare encuentra S9 camino obstruido por las rocas gran^
ticas y descarnadas que hacia aquella parte avanzan sJgunos grupos
de la sierra Parima. Esta es la región de íos glandes raudales : allí
b1 rio rompe y destroza cuanto se le opone , aDrténdose paso por
entre los peñascos ; pero se ve forzado á inelinar su curso bada
el nor-nordeste.
Otro dique igual al anterior formado conv> ¿I por un estremo
destruido de la cordillera, vuelve á atajarle el paso, y aunque
vencido , determina finalmente al norCe el corso del río. Por esta
dirección va á encontrar el caudaloso Meta qi^e baja de la Nueva-
Granada, veríficándose esta feunion S4 leguas mas abajo de la em-
bocadura del Guaviare. En esle intermedio redbe la^ aguas de
una grande planicie-occidej^al , cuyo mayor desagüe es el Vicha-
da, de aguas oscufits. Este rio tiene su origen en las llanuras ^ue
están á la falda de los Andes granadinos, y en aquel territorio re-
coge las aguas de 900 1. c. y las de 1 (K^ en el de Vengúela. £1 nesip
de la- planicie que se considera limitada por el Guaviare y el Meta ,
está compuesto de tierras llanas ó sabanas, también de Venezuela^
las cQales declinan sensiblemente deT oeste al este. Forman estas
tíerras parte del.giaa*decUve4]e los Andes y arrqjim sobre el Orí-
Boeo |wr«inll»sle>ilile3Í0B ,^Dda d«g«8 que ese ea maMeih-
sioa de 0M^. «. SI ifua 46 entro de ^btím^íém es de caelor ir
«f4kiiiii, f ^^W^ 1^ ^^ ^ ^^^(^ t^A- ^
Por la fArte ae laJttioia bujaa Im «gus de 4os huyas que w '
estienden hasta «1 twmM ^ Saite-Boiía', Ihnltad» por los cenw '
qiie4i?id9ii «la grtiMte'bof a del ^«iit|iari. Uaa «s de 900 1. c.-^ipe
teagQttnpor «oitioiátB y bwiAmxs eattos^^^ cta agmsvc^as y btaiH
cas, «e&¿> «I ^pttpo el prhKifttl de ellos.
La olnr krfsi ée20i l.c. d^searga por'iemitFO fi^óai!k)s, eotm
tos canto el mas woM^ es el €ataníapo, de ^agín» aegf as.
£1 Meta ntee^H taÜTddá mn^díQmil 4ie lea i»i^ de la Ntieva«
CUtmada y debe m origeii;á dos tíos que tejaa de loa páraiMS de '
dínagaBa yde'ia Sotsap». Cuasdo llega al^ciawgicotefoeogidoftt* *
lodad agsa;<pie^erieiiiia eatensioi^bSjé^di. c.^e^tre las eoaléi
«olo«hai 220 de ¥eB«Baetai. Mas adiajo de H coiÉhien^ del Meta
ee preaeiila'^ diriuoeo Bia|e6taoso?ppr m «aelraní y pfslttiididad.
Todas las ügaas |fhifMa$ qoe se met^sa ^e^m esleMiOB de 8,50O
1. c. perteBecici^ ai territorio granadkfo, le ^aii sfdo tribotaditt
por el iaitida, «lYíebada , el toamie y «I neta y }^fim 1. c. €e ^
tierras de 'Cvayasa faaa desapiado lei} él por nfodlo de 6S' «tas f
40e«ids,^«eofilnroon elpiodscto de 4#01. e; de la proviacia
4e Apure qve^son tiKib«tfirfts del Meta.
Per-treee Iegi»s <;oire«í Oriiioeo M1V. E. bMta d fomoso estre*
ifco del^mragoaa*: «lli vaehre al imdeate y eadeceza después al
aorie hasta cerca de £abruta, por espacio de 21 4/2 tegtiaS; to**'^
asaado loega'ia^vla del aaeiaale qoe ai^deja siao ea h aiar.
Desde la desembocadura del üela basta d firente de Cabruta y ^
fde €aieara^ caéa d Oriaoéo por sa r^ia d^redlfa las agaa§ s<^
iH«ateB4e aiia«aaperfide de ^rras Igml á ^98 I. c. que ^n las
^e eoiiqpreadte «aa boj« Toraiada por h» serranías de Chivapori y
«
-Gerbataaa. Odio Tk>s y eaa^ caüossirvea de cansas á este de»
^agüe. * • %
: Por la W|filé9da ^tieae el Oeiaoeo <aa aiftaéiJlo cOnsídfrable de^
bidé tftfito á ka agaas'que caen'eaaaa at^eifcie de 4 ,0#0 1. c. ea
^1 territorio graaafliao y qae^ajaa perla ppOTtaciá de kptre, conm ^
á las qae^eovroBponden á 4 jlM I. o. de esta laistaa provincia. To^
das las agoA^ de «ata gi»ade Ilaaara mitraa ea el Ovlnooo por siele
desa^vaderes ; neado '^ pfiaeipato el áTaaea y el Ca^aaapavd*
En segaidi^^i^nieel rio Apare, ^oe tieoeM^it^anea eípáraaio del
BataUoa, al aw 4b la tirita. lAému^ alU Dribaiite;» y m (ama «i
nambí» de'Á¡Hne hasta que llMaftdo á Jas UaonraBse «ae cofi al
Saraza qfie Ue?a sa corso de MmMinH&riiiada.^ Corre paialab al
lleta poMa orilla set^riaBal del dectifede los^ndes granadinos ,
sigiiíeDdS la Ibiea en qne aquel gran plano se inters^ oeu loa da
las cordilleras de iMrida y Caracas, ¿ám^ que no -*mo recoge laa
agaas que caen en la [)«»?ii¡6ia«de su nombfie, sino las que le enyim
las faldas' merídiottates de aqueUa&aorditkras pof medio de 450
sios y miiltítod de quabcadas y ca£os que sirvMi de d^sagooicros i
una si^rficíe de 4^-4 4é 1. c. El Ajlure entra por cuatro difeientcB
aaaales^ü el OriBaoo^ tani^do ptB frente á Calcara ledas las agmis
que anoünistra una anperflcié de 9,506 L c. del ^territorio grana'*
diño : da6,000 délas proYtneiaftde ApnrefEarinas, fláiida, Xca«
jyiD) Barqüisiineto; Carabobo y Caracas y de 6,480 así del «ístama*
de ia Psoima coma de otras tierras de la prmnoia de Gaayana^
•badeade «tré todas un total, áe 2^ ,790 1. c. que tilbntan aaa
aguas al Ocinoeo.é^ra'fannarse algnna idea dé'fa gran corpniaaetat
de esle rio, debe tañerse presante que una «uorta parte de aqoe»
líos estenses tafrUerios está en la región dadlas lluvias eeuatorialea,
4ande pueden caer cada a&o 40bO pulgadas de agua. Sí se adapte
qne en el resto caigan 72 pulgadas, se tendrán 74 par (énmao
medio de te llatias en las 21 ,7S0 1. c. que fomian la grande boya
dd Oriaooo. Mpónganse perdidas por k evaporación y tttvaeioa
dos terceras parias dd tdal de ias lluvias y se verá aae siempre
<pied«i 20 puedas de agwi que todo aquel inmenso territorio trl-
4Mitaal psiaoeo. .
La seginida grande inflexias Je este río -está ya deoMSda frantaii
Caieara en la latit. 7*» 98^ 55^^ hmg. O"" 27^ 25^^ O., á 75 vanas
solMre eLliivd áá mar. Las eétahoes Hanan» de la proviilda 4e
Apure tienen «un declina que deaoieBde de lea Andes de la Nueivah
-Granada, del lado de Pamplona, en^direosiaoñeil este. Hállaose estas
llannffas eontenídas ento«el lleta f Casenare por al sur, y eutveél
Apure y el Safare :pir eP norte. Los declives de lá&aardSlerBs de^
Mérida y Caracas s^rolongan hasta pacderse enlas^barrancasdal
Apinre, siguieBdoet uno la dmociondel nardaste al ^ureste^baata
-enoontnr al ünbanie y la Portuguesa , y al olio la de notle á sur, ,
>aiilFe laiPortngMsa y el rio'Quáneo. En la boca del Apure aon--
dpye«el plana suweamle bnihiado que viene de las Andes, peao
sigue^Lde lá e<»^eta.inecídiomd>da Caracas que «orre patal^ á
— 2é —
la costa. Este terreno qne se va realzando en forma de eq>laiiada
hacia la serranía, impide al Oridoco seguir su rombo al norte : no
puede tampoco segoir a! poniente'^por el declive de los Andes; se
ve , pueS; forzado 4 cambiar la dirección al naciente , entibe el final
déla peque^ escarpa de la Parima^ y el de la serranía de" Caracas.
El moi^imnm de depresión del terreno eslá en Tas sabanas de Cal-
cara , en donde el rio efectúa su último cambio de ruta , comple-
tando así una linea semicircular al rededor del sistema de monta-
ñas de^la Parima. Desde Gabruta corre hacia el naciente por espacto
de 56 leguas hasta el raudal de Camiseta en la Boca del Infierno ,
donde hace una pequeña vuelta al^norfe para volver á tomar luego
su primera dirección. En este transito tiene ya una legua deancho
y recibe de la Parima las aguas que le envían dos hoyas; la de Cii-
chivero y la del Caura. l3 primera inclinada de sur á norte está for-
mada por la serranía de su nombre y las de Cerbatana y Chivapuri;
encerrando una superficie de SM 1. c. que desaguan por el Cuchi-
vero con dos nos>'ta segunda está inclinada de suroeste á nordeste
y tiene una estension de ^,626 1. c. £1 Caura* es el rio principal
de esta hoya y á él caen otros 20, sin contar los pequeños que se
dirigen rectamente al Orinoco. Está circundada esta hoya de los
cerros de Cudiivero , Mato , la ¿ierra ülaigaalida , Maschiati , Me-
revaH , Arivana, Payayamú , Para , Turupa, Arabo, Chanaro y los
que concluyen en la fioca del Infierno. Por la izquierda recibe el
OrÍDOco las aguas de una parte de los llanos de Casacas y Barcelona;
esto es , de todo el territorio contenido entre la mesa de Uberito ,
k sierrita y el borde de la montaña de Tamanaeo basta las cabe-
seras del Manapire. Poco mas alláde^la vuelta^del Torno indina el
Orinoco su curso al este nordeste , y después de haber hacho un
camiifo deonce loguas por aqualla dirección , se «ncuentra frente á
la capital de la Goayana , llamada en su fundación Saoto-Tomé de
Guayana. El uso ha instituido á este nombre el de Angostura, por
M circunstancia de hallarse la eiudad situada en un punto en que
el ño se eslrcücba hasta reducirse á 8fó varas, que es la cuarta
fapte de su anchura ordinaria. -^
• £1 nacimiento del Orinoco, según las observaciones hechas p(H"
M. Scl^mburgck en sus recientes viajes , está en el mismo merí->
díano en que se halla fundada la ciudad de Angostura* La distan-
cia d,e norte á síít entre ambos puncos sería de 424 leguas, y-si-
.goiendo el curso de las água8deH>riiK)e0;deS45. En el medio del
rie hái un orinómetro natural que Uamm la Pieékñ ékl «ledio^
y sirve para medir el agua que pasa delante de Angoatura. Le he-
mos dado este nombre por imitación á io& n^lómetrai.' Si en* la
BMD^ante ^1 Orioaco (ornamos 60 pies por término medio de su
profiíndHad , dos pies por^flÉí yelozidad en^cada^segundo y 2,0d0
pies por su anchura ^resuUará que pasan por delante de Angosta-
ra 240,000 pies eubksosde agua por segundo, TólÚ0»en igual al'
que lleva el Ganges j^n su creciente ; debiendo observarse que. mas
abajo de Angostura recibe todavía el Orinoco al Caroní , qne sale
de la Parima, y es el mayor de sus tributarios. Siguiendo el Ori-
noco hacia el nacieute^ vuelve luego á ensancharse. Doce leguas
mas abajo de Angostura ( frente al paso del Mamo ) concluye una
boya de la proviocla de Guafaoa , formada por los cerros que se-
paran la 'del Caura y los que pasan por la Paragua y Tocoma. Esta
hoya inclinada 4^sur á tiorte tiene 600 J. c. y las lluvias que caen
en ella san conducidas por trece canos y otros tantos rios, siendo
el mas considerable de estos últimos el Aro, que recoge las aguas
de otros diez.
Del lado izquierdo recibe también el Orinoco las aguas que caen
sobre la provincia de Barcelona en una ostensión de 400 1. c, deslio
laiuesa de UVcírito.hasta la de Hamo. De 51 ríos que cruzan "este
terreno, once caen al Orinoco después de haber recogido las aguas
de los demás. Las aiebas acarreadas por las corrientes que bajan
de la mesa de Cucas^o forman una gran barra en el punto de Ma-
mo, donde tiene el Oriooeo 555 leguas de curso. Sigue el rio (k
nádente por espacio de once leguas, aunque en la isla de Fajardo
que está frente al desembocadero del Garoni, tuerce «li poco, al
este nordeste. *' ;
t^o queda indicado, el Garoni és el rio que lleva al Orinoco
mas aguas del sistema de la Parlma. Su hoya ocupa un espació de
2,800 1. c. deterrenos donde la lluvia anial se puede viduar.en
90 pulgadas. La primera inclinación de la hoya es de naciente ji
poniente y después de sur a norte. Está limitada de un We por
toda la serranía qne divide las vertientes del Brasil de las que van
. al Guyuni, por la sierra Pacaraima, por la de Roraima, qne se
une éespties á la de Rinoeote, y por las de Garapo y U^pamo, que
terminan e^ las serranías de Upata y Guayana la Vieja. Por el otro^
lado terminan la hoya del Garoni las^sierras Payuyamú, Arabo, Cha-
ñare y los cerros de la Paragua y TocofUa : 46 ríos y multitud de
--- II ^». u
-teDni f elPiíaptt as t^vlamo»
Bdr lajearte- is^etdarae&be el Orinoco lis afjua&de usa escta
estmisiDií de 50 L c de bt provincia da Gumaró ^.por iiiedi(kd»iiQa
ri66. iUiittiilaé«KoofiÍid8TaUeiiiente'sifiieoebo legttas'c^^^ al E. S,
fi. hasta ñeale á Gnayatta la Viaja, ^M toaree al £. N. B. y coo»-
* liuiía el aspafiió de ooee leguas recibiendo por medio de cinco dos
la&agms de nn declire de 70 L ik que forman* las serfaaks de Inmr
laea. Xambie» por el ktdo opuesto le entras dos riassde la proiia-
(áa de GuoMOiá. £1 Orinoeo entónces^ha re^^rrído 587 leguas; y
«sí por la grim masa de sus aguas como per la configuración diél
tttcreno , se eosancha considerable menta fiüente á Piacoay S. Ra*-
hel da jfonancas, donde se abre ftK'mándo las grandes islas ée
la Tórtola 7 la éa Yaya y tres mas pequaSas que estiMi frente i Bae-
raneas. Su anchura es.de puatro leguas, y altf e^jggieea el Yértice^
su Delta, el eual ocupa una estensiim de 700 1. c. Multitud de ca-
ios formados por las aguas del C^inoco ó por las que caen sobre
las tierras del mismo Delta , cruzando en varias senados aquel
gran paisa^^adO; forman un comfdíoadoLlItbmntode'lBli^y yan
•'^li^Nies á descai^urse en el Océano áem al^o^o de Parí».
Ño es estrado Tsr tanta inmensidad de aguas dirigirse por difi-
ceoRles camiuea para llagat al' mar, pues que no-steudo ssHScieiHe
para delenerfiís la eievaeioii de los teneuoa dreuafécinos^ pasan se-
bee ellos buGoanda por todas partes: un» salida. Ei Orinoco aquí ba
f'^eeogido ya las agui»^ [Curiales de 4 2)610 L c. del territorio de la
Gaayana, de 9^500 4el de la Nueva-Ciranada y de 7,400 de las
JMOviiiciaa de Vaaeaasida, quo hacen mi total de 29,020 \, c,
^ El férlice del Delta"Se encuentra en la latit. S"* 27^ If . y en loiíg.
5? AV d^ B, de Cttcácas. Bsté á la aHwa de 20 iti^aa sdife el nivel
Jké mxc, áé cual dista en linea reata SO leguas. A una y media le-
ffBmé»^. Ri^^ do iavrancas se aparta e^ etíio Macaréo*, el cual
§ 9MS leguas iHrfo{a la niitad dosuaa^suas^porel'^^iiM) Ménamo; Este
qaie daseoÉma e» el golfo^Triato , siguiendo lar orilla dd docKifode
las »esaa que se elevan en tes llamiras ds isdreslaaa y Cuniai|á, re-
cibo laff aig«M» quo caen cm «oaealeBsiantte 700^ l.c oondiRiAis
por Toriea ríos y caitos, Bnéntna qué é la derecha envía mn^^-
eloa 4a pamticadinm» q«o lodaa aa eammáom entra ü. Bla dispo-
sfeion de las 9%wm hace qom p«e^ oonsijterarsa eUMteemtto dld-
dido en ch» partes : la una que llamurano^^nperlarú oeddefital,
r* -^
^_ KA *
M» (^ «w
maolaX , entre* «sta y ú Oiíqqod^ La frimficau redbo \m «gtu» de
Mafiueo y opiiuitca eoa «s^ por todas^ pactes, anéniím-qna la otra
las reeibe del Orinoco á medida que se avanza hácit la mar, y no
tiene comunicación co»^ la oftrar parle del Delta smo por medio de
na arrastradero..
^ Siguiendo el ^cnrso de la gran madre del Orinoco ;. á las trece le-
guas del punto én qBe se apacta ^1 tronco printipal dd Delta, en-
contramos otra Tez el rio sin interposición de islas ,■ bien espacioso
frente á Sacnpana, teniendo mas de legna y media de anciio; pero
a^oco se abre en dps- grandes brazos llamados Sacupana é Imataca.
Aquel envia aguas al Delta ^ y el último, que es mas profundo,
recibe las que bajan de las tierra» de la Guayana* A las ^6 leguas
está otra yez el río unido én un solo cu^po , y de ú\i hasta punta
Barima se cuentan diez I^uas. Encesta distancia de 59 l^uas re-
cibe aun laf aguas de 580 L c. que son parte del dedico de Ima-
taca y qjue desaguan por me<lio de ooho ríos. Van adamas directa*
mente á la mar por diferentes ríos las aguas que caca en un ^pacio
de 200 Le.
La boea del Orinoco desde punta Bar^na»que estáá los 8^ W ^W
latit. N. y á las 7^ 2^ long. al E. del merídiano de Caracas, hasta
la punta N. E. de la i^a Nuina, latit. 8» 5^ 58'', long. 6«> 45' \ O",
tienaseis y media leguas : tománddapor la puttta N^-E. de la isla
Cangrejos tendría cinco leguas , y si se mide desde punta Sabaneta
hasta la punta N.. E, de la isla Araguao, entonces sería su boica de
•14 leguas. Ciertamente esta última podría tomarse por la gfande
«oibocadura del Orinoco y la de punta Bsurima ¿ Gangrejes por^ la
boca grande ó de Nayíos,
Aquí pues termina este rio que tiene su rango entse los de se^^-
do orden del globo entero. Es tan grande ooo»> eLGánfes de la In-^
día , el quinto rio del Nuevo-Mundo,. el tercero de la. América me-
ridional y el primero, de Venezuela. Su^cufSQ^total es de 426 leganf,
de las cuales 40^ sen naKgaUee» Coadiice las aguas q^ái 40i» jies
\ mas de 20^0 riachuelos reciben de una superficie de 30)8041 In-
icias, cuadradas.
Esta. gcaodSa heija de U ,000 L e.,. contando las 2ia q^ daaa-
gnaa cerca <fel Orinoco i \% Bsuir, es mas grande wa. vea y^edia
que toda la Francia y dos que Esj^Sa^ y llueve ea dk ]tri|»le casti-
dad deagua qjie ea^ueUa» Desemboca al gpsuidesOeéaio per 47 ea-
• - 53 -
nales sobre nna esteBsion de 50 legnas de costa desde punta Baríma
hasta boca Yagre , que es la mas occidéntaí de todas, y se encuen-
tra en la latit^^^" 50^ 25'^ y en ia long. 40o 35^ 50^^ al 1^ de Caracas.
HOYA DE CUrUNI.
El río Guyuni es el común riscipiente dé las aguas de esta hoya
por todas partes cerrada, menos por el oriente, hacia donde cm*-
re el rio á depositar en el Esequibo el caudal que le ha suministra-
do una estension de 5,500 1. c. Otras í 99 1. c. tributan sus aguas
á varios ríos que por separado las llevan también al Esequivo, y en
en el termina esta hoya, que está formada de un lado por las sier-
ras Gocoi , Roraima, Rinocote, Supamo y parte de la Pacaraimai
y del otro por las montañas del Yuruari y la serranía de Imataca.
Los principales tributarios del Guyuni sqq el Masaruni que lleva las
aguas de 500 1. c, el Yuruari las de 400 y el Sibauri de 200. El to-
tal de los terrenos que desaguan al Esequibo es de 5,699 1. c. en las
cuales corren 92 rios conocidos y 400- riachuelo^, pudiéndose asegu-
rar §|]e en estos parajes caen anualmente 90 pulgadas de agua.
j^'-Ja boca del Guyuni á la del Esequibo, en el Océano Atlántico,
no lejos de la colonia de*Demarari , hai una distancia de ^ 7 leguas.
HOYA DEL RIO-NEGBO.
El Rio-Negro, llamado por los indios Curana^ que significa n^-
grOy viene del territorio granadino con el nombre de Guainía y se
fórqa en un terreno desconocido, en selvas que están mui distan-
tes de la cordillera de los Andes.
.• Por el volumen de sus aguas, comparado con otros ríos, se puede
.graduar que lleva el producto de 2,000 1. c. cuando entra en el
territorio de Venezuela. Sus aguas son Q$treihMani&nte negras ; su
• dirección de poniente á oriente, hasta que en Maroa tuerce al S. S.
O. y encuentra en su curso el brazo Gasiquiare. Entonces pierde el
nombre de Guainía y se llama Rio-Negro. Esta unión y mudanza
de nombres se efectúa en la latit 2<> y long. O** 59' al O: del meri-
díMio de Garácas, en un terreno elevado solamente 215 varas so-
bre el nivel del mar. El ponto en que el Gasiquiare se aparta del
Orinoeo está á 557 varas de elevación, de manera, que descendien-
do en un curso de 72 leguas, la diferencia de aquellas dos alturas
que es de -124 varas, represen teiia por término medio de bajada
poco mas de cinco pies por legua ó 20 pulgadas por milla.
— » —
Signe el Bie^Negn) el bhsiqo rumbo del S..$. O., y á las tres le-
guas de curso pai^ pqr d^anke del paeUo de S.- Carlos ^ frente al
cual se descubran lo6. restos de una antigua fortaleza : desde allí
hai once legua? hasta la piedra ó glorieta del Qocui , que se tiene
por término prpfisional entre Venezuela y el Brasil : de este punto
se cuentag otras .QBce' leguas basta las fortalezas brasilenses ei^
S. José de Marabltonos.
Para llegar de S^ Carlos al Amazonas, siguiendo eleurso del^lo-
Negro, es necesario recorrer un,espacío de 500 leguas ó poco me-
nos, y otras tantas desde la confluencia de estos dos ríos hasta ^
Océano.
La hoya del ftío-Negro en la parte de Venezuela e^tá demarcada
por el terreno realz%|p que separa las aguas del Inírida y del Ata-
l^apoiíasta el Casiquiare : de allí por las colina» que unen las ser^
r^ias de ünturan y Tapí repicó con los cerros Goai, Imerí y Cupí,
-y en íin por losjterrenos realzados que desde la piedra del Cocui
separan las aguas que bajan á Venezuela de las qye se dirigen al
Brasil. Esta parte de la hoya del Rie-Negro tiene una superGcie de
850 1. c. y son negras todas las aguas ^ue tributa al rio ; el cual
recibe ademas aquella j[)arte de las del OriHoco que le lleva el Ca-
siquiare y muchas negras que este canal recoge en un territorio de
•I .200 K c. Si las aguas que el Casiquiare saca del Orinoco se esti-
man como el produelo de 500 1. c. se tendrá que el Amazonas re-
cibe por el Rio-Negro todo el.tributo de 2.550 1. c. de un territo-
rio de*Venezuela, en el cual se puede valuar en ^00 pulgadas la
lluvia que cae todos los años* Estas aguas son llevadas por 36 rios
y 60 riachuelos ó caños, y á ellas deben agregarse las suministra-
das por una superficie de 2.000 1. c, que ha recogido ya el Cuai-
ma, de la Nueva-Granada, al entrar en Venezuela. Asi .es, que al
salir de este último territorio , lleva todas las aguas recogidas eii
una estensiqn de 1.550 1. c. y es un rio tan importante como el
Guaviare cuando se reúne al Orinoco»
HOYA DEL GOLFO DE MARACAIBO. .
£1 lago de Máracaibo tiene 214 leguas de circunferencia, cal-
culando solamente sus ensenadas principales ; y ^ 2# si estás se
esclusen ; ocupa una superficie de 700 1. c. En el gran valle cuyo
centro ocupa se recogen las aguas que caen de las serranías de Ocft*
üa y Perijá por la parle occidental ; de M Jrida y Trujillo por la ád
9, CIO«« '
■o-
— » —
^ttées 4 }ft pro^«ift de PavnpltMsa «n li N#^ii<^tAd<H ái Mé»
fiel, Tmjilld r l&nicti^ e¿ YeñcaMda, «^b éb|0«Ml9é^ iewm^
ftilStts q<oe fes dan k formtt de ana bepradnra.
Tres declines bien prontrneiad^s def oeste, smftí^ éwtm pút
itB^cTio de ^ id rm y kW rlavhtieléB, todl[9 his^ «gaüs ^ «!« escenk
síon de 2.900 1. c. de Venjpsoela y <^ 400 de hi Naé^-draonda.
# ¿"estas se renneñ las que é^ée&tím whté el diIsbio lage^ sie ten-
drá q^m las agtBH» que cacen en l^á soferfieie íguat a -í.é^O k e«
iHesenibocáiit á! gDHe iite Maracaffee». Ef^^^ase i^te éesagie pof im
bocas ; dos peqneñas, que son ]os caños de Paij^na y Olibor, f etrsf
gpáSftée éb ámrsMmée a^dfmf sifMia^ enti^ 2aj^a f la isla
díB' San Carlos.
Los prineípaks fribut^ros éél lago siE^n ei €a«M«iiibo, ^ue llBta'
k$ agnas ée cin« «teaslonf de 73# 1. e. , d Zaliá és 44l#; el Ma^a^
faw^ 250^ y el Esealaült dé SO^. Caen adetüas e»el golfo, ^e esí^
é estremo sisfónariovial de es^ hfyyá, k» agms de «ttaeíip^(^e
dé 20# 1. e. de Usi peníifstila Géajíra y fos d^ 3^0*1. e. de la pro-'
t^iá" de Cony : ft^ q%re bate aseendei!^óde8 Icí^ terrenos' qfue vierteii
4\st la htffti ¿ 4.1^ 1. cr.
Debe teñera p^séiíite que en las tíeitas is^ merMHonales caeffi
ánnalmente 86 ^/2 pnljgadas de agua, y c» Bafs dd setentrion 52, y
contestas son motiles qtre acjuellas^sé ptrefcn cafeeíar'ft pulga-
das por término tíiédlo, ^ue es tres ve^es asas de fo qUellne^e etr
xCspaila.
les vQ^lés de kfÉgsA son nn f ecMf^ eirevlar túitmá^ por moa-
laias de éífereü^ altura». Al norte tos eerros d» te cadenea d« ln
e^a tes separan del mat : la eiMrdiUerá meridlov^ por el lado
opuesto parte sus límites con iM- pandea ItaMffa»; y taffioa friqpotf
de colinas bastante elevadas para determinar el curso de las aguas,
los cierran hacia et^sté joeste como diques trasversales : por con-
sicae»d»d#e8la eatraordkNffk fiOtfigttÁete áá mmmo, los ría-
ekoeto» de \m valles de Anigtta forjan m %kkmm fttvtieilar^ ikir
rtgbeadi^ su» oatBieAtes bá<ia utla bond^a^Mb i^fi^ftda por toda¿
pmfie»}Y m ba&aate iftaapw ninpmt saUda^ se reunea en un
Jfi^iolfnór,. Sotiletídis ittí á la t^e&m «linettcia dolai cívapora-^.
S4t yira»flokm el wn#éei mar^ liiii# ra p«rlBietr»2SI^ legnas^T
«Mfft ima flipertcle d» tt 1. e. Tl«i« tamMe» 92f istas^ dé
las cotíes algunas 'son meros peftaseds , y ée^ tt ríaetneips' ^uie ht
eaen el 'mas considerable es el de Aragna. El área de les terreudos
de las provincias de Carabobo y Caracas, que por su configaracion
•dnágonMOí ^ «afeáJifBe natoral^ áe Yaleneia , es de ^ leguas cua-
énámj qve^m^as á ks 22 de" ht ^uper§eie*de4 lago, jiáñ á toda
li koya -lOt, sobre las euales' eaeé airaalmenlíe ?2 pullsadas de
aOTA DBL GO^FQ OS CARJAOO.
Al goTfo de &riaco lo delinean la península de Araya, las playas
de Cumaná y costas de Mariquital /concluyendo aj oriente eon ios
terrenos bajos y pantanosos de Cariaco. De las tierras meridionales
^orientales del golfo sé descuelgan 54 rios^ el mayor de los cuales
^ el Neveríi que tiene su origen en Ttrumiquiri , cerro el mas
grande de la provincia. A la opuesta banda de) norte no hai nín-
giin río. Las legnas cuadradas de unos y otros terrenos, todos de la
provfncaa de Cumaná, alcanzan á ^65. En una parte de estas tier-
ras puede estima se la lluvia anual en $0 pulgadas, mientras qae
en Ja otra, que es mayor, no bajan de 70, así es^ que debe valuarse en
4(6 pulgadas el agua que cae en la generalidad de este territorio.
QQTA pEL GOUSO DE PAAU^
■ tf
La parte meridional de la cordillera de la península de Paria der-
r{ima sixr aguas en el golfo de este nombre. La serranía que se une
á aquella y divide las vertientes de la hoya de Cariaco basta la
^mbre del lorumiquiri, descarga en el mismo golfo y el con-
junto de estos terrenos delínea la parte' setentrional de la boya de
Paria. Las faldas de la mesa de Guampa que n^iran al mediodía^,
sirven de límüe meridional de fa hoya, y otras meses ligadas con
aquelfe fiOtt'eomo;diqués trasversales que sé unen al pié de la' ser-
ranía del Tormniqulri, formando así su término occidental.
Estos terrenos, casi todos de la provincia de Cumaná, escepto una
pequeña parte de la mesa de Gnanipa , perteneciente á la provincia
de Baredofta , formafi upa estensron de 604 I. c. , en las cuales hai
90 ríos y mas de 200 riachuelos que recogen y llevan al goTTo las
n
— M —
aguas que caen en aquellos terrenos, püdiiNldo estimarse la HoVinr
en 70 pulgadas porlaño. Los maypres ríos de esta hoya son el Giia*
rapíche, al cual tributan sus aguas 40dl. c.| y el Guanipaqoe f^
coge las de un territorio de 225. " . ^
VERTIENTE AL MAR.
Tirando desde la península de Paraguaná una linea que^trayic^
la sierra de $. Luis de Coro, que siga- después hác^a lál» altas saba-^
ñas de Taratarare y continúe por los cerros que dividen, los llano»
#de Carora de los del Cenizo, y en fin , por las cumbres que s.e di-,
rigen hacia Aguaobispo y el páramo <!|e las Rosas, se encuentra la
línea tnas occidental del declive de la cq^ta, y al mismo tiempo la
mas internada hacia el sur. Los cerros que diviéen el valle del
Tocuyo del de Barquisimeto y las colinas que se estienden hacia
Duaca, y luego retroceden hasta cerca de Urachiche en las sabanas
de Parra , dirigiéndose después á los cerros de INirgua , trazan 1^
linea oriental de estos terr.enos, euyos declives de sur á norte van
á perderse en el mar de las Antillas. Las serranías de Nirgua, Mon-
talvan , Puerto-Cabello, Ocumare y Caracas presentan unas cuestas
rápidas y cortas, también' de sur á norte ^ hasta frente á lalBibrade.
Calía ; entonces se* ensanchan á causa de los cerros que forman los.
valles del Guaire y del Tui y que determinan la hoya de Valencia.
La cumbre de la cordillera del Pao de Sárate y de Altagracia limita
^1 declive de los terrenos cuyas aguas van á la mar conducidas por
el Tui. £n la montafia de Tamanaco se ensanchan aun mas las tier-
ras hasta el cerro Tucusipano , situado entnedio de la¿41anurasdel
cantón de Chaguaramas, y de allí el declive se une por unas«iesas
á una peqtteña sierra que está en medio de las sabanas y da orígep
al rio Uñare. Entonces las mesas de Pariagyan , Cachipo y los bor-
des de la de Guanipa figuran el resto de este declivio, ^ue se une al
cerro de Jurumiquiri y se pierde casi frente á Cumaná para fenecer
Qn las penínsulas de Araya y Paria. £1 total, de este territorio que
desagua directamente al mar, tiene una superficie d^ 2,9071. c.^
pudiendo admitirle , según las diferentes localidades, que por tér-
mino medio eaen en él 72 pulgadas de agua todos los anos. Sirven
de desagüe á estas tierras 250 rios y mas de 400 riachuelos, sien-
do los mas importantes el Tocuyo, que recibe el tributo de 550 L
c; el Unjire que recoge las aguas de 400 y el Tui; por dofide descar-
gan las de 250. ,. * , '
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CONTINíJÁGIOBr Bl U TABLA ^
DE W^W)S ^ VENEZUELA DE 1% »>, T 3m- ÓEMN.
Xas hoyas y sistema dte serraitía á que pertenecen, sus leguas de cu^o^de
navegación y las cuad««das de los t'érrenoi que TÍerten en ellos sus aguas.
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NOMffiEUB
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Sigiapo.
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Orinoco.
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Orinoco.
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Al mar.
Paria.
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Rio-Negro.
Orinoco.
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AI mar.
Orinoco.
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. MaracailK).
Id.
Orinoco.
Id.
d« MiráoSa»
& qtt«
pertenecen .
^afhnt.
íRL
/d.
0e la costa.
Mérida. 1
N.-Granadar
id.
Psrfma. ;
Herida.
anafSBsa.
Herida.
Id.
Delacosta.i
46*
Id.
Parim^.
Herida.
De la cosía. I
#elteosla.j
Parioui.
id.
Herida. •]
Id.
' Parima.
Id»"
Los rios de 4^ orden se encontrarin detalladosisn las pcoaiiiüas.
I
40 —
•*
' LAGOS Y LAGUNAS.
Dos hermosol^ lagos tiene Venezuela: el'de MaracaibO; notable
porsd grande estension, su pcorimdidad , la multitud de rios que
recibe de todls partes y finalmente por las inmensas selvas que le
* fe
ro.1eau. Las cuales brindan al bombre cultivador con todas.Ias ven-
Xajtks de una tierra feraz y virgen, á cuyos bordes pueden llegar los
buques á cargar desús variadas pfoduccioncs. Es también notable el
de Yalengia, por su elevación sobre el nivel del mar, por su feliz
posición, sus pintorescas perspectivas y sus ricas y frondosas tierras,
alimentadas por la constante evaporación de sus a^uas.
Las lagunas son innumerable, sobre todo, en los llaijps ,^pero
la mayor parte suelen secarse al fiit.del verano ó es|^clpn seca. Sim
jembargo , las hai que conservan constantemente sus ttgqas. Las mas
importantes por su tamaño son en número de 204 , dé las cuales
^e bablará al tratar separadamente de las provincias.
PROVINCIAS.
KUMBBO
DS I,A.GUBA<:
Margarita
Giimaná..'*.*.
Barcelofta
Caracas
Barquifimeto..
^oracaibo
Herida
Apure
Guayana......
mr'mm
Total...
I
tm
4
90
*7
M7
i5&
5
5S
43
904
■BBHB
KOMBRt:
DB LÁ PBINCIFÁL LA«fW4 DE CADA PROVINCIA.
Arestín ga , que divide la isla en dos partes.
Guacasonica , que comunica con e| rio Morichal*
largo 7 es navegable por goletas.
Kamo , en la que descargan varios rioa y ella de<-
sagua en el Orinoco / acarreando muUitad de
* arei^ns. ....
Tatarigua, hermosa y riquísima «n pezes, comu*
nica algutias yezed con la mar.
Ciénaga de Cabra, cof as exhalaciones son mal m-
ñas.
*
Laguiteta-grande, hermosa , en la que entran «ba-
lan^lfas y hacen peaca considerable.
Ijlguoilla i célebre por el famoso urao.
Cabullarito, no mui profunda, pero rica en pezes.
Basiba, en donde antes había una misión y hoi
/sirve para la pesca de tortuga. ^
an
«F
^ - CLIUAS.
La tomperatara bo puede aquí determioarse con precisión ni por
UQatitn)} ni por k& altura $(A)rc el nivel del mar; porque sufre coqs
trasles partiealáreí en muchas partes que están en 1a misma latitud
y^ltnra. Bsta diferencia de digaas-se encuentra tanto ealas graneles
cadenas de la. serranía como ép ]{8 ^spadosas llanoras que están á
.sus pies : lo mtnitfo sucede en Ja^ inmensas selvas de los terrenos
bijos f en ías dilatadas costas que están bañadas poc el mar. Las
eaasas de este fenómeno están «n la^ mismas ser ranias^ que {knt su
4ÍBposicion seeqpuentran espuestas á ser recalentadas pochos rayo$
•#oIaare& del mediodía, é á recibir las fuertes brisas que viraendela
«Bar fresaas y aftrgadas de vap¿*es acuosos , -ó bien en las mismas
.brisas que llegan secas y calientes por agrandes llanos que ^an
«travesado. En las llanuras está también la causa de las diferen-
cias del clima , pues algunas reciben directamente las brisas del
Océano que refrescan su atinósfera, mientras que otras &o ttaceu sino
«qnilibmrse y apenas modificar el calor, al paso que lasmas lejanas
redbeo los vientos que .(^an pasado ya sobre terrenos arenosos* y
daprovtetos de yerbas y adquieren un calor tal, (^ cada ráfaga
.parece salir de un horno. También encías seltas pueden boscaase las
• cansas de las mutactones de la teróperatura : unas , recibiendo los
viqoílos regulares modlGean con ellos su-cafor, otras, abrigadas por
las altas montañas no esperimentan glande alteración de los movi-
laientosatíbosféricos. Hállaose algunas situadas en parajes de eterna
calma, y regadas por ríos caudalosos que mantáenen la frescura del
4ire , mientras que otras en terrenos ingratos no reciben sino aguas
llovedizas que absorben los vientos cálidos y secos del verano.
Por. último, las causas de esta. diferencia de climas s6 hallarán
también en las costas. Aunque situadas estas casi en^l mismo pa-
ralelo y al nivel del mur, están sujetas á influjos locales que mo-
' dificaa sensiblemente d temple del site. Azotadas unas vezes por
las brisas del mar , otras abrigadas de 1«» rbosques ó. de las altas
montafias!| no pocas sujetas á la reverberación ardiente de las fal-
. das^peñascosas de la cordillera litoral , presentan tantas dlbirencias *
cuantas son sos posiciones. Los terrenos Acos ó pantanosos, áridos
• ó cubiertos de TegM9^n,^ue están á barlovento de cada costa ; la
«Myor ó menor oblicuidad con que son estas batidas por las brísúB
húmedas y frescas de la mar, y la presencia ó ausencia de los tar*
f rales , son^causas todas qne iaflajen poderosamente en su temn^ra-
tnra y salubridad. ^
JVmiíacieKdo «l)fltecefeMi M M^ d^ «sUs etea^s locales ,
jpepfliéeraneqx» el türttoríe de ¥«MnKla dIvMo en tMs £«B^Íte
len^raÉaras , se^fHi mm dUéreátoe tüiiras 8il>mél irfyél 4e4 ««r.
>¿6ta6 tM6 .«HU» «e fnedea clasü^, rtgaiendo la étíkoumaéaa
Uarüda im<A fm, «i ttmns !($««« tenfiada^y eilíéas.
Eo las latüades ^ t« á #« ^ eaeMolna enVeiüaaelalasjaltaii.»
«as aeradas, & ]ím\UMeti»tá(tl9ié mmw ea^^iesa áias 4,9^ m-
ims sobce ^1 urTcá dÉl muí, ^xmq^e «b tieiapos «iterasos méim.
4errefá«e basia lai Sy4M van», desde ya sm feraiaM»let. im
poHitaa Mas ttorada84ela«rdpera 4e Mecida, esfcwa á S.47t ^w-
sas; pero desde k» f «94$ cesa l«da ^e^Mwñ ^^l^.hm ünvageaf
la^aigas se «freeen «Igunus^efesá la vista, esooniídas kiaje el4iielo
-é rocMea par la mme, A ia altumi^lcba se «ftanüeae el^teména-
tfo«BKt%cihdo 0flÉBe 2* f 9* oabee )0.
Na ea'ittQ^o la áateoi&dad 4d Imo onanta ^ influjo de«»irieslo
iiawio y ^latgBBfdidoy^ jbp «ce nciaadwa ^ la^qne dcüMie «mih
^qmttas aitncas >d desMoaia de iosigcaii^es vegetadas, iiadéaMas
:id josissia tíeaipp iaitaMtabtoa pwa el iiaaibre. fiata «ona-fría a^^ea-
itíeaAe^dMde 2.¡m ítiate ZJiSd wrasaobDe el mnel del fiiar,*y «
tawpeealMi se .eneoeulra eatve -1)9^ y t^M 4eMii¿melro ssa^f ■
14» aiemts ten^tladas efofiena desdeia aliara ie S.MS, varaa^
dbijtti iiaal% 7e«. n €$\&r 4)adia eslae 48» y «<> $0. En eala 4l#a
611.^116 la lempeinliifa es 4podepada, se puede <escogcr á 'VokHMadi
4l<eÑoia aniego «I gvato, á ila jcaetttmkie é á la<sakid de ^da te-
di vidno, así üofflofil deBarrolle de eaai tedas las i^airtas 4Ílile8«!
faombve ,* eiHpe las eijoám iml mvxiáu qw «no pueden pro^rar
iiiera de^slis Üniátes.
Xas üerfas eaKdas están desde 7#d varü Meta el nivel del^fliar,
cy en «lias marca ^al lermóoMre de ^9^M & 27'' S9.. No«s aseeálao
este calor, peso su «eeMn onüapsief conalante, los mnafliaa q9e
aelevQQtande los lierreiies panlaaosas , la.putréfoaeion'iáe las 8«a>
taneite vegetales é k^lnmadiarian de las grandes selvas y noáat»
inisiera cargada 4e hiidiedad , desarrollan en «n esla aaaa fiebrcs
«os ó menos periiielasas ; espeeMneaie «n aipi^lds •piHitaa«eii qaie
Iftinataraleni ha desplagado toAo éí hí^o ée ia iPe§i¡adoa aoaal^
r " »
?<^finnte füteMee á ia Tt^gm dd TianÉ» foé foitíf^MaBmm
prisüíto , ffe¿9M w«áo cisQl» de ki^éDWi del tal y dd aM?i»
«esto de fai tie^' «e dWfe de este á «Ate^ttñwMB^re «íte
tñeiit» «B «oa lOsa cea'fie^J^ |n maánm JaJüdci, Uéauee
«Miil»tcpi«lewíofei»0nff;, |wrq<te ee eicpciito «i teefwmdeB bmik
ves : el wtmlae de fkfttos.^UMHite te de pér «er «ottiftale 4»-
IM ie^lrdfiei^ y w lM<MlM<de V«DeMRd^4BS4»AMié» «wt«l de
brisas. Este es e] viento que áeiat c» «1 fAÍs, flnrlimowdn mk prnt^
4 neiie, «s déüc, del ivoideite; difiíklo'aw fcwrtn de^ qiietfe
ásete y «sffripBSláBdMe «n «i -afto firiodo»lMMi asfiOidoB qm
WD fueiacidos per la mafyor é^Deaer^fieUneia del sd. lEs ^«^^t
€rta to censa de WMtos «ik»%t0tMNin9s fitie «sÁrteB «■ ia «bi^mi
délostFáfíeoB, laUínfioM, 4S0BeQiite ooiielJMinÉred«l^
ia «wa omél de «ersvie. ^erifiease la ytjama «inndo. d «»l eflUí
«B<cfl/7Y^;li^4stfd9i0ei!^y«stÓBokte motos .fBjai^lefpasMi «»-
lieimr y«e^,dfeBda<€»tpe8eftjie4)ráiimiiio.^fll4ileiBp»ieB 90
«e mftiáBiefAmi liief^ tedas aeeminiuidas ée toieta. flai día^
«onqve oomiicllies, ^en foe oo^aiíe «»a «gota de ^^tñi, «mdoieed»-
vanaraeste «uistuEte y -cepiesa la limria. Por -«i «ÜimAí apnnliQA-
#0, fiiede estalAeceise^pM 6Bf fna «Mpaeada M por >áiñwo »•
di» lees hcnaik^a tto^a «ada4ia, >oayemiD*eiBla oadtnaiWHawBite fsr
iWttMMy«DiiHidMSfarieapffJaii&dK.iA«Btam b^
ffwio es 0Q«id»^elialk'el«iri:báina4d1^t$f^ |Í0áaaprteof»m;^Bn^
tAnees «e ^eiftalftaa 4es'mntes dei^ pvtet^ N'.IL yáaBÉfaáea«
mtfev^Éifmm mA ifjseseesdtí tL 7. fi^^ (K, ¡aieiideiMS IfscnenÉv
«B smeiDlNNB y dioieBailaie cpie^ febmÁ y mana. Ea dM«s jb^
ees ^nélen 4»er 4aiii]»ien tflgims iteiMaB , a»» itan Inaalea tecfino lis
^1 in¥iei!iM]> , ewJOCTJa» eoB elaiaHShge^eaioffag, y no se fialifr%a
HNroho de las^oeélas adetftco. Borilo^di^iie seontíie em cofiecimienlD
f«e el ^ieir^'l^ Venenela *es en l«s ««eiesde ^1 á aoliiliK^
-m les GaiOes hai mas ealer per ja.aproíinid«0i«i dd jeLial ibemlfie-
«ie tiop^l y la eesaemí de las fapiísas, reeniplaaadas per tlasfoolnaB^
^r tos molos ic&Mos del «md^odk. En los «tas «ais^onas, ^ae
wa^ deiPQSiiiie, %m tnáaesioalw, ipw estaar «nléBoes el so1«mÉ
lMmrisferi^a«Miii1, y seglar los iáeadhfeiiBE«BBft3|iae:rieaBP
trion. Estos vientos ó brisas soplan entre las nueve y diez de la
?*
— A -^
Sanaj^-Aamentanao de faena á pro^rél^n que el sol sé lerapta sobre
el horizonte, y disminuyendo en razón inversa , de manera) que
cuandd &le astro está en el meridiano , entonces está el Vientb (^r-
9^ del n^xiÉciuñrde su fuerza , cesando casi del todo cuando liega
ai ocaso. A corta distanciii de las tierras catma de nocife la brisa de
Atar y es pe^aiiáacaia pbr el viento terrál^ que proviene del enfria-»
miento desigual de las agys y á^ )^ tierras. Esta alternativa se
veriOca todos loB.dias , á escepcion de aquellos en que soplan Iqs
•inent#s fuertes del Borte ó del fur. 1^ primeros se esperlmentan
desdf octubre haSla n^ano y los segundos en julio, agosto y setieót'-
* kre, que soo k» meses mat lluviosos.
9 El iet^ü, que corre, del interlbr.de las tierras há¿la el mar, se es-
.tablece 4ntes de media noc^e y~ sigue kasta la salida del sol , y aun
algo mas tarde, mediando' eWe diíterral y la brisa un esfpacio de
algimas horas en qué se esperiment^ calma completa. Solo las cos-
tas.de Guayana son una escepcion de esta regla : nunca hai en ellas
terrales ni otros viesios que los que generaliaente se elperimentau
en los trópicos, opn esti^ mutaciones : en enero, febusco y mano
los viéitas soplan d^l N. al £. N. E. y él tiepipo e$tiá<;laro. En abril,
jnayo y junio son del E. al S. E^ En julio, agosto y seti^nbre no
hai #as que calmas y turbonadasi^^e llevan los vientos del S. al S,
•£. JPor úHimo ,* en octubre , noviembre y c^iembre jiai lluvias no
•mni (uertes y el eiélo está por lo común nublado. En la estaciogí
seea^ que es desde enero basta marzo, los calores sojí raui fuertes :
•%n la húmeda son continuos y mui «ecios los agji^aceros y las iKh
nadag. En la provincia de Giiayana llueve conslderabl^ínente, y loa
repentinos y vlolento|.chapirrones de la zona tórrida dan mas aguas
iea un día que las lluviaade Europa curséis. En las demás parte&de
•j^enezuela sucede lo líiKmo; sin^emba^pgo de que hai puntos 4m
qtte la^ilttvia es menos abundante que en lo^ selvas de la Guayana^
¡Durante la estación lluviosa' hai un intérvtlo que anteeede ó su*
cede al dia de S.-Jüan, en el eual cesan los agualBkros. Esta inter-
rupción del in^^ernoy^que dura j^egularmeñte uifiríes , se denomi-
na en el pai& el veranito de S, Juan, En la elevada cordillera' son
<casi constantes las lloviznas, sobre todo, después de la salida del
.sol.. En los páramo» cae freeuentemente granizo y nieve en lugar d^
^gua, y casi siempre está cargada la atmósfera4e una niebla espesa
-que ee disipa ordinariamenletlesde media noche basta la salida del
fol. , '
— 45 —
» En las descripcidnejij^ cada provineia. se haUari de sos ^^ren*
^es climas ^6 las épocas de las Iludías y de sns efectíDS. \
ASPECTO FÍSICO DEL PAÍS.
\ Como entramos en el mar llamado de Colon en los primaros
tiempios de I%con9nista,'aéBtinios penosamente alBirtado el ánimo,
al pensaren la injusticia con que la superofaesia de u&.aTénloreira
t el indolente desenldo de1o«na<9<}naIes privaron al Nuevo-Mundo
del noitabre de su ilustré descubridor. Nf aun este p^Heño mr
pudo conservar por mucha tiempo aquel débil leslimoniodo Ingra-
titud de los contemporáneos de €oIon, pues lu^go ae le imposo^-y^
hoi se le conserva el nombrede mar de las AhíUIos. Hallase Me
encerrado como un Mediterráneo, entre las costas del eontinente
por el O. y el $., y considerable cantidad de 'islas coHodias con la
denominacioade grandes y peque&as AnfiUas^ qiie^n grupos alinea-^
dos forman una barrera ti oriente y setentríon. Habitaban estas
antes de la conquisU u» crecido aániero dé tribus salv^^ sin
ninguna industria, sin culto y casi sin faogaf ; peroboí se ven lle^
ñas de indiíviduos de diferentes naciones europeas que. han* llevada
allí el cristianismo^ las ciencias, la agricuHvra y oteas artes : que
han convertido los desiertos en hermosas ciudades, en campSs li^jj^
labrados, y que pueblan con sus bajeles aquellos mares que eli otm
tiempo soló surcaban las piraguas de los caribesantro^fagoat Goaii^
do la Espa&a velaba codiciosa sobre las colonias para mantenertatf
incom||p.icada8 con el resto de la Europa ; cuando á ningún estnm*
jero lé era permitido penetrar ni aun llegar á aquellas tieri^s^)!^ *
que apenas se conocía la existencia por el oro de sus.mteas ; Vene-
zuela debió mucho al vecindario de aquellos estabieeiiniento»^dft
la^islás, recibiendo en cierta manera, de contrabando, k'iniuiA*
dé Y eMmpulso de una civilización mas adelantada. Convertidas
aquellas 4slas en iaetorias de los pueblos mas induatrioses y.maa.
cultos del antiguo continente, puede decirse que la Eutopa se ha-<
bia acercado á pQoasí leguas dé«la costa fínkie, y le trasmiiía ücH-
mente ton sus preciosos artefactos el producto aw mas pceciósp^e^
sus luzes y de su filosofal. ^ .
Cuando jse obserya c«>n alguna atención el flH)do eomci están colO'v
cadi^ los dos grupos de cerros que componen la isla de MaijgaiÜa^
la fttuacioa 9e 1^ de Qqííb» y Cabagu« ^:^QMc|fe.del: «^ que.se-
pM» «fMift 4» 1» 0Mii?> y A pM» tand» 4e «My «eonii Mt«n(-
lio parte de la tierra firme, y que fué desprendido por efecto de al-^
gnn fuerte sacadiooieDto (pM preeipít¿ una parte al fondo de las
aguas. Los grupos de los Testigos, la isla Sola, los islotes de los
fattes j la isk'dc k Tctiv^a, parece» tmááen mtos d« tíerri^
qm íwfícm müHmgiílif ^w itorf N. te grupos de tes í^^iI^és^íUs,
k4)«ekiila^ ks Seques y la isla de Aves se de|as iper coem pustas
^ mta nteta covéiHeoa, euy|.asli^ peakíaii revean en aquef
«pick o^qMNlo koi pof -tos amnes. f«l fes ft^ma estas^ «ks di^
thrt^C.i-.d.»«ltdl«q«„«i« 4 I» « «-l«^, I,
mm em k a^hEmkr^ée Caro por k peak <k Tteaen, la oti» esa k
|M<B9iik de k Ckajfara:
& eski íshs, q«e forman como una bmrera m kmie de la'eoe-
Isá Jde VeMSttek, bal inui ricas saliiias, críase en ellas ía yerba €9^
ckihíj tan útü para k fabtiicaeioD de toa erístaleSy abuadan en mo»
ehas las torlu^u, y ev la de Aves se, reoaen ininkos peores mari<^
aoa á paner soa faueyoa qwe pny?een de mantenimiettlo á las gentes
pdk*es de laa Uaa. La Ifeuigaríta, Umf conocida y codidada e» otro
Ikmpo pórl» bermasas pedias qoe llevaban sm nmnbre, eis bol la
kk mas impártante qne posee k repóMica. Su vent^joáa posicioa
Imf^qfie «i eik se eslafaieelesen los espaieies c^de muí al prín*
aípio ;*p6ro st eatónem ks slrnó de punto de apoyo para descubrir
Y'MHlekr ^««BlkeBle, mas^krde la covnrtíefun sus valerosos ba*
m^mntLWámmM cmm el c«at estralló k Espalk d mas
naDttfnsoy iáaa aguerrido de cuantos efúrestos armé para fprímir
klüknrtad americana. No existe ya k pesca de )>erks qm k dio
iank cekbfüad^ annque suelen todavk obtenerse algunas mui
iMrpiosaa. En fes primeros tkmpos de k eotiqukta eran tan abuñ-
daittts en eMkk y en la de Cubagua , que atmdos á k iHtiqía
iBicBos isomenianles y-aventureros^ fundaron una dudad con' el
■OBÜveéa Nl^va^édis. Mas larde quedó esta abandonada, cuan-*
da laaperks en^aaron á escas^s^, y abara ^re sus<eoslás y ld&
de i^aya tíenmi ks habttanks de Ikrgarita y Gmpiá una riqueaa
mns-eipetít^a é inagotable en k abMdante pesca de la Hsa. En dk
consiste el príndpal mantenimiento de sui v^nddrks, quedáj^
4de8 un gran ufbiñnfe que estra^sa pkn Tos puisrtos de k coste Ár-
melo pira ks Aslttks.'
Jiapro|i¡nánd^atoa mm^é k oasla iManEÉMmos eon alguna aim-
— #í —
doa los coUot d« Facia y da Gaiiaco,^ cree t^i^ODOcer eas^baxu
«i efecto de na saciidiimes(a, c|ii6 roaipieiido las. tierras dio paso é
ma irropaon Tiolenta .del Océano* áud está eon&rioada esta sos-
l^cba por la tradicioo ,, paes selueiita ^ue en el siglo xv^ cuando
Crístóhai Colon visitó á Paria en su tercer viaje, hablábanlos indios
4e aquella ^an catástrofe como de un acoolecimiento muí reciente*
Las islas que arednan las costas altas y peüasoosaa de fonnacio-
oes iguales a las cadenas interrampidas^ y que parecen residuos
del terreno desaparecido; las diferentes foentei termales que b^o*
tan á la orilla y dentro del mismo golfo, elevando la temperatura*
del mar por espacio de m«iia legua coadrada ; el petroleum que
cubre la superficie de aquel senp, estendiéndose a grandes distan*
<3aSy QLs mncbas aguas termales bidrosuICáricas ; las mina^. de pez
Mastica, á vezes inundadas ; los peñascos que en cordillera asoman
sobre las aguas desde la costa firme .basta la punta mas merídionqi
de la isla de Trinidad, las Bocas de los Dragos y la dirección y cons-
trucción de la serranía de Paría y Triflldad , todo hace creer^ que
la tradición indígena era cierta y no mui remoto el sqpeso*.
Mirando bácia el cabo Codera, se recáxnoce la cadepa de monta*
Sas que allí termina y que antiguamente debió estar unida á la p^-
lúnsula ^ Araya, aunque acjuel grande espacio tragado por las aguaar
»o presenta uiogunos restos de su antigua existencia. No menos
dignii de adidracion es Ja forma que ofrece la península de Para-
guana, apenas unida por un cordón de médanos á la costa. Las
a§na» termales que conserva «n el cernió de Santa Ana y su mis-
ma figvra ^ dan á conocer que es un resto preservado en las revo-
liidones que lia sufrido esta parte de la tierra.
£1 golfo de Maracaibo, que eo lo antiguo llamaron los conquista^
dores de Yenesuela^ á causa de la semejanza que creyeron encon-
trar entre Yenecia y las habitaciones construidas por los indios en.
medio del agua, da también señales patentes de haber sido origi-
nado por el mismo gran trastorno, que bundiendo una estension
considerable de terrenos , lo poso en comunicación con las a^nas
4el Océano. La |M>»cion de este lago al estremo occidental de Yenc-
zoela y en las puertas, por decirlo así, de la Nueva- Granada ; sus
opstas fértiles y abundantes ; sus ríos caudalosos y ricos de precio-.
SM maderas; todo, en ün^ hace que Maracaibo esté llamado á.ser
U110 de los puntos mas florecientes dd comercio nacional. La raza
Ceros y guerrera de los indios Qoajiros ocupa la periínsula^de su
— 4S —
nombre^ y los natumles oomervan 'su primitiva indepeadencia, A-
bida únicamente á sa valor. Al estrema oriental de las costas de la
república se encuentra el inmenso delta del Orinoco, habitado de
los Guárannos, raza de indios dócil y apacible, que coúserva tam*
bien su independencia ; pero que la debe solamente al suelo cena-
goso en que se halla. Quizás estos pantanos y terrenos anegadizos
en que los naturales se ven forzados á vivir >obre los árboles, seráa
álgun día como los terreno^ cultivados de la Holanda , el emporio
de la agricultura y del comercio.
* Las costas de Venezuela , tatito por la seguridad de sus puertos
como por la tranquilidad del mar que las baña , y por las escelen-
tes maderas de construcción de que están cubiertas, orrecen^ los
navegantes muchas mas ventajas que las de los Estados*Unidos;
así lo asegura el célebre viajero Humboldt. Es diKcil en otra paile
del mundo encontrar tantos surgideros en un espacio de costa igual^
y posiciones mas á propósito para el establecimiento de puntos mi-
litares. El estenso golfo de Cariaco se puede considerar como un
grande y abrigado puerto, capaz de contener todas las escuadras
de Europa reunidas ; teniendo en su $eno la laguna Obispos, que -es
uno de los mas hermosos puertos de la América.
^ £1 puerto llaftiado de CAibellOy para significar la mansedumbre
de sus aguas , es digno de particular mención , así por su natliral
abrigo, como por la facilidad que en él tienen los buques de' ar-
rimar á la tierra.
Mochima es uU puerto desierto, pefo bello y grande, con fondo
proporcionado, costa limpia , dársenas naturales ; teniendo salida 7
entrada franca con la brisa. Se le considera como el primer puerto
de la América del Sur, y aun como uno de los mejores del mundo*
4i0s bosques cercanos á la mar y las mismas costas abundan en
maderas preciosas y de construcción, que pudieran dar abasto á
muchos astilleros.
En una distancia absoluta de 260 leguas de costa, hai 5^ puer-
tos, 50 ensenadas y thuchos fondeaderos con buenos anclajes en to-'
das estaciones , siendo esta la causa de que en el día sea tan difícil
contener el comercio ilícito. Mas esta desventaja que se hace viva*
mente sentir ahora por la falta de poblaciones en la costa , será al-
gún *dia uno de los elementos mas pódeipsos de ^ prosperidad dé
Venezuela. Nada es el daüo que actualmente sufre el pais, en pfo-
porcios á las grandes ventajas que Irecibirá desi^aes. No sucede
— 49 —
ti^ como^'én otros'puntos de la Am¿ri^ qne ídolo tienen nna que
otra TÍa'para su comercio. Venezuela eu esta parte está fayorecida
porlánatutaleza : todas sus costas tienen pueftos y entradas fáci-
•les/y en lo interior, canales naturales para su comunicación.
- Lasix»stas provistas de ricas salinas, abudantes también en pes-
ca ^ tan variada cómo delicada. Allí no se conocen las tempestades:
-sus mares siempre bonancibles, apenas indican con un grueso olea-
je cuando algún furioso huracán ba devastado los campos y su-
mergido los buques y hasta las poblaciones de las Antillas. En va-
rias partes, cuando ningún viento arruga la superficie de las aguas,
son estas de una trasparencia tan sorprendente que se distinguen
ias rocas y las arenas á una profundidad considerable. Y cuando
désfues que ha pasado el sol por el meridiano, llegan á acumular-
■^e densas y opacas nubes cargadas de electricidad, este aspecto ame-
nazador del cielo, solo anuncia al piloto acostumbrado á frecuentar
estos mares, un soplo de viento que apenas le obliga á amainar el
velamen. Tierras felizes, llenas áé esperanzas, donde hizo Dios sua-
Tes y apacibles los vientos y las aguas,' puro y sereno el cielo, fe-
cundo el campo, dulces y hospitalarias las costumbres.
^ Rápidamenterecorridas las costas, pasaremos á las zonas del in-
terior.
ZONA AGRICULTOR A.
Ningún páis de América tiene tan marcadas sus zonas como es-
te. La primeca que se nos presenta es la de las tierras cultivadas:
la segunda la de los pastos y la tercera la de los bosques; presentan-
do, como dice Humboldt, una imagen perfecta de los tres estados
de la sodedad : la Vida del salvaje que vive en las selvas del Oií-
noco, la del pastar que habita las sabanas y la de los pueblos
ugríeéltores que residen en los vaHes 'altos y al pié de las mon^
tonas de la costa. Empezaremos, al describir esta última, con el
mismo Humboldt que dice : « Cuando un viajero que acaba de
« llegar de Europa penara por la primera vez en. los bosques del
41 Sur- América , la naturaleza se le presóla bajo un aspecto ente--
«. lamente nuevo. Los objetos que le rodean le traen á la memo-
€ na aquellas pinturas trazumas por escritores célebres que bab
« examinado Jas orillas del Misisipi en las Floridas y otras de las
« rejones templadas del Nuevo«Mundo; pero mui pronto percibe
li fiA69 6ÍD9 en BM^io" de k soaa t^niday ni taio^efi^ eo osa de
.« te islas ^ceidefite^ sino en a» fastísimcy' eantkiíeata deade todo
« es íigifflmtado : las nlai^aiift; los ríes y kt misadek f^etadoo.
« Si la bellesa de uaa eseens^ puteresea le CGamm^^^ es kay^ble
« deintr las varias emockMies que o&a^iL su imapiadiC» ; apésas
« puede dísiuigiiir kK fue mas escita sa sorpresa, ú el pceliiiido »»
. ft leacio d» aqueHas soledades , la belloxa ifidividflal f d ooatrasle
» de las f^nnas ó el TÍgor y firescara da la vida Yoptai qua earaa-
« terina el clima de losr trópieos. Casi se puede decir qae la tierm
« agobiada ha|o el peso do la» plaatas, bo 1«8 permite safidenle ea-
• pació para desen? olyerse. Los troneos de ks árboles estóaealer»-
ft méate ocultos bajo vmá espesa alfombra de verdura; y si etof^
i ehidoe^ el pipers y el ptübm^ faesoü dodadosfluneate traspla»»
c tados/bastadaapara cubrir una vamaMa eirtensioad#tiei?ra. Por
a esta reu&ioa singukr taato los boaques eoBio loa eo^tados, ya de
«h las rotas ya ée las moats^s , eariqueceB los donaiaios de la' na-
tt turaleza oi^ánica. Estas ¿lisaMia lianm qae serpesteaa^ por k
« tierra , suban hasta* la cima de lo» ác boIeS| y pasando del uno al
0 otro ascieadea á la altura, de aias de cien^pies.. » Rápido, veiida-
dero y hermoso cuadro escrito por mano maestra; mas sia en^
bargo, allí no vemos sino lo grandioso y j^éllo cbifio tierra salvaje:
son las impresiones que eV europeo reaibe al contemplar por la
primera vez una tierra virgen y potente, distinta en el aspecto y en
la^prodaedoaes áñ aquella que haivistadesdesu iitfá»ciai;; iaipre-
sioüea tistato^sias proftmdas y ani^te^s ewuit^realian) te ideas da
los táen^pos* primitivos, qlie se «nea en samanta ate peMipaa di
k craacioB an sv pureza oríg^ned*
Bepoiia no vadlas en sostoiser que aiagnna párfe dÉkk^iaiéfica á
eüst^uier ktlGBd que sea poedu^coüipai^une con: esto tefeitilida¿|
vavicMkd y riqueza. Efeetávaaieate es^así , 7 para bian wpsñtím ea^
to es preciso miravio bajo^l asista veaiieca* Noqaereitiaivpittkf
etMdm idéate , eoacetódes per iijoaginaáoaes esift^ciaifts k fuea»
M de eaüMíaBi&o^; ni instÉter qatiaaiaa tepeay^te» TraCsremiM ú
de bosqueiar te adelaJitea qae estés en el óafea da te p^ogMoi
bttmaaos : las nMjoras qde deben espü^cva da uaa pobtedan qreí*
atete en un. pna que posee graadas^vealti^aalnrate ¿ la^madifiK
aieioües predsas que redbiré la (imA de maüo» de k diSi«uáoa
1 keidtimr» FaofiQramaosy por (oíAt^ destirü# tofMoideamaiai
íáÉifitíM» <p^é i»tátt G&ti* eufH^HHrs» y te rentaja» parciales de cáék
«áa ,^r i^recamos esüi» métodb el mas sencillo y clhro ^ á^ la V€!2
^e el imito eoiii|>attt))e con Ibá límites estrechos db estáf obra.
(a oQUmerd- qae sínrede barrera meridional al mar de las An-
tfb» afea- en toda III Ibngftúd dé la costa sns íktdas escarpadas.
■cKshife' de eUas están constantemente batidas por las olas del mar
T'elri» llenen' á perderse á poca distancia de sns orillas. De tockis
tstas altares- bajan iíds á la sombra de espesa y lozftna vegetación*^
^á^ medid» qoesei^ande Fas enmbres empioa(]^s, se abren y
cnsancban kiB estribes de Id montaña, dejao'do valles mas ó menos
i&cliitaddft^ masó méa^ espaciosos ; todos útíles para el cultivo de
tocaSa d(» a^car, del árbol del cafó y mui especialmente del que
pvodiice la' estimada almendra del cacao, qne por sn calidad y
AttBdnndá 6Bcede á las mej(>res conocidas. Cada valle, pues, tiene
ra rio, sino navegable, capaz de dar los riegos necesarios ¿ todas
las kad«idas qne aÜí se pueden formar. Desde que la cordillera
s^ aleja de la- orilla dd mar, presenta grandes planos inclinados ^
4lQelfficafA9s pop las agnas que se desprenden de las altas cimas , y
Ittite aifudlos como estas están ocupados por selvas que hace im-
fienetmiblM sa Injosa vegetación. Cuanto mas se internan los cerros,
t^to masr se estienden las hermosas llanadas en que el hombre
aniFno ha heeho resonar el golpe del hacha. 0 viento dominante
qae pasa sebre la vasta ostensión de los marei?, chocando contra
isffg enormes masas , deposita en ellas las partículas acuosas que
Vivaba en tormade vapor; y por su medio se eonservan la frescura
yknmedady tan necesarias á la vida vegetal.
A cnalqnier parte qne se dirija la vista^ causa admiración el aS'
pectb ée aquellas sdedades incultas ; pero vestidas con todo el lu-
je de mía ttaturaleasa vigorosa. Allí se encuentran mil especies de*
ataderas preciosas, el ineienso blanco ó gris, olorosísimas resinas
y gOBOas mni estimadas , bálsamos de' aromas y virtudes en estre-
no variados y útiles ; miel en abundancia. Difícil si no imposible
le es al boabre i^netrar en aquellos bosques tupidos de malezas j,
f apenas es^dado atreverles por alguna parte ó medirlos con lá
yttíA desdealgnn punto distante y elevado.
Lffserraaíaque en algunas partes tiene flancos escarpados, en
elta» conserva planos s<4Nrepuestos en escalones , presentando me-
sftif 40 m eltear dÜMosO; en el que prosperan el café, el añil ; el
n
— 52 — ^
4
algodón, la c^a de azocar ytambm el cacao. Si se sube á las eiii&>
broa, se admiran las varias ramificaciones paralelas y trasversales
.quedan origen á inCnidad de hondonadas y TalliBs, donde está hoí
Ja masa de la población y de la agricultura. En estreúio bellas son
lias perspectivas que cada punto presenta. Hileras de cerros peladcfi
i vezes, á vezes cubiertos de monte, foromn agradablesvcontrastes
con los pocos campos labrados de los valles , los cuales se presen-
' Jtan matizados con los diferentes tintes de verdura que dan el maiz,.
k caña, la yuca , el añil , el algodón y otros muebos frutos de cul-
tivo. Cada uno de estos valles está regado como se ha dicho perdi-
gan riachuelo, cuyo curso se distingue á lo lejos por la mayor
frondosidad del bosque en sus orillas : y mientras que estos ofre*
cen un color casi uniforme de un verde mas ó manos oscuro y á
vezes salpicado por algunas flores, otros grupos de bosques alinea-
dos hacen ver que deben su existencia á la industria del hombre.
Compónense estos de búcaros { eretryna ) cuya sombra tupida
defiende las plantaciones de cacao y de cafe contra la estremada
fuerza del sol equinoccial, y contra la violencia de los vientos tem* '
pestuosos. Las diferentes flores de que se cubren al mismo ttempd»
que se desnudan de sus hojas verdes, dan un medio fácil para dis-
tinguir las diversas clases de bucare, en aquellas mazetas rosa<hs ó
naranjadas que matizan la campiña. Por otra parte se ven cuestas
rápidas é inclinadas, á vezes medio cubiertas por las nubes, y en
uno que otro punto de sus faldas el syrco estrecho de cafetales sin
sombra, porque allí , la natural templanza del clima hace inútil el
ausilio del bucare [»*otector. Contribuye también á embellecer y
variar el paisaje , la vista de pequeñas llanuras , ya verdes como la
paja lozana que las cubre, ya amarillentas cuando esta se halla de-
secada ó marchita por el rigor de la estación , y ya ennegreóidas
por el fuego , cuando las yerbas han sido quemadas para acelerar
a reproducción de los paslos. Én medio de estas praderas natura-
les, en «scaso número y sin orden, se descubren algunos grupos de
árboles frondosos ó de verdes platanales con que el labrador rodea
ó avecina su humilde habitación y de cuyos copiosos frutos hace su
principal mantenimiento. Si se pasa de valle en valle , si de una
cumbre se sube á otra, siempre el p^tisaje será variado y pintoresco,
aunque debido mas á la naturaleza que á los esfuerzos del arte ;
pues las tierras desmontadas y cultivadas, son insignificanles en
comparación desaquellas que están cubiertas auo con so ropaje {vi-
^
— 55 —
odfivo. Los tíos ó drrof os qtie abundan en f o^ esUi zona , sifren '-
para regar los plantíos en la eftlacion del veraoO; y pocas vezes sa-
len dé madj^e entteinpo de 1as:|(raqdes Uaviís ; porque coffeupor '-
eauces-muí profundos qae ellos mismos se has labrado y que nada
deben á k mano del hombre. De ordinario se ?on cerros pelados
con maficbas de verdura que empiezan con las cañadas, y que á-
medídrijue estas adquieren h^bodura y ensanche para contener las
capas vegetales que arrastran las lluvias, forman paSos de selvas
que aumentan en razón directa del crecimiento deharroyo y de la '
estensiQn de sus vegas. lPor todas parles se descubren montañas-
myéB árboles pandeen pegados á las rocas, y se elevab corpulentos
en medio de un verde easi negid, cerrando y entretejiendo sus co«^
pas de manera que impiden la entrada de los rayos del sol. Estos ^
varios aspectos del terreno se encuentran también en el declive
que va bácia las inmensas llanuras, y varias hondonadas fértilísimas
H y desiertas, presentan todas k^. ventajas que pueden ap^ecerte en
tierras de un clima templado.
Ríos caudados descienden casi 'paralelos, y abriéndose paso
por las grandes cañadas de la cordillera meridional , se avanzan al
sur en la zona de los pastos. Colocado el vlajefo^obre aigub» punto
elevado y dkígiendo sus miradas hacia aqueHas inmensas dehesas,*
no puede seguir con la vtstfl el curso de los ríos , porque-el calor
levaqta vVpores que produci^n una ilusión singuiar. Dé repente pa-^
re^ trasformarse la llanura «n ub vasto mar sin horizo'iU^, que
solo cesa cuando el sol va declinando ; siendo perfecta la ilusión
* pefque confundido con el cielo, iiene para eKobseiwador el movi*
^ miento .jíbratorio de las aguas. ^ : ^
Desde la región de las tierras calientesf se pasa por una grada-
don imperceptible á medida que|^ sube hasta llegar á las templa-
das. Álliiel clima tiene la frescura agradable del otoño en Europa'
y los campos os|entan siempre el lujo de la primavera. El trigo y
todas las semillas del antiguo continente se desarollan ron yigor, y:
en cualquier tiemfio del año están verdes los caq^pos y Iob árboles
llevtt flores y frutos ; pero á medida que pasai{ios hacia las regio- '
Be8%as , la tierra se empobrece, la vi||etacion és mSsjlébil y los
^boles ya mas pequeños no son sino meros arbustos. La falta de
utt calor vivo y oenstanle , la rarefacción del aire á tan grande
elevadon , una atmósfera^si siempre n^ulosa y cargada de hu-
medad, y los vientos que allí soplan con fuerza estraordinaria, son
ta^., siao qite almyciaUi» ál hemtoe d^^iiel oiifiiadesabiiido.4i»»
^0 algunas ca^s^ encnentoan si pié de lospárfimos, aE*doBd6
culüvaa el trigo jr ias papas. Ellas sirven de lasíio á los qué 4ekw
akrav^iur estas pasos peUgf^^os^ 7 s«s.babi(sftites coogH^ioieiiMOS da
la .ti€»r>ra , avisan al caminanie que inoante^nt^tase €Oiitimmr>«)i.
viije cuando la .natupaleza se opone., Suele allí decirse qae elpér
ramo está brwto ú 9u cwnbre se ¿alia eqvjielta ^ nubes Mane»»
y^ikegr^s,,'Qi4e46^ ¥«Q CQrj^\c&niina voíocidad estraoFdínaria^.
dÁ^ecekMtes opuestas , ó bien íormanii^ reisit]yyiii«s ^e precigitail
Ifart^ de ^Uas en jas bo^donadas inm^ta^^ y c«i«^d» se of eieierto
riunor ocasiMiado por el iñento. Eíftas señales ao^rapsmadastpor na'
íÚQ inten«Dy indican aliriiytefio que es mala Ja ooasíein para inten-
tar ^1 pasiú^ >pelig«o$o de la montaSa. Ordinaaianienite es de medía
niocbQL al am^kp^cer iciMuido se es^en^ée la^juhiaa .de tdqueUos m^s^. ,
elevados y mas espuestos á los malos lí^Qipoa« IMÍuolips «ion los fi^
sos m gue sesei^beaveoe ij^^mitláainesite el ^d^ina^ y en^ónofis el
Imai^ ^un, poQp "dói^l ao ^^ede aeabar. de pcisanlo y p^eie e»41 4
sp f Q^iüiB^, poeQs,4e^xstiK&]i a«i imiinHiéiiienfte m vida. (Sesdelairir
(úra de los i^ácamos^^deljínte^ «e^nAra fa¿^ la r^éaid^to
nievces |]i^[|>etui^. gUa es fia ii¥iá|fu$ 4&«.leiM8tf^ÍBjifim^ &fr *
rqpa y^;iuq 4ejía asolación ^esfiantoa de Ao^^Uwas i^ahr^.
Todo ^a^uel ,gr^ .a§rn|>ainien||^ de |»£oos bffladps, 4e 4empe8ti»^
sf»s |)áráín0s ó d« ciuiaiaa*e6 blancas, per la e9taGi$»n ^as^snae de Í4^
nieves,, cepeda «í^« ^ «grandes 4Q^és mbH»rl0i(de íMtjsspfmf .
solitario bosque que se pierde al norte y al sur \ bacía ¡el Jag»4é
Mar^aoaibo y al iPíq ^v^^ ^e&íea 4el >p«r a. j>esdje Ja base.liasta.la
cima se eleva cd terregiomi anfiM|lFn , ^t tad^s parles in^to f
c^ ricas Selvas. Tan «alo ¡enaAdó por la ^M^^aíon {alta i^Eto^pw»
el desarrollo de las plantas^ ^ en^pieziaaa a desüiiNir li^peftasaos,
y aun ej^t^cc^ se ven algmias tierras ^nl^re fUanas, 'déhilm6ñt& ^«ea*
tidas (porcia yerbi^y^h a^punos «arbusA^.^ en ¡1^ cuales no laltaii'
sitios apareistes ipara «1 oultivQ del tpigo, de la -cebada \ de Jtas |N^ •
pas y aun j¿d**cdfé^ .si se c^M^oge* lo JÍiás b%lo 4e las cariadas. %m '
aciába rae ven ci^xd^r^s i|l^vAdas q«ie oi^ce ^\ f^ait^m^. ^¡^M ,
una (^uta de be¿as Jar^ja^ ^^ubjertas de «un p^ enavt de e^lü^;
blanquiQcin^ La virtud '^ue ti^ne de eüitar ^«Híaior si ae -W^aa^
s^bEe l^ipiel^ k JAftOP de un uso ja^ui ix\\ .para los vi^aa^
u
f
— M —
a
ias«<» iiJÉi^p •jpJMMftBas o i^giM; ÚBimtÉm deewiii»«i
euandoj' mientras que «épm mas avadas rcuptanieocn «orno erte*
tiáas, porlpi^gim^iigeladas -qne UBtMten, ó por loa gnlfMS de
^aBcéiokHM» jpoadSiBiea da ios pnacipieios : ira cielo ^^a dejado j
chtto y fa^aaooBO^Y airablada : un siA eoya liu docilitada bo tieso
lar fiMsa ^oeeeaaría para 'derrotk las mmt» ^e p^|ietiiam«ilo.
e&mehfea^ 4as eáspMas píraividales mas elevadas : el aspecto dé*
calas de mi tílMieo Tespiandeeieiite; ó iáen osomrecidas por la ioter*
posléoB^loo ?af#f08 ; y ea fin ^ losdifcretiles j«e§os de^a luz ,
^pieoea aMMitettiido ana ««be denM ptofecla 8« B»ab^ mhre ol
vafiO; ora^líbceide.oi«tiiini]os Itftoe respiandeoer la opüna iiimo^
diata 0011 cralacimes rápidas Mfitñ sniilipiieaa estos cuadros ; todo ^
oetaitnlMi|ffi & dar ail paisaje una soledad y «n léanlo «ndefiBíblea.
Bntre a^^nas aoasas oBoraaes y detBodas, sac^OB deseabrirae al^
gasosespanÍMOs caiispos soosbrados (le tpigo, cuyas espigas lo baooD
diitÍB0Mr de Itf; piurtas qfne aq[KHBita&eimiei|te cubroo las fddas4o
Esta zona, qne coi^ene casi todas 'lai pfesioiies almosféricas eti
900 .^ haoi^ .pliede ^nnr ; od la qjse l^s dado eseoser la lem-
pantoBanq^in ^ '^leliiiitad, 4laBde ^oDa msi ealwM^sar^h^sta aquella
en ifaokwÉiíaBoaat loe Molos, y en la que un solo día le basta pava
pasar de «b esteeDao el otro, esAa «fve Mamaooos jsona (igric^ltom.,
Ctaí^dewMddaiifcajo d aj^nei^tode ia satobddad , su clima eelá <en.
estremo calamniado. En rasaaediaaasalliiras coosor?» an tempe^
nmoBto «aaf»y y ñ eb Jas |iaidis'ba|as y «n afa£Ha6<«i q«e los á>os-
qens Bio bsB sidiHtaiados, halaílgoaas caloBitnras, debido es esto al
doblo incwmnkiiÉe de todo pais síb cultiiFo, eBbiertode paotaaos
Y' can ana tierra eilida y luitaeda : ta ttfla de árbdes nuevamente
boiba e» la qae «spoBe mas la sal«d de tas bomiMñes ; porq jc el *
s^desoBVudve oniéaoeslos mtosnms qae exhala un terreno forma-
do de MtoB de vegetales epie se haa ido acnmalando por espacio
de flEHi4M)s«ígJos', peMMCste pdigio. eiiste solo en 1os primeros
aftas, y kts ealentaras tercianas qae ocasíoaan son mas inoomoda<*
qae peftgvosas.* Las^klealtas son aquí mni raras y los europeos ro-
dea lie^dosá los lugares habiiado8/*Se aclímataii al cabo de poco
tkoipo y goaaiB de salud.
Sdbopáos abora éae ojeada gfflieral «obne los tcrronps vírgenes
desde 4el faMo dé Paria hasta el de Maracaibo. Las mimlanas de la
panÚMli doMariaesIte <^slda8íei4as ; pooo es, por ta»to, ék coi*
tifo<n ^s; núii cuando todo estilidffidOj CÉdateoteada lendÉra
la t^taja de embarcar allí mismo sus frutos.
J^s selvas entre el Guarapkhe y la cordillera que divide las
aguas que caen al golfo de Cariaco, apéoas liaif^ algún cuHiro ejt*
los Talles de Guacarapo y Coicuar. Guando todas ellas estén sem^.
bradas de liacícndas; cuando estén cultivados el valle de Garipe, la •
¿fontana que riega el rio S. Juan, la que costea el golfo entre Gua*
rlquea y Tunapui, los cerros de S. Bonifacio y de Puncéres^ y los^
bo^ques'^entre Aragoa y el Guarapiche, | qué de cuantíosastprodac-.
ciónos no.^ldrán de e$(06 terrenos, tan aventajados por el dima y .
la bondad de ^a tierra y la facilidad de embarcar sus frutos 1 Las
^bocas del S. Juan y del Guar^ebeno estarán desiertas como boí, ?
y los terrenos anegadiKOs trasformados en tierras labradas tendrán >
en medio de ellos ciudades ricas y comerciales. Lo mismo puede
decirse.de los que están en las faldas opuestas del Turimíquiri, de-
donde se trasportarán las cosecbas al Guan^icbe {ittr caminos: de.
carros, formados por^ la natofaleza en aquellas hermiMas iotieeaa
qué están al pie de la serranía.
Barcelona y Cumaná tfiNien próximas á sus puertos laa tierras
de cultivo, y de consiguiente, fácil el embarque de sus prodaota.
Los golfos de Paria y de Cariaco estarán un dtá llenos Be buques
que irán á cargar los frutos de aquellas costas, boi casi iniíabitadas,
y entonces las dos provincias solas producirán tantatcuanto al pre-^
senté da toda la república y ocho veces mas. •
Las montanas do Tamanaco, de G'iftribe y de Guanape ü^en en:
el rio Uñare un canal que les ha proporcionado la misma natura-
leza , y sus terrenos ilanos, propios para caminos de bierro fadJi*.
tan llevar á la costa (Mas las riquezas de unos terrenos TÍrgeaies».
*Las fértiles é incultas tM'ras entre Ucbire y Riocbico, están todas^
ellas frente á la mar y con la vantiga de climas cáydos y templa* .
dos. Mas productivas serán algún dia ellas que lo son ahora los
valles todos del Tul y Aragua. ,La rica y grande montaña que se e9r.
^tiende desde Rioehico hasta Cancagua , toda plana, regada y fertí-*
lizada por las aguas del Tui , que la enriquecen con las tierras gra*»
sas de los hermosos valles qué xecorre , podrá dar mas que todas <
las haciendas actuales del Tui y de los valles de Aragua; tenienda
lafacilidad.de embarcar sus cosecbas en el mismo rio. AquieHas
haciendas que están hoi mas arriba , para entonces tendrán cami*',
noe carreteros que llevarán los frutos al punto de efl|j)arq«e> en
— 87 —
«
dónde los recadran los boqqes de vapor. Los ceihros entre los Ik*
nos y las sabftoas dé Oosmáhe ,^abora eñleramente desiertos, esta^
rán Ilesos de haciendas,, y la rlqoeza oacioual hábra pioporeioiía*'
do caminos para comunicarles cofi el Tui. Otro tanto sucederá con
respeeto á %s montañas do Ci^pigua , coyos habitantes aproreeha*
rán llí misma via, y los df Gaptya y Caríepe, otra que está aun
mas cerca del mar y que vendrá á ser tan hermosa y cómoda cnan-
to hoi es solitaria y penosa. ^
Los puertos desiertos al rededor del cabo €odera serán en aqne^
Ha época concurridos , y allí habrá un emporio de las riquezas de
las montauas qne en nuestros dias se ven incultas. En lu^ar de las
chozas de los pescadores^ se eneontrarán ri^as y opniéntas ¿i^a"»
des. Las costas poco cultivadas^ de Caracas, tienen en cada punto'
nn puerto , facilidad j convenieDcia para sn comercio. Todo lo
que puedan dar los valles altos oo necesHará pasar á la' costa ; por- •
que su población misma lo consumirá ; sin embargo, la naturaleza-
previsora parece que ha roto la cordillera en la abra de Gatia, para
que el Jipmbre con menos trabajo pueda llevíar á la costa los fírutos:
dé. su industria. El puerto deCatia, despreciado, s» trasformará
én^dades futuras en usa población mercantil* *
En fin, la sola provincia de Caracas tiene tantas tierras suscep^
tibies de cultivo , cuantas 'hai aetaalmente labradas en toda la re-
púbfiea y aun nueve vezés mas. *
Desde Caráttis hasta Puerto-Cabelló, las montañas incultas que
eiisten, poco tienen que hacer para RtviP á la orilla del mar
sus producciones. Los valles de Aragua tan ricos ahora y que son'
^nscepin)Ies d« 'mayor adelanto, coaiido se tnmben las selvas que*
en eHos existen , ii^en otro camino*' trazado por la abra de Agua**
caliehte. Tiempo' vendrá en que los buques» de vapor navegarán
por el lago de. Valencia, llevando iis pródncbiones deL contorno á>
losiferro-carrRes que las trasportarán á Pnerto-Cábello. Paira en-
wnces la nación se habrá proporcionado los medfos de comuni-
car con H costa los fértiles valles de la serranía de Nii^ua, que'
ahora está casi yerma por falta de buenas caminos.
• Las mentidlas del Yaracui, S. Felipe, las de Aroa y las Titcacas, -
solo necesitan cultivo para producir todo lo quetierras cálidas y:
templadas pueden dar; y aquellos «ríos que las atraviesan y su
apiaxirácion á la mar les dan ventajas considerables. Ellas solas
pttSkai tununistrar el doble de los ürotos que se recogen en la
oAreeeQ «i fumak ÜMfijv*. Slste hétmm tÍ^ saKcssUe pütitfi
Vi«BHr ifnib» I» oHeolM^ «de a^fmiias «ompm;, 7 las fartes ptah
flEMt ie tm-miéktm «eiétt crazadtsr]^ «í&bmos que «oovimiiQai el
ne Qm la «lana ^*^ rCiarp f «rta <spn ia Hiar« I»ds»'1as ikmtm
iaciilto y úm^tttm M «sto» tea» «itaeáa^ eiÉáiiees cidtivtflai,
y ia Jiaoaa; -««Meta dg la^imaQia4eCkac»^£mjBBtr6lasiennLY
el Tocuyo. Efbermoso puerto d^ChichuúfEk±i,i]ilabiteáoii]K^!a
tandea ass ai^Bas eaÉüectas de iinfiiee y «em ws «dilas ¿abrá 4ina
cítftdad 9íieeca«líl ^a% «I tíeoifD.
fiarqvÍMieto taMká.dosr vías eúnodas y «aptasfffira üe^ari la
macj^íámáas 4e las oartaa <|ffrÍHH ie brii]|é«a «oa «l>8teaidQ6 {mr
teaneoisdesárlMieB, y «nasMBiaiía'paata»osa^r ios deivasBea^e )m
apwk £1 Yacaeuá 7 d Acoa coe?ertjüto «n <caaaifi&, «er¿& nasFegaf?
doB for kB|ltt8<de >vi^^ r. |^of Abiva hafacá ^3nx>H6anHles i|jae af e»*
masanba moparte^eaos soUtadoa; tam^ ^i^eaes iRaa estráios ^e loAa
la ^e tb»seL*miÁ calíivadoi^n la fnódueia.
V FeíoiA «vtoior naéa es «awioiftrftoiQKi^de to^eapandieas ^pe
preraet^áiatipajlses deaieetes fue ekou«4Mi el lago de Maraoai^
bo : pareoe que la ProfMesaida iiaáoteoirio esta graiuaBata éeaptt'
para ^OfíBsatb&^íuSais á 1«b 1isn»sqae aatéú al pié de dbs flama ü-
taa «cordikiraftée'ilii^íMlo y jMiátMa^ vqmjos á«Qto»s e» AiMoa de*ea«'
Imanadas, yian^ á perdShe en las oiUaf éa «ste ^msíto é éski^^máe]
kfijQu A^bnkábk es solidada te gcau fealdad ée estas cosaareas,
su artaMÍQB «pKDdigiasaef ^^fofld^ud^ ríos caudalosos <fue |^ liek
9HL 06ila6 $íwák»^é!ti^^ijl^jámxm-qú»p^ todas fintea iein^
dona ) «ee ^^uedeaa.iaiooi^er tempfflxtliiiBa ^immoiwéía^^á 4BiiaIquieni
pHMl«GoiiaQ de lEurofH 6é& áxoAriea^ ideadedifaJlir goe aitsasaliis^
talos fttimQia jenipeatMosoai las w(vesf!«9aliMs. St«e refteioua:^
qp» afiteas oáhetaao líis ¡^ayasiMl áago nims esautaa liaeteiidas.;
qm afine JU}»étes«eastas se^kallw^iiiMaífíoUacianeaNde utegu» as**
taRsa, y qm, A )Xmío del jKais^ Auute íes s^vealre ^láAol de casao^
aaiiaUa flillerasieilift jiieullo^ «s vanArá ^^^naeicDÍeiitoáeiía que
Maracaibo debelar i&u l€$.iíe«||W i^mdeKsa^^tfnndo anta fiobla»r
ci«a aclafa 7 foafMireíoiHRia á .su «^laoMi^ «epaisaesr ^«ítkto Je
tfdn fOts «BiÉi^as. Pnsa «Éb^Q&es las amlaBS de Méddi y l^tpl»,
9aB se mÜsaBéom báéia^iel li^)i»oMm4ar {larsí sfllasvn fwotai"
t# omafiEáa ycpesitaiÉyer ^ue d^da itoia ia psdeteultisiada :bo»eaia
npiytlka.ta8.i9a6dMatafty£M^^ lriauyV8ii|rHpmfcm
•
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-^ M — -
«.
«BBfeatoi métím i»\mikfi tefe» aowmiéttto fMBatflensr ia
Í9kttm^áim>mH¡^Mia§0 ; 7 «ste j^bkrto 4e asñüiílQd áe tu*
qnes ée lajuslnB M«i»iai^,'ra*i eambiar ai..«ps puertos to 99*
4iQcUi» te Ja Miéofflritsa Em^ pvtjm iralfit é^m^w^málKiXdL
y por lel 'Om 4a da Aíei*ra<igcañidini. Ip^fae las wtílas miemm
dfiisLmmmd&ífíBHnyHcm., podrá inrjriU omBo i^mfluifidofar obI
luwpQQsa piOblafiMNa ^ imhrá émitmio en las altas tienas vui c]i-
ma lmi||M«^.«9a í^JntMta fritaa^vera. las itldeas ^ne apenas 1»*
ttm jnmAeorfis^^ seráü QBt¿8ces cwdaA^a Ju^ttaias ^ TI908 pe^
petorioB y f(HM»ÉHiotas fila gQtti»a'e!i«]iÉfimpfiraiiifiBto4elksiD-
80; de todas'las comodidades ée ia etMa^ <fe tudas k>s fteeeros de ia.
sMíediídSifJa^ktaiieiade ft|«eUas¿ la cotía^ecá mas corta, per-
qsie iatméí ^rnáam carmleiías ^^re el MuMMdbiesyial Metatan, iei^
tceTi^Ho y el lago^ De ím «rrillas del ¿alia fia <€rMa, se Iten»
rm ÍB»ímmaidmét Isis valles de Gumita y de S* <iri8lál»al 7 kaata
el pújelo de Tet^i» ^sibre el «DrüMfte.
La gran montaaa de S. Camilo enteramente ^deaietita 7 can mil
seA» Y tí^ 4»áaiaD^«e h atraviesa^ di^á ao pradiicW» inaiar eaan-
d& ^ de«Baa£ada y cultivada del. que jdbora cinde k riea api^
cid^aid^la&^^Bffies del IM y de jkragaa reasódoa. TeareansdÜi*
das, lenfíadas y fríos 8e««pieslraa «a los icerias^ en to qmk^
y^ea hs Ihfmm,, y la^chos rias ciegattiy fertüisan afaallas., Ua^
iMbüiáiaMr ¡aa'attí^iiiito de JtarienAas, pueblas y pB«u»^ c»*
iam99« AfUÍ iwla al j^liik) ^oe eapataias das riosíKta;^«gaJdes, al
aalia >f»e aa bada Maraeaiboy ¡A Uáhaa^e.liáBÁa é\ ^aaea* tm
iiiailktaaa'dieS. i¡¿ínilo seda la mano coa ¿¡a leaiéaai de Tiospaco^
epdoadev]Uií^>asp«ilMaa teplaaáa del ^eacap. Mordiese xeatei par
aa saft«?ie dedü^^ea ia^ 4teMr# i^itienta» é% gan^os^ ccttca»
das 7 fertilizadas por ríos caudalosos ; siendo de notar .fae ^afíie^
lias sabrás^, qm$ iwián papte ea U aa^A calai*esa, fiarte en la tem-
plada, sféaaa paeden \m .tisanátacse par les m^las camiinos..^^
sato aatáá babadas por las daeaos «de seis .oka^as miaecablaa*
Guando la pablaaioQ defiia€aite eatas teaiaitaois vif^aesj» «uajidoatof.
QflUI^ las 'eriUas d^ ^s ^^aid^fl^aas léás , pr^seatará oip& a^iaeta
9^pid pmf y ib1 amaina fieagoso.iitte 43onduoe á las «ato vadlas tds
XMrida), «acsá fiéflMida yae áiará m cmrasyas qoe aitatf|iiKráa«a
pocas tesas, JaHiike ^l pnaaMUe 0a. ae baceta Yj»m dó^. itas lios
navephkauíie'CoadMB^n al Apare «y id Orkiaeo ofirasea á indas ios;
pwidiii^ de Vibk'É^mí miék& iáfittea^ y las biiqsicsr da .fapar aa-
nrantarin todas éstas grandes vias que se íntrodíiceii hasta el pié
de la serranía de Marida', para esportar de allí yelíite vézes mas
prodactos qvk los qvt% da bol la agrlcaUora de toda Veoezueta.
Por «4ltnio/los bosques ÍQcaltos de los terrenos qi|0 están á las
faldas meridionales de las serranías de TrajíHo y BarqnisimetO; tie*
nen lo« mismos conductos para dar salida á sus frutos ; es decir,
• ríos que sirven de canales, entre ellos el mas importante es la Por-
tuguesa. Los costados desiertos y sin cultivo^tlé aquella cordiUeíaj
presentarán una mnchediimbre de haciendas y aldeas, cuyos habi-
tantes, huyendo del calor escesiTO de la llanura, habrán huscado en ]
las partes mas elevadas un elisia templado.
£special recuerda, merece por su ventajosa posición y 4a jnontaña
' áfi Turen, habitada apéaas por algunas familias, pero que labrada y
- poblada con el tiempo, hará á la vez el cambio de sus produccio-
nes por el abra de,'Barquisimeto y el río Yacacai*con Puerto-Cabe-
' lio, y por el caño Turen,ia Portuguesa, el Apure y el Orinococoñ
todo el interior.
Para que no se crea exajg^rádo este cuadro de la futura prospe-
ridad de Venezuela, basta considerar, que en la que aquí llama-
mos zona agricultora^ apenas hai 50 1. e. de culüvo permanente,
al paso que restan por rozar y cultivar 4.500 I. c. de montanas
vírgenes que darían un producto noventa vezes mayor que el do-*,
tiiri. EsUi zona bastaría para mant^er con mucfan comodidad* maft-
de 7,000.O0iLde habitantes, cuando apénaVtiene en^l dia 650^060
personas regadas sobre una estension de 8.757 1. c, que vienen á
estar en razón de*poco,paas de 74 por legua* No necesita mas que'
tener una población proporcional á*lf»4e España ; es decir, de 900
^ almas por cada legpa cuadrada, para dar un producto mayor que'
el indicado.
A fin de que á un golpe de vista se pueda formar idea de los
esculos emitidos, se presenta un estado comparativo de los terre*
' nos rozados y labrados , de los que aun están por cultivar en cada
(irovincia, y por complemento una demonstracion sobre la zona
affricultora, que se estiendé desde la costa hasta los llanos, ocu-
pando una superficie de 8.75Y 1* c. £1 largo mayor de esta zona,
desde el-promontorio de Paria hasta las cabezeras del Táchira , es
de 240 leguas tomadas en línea meta , casi de naciente á poniente.
Una mitad de su anchura tiene de ^ O á 4 4 leguas , y la otrft de A^
á 45 de N. á S. ó de la costa hacia los llai^» &ta faja egotiene
; - 61 -
Vibrios eq[>acibs iMfcs para lj|8 crías y también algnnos pantos in-
caliiVables, á cansa de lo escarpado y peñascoso del terreno y de
la destemplanza del clima. Lm siguientes cuadros darán la demos-
tración. «
euABao
HELOS TraitEBíOS CULTIVADOS, DE LOS QUE HAH SmO ABANDORADOS
Y DE LAS HIERBAS TUlGENBS.
«03IBRB DB LAS PBOYINCIAS.
nÚMBRO DB LEGUAS CUADRADAS
en cttltÍTo.
Caracas .'
Carabobo
Barquisimeto *
Coro , ,
Maracaíbo
Trujillo
Herida
Barínas.. ^
Apure
Barcelona
Cumaná.......
tfargarita
Tota)
44. 6
5. 9
6.
f.
1
7
I. 9
S. O
4. 4
5. 8
0. 4
t. 9
3. S
4. 1
coltivadas
7 otras
sDcesivamente
abandonadas .
I
49. 4.
ISO.
96.
40.
fia.
48.
fi4.
75.
8.
48.
50.
7.
qac no están
cnltÍTadas.
800.
470.
210.
930.
330.
i.MO.
eo.
470.
480.
300.
70.
400.
»
4.600.
Nota; Se ban comprendido en este cuadro por ser insignificantes varios pun-
tos culiirados que pertenecen i la zona pastoril.
i
TfBMOBTWLACtOV
DB LAS DIFEBBHTES CLAMS DE TERREftO MS LA ZOBA A6BMI7LTOBA.
Terrenos actualmente cultivados y otros sucesivamente abando-
nados
Montañas vírgenes
Terrenos llanoa útiles para cria de gananado mayor
Cerros, terrenos quebrados y llanos para cria de ganado menor..
Páramos y cerros escarpados no susceptibles de cultivo . .
Lagos, lagunas y ciénagas
Islas útiles para pesquería y salinas
To'al
C0*D>ADA8.
800.
4.5Ó0.
883.
4.U4.
983.
908.
80.
8.757.
— » —
zo^x M to§ ^mm.
si tan ^álide encontramos la primera sona qae casi igml» en
estension á la monarquía prusiana, no se debe arañar que la se-
gunda esceda íin poco á esta. Parece un gran golfo qiia se ioiro-
^ dace en lo interior de las tíeti^a»^;. es uii mar de yeii)a que por io-
ih» parle» form» h^rímite ; a» uir wM^is&rimo^ eemdo por hs
cordMJjerasr 7 tos iammisas telvasde la Guayana; es la verdadert
Vegiofr de los. ganados qoe altí^ multiplican casi sin los cuidad*
d«l hombre ; es ei- gran criadera que proporciona á la 2ona agri-
cuUora losi< animales útiles para el traimjo y las carnes para sus^
tentó de sus habitantes. Su porción central oñrecerá alpn dit
iguales ventajas á las generaciones futuras que desmontaráa las
grandes selvas.
Los llanos son un campo perenne de instraedon guerrera para
sus intrépidos moradores. Acostumbrados desde su juventud á doi-
mar el potro , á luchar con el to^o , á pasar á nado los ríos cau*
dalosos y á vencer en angular combate al cahnairyai'tigre, loi
llaneros se acostumbran á despreciarlos peligros. Guando la guerra
los distrajo de sus ocupaciones ordinarias, el enemigo los en»
contró ya soldados aguerridos. Ayudados dé un temperamento
robusto Y habitando bajo un clima mas bieu«eal|irosa que frió ^
sus necesidades son mui pocas : en paz ^ la soga de asilasar f
el caballo ; en guerra, el caballo y la lanza. Prácticos del ter-
reno y con la movilidad que les proporciona su lijero equipaje,
los hombres de los llaoos ntf paeém servenddos sino por hom-
bre» de kHPlInios^ y* Yeoeni^ tiene- «t^aforiiariiiiiieíaaa^flabtnas
y en el pecho áe sus hljofs valerosos , él vms ñra» Mearte éoi
la independencia nacional .
No se crea por esto que la zona de las crias es un estéril arenal ¿
una tierra sin agua,; ni que sus habitantes son pueblos nómadesi
con tiendas portátiles. Al contrario^ es. uu suela fértil y bien pro^
visto de agua. Bái! ciudades, villas , pueblos,, y hatos diseminados!
por los esteúsas llanuras : dos navegables las atraviesan en dlle«*
rentes direcciones, y tos ganados vagando en medio de aquelIasB
dehesas en una entera libertad vienen á reunirse en determina**
das épocas y por los esruerzosdel hombre en los lugares destinado^
j^asftlos rodeos. Áotes de HAS na había en. esta&.^abanas siotíl
U Tocaya' foe hablan feFm«i«eido ¡tor loveto tíeiipo^ «nía
Jiltó¥a'Graiiaá& ^ fui ^ ytlmOKx q«e emno i J«b Um»^ algoa
:fpDBd» vaeiHS» ((«6 t«tt¿^de CdPO j del Tocwfav Eitat Ikaacas no
mtam^^ pff«sei^0 a^pidto mifeiflaiáad meaótoiia y fiastídldmar:
íiesm^ Mft YaiíifiiaiW9 y penpeetívas agiadables* Mo en. todas ellas
ü mfre el esiiüt aiMeasader de )m retraes bajas, pues en. cleatoa
fftaJe&eKi besluitemeiile modlfiewfe ki toi)feFati»% pee Gsyosas
taetfes y y ana^e hai alfaaoa lugares espinstosii ka fiebres iof-
táfMlcateSj, e^jee lo gStefü^ seeo el aire f el clima salodabft,
laa mbmsB de Gomaná y Baioelo&a se dividen en. dos clases
íAm BMHtiadas : ka de Caraca» y Carabobo, en tres mal diferentes
de aquellas : las de Barinas son distintas de las anterím^es : las de
Ajgtwe tioita sua earaetérea farlicukirea : las de Guanana , en tn ,
ae düereneiaaf ooBsidefablemefite de todtos las menékmadas y entre
ai IBÍSBH& tienen notables variedades. Do manera , <|He se paede
di9eír^ que cada §rande poreion tiene un tipo particular4^o1^^*^
ÜBfue de las ésmas^ y sos faeeioaes priacipides meceeen ser desp
eritasw
Bn li» j^aviacias da Bareeiona y Cumaná ocupan. ^ osntco de las
llanuras una» mesas^ ¿pidas i desprovietaa de grande» vegetales',
donde el vifitíeAi moriria de sed si uo llevase agua consigo. Sus su»-
j^rfima planas etíé& cubiertas de capas de ar^a en la que nace
una pi^ fallida y poco nolritiva. ]&ia lypsna absorbe todaa las agu^
Ikfvediaas , las cuaiet se inárodieeii ea to ialert<^ de las mesas "y
fior 'sus bacdea filMa después , daado atíf^ á multitud de ríeew
fie esioS)« udfr mtum hicia el &. hasta <a^ al OcInoeD ; otroB dir»-
gíéBdoae al E. se pieréeiH ea el golfade Patia; y otiios^ en fia^ iúh
mnida lo yia áel N. sm tribuluáos del mar' de las^ Aatittas» Lae
' sabaaae^qua esriai; tá oráKte de estas metfis entre ellaa y el delte
éA Ociaoeo, tiaatti sM^e Uft aspecto verd% y abundanda da
aguaren laaque ereeen afnipadas las paknas de morlelie. Estaa
pkméaa gtfe viire ^ fuaflia ^ guii» al viajero sediealo^) ^sm ^
ciaito da eaceaítrar á^ pié una agua d)Bira»y agradd^le ; peroieopa
aif lerraia ea quecraoea es iúsadot y cenagosa , ao serla prudanfis
iateiita*.d paao «fe los atorieAofaf . fia dips se: oeuoeatiaa las
pnndéspraadpaliBWrtfe en la erti^Bion seca del Teiafla. A ftof&í^
4fto cpas laa si^anaa están mas tamedíatíis. al dslto ó»la laaie, eoOr
semoL ana fteatua te iat^piÉlos; asi r^gegxé te» Uufías $m
en ellas ons frecuentes, como por efecto de las iüuBdadones. Las
sabanas que están al occidente de las mesas, se componen, en parte,
de peqoeSos teirenos realzados 4 mesitas ; en parte , de llanuras
cubiertas de chaparrales y también de grandes espacios limpios con
algunas palmas de hojas en forma de abanico. Mui pocos moricha-
les se encuentran por aquella parte y los caños y rios no son abun-
dantes de agua. Raro es el punto que atli queda anegado : en las
mesas ninguno ; pero en las llanuras mas próximas al delta el agua
cubre una grande estension, obligando entonces los ganados á bus-
car un asilo en el declive lenio y suave dé las mesas. Cuando en las
sabanas orientales se goza de frescura , las occidentales están suje-
tas á una temperatura mui elevada y en las mesas el calor es casi
insoportable.
"En las provincias de Caracas y Carabobo hai tres distintos aspec-
tos mui marcados en sus llanuras, cuyo declive general es de N. á
8. Desde que se deja á la espalda la serranía , empie^ una serie
de colinas y terromonteros cubiertos de paja, que vistos desde una
eminencia parecen olas del mar cuando está agitado. Mas adelante
una galera peñascosa corre paralela á la serranía, y en varios pun-
tos está abierta para dar paso á los ríos. Después se distinguen de
distancia en distancia cordones de peñascos paralelos á la galera, á
los cuales se da el nombre de petríles, y tan alineados que parecen
obras humanas. Mas allá se pierden las llanuras en palmares , en
matorrales , en algunas mesas pedregosas ó llanuras con bancos y
en pocas sabanas limpias. Siguiendo la línea central hada el S.,
en dirección de la boca del Apure, presentan las sabanas otras dos
variedades ."las del alto-llano al oriente y las del Baúl al occidente.
En ambos se elevan como islas en un mar de yerba; allá , los cer^
ros de Tucusipano, Macho y Magdalena ; acá , los de k galera, del
Baúl, de S. Bartolo y de Cbarco-aisul : aquellos son formados por *
amontonamientos de enormes peñas , compuestas de una mukilud
de pequeñas piedras pegadas, que representan una especie de
•mosaico mui particular : estos , de una greda parda oscura ,
mezclada de cascajo y en forma de pezón. Las sabanas próximas
<& Tucusipano son elevadas con varias mesas cubiertas de pie*
4ras menudas, algunos palmares y varios motíehales que les sirven
de adorno y para aguada de los animales. Tienen, sobre todo> una
disposición particular en lá superOcie del suelo , que brinda facili-
dad p»a hacer lagunas ariificiales eadoiHle no las hai naturales {
— 65 — ^
mientras que ea las Ilaaaras inmediatas á los cerritos del Baúl, no
hai mesas sino sabanas bajas y mochas de ellas limpias ó con gran*
des palmares, algunos esteros, ningún morichal^ vadas hermosas
lagunas, ños y caños que conservan aguas. En las primeras, en la
estación de las lluvias hai pocas partes inundadas y en las segundas
solo algunas : aquilas desaguan en el Orinoco , mientras que estas
lo hacen en el Apure. Pero en todas ellas el calor es sofocante á cau-
sa de venir ya el aire calentado por las mesas de Gumaná y Bar-
celona, y pasar después por llanuras casi desprovistas de agua.
En la provincia de Barinas los terrenos de cria tienen faccio*
nes distintas de las anteriores. Las faldas de la alia sierra de Mé-
rida y de los páramos de Trujillo y Bafquisímeto se pierden á un
tiempo sobre las sabias de Barinas/ y entonces un declive suave
del N. O. al S. E. se dirig^sobre la Portuguesa y el Apure. Cauda-
losos ríos bajan de la elevada sierra y lodos casi paralelos siguen
el mismo declive , limitando de este modo las sabanas , que todas
tíenen^por confínes el pié de la sierra, por una parte, el Apure ó
la Portuguesa por la otra y á sus costados, ríos casi siempre nave-
gables, con orillas fértiles y hermosas vegas, útilísimas para el cul-
tivo.* Así es y que el habitante de esta vasta provincia puede ser
agrieuUor y criadora la vez , con la grande ventaja de poder em«
barcar sus frutos. entre las mismas haciendas. Vista una de aque-
llas sabanas se han visto todas, porque todas llevan el mismo tipo.
Desde que se deja el pié de la cordillera, no se encuentran ya cer-
ros de ninf^na clase y la vista se pierde sobre la ostensión de aque-
llas llanuras cuyo horizonte se confunde con el cielo. Los montes
que están á las márgenes de los rios parecen altas paredes de ver-
dura , y en medio de estas Qtras pequeñas oasi paralelas cubren
unos caños que sirven para desaguáis las sabanas en las épocas de
las grandes Üuvias, recogiendo y llevando las aguas á los rios; pero
como estos se encuentran con el Apure represado por el Orinoco, en
tiempo de las lluvias no pudiendo descargar con toda libertad , se
hinchan y refluyen hacia los canos. Estos salen entonces de madre
y se desparraman por las sabanas, cubriéndolas de agua que sube
algunos pies en sus partes centrales, y que solo deja descubiertas
las laterales ó mas próximas á los rios y algunos bancos que ape-
nas el ojo observador pupde reconocer. Mo duran todo el invierno
estos derrames, sino el tiempo en que fuertes y seguidos aguaceros
han caido con igualdad por todo el territorio. Tan luego como el
. . _ «0 —
Apure paede recibir las aguas, qüedaredncMa la inandadoa á aque^
lias sabanas mas bajas. Pocos palmares se ven en estas llanuras^ a!-
gomae manchas át bosques que se pierden en un horizonte oscurir,
y muchos esteros que cubiertos de agua en el invierno , conservan"
imsto» frescos en el verano. Espacios limpios* se estienden hasti
perderse de vista ; mientras que en las partes laterales se presentan
unas barreras que parecen colinas lejanas, na siendo sino los bo8<*
ques que sirven de adorno á los píos. Las riberas de estos están po*-
bladas de aldeas, caserías y hatos cuyos moradores buscan allí se«*
guridad contra las inundaciones ; sombra y frescura que dan los
árboles contra *el rigor del dima , una tierra- fértil para sus sien»^
bras, y una pesca abundante de que hacen^su principal manteni*
mienío. El maiz y la yuca les dan un pan sustencioso ; y mas variado
«1 suculento plátano , que se reproduce porsi mismo y alcauza uua
vid^ mayor que la del hombre sin necesitar de sus cuidados. La poi-
blacion crece con asombro & las márgenes de estos ríos, por la facr»
fídad que hai allí de procurarse los medios de subsistir. En aquellos
ftigares el calor está modificado por la frescura que comunican ák
noche los vientos de la serranía ; los cnales^ suelen enfriar mucho
mas que en otras partes la tierra calentada durante el dia, y tam-
bién por la que dan las aguas y los bosques de los grandes ríos
que atraviesan por todas partes las sabanas.
Las llanuras del Apure no tienen comparación ninguna con to-
das las descritas hasta aquí : es una tierra tan igual y plana, que su
descenso no se percibe ni en el curso de las aguas áHt rio Apure
que las costea por una parte, ni en el del rio Meta que les sirve dé
bofde poria otra ; pues el menor* viento de* E. 6 la menor crecida
del Orinoco lashace retroceder. Estas sabanas son el estremo dd
declive de la gran cordillera áe los Andes de Pamplona, que se d^
rige de poniente á naciente. Ni ur peñasco, ni una piedra, ni un
cascajo se encuentra en estas planicies : arena y greda es todo lo
que entra en su composición. Sabanas limpias, siempre verdes,
siempre frescas y de alta paja , cubren una inmensa estensi«m : el
nivel casi perfecto de todas his partes de) terreno Ms asemeja tanto
á la superficie del mar, que á su vista ocurre el pensamierrto de
que en tiempos remotos f iMiron niveladas por la estación perenne
de las agua^. En medio de aquel océanu de verdura sucede al via-
jero lo que al navegante cuando empieza a descubrir las velas de
un buque que asoma sobre e\ horizonte. Algunas matas, que son
p^eBotrfpii^dA árbotos, pafieeen nares á la velay.pMlueetttQ»
m 1<9lloM. el efecto de estas^. Otras vezes la masa yajporosa esleodUtUr
em la aliDifMera» da á las mbana» el asn^cto mísino de un mar le««
ja«B^ 9ie. siiiB^ve á igual ditlasda pareee que huye delaatp d^ -
TÍajiece.
L&uitfMixiádaddeiaqBriloa IlaHos ea doode todo parece iomófil!^
nftdijftde tet io^oiMatiei aoaqoe tsiste* Los ganados, caballos j
m&\ae se cckoi y^amUiplican cea una íeeUidad sorpreodeate. AlJtf
nOíQeceúlaiii^enHigttft modo/ los desvelos del- hombre^ miéotra»
qpift ea laaeins sabamiSy abaodaiites áe^ moscas á causa doilot-
hoe^oss, d cshdor debe cuidar OMieho loa veden nacidos espuestot-
ékset TÍetimaa da los giuaQOs, cuando el oaibiigo no ha llegado m
deiÉrizarse. Pance regla general.en. estos Haitos, que eoanto ma&
bosques ¿^matomles se encuentran en ellos, tanto mas abunda aUí
d gusano; y* euanAo mas grande y limi^ia de árboles es la sabana,
m^s aerados están por insectos dañinos. En este último cas»
estí^ lasiéel Ap«re, en que apañas tienea los rios algwios ribetea
» de aMBÉe nalOy, esinido ca Hiucbas partes enteramente limpias son
oeiUas. Coa mas razoaqneien loss riosLSucede esto en los canos. Bai
¿los bondesde algunos uá.peq>ueik> y angostetmantecito y en otros
úmfXe^pa^oualBS mas levados que. un hombre á caballo. Los ye-«>
^ados se veo pastando por aquellas soledadesen rebaños nuniepo*
sos, y los chigttres eft sociedad y á vezes por docenas á la sombra
de algunamata en las oriUas del agua. Un prodigioso número de
cumanes tendidos sobre los arenales de los rios, están siempre ca-»
IcBtindoee at sol con su aneha boca abierta.
El aspeeto d& la tierra ta» uniformemente nivelada ojrece, shi
eadiaii^ algunas pequeSas desigualdades causadas por los mé-
damos y bancos: Aquellos son- unos terrenos un poco arenosos, que*
^ ele?aa algunas varas sobre la llanura, mientras que los otros'
soft de greda, alzándose pocos píes sobre el nivel general. Difícil es
conocerlos si no se examinan* bien sus bordes , que las mas vezes
son io^erceptibles á la vista , como no sea en la estación de las'
lluvias; porque enlónees los médanos y los bancos quedan en seco
cumida el resto do la sabana está cubierto de agua. En est^i mé-
danoft y bancos esláa los pueblos , los oaserios y los hatos que se
eneoeatraa: á distancia de muchas l^uas unos de otros, y allí es
donde se refugian les ganadas , porque las aguas ocupan las partes
mas b^a8« ÁlU se emBmMffo, sútkicntes pastos para el tiempo que
— 68 —
dart la esiacion inTernal, mal penosa, sin enribargo, para el ^i-
'n^doy para el hombre, por ei aumento de calor, la falta de la
brisa y el número consideróle de insectos. En el verano no falta
•-abundante pasto fresco y agna en los ríos, caños y lagunas , fre-
cuentados siempre por tantas aves que llegan á cubrir sus orillas y
la superficie del, agua. Los galápagos, morrocoyes y cachicamos
ofrecen platos delicados á ios habitantes de los Llanos, y asítni^no
la variedad de pezes que allí se encuentran. La brisa del £. y de
£. N. E. sopla con violencia y aumenta su fuerza añedida que el
sol -^be, disminuyéndola á proporción que el astro declina ; pero
como estos vientos empujan por ddante de sí las capas de aire ya
recalentadas por las mesas de Barcelona y las llanuras de Caracas,,
llegan á estas sabanas con ráfagas abrasadoras. Desde diciembre
hasta febrero, está el cielo constantemente sin nubes y es muí raro
que alguaa se presente; pero la atmósfera constantemente oscu*^
recida por el polvo y unos torbellinos de este movidos por cor-
ríenles de aire que solo existen en la superficie del suelo, aumentan
éí calor sofocante del aire, a Hacia fines de febrero y principios de
« marzo, (dice Humboldt) es menos intensa el azul del cíelo, el
« higrómetra indica poco á poco mayor humedad, las estrellas
(^ suelen estar empañadas con un líjero velo de vapiures , su res-
« plandor es menos tranquilo y planetario y se v^ centellar de .
« cuando en cuando á 20*" de altura sobre el horizonte. La brisa se
« va haciendo menos violenta- é interrumpida por calmas. Luego
« se acumulan nublados hacia el S. S. £. que parecen como mon*
<i tañas lejanas de perfiles muí fuertemente señalados : de cuando
a en cuando se desprenden del horizonte y atraviesan la bóveda
« celeste con una rapidez que no corresponde á la debilidad del
« viento que reina en las capas ioferiores del aire. A fines de marzo
« se observa la región austral iluminada por algunas esplosioncillas
« eléctricas que son como unos resplandores fosforescentes circuns-
« crltos en un solo grupo de vapores. Desde entonces la brisa pa*
« sa frecuentemente y por muchas horas al O. y al S. O., y esté yá
« es un signo seguro de las lluvias que empiezan en Apure y sobre
(i el Oiánoco atines de abril. £1 cielo comienza á empañarse, desa-
« parece el color azul y se estiende un velo pardo en todo él. Al
u mismo tiempo se acrecienta el calor de la atmósfera : bien pronto
« no haí ya nubes ano densos vapores que cubren la bóveda celeste.
« Los monos aulladores comienzan á hacer resonar sus ecos lamen-
»
- - -^
■I
i
tf •
~^69 -
i tosos miic|K> antes del amanecer. En fin , el aspecto de cíelo , la
« marcha de la electricidad y los chubascos anuncian la entrada de
« la estación de las llavias. » A la vista de estas señales, emf^ie^
sa el llaiiero á moyer sus rebaños para sacarlos de los bajos «que
▼an á cnbrirse de agua ; bien que el ganado, sea por instinto ó
por costumbre, emprende por sí solo la Mirada hacia sus inver-
naderos, tan luego como los primeros truenos ó las primeras llu-
vias indican el cambio de la estación.
En.el invierno es cuando el Orinoco crece considerablemente y
sirve como de represa al Apure, él cual no puede desaguar con faci-
lidad por no tener una velozidad y volumen capazes de abrise palo
por entre el raudal que se le opi^. Hínchase, pues, y no p!|« '
diendo sus bordes contenerlo , sale de madre y redunda por todas
partes. La represa que hace el Orinoco al Apure, la ejerd^ este so- •
bre muchos de sus tríbufarios ; así que la causa principal de las *
crecidas de los ríos de los llanos es debida á las crecientes del Orf^ *
ñoco. Entonces es cuando el bajo-Apure presenta las inundaciones
del bajo-Egipto : sus sabanas ofrecen el aspecto dé grandes lagos con
islas en medio. Espacios hai de 50 leguas de largo sobj^seis ó siete '*
de ancho, que están cubiertos de 40 ó '1 2 pies de agua ; otros son .. ^
menos profundos , pero siempre lo bastante para ser gravados ea
todas direcciones por las piraguas, canoas, y bongos, que en aquella
estación sustituyen á los caballos. El ganado que no ha tenido tiem^i
po de recogerse á los invernaderos, corre mucho riesgo de ahogac»
se j y si por acaso llega á guarecerse en aquellas pequeñas islas,
«s ordinaiiamente pasto de los tigres que van allí también á bus-
car un asilo. Puédese, sin embargo, cuando se tiene práctica del
terreno, comunicar á pié ó á caballo de un hato á otro, aiínque
siempre con mil riesgos por los caimanes, los tembladores ó torpe-
dos y las rayas; y aunque en estas ^avesías hai frecuentemente' •
que nadar grandes trechos que ocupan los estenas , ^los Caños y
los imi, en otras partes es absolutamente necesario embaircarse,
como ^cede entre el Apure y el Arauca y desde ¿ws abajo de S.
Femando hasta el punto del Jagual , entre Arichuua, Gunaviche y
Caiiben. Tirando una línea desde S. Femando hasta la boca de
Capanaparo, siguiendo el curso del Orinoco hasta el Apure y con-
siderando este rio como una tercera línea que llegue al mismo S.
Fernando^ encontraremos un delta j^teriorá 420 legwts del mar;
_ 70— ■
-ieadmeno Ufet^áfico qae 6e(tuii'fltinri>ol¿t, oütce poc«s e|eii^Ios
4o el antiguo mtindo.
' Toando la credcnto'ba dcaozado todo «m incremeiito, lejanías
•CBbarcacJones el álveo 4e -los rioe, que ala deswnl^ 4e prolon-
far el camino, aneo el «ibstácDlo de las oorrientesy el>peli^de
'-Ins árboles que arn«li«a , y se entniD i>or tnedio de las «rbatns
cuya agoa estancada M eiitenuneole clara. No mcede lO misma ea
laelierfas del Allo-Apore, pnes aunque liaoen graddes 'llnnnw ,
dirandadas é inmeiKOs esteros , sin embaoge , loe bancos 'y méda-
nos iireporoiómni caininoB para transiUr y iniiohos mae lagares
<yara el refugio -de 'los animales', entre les coaleehti un gran Di-
eres , producen gran-
ar, qee esáSnesde
m las iDtmdaeioDes,
caBos qse van dismi-
ú ealor las baoe «va-
i'por ttposas-grandas
K^ilas galeresY pre--
nte'MKajonHdo entte
mível y ns plaajoíes
idas «las •«n >eirotlin-
iae <de Oammá, jOu-
, AaiimesasBltas, la
-nayoriparle arenosas, cayos declives vienen á pCid^se sófora erie
lie^ femando algunas revés á sos bases, ptonieies que en jas (M-
cientos sonoeupadas por las Bgua§. A Ja opuesta 'ribera .-«sidedt,
«n la de 'la -GaaiyanB , el aspevto de las sabanas >da i comtcrqae
perteaeeeo'Ql sratcma de la Parina, en tododirer*nte'deIa«a>ni-
.itíade'CBráctt.y de Herida. Tampocastm iguales áias del Canuií,
qae ana^oe batieu parte del sieiema de la sernorfa de Imalaca qae
«fiHuasratnifieacionde li <V^ima , sen , 'sin embargo , de un aspee- -
)to 'tétadmente dtétinto. las del Caroní son mas fl*eseB8 y de me-
j^rasipastos , rciultendo las Teutajas'deiteBGivá&lremeB(jlad«e«en(i-
-110» lanferazes gwxkIos irlDes de Aragaa. Baáa en 'tAa llnora
.jgw'se'eleía 900 yans Mbre 'Bl>sÍTeÍ4el.nMr itaipvnpMltTaes
,]Mloraca T «nibili iaiiafuso poMos^irv4iK«ü9(eH«iiM«s,«ft-
* •• i;
i . *
— 7+ —
linasy boifiMKálkB ; rkvs , morlcbafles y jabant^llfiqíiaft 7 ^Bámém^
tes de agua^ las 'Caales no se ínunáan á p^ar de *qm NiaeTé mas %
sALí que en otras partes ; á cansa de su aproximación á la m»r y á
las grandes selvas , coyas evap<HracíoBbes llevan los ^vientos del ,E. N«
'£. Las otras sabanas qae acecinan el Orinoco ordioarjameaie em-
piezan por grandes mesas deyadas , qne á primera vista parejean
iguales á las de Barcelona; pero se observa qae en ella* la.pen«
penetra el suelo y las rocas d^nndas y de formas capnchosas ^oa
cetros agnfpados en dístihtfs direccicmes ; se ven asomar per todas
partes. En las mesas de Barcelona no hai sino sseaá ó ttina«gn0(la .
compacta , y sus bordes son ^mos frecuentemente escarpados , for^
mando una especie de farallones :< en estis otras son raros esm
enormes barrancos , y las mesas se pierden suavemente en llannras
mas ó menos elevadas , que alternan con tierras bajas muí cstensas.
No siempre se ve en ellas la ar^a^ y soloiel granito, se presenta á
flor de tierra. Los ardores del sol están áHi mitigados por los vien-
tos del £.^ qne nevando la temperatura suave ée los vatros M'
mar, reciben amn nnevos grados de freseura al pasar ^r Jos bos-
ques muiestensos, sobre las aguas perennes de los moricbalesy
sobre varios rios caudaleeos. *
"Suceden a las mesas hermosas sabanas cortadas en diferentes
direcciones por una mnltitud de aguas e^rrientes ^ que c^i todos
pasan sobré rocas granítidas que están al nivel del terreno. ' .
Salen de en medio de Ja paja , grandes lajas , enormes peñascos
y aun cerros de figuras raras que al parecer formaban en otros
üempos parte de la cadena de montañas destruida hoí día. Otros
cerros se presentan tatf desordenadamente esparcidos , que no es^
posible conocer la dirección principal del sistema á que pertenecie-
ron. Aguas dulces de admirable trasparencia, corren por todas^
partes ; blancas algunas y superficiales, otras oscuras en profundos,
pozos, comunmente habitados por enormes culebras de agua que-
ba^n su presa de un toro ó de uncaballo. Estas tierras de pasto-
no se inundad ysolo unaque otra parte baja llega á. ser cubierta
por4as aguas en la estación del invierno. Desde Calcara hasta 'la
tegi(m de los. raudales os igual. ía fisonomía del pais, boi (olal* •
mente desierto^y solo recorrido por los t^res y otras fieras. Nubes
de grandes jnurciélages salen al anochecer de los intersticios de las «^
rocas á bij^scar en las fruías el alimento necesario á su subsíljlencia, a
Estas verdadofias soledades son rara vez visitadas por algún viaj^o «
— 72 —
ó pon algunos indios cazadores. No hai en lo interior viviente al-
guno de la raza linmana^ y s(^o cerca del Orinoco existen algunas
pequ^as poblaciones , distantes entre si días enleros de caminp;
siendo mas fácil la comunicación entre ellas por el rio que por tierra.
Esta Eona apenas tiene 590,000 almas que están én razón de 45
por cada legua cuadrada , cuando podría mantener una población
de mas de 6,000,000, dándole solo 700 almas por cada legua cua-
drada , cálculo mui bajo sí se considera que cada rio ó caño pro-
porciona vegas grandes y fértiles para ^1 cultivo del maiz, del plá-
tano y de la yuca, y qne las sabanas dan carne , queso y leche , sin
contar con la caza abundante de venados , chiguires, váquiros , ca«
•chicamos, galápagos ,' terecayes , morrocoyes, multitud de aves
acuáticas y la inmensa cantidad de pezes y tortugas que suminis-
tran los ríos y los caños.
Aquí termina la grande zona de pastos que se estiende de E. á O.
200 leguas , desde el pueblo de Barrancas en el vértice del dejta
del Orinoco , hasta el desparramadero del Sarare , en los conQnes
de la Nuevt-Granada ; teniendo de S. á N. casi ^00 leguas, desde
cerca del Vichada hasta la serranía del Pao en la provincia de Cara-
bobo.^ Ocupa el todo una estension de 9,000 1. c.
Las oíüco especies de sabanas de que se compone la zona de las
crias, están diMribuidas entre las provincias del modo siguiente.
1 •
*
•
Comaná v Barcelona. .
w
Altura inedia
sobre el nirel
del mar.
Lé|;oas
cuadradas.
S40
180
190
130
145 -^
1.979
S.973
1.500
4.936
Gtrácas y Garabobo
JPaiU*sS*' ••■■#••*•*••■•--*---->->>-
Apillre
*
Guayana.. •••*. ,,r - -
*
Total... . ..............
9.000 1
r
^
\
A
^ 75 —
ZOHk DE IOS BOSQUES.
Recorramos ahora Tai tercera zpna de Venezuela ó la zona de las
selvas, tan grande por sí sola en estension como las dos descritas.
En ella se encuentra la naturaleza en su estado salvaje. Los^bordes
de lois ríos y las selvas- antiguas ofrecen los grados mas bajos de la
elvilizacion humana : pueblos cazadores y los primeros ensayos de -
la vida agrícultora. En estos inmensos bosques e^a donde ios intré-
pidos conquistadores bascaban el imperio Tabuloso del Gran Patilí,
la magnífica residencia de Manoa , con sus palacios cubiertos '4e
placas macizas de oro del lago imaginario de la Parima que la cir-.
eundaba, en cuyas aguas se reflejaba la imagen de los sunlu0A)sr
edificios de aquella ciudad. Quimera halagüeña que sabian alimen-
tar los indigestas para deshacerse de sus incómodos huéspeées, in«
ternándplosmas y mas en la tierra adentro en busca de lo que no *
existia. Er^ un fantasma que llevaban constantemente d^ante de /*
sí, sin poderle alcanzar, y que dio origen á las espediciottes memo-
rables de Ordaz, de Herrera y de Spira en la tierra clásica del D%*
rado deRaleigh.
Desde las costas de la Goayana empieza esta gran selva, y la na-
ción Guarauna ^ la primera que se nos presenta, conservando sm
independeucía en el Delta pantanoso del Orinoco. Hacia las selvas
de la sierra Imataca, en parle anegadas, ep paiie, cruzadas de caños ^
Y ríos navegables, vemos las mas barmosas maderas y las mas úti- »
les al hoj3{bre. Scio la raza indígena recorre aquellas fK)lttarcasr, vi-
Tiendo doJa pesca y de las frutas silvestres. Mas^allá de la Sierr^"
Imataéa se estiendé una tierra víifgen y desconocida hasta cerca del
Cufuui. MiAtañas desiertas cubren aquel eqpacio apenas «habitado
en las orillas de losarlos por la tribu ieroz de los guaicas y otros que
aun no olvidan la persecución de los españoles , cuando unidos es-
tos á los holandeses salían á robar indios para hacerlos esQlavop^ .
Mas allá del Cuyuni la selva es aun totalmenjie desconocida, y solo
por algún rio se introdujeron vanos aventureros en busca de es*
clavos hasta las cabezeras del Caroní en la sierra de Roraima.
, En las óriUas de los ríos se encuentran hombres ferozes de dife-
reates tríbus que contuvieron la persecución sistemática practicada
por los frailes misioneros contra los naturales. También se hallan
errantes en unas saban'aús dilatadas que hai entre aquella sierra y
~ 74 —
la de Rmocote , á la.qtie rodean grandes é impenetrables bosqtes, ^
algunas tribus valerosas ^^ueliaQv&abidedo&ader su independencia.
La pesca, la caza y las frutas c^ínponen sos aumentos. Las riberas
dd €aroDÍ,. cubiertas ide eorpidei^tos^árbúlás yoioriiiesiaa^ede
glfiíito, presentan raudales peli^roBos.; (pero eslosfiKE^ 'pudieron-sfir*
mde j^arrcra á las «spedicixmeft ^spoestas por losfcailes caqpQcbi'- "^
nos, para apoderarse con las aflatas -i^n la raano y purtoaáio deJft
sorpresa 'de ios 'indios»acliiragolas , barinagotos y.amnacoios ouyas
restos aon esístea^
■Par las sdWas ^i^ costean eVrapagna^elntrfldiijo^en oti^. tíem*-
po^ el capitán Antonio Santos : atra^só en a(]pselia dirección, k
'Merra^aearaima y pasó al río Branooy allago^Aviará, en basoa
del D^ado. En la misma línea se 4iiaBzaiPC»i también :loattDÍsiona*ii6y
y«6rca de la sierra Pai^amma. tenia el gdbierno «de Guayauaua
puesto f!^e llamaban Quirior f> Qrioly ahora desierto, y s(A>iki
raza in^gena se^iseñoraa devanas comarcas en lascoales el cacao
nace sBvcstte.
lasríbUras del Gavra, donde hubo en otro tiempo algonas mh-
ajimes establecidas , también se hallan desiertas , 7 soioi^lgonos dfi
qps puntos son visitados por los que se emplean eai^ocogerilatito-
fmfíimarafmy tan 'estimada en elcom«roio.
.^JS0t^«ia sierran la Cerbatana, coostantemeüteM^idNatta.deini-'
,b^8 oléctricas , 7.1a ^erra Mai^alid|/\áYen tdbns dóciles, *cQfn
easiis eátán defóndUNis ccp empalizadas. Si pesamos dairegíon de las
erttaratas, eulramos on a4pelteMelfffis del Sipapo,.«i(dai£de;los:pri*
meros .misio^^os, dando 4;rédito^ los esonlos de los indios, sb-.
laston 4a nación délos rayas., hombres 'qnie teakm la^boea>6n^
ombligo^ És tambian mas allá(dejpqaeUo84§rando»ica]idal«s €0n3fi
losibneaias'jreligioiosflítiiábaB los pueblos qné^temaniía ojo enime-
dio'de la frente y otros eon^oGibtKa de perro* állms wordaderameDÉa
ttdmÍFQble ia ramificaclonMe tos grandes arios y aqo^ sísiemá }de
agm^^negras t<io mnpiB'iBiecto, ffiiénlni^<(|ue'eaiaB étoG» agms
llenan el aire iitibes€e >fiinotidos ^''mosqUos , de <Ma y üeaooba.
^Sxk aquelli^ selvas viren indij9s<dÓBtIes : los napoyas ,4ost|^aaoaB-|
}ofr.maisos y otros , láeilesde redonir ; los eovtes ip««de decirse- qoe
están en lostprimeroB^ensa^asi^eite^'BgeksllneaysemlaBí^ 71a»,
d i|tílaro ^ ú\ -algo&i&..:En «esta 'JfBieBtos ^se^mmeslFaii^fisam
umbolicas ^esmt^^^s «n las wcfts^y ri^ áüaeree&oiftdejj/ma*
Unaü^ :pet9oaiqeinitDló|k»><deik.'ieAiéi»úi bárbant equinoenvi.
■.^ — w —
.^^^8 peSas i^ián sobee el Gaáqidare , «n él Es^qoibo y rio
Branco. ^rpreiideiite es-en^estos lugares el eitligse de ríos ea«d»-^
4 losos, ^e pcesentaii'una comunicación espedilaeiítre 'millares de
4egBi^> por lafamoba'bifQFCtoiou 'del-Orinoeo que reúne la hoya
46'este rio con la del A^OMisotias, por medio del Cc^qomre , eanal
«laAiBral de 70 kg^as de^tego t ^tan aaclio «hbo eli 'Rta .
IBn los bosques del Oiiuoéo, cérea <de bus cabezeros/estím aque-
les indios guaiaas> de eslatuBa ipequena y 'de uneolor.'oa» blanoo
» ^e 'Contrasta slfigularmeate con la tallaiatta de Jos^carilies 7 con el
tJolor <de cobre tȎvfo, tprqiHO^de las otras tribus. {Fambieb thr^ii
alU aquellos^íerba9»guahaQrlbos queeo d raudal 'deeu'SoinbFe em-
tlmeion al cajeta» iBobaditia. EaíltL tribu está boi imii ^mimada
fior la pers^CuaioQ encarnizada «^quc le bace la dé ^los.maquiritares
ifiam robarle bus b^os que Uewin éwpiies á vend^ á la colonia !>e-
meFaid en cambio de herramieulas^ cuentas Üe nidrio.
Xas'Sólfas producen la sarapia, él maní, el pncherí; él caucho ;
da zarza^-pacrüla , la Tainilla , losgraiides afaaaendnwK y él cacao;
'K la Taataih#ya'det Yeatqari domioa lanaeicmt&squíritareque se
fledi«a<á la a^riculttiFa. En todas estas sehvas.]]acen mas de mil
«plMitaft^útUes ^ bálsamos y arpjuas deseoDocidos y elaQaTaenre^qae"
-«U-d'CWare^ uno de los véasenos mas mortíferos : esaqnella una
verdadera riqueza vegetal en lugares aun no bien espkirados, qjOie
el'bombre «¿v^e qpófiasosáatrái^ar por4ápiffi» puntos y que
.solo las vfieras recorren en -todas Affeeoiones.
Busca en Tace el viajero cuestos vastos desieittDS'el poder anlí-
gDo de los ijoaneti^anos, la aolfopofagia de los 'goaiponavis, las
MKRteitíasde los caráiKsy ettcouierciai aetividlid; .que ios hko'lla-
asiar.»por on .giiati viajero los ^khares del NuevcNJttundo. Peto
• 4lada de ^esÉoenevieDtra, ¿ino Testos miserable^ de unos, «eoBltinib^
mas'lranKiBas'enlos Divos , yon la'roza caribe 'inaceion y.*nulidad.
iinlodanipanesfse iwn las veli^ilis^e lae antíguaamfisiooes'eon al-
fi;iHiDs hombres btamsos <en tugar de 'los Icailes; y vaa^ios ind^s
.^dáoUés y somisos que trabajan ^pera ^procararse vesÜdos ''y pmen-
•tarse ^^tiales ¿aquellos en el^esiorior, aái aomoflo son delante .de Ja
i riel. ¥aiDo faai|ftraeo«ieionei5,'tert|iinóse1a>gaepraqiie se^hada eon-
:(aa<l8S(tvifa«s'ei^i%ldas por*')as(orillasde>les^os*óeo lassdhras:
-m lei5<tlnDȇ'lb vlda^^^jcialpor medios tgusves yceipios. La:trompe-
vifadelíBo^tilo yamoNBoeiia como v^a'Cosa'sa|;fada'vÁrvieBdo ehova
'¿•ilo^itia sB8;biílles y^diveniofi^s; y el li:alo ánraenle de los.^e
•>
ñ*-
-^ 76 —
*
trafican ood Ijs indios, irá con el timnpo redaciendo á naa vida
meaos penaba la| tribus que se iiailan aun en la iufaácia de los
progresos humanos.
El viajero encuentra por todas partes árboles gigantescos de ro-
bostas y estendidas ramas cargadas de espeso follaje , cuyas enor-^
mes raizes se prolon^n casi á flor de tierra en t#das direcciones , ó
bien bajando desde la altura de diez pies sobre la superficie del ter-
reno, se ramifican al rededor del tronco formando con este tantos
rectángulos cuantos son en número.' En otros árboles se apartan^
las raizes á la misnut altura , en forma de triángulo^ , y parecen
como gruesas tablas pegadas al pié del tronco^ Una multitud de
plantas purá^tas de formas variadas y flores caprichosas , cubre los
grandes árboles desde su base hasta sus ramas mas elevadas : estas
se ven otras yezes espesamente ^tretejidas por el CoHaje de las
pintas trepadoras, que serpenteando ora por el suelo, ora remon-
tándose á las copas y pasando de una en otra , enredan todo el bos-
que y le hacen impenetrable. Ademas del embarazo que oponen los
bancos cuyas raizes flotantes se agarran gpr todas partes á la tier-
ra ; contribuye mucho á hacer casi imposible el tránsito por Iqs
bosques , una maleza mui cerrada j grandes grupos de aloes espi-
nosos, semejantes á las plantas que producen la pina y á los que lla-
man mayales.
Variado y gracioa» es sin djida el aspecto de e^^s bosques. Los
árboles mas antiguos están vestidos con el lujo y IsTlózania de una
multitud de plantas nuevas entretejidas con sus ramas 6 arraigadas
en ellas, ó que suben y bajan en líneas espiples al rededor del
tronco , y arrojando^uego muchos festones con sus bellas flores en
forma de campanillas , ofrecen en un solo pié mil formas vegetales. -
Allá donde el bosqqts es menos espeso , se encuentran cantidades^
innumerables de pequeñas rocas que solo se elevan de quince á
veinte pies sobre el suelo, y que parecen monumentos escondidos
en aquellas agrestes regiones , á vezes en forma de pilares ó torres
armiñadas , ó bien como' túmulos 6 como mazizos prismáticos. A
su alrededor prosperan diferentes palmas cuyas hojas en forma
de plumas caen elegantemente y medio cubren aquellas rocas , al
paso que troncos espinosos de corpulentos árboles y otras palmas
de figura elegante y elevada , parecen puestos allí de piM)pósito pa-
ra servir de adornos sepulcrales* En lo mas cerrado de la montaña
se alzan rocas graníticas de color negro ó pardo oscuro , raras por
— 77 —
sus íonnas y de^uidas de Tegetacion algunas , otías sdo en sa ci* '
ma adornadas de palmas y oirás plantas éoloca^as sin orden , que-
dando descubierto el resto dH la roca. En muchas se presenta lo
mas alto de ellas como ruinas de antiguas fortiflcadones entremez*
dadas de grupos de verdura ó de alguna palma : en otras parecen
cúpulas que se cifran sobre una lujosa vegetación desarrollada á
los flancos de las rocas , á manera de bosqueciilos que reposan so-
bre las copas de aquellos árboles agigantados de la antigüe selva , ^
con SO y hasta 120 pies de altura : hermosas y bellas palmas que
se elevan á ^ 00 pies , contribuyen á suav»ar algún tanto el aspecto
sombrío de aquellos lugares y el de las figuras de los pélaseos y'
cerros que asoman por todas partes colocados en desófden. Aquellas
tierras cubiertas de una capa de hojas , esconde fácilmente enormes
serpientes venenosas, en gran cantidad y de diferentes especies. A
este inconveniente se añade la incomodidad que resulta de marchar
sobre una tierra húmeda y floja , resultado de lá imperfecta descom-
posición de las materias vegetales, las cuales presentan durante la
noche, estraordinarias luzes fosfóricas : diríase que todo el suelo
está cubierto de un manto plateado á semejanza de la via-lactea.
Troncos de úrboles , hojas y cuanto está allí forma cqmo un ciefo
estrellado, y se creerla ver la imagen de los ^tros reflejada sobre
un lago, si las copas tupidas de los árboles no formasen por enci-
ma una bóveda oscura é impenetrable. Esta ilusión se hace aun
mas brillante todayía por la luz viva de grandes cocuyos , que vo-
lando en todas direcciones producen el mismo efecto que la caida
de pequeños aereolitos.
Si la contemplación de las formas elegantes y gigantescas de la
nattkral^a entre los trópicos, es propia para elevar el alma é ins-
pirar proftndas reflexiones al viajero , no es menos cierto que el
sentimiento poderoso déla propia conservación , afecta penosamente
su espíritu cuando en una nocie oscura , en medio de aquellas in-
mensas seKas llenas de serpientes venenosas , oyendo los pavwosoft
gritos del jagdar y sin mas esperanza de ausilio ^ue el que le pue-
de prestar la dudosa humanidad de los indios salvajes , se pone á
considei^ la gran j^uma de pefigros que rodean y amenazan su dé»
bil existencia. Para llegar á aquellas selvas no puede tomarse otro -
camino qiíe el curso de los ríos, que como ramas de un grande ár-
bol cuyo tronco es el Orinoco, se reúnen todos en él. Poro tambiea
allí le esperan' los peiifros de los raudales , en los cuales es preríso
— 7ft —
pasaf la ¿ubtecadéii sobre peñas anonloiiada», ¿ p«r etlwhos j-
rápidos cajiaWy ó hie» 6leyarla.i Mena do cicles por peqpm^ta
cascadas, ooo al temor cootiiuio de ^¿dacse siaella en aqóallosxi»*'
siarf 08« No es esto todo : á cada paso se teme ser atacado pM^ loa
indios erranüs , cayas fleclias «»^eitei»^ qnítaii> la Yidaen^l cop»-
!#> eqpacb de- 4 5 miMtos ; y si se a^mga ei tonneiil» iQoeaaato qw
cansan las pieadarts de las moef altos y elj^m^ doraale al dia , y
ifii de \^i»zim€udos en todo el enrso de la noche ; 1» falta toM da
raeorsos pava reponer los bastimentaa^ si por desgram liega» ¿
agotarse los que sa haii> iiavado, y la perspectha de un hxwrible
üfesanq^o^e» el caso mm pos^^le de^ seetaiaoado» por algiua eafer*'
iBedad , caaaáb^se está toda el dia espaasla al sol asásmle y á te-
llnvias ábQaéSfiles, respiváadose un aire hámada ¿ inibcto ; se Ytríi
con cuánta razón dice Bomboldt al hablar de aceites regiones d^
niMYO-MimdO' « qne alK ctfói' se aeoslumbra uno á mirar altiombva
«- cornil B^ esencial al orden dela^natovaleza. La tiesra está sobros
« cargada de^ vegetalts^; nada detiene eli Hbretanmento é progresa
a detestes , allí donde una iamensa cafia de tierra manífeela la no
a intemnipida áceioa d» las luerzas. oirgánicas. Los caimnaes y loa
«• boas' son lioadvefios del: rio^^: ei jaguar, el pecan , la danta y loa
a raoBOs atraviesan los montes sin temor y sin riesgo , y se eslable-^
eccyr ea- ellOs oamo en una antigua heredad. Este acetada nns'
• naturaleza Itena de vida en qoe e^ hombre «a es nada, tiene aip
« ^0 de estrato y de triste. A la YÍ9la> del- Océano y de las arenas
« det áltíea sa aaestombra nflo eon Ivabn^o, aanqne en aqneüns
« lugares en que nada recuerda nuestros caaspos , nnesiroa bos*--
r ques ó noeslros nos no admira tanto la wta soledad que so atia-
« msa. »
Mas da hr mUad del territodo- da^ la repáUica está oea^iade por
la zona de- loé bosquies, y está apenas habitada por alfanas fami-
lias cri<rfla6 , eerea do 2,0M indios 'Vedneidos y aproximadafin^te
49>,^M independientes q«» viven regado» sabré la inmensa «^Mr*
ficiede ^9,244 i. c. El total pnes, de 4^, Od(^ afanas esparcidas en
aqueHaa sdedades estaría en razón de paeo> mas de das por'Cada le*
gua cuacada. Guando las in&Hgraeiones y las geaeradones fulares
empiezan á rozarlas grandes selras y el Ínteres mercanül Uamedlií
cada dia nnevos colones, entonces será coaja^o cadibiarán de aspecto
estas solitarias regiones qne el hmnbre^Qantto apenas b» reeovrid»
pop al cara» db Ipa rioa principales* » l\a se otea ^ dieé HuBíb^t 7
— rs —
m q«e ios; ^Mto^^MdÜKñm hteedo. y^em acunas fmt^ niiiÍ6«ei# ,
mmnamMmóékfB^VbstML d» utosqiiilo» poeden poii^ obstáGoJo^á
tf liSifVogiaeMff d^ cttUífO'en las9abiras;€l«<0tiayaoa : agvftt^denioa
m <ioa* «1 hóflibpe, como h» smeaiMia en tedas pnrites' y en* todos
« tí^BpoBi, camMuidot la^ snpvrfieie óaí ssmto , eaaible tambíei» M
m cQimié^mkm^é» bt atmiaiMBt y los.ñiBeoltoa cesarán Umt pnnte
0ti eoaméo 4»sapumx3m loa ví^ árboles ds Iob mónleB , y cuando
« eB>«slas'reg90Mi3 s» i^taft los fÍ0s poblados do. doáa^» y aJitafis
«cytk9 Itearis «nitífidttSv y euliisrtaS' <fe ea8erifts^ydo haláao^
S^afNia tliftdOBÍnta>ket poodKi nniitoiior^ÓHiodaDMttienfrd^
•W,^^>^^ ^ bd>^Mt«s« I Q«é' espeetáettl0 ta&. gcaado p^eseatAf*
rfrei^dflces^ol Otkujit»^ y^^ícml^^ücifú díe usa gni» proqpieFi^d
t«»d6»a !' LÓ8 tirreaofir atora ioundadios «ií d delta, s«¿a oono
te bc^llB «anif^És d«i la IMaudaí : ]as.oosta9d»8ior tas* enlape aqiiHil
yellüdiiocí», prodüoípá&dMiflKlastas €osecfaas« La&soitas limitadas
por la sepraofe Inatao» y Rinoeote darán solida á sus frstos por oí
Giif»i, surcado oiióflces por i)«M|«e& de vapor; ooaado%ora>apér
n» lo vewnen los^isidlos salvajo&eíaisas^ cCébilos ctmehas. hos hos*
ífam étí^ &mmt y Baragsa hoi46 difiieil navogaenm por sús^^i**
pmm^vmsáúes^ tsttÉjrin caiiilQOs carreteros y ríos navegables pura
fievar si^riqueeas al OriBO00^« El €a«fd rebosairá en preduccHMMS
eHlBHiMeB y tesará eaaaiaos. die careos para coffiwioar con las^ ea^*
btunss^cM Boíhbo^ detYesliMrí y el rim Pattma, braaa príod*
pid del rio Braaeo. Ta para emí^tem los grandes raudales de AttK
res- y Miópnre seré» obstáculos nm peqiaeios para k ioteresaafle
iMivegaciNr ^oe oonmnca el Orínoco» con el Amazonas por el Ca^
fB«n^. Eir les s^Harios rtos Nieta ^ Yidhtda , Guavíare ó (uíridaí se
croiaráfi mi hmjam ie vapor qm eoaéufitrin los ofegebos ée eo*
mereio de wm §tdm pelladoa aMmentaáa pw aqaellafi coanarGas
. baibftadÉ al preséis por idgunos centenares! de iiuiids ferozes y
errante»^ El Yentsarl y tedas los nos fue caen en la parte aílba éal
Gringo y en el Gasiquiare*^ tesdrá» sus ríb^as cubiertas de adi-»
vos^monúilores. Ek Río-l^ro de vefe en cqsvbSo visUado por algu-
nos especuladores pobres' , s^á ealánfios un canai importaste para
el comercio inlerier de las tierras meridionales de Venezuela y de
* la Mueva-Granada j S. Fernando de Alabapo^.la Esmeralda , Pimi-
chin, Marq^ , S. Carlos , lavPiedra Cücui ^ Mavaca , Santa -Bárbara,
la boca Sipapo ^ Haipure y Atures, serán puntos mui importantes
— 80 —
en el alto (Miioeo ; y en ellMgOy los de Carichana, Calcara, boca
deí Gaora , Caroni y el f artice del delta. La ciudad de Angostura,
única pAlatíon rica que hoi existe en aquella parte de laGoayana^
que está mas bien en la zona de los pastos que en la de los bosques,
debe su incremento, no á las inmensas tierras que recorren el Ori-
noco y sus principales tributarios , sino al tráGco con los pueblos de
los Llanos y principalmente con los de la proTincia de Barinas.
Qiandp sus relaciones se estiendan por toda la gran zona de los
bosqties convertidos en haciendas y labranzas por la iodustria bu*
mana, Angostura debe ser una ciudad mui importante ^«y mas im-
poi^ite que ella y laas rica la que se establezca en el delta ó cer-
ca de la mar. Entonces se conocerá también la ventaja que resulta
á los pueblos que se funden mas arriba de las cataratas, de poder
comunicar con el Amazonas por el Casiquiare ó pe»* el río Atabapo
qm se unirá á poca costa con el Rio*Negro por medio de un canal
artiGcíal. Para llegar á las- tierras occidentales de la grande boya
' del Amazonas, se preferirá el eamioo mas corto del (tinoco , y por
él saldrán^ la vez producciones de la Nueva-Granada y del Brasil.
Pero aun sin esto, las selvas de Guayana reducidas á cultivo , pue-
den dar por sí solas 240 vezes ma&irutos de lo que en el dia se re-
coge en toda la república. Si &e considera, pues, que la zona que
hemos llamado agricultora tiene bosques vírgenes que pueden dar
den vczes mas productos que los actuales^ se percibe que con el'
tiempo estos montarán á 540 vezes mas de lo que ahora se iogcdí en
el pais. Se ve que solamente las dos zonas , ó mejor dicho , sus tier-
ras susceptibles de cultivo , pueden cómodamente sostener una
población de 50,000,000 de almas. Aun puede hacerse snUr esté
aumento probable á 64,000,000 que es el doble de lo que hoi tiene
k Francia ; porque ademas de ser doble la ostensión de Venezuela,
sus terrenos son mas ferazes; por la naturaleza del clima dan do-
bles cosechas, y se siembran en ellos plantas que rinden en un es-
pacio igual á un terreno europeo , cantidad mayor de frutos nece-
sarios al comercio y á la vida del bombre. '
Las ^ 8,2 1 4 1. c. de que se compone la zona de los bosques pue-
den dividirse y clasificarse del imáo siguiente.
— «4
■eiB
Cerros pesarosos no cultivables
Cerros pari^ crias de cabras y oyejas., . ^.
Sabanas en lo interior de las seWu para cria de ganado nayor..
Lagnus r ciónasas.. ; .«
Terrenos anegadisos incuUif aleles : . . .^ ^
Terronos desmontados y cnlüvados por los indios
Montañas vírgenes susceptible» de cuUíto
Descrito ya el aspecto general de Yeoezuela, solo resta dar algu-
nos pormenores que se colocarán en la deseripcion de las proTincias
respectivas : pero antes no estará de mas indicar la situación de las
ciudades y villas cabezeras de cantón por medio de cuadros, para
poder de provto comparar sus alturas respectivas sobre el nivel del
mar, y su temperatura. Estos cuadros facilitarán tanto mas el para^
leloy cnanto q^e están formados de un modo que abraza ciertas fa-
jas de terrenos que por su posición están espdestos mas ó menos al
calor, á los vientos, y á aquellas causas generales que tanto in-r
fluyen en la temperatura de un pais. Se encontrará la tabla de
aquellos puntos que están cerca del mar y espuestos á los viento^
del norte : la de los que están eu medio de^a cordillera, y la de los
que al otro lado miran á las abrasadoras llanuras ó están situados eü
ellas. La reglón d^ los páramos tiene la suya así como la zona de los
pastos y la de kte bosques. Otra tabla bacc ver la temperatura á
di/erentes altaras seguri la calidad y posición de los terrenos ; por
último dos cuadros comprenden la temperatura de l^s 9gua$ dulce»
de los ríod, lagos , lagunas y de las saladas próximas á la costa
del mar.
p. «Boa.
6
'-J>
TABLA COMPARATIVA
De la teñperatuifa de las ciudades y villas cabezeras de cantón qoe éStáken
la costa del mar de las Antitias , ó próximas á ella , con la altura respeitdva
sobce él nivel del mar.
'
NOMBRE
de
LOS ¿ÜeABE»»
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Guaira
Rio-Chico. ...
Ocumsre *>...
Puerto-Cabello.....
Barcelona
Wrilu
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Güiría *...
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]li»-Ganbe.......w
Ufammiibo
San C&rloB de 2ulia.
Gíbraltar
Alta-Gracia..../...
Coro
Gosta<- Arriba »
Gumarebü
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Aiuiicioii** ...:..•%.•
Nortea ...4^.
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26 67
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2T: 29
97 99
26^ ti
98 It
la iL
1
NOTA,
Si máximmn de
mhr ha sido toma^
do entre las 97 3 de
la tarde y elwáxi-
mum de frió entre
las 4 y 5 de la ma-
ñana, generidmen-
teeaiawltetonse-
ca y en el princi-
pio de la lluviosa y
siempre en el espa-
oTo de 9 á 8 dias
cuando menos. Las
observaciones fue-
ron béChts con el
termómetro de Fa-
renheit y en la re-
ducción iil centígra-
do se ha elevado
basta la leg^ilda de-
cimal.
r^ íSp 'r— •
TAflLiL CeaKPÁHA^'CWA
dialli tempentdmde ksoiwiiileB 7 viltaos ^aOMÍsent d« caunoii qué'eMflii éír
laft^vÉHet é' ea* medio dariu sen9iiia& coiLla aMn» MÍBplielfi»«p sobré el>
niYel del mar.
NOMBRE
LOf LÜaABBS.
• ••)>•■ tk • •
'Bxureüu;,.,,
Santa Lucía
Ocumare
Gaacaguau. •«•.
Yiotoite
Tamem
HartciiU
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Valencia
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■Hitalbtn
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SinLilft.
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■ucuchies
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Bailadores
GríU
San Crí8tó]¡{al
Lobatera
San Antonio
Tn^Ulo
Carache..
Boeonó
Baenqne
Barquisimeto
Sin Felipe
Taritagua
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Qoibor.
Upaút .'
Sin -Fernando de
Atibapo.V
Alliiral
Taras.
■■■■■■•
4.044.
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94
94
49
93
89
50
87
67
56
11
56
95 84
NOTA.
El miiiaiiuiu^e
calor ba sido toma*,
doentre!a8 9 75de!
la tarde 7 el máii-
munr tle fHo entre
las 4y 5 de la ma-
ñana 9 genecalmen-
te en la estación 88-
ca 7 en el principio
de la lluviosa y siem-
pre en el espacio de |f
9' á 3 dias cnando'
ménos^' Las obser-
raciones füerOnii»7
chas con el fcerai6-
metro de Farenheii
j en la rednocional
centígrado se ha ele-
Tadcr baatt ti segun-
da^deeimal.
,
-_ 84 —
TABLA COMPARATIVA
9 t
Da la ■«9iQ|)enliura de las ciudad y villas cab«Etícas de c»Cob .qaé están «li
la entrada de los Uanog y en los llanos mismos , con la altara respecÜía
sobre el nivel del mar.
NOMtoB
- dr
•LOS EÜOAKBS.
?
OhMgosramas
Orí tuco
San Sebastian
Galaboio
San Garlea • . .
Pao. .'
Oiioto .'
A ragua Camanet'. . .
San Mateo
San Diego
Pao de Barcelona. .
Soledad
Araifua..
filaturin
Barrancas, ........
Períjá...!..,
Carora. ....,••....
Harinas....^
Obispos.
Guanare.
l)spino
Guanarito
Nutrias
Araure.^ ;
Pedraza
Achaguas,
Guasdualito
Mantecal.
San Femando .,
Angostura
Piacoa
Cajeara ;
seSBHBHai
Altara
en
^aras.
208
373
450
120
2«2
343
50
135
177
153
150
52
354
If
20
127
415
482
166
172
437
143
140
288
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too
308
180
80
69
36
• 75
Altura
-en
meteos.
Ha|ror
grado
4m calor.
^p
170
313
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100
177
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425
43
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9
17
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152
439
444
11»
120
117
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30 86
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Mayor
grado .
de frío.
28 00
36 11
S8 89
26 11
25 56
25 56
36 II
36 11
25 06
2( 11
23 89
23 89
24 44
24 44
23 89
34 U
2» 56
24 44
34 44
24 44
34 44
34 44
27 78
28 56
34 44
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25 56
30 00
30 00
25 33
36 67
33 89
S ej -íP'
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s ^-
38
Í7
27
81
28
28
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27
27
27
27
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27
27
27
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37
sr
30
37
37
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28
82
33
^fiOTA
06
78
67
39
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34
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78
11
23
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5D
78
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78
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50
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50
78
18
89
78
78
78
63
67
, El máximiam dé
calor ha sido
do entre las 2 y 3 de
la tarde y el máxi-
mum del Trio entre
las 4 ^ 5 de la ma-
ftana , geralménte
en la esladon seca
y en el principio de
la lluviosa, y siem-
pre en el espacio de
2 á 3 dias cuando
menos. Las obser-
vaciones fueron bo-
chas coa el termé-
metro de f arenlieU
y en la reducción
al centígrado se ha
elevado hasta la se-
gunda decimal.
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TABLA
De la temperatura de las aguas dulees de los principales lagos,
lagunas y ríos de Venezuela,
[
NOlfBRE
de los >•
LAGOS , LAGUIIAS T RÍOS.
Grados
de latitud. N.
ea que se
midieron.
Lago de Maraca^* . .
Lago de Valencia. . . .
Li^uoa de Tacarigua.
Lagaña de Sinamaica
Lirguna del Zulía
Laguna Guataconica
Laguna AresUnga '.
Ríos GataUínibo , Zulla y Es-
cala nte
Ríos Tocuyo y Limón
Ríos Tui y Uñare
lUos S. Juan y Gutrapfehe.
Rioa llf orichaHargo- y Tigre .
Iftios Guarido y Pao..
Riosi*ortuguesa y Gojede..
Ríos Guanana y Boconó. . . .
Ríos M asparro y S. Domingo.
Ríos Ganagná y ftaripa
Ríos Caparro y Uribaníé . . .
RíOI Apure y Araoca..^^ \\ . .
Ríos Meli y Gapanaparo . . .
Ríos Gáura y Guchirero....
Ri09 Gulfcyiare y vichada. . .
Ríos Inirida y Atahapo. . . . .
Ríos Negro y Pacimoni» . . . .
Ríos Casiquiare y Siapa. . . .
RiosGunucunumay Padamo.
Ríos Ventuari y Slpapo. . ^ . .
Rióf Páragua y Oria.
Ríos Caíroní y Cuyünl. . . . . .
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no
9»
90
8» é 9'>
9» á 10?
10°
9» á 90 W
8» á 9» 80'
8" á'9^ 50'
8» á 80 3(K
8«^ á 8<» 50'
7* á 7» 30'
7* á 8*
00 4 70
70 4 go
5« á 4«
i" á ao
50 á 4»
5» á 4»
40 á'50*
IP» á 60 *
0* á8o ^
V A $•
TemperatuM
del agua
por el
centigrade*
25.5 á 26.6
95. á 95.5
16.6 ái7.
96.' á96.6
25.5 á 26.
26. á 96.6
26.' á 26.S
26. á 26.
26. a 26»6
26.6 á 27.7
96.5 á 27.7
96.6«á 37.7
26|6 á 27.7
25. á 2ai
á 26.7
4 27.7
é96.
á26.
á 27.7
26.6 á 27.2
25.8 á Í6.6
25. á '26.
24. & 24.4
23.8 á 24.4
25. á 24.4
23.8 á 24.4
23.8 á.24.4
23. á 25.
24*.. k 2flí.«
27.2 á 29.4
!&SttS9Se
UOT^Í,
rili
26.
96.
25.
2S.
27.
Las obseryaciones !
han ildo hechas en
nnehotpvntot y du-
ran le semanas entoe
ras en las diferentes
navegaciones de los
rios y lagunas ; todas
á distintas horas y
épocas, tejiendo cui-
dado de conciliar las
obsenraciones , para
«btener el conoci-
miento mas aproxi*
mado de la tempera-
tura media. La mayor
parte en las bajas
aguas y muí pocas en
las ¿recientes.
0 ••
V".
TAfiUf *
De la temperatura de las gguas del mar tomada en la superficie ,-
; «Dlk pwte; bondt y^ttatnui .léjoa^de laico^ta.
<'
DB LOS PÁBÁJW.
«*•*
BnelgoUodePairía....;..*
Bu el golfo de Cariaco
En las eostas de Bafcétoaa j CliaatiA.'
En las costas de Garác&s^y Garabobo..
En las costas de Coro j llaraoaibo.. ..
temperatura
media
del centlgr*.
.96. 8.
S6. 6.
ss; 6.
94. 7.
■ Generalmente crece de 4 á K» él se pone el
termómetro en la paite en que el pgua tiene
dos 6 tres pies de protTuaáidád.
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NOTA.
*iMP
Las obervaeiones Mn
sido hechas en muchas
Mrtftt do lili inisTtn coi'j
tas á diferentes horas, y
en. distliilasiiipooas , pero
se ha tenido esto, presente
para' formar la tabla que
eski'ftandada sobre- mas
. de. tOOtoliie woetonea íp».
fueron hecbas eoa-el ler*
mómetro de Farenheit y
reducidas al centígrado.
^y£G£TALES•
Esceptuaadó solo el 'Nuevo reino de Grftnada y los países Mtiiflh
dos en.el eimador , ningano de los -de la América antes espaüdla
ofrece tanta eopia y variedad como Yenezuelayenlas producciones
* del reino vegetal. Plantas útiles al comercio, otras que el lujo y los
aitiguos hábitos han heeltf) necesarias; .cuáles preoiosas pafa^Ia
c«ra de las dolencia^ himiMas; y na número consídka'ábletie te
qoe" sirven para et cqmvn aItmentO; hateen H^íáima la jffom; auii
no conocida, de la tierra venezolana. Esctsanren te instruidos los
viajeros antiguos en las ciencias naturales^ se dieroia poco á l^s in-
vestigaciones botánicas y zoológieas .^mas se aplicaron , al oonoci^
niiento de los mínerades, yconttodo/mDg.iitíaroitiíoB ^ettteta he-i
cha perillos ex|Bte de )as que encierrannestro paSs, teniéo siem-^
pfe como poco rico en esta parle. Sin ios trabajos de algunos sa-
bios estranjeros que ;en ié{K)cas mui recientes visitaron ]os países
equinocciales , llevado? .da .su amor .á jias.cáencias, Venezuela hu^
bíera permanecido tan deseonécída ¿ría fii]ropa.cuUaie<9&aks«0í^
giones mas distantes de Ta Oceánia ó'd^ Mitee. í^o pofqi»^*» niñS
gun tiwttpe hiyin.ialUido.flipiáradaflMbJigal^^
]ilAI>Ue»^.|«lPá 'teiát con A«r reí ^ p«is . baja>todiM r aoe itafUeM* £1
suítB Añdai^u (pot^^ifoiplo , en tu Hwtorm aaliirál y indral :d0 Iw
Indias, líi&'é eouQíúBirmnchds ptentee iodigeims^ las qiieeik.su.'to&*
po se habían aclimatado^ Varios intiiierfi^ y aniíoales, y4a8.eaUdiie i
des generales ^1 país ;.|iep» suolira «no es^ an Miado científiao y
e^ mtti léjos.de «atístettr á los •sabios , queboí la eoBsnUaD.mtn
pof Qiiríosídad gue por prayeebo. Bi^ líempospailarktres D. Joii^e
Jpttti'y *P* Antonio «Ulloa bieieron .de orden «d^I-gobiaüna jaspañol
qn viaje á Amériea. A niiigaiio mejor que áestos doathombres mt-<
bios hubiefa.jmdído darae el eñcar>gpo de formar i^Leuadró fisko dn:
las hermosas regiones hispano-americanas.; pafO)ni tuvíeroatíem*
po para tan vasta empresa , ni fué su objeto ^principal la ciencia: .
Fueron enviados mas bien como pcsqoj^dores políticos que como
esploradores de la naturaleza ; y la exactitud y juicio con que des-
empeñaron su peligroso encar^o/hace sentir que no* dedicáronles- '^
dusifamante sus talentos á objatosde mayor utilidad para él gé^-
nero'huaiano. .Á ntas de que, ningnno de ealas beneméfíta^ aspa- •
ñoies visitó siquiera el pais'-veneíolano. La. pobreza proverbial de-
este exí punto ¿ -miücf ales, apartaba *deél:la atención debgobieniQy
ataaidatada-for las riieas i comarcas de M^íoo y?del Perú. Vendada
tan «ieita-y genera), que>ao solo es apiieable-á.las:ckncÍB8 oalnmp.
les, sino á los trabajos purdmente geográíeos que acaso^reqoianen)
ni6i»0S'tieia|K) y raenrsos. Poique sise^eséeptúanlas.hennosaseaivt
tas ihidrográficas^ hechas an lostúllimos üempos^porFida^ycCbnr»*'
ruca, no eiíste n^sgmr trabajo deresta.espeoie, porlo menos eaw9»«'
cidodel pvblico, que fuese mandado baBarideOfieíO'porieLgqi^er-.^
n^tespaaal :;y sia^eseapcion., níagnno puram«ftt8*tóregaAfBfX);>
DubemospiM á ios trabajos del señor .fiaron de^HaBÉbaUtda*
claiiioacioii de^miei^as plantas aos preciosas. Ni d^e olvidanr^
al: señor 'Bonpfauad <pie»ioaoompaftó«n'^8n*intereBainle:viaje:á faB(i
fliliittes.Qqolnoíniia1esy^]ii.«l sabiO'boossingauU'qiieieomo» bqláBica*,
y-qnímico «hadado ^á eoncner h! ftierza, riqueza <y tipliaacioft á^
mnsIrasiniBforBsprodittoioiies agrarias, y finalmente al seiior.Ro«»<;
lin qie ^on Mbil observadon-y diestrisímo {^cel ha enriqumdo^
losfoatiálogos eifropeos'con variedad de imuestrasde:ios*mdS'bell0B -
iBdivhlaos ^el' TéuM)' aniñíai anevteano. Stguieado lospasos de^es^*
tiB: liwulai>s> evBáiifnt)e^.arMbOfioso y modesto «venezólanp,tlo«íá'>
Mai^^^^MÉrgasj e^aooMo^yatari el m^ndorsi^^o por sos trabajos-eD
las ciencias, ^ha>elasiÁcaÁ5>m«i(^splaMU[r^^ue: se ocüfltavtyn'á la*^
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observadon ée sos ^redieisésores. t)6^ tqdas Atas daiMcat^éft y 4e
tt&a larga' Hita' (Te maderas con que tíos ha faYéreddo el «eMr Fe^
lieíaBo MoQtñWgro ColjtiQ > formamos el jedaci^o cuadrQ dé^pro*'
7 doeoioaes vegetales que ofr^emos ^ público.
: No se puede dividir la^ vegetación p«r climas; poes lo cálibo ,
Vm ó templado de estos, no «frece escalas safieiendes para^gra-
'dfiar con pr6d$i#n los principales vegetales. Estas escalas son \^
difereoteS' aHnras^á 1]ue se encnentraii los terrenos sobre él nti^M'
Uel mar ; y por eso , separán<|pnos de ima división general que en
otra parle bemos becho de las temperaijgrasde^ nuestro suelo, se*
guir^odos aqueflas eselusivamenijp.
DEL NIVEL DEL MAR A ^ .200 VARAS.
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•^ •
Desde los bordes del Océano basta la altura de -1 .200 varas
Hace y medra la grande y hermo^ familia de las palmas, llama»
das coa razoq por -un célebre esqritor , los príncipes^ del reino
^ vegetal , y por lo menos , con las q^e'^ningun otro puede compe-
tir en la variedad de productos útiles al hombre. Solo tres de
. sasínctividuos forman escepclon á esta regla, pues oo se sosli^
nen sino eñ alturas mayores y mucho mas considerables. Uno és
el palmiche de los cerros de €aripe y de la Cimarronera : nade á
•l;500 varas y sa tronco de tres ácnatro pulgadas de dfimetro*se
eleva hasta la altura de 20 pies : en ailiUas sirve de luz á los
indios de Caripe cuando penetran en la cueva d«| Guácharo á ca*
zar li|s pájaros nocturnos de este nombre. El s^nndo es la pal-
ma de la. cf ra ( ceroxylonanéUeola ) que Humboldt j^ncoolró en
la m^ntaila de Quindio, creciendo en una aliará varia de '2.098
vari»' basta 5.5S4 : vegeta también en la» mpmtaSals de Mérida
<fit miran ai lago de Maraeaibo ; y le viene su ñouáb^e tulgar de
Japera^que mana por .encima de Ja coftesa y que loSiiodígena^
de a^uéllaf$ regiones usaban desde tiempos remotos para alum-
bmrse. En fin, la palma r^al que es una especie de oreáú(m
'*^«'4) y que crece en la altura de 2,200 varas; árbol gigantesco
cuyas formas maje^luosas lo colocan enUre las mas bellas palme*^
ras del Nnevo-Aílundoi, Casi .nunca está sola : á m pilé ó c«^ do'
ella se mantiene por lo común una paltnape^e&a q«6 p(^ s«t
c^figur^cion es l)ama4^:^%Hde la^lpd^ ; a«bÍMU> hüspkte'qu^^
hace resaUar ma^ la {leri^esura 4e fu- ortosal eomp^üera.
• <*
n¡lef?n^t^8 palmas adoriiMi los declivios de las oerátll^ras, las
•espesas selvas de las orillas de los ríos y las vastas Uaouras cubiertas,
jr de altos y socalentos pastos. Nacen y viven estas en altunts yarite
basta la de K •20iP yaras , que como ya hemos dicho , es el limite su*
perior de su vegetación; y si bien reservamos sa enumeración para
Á catálogo que se pondrá al fin de 1a descripción de los vegetales,
no podemos menos de mencionar aquí algunas cuya falta seria de
gravedad en nuestro plan general. La 'primera de ellas por su im-
|M>rtanc>a , ya que no por su hermosura , es aquella que en su eu-*..
tusíasmo llamaron los misioneros j)(iii ie vida; la que también sa .
dice $agu de lo$ indios guárannos ; la palma moriche , en fin;
(coctía mauriiiá) cuyo nombre recuerda al hombre americano la
lecundidad con que favoreció naturaleza el suelo de su patria. Crece
desde el nivel dpi mar hasta la altura de 800 varas , en los terreno^
- húmedos y cenagosos. Guando en los calores del estío se seca todo .
-en derredor de este árbol, hallan al pié de él los yiajeros aguas' '
siempre frescas que se escapan de venas subterráneas : la parte mas
tierna de su cogollo sirve de hortaliza al iqdígena ; del renuevo lani-
bien saca cuerdas con que forma sus' redes y sus camas colgantes.
HantenimieiVto regalado es antes de Mzooarso el fruto de susrací^
mos j y maduro sirve para hacer.aceite ó javon ú horchaUfs qúa ei^
dulza con la^iel de las abejas. Con las hojas secas de esla' planta^
«ubre el indio su choza ; eon las. tiernas forma esteras , fabrica
sombreros y. mantas, velas parp sos embarcaciones. El tronco en-
cierra* en su parl^ superior un jugo azucarado de que hace vino : de
*6l saca tablas y aun algunas vezes embarcaciones pequeñas. Un ti)- ^
jido natural qpe envuelve el racimo del fruto antes de madurarse y
'«irve junas veaes de gorro á los hombres y otras de faldelasá las mu-
feces casadas.. La palma qie no fructifica suministra una médula -
barini^a que llaman jjfnnema , de la.cual hacen pan y usan cogu)
menestra. Podrida esta médula sobre el árbol , produce unos gusa-
iios|;rneso$ y blaQ(^ que comen los indios caribes como una cosa
««quisita. Tales son en 4K)Apendio los benéficos- usos de esta planta,
(011 que parece quiso Dios poner la satisfacción do toda3 lo&nccesid^.-
4^ del salvajede América. * -
No son menores los qne al hombre civilizado proporciona en. el
liioral el coco {lodoipeaj i no en valde conociendo sus ventajas se
liA dedicado i culUvarlo con esmero en estos últimos tiempos. En
Iiiie9tr|it Ihuiuras bai hoaqoes inmensos de'la sola clase llama<i|a
4
^^ ' palitta abttiiido', cuyás-hojas sirvieii panr caMr l&s'CiBaB; fo9' eogo-
I » . llo8*pM^bacw9ombrero0'ydtroncofUra'foiuarlos'<w
■\ , latos. Abondai)iisifim'68 en^ Rio>>Negro la llamada 'dtiqtilcMqiti^ Ign
"* eaal «oba^amialaieiite «iias^ barbas negm&fias een <qa» haoeír lós^ in-
dios sus famosas cabullas y oaMas^dástieoS) ineomiptíbles y Hjeros,
^ si- bien algo'Yohimíbebos por lo ^ueso d« lás'hebraB. La palma ya^
guaes tan'ffttimdátite'ea lassélvas* , en tas^Uamiras y en los cetfro»,
* quéfonna en oc^one^- escalaos* bosques, á bs quo^con razón po^
' HanHjarse o/ltuara» am^fican&s. De la parle mas tierna* de sos renut-
''▼ososan los indígenas como'bortftlita; sirven sus hojas secas para
^ ^ lechar Jais tiabttaciones, para hacer cestos , sorafoi^t)S y cabuTfas ;
k tlsmpo qtíe el tronco oírecouna especie dé tela ó cedazo natural
^uese.usft para las filtraciones. Dos clases de aceite da esta palma
\ anualmente en la estación del infierao : uno que sirve para el
.. alumbrado y seestrae de la cascara de la fruta, otro que dala carne*
^ de esta y se apKea al mismo uso cuando no lo comen en liígarde
manteca. La palmar chaguarama crece salvaje en las llanuras que
solo están de ^00 a 509 varas sobre el nivel del mar ; pero fiasicb
L trasplantada á la altura de \ .400 por puro adorno , á causa dé sus
! ' ''4brm^s elegantes y majestuosas-: elevases frecuentemente mas de
^ '2K^ varas", y tan solo puede comparársele con la pHiiguao ($ pir^áo
t que nb.ce mas a!lá de las grandes cataratas del Orinoco y se-man-
\ Hene á la, altura de 1 90 hasta 400 varas sobre el nivel del mar. Su
L tronco espinoso tiene 25 varas ^is^alto , sds hojas tienen la fioñrma <fe
plomas, delgadas, ondeadas y rizadas hacia la punta; prodtaoe
'^ enormes racimos de 450 á200 fruías farináceas, amarillas comd
la yema del huevo , algo dulce y iiotritiv« y que se couie como* el
plátano y la papa , siendo alimentD tan sano coofoagradaMe. No je
* cansan núñca los- indios y los criollos d» alabar lo» beneícliis dé avie
wbol mtfgm'fico^ que como dice HumbiMr, podría llb»arse)»i¿Mlt
\ méipcotan.
£1 cucnrito-vaágiai y el seja t^eneulá frota parecida al aibaí^
^0^ coque y sus penachos reclosy etogantet se elevan sobre un frooso
% de 50 á 5R varas de aftttra . Púoden aimsíintH^se^ al bMuoso gtuM»
oredoxa ó palma real y son plantas áociflble&c(mio*ol^ mmohe f k
yagua. Propordonanr eomid&s y l^gos iaiti4iivos eseeléiate». Sus
hojas ó. mas bien sns*pahnas llenen una cHpsDdfltt'tan pefpéadfe»-
hu^etí su juventud como* en su «vleao'dMmillO'^aola qM^las pMh
tas en este último estado se encorvan feBerélq^u«ñQraianM^I utas
ÜefiBOSO). tíarao.n^ frasco' penacbo. verde.. UrgK> aaria.emiinerar las
4iíér6Dt6a clasa» de palmaque axisten en niie»trO' fecundo suelo :
baatalo diolio pararformapeidea^ de la abundan^a^y-utílidad de
.aste árbol benéfico,. ouniasdisUntas familias' bepnoseaa nuestras
llanuras y selvas. Garaclerizan ellas de un modo mui partícnlar.^1
lerreno venezolano : no son como en los desier4os.del>África, gfu-
pos solitarios , habitadores de uno ú otro oasis qne4e vez en.cuaiN
4o varía la. baste unifonnidad de aqueÜos maces de arena ; aqn/
. Biieb]án'.es[iaeios inmensos de terreno , templan en ,los calores del
estío^los rayaos abrasadores del sol tropical y^en la ^tacion lluviosa
cuando todo se inunda, tienen el aspecto de un bosqpe,q|jie sale del
•enodelaasfuas.
Sobre los bordes del Océano y del mar de las Antillas y en- el"
4elta pantanoso del Orinoco se nutren» los mangles {rhisaphoñi
. mang(e)^^ la familia de las coprífoleáceas : los liai. encarnados y*
. {nietos {avicennia nítida). Fórmase la planta de numerosas raizes
. j^e levantándose! algunos pies sobre la. tierra se uneay componen
un tronco- ^^leso y fuerte, útil para la carpintería* De ^te y de las ^
0
jamas brotan renuevos semejantes á la jarcia de un buque ; tos ,.
cuales caen á. tierra, toman raiz en ella y forman,; por decidlo así ,
oirás tanta» maromas que en un espacio de muchacireunferencia
afinían el árbol en medio de los aguacales. El icaca (^firisobalü"
ñus étnico) , es un arbusto que orece espontáneamente cerca de la
orilla del mar formando espesos matorrales , cai^gados de frfita^
blancas y rosadas de un gusto agradable,, y de las coates 'se.baeen'
ascelenAes conservas* Las uvjgis de costa (cocüoloba wifera ) na-
¿ea> silvestres en las playas marítimas, en tanta abuadaacia qSe
4^arecen pequeños bosques. En medio de las lustrosas y redondas
bfjas se de^ubren multitud de racimos sem^aatcs á- la uva nt^gra
• 4e E«ropa'4B¿andD está madura, y tienen un gusto mui agradable.
fil: venenoso manzanillo babitaí el litoral y aun se interna en los
bosques.: su nómbne botánico es (hipomane manúinelia]de la
'.Iftmilia de las euforbiáceas. La fruta tiene la figura de una peque-
. ila4naasa9a, y es'tan olorosa coino las mejores de-EucoDaj.peroiel
jm^rudeate que llevado de tan engañosa apariencia, las comiera ,
recibifjíi la muerte. Sn sombra misma es nQCÍva,,piies así 4e día
como de noche produce el efecto de liinchar las f^rtes^q/aa han par-
lo del^aíre ambieiite.. «
Tawbieuea lasiOriHaadei.mav y basta 4a altura da 4 f200: vacas
A
\ '
~ 96 — "
Yegeta lá gran t'tírba de ios eirius, la biguera de la India ó cardo*
nes, qne sé elevaii hasta cinco yaras de alto en fprma de candela-
^ bros: Sa tronco es tan doro qoe de él se sirven para la oonstroe-
^ cion de las casas : sus brazos espinosos de diíererentes formas ; pero
elevándose todos rectamente hacia et cielo, son en las llanuras de
Coro y en varios distritos de las de Barquisimeto, dorante el vera-
no, el pasto común de los numerosos rebaños de cabras que allí se
. mulUj^lican con asombro. Este mismo u^ tiene entre otros la fa-
XK^ilia de las, tunas o cactus con espinas y sin eltes. Sobre esto
r planta de diferentes formas y alturas y que crece en ocasión^ basta
tres ó cuatro varas, se cria espontáneamente-el precioso insecto de
r* la cochinilla^ que hace la riqueza de una parte considerable del tw*
I» ritorío de Méjico, á tiempo que se descuida totalmente so cultivo
^ en Coro, en Carera, en Maracaibo y Barcelona, donde generalmente
se encuentra. Tanto los cactus como los cardonales forman en oca-
siones bosques impenetrables , mezcladois de mimosas arborescen^
tes de la familia de las leguminosas : tales son el cují ( mimoia
^, temesiana) de madera torcida pero^oi sólida, y otra de sus cla-
i -. scs llamada vulgarínente. ct^^de atvma , menos común y como
' el otro, útil par4 horcones, dfentes de máquinas y curvas. Eusten
también las mimosas fructescentes ó sensitivas : ktf de Cumaná de
copa esférica {humilis ) 4e tres á cuatro pies, la pelita de Calabozo
^ y la dormiens de Apure, qne tírven de verde alfombra. Una ter-
^ , cera parte de la provincia de Coro y porción n» pequeña de las de
Maraeaibo, Barquisimeto, Barcelona y Cumaná, están generalmente
cubiertas de esta sola vegetación dentro de la cual viven en soeie-
Sades numerosas, el chigüichigne , de la familia de las afumai,
los mayales' de la familia bromelia-caratas que ocupan gnuides ^-
¡ pacios impenetrables por las púas de sus hojas y la ¡^oiimidad de
las matas, el magfiei cocui ( mdguesis) cuyo vastago ó pitreo car-
^' gado de flores ,se eleva mas de diez varas. De esta planta estraen
en la provincia de Coro un licor es]^rltvos<^de muchas aplicacioii^
' medicinales importantes, mas fuerte y acaso también mas agrada-
' ble que el -aguardlinte comon.de la caiia , y del cu%l hacen los ha-
lavtontes de aquella provincia gran comercio. Así como este , pros-
pera abundantemente el m^eí cocuisa ó mas propiamente pita ,
{cocuisa aloe ) en los cerros calizos hasta la altnnr de 2.<^00 ¥a-
ras sobre el nivel del mar. Lo haí con espinas y sin ellas, y tienen
^us hojas varios usos. Las hebras deque 'están llenas sirvan para
»
s
— 97 —
hacer cuerdas ó tejidos ordinarios, en^Tiu(«stra tierra^ que en otras
hacen telas y aun encajes de ellas : machacadas se aplican con buen
éxito para la cura de las llagas y cangros. A la altura de 2.500 '
varas , poco mas ó menos , se sostiene agarrado á otros árboles el^;
maguei-parásito , en cuyas hojas rolladas á lo ancho y de hechura>
de cuña, como las de toda su familia», bailan constantemente agua^»
en abundancia los cazadores ó viajeros.
La pina (bromelia ananas) , de la familia de las bromeliácea^^
crece siempre aislada entre las gramíneas, y silvestre al pié del
Duida y otros cerros de la provincia, de Cumaná. Esta planta bella
por la simetría de sus formas, produce un fruto amarillo ó morado,
coronado de hojas plateadas , de los mas esqutsitos por su sabor y
aroma.
En la región de las palmas crecen corpulentos y hermosos el ta-
marindo ( tamarind/us indica ), de la familia de las leguminosas^.,
cuya fruía sirve de regalo y remedio, y la cañafístola (caparís) de^
que encontró Humboldt 50 especies y cuya fruta tiene también
aplicaciones medicinales. A la misma familia pertenecen el algar-
robo {hymencsa curbaril) de fruto harinoso, madera compacta^
.útil para máquinas , y cuyas raizes producen una goma escelente-
para charol y usos medicinales : el alcornoque ( bawdichia vir^
gilioides) áe mtdera superior, aplicable á las máquinas, incorrup*
tibie, y cuyas raizes se usan en la cura de varias dolencias ; y el
dividive { caulteria tinciorea)^ cuya madera es propia para obras
de torno y la fruta mui usada en el curtimiento de pielop. '
El cascaron majomo (securidosa^ pubescens) , árbol- de madera
. mui compacta y único que en escelencia puede competir con la ve-
i^. Del árbol- de aceite ó eopaibo llamado también cabima (copayf-
fera officinalk) , se estrae por medio de incisiones hechas en sa
corteza, €fi j^imoso bálsamo de su nombre^ que sirve para curar laS'
heridas , precaver del tétano^ aliviar de otras muchas dolencias.
Abundante á la par qué útil , crece silvestre en las selvas y sobro
todo ea las de Maracaibo y d^ Orinoco. El guamacho (ynga pun-
gens ) da un fruto agridulce y hojas medicinales. Hai también ea
Yenezuela árboles colosales de la misma familia de las leguminosas,
tales como el saman (saman acacia ). Admirable es el de Güere ,
bajo cuya sombra puede reposar un batallón en columna : el diá-
metro mayor del ramaje es de 72 varas y el tronco tiene 4 ^ de
circunferencia. La jigua {geoffrea superba) abunda en Rio-Negro
^ P. CBOG. ^ '-7
^
— 98 —
y proface iib% almendra aceitosa contenida en una cascara inerte
qne fígnra nn erizo. La pasa de Río-Negro {geúffrea hredemeyeri)
• árbol igualmente corpulento, produce una fruta do cascara mas
fuerte y mas aceitosa que la anterior. Los bucares (erythrina ve*
Ji^tina^ e. umbrosa y e. dubia), llamados Tulgarmeate auauco»
peonía, espinoso y liso, notabks por su altura,' por la prontitud de
su crecimiento y por la sombra benéOca que prestan al café y al
cacao.
La ceiba ( bomhax seiba ) de una altura gigantesca abunda (ks^
de las regiones mas bajas hasta mas arriba de 2.000 varas.
A la fai^ilia de las malyáceas pertenece el guásimo (guásima uh
mifolia ) que abunda en los países cálidos y cuya fruta sirve de
mantenimiento silvestre á los ganados y bestias. Tanto ella como la
<M)rteza del árbol sueltan después de machacadas un mucilago que
bebido es eficaz remedio para las insolaciones f tabardillos de hom«
bres y animales.
A las de las verbenáceas pertenece el maría (pétrea arbórea)
á^ol siempre recto y de madera escelente para arboladura : no
tiene mas ramas que las de su copa esférica , lin^la en estremo
cuando se viste de sus flores rosadas.
El jobo (spondea Intea) es de la familia de las terebintáceas,
resinoso, de madera frájíl , de fruta aromática y alimenticia , que
fermentada produce una bebida agradable.
Debe colocarse el piñón [jairopkfi curcas) en la familia de los
tithymelca%. Sirve la almendra de su fruta coiA) emético y pur-
gante y también da un escelente aceite para el alumbrado.
Este uso y el de laxante en grado superior tiene el tártago hi-
guerote (palma crisii)^ de la familia de las euforbeáceas. El emén
tico crece silvestre en forma de arbusto hasta la altura de tres va-
ras : su fruta en el estado de madurez es del tamaño de una cereza
y de la misma figura que la del piño»; y la almendra, que e» una
pepita blanca , es la que se usa como el emético en la medicina.
£1 totumo ( cresceneia cugete ) , d^ la familia de las soláneas ,
produce frutos de diversos tamaños generalmente redondos ú ova-
les. De ellos se sirven la gente pobre y los indígenas para formar
vascas de toda especie, platos, cucharas y otros utensilios.
Crece con profusión en todo el territorio venezolano la vera ó
palo-sano ( zigophilum arbareum ) de la familia de las zigofíieas ;
árbol colosal que se eleya hasta 50 varas y puede dar quillas de 25,
— 99 —
siendo su madera incorraptíble, la mas fuerte que $e conoce*
Superior i este es el granadillo {bucidá capifata) de la faoñlia
de mirabolanos, de que bai dos clases^ uno negro y otro pardusco,
ambos mui buefos para obras de torno, y de una madera que por
su dureza compite con el bierro.
£1 carato {genipa americana) de la familia de las rubiáceas es
un bello árbol de bojas largas, lustrosas, d^ fruto parecida al nís-
pero y de cuya semilla cáustica bac^ uso los indígenas para for-
loarse en la piel una especie de enrejado, negro ^obre el rojo con
que se pintan. £1 paraguatán {maerocuemium tinctorium ) de la
misma familia, produce una bella madera rosada, propia para eba- \^
nistería : su corteza da tinta roja y podría ser un articulo ioi^or-
imte de comercio.
£1 cbaparro-sabanero ( curatella americana ) , de la familia de
las dileneáceas, cubre los llanos altos y produce bojas tan ásperas
que se emplean para pulir las maderas^y el carei. £1 cbaparro-maA-
teca {byrsanima ehrysophilla), de la misma familia, produce una
madera color de almagre^ que tiene la propiedad de arder como
una vela-
£1 cotopris [melicoca olivceformis) y de la familia de las sápin- .
dáceas , es un árbol elevado de hermoso ramaje y aspecto propio
para decorar grandes parques y paseos : su fruta agradable da uní*
licor vinoso bastante aromático : crece con lentitud, es de mij^ha
vida y carga de una manera asombrosa.
Por incisiones bechas en la corteza se saca el jugo del árbol san-
gre-de-drago que sirve para tinta, y tiene aplicaciones medicina^ r
es corpulento y abunda en las serranías bajas y en las selvas de las
llaneras. Del árbol llamado murciélago , en la serranía, de JNkgua
se estrae el mismo jugo ; y allí abunda'tambien el cándelo que en.
otras partes llaman árbol de la manteca y cuajo en algunas ; se !»•
cree de la familia de los sapoteos y tiene propiedades mui particu-
lares. £ntre la corteza y el tronco se encuentra una materia seme-
jante al sebo que sirve para alumbrar : de la fruta se hace una be-
bida semejante al cacao, tostándola primeramente^ y se estrae de ella
nn aceite útil para el alumbrado.
El árbol candelero {aralia capitata), de la familia de las ,
analláoeas, es una planta bella, que serviste de ramas horizon-
tales. * •
£1 árb^dq leche (galactodendrum utile)^ de la familia de las *
1
r.
— 400 — •
Qrtíceas, se llama tamlüen palo-de- vaca. Crece en grupos, tiene
las hojas grandes y venosas, y da por »cision un jugo blanco nu-
tritivo semejante al de la leche de vaca, pero mas espeso. Según el
análisis de los Señores Boussingault y Rívero, contiene agua, una
materia análoga á la materia gaseosa de la leche de los animales, y
cera en abundancia. Esta última parece idéntica á la mas pura de
abejas y por este respecto el árbol de leche merece ser objeto de
industria. Si el licor se une al algodón, sirve para alumbrar, dan-
do una luz viva y de mucha duración. Existe en las provincias de
Caracas, Carabobo y Maracaibo.
El lechoso ó papayo americano ( cancha papayo ), da una fruta
sabrosa : sus hojas se emplean en lugar de jaboa para blanquear
los encajes, muselinas y zarazas. El árbol de pan [carolmea prin-
ceps) produce una gran fruía redonda donde están encerradas mu-
chas semillas semejantes á la castaña y que, como estas, se comen
y son nutritivas. Se encuentra también en Venezuela un árbol lla-
mado castaño [artocarpus incissa F), de hoja y forma diferentes de
las que tiene el que con este nombre sa conoce en Europa.* Es co-
pado y hermoso y echa flores gigantaícas como de media vara de
diámetro : contiene cada una de estas diez pétalos de ocho pulga-
das de largo y dos de ancho, un pistilo é innumerable cantidad de
I estambres : su color es rosado que por degradación pasa á amarillo.
Pridüce una fruta parecida á la del carolinea princeps y sus cas-
tapas se asemejan en el sabor á las europeas. La fruta de burro
[uñona aromática) , de las anóneas es ej guaruchi de los indíge-
nas, el cual se eleva en algunos parajes á 20 varas, tiene figura pi-
ramidal y su fruta está reputada como poderoso febrífugo : llá-
maula malagueta en algunos parajes. El catigúire (anona manirote)
es de la misma familia y tieae una fruta agradable pero muí no^
* civa.
E.n la familia de las meliáceas primoregia , el cedro negro ( ce-
árela odarata ) , es una clase de árbol de las mas abundantes de
nuestros bosques. Algunos suelen pasar de 54 varas de elevación
y cinco de circimferencia. Son muí comunes en las selvas del lago
de Maracaibo y clasifican las gentes con diferentes sobrenombres su
madera, según lo mas o menos subido del color, la abundancia
de resina y el arqjpa qué'despide. El cd\y^ho [swietenia mahagoni) "
lleva su troíco á 20 varas y tiene de tres á cuatro do circunferen-
cia : su madera es, sin embargo , mui inferior ala de los de Haití
r'
— Í(M —
y HondoraSy escepi^en Río-Negro , donde se encuentra de esce-
lente calidad y aun superior en lo compacto. El cahobano de Bar-
qniftimeto (crotón iucidum ?) es igual á la mejor caboba de aque-
llos paises y la circunferencia de su tronco pasa13e cuatro varas.
El caracoli (rhinocarpvis excelsa)^ de la familia de las burcerá-
ceasy árbol mui corpulento en algunas provincias y de madera
superior para buques de gran calado y para la construcción
civil.
«
En la Mnilia de las ienutremáceas el carnestolenda ( bombax
gossipyum) , árbol de corteza medicinal y cuyo enorme (ronco
aplican para canoas de una sola pieza.
DE 200 Á 2.000 VAIUS PE ALTLRA.
*
Desde 200 hasta 2.000 varas d^ altura sotee el nivel del mar »
nacen y medran arbola gigantescos dé la lamilia de las amirideas. ^
£1 caraña.(am^¿^ caraña]^ de resina bien conocida por «us mara^
villosos efectos en las heridas, es árbol que se eleva con fcecuencia
á 58 varas y abunda en las montaos de la provincia de Marida ^
« y sobre todo en las de Guayana. £1 cedro-dulce [ysim altisim^)
del que se distinguen tres clases , según lo mas subido del color de ^
su madera, que es escelente. El cedro-blanco de Rio-Negro [amy'
ris altisima) que se eleva basta 44 varas y cuya madera > ^ ún
lindo color amarillo después de seca, se usa para muebles y paraJa
construcción civil. El yastfate (ysiea cuspidatá) , árbol corpuknto
que se eleva hasta 5 i varas, de hernioso ramaje de madera esce-
lente para construcción naval y de color semejante á la del brasil.
Este árbol tan apetecido por su hermosa tinta , crece en abundan-
cia en el pats de los guajiros independientes , y aun se encuentra
en otras partes. El tacamahaco (ysica tacamahaca), de resina úti-
lísima para la cuca de las herf^Jas y para oirás varias aplicaciones
medicinales, produce una madera de muí buena calidad, ^uida la
resina de este árbol á la del caraña y aljgarrobo la usan los indíge-
nas de Rio-I>Iegro para componer unos hachones con que se alum-
bfan. El tacamabaca, que también dicen curucai los indios del Ori-
noco, es de. un grosor enorme : abunda en Cnniauá, y es tan común
' en Guayana, que los indígenas se sirven de la corteza para formar
sus piraguas álfeauoas portátiles. Para eüo la estraen perfectamente
ñel tronco sin romperla^ enrollan y atan su^slremos eon bejofo^
y al rededor le pasan otro grueso qae áGrman de distanda en dis-
tancia por medio de otro mas delgado. De este modo qneda for-
mada una embarcación que no tiene de espesor mas de cuatro lí-
neas, y en. cuyo centro colocan dos palitos atravesados que amar-
ran al bejuco de los bordes para impedir que estos se -doblen 6
tnan. Algunas he visto capazes de diez personas, y para Impedir
- que en las puntas se introduzca agua, suelen poner barro en uno y
otro estremo. Héaquí pues una corteza que por su lijere^ía, con-
sistencia y estructura proporciona al salvaje medios fáeiles para
recorrer los numerosos rios de Guayana, interceptados á cada ins-
tante por peligrosos raudales que no permiten el paso de las^ca*
noas« Si el tránsito de tierra es corto, el indio se echa al hombro su
embarcación ; pero si es de muchas leguas , la deja en el bosque y
. pasada la catarata dispone en méi^os de media hora una concha
semejante.
El maní (maronobea eoccinea) , de la familia de h» gutíferas ,
es un árbol colosal de 58 varas y de madera propia pata la cons-
*truccion civil. Hácese algún comercio con su reciña amarilla.
: £1 mamey [mammea americana) mui apreciado por su madera
'S^or su ff tifia agradable. ,,.
Pertenece á la familia de las leguminosas el orore ( inga ligus-
tma) árbol corpulento y espinoso , de hermosa copa y madera de
.mak calidad : produce una escele nte goma y se sirven de él para
úñT sombra al café ; llamante también *paují y ahoga*gato.
Hfli también otro paují (anaeardium oeciSentale)y pero este es
ife la familia de las terebintáceas, de madera amarilla oscura mui
propia para muebles y obras de torno. El higueron (ñcus glabratá)^
xhp la familia de las urtíceas ; es un árbol elevado de tronco?recto y
^ 25 ó mas pies de circunferencia : da una madera lijera propia pa-
ra en^rcioues y desús enormes raizes forman bateas. De la misma
familia es el árbol mora (morus tintórea) ^ coodCido también con el
nombre de moral de tintóreos : es mui abundaí^ en las tierras
bajas ; pero su tinta es de poc% provecho. El yagrumo [ceeropea
peltata ) y el malapalo {Jictts devdrocida) son de la misma familia :
la madera del primero es escelente para formar canales ; el seguft-
do es un árbol corpulenta que da el caucho y de cuya'.€orteza ha-
cen sacos. También hai un árbol llamado seringa ó caucho, de cuyo '
tronco estraen^los iudios gran cantidad de goma (jfie venden. á lus
tiabitipites (IM Brasil; los cuales la pnr^k^tn é iattoAigicm m los
macados de Europa goq el ao»l»re de goma elásHea.
.<^& la familia de las eoforbeáceas , el yació [hevea ffuayanesis )
se eleva 54 yara^ y da tao^bieii eauü^ho : atribuyese á la mezcla de
SU jugo lechoso mü el árbol euriMioa k formaeiou del daptíeho j
sustancia qjie sirve p^ira la elabiiracioii del cautcfao negro ó braa^
de que bac^ comercio en Rio-Negro y con el cual calafetean la&
jeDftbarcaeiones. £1 javillo de la mifj^ familia (hura orepiians), d^
«norme tnance^ sirve paraa canoas^y botaos, sacándose algunos ele
•I 2 varas de largo y 5 de ancho : da una leche cáustica, es de asa*
dera lijera y lo llaman también árbol del diablo.
£1 pendare [eitharexilum einereum) de la Humilla de Jas verbe-
náceas,-es un grande árbol abundantísimo en Rio-Negro, el cual
prodyace una leche p^fsúosa que emplean los indios como cola y aun
eomo barniz.
£1 barba-de-tigre s^ele crecer hasta 4a altura de 70 pies, y so
'trom-o y ramas están salificados de penachos de espkas crgese quer
es de la familia de las verberideas.
Dn árbol colosal hai en la provincia de Cumaná llamado^guarapa
(bauhima^obtmifolia) y es eiscelente para construcción de buques.
£n la familia de las lauríneas el volador ( giroearpus america"
nm) es un árbol corpul^lo cuya madera es propia para construc-
ción naval : de su tronco se hacen enormes canoas, y bateas de sus
raizes. El sasaíras {pcoiea yavicensis) adquiere hasta seis varas de
circunferencia y da una madera amarilla, resinosa ,é incorruptible,
^•que aplican para cascos de piraguas y embarcaciones miiyoref , y
cuya raíz y corteja son mui medicinales. El laurel sasafras, varie-
dad del anterior, es de tronco re^to que se el^ hasta 16 varas ,
de madera mui .usada en las embarciones en que se navega desde
Rio-Neg^o hacia el Amazonas y el Orinoco. En la misma famil^ se
enéuentra el guariman {cryptoearya camelilla), especie de canelo
fiíui aromático, aunque po tanto como el de Cetlan, y de sabor aígo
diferente; su fruta es-^mui estomacal y se conoce con ^quel nombre
«n el Orinoco, con el de caneliUa en otras partes. El canelo [cor»
leap winteranm] produce hQjas tan aromáticas como el canelo de
Ceilan, siendo c(mocido desüe la conquista con el nombre de tuer-
co-deUTocuyo. El aguacate (lanrus persea) es ile la misma fan^iliaí.
Se conocen de él varias clases importantes : de su fruto mui apete-
cido y gustoso se saca aceite ; s^ madera de color rojo , mas ó. me-
1
^
4 •
4 ' ♦
— 104 — *
fios sal)idOy es escoleüfe para máquinas y obras de torno ; yla cor-
teza drvc para teñir, dando un color medio entre amarillo y ro^fy. La
marima, árbol corpulento y hermoso, de la mas grande uiilidad j^a
el salvaje, es del alto Orinoco. Tiene una segunda. corteza del grueso
ide dos líneas , tan estoposa y unida, que sirve de manta á los in-
-dios y con ella hacen vestidos que los preatrvan de las lluvias. Es
^anta su abundancia , que hacen comercio de esta corteza con los
vcriollos, los cuales ia usan cotoo estopa para calafetear las embar-
-caciones en que se navega por los rios de la Guayana y para empa«
<quetar los chiucliorros que compran á los indios.
En t<;^a esta zona de grandes vegetales es donde se eleva á mas de
40 pie^3e altura" la guadua [bombusa guadua) , que es una gra-
míne£^ arborescente á la que nada iguala en elegancia. La forma y
disposición desús hojas, le dan un carácter de movilidad y liie-
rcza <)ue contrasta agradablemente con la altura de su tronco liso
^reluciente : ettá generalmente inclinada h4cia el borde de los ar-
royos , y se agita al menor soplo del viento. Así la describe Hum-
boldt, y añade, que el bombu y el helécho enarbol son entre
todas las formas vegetales de los trópicos las que mas sorprenden
la imaginación de los viajeros. La escorzonera [craniolmia annna)^
es de la clase de las gramíneas , cuya flor blanca tiene de seis á
ocho pulgadas de largo. Los cortus^ los maranta y otras plantas .
de la familia de la caña de India , crecen en las cordilleras á una
altura coBsiderable , cuando cerca de la costa solo prosperan en los
terrenos bajos y húmedos. Lo mismo sucede con los siiuzes {kermes
si^ caMenaifolia) que focman zarzales en las orillas del Apure > la
Portuguesa y otros rios , parajes estos apenas elevados \ 00 varas
. «obre el nivel del mar; al paso que á 2000 varas hai árboles que
adornan los cerros , y mas abajo á 600 , los valles. La caña-brava
Qljata , es una gramínea colosal que tiene el porte del jdonax de.
Italia y la describe Uuutboldi bajo el nombre de gynerium : es
útilísima para la construcción de casas .y hacen de ella cestas , se-
bucanes y manares, especie de sacos y cedazos. La bambusa lati-^
folia del alto Orinoco, Casiqulare y Rio-Negro, es una planta social
como todas las de la familia de las nastoides. Construyen también
con ella cestas. Los nudos ó mas bien separaciones interiores del
tronco proporcionan escalas y facilitan de varios modos la fabrica-
ción de muebles que hacen la riqueza del salvaje. El carrizo es otra
clase de gramínea social y gigantesca de nuestras altas montañas ,
.!«
¿w 40^ —
coyos grandes tobos proporcionan ventajas al viajero^ Casado se
corta la cana , cada separación conliene agaa dulce y fresca : los
nudos están á distancia de una vara uno de otro é incomunicados
interiomeiite ; el diámetro del tobo es dé tres pulgadas, propor-
cionando un escelente caldero para caldos y otras bebidas calientes,
poes colocado con agoa en medio del fuego, no se quema ni se
rompe y hierve tan proiitamente como ona vasija de boja de lata :
puede servir para mocbas vezes. Las cerbatanas del Orinoco [ca^
rice) canas da 4 5 á 4 7 i»es de largo sin nodo alguno y perfectamente
rectas, diindricas, lisas por dentro y por fuera. Sirven para cassar
pájaros, soplando por eltes con fuerza púas dé palma macanilla. La
pequeña flecha asi despedida adquiere un alcance de mas de
80 varas. Los botánicos no han visto todavía esta plañía monoco-
tiledona , pues las cañas que se conocen son las que los indios del
interior van á vender á la Esmeralda , de donde piaifin á todas par-
tes. Los heléchos arborescentes empiezan en la región de las palmas ^
á i .200 varas de elevación y cesan á -1 .879 : él número total de
estas criptógamas gigantescas sube hasta 25 especies según Hum-
boldt. £1 helécho {cyathea speeiosa) tiene en solo el tronco de
22 á 24 pies de largo. La calagoala es un hel^ho fpolipodium
erossifolium). El bijao (helic^nia bias) es ona planta moi apre-
eiable de cuyas grandes hojas se sirve el indio para formar suacj^r-
racas. Muchas vezes viajando este por lugares, desprovistos de estfi
planta, hace un rollo de esas hQjas y las lleva colgadas á la «spalda
para hacer un paqueno cobertizo donde rinde la jornada . Estas
^ojas tteuen dos pies de largo y como uno y. medio de anchc^: están
eiü)iertás de una especie de polvo que las hace impenetrables y sin
romperse , conservan su fresura y flexibilidad por m9& de una se-
mana. El platanülo ó yerba arboresc^e (mnséoeo) , de hojas lar^*
gas y lustrosas se eleva hasta 1 4 á 4 5 pies de altura , y sus vastagos
suculentos están unidos como los rastrojos de las caias que se en-
cuentran en las regiones hÁijoadas de la Eftjppa austral.
En las altas montañas las yerbas suculentas se elevan de 8 á
40 pies de altura, cuando en las zonas templadas apenas formarían
ell^s un césped sembrado de flores. Los musgos y liqúenes (mttsi-' *
frótidosH de la familia de los criptógamos son alli tan comunes en^
Jos árboles como en el pais deLnorte , y su vegetación está favore-
cida por la humedad deljaire^y la ausencia de la luz directa del
so\ j observándose constantemente que por la pajpte del norte se
T *
liftlhn en j&syor caalMad y mas hemoeos. iM patos y átmneoUum
son plantas parásitas, coyas oarroosa» y Ivcienles ksjM tienen á
Teses mnches pies ée largo. DIriase que los mat^eciihd&nes pará-
sitos reeraphiEan entre los (rópnos el nma^e y los UfMDes de la
zona boreal.
A la aitnra de 400 Taras se eneaentvan en Jas botines aa^nitos
fennaáos de irn tisú de seda snspen^Mos á los árboles , y esta es Ja
seda süTestre del país , la cual aim^e de un b^lo Imtoe es avi
áspera al tacto. La misma profnedad tiene ana e^ptede de bolsas 4e
igual dase goe se encuentra en las previndas de Bmínas y Tm-
jiUo ; obra de imdtHnd de insectos y qoe tiene na pié de iairjo y
t>tro de oircnníérenoia,
DE 200 A 5,5$0 TARAS DE AI.TURA.
Desde dOO basta ^,580 Taras sobre el nÍTel dd 0ytr está com-
prendida la zona de las plantas febrífugas , cuya corteza tan esli-
mada se encuentra en machos árboles de diferenlos espedes , alga-
nos de los cuales Tegetan á on lÚTd muí bajo y hasta sobre ios
bordes del marf pero los Tetdaderos ehinchoiiis ereeen entre .<8£5
y 5,9M Tsvas de eleTucion. Seenoacntran tires e^des de^okia
^cMHéiieate calidad en las montanas de la proTinda de Caracas^ en
las de Carabobo , Tocuyo^ Mérída f Triijillo. La yirtudde la quina
se conocía por los indígenas en i636. La descubriáua^eorregidor y
dos jesuítas la lloraron á España ea 464^ , genervikándose aUí su
tiso 4 mediados ^del siglo xvii ; d bien basta "1 682 ¡no %& biso lyi-
filico en Europa. £1 cuspa [bomplaniia trifoliaiieii) , de la familia
de lasdiosmeas, tiene la corteza febrífuga y tnasamai^ <^e la
quina. Es d^mismo ári)ol||iie se llama euspane eniGomaná, y 4am-
bien Corteza-ée-Angostura. Vegeta desde 400 btsta 600 'Taras de
altura y es taiita su abundancia en laproTinda de Gumaná, y so-
bre todo, en la de Guayana , que se encuentran bosques enteros de
solo esta planta. No menos de dniHruba especie febdfugadd. géne-
ro cavüi. ^
£n d' cantón Rio-Ñegro abunda la .copana {pauUmiaeupmna)
de la familia de las pindaoeas carbol pequdio pero mui pablado, ¿e
'^caya.fmta y cáliz se saea una.bebjda amarga y estomacal y t»abien
el esáveto ó pasta que llamea gaarain, que protece un ixsUo y
firme iínte aiqaríllo. Déla misóla familia es el paca^ro {sapindus
%
~ IW —
st^&nariá) coya corteza y lo esterior de «la fntta, 'que es se^á y
redonda, es osada por les indígenas en Isgarde jabón. A la misma
elase pertenece el mamón '( meHoocva biju^a) , de faei||06a copa f
fruta agridulce, propio para deeor«r parques y ízaseos pero de mi&
madera.
El diaparriUo ^ff^xomtfBO^rigida) de la familia de lasTabááseag,
es ]¿te madera roja escelenle para toda clase de cobras de carpin»
iería.
El árbol d^ nieve {chitmaníes tetmnia] de la teaiia délas jaz-
míneas , es propio 'de la Guayana^ da flores blancas aromáticas y
im fruto color de violeta. De la misma fanñlm 'ies éí -guayabo dB
monte [ckiamantes compacta) de madera roja asómente para
ruedas.
£1 guayabo {pscidHim pi>mmi/erum)^.áehí fmMík denlos mir-
ios , produce fruías dulces ó agrias : aquellas se comen y son de
las mas estimadas de América ; con las otras ^ bacen conservas
delicadas conocidas y apreciadas basta en Europa. * **
El limoncillo ( ecdiptkranUt^ pañieulaia ) de la ;mi8nia famMia ,
es de madera amarilla pálida, esceVenle para embutidos : se conoce
tina díase con espidas y otra sin d&s; esta última es inferior en
calidad.
£1 brasilete [hecastophyllum duhium) , da una madera propia .
4 para bongos y es de la fomOia de las legumisl^sas. A ella también
pertenece el^s^úriie, especie de aeasia fétida^ qiie:tambi0n pro-
duce madera compacta y útil.
El palo-cmdela'mísm^ f^rmilia [brownBa gfrandwsps) , árbol
hermoso de tierras frescas y cálidas, llamado tambitxi rosa-de-
montana por el color de su gran flor piramidal.
EÍ guamo es de esta familia [ingalucida] ^ de bermosa eopa/
bellas flores y vainas peludas que contienen «emiUas envueltas en*
üha pulpa suave y azucarada : se conocen varias clases , y entrjB
ellas, una propia de tierras frtas. Sirve este árbol para^dar sombra
al café. Pardillo : Cambien de las leguminosas, madera escelente
para muebles; es el qUercxH caris de Linneo. La sampta ó ya]^
[dipteris odorata ] de la misma familia , originaria d^ los bosques
i^e ht Ouayan^ , árbol elovado y beimoso , cuya madera sirve para ^
muebles y su fruto mui aromático ^se «sporta para perfumería.
"Él nazareno (himcenea floribunda) madera compaxstá cotor de vio-
^tij {mpia para embutidla y máquinas , lo misino q«e el piz
« '
— 408 —
[cUüca astragarina) color rojo oscuro , de cayo árbol se sacan es-
celentes tablas. Es también de la familia da las leguminosas el uta-
pe (bahuiiHa ntultineria). Su madera es muí compacta y notable
por su corteza elfi|stica de que se hacen buenas amarras eortáodola
en listones,
'J^tre las gutíferas está el mamei (mammea americana) ^ apre-
ciado por su madera y su fruta delicada y olorosa.
Mameicillo , de la familia de las myrtineas de madera rojiza ¡
propia para tablas y construcción civil.
£n la familia de las zapoteas está el níspero ( achras zapota ) ;
es de hermosa madera rojo-oscura y árbol que da tablas de gran
tamaño y fruta mui delicada. Los nísperos de Margarita , Cumaná
y Maracaibo dan unihito grande y de sabor esquisito.
£1 onoto, de la familia de las biiiueas (biíctí orejana) árbol mui
estimado entre los indios por el color que les suministra para pin«
tarse y de cuf a semilla de un color rojo se hace ya comercio^ usán-
dola en los guisos.
£1 guaricamo de la familia de las verberldeas (bryana coceinea)
llamado en Apure guackamaeá, de un veneno activísimo. Si*ise
ll^n á usar sus ramos sirviéndose de ellos como asador, á la ma*
ñera que se acostumbra en los Llanos, causa una muerte violenta
¿ los que comen la carne.
£1 caujaro [caréUi dentada) ^ es de la familia de las borrajitto-*
saSj de canon recto , frondoso ; da una madera pMuiea , útil para
construcción civil. Parece que pertenecen ala misma familia los
árboles conocidos con los nombres de pardillo^^negro y pardillo-
amarillo : dan escelente madera resinosa que aplican á muchas
obras.
Se halla en la familia de las íiliáoeas el cedrillo-majagua (mun-
tingia calambura j, de madera blanquecina apreciada en la cons-
trucción civil. Se conocen otras tres clases denominadas cedrillo-
horcón , escelente para muebles ; cedrillo de hoja menuda, superior
para tablas ; y cedrillo-hurel , lUil para construecion civil y el que
mas engruesa de los tres, llegando á adquirir $u tronco hasta
•i.8 pies de circunferencia. El majaguo (hibiscus tUiaceus) es otra
especie semejante , de que se conocen dos clases. De la corteza se
hacen cuerdas, lo cual es un articulo de comercio. De la misma
familia es el trompillo ( /ce^ta hirtella) ; su madera es rosada pro-
pia para obra^ ie torno y para máquitas. El copei {clusia alba) de
grandes flores de ninfea.; árbol cuyas raizas tienen 8 pnlgadas de
diámetro y algunas salen del tronco á ^5 pies de altura sobre el
suelo. £1 caimito (chrysopht/lum caimito) da una fruta muí ape-
tecida.
De la familia de las corimbiferas es la tara (%erbesina heliau"
thoides), árbol de tierras altas, de madera redonda y hueca y de
mucha duración. £1 incienso (frixi n&n/o/m), arbusto resinoso
de flores que despiden un olor de estoraque.
£n las rosáceas está el angelino (homalium Posemosum) , de
trooco recto y hermosa copa. De este árbol haí tres clases denomi*
nadas angelino Ó aceituno, angelino-laurel que engruesa hasta
4 Yaras de circunferencia ; y angelino-roble que es el mas elevado
y de mejor madera , bien que todos la dan buena para máquinas y
piezas de grandes dimen^pnes.
De la familia de las btgnóneas es el araguanei {bignonea penta^
phylla ) y una de las producciones mas útiles de nuestros bosques»
De este árbol se conocen cuatro clases y el que mas engruesa es el
araguanei-amarillo : todas son de mado'a compacta y adecuada
para máquinas, obras de torno y todas las que se esposen á la hu-
medad. £1 apamate es otra especie de bignonea , pero de mayor
frondosidad que el araguanei : es árbol mas corpulento y de su
madera se sacan buenas tablas que serian mui útiles empleándolas
en pisos. £1 roble blanco [tecoma pentaphilla) , el roble amarillo
[ehretia burreria)yY el roble de olor (chelone?) : sus maderas sOtt
buenas para máquinas. El cbacarrondai , hermoso p«r la variedad
de sus visos , semejantes al carei : se ignora á qué familia p^-
tenece.
La otoba ( myristica otoba ) , de la familia de las myristéceas ,
árbol que produce la nuez moscada : se encuentra en las provincias
de Guayaría , Cumaná, Mérida,\TrujilIo y Barquisimelo.
Lapesgua (gaultheria odorata), de la familia de las eyceas,
de hojas aromáticas , especialmente cuando se secan : se conoce
otra variedad llamada pesgua-macbo {gaultheria coccínea).
E\ guacito [melasi<mo xanthostuchU) 6 chaparrobobo sirve
para usos medicinales.
La befaría , cuyos troncos están divididos en un gran número
de vastagos frágiles y casi^ verticilados. Las ojas son ovaladas , lan*
ceoladas , blancas por debajo y rolladas hacia los estreñios. Toda
la planta está cubierta de pelos largos y viscosos , deá|)idiend« mi
Je
olor reñiioso mm a^raAible. Las abeja» ykilaii sua hermosas flores
yuFpúreáa, qoe son tan abandanies como eu todas, las plantas al-
pinas. Así la deseribe fiumboldt^ quien la encontró en la Silla de
4 Caracas ) y de la cual hai en casi toda la serranía eleyada.
£1 árbol earap^ solo encontrado en la provincia de Guayana ^
da uu aoeite reconocido «célente específíco^'para varias dolencias |
1^ y sirve también para alumbrarse.
I ' El juvia , uno de los majestuosos árboles de los bosques del
Nuevo*Mundo ^ empieza á encontrarse á dos jomadas al £. de la
Esmeralda s<^e el OriiHM;o. Es el beriholletia que Laet llama ta*
toche^ y hace mención del drupa que encierra las almendras^ dán-
dole el tamaño de una cabeza humana. Dicen que es tan grande el
' peso de este fruto y que los salvajes apenas se atreven á entrar en
' los bosques sin cubrirse la cabeza y las espaldas con un broquel de
madera mui sólida. La almendra es gustosa y de ella se saca un
aceite eseelente. El árbol no tiene en general sino dos ó tres pies
de diámetro ; pero su altura es de 4 M á 4 20 pies ; sus ramas no se
elevan hacia el cielo; están abiertas^ son largas, casi desnudas hAcia
lá base y cargadas sus puntas de espeso follaje : necesita \ o años
para dar las primevas flores , y estas aparecen desde Gnes de marzo
i ^ ha3ta principios de abril. Las frutas maduran á fines de mayo y
* algunos troncos las conservan hasta el mes de agosto, cayendo por
sí solas cuando están en perfecta sazen. En menos de 50 ó 60 dias
i ^ el juvia forma un pericarpio, cuya parte leñosa tiene media pulgada
de grueso y cuesta mucho trabajo cortarle aun con buenos instru^
mentes , facilitándose su abertura por una tapa natural que tiene
> -» en su parte superior. Humboldt dice : « Nada conozco mas á pro-
« pósito para hacer admirar el poder de las fuerzas orgánicas en la
« zona equinoeml , que el aspecto de estos grandes pericarpios
« leñosos ; por ejemplo , del coca de mar lodoicea entre los ma^
u nocotiledones y del bertholletia y el lechytis entre los dicotíle-
« dones. »
La vaiiHUa (epidendrum vainilla) , planta de fruto aromático ,
trepadora , busca los terrenos incultos y húmedos cubiertos de ár-
boles grandes. Se encuentran en los bosques de todas las provin*
cias , pero (Coa mas abundancia en los de Guayana , Caracas , Gara-
bobo y Barquisimeto y Trujillo. La vainilla podria esportarse en
gran cantidad ; pero poco la benefician. l)a una vaina de \\ ó\2
pulgadas d^ Isvgo. Desde los bordes del mar hasta la región alpina
á 2,A^ ymns, es la zona en fue yegeta e^ta estitnable planta»
En los basques de Guayana se eáeaentra süyestre el plátano
{masa paradisiaea) ; pero aun está en duda si habrá sido plantado
por algttnas tribus de las muchas que suelen cambiar de lugar.
En la Gimyana también se eiKuentra^l bejoco mavacure ^ pro^
bablemeaée un strychos^ que produce el famoso yeneno curare
een que los indios preparan sus flechas ; el palo kiraguero tiene «n,
jvgo vegetal estremadamente viscoso que se une al mavacure para
que se pegue el veneno á las flechas : se emplea el mavacure frescc^^
ó seco después, de algunas semanas de prepspado. El jugo del be-
juco recien cogido no está considerado como Venenoso» Se raspan
oen un cochiUo ramas de mavacure de 4 ó 5 líneas de diámetro ,
y quitada la oorleza se machaca bien y se reduce á hebritas mui
d^gadas sobre una piedra cóncava. Siendo amarillo el jugo vene-
noso , toda la masa toma el mismo color y se echa á filtrar en agua
fría. Las gotas que caen de la filtración es el licor venenoso , pero
sin fucÉrza hasta que se reconcentra por la. evaporación que se efec-
túa en un vaso de greda. Según el gusto mas ó menos amargo s^.
conoce si la concenlfacion por el fuego ha sido ó no escesiva. No
hai peligro alguno en esta evaporaeion, y el curare no es peruicioai»
sino cuando entra en contacto con la sangre : como el jugó del ma-
vacure no es bastante espeso para pegarse á las flechas ^ se pone en
la infusión el jugo vegetal del kiraguero para dar cuerpo al veneno.
Tales son los procederes descritos por Humboldt, que los presenció.
Las grandes ayes; como la pava de monte, heridas en el muslo,
muere á los 2 ó 5 minutos , á los 6 ó 7 un mono ; son necesarios
40 ó ^2 para que muera un cerdo , y á los ^5 espira una persona.
Los SS. BottssingauU y Boulin han hecho varias esperiencias qu^
han probabo que la sal no puede s^r considerada como un contra-
veneno del curare , y la opinión de estos hombres ilustres debe ha-
cer muí caulos á los que se fíen en el remedio de la sal ó de) ¿ugo .
de la caüa dulce , puestos sobre la herida y bebidos inmediatíi-
mante.
INiopo {acacia niopo]^ mimosácea de que los indios estraen su
tabaco herbáceo. Recogen las largas vainas de esta acacia ; las ha-
cen pedazos, las humedecen y dejan fermentar, y cuando los gra-
nos ablandados empiezan á ponerse negiios, los amaaan como una
pasta, y despnesde haber Qiezclado harina de yuca y cal de coudiá
de una ampularia ó cpacx)!, ponen toda la masa al'fuego vivo so-
r*
— H2 —
hxe unas parrillas de madera mui dura. Cuando la pasta se endurece
toma la forma de tortillas que se reducen á polvo Qno. El salvaje
para servirse de este polvo la coloca sobre un plato de madera de
^ á 6 pulgadas de ancho, y tomando con la mano derecha el man--
go de este plato aspira y sorbe el niopo por medio de un hueso de
ave con dos conductores , cuyas eslremidades se apoyan en las dos
yentanas de la nariz. Este hueso, que es de las piernas de las gar»
zas^ tiene 7 pulgadas de largo; sin él creería el indio no poder
l%)mar el tabaco. Esta operación descrita porHumboidt se ve ana
en el dia entre los salvajes, no solo los otomacos, sino los guahibos^
• los yaruros y otras tribus de! Orinoco.
£1 tabaco {nicociana panienlata y ni€Ocian& gbttinosa) en-
contrado por Humboldt en estado silvestre , no habieado^sto las
ofVas dos calidades que sa cultivan en Europa nicociana mbuqo,
nicociana rustica. \
El barbasco , raíz de piseidia erythrina^ yaqulna armiUaris}^
galega piscatorum , y otras especies de philiantas , con que los'
indios y criollos embriagan ó adormecen los pescados en los caños,
lagunas y rios cuando sus aguas quedan escasas. Es sorprendente
la actividad de este jugo que haee flotar á millares sobre el agua
los pezes de los cuales se hacen salazones ^ ó bien los secan al sol ó
al fuego. Este veneno no hace niugun efecto en los caimanes y tor-
tugas , mientras que en los torpedos ó tembladores disminuye su
virtud eléctrica hasta debilitarla casi del todo.
El bejuco del guaco (micania guaco) <|ueg¡y^ S''. Mutis ha
hecho fan célebre, y que es el remedio mas eficaz coíftra la morde-
dura de las culebras , abunda lanío en las selvas bajas y altas como
en las sabanas y serranías. Lo hai de dos clases, blanco y morado,
y se preGere este último como mas eficaz , y su jugo sirve para la
cura de varias enfermedades.
La raiz de mato (cerbera Ihevetia] , de la familia de las apoci*
meas es un escelente antídoto contra el veneno de las cuhsbras.
En las gttandes alturas vive el pancratium undulatum ^ lirio
hermoso y de mucha fragancia.
Desde el nivel del mar hasta 5,400 varas de elevación los limo-
nes prosperan perfectamente , dando flores olorosas y fruto mui
agrio.
Los árboles cuyos troncos esceden dev25 ó 25 varaá l!!e alto , no
pasando la elevación de 5,229 varas, y pre^jenfün casi siempre los
.» *
I
9 , " • '
efectos dd oloño y primavera á la yez^ despojándose de las hfti«
yiejas y revistiéndose de otros nuevas.
Las enredaderas ó bejucos que enlazando con sus ramas éar^-
mentosas los troncos de los árboles, suben hasta la copa de los mas
elevados , presentan por todas partes sus espinas en forma de gan*
chos ó barrenas, y bajando en seguida á la tierra , se lian al rededor
de otros árboles y entretejen de tal modo las selvas , que las hacen]
impenetrables en muchos puntos. Arriba de 2,000 varas de altura,
bai una clase de bejuco que llaman de agua, esti emodamento^jú-
goso , de 2 pulgadas de diámetro y mui blando. Guando se corta
caen de él algunas gotas de agua y si se desprende enteramente del
tallo principal, entonces la parle separada puesta verticalmente des-
carga una cantidad de íaigna clara, fresca y dulce. Una vara de a^e
bejuco da una botella de agua. Esta planta es mui útil para los que
se ven obKgados á atravesar montanas desprovistas de agua. Hal
bejucos de todos tamaños, mui útiles para la construetíon de las
casas de palma, pues con ellos amarran y afirman las maderas. Los*"
bai desde 6 líneas hasta 6 pulgadas de diámetro. Por último , el
bejuco cadena es notable por la forma que le da su nombre , por
su grosor y solidez.
Arriba de 5,250 varas los árboles son raros y los que se encuen-
tran no son corpulentos ni elevados como debajo de este nivel ; de
allí en adelante prosperan todavía los granos de las zonas templadas,
encontrando un suelo propio y temperaturas adecuadas para des-
arrollarse.
DS 400 Á 5,450 VARAS de altura.
Desde 2,400 hasta 4,950 var^s , es la región de las plantas al-
pinas y la de gran variedad de yerbas y raizes medicinales.
A 2,652 varas las mimosas pierden su sensibilidad , y hasta esta
elevación vegeta la zarzaparrilla , planta mui útil para las enferme-
dades siQlíticas. Se encuentra en abundancia .en la región cálida
desde 400 varas sobre el nivel del mar : la mas estimada por sus
propiedades diuréticas es la zarza smilax sifilítico de Rio-Negro
y el Casiquiare , de la que se hace algún comercio.
A la altura de 4,000 varas cesan los arbustos alpinos y solo se
ven las gramíiieas cuya región se cstiende hasta 4,^50 varas. La
nieve cae de tiempo eñ tiempo en este espacio entre 4,000 y 4,950
V. GBOa. s
• ^ m \
^ - — 414 —
Toras de elevación^ El clima frió y constaoteiiMite húmedo de estas
' alturas batidas por an vieoio destemplado , las hace inhabitables.
DesOe que cesan los grandes árboles aumentan los arbustos qne se
tostíenen hasta 4,000 Taras, y ^ terreno está cnbierto de una yerba
menuda y fina.
Desde 5,200 Taras hasta 4,900 es la región de los páramos en
«que cae granizo y nieve : esta es la morada del frailejon (espeletia
fraUexon) , cuyas hojas velludas sirven muchas vezes de abrigo á
los* viajeros que la noche sorprende en aquellas regiones. Frotan*
dose las manos con. las hojas , y cubriéndose con ellas la cara y los
pies , se adquiere al momento el calor necesario en tan helados cli«
mas. El Sr. Boussingault dice, que de esta planta se estrae por in-
cisión una trementina superior á la de.¥enecia ; y seria de desear
que los que habitan cerca de los páramos , sacasen utifídad de un
ramo de industria que la naturaleza les ofrece en grande abundan-
cia en medio de aquellas soledades. Al lado del frailejon y solo á
la altura de 4,200 varas vive un arbusto de tronco corto y carbo*
nizado , que se divide en una multitud de ramas cubiertas de hojas
coriáceas y de un verde lustroso.
A 4,950 varas desaparecen enteramente las plantas /an^rd^a-
mas. Desde este límite hasta las nieves perpetuas las plantas hepá--
Heos y ligúenosos son las que cubren las rocas, á vezes escondidas
bajo la nieve por mucho tiempo, á vezes cubiertas por hielos que
las hacen ver por trasparencia.
. A la altura de ^,450 varas las nieves son perpetuas, sien^re re-
lucientes , menos cuando están envueltas en nubes ligeras que sue-
len elevarse hasta 9,900 varas , mientras que las nubes densas cu-
bren casi constantemente los terrenos que el caminante tiene á sus
pies , pues estas se mantienen desde la altura de \ ,800 hasta la de
4,400 varas S(d)re el nivel del mar.
i
~445 —
PLANTAS QUE WSCPEm DE BASA A LA A61IGIJLTURA TElfl20LA|IA.
GBMBiXKS.
AiTOz..« Orizasaüva,
■ais.. Zeamais.
I Millo Sottehus.
I Trigo TtiOcum (gwtivum.
HAIZB9 HÁRIHOSáS.
Apto 6 Arracteho
Batatas. Convolvulus batatas.
Capachos
Tuca. Tatropha maníkot.
Lairaes Maranihaf
Mapuey..» '
Ñames Pitcorea alaia, O. «a**
Uva. D. hdbifera*
Papas Solanvm tuberosum^
Sulú « Uarantha?
FRÜT08 HÁE1N0808.
• r
Árbol de Pan • CaroÜnea princeps.
Castaño Ártoearpus incissa ?
Charo
Plátano Musa paradisiaca.
Plátano dominico Musa regia.
Cambare morado* . • . • Musa rosacea.-
Gambure chieo Musa coccínea.
Moricbe Palma mauriíia
[flejÉuosa,
Pichiguao Palma vmlosoíon.
SEMILLAS COMESTIBLES.
AioDjoli '. Sesasnm oriéntale.
Alverja Lathyrus salivus.
Chícharos Pisum saílvum.
Frijoles Phaseolus vulgaris.
Garbanzos Cicer arietlnitm.
Jadías Phaseolus nanus»
Maní Arachis hipogea.
Qaiiichoncbos Dolichos labiad ?
Quimbombó Hibiscus suctdeníus,
iTapiramo Phaseolus.
TEKDUaiS.
Brécoles Brassica olerácea la*
ciniata viridis.
Gol ..,.. Brassica olerácea.
Golñor Brassica olerácea do-
trytis.
Espárragos Asparragus saliva,
Voricbe cogollo. . . . . • Palma mauritia flex.
Navos Brassica hapus.
Pahnito Oredoxa regia.
Rábanos Baphanu» sativus
Remolacha. BeÍMi vulgaris.
Verei^enas Soianum melongéna.
Zanahoria Daucus corroía.
ENSALADAS T SALSAS.
Acederas : . . . Oxí&is acetosa*
Afo .» Allfwn saíivum.
Jff Capsicum.'^YaHat es<
pedes.
Albahaca Ocymum basilicum.
Anís Aneíhum fomiculum.
Apio de España Apium graveolens.
Berros Sgsimbrium nastur*
nium.
Borraja Borrago officinalis.
Calabaza Cucúrbita pepQ.
Cebolla Allium cepa.
Ghalota Sucios eduiis.
Chicoria Cicorium endivia.
Culantro Coriandrum sativum.
Espinacas.
Lechuga . <
Me|orana .
Mostaza. . .
Onoto....
Orégano . <
Otoba 6 nuez moscada
Pimiento.... «...
Romero
Tómales
Verdolaga
Vinagrera ^-
Yerba buena
Spinacea olerácea,
factuca sativa.
Oriffanum majorana,
Sinqpis júncea.
Bixa oñjana.
Or^anpm majoranoi*
MirisiMctí otoba,
Capiscum annwn,
Solojntm HcopenicuuL
Portulaea olerácea.
Oxális cornuta,
Mentha ititiva.
FRÜTAB.
AgQicale Lanrtts persea.
Anón.- Anona squamosa.
Cacao Theobroma cacao.
Caimito Chrysophillum caini'
to.
Gañt-físlula Caparis,
iSamto Genipa americanom
Tüardonei. < CMus,
Catiguire >• Anona nufídroéc
Cerezas 6 oemerucho.. Malpighiajmnieiffflia.
Chirimoya. Annona AMWoMltaito,
Chiguichigne •• . • Bromclia
— Í46 --
Cidra...
Cfrueras»
Gocor.».
,f%.
GotoperU
GocurUo.^
Gupana ..•
Fresas . . . . .
igua
ranadí? . » <
Granadilla.
Gpimo.....
Goamacbo*
Gimpátena
. Guanábana cimarrona,
"gayabas ^.,.,..1...
' Guayablta al sabana. .
Guariman
Htgo...\
Icac6 •
iobo «
LechoiQ......
Lima.. ...'...I
Liraon
CUrus medka,
Spondias.
Lodoiceu,— Cocos mu-
cifera
Melicocq.=Oliv€e for-
mis,
Palma.
Púuftinia cupana.
Tragaría vesca.
Genffred superna.
Púnica grana tum, *
Passiflora ^^drangu-
laris.
fn^a lucida.
Inga pungens,
Annona muricata.
Annona {palusíris f)
Psidium pomiferum.
Psid um hyriferum.
Cryptocarya canelillá
Ficus carica,
Chrisobaianus icaco,
Spondia lútea.
Caricha papayo,
Ciírus iimeía.
Ciírus limonum.
Limondto # Limonia irifoliata, ~1
Mamey colorado Lacuma bonplandia.
Mame j .^ . . . . . Mammea ojnericana.
Mamón Meíicocca hijuga.
Mango I Mangifera domesíica.
Mora Moras cetíidifoiia.
Melón Cucumis meló.
Naranja de Cbina..... Ciírus aurantium.
Naranja agria., Citrus vulgaris ?
Nísperos Achras zapata.
Parcha Passiflora,
Parcbita * Passiflora ? — Varias
especies.
Patilla 6 Sandía Cucúrbita citrullus.
Pina Bromelia ananas,
Poma*'rosa Jambosa vulgaris.
Sapote Sapota mammosa,
Sapoie de culebra Lucuma serpentaria.
Sapote negro Dyosptros ootusi folia,
Sarapia.. Dipteris odorata,
oejt:* .,,,,,,,,,,,,,,,, rttima.
Tamarindo Tomarindus indica.
Tunas Ficus cactus.
Uvas de cpsla Coccoloba uvifera.
Uvas de E«iropa Viíis vinifera,
Yuvia Bertholletia excelsa.
P£1HTAS QVE SE COLTITAN BN 6RÁNDB PAftA LA EBPORTAGION.
Algodón Gossipium uniglandu-
, losian.
AU\ • índigo fera íincíoria.
Cicao Theohroma cacao.
Café Coffea arábica.
Cafia dfe azúcar Sacharum oficinale.
Coco Lodoicea {cocos muci'
fera).
Tabaco Nicoíiana tabacum.
APLICABLES i L08 TINTES.
Aguacate taurus persea.
Añil cimarrón IikMgofera citisoides.
Añil de Qnatemala ... índigo fera disperma
{íincíoria).
Azafrán Carihamüs tinctoria,
Brasilf Coesalpina,
Gereypo .,
Gbacaranday
Chica ;....
Gonopia
Capaoa Paullinia cupana.
Manaca*..
Marvi
Mora.. Mortf^ tinctorea.
Murciélago
Onoio Bixa orejana,
Paneque
Panillo
Paraguatán 7« . Maerocuemium tincto-
1 rium.
Sangre de drago
Zapotero
^ OTILES POE SUS. ACEITES.
Ajonjolf Seíamum oriéntale,
A!guacate Laurus persea,
Garapa. ..%».. «^ »••...
Coco i, Lodoicea (cocos muci"
* fera).
Gopalba ¿ Gavima .... Copayfera of^cinalis,
Gigaa ....*....$..>.... Geofírea superba.
Maní * Arachis hypogea.
Maraña .»».....
Mirasol SBlianihüs nnnuus.
Piñón Jatrophtt curcas.
Pasa de Rio-Negro.... Geoffrea bredemeyeri.
Seque Palma,
Tártago, Balmacristi. . Ricinus communis,
Yari
Yagua Genipa americana.
Yuvia. I Bertholletia excelsa,
Sasafras Ocoíeajavicetisis.
APLIGABLitS PAHA COBDELBRÍA T TEJIDOS.
Algodón
. . . • Gossipium ; varias e§'
^ pedes.
Gaña brata «... Gynerlwn,
Ceiba Bombax ceiba, B. pen*
* tandrian. »
GdcniM ,»,Cocui8csipiloe,
Ghiguicbigup «... Bromelia,
Cbiquicbiqne - . Palma,
Mi^agua * I Hibiscus tiliaceus,
Marima . .«
Matapalo Ficus devdrocida.
Moricbe Palma maurilia, *'
Palma común óiBba-
trico . Chamétops ttwnilis.
Plátano Musas [todas las espc*
ciesX,
Onimbombó Bibistms sculentus.
Yagua Genipa americana.
— ^n —
PtANTAS QUE SIRVEN PARA EL ALIMENTO DE LOS ANIMALES ¥ VARIOS jySOS.
YERBAS DE PASTO.'
Abrojo Tfibulus cisíoides.
Bejuco de concbila.... Clitora teruaia^
Bejuco marrullero.... Phaseolus vexilatus,
Berdolaga Portulaca olerácea.
Borraja Borrago ofíicinalis.
€anutiUo tómmelina communis.
Cafia brava Bambusa arundina-
cea.
Carrlzillo de monte . . . Graminea.
Carrizales Varias clases.
Carrizo Gramínea,
Cardones. . .> Cirius,
Chicorea
Casupo ^, Elicottia,
Enea
Escoba amarga Argyrocheía bípinna-
íifida.
Gamelote Varias clases.
Grama de tarias espe-
cies Gramíneas.
1-
Gaanasna...
Junco de ciénaga .%.,,
Malva común
Malva blanca
Maiojo
Millo
Pata de Gallina..
Pira *
Rabo de zorro... «....
Sanguinaria
Solú silvestre
Sensitivas ó adormide-
ras
Tomates silvestres . . . .
Vinagrera
Yerba fina
Yerba de quines......
Yerba lechera
Vljao
Eliconias,
Melochia piramidale.
Walleria tndica.
Zea mais,
Sonchus?
Gramínea,
Sacharum ravenae,
lecebrum lanatum.
Miiraníha T
Mimosa húmílls. Mim.
dormíens. M.peliía,
Solanum,
Oxalis comuta.
Agros lis.
Panicurñ allissimum,
Euphorbia írichotoma
Heliconia bihos.
HOJAS DB ARBOLES QüB COMEN LOS ANIMALES.
Abou t . Atmona squamosa.
Bucare EryíhYyna umbrosa.
Caña del alto orio^eo.. Bambusa laíifolia.
Ceiba Eriodendrum anfrac-
íuosum.
Gagf. Mimosa íernedana.
Guacimo Guásima ulmi folia.
Guadua Bambusa guadua.
Mamei colorado Lúcuma b'onplandi.
Mango ,,,,,, Mangifera domes lica.
Piñón
Platanillo
Plátano, todas las espe-
cies
Roble blanco.........
Sabuco blanco........
Tamarindo
Ya grumo macho
Yagrumo hembra
Jaíropha curcas,
Musüceo, •
Musa,
Tecoma pentaphila,
Sambucus nígra.
Tamarindyis indica.
Panax longípeialum,
Cecropia peltata.
FRUTAS QUE GOMEN LOS ANIMALES , ESPECIALMENTE LOS CERDOS.
Aguacate
Árbol de pan
Castaño
Caimito
Caruto
Chiguichigue
Ciruela
Cogí
Fresas
Guamo
Guanábana
Guasimo
Guayabo.
Guay abita de sabana. .
Icaco ,
Jobo
Lechoso....';
Lima
Majagua
Mamón ,\
Laurus persea
Carolinea princeps.
Artocarpus incíssa.
Chrísophillúm cainiío
Genipa americana.
Bromelia.-
S^ondias.
Mmosa íemesiana,
Fregaria vesca.
Ingct lucida.
Annona múricata.
Guásima ulmifolia.
Psidium pomiferum,
Psidium pyriferum,
Chrisobalanás icaco,
Spéndia lútea.
Caricha papayo.
Ciirus límela.
Hibicus Uliaceus.
Melicoea b\jaga.
Mamey Mammea americana.
Mango Mangifera domestica,,
Meíon Cucumis meto.
Mora Morus celíiáifplia.
Naranja agria Citrus vulgarís.
Naranja dulce CitryíS auraníium.
Níspero AChras zapóla, .
Oloba Mirisíica otoba,
Palma i^l Oredoxa regia.
Patilla ó sandias Cucúrbita citruUus.
Pina Bromelia^ ananas.
Purbio
! Roble. Quercus.
i Sapote Lúcuma serpentaria.
i Sarapia Dipteris oUorata.
Seje
Uvas de playa Cdccoloba uvifera.
Yagua Getüpa americana,
Yagrumo macho Panax longipetalum.
ÚTILES POR SUS GOMAS Y RES ÑAS.
Algarrobo. Hymencea cwbaril.
Anime <
Árbol de leclíe ó de va»
ca Galactodendrum uíile
Bálsamo de Qrora ....
Caote
Cuídelos 6 manteca.. •
Caraña Amiris carona.
Copey Clusia alba,
Chiripity
Cuaco
Curbana Canella alba, *
Daguiparo
Estoraque ...........
~ 411 -*
Fraylejon Espeletia frailexon,
Gmrifue»....
IncioDso Trixi nerifólia.
JtTO
JiTillo Hurd crepUans,
Jobo Spondia tutea,
Kiragiiero
■atapilo Fiau dendrocUa^
Mará
Mkria
■apera.'.
Orore Inga ligustina.
Palma de la cera Ceroxylon andücoleu
Patomero
Pendare Ciíharexilum cin«-
reuiR.
Peraman
Sangre de drago.
Seringa ó Caucho CastÜlea elástica f
Supire....
Suelda con suelda. . • • •
Tacamahaco. . . ^ Jalea taeamahaeai
Taeio. »... Bevea guayanensig,
Sasafraa Ocotea Javicensis.
APLICABLES PAEA CURTIMUNTOS.
Gortidor
IMTidire Coulterta tinctorea.
Guayabo silveatre. .... Psiditm pomiferum»
Mangle blanco.. Aviceiria nítida.
Yapo
▲PU€AHLB8 PARA USOS HBDICIMALSS ¥ TBMBKOS.
Alcornoque Bowdicha vlr0liode*
Barbasco • Piscidia erithryna,
Calaguala Polipodtum craisifo^
lium.
Caña-fistula Caparis,
Canelo ó luercodelTo-
cuyo. . . , Winteranusf
CaneUUo ó Guariman. Criptocaryacanelüla,
Carapa
Cocuy Mague»¡$,
Cocuisa Vocui9a aloe,
Copaybo Copayfera ofíicinaUs,
Cuspa» Gupare, o cor-
lexa de Angostura. . . Bonpíandia trifoüata.
Gapana Patuina cupana.
Doradilla..
Emético vegetal
Escorzonera Craniolaria annua.
Fruta de burro d mala-
gueña . . . .% ünona aromática.
Guaco Micania, guaco,
ttuachito 6 chaparro ire¿a«/omo xanthos*
bobo tuckis.
Goamadio. Inga pungen»,
GCuiricamo ó Guach»-
macá hryana coceinea,
Guásimo Guásima ubntfolia. '
Jobo. ,.,,,,
Kiraguero. .
Manzanillo.
Mavacure . .
Níopo
Ñongué...
Spondia lútea.
Otoba. ,
Palo crut
Pasaña
Pepita de todaeqiecie.
Pesgua <
Pesgua macho
Piñón
Pucherf •...
QuiAa^
Raiz de mato <
Sagui
Saúco blanco
Sarapia
Simarruba
Tacamabaco
Tártago 6 paknacrisU.
Vainilla
Zarzaparrilla^
Ácada niopo,
Stramomo datura OT'
borea,
Myrisiica otoba,
Brownea grandicepim
Gualtheria odorata,
Gualtheria coccínea
Yatropha curcas.
Chineónos, — Valias
especies,
Cerbera ihevetia»
Palma.
Sambucus nigra,
Dipteris odoráta»
Isica tacamahaca,
Ricinas communis,
Epidendrum vcúnUla.
Varias especies.
MADERAS APLICABLES A DIVERSOS USOS.
Laurus persea.
Bow^Uehia virqiliodes.
Mymenasa curbaril.
Acata ^. ......
Aguacate....
Afilrique
Alcornoque
Algarrobo
Aoumose
Angelino .1 . Homalium racemo$um
— . aceituno ....
•— laurel
— roble
Anime.
Apamate
Araguaney
— amarillo...
Aragtnfo
Árbol de leche 6 palo
de Taca
Bignonea,
Bignonea pentaphglla
Galactodendrtmutile,
Árbol de nieve.
Árbol de pan. . .
Asta blanca;. . . .
Barba de tigre..
Bio
Birole
lUrubiro. ......
Brasilete
Chionantes tetranáa,
CaroUnea princeps.
Bdcare anauco
— plonia espinoso
- - liso
Cachicamo.....
Cafla-fístola
Cándelos
Candeiero
Canelo ó tuerco del To-
Heeastophykm du^
bium,
Ei-ythrina velutina,
Bnfihrina umbrosa'
Erytkringí dubia.
Caparis. — Varias ei-
[pecies.
Arabia capitata.
I
4« —
COTO ,Ci>rt€XWinterttnutt
Canelón
Canalete
Canilla yenado
CanU
Caobo ..rSwieíenia mahaganL
Caobano^ ••«... Crotón lucidum ?
Caimito ChrytophUkum cainUo
Caramacate
Caruto Genipa americana.
Cardones Cyñus.
Caracoli nhinocarpii^ excelsa»
Caneatetedaf Bombax gossipium*
Caraña ^ Amiris carañai.
Carapa. ••••
Carian
Carnpal* ..«.•••
4SaataJlo Ártocarpus incissa ?
Catiguire ^nnona maniroie.
Cascaron majomo. . . . ^ecuridosa pubescens,
Caujaro. . ,. « Cordia dentada.
Cántaro..^
CaTimbo
Cedrillo horcón
-> hoja menuda..
— laurel
— au^gua*. ..... Mun tingia calambura.
Cedro amargo., f, Cedrela odorata.
— dulce Isica Síltissima.
-^ blanco de Rio-Ne- Ámyñs alílssima.
EÍpiBO
Flor amarillo j^
Fruta de burro 6 ma-
Gaf**!^** Vnona áromaika^
Gásparilio...'. . ! 1 ! ! i ! 1«*
Gígua... Geoffrea supAa.
Granadino. Buctda capttaia»
Guachito, 6 chaparro Jir«{/» romo xafi(Ao«(M^
^•>oJ>o- chi9,
boadua.,. Bamlntsa guadua,
buamacho . . . . * inga pungens,
Sr"*""? Inga lucida.
Guamita
Guarapa Bacchitüa obtutífoUtL
Guarataro ^
Guarica
Ceiba..
fSfo.
Cereypo
Cerbatana....
Chacuarama.!
Chaparro..^.
— manteca.....
ChiparriUo
Chacaranday
Charo
Chupón «..
Chica
ClatelUno
Copaybo
Copey
Cotopría
Conopía
Congrio
Cororiocho
Goroba
Cubaro.
Cucbaro : ..
Cucurito 6 radgiai
Cugí
— de aroma
Cnynbi
CuyoTiae
Cumare
Cupi
CuquiriCa
Curbana
Cnrume
Cureo
Curari
Curtidor
Cual
Derego
DlTldífe
Bombax ceiba, B, Pe-
tandrum,
Caricie»
Pulma.
Curaíella americana.
Birsonima ehrysophü-
la.
Pelicourea rígida.
Copaifera officinatit.
Clusia alba.
Melicoca oMmeformis,
Palma.
Mimosa íemesiana.
Mimosa,
Calophyllum cupi,
Palma.
Canellaalba?
Caulteria tineforea.
Guarimaiia6 canelilla. . ^rypiocarya canelUla
Giiariquen ....*.
^uásimou Guásima ulmifoUa. h
Guatacare
Gualamare
Gualabo
Guayabo . . . : Psidimí pomiferum.
Guayaba de monte . . . chioSintes compacta.
biíayacan Guaiacum sanctum. G-
J Guaya ofíicinalts:
Higueron ficus glabrata.
Hpeso pescado
Incienso jrixis nerifolia, ♦
Indio despudo
Jabillo.óárboldeldia-
, , blo Hura crepiíans.
Jaque
Jebe ;
Jobo Spondia lútea*
Jopo
Kiraguero
Laurel sasafraa ....... taurus ?
— mulato Laurus f
Limoncíiio Caliphrantus pamcu--
iMa.
Macanilla Palma.
Macomo
Ma?uvire
Majagua Hibiscus íiliaceus.
Manaca
Uangle Bhisophora mangle.
— blanco Ávicenia nitida.
•^ prieto Ávicenia tormentosa ?
Manzanillo Bippomane mancinel-
» 2a.
— manso ]p
Hanf Moronobea coccínea.
Mamón . . , Melicocca bijuga.
Mamey ,..,. Mammea amerieana,.
Mamelcill^ Ardisia coriácea,
Mapora..!?.,
Mapurite Acacia fétida.
Maria Pétrea arbórea,.
Marima».
Mará
Maracca
Mariguaco
Hasaguere ^..,, *
Mata palo Ficus deudroMa,
.Mergo
(Morado .
•i
I
— H20,—
' Uora. , Morus Uncíorea, Mo-
ru* ceitidijhlta.
Morich((.^ . . . : Palma maurlíla
Murci^ago [flexuosa.
Nazareno Himamea floribunda,
Nlfia-..»'v i^.
Níspero. Achras zapóla.
. OCBtofi
"^Onolb Bixa orejana,
Orore ó aboga-gato. . . Inga ligtisíina,
Dtoba Mijrisíica otoba.
Palma real Oredoxa regia,
— de cera Cero^lon andícola.
'-' abanico, ó co-
mon Chamerops humilie.
Palmiche. Varias especia.
Pala 'oruz Brownea grandiceps,
— blanco
Paneque ; . ^ ,
Paralure....:
' Paraparo Sapíüdus sapénaria.
Pardillo Quercus caris.
— negro.: ,
Paraguatán Matrocuemiwn iinfito^
rium.
Parupire
Pauji
iP
^ÁHacfordium occiden^
- • tale.
Paaa de Rio-Negro. . . . Geoffrea bredemeyeri,
Pendare. . . . . ^ Cátharexilum cine-
[reum.
Piehtgaao ^ . . . Palma melocotón,
Pinayeie
-Pinaciento «...
Pifión Jafropha curca9\ ,
Pirita. Palma.
Piz Dalca €istragarina.
Poclieri
Puy
Parba o purbio
~¡aiebra luicha Svartiaf
Juaio
Iool$ de olor Chelone f
•— amarillo. ..... Ehretia hourreria.
•* blanco Tecoma pentaphiUa,
Saman Saman acoda.
Sangre de drago
Sangrilo....
Saguá
Salado
Saquisaqui....: T
Sarapia ó Jape Dipieris odoraía,
Sauces Bermesia casíenaifo^
lia.
Suelda con suelda
Sema »
Seje ; Palma.
Seringa ó Caucho Casíülea elástica f
Simbradera.
Tacamabaco 6 Curucay Mea tacamahaca.
Tamapire ji.
Tamarindo Tamfirindus indica.
Tara , Verbesina helianthoi-'
.^ des.
Tarare
Temare Palma.
Teñan.... ^ *
Tigrito
Timites . . , . # Palma*
Tintín
Toco
Totumo Creceneia cugete.
Totumillo
Tripa de perro
Trompillo •. Lüstia hirtella.
Vera o palo sano Zigophillum arbo-
revan.
Volador Girocarpus america^
ñus.
Urape Bahuinia multineria.
Yació Hevea guayanensis,
Tacifate Isica cuspidata.
Yagrumo Cecropia pelfata.
— macho Panax longipetalum.
Yagua Genipa americana.
Yema de huevo
Yurí
Yuvía Bertholleiia excelsa.
Zapatero
Saiafras Ocotea javicensis.
9
PLANTAS QUE SE CULTIVAN EN VENEZUELAi»
Las plantas cultivadas tienen zonas menos estrechas y menos ri-
gurosamente limitadas. £n la región de las palmas los indios culti-
vaban antes del descubrimiento de la Costa-firme , y aun cultivan
'lioi , el plátano , la yuca, el maiz , el cacao ; y mas arriba de esa
región las papas suministraban y suministran todavía un abundante
alimento.
£1 cacao (theobroma cacao] de la familia de los biteríáceos^ que
se encuentra silvestre en varios bosques, se hizo uno de los prin-
cipales alimentos para los españoles, como lo babia sido desde
tiempo inmemorial entre los indios mejicanos, que lo preparaban
en una infusicm de agua fria. £1 precio de \ 50 nuezes era un real.
£1 gusto por el chocolate pasó después deja conquista á España ,
en -1522 , dondften poco úea^ le usaron tan generalmente como
en América. Se puede decir que entre los españoles se ha hecho
una necesidad que aun precede á la del pan. Los frailes de aquella
nación lo introdujeron en Francia en -166^ y Alfonso de Richelieu
|ué el primero que lo tomó. Crece y prospera ventajosamente desde
pocas varas del njvel del mar hasta la altura de 652 que es su
límite superior, y solo puede vivir bien en la región cálida entre
k temperatura medía de 27° 5d y 25<^ 56. «El chocolate, dice
a Humboldt , igualmente fácil de llevar y de emplearse como ali*
« mentó , contiene una gran cantidad de partículas nutritivas y es-
« timulantes en pequeño espacio. Se ha dicho con mucha verdad
« que en África sin el arroz , la goma y el aceite de sbea el hom-
« bre no hubiei^ podido atravesar los desiertos : en el Nuevo-
• Mundo ebchocolate y la úor del maiz le han hecho accesibles las
« tierras elevadas de los Andes y los vastos^y desiertos montes. »
£1 árbol vegeta tan vigorosamente que la flor sale aun^ de los tron-
cos y de aquellas partes de raizes que la tierra ha dejado descubier-
tas : sufre con los vientos del N. £.^ aunque estos no hagan bajar
mas de un grado Hi temperatura. Necesita de un terreno no mui
espueslo al N. y oerca de los rios , para que en tiempo seco puedan
comunicar á la tierra la frescura' de sus aguas y que reciban eui
tiempo de lluvias la superabundancia de estas. Se da la preferencia
al terreno .qse puede recibir del rio los beneficios del riego , sin
temer las inundaciones de las avenidas. Es una dé aquelljis plantas
á la que ofenden los rayos del sol ; necesita una sombra conveniente,
que la prot^a de estos rayos sin privarla de su calor. Para este
efecto se sirven del búcare y del plátano : este la abriga durante los
primeros dios y después aquel , que dura tanto (»mo el cacao. Las
lluvias violeAtas que caen irregularmento de diciemi>re á mayO|
éespues de la estación invernal son mui peijudiciales al cacao.. La
ipcande humedad no es favorable al árbol sino cuando aumenta pro-
gresivamente y sigue án intorrupdoa por mucbo tieinpo. Si en la
«staclon de la sequedad , las hojas y las frutas nuevas se mojan por
im fuerte chaparrón , el fruto se cae del tallo. Si la cosecha del
cacao es una de las mas mciertas á causa de los funestos efectos ée«
las malas estaciMies y del gran número de inseetos, pájaros y cua-
drúpedos que devoran la mazorca ; si este rsmo de^agricultura tiene
la desventaja de obligar al cultivador i esperar seis u ocho a3as
para el fruto de su tt^ajo , y de producir un artículo mui difícfl
de conservar ; no debemos olvidar ^g» las {rfaotadones de cacao no
exigen tantos trabajadores como las de otros, artículos. Un hombro
basta para cuidar 4 ^OÓO árlioles, que un ano con otro pueden .pro-
ducir A 2 luieg^ de cacao , y esta planta continúa produciendo
hasta la edted de 50 aüos en los terrenos de la c<^, y de 50 en los
del interior : en aquellos necesita 7 años , y S en estos para empe*
zar á producir. Bai algunos lugares bajos y fértiles y con mucha
liame<faKl , en que fructifica á los 6 años, aunque á los 4 dé algunas
mazorcas. En Rio-Negro, donde llueve considerablemente, es adulto
ti quinto año.
Constantemente se madura y se coge el cacao ; pero tiene dos
^ooas de cosedia principal ; una por S. J<Km , en junto , y la otra
á fines de diciembre que es la mejor. La apuorea necesita cuatro
aieses para llegar á su perfecta madurez.
Las nMjores plantadones se hallan en las provincias de Caracas
7 Carabobo á lo largo de las costas , desde el Uñare hasta el lara-
cui. En el interior, en los vjilles de Cúpira , Rio-Chico, Guapo ,
Cancagua , Curiepe , Tul , Santa Lucía , Santa Teresa , Ocumare ,
Orítueo , Cüigñe y valles de Aragua.-te la provincia de Barqui^
meto, en S. FeUpe, laritagua y Aroa ; en la de Maracaibo, al es-
tríalo dd lago , en Gibraltar y Zulía ; eo la de Mérida en el Cha-
ma, Escalante y S. Cristóbal ; en la de Trujillo, eñ el valle de Pocé
y eü Pampanito ; en la de Barinas en Pedraza ; en la de Barcelonai
«n Caipiricual; en la de Cumaná , en la costa de Paria, en S. Boni*
9
— IK —
faciO; en Cariaco , en Guacarapo, I^gnaraparo , Garápano y Rio^ca-
ribe. El cacao de Orüoco se considera como el de príaiera calidad ;
después los de Gúigúe, Caacagaa^. Gapaya y Gúpira. Cos comercian-
tes de Cádiz dan el primer rango al cacao de Caracas , decaes del
de Socobusco.
A mediados del sigk) XYII, tranquilos poseedores los holandeses
de la isla de Curazao, despertaron por su contrabando la industria
agraria de los haMtantes de las costas inmediatas ^ y el cacao se
hizo un objeto de e^rtacion en la provincia de Caracas. Se ighora
lo que pasaba relativamente al j^tnlocto de esta planta antes de
•1728, época del est^feciúoiiento.de Ja compañía de Guipúzcoa. £1
solo dato estadístico que se conoce es que la esportacion del cacao
de Caracas, apéoas subia á príncipos del siglo XVIIl á 50.000 fa-
negas anuales. Desde ^750 á 4748 la copipañia envió á España
858.978 fanegas , que hacen un año con otro 47.700. El precio de
la fanega cayó en 4752 i 45 duros cuando se habia vendido antes
á ^6. En 4765 el cultivo aumentó tanto , que la isportacion subía '
á 85.659 fanegas. En los documentos oficiales tomados de los pa-
peles del ministro de Hacienda, sobre el comercio de Caracas ^n
4797, la cosecha se computaba en 455.000 fanegas de cacao,
S5.000 de las cuales eran para el consumo del pais, 40.000 para
otras cotonías españolas , 77.000 para España y 45.000 para el
comercio ilícito con la3 colonias francesas , holandesas , inglesas y
dinamarquesas. Desde 4789 basta 4793, la in^port^^ion desde
Caracas á Espala fué , un año con otro , de 77.4 4 9 fanegas anua-
les, délas cuales 65,766 we consumieron en la Península y 41 .95$
se esportaron á Francia , Italia y Alemania.
4 Se graduó por Humboldt , según los datos que tenia , que Iai9-
seeha anual de las plantaciones de Venezuela de 4800 á 4806,
último período de la paz intenior, era lo menos 495.00# fanegas á
440 libras españolas, de las cuales asignaba á la provincia de Ca-
racas que eomprebdia entonces las de Carabobo ,^ Barquisiraeto y
Coro .- 450.000
A la de Maracaibo, que contaba con las de Mérida
yTrujillo > 20.000
AladeCümaná 48.000 *.
A la de BsHTcelona 5.000
^.»
»• .
.1»
Total 495.000
%
•*
— 424 —
Estas equivalen á 2i^225.00a libras.
Segaii la memoria del ministro de Hacienda , del
año de 4 8#0 y la esportgcion hat sido de • • . 6,498.051
A lo qn^ se debe agregar el consumo del país , que
pues tiene actualmente una población igual á la
de la cpoca calculada por Humboldt , y consu-
mirá las mismas 55.000 fanegas que él graduó
para el consumo iutefior , que hacen . .-. 5,6$0.000
Se puede poner para el comercio ilícito la misma
caotidad que aquel sabio calculó (4 5.000 fane-
gas), que hacen . ^ ♦-• • 4,650.000
Total 4^,778.054
Se puede decir, pues, que es la mitad de lo que se recogía
antes de la guerra de la independáicia. En esa época , es decir ,
-/ en 4 810 j habia^cerca de 1 6,000.000 de árboles de cacao y actual-
mente no hai ardt>a de 8,000.000.
f En una fanegada antigua española de 470 varas por cada lado ,
igual á 20.750 metros cuadrados , se pueden g^duar (por termino
medio de la diferencia de los terrenos ) , 4 .456 árboles, dándoles
5 varas de uno á otro, que darían un producto medio de 46 fane-
gas de cacao : á 21 pesos estas producirían 556.
Según el producto de la cosecha sobreindicada , estarían en cul-
tivo 6.77d {anegadas, y aumentándoles 4.221, i causa de algunos
terrenos malos , plantas viejas y otras que no producen , «starian
en cultivo en toda la república ^, por solo esta planta , 4 \ .000 fa-
negadas. .^
£1 cacao es lo que en otro tiempo dio m%s celebridad á la agri-
cultura de este pais : su cultivo disminuye á medida que aujnenta
el del café, elj^el algodón y el d^\ aif&car, y su marcha es del oeste
al este. No solamente e» el cacao importante cf^mo objeto de co-
' mercio esterior, sino taiftbien como alimei^to del pueblo. El con-
sumo interior aumentará por consiguiente cpa la población , y es
preciso iesperanzar en que$o$ propiciaros de esta hacienda encon-
trarán mui pronto nuevos fomentos len los progresos nacionalesl
£1 plátano ftnusa paradisiaca)) de la familia de las.musáceaa,
llamado también higuera de Adam á cáu^ de la magnitud de sus
bqtas , se encuentra en la India y en la América*^^ la veiHadera
/ V
I
-r 425 —
planta de pan , y nac^en todos los terrenos que tienen ^ fqpo dg
humus ( tierra vegetal qq.e sirve de cuhierla ^ por decirlo así/ á
nuestro globo). No se necesita qne sea muí profunda, pues las rái-
zes del plátano son tan pequeñas y corlas , que apenas se agarran
de la superficie de la tierra ; lo que espone la planta á caerse eú
los fuertes vientos. Se pasan 4 1 meses , desde el diatque se planta
el renuevo del plátano hasta que la flor foriiía racimo , y para lle-
gar á su madurez necesita cerca de 2 meses; de manera que la co-
secha se^|i^c%de á^á ^ 5 meses det^pues de la plantación. Se d^be
^.graduar q«^ ai nivel del mar^ en una temperatura mediado 27^ p2,
necesitado meses : á la alatura de 700 varas, con una tempeiratiira
media de 25<> 56, 9^/2 meses ^ á U96 con la temperatura media
de 22<> 36 , rejO[uiere 4 I meses y los que se dan con mui poca uti-
lidad á 2.800 varas , en una temperatura media de 16*" , necesitan
45 meses.^ *
Desde que Ja planta empieza á florear tiene ya su pié una por-
ción de pjeioños , que al rededor del tallo herbáceo se elevan á dife-
rentes alturas^f y. tan luego como el racimo está formado, fa hai
otras plantas floreando, ñu grandes como la principa).; de manara,
que consequlivamente van creciendo y reproduciéndose , y llegado
el fruto .al estado de sacón , se corla el tallo. Este suministra des-
pués , pu4ricndo3e en el lugar en que nació, nuevas, malcrías que
den vigor á las fuerzas orgánicas de la vida vegetal/
Es digno de particular mención lo que el S. i^oussingauK ^ que
ha residido mucho tiempo en América , dijo delante del Instituto de
Francia sobre eáíte'Tegetal. tEl plátand es el fruto mas útil ala
« zona ecuatorial ; es la base del sustento de fos habitantes de las
II .regiones cálidas. Entre los trópicos su cultivo es tan imgortante ,
« como lo es en las zonas templadas el de las grann'neas^ plantas
« farináceas. La facilidad de su cultivo , el poco espack) que ocupa ,
« la seguridad y abundancia de las cosechas^ la variedad de alimen-
i tos que el plátano procura, según Iíb diferentes grados de mjdu-
« rez y hacen de esta planta un objeto de admiración para el viajejo
« europeo. Bajo un clima en que éfliombrc apenas llene necesidad
« de vestirse y de abrigarse, se le ve recoger sin trabajo un alimento'
« tan abundante como sano y wiado. Á la cultura. del plátano
^« se debe sin duda el proverbio que tantas vezes he oído' re-
« petir por todas parles entre los trópicos : Ninguncf muere de
^ « hombre en Ámériea : pitabra consoladora que jamas he visto
I
j^étgfet^Ast. Ea la choza mas pol»*e te recibe hespiialidady y «e
• da ée comer al qne tiaie hambre. » Cada racimo tíese de 50 á 4 M
y aun mas piátanos. El S. Crawford que residió mocho tiem|M> es
el archipiélago indiano , dice que ana aranzada inglesa de 4(^26
«letros cuadrados, puede contener 455 árboles del famoso sago de
la India , qa#darian mas de 8.000 libras de harina al aik). Este
producto es eomo tres vezes el del trigo en EnrqMi y coma dos Te-
ses el de las patatas en Francia , según lo ha demostrado el S. Hom-
bpIHt, Pero el plátano produce sobre el mismo espaeio 4p tierra j
]gaas sustancia nutritiva que el árbol del sago , pues el §. Boussin- -^
^auH ha probado en la misma memoria leída al Instituto , que un
platanal cultivado en su presencia en el valle del Cauca (Nueva
Granada), le habia dado por cada -100 metros cuadra(k)s 4*255
libras, lo que haría para una fanegada de 28.900 varas cuadradas,
•I 02. 462 libras, cuando el árbol del sago en»superfíciekual daría
44 .295. 'Spmando un término medio paca toda la república, dire-
mos que en una fanegada pueden caber 5.214 plantas , dapdo para
cada una 9 varas cuadradas. Al rededor de cada árbol nacen otros
' retoños formauado grupos , entre Jos cualet hai á vezes 5 ó 4 tallos
echando simultáneamente sus racimos ; sin embargo , tomaremos
por término medio dos racimos anuales en cada planta, y solo con
25 plátanos cada racimo , tendríamos 460^550 plátanos ú 805 car-
gas de 200 cada una , que darían el pan cotidiano, sin ningún tra-
iMyo , á 75 personas durante un año , á razón de 6 plátanos diarios
para cada una ; teniendo la ventaja de propasar el pan solo arri-
mando la^fruta al fuego, pues do este modo esk poeos instantes q&eda
asada y lista para comerse. Existen platanales de mas do 80 anos ,
produci^do abundantemente sin que la mano del hombre les hay^t
hecho ningún beneficio ;. pues por su sombra y muchos renuevos no
permite el plátano que se desarrollen otras plantas. La fruía del
plátano después de cortada , dura verde mas de una semana, en se*
« gttida va tomando un color agiarillento, y entonces es mas gustosa '
y mas dulce , hasta que á los 4 2 ó 4 5 dias «injj^za á ponerse ne«
gruzca ; llegado á este estado Hftfruta , es tan dulce, que se come
cruda , y asada , ó coippuesta de otrosmoéos : es de un sdbor esquí*
sito , sana yjitftritiva< Hai variedles de plálano : el jdominico (re^
gimrumphj masdéljgado y delici^o; el cambute {musa sapietin^
tiumJ¡mxS^f^q\xenOy y tan dulce , que generalmente se come
GCHUO fruta agradable , y verde se usa «n la oUa como hortalíz% ^
I
— 4» —
E& k zona edieote ereee el piátaoo coa una loünfai «ombniBa
y arriba de 700 varar fraettfioa yenUiiofiaraeBte basta 4 .4 90, en nua
tonperalvra media de 27<» 55 á 22» 25. A 4.704 yá'as en mía
temperalara de 4 O"* 22 se cultiva en algmios pan^ , en oaiadas á
cnbierto de los vientosy eqfwestasal mediodía, y llega hasta 2.00O
varas en una temperatura media de 4 9 <> ; pero se arrastra lánguida-
mente á 2.592 varas sobre el nivel del mar , y no madara á 2.754 ,
en ntía temperatnra media de 46*.. Hai una variedad del plátano
que se llama cambare morado , pequeño , y da frnto á la altura de
2.800 varas , en una temperatura media de 4 O"" ; mas no con tanta
lozanía, y su vida es poco duradera. El S. Boussingault en la misma
memoria presentada al Instituto > dice : « En la estación seca,
« cuando el ci^o conserva sú pureza meses enteros , y ninguna Uu*
o via baja á templar la sequedad de la tierra , se observa, sin em-
i bargo, al rededor del plátano , un Ételo bumedecido que parece
« h<d>er sido regado por la noche. Esto es debido á la irridadon
« noctiirna de las hojas hada los espacios celestes. En efecto , la '
« esperienda enseña que su enfriamiento respecto del aire am-
« bienle, equivale á 5 ^ 4 5 del termómetro centígrado ; y por tanto,
« parte del vapor acuoso contenido en la atmósfera se condensa y
« deposita eti las boja$ de la planta y baña después su pié cayendo
« bajo la forma de> grandes goteras^ n
Por los diferentes lugares en que abunda el plátano , y por
aquellos én que escasea se puede considerar el término me^io'^de
sn predo 4 reales la carga de 200 plátanos, ün bombrg^ necesita
44 cargas para un año , á razo^ de 6 plátanos diarios, lo cual le
hace un gasto total de 5 4 /2 pesos ó 22 francos por alto , y en igual
tiempo la fanegada producirla 404 pesos. El S. Boussingault, dice
que á peso igual , «ree que el trigo es mas nutritivo que el plátano/
pero piensa que este es mas sustancioso que las papas. Por último^
se puede considerar que fres décimas partes de la población sir-
viéndose de i^íálano , en lugar de pati, consumirán 5,449.622 car*
gas; que al valor medio de 4 reales, darán una cantidad dé
4 ,559.84 4 pesos^ y se habrán empleado para este culti?o SM^i^
negadas, á las cuales se pu^d^n aumentar 4 ,445 , por los terrenos
no bien cultivados ^ callejones etc,., lo que hará 5.000 ^negadas
de tierra en solo platanales. * *
El vMíit^fmaiz zea) , es una planta americana que Colon encon*
Iró cultivada cuando descubrió la Costa-Firme en su tere^ viaje
I
— 428 —
de 4498; pero se ignora de qué parle de Amériea es originaria.
Hacia tiempo que se discutía sobre este punto, cuando qaedó la cues*
tion no hace muclio decidida perun bráfilense mui instruido que
envió a! S. de Satnt Hilaire unas muestras que erecian sin cultivo
en las misiones del Paraguai. Las flores hembra^ de este maiz es-
tán bien reunidas en espiga , como las del conocido ; pero presen-
tan la particularidad de que cada flor parcial está cubierta de telas
viscosas semejantes á la de las otras gramíneas. Desde áutés del
desubrimiento , las mujeres indígenas prep^ríban el pan de maíz ,
moliendo entre dos piedras los granos hervidos de antemano para
ablandarlos ; en seguida hacían panes de aquella masa y los ponian
á tostar sobre un platón de tierra puesto al fuego : aun en el día lo
benefician del mismo modo los indígenas y los criollos , y ningún
adelanto se ha hecho en una manipulación tan usual y necesaria ,
en la que se emplea mucho^iempo. De la semilla de esta planta
hace el indígena sus bebidas espirituosas , fermentando el maiz y
endulzándole con el jugo de la caña de azúcar. Los criollos también
hacen lo que llaman carato y bebida mui agradable , de que se usa
como horchata. El pan de maiz es de primer necesidad en las pro-
vincia de Margarita , Coro y parte de las de Carabobo , Barqufsi-
meto y Caracas ; así es , qae se hace sentir la>'j^scasez de las cosechas
cuando por falta de lluvias se disminuyen en algunas partes; bien
es, que prontamente suministran el maiz necesario las comarcas
dond^Ja cosecha ha sido abundante , pues no se ha visto que haya
deoíia^Sfllft sequedad ó humedad en lodo el pai& á la vez. La falta
de una cosecha demaizjiunca seria una calamidad , porque la yuca ^
y ei^látano pueden siempre reemplazarla con sobrada abandancía.
Desde el nivel del ma hbasla la región de las palmas ,4^90 varas ,
crece lozano y jogoso : arriba de esta altura su producto y sutigor
disminuyen gradualmente. A la elevación de 5.^ 60 varíi^ según
M. Boussingault y se cultiva el maiz en Bogotá , aun en ui^ tempe*
ratura media de/i 4 "^ á |5^ , necesitando 6 meses para producir ; y
arriba de 9.200 ya no escuUivable. En el lími(e inferior , en una
temperatura de 27 ^ á 22^ , necesita 3 meses para producir : en ei
límite superior 9ntre^24 <» y 20^ de tc]$fpieratora media*, 4 meses ,
estoes, «inaaUurade'^.400á2.UiO varas, y nías arriba, 6 m^es;
Jodoel año se puede lener maiz , y; de eslo es una prueba evi-
dente el habef siempre malojo^ ó sea el mttizsembradMUui unido
omo ae hace con el trigo , di manera que no puede espigar conve-*
I
— 429 —
Bíeiitoineiile para dar ^^ftdes' majorcas y si para <}Ke fa planta
Tenga á ser jocosa y nalriüva á fin demanteaer con ella ios caba.-
líos, muías y amos. Ha| , sin embargo , dos cosechas al ano , «119^. -
llamada de verano y la'ó'ra de invierno. La primara se recog» «^
enero ó febrero y la otra en julio ú agosto. El maíz mi general se-
coge á los 4 meses de baberlo sembrado , á los 5 sí es de una coi-
lidad que llaman paiío»; y en los lugares donde se siembra sola-
mente inaiz , se hacen cuatro cosechas de este último y tres del prl**
mero. Las tierras fér tiles de Venezuela hacen elevar la planta á mas
de 5 vari|^ , con cuatro ó cinco mazorcas grandes. En las tierras
menos jugosas se levanta solo á 2 varas , y generalmente tiene dos ó
tres mazorcas. En las tierras ya cansadas ó muí elevadas, produce
de una á dos y mas pequeñas, y la planta solo se eleva á 4 4 ¡2 varas
£1 cultivo del maiz emprobece el terreno , y prospera en las tierras
virgenrs, lijems y búm^to: le convienen, sin embargo ^ casi<
todos ios terrenos, siempre que haya humus en ellos y sean sufl-
clentemente removidos ó preparados al efecto. Se puede graduav
sin exageración que la cosecha del maiz , en los terrenos mas férti<-
íes, produce por un almud de sembradura 560; en los terrenos de
calidad media 240, y en los inferiores 444 ; lo que daría por tér-*
mino medio 258. Un almud se siembra comunmente en un espa«
eio de 28.900 varas cuadradas, (la fanegada es igual á 20.754
metros cuadAidos) producto estraordinarío si se considera lo que da
el maiz en Europa en los mejores terrenos, y también lo que pro-
dudé en Méjico y en los Estados-Unidos. La abundancia con qvfó
se da este cereal hace que su predo sea ínfimo, siendo así ({ue
en los valles de Aragua soto cuesta 8 reales, ó 4 francos la faneca.
Con tres de estas pnede comer una persona durante un aSo, á ralon
de culero arepas "h panes diarios de m^m libra cada uno. Per6 se
debe graduar por la generalidad de la reptíiblica el predio medio de •
24 reales ó 42 francos ; es evidente que con la pequeña cantidad
de 9 pesos ó 52 francos , tendrá una. persona asegurado el pan
anual , y una fanegada sembrada proveri i 458 personas y pro-
ducirá «¿coHivador 4 422 pesos, calculando dos cosechas alano.
Pongamos que 4/40 de la población se sirvan de pan de maiz, se
necesitarán 4,454,408 fanegas al aSo. Si se atiende á la cantidad
que se gasta en el mantenimiento de animales domésticos , caba-^
Uerias y acémilas ^ lo que se siembra en malojales y lo que se
pierde^ no será exagerado el montante de 2;0OO.000 fanega^»
P. 6B0«. . 9
t
I
_ 130--
^qae se espetíien en el tarrUmo , eseeplo aguaos 4dlos foe roetai
trasportarse á las ootoi^as Tecinas varios cai^Bfinitoa. Para poéer
€ar esta cantidad se neeesitas 2.409 fanegadas en calUyo; á las
<nii^s se pned^ agregar \.B9^ por los terrenos mal coltivados^^
«fue por eaoaados dan poco ; loque daría un total de 4.000 fane-
gadas empleadas en el cultivo dd niaiz. .
La yuca (jtxiropha man^t) que han cmltiviado y cultii^an lo-r
4ayia los indios salvajes. Es ptonta cuya raiss es necesaria al babí*
taiite de los'bosques &k sus largas incursiones, sea para atacari
Jos enemigos , sea para visitar las aadones amlfias. El pm que se
hace de la yuca dura muchos meses , y su pMo peso le hace pii^
rífale á otro cualquiera. Bita planta tí^ie su raiz en sazón á los
O meses , en los lagares no mui. elevados de las serrmiifts , y en los
llanos ; en las partes lluviosas de Rio-Negto ,* necesita alto y me-
dio , y en lá serranía elevada la estraen % los dos ados ; porque pa^
rece que á esta época ha llegado á,su completo desarrollo sin pa*
saroe á un estado leñoso , lo que sucedería si se dejase mas tiempo
bajo la tierra. Prospera desde el nivel del mar basta la altura de
A A 96 varas , temperatura media de 22"* 56. A mayor altura dísmi*
nuye progresivamente ^ producto : pero seencuentra en corta can-^
tidad en el cantón de liucuchíes á 2.800 varas , en una tempmi«
tura media de •! 6 '^ , y neceáta año y medio para empezar á proéu*
air, mientras que á la de 4. «1 96 es al año, y en^ región mas
biya hacia el nivel del mar , tan solo á los -1 0 meses. La lentitud
delasicoseebas de la yuca en las selvas húmedas de la Gua<|áaa ,
ej^ce umt benéfica influente en las costumbres de los indios ; por
esta circunstancia están Obligados á permanecer mas largo timbpo
en un mismo sitio , lo que les fija y apega al stfelo q«e euUivnn.
De la yuca hacen >el mañoco , esto-es^ una harina de esta raíz , tos-
toda, lá cuíd conservan por muchos alosen saquüos dé mariitia.
Bi sus largas peregrinacioiies usan de esta bacina desliéndola en
agua ó caldo , lo que la hace erécer eonsiderabJemente , formando
una sopa espesa quedes da sufioieiite jiutrimie&to, pues dias ente-
ros están con dos pequeños éotumas de esta harina, medida equí**
valente á lo que puede eneermir el puño de nna mano regala. Dos
clases de yuca se cultiven , y parece tan semejantes una y otra en
sus hojas y raíz , que muchas vezes se confundid : una es la
yuca-duloe, muí agradare asada ó cocida ; la otra es la yuca-amar- '
ga , que solo.se emplea en hacer e\ casabe ^ tortas xk 5/4 delibra
I
— 4U —
¿efeso , OMS é mésm* La f mca-amarga sia la necesaria pñipaFai
^OQ f haoe el ^ecto de un venetto , ,7 para estraerlo se. le raifa
•una pequeña tela qiie cubre la corteza, se reduce á liariaat4a pulpa
'de la raíz frotándola sobre un rallo de hoja de lata, y poni¿di>la*
en prensa por 24 horas en unos sacos largos y elásticos, hechos de
Tarillas de caña , conocidos en el país coa el nombre de sebucanes^
filtra por ellos un agua que es el líquido venenoso. Seguidamente
|»asan la harina por un manaren tamiz de caña , y hecho eslo, ya
la harma está en disposición de ser estendida so^e un bvdare^
especie de platón de tkrra aigOsCOQvexo^ bajo del cual está el fu(^o.
£n pooos instantes se cuece la torta, y caliente, la retiran y poüen
iá secar al soL Lo largo de esta manipulación es causa de que eL
precio sea de un real por cuatro tortas , una de las cuales es mas
•fue suficiente para el pan de una persona. A la entrada ó salida de -
las aguas , en una vara cuadrada , suele ordinariamente sembrar^ae
una estaca , la<;aal da las raizes suGcienles para estraer una torta.
En una íanegtda pues de HO varas se pueden sacar por término
medio 49.206 tortas, dando por cada dos de ellas tres matas. Esta
£atttidad suministraría el pan á 55 personas en un año', y cada una
^gastaría W \¡2k pesos ó 46 francos á razpn do cuatro tortas^por un.,
real. £1 cosechero recibiría un producto bruto de 6^ pesos , y
ademas , puede sacar un escelente almidón que es el único que se
consume en el paisy se vende, término n^edio , á un real Ja lih^a.
£n una fanegada podría sacar 400 que le darían 50 pesos y el pro-
ducto total seria entonces de 659.
Supongamos que 2/4 O de la poblacioii se siryan de yuca por pan ;
iendríamos pue$ 207.029.460 tortas, que costarían 2.475.521 pe-
/'sos, y ademas4.50S. 400 libraste almidón, que producirían 55S. 550
pesos. Este producto lo darían 5.9^0 fanegadas á las cuales se les
puede aumentar por las diferencias de terreno, cultivo, etc., tn454 ;
serían por consiguiente 5.000 fanegadas de tierra empleadas en esta
sola planta. ^ ^ '
Las papas (solanum tuberosum ) es uno de los vegetales emi-
aentemente útiles al hombre, que la América ha dado al viejo
mundo. Cuál fuese su pais originario, ha sido cuestión largo tiempo
agitada y sobre la cual el barón de Humboldt no pudo pronunciar,
porque en ninguna pATte, en sus viajes, habia encontrado las papas
silvestres. Sin embargo , hace pocos años que la cuestión ha sido
r resuena por el envío de unos tubérculos á la Sociedad de Agricífl-
n
{
— 432 -
tura de Londres, de una forma redonda, prodecentes de ana loca-^
lidad de Ja república de Chiie» en donde eran abnndantfsimos , y
qne cultivados han dado otros tubérculos en todo semejantes á lo^
' qve se producen en Europa. Posteriormente el seüor Bertero , via-
jero tan intrépido como insíraido, ha encontrado en abundancia
las papas silvestres en varios parajes de Chile y principalmente en
las cercanías de Quíllota. Las papas se cultivan en ios terrenos cer-
ca ,^e! lago de Valencia , tan solam^ente á la altura de 550 varas en
una teip^)cratora media de 25<^. En la serranía costanera á i .200
varas, temperatura media 2P, se dan mui hermosas y se recogen
á les 4 i/2 meses. En el ramal de los Andes que pasa por Mérida,
^crece vigorosamente desde 4.200 hasta 5.000 varas sobre el nivel
dd mar, en una temperatura media de 45®, y necesita para produ-
cir, de 6 á 7 meses, y á 2.200 varas, en una temperatura media de
-1 8* 50 , solo 5 ^ /2 meses.
Este tubérculo requiere un terreno silíceo y abundante en bu-
mus para mejor prosperar : no le convienen los de arcilla dema-
jiado compacta ni de calcáreo puro : el terreno mas conveniente
es. aquel que está compuesto de arena y tierra vegetal, en propor-
siones'>tafes, que la humedad uo forme jamas un terreno con lodo
ni pegajoso.
Si se compara el producto que da esta planta en las provincias
de^ Mérita y Trujillo con las de Barquisimeto , Carabobo y Caracas,
y se toma un término medio, se puede asegurar que una fanegada
produce :24.000 libras de papas que es el doble de lo que dan en
Francia , y ese terreno suministraría durante un año el pan á cerca
de 44 personas ^ á razón de 5 libjras diarias , y le vendría costando
medio real al dia ó 23 pesos al año, lo quedaría un producto-anual .
de 4 .000 pQ^os aUcosechero, habiendo dos cosechas al año. En una^
fénc^Qda hai 4 1 6.600 plantas que dan , término medio, 4 4/2 li-
bras cada» una^ y en un año dos cosechas. Supongamos que If I O de
la p(n)lacion se sirva de es(a raíz como pan, á fin de poder compa.
rar.mas fácilmente el consumo que se hace de ella en el pais, en
cjase de verdura, y tendríamos 405,428.000 libras que darían un
valor de 2,474.282 pesos. Este producto se conseguiría en un.es^
pació de 2.4 48 fanegadas, á las cuales se pueden agregar por dife-
rencia d« terrenos, etc., 85^ ; resultarían 5060 fanegadas emplea-
da§ en este cultivo ; y cioi lamente el cálculo no es exagerado si se
considera el consumo que se hace en -el país. En Euripa, y fx^í**-
I
— Í55. —
sai&ente en la Alsacia, en una temperatara media de 1 8^ 2, se ¿üen-
tan ^66 días del tiempo de la siembra al de la cosecha de la papa.
En B«golá 200 días, temperatura media -14® 7 , á'nna altara de
5,460 Taras. En Pinatura cerca de Quilo 275 dias, en una tempe^
rainra medía de 4 í°. ; '
Este es el lugar de mencionar otras raizes que están cultivadas
en toda la república y que también se encuentran silvestres en las
montabas vírgenes^ que ocupan todavía mas de la mitad del terri-
torio. Y son : los ñames, que crecen hasta tener mas de un pié de
diámetro ; en terreno igual dan mucho mas producto que las pa-
pas, tanta sustancia nutritiva como ellas y sirven en el país como
e.<^celente verdura.^los apios , que se usan del mismo m^o , son
tan apreciables eomb las papas, y producen en igual y mayor can-
tidad. Los mapneyes y capachos son raizes qtie podrían hacer el
mismo o^io del pan ; pero de ellos se hace el uso que de los ña-
mes ; y úmo^roente las batatas de la forma de las papas, harinosas
como ellas, pero de un gusto mas agradable y verdaderamente dul-
ce. Todas estas raizes útilísimas para el hombre, que sirven de pan
y de legumbres , podrán aun ocupar en toda la jeQÚblica una es-
tension de 4.650 fnnegadas y su valor bien se puede calculür , á
razón de 200 pesos cada una, en 950.000 pesos. # ^
El coco ( lodoicea cocus mueifera) , planta indígena y que por '
sus inmensos productos ha sido reducida al estado de cultivo, ha-
biendo plantaciones considerables de esta palma , en las provincias
de Gumaná y Maracaibo, casi al niv^l del mar. Crece, sin embargo,
en tina altura de 700 varas, temperatura media de 27** 55 á 25** 56 ; ^
pero se advierte que es mucho mas frondoso en las cercanías del
mar que en el interior y en los terrenos elevados. Para sembrar el
coco ^e le busca bien maduro, y se le cubre cm tierra : se le riega
consftmtemente y a los tres meses nace : de lo contrario, está sin
brotar hasta ocho. Cuatro ó cinco meses después llega á la al-
tura de -1/2 pié, habiendo echado tres 6 cuatro ramas foliáceas.
£1 mejor tiempo para trasplantarlos es en la estación lluviosa, por-
que la planta recibe la nutrición abundante que requiere. Se siém-r
bra á la distancia de 8 varas uno de otro, poniéndolos en hoyos ci-
lindricos de dos pies de profundidad. A los cuatro años florecen y
un año después de la primera flor dan fruto y siguen dándolo por
60 ú 80 años, creciendo basta la altura de 20 á 50 varas. En los
terrenos aefios no producen sino al cabo de ^10 años, pero esto es
«-
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*5« —
raro/ A )a altara de 700 varas, eft no» teir^ieratiira méán dfe 28^
50«, cía i los 6 año»; este crecimiento rápido es tanto mas nttlable
cuanto ^oe los otros árboles de palma, go«do el moríche y el somr
b#ero {mauritimfiexu^sa y cotipha teotorum)^ cnyayidii es mmi
largsr, á vezes no suben 5 ó 6 varas en 60 años. Cada raeioio da por
lo regalar ^ 2- cocos, que se ifecogen caatfo 4 cinco vesses al afto , y
sia embacgo, no tddos se auidaraii, padiéndose calcular 50' ntt^es
pet ano, que prodvcea 4 botellas de acdle vendidas cuando menee,
á 2? reales cadar una. Hai en la co^ del gcdfo de Cariaco y de la ^o**
vincia de Maracaíbo haciendas de muchos miles de árHoles, Una
faasgada eonJtendria 452 áil)oles de coco que dari«ri un. producto
amial de 4^2 pesos con mui poco costo. £1 ápbc^de coco da frut^
en abu^dandar haaia que I!)^a á los 50 ó 40 ai#B, después de esta
edad el producto se dismíuuye , y un tallo de casi 80 , auuque da
mui poeo producto, no está del todo estérií. Doscledesde aceüe se
socan de él ; uno blanco y cristalino y otro mas oscuro, EÍ primero,
se obtiene rallaado e^ coco fresco y estrayéftddle la leché por com-
piesion , se pone esta ea a^a y se cuece : dejásdola asentar du-
rante una ndche pvodoee un aceite bknco. £1 otro se hace sacando
el agua éek ooco y dejándolo puddr, \o que sucede en tres 4 ouateo
di^ ; entóneos se recoge la médula oleosa y se pone e& paibis<al sol,
éslraiydndo el aceite que sube, el cual puesto al fuego queda pat:^-*
ficado y encestado, d^ venderse. Del. mismo aceite se hace escelente
jaboU) y es de esperaisse que pronto, se descubra el modo» con que
en< Inglaterra endurece el aceita de) coco, en términos de hacer
4elas mas duras que las de sebo y esperma , cuya lu£ es tan bdla
quo sobrepeja á la de es^s. El Sdlor Boussingault dice, q^ es muí
ptobable que no s^ el aoeite el que se midurece dkétftamente, si*
no el a^ile benefteiaA» reducido prim^ty á jabón y detraes estf'ai^
dos lod ácidos grasos como eV ácido estéríco qwt entra en ía codito*
si£jon de casi todas las materias grasas. Ea ef dia es empleado este
ácido para fabriearlas bugías que sostíiuyeii eoii ventaja á las velas
de esperma y de oera^ Las velas pcepasadas con. este ácido estérieOí
soa^:^ni fr^iiesy traspareates : paoarenfiediar este iucoBveaieñte,
se le aiMe como nao ó doe por cienlo de- verdadera erara. La pre«>
parncioB de estos ácidos grasos es euiel dia objeto de unajabrica»
cto initfensá eB>fittropa» ^
Sstá probado qde una hacienda de coco da actualmente mas pro-
d««to eu Cuvdaná j Maracaib» que una.de igual OBtenMOu de oa«f
f
1^^ y con ki (^idmifare de tener siempre buen^ cosecha :$mtrah
tejO) pues los cocales de una hacienda dan todo el ano frntos eo es^ ^
tsfdode ser recogidos ; beneficiados, no solo sirven para el consumo
ée la pd>laoiiHi sino que se hace ésportadon al estranjero, de mas
de 5$.000,pe6os , según consta de la Memoria del presente año y
del ministio de Hacienda. Si graduamos que en toda la jpepüblica
baf a 5^.000 familias que usan de este aceite á razón de tres bo*^
teiias al mes, bariaii 4,260.000 al año, cuyo producto seria de
345.000-pesos , que unido á 55«000 de esportacion haría un total
de 3^.opO¿J^ste yalor (^responde á 4,400.000 botellas de aceito
que seria la cosecha general, la cual se produciría en 99b fanega»
das de tierra, a las^.que se deben aumentar por árboles mui viejos
ú otro^que aun no producen 305 fanegadas, y entonces tendría*-
mos un total de 4.300 empleadas en este cultivo.
£1 tabaco (nicotiana tabacum), planta que los españole»^ e^oon*
toron ea k pminci» de Tabasco, cerca de Yucatán. Heroandií ;
Toledo fué el primero que la envió á la Península, y su cultivo
pasó luego á Santo Domingo, á las demás Antij|las y á los paises del
Borle ; en fin llegó á eonoe^^ en toda la Europa. En 1777, por
oédula de 94 de junio, Carlos 111 mandó establecer el estanco en Iff
provincia de Venezuela ; pero tan solo en abril de \ 779 quedó iss* ^
iablecido en forman Fué en \ T84 que el químico español Pedro Verás»
tegui, recorri^do el occidente , observó el uso que hacian de los
ambires^ perfeccionó su ekiboracion y enseñó á mezclar el uroo de
k^lagona de Mérída y á aprovechar el tabaco inútil. En 2 de agosto
del mismo año quedaron comprendidos ea el sistema del estanco
el' mo el chimó' y el nrao. Por los estados comparativos , desde
Vt^\ hasta-ISOf, resulta que un año con otro, la renta habia
prodoádo mas de medio mülon de pesos líquidos. Después de esta
época empeló la revolución, y en ^guida las convulsiones polílicae
que cierlameste no hacían prosperar la renée. En el decenio dé
•M2I á 4^31 dio á razón de 474.570 pesos de producto líquido.
£1 Congreso de 4SS2 abolió el estanco.
Según la Ittemoria del miBistro^de,Hacienda , de 4840, se \m
esportado fuera' del territorio en tabaco, un cagllal ^e mas dn ^ •
dTOO pesos en la cantitad de J .269 quintales, que viene á estar
á razón de 4 9 pesos la aiyoba ; todo este tabaco es de la provin*
eia- de Barínas, pues el de las ^emas se consume en el pais.
\ Esta planta ne$e«ita; ' para su cultivo una tierra grasa y hú'^
I
.*
I
-^ l« -^
zo«la faé éh 40H iS «úntales : en 4 805 «iháó á 2SiiMl , f al«te
siguiente de -1 804 solo «dcanzó á ^.565 , proviniendo eeU» rápidan
wíaciones de Ift mayor ó vmoor demanda del írntiB« El ano dé
4^859', aegun la memoria del minislro de Hacienda , teé de 27.dOfl
quintales, qoa daban un valor de 2d4J28 pesos, q»e ^me i scs
á« razón de casi H O ^/2.el qaintaU A la esportanion se le pnede an*»
mentar para el oonsnmo del pais , para alnmhrarse , 4 libras pot
familia al año ; qne serian 5.000 quintales. Ademas, por ks hn»»
macas , lienzos , eord<me|^ ele. se puede graduar para una cuarta %
pacte de la peblaoion , deducidos los indios 47.007 quintales , que
baránuB total de 50.000^ los cuales puesloyá 10 ij2 pesos dacias
nn valor de Sfi5.000. Este proéuclo se snearia de 4-.#00 fanegadas,,
y si se pene igual esleusíon. deierreno por los que son mal cultiva^
dos ó por los que hayan per^do sus cosechas , se tendean 2U)00 fii«<
negadas empleadas en la pianta del algodón. I^as grandes ptonta^
dones de este fruáo eséán ealoe Valles de Aragua en:las orillas deb
Lago de Valencia , sobre el ünaie, en el^olfo de Gariacoiy en M»»
raeaibo, á pesar 4fe que se oulttra en todaJarepUblica , con mas ó; {
astees abmidaBda.
Deade el niveldel mar hasta la- altura de 4 .572 varas en Seoon£
de TmjtllO', en una temperatura media de 49o 25, se da el algo^
don', pero necesita 9 meses para producir. En la temperatura me^
dia de 27o 52 al nifel del mar^ da á los 6 4/2 meses : á 700 varas
en una temperatura media de 25"* 56 necesita 7 meses , y 7 4/2 ¿
14 96. varas de altara en una temperatura media de 22"" 56. ün»
fimegadapuede producir por término medio,50 quintales, q«e da^
niip OD: producto brntode 525 pesos.
Enumerados k» planeas americanas que se cultivan con buew
éxito en el pais , es tiempo de dar á conocer las que so han traid»
de otRoslugares-, y que aclimatadas en Yenesuela hacen una part9
interesante de su agrícultam; El café , lindo aii)us(o de la fami^i»
de las rubiáceas (eaffea ambieaj. En 46i9 fué- intreducidt) en
Francia : una libra en grano tostado costaba 4 20 francos. Esta planltf
M llevada en 4 727 á Santo Domingo , p^veníente de Martinica.
Eff474l^ había algunas pocas plantas sin mayor culüfo, no se sabe
«•venidas de Cayena , Martinica ó Santo Domingo. De esta época
i i 4 760 filé UMit poeo el aumento qne recibió. En 4784 D. José An**
fonio l^lobedano, cura de Ghacao^; después obiepo de Oeayana,
concibió el proyecto de un establecimienio formal, y habimidb
f
j^IbMoí 9i.M^ ^ qu» reeofl^ <n^ vw«a k««9ta«, se perdió b
iiutyo$.par4e. Parw^clwyiagc samiUeves segna elmitoda de las Án-
tiihs y togr¿ dákOdO- pie» «a el m^r esUdo!i40 1««bu[«i>9 ^T^ ^^
toda. sig!Íie9»tt al HMsaio tíenpio E^. Bártotomé Blanfe y el: presbi*-
ttíto-Sy* PedsaSej». Gift ^ qtMiqwnlb de i78$.á ^7dd se sacaren
paia el pneplo de. lar Guaira 955; (foiiilato^ 86 libras, y en el de
«ITM» 479^8eesA^j^roD^6.94)d>qaiaMes.'i2 bim GomeiUMH
rqiB las plaaiacieiie» %a i79é e» loe vallies de idragua y e» el nusmo
aile 1* esforiaeíim tetal de Veoesuda fué solemeDte de 4.849»
quiíiMes 2i Htoas» y eiir 4^8 de 61). 7-4 5 enlátales 55. libras y se:
raeogiereiii iOO^OOOt en todeVenezeela. iidiisimeiiáese hen eq^or»
tadPy segott^ k* memoria de i84a> d^ mieisún» de Haeiepde,
248«8i65 quinUiles^ qpie dao uii Talos de 2,255.959 pesos que equi-
vale á cerca de 45 peses el qjweiek Si adnítímos qae una sesta.
parte de la población , -^no comprendidos los ÍDdi§eBaft salyíqes ,
conrame á raae» de 2i libras^ ftensueles per persona., daria un^''
pfodueto de^55.704 quíntales, que unidos á la. esportaeioii ofrece»
^iao para la cosecha general de 1» repúMiea» 2^4,567 , que repre-
8«itaft uea eanlidad de5^59íK57f pesds produieidos per li6,97^ .4 53
ivboles frutalestde café. Oeopau.efltes 51.20-2 fanegadas, y si se le
aumeotaii^^ los cafeialas vMje6^^ iiusespletes é- impradectivos
4998, habría en ettltivo 5.009 teagadas de tierra. Las mas gran*
das p1an|adeiieft están en los railes 4e Acagna , Tui , PBrgua , N»*
gutra, TruííHo y Barínae, aunque genectlmeiile se cultiva en todos.
loa pamg<A irigo elevados de la rapufaéica y tanbien en lesearos de
lai costa , en donde se pensaba que ta ataídsfeiu marítimai le era.^
perjoí^ial. S«Mmüe iAfariorseencaentiraá 2S^ ^arasea Ocumaie;
eu donde la teoiperalwe medi» es de 26"* 44 , y se ete?» basta.
%M^- ten^peralura media» 2i ^ , ^nque- puede darse lia8l#'2.725 ,.
en- una temparatoa macUa de 48 <" 50w BU «na fanegada se planlmi
5^50^^ áiMbs : Imh áe estoe adultos que dan de 4 6 a 20 libras ; sin
embarga, genenainuBte solé predtteen»4 4 /2 ó 2^ ó 5 libras ; paro to->
mando por témúnamedio^'t 4/2:tibrapor ár^ol, pnodaicíríe 70(lttin*
taies onye Talor á 45>pe60B serie de 9éO; A. los 5 aítosse coge abun*
dente coseche y dmttila planteeien eorcftde 59. Desde octubre hasQi ,^
dioíend>itt, segnn. los kiSBraa mas é ménae cálidos, se empieza á re» ^
eejer el grano del caíé, y oadu-ceseoba se hace en tres tlanapós por-
quelko. todos lea gamae se maduran i la yes.* Esta árbol' no florece
haeta los^dbaañoa j sq iae aeloisoiisíste 24 faotas* Las. Uiwias que
ft
• r
F- *
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-* 410 —
caéoi al tiempo dé la eflorescencia , la falta de agua por los riegos
artificiales en los terrenos J^iíjoS) y una planta parásita, nueva es-
pecie de coranthus qiiig se fija en las ramas , daña mucho al árbol
del café. Esta planta pide (for predilección una tierra nueva un poco
elevada , en donde la frescura y las lluvias templen el calor esce-
síyo de la zqq^ tórrida , á cuya.accion resiste poco. En los valles de
tierra caliente se ponen las erytrinas ó búcares^ara dar sombra á
las plantaci^iies , y tan solo en los cerros elevados no se hace uso
de la sombra. No le convienen absolutamente las tierras de una ar-
cilla dura ó las arenosas y lijeras ; sobre^na cama de marga ,
líerrarblanquecina y gredosa , se observa que la planta crece lo*
zana , «aprovechando el poao terreno úiil que tiene al rededor, pero
tan luego como quiere estender sus raizas, encuentra estorbo por
lo compacto de la tierra y se muere á vezes antes de dar las primeras
cosechas ó después de estas.
Gaña de azúcar fsacharum officinale) Las primeras cañas que
> llegaron al Nuevo-Mundo vinieron de las islas Canarias y á estas se
«nviaron de la Sirilia que las había adquirido de la India. Esta es
la antigua caña que se conoce en Venezuela con el nombre de
criolla. Sus hojas son de un verde oscuro , su vastago mas delgado
y mas abundantes los nudos. Hai otra clase que es la cai& de Ota-
hiti, de un verde mas claro su vastago , mas grueso , alto y suca¿
lento , y toda la planta anuncia una vegetación mas lujop. Esta
caña se debe á los viajes de Bougajnville , Cook y Bligh : el primero
la introdujo en la isla dé Francia de donde pasó á Cayena, á la Mar*
tínica , y desde \ 792 al. resto de las AnUlias. De la ish de Trinidad
pasójá Caracas y de allí á Cuenta y á S. Gil en la Nueva Granad^g^
Se ignora que haya degenerado. Tiene la ventaja de producir una
tercera parte de azúcar mas que la criolla y de dar una cosecha
mui considerable diñante 40 años, en tierras de una fertilidad or-
dínariá y por t5 ó -1 6 en un terreno fértil, méniras 4]ue se necesita
volver á plantar la criolla de dos en dos i^os, en un terreno roc«
d^no y de cinco en cincel en las tierras mejores ; teniendo ademas
^^'^ ' *r la propiedad de acomodarse á varios temperamentos mucho maa
^^aijb que la qriQlla. Hái una tercera especie; la caña morada, llamada
caña de Batavia ó de Guinea : es s^uramente indígena de Java , en>
donde se cultiva. Sus hojas son de un color de púrpura, y muí
anchas; la prefieren para el rom. A la caña no le'convi^e sinó^un
clima cálido , y no todos los terrenos sirven para su cultivo , tales
f ■
— 444 —
son los demanádo hámedos, los cerros y los llai^os arenosos. Neee-'
sita de una tierra fértil , en ya capa productiva sea y cuando piénOs^
de un pié de profnndidad. También se necesita qne la tierra sea
ÜTÍana y floja, porque las tierras gredosas ó arcillosas en qué^i-
I(cil9iente iltra el agua , no dan sino cañas mezquinas. Por prefe>
reoda requiere un terreno graso y ceniciento ; esta dob^ calftad
da mucho asúcar y mui biíeno. Las cañas se plantan en tablones ó
cuadros de á -160 varas, escogiendb para ello la época en que se
esperan las aguas. Estase observa mas particularmente en los l)i*
gares en que no hai facilidad para el Ti$go , y en donde la hai se
' siembra-lodo el año, eligiendo d tiempo mas fortuno para poder
eensegutr un orden progresivo en la madurez de la raism^ , á éa*
el que todo el año se pueda moler coa provecho* La cañSl se planta
.á la distMida de una ó dos varas, según estén pobres ó ritas las á
tierras , pues cuanto iqgis jugos nutritivos conserven, tanto mas de- ^
ben estar apartados tos cogollos de caña que se siemlN'en. Estos , á
los 45 ¿«4 8 días hacen aparecer nuevas plantas ^ qooá los 4^ me-
i ses , con €0||a diferencia , comienzan á florecer y dos ó tres meses
depiles^ háflan en perfecta madurez. Hai, sin eníbargo , lugares
ef^qi^e la caña se corta al año y en otros á lós 4 4'p-46 meses* Al
niyel del^ar , temperatura media 27® 52^ necesita p&ra estar en
madurez, 44 ipeses : á 700 varas temperatura media 25*^ 56 , 42
me^es : é'4 .2Q.0 temperatura niedia 25*, 44 meses, y á 2.'4<)0 tem-
peratura medía 4 9 * , 4 6 meses. El grueso y aKUra de ht asíM va-
rían considerablemente : las hai que tienen de alto c««a de 7 varas;
p^o por4o general son de 4. Tafibien varia mocho la mntidad de
. azúcar q^e c^ntien^*; estrayéndose de 6 á 45 centésioias partes de
su peso. Enguanto á la altura sobre el nivel del mar se reputa el ^
'mejor terreno entre 20 y 4 .209 varas ; en una temperalvra de 27-<»
á 25'' centígrados. A la altura de 2.400 varas hai cañas , pero no se
puede estraer de ellas azúcar. La duración media de esta planta,
consilterados los diferentes terrenos, se puede graduar de cinco años.
El producto de un tal^Ion de 40a^aras en cuadro , sé calcula por
téniDíno medio eó 500 pesos; sea cf'ue se saque aguardiente , ó bien
^papelón ú aaúcar. En una fanegada»* habrsi como tres tablones ; e&
dedr^ un producto de 900 pesos 6 de 7.500 libras de azúcar. Para
. sacar el cálculo d^ lá- covseeha general de It caña^ en aguardiente ,
azúcar y papelón , no se ha de hacer uso de los guarismos que pre-
senta la oontribueion estraordinaria sobre la.caña'^ Aegu^^nte,,
\
^ 9146
la*poblaeitai (%pe seria , sui contar los indios «ali^|6S| ée i 48.7et
{Morsoaas) ooBsumieaedíariein^te 4 onzas ée a«&cir ó^peton^ lo
^u^formaria la cantidad éd Á20 libras ai aio por cada inditidaou
Para fao(Hdaá4el os^uk) lo red^otreoios á soto 4(^0 libras. £8 ;piicb
icUto qWb ^ aeoesitaria una carga de 200 pam dos ipersonas qm
liaría al ano por lo 6 * parte de la población , 74.S04 cargas/ que
á 8 pesos ,(éraÚBO «oedio, darían ¡i^^M2, pava cn^o tuIot seiiui
A necesarios 0MS de 4 .003 iablones de catta. Sapougames también que
«n 6 ^ de la .población coiuyuma mensval^aeate 4 botellas de aguar-
diente por iodi¥iduo ; esto baria poco m^s de 7.4S8 «af^as de 80
• J)Otells|S ai Mes«)qiie al ano serian 80 .256 cargas fue á 8 péaos darían
'Qn valor de 7-14.048; ^para cuyo {irodocto se aeeesltarian 2«580
staUones. Ademas y «e ban esportado en aguardionto foera del paii,
|)or na yalinr de 65.074 pesos , qm seda e^prodoeto do otros 2i5
tablones , ó 7.875 cargas ; lo que fcurmaria nn lolal de 4 ,576.004
pesos que se sacarían de 4 .586 tablones sembrados de eaH^ en toda
ja república. Para estos serian necesarias 4 .528 toiegadas á las qnor
se debe aiunentar por diferencia de terrenos ; calles etc. 072 mas
quebarian um 4otal áe 2.500 fanegadas empleadas en tablones é¿
cana de artcar.
El aSil (indigqffera Uneibria) fué traído á Yenezoeia en 4 777.
B« Antonio Arvide^ á iastanda de-^). Manuel Clemente ^ hi;so ve^
BÍr de üuaiáiíalala semilla del Índigo, y tambi^ p. Pablo Orreor
dKm, -sugeto do grandes eonocimientos on esta clase de agriettltora.
Se realizó el primer establecim^Dla.en la jwrisdicoion4e la Yic«
leria; pqro no bidiiondo tenido la emipresa eli^ito f<ie%e espera- ,
- ba y ira^adtenoa la plantación á los sitios de Gúei y Tapat«^ , gsl
la jurisdierion de Maracai , ámáe la^cn colmados sus deseos , y
de donde «e envió la semiüa á las demás provincias., de modo quo
desde el a£k> do ^ 702 basta el de 4 708 no bajé la esportadon anual
de 'este género, de ttn imUon de Mt^^s, que prodnráo jin total do
4 9200,000 pesos fuertes. S6igii| la memoria del minislro de Ha-
cienda, del presente ano, ee encuentra iaai solo una esf ortacíon
de 4^,590 libras , de un valor '% 571,577 pesos , 4ue es casi la#
flsítad de k> que se recogía anteriormente , sin incluir la canti-
«dad que puede sMir de conlrabando. Se puede calcular quo la en-
secba geneml de Venezuda , uniendo el poco eonsumo que se hace
pura pt98 orAnarias, es.de Í6I0 Ubrt» , q«e Jbwú|n 460,000« A
•^
*
— «luí —
.. 1 0' vento teritn un <v«Aor die CTTS^OO p««08 preineidos por S7B <1W-
negá^to, á-lasemiles^ lespUMle aumestar iffaal número por lo
que te piqrde, laque hark por tcdo-^ete arlíettlo >\ ,4 50 fanegadas.
La. planta éel añil mas qoe oda al^na enpobrece el snelo donde
se QültíTa por mochos al&os. Las tierra» de M araoai , Tapatapa t
Tnrmero se consideran oomo gastadas, y no>es del todo así : bai
algunos pnotos qne 1q están ; pero la sansa de la din^nniñon de-
aüil es popqne el agricultor se aplka con mejor éiito , y mas prt>-
baJoiUdades al cultivo de la eafia y del calé. Sin embargo, no fal-
' Jan grandes espacios cubiertos de añil en Tnrmero y Waracai :
campos estensos se «ocuentran en S. Sebasti^ de los Reyes , en la
prottncm de Barínas y algunos otros pantos de la% de Caracas y
Carabobo. Esta planta requiere una tierra Itjera y un clima cálido,
el twreno limpio y bien eseorrido ; gprque la humedad que favo^
"rece á otros plantas hace perecer el aniL Si se pudiase culti?ar en
lugares llanos y estendidos qUe estuviesen al abrigo de la serranía,
garantisados á la vez de los vienifss demasiado fuertes y del dama-^
siado ardpr dalwl, se enoonUraria la {^antaen la posicton mas fa-
wrable á so naturaleza.
En un tmrreno fuerte sufre por la frecoenoia de las Iluviap, y sus
bojas aunque mejor nutridas en apariencia, mas anchas y ma%.
negras , coatienen sin emhargo , relativamente á su volumen y ta*
milío^ mqpha menor pjnrtp colorante.
En un terreno mediocramente lijero necesita de ^as ri^o esta
planta; parece lener menos fuerza , pero su yerba da prqporcional-
flttote mas fécula. No convienen al aüil los terrenos que están en
declive. Se cultiva en gran cantidad y con buen éxito, siempre
que la estación sea pro]»cia y áe^e 100 varas sotare el nivel d^
mar, en una temperatura media de 25<> 50 hasta 7^0 yaras , en
«na de 25^ 56 ; en la primeVa necenta dos meses y en la segunda
tres p«ra estar en estado de ser contado. En pequeüos plantíos K> h^
vialo á la aUora de •! ,496 á una t^mperaturfi de 22« S, pero necesita
tres meses y medio para estar en sn perfección, áfun á 4 ,800 varafth
se encuentra en ciertos poicos de la {{rovincia de Mérida , en un
estado' inculto y silvestre ; pero parece que no sirve para estraer
> unta. ^
El af&il de Caracas está reputado on los mercados europeosigual,
y á vexes superior al de Guatemala. Se planta cemun^iente á 5 pul-
gadas de profuiifiidad y á 72 pies de disttmcia en buen terreno ,
•"
I
— Í44* —
pero ú este es de calidad iuferíor, iiO palglkdas. Es inútil sembraf ^
campos de añil ¿ no ser qae llueva : la tierra debe haber recibido
agua ó si no la lluvia debe seguirse inmediataoiente después de la
siembra, j^ués de otra suerte la simiente se calienta y pudre ^ per*
'diéndose todo el trabajo que ha ocasioi^do. Al cabo de tres meses
el^oil está en estado de cortarse á una pulgada de tierra. £1 cor-
tarlo ^s arriba retardarla los pimpollos del segando corte ó ioh-
pediría su crecimiento completamente. En cuanto á la cosecha no
es como las otras plantas .que se^pera la flor ó el fruto ; en el añil^
lo que constituye el objeto del cultivo > es la hoja , que contiene,
las partes colorantes que se deben estraer por. medio de la fermea* *
tacióñ. Es ne^sario pues escoger la ^^a eii que tiene mas de es-
taS; y parece que ha de ser al tiempo de florecer : mas tarde darla
muí* poco aBil. Por «1 color vivo y oscuro que tienen las hojas y
!^ viso blanqueáno como terciopelo que las cubre y conoce el agri«*
cultor laf época en que debe cortar. Aseguraf.que si en este estado
cae un fuerte aguacero al ftñily las hojas pierden el viso blanque-
cino y la llanta da entone^ mui poca materia colMante. Ordina-
riamente soempieza á cortar cuando aparecen las primeras flores,
f Se co^a por segunda vez ^ los 45 ó 55 dias^ seguida de otra ó mas,
* Jbasta que Ja planta degenera ; es decir, en las tierras buenas hasta
el in del segundo año , en las mediocres al fin del primero. La
planta después de cortada d«be Hevarse in||ediatament€^á los ^on-
^He$ para la í^brlcaciq^ del añil. La primera fermentación se hace
prdinariaQiente entre 5 j ^ 2 horas á lo sumo , y al cabo de otras
48^e pasa al segundo tanque en donde se^bate de 6 á 8 horas ^^y •.
enióncis se deja aseirtar cerca de 20. En seguida hacen salir el
^u^, quedando en el fondo el^il que sacan y lo ponen en cola-
dores de Ueuxffpor eierto tiempo. Después le pasan i. los asolea-
* d^os ; que son unas tablas largas con pequeños bordes y en ellas se
hace la c|jsecacion al aire , impidiendo que se mojé ó se serene^
, Una fanegada ppiede pr^ucir por término medio 800 libras, que
precio de 10 reales harían 4,000 pesos pues se corta dos veses al
éño , dafndo así dos cosechal que comunmente se hacen en la esta-
cioo lluviosa. *« , ^
^ El trigo [Triticum cestivum). Este cercaban necesario en EUf^
ropa encuentra en Venezuela i^^ mjoltitud de esplanadas , masetas
y valles de jrande estension, ^^fceptibles de su cultivo^ mas
como casi allí mismo hai terrenos adecuados al ^éj á la caña ^ al
*«
♦
-^ ^45 —
diiil, al algodón, -aUplátafio, al maiz y á una porción de plantas
que sustituyen el pan^ ha sido la causa de que el trigo no haya to-
mado un aomefito considerable; sin embargo, hai cantones enteros
cuyo único pan es el trigo, tales como Mcrida , Mucuchíes , Egido ,
Bailadores, Grita, S. Cristóbal, Lobatera, Trujillo, Carache, Boconó,
Escuque; Tocuyo y Quíbor. h
Vemos también en los valles de Aragua, en los cantones de Tur-
mero y la VictoTia , campos de trigo mezclados con las plantaciones
de café, caña dulce y plátano. Esto también se ve en lostanlones
del Tocuyo, Quíbor, Escuque, Boconó, Carache y S. Cristóbal.
Dtesde la altura de 650 varas, en una temperatura media de 21° 50,
hai algunos grandes campos de este cereal ; pero se cultiva con
mas abuiídancia á la altura de 2,000 á 2,800 en una temperatura
media de ^8° 55. Cesa su cultivo á 5,500; parece que no se da ab-
solutamente á 5,900 en una temperatura media de 9° 50. Las co-
sechas no son tan abundantes desde 600 á 700 varas, como en la
región mas alta hasta cerca de 2,800. En la parte baja se puede
considerar generalmente, como lo estimó el sabio Humboldt, que
upi^ fanegada producia cerca de la Victoria de 5,000 á 5,200 libras
de trigo ,^siendo este producto dos vezes mas de lo que dan los paí-
ses del norte ; pero en las partes mas elevadas , da comunmente
mas un 55 por ciento , y sin exageración se puede calcular por
tévmino medio 4,000 libras por fanegada. Se siembra en diciembre
y se eoge á Jos 80 dias á 700 varas en una temperatura media de
25o 50 : á los 100 dias á la altura de 1 ,500 varas en una tempe-
ratura media dé 2\^ 50 y á los 4 meses á la altura dé 1,800 v^ras
en una temperatura media de 18o,53. Una fanegada puede sumi-
nistrar el pan á 17 personas durante un año á razón de 240 libras
cada una , que vendrían á costar 24 pesos por individuo , y al cul-
tivador producirla 400 pesos. Se puede calcular que el trigo que
se recoge en las provincias de Mérida, Trujillo, Barquisimclo , y
el poco de los valles de Aragua, puede servir al consumo de 60,000
almas, le que daría un producto de 144,000 quintales ó 144,000
sacos , que á 1 0. pesos harían 4 ,440,000 pesos , y este seria el va-
íor de la cosecha general de este artículo , para cuyo producto ne-
cesita ocupar una ostensión de 5,550 fanegadas á las cuales se pue-
den aumentar, por pérdidas, malos terrenos, etc. 870 fanegadas
mas, lo que haría un total de 4,400 , que ocuparla el trigo.
Aquí es el lugar do hablar también de la cebada que se da esce*
P. 6X0G« 10
\
.«
— Í46 —
tente y se caltiya hasta 5,400 varas de altara en una temperatura
medía de i 4^. Con bastante abundancia se siembra en las proyincias
de Mérída y Trujillo. :. .
Debemos también hablar de los diferentes granos y menestras
que se encuentran cultivados en todas partes y que dan un pro-
ducto tan estraordinario, que se prefiere dar de comer álos peones
de las haciendas grandes cantidades de estas nutritivas legumbres ,
en lugar, de carne , aunque esta tiene un precio equitativo en el
mercado. No es posible dar con estension un artículo detallado so-
bre cada uno en particular por falta de datos suficientes ^ y bastam
decir que terrenos enteros que podrian estar cubiertos de café ,
aijil , caña , cacao ó algodón, se ven tapizados de fríjoles , judías
alverjas , tapiramos, quinchonchos, garbanzos^ lentejas, chícharos,
mijo, arroz sulii y anís ; plantas que dan un producto cuando me-
nos de un 50 ,por uno. Sin exageración se puede graduar que
560,000 almas de toda la población ccTnsumen 40,000 fanegas
diarias de estos granos , que seria á razón de un almud ó la duodé-
cima parte de una fanega para 50 personas. En un mes consumirían
50,000 fanegas que subirían á 560,000 en un año; lo que saldría
á razón de una fanega por persona, cuyo valor, en término medio,
se puede graduar á 8 pesos la fanega ; valor total de 2,6S0,000
pesos. ^. •
No se debe pasar en silencio la auyama , mui usada como verdu-
ra, y también las calabazas y frutas como melones y patillas de que
seliace gran consumo. Todas estas frutas no dejaráa^e ocupar una
estension de 2,000 fanegadas aludido á que una gran parte de
ellas se siembra 'en medio de otras plantas; sin embargo, pondre-
mos 5,000 fanegadas cultivadas para estos artículos. Daremos un
valor medio del producto de cada fanegada en 500 pesos y calcu-
laremos solamente sobre las 2,000 , lo que sería un total de
-1,000,4)00 de pesos por estas diferentes cosechas.
Resulta por la descripción de todas las plantas , que debe haber
en cultivo en la república , J55,000 fanegadas de 470 varas por
cada lado, y como se debe presumir que haya una cantidad de ter-
renos recientemente rozados , que todavía no producen , otros con
plantas que necesitan algunos años para dar fruto, muchos cultivos
de malojales que sirven para el consumo de las bestias; y última-
mente j, para no escasear en esta clase de cálculo, dónde mas que
menos , se le pueden aumentar 2&,700 que harán un total de
9
^447 —
77,760 fanegadas, que hacen precisamente 50 leguas cuadcidas dé
6;666 4/5 varas, iguaTes á las de 20 al grado ecuatoríaL
Los terrenos rozados^y cultiyados en toda la república son 500 le^
gnas cuadradas 9 de las cuales solo una décima par le es trabajada,
por la generadon presente y le produce lo necesario para su sub-
sistencia ; los nueye dédmos desmoBtados lo habrían sido anterior^*
mente por esta misma generaoieB y per las pasadas ; yisi tomamos
tan solamente 200 anos desdé que empezaron los grandes desmon^
tes, tendríamos que un año con otro se habrían desmontado y aban-'
donado sucesivamente dos leguas y un cuarto por ano. Esto no es
estraño si se considera qae los cultivadores de maíz cambian cada;
dos ó tres años de lugar para sus siembras, tanto para evitar las
escardas , cuanto para obtener mayor cosecha , pagándoles con
usura los gastos del desmonte que llaman roza, los frutos menores
que siembran en los maizales. También hai otra causa que no ha
influido poco en la destrucción de los bosques vírgenes, y son los
fuegos que anualmente sedan , sea en las rozas para destruir los
árboles tumbados , sea á las sabanas para quemar las yerbas viejas.
Estos fuegos cuando penetran en las selvas vecinas hacen iSmensos
daños, y al cabo de algún tiempo quedan grandes espacios destruí-
dos, ó solo con pequeiu)s árboles que parecen restos de terfenos
desmontados.
Para dar una idea comparativa del cultivo venezolano , hemos
formado la- siguiente tabla , y por las últimas partidas hemos 'gra-
duado solamente la mitad de lo que se feíbia calculado para los
apios fríjoles , etc. , etc. , y con todo tenemos un valor de
25,752^797 pesos por la cosedui de 4 8i9.
.^
*\
TABLA DEMOSTRATIVA de las plantas de caltívo, su duración, m clima, sus
estas en 1889, e) valor correspondienteli el número
NOMBHE
de Ut plantas
cnltiTadaa. '
Cacao.
Altnfli «n raras
sobM
el QÍTel del mar
eo qáe
prosperan.
Niríl del mar.
áess Taras....
Plítaho...
Haiz.
lYüCA.
Papas.
Cocos.
Tabaco —
Algodón. . .
Café.
Ca»a
di azucab..
AÑIL
Trigo.
Nivel del mar.
á 700 raras....
á tl96
Nivel del mar.
á 4196 varas... (
de UOO-k 2100^
ÍS900
Nivel del mar.
áll95
á S50 Taras...
álí(K)
¿2200
áSOOO
NItcI del mar.
¿ TOO raras . . .
Nivel del mar.
¿ 700 varas...
¿1196
¿saoQ
— T
Nivel del mar.
¿ 700 raras...
¿1196
¿1573
¿*9S5 raras...
á 700 ....
de 1196 ¿2500.
« S7s5 . . . • 4« .
Kirel del mar.
¿ 700 raras...
¿1300
¿ 100 raras...
¿ 700
¿1196
¿ 6S0 raras...
¿1300
¿1800
Temperatara ^«Tiempo medio
inedia |
que necesita
la planta
para producir.
de sos limites
por el
termónielro
ceniigrad.
27«».
39.
85».
So.
«7».
32.
45».
56.
aa*».
56.
97». St.
32*». 56.
10»¿31o
14<ȇl5o
970. 32.
22». 56.
6 llStfios.
9 meses.
9 1/:i meses. .
11 meses.
90 días.
llOdias.
120 días.
180 días.
104iieses.
12 mese^.
23». 89.
2I<». SO.
*$•. 50.
i&*, 00.
120 días.
láOdias.
165 días.
310 días.
270. 52.
*5*. 56.
«7«. 32.
25*». 56.
22*». 56.
18*». 80.
2T». 52. í
28*». 86.
22<». 56.
19*» 23.
26*». 11.
25». 56.
91'' ¿22o
18*». 50.
27». 52.
25*». 56.
95*». 00.
27*».
00.
25*».
56.
22*».
56.
23*>. 50.
21*». 50.
18*». S3.
5 años.
6 años.
150 dias.
170 dias.
180 dias.
225 dias.
6 1/2 meses.
7 meses.
7 1/2 meses»
9 meses.
94 meses.
95 meses.
98 meses.
36 meses.
11 meses.
19 meses.
14 meses.
2 1/2 meses.
• 3 meses.
8 1/2 meses.
SOdias.
lOOdías.
120 días.
, - I
Número I
■
de plantas que
caben
en una fanegada
de 170 varas
eo cuadro.
f156¿rbote8.
?613 plantas.
98,00«. plantas.
98,900 plantas.
t16,6ü0 plantas
452 ¿rboles.
88,900 plantas.
..p*>
28,900 plantas.
SSOO^rboles.
98,900 plantas.
57,800 plantas.
Tiempo medio
de la dnracion
de la planta.
40 añoa.
60 años.
Planta anual.
9 años.
PUntaannal.
60 años.
Planta anual.
3 1/9 afitos.
45 años.
5 años.
1 1/3 años.
tí.
Planta anual.
Prodoeto atedio
de
cada planta en
un afto.
1 1/4 libra
por ¿rbol.
50 pl¿lan08
por planu.
238 por uno de
sembradura.
Una torta de
casabe de 3/4
libra de peso y
1/4 de onza de
almidón.
4 1/2 libras,
cada planta.
4 botellas de
aceite.
5 plantas dan
media libra
seco.
6 plantas dan
una libra ne-
ta.
1 I/I lib. par
¿rbol.
10/1 00 partea de
azúcar tomadas
del peso de la
caña.
72 plantas por
una libra de
tinta.
37 por uno
de sembra-
dura.
Apios, ñames, mapoyes, capachos y batatas dulces pueden dar un producto bruto como loa antecedentes
Fríjoles, taptramos, garbanzos, alrerjas, chícharos, quinchoncboi, cebada, arroz, anís, mUo , «uyanuí,
• •
prodactos^us yalores, número de plantas, el de las cosechas* y la cantidad de
defanegací|5 necesarias para estos cultivos.
¡■a
Valor medio
de los
productos
de las
plaolas.
SI pes. la fan.
de ISO libraf.
S cargas de apO
plátanos ; una
por un peso.
Productos
medios en frutos
al sño,
de una fanegada
de 170 varas
en cuadro.
i6 Tanegadas
6 1760 libras.
9 pesos la
íanega.
4 tortas por un
real, } el almi-
dón un real la
Ubra.
3 libras por
medio real, ó
4S libffts por
un peso.
t r. la bot. de
aceite 6 4 de es-
tas por un peso
48 pesos el
quinul.
10 1/2 pesos
el quinlal.
13 pesos el
quinul. .
8 pesos la car-
ga de dos quin-
Ules.
10 reales la l^b.
40peso8elsac9
de 100 libras.
160.550 plata,
nos 6 803 carg.
de 200 una.
474 /anegas.
19,206 tortas
y 400 libras de
almidón.
48,000 Ubuf.
1808 botellas
de aceite.
58 quintales
6 5800 libras.
KOquñttales.
70 quintales.
113 1/2 cargas
de puDolon , ó
agudraiente de
9 quid tales una
800 libras de. i<wmrM»«ft«
lini» 1000 pesos
Valor medio
de los productos
de «na fanegada
en un año,
en pesos.
886 pesos.
401 pesos.
1422 pesos.
Múacro
de
cbsecbas medias
^«
cada planta'
en un año.
Goseaba general
en ÍS99, '
en
toda la república
2 al año.
Todo el año.
Dos al año.
60{* pe^os de
casabe y 50
del aoaidon.
1003 pesos.
452 pesos,
1044 pesos.
525 pesos.
910 pesos.
Una al año.
Dos al año.
Todo el año.
Una al año.
11,778,031 li-
bras.
3,119,622 car-
gas.
Valoren pesos
de la cosecha
general
I
al
precio medio.
2^278,850.
2,000,000 fa-
negas.
207,029,460 tor-
tas de casabe y
4,308,400 libras
almidón.
103,128,000 li-
bras.
1,400,000 bote-
llas de aceite.
1,560,811/
6,000,000.
Numero de
fanegadas que
pueden estar
empleadas
estas plantas.
11,000.
»,000.
2,173,521.
538,850.
9,173,776.
350,000.
31,268 quin-
tales.
Una al año.
Una al año.
900 pesos.
Unta.
400 librl»;
400 pesos.
Todo el año.
50,000 quin-
tales.
354,567 quin-
tales.
171,315 cargas
de papelón , a-
guardienteode
azúcar.
^2,82^
525,000.
3,309,37 !•
4,000.'
5,000.
8,000.
1,800.
1,000.
2,000.
5,000.
1,376,094.
Dos al año.
Una al año.
460,000 libras.
440,000 sacos
de 100 libras.
de 9SS pesos la /anegada «*9. .
calabazas, meloDcs, patillas y otras trntu á 500 peso» la fanegada.
TOTAL.
575,000.
2,800.
1,150.
1,440,000.
1,390,000.
1,500,000.
15,752,797.
4,400.
4,680.
• •
1
^OTA. El plátano da hasta 2,800 va^as en una temperatura de 16» y neo^
lita 15 meses ; peio es de poco provecho su cultivo. Con la yuca á la misma
altura sucede lo mismo. La caña á 2400 varas en una temperatura de i^
na da azúcar,, y el a£il á 1800 varas no da tinta.
Las observaciones de tempeíatura han sido hechas con el termómetro
de KaMnheit y en la reducción al centígrado han sido elevadas hasta la
• decimal. Para las alturas sobve^piotpiosperan las dilMontas pláoitas no
habia sino una 6 dos observaciones por cada una , y para poder llenar las
flemaa me he servido de la lei presentada por el sefter Bousaingaull en una
imemoria al Instituto, de que el tiempo que las plantcu necesitan para ll$-
ffor á su madurez está en razim inversa de sus temperaturas , y el cál-
culo ha salido tan exacto con las que tenia ..que no deja ki menor duda de
(íiue en sabiéndose* la temperatura media de un lugar y el número de días
que la planta necesita para perfecctonane, se puede sadier para cualquiera
otro punto mas ó méuos elevado cuántos dias le sean necesarios.
V'
4
f
Aui^que Venezuela pertenece ala región equinoccial,. genet^I-
mente considerada como la patria del oro y de la plata, no se co-
nocen, sin embargo , ricas minas de estos preciosos metales , y sí
pequeñas cantidades del. primero esparcidas por varias venillas de
cuarzo , plata sulfureada^ azul de cobre virgen y galena; pero está
en duda si estas diferentes sustancias metalíferas no son acaso de-
masiaáo pobres para que. merezcan ser trabajadas. . *"
Al tiempo dé la conquista, á mediados del siglo XVI, se hicieron
tentativas desde el cabo de Paria hasta el de la Vela, internándose
en el interior para investigar de dónde venia aquel metal, precioso
hallado^or los primaros navegantes entre los habitantes de la costa,
y del cuar se servian para sus adornos. Bien se supo entonces en
Coro, Curiana y Caucheto que aquel oro venia de la serranía de Cun-
dlifamarca; pero sin embargo de eso todo el territorio de Venezuela
se vio esplorado con codicia. Fué en ^ 554 cuando Damián del Barrio
de orden del gobernador Juan de Villegas, descubrió la auna de oro
, de Buria en la serranía entre Nirgua y las sabanas de Londres, ló cual
dio origen á la fundación de Barquisimeto y de Nirgua. ^£1 mismo
Villegas en 1552 descubrió otra de oro en la colina de S. Pedro ,
en la misma serranía cerca del rio que hoi se llama S. Pedrilo. Pero
estas. minas fueron sucesivamente labradas y después abandonadas
según algunos pretenden, por un derrumbamiento de tierras que hizo
perderlas vetas ; pero lo masi^problable es, que lo fuesen á causa dé
haberse agotado las venas principales, por hallarse divididas en los
terrenos, no presentándose los métales sino en pedazitos coa las mas
engañosas apariencias. En 4560, Francisco Fajardo descubrió las
minas de oro de los Teques , y Pedro Miranda en el mismo (mo ^
dedicó al beneficio de ellas, dejándolas después al mismo Fajardo
por temor á los indios que á poco mataroaá todos los que estaban
en las minas y destruyeron el establecimiento. En 4 575 el capitán
Gabriel de Avila encontró la misma mina de oro que fué llamada
de Nuestra Señora, mientras Fajardo descubría otra cerca de Sj
jSebastian.de los Reyes. En 45S4 se fundó la ciudad de S. Juan de
la Paz sobre el Tul, probablemente en donde ahora está Aragüita,,
b cual flortció mucho por lá riqueza de las minas de oro de Apa y
Carapa, destruyéndose y despoblándose á los- dps años, por' la insala*
bridad del clima, y ac^d también por haberse agotado las vetas au-
{
— 452 —
riferas, comoes presumiUe sucediese iguahnentéten las de Nuestra
^Sepora. Finalmente en los Manches , Baruto (quebrada de Tipe],
se ben^ciaron algunas vetas auríferas que se abandonarousin
duda por el poco^ producto que daban. Pedazitos de oro y oro en
' polvo se han encontrado en el territorio déla serranía de Güigúe ,
en la de S. Juan de los Morros, en el cerro de Chacao, en el rio
Jurvari m la Guayana y en los cerros de la Encaramada. Alonso de
Oviedo ^^de Barquisiuieto, desaubrió antiguamente en Cocorote una
mina de cobre, antes riquísima en oro. Enire Aroa.y Nii^ua cerca
d^ Guanita, en la montaña de S. Pablo, se han descubierto algunos
minerales de plata. Se encuentran también algunos granos de oro
en lodos" los terrenos montañosos entre el rio Yaracui y las ciudades
de S. Felipe, Nirgoa y Barquisimeto, particularmente en ^ rio de
Santa-Cruz , ea que los indios orpalleros han recogido algunas ve-
zes. pepitas d granos del valor de 4 á 5 pesos fuertes. Varios g^ní-
fos se dicen haberse descubierto en tiempos atrás en la provincia
de Coro. Parece que el oro no se encuentra en verdaderas vetas en
las rocas de txúca esquita y de gneiss, sino diseminado de una ma-
nera c^si imperceptible* en toda la masa , y filtrándose las aguas^"
*
reúnen los granitos esparcidos : siendo así serian infructuosos to-
dos los ensayos de elaboración. En estos últimos tiempos se ha eu-
conlrado una de plata en Bailadores, provincia de Mérida, sin con-
siderar, muliidud de otros puntos en que se han hallado algunas
cuantas piritas y pajitas de oro ; pero todo esto no prueba absolula-
mente que este pais contenga minas de estos metales, bastante ricas
para ser labradas, quedando en problema, si con el tiempo gozarán
sus habitantes del lustre transitorio que dan las minas. Es mas
probable que seguirán viéndose ampliamente indemnizados por las
producciones preciosas é inagotables de un suelo que por razón de
su fertilidad y estension , será la residencia de la felizidad ; y eso
precisamente cuando los paisos que tanto se jactan de sus minas
no presentarán mas que escombros , minas y escavaciones terreas,
monumentos melancólico^ de una antigua opulencia.
Minas de estaño se encuentran en diferentes parajes que descu-
brió D. Alonso de Oviedo, ve<;¡no de Barquisimeto, y se beneQciaron
mucho tiempo por cuenta *de la real hacienda. Sacaron de- ellas
grandes porciones que se cqndujeron á España para la fundición de
la artillería, y después las empeñó el rei en 40,000 pesos á D. Fran-
cisco Marios ; vecino de Caracas^ que las ehbaMonó.
t
9*
Las minas de cobre de Aroa, en la serranía de S. FeÜpe, hace mn-
cbo tiempo que están beneticiándose : es un cobre rojo de nna cali-
dad escelente y aun preferible á los de Suecta y de Coqniípbo en
Chile. Fueron largo tiempo descuidadas y de nuevo beneficiadas por
el zelo y cuidados dcD. Antonio Henríquez. En ^800 produjeron
cerca de ^500 quintales de cobre. Actualmente están beneficiadas
por una compañía inglesa que anualmente esporta el cobre en bruto
á Europa , de donde viene labrado. En el año anterior de Á 858 sie
esportaron 70,550 quintales. De este mismo metal hai mintfS en las
provincias de Coro, Carabobo, Barquisimefo y Mérida, que aun no lian
sido beneficiadas. En la de Caracas hai en Tucutunemo y en la ser^
ranía del Pao de Sárate, y están en el mismo caSo. Indicios de hierro
ocráceo y magnático hai en la cordillera del litoral, en fas de Coro^
Barínas, Barcelonaj Cumaná, y en el sistema de la Paríme en mu-
chísimas partes. Existe una mina de plomo en el Tocuyo, de la cual
se han sacado muestras escélentes.
Minas de carbón de piedra hai en las provincias de Caracas, Ca"^
rabobo , Mérida y Maracaibo, y una riquísima en la de Coro.
En LagnnHIas , pueblo de la provincia de Mcrida , se encuentra
la^famosa mina de urao en una laguna cuyo fondo eslá lleno de un
carbonate de sosa particular, análogo al que se encuentra en Trona
en África : es el sesqui-carbonate de sosa de los químicos , segün lo
ha analizado el Sv. Boussingault. Esto lo sacan los indios zambu-
lléndose á 4 ó 5 brazas de profundidad y lo mezclan en el tabaco.
Estaba beneficiada por cuenta del Estado, y ahora por la del go-
bierno provincial, dando anualmente un producto regular.
Minas inagotables de mene ó pez mineral hai en las provincias
de Mérida y Coro, y sobre todo en la de Maracaibo. En este último
lugar se siryen ^e él para embrear las embarcaciones que surcan el
lago.
Fuentes de petróleo existen abundantemente en la de Trujillo y
de Cumaná. La rica, salina de Araya, que fué reconocida en ^ 499
por Alonso Niño cuando visitó aquellas regiones siguiendo las hui
Has de Colon, Ojeda y Américo Vespucci, y que antiguamente oscító
los zelos de los ingleses , holandeses y otros poderes marítimos , si-
gue produciendo^onsiderablemente : es una mina inagotable que no
necesita casi ningún trabajo por ser la sal mui pura. La real admi-
nistración de Araya no data mas que desde el año de 1792. Antes
de este tiempo estaba en manos de pescadores indios que fabricaban/
y»
1^ fOMgianaali ga^mtojp, |^aguA>^ goUenio la mo-
éerada.saina de 500 pesos.. Las saUnas de Arayaprodaieroaalgo-
Merm en 1799 y &000 dmos ea limpio. Salinas hai ademas ean la
.provincia de Barcelona y en la de Gomaná. La pcovincia de Cará«
«6as posee algunas omi hennosas -en los Re|nes. La qne antigua-
mente existía, en. la isla de Tortuga ti& destruida por orden del <go-
^ .biemo espaik)! , temiendo qne alli se estableciese alguna potencia
.nstniojera; y qne le sirviese de pnnto para hacer un comercio ili-
oto con la. tierra firme. Finalmente las^proviacias de Margarita y Go*
.coy Maracaibo tienen abundantes salinas : estaúltimasobre todo.Mi-
f" ^»s de azufre sin benefidacse existen en las provincias de Cuman^t
.Barcelona, Coro y Mérida. £n la de Gumaná.«e encuentra azavach^,
y tierras pri|^as para fabricar la porcelana en la&de Gumaná y Gara-
cas : granates en el cerro de la Silla. En toda la cordillera de Vene-
zuela, tanto la costera como la int^ior, se bailan escelentes crii^
« tales de roca, pizarras, mármoles, granitos, yeso y cal en abundan-
I tísLy y solade estas últimas se hace algún uso. para las.íabricas.
I * Últimamente^ cantidad de aguas termales aparecen en todo el
.pais, tanto en las serranías como al pié de ellas ; pero aunque úti-
les para vaips enfermedades , apenas, hacen uso de ellas. Las mas
, cálidas son las de las Trincheras , cerca de Valencia, en la Quebrada
I de iguacaliente : las encontró el Sr. Boussingault á 97*, y fuera de
los manantiales de Urijino en el Japón, que se asegura ser de agua
pura y estar á \ 90* de temperatura, parecen ser las mas cálidas del
mundo. Contienen según aquel químico un poco de hidrógeno sul-
furado y depositan silice* Las aguas termales examinadas por el mis-
I .mo Sr. Boussingault son las de Onoto^ cuyo calor es de 44^ ^, y casi
de agua pura* Las de Mariara estaban á 64<' y se componían de sí-
lice, de gas hidrógeno sulfurado y algunas partículas salitrosas. Las
mas particulares son las de Coro, en la Quiva, cerca del camino que
va al Pedregal, en donde se elevan dos masas blanquecinas en for-
ma de semiesferoides, una sobrepuesta á otra ; la mayor es de SO
Yaras if< la- menor de 44. En el diámetro de ellas se encuentran mas
de 40 hoyos que semejan á. platos convexos, los cuales se elevan
algunas pulgadas sobre la. masa principal, y en el centn> hai dife-
rentes hoyos de varios tamaños llenos de aguas pajizas, verdosas^!
blancas, negras, cristalinas y turbias4 de sabores y olores distintos,
cuya temperatura varía en casi todos ellos, desde 5^ 5 hasta 66* 6
del termómetro centígrado.
»
499 ^i>
ANIMALES.
<
Para completar el cuadro físico de Venezuela, iremos cooside-»
raudo los difereutes animales qjjie y'wen en los bosques, en las lla-
nuras ; en las cordilleras , en las aguas del mar, ^ los lagos y ríQS ,
colocando separadamente los que están reducidos al estado domés-
tico. Describiraados los primeros dividiéndolos en mamíferos , aves,
pezes, reptiles, crustáceos, insectos, moluscos, zoófitos; y los se-
gundos en ganado vacuno, lanar, cabruno y de cerda, en cria de
caballos, mulos y asnos^ y últimamente de aves domésticas.
MAMÍFEROS.
óKDBir flB LO» cuAnmuaraf •
£1 araguato {simia ursina), del género de los aluates, vive m
sociedad ; hembras y maches tienen una larga barba y su color es
^ jdeonado mas ó. menos oscuro : el pelo áspero y largo , el tamaño
del cuerpo 2 4 [2 pies sin la cola : se reúnen á aullar en las c0|>as de
los árboles. Entre ellos hai siempre uno que canta como maestro de
coro, y generalmente se distingue una voz mas baja que después .
de uDT largo rato es reemplazada por otra de diferente tono , á que
jre$punden todos alborotando los valles y las selvas con sus desagra-*
.ddUes alaridos. Por lo coamn> después de amanecer se oyen sus ge-
joidbs bronces y tristes; también antes de anochecer y con mas fre-
cuencia cuando quiere mudarse el tiempo. Si algún cazador los per-
sigue , buscan las ramas mas elevadas de los árboles y se sitúan de
modo que estén siempre encima del cazador, á quien arrojan orines
jeseremento con un tino estraordínario. Las madres llevan entón-
aos í¡as hijos sobre la espalda para ponerlos en salvo.
La marimonda {simia belzebuth ) , del género dejos áteles. La^
hai de dos especies, una de cara negra , los pelos de la cabeza lar-^
fosy eríj^dos, el hocico mui prolongado y las ventanas de la nariz
íOxA anchas.; el color del cuerpo es de un negro sucio, el vientre ^
blanquecHio y las patas y la cola negras. Con esta se agarra y de ella .
diestra y admirablemente se sirve para coger las cosas que no pue-
de alcanzar con las manos. Estas , los brazos y los dedos son ihui
largos,. Se. bal^jAcea sostenida por las manos. y la cola ^ es muí tí-
I
<-. iU —
mida y camina mucho sobre las patas de atrás, llevando los brazos y
\% cola leyauíadds. Otras hai que no tienen erizados los pelos de la
cabeza ; su color es oscuro, el yíentee rojizo y la cara menos fea.
Todas (ienen comparativamente á los demás monos, un vientre hhr
abultado. El largo de esta^parimondas es de una vara, y son mui^
delgadas.
"^El caparro, del género de los lagoíhrix : mono grande, grueso y
forzudo. Tiene 2 í /2 pies de largo, fuera de la cola que es gruesa y
del mismo largo, con la cuííl agarra fuertemente. Todo él es de co-
lor*de ceniza y el pelo snave cual si fuera de seda ; la cara es triste,
negra y pelada , con alguna semejanza á la humana. Este mono es
mui pesado en sus movimientos y tiene tal destreza en la cola, que
de ella s&^irve con gran tino cuando no puede alcanzar con las ma^
nos las frutas ú otra^cosa. Duernoe mucho y es múi goloso; cuando
Vi; la comida se endereza sobre las patas de atrás, con saltos y mo-
vimientos estiende las manos , dando a la vez gritos estraordínarios.
Hai otros caparros de color de avellana y con las mismas cuali-
dades.
El capuchino (simia chiropotes) áé\ género de los sajous , tiene
la cara pelada y negra y el resto del cuerpo con pelo negruzco, lus-
troso y mui negro encima del lomo, cabeza y cola ; este pelo parece
peinado , y separado á propósito desde el cráneo hasta la cola por la
mitad del lomo : el rabo, que es uno de sus bellos ornamentos,
por lo grueso y poblado se asemeja a un penacho. En la cabeza tiene
el pelo recortado como los frailes, y desde las orejas \e sale una bar-
ia hermosa que le llega al pecho ; y cofuo su cara, orejas y garganta
están sin pelo, parece precisamente un fraile capuchino. Son ferozes,
inquietos , y se domestican con mucha dificultad.
El machango, del género de los sajous, mono común que se en-
cuentra en todas partes ; su cara es de un color aplomado, el lomo
y costados pardos, las patas, pies y cola mas pscuros. Este mona
tiene el pelo poco'largo, hace muchos gestos ; es tímido, gritón, sobre
todo en el estado doméstico y cuando ye la comida.
El machin (naova vapari ) del género de los sajous, tiene pelo
gris y cawr azulada con tes órbitas y frente blancas como la nieve.
Este animalilo es tan dócil como feo y se domestica fácilmente.
Gusta dé pasearse encaramado sobre otros animales, como perros,
cerdos, gatos etc., de los cuales es mui amigo.
La mona,' del género de los sajous , tiene cabeza reSonda, lá nariz
r
f
cbata/el hodeo certo, tos labios n^i espaoMTos, edloñátdaseB las
asentaderas y la cola levantada sobre el esptarazo, á vezes Utas lar-
gft que el cuerpo. Las monas se rennen en tandadas numerosas pa-
t9L ir á devastar tos jardines y maizales que están cerca de los bos-
f ues , y mientras que alguilas, colgadas de los árboles ó cotocadas
sobre los peñascos, están' d* vigía para observar lo que pasa, las
Otras pillan todo lo qoe pueden llevar á cuestas. Sw mui desconfia-
das y huyen del bombfe : las bembí^ paren uno ó dos bijo^ á los
cuales crian poco mas ó menos como lo hacen los racionales. Tienen
mucho cuidado de los reden naf^os y tos defienden de los animales
ferozes. Cuando se les domestica pierden su vivazidad, destreza é in-
teligencia. Comen de todo^ pero prefieren los alimentos endulzados.
Arriba de 5000 varas parece que no existe ninguna clase de monos.
• £1 lili (simia uiurea) del género de los saimires , es onó de los
mas lindos de su espede. Los que viven en el rio Guaviare no tie-
nen arriba de ^2 pulgadas de largo , pero los del Casiquiare solo
cuentan 6. Tienen la cara pelada, y es blanca con una man6ha pe*
quejia negra azulada que les cubre la boca y la i^riz. Los tftíes mas
elegantes en la forma y de color mas hermoso , viven en las oriltos
del Casiquiare ; los que habitan el Gnavikre son difíciles de domes-
ticar. Ningún mono hai que tenga la cara mas semejante á la de un
lüñp que el tití : la misma espresion de inocencia' ia misma son-
risa maligna , la misma prontitud en pasar de la>alegría á la tris^
teza : sus grandes ojos se bañan de lágrimas ea el instante en que
se ve '^obrecógidopde temor. Es tímido, delicado y afecto á comer
insectos , especialmente aranas. Su color es ceniziento , cob rayas
mas oscuras, ¿ bien de un varde amarillento. Se alimentan de fru-
ías , de vegetales é insectos , y se les amansa con facilidad ; pero
conservan sícanpre enemisi^d^ntra loa gatos. Hái también algunos
bliidco%y otros casi verdes qiui lindos.
Los macacos ó micos , del gnnero de los ^is. Su cara no tiene
casi pelo , y es 4o color pardo oscuro ; .pero tiene patillas mediana-
mente largas y negras. Losojos son pequeitos, vivos y redondos, los
labios casi negiios, el pelo y el auerpo pardo , daro debajo del Vien-
tre, y mas oscuro ce las |>%tas, cola y loip&o. Su*^pequ«ñez y gracias
acompañadas de una vivazidad cstraordioaria, tiacen que esteaoi*
mal sea considerado como uno de los monos mas graciosos. De es-
te género los hai casi negros y otros de un blanco sucio.
£1 caranegra ( simia mehnocephalt^ , dd género de los bra-*
t
dives^^f mi aaiiMtqfa«'ti9m'9l Jiocieo agnnritoT-meío, lafhMm
te; Jarlaifo^de la cara y ^ liMieo del mismo edor ; el pelo efi m^
Hb pertes ^coite y Íleo. ISl coiét gei^^ral de la parte snperíer M
eoMrpo esdemrgris^senízíeiito un poco oeenro, y li pirata-del pekr
lemáaa en mm tíata leonada ipas fcMártemenie marcada^sobre el
Ittna; la cn^ de u» gris claro. En m niM^nniento es esta masosetkra
^e en la punta ; los costados de les miembros son del mismo cck
lor ; el cuelle y vientre de an blanco parb.'f^te animal habita los
bosqnes de la Goayana, y se alimenta como los monos, con fratás
raiñs y iiojas ; es muí ágil y Ti?e«ebfe los árboles. Tiene baen ca«
ráeter , no haee gestos come los monos y carece de su petulancia :
les indígenas lo cazan pam comer su carne.
La Tiodila [simia lugem) del género de los caliithrex ; anima^
Vflo que tiene el pelo suave , lustroso , y de un hermoso negro. Su
cara está cubierta de unaespeeie de máscara en forma cuadrada y
de un color Maneo asolado qae le cubre los ojos, la nariz y la bo-^
^. Es un mono muiraro y delicado que se encuentra en la orilla'
derecha del Orino<^ , en las montaüas graníticas detras de Santa
Bárbara, y también habita cerca de S. Fernando de Atabapo.
£1 cararayada, del género de los nocthores; mono nocturno que
duerme de dia ¡H>r no poder soportar la laz. Su color és cenbiienlO',
y^l cuerpo cati*del tamaño del caparro con una raya negruzca en
k cara. De noche estcuando busca su aKmeaito. Tiene la fisonomía
triste y abaüda , sus movimientos son wudio mas lentos que los dd
eaparro. . /. *
£S oMnbi) dd género de los nocthores, es otro mono neetnrao»
de un color ofcnro y la cara casi negra y muí tdste : su cela tiene
poeo pelov Bstá continuamente sentado con la cara entre las pier«.
stts, la colá enroscada al rededor del cuerpo, y dttrmimido -iodo
el dia. ,
£1 chucuto y mono de. cola certa* Lo hai pajedo y cenlsiento os-
eare ; d pelo no es mui largo ni áspero, la cara^lgo negra al
rededor de los ojos , que son graadesry Tedondos« Tienejj^oca ytve^
ca t sediHüestica ^ es leo y parece poeo inteligentes
. ÓaSiBN DB liOS 0ABllÍK0ÍBH>e. i . .
£1 muFcaílago, flue es tipo de laiamilift'de los cheriopieoMÍy cam
aÍToro/tiffi&e^^Jueif^ de^^oa ratón y. la nicEoJM^a gue le fi»y^ de
t
áHdeofftíra&tanMmlatariA. Lo»lniilé carias dttes^; mm'^#b9
muitieiien de froto y otras- de «raectos ; estas tilCimas drapa» k^
sangre de los animales , y dé ellas una es mas graade y otra HM»
peqttefia. La primera tiene en el hocico, arribaje knaf4¿; una^
especie de membrana levantada y las orejas mas grandes; ealaqw
cbnpa la sangre de los caballos , burros , malas y ganados. La otra
mas pequeña es la qoe ataca al hombre coand* di»rni0 y general-
mente en las estronidades : mientras estrae la sangre, bate üjera^
mepte las alas , produciendo una frescura que impide sentir d
ardor de la herida. «
El erizo, dé la familia de los insectívoros^ tien« de 6 á 40 pi^
gadas de largo, la cabeza lomo y costados eobiertos de espinas, pe-
cho y vientre de un pelo suave y fino , Uis patas cortas Y pelada»
oon cinco dedos largos y separados en cada pié, la cola larga y tatf
cubierta de espinas que apenas se le ve. Vive en loszaitales, «#•
alimenta de frutas, raizes é insectos ; pemÉmedendó de día en stf
madriguera y haciendo sus correrías por la noche. El erizo se de<¿
fiende haciéndose una. bola, y cubre todo su cuerpo <íe agudas puas^'
logrando así cansar á sus contrarios. Produce de tres á cuatro hijo»
del todo blancos y sin púas. Antiguamente.se creia que este animal
mamaba las yacas y las mordia ^ pero la ccDifiguracion de su boca
hace imposible este hecho.
El oso negro, del género ¿del oso, tiene casi «las mismas costum-
bres de la especie europea ; es, sin embargo, menos feroz ; su all^
mentó consiste principalmente en frutas y otras producdonés v^e-^
tales, no atacando los pequeños cuadrúpedos si no se ve forzado á'
ello por el hambre ; se alimenta también de pescado , y la mi^ es«
su comida favorita. Trepa sin dificultad á los árboles y atraviesa*
fádimente los ríos á nado; S)a piel ea mui suave , y se domestica'
con fadlidad. Se le encuentra en las selvas del Apure y de la Guaya-»
na y también én las de Perijá y Mérida desdé 5 (M^ hasta 2;(MM> va-
ras de altura sobre el nivel del mar,
£1 zorro negro, del género de los ratones, hace su morada en el
hueco de los ái1>oles ; sé alimenta de maíz, caSa de azúcar y toda*
dase de fruta ; come también carne y particularmente ostras quo*
abre con una admirable destreza. Este animal tiene cerca de 2 pieaf
de longitud ; el pelo de la piel es espeso y largo, negruzco en la su* •
perficie<*y gris inteiiorménié : la cola , que; tiene un pié de largo '
está poblada y marcada regularmente con círculos aegros. Como'
I
— ^60 —
está armajio de prras, puede íádlmenle^epar á los árboles ; aada
obUeaameDte. Se le paede ^mans^ eon facilidad y tiene buen na-
tural ; pero es tan iDali{[DO como el mono, eu estremo sensible al mal- ,
tralo y no ohida^la persona de quien lo recibe. Su piel sirye para
bacer sombrero^.
£1 zorro guache, del género coatis, es del taniaño de un gato, al<
go mas largo , d^ col#r gris form^o de blanco y negro , Ja-^abeza
agij^da y d hocico n^ro, la cola Iltrg^ y poblada^ y trepa bien por
los árboles. ^.
La comAdreja, del género pgtois. Las señales que distinguen esle
cuadrúpedo son la longitud de su cuerpo, las patas cortas y la íleii-
bUtdad del movimiento : así puede seguir su presa por los escon-
drijos i^§í^ estrechos y pi^fundos. Es sanguinario y feroz, pero co-
no su subsistencia es precaria, puede Yi.?ir sin comer por mucho
tiempo, y si la casualidad lo eonduce á 4onde Inri abundancia, des-
truye todo antes de saMsfacer su apetito , y chupa luego la sangre. .^
Su longitud sin incluir la cola es como fie 7 pulgadas ; el color de
unurojo pálido sobre el lomo y los costados, blaoco en el vientre y
pecbo. Al acercarse la noche sale de su agujero y espía al rededor;
de los corrales de las granjas. Destruye los ratones , ratas ^ pollos ^
pichones y conejos, y cjftapa los huevos haciendo un agujerito ásu
estremidad.
£1 buron del género putois es un apimal que sale de noche de
sn cueva ; su color es amarillo pálido, los ojos encarnados', oldr
fuerte y desagradable. Se domestica fácilmente pero es irascible y
]|iuerde con fuerza : sirve para la caza de conejos , mas es preciso
poüede «in ^ozsd , porque si no , coge el conejo por el cuello , le
chupa la sangre y en seguida se duerme en el vivero. Se le alimenta
con gan y leche ; es de dhm cálidos , y Cgando está en libertad
bace su gu^ida bajp las rai;ses áf los árboles.
. £1 mapurite^ del género de las muffetas, parece que es la especie
ma^equens^ de las tres ó cuatro conocidas con el nombrip genérico
e muffetas. £1 fondo de su color es blanco amarillento con una
banda parda desde la cabera hasta el lomo ; la punta de la cola
blanca y los pelos de esta tan largos como los de todo el cuerpo ;
el pecho y .vientre pardos. EstCL animal despide, ^e una especie de
bolsa que tiene junto al oriíiicio, un licor mui fétido que se esiiende
con rapidez á gran distancia, y es lanjíesagradable que xepugna
aun á los perros^ los cuales hqyen de este animal en v^z ဠperse-
J
— «I —
guirle. El licor es su única defensa cuando se ve acemeUdo, y bas-
tan algunas gotas para infestar el aire ambiente y hacer huir á sus
perseguidores. No se encuentra en la región fría.
Nutria del género de las lutras : este mamífero tiene el cuerpo
largo y grueso, las patas cortas^ los pies palmeados, la cola chata ,
los ojos abultados, las orejas cortas y las barbas fuertes ; su piel es
pardusca y bastante estimada. Este animal es casi anfibio, vive de
pescados , nada con mucha facilidad, duerme de dia y no va á la
pesca sino por la noche. Zambulle mui bien , y puede permanecer
mucho tiempo en el agua.
El zorro es del género del perro. Lo hai colorado y pardo ^ y
abunda en todo el país. Durante el dia se mantiene en sus madri-
gueras ; su caza principal es por la noche, y hace presa de los ani-
males mas pequeños, particularmente de las gallinas. Devora tam-
bién el pescado como todo alimento animal. Es difícil que caiga en
los lazos que se le tienden , á causa de la mucha astucia con que
frecuentemente hace inútiles las precauciones del cazador. Este se
ve obligado á perfumar sus lazos ó trampas con incienso y otras
sustancias cuyos olores disimulen el del hombre.
El jaguar, del género de los gatos es el mas grande y formidable
de los del Nuevo-Mundo. En él ejerce la misma tiranía que el ti-
gre ó el leopardo en las regiones cálidas del antiguo continente.
Haí jaguares de 7 pies de largo desde el hocico hasta el nacimiento
de la cola. Este animal tiene bastante fuerza para tumbar un toro,
pero la presencia del hombre le intimida. £1 jaguar, llamado vul-
garm^te tigrej hacia grandes estragos en los ganados. El mucho
precio de su piel le hace ser cada vez mas raro en los paiscs pobla*
dos. Sus costumbres y hábitos son los mismos que se observan en
los demás de su especie. Espera su presa en lugar oculto, salta so-
bre ella con fuerza y le quita la facultad de huir ó resistirle. Algu-
nas vezes, instigado por el hambre, se aventura á atacar al hombre ;
pero rara vez si le encuentra prevenido. Trepa por los árboles con
admirable destreza, nada con la misma habilidad y puede arrastrar
su presa hasta su guarida, aunque sea un buei ó un caballo, para
satisfacer su hambre sin temor. Hai tigres negros con manchas que
resaltan, del mismo color : son mas sanguinarios que los otros y se
encuentran solo en las selvas de la Guayana ; mientras que la otra
clase vive en lodos los bosques del resto del pais y abunda consi-
P. 6S0G. II
\
4lcráUMÍMÉi «D loi de la Gnafana. Sa carne esUaiioa jni^i^
•fltl^iléa.
Pantera, del gébero de loa galoa. £d la parte elevada 4e Jas ser*
' molas de Nliigiia, A§iiaeaiieDte y Ferija existe b1 tigre panteca. Sas
manchas sos aias oaeMidas ^pe las del jaguar y mayor su yoraaidid.
Se ecmKa en ]o mas profiiiKio de los Jl>06qBes, de donde no sale
sino euftiido le obliga el hambre.
OBza^ del género de los gatos. Es una pequeña pant»:^ que no
es fenez ^t^ eunvdose cree mas fotfte. Tiene moa desarrolladlos
los órganos de la vista y del oido y ye mucho de noche.
£1 leoQ ^feiisdi€color)j'úét género de los gatos, aftímal tan feroz
cofiM el Jaiguasr, devora su presa y no la deja hasta que no se ha
saciado. Si cncpentra muchos animales, los mata todos antes de sa-
tisfacer su lAmbre. Corre velozmente y sube á los áEÍ)oles con mas
lijereza que el jaguar ; pero es perezoso, y coando está harto no
alaca al hombre á no ser que le halle dormido. Su carne es flaca y
tiene un tufo desagradable. Abunda en la serranía, desde la altura
de 5. Oto basta 4.800 varas sobre el nivel del mai*.
£1 gato tigre,' del género de los gatos, llamado también gato-cer-*
vante ó cunaguaro. £ste animal tiene como 4 pies de largo, se pa-
rece al gato, pero su cola es proporcionalmente mas corta y su piel
mas bella. Esta es rojiza adornada de manchas negras de una for-
ma oblonga sobre el lomo y los costados, redondas sobre las patas
y ej vientre. Es escesivamente feroz ; pre6ere la sangre á la carne,
por lo cual es mas destructor. Vive en la misma región de los leo-
nes aunque se le encuentra en las selvas de la Guayana á solo 500
varas sobre el nivel del mar.
>
6RDEK DB LOS VARSVPIOS.
El rabo-pelado, del género sarigues, es poco mas ó menos del ta-
maño de un galo. La liembra tiene una bolsa á manera de alforja,
en la que encierra sos hijos hasta que están capazos de buscar
por sí su alimento. Su color es blanco sucio, su pelo de dos espe-
cies : d del cuerpo suave, largo y blanco por debajo, pardo en la
punta ; en la cabeza, cuello y demás partes corto. Tiene un círculo
pardo al rededor de los ojos ; las patas de un color de avdkaa ,
las barbas largas de un blanco ro^ ; su cola es mas corta que el
cuerpo, desnuda de pelo, y solo se le ven algunas cerdas que sal«i
f
eultalafi eseastiUas blancas-cj.neJa cubren. D^MTioa de di» y. caza
de nocbe ; vi¥e sobre los -árboles y ea los agujeros de sus troncos f
ae alimeota de^najaríUoS) cuadri^edos, .insectos y aun frutas ; ataca
los gallineros y hace destrozos considerables. En cauliverio esia*
dolmite.y no muestra diq;>osicion álafauíiliaxidad.
£1 ratón de monte; del género sarigues, es un animal xm poco ma»
grande que una rata y vi^e sobre los árboles; se sirve de su. cola
para sostenerse en ellos. Con la misma se sujetan los hijos del
lomo de la madre, la cual se los lleva consigo á ia menor alarma.
£1 lirm), del. género sarigues, es un animal anfibio : lo llamaa
también pequeño perro. Es lindísimo y vive en los ríos y las ciéna*
gas. Su pellejo está cubierto de un pelo corto mui suave y de una
belleza rara. El color es blanco y negro , de una simetría tal , que
comenzando desde la cabeza, forma una cinta de pelo negro que se
abre en forma de semicírculo del ancho de una pulgada, y á dos-
dedos de distancia sigue se^u^f^, tercero y cuarto orden igual.
Como estas rayas son negras sobre un fondo blanca, contribuyen
mucho á la belleza del animal. Su pequeña cabeza tiene barbas co^
mo d gato ; los pies traseros son membranosos ; la cola ( con la
cual agarra como ios monos ) absolutamente sin pelo desde la mi-
tad hasta el estremo. Este animal tiene el vientre dividido en dos
pedazos de pellejo que abre y cierra tan herméticamente, que ape-
nas se puode reconocer la abertura. Estas partes están cubiertas de
un pelo corto y suave : con días la hembra cubre hasta, seis hijos
que lleva dentro del pellejo*
«
ÓRDBN DE JUMS ROBDOUBS.
La ardilla, del género de los de su nombre, es un gracioso anima-
lilO; agrada á la vista por la elegancia de sus formas, la vivazidad
de sus movimientos y gentileza de sn disposición. Aunque es natu-
ralmente bravio , se familiariza mui pronto con el cautiverio , y
aunque tímido recibe con gusto las caricias de las personas que le
alimentan. Vive ordinariamente en los bosques y hace un nido có-
modo sobre la cima de los árboles, compuesto de hojas de musgo.
Baja rara veza tierra ; su alimento consiste en frutos, y en pájaros
á vezes. El color de la ardilla es de un pardo vivo que tira á roji-
zo ; el pecho y vientre son blancos , las orejas están adornadas de
tufos de pelo ; sus ojos son grandes, negros y vivos. Se sienta para
— U4 —
eomer y lleva con las manos el alimento á la boca. Hai ardillas de
un color gris negruzco mas difíciles de domesticar. Estas ultimas
suelen verse hasta la altura de 5.000 varas sobre el nivel del
mar.
La rata, del género de los ratones, es una especie de las inas per-
judiciales al hombre. Se multiplica con una rapidez tan asombrosa,
que un solo par en dos años puede ser el origen de medio millón
de individuos. Felkmente sus numerosos enemigos impiden esta
espantosa multiplicación. Las ratas llegan á ser tan grandes algunas
vezes, que hacen frente á un gato 7 le fuerzan á retirarse. Sus mor-
deduras son temibles, su índole atrevida y en ocasiones se destruyen
ellas mismas. Parece que este animal ha pasado de Europa á Amé-
rica introduciéndose en los navios.
El ratón ^ tipo de su género, es un animalito que está estendido
por toda la tierra en gran número. Sus enemigos son también nu-
merosos y fuertes, y no tiene medio de resistirlos. No se ha estin-
guldo por su gran fecundidad, pues en cada cria produce de 3 á í O
hijos que nacen sin pelo, y al cabo de ^5 dias pueden subsistir por
sí mismos. Su color es gris de hierro y los hai también blancos con
los ojos encarnados. Parece haber sido introducida la raza también
por los navios de Europa.
El perro de agua, del género myopotames ó covias, casi se con-
funde con la nutría en la forma del cuerpo. La cabeza es como la
de un perro, pero el hocico es casi redondo : las patas cortas y los
pies palmeados : tiene las orejas como el castor y las barbas fuer-
tes. Es anfibio , vive de pescado y se nutre también de yerbas y
frutas. Se pasea por tierra no lejos del agua, nada con la mayor fa-
cilidad y se le ve levantar su largo cuello mirando por todas partes,
zambulléndose después y permaneciendo mucho tiempo en el agua.
Vive eu cuevas que hace cerca de los ríos y allí deja sus hijos, á los
cuales nutren las madres hasta que están en estado de seguirla por
tierra y i)or agua. Abundan en Ibs raudales de Atures y Maipures
en el Orinoco asi como en el Guaviare y el Inirida. También sue-
len^veric algunos que se confunden con la nutria , en el Apure y
sus ríos tributarios.
El puerco espin, del género de los coeudous , es de dos pies de
largo y algunas de sus púas tienen á vezes cerca de 5 pulgadas de
longitud. Su color es gris que tira á negro, resultando de una mez-
cla de blanco , pardo y negro ; la parte superior de su cabeza y
f
endlo tkaie nna m«lliM de edpi9as que poe^e ^riisar ó plegur á
VOliiBlad. El pelo del hocico y miembros es mni corto, las poas ó
picas que cubres el lomo son mas largas hacia el medio^ terminaiir'
do en punta, y marcabas alleroativaaiente con aniLtos negros y
blancos. El. puerco espin se mantiene ordinariamente aoostado, pe-
ro se levanta cuando se encoleriza^ Duerme casi todo el día en su
solitaria madriguera y sale por la noche á buscar el alimento, que
consiste en vegetales, raizes y frutas. Es pacifico , nada familiar y
muestra apenas una sombra de inteligencia.
£1 conejo, del género de la liebre, es un animal que tiene las pa-
tas cortas, la forma redonda, el color leonado ó de un gris meascfa*
4o de rojo y el pelo corto ; vive de raizes y abunda considerable-
mente. Bai conejos todos blancos y otros con:mancbas negras; sus
jNitas son mas largas que las manos, d^ suerte que mas bien salta
^ue anda : es notable por sus costumbres dulces y su estrema fe-^
cundidad. La mayor parte hacen sus vivaos en los bosques en que
habitan ; tienen las.orejas largas, la cola corta, y viven cerca do 7
anos.
: £1 chigüire, del género cabíais, es un animal anübio, que tiene
él hocico de un carneroy el pelo tosco, espeso y de un pardo amar
rillento, la cola tan corta que apenas se ve ; se alimenta de vege^
tales ; es tímido, vive en manadas, sale ordinariamente de noche,
si bien se les ve de dia en las orillas de los caños y ríos tendidos á
la sombra de espesos arbustos.' Nunca se aleja del agua, á la que se
arroja al menor peligro que le amenazo ; de tiempo en tiempo saca
la cabeza fuera de ella para poder respirar y se le ve nadar también
eta manadas. Algunos suelen domesticarse. Se le caza no tanto por
8u piel, cotno por su carné que se usa en los dias de abstinencia*
El chtfdire se encventraen Indas las sabanasyipeto eón mas abun-^
dañera en las de iptire, Batínas, CaJrahóbo y Caricas.
Elácortto, del género cobayos, es un animal denlos inas fecundos;
se llaina támbkli conejillo de India. Se cree que un par puede prb*
dudrihas de SOO ea un ^o : su 'color es blanco varúfdo de mancháis
negras, amarüias, naranjadab, etc/ROey deterioárt todas las tíustan^
das que eácüeñti^. Aunque eseneiáliñé&te i^ni^ro / atáea taiftt*
íáeñ las BÍaderas y yerbas y es de natural mui dutos'y jlímido. • >
: ' El ag^iii ó acore de monte; del fénero agulís, abtaihi>en ) kys boft>
^es-, <eQliBas y liados', h^ieAdo rara vez vivacoft^'pirqutB ptiafiew
los tii|ed)s'deJos IrolMps do los áfclielea. <:wre(«&a:Y«loiidadidani4>
«5:-^
\
— 44$ —
do'graiideB Mitos oonra ht*líeim, á la qu^'se Mtm^'en la liÉaMit
y inaradel oido. Se afímenCa ^eraíze» y frntaa, prefirienik» teséííi
Tena» especies de palmeras. Gome oarne y pescado, y lleva ooo
maBOS el atímeatoá la beca, sentándose pani'Ooaier.'En sus
tos, feeimdidad y delicadeu de su carne «e semeja al conejo. Seria
«nm conTeníente que se le reáajieee al estado doméstíoo, pueadh^
t& entonces un producto seguro , tanto mas cnanto que su piel
es mui fuerte. Cuando se irrita, ataí^a coalas manos, y^enténcea
suele caérsele parte del pelo que eriza.
La lapa, del género pacas, habita en los bosques particnlarmente
it 1» ot^Ha del agua en miringueras que ell» misma^construye ; m^
"da^ ntvi bien, su voz se semeja al gruñido de un cerdo^ se alimenta
^6 naiees que desentierra con el hocico ; su oaraa es mui gostosa^i
tole de noche para buscar el alimento, que consiste en- raices veg^
tales y fhitas, y devasta las plantaciones de; cana de azúcar. Tiene
eemo 2 pies de largo, los ojos pardos, la punta de to neriz Begniz<>
ea , el color taoiiádáy subido sobre el lomo y los costados marcadi9S
con cuatro ó cinco bandas longitudinales formadas de manchas blan*-
queeiuas ojaladas ; es blanca por el petho, vientre y mejilliais. Haí
-alguna» especien que son partías ; su cameles tierna y parecida á ht
-éel lechonciílo. Abundl» este- animal eea la* cueva del Guáchurodé
h provhacifi deCumaná, á la altura de-4'.490*vara8^obre'el nivel
^el^mar.
Xa.peiett, típo^^^tetro, 8srim:amoial>tpe'teme:;diíiO:yílft
Uma : «i>voz>so.deja^ rasa ven oíradn^dia, pevo d».9W8faeiti(Bi6 «i
taiiento»«gudi>y)'i«etiflMro!: de. tiempo en..ti«ttpo.parecei|iite.pro^
rumpeen un «f prolongado^-Se le halia:^cpiitinuaflMiite.8olNre'rlds
láaeMes, pnliCípal^l•ñi»i<dlD»e^ylq$nnio. ^egiia se dieé,:ba}a de-
jándose éter de'tos 4rboi» éüañdoiiÑe copiidisriaBthflías dBi«»
4m:: sehamvnto^^sín eáibcrgO) lalsaQaspeMEaa^qne bá|anibiei»ffb
•iMiávboles. L&poMÍon áus'fiEHiigiBisa dé«itDSflBímatlés(e8il9tde^^
4av!en:ti0ffra i^iesfluní ttMfiniíiáiOfjagaBB|dDi4c.lMnf boiifff «éfpaml»
qne.estámpnyaBdia«faréB.:£a ÉoMpi^aeioDy(e| mefÉmÍBnM:do^iil
«qnebétO'pinuBbéB .q«o«sfn¡e«in úejotifi8tuhav'fin»x»(iJU9artQ da
ai»'liijo.*6Q Mfiloios mas Jargobtn itiemyo do<irio^ y á*v¿to 5&ifs
te: inísiOwdMnirf 4:8 ' htMs ■•a^dú8;oLo¿iai»tmkiwlbpag«fabp<Éragi
f
son mai lentos y mucho mas en tierra por la estmctnra de su
coerpo. En la parte elevada de la serranía no se le encuentra^ por-
que parece que no existe este animal á mas de i .200 yaras sobre
d^aWeldel Oeáitie* , ' "
^Eltcachieano^ del fineio Mms ,í es «neuadrápedo del tamaiO)
de Júmpesm pe^Mfto ^ufonnda en las cabanas ; típoe el cuerpo en* .
bieitO' de una* 'conifla gnameoida de eseamas ; dos grandes piezas .
csbiepi su lemof^ rabadUla, entre las enales se hallan bandas de
iwamas hmib péqueüa^. No tíene malidaalguna, p«ro hace daño en
los jaBdiaes/ comiéndose les'inekMies, pala4as:y4»tffos vegetales. Ho^,
ppede tr^pai? ni saltar y cerro regnlannente. Para coger el cachi-.
eamoeS'pisecásoinarabarsobreél de frente,; pues las escamas de la
eabeaa nojíepetmitett ver hada delante sino por los costados. Vive.
en< coeveasnuii profundas' y dispuestas dcr modcK^^el agua no le.
pef^udifiue. £n la^madrigoera se hincha de modo que es ditíeil sa-
carle y pero: ponúéodole un* dedo ó cualquiera otm cosa-en el orifr*
cío, iameditta«<?n/re se deshincha y aesaca.
El oso (ialmero>y del gteero komiigperoS). tídBe 4 pies de longi-
tud» la eob de 5 pies de Un^^ oobiertade peloS' lisos y lai^ que
íentíin eomauDa palma, y la eabeaa estrecha, los <<3>ios p^neAos y/
nebros, la> beca sumamente. pequeia , la leugua inui larga y re-
donda, losvpies Yi mavios armados 4e uñas y la»^de delaute mui lar»;
gae y 'capazes^de beiir. Xodo^ ^pelo está saezeiado de nsgro-jy»
Uhttoo), .se. jiianjiiene de hovnigasf. pastee ^e eoio vive eu le»4
para|ear ettdQS>< pajMttBHlaflDaeateenltlas siMnal^
£1 oao^melero , dd gánero hoimtgiieros, e^de un color ^sncsKi
müento, mas»chiiv;«i k parte supener* de )a.oalM{i,<y>la,panlep.
ialbñer del-úueqiOsClasbiMigraí; Mane^iceiva de 3;piisrdeJafgOytla>
uaben eoala'yau^iíitKia'no.pasa deunípié» ÜMoaia^mítí y^oHab
éalMihide unarigHBiMigaMdiwiryaBa dasaabriK laa eabnenus sin^la*-^
moRdBíla)r^daduraRde.laaabi¿as^élas*q)*e(pifliaD|| Ma.píelldflufts
yrckbietta^de'iMlhs^ V'inis en: las^ n»ntaftas)yfipaiiBs .pooo^ haiñtacto
dBila JsoMi caUcntB : suele afíaianlanB.de(pi9tfrfl|os'yEatQnesj}lae»o
lR:maÉ9bsaii;á los-iiiioleB , AMme^diaBde'dbiqiefdenoeheíyfattr
dáanalieBisÉnD liblilidndbdeéÍ8i|>fei4ueílD«
. • )
<
— -IM —
ÓEDBlC DB L08 PACHIDBUIBS.
La váquira, del género del cerdo, es una especie de cerdo pe-
queño y sin cola ; so color es gris, el lomo y costados negros con al-
go de pardo á los lados de la cabeza, cerca de las orejas. Sus barba»
son laquas y compoestas de cerdas negras , que tiene también sobré
los ojos : el hocico es blanco. Las váquiras van en tan numerosas
manadas, qae algunas vezes llegan á mas de mil individuos de fon-
das edadeS; que atraviesan inmensas ostensiones de terreno. Si tie-
nen que pasar un rio, la que va á la cabeza se detiene un instantey
Juego se arroja al agua. y es seguida de todas al momento. Cuando
ven alguna cosa que les alarma , se les oye un castañeteo en los
dientes , se paran y eiaminan el objeto de su temor. Si algún cal-
zador se aventura á atacarlas cuando están reunidas en gran nu-
mero, le rodean y le hacen pedazos si no logra subirse á algún
árbol para sustraerse á su venganza. Abundante es en las selvas de
la Guayana y en toda la parte cálida y templada del pais.
' La váquira de collar^ del género del cerdo, es igual en la forma á
la anterior , pasa su vida en los bosques y anda apareada ó en
pequeñas piaras. Sé alimenta de vegetales y raizes que se procura
hozando la tierra ; come también pescados y reptiles , y destruye
muchas serpientes. Se oye su gruñido á una distancia considera-
ble. Tiene una glándula colocada en jnedio de los ríñones con la
que arroja un liquido iafecto á los que la persiguen. Tiene cerca
de & pies de largo y una raya amarillenta ró<lea su cuello. Se
mansa con fecUidad y puede vivk ei| el estado doméstico. Su
carne ^s buena, pero fá momento de matar la váquira es preciso-
^piitarle inmediatamente . la bolto , porque.^e \o contrario no se
podría comer. Se encuentra este an«nal ea las llanuras y sabauaa.
ekivadas ha^ la «Hura de 2.400, varas sobre el nivel del mar. :
' la dMta, del género tapir, tiene como 6 píes de largoi Su colnrr
er moreno oscuro ; bkwco puro los lados del labio inferior. Tionéi
«na banda: á loiargo del nadmieato de Jas crines y al jr6deéMr:de;
las orejas ; el pelo es corto y- la piel mui gruesa; La oabezatermi'^
na en un hocico ¿ especie de trompa cubierta de pelos del mismo
eolor que el resto del cuerpo. Vive solitaria en lo interior de los
bosques y á las orillas de los ríos , y huye de la vecindad de los
hombres. Se alimenta de vegetales, es de un natural tranquilo y no
f
— 469 —
aUca al hombre sino en propia defenia. Se amaiiai y 8i|f]e á sil
amo con doeilkUd. Sn carne es escelente. La danta se eacaentra en
les llaoos y en la serranía elevada,
ÓSDBM DB LOi ROMIHAHTU.
. £1 venado, del género de los ciervos, es cuando pequeño de'u»
color leonado mosqueado de blanco , cuyas manchas pierde á me-
^da que crece y y al año se le ve leonado rojizo : debajo del pecho
y de la cola es blanco. Su asta crece á proporción de los años y su
OAyor altura es de dos pies. Es estremadamente vivo , habita los
bosques y las sabanas, en las cuales suele vérsele en manadas. No
se sirve de sus astas para defenderse y sí de sus pies : la hembra
00 tiene cornamenta ramosa. Este animal come fratás, yerbas y re-
mievos de los árboles. Se retira á lugares ocultos para rumiar ;
üeae el oido y el olfato mui finos. La hembra pare uno ó dos cer-
vatillos. Se amansa fácilmente, pero no se pueden poner juntos dos
machos, piurque se combaten hasta morir. Los bal de varias especies .
y entre estas unos eaieramcate Mancos con las mismas calidades.
6bDSH di los CBTÍGBO0.
£1 manatí , d^ g^n^roi lamentino, es anfibio , herbívoro y nada>
9B91Í bien ; poro np puede arrastrarse sobre la tierra con facilidad, i
aunqiké tiene la costumbre de arrimarse al. borde para nptrirse .4o.
yerbas y de la cortesa de los mangles» Es de ^ O^á -1 5 .pies de largo^
y su color gris ceniziento. Tiene un buen natural, los cyos peque-.
]|es y está obligado á. salir frecuentemente á flor de ^ua para po-
der respirar» Su eaero es m^s grueso y eqp^o que el del l^uei y. su.,
carne tiene^.gpsto de la d^ este ; la grasa es abundante y liüLpara
el Alumbrado : suele pesar de 500 á 804 Ubnis,. Este animal jtienedps
pef^ueltofi braios ó aletas irregulares si» división de de^os ni de
uílas. La hembra «Melé llevar en sus brazos dos hijuelos, qu^ geno*
i^ibnente son luN94>ca y macho : los estrecha, contra el e^ t<iw^ y
los piulre de imia leobe grue^ basta que pueden seguir á la,
madre. Hai muchos manatíes en el lago de Maracaibo, enet CMri«t
ñoco y en algunos de los ríos que caen á este.
La tonina, del género de los delfines, tiene como 9 á 40 pies de
largo y 2 de diámetro ; su color es negruico en el lomo y el del
\
ó dos hijos que cria con cuidado lU«iníbloB!«B(aaa>akatas wáimíi m
están débiles : ejerdtalos en nadar , juega con ellos , los defiende
con valor y nunca los ahandana¿ Sejfttimenár.de pezes, príndpal-
mente de torácicos. Abunda en el mar de las Antillas y en el At-
lántíoó :' hm^BB naweiiis9s> ee^vem^n) loe »s Afrare^y. Maood.
Bbí^ €ruanaie>y d^Aáibag^ ^hay—wiía» t— Mwsy sedadft'si im^
bfán ll^|[add att¿]»iiiflatendo¿por et ttrÍBO0o.<iibien'por «eLA^^
II ífisetn: ó(cliacal0te , et.iBiBiliéL ^ig|iBtiMciKH|iie' mlSiza^ ow
1» ballena y.lÍ6|sa á.4aMr'40:plB8ad& laigoy mas' de 4Qide elwiii»-*
íeceaBta!:<8U eriKaa* ocupa; la 'inatota parte de la masa tétal. Iste"'
c^oBOies^ de .naftvral fan2 y ivuir terrible ;.8in; «nbargo esdi^Blr
deia^ penevmqoít d^ bofiii»ney ponfae^suLgraaaiesperout y él émbsr
qo» tieníe eon cebes demadiadoi poderoso» para^^e aifuetna anuí»'
tfe:loBipolígiiw<qoeliai>en^<8u>peN9Ba MiüttnJiiesimsimaces.fá't^e^
ras 40:lesPii«i«nib8ndafda&'«imev6iaB. No iMK»
VLK^ deidfos.^qatdé^bacrado'^eniks oMMi^oUDeiUidiiee y^la bwar
del Uñare, causando tal putrefacion, que infectó todo el aire de
aquellas comarcas,
£1 narval, llamado pez-espada , tiene de 20 á 25 pies de largo ;
m fsrma'es ot^i, carece dé ^eotes) peponie lá>iiiaiidíbuki superior
Icsalé'ma pua^déiiueso >que »0'teja^de74 tO pies de Mgo* Goff
ék Étaca'á'SUs^eneniigos^iiF «esoeptuar^lli bsüeiia», AtraTesáiidMiMí
dtcverpo. £a fúemi'celique'^lardeBelBUP^es^liiyVqvepaMtBa enél
cáseo dé hiB^enlbareaéíbwM. Estapua'^n^de^vn'maflF pBeftrfUle al
d^Méfliitte/ perqué* jamas-' 96 imne amariHo*. Hki^ bastantes dé ellw
sobre nuestras «osto y piíiMsipáttneikle'^a las de^ilaraoáSbo;.
TFode^^estes- eetáoeo&«paMemá> prüaientMriMa ^tl6'd§bicMn>^ei(«K'
oeoer^á^ Ibi^Ms, pisl^él * examen' pmebttlO'eittti««6.<l^é0(M8^«-'
ron por les pulinonesj lo-cval te&^bBgaá 8álli^^e>tiMÉpó>ett lie^plff
SQt^reflasnperfleiedél^agcm» para' tomar el'iíre'fieeesatíoiá^la eon^
servvemck dd kr #fe/8ií'eaBgre es'cáli^liBf/^uMfíVH^
r'ias'meífb^ e9iéán'pr0tl0tas<^ mi aparéfeéxafiíiálrío'í^
maMiÉK>9.
f .
f
— *n —
AimUUSS COADEÚnSOOS DOMÉSTICOS.
Eaflmeoados los animales cuadrúpedos q]aer se crian sUyestres en
el país y yiyen independientes en los estensos y espesos bosques ,
paflaremoft en reyista los que el hombre europeo ba introducido y
domesticado sacando de ellos inmensociiieneficíos. Para poder , en
elerto-BMde> dar una idea aproximada del producto de la cría, ha
sido necesario- hacer un trabajo prolijo sobre la pobladcm dedicada
á eUsi, y ademas iada|;ar el número de indiyidnos ^ne consumen
iál O' cual e^peoie, ; ikiico^ medio do Uegar al conocimiento del con-
suno de cada Qnay.piu»ude.ahlayerignar^ los datos' estadísticos
emitidos ea esla obra coinciden, coa k> que del cálenlo resulta.
fiai. pueblos, que comea solamente carne de cabra, otros de esta
y. de. pescado.; cuales carne- de, reses.y de las otras ,. mientras mu-
idlos, aonntren dasob peseado^ carne de cerdo y mucha cazería*
£n iOin^.poblatíones.enteras halqiae yiyeade.una mezcla de todQ%
Bor tanto, desp.ues de.nn maduro examen apopido en los conoci-
mientos práctixx)s que tenemos del país y en las. noticias adquiridas
en todos los. pueblos y luganes^ se han lormado los siguientes ro*
aúmenest
•éh dedicados á la agricultura ^12.489
1^ dedicados á la cria 244.976
dedicados al comercio, artes > etc., etc. • . • 235^^.4'68
a
loo
Téuii . . , • w^ims
JMUoi iiukpetíáieniós*
*■ 4
\
52.4f5
•¡^ aplicados á la agricultura. .... 276.50
•iK^iaflkialteiiiteittEÍa. ...i. .....•.« .7 JIM
1^ 'apl|óadt>K¿üai:pnc» y)onBa% « JAtLMXii
Total general. . •4>.g....<.. .•MffjMK
\
— 478 —
Retúmen de la pobkteion dividida según sus alimentos.
•^ comen carne de ganado 285.604
ró comen cabra y carnero A 89.069
•¡^ comen carne de cerdo . ^ 89.069
•Po comen pescado. • • • • 94.557
~ viven de caza • • • 94.55T
7^ comen legumbres, queso, leche 94.557
Tolal. 945.548
A mayor abundamiento se ha formado el estado que sigue para
que se vea el número de animales que según los cálculos del autor
había en cada pronncía/en los anos que estuvo trabajando en dlás
para bacer los planos corográficos y dar al gobierno las noticias mas
exactas posibles sobre la estadística del pais. Mas como estos datos
se han conseguido en diversas épocas, ha parecido conveniente re-
ducirlos todos al año de -1 859 , teniendo presente las perdidas su-
fridas en los diferentes puntos, por guerras, pestes, ó mudanzas dé
animales de unos lugares á otros. Estos estados ademas de servir
de basa á la riqueza pastoral, tienen la ventaja de dar á conocer ló
que existe en cada provincia y en cada zona, de ub modo aproxi-
mado, por haber sido imposible calcularlo con certeza en yista dé
la falta de datos oficiales y metódicos sobre estos puntos. El pais ,
recien salido de una lucha larga y sangrienta que lo trastornó y
consumió todo, carece de casi todas las administraciones que en las
naciones cultas y ricas se ocupan en la formación y arreglo de la
estadística general^ basa indispensable de todo buen sistema guber--
nativo y económico.
....Los cálculos que haremos sobre el consumo de los anímales pro-
barán cuánto se acercan á la verdad los resultados ya enunciados»
Ellos servirán en tiempos venideros para conocer el progreso ge*
neral de la cria, y estimulará á los encargados de la administración
de las provincias á formar sofafre basas sólidas unas averiguaciones
cuyo objeto es dar á conocer la riqueza de un pais, y los medios de
aumentarla.
Antes de presentarlos estados yloscáteialotindioados^^a#$tará
de mas dar una ideado los.ganaAav»qarmftianeB.lla'¿i[k¡ca4^ la
rflvoludon^ y ío que quedó después de 22 años de una guerra san-
grieáfá y desoladora« • .• i ' '
f
— 475
£1 Sr. Deponsí que habitó mocho tiempo eo Caricas , y cayos
infonnes estadísticos son por lo general exactos » eompatjó qae el
número de ganado vacuno sabia en aquellos inmensos llanos, desde
la boca del Orinoco basta el lago de Maracaibo, á 4.200.000 ca-
bezas ^ á 480.000 caballos, á 90.000 malas ; haciendo subir ei
yalor que producían aquellos ganados á 5.000.000 de francos. Si
reflexionamos que esto se graduó para el año de 4804, en. el de
4 84 2 , que fué la ¿poca eo que empezó á ser desastrosa la guerra ,
podía haber, según la» reglas de la duplicación que mas adelante
se yeráu, en ganado yacuno, 4.800.000 caberas; en caballos,
450.000, y 270.000 malas. Por los informes adquiridos en los
lugares , después de la guerra , habria quedado á lo sumo en cada
provincia , en ganado vacuno lo que sigue :
En Apure 200.000
— Caracas 45.000
— Barínas 40.000
—« Barcelona . 40.000
— Carabobo 5.000
— Cumaná , 4.000
— Guayana. 4.000
— Maracaibo 3.000
— Mérida. • . . 2.000
— Barquisimeto 2.000
— Trojillo • • . . 4.600
— Coro y Margarita 0.000
.■•i»»»»»»^— ^■•■•^•""■^^
Total 256.600
El Apure fué el semillero de la reproducción del ganado : allí
ocurrieron de todas partes á comprarlo, y en él día se tiene ya el
número de 2.086.724 cabezas. Las muías , ademas de la destruc-
ción de ellas en la guerra, sirvieron á los patriotas para procurarse^
armas, municione.^, víveres y ropas, trasportándolas al estranjero;
y ademas, en los últimos años de 4853 á 4857 , la peste devoró
lo que se habia aumentado. Por ló que toca á los caballos, fácil es
imaginar cuántos se consumirían en una guerra tan larga , y cuán-
tos se destruirían en aquella misma época de la peste ; fué en tér-
minos , que muchos ha^qs quedaron sin un solo caballo.
\
ESTADiSTIGII
de loB^gamAosy aaioidMNto'eña de VeneEO^, dMéidBB:piNr:aDnas, hecha «É
Alio*.
1884
1888
i88»
48»
48S5
1884
18S1
1888
18S8
1819
I89IT88
NOMBBE
BB LiJvPBOmiOUf.
Gabácaa. i «.. ...^..
Gababobo ..«.«•...
Barquisimbto « « .
BABÍHA8
AruBB ,
fxméxL
BAB€BL0NA
Ck>BO .....'
Maboakita... «...#....
MáUOA... ,
Twonujo
Mabacubo
GUATANA
Total
BB la ¿OKA A6BIGULT0BA.
Oaaado
TI
GaB¿0A8.«..>«
GABABOBO.* »
Babquisiiibto
BaBÍB A8
AVIMUI^.......*..».»....^ ...,•• ......
Gomaba
1889 / Babcrloba »
COBO
JSUtflABZTA.. •....
IttBIBA ;.. »
T^anuj}..,
Kabacaibo
GüATANA...
Total
19,189
8,985
13,187
»
»
9,4&4
1,884
4,110
309
5,799
4,588
11,825
»
71,743
L«MZ 7
47,j
4,330
175,907
»
40,587
• TS66
900,500
15,n0
21,471
6,915
63,884
»
516,880
Mal».
4,453
M09
2,584
»
762
72
800
a»
4,900
700
181
»
11,820
Caballos.
4,651
1,752
3,319
»
1,068
340
1,286
587
939
470
»
14,065
Boma.
9,958
5,888
14,026
»
»
1,851
554
7,105
864
1,660
445
500
»
41,646
Godoi,
16,000
14^000
19,000
B
B
a»ooo
i>ooo
5,000
900
9,000
1,000
1,900
»
68,ftO0
ESTADÍSTICA CALCULADA
38,264
22,632
29.651
»
»
4.964
3,168
16,440
544
34,374
26,328
52,006
B
927^768
■BHCBBaí
54,520
8,906
10.755
2,418
527,721
5,168
»
»
»
»
18,544
1,334
1,032
144
802,000
1,600
27,576
104
127,026
4,500
41.490
4,200
224,291
■ "724
»
»
9,302
3,504
6,658
»
1,868
680
2,80%
618
1,454
1,880
MU,«8f
_
29^090
31,718
19,906
11,796
28,042
»
■ »
2,564
1,106
28,490
637
8,800
2,670
5,587
»
108,690
96,000
18,000
24/X)0
»
»
5,000
S,000
9,000
9,000
9,000
5,000
8,000
»
106,000
f
BNERAL
Kerentes años y calculada d«ypM |Ai:a isab^r loc^i^eliftbmfel año de 1839.
II
BN LA ZONA PA9T0EIL.
•
•
TOTAL GEKBRAL.
Oaiuido
▼acuno.
Lanary
cakmao.
MslM. :
CiabaUes.
Bam>8»
1
COTdot*
Ganado
taoano.
*
Lanar y
1
VttíéM.
CdMain»
Borros.
Cerdos •
05,i»^
54,47<>
* »
3^658
15,977
8^kÜ$
18,000
222,554
51,430
8,291
18,628
18,378
34,000
66,600
3,350
1,090
5,670
1,940
14,000
75,585
6,670
2,299
7,422
7,838
28,000
»
»
»
»
))
»
18,187
475,907
8,584
3,318
14,026
19,000
173,604
10,606
8,751
47fÍ43
7,081
45,008
f73,'608
10/166
5,T61
17,li4«
7,051
45,800
100,800
1,515
3,383
3M8D.
3^83»
30,«0O
3Q9&680
1,M5
3,383
3f,59D.
3,099
30,000
34,68S
3,487
310
1,870
730
6,008
57,lj57
•
3,694
972
3,938
3,084
9,000
149,913
«,o«^
967
8,109
2,917
13,000
150,797
5,591
1,059
8,449
3,471
18,000
»
»
»
»
»
»
4,110 '
200,500
860
1,286
7,108
8,000
»
»
»
»
»
»
309
15,776
58
365'
864
900
»
»•
»
»
»
j»
3,739
31,171
ijoao
887
4,660
3,000
»
»i
A
»
»
»
4,388
6,915
700
%9
445
1,000
»
»
»
»
»
»
11,835
63,884
484
470
300
1,300
54,814
3,757
148
778
628
1,000
54,814
2,757
•
148
778
688
4,000
183,146
59,530
42,?567
69,436
24,790
446,000
958,859
576,410
24,187
83,501
66,436
179,100
>ARA EL AÜO
1859.
•
406,844
38,340
3,000
6,877
8,428
30,606
445,108
72,770
11,906
16,279
38,831
86,000
118,800
4,488
1^080
3,780
3^000
30,006
441,483
14,878
5,508
7,304
44,776
38,000
»
»
»
»
»
»
29,^51
527,721
5,168
6,638
28,043
34,000
517,813
31,818
3y000
8,300
9,500
138,507
>517,8ia
81,818
8,000
8,300
9,500
136,507
404,800
3,030
800
7,2 0 0
3,200
40,000
401,600
3,050
800
7,aQ0
5,300
40,000
60,680
5.497
868
3,373
4.500
14,000
65,024
33,981
4,702
3,141
3.664
19,000
398,436
10,050
1,834
16,318
5.834
44,000
801,594
41,083
1,979
48,898
8,942
17,000
t*
V
-»
».
»
i»
.48,440
802,008
4,600
3i)S7S
38,430
9,000
n.
»
»
>>
ft
541
27,578
104
618
637
^000
»
»
»
D
»
34,374
127.026
4,800.
^323
8,300
9,060
»
»
»
»
»
26,828
41,490
4,200
1,434
3,670
5,000
»
»
»
'»
»
53,006
224,221
724
1,880
5,597
5,000
54,814
3,7W
148
778
628
2,860'
. 34,8U
3,787
4M«
778
628
8,000
1,858,856
85,465
10,310
48,448
34«887
286^587 MM,7U
4,91A,84i
38,338
!r8,164
140,507
•
868,507
<
I
— ne —
\
DE LA CRIA DEL GANADO TACÜNO.
£1 bnei no existia en América y faé introdaeido por los españo-
les. Por la estadística babia en 4859 la cantidad de 2,086.724
cabezas en las tres zonas del pais. La sola provincia de Caracas que
contaba el mismo año con una población de 242.888 iqdividaos
ba consumido &2.489 reses. Esías haa4>agado derecho en las ren-
tas municipales, y á ellas se deben agregar cuando menos 2.5H
que se bán matado en los batos para el uso de los propietarios sin
pagar derechos : tendríamos pues un total de 45.000 en un año.
Según esta proporción deberla el resto de la repúbUca , deducidos
los indios independientes, hacer en un aAo uu consumo de '1 65.440
reses. Para averiguar si este cálculo es exacto, debemos tomar los
resultados que dan los estados que anteceden y encontraremos
que tres décimas partes de la población comen i»urne de reses. Pon-
dremos para cada individuo 42 onzas, lo que baria.8.564 arrobas
de 25 libras al dia , y en un año 5,405.960. Demos por término
medio á cada res 4 8 arrobas, y resultarla para este
consumo 472.442
Se han esportado en pié. , . • • 8.949
Se han esporlado en carne salada 55 i
To!al 48Í.752
Si en logar de tomar la proporción que se acostumbra en el lla-
no, de que 4 .000 cabezas producen 400 para vender anualmente,
se toma una menor, es decirj tan solo de 90 , resultarla que debe
haber en toda la república 2,049.244, resultado que casi coincide
con la estadística. .
Otro düo no menos curioso é igualmente útil nos conduce al
mismo resultado. De las 2,086.724 reses supongamos que dos ter*
ceras partes sean hembras, á causa del gran consmno de los ma-
chos, tendríamos el número de 4,594.448, de las cuales quitada
la mitad por las terneras y novillas que aun no paren , habría eu
vacas ó novillas que paren 695,674. Deduciendo un tercio por las
que suelen anualmente quedar sin producir (regla mui constante y
conocida en el llano) quedarían en estado de producto, 465.585
reses , que producirán oivos tantos becerros ó becerras ; pero aun
f
— 177 —
estos no todos llegan á lograrse, y comunmente tiene el ganadero
una pérdida del -10 por ciento que serian en este cálculo 46.558.
Queda pues un producto neto de 446.955 cabezas, que suelen lla-
marse de hierro arriba , es decir, que han llegado basta la época
de poderlas marcar con un hierro caliente, lo cual se ejecuta al año
de nacidas.
Los ganaderos para saber el número de sus ganados , multiplican
el numero de herrados por 5, y el producto les da el de la$ cabe-
zas que tienen en sus rebaños. Sirviéndonos de la misma regla
multiplicaremos 416.955 por 5 , y el resultado de 2,084.675 será
con mui pequeña diferencia el mismo número calculado en la es-
tadística.
De lo espuesto se deduce que bal un producto de 446.955 reses^
y tan solamente un consumo de 4 81 .722. Claro es pues que sobran
anualmente 255.245, á las cuales deben unirse las que van sucesi-
yamente pariendo, k los 4 años, á pesar del consumo actual de la
población, el ganado duplicará su número, pprque este período de
4 años es mui conocido del llanero , y para él es una regla que na
falla, salvo por la peste ó la guerra.
Si analizamos mas las cifras, nos conducirán á otro cálculo bien
notable sobre el producto de la leche y del quesa
De las 446.955 vacas paridas que conservan su cria durante un
año , y que pueden proporcionar leche suficiente para la fabrica-
ción del queso, se deben quitar 2 décimos (85.586], por las que se
dejan espresamente sin ordeñar ; otros 2 décimos que anren sola-
mente para el consumo de la leche y del pichero ( comida favorita
de los llaneros) , de manera, que solo quedan 6 décimas partes
, (250.4 58) para el queso.
£1 ganadero suele dividir en tres trozos ordinariamente las que
destina, á este On , y va relevándolas durante el año queseando en
el verano y en el invierno, según que los pastos proporcionan abun*
dante leche á las vacas, de modo que se debe calcular por término
medio, que bada una de ellas puede dar 75 libras de queso al año.
A razón de 40 onzas diarias durante 4 meses producirían 750.474
arrobas.
Supongamos ahora que 5 décimas partes de la población, es de-
cir, 472.674 personas comen queso á razón de 2 onzas por dia : se
necesitarán pues 2.565 ar^óbas diarias, y en un año 862.&9b. Ade-
mas se han esportado por las aduanas, 4,276 arrobas ; lo que hace
{
— 17»^
nn totd do 8M^774 . Se. áAe. tembíea deducir la omlídaá 4e ^fM-
80 de «abra y ovi^qoe» como mas adetaale se veci^dá sam prodwto
4e 85.520; quedaapws de queso de vaca 7S5*45^4 , que^aom
corta diferencia la eaatídad calculada.
Ecr último^ se puede graduar qne las S3,5S6 vacaa qjne se des?*
iiaen puramente para la leche y pichero den á razón de 2 iMiteHas
diadas cada una duranie 6 meses ; baráa en o^aSie ,50^#4S.960i.
De estos datos reai^Ua qne se puede saber con la mayor afroiuma'-
'4áoi^ posible el pioducto de ia cria^ el cual seria coim> sigme .:
472.442 reses consumidas á H pesos una. . •1;896.862
9.280 reses esportadas á 48 pesos una. • . 474.054
404.722 Total 2^7^«l
746.498 arrobas de queso á 4 peso 746.498 I
4.276 arrobas esportadas. . . 4.947
50.04 8.970 botelfas de leche ¿ ^/4 de real una. . OS^.OOST
Total 5JWJ54
Este producto está en razón de peso y medio por cabeza en ge*
neral, y calculadas por término medio cada una en 6 pesos de ca-
pital; daría este una renta brut^ de 50 por 0/0 anual.
P0 EA CftU DBEi GANAIK> LANAR T CABRXmO.
£1 carnero fué introducido ppr los españoles y la cabra tawbien ;
pero parece que esta última es de la raza africana yeoida de las i&»
las Cjanarias« Resulta de la estadística que debía haber m 4 859
la cantidad de 4 .94 0.542 cabezas de cabras y carneros, de la cnal
se deben considerar la mitad hembras. Ja cabra da 5 crJa& alaio y
en cada parto pare dos cabritos, hembra y macho. La OYeja da 2
partos al ano y un cordero solo^ siendo mui pocas las que pareaf
dos. Se mueren muchos de los unos y de los oíros, sobre toda )
cuando los rebaños llegan á ser numerosos. Se puede, pues, por
termino medio , reducir la totalidad á das partos , y cada parto á
uno solo que llegue á criarse, lo que en un ano dará un produelo
de ^ ,91 0.542 ; ei^ctiimente el doble ai no seconsuíniese una parte
por el hombre.
f
•IW*'
rara saber lo que es este coosumO; reem*amos ^ eslado y vere-
mos que 2 décimos de la población , es dedr^ -1^9.069 individaos
eoaMiteMie'4e>cAiaw kmlK»éñtmDmfíc^b9É» por año p^rai ea^-
da iiAO^ lOfW'luiíia nm oaaMma^anvaii de ^.512.552. Ademas se
huie^K^Dtadai laeeoloiiia»74IT; q«éal80,.p«eS; eomo aumento de
la 4riaiW7»A8&,.qae:á ]o»3i alto» pmdiacM la dvpHeaoioii ade*
mas det osMwnwí úd fmhto.
Sk {mwiñéÉmm ahora* que de lais 9ISS.4 76 madres^ que pvedén-
coDSinnii* m erím, kumttaá smmistre laleobe soAetente para eiep»
to «flMomo ée los cHadnres , y para: in fabríeaeion de queso ( la*
otea mitad de 477.5§5 qnedn sia ordeñar ] podremos fácilmente
calaidar i&,eaBfídaiide este prodado^ teaotaadopor término 442060'
que sifuea pasa saoie Isehe» €ada 4 eabias pueden dar una bot^a
diaria y 6 da esias^ anaalibea^ deqoaso, lo qne en un. año daría
S^líSA flivobas aaleniuido <pie sotamente en 4 meses se saque
lecbe. parai estectsMeacioft, «Ufa prodado se consume tedo en el
pais.
las>5{b$2yi eabraaraataateadaaiaa la lecftie para bdwr, y pott<^
dremas efrua aia anitaüante^ iMÁJiWI boteias que no hacen en
la jgcnsmar praBomaataa S mascaba leehí^ qne se consume toda en
los mismo» Uigaias^
Qe lo expuesto se dadnos cobl la mas grande aproximación' el va-
lor de aata eaia delmodb sígoiante :
4.512.552 cabras que se comen á 4 peso una, • 4.52.552
707 cabras esportadas por. » •I'.444
4.5li5.20O< Total . 455.696
» -■ » »i
82.520 arrobas de qjieso á 4 peso. ...... S2.^20
4.494j8ft7 botaUaadailaelie á4/4dereid. . . . 46.74'4
Total 4.642.750
Este producto está á razón de mas de 6 reales por cada cabem
en.geaaEaK.St cateolamaft qaa d término medio dei'«api4al de un
rebaño sea de 4 4/2 pesapor cabem» tnidasmos 4|ae eate dará un
50* por eiaoloj aaual..IÜe> aa baeakadada la kuut parque bai poces
carneros en proporción á las cabras.
{
DE LA CRIA DEL GANADO DE CERDA,
Los cerdos , que hacen parte de los anioMáes de cria, vinleroii
también de Europa, aunque nuestros bosques tengan váquiras que
son de la misma especie que ellos. No debiendo pasarse en silen-*
cío su cria y he hecho todo esfuerzo á fin de poder fijar su número
mas aproximado en cada provincia. Por la estadística resulta que
en la república había en ^859, 562.567 cerdos. Consideráronos
la mitad como pequeños, es decir; 484.257 ; la otra mitad la di-
vidiremos en dos partes iguales 90.626 machos, y otras (antas
hembras ; sacando de estas últimas un tercio que oe paren , que-
darán pues para la procreación 60.446. Cada una de estas pare
dosvezcs al ano, en cada parto, término medio, suele tener &
lechoncillos y produce hasta los 45 aüos. Pero dando por supuesto
que solamente lleguen á conservarse tres en cada uño, tendríamos
en uQ ano 562.496, que darían el duplo sin el consumo de la po^
blacion.
Por el estado de esta resulta, que dos décimos comen carne de
cerdo, y estableceremos que diariamente sean 40 onzas; senece*'
sitarán pues para 189.069 individuos 4.726 aírrobas, y en un año
4 .724.990. Si damos por término medio á cada cerdo dos arrobas
de manteca y cinco de carne , veremos que para suministrar esta
última se necesita 544.998 animales , y siendo el producto de
562.496^ quedarían sobrantes en un ano 17.498 por aumento de
la cria ; los cuales unidos á los pequeños que están progresivamente
en estado de procrear , tendremos que á pesar del consumo espre*
sado solo necesitan un año entero para llegar á duplicarse.
La manteca del cerdo se consume en toda la república , y se
puede graduar que 7 décimos de la población ( 66 1 .758 personas)
consumen anualmente á razón de una arroba por individuo; y
como fijamos para cada animal dos de manteca, se ñecesitarian
550.869, que es con corta diferencia lo* que se calculó para el«
consumo general. Todo eso nos hace conocer la aproximación
equitativa con que calculamos el número de estos animales en la
estadística.
£stos datos nos llevan también á considerar el producto de esta
industria, calculando término medio por cada animal que se vende
5 pesos ; darán en un año, los 544.998 consumidos^ un valor de
4 .724,990 pesos.
f
4Si —
Si se calcóla qde d capital gieneral sea de 2 pesos fot cábela^
tendremos que esta cria da un prodado de mas del 4 00 por dentó
anual á sus daéil«s.
DE L.4 CRI.Í DE CABALLOS T HULAS.
£1 caballO; animal el mas útil para el hombre, sirvió lie espanto
á los indígenas en tiempa de la conqnista , porque creian qoe él y
el gioete eran un solo animal. Ni este ni el mulo se conocían en
el Nueyo-Mundo.
£1 caballo es el solo animal que comunica por la generación
sus buenas ó malas caalidades. La yegua lleva 4 2 meses el potro y
á la edad de 4 5 á 4 8 años ya no concibe*
Por la estadúlic^ debía haber en 4859, 78H68 caballos y ye-
guas. Gradltto qué el número total de 59.S58 muías que se encuen-
tra en la misma estadística se divida en 5 partes y que dos deettas
se unen á la cria de cat>allos, la otra á la de los burros. Según esto
son 26.226 , que se agregarán en el cálculo á los caballos y darán
un total de 404.5^4^ entre mutas, caballos y yegoas. De esta suma
se debe quitar un tercio como peqnefios. Quedarán 74.596 gran-
des, y de estos considerando muías una tercera parte, solo tendría-
mos 47.751 que consideraremos como caballos y yeguas. Este nú-
mero dividido en dos dará 25.865 yeguas, de las cuales se debe
aua quitar una tercera parte que no paren ; quedan pues solamente
45.9-10 que producirán otros tantos hijos en un año (caballos y
muías ) , de los cuales se le debe deducir uaa pérdida del 5 por
ciento, que son en este caso 795. Nacidos y herrados serán, pues,
44.t45, cuya mitad se puede mirar como hembras.
Con este producto y bajo las bases antedichas , esta cria duplica
en muías y caballos á los 5 anos y medio. El número de animales
herrsídos, multiplicado por 7, 4 representará coA mucha euctilnd
al criador el numero 4e caberas que tiene de estos, animales, i
Sin perjudicar pues á la cria se pueden vender 42,000 al. año á
50 pesos, que darán im producto bruto de 460.000. Si calculamos
que el capital general sea de 20 pesos por cada animal iodistinta-
mente , tendríamos que este producHria el 22 por mn\» s^ coasi-
deiar el aumento de la cria.
DB LA CRIA DE LOS BURROS T HULAS.
£1 asno, antanal doméstico-, llevado por los españoles á la Amé-
4»
\
tmánm une i^eaBde y htítamo •que» Esvopa.
De la estadística resalta^ qoe hai un uúmemjóeA^.WIf álos
qne debemos unir por razón de la cría, la tercera parte de las ma-
las que se encuentran en dicha estadística, cuyo número será
'éfi.442 ; así teadremoei» tetal de 4 K.6I9 eadbeeK.'Qvifedaa este
h lerceía farte ueno peqneilOB , qoedatáe 4iS.44^||randes, ¿de
lae aiaies nbii$«peDie8 una dédm» aparte 4e melas. Tefldrsntea,
pues, 92.472 burros y burras, cuya mitad conMertraaiea «ceBio
.toaabn» y.de eilasameercera portea 4$j96i qoe «o paren. Con
ella nvestüo AUttlsiaiiiuKKO'será de S4.7t4, ^foe Úm «b un afilo
otros tantos hijos, sea de la raza de berro ó de raela, de les euales
hat ordinftriaflMttle una pérdida del 5 perck»t(^*f4.IMd). Qaeda*
fén por CMsi^HíeBte pera 4ierrer MAM, de4e^e eepúede étti-
Év mkád iiemiiras y mitad roaebos. "^
fiágniendo esta regla, se obserra qee á leedes efios f tmeseese
üieBs^ee la doi^ieacioii de la erta, y les dosílet de «lia pueden ¥«n-
jdsr 29,000 «somates ya berros deaoto; que peí* «e Iénfilii0í«ie-
áb de 42 peíos eedauneie produee» «i «rafordeStt.OOO peses.
8¿ celeelaaMs que d capital de 4 SS>04'9 Mirres y utulas (térmi-
■Ottedie) sea de e pesos *p<Mr cebe^ , lendrenos que> produeuria
leeoelmeBle á ram de peco mes del 29 por eiaote.
Ne ae bao puesto ett eueftle lee eebeiles ^pw ee Becetüee en e^
les reiaeliesy peeqne teinpoee se han ealeuMe lea buffot que son
ípudiq^iisdbles #n la cría de lae yeguas, y «uey oero secempeiisan.
lyU XA CRIA DE VARIAS ATSS.
Seerian'4MMbíen mdMftid de «tes'^eaiéstkus^que ay«»dan sobre
wnsera i la subeisteueia de l|t pMacioB ; pero estes eou demaeia-
do mmerosae pera poder dar de ettas aq«t>«Hi Idea Áveesslancfa-
Qfc, aunque ee puede aseguear q«e 4a «ria de gidlimie , paternas,
pi^ y payes es ano mas predac«ka ^piele de les eendek, es deet^
qoe da me del 4#0 por «lento de bi^Mido. Sí graduames sdla-
uaeoteq^s ei» teda la repdbUi» baya SO^.eoOpetseRee que -comen
diariamente un cuarto de estas aves, eeneoei^itSffiatí-'Se^. 099 al día,
y al año 7,500.000 , que á dos reales término medio ^ darían un
produelo d^ Í.$25;000 pesos.
CdenlandD^ Uimbi0nqwrt'dl}bledeeeeudamt9M( 4(99^99 per^
f
— Í85 —
sosas) coasameo diariamente 2 hneyos por cabeza, resaltarán
^O.MO dtarios y en un aSo ^f ^.SOO.000 fue darían un valor (i
estése la otra-^mtHad resultaría nn producto general de 2.993Í0OO
pesos, que es mas de la mitad de lo que rín«Je actualmente etí to-
da la república la cria de ganado Tacaño y cabruno, y dertaminte
con mucho menores gastos.
Indicadas ya todas las produciones de las crias, se puede itsu-
tth? s« ¥ak>r coiBersigiie.
Ganado Taícuno. S.TSTHSI
Ganado cabruno y lanar 4.642.730
Ganado de cerda 1.724.990
Gabaüos y andM. ..%...*. *m.é0O
Barros y muías. ...••.•• 548.000
Gallinas, palomas» patos y paivos. . . • 2.993.000
Totafl^eDSTal 40,923.851
Quedan aun dos animales que, aunque no producen yentajtt en
^«Mm, 80» de «Mt fraaáe nlíMftd al iMÉbre : el|fale y ei f^rro
llevados también de Europa. El primero es el único de esta especie
que se ba podido hacer útil. De dia tiene alguna dificultad par»
ver, porque se le contracta la pupila demasiado con la luz ; pero>
al^oerearse la noche goza de nna escelente vista. Sus bigotes tie-
v¡m «na grande senáhütdad y le. sirfen para «segurarse de la pro-
ñmdMad ée^le-queeMnlne.
En eottilo al perrey todo el mundo conoce su amor y su fideli-
dad, y mui pocas personas saben apreciarla. Su mas ardiente deseo
es agradar á su amo y es feliz cuando recibe de el una caricia. En
América no lo había, y cuentan los historiadores que los indios solo-
tenian perros que no ladraban. En el dia no se conocen , y es muí
probable que fuesen zorros domesticados como los que suelen en-
otmtrarsé redavis. 1M»S tléfiéo casi la misma figura del perro, y
HteelfosaeoiMtinífMran servirse adtgtmos indios para caiztin
Para mejor inteligencia de las produciones de las crias se han for-
mado los siguientes estados que sirven para compararlas entre sí, y
ademas dos caadros que pueden ser útiles á ios criadores, porque
establecen ciertas reglas peculiares á este ramo de industria sobre
un número dado de animales.
\
CUADRO que representa la cantidad de ganado vacuno , lanar
CALIDAD
de
ték cari.
JNámero
de
animales
existentes
en 1839.
N&aaro
de los
nacidos,
calculados
en 1839.
COIVDHO OniBaAL DB AimULBS
BK 1839.
Número JNámero Total
de animales de ,
consumidos animales
en el país, esportado?, anímale*.
MikMro
que queda
para él as*
neato déla
cria fg» 1839.
Ganado Tacuno. . . .
9.086.790
416.935
179.443
9,880
181 .Til
*
S35.313
•
Cabras JO ejas....
1.910.341
1.910.349
,1.313.589
707
1.513.380
397.063
Ganado de cerda.. .
363.507
362.496
344.998
»
344.998
17.498
Producto en dinero del ganado vacuno en un año.
Reses consumidas ps. 1.896.862
Retes esportadas » 171.031
Qaeso consumido » 746.198
Queso esporudo » 4.9fir
Leche consumida » 968.00S>
Total ps. 5.757. t3l
NoTi. La cria de ganado ráculo produce anaalmente nn 3o por ciento» calcnlando el capital
de 6 pesos por cabeza.
Producto en dinero del ganado de cerda en un año.
Cerdos consumidos ps. 1.734.990
Nota. U cria de cerdos da mas del too por xoo de producto anual, considerado 6 dos pe«os
por cabeza el capital. Las ates dojnésticas dan aanmas del 100 por 100.
f
y cerdos, so consumo, esportadon y sus productos awialeg.
Término
déla
aapBcaciMi
dekM
— imnics.
Precio me-
dio de los
' animales
vendidos 6
consumidos
P&OD
Arrobas
de qneso
consumidas ■
en el pais.
ocTo DSL Qmráo
BH 4838.
Ambas ToUl
de qneso de
esportadas, arrobas.
Prado
medio
en cada
anoba
de queso.
1 peso.
Cantidad
de botellas
de leche
consumida
en x839.
. Precio
medio
deles
botellas
de leche.
4afi0i.
10 pesos
en el pais
y 18 pesos
y 6 reales
en el es-
iraojero.
740.198
4.S76
750.474
80.018.080
'A de real
por botella
S afios.
4 peso
en el pais
y 1 peso y
3 reales en
el estertor.
8s.no
»
tt.aao
1 peso.
1.494.857
V4 de real
porbotella
■
1 afto.
5 pesos.
»
•
R
»
»
»
Producto en dinero del ganado lanar y cabruno
en un año.
Cabras y OT^ consumidas 9...... ps. 4.IHS.56a
Cabras y OTC^s esportadas » 4.444
Qaeso consumido -^....f n 89.00
Leche eonsamida..... » 46.714
Total •• ps. 1.049.730
Nota. la cHa de cabras y ovejas produce anualmente nn 3o por ciento calculando d capítol
á peso y medio por cabor.
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Numero
de madres que
dan toda sn
lecha i la tria.
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Número
de madras que
pueden dar sola-
, mente leche.
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A
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A
Numero
de animales
que se pueden
conterrar.
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Numero
de animales
que mueren
pequeftos»
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Número
de animales
que nacen
en un año. -
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1
AVES.
ÓIDBN DB I.A8 ATB8 DB AAPIÑA.
AVES DIURNAS.
Familia de los buitres.
Gavilucho (vuUur barbarus). La parle superior de esta ave es de
un moreno mezclado de gris, sus alas y cola de un gris ceniziento,
la parte mas alia de la cabeza de un t)]anco sucio ; una banda negra
rodea sus ojos y parte de cada lado del pico. Esta ave une i la anda-
zía y crueldad del águila la vorazidad a^iuerosa jde los buitres ;
prefiere la carne viva/ principalmente la de los cuadrúpedos que no
pueden resistirle ; hace presa de los conejos^ cabras ^ cerdos y ana
de los becerros. No produce mas que una cria al año y forma su
nido sobre las rocas mas elevadas é inaccesibles. Puede resistir al
hombre por mucho tiempo. Se les empieza á encontrar con sus ni-
dos á 2.250 varas de altura.
Samuro {percnoptere uruba). Es indolente, voraz y exhala un
olor repugnante ; prefiere la carne que e^tá corrompiéndose y los
escrementos, y en ello hace un gran servicio á los hombres, des-
embarazando la tierra de objetos cuyas exhalaciones pestilentes in-
festarían la atmósfera : por esta razón no se le mata. Anda en ban-
dadas y hace su nido en cuevas sobre las rocas mas elevadas é
inaccesibles ; da una cria al año y los hijos nacen blancos. Tiene
mucha vista, y su olfato no es tan fino, que desde mui lejos perciba el
olor de un animal muerto. Se eleva mucho en el aire, pero su man-
sión es en las partes cálidas, y no habita ya á 2.000 varas. En
Bogotá se encuentra á 2.800. Sigue la marcha de los ejércitos para
aprovechar los restos ^el ganado que se mata; así es que un cam-
pamento está siempre Heno de estos animales.
Hai un samuro de color blanco sucio , con alas pintadas de ne-^
gro y el pescuezo colorado, que llaman rei de los samuros (vuliur
papa). Tiene este nombre porque los samuros por temor le ceden
el lugar cuando se arroja sobre algún cadáver que hayati comen-
zado á devorar.
40»
Familia de los halcones.
t
Aguilote ( falco guayanemis ?) : especie peqaeña de águila. Vive
solitaría con su compafierar, bace siempre su nido en la cima de los
árboles elevados ó sobre la punto de las rocas. Se alimenta de
eame palpitante y lleva de la misma á sus hijos. Esta ave vive mu*
dio tiempo y es capas de pasat taM«eiBiiits sin comer, lo que po-
cos animales podrían resistir. Habita arriba de 2.250 varas.
Garicari {fakobrasiíimiií^: MvpsfnAsv pero capaz de remon-
tarse en el aire con gran rapidez y de caer sobre la presa con la
mima imperiosidad; Le sirven- de pasto los ratones, Ibs reptil^,
lo&paJaríñwBP f asn loa insectos. Yife s(A^ y apareado^ se mñiHene
solms la éauk ét há árboles é^ éaXw casafr, y rara ver ataca los coiv
raba en ^pié estáte las aveS" domésticas;
Gimlan {falecf. : es fiiei>te, acüfo^ y atrevifo ; lamayor parte del
tiempO' lo pasa^eseafamado sobre h» ramas de un árlx^ 6 en los
tedld» áb tas^easa»* ; ^^^^ '^^ consltoye su mdb y se contenta con
el "pt im«ro fue IkaHa; Ctiaaidb liifaenAra muete, el macho cuida
de los peiivelés bssliar ^ost eslés' pueiÉui proteer á su subsisten-
ciar. Se le pueée amansar, maniftséa una^ grande afición á su amo
y puede fácilmente aplicarse en auxilio de ios cazadores^ para coger
pieais pe<|ueillL&. Persigúelas paternas separadbsr de sus bandadas;
se aumenta áe carne pal^^nüs , busca Ibs pajaritos y pollitos ,
caecomo «na maza eobre-su presa- y lá airdbata con r&píder. Tive
en ia» par^ cflUáff y templadas»
AVES BR RAPIÑA NOCTURNAS.
Fkm'Ñia delns cerufess.
Mochuelo (sirüo cayennemis^ :.sealimanta.da pequeSos cuadrú-
pedos, pajaritos y reptiles., Es.uaa^ave-toffpeiíaa sadedumbra coa
la claridad del dia y no hace sus corisirías. sino un poco ¿olea de
nacer ó después de puestorclsol : en. el Jiesto de la noche elakjQuae
de su vista es igual al da las demás aves^durante el dia.
techuza ( &tnx mexicana ) : habila. ea los subterráneos y ea los
agujeros de ios troncos de los árboles ó en. los. lugares oscuros é
inhabitados. Jamas se le ve durante el dia ; mas en to&momiffltoa
de la aurora y el crepúsculo busca su presa ; se alimenU4aardi«^
?
iw'^-
Das i. jPuMpQr, ff, p#«MlQf( 4e ¿iferwtefciiyfirtM> 9» ^xmámoL 9ifpi^
ñas yezes á entrar en los patíos de lasJbMWJiii4at f JVÉeMte lo» po-
Dos luisjta d^jy^s^mmoe pflÍB«MiSi.JS«i grita^nodanvíaipaiioeal
geniUiOi iMtimeií» éa iiMfc piTaoBa iqoíMLiBflÉáaiidwguidOi U M
de varias especies^ Mti^ i^ímaiot;. iMust wfvia^ *
dKDKR ]»r LOS aomaienis.
Pamifía dé tos denttrósiros,
6»Í0haro : páj#ro^ A^t«riii9r fue* sola att eníBMBte^ akla» mftn>>
faíkis de. Garipe. y eii abHodaMía «rti^^iotm en la gcaA coeva
qoe lleva s« nofnbjrev £1 plwiejf tiene jm> etiar emtaSo elacoié
parda oacnr») BMudMida coi^ rafee y i9«9l€» negf»D; ia eabeet,
las alas: y Úncela están ieeh^nedaiB derfie^aeiae namclMa Uamou
con un ribete negf» ; m iafvnflo es pac» smyoir qaa ri 4s nna
paloDUit $« se9it)kiA9 iüisie y sps séf* püqiüter/y andes no fat^
den seperiai^, la. i|^pi;esioil^ do; h. loe^ El píio: es. eode»; eneoEvado
y armado de^áeelee debles» i^o» indkfs de Guipe ^ por la fiesta
de $« Jnaa imJ^ wlbree4e tas« peíneles 4» estos pájaras: pera
estraer la ff^m^m es un peeo- UqeidiK, (iespeifl»teiy eín olor f
tan pniu qne dura i»as íb m mo m bus» estado. Las nidos
están en los huecos de la cueva y particularmente .en.b» de h
bóveda, Gste pájiíiQ vive ¿ )ii: allmit día. mea de^ -l'*iM; vares y se
manüene de la fruto del árhal fMfy^á» «¡te. abumia ea los bos^
ques de les cirros di^ Cari|^, y aeieiper ta noehe vaies b«3ea de^
ella.
Sauce. PequeSo pajavo de ootoe vepde sido per íendHia f ama-
rillo, claro^p^ debajo. Cania wms> lee.canartee^ asAa en- baada*
das y se conserva ea janiaa»
Píoo de pMita* Pájaro da un. eeior Qentaevle, peqoeilay apnsN*
ciado solo 1^ sit^ caotO' %9a es ai;iadable* Se aeosinmbra fieU»-*
mente á la iauta.
GiKuüatá. AvB: peq«ie&8 de liadoa celares , laní nta^ alegre y
cantadora ;. se la tiene en jaula por b melodía de s6 leaaAa*
La paraulata ( iurdtis.^..,) , (^ puede enerar en pariMo^.can
el arrendajo, poi^ el canto, silva pfirfeeUsoeale apeeadiendo' reta-
zos de música.,, peca no es imitadora del canto día otros aniaia*»
les : su color es ceniziento claro y no tiene n^da de MUo» Oat otea.
\
— 492 — -
clase mits oscura qoe canta mas y á la qae gusta el aj{ , nendo
por esto qae la liaman ajicera.
Azalejo. Pájaro del tamaño de la paranlata ; pero m canta bien
y su color es un axnl celeste lindísimo ; la hembra es de on azul
sucio. Va en bandadas y gusta mucho del plátano.
Gálgulo ó Querrequerre. Este último nombre es lo que pro-
nuncia en su canto ; es mas pequeño que una paloma , su color
de los mas bonitos. La cabeza, cuello, pecho y vientre son de un
verde claro ; las alas son por encima de un hermoso azul , las
plumas mas grandes de un verde claro, y negruzcas.
£1 arrendajo (turdus) : tiene un hermoso canto y la particula-
ridad de imitar el de todos los animales, aun el rebuzno del asno.
Su color es negro brillante, el pico negro ribeteado de amarillo,
los ojos negros con un círcalo amarillo. Este mismo color lo tie*
ne en la cabeza de las alas, en el vientre , muslos y tronco de la
cola. Se Je mantiene en jaulas y -ya domesticado puede vivir suel-
to y entrar por sí solo en la jaula. Forma su nido de uña paja
mui fina y suave que teje en las ramas delgadas de los árboles
mas elevados, quedando colgados en forma de botella^.
£1 conoto es un poco mas grande que el afrendajo é imita
también el canto de otros animales ; pero es hediondo y su color
casi igual al del arrendajo, con sola la diferencia de que el ne-
gro tira á pardo.
Siete-colores (tanagra septieolor). Wjaro pequeño y lindo que
lleva esa misma cantidad de colores en todo su cuerpo, y particu-
larmente se distingue por la belleza de los de la cabeza, que pa-
rece un bordado de seda. Todos estos colores son vivos y bri-
llantes y es lástima que no se le pueda domesticar.
£1 verdecito {tanagra) es uno de los pájaros mas particulares
y lindos que se encuentran en Rio-Negro. Su color de un azul
brillante tirando á verde y todo tachonado de unas manchitas
menudas de un azul subido : tampoco se puede domesticar.
'Cardenal (tanagra). Pájaro pequeño y lindo de solo dos bri-
llantes colores. Las alas , cola y lomo son de un azul que tira á
negro, lo demás del cuerpo, encarnado; la cabeza negra con un
cópele encarnado, el pico y las patas negras.
£i negro-colorado {mnsicapa)^ del género de los hormigueros,
es un pájaro lindísimo por sus colores encarnado y negro ; este
último parece terciopelo»
1
— 495 —
£1 Ya^acabó es (amiiien ua pájaro del género de los honni-
güeros , que en su canto triste pronuncia k voz que le da el
nombre : suele cantar también de noche, y en los bosques parece
una Toz humana.
Yinotinto (cotinga pampadour), del género.de las cotingas. El
nombre indica el color de este pájaro que es lindo y no muí
grande : abunda en Río-Negro.
Cucarachero (regulus), kse mui pequeña de un color aleona-
do con pintas menudas negras y blancas; está siempre en movi-
miento , se revoletea entre las ramas y trepa por todos lados. Se
alimenta de insectos, gusanos y semillas. Sus huevos son del ta-
maño de un garbanzo, su canto se asemeja al del ruiseñor ; vive
«n tierras cálidas y en serranías elevadas.
Campanero {ampelis caranculta) , del género de las cotingas.
£s del tamaño de un cuervo , su pluma blanca como la nieve y
«ncima de la cabeza tiene un tubo espiral de mas de 2 pulgadas
<le largO; el cual es de color de ébano ; pero está variado de plu-
mas blancas. Este tubo tiene comunicación con el esófego, y cuan*
do está lleno de aire toma la forma de una flecha ; mas cuando
está vacío se queda en estremo lacio. Por esta especie de trompa
arroja el animal un grito tan claro y fuerte^ que parece el so-
nido de una campana y se oye á disi ancla de casi una milla.
Trompetero (caracina scutaía). Del mismo género de las co-
tingas : sus colores son hermosísimos y su cank) tiene algo del
'nombre que lleva.
El gallito de Rio-Negro [pipra rupieala)^ es de un color ama-
rillo naranjado y la cresta de plumas del mi^mo color tiene en
el estremo una especie de cinta color de canela claro ; son mui
lindos estos pájaros, y pelean entre sí como los gallos, erizando
las plumas. Se encuentran muchos en los cerros de los raudales
de Atures y Maipures y también sobre el Yentuari.
Familia de los tissirasiros.
Aguaitacamino, del género de las golondrinas : pájaro noctur-
ao que. sale á los.caminos después de anochecer y antes de ama-
necer; tiene un vuelo corto y l>ajo que parece que salla ei^vez
de volar ; en aquella ho:a se procura su alimento.
La gioJendrina es una ave que no necesita viajar mucho como
F. CEOO. 13
~v»4 — V
IkMOD «n la» olms {NiH6s<idel m«ado, Mpiti k8^«ÉlMi«nBs ; pues
^qui^Diicasi omistanies^porel. calor. DestcuyeiknncheS'iiisccte.'de
jqoe h«€eo4a principal aitnMiito. Gonstrayen fo&sUosca le»c«as
habitadas y en los agujeros de lo6 peñascos. Hai una especie foe
llaman iijerata, mas graikley de cola Jatfa qne aeabre en dos como
unas tijeras.
EL pico de tijeras : es una golondrioa de arar que tuela peluda
á las aguas^ surcánd^as con la parteinferíor de so picoa fin de ase-
gurar los peiecillos que encuentra en su camino.
Familra de los conirostres.
Trupial (icterus) del género de sa nombre ; pájaro mui canta-
dor, de un color amarillo de oro euia cabeza y iodo el cuerpo ; las
puntas de las alas negras , y su parte superior k) mismo con usas
plamitas blancas que forman una pequeiSa lista ; patas y pico ne-
gros y plumas negras en la cola. Guando canta eriza las plumas ide
lodo el cuerpo. Hace su nido en los estremos delgados de las ramas
délos árboles mas elevados y lo deja tloiar libremente para que no
puedan cogerlo las serpientes y otros animales que lo buscan para
devorar los piebones. Está en forma de botdla y la entrada se en-
coenlra de un lado en el lugar que principia el ensanche del nido.
Vive en fimilias; y así es que un árbol es como una poMadon : po-
ne la hembra de 4 á 5 huevos.
Gonzalito (cacique) pájaro casi igual al turpial^ omiscdo la dife-
retieta de tener el color amarillo mas subido sin el blanco en las
alas, y mía mancha negra debajo del pescuezo ; caniabien y bace
unos gorgeos mui largos. La hembra no es tan» canAaéoea oomo» el
macho : Tiven en familia y forman el nido comojos trapíales.
Viudita (vickta), pájaro pequeño, todo negro y brillante eomoun
raso con una lista blanca al rededor de la cabeza , en la partea su-
perior de las alas, en sus puntas y en la cola ; lleva copete, es viva
y alegre, pero su canto no es agradable.
Ganar io (fringilla granatina) , es un poco mas grande que eF
de las islas Ganarías y su color de un amarílio mas subido. Luego
que ha escogido su compañera, la ayuda á la eeostruceion del nido,
reúne con ella los materiales necesarios y cuidan ambos de la súb-
síslencia de la familia.
Tolditos (orioltts niger)j'peqne^m pájaros <|ue van ^n grande
;
^ntvo "■ '
kaadvias ,<di»r«l8Bdoio8ftaiDpiM de omm ; la.eolor.es dd>un ü^-
gro oambiMile q«e lefl^ iodos los .iHS08<ilel^acero ft>rimido.
Pamiliü denlos tentHr&stros.
m
Tacasilo de montana (merops) , peqoeito pájaro de «n verde
tltornasolado y oabeza grande ; se masliene de-frutas é insectos. Haí
otro de diferentes colores mui vivos y brillantes ; su fioo y patas
son encarnados.
Tacnsito (trochUtes) de variasespecies por su (amafio y cotores.
Todos son atornasolados y el fondo verde de varias gradaciones;
)os hai dorados, azules y color de fuego ; todos ellos según están he-
ridos por la luz representan diversos visos que centellean el fnego
^e los rubíes topacios y esmeraldas. Son mas bonitos que las mari-
posas y andan de flor en ílor chupando eln^tarcon sus largos pi-
cos, sosteniéndose entre tanto en el aire con el ráf4do movimiento
de sus alas. Si son notables por sus colores , lo son también por su
estremada pequ^ez ; algunas de estes avecillas con so nido pesan
un cuarto de onza. Este está formado del algodón de ceiba, y los
huevos que ponen en él son mas pequeños que un garbanzo.
Colibrí, ave de las mas pequeñas y de plumas mdi hermosas : no
es posible mantenerla en jaula á causa de la dificultad de procu-
rarle el alimento.
Carpintero {pims robustus) es de un color blanco con pintas
3iegi:a$> Ueva^uit copete encarnado, el pico y rías patas negros. Los
bai da varias clases y todas ellas trepan por los árboks que agu-
jerean con la fuerza de su picO; haciendo un ruido tal^ que á vezes
parece que se desprende la rama de un árbol. El nido lo hacen
jredondo> en los troneos de esdos, abfi^idolos^con tos picos y Jos
|M6s, y la íámíUa que allí crian mo ae dispessa. Se alimenta de
av^pas y frutas.
El piapeco (fomphufiu^) llaioado, tambí^ tueaa, diostedé , ó
pico de fraseo. 6e:dteeata defrialas, ataca ttinbien los pajjarillos
¡y .coge lQ»teievoa de los nMas. Vada bajo y en línea recta ; se ven
an^grqpoa de 8 ó<40 posadosaofeHrela cima 4e los árboles ims «1-
..to» CooM> oalieüB la lengua. Swble^ cogo m presa.eon los lado9 é
~ 496 —
t
la ¡yanta del pico, la arroja al airo y la redbe en el garguero. La
parte superior del cuerpa, el vientre , ala$ y cola son negros ; el
bnchC; cuello y mejillas de un amarillo naranjado^ algunas blancas
con rayas naraojadas ó bien encarnadas ; la piel pelada que rodea
los ojos es encarnada ; una línea negra separa el pico de la cabeza
con una banda triangular amarillo-pálida ; la parte superior del pi-
co es azul claro ; los iris de un azul brillante ; las patas tiran á gris ;
las uñas negras. Se amansa fácilmente y toma el alimento de la
roano : cuando vuela lleva el pico horizontal. De esta clase se co-
nocen cinco distintas y entre ellas dos que tienen el pico mas del-
gado ; habita hasta 2.000 varas sobre el nivel del mar. Hai tanta
abundancia de ellos en Hio- Negro, que los indios se sirven de las
pocas plumas de estas aves ( las que tienen en el pecho coloradas y
amarillas) para todos sos adornos y para los Qecos de los chin-
chorros que se fabrican allí para vender en Angostura,
Samurito (cro/opAa^a ani), pequeña e.peciede cuervo, pero
hediendo como los samuros ; son negros y viven en bandadas ;
muchas hembras ponen en un mismo nido. Comen toda clase do
inmundicias y particularmente las garrapatas de los ganados y ca-
ballos.
Garrapatero (crotophaga major?). Es un pequeño pájaro con
copete de color pardo oscuro y el víeqtre amarillo pajizo ; se man-
tiene costantemente sobre v\ lomo de los aiiimales que están pa-
ciendo y los limpia de las garrapatas que tienen en el cuerpo, ha-
ciendo de eslas su principal alimento, así como de los gusanos y
larvas de insectos que se hallan bajo la epidermis de los bueyes hasta
el momenfo de su metamorfosis. Pónese este pájaro sobre el lomo
del buei y le rompe la piel con su pico para sacarlos, viniéndole de
aquí el nombre de pica-buei : es pájaro útilísimo por este respecto
Á los ganados.
La guacamaya rosada {ara maracaná) es 43ña hermosa ave que
vuela en bandadas y siempre aparejados macho y hembra. Se posa
sobre las ramas superiores de los árboles mas elevados y se alimenta
de granos y de frutas , preli riendo. la de las palmas : también gusta
de los granos del café y hace mucho perjuicio en las plantaciones.
Hará vcz baja al suelo á causa de la longitud de su cola ; se ie
amansa fácilmente, pero no habla sino con miicha dificultad y gri-
tando repite la palabra ara ; lo cual ha sido origen de su nombre.
La Itembra hace su nido en los troncos de los árboles viejos, y pone
1
— 197 —
dos huevos blancos. Las bai coloradas con alas amarillas y, azules^
amarillas con alas azules y coloradas [ara rauna] , y de un azul
tirando á verde con atas coloradas y amarillas (ara militar), pero
todas ellas de igual tamaño y con las mismas costumbres.
Catana azul [psittacus acamil). Especie de loro pequeño de lin-
dos colores y formas ; las bai vr rdes con la cabeza azul y las alas de
diferentes pintas, otras con la cabeza verde y la cola y alas de va-
rios colores. Hablan mucho y su voz es mui agradable : habitan en
Rio Negro.
£1 calzoncillo, loro mui pequeño del famaño de los pericos (psit-
tacus maipures)y tiene sietecolores lindamente distribuidos; negro,
azul, verde, naranjado, amarillo claro, colorado y color de canela.
Silba mucho imitando el canto de muchos animales ; entre otro3
el grito de los monos. Estos pájaros viven en bandadas en las
selvas de la Guayana y son mui apreciados por sus escelen tes cali-
dades ; porque ademas de sus formas, colores y canto, son dóciles,
graciosos y mui cariñosos con los que los cuidan.
El perico {toni-ete) tiene la forma del loro, pero mui pequeño :
es una tribu numerosísima en que los hai de varias calidades. Van
en grandes bandadas y en su vuelo hacen una gritería estraordina-
ría. Los hai amarillos con las alas verdes y coloradas, todos verdes
y la cabeza de un color amarillo sucio, de un verde claro hermoso
con picos y patas blancas, y otros mucho mas pequeños de un verde
lindísimo con alas azules y vero'e mar. En fin , oíros de un verde
subido un poco mas grandes. Todos ellos se pueden domesticar :
hablan un poco menos los de las alas azules.
Loro (psittacus). Su color generalmente es de un verde hermoso
con pintas amarillas ó coloradas en el tronco de las alas y en la
cabeza : la cola y el resto de las alas tienen plumas variadas de
amarillo, colorado y azul. Se domestica fácilmente y aprende á ha-
blar. Los loros van en bandadas y cuando caen sobre un campo de
maíz, (o destrozan. La cotorra es roas pequeña y habla mucho mas; .
tiene el pico blanco y el color verde mas claro. Los loros de Rio-
Negro son mas grandes, de un color verde amarillento y mas tor-
pes para hablar.
— 49a —
ÓRDBR DI LAS GALUNIcEAS.
!
PaDji de oopete {craxaleoior). Este' especie tiene oerca de 5 (úes
de largo, sO'COpetei es espeso y las plumas están risadas en las pon*
tas. Esnegco en esta parte, la cábela y dcoello blanóos oon la
pmnta de Iss- plumas negrasy el>resto del coerpo pardo color de avei-
llana, mas claro por debajo ; el pico y patas son de un gri9 eeñoh^
úeñiOi Esta aye vive en los bosques , se amansa fácilmente y se la
podría reducir al estado doméstico ; su carne es mui suculenta y á^)
un sabor agradable ; soplíria-al pavo siendo mas fuerte y teniendo
la carne menos seca que él. Atendida su fría tranquilidad, se puede'»
decir que esta ave ó no ve el peligro ó no quiere hacer algo por eyi"
tarlo cuando se halla perseguida por los catadores* Se le encuentra .
diundantemente tanto en la tierra caliente como en la templada*
Pauji'de piedra (craxpauici). Su cabeza y cuello están oubieiw
tos de plumas corta» que tienen la aparienda de un terciopelo nen
gro,^ el resto del plumaje es de un negro brillante oon un viso*
verdoso ; tiene blanco el abdomen y es del mismo color debajo de
la oola ; las patas son enoarnadbs y el iris pardo; el pico > es de un
oueamado brillante y la prominencia que le domina es' de color de-
pizarra. Esta ave vive en grandes bandadas que se posan sobre los
árboles y hacen el nido en la tierra. Ordinaríamente se encuentraní
en los bosques de la serranía en que no bai muetio calor. Suelea
hftbilar de 4). 200 varas para arriba. La hembra conduoe sus pollos
«orno las gallinas^ Se alimenta de gusanos é insectos, pero'prefiere
las fruías y vegetales. Se amansa fácilmente y puede reducirse ai:
estado doméstico, pues su carne es buena para comer y se psorece á
la. del pavo.
Pava de mcmte {penelopecumanensis). Es el ave mas grande
de su género, pues tiene cérea de2 f/2 pies de largor El color de la
superficie de sucuerpo es negro intenso ó bronceado con un reflo*^
jp verdeó aoeitiinado ; la- plumas de la oabeaa foitnanuna ejpede
^copete que el animal puede bajar ó levantar como qtiiere ; la.
mayor parte del cuello y el ipecbo* está mesquenda de blanco ; cada,
pluma tiene un ribete del mismo color ; las mejillas están desnu**
•das y son de un color violeta purpurino. El iris es pardo rojizo , el
pico negro y las patas encarnadas. Debajo del cuello tiene una piel
de una escarlata brillante. Esta ave abunda en la Guayana y su
carne es mui buena.
1
^m^
Guacharaca (parraffuas). Ave que vive en bandadas y su canto
dice la palabra de su nomÍBre:.efi«ad*iemi^íeia áx^ntar en los bos-
ques en donde se mantiene, las demás bandadas responden inme-*
dlalaiiieDle fonfHvndé una gntwía» eslra#vdfi»fia^ E» mas grande
quitiuiia gallina^ su color p^ffdo osooMi^aeeitfiMda y coDícola y pa*-
taB^argM ; saltaide rama en ramay corre nmebo en elisu^loj pop>^
qtM» su Toelo es algo pesado* Se 1^ puede reduein fácümonte al es**
Mo doméstioo, y es su^carne de ungiteto agradable.
Paloma (^timto^/Métf). Éntrelas numerosas ares «de esta
género debe colocarse la paloma de*Rio^égro como una de las
mas bellas. Los* colores <]e!roacbo son mas virosque los de la bem<^
bra : la cabeza-de un color azul con tornasol morado, el pico patas
yojl^ eaeanmdos ; el pecho color de vioo tinto con yisos^enoanuK
dos y amarillos, el lomo color de avellana claro ; el pesou^o blanco
y negro muí brillante ; las alas- y cola de unicolor de avellana os-
curo con cintas blancas y negras. Su longitud es de9 á 40 pulgadas*
ysn canto no es^tan triste como^ de las otras. La paloma monta»
ñera tiene el segundo logar y la turca y la poneha el tercero. E^
numerosa esta espede en todo el país y hai individuos de ella tan
pequeiios como lindos. Escepto las- tres primeras que van solas ó
apareadas, las demás so encuentran en numerosas bandadas, su car-»
ne es muí delicada y apetecida. Llimanlas tórtolas (columbatur^
twr) y las^liai de varios colores^ lo mismo que las que se designan
conocí nombre de palomita de collar (columba risona).
Codorniz, llamada vulgarmente perdiz (colinsj. Tiene el lomo*
pardo ondeado de negro y un poco bMnqueetno sobro los- ojos. Es^
comida mui'deHcada. El maeho^leja oír un canto que se imita con«
uu pito para coger la^ hembra ; estaponede '1 4 á 4 8 huevos : con»^
truye su nido sobre^latierra con yerbas-y hojas. El macho no ayu-
da á la hembra'cn estfe'trabajo y se queda allí parado oomo un»
centinela ; pero se junta con ella para conducir y proteger la cria¿-
Los- perdigones eeban á correr luego que^ nacen , y la madre tlMie
con ellos mnetio chidado y manifiéstala mayor ternura;
Tigana Esta ave es de un pié-delargo, sus oolores'son gena-
ralmento pardo rayado do negro y las patas amarillas. Soamanstf*'
fáéilmeiitey litfipia'laaeasas'do los dnseetos' y sabandijas* Tteno^el^
pescuezo largo, i e9té' siempre triste y-camioa-con lenttittd y ca«^
téltti
— 200 —
ÓftBBR DI LOS ZAHCÜDO0.
t
Grulla {grus americana) y de la clase de los caraivoros. Esta her-
mosa ave que reuoe á la elegancia la variedad de los colores, se e&-
cuentra en abundancia en Rio-Nej^ro ; tiene 2^/2 pies de alto. Sa
pluma es negra con reflejos azulados sobre el cuello y espaldas; loa
primeros guiones de las a)as son negros^ pardos los otros. Dos man-
chas blancas y grandes realzan el fondo de su manto ; una orejera
ancha de un hermoso blanco en las sienes y de un encarnado vivo
sobre las mejillas envuelve su cabeza y desciende hasta debajo del
pico ; una toca de pelo negro y espeso cubre su frente, y su copete
bastante tupido de color de isabela termina en un ramilletito ne-
gro en cada pluma ; su iris es blanco , el ¡hco y las patas negras.
Esla ave es de un natural dulce y se acerca al hombre con confian-
•
za; en S. Fernando de Río-Negro eslá domesticada y come en los
corrales con las otras aves. Se posa en las ramas de los árboles
para dormir y se alimenta de semillas, yerbas, insectos y gusanos.
Guando canta se percibe un fuerte sonido en su vientre mui dife-
rente del canto; es sordo y profundo, y parece que sale del ano. Se
remonta mucho en su vuelo y siempre viaja por los aires en gran-
des bandadas formando un triángulo isóseles.
Gallito de monle (psophia crepiians). £s un pájaro de bonita
presencia, casi del color de la guacharaca, del tamaño de una ga-
llina. £1 pico es verde y encarnado, su plumaje hace un vj^o acei-
tunado ; las patas son coloradas y verdosas. Canta levantando el
pescuezo y hace sentir un sonido doble como el de la grulla. Se
amansa fácilmente y come con las demás aves de corral. Parece que
tiene antipatía á los niños á quienes persigue á picotazos por los
pies. Vuela mal, corre lijero y vive ai pié de los árboles. Su carne
es buena.
Garzones {mycteria americana), de la especie de las garzas rea-
les. Tiene debajo del gargüero un depósito en que recibe el agua
que traga con los alimentos, en lo que se asemeja al pelicano. Su
cabeza no eslá cubierta de pluma, pelo ó pelusa y esta desnudez le
da de lejos la apariencia de un pedazo de madera ; los ojos sin pár-
pados ni apéndices parecen embutidos en la cabeza y la hacen toda-
vía mas disforme ; su pico se compone de dos largas piezas huesosas
con las que hace un gran ruido cuando las limpia. La parte supe*
J
204 —
rior de ias alas es negra con un reflejo azulado ; el vientre blanco*
Tieneias patas largas, íft^s y yerdosas» los maslos del mismo co-
lor y sin plomas, asi como el cuello que es todo negro con un co-
llar colorado. Se le encuentra ordinariamente á las inmediaciones
de los sitios pantanosos , vive solitario, se mantiene mucho tiempo
sobre un pié como las grullas y se alimenta de pescado, quedes-
truye en gran cantidad. Es del alto de un hombre y no se ve sino
en las sabanas á las orillas de los caños y esteros. Es ave de tierra
caliente.
Gayan [tantalus lucnlator). Especie de garzón, pero mas peque*
ño. Vive en bandada.^». Su color es negro y blanco y su carne es
buena para comer : tiene las mismas costambres que el garzón.
Todos los años se ven grandes inmigraciones de estos animales pro-
venientes del Brasil , á la salida de las lluvias ; pero no se sabe
que regresen ó emigren para otra parte.
Garza morena (árdea). Ave pescadora: se mantiene en los ár-
boles cerca de los rios , en las orillas de estos y en la de los caños
y lagunas. Descansa frecuentemente sobre un pié. Su color esceni-
zienlo y su carne ofrece una comida escelente y abundante, porque
es ave bastante grande. Vive en tierra caliente.
Garza atigrada (árdea). Se halla en la Guayana en las sabanas
solitarias, frecuenta las orillas de los rios y caños, y se alimenta de
ranas, serpientes y otros reptiles. Espía su presa con el mismo aire
melancólico que caracteriza á toda esta familia. Construye su nido
sobre la tierra y pone 7 ú 8 huevos. Se amansa algunas vezes, pero
se oculta entonces en todos los rincones. Hace la guerra á los rato-
nes con tanta destreza como un gato. Esta ave tiene como 2 4/2
pies -de largo y el plumaje de su lomo y alas es de color terroso
con muchas rayas trasve^^ales y pardas ; la cabeza y el cuello son
algunas vezes mas pálidos y las marcas oscuras tienen mas bien la
forma de manchas que de rayas ; el vientre es blanquecino cruzado
por las mismas bandas morenas.
Garza blanca (árdea). Ave triste y de poca industria ; pasa su vi-
da en las orillas de las lagunas y rios en unión de muchas otras ,
contenta con sus ranas y pezeciilos ; es mol flaca y su carne no
sirve para comer. Hai entre ellas algunas rosadas con plumas muí
finas.
Pájaro-baco.( Aero» butor). Especie de gar^ de color leonado ,
se mantiene habitualmeiUe escondido ett medio de los Juncos y yer-
— 2M:^
\
ba» aooálíeiS) inmébü'yd pico levantaéy^ al- oídlo. Calido. etata»-^
cado« 98 d]»fie&4e con* valep y daiá-sasvenenAgoaíQertMí pioatlAM ;
piro tiene un terror pánieo ¿ losaMMirot^ de 1m cuales' hiife..Sfc
e» per^e^ido; bwsca logar para eteooderse^ pemeado lacahMa eat
alfana parte oenlta^ le parece eetar en salvo amiqne el. reato- áA.
caerpo esté deseabterto. Eatónee» le atacan con foría loa samaioa
y en esta díspasieioa es Wctíma de ellba* Dorante la nodie hace oír.
una espede de gmmido iúgobre y se nntrei da insectos, límala^ ra«>
ñas y pequeños pescados.
A4oaral>an cabezón* (carandnaéj. Esta» ave» van siempre aparea-
daa, se maniieaen en las praderías para boacar en ellas los gusanos
y tíenen^espelonea en las ala». Sti color es oentziento y el vientre.
blffiíOD con maneha» negras ea el cuello y ala»; ciertas plomas la'
salen- de la cabesa tiradas>en forma de cola hacia atras. Estas aves
son de noche como una centin^aique al nienor ruide edian nor
fuerte diillido y<se alej^ dél.$iiío ; so vuelo ea corto- y algo pe-
sado.
Pato cuchara (|9Ai^a/«a olata^. Esta ave debe«i<Dombreá la
forma de su pico ; su tamañoes poco masó menos como el de las
garzas y su pico tiene mas de 8 pulgadas. El color de ella es todo-
bJaneo, si bien, hai' algunas de un rosado pálido; los> pies son ne-
gl«s. Freéuwilan'los pantanos rodeados dé árboles, soreles cuates
haceu'SU nido escogiendo los maa elevados. Se alimenlan de pesca-
ditOí^^ reptiles y gusanos, m*. pico les da la. facilidad de buscarlo» en
el fangOi Cuando están en peligro ó enec^erizados) tiaeen cast«me-*
tear con> preeipitacimi< sua maadümlas y este esel único son que se^
Itfoye;
Gsu9a(y{pmraja9ani^?)i fis^db un color casiano con pmta» mes-
nadas blancas y va siempre apareado. Su pico es largo y un poeo
encorvado; su'canto^gudoy de su'smido se origina el- nombre que
llena. Gritan* mueho de noi^e y también cuando vudbtn ; se maa*-
tienen en los enteros de las llanuras, nutriéndole de pe8eadill09>y
b'
Ásmea'ipalamiBScUíiemmíUáli^ Esrunaave^triste del tamaño de un
pa90';:peiH»»n carae'al tacto^pareoe toda esponjosa. Su^solores-ne-^
gPú y biaaeo*; llene-espaelas^ en loaettcneatnoa de.larala» y de laa
patas ; su canto es triste, su vuelo corto y no mui elevado. Se le eor-
cuentra constautemaiiteeni las sabanas y en> leK> logares panteíosos
Uamadl>s'esteK084< Bá ttóü^aoMAióaile: y Hm habafti osla? estidft >ea¿
;
— 2»»: —
oióelta Adeudad f hacen, de nodie^sobt^ toáO| oír; s« oanto qüe^fle-
asemeja al rnido de nna voz muí fuerte.
(Mlioeta' da ajgna {fWiewmartiniea). Su longilüd es de un
pl¿, sü p\m asnaríllo en. la ponta y rojo- en el naelmiento ; lar
frente del mismo* eolor asi como las patas; todo el ^ plumaje par-
do escaro, miH'eno verdoso por' encima, blanquecino por debajo;
una línea blanca guarnece las alas. Vire d^ pescadüos y yerban
aonáticas» Como este gallUo tiene la» alascorlars, vuela poeoyUe-
Tia los pies colgando. Nada poco también y p^manece oculto en-
tre las caüas y juncos-; frecuenta la» lagunas y su' nido colocado
á^la orilla del agua está constmido con pedazos de caña y juncc»
entrelazado»; ta madM deja- el nido todas las nodies. Los hait
de diferentes^ tamaños y de distintos colones ; pero todosr con lasr
mismas costumbres. Tienen un espolón en el encnentro de las
alas.
Flamenco ó pi]9Toso\á^O'(phoBniúopteru9 ruber). Habita las^
orillas dd maren'bandádasque^aiimentan'deineduseos y pescadi^
tos ; mientras hacen su pesca metiendo la cabeza en el agua, una'
de ellas está de centinela para advertir del peligro en caso neeesa**'
rio. El color es todo rosado , y como son altos y se mantienen en ba-
talla en las orillas del mar, inmóbilés, atentos á su pesca , de aquí
sin duda les vino el nombre de soldados; La hembra' construye su
nido en medio de los pantanos, elevándolo desde 4^ pulgadas hasta
2'pies, semejante á un cono truncado ) cuya cima está hueca : pone
en él dos huevos queempollá manteniéndose á horcadillas sobre el
itído. Se domestican fácilmente, pero entonces pierden süs bellos
colores y se ponen casi 'blancos : parece que el agua salada le hace
falta é influye poderosamente en el'coloridode sus plumas.
órDBir 0r los* aguáticos.
ZomhuWiáor (podiceps americanus). Krc que no vuela pero'
que nada con mucha facilidad ; cuando es perseguida^ sesumerge en
el agua y no saiet)fra vez sino á mal' \kv^w dlstanda^déllügar de'
sfiinmersion. Sé mantiene en lós-lágos'ybacesu nido en los^jun^
COS.
dotáa- [earb&f : espédedc pato que •vlre.en bandadas en los laígoy ;
sn-colOres.'pardO'Oseiiro easitnegro ytiénolás4iiiraiasKK»tifmbres^dé^
— 204 ~ ^
los palos. Por su modo de mirar eon la cabexa leTtBtada, par^eee
una ave estúpida ; se mantíeoe largo tiempo en los árboles Teeiuosal
agua.
Cuervo {platus?). £sta ave vive en el agua y se mantiene tam-
bién como los alcatraces en los árMes : los hai de agua dulce y de
agua salada ; ambos son negros^ estúpidos y muí voraces. Nadan ma-
cho mas que vuelan , y cuando son perseguidos se sumergen y salen
lejos del lugar de su inmersión.
. Alcatraz, ó Xococo {pelicanas fuscas) : pájaro grande que habita
las costas del mar. La envergadura de sus alas es de casi 9 pies. Se
balancea lijeramente en el aire , y cae como un plomo sobre el pes-
cado de que hace su presa. Se reúne algunas vezes en bandadas para
pescar, llena el saco , que tiene debajo del pico , y se va en seguida
á digerir con comodidad sobre la cima de alguna roca ó sobre las
ramas de los árboles. La bolsa que tiene puede contener á lo menos
40 botellas de agua. E!s mui voraz y come de una sola vez tanto
pescado como seria necesario para la comida de 4 personas. Ge-
neralmente suelen volar casi al nivel del agua y solamente se ele-
van mucho en las tempestades. Reposan y á vezes duermen encima
de las olas.
Pájaro-bobo {sula). Este pájaro se llama así {)or su grande es-
tupidez, pues se deja coger con la mano sin tratar de huir ni defen-
derse ; no puede emprender su vuelo sino hallándose á cierta altu-
ra, de la que parte para asentarse sobre el mar y cazar los peze-
cillos que nadan sobre la superficie del agua. Apenas deja las ribe-
ras. Las islas desiertas están llenas de estas aves.
La gaviota [procellaria puffinus) es una ave pequeña que se
mantiene en grandes bandadas en las playas desiertas del mar ó de
losrios. En la arena es donde deposita sus huevos y cuando alguna
persona pone el pié en aquellas playas, se alborotan todas las gaviotas
con una gritería estraordioaria y en lugar de huir revoletean sobre
la cabeza de las personas y se lanzan contra ellas para picarlas, pu-
diéndose entonces malar hasta con palos.
Pato-real ( anas ) , Su mansión es en cenagosos ancones, en lagu-
nas y esteros; construye su nido con pequeñas ramas en la horquilla
de arguQ árbol , pero mas comunmente en el hueco de un tronco.
Son numerosos sus huevos, pues llegan á una treintena en cada cria»
La hembra se sirve del mismo nido durante muchos años; nunca
va en compañía sino de tres ó cuatro^ y se amansa fácilQiente. £i»
;
205 —
del tamaño del pato doméstico y mucho mas hermoso , á causa de
)a belleza de sus colores.
Pato-carretero (anas). Ave de paso que va siempre aparejada ; el
macho es ud poco mas grande que la hembra; su color es pardo
oscuro con pintas blancas y negras ; su carne es muí buena. Si se
roa(a la hembra , el macho ni siquiera intenta huir^ pues se queda
cerca de ella de manera que da {figaral cazador para cargar y volver
á tirar. Se encuentra en las playas y en los esteros. Se mantiene de
pe^caditos y también suelen comer una yerba llamada carretero;
pero entonces su carne tiene mal gusto. Es fácil de domesticar. Sus
emigraciones son cuando el Orinoco comienza á esperimentar las
primeras crecidas, es decir, después del equinoccio de la primavera ;
se dirigen entonces en bandadas á la región austral hacia el S. S. E.
Abandonan el valle del Orinoco para pasar al de las Amazonas , ún
duda porque la profundidad de los ríos por la creciente de las aguas
y la inundación de las playas les impiden coger los pezes , ios in-^
sectos y ^os gusanos acuáticos. Cuando van hacia el ecuador, están
mui gordos y sabrosos ; pero cuando regresan ^ que es en setiembre,
es:án flacos ; entonces se bailan acompañados de los gavanes, los
cuales ofrecen un alimento escelent^.
Pato-comun (anas). Los hai de varias especies y tamaños en las
lagunas, esteros y caños , y lodos de carne mui sabrosa y mas esti-
mada que la del pato doméslico. El agua es en parte su elemenlo ;
su modo de andar es lento y embarazado ; su voz mui desagradable.
Güires. Patos pequeños y mui gordos cayo g^ilo es güiriri que
repiten á menudo ; así es que se conocen también con este nombre.
Su color y tamaño distintos , pero en general son pardo-oscuros con
manchas blancas y negras ; su forma y costumbres como la de los
patos. Viven en grandes bandadas y se mantienen regularmente en
las lagunas y esteros en que pueden pescar. Son mui gordos y su
carne mui gustosa ; abundan considerablemente en las sabanas de-
siertas entre el Araiica y el Meta y los hai en toda la república. Se
pueden domesticar fácilmente y se encuentran en este estado en
Caracas á la altura de -i 04 1 varas sobre nivel del mar.
\i
im —
JLVES DOMÉSTICAS.
\
PafáMMal (.pao'iírktaius) de la ckfie deilas.gayiaáeeas, fiíta
Jwnneaa ave esoriguiaria del Asia ; la hembca aimqiie liene la crMia
y oolaidonio elmaelio, na Ueae tan brUkintos «olores ;.pone de 5 á
^ huftfos bUmqueoinos-en un paraje.ocDUo fraca q«e el-rnaabo no
te vea, perqué de ioienlalos remperia. Tardan los pichones 25. á
;30 días en salir. Los payos.reales blanoo8:no s^ oomunes. Sus ojos
son yisibles sobre la «(ila.por.una sombra lijera. £stAs aves se en-
.cofintran^ea Asia y África ^ peco ks mas hermosas se venen las Ua-
nnras'de la india y á las iomediadones del Ganges. Los romanos
;las buscaban mueho y la Biblia dice que Salomón las iriijo del
Oriente. En los üempos de la caballería se servia un pavo-r«al
asado y adornado de sus plumas sobre 61 que hp ^b^lleros presta-
lian juramento de haeer algunos .grandes hechos de armas, y dicho
juramientoerasa^rado p«ra ellos. £n el pais prospera^ bien yse,tíe-
.ne solamente por lujo.
Pavo ( meleagris gallo-pao ). Esta ave de la familia de las, galli-
náceas, originaria de la América setentrional , no ha sido eanoeida
en Eufiopa hasta mediados del siglo xvi en que la introdujeron Ids
españoles. Aunque desde pequeño teme el frío, vive en grandes ban-
dadas en lasselvas del Canadá^ que están cubiertas de nieve las Ues
.cuartas parto decano ; ^ mas fuerie alli que en.el estado domés-
tico y.pasa basta «40 libras. ^u ^ttm^je>masiiermoso es de un ^m
osenro y goarneoido en las. estcemidades de las .plumas de un bri-
llaotecolor de^oDO. :El pavo «e encoleriza Dáeilmenie y persigue á
picotaaosios inuehaeosy los perros ; pero un gallo le hace ewrer.
Cuando él ha heobo huir el ob»ieto de su aversión, desplega «en
.orgi»Uo.8a4>ltimajey hace la rueda .como el pavón, dt^jaiklo oir un
iaoniáo deapeobaeioQ.:La hedibra pone ^8 ¿ 20 huevas ^e^enUa
al fin^H), el que los r^o^ria por no estar privado de ella:; y.es
tal su per^ev«ianmf«»i eneubrirloSy qoemuchas veoes se muere de
hambre sobre ellos. En Venezaela prospera bien y se cria en todas
partes con mucha ventaja.
Pato (anas aquatico). Esta ave es taii común, que creemos
inútil hacer su descripción. Parece que en Europa no fué conocida
antes del descubrimiento de la América y de donde se juzga que trae
;
4m
sa origen. Se cria en mucha abundancia en todo el país, dando
grandes ventajas á sos criadores.
Ganso ( anas), de la familia de los palmipedos. Los gansos sil-
vestres emigran y yan á pescar en iovierno á los paises del medio-
día-^n que :hidlMi aguas quemo eslán lidiadas. Yáiete» «q bandadas
iomiiedo des Uiftaaniafaradas , ^de múio «que haeoí un ájipitoff n
cuyo véctiae va «n.maelio. £1 s§aiMo4om46lico es de la miama es-
^^e y Uega á ser iUn objeto de grande .utílidad por^us pliiiBas, pe-
lusa, carne y grasa. En Venezuela apenas hai alganos, á pesar de
que prosperan perfectamente.
Pintada, gallineta ó gallina de*Guinea (numidia meleagrü).
Ave orígiiíada de África y pcirapalméate deLpais.de iirgel , de la
jámiliatdeias galUnáreas. La pintada tiane la cabeza sin. plumas ^ Jtas
•barbillas earnoaBis debajo de las mirillas , la cola coria y ¡una pvo-
minencia huesosa encorvada hacia atrás sobre el cráneo. Se llamaba
aalifiuainHile gaUina de Mdeagxa ó de numidia. Los romanos
ila JÉisfiaban para Ja -mesa y costaba caro. Su voz esaliilloaa y desa-
gradable. Guando se amansa y domeatica, afecta sin embargo electo
imperio s^re las dornas aves companeras <de eselavilvd y ae hace
tiBiar de los patos. Las halen Venezuela, donde ptoapecan.
El^lo [pkasiasms gaUus ) de la famüia de las gálUnácaas; es
el primero que se ha bocho servir á las necesidades de la vida, ^ttn-
gun animahmanifíesia mas valer y oi^lo ; sultán en medio de su
serrallo, ledeiende con res^neion y canta su viotona. £1 ounbate
degaUfos es usa diveráon «un ini los pueblos civilixidds.Losvgaüos
salv^es de las costas del Ihialabar wn AOgDas y amadUos^.y sus
huesos oaeideS'SOD negros como el ébano ; se. han vislo<a]f^os de
dios Itaeer frente á on gavflan y foizarle\áretit«'se« La eiria.dalos
«gallos y gallinas es considerable an el país , en donde ccece y.piios-
perá con ventajas insMnsas de toda la pobladon.
La paloma (calumba) qve todos conoeen^ es de ikucias^ de las
gallináceas , abunda sMicbo*en el pabj ias^hai desdtfeimtes.coto-
ve»y>8on íaii mansasy feenndas cómalas qiie viven en;|>leiia libecfead
«a los bosques. £n> todas, partes* ex^tcn «óasdenatos animáteS;
«mbolodeia temara.
— 20g —
\
PEZ ES.
La clase iamensa de pezes se divide nataralmente en dos seríes :
pezes oseosos y pezes carlilaginosos; los cuales difieren entre sí, no
solo por la naturaleza de su csqoeleto, sino por on gran námero de
caracteres diversos. Los colocaremos en estas dos grandes series.
SERIE DE OSEOSOS.
Mero. Uno de los pescados mas sabrosos y que mas abundan en
nuestras costas ; no tiene escamas, es de un color aplomado y cre-
ce basta 5 pies. Se cogen muchos á la entrada del lago de Mará-
caibo.
Pargo. Pasa por el mejor pescado ; fiene una escama rosada y
blanca y se cogen muchos en toda la costa. Se hace una pesquería
de ellos en el lago de Maracaibo.
Yagre. Pez mui grande, que abunda en las orillas del mar, tiene
una cabeza enorme y ancha boca con dos grandes barbas qm le
salen de ella ; ^s escelente pescado. En los ríos del interior los iiai
liasta de 6 pies de largo, sobre to Jo, en la provincia de Barínas. Su
pesca es abundante, como también en el lago de Maracaibo.
Liza. Tiene un brillo de plata s<^re la su(>erfície, que está real-
zado por visos de azul de acero; sus mandíbulas están guarnecidas
de dientes, las escamas son anchas, la lengua blanca, lisa y gruesa,
üu hueso estraordinariamen te delgado , cubierto de escamas y ea-
corvado como una podadera , se estiende desde el cuello hasta el
ano. Las pectorales tienen la forma de una lioz y son grises cchuo
las otras aletas; tiene un pié de largo. Abunda considerablemente
entre la costa de la península de Araya y las islas de Coche, Cuba-
gua y Margarita. Es una de las grandes pescas de las provincias de
Cttraaná y Margarita, en las cuales anualmente se emplea una can-
tidad de hombres y {pujeres quS establecen rancherías para salar y
secar el pescado en las islas de Coche y en la costa de Araya. Este
se vende en toda la república y se lleva también á las islas vecinas
de las Antillas. Tiene cantidad de huevas que se salan y secan al sol
y con las cuales se hace un gran comercio. En el lago de Mara-
caibo hai mucha abundancia de liza, aunque el agua es dulce*
;
209 —
Sábalo. P^ grande que se cc%e en abundancia en las costas de
Cumaná y en el bajo entre esta y Margarita ; sos huevas son enor-
mes y de todo se bace mucbo consuaio. Este pez se encuentra
abundantemente en el golfo de Maraeaibo. En los ríos de los
Llanos hai lambió un pez sábalo bastante grande > y particular-
mente en la provincia de Barínas.
Lebrancbe. Pez abundante en las costas y sobre todo en las de
Cumaná y Margarita, del cual se hace buena pesquería. Parece que
una de sus mansiones principales es en la laguna del Uñare, donde
procrea considerablemente y á determinado tiempo salen de allí
grandísimas emigraciones que remonlan contra la corriente y cer-
ca de la cosía, cayendo en seguida en manos de los diestros pesca-
dores margariteños. Lo mismo sucede con otro pez llamado jurel
que se encuentra en abundancia junto con el lebranche en ia lagu-
na de Tacarigua que está cerca del mar. En el lago de Maracaibo
hai mucha cantidad de estos pezes, á pesar de que el agua es dulce^
no salada como en las lagunas de Tacarigua y Uñare. Este pez se
halla en (odas las costas del pais.
IA pez^cofre, de la familia de los ostráceos, está revestido de una
costra oscura que lo cubre enteramente, y de la cual toma el nom-
bre. Comunmente tiene poca carne, pero de buen gusto.
Dorado, Pez humoso por sus colores que le dan el nombre. Se
le halla siempre en cardumes ; y se cogen con anzuelo mediante
pedazitos de trapo blanco que se dejj^en hacer mover constantemen-
te, sobre todo si se hace la pesca en un buque á la vela 6 en un bote,
pues suelen seguir á los unos y á los otros. Son de mui buen gusto
y los hai de mas de vara de largo.
Rayado. Pez de color brillante; está en la mar, lleva cintas ne«
gras y un ribete blanco, el fondo naranjado, y su carne es un csce-
lente bocado. Se encuentra en nuestras costas ; pero hai otro raya^
do sin escama en todos los ríos de los Llanos, mucho mas grande
que el del mar, pues llega á tener cerca de 4 pies. Su fondo es apio*
mado claro con rayas trasversales negras ribeteadas de uü color par-^
do oscuro. Su pesca es abundantísima y se hace bastante comercio
de él por lo sabroso de su carne.
Valentón. Otro pez grande que se halla en todos loa ríos de la
zona pasloríl y del cual se hace abvndante pesca.
Morocoto. Pez que se encuentra en gran cantidad en todos los
•rios; así' como el bocachiea en toda la ostensión del lago de Ma-
»• SKOG. 4^
t
racaibo ; tanto del uno como 4el ^» se ihace wkl adñiiidaiite
pesca.
£alLe^-vieja. Este pez se encuentra «n todas -nuedtvaaiCOsta»oaa
el nombre de yieja ; se alimenta de mariscos; por encima del cuer-
po es de nn amarillo oscaro rayado de azul , mas daro soÉre los
costados^ y llega á ser gris debajo del TÍentDe* Sa longited «ade
cerca de 7 pies. Tiene el nombre de baliesti^Yieja por la naturaleza
de su silvido que se asemeja á la voz de una persc»ia debilitada por
la edad. En los ríos y en el lago de Mara»;aibo hai um pez seme*-
jante, pero map pequeño , sin listas y de un color aptomado : iU^
manle viejita:
El carif'e es un pez gramle de que se hace buena pesoa task éi
lago de Maracaibo y en toda la costa. Es una comida escelante , :tie-
ne el vientre de. un color plateado y el lomo cenisiento 08C4MI^
Esle pez es casi redondo en su forma , pero «s largo como de mu
vara.
Pnerco-es{nn marino. Bebe su nombre á las puas daqve eslá alo-
mado ; cuando se irrita puede binchar su pi^. £1 lomoes azul , Ids
lados y el vientre blancos , las aletas corlas y cubiertas ^deiiianehas
pardas, y el cuerpo lleno de otras negras. Se le ve en naMtradeoa**
tas. Su hígado es venenoso y se le oc^eooii anzuelo. Áoépeaseélal
cebo dando vueltas y revueltas al rededor ; lo muerde y 'lo arroja
inmediatamente, mas viendo que permanece tranquilo^ vuelve á)¿l
y le engulle con el anzuelo. Cuando se ve cogido entra en fmroffy
eriza las espinas, hincha el vientre y procura herir todo lo fue se
le acerca. Como estos medios no le salvan y recurre á lá astucia :
acuesta sus espinas , recoge el cuerpo y se hace ieiible como up
guante. Viendo sin buen éxilo este segundo securso , toma su ac-
titud defensiva y redobla su rabia ; sus vigorosas espinas le cubren
de tal modo el cuerpo, que no se puede co§sc con la mano y es me-
nester aguardar á que se muera.
Guabina. Pez abundante en todo el país. Su carne es buena me-
nos la de la guabina que vive en el lago de Videncia, quees insípi-
da , lo mismo que la de los vagres que allí habitan, Hai usa espe-
cie de sardina de mas de un pié y mni espmftsa. Esta» traa clases
son las solas que dominan en aquel lago. Bai sardinas enlodas par-
tes y mui hermosas ; las de la mar no aoa tan grandes como las del
ÍQgo de Valencia, sino pequeüas como las de Europa y 4e un gusto
tan bueno como el de aquellas. Habiéndeae beclie aigonaaealMV
f
Qes eo bftrrilos por v^irias penónos, aalieroa tan gustosa^ comQ
las preparadas en Europa.
Aguja de mar. El hocico de este pez es largo y puntiagudo , su
cuerpo y cola son tan delgados , que por eso tiene el nombre de
aguja; sus dientes son pequeños, fuertes y colocados de manera que
los de una quijada entran en los intervalos de la otra cuando cierr^
la boca. Por encima del cuerpo es de un negro azulado^ Ips costa-
dos de un verde mezclado con reflejos que tiran á azul, el vientre
dal bla^ico mas puro , las aletas grises y azuladas. Tiene por lo co-
mún 2 pies de largo y solo pesa 4 ó 5 libras. Su carne es seca y
flaca y no sirve sino para cebo en la pesca.
Caribe. Pez bueno para comer; los mas grandes tienen casi un
pié , abundan considerablemente en el Orinoco y los rios que á el
caen ; tiene dientes triangulares, agudos y afilados , la boca ancha ,
devora los pezes pequeños y es sumamente sanguinario. Si una
gota de sangre sale del cuerpo de una persona ó de un animal, en el
instante de pasar un rio, se reúnen millares de estos pezeS; no á chu-
par la sangre^ sino a arrancar pedazos de carne, no temiendo en-
tóneles á nadie.
La perdona ó el animal que por su desgracia atraviese un rio con
alguna úlcera ó pequeña incisión^ llegará al otro lado con el hueso
descubierto. El nombre de este pez le vino de los Caribes ó Caní-
bales, comedores de carne humapa. El hombre del Llano, obligado
á cada instante i pa&ar nadando Iqs anchos rios de aquellas co-
marcas, teme mas a esle pequeño pez que al calman ó la anguila eléc-
trica que llaman temblador.
Gymnota ó torpedo. Anguila eléctrica que se encuentra en las
lagunas, aguazales y rios de la zona pasloril y délos bosques. Ella
hace sentir fuertes conmociones semejantes á las que causarla el
golpe de electricidad, al que quisiera cogerla ó al animal que se le
acercase para devorarla. Esta conmoción se trasmite al pescador
aun pormedio de la cana con que la pesca : á vezes los animales que
pasan por algU4 rio y soi^ tocados por el temblador quedan de tal
modo entorpecidos, que mochos se atu)gan, y esto puede también
suceder 4 una persona.
Anguila. Pez de aletas, sin espinas; tiene la forma prolongada
cQjsm la.i)fUebjra, envu^ltii en una piel gruesa cpy^s escamas soq.
casi im^ceptibl^s. No Ujsne j^eUs en el vieatre, y como sus aga-
lli)i^ ^;»(áa mejor resguardadas, re»dta que puede v^vir algún tiem-
— 242 -^
\
po fuera del agua. Es verdosa por encima y plateada por debajo ;
habita en todas partes en el algua dulce; su carne es un poco indi-
gesta pero mui buena.
Doncella. Pez escelcnte que abunda en el lago de Maracaibo y
sobre todo en una lagunela que queda eu la parte occidental de las
orillas y que lleva el nombre de ese pez. También se encuentra
abundantemente en todos los ríos que tributan sus aguasal Orinoco^ y
compite en la bondad de sus carnes con el payaro que vive en los
mismos rios y un pez de espada que se baila en los de la provincia
de Barínas, especies que no se encuentran en el lago de Maracaibo.
Gallo marino. Habita sobre las costas de la Guayana y también
se encuentran algunos sobre las de Cumaná y Caracas. Su longitud
escomo de 8 pulgadas; se alimenta de gusanos^ de moluscos y de
otros animalitos marinos. Su carne es estimada ; este pez tiene el
cuerpo plano, de un rojo plateado, las aletas de un gris claro, las
mandíbulas guarnecidas de dientes mui pequeños^ su pupila negra
y el ííis pardo plateado.
Pilólo. Este pez déla familia de los scomberoides, debe su nom-
bre á que comunmente se le ve con el tiburón, á quirn parece con-
ducir á los objetos de presa. Su cuerpo es largo y cubierto de ban-
das trasversales con cuatro púas sobre el lomo ; tiene un pié de
largo y su carne es buena.
Volador. Pez que habita en nuestros mares. La cabeza y el cuer-
po son escamosos ; tiene una fila longitudinal de escamas debajo
de cada flanco y aletas pectorales deescesiva magnitud, tales, que
pueden sostenerle algunos instantes en el aire. De este modo escomo
procura escapar de la vorazidad de otros pezes que le persiguen ;
pero no puede mantenerse mucho tiempo fuera del agua y aun en-
cuentra en el aire nuevos enemigos que hacen presa de él.
SERIE DE CARTILAGIKOSOS.
Tiburón. Del género de los squales (perros marinos), espanto de
los navegantes, el mas feroz y el mas formidable de los monstruos
marinos. Tiene seis filas de dientes planos y triangulares que pue-
de levantar ó retirar á voluntad ; el color de su cuerpo es cenizien*
to. Como el tiburón tiene la boca por debajo, se ve forzado á vol-
tearse para poder devorar su presa, lo cual le impide ser mas des-
tructor. Nada con la mayor velozidad; sus aletas y cola están dota-
f
— • 245 —
das de una fuerza muscular estraordíDaría. Sigue los buques con
la esperanza de alguna presa, y si algún marinero cae al agua, e^
luego víctima de eate monstruo. El tiburón llega á tener 50 pies
do largo y algunas vezes pesa hasta 1000 libras. Está estendido por
todos los mares. Tiene de oocbe un brillo fosfórico; su piel es gra-
nujosa y sirve en las artes bajo el nombre de lija. En Venezuela en
lugar de eso se usa la hoja del chaparro para pulir las maderas.
Peí-sierra, del mismo género de los squales. £1 nombre le viene
del anna terrible de que está provista su cabeza, formada de una
juateria cartilaginosa mui dura. Su color es casi negro por encima,
degradándose hasta llegar á un color blanquecino debajo del vien-
tre. Este animal se atreve á pelear con la ballena ; sus combates sQa
írecuenl^aente mortales y el pez sierra rara vez es vencido. Su
longitud es de cerca de 45 pies y la sierra tiene cerca de 6. Se ven
muchos sobre nuestas .costas, y bal también en los ríos de la pro-
vincia de Apure un pez que nombran sierra.
Luna. Pez de los mas notables por su forma; habita el Océano y
el liediierráneo y bago todas latitudes. Su color es negro sobre el
lomo, sus costados y vientre de un blanquecino mui brillante, par-
ticularmente cuando está espuesto á los rayos del sol : por la nee
che despide una luz fosfórica que le hace parecer como la imagen
de la luna reflejada en el mar. Tiene algunas vezes hasta 4 2 pies
y mas de largo y ancho, y pesa frecuentemente hasta 500 libras.
Le conocen en nuestras costas con el nombre de manta.
Raya de mar. Este pescado es el mayor de su especie, su carne
es firme, blanca y sabrosa; llega algunas vezes á tener un gran i^r-
mino; es moreno por encima y blanco por ddÍMijo ; comunmente
se le halla en alta mar y solo por temporadas se le ve en las costas :
algunas tienen el peso de 200 libras. Se alimenta de pezes á los
cuales hace una terrible guerra . Sus huevos, diferentes de los demás,
tienen la forma de un cojín largo guarnecido en los dos estremos
«on una espede de filamento ó cinta.
Raya de agua dulce.- Es de la misma figura de la otra pero mas
pequ^; las mayores no tienen arriba de 2 pies de ancho y pesan
20 libras. En la arta tiene una poa con la cual es diestra en herir á
los que la pisan. Ser mantiene siempre en los logares fangosos, so-
bre todo en los ríos, caños y lagunas de los Llanos, escondida toda
en el barro ¿arena. Las hai también en la orílla del mar y su pi-
cada produce al momento binefaaion y «nos dolores agudisimos que
- Sil —
\
hsíceñ desesperar al paciente por mucho tíempo : esmúi temida por
todos la picada de este animal.
REPTILES.
ÓRDBH DE LAS TOftTTlGÁS.
Torttr^ de mar. La hai de dos especies en MwdnB ntres : la
eareta , cuya carne es mal sana y los huevos Mh bosaos, es 4a ^ne
produce el earef ; come yerbas tanto dentro del agsfa eome flie«^
de ella. La otra no produce carei , pero sn «amo es buena pidPa
comer, así como sus hueros, de ios cables se «ica mttdio aeeHé.
Bai tortugas que presan 390 ó 400 libras , y la hembra pone m ^l
mes de abril frecuentemente mas de 400 bnoms qtie eolierra eb
la arena , dejando ai sol y al aire el cíodado de dar á Iva los vi-
vientes cuyo íelo encierran*
La tortuga aratis de agnad^ke abunda nmeho en el rloDrtAoco^
donde tienen ciertas playas en deteinmiadas islas á donde anrnlk
ikféute Tan á poner sos huevos ; lo cual da logar i que todos los
4díos se haga en aquellos sitios una cosecha oonsidterable de Ihio-
TOs j reduciendo la mayor pEsrte á aoeite y de que se baoe comercio
4n Angostura. Las tortugafs del alto Orinoco y Casiqviare pmtenstes
huevos en febrero y omrzo , y para las del bajo Orinoco se abfeb
las pisyas el 49 de amr«o , es decir, que se empieza el beneficio
-de estás m^nas de huevos que están en las Islas de Gücurupará ,
Barraguan y Panaruma. Bstas tortucas no son tan grandes cmno
las del msr, su carne es eseetente , sus bncTOs sabrosos ; ordkiarla-
nieoté pesan mas de 200 libras y ponen de 80 á -1^ huevos. Hat
también algnnas en el bajo Apure, en el Melé y en el Arauca, cérea
de su eonfluetícia con el Orinoco.
El terecai es una especie mas pequoiade tortuga qne se e»-
je«fentra en el Aptfre y otros ríos , pero abundimtemente bo^ en el
Guaviare , donde se hace uno^grau eosecha cto Iraevos para «ciimfer-
Jos y estraer de eHos aeoite. Ponen también en las pltyas, y (»or
enero y febrero se hace la C0secha : (üs^ tereeat pesa mm de
^5 libras y pone dé 46 « 24 huevos^
Et galápago , especie de tcnrocaj un poco inas pequefto. Oi^iM-
riamente vive en las^af^ttas y en «il!g«m<Ai túb»] p^sa Í0 UbrM7
/
219:—^
pone má {finí ciaMad de InieTOi. Sti oum lu^^es la» delieada
ottni ia M tar0ecu
£i meüroooí otiptrO) q$íé Wegíí'é tenes días de 2 fues; tiene ana
CMBS patdMea coa maoobte «gnn de nacha thaelría y realzada
mt todm aos^eootonaoft* Es a» plato delicado y afaaoda ooaaiáBca-'
UiBieiiie en los Haiios« Eo lo» gruiées catores de la eatacioü seoa
Ée ocallan tejo laa piedras dentro de agajeros que haeen ellos
Biliflios j Y paion de e^ mo^ sm tomar aliafeeato algooo hatta qoe
Bolan qod la famnedad^de las prím^aaafoas penetra ea la tierra.
La iiioMea en oira clase do morroeoi , mas cbata , im poco mam
pequéis, sos manchas menos r^evadns y méoos bella. Tieoe como
el morrodoi la vida estremadamente daca y se haee de sa escekate
come un caldo muí nombrado.-
ÓRDBN DB LOS LAGARTOS.
Familia de lo9 coeodritos.
61 eaiinan^ reptíl llamado también aligátor, se distingue, por sa
hocico attcbo dHttso > pies medio ^sopalmados , sin dentellones ; y
{lor la disposición de sos dieaies desiguales en el largo y grueso.
Vi?o en los píos , caños , esteros y lagunas que no están arriba de
700 ¥ai:aft sobre el nivel del mar. Permanece inmediato á las orí--
Has entre dos ^iioas^ en esfedacion de los aaimato que Uegan á
hebcr ; de estos mui pocos se le. escapan ciiando los ataca. Este an*
fibio no mede comer debajo del agua y sale á tierra para devorar
su presa. Los bai de mas de 22 pies de largo > no tan abundantes
los machos cfomo las hcmbrasy porque parece qoe se matan entre sí
en la época desusamoriss. lifk caimán no entra en la pubertad basta
los ^ O anos y entonces tiene 8 pies de largo y pudiéndose admitir
que los de mas de 22 pies üenen á lo menos 28 anos. Este animal
aUca do.dos modos , con la boea y con k cola : en el primer caso
se- pone aleoatado de la presa para moderla ^ no pudiéndolo hacer
de íreote^ y en el segundo se acerca á ella de costado también y da
un gran golpe con la cola que pi iva de sus ^ntidos á la perso^m ó
auMMl^ y eoiónees loa^rra y zamballeal leudo del agua para abo-
farlo y acabarlo de matar. CasiBdose fliata um hembra, se le sacas
loo liuefos que »o tienen la cascare dnra , y cocidos y secos son
«na comida regalada, no solo para el indHmna sino también parai
— 2ie.—
\
otras persfflias ; en Mancaibo los oomeo modio. En d Apare se
caza d caimán de yarios modos para cc^er sos dieDles y sobre todo
la manteca , con la cnal se alumbran loo llaoeoos» En d Orinoco
los indios otomaoos y yararos eomen el caimán á pesar de so olor
á almizde ; sn grasa se emplea en las fricciones contra el reama*»
tísmo. Ponen sus huevos en las playas de los ríos, y de ellos saien
vnos caimancíios qne al momento se dirigen por instinto háeia d
agoa^ en donde la madre los protege leniénddos siempre arrimaáos
á las orillas durante tres meses, para que no sean decorados do los
otros animales, y sobre todo de los machos, que suelen comérselos.
El caimán tiene la costumbre de salir al sol á catentarse , pero no
se aleja mocho del agua. Se qoeda entonces como on gran tronco
de árbol, con la boca abierta. Ciérrala coando está llena de moscas
y las engulle.
Los que están en los lagos suelen salir f or las sabanas coando las
aguas les faltan , á buscar canos , ríos, ú otras lagunas. Sos mar-
chas las hacen de noche y siempre en la dirección del agua que
huelen á muchas leguas de distancia. Caminan con gravedad , na-
dan con suma rapidez y corren con lljereza en línea recta : pero no
pueden cambiar de dirección sino con dificultad á causa de la dls-^
posición en que están las vértebras de so cuello , lo que hace fádl
el evitarlos torciendo la dlreecion. Este animal tiene moehos ene-
migos y en las orillas del Apure y del Oritioco hai llaneros é indios
bastante atrevidos para atacarlos cuerpo á cuerpo y bastante dies-
tros para darles, la muerte. Los lugares en que mas abundan son
los llanos del Apure, á pesar de que no faltan en las detrás llanu-
ras. Los ríos en donde se ye mayor número de ellos estendidos so-
bre las playas son el Orinoco, el Apure y la Portuguesa.
La baba es una especie de caimán mas pequeño y no tan feroz
como este. Su carne es mas tierna y mas gastosa, según k> aseguran
los indios que la comen ; los huevos son también mas delicados ,
y la cascara de estos, del tamaüo de un huevo de gallina, es de un
blanco color de perla y labrada tan simétrica y menudamente, que
es cosa particular. Hai babas en el lago de Valencia á 546 varas
sobre el nivel del mar.
£1 lagarto, de la familia de su nombre,- tiene la cabeza y d cuer-
po chatos , los ojos gruesos con pujólas que se contraen á los
lados ; sos párpados son mui cortos , se retiran ^toramente entre
k órbita y el ojo, y desaparecen ; su lengua es escamosa, y vive
;
— 247 —
de in^toB. Sq pid es como «fia escamUla , k cambia todos los
^os «n la prínia?era ; la cola tiene pliegues eiroolares y vuelve á
salir ó crecer caando se corta. Vive entre las piedras y muros es-
puesto? al sol , y los hai de varías dimensiones y colores mas ó me-
nos sabidos y variados ; todos ellos los comen los iodios.
La iguana es como un gran lagarto; su cola y cuerpo llegan á
tener hasta cerca de 5 pies de largo ,■ de los cuales la mitad es cola.
Tiene un pellejo que le cae desde la punta de la quijada hasta «1
pecho, casi semejante al del buei.Una cresta tiene en la cabeza que
le sigue después por todo el cuerpo colmólos dientes de una sierra
basta perderse sobre la mitad de la cola. Los ojos tienen mucha vi*
Tazidad ; la cabeza es la del lagarto y los colores tambieD los mis-
mos. Las hembras son mas pequeiias y de un verde mui claro ; po-^
nen mas de kO huevos á la vez , en agujeros que hacen en la arena
ó terrenos próximos á los ríos. Los huevos y la carne de este reptil
tienéu agradable gusto ; la carne es blanca , del sabor de la de ga-
Uina, y de ella se eoúsume bastante por todas las gentes del campo,
llaneros é indígenas. Mantiénese este animal en los árboles y por
medio del silbido lo entretienen hasta que con un palo ó caña le
pasan un lazo al pescuezo. Parece que se divierte de tal modo con
aquel sonido , que aunque se le toque no se mueve. Luego que se
les pasa el lazo al cuello , se tira del animal con fuerza y se le ar*
ranea del árbol. SI la Iguana se ve perseguida, corre con presteza ,
y si encuentra un rio ó laguna , se arroja al agua y allí permanece
mucho tiempo sin respirar al aire.
£1 basilisco , reptil tan célebre en otros tiempos y cuya mirada
se decía que causaba la muerte^ es un animal inocente que vive en
las orillas del agua. Llega á tener de 5 á 4 pulgadas de largo y su
carne se come. Aliméntase d« insectos ; la piel de su garganta está
floja y tiene una cresta escamosa que puede servir de aleta para
nadar.
El cotejo es de la familia de los geckotiens , su color amarillo
con rayas negras y una longriudinal blanca sobre el espinazo , el
vientre blanco con las patas largas. Son nocturnos , comen insectos
y andan por las paredes. Estos no los comen los indios y dicen que
su picadura da fiebre.
El camaleón , símbolo de los lisonjeros que aprueban todas las
opiniones y se doblan y amoldan á todos los genios , porque se ha
ereido que este animal no tiene color propio y que siempre toma
\
el de los objotos intiiedüto. Puede vWir como Idganos otror lagar*
tos VB aüo siii eam&r, ki que dio lugar á la frase vMr como el
eamalean.
teMN MI LAS IBBPISHTM.
«El boa coaBirietor^ llaaiado culebra de agua, luta 4& las mas te^
mibles culebras que babitan esie país. Abundan en la Guayana ; att
cuerpo , cuyos colores é^tán variados de gris , aioarUlo ^ negro y
rojizo y lleva sobre el lomo ou dibujo en cadena que i^grega á la
bermosfira la fuerza : esias cualidades le batí valido un culto entre
los salvajes. No (lene veneno^ pero ciñe y destruye-sii presa eon su»
tortuosos pliegues y la enpdie al instante « /cualquicm que sea su
Toliunen , para satisfacer su apetito voraz* Atgunoe boas tienen de
30 á ^ píes de largo* No se le encuentra arriba de 1 ^416 varas so-*
bre el mar. La presa la baee siempre en el agua , en donde babita^
Tiene una fueria tal^ que contiene á un toro siempre qm pueda asirse
eon la cola ^-i^ana rama ó tronco. Agarra el bodi» del toro y
no lo deja por masesfwsrios que este baga^ batiéndose y dando sal**
tos para escaparse del monstruo, hasta que exhausto y «f oviado del
dolor, se somete á ser. víctima^ Bnténces el boa lo cine con su enor-*
me cuerpo y lo comprime tanto que le da muerto para engullif lo
después. Su ancha beca tiene dos órdenes de dlenlts en cada man-
díbula. Se sacan de la parte musculosa del lomocnerdas de guitarra
preferibles á les de loi intestinos del tttonoalnato»
La traga* venado 4s «na culebra bmií grande de mas de 1$ piee
de largo , caai con los mismos colores que el boa , á no ser que los
tiene todos mas brUlnatos. Se mantiene en tierra y en los arbolea
f sus presas son animales^ como el venado^ que le gusta mucho «
de donde seguramente trae su nombre; también se traga los demás
que sean mas pepenes qae este. Cuando se ha tragado na venado,
si tiene cuernos, led<^ la eabeaa fuera de su^asqoeresa boea, y
entonces se ve al reptil como hinebado y en un estado de entorpe-
cimiento , sin poderse mover hasta que 4a cabeza dfl vraade eae
por la putrefacción. Esta culebra tiene los dientes eomo el boa y
es (an vora^s como él. Si el vedado no tiene astas, «mpleía á tnagsrlo
por lacabesa.
La macawrel es una culebra ignal á la tn^a^venade «on la mlfiM
1
Jigofa y ms^múbfmy tUfonMNMbM bq!» ea ^e^iio érete kAiO
como ella.
iM outebtft'€emd>el 9é la mas teonUe 4a asía ^l^eoie:; Uapi á
'teaer 6 pías xla Iar9a y A'Si f>iii«aciaf dei airciMiféreii«ia. to ookt ta»-
Jiiiaa an lo que. fe líélna oKeidiel ; te 4ica fae eaila aSo echa mo
■laa, la oierlo eñ-qaeM hlin viflo «oa 2 y haMa 6 da «Uto ; eaMaim
«Aüv. focarte ^ alaftizele , y «acierra uAtaoMo morlal an las cfdiili-
Mos. Par8ae«|ia .«usiojaB eentsUean y en booa preíanta «Iw frande
taibarlara , tieaíB -Ia teftgna negra «dividida an diaa, y d* ruido ^(*e
hace con sus cascabelases a«i 'semejante ai que se Incía al esine^
far un per,gBnnDo, yae {raadeoír á%B pasos dedístaneia,. A fuesar
del aviso que esta, sonido pro|iDraioBa, es nnii diUtcil avilar «I lar
- pimío si aepesa arríasaéo á rila. Cuando ^easaénay aaa mavíMnoitos
-aen lentos ; abanda mécto en tos Itanos y su» iabitaoiancs prefa-
jridas son las ovevas» Se mantreneB easondidas enlae las altea piq^,
yailí se eocuentran ordinaríaniéiiteanraiUadaB^ peroaoo la eatfSHi
levantada paca poikne defender aas fécümenle. Lo íveHe éel «a-
-lar las bace emmder ée día d bisoar Ingves eetebríos y fresaos ;
y por ia tarde eospiesan á Milirde sus asaondr^os casando parte de
toaiaehe, y alaaiaseeer es labora segura de enoontian^las : abundan
mi üedas partes , menas en ias 'sevraaías mui elevadas.
La mapaaaru ea una ealebra mui veneaon cuyos ealoras fomln
onacadesa de negro y amaritlo en laparteauporiar^ y en la inferior
tícDe un amarillo que degenera sémiManeate en blanco : encii&a
es oMSo un oaeno pintado p^o por debelo liene dos Inieras de es-
camas movibles ^ue le faeüilan andar eoa aiuafa» agíüdad; así <es
fue está confinada eomo la culebra mas lijeni y da las ans atre-
vidas para atací^ ai bombee. Abteda an lodos ios parajes calientes ;
m mantiene de frutas y gMa de las §ua79d)a$ y las parchas.
llapanare-rabo*lnlo. Galebra de la misraaclaae pero mas grande;
le dan' arte Hiuibre porque atiene la eola mat delgada y sos péÉttts
laasbian aiai paqueias ; ea Mi otwA y -veneoasa como la atra.
CoÍ6l>ra>4igrc , de la misina clase ; tiene eseama» por dakijo y
está pintada con manchas .eaá iMgras sobre un isndo vavdoto y
Manqueaiao Muía aba|o^ tirando á colar de pitarra. Cuando esta
aatabaa «stá irritada y se dispone á nmvder , levanta la parte infé-
.«ar de su eaerpo y alza la eabaaa basta la.altura de media vaaa :
aügaamslieam mas de n píes.
iMa. Cukin«i}a2|Ma^laifo; tinni eanoHifc par deiai^ ca-
\
lar yelde oecmro oon nmnchas inegntees^ amuilks'y perdis : es
de la misma familia de las mapanares*
M acanrel de caatro narízes : culebra de la familia de las mapa-
nares y con los colores de la trama-veoadó macanrel. Su loogítod
es tan solo de poco mas de nn pié ; se la disüngne por un p^r de
eneróos móviles ó eminencias encima de los ojos. La cabeza es
chata casi como la del sapo , y representa en el hocico la flgura
de 4 narices , de donde toma sn nombre. Es muí venenosa y tó
dice qne la persona 6 animal picado por ella cae inmediatamente
al snelo : tan agudo es el dolor qne ocasiona.
La cnlebra«-sapa ó voladora tiene cerca de dos pies, la cabeza
mnl chata , color pardo y el resto del cuerpo, por encima, de un
amarillo oscuro, marcado con grandes manchas redondas y negras;
el vientre es de un blanco amarillo. Cuando quiere morder se en-
coge de modo que representa la figura de un sapo , de donde le
viene el nombre. Al atacar se estira , y es tan atrevida y feroz ,
que persigue á vezes por mas de 200 pasos lanzándose á morder.
Sabanera. Culebra mui grande de un color amarillo por debí^
y amarillo verde por encima. Tienen algunas mas de 40 pies y ca-
ipinan con una velozidad estraordinaria y ondeándose por todo su
cuerpo y teniendo una gran parte de él levantado á mas de 4 pies
de altura. Esta culebra no es peligrosa y se encuentra en abundan*
cía en las sabanas, de donde tomó el nombre^ sin duda por el modo
de caminar en ellas mirando á todas partes.
Sobadera. Culebra larga y no maligna, de color verdegal sobre la
parte superior con una lista negra sobre el lomo y el vientre de un
verde manzana mui claro y brillante. Llega á tener hasta 6 pies.
Llámanla sobadera porque su maldad consiste en dar grandes lati-
gazos á las personas ó animales, por medio de su larga cola, sea
que esté agarrada á un árbol , sea que se encuentre en el suelo.
Brinca desde mui lejos sobre el objeto que la irrita, fustigándolo con
una rapidez estraordinaria , persiguiéndolo constantemente apo-
yando su cabeza sobre el suelo y balieúdo fuertemente la cola. Esta
culebra se alimenta de pezes y reptiles.
Yiejita. Culebra que tiene las mismas piulas que la tigre, con
la diferencia de que no tiene sino 2 pies de largo. Su veneno es
mui activo. Suele vivir eo las quebradas secas y entre las piedras.
Culebra-bejuco. Reptil que tiene la forma y el cdor del nombre
que lleva; no ataca si no se le toca. Suele estar en las ramas de los
;
— 221 —
árboles y caando anda por el suelo se tiende como nn bejuco. Hai
una amarilla mucho mas delgada y de la misma fonna y que llaman
híladilla : dicen que su picada es mortal.
Culebra de dos cabexas* Tiene cerca de uno i dos pies de largo^
las dos estremidades de su cuerpo son de igaal grosor , tiene los ojos
escesivamante peqoeños y cubiertos por una membrana ; seis esca-
flias anchas cubren la parte superior de su cabeza y el cuerpo está
Heno de pequeüas escamas cuadradas. Se alimenta de lombrizes ,
escarabajos y otros insectos ; derora sobre todo las hormigas que
en numerosas legiones hacen grandes daños á los sembrados. Gomo
esta culebra tiene la facultad de andar hada adelante y hacia atras^
puede penetrar en los retiros subterráneos de las hormigas, gusanos
y otros insectos. Ella es^capaz de escavar la tierra mas qae ninguna
otra culebra, siendo so piel mui flexible y sus músculos mui fuer-
tes. No es venenosa.
Víbora. Llega á crecer hasta 5 pies , su color es amarillo mar<»
cado con manchas negras ; se alimenta de pequeüos animales y
nunca ataca al hombre ni á los grandes cuadrúpedos, á no ser que
se le toque 6 irrite ; en este caso se enfurece y su m<M^dedura es
peligrosa , porque tiene en cada^lado de sus mandíbulas 4 dien-
tes como de 5 lineas de longitud. Estos dientes son blancos ,
diáfanos y agudísimos y se Its llama dientes caninos. £1 veneno está
contenido en unas vejiguillas colocadas de uno y otro lado de la
cabeza. Oprimidas estas vejiguillas por el movimiento de la man-
díbula , dejan escapar el licor mortífero, que atravesando por el
diente dispuesto naturalmente á darle paso , filtra en la herida. Se
dice que el tabaco las mata.
Culebra común ; mui distinta de la víbora por los bellos colores
con que la naturaleza adornó todo su cuerpo. Existe la culebra
coral, cuyo nombre le viene de su color que es encarnado con ani-
llos negros : es mui ven«iosa«
Todos estos reptiles abundan en la parte cálida y disminuyen á
medida que se eleva el terreno hacia la reglbn fría.
Sapo verde. Reptil de la familia de los escuerzos ; se encuentra
en las cavidades de las rocas y en las hendiduras de las paredes.
Su color es blanco lívido marcado con manchas por encima del
cuerpo, rodeadas de ufi drctilo negro yjrecuentemente reunidas
mticbas de ellaa ; su cuerpo está salpicado de terrugas lívidas sdbra
el vientre , yerdes sobre las maiuH^as y encamadas en los iukft
\
"gatos. Exilala m coerp^iNi ol«r Uáíé eavidoMlá ifviiade, y, eott»
ei sapo eomuB V derraHU nn iHmiQC' mas e«rf09if«> qae el de este.
Su respiración ya acompasada de una hiDcbaaeii ea la tMica.
Sapo comadn». Este géaacD de sapo batiHa en ofimas mas eáU-
d«6 y ea parajea paatanosos : tieae el euarpa durta^ los ejoa
peqv^os y mai separados* Es el mas grande de teidos los coiioo»-
dos, pues los kat que tieaen seis ú oobo palgadas de luigoy k ó ana
de ancho. Se le ta dado «ste nombce parque i medida que ii
kembra pene loa huevee, ü los reeage y lle«a cobre el temoliaste
qoe están pnóáoms á siacer. En este mouMuito as aeen» ai afaaj^
los coloea en eUa oaa precaadon fiara qae poeda» dasarrottaxae»
oaamas faeüidad. Otra partíettiaridad no menos noiaUeee advierte
en estos sapoi y es la de caaiar en coro «ooipoeste de 45 ó mas
iadividaos, y fiareoe que hai nooq^e hace de matttro deeapílla
s^un la igualdad con que empiezan y terminan sa concierto , no
veriicándoaa el oirá uno solo ¿ntes ó después (tel eiyfesado eoro
que comumneate dora de 6 á 8 miiiutos.
Pipa. Eite reptii de la inúlÉa de los siq)Ofl es de color aeeitiiiuido^
la hrailMra es mas grande que el anaabo , tenteodo e^oa de<5 pul*
gadas de lanso.' Cuando ia hembra ha pMsto los ImovoSi el «»ftcbo
Ips esUendt sobre el iemo de aquella , cuya pid se hincba y -forma
«na espede de oeWttas. El caler dftia tnadre los ba«e nacer y p^r
vece qoe salea de sa lomo. La caroa ée este sapo no es maléfica ;
los indtes y sobre todo tes otomaees , la comen con i^acer.
Raaa. No tiene poséülas , y sai mas largas las palas que las dd
sapo. Es mvl lijera , fuerte, henite'; de un hermoso verde por en*
cima y blanco ó amarillo por debajo , condos manabas negras á lo$
kdos de la eabeaa ; ios/Ojos son de edor de oea. Aig«»as pensonas
sa divierta en conservadas' e» oo fraseo grande de cristel n^edía
lleno do agoa y una pequeña ewaia ^ á te lar|$o de Ja ewil la raoa
sobe ó baja según que el tiempo debe aer bueno ó •mate : os Wá
baróqietro vivinite.
MOI^ÜSCOS.
Calamar. Molasco que §^ eaapentra^eil laufistri» aodasi derpaiM
un licor negro y su esmeros «Qteida oso<thmte( 4^ Ik&tlme^'
se puede áioar el colar Uampidoaspéau- « r
/
Cara«fil*estJX)iDi>o. tfahnco 4pm>8eiei>fl<MmtBi stiiise nofiítftts eos»
tas ; los bai de mas de un pié , y lo graeso de la comía baceier^er
que el- aniíiMl dflbe n?ir iiacli* tiempo, fil cétocáe ella es Uaico
perdenUra yen la acertara tiene uiiieolof da mía i)as(aote vtTa,
la parte bUmoa de esta coneha sirve: para éib«jar ootto sobr^e d
Guarura. Otro caracol que alcanza á «n pjé de laif o ; so es (ail
grueso como el anterior y sirire ¿ loe arrieros para tooar á manera
de beeina. Los Hiayordepnos de las bacíendas junea »so 4e «ste oa*»
'raool para llamar á los trabajadores.
B«F0ao>. Caracol peqvelío ^^iiya abertara es mas ancba que lai^ga
y llene la fi^rma de una inedia Inna. El animal se arrastra dejando
liuella de un humor yíseoso ; tiene uno ó muobos pares de cuer-
neeitos mui movibles y dolados de una gran sensibilidad. Estf
anknol es bueno para comer y la eoncba sirve fiara ilnmínadones.
Garaceles. Bajo este nombre denoaMnaai en elpans to<ks ias con^
€iias que se encuentran en las onUas del mar y de las lios* Haí «n
sinnúmero de varaedades por sus oalofles , i^ras y (amaHos. E&
la península de Paraguaná se'«Dcnenlran las especies mas bellas
eon que se hacen flores primorosas. Bai «afanos delamiamaágiira
y color que las foojas de rosa y se encuentran de todas dimensiones*
Se* bailan earaoolitos tan pequeiios como un grano de mijo, ven-
ces y rosados , aplomados j pardos y blancos.
Almeja de- mar. Se encuentra en abmdanoia en ks costas y ef
animal que Qonüene es booaido delieado^ . ^
Chipichipi. Pequeña almeja que abunda «a las costas orientales
de la repúbüca y de la quese hace oonsiderabio pesca , pues es un
manjar escelente, preferible á cualquier oteo mariseo.
Venus. Condba sóüda , bastante gcoesa; se halla eon freeoencia
en las orillas del mar ; se enüerra en la arenad poco profandidad,
de modo que puede salir de ella fácilmente; cambia de lugar con
la ayuda de su pié, y tiene tambíei^la facultad de saltar, golpeando
el agua repetidas vezes con sos-yalvas* Su concha es mu i buscada
por sus bellos colores.
Ostra. Concha biyaka, sift pié; su capa está guarnecida de una
fila doble de franjas , sus conchas tienen, una cliarucla sin dientes
y están compuestas de hojas que seseparan con facilidad. Se Bjan
á las rocas y aun unas con otras. En los manglares se ren también
agarradas hs >oetms.á;las latizesy ramos^ y;abeimdaomiiebo en núes-
— 224 —
\
tras costas. Muerta la ostra^ k condia se abre. La ostra veiáe es un
bocado esquísito.
Ostra de perla. Se encueatra ch los bancos ootsa de las islas de
Margarita , Gubagua y Coche y en la punta de Araya. Los ostiales
producen la perla redonda. El animal yive 9 ó ^ O anos y al coarto
la perla comienza á mostrarse. En ^ 0.000 conchas no se halla á
á vezes una perla de precio.
Broma ó tarets. Célebre por los danos que hace perforando la
quilla de los buques , las estacas de los diques, las esclusas etc. Es
un molusco cuyo cuerpo tiene la forma de un gusano largo^ eubterto
de una capa tubulosa abierta en las partes superior é inferior. Su
concha está compuesta de d6s válbulas romboidales , pero es mui
pequeña y solo cubre una parte de la. capa. Parece que trabajando
por la estremidad de la concha , á manera de barreno , el animal
taladra la madera sumergida y hace el agujero en que se mete. A me-
dida que se introduce va tapizando la escayacion de una materia
calcárea, de suerte que en breve se aloja dentro de un tubo pétreo
que á primera vista bien pudiera tomársele por una segunda con-
cha. Como este molusco ataca la madera desde pequeño , la abertura
esterior de su cueva es mui estredia y pero creciendo y desarrollán-
dose á prqwrclon que se interna , aumenta progresivamente la ca-
vidad que va haciendo. Dos tubos que tiene en la estremidad pos^
terior de su cuerpo están aproximados á la boca de la cueva, y
por uno de ellos da entrada al agua y respiración necesarias á su
vida , permanecilhdo^iem{Nre con la boca para abajo y él ano hada
arriba. La broma común llega á creeer oomo 6 pulgadas. En algu-
nos puertos los buques que no están forrados en cobre no pueden
permanecer mucho tiempo en ellos sin que ios inutiiizen estos
gusanos. Es indispensable carenar las embarcaciones cada dos ó tres
meses para evitar los daños de la broma.
INSECTOS.
ÓIDSH DB LOS COLBOVTSaOS. i
Cantárida. Especie de mosca grande^ verde dorada que sirve en
la medicina.
Escarabajo. Hai una gran variedad en el tamaño > el color y la
/
— 225
forma dé sus cuernos y todos son muí comunes en los bosques y lla-f
nuraS; en tierra caliente y templada. Los hai también con visos de
oro de diferentes estructuras. Viven de orugas y aun de caraco-
lillos.
Cocui de mon(aila. Se encuentra en los bosques y precisamente
en los árboles mas elevados. Tiene cuatro alas , las dos primeras
mas gruesas ; el color general de este insecto es verde claro atorna-
solado y notable su cabeza por la protuberancia que de ella sale
eomo una prolongación de la frente. Los bai de mas 4e 2 pulgadas
de-largo y su cabeía despide una luz tan viva, que con des de estos
inseclos se pedriaíeer en la oscuridad.
Cocul'-de-cana. No es tan grande como el anterior ni tiene aqudla
protuberancia ; su color es un negro pardusco, y de noche produce
el efecto de dos luzes no mui vivas que le salen de la cabeza : cuan-
do vuela se le ve en medio del vientre una pequeña lista color de
fuego.
Gusanito luciérnaga. Se encuentra todo el año en los caminos,
sabanas y campos cultivados. El macho al revolotear deja percibir
unas lu2es mui vivas ; la hembra no tiene alas y está oculta bajo la
yerba durante el dia, y de noche despide una luz brillante. Este in-
secto tiene un color negruzco.
Yaca de S. Antonio. Insecto mui común , cuerpo medio esférico,
corselete mui corto y de un color encarnado moreno ; mui bonito,
con muchas pintas negras en las cascarillas que cubren sus alas.
Estos insectos viven sobre las plantas, no andan lijeros, pero vuelan
con rapidez ; se alimentan de pulgones y se pegan á las hojas para
trasformarse. Si se les toca , echan una gota de color amarillo.
Cucaracha de montaña. Es de color verde y sus alas reducientes
forman visos cuando vuela. Es de la misma forma de la cucara-
cha común, pero mas grande y no es hedionda. Se nutre de vege<-
tales»
ÓKDBll DB LOS ORTOPntOS.
Tara. Insecto que vive de plantas y yerbas y que suele verse en
numerosas bandadas. Muerde con fuerza y aun puede romper ia
piel del hombre con dos dientes mui duros y gruesos que tiene. La
disposición de sus palas le da la facilidad de saltar mui lejos y pue-
p. cio«. ^'
— 22Í.— \
daeoa.8ual«9 Inmiareiitas volar mmdU/^ íMímé^ wrioR m-^
lorw.
Grillo* Los hai de iwrias eafetm^ y todos eHo» sritaa €Qii faoíli-
dad atento que sus patas posteriores son mas largas que las oinnh.
Este insecto vive ^ los eam|X)s y easas , bace un graa oeocuio de
yeriHifi y plastes; las hembraa poneiii sha tuievas en la tiaira: y sa
canto e» un ebillido muí agudo y moliBlo.
Cucaracha. Insecto de cuatro' alae, oblongo y Mpaseo eon dos
cerdas langas e» la cabeaa y otras^ dos. atas: groMa» y oortaa ealii
coUu Se iiiaAti«ie en los logare» oálides , pone on aeie baef o lar-
go en las hendiduras de las puerto», Tentoaasó paMdca : eada:lHie?o
tí€üe> una separación de celdas y de osda^c^a sate unKdieMadtti
£s4q anioales^ fétido y vu^ ptáacipakiienle de noGhe^ altineBlá»^
dose de toda elase de ooeiestibleaque eneuontnu Deoktufe h» yartá»*
do»^ y papeles^ Bai una (dase qne ¥iv» dehajo- de* líerva : eata mu
tiene alas y se encuentra también en los bosques.
Gbiripa, De la misma especie de la«iicaraeha«, pem mas peqneiía
y lüstreea. con Ja misma hediondez <|ae laianlerior. A la. altura de.
2ú^ varas no se encueotran estos animate» ineomedaa y <ftpie'*>
rosee, que aola con moeho aseo pueden deaterracse de lasibabáta-
cienes.
Caballito del diablo. Insecto que tiene las quijadas y. mandibulaa
córneas^ los ojos ea general mui grandt^, y las alas mui anidas ea
situación vertical. Es mui carnívoro y vuela con mucha rapidez.
Comején, termite ú hormiga. blanca. Es un inaaeto quecon.pro^
piedad pueda llamarse minador, pues no adelanta ub paso sin cu*-
brirse con una bóveda de tierra ; asi es que fornm un camino cur
biertoy poréi marcha en todas direcciones^ estendiendo ramales por
do quiera. Destruye los papeles, pergaminos, cueros, lienzos y
maderas dulces con una prontitud estraordiuaria , reduciéndolo
lodo á polvo. Trabaja dia y nodbe y sale siemiNre de los lugares hú-
medos, sube por las paredes y árboles mas elevados, siempre lle-
vando su. camino cobierio. Tiene de 5 á 4 líoeas de largo, su color
es blanco con cabeza oacuira; tiene 6 pata», casiiua lijero, ei
cuerpo es redondo, el pellejo tan delgado que 4 k menor frotación
se deshace. Los nidos de estos animales están en tierra , en ios ár^
f
— 227 —
boles y" ea la^i. ipadera« viej^, y forman uiu^ especie de eolmem^;
pero toda de tierra , es decir ,. una cantidad numerosisiipai da fí^
quenas celdas en <)ue depositan sn^ huevos : ooiBa las abejas^ Pl'
rece que tienen sus trabajadores. £$ mui difícil sa destrnccioB j f
para preservar los archivos , ropas y mercancías, ei preciso servirse
de madera de cedro amargo, de la cual huye. Ba|a la altara de 7^
Taras hace los destrozos indicado», pero algo loas arriba iolaataea(
las maderas, y á -1200 v^as*ya no se encuentra e^terpiefueno anir
mal destructor,
ÓJUIBH PR LOS HIVBSQBTSaOS.
La abeja es una de las grandes obras de la creacioQ.. Produce la
miel y la cera que receje de las flores. La actividad y el aáeo reinajiíi
en sqs colmenas. Un enjambre se compone de la reina , machos y
operarías ó neutros. Los primeros sirven á la reproducción de la
raza , las ultimas, así como los artesanos y labradores , alimentan
las otras clases , construyen los edificios y cuidan los gusanitos. El
número de machos varía de 200 á 4500, el de las d)reras de -1500
basta 23 y aun 50.000. Las celdillas tienen la forma de vasitos ex¿r
gonos^ y su reunión forma el panal cuya regularidad es siempre ad*
mirable. En llegando el momento de poner la hembra los huevos,
es el objeto de los cuidados mas asiduQs, Pone sus huevos en las
celdillas mas pequeñas y de ellos salen los operarios ; los segundos
son para los machos y los mas grandes para las hembras. Nacidos»
los huevos, van muchas vezes al dia las operadas á darles una es-.
pede de papilla que ellas vuelven de su estóipago.
La cera de ios enjambres de América es mas difícil de blanquear
que la de las abejas domésticas de Europa. En América la proximi-
dad de las haciendas de caña perjudica mucho á las abejas : estos
insectos muí ansiosos de miel se anegan en el zumo de la caña que
los pone en un estado de inmobilidad y'eipbríagiiezr cuando lo chij^-
pan con esceso.
Avispa. Tiene una parte de la industria de las abejas , vive en
sociedad; tiene costumbres salvajes y busca siempre la guerra y el
pillaje. Se sirve del aguijón como de arma ofensiva para atacar los
animales mas débiles ; hace su nido en el interior do la tierra á la
profundidad de medio pié. Sírvele de entrada un conducto tortuo-
so de una pulgada de diámetro y tiene el cuerpo pajizo con zonas
— 228 — \
negras. Hai una calidad de avispa que hace so nido casi redonda
en las ramas de los árboles, compuesto de una greda mui fina , y
se encueotra también en los pequeños arbustos de las sabanas.
Abejarrón. Demasiado conocido por los estragos que hace en la
c-ampiña ; vive en los árboles cuyas hojas destruye rápidamente. Su
larva con el nombre de gusano blanco roe las raizes de todas las
plantas. Inmóvil la mayor parte del dia, vuela por la larde de ár-
bol en árbol con su monótono zumbido. No vive mas que una se-
mana y no se dej(i ver sino por espacio de un mes.
Pegón. Especie de abeja un poco mas pequeña que la común ; es
negra y vive en sociedad como las avispas. Pasando cerca de sus
colmenas ó en tocándolas, se lanzan todas contra la persona y en el
lugar que pican allí se quedan pegadas haciendo un zumbido, por
lo cual se les ha dado el nombre de pegón. Lo mismo hacen con
los animales, que los temen casi tanto como á las avispas.
Cigarrón. Es una especie de abeja grande que se alimenta del
néctar de las flores ; habita en agujeros que abre en las maderas
con unos dientes que tiene á manera de tenazas curvas. Los hai ne-
gros y amarillos con alas trasparentes. Cuando vuelan producen
un zumbido mas fuerte que el susurro de las abejas. Está armado
de un aguijón y su picada produce un dolor agudo.
El tábano es un insecto de las alas separadas, la Irompetilla lar-
ga y esterior, las antenas divididas desde cuatro hasta ocho anillos;
las larvas parecen gusanos largos sin patas y casi cilindricas con la
cabeza escamosa, y cambiando de piel para pasar al estado de ninfa.
£1 tábano tiene la forma de una mosca gruesa que vuela zumban-
do; atormenta los caballos y bueyes agujereándoles la piel para
ohuparles la sangre.
Bachaco. Hormiga colorada de cabeza grande y dos pinzas en
la boca , con las que agarra las hojas de las plantas, las cuales des-
truye para llevar á sus mansiones subterráneas. Hacen escavacio-
nes que parecen canales, y en ellas se encuentra multitud de gran-
des celdas en donde depositan los hijos en medio de una cantidad
de pelusa vegetal que se llama yesca de hortnigaSy igual al noli ó
yesca de la Nueva Granada. Esta materia es escelente para estancar
la sangre ; hervida en salitre, es una de las mejores yescas. Conos'
de muchos pies de al tufa forman las tierras sacadas de los subter-
ráneos de estos insectos y en ellos hai tres clases de individuos ;
machos^ hembras y neutros. Yiren en sociedad formada de neutros^
/
— 229 —
y luego que los machos y hembras adquieren sus alas, salen del hor-
miguero. La fecundación se verifica en el aire ', muchos mueren en
seguida y las hembras que deben llegar á ser madres pierden sus
alas ; unas van á formar nuevas colonias y otras detenidas prisioneras
por los neutros de la habitación, ponen allí sus huevos. Se alimentan
los bachacos de materias animales y vegetales y muchas vezes des-
truyen la ropa que encuentran en las iiabitaciones. Gustan mucho
de sustancias dulces y son la plaga de los jardines y de la agricul-
tura. En una noche destruyen un jardin entero. Los lugares por
donde pasan quedan tan trillados como un verdadero camino, y los
bai de mas de medio pié de anclio y de largo muchos centenares de
varas. Los indios de Rio-Negro comen el bachaco que se denomina
culón, por lo grueso de la parte posterior que está formado de man-
teca pura. Los recogen en la época de la fecundación, enciérranlos
en saquitos de marima y ahumados los comen estendiéndolos sobre
el pan de casabe.
Hai otra clase de hormiga grande y negra que llaman de leña,
porque suele habitar en tierra y mas frecuentemente en los troncos
de los árboles podridos. También hai una amarillenta con la ca-
beza negra que vive del mismo modo. Muliitud de especies mas
pequeñas existen y muchas mui bravas, cuyas picadas dolorosas
suelen dar calentura ; tales como la pica-y-huye y otras llamadas
cazadoras que se quedan pegadas cuando pipan y al separarlas es-
traen un pedazo de cutis. Enfin, otra existe que se mantiene en los
cujíes : al tocar las ramas de estos árboles, caen á millares sobre
quien los mueve •
ÓftDSir DB Ij09 LBPIDOPTBHOS.
•
Mariposa pavón. Este es el género mas hermoso de todos los in-
sectos y al que la naturaleza ha dotado de mas ricos adornos. El
oro, la plata y las esmeraldas, todos los colores posibles mezclados
con un arte admirable, brillan á porfía sobre sus anchas alas.
Pasa su vida en los jardines, alimentándose del jugo de las dores
que chupa con su trompa.
Mariposa del tabaco. Este insecto no se encuentra sino sobre es-
ta planta. La larva es verde con marcas laterales en cada seg-
mento, rodeadas de un círculo de color purpúreo, cuyo xnaliz.
— 230 —
\
cobre tambieu la espina codal. Sas ate son de un color osear»
con rayas blancas.
Mariposa de colas. Tiene las alas adornadas con dentellones ne-
gros sobre nn fondo amarillo claro. Cada ala tiene una cola qne
es la prolongación del dentado negro que rodea las alas.
Semirámis. Esta mariposa se encuentra sobre las cañas de azú-
car; es muí notable por las largas colas que terminan sus alas
Inferiores ; tiene cerca de 4 pulgadas de ancbo -cuando estas se
bailan abiertas.
Son innumerables las variedades de estos bermosos insectos,
tanto en las mariposas diurnas como en las nocturnas, y de ellas
podrían bacerse numerosas Colecciones.
ÓADSlf DB LO» ■BMIPTBROS. .^
Gimex ó chincbe del bosque. Este insecto vive sobre las plan-
tas, se alimenta de orugas ^ despide un olor desagradable; es de
colores muí vanados. Da este insecto como 40 hijos á la vez y
la bembra los conduce como una gallina sus pollos. Siguen elW
los movimientos de la madre que no los deja, parece protegerlos
y mueve las alas para alejar al enemigo que se acerca á su la-
mília : el macho es el que eila teme mas. Luego que los pe-
queños han adquirido bastante fuerza, son abandonados por la
madre.
Ghinclie común. Se encuentra en los lugares templados y cá-
lidos pero no se ve este fétido animal en los Crios. Todos le co-
nocen ; parece una gai rapata, sale de noche para chupar la san-
gre á las personas que duermen y es mui diestro en retirarse y
esconderse cuando se le busca. Lo hai coa especialidad en las ca-^
mas y pone muchos huevos cuya destrucción es algo difícil. iJno
solo de estos animales es capaz de infestar en poco lienipo una
casa entera. Se le encuentra hasta la altura de ^.502 varas sobre-
.«1 nivel del mar.
Cigarra, fiisecto cuyo pico. parece salir delcueílo; el macho se
distingue por su canto penetrante y monótono , que proviene de un
órgano situado en la cavidad de su vientre. La hembra ¿iene un
taladro con que hace agujeros en las ramas de los árboles pajca de*
positar en ellos sus huevos ; la larva que de estos sale és blanca.
Deja su nido para sumirse en la tierra., donde «e alimenta derdizes :
/
~ ^4 —
se cambia despaes en ninfa, y yiye asi en la tierra durante un
año.
ÓRDBN DB LOS BHIPÍPTBEOS.
Ck>chioilla. Se halla en la provincia de Barquisimeto , en Coro ;
£arora y eepcade Barcelona, pero no es un objeto de cuUÍ¥« y de
£oa2ercio «orno en Méjico. De este insecto se saca el bello coler «o-
aoeido con el nombre de carmín, de que tonto se usa en Ja pin-
Uira. £ste animal se £ja sobre los árboles en una época detemii-
nada del ano , los machos parfi metamorfosearae y las hembras |Nira
loda su vida; parecen |)equenas agallas. Despaes de haberse jun-
tado, las bembras ponen sus huevos, los coUcan en la piel deisu
vientre, se secan y sus cuerpos forman «toa cascarilla que encierra
los hjsem&. La coclúnilla que vive sobre el nopal es la q«e preáuce
éi .mas bello encamado.
Pulga. Insecto de calor pardo con la mbeza vellosa ^y pequéis.
£1 hocico grueso y agudo , é pierneclllas y en cada una 5 coyvn-
iucas diversamente articuladas ; tiene cierta espede* de muelle mui
delgado , pero tan fuerte fue j)or su jnedio da un sallo 20 lüeses
jnayor que el tamaño de su cuerpo. Abunda m los paises 4e«i-
plados mas ^e en los cálidos y fríos.
Pulga de ni^ua {pukx p&netran^). Insecto ée mjénos de aiedia
línea de largo y mni ^parecido á la pu^a, de la cual se diferencia
en tener blanca la |»arte posterior de su ouerpo y la boca ^a^a
de una tron^pa tan lacgacome Jdí cuerpo. Se introduce -eo los pieside
las personas^ «n donde dcfiosita sus huevos, q«e avivándose inoie-
diataofeente. causan comezón:, y si no se sacan |>ronto^ «i^ece basto 5
líneas áéb^o del ciítis. En este estado ya el insecto es verdosn y
produce delores agudos é inflamación en la parte 4ai'qtteeslá.>Si
no se saca i tiempQ, se multiplica é imposibilita de fadar á k per-
sona. Los cerdos, monos y ^perros son atacados por estes in&eotosN á
los primeros le$ son mas látales, porque» hasta suelen posárseleS'ien
Ios-pezones de las tetas, y comoles causa dolor nosejirestaniádar^de
jnamar áisus lechoncillos, los cuales se. mueren de hambre. Les «no-
nos y perros suelen >sacárselas diestramente ^oü los dientes. -Serob-
.aerva ^ue en los liigares salitrosos ao bai de esta plaga, í^W4iim á
te 4dtiiraí de ^«4 00 vairas sobre el nivd del mar.
— 252 —
ÓRDBN DB LOS DIPTBftOS.
\
• Mosquito. Insecto bastante conocido por sus picadas y obstina-
ción. Nace en los lagares húmedos y después de haber sufrido su
metamorfosis habita en el aire. Las picadas producen irritación en
la piel. Los bai en abundancia en el Orinoco, arriba del estrecho
de Barragiian , y sobre todo en los raudales , en la Esmeralda , en
una parte del Casiquiare y en el Guaviare. Estos animales aparecen
á la salida del sol y sé retiran cuando se pone. Hai también zancu*
dos. especie de grandes mosquitos ; estos se encuentran en el Ori-
noco abajo en el delta» sobre los ríos Apure, Portuguesa y sus tri-
butarios y generalmente en todos los rios de la zona pastoril , en
los logares húmedos y pantanosos del lago de Maracaibo y de los
ríos que caen á este. Los zancudos están en movimiento mas de
noche que de dia/ picando fuertemente con su grande aguijón. Hai
otra especie aun mas grande, pero menos perjudicial , que se en-
cuentra en los bosques cerca del mismo lago ; esta pica de dia.
También hai el jején, mosca pequeña, ó simulie, Tenenoso, quede
dia se encuentra en los lugares húmedos y en los rios de estos. Los
hai que se salen al amanecer y se retiran cuando el sol calienta :
otros se aparecen al anochecer y duran pocas horas. El único re-
medio que hai para estos insectos tan molestos es el viento, y tam-
bién el humo. Es de notarse que en los rios de aguas verdosas hai
menos cantidad y en los de aguas negras no existe ninguno de es-
tos tormentosos insectos que á vezes impiden hasta el comer. En el
lago de Maracaibo suelen verse nubes de otras clase de mosquitos
que se llaman bobos , porque no pican y su número es tan grande
que parecen nubes opacas y estensas que se pasean por la super-
ficie del agua. De estos suelen verse algunas vezes sobre la playa
del mar. A la altura de 2.000 varas está uno libre de esta plaga.
Moisca brava ó carnicera. Se parece á la mosca común , pero es
algo mas gruesa y de un color negro con bandas grises. Busca la
carne de que hace su alimento ; es vivípara , hace sus larvas vivas
y estas producen grandes daños en hs colmenas. Hai otra mosca
grande de un verde luciente, que apenas se posa sobre la carne
cuando espele una cantidad de gusanos que crecen prontamente.
Estas son las que depositan gusanos en el ombligo de los animales
recien nacidos, á los que si no se curara de pronto con la cebadilla
1
-- 2S5 —
86 morirían ; lo mismo sucedería coa las heridas de los animales sí
nna de a^vellas abundantes moscas llegara á depositar sus gusa-
nos en ellas. Otra mosca hai mas terrible todavía, la cual suele agu-
jerear la piel de las personas ó animales y debajo del pellejo nace
un gusana peludo que á medida que crece da dolores agudos, bin-
ebándose la parte sin nuestra ninguna de abertura. Afortunada-
mente estos no abundan mucho. Por último, las moscas comunes ,
insecto incómodo que se encuentra en todas partes, ensucia con sus
escrementos las telas, dorados, etc.; coloca sus huevos en donde de-
ben vivir las larvas y estas no dejan su piel para metamorfosearse,
sino que se endurecen , forman una cascara que encierra el insecto
y con el calor nacen pronto. Las hai todo el ano.
ÓRDBN DB LOS PARÁSITOS.
Piojo. Animal asqueroso que se alimenta de la sangre humana
y de la del cerdo : es de color ceniziento oscuro y de sustancia mas
dura si habita en la cabeza, y mas blanda y de color casi blanco si
habita en el cuerpo. Son mas comunes desde la altura de 2592 á
5497 varas sobre el nivel del mar.
Piojo de pichón. Este insecto parece alimentarse sobre las plu-
mas de las aves , ya de la materia córnea de aquellas ó ya de la
zuarda que se les pega y las preserva de la acción del agua. Comun-
mente se le halla debajo de las alas, en los sobacos y cabeza de las
aves, multiplicándose hasta el punto de enflaquecerlas y aun cau-
sarles la muerte. Este animal tiene el cuerpo mui estrecho y largo
con el abdomen informe.
Piojo de gallina. Es mas pequeño y redondo que el anterior, de
un color ceniziento, hace enflaquecerlas gallinas y multiplicándose
' considerablemente, no deja otro recurso que quemar el gallinero y
' bailar con frecuencia las aves.
Piojo de burro. Es amarillo y pequeño, ataca los pollinos en la
estación lluviosa y les ocasionaría la muerte si con tiempo no les
cortasen la lana del lomo en donde se depositan con mas abundan*
' cía. Los aguaceros que caen entonces diariamente, son suGcientes
' para aniquilar esta ptaga.
Garrapata. Insecto sin alas con 6 patas que se agarra fuertemente
á las personas y animales ; en estos se hincha tanto chupando la
iangre, que pierde totalmente su figura y parece entonces un grano
— 154 —
\
de garbftDE» (MBiiídslQ, f <e8«t«aiid» foc ú «Man 'se ete. fia «na
plaga temMe falta Im anhnaias , ponfae^aeftos kitNriiicea niMhas
^ las orejas eeattevándaks oaaMnwnnnte «mi ettIerisaAad ^i^e-les
hace plc^r ó peréor estas , oitéBtras ea el lOMrpft te f ngckMe Mía
aaroa geaeraL iHal iMa dase pefuciía «fue JhMMin «tojamMoc, ipar-
iqae este inseol&es eoknraidoyMNÍ fieqtt^a; ^se fega^oiM Jfa#ff-
rafaia y haeo <na$ mal qñe «ila. iiaiipiáiíAMe «n>b agaa^de tataoo
y ottia&do a Jos aráuries icea «1 «atrnte de <Minfit9«iaeiett id Mo-
fiíeftlo todas las g am|>atas -ó «cohmidilas t^e 4iaiieA.
éWMK OS LOS WiHAVODWk
Gongolocho. Su color es negro, amarilioó pardo, liene multitod
de patas, habita en las casas y los bosqoes y en el suelo ó debajo
de las hojas se mantiene enrollado como un ovillo. Ordinariamente
sale de noche, y si aJgaoo le toca reúne las patas y ^ ijueda Jumó-
bil.
Cienpiés. Lo hai de dos ecypedes , ano negro y otro amairiUento ;
al primero se mantiene en los bosques y crece mas de un pié de
largo : el otro está generalmente en las casas y solo creced liga-
das. $a picada causs^on dolor mui agudo;. se hiAcJuí la|iarl8 Mórbi-
da y produce calenluca. Mantiéoese deánsectos.
évaii sm^áB AMUkÁáA,
Grande-araña. Aifimal asqueroso «que se enoueatra en los 1k)s-
qnes mas solitarios, muí grande y gruesa, y su picadura (Caasa ter-
ribles fiebres; abunda en la Guayana.
Arana atroz. Esta e^ecie es de an tamaño mediano; los cuatro
ojos de en medio forman un cuadro y los dos laterales jinalÍQca
oblicua. Se mantiene en los agujeros de los paredones viejos, jas
hendeduras de las puertas y ventana^, y forfiia.ttn nidd cilindrico.
Araña común. Habita en las casas, bosques y cao^paa^ hao^^su
tela cilindrica y vive de las moscas que coge en alku
Araña tetracauta. Es ferruginosa con cabeza calorada, iicgueiyí;
las patas de color de sangre ; el abdomen tiene casi la figura de una
media luna. Hai de esta misma figura plateadas y doladas mui lin-
das.
Galeoda. Tiene cerca de i $ lineas 4e la^go^ eamoi Jifeaeni^ jpe-
I
— .255 —
luda , un poco cenizlenta y rojiza ; sus antenas son un ^ocq mas
largas que las primeras patas y las mandíbulas velludas terminadas
en pinzas encorvadas y dentadas.
Tarántula. La fama de esta araña estaba mui estendida en Euro-
' pa á causa de los síntomas terribles que según se decia el*an las
consecuencias de su picadura; está sin embargo probado que -tiene
jnui poco ó ningún veneno. La que se conoce en el pais con este
nombre es de una picadura muí fatal en el casco de las bestias ,
pues lo pierden si no se curan en tiempo.
Araña-peluda. Grandísima; se encuentra en los bos^es^ está
cubierta de una pelusa blanca y su picadura es venenosa*
Arañila de la playa. Mas pequeña que uiia hormiga; jsoío se en-
cuentra en las costas de la península de Paraguaná; «s de colbr de
chocolate; apenas se siente su picadura y solo por síntomas mor-
tales se conoce que uno ha sido mordido por este insecto. Si no se
aplica inmediatamente tma ^an^fa^ fa persona, se vuelve loca y á
vezes muere.
Alacrán 6 escorpión. \ive en la tierra debajo de las piedras ,
corre con velozidad levantando su ccüa ¿ orqulTladas ; esta llene
6 nudos , el último de los cuales prolongado hacia arriba en puúta
ic sirve de aguijón. Tlahita en los países cálidos y los liai de dos cla-
ses^ negro y amarillo; este es mas venenoso y su picada causa los
mismos efectos que la del cienpiés. La alacrana pare una porción de
hijos que lleva sobre el lomo durante algún tiempo, cuidando con
esmero de su conservación.
< ¿HDBH jw xos caosacicfos.
Cangrejo, Tieiie 5 ptres dejuitas^ y las primeras de cestas tarfl^-
naa en pinzas ; es.mas ancho que largo, vive,«i tiecras húmedaí y
se esconde en agujeros que hace debaja de üerra. Se nutre de siis-
.tancías vegetales y es nocturno ó crepuscular. Su carne es^ligrosa
en los lugares donde hai manzanillo ^ porque -comen mucho esta
fruta venenosa. Ha> cangrejos úe mar^ de agua dulce y ótro^ que
viven en los Jtosques y montañas.
«Camarón. Su carne es mui delicada y agradable a) gusto. Es.jde
un color verde bronceado, mas cuando está cocido os de ha encar-
nado claro. Se pei^ca en las orillas del mar J'de }os rios., «n los li«e-
. eos de las,piedras.
— 256 —
\
Langosta. La de mar es mucho mas grande que la de rio ; habita
en-las hendiduras de las rocas, y lo mucho que le crecen las patas
de delante le obliga á andar de lado. Las hembras llevan los hue-
TOS pegados á unos filamentos debajo de la cola. Este crustáceo
es muí eslimado como alimento ; cocido cambia su color verde en
rojo,
Caracol soldado. Este animal se apodera de las conchas vacías
para hacer su habitación ea ellas; como tiene el abdomen tierno y
membranoso, en vez de una cabierta sólida , como todos los ani-
males de esta clase , se aloja en las conchas univalvas, y sogun va
creciendo va buscando otras mas grandes. Ordinariamente es de
4 pulgadas de largo. Si se les despoja á muchos de ellos de la con-
cha dejándoles una sola , se la disputan con encarnecimiento.
ÓADBM DB LOS^AHRLIDOS.
Ssmguijuela. Es mui sensible á los cambios atmosféricos : se agita
cuando el viento sopla > se esconde en el cieno cuando el cielo se
cubre, y si hai tempestad, sube á la superficie del agua. Habita en
los estanques, ciénagas y arroyos. Se aplica mucho en las inflama-
ciones.
ZOÓFITOS,
Estrella de mar. Tiene el cuerpo chato , formando un disco
del cual salen cinco radios principales , y la boca está colocada en
el centro de ellos. Loa radios tienen por debajo un surco longitu-
dinal y una infinidad de agujeros que dejan pasar los pies ; el lado
opuesto está guarnecido de pequeños tubos que el animal estieiíde
cuando está en el agua y sirven para estraerla. Se alimenta de in-
sectos y de pequeños crustáceos.
Erizo. Se alimenta de mariscos, rompiéndolos con sus vigorosos
dientes que en número de cinco están bien engastados en una espe-
cie de mandíbulas guarnecidas de muchos moluscos ; tiene la boca
en medio de la superficie inferior y el ano en el punto opuesto; es
del tamaño y forma de una manzana, y su carne es agradable.
Medusa. Tiene forma orbicular mas ó menos convexa; boCá de
?
— 257 —
color rojo en el centro y una multitud de apéodioes cornudos con
que coge los animales de que se alimenta, tales como gusanos, in-
sectos, molnscos, etc. Su cuerpo es fosfórico durante la noche, aun*
que parece que esta calidad está subordinada á la voluntad del ani-
mal, pues se ha observado en el mismo individuo el paso del estado
fosfórico al de opacidad, y vice versa. La marea los echa diariamente
en todas nuestras costas.
Fragata. Zoófito de diversos colores, y sobre lodo, rosado y blan-
co; es como un cuerpo oblongo hinchado que lleva encima una
membrana tendida que le sirve de vela, y así se le ve flotar sobre
las olas. De esta hermosa y brillante qiembrana tomó sin duda el
nombre de fragata^ y abunda'tonsiderablemente. Grandes cantidades
de ellas son arrojadas todos los dias á tierra por las olas.
\
:KS9ffS9SKP^sigfei9e
«B.4K>]iAVIA IPOliITICA.
E9TEN8ION T NUENSIOHBS ANTIGITAS.
m
Dejamos detalladas las fronteras qne una larga y pacfflca pose-
sión entre naciones limftrofós*. han acostombrado respetar; y en
esto hemos segnido la opinión del sabio Humboldt , qne asegura
haber tenido en sus manos los mapas manuscritos trazados en lis-
boa y Madrid, y haber hecho un estudio particular de la grande
controversia diplomática sobre las operaciones intentadas por la co-
misión de límites ; así es que en la demarcación de las fronteras
políticas, está especiflcada toda la línea, de acuerdo con los mapas
y la obra de este célebre viajero, esceptuando solamente en la em-
bocadura del Rupununi, ^ue temos toottdo por raya* pues según
los últimos viajes del S. Schomburgh, allí está la sierra de Mara-
capans de que habla Humboldt. ^fl hubiéramos podido hacer otra
cosa, atendida la imposibilidad^de penelmr en territorios ocupados
con puestos militares por ]ps ingleses sobre el Esequibo y por los
brasilenses sobre el Rio-Negro^ Sin embargo, si se atiende á los tra-
tados celebrados entre España y Portugal en -I ° de octubre de ^777
y en ^4 de marzo de 4778, en la embocadura del rio Apóporís,
latit. 4" 46^ S. y long. 2° 45' O., deberían coincidir las fronteras
de Venezuela, Nueva Granada y el Ecuador ; y si fuera así, la línea
recta que parte límites entre la Nueva Granada y Venezuela por el
meridiano del Paso del Viento, vendría á dar dos leguas mas abajo
de la boca del Apóporis, en la catarata de Gupatí. Entonces segui-
ría por el río Yupura ó Caqueta abajo hasta la laguna Gumoapí ó
Gamoupí (en algunas cartas Marachí) de donde se dirigiría al N.
hacia Loreto ó hacia la boca del Cababuri sobre Rio-Negro. En se-
guida todo el curso del Cababuri serviría de lindero basta su cabe-
zera en los cerros de Archívaquerí , donde se encontraría la línea
que divide las aguas del Mararí y Castaño ; aquel^ tributario del
?
— 25t -^
f eiie^^Éli iiaia. Ffi^ eila bu« va demaecuiNK- iMÉrk' qoe-
raí» ioft dies: y sri» etlabteráiíttttaflu fofidute
el siglo j&fi»^d«ide S. ioaá ée Mtravilsaoa>, •» dbnde tioeii sa
puASiOi oiiUlae;. bafita el imHib! de! Lorete.
SHa^atíÉiufe a lo^ciiike ditfe.al^S^. toé Mamieftftestnepo^ seca'etwio
del interior que fué ea la BC|iékiiea de GoléÉiiHa^ ea so; tomo !<> de
la Historia de la Revol ación, el límite hacia el naciente seria dis-
tinto del demarcado, pues quedahÍA^aarel rio Esequibo en lugar
de la boca de Moroco, y siguiendo aquel hasta 4'* 50^ laiit. N., en
el promoák) debtieMboindiiniiilati SUmmit y del Rop«mini se era*
zaplft.ei{Eae9Úbo basoMdo^ l«a aendiltea» detaiBilwiyas d^ ealeno
y deiiltipttuiiiii; Segakia hiego las ámaB.á$i la eooilileDa- die Ttt»
mumuaqne, que- por lo» úHíiobi^ viajes d«l Sk. Sebombui^ debe
ser* CacawaynM, y por uii.reteoeeaa iriaá la.de Vasara que según el
misiDO'^iíeiio^son'losraioiiÉn dvAíinajettDe PeRgheate^ ürsato y la
sieitaGttiQCOii* eadoubitianeasii orl^ev alTwotáty diRupaovnl.
SigiáaBAalnogo alN..h¿da.ellago«AanMÓj.taiK<élal»roen'la fábula
del Boma», toiiiaria¿ la linea aobre la&caÉinraB.det MaHd. y de allí-
segwiaipor lai sierca.dePaeBraiiBaiqafiitliirida' )dsí ttibuitarios del
rio-Bfianoo y dall€anMií..Esia eapaeio aerki: di^^OO K* c. que ha-
bría que disputar á cuatro oaflíonBa^limitiofes^ la Inglesa^ la bolán-
desfty lafrancesa y labra»len»e^;'oada(iina.d8 las cuales tendría sus
prelenaíonea sobwuBiptis dosoonoeído y sdo pisado por los ludios
indc^ttdieoles. üUiaitmettte, oon raspéele sLla I^va Granada so
obsocra- que el.b2»Dn) de QumboiáLfija'^l limites en el río GalaB'-
cala , arreglándose sin dudaá las oariaBide^PidÉlgo que baoen cea^
cliÁt allíila pro¥ÍBda.de RÍ0»&uBfaa^.del mís»o modo que en el de
PuBla^Esgadft. la. de Macaoaiho , dsnomioiando el> país intermedio
prwinda: Qoajmt, De loque se in&ere<iaeo8(B; segua^, no per«
teneda á aínguno de los dos goÉ^iemo» limítrofes^; pero si se atien-
de á oinos-antone» que Imn eserílo sobre VeAosoela, oomo Oviedo^
se ^e qofi el rei.ceiicedió á^lós» pnwMMis deseuiMídores el terreno
desdo: Maracapana. baatateL cabo do k; Vela: :. aaíi también fueron
estoalo».líinite9.del;aGneiidaiiiieiiéo doloi^BelMure^ y erigida Vene-
zuefaDen^^ protiocia, también. coastrvóaqnBl tcfrítorío. Corrobora
estatidea lo quo escribió ebcélebre< gnmadino losado Caldas sobre
la geografia de sa paísiyqtte publifi¿.^^el Semanario dü 4808* Las
mismas palabras reprodujo la Gaceta de Gobierno de Colombia,
— 240 —
\
eaSI deiiiarzol822,ii*24yyl]abluidodel08Un¡te8de laÑoeft
Granada dice así. • Toca en la cordillom de Cácatay batea las ca-
t beseras del Táchíra , agoe sa cano hasta sa embocadara en
f S. Faastíno , alrafiesa basta las montañas de los Motíioiies y
t Guajiros, y siguiendo estas Ta á terminar^en el cabo de la Yda. •
Débese respetar la opinión de este sabio, porqoe oonoda la mate-
ria, era granadino y escribía para sn patria.
POBLACIÓN.
Pocos años baoe qne se carecía de datos aproiimados sdbre la
población de Venesaela, pnes áunqae se habían hecho algunos es-
fuerzos para formar empadronamientos, el temor de ser alistados
para el servicio militar ó para el pago de contribaciones, obligaba
á los babiíantes de los campos y aun á los vecinos de las pc^lacio*
nes á huir de ios encargados de aqad ramo; y los padrones eran
siempre arbitrarios. La paz y el orden qne han sucedido á los tn-
multos de la goerra, han desterrado aquel temor, resiableciendola
confianza, y aunque los resoltados de la operadon disten algo to-
davía de la verdad» por ser muí difícil recoger los nombres de tan-
tas personas que viven^uera de los poblados, con todo, los errores
no pueden ser ya de mucha consideración.
En cuanto á los indígenas, tampoco se habia penetrado hasta aho-
ra con este fin en los terrenos que ocupan ; pero los trabajos de la
comisión corogrifi^ja qqe ba empleado tres alios en recorrer las
partes desiertas del pais , ^do habitadas por ellos, dan una idea
ba^nte aproximada de su número.
La población de Venezuela según todos estos datos es de 945.548
almas, y se puede dividir en blancos, indios, razas mistas yescla*-
vos; bien entendido, que el número de estos últimas consta de los
ocasos y que como se ha dicho, está mui aproximado el de los in-
dígenas independientes. En cuanto á las otras clasilicaciones, ha si-
do mas difícil conocer el número de individuos, por no haberse e^
presado en Jos empadronamientos diferencia alguna de tas casias
mistas. Sin embargo, el que ha recorrido durante diez años todo
el territorio de la república, en trabajos análogos, debe merecer
alguna confianza en los cálculos debidos á sus propias observacio-
nes, para determinar estas variedades de la población ; he aquí sa
resultado.
/
— 244 —
Indios independíenles 52.4^5
Indios redacidos de raza para y de GOfitombres mas
suaves 44.000
Indios redacidos ya con las costumbres y usos del país
y con ciertos caracteres de familia que los hace distin-
guir ^55.000
Blancos bispano-americanos y estranjeros. . . , 260,000
Razas mistas de europeos, criollos^ indios, raza africa-
na y mezcla de mezcla 4i4,l5f
Esclavos 49.782
945.548
Población de Veneznela en la época de la revolución según el
Sr. Humboldt,
too
H
I ou
'-^ Indios raza pura cerca de -120.000
^ Esclavos raza negra 62.000
~ Blancos nacidos en Europa ^ 2.000
,Vo Hispáno-americanos, criollos, blancos. . . • 200.000
1^ Gastas mistas de mulatos, zamb(ls, mestizos y
mezcla de mezcla . 406.000
800.000
r. GEOO. 49
-.tt^
\
ESTAJDO de la poMaoioii «dml distribuida por provinctes.
Afios
p«dr»na
miento. .
1838
itBtt
1857
1837
1837
i837
1837
1837
1838
1838
«8nr
YS38
1837
PROVINCIAS.
Caracú
Carabobo
Barquisimeto
Coro •
Maracaibo
Trujlllo
Herida
Barínas
Apare
Barcelona- . . • y* . • . . .
Cumaná
Margarita
Guaraná
Total. ^ .
Saperficw
en leguas -
de ao at
gi*dD
itfrial.
679
78S
011
9.7180 i
362
907
1.994
1.860
1.115
1.463
37
30.149
Población
absolata
comprendí-
dM la«
S4S.888
96.967
11S.755
40.476
4S.83S
41.788
62.116
109.497
15.479
Sa.105
50.671
18.805
56.471
35.951
945.318
Población
relativa
por lesna
85.4
445.7
144.1
fi.0
15.4
123.7
68.4
51.9
8.3
45.1
3A.6
494.7
2.2
26.3
d«
csdafoc.
34.^9
4.064
2.381
1.46S
565
1.371
698
1.458
158
841
U4U
608
49.782
I
Parecerá estraño que la población haya aumentado tan poco
desde el principio del siglo xu en que aquellas regiones fueron visi-
tadas por Humboidt, que ha sido el primero que las ha dado á co-
nocer bien al mundo civilizado. Graduó que en ^ 800 podría tener
Venezuela 780.000 habitantes, y cuando estalló la revolución
800.000 á lo mas. Si de aquella época á esta hubiese habido paz
en tan hermoso pais, alcanzaría la población á cerca de millón y
iDedio. Fúndase esta suposici^ en^que según el aumento que ha
tenido la de algusas provincias en los anos de paz, se puede tomar
por periodo de su duplicación el espacio de 56 años, que daría un
aumento de 0,028 anuales. £1 comandante de ingenieros^ primer
/
~ 145 —
profesor de la academia de matemáticas de Caracas, ha hallado que
la pobladon debe duplicarse ca^ i 8 ali<^ ; pero como sus cálculos
reconocen por basa los datos estadísticos que suministra el circui-
to de la capital, que es una de las partes mas sanas y mas avanza-
das en civilización en toda la república, hemos creido que com-
prendiendo la generalidad de las tierras debiamo'^ doblar la esten-
sion de aquel período, y así lo demuestra también la comparación
de la población de ^825 con la de ^859. Al efecto unimos el si-
guiente cuadro.
- S44 —
1
POBLACIÓN general de YeneEoela pan conocer su aumento,
comprendidos los indios independientes.
1
I
NOMBRE
de
LAS PROTIMCIÁS.
POBLACIÓN
en
POBLACIÓN
en
1839.
Caracas.
Carabobo
Barquisimeto
Coro. s...
Uaracaibo (5000 indios).
TrigiUo
Herida
Barínas
Apure (9000 indios)
Mai garita
Gumaná
Barcelona
Guayana (35,000 indios).
166.966
74.317
85.557
SI .678
30.0U
39.551
41.687
87.179
S4.333
14.690
35.474
36.147
56.3ia
DIFERENCIA BH 14 AÑOS.
En OMS.
942.888
75.922
96.967
99.650
119.755
97.198
40.476
18.798
49.839
19.788
44.788
19.937
69.H6
90.499
409.467
99.318
15.479
»
18.305
3.615
80.671
15.497
89.405
16.056
96.474
5.164
En menos.
!
Total 701.633 945.348
952.659
8.854
8.854
BBSUHBH DB LOS «DIOS BH 1839.
En el cantón de Úpala 8.600
En el de Gaycara. 9.180
En el de Rio-Negro .19.890
En el de Angostura 9.100
Enelde Piacoa.... - 9.500
En el Delta 6.670
En Apure 9.an
EnlaGoajira ^... .9.000
Total cbbbbal 59.4 15
CÁLCULO DB LA DOPLICAaOH ItOE
ES i BABOH DB 0,058 AS VAL.
De 1895 á*l839 faai 14 años : mul-
tiplicado pues 0,098 por 14, dará
1,399 y mulüplicando la pobiadoo de
1895 por este numero j cortadas las ül-
liraas tres decimales resultari 976,6'i3
que es casi la población de 1839, j po-
dría ser exacta sin la peste qae deso-
lé el Apure deste 1839 hasU 1838,
haciéndola perder, en lugar de au-
mentar.
/
— 215
Según la regla establecida en el coadro qiie precede, e) añe de
I 8d9 debía haber sido la población de i .404.800 almas, sin contar
)a emigración y comprendiendo los indios independientes. Como
solo tiene Venezuela en el aíio espresado 945,548 habitantes, re*
sulla un déficit de 458.452 personas, el cual espraia aproximada-
mente los estragos de la sangrienta guerra de la independencia , las
víctimas del terremoto de 4812 y lo que han devorado las epide-
mias de 1 81 8 , la mortandad de 1 825 en los valles de Aragua y la
de i 852 á 1 858 en el Apure. Para un déficit de esta naturaleza, era
preciso que hubiesen sucumbido 262.000 personas en aquellas di-
versas calamidades. A la guerra sobre todo debe atribuirse la parte
principal de tan espanto-»a mortandad, no tanto porque los ejérci-
tos fuesen numerosos, cuanto por el modo cruel de hacerla, dego-
llando á tüdos los prisioneros y aun á los vecinos pací ti eos sin es-
ceptuar edad ni sexo. En consecuencia de este sistema horrible,
conocido en el país con el nombro de guerra á muerte^ las pobla-
ciones enteras emigraban con los ejércitos y unos eran consumidos
por el hambre ó las enfermedades , y otros eran víctimas del can*
sánelo ó de las fieras en los bosques. Comarcas enteras cultivadas
y ricas quedaban convertidas en yermos : el fuego consumía las
habitaciones, todos los «hombres eran soldados ó andaban fugitivos
por los montes. INo seria , pues exagerado suponer que 200.000
personas perecieron en la guerra de la independencia, y que las
62.000 restantes sucumbieron en el terremoto ó fueron victimas
de la peste. Y como el aumento que en 27 anos debieron producir
aquellas gentes si hubieran existido, alcanza á 4 61.200 almas, evi-
dente es que la población de Venezuela hoi seria de 4.506.255,
que son 560.845 mas de las que realmente existen.
Se ha dicho que la población total de Venezuela en 4859 es de
945,548 y que su territorio alcanza á 55.954 1. c, en las cuales
no se cuenta un espacio de 6.000 1. c. que tal vez se disputará con
el tiempo á las naciones limítrofes. Según estos datos corresponden
26,5 á cada legua cuadrada, que son menos de tres individuos ó
2.9 por milla. Considérese ahora que la Inglaterra tiene 257 habi-
tantes por cada milla cuadrada, la Francia 208, el grande impe-
rio de Rusia 57, y se formará idea de la población de Venezuela.
Ni el África misma tiene tanta desproporción entre sus habitantes y
su territorio, pues Trípoli desierto cuenta 5,2 por cada milla cua-
drada. La América toda tiene 4 .258.444 U c. y en ellas una pobla*
N
\
cio« de S9 mStones ; demafien que tocan á cada HiiUa caadrada
55 indiTidüos de difere&tes razas, segan el resunen aiguenle.
PMacum de la América ^ general, sacada de la Geografía
^ de Balbi
Blancos europeos ó descendientes de europeos esta-
blecidos en América • 44.600.000
Indios americanos indígenas 40.000.000
Negros ó africanos sin mezcla, esclavos y libres. 7.400.000
Razas mezcladas de negros, blancos, indios, mu-
latos, mestizos y zambos y mezcla de mezcla. • . 7.000.000
TotaL . • 59.000.0(N)
ETMOG RAFIA.
Á pesar de sa pequeña pc^acion, Venezuela es una de las par-
tes que frecen nuiyor aúmero de puebles dHérentes que hablan
distintos idioflMS.
Según el apreciidb4e Atlas Etnográíko de Balbl (del cual nos ser-
vídéoi para la dasücacíon de tos pueblos según sus lenguas ) se
haUan en toda la Amériea 458 lenguas y de ellas resultan mas de
2.000 dialectos en mía población de 40 millones de indios. Hum-
boldt calculó que antes de la revolneioo babia en Venezuela
4 20.000 iadios de raza pura, y como á este mimero corresponde-
ría, según los dates amsríores, seis lenguas y 24 dialectos, resulta
comprobado nuestro aserto, pues en realidad se hablaban 44 idio-
mas, de cuyas variadenes y combinaciones resultaban 450 dialee-
tos. Otra cosa notable en América, y sobre todo en Venezuela, es
que las razas indígenas forman apenas una coarta parte de la po-
blación total del IVueye-M undo y que esta proporción baja todaríá
en la antigua capitanía general de €arácas á una sesta parte, según
lo estimó el Sr. Humboldt en la época enunciada.
Procuraremos hacer la cla^cadon de los diferentes pueblos que
fueron hallados en Venezuela según sus lenguas respectivas.
La familia Car^e-^Tamañaco, asi llamada del nombre de esas
dos naciones, comprende las lenguas de las tr!bus siguientes.
Caribe. Hñcion mui numerosa en otros tiempos, cuando por su
audaiia, porsns empresas gu^reras, por su espíritu mercantil ejer-
cía una grande influencia sobre el Tasto pats que se estíende desde
f
el 9émdဠiiasCa las AátiÜM. DomioalMi sobrii todo el ¿«no dtl
baijo Orinoco y oéupaba todas las [xeqaei&as Antillas. Los Caribes
del ceiitiaente so» los indios mas robnslos y ^^ >^toe que allt se
conocen y aonf ue «s otros tiempos hicieron tráfico dé esclavos y
íuesencnielesy feroiesen sus incursiones, no eran, sin embargo^
antropófa^ como sus hermanos ^e habitaban his pequeias An-
tillas, en quienes esta costumbre era tan común, qué con alusioa
á ella se hicieron sinónimos los nombres de CanibaleSy Caribes y
antropófetffos.
Los Ttiapocas y Cuneguaras que habitaban las llanuras entre
Caripe y Maloríií, se cree que hablaron dialectos de la lengaa ca-
ribe, lo mismo que los Yaos de la Trinidad, los Guachiris y los
GnariveSj tribus todas en el día confundidas con la población.
Homboldt piensa que los PurugotoSy Avárigotos HiripiripaSy
pueblos que antiguamente ocupaban el país que estuvo tan largo
tiempo bajo la dominación caribe, podrían ser tribus perlenecíen-*
tesa esta hermosa raza.
En el era los restos de ella están reducidos á las riberas del bajo
Orinoco-, y sobre todoá la provincia de Barcelena. Loshaí tambiea
que conservan su independencia, como los Vayamaras, en las e^^
bezas del rio Paragua, y cuyo dialecto probablemente es caribe;
los Arecunas , cerca de las cabezas del Caroni y los que ocupan las
orillas del Goyunt y sus tributarios, que según Humboldf, parecen
también restos de aquella raza.
La antigua residencia de los Caribes era en las cabezera» del Ca-
roni y sobre el rio Caris, en las llanuras de Barcelona. Los JUria^
parís eran de rara caribe. Los Chaimas , nación numerosa, ocu-
paba las montanas del Cocoílar y del Guácharo y las riberas del
Guarapiche, del Areo y del Caripe, en la provincia de Cumaná. 9a
lengua tiene una grande semejanza con la tamanaca. Los pocos
restos que se encuentran de esia raza están ya reducidos y la mayor
parte se ha mezclado con la masa de la población, conservándose
apenas en algunos pueblos algo de sus facciones primitivas.
Los Cumanagotos , nación muí numerosa que habitaba las Ha»
nuras de Barcelona , cuya lengua era también hablada por los Pí-
ritnsy Cocheimas, Chaeopatasj Tapncuares, Es mu4 probable
que el idioma de estos últimos reconociese eT mismo origen de la
lengua cumanagota , mui rehcionáda con la tamanaca. Todos esta
pueblen están hot confundidos con h población.
— 2« —
1
Los Palenques y Chiarives vivían cerca del Uitare en la moB*
taüa qne aun Jleva so nombre, en la provincia de Caracas. Estas
dos lenguas así como la cumanagota y la de los Cocbaimas , según
Humboldt están entre la (amanaca y la caribe, aproximándose mas
á la primera. No se encuentran boi individuos de aquellas razas en
su estado primitivo y sino mezclados con la población criolla, y solo
una que otra familia conserva sus primeras facciones.
Los Pariagotos habitaban en la península de Paria. Su lengua
parece un medio entre la lamanaca y la caribe : están confundidos
con los demás babítantes.
Los Tamanacos, nación en otro tiempo mui poderosa, está boi
enteramente destruida : algunos restos de ella se hallan mezclados
con los Panaresy Ojés, 6 Ejes, Ayanos^ Guaiquires y Parecas que
viven en las cabezeras del ^chivero y el Suapure. Unos pocos Guai-
quíres se encuentran en S. Fernando de Cachicamo, reducidos á
poblado y con bastante mezcla.
Los Vara-MucuruSy los Varacas , Pascibis, los Paireres^
Acherecotis, Avaricotis que vivían sobre el Cuchivero han desa-
parecido, lo mismo que los Güirigúiripas j Vochearis que babi*
taban á las orillas del Caura, no existen y solo algunos restos de las
naciones estingtt¡dasdelosi4r¿9Uii5, Pariagotos, Güirigüerípasj
Paudacotos viven reducidos en los pueblos del cantón de Angos-
tura, Todos tenían y los existentes tienen un idioma poco mas ó
menos relacionado con la lengua tamanaca. Esta se hablaba en tres
dialectos principales : el malano pnli^p y estendido, el carataima
y el cuchivero.
Sobre las riberas del Caura hai restos de los Arinacotos y tribus-
de Arimacotos y Cudupinapos , cuya habla es una mezcla de ca-
ribe y tamanaco.
Los Guáyanos habitaban entre Angostura , Yuruari y la sierra
Imataca , precisamente en donde se fundaron las misiones de los
capuchinos catalanes llamada? del Caroní. Son los que han dado el
nombre á la Guayana. Ellos con los Caribes, Guaicas, Aruacas,
Barinagotos y Arinagotos forman actualmente la población del can-
tón Upata , ya algo mezclada con los criollos que los han visitado
y que habitan entre ellos ; pero no tanto que no queden general-
mente con sus primitivas facciones.
Los Guárannos , casi todos independientes , viven en el delta
del Orinoco y aun sobre los rios que entran al Océano , bajando de
/
^ — if 9 —
la sierra Imataca. £^ nación que se comp(me toda de marmoros
y que vive sobre árboles, traGca con los pueblos inmediatos y la
Isla de la Trinidad. Muchos de ellos ban salido de sus selvas y ce^
nagales y están reunidos en varios pueblos def cantón de Piaeoa
en Guayana. También los hai en los canos de la provincia ide Cu-
maná.
Los Guaiqveries de la isla de Margarita y de Gumaná hablaban
un dialecto de los Guaraunos; pero en el dia están mezclados to-
dos con la población y aun han perdido enteramente su antigua
lengua.
Los Aruacas que viven sobre el A toparan y el Mazaruni es una
nación feroz y guerrera que habitaba las pequeñas AiHillas antes de
los Garibes y que conserva todarvia su ind^endencia. Algunos que
es(aban en la provincia de Cumaná ya se encuentran confundidos
en Ja masa de la población.
Los Arecunas i que viven cerca de las cabezeras del Garoní,
tienen uu dialecto al parecer de la lengua de los Aruacas. Losiáca*
vai que están sobre los ríos Sibaroni y Pulavo hablan un idioma pa-
recido al de aquellos y mui verosímilmente de origen caribe.
Los Gandules que habitaban las costas de la provincia de Ga-
rácas eran de la familia Garibe-Tamaco.
Los Caracas j Teques, TaramaynaSy Chagaragotos ^ Merego^
tosj Tarmasy Mariches y Arbacosy naciones todas populosas,
bárbaras y guerreras vivian en el pais que fertilizan los ríos Tui y
Guaira Hoi están destruidos en^rte, y en parte confundidas con
la población. Aunque se baya perdido enteramente la lengua que
hablaban aquellas tribus numerosas, se puede inferir de una cir-
cunstancia fácil de observar que era un dialecto de la caribe, y es
que la sílaba gua entra en la composición de casi todos los nom-
bres que se conservan de ríos , sitios, fruías y aun de muchos in-
dios en todo el territorio que está desde la boca del Tui hasta las
sierras de Nirgua y Barquisimeto y el rio de Guanaro. Gorrobórase
esta idea con la inspeccion.de varios cráneos hallados en los valles
de la serranía , en los cuales el ilustrado profesor de medicina ,
D'. José María Vargas , ha creido reconocer Iqs caracteres de la raza
caribe.
Hablaban una lengua común con la de los Gumanagotos los Tu-
musas y Quiriquires^ que vivian en los valles de Ghupaquire y
Gúpira. Se han encontrado no hace muchos aiíos algunas familias
\
eÉ los t>osques que cobren la serrai>ia entre Gotera y la montaSa de
TaiDaivaoo. Los restos de estas tribus se han mezclado con fa po-
bladon.
\lvian en los valles de Aragna , lago de Valencia y sns iomedva-
ciernes los Taeariguas , Archas , Meregotoe , Ajaguas y Muca*
rias, Sa lengua debe haber sido la misma que hablaban los indios
de Caracas, y como e>(os , la han olvidado. A pesar de estar ente-
ranemente mesclados con la población de aquellos Talles , muchos
conservan unas facciones indígenas , algún tanto modificadas, pero
fáciles de conocer á primera vista.
Entre el Oritaa) y los Tisnados, en las llanuras de las provin-
cias de Caracas f Carabobo vivían los AmmbñS^ Guarióos^ Chi-
ripas j Güires y Aiapaimes : han desaparecido todos ellos por ha-
berse meidado oon la población y solo uno que otro individuo
tiene facciones de la raza primitiva : del mismo modo está perdida
su lengua y no se sabe qué dialecto hablaban ; aunque es mui pro-
bable que fuese de la gran familia Tamanaco , pues de estos habia
en el alto Llano en donde conserva su nombre una estensa montaña.
También los halna en el Baúl.
Los Curaguas , Amaybos y Baranem vivían sobre la Portugue-
sa y han dejado solamente algunos restos confundidos con la pobla-»
clon, que nada sabe» de su lengua primitiva. Se encuentran en Ca-
maguan y el Baúl y es probable que liablasen un, dialecto de los
Cunagnaros, bermanos de los de Maturin que vivian sobre el rio
BoeoBÓ y cuya lengua era un dialectcfde la curibe ; lo mismo que la
de los Caiquetias y Atisaeuymm que vivían sobre et Apure y cuyas
rasas estáa enteramente mezcladas con la población.
los Guabaribos , saeíon de homfjres belicosos y casi blancos, á
quienes asi com» á los Guaicas ba dado renombre la actividad del
Cítrare con que envenenan sus flecbas. Habitan eerea de las cab^-
zeras del Orinoco y en el dia están tnui maltratados por los Maqui*
ritares : tienen una l««gtta distinta de las anteriores.
Los Qniriseamm» ó Ririshanas son vecinos de los anteriores y
doDúnan en la sierra Parima entre las eabezeras del Ocamo y del
Oiinoco : son lérozes^ y parecen de la misma famüra de los Guaba-
ribos.
ios Guaicas en ^to tiempo eran un» de las naciones que como
loa Guáyanos y Caribes estaban reducidos por los uHsioneros del
Carooi. Aun bai muchos restos viviendo en el nmmo sitio dooíe
/
— »l ^
estaban las aásicmesy miéniras qoc en los rios tribiilarios det Gu-
yuBt eiisten aon; independientes algunas tribus ferozeay guerreras
que son temidas por los mismos Caribes del Esequíbo. Parece que
los Guateen pequeños y blanco» que vif en cerca de ios Ouaharibo»
y snbre el Ocamo, Mataeona y Marictii baMan una lengua seme-
jante á la de los Guabaríbos.
Los Gncthibos ^ nación numerosa, nómade, sucia y feroz que
Yive errante a lo largo del Meta y enlre el Orinoco y el Vichada.
Estos indios impiden á los viajeros dormir en tierra en las riberas
del Meta y del Orinoco.
Los Chiricoas que habitan en las sabanas del Apure y también
entre el Meta y el Vichada hablan un dialecto de la lengua de los
Guabtbos.
Los Otmnaeo$ , naeion miserable, feroz, sucia y de las mas em-
brutecidas, presenta el fenómeno Osiológico de comer todos los días
y durante muchos meses cantidad considerable de una* greda javo-
nosa que ellos llaman pof^, sin que su salud se altere. Los pocos
que bai reducidos á vivir en poblado , ya no usan la greda , pero
es mui común en los Yaruros escoger una satítrosa^u que suelen
lamer los ganados.
Los Chtamas, nadon tan sucia, estúpida y vagabunda como la
Otomaea. Entre el Apure y.^ Orinoco bai algunos restos insigntfi-
cantes , mezclados de tal modo, que nq^es posible reconocer en dios
el primer tipo de la familia ; sin embargo, siempre dejan conocer
algo de su (erigen y de su estupidez : su lengua es un dialecto de la
Otonoca.
I>e los Guacuaras no se eonocen en et día sino algunos restos
en los pueblos de las sabanas de Caracas cerca del Orinoco ; pero
mxÁ modificados por su mezcla con los ^rioilos^ con quienes viven :
parecen per teneoer á los. Otomacos.
■ Los Y&rur&t ó Yoapines^ tribos indefcndientes que viven de la
pesea y casa en las sabanas del Apure sobre el Sinameo , Capana*
paro y el Orinoco. En otro tiempo formaban una naeion potente y
numerosa en las riberas del Apure , del Orinoco, y sobre todo cérea
de Caieara y en la boca del Goárico. Aetualmeaite están reducidos
á pocas familias. Estos indios> eran lámeses por su deslresa ed eazat
los jagoafes y euyaa pJM^cs vendían á los españoles. Hablan la lengua^
de tos Betoyes.
La familia de los Yaruros-Betoyes que babitaban e» loa llanos
252 *-
\
de Gasanáre y del Apuré y cayos restos existen esparcidos, tenían
iiua lengua peculiar de la que los Situfas y Airicos hablaban un
dialecto.
Los Gyros^ Gayones Cherecherenes^ Dazaros, Cucaros^ Amai"
bo& , Tobaros y Atisacaymas , que habitaban entre el Suripá , el
Apure y Portuguesa han desaparecido ó están mezclados con la
población : algunos restos aun existen en Santa Bárbara y otros
puntos, y parece que su lengua era la de la nación Yarura-^Beloy ó
un dialecto de elia ; pero todas estas tribus están de tal modomez*
ciadas en la población de la provincia de Barípas, que no es muí
fácil reconocer sus descendientes.
Los Taparitos hablan con una eslraordinaria rapidez : algunas
de sus Iríbus mui ferozes \41rcn en la hoya del Gaura , en unas sa-
banas cerca del Nicare , llevando en lugar de guayucos ó faldetas
una pequeña (apara , fruto del crecencia cugete» Su lengua parece
ser un dialecto de la Yarura.
Los Manitivitanos^ nación antropófaga, guerrera y feroz, aliada
de los portugueses , habila las orillas de Rio*Negro. Hacia fines del
siglo XYiii , bajo«u jefe Gucui , los Manitivitanos dividían con los
Marepisanos la preponderancia del poder sobre Rio-Negro , y eran
los rivales de los Guaipunabis sobre el alta Orinoco. Penetraban
de tiempo en tiempo en este rio para cagar hombres que bacian
esclavos y vendían á los portugueses ó mataban para servirse de su
carne como alimento. En él día hai pocos de esta nación en las mi«
siones : se les llama Maravitanos y son los mas inteligentes de todos
los indios : van ya vestidos como los criollos , conservando sin em-
bargo su lengua y hablando la mayor parte de ellos la espa-
ñola.
Los Marepisanos, vecinos y rivales de los Manitivitanos, á los
cuales bajo sus jefes guerreros Imú y Gajamú disputaron cerca de
la mitad del siglo xviii la superioridad política sobre las pequeñas
naciones independientes de los portugueses esparcidas sobre Rio-
IVegro. Ya no existen Marepisanos en la parte de Rio-Negro perte-
neciente á Venezuela ; pero sí se encuentran en la parte del Brasil.
Los Cheravichehefias ^ que se dice hablaban la misma lengua y
Yivian sobre el Guainía , han desaparecido.
Los Barias^ nación numerosa de la Guayana portuguesa. Hai
algunas familias de ellos en los pueblos del cantoo Rio-Negro^ mui
dóciles y dados á la agricultura.
;
— 255 —
Los BanibaSj tríbn de la Guayana portuguesa^ habitan en los
pueblos del Casiquiare. Gustan de vestir bien.
Los Vaupes viven sobre el ücayari , tributario del Rio-Negro :
son aliados y amigos de los indios Ucanavis. Estos , los Azanenes,
Macuenes y Manivas, que viven sobre los rios tributarios del
Guatnía, hablan una misma lengaa con diferentes dialectos perte-
necientes ai parecer á los de tos Manafivilanosy Marepisanos.
La familia Saliva ^ nación agricultora , en otros tiempos mui
poderosa y estendida y todavía mui numerosa. Su antigua morada
parece haber sido en las orillas del Vichada , Guaviare y entre el
Meta y el Paute. Los Sáliws gustan mucho de la música. Desde
tiempos mui remotos se sirven de trompetas de tierra cocida , de
cuatro ó cinco pies de largo y con muchas partes gruesas y angos-
tas que se comunican entre sí por medio de pequeños conductos.
Estas trompetas dan un sonido mui lúgubre. En el día viven
estos indios por el Meta ¡ en la prosincia de Gasanare, territorio de
la Noeva Granada.
Los Atures , ración guerrera y poderosa ya casi estinguida, pues
hace medio siglo que no se le conoce sino por los sepulcros de la
caverna de Atanrlpe , en donde se conservan los esqueletos en ma*
pires, esi)eclede cestas, y en vasos de tierra pintados con crte.
Iguales sepulcros bai en el cerro de Perepereme.
Los Qftaqíias ó Mapoyes viven sobre el Orinoco, entre el es-
trecho de Barraguan y el raudal d#^nta Borja. Son de la misma
fáraiiia que los anteriores.
Los Macos y Piaroas, nación numerosa , agricuUora y de cos-
tumbres dulces que vive independiente entre el Sipapo, el Cuchi-
vero y el Orinoco. Sneten traliear con los criollos y son aseados en
sus habitaciones. Algunas tiitjus de Macos viven eii las orillas del
Ventuari y del Padamo.
Los Guainares ó Guiñaos de las cabezeras del Púdamo ; los
Ma^itsi , Maióngcong y Quevacu que habitan las cabezeras del
Yentoari y las orillas del Merevarí; hablan la misma lengua ó dia-
lecto de los anteriores.
La familia Can^erc-^Maipure ^ nombre compuesto de dos na-
ciones.
Los CavePe ó Cabres, enotro tiempo numerosos, potentes y guer-
fepos, diipiitaron á los Caribes el domino del bajo Orinoco. Después
• lié lií §r«n derrota sufridji por aquéllos antrop¿fagos conducidos
— %u —
\
por $a jde Tep , 6B la Boca 4el Infierno, pwioeaa randlil Uamado
antiguamente de CanaiseUi , <|aedanHi tan destruidos que en ade-
lante no se habló oms de ellos. Hdí sin embargo ajguoas faunilias
que yiven en los pneblos de Rio-Negro. Usan vestidos f se dedican
á la agrícnltura y á la construcción de erajMrcaciones,
Los Guaipimabis eon de la misma íamilia : nacían anfropóliaga
aunque la mas culta de todas las que viven sobre el alto Orinoco.
Estos indios detuvieron los progresos de los Caribes en sus regiones
¿hicieron sobre el Guaieía una guerra eslenninadora á los Manití-
vitanos sus rivales. Los Guaiponabis, originarios de las riberas del
Inirida , conducidos por su iqíolo 4 jefe Macapú y por su sucesor
Cuserú , ejercieron bada mediados del siglo xviii k superioridad
sobre todos los pueblos del alto Orinoco. Crucero , otro jefe de los
Guaipuoabis, abaiidonó el Iníf ida y con su horda f«é á fijarse detras
de las moo tañas del Sipapo.
Los Etenamos. íerozes que habitan entre el Mariate y Gamaoi
son descendientes de la horda de Crucero y se hacen respetar de los
Ifaquiritares, que no se atreven áaiacarlos en sus regiones defendi-
das de raudales y peñascos , en donde saben apostarse ventajoea-
mente para defenderse. Cuserú , amigo de los espaikrtes, se esta-
bleció con los suyos en S» Fernando de Atabapo , en la época de la
espedicion de Solano, y de reí que era, pasó a akalde de aquel
pueblo. Sobre el inirida esiáo los restes de los Guaipunabis.; pero
ya no son antropófegos : n^antieoen tráOco.oon los babítanles. de
S. Fernando y se pueden pasar sus raudales, por no estar ya defen-
didos como en tiempo de los Caribes^
Parenes^ pueblo antropólégo que Im> debe confudifse con los
Parecas ó Paravenes del rio Caura. La leii§«a de los Pereaes, es un
dialecto de la maipure : actualoieQte nis se sabe su mocatkó ya no
existen sobre el territorio de Venezuela.
Los Maeipiuresp nadon. del alto Orínoco^ en otvo tiempo, fuerte y
numerosa, bol casi estinguida. Los Avaaos^ Gañeres, PaveriuBs,
Guaipunabis y Chii:qpa^ np bable^n.^ino dialectos de bkdgiia de
los Maipures , mas dulce que el idioma ayanoi. Dos fandüasno mas
existen de to4^e$ta;ra^|.yestón mezeladas. LosJIonaiioitiíy Ca^r^
Puipitenes , dé la familia Maipure , han desaparecido.
ÍMPanqresqv^ xiv^n en las i^í^ifis del rio IWo y cu la ser-
ranía de Ci|chivero , d^jaM eoiM^ por suctaagiia iqvepert^Moen á
la misn^ ifuniUa. Tienen, W^mi^Bii f tiu» eam-.esláa ci^^siidÉdae
/
-i- »5
46 empaUradas, preMitaüdo la mitrada da dlü, pmdifOifertiiQa-
doft y cubiertos de palma.
A esta inisiiia faisília , según tradácioQes recogidas en ios misnios
lagar6$, pertenecMn las ^tribus ^e los EcuanabiSt Civitenés^
Cruainimaneses^ Berjfpaqmnavi^, Avimam^ Deesanas y Amoi-
sanas , las cuales TÍvian entre el Casiquiare y el Rio^egro, y fae-
ron perseguidas y destruidas cnaado ím portogaeses hacjan el trá-
fico de esclavos en aquellas oomarcas.
Acka^um , nación nómade y estúpida ; su lengua tiene alguna
afinidad con la de los Maipures. Están confoadidoscon otros indios
del Apure.
Maquiritares ^ nación casi blanca, numerosa y agricultora que
vive sobre el Padamo, Cunucunuma ^ Ventuari y los tributarios de
estos. Hace la guerra á los Guabso^ibos y Guaicas para robar indios
é indias pequeñas que llevan á Demerari á vender, y mas comun-
n^nle á los holandeses , en cambio de herramientas , cuentas de
vidrio, espejos etc. Humboldt creyó encontrar en »i lengua una
mezcla de Maipurey Caribe, Los Maquiritares son en el día los mas
preponderantes ea el alto Orinoco,
Los Arivianos , Au^rianos y Yocuras hablan un dialecto del
mismo idioma.
Los Carasicanas que vivían antes sobre el Mariata y Manapiare
están ahora en ^1 Mapichi y Yavitari, donde siembran un poco de
algodón. Son aliados de los Maquiritares y hablan ua dialecto medio
entre el de estos y el de los Macos.
Los Uuiscas , de quienes hubo alonas tribus dependientes en el
territorio de Venezuela, formaban u^ nación poderosa que habi-
taba en las llanuras de Cundinamarca. Dos jefes los gobernaban
simultáneamente. Una especie de ponlíílce que residía en Iraca era
objeto de la veneración de los peregrinos y de ellos recibía ricos
presentes. El oCro era el saque ó rei , y tenia su morí^da ea TuQja ,
siendo tributarios siuyos los zipas ó principes de Bogotá. Los Moscas
y los Muiscas, adoraban el sol como los peruanos, y habían hecho
tales progresos en la civilización , que después de ellos, de los Meji-
canos , de los Zapotecas de los Queches y de los Kachigueles, se pue-
den considerar como los mas cultos del Nuevo-Mundo. ;
Los MucmhieSi YurioagMos ^ Escagiíeyes ^ Miyuses% Triea-
. gua$ I Tápanos f Mocobos^, Mucunches, Uambunes^ Chamei0%
MmímiU0S, hmnios^ Aviamos y Mm%iftíeSi que Juthitfibafi jel
— a»e --
\
Tpm6 DMiaUiloso de Méiída, hafotaban dialeetos de los Mttiscas,
en cuya lengua fallan los sonidos correspondientes á las letras b ,
d , z. Así lo acreditan todos los nombres indígenas que conser-
van los lugares de la provincia. La principal masa de esta po~
blacion está compuesta de aquellos naturales que boí hablan la
lengua española y no la de sus antecesores. Sus facciones son tan
semejantes á las de los puMtlos de la provincia de Tanja , que no se
encuentra diferencia alguna. Los Timotes , Tastos , Escuques y
Cuicas que habitaban la provincia de Trujillo, estén en el mismo
caso que los de Marida : su lengua debia tener un origen común :
en el dia están enteramente mezclados con la masa de la pdl>lacion.
Los Goajiros , nación numerosa , feroz y guerrera que en otros
tiempos contaba mas de 60,000 individuos, boi está reducida á poco
mas de -18,000. Tienen relaciones comerciales con los ingleses y
holandeses , son buenos ginetes*, crian ganados y cultivan algunos
pedazos de tía:'ra : manejan perfectamente el fusil y las flechas.
£stds las usan envenenadas y la mayor parte de ellas con la púa Top-
inada del hueso que la raya tiene en la cola ; el veneno es tan mor-
tífero, que de los que llegan á ser heridos pocos se salvan y el mayor
número muere en horribles contorsiones y dolores agudísimos.
Los Cocinas están sometidos á los Goajiros y hablan un dialecto
de la lengua de estos , lo misaio que los Sabriles y Cucinetas,
Los Zaparas, Aliles, Tarnanares^ Bobures ^ Toas, Quiri-
guiresy Carates y Alcoholados , naciones y tribus que habitaban
al rededor y en las orillas del lago deMaracaibo y rio Sticui. Algu-
nos restos eiListen todavía en la laguna de Sinamaica , Lagunilla ,
Moporo y Ticaporo , en cuyos lugares hai varias familias reunidas
que viven en chozas elevadas sobre horcones de vera en medio del
agua. De estos pueblos anfibios se cuenta que para hacer la caza de
los patos comenzaban por ecliar al agua muchas taparas. Cuando las
aves acuáticas se acostumbraban á la vista de aquellas boyas , toma-
ban los indios otras semejantes en que metían la cabeza después de
haber practicado dos agujeros proporcionados para los ojos. Con
este artificio se acercaban á los patos unas vezes á nado y otras ca-
minando ; pero siempre con disimulada lentMud , como si la tapara
fuese impelida por el vienlo ó la corriente , y ya entre ellos , los
iban tomando por las pa^ás y sumergiéndolos en el agua para
asegurarlos |X)r la cabeza á una cuerda que tenían atada á la cin-
tura. La lengua que aun conservan estos inuNos parece un dii^lecto
f
— 257 —
de la g(M¿ir^ ó de ^^ origen común con ella. El objeto verdadero de
vivir en medio del agua, no es por la insalubridad del clima ; copio
algunos han creido , sino para librarse de la plaga de zancudos y
jejenes que abundan mucho en los terrenos circunvecinos sobre-
cargados de una lujosa vegetación.
Los Motilones eran una formidable y numerosa nación que ha-
bitaba un vasta territorio sobre las fironteras de la provincia de
Santa Marta y entre Salazar de las Palmas y Tamalameque , pro-
bablemente Qd la montaña de Borotarc, cerca de Ocaña. Estos indias
infestaban los caminos que conducían á los establecimientos españo-
les y sobre todo á los situados en las montañas de Pamplona y Ma-
rida, é ínterceplaban la navegación del río Zulla. S. Faustino fué
erigido en el lugar que ocupa , para atender á la persecución de
estos indios , los cuales se hallan tan destruidos en el día^ que se
Ignora la lengua que hablaban. *
Los Jiraj aras j Nirvas, Cuibas^ Tocuyos y Güeros, Gayones ^
Omocaros y Yanaconas ocupaban la actual provincia de Barqui-
simcto y la serranía de Nirgua , en la que los Jirajaras y Nirvas
hicieron una vigorosa resistencia á los españoles que allí se esta-
blecieron para trabajar las minas de oro de Buría. Las dos últimas
razas fueron enteramente destruidas : las otras, que prestaron au-
silio á sus opresores así para la conquista como para las espedí-
clones qué hicieron en busca del Dorado , se han mezclado de tal
manera con la población , que apenas conservan algunas facciones
indígenas. Es mui difícil graduar si hablaban algún dialecto de los
Caiquelias ó de los que habitaban los valles de Tacarigua ; bien que
parece probable que pertenecían parte á estos y parte á aquellos , si
se atiende á los nombres indígenas que aun conservan varios pa-
rajes de aquellas comarcas.
Los Caiquetias pohhhan la mayor parte de la provincia de Coro,
y fueron ellos los que ayudaron á los conquistadores en sus des-
cubrimientos del interior : siempre fíeles y leales , sirvieron á los
españoles como bestias de carga, llevando al hombro los bastimen-
tos a lejanos lugares. Los Guaranaos de la península de Para-
guana, los Topuros de la serranía y los Baraures hablaban cierta-
mente la misma lengua, si se atiende á las facciones generales de
aquellos habitantes y á los nombres que conservan los diferentes
lugares.
Los Baraures (\m vivían en el cantón actual de Araure, los Tu-
P. GBOG. |.
\
— 1238 — ^
fxtriguas^ Duriguas 7 Tucariguas que habttat^an el pate entre é!
Cdjede y la Portuguesa ^ debían hablar lá misüía lengua de los de
la provincia de Barquísímeto, á jcausa de ta identidad de nombren
que se conservan en muchísimos parajes.
JKACIOttES eSXRANJEAASk
Atraídos por la grande utilidad que sacaban de )o^ rescates y de
la pesca de las perlas ^ fundaron los españoles en líil^Ia de Cnba~
gua una ciudad con el nombre de Nueva-Cádiz. Al principio pros-
peró tanto la colonia, que en 4509 sacaba de allí el tesoro real
45.000 ducados por solo el quinto que correspondía al erario.
Una lei de \ 505 permitía hacer esdaros á los indios Caribes , bajo
pretesto de que eran antropófagos. Desde entonces todo el que pudo
armar un buque se hizo pirata para saltear Caribes ; y á sus ojos
todo indio fué Caribe. Esto atrajo gran concurrenda a las costas de
la Tierra-firme , formó parte de las utilidades de los habitantes de
la Nueva-Cádiz y produjo también en 45H otro establecimiento
en las costas de Cumaná. Mas tarde fué abandonada la Nueva-Cá-
diz , cuando escaseando las perlas y los indios , no hubo nada que
sustituirles en la miserable isla de Cubagua, donde hasta el agua
dulce era preciso llevar del rio de Cumaná.
La ciudad de Coro fué fundada en 4527 y después comenzaron
los españoles i poblar en el interior. Ya desde el año citado de
4505 se habían llevado á Santo Domingo los primeros esclavos afri-
canos : mayor introducción de ellos se hizo en 4 5 ! 4 , y en 1 54 7 per-
mitió Carlos V llevar 4.000 de aquellos infelízes para sustituir i
los indios en los trabajos del campo y de las minas. De esta ma~
ñera j desde que los españoles comenzaron á establecerse en el con-
tinente, llevaron á él la raza africana , sin dejar por esto de hacer
esclavos á los indios, gue habían nacido para la servidumbre
según la opinión del obispo español Quevedo. Permitió en 4 527 el
emperador Carlos V que se e^lavizase á ios indios que resistiesen
ala conquista ; pero en 4550 prohibió esta iniquidad, porque los
conquistadores hostilizándolos y maltratándolos hacían nacer la
resistencia que les daba el derecho. Debióse en parte este acto de
Justicia del emperador al zelo infatigable y piadoso de frai Barto-
lomé de las Casas, que consagró todos sus esfuerzos á reparar los
males qae la codicia de sus compatriotas hada á los sencillos indios ;
F
«liüMfa m^tiemM^^ml»»^ y^Aewiu&qte afüdado |>or Jos reln
§iM«6ilBJti anta itf Smto Dao^ga. Pem tambíeQ es cierto (¡be
^ ítkl «se^vo lie Ciésas ^or 'f«Mi^0er« ios amerlNmBos , le Uz»
ii|jti«l0 eott lo» Mldird^s <te África, pift^s por tii»rar i los iodios 4e
sm^potiMades |^»9iiao la coQUouacm del traifieo de esclavo»
«MloaySiH^aíidiéQAiafiAalgUH tíempo^gipr tí nuofetieoesipaaoUimé^
ie%.4e Ci^iiéi^. Junio ^es decir en este higar ^ f oe «i ¿áeo la esc^a**
litada «s na ^^tv 4»al , el earioier Baturajomnte huBi^DO do lot
«qfsMM y. ta^eoQsliittle frotoecion <|iie éaa dado sus le^es á loa
eMavos^ lian oiiabBhRÍdo wmbo i aüviar ,^ 4rwte coadicioa*
: Eú d eebeo de ^é^-añea» desde fel^rero de -1745 hafta agesto do
473^^ m iiitnodQjertmi»i'ia aola j^roYÁaciodeCavécaa f794 escla-
lioa. l^'\^ dé&s aí^níeales desden de iio¥ÍeA)J^e de ^.730 ¿A7 do
obrH de il^ alcansó la ialirodficeiiHi á 54S6 aCrkmiofi ; y para q«o
Mójese ^1 el em^éeA 6 OO el mcaero de esolavoe qm talcttló el h^
Bon de MftfiíbdMf > eFa{)reeis0.ftte, «n ego con otro^ liiil)leaeQ en*
tntdo en VeneEiteiA de 20 á S2 mil oftiicaiios» SegiM cd citado ttmn-
Mdfe los esdafos ea tieio|io de la revoluciott i^aiaqwman las ^
{Mffijeside k fKiUaúoii. Ddwioos poea «ftlcalnr ^oe hatía éfttoiv-
oéb ..«..«.... ^ «... 62^<MH1
So aiii&eiito progtésño , «egvii las basas eatiUecidas y
ddbkiferos:27.aiDS^ • «..».••••«,•,..* Á^^^Z
Total 78,652
6i odttitjiBoa qoe to peiíte y la guerira baa costado á Ve-
afmela V$y%^ ^noms^^ la pérdida jM-opordooal de
loa osdami. será de^ «^.«.^«^^.^t^.... 22^44#
DeUdn pues eitetir 56,^92
Solo existen. * . • .• i^,7^
^mmé»'tfm*^r'm0mm
Déficit, . • • * • 6,4^9
Según se demuestra, el número df 49,782 siervos que bal en
toda Venezuela , es de poca importancia con respecto á la pobla-
-á&aif y^coüo^ f^^iea M jpróMUdo iNigw^osiWieAte la introduc-
«toQ do eaclaivos^ ylaieide44deociiibrede4l$0iia,ffatifi€adoolffa
é^i9Ai^ doetovaüdoKfateaá loa hijos do las esola?ias^ tasiiUa que
en un espacio que so fiiedo osoedof d« ^íkiiSkm^ h^ibiá d^dd de
4iMriftO9diiiritadeiiVfitt(9ii0k* *>
I
■
De la introducción de las razas enropea y afrteaiit y de sü anión
entre sí y con la de los indígenas de América, ha resaltado poblado
el país de hombres blancos, negros y color de cobre, con todas las
tintas intermedias que pueden ser efecto de la mésela de aquellos
colores y de stís diversas combinaciones. Así también se inv^staroit
denominaciones mui variadas para clasificarlos. Llamóse mulata
al hijo de blanco y negro; mestizo al de blanco é indio ; zambo ai
de indio y negro. Tercerones y cuarterones eran aquellos que se
acercaban mas que los mulatos á la raza europea y saltoatrás á los<
que se alejaban de ella por alguna nueva mezcla con el co^or afri-
cano. Ni se limitaron las diferencias á los meros accidentes de la
piel , sino que de muchas combinaciones resultaron formas mejor
desarolladas, individuos mas vigorosos y bellos que sus padres, y á
veses también mas despejados de entendimiento y mas capazes de
cultivar con fruto las ciencias y las artes. « ¿ Por qué, dice Lavayase,
« los individuos que nacen de un africano y de un indio, tienen mas
a fuerza física, mejores formas, mas entendimiento y energía mo-
« ral que los negros 6 indios? ¿Por qué, aunque el blanco es sa«
<r perior en fuerza física, intelectual y moral al americano indígena,
« son los individuos nacidos de la unión de un blanco con una india
« inferiores en las cualidades físicas y mentales á los zambos ? ¿ Por
« qué se distinguen los mestizos en general por su bella presencia ,
(jc por una Gsonomía agradable y por la dulzura y facilidad de sus
c( disposiciones? ¿Por qué es el hijo de blanco y negra superior al
<( zambo en entendimiento é inferior en fuerza física? ¿En qué
« consiste que cuando esta variedad de color se mezcla, sus deseen*»
Q dientes son notables por ana constitución mas robusta y vigorosa
a y por una energía natural mayor que la de los individuos naci-
« dos en el mismo clima, de padres de sangre europea ó africana sin
« mezla? Los que entiendan la naturaleza de la mezcla de razas, po-
li drán responder á estas cuestiones. »
RBLIGIOX.
Desde que los europeos se establecieron en Venezuela, casi tó*
dos los habitantes de este pais profesan el cristianismo, y tan solo
un corto número de pequeñas nacio^^es de indígenas independientes
ostán abandonadas á sus estravaganoias religiosas.
Las tribus indígenas que habitan el Carooi , las de los rios trübU'»
f
torios dd Cuyünii'del Veoitiari, alio Orki^eo y áei toírida , coBfto
]b$atttígiios peE^9 , ton adoradores de las fuerzas de la naturaleza.
Llamabao al buen principio Cachimana : Manifau es el grande
espíritu que arregla ks estacíotíes y faforece las cosechas. Al lado
deGaetñinaiia hai un mal principio, Jolo^KiamOy menos poderoso
^poro'mas astuto ; y sobre todo , mas activo que el primero^. En las
riberas del Orinoco no existen idolus^ como sucede entreoirás tribus
que bao permanecido Celes á los primeros cultos de la naturaleza ;
jpero el botuto, trompeta sagrada, llegó á ser un objeto de venera-
don. Para ser iniciado en los misterios del botuto y llegar á ser
piache o adivino, era preciso tener costumbres pura$ y ser celiba-
•tarío. No había mas que un pequeño número de aquellas trómpelas
sagradas.
La mas antigua y célebre era la de la colina situada cerca de la
confluenda del Tomó y del Guainia ó Rio-Negro. No éra permitido
' á las mujeres ver el instrumento maraYÜloso, y se les escluia de
-todas las ceremonias del culto. Sí alguna tenia la desgracia de ?er
el botuto, le daban muerte sin piedad. Humboldt recogió estas par-
ticularidades de las tradiciones que se conservan entre los indios;
p^o en el día la tal trompeta sirve en los bailes de todos los pue-
blos del Goainia , y este instrumento no es otra cosa que un palo
- hueco de cuatro pie» de altt y de madera sonora. Golpeando el
suelo con él, despide un sonido fuerte y tétrico á la vez.
Es cosa notable que casi todas las tribus tienen la idea de un ser
supremo que lo gobieriía todo por el ministerio de un espirilu
bueno y por el de otro espíritu malo. Creen también en la inmor-
talidad del alma , suponiendo que cuando muere un indio va á
ciertas lagunas á renacer en el vientre de una monstruosa ser-
piente. Esta los introduce eii un lugar delicioso donde no se hace
mas que bailar y embriagarse. Otros creen que el indio reposa en el
mismo campo que cúUtvó durante su vida; pero todos están de^
acuerdo en que el alma no puede estar fuera del cuerpo sin comer..
• Losfunemlés se hacen de diverso^ modos; ó bien se entierra el ca-
•dáver con víveres , ó se deja desecar en mapires suspendidos á lor
arboles ó én las casas al humo y al fuego; mientras que en otras se
pone el cuerpo én el rio para que salga comido por los pequeños
^ipescados nombrados caribes , y entonces sus huesos se ponen en
cestas y se cuelgan en las casas. Otros enfin se entierran con perfu-
mes y varios bálsamos/ y al cabo de ua ano se ^^ü los huesos, que
éé les papi^tes. Fer» getter>im0iii» fariMn toda In «d^h^ te gtd-
ttir; baitor y bebw.
Lo» babitftfiteis de eiertes iiaci«iie»«iite6dBl smatteeeriftlia ée tai
«ñas y emp iesaii á gritar com^ si Horasmi' á tas ¡lamflutea wmaBlm}^
i8ta griterk cesa c&motia^pmm á de^untar el dia.E&a^fnnaateilHilB
los piaches ó encantador»» hacen las Tases ámméésá», dftías tieaen
aditiflos. Nó^ faltaii indtas que se represenleii i Dtar en figam4B
evlebra ó de sapo; pero lomas ofdiimiita^ asá osmo W ma» Mlnnd,
es reooQOcer en el sol él ser que dispensa ¿la: tüerra tos bienes y tas
soales, la abnndaneia dis la« GOseGlia»y la escases de las UiMrita^.
Los eelipses^ de la Inna prodaeen una gran ceastnroaoidn», porfoe
los creen una señal de enojo provocado por la debilidad ^ lai pecan
6 ki' cobardía d<9 los indios; Para aplacar el agtro tona^i ka- anuas,
focan los instrumentos de gnerpa>y cortan' ó arranoaasárbeiesean
otras pruebas de fuerza física y de acUTidad : las BUij«res dan gmn-
Éas vozes tirando al aire maíz, yuca y otra» cesas basta que» apad-
gnada la luna y pasado el eclipse , todos aquellos estcemos de dolor
.ee convierten en alegría y la escena se termina eon unbaileu Entre
*los Tamanacos, refiere Humbold^ que se conserva la tradimon de
*qne en tiempo de las grandes aguas iban skis padres en canoas-para
libertarse' d6 una< inundación que cnbriaitodaa las tieiras^ Enton-
ces, dicen, que lasólas del mar batían contra lás-reeafi^le k'Bnea-
«nmada. Esta idea no se presentaiaisladainente entre lo» Tamanacos,
sino que hace parte de un «stema detradieoionesthistóriea»,,onyas
nociones se hallan esparcidas entre los Maipmtes de las grandes oa-
vtaratas, los- indios del rio Erefalo que desagua en eLGíittray entre
jtodas las tribus del alto Orinoco. CuandOisepregunta á los Tama-
sacos cómo ha sobneviviéoel género'humanoá aquel suoesoe^Jra-
^oniinario ó edad del agua de-loa Mesieanos, raspoBden « que- un
;« hombre y una mujer se salvaren en> lo Mo de wl njsnte llonado
>e Tamanacú, situado en Ií» orillas del Astvterú (¡boi Oi»hürero)iy
if que habiendo arrojado tras air per encima de 8u»<»lMBiB.er<^to
«• de la pahna moriche [imauritiü ) viéiion» nacer de^les.hnesost de
« este fruto les hombres y lae mujeDes q«e pebtanmide nue^cr la
« tierra. » « Hé' aquí, aiíade Hnmltoldt, en toda simpliádad, y
entre pueblos salvajes , una trbdtccioa' qnn losígniego» han adonuir
do' con todos los encantos de la imagaacm. »
A algntias legues^de la Enoaramadase flinra^en aedieide la^sa-
r
^. ^^^^^ _^
baña una peña llamada Tnpümereme ó Roca*Pintada, qne presenta
figuras de anímales y pinturas simbólicas. Hállanse gerog1i6cos se*
mejantes debajo de la Encaramada cerca de Caicara, sobre el Ca-
«qniare y eotra e^ -y el Orinoco. Sé en^uentrin á vezes estas
figuras á una altura considerable y sobre murallas de rocas solo
accesibles conandamios mui elevados. Cuando se pregunta á los in-
dígenas de qué modo se ban podido esculpir aquellas figuras « res*
]K>nden sooríéndose , y como contando un hecho que solo un es-
trasilero puede ignorar, « que en la época de las grandes aguas
« iban sus padres en canoas basta aquellas alturas. » Otros tieneá
por tradición^ como en el Casiquiare y el Sipapo, que Dios hizo en
ial cerro á los hombres ^ en tal otro á las mujeres , en algunos Io$
tigres , los monos, las culebras, los rayos, las nubes, los truenos.
Por cada uno de est^s cerros tienen una especie de respeto ó ado-
ración singular.
Últimamente , diremos algo de los matrimonios que no tienen
nada de religioso entre los indios : son simplemente fiestas de bai-
le y embriaguez^ á la conclusión de las cuales el padre da la hija al
novio; y este está obligado á pagar algo, sea en pescado, cazeria ó
trabajo al padre de la esposa , la cual debe ciegamente dar la mano
al esposo ó mas bien amo que el padre le destina. Este no conserva
4iutoridad alguna sobre los vatones y sí una absoluta sobre las hem^
bras. Se deben esceptuar de esta regla los Guajiros, porque allí kt
autoridad eslá , no en el padre ^ sino en los abuelos matemos , pu«s
dicen que aquel no puede asegurar que sean sus hijos.
Algunos maridos suelen cambiar por un determinado tiempo sus
muieres por otras; pero vuelven á tomarlas al espirar el término^
sin que haya enkre ellos la menor dificultad. Hai otras tribus como
hs caribes en donde el adulterio es castigado de muerte : los dos
adúlteros son sacrificados por el pueblo en la plaza pública. Gene-
ralmente ealas demás naciones el marido ofendido toma su ven-
4$anza sobre la mujer del ofensor y en todos casos la venganza es
igual á la ofensa.
Por la lei hai libertad de cultos en Venezuela, y cada cual puede
profesar públicamente la religión que mejor le parezca. Sin em-
bargo , la masa general de la poblacipn es Católica ^apostólica ro-
mana, religión introducida por los conquistadores.
\
— 264 —
GOBIERNO.
Cuando se descubrió la Costa-Firme se puede decir que los es^
paSoIcs encontraron una sola clase de gobierno , que era el abso-
luto, aunque paternal, de los Incas, Cipas, reyezuelos y Caciques.
£n Venezuela no habla sino repúblicas con jefes á vezes electivos i
Tezcs hereditarios. Algunos reunidos formaban confederaciones , y
por lo común , la mayor parle ?ivia bajo un gobierno patriarcal
cuyos jefes no gozaban sino de una autoridad mui limitada. Al
guerrero más valiente, al cazador mas hábil y animoso elegían estas
tribus por jefe. Aun en el día este espíritu de independencia se
conserva en las tribus que no están sujetas á los nuevos habitadores 7
y con. razón Depous dice « que el hombre qu« vive de la caza ó la
o pesca no se cree feliz sino en el fondo de los bosques, sobre las
u costas del mar ó c^rca de los rios : allí sus semejantes no le dis-
o pntan las frutas , las aves ó los pezes : su aislamiento hace su 11-
« queza. n
Los primeros conquistadores fueron bien recibidos en todas par*
tes ; pero abusando de la sencillez de los indios, dieron lugar á guer-
ras continuas que n»od¡Gcaron su índole y sus disposiciones natu-
rales, sufriendo tantos cambiamientos, que no se conocen ya estos
indios por el mismo pueblo. La mayor parte de ellos, perdida su li-
bertad, pasaron á ser siervos de los conquistadores. A los mas es-
forzados de estos se les daban por premio, encomiendas, que eran
ciertas fracciones de territorio conquistado, cuyos indios estaban so-
metidos á pagar tributo. La encomienda fué declarada inalienable y
como unida á las cualidades personales del titulado, por diferentes
leyes cuya ejecución fué confirmada por la de ^5 de abril de 1629.
No podían alquilar ni dar en prenda á los indios que tenían bajo
sus órdenes, so pena de perder su encomienda. El producto del tri-
buto de los indios no podia pasar jamas de 2.000 pesos fuertes ; so
asignaban pensiones sobre los demás según la orden del rei de 50
de noviembre de 4568. En Gn , las encomiendas fueron dadas por
dos vidas, es decir, pasaban del padre al hijo; después pasaban
á la corona y los indios venían á ser vasallos directos del reí. En
-f 687 cesaron las encomiendas , quedando los indios sujetos solo al
régimen de las doctrinas, donde no estaban de antemano sometidos
al de las misiones que se establecieron en 4656. En 4751 se for*
^ 265 —
mó la capitanía general de Caracas que comprendía todo el terri-
torio que hoí forma la república de Venezuela , y estaba dividida
en intendencias, corregimientos ó subdelegaciones, alcaldías, en-
comiendas doctrinas y misiones. El jefe era el capitán general^
también gobernador y presidente de la audiencia' real , y dé todos
los tribunales , menos los de comercio y del tesoro público. Estaba
igualmente encargado de toda la parte militar y de las relaciones
políticas del pais. Duraba en el empleo 7 aSos y recibía 9.000 pesos
por aüo. Cada provini^ia tenia un gobernador particular cuyo ejer-
cicio duraba 5 años. Conocía en primera instancia de todas las cau-
sas civiles y criminales, y para dirigirse en los negocios contencio-
sos, tenia un jurisconsulto que llevaba el título de asesor, nombrado
y pagado por el rei.
Vino por Gn la épooa de la emancipación . El 4 9 de abril de ^ 84 O
y el 5 de julio de 48M , serán siempre memorables en la historia
del pais. Una nueva organización se le dio entonces, formando una
república federativa compuesta de las diferentes provincias y paises
que se habia^n adherido al nuevo orden de cosas ; pero este no duró
mucho tiempo. El terremoto de 4812 y la invasión de Montevcrde
en el mismo año, hicieron sucumbir la naciente república. Sin em-
I)argo, en 1815 Bolívar y Marino libertaron el pais que mui luego
volvió á perder su libertad por los esfuerzos deBóves, quedando
sometido al antiguo régimen , hasta que en 1816 Bolívar empren-
dió recuperarlo con solo 250 hombres, y al fin lo consiguió.
En 1818, tomada la provincia de Guayana, se instaló en Angos-
tura el segundo congreso venezolano; pero como 1a mayor parte
del territorio estaba ocupado por los beligerantes, se puede decir
que el gobierno de los patriotas era puramente militar. La campaña
de 1819 que libertó casi toda la Nueva Granada, dio origen ala re-
pública de Colombia, compuesta de la capitanía general de Caracas,
del vireioato de Santafé y de la presidencia de Quito. En 1821 se
proclamó en el congreso de Cúcuta la nueva república, y á fines de
1825 ya ni en Venezuela ni en el resto de Colombia existían sus
opresores : la antigua capitanía general formaba cuatro departa-
mentos de la gran república. Finalmente en 1 850 se disolvió este
inmenso cuerpo político y volvió á sus antiguas divisiones, formán-
dose tres repúblicas denominadas Ecuador, Nueva Granada y Ve-
nezuela.
Esta última se constituyó definitivamente en la dudad de Valen-
— 2M —
\
€h en d aikK d» -18S0. Su gobierno se coeapone de tres graadeg pó-
deles : legislativo, ^ecutivo YJf^dicial, y todos emanan directa é
uadiredaEieBte de la Yoluotad del paebfo»
£a cada pfiiro(|aia » cualquiera que sea so población , se forma
la asamblea parroquial cada dos años ^ el dia ^'^ de agosto» Esta
asamblea coya duración es de ocho dias, está presidida por el jues
de la parroquia acompañado de cuatro coijuezes. Allí van á votar
lo& yenfiaolaoos mayores de 21 anos y dueños de una propiedad raíz
cuya renta anual sea do 50. pesos, ó tengan una profesión, oGdo ó
industiria útil que produzca -1 00 pesos, sin dependencia de otro en
dase de sirviente doméstico, o gozando de un sueldo anual de 1 50
pesos. £1 sufiragío eoosiste en nombrar el número de electores quj^
corresponden á cada cantea. Los registros de los votos se remiten
seUados á la autoridad civil del cantoQ| y esta, asociada al consejo
muttidpaJl , proeede al escrutinio de todos los votos : aquellos que
resultan con mas número quedan nombrados constitucionalmente
electores.
El dia V de octubre de cada dos anos se reúnen los colegios etee-
torales que duran ocho dias. Para ser elector se necesita tener 25
anos, ser dueño de una propiedad raiz que reditúe 200 pesos anua-
les^ ejercer alguna industria que produzca 500 á gozar de 400 p^
SDs de sueldo ai a£io. Los electores durao dos años, y ellos nombran
el presidente del estado^ el vicepresidente, los senadores, los repre-
sentantes, los suplentes y los miembros de las diputaciones provift-
Óales* £1 Bambcamiento de ks dos primeras autoridades se remite
ala cámara del senado; pero los otros quedan deOnitiVamente
Bombrados en el colegio electoral.
£N'' de noviembre de cada ano se reúnen las diputaciones pro^
^lincéales en la capital de su provincia. Las sesiones duran 50 dias
Y pueden pcorogarias por 40 mas. Toca á ellas proponer al pod^
^ccoiivo la terna de los gobernadores.; á la corte suprema de jus-
üda ks de los magistrados de las cortes superiores : informar á la
cámara de represéntenles, de las infracciones y abusos que se hayan
cometido contra la conatitucion y leyes y vigilar el exacto cumpli-
süento de estas. Denuncian al poder ejecutivo ó á la cámara de re-
presentantes los abusos y mala conducta del gobernador y demás
empleados de k provincia. Presentan temas á los gobernadores para
el nombramiento de jefes de cantón y para el de los empleados de
la administración de las rentas provincialefti' Hacen con propordoa
f
tal. ffai<iy toüH dit ^^im j tüBMéft* Mg|ibtoawÍMfi«Bite»praffi»'
loque sea por el biei) y alMi4i44artepMm«i». Lardaftaemtdelis
<ifiiliiail piwi<<>Éil<D e» de 4 fcnofty se naiie^w fiar stedeada
4kk Ha» oft diputalii ewibmfb per eate átndo»»
M p^dec legiskkltve' és. e( €anf(9ttS0* wietaNiV fuaw reaae el, 4ia
ai^4eeB«mde€aAi'aíbvdí»6eefeMáaé4crediiv«ie%ktfia, énraaiD
an atsMoe» IMMiaa' f fodúteMatfpioMgir 39 aiasiÉ. fisto enerpo m
.^m^imtétsémdMmtmy a»>de y^prayeg^gwÉ^ y otra de msm^
iá8r«5« Se tate M 4aa pofieadtir pfpTÜMáa y da te otras, uno ptr
caifa SdJÜQr-alnías^ ll«ms4 aína em asa InwaMMs ,^D<yváiiiaaa
]^ mNaA te^cáamasiaada doa aiaa yp^déando aec mtkípám» 11
eoogreso Haca eir aaeratgiiay peifitoaioB» 1» eiascte és prasMettle
y vicapBaBidaaie* de Ix rápúJbliNi^ y admite éM snsí iieiitíiiaiaBw La
«áaiara> de rapresanimitea ?ei tas» aciiaacÍMieft eea^ra.eata» das dias
iÉBd»iiatie8y eenára llia BMarnteoe del coiMejade estaday k» diría
-eorfer saprenÉa^. y deelai» n» Int 6^ no* ivgar i lar íiamiactaa de* eanaa,
aw pe^weíar de las atetbsciaiiea prepiaa de* lo» tpíhoiiales d)e paaA"
«ia.; fia 9ásátv^ del senado svataaistar y tasei^MD lo» iaeoms mieía-
éas> &i \m cañara de vepreseatántea^ é ioaeiipairaade ea aa s^ai la
eerte avprema, seateaeíadBfiíiiliTaiiienla. Gonrasponde á la <áan<a
de representantes yelar sohvela'ittveral^ de ka rentas nadosaleS;
aiuniíiar las: eiieala9> da la» gaafoa pélriieos- qae el ejaentivaí debe
pnaaeptar attMÉneaie. Em «ualeafBKra^ de lae do» cámffl^s ^ y solo
4^propttBri)a. de mam BneBabraa^ pne^n laüer 00196» ka kyes» y d»-
eMUsm, asepip<ninnd0 ka; «pie a8l)aM«$eii fB^HMlo& enya- áiIctaÉsia
pertMUBeo'á la de Dapree^irtantes. Toda lei debe ser discwtídfr tre9•Te-
-na<en eadaicámar»,. y sandeBada, pasa« ai <jeeatif¥o»qH»lai manda
éamfiíát é^ hi objeta!. EBték príaMir-Gasa Imite fveraa.dlB'leij.ev el se-
fiiiié»T«aÍ!«e ákt cámara qiA k peopiBo pasa considerar de nniew
al protesto y ka obffedoDea , y ss ka haiUirt' Awdadaa, maBdaid ar-
^ihor el pvof«ato.dllaeáiiiaiadeierí§flik,.»j!iicío>de laa.dea tei«e-
raa partea ée loa atkaaluoi pvosaitoff, no balkre ftmdadaa ks aJbje-
ekii^ pasaai eoa^dlas al f^oyeeto á katra eámara. Sk estoeatyeie
fnBiadBalaa:ebiaQía&ea del cjeavÉiiio, qiaeéari el paoyacta avefaífa-
do ; pero si las dos terceras partes de los miembros presentes de la
aspÉada eáfliaaa< eslMvieMii de aa«ento üm kr otaa , ei> q«e lui son
fMiwfcdBaikfcobjeeBMMa dM tjfMikiio^ ae dafoio^é )»sée:al pesgealQ
y
^ra qué lo mandé ejecutar como leí , sin que tenga arUtriopara
'Oponerse. Últimainente, si pasados diez días fiados al ejecolif o pnra
mandar ejecutar ana My no la defolviére con ras objedoues , ten**
drá fuerza de lei y sera proclamada como tal.
El poder ejecutivo está á cargo de un magistrado con la deñomn
nación áe presidente de ia república. Dura solo 4 aüos en sü des-
tino y no puede ser reelegido siflo 4 años después. Tiene tres secre-
tarios que eKge él mismo y puede destituir cuando quiera y non^
t)rar otros ; uno del interior yjustieia, oivoáe giterra y marina^
y otro de hacienda y relaciones esUriores. Por conducto de ellos
'iM)cn darse las órdenes del {w^sidente ; son responsables, y sus
órdenes no% obedecen péT nmgUDa autoridad^ si son contrarias á
la constitución.* En ciertos casos arduos é importantes debe consol-
'4ar el presideoffe la opinión de un consejo compuesto del yicepre-
sidente de la república, de un ministro de la corte suprema de jus-
ticia designajdo por ella misma, de cuatro consejeros que nombra el
> congreso y de ios tres secretarios del despacho. Toéa al presidente
. de la república conservar la paz y seguridad del estado , hacer eje-
- catar las leyes, regir las fuerzas de mar y tierra ; pero para mandar-
las en persona necesita el consentimiento del congreso; lo misino que
' para llamar la milicia al servicio ó para decretar la guerra á nom-
bre de la república. Con el voto consultivo del consejo, puede con-
Tocar estraordíDariamente el congreso.
' El poder judicial de la república reside en la corte suprema de
justicia compuesta de cinco juezes, y son atribuciones suyas conocer
en ciertas ocasiones de las causas que por responsabilidad se for-
man á los secretarios del despacho y también de las que tanto á es-
tos como al presidente y vocales del consejo pueden seguirse por
delitos comunes. Decide en las lilis contenciosas de los^plenipoten-
* danos o enviados estranjeros, cuando lo permite el derecho púUi-
< co y con sujeción á los tratados, y en las que por re^nsabilidad
se inicien á los agentes diplomáticos de la república. Resuelve las
controversias que se originan de contratos celebrados por el ejecu-
tivo. Oye los recursos de queja contra las cortes de justicia , ó ea
particular contra alguno de sus miembros, y le toca también cono-
cer de la nulidad de las sentencias que aquellas pronuncian en la
última instancia.
Tal es la estructura del gobierno actual , que por su encadena-
nuieBlo hace dimanar todo de la vohutad nacional , espresada por
f
ellii}De flíerdciode.los filfraga9left.iNircoqiiilBíto7 y dei^t de|a»
electores, diputados pfomciaks, rffi^tenUuite&y aenadore», hasta
los altos fuoeicHMints de la re|iabUea« >
Si faola armooía y zurdea se ve m eate gobtemo /no. $»cede (I9Í
^A los «le los indios indep^dientes qtte aim ;exis4eii éu el torito^
rio. .
La naeioD 3é los Guajiros, qoe habita ea la península de e^i»
Rombre, está dividida en varias tribus que llamaa pareicdidadles ,
y cada «na obedece las órdeiMS do su cacique ó Jefe. No se sabe pr^
cisameDte el número de estos, perosí.que son hereditarios, aunque
siempre se necesita el consentimiento de los principales de la tribu
para investirle de la autoridad de jefekF^^Yiven entre* ellos, casi en
continua guerra por la mas leve cosa que suceda á^uno de su tribu»
y mas á menudo por causa de.reses ó caballos qu6 eriau y que entre
ellos se.suelen robar. Hai muchos oupítanes que son los^que eondu^
cen los varios grupos á la guerra, y siempre residen entre. ellps con
sus ÍMuilias.
Los Guárannos , que viven en el delta del Orinoco, estén maa-r
dados per ^5 capitanes que dirigen su tribu como mejor les parece
siempre aeonsejándose con los mas viejos. Entre ellos tienen una
especie de federación para defenderse recíprocamente en ca$o .4v
ataique.
Los Caribes, que viven sobre el Caroní y en las selvas del Cuyuni,
no eligen á sus jefes sino eo sus asambleas generales cuando van á
la guerra. En tiempo de paz cada familia se rige á su antojo y no
conoce otra supremacía que la de la naturaleza. Tienen sin embarr
go capitanes que son los prJDctpaks de cada horda, y son los qu^
los llevan á la guerra bajo la dirección del jefe que se reservan
nombrar ;^ero no se dejan dirigir en nada por estos capitanes.
Los Otomacos tienen jefes á quienes obedecen en tiempo de paz y
de guerra, y son hereditarios. El cacique ó jefe destina diariamente
cierto número de sus vasallos para que vayan al dia siguiente á
cazar ó pescar para toda la tribu, y así sucesivamente por turno.
Todo lo que seJogra en caxa ó pesca se. deposita en la .pucrla del
cacique, el cual lo distribuye dando á cada cabeza de familia la can-
tidad proporcional al número de individuos que tiene ; asjí es que
esta naeíoQ no compone m^ que uña numerosa familia, que. ase-
gurada su subsistencia , pasa los días enfcstines y daaaas.
los Yaruros tienen el mismo método y susjefes so» hereditmos^
1
Los Goaipunabis tienen cadfves «fi» njgoii cmHh liitas , !y <k^
lf« eXIm^kmii aliama : «a* tieedítatios tieÉipr«:f»e fo iiHÜia no
dageiMte : «d ^sÉw^qvstsá^ «dmd, a« reteaa yamUnn 4ilro;
pero á este no le obedecen sino cuando hai guerra , 6 en sus cooi^
íbmeB parlioahM» ; par lo ¿eaias.%e ri^s «aáa ímáíkí defnr :sL
Los Mt^TÜtiM tMtten oadifnes 4«itq«kMieS'á«pieBdM lüs^«i|piÉ»*
flM^ q«e so» «omej^év defraudes fiwrtlli». SiiImíHIw 'SiiBle ont
grtin léderadofi pam áokmá&P»é^ olrali aifiimnB^ y atacar ¿km
Üi^^faibmixm^m» vivenMfputi «léefla.
Los Guafalfyes «rraiolos Iíümíi jofos qoo tos cai^emí en «as cqp*
F0ri»BS y teasa. IiMekMido ««lie 4A^
Los ftaroas iImM eapífiuMS'elweilvot ém mustie las iiií8ffi»lánii«
Has , y aéemas fcmi$fm&^e»» ■muíími cierto nim«PO 黫sl0B€i^*^
tttnes , ^ue SM iMiwdltafiís.
Los Gaabaribos parece que tienen sus jefes electivos ;|«no«iÉo
sO sabe por ifl^eni^s é& loa Miq^iiílaMs.
Los Armacas^ tfa»fioo tm }eié6 «tnolífos en 4ídmpo 4o ¡^ y «de
guerra. Aéeisas'cada trib«1i«iio«apitincB4|Qo leadkngofty oüitoo
^e hacen pi»rt« cte las-eiecclooesde ios fiaieii|«im».
Las demás tribus no tienen sino los mismos gobiernos, eo 9WN
M todos flrai ^M^ernalosy y la jAToatad ^inmaeitra gran anspeto á
loo atio^Mios , Ido <mal«s os^tt %iioargadoB<cteiiarrarlopas«doy las
taoontédnHentos que merecen Irasmltirse do ^neracion en igeno*
Toeíoii, pues no tienen otro medio «qoe «I do to tradimon para per-^
|)Otokr dertos jieelios , accionas ó gif«fraa aaemoraljlos.
TfiUfm müffmat ^¡ue mven o» las selmi f BObatM» 4e Vene-
■
UN M iOAi;mr#Ér áf «i»-]na€»Py MonrmcM ote €oi?|M^iii4
' CurimHífu»^ -^ SolMio ^ rio Savma : han loaido ^piÜBé'Mi
•le» dota Esmovalda y loibmdknios. ^ gotenndorde átaifaBa^
general fl^eas , le^ ftm «a 'oe^pilaii 9ioUa4or{iO&.IMi. ák» «attínn^
J«fiis«4écÍ«i'yaNHi^iUcfis ^ « «* .«. ^>^ -^ . < MB
f
Suma anterior ^60
Curu€hupMo9. ^ S^ÜRfe d vio <üiets« tai nsfits
de los anlerídlñ^/ .^'.«.^^.v^v. -lé^
6«<atfjnfna^'$. — Sobre el rio ÍDÍrida. Tienen bue*
ñas labranzas y hai dos puebiecitos que trafican con los
baftitai^tes de S. Fernando de Atebft^* Las mujeres
UeTan fustaft tereiade f los iioiid^Mñefe mi gpaKyveo : se
pintan de aztil, ^m easus etláii Iríen hecba^ eonaorrim
toésivía una «^oMa eftbivFta ée cuero áe tigre y muí
bien tejida eén uttt «ipecie ée «aitndMfe , pura éofen-
derse de lasfl«(^i. . • .« 240
Maquiritafm. ^ En te lafOiía CaÁIl. Vivem des»
nudos con g^y^co; las mujeres t&anea m deUmal
de cuentas de o» pile «Miiroéo por adorno y en sus«a*
sas están sin él* Estos indios iraÉeaa tom. los de Síinta
Bárbara. .•.»•.«.•*««•. 50
INDIOS QUE YIVfiN SOBb£ UIS RÍOS QUE TX£K£M
AL ORlNOCd ffOR bi. l^AAtE «Bl» OfiSTE £N £1,
CANTÓN BK^^BGIlOé
Guahibos. — Viven errantes sobre el Vichada y el
Meta, se mantienen de las frutas de las palmas y de la
caza , comen culebras de agua , son ferozes , altaneros
y difíciles de fijarse; van desiyidos y solo con un pe-
queño guayuco de marima. No tienen casas, y viven
bajo enramadas. Se pintan con la chica, que es un co-
lor de ladrillo. Ün capitán de esta nación se ha estable-
cido con su horda cerca del raudal de Guahibos , y
ayuda con sus indios á los transeúntes en el paso del
raudal de M'aipürej en donde ya no Vivé casi nadie. La
mayor parte de estos indios tienen el pelo negro , no
mui grueso y de un crespo suelto ; toman mucho ni<ípO. .4 ."ÍOO
Ámorua. — ' Viyen sobre el rio Vichada , tienen al-
gunas labranzas ; son suaves y afables y se dedican á
Ja pesca y lá caza. SOO
Sigue ^ suma 5.480
[
— 212 — ^
INDIOS QUE VIVEN MHIRS LOS lUOS QCB CAEN DEL
NORTE T DEL ESTE AL OAIKOGO EN EL gInTON
RIO-NEGRO. .
Suma anterior. . , 5.4 SO
Macos. — Sobre los ríos Panrgddoi y ADav^i. Se
dedican á sembrar yuca, iíame y pláUmo , Ueoea bue-
nas rancherías, son dóciles y iraOcan con los cnoUos* i 80
Piaroas. — Sobre los ríos Calaniapo, Sipapo y lo^
que caen á estos ; tienen labra nza| y buenos ranebos
con mucho aseo, son sociMes y todos llevan guayueo :
trafican con los t>oeblos de Atures y Mi^pures ; tienen
muchas gallinas, patos y cerdos, y hacen mucbo casabe.
Algunos se habían establecido sobre el Oftnoco, pero
los Guahibos les quemaron sus casas y labranzas y se
volvieron á los montes • 2.000
Mariani. — Sobre el rio Samariapo ; son como los
anteriores y suelen venir á pescar sobre el Orinoco. . 460
Macos. — Viven sobre el '^aptehi, tributario del
Ventnari , y sobre el Padamo ; no trafican con nadie,
pero son afables y cultivan la tierra 900
Etanamos. — Sobre el Mariala y Camani que caen
al Yentuari ; son ferozes , guerreros y no se comuni-
can con nadie. Su^ mujeres van desnudas enteramente,
y se pintan de negro. 4.400
Averíanos . — Son fáciles de rtíflucirse, vi\en de la
pesca y caza, tienen algunas labranzas , no trafican con
los criollos. Sus mujeres van sin guayuco y solo cuando
se adornan las casadas se ponen un delantal de una
cuarta. Viven sobre los ríos Mataza, Amáname y Yamo
que caen al Cunucuiiuma . • ^ -i .600
Curachicanas.— Iguales á los anJeriores : viven so*
bre el Mapichi y YaYitari, son trabajadores y siembran
algún algodón. 600
Avirianos. — Viven sobré el Puruname, cultivan
la tierra, sus mujeres van desnudas.. . . , . . 450
Sigue y suma. . . • • -10.170
f
— 273- ^
Suma anterior. • • » 1 0.-170
Yócuroi. «- Estáa sobre el Yao y son d5mo los an-
teriores -ISO
Guainares 6 CruinaoSé — Sobre el Gontinamo y
cabezeras del Padamo : enltivan la tierra y tienen bue-
nas casas ; ]as mujeres llevan un pequeño delantal
cuando se adornan, y se pintan de colorado. . • • ^00
Guaicas, — Son mas blancos que los otros indios,
viven en el Ocamo , Matacuna y Manaviche ; algunas
tribus de estos son aliadas de los Maquiritares y otras
de los Guaharibos , dos tribus que se bacian la guerra
en ^858. . ; 4.200
Guaharibos. — Son ferozes y guerreros , viven en
el raudal de este nombre y en el Orinoco arriba; no
usan embarcaciones sino conchas, y viven de la pesca y
caza : sus mujeres van todas desnudas 4.400
Quirisicanas. — Vecinos de los anteriores, dominan
en toda la sierra Parima, éntrelas cabezeras del Ocamo
y del Orinoco ; son feroies y están en guerra con las
otras tribus vecinas 500
Maquritares. — Viven sobre el Ventuari y sus tri-
butarios, sobre el Gunucunuma y Padamo y los que caen
á él. Estos hacian la guerra á los Guaharibos en 4858,
para robarles los indios pequeños que llevaban á vender
á Demerari , y mas comunmente á los holandeses en
cambio de herramienta y cuentas. Las mujeres van
desnudas y cuando se adornan se ponen un pequeño
delantal. Traflcan con los criollos de S. Femando y son
mas blancos que los demás indios, escepto los Guaicas. 5.540
mOIOS QUS VIVEN SOBRE LOS RlOS O^B CAE.t At
CASIQUIARE T GDAINÍA EN EL CANTÓN DE RIO-
NEGRO.
Mandavaeoi. -*<- Viven sobre el Pacimoni, cultivan
ta tierra y trafican coa los bFasüenses. ..... eeo
Barias. — Sobre d rio fiarüña : enltivan I9 tierra.
ueysuma. . « . 47.700
»• «ce. ig
\
, , . Smmtí^anterior. . . . -17.760
Una tribu se habia e*l úblecido en^k^baiB» éSb H&mimi
mu el Ga^quiare ; pero el^sarampioq lo^ hizo Tolveí: á
sus montas. . . •• • -. . . . -• . ^.' -. . ^^00
con los br«Htt6B8e8« . • . . . . ••".•• *54M)
Tapiros. T-S<)bro^6}€c(»taH0, iiüMtano d«l^lda^ :
trafican tambiMí ^n los 'brasileofles >-• ^^0
Yabanoa* — Sobre Torvaca aflvieiite de Idupa : sMi
como los anteriores «... 4^
Azanem.-^ Yiven'sobre el Onaiiiáiy AqBio y Meaüe
«M; 'están desnudos y solo cqn nn pequeñq guayuco ;
suelen traficar con lo» indios de Hafaa • . ^500
Macnenis. -^^hre-^l rio^de este noariiiffe : s«i eoftio
los anteriora. • . . • . ••••..• 4SM)
total • . ^9.42t)
INDlOBfQÜE "VIVEN EN EL CAN1M»N f^E 'GAIfiMllA.
Paitare». —- Yiyen en las cabeceras delCuchiverO':
son dóciles y cultivadores. ••...•.. *U90
AyamanoSy Guaiquires y Parecas. — Viven sobre
el Gbivapari y Soapure : son como los anteriores. < . . -i.MO
Mapoyes y Piareas. — Descendientes de los Sali-
vas, viven sobre el Auyacoa y Parguaza : son afiy)le8j
cultivan la tierra y tienen regulares labranzas. - . -• d#0
Total. . HW^
INDIOS, QUE TI VEN EN ^BL CANTÓN BE ^ÁlS60«7U|k^.
Panares. — Sobre el rio Mato que cae al Caura ;
cultivan la caña , el algodón , el plátano , la yuca , el
Hame y ki Mata* 'i«s]BMfj6r«>v»f Indas -desi^^
ilMo cuaqdo.se .casan se poBMüigaByaaó.. •; * . ; ••'2ffo
Tapani^^^^ >Hvcb «n el «ia1W¿aSB, íbrilmMio^«l
Sigu^^si^íma 200
c: . .s
f
^^^Smntpmkifior 200
Gaura; soñ^m^j ffii^réras : eii'lQgar^de ^gtitfftieo
ambos sestosHlle^da nAa- tepai4ta ,^Wm de la-^éHay
^{M9Éca y tieneo algunas* pequeñasJabraneas. . , . >^#90t
CaduíHmipés¿^-*^'^im^ vtféllo «á* vMr< «ntre él^Bre-
MMo y Caura) después de haber estado largo tiempo en
las cabezeras'dePVfetttirtfrij-btiyendo^deldS'útteioiiertM.
Son feroííés «y'^QWStos, vifen^de^Ia eata-y JébÉani^és
ílWk'ras. ....... . .... ... . , . ^#0
Arinaéóf^s y ^Ammeút&s. — 'Sen'déíálles , ^dltnran
%l{>IátaDo, la-yuea, la caña y la batata ; •tienén'^Ménfts
rancherías ; las tnojeres' van desnudas y solo exaudo* se
casan se poften tm'guaytico*de"^lres dedos d« ewchol* Vi-
ven en las 'eaiíéteras 'del tw^Cattra. 4*4
'^Hayoncong^ Quevaeu y Mavitzr. — De las cSibe-
zeras del tJawa^se^wer'ifferevári'y áígcrnos sbbf e~las
delVentuari :fettt'éWio^}ós^tert6res ^- S^
— ' * Total ^.900
« ♦ »
INDIOS QUE TIVEN EN EL CANTÓN DE UPATA.
Guaicas. — Están sobre los ríos Macapa y el Ca-
murán, trHlii(^fiosi#éPcbyütii.'<^tat naeton" e^féfOry
guerrera ;(líi8 tCaríbe^^preéat^n si^tü^e éMr enf^z
con ella. 9li$*itttf}éi^si tdti^4l«án6dft» e6n *tíDc -pé^u^Ko
Ittantal de cuentas.- YHreD>de-la pesca y caca y*tienén
algunas ptfqiNllils^alHNiíMiss "IftiMiM^
ftMíaS^ plátano.. , . . . . .... ... 'fíStfÓ
^TCimaragotos. Viven sobre el CaKQanata, que desem-
hafi al Yuruán : son ferozes como los Guaicas y viven*
lo mismo 400
Cachirégdtkuk^ éi^^VMán^ltítrM tñ'fm^ú'j leerte-
íugiaron á)lDSPiilM\Y«»ii«n''f ^CiMüittv ;'^80riiM^
y cultivaniilfaasri tárenme. . • : . ..... 11V>
taSa de Gá^UD ^4Mbl^glfÉ(^sfcfilgf^^
9
tSÍi0áif suma. . . . 2.9M
I
. — 276 —
. . Suma anterior 2.900
del Caroní, calüvan la tierra y viven de la pesca y ca-
za. Algunas tribng de esta misma nación viven en las
oabezeras del Carona . 600
Barinagotas. — Viven cerca de las cabezeras del
Garoní 400
Arecunas. -— Viven en las cabezeras del Garoní ,
sierra Roraima y sos inmediaciones. Se mantienen de
la caza y (cultivan la ynca .800
Acavau — Están sobre el Sibaroniy Patabo : son
como los anteriores , 4$0
Aruacas,— dación feroz y guerrera que vive parte
en el rio Atoparáo , parte en el Sibarona y Mazaruni ;
llevan un guayuco^ tienen pocas labranzas y viven de
la caza y pesca. ^,500
Caribes. — Están sobre los ríos anteriores , el Ara-
sari y Guyuni; y también algunos sobre el Garoní y va-
rios de sus tributarios ; tienen algunas labranzas. . . 2.000
Total. ....... 8.400
INDIOS QUE TI VEN EN EL CANTÓN DE PIACOA.
Guaicas^ — Se encuentran sobre el Goainía : Jas
mujeres van desnudas y solo con un pequeño gnayaco.
La pesca , la caza, el plátano y la yuca provoen á su
subsistencia. 500
Guaraunos. — En las or|Uas de Barima , Amacuro,
Arature y Aguirre ; como los anteriores. .... 2.000
Total 2.500
Guárannos y Mariusas. -^yisea en el delta dd Ori-
noco y son todos marinos. El pescado y las fruias de
las palmas^ particularmente laf del moriche; hacen su
subsistencia. Sus raoi^berías-e^in^tre grupos 4e pal-
mas elevabas del.wirfo á ciiisa.de. Las crecianiefr del
&0»t y suma.
I
— 277 -^ -
Sunla anterior. . •
rio. . . . • , • . 6.670
Total de la provincia de Guayana. . . \^ .040
Guajiras^ — Habitan la península qne les da nom*
bre, lacnal hace parte de la provineta de Maracaibo¡:
son coltí^adores de maíz, frijoles, yuca y nn poco de
caña; pero generalmente se dan á la cria de ganado,
caballos, molas y cabras. Son guerreros valientes y
diestros en manejar el arco , el fttsil y el caballo ; no
permiten que nadie se introdnica en sn territorio y sn
número se gradúa en -18.000 , la mitad de los cuales
pertenec^ian á la Nueva^Granada y la otra á Vene-
zuela 9.000
Yaruros, Chirieoas^ Guamas y Otomaeos. — Vi-
ven en las sabanas del Apure sobre el Sinaruco, Gapa-
naparo, Orinoco y Meta ; no tienen labranzas y se man-
tienen de la pesca, de la caza y de las frutas de las pal-
mas. 2.575
Total general 52.415
ADMINISTRACIÓN POLÍTICA.
Los naturales del pais no tenían antes del descubrimiento dívi-
sbn política. ni administración. Consistiendo toda su riqueza en la
pesca, la caza y un miserable culUvo; siendo por otra parte in- .
mensa la comarca que habitaban y ofreciéndoles esta en abundancia .
los medios de subsistir, no habla entre ellos límites designados. Sin
embargo, los que eran pescadores, ó cultivadores^ tenían determi-
nados parajes ea donde residid, á las orillas de los ríos ódel mar,
y aquello^ que vivían de la caza recorrían ciertos bosques ó llanu-
ras que consideraban como propias : unos y otros tan solamente
erai> inquietados por ciertas naciones cuya superioridad y. valor
tenían avasalladas las demás de un modo bárbaro y despótico. So-,
bre las. costas del mar los Guajiros, los CaiqueUas, los Gandules,
los Gumanagotos, los Guar^unos y. Cardes eran los de mas influjo»
Estos últimos tenjao. atafiUadafi te^^ibos á derecha é izquierda
del baj^ Orinoco. Los Cabres, numerosos y yaiientes ^ les disputa-
ban la supremacía y les hacian una guerra continua.
En et alto Oriooca los Guaipuí^abis fbirm^ftn la nacionr prepon-
derante y mas guerrera y los Maravítanos mandaban sobre el Rio-
Negro y hacian U goeUrará estos. £0 el^jnfttiiet de)|as^«€tlfftta dev*
Guayana habla naeiéiies^niiBierosfts, eeno lOsMa^iiritafetf, Salivad,,
Guáyanos y Guaieas< £a lai Uviiiias lo» G«ahibas , Yaiwaa^ 0^
macos, Ghiricoas y Guamos. En la setiinj» ekwtdtt lo» GuíaM yi^
Mucuchíes : domíoahMf al pié de eUai los Motilaue» y^ Gjros .9011;
eran los mas poderosas. Ka el.lag^dé liaraaaito loa:Beb«reaff Zér?
paras eran prep#adaraiiles< Lo» GayMie» y Girajaraa ea la»iceraHi
nías de BarquisioMlay Caratebo erauílos^Me iarriUeai Los ArlMtK.
eos, Teques, Caráeaa y AforiQh«Síenlai黫m«d&la<oalli é^iGuiem^, .
así comwlos'Tumusas y.Quiriquires en las montañas del Tui ^ eraiti
numerosos y guerrero» : asMammé k)».rh»wits,ajiJ<»s»nrairfa»da^
Cumaná. En las Uaatftasidt'esláa, dO)€áiá«aafy BdiinaaidaníMbMi ;
tribus numerosas^y paeaoe fo» todafi fnitabaí» auhyugjErfaiyaria ptt^n
derosa nación do- las GaribeiK
En -1511 ios religiosos domijiicos GonJleray Gaicé salieron, de Jai
Espaüóla para predicar en Cumaná el E?ang/eUQ,,y fueron bien reci-
bidos 4íiM 4os indios.
En -1515 el primer pueblo que se fundó fué en la isla de Cuba-
gua con motivo de la pesca de perlas , surtiéndose de agua en el
continente.
En \ 520 se concedió al Padre Casas la conversión de los iiH
4ígeiia»dél ^ottMeMe, desdé Pttriá itfetteite hlnta toear wt' M^
límites-de la pretlneia dé Santa^ Marta. Ett- el «élf^ de aaotefé b»-^
bia eltló6C0»'im' coütanlode religiosos démimcos y- en aqvfel afM»*
ínerlMr -destrtiíáctt yasésinadoa lo» fMled,- eAre|M^e^alÜ de^esérdene»'
comüMafréft^ p«elfe^de OlilriTMln']N>^ull^AloflM►^}edai^Miai»
•de CtHiggárf O«tttpofttadé séiMfe^el'rí^ dé GMmhjp, hoí MaM»^
nár^ á' nMdto legua dé^soboea, el pHcner puebky dep la oostaidé"
YeneiMá que lland TOlédo c» •{ mi . FVié ei» seguida dtotfidg pott^
105 iHiH^eiiastf
Eft 4829 síé eofleedi6 á tf ar^&lo imaMbos, oidorde la ttpaiéfa/
el podérjieMar iaüsAa dé la 'Margarita, y^tamfcfíeii se^bhío-asiánl»'
GonjyiegeOÉbatieropafraiifMr piidicae descubrir TpoMarefrla porte >
compittidlda^tre el^cal^tia^ ». iiteía»^ el di» la» velé'.
f
iniliBO aüO'teMó^ sa«oafgG J«aii:de AiDpées, poM^rlas islaede^
CanlNi, abo(áOrak(Biy Cvfaiae y^BmiaYve^ hoí Bonaire. A^in di»
impedir los escesos que cometían los negoeíaate» de ht Esp^iMa, e^
saskMHMsioiiee'SolMre la cesto de VeiieEoelaj coa eVobjelo de es-
claTiBir 4 losiüéígeiiaftj la^audMDda anloráó á Am^úes para íobk
perjKrl^, ceM^seJ^ró Inego^qve fundó la ciudad de Coro ceni»-
amistad del cacique Manuare , aunque na tema faeoUaées. pmtft
poWiri^aieltoiit'na^o»
Llegado el año de 4528, concedió Garlos V á los alemaBesBelnp»^
res4ft' oenqttittr Y^ poMísma de la parle de Venezuela situada enlra
lostCabea MavaeapiAa, al orieiitey y el de la Yala al occidente, au*
toritéadéloa para nombrar gobeitiadares con el titulo de adela»'
tachíf y concediéDdolea esclavisar á los iodios que no se les sorae*
tiefMi; pero sujetos eUoa mismos á la intervención del religioso-
dominico Montesinos , qua fué electo protector de los indígenas»
Noniibi^ron gebopnador y teniente de la conquista á Ambrosio AW
fingaiL*y Bartolomé SoiHer.
En 4550 se prohibió esclavizar indios y se dieron á' Diego de
Or4az 26<^ leguaside (erritoao desde el Maranon hacia las comarcas
dehfaaéo^ los Beteares. Ordaz llegó el misma afio al Maranon y
navagó* baoia Paria como territorio incluso en su Jurisdicción , en
donde se posesionó de una casa fuerte que habia levantado indebi-
dameataelMgobepnadop da Trinidad^ Antonio Godeño, y dejando en
ella^t-guaiHueíaft suiclente) entró en eltOrinoco ; pero solo en 4 556
fuó'<»iaodo se fundé la primera población en la vasta Guayana : se
llagió^ganlo 'Vemas y foé-en donde hoí está«l puerto de las Tablas,
frenáosla isla d« Pajarda, en e) Orinoco; pero quedó destruida
en4i59di|)orloabi^andéseBdel^B8equibo y Demerari; mandados por
Adriana Sanse».
Mñi9${ laaterritociosdaGueyana, GumanáysusdependeAciaa
pevIavecíflMa^'VJramato del^Nuevo reino de Granada, y Guayana
bate 4(7ia ^ita^ «Di4a á Comaná.
fio <lid9ii Ita^^omareas da Maracaibo qno dependían de Venezue^
la^lu^agpégBUSQaVmismo vireinato, uniéndolas á Marida qae eraÜl
capital: d»u^a piovioda granadina desde la conquista. Maracaüvo
poFiSa poiíaioo llagó ¿ sop capital del* gobierno de su no^bre^ y
Méfidttdtpendenoia de^élt
En 4718 se unió á la Nueva Chranadala^nsvinaia éaOaráoaaf *
«<< '
I
— 280 —
soM^peod^iems, hasta qoe eailü qiieéó formada la eapteniar
general de Yenc^ela ; su territorio iio compradla entonces sino *
las proyincias qae hoí son Goayana; Comaná, Baredona^ Caricas^
Carabobo, Barqaísimeto y Coro.
£u ^777 se anió á la capitanía general de Venezuela la provin-
cia de Maracaibo, que entonces compradla los territorios que ae«
tualmente forman la provincia de aquel nombre y las de Marida^
Trujillo, Barínas y Apure.
En -1787 se formó la provincia de Barinas, qae comprendía di. -
Apuro también.
Después de esta última época quedaron las provincias de la ca-
pitanía general de Venezuela distribuidas asi : Caracas, Cumaná,
Guayana, Barínas y Maracaibo. A esta comarca debe añadirse la isla
de Margarita que tenia un gobernador particular, y la de Trinidad
que pertenecía á la jurisdicción de la capitanía general, hasta que
vén -1797 fué ocupada y retenida por los ingleses.
En i 81 0, época de la revolución^, fué erigida Barcelona en pro-
vincia y confirmada por la junta suprema en -i 8H • Suicedió lo mis-
mo á las provincias de Mérida y Trujillo.
La provincia de Coro fué erigida por el gobierno español en -1 84 5^
pero no se puso en ejecución la real orden sino en 4 84 8 por el ge* '
neral Morillo. Fué confirmada después por el congreso de Colom- .
bia.
La lei fundamental dividió la república de Colombia en tres
grandes departamentos, Quito, Cundinamarca y Venezuda; los que
ponia bajo la autoridad de jefes denominados vicepresidentes*
Mas el congreso constituyente reunido en Cúcuta el año de 4824^
hizo con aquellas tres grandes secciones una sola r^ública y sub*'
dividió el territorio en doce departamentos : Venezuela contenia
tres denominador Orinoco, Venezuela y Zulia. El congreso constitu-
cional de 4 824 erigió las provincias de Apure y Carabobo y dividió
el pais en cuatro departamentos, i saber : el de Venezsela , que -
comprendía las dos provincias de Caracas y Caubebo, cuya capital
era Caracas. £1 del Zulia, que se componía de las provincias de
Coro, Trujillo, Mérida y Maracaibo ; la ciudad de este nombre era
la capital. El de Orinoco ó Maturin, que lo formaban las provincias
de Barcelona, Cumaná, Margarita y Guayana, siendo la capital Cu-
maná. El de Apure que se componía de las provincias de Barínas y
Apure, tiendo por capital á Barínas.
I
Por fia } en 4 850 se disolyió la república de Colombia y vo1tí¿
el territorio á sus tres grandes y antiguas divisiones* £1 ^ Vene*
znela se snbdividié en '1 3 proYineias, creando la de Barqviameto ,
estas en 88 cantones ó distritos municipales y aquestos en S23 par- '
roqnias que comprendían multitud de yedndarios. I4 mayor parte
de las provincias llevan el nombre de su capital. Guayana y Mar-
garita conservan el originario de su territorio. La de Apure , tan-
célebre en la guerra de la independencia , se denomina así por el
rio que la costea, y la de Garábobo recuerda el campo glorioso en
que se dio la batalla que afirmó para siempre la independencia
del país. Los cantones llevan los nombres de las ciudades ó villas
que son sus cabezeras, y las parroquias el de sos pueblos. En estas
hai dos alcaldes que se relevan por tiempo, duran un año, y son
los órganos del jefe político del cantón. Este lo es de los goberna-
dores y preside los concejos municipales que están en las cabe-
zeras de los mismos cantones. Estos cuerpos tienen á su cargo el
gobierno económico de su respectivo territorio.
I
-^a«í-r
ESfkWf qn»*demueitw lit^ ee/tBmñxm-áé cada provhicíat , el aAnero*
dehaMtMfi^ 0Í»4)QttpveiiáÉ«;los4i]diO§'íiid«peiidieiite8, ei>def««
4»PflM« f obj
«n 'l«f«a» ^' «D
cn»4r»dM
uftMNMK^* • • • *
S^Sti*
Barquiílmeto.
Coro
Maractibo . . .
Tn^iUo
Mórlda
Barinas<
Apure
BareeloiMu...
Gamaná
Vargaríia....
Gaayana
ToUI.
78a
9,780
368
907
1,984
1,860
l,tt»
1,463
10,149
'ii
8S,9S1
119,755
40,476
83,839
44J88
69,116
108,407
13,104
39,103
80^671
18,803
15,431
9
9
9
9
9
9
9
9
9
9
8|J
6
9
9
9
3
899,883
1
3
3
1
1
46
16^jftuiácjMt<Maiita, Vüta»», Chía- ^?
reaaí.,, Sia, LupJ^QcyflBfjp^
GafucHgua , Riocinco , Chrrlu-
Tormero , Haracal , Gura^ 5.
SWWftlHn.4r>Cal|J|ftiw-,.
6
6
5
4
8
8
4
8
9
9
8
f
NQHIIft-
del<»
I.
;'
88
Cabello, riirgua, Montalban
StCáftoMT-lva*
Barquisimeto,S. Felipe, Yarí-
tagua, Carora Tocuyo y Quí-
bor.
Coro, Gostarriba, Gumarebo,
Paraguaná, S. Luis y Gasigua.
Maracaibo , Perijá , S. Garlos,
Glbraltar y AlUgracia.
Trujillo, Garache, Boconó y
Escuque.
Mérida, Mucuchíes, Elido, Bal
ladores, Gríla, S. Cristóbal,
Lobatera y S. Anlonio.
Barfnas, Obispo. Guanare, Os-
pino, Guanarito, Nutrias, A-
raure y Pedraza.
Achaguas, Mautecal, Guasdua-
lito y S. Fernando.
Barcelona, Píritu, Onoto, Ara-
gua, 8. Mateo, S. Diego, Pao
y Soledad.
Gumani, Gunnanacoa , Cariaco,
Garupaoo. Gttiria, Riocaribe,
Aragua, Malurin, Barrancas.
Asunción y Norte.
Angostura, UpaU, Piaroa, Cal-
cara y S. Fernando de Ata-
bapo.
I
ADMINISTRAGIONBllfeJIAfilEIVDA.
I4b tribus ¡Ddígenas no tenían ningjOQid cla^ de ado^niatasuiioil ,
y entdonde no había propiedhd-ni riquaia^epa pajabrá do era,CK)fr
nociia. Los primeros conquietad^resi atravesaron el país en buspa
de ofD, y cuando lo conseguían se hacia entre ailos una división prci-
pordonal ; hasta que plántadiBis ía»()ria)flfiM p|ohUflk>ne6 s^empeyó
á dair orden á la admiflistraoíMi;.
EA ODiipaMiMmoii^ ea^id^rapénas haMapi«»ysyog^'<wW)FÉ»>
sobre úim imniensa estension dA<69#t|i que biiiidi|lift,á toAtg 0Qineit\
contrabanda^. el gobie«Bái« español nf {M»dk €i|í9(»llU^'i]l«d«Alfsam^
fic¡e»t«».ptr»^b«oer lrnHe'á>los.g^t#s, aunc|aa» la^^adÉlMi^Uaf^l<>%^
fuese simple y sin muchos empleados } aá es , que de Uéj^m veoiluQL
á Venezuela anualmente dos terceras partes del dinero necesario
para.cut^jpír lo$ g^lQS. £;icapi^9A$eo^i»Ji<re«m4i.la,viaieln{H)4€ir^
militar y administraUvOi hasta, que. el ampiMto de laAteniradAMi^l
á conocer que er» tiempp dedax.rc^laa á«Ia^jc6oU«piUdicft«.i^ ai»7^-
mentó sucefiiyameate-elnúmemd^eJui^tddoSyjttA.i??? &&iiMta)4t.
una intendencia. cuya aiflorjdad s«. e$ite];i<Uá,á .ta^^U.aa(!it»ma^!§er^.
neral. Los gobernadores de las provincias eran delegados del inten-
dente , determinaban todos los gastos ordinarios , pero no podían
autorizar estraordinarios sin el concurso del intendente. En todas
las aduanas principales había un contador y un tesorero ; y existia
un tribunal de cuentas.
El siguiente estado dará una idea exacta de las rentas y gastos
en tiempo de la capitanía general , reduciendo los pesos fuertes á
pesos del pais^ y despreciando las pequeñas fracciones.
1. /
]
{
— 2«4 — -
ESTADO de la renta y gastos de todos los ramos de la intendencia
de Caricas?
Renta
Gastos
BáLáHCB
liquida ¿»
AROd.
todas la«
eoDtríbo-
de
de*-
NOTA.
_
cíones.
toda clase.
faTorable.
favorable.
Peaoa.
PMm.
Pesos.
Pesos.
No está comprendida en
1793.
1640,955
4,979,479
259,234
este esUdo ni la renU de las
Í7M.
i,98M14
%049;B7S
97^1
buias qve montaban anual-
mente á 32,500 pesos, ni la
1798.
1,805,910
l,987,MS
195,595
de la yenta escIuslTa del
1790.
1,737,SÍ8
1,511,559
495.666
tabaco, qne se eleraba á
975^009 pesos netos de gas*
1797.
1,435,988
2,357,954
951,969
tos.
Del precedente estado se deduce, que un año con otro quedaban
en favor del rei mas de 700,000 pesos de la capitanía general de
Caracas. Para que se conozcan las fuentes de donde dimanaban las
rentas, presentaremos el estado general que tenia el gobierno es-
pañol en los últimos años que precedieron á la revolución.
I
_ — 285 —
RAMOS DE RUNTAS.
Tabaeo »
Aduanas <..<«..<«
Alcabalas ,.....,...
QaiDtos
Papel sellado '.
Cotnpotleion j Tenia de tierras
Tributo de los indios «
Derecho sobre miel....* ,
Derechos de pulperías*.
Derecho de lanzas
Medias anatas de empleos
Oficios Tendibles.
Salinas....,....;
Diezmos y vacantes.
Mesadas , medias anatas eclesiásticas. . . .
Anualidades
Bulas de Cruzada •
Gorreoa.
Confiscaciones 7 eomisos ,
Pasos de rioy peiges
Masa común de real Hacienda ó rentas
que no lenian ramo particular
Total.
I. ■ ■
ttN PB808.
m
700,000
^400,000
400,000
40
30,000
1S,€00
90,000
93,000
30,000
4,000
10,000
8,000
14,000
130,000
15,000
12,000
96,000
95,000
4,000
300
999,465
3,978,795
5P^
I
En tiem^ de la repábliea de Oolombia se insertó en una Gaceta
de Gobierno del mes de noYiembre de 4 828 , un estado limado
por el S'. Rafael itefenga , sobre la baóenda nae^al ; y por lo qne
respecta á Venesnela se ye que sn pro^hKto fné de 2>401l.5«9«06
y. svs gastos iteran de. • « . • . • 4,879.954.80
Había por consiguiente ún déficit de pesos. • • • 2,4|7.56S.74
^ » ■ - •
Las notas que acompañaban el estado bausán ver los de^ndyines
que reinaban generalmente en la contabilidad ^ y las Jtaltas que se
babian encontrado en cada administración.
''Separada' VeDezabla de Colombia; uno de los primeros j^sosqne
dio foéf »r¿iiiMMrr su iadministracjoa . y balancear con pru<]teQc¡a sus
gastos ^ma- m^ reittas : esto se debe al congreso constituyente
do ^830. Se organkó de modo, que las imposiciones nt> fuesen
directas ñ¡ sobre** Ias| personas ni sobre los bienes , y que iédirecta-
diente fi%y«sen sobre. ia& producciones .da .los.uiMB-'^t*de los otros.
Desde a^uvMa épocé*las*FeD(fts»marclian-eoni]n''«<^éfMo dflmirable
y bajo tnMVtema sitiplvrfpreeiso'cmicufren'pelffectamentfe á cum-
plir su objeto. Todc^s'Iós anos el ministro de hacienda presenta las
cuentas al congreso y pide, las saiiia^rpra«wpaM(>a&4eii»s gafetos para
el año ff#nidero. Sl.una.guerra.ú.ot«o>tai$OBtoeiiirieolo imprevisto
fuese caoítf^de que las •rentos no- eubms^ 'él'prestEpttesto j toca so-
Islmente á'la cámara' de* n^esi^tantes establecer el impvesto es-
traordinario que déi lo necesario para amortizar ó cubrir el déficit
ocurrido. $i el nue^ impuesto es sobre kiBiini^ovlMísnes'ó espor-
tdciones^debpais , to|caia recaudación* «• lo» «dmlttlsMdores de a-
dttana. Bi íes sobre i productos •internos, entontes pertenece á los
administradores de>fehtas próylnciales.' Tanto los unos eomo los
otros dirigen sus cuieñtas y reciben su i19pulso.por.e8te respecto,
de la toMNWÍa genefal, las administraciones 4e janana sott en nú-
nléro de^n«ce, de llis.€uaks>hai*o0lio'prffl<^tes,^7 'sbn , la Guai-
ra, Pu^to-Gabel lo {Angostura, ^Maracaibo, Dimana; Barcelona,
coro y MaFgarita : las ciaco«s4a^báItei?aa& san Carúpano , Maturin,
H^uerote, Adícora|y Gumarebo. Todas ellas reciben susi órdenes
da' la tesorería genetal, y esta concentra toda la contabiliiad cada
tilmestr4«.£Uribunal de fiamas la revisa, y sus fallos son inapela-
bles.
^Enlas'lreí^ fRTOVinctas'tial^ en cada
viiM,{ry^.eato 4ia«6ite4adilrai|^Í!«»9i»ifÉ(iiQ05SiiM aüiMiMlama
.><W^Y^iiiagta»<ija»<ti>ai()>toiitiilgi,|Wyta<>» güer-
X Mim^en si}4)¡Miri«éNkf«aiai»apMéa fíHwin'tfatBtiHiqülna
> Wíta<«rli9^ C9^ pro.viqcíalea y.naeioaales;.f iwciteoMMa^ifíAeii
las ttuiUdades que resultan de las. cuentas que deboi estar cm el
Los administradcNres de aduanas principales y subalternas tienen
*nMi'tl«M]ci^jo;^lo»ide'Ms tencas tfe las provincias, un lauto, pw
^Mito^iObfeMá r^^etiMacloa ;[ y cuando en casos estraordiaaUos
lienen que recaudar "por^l'tesoro pAíllioo los impuestos intáriores,
f
redben de este ud tanto por ciento yidírlgen sosicuentas á la teso-
ráría general , coma también las anokles.r^^tívks á stjb-pvoviaqía.
T^os los años las diputaciones provmciales exaininan las cuentas
-^é wip adiiatrtpadswa y esteblteea fca gastwj ¿'Impuestus, nupu*»
d^ndo ni los concejos municipales, bi'^^losjefe^ políticos, ni los
. . g(t)érnadores ; ' hacer ínas gastos ¿e Ids presupüeétos j. y méuos ^r~
d^ar.el ma& pequeño Jmpu^itOi^*D6>^^ste modo cééarprovifi^ Mbe
aihialn6a46-«us«Mn<«B'ty>M^9nllS&>^ lós^Ctíálés sd pü'Blicán detállti-
'^ametítiB /'y''1^ 'ini)Ht)n*eiít^^*«adaT6fem«iKirtcutso6.; enio ^^m
han lüvérlido las rentas Y cuáles son láS'^progresdsqtveise'hacen.
iHai también una administración de ¿orfeos. taf'gétféfál'eáta en
la' capital de la república y depende de la tesorería general, ea
ddnde todo se centraliza. Existen igüakaente ottcesAuÉmaUnoá»^
nes pritícipalés y tréítita* y útie ve siibattéftitts , qae^ reeiben -siféMD
ó comisiones , y de eiste modo en toda la- república' Y'^n'l^^'dtfec-
clones prihcipáles , haí' comunicación «^«isvida de. na puoéo- abollo
tobas laá S^gmatías, y étítre'CáJrácas y la Guaira ¡dM^efés ál'ldfáí;
ndiéntras que en otros lugares trasversales solo cédiai^'ÍS dias. )
r \Lsl inspección , pues , 'de los encargados de recÍbíiv4a9Teiii«s<Mi*
clónales está confiada á los, jefes poíítrcós,' a los'gOUétMá^loiréfi j'á
la* tesorería general , y por último á kliMiS'fiVVeroís juezes en. elí tri-
bunal de cuentas. Y como lo^ detallen tF«ben'estar-ePfeglfiK]o»áÍISs
presupuestos, las diputacione&.provkíeiAles ^en in resi^ttva.^ro*
yiicia, y la cáiBara-4e»fepre0NitMte$ en el congreso , -son 'tos ^^
aj^hnMHui-ió desapniebaD 1m¡fsá^m y Ipoñen así eüséllo al ramo mas
doSicado é intereMPtflMi»wi*egii>id>>
' lAMtk^^ue se-Mbededóndeí^pMviénett las renltas nacionales, no
oAará de mas»fr«Mii4tr«H#etopt4«B hmios que fcs producen , y 86
tendrá de esté%i#Ékr<4Pf!^rtm|Mffi!ito He un año j sirviéndonos áel
ültiflitl^e^ ^ 839 /ytlsfinfáHrotm 'detalle de sus gastos. Tanto ifetos
'"COtaolas rentas están necesariamente sometido^ á todas la/fazes
^Meas'dén^tado y se hallan espuettos á todasHas vicisitudes de
dée««iWfcry*p1ÍTJ«|^ del cotoercio ó/de la na-
ción.
/
, . • • •
t
— a» —
INGRESOS.
Importación.
Esportadoo.
Impuesto lobsidiaro por
iñaportacion
Impuesto subsidian) por
eH»ortacion .'....
Almacenaje.
Prácticos.
Patente de buques
Toneladas I
Deredio de tránsito .. . .
Correos»
TOTAL.
Corte de maderas pre-
ciosas
Derecho de Tenia
DesiUacjon de aguar-
diente
Papel sellado ;....
t Décima parte de rentas
municipales
Impuesto para gastos de
justicia
Salinas
Contribución por des-
cuento á empleados.. .
Contribueion estraodi-
naria sobre la caña. . .
Miscelánea.
PesM.
1,003,489,84
178,069,46
108,709,76
t»,907,«S
761,51
6,018,00
70,00
35,737,40
a,05f,67
. IÍ,45SI,78
Sl,6i
896,12
35,899,99
84,06i,75
31 ,309^09
95,459/)9
73»33!li,79
18,790,98
17,633,57
5,842,34
TOTAL eBHniL....
GASTOS.
Interior
Guerra
Marina.....
Relaciones esteriores...
HteleiHta. ! »"««''^- • • ^ »»«M*,n
f imprevistos. 21,232,91
TOTAL.
P49MS.
399.609,02
372,297,20
88,888,26
15,440,75
287,847,68
Total de gastos de la administración.
Crédito público,
Esterior Ps. 160,000,00
Interior 50,000,00
Crédito público esterior.
A cuenta de las remesas á Inglaterra se-
gún la lei Ps. 88,000,00
Crédito público interior.
Iiíteresesde la deuda consoli-
dada de Venezuela 1,792,10
954,055,51
210,000,60
90,892,10
Intereses de empréstitos... Ps. 86,427,58
Suplementos de gastos es-
traordinarios de güera de
188541836 51,491,28{
Gasiosdel afloeeonémieo an*
tortor..... 1I/M4V37
Soeldoi devengados por ios
empleados de jastieia de
1836 41838 98,354,06
218,518,96
l,727,176j80
TOTAL........
■
Se debe pagar un empréstito en efecUfo,
que monU á. Ps. 146,235,34
Se debe á algunas adminis*
traciones 16,068,20
4,472,958,87
172,S1M4
TOTAL GimAL.
I,6484t77,4l
I
— 289 —
Había, pues, un sobrante de 76,899 pesos y 39 centavos. En las
rentas sobreíndicadas no están comprendidas las de las trece pro-
vincias , las cuales se puede calcular ascenderán á cerca de un mi-
llon de pesos. Dedúcese, pues, que la renta actual es igual ó poco
mas de la que se sacaba por el gobierno español , y so puede con-
siderar sobre manera aumentada, si se atiende á que no hai alcabala^
á que el (abaco es libre y no de osclusiva propiedad del estado, á que
los indios no pagan tributo, y á que las bulas de Cruzada, diezmos
etc. están abolidos; lo cual daba casi un millón y medio dq pesos.
Si se ban demostrado las renías y gastos de la nación , es indis-
pensable dar á conocer los empréstitos que contrajo Colombia, y
que después de la separación de las tres repúblicas, convinieron en
dividir la deuda y tomar cada estado la parle que le correspondie-
se. La convención para este arreglo se reunió en Bogotá y fué con-
cluida allí el 23 de diciembre de 1834, por medio de los ministros
plenipotenciarios S' Santos Michelena , por Venezuela , y S' Lino
de Pombo por la Nueva Granada ; no habiendo concurrido el del
Ecuador, los dos dividieron la deuda en i 00 unidades, de este
modo :
Venezuela 28^/2
Nueva Granada 50
Ecuador 2M/2
400
■I
(ornando por base la pobladon respectiva. El primer empréstito
fué contraído el 45 de mayo de 4822, con Hering Graham y
Powles, de Londres, y ascendía la suma en libras esterlinas d
2,000.000.
Venezuela. . . 570.000 \
NuevaGranada 4,000.000 J 2,000.000
Ecuador . • • 450.000 )
£1 segundo empjréslito se celebró en 45 de mayo de 4824 con
B. A. Goldsmilh y compañía, de Londres, y montó la suma á
-4.750,000 libras esterlinas.
Venezuela . . . 4.548.595 b45J
Nueva-Granada. 2.512.975 ) 4.750.000
Ecuador. . . . 99^.579» 05)
t ». CKOO. **
f
k Venesmela, pues, tocó pac el pcimero y segundo cpipné^tto^ la
cantidad de 1*. ^ ,888.595»^ 5 % ^ue á ra^^on de 5 p^o^ faertea^ li-
bra esterlina hacen de los pesos sencillo^.del pais 6.20, cent* Y por
consigaiente una deuda de ^^.698.049 y 95 cen(. C^gcth^f^^^ ^^
Yenezuela ratificó este convenio en, 26 de juUo, el de la Ójuj^^a Gi^-
nada en 25 de agosto y el del Ecuador en 26 de noyiemhce de i 837;
y el cange de las ratificaciones se efectuó entre Yenezuela y la N^e-
ya Granada en 7 de febrero de 4858 y en 22 del mismo entre los
dos dichos estados y el Ecuador.
Tiene ademas Yenezuela una d^uda doméstica contraída en tiem-
po de Colombia^ y la parte que le h.a correspondido por sus 28 4/2
unidades de 7.2^ 7.91 5 ps. y 4 2 c, que unida á la deuda estranjera
fpriQa un total de 49,2^^.965 y 05 cent.^ igi^ales á 76,875.860
francos y 20 céntimos* La deuda dpméstic^ ó del iotcrior , dentro
de pocos años podrá ser pagada con las tierras baldías y los rezagos
de la^, rentas de diezmos.
ADMINISTRACIÓN DE JUSTICIA.
La razón del mas fuerte era la justicia entre los indígenas : cada
cual procuraba con sus armas , la astucia ó el veneno vengarse de
las ofensas recibidas. Hombres desnudos^ sin tierras propias, sien-
do todas eUas del primer ocupante, ríos sin número que les pro-
porcionaban pescado en abundancia^ selvas inmensas que les brin-
caban con toda especie de cazaría» di&cilmente 4a,ban lugar á q^e
hubiere pleito ep^tre aquellos gentes, y cn^^d^ ocui^ria 1q decidían por
la fuerza. Los caciques ó capitanes podían cua^ndo n»as conciUa^ la
paz ; pero no tenianr autoridad para castigar. Si uno era muerto,
los parientes vengaban la sangre matando al que mató, ó en caso
de no encontrarle,; en cualquiera de su familia ó de su tribu ejer-
cían la venganza, costumbre que aun existe entre los indígenas in-
dependientes y que llaman ellos vengar la sangre.
La administración de justicia en Yenezuela se resentía de lenti-
tud y vanas formalidades que hacían interminables Jos pleitos ; así
es, que ninguno ó muí raro se terminaba ante los primeros j«ezes
en menos de un año de continuos pasos, gastos é incomodidades :
mucbos duraban tres y aun cuatro anos. Los juezes de primera ins-
tancia en lo civil y criminal eran los gobernadores de las provin-
f
-Li-
cias , sus teqlenM gol)eniAd(»res y las alq^Idies 0i:<]iQdrÍQs de yitl^s
y ciudades, que siempri^ fueron, dos , y cuya juri^iccion se estén-
dia á todo el distrito del cabildo, Estos y los alcaldes de partido
que solo ejerctan la jurisdicción pedánea para las causas menores,
«ran los únicos juezes en cuya elección tenian Iqs pueblos alguna
parte, aunque remola i pues eran nombrados por los cabildos. Ep
•1 787 se estableció la real audiencia y cancillería de Venezuela, cuyo
primer regente fué D. Antonio López Quintana ; habia también tres
oidores y dos fiscales, teniendo ademas cada una tres relatores, dos
escribanos de cámara y un alguacil mayor que gozaba de los ho-
nores que los oidores recibían. Era este un tribunal supremo que
representaba al rei, y en la mayor parte de las causas no babia re-
curso alguno de sus sentencias.
Los congresos, de Venezuela se han esforzado en corregir los de-
fectos de la administración de justicia española ; sobre todo, en. ar-
reglarla de modo que los pleitos se decidan en el ms^s breve tieío-
po posible, y últimamente se ba nombrado una comisión que forme
los. códigos nacionales. Por las leyes anteriores,, ep la república no
hai ningún iuero : todos los ciudadanos son iguales ante la lei > y
por esto es menos embarazosa y monstruosa la legislación actual.
La justicia se administra en toda la estension de Venezuela de una
manera uniforme. En todas las parroquias los alcaldes son juezes
de paz, pronuncian definilivan^énte enjuicio verbal en los nego-
cios cuyo inleres principal no esceda de 20 pesos. Conocen tam»*
bien en juicio verbal pero con la apelación para ante el alcalde mas
inmediato, de las que esceden de 20 y no pasan de 50. Conocen en
juicio verbal asociados de hombres buenos de las denoiandas cuya
cuantía esceda de 50 y no pase de -1 00 pesos, y con apelación á los
juagados de arbitramento. Sumarian álos delincuentes, lospersi<>
guen y aprenden para remitirlos al alcalde mas inmediato. En las
cabezeras de cantón los alcaldes conocen por sí solos de las deman-
das civiles, sobre negocios cuyo interés no esceda de 1 00 pesos. Sus-
tancian las causas de que debe conocer el tribunal de arbitramen-
to^ lo mismo que las que correspondan al tribunal de primera ins^
tancia en los cantones donde este no resida. Conocen por sí en
segunda instancia de las demandas en que se interponga apelación
de las sentencias pronunciadas por los juezes de paz. Últimamente
proceden en negocios criminales á la formación del sumario, á la
prisión del reo, su confesión, etc. Los juzgados de arbitramento se
t
— 2^2 —
componen de los alcaldes y de los arbitros nombrados por las par*
les. Conocen entonces de las demandas civiles cuya cuantía en sa
acción principal pase de ^00 y no de 500 pesos. Conocen en juicio
yerbal, á prevención con los juezes de primera instancia, de todas
las deroandas por injurias de palabra ^ escrito ó hecho en que no
haya erusion de sangre ó grave contusión. Últimamente conocen en
segnnda instancia de los negocios que hayan sido sentenciados en
primera por los juezes de paz asociados de hombres buenos, pasan-
do de 50 y no de 4 00 pesos.
Hai tribunales de primera instancia en los circuitos judiciales ,
llamados juzgados, desempeñados por un solo juez nombrado por
el gobernador de la provincia entre las personas que indique la dir
putacion provincial, y dura 4 años en sus funciones, pudiendo ser
reelegido. Conocen de todas las causas que no estén por la lei atri-
l^uidas á otros tribunales, tanto civiles como criminales. Conocen
en primera instancia de las causas de hacienda pública, y en se*
^unda de las que principian en los tribunales de arbitramento y
se le remiten en apelación. Conocen de los reclamos de invalida-
•cien, dirimen las controversias de competencia entre los juzgados,
alcaldes y juezes de paz^ y tienen otras muchas atribuciones para la
l)uena y pronta administración de justicia.
fiai cortes superiores de justicia , cada una compuesta de (res
ministros juezes que se denominan, presidente, relator y canciller.
Ci>nocen en primera instancia, previa la suspensión decretada por
el poder ejecutivo, de las causas contra los gobernadores por res-»-
ponsabilidad en el ejercicio de sus funciones, y de las de los juezes
de primera instancia en el mismo caso. Conocen en segunda ins-
tancia de las causas civiles y criminales que principian en los
juzgados de arbitramento , y asimismo de los reclamos sobre in«
validación de juicios. Por último conocen de los recursos de
fuerza, de competencias, dudas, etc. Hacen ademas el recibimiento
de abogados y los mandan inscribir en la lista de estos.
Existe una corte suprema (que es el último tribunal ) compuesta
^e cuatro ministros que se denominan, presidente, vicepresidente,
relator y canciller. Esta corte reside en la capital de la república^
Hai cortes marciales compuestas de los mismos ministros de las
superiores y suprema , con agregación de dos jefes militares de la
clase de coroneles y generales, los cuales son nombrados cada
4 años por el poder ejecutivo.
— 295 —
fiai ; en fio , eu todas las capitales de provincia y en la Gaaiiti ,
Paerto-Gabello.y Carúpaoo, un tribunal de comercio compuesto de
un juez y 50 conjuezes. Este tribunal se reúne cada tres meses j
decide de todas las causas que se hallan en estado de verse, el dia
en que abre sus sesiones por el orden en que se hdyan sustanciado.
La elección de juezes y conjuezes se hace en junta general de agri«
cultores, comerciantes y criadores vecinos de la provincia. El dia
4 .® de diciembre se convoca y cH 5 del mismo mes de cada aüo sa
celebra la junta. El juez dura dos anos y los conjuezes igual tiem--
po ; pero cada a&o se releva la mitad. Por la leí de ^ O de abril de
•18549 puede cualquiera pactar lo que le parezca, pues ella le da fa**
cuitad competente, y también puede sujetarse á este tribunal aun-
que el asunto no sea comercial.
En cuanto á la organización judicial, el territorio de la repúbli*
ca se encuentra dividido en cinco distritos, como lo espresa el es-
tado siguiente ; y por lo que toca á los crímenes que se cometen m
el pais, dos cuadros que le siguen, sacados de la estadística judicial»
darán de ellos una idea mui completa.
!
— 294 —
ESTADO que manifiesta la organlzacioQ judicial de la república
en 1830.
DISTRITOS
JUDICIALES.
wmammstmsaBmii
NÓMBaO
de ias pro tí ocias
de que
*• tótñpontn,
>«iÉtllMMItoi«iirf^M«llta
(Cumaná...
Guayan»..
BarceloftB.
Margarita.
fl^ Distrito
Caracas.
'(^arabobo ....
ttt IHsirifio . »u ,-, . I Biar^ulüinidto.
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4'Dlttritó jApure.,
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O
llillisífféaSl'
í
— 297 —
ORGANIZACIÓN ECLESIÁSTICA.
Antes del descubrímiento tenían, y aun ahora tienen los natu-
rales Piaches ó adivinos, que son médicos y sacerdotes á la vez. Pro-
noslican la paz ó la guerra, si será un año de escasez ó de abundan-
cia ó si babrá mucha pesca. Se hacen pagar bien, de manera, qu€
sin trabajar tienen lo necesario para vivir. Eran mirados y todavía
lo son entre las tribus independientes, con una veneración supers*
tíciosa. Su influjo equivale á un poder absoluto, del que sin em-
bargo no abusan. Sus prerogativas son muchas. La mas notable es
la que ofrece mejor regla para juzgar de las otras : tienen un de-
recho positivo é indispensable á las primicias matrimoniales, en ca-
so de casamientos adoptivos ó supernumerarios.
Descubierto el Nuevo-Mundo, el papa Alejandro VI por sus bu-
las de ^495 y ^50^, trasmitió á Fernando é Isabel los dominios
directos y los dominios útiles de la América. La Santa Silla no po-
día comunicarse directamente con las Indias españolas sino para
los casos de reserva. Todos los otros actos pontiGcios debian ser
dirigidos por el papa al rci de España. Este, pues, tenia escíusiva-
mente el patronato, en virtud de las bulas de los papas y particu-
larmente la de {{ de julio de ^508. Asi, desde el descubrimiento
del Nuevo^undo, la propagación de la fe, la fundación de las ciu-
dades y villas, la construcción y mantenimiento de las iglesias^
eran únicamente obra del rei, ó el resultado de Ips gastos del te-
soro real. Según este derecho constante, no se podia fundar en
América ninguna iglesia catedral ó parroquia , ningún monasterio
ú hospital, sin el permiso espreso y directo del rei.
En 4 de junio de 4552 eligió obispo de Coro el emperador Car-
los V, estando en Medina del Campo, á D. Rodríguez de la Bastida;
y en 465^) el obispo D. Juan López Agurto de la Mala trasladó á
Caracas la catedral de Coro, dedicándola al apóstol Santiago , per-
maneciendo sufragánea de Santo Domingo hasta que fué erigida en
metropolitana.
En -1777 se creo un obispo en Mérida, sufragáneo de San tafo ,
que se formó en la parte occidental de la diócesis de Caracas y en
la parle oriental de la de Santafé de la Nueva Granada. En -1790
se creó el de Guayana, sufragáneo del de Santo Domingo, que com-
prendía esla proviticia y las d^e Cumaná y Margarita. Las rentas de
los obispos eran asignadas sobre los diezmos.
En 4501 Fernando Y obtuvo en propiedad el diezmo eclesiás-
tico qce se hizo ceder por el papa Alejandro VI; para evitar de este
modo el influjo (}ne !a SE^nta sede llegare á tener tbh el tiempo én
los dominios de América. Del total del dlé^tno tomaba el rei ün üCh
noveno : tina cuarta parte del resto correspondía á los bbi^pbs ,
otra cuarta parte 'al cabildo, según las dignidades que tenia : lo que
quedaba se dividía en nuete partes y de ellas tomaba el rei una ,
cuatro los curas, dos para el 'sagrario de ta^ iglesias Catedrales, dos
para la fundación de beireficios y hospitales en las ciudades ; villas
y parroquias.
El de Mérida isolo recibía la cuarta parte del honorsirio del de
Catácas, y el de Guayana tina asiguación de 4.000 peéos fttertes.
£n 1 805 fué erigido el de Caracas en Metropolitano , éiendo él
primer arzobispo el D' D. Frantisto Ibarra, y entontes los de Mé-
rida y Gutiyana dependieron de él.
En -1652 se estableció el método de misiones y una gran parte
del país estaba sujeta á gobieru)3s monásticos. Los capuchinos ara-
goneses ocupaban gran i^rte de la pirovincia d^ Barcelona desdé
•16^2. En ^656 estaban también en la de Cunianá, en ^65^ en gran
parte de la de Caracas, eéteiidiéndose diespues á Apure y fearínas ,
y últimamente efatraroh en Marataíbo en ^687. En el Orinoco ha-
bían entrado y formado misiones diferentes rciigiosos^ como éan-
delarios^ franciscanos; observantes , j^uitas y capuchinos , y todos
desocuparon la tierra phr no poder Subsistir en día ; hasta qué en
•1724 seis capuchinos catalanes fueron á formar las misiones qué
después se nombraron del Caroñí.'En n54 se fijaron por el gobér*
nador de Cumaná los límites á los capuchinas, desde la mar ba^tá
la angostura del Orinoco : á los padres observantes , desde Angos-
tura hasta la boca del Cuciiivéro. y á los jesuítas desde allí hasta
lo$ confinen con la Nueva Granada.
Después de la espediciofa de "Solaiio , que fué en 4756, el rei
encargó á los capuchinos andaluzes el territoñb compreridido desdé
Maipure hasta Rio-Negro , dándoles los pocos pueblos establecidos
por los misioneros observantes.
61 -1 4 de diciembre de 1^1 9 espidió el corigreso trn deéreto en
que espulgaba á todos los capuchinos adictos á la causa i^eal , y
convirtió sus coíivetitos en Instituciones dé educatcion.
— ¿99 -
El 28 de julio de 1 82 1 fué suprimido todo convenio de regu-
]ar«$ q^ eiililai^ ídAiob de óobo religiosos* El 14 de éétobre áel
mismo ftko decreté til eoitgfeso qbe los clérigos delaten svboHli-
nados af ^oder éWit. En Oii , ün decreto M 'miéoio ednigreso ié 4
de enero de í 8^*2 ,'ordenó proveer a las vacantes en los capítulos ,
de no acordar ningún beneficio sin la autorización previa del poder
ejecutivo ; que los arzobispados y obispados estarían vacantes
hasta que se hubiesen terminado las negociaciones con el papa , y
que los clérigos secuffires ée Goionibia serían independientes de
toda influencia estranjera.
En ^824 la lei de 22 de julio declaró que la república debía
continuar en el ejercicio de los derechos de patronato que los reyes
de España se arrogaron sobre las iglesias n>etropolitanas ; catedra-
les y parroquias en esta parle de América.
£1 gobierno venezolano, ejerciendo de hecho el patronato de los
reyes de España , queda en posesión de los derechos de estos , es-
presos en la bula del papa Alejandro VI. El gobieruo , pues, viene
á ser cabeza de la iglesia y dueño de nombrar para todos los obis-
Irados, prebendas y beneficios,' sin mas dependencia de la corte de
Roína que para su sanción. Se acordó antiguamente que el Santo
^adre no tuviera comunicación directa con la América , sino por
el conduelo dei consejo de Indias, y que lodos los breves, bulas y
dispensas fuesen remitidos á España para recibir la real aprobación
antes de pasar á América. El gobierno de Vetiezuéla exije los mismos
aerechos y así lo ejecuta su clero. En virtud , pues , de tales con-
cesiones , pertenecían á la corona los diezmos vacantes ^ los subsi-
dios y demás productos de dicho ramo , y por eso el congreso ele
4855 abolió los diezmos el 16 de abril y fijó las sumas necesarias
para la manutención de los obispos , dignidades , clero etc.
La república está dividida , en cuanto á lo eclesiáslico, en la
forma siguiente. El arzobispado de Caracas, compuesto de las pro-
Tincias de Caracas , Carabobo , fearquisimeto y Apure. El obispado
de Mérida,de la provincia de este nombre y las de Trujillo, Coro¿
Maracaibo y Harinas. El obispado de Guayana , la provincia asi
llamada y las de Cumaná, Margarita y JBarcelona. Caracas es la seile
del arzobispado y Mérida y Angostura la de los obispos sufragáneos.
\
— 500 —
£1 arzobispado de Caracas tiene
(Jna población de . . . 465.7^ 4 con -i 87 parroqaias
£1 obispado de Mérida . . 290.709 con -176 id.
. £i obispado de Guayana • -156.510 con 460 id,
TOTAL. 892.955 coa 525 parroquias.
ORGANIZACIÓN MILITAR.
Empezaremos con lo que dice M. Depons.
« La defensa de las antiguas provincias de Caracas , Maracaibo^
<i Barínas , Guayana , Cumaná é isla de Margarita , estaba conGada
« al capitán general residente en Caracas. Los gobernadores parti-
d culares tenian el derecho de tomar provisoriamente todas las me-
« didas que las circunstancias indicaban ser necesarias ; pero de-
« bian dar cuenta al capitán general y ejecutaban definitivamente
« sus órdenes. A primera vista parece que todas las provincias,
« obi'ando bajo un mismo plan^ debian hacer nna defensa mejor
« entendida y mas eficaz que si cada una obrase separadamente.
« Esío seria efectivamente cierto , si ellas hubiesen estado, sufi-
<f cientemente cercanas para poderse socorrer mutuamente; pero
ü la inmensa distancia que las separa no permitía la reunión de
« las fuerzas comunes sino con macha dificultad y lentitud. Habria
r sido mas ventajoso que cada gobernador hubiese podido seguir
ó libremente el impulso de su honor y -sus talentos , en lugar de
« hallarse obligado á esperar las órdenes de un capitán general dis-
« tante cien leguas de las provincias mas próximas , y de temer su
« desaprobación ; si la cuenta que se le daba no justificaba bas-
« tantemente lo que se habia hecho por via provisoria.
ü La tentativa que un enemigo podia hacer sobre esas provin-
« cias , debia naturalmente ser por mar , y por débiles que fuesen
« sus medios marítimos, habrían sido siempre superiores á los que
« debian proteger las costas , no teniendo España por toda defensa
« sino algunas embarcaciones destinadas á impedir el contrabando
« y que una sola jíragata habria derro tado. No habia nada que
« esperar por mar; veamos, pues, la reiistencia que podían oponer
« por tierra.
I
— 301 —
DEFENSA DE LOS PUERTOS.
« Maracaibo estaba separado de la provincia que se llamaba
• Venezuela, por el lago de su nombre y por monañas desiertas
a que ocupaban un espacio de mas de 60 leguas , enlrc Maracaibo
0 y la primera ciudad de la cual pudiese esperar socorros , que era
« la de Trujíllo, y para obtenerlos era necesario el consentimiento
« del capitán general cuya residencia estaba á mas de 4 00 leguas.
« Esta ciudad no debia , pues, contar sino con sus propias fuerzas
« para rechazar al enemigo. Un solo fuerte defendía la entrada de
<i la Barra y una batería la entrada de) puerto. Sus milicias forma-
« ban 5 compañías de blancos y 4 de gente de color.
« Coro á 50 leguas al E. de Maracaibo, no tenia para su dé-
« fensa sino un pequeño fuerte en el puerto de la Vela ; pero la
a esterilidad de sus costas y la pobreza de sus babitantes , liacian
« la mejor defensa de este país.
ff Puerto-Cabello sin contradicion era el puerto mejor defendido
« de la capitanía general de Caracas , á 50 leguas al E. de Coro.
o Un fuerte construido con bastante inteligencia como solidez , si-
tf tuado en una isla al N. E. de la ciudad y cubierto de una gruesa
ff y numerosa artillería , hacia la defensa principal. Sus fuegos
9 se cruzaban aunque de lejos con los de los fuertes situados al
« O. sobre el cerro de la Vigía. No halia guarnición fija en Puerto-
tt Gabello. El regimiento de Caracas enviaba en tiempo de paz
« una compañía que se relevaba todos los años. En tiempo de
fl guerra se duplicaba la tropa de línea , reforzándola con las mili^
ci cías de Vale ncia y de los valles de Aragua.
« La Guaira, sitr.adaá 25 leguas al E. de Puerto*Cabello, estaba
« destinada á defender la rada y á garantir la capital Caracas , do
« la cual dista mas de tres leguas. En este puerto se han desplegado
« g( andes medios de defensa para hacerle un baluarte de Ja capi-
n f al. Erizado de fuertes y baterías, parece desaliar al enemigo mas
« temerarío. La agitación continua de su rada, tan incómoda para
(t el comercio , era en caso de ataque ventajosa á los españoles.
• Todo parecía anunciar que con buenas tropas, no solo se podía
« impedir un desembareo, sino destruir las mas fuertes escuadras ;
« y aun cuando el enemigo fuese dueño de la Guaira, le quedaban
• grandes obstáculos que vencer para llegar á Caracas.
f
— 502 -
« La ciudad de Barcelona , á 50 leguas al E. de la Guaira , tiene
« en el Morro un pequeño fuerte para proteger la entrada del río ;
« pero muí insignificante, porque en Pozuelo bai fondeadero y buen
« lugar de desembarep.
« La ciudad de Cprn^náf i^^ leguas. al £, d^ Qarceloi^, tiene
« un fuerte ex\ buena posicioq , aobra una colina en la parte orieu-
<( tal de la ciudad, y babria, habido algunos obstficulos en cum 4e
« desembarca* También bsibi^ una batisria. en l^ hoia del ría,
« frente ^1 fondeadero. Formaban la gii^rniciou 5 camp^E^fii^ 4fi
« frofia de lío^a y las milicias con^puestas de '1 4 compañías <|e
« blancos., do$ de artiUería , dos de caballeriai -11 de gente de cqr
.« iqr^ 5 de iof^interia de i^ifi^Of y una o^a4ia de artillería,
«La isla de Mar^rita ; silbada 4^2 leguas, al N. de Cuioapá ,
« estaba clpfendida, (\or la na^raleza y por una con^pania de tropas
• dp línea, 4 com|i^aías de infantería d^ liailicias 4e blancas , UQa
1^ de artillería y 4 compañías de gente de calor. Tenia ademas unos
« fuertes que dominaban la capital y otros dos pequeios en lo^d^
t pi]^er(a3 principales.
(i Ango^mra^ á i£0 leguas de Cuiuana , calculanda la distancia
ik por el caipino del mar y del rio , el cual tiene sv^ boca á 85 lefias
« de la ciudad de Angostura. Es(a se bailaba defendida por las for-
1^ talezas de Gi^yana la Yii^ja , donde babjia dos fuertes 4e ai^tiguii
« construcción que estaban á 52 leguas de Angostura. £sta ciudad
v teQía up^ pequeña fortijKcaciou de la parte de tierra y un fortip
« al urente sobre la orilla izquierda^
n£Si£i|^ARC9 COBRE I^j^ COSCAS.
« Todo lo que se acaba de decir se refiere solo á la defensa de
<i los puertos de mar ; pero en el caso de un desembarco sobre las
a costas, es suficiente comparar la estension de estas mismas costas
<c con la población de las provincias , para formar idea de la resis-
« tencia que encontraría el que emprendiera una invasión. La ra-
« zon, ilustrada por la esperíencia, eslá bien lejos de mirar los
« fuertes de las ciudades marítimas como esencialmente útiles á
« la defensa del país. Su conservación y las guarniciones de todas
« estas for{a1ezas cuestan enormes sumas en tiemjM) de paz. Ellas
« deberían, pues, cuando menos, garantir el pais en tiempo d^
« guerra de los insultos del enemigo ; pero todo lo que pueden
I
« tf^e^k) á algfiimi6^Aia» d« 4ts(«|]^^4e oWm^ Si wa^ coavaoeion
o, s9grd4a>e£toblQ^ese m 4^09^0 d[e D««9Í0U€^ , puraque. nin^iia
(| inva^km s^ hi€iie«e «loo pw lo^ Iqgsir^forvtifiQd^W, o bien qve
« ]«^ opstafi no p^^$iBQMlBe;iíi otrpí punten» 4q 4cj0^iab»rGo sino los
«, puertos, no bai duda q«iei s^ dab^ia ei^tónc^ eiE^enr todo de
« los foerles, baterías y redactes que estuviesen en buen estado
V, y hiei^ aerTtdos* Feí^o en.ui# cofsjta cuyos puertos foi^tifl^dos
f están á €fO y ^ ao lpgua$ distai^te^ e^trei sí , y. en^ doiode en ^s
% intervenios. baí multitud d^ ríos, fop^e^^ros, radas, ensenadas
« y playas cómodas para desen^rcar to4a la gruesa artillería de
ft los puertos de mar, d^ eual^vúer modo quejeUa afia ^tíspuesta,
« no so!api^^te es. inútil sino nodiya , porq^$ retiene para so guar-
« da artilleros y tropsi^ que no pu^n qtti(ar«e 4el lugar en el
« caso que un deseipbarcQ ijeQutada. en un |i«»nto aislada de la
« costa bici^e su socorro indispensable»
« Por la r^alucion q«e l|« sufrido ja. (¿ictic^^n la guerra que se
« ba becho al fln d^l újma^ sigl^ , la má&ima dei no dejar c^ras
ii plazca f Minies ^ ba desaparecido^ del mifu^inodo que 1« de
« procurarse una retirada áníes ded^r /(k batMa, Las. victorias
fi de los ejército^ franceses Mnprobadc) tamló^ 1^ bondad de esta
« reforQ(ia; adop^<pa poi^ l^s cajiitav^es: ^^ valientes y mas espieri^
ft m^entadps de la Eurc^..
a Si este nu^vo método se apl^^a át.pais^^s como la Europa, sem-
« brados de ciudades en doi^e el arte, se ba «postado para bacerlas
<x inespngiuables , ¿ con cue^ota, ma^ rabión no {¥¥irá aplicarse en la
« invasioadf. un pais <|ue, no tiene. soJ^^-e l^co^a sino algunas for-
« üficacioAes. situadas á grandes distanc¡A& las unas de las otras ,
^ y q\ie. nece^tan casi meses enf^eros para comunicaj:^ entre sí?
« Atacar los pu^rto;s de mar ^eria 4ar la preferencia á puntos en
% donde tpdo§ lo^ medips de del^jo^a ^stáa rettnido4 « y en donde
« necesariamente los ol^láculps spn mas grandes ; mientras, que
« desembarcando á alguna distancia , no. bai que temer ni artille-
« ría ni mucbas tropas. El deseipbarco se encuentra necesaria-
« mente protegido por los mismos navios de la espedicion , que
« dirigiéudoise eu seguida á cruzar delante de los puertos, atraen y
« mantienen alií las tropas, y disminuyen, por consiguiente, la
« resistencia queesperimenlaria el ejército destinado á la conquista,
« si esta división de fuerzas no tuviese lugar. De este modo el ene-
I
— 5*4 —
« migo peneira ca las tierras , aumenta cada dia sus fuerzas con
« nuevas conquistas, y cortando la comunicación del interior con
« los puertos ya bloqueados por la escuadra, tos obliga á rendirse
i á discreción por el hambre, sin que le cueste uñ solo cartucho. »
Tales son las reflexiones bien justas y meditadas que dejó estam-
padas en su obra M. Depons, á las cuales es preciso añadir algunas
ideas mas.
El primer objeto que indujo á los españoles á fortificar algunos
puntos de la costa, no fué ciertamente el de defender un pais
desierto é inculto entonces y habitado solo por indios desnudos y
por fieras ; fué su intención poner á cubierto las primeras colonias
de las invasiones que en aquellos tiempos hacían los temibles
Filibusteros. Las pocas riquezas del interior venian á acumularse
á estos punios, que eran almacenes y depósitos, y allí también llega'-
ban las mercancías europeas. Un pais nuevo, cubierto de espesos
bosques , y conocido tan solo por los naturales , no presentaba sino
uno que otro camino que frecuentaba el hombre blanco. Puestas
pues á cubierto la entrada de estas únicas vías, parecía entonces
asegurado el interior , y las baterías y fuertes protegían los depósi-
tos del pillaje de los ladrones de mar.
Un segundo objeto no menos importante para la España tenían
estos pocos baluartes levantados en las orillas del mar y tan distan-
tes entre sí: era para que en caso de un levantamiento contra el po-
der de España, los adictos á esta, las tropas, las armas y muni-*
clones tuviesen unos puntos de apoyo ínespugnables para los hijos
del pais , que privados de los medios de poder batir murallas arti-
lladas y sin los conocimientos del arte de atacarlas, debían necesa-
riamente hacer infructuosos todos sus esfuerzos. Los españoles, en-
tonces dueños de la mar, podían entre sí comunicarse , proveerse
de víveres en las islas vecinas, combinar ataques sobre toda la lí-
nea á la vez , recibir por mar todos los refuerzos que podían llegar-
les y con ellos atacar en muchos puntos ó concentrarse en uno solo
é internarse en el país para obrar en combinación , á fin de apo*
dorarse de lo perdido y someter á los rebeldes. En cualquier evento
funesto siempre contaban los españoles con muchos puntos de apoyo
donde replegarse , allí formarse de nuevo y de nuevo entrar en
lid.
u<
-r 503
Dé IiAS fortificaciones de la costa en el estado actual;
t ■ ' . . . ■ ' •
!Si'aiitíguainen(e aquellas fortificaciones no hnpcdkn nn dt^sem-^
barco ó invasión , y solo servían para proteger. los almacenes tJel
comercio y tener pnntos de retirada para contener los pueblos que
qnisíesen sacudiré! yngo de los españoles, en él dia servirían* rae
nos para irbpediir la invasión, porque bai mas vías abiertas para in-' •
trédneirse en el interior, y en este se encuentran mas medios para
subsistir un ejército. Algunas baterías con artilleros bastarán én los
jmeftos para contener un áfaqne de piratas; porque no consfdefa-
raos aqnellos como pnntos de apoyo para operaciones inilitares rili
como depósitos de almacenes de guerra' y ínueho meno^ aun como-*
fortificaciones que puedan proteger el país en caso dé aíaque, sien-
do fácil probar que son ahoi*a tan perjudiciales como fueron óíiles^
k Fos españoles en la guerra de la independencia. Estableceremos .
algunos príncipios que nos conducirán paso á paso á la prue1»a del
aserto.
- Nada diremos de las revolncíones que desgriciadamente pudie-
sen turbar la paz de la nadon , porque \ú vemos lejanas y bajo un
punto de vista consolador^ teniendo por máxima que el éxito de
toda revolución, en gobiernos populares, depende absolutamen-
te del consentimiento general de la opinión pública y no de la '
fUér!s& armada ni de la^ fortalezas. Se ba visto en América y en
Europa qufe esta ffláximá'*es verdadera. En Francia en ^850, en-
Venezuela en ^853. En el viejo mondo era un pueblo contra un
rei con fortalezas y ejércitos que le eran fieles; el pueblo sin em--
birgo venció y espuísó al rei. En el Ñuevo-Mundo eran tropas con'
for'féíefeas éontra un gobierno republicano ; pero el pueblo vendó
y espulsó ^ los rieUeldes. Acordémonos que ttídos los puntos fórtifi-'
cádos, esceptuando uno, estaban en manos de los insurgentes, todo '
el' ejército y marina , con pocas escepcloncs , estaban con ellos y por'^^
dios : todos los parques", almacenes y cajas nacionales mas impor-
tantes estaban en su poder. En fin , el gobierno quedó destruido al
primer golpe y roía la unidad, quitándole la cabeza con fe espul-
sfoñ del presidente y vice-prcsidente da la república. Pues con todo
esto, la revolución no se logró, y si rs cierto que corrió sangre, lo
es también que los sublevados sucumbieron á la opinión general
del pueblo , que casi en masa se levantó para defender sos derechos
— 3iM —
y dio nneros días de gima al esclareddo genial Páez, que antes de
la deportación det presidente Vargas foé elegido por este para que
emprendiese el restablecimiento del orden oonstitocional. Gloria
eiN»a¿iiiio Y otralA Várgaa por íq paemioii y;aolirt0'en.8l.noa-
bnaníaitto : áPáea por la pronla^ej^oeiieíoadaiui enm^o^en qfie.
demostró tanta, viiiad como andaiia^ tanto palriotism* como h^
mm. En esta ocasión adquirió un. tiaM^re isservada ¿pocos de los*.
fundadoMade la repóbliea ;pues !♦ cupo^ UtdKha de salvarla de la«
anarquía ^»1, despotade baher ayudado ádefendarladelainfa^
sioii eatrato^Nsa : dcd»le pvea4e giMvrflra y de ciudadano^
Sí es,.p«ea, la nMioría qiie iodignada se- levanta por el. uUn^fa
qpe á sttSi l^es se i»ogara ¿,q9ien podrá ountenerla? Ella se dari
H^ {orma de gobíeroa que qpiara^ y auaqfie* los soldados. 06upea^
nuidMis forliieus no podrán oprimir la mafi^ia^ sino por pocos an«>
Bréalos y al alcaoie de su. catión, Si^es^nna. f^Mxdon que quiene na^
poae^ sus €apri€ho0«a)i|aia<j «laraestá que laanayoriabamsucuoH^
blr la pacte- uaBaoc^ ;si;esta'iieBeenisu poder íortaleEas , iuyrá dei?>^
ramar mas sangre, pero su caida será inevitable, será mas ruidesa,.
y su castigo ma» tra^midu sarvirá^de saJudahleicjiímf^ paranwa-
tener en la futuro la pública U^aaqniUdadv
Por tanto^ no exanoáiíaienios baja este puAto de. vista, lasrfertilif*':
cacUmeai.^no por la aecmria& que puedan ser á la defsnsa del*
ipais.
El estado actual del erario na permite ahora ni le permitirán
basta de aquí á alipinos siglos que^nuestcas costa» estóa erisadas de
forlifícaciones, asi coma están llenas de puertos y fondeaderos. Los^
|K)Gos de estos ^e tienen alguno» tuertes o castillos están eonstrui-
•dos de modo que no pueden^frir im bambardsoj. ni el tesoro pú-
blico está en disposición de ponerlos al atoigo de esto j, y si lo es^
tuviera > mda babria liecbo con fortificar una entrada y dejas mu-
chas abiertas. Si encerramos nuestros elemeatosdergaerra en este
obras antiguas^ la mayor parte arruinadaay todas insuficientes par^.
un ataque que le hiciese una potencia marítimai, nos esponemos^i..
perder todo en» un día., quedando ún medias de poder resistir ola
invasión del enemigo^ Pero si estos elementos están en lo interior
y precisamente en los puntos estratégicas dei pais,. no serán presa .
de Diogjana poteocia consoló una espedicioo marítima : necesitará
combinarla con una terrestre y e&ta tendrá q\}e arrancápnosloe de
las manoS; pedio á pechO; y no co» la superioridad de su artilteria.
rmMWitM iiptimnwnai, itt«riéeiiii9^qiM0aM dí^ptfdMMi^pMDH
dvciir «L mwMK tMoipii^ «d afe9ta ¿aanadaéo) #bi «i aapiÁn im
iUMtra»ibabí(aiile$i,.4«« babiaii:«pm4aaQiMU«i liahtaita»)9Ma|^^
nabte» » i laS' pedgia 6u<w4er fwacwiniittlc? lotfitf á loa iotHppaap
cnaiidoiiM vjanMiafaiQainatídai>pav lasseipaftalaa.aoii awai<y amsaiiK'
lea que daeoeaoqíao^i Adevm » a» eaoa^ vháoaiaaaiittoMiM^
loíg^ u pmrtfli4a;a|Mii»«i0'a.«aflaliiir lipid^mite üa al faüma»!
4al naia €iia asásantanaiáft iíirpBaiiéidaí _ aaotiltiíaMit t dasatii^ft:/
Ito iud»mliigaiR 4laacafla«Maay.y da^it % conaidaiar aiwitaa nawin p
fiaÍM 00 eMlariii»aatA4a9loi^rirf0>ailMfliDfi*,
P«r» «Ifaaaai loiaaiaacaria^^ aad« bibria bacho.noi aftasadmeoH
foadaaa eavM^a oiMliaa fmtíím^ Hm iMaiaa» maqcliar al imf^.
tam v^n9QimhmB^9i§^qfimmmmb^]m paMl^y Boriairaailflai
WBÍmm^ vmm mmo á laa» aiaadrifaní ^aoi aa a» taaini ,. p«»Mi
id^cia* a« Meatfa» wm^xm laapaaiianí de teraar^aa atláa ertatAui;
oai9lto9aa^«ottlaaiarinMaihaaaias'3 paia %uae eaaM,. piMsiao I*
fiarja nadiiNa' coa aitoaa igutaa., perqM üoflalaoa caniínaa ao Iv
gaaiiHliaiaai haaot UKi^detaiaiinMrttaa arliUeiía.
6atl# ai|HMal^sedad»oao daa aauaaoBancíaB : Ja wm^ ífm^fmm
aaaleiier el fobiam» I» aéniaaaaaDtiaalas faatalazaa aataalet ; A
d<d)a.M|iaMr eaialanifN^dakaíCtAdBdMKiaiqíi^aitáo haUíaanJag
^ imalasafia». aaataiiaiteY delind^ alra^fiáe{)ara.«BaagM^
^ikaitaRior hiiiai^íofeab^iavle8.ea ka aetoal fmmaMí paíi satf
i» iiapciiprittta del BusiB» f d pecboidaf au yjoa*
aa» a* DBfBM^ Mir pa».
Por. tefua aolacades^tehiáyisftoícnfaiAttiU saaé detodar Ma
costas, y bien se puede decir imposiUeaB al asladaí ^sante; «á
fnes*, salo el iiil«r¡áMr esifiíisaept&te dé defensa* Deade que «aeiie-
OMgp baya di8iej»baF^o e» onalquier punto* y se Jba^ iaiaodaei4t
«a las tíerrasi ^es^á eaputealo á ser alaeado. á cada insianie.y sia»*-
Ifte ea pontos veot^osoa pasa, lea deba«H*es y peajadlaialea i loa
íairaseiaeB. JUi aaaoo de^ e^ aa elanL £1 paas tiaaa tras aanaa bíea
mafcadea que eorreK ea toda sti esleiiaían paiafelaa á la oaaÉa- ¿a
primera es la zona de la agrtcuiUva^ enaadade ateay eaaarpadaa
t
imnaám, alprnas eortes Itinmas , shüteséM» f en "gMéral mr
¡NOS q«ebi«do y nonlaoso : hé ttqoí la príiMni linea de defensar
apoyada co la .segunda que es la zona de his |)astm. EMe país ttfé^
Ikno, cortad» por ríos y caitos, con grandes palmares y cq^cios*
inineDsos desprovistos de vegetales, con lugares <pie te Inüddan. y*
sus ríos generalmente anebos y profundos , fbnnan la segnndalínea '
i^Miyada sobre la zona de los bosques , terreno inmenso habUado-
seio i)or fierat é indios salvajes , qne sin embargo ofrece algunos
caminos por ios ríos navegables : esta es la tercera línea. Sobre es-
tas treb grandes fajas puede obrar con inmensa ventaja en leda la*
eBieosioadel territorio, porque poeos tildados (y si digonlogun en-
r^[ieo,' no me equivoco )í , podrán marcliar entérrenos escabrosos y
subir con mayor prontitud sobre cerros empinados, como lo^ pue^
de liaoer el babitante do la primer toqa , sobremiinera ajptói para
delBiiderla: por el conoómieoto ^U4 liene do- los lugares, la eos*
tambre de su. clima en el que suelo hacer 4 6 leguas al día sin mo-
loatarae^ y soteo todo, el tipo endispararel fusil eon que está acos-
tnmbnido á malarias aves al vuelo y en la carrera á las Oeras. Eh
la' segunda zona eneootraooMs el campo del bomb^lliii^i^. So cli-
ma abrasador no le molesta^ el caballo cansado lo reemplaaa con
otro salvaje al instante^ la carne sin sal es satánico alimeoio, tos-
MfS'0ias grandes oo le impidan el paso, y oon su catello iiace hasta
39 leguas al dio. La destresa en mamejaiAe, el eonocimanto de los'
lugares:, su audaiia y su modo: de alaearv sorprender ó relnunse, le
ba^n lemible y acaso invencible^ £u. la tercera loaa eao(Mitramo&
lias iitidtos salvajes, que se unen á los del pais cuando la guerra se*
enciende : así lo hicieroii en la déla iodependeñcta y así lo barian»
en caso semejaote, siendo los mejores ausiliares en aquellas selvas,
en donde no liai otro camino que el .conocido por ellos. Allí es el
non plus ultra de cualquier ejército : tiene que detenerse por falta
dé camino , por falta de Yireres ^-áüeniiK) que los defensores en*
«lentran los unos y los otros.
Nunca .llegareu>os á quedar reducidos á esta ^llima Irníea. Seria
fircoiáo que el enemigo pudiese cubrir cada legua cuadrada con una-
fuerte división, y esta que estuviese bien atrincherada, porque do
lo contrarío, correrla riesgo á cada instante. Abora bien ¿con qué
■e alimasiaba tanta gente? Cuanto mas numerosos son los ejéreltos ,
eotí BUis dificultad encuentran modo de subsistir, y si son pequa-^
nos, pronto llegan á ser destruidos.
— ¡m —
Elpvebto que deei^a.QaQaervtr tn libertad^ ne peroitle que le.pri-
j^endeella ; el pueblo que qlúere deSendcr sus hogares y sa, hé-
flOr, no es Yoooidapor ningúa poderiitiiBáBO i s» lo^taraLi^eáiidrlo
á ia miseria y pero do someierió al yugo : lei enemigo reeonrerá •!
paiS) pero no mandará eo el : no será dneSo sino del terreooqne
4)isa. Caaodo la oaeioo en masa -se letanle^ bal más finensa; de
la que se neeesUa> y tiene ademas fórmkiables ausiliare»^i)w:le
ayuden á la defensa. El clima solo dará razón- de: asa (mrera p4H
te ; la otra quedará al eargo de nuestríos malos caminos , de las as-
aras montanas, de los ioíseotos y.atin de las fratás que ayudarán
á ia causa* nacional. Queda^rá por último una .tercera parle qqe^jie
disputarán las balas y las lanzas. Nuestros oerros escarpados y tupi-
aos de bosque , nuestiros llanos áridos ó anegados y nueotraés^esiw-
las é inimfeB^as selvas valen roas que mil fortalezas en imestras dite-
ladas costas. Estas que pcescülañ innumerables ptintos de desem-
barco á un enemigo^ ofrecen también otros tantos á los amigos qée
nos proporcionasen armas y municiones ; bien que no habria gran
consumo de ellas, porque con solo las marchas y contramarchas
seria lo bastante para concluir con el soldado europeo, en un clima
abrasador, húmedo y no muí sano para aquel que al desembarcarse
debia esponerse á las penosas fatigas de una campaña, en la que por
todas partes veria el enemigo sin poderlo nunca alcanzar, y que no
lo dejaría dormir una sola noche sin molestarlo ni alarmarlo , da-
ñándole y matándole hombres. No podria contar con que una ba-
talla campal asegurase su conquista porque sus masas no podrían
marchar como en Europa, su artillería no tendría caminos, sus
caballos á los pocos dias estarían inutilizados solo por el efecto de
los pastos. Tendría que seguir unas columnas que los atraerían á
los desiertos ó sobre serranías empinadas, y desapareciendo delante
de ellos , solo sabría la noticia de que estaban á mucltas jornadas
atrás ^ ó bien las veria al frente en otro cerro mas elevado. Esta es
la guerra verdadera que el pais debe hacer, porque es la que no
puede soportar el soldado europeo y la que asegura al venezolano
iun triunfo cierto y ventajoso con poca pérdida , pues no tiene que
temer el clima , los elementos , ni las escabrosidades del terreno. A.
lo cual debe añadirse que conoce palipo á palmo el teatro de la
guerra, y que en él jamas se le podrá forzar á aceptar un combate,
á tiempo que el enemigo estará espuesto á recibirlo á cada ins-
lante.
M te MpiMiMi 4iát MtiktímmUB mhaéhcím «• mnmi ra
-€MuifaiiB, QsanMúj Ifargnto^ Gantoto^ MttnMllM) ; «stando^pm-
tisioiiiimmite éopriniíte ias «de <iafáe», B«ur#ékiiM t "COKo. fiii
••deontmi comanáanle ésl^eaélíllo ^Mettát^nlftíBami de^MÉFi-
'«ilb». »U fMPia iieniMiiiDte'fa» ieftIÜ éti Mmttdlo>M la itepáüliiga
lÉolaasdénd» á &4K MÜadM, dtsüiMdM eMre Mamcftifce , FiMflo*
CiitoQllo, ValeMia, CoHwtiá y GMyana, y >ttDO6^eB40Btaeament«s
-ée muida 4d Marnaiiita y kpv»e.
La Aiei«a4eia'iiad(Ni r«po«a iolil^e la «¿ft^a ^q^ia-^o fli^de d»
léoi^leneft : la itmivaj qUe^wtá IMnada á baeérloa sarvieloB qii&
'#B iNiedeii neteslMr m Uetope de pa, ynioiiMa de6#l5iQdi^
-AtMRde arlttlerfe, iiiAmtería y eabifiüMrfa :*la otve-es la de f^ertm,
-%Qe 0B la i}«e dabetmareliar en «MD-de «Mitfiíeek» iminrídr o^taqtte
-^ÉleHer ; su i>d»en> weiende á «;f98 4fi8k idue» de tuém^MoM^
Ldb do6 estados aígvietttasdanltt «na idea ism éipceflataneiada
A eslM féenas^
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N(KA. ia major D«r(e de lof cuerpoi^ coaojpañfas sueltas y medias compafiías ya organin»
doi,'c8e0den del «ñínimuii defuersa qme'^ el i>eila«ienilo>«n las firereaelMief M art.9;
iNiro jc»)culánd»U>g todos coa elmioiniuiii . resulta c^ue Ja milicia nacional orfanUada hasta
M en' la i^púbnca aseleodo á «5^669 bottibres , del modo ligoiente :
InCMaitii ••• ifi^iT
CabaUería <683 .
{i^rlüferk »SIS '<
]i|fflAto#ia «•,«»
. CaJi)aUena «... 7,i00
'I ÁrtmeHa —
^15
f
EDUCACIÓN PUBLICA.
« La masa general dé los vcDezolanos estQTO sumida , dice Res-
« Irepo , en la ina$ profunda ignorancia cerca de tres siglos , ó 0r
« todo el tiempoquo \o^ españoles dominaron este pai$. Los indios,
c los esclavos , los labradores y arlesanos ; es decir, los cuatro .
« quintos de ia población y no aprendian á leer porque eran raras
« las escuelas primarias, que solóse encontraban en algunas villas
a y ciudades populosas. Acaso el gobierno español en todo el tiempo .
« de su dominación no dotó una sola escuela de las rentas reales.
f Las escuelas primarias que Cristian estaban dotadas por los ca-
~tt bildos ó por fundamnes que backn los particulares para la eda-
• cacion de sus hijos. » El Repertorio Americano se espresa sobre
^esta materia asi : « No entraba en nuestro sistema de educación la
'4 esgrima, la danza, h equitación , la música, la natación ni el
4 dibujo. Un velo impenetrable nos encubría 14s idiomas eslrau je- '-
jk ros , lá química , la historia de la naturaleza y de las asociaciones
« civiles, una sombra^scura nos^eparaba del coQocimiento de nues-
« tro propio país, de nuestro plaaota y de la mecáatea general del
« universo ; no teníamos la menor idea de las relaciones que Jiga-
« ban al hombre en sociedad y á las sociedade&.eBtre sí. En suma,
« ño se enseñaba nada de cuanto el hombre necesita saber. . ^
« Como no estaba en los intereses del gobierno el ilustrar la -
« fueoto dé doñdé lá sociedad recibe sus mejores impresiones, ni.-
« prelparar á'gozes puros é intelectuales á aquel sexo tierno^ cuyos;
« encantos pudieran contribuir tanto á la virtud y á la dicha, no
« se trataba sino de hacerle conservar durante todo el tránsito de la .
« cuna al sepulcro, la frivolidad, la inconstancia, los caprichos y '
«poco juicio de la primera edad. Ensenarla á manejar la ¡aguja, ,
o inspirarle el gusto al adorno; he aquí á lo que estaba reducida la '
u educación de nuestras mujeres.
« Viciada así la fuente que debía dar ciudadanos útiles á la pa-
« tria, no.se encon traba, por todas partes en América mas que disipar
« clon, falta de costunlbres, inagcion perezosia, galantería; y el
trestranjero instruido y sensible, al mismo tiempo que hacia justi-
xiíkilialéótó iiatural , al carácter ameno, franco y hospitalario
— 545 —
i del hofiftbre afaerioano , se afll§;ift al yer. su misera cmidicion io*-
« cial ; efecto iodo de.losprinópiosdapoilitíeaquedi^ed srg'oi'vi
« han gobernado eslasregHMiesi » . .
Mas con todo, áprineifáos del siglo presente se faideróa alanos
^adelaotoaen la educaoieift pábliea. En 4696 se fandó en €arácas al
«eminaríopor el llustrisioio frai Antonfo González de Acoüa, y io
-acabó el obispo D. Diego de Baños. En 4722 . el A 9 de agosto, fue
•autorizada por el papa la fundación de la unitersidad dé Catáeas ,
<;reada por Felipe V en el año anterior ; mas no tuvo logar su Ittai^-
guracion hasta el N de agosto de 4725. Ix)s estatutos fueron apro-
hatám por el reí el 4 de mayo de 4 727.
Antes de 4 800 Mérida tenia en' colegio, y en 4S04 el vioerector
fué enviado á Caracas á solicitar el establecimiento de una univer*-
«idad, en donde los habitantes pudiesen graduarse ^n verse obli-
gados á ir á Santafé ó á Caracas ; pero itOfMftdo obtmierlo« En tíifó
real cédula, espedida por Gártos lY á coiisvíUá del svpreflio consejo
de ludias^ eDupareoer fiseal-^ y qne esiétia en' Garáae^ (i lo menos
¿ules de la irevolneioo) se prohibió 'el estabiecimiénl&xle la uñivier-
«idad de Mérida; porque &. M. no coBsidek*aba cenvWente se lii^
ciase. general la ilustración eu América:. Con tbdo éa'4ft#2 se conta-
ban en ehcolegiO'dé€imeas 64 pensionistas yy 402 éaterqos. Había
doce cáfodras, dos de filosofía) cuairo defteotogía'^ dos de contio-
versia,' uóa de filosofía: nwFal , una de teología positiva , ufaadc
dearecho civily una de derecfaé eanónico y una de'mediclna.'
El gotóeróode Colombia- habla ya designado les bienes de los
«onyéntos para l&edocadpn de la jnfentvd, y d i^bremíD dé Ye-
nezoela ^lieého despvés todos losiesfuerzos para que set dHtsMsx la
enseñanza en la masa de Ja poMacien, y al eívoto ha estiablecido ya
once eolegfbs-entoe €utnaiiá y Valenoia/Guanare , Barquisimeto ,
Tpcoyo ^ TrujillD , Coro^Mapaealboy Gnaféiía, Margarita y Cala-
bozo. . - -••.•• ■'• • •-. . :•."•':'.
Exislen las umvehsidadés de Caracas y Merida ^ naontádas bojo
un pié «mi difecente decoino las tenia el gobielrno español. Tam-
bién |iai iitia academia militar,^ la que se enseña las matémiücas
en todo&.sii6:raiiios;la fortüeaoioQ, fitrtslleríay dibujo, elci^ que
..viene á 8er«n.i^aétel deíaícialfes.ilusiradoa. Los estaUoeímieoios
privadoadeedttoaoÍEín.qup enasten en Caráeasj soíiddsxokigioa'^oc
4obrepiijaD>á h» qiíe han de este giénero en toda 1a¿ república, el
-colegio: dé' .la Ift^eiModéncia'y elde la fsa ; jaitanas dos'basaa de
í
«duGuibn :{Mira imli» ; mxná ftím »ccigidas. la ^MpBogémi^ie rntuéUof,
fonnada baoe^peeo üanfo^ . bá «pediéomia ítei «obra Jlaa «gaiid«
primarias, á fiu de que no baya paiV0q«ia'«iii>e«ta>miti6aon, -jpvfls
«ueata toda la(r6piÚiiíeB:«« «oíd iiifll«éd|io «anik aMvela /por cada
:4i4 , onaPEid» k fUiem ^^Otanada ancata «no por aaia M. ^Vardad
•6s que de 525 paifOf{ms)bai 4^1)4 ¡aín.itiiigiiii «estabtotimíieiito ipú»-
Meo de iostnicdion itrimárta. Ei ieitodo^qoetse pone al fio de >aate
atUeuio dará mndMilisiainiasifiíaeta^ipor aalar formado «tpresa-
meBle por k ámtcdon de^etiudios , «cayos (trabajos iJiaria pronto
«OBpcer aa sutilidad en ioda Jatrepúblíoa. Pero átítes de tevolinar
este articulo, es indispensable Iranmitr aquí Ío que W iDepons
•díoe ien.su obra sofaiDe.'la(iiplltiidifce!faiB.vaiieKOlaBoe para lasoien-
xiaa.
fiiLa vefdftd es-^ueJas fiEi0yo6'de^Cosla4Ffr]Be tiauen oliespiritn
« yíto, penatnitítey saa nios>awcepttbles.de apüeaeton que los<erío-
^a Uq6 fnaneeaes. Son áiÜMioses á esémmB foatttaaa; ^modalas ty >«&-
^ Uiae , en fa» ajeceioiosille .armas , de>equllafiae*y>de 4anM , an
•a nonsica y «dibujo , matarías de»ei»io«idas .tu ^su^téucaeion ', mas
a por «18 adeiatttos^an'laaiaacnebis y por hif jEocfUdad que damuas-
€ tnm<jen:a|meader4jalid»caGboíaitil, pQade:jfi«9Hna^iie*80h>< dalla á
• i sus dtapoalaioMS wia¿di«aflioo qi» laaijoanduzaaalieouocimianlo
• deiCiertafi,matarias(qite>liaKMtBeliaB las^ideaa, foroMnuel |uicio^y
a'ODltivaBtáliaHleiiilíHiianto. Hasta afavaa laiateeacíonide loserio-
« líos espáñsi» tba pattie ipado ^de las ¡préoeapueiones >iiaeion«leB
^.q«B baaian anrar eaatldsiden toda lo qae no eDa.de >aa>aacion.
>« Estaban en:b Éitíma peíaaasion detque jm> iiabia'peBaamienljOs
;« íjüatoB, piioaÍpÍDBia<Sltdas,jiBaBal aana» ainoaeaii»(lasiaapaitolesyy
f * qae par iuaacoooafctaebeía jBatnraltiiorpodfeninénnB de fordar sus
a pradttockuea maadáadolasicom fas /de q^hob paiaes. (Faso se :baae
«aabora iumi:tclÉKrjaTOliicioD en iUs iopUiionea, yitodaranuada >q«e
« la generación que va á reemplazar la que está en su ocaso ,#fr»-
^la cera al nanadot^orppeQdidoeLespectáealoHdatiBBa aaljcwa'moral,
>c producida por ktoaiiionidfl bsabádurktnaeíoiMii oan la parle
^a áttl d€tios<pHnatp(a6 de otros pnd^tos^ iBuJafedto ,etada la juve»-
^[iudeapamlla, i peDetfada.de ia áaiiiiáiaoeiaide^tt ialaaaokKi,ipvo-
a eom: ÍB8tfttlraeiefreadoi<oan avades laa obraaiA» p^íMe «atranfaros*
4íPaoos>sonios.íéfeaa5iqna ao bigeiua>qittnidaDaitoadiieif'él)f«aa'-'
t« cas y ai toglas íáui aalo^eLisaiDatfeo «fe iad áffenáairia^ ¡MmoAo
jiifflaBrieBjte&aBHaa>piMrdiiMbrib4ne|latjMiiBMi|i^jpa^
— 3Í5 —
« primero. No piensan como sus padres, quecreian que la geografía
« era una ciencia superfina y que la historia del género humano ,
« refiriéndonos lo pasado, no nos ilustra para el porvenir. A sus ojos
«'hoi reconocen en él comercio una teoriá digna de mas honor del
« que hasta ahora le han hecho los esj)año]es, y ja no es mengua e3-
« tudiar las reglas de aquella profesión y y adoptarla como oGcio. »
Cuando se escribía esto en M 804 , ciertamente que no se profeti-
zaba , sino que ^sa .veía la macchauieila nacioii. Si volviese ahora
Depons á aquellos paiBes, le sorprendeiKan los progresos que se han
becho. Yeriacultivar, y producir ópiqíos frutos á las ciencias y las
artes ; vería prosperar la-agricultura, el eomercie y^ki industria ;
i^erm adelantos en las inat«málicaS|:ymodatfsmui cultos. El dibujO;
la músíca^latequttacion yia danzs|, ramos de utilidad y de adorno,
«Ipasecerian á su<fi$ta cullivaios «bu tanto guéto como esmero.
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de las escuelas primarias, así públicas como privadas que existeo a
Babceloh*....
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ooMBaao.
A la í\Aí»»An Aák IaA AS||A9&/jMt¿ V^||^V||a1^^ *Al^Mr2^«¡A JI^^M^^
pais una nadon qae pudiese llamarse comerciante : esta era la ca«
ribe, á quien el célebre Bumboldt di¿ el epíteto de Bukhares del
r^uevo-Minidir, por sos eiiiyicuiH gnelrreras } pur su aelifllKld'ci^
ttDWiai. CsülíneaB el gén^a de sa eomerda, jEóoLeSr adivinado
entre tribus todasdesnndasiy sin otras necesidMes que la de co-
mer | y esta la satisfacían cdn la pesca y caía 4|ue les ofíecfan en
abundancia los ríos y lals selvas. Sin embargo , lea hacían faltai loa
ctfoneffparspintarse^y partíknfermenfie d coURild(^ q|a# habla lidb
introdncidc^por ios (Skríbes ; eilos eran los yandedbres del eoUry
traficabaa tambiemcon los venenos, piedras de taríoi colores, fer*
cadones,, esteras, guapal y Oabnilas de morlche para sna ehlncbor-
ros. Tódi^s esUis objetosi sertian á su especnfaclon , y asitnismé U
Étíf, S!lt»taiNili qne lo»iiidio8|(Miien<ciial si (basa Skúcnr, y oon eUa
f algnor oroueni pedazos también hadan comencié b» iidioa de QoíO
y Bal quisimelo. A este tkiñco sucedió el de la y^nta de e$claYO^ en
cambio de fierramiedtas, es^ós y cuentan de yldrlo,. desde que It)s
«sropeiB.ltedaran á faH coitab de Venetuftbi. Los^Oarilkt faneían por
eso lejanas incursiones, asi como en el interiorada M Gubyanai los
Manativilaoos y lo^ Guaipudabis. Vendian á los infelices i(idios que
iMnpnettdian' ed hs< selvas' ó eirsos haibftadonesl, y los* compraban
tasHBdpaíioki y ptrUoüíeses <}ue hacían «rte infamo tráfico* En 45M
prohibió el rei de España que se esclayizase á los lidioé , poitque
desde i 505 Labra f rotnuígado una lei en la qi^e eni permitido á
iliPespiillotew hnean eüAayos'átiadbt los^ameiícaneB fue fuesen de
origen, caribe.
£1 comercio de Costa^^Firtie, y sobre todo, eli de la provincia de
Caracas, se redilda |friadpalnítente á la pesda de perlas., Las islas
át Maigarite, Cnbagna, Coche;,. Punta-teayat y lai boca del rio del
Hacha eran célbbreb en el si^Io xti. A príndpiob de la conquista la
isla de Coche prodipcra cada mes el valor de ^50i0 marcos de perla.
£1 ^íaU) qjnoloi^clfifiialiss^ dlelrpei socaba» del prodoeto de tas pee*
las subía á 4 5.000' ducados,; que según el valor 'del lUetal cuaque-
DHJMJBW» tmii*i>Mn> f MM^qpMrél^ mldr ie k&fcria» bastareis aik>
de4^3# ««hia w ai* <oaí<»M^ái»a<MM>lh4ai«ai« Fasa joagar^c^
y Génavüif deb^maav aattwiaiHna»>ti»? a» «l^«íilIle poríodo todas la»
miaM^e JMmaíaa aala dfkbvi 2^ebttiM4a daraa y ^Ele hr flota d«
Oiwudo ^aaeaía M aqBidtoa (Moapé^nai iwa, (Rorqna caai oortama •
caBea>^ da 2.IHMI laarcoada: i^iaiai^ Lat^paiias«aEair ta«ta ana i»lieitaf^<
daa^ cuaatA ^ve-al liiía>aii¿ia(f atf babiatintrodiMÍdo»efi Ensopa, por
daa iwtea diaaiatiialiBaitUí' o|Niotáaa< Bnr OaBUümUtíe^eB donia:
loa^ Paleologpa faatoha» leaUda» aabiaoM-dé litlos^la perlas «, y pote
GraBAda^. aoiidMiciaida loaFaye^ aaanoa^ ^ua'daipiegabav' tw m
coate lodo al Iv^ oaiealal. te ptrlaa daii (Maala fie^t^refaiini álaa:
deJuaiéiioa';: paro^ la^eaaHdaii de laaiiklÜMaa ao^arr inaaoír poaoí
daspoeadal desoubriiMAto' daü NiiÉW-tttaiMkh Xaitttí en Ifidk co* *
mo «a* Eapaikb I» isla de> Cotafta emi «l» oi^toáe fiMafam espeean
1aiioiiaa*mereABtfleai Lai||e«ia)da'Uiafieffla»dfaBiMlttf6 oápídaioaDle^
liáeift<fiiie»-del ñffio )^ip y 4e9D]i;diae Ltfety IwÉbi» oeiad» áirte» de^
H%%. MimimiséA ée k»i MlatíaMav «Mr iaáUvbM oa» DsnRsha:
exaotitod laa^pariaa aoA» toat^ y th oaolmeiü^Dtó de diamaotea dia»
mioofOMMi ia^ pesaa^di» i^ perlaa-de-CSkibtlpM. Áh aMoaa fiemp» laa
ostras que producían las perlas se hicieron mas esoasaa, popqiÉi aa
pcapagaciair baUa akJo k^pedída^par h^iipradorilf destcooeton de
miUanas de eoncbasi
Guando ealo«9^aeedía., ti ialieitMr de laa< Mrraa daba mui peen*.
Laa práinoiiaa«oloB08'erao> uao&coa^istbdbres qoenor badán olía
cosa que recorrer el paáa en^ todas diiieoaíoaes en bvaca de oro. Sia
eiubar^iXuaidoya/iM^dcttafeiida^ eOBiieMk>de las perlaa, temos
en. i^M la árdqn para que «uaataiaatie vkiiiese ¿ Borhuraia por
coauia da loa tecMOB ua barco* de EaM^p» > pn^eodo alediDdere-^
cho, cardado de aian«aBÍn)iiealaa*y JoeveadarrÍM, SaoelM^BDiedio íüé
qpíeii ob(«ve»de«la ocx^le da Sapaaai^aqiael'periiDiso^, y se^ puede de*
cir que estosi vm^ fae]ioa< laa^paioiems. pekiiúooe»> oiercaiitües da
la Uefica firtuedeVea^aaelai c«» la aiadre piina^
Las- boteudea^ esjabloeidoa aa* Gacazao eaeilaroa ea f654 á los
babitaaiea.de Oarieaa< á dledíearae á lo» trabajos de la agrioaltura.
Pronto comenzaron á esportar cacao y pieles ea canlidades suficien*
tes para baeev traficaron los holandeses, de quienes recibían gé-
neros europeos qiM neeeiüaban los colonos. £1 tráfico aumentó de
f
td mod^^ que laworiMifoW jasgó qn» éát úkÉfb éé hsummltr
publicóse na deereta rapnnnéiiddfe , yseftitaroii dos nátíns^esde
España cargados de géneros para la colonia, sobre los éfiál«s se pu-
sieron derechos ébQrmes. Los holandeses á eofRéeoéiicia ñé esto ,
cemensaron á baeer un comercio de contrabando , y "(^ncRan tan
barato, que les era imposible á los comerciantes españoles poder
competir con dios. No contentos los contrabandistas, quisieron te-
ner en la costa un punto para sus operaciones, y al efecto eligieron
el lugar que hoi ocupa Puerto-Osibello. A las cliozas de pescadores
que ea aquel sitio había, añadieron I09 contrabandistas holandeses
otr^ habitaciones que hicieron construir, y permanecieron síllí por
tiAto tiempo, que mas bien parecía aquel punto una dependencia
da la o^nia de Guraiao que no un logar sujeto al gobierno d&
£spana« Como aquel punto iba tomando importaircia^ las antoría-
des espáni)las intentaron sojetarleí á la obediencia, valiéndose dé la
fuerza; pero bailaron tan decidida resistencia, qne renunciaron á '
}¡L empresa^ y desde entóaees l^erto^Gabello vino á ser el pm»(o de
Reunión, de un populacho Hoencioso y desmoralizado. Por ultimo , '
á principios del siglo pasado sus habitantes fueroof rédocidbs á la
leí y al orden por las fuersas navales de la compania guipuzcoa-
^úy qqe á la sazón empezaba á entrar en relaciones con las provin-
cias de Venezuela.
Habiendo tratado de renovar sus especulaciones en 4790 los co-
merciantes españoles, no hicieron mas qne incitar el espírtlu de
actividad dé los holandeses, los cuales abarataron en todo. Por este
tietópo el producto anual de Caracas , f olament^ en cacao , era de
65.600 quintales. La estraceion por las aduanas reales subia á
24.000, detsu^rtie'qüelos holandeses recibían los 44.000 quintales '
reslantés en los navios que hacia¿ el contrabando. La corle de Ma-
drid., notando esta diminución én susrientas, y resolviendo poner
fin al trato con los estranjeros, recurrió á confiscación de propie*-
Híaáj i maltas y castigos sobre las pembasque «fiíesen descubiertas
habiendo el contrabando con los holandeses. A p?sar de estas me-
didas cl tráGco ilícito continuaba, y no siendd suficientes los mediosí
adoptados para impedirlo, recurrióse al espediente de formar una
compañía que monopolízase en la capitanía general todo el comer-
cio de ingreso y de esportacion.
Esta compañía, establecida por una cédula de Felipe V en 4728,
se componía de vizcaínos que podian dedicarse al comercio sin per-
— OÍ —
jjQ^<Ngr de i]|ii|gii^;nod« sa nobleza. Le era yero^de msi^f-Mh^
J09 mo^i Yeaezuela dos navios de 4^ á 50 eaoonesy cargados de
.prodactos espaSole» que debían ser desembarcados ea el puerto de
la Guaira. Los primeros buques que despachó la compañía saUe*
rDn en n50 del puerto del Pasaje , época en que el coronel D. Se-
bastian García de la Torre era gobernador de la provincia , y el
S^ D. Msrlia de Zardízabal comandante general. El rei aulorisó á
la compañía para que sus buques cruzasen desde la boca del Oii-
Qoco hasta Rio-Haciía, podiendo apresar lodos los buques que en-
contrasen por la costa , oc^upados en hacer el contrabando , y
reforzar el cruzero con los buques aprehendidos, si lo tenia por con-
Texüeute.
£n ^754 la compañía obtuvo el permiso de enviar á Venezuela
los navios que ella tuviese á bien despachar, efectuando sus cam-
bios pn San Sebastian ó en el Pasaje ; pero el regreso debia tener
lugar en Cádiz para pagar los derechos. La compañía tenia los dos
tercios de los productos de las presas , por hechos de ^atiabando ft
y el otro tercio era de la tripulación del navio aprehensor^ Las mer<A
cancías pagaban los derechos de entrada en Caracas y se vendían.
Lo$ cargamentos de cacao debían enviarse a España ; pero si el
buque no podía trasportar todo , les. era permitido á los factores
remitir el resto á Vera-Cruz. La compañía se comprometía á pro^
veer de mercancías y víveres no solo á Venezuela sino también á
€umaná, Margarita y Trinidad. £1 gobernadar de Caricas en su Ca-
lidad de juez conservador, tenia el derecho de decidir sc^re todo lo
que correspondía á la compañía : pero esta podía apelar de sus de-
cisiones al consejo de Indias.
En -1742 la compañía se hizo dar el monopolio del comercio de
la provincia de Caracas y en 1749 estalló la revolución capitaneada
por el caraqueño Joai) Francisco León, fundador del valle de Pana-
quiere. £M 9 de abril se presentó León con gente armada á las
inmediaciones de Caracas y el 20 entró en esta ciudad pidiendo la
disolución de la compañía de Guipúzcoa ; pero el éxito fué desgra-
ciado, pues aunque por lo pronto se le ofreció la estincion de la
compañía , según sulicítaba , se le declaró luego traidor y su casa
fue arrasada y sembrada do sal. La misma compañía obtuvo ea
4752 el monopolio de la provincia de Maraeaibo. Esiee privücgíos
escítaron un desagrado tan general, que el gobierno delerminó hacer
modificaciones^ Se convocó una asamblea compuesta de ua q¿-
c
»*Í|{tHI' A^ stf^tob 9^ lli c<)]Dp8fl& Y. ^ CAHÍTttcHiféff 'oÉl pdih.
Ssla asemblca lera ]^n^dlda por él gcjj^erfiador gt^tveiral y ttt ^k
se tnifé de IQtf e! ptetíú M caeao» Lq|^ que f«tKi«abáti tettái^ ál
-p^ó eoüTettido; tenisii derecho éee^tí^r á £spliirá élt^to'db ^
«lefeedfaift en natíos de la compañía^ para qüis alK«e reüdiese por Üa
'jprbpía (Jneirtsu M^có , Santafé , Santo Domingo , Pítétto*ltíco ,
Cuba y fos'Mas Canarias, la vieron eomo inies ia libertad dei^car
4e Yenetnefe el cacao necesarit) para su conStttnb. £1 gobierno de
la proTiñtiia aprobaba previamente los preíbios -de los artículos pro-
Tenfen^ de Europa.
La compañía ^^mpleaba paráimpedtf el contrabando -t O embar*-
caciones armadas todas con 86 cañones y tr^>uladas con 51^8 bom-
bres ; babia ademas ^0^ guardacostas en tierra. Los gastos anuales
de e^te «envicio montaban á aOt.OOO pesos fuertes.
Baje la in§uiracia de la compaMa la eéportacion del cacao tomó
un grande incremento én la provincia. La cosecha de este artículb
f fué evolaadc en ^^MO quintale's el* afio de 1755/ y en 4765
^mont6 á 4 40;659 quintales. Cerca de ésta época la compañía con
menoispreeio' de sus deberes habia béCho él comercio con los es^
tranjei'61 y et contrabando con los holandeses de Curazao. Este
diBérden produjo séídíB^WDton, y poco desperes el ministl'ó éspafíol
unió ios puertos de América: al comercio de la Península y por Ids
■raglamentOB de 42 de otJiubre de'^TTS , llamados del comercio
itfr^, quedaba disuelva la compañía guipuzcoana, á^la'que sucedió
ktdeTilipiuásbajo diferentes reglas; pero esta también cesó éu
4780 por las reales órdenes de. 9 de jnriío de 47Y9, habiendo du-
rado el monopolio el espacio de 50 años/ "
A: (wnaecuetfcia de la tólima gueí^ra dtei silglo xrm; el rei abrió
los puertos de Amética á los estranjeros iel -i 8 de noviembre de
4701 ; maa^tá orden fué rerdcadaí el 4^ de febrero de 48O0. Por
> <
un decreto del capitán general y 'del intendente de Caracas, fee
ooQCédlÓQQ 20 de mayo de Í804 la apertura de los puertos á los
60tranjé!*O6 hasta fin del año, ó' la éporCa de la pdü^ durando 6 mé-
aes'esloi permiio/ La decadencia ^heral de las ihanufóc^tura^ ¿e
Españja , qué obligó lá los negocfauíes á' (ómar tos géneros de Ids
•oíros Ipaíatesf para provwr d las colonias; fué causa de que tuviesefn
f»e pagar «oíwnaes ctereolios á la mbtTÓ|)dll , y otros todavía mayo-
res oualidé Ifépiill las inet^e^éHás'a su ddsIfuD : á^í es, ^e áil-
•t«$.del^redbiil2tó el üómerciátile por metíbr/'él pirecib 'de tós artícú-
» w^ -.ti % i .
SQútklor Áo' pañk tnénM'dé séttffr y dtei^it úá't^strfrftti de eoátM^
Kdndó ()cié siétíspre salía en faVor del estrdiijé^ qtiift uo vi^ndüaflriM
^e por metálico , f tais isks vecitídl^ mglesá^ ^ UentrMes etkti' láÜ
^úe fógf aban e^tas ganancial. ' ' '' ^
£1 coiif)er(^io directo se liallaba en uh estado ^e hngtiilfex t)of
las muchas traban que tedia y por la rivalidad de los poderes néú*^
frales, pubs la metrópoli apenas enviaba mas délo que pód^ jLar
por sí mi«na ; no mncho mas qué' frotas secas, lotíí mili IrifeWdi:';
quincallerías, hierro, aguardientes catalanes, vinos^, aceité, sédaá
(astas de Barcelona , escabeches de afun y otros artículos semejan'*
tes de poCa importancia. Los géneros holandeses y alemanes totíS^
nuaban entrando por sus vius antiguas ^ dMosas. ¿Ifoitádo , eúáié
estaba , el coíUercio directo , várittba macho por las tMsüudés dé
iá guerrii ó de la paz. Mientras doraron las úMma^ guerras , sé
reducia á pequeños faluchos que sallan de E^lía cargados ^epá^
p^rá hacer cigarros , que el amerk^HO esfMñóf ^HñMétéñ^^ eMÉé
itno dé lós'^ríctriíos éemas lojo fyára él, pajgaín'é» á Vetes 40 dHVüé
por la resma. A este artículo ^liao Agregar' afgbnos agüat^ent«a
Mancos. Si llegaban tales embarcaciones, retomabaü* cargadas dé
feacao comprado á f5fesos ñiertés, el ciAl Vendían á 442 en M
Península. Sin etnbargo , est&s Roerán pé^uíelMi» a*r)^iítttra9 qué
ííó tenían el carácter de comercio , sino de lotcflrfÉs. < .
Casi todb el comercio de las provi^ias de Cat^cttsr con Ta metró¿
poli se hacia por el puerto de la Cuaira , <)^e á pesar' de su mtít
radia, disputó por mucho tiempo^ con otros puertos lá Véñteja dé
estar mas frecuentado, la razón era p<yrqtte en las fnÉdiedtacfoiM
de Caracas, en donde son más abundantes las producciones, no té*
nian otra yentá sino isn Ici capitial , Iti queá su turtío úo üas podM
ésportar á otro paraje qtíe i la* Gtiafra; y como 'la pbblacioú dé
aquella dudad éotisükdiiátoiáis'anMibs de iie(íé90dad ; 'eohMdídlid f
Itíjb, él cbmercíanle ballabér éü »tt ititéfe^ él fVée«é¿la# el puéHd:
A consecténcia dé esta cireu&staé^tt, f uérto^CaMfo, <)ue estaba tt
30 leguas á sotavento, iro ie eonsiOeral^a nutíica como puerto éé
embarque sino para los drtíetüór ^ue mn iniáédiacf^nes j^rodüten
y parte ée \ós correspémMfentes á los valM^ AUlglta, VsA^toi»';
S. Carlos, S. Felipe etc. Si acaso sucedía también, que el producto
natural aumentaba de tal suerte que escediese el valor de los géne-
ros importados por navios europeos , los comerciantes iban á la
(
Goftíra pvm dispoo^ de sos earpmea(os , de los cuales no podían
aperar biiena veota en otro paraje, y después iban á Poerto-Ca*
bello á cargar en retomo. Maracaibo , Cumani y Guayana recibían
cada uno dos ó tres boques de España ; pero en Maracaibo no po*
dian obtener en cambio sino café , cacao y pieles de venado ; en
Cumaná algodón y un poco de café ; en Guaymiales productos 4|ue
Uevabaii de Barinas, Barquisimelo etc. por el rio Apure.
.. $alo una tercera parte de ios cargamentos que solían llegar de
la.Peniosula , particularmente los que se espedían de Cádiz, donde
se formaban las tres cuartas partes de las espediciones para Vene-
zuela, consistía en mercancías nacionales, y muí frecuentemente no
componían mas que la cuarta parte. Lo demás consistía en géneros
^straojeros , que el comercio de Cádiz estraia de diversas partes de
Efuropa y que se naturalizaban por medio de derechos. La Francia
abastecía para este efecto cerca de la mitad , Inglaterra cerca de
una cuarta parta y las ciudades anseáticas el resto, escepto algunas
gasas que il)an de Italia. Los catalanes eran los que formaban en
V^ezuela el iQQaycHr y mas rico cuerpo de comerciantes ; eran acti-
iros , emprendedores y unidos entre sí. Cuando llegaba algún car-
gameptp^ veinte de ellos se hallaban quizá convenidos para su com-
pra* Trataban de sacarlo de las manos del vendedor lo mas barato
posible de un modo particular. Como eran los únicos capitalistas ,
y que no tenían competidores ». uno de ellos en el primer día de
yeni|i ofreeia en nombre de los que se habían asociado para este
efecto :los precios en que haK»au convenido. Si los rehusaban , al
4ia siguiente iba otro y ofreda menos. El sobrecargo se hallaba
embarazado al ver. que no alzaban el precio, y frecuentemente
ocurría que disponía de sus géneros, vendiéndolos con menos valor
de lo que le habían ofrecido al principio. Del mismo modo alzaban
diespues el precio de los géneros de retorno, sabiendo que el bu^ue
tenia que VQlver en cierto tiempo. De manera que se podía decir de
ellos quC) manejando solos el importante ramo del comercio , eran
unos verdaderos monopolistas que casi seguían haciendo en el país
lo qiieiiites habia hecho la compa&ía guipuzcoana.
' Itft aportación de la compañía se puede calcular un aíío con otrq
diesde 4750 en que empecé hasta 4740 que estalló la revolución d^
— 525 —
Jaaa Francisco León , en -I^SOO^OOOp*
De ^49 á 4790 qae la compaüía qaedé 'di'-
snella, se puede calcular un año con otro en . 2,000,000
En los años de 4793 á ^96 5,439,682
En los años signientes dé 1792 tásta 4800 2,043,424
Últimamente antes de la revolución de 4840 4,776,500
En el año económico de 48$8 á 48^ • . . 5,374,488 34
. La revolución que hizo Vcficzaela ha Ir^ido glandes bieo^i^ jal
oomcsrdo : ya este no .está eiiv manos de ano^ pocos monopolislas :
eada individuo puede dediowse á los negocios mercantiles y to-
das las naciones pueden concurrir á los mercados venezoiariot. i)é
este modo bal competencia y de ella reaulian venia^ en la compra
y venta délos artículos necesarios y de los productos del país.
íii esprilsíon de los españoles produjo nuevos bienes á la socte-»
dad venezolana. Sus bijos se vieron obligados á entrar desde luega
en una carrera que juzgaban baja y no digna de ellos, y de'este^
modo abrieron un vasio campo á las especulaciones mercantiles^,
ao^olamenle en los puertos de mar y ciudades principales, sino en
el interior del país. En esta carrera hai multitud de bombres que
se ban-enriquecido y hecbo un nombre en la sociedad por sus em-
presas , actividad , cálculo , acierto y viveza en las especulaciones
que permite el pais.
Para dar una idea exacta del actual comercio de Venezuela^ véanse,
los estados que se ponen á continuación de este artículo , sacados^
de documentos oficiales ; y por lo que respecta á lo esportado an-
tes de la r/evolucipn de 4840, eslamp^inos uno que servirá paira
formar un paralelo con. el de 4837^ que fue publicado en uno de
los periódicos de Caracas. ....
i
mncIA sobre la essfirt§4^m * Fim»^ ^*<^ ^ ki vf^lwtion
4f tW^» -con l^ (Í4, oñp ^^^P'Mi^ 4« 1^9$ ^^ t9d7^
. £iipoytA«t6fi cMes de íSiiO*
Patos fuertes.
' it<l,4M fanegas de eacao á f 2 pesoar 50 centavos. . . . 1,€83^,<N)0
^ A^fim paeas de ülgoáenf á fü pes^i. ......... 48i^0M
SP^eflO quioiales deeafé á 1^ pea». .... .> . . . 86O«É0
l^jPOiy^M UiNra3 4ltí4ffiU.áli>6aQ^oeiilevo«. . « . ^ . , U2M^^O0(i
; l^^yW lU»i;«i^ de .veoilla á^e^atam. .... ^ ... . 7,.5(90
l€OiQIM^ ^i^ d^ «arva^aFnllü A .9 c;entavQS ,,.... 1^,000
t?i(í,(M».cjwo^íi4 pejid. ... . . , ,.,. , , , .• 130>000
g!90,W0 ciw^jQs i 1 cealavo., . 2,00p
C;,000 ipiíl^^ y caballos 4 30 pesos. ........... 180.000
' ¿18,000 resesá 12 pesos. . , 216,000
'' 800,000 libras íe cobre á 10 centavos. .......: 80,000
|»n»MH III IJH
ToUL , . . 4,77§,50Q
•
r
Esporiacton de 1836 d 1837.
Pesos fu$rles«
Bi,089 fanegas de cacao. 875,032 15
"''38,784 pacaá de algodón. ...'.........*. 616,943 08í
'^l*e,S48 qnintafei de calífte. ............. 1,65^,908 36
^Mr¡mS litwras de añM.. . .502,4^79 OS
ill,550 cueros , • . . * 247^3^ Mí
1,205 muías y caballos. . • 104 028
7,912 reses 148,087
2^450,000 mineral de cobre . 34,040
20,431 quintales de tabaco en rama 256,213 10
230,000 cueros pequeños 109,733
Azúcar y papelón 53,979 31
En yaríos otros artículos 335,823 63
Total. . . . 4,943,597 05
— SK —
COMPARACIÓN dd movimiento mereaniil habido y derechos de
liodeí^»i^mlmtñ4BÍmtí9éüUm.,
De 1829 á 1S30
be 18310 á 1831
De 1851 á 1832^^
De 1832 á 1833
fie 1833 á 1884 '
De tm á 1835
pe 1835 á 1836
Pe 1836 á 1837
De 1837 ¿ 1838
De 1§38 ¿1839
• *
oyimiento mercantil.
Derechos de adu
5,587,104
—
978,909
4496,183
—
737,796
6,215,017
—
1,156,997
6,319,962 '
—
1,145,128
€I,60O;C94
n-
l,0g8,648
6,8SÍ6^881
996,042
7,179^51
830,588
9,619,075
1,259,929
7,314,191
1,027,268
$,m,i^r
ÍS¿
1,416,257
GéMPAkÁCIOH'dé los f^eeios^m <|tie réMian estimados lo$ einto^
frnios prineipedés en M difer^tés aduanas de la república en el
Algodón. Añil. Cueros. Cacao.
qql. lib, " uno. fan,
ít^ Gaaira 14 i 41 2 81 18 41
Puierto-*G<ri[>ello^, . . 8 33 . 1 28 1 91 14 97
Maracaibo 15 84. 1/2 1 1 57 14 53
Goayana ^1 77 1 OT i 81 11 84
Coro 1^ ' to 1 50 41 05
Barcelona t . 12 22 VS f 51 . 2 28 15 01
Gunlluiá» 12 08 nr 2 06 14 30
Oanipano «...,., 10 » 1 06 12 25
Maturici. 9 13 1/2. . ^! 1 1$ 7 50
Güiria. . ...... 9 13 » 1 71 10 94
W^nerote. ..... d * 2*51 16 8ft
Stan Griego. . ; . . » »' » jo
Riocaribe d o » 10 36
Cvampii^.. » ... . n D I 21 9 .
Café.
qql.
11 98i
9 36
8 05
•& ■'
9 81
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»
11 67
9
11 60
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^?^
••, i» •' 'i
.. I o*' I
t
— 52S —
GOMFÁRACiOSM nmoimiéa^ «cnroalti, y M total if« dffvdbot tfr
rada aduana en los dót úUimns «6ol. Moateleiít *
La Guaira De 57 á 38
De^38 K 39
Puerto-CabelJo .... De 37 ¿ 38
De 38 á 39
Guayana . De 37 á 38
De 38 á 39
Ifaraeaibo De 37 á 38
De 58 á 39
Coro. De d7 ¿ 58
De 38 ¿ 39
Barcelona. ........ De 37 á 38
De 58 á 39
Cumaná De 37 á 38
De 38.^ 39
Maturía. . De 37 á 38
De 38 á 59
Garúpano De 37 á 38
De 58 á 39
Gñiria De 57 á 58
De 58 á 59
Bioearibe(l) De 57 ¿ 88
De 38 á 39
Higueroie De 57 á SI8
De 38 á 39
Juan Griego. ......
De 37 ¿ 58
De 58 ¿ 59
MoT. mercanhíl.
3,641 ,84i 05
5,165,470 32
1^,596.7»2 29
l,885,Íbt 16
606,767 33
688,573 12
696,596 27
774,905 54
160,430 20
289,253 70
178,929 41
295.176 50
167,760 60
118,876 81
249,134 81
272,724 57
108,515 25
94,114 37
112,806 12
64,016 18
21,925 21
40,062 82
27,9S7 30
28,741 97
Der^duM.
585,082 72:
774,930 €S
116.419 2$
197,344 62
129,594 30^
171,201 2a
105,3^ 68
115,179 67
15,397 55
44,907 02
M,527 48i
42^14 64
17,9S6 76
25,140 77
11,664 5a
19,158 36
9,919 5Sr
11,657 03
6,500 27
5,635 3S
445»
1,271 76
2,065 08
c
i,4%4 58
1,009 521
"(l) Mi en este año ni en él puado ha enviado datos estadtstieoi el admlnMrá**
dor de la aduana de RiocarilM. Los derechos se han sacado por las relaciones de la
tesorerfa. =-_--rr .
t
— 529 -
Adteorad) • De 37 á 38
De 38 á 39
Cumarebo (2). De 37 á 38
De 38 ¿ 39
Pampatar • . De 37 á 38
De 38 á 89
»
O
»
900 94
JD
B
32,1069 87
628 72
7,944 50
92 40
7,354 81
127 25
COMPABACION de la£9porta€%an hecha en los tres úliimos años
délos 5 frutos principaUé, los precios medios en qu$ han sido es»
timados y el valor total de cada uno»
*
De 1^36 á 1837 :
De 1837 á 1838 :
De 1838 á 1839 <
Algodón
38,741 qqs.
32,601 B
28,498 »
A ai ti
«
áP«.l5 91
¿ B 11 44
á B 10 33
616,259 08
372,201 59
294,078 64
De 1836 ¿ 1^7
De 183? ¿ 1838
De 1838 á 1839 :
Añil.
447,734 »*;
383,820 B
428,390 B
á
á
á:
B 1.12 1/4
» 1 12
» 133 1/2
302,479 03
427,508 40
571,377 41
Cueros
•
«
De 1836 á t837 i
De 1837 á 1838 :
De 1838 á 1839 :
111,424 n«
121,603 B
139,140 »
Gaoao.
á
á
á
» 2 22
B 1 93
B 2 05 1/2
247,079
240,576 28
283,091 04
De 1836 ¿ 1837 :
De 1837 ¿ 1838 :
De 1838 ¿ 1839 :
60,620 fgs.
52,911 B
60^088 B
á
á
n Í4 14 1/2
B 14 05
p U9B 1/2
858,593 90
743,652 78
951,570 40
De 183» á 1887 :
De 1837 á 1838 :
De 1838 á 1839 :
Gafé.
166,335 qq$.
174,864 »
2l8,9t8 B
á:
á.
i:
B 9 98
B 907
B 1030
1,659,794 36
1.586,633 86
2,255,509 0»
(f ) Tampoco lia enriado daloa el adminfitrádor de Alícora.
(s) El adminiítradoi^de Ganiarebo no enrió datoi el afto anterior.
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INDIJSTRIA.
Es un grande error, dice Balbi , bastante esparcido en Europa ,
d considerar á lodos los indígenas de América, no convertidos al
cristianismo , con:o errantes , viviendo de la caza y de la pesca y
privados enteramente de las artes mas indispensables á la vida so«
cial. Los indios de Venezuela que se conservan independientes ofre-
cea generalmente el aspecto de naciones embrutecidas ó que mar-
chan lentamente en el camino de la civilización. Muchos de ellos
son la imagen verdadera de lo que eran 500 anos atrás, cuando
por la primera vez fueron visitados por los descubridores. En las
selvas de la Gu^yana todavía se encuentra un gran número de hom-
bres y mujeres desnudas sin otro ornamento que el cuerpo pintado.
Sin embargo, sabemos que muchas tribus del Orinoco y de la
costa cultivaban maiz , raizes diversas y algodón , del cual sabian
hacer unas telas ordinarias. De la palma moriche sacaban unas he-
bras que les servían para sus chinchorros y también para pescar.
Casi todos ellos sallan hacer vasijas de barro , porque en muchas
partes se encuentran restos de esta fabricación indígena. Sabían es-
traer de las hojas del árbol chica unas pastillas coloradas con que se
pintaban el cuerpo, y con las mismas hacian geroglíGcos sobre sus
vasijas. La estraccion del veneno curare proveniente del bejuco ma-
vacure, es invención de ellos. Esta operación es tan química como
la de estraer el veneno de la yuca amarga y hacer de ella un pan
sustancioso que se conserva largo tiempo. También se debe poner
á su lado la confección del tabaco que llaman niopo ; y no es menos
de admirar el método con que sacaban la fécula del moriche y el
modo de formar su harina de pescado para la estación lluviosa que
no daba lugar á una pesca suGciente. Bastante ingeniosa es la ma-
nera con que hacian las conchas ó canoas de corteza de árbol y tam-
bién la fabricación de las de madera, hallándose privados del hier-
ro. Una piedra ó un hueso les servia de hacha ó de otro Instru-
mento cortante, y el fuego les ayudaba para la pronta construcción.
Sus arcos y sus flechas estaban bien trabajados : lo mismo sus ma*
canas, que eran de una madera dura y pesada. Sus rodelas eran de
admirarse por la forma y enlazo de los bejucos que cubrían con
- $Í4 —
cueros de manatí , de danta y de tigre para defenderse de las fle-
chas. La construcción de sus casas indicaba inteligencia , y no ma-
cha ignorancia en la dispoeteídft <ie sus fortificaciones de pah á
pique en puntos defendidos aun por la naturaleza. Las mantas que
sacaban del palo marima y una especie de camisas para ponerse á
cubierto de fos mo^uitós y de las lluvias , són obrds Tan curiosas
como otras semejantes que hacen de la palma moriclie. Los quipos
que los Caribes hablan porfeccíoñado y que se encontraron támbíeii
en el Perú, eran unos nudos que servían á aquel pueblo guerrero
y comerciaule para tjfasmitirse las noticias. Las cerbatanas eran (iar-
rizós cilindricos y largos que servían para la baza de pájaros. Laá
esteras, cestas, talegas y sobre todo las guapas, especie de cesta
casi sin bordes pero labradas primorosamente con grecas eh líneas
rectas combinadas de diversos modos. Los colores que sacaban dé
los óxidos dehierro y magnesia, especialmente ocres amarillos rojos
y aplomados : el barniz del algarrobo con que cubrían sus pinturas
en vasos cocidos en medio de un fuego vivo : sus instrumentos de
música, trompetas^ botutos, y unas, canas de diferentes gruesos
y tamaños, á manera de zampofia : por último, el mádo de bacer
él pan de maiz que aun se usa por todos los habitantes de Veue-
zuela^ así como el de lá yuca amarga ó de la dulce , son cosas todas
que indican mucha inteligencia^ y bastante industria en su estado
salvaje.
Los ade!antos que han hecho los que viven todavía en los bosques
de la Guayana se reducen á llevar un guayuco, ó faldeta que usan
por honestidad , pero muchas mujeres van sin él y otras llevan una
especie de delantal de un pié en cuadro tejido de cuentas de vidrio,
formando líneas rectas combinadas con mucho orden y gusto. Usan
ya del hacha y lúachete para construir sus casas y embarcaciones
.qne haoen de un solo tronco. Tejen, en fin, bellos chinchorros de
moriche y á esto se han limitado sus progresos ; mientras que los
Guajiros que están en la costa y entre la Nueva Granada y Vene-
zuela, tejen buenas hamacas, hacen grandes mantas con que se cu-
bren á estilo de los antiguos romanos, tienen crias de ganados, mu-
las y caballos, se han hecho escelentes ginetes y manejan bien las
aripas de fuego^ q:ue aprecian tanto como sus arcos. Vemos ál mismo
tíempo que los Guárannos , moradores del delta , en continua co-
municacion con los nabiíanLes del pais, no han hecho oíros adelan-
tos que usar dd hacha y macheta para poustruir sus embarcaciones
I
y cúferirse con aígutios vestidos mui lijerps para precaverse mejdr
de la plaga (fe zancudos*
los diferentes ramos de industria solo han comenzado á tomar
algnn incremento después de la revolución., Él sisteina español no
era propio para dar impulso á la industria , porque esto era con-
trario á sus intereses.
La imprenta, manantial de ilustración, se halla hoí en Yene»-
zuela en igual grado de adelanto que el que ,tienea los buenos es-
tablecimientos de este arte en las naciones mas civilizadas* La agri^
cultura empezó a fomeníarse en tiempo de la compañía guipuz-
coana , por haber sido cotonees la época en qUe hubo nías esporta-
cion de cacao; pero nías tarde se reemplazó ep parte esta planta
con el añil , el café y el algodón , y en el dia las praniaciones de es-
tos frutos , las de caña y de tabaco reciben mejoras que las llevan á
su perfección. £1 azúcar, los aguardientes y los tintes son artícu-
los de que provee la industria del pais para un gran consumo in-
terior y para los mercados estranjeros. Destruidas las crias desde la
guerra de la independencia , han prosperado ya de una manera
asombrosa por medio del mejor cuidado que, se les da, sacándose
también mas ventajas que antes del esquilmo de los ganados. Se
fabrican telas ordinarias de algodón y lana , algunas mui regular-
mente labradas. Se tejen mantas, chinchorros de cocuisa y algodón,
y hamacas mui bien adornadas de flecos. Los indios reducidos
de Rio-Negro hacen con tanta laboriosidad como primor chinchor-
ros de moriche que pintan de varios colores y adornan vistosamente
con plumas. De cocuisa ó pita se hacen alpargatas, cuerdas, cabes-
tros, aparejos de enjalma y sacos ordinarios ; y de la palma chiqui-
xhiqui se saca. una Gbrá de que se hacen cables para embarcaciones.
En el páis hbi fábricas dé sombreros de lana, seda, paja de Jipi-
japa y otras materias como palma y cogollo de caña. Dan manteni-
miento en abundancia para el consunto interior y de las Antillas
las pescas de Margarita, ¿umaná, lago Maracaibo, lagunas de üna^e
y Tacarigua, las de los ríos Orinoco, Apure, los de la provincia
de Barínas y otros. A esto- se agrega la caza c^ chigáireS) oaya carde
se usa en los dias da cuaresma. Para el alumbrado hai ya fábricas
de velas, y se estracn esceientes aceites del coco de la pal(^ yagua,
de la semilla del tártago , de huevos áa tortuga en el Orinoco ; el
mismo uso se hace de la gra^ de caimán. E¿a Rio-Negrofiíe cons-
truyen buenas embarcaciones^ y en Maracaibo naves para sülagD-y
— 556 — '^
para la mar, preferibles á caalesqaiera otras por la bondad de sos
maderas , y por su estnictnra que las hace fuertes y Teleras. Dan
grandes productos las minas de cobre de Aroa , las de urao en La-
gnnillas , las de sal de Gnmaná , Margarita , Barcelona , Los Roques,
Puerto-Cabello, Coro y Maracaíbo ; ana de mene en Maraeaibo y otra
de carbón de piedra que empieza á elaborarse en la costa de Coro. Se
fabrica jabón , gran yariedad de quesos muí gustosos , chocolate ,
dulces y conservas de toda clase. Hai muchas tenerlas de suela y
cordobán ; y las talabarterías dan obras útiles por su solidez y
comodidad. Existen buenas alfarerías ordinarias de mano y torno y
fábricas de ladrillo y tejas.
En fin hai talleres de sastrería y zapatería ; herreros , carpintea-
ros, albañiles , plateros, ebanistas , hojalateros ; y los trabajadores
en carei mejoran cada dia sus respectivas arles. Todas ellas, ora las
de primera necesidad , ora las de comodidad y lujo , adquieren
progresos con admirable rapidez.
Recorridas velozmente las fuentes de la industria venezolana, no
estará de mas dar un lijero detalle sobre algunas de que se tienen
datos que pueden conducir á un resoltado mui aproximado, por lo
que toca á sus productos , tal como el pescado.
Por el estado calculado sobre el modo de subsistir la población,
resalta que -1/10 de efla, sin contar los indios independientes, es
decir, 94557 individuos, viven de pescado, y dando á cada uno 40
onzas diarias, tendríamos 855,708 arrobas en un año, que á 2 pe.^os
una , término medio , daría una cantidad de . . . -1 .71 0.4^ 6 ps.
Según la Memoria del ministro de Hacienda , se han
esportado en pescado -1 1 .986
En tortugas -1.055
Total. . . . 4.725.457 ps.
Por el mismo estado resalta también que otro décimo de la po-
blación se cálcala qae come solamente cazería , y si se les da tam-
'bien á razón de -10 onzas por persona, tendremos 855,708 arro-
' bas en un año, que á 4 peso darían 855,708 ps.
El jabón que se fabrica en Venezuela produce una gran cantidad,
> y se podría calcular aproximadamente á real cada mes por persona,
. lo que daría casi millón y medio : si el medio millón fuese de jabón
' estranjero , resoltará que en el pais se fabrica un millón en este
artículo.
— 557 —
Los sombreros de paja/Tas hamacas, las (elas ordinarias de algo-
don, las mantas de lana ^ la loza ordinaria y las cnerdas son cosas
que se consumen mucho ; pero difícil seria dar un resultado de ca-
da una en particular ; y después de muchos cálculos hemos estable-
ddo el siguiente estado , el cual da á conocer el numero de los in-
dividuos dedicados á este ramo, y lo que aproximadamente pro-
ducen los brazos útiles de esta parte de la población en su relpect^
va provincia. Calculando 500 dias de trabajo á medio peso diario,
asciende á 4 4 ,654 .700 ps. que yendrian á ser á razón de 4 50 pesos
por persona útil , y por el total de la población dedicada á este ra-
mo, 49,48.
ESTADO que representa el número de individuos que se estiman
ocupados en cada provincia en las manufacturas , artes , empleos ,
ejército , marina y pesca en 1889 ; el número de brazos útiles , y su
producto en un año.
IfOMBRB
»■
LAS PKOVniCUS.
d« individaM
caknladlo*
«ncadcpMTÍatíi.
Caracas
Garabobc... ......
Barquislmeto
Coro •
Martcaibo
TrvyUlo
Herida
Barínaa.
Apure....
Barcelona.
Gumaná
Margarita.. .......
Guayaiía....
Total
60.7»
1B.IS8
S.0I6
IS.486
13.486
ai. 740
27.974
a. sai
7.S15
is.aos
6.406
6.174
NmiMfo '
d« brasM útiles
en
cada provincia.
i38.4eS
90.780
8.080
9.486
S.688
3.786
3.788
7.846
9.484
818
8.608
8.067
8.488
9.084
Producto de cada
individuo ÚCI»
á raxon de 4 realea
diario* porJoo dlae
77.678
8.109.800
1.949.000
1.494.400
404.760
867.780
867.780
1.066.900
4.368.600
180.980
390.780
760.080
808.100
pi. 11.684.780
r. «ioa«
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ESTADO que representa el número de ¡ndividuos de cada provineUi
^«eapaAMen )ft etfcr, y de tes braxos útíles para el trabajo, c(m et
yükutfptt teS' coneipoiidei'ki ' piopoi tAonalBMnte á los prodtDRtOB
bnitos de la cría en 1839.
mmsBmBmmmaBmma^steU
PROYINGIAS.
Gar&caB
Carabobo ....
Barquisimeto.
Coro
Xancaibo ...
TniJlUo
Herida.
Baifiu»
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Cumaná......
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103,234
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JtWm ^nH ^P^^R^P
▼alor total
4ela
8^411,780
fl,40A,H6
S,497,I97
8,M0,»5
643,161
S,7S6f345
I,O1S,08S
8tt,18»
48»M^Me
HÚMTO total
debí
ei^iBi
sa;9M
87/n6
.I3,«a
lo^sn
90,671
56,496
4y366
17,866
16,890
6,101
8,136
mm^mam
— 544 —
EESUMEN de los productos de la indastria venezolana eñ 1839.
GALIDAB
déla
niuncro
ó»
indhridoos
caknladiM
prariacU.
Agrieiritora. .
Crta.
Arioiif itíc* • • •
Totales.
Namcro
d«
brasM átil«s
en
cada ramo.
tiS,4S9
§44^976
S85«MS
808,960
BaaoBáHi
157,457
81,855
77,678
Valor
proporcional
4 cada
individuo
en general en
pesos.
Valor
proporcional
4 cada
indlvidno
ólil
en pesos.
Valor
déla
8i,5
44,85
48,48
198,790
54,tS
487 55
4SS 80
450 a
188 84
85,798,797'
40,985,851
11,651,700
48,330,548
por «1 último estado que antéele se ve qne la población del
pais (esclayendo los indios independientes) liabria producido
48.550,548 : tocarían pues á cada nno indistintamente á razón de
54,45.
Será curioso á la vez que útil saber aproximadamente lo que gas-
ta cada individuo en vestir, comer etc , á fin de hacer una compa-
ración con el producto general de la industria.
Después de muchos cálculos minuciosos , hechos sobre los diver-
sos gastos en vestuario de las distintas clases do la sociedad, y según
la edad de cada individuo, hemos venido á sacar uu resultado ge-
neral en esta forma.
40.000 íe
idividuos gastan 400ps. .
• «
4,000.000.
20.000
•i—
50. . ,
» 4,000.000
50.000
.—
25. • •
750.000
40.000
..
40 1/2. .
420.000
50.000
•«•
8 . .
400.000
400.000
-^
. 6. , .
600.000
450.000
—
4. . .
, •
. 0,600.000
200.000
—
5- . .
600.000
292.955
■
1. . .
ps*
292.955
m2M^
5,662.955
— u^ —
Por esta d^Qo&trackm se pii«d« ^ puos^ calcubr ím ^ IM» de
vestuario y ropa de ca$a iodistintaioeate p^ra oada individua^^^
la suma de '6; 54 al aSo.
iiMiáiyHcas del país pueden éat en terasordiiiariü^smtai^
chinelMrrqB y iiamacas los 662.95?; quedajciai^^pnes, 5 miUoms
q— <it mpawi 4et estrMijaw).
. táff lo |ue respecte á in e<múda, tsnemastMoi irfii'Mflli#s
sobre las prodticdóDes de! país y de los eomestibles que yieoen d^I
estranjero ^ Ibs cnáTes nos conducen á uq resultado que eM en at-
moAia perfects^ qab las oon^chas d^atandas^. .te »u«m«:
CONSUMO DE TEMBZtlELA.
^wy^^^W**
ArtMíM»^^
Plátano*
Maíz. •
Casaba
Kapa9» «
I*'
. pesos -1,599.8^1
. 3Ul73.Si¿i
A-' -•
•< *
GaBAdo yacano. •
Came^ . ( Cabras. , . • .
Gerdos« , . .
1rr:!rí «aaíerfe t53.T68
y av«f-. i
f ' A^ea^em^kae y teetes. !»,9W;60«
Cacao. .
Café. • .
• ^
464 J 52
JÜeorei I Aguardiente. ; . . . —7^4.048
e^. j Papelón y azécar. . . 598.072
9m^^
Qoesow
Leehe^
558.54 8
984.807
V^022
4í|M4.i»4
5,87=1.^0
4,IÍ7.452
4,912.120
4,,»li.525
Legumbres de to^a clase y mtfiestras. . 4,M9.00O
Sigueyjmma. . WUmA^^
DiWiQS
AoeMe de coca.
— de yagua^
Tabaco. . .
Algodoa y.aiUL
lúm. . , •
Loza ordinaria.
y<d«s 46l pai».
209.00Q
240.000
8.000
1^000.000
Í00>00«
flS.OOO
j».440,455
2,045.1^00
Total de objetos del pais. • .
En comestibles estranjeros Jabón y "fetos
Total en pesps.
• •
4,90avM#
2S^9Sd.43S
Esiajartida^pnes y estaría en razón de 52^42 por cada indi-
jldao.
Para el manteniiniento de caballos , molas, asnos, cerdos /ga-
Ulnas , paros , patos , etc. , se puede graduar en
manrymalojo 4,900.'0#9
Por las Übricas y -la oomposidon de haciendas
en^todaia república. 3,000 .000
'Para''berramieittas , máquinas , t»rros muebles
f otros objetos, médicos, mecKdnas, etc., inchiseB
4,900¿090 que Tienen del estranjero 2^IH)t:000
(Sastos püblicoB del gobierno, ejército, maffiMí ,
congreso , diptitaciones , gobernadores y adminis*
tracion en general 3,0>M.90<^
piii 1^1
•^— wwtpw
TiJtelep pesos. ., * 42,000.000
De esta partida tocarian á cada individuo de la república , es-
cluMos lesMdios'iindepeiidieotes, 45,
B i gttto general seria , pues, :«Mioi«ígaa,.
MMuirio de cada uno. ,« . .6,5éps.hlillRl. « %t%m>Ma
UmUA ^ 32y42 msiñ^kn
«MtM diversos -^ . 43,45 A%S%Mm%
-qpdtal por persona. . .82,49
46.6^6.066
— 544 —
.Si la renta kidiistríal es de. 48.550.548
Los gastos generales de 46.646.066
Hai un sobrante fayorable de pesos. • • . -1 .74 4.282
Repartido este sobrante entre toda la población, tocarían á cada
persona -1 ,92, lo que prueba que el país marcha de una manera
ventajosa , pues haí un sobrante.
Los cálculos precedentes nos conducen al conocimiento , si no
exacto, á lo menos el mas aproximado posible de la cantidad de
contrabando que se hace en la república.
Yernos que para el vestuario se necesita en mer-
cancías estranjeras 5,000.000
Para comestibles, jabón, velas, etc 4,500.000
Para diversos objetos 4 ,500.000
Total ps. 8,000.000
Si el pais necesita para su consumo general 8 millonies, y se in-
troducen durante el espacio de 4 años solo 5,750.00.0 de mereci-
das un año con otro, daro está que faltan 4,250.000. Sopongamos
que baya un bene6cio general de 80 por ciento sobre el valor que
anuncian las aduanas y el precio á que después se venden en se-
gunda ó tercera mano , nos darían 5,000.000 y siempre faltarían
750.000 pesos. Esta suma nos representa, pues, el valor que debe
pasar por las aduanas y que se ba introducido por contrabando.
Veamos ahora las mercancías y el dinero que ha entrado , la ga-
nancia que puede corresponder sobre el precio estimado en las
aduanas á los introductores y los derechos que deben dejar al era-
rio; el resto lo deben estraer en frutos ó dinero. Los siguientes
cálculos aclararán la materia.
« •
Entran por las aduams. . . . . . ps» 5,757.000
Ganancia de los introductores de 50 p. O/o sobre
el valor estimado en.h» aduanas. . . . • . 4,427.400
Contrabando , calculado en • • 750.000
Ganancia de 4 00 p. O/o 750^000
Muero entrado ....•• 900.000
Total 7,284.400
t
— 545 —
Es, pnes, evidente que esta eanOdad debe iaHr ea Anero ó firo-
to6 , menos lo qae se deja por derechos y comisiones.
En frutos del pais y prodacdones. . • ». • • 4,640.604
Se debe aumentar un valor de 4 O p. O/o sobre
la cantidad , que siempre se pone de m¿nos en las
facturas 464.060
Por Gomisioines de importación y esportacion. . 200.000
En dinero esportado por las aduanas. . • » 452*000
En derechos de importación y esportadon. • • 4 ,44 6.256
Total. . ,. . . 6,852.920
El contrabando en la eqportadon sma. , • . 454.-180
Suma igual á la anterior ps. 7,284.400
Este contrabando de 454.480 se baria en toda la república en
la esportacion de dinero; y en cuanto á producciones del pais s^
ria el cacao sobre las costas de Paria , el pescado sobre las de Itfar-
garita y Cumaná y pieles en las costas de Coro.
El total, pues, de contrabando en la importación
seria de 750.000
En la esportacion, de • 454 .4 80
Total. . . . ps. 4,284.480
MB
En cuya cantidad el erario público seria defraudado respecto de
los derechos de aduanas , en mas de 500.000 pesos.
Considerada la industria veneíolana y M gastos generales de los
ittdKvidws de la saciedad^ np seria dittcil , eon ks bases ya estable-
eidas , dar una idea , si no cabal , á lo menos la mas aproiimada
posibte ae^rca del valor de todos los establecimientos de la indus-
tria rural. Se halla esta dividlda^en el pais en dos grandes sistemas,
el del cultivo de los campos y el de fo cria de ganados.
Para apreciar el valor del .primer sísCema, era preciso conocer el
de las haciendas y plantaciones, y para conseguirlo - hemos tomado
por base gsneral 25 fanegadas para una hadenda de cacao , y en
proporcióiiea diierenles el número de fanegadas que hemos gra-
duólo necesarias para d cultivo de cada fruto , á fin de que se le
pueda dar d título de hadenda y ptantadm. A cada una de.estaa,
.j<l<Pntoi.iiai»if»4yltiiiwrf»^4^ lalor de sos
tierras, catti^^oMM^v, llfamUM f ^enwiionU». De esle jdoA»
lodo lo cultivado en Veoezaela queda dividido en partes propor-
€¡eBiíles*7€ada«utta de estas üpwisoiita qom «ifMlIlqiieda «el total
en que se estinwrfa fainüriá-dí^l oirtlk»#n la rspÉMica ; no Jia-
biéndose incluüo él^i^Sf #ef<» <gilftfaflv pvpqw Ho^ert-delioasa ,
nllampevo el de los animales, porque estos se hallan 4»mpfWMÍidos
en la paHe quetrala^ Itstrito^aa^gonei'ai. ^mítiaasf una -eva*
loaelon dé las erias^ era noeoiartDMs^aootwla^^liwi latas- y^ «oáihe-
mes^erVido de- un pík^^i^iAA^máuimy ussv^aeir^ aqattun
hatorsaaTf^oippuesto de mil cabauü de ganado vacuno y que tenga
dos leguas de tierra^ su casa, corrales, enseres , y bajo este supuesto
^ en diferente» proporckmes, %€mo»'dMéÍdo4es denasmiInMiles
dQ«i»íac.|Mrar podar estimar mas fácilmento*U.firjia en genei:aL
Estopes ha parecido el único modo acertado de calcular la pro-
jpedadinuaj de )taOfB«o^lii. ¿as Jímmus tMfK>faHi<».en.aiie lo bemos
IimdadO|.haUai:áftiicit^iHmtraii^ joi:9t,pDrrdiwauias ^.ora^H)!^
eiagenoida», aepin Jas .diversas xnaoficas de yer 4e oada uup. i pero
los mismos que las cecbMau bahi^án decaofesar, qiio en seoiqípiles
indagaciones beotta biediO:dosiúeo«s : aoo, j^r^entar el modelo ,
la(INMi(a9';f>or decirlo asi, que deben seguir en cuanto al lo^daj/gis
qiie>quiaron dedicarse á averiguaciones estiidisticáa;^ Áisa^ ofre-
car nn eitfmalo á fas autoridades y i los particulares para estudiar
el'pab y 4jár de tin modo mas esaeto las propiedades que consti-
tuyen la riqueza y fnensa de las naciones. Conocemos mui bien lo
#miaihü fttiiiilMrflIiiiiirtaalMtiétita^ i Attada Jatost^su-
dísticos no henmm^iú^htmwivmk^fm caéMirttI siíaianaaiiia^
iHhi» imsmmimmmm ItowaagiajádaasfaMaaieBtablniias Jfiíusstos
rilMilaMin(jh«MaiinJwf bo Msm iáhm queaDáÉfRfBMr^ifBoinf
ÉSm.}iiiímk)i>^Mgtímmx\mbiá% Mnapidia,.yjaa dnueaparviriqÉi
Jhk iawiiapMWi<aij<taaoMMí ii«mi>«áatiaéMMaisÉaHttlMnaslai
de la eoftmmín^^pottímé
i¥aüliiiiaMMidicÉie»<É»iipM^|<ai, nm^úitm oilaÉloatpi IMIan
<B» *aini>attiiMia«MinaiauM>ni aakipisdo^ tanflsrto* La !*«•
mmm^.iáúm dhjjjaasmtiwdiaiiitiaüiafcniéaiea Man dtfii»
5ieni»w « 9 Mft» luMwlriÍ0 je»i^Ml#ak i^^
f
t'
Y tanto mas líenos penlsii^ «B'vuestfe é«e»^pro|rféllo , ^tnto
que ét sabio D. Ramón de la. Sagra , m ra obra sótiiro H isla S$
Cuba (fmrfe 'agrteomo-estadíitica^)^^^ seg^uidf il imUnu», m^todl
hipolMeo «eon justo y general Aplauso*
"ijas cnadges que 'Siguen darán una yímeXBtí^ de la propiedaf
rural 4e Vn^zuela , dividida #n agrariaiyv}9oairia, cuyo valor to^
tal ascicmde i 90,087.848 pesos, iguafe9L44a64,354 .272 francos^
IQSTM^ dtmostrativD de los terrenos vsljdfos qaekal en cada previa-
el autor, euando levantó los mapas corojyráfíoos.de las provincias.
If^a. JBn Váracaibo eft&n comprendidas 700 leguai cuadradas del lago que na
ei Üem, lo mismo sucede con el lago de Talencia, lagunas, etc.
Terretioif vatíUos.
tin la zona pastoril » I.MO
Bn la ion« agrlenUora » lO.OfiO
ToTix. . .^., . 1. Ct 9^,S4a
>mfrmmmn^»m
MIawmapagtorü. » v.eee
Total Le. 14.480
CD&mO DKMOSnáTITO de b rique» agnrit de
lepreMOUr el número de htdendu j plüitadoBe* qw
y geneial de lu Utfiu, ptantM, GHU, «idau j euetei
II dqiie M uianm
«ber en h repabUcí,
i> M VUA midnret 6 ruiuc»».
Por lo que M ntunU de Itwr* por etdi taielendi, cilleí, pitlof , ele., r porlM terreM* «n eri
UToqnenunopradnoaDá nnmdeSDpemliDoegidt
N lasnutOrmuilti 16,900 biuepdu en cuIUto
UO lef;im cultlTidu anteriormenle, 7 en U ■ehulldid en ntírt^at Mm boaque*, TtHi— rln
i B pem la ruaiadt hacen
1,3M legDU de terrena» IneullM, qoeUMendiMiMr que euin UDuyor parle en le* mqfan
p*ri||ei de li iDiu igilciillDnl I pcHUItncgada
ifiU
'Pí
n
En
UCOTM
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planlu.
T
En
enierec;
TOTAL
de Ii rlqaeu
MMVUO
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ís.-m
49,»1»
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S8,«S0
131,000
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13,SU,4tO
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807,000
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•,MT.I«
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TOTIL
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«.MT.Oll
•un,M>
GSñOtl0^lyWt&StttS!tPfft*éB te ^ tf^iHsnt p0RtaaAi de ViÉnnsiMiá « vil 'éÜraB'ttT'
poder representar el número de hatos y rebaños que puede haber en la lepobliea
' pueuu j ^enena ue ueiias^ auuuaKB^ vasaS) cornuea j
«i^HÜ^Mai^MIII^
11 CRi.
Ganado Taca-
£: M
kgnalpor
6 t'V^tttt fiaiAlliilo
vebáfto. M 0«oik ó
Ju
¡Bañado de eer-
CabaHoifmii-
la«.........
Sorrof y ma-
lai ,....
n/i
SK .
jGainnakfpálos
parof, eic
iiealet.
'a legua»'
4/SI%ua.
46faaegaiir
440
pmdé legí
i/W de leg^
SOO
400
M
400
1 fanegada. 5 ps. la i
tjjlQll'
800
TjLLoii w li» usBm^mmtoMr
I
f
di'
üane*.
mr
80
80
lOQ
80
90
980
1^
SM
lai/si
818 «O
4|D
88 ' »
ilO
180
Total.
1,006
fltt
tüMO
i
Í0 4/i
Loa terrenos deMbanas aue%lán sea en la 4>na pastoril, ó bien en la lonaiagricultora^ y que
■8 WMa en este eáleaio, tenieoda sin em8argaü8iMos, sepueimV'tduar áaHn de toooe
por legua
Xatal.;..
f ««I^A^a^».*)
I90TX. De estaltsgiisrltti dgunas de la zona de la agricuUvra, poi ieite<re«88€8toe|i8tt'
crianza de mímales, y se pueden resumir de este modo,.;
Itt tazona agrlwilwni ; lerrMwr á pfep^tuipan-cl'c«tttw,1eg!wt.- . .• . . ^ I4888
£n las zonas pastoril 7 de agricultura, terrenos para la cria -. . . . .j» 0,819
«MMi
mmmmmmmam
ToUl.. 4.. ,...^..^11,480
asigna un detenninado número de tierra y animales á las diversas crias, A fin de
con arreglo á la estadística general de 1839 , y de este modo demostrar el valor
lÚMBBO
de
bato»
6 rebaftos
en la
rtpúblíea.
9,087
3,83t
7,4S0
2,087
5,190
40,000
S0,S65
ds leguai
coadndái
«mplmdaf
en la
criansa^
4,174
t,910 SB,1Cg ' 9,86S,7S0
861/i
909
986
6 I/i
6,649
9,970
9,619
fjttíítummkL'm'tMiiMñt^á^é'íMM^m^fmá'Mií^m
En
En
animales.
ifMrivriMHMWM mmmmmmmm íimmm«mm*
l,6S9,600
34,600
104,M)0
1<»,400
99,991
3,313,191
fl,IIS^
m,m
. 3,O8t,O0O
4,9S8,800
1ÍS,000
Eneans
, r.
conalet*
En
enseres.
» ■ •
•$/M¡ltÚlf
929,269
%i%m
19,105
':
908,700 90S,700
366,000
[50,000
19,573,850
9,169,969
»
133,000
468,185
TOTAL
mmtmmmmtmi
iiMHIlOí.
3,496,994
l,lSi,IOO
9,698,900
l,'i30,909
904^991
Total.
94,891,865
894,000
98,148„865
Nota. En las sabanas de las zonas pastoril j de agricultura pueden Yivir 10 millones de re-
es , caballos r muías, y si no bai pestes, en 1849 deberla haber la cantidad y aun mas, según
■8 reglad establecidas sobre la duplicación.
— 552 —
BESÚMUf GBNBIUL DB LA BIQCEZA AGRARU DB VENEZUELA
ES 4859.
£1 valor de los terraiof, ptantas, cams, etc. ps. 64.974 .955
El valor de los tenenos, animales, cana, etc. . 25.4 44. 865
Total. . . . 90.085.848
■ /
La agrkidtiira ha producido segun los estados
anterieces. 25.752.79f
Lo q«e da eon fsspeeto al capital ob 40 per o/o*
La criaha piodacido segun los estados anteriores iO.925.846
Lo que da con respecto al capital un 45 p. O/o*
Total ps. 56.678.643
Si ealcolamos qne la agricoltara tenga un gasto annal de
25 por O/Oj le quedará libre un 4 5 ; mientras que la cría tendrá
un 45 por O/o Y le quedará Ubre un 40 , que es mas del doble de
la agricultura; pero con todo, está espuesta á mayores riesgos
que esta.
GEOGRAFÍA BK IíAS FROVIUTCIAS.
PROVINCIA DE CARACAS.
SITUACIÓN ASTRONÓMICA , BStBNSilON Y POBIiACiON.
£&la pro viada se eocueolra en la latitud boreal d^sde 7*^ 58^
hasta ^O"" 40^, y tomando por primer meridiano a Carácfis, su ca-
pital, tiene 2<* 8' al E. y 0° 57^ al O. Su figura se puede considerar
como un octágono irregular trazado por líneas curvas , que encier-
ran dos zonas diferentes , una de serranía y otra de llanos : la pri-
mera con una costa peñascosa, escelentes puertos de mar, valles
ricos y fértiles, montañas habitadas, colinas ora cultivadas, ora de-
siertas, cerros áridos , incultos ó escarpados; climas cálidos, tem-
plados y frios ; terreno todo que se puede llamar centro de la agri-
cultura y comercio de Venezuela : la segunda presenta estensas lla-
nuras; mesas altas, espaciosas ó pequeñas ; sabanas elevadas, bajas
otras, cuáles desprovistas, cuáles abundantes de agua en verano ;
pequeños bosques, grandes palmares y una vasta selva, toda de un
clima cálido y sano. £1 má&imun de largo de este territorio es de
cerca de 60 leguas de N. á S. , y de ancho de E. á 0. 62. Tiene 2,829
leguas eaadradas de las cuales se gradúan 503 baldías; y siendo su
población de 242,886 habitantes, estái^ estos en razón de 85,4
por cada legua cuadrada.
IJIUTES T CONFINES.
Confína esta provincia con otras cinco, que son, Barcelona por
el £., Carabobo y Barínas por el O., Apure y Guayana por el S., y
por el N. con el mar de las Antillas. En la punta de Aroa , entre
Cuyagua y Choroní , empieza el límite con la provincia de Carabobo
en la falda que del cerro de la Meseta viene á la mar, y sigue por
él hasta la cumbre de la serranía llamada de Ocumare, que es la de
la costa. Tuerce hacia el cerro de Ocumare y baja por otra falda
F. GKOO. is
- 554 —
que se pierde ea el lago de Valencia, en el punto de la Cabrera;
aquí atraviesa el lago rectamente aVS. á encontrar el cerro deYu-
ma^ por donde pasa el camino de Magdaleno i Gaigüe, ioclina en se-
guida al S. O. á buscar las cabezeras del Rio Caicara, y por entre
Cerro-Azul y el valle de Manuare va al origen del rio Círgua, el
cual sirve de límite hasta su desagüe en la Portuguesa. En este
punto concluye el lindero con Carabobo y entra el que separa á
Caracas de Barínas , e» decir, el rio Portuguesa hasta su confluen-
cia con el Apure. Aquí parte límites con la provincia de este nom-
bre, 6ig«l9udo el curso del rio J^urekista^e' Ungí a tributar sus
aguas al Orinoco. Empieza entonces el lindero con Guayana demar-
cado por el 'Orinoco inistno hártala boca ^det SiiiAtB/^gufiefido las
aguas de este'ilo hasta* su orfgéñ ; ydéspoed'loínaiklo el^ctimodel
ITnare aguas abajo, se recorre la linea divisoiia eonía provincia, de
Barcelona.
COSITA DEL HAK.
' Desde d morro de üñ^re ba^a el cabe Qtiit^ , la t&tí» totíre al
O. IncTinándose al N; por espacto do '2§'l«||^s : tí)48f estiHflra baja
* mui aplácmda y limpia, 'de ñiddoH]tie*patU'IIU«eiir nobai nece-
t-éldad de cítra gttia: qtie el e^cMd^Ho. líM^ftttflM^deBiglief^te y el
*'rfel Carenero/ dfetahte* eirtré 8Í^2 léguay/so» los^üBtee^que? bai'en
'* é^e tret^hó dé cesta ; pero á 1a4at*gQi ñ&íaé^ effa^ se^pocde Ibndíear
' por el iMidérO'de titdtasí que tíünis^toft^^» al^lideMié laembar-
- catión. ' •
^ E:í cabo Codera esr u» 1ÍW»%^totíf Téd<«ldov «^'N*.' «teí^tel, y a
'dlstdücia de una ítílfí^ s^e «lüa'letí^á de tiMii baja t ten limpia
que á medio cable de ella hai 40 braza9^<M 'leiM^^diaiKnia. Bsta
lengua forma por su parte occidental un hermoso fondeadero lla-
mado Puerto-Corsarios; qtte á dosnaibtode tierra tiene 8 brazas :
su fondo es de arena. Desde aquí hasta el fondeadero de Chuspa,
'Hdigtante Megtias ,- Irf cdstaf tiene alWcáfeíf y^cot-re* al O- N. O. Este
' ' fbndeadérai^^ btré no ygMnde ; f {Mn^areiitrftf m éVmlúfXi - necesita
' 'éresdatiíéiHó.'Eki 1á ^fifa dH'F«<ile'e^0eliiyé%^seinida de Glius-
"' t)a, t d«ideWllirt8tá^'ft»<l«»dW)* dé^í^
'costa; en^Mdá éllA ^éfnHedé fi»ÉdédHimeMa'AU]Hif á'%tro de mos-
' •' quelé; En-'ésté-espíBfd^ é^ii'te ^eíWeirirdasf de CáWaflgfelm- , T«ttsaiia ,
''^ éariietó y Antre. ■ ; •• ,
No^tse pñ^é déttr-q««4a*€kiáira-seft Hu^p«efr4(Hii^M»vida^«kié
qne^¿^al't>.yPi]iita^€ar»baUeda alE. ; por co&slgineiité} no ésii
al abrigo del -I'' y 4^ euitdraBte,* y la bpisa^de^E.^ que-ec^staaite'*
mentereina , "trae HMicho maride lo¥a*. Para 6t<k€ir que los bu^jes
se atraviesen: áieHaeiiatido el YieBto-eak&ay se amanratt eoi^codera
á popa^ teilAda atO. !-9d^diid<>e9'debiieii téoedeno y á un oable-de
"fíerraliai 5 brazas. En este fondeadero rara- vez se-esperimentíL
-otfo vi^to€|ue'ld4»¥isa;peroH»ii6le haber coptos iQlerviaioside m«h>
lOtt^l O.j-en-euyo-easose pasa iaedderli áf««»^ Apén«Blifti>temtlé9;
pefo^íHNirboiiáda9'del 6¿ El en la e6Ueí«ii44iviid8avl^Jtodo «atoee
^e•Hge, queatmque^la'Gaaira B0 sea por la naturaleza deM^alun
puerto ó fondeadero ; lo es por sttdima,» ftm% todavía po|q«o §a
aquel pmrto do eorren riesgo las embarf aciones ni aun con vientos
fuertes.
• Desde el fohdeadero de la* Ouaira^ sigue la eosla al. O., bastante
limpia para poder atracar á una milla hasta elpuerto de Choroiri,
atante? 4 4 leguas : en este espacio están la ensenada ^e Catfa y los
*Kmeftéeitosi de Oriearo y de la «Gruz. A poca dlstanteia^ de Chofoní
está la punta^de Aróaén las faldas del -cerro de ia peseta, donde
tefmtnsl la costa déla- provináa de Caracas.
ISLAS.
• •' ' :
*Tevtaga'eé^f*>B^8' grande ^ e^tá ¡en^lfiíierlilHniodQ la laguna^ de
-fjnare, á:461eg0a^5fttNkideta>co6ta, 481egoa6^0;deM»pgawta^
44 al'IV.' N. ÓJéelmoftor de Bar^lona y 56 de la Guaira .^1%*» mas
ide 44egiias de E. á O. y 2átf N. á S.J«u%strQmid«d.ori€át»l asta
-^Hena de-eset^Ues ásperos y eíté^ile^^eíale» «nafar A fvera* A la parte
'^élS. E. '6é hiatiai una rada de^fiiguna e^^oaodidad para lasembar-
^'^mikmtesy Y ^^ «itti írmúmísAa 4^ mercaderes' en los- mesesde
^ mayo y agostO/'C» queriban á .-eoger wh Esta 46la está desierta é in-
»«€iilta, pero era «wi-^abueíante» en sal , «la cwal ^e -saeabai de «na
laguna que dista 200 pasos de Ja^ttiar.
En^lafiMe éel*«|edMUa:tiei^«ii<pe«ftopeqiieio y alguna agua
>dále&y aunque poca :porae^i>la4$la está pobláNte de árboles ; pero
'bada et oriente se balla-des^uda y no* produce knas que yerbas.
-^Hai- cabras y nMoliai^twtugas': estaa^últimas^ -salen á la playa íde-
'.fdsitar 8U6vi«evos¿^:Fct4ft^3i4^del Nv^stá^el ca^yo Águila quemsta
t
nedia milla de la oosiba , y el cayo fierradura que brma qoo ^esta
«o canal de una roüla, cayo pa^ no debe emprenderse con graa«-
des embarcaciones. Al poniente bai otros cayos llamados l^ortugnir
líos, circundados de im plaoer de poco fondo.
. Orchila se encuentra en el meridiano d^ cabo Codera, distante
de él 2d leguas , y otras tantas al N. N. O. de la Tortuga y á 2(8 al
N. N. E do la Guaira. Presenta la configuración, de una media luna
y está inmediata á otras islas é i^tes separados entre ^í por estro-
chos canales cuyo paso es mui p<^igro$o. £1 mar es mui profundo
en la costa S. O., la cual parece tajada á manera de una pared.
Cerca del estremo occidental liai una playa de ar^ia limpia^ frente
á la cual se puede fondear al abrigo de las brisas. Esta isla es baja,
á escepcion de los cabos al E. y O. que son mui allos, y en los cua*
les abundan el arbolado, los pastos, y sobre todo, la yerba orchila
útilísima para la fabricación de cristales. Lo demás de la isla es ári-
do y ofrece poca vegetación; está escasa de agua, y los únicos ani-
males que se hallan son cabras monteses y lagartos. .
Roque, isla pequeña y desierta, 40 leguas al N. N. O. de la Or^
chila, y 28 leguas al N. IN. £. de la Guaira. Es notable por una alta
jnotttaña de piedra blanca situada á «i extremo del O. £1 centro de
esta isla es bajo y cubierto de yerba ; el estremo del E. ^stá muí
arbolado, pero se inunda en tiempo de marejada : en la estremi*
dad del S. se halla una fuente de agua mui fresca, de sabor alumi-
nóse. Los Roques , pequeño grupo de islas desiertas que están al O.
y S. del Roque, todas pequeñas , bajas y mui arboUdas en sus cos-
tas; están cubiertas de mangles de tres ^pecies, rojo, negro y blai-
co. Se navega fácilmente y coa seguridad por en medio de estas k-
las, del O. al S., puea» reinan constantemente los vientos del £. y
del N* Este grupo se levanta sobre un arrecife peligroso para la na-
T^acion : tiene 8 leguas de naciente á poniente y 4 del mediodía al
setentrion. Las dos islas mas grandes están al S. y se les conoce con
los nombres de Cayo-Grande y Cayo de Sal. Estos cayos están á
24 leguas de la Guaira. Tal nombre caifa se da en las Antillas á la
islas bajas, rocas ó bancos de arena.
Las Aves son dos grupos de cayos é islilas que se levantan sobre
dos distintos arrecifes que se denominan Ave de Sotavento y Ave
de Borlo vento. Distan entre sí 4 leguas, bailándose la segunda á
8 leguas al O. del Roque y 28 al N. N. O. de la Guaira^ Están ha-
bitadas por una infinidad de aves que pcNoten sus huevos en la arena^
porque las islas están casi desprovistas de árboles, no habiendo mas
que algunos naranjos y limones. Viten en elfós varios pescadores
holandeses. La principal tiene I 4/4 leguas de largo; es mui es*
trecha y está rodeada de rocas, en las cuales nau/ragó laescaadra
francesa dfel alnnrante d'Etrees en 1678.
Farallón Centinela. Es un islote que se encuentra al N. del cabo
Codera y cáS á distancia de 4 leguas de este. Parece un navio á
la vela , es mui limpio , y por la parte del N. como á dos tiros dé
fu^il están dds piedras ahogadas que forman entre ellas y el islot<j
iin canal tle mocho' fbndo.
MONTARÍAS.
' • •# J
La cerdillcra del litoral es la mas elevada , y sus mayores picos
«on NaigUafá y la Silla de Caracas ; el primero á 5.5^0 y el último
i. 5 J 46 váidas sobre el niveF del mar, del cual distan en línea reofá
4 4/2 leguas ó -lO.OCyO vai^s. Esla cadena forma un si^éma aparté
que se confunde con el de \6^ Andes cerca de Barquisimeto. ^
En el cerro de la Meseta , á inmediaciones de Choroni , empieza
la serranía que corresponde á esta provincia , y presenta picos que
se alzan progresivamente de 4 .555 á 2.525 varas , que es la altura
<del cerro Pahnar. Hasta aquí la cordillera es una sola masa con
dos declives bien pronunciados ; uno al N. hacia el mar de las An^
tillas , <>^tro al S. hacia ellago de Valencia. El ancho de este trozo
de cadena es casi de 6 leguas , y su largo de 30. Del Palmar Ba->
len dos rdmos paralelos , Mamados Cerro dé Carayaca y de Agua-
negra que se pierden cerca de la mar , en la abra de Catia , donde
parece cortada la cordillera. Sus alturas rm pasan arriba de ^ .60#
Taras^. Del mismo modo se desprenden otros dos ramales con los
nombres de Higaerole y de la Cocuisa , que dirigiéndose nno al E.
y otro declinando un poco al S., se ramiGcan de diversos modos y
dan origen á los cerros de los Téques de San Pedro , del Carrizal,
del Hatillo , de Paraéoto y Chafayabe , aparando las agus» del Tuí
de las del Guaire. Teti^inan en S^nta Lucía y dan origen á muchos
valles , entre ellos Caracas ( el mas notable) y el que antiguamente
sé llamó de la Pascua , que hoi nombran sencillamente el Valle,
Las cimas que mas se elevan están entre Í.600 y 1.982 vffraS. Los
rios Guafre y Tui limitan esta masa de la serranía, que desde d
(^Imar se dirige al S.'E. hacia Sania Teresa : su largo es de 4 2^ le-
1
IBM Y 8tt aBebiira iMdia d#^6.«De6df9 «I atea 44i€alt»aig8ela.€er*
faaía eostora «leváttdoae á sn^ iaayor alium 6ft ta^ Silla y el Pieacho
deNatgvatá , da caya* falda meridifaal sa)e.uft^di^e qaa^ciitnr»^!
YaHe de Caráeafi por la partedei aacteala y rseuna á44«6rraaia dal
Hatillo, en el punto en qoe-el rio Gtta»re>sa>ve-Í0ftad#áakrii!8t
BB'-pasasiibterráfieo deMaa&da 2M varas para'dkigifiealT^ibJja
visla da la €ae?a en qm se*<pr6€i{Hta<el rio y l»4^igpiraciott^a4t
sarranía, bace pausar qa«i en tiemjptta- reiuotoa-el- valla dé Gasáeaa
p>dria haber sido Halago alfiao q«a sa^sacó laag^ ^a-laa^gnaa
se abrieron un paso en la parte mas débil 4e.la>aw^ui^»^La«|ttiNQ%
pues y de los cerros del Hatillo con el dique llamado Cerro del
Auyamal , da origen á la serraaí;) de los Maricbes que queda liml*
tada por el Guaire y el rio Cancagua por un trecho de -10 leguas
bafita Aragütta y una dfiolH»ra da 2-4 /2. lAi^ervimiaiwiiAf la«.ca9ta ,
jdespues de Naígnalá, . ettsancha sua baaes' nMridi#Bates y daspíAa
bersos ramaksqueíorniaii loa valles d^^ftafaffa^^Giiatiffe ^ Oa^
piyay Curiepe preseoiattdo'^obFe 42 lapias^arila^g^ ima^aiietiam
media do'^r Enel €atK)Coderai<^noliiye>de «€^eiHa la^cendillai^
4a ia costa, y lasque acierta di8laniáase'>iBí^se99Ír-la'<lire«eíoD
de lacaya*, es lacordiUera-del ifttériai^, foiHíaada^*{]^r' un^raaial
del*m¡smo sistema ^-que^ se despreade é^l cerra^-de-Tuattragvaaü
la^provincia de Carabobo , y* corriendo paNikla a^^^anraBÍa^aJa
oa8ta> separa las Uaauraa de lesrieaa vattes da^ Toí^y^'Affagliak
finios carros de Yuma y da Mauuare' comiaiM la raya^iyisona
caá la^p^ovineia d<^Cambabo,:y desda- aqfí«i||p^aareaiaa'á(€agBtr
la«opdUiera del iateríor. J)espiiasrde'6»rmaF>'las:Y^las^'da> Tfí^aíMif
«tima, se abroen dosr^^najea: unoiqua^sa faNií^eoiifidevaUar
BMUte eD la yiUade *C^ , .dcjaiAdo WM< anabá «abra-^^ sa vuelva
luego pri^resivao^e^te á ievawtar > dtaigién^a'fiJeaíipre g^<|aoian4a
basia poderse en el -morro del ^kiarO) «^bra eMimile'^.4a^la^lprai^
yincía de Caracas coi^ la de Bareelana. Sus p«ftliaa'|]psei&HQiafadoa
es4a&en)lapierra>G«ard{fna'<la -i.^fS yaiiiS):y:<an^lasNc«^4^4a
jfatouitay Al4agGa€Íade>4.893 y 4«85ai S^aifaMaa^setaiMtoicnsrt^
desagvwtíb al Tui¿4a tnar ,'miéatf«S'kaorieMa|es4a«ltooeft,i^l:*Guáh
rieey .al Uñare ^ ^aado origapá- varios^ va^tl^Sffériila^ ^iharmasna*^
mim trechode 47 leguas^ teniendo la.^sarraoía'f^iieralo^eoia dda
li^f bo« £1 valle del Tui está alevado-25(^ vavfis frauia i^Qowmm \
]al jiaso q^ el 4al Guirica está 4 085* freair á $. ¡SeiNOtúwa»'^ ^
. Sl'OtroraHkal'^ua seabrrcavea- dafllicasipraiaayfe^^iaeaoii^^d
— 559 —
S. S, .£U 9 .se. eteya, d^xepeute ea Cecro-Azu), y en el de la Platilla
2.077 y 2.2í>6 vara^, y reb^áado3e depues y á vezes interrum-
piéndose por un e^paclQ de 8 legqa& con urv.ancho de 4 , concluye
cerca de Camatagua,, uníj^ndoee, en. el cqrro de la Virgen ¿ que es .
el estremo oriental de la Galera : esta corre paralela al mismo ra-
ma] que Yiene do la provincia de Garabobo j como una estrecha
muralla pefiascosa que sirve de último límite á las estensas 11a-
nui;as*.
De la cordillera del litoral caen directamente á la mar 29 ríos ,
cada uno d^ los cu(^les forma un valle que puede regar con sus
agi^Sk Por la parte meridional caen Á O ríos al lago de Valencia y
22.Í1I rio Tui, formando .cada cyal un val^c delicioso. El Tui es el
principal rio que corre en medio de las dos cordilleras de la costa
y del interior. De esta última recibe /1 7 y 2 van al lago de Valencia.
El Tui nace en los. cerros de Tamaya y Maya : tiene un curso de
55 leguas, recibe 59 rios y multitud de riachuelos, y empieza á
ser navegable enir.e,Aragú¡ta y Santa Lucía pof espacio de 24 leguas
has' a la mar. Esí^e rio está llamado á ser el canal que llevará los
frutos de todas las selvas, hoj incultas, que se hallan en la serranía
y al pié de ella,, por donde corre el rio.
' De la cordillera del interior van también directamente á lámar
-15 rios, y 5 caen al Uñare que los lleva también á la mar. Con-
duce el Guárico al Apure 25 , al p.aso que 7 van á la Portuguesa.
£n los llanos se originan 1 5 que descargan al Uñare , al Suata y
alQfinQco, el principal de los cuales es el Manapire que nace en
la.montana, de, Tamanaco. El rio jnas iniportante que se dirige al
S.es el. Guárico^ 9i1e.se origina .eula montana de Manuare y desa-
gua, en el OrinpCQ cerca de la boca del Apure ; es un rio de se-
gunda pr^en en. los de la república j, tiene ^24 leguas de curso y
60 d^ navegación, pudiéndose ir embarcado por él hasta mas ar-
riba di^ CalaU^zo^ : en. invierno pueden, subir las embarcaciones
mucho mas arriba de Camatagi;a. El Orituco es otro rio importante :
li^ne rango de,2'j orden en la república, su^curso de 71 leguas,
SOde.las cuales son nayegables : nace eula serranía de Altagracia^
qfie hac^,p^f le de la del inlerjor. El Manapire es otro de 2^ orden ;
na^e en I^ cordillera del interior ep la moniafia de Tamanaco, tiene
unpursade 63 leguas j S0Í9 ^ 2 navegables^ De los que se dirigjen
— ^60 —
al N., el mas imporlanfe es el ünare, del qoe se hablará en la
provincia de Barcelona , por partir límites con ella. Tiene pues
esta provincia 5 ríos de 2. <» orden, uno de 5.® y 141 dé 4.* orden,
sin considerar mas de 500 quebradas 6 riachuelos.
L4GOS y LAGUNAS.
Lago de Valencia. Parte de este hermoso lago , llamado antigua-
mente de Tacarigua , pertenece á esta provincia, desde la punta de
la península de la Cabrera hasta el cerro de Yuma. Esfa pequeña
porción solo contiene 5 leguas cuadradas , quedando en el terrl-
'torio de Garabobo las ^7 restantes. Tiene este lago 25 leguas de
circunferencia : su figura es oblonga j con casi 9 leguas de E. á O.
y 4 de N. á S. , frente á la hacienda de Yuma , que es la parte
mas ancha. En las 5 leguas cuadradas que pertenecen á esta pro-
Tiqcia está la isla Cagúire, que tiene una milla, el islote del Zorro
de méuos de media , dos peíiascos de algunas cuadras , llamados
Hormiga y Gotúa , y la peña la Hormiguita , entre aquellos dos
peñascos. La profundidad media del lago es de 15 brazas y en los
lugares mas profundos tiene 57. Su altura sobre el nivel del mar
«sde 516 1/4 varas. De la provincia de Garácas caen al lago ^2
rios con 5 bocas. Las aguas del lago son salobres. Solo hai en él
tres especies de pezes : guabina , vagre y sardina ; no hai caimanes,
sino algunas babas. Las aves acuáticas como flamencos , patos ,
cotuas , güiriríes , gallinetas y gallitos ; ofrecen una escelente ca- '
zería.
La laguna d-; Tacarigua se encuentra entre la boca vieja del Tui
y la del rio Machorucuto ,iseparada de la mar por una lengua de
tierra , que da paso á las aguas saladas, no estando su boca tapada
por las arenas que acumulan el flujo y reflojo del mar. Tiene 15
leguas de circunferencia y ocupa una superficie de 8 1. c. Está di-
vidida casi en su medianía por una lengua de tierra 'y un islote á
flor de agua : la parte occidental toma el nombre de Ensebada del
Guapo y la oriental se subdivide en dos partes por una isla ane-
gí^da : llámase la una Ensenada Grande y la o!ra Ensenada del '
Marapatal. Hai oíros islotes, pero todos anegados , y solo sus man-
glares asoman en la superficie de las aguas que están al nivel del
mar, y cuyo fondo en su mayor parte e^ bajo, no escediendo de 4 bra-
zas los sitios mas profundos. Las orilfas de esta laguna están inunda-
dafl. £a eilds está el pajerto de Palmita , frecaentado por los pesca-
dores del Guapo, el de Santa Gmiz por los de Cúpiraj y en su boca se
halla nna poblaeion perteneciente á Rio-Chico, que toda se dedica
á la pesca en la misma laguna, abundante en lebranche y mojarra,
róbalo , liza , pargo , vagre, chema y sábalo. Solamente 6 grandes
quebradas caen á este estanque, que tiene de largo 4 4/5 leguas
de E. á O. y 2 4/5 de N. á S. Guando se suele abrir la boca de la
laguna , sale de ella gran número de pezes que toman el rumbo
hacía Barcelona , y al p^sar entce Gomaná y Margarita caen por lo
jcomun en las redes de los pescadores de aquellos parajes.
Laguna de Uñare. Está situada entre las bocas de los ríos Uehire
y Uñare, separada de la mar por una lenguado arena que produce
escelente sal en sus orillas, siendo su mayor profundidad de 5 va-
ras. Es mui estrecha y larga, y tiene de £. á O. cerca de 4 leguas,
y 2/5 de N. á S. Su circunferencia es de 8 y tiene 5 1. c. de super-
ñcie. Caen á ella los ríos Chavez, Cántaro, Purguei , Tocuyo y la
quebrada de Caracarache. Estas aguas comunican por el caño Pes-
quería al Uñare, y este á la mar, cuyas aguas saladas á marea lle-
nante penetran por el Uñare á la laguna. Abunda esta tanto en pe-
zes, que los habitantes del vecindario del Hatillo están enteramente
dedicados á su pesca, ayqdados de los vecinos de Clarines , en la
provincia de Biurcelona. Las orillas de la laguna son áridas y salitro-
sas : en el verano se seca mucha parte de ella , alejándose cada vez
mas del pueblo de Uehire. De esta laguna salen anualmente gran-
des emigraciones de pezes j que remoutando la costa , van á los ba^
jos entre Coche y Cubagua y á la costa de Cumaná, en donde los
cogen los pescadores de aquellas provincias.
Laguna Encantada. En ella tiene su origeg el Rio-Chipo : es un
grande estanque producido por las aguas de varías quebradas que.s.e .
desprenden de los cerros de Urape, situados en la coirdillera del in-
terior. El rio sería navegable con pequeñas embarcaciones hasta la
laguna, pero su cauce no está limpio y en el dia solo ofrece 5 le-
guas de tránsito á los cultivadores de sus fértiles, vegas, .
La lagun^ Taign^iguai se forma en los terrenos antiguamente
ocupados por las aguas del lago, de Valencia. Parece. que el rio de.
las Min^s que viene de la serranía al poniente de la viUa de.Cura /.
después de perderse por mas de una legua^ aparece de repente por,
medio de un caño, y forma esta laguna que desagua en el lago de.
Valencia por el caño Diaparo.
t
Lagaña Palmananitía ; laí mn% grande'^oe eiMo €» lift MnopaB de
Caracas. CilínTÍerao«omiiiiieaeettel0^iiioo»pov'Wi p6qiieilO'eiHlo>
y cuando está ilént ocupa nn espacio démaa d^'U)giia y «MÓia-de'.
largo Telina de anchb/
Las lagunas Gtíamo , Ganadoty MtfrareiK^ conse^ai^ siéaipre sua-
agoas^ son. grandes y están «n(re PalHiamMia y'«lri#lfaMipÍN>al;
fiíide la escarpa de 1á mesa i^añrtesa.
U lágnna Oarobaestá «nlre^Manapire y Idi eerrilM déiCa^nHa.:
mantiekie sierapre'égvm y ^ ba9(«nl«'gniad#i\
Cerca de la boca dé Ottaritlco faat ^natro Itguiia^ daMoka ids^.
qtnérda-de este rio, lascnales conservan 1)a4aa(eag«a, saalMrma-
sas y están llenas 4é a¥«s acuáticas.
Enia isla de A))iiriio liai cuatro li^ionas' grandes, honéat^ríéas:
en pezes y dyesycon grande 'abnndanciaf dc^cUgMres.-
CUMA.
El clílna' deiá pro^írieiÉ dévCaritas^d^bé coosidairaivae-sanA^ en •
generaK Sus düMadas 'llannras -no snfi^n ^^lires , ni >á la • entrada *
ni á lá salida dé4as«g«as^' y sas^iabilsnies goea»<dei sakid; La gran'
selva da Tamnnacoyiaf' montaña de los Ofitresson sanas/ lo mísiDO >
qnela de;6MPÍIie. Los grandes bosques de esla^ provincia- no son
enfermizos, esceptuando los de algjunas partes bajas y anegadizas,
como los dé Csrpaya , Odriépe, Rio-Chico-, Gtiapo-, TfecariíHMi y C6^
pira, en cuyo^ lagares screlen dsfr calenturas tercianas ^ emanadas >
de un clima cálido y -faúáiedo y dé las exhalaciones de los pantanos»
Cuando se desmonten estas selvas «f se dé curso á las- aguas, caan
biará su clima , que atfn en el estado actual no' es peligroso, pnes
en los logai'es sobre-indicados iiéi grandes poblaéiones y cereadé-
ellOs ricas y beltes haciendas.
Ett \á costa^l mar el paisicsisano ; tan- solo en nnoqneotro'
pnnto suelen á vezesdar algana sfit'bres, debidas á las anegaoione»^
y estas son muí raras.
En la serranía todo es sano y de- un temperamento d«eoiis(ante
primavera. iJOs valles son salubres, y cada una de- ellos tiene-
dimas variados, seguu sus dfferentes^levactoncs sobre el 'nivel dd
mar, haliáádose en todos un caldr moderadt» 6 una flreicura delt*
tíósa.
— s» —
ESüAGlCKf OlIrlJVflfifilU».
En esta provincia empiezan las lluvias eu mayo, y en la costa» don
raa hasta oclobre; después siguen unas, lloviznas llamada&nor/^i,^
qj^e comienzan en .diciembre .y. acaban en enero. £nlos.yalJe&.q]]Lá
están entre la cordi-Ueradc la costa y Ja del ¡nleck)ir,.aQ«bft ^l uk'n
viemo-en octubre, y uBO-ifue otro af;pacero delo6jaox:te&,siu«iaUieir
gar al Tiii ó al lago de Valencia.
En octubre cesan las lluvias en los llanos ^ los cuales nunca que-
dan inundados en la parte que se llama Alto-llano ; si se esceptúan
varias p^tneñés sabanas. Tampoco suceda esté en lá part)e norte de
las llanuras de Calabozo , donde apenas se cubren á medio pié de
agua algunas sabanas bajas. Hacia el sur de Calabozo, el terreno es
yt-mul. bajaTlosiiod tioárieoy . Tbfi8ck>6> Ctcglia^y-Porlu/^venf que
jtotagot» 60 eh ApiHref so saltii déunmáfieppoD la^represftquef^olDtf
esttí/á ^ansfttiíc Iaid:crecteat6s:d6l.'graiide«0iÍB6fx^i'£s(ós7Í08riiñjUBi»
dlMí]í<ctttáft4fts lani)fy<nnparte de* Ji^^abanM^áamediáias ¿ ellóis/ for^
SMndOíTgratt'niMBeffOfdé^esIem q«nR6afa)¿s6í6e<ntn enJoffiáirtedél
¥tt»iio^ y^imocliM^ idlfli6HC(Msc9J»i£Ícemgi^ Codoieimio* El bmé
aMaMeée estose^fOs^eflteirde^CaiBigoiw, jCOfenag«is41egQi]^de»«>
drJa I^rtagttesií a4 Guwiuoí) yttaaiíhbDáaft > qveseaMctsItao icamwfii
c* iMofats pactes^^-parar. ptderlésiatniTesafi. Lo * mismo ? sucede em
lmrÉ^níi3iqo»¡eai(áacmrcdíée*í»\ b<Mfl»^eJo».f i»et!Ohi¿gaa>y 'Tiseim
" ía esl«0HmnikliÍBin6FD6^iiace;peff0ios.1o8)eamiiia6fqiuea^^
fliKilaaao^ coBierdted6f.báiQ{'Tirí/.lafi^doiCapa|[8^ Ouriépf,des.«Pita*ij
ses^ LtfftftijOy dUBOiapr) (]^pD)^Cbp)la::^Micaff^l.^£a:^lasiCllliav
sinba«iim lado4aÉrtpiolnB(!k),'q«e<á;yesÉB JasiBaiaa'iienettdifii^^
tad en salir : los demás terrenos sondespejados, ysiiüráiiáto nfl>«s>
taDr!mfféé.' En 'los. Ihüweo'SiifredaiiMotmHÜdadi; de* tener iqtt»f)etar
tevaüés^y rmi ntdeí^ f Jsdgoitas'veMff^ .trecim 110 fieqtieaMr'dé
gmmfM^\9éút^ i iQíémtuB ;«8 ttfaOTit«iÉtoe«aeepteKalgiraa»^p«c[ii«?
nasípniiee/
■
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97 parroquias y 4-17 grandes vecindarios, en que se cnltiva café ,
cacao , añil , algodón , tabaco , caña de azúcar, maiz , arroz , algún
trigo, yucas, plátanos, cambures, alverjas, papas, apios, ucumos^
frijoles, caráotas, quincbonchos, auyamas, lairenes, capachos, ma-
pueyes^ ñames, toda clase de hortaliza , y las frutas de tierras cáli-
das y templadas que sirven para regalo del hombre. Consta la po-
blación de 242,888 habitantes, que se pueden dividir de este modo :
$0/4 00 que se dedican á la agricultura, 25/4 00 á las crías y 25/^ 00
al comercio, artes etc.
CIUDADES y VILLAS CABEZERAS DE CANTÓN.
CANTÓN DE CARACAS.
Cadicas, en otro tiempo capital de la capitanía general de esle
nombre, io es ahora de la república de Venezuela y de la provincia
de CaráeJB». Se encuentra en la latitud 40^ 50^ W^y y en la fongitod
%%^ 2h% al O. del meridiano de París , y ^V ¥ 45'^ al O. d«l dé
Greenwich, á 4 ,044 varas sobre el nivel del mar, en una temper»*
tara media de 4 9^ 45 del ceotígcado. Fué fundada por Diego Losada^
en 4567, en el mismo punto en que Francisco Fajardo, vecino de
Margarita, fundó en 4560 on hato de ganado , llamándose entonces
cA lugar, Valle de San Francisco. La ciadad recibió el nombre ée
Santiago de Lean de Caráccu ^ que no podo conservar, quedan**
dolé solo el indígena de Caracas^ porque así se llamaban los nato^
rales de aquellas comarcas, que tantos esfuerzos htderonpor edd-
servar su independencia. Tenia< la ciil(kd por annaSiUn león psté$
rampante en campo de ]]|ata, dy^ual llevaba, enlr&sus bracos una
venera de oro con la cruz de Santiago, y por timbre una eorooa.coii
oinco puntas.de oro. ; >
£1 suelo sobre que está fabricada esta capital, sé.incliAa gra*^'
dbalmente al Gnaire, río que se aumebta con las aguas de ioa ^B^
vamos á. nombrar, vadeable en (odas ^estadones , laéníM despoea
de grandes lluvias. Otro declive conduce al E. hasta el rio Amoaeoy
sobre el cual está conslrnido un hermoso puente. Este doble decli-
ve del suelo contribuye; ála^salubrídad de la población. El Caroata^
riachuelo que se atraviesa por otro puente , separa el barrio de S.
luán de la dudad j>ro{9anMM4^ ilichaí El Catuche corre casi por su
oeftlro y sus-a^^ ,aHfliedt8Ri<ria&'ineiite9 pilleas y particiilmref;^
Raonidos estos rios al Goaire» baüan el fértil valle de Ghacao, Jor-
m^dp por la prolongación del de Caráeas, que concluye en Petare
en la caeista pelada de Auyamas, mientras al estremo opuesto se
puede decir que principia en Anlímano. £1 rio Guaire corre pQr
este^ valle, que esta á 966 varas sobre el nivel del mar, del cual
dista en línea recta solo dos leguas ; pero se interponen las mas a|-
.t^ serranías de esta provincia, las cuales por la parte del N. pre^
.senlan hacia la mar y un enorme precipicio , frente á Garaballeda ,
ocasionado por el pico oriental de la Silla (elevado 5.1 46 varas so-
bre el nivel del mar) del.que solo dista una legua en línea hori-
zontal.
£1 rio Guaire nace en el grupo de las montañas del Palmar, que
es un nudo de donde salen y en donde se ramifican algunos cerros
que originan diversos valles, entre los de Garácas y del Tui. £1 Guaire
que baña el pié de la capital de la repúbUca, se forma cerca de las
AjuntaS; por la upion de los dos rios S. Pedro y Macarao. Hasta
Antímauo .el valle es estrecho y. algo tortuoso, pero desde allí se en-
. Sancha y lleva una direcion constante de poniente á naciente, cor-
riendo el rio por su medianía hasta la cuesta de Auyamas : allí
tuerce al S. £., se abre un paso subterráneo en la serranía, y se
precipita por una cascada , siguiendo después por entre dos enor-
,,mes murallas de cerros á buscar el rio Tui , al cual se une mas
abajo de Santa Lucía. Al examinar este valle tan bello y variado
por las x^asas de campo y haciendas que lo cubren , por las flores^
frutas y grupos de árboles distintos que lo adornan , no se oculta ,
sin embargo, al observador, que una gran parte de los terrenos que
están al pié de la Silla, son residuos de este cerro ; que acarreados
por las aguas en el trascurso de los siglos , se han ido depositando
por capas , formando un terreno inclinado hacia el Guaire. A la
derecha de este rio, aunque la serranía es mas baja y menos pen-
diente, presenta en pequeña escala la misma distribución del ter-
reno. Los riachuelos que atraviesan la ciudad, ó aquellos que fuera
de ella corren por el valle , presentan orillas mui altas y ^carpa^
das, cuyos surcos profundos son debidos á la rapidez de las aguas ^
cuando después de fuertes lluvias descienden de la alta cima del
Avila y de la Silla , y van á caer á su antiguo lago , ahora trasfor-
mado en valle pintoresco, cerrado por todas partes, y con una sola
abertura subterránea que parece minada por las aguas , las cuales
antes de abrirse este paso debian quedar estancadas en el mismo
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'yMe*, fonnandiniti' hermoso hgo en medio de "áltas^ semtüiasf.^ Lt»
^dos dmas Tédotídas^dé* la'SfHay se Ten de Carácas^ como mtii {(ró]^-
iEnas-á Iseitkdad , estando -shrembargo á k distancia^de 40^:900
'Tara? j ma» elevadas ^iioe^et ^odo del teotro deia-'chidtld^.fi05
'Taras. Se res casi bajo los mismos ángulos de deracion qtieel^ico
*de' Tenerife desdeel pcrerto de OrotaTa.' La* primera mitad áéí
monte está cubierta de yerba corla, y despaes una anfcfaa faja^^e
'árboles siempre Terdes eíñe los-eostados det cerro iia^ta cerca'de^ni
cumbre : allf cesan, y masas de rocassé'leTSiitanretí formaHlcM-
pulas."^ Privadas esl^s de tegetaeion , -^sis flancos pdádos aumentan
la altara aparente del cerro, que en la templada Europa* apenas
'llegaría á tos Hmites déla región ée las- nievcs'perpctmis;''Eih«sta
^montana tiene constantemente á* la vista'el habitantchd^^átáea^la
altara de fas otras dos cajpltafes que con ^na íbrmarotf'la antigua
"Colombia , es á saber ^i^nt^á^ Bogotá y^Quito \ fat prlmerr conoío
^á ir altura del pico-mas Itlto/ y la^otra 359'^raras ma»wríba.
' Caracas es laTesidencía del poder ejecutÍToy del'jüdkfáfj y'tflí
' también sercuneantrainrente por-el' períMo^de tresmeies'istpo-
^ der legislativo , tompuesto de unacánaaradc^eníidores^y titra'de
'representantes, firmando umbas el congreso nadonal.^Harmna
corte superior, y es- la sede del arzobispado.
- En' 4 766* la poblarcion^e "Caracas y del hermoso ralle en-ijuc
"^la está situada , strfríó una- crtfel epidemia de viruelas^ eñ^que
t perecieron' ñÁ% lüil personaren 4a ^dad solamente'. Besdc aque-
t lia época memorabiese ha" hecbo-tan- general 1^ inoculación j-que
^^^toüboldt dfce4^!QH»erlÉ iél Tisto-ejecttterr'sin dtrtteHio dé^iormM-
* eos; El gobierno ida aclualmente lapropagadon^de la vacuna;' y
en las'^ndes poblaciogeS'bar esmero en- mantener elpuff-necesa-
' rio. En el^ño de'4860 la poblacfon*de*€arácarera^de '^W^'A-
*mas; Bespues'dela sal!dade'Htfftibbldi(que toé^naqtíell«"époc8),
riguió aumenptando 4a pobhtetony se^gradufeiba en' f^ditOi^- almas
"cuanda* aeaeéió et terremoto de í 812 ,- que brzo perecer cerca- de
■ 42;M0 personas bajólas-ruinas' de los^dificios*. Los^acontéeiíliien-
4 -fos' políticos queban sucedido á aquélla catástrofe j banr fed«íddo
-el número á SS^.^dOO ; pero eslas pérdidas , como 'dice^elmisíio
* fiumboldt, s^ff-mui pronterepai^adasj si d pais enestremoféftii
y comerdanle , de que Caracas es d centro , • tiene la IfeHiÉidad-de
gozar de alguBos años^de reposo y tlenttatsáftia>áéttiiuis^riMfon.
' Hai en Caráea#M6^ 4glé8lftS', ^ee4aipreÉd!do9 é-'üaiívejitosj 4Mh)S
V
- ~í567 —
WMtWBalwiiten-5 d»«moiy«8, ifi^tonel^ deinihf^ ;..la$ reatas.de
•esleaéUiaio^.y Mit«Mi7«iit08iDiísDM>f Jbaa^do>siipriaüdoS( y d^ti-
DadUftei|«ella| y loe^düMMo^pam k eckwaeioq publka* Ea lugar de
fraUes^^se^v^'hoÁ i^eooiver yor k)« dausJUQsmoabríUaatQ juventud^
^•dattdo^tos^iaA liellaft«s^niiiK8s á^f fMMkes y á-sirpairia, pprsas
preeoxe&'laletttDS: yooBStanle ^pliea€iao,«.£l'Sr Felidano Monieiije-
gro ColoD ha cooverlido la» v^ja^ipaaedes de S» FfaB€Í$€o en ua
beniiosoy útil «stabkoimkatodc «duoaoioa^eoD el nombre de Co^
fej|fiO''J»tfa^/nfi{6fi0mfeiimarqiief»se^ Ádlí.mismo
el getteipoo iiaee 4roedifi<ar i^waéú^ga ifel^mismo «on véalo para
desüoarlo á la enseñanza pública. Cuenta Caracas una uniyersklad^
un 4e»inteÍ9) >iiaA «keademia militi^r ^^tras^de pintura y másica ,
vUnaseaeoelas. -públicas y/<K>1egio& particular es^ entre los •cuales
mareee&paftkitíar meaemn el«eolegio'dc la Paz, 7 dos de ninas :
en elksMfie aprenden todas<Ja& oateiHasique ae enseñan en Europa
enf esuibMfiíiíéatos sfm^ntes.rfiai'fiocíedade^ palrióUcas, de agri-
c«ltora y de «niigradoii ; cmco improB^as; que> pueden competir
CM)n 4as^ui^peaS; yoiroa taaio^^eriódicos que circulan por todala
república y se envian al estranjero. Caracas tiene un teatro^: 8
puentes que atravíesiiniosrio^y ^ pkuas.grandesi y.^ pequeñas. La
mayor tiene 450 veca^ pDrnsadáiadOi y al r^dedor.deella4uurmachas
pequeñas tíendas de géoeros y víveres» Bstaj ^za eslá bien egipe-
dfada y es ei- mercado, geiMrs^ pre^visiO' de legun^resi íruias^xar-
nes , pescado , oaflería , ote ia cal^d#al y atoada á.ain lado dcla
pial», noUtene niagvnasifiietría. «Al.'liraiitede este^ftilifieioseestá
eooclivyeiido di fidacio niitni|Npal$*de arquitectura' moderna ; y en
otro lado^quedan el palacio «r^zobispul y el seminario. La segunda
pksa es latdel .tenplo'dolaí Candelada , rodeada de unabakius-
tt^da de^ihienrov Amiqüe la plaza^no etíi enipediisíía^, su sueloarci-
lioso mezclado de arena es un pisotail btíeno 4ineiar que el de la
piedra^ Lal.67e8ra^'fiesa'e9la deS. Pablo .vsuúnica regularidad
ea;i5UvíorBiaan]adiiaday ymu úbícoí adorno una/fnente que esiá en el
/medio. La^iglasiaide S] PaMo está jcn/otia esquina.. Los^otras placas
Ben^laf WnuUd; Si iactnio ^ S. Láearo, la Pastora y la.de S. Juan,
i'flias grande q«fe''lasi anteriores j pero de ana iomuuírregular y sin
empedrado.
LaSeal4es-deGtffáca9;'4mDO'las;de todas las dudados -modernas,
están en lútea recta^de-S k 40 varas do>aiMlu>^ empedsadas, y cor-
tándose en áDgu)O'i^00t0/ isla eslatinica iregolaridad y simetría de
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la capital , ciudad bien construida bajo otros reapedoa. Las casas
son espaciosas, bien edi8cadas, de buena apariencia, y algunas tie-
nen pisos altos : Humboldt las encontró demasiado elevadas para
nn pais sujeto á temblores. Las casas de personas que gozan de co-
modidad, están bien amuebladas, y por lo general en todas iiai mu-
cho esmeró para adornarlas con un lujo que con frecuencia no está
en proporción con la renta del dueño.
Sbnon Bolívar, héroe de la América del Sur, nació en Caracas el
50 de Julio de H795, y murió en Santa-Marta eN7 de diciembre
de -i 850. Allí reposan las cenizas del Libertador de Colombia, Perú
y Bolivia.
Como esta capital no puede tener todavía aquellos monumentos
y obras públicas que poseen otras, por estar aun, digámoslo así, en
la infancia de su vida política, sera mejor darla á conocer bajo otro
punto de vista, y al efecto nos serviremos de las mismas espresio-
nes del ilustrado y célebre viajero Humboldt, que la visitó en -1 800.
Ciertamente que si la viese en el dia , la encontraría mui distinta
y no la hallaría inferior á una ciudad europea. He aquí sus pala-
bras :
« Dos meses hemos permanecido en Caracas M. Bonpland y yo,
a habitando una casa grande, casi aislada, situada en lo mas emi-
« nenie de la ciudad. Desde lo alto de iina galería podíamos des-
« cubrir al mismo tiempo la cima de la Silla, la cresta del Galipano
« y el risueño valle del Guaira , cuya rica cultura contrasta con lo
« sombrío de las montañas que la rodean. Estábamos en la estación
« de la sequía, en la cual, para mejorar los pastos, se pone fuego á
« las sabanas y al césped que cubre las rocas mas escarpadas. Si
a teníamos razón para estar satisfechos de la esposicion de nuestra
« vivienda, todavía lo estábamos mas por la acogida que nos daban
« los habitantes de toda clase.
« Aunque yo he tenido la ventaja que pocos españoles , de haber
« recorrido sucesivamente á Caracas, la Habana, Santafé de Bogo-
« tá. Quilo , Lima y Méjico ; y que en estas seis capitales de la A-
« mérica española mi posición me ha puesto en relación con per-
« sonas de todas condiciones, sin embargo , no me tomaré la liber-
« tad de pronunciar sobre los diferentes grados de civilización á que
« se ha elevado la sociedad en cada colonia. Mas fácil me es indicar
< los diferentes grados de cultura nacional, y el objeto hacia el
a cual se inclina coa preferencia el desarrollo de las facultades in-
« J^ja un mismo piuito d^ ykia. » '
i( Me ha pujido que en MéjicQ y Bogotá hai unii tendf^nda de-
i cidida por el estadio protoido de.li^.iáeiicii^;. ea. Quito y ea
< vUma mas isaato por. las letras, y por. todp io que puede lisonjear
« uua imagmaciim ardiente y viva; eala üiiMMaa y Caracas mayor
« conocimiento de las relaciones poUüeas de las oacioues, y miras
« mas estensas sobre d estado de las colonias y de las metrópolis.
« La multipUoacion de comunicaciones con el comercio de Europa»
« y aquel mar de las Ao^tillas que hemos descrito como un ipedi-
« terráneo con machas blocas , han influido poderosamente en el
4 progreso de la sociedad ^ en la isla de Cuba , y en las hermosas
.« provindas de VeneEuda : en ningana parte de la América espa-
« ñola ha tiunado la civilización un aspecto mas europeo : el cre-
« cido número de indios cultivadores que habitan en Méjico y en
a el interior Je la Nueva .Granada, da á estos vastos países un ca-
c racter particular, acaso mas explico; pero en la Habana y en Ca-
. « rácas , á pesar de la población de negros , se cree uno estar mas
« cerca de Cádiz y de los Esta^los-ünídos que en moguna otra parte
« del Nuevo-Mundo. »
c Como Caracas está situada en el conlift^nte, y su poblaciones
« menos móvil que la de las islas , se han conservado también las
« costumbres nacionales mejor que en la Habana, y aunque laso-
« ciedad en aquella no ofrece unos placeres mui vivos y variados ,
« seesperimenla , sin eoobargo en el interior de las familias^ aquel
< sentimiento de bien estar que inspiran la franca alegita y la cor-
c dialidad, unidas á los modales de la buena educación. •
El Qlima de Caracas es hermosísimo , ppara dar una idea mas
exa<fta UQS serviremos del mismo Humboldt que lo describió así :
. i La poca estension del valle y la proximidad de las montadas
« del Avlta y de la Silla, dan á la situaciou de Caracas un aspecto
«triste y severo, sobre todo, en aquella estación del año en que
« reina la temperatura fresca en los meses de noviembre y díciem-
«c bre; pero este aq^o melancólioa y el contraste que se observa
« en, este tiempo entre la serenidad de la mahana y el cielo cubier-
i to de la larde, no. se advierten en medio del estío. Las noches
c de junio y julio son claras y deliciosas ; la atmósfera conserva
« casi ^in interrupción aquella {iureza y trasparencia propias de
i las alturas y de los valles elevados^ un tiempo quieto^ eqi tanto
I
« temperatura desigual. En esta- «^ilefe^* d^ ^sfili» M" MfMtti fle
'« daáo9^^sÍali6^B68^^Hif«^áiti^iiM»dis!e»ei«^. »
« ^erpetiia , pile» 9e halla ^ Uidirs pm^ ¿ «lédfii ñSénéb }tttcft^
"« áülera deía^ AtMi4rie« eqirittMcii»! entihS' 4M f il^#<^ IbMei» é^th-
• tadoB'. En e<tN!t(^ ¿qué nayei^'dtelkftt pu^peéirM'fpmht de
« «na teopenttJMi'fao se^sMtieii^dttr^^ ^ etttt)e'lSO*'f t0%
« f de no^He^eiHrefé» f ^ f que ftnfiai^ce igoan&istile'lk végé*
« flKmtt éel*pfátiii»i, del uaM^o, dél'árM M (Mf¿^, d^tnanntno,
« déi- afbatioaque y dé! ti«rgd^' Per 6Bta' rasan, uii eserittor natíí^
« irai'eempard la* afl««eioft4e cbrátsas; áh I» é^ paraíso ferrettal ,7
« reeonoeeéii el hmmmj }06 Uírmitea cpte^e áfeeftíénr, to»etiÉt]fo
«fiiMPdel paralaa*. »•
i E^de'Mmim <)«ié^tiií cfitiifrte» t^dbtiiAiídO seft^aiéMh^t^tííé (ata
« ifleofisUsite r n'arhiblé' :< kié hab^éiités ée^ Ga^áea» ^ qlHéíM fe
4f qtie en úii áii^fti» dk^«»«ii' tafias efttiBH^ié«é!f; y ^ lo^ ti^^>s-
^ áós de uiía á-ófréhsé Ifiérifleaft c<»ti la^oikyidt ]pf ec^itlrdMl. MudiA»
• yezes, especialmente en el mes de enero, laüoefce ctitá ten^á.-
.d ttiía wedte c* da^^^lJ», es síígülda dé trt día , dtmwité éfifttóf, el
i t^nnóihetró ^e tiíáiitiéfél^ é la soKibCa ^b^ ^ aéW hmt^tibiíh
^éécfñini, Y%Am lüíÉbd d»! sé e^ttorilí^teirfettipef^ilífttí de
• <r t8^ y' 2í4^r
t tú Catatas soii muí at^undántos fas fhitítis en' ibr tres tnésé?
« de abril , mayo y Juoio tlas^ tronadaiTteticn'siettipíreáéf lado dkl
« este y sudésié; de f etare y dé Valle. Eti las regronéd bkp^ de Ifts
« trópicos tío cae granife , pero cm Caracal se ver graíñtíé eádá kua>
I tiD ¿ clncdáfios, y autt se^ bá tisto en váHlss todarfa itíiís ¿itjbif,
r ctiyd'fóHÓa^iTO, cnandd%é'o(1^e(;e, Üate utiü Tirrs0ni»«iM éh el
9 pueblo. I^caldk de Itts aewrfitos eáttíéiios rtirtrentifeti6SdtrWt[üe
«' etgi^ntzó eu'Ia zona (órfidaáSocftdésas sofire'^rfaitetdliK mat^,
« á pesardelá'ffeeutínciádei&frfltíaíJás. 1 ^
■ aKlMiTúíraft«scóydtífciéí<d;qilé*aca^
« tamftl^ á! lá ótrttb^rdé h^ 'tyrddúccfotiieir eqiíilideétiifeíf f ^b^'e^
« db aiúcartie cttiúyd eoff Itt^ff étlto, nutr éít altaras qtte é&óéáák
o í Ta de Catata, péró se pt4fieré di yane'(á causa dé W ééi|Cir¿d¿d
u ¿^1 estioy d^ riftetio^p^dfegdsdtpdtst^ld'délrftbo! de etíé, cafo
'ü9^^míf^e')^&%Mtiiltitm ésr dér ^IWte tá]i^. tttíttiio
f
« allá de Chacao ofrece el aspecto mas risueño y alegre. Et ptátaao^
HT qtié se t^ én léts i^tatitsd^nies alredlMtof de !a ctitáad', ño ejs; el
>giraii'pÍitano Uarlbn, shioeficanifrave y dominico que exigen tná-
'«^ikos calor. Losmas sabrosos ananás sód lo^de Barata^ dbbEótjpe»
« drado y de las alturas de Baenayista en el camino de la tlt;toria;
^difliida nntiajém sttbe por Ik^rtmerá Ve2 al valle de Caracas, se
r ve agrádcft^Temente sorprendido d^encontraír al lado del árbol de
r ttíSY del plátano,' h« hortaliÍEa^y legumbres de nuestros patstes,
'f fa fresera, l&s tifias y cásl' todos los árboles frtitálefií de nuestra
c «ona tempílada : \tó srantanas y los mefocotones mas estimador
ir Yienéu dfe Nfacarao ó de la- e^tremidéfd occidental del valle; donde
«el membrillo es tan común que se ha becho casi salvaje. Las con-
(( Aturas de mangana , y sobre todo, la de membrillo , son mui bue»
« cadas en un país, dónde se cree qué para beber agua es nece-
« sárib escftar la sed comiendo algunos dulces. »
Cairfteas es ét centro dé un gran córaercfio , qu.e hace no solamente
con todíi la provincia sino con las de Cárabobo) Barquisimeto y grííü
partfe dé las de Apure y Barínas. jA la provincia que mas comercio
*ace con fas naciones estranjíeras, y ?üs fralo¿ principales son taba-
VsQ, añjt, cató, cacao, algodón, zarzaparrilla^ cueros y otros. En Car-
racas es dondi mejor se trabajan los adornos de oh) y plata y los
liu^bles para las casas , pudlendo cotñifetit* con los que viaoeü del
extranjero.
£1 cantón de Caracas tiene las parroquias siguienteid : en la ciu-
dad capilar, taCatedrat, Santa Rosalía; í.' Pablo, Attagracia, Can-
fleljiria y s; Juan : fuera ^e la capital las que fbrman los; pueblos
ífe Cliacao, Vlilte, Vegá^ Anlimano, >facaríio,. fk Pedro, Teques, C^r-
ítaíT^ S; A^ttípib, S^ Diego y Para¿9to. .
Oj^MTON VE LK GUACIA.
- i ' .1 ' ■ ■ » .'
La Guaira; d¿dlaft'q\to sfe encuentra Ü li<>rift4 AJmar, puerto
de la capital y el primero de la república. Está situada en un terre-
no estrecho y desigual , ééStt gftmdes eéítos que no le dejan ota
\j$ta qpe la del mar de las Antillas., Dista de Caracas, en linea recta
t ifcgua y 2/5, y por 0! qaniino 5 f/2. Eá et segundo ptíerto regulv-
ñ^^nt&forttficadQ qu^ U^ne el pai$ : i^i^ érdíi^ estfi ent^rainente dc^
'iQHttado y soló se cuida de M murallas qué miran á fa mar, én cuyas
I
bóvedas perecían millares d^ licímf» mt la ¿gcip» 4^ ]1^ ginarra 4< In
independencia.
Las casas y otros edificios están bien.constraidos; solo Uen^ dos
calles de E. á O.; está dominada por la batería. d^l cerro Colo^
rado , y las fortificaoioni^s á lo largo del mar e$tán bien disppe^tas
y conservadas.
La Guaira es menos una rada que un puertQ donde. el mar está
en continua agitación : los buques sufren la acción del viento, las
corrientes del mar, el mal anclaje y la broma. Los cargamentos se
hacen con menos dificultad, atendida la proloJigacion del muelle ,
en donde pueden atracar las falúas. Los negros y mulatos Ubres que
llevan los frutos á bordo de los buques son una clase de hombres
de estraordiuaria fuerza muscular : atraviesan el agua á medio cuer-
po, y lo que es mas admirable es que nada tienen que temer délos
iiburones que tanto abundan en aquella rada.
£1 calor es escesivo durante el día y á vezes también de noche ^
j con razón se considera que el clima de la Guaira es mas ardiente
que los de Gumaná , Puerlo-Gabello y Coro, porque en aquel se
sienten menos las brisas del mar y las rocns talladas perpendicular-
mente abrasan el aire por el calórico radiante que exhalan después
de puesto el sol. Del examen de las observaciones hechas por Hum-
boldt, resulta que la Guaira es uno de los puntos mas cálidos del
litoral del NuevorMundo y de la tierra en general; sin embargo,
tenemos puntos en las llanuras del Apure en que el calor escede al
4e la Guaira..
Este puerto, aunqqe pálido , es sano : las epidemias no reinan
jalli como en las Antillas, y si en i797 y 4798 hubo una enorme
mortandad en Filade^a, Santa Lucia y Santo Domingo, no se debe
estrahar que en aquella ¿poca hubiese fiebre amarilla en la^Guai*
ra, habiéndola llevado allí un bergantín procedente de los Estados-
Unidos.
Las parroquias de este cantón son la Guaira, Maiquetía, Ca*
.rayaca, Tarma, (lacuto, Garaballeda, Naij^uatá y Carguao*
La villa de Petare está situada en una pequeña altura , á la orilla
del río Guaire, entre la quebrada Loro y el rio Caurimare, que tri-
butan allí misino sus aguas al Gúairei La posición de Petare es bella:
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domina todo el valle del Guaire y á lo lejos se ve la capital de la
república : su aproximación á esta , los terrenos fértiles que tiene
en su territorio; un clima delicioso y sano, su posición en el cami-
no que conduce á los valles ferazes de Guarenas, Cancagua^ Capaya,
Rto-C!hicO; y los cultivados cerros de los Mariches, lo hacen un pun«
fointerésíañte.
Las parroquias son Petare^ Barut^ y Batlllo.
. . . •
» ■ •
CANTÓN PE GUARENAS.
■
La villa de Gnarenas está situada en un valle mui hermoso, so-
bre una altura á cuyo pié corren la quebrada de su nombré y el
rio CurPupao, que unidos forman el rio Guarenas, el cual baña y
fertiliza el rico país por donde pasa. la villa es regalar, goza de ua
temperamento sano y agradable ; por su posición domina los cam-
{N)8 que la rodean sembrados de haciendas y cazerías , y por todas
partes le proporcionan bellas perspectivas los cerros que la circun-
dan. Se encuentra en el camino que conduce á los valles de Santa
Lucía y Santa Teresa por una parte , á los de Caucagua, Capaya y
Rio-Chico de la otra, con los cuales, así como con la capital, hace,
comercio.
Sus parroquias son dos solamente ; Guarenas y Guatire.
CANTÓN DE CAUCAGUA.
La villa de Cancagua está situada en una mesita barrancosa , á
poca distancia de la cual corre el rio de su nombre por una ancha
abra circundada de cerros cubiertos de bosi^ues. Se encuentra á
menos de una legua del rio Tui, que aquí es ya navegable y puede
conducir los frutos hasta la mar. Los terrenos fértiles que contiene
8U valle, los grandes bosques que aun quedan por desmontar en
parajes próximos al navegable Tui, hacen de esta villa un punto in-
teresante para el comercio y la agricultura ,' gozándose én ella de
im temperamento cálido pero sano.
Sus parroquias son Caucagua, Afagüíta, Tapipa, Panaquire y Ga-
i.
I
la villa de :Rk>-Chioo eat¿ sitiiada á la orillaidel rip dem AOis^
bre en un terreno Imijo cerca de la mar, de la cual dista rpoco aaw
de una legua en linea recto. So clima es cáUdo» hilmedo y 4 ^^^es
enfermizo. La frondosidad de los terrenos qne se cultivan en este
cantón, su aproximación á la mar, en cuyas costas pueden fondear
buques ; su cercanía á la laguna de Tacarigua, riquísima en pezes,
casi en la boca del rio Páparo por donde b^jan las pftodqcoíooes ilel
territorio de Cancagua, en el camino jque va á Barcetona por ím
Qosla, y los.mucbos terreóos vk^enes y fértiles que enderca, Imea
gue el .punto de Rio-Cbico sea interesainte pam la agricuUura jM
comercie.
rSus. parroquias son Rio-Chico, Coriepe^ XacarigiMi, Giiapi)» C4»
pra^ Ucbire , Sabana de (Jcbire, Guanape y Xiuaribe*
GÜNIBOÑ DBVilIf'ni.feüQiá.
La villa de Santa Lucía está situada en un fértil valle imnado
por el Guaire. Su temperamento es cálido pero sano., y se. goza de
una bella perspectiva , si de alguno de los muchos cerrítos que
tiene próximos se pasea la vista hacia las montañas que encierran
el valle y sobre el valle mismo. Su posición es interesante por las
invehas haciendas de qi)e están cubiertos ^1 v^lle y los cerros j, y
Jo será todavía inas cua^do se desmonti^n las ig^ades jsdvas qiifi
|iene en sus li^nedi^iones.
JLas parrogtui^s son Sania Laciía y.Saala Teresa.
.]ya villa d^ Qqum^re estáMtMada an nnfi4abanii>alta,^l tpi¿^3^
tentrional de la serranía del interior., y á.|MHa distancia del Toú
Sp)Pi)sicíon elevadA la «iiace dominar una ^^rs^e ^^teosion dejas
llanuras cubiertas de haciendas que están á naciente y poniente^ j
también descubre las vegas cultivadas que demoran al N. Esta
población se halla cerca de los caminos que atraviesan los llanos,
y casi en las faldas de aquellas grandes serranías que los separan
íerazidad y buen clima C0Dxl4<in 4i, ¿paiM9^.M»defi0i»oto f'Wlr
los fragosos caminos que cruzan las sierras se hallen en vat^ioih^
todo para facilitar su tránsito , entonces será mas impcirtante esta
villa j que por su posicioa.lM:ijMA cop xvüJ ;rjentajas al comercio y á
la agricultura.
..bi»(pa»N)4MMiAfi'eale oMitimMii Qenmare.} ü. fjrtnoíseo ,<M-
rifaM , (teha f lisaia.
i». eiii4a4 Aq la Vlptcim«0t¿ (¿ronndad» c»ú ¡por 4odAs pavte»
demlixiasaiAm^vT {>or^eUa'pa9a tel. pequeae Piiaobuelo CalaaíObt'
qn<^d€!samboea<6R.ei'lio Amíf^, -el mial /d^ «aeibive^á los £értUe&
vaUes.'j^r 4andeicoi3Pd» fistos irisaenos «mi&pos «e desoubfen des/to
k^f«^eiKi:cue^ dpi GaW^rio Moía^iQl. : es un «asto Tospa^ji^í
cu]iúesM»4eiaEdinoB9!plaiitaciofie6„ árl)ol£5 «il^esti^, 'Oafi^riasf;
aUwyi# Por ia ^parte del $. y ia del.S. £« se» eMvnB tos aUasmoiR^*
ta]ktt4e4aiPalina» Gíttwainia, TisHra f €uii^j^,:Q9itwiidá¿»dQs^^^B»^
df ÍQ:qMe>Akaa^ h'Ni^i ty^aiillAado Jas jiwiWBas-H<4Hi9aa.^6fi«a
de-la Viotopia^ ea(CtteQtra4a'di¥Í«ioa de las «aguasque ^an al ^io»'
Aff^ua^9 alcoalílps conduce allag^de 'ValoBiúa , ó bien eonF^UMea
SQilii^ dfmeala, jpeotbióndoliis ^ Tpi '4»aiia rlteníarla» á Ja mar* fl¿
affiírtawbiaa<, 4ue<eKawnaado tlascaestas i^eeinas^y i^us decli\iea
peiipeo^iottlaKefty j^fie ¡salea oai&o óteos tantos j^romoatoffios em Ja
Uaotuea., se dkscuiMran oa mis &Pinwi he ««liguas oiritlas deriagp
l]amido4e Taiearif^at balde ^al«iKeia.^£ailas< cercanías de la Nie*
loria se jMte Oa laloíiilaridal .y ida q«ie á A ^Uufa :de ^^ laem
sobre el nml Idel loa»* , se :h«lknieamfios jde itrigaman^ladiM don
plantaciones de ^arácar ry café. (Dos viasde aomereio «pasan por Abl
Victoria : el camino de Valencia , de los llanos de S. Carlos y fia-
riñas, y el camino de la villa de QuxAf de los llanos de Caracas y
de Apure ; el uno casi costea la orilla setentrional del lago, el otro
pa^a p<NrJataiitig«aT^illa'aíieiHdiaaal abaudoAadapor.ias a^a^ir
eabi^r.ude'iinalazaoa vegataai0n^'SiTiea*oaiesia, MaSfrÁsa aun<a»
la*-^ue onbKe^a^aerwMa de dan^e m onigipaa^el Avagaa-y el ^íi0
Tigre,, trihataffiode a^iial^ €íí»ras deatei^os^^cM i|ii;tei»parameDli>
deU^kísot, tofranmB aaH mnUay» |iara^aolai>iaa.qHieiM9<4e4iqiHiA.
á éesnMtotáf laraliUgoas selvas qtiie sé éstieiMÍéii desde iás caiézérá»' ^
del Aragna basta el nacimiento del 'TÍri.'
La Yíc&oria, el Conseja y S. mteo fénnan hiir patr0<ftiias dé-
estévanloD.
' .■.■'''
CANTÓN DK TDRMERO.
«
' La Tilla de Turmero se baila ntuada eo vak valla q^a «e eoont-
nica con el Aragua , á la falda de la serranía de la eofita-y- en la '
confluencia del Guaire , el Paya y Turmero, los cuales forman el
río de esle último nombre. Un- ediíióo cargado de adornos es sa
iglesia , la cual está en la plaza mayor , situada en el centro. Fué
en otro tiempo la residencia de un gobernador general ¿elosi valles
de Aragua. Los terrenos que están cerca de esta ciudad y de foda
la parte llana del cantón se hall&n cubiertos de haciendas, planta- -
cimies y caserías. Es uno de los distritos donde bai mas pobla*
' cion acumulada, viviendo de Ya grati fertilidad de aquellos valles.'
AHÍ se encuentran varios samanes dé un grueso estraordinarío , ^
pero ninguno igualal famoso de Guere , iajo cuya sombra piféde -
reposar con desahogo un batallón en columna. La mayor parte,
ó por mejor dedr, casi toda la serranía está inculta. La prosperidad
de esta villa se debe mas á la agricultura que al comercio , pues
su posición algo apartada del camino principal , la priva de un
tráfico mas activo ; sin embargo , cuando la serranía esté cultivada,
será mayor la importancia de Turmero, pues en consecuencia d^ '
su aumento en agricultura, obtendrá mas ventajas en el comercio,
el cual es mui favorable en el dia á la parroquia de Gagua, por ser
esta mas central, y bailarse colocada en la parte plana que han *
abandonado las aguas, i^que es de un fertilidad asombrosa.
E¡í temperamento de esle cantón es sano aunque cálidO\.
Son sus parroquias Turmero, Cagua y Sania Gruz.
CANTÓN DÉ MARACAI.
La ciudad de Maracai está situada en Una hermosa llanura , ré-^*'
gada de aguas qne se dirigen de la serranía de la costa al lago, del"'
cual dista méoos de una legua. Es una poblaefoii mni alegre, y'.si *
se sube á la altura del Galvario, se presenta al espectador una de '
las bellas perspectivas de paisaje : la vista del lago con muUitcid de '
rm étf éllbé^ { W éeri^s de (Süi^e ; Ttímá y los qne están
pt^niiiios á la abra dé la tilia é&Ciirá, los de fucattíñemo que se
uoeii ft latafidá lejana <)ue va al Páóde Sárateyse ven ead azules: '
las (^rSlÉs'del ía^o setnbradás'deplahteciones y lideiefidas, i unas '
cnftfrtas sabaiías eo que sé erialn ganados y éaball^ V ba^en tíu eoiH
traste singular ccn los terrenos cubiertos de una alta y espesa vch
gelacr^n. Las casas regadas éü toda la esteimión que áleaUía-laTisfa,
las diferentes degradaciones del yérde qtie presenta !a variedad do -
terlrend^ cUfltivadiis dé café, cafta dulce, algodón y^afill; krs faldas^
meridionales de la serranía dé la costa ,'qii'e seí-avan»in de distati- *
cía en distancia cfn la plániéie qué en tiéni{Mis i^emofos debian oca-
par las aguas del fógo , tddo contribuye á formar la vista mas bella
y pintoresca de un variado paisaje. Guando estén cultivadas las"
selvas que se encuentran en la serranía y otros puntos que están ál
pié de ellas , cuañado un camino coinódlo aeoite , por dectflo á^ , la
distancia al puerto de Choroní, entonces tomará Maracai mayor
incremento del que basta abwa debe á la agricultura y al co-
mercio que bace con las poblaciones de los contornos.
-BI elbsia de Mflrrácai es caliente, seco y sano.
Las jpsArroquias son Maracai y Cboroní.
CANTÓN DE CURA.
La villa de Cura esfá cerca del rio Tticutunemo en el punto en
que esté vdltea báeia el llano. El rio presenta después de su origen
el fenómeno de perderse enteramente , basta no dejar por muchas
leguas vestiglo alguno de sos aguas ; pero de repente se le ve brotar
por todas partes en á punto que llaman cimborro, y sigue entonces
sü cdrso como los demás ríos. La "villa de- Cura está fabricada sobre' *
un terreno árido y seco en la grande depresión que forma la cor-* '
dfliera del interior , dejando una ancba abra para poder pasar de
los fértiles y amenos valles del Aragua a los ésténsos y tristes llanos -
que van á perderse sobre el Oriiifocó y el Meta. En esta grande '
abra se ^videñ las aguas qiie corren hacia él lago ó hacia las *
llanuras.
^ Los cerros calfoos que rodean la villa de Cura^ impiden que
tenga esta una vista mas a^rádaljle';' sin embargo ', hacia el E. se
désfctibre et vallé de Ttteutoúeíaó Heno de haciendas , y al lado '
opuesto el valfedto por donde corre él Ttó de las Minas , el cual se '
I
p^r toMaiVíft «itaada. «i .Jo ^iwr^^ vfoe "«iMidwie 4 W^^Um?!; A
La ciudad de S. SebMtíaift'dA 'lofitRepea m oaft^e la«i «iis<«iití-
gaas, y su construcción tuyo 4K%eE 4eto'iTQ6iicift.giii^lw4>íii.de
existir una mina de oro en sus contornos. Está situada en una
cuesta por cuyo pié corre el rio Guaneo y una quebrada. Su situa-
ción es agradable , y la vista de unos pequeños cerritos que están al
N^; cAQipiiestos de 4in AaJG¿feQ,griiHido.CQni»>6l 4e ios-MiotiiOsile
S. Jnan, le 4ftn Jin^fi^p^eto ipiatoreico djei oMsnO'iiMido que ^sw
caceos ^si todos en iociaa 4e pan áBMÚC9T,f «cubiertos ^e.giwmi-*
imS'Coii^giiQas.ioaiuibaa dol)08q«a6Ulo6« fiufi-fio^lexan^ea todto
dv^eccioiMs. JDidgse q4ie'WÍeroo4ii«vse.á «ur
8e,«stiend«o en loailaoos y^^ (tuyas falda« Qowee >el xiQ-G/aUmo íQH
dip^ioD aljíitGÍeiite, :ii0/iaiti l^os4e ia4úudad.
Xos tecr^ds^fue^fttátt^ vedodpréa $iaS(alrastiaii*«eJi8il|mLiWlí:
onttmdofi de; wü^ y :gr«ides fOspaeíts xubiectflis .d»T#^j^ p ana.
sembrados aie^^oasitas que dag>^;PAÍsaóe «ooa iV^i^iia ^gj^dabl^ El
C9Uv^.eaá en 4^ viüles dsü intAclojr ^m, la^J»9Ía g^p^m^am 1^
Talles del Tui del valle de Guárico.
Xa situjaciop deeata jiptigua qi^d^d 'asobee hsI 4MHWA04P« i^.al
AUo- Llano yiJos^riiQoaiUilldStdeJHritii^^ la-taifiun^wnUt^^Wf^
eiaite , llamadora fffi^^emT «por la fia]ii»bfÍ4a4 d^ su {ülm^ i>wwaL
aioQr4U6.3ns Miiitafit<«iiMpmi ü ftepb%jp.ff .MgBrtt»jri»|wi|li^'gpi»
«p* ESSL —i
posiciones , es dedr , casi á la entrada de los llanos , y al pi¿4e Jt
serranía.
Cerca de la dudad ha! una cneva particular por su figura y las
diferentes estalactitas que tiene ^ Varias de las coales , reunidas á
las estalagmitas han formado algunas columnas mui curiosas, divi-
diendo d subterráneo en distintos salones. t.nüñiz , parrdgufa de
e^ cantón , se han hulládo huesos de mastodonte ; lo que prueba
Que en tiempos mui remotos existia en estos paisés aquél granAe
anímsíl , cuya raza ha desaparecido enteramente.
Componen este cantón fas parroquias de S. Sebastian, S. Cád-
m!ro , S. TYancisco áe Cara/Camatagüa ; Carmen de dura, Para-
para y Orthí.
• . - » • * , .
'CaiiiM m cNMOcou
, . ..
ta vffla de iMtiico está «itualBa entre la qu^aSa dé^Témemni^
y él Vio de sunombre , en tm llano fértil al pié de hisemim'at|Qe
éepara los vafles idérTui de las Ilamjras.iSu posidíon^laliaceftfté'*
resante : se hafffa en un temperamerrto ¿áMdo^mrotáíluaalife ; 'pór
ittia parte tiene Ihnursis pai^h t^a, ^orfaotra^osquesparaél'
ciíftí vo. sus "terreniis producen frttlos 9e un aroma esquisito ; liPte»
son él cacao y cá isñaico. l^Tposidon áe Witttco üo es pintowsea^
pero vista desde la altura del camino que faldea los cerros ,^af a ñ^
á la villa , la perspectiva es agradable. Ef ^urso del rio üo^idtca
una vegetación casi negra y Hitii elevada ; las tierras lAmdar se
ven de tatíos ccAores segnn^hrs pfattladones, á'favéí qfoe ^encimar
de la cumbre de varias colinas se distingue un horizonte lejano
de sabanas , y por otraifiwpte^ bosgiies HMK^tps que se pierden de
vista.
fLasanauMa'Se^levaal^nopte.de la vi)la'er«iiidaa^i^^i^^><i<^f T
en lejaiw <vi«t4-.^4e^^mtwen los i^ei^ro&^e 4|is^ ^ de Carapfi. Nd^
mo^ibo clx^ttUijifoviUfft4ie^Ye^^edor4e4a*vil^:pero e^^rbas^anto
el qm9^j^»lh»ie/¿ím(^9» L^fua^bieia i^l S^^^iguiafido Ja^^^w^
del X)ritaco, jfpor el. IS, f^áotem» en ei vaUe^de Alt^aeia.iCfMnda
esta villa atenga fw bosqp^ desmpntados^^j abierto j^n^ioaniao al
Xui^ ;entónqaS; j^seseiitai::^ joívo .aspeela^.fuaQueea el >dia -os ua
iaís parroquias de este cantón son Oiriitico, Álfógracta, Lezama y
tagnai/ •
■• . . • I
CAJSTON tXE CHAGUARAMAS.
. T,La villa de Chaguaramas está construida sobre un llano árido y
;eco.: dos pequeñas lagunas son las aguas que tienen sus habitantes
en tiempo de verano. La posición de este pueblo es buena , por
cuanto está en el punto en que se reúnen dos caminos que del
llaino van á la serranía ; pero la falta de agua y de terrenos de cul-
tivo en sus inmediaciones^ hará retardar sus ^rogresos^ Dedicados
á la cria todos, los habitantps de Chaguaramas , pasan la mayor
parte del tiempo en sus hatos, y por esl^ está casi siempre desierta
aquella villa. Si para fundar esta población se hubiese escogido un
lugar en las orillas del OrítuiU, hoi estaría mucho mas adelantada;
bien es, que Chaguaramas es una de aquellas poblaciones que aun-
que de poca apariencia, tiene ricos propietarios de ganados^Quyos
rebaños crecen admirablemente en unas llanuras que llevan fama
de ten^r esceleAtes pastos. Hai en este cantón ¡>s^rro.qiiiasqi|e está])
l^^^nadas á prosperar prontamente como el Chaguaramal y el Potj:eroj^
qae tienen tierras de cria y de labor, y el rio IJnare.que facilita eí
Vavyo^te de sus producciones. Demontada la montsm^ de Tamf*-
naco, tendrá otra perspectiva el valle de la Pasciia^ f i se funda 60bra
ék rio Tamanaco.
£1 temperamento es cálido pero sano.
Las parroquias son Chaguaramas » Pascua , Tucupido , Chagua-
ramal, Potrero, Santa Maria, Altamira, IguanayJEf^QO y Cabrqta^
CANTOlf DE CALABOZO.
' La villa de Calabozo debe su ftíndacion á la coioipt^íá gnipúz-
cdana , á principios dél siglo xvm. Su aspecto eá agradable y sir
íglTesta mui regular; el clima es escesivamente caluroso, aunque
templado por las brisas del Ñ. K. En la estación lluviosa está es^'
puesta Calabozo á grandes inundaciones que casi interrumpen la
comunicación, pues se estienden por las vegas del Guárico y por
hs sabanas inmediatas. También caen rayos con frecuencia, lo cual
hizo que el Sr. del Pozo tomase lá precaución de hacer circundar
— 58Í —
) .«
\ «
la villa con pararayos, algunos de los cuales existen aun. Los edi-
ficios son tutelaos j hkn eonstruidosv y todo u^íca m asta población
un adelaiito rápido. Se ha establecido un coljagio^ y piarece que
este punto, en medio del llano, entre el Apure y la serranjía, ven-
drá á ser un centro de ilustración en aquellos inmensos desiertos.
La residencia de ricos propietarios de ganados, en el camino prin-
cipal que de los valles va al Apure, hará que Calabozo sea siempre
una ciudad importante para el comerdo y la cria de ganados. Sus.
habitantes ricos y de costumbres dulces, reducirán á costumbres:
Iguales á los llaneros, que solo necesitan mas contacto con las gen*
tes civilizadas, y un poco de ilustración que está en el interés de
los ricos de aquellas comarcas proporcionarles. Las vegas del Guá-.
rico ofrecen lugares útiles al cultivo, y también los hai en muchos
otros puntos ; la pesca y la caza dan abundantes alimentos. Hai en
las cercanías de Calabozo unas aguas termales en cinco vertientes ,
rodeada^ de un pequeño bosqtiecito de algarrobos, á 600 varas del
rio Guáríco, mbt^ una mesa Uiüpía y bonita.
Las parroquias de este caaton son las siguientes; Calaboso y Án-
geles^ Trinidad , Cadvarío, S(»abrefo, Barbacoa, Bast£0>GuardHlí-
naja; Camaguany GuayavaL
■ f
( I
I
: I I
i
:■ I
d&d' Óo mí tienu , fciTtnw Hlnss> pobntftn iteohttit', iMitiTa, boodM
, r 1
lat eantones, so altura sobre el nivel del' mar, su temperatura media, cali-
de omiM, esclaiM#ÜBlMefairkia^^afilat ii ia; pcmrkiilaiTjp te Is^Mp^tMcii,
— 884 —
TABLA.
t m • ■
BB hkMhTVMk BB tOS CBBAOS I» U FBOTtlfCrÁ BE GÁBiCAS.
Kombres, Yaras,
Ghoroní 1S55. . . •
Tamaya 4449.. . .
ftlñtr.. .'. • . . "BK,. .
Áylla 1781. ..
Silla 3146....
NaiguaU 336Ó...«
Cares S9iiO....
Cacalo. 9710. . . ¿
Capaya 9000....
Buenavista aooO. . ..
Cocuisa. -IdS!»***
Higuerote 1944....
Serranías.
de la costa.
... id.
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ft^^^t
» . c . . ■ Vw.
Anauco y Guayabo. 4600 id.
MariclieB... 4300 id.'
Aragüila 1330.. kt -
AltoGüaime 4251 \. id. '
Agaaa«gr4. ....... 4600......... id. .
Nombres. Varas. Serranías.
Platilla S2S6. . del interior.
Cerro-Azul.... 2077 id.
trmti.:..:. i704 fd.
Morros de S. Joan .. . 4183....... id.
Abra de los Llanos .. . 710 id.
Pao depárale....... 1910. id.
Guaraima 4998 id.
loma de Hierro..... 4S00 id.
BoDcador 4750. id,
Consumidero.. ;..... 1368 id.
Loma del Viento.... 1655 id.
Cerro Palomita 1895 id.
t6olfiM 1565 id."
Guanape 4550 id.
Onáre... 49N)0 id.
Morro <|e S. Sebaslian 4190 id.
Galera 680... del llano.
tucutiiMUio 910.. id.
TABLA Q£ tX)S RÍOS
ti . é .
DE 4*" ÓBDBN ]^. LA:PBDyilfG^A DB CitBÁCAS.
Nombres. Serrantií. Studesa^.
Choroni de la cotia. A la mfXf
Chepe.....
id.
id.
id.
id.
id.
id.
id.
Mamo id..». ...y. id.
Xofbi.. .»••«.....
Maya
Cagua
Petaquirito.......
Chichiriyichi id,
Orlcaro. id
id
le». ........
id
id
id.........
'*.
Bio-Scco id.
Maiquelía td..«....¿.
Guaira id
Macote. id.,':
S. Julián.... id..»
Bio Grande id
Cría id
Ifaiguatá id.,
Camburí id.
Cares id.,
Anare '. id.,
Caracas id.,
Osma ^ id„
Tuasana ,. id.
Uranoa.,. ,„,,,.,.'. id..
Chuspa id.,
Aricagua td.,
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N&hlMres. Serranía, ^desagüe.
Pié CtM^ ...... d«Ja cosu. Lago de Y**
lencia.
S. Jatt ó Ta^tap». . id.». . . .
Bieiiio «... id.......
Tucúpido i id«
BUrmi* «.....#'*•.. id^.....
Tormero id.
Paya... id
Guaire., ..*.. id
Guaipao id.- ,
Tigra id.
Aragua id..
Calanche del Interior. . .
TocoEon ,,t td...,..b,
Minase Diaptro.... idi
fácau ^ id
Guare I Ut
Mosia 4 idi
id.
Tarma ^....^
Súcula •' ^ id'...,
YÜre.V. ."■..". ► . . i .". ,'. id.. . ,
UgfHio». .../id...
Guaire de la cqpu
Macarao ........... id,
Caruata id,
•*■*
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la.m«r.
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id.
— S85 —
Nombre* Serranía, Su desagüe.
Catuche de la cosía. ... i la mar.
Anauco... id,.,.. id.
Valle id W.
€aurimare id id.
Goairita id id.
Taguacita del interior id.
Taguaza id id.
Cancagua de la coala id,
,, id,
,, id.
,, id,
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.. id.
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.. id.
.. id.
,. id,
., id.
.. id.
Guarenas id
Arismao id
Guairita id
Curopao id
Guatlre id
Pacaragua id
Cblrmita id
ChutpiU id
Macaíre id. ....
Cuira id
Apa id
Panaquirito id
Sapo id
Merecure de la costa. . .
8. José del interior. .
Capaya de la costa. . . ,
Aramina id
Curiepe id.
Guapo del interior id.
Guaya id.
Batatal id,
Mactaurucuto id,
Bio-Chico id.
Guarebe id.
Bucaral id.
Cúpira id.
Chapaquire id.
Vchire id,
Chacacual id,
Chavez id.
Cántaro id,
Purgüel id.
Tocuyo id,
Chirgua id.
Camové...^ id.
JHanuare id.
Tormenta id.
.... id.
.... id,
.... id.
.... id.
.... id.
.... id,
... id.
... id.
.,,. id,
... id.
... id.
... id.
... id.
.,,.id.
hoya del
Orinoco.
... id.
... id.
... id.
Tisnados id id.
Piedra id id.
Manapire id id.
Tucutunemo id id.
S.Juan id id.
Pagüicilo id id.
Pao id W;
Carate id id.
Garamacate id id.
Suata id id.
Loro id id.
Cagua id id.
Gamalagua id id.
Taguai id id.
Tinapui id........ id.
Cura id id.
Paya id id.
Buche id id.
Parapara id id,
S. Antonio id id.
Quesípo id id.
Guaromen id id.
Macaira id id
Memo.... id id.
Guaya id id.
Guaritfeo de los llanos. . . id,
Mttcapra del interior.... id.
Pascua de los llanos... id.
Santaclara id id,
S. Isidro id id.
Espino id id,
Iguana id id,
Aracai id id.
Suau id id.
Chivata id id.
CbiTaliea id id:
Ipire id ¿ la ]
Santa Inestf id id.
Coporo id........ id.
Quebrada Honda. ... id* ....>. . id.
Tamanaco del interior id.
Guaribe id Id.
Aragua id id.
IGuanape id id.
aas
. GfiOG,
ss
— 58e —
PROVINCIA DE GARABOBO.
SITUACIÓN ASTBONÓHIGA, ESTENSION Y POBIíACiON.
Esta provincia se encuentra en la- latitud boreal de S^ Á 4^ hasta 4 0^
35', y en la longitud de (y^ 45' basta ^* 48^, al O. del meridiano de
Caracas. Su figura se puede llamar un paralelogramo representado
por lineas curvas que encierran dos zonasmui- marcadas : la serra-
nía y los llanos. Tiene la primera puertos de mar, valles , terrenos
fértiles^ algunos ingratos, otros desiertos, cálidos y templados, úti-
les para la agricultura y el comercio ; la segunda^ por sus pastos,
sirve parala cria de ganados, caballos y muías. £t máximum de
largo de este territorio d^ N. á S. es de 47 ^/2 leguas, y de
ancho,, de E.. á O. 2-1 4/2 ,. teaieBdo la mitad de osle- ancho en la
parte mas estrecha. Las leguas cuadradas de superficie son 679,
no comprendidas 47 que ocupa la parte del lago de Valencia que
le corresíwnde, y hai también 88 leguas cuadradas baldías. La po-
blación total es de 96. 967 habitantes^ que está earaioa de 4 ,45 por
cada legua cuadrada.
LÍMITES Y CONFINES.
Confina «sla provincia con otras cuatro^ que son) Caracas, Rati-
nas, Barquíslmeto y en u% pequeik) punto con la de Coro. En la
punta de Aroa, entre Cuyagua y Choroní, empieza el límite c(m
la provincia de Caracas, descrito ya en esta, y que termina en la
boca de Chir-gu^ sobre la Portuguesa. Aquí principia el lindero
con la de Barínas, Las orillas de la Portuguesa, aguas arriba^ hasta
la boca del caño Igúez, forman la línea divisoria ; después sigue por
el Igúez, y á poco deja este para continuar el curso ^ aguas arriba
del Guanare viejo , en dirección al poniente hasta el punto de la
Yeguita ; aquí tuerce el límite al IV., poruña línea que atraviesa
la sabanas, á pasar cerca del Picadero, y acaba sobre la Portuguesa
junto al hato llamado Mapurite. Sigue después otra línea indeter-
minada por la montaña de Turen, que va á pasar por las inmedia-
— 58T —
cíones det vecindario de Santo Domingo , y de aqsí otra na méttos' '
indeiermiDada; hasta dar en fa boca deCanjartlo qnedesagtia en él
Cojédes. Este rio es entonces el lindero , hasta frente del cerr^ P^
tiguado qne atraviesa la montaña del Altar^ preeisamente cerca del
camino que de S. Carlos va á Barqnislmeto, en el paso de la Boca.
Hasta este punto llega la raya de la proviDCia con Harinas, y em«
pieza la divisoria con Barquisimeto. El río de la Boca , ¿Gojédea,
signe marcando el lindero hasta donde se jnnta el Ho de Barq^ian
meto con el Buria ó S. Pedrito : entonces sirve este de límite hasta
las labranzas de Nuarito, que quedan frente al cerro que da orifje^
al rio Yaracui. La cumbre de este cerro divide el territorio y
el rio Taracui , ya formado , sirve de raya divisoria , casi hasta sa
derrame al mar. Allí acaba la división con la provincia d&Barqub^
simeto^ y en esta misma boca del Yaracui principia y se puede de^
cir que acaba la raya con la de Coro, pues solo en la boca del rie
está en contacto por un espacio de menos de una l^na.
COSTAS DEL MAR.
Desde la punta de Aroa , en las faldas del cerro de la Aiesela ,
continúa* la costa al O. con inclinación báeia el Si, la distancia de
2 leguas , hasta la ensenada de Gata : toda ella es mm limpia j m
puede atracar á una milla, y Baéaos si se quiere) habiendo b«Qn an*
<^1aje en la ensenada Cuyagua. La ensenada#de Cata tieat) vadia
milla de boca y otro tanto de saco. En la punta oriental hai.QQ ia^*
lote casi pegado á día, y desde él baja para el S. haata el londa dft» •
la ensenada donde desagua un rio con veril de poco foado ; por la
demás , la ensenada es limpia y su fondo oe 27 á 5- brasas , que a»
hallan á cable y medio de la playa.
Al O. de la punta occidental de Gata, y á 2/5 de milla, ettá la
punta oriental de la ensenada de Ckmmare, que ofreoe también mu >
buen fondeadero : de dicha punta oriental sale para d N. C un
islote, que forma f^sv de medio cable de ancho, y tan limplo^y
acantilado, que el menor fondo es de 7 brazas. Esta ensenada es
bastante aplacerada, y el escandaUo-es buena guia.
A casi una legua del islote de Ocumare está la punta oriental de
la ensenada llamada Ciénaga dé Ocmnare, que noes maS'qaeiiaa
abra de tierra anegadiza , que sale de la costa,' y que enlra^bi^ .
fondos de arrecifl?» íbrma un canalizo come- dv^nneaMe y mediou
— 388 —
de ancbO; en el que hai desde -15 hasta 5 brazas. Este fondeadero
es muí malo y solo capaz de embarcaciones de cabotaje.
Media legua por el O. del morro de la Ciénaga de Ocumare, que
está en la punta occidental , se encuentra el puerto de Turiamo ^
que es escelente y capaz para todo género de embarcaciones. En
sus puntas esteriores tiene una milla de abra, y luego angosta hasta
quedar en 2/5 de milla : de N. á S. y en todo él se hallan como 20
brazas de fondo de lama y arena : al N. O. de su punta oriental
haí un islote á distancia de un cable.
Desde el punto de Turiamo para el O., y á distancia de 5 leguas^
está Puerto-Cabello. Esle pedazo de costa es limpio y se puede atra-
car á una milla : hai destacadas varias islas que están al E. de
Puerto-Cabello y se puede navegar por entre ellas.
Puerto-Cabello es un canalizo formado por varios islotes y len-
guas de tierra baja de manglar, en el cual es preciso entrar á la es-
pía, y se amarran los mayores navios al muelle , sin necesidad de
plancha ni tabla para bajar á tierra. Este canalizo tiene su boca en
una ensenada mu i espaciosa^ resguardada de las brisas, y es de es-
celente fondo desde Á 2 hasta -1 5 brazas, lama arenosa. En 5 brazas
se está bastante cerca de la playa , que no es buena, por tener al-
gunas piedras : el mejor fondeadero es E. O. con la boca del puerto,
y como á 5 ó 4 cables de ella. Este puerto es el carenero de todos
los buques mercantes que van á la Guaira, y el paraje donde in-^
Yernao, y así, ordinariamente las embarcaciones, luego que dejan
8U cargamento en la Guaira , van á Puerto-Cabello para estar mas
resguardadas, repararse de las obras que tienen que hacer y tomar
parte de su cargamento de retorno , volviendo á la Guaira para
acabar de cargar. ^
La costa de sotavento ó del O. de Puerto-Cabello forma una gran-
de ensenada llamada de Tucacas, en la cual hai varios islotes : en
ella se atraviesa la brisa, lo cual la hace algo peligrosa.
En la boca del Yaracui que está á 6 leguas de Puerto-Cabello ,
termina el límite de la costa de la provincia de Carabobo.
ISLAS.
Solo tiene cuatro, sin considerar muchos pequeños islotes y pe-
ñascos que se encuentran sobre la costa ^ á barlovento de Puerto-
Cabello. De estas islas, tres están al N. de dicho puerto^ entre este
— 589 —
y el de Borburata^ no mui lejos de la costa, y la otra al poniente de
Puerto-Cabello. Las tres primeras se llaman Isla Larga^ Santo Do-
mingo y Alcatraz , en medio de las cuales y á su rededor hai fon-
deadero. Estas islas son pequeñas; bajas^ con poca arboleda, y una
úe ellas tiene una laguna salada en el medio. La cuarta se llama
€ua¡guasa , frente á la boca del rio de su nombre : está siempre
verde y á vezes sirve de lugar de paseo á los habitantes de Puerto-
Cabello ; es pequeña y se halla cerca de la costa.
MONTANAS.
La cadena litoral de Venezuela, se puede decir que se confunde
€on el sistema del ramal de los Andes que se desprende desde Pam-
plona y se pierde en la abra de Barquisimeto. El rio Cojédes y el
Buria que le cae, dividen, en cierto modo, el terreno de los dos sis-
temas, en la montaña del Altar.
La dirección de la cordillera de la costa que allí se llama de Nir-
gua toma primero hacia el N., y la cumbre del cerro Tucuragua
es el punto de partición de los dos ramos que se estieñden á formar
el pais montañoso de Nirgua, y las altas paredes de la costa, por una
parte , y de la otra , la cordillera del interior que sirve de límite á
ios llanos y encierra el hermoso lago de Valencia, los valles de
Aragua y del Tui. El ramo principal se dirige, como dijimos, hacia
el N., formando el valle de Nirgua, dominado por el picacho de este
nombre y por el cerro de Santa María, elevados ^ .920 y 4 .895 va-
ras sobre el nivel del mar. Desde aquí sigue la dirección del N. E.,
inclinándose á Puerto-Cabello , arrojando varios ramales á su iz-
quierda, que forman pequeños valles mui fértiles, los cuales van á
perderse en la pestífera montaña limitada por la costa, el rio Yara-
cui y el de Aguacaliente. Este último corre por cierta abra que es
como una cortadura en la serranía llamada aquí de la costa, y por
la cual se puede hacer un buen camino carretero para la comuñi-
cadon entre Valencia y Puerto- Cabello. A la izquierda salen tam-
bién diversas hileras de cerros que forman los valles de Montalban^
Chirgua y otros pequeños, cuyas faldas se confunden en las llana-
das que están entre Carabobo y el Tinaco. El mas alto cerro es el
Torito, de ^ .468 varas. Después de la abra de Aguacaliente, la ser-
ranía de la costa sigue arrimada á la mar hacia el naciente, y sus
basas se pierden á vezes á poca distancia de las orillas del agua , á
f
I
« Teses en Its aguas mismas, ea ferma «le altas paredes^ hasta el cer-
ro de la Meseta que sirve ée Umite con Ja proviticia de Caracas. «Los
•49erres oías altos de este trozo de cadena ^ son las Tetas deHUaria >
de 4 .6^ ¥ar<a$, y Patanemo de 4 .^30.
£1 otro ramal qne^le de Tucnragoa, cerro elevado 4200 vasas,
se puede Uamar secundario : signe su rnmbo al nádente^, sedismí*
Jiuye considerablemente en las Palomeras, tuerce prím^amente al
IV. E., después al N^, y tomando el rumbo del naciente, levanta'€as
cumbres y va á formar la cordillera del Pao , que viene á quedar
paralela á la de la costa. Su mayor altura es en Cerro-Azul de Gúi-
güe , que es de 4 .420 varas , y se une al límite de la provincia de
'Caracas, en el cerro de ¥uma, cnyaa faldas -se pieideu eu el lago de
Valencia, miéntras<qne lacuatbre del Palmar elevado 4.050 vai^s^
da orí^B al val4e de Tacasurama.
Aquella pared peñascosa que Hamau galera de S. Carlos y 4é[
Pao , se puede considerar como la antigua costa del juar de yerba
qme -ofrece la vista de los llanos. Se origina en las sabanas de San
Carlos, por medio de vaiius cerrítos aislados y trasformados des^
poes en una estreclia hilera ; corre paralela á la cordillera dd inte-
rior, y sus mas elevadas cumbres no esceden 800 varas de eleva-^
don sobie el nivel del xaar. En esta furovincia va hasta el río Cbir-
^ua, que nace en el cerro situado al respaldo del valle de Tacasn-^
xoma.
De la cordillera de la costa van di-rectamente ak mar .24 rios^^fne
dan origen á otros tantos valles, ya anchos y largos, ya es^%cbo6 y
cortos, pero que todos pdtden ser regados pw. medio de eUos : /nin-
guno es navegable , si se esceptúa el Yaracui , por el cual puadien
Irajár las .producciones de Barqutsimeto. Las aguas qne se descnel-
. igan de la parte meridional de la serranía de la costa y de la de Nír-
. :jguay toman dos direcciones , una hacia el lago-de Valencia» ^a
.Atravesando los llanos hádala Portuguesa* Las.primeras ««eatan S
xlos ; el principal aunque peqseno es el de Valencia*.. Las .sc^§«»das
22 rios ; el principal de los^uales es el Cfairgna^^ que loma ^x^i^a
en la serranía de su «nombre^ cae al Pae^ pasando; por i»Da.4ibr<afde
esta serranía y desagua en la PortogiiGfia , siend» navega&lr iMf ta
cerca de la viUa del Pao mismo*
f.
— sw^ —
CMi* odfdiHertí qae llaiDaiiiQ$ d«l interior, «e desfsreodtt 20
ms ; y escoplo- 4 (|ue vaa el l«go de ¥«kiicía, ios dm&n descMfgan
Mi9;ag|]aftieo la fartjoguesa. £1 mas grande deeUes w^AxorkiC^ir'
9U<fiie«ífv0 de f»T« di/V4SOfta,eon la j»rovtaciade€amcaa,f se
<iNrigí«a «I d oenro'del Painiar , que encierra ti frilt de Twwn-
£1 prioeii^i |J0 4e eflta previncja es d Cnjédes y que lo íoraa el
fMrfde BarqiiísJBMto, el etial al uairsea] de fivia (qué v<rdad«ra«-
waole debía Ihunafae rio de Nirgna) tona el nomlire de rio4e la
Boea j faaata qpe^eroa del pueblo de Ccjédes , adqskre eribi aom*
irte ; 'oao ¿I va i presealar ««s ajms á la iPoriitgiieea. A 4'4e9aas
.abajo del piioblode€oiédes,«ael p«a4o ]laf»idoAg«fieai,«ii^eza
.á iSer oavagable iiasia su deseinbocaditfía. £8te río, el prínaeio en
la províaeia , 4ieae su rasgo en los de .segando óideo. en la vapú-
bUreá» míéatitts.que los demás no son <á ano de ieroer lórdmi^ El
número total de los ríos de este (erriiorío es de 74^ de 4° ónéen ,
.«Btise los enales uQo,de 2«qne es el €ojádes,ain eonsMemriBnltitad
<tde iqnehBadbs-ó mebnelos en námero de mas de 1#0.
LACOS T LAGUNAS.
El lago de Valencia ^ Jlamado antiguamente por Ins ándígeiqas
Xacarigna^ lOstá á la altura 4e M\7 varussohre el nivel del miV,
y la jmte inas baja del >fondo á 4^0. A este lieroMiso eat^whque
debm los ricos vnlles de ixngiia sn gmn férUídad^ fnea. su
constante evtaponMsioo fdr.eiporcioaa aqneUa bumodad neoeaeiáa íl la
vida vegetali dándole vigor para sn desarcollo y mitigando la fti^rza
dnl«>l .de los ijc^ks». Está árenndado de cerros ; al .N« josté^ la
Meseta , Mariam , Ttelamo y Oeumace y Pataaemo le sepaJW^Ae la
oosíta del xnar de ks ántiUa^ : al $. Guacamaya , Ynnia , iktro-
..A«d y Queipa lo «írvan debalnacto eootra los viontos abrosadpres
4e Jos alanos, y wmos gr^es de eelmasdeleraiinan el-onvsn de
las apiaa«cer«MDudo<el<»r€Niíto jpor el E. yfM>r el 0^ iios iQianhii^los
4e ios uraUosido^^kffaina , en nóoftevo ido M ., Aumentan (^¿««fiqne
. timieja leiins de; oiif«rftiiá# y 12 Mas i^n eUa. i«a.fHdHi$Jipaidoiasta8
«os la iala^l Boceo, qn^ ti«iae 2 ftm¡Knsi4e Joirgo ; la ido Ja ¡Gnlibra
jque oíanla inMdia l^na ; lasi do Gaifujoe y Otajaw^ ^ de matiiiiUa
t .Mdaiuna ; i^bandMugne , ^nn #000 jum- patnona iqno eataa , /Uírtible
ofMiro«(ftttarn^pBoa
82 varas sobre la superCcie del agua. Menos de media milla tienen
las de Brojita , Cura ; Homo y Zorro ; algunos centenares de raras,
Cabo-Blanco , Vagre , Araguato ^ Pan de Azúcar , Fraile , Cucara-
cha , Hormiga y Cotúa. Hai ademas las peñas llamadas Vagrecílos ,
cerca de la isla del vagre ; los Monacillos , que son dos peñascos á
las inmediaciones de la isla del Fraile; el de Cucarachita, cerca de
la Cucaracha ; la Hormiguita , entre la Hormiga y la Cotúa , y por
último , la peña que queda frente á la Cabrera. En estas no está
comprendida la hermosa laja que se levanta sobre un fondo de
granito , entre el morro de Guacara y el islote de Cabo-Blanco ,
cerca de dos varas sobre la superficie del agua , casi perpendicular
en forma de una gran mesa cuadrada , perfectamente lisa y del es-
pesor de mas de dos píes , pudíendo considerársele como un ni-
lómetro natural , al cual solo falta marcar los pies y pulgadas para
que indique exactamente el aumento , ó mas bien la diminución
anual del lago.
La esperiencia de casi un siglo; ha probado que no es constante el
nivel de hs aguas^y que falta ya el equilibrio entre el producto de ja
evaporación y el de las aguas que alimentan el lago. La vista del suelo
del pasoxie la Cabrera y el déla vuelta del Auyamal, prueban que
hasta allí llegaban las aguas y que la península de la Cabrera erajin-
tiguamente isla, así como el morro de Guacara y los cerritos próxi-
mos á este pueblo. Lo mismo se observa en el terreno que medía
entre Valencia y GQigüe y en los montecillos que se elevan en me-
dio de la llanura que está al E. del caño de Camburí ; de los cuales
algunos como la isla de la Negra ó Corotopona de los indios , han
conservado el nombre de islas , estando en tierra firme , loque
prueba bastante que ]¿s aguas se han retirado mucho desde el
tiempo de Oviedo , quien en su historia publicada en Á 725 , da al
lago Á 4 leguas de largo , que igualan á^^/^ ác las actuales si las
A A eran de las de 5.000 varas conocidas en el pais , y asegura que
distaba solo medía legua de Valencia. Actualmente se halla el lago
á dos leguas de esta ciudad y su mayor largo es de 9 leguas de 20
al gradó. Antiguamente para ir á GúígQe, se pasaba por las tierras
de los Aguacates , por las cumbres se iba al valle de Noguera ^ y
por la cresta de la serranía que mira al lago , se pasaba á aquel
pueblo ; lo cual prueba , que los terrenos hoi cubiertos de hacien-
das y caserías , estaban entonces oícopados por las aguas. Hai otra
prueba en los documentos de los indios áá pueblo dé los Guayos^
— 5^5 —
€iiyo9 egidos bácia el lago se estienden una legna que llegaba
basta la misma orilla , cuando bol pasa de 4 millas. Gomo el ter-
reno que rodea el lago es sumamente plano y liso ; resulta que la
diminución de algunas pulgadas en el nivel de las aguas, deja en
seco un yaslo trecho del suelo, cubierto de limo fértil y de des-
pojos orgánicos. A me£daque el lago se retira, los labradores ade-
lantan hacia el nsevo borde, y á la retirada progresiya de las aguas
se deben las hermosas y ricas campiñas de S. Joaquín , Guacara y
los Guayos, Valencia, Gtigüe, Magdaleno, Santa Cruz, Gaguay
Maracai , plai^adas de tabaco , ca9a dulce , café , añil , cacao , al-
godón ^^ maiz , plátano y toda especie de verduras y frutas. La pro-
fundidad media del lago es de 45 brazas y los sitios mas profundos
no tienen mas de 57.
La superficie de los terrenos , cuyas aguas van al lago, es de
86 1. c. y y como en ellos caen anualmente 72 pulgadas de agua ,
resultaría que si en un año no hubiese filtración ni eyaporacion
(cosa imposible) , se ensancharía el lago cerca de una legua , y se
alargaría mas de 5 , batiendo sus olas en los cerrítos de S. Joa-
quín , al pié de Maracai y cerca del morro de Valencia , reconvir-
tiéndose en islas , la Gascabel , la Negra , la Gabrera , el morro de
Guacara y los cerritos cerca de este pueblo : el terreno de Gdigüe
formaría otra vez parte del lago. Este es el resultado de machas
nivelaciones barométricas, ejecutadas en la circunferencia del lago,
que es de 25 leguas , tomando de punta á punta. Sus aguas son
salobres , mantienen constantemente unatamperatara un poeo mas
baja que la del aire, sin duda porque una masa de agaa tan con-
siderable no puede seguir con igual rapidez las mutaciones de la
atmósfera y porque recibe el lago arroyosj'rios de las montañas in-
mediatas, flai abundancia de pes^ , pero solo de tres clases , cuya
carne es blanda é insípida : y son la guabina, el vagre y la sar-
dina. Seria de desearse que se pusiese en ejecución el proyecto de
poblar el lago de las muchas calidades de pezes que se dan en los
ríos que atraviesan los llano» y que las tortugas y terecayes viniesen
á ser habitadores suyos. Es bastante notable que en él y en todo el
sistema éesús tritatarios no haya caimanes > á pesar de que este
peligroso animal abunda á pocas leguas de alU, en las aguas que
caen al Apure ó directamente alnnir de las Antillas; solo hai algu-
nas pequeñas babas, especie de caimán que no es leroz.
Es también notable la calidad del tenreno de los contornos del
lnfD^M haa fcnawpaéo fas ^gms , el Mil MálliM ie ptfHííos
canusaks bkacos, q«e cmi oo^^M ff«r«tta«spMie46 liemqüe
füsáBHM^s, <»fo folvo fin liftJscvUflMlile, qBeii«oe el afecto
de iosfei«4e»áe la iMvplea , y lüi iiiiirfiifci ■MÜ^fl^peBrafJMrjqae
'Doprofemí 4elaciHMltt,flnoHwbÍMi4el áaeeeler^eéaiála ea
elfa^pMS&UéiMMbkikfnnÉdadMQnttMddi^paM en
émáe él vife, MieaMeine , 7 redaoido á<foho tepenapüble ,
pmaie ser la «a«sa de la uno •waeían q«mniiiyrimfii^ «gando
iae peqwiasfMliciilis.de «¡«eHúeafttel pWeío Imaww ; ¡panqué
n# «aeede lo mumOitm el'éMreae^pM 4iee>MMlio XwBfo«stá
ahaadeaado, «uHWfie lea pactos ó>siHrAragaMBlDsqiie.4ia«B«flDlor
' hlsa^aoriao á ia t«rm no 4l^a la amsot áeda ^«eMiriiMBino
caracol pulverizado.
i Los &refi. fiovsfiíiipoU y Riviaro tea wnaMaHi «1 ^agaa del
JU^o, y «aeoBliiiraa^iae kam ^^tí de cagtiaaaéeáe aosa y deíaiag-
nssía ^ «de- muríate) de sosa y de^^ailMe y eaobeaate ée eaL
ia wto del'to9e.«s píaiol«sQaa Jas Jalas «0Q«sas.M6SB{eBtte^tas
/4e folUje, iS9B fii^ablsttieate iMBcaaMs, y mSlaaesdbB srauaesnti-
*isas>^e ^«ViA 911 ias'«nllas ó atearósaa «d la^o , H»oipletm la
^peupectiva* tas ansiitaaas ^«e lo «draamiaii , idu ai paíafeüiDa
visla faniada y'baltoi Uu qoe^iattaan friáas ^láaia cía— dioto ,
.«8^«iibffei4as4s psjaeaft JcaMhaside4MH^p»^i]eeauiiaalia:coii
J# ssc^^del iemoa y los fiBaGÍMs«leiaMdas ide la semak. Xas
4fm'üemHí sasáridas vastes al salasÉríoa , sao por lo'^aaiaisias
iniadesas,(aiMfaesw»kB:ialÉatt^flaiiiBia» oaibiertas de graasáMtasqae
vfiUieaatetiOi6o«»»inti]B»'lnacara. B«mMdteeee.q«eaáfcin-
<ñpí».dd iaia^ «oaádo elaal eKá en s«.dédía»ciaD «ascicttMal ,
:las>ODestasqtte oadea^^ á \^iAmm^ Crvacara , S-iiiquiw ydHamcai
' astin «toasadas for los nf os^sM aei^ niirfalrasqws las qfiM^aeiía-
.yan al iadoop«estodal;is@o eaiae tos J^gamAes, ^SAigÉe y itaida-
laaa ^ irecibeB «aai.tos mates <fae«HÉPaQiei ai «aHe por^A jÉsa de
! Agnacntieate o ^eitárbola, na ^aípeifaD aÉrmesa>^Iás9a>7«gtte
^i^está íiapiwfaaile 4e ^fipsrest asaaaas.
. iaaicaraaiitts del tegoi^io aaftinri saaaaaiaaaBaÉdaíiMÍ «aattsa*
.iqaadsd ^ fieafne rmlámtai dipiínilasi aplasJMk «tt^istíilA^aaaiieno
'f4^(|aMsto^ laaaivsaefhuaKfias*
k ia ffnaviaisaide42aréi»«f«itaMM^
lago, y eaaiaa km mu ásla^<wi6l<^^:4as.|itisffafl ftiHiagri^
, .aiaigadawste<tei»yJcadefiiiii^o>*aat» los
' 'iÉaf»r«iidii]i«itieae'4 le9at8,'dedde'kieii8eB«^
: hwám i la ¡had^nda 4e Vuwa.
IfwSii&fasimis M esfeoeairattca Im Uanas^tieí P«o, S. hartos y
el^ftasl/^e-nrren fialia beher tesanianleacii la «stcmeu-de'^ñe-
' Mi»:; HMMbi9«e^eeaii y^ms eaiiscrvM MMJif uaft 4 pen^^su-taMiSo
«fl'tnf>^l]eao7^qlte no fasa de 200 á «M varas; y BO^meroaen,
' «por Aaalo^ <oaa: paf4íeaiar «eooioB.
CUMA*
:£i 4e Jqi.pDdviaoia 4e Car^bebe «s^^oaerakaeBite «ano. Sua faar-
rttafiaa'lkQftfastii&ftufrfiiii tebres, stts seri»fiías^)zaQ-da«aotaia
' teaiipiada y de «Hia coaAmitie inimavera ; ten ae46'cerca 4a la^ooita
f«efQa«iMUra«ii éeoiple «ai iUAO/'eB laaüia»taoafr.i|4ie bafliA»el
Morón , el Alpargaten y el Urama baslB «1 YftDMii» Jtista-wowltjía
suele llamarse de Sania María ó de S. Felipe. Ciertamente que no
hai en ella ua temperamanU) saladable, paro ^ insalubridad no
es peligrosa, y solo en la estación de las lluvias suele haber allí al-
rfMaaK)«lenliin&. TaaluagateíMtto^^ éei^U iparte'iMi|« y ««agada
r4eia sehra f «a^aiibo^ar tosvcrfias'CnlúeriattamrfiMaddiiaftla^^
lM)90(adoa, fa cd dima asiüslanto y nodebea tcasnrse lastlabnes.
(A Yezes «oeieii «steB opareoer en jia mala «del Ma de tfétanrtMcr y
>1?iiriama ; petado ée Ma csaaera pfciodíea y peU^posa^ puos^en
• 'teios efllaa:p«nlos iiai tehitaeteaes y .paMUoscpie ip4#aii coaAeaéos
-6af4BédR)«deai9«dtofH^aJidas>4Soledaii^ riMitteiite:aéoniadaf^r
ana inCnidad de grandes y variados vegetales.
MTJWEMiN HE' tBmSRffO.
En la parte de la serranía de Nirgua el invierno empieza en mayo
y acaba en noviembre ; en la |)iarXe montañosa » hacia la costa ,
empieza en abril y dura hasta setiembre : en la llanura y demás
. (j^Biest^da la aarrapía, 'desde pctnaipios 4e 91990 ftia^a iufs de
(AJ|0MH^ba«a$ qvMlan íiiatidadas;maaadbi(ia 4t\ ^má\ ^ ^m 4fliu-
^tett'se temaftcalero&9 ifiaaihMSiaispraeeDtaa eBtáÉcaaHM abco
Aim fcMDOK y las paMe6««l«fada6'«»li% laosid y tafg^Ara^áel
.)iIlBe^d.pé6íde^tayd8Ja édBoL TaíÉasleaiBBaKí dpáwnaHa-
— 596 —
nas están de nado eu la ¿poea del ioYÍerno^ y ^^ nns razón los
ríos, de manera qoe se hace fastidioso el tránsito ; pero á medida
qne la Portuguesa , que es el rio que recibe todas las aguas de la
ilanura , puede entrar en el Apure 6 salirse de su canee; bajan los
caños y rios y quedan con poca agua , desaparecen con la fuerza
del sol los esteros y solo subsisten con agua algunas pequeñas lagu-
nas. Pocos dias de buen tiempo bastan para poder atraTOsar en
todas direcciones unas sabanas que en muchas partes eran antes
intransitables.
Los caminos de la serranía son buenos aun después de fuertes
lluvias , pero no sucede así en aquellos cubiertos de espesos bo^
ques, que por lo general se ponen tan fragosos, que á vezes no se
puede pasar por ellos sin esponerse. Duran los barriales y atasca-
deros mucho tiempo después de las lluvias , porque los rayos del
sol no pueden penetrar y dar calor al suelo y que está cubierto de
una espesa bóveda de verdura.
DIVISIÓN TBRaiTORIAL T PRODUCCIONES.
La provincia de Garabobo se divide en 7 cantones , con-l^s nom-
bres de Valencia , Puerto-Cabello , Ocumare , Montalban, Nirgua^
S. Garlos y Pao , que tienen ^5 parroquias y 90 sitios ó grandes
Tedndarios. En este territorio se cultiva mucho café , cacao , algo-
don j caM dulce, f abaco, maiz , yuca , plátano , cambare , ñames,
arroz, fríjoles, tapiramos, oeumos, quincbonchos, apios, carao-
tas , alverjas , papas y repollos, toda clase de hortaliza y delicadas
frutas.
El total de la población de esta provincia se puede dividir de
te modo, ^ que se <
al comercio , artes etc.
este modo, ^ que se dedican á la agricultura , -j— á la cria y * *
I oo
COafERCIO.
Después de la Guaira, Puerto-Cabello es el mercado mas fre-
cuentado por los europeos, los norte-americanos, los habitantes de
las Antillas y de algunos puntos de la Costa-Firme, recibiendo to-
da clase de mercancías, y exportando café , cacao, añil , cueros ,
•azúcar, algodón y tabaco. Tiene comercia esta provinda con la de
Barquisimeto, recibiendo cacao, café v cueros, y dando en cambio
— 597 —
dinero y mercancías ; también con la de Barinas , de la que redbe
aüíl, cueros, cacao, burros y cerdos, y en cambio devuelve lo que
da á la de Barquisimeto. El comercio con la provincia de Apure e»
de ganado, queso , sebo , cbigüire, pescado ; enviando á ella sal,
dulce, casabe, plátanos, aguardiente, maiz, arroz y toda especie de
mercancías. IJltimamente, de la provincia de Caracas se recibe di*
ñero y toda especie de mercancías, dando en cambio maiz, casabe,
menestras, aguardiente de cana, cordobanes y dinero.
CIUDADES T VILLAS.
CANTÓN DE VALENCIA.
Valencia , capital de Garabobo , única provincia que lleva el
nombre de una batalla gloriosa. Así se llama el campo en que se
decidió la entera independencia de este pais , su irrevocable eman-
cipación de la metrópoli y la destrucción del poder español en
Costa-Firme ; alli espiró una dominación de tres centurias, adqui-
rida por el crimen, mantenida por los abusos y defendida en una
lucha sangrienta con cuantos medios sugiere la nialdad ayudada
por el poder y animada por la venganza. Valencia fué fundada en
•1555 bajo el gobierno de Yillacinda, por Alonso Diaz Moreno, y es
•12 años n)as antigua que Caracas. Se encuentra en la latitud de
ÍO** -lOM V^ y en la longitud ^o 9/ ^tf al o. del meridiano de Ca-
racas, á 565 varas sobre el nivel del mar. ^encia ofrece algunos
recuerdos históricos. Lope de Aguirre , llamado el Tirano , bajó
del Perú en -1 56^ por el Amazonas , vino á Margarita y de allí se
introdujo por Borburata á los valles de Aragua. Cuando entró en
Valencia, proclamó la independencia del pais y la deposición de
Felipe 11. En los tiempos de su libertad , se vio elegida capital de
la república en dos épocas mui memorables en los fastos de la his-
toria, después de la proclamación de la independencia en '1 8^2, y
en 4 850, cuando regenerándose Venezuela, se separó del resto de
Colombia. Valencia está colocada de las primeras, en el número de
las ciudades que no eseusaron sacrificios por la independencia, y
entre muchos rasgos de vsjjor heroico que puede presentar al mun-
— 5f «
d(KiMM BMiBií^siBcim^de BU k polüica y dta eafl^ OQpdte;krs ríg»«*
roJtBsÜio» g»tottida»eii^ i »IA¿ Pisarán miieluiagiMiQncioBcs^á&Ut
qm e^lft beBemériía pal>te€Mn, llamaás antes k CüimímÍicU itaí,
por escwleneia, s» reeobi^de las malas qve le kizo «ii£pir.sii.deGÍH
dide aiBor i la liberted y los f encvoma sacrifieioa de^ si» y|os. La
nuevafefleraetoa proba el «iío de'4855 que eraiiiiBato «s^la .d
Talor^ y que do oedian á sos fiadres en amor á la bberlad^ poea «■
puñado de jóvenes se defondió beróícaniOTte contra Im .mejona
tropas, hasta que fueron libertados del sitio que sufrían.
La ciudad está fundada en un terreno llano, pero que tiene dos
declives, uno de E. á O. y otro de N. á S, y ambos van á concluir
en las orillas del rio de Valencia. Estos declives son mui suaves,
y se puede decir que la ciudad ^stá sobre una hermosa esplanada
que se encuentra á la entrada del valle que baña el rio de Valen-
cia y que empieza al pié de la serranía de Puerto-Cabello. Las ve-
ga^ del río ofrecen basta la falda de la serranía de la costa terrenos
útifes para el cultivo ; pero después el resto se compone de sabanas
que se estiqndcn no solamente en la hermosa llanura sino también
que arropan , por decirio así , los dos ramales que vienen de la
gran cadena, uno de los cuales se conoce con el nombre de Cerros
de S. Diego que presentan una cuchilla en forma de dientes de sier-
ra; otro coa el nombre de Cerros de Guataparo que es una fila mas
unida y que se eleva sensiblemente a medida que se aproiiima á la
serranía , mientras que aqqel se rebaja considerablemente y foram
él portachuelo de S. Diego : queda este casi E. y O. con la abra
de Aguacaliénte, la cualdivide.absolutamentela serranía de Nírgua,
y Chirgua de ta de Puerlo-Cabellp y Ocumare. Por esta, abra que
C(»Tcfuce á la costa , peftelra todas las tardes un viento fresco del
mar, que se estiende después sobre los valle$ de Aragua. La direc-
ción primera es hacía los Agpacates, tan luego como sale dé en
medio de los cerros que forman el valle de Valencia , y allí depo-
sita las partículas acuosas que ha llevado de la mar ; así es, que en
aquel punto suele llover mas que en Iqs opuestos y la serranía pre-
senta una vegetación mas lujosa. Esta barrera de cerros que se
opone al viento, lo hace torcer hacia el lago y de allí se diriíge
siempre hacia los cerros de Güigüe que tienen una vegetación ro*
busta y verde, cuando al opuesto los de Guacara y S. Joaquín tie-
nen sus cuestas peladas y casi desnudas de grandes vegetales. Eil
el punto en que ía ciudad está construidsl , se avanzan dOs cerros
quQKmiflioaApeniM de ios dosnannbi ámaUlos : e) <»iaitiAvs«t'
Uama el Morro, cubierto de una hermosa vegetacioi^; en la ««al «a
desnktvtt enomas peüaseoscakácQOs; el opuasto-cs en forma de
pezBD ^ lapiEadO'aQkmeate de paja, co» medio de la cual se elemí
las gcandet hojas del akifi<eueDÍ y toiatgoeTásIagofrde «asieres.
£1 -rif^desGnbe -ua aree al rcdedar de la eiodad y lieoe impneBle
hermoso que hizotonslniip el geoefal llorido Goeiido TaieBcía era
sa cuartel general* en -1 820.
E$U dudad eatá< per todaa parles rodeada de.hennesaa 'Ihmiirat.
coa alia» gremÍBeae> y ea medio de>ellas no Daltan peqveilee bes-
queriUes qne adornan, loseajtos que his ataravieBan* SI se esti^ide;
la Tísla al N«) se rea los cerros de Pinrto*Cabello ; en parte llenes
de gnmínaaa y en. parte de espesos bosques y sobre los coalas se
ele¥anJa3 Tcftas'de Hilaria ; abS. si* sedhnge á maforéislatteki,
coQieai^n losc^rres de, los Agualates y (íaelpa cubierlos de selw
vas^ y losd&NagoeFa tapiaidosde«yeriMiBO0A manebas de verdura ;
miéaU*as.qoe al ponieüte. laaiaidas de^nna^serrania pelada se diH-<
gen- bácte CaiabofaO; dejando nn. boriionte iodelermiaado qve
ocalta aquellos campos gloriosos. Al oriente , la serranía uo-enlmi •
la vasta eiSaaaion q«e:oeBpa!«l; hermosa laga qve desde algnaa
peqadki caáneneía se deseabreeBilodft sa bellesa , y los cerros de>
GñigOe y loa dé Magdaleno'se ven< asóles , termin«Bde la perspeo-
Uva los de la Victoria que se confunden entre el ciclo y un horl^
zonte oscuro. La posición de Valencia es bella por sí, y sobremanera
interesante, tanto para^tt^asporiarsoairalos al mejor puerto habi-
litado (del cual disla solamente 8 leguas por v\ camino del cerro)
cuanto porsuaprosiaiacien.al lago>, coyas tierras foiriíKámas son
el granero da taspra? lodasde Carabobo y Camas*. Si le es ntílf-
sima la iamediaicidná) estos terrones , lO' esean mas la de las ser-
raniasveóiias 'que proporcionan puntos cvllivables^y de que sabe^
el cullítadODaproasebanet Ne salarorate merece Valeaeia ser epie-
ciada pQc«su clímft<y i8«4ecrcnoy staeitsailísntipor saposlclon ee<*
meotíalL^Todole que viene del inteiÍDr del peisfaira'SSP'embareade
por "Pnertoi^CidiellQ , paui por Valeneia*^ Casi ledos los caalenes de
las pionanaade Bacinas y Baiifaisimeto hasas-sacemerofo pasan-
do por Valeaaia^ y todoa los cantones' del. interior ^de la provincia
misam tienen qne pasar pee allL S^s habüíalss' en náiaero'de*
4 6,0áN>ae dedican Al :tnibaíOf^ y sobre^toda^ á la agrimiUitra y al
conwcíQv y so índoaüda ha hooho^oaoibhur e» pocas<i^los los^bos*
— 400 —
qaes en haciendas y los escombros en grandes y cómodas casas que
hermosean la ciudad.
Valencia tiene un colegio y Tartas escuelas , y nna primaría es
la mejor de la provincia. Hai un beaterío de carmelitas donde se
ensefian á las níilas varias materias que forman su educación , y
una escuela destinada esdusivamente al bello sexo , la cual corres-
ponde bien á las esperanzas de los padres de familia.
£1 clima de Valencia es mui sano, el cielo puro y sereno ; y el
calor es refrescado por las brisas que vienen de la hermosa abra de
Puerto-Cabello ó que pasan por el valle del Tui ó por el pintoresco
lago de Tacarígua. En la misma abra, en el punto de águacaliente,
hai unas aguas termales que se consideran las mas calientes del
mundo. En el cerro de Guacamaya , próximo á la ciudad, existe
una cueva mui singular, y no pequeña, que es debida á la descom-
posición de la cal de que se compone el cerro. En ciertos parajes la
ciudad está infestada de bachacos, hormigas destructoras de la zona
tórrida, que viven en ámade hai una tierra gredosa colorada, y sus
escavaciones á vezes son tan grandes, que parecen conductos sub-
terráneos.
#
Valencia es cabezera del cantón de su nombre : la ciudad se di-
vide en dos parroquias , y hai ademas las que forman los pueblos
de Gúigúe, Tocuyito, Naguanagua, S. Diego, Guayos, Guacara jr
S. Joaquín.
CANTÓN DE PUBRTO-CABELLO.
Puerto y plaza fuerte en otros tiempos. La parte fortificada for-
maba una isla que cociunicaba con el continente por un puente
levadizo. A consecuencia de la revolución del año de \ 855, fueron
demolidas las fortificaciones de la ciudad , y solo ba quedado una
batería que está á la entrada del puerto y el castillo de 6. Fer*
nando, ó Libertador, hoi desartillado y sin guarnición. El puerta
es escelente y debe su nombre á la exageración que hicieron de la
constante tranquilidad de sus aguas y de su abrígo , los primeros
que lo visitaron, diciendo que los buques podían estar seguros en
él , anclados con un cabello. Fué fundado en su origen por los tra-
ficantes contrabandistas que visitaban aquellas costas, los cuales por
convei^rles hacer clandestinamente sus desembarques, evitaban lo^
puertos nms frecuentados^ y eligieron por punto de sus operaciones
— 40Í —
el sitio en que actnaiineiite se baila la ciudad. En aqoeHos tiempos
Borbnrata era el puerto de Venezuela y habla allí una población
cuando en Poerto*Cabello solo existían unas chozas de miserables
pescadores; en el dia es viceversa. Este puerto es el mejor de estas
costas, si se esceptúa el desierto de Mochima. La bahía es ancha y
hermosa, cómoda y segura ; puede dar anclaje á toda una armada ;
está defendida contra todos los vientos.; la tierra que la rodea al
S., al E y al O. está tan felizmente dispuesta por la naturaleza, que
nada siente de la impetuosidad del viento del N. £. tan común en
aquel mar. Las agitaciones que continuamente prevalecen con
mayor ó menor violencia en los mares del trópico , ni siquiera la
tocan, y antes se diría que era una laguna que un puerto. Las ondas
nunca perturban la tranquilidad de su rada. El anclaje , que nada
debe al arte, es tan cómodo, que los navios mas grandes pueden ir
junto al muelle y cargar ó descargar sin ayuda de barcos. Puerto-
Cabello es el primer lugar que se ha dedicado á ornatos públicos
y de utilidad ; tiene un hermoso muelle y una plaza pintoresca
frente al puerto. La ciudad presenta del lado del mar un aspecto
risueño y agradable : Montañas cubiertas de vegetación y coronadas
por las Tetas de Hilaria forman el fondo de la pintura. Cerca de
la costa todo es estéril , blanco y sumamente iluminado, mientras
que el parapeto de montañas está revestido de árboles de espeso
follaje que estienden su frondosidad hasta la tierra morena y pe-
ñascosa.
Un acueducto de 5.000 varas de largo conduce á la ciudad las
aguas del río S. Esteban. Antiguamente Puerto-Cabello estaba di-
vidido en dos partes ; la interior resguardada por una muralla ar-
tillada, y la esterior abierta ; pero en el^ia forma una sola y va
progresando cada vez mas. Este puerto es el depósito de las. pro-
vincias de Carabobo, Barquisimeto y parte de la de Barinas.
£1 clima de Puerto-Cabello es menos cálido que el de la Guaira.
£1 viento en aquel punto es mas fuerte que en este , mas frecuente
y mas uniforme. Las casas no están fabricadas sobre rocas qne ab*
sorben el calor del sol durante el dia y lo despiden durante la no-
che. El aire circula con mayor facilidad entre la costa y las mon-
tañas de Hilaria. Dos cosas son, sin embargo, necesarias en Pn^to-
Cabello ; una el mantener un buen fondo á su hermoso puerto ,
procurando que no se llene de tierra ni de arenas acareadas por
las aguas que descienden de los cerros , y la otra impedir que los
P. QBO«. M
laanglw^^-csláaá bMteir«ii(t> M Begoeü i émmiít mmwmmpe^
lUeotos^ ^e tegift perder ia Étfaibrídad de ^|m f om «qnel fwoMtu
wmoiesáeisaim^^fvt Im agMs, ó Meas per ios ardoiea «tel ^ »
produoeB eaiaMiickmea que {Medéo áat ealmiteras rntermileiitos, y
así misaie puedea originarlas aqaeUos terreóos ftte ^nedaR^ne*
gldos eotre Poerte-Cabello y Berborala. Hai nigoaas sattsas «enea
éa Paorto-Oabelle , q«e se beñefídaa anualmeBle , datido unía sal
4e eopwmi ma\ blaaca^
Las paiVoqAías de este oantea seo , Pttsrto>-€abdto, fiimgtusa>.
liorea , Berboraia y PatueoMb
La vUla da Qco&Qare está situada es un valle fertilbimo y frott^
doso, formado por ei rio de sa iiMQbre, ea cayas F<f as está platt^
luda la pobkNHon. Una tieita llaaa y líea se estiende cablerta de
vegetadon hacia la orilla del mar, coytis playas distaii solo dio^
miilas. AlU está el peerto IJiamado de Ocamare , que es na esoe*
lenle fondeadero, memorable porque efi 1S46 hizo en él su se-^
ganob desembarco el general Bolívar ; con un pniíado de vafien-
In para liberiar su patria. Por el poniente uAos cerros eleyados y
adornados de un espeso follaje de agigantados árboles , casi se^mieír
á los del valle, cuya estrechura y tortuosidad no presentan vítñ^
gnna bella perspectiva al S. j sino una alta y enorme masa de ne-
gra vegelacton ; mientras que al oriente les contrafuertes déla ser>-
Kmía se avanzan para dar una vista algo esteñdlda pero mtii trtf!'-
larme : por allí se encn^tran valles fera^sescon hermosas liaciea-
te que todas tienen la ventaja de poder embarcad sus frutos á la
orilla del mar, dd cual distan poeo.
. El temperamento es cáiido pero aftgo refrescado por los vienfos
M mar. En dertas apocas suele haber al^funas calenturas debidas
á los tirrrmios eenagósois y á los bosques que Hcfnei barloveuto,
peto eso 'AO >eB Ti^ueníte.
Las parroquias son , <Oeumate , Cata -, <%fegiia y Td^Bitíto.
-* 4110
cAHVeN DB mh^oirA.
ía oíuéad de NívgMy ó Niraa delCoNido, «b ai«i aiiti|g«a. tel
Mbitanles, hauy^r forte goite de oelor, oibta?ieiioB del reí ^ li<
Udd de^e^ y /aa/e» ffOiátl^s. Fu4 fondada en f SKIS sobre M
feüqcRiB die la cisded de las f^itoas y abanéraada per «I capíMí
iüego f anida. Bxisftw n«i poco tiempo y sm taariadoves m rMh-
giqpon «a Barqoimieto , á oaosa de la mvwíob de loa iodiüs ii»«
áetes. DesfMies volvió á pd>tairki el capitán Diega Rdmero co« coli^i
nos de^ la raivcbería de tas nuias, eíkAh^^ «n téeamio del gobn»*
Mdor Collado, trastriéndola al r¡0 Nii^gva con el wfflkbna de N«eirtf
}ei'ez , que tampoco subsisiéó por las hoatíttdadesde tos indígenaSi
SEDO basta el 2^ de ^ 568. Eq A 5^ de orden del goberoador D.
Pedro POAce de h^úskj la voütM á leedificar Jttan de Mota : espera
Baent^ esta los mismos contratieoifios^ hasta cp]e<» -1628; con el
general esterminio de los Jiraharas, la pobló el gobernador D. Juan
de Meuéses y Padilla en la parte donde hoi permanece con el nom-
bre de Nuestra Señora de la Victoria del prado de Talavera : su
posidon es en^on llano alto y pÓFOtovesco , circiindado de cerros ,
en ei cual serpentea 'd río de su Bombre.
Las cimas del cerro de Santa-María y ei picacho de Nírgaa, íor*-
man una barrera peñascosa y de difieil aoceso, mientras que la vista
de otros cerros que se ven en todas diceeciow» dan al paisaje tiii
a^>epto rísaeio.
So cuma es fresco y saludable, y los calores de la zona tórrida so»
áiiigados per los vieolos que desdenwton de las serraníae cffounwBi-
oins. Cuando lasisekas y vtilesiqve hüitapaten yermos ,eal¿n des«^
mentados y «ubiertos de poblaciones y fafaeieodas , «atónees esta
viUa podcá florecer, y su posíeieii lerá tanto mas interesante,
coai^ qse estará «B el camlbo^ae dobeür de los vaUos deS. Pa^
Mpe áilos dé WMenela.
Las pamiqtiiaB de oie anüott^son', Mi^gsa , ItaiMila , Cabria y'
Xaría.
UviUadeMoalalbaAeatá sitoada alfJ¿de^«i)«m)e,.#o w^
Uftiiora á la oriJla del rio de su nombre. Por mía firisM
— 404 —
le sinre de barrera para que no lleguen á este delicioso Talle los
Tientos que han pasado sobre las montadas pestíferas de la costa^
mientras que al frente, en lejana perspectiva , se Ten los cerros pe-
lados que se estienden en dirección á S. Carlos, y á los costados
mas próximos se elevan las cimas del Talle de Gtrgna y mas lejanas
las del de Nirgua. £1 buen temperamento de Montalban y sus fe-
razes terrenos le bacen un punto interesaote ; y si bien ahora tiene
pocas tierras cultÍTadas , le quedan inmensas seWas que se pierden
sobre el mar y que una Tez desmontadas harán cesar las calenturas
tercianas que allí suelen dar, por los derrames de los rios y por una
TÍgorosa Tegelacion que impide que los rayos del sol sequeo los ter-
renos pantanosos. Guando aquella tierra TÍrgen y fértil , en la que
se puede decir que casi prospera sin trabajo el café , se halle sem*
brada dé plaotaciones y haciendas , Montalban será entonces una
ciudad populosa, donde se gozará de un clima dulce y saludable.
Las parroquias de este cantón son, Montalban, Ganuao y Drama.
CANTÓN DE SAN CÁKLOS.
La ciudad de S. Garlos se encuentra cerca del rio^de su nombre,
en una hermosa sabana con colinas cercanas que le sirTen de ador-
no y son las que dan principio á la famosa barrera de los llanos,
llamada galera, que se estiende paralela á la cordillera del inte-
rior, costeando las sabanas de Garabobo y de Caracas hasta perderse
sobre el Guárico cerca de Gamatagua. En lejana perspectiTa están
los cerros que forman la serranía de Nirgua y los que se dirigen á
formar la del Pao, llamada serranía del interior. S. Garlos está si-
tuado en el desembocadopo del camino de la serranía y en el que
conduce al occidente de la república y á las sabanas de la provin-
cia de Barínas y las del mismo cantón, que le da una grande im*-
portancia para la cria y él comercio. Los edificios de esta ciudad,
las iglesias que tiene, indican la riqueza de sus antiguos habitantes :
en el dia se está levantando de los males que le causó la guerra de
la independencia , en la caal sufrió varios sitios y fué uno de los
puntos mas frecuentados por los ejércitos beligerantes. En sus cer-
canías hai buenas tierras de labor, y tienen fama sus naranjas dul-
ces que abundan sobre manera , y de ellas se hace un grandísimo
comercio. El cHma es cálido y sano; pero á vezes está sujeto á fie-
bres provenientes de varías lagunas que tiene en sus inmediaciones.
— 405 —
y de los derrames del rio : estas forman barrizales, de donde sue-
len elevarse miasmas que los vientos llevan sobre esta interesante
ciudad j la cual es grande , hermosa y bien dispuesta.
Las parroquias de este cantón son S. Carlos , Tinaco, Tinaquillo,
S. José, CaramacatC; Cojéáes y Lagunitas.
CANTÓN D£L PAO.
La villa de S. Juan Bautista del Pao está en mía sabana alta, cir-
cundada de cerritos de paja , y cerca del rio de su nombre. Al N.
forma perspectiva la serranía que conduce á Valencia y á las 'fér-
tiles orillas de su lago ; al S. la galera peñascosa que sirve de bar-
rera á las bellas sabanas de este cantón ; al poniente los cerros no
le dejan libre la vista de las llanuras que se estienden entre la ga-
lera y el cerro de Tiramuto; pero al oriente una ancha abra entre
la misma galera y la serranía , se pierde én lejana vista hacia los
cerros que se dirigen sobre la villa de Cura, y se elevan considera-
blemente en el cerro de la Platilla. La situación de esta villa á la
entrada del llano, en el camino de Valencia y en el que va al Baúl,
la hace importante , sobre todo á causa de la cria de ganados ; y su
rio navegable para pequeñas embarcaciones, aumenta las ventajas
de su posición. Su clima es sano y mui cálido ; pero es refrescado
por los vientos que casi siempre dominan.
Las parroquias son solamente dos : la del Pao y la del Baúl.
TAQLA GOMPARATIYA de las po»c¡0nes, astrónonúeas de. las' cabezeras de
sus tierras, terrenos baldíos, población absoluta, relativa, hoiQbres de amsOf
que se cultivan para la esportacion.
NOMBBB
da
LIS CABEZAS
DB CkNTON.
BM^
.1 I. I íl I II
rtn
AUura
sobre
pitammmmf^
POSIGIOir ASVIOHÓMICA.
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Fveslo-CataBlla. *.
Ocamare
HligUa* ••■•••■••••
ÜMalbaB.
San, Garlos.... «...
Pao
Islai da Baarlp- Ca-
bello
Latitad
norte.
♦Oo. W, ifí
¥i. 99. M).
10. 27. »,
II. 59. 10.
Longitud
E. ÚO.
del tBffidiaao
de Caracas.
4*. 7, 80. O.
Oo. tto. 20. a
f. 36.50. O.
I«..98.0. O.
9. 30. 90. 1».2I.51. O.
9. ». 50.
i)». 88.60.0.
el nivel
del mar
en Taras.
■ü"9i"*"
505
25
920
800
242
249
»
Tempe-
ratura
media
del ter-
mómetro
oenti»
lirado.
25. 89.
29. ftl.
25. 28.
2f. 67.
21,. 05.
28. 34.
28. S4.
CALIDAD Bfe LOS TBBmiNOS
DB QUE SB COMPOHBN L03
CANT0MS8 BK L. G.
o
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Q
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«6
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6
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1 80
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Total 242
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55
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B
17
TI O
88
78
157
970
679
íb
mtones, sa altura sobre el nivel del mar, su temperatura media, calidad de
Idavos 9 distancia á la capital de la proTÍncia j de la república, y los frutos
is
P(»|ilÍC10« • MB Ut» aAMCOllW*
9^
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Toul
población
en 18S9.
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Gafé, cacao, añiL taba-
€»,caiUfc7algotfon.
Cacao, café y cafia.
€acio y jcatt.
Cacao, café 7 ca0a..
.Cacao, caCé y calU.
IPocoeaetojeafé.
Caña.
— 408 —
TABLA DS LA ALTÜBA DB LOS CBBBOS DE LA PBOYinCIA.
Nombres. Varas. Sarranlas.
Tacuragoa ifOO Nirgoa.
Madera.. ..¡ ins id.
Picacho. 1990 id.
SanU MaHa f896. M.
Temerla 4908 id.
Cbirgna. 1094. id.
Hilaría iMO Cosía.
Paerlo-Cabello.... 1595 id.
Palanemo 1630. id.
Nombres. Taras.
Taríamo 1490.
Ocumare 1890.
Tiramulo 1900.
Queipa 1936.
SerroMiaM»
.... Costa.
id.
..Interior.
id.
AzuldeGOigne.... 1490 id.
Palmar 4S50 id.
.Toma 800 id.
'Galera del Pao 800 Llano.
¡Galera del Banl.... 800 id.
TABLA DE LOS BIOS DB 4® ÓBDEII DE LA PB0Y1IVGLA.
Nombres. Serranías. Desagüe.
Coyagna delacosla... álaoiar.
Cau id fd.
id.
Ocumare id.
Turiamo id.
Pataoamo id.
Borborata id.
8. Esteban id.
Goaiguaza id.
Agua-caliente id.
id.
id.
id.
id.
id.
id.
id.
Sancbon delfirgua id*
Morón id id.
Alpargatoo id id.
Capa id id.
NariDjo id id.
Canuao id id.
Urama id id.
Cocote id id.
Temerla id id.
CaouaTilo id id.
Cabria id id.
Taría id id.
nirgoa id ^Orinoco.
Nuare id id.
8. Pedro id id.
Tacuragua id id.
Burd..... id id.
8. José del inlerior id.
Mapuej id id.
Camoruco. id id.
Tinaco deNirgua id.
Bejuma. id id.
Tamanaco id id.
Tinapú del Interior id.
Aguirre id id,
Macapo id id.
Oruje id id.
Nombres. Serranías. Desagüe.
8. Cirios de Nirgoa. . al Orinoco.
Aguirre id id.
Montero id id,
Argoaoo id id.
MonUlban id id.
Onoto id id.
Tigre Id id.
Tirgua id ... id.
Taya id id.
Tacoao id id.
GhirguaóPao id id.
Paito del interior. id.
Guataparo... deNirgua id.
Tinaquillo id id.
Orupe id id.
Para del Interior id.
AragOita.. id id.
Naranjos id id.
Pacaragua. id id.
Prepo id id.
Caimán id id.
Gaimanello id • id.
Cbirgua id id.
Valencia de la costa. ... al lago de
Valencia.
Cúpira id id.
8. Diego ó Guayos, id id.
Vigirima id Id.
Turiama 6 Guacara, id id.
S. Joaquín id id.
Cura id id.
Mariara id id.
Cano del inlerior id.
Palmar id id.
Calcara • id Id.
Güigüe id id.
— 409 — .
PROVINCIA DE BARQÜISIMETO.
SITUACIÓN ASTRORÓMICA, ESTBNSION X POBLACIÓN.
Esta proYincia se encuentra de los 8® 47^ á los -1 0^ 46 de latitud
boreal, y en la longitud de A"* 25^ á 5<^ 2b\ al O. del meridiano
de Caracas. Su figura representa un triángulo formado por lineas
curvas : en ellas encierra toda especie de terrenos, cálido, templado
ó frío. Valles ferazes útiles al cultiyo , montanas espesas y desiertas^
cerros pelados y áridos, llanuras estériles ó con pocos pastos ; teiv
renos todos que sirven para la agricultura, para (a cría de ganados^
particularmente del cabruno que abunda en esta provincia , a^
como para la de caballos muías y asn<^. El máximan de anchu-
ra de esta provincia es de 40 leguas de E. á O , y otras tantas de
largo de N. á S. Las leguas cuadradas de superficie, son 782. 0/(^,
de las cuales cerca de 449 son baldías. La población total es de
442.755 habitantes, que están en razón de 444 por cada legua
cuadrada.
LÍMII^ES Y CONFINES.
•
Confina esta provincia con otras cinco, que son, Carabobo, Co*
ro , Maraeaibo , Trujillo y Barínas. En el paso de Cojédes , en el
camino que va para S. Carlos, empieza el límite del E (ya descrito
eñ la provincia de Carabobo), el cual va á^rminar en la boca del
l^racui. Aquí empieza la frontera con la de Coro , por una línea
indetermmada que atraviesa una nootaña desierta y anegadiza, y
va á buscar el rio Aroa cerca del desembocadero de la quebrada
Minapano : toma aquel rio arriba hasta el Tablero : allí tuerce al
N. á buscar las cumbres de los cerros de Salsipuedes y Agoalinda :
vuelve al £. siguiendo los cerros desiertos de Aguaclara, S. Feman-
do y Guaca , que separan las aguas que van al Tocuyo y al Aroa
hasta el cerro de Curarigua ; y en este lugar vuelve al N. por la
quebrada ida. Cararapa, deqpues el rio Tocuyo, agua^ arriba hasta
Camayatá. Aquí sirve de raya el cerro de Sigoa aguas vwtíentfes^ y
encontrada la quebrada Aguanegra,va j^v «Ua hasta tomar la cuift*
bre de los cerros del Buco , Carrizal, Danta , Quiqui , para llegar i
las cabezeras del4iíf>. tasagme/MHri^O^ qañ'^ ie^^ a O. Al llegar á
este punto , vuelve la frontera al S. S. £. por los cerros de las sa-
banas de Taratarare que dan oogen al rio Dichiva , el cual sirve de
linea divisoria hasta doade cae la quebrada del Degredo. Sigue
entóncet.te.«ftfa por tM^euM^e^ di»Hb«aifa>el i<iMlitt4ito Casire
basta encontrar el rio Sicare : en este panto termina el límite con
k provhicia de Coro 'y por un corto trecho confina con Ititie Mará-
^eaibo por tes cumbres desiertas que dan origen á tos rios Sicare y
^Santa Bárbora. En las «abejeras deestetftrmo^ empieza ei lindero
<ee» la provlnela ée Tnyjllfe, por toéas las- cumbres délos cerros
ifm ^íden las aguas ff«e vaib'á los IlUoes ^1" Cenfao y de Mt)nai ,
iMttta «lemtpftp Y^s e«rros ée Parajá^ fw cuyas ^eunibfes se H^a á
Ja q«e4^a^ de Villágafi, y se sigue esta aguas abajo , abaste encon*
HüM te de A^a^Hispo, y por esta se catfiinéa la ^ea tomande desi-
-j^oes la quefe^a^ de ^tes MMiJbs ha^- su origen. E^ este punte
'^FU#^el liudere al $, aguas ^evi^tes^ á temar el páramo ile tea
IWiisas , el <M Jábew y el de€tf¥ÍBAbú ; <ieaH4 á Sagúes y al páf «ne
itt les Reaaties : aquí lerfiataa €en la previueia de Tropte y sigtié
%k^ laiúiaa. la niyur toüift iaS'OWHifcrea de un rameáel párauíd
en dirección al E. N. E., costeando la quebrada de Gualques^qué
va al río Guanaro ; atraviesa este, y casi en la misma dirección, el
límite va por las cumbjse&^de ujios ceim^ ditsiertos , á encontrar el
rio Portuguesa, que pasa siguiendo la misma linea hasta el cerro
^pftB de Qi^ggm at -Maéi. inilá «ügiie §0r k quAbraib Hmmi» la
Ra(^ 9fW» abaj^ iMSia «I jtíp llevador. Pam eati^ rio pai^aubir. m
k^.4mi^fmk AbIM. Ji. 4). i ift-^iMbí» A»;b jietmw%i yí^er aala,
K0Ha»:^istteAftefc,. 4t9aif Ü íídA^im ba3t& c««68íiie te loíiáiinmott 4a
tairioft'ilieanfad'ldSaaé. iSa.«stt panAei^ehe áílüisaffir ias^JOM»*
^r|9s éi dMde umá» dosisifiii.éiieaiy Sanare : j» > ¿Mgs fwr irta
llMta*'iH9Soiitoir fCÉtMifo íMi^uaAa <qne>aÉatiúaÉi Un «MHtefi&del
UtNri^ e^iel«>a.tt!.tf BoíMh /eutíd ^asejéf&icaaífto «gMianill
•m pKdb éioÍDsqaipif «ate poíáBémm^liímmtmmmiAÉmít^imi^
ffmifm^ ^m átelurtÉnte tnygatiwiw ^#o^«»tefcjyiÉMii iteiliila
kk muñm^m de laa piodaeilloMB ú^h^ jHro^faohi , llwffcüü
Mharttda» á taei{tgbCalMllo , 7 tecMÉidet por 1» qéhimi tía^Iip
£1 fama» 4» Gahiibb& i|ae se «bw i la attiía éR 4y2M tahis
sobre <ei niirel ád mar, harne pwle ée> la gran cadena de los AodeB^
fte dasdePtinploiift desprendeawkiamo qme wneilwnuir ki
altoBairaAkde Méeide. Es el pnatemeB eleíadode est^proviiiciti.
y en él se origina el TocwfO , no él aws ||v&MÍe<*»efl^teTrilovlo*
£1 páramo se divide en dos ramos paralelos cerca de Guaitó : el
mas elevado corre al N., formando sucesivamente los páramos del
Jabón y de las Rosas , y baja ca«i de repente la mitad de su altura
cerca de Agjoaobispo , de donde aj:;roja ua ramal sobre Garadit' T
sigue bácia Barbacoa : sus mas altos picos se elevan 2;649> itaca^
Qerca del sitio de HatoarrU^a , punle en que se abre en dos rami'^
ficaciones , una fue se pierde cerca de Gan)ra > y la otra cercai4i9f
^enales^ formando el valle feraz de Cvcarigua del LeaLQ seguodo
ta disxniAnyendo de altura , ¿ medida q«e se aleja d^l punJ^ Al«
partida, en Guaitó, y frente i I0& Htmwcaro^, di^ja su paraMiwiia)
coa e] 4>tx:o ramal y se dirige al N. £.,. formando 811& ba^es mMi^'
iaie&lpft vaUes de Cbabas^uea, Portu^esa ^tAcaipgtia y Bi^lai^^
miéntjras que los. occidentales forman el país montateso que ef^
^ntre el Tocuyo > el Guéxm y el Sanare y el fijabiffo , en^ee9i\aA4<l'
también el valle del ToQq¡;o , lajianada de Quábor^ el vallio de Saih-
^i^ímieto ,. y rebajándoae ^n la.abca de Sarare , pceoenÉa en ^ntmi
iimiedíaejuMoes. y ea la montana del AJtar el #onto de inteEseeeJMh
del sistema de los Andes con el de la cordillera de Venevtiela). Sif<*>
IKce.q9^ eot ^Btopn)vi»cia.9e 4¡»aa enGontca4í>iloft4oa6Í6teii>a9'de
^U)ntofiasyealaa,4wca«^a9•d4'4CH^oh«spQ,,<;waQbe^Xjl^^ 99f^
qnísínieiKX^ Caror^ y Puaea.^ ventea ua aom^Mo estado 4# traiH
torno I9& eap^aa aatratífieadaa.; asi es qi»e e« esita^peoYínm es díK^
cil seguir las líneas de las cordilleras , pues en todas ellas bai^nüit
especie de confusión. La serranía de S. Felipe está como aislada |
y con la de Nirgua encierra, yy>¿WiiJo así, el valle mas fértil de
este territorio ; pero un ramo que ta hacia Duaca, á vezes ínter-
deM<c«Éí^ívtiior flomteiM «ss^ '(Mwra«ii(>pleM^ipeco^l0¥édi^^
— 4« —
coüctaymi sobre el Tocuto, eerca de la quebrada Carapa. Uaeose
aquí con los cerros que Tienen de las Tucacas, paralelos íl la costa,
como haciendo parte del sistema de la serrtmKÍa de Coro y que pare-
ce pertenecía á un eslabón que debió existir en tiempos remotos ,
paralelo al de la costa de Caracas, ó que bien puede aun existir en
un estado submarino.
De esta serranía de Coro, que se estlende báeia las altas sabanas
de Taratarare, sale un ramo en dirección á Caracbe, qué encierra
los llanosf poco fértiles de Carera, y siguiendo por los cerros de
Parrajá , parece que se confunde allí con el sistema de loe Andes ,
el cual avanza también un ramal hacía Carache.
RÍOS.
Tres direcciones llevan las aguas de esta provincia ; la mayor
parte de ellas van al mar de las Anlillas , conducidas por 25 ríos ,
el principal de los cuales es el Yaracui, navegable y útil para tras-
portar los productos de los fértiles valles de S. Felipe.
Mayor que el Yaracui es el rio Tocuyo; pero aunque recorre un
grande espacio en este pais, no empieza á ser navegable sino cuan-
do confina con la provincia de Coro, y entonces ofrece el mas largo
curso de navegación, de manera que aquí debemos calcularlo como
perteneciente á ella. Hacia los llanos va la segunda dirección de las
aguas , llevadas por -1 4 rios al de la Portuguesa , el cual pertenece
á los de segundo orden de la república. Nace en este territorio, pero
es insignificante en él , y su descripción debe colocarse en la pro-*
yincia de Barínas. La tercera dirección de las aguas, que es la mas
pequeña ,'va hécta claran lago de Maracaibo conducida por el ria-
chuelo Sicare.
£1 número total de los rios es de 58 , sin considerar multitud
de quebradas ó riachuelos, que en tiempo de verano están casi to-
dos secos , y en invierno foroian torrentes que pronto bajan y se
secan ; así es que en muchos de ellos sirven sus cauces de ca-
mino.
I.A6CNAS»
. La diénaga de Cabra, que está en un terreno bajo, entre Carera
y.Rprbaieoas^ es la única que m^ereoe alguna menctcm en eslapro-^
— 4^5 —
•
YiQcia, De los cerros que están al pouieiíte de Barbacoas , sale un
rio que viene á formar esta ciénega^ la cual está adornada de vege-
tación en sus orillas ; pero el calor sofocante de este territorio, las
plantas herbáceas que cubren las aguas y los árboles que están eu
sus orillas y forman un conjunto de exhalaciones malignas, que
provienen de la descomposición de las materias vegetales ; por esto
están desiertas las orillas de esta ciénega , y aun se teme el pasar
por sus inmediaciones.
CLIMA.
£1 clima de esta provincia es generalmente sano , y tiene paríes
de un temperamento templado , en donde se da el trigo y las pa-
pas en abundancia. Es la parte montañosa del país , en la cual se
elevan páramos de un frió escesivo, que no están habitados , y solo
dos malos caminos los atraviesan. Los lugares bajos son por lo ge-
neral mui cálidos, y sus tierras ingratas, si se esceptiian las féiftiles
selvas del Yaracui , Aroa y Moroturo , que por su gran cantidad de
vegetales, y la mucha humedad que reina en ellos, hacen estos lu-
gares malsanos. Sin embargo , existen allí algunas poblaciones que
se aprovechan de la estrema fertilidad del suelo, sin que para ellas
sean peligrosas las fiebres.
ESTACIÓN DE INVIERNO.
Las lluvias empiezan en abril y mayo, siendo mas continuas y
abundantes en junio, julio, y agosto ; en setiembre y octubre dis^
minuyen sensiblemente. En la parte seca y estéril de esta provin-
cia, qne es una grande estension del cantón de Carura, y otra pe-
quena de los de Barquisimeto y Quibor , están obligados los habi-
tantes á recoger las agaas en estanques durante el invierno , para
servirse de ella en verano. En la serranía, los caminos son regula-
res en la estación lluviosa , y solo en las selvas se forman algunos
barriales. La parte árida prontamente se seca , pero en la llana y
cubierta de bosques, se hacen casi intransitables los caminos.
DIVISIÓN TEBRITORIAL.
La provincia se divide en 6 cantones^ con los nombres de Bar-
«prnlMeta^ ¥«lhigu» ^ ffMípeí OaAtr, Dieay» rCammi» q«^ ij».
a«i lodos 96 fMtroifwtt y da msíateíM^ cm h» dalo»» ^t^
t%>, «ift» etea*^ imük, aül, {Mimo^ f«oi, oMawi», pt^^s^ ^
tatat^ icaáea, ocuMs, al^odoA, «afta Meo, abei^aa, ítíi^koi, §»»
hnzog^ osraotas, aírala ^w^ anís, eeha4a, «Debas ajo^y ^eb»^
Naa^ variedad de vendaras f fsmimu
£1 total^ la poblaaíoii de esta pre«inda se p«ede dWidir del
modo sigaiente : 45/400 que se dedican á la agfiesHwa, ^409
á la cría y 25/4 00 al comercio^ artes, etc.
GOXERCIO.
Con 1t proviiíeia de Coro ^ oomereío e»ttn mtíifo^ «ataycndo
Mnttidad eoiisid«nd)le de sai , géoerosy leaa, y Uef«Bá»eift oanbÍQ
cveros, vb^, papelones, aaócar, censertas, hadiia, cebollas, ajos,
meDestr^Sy muías y bmros. Gen la províada de Garabobo se baos
ordftaríamente en Puerte-Cab^lo, üerando á este ponto cacao, calé
y caeros, y rmbíeBde ^nero, efectos áe mercerías, quincalla y s«r*
tidos de bodega. Con Caracas se faaee el •comercio eniriando iüH, cor»-
d<AMitMS y meaesferas , y recibiendo mercancías secas y efectos de
bodega. £1 tráico oon la provincia de Barínas se hace Ileivando i
Gaanare harina, sal, papelón, cordobanes, ajos, cebollas y algunas
frazadas, y recibiendo dinero, cueros y algún ganado vacuno.Tambien
se comercia con las villas de Araure y Ospino, recibiendo maiz y
menestras en cambio de ajos, cebollas, chinchorros , zapatos , cor-
dobanes y suda» Este comercio se estiende hasla Barínas , Gaana-
fito y Nutrias, á cuyos lagares llevan iodá espede de obras de za«
palería, talabartería, chinchorros, bamaiCas, lienzos del país y
abonos f eneros estraínjeros , trayoodo de retomo pescado , carne ^
gattado, queso, sebo, oabaUos^enül»
CmDAl>eS ¥ VlImhAB.
•»■■»■
CANTÓN DE BAAQmSlMBTO.
La ciudad de Barquisimeto , aunque una de las mas antiguas ,
Mn^vteo^á^r oapbal do provincia el ailo de 1^90 , {mtenneieiido
éaksilai de Gacabóbo^ y»fM^QftiMDté¿ teidfl'OiiiéiQs^ Si li»<
ptimeus qvm m^tm 'Ae ^s«^la á los w&tHfltstaámiBB , evoidowN
Hfíado de €^kx, iba» á J^usciar en tierras éescmioeida» k csniM )f»(
hulosa dd ^Dorado. Bairq^&ktieto y laaiiracfDe condoceá tos^lhoios
de Baríoas; mnebas vezes sirvienDsi ée pniiéo de remioA -^é^f^t»*
tid)a á las atrevidas y kjanaft espedicioBcfr de los oasteHanq». B»
'l'$l{2 fundó estta ciudad d fobermtét»' J««ín de Viliiégas , IknaáiiiH
dola Niie^a Sege^vút^ pena dejar vtiieukpdo en ella el nemiiredeisil
patria : ftfé edifte^da ea el süio cpie se UaíBaa el TejiBHr, y deepua
se la mudó ú lugar q^iie liei ocupa, en tiemfio del gebersadeit
Mauzaneda. Barquisimeto está simada en la latitud N. 9<> há^ W^y
y eia la loQ|;ititd 2** ^2^ 52, al O. del meiidiano de Caracas, á
625 varas sobre el nivel del mar, dd cual dásta 22 legnas-tín tínea
necta.
En esta ciudad tuvo su trágico fin Lope de Aguíire., liaiÉado d
Tirano^ natural de Oñate en lafitroviAcsi de Gaipázcoa. Lne^»
que se vio abamdooado de sita moírañones^ mató á su propia Uja ,
para evitarle ia alrenta de que la llamasen bija de un traidor, fil
maestre de campo Don Diego García de Paredes logró apreliencter
á Aguirre, y le hizo matar por los mismos maramnes*
En 48t2 Barquisimeto fué casi destruida por el terremoto que
anL'utnó á Caracas, pereeiendo casi toda la división patriota que se
hallaba en aquella ciudad , á las órdenes del corcmel Diego Jalón.
Fuéj^nlo oeofttdo varias vezos por las partes beligerantes, wttscf*
tras doró la guerra de la independencia , y casi en su mismo re«*
cinto hvbo acciones mui sangrientas.
Barquisimeto se halla ventajosamente situado solare nüa llanada,,
en la reunión de los caminos que v^n áias provincias oceidentalesí
y valles del Tocuyo, portma parte ; por otra, ^rten ée eUa viaiS'
de comunicación para la provincia de Coro y los fértiles campos
de Yaritagua, S. Felipe y Aroa, á la vez que allí también se juntan;
los caminos ^ue ylenen de las llanuras de Carábobo y 0ar!fnas^ y
de la serraoái deNángoa : todo estabaee qfoe Barquisimel» sea mt)
punto interesante p^rn fk aomcrci^), la agrieoHoia y las oiias; Loa»
altos barrancos del rio q«e correal pié de la ciodad dan i esla tm
afecto ptetoiüeseo, J^r todas fwrtes la vMaes faennoia':
al S« se vofol rico valle pof donde eeire el^Ho,-
cieodaS) y limlMido por dos bitems de 6eitoa> d windosí itno^ oMi'
ettUertbs de plantaciones , ó coir mandbas de bosque que animan
el paisaje. Al poniente, varios cerros lejanos y aislados ocultan las
llanuras estériles de Quibor y el valle fértil del Tocuyo , que tiáae
sus serranías cubiertas de campos de trigo y de cafetales. Al N. no
se descubren las planicies poco habitadas é ingratas, que se dirigen
hacia Duaca, porque varias colinas de mediana altura impiden que
se vean, mientras que otras , que aparecen al naciente , ocultan los
campos variados en perspectivas , que están entre la montana del
Altar y el pais de Yaritagua. En el último plano de este cuadro se
miran en medio de nubes las cordilleras que esconden los valles de
Nirgua , y la abra que indica la posición del riquísimo pais de
S. Felipe.
En las basas de la serranía de Nirgua, donde terminan las saba-
nas de Londres, y en las selvas del Altar, es el lugar donde existie-
ron las minas de S. Pedrito y de Buria, las cuales dieron origen á
la fundación de Barquisimeto y Nirgua. Fué también en aquellos
cerros que apenas se ven azulados , donde se refugió el negro es-
clavo de Pedro de Barrio, nombrado Miguel, que unido á otros ase-
sinó en una noche á los mineros. En aquel monte construyó un
pueblo atrincherado , se hizo llamar rei , y coronó por reina á la
negra Guiomar, en quien tenia un hijo pequeño , que fué jurado
principe heredero ; creó oficiales y ministros , y nombró obispo á
etro negro que en las minas llamaban el Canónigo^ el cual levantó
iglesia y celebraba pontifical diariamente. £1 nuevo rei tuvo el
atrevimiento de sorprender de noche á la Nueva Segovia ; pero fué
rechazado , y Diego de Losada salió con gente del Tocuyo y unido
á los de Segovia marchó sobre el rei Miguel , le derrotó y mató , y
la reina , el príncipe y los demás , volvieron á su antigua esclavi-
tud. Estas selvas , hoi desiertas , convidan á un establecimiento de
colonos , que no busquen las antiguas minas , sino que beneficien
la mas segura que les preséntala naturaleza, en una tierra virgen
y feraz.
La posídon de Barquisimeto hace gozar de todos los vientos á
^ta población. Se puede decir que está en una mesa despejada , y
auiíque por todas partes la vista presenta cerros, estos mismos son,
{lor decirlo aáí , los conductores de los vientos , .porque como no
están en lineas continuadas, sino separados á diferentes distancias,
dan libará que las brisas, remolineando entre sí, lleguen con mas
fuería á templar los ¡calores que debia haber en Barquisimeto. Los
417
«ieaios del 19. JE/son los m«B «oaiteiites : vieam dd mar^'y e»*
trando por el Talle en que corre el Yaraecü^ pasan luego por la
montalía de Santa María ó de.San Felipe , reputada enfermifa, por
la multitud de plantas que allí se pudren , por la falta de sol que
penetre en una espesa bÓTeda de vegetacidn , por las initndadones
de los ríos debidas á la caída de los árboles vi^os , que. obstruyan
sus cauces , y por la falta de brazos que desmonten esta selva.. Sin
embargo, no van miasmas pestilentes áBarquisimeto, y si algunos,
como es natural , acarrean en su paso los vientos, al chocar estos
con los cerros de S. Felipe , cambian de dirección bácia los del
picacho de Santa María y deanes van sobre los d6 Yaritagua ;
así es, que estas dos serranías están, en las parles batidas por estos
vientos, húmedas y cubierta^ de una asombrosa vegetación, en
cuyos lugares quedan depositados los miasmas que pu^eran llevar
los vientos del N. E , y puriOcados, diremos así, vienen á refrescar
la mesa de Barquísimeto , los llanos, valles y caestas que componen
las cercanías de esta ciudad.
Las llanuras , cubiertas de ricos pastos , ofrecen la facilidad de
criar toda especie de ganado. Los cerros elevados producen esce-
lente trigo, las cuestas café aromático, y los valles esqotsito cacao
en abundancia ; las planicies se cobren de algodón , de añil y de
los granos y frutos que sirven de mantenimiento á la población.
Si se ven algunos cerros estériles , si se encuentran llanos áridos ,
no están desiert(¿, y antes bien, pacen en ellos muchos rebaños de
cabras casi sin necesitar de los cuidados del hombre. La cria de
asnos, muías y caballos es escelente é inmejorable. Pero también
se hallan cuestas de mucha estension , cubiertas de un espeso bos-
que, y también planicies dilatadas , en 4onde las altas copas de
sus robustos árboles forman un manto de verdura negra que las
cubre. Desiertas todas ellas, apenas transitadas , convidan algunas
vezes á sacar partido de su gran ferazrdad , si la masa enorme de
' vegetales podrídos no hiciese exbalar de aquellos lugares un aire
malsano y enfermizo. . En una parte de este territorio se ve, sin
embargo, formarse una población cerca dé las minas de cobre de
' Aroa , cuyos habitantes, atraídos allí por la especnlacicm y el ín-
teres , se han hechosoperiores á los peligros del clima, y una gran
-palote de los terrenos inme^tos está ya desmontada y sembrada de
¡plantas útiles al hombre ; pero ésta es como un grano de arena en
une snlti ,^piies solo éilas montanas, por su maravillosa fertilidad.
fodriltt Jí9it la «Émteitte áé Mh la fbUiekMi «e «eaMMh.
toicMal áft a^rqiüuMlD tíeM«aB caías kitiicoiisiMMat., y al
flaQtiiaiaa«i¿laa«aJwl(»aÉ0ngiilar.lai«aaelaiíftf fiarías ewoe-
iaa f«ra la adaoaciatt de la Reatad*»
EtíA ctadad es cabeaera del cantoo príneipal y mb fianrogaífs
MU, fiarífiíiiimato, Cabudare, Sarara, iUar, Baria, Saataitosa,
JHiaca y Babara.
«
CANTÓN 0K QGÍBOa.
iia TiUa €b Qoibor «siá süméaan tm Hano árido, aeea y iüi^í
lantilado, enkfe éas%aahrada3^tte ao SMDiaiatDoii a§iia luficJaaAe
á 1a|ifii>laoi0i> ; y á aoiaer (fue esÉe pnáo^ se baUa aunado en d^ea-
miao ^m «ODdooa al occiáenla y i jtoq^isiioelai , ana babttaol!^
aiimea prasper^iaq* £a esie eapton ^9. man oamarosas rebaiíos de
cabras que eatátt.-ett uo tenrcuo e^ril, pero adecuado para ellas.
Tan solo en la serranía, en donde está la parroquia de Guiúro^ bai
lenrenos moi férüles y de «a temperteeoto frasco y sano, üi país
está divkUda.en dos clases de terreno, «na de llanos estériles y ca-
lientes , pero útiles para la cria de cabras, barros y molas, y otra
4e lugares montaüosos^ cubiertos de vegetaiciioii y Uwplaidos, ipi-
les para sembrar trigo, papas, café y caña.
Las parroquias son Qoibor y Cublfa.
CANTÓN DEL TOGUTtO.
«
La eludad del Tocuyo fué fimdeda á«itas ^luo BauqfiíaiM^ta, por
luán de Carbajal, á fií^s de ^ ^45, ialituláadola Njaestra-^Señora de
la Concepción. Está situada en un beemoso TaUe, cérea del rio de
aa QOBibra : el terreao ti^oe un declive báeia tes vegas b(^mi09as
4e aquel, producido por las eoestoaqua tiene al orieBle. Cstas, par
ftu altura cubren la vista de la sobarbiavosdieiiatdaias An^es, á»cuyas
4alda$ está el pueblo de Sanara de un tanperamanto fraseo y b«r-
moso. Xampoce $9 pueda v^e^» á ¡e^Madaila aarMoiavd puribto'dal
Gipáiaco ^e cata en medio de ells. Iodo aila paia na»tan<W:ae
^la sepobrad^ 4e trigo, papas y ciCé, y suriettoMl rada loa fliaaiM-
4PfiT h'm» Si vúfüJm» ai pouianki, wa.fdtasaimaí^ifi^'BaajpKa-
.faAbí ^P te ciial le de9i2ubaen baatadaafasasidaslis faaUlaídaBMUÜp
nm^nn caippo^.s^ diitiftgi»ip JífisplMláasi» irigo y éij^pM» fdas
logares donde so ven paciendo las muías y caballos. Esta bella pers*
pectiva nos oculta otra mifiityq^ «tettiBl lindo yalle de Gurari-
^ua del Leal , y las hermosas, sanas y frescas alturas de Barbacoas,
pais de k quina y del trigo^ y eo' el que el írío se%aoe sentir. Si
tflriraflMM al S., dos filas de eerros, al pareeer uoidas, pero cuyas á^
jBas haeen pereAbir la divisiün , y que se pierden en la atnósfera ;
Indledn la direecien de los Talles de los HmnucBroS; á donde el rio
¥oe»yo deseieode , luego* que deja los páramos. Estas elevadas mo-
les donde el fraüejon yegeta, y donde d hOBHl)fe no se otrere'á ha-
I^Har, no son Ti&íbles desde el Tocuyo »i tampoco él alto peSon de
los Bumueaipes , que parece vfñn pared enorme y etevada, que in-
dica la aprolimacion de los caminos que ran á las provincias de oe*
ddeote^ y el que se dirige á las'Hanuras de Barfuas por los eleva-
dos valles de Ghabasquen. Si Tolvemos 'la vista áW. miíamos óm
paredes de oerros casi desprovistos de vegetaeion '.en medio de ellas
corre el rio y en un fondo lejano se pierde , indicando sin em-
bsó'go la direodon que lleva bada las áridas Hanuras de Carora.
La ventajosa posición de esta eiudad , es -el estar en un valle sano,
y en el camino que de Barquisimeto va á las provincias de Trojillo
y Méñda, y tener por todas portes (errenof. üliVes para lá agriculi-
lura, algunos para crias y todos salubres, frescos y aun ñrlos ; muí
IKMros 'bai calidos y solo una pequeSa parle es enfermita en el liú-
do valle de Curarigua del Leal. £1 trigo de este países de ios me-
jores que se oovooen, y sus bsibit^teslo cultivan muebo. y lo es^
portan á los Hamos y al resto de la provincia. De tona de oveja se
lÉbrioan mantas y otros paSos de que baoen oomerdo ; aaí como de
los producios de sus tenerías ^ y Mwt toda de la ssA^ en términos
<de baberse beoho los veudedores'eschnivia^le este artículo de prt«-
UMraiieoesid(Él,4ueestra#& dt^kprovúieia de Coro/ Bale espirita
de especulación data desde mui atrás, pues un habitante^el Ta^
euyo, Gnelábal lUidrígnes, ffé el pñmero que logr¿ introducir
ganado em SMiaM y en los Hanoi, on 4^4^.
'Hai eu Ifr eMad del Toeufo uu colegio, y esoiielas4u primeras
letras.
Las parnoquiasde^e eonslu wle 4|istoft s4Ui : Toe«|fD,>SaBare,
Guarió», fi(iaMHMN>-tfltp, H«flMiearo4iafo, CbaíbasviOD) BiarÍNíeoa#)
y Curarigua.
4M —
CAHTON ra CAROBA.
La ciadad de Carora, fundada ea 4572 por Diego de IMoatesi de
.órdea del goberaador Diego Mazariego» es uiia de las ciudades una
autígaas. £1 Morere es el único río qae pasa por eslos oontornoi j
y es tan pequeño^ que en la estación de sequedad, apenas da la su-
.ÜGÍente agua para el consumo de los habitantes. La ciudad está bien
.construida, y todo indica en ella el orden y bienestar de que goian
.sus moradores. La situadon de Carera solo debe á la naiuralea
„an aire puro; el terreno es seco y está cubierto de plantas espino-
sas, como cují, cardones y tunas.
Se encuentran en aquellos lugares dos especies de cochinilla silves-
tre, tan hermosa como la mistica, pero la dejan perecer en la planta.
Haí, sin embargo, en el cerro deGuacamuco un temperamento fres-
co, una vegetación rica, en la que se encuentran bálsamos odoríferos
y gomas aromáticas. Los cerros que esconden el valle de Gurarigua
y los altos de Barbacoas , son de un clima templado, y sus faldas
ofrecen terrenos útiles al cultivo. En mayor número los haí en la
plana y vasta montaba de Moroturo, atravesada por el rio Tocuyo;
pero los miasmas que ailí se forman impiden el poder habitar en
aquella selva. La cmiveniencia y la industria de los vecinos de Ca-
rera no los indina á objetos de agricultura ; ellos prefieren dedi-
carse á la cria de caballos, mulas« asnos, ganado vacuno, ovejas y ca-
bras, y los terrenos que ocupan estas crías son cálidos aunque sa-
nos , menos las llanuras de Gadidbe y Cazire , que aon enfermizas.
La atención y actividad que emptean los habitantes en sacar partido
de lad crias , hace el élg^ de ellos y y considerados bajo el aspecto
ée su industria y laboriosidad , son superiores en esto á muchos
puebles.
IXki vecinos príncipates vivetí del producto dis sus ganadosi y otros
ganan su vida benefiü^iaado, los, pieles, de Jas qlte hacen calísado ,
mootorasrétc. , que se vended en muchas provlneiaa 4e la república.
También se tejen hamacas, y se hace buen jabón.
. Esto cantod ^nsta délas parroquias siguientes : Carera, Burere,
Arenali»,^.Ar^lfie, Rio-Tocuyo, Ssquisique, Sr Miguel y: Moroturo.
— w —
CANTÓN DE SAN PELIPB.
Béee: poco: ma» de ua siglo qae la emi^ aetnal d^ S» Felipe bó -
8^ ooníoeb con otro nom^e que el de aldé« de Cocorote; Sm em-^
bai!gQ> alraidorpor la.fertíliáad del tecsreáofomcbos carnarios y áL-?
gooos naturales de los dhUrttos veciaoa^ se estableoteroaalli, y. hit
oompaikk jsolpaascáana «onMruyó alinaoenes en áq^el pqoio, con «K
objeto de comerciar en el interior. Desde ^ionce^^ insudó i de '!»••*
peetoí efita villa : casa^mai hermosas y calks focmadss.OQaFegidat.
rídad oc^upatoD el logar.de ks cabanaa qoe eataban deaQrdeoada**^
ipenle agrupadas.
£ste cantón eslá regado por dos ríos piineípales , el Yacaoii y el
Aroa : por aquel bajan las embarcaciones á la mar, cargadas de las
producdmes de ogricultora de losValles de S¿ Felipe y Yaritagua y
mientras que por el otro se esporta el mioecal de cobre en peda-
zos d^ piíedra para la Gran Bretafta. Pe$os torreóos bai tan ferazea
comp los de este distrito ; pero tienen la desventaja de estar en pa-
rajes mal húmedos, y por el gran número de plantas son casi im-
penetrables : están anegados por los riachuelos que los bañan , y
hallándose espueslos á un escesivo calor^ hacen desenvolver mias-
mas debidos á los pantanos y putrefacción de las plantas, con per-
juicio de la salud de los que en ellos se establecen. Sin embargo,
cuando se aumente la población , cuando empiezen los desmontes
á barlovento, irá la tierra componiéndose y los colonos se avanza-
rán progresivamente de la costa á los valles de S. Felipe y de Aroa ,
donde una pobladon laboriosa cultiva el cacao, el café, el ^il, la
caña dulce y el algodón. La atniúsfera de g. Felipe seria en estre-
mo sana si no soplasen los vientos del N, £« : ellos son los que á
vezes llevan miasmas que suelen hacer enfermizo el lugar en cier-
tos tiempos, en que hai mas caatidad de materia vegetal en putre-
facción en la montaña vecina que baña el Yaraeui.
Las parroquias de este icuiton aoa : S, Felipe, Cpcor<>te> Guama ,
Albarico, Aroa y S. Javier.
La villa de Yaritagua, situada en un llano hermoso y fértil, goza
de un temperamento sano, aunque cálido, Su posición le da la ven-
— 411 —
toja de poder traficar con S. Fetipe, Barqoisimeto, AroayNirgoa.
Las hileras de cerros qoees freos» aJnwesav yara llegar á estos dos
pontos, están en perspectiva y en toda sa bdleía. Los qoe separan
efcniiedgW>rg>a»siii ífgáiídsl y<ofc6Btto>deqi>espea»Ysi<SBh
fte yente hémfm ; «¡¿nlÉBs fÉe ios ^iis nhpTin^ jMb és Asaay
OBÜff inláütosde granáans» j nb mü dtMábJomwb y^aénwü»'
BÉn' caüÉM» 4«e les stomeMí , pero isa- flngsMM leriao9MB
j^snasos. No MI «f los esateM^qne oéniKseeniS. MMpvyilapv'
q«iriaieta^ ohIms ItaMs y eortfos. M Tállb éBl priasero na y« ea^ Ib*-
dftso^eslBMioH; pené lab aermr qan 1% slvf en diB burera^loM^
ean, y i gran astaacia dnaancMi laanefaa' dm enMartad^esp^
sos bosques por los cuales corre el Yaracai , dirígMñdasval alat f
ennina la vista n liariaante anliiagto #ff vapores, ^i as Mía esta
jirtspMiva, na lO' es alénas'la qm se ^lige i fca^jwrtaseta., cmpá
mite d<!ta «ntenver á lo M}as foseóme qaa le sii^vaadé Uirilai
eott lis Hamnaa. fiAasie eanto» iMl grandes espacian 4e mufono'
plMMdas de* eafé', eaosé y odia éüee.' Bl oRina es saladaMe;
Laspairro^niasmi : iMtagoa, tfratMblie, Gbtfeaeoa y Cuan*.
TABLA COMPARATIVA délas podckines asirónoiiiieasde lascabe9Bens4eIo6
tionras , terrenos baldios, pobladon absoluta, relativa , hombres de armtt » esda-
tiyan para la esportadon.
HOüiniB
SB
DB CANTÓN.
POMCIOH AsnoiíAncA.
Latitud
Altan»
Lonptttd O.
del meridiaiio
de Caracas.
Btrqnltiiiielo.
Qoibor
•••••• I
Tocayo, «•«..«
9^.w.\v*. i-.is'.a''
9. 36. es 3. S5. 87
9« ai, 99
I Gtron ' 9. 49. 40
BiaFeUpe.... io. 90. ii
Tariiagua 9. 57. oa
3, 91, SS
t. 54. 08
I. 59. 95
1.59. 30
•obra
el nivel
del mar.
Ta«p«- CALIDAD DI UM ISABnOS DB «QB
ratnra 1 *■ COMPONIH LOS CJÜROSIS BX
^^^.^ LMUA8 GÜADBADAS.
delter-
9»
1»
754
415
974
376-
toTAL.
cniíi-
^rado.
951». 80 98
99. 14 tf
95. 56 19
97. 78
99. 67
96. 67
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9
s
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ka
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SI
446
446
T91
cantones , su altura sobre el nivel del mar, su tempwatnra media, calidad de sus
voB » distancia ¿ la capital de la provincia y de la república , y los frutos que se (BuI-
NAOMTO
d« I. e,
qtie
baldlM.
so
64
10
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fOBLAClOír 1» LOS CAMTOH».
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Gifércafia.
Ofé, cacao, cillt y
• • •
Café^ eaoao y eals«
Cacao, cafia, «aH y
alUL
4;;aaao, caftaycaft.
— 41« —
TABÚ DB hk iLTUBA ÓB LOS GBUOS DB tk PBOYIlfCIÁ.
Nombres^ Yaroi, Serranías,
(SiTimbl ^. ^b... de Trujólo.
lainm v. 4f««^»^«^ M.
VAH.
Agua-Obifpo . . . .«r.
•••«'••^•» Iv*
Nombres. Varas. SerraniaSm
ühabuqueiL... ^0... ^eínmacaroi.
Sanare. wwn^Bi. tMS#^ iJtyiumMjwttr
Zancudo. ISOO Ü^
Diuca •...v...» 1S80.» Id.
VAWJLJDB LOS BilOS DE 4*^ ÓBDBN lÉt lA-^^BOl^llICttiP^
Nombres. Serranias. Desafíe.
CHUMM|U6fl'. .... HttUUéá- 11011110801*
rof. **
^ChilNHi|iiMMi^. •% . « Ü «^. •«...• 4d.
Saguaz............ Trujillo..4.... id,
Biiciiet^4*vN»r^..».. id «^^ • df... . « ld#
Morador. déO^ino..-.^.... id.'
Acarigua ddBarquiíi-
niéfb •'.'• . *• . r« iv**
Bio-ClarO' «.. id «.... id.
Claro 4.. Id 4.... id.
. VoelUi «.. id 4.... id.
DflfVm • .V «.. 'Id. ....4..V. ift.
BarquIsiffiÑífó....^.. id «.... id.
'HM^viarQiVWA • it* • MI* iflf* . 4 ••• . Mib
Caracul del9irgaa..«. alamar.
ünchtehe. ^ S. Felipe^ . . . id,
Chiajurero. «.. id...,.«»... id.
Nombres. Serñinias. Deéagüe.
^^^....i.... SrB.Y8R||fir... tytaSF.
Albarlco..(. ib ^, id.
Carabobo.' ÉL ^ id.
La Cnis. • ^. • «w% • • . tt. .«««^«....k idv^
Yumare..j... deüai^turo.i....^ id.
Gurarigua< . . . del To4ajo % id.
MoV^ífo.. . « . • r Se'fjar^ra ^k*»*» • • . .^ 0^-
Bucaret...... deCarlcbe v id,
Cailehe ..».,» d»Jirájiara>% . . . . rf. id^'
Castre.. .tf ,., V .,.y^*id.
Santa BárlUra tí 4, id.
DinnVa. ••».... dbCotv. •'..*. ....v ÁIL
Baragaa.4 Id •<. id,
CnH9re..tf..««ww^.. M..v^....k.id^
Tuy «••«. deMdk'otnro.....*. id.
Sicare....k.... deJMbart *, id^
^ í»^
PROVINCIA DE CORO.
£$ta froYÍncia se encveiitia d0 -10^ 5^ ¿ ^3^ 9^ W^ de
faof ealy |i ea la longiicid de 'I M 8^ 52^^ á 4»<» 22^^ al 0< del meridi^
na de Caracas. Su fignra es muí irregiriar^ri eansar de k jiwfaflih
de Para^UAQiy del largo eerd^» dexaédaoosgne la^eoeadettaiJ^
tierra , firme. Su terpeoo e%iéú\p «eria^ el mas infisate de teda lib
costa de Venezuela, si no fu^ra modificado por las ricas-seka» ^kk
están- entre el Yaraeui y el Tocuyo, entre este y la* sierra die CesOv
£n aquellos -parajes, cain desiertos^ hai calles r¿co6y,coliaafrfei!aae%
llanuras y ei^rrof cubiertos de mía lozana iregetecioa,^ ^pe haeea
un contraste singular <con los terrenos áridos y secos cubiertos 40
lunas^ cardones y cajíeS] y eon los cerros pdados^ y calizos, en^ ^laar
sobiesale la planta del m^guei. Si la parte cubierta de seli^fr m^'
«scasa de población, estaos mucho mas numerosa en la parte-aiídt'
f seca,, donde se crian cuantiosos rebaños de cabras y de ov^ii^a^
buenos caballos y muías,, y un número no .gaqueüio de ganado m«^
cuno
£1 juáxjmun de ancbura de esta loromcia i es de 62 leguas da
£• á 0«, desdela f unta de Tücacas basla el caño Oribono^ y deJN*
i, SL, desde el cabo de S..Romanr hasta» el rio DidiiTa^ 42 leguaü
Calculada 1& superficie, tiene 941 K c*, de las codes bai cérea da
2S5 baldía&.^|K)blacÍQn e& de ÁÁX¿í7Q almas*: sus^babitantes estia
OK ra^ou de 43l.p^. cada iegiM^ cuadrada^
LUilTES r CONFINES^ ^
•ü&áñmeOk HufmmimÉm JiMiwiiiuiiiuij Bifci|teia»|j^jteiÉitit^
no, y contÍDiia por este hasta llegar á los
.4Mlte«éBiM M»kiri|Hiaiir)óiite«MM.
•
c
COSTAS DEL MAR*
Desde la boca del Yaraeni hasta. la pufttade lacaos», la costa es
baja, con algunos manglares, dejando una playa estrecha entre es-
tos y la mar. Tres islotes salen afaera , llamados cayo del Norte y
cayo del Sor y cayo del Medio. La punta de Tncacas está formada
per nna tierra anegadifa y de manglar, que sale de la tierra alta
«orno á una milla. Al E. Iiai un cayo tendido llamado Sombrero ,
tfoual forma con la costa un canal de poco menos de una milla de
andio, y aunque tiene 12 brazas de fondo, está obstruido de bajos,
y es ademas peligroso por los arrecifes que tiene la costa. De la
punta de Tucacas continúa esta baja y sembrada de arrecifes, que
salen á distancia de media milla de ella, con varios islotes, basta la
boca del puerto de Chichiriviche, que dista de la punta mas de una
legua. Este puerto está formado por tierras bajas de manglar, y
'aunque se halla al abrigo de todos los vientos, y tiene un fondo de
7 brazas de fango, es algo peligrosa su entrada por los arrecifes y
iMijos que bai en ella, á cuyas inmediaciones están el cayo de Sal
y el cayo Borracho, rodeados también de arrecifes.
Desde el puerto de Chichiri viche corre la costa como al N. N.
O. la distancia de 6 leguas hasta la punta de S. Juan j y toda ella
contifiáa aplacerada, en términos de cogerse ^S brazas á'4'mlll2^
de tierra. La punta de S. Juan forma por su parte occidental j tina
grande ensenada de fondo tan bueno que á una milla de la playa
solo ha! 5 brazas. Al N. O. de dicha punta existen dos cayos qué
se llaman del N. E. y de S. Juan. £1 fondeadero-está al i. O. de
este cayo , dejando caer el anda sobre el número de brazas que
convenga al calado de la embarcación.
Peide ia pnU de S. iuaii oéne^la caün ímm al ü. (L .la dis-
méá di iMa de 1 0 iegnas, tota laipoota dil^SuBwro, y. toda eUp
m agbNíNRida r <Unpi«k» €«iefi da panta' éétíkmto ae* fofeai wm
«Mta MMiiMJada foco (méú ; casi oo daiiailií90fde»sla Wsa é4ai
|iii|lMMJiflM»p)iMAei*i> '- ^ -'" '
'uV¡».h^fmán^f¡§mm%: ^mmkk icMta msk »l.faiiüiÉü»:ifeniin«ii
TMÍiajinÉqridi^ilMiít»to íjrtuiwla Jehlfc IMtiée ^Med ^ diilnaiii
^Utapaa ;;ti4a 9lhits.Un9iájm^9átíi90mmáv ¿iMédia tegua ^
si te ^aiere^ sin mas 43iMdado^auiaii<tlf<witi<tlln¿4^«ac^
*tra el paerlo dé Cémarébd en ^ta cbsta, áe la caal sé le?alilaii vav
tlM cerros de doBde se descubre la iliar.
La ensenada de la Vela de Coro , tiene fondeadero ^ y para dirí-
•gtrse á él no hai necesidad de otra guia que el escandallo, pues el
fondo es roui aplacerado y limpio. En la parte oriental de esta en-
senada está el pueblo dé la Vela de Coro , y como media legua
-adentro, y al £. de él, el pueblo del Carrizal. Casi á igual distanda
al O. de la Vela desagua el rio de Coro. La Vela es, pues, el puerto
principal de la provincia, y dista de la ciudad capital poco mas dé
dos leguas.
De la boca del río de Coro roba la costa repentinamente pat^
el N. O. -1/4 al N., formando una cadena de médanos de arena ,
que tiene 61/2 leguas de largo y de una á media de ancbo, unien-
do la península de Paraguaná con la tierra firme. La costa oriental
de la península continúa al N. por espacio de 5 leguas hasta la
puntado Arícula : toda es muí aplacerada y á 40 millas de ella se
cogen las 40 brazas. Arícula es un pequeño puerto para el córner^
do de cabotage. Desde la punta de su nombre corre la costa al N.
N. O. la distancia de casi 6 leguas, hasta la punta de Tumatei ; de
aquí sigue 4 millasal O. N. O. hasta el cabo de S. Román, que es'fa
parte mas setentrional de la península. Cerca de este cabo está
Puerto Escondido , y Otro mas, nombrado Bajabaroa : ambos son
buenos fondeaderos. En la península se levanta el cerro de Santa
Ans, que se ve á gran distancia desde la mar.
Del cabo de S. R^man corre la costa como al S. O. un espacio
de 4 leguas basta la punta de la Macolla, aplacerada y limpia , pu*
diéndose atracar en ella, sin mas precaución que el escandallo. Esta
punta y la de Espada , que está en la pen^psula Guajira, provincia
de Maracaibo , casi E* y O. con la primera , distan entre sí -17 le-
guas , y forman la entrada del golfo de Venezuela ó de Maracaibo»
En este golfo , y en lo mas al S. de él , desemboca el gran lago de
Maracaibo, que solo ofrece una boca navegable y capaz de embar-
eaeione» de «40 pierde calado, porque* forma barra am que tío hai
rmM d» 4-2 'piea de ágtia.
De la punta MáceHa (que es un escelenle puerto) basta punía
€Miéf ]^ oaala> oarre M Sw & O. , y de alM eí gue easi a1'9 < basta piír^
la Cafféon.'fi* toda olii ie p«éde^ «fondear , pues^^es- cMa Hmpía f
aflMiMili> pero lé^ptniof naejures ito lots ^aqtie^ , pul^rtólier»-
iMsa y <9egar» , f la^enieitada de Ayana, que es un esee^ente fon^
paerto Goaranao, donde mi Im ¡momi wm^ 4e mi Ani^Vif»
iMxynio dttl .oNritt» de niédaiios fi^ im^ la jM^ímpiT^la «mií»
Por a«to fonficmiciiMi «e foriaa aqpí «a irtfo^U^ lai|ieiuiM«Jia(f
Ja oosta^i el c«al qi^eda^^eqrado al E. por el ialmp de xnídaaM, f
^Wtoal O» ^Ue pqnln Cardoa f póiUa Saiárida. Frente á esll»
jpoeblo la co&ta ,está ciwsidecada c<h»o w poeclPt amfue ne 4^
jnaa Que ana rada.
Desde Sasárida hasta el c^úoo Oríbono, la costa corre en dirección
4 O. S. 0«; por -14 leguas» teniondo iMurapcoaesctirpadoa : todit es
mui apkucersulaff y se puede fondear doiimh ^joa de ella.
Goiivoe.
Esta proviQc;ía tiene ooo qoe es el tercero en magnüjid deJos d?
la república* Tiene 60 leguas cuadradas , y se le llama gotfete de
Coro. Esta abierto háoia el poniente, coiQttnicaado.con el golfo d^
4laracAibo, que es el mayor de todos. U entrada del goUéte de Cp-
jno se baila entre la punta Sasárida de la costa finue , y lia |>|}Ata
£aJcdon 4e la peAÍnsuIa de Paraguauá : la distancia de una á otm es
4^ 6 l^iiuas. Este golfo tiene 14 leguas de largo y 6 de aocho , con
púa circunforenqia de 42, á oausa de doe peqaelias peluiQsnIas q«#
se avanzan de la costa al golfo, coa la particularidad de asemejafae
4P su %ara á ia de Pacagjuauá» Este golfo tiene mucho fondo y
iBitá hian af lacmido ; paroosr^de la coi4a y delistmude méda*
jioa es preciso londear 4ínui afuerar Los vientos.que aquí doBiÁnaii
;^iau#u4el N. igt y «i«^ifote ^ aliubcigo de Iqs del N* Q. Todo -él
aa inieda «awdaiar ^mo H« iniu0n0Ok poepta.
Ufi vm grau^fPiSau.a» UNvmw 4a iftisi^cawdw gmitüni
de islotes y peñascos. La principal es la ís|ai4a ^IvfiHlf t^r^lÉP fHÉi
m^ gaUaledaCaí^, autre las,piiniaa.(iaHiiM y M§fñ§mm y^^ne
aa^ai^UandbitaAalrgpUata^a^ifaRiua da patpaüía'ianÍMülaftniMW
dasimháifia el rio dn Aisoa. ¡uiaMid^ásu^ In&jmnluraaidn^ftvfti^dÉl
éM'Y Bmmb»y^0inm^ ^mlím9^vikiM mMáBAf^ftá^tínsk-
buena calidail. IJtttaWQMíD^; ka4iQ»jQ%l^(9i]<)S«;«p«piijntil»fimi^
á la punta de S. Juan , llamado uno del Nordeste y otro de S. Juan,
distan entre sí dos millas. Esto^^ti^en un terreno poco elevado, y
están circundados de arrecifes. Cerca del primero hai yarios cayos
La fljemra de Codo ó de «. Iiui» ^ el«v#. #ft m64ÍA 4« ih^ fHKráMía
tiasU jla altoi'a de ^.$01^ .vaoa^.sQbrt^i Aiy«l dal mm, kgmwknm
«u GUiMbre una llima^ ii^^flar y c^B^e^ 4e ^UMMBli.^»4iltai-
ci^ de doQ^Q m\f^ ^ ra^os , ««ta «1 N. £. üK) m c)imioi»f«Ado
su altura bftBto Cutnarefeí^, !^»»qil0 se <U«^9 «1 $. & fiAUlto ia-
. mtídkmm^ de üifeneoriuea^se po»^ piwlela.QW ^el pAm^o, j ¥a-á
lerumiT e« el 4;enco de Pirttu> «eirea del« «Q«ta, £n la pacte oeoH
ámíAl de te Uaiiada, «o diMáj9>s^e««i4entost Ui pairatuM.de íGuií-
iD^giNt, «e e)e^^ un pieo^mn esKe.u^iiriH'e i 4^$0 taoM dé^filtiui»,
del'eual sutaii de« pamid«s peqveioe «sd alJif» y otro al &., miéB-
tras que m tareero xnaa largo m 4irffe al ponidiiie io^ando ios
QQri^QSt4e} P^egal , VAdiro > tteoe ? i9»l^i;^a.^4(9al40l lona Ata
por d^nde pasa eilrk> $. huhq^^miiiá^é. h moit, y «Q^fioBt»-
ehuelo por doude pasa ^ ^awAt» %oe 49^lte^miri ^Á'^ft^kb,
£^ie pais moQtai^ e» d0pq^r4tm:s( ^ U^i» ¿.9M iiaraís) y >de
una estructura singular, pueai«8iíqir:i)aMa]|fi.«|.4iiriiia(á io«iftr,
en dirección al N. O., mientras otros forman un óvalo que encierra
las alia sabanas de Taratari^re^ Aü^ corren casi paralelos dos ra-
males bajos y mui interrumpidos , que se dirigen á la costa, y de
€ODai§iiÍQülo 4á» isiarro de S. Ims. ¿I «aé pM» flll>i¿ 'A»taip«rro-
qiiia éé Apnlwia, Jénmaia: léiBÉirtaiiit^aiO— rb, l8nia>liBda4N
jpaopooiagnjttoéft €iÉiyi»a Y ApwUHwa'ie ii»WMt3flf «Maf»,
— mi —
«Biélices tuélre i servir de luya per el Itdo opuesto , diñfiendo
^■8ftglMeqiieTaiíhieia«lN.alrloTocQyo, y háda^is; aldeAroe,
lemiimodo en la pasta de Toeacas y puerto de GliMikivMie* E»-
'tos pequeüo9 ramales bajos, i Teses interrampidos^ dep^iden de la
.sierra de Coro ya desorita : parecen todos estremos de la cadena snb-
^mariifo que corre paralela á la ¡costa de Caracas , cayos residbos se
ievantan en la isla de lá Tortuga y en la de Margarita.
,* • '
RÍOS.
Caen al golfo de MaraoMbo -1 2 ríos, y á la mar -16 ; todos mucm y
corren en la provincia, sin fertilizarla, pues la mayor parte de ellos
se secan en verano, y solo oonservín algunos pozos en diferentes
puntos, menos los que salen de la sierra de S. Luis, en los cuales
-corre siempre agua, aunque poca. El principal de estos es el rio
Hitare, formado por los ríos S. Luis y Pedregal , y desagua en el
' golfete. El mayor de los que van al mar de las AotHlas es el río
Güeqoe. Bai ademas dos ríos navegables, uno el Aroa, que tiene
su origen en la provincia de Berquisímeto, en el cerro de Duaca ,
y corre en este lerrítorio por espacio de -12 leguas, y otro que es
-mayor, y qae está entre los de segundo orden de los de Venezuela,
m él Tocuyo, que se forma en la misma provincia de Barquisímeto,
en el páramo del Jabón , cerca del de las Rosas , teniendo sus ma-
' nantíales á 44 05 varas sobre el nivel del mar, y 96 leguas de corso.
-Sí {fonem (M'oporeional su dedive estaría en razón de cerca de 45 va-
ras por cada legua. A este rio le caen 40 que se oríginan en la co-
-marca, llevando las aguas de otros 4 O que se forman en la próvln-
.da de Barquisiineto. E^Tocuyo, poes, ofrece en la provincia de Co-
A) 44 legoas de navegación , y las montaiías que él baña , son los
iemmm mts fértiles de la provincia.
LAGUNAS.
t
■ai valias laguaw éa aguas salobres en d Istino de mátenos
f«e«ieila.«08taooB la pei^nwkide Paraguaná. kátms» entre Co-
lacitft y IftSMttIafta de Omria «xittea varias ciéM^s que mt^Usn
«MMTW if te Mtlmnao; f«i9 m peqvellas y de poeo imwm.
T«ios4ai/balÉtailai4al»eilita, dasáe Cwiardiio basta losconmies
da MQncaílo, •tímkm, i aípsipii éa^mn anÜéhUes pata «soi d«r4is
— 45« —
personas y de loa ABmerosos rebeik» de cabras , porqae los ríos ge-
oeralmente se secaa en aquella parle de la provincia ; así es^ que
en donde bal una casa , hai también una- laguna que se llena ea
tiempo de las lluvias, y que por lo compacto de la greda no filtra y
eonserva el agua en la estación seca.
CLIMA.
£1 clima de esta provincia es en general cálido y seco, pero sano*
En la sierra de Coro solamente , se encuentra un temperamento
fresco y delicioso ; en las demás partes donde hai serranía , el cuma
es cálido y pero nunca malsano. Esto proviene de la poca elevación
de las cumbres, cubiertas de gramíneas, las cuales siendo general*
mente calcáreas impiden el crecimiento de las plantas ; eütre las
pocas que hai hi mas abundante es el aloe cucui de que se saca buen
aguardiente. Hacen escepcion de esta regla los cerros que están de
la parte de Acurigua y Macuruca, los de la montaña de Omuria y
los que costean el rio Tocuyo. Todos están cubierto»de una fuerte y
lozana vegetación , bajo un clima húmedo y cálido , y por consi-
guiente algo enfermizo. Sucede lo mismo en la parte llana cubierta
de bosques y pantanos , cercana á la mar, entre las bocas del To-
cuyo y del Aroa, donde el clima no es mui sano : á pesar de lo cut!
aquel distrito no tiene una población pequeña. En ciertas épocas
suele haber fiebres peligrosas.
ESTAaON DE INVIERNO.
La estación de las lluvias empieza en la parte mas oriental en:
setiembre, y dura 6 meses con bantante inTerrupcion de días, IhH
viendo mui poco en la segunda, ea proporción de lo que llueve en
la primera , porque allá el terreno es seco , estéril , y acá está hú-
medo y cubierto de vegetación. El ponto de división entre estas dos
calidades de tierra está en la serranía de Gumarebo. La calidad del
suelo,. arcilloso y eompActo , en la parto occidental, hace que las
aguas no peaelren en él, ó bien qu0 se pierdan en terrenos desmcnro*
nadiws V arenotoa, lo tmi causadla esterilidad de a§iielios parajes.
No sneedeasí en la parle oriental, donde «e formao grandes barría*
les^. y. en piecioe puntos eslensoe dwc^s ^^ ba^en incómodos
lo|€8n^BO$^necesitándalke de embaiMMküQ en algunos lugares. Estos
P. OBOfl. M
üerrenos tienen sabanas en qne se cria ganaéo Tacmio, y'miámíígQííñ.
van á la mar ; pero el poco dedWe del suelo y tas confínas» «gm»
producen este efecto qne cesalan Itrego como pasa «I hivienMK
DIVISIÓN TBmvraiñMnL.
Se divide toda la provincia en 6 cantones , con los nombres de
Coro, Paragnaná, S. Lais, Cumarebo, Costa-Arriba y Gasígna, los
ciMles tienen 56 parroquias y 26 grandes v^cindavios, en dondn-se
QoHivaniaiz, yuca ; plátano, cambure, café, cacao». algodón, cana
dnke, frijoles, caráotas , anyamas, sandias, verduras y írutaa.
La poblshaion de esta provincia se puededüvidir del modo siguien-
te : a5/.^ 00 se dedkan á ja agricultura, Áhji 00 á la cria^ y 20/1 0.0
al-eomercio, avtos, ele.
COMERCIO.
Esla provincia hace su comercio cou la de Maracáíbo y con 1a
de Barquisimeto , especialmeDLc cou las ciudades de Carora y
Tocuyo : con Puerto-Cabello, en la provincia de Carabobo ; y con
las islas holandesas Curazao y Oruba, sostiene un comercio activo,
eaviando á estas últimas pieles, papelón, piálanos, maiz, hamacas,
caballos, burros, muías, cabras, ovejas, sal, lana, queso, madera
y algún cacao; recibiendo en camlío dinero y (oda clase de .mer-
cancías. Recibe de la provincia de Barquisimeto cueros, suela,
papelones , azúcar, conservas, harina , cebollas , ajos , menestras ,
burros y muías, dando en cambio sal, género y loza : á Maracaibo
saweuKÍan hamacas, queso, chivos y almidón, recibiendo mercancías
diíarenles. ^
CLUDAJDES Y VISÓLAS.
CAimHT tm GOAO.
•%e eiodad descaro , Mgwéo rtisUbteei&Miito dmémfet^Mifskfm
etí 9a 9ieiTa¿Mnni'/ñiá fudod» ea éfta3,«ei. ^&ide>jiiiiQ.,*to^
S(miti*4mi)[yl«riMw H(mió*pDP ínsm^ ámpén , jqw QBD>e0. lmoi«»
bres de0enll»rvó^É»la eostaCsm» y ae eMUeoíé «lool^ l«|flaci«»
con \^ í«to9 «dffttfiíttfl»,, y ^^atíim^wmtíki' ma i^9&té0^Bm>'. f :
Sajito JtanN;<^^ Amia te casM 4e «p«iofr jaspa^^
taha JasoiMtaiimaxia, y fv» vkdtáda 6& 4 4r9i9 f)0r el prímier einqpeo
qaé(Hi9iió 4 este prá , CtkléM Guerra , el oiñá tcafieó ota to; :
ñatearles «nel pseaje en^doade éespues ee fvndó Ja dkidad, reí-
ciUsñdo Reídlos a^oa'OFo.^ foeéó en Cúcdana '(ciae.aeí seii»<-
maim ia Herrar) eon aolo &5 hombres, por ^aek) de Molías. .
Cmndbaepsesentói ▲«fiíee elieayQí%«e MMiitmre, id «as {loderoao
de la namn Caáqsetia, venia ccmdoeido en 4ianaeapor otros eft«>
cifuaS; ysaoBaipaííadoide ^fdOtaobks,^ E\ oegal» del «aeiqne ai es^
pafifil iaé ^6¥aluaé» en 4i.04it f«Bos, y se lúze una perpetua
aüeansa* ¿aiMs acpMlte indias ialtaran i «hs promasas, y por so.
laaitad síenpae^stoviarG» 'libras de tribsto y éemeras. £a 4SÉdS,
llag&^'adeliiitad& y jgebejrBtdorde lat^ooqaíeÉM qaase bkíefiat .
pfiT lafomBfisfiía itiaoiana .ée los Bekanes , Ajatoosío de Alfia|er,
cmi su iaidffiÉe'geBfiral fiartolosné AiUter, .«fiibosalema&es , con
'400 españoles, enlrc eUos ímmk6BfUM§^sj ÍHn»bres«ables , j.
Jjian de impúes eoteegó S mando y se mkó á iSatito Dtmas^cK
£Qfi9 filé pw largo 4kmipo b eapital del país (^ne «e Uaüó Ve«
ñúsnela , y en |S¡56 í1q§& á día el obispo D. Jüao Rodis^oes^ pro*
oedenle ée Pnerto^Rico.
De Coro, y eon tí M«lie^do Ids ¿idiAS de «qa«ttaa«eo»ai«a&y-ae
eiipMAdiemuí kskicHrsioiiesbácia^l lago 'de Uatftcaiba, tofliena:)
d^ Pei^ y vü\e de Upar. De allMambian Jor^pe delkpira, Ittool»
FedePBiaan y felife Une aalj^son á sus lejimas ^áadkiojÍMisen rri
iatei4or del paia, «ftfbusea del Dosado. E^, piaé, Gsiro eo aqvel
tiem^ la eseala^e (odas las empatas 'Okas memorabtes, y, no ea^
capó «de /la oodim de los eorsaiios <iogle8As , pues en -1 h$7 ea te
aoobe éA 7 iie«atí0&y)iievda6eniburci^#a y al fomper el alba el<^
^«s^cafon k mudad 9 se apodeiwpfi de día, la sapiearoo y «a
hteiec^ m§«r ^00«a peaosv pam'iio<qaemarla.
£a i ^7^ lí. Juan. P^meaid , nembeado por el foí .^gio^arnador y
4»ipitatt»pnfiFal de la.prov4Bda,. trasladó la capitol á €aráeats^ y mi
ii$%^ el obispo /Fr.. Juan MamaiúHo ;.fijó «u neaideftek ardbitrwriar
mentemí ai^yaaUa €Íadad^á)esdemi&óiieas«mf«eé ¿deasi^'GDiio, f.
GAféeas i elevawOp la mtíjgaa eBfiM 4e Veaesfieia no Uogé A
lmiar«lnii^o 4dia|sro«inGia.basta^<$(b5 «eii ^e AiéemiMb^Wt
— 45^ —
tal por el reí , mas no M considoada gobio proTincia sino eir
•I ^ 8 en que el general Morillo puso en ejecneion la real orden.
La guerra desoló enteramente á Coro , donde duró hasta ^825.
Era tal la miseria, que sus habitantes perecían de hambre. No ha«-
bia una oveja ni una cabra : no existían caballos, malas' ni asnos,
mucho menos ganado mayor. Pasadas aquellas calamidades empe--
laron los habitantes á comprar algunas cabras en Carera , y tan
arruinada estaba la provincia qae cuando se decía que un individuo
tenia yarías de estas, se le tenia por afortunado, y si Uegsüba á po-
seer un par de burros , se le estimaba hombre rico. Mas por la es-
tadística de bol se puede juzgar lo que puede la industria de los
naturales de Coro, aun cuando el pais en gran parte sea mui esté-
ril , pues espacios de mucha estensioD están culáertos de higuensi
de la India ó tunas, de cactus 6 cardones, de mimosa» arbórea
centes ó cujíes ; con todo, en el trascurso de ^6 ados se cuentan
existentes en la proyincia 802.000 cabras y ove}^, 46.440 cabe^
zas de ganado vacuno, 9.000 cerdos, 28.420 burros, 4 .600 muías
y 2^572 caballos. Esto solo puede también dar una idea de las
ye:itajas que ofrecen las tierras venezolanas.
La ciudad de Coro está situada en un llano estéril á 40 varas so-
bro el nivel del mar, del cual dista media legua, leoiendo á mas de
dos el puerto de la Vela que le queda al E. N. E. La escasez de
agua hace que los habitantes estén obligados á irla á buscar á una
legua., al rio de Coro, y la necesidad ha obligado á formar un grande
estanque cerca de la ciudad , en el cual se recogen las aguas lio*
yodizas. Se trata, sin embargo, de conducir el agua á la población
por medio de un acueducto, haciendo una gran represa en el rio,
lo cual produciría un gcan beneficio á aquel pueblo , que goza de
un temperamento sano aunque cálido y seco. Está, sm embargo^
refrescado por las brisas del E. y N. E^ que hacen soportable el
calor, tanto mas fuerte, cuanto que por todas partes la ciudad está
rodeada de terrenos secos y arenosos. Su posición en una tierra
plana, la priya de bellas perspectivas ; con todo, desde ella se des-
cubre la sierra de S« Luis, donde un dima tinnplado y una pr4ma-
yera constante ha hecho que se establezcan las mejores haciendas
de café, de caña y toda clase de hortaliía. Al otro lado de esta fértil
«erra se estiende hasta tocar en la provinda de Barquisimefo, en
el cantón de Carera, un terreno seco, estéril^ quebrabo y con hile^
ras de colinas que se ramifican de diversos modos , cubiertas de
_ « 457 —
pocas yerto, abundando en ellas d aloecncni, qvte da un licor espi-
rituoso y de bato gusto, del cual se hace un comercio interesante.
Eslad plaiilas se piledea llai»ar las verdaderas fcüBCÍendás naturAles
que suplen á las de la caüa de asacar. De la parte del órlenle unas
eelínasi de poca elevaeioa impiden la vista de los cerros de Gnma-
lebo, á cuyo lado opuesto s^estiénden los terrenos mas pingües de
la provipima ; pero malsanos por los derrames dé los ríos y la es-
pe$ura de las selvas , en un elkna caluroso. Estos bosques que lor-
man la montaüa de Ornaría, los valles de Acurigua y Camorreo y la
aelva que bafia el Tocuyo , y mas allá d Ároa, están casi todos de-
flierios, y solo atravesados por algunos malos caminos que conducen
á la provincia de Barquisimeto. Entre estos y la n^r, hai heripo-
sas sabanas de abond¿ites pastos , en las que se elevan algunos
perritos ó colinas* donde se cria ganado vacuno que en tiempo de
las lluvias está obligado á refugiarse en buicím» pvntos sobre los
terrenos altos. c^iertos de graiiiínfiis¿ Al opuesto lado, biela el
poniente, una Uanara árida se estienée hasta el lago de Maracaibo ;
las tunas, cardones. y cujíes casi son las linicas plantas que se dan;
pero una numerosa pofoladon habita este vasto pais , cruzado de
caminos , con aldeas y crecidos rebaños de cabras y ovejas, muías
y burros en gran número. Sobre estos terrenos áridos se elevan
pequeños cerros , en cuyas cumbres encuentran los habitantes la-
gares propios para sus labranzas. Unos cerritos de arena con algu-
nas plantas que solo nacen eil las orillas del mar, impiden que este
se vea desde la ciudad de Coro. Estos cerritos forman un cordoa
de médanos por la parte del N., que se esliende por el prolongado
estrecho de Paraguaná, península particular por su forma, de cayo
centro ^ levanta el cerro de Santa Ana.áToda ella está poblada , y
contiene muchos rebaños de ganado. La posición de Coro cerca de
la mar, próxima á las salinas de Mitare, é inmediata á las islas ho-
landesas, le dan alguna importancia comercial.
Es falsa la idea de la pobreza de Coro : la circunstancia de ver
tan poblada la parte mas estéril , cuyos moradores poseen rebaños
numerosos qde les proporcionan bastante comodidad, es una prue-
ba evidente de que hai riqueza en esta provincia. Rara es la fami-
lia que no tiene un corto número de cabras, animales que fácil-
mente se mantienen con las plantas grasas y espinosas , y las grar*
míneas que producen aquellos terrenos. La escasez de lluvia es
propicia á h propagación de estos animales que aHí se reproducen
'£ai»;iNrtydMiqii*ítlÉi'.iifciiüo :titl|i«i la
. fltitt.lo»eitaiifae08rliM8l89faelMi.«ÍiadQidt<te
tarde se kt ansátint. jpsni leitniir teMlit; fi kMMÜMi lípMite
m refiteila mkamtfttuMh dttpttM'd»]!» eM s^ét MMifM al
gwaéb y 4oe wi fNMMrfof J«»«HiVoi) Jto «feetfM (fe M»e«Ha-
é&é éük iMnbM. Adema d# dur een I» «ame r'l#(ft«^ ttlüaeotos
gwtesaa, lasfMe» d« Iweaibr» íútmHt M «rtfeitK»'^ amiiéfcio
«fe lIMiM «littdsd f eOlWNÉN»»
En 1» eoHni» s» dto ali>adaiH» MWéfctfj dfe HMrii- ? tf atBWon
praspeni.bMD ea alRMí)» jpMli»*d« la^ «vranii ^ f 4le^#8#!k!een
iaa mcyetai haaiaeM d< lli»Mniel«.Laeriad««iMM#^ níiiM»^ «ios
' f ganada vaaaod «Ihaii» á ilfflteUai»l»Mt«Mii Md# 14 fie. ¡Meden
Mcetitar.eft m ettiáo^nmAÍQr jiwiiui 4» «hid f d»^ tüeeiüli-
dadaa fw paadafl apeteha pwre» pmr amofldr <i«aqitíift f Míe-
ga«. ea el awodir — f—wlhw, ,
14I8 parft)^Éiaa(da dBte^ eoüMr <«*, dw/^l» íMi, OvrMI ^
. tiwmhm%f kutáit^r lftiirti»i>> IfctiwtT IftMWin^
caaiffos Dfc' paaiasiraiiá».
La \illa de PoebkHlVttevo e^ situada ea iiaa. maMla ea el
centro del caaton , y á poco maa de 3 leguas de. la BUff» La vkia
de varias colinas impide ver ierminar.por todas .pactas su temto-
rio , en las orillas del mar que lo circunda, méaoa por uaa pacte y
en donde una lengua estrecha de arenai cobáecta de tui.cosdoade
medaños, la une al litoral. Sin embaí^^ el cerra de Saiita\iiia^ en
jfSiTVd desnudo de vegetación^ en part€ cubierto, de eUa9.coii.§raiides
pénaseos que salen del^entco , se presenta ea toda sa belleaa. &a->
l)icndo á la cumbre del cerra en donde se elevan en. forma de. pi-
sámide unas paredes peñascosas |» la vista domina.f9r todas. pastes
el territorio de este cantón, y se perciben sus Umíies blanqueados
., poff las olas del osar, ó biea cauüuadicse coaellas eu'el tosnoute.
Hacia el N., el cabo de S. Eoman se ve psomiasnta sabva la líarra
^, Jbaja, y las olaa se rompen al oriente ceatca k)s.anrea¡fBSrdel'pe-
^aeno puerU» de Áxwüsif miéntcaa al o^iesto lada mu» ecliaas
^ impiden ver loe fondeaderos de los Taquea y de>l&aaUiMida Qta-
^ lanao. Volviendo la vista al. Si, ea toda^aa esfenaioHp sa descubre
^ : el golfele de Coro , lo&monteeilLos de areDa^aa-fioma^ oaoBfWte
,• njien el teirreoo ¿la CmUfüm»*, ^.doade iiasol diHaiafcrftBlí^ y
é
J». i)#liSQ]<mili»wo. «mpaítoa'eh aire y no.d^iia ver. la sen^aQia- ele
Coro, sino como una sombra oscura que se confunde con el cielo»
llipiii4^l^ei(Q€Íaihg«kel8St,.no aa descubre ni un rio,.QÍ ui) arro^ue-
-to^l^'Siip'bMi^o^.eAle^JiolaB- icesipoj^os de a{||ia .perenne.,. sírviéa-
dwáh la)pttbta<M<»li4 A» estan^^oea arliOciales ó de pequeñas lagunasu
,£ai A9l^ petüÍAfialcb fistá laxka. salina de Guaranao , á donde vienen
ooudiAa* lioqui^ ¿ ow^ de sal, Hal oteas salinas en los Taquea.^
''Üvi^j^yAnMmQ,f Aríoula y: Tiqni» £n Jax^osla del Q..se encuentran
-£0clM/^35 fiar«i, y hsi eaella. unos lin4iks oacaQole& de q^ue se bac^
.ftWiftrciOrjE.BíW' ser allí el úmoQ lugv donde se hallan en. todo
YettCRueUy .y £6^ usaohpara^foimar coa ^los, flores artificiales. Cer-
'«a^del «ei:rQ<.de S^nta Ana bal múias de. hierro « a^fre y aguas
.twnftl«s«,,
I-aii üfiEQiyMai^^de.^ icaniau son^ FoebloriXui^yD^, Baraihé^ Ene-
'ilityM(avMciruVj^ptji.'Aina..y Yadacaq^úia^
' . ■ '' **
CAPgrON* DE SAN LUIS.
ia. vüla.,da.& Lukestá situada en. el flanco meridional db la
sierra de su nombre, en lugar estrecho, como colocada en anfitea-
tro , pasando por medio de ella una quebrada , cuya agua sirve á
los habitantes y da origen al rio , que unido al del Pedregal forma
el Mitare. Aunque espuesta al calor abrasador del mediodía , está
.SU lejpperatura.refriescada por su elevación sobre la sierra, tenien-
4a una vista hermosa hacia los terrenos áridos que al pié de ella
st^&tiendenal Subasta confinar coa la provincia de Barquisimeto.
Colinas, estendidas en .todas direcciones se confunden en el horí
.;mnteefiu^^un cielo oscurecido por el polvoftrine se eleva de los ter-
i;#nos ^ecoscuhiectos de planXas espinosas , en donde los vecinos se
. 8ii;ven de estanq^ue&. para ellos y sus rebaños. Pero si. se vuelve la
TÍsM^aL poniente,, los cerros del Pedregal se ven en el horizonte en
.lejjína.perspecLLva7 lo$ cuales esconden las selvas que se pierden jen
9I ,la4$a de M§j:a<Qaiba, mientras que al oriente la sierra misma de
^,S« rLiiis.jQubce las montanas desiertas de Omuría. que terminan
^jsoiu^e^el tria.TocayQ»..Al N. las cimas de la sierra cubiertas de pe-
.lí«VB<i0ik]j, de. 4xaa. fresca vegetación., ocultan la hermosa esplanada
d^Cttr.ima(n47,y ios terrenos cultivados que por toda la cumbre j
.^H^üflj^^dfts. est^n (»ih|^U)&4a planteciones de café , plátanos , al-
— 44© —
godon ; maiz , yuca, caBa dulce y toda cla^e de veréunis y meiiesp-
tras.
Los terrenos de este cantón son MrtHes fisanos en lá parte de la
sierra; sanos^ perolbidos , en la parte plana ó cabierfa de colinas
pedregosas de poca elevación. En ;^tas hai varias aguas lennales
en diferentes puntos, y la muí particular entre la Golva y el Cardón,
donde se elevan en lugar desierto dos semiAferoídes 8ol>repuestos
uno á otro, que se alzan á 45 varas sobre el nivel del terreno en
que reposan. Allí hai 40 bbyos que se asemejan i {Hatos convexas
de varios tamaños, y estantiempK llenos dé aguas pajizfts, verdo-
sas, blancas, negras, criiiblinas y tflrbias, de olor y sabor distin-
tos, variando su temperatura»de 5^^ 5 basta 56"* 6, del termómetro
centígrado : todos ellos están en un corto espacl<v cuyo mayor áiér
metro es de 50 varas y la masa, se compone enteramente de una
materia blanca, petrificada y stn úinguna vegetación. A su pié, de
una parte bai un terreno cubierto de yerlKi siente verde',
pero es un atolladero todo él , mientras que al opuesto, reposa so-
bre el declive de una oolina estéril^ cubierta de tunas , cardones y
cujíes. ' '
Las parroquias son, S. Luis, Cabiire, Pecajca, Águalarga, Pedre-
gal y Curimagua.
CANTÓN DE CUUAREBO.
La villa de Cumarebo eslá situada en una alta esplanada irregu-
lar, que forma el declive de dos cerros que la dominan , y en ella
se goza de una bella vista del mar, cuyo borizonte lejano se une á
la bóveda celeste. Las ^colinas que se estienden al N., cubren el
puerto de Gumarebo que dista una legua , y varios cerritos con
caserías que casi tocan los bordes del mar, bacen la perspectiva to-
davía mas pinloresca. Al oriente un ramo de los cerros de Gumare-
bo que se pierde en la ensenada de Ricoa, sobre la mar, impídela
vista de las bellas sabanas que bai entre el rio Oúeque y el Capa-
daré , que aunque se inundan en invierno, presentan , sin embargo,
unas colinas á propósito para recoger allí el ganado vacuno que se
cria. Por la parle del poniente, los mismos c-erros de Cumar^)0
ocultan la perspectiva, que seria hermosa si se pudiese ver el puer-
to de la Vela de Coro. Por el N. unos cerros con grandes peñascos,
cubiertos de vegelacio», no dejan descubrir l<» valtes fiirtiles pero
— 441 —
enfermln)», de Acarigoa y Maeonica. La sitnacion de esta yiSh, en
lagar sano y bien ventilado, en el camino qne de Coro ya á Pner-
tó-CabéDo , y no mal distante de la mar, i donde pne^ eondodr
sas finios, con terrenos fértiles y bellas sabantis , la bacea intere-
sante para el caltivo, la cría >8n comercio partíciilar. Dos agoas
perennes bañan ytertíllzan el terreno %n ^e está átaada la. villa ,
'^ dos cerros coatignos á la aplanada sirven de escalente ponto de
apoyo para defender el pneblo , y entonces nn peqne&o cerrtto en
qne está censtroida la Iglesia y qne domina la plaia viene á sor la
mejor posición, y casi una ciodídela.*^^ es qne en tiempo de la
guerra de la ind^ifdencia,*)[>ndieróiK«llí sostenerse por mocho
tiempo los patriotas, rechizando coatinaamente los atai)pes infroc-
tuosos del enemifo.
Las parroquias de este cantón son Gomarebo , Pirita y Bara-
bara. ^
CANTOR DB OOSTA-;AllRIBA,
0
La villa de S. Bligoel del Tocayo está sitoada en an llano ane-
gadizo á la orilla dol rio del m^smo nombre, distante oifa legua de
la mar.
Aunque su posición está ep un terreno bajo, que en la estación
lluviosa se aniega por todas partes, quedando apéiyis en seco el
lugar en que está fundada, sin embargo, su aproximación a la mar^
en el camiqp que de Coro va á Puerto-Cabello y á las minas de
Aroa, cerca de un rio grande y navegable, con sabanas en sus cer*
canias y selvas vírgenes que se estienden á derecha é izquierda de
las orillas del rio Tocuyo., hasta confinar con la provincia de Bar-
quisimeto , le dan una importancia , que creceríi con el tiempo ,
cuando aquellos terrenos se desmonten y se cubran de haciendas y
plantaciones, que podrán enviar sus frutos á la costa, por el canal
natural del rio Tocuyo. Será entonces cuando el hermoso puerto de
Chichirivichi se poblará , por la concurrencia de los buques qae
alli se dirigirán á cargar de los frutos de unas tierras virgenes y
esteosas. Aonqpe aea malsano el actoal dima de la mayor parte de
estas comarcas , por la acomolacion de materias vegetales que in-
fectan*el aire, este mal cesará luego que se corten los árboles viejos
de los bosques de que están cubiertas aquellas tierras, y entonces
vendrán estas á formar la parle mas agricoltora y rica de la pro-
ifi0lfiidr€»a^ esÉaadiiDáisffiiíGnteiriiCpíérift'lMir^
nnÍKÍBc«to7 cnÉUHia.dttsaia kmwi.^ieélilMM»i^ <)p^ rntum^- te
aUriM jarcies aklNdf» dititefíifttfifiatfiíi «i(ArQir^eiliiní>a^^
tie»{»^neiMi4ft>laK»náM-iAi(«a{iM(r *t« |»ié ^nirfrMp^pwr te4e
cacao 7 e$ílméB,^míém*Il3Daaámu4en9í^^
ttáámt^, qiietcsláii&oeDHréi hb JMcterdtelr Técmwn jPítfWimkm» «1
'«tf)miit»áilai»iiaqoaiidar^apof qoeíaiiíaiicírdriiKf^lfiíacIqaMdAd
sotaaoeiitBf in kttótaaHmámbéB pilíJBiÍQíi^twlita,;)íHUHii ftaniilimn
y dligiiaMMCaiasiihrif«ulniiWBi I fcflMuiíirwnft <|tie>»atei>t4ftimte8itCBH»-
itMicníiDfVMsatf paa^vB lito«BmiAá'QolMittMkte ^«Imi^MiG*
Cas |H#aphw ékmm iiiü—i «■iik.lÍíi«eVítefr{ifl«Q|i* », Qéth
dare, Jacora, Garorita y Tocaeas. ;,
CANTÓN DE CASIGUA.
La villa de Cas¡g«Mv9ltii|Mi»«i m ll{tt» ávido y seco á solo ona
legua de la mar, de cQya perspeoUva le priva su poca elcvadon ,
goza ; sil} embargo, de fó vista , aunque lejana , áe fós cerros que
vienen de las alfas sabanas de Táwl^raTe, y^^ tos que costean: el
rio Palmar, que le sic^e de limite con el cantón de AUagracfe en
tá' provincia de Matacaíbo. S\i posición en el' camino que vade€oro
¿ Maracaibo'es \á única ventaja que tiene, pues sus habitantes es-
tán obligado^ á servirse de lagunas artificíafes para poder beber
agua en verano y sufúinistrarTa a sus crecidos rebaiKis dt? cabras.
En este pueblo se fabrican fas mejores hamacan d^ algodón de toda
la provincia. Afgunas pequeñas salibas ofrece aquella tierra árida,
y en los cerros mas cescanos se hallan terrenos propios para cuitf-
var maíz, algodón , yuca, frijolees, crfPaotasy auyamas; mientras
que en otros cerros calizos se da la planta del cocui. A pesar de fa
mucha esterilidad dé este cantón, tiene mas f^abrtanítés que ef feraz
de Costa-Arriba, porque ef díma es sano y fas crias^ f tierras de
calCIvo que hai en él proveen desahogadamente* at mantenfmíeiKb
de su'pobfiacion.
las parroquias son Casigua , S. FélRr, BbnflíS, Dttbajuro, €apa-
tárida y Sasarida.
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TABLA CXHiPAR AUVA áe las posidonei aitroiiómieas de las eabeser» <
de sus tierras, terrenos baldios, poblaoipn absoluta, relativa, hombres del
firatos que se ciiltí?aii para la esportaciMi.
d"
LAB CABBiaAf
DE GiLirrON.
WHv •••••••••••••
Pingainá
StnLois....^..^..
Comarebo
GoiU-Arriba
Gaiigot
Illas
ponaoH iBTAOsóincA.
Latitod
aorU.
4<oiif it«d O.
del narMUADO
a» Cartea.
AltWM
•laifvl
4tlaar.
i|o. %kf. SS.
II. 5S. 90
11. 9. 91
II. 96. 45
11. 1. 0.
II. i. 80
a*. 47'. Wf
S. 4. 50
fl. 51. SO
9. 96. 5
I. 98. O
8. 88. 80
40
707
909
15
Total..
ratara
madia
dalter-
nonalro
caati-
(rada
CALIDAD DI LOS TBBKVHOS »Í
Qül 8B COMPORTO LOS GÜh
TOnS BU LBSÜASCüADRADÜ^
t7«'^91
97. 99
94. 45
96. II
97. 99
97. 99
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108 V,
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97
100
114
¿I
L
itt
85
380 54
811
eantanes, sa altma sobre el idrel del mar, ea temperatma media, calidad
fj esdavos, distanda á la capital ^e la provincia y de la república, y los
üaasas
POBIrACIOH Vñ LO0 CANTOHIS^
9
Total
d«Ia
poblMíon
en l8Se.
9.196
6.087
10.817
3.S76
5.0Í0
6.080
Población
rvlativa
por legua
40.476
76
6»
57
65
32
Hombrea
útites
pam
la» ariDM.
700
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S50
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5.800
304
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do la
provincia.
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LA B8P0RTACI02I.
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184
Algodón 7 café.
JügOdOD.
Cafia 7 café.
Cafta*
Cacao, difé 7 caña.
Algodón.
— 446 —
'nCBCjnXB'LA'líJ«TtJBA inTtOST'ClBBOB^te'XA.'YllOVniCSl.
Nomhres.
Yartu. Serranías.
»'«
Agna-TiTi 8D0. deCioro.
Pedreml..... flí5....««..««^'<rf.
8iemr9.1mh.... iM Itf.
^pliuuuli.« 1160 ^tff
'1Ü4LBA DS. IX)» 9;0SÍ BE 4*" ÓADEN PE 14. Bi0¥II!qCIA.
2fofn&re#.
CiBimrcpQM.<fct>isA« *■*
Farol. SemaUttf^
Tacura 600 id,
Gapsdaro* ■ ^M«Hw•• # 40Q^m • im«* «»«# ui4»
H>uatdiiiu 750 U,
■liioii -900..^...»,.. fif.
Nombres, SerreoHtts. "DMQffte.'
£Qr0......« deCoro áHamar.
Seco .} id •. id."'
Sigumba ii %. id.
Acnrij^ua •••••••■••* mí* —^ •••'•• «^ • id.
Motara i4 .....*. id.
Omuria. . •viw«(«Mti»« id. «.i»»* «<>«• «(> • id. i
Upipe m t>. id.
GOeque.^ id h-. id.
Gaidie .'. ; . .' id» •**■ h> • id.
Agaide tí 4.. id,
Capadarc* • • m^mk* v* ^*'» • %^ • 4* • id*
Tuquere Ü. ^.. id.
Diiamurja « Id.».. ««.. id»
Xlürlma Id .h. Itf.
Gaaidima Í2 i({.
Rio de ]Qfidta9Hb> '
dios id 4.. id.
Agua-negra |d Id.
Goaea. delaftlisioo (d.
S. Fernando. . «. de la Hision. á la mtr.
Agaa*clara. ...*... . id,..p Sf.
Ghlquichiqne.^ id,,,^ id»
AngfiilÉ. .^id..^ id,
Aroa • . » de S. Felipe. . • . • • id»
8. tai9<M. de.^G0ro •^. idl
Pdftegal id
MiUre id.......
CkiAoreí 'id
Gabca. « id
SaiáridK **• aid. . «. . . .
Gapatarlda id........
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Agoa-Tlyt. ........ id. ..*....,..• Id*.
Borojó; .,.id..M id.'
Maticora id idL
4€(isulM«*...*»...<.v{id. «M... idi»
Palmar id .. idi
DiíJhiTil id id.
r
ñe#(í€iA m mmiíCífám.
SITUACIÓN ASTRONÓMICA, KSTBN8ION Y POBLACIÓN.
MEáta pfóvlncia se^eiiai©Dtra«lft 'hlliittdlMweaA^'S* *íi'e5a'^
á líí«46^ y.en la longitud fle^'W'áe» ^l^rf O, >del meriélaWD
dé Catácas/Sa 'figura «pvesGíilap#64iffiáffli6Qile^la«ée ii»>iiáiii8riDi6v
cuyohueco 1o fonaa él -lag© , W «iial recoge 4a» 'agna^^ eítet«^-
rtlit^ioT las de dlgúttosolww. Ferqian -él' «üdo 'deísta provkwfia
tcrrenos4Bf?fSrtos y seeo», otras féuiílcsy líien ícgádos^ifte ríos-; ^sttba-
naB'pawi% cría de'gttiiadés;'flleíraiifes tío wuia)tes,'yHdda»dflM«p-
tas; selvas inmeiisas y yermas; ter#UotíOi'etí>fíii, «f^e-eottltene gra»-
dB»lagüBas y^ciiHjaga8,iél!fa»s^tt«s y erfefiMizos/cttlktos, tito»-
dosyalg^tto* tMiíf^dOB etí las eorüffieras «f»e #rwfl 4e líasHte'CO»
otras provincias. Ertees-^ílpais-ett^a €l*«ittt)r^oelde aplieawe á
la'v^ di comercio, á 'ha agri«tí!l»ra y á4a«-'ci*ías.
' El*míttoffm*de**largo^de»este ^Erríloño^s^eíKÍUflgiias de N.4
S.ífJcltiywdoia parte de%pefnfíwufft«iitfjica, y^deanélie de^. 4
O. Tf8. la SBperftcie «msta'de 'STW h c, 'eoifirpreüdidas^^lító W»-
deílago. '
La población total es'dei'Í7,^8W ^afcfftaníes , fi«é'€<?fími- en Taton
de'^5 porcada'legtia'cuaárada. ...
Confina esta provincia con otras ^seis, que son CMO ^rlti^Uo ^y
Mnnda^'y eonda^Nnaia Srafiada 0n Jtiéima'dclt6p»raiiici«sr i»ffaor
i)aiAe el fledioiQliiciiMiacaafie^a miacoítoiattgBmmaf iWfiMwáa
por ndUi la ^eaínnlib €á]i|iM,.4Ér«désa la2áaDra4áiBeite.^]pasa^r
el «flviDidB ilalfffte'YpardMinBaitas d8iaDB.^:'y fa^
de& flioiMdaflai&idél lia«Uft.¿«ffilaaHpt¿«b paíftce^thalla ffntMo
por das'dofim üfidqfniíiiMftta&^fifín^
pacte de^düiprawbiaaiáe Rk>-JlaolHu^ibda»tafi«iBiikiMB3dedasie^
dafteajé'qiiaairiBrtáudiBB'ja^aK^ di«* :
chaigroódntb^ yiéBBp««l aÉradíieótiiidiril»d||iiailii^-]0afta.
La misma sierra de Perijá, siguiendo las crestas que dan orágao.
— 448 —
á 106 nos Palmar, Apon , Negro y Santa Ana, oon (odas las respec-
tivas yertientes, siryea de raya diyisoria hlMa llegar á las cábese-
ras del rio de Oro; entonces el corso de este es el lindero, y en su
desagüe al Catatumbo empieza el limité con la provincia de Pam-
plona.
Aqní es incierta la demarcion , y se presume que sigue casi al £.
S. £., por una montaña desconocida , y al pié de los cerros que son
estribos de la serranía en donde nacen los rios Tara y Sardinete :
atraviesa estos dos rios y va á encontrar el puerto de la Grita que
está en la boca del de este non^bre, el cual desagua en el Zulia*
Terminada la linea que marc^ la frontera coa la Nueva-Grana-*
da, por la proiáncia de Maracaibo, sigue la raya que demuestra los
límites entre esta y la de Marida. Esta raya es el mismo rio Zulia
abajo baste la boca del caño de la Ciénaga de Orope-Grande, y de
este punte se dirige por montanas 4esierlas casi al £,, basta en-
contrar el estremo meridional de la Ciéoeg¡a-Grande de Umuquena :
de allí al Puerto de Escalante, de este á la ciénega de Onia, por la
parte del S., y en la dirección de los enjutos va al rio Chama, que
at^viesa. Corrp después al N. £. para encontrar el caüo los Monos;
sigue este hasta so desagüe en el rio Mocuepe , vuelve casi al na-
ciente atravesado los rios Guaci, Guama y Pino ó Capaz, en la boca
del rio Chimóme. Entonces retrocede al S. S. E., y sigue por este
rio arriba basto el pié de la serranía del páramo del Salao. En este
lugar tuerce al N. E. y al E. siempre ai pié de los cerros, atrave-
sando por montañas desiertas el rio Juan de los Rios , la quebrada
Lanuda y el rio Torondoi, en la boca de la quebrada del Mene , los
de Capió, pueblo la Sal y Chururí. Entra ahora á lindar con la pro-
vincia de Trujillo.
La raya va al pié de la serranía, ai N. N. E. atravesando los rios
Moiapá, Alguacil, Arapoi-Grande, hasta las quebraditas que están en
el camino que de Chirigüé va á Gibraltar. Aquí la línea se aparta
de la serranía, y por una selva intransitable se dirige casi al N. N. £.,
atravesando todas las aguas que encuentra y tombien el camino que
de fietjjoqoe va al lágo^ dos leguas mas abajo del paso del Sequion,
y siguiendo siempre por montanas desiertas llega al rio Motetañ ó
Cenizo. De aquí busca la conauencia.de las quebradas Pahna , Ne-
gro y Juncal con el rio Pai^U ; entonces este rio sirve de raya baste
su cabezera, y allí empieza la división con la provincia de Barqui-
simeio.
— 449 —
Las cumbres desiertas que dan origen al rio Berberá , que va á
los llanos de Carora y el rio Sicare que corre al N., sirven de línea
hasta el punto en que esta serranía deja abierto un paso al Sicare
para correr al lago de Maracaibo.
En este lugar empieza ya á lindar con la provincia de Coro, y el
término lo demarca la serranía de las Pinas ó del Empalado, aguas
vertientes al lago hasta las cabezeras del Palmar ; entonces sigue la
línea hasta el caño Oribono y por este continúa hasta la mar.
COSTAS DEL MAR.
Desde el caño Oribono hasta la punta occidental de la isla de
Zapara, la costa es baja, cubierta de algunos manglares y de méda-
nos de areaa. Allí queda 'interrumpida por los bajos del golfo que
corren por una legua al O. S« O. hacia la isla de Bajo-Seco, esten-
diéndose al N. de ella mas de media milla , y siguiendo una entera
en la misma direcden, se eiu^uentra la barra, que es muí difícil co-
nocer sin mucha práctica. En la misma dirección O. S. O. siguen
los bajos de Boca- Vieja por mas de una milla, terminando casi N.
y S. con la boca del caño de Punta-Manglar. Lo que hace mas di-
fícil la entrada por la barra es que la mar rompe sobre todos los
bajos, pero bien examinado se verá que en donde está la barra allí
es mas hondo y no bal rompiente. Para buscarla se debe pasar á
cable y medio de los últimos rompientes que vienen de Bajo-Seco.
Este bajoes una isleta de arena que apenas tiene 200 varas en todas
direcciones; está mas de una milla distante de S. Carlos que le que-
da al S. E., y como al E.; el antiguo castillo de Zapara que está en
medio de médanos en la pimta occidental d^a isla del mismo nom-
bre. Eeta tiene unos mangles mni altos y por fuera de ella, en
6 ó 7 brazas el fondo es de lama dura mezclada de arena , y es en
donde debe fondearse en caso de necesidad , advirtiendo que debe
hacerse con un buen ajuste, porque es mni fuerte la brisa en este
paraje.
Después de la barra de Maracaibo sigue la costa de la isla de S.
Garlos, cubierta de médanos, y en seguida las de Sinamarica y la
Goajira, que forman la ensenada dé Calabozo hasta el pnerteclto de
Cojoro. Allí se eleva la costa en forma de esplanada , cortada verti-
cahnente, rebajándose después cerca de las lagunas Cucineta y de
W TttcácaSy en la que hai muchos arrecifes próximos á sus émbo-
J*. GEOG. OA
— 4S0 —
otilaras. Yuelve á realzarse cerca del cabo Espada ba^ el cabo Chí-
cbi^acoai dejando ver las serranías de la peninsala Goaj^a y los f i*^
eos de las sierras Cbimare y Aceite que se elevan en, el interior» la.t
costa es limpia y aplacerada , de modo que el escandallóos boalar,
gliia. En el cabo Cbichíbaooa, termina la costa de Yenezuebí} y ff^
roce que debia ser en el cabo de Ja Vela, ponto qoe.sieaqp^e ha w^
vido de término á la& fronteras de este ^ais.
GOLFOS.
Maracaibo posee el principal gplfo de la república, el mismo que
diá> nombre á.todo el país, Uamándolo Ojedade Vemmaij é^e^fiaBS
dei^ Vemwií^. pero sujoomboe aoiigno em Co^mioi^ak ¡«a e&tva^
da^á oli^ deBoimnada i^Algaraiioto Sapaée Mmmoáho^ ieii¿loi^
mada pon la punta: Macotfa de la peoíulula de Pafagutrná^j la^punl»)
Hf^da de la pe»ins«^Goa^ra« Las des caelAsde e8las.pliiBmtla^i
la^ . de C^co y Mai ioaibo^, ^mnxk al< míente^ pMtenin y ambriiá* i
e\ golfo, cuyo largores de 28t h^gmkj y 15.^ aoabo^: «liciaénnfo*»!
rQ9€ia tieso 9^^ y 450 i. c-. su siiperScia*. Su dlreiee«iii es^^^B^ A
N« Q.f y en, «o estreno mefidtouateslá la boes deMi^de Marse*
caibo. k lasroo^ado tpdo?#ste §alfo se ftued«t aiJM|cal^.siaJ^eM^)
liafiM í^^pr <5' ó 6. brozoB de of na,
A .medida queso alausa al S», l«mala< barrea de Manacaibo, aea^>
qiia)6e veaga4e la^puataMs^liaótdaladeE^ada, el fondoícKattdt^
nw|W^tprppei»ianateeitt6, y-«9vta eoavenjeote no atacan k)0os(a de í
la lwm< do:noelH^. sioio atmMAaiSQ ómaotoi^rse en bordeará 4 ^.y
g^m de.eUailiasía^ qoe.acHipe el diai.Lrs hrisaami este gelíé; aoftr
ítmm y vioiiea deliN. ^,.E. » lo cual ea causA^^tcett la barias y^^
d^as.iJostaimeridioQal, baya aiempreinai^ampollada^m tsiaamni
pfdigpym. una bandas
Im pteamic e^ díolia batiu se^ veeifiea en ios^dns de eoüQiíatiaiii)
yopoMíe^iá iasc|^.4/4 d^la4»fde, y en aunas FtJM sjtbetla «aieaí
de 2 á 2 4/2 píes. La barra tiene en en su mayor agua 42 pieSítoUfi
tiemiiofdafafiísaft y á^v^eaes niaaea>IOi'iiieM * agnai quafsoBi;maifi»,
süiemAitijOQlubae yuoit^bfe.. Jbat eiabaioaemnes q^'aBt>peligift>
pue^ipeiNmpor oaMi'bMrft.). doben^se^ de ií fáeasifdrcaMb. NdWj
IHie4a'eiilmr<;ain pfédkM^ yasiíi luogo^que se baile la ^nbarcaeíoa:}
N^i»S. n»a;ó raaéiiia^eoft el eailt)}oS> CéitoS) y ea«5^4y¿bEaiM4i^^
agm^idebe^ttOMiter al makik ipaeaeiiO. :haal«; jeonari^ A¡%%. düte^
— 4M —
cujo fondo se verá ya la pompiente de mar en k>9 bajos^ ea vm \{f
nea como del O. N. O. Por dicho fondo de 4 ^/2 brazas se opntl-
nuarápor el 0«> orzando ó arribando según con venga, para conserr^
TUrlas basta qjaedar mas adelante de los últimos rompientes y en*
tónces se estará próximo á la boca, y allí ^ manteniéndose sc^ra.
biNrdos oortos, se esperará el práctico.
Navegando con rumbo á la barra y. lo primero qjue se descubre:
por ser lo mas alto de aquellas inmediaciones, es la isla de ToaSii.
q;ae está como al S. del Castillo de S..CárloSj y á ella se deberá po-
ner la proa hasta descubrir los castillos y BaJo^Seco » gabernándosa^
como se ha dicho. Es mui esencial el conocimiento de la situacioD*
de la boca de la barra que está al O. del meridiano del castitío de
S. Garlos, porqioe de no tenerlo, es seguro que creyendo eslar entre
Bajo-Secoy la costa del E. donde se baila el t^asUUo abandonado de
Zapara, se en^penaria sobre los bajos para* emprender la entrada y
seria un prodigio no perecer. Los buques que paseo de iO pies de>
calado,; deben entcap en la pieamar,.para^evítap el menor 4o ]ue que
les hiciese perder el timón; en cuyo casoseria inevitable uf^iijiufea^^
gio'por la estrechez del canaU
La salida de la baura hasta franquearse de loe bajos-de elia;: debe
iiacersé con práctico : al^ salir el golfo no*se necesita ya de instruc* .
clon particular, pues aunque debe hacerse sobre bordos, sepuede*
prolongar sin mas cuidado que el escandallo^ Bsdeedveptir que en
este golfo es general el llamarse el viento al N<. ó mui pr^úmo' á
él, á las 4 ó 5 de la (arde, por lo que conviene mucho estar á dicha
hora en las cercanías de la costa occidental para tener bordada biea^
lai^a al E. IV. £.
ISLAS.
Desde el cabo Chichibacoa para el N. 75» E., y á distancia de
jom de 6 l^asy están los MoQJes del Sur, que son dos islotes mui
pequeños y sumamente limpios; de modo que á medio cable de
ellos se puede pasar sin cuidado alguno. Como al N. de estos y ^
distaneia de una legua, hai otro que se llama el Monje del Este^que
tambiea'es mui limpio, y eomo al N., y á distancia de casi 6 le^-
gpas, hai otro grupo de 7 islotes que llaman los Monjes del Norte «
los cuales tienen arrecifes , y noeonvicne atracar á ellos amenes
de'Una milla de los freus que forman los Monjes: del Norte erntl
— 452 —
del Este y |Ios del Sur : los qne estos forman con la costa son
mni francos y limpios, de modo qne no hai el menor riesgo en
la navegación que se haga por entre ellos. Estos islotes están de-
siertos, y solo habitados por las aves. Todos los comprenderemos en
nn solo grupo.
La isla de S. Garlos es la mas grande que tiene esla provincia so-
bre la costa del mar, pues de otras que hal , se hará mención en la
descripción del lago por estar dentro de este. Tiene la isla de largo
7 leguas y de ancho 4/2 : su terreno es todo arenoso cubierto de
playas áridas por la parte del N. ; mientras que al S. una vegetación
siempre verde, compuesta de altos manglares, cubre toda la costa ;
en el interior hai una porción de médanos formados de las arenas
levantadas por las brisas fuertes que allí reinan. Crecen las uvasí
marinas y algunas gramíneas salitrosas de que gustan mucho las ca-
bras, animales que se crian bien allí. Cuando hace calma en esta
isla, hai en ella muchos jejenes y zancudos, que desaparecen solo
con la brisa , reinante generalmente en estos parajes. La isla está
formada por el caño de Paijana , por donde sale parte de las aguas
del lago : no es mui ancho, está cubierto de manglares , y los
terrenos de sus inmediaciones son mui pantanosos. En la punta
oriental de esta isla está fabricado el castillo de S. Carlos y cerca
de él unas casas en que habitan las familias de los prácticos que allí
residen para hacer salir y entrar los buques.
Cerca de esta punta se levanta una isla baja cubierta de man-
glares , casi toda anegada , llamada isla de los Pájaros : tiene poco ^
mas de una milla, y forma un pequeño canal con la de S. Carlos,
por el poniente, y otro al oriente con una isla mas grande llamada
del Pescadero, que tiene #erca de una legua ; pero estrecha, anegada
y cubierta de altos mangles.
Estas dos islas y la punta del castillo de S. Carlos, forman un
canal con el estremo occidental de la isla de Zapara que queda al
N. de ellas , distante media legua. La isla de Zapara es baja y cu-
bierta de manglares mui altos, con muchos médanos de arena des-
provistos de vegetación en el centro y la parte occidental. Forma
esta isla el caño Oribono que no es ancho, está lleno de manglares,
tiene dos hermosas lagunas y es una de las bocas del lago. El Ori-
bono y el Paijana solo pueden ser navegables con pequeñas em-
barcaciones, y al llegar á la mar tienen también su barra.
Zapara tiene 5 4/2 leguas de largo y 4 de ancho , y en su parte
— 455 —
occidental exist^todavia el antiguo castillo de este nombre, aban-
donado en el día : allí fué donde los filibusteros se burlaron de los
españoles, cuando pretendieron estos inapedírlcs la salida del lago,
después de haber saqueado á Maracaibo, Gibraltar y Trujillo. £1 ca-
nal para ios buques grandes se hallaba entonces arrimado á la punta
occidental de Zapara y del castillo de este nombre, que actualmente
queda mui apartado de la costa, y el canal que existe hoí solo puede
servir para pequeñas embarcaciones. En aquella época no se babia
formado aun la isla de Bajo-Seco.
£n esta pequeñli isla cubierta de algunos mangles, lagunas y
playas de arena, construyeron los patriotas , después de haberse
apoderado del lago, -un pequeño fuerte que en el dia está arruinado
por haber sido fabricado sobre un terreno arenoso, sin solidez y
sin tomar aquellas precauciones necesarias cuando se trata de fa*
bricar cosas sólidas sobre un suelo sin consistencia. Era preciso ha-
ber pensado ante todo en consolidar el suelo, y en lugar de un
fuerte , cuyo peso era enorme , hacer construir baterías cuya posi^
cion no debia tampoco ser en el lugar donde se situó el fuerte. La
isla tiene menos de una milla y dista de la de Zapara 4.575 varas
y 2.816 del castillo de S. Carlos. En la primera distancia hai un
cordón de bajos que forman la parte N. del canal por donde pasan
los buques, y en la segunda distancia todo es de mucho fondo, por
ser el canal principal por doods corren las aguas á la mar. De Ba-
jo-Seco á la barra hai 5.855 varas y el canal es estrecho. La isla ,
pues, de Bajo-Seco , es como un punto avanzado frente á la gran
boca del lago de Maracaibo , que debe considerarse entre la punb^
del castillo viejo de Zapara y la del castillo de S. Carlos, cuya dis-
tancia es de 5.500 varas. #
Todas estas islas están formadas por las acumulaciones de las
tierras que acarrean las aguas del lago y las arenas que mtfeven las
del mar, y en el encuentro de la corriente del lago con el oleaje de
las aguas saladas, se han formado con el trascurso de los siglos las
islas S. Cárlosy Zapara y Pájaros , Pescadero y Bajo-Seco ; esta es la
mas moderna*
II0NTA!(AS.
La antigua serrama de Hotos que separa las agnas que caen al
la^o de Maracaibo^ de las que van al valle de Upar;, y que fué atra-
— 454 —
tesada por los primeros conquistadores^ es la que se tlama sierra Sfi
'Perijá; eslremo de un ramal de la gran cadena de ios Andes ^ que
«e desprende desde Pamplona hacia el N.^ y termina en las sabana
de la península Goajira en los montes de Oca. Esta serranía es la
mas alta de la provincia de Maracaibo^ á pesar de que sus cunpffores
no se elevan á mas de ^.500 varas sobre el nivel del inar. Toda
día está desierta, y solo en sus faldas cerca de Pcrijá se encuentra
alguu cultivo. Tiene 45 leguas de largo desde los ^lontes ,de Oca
hasta las cabezeras del rio del Oro que cae en el Catatumbo, porque
ele allí á Pamplona pertenece á la Nueva Granada. La otra cadena
que cierra por el oriente el gran valle en cuyo centro está el.tago
de Maracaü)0; es la cordillera de Siruma y del Empalado. E^ta sirve
delimite con la provincia de Coro, y sus cumbres desiertas y cu*
Inertas de vegetación se elevan á 850 varas sobre el nivel del mar^
Tareco que estos cerros pertenecen mas bicQ al sistema de la ser-
ranía de Coro y cis una de aquellas grandes cadenas que han sido
interrumpida^ por las antiguas revoluciones que ha sufrido el jglo-
1)0.'EI punto de interstcccion del sistema de los Audes y el de la co^a
de Caracas , es en la provincia de BarqUisimeto,. cuyo .trastorno se
observa todavía en donde el rio Sicare pasa por entre los cerros
para venir á los llai^os de) Cenizo á tributar sus siguas al gran lago»
Allí termina la pequeña parle de serranía que por este lado tiene
ItfaracarbO; cuyo largo es de 52 leguas hasta donde se pierde cerca
tdeias orilias del rio Palmar. La isla de Toas que está próxima á la
boca del lago, se presenta como un residuo de la niisma cordillera
ée Siruma, tragada por las aguas 6 hundida cuando la catástrofe
redujo á golfo el terreno que existiera entre la costa de Paraguan4
y la Goajira. El cerro fie Santa Ana en aquella , y la Teta Goajira
en esta^ son restos de una cadena que se prolongaba hacia la Or-
chila. Asimismo los Monjes, pequeños islotes que se elevan en m^
dio del mar en la línea de las islas de Oruba y Curazao , pareceii
también las puntas de cerros sumergidos ; que en tiempos remoto$
formaron una sola cadena con aquellas islas y las sierras de Chi-^
mare y del Aceite, entre los cabos Chichibacoa y el de la Tela.
RIOP.
Todos los irios de esta provincia ciaen al lago de Maracaibo , j.
€ste lleva sus aguas á la mar. No tan solo recibe las de su territo-
— 455 —
tíory skiolaS^áé Barqfiiisrhneto, Trttjííío, Méridü y hasta'de la pW)-
•íittcia de Pattrj^ímo perténedente á ia Ntrc va Granada. Nacen y
«oraren por este territorio 4*0 tíos, e! priodpal de los cuales potáu
•navegación dé 22 leguas y por los terrenos de sus inmediaciones ,
-es el Soctii, rio de los de tercer tSrden en la repúWica7de ^5 ife-
gtftá ée ctrrso. Pero si cons^ideramos tacbfoíen los ríos que nacen én
las provincias mencion;rdas, el teiritorio dé Maracaibo-está bañado
Y^fertilizado por S5 de ellos y roas de i 00 riachuelos. En este caso,
*<fl prhicipal viene á ser el Calatumto, de los de primer orden eta
"^Cftezuda , con 0^ leguas de curso y 40 de navegación. Sigue defe-
'^pfBts9 A Ztilia , de igual categoría, con 66 leguas de curso y 44 de
iMfvegacfon ; Itrego el lüfotatan, de los de tercer orden, con un curso
^ie 55 leguas y ^6 de navegación , y el Escalante con 4 i de curso
y 25 die navegación. Todos estos ríos están cubiertos de una asom-
"i«tosa vegetación , pero todos ellos corren por terrenos que suelen
^t^bitt las aguas en las avenidas y muí pocos de estos quedan eñ-
tóncés en seco, si se esceptúan aquellos que están en las partes dis-
'^tes del lago.
LAGOS T LAGUNAS.
DI pria^l|i«íl la^o'^e toda Yéniezuela es «1 4é Maracaíbo , semé-
JttÉte^ «d mediterránea ^e agua dulcie. Gipodadanlo vfi^s serra-
VÍ9B : la d^e- Merida que se ^eva hasta el' limite de las nieves pef-
-píBltms en >el eéstrettio de k provfftcia, for !a imrte del S.; por el £.
iás ée Sframa y Efnpfatafdo y al O. lars de Ocaiía y Perijá , íducIio
-üiaft 4)ajas , las enaies van dísttfnctyendo grádualmeñte hasta per-
diNTse^^eerca de la <co^a , las tffias- en kis ^renvos áridos de €oro ,
las otras en las sabanas de los salvajes Goajiros. Todas ell^s for-
'afilan «na línea casi ciréulat q«eréppefee«ita la figura detinafier-
'«vchim, ctiryo-dtáttieUro deE. á O. es de 7% leguas, al paso ^e
-m íAeiflura é*tuada hacia la costa, sofe Üene 5^. Su lírrgo dfe H.
?i^. es de 60 leguas. Casi en él centro dfe esta grande hoya edá
'^ hermoso lago de Maracaibo, ctiya supierfitie es de ÍOO 1. e. fér
medio de 5 declives diferentes* que vienen dlel S., del E, y'drf d.
^tvcoge las aguas que anualmente caet! "en los lcrr<*nos circtfiírvfe-
éinos, los cuii\»es por sa coníigurácion y posición desaguan en esla
•liaBUfa. Esftos terrenos pertenecientes á la provincia de Maracaibo
(yuMKáios ^e ellos á las de Pamplona, Méfida, TrojiHo y una pe-
— 456 —
qoeña parle á la de Barquísimeto, forman un coojOQto de 4.0ÍK)
]. c* que es la cuarta parle de España* Hai páramos de 5.000 ya-
ras de altura, de donde emauan aguas que descienden precipita-
damente á la llanura ; esta, aunque larga y de un declive suave,
las precipita con fuerza al lago. No sucede así en las partes late-
rales , cuyas mas altas cumbres son de 4 .500 varas en la sierra
de Perijá y de 850 eu las del Empalado.
Si se calculan las aguas llovedizas que anualmente caen en tan
grande estension, y se considera que aquellas que no se pierden
en la filtración y evaporación van á acumularse en el espacto
central de la herradura , no sorprenderá que allí exista un lago
de tan grandes dimensiones. Por las esperiencias hechas en el cas-
tillo de S. Carlos, en Maracaibo, en Gibrallar y en Mérida, sotee
la cantidad de agua llovediza que cae en un espacio y en un
tiempo dados, resulta que anualmente en los dos primeros luga-
res, caen 52 pulgadas, mientras que en los dos últimos son 86
-1/2. Como aquellos son menores que estos en superficie, se ten-
dría por término medio, que en todos los terrenos que desaguan
al lago caerían anualmente 78 pulgadas. En los que rodean el
lago de Valencia caen 72 : en Vera- Cruz 68 , y en S. Carlos de
Kio-Negro 1-12. Dado que la mitad de las aguas llovedizas se
.pierdan por.la evaporación y filtración antes de llegar al reci-
piente, conuiq, que para nuestro intenío es ahora el lago de Ma-
racaibOy siempre tendr|a|uos 59 pulgadas. Si este estuviese encer-
rado como el lago de Valencia; se veria que la cantidad absorbi-
da por el calor no e$tá en proporción con la que conducen los
rios que desaguan en el, y se conoceria el anual aumento de las
aguas en el lago de j^acaibo , así como se observ^a la diminii-
. cion en, el de Valencia.
£1 lago de Maracaibo lleva diariamente una gran cantidad de
. agua á la mar, por una boca de 5.500 varas, desde la punta del
castillo de S. Carlos hasta la punta mas próxima de la isk de Za-
para, Y por las bocas de Oribono y Paijana, caños de-poca anchura;
pero también introduce la marea una cantidad considerable deagua
Jalada suspendiendo el curso de la dulce^ cuyas osciiaci(^s^e h|-
. cen sentir hasta las e^lrepaida^es d^l lago. Las agpas salobres que iio
llegan pomu^mcnle mas alia de Maracaibo, suelen pa$ar adelanle
hasta la punta Icotea, cuando hai grandes mareas y vientos fuertes.
,Es estrfioi'dtnar^a la violencia con que entran y salen las aguas ;j
— 4W ^
para maijor iiiMigencíaj daremos algana idea 4e ello, determia^n-
do al mismo tiempo la anchura del canal prúoKÚpaí por donde pa*
san los biiqae^.
De S. Carlos á la barra hai 8.651 yaras ; el ancho del caaal
.. frente á S. Garlos ^s de i .900 varas , frente á Bajo-Seco de 4 759 ^
y de allí bástala barra de 700 á 800 yaras. El ancho de la barra es
de 6100 varas y la p^rte mas baja es un espacio de 50 á 40. Entra<)o
un buque en la barra con todas sus velas y por el canal indicado ,
camina U millas por hora, cuando méoos, que hacen 61/2 varas
por segundo. Si damos al buque por la fuerza del viento una mi^r-
cha de 8 millas, habría una corriente de 2 pies por segundo que
entraría en el lago, igual á la corriente del Orinoco después de pa-
sada la boca del Apure. Sin embargo, este caudaloso rio hace cono-
. cer el flujo del mar á 85 leguas en el interior , siendo la marea en
Ja Boca Grande ó de Navios de 2 á 5 pie^ , y de 2 á 5 es la de la
boca del lago. Las aguas, pues, del de-Maracaibo conservarán un
aerto equilibrio que no pueden mantener las del lago de Valencia ;
con todo, su fondo debe disminudr, aunque con lentitud, lo que
$erá.mas visible en las orillas por la gran cantidad de tie^^ra que
anualmente acarrean los rios ea sus avenidas.
Este lago ioinó el nombre del cacique jefe las tribus ^tablecí-
das en sus costas > cuando fué esplorado por los buques de Alünjer
en ^529. Tiene la figitra de una guitarra y no la de una redoma,
como basta ahora se ha dicho. Su largo de N. á S. es de 40 leguas
desde ¡Bajo -Seco hasta. la ensenada de la Boy^a, al* oriente de la
boc^ del ZuÜa. En el estremo meridional desde la Mochila de Gü*
. bralLar hasta la ensenada del ZuHa, hai 24 leguas : en su medianía
entre Laguneta y Misoa 47, y en donde empieza el brazo de la gni-
tarra ó. ^1 verdadero canal del lago, que es en punta Icqtea, iip.
4 4 /2 . £1 cuerpo de la guitarra tiene pues 26 i ¡% y el ^razo 45 4/2.
La cirpunferencla , sin contar las ensenadas , es de 420 legras , y
comprendiendo las sLuposidades principales, 244. Este lago ocupa
un espacio de 700 1. c. A no ser por la diQcultad de la barra y los
bajos; del Tab|a^q, podrían. navegar en estelaga buques dealtp |]^(f-
. do. Las.ori|las son:b£yias y el terreno vi,ene declinando suaveme;^
hasta cierta distancia debajo d^l agua, en donde de. repente fariña
. un barrap^o. Rj^corramos ahora el terreno de est^s costas 4eside ja
; isla de S. Carlos., . , . ,,
. Esta i^la está en par^e anegada y cpbierta d0 mangles y en parte
puede prosperar allí : en la punta mas mental A^tÉlalaHttti'^l
-<i0tille>de S. Cai^l^, para ^édéná«r k «iRriída Mla^o; ét^sSío
f^ja&a separa «sta Ma, f déiíá^sü 4KMfti^fts(tli'^l'^ltf(^D*es^Gioy(a
«legada •con sék) «tnaof^ ;'ma» adentro^ <haíí' temnos'calyferlas ie
«iénagas, eaeallesy ]a'héi«#«i iagMa^ée^Banüiea : !a'i^la^«ílte
( fiombree^tá atoada «a 9Da'víd(csv'fhtDtfi% YB^^^'^^^^^o^'c^nre
-^ rio Limón ^ftie caef á dieba lagttna/scimtMrado^por tatias tegnas^e
'labraBMs 7 caserío : st» ofíftesdangraúdánmos plarMros^totíífrra
^ íárt^y pero algo «MormtKa. El terrenoes -cenagoso 'Cfn'sir'nitiyor
farte, y en d tafíwror cs^ áe tm asperón- f4»|é, poco TairoraMeá ía
vegetación. En la costa del lago efiílá la pairro<}ma de^W^an, y en
frente se «lera-en ja^msenadía de OraM ki' fsiár^ Toas^ la alfeifa
de 80 varas : nHí Imi mliwde cal y de^caH^on dé piednr. ^(H^-
|an4ia^ MaracaH^o fá isoirta está balittadft ; laü granee» 'cocátes^pisl
r terreno esllafto, ciltéiil,<;on^iif%tt&tos,^éftanetesiY^<'*'^^^
laclara A)to y Bajo : etiti la Sállna'^tícd, ^ 've^ílttdatib de te^<-
Hada y varias otras isafinas escd^les. A4 f^nte y apénas^sobre^^l
nivel del agua se ye*fa i^a ^^(álaflelAcov Wa 'altaestAanada , en
'féitta de colina aplastada, se^diHgeálliMrákcailbo, fbnnala enhenada
'flei pnertode esíta e^fiíaA y cotttinéa iiast^ ponta "de fdhnasifel
: Oeste eiHloude se p^ei^e. fodoes im contihnu) caseHo : tdtededér
€el piterto^tán los Battcos, tccreo^títido y fihiloreseo ^Oos^ttabi-
laltttes déla capitfd : las orlYlas tist&n 'séntf^radas^ A&^amdes cocales
flUiñss ^e^iorlalitas ; la cofína cñbietta de cabras y ^yréjas, Ifts tn-
naes, -cardones y 'Ciijfes sfnt lasplánlas qne^tí tegH;an; el terreno
«5 nn asperón rojo y i^o osmtro; pedregoso, aboirdafrte en 6\iio
>€e hierro : ^observan cantidafdée mafderas petrificadas. LdS redti-
€ari0s de^as üaiíadas Altas, Bajas, Adentro y Afltera están eneile
impsáOy y 4 á 6 leguas mas al rnferior, la ilanitra que oeapaín' tos
tedndarios .del Jobo Alto y Bajó y del Ancón, ijiie esdttstvattrentte
se dedican i la cría del ganadtnracnno f cabruno; Bn la punta de
Müías^ del Oesjte exiiste la parroq^iade la tüí^da, y aquí se ne en
'ttda ^ueélension el hermoso lago cuya» orillas se («renden de tilta
y el borñonte del agna se «confnnée con la bóveda teleste. ^ fresde
eáfa panta hasla te bocas del rio Palmar es on espado Rano án
colinas y cubierto de bosques, su terreno arcilloso ailefna con el
arenisco. y ofoeeeeseelente tierra para el colthio, y mas :fli»lentro una
montdíta espesa de donde se sacan preciosas idáderas.' Eistá será 1á
parte que mas prontamente se desmontará por la aproihnacion al
lio ftlmar, por sn clima, la poca di^noia que haiáiacapitafl; y!a
mnt^ha p</b]acion de la Cañada para consegnir jornaleros. Mtío
Palmar hasta la boca de iSanla-Cmz es un terreno tpie se^onspoiie
de i>anoos de arenay arcíHa mezclados oon las partículas de todTe*
getales podridos : hai sabanetas de asperón y tnncbas ciénagas ; asT
68 que presenta up terreno con potreros para los animales én vera-
Do, tierras de cultivo y n)ad^ras de construcción : mas adentro i
4 legijas están los sabanas de Sartanejo y de'Perijá, ncas y atnm-
dan tes en pastos y aguas. Desde aquí empieza la costa á ser liien
enfermiza, particularmente en el invierno, y hasta aquí es liat)ita-'
da. De Santa-Cruz á la boca de Rio-Negro está desierta, cubieita de
montaña fértil^ pero que se aniega, y mas adentro á 4 leguas de ht
costa, se elevan las tierras y se encuentran los llanos del' Apon y de
S. FeTipe con escetJentes pastos, bien regados y en donde j^cemu!-
típiá de ganado vacuno, caballos, muías y burros. £1 rio Negro
será uno de aquellos que verán mui pronto sus oriTlás cubier-^
t^s de bs^cüendas, por la ventaja que ofrece á la agricultura y á to
crias, pudiéndose ademas esportar los frutos por agua. Del rio-Ne-
gro hasta la ensenada del ZuHa, todo es país anegado, cubierto de
basques, encale^ grandes ciénagas y lagunas, y se estiende muchas
leguas adentro : después sigue uúa montaña desierta y desconedda
que termina en las alturas de la sierra de Motilenes que divide la
provincia de Saota Marta : este grande espacio será el último que se
poblará y su terreno bajo va elevándose anualmente por el limo que
en capas depositan las aguas de los rios Saniana, Catatumbo y Zu-
ña. Esta es la parte mas rica en pescado, ^s costas to ^bs desiertas
ofrecen escelentes ensenadas y bajos para la pesca : en ellas apearas
se encuentra una que otra playa para establecer las ranchería» da
los pescadores que concurren todo el año, introduciéndoseed ha
lagunas del interior, abundantísimas en pezes. flai dos iélotesen ti
boca dé la Lá^neta, otros dos en las puntas Otogá^ de -Gongo y h
isla de Damas cercaré Catatumblto, y tres en la boca delKritttbai.
El rio Gatatuftibo y el Zafia ofrecen á los haliitaiites>delo6 vafiie*^
de Gúcuta un cana! natural para llevar sus firotoscon poco costo ^
puerto de Uaracaifoó, V sus orillas afgun dia íonnarán tm caserío
continuo. £n«l€atatumbo está la parroquiadel ¥ñw; y en ka flor*
queta hai un grande vecindario : por ^'ZttKa arriba se encuentran
— 4«0 —
varias haciendas y algunos peqneKos gropos de casas. Los bosques
presentan la yegetacion mas lujosa que se puede ver. Desde la en-
senada del Zalia hasta la punta Santa jtfaria, el terreno es cenagoso,
compuesto en su mayor parte de vegetales podridos y convertidos
en tierra, alternando con bancos de arena y arcilla. Por varias le-
guas adentro está anegado por los muchos ríos que riegan y se der^
raman por la selva, cubierta de árboles preciosos tanto de tinte co-
mo de construcción.
La parroquia de Santa Rosa, los vecindarios de Guaci y Pino se
comunican por agua, lo mismo la villa del Zulia que está sobre el
Escalante : este es otro rio lleno de haciendas y labranzas : tiene la
porroquía de Santa-Cruz y el puerto de Escalante, punto en donde
los de la Grita y Bailadores embarcan sus frutos para trasportarlos
á Maracaibo. Estas montañas son de una fertilidad asombrosa. Desde
Santa María basta Boscan es una serie de caserías , haciendas y la-
branzas, y se hallan las parroquias de S. Pedro, Bobure, y la ciu-
dad de Gibraltar : tiene algunos terrenos anegados, pero la mayor
parte útilísimos para el cultivo. Posee muchas clases de madera de
tinte y construcción, y sobre todo unas tierras en su interior aun
vírgenes, cuyos enormes árboles denotan su grande fertilidad : al-
gunos caminos que van á la provincia de Mérida las atraviesan. La
estación de las lluvias es la mas peligrosa en esta costa que nece-
sita grandes desmontes y buenos desagúes en los rios para cambiar
su atmósfera cargada de miasmas, producidas por la putrefacción
de los vegetales. Desde la Mochila de Gibraltar hasta Moporo, la
costa está toda anegada, y por varios caños se iutroducen las em-
barcaciones pequeñas.á las bodegas de la Seiba, Seibita y Moporo,
un poco internadas, de donde salen caminos que después forman
uno solo para la provincia de Trujillo : las dos primeras son dos
pequeras, parroquias : ppseen terrenos de. aluvión, sobrecargados
^ tierjra vegetal ; lo frondoso del bosque, su esp^ura y el tamaño
de^us árboles indican lo rico de estos terrenos que las fiebres y los
insectos hacen poco habitables. De Moporo hasta Mjsoa es un ter-
reno feraz bañado por las aguas del Motatan y por las que vienen
^elos llaojO$del Cenizo. Los indígenas de M^poro^ Tomocoroy
Uisoa viven en el agua como sus antecesores i sobre la madera do
]rera establecen sus rs^ncherías, para evitar la mucha pl^a de la
orillas, y esta clas^ de palo llamado de hierbo, resiste y con los años
$e petrifica en el agua. E^n la. costa se ven mudiios caserías y sa^,
— 46Í —
habitantes se dedican al corte de las maderas preciosas que eiisten
en las selvas. Esta parte pronto progresará si se hace nayegable el
Motatan , y sus orillas podrán cubrirse entonces de haciendas y
aldeas : de aquí se va á los llanos del Cenizo, á los de Gárora y k
la provincia de Trujillo. De Misoa hasta el rio Benítes es un terre-
no anegado en las orillas y algunas leguas adentro, y solo habitado
por los indígenas de Lagunilla, que forman parroquia con el puebla
viejo de Misoa. Viven en el agua y se dedican al corte de las made-'
ras de tinte y construcción que existen en abundancia en la gran
m
ciénaga de Lagunilla. En el interior es una montana desierta y pes-
tosa por la que atraviesa el camino que va á Ciruma por las Pinas
y á los llanos del Cenizo. Desde Benítes hasta punta Icotea cambia
de aspecto el pais y puede admitir cultivo sin mucho peligro del
clima, pero el terreno no es tampoco de tanta ferazidad. De la pun-
ta Icotea hasta punta Leiba es un terreno de asperón con arena y
pedregales ; vuelven á verse los cocales en las orillas del lago, las
tunas y cardones mas adentro : allí inmediato hai un continuado ca-
serío y la parroquia déla Rita. En el interior hai una montaña ári-*
da y seca, bañada solo por el rio Mene y el riachuelo Abrare, cuyos
derrames producen ciénagas y barrancos cerca del lago. Una rica
mina de mene en forma de laguna hai en esta costa cuyos habi-
tantes se dedican á la cria y cultivo de cocales y hortalizas. Cerca
de punta Leiba está la isla de Burros en donde se estableció un la- '
zareto, y allí cerca el islote de los Pájaros^ que están al naciente del
puerto de Maracaibo. De punta Leiba á punta de Palmas del Este es
un caserío hermoso y continuado, sembrada la costa de cocales : se ve
en medio de ellos la ciudad de Altagracia : el interior es tin terreno
árido y seco en que prosperan mucho las cabras : hai también al-
gún ganado vacuno. De aquí salen caminos para Coro y Ciruma. De
punta de Palmas hasta el Ancón es una colina pedregosa, aplastada
con algunos arbustos y la playa tiene varios cocales, encontrándose
diferentes hatos de cabras : de allí al caño Oribono es un terreno
bajo arcilloso y anegado en donde está la gran salina de Iturre. Viene
después la isla de Zapara, toda ella desierta, en gran parte anegada,
y del lado del mar con médanos y arenales : en su estrefmo occi-
dental están las ruinas de su antiguo castillo. Frente á ésta isla y al
costado de la de S. Carlos están las de los Pájaros y Pescadero, cu-
biertas de mangles y anegadas : por último entre S. Carlos y Zapara,
como de punto avanzado está la isla arenosa de Bajo-Seco con al-
gpnoftarbustoay en tarias^iatles anegida : tiene «na fórtiflcaiiiea
BUMlema ya üuitilizada* Antiguamente el canal de la barsa coniai
arrimado á Zapara y aun actualmente se ven los restos de este, por
d cnal no puedenpasar sino pequeña» embarcaciones^ teniendo «at
la barra 5 pies y de 4 O* i 4 SI el canal » Al estramo de la isla de Bajp*
Seco y aorimado á la costa de S. Cárlos.bai un estrecho- canal de
pooa agua, por donde en otros tiempos entrábanlos bu^ea cuan-
do aun no eiistía la^isla de Bajo-Seco que se fué formando eon e£
cnrso del tiempo, con las arena» que iban acumulando las aguas del.
mar. Hasta puntar de Palmas, es decir, 4 leguas de Bi^Po-Siaco» toda
es agua salada : de allí á Maracaibo es algo salobre; .pero de niiH
gpnmodo mala, en calidad, escepto duruite los vientos fuertesdel
N» en loa meses de febrero^ maiso y abrlL Aquellos neyuelven deí
tal modo las aguas qae no se pueden beber, y entonces los hab^
tantes se sirven de pozos de bastante profundidad, cuyas aguas na
son mui sanas. Los ricos tienen cisternas que reoogan las aguas
plaviales. En mayo suelven á ser dulces las aguas, porque empiezanT
las avoiidas de los ríos del interior^, que desaguan al lago pop 60 bo^
eas y 60 de caños,, condadendo las de una superOde de'4»000 le*
gpascnadradaS) en las cuales se fonman -lOürios y 400 quebradas
conocidas^ Estas aguas se ramifican de diversos modos corriendo
oonmas ó menos incUnadon en distiutaa dicecdones ; y ya unién-
dose, ya^ formando ciánaps y lagunas, ya dividiéndose en brazosy
Timen á pagar su? tributo al gmblago.
La laguna daSiaamaica.es una.de las mas beUas queüeáie esta
provincia : semttra á ella poc^ el rio Socui y al cabo da 2 leguaase
presenta como no. circulo de aoa*arboleda siempre verde, toda^de.
altos mangles qiie.sa ven salir. delsenode lasaguaa sostenidos por
su» numerosas raises. En medio.de la laguna se elevan varias po-
bladones de indigenasxion sus. casas cubiertas de enea y fabricadas
sobmestacas á pocos'pies sobre el nivel de las aguas,, babiendopam
este efecto escogido las- parajesren^querbai bancos^de arena y poco»
fondov Estos indiosdesc^endientes^de le&aatiguoa babilantes4el lago
conservan el, modo, da edificar de. sos aalecesocea, y de aqpii luvo^
origen el dar el nombre de»peqpena Veneeia á esta comarca; nom-
bra qpe despoea se estenéió á todo d territorio que bdocnpa lar
república^ A ladecechaide esta hermosa laguna«hai un caño fiave?-
gable con peqoeñas^canoasj.ehcual. condace á la pacroquia de Sin»? •
malea; mas hada. el jX. baLotrop^qvieftopoDelcual sepnedairal
ci|ÍHesta 4b em^ da la; anal se únmkt ¡mpa' cubcb las casas y para-
baoor aitesas^JEale aneal tienfi 5.tog||ia»r46 largo y da 4 á 2 deancha*,
Eiiveasialefol^'dala c^taiOrÍMitolAe:6fita la$^ desemboca d
rk^Secat ^oaallí «a llaiBaFdalUaH>aw Ge Bavfi^l^ y ¿madldagoa
se sube por él, haciendas y plantaciones adornan sas^ ricas oriHafl^:,
pefosBO/mni l¿j06>da aUasal.N».y.iá.S. halgamde$.c¡éi)agas Uam»-
dus del liai^* qjaa^tieDea.da 4 á 5 legifuis. fistasjí^iáBagf^aestáa cih'
b¡fictaadey^rt>as.afii}átíca&>yabimdaa^>caKi8CÍa% SiH^terrenoa0Ír^
cimvacúiosesl^uii. llenos- de mangles qn» par al N; se unen al ^n^^
da^anaalda SiaaBiaica.i^ por el & é onos^terroaos cubiertos «te <ar<<-
bu^taa y: algunas sabanetas». La laguna de Sinamaina tiene 2.1eg9aa '
dalaciQ>y Dinas iantastáe^aaoho.:. su abondanoia en^fiie^is bace^^e-
allí r^esidaii losiodios^uenoaealiaienlan*deotra«asQ.;^'SU:posicíoQ
en medio del agua les facilita la pesca y los lil^eria de Jas picadu«<*
raade losrinaa%ui|oaff]e abuodaa sotvamaneri encías coslas^uie-
ffada£L
La laguneta de Bernal queda en la costa al orieuta da^Berijé^ Y:
eniiM«deiH3«tbQ«attlos)riajilb^k»Sk i«M fS^ lfQada5(qga)6alor-
DMiU: enlas aabanaa'qii^reatán «eraarde fíeríiá; ábundaiaurpeieayy
está bi«nfabri§*dak
Qtm llamada la bagnoata^ se - encuentra eq lamitadde la. casta,
oofttdenlali^fcil la^^ r.tíesa.dos' bocas- por: donde pueden ^(lar ba-
landfOB» y |)eqiioSas- goletas^ Laf.Lagwatatienadfi anobooercarda
4 iaguai^ y 5'dal»Bo«. £aHa:C6sta,occádenta} estarla ensenada daNlas
D<«a0tf}aaqna>porrunL€ane sap comunica: á ki laguna» del Garasro»^^
So pmsdo^tambfe» aabir «nbaroatoaV cano. Manatíes y al ^icEobo.
qtt%a(hcofliuni«Btt canJa lagunac J)]^Q liaiiiie}/,daagpas negifiB^4o^
5 lagoaa de largO'y maa de 4 4/2^ da aneliO). Na^naui Jj^da. esta se-
baUa otm grau laguaavti&viihda^ también da JuanoManual, cuyas
aguaaso» blancasií
Bara iciéelfo as fojttiíaa^aftti^ desda el!lagO! pos la^aiBeaada da^
GoagO). y per «¿ nb'ftrayef aalk basta dar. oalif la laguna' qiietiene^
casi 5 leguas por cada.f^aMw^e^lodaft^bttiafeutídanGkrde peses;
pamiios^iilhÉ aatát^aneg«i^fi1f esidi£ítílenuai|irte uu: lug^ seoo,
paradbaÉMÉcáan laipeÉiumaL.
Ofed|)iiai^da:laiiagBiMAa^<ártpiiea>dilta!ieia) estala eikémda-ákbla-
guBakdr;dlag¿ qua^tíeaa lllaa^4»'le||lla^y^ ea riea m peses^ Ger^oa de^
estabsa.^btfar }at.eiMtmimá»t€smm poelarisQalae pm^da enlrar al
— 464 —
rio Bravo para ir á la lagaña de Joan ManneT, de qne iiemos habla-
do. A legua y media se encuentra la boca del rio Negro que es un
brazo del Gatatumbo, y subiendo este^ á menos dé 5 leguas se ha*
lian á derecha é izquierda dos lagunas, la del Norte y la de hs Gar-
zas, la primera con mas de 2 leguas en todas direcciones y la t&lfti*
ma mas pequeSa.
* La laguneta del Zulla es la mas grande que tiene la provincia^
aun cuando así no parezca por los árboles caídos que hai en ella, y
los muchos juncos y encales que salen de sus aguas. Tiene -10 1^
guas de largo y 5 de ancbo : está formada por las aguas que derra-
ma el Gatatumbo, por los caños Blanco y Guasimal y también por
las aguas de la selva plana que está entre el Zulía y el Escalante.
Desemboca al lago por medio del río ¿irimbai, y al rio Escalante
por el caño Represa. A ella no pueden ir sino pequeñas embarca-
ciones, porque no es mui honda.
Aquí es el lagar de hablar de las grandes ciénagas que tiene este
territorio, las cuales forman casi un semicírculo al rededor de la
laguneta del Zulia.
A poco mas de legua de la boca del Zulia ó Escalante está la pun-
ta de Aguacaliente, y á su frente en el interior de la selva existe la
ciénaga de este nombre ; parece que sus aguas tienen en efecto
una temperatura mui alta. En los fuertes calores se ve constante-
mente en este lugar un relámpago sin esplosion que suelen llamar
los navegantes el farol de Maracaibo, por estar en su meridiano
y el de la barra. Tiene esta laguna cerca de media legua. A poco
mas de una, hai olra del mismo tamaño qne se comunica también
con el lago, y que se lenombra Boyera. Tres leguas al N. de esta se
encuentra la ciénaga d^anta Bárbara, que por un caño se comu-
nica con el Escalante y por otros con la gran ciénaga del Ghamaque
le queda al oriente, á poco mas de media legua. De N. á S. tiene
4 leguas de largo y 5 de E. á O. Desagua por 5 ríos y un caño al
gran lago. Tiene cuatro islas en donde desemboca el Ghama, y una
porción de árboles caldos acarreados por las corrientes hajd sido la
principal causa de formarse esta gran ciénaga.
Al O. de ella está la de Ooia, producida. por el río de este nom«-
bre : tiene tres islas y el resto está cubierto de ^Itas gramíneas y
plantas acuáticas. Desemboca al Escalante por 5 caños, tiene ^ 1^
guas de largo y 5 de ancho. Casi al poniente de esta, y á^ leguas de
distancia^ está la .gran ciénaga de Morpturo, formada por vanos ríos ^
— 465 —
la cual tributa sus aguas al Escalante por medio de 5 ca&os.
Al O. de esta con un poco de inclinación al N. y á distancia de
7 leguas, está la ciénaga de Motilones, formada por los derrames
de las selvas, comunicándose por un caño al rio Zulia.
Al N. de esta se encuentra á 4 leguas la de Mariana, que tiene
2^/2 leguas.
Al poniente de la de Mariana y como á 2 leguas está la de Balder-
rama, que tiene A leguas y dista una de la lagtineta del Zulia qae
ya hemos descrito. Estas dos ciénagas son las únicas que no tienen
comunicación, y están formadas por las aguas de las grandes sel-
vas que se estienden á derecha é izquierda del Zulia.
En la parte occidental del lago bai también algunas ciénagas que
merecen nombrarse, lales como las de los Potreros, del rio Palmar,
la de Quiriquiri, Garcita, Bbca-Vagre y Gucuitos.
En la parte oriental está la gran ciénaga de Lagunillas que ocu-
pa cerca de 5 leguas, toda ella cubierta de yerbas acuáticas y mu-
chos manglares. También existen cinco ciénagas formadas por el
rio de Tamare; las dos de Temblador, así llamadas porque sus ter-
renos se hunden al menor peso; y últimamente la de Mene, forma-
da por el rio de este nombre, y en la cual hai una mina ábuiKlante
de este mineral. '
Hai ademas una ciénaga cerca de la ensenada del Gallinero y
una en la boca de Abare, llamada de la Seiba. Todas ellas están
siempre llenas de aves j y producen junco en abundancia para la
fabricación de esteras.
>
CLIMA.
•
£1 clima de esta provincia se puede dividir en dos; uno cálido y se-
co, otro húmedo y malsano. El primero se encuentra en todos aque-
llos terenos que por su aridez apenas producen algunas plantas ca-
nosas. Por la descripción de las orillas del lago, se puede ya venir en
conocimiento de los lugares que son salubres ó enfermizos. Sin em*
bargo , se puede decir que las orillas del lago y las tierras que 1q
rodean, cubiertas de espesas selvas y terrenos ánodos, son todas
ie un clima enfermizo , pero á medida que el terreno cesa de ser
anegado y sin bosques, se encuentra un temperamento sano. £1 calor
seria escesivo si no fuera refrescado por las fuertes brisas del N«,
que según hemos dicho tienen lugar en febrero , marzo y abril. £s-
— 466 —
tas son reemplazadas por los Tientos del S. en los meses de mayo^
fiitto,liflk>r agfiíBto^ ápoeaMen ^e son idtdtes fas agttas en todo él
ESTACIÓN DE «MH^ICRNO.
En los cantones de Maracaibo y Altagracia; situados «eiy;a de k
<eotoi^ ée ah terreno ¿rido y leco^ Vttme poeo «n mayo , y en los
iaps«s de Mío 7 agosto es veramo; Tuélve á tlorer en setiembre^
netobre y iiovi«mbPe, y en los d^nas meses faai Quedad. No sn-
^éivde asot es el estreno liel la^ 4oB4e suele Uo^ er <lesde el mes db
mayo hasta oelffbré f en los deaa« meses tío faftán aguaderos. Debe
.oiptritair poderosamente á «sUns 11»vias la g^an masa tfe h ev^apo-
Meion diaria del lago. Acnmtfiados en la atmósfera eslos vapores
son empujados por los victos káeia el estremo del lago, y atraídos
-ftiSí ipwrias inoMsisas «elvas, se detienen y desdenden en lloiias. En
ios lugares en^qne desemboca el Catalwmbo, parece qvttse acomti¿-
lan mas frecnentementa los chnbaseos y tñlí el t]Hiem>^y les telám'^
pagos asusta» continuamente al fNifegante : parece <]tie la mfateña
eléctrica está concentrada en aquello» parajes, en les cuales se ob<^
'MTva todas ]M noebes un fenómeno 1 ominoso qne es como un re-
lámpago que de tiempo en tiempo enciende el aire. Desde la mar
«e mira como si estuviese sobre la ísfe de Toa» qtte está casi en el
OBérídiatto dé la bairra de Hí araoa4i»o : pasa sobre fas bocas del Cata-
itiflibo^, y «ípve de gaia á los marinos* ¿Será acaso d diespreridí*
miento del gas hidrógeno en las grandes exhalactonesde los panta-
nos que ocupan un inmenso espacio cerca de las bocas del Cala-
tumbo ?
El viento del E. es^asi constante : todas las madrugadas sopla
de kw 2 á las 7 de la maSana ; calma entonces^ y entre las S y las
-H r^na el viento del «. en los meses de mayo á agosfomncbas ve-
im basta la tarde, y vuelve i whnar hasta las «4e te noche qué
m^ la bdsa entre el N. y N. N. E. En ios meí?es dé setiemtré y
«t«lwe baí muchas calmas y á vezes teínan vientos delN. O. Entré
MiiiimiiDe y dioieííibre empiezan las brisas del N. E. ; pero siempre
eainhn ilespoes d^^nedla noche y son reemplaíáldas de madíogada
«a» «I viento del Si, hasta qne estando eJi sol muí efevado sobre ét
tom¿die"se présenla de. nuevo la brisa. •
Eti loís m síís de marzo á octubre los ealoreá son éscfeiYOS. Cüán-
w
— .4*7 —
I, •
do hai calmas , son insoportables á causa de la reverberación de
los arenales.
DITISION TERRITORIAL.
Se divide esta provincia en 5 cantones, que son Maracaibo, AI—
(agracia , Perijá, Gibraltar y Zalia, que comprenden ^ 9 parroquias
y 50 vecindarios, en iDs ctidles se cultiva cacao, arroz, cocos, plá-
tanos, maiz, ynca, calabazas, café, algodón, cafia de azúcar y hor-
talrias de tófla especie.
Él total de la poblacfot de ésta provintíia sepíeíle dividir dfel
táodó signtetite : 4B/1 00 que se dedican á la agrlclittura , ^ 5/4 00 i
las mias y 40/100 al córtiercio , artes, éie. Tenia ésta pt'ovincía eh
-ISáffj el iráinepo de 54^6 eitíbattacíones para trasporte de tropaáí,
y toas íie 1700 eiitre bbtígos, botes y rafncih&s'que ííavegan poir fel
lago, á los que si-damos 5 individuos por cada eínbarcacion, tendre-
mos 6000 entregados á la navegación. í)e éstos, algunos ííon pesca-
dores y otros conductores, cuáles criadores, agricultores y navegíiii-
•tesálavéz.
Las naci(mes que concurren al mercado de Maracalbo , son los
Estados -Unidos de Norte ^América, los dinamarqueses , principal-
mente deia colonia de Santómc»; ^ Inglaterra, Francia, Alemania <y
HolanJa ; para las cuales se esportan no solamente las producciones
del país, ^0 también las de los fértiles valles de Cúcuta pertene-
cientes á la Nueva'^ranada. Las provincias de Mérida y Trujíllo
traen á Mas^eaibo sus frutos ^ara venderlos alli. Los artículos que
salen de este puerto son : añil, cacao, caféf azúcar, miel, cera, som-
,i)rerps<de p^ja^ cueros, algodón y ^alo de tinte^ y se introduce to-
da ¿lase de mercancías secas y caldos ;■ efectos que después se llevan
i las lirovincias indicadas. Se hace también un pequeño comercio
^coii el caat^ <^$igua de la prevíacia de Coro.^ y es de bamacaif^
jqii€SO)<3abita8 y aimidon. I^ Mérida y Trujillo se recibe café, cacao^
3)apelQi)| miel^ azúcar, conservas, mantas, pellones, tabaoo, pHa y
«verdasv y se da en cambio sal ^ inercancias«ee$is y ^Idos. De los
afiles de QÚGUte b^a priAci|>alfae]ite el cacao y se lleva á ellos «all,
ftoda.clase de mercancía^i UeoJ|e% etc<.De los valles de Upar^ de la
|)rovíncia 4e Santa Marta ^ se «straen ganados» •
— 468 —
CIUDADES T VILLAS GABEZERAS DE GAJTrOir.
CANTÓN DE MARACAIBO.
La ciudad de Maracaibo debe sa nombre al cacique que domina*
ba en el lago cuando por la primera vez esploraron los europeos
este punto de la Gosla-Firme. En ^ 499 Ojeda y Yespucci entraron
en el golfo de Maracaibo^ llamado por los indios, de Coguibacoa;
pero los descubridores le dieron el nombre de Golfo de Venecia,
y de esta denominación resultó el diminutivo Venezuela ; así es
que Maracaibo es la cuna del nombre de esta república. El lagar
que boi ocupa la ciudad es el mismo en que Alfinjer en -1 529 cons-
truyó varias casas y formó un depósito de mujeres y ñiños que de-
jó con escolta^ mientras él iba á recorrer las orillas y rios del lago,
haciendo prisioneros á los infelizes indios que envió en seguida á
Coro, vendiéndolos como esclavos. Ea 1574 fundó la ciudad el ca-
pitán Alonso Pacbeco, dándole el nombre de Nueva-Zamora, des-
pués de una guerra de 5 años que sostuvieron vigorosamente con-
tra él los indios Zaparas, Quiriquires, Atiles y Toas que residían en
U circunferencia del lago. En 4595 Gibraltar fué fundada por Gon-
zález Pina Lidueño. Despoblada poco después, fué reedificada por
Juan de Chazarreta. Destruida de nuevo por los indios Motilones en
el año de \ 600; lo fué también por el pirata VOlonais en A 665 y 5
años después, es decir, en 4668, sufrió el saqueo del pirata Fran-
cisco Gramont. *
Gibraltar, por lá fertilidad de sus tierras , era en aquella época
mas rica que Maracaibo, en donde no habia sino unaschozas de pes-
cadores. En este punto fué donde el filibustero Gramont, después
de haber saqueado á TrujíUo y cuanto encontró en su paso, supo
que la escuadra española estaba fondeada en el Tablazo para im-
pedirle la salida. Formó entonces con uno de sus buques un biuló
y salió del punto de Maracaibo con viento y marea favorables. Gon
el bruló incendió una de las fragatas españolas, mandada por D.
Alonso del Campo de Espinosa y tomó las otras que estaban á la
salida del Tablazo. Después de una estratagema mui singular hecha
— 469 —
al comandante del Castillo de Zapara, pasó sin recibir ningnn daBo.
Hasta el año de 4678 Maracaibo dependió de Caracas, fué des-
pués agregada á Mérida , y por último vino á ser capital de la pro*
yincia.
Los jesuítas tenian un col^io en Maracaibo, <}0e fué suprimida
poco después que la orden, y con él cayeron también los estableei-*
mientos de instrucción pública que había en la provincia. Maracaibo
ha presenciado una de las batallas navales mas célebres que han
tenido |ugar en la guerra de la independencia ; los generales Pa*>
dílla y Laborde mandaban las fuerzas beligerantes. Allí concluyó
sus incursiones el atrevido Morales^ quien tuvo por fin que capitu-
lar para abandonar el pais que fué el teatro de sus hazañas y de sa
elevación. La ciudad está situada en la latitud 40'' 44^ N^ y en la
k»gitud 4'' 44^ al O. del meridiano de Caracas, á 44 varas sobre
el nivel del mar, del cual dista 7 leguas. Está fundada sobre un.
terreno arioso, y su clima es seco y cálido. Su temperamento es
todavía mas caliente , porque el viento allí es demasiado suave y
nada regular, el terreno no está regado por ninguna corriente y la
lluvia es escasa. , .
Los meses de julio y agosto son serenos , á menos que el viento
del S. interrumpa su calma ; á este viento llaman el destructor j á
causa de su malignidad. Se observa que cuando los vientos son mo-
derados el año es lluvioso, y cuando son violentos, seco. Maracaibo
está sujeto á tempestades. El trueno rompe la nube con una esplo-
sion terrílica y el rayo cae y consume lo que encuentra. Sin embar*
go^ no se esperimentan aquellos huracanes que visitan con frecuen-^
cía las Antillas.
Las lluvias copiosas que traen estas tempe^des, formau un tor-
rente que atraviesa la ciudad con una rapidez inconcebible^ cau-
sando algunas vezes graves perjuicios.
La parte principal de la ciudad está á la oríHa de un pequeño
golfo que tiene 2 millas de largo, y sé estiende hacia el poniente. La
otra parte está construida sobre una eminencia al N., mirando al
lago, que allí tiene 5 leguas de ancho. Desde esta parte de la ciudad
se goza de una vista hermosa sobre el espacio de $gua «n que na-^
y«gan las embarcaciones que vienen ó van á la villa de Altagracia,
que se descubre á lo lejos sobre la ribera opuesta. Esta sirve de lí-«
mite al paisaje que parece salir del seno de las aguas, formando su
fondo los cerros azules del Empalado que se pierden sobre el rio Pal*
^ 470 —
mar. De la otra parte de la ciúdad^ se ^za de otra vista mas bell^
todavía, sobre el pequeño golfo que sirve de puerto. Los buques que*
a!fií se Ten andados, Ibs botes que atravdesao en todas direcciones^
la orilla opuesta sembrada de grandes cocales á cuya sombra bd^
moltUttd'de casitas de recreo, lindas y bien distribuidas, una colñía
pedregosa con algunas plantas áe eactm elevados que se descubreili
sobre el fondo de uncíelo puro y sereno ; lo iluminado de la parte*
superloii de esta escena, y lo sombrio de la inferior que está al niirei'
del agua, forman una oposición hermosa y pintoresca.
* Bl- lugar en dónde empiesa la ciudad se llama punta deMaracsii-
bo; aquel'donde- el golfo comienza se denomina punta dé Aríet»,
y)«n ft-ente se baila la pUfHa de Santa Lucía, á 2>mififts d^dtstancllít
' Bti Maracaibo bai bastantes casas construida» eon< n^ucho gusto ;-
pero en medio de ellas suelen^ leerse otras cubiertas de enea qe»
presentan un contraste singular, no muí agradable- ala vista : silp
embargo, la oonstruocion se mejora y van desapaced^tdo-Mis habl^
tadones de poea solidez y comodidad; Las calles que se estiendM
perla ofHIadel lago ofl^eeeuunaperspeeti va agradable. Gisno ÚM^
parle de la ciudad está sobre una pequeña esplanada cuyo deblive
síB-estiende bácia eMage, se ven los edificios como en* anfiteatro, mi-
i^ndolos de S^. á N;, y á los dos estremosde laeltfdad , ua^lerreno'
bárraiicoso sembrado de pequ^as* casitas con algunos árboles^, éá^
un carácter- particular al paraje.
* Maracaibo tiene un eolegk) y varia» escuelas, entre-oíras una di^
ndfttiiea; Depons dice que en Maracaibo se ven jóvenes laní^^ored*
dos por la naturaleza, que la mas tijera instrucción elemental dei-i-
arrolla sus facultades, lo que no se consigue cq Europa sin un laf •
go estudio y sin buenot. maestros. En Maracaibo bai mucha afición
¿^ la música, particularmente en las mujeres, que genendmente to-
can el harpa.
A pesar del continuo y escesivo calor que se siente ei^ Maracaibo,
éste- lugar es sano , libre de epidemias^ y luego que una persona se^
Ma aclimatado en él, conserva inalterable su salud , tan bien ó me^
jor que en otros parajes donde el calor es minios ibtenso y bai nra^
FBeHí^)» para réfk*e8caFse¿ En julio y agosto, cuando el áireeslá muí
OfiUonte, el preservativo mas común contia los malos efeefo» dHiF
cliooa es tomar bailoe fttseuentes e» el lago, la-cfiales' una oastumn
]|i«e tan general, que á^todas horas bai gen te bajándose á susiorllta»^
principalmente de madtiiiígadli« Eft c^iapartedéMago no-bat animti^^
M^paaU)0, e^ ialiresante por, »u po&ieioft geográics^, sea. que» «^^
efHd^íd^ce fcama pi}Alo mUitor y dd^coo^ftceio, biea^conio da agci^i^nT
, £$ el al» izqpierda de la defeasa de la repúbiiot; y el qi»e poMari
sOrlaga aniena^ dei flanco á laNiieYa^Grasada y á las proviaciaa d^
Coro^ y Bar^Wiúiaeto, de íreaie á laade TrujiUo y Mérida, y puediet^
alUUma^^de.sevesilasd^ioas.
Maracaibo es.el depósUo de las produocioiies de sus pwMas^ el dft ;
la&^pFOvineiaS'del iafteríoc y el de los (ertilos valles da CúcaIi^ paf t0<-
Decientes a la Naeva-Oranada. Los buqaes de Bnm^ y daAaiéiisiiK
taq^ie» deposita» al)i stts mereaocíatf qp^tfiedenama» de^iHips
en todas direcciones por los pueblos y provincias indieadas> de iMn.
do que Maracaibo es un verdadero emporio.
Con dificultad se encQQlcará. eu Venezuela una vegetación faa
lujosa como la de* estremo del lago, en donde parece que la tierra
eatá' agaviída:. cob:. el pesa de «Dmnes y otKrpuleutot 4fl)oIe& que ja*
miiiilBiOv8tdof tooadofr por d^heoriM». CkMBde uaa. miflauroia emi^
gcffGÍoa; hábáfee .eato»' piuf|É0i tereenes^ entónve» se disiparáa. loi«<
nitasKias qua^to» baaen boi* ioaviKfbrefr) y <d agrícullo« podtá recv*^
bi« lo»biique»de>£iirofM ytéeflfMnharloften.9u.miaqia^íiaeieada. iái<
neo^dad es q]M>eatan.lMrllabát^Bte»déraeCa}paI1leide^l«go, déJto»<
Vafi ]d»pi(fifaick)Sváa8iuJiiiiastoi%á>fa capitel ^t » la. parte mna poi^^'
bládli r T ^^ ItiGBO qoBle» offieaer uhhi abliBda»te? posea , Im iagtios. :
desde* jénanas áidedinaesfiíálli B«re(pieíaiit' y ¿sop.pM»!» uncís a»**
catates itia»ineR>»^. nadadóne» y iMiBQB.
SlosdOiBJiiiee hw|BBs>que! iiay^ifMi eu Ib» ooafes veeioos seioofofit*» .
ti*uiSjeu:fl|v:MaraaaibO) el eud posean wntBja^peeiilfBres para laioatts^i
tra«6iontna«aU
Las parroquias de este caatoa son, Maraaaífao*, SúsamaioB,. Mojanr*
y la Gaaada.
CANTÓN DE ALTAGRACIA.
hm TÜhft dé Alta0raB¡«»aftái nluada.eii Im métt» atieniai del lugOf,
i4lflaiHaft'di8lÉttleAel flM». i» díÍH«iiÉ«ftgr»|Mt'4e0OíMibaa^q^í
eiriaianihs oríMia« del» agua, hpeispictnardvrlodastaoealar.efMftaBjip'
CaTflobvé (fljdbp^lacittdaéda Sianuaibacf diiaitoabiftiliiiiÉaMhítT
— 472 —
esta TÍOa ana Tbta agradable é interesante. Mirando al S. se des-
cubren á lo lejos las colinas qne se estienden desde la punta de
Santa Luda hasta la de S. Francisco, bajo un délo puro y sereno ;
mientras que al opuesto hacia el N« se confunden las aguas con ét
cielo, y una atmósfera oscurecida por el polvo impide Ter la tierra
baja de la ensenada del Mojan : la isla de Toas se eleva en medio
de las aguas como cubierta de un velo. La parte estéril de este can-
tón es la que está habitada y algunos puntos de las orillas del lago/
lo demás se halla casi desierto. Guando las montañas de Siruma es-
tén cultivadas, entonces tendrá mas importancia esta Tilla de la
que en el día tiene, ya por la salubridad de su clima, ya por su in-
mediación á la capital.
Las parroquias de este cantón son, Altagracia, Rita, Gabima, La-
gmiilla y Siruma.
CANTÓN DE PERIJÁ.
La villa de Perijá es el único pueblo que tiene este cantón. Está
situada sobre una pequeña elevacÍMi rodeada de una hermosa sa-
bana, desde la cual se ve la sierra de su nombre y varias colinas que
están al poniente. Al E. la vista se pierde en las sabanas de Sarta-
nejo, mientras que al S. unos cerros azulados >que se divisan in-
dican la dirección de la cordillera que viene desde Ocs^a y i cuyos
pies están los llanos del Apon, ricos en ganados. Al N. impiden al-
g«nos arbustos que se vea la montafta fértil que costea el rio Pal-
mar, la cual se eatiende hasta el pié de la serranía que separa el
valle de Upar de la proyincia de Maracaibo. Pocos son los terrees
cultivados, porque la cria de ganados es la principal riquesa de los
habitantes. La villa de ^rijá va prosperando por las ventajas que
le ofrece su posición en el camino que va al vallo de Upar, á Mara-
caibo y las tierras de cria.
CANTÓN DE GIBR.VLTAR.
La antigua ciudad de Gibrallar esla única población grande que
hai en la parte meridional del lago, bien que en ella hai mui pocos
habitantes. El terreno es mui úül para cacao, d coal crece espon-
táneamente en las selvas ; así es que. en este distrito se hallan las
minores plantaciones. U posición de Gibraltar ala orilla del lago.
— 475 —
es bella, está en la dirección del camino mas corto que pnede ha-
cerse para ir á Marida, con una montaña al S. que se estiende hasta
la a^ta serranía, toda desierta y dé una fertilidad asombrosa ; está
bailada por muchos ríos qne descienden de las cordeleras á tribu-
tar sas agnas al lago. Cuando aquellas tierras tan ferazes estén des-
montadas y cubiertas de haciendas y de pueblos, entonces será Gi-
braltar otra ciudad : será un punto de comercio y estará, menos
espuesta á las fiebres intermitentes causadas por los derrames de
los rios y por una vegetación viciosa.
Las parroquias son Gibraltar, S. Pedro ; BobureS; SeibaySei-
bita.
CANTÓN DEL ZULÚ.
La villa de S. Carlos del Zulla está en la ^árgen izquierda del
rio Escalante, en medio de un terreno cubierto dé bosques que no
le dejan otra vista que la del río. Sin embargo, su posición á la
orilla de un rio navegable^ que puede llevar todos los productos de
las haciendas que se vayan formando en el interior de unas tierras
fértilísimas é incultas, podrá ser de alguna importancia, cuando se'
desmonten las grandes selvas que hai entre el Escalante y él Zulia.
Su clima, á vezes enfermizo, se mejorará con los cultivos, y las ha-^
ciendas productivas que boi cubreú las orillas del rio tendrán en-
tonces un mérito tanto mas grande, cuanto mas aumente la pobla-
oíon.
La distancia de S. Carlos al lago es de 8 leguas, y pueden su-
bir en este espacio y aun mas arriba embarcaciones regulares. Este
rio sirve de canal natural á las producciones de las haciendas de
Bailadores que están al revés setentrlonal dfla cordillera, y con el
tiempo vendrá á ser una ciudad comercial y rica por sus produc-
ciones de agrícultura. Los inmensos terrenos de este cantón, que
se estienden entre el rio Santa Ana y el Catatumbo, y entre este j
el Zulia, estarán llenos no solamente de haciendas sino de pueblos
y ciudades que no serán inferiores en comercio y agricultura á las
mejores de la provincia, porque estarán en el camino que va á los
valles de Cuenta y á la sierra de OcaSa. Los buques de vapor sur-
carán aquellos rios para recibir las producciones que darán aque-
llas inmensas comarcas , habitadas boi solo por fieras é insectos.
Sus parroquias son, S. Carlos, Santa Rosa, Santa Cruz y Pilar.
TMfL/L CCAfiMEAWA de* ia partdo» álteDiBÓMk» (tete cabezeras di
daflb flb «n túnraB , texamiaá IfaMÉ», pottMíoBabBOliitBs rAtiva, homlrtf
y los fclaa f aa aa oniüaafc |Mra. Aq» «if^artaiiiinii..
aOHftB
de
Hq^iqiQIK jM^aOH^lUC^
Aitaraf
T^pnfMrar Cl^^mm»BLOSTBBIlM
tura ^' Q^ 8B coiiPOn^
.-^ . feOfrO^TOHB mr L.C/
LA9 C^OZBIUS
DK CANTÓN.
Latitud *
norte.
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Longitud 0.
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it;on, su altura sobre el uiye|, del mar, s^ tempratmra, /^pedia^, cali-
armas, esclavos, distancia á la capital de iaproviucia y de la república,
■veaaa
bm«ro
» 1« c.
«Idias.
POBI.ACIOH DI LOS GÁRTOüBS.
Total
d«U
población'
en 1839.
990
150
400
80
800
4490
96.881
4.790
3.097
5.094
5.110
»
49.889
Población
* relatHrft
por-
• 1. t»
79"
5^
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5-
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Hombres
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* • » •
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. . ""m 'u > i . . > .« I?.»! "i 1 w ■ ";■■ ■ u' H I « j . ,i!^r^!^^7T^frrr?r?m
— ne —
TABLA
DE LAS ALTUBÁS DE LOS CEBBOS DE LA PBOVINCIA.
Nombres, yaroi. SerrtmUu,
Isla de Toas....!... 80.... Haracaibo.
Empalado 8S0.... Sirama.
iVomdre».
Sierra de PerQá..
TeU Guajira
Sierra Aceite
. iSOO...
1 ... a
4<»S....
.... Perijá.
... Guajira.
id.
TABLA
DE LOS BIOS DE 4'' ÓBDEN DE LA PBOTIItClA.
Vombrts* Serrania, Sudeiagüe.
Totoli Periiá LagodeKa-
raeaibo«
Gnazare id id.
Soeoiiito id id,
Tbaas id ttf.
GuayabiU id id. ^
Ij^a id id.
Tapial id fd.
Palmar id W.
Santo Grillo....... id id.
Guerbo id ;. id.
Naranjo id id.
Naranjito id id.
Sin Juan BnlaSabana id.
San Ignacio id...
Apon Perijá.
Cogollo id..,
Hncoa id...
Aponcito id..,
Argnaco id..
Wo-Negro idé.i
Aricuaaá id,.
id.
id.
^.
id.
id.
Id.
id.
id.
Santana... ..*... .. id.... ...*• id.
<k>neepeion.... Laguna id.
Manatfee id id.
Bobo id id.
Bravo id id.
Oro ; Pfcrijá 7.. id.
Tara Salazar id.
Sardinate id id.
Negro id id.
GaUlumbito id id.
Birimbai Laguna id.
Cmuqnena.. Giénaga Moro-
tutu id.
Morotuto id id.
GoBeha Qénagadel
Chama id.
Cedro id id.
Gareiu id id.
Mueojepe.... de Herida id.
Goacf id id.
Guanta id id.
id.
id.
id.
id.
id.
id.
Hombres. Serranieu Su desoífüe»
Pina de Herida.... Lago de Ht-
racaibo.
Santo Cristo. • Bn las selyu
deunrio.....
Gongo id
BIjao id
Culebra id
Basabe.. id
San Pablo id
Torondoi.... deMérida.. ...... id.
Gapiú. ...;.. deln^lo....... id.
Bosean id id.
Gbioruri id id.
Sanearlos id id.
Uto. id id.
Buenaylita id ..id.
Poco id id.
Gaus. id id.
Cberegfie ». id id.
Sequion id •.... id.
Carillo. .... En los llanos
del rio Metalan id.
Tomocoro »«••.•.• 4(t»* ••••..*•* id»
Ceuta..... id id.
Juan Guillen id id.
Barrúa» id id.
PaujL deJirajara id.
San Juan id id.
San Pedro id id.
Baya id id.
Bio Claro id id.
Sicare id id.
Hisoa Empatado id.
Pueblo Viejo id id.
Ahorcado id • id^
Parante, id. id.
Chiquito id id.
Temares Sirama id.
Benites id id.
Mene id id.
AbrarOk.. ••...... id id.
Palmar id, id.
n
4^
— 477 —
PROVINCÍA DE TROÜLLO.
SITUACIÓN ASraONÓmCA, ESTENSION r POBLAClOir.
Esta provincia se encuentra de los 8* 28^ á los 9^ 42^ de latitud
boreal , y en la longitud de 2^ 59^ á 5<* 4 1^ al O. del meridiano de
Carracas. Su Ggura se asemeja á la de una alcarraza , es la luas pe-
quena después de Margarita, y si se esceptúan las nieves perpe-
tuas, tiene todas las presiones atmosféricas en que el hombre puede
vivir, desde las regiones mas cálidas hasla las mas frias. Encierra
teirenos propios para cultivar todas las producciones de tierras cá«
lidas, templadas y frias; y en estas tres especies de climas se en-
cuentran terrenos propios para la cria de ganados. De valles ame-
nos y fértiles, se pasa á hermosas y dilatadas sabanas, de colinas
frondosas á cerros cubiertos de gramíneas; de los campos de trigo
i la región en que solo vegeta el frallejon. Si tiene partes habitadas
en los flancos de sus serranías, en otras se ven cuestas desiertas y
cerros revestidos de una lozana vegetación. Por todas partes se en-
cuentran prados y sabanas con rebaños, valles y cerros cultivados,
selvas y páramos solitarios.
£1 máximum de anchura de esta provincia, de E. á O* desde el
rio Gburui:í en el pié de la cordillera, hasla las cabezeras del rio
Botonó , es de 20 leguas , y su largo de N. á S. de 25 i ¡2 desde
las cabezeras del río Barate hasta las del Paují. Sus leguas cuadra-
das son 562, de las cuales hai 66 baldías. La población consta de
44y788 habitantes que están en razón d^ -1 25,7 por cada legua
cuadrada»
iímixss t cosfimes.
Confina esta provincia con las de Barquisimeto, Maracaibo, Ma-
rida y Barínas. El límite del E está ya descrito en la provincia de
Barquísioielo , y los del O. y del N. en la de Maracaibo. Linda por
el S. .con la provincia de Mérida , y en pequeña parte con la da
Barcias. En Jos b^sqiiea.del riaChiirurí, que están al pié 4e la cor-
diltera^ empieza eljimjjte que demarca el mismo río hasta su orí-
gen; de allí se atraviesa el páramo de la Sal , y la quebrada de
Tafajes lo delinea eo^a^g^Mla toasta »a desag&e eu el Motatao. £n-
tóoees sigae por una loma que está al O. del pueblo de la Mesa
hasta la cresta de la serraDÍa pftnwpal, que separa las agaas que
yierten al Santo-Domingo de las que caen al Motatan. Por aque-
llos párame» '^'la raya basta <el dé TttíSStílH» ,'^ d^^eiEfte al páramo
de donde nace el río Barate. Aguí termina la provincia de Mérida
y empiézala de Bafrhias.
For la cuinbi^e'tfel páramo de Caldera Ta el límite dWltorio faa^ia
él de 'Kiqaitao , y emónces sigue por la cum'bre de una serranía
'ijue se dirige bacía el llano; por la<^be2m*a de la quebrada Assufbe,
l>aja á encontrar el rio de Boconó, lo atraviesa , y por unos terre-
ólos quebrados va al rio Auns, que sigue aguas arriba hasta stis t^-
bezeras : estas se bailan en el páramo de los Rosarios, en donde
empieza la raya con la provincia de Barquisinieto.
« ■ ...
• • t » *
la serranía fie esta provincia bace paMe'del gran rttfiíal Ae 10s
"lUndes que desde Pamplona se firige él N. £. sobre Mét^.-IEÍ pé-
ramo del Yoícan , elevado tóOO varas stíbré el nivel del tiÉir , per-
teneciente á ano de los ramos que salen de la sierra de Mérida , ^
une por el N. con el de Tuñame, de iguaT altura. Be cada uno safe
una cadena y ambas se dirigen al N.-fi. casi paralelas, y encierran
tí cantón de Boconó. La mas meridional es la. mas alta y ^^ceim-
pone de lOs páramos Niquitáo, €alderay Rosarios, Bfsnáá y Jábüya;
ik este -último se tme la cadei^a setentrional , en iá cuaV estin k^ "pí-
tamos Tetas, Linares . Atajo, Tonocó y <:abimbú, de4ondeisdén
ránales al N. N. O. , formando un país tneñíaüoso cou'vatteB bícos
y ferazes. De estos pM'amos nace una cordillera, que en pai^ if^
para el cantón de Trujillo del de Carache, y atravesándooste últi-
mo territorio, se une á 4tata sei^a&ía^fíiarÜene del páramo del Ja-
bón, en el punto llamado Hato-Arriba. El páramo del Jabón es una
prolongación del deCabim'bú, y sus chnas'dirigi^aldsi^hAtéi íéí^.,
lie rebajati eoiisidtrabléinéiíte , safiendor'de los*]&iitté!ri!é^%^|^É^
tnés;rmm-de sas cumbtes mas'altas cte tá dé' i^áoM^, ^^ifHrik
"tMoyúm. tkü sigue disminuyendo^ tiene soSáuftftttel.íilS éa4\
puñt¿ de' Baio-ÁTrfba , en donde incihia trl^f/ff jfl^'sepíirJÉlBtítts
liaúosdé Monái^ hn de Cadiche. Pcff^ lin i^bi^«)aw
se cotnanica á unos y otros, y tomando allí la cordillera el nombre
de J ¡rajaras, separa los llanos del Cenizo de los de Carera. En el
pnnto en que se originan los ríos Jirajaras, Panji y Sania Bárbara,
tfFaioa la pv'td q«e cerf^^pendehá TruJiUd^ si We«Ja eer^Wera,
¿irígiéiidMe mniiiya al N«, ¥a álornatte to «eriwi qm^^áfñéim las
Jerrenós de Maracaibo y Coro, ya deserilos-^ a^oallat pf mnci^li.
Todayía -tiene Tn^iUo oárj ramal sm iia|^Qrt«Bte¿>^iieipejrtelieae
.también á la .serranía de los Andes. EH^Kzaeo el fárasa^-deJa $4)
úe -cuyosflancos sale la cufista de Mfkovttí A del iPir^aetoelo^ y;de
Mié «una cadena; de cerros que pasan al wwa^ da llendafa., pei^
diendose en: la c^nfloeneiadel rio Momb0y i;on el Alofafaa ; méat
tras4]tte ^ ramo del páramo de la Sal, sigaiendd paralele al dea^
crito bacía el N. se abre en dos; uno se acaba s(d^j*e fietíjOí^e y
el otro cerca de Yalera , en una mesa hermosa llamada Saoana-Lar-
ga, antiguamente nomb^da-Saltana de les Truenos.
E\ principal rio de esla provincia 4s el Alotatan. Gsie nace ea el
páiamo ele Mucuchíes, en la provincia de Marida, f sedbe easi to-
das Usaguas del terxitorío de Trujilla por medio 4e 46 triboteri^^
Tiene rancio entre los da 3®' óiden de Y^eaueiaí suemso es^
•5p leguas^ -1 8 de ellas en la provincia de Maracaibo; su naveg^eían
es de 26 , de las cuales con^spopidea solo ocho á la de TrwjiUo»
Van á caer ademasen la pfovinc^i de Maraibo 44 rios^T ^si todos
ellos eniran separadaxnenle- al lago; de manera q/M2S «trítotiA
^susa^uas á la grande liof a de Mai'acaibo. A la del Oriaoaa ^m^é$
ries ^ue se abren paso en la serranía y se^^brifenf ett m^Dle-cuer»
po á los Llanos de Barínas, icon el nombre* de rio B^cmió, h^no$
pues de la proTÍnda,S9n en Mttme«>;^ 6€, todos de A^ é^n y
j]!as de 80 vmÜB^xiidQB ¿ipiebradM abandoatoi de i^oav
Ninguna tiene esta provincia digna de describirse, pues solo hai
una mui pequeña en donde se origina el rio Momboy, que pasa por
Mendoza.
i:...
— 4*0-
CLIIIA.
El fTima de esta provincia es maí variado y sano en general ,
aunque üene partes' enfermizas en las llanuras del Cenizo y en las
de Monai. Estas sabanas bellas y ricas en pastos y cubiertas de ga-
Bados , son , sin embargo , propensas á dar calentaras. Lo demás
del país es salnbn^ y se goza de todas las temperaturas que uno
puede desear. Tiene terrenos cálidos con vegas ricas cubiertas de
iiaciendas. Cerros de varias alturas con espaciosos lugares en donde
ne encuentran climas calientes y Crios. Allí bal valles fértiles y ber-
mosos, y en un día se puede pasar de un calor fuerte á un frió in-
tenso. Pero las cuestas que miran al lago son enfermizas.
ESTACIÓN DE IliVIERNO.
Empiezan las aguas en mayo y duran basta octubre, i pesar de
que en los páramos las bai casi todo el año y las nubes descienden
hasta los valles bajos, que están como encerrados por las cordilleras.
En la época dd invierno, el tránsito de los páramos suele ser pe-
ligroso; sobre todo eu la cadena mas meridional que mira á las di-
latadas llanuras de Barínas. CaandO estalla una tormenta en aque-
llas elevadas cimas, pone en peligro al viajero ^ para quien no bai
otro refugio qtie descender de ellas. Los caminos en general no son
malos en la estácioh lluviosa , aunque se hacen barrizales en las
partes cubiertas dé bosque. Sucede también que cualquier riachuelo
ó quebrada crece tan repentinamente, que el caminante se detiene
y se ve' forzado á esperir algunas horas hasta que bajan aquellos
torrentes, iii iilviernó los peores caminos son los que conducen á
Granare y á los pueblos del lago de Maracaibo^ haciéndose tan pan-
tanosos , qne con dificultad pueden transitar por ellos las muías ;
pero esto sucede en los territorios pertenecientes á las provincias
limítrofes; Barínas y Maracaifoo, á causa de lo plano y bajo del suelo
y de las espesas selvas que lo cubren.
DIVISIÓN TERRITORIAL.
La provincia se divide en 4 cantones que son, TrujillO; Carache,
Eduque y Boconó ; los cuales contienen 23 parroquias y mas de
40^V¿ciádftrib8 , doiide se oolliva eaeao >^ftfi^ ^^ dAfii^^iri|^, A-
gbdoü , cebada , papas « {üááuios , ynea, ttafa|>alv^jas, gaiQ>a9KEos>
t»i^uita8^y-.mtialafabiipatti^>y fivrtaik • •> •
£1 toltal de k pdtíaddií de<ii^ipravio«id;«6^^0d64íjridír del
mtoád úgniétí^ t 59jf^ 00 : que se dedteaa 4 la agiioaltoca , 't 5/4 0«
i teerla y 3>^4!0<l d eaiÉMVCfa) y artes, : . ,> . , .
COMtfftilQ;
r '
Esta pcofineia hace su oomertio pk^incfipalmtíite con la de Ma^
racaifoo, Uetaidacaeao^ café., oQUsecias y ftzúef% y:re<ábíeAdo ^
cambio méñsancías -de teda/)te$e i lieoi^es y sal^. Cosier&ia tomhifiíi
em Guanaucé yBaiína/») enviando ¿e^eindadosoifé, niea#Mi*a%
azúcar, papetanes y bariúa, y recU)ieiidade:ella9ip»a4a, arroz fia
vezes caoaa: De ^«freía y el Tocuyo v^eiJb^, obras de trabar lieris.^
z^HÉos y jaboÉ, dando en cambio €acaa.^<ca(é, cueros^ reses y
malas. ; •, .
.v-^
CIVD^ABtá Y y ILOTAS. •'
- ••
j 1
CANTÓN DE TRVÜILLO^
La dudad deTfujBlo es. la capitaldeJa proviuoia ^ue con su
misiDo nombre M erigida en ASÍ i : su iarritoiio ocupa el antiguo
distrito de los indios Guiasr descubierto en -i $4? potr al.co«ittdor
Diego Luis Valido, que.iba en bu8i»:de u]^:núna4e Qiofue se
deda había en él ^alle dé Booauóy en dondeÍQs.natura]ea.ciilt¡?abQiE
el algodón. Qn el aiode -I dM; Diego García f!ar41e& enátó emel te»-
rítorio de k^s Cuieas, y enEsciKpe; €«rGa4d MotaiaU, fundó. la ciu-
dad áe TrujUlo; pero al afio. signianla 8iitifkri>»la oiudad loe indios,
porque sft Yierou maltmtados ^por loa espMbdea, y García Paiédes ,
que estaba en el To^uy»,, marcha sobro TruiiUü y lib^tp ííúmM^
dA , bien ^e tuvo que abandonaciel lirg V y ffatiiarsiu.KnrfiSí59
Pedro Rw, de órdeá dd gobernador GutiéDm de laPeña^árepebl^
á TnqiHo«&-el ñusnan lugai^fx^ii el n^wbtQ (¡^ MirabdLAii leste ano
fueren révaoados lo8:peéeres dadtís^.RuiZ'y s6i4fSpach«Km^uevos
titeos, al tmu^i&á0T díiáiKM
volvió á dar ¿la poblaeioñ el>.nflnibffe dé J^u^ ^^y A poeo ti#mp9
P. OB06. ^
lii¿ MMMfe étílM fli»^»plWíi.4^l^HW^4ftJQ^^,^¡^i^^ífcfiMm
ea dos baadcs, y giando gob€ii>ri»;etltoiiíidfl támú^mméi
lÉ»oíiiiadÁJaSriM«.difckt l&'wwtot»»hobfi»fci>i-6raad%tedtwie
ras y los tigres qae devoridiMulo» gmmhstt te eiUifriecíói4fiS|MQi
la ciudad & leguas oías abajo, sobre el rio Motatan ; pero la hume-
dad^ los tigres^ las calebrasy.lastboraiigas, foeroa causa de aban-
donar aquel punto , después de muerto D. Pedro Ponce de León ,
aaeesat de- Büraaita^ y la dudada» «miMiaéiitBdaPM ob valle
áeflMifaii»; iiia0<par lo cáM#f béiiiado*dil.fiílwuMibm
iii«diiica>al l«§ar daada boiaiistai BwMg^yaJarfifflHgmdad .dabsür
manwrfé» Im^mmMBmiilm y aaiüoMe ét^if^swíi^ámoi^ímkúr»
tíboMli» en'^tuiéloay paettea» haMlBfila% y UbfáéiW'pHiGL aiodad
•opuléiita per el grafr tWieíaiod^wis tfqtoi^ieiyaciatowte dasea»
taé) del(eml4iabitt^aBdaa^li»l<d»eaL4oá}fiyiB^é»i)q^ Huaiiás
todo anunciaba que esta dudad llegaría á una prospérídad.ablLlá-f
otties , frustráronse tan balagüeñas e^^anzas á consecuenda del
saqueo que sufnó^ant^fif^ pv ej^ fjpM^f^B^ísco Gramout , que
quemó y destruyó aquellas suntuosas fábricas. Mucbas de las fami-
lias que pudieron escaparse fueron á dar á Mérida , donde se esta-
bleciermi. La dudad de.'EffllMt^ <a|^^hi94a entre dos cerros , es
mui burga y estrecha , y tiene un declive mui grande que Tiene á
pefdarse<wn»darl«aiiíi|gasid^^i9aiS9 Jaeinük Mi»f Utanaferiabai
una lüfsmniaxd^pifel 4¡^ 44W hüwtas#^Stt teiíipniwn wÉajBa.joiwib»»
iHgu»«y>en 4l>ae'goia da im aihi' puro ;. paoo^aL apÉa<) aunquOidam
ytwnpaBMituv aalé»4ttp(nguaébfde pairi<Éiiii|»nMtfn6 ipwpuyim
Au«»piptra»» las>ouid¿|^yinvae»paií»^ átl^saluá^.aHifaisAaft y
«msaatdeüBiMndadaa. ]aApaBCiiíaida.<iiaeiaM^,ffluapMk&dCtf vat»
na saín» al uiaifcdll laaivii» givi dada» baUaaupenyaidáiror.itaii
aaiBunaa^eiibuq^ebpaii^i y^aita^la^samnítbdihdaNifelMae.djia
Ifiaai^ s» Aía^var so>^ •■< daaa oMadM B&tavHiiwcawbias^eQ
dhttpdéaam^ fi diétiiida^6x4 lagaasf wguauinti aalqpaMhlQL d»
Slstai km^y elawdat2ilHMr Yana^.y^aéiabaaiemnMlaa^BMwiucikD
ysuN^«|]^,gM#ieNpiaÉi*a0^ua4asrg8iiaril*ifl JÉMÉspiy MWIk» lu?
via]oa»la»ftli»attiiiavíÉt»9W|««rit409^^
«toíaigum», fimiida a» Tiq}illo>ifll m^Á^'jmJMmimi 4a MM^*
liatido^p eny»iiBsdi»^aaáwg IflB^haiaiteea'dtf uwii qta
PIT' espasíai de.I alh».liaUii dasoaado la. aangee aa Yaiieauala y
afligido to.]hqaia)yM^^.T#9ito .bii&MrTf^o^ 4mdA3#r«r ei|,
45^ «leí ionio d^AHÍ^fi^^ dei^a (JeJav^etT^.Á t^M^.QmOí^*
Slse^subetl lps^.^fMfi<;». ojüía sé{)ai:aa «stáxiodad^a^.Ia. TíUa^4e.,
&)ooiiá|, se gpza 4€f usa: .^ísy^udel idosá «uaiui^hacA tjheoq^pQ^fimci^f ,
claro. Ai S. se presenta una elevada oadena.de,j|^jíi^iiiuMy;,i^n: d^
reina eowiml^vfmiti^m yJfipi^ifiriQ.y deatánp^ 0sÜQ:QciiUá tas
inmejisasL Uanpras^ |de Barína&^jpecQ. da realzit aL henEooso' i:aIlQ de.
B4^n¿, rodeado de. pwrainos^,
Lostios Booonój! Buyi^ate se,yejQ,SQfp€iiü;eai:iK)^ el valleoomp hh--
los plateados, y unidos de^ues^ se prec^)¿taii(oc.i]juialbra.^tJrecba^
^ee^^^jDQkouna cpiAadapa ei^ I91 sa:xaQj[su.Aii N. se ,defieul>r0n
vftrlos cevrQs qiie ca^paralelos se4iiigen á k)s.UaQo&de!Í(€e»i8^^^
escondiendo entre dios valles ricos, poblados y amenos, b^adoji.
por los ríos Momboy, Motatan , Jiménez y Mocoi. También se divi-
san de aHi los sitios de Velera ^ 1^ mesa de Betijoqne, las bellas •
planicies de Escoqtie, y las frondosas monlaSas desiertas qtie der-
raamn sits v»f4ipto ea cd^Jagp do Maxaf6^u|)0^,Ejl {tais mcittto&oso
de SaAta'A|ii^.Y 6íq]aisaVilPW4^^ vifita^d^ losv^les de Ban;pai^
Meja^j CoiipsfMú^i^yr^lafaobe, y.síriase^^
riUento enljre o^rDs, y. eaiwaiJiondQimda lDs«lIdi^.dfíMoQaL,.
laíéiiUia^^ ea lejaiMu pen^aotiiia l0%^itQs 4ie ^ Jlraj£M:at 1- lo» glandes
llanos del Gewosii^iiiieDdea^. ^^^\ faorkonteu Lasiierxas derisatori
puntosr deserítes daArantiwar, emmh^v ^1 J en ^^jefo^c^i todas
las fNTOdil^^ói^'de: 1^ 8im táiiá#;:f miii^^ dA la^t WMSf ton'** .
Bl lrig|()i<^0m«l»ttSr4bii«dftnte^»y'^pa^
calo d^. c^^oiar^aeratHF<9u.7lu9lUei>r 6^:01]^ : ojüM^ -^utos*. iai^
agrí«i»Ucirta/ lyo es f»i^ipi^|9(miweion ^:a|(¿io».Qri^t8aBidoftsíOar
baJios^pHtof^y pi^l^fWipvj^f^atffyi^fiea^
ne«)sde aUi/SOU^fm^ gji(M^^y<:8ii^;áarBfriaaft fps^os^^qpe «una^'as-
logaies ; <G(m ^\9i9»^ IM^ricaa saagM>tAioarios. yiíaaiiti»;.*- $» baeoa ; .
taanUeft^tU b^iw^Mü» y 4«lc«&wok driíodos ; r ^^ raices de
ini«sMa; pnarr^m^át la>aiitepeien«jfh'#pBi6bi^ iasivetea
da e&m: qmi^íeixmn d^ te fm^m. ^ MMifmhnm^, d#l oorii.
trWj 9H04^criaíA^flto89Ch4l^rr^alw4fllei|e9wfi
25rJ«gii4# ^rb^d», M^aoaUNH» b» MM^
TÓ, tanto para los cereales de las zonas templádíáisí como'pa^á.Ío$
frutos tropicales , la bondad de su clima en l'a^ mnchas serranía^;
la cantidad de selvas que aan quedan por desmontar, todb con-
curre á hacer esperar grandes progresos én esta pequeña "proviiicla
cuando su población llegue á ocupar y cultivar todos los terrenos
susceptibles de producir. ' ' ' /' " '
En Trujilto habia un convento de franciscanos y of ro de domf-
nicos que se han convertido en establecimientos de' educación, apli-
cándose sus rentas al mismo objeto. Hai un colegio, varias escuelas,
una capilla y un monasterio de religiosas dominicas qué trabajan
con primor muchas curiosidades de mérito. .'•...
Las parro()úias die este cantón son ^ Trüjfílo', Saní Jacinto , S¿h
Láíaro , Burero , Quebrada-tiónda , Jájó , t^ampánito y Fámpan-
Grande. ' ■
CANTÓN D£ B0C0NÓ«
La villa de Éoconó sé encuentra en u¿ hermoso valle,' Vico por
sus tierras y producciones, y elevadó4572 varas sobre el nr^^eldel
mar. Está rodeada de elevados párateos cuya altura sobré él vallé de
Boconó és de mas de 4 900 varas.Estos parámosse denominan Volcán,
Caldera, Niquitao, Rosario, Cábimbú, Tónocó, Atajo, linares, Tela y
Tuñame. Hacia elS. E. baja el rio'Bóconó y al N. E. el Burate, re-
ciblendó ambos en su curso multitud de quebradas que descienden
de los páramos, regando y fertilizando todo el territorio hástá'qué
se unen cerca de la villa ; entonces forman una inmensa playa peli-
grosa en su paso, porque d teírenó se sume en tát!ar¡íaí'ífe, y di-
rigicRdo sus aguas al S^ en un solo cuerpo , se abre paíso per los
páramos Niquitao y el Rosario , y va á llevarlas al rio Portuguesa ,
con él nombré de Boconó ; ño^qtté ferCIRíaf una gran parte de las
llanuras de Barfnas. Este valle, quese compone de (errónos adecua-
dos al cultivo de trigo, cebada caña ,!café, algodón , ^tátítá'Os) pa*
pas^ maíz, alverjas, garbanzos, yuca^ etc., todo' bajó un clima mui
sano, no dejará de adelantar mucho, teniendo abiertas las vias'jfjara
una prosperidad venidera, cuandid Ifts Selvas que miran á tas llaíitt-
ras está) desmontadas y tiíia poblácíéift horneros^ haya: cbti^rtifdd
el camino que debe conduoif los hab'itstntes de'Guanare á \ai Orilla
del Motatan, donde embarcaftlán tas prénaucclones de la séiranfe q\io
aun tienen inculta. Graüdes sértin éüt(ÍliéÍ8lttü tidélaiiK^ (fá Boconó
. i^ SWWaiiias d€( este ie^M<>a.fi<>^:?<><ÍPttpf: Jps^
.'il '.'. t' I • •♦ •. .,' í \*:' > ;, .... • Vi' /
«
í. ; 1 M bHí 4le C«f#Pte/^tá al Jiié de la sgrr^ de Agoa6bís{i9,;<gi^
,58^pWí3^.^|tr9.vip(ía.4p,9afqttisimclo déla deTrujyip. }ji ba$^e.lr.J?|o
{ qtte.y^i^ $i|;ibOi9p^i:^, 1^ t^peremeato.es delicioso y sai^^^.f/Q^la
. «eri^^a^qn^ |a .^^i^i^ clii^ templado» y irlos. ÁlS.ce, inicia
, WP^tPár^ixic^.a^iBprci €#y.i|e]U)s:ea oiebli^^.miVlPa^ que aJÍ;i^^ía
^s^rr^pí^ 4ae;d^sdp. AjK«aQbÍH>o.$e esUende bácia Bato*^£^)i» y^
,pi^ésepUi ei^ todfk subpUeza. Sola iiaa pequeña piarte, de.eite t^i>-
aorip.^^pferjB»Í?^.^a laj|,%n»rfi& <|e;||<fi^i. Ep €*.fiueWjí íeSaftfa
^j^^p§fteiw9i^|eí g^íe^canton ,,íje n^ai^dó ,ei:i©r iiojí j^ájpW^ ,
que auq p>0,>^^iv teYHÍ^fl% «a ijJfWW ^Crl^lentovifita ei|trie.||9-
. ; iiU pÍMla)<«,|iciCi^i¿phe^,j^elcawi^ pyittc¡palpor/í<>ft4e Jc^msl-
.;te^;*!^qs;l«.qw>iy;ÍWl?^de,Ja8 proñiuilaí^dj? Mórid^. y.Tí^iiaiq,
. wY §e.4if ¡^[^Jiácií^ l?s.^;»^5quiffli;^t^ (;^raJM*íííyftaríic^.yK«4-
,sífn Wíe # i4é 4^ .la( W^im^,pufi5te,de lj> seirí^í*» li^fi^ «í^ ^í? J»-
.iP%íft«8lP»«:*ía,affifi«ítSfift y,líftí9r»siP9y |» G^raaf^4^.# ?W ÍSW-
*^^^* r'í'^* * \ i • " ► '' ;- 2/' ' 01 -"i'M .' • - *. • j 5 * • ,Í)Í1' ' í'U
y Siquisai, ..;,^,:.' ^ j . ,s,,\^
CANTÓN DB ESCDQüE.
* •
La villa de Escuque se encuentra en una bella planicie formada
por el declive de un ramal de la serranía que se dirige por Beti«
joque bácia el lago de Maracaibo^ perdiéndose en las selvas baña-
das por el Ghirigüé. El rio Escuque^ formado por la unión de loa
ríos Colorado y Blanco , baSa el pié de esta villa ^ cuya situación
alta y despejada^ le proporciona un temperamento sano, refrescado
por las brisas que descienden de las serranías. Hicia el S. la vista
^e recrea sobre un terreno quebrado que se pierde i las orillas del
Pero nada es comparable á ia de que se goza desde el lugar imib-
1)nrilél>otienMi , ^n el «Mi»» '^^tai Béfijoq^e'. 'Bié'iM se^es-
cobre todo el llano, la parroquia de Valera , el corso del 9M:IÍo(6*
tan, y Sabana-Larga qoe se mira como ona espaciosa mesa en me-
dio de cerros. Al lado.ip«Ml»«eTeK«i»?Ma so estension los lla-
nos del Cenizo, las selvas y serranías qoe le rodean, y en f<»ma de
^flfii Hk MécarelHserriyOoBqQistóite, «n «tf^Méhrs'^JeiíMneritran
' «toiís ftgins temida que'^ena «aMlms "y ^eáfieiiési ^A Ik %qifittiia
^4ál tajoAflo^tie't^ á BétQoqfae , "se WfA «eérl^^MMdb, ^ ^1 «nal
•"«siét HUBÉ-Biiaa'ie ^IrAéo , <doiK>ekle ^^cm él'«oiilbl^ ^'<K^^^i^^
-^lombktne ^ por '%aftferse ^deseó^ieito % tfiÉá^ld ^Müe %e ^e^NM ,
"^ooé tiempo ^despties'qttéUs árütas^répoMieantó tM$o^(A^la pi»-
^%HÍa.^fiste aí6eitei flavÉiilÉÉf^rifa^, dMffl^'^^li^ f^StosiNe
'tm ^lor WBsagtaoaMe. T}iH«%iii'Yas^iffffÉ8^ie'*cíiie^HiMiiD'een^^{i^^
t les 4e ñ^f ^ la^^ebf^ fr^^Mp^^ise^é-*
'MxieittfíitHmuAitis ^bdi'bóHontó dé ago#iiirtf ffis ^MÉM>Íé. *
• ^%é¿'MkMtos%Mllés^(te M8 iMáéB%t tík^^mm /tanáM ^
ferentes valles, en climas cálidos, templados y fríos en-^éjÉlMpera
-^ÍH^^PeeAMó ; ^1 ^fS/M MiféVItt' c«ttft>éMée;>Bk(^^llés nliM
tt»i^^osí lA^ik'^ feI<!ÍMt«*ifa^fegAtei!ii
110 wa*ttíw sMm^ el '^Mua, Y cS'^eNiíf 'TuiraMrar BÉduqtieieMí' ^^chmdo
janaéo, cabras, ovcijas, malas y caballos.
dosayLaMesa.
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TABLA COMPARATIVA de la posición astronómica de las cabezeras de can-
tierras , terrenos baldíos, población absoluta, relatiya, hombres de armas , escla
tí?an para la esportacion.
NOMBRE
OB
LAS CABBEKRAS
DE CANTÓN.
P08IGI0H ASTSOllénOA.
Latitud
•orte.
Long-itod o.
del meridiano
de Car&cai.
Tn^iUo.
Canche S». 8^ lO''
8®. 81'. o
8«. y. C
9. 61'. 48"
Bícuque 8». 88'. ao" 3. 20'. 58"
Aituraa
aobra
el nirel
del mar.
Booonó 4«. 44'. O"
90. 82'. O
980
1.480
967
1.879
ratora
medía
del ter-
mómetro
centi-
Cn^ado.
92o. 24
19. 19
91. 59
18. 93
OALmüim UM muraos db qbb
aB COMPOMBH LOS CAKTOMBS BH
LB0ÜA8 eVAniADAS.
Total.
i
a
«8
6
36
6i
i
wtm
i
.
H SP
8
8
68
mimm
lao
32
44
86
46
179
88
987
ton , su altura sobre él nirel del mar, sü temperatura media , calidad de sus
«ros y distaneia ¿ la capital déla provincia y de la república , y los fimtos que se eul-
^ - 1 * •
'Núiner»
de L. c.
qite
se cveea
baldías.
POELÁCIOH 1>B ¿09 GAütdáttT.
• • • •
Total
deía.
«
poblacii^o
en 18S0.
»••«•••
as
6
80
8
66
11.883
1
PoKIacroii
reliaVfV^
. piifi4n4M.
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líombrés
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Ncmbrei, i Yaroi. fimraniai\
Caldera. ♦«
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Rosario ^.iitío tá. .
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tÍNnMiMI.M..^. 4»fOO...«. Id. I
Cabimbu** ••••• é^^l^Mir <-•■#• r«» 'M*. •
Tofiame 1. i^iOO. ..:... Méridi.
Tetaa^... '....... 4,800...,!.. Tripulo.
Aii4o*i..4 , iilno.......^. id. .
tVteoéó #...... ./ai*. ,.....^ id. •
AgMO-Oblqft;..^ SM^.;.: id. '
Méndosaj... Sjhx) ^ id.
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XABI.A.U>B IjOS fI08 BB 4^ ÓUBN pM hk n|DTIRCI4.
Nomkr^. MgndfiUu. MMgie.
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VonAoi «•TTt^fflto .•!••.• id.
ColcM^Ab... i., id j.... tí,
Qniwcí •MtM^«.(«» dd«9iii«*i«.r«.i^ ?
A]¿fMMÓU'.S)i»«»... 4*» "id*. •••«•••• w. I
Arapof...; L. id «.... id. '
Foe«. |.. id |.... id.
BacBaTitU.«»«.^.. i<it.*«*i»*.* id,
Miquimbos ....^.. id I.... id.
Gaof..
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Sequion. id id,
Boeonó id Orlnoeo.
Bnnii...... id id.
Stnlaeiiio
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Carache. I....
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riiitfUiis^^dMi^Iii <i»<<i»yttyfeiiiÉtiiiii>tiftett'íiii^
, fáífiiQ^^^^'^Hígtímw ik%ííi;fHmiéúik^^%}mií&áÍíÁií^ \' leal-
en que se alzan cerros nmiñeáili^^mílklSméímám^
regadas por rios y ocupadas por selvas de una T^etacton admirable.
£1 agricultor encuenlra lupcii^fMpios para (oda clase de cttlÜTOi
y el criador parajes laui úiiks para ^ado Yaenuo^ cabras, ov^^as,
■iittin/ipM^iinii tiiW|iiifti^iit||ii>iMiqiliiiiit^^
dtai i»ilijiiiilmwii Ép- hiiWMBhit¿-^aaÉtá¿*<ilii Mi ¥tÉfmetifk»
>a»WI lfMBttafaiii«&bÍM(at>4iÉi«íl)^^
I Ja flUdl altei* 4Érito Mto 4éé MlliÍ%éil<¡«líii#Bi0t¿«Ml|b.
^i|P^^^él|prfg^h>lli^^^^■M^^l#^
?i
encontrar los páramos de Granate y Santo Domingo , y por los pi-
cachos de estos bu»^ ^ri^ Gaf a{[ii4,^pf)dt; «el, punto en que había
un puente : sube después por una cuesta desierta y ya á tocar en
los páramos eleyados de Apurer^^^oconó y Don Pedro , en donde
nace el (^r];^^ Entonces. s^e continúa por el pprsódf esteno hasta
la boca del Dorado, que demarca la raya aguas arriba^ hasta el
^braz^i^e y^y^i 490^0 0OTmca,>Q^:4 D/ribaiita^ d^ode tannina
Ja pripyiwift de QairÍQas y ^nitm. la de Apireu Atraifmdci ^ Uríbante
; 1^ eiM^n^e) rio Borga« y «^ )m^: $n f^lvmraiai^Y^idQJtea
^^ví$ori^,fq|itre,i[a9 dos pp^qyiiveias. Aqni empieiva IJUftOAtern^vQufa
{¿ii^K^^Ccifv^ toofiitt^niíiíteli(iswadía,qiie.da
> yi^titm ¿ los^^sjQW mm 4l ^T^rbes ».bas(^ U«|iui:i laaxabeier^
.4et Tá^!Ura£.y,{i9r fl^le^iirm.oeníMaúd^á ln w^bmdaide.Dpa.f'fdnf 1
por 49. (<;nal «¡gua la.mya.y. Jq^^ por Uk qmiln»UM Ufibüf ,
^ NWWftfNQ» ;)mili m^^mif^^M^i^infi iG;4momto»»mi.^fiy94uiaio
¿,ppr .upa.ippsto apnra,ii va. i fbuscar )aJ)oca.dditm .daJa^iOrite
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jO'- liií »!J ">>'> í;í> ». «i}..-.| «n i|oiifjdfKaf>'i Kitíi ;riü...'í 'ío-U.-ii» ,. U
La serranía de este territorio pertenece tod^iJddanal.idfldlos
.Íp¿b^'«a^,4e9#.8NW)MW a)JH^.E.iD$Llimttflr;dfi mama
nuando al S.de S. GrúiMói Vftf^all^aMidOM^RNfMíiM^
rr4ei«^ft4J^ifft (yilK«s «4)mel i^iMd MflM4an|o.a9iiffei«tta
ya el pais muchas cadefti^ iy.ligu()i%PÍ>WtiiPft>eaje|^cb küiliwip-
cion , para mejor inteligencia, desde la Sierra-Nevada de Marida ,
cuyos picos cubiertos j(!|d.J^y^.^^Dy se elevan de 5.466 á
5.479 varas sobre el nivel del Océano. Esta sierra , la mas alta de
;>^a iimf>Mlíi»lMkDe9^m4i9i4^ ébil^^ttifxaa«>Aidfr*
-.44^1^9 9afíB%:Plflli}M^i)fi»aJi Sv^Q\ It^miPkt^ieiékjémiimMh'
.mmA^:1Í¡^^ WW a%»i|i1 Jrtrtüraity^Ni Anl^nip átínfá Uiámm-
.,*sf4^miúm^^Ahm4inmík x^á^ mkmi .^anUa lia *i
Doh'Pédró, irica¿aá; Culata'^ YégálUá/ifigárá^ fiinofCaóaaguá f '
Molino , salen Varios ramales , cálsi paralelos eütre sí, y tambied
exi' dirécdoñ al S. 0^ formando los talles hérmosÁós^- sanos ^ pin*^
tóbeseos de Airlcagaa; Mncnpati, Mucachachi/ Gapnri, Gnaracbe f
Fhegófíerd y'^téndose ál misino tiempo el ramo masséténtrioñiit'
al parama déí PortacfaéeKi. Este páramo ^vMé tos vafíéí de l¿
Grita y Bailadores y se une á óim cadena de cefrosi, 'qn'e corriendo
también ál S/O', encierra e^tos valles y los de Tádhá , Lóbatera y
S. Cristóbal ^ perdiéndose sns'fsildas en las espejas ^lyas^ desiertas
que se estiéiidén basta él lago dé Maracaibo.' E^ úitíínó ramal
que es el mas sefontrionaY de todas > y que «n su medianía da paso
al rio Chama poruña 'abra m«i estreclNty se dirige al N¿ de Mérídai
En él se alzan los páramos CnoliUlá; 'Conejos/ $alftdo, Culata y Paii
d« AKÚcar, devéfldose'algtfn^ á masdtf^tr.OíOO varas. En esté ptinto
se le ane ia cadeiW trasversal qtie sale dé la Sierra de Herida en
dirección al N. £; fen día se bailan los páramos Alto del Frailé^
Santo Domingo, ylfttcbclifes, que unidos á los otros ya descritos^
encierran los deliciosos valles de Macumbá, Mucnjtin, la mesa de
Mérida ; lás campiñas del Ej/láor'y de 'la Mesa^ Laganilla , S. Juan ,
Cbignárá^ Jajf, y el del Ghamá ; írio qoe éorre por una gran profun-
didad y con una rapidez estraor^n^a^ pasando por la abra que i
le da entrada á la hoya de Maracaibo.
De esta cordillera de páramos , comprendida entre la Sierra-
Nevada y Pan de Azúcar, salen cuatro ramales bada el N. E ; el
mais meridional sirve dé barrera á las llanuras dé Barínas, y va i '
unirse al páramo del Volcan , en la provnieía de Tmjfiló , encer-
rando Wvdles elevados y fríos de' Santx) DOmingOV lá Píédray
Pneblo^NuevOi Otro que corre paralelo y s^uné ai páramo dé Tu-
ñame , encierM el valle de Timotes ; y otro también paraleló que
va al páramo de la Sal , rodea en parte el valle feraz de Mendoza
en la provincia de Tmjiflo , á la vez que sus faldas^ setentríonales
descienden ^ la espéka selva que va hasta GibraKary sobre el lago
de Maracaibo.
RÍOS.
M • \ _
' •• • • • . • í • * * ' ' • • * . ' : / 1
Del país «nontaüeso de Marida, que es la partedfAia de Veilé- ^
zuela, nacen 75 rios, 55 denlos cuales se dirigen á la hoya del Orí- *
ñoco, atravesando las hermosas Ilaníinas ite Barlnas* Tr^ de estos ;
ii»f80»bt9.«Q taii(i(ivJNpM^U<««mlMk 0% igual ^m m^iiUth
d^ de,b Mmoteaii>^4ft I« Gril«i»i t\ «mi iteiiftl4if«iM4t^«i^
cunda tí«ii«,t4^|i«.á<4 jMAi^^Mip»^ nor^ pwUe iMtorlir |M!l«
U)is.d«aiia^4rí(íi»,i^ar$€ii^9ffi^^ ¿tur. HiMvaarde BKBtuft4
dfi 2M 4a/9l^d^ó mÁiMioi^^
p<)rit(4^Pi9r^49fgíMAe$«}tM^ .
LagmiiVa ^ MWNHdA füihlftaatPteafe iiti[e« #Uitíiii» SMOfi de
tic^i^, sq^tiMia'iqíiii mmif^^ ^m caohawta dk» aoNt fiarticvlar,
samjltttf 4i qja» sUrMTUMMt ^'Saana^ m ÁAitea. : en el^iitf ^fttf»
eafíM«tef4^«i9iktd^)^iM«M«ftv.9^l^ mMudMái ittnif
suiganllb S« ^^iiii«toa)€»4i^ag¥NM é ^W im^^ sibMiit «reí del
m^^ tí^m >I44M T^(mde|lai^:,.3^élr4iucho:y d^S ¿« pías de
peeluMUikNl, V«af Br(^d#)#Ua:«a(é sac^i^otmlleia. deijDiieoa y
eiiaalea y 8oto^U99t!tafQini iiasle ;tíe da. ésta se.
estrae el urao y también se sacaría de las otras si estavÚNttft d«qie^ '
jadas y con agaa.
Es fácil limpiarla y mas fácil aun^nservarle el agua, elevando
un dique para contener las pluviales é impidiendo que los indios
se avvav ^ ^ItelpaiaiMgir a«9MraÉM;/Ihtot!Mi|WiKta «pVcadli
al..AM)u»^serfM2i- iiim> dilhaiMÉi«lr)a««ir.4ua^^^ noc ta
para la wumr^mmM JüimnáiL
DBm lA ililllKiiwiir'""-*' "^ miin««>l . .
gp» á kídinwi, ¿¿4790 Y,ara9^..E? j>eqji^jaia.peiio taír grofuada qua
no.scLfepedií íí^UÍeíWj ¿^ elí^. sáié i;n arrOYQ ,^. origen, doIriQ Santo
BaritoffP^QL facilitar 4 tc^;rM d^, sq^ friitp^ sil Afiure y; al OjcW
noca. * .
AljiédiB ldiSeKra^%^(!$i:c^.a0l caminaré va d^ Jaj[i á S: Pa-»
ÁrO|,eotr€iÍoj$.ijÍ[>9JSi^^ <;a(i^az^ halunala^na form^a por Imi
agpsde dos qp^rad{,&9, j^ce[r:<ia4^1 rjo Mu^u^f^e,. en la^,se.lVas que
se estiendei) l^ícja. el l2^$)i^ baloíras dos, que Ü^sf^ d^gaframacle-
i^^foima^aspoif los ijemxpa^ de aquel rio!: c^dafUi^a ti<^ne cf^rc^
deunajegu^ ' . .
CLIMA.
£1 clima dé lá provincia yaríá según Tas áUurás dé los lugares y
ja esgosiotoi: d^ qllos, al H,. ó sd S, ^e, la ^exranji^ 6^,^n , su cf^ntco ,
loqu)e fiac^ variar los^gi^dps ie i^r,,^un cuapp/^llp!^ la^misipa
ele-vatíQU soJaj;e el nivel dd.waic; s|A^^bar:gp,.5e (jubile decií que
eu general goza la ^oy'mci^i^ Héfiá^ de tejpppraníento^ jnas bien
fresco^^tei9plad(^,o. frios^-qjjü^caU4f>^^£st^^, v^ sei^^u^traioi
en las.selvafi im&ft^ii maúj9inaft.^d opijiqaalds,ininedi$iicio^ ¿4
lago de Mar^^fiaiba; e;Q,Jaiqfia saJljmftO:4Á.S/3i|i qwílo,.y, sobre
el Uribanle. Las demas^^jartqa SQixJodaft.^aJW j;;.ea m. sojc^ dia se
puede pasar del frío mas intenso á un calor moderado, y siempre en
lugares salubres bellos y pintorescos.
. . . • . •
Ea ^ti |)£p«in«fiei»(ue3ian.. las llJujia&eii:«ljQi^<^de.mar«0; ydur
rau ba3(a.ud^f^ji^utu*erei^«^ ^ípdp tes.apa(&ib¿jan4.ea torjeenites
aojare, todo,, CU). j|uai<uT..Agpsltaf £n los^dema^ m^se? ^^aJt^M^^idia fr.e-
(ífmA9^ li^^m i W^9^ nM»os^.coBÍosas. Qm ú^vf^x^ Mmm en
l^s7l^iiH^Q^bai'QB^eU«s>«M.c»^ q};a saie.de los,
gf^di^ b(«iiWfi^ qi^^i^s^ fAl4a8 df^ ^.9^^'£^.| y ^. los.
Yíei^o^rf^ewir.eii jEf)Sp^4#>0£i|)e^ d^>
uM»^%%ÍMNye«te»fQi(!41a^c^^ elvSpl^.f^noii^naift 4 l«^A(ars^,.
S^ 0li^MfY%.9$l«;^<áll4í|^^(iÍ^R^
c a los terrenos bajos, no se ve etííÁs^f^ ^,m^Ñm^f^^^%^%
~496 —
» I
¿abre todo el pais. Los eaminos de los paramos son , sin embargo ,
buenos á cansa de la rapidez óon qué desciend^i las agnas y de la
desnudez de los cerros; pero en la parte en donde hai selvas, aun
cuando puede transitarse por los caminos, suelen, estos tener pasos
difíciles; así son los que de los valles del Chama pasan á Barínas ó
al lago de Maracaibo, y los de las laderas del mismo Chama. "Estos
últimos son peligrosos por la estrechez de la senda,, los derrumba-
deros y el gran precipicio en cuyo fondo corren impetuosamente
las aguas de aquel rio. Este en una distancia de 4$ leguas (desde el
páramo de donde sale, elevado 5060 varas) , hasta la hacienda de
Estanques en donde tuerce hacia el N. para durigirse al lago de
Maracaibo, tiene una diferencia de 4548 varas de nivel, que está en
razón de 254 varas por cada legua de distancia directa.
DIVISIOM TERRlTORIAXi T PAODüCaONBS.
Se divide esta jiífovincia en 8 Cantones que son, Herida, Mucu-
chiés, Egido, Bailadores Grita, Lobatera, S. Cristóbal y S. Antonio,
que tienen 56 parroquias y 60 Vecindarios^ en los cuales se cultiva
cebada , trigo, arroz, maiz, tabaco, café, cacaoj algodón, añil, ca-
na, plátanos , yuca, papas , apios, alverjas, garbanzos y toda clase
de menestrias y frutas. La población se puede dividir del modd si-
guiente : 55/^00 se dedican á la agricultura, 40/400 á la cría, y
55/1 00 al comercio, manufacturas, artes, etc.
GOUERaO.
El comercio principal se hace con lléra«libo , de donde se recibe
toda clase de mercancías secas , licores y sal, dando esta provincia
en cambio sus producciones, que se embarcan por el rio Escalante
ó el de la Grita, ó bien se llevan por tierra por el camino de Escn*
que. El comercio con la provincia de Barínas, se hace con su capital
y con Pedraza, llevando de Méridá harina, papas, menestras, azúcar
y manubcturas del pais , y retomando de aquellas cacao, arroz y
ganado. A la provincia de Apure se lleva harina, aguardiente, sal,
ajos, papas, cebollas y alverjas, estrayendd de ella ganado, que cam*
bian en los valles dé Cüéuta por mercancías aecas, caldos t^^ >
efectos que se introdüííéá también por los lláúos mas meridionales
de las provincias de Barínas y Apure. ^^
^7 —
CIUDADES T VILtAS.
CmtON DE lláRIDA.
La ciudad de Herida, capital de la proYiocia de su nombre, fué
fondada en -1558 por Juan Rodríguez Suárez, bajo el nombre de
•Santiago de los GaballeroSé Bodriguez era natural de Mérida en la
proTincia de Estremadura, y siendo vecino de Pamplona, en la
Nueva Granada, fué encargado de la esploracion de la Sierra Nevada
y de la conquista, de los indios Timotes. Mérida se halla en la lati-
tud de 8^ ^0' N. y en lajlongitud 8^ 58' 20'^ al O., del meridiano
. de Caracas, en una hermosa mesa elevada '1 97^ varas sobre el ni-
vel del mar. Dos rios , Mucujun y Alvaregas, recorren casi de N. á
S. el pié de la mesa y van á caer á un t^cero (el impetuoso Cha-
ma) que pasa a] estremo de ella /de E. á O. La mesa queda de este
. modo rodeada por tres ríos y solo hacia el N. está unida á una alta
serranía de la cual es un declive. Esta hermosa ^ planicie tiene
5 leguas de largo y de ancho 5/4 de l^ua. Forma un declive mui
.pronunciado hacia el S. y. otro suave al S. O. y sus barrancas son
xnui elevadas y pendientes. Desde esta mesa se goza de la hermosa
vista de la Sierra Nevada que queda al S., elevada 5479 varas so-
bre el nivel del mar y 5,508 sobre el suelo de la ciudad. Los pi-
cos de esta sierra, coronados de eterna nieve, las grandes masas de
(granito que salen^de sus flancos cortadas perpendicularmente y la
gigantesca n[iol« que forma esta majestuosa sierra^ le dan un aspecto
. imponente. Sus blancas cimas á vezes cubiertas de nubes,- á vezes
relucientes con los rayos del sol ó envuelti^ en niebla que los hace
. aparecer y desaparecer en pocos instantes^ todo concurre á dar á la
siei^ra un carácter bello y sorprend^iiie.
Por todas partes se miran cerros mui eMo^ que se (úerden en le-
jana perspectiva^ y solo dejan ver la abertura principal por donde
i^orre el Chama. Los ricos valles del Egido, las vegas del Chama, el
país pinloresco de Bailadores, los fértiles campof de la Grita, los
sitios poblados q]qe recorre el Tórbes; todo queda cubierto por los
altos páramos, en medio de los cuales hai valles h^fposisimos y
parajes que convidan á residif en. ellos. Ai Jadp opuesto hacia el
,napjeate no se pu^de^ ver las b.9JiIas.c^pin9s que. e$.^ cerca del
P. 6B06. S^
Chama , ni los pueblos situados mas allá del páramo de Santo Do-
mingo, y menos auB'MlBkél IV. lat atlas «cimas que cnbren las
inmensas selvas que se pierden sobre el gran lago de Maracaibo.
Mérida faé erigida en proyincia en ^ 8^ ^ . Habiéndose declarado
en favor de la independemáa, <sq|MiriBijwc )de Maracaibo á que per-
tenecía : tiene en un cerro cerca de ella una laguneta que se llama
él monte út las ^ores, por \m itiucÉiis^e ^producen kisirbéJes y
llantas qtie la pueblan : posee tdtt^íea aguas minerales «alientes y
tiú^a fieffa amarina que Vfe nn eelor negro ^€A>T«saHiHile. Iktoaéaa
tas pl^amtas tn«did&af«s y bai miicbas gomas y resinas apreoiabfes.
$5 mní curioso ret prejqfyem en un mfísmo «lek) el pÜtano, el
maiz, la c^Üa dcdce, el trigo, las psfm y la cc^da.
la thrdad de Herida sufrió tñ IMÁ el mismo terremoloque
d^estfuyó á tuenca; y m 4S12 fué aminada por d del 26 de
marzo que destruyó á Caracas ; pero tolviS á reconstruirse y ahora
está mas poVtada que itítes,
Anf iguamente baMa en eMa ciudad des "pin^idos que se t)díiA>fti
encarnizadamente, y esta desuKiíoii «ufiKi 4as famffias intuia mu>-
cbo contra ios progresos de la ftí^ám ; mas batiendo t^esado
aquel mal, tfn el día adelanta, y prospmM «us 'V«dB<» á fetvor
de h pas; y !a xrrmottía. Guaneé Herida tenga «na p^Koée tumi-
Igracion , ó que la población eredente desmonte la grandes selvas
que miran "hacia el lago de Üforacaübo, entonces sevá. esta ciu*
dad la reádencia de ticos proptetaríos , que 'faafflarin en un clima
delicioso y sano todos los placeres qtle propordofta la sociedad, los
habitantes dicen que iñ d frto ni el callar se baoen ^enfir alK en «n
grado capaz de incomodar, y <que ptieéen llet^ wAs^tarmente
vendos jle lana ó de seda ; pero no p&eiem negar que las vanaeíi»-
nes del tiempo ^n tan &ptdas y seniles, qfoe á menudo cansan en-
ftermedadcs. f emen'd oriento éfH O. 'que «nunca -sopla sin dejar algu-
nas señales de su malignidad; pate^-queesloprerviMie de qne)és
Vientos íM K. que pasan por 4a gran wé"^ ^aüñtda por til €bama ,
4esde el lago de Iforacafbo, se fntfoducen por la abra por donde
píi^a d mismo tio y dioeanéo c<Hitra la serranía de Gstánques, re^
fluyen %km'él E. ipcnrel valle áá nifemui!!hamay vfBnen Iftsla Ai-
tída, Hevaí^ en 1SU t«n(o erigimos de los m^a^mas ^que eilials» aque-
llas «*tí(8 d«lertas. Shi ^eitíWirgo ,ite tmcde aéegurtr ^e !a Kswwa
«principal de alg^áft íusigaÉficantes ^énÉie^kdeis , «stá mas blai
'«u lo variaMe^ tiel diteumpde» ^ ^tsduesfda se ieíperttneriliiB tu
tin mismo Aa fes ÍRters^s t^ímpera'taras it\tís i^tró e^t^dtme^'iie^
Europa. "Con todo, d teropcrameirto es sano y fresto, pues el termó-
metro baja hsÉídí M<^ del centígra^do.
las iltiTias son alHindaiites , y ^^ podría dedír que darán éasi
lodo el año ; pero las mas fuertes de ellas caen en la época del in-
vierno.
Mét^tda es la sedB de tm obispado, tléfne Seminario, un eolegio ,
varias eseuáas y un convento de moiíjas que liacen obras de pri-
mor. Hai una catedral y varias capíña's.
los merideños tienen ba^tahte perspicazia , profundidad en sus
ideas y aftcion á la literatura. Ninguna clase desdeña el trabajo. La
agficuHirra , las erias , las fábricas de varios géneros de algodón y
lana, que por su baratura son preferidos 1 los europeos, consíti-
tuyen sos ocupaciones prirídpailes. Entre las fábricas hai algunas
de alfombras de lana, adornadas de flores y tenidas con coloréis cié
vegetales de! país, taü vivos y pentrnnentes como los de las mejores
ffibricas de feíropa. la agricultura produce trn x^afé de ios mas es-
qufsitos, y cfu tan grande abOndancia los frutos necesarios i la vida,
que aun los tíans pobres tienen lo necesario para vivir holgada*-
meftte.
Mérida , en fil[i> por los terrenos ricos que posee, por su cliiiia
sano, por su posición casi en el centro de su provincia , en el ca-
mino que va i las demás de la república , será algún dia una de
las mas ílorecientes «Tudades del interior, ctiando la riqueza de los
particulares haya proporcionado caminos para facilitar el tránsito,
y que los grandes bosques estén cobáartos de haciendas y pobla-
ciones.
Las ptTPoqufes «de este «entoft «on : ÍMégda , Horro , Aricagua ^
P«í€ft)lo ^uevo , IfocueMolii , Mucútfii, Asequfe^ Tabai y la Punta.
la ^hi 4é ^99máiáe» es ia ^as elevaba en todo el territorio de
Voaesiiiilii. t^ú isiluaéa M ]plé de los pirainoS Santo Domingo y
Muc^hios, «etca de las <ítiXkÁ 4el Chama ^ ten una llanada que
forma el dedt^ 4Íe una aJIa seitanfíaiiiie ée une «I páramo de Pan
E6tá pobfocion ^á rodeada de cerros e1eva(!lo^ los cuates depea-
det á^las iiU^a» de pársffim que ieft«i6rrran el talle deil rio Chama,
.y 4«e «1 r^ Bépamn (as trg^ra^^ is^m i i»té rio , ie hé iqüe van i
— 500 -
la gran niontafia que termina en el lago de Maracaíbo. Al S., sepa-
ran las que se dirigen al Chama de las que se precipitan hacia las
hermosas llanuras de Barínas. Al E., se efectúa la separación de las
aguas que van en opuestas direcciones al lago de MaracaibO; con-
ducidas por el Motatan y el Chama. '
En este cantón todo es grandioso é imponente en cuanto á los
cerros, que llegan casi á la región de las nieves perpetuas, las cuales
cubren allí muchos picos ; pero todo es pequeño y triste en cuanto
á la vegetación. Arbustos, gramíneas y frailejon, es todo lo que se
ve sobre aquellas grandes moles , heladas y barridas por vientos
fríos é impetuosos. Si las cimas de aquellas soledades están incul-
tas é inhabitadas , sus flancos ó sus bases tienen campos dilatados
sembrados de trigo, papas, cebada y menestras, y en los valles que
se forman en medio de aquellas masas, hai pueblos cuyos habitado-
res gozan constantemente de un temperamento frió y sano. Los pá-
ramos de este cantón son : Mucuchies, Pan de Azúcar, Tapias, Sa-
lado, Santo Domingo, Alto de Fraile, Granate, Volcan y Tuuame ,
cuyas alturas son de 4,420 á 5,060 varas sobre el nivel del mar.
Los caminos que atraviesan estos páramos conducen á Mucuchies ,
por donde también pasa el camino principal que va á las provincias
de Trujillo, Bar^uisimeto, Carabobo, Caracas y Coro , y á los de-
mas cantones de Mérida.
Este cantón se compone de 7 parroquias, á saber : Mucuchies,
la Piedra, Timotes, Pueblo- Llano, Chachopo, Santo Domingo y
Mucurubá.
CANTÓN DEL EGIDO.
La viHa del £gido está situada en una mesa llena de quebradas
que facilitan riego á \& tierras cultivadas que se encuentran desde
el pié de Tos cerros hasta las orillas del Chama, que pasa á poco mas
de una legua de esta población. La vista es bella y pintoresca : al S.
sé ven los altos cerros que ocultan las elevadas mesas de Asequias y
iPueblo-Nuevo y se miran los picos de la Sierra Nevada que majes-
tuosa se alza sobre todo lo que la rodea. Al N. se levanta una ser-
ranía en anfiteatro, en parte cultivada, en parte denerta, á cuya
espalda los páramos de los Conejos y de la Cuchilla, cubiertos de
gramíneas, sirven de barrera á los vientos que pasan sobre la mon-
tana desierta y que acaba sobre el lago de Maraca|bo. AlE. se pre-
sentan en perspectiva los cerros que formaii.Iíi mesa dp Mérida, y
— 50Í — ^
al O. otros cubiertos de alguna yegetacion, detras dé los cuales es-
tá la famosa laguna del urao. En tbdo este territorio sé goza de di-
ferentes temperaturas, desde el calor escesivo basta los páramos
helados! La parte cálida cubierta de bosques es^enfermiza^ la tem^
piada mui útil para el cultivO; y la fría^ auuque desnuda de vege-
tales, es mui sana. Guando se desmonte la gran selva que está en
la parte setentrional de la serranía, cuyas aguas descienden al lago
de Maracaifco, y cuando Ia$ veredas que boi existen sé haúeñ con-
vertidas en vías cómodas para el comercio; el Egidó seráunptticlilo
que prosperará en agricultura y comercio, p(^ la bondad de su eli^
ma y de sus aguas, su inmediación á la ca{>itai y su situación éa
el camino que va al lago.
Este cantón consta de 6: parroquias, queson, Egido> San Juan,
Lagunilla, Ghiguará, la Mesa y Jají.
CANTÓN DS BAILADORES.
f
• . f ■■ '
La villa de Bailadores está situada en una de las bellas posicio-*
nes de la provincia de Mérida.
Se puede decir que está casi al principio del valle bañado por el
Mucotuyes y que por su attura lo domina eq toda su estension. Dos
grandes hueras de cerros cubiertos de pajasi^ven de barrera al an-
cho valle que se ve sembrado de haciendas y plantaciones. Estas
hileras impiden que se vean los valles elevados de Guaraquey Pre«
genero, de la parte del S., y de la del N» los que bañan el Esca*
lante y otros ríos. Al E; un. páramo cubierto de fraitejon separa el
valle profundo déla Grita, y las nubes que ccmstftntecaeiile reedr*»
ren aquellas cumbres, dan al cielo un a^cto sombrío y tristCi
mientras á la parte opuesta un sol deslumbrante ilumina el valle
en toda su estension , y los cerros, perdiéndose en un horizonte
claro, apenas se ven de un color azul que se confunde con el del
cielo. El temperamento de Bailadores es sano ; posee este cantón
terrenos cálidos mui productivos en que se da tabaco escelente, ca-
cao, caña y plátano, y otros fríos en que abundan el trigo, la ceba-
da y las papas. Por un puerto que hai en el rio Esi^ante se fad*
lita el trasporte de las produciones de este cantón al lago dé Ma-
racaibo, y cuando sus malos caminos estén compuestos y sus gran-
des selvas desmontadas, vendrá á ser el distrito de Bailadores una
de aquellos en que se construirán suntuosas ciudades de ricos pro«
pieUrios qpe goiario en mx dioui fresca j saqo de toda^ las (xh
nifdidade» de la tid«»
JLas parroq¡aía& s^n^ Baüadore» C ^e^a del cftnUm,), «tro fiair
l%toes, y GiMirmpe».
LaciiiAidd# te^ GsiUeetá soWe «oa pe^feit; «ms» iMUmidií ^
f^p^ri» por la tese 4» w eerv»^ el eoal diviée dea rm fie f9>
uoea al pié de )a ibíínd^c etndadr Eala q^edfi c«n0 e» «na caía-
fffleada de aerraüia») ^e d^ a) piía vn we teiile f seeal^ríir
á primera \ista ; pero examinando la variedad de la.perfp^etiva^.
lo»4fl|raBOS cnUifadea^iiese ye»i^0»OypeQdie«t«ade'lo»eervi»6yó
bien en ias vegas de los ríos lo$ varioi gmpds de. wtéon.^gm ao^
bresalen en medio de las gramíneas, las diversas formas de las cum-
bres y los tres valles p<»r donde eoi^» Ion rios Venegará, Valle y
<xrita, se obtiene un cuadro de aspecto variado y particular. Esta
•ciudad, eati U^ÜMtk llamada^ ¿ se» una de fcta que prosperarán
cuando sus selvas que miran hacia el. lago é^ MaiiMaibo y 1o»IIík.
m» 4f iNilteiS)) mHük detfQfofitadfiH; dos eenduotot úmá- tómodos
tandrán »b» taibítaoiofl para dar Imj^so & sa ^o«ll»ray oaiomr'
mi : por ma parto el rio dúfá f pot d etol se puado k batíAiíA
lagp de Maim»ifad)j y pot otfti el UriUboiite.^ que puotk eotoducir
kftiHt el ^iooeei^ fca Grita: oott Jbwanpg «anmos ^mat k ílmymet^
too do laa (HMtaoo y Teieo ^ datia 4 tus babtoile» facüidad para.
tüt^portaf loa pDedoéoaoa do lo», iersooos bol víii^eo f yonoaoi.
< ÍMipoiiSf«ioato%Ift'€Má^Srogii9ewy i. J^^
<
' la villa d^. Lobatara está spinada sobro uoa loosita i la orilla 4eb
^ I>ebalor#, en «n Uteronoq^obrado^ qpe lo praporcsoaa} «n om^
bargp^ cabello pon^pocitrai Al S. doesjlapobkm^ii.bai oiia eolÍM
m qo^ la segara dctlvojia do Tórhos y otra al M« 900 la dilúdedo
lin. HaiHiras q^ se pierden sobro ol.rip do4a Crtta ;. 4 B*t Mioiaa
liU diia. sorrap^ qiio so ono al páraioodeí J^rta^bii4^ y a) O4 vm
bBfíiía do aerros.qQo iorpido la.viita de la&npf» y{bo«Eii€ooa.fidtol
^ CÚ€«lta« M, poiÍQÍQ«b do oHa* villa cerca del puerto de Jasí^CiiiasiM
^al> calino qnj»^ va i S. Cria^ba)^, qo loui l^jos da Cfí^ai h
— 505 —
hace nn, punto de esaalá para el íp(Hiiercia, bi^n sea para fas pro-
ducciones que vienen del interior , ó bien para las qqe se estra!-'
pn de Maraetibo. £1 temperamento es fresco y sano, con tierral
p>|iiii piit loi ffotí do i»ÍM< oáUdoo y tttptoto» y pw» k^w»
4& ganado taonDo,, cal^a^y q^r^as^.
IxrtMlQIfti^ Goiiatit«ei^n y San Jugo son laij^ro^uias de este
■
Bstá^$i£fiada k vitlá 4e S. Cristóbal sobre una colina llana, por
cuyo pié corre el río TOjrbes^ gomándose ^ d^ un cTln^a sano atm^
qpe eíilidcN Ea u^o^ioi pnablo» «ifl(Qeptíb|es mas prontamente de
progresos, por su ventajosa posipon en la fntrada de Üos Llanos y
ceroa^e les Yalle»ii6 Giicute. Su»tíem» $on a<áefl«a|a&al ettlfii^
YO de laa producciones de paisea cálidos y templados ^ y á la cria
de gpnados ; la flicflidádide coinerdar con los llanos, cotí STáfa-
caibf) y Pamplona» aon^drcimptakicias que llamaai-eate pueblo ¿ser
uno* de los mas iioiportanles de U provincia 'de Mértda. Al N. tiene
el diatrito <fe'T^b^) e^bk^rto de |ilairtaiDÍQ|}«a ; al S. se dUat» ol
Talle del Tórbes sobre la montaba pestífera de S. Gantilo, riquM*
ma en producciones naturales ; el E. una 4Ca sét'ráñía ctfbiéMa d^
robusta Y^gef^cioii, baqe na con traste, con tinque esti al O., solo
tapitada de gramíneas. lias crias) el comercio y la agilcultura son
306 Ba¿vii0s que tiaseesté entoit pva/soí a^kuOos f otucos..
las parroquias son, S^ Grístóttal, Táriba,| Guásimo yfGapacbo.
CANTÓN DE SAN ANTONIO.
I;b yila de S. Antonio está situada al pié de un cerro, sobre una
Uanada ettoea dri m Tácbi^a qjae sirve de frontera con la Naeva
Granada. Al otro lado de este rio están los ricos valles de Gúcuta.
El pueblo de S. Antonio está llamado á ser un punto de gran co-
mercio con la nación granadina, cuando alli se establezcan capita-
listas de Maracaibo con sus almacenes. Por alli deben pasar los ga-
nados que vienen del llano para el QODsumo de las poblaciones de
la [urovincia de Pamplona, y alli también pueden reunirse ios ne-
gociantes que especulan con los producU» de una y otra provincia.
£1 clima de este cantón es sano aunque cálido.
No bai mas parroquia que la misma cabezera del cant<m«
TABLA COMPARATIVA de la posición astronómica de las cabezeras df
sus tierraS) terrenos baldíos, población absoluta, relativa, hombres de armas,
qiie se cultivan para la esportacion.
mmatams
11. F un
ismaemmmitmmémaaímsi^
aMrictBBMBfiBaat!
NOMBRE
de
LAS CABBZBRAS
DE qANTON.
Herida.
VaciMkíéf
POSICIÓN ASTKOHÓMICA.
Latitud
norte.
Egido
I
Bailadores
GriU
8«oCri8i(^bal......
lK>baiera * • •
Saa Antonio
So. w.
8. ao.
8. 10.
7. 57. 25.
Longitud
al O.
del meridiano
de Caricas.
7.
49. 40.
7.
3^.
7.
42. 20.
7.
8S. 25.
?•. 58'. 20"
5. ái. SS
4.05. O
4. 43. 40
4. 54. 40
5t i9- SO
5. 17. 40
5. 85. SO
Altura
sobre
el nivd
del mar
en Tiras.
Tempe-'l GAtlDAD DB LOff TBBlOHOff
rttara
«
i971
2983
1441
2091
1194
1093
1560
980
media
del ter-
mómetro
cent¿-
l^rado.
17*. 92.
DB ^^B 8K COMPONEN LO»
CitNtÓÑES BN L. C.
o
a
o
C
S
B
m
h
•>«
6
15. .97. 3
11. 67.
18. 49.
i8. 72.
21. 39»
20. 95.
22. 24
Total.
37.
79
98
10
6
35
I
E .
415
»
4
II
4
1
9i »
59
50^
160
7$
8
244
89
557
I I ii^«««>"
Niiirl h
»
»
))
16 »
Q
á *
oJ|
X»
»
6
456
423
86
139
8
277
»
99
»
14
1
»
S
47
907
cantón , su altura sobre el nifel del mar, su temperatura media, calidad de
esclavos 9 distancia á la capital de la pravincia y de la república, y los frutos
Número
d« 1. c.
se cr«en
baldías.
36
34
46
75
100
90
I
S
SOS
POBLAaOH- DE LOS CARTONES»
Total '
déla
población
en i8S0.
Población
rdatÍTa
por legna
cnaUrada.
13.0»
5.680
10.010
^6.705
9.8U
10.797
5.7:J9
3.90O
_.
68.416
Hombres
ütiles
• «
para
laa armas*
77
«6
217
48
S5
lio
173
68,4
9sa
400:
800
800
700
800,
S50
30Q
Kómero
total
de
cíoUtm.
^P«B
aasm
4.700
■kJi
26
88
4tO
197
75
698
DISTÁlidUS
SI IiOS CAVTOITBS.
A la capital
deUr-
péoriacia.
6 V*
«^6
80 Vé
» V*
30 Vt
A la capital
déla
repnbltea
FRUTOS
<tVS Sa CDURTAV
para
LA. ESPORTAUOH.
•
firmimmmmm
w v«
434 Vi
ím V«
«o Vé
u ^k
m V6
169 V«
176 V*
Cacao, caña y café.
Gtfta, eaeao 7 café.
Café, caña y oMaa
Gafé,cañaycaeto.
GafiU, afttl, café, cacao
y algodón.
Caña, añíL café, cacao
y algodón.
Gaña, añil^ eaf¿, cacao
y algodón.
smaBsaatt
iai«
— S06 —
TABLA BS LA ALTURA DK LOS' CUBOS DB LA PBOTmCIA.
Mrtfli. tu
Notá^res^ Yarat, Serraniat.
A^nat •••••••••#• ^o80* • «^ • •> «j* wL
4IMHHÍQB»* •«■•.•• • Bfo4M»««^« •«•• IcL
IPoiiachuelo....^., ■|Nfl i M»
HollM«.««i*...^. 8,790.. .« kf.
Caoaguá •• fl^09¿.. «...•• M.
■igñé ^. 4,M0 ^•. M.
Taño. M 4»ooo...« id.
Culata Vegallla... ^^-MOi.*..,.^.*, 14
Aricagat 4,090 id.
^^VIK r^^^^Vk ••••«• fly^WW •»•.•••• Hm
Teladero 8,810...» id.
BMUBárbii»^... 3^,819;,. «....,, tíL
Bocambooo . . . .^ . 4,190 id.
Apure 4j5i0. .,^. id.
Siem Nefada en so -
pafo 8^110.. .« id.
Pie«ek»del*Btor-
nNenda 8»ie6 id.
Nomhres. Yaras. Serranías»
ro de ti Sierra
NeTads: — «^•;i,m«*, «iJMrid
Alto del Fraile... 4,900 id.
míBio •..^4,atO,.»..^,.. W^
Vteadko de Stnfo
BmbIo$o. 4,M <i.
Grauíe 4;ri». id:
Picacho de If nen-
cMto.it 9|099I........ id.
PandeA|[úcar.... 4,9S0 id.
CNMa.. ^.. ••««•. 4^800Sk«. ....*. idk
Salado... 9^000 id.
Conejof •....^... \WU^ i^»
Gaehilla 4700 id.
Taplaa \9¡0 id.
LaSal 3,9M. m
TABLA DB LOS tlOS DB 4t ÓBDBM DB LA PBOTIHGIA.
Nombres. Serranias. Desagita
<fc>int> >*..>* de Heridlo. la|[9d»M|u
racaibo.
Vaei^lHii... •»..... id..«> id.
AWaregas*. id Id.
Nueslra Sefiora....
Gapiirf
KIo-lfegru........
9. aiif^el .........
Ilucuchich(. . . . .
Giacaolá «...
Canagui
Kucombofllo
AU|uiii6. • • «^ • • • «4 •
Aricagua
Mocupatf
Dorado
IfaTay
Pescuruj
Capai
Perdido.
Goacf
Frió
Cimomó
Mocnepe
laandeloaBioi...
Negro
■A* .••••■•.. • Kl.
» . . . «*,• . MI.
id.....
id Orinoco.
id id.
.a. • . . .^ i . . . . to.
id id.
MI ....^. ..... 10*
id. ..•••ft.... id.
id.
id.
id.
id.
id,
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id.
id.
id.
id.
id.
id.
id.
id.
id.
id.
id.
id.
id.
id.
id.
...... id.
lago de M a-
racaibo.
id.
Nombres. Serranias. OesaffBe.
Gopnrl deMériilfe.. lagod9*|fa^-
ncaibo.
Gnaraqno «.... id..^^ y,.
Fuga id id,
S. Antonio id « id.
Bibo id.
SamparolB id.
Cboruli id.
Orinoco.
,. id.
'»»»•«« % rw
«• Mh»«»»
id.
id
id.
id.
id.
id.
Bi9>6raD|le*Av.4... id,^.
Bíadaog^ id...
Valle.... id...
Agoadía ..••«..*,.. id...
Venegará. id...
Angaravecha id...
Salamoniito id...
S. Sebastian id...
Guaramilo id...
Lobateríta id...
Lobatera id...
Mocoiies id...
OnU id...
Culebrilla id...
Tegüines id...
Guaniries id...
Tirap«Jé id...
Gaqaitire id...
>*•
qicaibo.
id.
id.
id.
id.
id.
id.
id.
id.
id.
id.
id.
id.
id.
id.
id.
id.
id.
Nombres. Serranias, Desagüe,
Umaquena. . . de Herida. .a llgp de ]||a-
Guarumitas........ id id,
PaTtai id id.-
Morototo id id.
BoeoDó . . . «.^^««^ f •!%■ Id*. %r* «M»»^^ id..
Carire...: id.......... m;
Tarbes id Oiiaoeo.
Nombres. Serrantas. Desagüe.
tbipamarí.^ ^ . 4p Kérida Orlnooo,
Frle^. ............. id id.
Táehira id lagodeHa-
racaibo.
M^pá id id.
Tor(yiidai'»*#^AM..i. ld••«^Mk•....^ id.
Páujr. %d:. id.
Agujlaa id iid.
sSs-
PROyiNCiA BEJBARiNÁS.
SITUACIÓN ASTRONÓMICA, ÍSTENSION T POBI ACIÓN.
« • • • •
Esla provincia se eacaentra entre 6^ 46^ y- 9<* %V de- latitud bo^*
real y ea la longitud de O*» 56' 50^' á 4« SO' 50'' al O. del meri-
diano de Caracas. Su figura se puede considerar como un trape-
zoide curvilíneo. Su lado superior que es el mas largo lo forma la
cadena de los Andes, el inferior, mas corto ^^ lo traza el célebre
Apure, el lateral, mas pequeño, lo determina eí rio Uribante, al pa-
so que el opuesto, mucho mas grande, lo figuran los ríos Gojédes y
Portuguesa ; demarcación que seria exacta, ano ser por el ángulo
entrante que forma la raya para escluir de esta provincia la parro-
quia del Baúl. La mayor parte de este territorio lo componen her-
mosas sabanas bañadas por ríos cuyas márgenes son susceptibles
de cultivo. Cuestas escarpadas con declives suaves, proporcionan á
los habitantes lugares frescos en que prosperan las plantas que ne-
cesitan de un clima templado. Valles hermosos se encuentran en
los flancos de la serranía, y bosques vírgenes cubren grandes espa-
cios sobre los cerros y al pié de ellos. Mas arriba de la región tem-
plada hai parajes frios que terminan en paramos yermos pertene-
cientes á las provincias de Mérida y Trujillo.
£1 ancho mayor de esta provincia es de 44 leguas de N. á S.,
desde las cabezeras del río Abro hasta Nutrias, y el largo de E. á
O. de 86> desde la boca de la Portuguesa hasta la del Burgua en el
Uribante. Sus leguas cuadradas son -1.994, délas cuales se calculan
4.005 baldías. La población es de 409.497, y sus habitantes están
en moa de 54,9 por cada legua cuadrada.
LÍUIJES T G0NFINB8.
Confína esta provincia con otras seis que son : Mérída, TrujillOi
Barquisimeto , Carabobo , Caracas y Apure. Las f rpnteras de cada
una se encuentran ya descritas en su respectiva provincia, menos
en la última que detallaremos. En la boca del rio Burgua que está
sobre el Uribante, empieza el límite, y este último río sirve de raya
divisoria hasta su desagüe en el Sararé. De la unión de estos dos
— 8*9 —
I
ríoB se forma el Apure; el cual divide las dos proyiacias; hasta qne
se encuentra con la Portuguesa donde teraúaa la provincia de
Apure.
MOKTAfÍAS.
lina parte del declive oriental de la cordillera de los Andes que
forman en este país las montañas de Mérida y Tnijillo y y otra de
las de Barquisimeto^ son los únicos cerros que hai en esta provin-
cia. La cadena corre en dirección del N. E« y la cumbre del páramo
de Don Pedro, cuya altura es de 5.900 Taras , es uno de los. pun-
tos que llegan á la región fria de los paramos. Los declives de los
de BocambocO; Apure, Sanio Domingo, Granate, Caldera, Niquitao
y Rosarios, que miran hacia los llanos, son las tierras de mayor al-
tura que hai en este territorio y el punto mas elevado es el de Gra-
nate , de 4.7^5 varas. Del páramo de los Rosarios sale un ramal
que se dirige hacia la abra de Barquisimeto, disminuyendo su altu-
ra hasta casi perderse cerca de Sarare.
. RUIS.
Todos los rios de esta provincia desaguan en el Orinoco por me-
dio del Apure. Son 48 , que se forman en las provincias de Mérida,
Trujülo y Barquisimeto ; 59 que nacen en su territorio y lo riegan
y fertilizan desde su. origen hasta su fin. Bai 8 ríos de 2** orden ,
5 de 5ff y 57 del 4®. El principal de todos y el mas grande de esta
provincia , es la Portuguesa , que se origina en la serranía de Pañr-
quisixneto, Heva.Bdo el curso de N. á S., y al entrar en las llanuras,
tuerce al .E« y se pone, paralelo al Apure , uejando entre él y este ,
los ríos -Boconó y Guanaro, que son también de 2^ orden y nacen
eA las pco^vindas de Trujillo y Barqufsimeto. La Portuguesa tiene
66. leguas de navegaebm, Boconó 53 y Guanaro 50, atravesando las
sabaÉas y á .vezet cambiaado de nomtee y tomando disthtas direie-
cionesi £1 üiibante y el Caparro, son ríos*de ^ orden que se for-
jQsaa por el eoicmno de otros muchos en la provincia de Mérida :
al entrar en esle territorio scm yan^vegal^les, y proporciónfan cada
bno 4 4 lega» de navegadon. £1 Suiipá y>el Santo Domingo son áe
igfml árdcA ; aquel se osU^ en la provinda y este en lá de
Mérida. El uno tiene 54 leguas de navegaoioa y rt otro i^; el pri-
ittfeA) éoslea unai "ftíM Ht%en, Áe la qne Mi ¿gtm Üa et canal na*
HMl tmra^pGirCHristts fhrodncdofies, ndéntiraft qoe él segando sirve
de puerto á la ciudad de Barínas , atento qne las embarcacbmes
llegan hasta Toruno, distante poco mas de 4 iegaas de aquella ca-
pital. Los ríos de S"" orden j» «1 iM|Mirro, Pagüei y Canagaá, to-
dos nayegables de 29 á 50 leguas , y nacen en el territorio, menos
^'Mm» ^ «eiema^ii «l^k MArída, slrtltfndo de canal á los
IuJMm^s ée PisArafea, pam tmsportttr im^escdeste cacao. A^mas
4a loa ST tías de 4* Man , -ifiéAe esta pre¥in<»a toas de^CfO que-
4mdas é riaiAMMlosqte serian tn los talles de !lragua otros tantos
tioa.
lAGOS T XAOÜNAS.
fia ios primeros ninguBO tiane la provincia. TMas lagunas pe-
tpMias se farniao «a «us llaanvas, y de ellas unas se secan, otras
^eoMarvaa agwi en teraoia ; peno nfaigona mer eee|»ar(icei!ar men-
ción.
iaiiKA.
Tras 4i6tíia^ üaao^séa ^cdTMraía* £1 uot irib aaa taparea dosier-
Ios, ^ ofcro tfttnylaáft en panijes f^oo iMMtirios , f el aUtno eétliflo
que comfwmit 4a f9^ «las pablada. (Sin oaibio^^ «otro las iieta-
paraiiiifas aálUktt y foa^ se «nauealgan dtoas ééUámm áatfwiw-
.tas gsadDs da aU«f% &abtítéA éodlmmmálMé delaaemdiía q«e
tema «1 ipiais JBOHtaiíosó de Il4rida| Tri|p»fMP^piÍKiiialOw Todas
estos dadives» CTcalaa^ iMisas^eia gewaafa, aüás espuertas á tos
vieiilas4tátidaa diiü fc. y M £«, qea han puado ya par atAre to-
adas las IkMiraaqie tensa ea¥aBaíoalaáa.£ona do te y
an edar -as «My^ qaBd^veaa «DaMisaMal igiBi altara >eB«l
^dealtw ¡junio «u m iáda él1a9»>d»3rsnMdba.S«a0ds jo uril-
»aatt<it>rttes»wiitssqwi#<BÉ¿a iispwatuiá)iaafieirtaa éai3L^
fr^sU aa 4a oipÉ ife ^Mama^ftan fnla dfe If amÉiúi «a aaiéea*
Jteta aiad Ér f»i«iáiaas.,.«iMenÉráad0Si[4a trsjrtnte alU y lauía
arta M ^ asfladaí y náte ^«ae «stte rialíiijÉ éiiealas ^viattÉa.
Saean» ate ^aohama, vswénetiaéaéb k3raila teawÉHAaa de
Xícapaaof 4e Mraft; feoa sasminiíila > ei^^áwps/4a wcuMrtw
desda tanga ii eaosa^la alto»
■■iifwhMtsalinMliÉ (Mfom -^Béí ««iMto ttNlMi^ if il Ik^r iQ
éiflnni4d^ttsHBntaéi, YMf«ifeiidDisahiilft, deposüa «Kí kis
Mrtwft» i»>iwfc iftiilpy; yJw «yí qtt» loon «1 e««o ^ tos ^
{^ MftMi imateto sd«»4te fioi|Mo y S. CanÉlo* MroHit
ywlg lis idea w M^sar nietos tetfHwtflmltMiila^MiiUífla ite
S^f'dlipe, ylMMBdo émfm% «düirttrti irwitbo «íéms HiftifatdM oe-
JCiilBrtato4»ii«g»«riaéteWtg«a, iMnRi«eB4íf«od«i «l^.^foo-
mnlo k wamMik ¡M íAltar, y AaNMÉbooilidftal tlano. D4(w9h4<i6
-f«rlftcinénte4eidre«^Tiie«»44f:. ypaM«er«É4elte^ «dft
KQ^bt éi«m , MNnle 4|f e «Mbn ila8*Miira8 <M -Cejédes ^«eda de^
tenido el yienlo qae Tiene de Barqnisimeto , y ittfMta «AIÍ la bu*-
ifieitNi, %a4«i» «rigen ¿ la «elfaéeltoeft^eiÉre el^^éAes y el
'Sl'dliaia<4&«lta6 séhmm wriwwdtBiítfte eaffcittiaü, ptmpqae^sdiii
*9iHMre Vr'smíaovhhmmm^ y-^ennAa* vSs^'SMvaitW'CXiMei^aB^ciei^rafflmCtaD
sdB<s«nfi,á |É6ár #aN]iiea]fW66fimt«6 4até1ltts<e^áii ^|etos á c»-
'liüfttttUKiy H' vmsa 'ñe 4os paattanus tie Iob i4ea ^pie «d^ffioniR i. t>inio^
'«^fttd, otiy«9 iiii0itMs«e ]%e^%i 1[>tísa «genera!, ^na de las taosasy
quizas la única de derlas calentaras que en ^eftermimiáas épocas
suelen afligir algunos pueblos de este territorio, es el encontrarse
ellos en la dirección de la«oontaite 4tel ¡ú» impregnado de los va-
pores producidos por la putreraccion de los vegetales, que encuen-
IHi ^ *ptm p9t las ^^agas , treme<late y fnntaoos. fin la «erranía
flai iRIlflMs WfliOa j'Tr0SO9S«
tMo^iMl «i lwri«PD»4 §3út»étm%fé y <dita Imm úykm^m , y
en junio , julio y agosto son tan copiosas las lluvias^ qae>«Q«i dfa
<m.iU9í9^9g9k4inmif&M^ré^iio^ *«n <seis. CsCa es
«fiaáa te iJwmm'pAadlpatm qob hmm «saMr 'de. «uAfe los ríos ^
los cuales se estienden por las sabanas bajas é inundan grandes
espacios. Causa es también Ja 4MtíS inundaciones, el hallarse en
esta época de tal modo crecido el Orinoco , que su velozidad unida
«é«»|HU>A ^9Qldhie&4ÑiQe ¡tfé^JA Épaife m 'pñeiftide^nnf ar todas las
— Wí —
ellas. El aamefito cdmecaúro de estts agMSy f Its erillts bajas del
ipare , impiden qne todas Tayan al Orinoco , por lo cual salen de
su canee é inundan las sabanas. Esto mismo sucede en los ríos de
harinas que caen al Apure , el cual sirriáodoles de represa , les
obliga a salir de madre. Hai entonces yarios caminos trasversales
casi intransitables , ó por lo menos , con gfandes trechos cubiertos
de agua á mas de tara de profundidad, y cerca de las alturas algu-
nos riachuelos suelen detener por un día ó mas tiempo á los tran-
seuntes. Los caminos que pasui p(tf el |»¿ de la cordillera son bue-
nos , y generalmente transitables los que condueen de un pueblo
á otro; pero hai ciertos parajes poco habitados en-^que es casi
iniposible pasar de un punió á otro ; bien es que ton pocos , y que-
dan cerca del¿ Caparro , edtre este río y el Uribaute y cerca del
Apure y la Portuguesa.
- Luego que el Orinoco emptesa á bajar , van también descargán-
dose el Apure y los rios que en éi desaguan ; las sabanas se secan ^
conservando agua solamente ciertas lagunas y esteros coya eva-
poraciott progresiva hace que muchos qued«i absolutamente secos.
Esta es la estatíon en que se encuentra mas pkga de xancudos en
las orillas de los ríes , solare todO; de los que están ménqs espuestos
á los vientos; pues solo cuando eslos soplan queda libre el aire de
tan molestos insectos,
DIVfiSIOfN TEiOllTmilAL.
• I
* '
Se divide es(a provincia en 8 ^nntonesy á saber : Baríoas, Obbpo,
Cuanare, Ospino, Araure, Pedraza, Nutrias y Guanarito; los
cuales contienen 62 parroquias y 70 sitios. En este territorio se
culiivacafé, cacao, (dgodon, maíz, caüa dulce, añil, tabaco
escelente, plátanos, yuca, ñame , ocomos, quinchoñchos , batatas,
cambures, fr^les, caráotas , arroz y gran variedad de frutas y
verduras.
£1 toíal de la poblaciofi se puede dividir de este modo : 40/100
á la agricultura, 55/400 « laería y 25/100 al comei^io, artes ele.
comcié.
Comercia esta provincia con Angostjara, Uevwi^o. café, cacao ,
eueros^r aftU^ maderade^ooostruecioni acfos^ algodón^ maiz, azú-
car , papelón , papas , garbanzos , alverjas , snela ^ yerbas medici-
nales , cebadilla , aguardiente , caernos , muías , yeguas y ganado ;
recibiendo en cambio mercancías secas , loza , jabón ^ ron , vino,
ginebra, queso, aceite, vinagre y sal. A Caracas y Puerto-Cabello,
llevan de esta provincia añil , cueros, cacao, burros, cerdos y
ganado vacuno ; recibiendo géneros y efectos de bodega. El comer-
cio con Barquisimeto se h|^ce recibiendo de aquella provincia
sucia , cordobanes , zapatos , chinchorros, hamacas, lienzos, sacos,
yerbas medicinales , cebollas, ajos , cabullas , conservas , cobijas,
efectos de talabartería, garbanzos, azúcar, papelones; dando en
cambio maíz, fríjoles, arroz, queso, pencado, chigúire dinero y
ganado. Del Tocuyo se recibe harina, algodón, frazadas, dulce,
sal , cordobanes , ajos y cebollas; devolviendo por esto, cueros y
dinero. De Boconó (de Trujillo) se recibe harina , cebadilla, carao-
las , alverjas , garbanzos, azúcar , repollos , papas y yerbas medici-
nales ; dando en cambio géneros y dinero. Se envian de Mucuchíes
á Barínas yerbas medicinales , papas , alverjas y harina ; devol-
viendo ganado , cacao y pescado. Con Marida el comercio se hace
enviando de esta papas, alverjas, garbanzos, azúcar, harina, con-
serva, pellones, zaleas, mantas y hamacas; devolviendo cacao y
ganado. En fin , con el Apure se comercia enviando á Guasdualilo^
y Acbaguas cacao, azúcar, zaleas, pellones, mantas y hamacas;
retornando en cambio ganado. A San Fernando se suele llevar lo
mismo que á Guayana , recibiendo de allí ¡guales efectos que de
los dos lugares anteriores; así es, que debe considerársele como un
punto de escala. Al resto del Apure se lleva maiz, arroz , pellones,
mantas y azúcar ; recibiendo en cambio ganado vacuno.
CIUDADES Y VILLAS.
CANTÓN DE BARINAS.
La ciudad de Barínas es la capital de la provincia de su nombre,
erigida el año de -1787; habiéndola separado del distrito de Mara-
caibo á que pertenecia. Los progresos que hizo en pocos años el
territorio de Barínas (al que entonces correspondía también la actual
P. GEOG. 33
— 5U —
provincia, dé Apuro) y la facilidad conque podia ser invadida por
los rios navegables que desembocan en el Orinoco , fué ló que in-
dv^'á delerminar la creación de esta provincia.
La ciudad de Barínas fué fundada en -1576 por Juan Andrés Va-
reía , en la cumbre de un cerro inmediato al origen del río Santo
Domingo. Llámesela al principio Altamira de Cáceres, eu honor del
gobernador t^rancisco de Cáceres : después se recdiOcó sobre una
meseta nombrada Meromy en cuyo lugar se la denominó Barínas ^
por el nombre del territorio. Más atormentados Iqs habitantes por
los insectos , cambiaron otra vez de puesto y se situaron en una
llanura , lo cual fué aprobado por el rei.
Barínas progresaba considerablemente ; pero la guerra de la
independencia ha detenido su prosperidad por muchos años. Ade-
mas de haber sido esta provincia un teatro de guerra á muerte , la
capital sufrió un sitio , y fué tomada , incendiada y saqueada por
los realistas ; así es, que ahora está levantándose de sus ruinas ; si
bien parece que va logrando rápidos adelantos. Este paiS; por su
posición geográGca , por los grandes rios navegables que lo riegan
y los terrenos adecuados al cultivo que hai eu sus orillas, puede
llegar á ser de los roas interesantes por su agricultura, crias y
comercio. Ninguna provincia de las que están en la zona pastoril
posee las ventajas que la de Baríuas. Al Ñ. íe queda una elevada
serranía, que le proporciona tierras útiles para los diversos frutos
que se quieran cultivar, desde el calor mas fuerte hasta el frió mas
intenso , y de distancia en distancia rios que corren casi paralelos
entre sí, desde la cordillera hasta el Apure, proporcionando cana-
les naturales para la esportacion de los Trulos que producen aquellas
fértiles riberas. Al N. se elevan como en anfiteatro las grandes gra-
das que conducen ¿ los nevados páramos de Santo Domingo y de
Granate. Una alta mesa cubie; ta de gramíneas se presenta primero,
y detras de ella las cuestas que se suceden unas á otras, hasta que
la elevación de las mas próximas impide ver las que les siguen y
los picos de los páramos helados y desiertos. Hacia el S. una espa-
ciosa sabana orillada por las vegas ai1)oIadas del Santo Domingo,
forma horizonte, no pudiéndose medir con ia vista su estension
que solo concluye sobre las lejanas barraocas del Apnre^ Al E.
anima la vista la serranía que se dirige al N. E. perdiéndose en los
vapores que salen de las sabanas y cuestas calentadas por los rayos
de un sol deslumbrante, mientras que al O. unos cerritos inipiden
— MS —
la perspectiva de lá misma serranía , piieslas sabanas no péi^mí-
ten ver sino cortos trechos de sus terrenos uniformes: lá rare^
facción del aire se opone á que se vean eti' toda su extensión.
Ya hemos dicho que ninguna provincia tibné las ventajad de ésta :
sus habitantes pueden ser cultivadores , criadores y comefciaiites
á la vez^ y lo que es mas particular, residiendo al mismo tiempo en
un solo lugar. Las orillad délos riós sóif táii feraces, que producen
abundanVenáente cacao ; añil, algodóíi; (abdcó, itíáfZ; plátabo y
yuca. Saliendo de las vegas, las sabanas inmediatas están' cubiertas
de frescos pastos y en ellas se crían numerosos rebarSos de ganado.
Por último, el mismo rio á cuyos bordes esté la casa de habitación^
STve de canal para llevar frutos y traer mercancías. Pocos rios de
Venezuela (ienen tanta abundancia de pezes como los de la provin-
cia de Barínas , y de esle recurso vive una gran parte de la pobla-
ción que habita en las orillas de aquellos ; así es , que casi lodos
los pueblos de este interesante lerrilírío se encuentran establecidos
en las barrancas de los rios , que son ciertamente roui caudalosos,
porque salen también de las mas elevadas sierras de Venezuela ,
cuales son las de Mérida y frujillo.
Dos grandes selvas tiene esta provincia; la de Ticoporo que se
liga por la serranía á la de S. Camilo y la de Turen que casi se
une á la del Altar, sin considerar la parte de la serranía desierta
y cubierta de selvas en una estension de mas de $0 leguas de largo.
Cuando los valles de esta serranía estén cultivados y habitados ,
cuando la gran montaña de Ticoporo , regada por muchos rios y en
la que nace silvestre el cacao> esté rozada y poblada, y la de Turen
reducida á plantaciones y haciendas, entonces será esta provincia
una de las mas ricas por sú cria^ produciiones y comercio.
Barínás posee un colegio eñ Guanafe , y tiene varías escuelas.
Sus habitantes se dedican a empresas níef cantiles y agrarias, y sus
ganados se aumentan prodigiosamente. La peste ha destruido las
bestias cabalfares y miitarés con qxíé áé cuidaban los ganados, y
los habitantes de esta proviácia han sido los primeros en saber con-
servar sus crías, con tanto aclérío, q;ie los numerosos rebaños,
en lugar de alzarse por falta dé caballos para conteñeríos, se han
amansado en términos dé dejarse conducir á los rodeos por gente
á pié.
La ciudad de Barínas es faniosá en los mercados europeos por la
calida'd de sa tabaco saperior, bien que el de Camanacoa sea pre-
ferible.
El clima de Barinas es sano, aan cuando en la estación de in-
vierno suele haber fiebres en algunos pueblos de este cantón: pa-
rece que provienen de los parajes anegados por los derrames de
los rios.
Las parroquias son : Barinas, Coroso, Pagnei, Totumal, Caroní ,
Toruno, Palma, Santa loes, Santa Lucía, San Juan, Quebrada
Seca y Barinitas.
CAKTOÜC DE OBISPO*
La villa de Obispo está situada en un llano hermoso y culiivado ,
cerca del caño de su nombre , teniendo á 2 leguas el puerto de
Caroní sobre el rio Sto. Domingo que facilita la navegación con el
Apure y el Orinoco. Casi todo este territorio se compone de llanos
espaciosos cubiertos de gramíneas , en que pacen numerosas vaca-
das. Las orillas de los rios ofrecen vegas fértiles, úiiles al cultivo
de la caüa, del añil, del algodón y del tabaco ; mientras que al de-
clive de la serranía de Trujillo, la tierra casi toda desierta, propor-
ciona parajes para café, que allí se da escelen te. Tiene esta villa
las ventajas de estar cerca de Barinas , de tener próxima la serra-
nía, y de poseer un puerto sobre un rio navegable, pudiendo de-
dicarse sus habitantes á la cria, á la agricultura y al comercio. El
clima es cálido y á vezes hai calenturas producidas por los derra-
mes de los rios ; pero no son periódicas ni generales en el terri-
torio.
Las parroquias son : Obispo, Yuca, Barrancas, Masparro,
Pueblo Nuevo, la Cruz, el Real, S. José, Sabaneta, Mijagaal,
Santa Rosa, Libertad y San Lorenzo.
CANTÓN DE GüANARE.
La ciudad do Guanare fué fondada por el capitán Juan Fer-
nández de León, en 4595, y según Oviedo en 4609, Está situoda
en una hermosa llanura al pié de una colina , en medio de dos
riachuelos, y á una legua de distancia se halla el rio de su nombre.
Es una de las ciudades que estando en la zona de los pastQs mas han
_ 5n —
prosperado en la provincia de Barínas. Las fábricas de sus casas
indican un adelanto progresivo. Si consideramos la situación de
Guanaro por lo que respecta á la agricaitnra^ veremos que en la
parte occidental posee tierras sumamente fértiles. La parte eleva*
da del territorio , compuesta del declive de la serranía de Barqui-*
simeto, y el valle del rio Guanaro son de esta clase , y sus selvas
riquísimas convidan al desmonte. Si miramos á las partes orien-
tal y meridional , encontraremos llanuras espaciosas , cuyos pastos
parecen destinados por la naturaleza para la multiplicación del ga-
nado. Por consiguiente , á esta especie de especulación es á la que
se inclinan los habitantes de Guanaro. Su mayor riqueza consiste
en ganado cuyo número es considerable. El cacao, el café, el
añil , la cana y el tabaco son sus produccnmes principales de es*
portadon , con la ventaja de estar cerca de dos embarcaderos y sea
en lá Portuguesa , sea en el Guanaríto , que no es otra cosa sino
el rio Guanaro. La ciudad está éki la encrucijada de los caminos
que van al interior de las sabanas, á la eapitul de la provincia» á
los valles«de Ghabasquen, Omucaro y Tocuyo, por una parte, por
otra , los de Boconó y Xi'uJiHo ; y últimamente » en todo el camino
que conduce á las provincias de Garabobo y Garácas , y á las de
Barquisímeto y Coro , lo que hará ser siempre interesante este
punto para la cria, la agricultura y el comercio* Hai un colegio;
y la ciudad está bien coaatmlda , en un temperamento sano , aun-
que cálido.
Las parroquias son : Gnanare , Tucopido , Boconé , S. Rafael ,
María^ Maracaí Papelón y San Üigael.
CANTÓN DE OSPINO.
La villa de Ospino está Mtuada al pié de un cerrito á la orilla M
rio que lleva sa nombre. Su posicioA es bella y saludable , aunque
caliente su clima ; pero tiene la desventaja de estar algo desviada
del camino principal que de Barinas va i Barquisimeto y á Va-
lencia. Esto queda compensado , sin embargo , con la circunstancia
de componerse este distrilo de un suelo fértil , dividido en dot
partes. La una está en la serranía que se presenta á la vista bada
el poniente , en formas variadas y pintorescas , y en ella bai luga-
res propios para diferentes producciones ; esta es ia que divide el
territorio del Tocuyo > teniendo un camino que atraviesa la ser»
— 518 —
raniay v^ al DH^eblp del jarico. La,Q(r^^^ue esia p^yor, se com-
pone dej^nd^s sabaojas ^ab^^daótes ^e ,RasU)S y a^, ^ tierras
útíles.al misino üen)po pai:fi.^l (tuitivo ; (|$í^5 que sjd yeo gr^ucir
en esle (ejrritQCÍp el cacao y ^1 ea.Cé. Hai a^pí ajbii/oi^ntes.qfi^ de
cerdos , y jen ainguna parte de la r^públii^ s^ eocaentrao ea mayar
número y mas gordos. De elJQs.se hace yja qoQi^cio cqqs^erable
con las'p|rovincia$ de Carabobo y Caracas.
Las i^r^oq^í^ sfya : Ospino.y Aparicjp,^.
ClkSfOVI /JDB AHADEJi.
La villa de jkraure-está {>laAi6ada en un llano abierto jrl pié4e
una peqiMíla galera, teakado á menos demedia milla la paño-
quia de Acarigoa , coa la que fomavá nn solo poAio con el iiem-
po. Tiene ia ventaja de ballarse á -5 .leguas üel cafio iHirigiia^
navegaMe , que oonduoe al rio Sarare , este al^Cesjédes ^ que cae á
la PórUigiiesa , ^1 cn^ desemboca ^n et Apure , y este ékimo al
Orinocct; de manera, que desde e^ta vüla se puede^ír embarcado
hasta Ango>tnra. Si á esta ventaja se agrega {a de justar en la en-
€ruci|áda de los o^iminos que van por esta proviocfa y la de Apure
á las de Barquisimeto y Coro , y ¿ Its de Garabobo y C9racas, se
conocerá la posición interesante de Araure , que tiene ademas la
fértil selva de Turen, casi >toda inculta, fosee ierrenos b^os y
lierroosas sabanas en que se crian numerosos rebaños de ganado.
: £1 cacdo / e( café , fa cSiia , el ajÜA y el tabaco se dan esceleiUes. CI
clima es sano en todo este territorio y sofo . en ia monteüa d0
Turen suele habei^ fiebres. Esta villa es la patria del intrépido
Pápz, actual presidente de la rioplblica, y cejrca de ella se dio la
célebre batalla de Araure que libertó toda ia provincia de Barínas
en^Hío.
La^ parr(k[u{as sen : Araure, Acárlgua , AguaUabcft ; $. Rafael^ '
Misión*; SabaoeU y HrUu.' ^
C^j^TpN DE PEDRAZA.
la ciudad de Pedraza fué fundada en H9{ por Gonzalo Pina La*
•dueño, que así la llapió. dándole el nombre de su ciudad natal en
Estremadura. Fué situada al nléde laserraqía. pero cu J 614 los
r
— 519 —
Indios Giros la destrayeron , y ée reconstruyó en el lugar actual
por el capitán D^íego de Luna. Está se4>re «na hermosa 9aA)aDa eei^
ca de la orilla del río Cana^. fis miOf de fes terrüarios en ^|ue%BÍ
mas teiilaf as para «4 <;ultlto de tierras templadas fHas y eallanla^.
En estoéitiflw Mestiéndefagran scfhraéeTIcopQi^que tiene SOle^
gnas cuadradas*, está bailada por multitud de ríos y en ella nace
sllyestre el cacao. El clima #8 alM pNíKUM^ ¿«capsa de los pantanos
que forman las aguas en sus crecientes, y por la espesura del bos-
que ffWfWiédií Ja anHadi da knim^os del «qU i paoa 4íMi^ía ú$
Pedtma.es 1» iia?#9iMA^miCM^iiiáf piirálpii^denbaMri^
prx^^on^Hmes 4 ApwWt ¥ P^^ MUiptitiite, baala A«pisltira. Sna
b^lijtentaf ü Mton-i laa^tMHaiia) ^^a^har lodfi al ealüw del
capao fucr!sefda<a«ad£»t«; ianriiita aliaül^al «alé» el tlgftiiün y to
capa. .800 {HH4iMHaíaiifl»>de,eale(0t«ii«i. l}iaM4aba«És .«vi ««IUiki
parAáa«ria.y«Mutfai9d«<«UaS'aa oafami.'de agna.Miila eatawmiiUiiC'
vioaa. Sin.eniMi^,.p<H'ja04Msifiiafi, EedMna.aS'.^ «aictoa isalNte*
pero.aaM; io^ la«biefiiMhi^4a KMltanb.aí>^a0ea|itiíaii laifwte
de- 1^ .meaéalía de iTicwwa i^ liia^ñehlai4|iiB estáu >aoiina .41 Ufi*
bantc, eo Joaenatoa aa6teti^al>er^l^aba^ayiB^pwa^««len■l
Las paiiamiaa jea ; faéraiay Ct^i^Blá». flao^gaá» Mm^ Baadíat
Mamporal, Santa Bárbara, San Miguel y Guaca.
CANTÓN DS NUTBUS.
La ciudad de Nutrias es una de las mas comerciantes del río
Apure después de San Femando. Esta es eJ depósito del bajo Apure,
y aquella lo es del alto. Está construida sobre un Uano que se inunda
y á una milla del Apure, donde está el puerto. En invierno es mui
malo el camino que eslá entre/ este y la ciudad. Su bella posición
geográfica hace que se le pueda llamar el puerto general de la
provincia de Barínas, y cuando esta haya llegado á la prosperidad
á que está llamada, Nutrías será una gran dudad comerciante. La
principal riqueza de los habitantes de este cantón consiste en gana-
do, y las bellas sabanas que tiene parece que favorecen sobre ma-
nera las criaa ; sin embargo, no Taltan tierras de labor en las orillas
de los ríos, y sus vecinos las cultivan. El clima de esta ciudad es
cálido y algo enfermizo, y tiene algunos parajes espuestos á calen-
turas ; pero la generalidad del territorio es caliente y sano. Las fie-
bres que atacan á vezes en este lugar son debidas á los derrames del
— 520 —
Apare y á los |Niiitano6 que eslán cerca de la dudad^ sobre todo
los que se eacuentran á barloTento de eUa*
Las parroquias son : Nutrías» Dolores, la Gnn, Jobo, Santa Ca*
talina, Santo DomiogO; San Jaime, Guadarrama y San Antonio*
CANTÓN DC GDANARITO,
La Tillare Guanaritoestá en las orillas del firtil río de Guanare
que le sirte de cand para llevar ras produciones al Apure y al Ori*
nocoy tanto en niTÍemo como en fülmo. Con difiouHad se encontra*
rá en toda la proyincia un río tan poblado en sua oríllas eomo este»
y tan abundante en pezes. Los platanales duran mas de 80 ailos y el
rio nunca deja de suUmiistrar escalente aKmenlo á los babitantes»
los cuales se dedican al cultivo de aüil, caña y a^odon. Sabanas
bermosas con machos ganados, hacen también la riquem del pais»
y Guanarito por su posición hace comercio con todo el interior
de las sabanas de su territorio. El clima, aunque cálido, es sano, y
solo en algunos estreñios de este cantón suele haber fiebres.
Las parroquias son : Guanarito» Morrones y Sabana Seca.
« t
TABLA. COMPARATIVA de la potiáon BAroaAmica de lu cabezas
dBBOstiwns, terrenoa baldíos, pobladon absoluta, rdatira, hombres dci
frutos que le cultivan para la esportaeiou.
9
|toii, su altura sobre el nivel del mar, su tempecalura 'nedia, calidad
^y esclavos, distancia á la capital de la provincia y de la república, y ''
rrr
^t. c.
fetdtM.
»OBLÁCIOH pp LOS cahíces*
Total
población
en 4880.
90
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9
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ip^i mtmmmmmmmm.
11.397
SI «101
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Población
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Gtc«ojcÁfé.
Cacao, ital^, a]godoft,{
M.
n
Cafia , aftil j algodón.
■^nnnRi«p***<«nMH
— 524 —
TABLA DB LA ALTUBA I>B LOS CEBBOS DB LA PBOYIIVCIA.
Nombres, Yaras. Serranía»,
Don Pedro........ 3000 Venda.
Bocambooo 4190. id.
Apure 4Sao. id,
Saoto Domingo.... 4700. id.
Granate. 4715. id.
Nombres, Yaras, Serranías .
Caldera 4848 Trujilto.
NÍ4|UÍUo 4480. id.
Sarare * 9900 Barqulsi-
meto.
Zancudo IMO. id.
TABLA DB LOS BIOS DE 4"* ÓBDEN DE LA PBOYINCIA.
Nombres» SerratUú$, DesagüM.
Tanre Herida..». Orinoco.
SanUBarbara id id.
Pedrasa la Vieja.... id id.
Currílos id id.
Capitanejo id id,
Meno. id id.
Zapa id id,
Miday id id.
Bautni id id.
Socapó id id.
Bombú id id.
Tieoporo ^...«. id id.
Azul id...,', id.
Curbatinaito. ...... id..* id.
CurbaU id. id.
BscagSei id id.
Bomb6.....« id id.
id id.
Hombros, Sorfonias, AMogSM»
Tuca TrujUlo Orinoco.
Galderilo id id.
Anua id., id.
Tucopido id id.
María Barquisimeto id.
llorador id.
Toco.. id*
Caro id.
Taunó id.
Are id.
Bombis id.
Bombón id.
Guache id.
Bocoi id.
Acarigua id.
Caro. id.
Sarare id.
Turen id.
id.
id.
id.
id.
id.
id.
id.
id.
id.
id.
id.
id.
id.
— 525 —
PROVINCIA DE APURE.
SITUACIÓN ASTRONÓMICA, BSTENSION T POBLAaON.
Esta proTincia se encuentra en la latitud boreal de 5^» 55' á 7° 55',
y entre las longitudes de 0^ -17' al E. del meridiano de Caracas
Y 5^ 9' al O. del mismo. Su figura se puede asemejar á la de un
caimán, cuya parte superior la delinean los rios Uribante y Apu-
re, la inferior los ríos Nula, Arauca, Meta y Orinoco. La mayor
anchura de esta provincia es A^ 56 leguas de N. á S., tomando del
meridiano de Santa Catalina al desaguadero del caño Machiacare
en el Meta , y el largo de E. á O. desde la boca de Cabellare en el
Orinoco, hasta las cabezeras del Nula, de Í^O leguas. Es el terri*
torio mas plano , á la vez que el mas bajo, el menos cubierto de
grandes vegetales y que apenas tiene algunas leguas dé cerros.' To-
do es una planicie que forma horizonte, cubierta de altos y sacu-
lentos pastos; es la verdadera región de los ganados <}ue viven casi
desdeñando los cuidados del hombre. Tiene ^ 860 leguas cuadradas
de superficie, y de ellas cerca de 690 son baldías. La población to-
tal es de ^ 5,479 habitantes (entre los cuales hai 2,920 indios redu-
cidos y 2,575 indios independientes), que están en razón de 8,5 por
cada legua cuadrada.
LÍMITES Y CONFINES.
Confina esta provincia con otras 6 que son : Caracas , Barínas y
Mérida, con las de Pamplona y Casanare d^la Nueva Granada y con
la de Guayana. De un ramal de la cordillera de Pamplona , sale el
rio Burgua , cuyo curso hasta su confluencia con el Uribante , de-
marca la raya divisoria con la provincia de Mérida. El Uribante y el
Apure sirven de límite con la provincia de Barínas hasta la boca de
la Portuguesa ; de allí hasta la del Apure linda con la providcia de
Caracas. El Orinoco y después el Meta hasta el punto del Aposta-
dero mas arriba del cerro Pelado , sirven de raya divisoria con la
' Guayana. Una recta que va derecha a! N. basta el Paso del Viento,
sobre el Arauca, después este rio aguas arriba, hasta frente al des-
parran[)adero del Sarare y rodeando este hasta encontrar el ño Nu»
— 526 ~
la , y por último , este rio hasta sn origen , es la frontera con la
Nae?a Granada éñlá protiúcia dé Cásanare. Del origen del Nafa
hasta el del Burgna por teda la cresta de la serranía que vierte sos
aguas al Uribante, se demarea la raya divisoria con la provincia de
Pamplona i
á
Un ramal de la cordillera de Pamplona qne se dirige hacia eí E.^
terminando en un espeso bosque, llamado por los indios la Gran
Montaña , es la única pequeña parte de serranía que bal en el Apu-
re, y bien se podría decir que no la posee esta provincia, porque
aquellas faldas nunca haá sido transitadas por entes racionales , y
S0lo se descubren como una isla azulada sobre un inmenso horizonte
verde. Hasta- el pié de ellas han llegado algunos indios del Polvero^
pescando por el rio Nula en canoas pequeñas, y no se tiene otra
relación que la que ellos dan y lo que la vista indica sobre las ca-
bezerasde aquel rio. Su allura medida desde el I^olvero, que es
una distaucia de 20 leguas, dio H50 varas, suponiendo una re-
fracción ordinaria de 4/14 de arco.
Es* de notarse que en las sabanas desiertas entre el Gapanaparo
y el Meta, moi cérea del Orinoco, se elevan algunas colinas como
d mmite de Parare, la galera de Sinaruco, los cerritos de S. Anio-
nio, los cuales parece que mas bien pertenecen al sistema de la Pa-
rima, lo misino que los ceriitos que están entre el Meta y el Gua»
viare en la ribera izquierda del Óriboco y hacen parte de aquel
fiM'sistesMi. Esocfituaiido , pues, los* indicados terromonteros,
en el resto déla protiBcia del Apure no se enobentra ninguna pe-
IfifieadM.
£1 principal rio de* esta provincia es el Apure, de los de -i ^or-
den OB'los de Venezuela , férmándose de la unf^a del Uriban^e y
4el Sarftíe. El primco'o nace en la sierra de Inferida, y se forma por
eleoneursddeis rioa de aquel territorio y muchos riachuelos, pro-
yirmiMMido á testo provincia 44 leguas de navegaci^mj EÍ Sarare
lielH^'su or^en cerca de la ciudad de Pamplona en la'Ñucya Gra-
nada, y solo en las grandes crecientes envía algunas agaas á su an-
— 527 —
tígoo caace , siguiendo en el dia ia ma^or cantidad de ellas al' río
Arauca, per medio del desparramaderó llamado del Sarare; es rio
de 2^ orden y en este territorio tiene 22 leguas navegables. Desde
que estos dos nos s^ juntan y las aguas loman el nombre de Apure
que no pierde hasta su confluencia con el Orinoco. El Apure ti^ne
^ 88 leguas de navegacioii y 2^ ^ de curso total, desde sus cabezeras
eñ la proyincia de Marida. Este rio recibe todas las agUasde la pro-
vincia de Barínas y parte de las de Mérida, TrujillO; BarquísimfetOy
Carabobo^. y de la misma provincia de Apure. De esta caen á él 5
rios que se forman en la llanura y 2 en la serranía. Dé ios der-
rames del Apure se forman 6 rios que dan origen á varios caños y
estos comunican á otros 5 rios producidos por los derrames de!
Arauca que es el segundo rio de este territorio>, y es también de 2*
orden en los de la república. Nace en la provincia de Pamplona por
el rio Arauquita y las aguas del Sarare que se le unen en el des-
parramadero de este nombre^ ofreciendo á la provincia de Apure
-140 leguas de navegación : va á desembocar al Orinoco. El tapana-
paro es otro rio de 2** orden y él 5** de esta provincia ; se forma en
las llanuras de Casanare en el grande estero4e Cachicamo, presen-
tando 50 leguas navegables. Baña esta provincia per uñ trecho de
52 leguas, el rio Meta, uno de los mayores tributarios del Orinoco,
que vienen de los Andes de la Nueva Granada. Tiene puesto de -I ^^ or-
den en Venezuela, y es navegable por espacio de ^72 leguas hasta
el pié de la cordillera de Bogotá, á 20 leguas de esta capital» El to-
tal de los rios de 4*^ orden que bañan esta provincia llega i 22, y
sus aguas van á la grande hoya del Orinoco. Tirando una línea des-
de la boca del Capanaparo en dirección á S. Femando, resulta que
todo el terreno que queda al oriente de ost^Unea, enlí'e el Diinoco
y el Apure, se denomina con razón Bajo-Apure, porque ía poca ele-
vación del suelo ha dado lugar á que las aguas se abrán muUitud
de canales que forman una especie de delta interior, cuya hidrogra-
fía es de las mas particulares.
La principal por la ventagas que ofrece de abundanlísíma pesca
y también por su (amaño, es la laguna de Gabunarito, 4e 2 leguas
de ancho y ca3Í 4 de Urgo. Muchas islas adornadas de una gigan-
tesca vegetación se elevan eii medio de las aguas : se comunica esta
— 528 —
lagana con el Orinooo, y la forma el rio GabaUarito originado por
por las aguas del Aranca.
El desparramadero del Sarare es todavía mas grande , pero me-
nos profundo y menos rico en peses. Esta laguna está entre el Sa-
rare y el Arauquita y tiene de 4 á 2 leguas de ancbo. Los terrenos
lajos entre estos dos rios han dado lugar á que se forme este gran-
de estanque. Las aguas del Sarare que no podía contener su cauce
por el aumento de las arenas acarreadas en el trascurso de los aüos^
y por haberse aglotnerado árboles caidos y arrastrados por la cor-
riente^ han sido la causa de que saliendo de madre el rio se eslieuda
sobre un terreno bajo y lo aniegue. Aumentándose anualmente el
obstáculo, ha formado un enorme dique que solo pueden pasar por
encima las aguas en las grandes avenidas ; asi es, que el resto del
año la corriente ha abandonado su antiguo curso y se dirige por el
desparramadero al rio Arauquita, que desde luego toma el nombre
de Arauca por el volumen de agua que diariamente le entra del Sa-
rare ; volumen que antes iba al Apure. Hai cerca de esta laguna otras
tres que tienen de 4 á 2 leguas, formadas también por los mismos
derrames.
La laguna del Término es notable por estar en el límite de las
llanuras de la Nueva-Granada, por su tamaño y por los buenos pe-
zes que se encuentran en ella : tiene 5 leguas de largo y -I ^f2 de
ancho ; la forman los derrames del rio Gapanaparo.
La laguna Baratera es digna de mención por dar origen al rio áe
Matiyure que desemboca al Apurito frente á la capital de la provin-
cia. Esla laguna existe por las aguas del caño Aricbuna que inundan
el espacio de terreno bajo sobre que ella está. Tiene Á legua de an-
cho y 2^/2 de largo.
La laguna de los Mdios^ casi circundada por los cerritos de Ara-
guaquen, es bella y su posición pintoresca. De un lado están los
cerritos, de otro una hermosa sabana ; y una espesa selva encierra
los otros dos. Aquí hai siempre agua y la caza es tan abundante
como lo son también los tigres.
La laguna de la Merced es otra que merece mencionarse , por
la cantidad de pezes y por tener un Vano llamado de la Mina, que
se comunica con el Orinoco.
Las lagunas que dan origen á los rios Sinaruco, Sinaruquito, los
Indios, Claro y Clarito, son todas bellas y ricas en caza! Varios mé-
danos de arena que se estienden á grandes distancias , como aiu-
Ilíones que dejaroa las agías cuando se retir^oo de fq9ellas ,.pla-
uides, son los que alimentan estas Jagfina^, y la fiUraeíoavContinaa
de las aguas que ban caído sobre grandes lerr»^^ apeoosos, en la
estación de las lluvias, bace los efectos de un manai^tial, acumu-
lándose en los puntos mas bajos, de los cuales se originan ríos cu*
biertos de moricbales, cu^os bordes son casi siempre de un suelo
que se buQde al oienor peso.
Todavía bal 42 lagunas mas , cuya enumeración seria larga y
fastidiosa; sin embargo, se debe decir que cada una tiene de. una
á dos míllasy^que en todas bai mucba caza^ que nunca se secan y
que sus aguas tienen de I á 2 varas de profundidad.
Innumerables son las pequeñas lagunas que se enc^^entran en este
pais, pero la m;ayor parte se seca en la estación del verano en que
el sol calienta tanlo las aguas, que llegan á la temperatura de la
atmósfera y están, por, consiguiente, sujetas á una fuerte evapo-
ración.
GUMA.
£1 clima.de la provincia de Apure es sano en general, y solo se
consideraba espuesla á calenturas aquella parte anegada que se
aproxima al Orinoco; pero desde ^ 852 basta ^ 858, ba sido aQigido
todo el pais por una fiebre espantosa, la cual ba becbo perecer cer-
ca de 9.000 personas, que bacen -i .500 anuales, sobre una pobla-
ción que era, en -1825, de 24,555 almas ; quedando abora redu-
cida á^ 5.479. ¿ Causarán estas epidemias las gpandes selvas de
S. Camilo y Tímocoro que están al poniente del Apure? ¿ Serán las
materias podridas de los vegetales de aquellos inmensos bosques,,
que llegando á cierto grado de fermentación producen una atmós-
fera pestilencial? Se debe tener presente que la, epidemia empezó
por los cantones de Guasdualilo y Mantecal, que están en la direc-
ción de los vientos que vienen del O.,. precisamente donde existe la
gran selva, de la cual no están lejos. £1 segundo año atacó en el
cantón de Acbáguas y el tercero en el de S. Fernando, preserván-
dose entonces esta villa que no está en la dirección de la gran sel-
va. También es digno de notarse. que estos vientos del pniente
soplan precisamente á la entrada de aguas y que en esta época es
cuando se ban presentado con fuerza calenturas paludosas y ma-
lignas áia vez.
n
Acfoafmeiile ha eMiiéo el bmI; y e8< ds^^tpownt que voHoi á
jjozftf aqoel' pah 46 so «itttgtt» fsfobriiMi) htstftí^pM ot» #1 aimo
^eliiefiípo'Ytteltttii hs maleria» orgéBieas de 1m graidce^ bos^im»á
emanar mi aire peatfletteial, 6i e»'q«e ellas han Mo la «a»» de
ias últimas e|>hieiiiia$.
Se pQede asiga^ar cftielto nanwaaie kpetmmm» te» mas eUi-
das de Venezuela, y la razón está en qne las eap«'4e'aitto<»iidttd-
das por los vientos de! 6. N. E;, qBe relna« gesemÜiieitl^eD ve-
tana, han pasado por las mesas arenosas éa^CmmnMly fiáreébyM y
' desptiespor fas ITanüras^ secas y por -los terrenos pedMgoees de Ca-
rracas; demanelra, qnellegaBreealentadosal Apnre^laarever-
'hei'aetones deaqníell^ lefireflos. Las sabanas pHinas^el Apure,
-desprovistas dé aHos vegetolesqne ler deu sombra, atiserhi^ tanto
^k^r, que i pesar del desahogo noeMmio, l»tfet*ra f el ake no fie-
Dctí lugar de f^esearse^AislMentente; desde fo^ékí nodhe hasta ti
nacimiento del sol. La teiQperatura se mantiene á 55^ cent^^radoa,
si á las 5 de la tarde se coloca el termómetro á la sombra de
una mata ó grupo de árboles^ y é^ pies de altura sobre el terreno.
En la estación lluTÍosa, citando el cielo nublado reflqa el calor ha-
cia fa tierra y eesan enteramente las brisas, sube el termémetro á
la Sémbraf á 39.5^. Bn la noche baj[a solamenle^ 4^* & 9«'á lo sumo.
ESTACIÓN DE INVIERNO.
' Desude ^Imi^^ dieteftrbre basta 'el éé febreroestéel ei«lo eosrs-
laútefflente sin 'nubes , y si apateee afgtlita , e^nn- f^émeno que
llaiiiá la atetíbkni dé los habitantes. Laforiáa dé) E. y del E. N. E.
sopla Con vioTéttcia. A^princlpios' di mano se var haelenáo méios
violenta, é interhRirpIda {lor calnito ; y i ities dá attíMB^la hrisa
pasa fí'écu^temenledeFO. a!S. O. Señal esiestasegura de las llu-
vias qtie empiezan i fines de abrH, y su mayor fuerza es e» junio,
julio y agosto : la cantidad Óé agua es condderaiifle ; baldías en
qíie no cae ttfla sofá gota, otrofáen que Viene poi^ lüfervalos y oíros
en que estíKré^áiite la líüviá. Las aguas qtie eaeír producen gran-
des a veuldad^ éh tói^ riós*, f corneó eútónées 05 g^ieral laltovía en
toda tá gfándé Ií6ta dfilOirhioc^, e^t^se Itífna demasMdoy'represa
el Ajiíiíre, él cúa'f {íródtÉce el íbfeíao efecto en los ries íque le cami;
' y esta é^ fó cati$a dé saUr todes dé^ rnadt^, anegando los terrenos
bajos de sus inmediaciones. El alto Apure forma grandes lagos y
— 554 —
«píamente los.baaoos se eUrm.Z ó ^ pie$ 9e^ve la iottQdacion. El
bajo Apure pfesei^t^i 9A mar; cubriéndose aquel espacio de 4 á S
varas de agua, á cuya superficie solamente asoman la cima de Io$
mas altos árboles,. y los médanos en que están Jos batos colocados.
Gnlónces es cuando los babiiantes del Apure no remontan con sus ca-
nosas por los cauces.de ]gts TÍOS; sino por medio de las sabanas, para
evitar la violencia, de. las corrientes y el peligro de los troncos de
árboles que eslas arrastran. En noviembre es transitable el alto
Apure y todo el bajo á fines de diciembre, y basta llegado j(nayo se
puede andar por todas partes; mas en junio ^s difícil ya en q\
^Ito Apure, casi imposible en el bajo^ y en julio están las aguas en
«u máximum de altura. Sin embargo, esto no impide que el llanero
vaya, no diré á lodos los lugares, pero si á la mayor parte del país,
escogiendo los baneoá, las st basas 4«(poc«agaa y á vezes otras en
que el agua no llega sino á la cincha del caballo ; aunque se ve cons-
tantemente obligado á pasar por los mas pequeños esteros, canos
ó ríos, á nado, con la silla sobre la cabeza.
Se divide esta provincia epi 4.caalon^ oon.lp$. nombréis d^eA^^bá;
guas, S. Fernando, Mantecal y Guasdualito, que contienen 22 par-
roquias, 16 grandes sitios y ^'3. parajes de indios OtoinacQ$ y Ya-
ruros. A las orilias.de los rJQs y canos, en dp^de e^tán las j)QbÍftcio-
nas, se ap^ovecbam tos bs^Uijta^t^ do los.|^p^ni]^;jDqsq^e^,q|ti^ bai
m ellas, cpmo del único (^#:eaQ ad^quado áJa?^r|cuUura« AH^'sp
QuUivamai?, yuca^ plátanQSt<^^<i^^; ^tcumos, carapLas> ínÍQ|e^^
arroz, cana dulce, bai^i^tas y auywas. ^
La población se puede dividir del modo siguiente : 20/IjOQ.^ la
agricultura,. 60/lC^ á la qri^, y 210/400 á las artes,, cofper^io, ^ic.
El comercio coa Mérida ^ hi^Qp llevando de Apure ganado, en
cambio deharina, aguapdie^i ajos,; pa{)aS; cebollas, sal y. alverjas.
A. la villa de Aranpa de la.proviiiiQla.de Gasan^re, se envía lo que
3e recibe de S, GrisiAb^K jp .c^^io de dlne;:o., bestias y ganadu.
Con la provipc;^ d¡^..B;M'i[Q4^^,n^^ia á^,io díi^cirPí Cib^lio^ mu-
la», ganado, queso, gra^a^.tp^tiigas, pescado y ^uero , por dulce,
u:: 532 —
aguardiente, géneros, herran^ientas, zaleas, pellones, mantas, ba-
É
macas, sal, cacao, café, plátanos y maíz. De la provincia de Cara-
bobo se envíao géneros, aguardiente y dinero, devolviendo qaeso^
sebo, ganado» bestias y chigilire. A Caracas se lleva de Apure que-
so, chigúire y ganado, en cambio de dinero y mercancías. Con la
provincia de Guayana es bastante grande el comercio, recibiendo
de Angostura toda clase de mercancías secas y licories, berramien-
tos, loza, sal, jabón, velas, muebles y barina ; dando en retornó cue-
ros, fríjoles, manteca de tortuga, cerdos, maiz, arroz y muías. De
la provincia de Barcelona se recibe dinero, dando muías, caballos
y ganado.
>
€
CIUDADES Y VILLX8.
CANTÓN DE ACHÁGDAS.
La villa de Acháf^nas toé en so origen una BSÉisioa fundada por
Fr. Alonso, en •1774. Lleva el nombre de los indios que babiiaban
entonces la grande isla formada por el Apurito, y limitada por este
y el Payara, brazo del mismo rio. De estos indios[solo quedan algu-
nas familias. Acbáguas es la capital de la provincia de Apure, eri-
gida en A 824, perteneciendo antes á la de Barínas. Qaiso el congre-
so colombiano dar una muestra de gratitud al pais en donde se ha-
bla siempre estrellado el poder español, elevándolo al rango do
provincia con la denominación del rio caudaloso que la separa de
las otras llanuras, decayó rio toman sus habitantes el nombre de
apúrenos.
Las hermosas llanuras del'Apure son poco útiles para la agricuU
tura, pero brindan con inmensas ventajas para la cria de ganados.
Se puede llamar con razón el semUlaro de estos, porque en niogun
paraje se multiplican tanto como aquí, necesitando menos de los
cuidados del hombre. Despucs de la desastrosa guerra de )a inde-
pendencia, los demás llanos de la república babrian perdido su^
crias, si el Apure, por las previsivas medidas del general Pácz que
dirigía allí la guerra, y por haber sido áiftes que otros puntos li-
bertado de ejércitos enemigos, no hubiese mantenido las suyas en
regular estado ; así es, que de aquí salieron el ganadO; las mutas j
— 555 —
caballos para todo el resto del pais. En tiempos anteriores^ do ba-
bia en estas soledades sido venados y chigúires, y Cristóbal Rodrí*
guez, habitante del Tocuyo, fué el primero que en -1548 tuvo la
feliz idea de enviar á los Ilaaos de Bannas.el ganado espaüol^ in-
troducido de Coro y del Tocuyo. Este fué el que.se multiplicó, y en
el día es una de las fuentes mas ricas de la industria venezolana.
En las sabanas del Apure vive el ganado en plena libertad en me-
dio de las manadas de venados y chigüires y numerosas bandadas
de cerdos qne se bao sustraído del estado doméstico y viven erran-
tes por aquellas soledades. La posición de Ácháguas sobre un rio
navegable con tieiraa de labof ao muí mos del Apure y cop .ricas
sabanas á su alrededor, seria muí interesante. para otros países;
pero no para los pueblos qne están en estas llanuras,! en las cuales
se bp^sea solamente, al atravesarlas, la dirección majs corta, por
que su tráfico consiste en rebaüos ; para cuya conducción se prefie-
ren las tierras sin montes pi poblados. Acbáguas viene á ser un
punto importante solo para los que deben pasar por allí p^ra ir á
los batos q«e estén en aqiMUa dke«eioii. Sin.íembacgo, cuanddi las
«sabana^qne están del otro, lado del Araoca, hacia el Meta, se bai>
Uen enbiertft^ dé ganados y (KAlaetonas, enl¿iiQes«á«há|iaaf;foM
tomar mayor incremento ; pero no tanto temo las .vIHaS'sitQadas en
las márgenes del Apure y ett las vías menos larga», para llevar los
ganados á las partes mas pobladas de la «orranía y- de la eosta.
Las parroquias de este cantón son : Acbáguas, Santa Lucía, Gua-
£imal, Apurito, Banco-4iargo y San-Antonio^
CANTÓN DE SAÑ FEUl^ANDO.
Laclndad di S. Fernando estiá situada cf#lá oriHa 'derecha det
fío Apure, cerca de la embocadura de la Portuguesa, uno' de lois
ríos mas interesantcíft déla provincla'deBéríifrasj'Su pesiHon geo-
gráfica es vefttfljo^ítríftta para el eomcfrein V álM se ^tepotítun todas las
predu(x^oneá de ?a( vflíCapríryincfoMile'&arfoas, atife^ la escala para
la de Angoslura^ aiU vieríen las nyeréaneías de GaráeaS, alN con--
entren fodos los com()raNlorés de gtrna^-delí Alte^aoe *y^^^
provincias de Barcelóiia't Oüttaná^, f «11/;''nrilHat<itfeMe haMude,
eslá la Itdve del ifo}ó AfMire. En'esti^>eán(io« eiMe el ^lta> interior
que fonnan lo^Hus^Apui^^r ATaéMy hurtes de éo<i^ar ^ Orinoco, y
mú esta ^térritcM^k» (amblen se eiiodfeniran'éahlnMiiett^ verdes
— W4 —
con ricos pastos, abandantes en ganado, y otras del todo yerman
mas atlá del Cunatiche, hasta las orillas del Meta. Es tal la impor-
tancia de San Fernando, (]iie qifemado'por Tos.patriotas, rcrraeió de
sus cenizas, y Tueltoi qnemar en 18^36 pornna (hccíon destracto^ra,
vohió á aparecer reediflcado.
Las parroquias son S. Fernsmdo, S. Jttan, Ariebana , S. Raíáet^
Ciinaviche y Carlben«
La tiHa del Maiit^Beat eiti atWad» softve ma^ábaná- bermoaa é Va
&if\kí del fio Gtfleiira. So teú^raffientoeálido y sano, ba aídc» o^
líDBÉttieiite alterado por ««a epídeoifa, leiiya cansa podría deefn^
que no es local, éino emanada ilela moiyliÍla"de'$. Gatiiilo. Sabanas
Mcbas y estensas con algunas mátaa y estevas, Ávidldas por caff^»
y rios^sombireados por flfetea de monté, tale» #oii las faeetones tfe
«sle'pais, qaeeatá'IMüafdo á piAoipei^i^ anas, anaudia Ibb sabaiAs^
^léaliirM qiüatiiMiiíbécía eP6.>Miiii «ilblirt«rd»i|tHiaiiaB y anmotí'-
üdaa^laa piribtaciónea 46 la c6sia yde ia^aetráflia, pi»seiitéAeea«e
mMmtJmim al camlffo M emáetéo^ qaoifRidráa haeor las pt^a»-
tbMiaa dé'MÁfMay CamiM^.
LaapairMRffilM de ii8lotaatoiiÍBDft4 MftQtflwl, RiacoiiMttaido^ I»-
depeiÉkiiM 7^690 rVéMste.
CARTIHf »E O0AISbÍlilíl>TrD.
I^ Tilla de GuasdiMlitoeatá «i^ada «a un llano circundado de
esteros y terrenos anegados , á media legua del río Sarare , sobre
:€mm eriUasfMé^.fUierlo 4e k <l?«rÍQ»4f« 4 do»4é^ Ih^ «n ca-
«MalaaMierafMlariftaikf Aügoltiiaa. A <poeo mas día 4 leguaa bMt
^S. queda la villa; d0:Afa««a p«is(aMetete/i.te;Nwi»rGmi)adi¡^
.lardada «a; te4HNMa4ei^qlMi4»l^río»4elfma«ii^4^ dia.flMiiSefm
«Ana CiiAasdiialitó ea el imtlosinfr pttf4a pwfwctoiiar - caá -itfttMjft
i«a.n^ai«^afeílaiqvei»n«^«i4a'ipUk^ lí )áa;|l4iM».d0 GMawr#;. in
fftasiaioa 4e^ieMe^;ponla>8«ia mi^ parque «aié^anaL
fmmf^f Jkado ae.candcaea toaiHiaadfs4to>Tattoáda^^lamrrar
iBÍa d«t MáMa ff. Mrtipiqaa» B«lria^da8«i:mi»9Tf^ oerca deaaa
'^mmi^ riíA^aitaiaSa, qnaf nate^Ha/s^^mMaeriiif» aamara-
MPObinm» ,: fíüadttalita leitó jiwiid^j áittfttfaraiMqüwdo «taeUa
— 535 -.
esté desmontada, y su clima, enfermizo por la aproximación á la
«tifa, «e'candrfoteQTDiia^riQí'peMacbn, ique<^tÍftiiMráftt\él kigtr
qttelHÜ oc8^4t iiilla«!iA4M|UMMÍa á ¡qms atlá/ 4«^tii ca^^l^ cMi
en los oonfines cob láliMeiqMifttiMRlft Y«Biimit«fe(o<a»aÍAiMk4e
Araucd; que se encuentra en igual posición, hace que ella sea el
refugio de muchos malhechores, y seria del ínteres de ambos go-
Jbiernos tener siempre allí pequeinias guanActooes que iftákma
iaj>oyar lasautorídades, para impedtriineiestDS^piinios lejanosj casi
«[ilos<lesiertDS'sirran detsüa i^persQoas inmorales y delincuentes
4e ambas repúblicas.
Lasparn9qim»soii : fíuaidtiaKlD, Ptknariio, Goaslitucieti/VAtofi,
Polvero y Trinidad.
^ k
• • é #
TABLA GOIIPARAUVA de la poiicioD astmnómMa de Jas eabezens
dad da tus tierras , terrenos baldíos, poUaeioii absoluta, relatÍTa^
y los frutos que se enltivaa para la eaportack».
HMBU
LAS CáMZBKAS
ns cásvoy.
Aehéguaf.
PO0ICIOJÍ ASTROBÓMIGA.
Latitnd
aorto.
8ta Fernando
Manleetl...
GoaidoaUlo
7» ty IV'
7. 53. II
7. U.-16
Lonptvdal O.
del meridúmo
4é CoitM»
Altaras
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dUoiar.
*• O» •«
0. 35. 90
f 1. 43. SO
S. 43. 80 3. 4S. 8
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IW
Xn la poblackHi se comprenden h» indioi redocidoa, eomo signe :
Canten de Achásnas
Id. de San Fernando • . . 4!U10
1^. delManlecal 670
Id. de Gaasduallto 450
Total... •• 9940
Iinton, su altura sobre «I iiiyel,del mar, sa temperaturii' media, cali-
e armas , esdavos , distancia á la capital de la provincia y de la república,
■BBaMlB
mm
mm
(úmero
Ae 1. c
que
t6 CTC6U
baldías.
490
aoo
aoo
too
690
POBLAaOX »■ Mi CAXT0KB9.
Total
de la
población
en 1839.
4.M3
s.ns
3.063
9.915
15.479
Población
tdaiffa
por
t. c.
11
11
6
16
8,8
Hohibras
útíles
pafa las
armai.
Nómero
de
esclarot.
900
400
2S0
950
1.100
94
83
55
16
]lI9Ti)ICU .
DB XiOS CknrOMMS,
k la capital
deU
provincia.
15
wVé
W/í
íU
A la capital
déla
Tepüblíea,
a*i
85
90
IOS Vi
I» V,
FRUTOS
que ae caltiTan
para
LA MtMXACIOH.
Nada.
Id.
Id.
id.
Hai (amblen indios independientei Taroroa» Otómaeoa, Chfriooia y Gnanioa, como sigue :
Cantón de Aehágus..».. lOOO
td* de San Femando. ••...... 478
Id, del Mantecal. , 900
Id. deGaasdualilo »
Total 9S75
— 558 —
TAMUL VrtM mtm Mt 4^ éVBBH t^S %k «PB0V11II» A.
Ifambre, Serromia, Sméétagü^ Namkrt, Serratiia. SudesagMe.
Nula Pamplona Oilooco. Atamaica.... derrame del
aeHnis*»»»*^iMP4immHB»»«B»*Mh * r
GuarlÜGo id id. : Apurilo derrame del
Gal^nVa •«•*••••• • f0« •«»»• •v#«'4K*
Matijure id M.
ArickiiM*..'.. derrame de
Turumte. id •.. id.
caires id M.
dInllHv***. Ailerrmedal
Arauca ,.. id,
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Cabullarilo. id ,.. id.
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CouaTiche... deUi salaoM.— . id.
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FAOViNfilÉ (DE Béft^BbONá»
«TTüACiÚrN ÁStíiOVÓlílCA, líSTlBlWlOír t WTBÜAtílOÍÍ.
JBMft ^li)^ifilft«e ininiOitrt de 7« 48':á id^ IdO' de ^latíHidibao»-
'SONi^ él í Otinoeo, T -^Q ((n'iná se-ipÉif de to ickmr cte .lis /Éotüdi^
t|géii»do:teásltt'i|»d'te»6áifta>l)í^ *&
^MM%o<v costeo Jbainmf«r 8ÍiK^«adé£. é^0« csti:bafie,i4iieüene
^¿&4«|^sf$, MiéiiltiB^cp]e>«n>ei>«mtro«olo:ll8Bft^d7ien 1» tciíaa M
'f >whák'9í^ Nv i-S.mét «15 QegDitv fiweptiK^im fiíja^dc cñtm
4«R tléelMiiikaacMtaiy efrlaxfitescéceiKiiKDtnií^ieirenpé úiíto M»ili
r«lcit<ltiv^ 7'«a te i|»e ksbabtosieftiieinn.siis «ejotietlMtiiqidai,
lo*¿raais^^>sion éUiMrafas coo^sraiideá Bmsá^ iettwo Jtado fn^a csíbi
de ganado, caballos y muías, cuya superficie contiene Á \ 55 leguas
cuadradas, de las cuales >aiiíei*«a de^tó baldías; y calculándose
una población de 52.405 almas, están en razón de 45.4 por cada
fjffuéwcii^icadft*
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GoafiM eÉla<(lrtyviiKi»ooii Ifts toas ^^í^m, Cateábalo., Gm-
:mmk al;£. y al ;& fikiaiaM. ioi riasrUMBey Soala k( sifataDf4e
la A .Gacéoas,.fHBáBáo^l»iíiMda<uafliicidieamká \9tMm de lQ«daa
iriai, Qno ét \m ««alt»deBeiíAa€a a)imr 4a Im^áaAUa^iy lel o«ao4l
QnÉaco; eala fio sirve de láníte al ^.f:aMéiktraavqac itl^ft. «s^el
:iiiaRáe teuáÉiaiaa^l^aiile ata isteiiaclií0ida;«»<ri OffiD^e#,'da#r
rjaBbMa:al) wm.dB toiPozos ;ial ooakJiaala .su arídao Wft 404k^
-éMk en Gaiottiá, y de alU^ y<»c ma ama 4a9ÍMl9i vcoece Ja^^ú^a
cenJ^l^ottaule estaMadaikÉ^ oihaaenadM ri0 ¥a^0» yífiíü^wi*
iasleafa^éliatlatméefiagde en al MeéeM-Uno^ al aoai^agW
cffnte^ as .^ Jioiite lasiada boaa dat BM^OaiQ;, ^ m&m^ ^«^
alrw^tdeirspirbaeteTaii enteca ipm «alé auto mala da au aoHil^r^.
Jfta aqtiíiairkitea ábosaark boenderAritiiiiMfifie» QVrioiigre^ 11
— 540 —
GaaDÍpa, y ese Morichal demarca la diyision basta su cabeiera. De este
punto se tira otra línea para buscar el origen del río Tonoro en la me-
sa de MondoDgo, y este rio es en seguida la raya basta k boca del río
Tacata sn trilratario. De esta boca se tira otra recta casi al N., que
atraviesa la mesa de Rapio y de Capacho, terminando sobre el río
Amana en la embocadura de la quebrada Carapa. Esta es el linde-
ro basta su origen ; de allí hacia las cambres, agoas vertientes, se
buscan lascabezeras délos ríos Tucuyucnál, Tristeza y Amana, que
salen de los cerros de sus nombres y del Monía ; este ultimo está IL
gado con el alto cerro de Cumanácoa ó Tnrimiqnire. DealU tuerce
la raya al poniente por las cumbres de la serrranía, aguas vertien-
tes, hasta encontrar el cerro Arrempuja, que da origen al río Que^
recual; por unas cuchillas va hacia el cerro Lambedero, y bajando
al N. N. O. se dirige á encontrar él rio Neverí en el' punto llamado
Guayabo. Aquí io atraviesa y sube la cresta de la serranía que eos-
tea el vafie del Neverí, va á los cerros de Gonoma y por sus altuite
baja á la mar, fronte i las islas Arapos pertenecientes á Gumaná.
, •.■•.•.. í'-
I ' cdstXÍs mi, If ík.
. ■ » I • . • , • •
Cerca de punta Gonoma empieza la costa barcelonesa ; toda eKa
^ es limpia y hondable, y puede atracarse á dos cables sin riesgo al-
[ guno. Al O. de punta Gooioma y á distancia de 2 millas está la de
Pertigalete, y entre las dos se forma una hermosa ensenada en que
bai -1 5 brasas de agua á uu cable de la costa : el fpndo de esta en-
senada es de playa de arena en que desembocan dos rlachudíos :
toda ella esimui limpia mém» la parte oriental que tiene arreSci&s
como á un cable de la costa. En ñ^nte de esta ensenada y como a
5 cables al N. de la parCl de Pertigalete, está la costa meridional
lie la isla de Monos ó Guaracáro : todas las riberas de ella son mui
üii4>ia6 y acantiladas, á su parte ;del N., como á dos cables, sale
un farallón rodeado de arrecifes, al que no se puede atracar á me-
nos de medio cable y el freo en (re dicho farallón y la iáa de Monos
e$ mui limpio y tiene 28' brazas de agua; También 'es mui franco el
{mso que forma la isla ooui la^ costa y bai en él de oO á 55 brazas
•de agua en su medlaiiía y aun casi el mismo fondo cérea de ias cos-
tas de la iftta. A noíedia !e|(ua al 0^ de la púata de P^tigalete,. está
'la de (kianta, y-entre las dos ferma la costa una emsoBada llamaida
'dePeríi¡gale(e,ilenK^'dé la cual bai varioa islotes» Eoelli^deseéi-
— 544 —
boca un riachaelo qae tiene arrecifes en la parte occidental de la
ponía Pertigalete, y otro arrecife ó bajo fondo está en el centro de
la ensenada.
Al O. de punta de Guanta y á una legua de distancia^ está la de
Berganün : entre las dos y como á una milla de la primera se en-
cuentra la ensenadita de Guanta^ en cuya boca bal varios farallo-
nes é islotes que forman freus mui angostos, aunque mui limpios y
bondables. Dentro de la ensenada bai desde 46 basta 9 4/2 brazas
qUé se cogen á medio cable de la costa : en el frontón occidental
de la ensenada bai un arrecife que sale como á dos cables.
La punta del Bergantín está rodeada de arrecifes que salen cemo
á un cable y se estienden al S. cerca de una milla : al S. O. de ella
sale también ub islote con escollos, que no deja paso franco entre
él y la punta, desde la ciial sigue la costa al O., haciendo una en-
senada llamada del Bergantín, cuya costa meridional es mui sucia
de arrecifes y un placer de poco fondo que diesde ella continúa
orinando toda la costa del O: basta el morro de Barcelona. Este,
morro es utia tierra alfa, tendida N* S. de una milla de ostensión y
liinda á lá costa por un istmo 6 leaagua dé arena mui estrecha que
tendrá uba áiilla de largo. Laclístancia que bai del morro de Bar-
celona á la punta del Bergantín ^ es de 4 4/2 millas y la costa que
roba para el S. forma una grande ensenada llamada de Pozuelo: En
todo este pedazo de costa, íque es de playa de areiía y tienda mui
baja, sale el placer de poco fondo <3asi una milla al man
La costa occidental del morro de Barcelona es sucia, y debe atra-
carse como á dos cables. Desde la punta N. de dicho morro hasta
la punta Manricia que está al S. de él^ bai cerca de 4 miHas, y la
costa que es de playa de arena y mui baja, roba para el E. y en ella
desemboca el rio de Barcelona, formando un gran placer de fango
arenoso. Por este rio suben embárcacioíies pequeñas hasta la ciu*-
dad de Barcelona que dista una legua de la mar. Esta ensenada es
el puerto de aquella capital, y para fondear en ella no bai necesi-
•dad de otra guia que el escandallo. Desde el fondeadero de "Barce-
lona corre la costa ai Ó. con alguna indinacion al $. la distancia
de mas de 40 leguas hasta él morro del Uñare, en donde está el li-
mite de esta provincia con la de Caráca$ en la boca del rio Uñare.
— Itt'-
ISLAS.
' . .i , , i '
Ea €#U..OGirt%^i 9ÍettmA^ ^rn^Mm 4e.qp»<pJMi>fcahMft,Mi>ii>
4(íw^ioná$ ella, bal ^liia gf9ncle« 41a9u4a»4«^Eii»uiaf j tos4aiir
loaoas yh^fiamfibA* ú,^0da|Sfaade4Q.halla«l Q« daiitíslM^
la Carnea QiP«d(iiital ^ qm «stá. ea «I i^fitoriQ 4e: h itr^simmrAf
€iuM»i»¿> da 4tte te l¿bl^rá ea'aii:di9WW»oii*Qw astli i«l9^9M9^
forma ua4mal,4« ii^wlla:l<iria4a«iM)hO;, frtaa UiiiiJi^.ip%i<^
Iiaí^qe4ar necpuurdOfi i»aaipj«dra abogada qiiw^. estáiOWHit i dos
^lea .al B* 4e la Ruato. «iri^^lal^ 4e ,la« Ficiida ; asu i4a (mm
0¿.^> ^. 6..Nv.E. cdopia 9mAi^ tíena poao.ipaa da imu^tíAla^^
asieHiM^a(.aiif costas isan mii'lifNP^^ Y^al .N. día m fisj^amo ^ríepr
4ai üett^ da» larai)Meí9».Qo«»(a aji & Q. 'l'/4 a4 Q« da luJgJaqdftipwii
(da, Y ádiaiaüoia :d9 iiiAadaJl^ua> asü, l^.PiM»daisegaDda«'4fi^ -m
m» i^<d^iS«ac9e.cír^larv qiJia.^aadcá lr6s^aaUeSldawlamMj h
cM»t«^>wi»«biairi«N Gmm>a)H$,>64t(Qf daelto» yni;iBsta^ia.d0^iiiii
49ilia^ aMá ^iObíioimír 4il R*> ^pe^^Mia Míta,>JBiaiio^^fpa: \§i§mf
.QMr«k.é,icmb4aiiia liiapia ;:ai 0« de ella y i diatanaía d^^d^ jm«-
lia» etstíí. la Iguala fWQtajL ^ Ja CAwapa s^iUKlai la -eual-aaiwe
£, o^« y^iAajbáew^e^lasaatído.oiaade^ui^ : también a jam
Umpiar y^ljt««.«t',E. dos ialalea? widral Q^: : lal^ (k f %4iNc;aMaa
de ia punt^aap4e»(al'd«JaiQIÉiiafUtia^giM4«i^
fihwMUbgraaia, ia^m^líalaHis 4a to^i^ íFtagutorvy'^HitrfMií fapfor
«MiíA&ia»» qoaieaeaal) E; Q^»^tti vm^^ la§»ta* Ai Qw «da^aUa»^
it]iaereterde«i]riUa^.aatá.Ia QbiaiaRaideli^^. uióda ¿ilai^niaw
«madef padiia bftja4deiaQaa« y.iiiedna q«e aale fiaran '^< 4 «ad^
jiúUa Uw\^ éBi lo Olas sataailmiial da JíaXamnia^ ciMihnNala
iüifo <y aiiianadi0i4el^lne«)dailaa' éaajiafaiay.M a» uttufkm 'BartMfg
has!0ifeb8'j)i«i€<nrtai4iitaMiUda la iiiw>j?awiaiitelde k^fhiiniiip
4el G. nifatoaAlay al & de toioaa ariaalalrde laiCbúnanatgci^da»
•afila.Mi|{biaiftiiaéil#.,>qiiMa8ii}mayar^leiiaten^ tíA.Q^
úmB4b^iDj¡kB. Belasifilaj£armi4aa paaos.ó eanalea^ «ata ^;^^m»
4a cuna» ^jioaiide) aoBm^eiOe^dno
lama, y iQtro*al;8. cao h pmiAM, BergmiUii, de^oiediaiaBállaidP
ancho y también muí limpio. Entre laChimana grande y la del S.
hai varios islotes mni limpios. Reuniendo los que hemos dicho de
las Picadas y Chimanas, se concluye que estas islas y sus islotes
«itiftJskto«lKnfe«aé fiíi.§é» f ¡oii MeMUiAi tíflBttlipHL ^y jm^ «o
MtalKfomatkHM«}iMof«liíi^^
lte|Hfti pam^abMiJli'&é>fi0ttiift8tteMi) 4fifi9ll»eDAt)pMMlf% 42011
hai Bioi pocDetoáa - ' .}i
Todas estas islas son peñasoosas y algo eleyadas ; muí pocos ve-
getales cubren su superficie, f -pai^eoes restos de la cordillera su-
mergida que en otros tiempos se unía á la del Bergautiu. Las dos
ietat'dei^idte^ ei«áii^liñiitaíul!Spuflldaí>teiesla BifadM)% iiajas y
tuiiitgtw damhilwhí, . jjrtan «ualMtoUikpMsál-O^^iiiidHfeden)
deitüeateáv BitiaíMi» f¡0mai^A^^Q.\yájmmai^umifáínr. caire
iüdMJad^uiil/püQí.q«i mmfmeil^ifmrkm aiir üIím i J|MI> sata de
anate»lsto'yiídi4itt4iaie«a«liiÍHlt ^ttccbo.
. . ' . i. ' ■■ • . •■ ■
La serranía llamada dei interior, que es un ramal de la d^» Ca-
ráeis^ piitoiHnniaar «««Isevio daMüMO»^ fiOBfvtí aUíiqueda to-
tataaem»; tHterwmplÉs pat» tt^paatideasite i!Í6^. c«fÉ .nbtra^oe^-
d^uM^ioéduat pl4éi(i4«m»,mi4iilraaiia5«Qriefit«l|»aaa<ei^
estea^saliaa^ W9*«liaM«a da^di*-iMai^ f taffarti^
tu-y Pamitatai píidülido» miiUdas cmlaa ItMiuKaa^ par una par-
lej y €«mt^ laiiMMi.p(Híi*olMi^
La>siériwM>IMifaBítiii>se Remulla da. iaepaiitei>8iiftalli8« lías-
ete §|raiMte. gBi|tiiiafaowt f»r :tejp>r»a»iQt» áüwria», qufiíias la
iiie»oi4é«t«l>daik^ pimiMlai (ttjo^ IMga á
%4iSmsmaii «a^paiW^eilNiíjiaiqitiia^^iia astáiLiu aa.{Hwrii»iia de
Comániv Pri^fiaiifaiiiinti itoiiwmilas^apoal Sk & ^ olfOjal & .0* :
^r{M4«Mf^id'fn0di»^ruiM4ihAa»^ y>«aift aíbiialMia^de las
meMsytimliüio au bait^i muiwa aÉhrBiel«i»abddt jowr; el otro
r^Ka tofe esiié»driíBoigMiilg>T ai ^wBt jdeíaatantonAi» elevado
SJf^ ^mw seiM Ai niral'M mat^ oMiidtéiiteaft áflapuei eou un
terFenoaraat«aM)<qttefa^pief!io8nalipiiiitodtt'(^ ^^
— 144 —
Sábana de Goaishamáj 7$aMmú¡A ceiroda kttempiti/^^ i|«m luiee
parte del Pionía, sale na ramal que dÍTÍde las agaasque caea al
Néverí délas <qiieTaaf<ála<ifiar^ perdiéndoa^en la ftaiid^'abraiqae
separa esta oarilliera) ItaiiHida del Ber|aotla<64»Ban»toiia; á» les
cerros de Pirita y Faraidáta. 'Ealos últimoi It^hmm^ ooBriderado
mas bien como ü tna) dela<ceiMlera^el4nleríeírde€)ipráe», qae
eomo una prolo&gadwi^ de-eibi^i á caosa^ de la notaUe íüfternipcioii
qne se observa eereaidéBareelena ;. pevo niakk .la tamí^aotógisa-
mente, se debe ccttsideaf rodeno iioasdla.dadeÉíaüqiie^ngQefaaata
perderse ea la provind» de jCOaMBa, ea el/g»lA> 'Mste, y msñV^ á
aparecer en la parte meridional de la isla de Triitídad.
' ' . • , •
£n las otras províndaa Ho ae h&heebo na ai^^todb especial de
mesas, porque se habiia rodaéido i .mnaaioaailas sui mi^yeriale-
res; pero no sucede así eon las de .esla> porquera ella fceauoi un
sistema paiticalar éinkaresante, el oaai aeestwde hada la pío*
vincia de Gumaná por el £• y. bacía la de Garáaas por el O. £n
lugar, pues, de hablar en aquellas profincias de las mesas respec-
tivas que se unen al mismo sistema, lo haremos en conjunto aquí
para que mejor se pueda comprender y apreciar su total desar-
rollo.
j^jo dos aspecto^ diferentes se presenta .eLlensno. á la yisia^de
quien atraviesa las hermosasJlanuras deBarcejboaa; forman el nao
Iffis sabanas, el otro las masas. Aquí la oonfiSuvacioa djoJ. suelo y la
variedad de su si^)wficie están mejor proaiifteiadas que en niafu-
na otra parte de los llanos de Vengúela*. AL pié m^dioaal de la
sien a del Bergantín, que en su cumbre tkae una. milita, elevada
'i .895 varas sdbre el nivel del mar , se.. ve estendessí» la, mesa de
Úrica que i(xm& uasolo cuerpo cmi laade.Sabus.y Alondaago yo^n
la dilatada de Gaanq». La. dirección geaieisal d^lsi$(ejm4e laf laa-
sas corre S. S. O;, y constituye el puato.de partición de. las i^uas
que se dirigen hacía el Orinoco, el litoral de JBaroel9Qa.y la provin-
cia de Gumaná. Ininediátaá laparte ooiid^atal d^ la m^^ de Gun-
nipa; una elevación de un terreno üoaibado,.ca^i i9ipA)?ceptiblja á la
vista, forma una.'eresla ^e se. une á una Xija ba^tpi(e eslrecba de
rocas, llamada la Sierra ó&ierrita, lacual» princÁpiaf^do e^ elcerrito
de Buenavista, sigue la misma direócien del S.S. O. hasta concluir
— 545 —
en las aguas del Orinoco en laroea de Monrieur Ignacio, casi fren-
te á las Tentanas del Canra. Del mismo cerrito de Buenayista salen
en la direccicm del poniente en el territorio de la provincia de Ca-
racas unas eontracnestas de^sabanas alias qne terminan en los cer-
ros Tkirijí, Macho, Magdalena y Tucusipano : este es el mas ele-
vado, annqne soto tiene 540 varas sobre el nivel del mar y 200 so-
bre las sabanas. Las mesas de üríca, Amana, Tonoro y Gnanipa,
qne están en las provincias de Barcelona y Gnmaná, formando una
sola masa, tienen de 290 á 464 varas S(Hi>re el nivel del mar^ y de
4 58 hasta 205 sobre el de las llanuras inmediatas. La ostensión del
sistema de las grandes mesases de 470 leguas, 45 en las de Barce-
lona, 54 en la de Caracas y 54 en la de Cumaná. La dirección ge-
neral de ellas es, como decimos, S. S. O. ; pero bai otras muchas
que van al S. y S. O., tomando los nombres de los rÍQ6 que bañan
sus bases. En los límites del territorio de Barcelona, las mesas que
se dirigen hacia el de Cumaná, demoran ál E. y al S. E.
Pero si basta el S. de este sistema solo se encuentran mesas que
se pierden sobre el Orinoco, no sucede a^í hacía el N., donde no '
existen mas que sabanas con chaparrales, algunas palmas y gran-
des campos de carrizo , los cuales ocupan inmensos espacios que
antes es^ban coitf vados por loa indios, y que se han vuelto saba-
nas. Parece que aquí !a tierra no tiene *slnó una capa delgada del
humus que alimenta los vegetales ; pero que puesta una vez en cul-
tivo pronto cesa de producir , porque la alta gramínea , llamada
carrizo^ se apodera del puesto y crece vigorosamente en él. Se pue-
de casi asegurar que en los "puntos en donde hat carrizales han cul-
tivado maiz los antiguos ó ios modernos iridios de la nación Cu-
managola, que era la mas numerosa de lasque habitaban esta parte
del pais : en el día casi todos ellos están confundidos con la masa
de la población y solo algunas familias conservan el tipo originarlo
de so raza. En la parte de las mesas viven aun los restos de la po-
derosa nación Caribe que cultiva la yuca y vive de la pesca. Es cu-
rioso ver un pueblo en otro tiempo errante y formidable, ahora
afecto al suelo y sumiso ; un pueblo diferente de todos los otros
indiosr, por su fuerza física é intelectual que ha hecho tan pocos
adelantos hacia la civilización. Sorprende ciertamente ver á las
puertas de Barcelona hcmbres con él pelo cortado como los frailes,
pintados de onoto, con un pedazo de tela azul turquí que les cu-
bre de la cadera a la rodilla, mientras que las mujeres se presen-
P. GBOG. ^
Ua ettierameait detaodat coa éL eaerf^ iiiiUd« ck roj^ Wñrnméo
on siemí^ guayoc» é iakMM d« 4 polgAdas de mék^
£ft €ÍertaB>«ate im ^«rtraate partieotor ver á lo6 Omiaiiag^los
qaB f ifen al &. 4e iaa meem , veatiáea, baUasdo» el espefiel. y qme
aipéoas se distíngueB de loa eríoUoe, cmuado al fi. lea Garibea des^
QiidoB y hablando so lengM, «o bao perdido el tipo de íaoaite»
Parece que los primeffOSy mas sumiaes, se baa m^aelado mas íadl-
túeuie con sos c<»iqoistadores, ouéAtra» qoe loa segondoe, bms al-
taneros, bao evkado la meieku Si se eocoeotraii al N. ó ai S. del
pooto de partición de las agoaa ( qw aqoí lo foroMi el síateíaa de
las mesas ) cooUrasles sorpreodenteaeift ta aeres y en loa tenrew>s^
no se debe estraüar que se eDcnentren tanubien en las aipaae* ios
ríos qoe dependen de aqoel sítteoMi) y que van bácia éí S. ó al E.^
son abundantes de agoa; lamas se secan ^ y nweboe de ellos son
inagotables, pudiéndose casi deeir, qoe apenas se conoee ea ao-
mentó en la estacioB Uoviosa, pues no bai aYeiiid«a de loertes Us-
vías. De los qoe van al N. ó al O. se secaonaigran parte^ ó que-
dan las agoas emposeadas. Solo dossoa na? fgables^ y ea el tieo^
de las llovías crecen tanto, qoe á vezes salen de madre; sin em«
bargo, todos provienen de la& mismas mesas en donde tañan orí-
gen ; pero la diferencia está en qoe ios uoos vjanen acompañados
basta su desagüe por mesas laterales, mientras los otros lo «tan
solaviente por sabanas. En estas mesas está la causa de la forma-
ción de ^ 00 ríos que bañan las tres proviiidas de Barcelona, Guma-
ná y Caracas, ^usa que antiguamente se creyó eiistir en ana gran
serranía qoe imaginaron atravesando las ilanocas y uniéndose á
los cerros de Altagracia y del Bergantm. La -constitución g^élogi«a
de las mesas difiere ciertameate de las dornas Uannras : se compone
de capas de arena eimeotadas con greda, o de arena sola mezclada
á vezes con guijarros.
La soperficie es perfectameníe plana y muí pocos los 4ecli ves de
los bordes que estén bien pronunciados; así es, que de las aguas
que caen en abundancia en la estación de invierno sobre la grande
estansion de las mesas , ni oaa gota, puede decirse, tiene tiempo
para descender á los pantos mas bj^os y dirigirse á los rio3 ; por-
que la arena chupa ó absorbe esaa misnuis aguas,, las cuales pene-
tran hasta llegar á un puato en qjie no bal sino greda apcillosa) du-
ra é impenetrable* Se ve que tanto la greda como la aoeaa están
por capas horizontales, ys^^e diría que en tiampps. remólos fueron
depositadas por toa agMs ^pt^oubrian nuestras grandes llanoras, y
qte M, acaaaíiiMaa) sirT^n aliora para depositen las aguas pluvia--
les, pre^erréiidolaB de ids etetos de Ja «rva^ef aeíon y úrvieiido de
iFerdederos.iBaBaaotíÉle8» Gucndo se m^& con ateocion ua peqneíío
bílo de a>;ua, que sale de ua terreoo. paalaaosO) semJ^do de pal-
ma moriche, se recoDoce que el suelo arenoso sobre que corre le
envia constantemente agua per flUfracon, lo cual se ve patente-
mente en los bordes de las mesas laterales, por los cuales penelra
casi al nivel del agua. Hé aquí la razón por que en lugar de perderse
por el efecto de la evaporación en un temperamento de 28^ á 5S*,
ó por la absorción de las arenas, sucede todo lo contrario : el vola*
men de agua aumenta tanto y con tal rapidee, que muchos mort-
chales á las ^ O á 4^ leguas de su origen son ya ríos navegables. Hé
aquí también la rafon pir que los ríos que ran hacia el mar de las
Antillas se secan y no so i navegables; porgue se originan en la»
mesas y después corren por terrenos que n« tienen filtraciones^
mientras que los que van al Orinoco ó golfo de Paría, tieii«n mesas
laterales que les acompafian en su curso y les entían censtanle^
mente agua en abundancia. No será de estraüar que en ette gran
sistema de mesas se formen ^00 ríos, pues su desarrollo en ifts tres
provincias de Barcelona, Gumaná j Caracas es de 7^^ leguas cua-^
dradas.
Ríos.
Tres distintas direcciones llevan las aguas de esta provincia : par-
te va al mar de las Antillas, parie al Orinoco y parte se dirige á la
provincia de Camena. £1 principal rio es el Uñare, el cual se for-
ma de dos qiuebradas, una que nace en el pueblo de Pariagnan, y
otra que sale de Mata-Bedonda, reuniéndose al pié del cerrito de Bue-
navista, para (ornar el nombre de Uñare» Este rio tiene puesto entre
los de 3»' orden de la república, su curso es de 5^ leguas, con 2fS
do navegación. El río ]>i«veri es el segundo de la provincia ; pero en
la república es río de 4« orden. Nace del Turimiquire, cerro el mas
allO'de li catáilhift de BiroiliiM y Cumanl. Las embureaeioaes de
cabofai«#éle9Mi tete 4 4/4 legaas^ loioafroeos hasta S. Diego, cuya
diiteacit es á^rü kguM, y ka ums pequeños Mben hasta el Guaya-
bo -12 1/2 legma mas Mrrtt». El rio f9» tiene H navefaUes ; él
Cari 45) e) Gvamptty el Tigre y ]iÍQricfaHl«-Lar90) de que se hablará
— MS —
en la provincia de Garnaná, ofrecen aquí 10 leguas de navegación
los dos primeros y 5 el último. Goenta esta provineia 88 ríos, de
]os cuales 27 van al mar de las AnHIhis, 40 al Orinoco y 24 á la
provincia de Cumaná : de estos solo 8' salen de lamm del Bor-
gantin y 80 del sistemado las mesas.
ÜAOUNAS. .
La principal es la de Mamo ; su fondo no es mucho por la gran
canlidad de arena que acarreau las aguas de los rios Mamo, Merei,
Pesquero y Gamoruco que caen á ella : es abundante en pezes y
sus bordes conservan todo el ano un verdor estraordiDario : se co-
munica al Orinoco por la boca del rio Mamo : tiene de largo 4 le-
guas de E. á O., y casi una de IS. á $.; ocupando cerca de & de
superücie. Viene después la laguna de Garapa , que aunque pe*
quena , es rica en pezes. La de Guariaparo ó Gurioparo es algo
mayor, tiene mas de una legua y abunda en pezes. La de Anache
contiene en stt«eno algunas islitas^ y es frecuentada por los indios
de Ganastoque hacen en ella abundante pesca. Tiene una legua de
ancho y una y mediado largo. Estas tres lagunas se comunican con
el Orinoco. Hai ademas otras dos pequeñas cerca del rio de los Po-
zos, próximas al Orinoco, y una en el riachuelo Amana que cae al
rio de este mismo nombre.
CLIMA.
El clima de esta provincia es por todas partes cálido, pero sano,
y solo en la sierra del Bergantín hai algunos pantos frescos. £1 ca-
lor de las mesas, á ocusa de la reverberación de las arenas y la
fa'ta de vegetales que den sombra al suelo, es abrasador. Guando
en las sabanas que están al N. de estas mesas la temperatura me-
dia es de 29^, en las mesas alcanza á 32° del centígrado.
£ST ACIÓN DE INVIERNO .
La cesación de las brisas y tos frecuentes esplosiones elMrkas
son dos fenómenos que ináicaa la entrada de las lluvias, las cuales
vienen á fines de abríl. Gnanto mfls llueve en esta pro^inícia, tattto
mejor se encuentran hs paftesmeridlonalesy oriéntale» qtté de*
penden del sistema de las mesas, porqae^como afqúeHas son Fufares
— 549 —
altos y de arena^ qaedari los camifios transiUbles y solamente se
suele encoBtrar algún río abundante de agua^ pero por pocos instan-
tes. Siendo cortos los declives que llevan hacia las honduras las
aguas llovedizas, penet^ra la mayor parte de estas y filtran por las
arenas de las mesas de que se compone este territorio, esceptuando
solamente los terrenos limítrofes al Orinoco, que se aniegan perlas
crecientes de este gran rio. INo sucede así por la parte del N. ó del
O.: allí las lluvias suelen caer un mes después; y cuanto mas abun-
dantes son, mas pantanosos é incómodos se hacen los caminos, por
la calidad del terreno. Los caños que hai que pasar están entonces
de nado, y los ríos necesitan de canoas. Estas llanuras se pueden,
sin embargo, atravesar en todas direcciones en la estación lluviosa.
DIVISIÓN TERRITORIAL Y PRODÜCCIOHES.
Se divide esta provincia en 8 cantones que son : Barcelona, Pí-
rítu, Onoto, Aragua, S. Mateo, S. Diego, Pao y Soledad, con 49 par-
roquias y 29 grandes vecindarios, en los cuales se cultiva cacao,
café, caña, algodón, maiz, yuca, plátano, fríjoles, judías, alverjas,
apios, Sames, ocumos, mapuei, papas, ortalizas, cocos y frutas es-
celen tes.
£1 total de la población se puede dividir así : 55/iOO dedicada á
la agricultura; 50/100 á la cria y 4 5/^ 00 á las artes, comercio etc.
COMERCIO.
£1 puerto'principal está en la ensenada de Barcelona y al abrigo
del morro de este nombre, en el cual fondean los buques menores .
que vienen de Santónias, Curazao, TrinidáR, la Guaira y Cumaná,
mientras que los de cabotaje de estos últimos puntos ó de otros de
la costa se introducen por el Neverí hasta la misma ciudad. Impor*
tan toda especie de mercancías secas, caldos y efectos de bodega,
«sportando los pocos frutos del país. Con los cantones de Orituco
y Rio-Chico de la provincia de Caracas , se hace comercio de sal,
gaiMido y qoe^, reeibieiido caeao y café. Del cantón de Chaguara-
mas se recibe ganado, queso, sebo y dinero en cambio de sal. A
Caracas y Maturin se envían queso, cfieros^ ganado y molas, en
cambio de mercancías y efectos de bodega. Se llevan á Angostura
los mismas artículos y ademas, aguardiente, papelones, casabe, me-
— 850 —
neslras pescado, pMtonos, sombreros 4e ptja, oerdos, maíz y
Con el Apare se comercia tomando los gañidos al conlado.
CIUDADES Y VILLAS.
CANTÓN D£ BARCELONA.
La cindad de Barcelona es la capital de la provincia de sn Boai^
brc : eslá á la entrada de las hermosas llanuras qne sedilataa báeia
el OrinocO; haciendo parte de la zona pastoril de Venezuela. Estas
sabanas fueron atraresadas por la primera Tea en 4$5$por M
hombres, al mando de Álderete y Martin Nieto que desde Oriapaii
( que debe ser cerca de Barrancas en la provincia de Cumaná )
fueron á dar al Tocuyo ; marcha sorprendente y atrevida si se con-
sidera la gran distancia y las numerosas tribus guerreras que ha-
bitaban aquellas llanuras. Bien hicieron ver esos indios su valor,
cuando los prhneros conquistadores quisieron fundar pueblos en
sus propias tierras. En 4 5§9 se levantó en el slüo del Sadado, á
poca distancia del Neverí, la ciudad de Santiago de Jos CabaUeros,
por el gobernador de la Nueva Andalucía D. Diego Zerpa» Cuando
quiso introducirse en el interior eon 5(H) Hombres, íué ataonio, ven-
cido y muerto junto con 4 80 de los suyos en Gamomoo ó ol Carri-
zal, á ^4 0 16 leguas de la costa, por los indios Cnmanagotos y
Clmcopatas. A poco cayeron estos sobre la ciudad , la cual pudo
sostenerse por 14 días hasta que un refuerzo venido de Margarita
hizo retirar á los indios, y los ^pañoles tuvieron que reembarcar-
se. El capitán Garci González en i579 llegó hasta las Ajontas de
Chacopata ( hoi el Juncal ), viniendo de Caracas, pero tuvo quoie-
tirarse sobre el Uñare.
Eu 1585, Cristóbal Cobos después de haberse baiidoeon el cali-
que Apaicuare y hachóle prisionero, fundó la ciudad de ApalcMre
que llamó S. Cristóbal de los Cbmanagotos. D. Jaatide liarottn
-1591 trasladó la población de Apaicuare al litio de los» OiMiaftagD-
tos, cercano á Barcelona. En 46>97, D. Joan Urpio, 'Oat^dffa, fm-
cipió á fundar la Nueva Barcelona al pié de Cerro 8m^ z solo'dtfró
S5 a^os en aquel sitio. Finahneote, en -167^, bajo «1 fobiemo de
D. Sancho Fernández de Ángulo, fué Barcelona trasladada al Idpr
que hoi ocupa. Esta ciudad, que dié d^^pues m noaaAiffa itcéaila
— 5SÍ —
provincia, eé dkse que cmitaba y« en f 790 una pofolaeion de 4 6.000
almas y ea 480O pasaba de 46.000; pero en el día apenas tiene
6.000. En -1844 liegé á ser provincia independiente de Ciimaná. Se
encuentra la ciudad en la latitud 40* 6' 58^^ N. y en la longitud
2» 20^ y^, al E. dd meridiano de Caracas. Su decadencia se debe
escludramente á les horrores de la guerra : sus casas^ sus calles y
8US plazas fueron cinco vezes el teatro de las escenas mas san-
grietas de la revolución. AUi perecieron heroicamente sus defen-
sores sitiados en una casa fuerte, y aun en el día se ven con vene-
ración aquellos escombros por el pasajero que medita sobre la
suerte de los valtentes que pelearon con tanto denuedo y constancia
para libertar su patria. Barcelona recuerda con orgullo que ha ser-
vido de tumha á sus tiranos, aunque tenga que llorar la muerte de
sus propios hijos. La -posición de la ciudad en llano elevado 4 6 va-
ras sobre el nivel del mar^ del cual dista cerca de una legua, no le
proporciona ninguna perspectiva agradable. El rio Neverí pasa por
la ciudad ; y al N, se ve elevarse sobre los matorrales que circundan
la capital, la isla peñascosa de la Borradla. Al E. alguos cerros im-
piden que se vea en toda sa hermosura la sierra del Bergantín, y al
O. se descubrcíi los de Puerto Santo; mientras que al S. el bosque
del rio ittlerc<*pta en parte la vista de la ancha abra por donde se
pasa á las bellas y ricas flanuras regadas por multitud de ríos, va-
riadas por la configuración del terreno, pobladas de ganados y por
todas parles cruzadas de caminos que conducen á los hatos de los
criadores y á las villas^ parroquias y pueblos que esián esparcidos
por las sabanas, en todas direcciones. Las pocas tierras cultivadas se
hallan cerca de la ciudad «en ios valle» de Bergantín y Capiricual ,
y aquellos son ios puntos en que hai mas tierras sua^plibles de
cultivo, á pesiir ée que en ai éiñ la generaífdad de la población se
dedica á la cria, que aunque con mas trabajos, les da grandes pre*
áuctos. hn otTM tlemyoB e»a ^e ol punió á que se enviaban can-
tidaáes 4e taeajo y se embarcalMH» muJas ; pero en el día no se faaea
ai lo* ano ni io otn>.
TIeae Bareeloaa neas saliaat eael Morro y la playa, á las eualee
fieaeo aaiialmeiile loa iaéios Caribes á trahajar algunos días panr
vmhkf cu pago im poco éeasA. Hoi úif^B» aiiaerales frías y caliVa-
las ea las parroqaks de Bargaatia y 8. DIega» y tabre todo, das ea^
Uenlaa sulfáreto, aa media del rio üfev^ri, cerca 4e S. Dtega, que
htalan oonclaotoaMiile aia perder iu teiaperalura. .
— 552 —
La ciudad de Barcelona no puede hacer el comeroio sino con
una pequeña parte de su territorio, pues al S. tiene á Angostura y
el curso del Orinoco, por donde se proveen todos los que están en
las Uerras de las mesas. Maturin por el naciente envía mercancías
á las partes limiírofes, y la provincia de Caracas por el poniente do
deja de facilitar á las de Piritu y Onoto toda clase de géneros y ví-
veres ; de manera , que solamente le queda un corto círculo. Siíx
embargo, su aproiimacion á la mar^ en el camino principal de la
costa, su inmediación á las tierras útiles para el cultivo, y la faci-
lidad de comerciar en todos tiempos con el interior , le dan una
ventaja considerable que la bará con el tiempo prosperar mucho.
Tiene una i|¿lesia y un puente de madera sobre el Neverí, y bai va-
rias escuelas. Los Padres Observantes fundaron en esta provincia en
menos de 20 años (de 1661 á 1680 ) ^6 pueblos de doctrina, que
pagaban un tributo á la corona de España ; y ademas se establecie-
ron Á4 pueblos de misiones con las dos villas Aragua y el Pao. Los
Caribes independientes quemaron muchos de estos pueblos en 1 684 ,
•1697 y 1720. La viruela ha hecho también grandes estragos en di-
ferentes épocas. En 4792 había 49 pueblos de misiones, habitados
por 6.495 almas y 46 de doctrina con 8.460. La tierra cultivada
por los 55 pueblos, era en aquella época igual al espacio que ocu-
pan 6.554 almudes de sembradura y habia 4 895 reses.
Las parroquias son : Barcelona, Pozuelo^ S. Diego, Aragüita, Ca-
piricual^ Bergantín^ Pilar, S. Bernardino, Curatacuiche, Caigua y
Carito.
CANTÓN DE PÍRITU.
La villa de Piritu es(& situada entre cerros, á la orilla de una
quebrada, distante una legua de la mar, en donde está el puerto
llamado Piritu al cual solo van embarcaciones de cabotaje. La igle-
sia situada sobre una allura, al pié de. un cerro, es una escelenle
poyicion que domina toda la villa. Era el antiguo convento de los
Badres Observantes en el cual residía el capitjalo. Aquí hicieron
consiruir al pié del cerro un pqso profundo, al cual se baja por una
escalera para obtener agua cuando escasea en el pueblo* En verano
tienen los habitantes que servirse de pozos que están fuera de la
villa para proveíase del agita necesaria á los míos domésticos. Este
punto es sano y. se hace algmi oomercio<eofl eltuieeior. Los tenre-
— 855 —
nos de estos cantones son propios para el cultivo del algodón, teq-
uiando presente que en lo general llueve mucho aquí de mayo á
octubre, y que en noviembre y diciembre caen con frecuencia unas
lluvias que llaman fortes.
Los pueblos de este cantón son ; Piritu, S. Miguel, S. Francisco
y Clarines.
CANTÓN DE ONOTO.
La villa de Onoto está situada en un llano cubierto de bosques y
gramíneas á la orilla del rio Uñare, que no le deja otra perspectiva
} que la vista de sus aguas. Las bellas sabanas que están en sps cer-
' canias son mui útiles para la cria de ganado, á que generalmente
se dedican los vecinos. £1 estar rayano este canfon con la provincia
de Caracas, en donde hai pueblos que tienen terrenos útiles para
el cultivo^ le da alguna importancia para el comercio ; y el rio nave-
gable que^forre á lo largo de su territorio le sirve de mucha utili-
dad para el trasporte de sus productos.
Las parroquias son : Onoto, San Pablo y San Lorenzo.
CANTÓN DE ARAGCA.
La villa de Aragua es una de las mas interesantes de esta provin-
cia : está situada en una sabana á la orilla del rio Aragua. Su posi*
cion en el centro de las Itanuras de esta provincia , en la encruci-
jada de muchos caminos que conducen á todos los puntos de ella;
pudiendo comerciar con Barcelona, Angostura y con los llanos de la
provincia de Caracas y de Cumaná ; en un clima caliente pero sano,
en medio de ricos pastos que alimentan un gran número de gana-
dos; son todas circunstancias que deben favorecer esta población
para que prospere y adelante. Sus habitante^, casi todos ricos pro-
pietarios, contribuyen al engrandecimiento de la villa, que está lla-
mada á ser mui importante en estas llanuras.
Las parroquias son : Aragua, Margarita, Chaparro, Cachfpo,
Santa Ana y San Joaquín.
CANTÓN DE SAN MATEO.
La villa de S. Mateo está fundada sobre vm llano, cérea de la la-
guna que aumitiitra agua á sos habitantes. Mc^ mui 1^ de eKa
— 851 —
está él rio Prespuntal, et cual toma orí^n en la mesa de Salas que
hace parte del sistema de la de Gvaoipa. Sus terrenos son aparen-
tes para h cria de ganados^ y en la dorania bal tierras útiles para
el cultivo. E>e8de las mesas que están en hs inme^adones de fia
flHa se goza de la beUa rista de la serranía del Bergantín. Et dfma
aunque cálido es sano. Se puede comerciar con Barcelona, y en
todas 4as estaciones del año se llevan sus ganados á los llanos de
Matorin en la provincia de Cumaná, donde se pn^rciona la ven-
tea de venderlos para las colonias estranjeras. Puede de consi-
guiente comerciar con la misma facilidad con la capital de su pro*
vlucia que con la villa de Maturio.
Las parroquias de este cantón son : S. Mateo^ Quiamare^ Santa
Rosa, Úrica y Ghamariapa,
CAJíTON D£ SAJS DIEGO.
La villa de S. Diego, llamada de Cabrutica; está situada en una
hermosa esplanada á la orilla del rio que lleva su nombre. Tiene
una vista bella hacia todas partes, pues las sabanas, en forma de
variadas colinas, se elevan sobre la llanura y realzan el paisaje. Los
varios grupos de árboles que se ven en ellas^ hacen un bello con-
traate con las graouaeas qite las» cabreo* Ko mui l^os se esUeode
hacia el Ofíaoco la sierrita que loma va origen en Buenavisia, de
doode nace el Suata y sa fe«na el Uñare, k^taiuimAo esta estre^
faja de roca^sobre el DíÚDoceu £1 podar oomoaáe^ ficÜBMüte en
Guayana por madto de «ato rio, es una de \m venUjas del canloa
de S^ Di^gP» cajo» tenreQQs son pcopÁo» para la eriade gfUMide»» La
mitad de este canti^n se «oiBpiHMft sin embargo, fie iwsas^áfid^
que se pierden sánbre «l\>riadeo, y eufos pasUM^ no eon buenos.;
peJTO en cao^Uu tiene eeoelentes potreros carca de \m oriUas del
Quemo riou
Las parroquias son : S« DlegO; Suata, Santa Clara, Guaiciipa^
Sania Crtiz^ Uberito y Gwaasto..
CANTÓN DEL PAO.
La villa del Pao está situada en una pequeña mesa á la orilla del
rio Catuche y cérea ád de su nmibre que nace en la mesa Gmni»
pa. Annqve la oabeiera eslé á <listatt€ia de 42 leff^as, deade aqai
— 555 —
pueden ya bajar embarcacioa^s por el rio Pao al Orinoco. Dos gran-
des ventajas tiene este canten ; la una, el poder Ueyar á Angostura
las producck»ies que dan las vegas del río, por el rio mismo ; y la
otra el ^pw, ettafodo «aiévr iva Uimnm i Im mmm yonium, «•
áieU á los c»r«os poder ir «o sobmente basta el Oúmco^ sino tam-
bién al cantón de ülaturin en la provincia de Cumaná. Solamente
en estas mesas se vea grandes carros cargados de las producciones
del país, atravesando las dilatadas sabanas todo el año^ porqueeUaa
son verdaderos caminos carreteros formados por la naturales
misma.
Las parroquias de este cantón son : el Pao Eariagnan, Tapirtre,
Uucura y Boca del Pao*
CAMT(»7 DE SOLEDAD.
La vBla de Soledad está consfruida sobre las. barrancas del Orí*
ñoco, frente ala ciudad de Angostura, que se presenta en perspec-
tiva en toda su belleza. La vista de esta ciudad| el majestuoso Orí*
DooO; la P^na del Medio, que se levanta '•obre la s«perOcie de las
aguas, las embarcaciones que atraviesan el rio y los buques ancla-
dos ala opuesta ribera, todo contribuye á dar al paisaje una gran
belleza. Estooantoft tiene uñ rio navegable, que es el Caris, en el
cual se embarcan las producciones que se dan cerca de aquellas ri-
beras. Sus grandes mesas le proporcionan caminos carfeleros, y- la
posición déla villa cerca deGuayana la bace interesante y prospe-
rará ; pero jamas llegará á rivalizar con la ciudad de Angostura.
Las parroquias son : Soledad, S. Vicente, Mamo^ Santa Bárbara,
Tabaco, Can, Merecural y S. Pedro.
TABLA COBIPARATIYA de la posición astronómica de las cabezeras de
sus tierras, terrenos baldíos, población absoluta, relativa, hombres de armas»
que se cultivan para la esportacion.
NOMBRE
da
LAS CABBZSRAS
DE CANTÓN.
Barcelona.
Piritu.
Onoto.
Aragua.
San Blateo.
San Diego«
Pao.
POSICIOH ASTBOHÓMICA.
Latitad
norte.
Soledad. • •••
Islas de Barcelona.
Id. delai de Piritu.
10». 6'. M"
10. 5. I
9. 31. 3
9. 34. 58
9. 45. SO
8. 16. 30
8. 38. O
8. 8. 58.
LongitadB.
del meridiano
AUor«
en Tirtt
sobre
el nÍTel
Tempe-
ratura
media
del ter-
mómetro
centí*
de Caráeas. I del mar. I grado.
8*. ««y. 5"
1. 55. 3
1. 80. 58
3. 16. Id
3. 40
2. 1. 25
2. 16. 50
3. 19. II
16
119
50
OALIBAD DB LOS TBRRKNOS
DB QDB SE GOMPONBlf LOS
CARTOHSS BM L. C.
o
s
27*. 80.
26. 89.
27. 22.
135 26. 94.
177 27. 78.
152 26. 11.
186 28. 84.
82 27, 92
»
» I »
21
20r
80
Total.
«m
64
180
181
45
»
»
«
S
o
O
ii
21
83
»
125
768t
233|
I
E .
Q
85
15
T
o 2
§1
fe"?
Q m
»
20
»
9
7
4
12
120
97
e
0
Q
^ P
o — .o
»
8
108 T
Mt
35
246
167
190
185
187
24
1158
cantón , su altura sobre el nivel del mar , su temperatura media , calidad de
esclavos, distancia á la capital de la provincia y de la república^ y los frutos
mero
de 1. c.
que
se creen
baldías.
2S
8
53
50
72
70
38
»
283
POBLACIÓN DB LOS CÁMT0MB8.
m
Total
déla
pobliicion
en 1839.
10.780
4.121
4.58!»
1S.992.
6.957
3.888
S.8S&
5.924*
»
52.103
Población
reUtWa
por legua
cuadrada.
07
113
14
57
42
SO
21
21
»
45,
Hombrea
üiiies
para
la» araas.
900
400
400
1.200
500
500
500
400
Bi
4.400
■^■■■a
Homero
de
«aclavos.
43
65
512
139
37
57
23
941
DMTINCIÁS
DI I.OS c&HTOirn.
k la capital
de la
proTÍacia.
s Vi
18-Vtf-
10
48 V«
59
32
v¿
Vi
h. la capital
deU
república.
58
49 Vtf
48
€0 V*
66
7« Vi
OS Vi
FRUTOS
QOB as CULTZTAV
para
LA BSrORTACIOÜ.
Cacao, caña , café, al-,
godon y cocos.
Algodón 7 tabaco.
Id» y caña.
Gaña y tabaco.
rd. Cacao, café,
algodón y tabaco.
Gaña y tabaco.
Id.
Id, y cacao.
9ttmmiffm
■■■■I
.
— 558 —
TABLA
DE LAS ALTURAS A LOS GEBBOS DE LA PBOYINGIA.
N<mbrei. Varoi. Sarrñntas.
Ptonía M50... del B«rgan-
ArraBpoJa 919» id.
XaraTiüt MQD W.
Tristeza 489D iU.
Taeoyucal 1M0 tf.
BerganÜD « tM5....**« id.
Nombres. Yarat. Serranias^
Horro de Barcelona. 1(3.. de Barcelona.
CermPawMilaU..., 444... de San Ber-
nardino.
Cerro de Hrtlo. .... 800 de Pirita.
Mesa de Vrita «64 de Mesas.
— de6«anipa... 800 id.
^ d«10rki«oo... 60 id
TABLA
DE LOS BIOS DE 4'' ÓBDEIT BB lA PBOTINCIA.
NeTcri. . . .
Serr4íniM. Su deiagü»
Bergantín á la mar.
Rarleaal id,
MarsTüla id.
Querecual id,
«inas id.
Cborro-Trio id.
Gapirieual id.
U.
U.
«.
>•*.••. M.
U.
tu.
Pretpu&tal Mesas tí.
Ocopia id. Id.
Gaprafera id*...* tí.
Limón id tí.
Seco id id.
Guarió id id.
Tonoroporo id Id.
Orooopicfae id^..* id.
Mapuei id id.
Ghiguapo tí tí.
Güere tí id.
Mería id id.
Caico Seco. id ad.
Misacantada tí tí.
Merei id *.. «,
Cachipo id tí.
Maco Cerrito Guaya-
can ...
Suata Si
Lindero id...
Mapire « . . id...,
S. Gerónimo id...,
S.Diego id....
Cabrutica id...,
Aribi Mesas...
S. José id....
Pao id....
Pariaguan tí....
Guaicupa. id,..,
Catuche id....
.... m.
el Orinoco.
.... id.
.... id,
.... id.
.... id,
.... tí,
.... id,
.... id,
.... id,
.... id.
.... id.
... id.
Nombres» Serranía. Su desagüe.
Perro Mesu..
Aguaclara tí...
Algarrobos fd...
Riesitos id...
Hamaca. id...
Tapirire id...
Moquete. id...
Caria id...
Venlazon id,,.
Carapa..«.» id...
Canoa ,,,., id.,,
Gbuapire id...
Carrfcilo tí...
Limo ,,,,,%., id.,.
Colmenas tí,,.
Coritas tí,,.
Peñas..., idm..
Carapunchin id,,.
Palatnbra id.,,
Cucasano. ; id,,,
Camoruco » . . id..,
1 i.8i|Uorv ...••.«.. la*..
Meréi id...
Mamo .•«•••...».. tí**,
Cbuiuto id...
Pozos id,,,
Orítupano id...
RioSeco id...
Chife id...
Pando id.,.
Jaime id..,
Areo id,,,
Claro id...
Yayo id,,.
Amana....... Bergantín
Tristeza id.
al Orinoco
.... id.
.... id.
.... id.
.... tí.
.... id.
.... tí.
.... id.
.... id.
.... tí.
.... id.
.... id,
.... id.
.... id.
.... id.
.... tí,
.... id.
.... id.
.... id.
... id.
.... id.
.... fd.
.... id.
.... id*
.... fd.
.... id*
.... id.
.... id.
.... id,
.... fd.
... tí.
.... tí.
.... tí.
.... tí.
... golfo de
Paría.
... tí*
— 559 —
Nombres, Serraniai, Desagüe,
Tacuyucual.... Bergantin . . . • golfo de
Paro.
Úrica id id.
Rapio id id,
TacaU id id.
Nombres. Serranías. Desagüe
Santa Rita Bergantín .».. golfo de
Paria.
Tonoro id... .... ¿d.
Goporo id... .... id.
saatatetBmdiaím
— «60 —
PROVINCIA DE CUMANA.
SITUACIÓN ASTRONÓMICA, ESTENSION T POBLACIÓN.
Esta provincia se encaentra entre los 8^ 9^ y •! O*» 4 4' 'de latitud
boreal , y entre los 7^ 54^ y 5* ^2' de longitud oriental del meri-
diano de Caracas. So figura es tan irregular, á causa de las penín-
sulas de Araya y Paría, que no hai con qué asemejarla. Su terreno
se debe considerar como dividido en cuatro zonas : la primera es de
serranía , bañada por una multitud de ríos , formando hermosos
valles con terrenos de cultivo, y con puertos sobre los golfos y el
mar ; la segunda se compone de mesas altas regadas por morichales
que forman grandes ríos, los cuales casi todos desembocan al delta
del Orinoco, proporcionando una navegación íáeil en el interior:
la tercera consiste en sabanas hermosas , escelentes para la cria de
ganados , que todo el afto tienen agua y verde pasto : la cuarta se
compone de tierras que se aniegan , cubiertas de bosques espesos,
habitados por fieras é insectos. Climas frescos y sanos, otros, cálidos
y enfermizos y muchos cálidos y sanos, tal es el temperamento de
esta provincia. El máiimom de largo del territorio está en la direc-
ción del N. O. , desde la orillado S. Rafael de Barrancas, sobre
el Orinoco , hasta la punta Escarsero en la península de Araya y es
de 64 leguas. Su largo tomado de N. á S. desde las Barrancas de
Fajardo , sobre ^ Orinoco , hasta el cabo Tres Puntas en la ponín-
sulade Paria, es de 50 leguas. Su mayor estension de E. á O., desde
la punta de Araya hasta la punta de la Peña , frente á Trinidad , es
de 28 leguas. Las leguas cuadradas de este terrítorio son 4465, de
las cuales hai cerca de 407 baldías , y contando con una poblacioiK^
de 50,674 almas, están en razón de 54,6 por cada legua cuadrada.
LÍMITES Y CONFINES.
Confina esta provincia con las de Barcelona y Guayana. Ya. en
la descripción de la primera está delineado el lítnite con ella , y
por lo que toca á la segunda , la demarca el rio Orinoco , desde la
boca del rio de los Pozos , hasta el vértice del delta , donde se
aparta el caño Mamo. Este caño hasta su desagüe con el nombre
de.toeacVagre en el géUúA^ Psria fotmá la iíiiea Afisoria cod la
]HY>?hicia de Gnayaaaí.
u.
COSTAS DEL MAR.
«
fimpiexa la costa d& la provineia eo la be«a mas occidental del
delta , -fse es la llamada VagjM ; toda etia es .baja j anegadiza ,
abierta p<H: un gran número de rioa y eanos ^¡m desagnandeütro
del golfo y de le% enales ü mas Uimdable y frecaeoiado ts el Guara*
piche, por donde se navega y comercia en el interior con goletas y
^EnharcacioneemayiNres. Después dé pasado Güiiia la oosla i|iMd^
mas elevada y como destrozada, con porción de pequeñas enhenadas
basta la boca grande de los Dragos , formada por la isla de CbacaF-
ebaciire y la costa firme. La punta masaalíeote de dMacoata, al*N.
y E. y forma un islote alto y escarpado llamada >el Morro, Desd§ él
continúa la costa para^el 0.^ con alguna iaféiüsqa pata ^S. por
espaeio de 6 leguas hasta la ensenada de Mejillones , desde la cual
roba un poco al N« basta el cabo Tres Puntas, que dista cómo H
leguas. Toda esta tierra es alta y de serranía y la «osta sumamente
limpia, pues á una mlUa^bai de 20 4-40- brazas de aosna kmoea.
E^ este espacio e^án Puerto Viejo , Puerto Nue^o , ^iUfaleta y la
ensenadita de^ Chapare. A d^ leguas se enouentra.la ensenando
Uñare quQ olrece un buen fondeadero al abrigo.de las brisas ,. y en
él desembioea un rtachuelo. La3 pi|ntas.de esta ensenada iionen va-
ríosislotesry arrecifes. Desde alii hasta el. cabo Mala Paseua sigue
la i^slaál O., por una distancia de mas- de 6 hpuaa; toda es muí
liippia y á una milla se encuentran 8 brasas dafondo« £n ellateslán
el puerto S; Juan.y laen9^iada,G!herepare.Dtsdeel cabq Mala.Paseua
sigue, la costa al.Q. por ^ 4/2 .teguas hasta el monro.de Puerto
Santo : este morro está unido á la costa por unaiengdela baja de
arena. Cecea de este al peiiaietttei existe ua isliste llamado también
do Puerto Santo y al otro lado de dicha lengüeta bai fondeadcio al
abrigo de lai>risa con fondo de 5 á 6 brazas : aquí se encuentra la
ensenada áe Cs^néoiés y la villa de {lio Caribe. Desde el morrío de
Pnerto-'Sattto^ corre la costa al O.i S. O.,; casi ^os leguas < alif está
la ponia^de i^pian Váziyis^ q«^ íbrpa una ensenada coi' l^dea*
derode 6 á .7 brazast, al< ábñgo de las ^r^. Su ééia ensenada
dis^mboca on riodondíe pnede hacerse aguada , y enel Pééídéo oe-
eidenlnl de ella bal in islotjoo <dn dondetestá'la Wlhi de <4i^pano>
p. sBoe. w
al O. dt la ovtf y á 2 iHuUm estáa la punta y JuarrdfialiBaav^lpK
tiene también un islote inmediato. Desde |wala y JDOlro Salim»
corre la costa limpia con yarios faralloncitos pegados á ella, hasta
el morro Blanco que dista una l^gua. Die allí para el O. corre la
cosía hasta la ensenada de la Esmeralda, distancia de 4 leguas, en
]a.cttal eiltalasisasaBadas.d» Lehrancbey Gaírrapatas.^oad(MiÍ9lo-
|eB..Eá morro áe. la Esneralda es «a is'ote#«paiiad;0 d« biioata pw
«a..cafialiao* emamúe medio cable. Entre LfbrftiM^hery mono E&*
naralda 4iai ooo» iehie$ baslattta.fofira ideóla €/mlA llamadas. Gar*
rsHPoitaft.. .. r. .'. '
ifííp i^./0* del morraidel la £sm»ml^.le.foniMLiiB)abgraQile aaaa-
nada; pero etíá obsir4iida< por un (dacer de íondo muí desigual ,
«abaa^el .cual se lea^náan ties idote& . Se puede Jondear., sin em^
1411190 ^aiabríga* y cecea^dal morro. I>eesta.eDHaadajbas|ia'iafiufi(a
^> mno del MauaoUlo, distancia de casi ^ leguas i.bai f laecr.qne
aalf cono na tf rokiáfiaiiUa ¿ euslaailiuna anaan^ Ja) peri».aLisbrittda
toda poTioL plaaer« Ai (X dé elia^sí^pe ia coala aiolliiafNa)iiiiala la
pti«ia¡d0 OiürapotUBO » .distaaeia de f 4/21 leguas., desdcula £aal
aia^iifiTffi ittu iplaeer.df raaluea miU¿i al i>i. E. . .
. ÁittiHi ieona dafnia puata^astá Ja (anata, eaitacpadá y alia ^ peno
i^ada a^.oorxavGoittD al Ni jt^ y imai tava.yi attiegadíBa ppr caá oua
faigua^ ea.doBida¡&a4evaiiíft'e|jw0it>a(4e£bafMp«tejqao foaaajuiia
poqla saUaote de caaldos» imiáa^*
' £Qiiai<JuándiaBOs4eiS6oj!ro.4e Cbacopata se¿kaikui. la pmMas
Oiéeataieftda la.iiiaude MargaFüa que forman coa ia.coetaittn casal
da caes ^laffaaa , e» medio del cuai asCáu las^áslas de.Cooba yt^u-*
higwfl» perieufleíento á la provioda de 'MicgarHa^
.SteJeiJa püttta ómaiiríade ^CbaoopataieoEre (a^ipita al.$. locw
maulo una-gcaaié eiiaeBadaí.eiiIaq|iefistála itfiíkkác^^aribeaf el
tíkÉ^eo dd Lotes. ^ >
..i)aye.aUí*itoiÉ*e'id iccBlaal O; bastan^* pan^aeonbealO'algnaaK
Jwotet'basla.ieliiÉODria déla Paña que dista 4 Eagvaa^ y desda esta
btij^ifdgo fttraiclr^obaata punta Gocda» ia.osal .íamna^unaiense*^
9ftdeiihiipbya¿>y tíeccaimúi baja baatá ia;|)Qnttd6oíiiaadiia^.GHa-
HMW^lM > fwrmida poc.un.pedaEodeileoitea eioaiyaiíl^.yaiUo^ 4|ii«
sfi)QfiffAtaa9bf]ifeíy«itiewa biya.). q»fdaoda^«slado. par elU: mel
Mi^ l mAmk i«ue¡^ easeiiadá..hai. uaa (Huiáke «escarpada do
^Mi4)í(;(W44 e>t«AsioQ ^ llamada de Ja^ Aunas, fetaenaanria inane mas
^\ í%^ ikt»^ñ id« ipmta Cyeniai: laide. iC¡aobiu.,Dé tquí «cobünía . k
«•í
.*•>. •:,» .
y^deaúiva ¿ pmilük'áf a ^ ^Mfst» toda ba}a y playa dé* airear; ^
^lMid0 eiláD'laa fomonaaallaa^tjk^ Araya^ fisrtac^ta de^i^faifaéohtH
BinttoiiwiA S. ^. Av. lá di6ta«iíeia4e 2 m'rMad hast» )a poma de
FMdras, qw^etíá itonaidapor el extremo oecidéntíil del cerrt) de
fiuaianaohe. La piiiila foraia; uá frootoa de meála nilHií, y ^ego
seántemíMla tieito alia dél^oenrroiy en su putfta rtias n^eridioiial
está el lugar del San loario del Nuestra Smom de Agdasanla. 1.a ee^la
«gueHel attmb tnmbo del Si. Si fi Hasta la punta dM Bañrf 1^0)1 ,
pasÉero'd^'pé^yaúdeavéiía'baja) después «setfrpádiá p('r(> tioéla'liin'^
pía ; eafella^seíorm^la'etisenadtái de Araya, en duya 'punta meft^
diaaifiliqtíe éa (irhieiiiai'al- oerpo esdarpude del B&ff^n /liftMa^ ikt
castillo, cuyas reliquias aun existen. • !
La coait sí^e al 8; E. á la pmtadél Canel, y óMónec'ése dtf'fge
al'Bb Si E. por ^ds¿>5 leguas liaMat la pmitaf de Aréáas ; qat as la
meridioMd d« «tá cosCa y Ut sttelpfriotial d^^l golfo de Garíéco. &ñ
la i (mota: meriiiwiÉi^eakárel)nioilo«detkvnaná. I^dfa. punía es V!é
acena.fmi¿l)ajaiy deadeetta sale yará' el^O. y 9. ñmplaeerftn
aoao<yade^.q»edef>ratola($e paaa de'(4'á'5t>i«zas> y de esta' pno^-
(«BAidadJbastftbararv £1 veri^del plaefar «qtie desdé lapu^rté corre
plirA'Oi'»Si y ^' mantiene fu «i '|>egadtf ala c^a , forina'cen eHa la
bofii dei tfo.llittaiiáres ^ desda ta^snal fa sirftóndo fára^el S. O. y
yieinwia eolpinilái.I^édtBa. La pobtoeibn y daisfdfe^e (kráiyaiiS'esi-
tírr^á éa^iiemlaMa/det>a:pullla' y á etflla^ déFHd'I1ái)zai)áfe^v 1^
14 laja delierveno y mas «epeade'la'pdaya hal uafa'pbblaeiofi^'de
ioétea sa^amdaidéila de Ctfoiai^ pot< elmeneidnadb rio. El'fdiideap^
déroeitácKlalTrettlaióia) O. de la«bocá áelHo.^De la^pntiM'^
Piedras continúa la coala casi al^.' pm^'^p'^s dé- mk legcra-; tfnas
vezes escarpada y otras con playa de arena hasta Puerto EsoendidO;
que es una. ensenada que hace la costa y tiene como media milla
«otí 5 tm»n4e:foádi» aaí M< tñlM^wki
. Desfie4a4MBta>écoidfOial de Puerto Esde^Mb <X!ftre la c6l9(«^l
(O. I esetriwdái, perb lii&piaf')]Mitía;puiiUde^€ai«ifHáiiQi1t6. D^íi^uí
f^lfOiovro yi[ígíai4e' MothfMM 't(ai'S/4<dé náW^) y eMm\k áM íc
iomlaiiiié'gtgtidíi y biih*ncm.eiiMiiada cowfénifodt^fide 4$ tr^^
4ihr4ziA,¿ii»nesdeua'Cal>te.^ékí>eoBtái - '<
lafVigúitde ModwnddfsyíliaicoHie'alO. SiiOMmOi tengfÉdfa^dk
itierra ^eesílaqiteffonm la^ylafilaorlbnláldáíipiímc^'ife Méciilmá,
calas ó enseaadas qiia soa iiiias dánenat naliiraks^ con pn^to»
clonado fondo qoe no p«sa de -15 brasas ot liaja de 5, i un cable
ó cable y medio de todaa si» costas : eatas son en so mfor parlé
moi limpias ; de modo que con .solo el cuidado de pasar i cable y
medio de todo lo visible , se va libre y separo de enalqeier rle^«
Las dichas calidades y la de tener la salida y entrada franca coft la
brisa .9 baoen qne sea el primer puerto de toda esla América y que
se le tenga por uno de los mejoras del mando.
Como á nna milla al O* de este poerto está el de Ifonare que
también es ipoi hermese : en todo él se baila fondo de 45 á 5 bia*
za^ que se cogen á medio cable de sus riberas : estas son limpias ,
sa boca es espaciosa , y se pnede entrar y safir de él con la biisa y
á coalqnier hora.
La pnnta ocddental de .este puerto se llama cabo Manare y y
desde ella corre la costa como al O. S. O. media legna hasta punta
Tigrillo. La costa continúa bajando-al S. y E. casi ana legua y des-
pués vuelve para el O. 4/4 S. O. rasi dos legoas hasta panta Gorda.
Es el fondo de esta ensenada que se llama de TigrlHo, está un ca^
nalizo por el cual se comunica con el puerto de Mocbima. Hai en
esta ensenada 5 islas llamadas Venados y hs Caracas» Al S. de la
punta Corda y á distancia de una legua está la punta del Escarpado
Rojo y las dos forman ia boca dol golfo de Santafé. D^e esta
punta baja la costa al S. y luego sigue al O. la distancia de casi una
legua basta la purta de la Cruz. Como al O. N. O. se halla k isla
mas oriental de las Arapos , distante carca de una legua. De la
planta de la Crui; signe, la costa al O. hasta cerca de ponta deCo*
noma y toda es limpia y JiOQ4able.; aUi termina el tenitcnrío de
Cumaná y eqipif za la costa del de Barcelona.
GOLFOS.
Entre la isla de Trinidad y la costa firme está el gran golfo lla-
mado, de Paria , q«,e ofrece segnrb abrigo.en las embarcaciones ,
pues se puede fondjear en coalqui^ p^rte de él sin el m^nor ri^o
y por el número de brazas que acomode. Se diría que este golfo
d^ su existencia á una .catástrofe , pues la isla de la Trinidad está
indicando que en otros tiempos» báciá parte de continente ^jy lasii^
las entre esta y Paría son como reitbs del terreno sumergido. Se
caHra á es(e gran golfo por dos canales , uno al N. y otro d S. : el
del N. está dividido en varios boquetes por algunas, isla^ ^ y en.el
— 5é5 —
S. hai un islote el caal despide bajos fondos de piedra que son pe-
ligrosos. En la costa occidental de la isla está Puerto^España^ que es
su capital y en este punto se reúne todo el comercio de importación
y espoTtacion. Nada seria mas fácil que entrar en el golfo de Parla ,
bien fuese por el N. ó por el S. y navegar deutro de él , si las cor-
rientes que se esperimentan , dftoianadas no solo de la corriente ge-
neral que en toda la costa de la Guayana se dirige al N. O. , sino
de otra' particular qué causan las mareas, no presentasen algiin
estorbo, que , aunque pequeño, es menester precaverlo con el co-
nocimiento del efecto que causan en los diversos puntos de él.
Ed estos parajes la estación de las lluvias es desde julio basta no-
viembre, en que las brisas ó vientos generales, sobre ser mui cal-
mosos, llaman al E. S. E. y S. E. En los restantes meses sopla la
brisa fresca del N. E. 6 E. N. E. : esto y el haber dos bocas para* en-
trar en el golfo de Paria , induce á preferir en la estación Ilufibsa
la del S. y á entrar por la del N. en la seca.
En la costa occidental de la isla de Trioidad puede hacerse agua-
da en muchas partes de ella, desde punfa de leacos hasta la de Brea,
cuando Ih marea sube y va el agua en la dirección del S. O. ; y
' cuando baja en la del N. E. Del cabo de la Brea hasta Puerto España
sigue la marea la dirección de la costa con cortisiiba diferencia ;
esto es , se dirige al S. cuando la marea llena y al N. cuando
mengua:
' La entrada del N. dé este golfo tiene 4 bocas llamadas de Dragos,
las cuales están formadas por tas islas Monos, Huevos, Ghacacba-
cáres y la costa. La boca de Monos es muí espuesta á calmas á cansa
de la grande altura de sus costas y porque siendo angosta larga y
tortuosa -está llena de remolinos : es acfe§ias la única que tiene ba-
jos ; causas (odas para que no sea frecuentada.
En la boca de Huevos , cuando la marea mengua , sale el agua
con tfna velozidad de media legua y mas, pero en la creciente casi
está parada ; esto, y el ser la taas corta de todas, el hallarse á bar-
lovento de tas otras dos siguientes, y el ser enteramente limpia, la
hacen mirar á)mo la mas propia para salir.
En la boc* Navios sale siempre el agua en la creciente con una
^velozidad de media legua y en la menguante hasta de 4 millas : es
mui limpia y ¿u establecimiento se efectúa á las 5 horas y 59 mi-
nutos. Lá entrada por ésta boca es solo asequible cuando la marea
■ llena ; pero eh camWo es la mas propia para salir.
Sa la boca, grande sale eb agaa entiMtrcía ymúfHe)citá menor ve-
JozkLad que par las otras tr^ ; y m la creeiente queda ccisi parada:;
e$ (ambieo basUate UiD|Ha y su anop^Hud permite bcM^dcareoiuo ae
quiera ; esta es la oías íreeuentada por Ia$ ein(bareactoit«8 qae \sm
.al Gqarapiche.ó á Gñíria y su.costa.
En oiuguna de la^ 4 bocas se batía fondoá ^í^bcazi» eanieiIiD
4e sus canales, y eoa todas, 6seeptuandoJospi|fl(o$>^e$e^etf.e»la
jdart» marcados con escollos, puede atacar uo: navio Ua$Utoi;ar oda
&«9 penóles eu las orillas. '
La eolrada del S. tieoe ttmbieu 4 eauale$. El prijüerD «^«(^ne
formaH la punía xie Icacosy un bajo que bai at Oide eltaádistan-
cia de inedia 4UÍUa,e) cual de IS. ¿O. Ueue Cbmo^dos'cables de^-
teBsiou y i 4/2.brja^6 de agua sobre piedra : ek can»! ttefle iOi>ia-
2a». La eorrieate en ^te- cana) se dirige nl^, fO/em'la^i«teie»le,
cosí una YieJUxüda4 de 2 1/2 initlas yalN.p.tea'lava^í^^te cotila
de 5^/2. ' . ' "
El segundo Manal es el formadia por.diqiio bajo de piedra y ua
ptStcer de cascajo y piedra que d^mora.al M: O. sobre d cuai:bai4^
' brazas. Su esleosioo es de 5/4 de miila: en díreccio» N. (K S/E, Las
eorrtenles f Q este canal ticneía ca^i H n&isina ijifeeciou qué eú el
anterior, ym ancbura sera.de una fpiUa.
El tercier canal ea «1 forn^ado por diebopbcer y ^I isk)te áel Sol-
dado y sus arrecifes y bajos del S. y del S. E. Este cañal tenBrá.de
osteaaioa de E.áO. dos millas est^smsj y en «u.n^iod.tnefttas y de
^'á 7 ep los costados. Las aguas con en edta creciente al O. 4/4 S.
>0« con yoK^idad de 5 -1/2 mijias y en la vaciante .a) N. O. y 0/N.
.0. coii lado 4 y 4 ^/2,
. ' El, cuario eanat es el firmado por el* islote Soldado y ^ eaxktíneikte.^
Tiene de estensioa 4 millas : sQ corriente se dirígo- siempre al N^O.
ú O. N. O. con velozldad de 4. 1/2 á 5 millas, en ifte#4o del carval y
áInmediacioQfs del Soldado ; peroá t/;^ milla de ia. costa .^mejsu
vekojtidad st^lo es der 1 1/2 á 2 millas.
.De todo lo didio resulta, que en cualquier tiempo>i5e puede en*
trar en el golfo por las booas del S., y ^un da^noi^, como esta sea
clara : que la mejor boca 4s la primera, oo solo porqüie fsti á bar-
lovento, sino porque con una simple orzada so ircrt>dsa todo*«l«íe9fO
que bai, especialmente en marea vaciante, pues que se pu^de pa^r
á. menos de cable de punta de Icacos de la costa de Trinji^ad^
Las costas de Paria pf e^sieatan ua terreno i^itbi^to de seimiifti
~-1
— M% —
eott^nib «f^etiaáoii éaüibresa : fw dias caen <5 1 ríos al golfo^^fon-
manck) vaMes Éemmaoajy bit«Ébs:.piie«les*payta embareacioiue^.per
qboias, edireaBenins, baduidis y piiebém» Lto-oostas del Go^rapií^
éhe y de-las booas^i^ ddte del .Osiioeo soq al odétararío : Icrveute
bajos y anagados., «Qbéentoado'beaqiMs st^üatiofiqHe dajaB'^apéaas
peiGÜMr kU'bocasrde'tosiiosf eaflo&y ed námeraée-iihpor lif^s «oa-
tía nsí aisgolf o. las sguaa áe -lO no»; aaí omdo por S tkMaasée M
óátosdebMte eavláélt iQríMco tina * gtan parte de las suyas al
CKoane. lia» marease» el-. ^Ifo, báck éataa costas, se eUrrafiíaadM)
yjBubenüafitaáO ó übphés. £1 %(AkyJáme29 leguas: de E. i O., 'U
4q Nv á(S. eo su ma^or ancboKay y 8d,de csronaCereacia. Se* cbaatt-
nica con el delta del Otáaóco par idscaiosPedeiniáles^.Majeiaaia'y
Yagre , y con el interior de las provincias de Guayana y Cumaná
por ios caños S. Juan , los rioaTloapai , Mapaei , Goaoipa y Goa-
rapiclie.
£1<^1Í6 da» €arítt80)pfÍBQipia(ea:la8 puÉnta^de Ornaaná y de-Aré-
aasdé lapiniustaki deAcáya^ entra -lasi caulas hai ttoa dislMiera^e
4 miái9B. íPttceceiiae ddbe au exisleaciá i> un rompiiDienlo dé tierras
acoaii>adado<de n&aairro{icieii del* Ooéano, catáitrcfe qite n(»esfnQi
aiptigua; pues su meÉioiaaise oaaaervabaientre loa indios' bastñ' Enes
*del siglo X¡V, y .16 dsenta'^oe ea larépóea del teroer f iaja ée Gás-
tdbabColali , :ia$iddlí9aoffli kabiaban-de etla eoeio.de aa aeoaled-
aaanterjmtti'iacieiita. ti^te golfo cpie iien« aaanaaüalss cdi^ntt^y
submarinos, se interna al E. ^ ^ -1/2 leguas y en su mayor aaupIMad
Heue tr0s. datáamm siiis fliareas» i las iafuaas 4e €ai(íaai> y Ctam-
fMMta; te ntéamá^nmm eü de 24 Wguas-:y fte^paade^oiiiiar ^seiüb^n
glande y abfifadaí puerto,. padiéndaBei dar üaado eii>ettalqttiir paste
da éAiy pB9 llegAjsutpfOfíaááidad Biayohllasla 87 inásás. itas^esatis
ssu: nioi iüu{das :y. puede aitraaarta á H /2 tkiléa , aréaiis^ai>«st)réi20
Qttevtíikly e»*<ldade;:estraalM«dosa»bBtfaíiaiitta», sbifonéo esipaeo
Y soto aitnne.paqairpBqiu«fiafseailKarcacisi|es::La cusía merMioaal' Ja
forman unos cerros cuMeclres de.hal»laei¿aás<y bacieaidas, esn mdl-
litud.jcl&ce«Ble»iqAe daa'«i paiiai&Ma>wta pMóMscé:, tfiíáñtras
«1 opueiNai, rtfaa.<^séavpe6QscaBa y ealiMl^ii»
(broMidas^ por las^agaas éñ nisaMJgollb. La (OaSf es <el' pumeMfsl-
Mera, easi:redoiido:popd péqueík> ; ia otra la lagaan^Cl.icaf cplcí pn^
jreee una koya.nim neduci^*; tíísi» despms lagiaia Crárider-ó )l^l
OWspOique'mereaeuQa psrücaiar jMsawiion : sé fifUM as e^iMf^
dÉMfia; sa oaslaiMaDpaÉtey.p«uái43MileAiun4aspc€to y^ é
imponente y la embdtaMn algiMias feqw^mixia¿ Tiene de looé^
de 9 á 20 brazas tan ümpio y acantilado, que paraaavsepr en él ao
hai que dar resguardó mu que á lo visible. Tkoevaa legna de £.
O. y mas de milla de N. á S. La última boca es la de la laguna de
Gnacarapo, de usa lepia ; pero solo sir«e pan la-péica»
£1 golfo de Salitafé se Interna bada el £< €imio.2.1egfia8 : soscos-
tas son muí limpias y su Sondo* de 20 á 50 brazas. La baroera del
N. es escarpada y peñascosa y ai paso qae la^del S. e& llana y baja
cubierta de manglares por los cuales desembocan 5 ríos loecsunles
forman otros tantos valles que so eneoeatEsanen medie dedas ser-
ranías cubiertas de una espesa vegetación. £1 ancho del gdfo esde
mas de una milla y su circanferencia de 6 leguas.
*
ISLAS.
La mas glande de todas es la qoese -eiiotteatra ea el goUe de
Paria ea la boca del Guarapiche : tiene & leguas de largo y 5.deaa-
cbo. Al S, de ella está la del Yagre separada por an cañad .que tiene
mas de legua y al N. £. las dos.denomiaidas Areaay Aniica ; la
primera de 2. leguas de largo y laaegunda de una mitad mas pe-
.quena« Todas eUa& son bajas y cubiertas'de arb^eda en pasto y efl
.parte de arena. Un, bajo- fobdo tienen en el lado oriental j. perenal
opuesto hai canales pox..doade pueden pasar peqaenas embasea-
cienes.
La isla de Yeoados ique está cerca de la boea deLcio Chipa, en
el mi&mo gotfo^ tíeae 1 ^ /2 leguas de largo; e& tamicen miii Jh^ ;
pero entre ella y la eosta hai an canal boadoj nüairas^que pea la
parte orienlal existe aa bajo que se estiende muchas l^uasalnera.
Al S. de ella y cerca cí^ la costa están las dos islas de Guanipa ^ue
se hallan en la boca de este rio , y entre ellas y la costa hai paso
para lasiemhareacieoes quede la bocada Guanipa suelen ir á la
boca del Yagre en el delta del Orínoco.
£1 islote de Patos que est¿ ea la dineockm de la boea grande 4e
Dragos y varios islotes cercanos á la costaiy ai promontori0.de H-
: ria^ son altos y escarpados y taadbien deaerlas, como todas ka islas
.«delgolfo/ Ademas délos islotes enumerados en la desoripeton déla
coala, hai unas islas grandes entre el puerto hermoso de Mociama
y -el golfo de Saolafé , llauMdas las Caracas : están en la ensenada
del TigrillQ* La prinMia ó del £. sellan»; de Yeaados ; ta seguada ó
4kl medioie UaiBftCttrmiMtE. y !« tirOihi^, (Sanca del O. Shs
costas aoB nMtbMnipíaB'yiBolo la punta N. 4e>lA de Venados, que ie
llaoNidet Qamfanatío, despide- á laa^sma paite nna Piedra qfne
sale «SBid á na eaüe de ella. Todds los pasos 6 ftrem que forman
dícbas islasientrení f «on la costa €mirsotfliMMas para cnal^^iera
clase de buques ; yannqne aignnos sean algo estrecÉK», hai en ledis
ellos senda proporcionada á 'dejar caer nna anela* én caso de neee-
sidad. De lo única ^ne bal qne* resgnaidMse es de un bajo de
piedra llaasado é» Canicas qne se balia algo al N. 0. 4e la Caraca del
E. y á-disiaoeia de ana mWkn lai^.
MONTARAS.
• »
£1 cerco del Tnrimiqnire se.presenla oobierto se socnlentos pas-
tos hasta la cima redonda, elevada 485(^ varas. Allí sobresalen dos
picos revestidos de una espesa vegetación, eaya all«ra sofc^ el ni-
▼d del ma^ es de 2.454 taras* Esta grafti mesa «stá en el eieniro de
la sertank dé Omaná y BasoeioBa, llamada del Bergantín ^ y se debe
coBaidanr como'nna l^oiongaeíon de la cordiHera del interior de
Caracas. La granee abraqncdeja esta al Sj de^nareelonQ, de 2 ái5
leguas , cuyo sui^ se lerátita 60 varas sobre d ffivelde las^agoas
del mar de las Antillas, ¡Muía creer que k mesa del Bergantín 'ño
baria parte del sistena dotla eeidíHen de Gai'áeas-qne^pafecefeiMi-
clúir en el cerro de Paranlata. Pero si se echa una ojeada sobre ks
costas'del cabo Codera y sobfv te de la panfo^nla de Arayay Parla
y las de laésl» de l^rinidad , Tiene^l momento 'á la- fmaginacion la
idea de si en- fieaapos semotea femaban aqneltas costas una soSa
eadeiía^ qne miagrañoalástniCa ha hecho snmergir, las islas Borra-
cha, Cbimanas, Picoas^ Caracas, y laade lA bocas d.eEN*ágos parecen
restosdaaqnel nanfiragio. Si pudo haber tan gfande interrupclooren
la cadena pnMpal,.no«8^ aátntrarse laéopeesfcsnó inlerropeíon
de pocas legoaa en la cadena dd interior, il^bia en maches pnntbs
cenaqnolla; y así-, la eonstdaramós como nna prolongadon de la
delJaterior^dn Caracas^
Al Si de los píeaobQS'del'l^iriaiKpiire salen dos hllefas de cernes
paralelos qne forman el valle estrecho y largo por donde corre al
poniento el Nev^rú La* meridional se pierde cerca de Aragnita,y la
setoikianalá las inmedwcéone^dePeauelo en- la proviada dtíMr-
cekMuu Ur primara dirige varkMi4»nijiÍ09finl:N. Ibrttando d valle
^misi dkiipo MftiratiüicsKáQfiwikl )6.v(dgind0RJM«^fiatoanmálliflfe
nasa )efr«];«iQftiá 9mAr9<0\ .^;^iM/IMiÉiqÉÍRt:ijée':]»ián»ii»*-
(fw! fffoUilgjÚMlMetfor jéipim 4e 4<*igiHt»ÉáBÍa £i iNh^ct^iuniíto
ait^iTO de'])asLagiiiMs<,.clenwelo"l;<«fOO ^^vm^hifaiin Amáñeos
ramales d^ u«a(osJa«i«tKi«ift ; ««nofootmi al feokaie ^ifanoaiid^la
barsata: lotf nflioaaTítlal ^^aMondeCasíai» y ífMi4l¿all«0e<Wí)(kWMiá: ;
el otro ramo se dirige al oacíenie'V fáiáríOHMi? elnéif MeoMÉtce del
P«rgatoriO; el célebre del Guácharo y la elevada y piotoresea mesa
del Guardia S. Agustín , cu^ «<mfigciJ*acíon parece indicar que en
oíros tiempos era un lago alpino. Esta serranía encierra con otra
qiM ^i«MidafeBk)«Ía,:«y»{qiierfl»4B|a'HMiill^ i]dL[r«nn»|Éire,
ki5 ^H)a»*ile«^ fl^ramaoo , Gntaatogwtoa.iy'tOalípe^'SÉteioifeáíllMis
IparaMais a6rpMrrieiy«obie'M<^!Mli»^S. iiiatt,(«iireaKJbAá:lMv^
Canp»^ 4«» «sMhoe nt irMiaiiiM háeiBi/UHttL, Amci^ 6nDBi«^ irra-
(pm y UuBcéras vf^ft al «mmicafytoitoiiflBtila la miniad
defnlii^TOrdparí(«tV(M»)mftHíaoad«Bníi«Érid «ÉaeiiMfitt6riáÍMaatde
lá islaíy y toito-ftaiM d» élla^aa élmmíi^ vu'iseiAm; de cfAedaas ¡que
'e3i»(e>iiletej(>>M agsay éeídbfla cusía firmé 'bacila Mi « La ovni-
Meaai «aa^ütMlriMMrl fteaio ai^fiieUadle.GuÉitia; «Biel.iteffooi<ieS.
Boaiferái ¿útttnaiWMiiiaii á»laaaa»a»JaÍ)niaiiH!á Si, k^ásúm», ém-
píée Oft laflMil, nqu6^daacaii»M«éa*ttnr.s«iHKfft9Í0 imé ímineilas
e()rf09fl« lo^.pi^MÉiiilarávrPBrH^ éejaodo^almatíHÉteualvflriledito' Ca-
riaco y la lagUiía'tQflniifMiMr; «i^'praienl&UáKdti fliíaMrspe^^ lai Im-
gona Btttia^iMl. (fttmU á^Cwaatft a»*difaarfiOiiAaiife^pkey.da'4il6
ywB$de'^Um9¡imimm aat*^(X)fidilAtftt>caA»i»ipeímHe4«'l» pt^
M^anlia de ^af a,, ¡laMciél ^Hít& sacáBaiduef ée I& Aardütaca de la
eoM^ée €i9ititmyti^ ^ifnídé enm) dabO'iOtídeB» y nnaNejé'apa-
itf«dff<«R iai ¡teB<liiiiaiéerAiiaya^gigHÍerid»tfi>^ ÜeiMnf y^iahiiaBio
á qiijBdijr «mlfiWiBtpiUti an'iatfééafcsidpftgágéa, »fMpat'"""r >»r
liUim» veaaolto^iski.ida^jKmiM.; iáiiiaofdílMa.;e0ci«^ yaneiS.
y por el N. multitud de valles; pero los(«Éft;giPMáa»iaeiii.lQB-ide
Y4igiia|apa«0' y Sal^a iIfftMyf4ir:«Bii)Mie^>Gaaéppari y Ai«-€aribe
l^ofoti^a. -
£1 cerfa/da^Meapirei|«wqce?tf»iii|Éfi.toaa><eiMri/qitteM
aflrtíUorM/kiiiklílilwkfc^fdítfíainittatMM^ Iftemia)
de foimaeíM pfiimilif% f q^unee(iisri)B9ii JÉdn^Míitfda d omi-
batían sns bases, por()ji6 siaeste.^ibftiii^o'aíl biMap ^íOMi^im
golfo» de Paria y de Cariaco. De este dique sale un ramal al S. que
se pierde cerca de Guariqucii;, encentando por una parte el valle de
GuaearapO) y dando origen al opuesto al de Cok»ar y otros.
«1M<
/'i;
Pe la fOfdiUeía Itoada del .Beig8P(i»^ll 4»iCiiim|in^«alflib4:42
tm dei .4.'' órden^V deii^ <eiiai0B 40) ¥iiard«reoMlk^e(r¿ ila: mw ,
siendo el principal d^4^Up^lrMai)Pltt«|es6'GQ(io
Parta van los aguas (^ |ianti«0<MI4dp ¡lí^xia».; ^A HW^MtooeiMle
de.ellostes^el Si. Im^y m i^^^'mif^M*m^iéí(&(m MMm^j
permiite.s»Ur .por jél.b«qu«»(akffíiíar^f >qw^
.pficío.de.i4!liífii^,y^,py|^;SÍ'S99m^fm :ii.:.. -
saje» 2A nos tAqrt)í«n 4a 4 . ""ióftlsi^, ^l4»fikWffMl4^^^^itoac€M^
ci Uracpa y e).Ti|t)$i»«f^qii^ Uw«i^el j^
ciony 5.0la0gQiidC(. . í , i :
Últimamente.^ del. d«lla kéi^irQmo^m^mffm ff^imtfmíá^im 5
oanosaDavegj^kis, ^u^y^^s i%i^»tpi«iHPni ds^tfié J^f»; r^fte»^ «Mos
•esel ^oaSo .Goacgi^po « giMi^rfiiece -|}7f Hi9ia»)4« M^ñiogpieMif .»n
agnas.(^«eidaa» Los o|nc)»{pBafMOMi|im'l#ito el»a8o ««f^gacMii pora
peqoenasi embascattion^s, yy ^l^ s(|q>> AliMWay- f^^)&i'íjMfaito,
Guaran y Guama]j,.§»ei d^{i4^ "i 7 y ^.^«
£t total, pites,fde lo»iri0Sfd&>4'^4kd«aHeaf(l^':l7é);im(C0fifí4erar
.mnllitiid de dacliaeliss.da.fqiiiiQha ag»a.>ea%]^'9l«§ií^ ^taif^i^
viocia tiene adex;aaa dos i4o#iqiie son^cpiípideya^^Ms^^coflWhii^'y 4r-
den de la repúhiica.;fii Guripa, da; 7i& l^f^as^t o\m¡»'^f.2A ¡de
.nainega^ian. Nacerán larIneaa^d(S.aa mm^a ^ itsriipiía «n^^el gMfo
de Fa0ia ; «I Q(ro>es^«liti«|iiif^«€Hi 7^1egi;ia»'da.ai|^^y44ffle ilfUV-
lacio», al cHa¡l.tiea^ 10 «igen en.laJ^ma^pno^miaía ly.^ m^Sutato
de Ja expresada rsiiesa.,^ . ... < >.
Entre ios rios' da S.*" orden hai ftambian 4oa, %«a son el 'Oiiairsai-
piche y el Moiicbal Lacgpi. fil^primeprp aa^a^as 19A «BriTO-^e' la ía*
^na, Ikné Jdu cvrso.de 54 legiwa y 23 danatagaaion^ Eksagimio
aa forma eo. la mesa.de su nombr^rcorcajlif jfig<iaa¥iPiap<ia«te^^
92 para buques minores ; siendo ademas d límite poi^ el estremo
Meridional de las sabanas de este territorio.
LAGUNAS.
. La lagima de üfMnavista 6 de Gampona se enenentra circundada
decerrosioBiediirtosásasorillasporelN. yS.jYporel E.á4 4/2
le§^a de distancia , al paso que al O. está el abra del golfo de Ca-
rneo. Las 'agMs ifom deseiefiiden de los cetros cuando llueve y las
que llevan los ríos Casanai; Gedello j Aguacafiente , son las únicas
faoooBservawlali^iitia, la cnal parece mas bien una bella prade-
fia, parqM aesí'toda ella estieobferta de alta enea Y espeso junco.
^m oríMm toft aMoasas en leda eM, "f pw el eanñtio que va de
Cariaco á Gasanai, por casi 4 4f2 legua bal un terreno tan bueco
qoe al ^paisar sobre él o^ d camfntiate resonar sus pasos como si
pisase sobre una gran bdvcfda. Eli los bordes de est& laguna se en-
^cncnMa laMibiBi» IttnAídoS'de baber arrojado áHi fa tierra materias
bitun^inosas. La laguna tiene 4 4/2 légná de E. á O. y 2" de N. á S.
€on naa circiaiieraMn& de <( 4 ff . Se comunica por un cañb llamado
- lía Gampoea es» ki'iagiina de Cariaco, circundada dé bosques. Sus
bordes llenos de mangles se ven, á causa del ff<ij^ y reflujo ^ alter-
satiiíaniMite cubiertos por el agua ó' fuera de ella/ espüestos á los
at^ores del sek Pf&r «slO; 7 por 4a bbuiydancía de materias vegetales
#n pvlraficeiOi produce uáasí eíbafaciones perniciosas á la salud.
La kigona de'Cariaod comdttka {k>r ínedio del nüsmo rio Campona
al golfb de Caríaeo : tiene una legua de N. á S. y oirá de Ei á 0. con
% de circunfereueta, en parte cubierta de junco.
Deia laguna de (Jampona bacía elS. 1?. 2 4/2 leguas; está la la-
*''fUna de Putucoad. Sos bordeas dst&ñ al pié ié los empinados^ cerros
de Savácal por la parte del N.; alOlla montaña que se tine al cerro
de Meapire ; al E. otra hacia la abertura dífel valle de Guacarapo y
Meia ei'IS. una «ílva anegada yatascosa, ^r -dónde entran á ía la-
guna varios rfos que ifác^'en los CerMs de S. Konifado : tiene de
largo 2 4/5 leguasy'una de ancho, yS^dc circóiifei^éfacia. Aquí se
forma el caño de S. Juan, y aunque distante ^2S leguas del golfo
Triste, se siente ló yybstante la marea hasta fa laguna; de modo
-qtie el cerro de Máil^ü^ es'd fitíícb obstáculo ^tíe Bai para que las
aguas del golfo de faria no se comuniquen con las del goTto de Ca-
riaco. En la sierra que le sirve de dique bai una multitud de fuen-
tes termales bidrosQlCúreas y un terreno hneoo cuya eoneavidad
parece estar de E. á O., qae en Jos gjrandes terremotos de 4766 ha
Yomitad^asfaltos enyueitos en petróleo visooso» Se encuentran tam*
bi^ minas de azufre.
La laguna de Gaarapiebe se forma p<Hr les dernuaies deisglw rio :
tiene iftuiidfuH mA.<if«n 9^^^ ^ tirano y.ni aiafait calidal'se
Ya por el^^cAftQ.ColomdO; que 4ebi<^ -ser >eo:olro Hcüipi el etue» ¿éí
Gu^arapiebe* Esta la^uüA tieiÉe^ leg«asd&-NUá S^ y^j» tenta^de
E. á O^f i| de circi}¥xferei»(sia..£a éj» tai nmahatepltatas 4$mm
y jjineoj) y ^rbpW. que pareen iibiiaiiegato* , ' ;
La laguf^ C^pm^ej^ jperca .4e Mantria, jH mlmlumé^j etsl-na^:
dpnda ; tiene .w^ Uigiia de ; Mma^^ f bai m «Ua «ielio»pti»f*
las orillas, oireces>:uHilt^<iinbf a. delieioM', y iSe^pttfUM f«e>eo««»
nica cQ¡í^ el xio Guawí^ por ^m p«9iietto eailOf<pa «eHa iieae; p^nr
nadie baj^ido trmi^te.í.^ama di) ios e8t«rbM>de palo»€fádo8
qpe ^aei^euentr^B^ y fm 1^ i^Bsp dd bosque.
La laguna M«^uai;e a» vfm pittfueííd p^ms^ uMQoioMte; MeanF
solo media .l^ua de Jafgo..y mvedia miUa.de Bimbe«
^^^ .un^^tioplar* mmeíoB iadts OuMWMdoi» que permiie
una escelente naviegnms á lat balaudM y yctquaiat golalas qfm
4es4e Trinidad. yieikeii |pr el qapSiaManamO'á.tiaiearéOBios^ Manos
de Maturin. Es f^i^rtemente hecm^so Ver enfi^sdiode^uaUídMafli
naYegar los buqipes soibpe ^m ^g«ft iapaeibto w^mémhtéB^üMio^
sos árboles. Bai muchos pezes^ y el rio Meríebal.Lai|^ juministea
agpa á esjta iagiinifty.0iiya ftir<suaferciocJúi ea*de^^/i legiiasiéeanitio
y 4 i/2 á 5 de largo. í
Las lagunas de Yocore , Aguaverde y Guaritico ti^ea 4 4/^ k^~
gua cada una, y en ellas entran embarcaciones por la comunica*
(ion que tienen con los caSqs del imsmo Q.oq|ke que salen y eniiaii-
en Manamoy brazo del Orinoco, uno de los canales principales del
dí}lta¿ .♦.. ♦.. . ' ... :
L^ laguna» Sembosa, CWmohppie y S^ Antomosen «avefl^UMr
tainbt|3n^ pamt emtatrcaeioÉee mañoca, tan liiago.xa»o ^1 Ori^
noeo se iroffuesaréfiaimda^ caiúa OamiCfiapo, eonelntaal se^xi^
munica. ; .'':. ' v-J--; - :i'>i ^ ■■ » '
Multiiud de otrasi pequeSas lagOMA edaleBf. ;co«servia ^la
mayoRpaTtede8«&la8mia;'>pao)S«i tan pe9nííiie.i|a»fB»flMDeeei|
— ««
• »
£1 temperamento en esta proTinda varía rfagMÉrtsenfe ; ¡mes
en Ja piBÉAolft áváfiy^ieaieilliiit»^ auto f^iie^xi^ mléi^tta ^r^ieteii
ladefi«iriai«s oalÍBnle,lita*d<l<r?Wip»tePi» Siieederfe
miin»afmi ftw ¿h— tus-; rtpwniaóii'Cfctláiii f •mms, oft^aMr^enpünCts
á baAtíitaraa. fio loa italltodétevarreiii ae obecrvá el nüsiaüo fen^
nafta ^ioftW aiintaMiy. ft-oaáost, otro» iftalsatioa y dlidbs'. JBsIo
depende , en parte, dafifa» émnaúom^é^ llfti agittis^^^Miiociy, an
pafie^ JaÉiianÉDÜ» «a loalrtoa t ifts «apMB MM ^^ft^guérfain
ajiagi^M» T ^MMnmMk 1» aoj^oílifen 4^«a ae' eÉHkMlrati «lartoa
pwaini fa> tiwiwrAjlMrtifveiiio^lánwaoíii 'p<^<iw<^a: Faro en -gjiMentf
kríptOMMÍÉ dé^iGMVMáiaB'flaM'f ma piMrM^ iMftrmkl^ «é <]^den
aMiBanm.'Ua)aiÉHHid»l^to'éa^8Mftfé/eíftteBl^ áMBUfefiCnras
por la acumulación ^«VDoAiaeOss yerl»Éa iMlrÍM#, V flMHíNM^ que
8Bf eftgaA»< y> iai^ar f\wt'4^ a^ia salga ün ^)l^ 'fiífidiy á que se
unen las exbalacíMeaideéaaipflaítinioaydateselta^kmiiéaéas.
' faniart^adar'iaaiawmi y lis del "^sé^WtíSíimé'f^ las Husmas
aww n lialaaiisaÉali wi^aaMafr'en éiafcog tniiiéü; '
La« wmmáMlMm \é^ Uí layma^ IHltoctttf y'de ra4'<d^'€áriaco y
tflHplia^^ «alia aspMaia» á «rtaWWaaY tftgitWéti las orHfáa' del
mar, fresco ea la serranía y valles altos y nHi anfacáaie oá tas
t ...
« I
Es mu i variada en esta provincia. En las inmediaciones drCo-
naóá y. ittil«>pMÉíitÉla<de Umii^inÉfíí^im.ímff^mmiÚf^^^
map} f y dfwyihattQ aitiaiabKBv :ila9iñwia p^tj^v at^^pfts^' «p»» en
ekjoaatdniéei^liffQaQawHi.^ Haiiiarafó^^ lliwvé ea^ñnyv'^lwio, cesM
las aguas en julio y agosto y vuelven á seguir hasta finesHléM^
aieolbfa; 4D:4of caHÉain éiu6aaiipafló;,' Qi^rir>ytilio' Gáfibef , «m-
|»agaw>tfltt)mgffy jfc wp ihirtaf ga»ulK»qIjfflBpi?«g>eff'>oa^iigr<w P^
todo noviembre y diciembre, y en la parte mas próxinM^aiMpil^*
Paria , duran por todo enero.
£v>rtxiirtdiiidii|lm9é»t6iiilei pasta mohlMosaiiíeaeif'Bortes qM
pieBaB d MvierDO i^inesude mai^ y flan» ¡bértaí octubre : sígoeii'
después los nortes que duran hasta enero.
BSi í.mñfú^ > ptte») úeiimkignoM^ «ladnosi^ae eo«ilooeiiid«i €a-
rápano árCJuím ó4)iealiáéia:Siy B«iiía«Í0Ó'P<ii<'lá-%ÉOB4|ifi«kd« Sania
María áe^úpe y AniijKÍpayM> poflpénMB&kis-é méémééoiii Los de l09^
llanos de Aragua y Maturin son transitables: solamente algunos
rios ó caños suelen impedir el paso por algunas horas. Las mesas
presentan siempre o^i^l^qte^cai^ii:^ S^ lo^U^^s bajos desde Gua-
ñipa hasta el Orinoco , entre el delta y las mesas , forman grandes
espacios bajos. Eotóncei se^bfti;^ «ij^po^t^mente <i|i transitables y
este es el riguroso invierno que deja iocomunicado el tránsito entre
laB^aJMiiia94a^MaÉiríB'y4a$>áidiTalieaea« ' -'i ;
. WVtóltW TERIBÍi'ttmilehi
•i» •
Se divide toda la provincia en 8 cantones quer^tté^aiJosaioliiteQV
deíaa^odádes yiiriilas*dj&!sa9íoalMHér«a;cU&ioiiiitfai80D rjQnaouMiáy
Cffiíniaiiaflfiflb^ Qaciacoif.Gari^painiv Ri»f'Ckriijf&v^£^a>>^^^^9^^
MakurtQ y losCtaos>^ ^ctíaBeiiwai^ ibnraftnñst.TüsMÉ 4é pania^i
quiaa y 2S^ graadfts ^eeiiiáHiáiis^/.eis t^/OiifiéeáÍBd<«tiltáni>«acao y ca^
fá, Ganavdiiloeí^..»t9tidiidj^ «aüáiv pats^' yflcav>piálBiiBa[¿ itea^^.ia^;
aaj9aaB>iMUfli06,.aféo6i^aiaa^.|cdb<ili&sit^#n^<^^
L$ pobiaclon xki esl* f[»iKtiabia> ss paladé iJiaidiri delaaaitoí sin
g«fletti£ : 4 3/l>0É: saidedicaíi á> la aifgnoriMAia dfij[4 M>áíük'<)na; t^
. •€iiaafi¿ándeúB« eámercia(ÉaDáteaael«ia^ kstííuái'Bíit¡.Á9^^tmstv
Maaprtíflivy 'las .ci^lofii^, ¡k/amiéL áí^éstaii.pflanAflk isal«. poimidi^v
omík ; algidaii», «aaü» deókia^icadafiL^itadiaaabv alpotjaülffjeafé (
recíANflHdO'iiieDeanK^fsatas })ebtí»sídmbodag^ )1 hammioata^^toi
pncvtostde Carépaiio^iRii»jí;adte vy(4]ínr €iiH^
•
f
— 8M —
bace especialmente con la flercana Triiidadé tMvrin-liaM^oaiiicreio
también con esta isla y las Antillas , en? íando á eUas ganado , ca-
ballos y malas que se embarcan en el cafio S. Jnan 9«n caiyo Celo^
rado, que es el Gnarapicbe ó S. Bafael de Banráncvis ; y. con áa-
goslura y la Trinidad en donde ae embansan muchas molas y
ganados.
En fin f esta praviaoia es la que tiene mas costas^ pneptos y ppa-
los dtTetsos para el tráfico ; así es, qne lá facilidad-de los embar*
ques y la inmediadon de la isla de Trinidad eseitan al oontiiabaodo .
CIUDADES T VILLAS.
CARTOir DB OHMAlfÁ.
La ciudad de Gumaná es la mas antigna de todas las de la Costa-
Firme, y es capital de la provincia de su nombre, llamada antigua-
mente Nueva Andalucía. Las costas de esta provincia fueron las
que primero descubrió el inmortal Cristóbal Colon, en su tercer
Tiikje el año de Á 498.
Gonsalo Ocampo en 4520 fundó á media legua de la emboca-
dura del rio Cumaná { hoi Manzanales ) el pueblo llamado de To-
ledo, y en 4521 de orden del aloHrante p. Diego Colon, salió de
Espaüa Jácome Castdlon, llegó al ManinMes y levantó la fortaleza
principtada por el Padre las Casas, dando i la ciudad el nombre de
Nneya Córdoba, síloándola en d paraje en que ahoia está.. Desde 1 521
fué considerada como capital de la provincia de Nueva Andalucía.
En 15i^ se arruinó la forta)eia de la boca del rio , de résnl^s del
gran terremoto que siA^ió á las 1 0 de la mañano del 1 J* de se^
tiembre , en que el mar se elevó 20 pies sobre el.nivd ordinario ,
babiéndose notado que las aberturas de la cordillera brotaron aguas
negras y salobres , impregnad^ de vufre. Cumaná está situada
en la latitud 10» 27^ 52^^ N. , y en la longitud 2"» 54^ 58^^ al £. del
merilfeno de Caráeas á 2^ . vacas aabre el nivel del mar», en un
terreno «eco , á las orillas del Miaianáres, al píé-dte una cfpsia
desnuda enxlonde ^stá fabricado el, antiguo castillo, de Sst Antonia,
á 70 varas sabré él 4pr« 0e la icindad.á la^playa bai unamülade
distancia , y es un Uano árido y aéoo^^ue llaoian^el Salado* rto ^
necesita un examen mut prpfnmdO'del plano iap^fcáifloa. dé Ifuidipt»
dad de Ciiihaiiá , para convencerse que en otro tiempo las aguas
cubrieron todo el terrend impregnado de muriato de soda , por
donde corre el Manzanares , y que el grupo dé co]inas i que está
arrimada la ciudad tío era antiguamente sino una isla del golfo de
Cariaco.
El Manzanares divide en dos partes la ciudad : una playa árida
y salitrosa la circunda , y solamente las orillas del rio esiáu cu-
biertas de vegetación y sembradas de charas , pequeños lugares de
recreo.
En la falda que forma la colina del fuerte de San Antonio^ se en-
cuentran las ruinas del antiguo castillo de Santa María, u Es^ como
(( dice Jiumboldt/uná deliciosa posición para los que quieren go-
« zar al ponerse el sol del fresco de la brisa del mar y del aspecto
« del golfo. Las altas cimas de la isla de la Margarita se presentan
« sobre la costa peñascosa del istmo de Araya; hacia él O, las pe-
a quenas islas de Caracas, Picúa y Borracha, recuerdan la catás-
« Irofe que despedezó las costas de Tierra-Firme. Esíos islotes
« parecen obras de fortlGcacion, y p.ir el efecto de 1^ refracción,
« mientras que él sol calienta con desigualdad las capas inferiores
« del aire, el Océano y el suelo, sus puntas aparecen elevadas co-
« mo la estremidad de los grandes promontorios de la costa; el
« liómbre curioso y observador se complace en seguir durante el
Gf dia estos fenómenos inconstantes; ve á la entrada de la Doche
« sentarse ó volverse á colocar sobre sus bases estas masas pedre-
« gosas, suspendidas en el aire; y él astro cuya presencia viviCca
« la naturale7?a orgánica parece', por la inflexión variable de sus
« rayos, imprimir el míivimienlo á la inmóvil roca y hacer ondéa-
te das las llanuras cubiertas de áridas arenas. ^
Las orillas del rio Manzanares son niui agradables y asombradas
por árboles agigantados; sirven á los liabitantes de Cumaná de re-
creo y de lugar para refrescarse. Allí de día y de noche los niños y
los jóvenes pasan una parte del tiempo en ct agua, y de boché fa-
milias enteras van al rió a bañarse.
Ilumboldl; dice : a £1 puerto de Cumáná es una rada que podria
« recibir las escuadras de la Europa eiifera. T^odó el golfo de Caria-
« co, de íque hemos hablado, ofrece un escelente ancladero. El
« gfande Océano no es mas calmoso ni pacificó en ¡as costas del
« Pera, que él mar de las Antillas desde Poerló-CabellO; y pa'rtlcu-
« larmente desde el cabo Codera hasta h punta de Paria. í.ós hu-
P. OBOO. 9T
i racaofis de ím khi AalBIas jamas sehaceaaoilirejí eatosjNtf^íes
• en qae se navega en ehalvpas sin eaUerta. »
« La dudaé colocada al pié de mía árida eoliaa osCá domina Ja
« por 'uD«€asliho. Niugona torre, ningiiD campanario, sífana.iiie-
« dia-naranja que pueda hacer llamar la atención del viajaron pe^
« ro sí machos tamarindos, cocoteros y palsieros que se eloTaa por
« encima de laa casas, cuyos lechos son aaoteas. Las Haniiras que'
i la rodean, sobre todo las del lado del mar, ofrecen un trisie a»-
« pecio, lleno de polvo y árido, mientras que una votación fresca
« y vigorosa hace reeonocer desde l^yos las tortuosidades del rioque •
« sépala la ciudad de los arrabales. La colina del inerte de S. An-
« tonSo, aislada, desnuda y blanca, despide una grao masa de loa y
« un radiante eolor % esta colina esta compuesta de grietas cuyas
« capas codtienen petrifícaoiooes pelaginosas. A lo l^os y hada el
• S. se ||kH)looga una vasta y sombría cadena de montabas qae son
« los altos Alpes calcáreos de la Nueva Andalucía^ sobremontados
« de escalones y otras formacioties mas recientes. Bosques majcsiuo-
« sos cubren esta cordillera del interior y se ifnen pof un valle
• poblado de árboles á los terrcfnos descubiertos gredosos y salitre*
« sos de las inmediaciones de Cumaná. En las playas marítimas y rn
• el gol (b se encuentran bandas de garzas ráaíes pescadoras y alca-
« trazes de una forma muí pesada que surcan como el cisne levan-
a tando sus alas. Se ettcueniran cerca de las. casas millares de bni-
« tres ffaUinasos. Ln golfo (|ue comiene manantiales calientes y
a submarinos separa las rocas secundarias de los^peñasoos primitt-
« vos esquitóse^ de la peníiMla de Araya. ¡Una y otra costa están
« babadas por un mar pacífico de un color azulado y blandamente
a agitado por el mismo viento. L^nciclo pu< o y seco que3clo ofrece
9 al ponerse el sol Agunas lijeras nubes, descansa sobre el Océano,
« sobre la península detprovista de árboles y en las llanuras de
« Cumaná, mientras que en las cumbres de las montanas d^ inte-
« rior se ven formarse tempestadas, aeoniulanfe y resolverse en
« copiosas lluvias. De este lÉodo es como eta estas costas y al pié de
« los Ánde% cielo y tierra ofrecen grandes oposicionas de serení-
« dad y nieblas, de aaqu^dad y chubascds, de desnudez absoluta y
« verdor sin cesar renaciente. Las rogones bajas del Nuevo GonH-
« neme difie/eo tanh» de las regiones montuosns del itlterioi:, co-
i me las llamiraB del bipo{;gípto dii'ierende Jos llanos ó meiMas
« elevlidas« » .
liimmn |iiMMraki.fmn Mmfo ée^ht^üñakoBi üt IÍ8nrai.leiDÍ»|ó
Viitomblof ; y- ^éÁ dendécitsibnkáe 4)T^liié de BiMl«9MraÍMi|ké,
ea.3^iHla taM.todaitnniidBflo¡4s4« ^»!M»>Bir»4| td»«fo»U) A^ IM^
y 'd i9>áí. enafcode ^MS^ibvba tanliliiMs, 5 «i «Mino- ka» mh» eFv
42 de abnl de Mi^^ <}ne biio «sln^< «» Iqs <tdífl«KB; ^eiD vkk^
saaepte'deiiiiipinatperwfia, A^oaacada I(»»4iitidil08'aft»el9i<de ios
tef lindóles, CJMOñnivoüin» bueaosaditíoíoa^ 'fH)da»lpk»oaMseslái»
Gon9(iifiMdMi muí i^eraoitiite, «y aé»i)iijaft, ¥ÍéMkMa^ll§iMtos ni$
liabitoBtes á Morífieae teibrilem á J^fsegurMad.
Ea esta chidad krí >iift.€<ii«gb y varjas esciMlsf para Ja «dúo»-
ciondeia jit«9«iiid. ^Qilieii8Ín».«fiBa.>J9teiía,4]Mrni9na) y habia
do» oonvaoloa^upaf nuilasjtp 6Í.dMi««^éa dmiJ^ifasA lQ*«B^tüa»-
oa púMc». Ci»ti ciudad esnalaMr p*r ila ^aceíaf y artaboidad de
«VI «tiüNi, 'iQ-ooalyaenÍQMid» qoBMri 'iaiOD eaiá teBqriid«|ior los
^Dto$ ma^ílHliOi. ;£» 4a punía' da Afay» oataa de Guaaaoá 4stá la
famosa aaüaadaámyayeQlacaBlliaeaaisvQ) taotodel^[Ba4]a'llat)a
que te JUBlai la^^lar.ttiaa lápade te IJaottra, soma deliagaa del
laarque anUii^p^p.eftaaiea.ó.aeoiiiiíaaaaaiiéaielJaja «e hallafiate-
«aeidoidel viente. Daaía'ia:{NpBÉa.áa}j|*a|ft isa^taa kidaia de €al-
bagi|«, Imr^VmimvImMihir^Hiltí, ke aMMadal aa«tiMada^Saa^
tieg^ ai eerroiderk .Virta- f^.M^vfsmlmym/^úi^^k
sensible ia mámn^^^kmm daldtorflHün^
•JEate^ffawiWiat i^é.h^i^ixvimmÉímlmmifA aaa^üráe -^attevo
el yugo español, resistiendo en 48^3íÁ iantffxHaajaai-iBéaier^ede
Monteverde. La capital ba sido tomada varias vezes, y sus calles^
plazas y hasta las paredei 4b <vi$^ ^fW^J»^ sido bañadas con la
sangre de inocentes víctimas que no pudieron sustraerse á los bor-
rares da la)§HaH»á BwwHa,
Lae paycpfnipifdaljoaaÉaicayiiti oiWi s4lfaMaad^ S> JaeH; Santafé,
Maiiqoilai^ IlaaáeMFe y
La viUaída£aiMMeaaL>aiÉ¿ailBBáa>eBiMi^Afalíl^ alBlwaaBa:llia-
«D w iDMMKQr4ftAoaur¡flr¿ i\aaiaa^piia f b jÉaai ihÉyoa eptafaa^c»-
Jid»<etÉ^<liBttMliMria•«aiMa^ fMoattiojMianBMailítgai 44|s
— s«o —
ángalos entrantes y stlieiileft de los cerros, cortados perpendicular-
mente^ indican la antigua costa. Por todas partes bai bellas pers-
pectivas : al S. los altos picos del TurínMquire, las elevadas paredes
del Gocbívano, las puntas dé Guaca, GuTon y Tres-picachos, y la
lejana cascada del río Lajo, cabezerá del lionxanáres, que se preci-
pita por peñascos, presenta una vista variada é imponente. Al N. la
barrera de cerros arbolados que separan del valle de Cumanacoa el
bermo60 golfo de Cariaco, contrasta con la pelada mesa del Coco-
llar que queda al naciente y se apoya por una parte á los flancos
del Torimiquire y por otra al cerro'de las Lagunas. Este se une á
la cortina que mira bacía el golfo. Por el poniente se presenta una
abra casi perpendicular, cortada en los cerros que es^án roas alld
del pueblo de Arena ; ella y la vista del suelo de la serranía no deja
la menor duda de que en tiempos remotos se abrieron por allí paso
las aguas que ocupaban la planicie que hoi circunda á Cumana-
coa, la cual tiene de E. a O. mas de 5 leguas y 2 de N. á S. : en
ella se reúnen 6 ríos cuyas aguas van por aquella vía bacía Cuma-
Dá. Aquí seda ún tabaco escelente por sus calidades y aroma, del
cual se bace un gran comercio. También hai aquí una gran cueva
en d cerro de Cuchivano, de laeúal se han visto salir llamas ó,
mejor dicho, un gas inflamable que se ve brillar á 240 varas de al-
tura. Hnmboldt cree que la descomposición del agua en la marga
de pizarra que éslá llena dé piritas y contiene partes hidrogenas ,
es una de las principóles causas de este fenómeno ; en el día, cu-
bierta de una espesa vegetación , no se conoce tal fenómeno.
Las parroquias son : Cumanacoa,. Aretnas, S. Fernando, S. Lo-
renzo, Aricagua y S. Antonio. - •
4.
CANTÓN I)B CAKIACO.
La ciudad de Cariaco, que antiguamente se llamaba dé S. Felipe
de Austria, fundada en 4 600, sufHó mucho en su principio por las
incursiones de los Caribes :.e^á sitaada en un llano cerca de fa
falda del cerro de Catuaro , á la orilla del rio Cariaco. El golfo de
este mismo queda á 4 -1/2 legua de distancia casi ál N. O. La laguna
llamada también de Cariaco queda al IV. á media le^ua, y al N. C^
la llamada.de BUiroaJvisla^ Cámpóna está i «na legua. Cslá lieñc 5
de largo y;4 4/21 de ancho. Se oomuaieá £on la otra y bon ^el golfo
por el cdüo CampOM. Tambisn queda en esto .territorio la laguna
Putucaal separada por el cerro Meapire. Mui fériiles son los terre-
nos cercanos á estas lagunas ; ¡tero por las mochas plantas que hai
eo ellas y los manglares de las orillas hacen que los terrenos veci»
nos sean prepénsos á dar calenturas intermitentes. Los demás para-
jes de este cantón son sanos con tierras vírgenes útilísimas para el
cultivo. Son de una fertilidad asombrosa las que forman el valle de'
Guacarapo, por donde hai la proporción d^e embarcar los fititos en
el rio S. Juan, que lleva sus aguas al golfo de Paria ; así es^ que*
este territorio puede llevar sus producciones á aquel golfo ó al
de Cariaco. En este cantón hai también aguas calientes hidrosul-
fúreas.
Las parroquias son : Cariaco, Casanai, Guacarapo^ Catuaro, Saifla
Cruz, Santa María y Chiguagua.
CANTÓN DE CARÚPANO.
La dudad de Carúpano está á la orilla del puerto de su nombre,
situado sobre el mar de las Antillas. Un valle longitudinal de 2 le-
g«as le demot^a al S., rodeado de cerros cuya perspectiva es pin-
toresca. Al otro lado de estos están los valles poblados de Tinapni
y Pilar y los fértiles bosques de Coicuar, bañados por ríos que
proporcionan embarque para el golfo de Paria ; que está mui
cerca.
La posición de este territorio, que ofrece á sus habitantes la fa-
cilidad de trasportar sus frutos, sea al mar de las Antillas ó al golfo
de Paría, es una de aquellas ventajas útilísimas en un pais , cuyas
tierras son de las mejores para el cultivo. Grandes selvas cubren
todavía la parte mas rica de vegetación y la iiás cercana al golfo ,
y solo el temor de las fiebres por los terrenos anegados que bal im-
pide que allí se acumule una numerosa población. Solo necesitan
estas comarcas ser desmontadas y cultivadas para cambiar de as-
pecto y ver pobladas unas tierras vírgenes que apenas tienen algu-
nos habitantes.
Las parroquias de este cantón son : Carúpano, Carúpano- Arriba,
S. José, Rincón, Pilar, Tinaput, Tinapuislto« Coicuar y Guari«>
quen.
5» —
«MrMm M MOi*>CMMB.
dond« estítití peqiMte puesto de mi mmbrQ^ £1 m €aiibe qua
pasa por k poUaekMi airve de •teniAdft ¡iMliaral dmií «baila f «i^apro
v^rde, fue ooniraala admÉraUeoMale coa los paHaacoa^desiiadoa de
la ^osta« La ilM md&am ddt mar'^uo'aeiiíardoá'lansftdistoiioiai
muéndoae m W»on4e al «íolo, ooftivasAft Umbíap aiofoiaDaieat»
con la perspectíva de «loa corrot' oatérttes'^iie por 4od« faiteo ro>-
deán la pequeQa llanura sobre qae está sentada la población..
Lao tierras de euNi vo se esütñi&k por la peaáiíaiila desteto ¡qfae
tiene multitud de puntos para cultivar ««atiotos,, «eo €» el ffiUo
de Paria, sea en las costas del mar de las Antillas ; de manera qae
se puede decir^ que cada pUatacioo. que está «n aquella montañosa
península tiene á su puerta el embarcadero de sus frutos.
Eq la sabMia ^e YagiMTiyaso tei im imoerM 4oeal Y'toühim
oaa lagmna di» aí$iia salida eo doMlo exiateii ^mides^eáMea fni
solo f e eneveairn en la mae ¿tn'to»<rke^e oacü áeUa^^peroc»
dicba laguna m cfee que «ef sttlüeiiráaea la cettHinitaeiiMi «od «I
mar, ponqué famgwMi ser mili profiiiida«^
Las {Nirroqjttias 6eft4l¡o*HCitibe f Yagnaraparo*
•I.
l^ ciuidUd de Cdkia.QBt^i la oiáHa dfi.w]e^'*^^t#flir»wi }oa
pla<ie ^1U> que ^eübaefi ei^fj^iferParia, ai^nloiel^isivo^jeatietel
pilarlo de «^daottbr^; tíie«»e>por parapocllt^Tel^giilfapMaPMi, i^kkí
de* TrkMdad^ y l|i:pafta^eQ»a.^oala<da4a piw><Mwilw di^ eariaiba^ta faía
l^oei^de lo»l)rágiWiJ>aiiw»ote4o^^iMeaiearo»iift|iiWejíiytdead^ etta
ia;eo«la di&qetoivtfa^e.flaetae«wlíaiidatiaau^il§imrapaBQi>A^^
qaa'ad9«Ba0 laa>wMla^;del-«ei^ylw»earro»>yie-aatqi^^ delfaa
de ellos, cubiertos de una fresca verdura, forman un eaadwtpite»*
r<M#v.(adalwfeíe»d.ak| ^oadoi talk^i^ lia<ia-4ia»|WKa fara> ewbaacar
gnaiifeatop; f 'lA^him«iÍa(«iea>ita Ma de.TriiiaM atraaequaf. «ar-
cado ventajoso para ellos. Posee aguas termales cerca de la coelat
Las parroquias son : Gñiria, Punta-Piedra , Zorro é Irap;).
— M$ —
(JA^TWl .9JP AJ^AGÜ^v
ta ^iUa de Aragaa omnanesa está' situada en el decHte mer^
dlional de la serranía de Carfpe , cerca del ño de $a ' nombre. Por
todas partes está rodeada de colinas caMhreas que impiden la vi^ta
de la dilatada llanura puc tiene ^l S. y los empinados cerros <|ue se
levantan ^1 O.; solo los picos piramidales del de ChltiqQiré se de-
jau ver sobre la n^esa dePuncérés. Eú en este cantón terrenos
propíos para la cria y la agricultura. Aquellos están en las sabanas
qne se esUenden n^as allá de Guarapiche, y estosen la serrana que
contiene los amenos valles de S. Francisco y Guanaguaua y el her-
moso de Garipe , antigua resid^ehí de los Chaimas y después áé\
capítulo de los Padres Observantes. En este territorio está la oéle«-
bre cueva del Guácbara^aiñp^^.PQr su .qpn^uracion, por su lon-
gitud y anchura, y en particular por la calidad de pájaros noctur-
nos qne.habitan eo cjla^ los pual^ le bai) dado el npinbre que lleva.
Los indios consideran esta cueta cómo una mina de grasa de cuyos
producios se aprovechan aduatmente en el náes de junio , cogiendo
lo$ picbones*; cuy^i grasares slry&>para sazonar sus'manjares durante
et atÍQ. Corre per esta cueva un riachu^o de 5á 8 varas de ancho,
po(;o protVindo. Se puede dívfdtr et subterráneo en 9 grandes rama-
les ; el principal tiene ^5 varas, está compuesto de petrifléacfones
antiguas , habitado por guácharos, y en parte baíiádo per -el rftf, en
p^rte DO pii^s este- corre fjor uñaviasubttnrineai ta entrada es¿e
31 varas de ancho y t^ dé alto ; et terreno' va subiendo y disnii-
onyendo de H á t2 en altura y anchó, su extremo está á ^25 varas
mas elevado qué%! vesliíbiito déla cueyaj Et se£uuA>fama) es dé ^f9
de I á 5 yaras d» antbo y de !^ á 5 de alto . Se baj^ para* \r i' él deblendb
caminar casi siempre por él rhichueló : se compone de una'^^ greda
arcillosa etidurecida. Ests^ paiHe está ^n aves ni njngun otro viviente
y sin petrificaciones. £1 tercer ramal tiene 153 varas de largo , t8
de alio sobre 1 4de aneho^ y después se. estrecha hasta no dar p^so.
Se sube para ir á él y esh mansión de Tá^ lapas y Tá "parte fnas b^
lia y sorprendente del tfubterráneo. Las (tetrffiraclotoes son ren-
dentes y briflantés y se pueden observar todas sus edades, jutrí eá
presencia del eapeetadtor ^ reh caery petrtÜcarse •fas gotas que
fdMman después las bellas y variadas estalagmitas v estaláctldas que
la adornan. • ■
£1 total de la coeva es de -1285 varas. Paede considerarse como
una maravilla de la natoralexa , Ja primera de Veoezoela y la mas
estopenda Genocida en 'las rocas calcáreas. Cerca de esta coeva se
da 4|1 famoso tabaco del Guicbaro, mui estimado en todo el país.
Se da también en el valle de Gai ipe un café de aroma esqnisito. La
posición del valle en un logar fresco y sano, las grandes selvas que
le rodean, sn inmediación al caño de S. Jnan, á donde paeden su-
bir goletas, hacen este punto uno de los mas interesantes para una
grande inmigración que habite Iqs bosques que cubren los cerros
de S, Bonifacio y de la Cimarronera y el estrecho valle por donde
corre el rio Caribe.
Las parroquias de este cantón son : Aragua , Caicara, S. Félix ,
Goanaguana^ S. Francisco y Caripe«
CANTÓN DIS MATÜAIN.
La villa do Maiurin, célebre en la historia de la revolución por
los diferentes ataques que b^ sostenido, se encuentra en una sabana
entpe el cano de su nombre y el rio Guarapiche que le proporciona
navegación para pequeikis embarcaciones hasta el punto llamado
caño Colorado, distante 8 leguas en lin^a recta. Hasta allí pueden ir
goleias grandes : dista este punto del golfo de Patia 7 leguas en lí-
nea recia y por las vueltas del rio hai -1 5 leguas de Maturin al caño
Colorado, -14 de allí á la boca del Guarapiche y 2 4/2 para estar
fuera 4^ los bajos de punki de Arena » teniendo de 24 á 30 pies de
aguü el canal del cano Colorado : este no es otra cosa que las aguas
dial Guarapiche que en tiempos antiguos se fueron por aquel caño.
La villa de Maturin es(^ llamada á proeperar, tanto por sus hermo-
sas sabinas como por las tierras de labor que tiene cerca del golfo
de Paria , en la serranía de Puncéres y las selvas del S. Juan. Este
caño, canal natural como el Guarapiche, sirv/e para el trasporte, no
solo de sus productos agrarios sino de los gans^dos y muías que de
aquí en pocas horas salen al golfo d^ Patria.
Maturin es, pues, uñ puotq comercial y de grandes ventajas para
la cria y la agricultura. Haí en este cai^on minas de azufre en Gua«
yuta y Puncéres, s^ marina y br^den:f)tí4a y guajada.'
Las parroquias son : MatifriUi Pun^é^es, .Chaguaramal| Areo ,
Santa Bárbara y Aguasay.
— 585 —
CJMIOfi' AE.IiOS QAftOf.
í
La villa de S. Bafael de Buráncas es la cabeasera de este nuevo
noeo, ireate á la isla de layí^ cerca de Piacoa é inmediata al delta
de aquel gran rio, puede llegar á ser con el tiempo una ciudad lm«
pwteBte^.lM» Mies y esteasas sabanas que posee conservan en el
v^ran<> pastas verdes, y sus buenos potreros sír^n pnea^ncerrar en
ellos los gnnados y nulas» gue se destinan i las Antillas ; de ma*-
ñera que cuando los demás Uanos de CarácaH, Carabobo, Apure y
'iMnas 8# vean obligados ¿.ueader ^m p— dei i — pwsin ínfimo^
los criadores de esta provincia pueden vender los sayos con un va-
lor doble á los estranjeros de las cdonias vecinas , que por estar
mas cerca Irán.á proveerse allí de carnes y aniáiales.
Las parroquias sotf Barráaeas, Tabasco y Uradoa.
I '••
• ' • . .»
t
(
TABLA COMPARATIVA de la pesidoii as^nómica 46 las eabezeras de »]
tierras, terrenos baldíos ,- poiWttifflou fftsdUtta- ^ -relatiyay hombres de armas, c«^
se cultiTan para la ei^portaclon.
mmaitmmmmmmtmí
NO
DB LAS CÁBBZBftA9
DB CAHIIIM.
GuOMDá.....
GomaMCoa.
Cariaco
(iarúpaDO....
Rio-Caribe..
Gfliría.......
Aragua
Maturin
I . ,
POilCIOll ASTBORÓMICA.
HorlB.
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Lakgitvá al ^.
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«oo. arr. 51".
10. snr. 45.
10. 30. ».
40. 44. iO.
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9. 58. 15.
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9» 54' 08"l aq
8. 97. 90
3. 46. 35
3. 84. 8
4. 59. 3
8. 36. 40
.. 9. 44. SO. 3. 2». 10
I
Barrancas
Islaa de Gamaná
<(l. deCarúpano
id. de Matarin.
S. 97. 30.
»
o
5. 7. O
80
10
10
354
11
90
»
»
Total
«Má^
97°.64
94. ÜS
97. 99
96. 95
96. 95
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97. 78
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35SVa[«V.
I
i
1
9#V.
440
[i , su altura sobre el lúiA del mar , tu tmwntani 'media , eaHdai de sos
m , distanda á la eapital de la profinda ; de la renúblieat y los tnM qae
8
I.Mt
15
5.m
150
7.861
150
A.am
»
»
»
»
»
»
41S
B0.«74
• • • • • •
* •
• *J ■■••■•
. i
f » *
}f.
— 588 —
TABLA
DE LAS AtTUaAS DE LOS CEBAOS DE LA PBOYINCLi.
Nombrei.
Varas, Serranías.
Puncéreí .
MaDicoarei....*.. Z8fi».,,^p*^.iif,
TeUs de Cariaco. . . 4fg. Id.
Piéo de (!áriaco . . . 499.......«.. <(|.
Pico del E..^ ttto.'. .'...«.. id.
9* «lose ■....••••• • vu^.. «•#••••• 'M*
Puerto-rato 710 ;.. Paria.
Meapire.. 406 «..id.
Cattiafo...... '.!... 480,, QMtocwjCbirMPiira 176S.
Pico Santafé iSO fergamin.
Ywriniil^^,^»^^ 4aOttM.«^*f «4d.' • »
Brito 1700 ».. id.
Tataracual 1499 ;.. id.
Tres Picacbofti.,.. I800..*....u. id.
Culón 1796 ; Turumi-
^ire
Goacat 1800 i., id.
Gnclii vano... •. ^.. *. 1866.. -f •..!.. <d.i
tlanoTiimiii^iire 4860 id.
Nombres. Varas., Serranía»,
1461 Tttimmf**
qvire.
Purgatorio ....... ft9i...'. id.
Quácbaro— •M'^^.* 4780.......... id. -
S.Boiiiraeio.^..^. 4800 Carip^*
lleia«É«d4 .
Sao Agusti|i..*.« 4144... •.«^•.. id.
Cimarronera ..«««. IMMlL . *^« • .-• « • id.
id.
liOO Puncéref.
Cerro CambnraU.. 1700 Tunioii-t
! ■ < <|ttire.
Periquito. ..fc 4376 id.
Uano Coool|ar.... HSf &J.
Laatagunaf. 1400 Cariaco.
MariciQlUl 440#L «.
l|DpQlikl6..«...<»^* 68$....^.... id,*
i .
TABtA
DB LOS BMM DE ^ 4bDBN*»E LA PUeVlMCiÉ DE COlfAÜÁ.
/^otM^rea. • Sekankts, Desagüe.
Putucar .... TnriAniquIre. . . ; golfo de
Carlaoo.
K^^O ..«...*•.« f ••* I MI. .« ...a.. « lu.
Guasduas id
Cnrlbe..*.-.'....»»^. 'id,
ArénM -. id.
Aricagua .Hd.
■id.
AgnaMaMMK ....
S. Juan ¡fd,...
Mamanáret . « 'id....
Cedefio Ber|antin.
Tataraoaal -...'id....
Taraeaal id..».
Norucual ...... . . . 'id. . . .
Colorado. id,...
8antaf6 id....
Qoeiepe c|nriaco.
Gairfailal ;M...,
TonanUl.. id...,
Guaracayal id,..,
HariquitáL íd,.'.,
Tarabaeoa... id....
Caehiamare id,..,
Brito Bergantín.
Caneamore....... id.,,,
Ui.
. id. '•
. id.
. id. .
. id.
. id.
^id.
7id.
. id.
alamar.
. id,
. id.
. id,
golfo de
Cariaco.
. id.
. id.
• id.
. id.
. id.
. Id.
. id.
. id.
, WflUlrgi. r54rrafi|aa. , . Deságñe.
Éacarapana.... Bergantín.... golfo de
2uaraDactae.....*r^ id..>..^.'.'.. tíí, ,
ondanillo..' id,,\ i lámar.
qoluá.; ."id..;....;... id.
Bordonea...* Id.< id.
Golor<|do... Ta|:ii|;niqutre..«.,. golfo de
* Paria,
^tarapiche.;... Cariaad. ....... id.
CocoIAr....*TttrMiiqufre..;... id.
CapirieuaL.k Cumanac^a id.
éuata^l...« id..'....^.. id. ,
Aro 4...... id id.
Cliaearaeual* id.: UL
>ejuc«....|....;. id..., id. •'
f arrancas .J...... id.,', id, >
^tte... •.-....>.<,<•* id...
Aragua 1... Caripe*.
HanailT!». •!...*•« ^..*
Ouayuu....'. id..;
Üuncérea...^ id..'«
IPotreró^.......... Ú..'.
Orocuare.... id...
Arénu id...
LaCnu id...
S.iuan........ Meapire
id.
id.
id,
id,
id,
id:
id.
id.
id,
id.
>i^tt
— 589
Hombres: Serttmias. ' Desagüe.
Catuaro Cariaco. :..;: golfb
Paria.
EspDga . ; . . . ; .- : . .*; té: ; ¿ . : . : .v. id,
Juan Antcmiv . : . . ; id; .:.;;; ; .\ id,
Domingof :...;.;»; id. ::,:;:, ."'id.
Caribe .;.......,: id.......... id.
Tomphital €¡aripe........ id.
Hacha. ......' . . . Cariaco ....... id.
Gu^carapo...:..., fd.:.< id.
Caripe -. Cartpe. ; .....id.
Asagua id id.
Arguigua id id.
Yaguanía Gan&paiio ...... id.
.Grande id id.
Mercmare id id.
Coiguar id id.
Mapuey.... id id.
Sabacual id id.
Tinapui id. id.
Pricantal Cariaco golfo de
Cariaco.
Corumontal id... id.
Colúa ............ id Mái'-'
Oricaro id. id.
López id «. id.
Cariaco id id.
Santa Cruz . . . Purgatorio id.
Guácharo id id.
Potoctiá id id.
S.Juan id ..*. id. .
Aguacaliente... Meapire id.
Godeño id id.
Casanai id ..id,
Catuaro.;....: — id golfo de
Paria.
Rio Grande. . . Hio Caribe. . . ... id.
Santiago id id.
Concepción id id.
Caslilto id id.
A uafría.. id id.
Dcsparramadero. . . id id.
Rio Seco id id.
Yagiiaraparo.... Paria id.
Viejo id id.
Aruco id id.
Arauoa id id.
Chacipal fd id.
Jobo id id.
Purgatorio id id.
Moran Id... .id, .
Siete VuelUí id id.
Rio Grande id id.
Chiquito id id.
Irapa id id.
Güinima id id.
Palma,. id.„ id.
Nombres. Serranías. Desagüe.
át\iSoM.:., ,.:.:..,. id...::.:.... id.
GaáraKUártf.;..;, PiíHá..;.... nolfo de
Paria.
Goanágaána...... id....:...... id.
Gualat))itíáré..;;.. id.......*.;., id.
GOaratoas......... id..........', id.
Tinapuiciló..: Carúpano......'.'. id,
Pilar id id.
Chagiiaranas.:.:,, id,...:..'..,, id.
Gaararoare......*. id id,
Sanu Isabel. ... Rio Caribe id.
CaraUl id id.
Cherepare Paria....... alamar.
Cangoa id id.
Popul id id.
Rio-Caribe id id,
Mauraco id id,
Churupare id id.
Puerto Santo id id.
Carúpano Id id.
Amana Bergantin golfo de
Paria.
Areo id id.
MapirltOrf Mesas..., id.
8. Juan id id.
Pinal id id.
Caris id fd.
Tonoro. Id id.
SanURiu id Id.
Tácala ,.. id. id.
Rapio id id.
Tigre . . id,,,, delta del Ori-
RioSeco.......... id.
Areo... id.
$. Jaime id.
Pando id.
Chive.... Id.
Aritupano id.
Aribi.. id,
^tíio,..9, id.
ñoco.
.. id,
.. id.
.. id.
.. id.
,. Id.
..id.
.. id.
.. Id.
Quebranta Paria., golfo de
Parla.
Siblsa. id id.
Vara id..., id.
Yaguaro , id Id.
Cacao fd.. ...... alamar.
Pava. id fd.
Puerio Viejo fd f.. ié.
Castaño id fd.
Caldero fd.... , fd.
Angelóla id... fd.
LaCruz id ,...,, id.
Tacarlgua fd fd.
Chuao id fd.
Cumaná..... id id»
nomibrei* Mnamlai. Mt^gU.
Choptre JParia á
tigtUto i(f i<{.
Guaeueo .«• id id»
8. lian.... ...:... U....« ül.
Tunidtt»... fif.... id.
Bi4«. lóai déludel
Orinoip.
Yáfo....; M... .;...... la.
ftiflHvi Id*. id.
* * ■
i» ...
Itmar.UniMii
•A*-
Id.
Orinoco.
.•« Id.
Hom>eoL«.....«
TuiMSt (..«•««.M Id. . > »m » >w . » Id.
UKifta....;..:.^ Id OrimMD
MuMpra M id id.
Gtuufuapo... dslOcfaioeo,..^..^ id»
Gnaiitfeo.. •..«.•.•.•«. Id Id.
6u«m.....*<^.«.»» Id .«.. Id.
6iUiMl.«..».»MK*4<i id.
^mwicáá^ m mmimtéé
Ésía. provincia se encuentra Se los \(Í^i\^W^ a los 4f® S' 45^'
de latitud N. , j entre 2p 40' y 5« 9MS^ de longitud oriental del
meridiano de Caracas; pero. si se consideran los grupos de islotes
y las islas que hacen parte de la mismTi provincia , aunque casi
todas estén desiertas, veoios entonces la parte mas meridional de la
isla de GocBe estar en 40<^ 46' .y la punta mas setentrionál delaJsla
Blanquilla en 4 ^'^ 55^ Esta se encuentra por sXi costa occidental á
2^ 25' al E. del meridiano de Caracas y el grupa de los Tesügos.á
3** 54' al E, del mismo meridiano. Su territorio se debe dividir en
dos partea, la una compuesta de islas casi tbdas desiertas , y la
otra de la isla mayor que es la qiie- constituye la verdadera pro-
vincia de.Margarita* Caeslahai tierras fértiles é ingratas^ aquellas
cultivadas y estas cubiertas áe cabras que .procrean prodigiosa-
mente ;,pero todo el territorio es de un teiílperanteBto tan sano^ que
allí no existen médicos ni boticarios. El. máximum de largo de esta
isla es de '1 2 leigna$« desde la punta de la Ballena basta punta. Aré-
Bas en la direceion de E. á O, y de N. i S«, desde el morro y cabo de
la isla hasta punta Mosquitos tiene oasi 6 leguas.
Lasieguas cuadradas de este terijtorio son 57 , en las cuales hai
5 de islas separadas de la Margarita , de ellas 5 leguas baídlas y y
teniendo una población de i8,505 habitantes^ e^n en raxon de
494^7 por cada Icigoaxiiadnida.
m '
^Jbnsm y Gosf uuEs,
Como esta' provincia es una ísla^ y tiene ademas otras que ha-
cen parte de su territorio ^ se debe ¿lecir que está rodeada por el
mar de las Antillas , .y fue no tiene otros limites^ siendo las costáis
de la provincia de Cumaná las tierrafs mas cercanas*
#
COSTAS OBI* .MAB.
Del cerro de Matasiete se ésllenáe Qna bAsé hacia U'mdt^DaflHidtt
punta de la Ballena, que casi está en el meridíiQO del morro de
Ghaeopata de la provincia de- Gomaoa. -DésAe ella corre la eoafa
como al N. N. O. la distancia de casi 5 legoas hasta el eab» de la
Isla, formando el frontón del N. E. de ella, que es limpio. Dead^
dicho cabo corre la costa aS S\ O. hasta punta de h Gallera qne dista
2 legnas y también es limpia. De esta pouta corre á )a de Mada-
Libre al S. O. nna legua; y entre las dos se forma una grande en-
senada con un placer que sale del centro de ella cenca de una milla.
Aqui se halla el pueblo y puerto de Juan Griego en el fondo de la
ensenada. Desde María- Libre á la punta de Tuna , distantes entre si
4 leguas , se forma una grande ensenada de mas de 6 d^ costa : esta
es la parte mas baja de la isla, y vista á cierta dísiancía, parece
ocupada por la mar y tomo si estuviera la isla de Margarita divi-
dida en dos. Toda la ensenada es limpia y no hai sino el phcér qae
circunda la costa, que sale cuaddo mas media milla 'de ella. 'De ía
punta de Tuna al morro de Robledar hai 5 leguas, y va casi al O.
-1/4 al S. O. : la costa es toda limpia y puede atracarse á' dediá
milla. De Robledar á punta Arenas hai casi 2 leguas eti dirección al
S. ; toda la costa es limpia, y el ptacer de poco fonído' sale como á
media legua. El frontón de punta Arenas es la parte mas occidental
de la ista y al N. O. de él á distancia de casi 2 leguas se halla el
veril oriental de un placer de piedra, cuya menor agua es de 5 bra-
zas : está tendido N. E! S. O., casi ^ma legua : allí estaba uñó de
los bancos de la gran pesca de perlas. El cabal entre fó co^ta y
este placer es ipui anchó y íranco y sü mayor agua* desbrazas
aíena. . '
Volvamos á la punta mas orienta! de ta Isla de donde comenza-
mos la descripción de la cosía. Al Si O. de la punía de Ballena , á
4 i /2 legua, está la punta de morro Moreno, y entre las dos se forma
una espaciosa ensenada en cuya ^arté setentrionaí está el pueblo
de Pampatar. Casi en la dirección de las dos puntas y medianía de
ella está el islote Blanco , mui limpio , y puede pasarse sin riesgo
alguno entre él y la tierra. En toda la ensenada se fondea én S y O .
brazas arena á distancia de' 2/5 de milla de la plaza. Este fondea-
dero con brisas frescas del S. puede ser algo espuesto. Desde morro
Moreno corre la costa al S. O. f/4 al S. la distancia de 2 leguas
hasta punta Mosquitos, y enxte las dos se forma una ensenada en
cuya parte N. está el pueblo Porlamar. La cosía entre esas dos
puntas es sucia, y no debe atracarse á menos de 2 millas^ sucediendo
IoiDiimo«m*lft«tele«i0io al O. KN^Me psp^Mo^f^iMftiMUí:
punta GMsen», 4íilttMÍ6i<i# iiM.d^ ^^gp^s» e^rpee^Bi.E.O,; es
sqeU y de^piader- da^púedfa qfiá^stíie i upa miUa^ De aW n»ba te
co^ al N. MiÜ nnaMfc M Paio que disj^ oiro tafia, y-cl^gfw^ va
como al O. N. Q., casi 5^ leguas baala pf a|9 4o: Ar4paso,%ue, CO190 ,
ya beoNis ikhfii es la inaa a0dda11tal.de la ida : U>da asta ooai^ ea
tan auoía eotto la aiKerwf .
■
LaBlaoquill^ C8táá^9 le^asalISi, O, del puerlode Juan Griego,
rieae 5 leguas de circunferencia y abunda en lortq^s. La habiian
algunos pescadores : sus costas soq uiui limpias , á escepcion del
frontón del S. 0« que tlepe varias piedras lo mi^nio que algupas
puntas por la parle del^O. y que la punta mas seleotrional. En la
parte N. O. hai fondeadero desale 20 brabas que se ];iailan i una
milla de la costa basla 7 ú 8 que se cogen á 5 cables de ella, y todo
el fondo es de arena» En la costa del O. y como en la medianía de
ella , en una enseaada.de pbya, bai una casimba ó pozo de agua
dulce, donde se puede hacer aguada.
Al £. de la punta mas meridional de la Blanquilla , y á distancia
de 2 leguas, empieza el grupo de islotes llamados los Hermanos :
son 7 f todos ellos mui limpio3 y tan acantilados, que en sus cana-
les no se cQge sonda : estáu desiertos y sin agua dulce : parecep
picos de montanas submarinas qu^ asoman sol^r^ la superficie
del mar.
Al N. £• del puerto da Pampalar y á dis^nciade 46 leguaa, e&tá
el grupp de pequeñas islas llamadas Ion Testigos, taml^íen en nú-
mero de 7 con algunos otros Xarallon^^s. Se^ucuentrau eo el meri-
diano d^l i|Aorro de.P|iertO;Saato ^ ^ la provincia de Gumaná , dis-
tante de él 42 4/2'k\guas» l/ii pasos, eotce los islotes son francos y
limpios ; pera ao ^si toa que forman los farallones por. ser mui es-
trechos : á todos estoa isl^te^ se puede^ atracar i i cables, menos
al mas setentrional que tiene arrecifes^ coiQp ¿media milla en con-
iorno« Ent^e estos islotes bai fondo de arena sobre el que s^ puede
dejar caer el aufla en C940 de necesidad. El islote jpriiicipal lla-
mado Te^tigp^-Grfuideestá prolongado ei^Ja direc(^|pp N..O*^. E. y«
en ^\e s^ntjdo tiene, jméi^os de upa legua* i^n su parte S..0. bal
buen fondeadero .abrigado <i|f las brisas desde 9 basta -{."[^razas
P. QEOQ, SS
arena grnesn. Etotre IM TMHj^y ^^ coatefe haNt aiHda), fmts.
«de élites, coittoá casid legtiás, M aiiir%fa»filaoar/dir>aaainicoft
tMi<k>do 5 i 6 braaas qmd6ba avilaM 'OW enlMcaaíMtt i^tidds;
A S'teigiiasarf?. E; 4e ia piiflM niaa setentrioÉal Í^ltfiiiai||afMi
*qti^ es el asarro y cabo de la iah, esf^ ^' |;ra^'d& iMo4es-llliaiados
los Fraüés , de los cuales el ñaa neHdtonal-^s» el mar glande. 8an
también en número de 7 ; limpios todos, iMáitea el'iiiaa'seieDldo>-
val y rodeado de afrecifes qoe salen como á 2 cables de él.
Al N. £. del Testigo-Grande , á diataaciade 4 leguas, está la is-
Hta de la Sola^ mai limpia : le qjoeda el grupo de los Testigos al
E. á 5 leguas. Los pasos entre los Térffigos y la S(ñh, entre esta, los
Frailes y Margarita , son tait rfanoos?, que cfn cualquier tfempa y
con cualquier buque pueden omprendersi?.
Eli el canal que forma Ta isla d'e Margarita ron h costa d^ Cutnaná
liai dos grandes islas y la mas orit|ntal Hamadti Coób# , y lü oeeí-
deníal Cuagua 6 Ctfbagua. La isla Cócbéf e^'baja y*áHtfa , está ten-
dida casi N. O. S. E. y cercada de ptacer depíedray attecifes que
sulen de sus puntas N. O. f S.'E. , como medfa* legua, de modo
que forma dos'pa?os ó canates, el' del N. co^lti iéla Margarita que
en su menor amplitud tiene 2'tíññit9 yrl'del'S. qtic f&nna con la
costa de igual anchura. Por cualquiera de estosdds ranales se puede
pasar francamente ', pues bai mui buen foiiíte en que se puede de-
jar caer una ancla, y aguantarse sobre ella conlo en un btien puerto.
Etí otroff tiempos habla cu está hla pesca dfe perlas, prro en él día
no se cogen sino tortugas y pezes que "se safan para el continehte y
las islas vecinas. Tiene 2 leguas de largo y una en su mayor an^
chura. Los pescadores, que ocurren eb gran* udAífírb todo el año,
ó se srrreti del aguif trafdd de Margarita ó^de la costa de Cümaná ,
ó hacen casimbas que dan una agua safóbre.
l^ isla de enagua es algo menor que la de Coche*: 'corre casi E.
O. tiene un bajo y arrecife que salen á una milHi : há costas dé9
Ñ. y del S. son nmi limpias y én $ü froritotí oecidÉutáriMii pljioer
de piedra que se avamía en el mar comoi f/3 de mBfc. Esta isla
forma también dos canates*, tmo a! N. con lá feht d)^ Margarla y
otro a! ^. con lá Costa-Flrmfe 1 ambos son mtif f i^rtfcos y la parte
mas angosta éñtfelá'isla fMsr^ñfítsi'itífím übas á&légútí. La isia
está inculta y tiene ma$dé'5'leftmrdé'crrc«ríifón»ida. Eñ otros
tiempos se hacia en sus rostas -una abmtdanfte pesca de perlas que *
atraia muchos comerciantes , y esto tmé causa de que se fundase
- tgh -
' . • - ■ •
iülen ^S^S un pueblo q.ue se, llamó la Nuev3 Cádiz y que turo
ayuíitamieoto. eu j527. Sus habitantes 11evaI)aQ del cootinente el
agua para beber , p^ro desde, que se abandonó lá pesca quedó des-
4rui<Ia la ciudad y desierta la islaí. ,
MONTAÑAS,
• •• "t • . • ■
* >
r
El cerro de Copei, que es el mas aúo del cantón capital , forma
dos valles, al E, el de la Asunción y al S. lí. el del Espíritu Santo.
En la costa que está freiife á este ulfimo se descubrió una pesca de
perlas en 1558 , ló cuál dio importancia á Margarita. El cerro Co-
pe^ se presenta escarpado al lado del S. mientras al N. se prolonga
-en forma de colina terminando en el morro y cabo de la íslü y ofre-
«ciendo en sus declives un terreno úlil para cultivar algodón, lAaiz,
fríjoles etc. Al oriente de estos cerros se elevan el de Malasiete con
Ires picachos cuyas bases se pierden en la mar por el oriente y al
poniente , en una llanada larga y «strecha que separa sus bases del
de Copei. Unas pequeñas colinas pedregosas están al rededor de
^titi|ttt«t jMtú^f yj04i«« M-€9tiiwéeU'de9d«'Pai4«iimtil«sila4«H«ta
Mosquitos. Lo demás es llano^ estéril, cuhwiili^die^t«a»a y^JMwíi^iQSv
y todo este terreno descrito es que el pertenece en el dia al cantón
capital ó de la Asunción.
La parte occidental del cerro Copei forma el valle de S. Juan ,
y .en su cumbre y fal4as el terreno ofrece ventajas al cultivador ;
así es que toda ella está sembrada y Ifena de plantaciones. Los cer-
ros Guatoco y Picúa son como grandes estribos del Copei , (¡uú se
estíenden al poniente. Lo mismo se deben considerar fós que existen
entre la villa del Noríe y el pueblo llamad^ Pedro González : am-
ibos ramales vienen casi á encontrarse etí Juan Griego. Entre S'a-
íbana Grande y Aguaverde se levanfan unas calinitas , que cos-
teando la parte meridional de la laguna Arestinga,. acaban en Tos
cerrilos de Jas Tetas.
Depfi.es de jiija grande depresión de 5 leguas se eleva otra masa
compacta nombrada cerros de Ma(9nao , con 4 picachos bieii pro-
nunciados qiie sil] embargo no forman valle y sus bases se pier^n
ea la costa del mar ó en la laguna Arestlngá. Estos cerrps incultos
ppr Ip ingrato de sju terreno , tienen ^n sus faldas algunas chozas
de criadores ae cabras q€e aquí prosperan ventajosamente.
Al examinar los cei ros de Margarita , las isla§ que la rodean , el
— W6 —
bajo fondo entre ella y la costado Gamaná, lo destrozado de esta, la
posicioQ de la isla de la Tortuga , la conOguradon de los cerros de
la punta Tiícacas en la proYÍneía de Coro y de toda U aenranit de
esta liasta el golfo de Ifaracaibo , la identidad del terreno de Marw-
garita con el de Coro, la igualdad de las plantas que se eneaentratt
en ambas provincias , todo hace creer que en otros tiempos estu-
Yíeron unidas estas tierras al continente y fué una cadena de cer-
ros paralelitA la actual de |a costa de Caracas, cuyos residuos. se
muestran en ks islas indicadas.
Mas al IV. los Hermanos y Blanquilla que se encuentran ei^ la
misma liuea que. Orchila, Hoques, Aves, Donaire, Curazao ;. Oruba,
península de Paz^aguaoij sierras Chimare y Aceite de la península
Goajira, demarcan una tercera jcadena paralela á las oirás que pa-
recen destruidas por la misma gran caláslrofe que liiio desaparecer
las demás tierras.
AiOS.
Cnati^ ritetHiflo» de •paca' ae«i tí«n0 esto isla , el n^jQMTidbtos
cnaleteseldeltXfMohm. .. > 5
:«.
LAGUNAS.
La laguna Areslinga tiene una abertura a la ítíar a Una legua af
poniente de los cerritos de las Tetas ; y esta laguna dividiría en' dos '
partes la isla de Margarita, si un istmo.de 'Á 'r/2 leguas de largo no
la uniera. Este istmo tiene en lo mas estrecho 70 varas : su anchura
media es de 200, y esta elevado en algunas partes de 4 á 5 varas
sobre el nivel del mar. En varios puntos los médanos se alzan á
lilas de 20 varas. La laguna tiene 3 Irguas de largo y 4/6 de aneho ;
es poco profunda y sus aguas son saladas.
La laguna de los Marites (iene casi una legua de N. á S. y mas
de una de E. á O ; se comunica por una boca con el ifiar y abunda
en pezes.
Hai una que aunque pequeita; merece mencionarse : es la nom-
brada Salada, cerca de Juan Griego, en donde se refugió un puña-
do de patriotas , escapados" del fuerte de Juan GHego, sléüdontlf^
vilmente asesinados.
— $97 —
Glllf^.
El dHDi es c¿li<)o pero sano, y cvaadoalgim margariteüo se en*
ferma en Cosla^Fkme, ré§reaa á su tierra, y eile cambio es siifr*
eienle para sanarle*
BSTAOON DB INTIBRAO.
A fines 4e mayo Hnere mi poco ; en jnnk) , j«Kf y agmfo es ve*
l»no; Tuehre á llover en setiembre, <|vee8 la época del invierno
en esta isla ; pero las agnas no son Un abundantes «omo en la €oi«
ta->Firme, en términos qoe los babílanies hacen sos grande» sieoí*
bras en octubre. En noviembre, diciembre y enero caen los ñor*
tes, pero estos también son mmi débiles y generalmente hat esca*
ses ¿B agoa para las coftecbas. Los caminos son bnenos, paes dea»
provisto el terreno de grandes v^^etaies, pronto se seea por la faena
del sol;
nivisioÑ náarróaiAL.
SeiNide lá peofincia en éss eantenes qno son, üMÓefén y Not»
te: tienen -I ft parroqnias y otros tantos veeindarias , en los enaies
se cultivan eafé, calle, maii, ynca, plétanos, fríjoles, lames, neo-
mos, caeos, algon cacao y vsfrías frutas.
La población de esta provineia se puede dMdir asi : 5d/Í00 ^ine
se dedica á la agricultura, 45/toe á la cria y 58/l#0 al eomereio,
pasea, iCtc.
8e hace con hs provincias doCmnaná, Baréllona y Caritas, ca«
la Ma de Trinidad y 1m eolodias de Barlovenlo ,' Rearando á elfos
pencado, caf^, iimacaa, galKnasy fartugae» y trayendo mercan*
nías -seets, lieeres y ViveresL
. ' ' • i ' I '
CAfnon ps tf\ AsuncioK.
> ' . í o |.: ¡' ■
La dudad dte la Asundbn e$ti situada en Hd vallédiio fbnúado
por el riacltiielo de sü nonlbré, cuya» vegas cubiertas de vtshÜiira,
GOQfrastan admirablemente con los cerros pelados y redondos que
casi circundan la ciudad, en uooideJos cuales se ye el antiguo cas-
tillo que la dominaba. Est^ la ciudad á 1 29 v^ras sobre el oivel
del mar, del que dista una legua por el lado de Gqacuco^ doadv
desemboca et riachuelo , teniendo el puerto de empalar a -I 4/5
de legua.
Este puerto es el pvíilflífiAl i^h t9ltyy<#^tá defendido por un
viejo fortin. La Asunción es capital de la provincia, se eocuentra
en la látltod^N. f4*U' 5^^ éa léteti^tod S**'*' }íBíf''á\0. ^éeH
rMaffe^ ^' ominas. La* Mctrgailta- Pilé'd«9ei!ibiefl)a per Ooldá a»<
l€jrc«ervl*jé'en IfWt |íem Orfelfibal'^itert» wa ü%o ile^es pmA
p<ir''tthi'(9la Y la^Ae'f5uagiia y»TeeffM<} las priffieras perlasrqve ftre>-
rtw dM' N««Vo£>1IMÉdb á fi)iirefii. La feMa'de^ ^elffas <l9 C^a^mi
MM'^iie e«M paií(o'<Btíse ^éotti^^^hf^iye^mé cíe^ basltiilé i«np«f^
ttftcíá^-He m«fiH% que eti eí^étta* épeea'^argarfla letefondwi ^
él;l£n ñ^smi meGWcüill^ 4 Wtfette ' vKilili»»; -dlñw tf» la l^spcHi
ñola, que poblase la isla de Margaiita y levantase una fort^l^Mr;
y al siguiente año se peri^Uió al, y^^QX dQ Guagua poder esta-
blecer en Coche ganados y labranzas. La deca lencia de la Nueva
GfMiE, faMnÉn e;i 4au>i>»f»» > éa |iáM»<«4i Mt^f^a^ M iiri-
ri;^jQiifciÉiiffNI»"ál IftiMÉÉlw.fMNfla fittfifl.fmert^dlel üapárto
Santo, en Margarita, fué ciM^tlrtmirfQteáiMiíii^
n>i¿pini}pi8t» é«|iM5 v^ liáli) icle ^gatttdcK M.tliliii^fi^ 4900 ^tí
existe la capital de la república. En ^56t desembarcó, <4ptft49
Aguirre en la ensenada de Paraguachí , que bol se conoce con el
nombre del Tirano. Prendió sff góberródor D. Juan de Villandran--
IMri)#s,^rJlMMÍJpifdp,4tVviaf Mt^il 0kMmÍ/9f f ^iOü^t ^ iH^
iafi^a(ttcíiH;i»ttf8» |«ft9M8 f^tA$fti^NtaMfl»4iam't('rf)|ti4^^|
George Somers saqueó la isla de Coche ¿fyfiA^^{^4íífi{ht4liíífÍll
destruyeron los esiablecimientos do Margarita. En esta isla hicie-
ron sos hijos prodigio#4U iMHof' pMmMM el yugo de los espa-
ñoles y se vieron la mujeres qi^udif i la defensa casi á la plir de los
hombres. Bellas páginas, gloriosas, reserva la historia á este pueblo
heroico que supo resistir a lós esfuerzo^ ae sus opresores y conser-
jv Bn Ips^^eiBgf]^ )l^SJ4»t^f)litf)$o|lau^§Wí^^J<(.l•^qta^l,¡^^
Margarita por.su posición cerca del coDlinente, está como de
avanzada de él ; y sii$ íh^oi» y i^nMMí^en del territorio una cia-
daüela.
SÁ fcrfMsia:de»!laB^|i«l)laf'(|ue Ivímcícmit tMibne^ilo m: hade ya
ICOÉ I^IMÑICto •il.fltlS CO9|lS,:«I.C«ÉriM0, «Ift 4lklllÍÍaB^IIMI''de
p»tetiprQftMela fí(|0ei»d«'»ipirlliglHlf«lii4aMef«que«0ff r|^
. per iairépláos i) me y ^fiaiioai^ y ge (han ^^leobo *ÍBÍii^(» wM 4a
.giHfrade taliodépéiMleiloáú
St^DC'^Mflipiteirídos füilaMBéirfiefMdtB nUatt^^tTMom
pocDá IbgAt» dt mIiívo } %ii%\» ItatiMto MHresiéritot oim «Mwir^
poiaa». oelUlmre8';>w^ ^por esa la Wlfta en k awvftttia de 'G^i
éerrcHMSP^enpu fepÍüídaRÍ>fs^ MldMte-jpaia fvoieer4foiui p«íMiialÉli
de 48 Jii0< hábiaíiilfá. La AsaiieMn <«^la' icildMM;i|i 4e) «obMM-
•dar : íltléía «ii/capfeálo dflVeooUilQt , «otMOftido' acÉ«»MiiK6'«ti
imlágíft/liat adtaiasMMi mtmH 4# pMMjóé ^fin iaii«Mi»fBHe§^
-^rt»|Miia Y »pf .ftdtaHáe <rio$ ,^estéi4o8ÍlitÍ>toime»oMigii« ¿«0f>flf«e
.de!eatmifD«. liidéaiés |l* tefMiodiaaeíoiM»* ^émtaii 4é í9»^0tm
lériiks^ift pdUiiiM 0a»cMi<i'4Nm fi«fioli4 ártfttiM» y^fieSéa. M
tMMi m'.fe^ftpMt^ fcfeii«auMBtwiiái', tu«fM 0a«:*|iabttaiÍ0»^
:aiin BaM;¿«itt«iiihfiBRKá^ 4db éesétei'lyidiKtria^ttttMiceloA. fiti
eitavIaiieriiveiéMslMnts f«r4tt «tM&iMsiiMde |aí aom.
> .La6'vpfEitaéMAsy«nnélf{Mpdpitiiit^
í|liPta.^iifeffc'¿s»'lMmitín M. ia iriH» dte jQocba ><|«e^pMMwe»»íAI
ipMihJM, Ltaahfgirtleftoi lÉíi iÉ^i\iiwiwfCi>i<slat |ÍMei»s'T ^^
de ^000 personas de ambos. Hifiy é0étiá9ieé9¿mMk^j^mfMí
lürotnUdaéaéirto pn* ^a.áiMlfc1e.,a>rtl»n: inuratai^WMl «Udia
una red de 200 varas de largo^ y.^hara^stMiiee^VÉtiiül J ikMl
no saquen 4 O ó 12 quíntales á lo menos. La ^ contiene tanto
pescado en ocasiones , que tienen que cortarle los lazos para dejar
escapar los pezes , pues de otra suerte no podrían nunca sacarla á
tierra. Se cogen diferentes clases de pezes , siendo la liza el mas
común.
Las salinas forman otro objeto de lucro para Margarita , pues
sirven para las salazones , y dan la escelente sal de espuma.
La población se aumenta considerablemente en esta isla , y gran
parte tendrá que pasar^l continente, pues sus tierras apenas dan
ahora lo necesario para sus habitantes.
Las parroquias son : Asunción, Robles, Fampatar, Porlaroar,
Espíritu Santo y Paraguachí.
— 690 —
CAHTOÜ DtL KO&TB.
Lt ciodtd del Norte «stá ikntdt á la iHora de 252 yaras en an
llano que fa laacmiiéleaMait dHBkMtfesdo J»eia al pvato de fe
laar en donde eaií al lagania pvarte da la isla naart^nido JnaD
Giiago, del aual diaui 5/6 de liegna. La posieion da esta ciíadad es
bella y pintoresca; por ana parte el decÜYo del Talle deja Ter la
grande estentíon del mar Carilie y cnyo horixonte pnroce anido á fa
bóveda edesle ^ al opuesto nunbo se descabre la vista del cerro
mas elevado qoa cobre la «apílal de la isla , en el coal se goza de
lui clima inénoa cálido y de nna vis4a por todas partea. sorprén-
dante. En la 9 por donde qníera que se vuelve lik vista bai cerros
allí enteraniente desnudos , aquí veatídos de pija y mas idlá ador-
nados de bosque ó cubierCú^ de plañías cultivadas ; y lodoa domi-
nando 1^ Uannra sembmda de caseríos , cuyas habitantes recao^
dau con placer qne las huestes jto Morales y de Morillo no llegaron
á pisar sas h^gafea, En asta territorio se encnenira la gran laguna
Arestíngn» que apenas queda asfiarada dd mar por una eatredia
<;¡nta de médanos^ y al opoasto as eleva el earro de MacMiao con
picos agudos y peiiaseosos. Soa cuestes áridas, cubiertas de plantas
espinosas y. sirvan , sin embalgo , pan. la cría deeabras que abun-
dan consideraUeaieate^ k este caáton pertenece la ida Zanquilla
y el grupo de los Hermanea, máénims las oKm islas se oansideran
canso d^endientea del ioanton eapítai.
Lis parrnqntei.san : Notie , TaflBfiguai Itum Griego , S« Joao ^
MtooGonaáteny
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TABLA COMPARATIVA de la posición astronómica de ias cabezeras de at
tierras , terrenos baldios, población absoluta, relativa, hombres de armas, esét
tivan para la esportaclon.
NOMBBB
»■
posición ASnonÓMICA.
LAS CABUnUi
DB CANTÓN.
Latitud
norte.
Altura»
«■ Taras
sobra
Longitttdal B.
del neridlanol el lúrél I
centi-
Tempe- | CALIDAD DB LOS TBRKBXOff DB QQB
SI GOÜPOIBK LOS CAJITOniS 0
.. LB6UA9 CUADBADAS. \
media
del ter-
de Caracas.
AftmcioD
Norte.
U^. f. 8"
lio. 5'. 81"
del mar.
grado.
8«. 7*. 88"
IS9
98». if
8. 3'. 16''
S9
Total.
'. 11 8
BH
ton 9 su altura sobre el nivel del mar» su temperatura media, calidad de sus
vos , distancia á la capital de la provincia y de la república , j los frutos que se cul-
MdiDcro
d« 1. e.
que
s« creen
baldlM.
«MMMMWMtakMNMMHMMiMi
2 V.
Va
POBLACIOM DB LOS CAHTOIWI.
ToUl
déla
poblaáon.
i)
8*3SS
9965
18.90(1
Población
relativa
por íegnaa '
cuadrada! •
^-
Hombres
ütilea
' para
las armas. | esclavos.
«96
416
4.947
DISTASQAS
rt Ir'.
A le eapital
A. la capital
provinaa.
república.
H mam
f - •■«■a*
para
"*^^^''''**^^* xí^rtPORTlClOH.
700
800
1.803
186
91
éÍIi -JP ^
tt7
» Vd
93
95 Vé
Gafé , caña , oocot 7
cacao.
Gafé, caña y ooeof .
TT
— 604 —
láBLÉL
BB 14 $Mmmk MI iM « WMt MI hk wm^mw^
ífómbrti. Taras, . 8erra$Ha$. I K&mkres, Vara$, Serranías.
ltS4...r..l tfirsariU.fCopel • fSlt. Vargtrttt.
TABLl MI tOf líos Bl 4* <ku>lll DI Vk PAOYinClÁ.
HiMiifrret. S^oñtoi, B$$ñgMe.\ Hamkraa. S&ffoMeiM* Bambas,
AsandoaJ Copel.. ..•••• al air.w. fciii .«I!»pei. ....••. «Inur.
Upirtotetta...., id H. iTacarigna.. id id.
t
b
«r <Í»
PROVINCIA m Géktkm.
'* ■»
# •
'aH:«AQQH Affg^mámfk w^vmon T fonación.
• • • t .
•
Esta proyu^w 80 eo, ciientivii íp, í<> 8' á JO^ 2' de latitud N., y
ettire 2« 9' al O. y S^ 45' al E. del meridiano de Caracas, Su
figura eg.flioi irrtfular, encierra terrenas, generalmente cilidcMi^;
algunos frescos^ ninguno frio^ pocos secoS; mochos húmedos^, sanos
en ^rañ parte y otros enfennizds. Esl^ país es el mas imponente y
majestuoso, así como es e( mas grande y desierto de Venezuela. Es
la patria del gran lago fabuloso de Parima, de la ciudad suntuosa
del Dorado ; es- ia tierra <iue dio nombre á todo el yasto territorio
de las Guafanasi por los indígenas que habitaban entreel Caroníy
la sierra Imataca ; es él pais por donde corre uno de los mas gran-
des ríos del globo j separando del resto de Veneiuela y casi circun-
dando un Tasto territorio erizado de serranías escarpadas, con lla-
nuras cubiertas de frescos pastor y bosques inmensos , habitados
por tribus salvajes de usos y costumbres diferenteS| que represen-
tan la infancia de las sociedades.
Kl máumttn'de E. á O. tomado desde la boca del Gnyuni, en
el Esequibo> hasta el punto del Apostadero, en el rio Meta, tiene
una ostensión de 241 leguas. Su ancho de N. á S. es de -150, desde la
mitad del cano Matoraca (por donde en invierno se va embarcado
del Gababuri al Barima y Pacimoni) hasta la villa de Calcara sobre
el Orinoco. Tirando una diagonal en dirección del S. O. al N. E.^
desde el punto en que coincide la línea Avisoria con la Núeva-
(]rauada^ el Brasil y esta república, que es en las cabezerás del rio
Mamaci, hasta punta Barima, en la boca del Orinoco, hai una dis-
tancia de 235 leguas. Calculadas las leguas cuadradas de esta pro-
vincia, resultan 20.1 49, enorme ostensión comparada con las demás
provincias de la república, porque todas ellas juntas solo tienen
15.802 leguas. cuadradas; así, pues, la área. de Guayana escede al
resto de Venezuela en 4347, y se puede decir que esta provincia
os tan grande como las otras doce que componen la república, y
ademas, un espacio igual al que ocupan las de Caracas, Carabobo,
Barquisimeto y TrujUIp. Sería todavía mayor la cstensión de Guaya*
oa si 96 comprendiese en sus límites el territorio entre el Apóporis,
el Yapara y el Gaamogí .49fi^iit«r ^imffXk^Ui Cababari, segan
los tratados entre España y Portagal. Entonces se anmentaria con.
5.600 legaas qae ocapan los biasileuses. También aamentaría so
eslension si se tomasen por límite las cabezerasdel Esequibo y del
Rapananíf't MftrfáW eété- tá^ qtie Wptiisít 'i la^Méliilnrveciaas
2iii'00« Saneando este número con el anterior se tendrá ana área de
dOOO ].' c. que Kabria qne reclaknar/lb que Ifartk <^tie está j^rovin-
cía faese una vez y dos tercios más grande que él restó' dé la répt!-
b'lica. Pero si tan grafrde és'ést*¿ pais, su pKoMadon Wmtii escasa,
y puede estar en páraTéto con la peqtie!íá íslk dé Mirgarife, qué solo
tiene 55 líeguas cuadradas ;'bien entendido, que tío'secomprettdefi
en el cáTcuIó fasLÍríbus de ididíós qne víVen en una satvátóTtiáépen-
dencia.
De las '^.í 49 se íelíen cónsícleW 46t*o(Ítf recorfíd&s y'ociipátlás
por tribus independientes , que' viven delS pesca y <fé lá máftitaí
harinosa de la palma : por asociaciones p^üeBás, qne cúlRvan la
yuca y'erplatáno a ló íárgo dejas riberas tfé' los rios, peádindo y
cazando en las lagunas y seívas; por ttri)us féróze^ , que v^gan en
las sabanas, man (emendóse de las'friíhaisfeílVéstrés que tés propor-
ciona la 'gran familia de ías palmas, y^tfé'fá caza dié'váfías especies
deanimaleSf £| número de lodos esíóá indfós pué(!í¿ áscén(térá
4^.040 j.pobl^íon que esfaria en razoíí d¿ ¿erca Set^lj^'pórh-
gua cuadrada dé ías recoixiáas per ellos. Éltesto, fcíabltaiíb t cono-
cido por fcís vecinos 3e ía jGuayaná ópórttidí^fetias ciVflfeados, es
un espacio de 4149 I-c.,,y ascendiendo süpobfócfón á ÍSj45Í (de
la cual. la nútad'soii indíos)j.,esfafiáñ én' faíoú dé 5 ^f2'por cada
legua cuadrada. € .. .
Renpicudo las dos jcantláaáes de leguas, y Iá¿ dÍJS cféí baíiámtes ,
'•f ''i '^». " r ■ ,
no aicao'/arian entóneles sino á 2.Í por legua cuadi^dá. Dé fe can-
tidad de 20, Mí se. gradúan l9:4656a!días. *'' '
"»••'* • ; /■- ' . ' ' ; . ■ * * • j.
, ; himJMSX COIS FINES»
•• • • * • » , ■ • ' { ^ ■ ' .♦
' ' . ■'.•'•.
Confina^ esta provincia conJal^ de^Cumatiá^^ftálPcélonáí, tfáráéas y
Apure , y ademas con terrenos desierto* de 'laf'PírieVá Granaba del
imperio del Brasil' y d¿ la fiuayana íngléia¡ "'
Desde la Boca del Vagre^' la mas óccí^eñítat'JÍéíf grati ildltá*'(iM'tí)ri-
noco; va el límite por todo el caño Mandmo basta C^tcü^dd fikrriln-
Ofev»#co'hafl»lái mühméom áá 9k>iérMs(fliBoA<^ atfdttide ter^
mina It' fít«i4iiÉhp4^ Cviiaiiá^imiftaQP iáid» incdkifln; SL'«urto
' déi OrteQeO'dénMMC-Uir0f(i'4ei^»f^ Imta
la boca del Saata^ en c^ff^ipm^eMífá^iáMiáatlká^tC^
misnu) Orinoco delinea siempre los límites con esta provincia hasta
la beca del rio Apure. AlliBjOippidMnr l4>p^<((^ftn>ine8 con la provincia
de este nombre , siguiendo el curso del Orinoco hasta la boca del
M«tft : €St»^o *vé<d«ipcMi éki MiMmfLháséLdiifmÉ^ Ummáé el
ApMtaác^, wmr^tt'M^M Qmf9t4áéo. UÉüi mctAtqmi^iske.ét
m^Mítimaf ApOMdeio ^knigv Í|o<«^ aVXh><W>dvOaMi), va^ al^S.
I por terrenas' siWaJái r ámméádm^ p«C*iiiiÉNBt«ft.ái b N»Ta
Gramida j atMrftesa el VioNéi^ d- rte €««»» nfwdktteiila< mas
arrtla úéioál» tíiMiM^M, ciMaiHÍ0kportnttadsl»jgMfl¿e! iala ám»*
naYtBBi. Be^pufeft «igtiifeÁdf^tsieiMpfe et-itaínBO ibandialiot^ la Jima
craza el fuiiMa^eo' el^ rMidil<MainÍMHicov ei Ctoinfarwfii'faoca» dd
caito Napiarí) y t«rarfii»^ai iM-^afewas de' ütoaachíj tpasaadQrjpar
las de r9aqaiefii>é9imp«aa/:En.4lofi§tprdabi|f^^
frofUenr eofl^el mparid^ dal Botaü'^ p«rHi]iten«i»}<finibad(rva*á
dar á la piedMi Ceevt, pvsMiAcrpQiite oatonat diriA<|iHD ^yTainD)
que caen al Guaiuia y por las de Gimié, f)GaioiF»Yiaaa^.MbnÍ4mare
que desHttbMaM al riOrUfitiiiMi ^o lifámá .ItanMidtt taubiea Ii^iiá.
Atra?esaDd(ve^-Ri9-fle§ros; flMinte á k( piedttdd £i<»clii^.ya.por un
terreno étBtev^ áUt fiilta!ÍMM:caÍíii Malta nn^: que ai Mt uetmMes
del rio Cababui4 rdeib»'part«'d^'«Í09^gM»y'tai «iivte al Baoia.
Desde allí sigue \^'\kim^» U/^-i^mpm'áé Iss^ieoron Oipi', Imerí,
Gnai y UovrttsiA>,'«trañreMMéoel daoiimiqaa eofnviáa pr^ tierra
el río Mftparif eéi» «1 €aatáno^; y for 'Idr'sierw'Ta^peeó'ipiQa las
crestas úé ia'serranfe défarlofai efttsegtiiSii .'pls»pilr'U>a^GefI:or
Putttíbii^, VárioMÍ/JIfásMM^ Mét«taHif AriVao«f q«e sa ao^^áJa'
sierra de fteararma , y p6r'esitt>eéi^íWqrQ>4a9Mi 'iMMíbntas r ^«
hasta eo«ónmiP«l*fMp<}fi«iiA>en>s«id^6«t)lNiiiadie^ aa^at foé<fttílMP,
pasando pof'los';c(H*ros< ^MafWBápaas^ wá 'm^^ (fanilaa^apnis qve
vierten háehrfor^t téfrfiUkies», cftte^htn-Áaianíiihaala^dliSdidaa
por la^ cumbos dfi laS'isiWiitts^tditoadAs* AM^taíia9iirla.lraiitara
con el fifrasiT y entra ki dér la Gitat^iM'kfglsía;
ht línea se deoMfta por ^ fti* márgei ^i2({itlarchi40M:»iqtfílio basta
sutonAnencia con el Glvyiftti: P^'i^ ootvoéaestairio va á eoet^n*
trar la boca del rio Tupurú^ cuyas aguas remontan. Se dirige á las
láBiko, to«to «I id» !**•.«• tofc««<W'i»íw»iwi.Afw
jK»oai «A».
le¿a <• «»Ae ,«• Ihut ««bo Mili». Fwnte «««**•» «PíWMMxa
la boca del «io lldwiCD, qiieeg el «mito 4e 1* Gw»*- D*»»»* ""
.«e M« al N. I» «Mi» b*ia f MB «Weda. harta U poBta Q»c»lc8,
.,ae 86 dtttiBgo. por famar ■•..eawwid» «I S. f '««W al O. uoos
cocal» iwi atoa qaeaw loa iM**^ JM«» M«*«te cotíapQ-
blada e> k» dam» de Mai^ea. D«^ difita-íW* W «1 W. íl. .0.
y N. O. huta mmta Caaima , «iak» boosi Wjo rewM»oqm»ento es
iutenMota para le» «|» bajean k boe» pande del Orinoco, por
no haber «Iro puto doadefioder balkar coa «eiwidad ; y sn con-
figuracioaea.to6«|«ltocaWe,.iio solo par lastrada é ebwíoe pre-
sente, SIDO por trea eaniloa ó mogotea^w m «tísUb Üerr»s aden-
tro cooio al S. O. ai el día e» Maro- . .
Al N. E. 4ee«ta beea, ««oá 5 letiM, ae halla na placw de
areoa ima de 2 í/í braaas , y PM* «i»*rlo «e debe te»er cuidado
de no baiar de lu 5 hram de tan*. Deíde la boca de Cuaima M-
«oe ona costa de arboleda pareja 5 rasa «w «e eatjende como »
legM» al N. O. ea ^ne «I halla la pauta Mooomoco : á esta sigue a
costa de Sabaaet. qoe se dirige al O. «w 4 leguas , también d«
arboleda pareja mas rasa y rnéao» hondaUe %w la W«*KÍ»r . La isto
Cangrejos tiene en sa ponta mas N. y E- M placer de color de cafe
molido tne se estíende 6 lega«« por sa parte del E. y como 2 fOi
la del N., el «wl baee peligreea U entolda al rio, poesentre «¡I y.la
costa de Sabaneta se forma la barra de 1» Bw gnude iiel Orinqí».
cuyo fondo en b^ja mar es de í 5 pies y de 16 en pleamar , lama
suelta. La barra tiene 5 leguas de N. i S. y algo penes de E. a O.
Desde la pnnta de Sabaneta sigiM» la costa de arboleda pareja roas
alta que la anterior con dirección al S. Q. como 5 legua!», y remata
on la punta de Barima ,qw mw de tirmía» á esta costa fieguida, ,
pues desde ella se forma »l»a grasde ensenada en <i«e, se i.iitfiF,»a
el rio.
La coéla que sigue desde. la isla de Cangrejos pera sotavento et
bien distinta de la anterior, rasa , toda quebrada:, formando dife**
tientes bocas por donde desaguan los canos delOrinocOj capazessoto
para etníbaireaciones pequeñas que tengan prácticos, pues están He-
nos de placeres de arena peligrosos.
Para los que quieren recalar á la boca grande del rio , recono»^
cida que sea boca Guaima, y no bajando de 4 á 5 brasas lama > s^
seguirá basta que punta Burima demore al S. ^/4 al S. O. y se baríl^
rumbo sobre c^ en demanda de la barra, sin dejar de sondar pard
conservar et fondo de lama, aunque sea á costa de poco agua, pñe^
es preferible barar en esta que esponerse á caer sobré el placer
de arena dura de la isla Cangrejos. Si se cogiere esta calidad de
fondo, se girará para el S. basta recobrar el de lama : de estemodo^
se srgufrá aproicimándose á la punta Barima , j cuando se esté cue-
rno á 2 leguas de ella se avistará por sotavento una- isla grande de
arboleda, que es )a de Cangrejos y se empezará á aumentar de rondi>^
por haber rebasado la barra basta coger 5 brazas» En esta situacioii»
se gobernará del S. O. ^/4 al S. al S. O. -1/4 al O. ptramantener lar
medianía del canal , en inteligencia de que si se cogiese menos de
5 brazas lama, habrá sido aconchado el buque sobre la costa firme
y se deberá hacer rumbo mas al Q; para volver á la medianía del
canal. En toda esta costa hai mareas mui vivas y regulares , que se
dejan sentir en el rio hasta Imataóa, pequeña parroquia. Cerca del
establecimiento de ellas solo s e observa por los prácticos quettenen
4/5 de menguante á la salida de la luna.
Desde esta boca se estiende el delta ó desagñe del Orinoco hasta
lo interior del golfo de Paria, quedando esta porción de costa iu*
útil para todo tráfico y navegación, pues n(^es mas que un laberiiilo
de islas bajas de fango y anegadas en la estación de las crecientes;
sin embargo, diariamente entran por Macarco, Cocuina, Pedernales^
Mahamo y Vagre, goletas y balandras del porte de 45 á 50 tonela-
das que trafican con Trinidad.
ISLAS.
llene esta provincia un gran número de islas que forman el
delta ; pero no consideraremos como islas de U. costa sino' las de
Cangrejos y Cangrejitos, que están en la embocadura occidental del
Orinoco , las cuales son bajas, la una mui pequeña y la otra coíl
— I
t
una estension de casi legna y medía. En la costa entra la boca de
Cuaima y punta Mocomoco ; hai dos.tslitas bajas llamadas de Co-*
Toctiro. Cira hHta existe en la boca de tfucnina ; el islote llamado
Hedoiido está en la boca deMacareo : entre la boca Capare y Cu-
TíOltía hai otra baja, y frente á la de Pedernales, una llamada Pes-
quero. A la salida de la boca de Manamo bai dos isíita's, llamadas
ik Pfatb y á causa de un mineral que allí se encuentra que es ana
pirita de hierro ; y otras dos islas pequeñas en la boca de Vagre ;
ninguna dé ellas es habitable.
UONTAfÍAS.
Los grupos de las montafiías de la Taritiia están enteramente se-
*ffa rodos de las demás serranías de Vcncznela. Es un sisfema aparte .
-y totiilnaente distinto, qtie los geógrafos conocen con aquel nombre.
rilo es una cadena contínuada sfcio un agrupamiertlo irregular de
ition tafias separadas nnus de otfas poi* planicies y sabanas. Se ven
largas y estrechas htlefas con cimas peñascosas y corladas en pris-
itaftií informes qie van en diferentes direcciones, y que de rrpente
^ pierden fen fas espesas selvas. Cerros alios' y unidos en grupos
desjordenado^, con Taldas rápf<íás, con cimas desnudas que parecen
tMminar fas llanuras qne los circundan, J en ¿üs bases se ven, co-
i»o arcliif>ié!agos de islas, formados por nnas inmensas penas aisla-
idts y -agudas, otras redondas y muchas destrozadas, todas de un
«sdlor negro y sin vegetación ^ que se estienden á grandes distancias,
dejando en duda si aquellos son restos debidos á la descomposición
lenta de las aguas ó mas bien á ahamíentos parciales ó generales
proteidos pett las eclosiones subtertáneas que hayan levantado
fa stapet'Qcfe de nuéstri planeta. Promontorios pequeños asoman
sus penas(X)$as cinras sobre tos mas altos árboles, como monumen-
tos escondM<1s en los bosques , otros mas pequeños aun quedan
"WfuWOs bajo un espeso* follaje. En las sabánaá se vén esparcidas pe-
ñas enormes quebradas y amontonadas uná^ sobre otr<-)s, que á lo
léj os parecen reliquias de monumentos. Al considerar las sabanas
y bosques de la Guayana, parece ique se están mirando las ruinas
de una antigua c inmensa ciudad, en la que el tiempo solo ha con-
k» rvado algunos testo^fnfon^s, por lo que con dificultad se puede
per tíbirla verdadera eSfnyctura y configuración de los destruidos
edificttOB^ y m^nos aun la distribución de las diferentes calles. To-
4»
'4o es desorden j tonfti^ion €n el sistema de las iDontaüas dé 'la
PitriÉna. ^n embargo, éxaminaodo con caidado sos masas, analí-
'lando sus ramiBcaclooes principales, se adquiere tm resollado qtle,
«i no da una idea' exacta dee^e soelo' trastornado^ aclaira á tóme-
nos sn distribución.
Par litemos este inníenío espacio én tres grandes trozos que lo-
nmremós )pov el curso mismo det caudaloso rio, que casi en semi-
^fXíUlo baña el terreno que los contiene.
Denominaremos al primero de esWs trozos primera dirección
(tel Orinoco y "reparación del Casiqviare, En este íerr(*no la sier-
ra Parima'es la mas larga y' corre en la direccfon'del N, N. O. [íor
50 leguas. Al estremo del'S. e^tá la n'erra Tapirapeeó y al opuesto
N. los cerros Variraa y Masliíaii. Su mas alto punto es el Piitubuire
de i .49*2 varas medido por Mr. Schoraburck. Sale de la sierra Tía-
piraprcó, la de Un turan que se pierde sobre el Siapa ó Idapa. Los
^rroíde Üeumsiro facilitan un pasaje por tierra para comunicar el
rio Castaño con el Mararí, tributarlo del Padaviri en el territorio
brasHenite : los cerros ücuttjsiro con loí de Gnai, Imerí y Cujh' se-
- paren las aguas que eaen á nnestro territorio de las que van al del
Brañl. por un espado* de 45 leguas.
La sierra Mei y elcerro Samtfro parecen unirse aonque separa-
•^dos, á los dcr Darieapa, Mapaya, Idaya y Parimoni que con una hi-
lera de carritos forman' los esttremos declives del terreno por donde
corre- d braio Casiquiare.
Loscerros'QuIíjuirlfM, Gua>aba, sierra Maraguítca y cerro Düi-
da parecen un gran ramal que está dividido por el Orinoco. (!erba
de la separación del Casiquiare el cerríto de Cameronara con los
ceñiros 6euinabt, Maguas! y una protongjda colina que después ^e
«leva én los certos Ouasacavi y Guanapiare, delincan las cfnmbi'es
que separan las aguas que caen al Casiquiare y Rio-Negro dé fas
qiie tan al Oñnoco y Atabapo, presentándose á larga distancia* y én
' 'dirección al •$. los cerfos Saquira, Mavicurey una colina entró «el
Ataba^ y -él litírida. El pinito mas elevado de citas masas eíel
ÍHéraguaca de 8 . 0<)6' varas.
El segundo troxo lo llamaremos primera inflexión del Otinocüj
la'euál ae eféctiia después de su Union con el Guaviare. La míais
^ larga cordillera es la de Maiguaffda que corre de E. á O. y despties
tdé& á N. por^tFfeguas, tomaiido éf nombre de serranía Goelii-
*ieny»]t la cabesrm deeste Ho. eorre'en ¿egufda ál N. 0¿ y dIesjMies
~ «12 —
al N. por 50 leguas, formando loa cerros de Ualo Hilaria y Pastora
y termlnaado cerca de Ja boca del Caara, Casi paralelo al curso del
Orinoco aunque en l^ana disUncia, vemos las masas separadas de
los cerros Cochamacaríy Qyeneveta Mariveni Yao, (laneva^ Aeiía
que terminan, en la serranía de Guamapi, cerca de las cabe^ras
del Gucbivero« Paralelos á estas masas tenemos los^cei ros Yacapa—
na, Nefia, Yumari, serram'as Mapicbí, Guayapú, Vadipú y Gerba*
lana, que parecen una sola bilera aunque destruida en Yario$ pua«*
tos, y que acaba en Calcara, después de recorrer una dii^cia de
80 leguas, Olro ramal paralelo tambieq y mas confuso que los an-
teriores , se puede decir que costea el Orinoco : sus ma^ grandes
masas son Siquita^ Quecanjuma^ Calilumini, Ovana, SipapOi Cu^
navana, Calaniapo y Pena, siendo en este ramal en donde están los
grandes raudales del Orinoco^ llamaos Atures y Maipures. Aeba-
jindose luego Jos cerros y subdividiéndose en pequeños é innume*
rabies cerritos formaa las serranías de Santa Borja^ Caricbana y
Barraguao, terminando en la Urbana.
£1 (ereer uozo lo. llamaremos seguuda inflexiim del (kinoco
la cual se efectúa después de su umon con el Apure. Los cerros
Merevari que obligan al Gaura á bacer casi un semicírculo, Jos de
Araba y Paya\^mú que se unen por el N. á la sierra Maigualida^
{arman el gran raudal del Caura) llamado Arare^luri^ mientras ai
S. se unen á la sierra Pacaraima, mediante el cerro Arivana. Aquí
es el portaje 6 arrastradero por doode se puede pasar por tierra
del rio Parima que cae al rio BrancO; al rio Caura que deseizd>oea
al Orinoco. La sierra Pacaraíma corre casi 40 leguas al E. : diri*
giéndose en seguida al S. E. por 24, retrocede casi al S. por 20j
y volviendo al E. termina después de una cadena de \%\ leguas,
en los cerros de Macara^ns, en la boca del Rupupuni sobre d Ese-
quiho. Paralela á ella están los cerros Oris , Qirapa, la sierra de
este nombre que se ramiílca al N., la de Usupamo^ la -si^rá de Ri-*
noeote que se ramiCca al S. con los cerros Irutibub., Arnacarima,
Jtfarinia y sierrra Aoraima que da origen al rio Garoní. Esta sierra
se une á la de Pacaraima, y de ella salen varias hileras desconoci-
das que se pierden sobre el Esequibo y el Cuyuni, entre las cuales
se conocen las sierras Camoran, Yeoamo y Arimagua* El largo 4e
esta interrumpida cadena se puede gr:adiiar de i 00 leguas^ una
tercera mucho mas nncUa que la descrita, peromui iatecrumpiday
con cerros esparcidos en de^órd^^^.es.la que se Cimoce con el noad)re
— 615 —
de cerros del Orinoco y sierra de Üpata é Imataca. Las cerros Ur-
bana, Tacato, Tnragna, Arimacarl; Torupa; S. Félix , Topunto,
Parida, Pao, Garaqnefío, Tocóina y Arlmagna^ aanqae entre sí se-
parados, hacen parte de la misma serranía, qne mas nnída se maes-
tra en la Vieja Gnayanay en Upata. Las sierras Piacoa^ Merí é Ima-
taca hacen parte de la misma cadena, cuyo mayor largo se puede
considerar de 240 leguas, desde el rio Caura hasta la costa del
Atlántico.
El primer trozo descrito es la región de los bosques , cruzados
por aguas negras y blancas. En estas es la mansión de la plaga de
insectos la mas tremenda , en aquellas falta totalmente. Las aguas
negras son límpidas y trasparentes, mientras las blancas son sucias
y turbias. En las unas se refleja la imagen de los objetos como si
estuviesen vistos en un flel espejo , mientras en las otras no se ven
sino confusamente. Aquí las aves pescadoras encuentran donde ca-
zar :en las negras es al contrario ; así es, que en sus orillas no se
ven aves y sus aguas están llenas de boas. En esta ^región Hueve
casi toda el aio , y nunca sopla el viento , así es que las hojas de
los vegetales están en continua calma. Los pájaros se encuentran
alU adornados de plumajes mas bellos y d^ colores mas vivos que
en ninguna otra parte ; los monos son muí variados y lindos, los
animales monteses en abdndanciá y los jaguares y tigres negros se
enseñorean en aquellas selvas.
El segundo trozo es la región de los raudales y allí se ven en toda
au belleza los isfectos de las aguas y la naturaleza en su estado pri-
mitivo. Las sabanas cercanas á estos raudales presentan las varieda-
des mas completas desde la creación de los humus, musgos y plan-
tas grasas sobre las peñas puras, hasta las plantas mas bellas y
frondosas del reiuo vegetal. Este terreno ea una mezcla de sabanas,
prados y selvas ; hai viento abajo de los raudales y calma arriba de
dios : allá se navega á la vela , acá se desconoce semejante recurso.
Indios pacffieos y cultivadores habitan la orilla derecha del Orino-
co , al paso qne la izquierda la recorren tribus ferozes y nómades.
Las cavernas de los cerros se encuentran llenas de esqueletos hu-
manos; las rocas, ée serpientes enormes, y las selvas, de ferozes
ti|;res ; mientras que los árboles están cubiertos de pájaros de todas
clases, que viven en medio de familias numerosas de monos.
El tercer trozó es la región mas habitada , y en donde se hace
mayor comercio de todas las llanuras de la república. El rio propor-
- 6*4 — .
ciooa con sus brisas la subida contra- la corríei^e, j e^t^ 4t|«iUpi la .
bajada de ios buques. Uua larga y eslr^oba fa^ de ü«rra%.e>.Ia ba^
bitada; otra aociía y poco conocióla, ^s 1» desinfla, ^o tfioniHi.
sobre la sierra Pacaraima; es la región de las ^andc^i selva» ep
donde hai uoos parajes ventilados y otros de eterna calma ; en unos-
llueve, abundan teniente, en oíros apenas cesa de lover. Las fieraí^
tienen allí su pacífica morada, y el indio no está visitado [(or niiigua .
blanco en sus tranquilas soledades. La faja estrecha, casi toda ella^
es i;egioa de pastos : el indio civilizado vive al lado del crÁotllo,. ^1
comerciante pone eo movimiento su industda y el criador sa<^
ventajas de sus rebafios.
RI09.
£l principal rio de esta provincia y de toda la. F€y[»úi4i«a m
el Orinoco, que tiene puerto entre los de 2*" ordena los^d^I
mundo y es el tercero de la América meridiouaL Nace en. \9t
sierra Parima, á uua altura qpe no puede esceder de 1 900 varas ;
tiene su curso 426 iegpas desen^bocando en el Atl4nticf» despipi^dd-
facilitar 400 de navegacíop» lül Guaviare y el Meta qvie oa«j^ ei|.
los Andes de la Nueva Granada , son de primer ócd^n. Ca4a un^
tiene 210 leguas de curso y de.lüO á 470 nav«:g{^i)leSh £1 Carop(
que nace en la sierra Roiaíma tiea^ 18$ de curso con Í6Q de na^
yegacion. E\ Cuyuoi que cae al Gsequibo, es^tambien de primer or-
den, teniendu 1 ^ de (^ursp y 125 d<.* navegack>n..Dliinidmenta., el
Guainia qjne nace en el territorio de la Nueva Granada j ofrece 72
leguas navegables entre esta república y Yenes^uela basta la ray«
con.elBi^sil ,. porque de aUi.prioyor<:;¡or.a Mavia una larga »a^*<
gacíon de 500 leguas liasta.el Anvizonas»
Entre los de Z° orden, cfue vienen de la MuevarGrauada á ^ier
terNlorio, se cuentan el Inirida y. el Vichada y entre los ^e nacfn^
y corren en la provincia i^e enumeran el Gaura, Tfir^gua, YeoUiari^,
Siají^^ Sipapo, Padamo, Aro, Gudiii^ero» C«ift^iW>H>^ i Mi^%aruiii|.
Yur.ua>i y el famoso brazo del Casinujari qfi^condiUí^ las^agnas-deli
Orinoco al Río Negro y al Amazonas.
De 5*' orden ouenta ^sta provincia el OoMua, Aial.ap^i P^t
moni ; Suapure , lea varo » Ainiri», Mav«m> I^ialf^y Pur^vi-..
En los de 4^" orden b/ii 2212» s^n cos^sf^^raj: mas d^e .700 ria?^
chuelos tan abundantes , que en mtacbos partes, 4e 1^ ref>ubUi^ ^t
deno^nnarian ripSt
— 615 —
Como el territorio está dividido en tres hoyas hidrográOcas , que
son las del Orinoco, Rio-Negro y Cuyuni , díren^ps que en la pri-
mera correa 158 ríos de solo este territorio y 500 riachuelos cojao-
cidos; que en la segunda son 56 ríos y 60 riachuelos, y ea la terr
ce) a 92 de los upos y 400 de los oíros : baciendq todos un total d^
286 ríos y 760 riachuelos.
Hai ademas caños naveg^ablcs que se forman en el della deA Ori-
noco y son 6 -prímarlos , 6 secundarios y^4 ipas pequeños , de Ip^
cuales se dará al fin una tabla. Todos estos c^os tienen bancos dq
arena que se Ilamaq pa^os^ cuyo número qujedará detallado en I^
tabla citada.
Todos los demás c^ños de esta provincia , riachuelos ó ríos ,
tienen raudales y saltos. El Caroní forma 5 grandes raudales y tre&
saltos que son Arimagua , de 8 varas , Nequiraa , de 9 , y Caroní,
frente al puerlo^ de 7. El Orinoco tieije 16 raudales que son :
Camiseta ó Boca del Infierno, Carichana , Mariimri, (Jaribeo,
Tabajc ó Sta. Borja , Atures, Garcita , Guahibps, Maipures, Ca--
majé, Nericuao, Hormiga, Ají, Castiilito, Sta, Bárbara, Már-
quez y Guaharibos : hasta aquí es navegable el rip. Escepto Atures.^
Maipures y Guahibos, los demás son insignificantes y se pasan faiQil-
merite.
Al de Atures no pueden subir grandes embarcaciones , pero si.
bajan con el ausilio de las crecientes. En esia época descienden
las que se construyen en Rjo^Negro cargadas de cables de chiqui-^-.
chique que se venden en Angostura y sirven para comerciar cpn
Barínas. En el paso del raudales preciso desocuparlas y llevare!
cargamento por tierra al hombro Je los indígenas^ por mas de una
legua, para ¡ue la 'embarcación pueda payr sin dificultad el ratt^--
dal. Su descenso total es de II varas en un espacio de mas de un^¿
legua , y sus pa<os m4& reporjibrad.os son la caida de Pereperemp,
el Salvaje, Sallo de Piapoco,, Sanlinero y Yabarilxín.
En. el de Gujihibos es preciso también medio descargar para su-
birlo , pero no | ara bajarlo : este se pasa prontQ, ponqué tiente uo ■
solo dique que en el invier,no no es peligroso.
A un.a leg a se encuentra d de M.aipnre, en el cual es necesario
descargar para poderlo bajar ó subir, y está en el mismo caso queel.^
de Alures. Tiene de largo mas.de una legua y el descenso g^ncr^al
es de 1 9 varas. Los díqqes naturales de mas fama son , Puri;narípji^ ,
Manimí y el sa to de \sl Sardina que es el mas peligroso.
— eu —
LAGUNAS.
La de mas importancia eo el dia es la de Vasiva ó Mandayaca ,
en la que babia una misión en tiempo de Humboldt ; pero en el dia
la isla en que estaba fundada se baila desierta y en la. laguna haí
gran cantidad de tortugas.
La laguna Macavacape es particular porque en ella bal Yariaa
islilas y morichales cuyas aguas presentan un fenómeno bien no-
table : las unas van por el cano Itinivini y rio Conoraehite á Rio-
Negro , mientras otras por el cano Mé ó Del desecho van al Casi-
quiare.
La laguna Culimacari merece mencionarse por las buenas ma-
deras de construcción que tiene en sus orillas. Su largo es de 2
leguas y una de anclio.
La laguna Caripo comunica por dos canos al Orinoco y al C^i-
quiare , cerca de la separación de este brazo , pasando eatre la peSa
Guaraco y el cerro Pava.
La laguna entre el Atacavi y el cano Chirari es interesante por
cuanto en la estación de las aguas se puede comunicar por uno j
otro al Atabapo y al Orinoco.
Lo mismo sucede con la laguna Sárida^ la cual se comunica del
Inírida al Guaviare.
La laguna Caucagua tiene mas de 5 leguas sobre una de ancho.
Se comunica con el Guaviare y es abundante en peses.
Lo mismo sucede con las.de Sesenta^ Macjisagua y Surlnariy que.
son producidas por los derrames del Guaviare.
La laguna de Bpcon sobre el Inírida^ y oiréis sobre el mismo rio^
no^proporcionan pesca, ^rque son de aguas negras y solo tieaea
grandes serpientes boQs,
La laguna Ahota comunica por un cano al Orinpco^ tiene bnenoa
pezes y tierras útilísimas para el cultivo.
La laguna Gárlda sobre el Orinoco posee buenas tierras y allí se
halla establecida una tribu de Maiuiriiares» Lo mismo en la, la-
guna Yapacana que comunica con el rio Yao«
La laguna Ubua es abundante, en pezes. Tedas las nombradas,
están en el cantón de Río-Negro.
En el de Calcara hai muchas producidas por las. ereoientes del
Orjinoco : pocas se secan y en ellas hai mucha pesca^y.caza; sobre
— «IT —
todo en la de Coroza y en las que se hallan inmediatas á la Urbana
y Caicara.
£n el cantón de Angostara cerca del pueblo de Pargoei y vecino
al Caura liai una laguna que fué producida por un terremoto : existe
otra cerca de S. Pedro, que tiene muchos pezes; y las que están
en las sabanas del Torno ofrecen bastante casería.
£n el cantón de Piacoa se encuaniran muchas lagunas^ sobre
todO; en el delta del Orinoco ; todas son mui abundantes en pezes
y en ellas sale y entra la marea. Las que están al estremo del caño
Mariusa proporcionan en el invierno un paso al cano Araguaito.
Las lagunas Marieta^ Sacnpano, Socoroco, las de las islas Tórtola
y todas las qae están cerca de la Guayana Vieja son formadas por
los derrames del Orinoco y conservan siempre agua y pezes. Entre
estas'bai una que merece particular mención ; es la de Casacoima ,
en la cual poco faltó para que la tripulación de unas lanchas espa-
ñolas tomasen prisioneros á Bolívar y á varios proceres de la inde«
pendencia^ entre los cuales estaban los generales Arizmendi , Ber-
mudez, Soublette y otros que tuvieron que echarse á nado para
poderse salvar,
CUMA.
£1 clima de toda la Guayana se podría considerar cálido y sano si
no hubiese logares espuestos á las exhalaciones de los pantanos que
deja el Orinoco en su bajante, ó á los miasmas de ciertas lagunas
cuyas aguas están estancadas , lo que produce calenturas intermi-
tentes^ pero no peligrosas. En las espesas selvas sucede lo mismo á
causa de la grande humedad y de las emanacipnes gaseosas de las
plantas, cuya putrefacción está acumuladsftdesde tiempo inmemo-
rial. En las sabanas del Orinoco que no están en la línea deesas ema-
naciones se siente un fuerte calor, bien que se goza de una atmós-
fera sana, tales son las sabanas de Upata, de Angostura, Calcara,
etc., en donde el calor es desde 27^ hasta 30<» del centígrado. Las
piedras ensegreei^s que est¿n en las orillas del Orinoco ó los gran*-
des bancos de granito iiegro que se asoman en las sabanas espues-
tosa los ardores del sol, se calientan tanto de dia, que al entrar la
noche se han visto á 5$^^, y las arenas de las playas á 2 pulgadas de
profundidad, conservar «n calor.de 54<> á 58^ á Jas 7 de la noche.
Se dice oomumn^te que el dormir sobre las piedra» negras es
DMiaaoo : m* nb fiij^o he* leftidí^ piiMbm át Mto, y del foflajo
pernicioso qoe daa á la luna llena sobre la salud de aquelhis que
duemen «Mi.lft eartí et|H|e6ta i salnK. Ptireee también que en
Akires y ÜMpsces ««e|en*daroal€Otur«s mas qfie en otras partes
y aa oree que es. la reoflío» de< un gran calor á una humedad esce-
siva del aire, y. tas exhalaciones venenesas qoe se elevan de los
desD«<i»s peftasaas'de ioaraoMeSi Hiimtoldt dfce « Las peiías ó
« rocas giMiiticasqtteel Oniioco baite períódieamenle en las cafa-
• raias y ettlM te aoúiioiies 4e i^rioliaiia y Sta^-fiárbara , son lisas,
« naipras y como baraíMd^s de lápiz-plomo ó inoHbdena. La mate*-
« na colef«Ale>iMi>peoelra enia píedra^e es un granito con unos
i si-awis.f«6<toaliei|^>algoiiies cristales de afrfibd a. Igworo yo si
• es» con ru^a ¿aki^ena q«es>e<M)Bstdera en las misiones del Orí—
« «oco la projiifiíidad de iaa poftas desnudas, y sobre todo la de
t las masaaq«eUef«^'Oorteia de earbo&o de óxido de hierro y de
«• magnesia, eaneo^va i'tasalod. »
ESTACIÓN DE INVIERNO.
En los lugares próximos á la costa, en las sabanas de las anti-
antiguas misiones del Caroní f enla parte entre el Cuyuni y et
Esequibo, empieza á llover desde mayo hasta octubre. En noviem-
bre entran !éÍ3 nortes que doran hasta fin de enero. En las caboze-
ras del Ganoffí, en las sierras Rrnocote y Carapo llueve desde marzo
basta dicienshre. Apiernas casi todos ios meses hai grandes aguace-
ros oorao sneede en- las eabezeras áíñ Paraguá en la sierra Paca-
raima.
En el cantón, de Río Ne^f e Hneve lodo el afto, menos en enerO;
febrero y marzo, que es verano, en cttya época, no dejan de caer
algimos aguaceros ; pero en^ los nieses de junio y julio llueve coo
mas íuersa y es la época ^verdadera de las grandes Hutias eeuato-
riíalet y la causa doto grandes: creeieflftes del Orinoco. Bléctivamen-
te, vemos esto rio frente á Angostura quedar en su pleno hasta 24
de agosto, y disariimlr después progresiyamente ; pero con mas len*
titoddelO'^uehaliia'Siibüo desde fnesda malrso hasta quedar eo
s^máüMBum.
El Orliioep, el Ventuari y el Atabapo erapiesani crecer i fines
de maezo. £4 0«avia?e) crece 40 pies, et Atabapo 59, el Inírida
MS>, á Vaatmi i'M^y el PadasK) y el <ki nneaBttffla^Sf f el Maraca 26 .
La creciente de todos estos grandes ríos qae concurron al Orí*
HOCO, fué medida tanabiéii es <3eiiijQi)to'fN«té á GastillitO; masar*
riba 4e\, VJtíi^) en ui a peoak a#i p!ei>f>eadtrin}w q^^.'4«' el^Ha^eiq
forxqa.4eiC{isiti(>o sot^r^^iU^u^. Ul0#M^4pe^]Et^i«4£¿a4(Ke> ^m
en la.üUii^a,cr^e^te in<lic^ba«5.6 pi^^ea^l me^fdeei))^^ ¿ppaa *
en qpe. e^lá m^» bajo el Orío^ct^
Después ^icpe el VLcbaddqpe croce^Q pie^ y^el^il]^PQ,atn»^u-
to* Pa$«4Q^li>s raiidíries.si^^e elMfí^4oe<:r«}c« 47 l4 k^v^.ú9
pii^^La (inijf.midida4 xoodift.del €£UAiú|Hve^se4«b^x;^&i(k9r^r.fp>i|»r
bajante de ^ 4 varas ; la del iMXv^dfi 8, las, d^ Ktíí^jk^fY d^^Vi^;)^
uart de 6 ; las del Padamo, Cuntlnamoy Cunucunnma de 8 á 9 ; la
del Vichadade7;IadelSipapo4e6sJ<ul^lMetade^4; la del Apure
de ^ 0; miéiiti as que la del Orinoco arriba de Mavaca es de 6 ; en
la.oonfiseMífijM iGuaMM» -de 4® ;.a)MJo 4< loirftttdikie8.ih 4<^);
abajo áíthpíge é$M ; fueote á^Anfostum^eM : «si» pnototfdK
daé «üfniíwf e -lO'vtinBfirbaaia el Míb^ con atgmn»variaeiMie8^ y*
deaiU 4)atfa idrajo 86H>>de)4i Tm»<
Si«e>nsid»mmeet6«tet ^qtde»: cmtitnlds^de los ríes ififotttaríi)»
ád i^kiooonf ao aecá>estti^ :fmA» ttm oomM^sey taaoPMido eo
la estación de las llovías. El Garoní q««}COiidiiM>«i) 9M»^foUlltecft
de^il^^ fin»e §§ piei^ yfii próán¿íd«i iiidliii'te'ff«46«gr«éiiar
eo; H ysifia* £1 PaiBgaa.«iio de>aii» gi«iMl¿t .trilii^ili«s sí¡¡bé"2S^
pies y tiene» jttoa profipiidiéaáiiiHNiia^d* 9í «avas;
E^ Gttfaai i|!ie.4»i0 Mk B^^qufbO' cf«O0 92 pies-y m pfoftmÜdM
media o» de.-M ym9$,
JBor áltimo ai RkhNagro «rece $8í pies y M praf««iii<}ftéiMdili
es de 40 varas. Los riof^ Siapa y Bidamo er^eea 48^ píes^y^seii pee-
íuBiUdad;ai«dia^«s .áe-S ¿ 46 faras. £1 Cañmiam «eeaeSOipíes y
su profundidad media es de ^1 0 varas.
GiMJidoilodoa ealaa; %cmio% rías^eatáo «ii<Mhpiaim*cpaei(ítile) lina
parte considesaUe da loa besqaaa^ y tafkiAaa da- eos^orlNaa «^aé»
cufataila de^ina^ da^ ^mén^^ q^a^en nMCbaa pap(6B»ii^a»«n€«eti^
tra'Oa doodjb liaoaK pié. jKa aa«ra»qiia lai&undiicitfh «aa démv-^
chaa iegnaa da aoMlwra, qée á !o aona aaaá^ dajoasdia tegua ^ fie*
ro4Wf iao. quádtn jaipiai .mM Interior vaiÉMs, astoiai^ioa anaga*^
das.fkar.las pequanaa^ oaíkis, laa o^alisa iio aoeoeiitraa róaK)4t«)a-^ )
guárame! roaipi0tite>
— «16 —
mvisioii TsunnmiAL.
La provincia se divide en 5 cantones que sop : Angostara^ Bajo
Orinoco, (su cabezera Piacoa] Üpata, Gaicara y Rio-Negro (sa ca-
bezera S. Fernando de Atabapo). Todos contienen 51 parroquias en
las cuales se cultiva maiz, caña, café, cacao, algodón, tabaco, ar-
roz, plátano, yuca, ñame, caráotas, frióles ocumos, batatas, ma—
pueyes, algunos cocos y muchas frutas. La población se puede di-
tidir del modo siguiente : 45/1 00 á la agricultura, -1 5/1 00 á la cria
y 40/^00 á las artes, pesca, comercio etc.
COMBRaO.
Los puertos de esta provincia están sobre el Orinoco y otros ríos ;
niaguno tíene sobre la costa del mar. El principal es Angostura,
donde coocurren los buques de mar y los del intelrior, por canales
naturales que sonólos ríos. Tíene comercio con Santómas, la Trini-
dad, las colonias inglesas y imicesas y les Estados-Unidos ; red-
biendo toda clase de mercandas secas, caldos, herramientas etc, y
daadaen eandHO froto» del país. '
Recibe de la provincia de Btrínaa aftil, algodón, café, cacao, ene-
ro^^ astas y algunas maderas , y da «n retorno mercancías secas y
efectos de bodega, beri<aiiiieBtay embarcaciones, cables etc.
Ito la de Apnre recibe cueros, grasas, queso, ganado, bestias ca-
ballares y mulares, dando en cambio lo mismo que á Barfnas.
De la proviAoia de Barcel ona recibe lo mismo que de la de Apure,
y ademas papelón, easaba y aguardiente.
Be la provincia de Cesanare de la Nuera Granada se reciben mu*
las que pasan á TrmiclSd.
El puerto de las Tablas, cerca M CariDÍ , sirve para embarcar
los ganados del cantón de Upata y llevarlos á laseolenias.
En el cantón de Rio^Negro bal dos punios que hacen un peque*
So eomerdo , S^ Fernando de Atabapo y 6. Garlos de Bio^Ñegro.
Del primero salen pava Angostura cuando el rio está crecido, lan*
días, piraguas, cables, chinehoires, guapas, cara&a, pucheri, zarsir-
{Nirrilla, sarapia, caneUHa, almendrones , manteca de terecai, mo*
nes, pájaros ; en cambio de mercancías secas, licores, herramientas
y sal. También por S. Fernando de Apure se hace igual comercio ,
T ademas se lleva un poco de cacao. -
Del wtfjaniOy el oomeicio escon & José de MarafVitaiieB y S. Ga-
briely pertenecientes al Brasil ; recibienéamlá, pnoherí, zarzapar*
lilla y tabaco , dando en cambio mescancfos secas , sal y goma
elástica.
De los indios de la E&mférdda reeibén los babitantés de S. Fer-
nando de iltabapo almendrones /caraña; saraina, zarzaparrilb ,
pncherí, guapas y manteca de tortuga. . .
De los de Cunucunuma y Ventuari reciben cascos de curiaras^
guapas, yeradas de flecha, casabe > mañoco, cerbatanas, curare,
chinGborrds,gallínas,. plumas de piapoco, pa^os vivos y empaja-
dos> cera y paraman. Lo miaño traen los indibsdel Guaviare, Iní-
rída y Gnaiaía, y ademas monos y cauciio*
CIUDADES 7 VIliLAa.
CANTÓN I)£ ANGOSTURA.
La dudad de Angostura es la capital de la Guayana, provin^
cía que tomó su nombre de les indígenas que habitaban parte de
aquel territorio , y que fué después estendiéndose á todo el vasto
país que queda encerrado entre el Orinoco, el Gasiquiare^ Rio-*
Negro, Amaxónas y el Atlántico, formando' una inmensa ishi de la
cual pertenece gran parte i Venemiela y al Brasil ; y pequeSas por*
ciones , á los ingleses., franceses y holandeses^ los que tienen esta-
blecimientos coloniales. En 4499 \icente Yenes Pinmn, célebie
compañero de Colon, reconoció la boca del Orinoeo que llamó Rio*
Dulce y que los indios nombraban UriaparK JEm 4554 Diego Ordás
entró en el Orinoeo y llegó basta Carichana ; pero en 4 555 su maes«
tre de campo Alonso de Berrera subió basta el Meta y se introdujo
en este rio, en donde murió, peloando^eon loe indígenas. En 4576
ratraron los jemitas Ignacio Llauri y lulian Yergara , y fueron los
que pusieron los primeros oimientos de Santa Toétas j frente á la
isla de Fajardo, en el dia ffaerto de las Tablas ; pero su aelo evan*
gélieo quedó frustrado por la invasión de ios holandeses ( á quienes
capitaneaba Adrien lanson en 4579 ) los cuales destruyeron la na*
cjente población, t|9niendo«los misioneros que abandonar d pais.
Don Anlonio Barrio que hal^a bajado de la Nueva Granada por
gvas mas abajo del primer panto en que se fundó , qne^faíÉdo la
pfOvineii ddrito«éiili6actodepiadtoitei*glá Wtoé^a^Qranada, Menos
. «11 to orieiiiüüté. la 47*1 JM «MOpréaitMa e» Ift'^tMía «üM-
ral de Venezuela^ mas penamédA ateami» unife^á ^Cttmaiflá faü^a
476§.
£o 4 5#& fiK&de Santo Toma» k prínfotn es^Mofi^qtte iMMia
flor esta pacfi&tl Mrado^ ím ó«al:iM-'lAeáaz4 «Im tl-^MM^iel T«-
tdm^i 4K4ltéiNi lám}má9ma»ei9k9m^áSLf^eMWl,m 4eg«llis
mas allá de la parroqMÉ d9>li fm^amyVkaí^óá^ anílstifUMn^e
Barceloneta : pocos regresaron y moi escarmentados por los indí-
genas.
£n 4 2 de enero de 4 61 8 se apoderaron los ingleses ^ cóndacidos
por Walter Realegh^de SMo^osmb^ qm dakQdló> valerosamente
con pérdida de sn vida el bizarro gobernador Palomeqne. Realegh
sa jueó y quemó aquel estabiedmiento. -Un año después Femando
Berrio reedificó en el mismo lugar; y en 4764, en tiempo del go-
l>ecaador iK-Jooftiiii^ Mcmat» deJfffidiaa^iaefriQépfé éMnaOrnir
SaotaTomas^dc la. Nueva €M|tnav enlapas maHafribatea^el
lugaf entqae^aeüíalfflBnie axiafte ; ffer»^nokiyodié»<»a«Dr^r aa
nombre porser dematiadoiaifo», y^ieanstítuyó ri^de Am^astun.
ElecUvaineaiei aval ponla»«» que «e <áMo6 la Mdad, $e aogoata
4Í Orinoco^ii solo tia«e'S95 vaaaa^fipaiftte á'k)s^aalit«aaliariin!iBa*de
S. Gabriel y.S< Rafael , y 44^411 «n e4 giaíli patea' d<» lé ^laniada,
ecrea. del efliliafcadero'daligaaa^a^ : «ns ^rtba ó^mas •abisj») au
aii£biar«e»da AiSif^é-¥.ñ(^ ^áTMJEmmttüo MaSti^ehO'StflevaBfa
iin.fMOttac^de'^aB%mtf aoiMiiea^ eoyoe lados
4itad(»s penPf>idíe«iarmai<6 €iape«'eotéli lüse fma:|»«r«i(Mi de pe-
«aa aa»auu>aadaa'ó(espan)ldto^q«e!a9aBW»'«a latfmatapias'avs
Agiidaa y apíoflMriaa^^Bbavaa* Lamfflar4a*lapliii^4esnuda;qiie^ila-
man la JPiedra.|M-Medi«^ e9lá>adaraada de«tt paqutíbe^ áiM ^9«e
las creGÍe|ites4ift|iaa;pa4id# arrancar*, iiar las i^M»^«tfdi^o en
aquella pwi^laa|ig«aa4iirbíi6'A ^ aaeaatváa bajanteaj ÜMm Ids
habiUotes ^de Anttwlua» ^fti ^iiíiiaetf «wg»» nitural qjáé Mm éxac-
Umente la allwt ée laa dáier«il«é cgeciiiw» a4 «uno 'ée lo f«e
dismiavyen düaiiipiaaiek» afMiu J^ia^MatiófKdl^lMareriaBtas
cubrir del lodo tata «lafca; perotyi>rs«ateiahiise^oaÉa«Bf9ie el
máximiiía á qaf «e bao itavMdr ta» mam ásbre irt ihciide) rio étk
la bajante ó verano es de 30 á Sd^iesi altara «iiortiie, sise cottt^
para el anchoa Orinoco' y su prDfmdifbá media , qae en este
punto se debe estíoiar eo #d:ptto :ée oantígoíénte 66 enortt^'Ia
masa de agua qte á cada insltoté |ML$a.por «Itet puntd^ tiendo tMilá
bajante 240*000 pies eábkbslper sagondo , fialúMmJgiMii al ^
lJe?a el Ganges ea^^u oneomée.
Solo en 4728 inUrodojeroD les eaporbáaíés cstalá0c« el prfúief
ganado vaeuoo (loBiávdok) de laprofimia ée ConNmá ) qtae de^-
pues prosperó ba«ieiid0lasríqilea»s<de ka mlsiiMliM-dtfel GAroni.De
Asgostora salió en 4770 «el eapítaki AAtoni» Santas Ae' la Puente ,
remontó je} Paragna , éiraveeók 'serrMik'«ki PiseafafiM ^He llanió
Químiropaca, bi^ó por el río Parima^ fvé atlago^\lni>aeó/ desprendió
por el rio Braneo, sobióel Aio-Nefro y el Oásiquía^é, y per el Ori-
noco abiyo Yirivióal Inglur deeursahda» Acéaiygffet^tffctfijiete at ddpi-
tan Bárrelo en 4-77# ;ijiiiilQsr««bieíon'el Qa«ra y «rt^reiFato, atra-
vesaron la BÍísrra Majgii»aUda, fcajaronpor el-Manaptüi^ áV VeAt«afí,
y atravesando- las tierras , fieron*^ la'Bsmemlda. fisie tatttfno qtfe
debía servirá la eomunlaacíon'^de. lo&astaiiMinrielllés'lflel'€ftiti^
con los de la itsme^da^litéaseititadoipor 4^f^Mes lÉil^tares, en
una esiiusion de mar de BO Icigtstas. 'Los hidioi-ee ^íablánadtl^Hdo
á los espsftoles. pam ttbertarse^de las peiveaiomMBde le^<€atlbes ;
mas se dis§4is(arontpor e) meA trato * que- iMoaéms^ buiílpédids'léfr
datmn, y en una sola^noelie; >áUévnii9nD''bi)m^]»tiiisitMilOdoe'lm
puestos, los quemaron y defollareii las solltodt)» , e^eapaado mili
pocos que dable r^w la vida á la bifmani^tlád M algunas- miij^es.
La ciudad doAagosluiiavsta edSfictféaieoHio-en'atiátedtro, en la
pendiente de una coliiia , en parle desnadar de re^<iac¡on<:S«M enf-
iles son paralelas al curso éel< rio. Yariaii date están eoQsIfaidasreii
la r> ca pelada^ son altaf> cómodas y la HMiya» parta de piedr;i, <oya
oonstruecioa prueba- que lois babitan^sr ,00 femekk tnirénMas. Sfn
embargo, en el.^ran temblor der47'66tqtiedeattiasid'áCiinid«á j el
suelo granítico deila&-doa orillaa^M )Dmaaa> -faé^aftaió basta léis
rauda'es de Atiures y ^]ai(>ures* M^Sm de.eséaá.rawMesee^^ieiiten
temblores alguua^ vexesi que selímilmiJa madre del alia OriíAorro
y de Rio^Negro : parece que dependen 4etitr cento'Yelcáisfoexltfe*^
rente del de las islas Caribes. Los misioneros ^ Yavilry íSí Pemande
de Atabapo dyeron á fiumlteklt ^ne en i7dft hubaTíelatttoa tem-
-•14-
blores de tiem ailre al Gm?ían y Rio-lfegrOj^ y les curies no se
|MX>pagaroa «1 N. hacia lfeípore$.
Angostara se encaeotra ea la latitud N. de 8* 8' 44^', y en la
longkad 3"* 9^ kV al E« del meridiaDO de Caracas, á laaltara de 6^
varas sobre el niTcl del mar , del cual dista por d río 83 leguas*
Hasta aquí llegan nafegando á la vela bergantines y goletas, á de-
positar las mercancías qne se derraman despoes por el interior ,
por medio de los canales natorales qne ofrecen los ríos , por los
cuales bajan en retomo los productos del país que se acumulan e»
este punto, verdadero almacén de los llanos de Veneiuela.
Angostara es la única ciudad de esta república que tiene un edi-
ficio elegante y á propósito para mercado púbiioo i imitación de los
Estados-Unidos, pero proporcionado á la población.
En lodo el ano el calor no es tan escesivo como debería serlo ,.
estando fabricada la dudad sobre la roca Yl?a, cuyo color negro vi\i^
sorbe los rayos del sol y despide después un calor que sería su*
focante, si no fuera refrescado por los rientoaireguiaTes que vienen
de la mar, y si el aire no estuyiese también modificado por la fres-
cura de las aguas que riegan este vasto pais y la espesura de las sel-
vas que h) rodean ; asi es, que el termómetro sube pocas vezes ar-
riba de 30* y baja de noche de 2-1* ^^ á 23« 33.
En todo d Orinoco se mira como perjudicial á la salud la acción
que ejercen sobre la atmósfera las capas de tierra negras y pedrc-
gosas enardeddas por los rayos del sol, que en Angostura abundan
sobre manera ; sin embargo , Humboldt creyó que se debía temer
mas á las aguas detenidas en las lagunas y anegadizos que se es-
téendeo por detras de la ciudad hacia el S. E., y ciertamente algu-
nas vezes suelen las calenturas afligir la población ; pero se observa
que alaron por 16 genefel á la gente pobre, que come con demasía
frutas y se baña con esceso sobre aquellas rocas qne deben en gran
parte contribuir al mal. Las brisas son aquí mui regulares desde el
mes de noviembre basta el de mayo. En el resto del año se hallan
interrumpidas por calmas mas ó menos frecuentes, mas ó meaos
largas. Las tempestades suelea venir en los meses de agosto , se-
tiembre y octubre, y son producidas por un viento que dura foco ,
pero cuya vinlenem casi iguala á la de los huracanes, y por lo co-
man termina en lluvia.
En este territorio el-^ general Piar ganó la célebre batalla de San
Félix eHI de abril de ISÍT/viclorla qne después proporcionó la
toma de Angostura, y en esta misma plaza el héroe de S. Félix fué
sentenciado por un consejo dé guerra compuesto de sus mismos
compañeros de armas y fusilado por él críiñen de conspiración. La
mayor parte de los proceres 'de la 'independencia se reunieron en
esta ciudad; cuya posesión aseguró para siempre la emancipación
de toda Venezuela. Efectivamente unos inmensos desiertos cubrían
las espaldas de los defensores de la liberiad, y el Apure, uniéndose
al Orinoco, presentaban juntos una estupenda línea militar que ame-
nazaba por todas parles el resto del territorio y al mismo tiempo
cubria los llanos mas abundantes de caballos y ganados : elementos
con que se prolongaba la guerra para llevarla á todas partes del ter^
r¡ torio venezolano. " • •
En Angostura se reunió el segundo congreso de Venezuela , cuando
casi todo el resto del pais había caldo sucesivamente. bajo la domina-
ción espaiiola. Un puiiiado de patriotas lo componía^ pero estaban á
prueba de la constancfa, del valor y del desinterés. Allí el 20 de no-
viembre de ^818 , dieron la célebre y solemne declaratoria de. Ja
emancipación deVenezuelja, y en medio de los aprestos de la guer-
ra se dictaban también leyes benéficas á la sociedad. Las selvas del
OrÍDoeo vieron eniónces por la primera vez los tipos déla ¡mprvn/;^
que dirigidos por los Zeas y Roscios propagaban por todas partes e!
fuego de la libertad. En aquellas soledades se organizaban las huestes
repubíicanas; y el indígena, arrancado del estado salvaje al estado
monótono de las misiones, se vio de repente incjorporado en iasGlas
libertadoras; y lanzado en iina carrera nueva, para él desconocida^
Estos fueron sin embargo los elementos con que el héroe venezola-
no, Simón Bolívar, emprendió libertar la«I\ueva Granada ^ cuya
gloriosa campaña siempre hará época en los anales de las naciones.
En las selvas de Guayana retumbó eH7 de diciemb rede ^849
la primera salva de artillería que anunció la creación de la vasta
república de Colombia , á consecuepcia de las espléndida» victorias
conseguidas en aquella memorable campaña.
Antes de -177^ Angostura no tenia comunicación directa con la
metrópoli : ea ese año fué cuando algunos comerciantes enviaron el
primer barco á Cádiz ; y desde de entonces se estableció un cambio
direqto de mercancías con los puertos da Andalucía y Cataluña. Las
1>ocas del Orinoco tienen una ventaja sobre todas las otras partes
de Venezuela : ofrecen la mas pronta comunicación con la Penín-
wáU. n viaje de Cádi» á pnnl» Biriiiia.te.|iaoa á fem ep 48 ó 30
im. U ^TqeUa i Evropa es de $9 á 55, EsUndo est^s bocasi l>ar-
loveolo de todes bs isla9j I09 oavíos de Angostara pueden jnante-
oer un eomemo mas lucrativo con las islas de las Antillas que ooo
la Guaira y PuerUhGabellOi ; así socede. Con respecto al comercio,
el mas activo es el de la provincia de Barínas^ aunque puede decirse
que Angostura trafica con todos los llanos, no lamente de Vene-
zuela sino ta^ibíen de la Nueva-Granada. Por el Arauca n^nooian
barcos bástala villa que lleva el nombre de este rio : otros se intro-
ducen por el Meta y el Casanare y proveen á los babllantes de
aquellas llanuras» y remontando aun mas el lleta, van basta el pié
de los Áudes^ranadinosá llevar las producciones europeas. Coando
la población aumente en estos ríos y cuando la riqueza territorial
sea mas grande^ entonces recorrerán estas vías , que la naturaleza
ha trazado, buques de vapor^ que llevarán por todas partes los pro-
ductos de la industria europea para cambiarlos por los de la agri*
cultura y cria. Nada diremos de las grandes ¿ías que proporciona-
ráQ i las generaciones futuras el Orinoco , el brazo del Gasíquiare
y el Eio-Negn) , porque entonces mas allá de los raudales se habrá
también establecido una inmensa población y otra uo pequeña ocu-
pará el delta y las costas próiimas á la mar. Cuando aquellos tiem-
J>os lleguen, Angostura será un punto de escala , pues cerca de la
mar estarán los grandes depósitos de las cuantiosas producdones
que podrán dar unas tierras vírgenes y tan estensas como el resto
de la república..
Si el lago de Maracaibo se puede considerar militarmente lia-
llando como la izquierda de Venezuela , las bocas y deha del Ori-
noco Torman la derecha. Allá la llave del lago era él castillo de
5. Carlos , aquí las fortalezas de la Vieja Guayana , Obra del siglo
x\i, y que aun aparecen en tos fuertes destinados para te defensa,
llamados S. Francisco y el Padrastro. Si como punto militar es inle-
resanle Angostura , lo es también como punto comeidal, y ticao^
vendrá en que lo sea para la agricultura, cuando las selvas del fia-
ragua estén desmontadas y las sabanas desiertas que bai entre alias
y la ciudad se encuentren pobladas dé ganada y crmadas porca-
luinos carreteros ; cuando , en fin, la grande tioya.del Canra , eá
donde crece espontáuea la sai*apia aromática, e$té habitada; sos ri»>
cas selvas, convertidas en bacieiidas o plantaciones.; y las OriHaa
desiertas de su rio, coa villas y pueblos.
Las pannijém é&^^tKm «MHM^on : ánptiiira , iOcaoopMi^yWld-'
maWD, BoilNMi, lMla«a, 4i PMn. IHiisím , S. Mito , HiwpMt
cautoh vel hajo orijioco '6 fiacoa.
La "vitla ée TlieM -mtíi «Hiüéft en 4iim és|$laBi«48 'o» irnfl 'lejos ár
ttft Imoo del Miioco namiid#4l6'Pi«oaft tamliieii. SsfKnteíon eerea
áe Mlc fio, ^9«(i tev«Q66 cenaoos para «i icafléí^ y ^arri la cria y
ooa la'vaolafaiéa poáer tfftl«ar eon Trltildad, ie dan bástanle fm-
psrtanda. á feut éé q«e por <a poca población qne tiene, fio
aofamftzaa qne suelan ser los 4en*eflk)6 de qae se c<lmpooe ,'se re-
tallará al«a s« fMHPa prosperidad. WMlés poder dedr hasta ^oé-
panto podrá Hsgarooii al tíeoipoo^ enfgtiwidéciftíanflo de este país^
pues fas tierras del*dMla del Oiinooo podráa alegar á-ser tan rate^^
resantes oono hm lo -son fas de Holrada, y los rerrenos entre la
sierra Imataca y la mar presentan todas las yentajas de un Hsan*
jmtiporfomr, tolos lupmi InMadéspor la ««don Ouarocma/^ine
weMis en aqsoflos pantanos y teinlfladiAes,>serén convertidos por
las geaer^stoüos ftiniras «n hermosas »baeiendas y plantaciones ,
cuyos habitantes embarcarán sus frutos en las orillas dolos misinos
eaik^quese veíi^MtUMilmeflíle daiMios ysdlo pobMos'por onjam*
hrss de zanmidos y nosquüos, hHiai9«tes no eesande^atormoniar
sino coando el iteolo los díspoMa.
Las parroquias son : Piacoa, Santa Catalina ^ Sacupana ; Pede*
nales, Guayana la Vieja y. Fugas.
OAlfrOM 0S UrA1>A^
<ta viUa jdo -Vp^l^tMi mk jatunhmtm^A. wkam ckoandada de <x>*
iínac^ y carsosiqiiftjj^ ledas- pofles'in'dflBiiiiia.ipeffspecttfia v«r«éa,
m trwif QioiiMÉD^^BMWicéMa^ y soliaa iodo oaao. Im lamnosde
eMa tencuso saaAasi'M se ceneoea aiia«Btdotellaa.iÉao «n grasdes
itasaii, f «CM ai» líMpiaeali.Mla émétaáa^odmiq/amf varias pro-
^mim^íM Icwwpaa^^naartáii^préMf é4a ^tíHiá mi tos^itiaaJ^
UwT átUai ; m el dtalsiiRSM navios Aipauiíinei tseninju InWan
faadado-dis4W.fiMimss : caMá aomeíaitaan? laig9rerJta»éctíoa para
la arfa cmo pata» el»eadti«»dÉl'Caié^ del eÉOM».detalgttdoo,^de¿hi
cafedaJiúttrjidaLaiui^ yjallí.la«dáaa;B«ataipatttáiMa to^pn»^
ciosa plañía de la qniat* Están las liüras mtscladas, de manera
que se pueden sacar ventajas para la ecia y U agrículivra á la yes y
dejar allí útiles establecimientos que puedan formar la riqueía de
sus habitantes. Si en lugar de frailes hubiera habido una sociedad
emprendedora con {os medios que ellos taiyaa , estarían en el dia
estos lugares bajo otro pié. No se crea que los indios reducidos i
las misiones se debieron á los esf ucnos de afneUes misíoBeros. Faé
á los colonos que habitar en el país desde 4 &76 á A 724, á quienes se
debió la reunión de los indígenas^ pues en aquella época los misio-
neros caudelarioa, observantes, jesuitas y capuchinas todos liabiaft
venido y desocupado el pais oomo lo especifica Fr. Félix Targa en
una relación escrita en i 795. Solo al cabo de un siglo y medio que
los colonos militares se mantenían firmes en Santo Tomas, pudüe-*
ron los capuchinos catalanes fijarse en el Caroní con lo$ indios Guá-
yanos, que habia siglo y medio estaban acast«mbrado»á tr^^r coa
los españdes y á ser protegidos por ellos con|Lr|i los ferozes Ca-
ribes, r
Cuando «na poUaeioi^ industriosa ocupe partei solamente de esta
vastísimo territorio , Upata seváuna villa mui impostante por sa
situación en el oamioo que condoee al gran canal doicnmereio que
es el Orinoco.
« Las parroqmas son : üpata, AUagraeia^S. Miguel, Caroní, Ca*
ruaobi, S. Antonio, Cari, Cnpapoi , £anla María, Mmar, Mamo,
Carapo, Guasipati, Tnpuquen , TomareoM» y Pastora. .
CANTÓN DE 4ZAiaaRá;
La villa de Calcara est4 en MjOrilla denscha del Orinoco al pié
de una colina. En mecuo del rio se levanta una isla cubierta de
árboles, aiempve verdes , la «nal impide la vist» del pueblo de Ga-
brata que está %Ja parte opuesta. 'Dosi largos eaiules tema el rio ,
cada uno de una milla de;aafho^ fin. este panto «1 Ortnoeo eambia
el'CWBO qne.taaiade S. a tf *en d de^ü. El Mlai»uetesia vMa'cepca
de la boea .cM.Afmcei, iOn la eriUa de un gran rier en que pueden-
navegar grandes embareaciiaMr}y.eL.po8sor4efrenoa «tüMmos de«
pasto 60n QÍrQaaataamas;qMja.Éaoáp siempre un «punto inténsame
para el comercio y la cria. Las tierras de cultivo que tiene esle
terriu>rio aslátt.dem<^8iado lejanas; sin^ embargo, ooantdolaprtda*
cion crecienie ocupe las sabanas desiertas hoi, se fprmarán osmi*
nos carreteros para el trasporte de ]os frutos que en el dia, por las
distancias , no se podrían enltiyar con provecho. En el cerro del
Tirano y en la roca Tecoma se encuentran figuras simbólicas tosca*
mente* eseolpfieis, repraibntando «n sol y qq «Btñial grande : puede
ler tlttplr. A aigünvs leguas de hi EncKrftfiMdii'SeMíl^v» en fais'sa-
btoas la peiai de Tepumereme (roca piíHads') q^ Dllreee tgoras
éeaohttalety ^íniures'tiBfalólkas, semejante» á lade Gaieara. Loi
fieos M ccarrc^ée fiai^ra^an , aiakidos, f susNcuestás escarpadlas ^
de^rovlstaa de Vegetalifs, ledén un carsoter'inipóneiitv: Estás for^
ufas raras eran migadas oetnd l«r almdtis y antiguos jete de Ik
tribjft de ios Otofldaeos y^en iMt^oeFras-^oe exfsleii en este cerro
8d encuentran muchos esqueletos. Aquí el Orinoco es 'célebre por
la famosa y abundante pesca de lat toí^tuga , ypM la cantidad de
mosquitos que de aUí pAra arriba oscurecen chaire. Anuahheiile
en las playas de Para:riBBMi, Barragoáa y'GucunlnipafoseTeiiiien
los indios que vienen á recoger los hñgffrw^' Les de It Urbana es*
tan encargados 4e eoslodiarias, eomo deseoMlimtes.de los antijiuos
OtomaMso». El 40^ mktm se tíurm lat phytí9 en a^éHas tres is*
las. Seeofmi aeUwdwwiBfto 4. ««^ botijas ée snnaleca de 29 bo^
trttas cada una; se Be6esltan^5«#M huevas {Nvacadá éoti|a« La»
tortugas poaen de M á 420 huevos ; pero iQmamnfB por támiBO
medio 4§Q : de ^saté nésMTo hi^eiarta pavte se pierde y rompe-, y
otra emrtii parle la cemes' y seetfh pan^Henir i sos tasas las iodM^
ReiBltaria, P«Ms; qae pata pmdaeir te 4; 900' batí jas era prédte
que4O0«OdO tortugas (cuyo |ieso4aea4 et de SO^^Oquinlales) salla*
sen á poner 4 O miHanes da itaeaesren aaio aquelhs tres playas. Si se
caleak la que penen en otraa pariéshasiá eerca de la fooea dd
Orinece / e» uaa eilenfíaii de casi a^OAs^pas depekilaripin anaal*
BieaterSIO 'mülAaes 4i -huevea en las playaá del Orineco. Anual*
mente* en' ittgott^ra-aa feoMUai ias'ph^ y él rematadet perdbe
el dédmo de le dssaelMK En -este eantaa se «aeoenlran muchea
aMHwH<es»4»les qMf «seeada tma «raa caatidaA dé tnaateta*
Se haHa lamhie»afai el famase esiteehp de ilai¥agu4ti f el de
CaaHIlitO) qaé eaanii'ballo y parÜMar ;^M naistno modo q«e pía«
toresea el niégale 4e la-Geeaiaaw Per «Mme «lia les'raudales pe«*
quelk)s'de- MeriBMfi^ GáribeU' tMufé^^^cuyea .fiases fto<aon Mí*
diesw ••■...-••
Las parroquias son Caieira) CueHvenS; Aitagrittia>y UAamik.
^Mmon-ím KYQMFfeéK^.
Li- viHH de SI
OríMeo^é a mHhra átf álittmeni y aM i» oubMq edeano d#:e9e# ti»
«te descctoea por leguir. Bh tiktapé d^im griiiifi cwKtem» qvm§M
hi YÜIft^ra imv'Mrá wiMa dr aaf p«piifSI»'«Éar ((ii€rifcb)6ri»M9
con«^eá al Atatopo. G» InM, piífliifMW é wiifWfte' W' inmm á»
eMa» ti^ cHidaiMot rioi; ti Alabifto éitatur « «iHi üifaMid»
Mil hffffa-s!] eoraoreat^y wúM^mlMmiímé» iiiagado9< ElikmHm»
aaff69e«(areBrtoda m éfttt0miwt,fiaf(le#M» Migada y mmmñMm «9
pievdeiraH aüsaguas.* A4a'lé|a^ aeimim^^ardal Mnowftiirifcffov**
fuBiJMm edtr 4nMiiya»aiaw dé- prtteicaa »y caaMr «p» fMiaatt asiíi
d<A Mtto-dál'ria; fca»fiinl«Nis{>alnü vadiiMideiCMIiaa la»4^^pMl^
46^ f de Ima tgHirfIgflirteiaat, «daa «I fKiiia}ir*«iit'iapaelrfafHetrii«f.
Enlfr«abilMiaiaMie'4nl«vfi«i#iiao«iaiió'«^yaAn.1l^^ ^^44^
-wa pn^fwi da fioPisgÉanaiqaa aa^rngtfetfp sim smfn^iÑm ^im^m^
^ymmú^s9¡ínl$\U0t^isméB^miKMáf iMMmdé^aviaadail^á éf per
aNSaaíqvIsmv €ila ^aém RaoMr )M»al*faMnrliéMbaa Miaaa fü
fabdardab^jd MiiiMxlf{«iiaie'pMHial:aaiAf9iaa»al áai^
fíy«a<fe ñ^Étmm <dl0'alMaBl>íaTég>ia¿ f<r(a» miiw uiaitili»iÉ 4^*4»
iM^tafM^db ^V44: d NymÉaa y iw§n -M ali laUMra ^eé mubim
' m%m»^iémhéé l# wpi¿iiiaÉi<é»iMpil»iifBaiái<ila villBrxjtfÉ laa íom»
dtoa'#qaiyaiiÉfciav y^yÉH/ dfe <i«> qÉe^nwt: j (a» «iiila«l& aott' «n^
aIMdé daaiaÉ'Vllla.Ha^lta aaÉtaa «aaN^ nfumimMkmttbfífméi^
atfmwtdaÉ^^1o'qwliiél«pif«l»«ltaMiaMea^ da aaia
mMtm, 9/9§é¡mfms^kiémtifteMíhié^ anlaRékÉb/ tm>ta(^dir
destierro y^'imliiAMs^ IMiv tofünMoÉ éa^ptagi yie^jéaaartia» al
atra d\» día y dfe'iMM$M€.<CNaiVD^«Éiai<}Mf«^^ p«e-
üyhiBa fér aatalÉiMÉí^miadlIatiaa a» aa dn|MaédBi^«M»
lwna>d>iyipdaMíff atiWfcfti. uwaOaiiitaitoi <» adMÉaiir^ánRm tü^
fu flHirtatii dtit Düiiaaiiy; ]i9H»iadars#pdaiifc iiaíaigiímtetmilT*^dt
los Andes de Pasto, da Qaito^dél Perú, de Bolivia y de todo el vWl»
impatl^'M Hááá iMMoaveiviM/efeifapMÉ y ^te^ta?iapÉ1iltiU*^ la
Plata. £n esfe cánion deoe tamMcii so origen el OiinocO; na muí
télm dfét rácr¿r$rde (TuaKíl^ós : éf pifotmr qittsr Ife^d á ^tei tviiAt .
filé ercflpüan BóbádÜl^, cojoiaadáiite <ier caátiflb <fe SI ejfM'«a
fíW. Sobre e! rio GoaTlarre ^e bace anaalmentié titia cOMcha: esftt-
t^iidá de'tii^tüs' áé ietetíá, h CdaA entpfeta étt etttnv t <lwa fúido
él ffiés élfébiñeftf, ri0eoj(fóiidó$r mcm de 3M botijas dfe^í boeEfflts
eada ima. Para' bacer una botija ñtfneceátdtí i'O.if^ baeYO»: tos
ferécayí» pottea de t6 i 24, y tomando pO¿ tímrino medio !ÍI,
dfedtaeiefidó Qtia euarla'parto gne «e comen y íseean peí' b» íñém,
86 necesí^ 4tíe 20f).ü00 terecayes (ccryo pesotcánlesiáe'^MO
qulolate»), rengan* á poner anaabaientr eir laf dfrefeBles'phiTas
del Guaviare 4 millones de hueros; y si ctfenlainos'igaaft néfliero
dé tos cfoe'poifeiren los cailos, lagañas y otros nos ^ res«rito:ian
mas de 400i(H)€^ terecayes, ^ el Guaviare bal eamanea en atan-
d^nria, pero m) se 6iiiem*flrtran^ lortégaa lesftas'.t»' bailan eor$a^dí»la
boca del Gasiquiare, arriba de la Esmeralda, y sobpe todo^odo^'bi' la-
guna de Mandavaca en la qno se benefician 20 botijas anualmente^
En el randal de Atures abundan sobre manera los perros de agua^
aunqne se encuentran también en muchos rios, pero en ninguna
parte en mayor número que en los raudales, á causa de la facilidad
que les presentan las cavernas y huecos de las penas para poner en
salvo sus hijuelos.
En fin, en este territorio es donde se encuentran esas aguas ne-
.gras tan notables. Humbokil dice : « [«as aguas negras y blancas
« esiámian estraordinariamente mezcladas en los bosques y en las
« sabanas, que no se sabe i qué atribuir la causa de su color. Las
4 de Atabapo son puras, agradables al paladar, sin olor ninguno^
« oscuras por reftexion y algo amarillas por trasmisión. Lo que
4 prud)a la esirema pureaa de las aguas |egras y su Umpiezn, es su
« trasparenda y la claridad con que reflejan la imagen de Ibs obje-
4 tos que las rodean. Los mas pequ^os peses se distinguen á 20 ó
f 30 pies, y muchas vezes se ve hasta el fondo del rio^ El verde de
« la imagen reflectada parece tener en ellas el mismo color que el
« dbjeto visto directamente, i Añadiré que hai color de café, ver-
dosas y muí negras, y q«e ea estas últimas las arenas son tan blan-
cas como la nieve. Ninpift zancudo, mosquito ó insecto semejante
vive en estos ríos, y solo unos que otros en las aguas verdosas. Ilai
poca pesca y ninguna ave pescadora : tampoco hai caimanes y sí
grandes culebras de agua y muehas toninas.
La villa de Atabapo será siemfpre de una grande importancia por
_ «52 — •
m bolla posioioQ geográfica y sobre todo 'cuando los desiarlos se
jyaeblen y los buques de vapor remonten el Goaviare. Las orillas
de esta rio están cubiertas de una tierra en estremo productiva.
ltí$ ricos bosques del Inírída y todos a^ uellos, en in, que cubren
una inmensa ditaucla al lededor de este iateresante punta, concur-
rirán allí, que será un gran mercado, residencia de ricos propieta-
rios y navegaiUes. Aquí en este cantón es también la región de los
mas grandes raudales Atufes y Maipures, que abora sirTen de es-
torbo al pequeño comercio, pero á las generaciones que poblarán
estos inmensos desiertos les será mui fácil bacer desaparecer los
obsláculos que bol impiden el paso.
' Las parroquias son : S. Fernando de Atabapo, BaUasar, Yavita,
Pimicbin, Maroa, S. Miguel, Tiriqoin,. S. Carlos, Solano, Buena-
Yista, Santa Grus, Quirabuena, Esmeralda, Santa Bárbara, Mai-
pujre y Atures.
^
tV
TABLA. COMPARATIVA de la posidon astronómica de las eabezeras de los
dad de ms tierras, terrenos baldios, población absoluu, relativa, bombra
j tos frutos que se cultivan para la esportacion.
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196 Ve Café, cafia, tabaco 7
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Galht y cftfc.
906 7tf Gaña, café 7 cacao.
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Están tambie» cmwigMdmt m ,\k ptikiu/kmrím Indidytedjyandiaim
Mi.aliiúaMrBftM8ig«i:
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r<t« Sao Fernando . . « lO.Oít'o
Q6 vHWVn^Pv ^^IWS
« • • »
Total.... 41.040
•
I
— 656 r-
TABLA
JOt lA ALTUBA OB SOS (CIEBOÉ BS LA mOTtirClAl
CAHTOH DB AHGOSTUMÁ.
Piedra San Felipe. 465..,. delOrínooo.
eutiea S35 Paraguay
Toconia.
. id.
, id.
. id.
. id.
. M.
. id.
. ftf.
Carapo.
. id.
Budare MQ.
Pao fioe
Terronal 400.. .j
Viiiiea m»
6. Mateo... 885
Tonoro 1180........
Guafqviniaia 8W
Carapo del Para-
gua itSO id,
Oria 6 Pápelos. . . 1000. id.
" Wdm&fc*. Varas. Serranías,
AIgarpbo,«..v**<t*' 3I0...... Pwagua y
TocoiM.
id.
id.
Ghanaro SOCO id.
Pairatana 700 Paraguay Gorarupa......... «00
Tocona. Tacuio latfS
San Lorenzo £30
AlTadooea 500
Garapo del Coru-
mo 660 id.
Araguatos ,635 id.
Parida 936 id.
Caraqueño 6S5 id.
Topunto 535 id.
MaUtigre 450 id.
Botado >35 id.
Paraguaculo j995 Turagaa
Arimacare |4t0 id,
BtBU «... 4080.. .* H,
Tucusiroba .800 ^id*
id.
Blaneo 505.
Goroba ^ 610.
Torre 760,
Tigrera 860.
id.
«d.
id.
id.
Vrbani |S70.
Hwra 1800.
Tucuragua 9S00.
Negro 4S00.
id.
id,
id.
id.
id.
OAlfTOS DI UPAVA.
Nombres, Varas.
Guaritoco 750..
Terrecai 780...
GaraUl 850...
Croparemo. . . . . . . 610...
Perepo 760...
Oroytujmá 760...
HapiMTile (
Panano 610
Algarobo 760,
Mayor! 606
Trapiche 595
Guacarapo 630.
Cbírica 690
Peluca. 700
Serranías.
«... Upata.
id.
id.
..... id.
id.
id.
iá,
...id.
.. id.
. . id.
.. id,
.. id.
.. id.
Imataca.'
'.*• • • • • «j • •
Nombres. Varas. Serranías.
Guarguabayme . . . 780. Imataca.
Gfieyse 655.
Payiapa 800.
Imauca 85S.
Nuria 850.
Cumamo 780.
Telrepe.... 6Bé.
Pastora «.«... 700.
Gayguao 835.
Aveehiea. :....«..; 940.
SanlaGriu 710.
Chaguaramas,.... 830.
id.
id.
id.
, id.
id.
id.
id.
id,
id.
id.
id.
Carichapo.v •••«»•• <^ ^-^
CAHTON DK.CAICAKA.
Nombres. Varas»
Pastora 930...
Bóchela. f 1380...
Hilaria 1300...
Matos 3S35...
GuchiTcro 600...
Serranias.
Guchivero.
.... id.
id.
.... id.
.... id.
Nombres. Varas. Serranías..
Roca Pintada..... 377.. >.. Cerbatana.
Auripa 6 Encara-
mada. 380 id,
Santa Fé 400..: id.
Urbana 285 id.
— 657 —
Nombren» Yar^s. Serranías.
Baragiun 9M. Cerbata»
na.
Marimarula*...... 371 id.
Mogote Gocaisa .. . i80 id.
Carichana,... sao id,
CAHTOM DI
Nombres. Varas* Serranías.
Santa Borja 900. . , , . . Parguara.
Yachaco 230 id.
Payara S40 id.
Vniana 696 Aluref.
Cachicamo 565 id.
Tambor 330 id.
Gallina 575 id.
Gundaminare 370 id.
Samariapo 780 id.
Samisa 800 id.
Cuadrado 1000 Sipapo.
Camumini 4347..... id.
Canavano ,2351 id
Sipapo 2492 id,
Ovana 3403 id.
Jucamari 2700 Mapichi.
Picos de Siqulia . . t600 id.
Maripare 750/ id.
Ifombres. Yaras. Serranías.
Gabtlan. SM GerlMiU-
iw.
CerbaUna 1580 id.
Hanapiare 4306.... id.
Nombres. Varas. SerraniM^
Mono.......: 600 Mapichi.
Mavi^ri 650...., Guaiafltví^
Pajarito S50 id. .»
Saquira «86 ÜL t
Canapiari ^ iBO^ «!.«*•'
Guasacavi 800 idí .»
Nevía 3300 id. '
Guarental 600 id*
Cuchamacavi 3Kao« • . . . . CucIiíim-
eavi.
Ipacana 9S30 N«fia.
Quioau.. V 9700.... .Marafltiaea/
Duida * 3960 id.
Picacho 9600 id^
Maraguaca 3900 «.td.
Peñón Maraguaca. 3000 M»
Zamqro 3800 id. <
Yumariquin i950 idr
TABLA. DE LOS BIOS US 4'' ÓBDEIf SE LA PBOYINGIA.
Nombres. Serranías. Desagüe.
Manaviche Parima Orinoco.
Matacuni Yarínu. -..••... id.
Yarima.. id id.
Yatamú Quiquivílza id.
Cundaoama. ...... . id id*
Arapani «... id.. id.
Mahame... id...^ id.
Paramú Cuaaaba id.
Guricanama... Maraguaca < id*
Puruniama id « id.
Cabirima id id.
Guapo........ ... id........... id»
Sodomi id id.
Tamatama id id.
Tamo id id.*
Amanama ........ id*.... id.
Malaxa...^ ..id id, •
Geheta CoiuraB.. ..•••• id.
Yumariquin id. •.....• ..i id.
GuantfO id........... id,
Haturaca.» ••• id id.
Siripisi id id.
Nombres. Serranías.^^ Besagile.',
Malapiri Uaturan ,,.,, Oriaooo.^
Gua...... id id.
Pamoai..... id RionKe-
Curamttni..,......\id... •.*••..•' id.
Casiano...... TapiPtpecó id.
Caimán. ..t id id.
Tarira id id.
Cunueunu ..••«*•• .id.. id.
Turvaoa id id.
Cachetaineri . . . Im6ri id.
Moreje ád id^
Guajavaca • id id»
Baria id id.
Ichevfloi MagoaaL id.
Gonoroehite.... Sabanas id.
PimicJiin...... . . jGuáMcaTi.. . <
,Tomo.^....t GoiloadeGuK
\ ... aiyé
'Aquio id
Naquieni • id •••<
Memacbi id«..*»..^
id*
id.
id.
id.
id.
SíKnniai.
GoantiTl GuaMCtTi id,
TeiiiU..*«.»^,.jáilH -^^
AUcMi JiipMtU.^... 44.
Panmaoie... Cuchimaetri id.
lao lao ki,
VarlbeDÍ Haribeol.....*. iá<
Mapichi Mapichi id,
Qiic>1iaiiiacaTÍ ni.
X<y<¥ii...%.'v.^ id,
laTilwi...^..*.jfii«japú»r «*•>.. -id.
1M|>Ú éi.
Minipiírí > JJiBMBapí id.
I • • • • ^Bai^^MiiiHa* * w « • ^w*
Cuwf» GaneTa id.
<Q«M«aba -M.
••••« •»<
4íuMi|«ii4lia M.
Pantos... ...... 'Varna.. « id.
QucJniiBa.-. .^ . Yvnari. Id.
Masa» . .««•••». MfalU........ id.
Maia9oiN«i. •..»•■ D6M|voa. ...<••.. 'iid,
Cunama— « « . « ^^^KmMtmmm, .•.,, fd.
OTaBS ^«r«r«i>.'.-a*«». YMHan. ••••.• -id*
Gaayapú Guayapú id,
Gataniapo Galaniapo iá,'
Avaet*
id.
LjnailW'*«»*»«** »« *aB« »• 0'wm r» . «
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lflBlÚ«~» •*«•»».•.... id-... •••...
NIcare id
Thfttire Tnragua
TaMM» « ^
Tacna.... Id
Urbaai ,,. fd
Pii6VlȣabeHe..*. id.
Caoi Id
Purgvei id
Pao...... id
Turapa iá
Turupa..... iá,,,,
Curumiitopo. . Gunacopa-
.na
Marípkhe ^
Comuriea iá
I»alabra..... iá
Guatlpap«..^..r... id
Guanipe .#«,..... id
Real<jorMi«...... id
Arisa.-. .*.•••• •'. • wnragua. .......
Güeche Para
, Tocoma y Pa-
'•'•>i«^^.«.
^«^■.■•«•«■.
iá,
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Tuparo Sabanas.
Tomo «,.««. iá»*,,.^
MeteU id
Bdagna id
pBfKB6BÍ Parantraimit
AtiMi 4d......
Gb(vapurí.«»..«
Gaiip««
AopHM Parguaia...
Pargawft, »»,#>. 4d.#.«.
HorMa»* •*»••«#•'* . •ti*« • » . ««i^c* « 4da
Tortai^* ••«•••• •«• 4d.r«>.>« ^««9. » «itt.
ChaiMpa .^^. £afÍ«aBa» «••*•« id.
GuadtanM....-CiioMvMPO*«r«.^< tf.
Sipao.*.*..* Haloa*.* «.*..*,« id.
HUana««»w.>».Nr... ••d.« •««« y... id.
llercaarJ.»,.,,,^„.PaÍM.«..»«.«.»«.. Id.
Ganancua .... JleimrasL«...*«id.
BmcttiBi— ■«^■^»-jid— » «»■■■.■»■■ 4d.
Pareta ..w*. id id.
TapMana.«««^«....,iid».«« . »..».»«. .Id.
ÁTenima . . ^«^.«. «.id.*. •. .««^ id.
YarcaJbai ^..^ id id,
Ayacwii^.w.......^ id. -..^* id.
Vailnt .----.------. id id.
Adama « . MaifMlida «. ««« . id.
S. José
ragua.
.... id
Tapaquire id,,,
MaiMires Id
Curlapo id
Tirgna..... -...%.. id.,.,,
Orooopialie^-. .-. .-.-. 4d
ifarvaatavi^^<ir.r.,... Id...^
Cándalas ia.-.*.'.^».'^. <id .- . .•« .-.-.•. • .
isiiaiaBiraM#»*.^.F^. #• >id , ^i^»*,*», ,
ComMai.^*»...'.'^.'. Id«. «,..««•.
1lio4aaM..........^, Id...«^^.^..r
KOGoaaa^^ww^''.'*-*.»* Jd..»».**-.*»-^.
JLraisMia.-.>.>.*r.^»..>«** '44i«v.'.'-'»*»^««
Gonyo....-..,...^.... id.^..-. .i...
Cebolia....*^».»*^*.». id
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Oriss.'*.— ••«—
C;aro<fcfair4u,*
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mnííbix», BevTímlas, l^eéaffie,
Vio .r« ••.•«• Kfyvyvné* a • rr Srinéca.
AraicttqA^.. SaotraiiM...<...« id.
4ii#ciyrfta ••«<»•••« « «•««^ •«■••• •« i0«
'Goquenam 'Kunliua M.
Yaroani id Id.
Tama ttlnocote id,
CarayareDetebofa. . M 'fd,
'Cunnte..... id ~M.
Uriman ^ id,.^ , id.-
Gapur6 ••••••• ««tf^ idm »* • • • • • • M.
«jarapo •■«••••••■-■ lu ••^••••••» «ci*
Csupamo UinfMino id.
Acuniini id id.
Tama Upata , . id,
Pfiludia^.. •'».«. Id......^... id.
Chigaacara Id <... idí
Urape U.**.; id.
Gurí fd id.
Garatupan « Id. .<• . • id»
Tunapul ..«.• itf. » id.
Taguachi ti.
Upata. Id.
Plaunales td.
Guanape id.
m* • »* , •-•
'•'••*▼»••»
Casacoima id,,.»*.,,,.
Conorolma id..r«.«.*..
Herí id.
Aguirre id«.... ».«;••
Acure 4d^^......
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Moroco. ...«<••... id Id.
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Garicbapo id id.
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Gnanvre. id id.
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Marawacan». »< » «^ • Id. ••••*•«.•• 4d,
Tupurá. Id.... id.
Atecblca Uaa^ama. ...... id.
Hinnic...... JtioDcol^ Id.
Gamuran......^.,.. Id id,
Gamarate ,.. Id id,
Paliiarup4 ..*«.•.. id. ..a...... id»
QiLfirtnafa. . .v. .».. id.^..... »-mi. id,
uTapO .•«v*.*»**^ . fu ...»«..••. ttt.
MauBa »«..««.»•..•. as. . • »« . . t « • tu.
vvUBBImí. •■•. ... m0. Ht. ...... c*<. tcl.
Yenano... ••..••• Id». .««..... Id.
GttiripuL..... Arlinagua id,
Tuoioo6«.^.t.«.. Id Id.
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ünarui ,.».. Id id.
Gurustri.... Id id,
Taseoai .«.«•»•.«.. id « id,
Gofltciira..»«.«.r«. id id,
COCCllBQO. ».«••»• •. V id. .,,.,.,.* td,
Guariini.r.»« id Id.
Arayarú...^... Aomlma id.
Gaco id Id.
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Rapa PacaraíBUu. id.
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Bouro...^... •••. Id.»«»« Id.
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Primarios.Secuiidariot.
Tardaríoa.
— 641 —
TABLA comparativa de las capitales
de provincia para conocer su
población, la época de su- ||ip]|^f|| ^y la de su erección en pro-
vincia.
»
NOMBRE.
POVnuAvHuEV»
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• . • • ■» >
•
DB Lie fvvmk^mt,
1
|« L/^ 9mMf«||v.
Garicai.s • *. • « •;
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■ *Hws -^
Yalencii..'
16.000
1555
'11»4 ' '
Barquisimeto. « . , .
4$«OpO
^55S
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Coro. « -* i» ' 0 ^ » ^
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llifiS
* 4915 .><
'•HAMáaiH» .;.•.?
' «4.000
«^1 J
W78
Trujillo. . . .., ^ . ,^
4.000 .
1568 j
. 4*tl .
Herida . • . . w •
^m
11658
:*ftil
Barfnas. ..... J
%.im
<i576
«787
Achaguas. ....
d.ooo
1774
I83S
Barcelppa , , . , ^ ^
6.000
1.657
1811
CumMiA.;, , ^ ♦ > .,
•8,.aoo
Am .
1531
i
«MÉfgiMta t . *. ^ .i
^,^69 <
403Í
1811
Guayana. .,..,, ^
, . 4.00P
157^
1768
■, , ., •
j { . \-y
Jt
•I
FIN.
P. GEOti.
41
ERRATAS.
Página », Unea nr, En logar da II fiM, UtaM 4^
M. It, M. SO, id. & Tomé, fóa#« Smlo Tomii* ^
W. »» W. «t tó. 44e,tóM«l», . .., *.,
itf. 88, id. 18, M. Uriunle, l^i»e QriiMnie.
Id. -«I, M. 8, Id. AragoftCnnianeM, ¿^o^tfártgiMU
«
Id. 34, id, IS, Id. Aragua, léase Aragna Guinaiieia. ,
id. 84, ML; 88, Id. 'W^^Sy léase W.9^
id. 198, Id. 18,'* 9d. mafabasUii^oM. mar baila.
id. 148, Bn la Unea é0l eacao dlee 18 fanegadaí^ Moae 18 fimegat.
id. 148, Vq la Hnei^ del ubaco die» « filaiiUs dan jn^dif libca, imaiJto
una libra.
id. ' SS9, línea 14, En lugar d« Tvniaearaque , léase tmmómqiae.,
id, ' 980, id. 88, id. , 286.000, léase 889.008.
id. T 900, id. 96, .id. . 99.M8^ l^oi» 40.080. ....
id. |!fO, id. n, ,..^, , 86.199, lda«« «1.871.
id^ 950, id. 90» id. . 8.44^ léase T.800.
id. 189^ Bn la población do Oarácaí , en lugar de <8.81S, fiase 48.548.
Bn loa aaéiat^ do Garáeas , en logar de 8.000, Maae 8.781.
Bn ol total de la ^ladon de la proiIncU, ea logar do 140.106,
ié<r9é 919.888.
Btt el total de esclavis, en logar de 844M7, léase 84.490.
id. 406, En los esdaTos de Valencia, en lugar de 1.960, légi^f^ il^m^ . . „.
En el total de esclayos de la proTÍncla, en lugar de 4.480, léase
4.084.
id. 455» ¿fR«a 8, Bn logar de primer 6rdon, léase aegundo ¿rdon.
id. 468, id. 17, iJ. oálido 7 seco, léase cálido j aano.
id. 539, id. 10, id. %9Ut léase im.
/
ittsssssm
^^
^ecs
«^
índice.
<^m*
geografía física,
Sitaacion • 1
Fronteras naturales id.
lámites polfticos ; 3
DimensioB 7 superOcie, 4
Estado de los. diferanies terrenos . . 5
llares .»»«•.»;<.'.. p*4...v......i 6
>a»tf0f.. .,..i,...« .¿ 7
Estrechos 8
Cabos,.. -r»*«k*«».^«;.i,.,V« >' M.
Penínsulas »»•....•«,....; 9<
sosias **••• ...... ..'iif.aiá». •.•••• t *w< '
Estado de los puertos | ensenadas. • ii ;
Islas. * .^,. id.
Montanas... «««..««. •*.... i2
Tabla dQ los cerros mas elevados. . 16
Mesas 18
Metéoros 90
Hoyas hidrof ráflcas j rios princi-
pales .,,,.,..... id.
Hoya del Orinoco ii
id, delCuyuni. 33
id., fiel Rio-Negro id,
id. de Maracaíbo. 35
id.. dQ Valencia 34
id. dQ Cariaco as
id., dq P^rla id.
Yertiente á la mar *. 96
Tabla de las hoyas h idrográficas. ... ^
id, de los rios de Venezuela. .... 88
Lagos y lagunas .., 40
Climas.... 41
.Estaciones y Tientos , . • 43
Aspecto físico del país. 45
Zona a^ricultora.. 49
Cuadro de los terrenos cultivados y
sin cultivar 64
Cuadro, de las diferentes clase» de^
terreno de la zona agricoltora. ... id.
Eona de los paifbs. . . u* . .iV. . ..r^^t
Cuadro tfe las eütenston délfes salMh
' ñas.. .V 4 .... . •••.•• '• .
Zona dertos bOiq«es.v....-.v. ...;..
Cuadro tle -fara dtfereiMes elases de
los terrenos de la zona de los bos^
ques......
Tabla de las temperaturas (fe las ckk-
dades y villas que están en la cosiá
del mar. • ; ^ .'
Otra de Tas que estin en medio óm
la serranía
OIra que está eh la elltrádií y éá
medio'ée los litaos.....: .'•
Otra d»li temperatura de los páft«
tll«t:..(<.«..*.*«.».i«i..«.¿...iW.
Otra 4e laJetiiMnutnw de las saba-
nas...« n ••
Otra de la»flelfM. k
Oiradeloacerju)a.n..«.
Otra 4e las aguas de los rios y lagu-
nas* .......f...
Otra de las aguas «iel mar.. «
Yegetalesi...* .« i.
id. ^ del nivel del mar á 1200
varas
id* de 900 49000 varas de al-
. . tara..
id, despoásaao i<i.... .'
id.. dQ400Á{U30. id.i,.,.
Planta* que sirven de base á la agri^*
cultura venezolana.. ;.*....•'....
.PUintAS.que sirvan para el aumento
de los aBimales y otros esos.
Maderas.aplic^ble^.á diversos usos..
Pantas qye se cultivan «« Vener
^ueU, ,,.... ...<»..«...««
CacaPi .S.U cultive .....*. j. « • .i*>* . ..
PlaianQy id...*.»** •««••• ••>*...«•
73
1S
81
83
83
84
9r
89
90
id.
Maiz,
id.
101
106
113
' i
113
117
118
j
111
id.
494
197
— 644 —
•üt ^
M.
Papú, id.
Coco, id.
Tabaco, id
Algodón , id
Gafé, id
€aña de Azúcar, su cuIUyo .
Añil, ID CUllÍTO
Trigo, id
^Irasj^Iantas, legumliff^,^^,»
TabU|,f|g|ivMirf^HrA4e^,»|j|iiiV^
- cuIUvo T cosecha ceoeral ,
dinerales ..^•. ...... t •.»<• ».5 ^ > , .,< » • ^ •
id* ¿rú^u f)e l^^s.^^ij^uip^-
id, <j^Ío8.(^j:nf\;grai|*.
id. deloj|ppi^)ipV>#**
id.. . áe los xaedoros • . .
id. á% iúB edeptailos. .
id. delospacbídamua
M, de los rttiBéBanlM.
M. dekngeiétftÉi.o.
ADiiiitliiiCM«MpedQ0 dí9Mé»ae«L.
AlTisioa dAUuipfibljtcioiiei.porjiif
ocut>arifttiHi« «■«>>.«>.■.. .
id. — 4M»aittalijneiüof •...•«
Ustadistica geaecal d£ÍM aoánalee
'"domósücos •««••.... «,
Cria 4f^4aiiado vmuao »
•^d. dft Uo«r ^ £atuuu)0 «^
Jd. da cerda* ^.••.
.dtf. dfi. caballos 7 JouUs
id. dBiws .^i.y
Jhiadra da los imanado», .laeuno, ca-
•^■NMO de «oda i$ sits prdy
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140
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buiros '.
Bsladb ^eoih|iawnivo del {Mrodaeio
>» delOOaeabMatdtfctli^ldf,
■Hilift y 4MIT08. . . . ;. k V .*; .
" ' ' id. . d& g«Ma«o vaeiMo, oJAruno
'• ' ydeetA-dá -..
Ares de rapifia diurnas: ....'/.;.;.'
'^üd. ■ id. • noo(HriKis.i.««4.'.'
•^\ld. évdeo de los «fonioiié». < . . . .
'lid.- id. • d6>toa tgepaddwes. «k.
184>
186
487
188
4^,
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4db
"Mi»' 98*
id. id. de los zancudos
id. id. de los acuáticos
Ares ^mésticas
^y»'f
id. serle de oseosos
id. id. de cartilaginosos
Reptiles orden de las tortugas.
id. id. óe los lagartos
Moluscos
Insectos orden de les 'coleópteros. .
id. • id: de -los oropteros . . .
id. • ' idi de4o8«evroptero6..
id. • • id. de loe himenopte-
ros
id. id* 4e 4os lepidópteros.
id, • id. 4le4os-béfl»pter<o6.;.
id. • id, de los Fhipipteros . .
id. id. de los cUptoros
id: id, de los -papásUos ....
id, ■ id, de-los.miriapodea . .
* id. 4d. d« jaranas
id.... . id. . de Jos- crustáceos.. .
id, .id. delos«oélidos
id. id. de tos zoófilos .....
GEOGRAFÍA POLÍTICA,
Estention y diMaeostonet aMlgiMs..
•íóblacioB ........... k ». X .•
Estado 4e la poblaoion
id.. . 4M)aiparetiva con los Indios..
FebUeioB -general de América
Etnografía de los naturales
Kaciones estranjeras introducidas. .
Seligion antigua y -aetuil -. .•
4&obíeroo-aRtiguo -id.»..
Tribus indígenas ^e viren en las
selvas-de la Goayana. I ;
AdmÍRittraeiOfl política
Estado de la división -peUliea, sena-
^ dores y^ representantes
Administraeionile ^acteniía
Estado de-ht •intendencia de Gai^-
900
903
906
908
id.
919
944
915
918
929
9»i
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406
id.
cas-
vi- f
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idl '^ ios itafEíeé' amíguoit de
• • • renta-.' .•.■.•.-.•.-. . .•.-, ........
1240
943
944
146
id.
BK8
968
«Í64
9fO
9T7
289
985
984
985
administración dejviaUcií^t, .*,..* 290
^9tadode laorganizaci.^jD judú^l., 294
id, de los deliips y pen^*.., , ... 295
iQrganizacioQ ecl^i^jlc^. ,.,.,,.. i 297
• ••• *,•
300
w.
id.
id. militar..^f«,.^
Defen^A4e .Uw puertos»., , . , , i
.^se'mbarcp «obre 1^ «mUis* ......
«#QrtiQc90laR«g ««¡(i4«l<)» de l«s «08*-
ítag... .,,..,.,... .,...,..., 605
Defensa del pais 507
Cuadro de la milicia nacional 3i i
rpducAc.i«ir páJ^ti^a. , . / « si2
QiacIrQ 4e l9S e^spuejas y iuveniuid.. M6
»Ck>m^X£Ío... ..>.,.,.. 316
-Aoticla .comparativa dje la.e8porta«*
cioo.eD iSiOy i837 «6
€jDmparacion del jnoyimiento mer*
. .cantil de 1830a 1839.... 317
xle los.precios úe ios piin-
. clpal£s.actículos S97
. del .movimieiilo meroaii-
4ii 0n iQs ijlimos años ... 628
.fistado del.müTímientodel comérm-
elo y. sus prodoetos de 4888
á4830. 550
IIOYkiúenio.m6r€ai>til de las adua-
• - ■ oaa Y SB8 producios de
4858ái838 331
Estad» de la naregacion en el co-
mevoio íHterior. 332
Industria 353
.&tado de ios individuos ocupados
en las artes , empleos ele . . . 337
id. eú la agricultura 338
id. en la cria ^.,, 9^19
. id. del valor total de la indu^-
tria venezolana por prqxif^T
cia
{^súmen de los producios de la ijgir
j^duslrias
^{istos de vestuarios de los ven^^To^r
zolauog.,,,,...,..... ^,,^,
Consumo de la comida j otros ^-
tos de los venezolauos. $44
^ylado de los terrenos baldíos ^, .« 344
Cíiadro de la riqueza n^af Ja. . ^» . . , 348
, . id. id. pfiípjuaij^a*,.., 349
GEOGRAFÍA m JM «WWNUAS.
340
M
itf.
. . PROVINCIA. DB q^|l4£^.
■ ■ ■ •
ükuacioo, .eatensioi f pdblaeíoÉ . . , 353
vUniites y confioei.. . ^. .......... ,. id.
Cesta iiel.inac.. «.....« 354
Islas.. •.....•..^« ^,. SK5
Montanas. ,,,, 357
lUos, 359
tagos y lagunas.... «^o
Clima , 362
Estaoioii de invierno 363
División territorial y produciones. . iíj.
Cantón de Caracas 3^4
id. de la Guaira 371
id. de Petare 573
id. de Guarénas- . . .'.'. 3X3
id. de Cancagua ..'.... i^.
id. de Rio Chico 574
id. de Santa Lucía ;.. id.
id. deOcumare id.
id. éelaYtctéria...; 5T5
id deTurmero ;.• 876
id. deMaraeat id,
id. de-Cura ; 377
id. de San Sebastian 378
id. deOrituco.- 387
id. de Gbaguaramas 380
id. de Calabozo ' id.
Tabla de las posiciones, terrenos,
eselaves 7 pebladon de cada
cantón 385
id. de 1^ altura ;.. 384
id. de los rios de 4° orden id.
PROVINCIA DE GABAlSOBO..
giluacion, eslension y )?p|iU«oii^,. j^
J#|mites y confines ,.,«.,. 4, ». id.
Cpstas del mar r ..... . ..... . ... ...... . ♦, .W
Was W8
Ríos ^
l-ígos y lagunas. ,. 3^
Ciima t . . V .• • 5^
£f tacion de invierna. . « . . . ^ .^ . , ^ .,. id,
DivisÍQAl«/;rit(»rJ¿miK)dlK¥M»Qft*^ ^OS
\1
— 6H —
Cantón de Valeaeia t 997
id, de Puerto €abdlo 400^
id, deOcumare 40f
id. deNtrgua 403
id. deHoDUlban id.
. id. defi.Cárloi ^.^ 4M
td. delPao.^. /....é.. 405
Tabla délas posicionea, terrenee,
eadayos, y población de cada
cantón 406
id, de las alturas de lo» cerros. . 406
' Situación, estension y población. . . 409 ¡
Lfmiles 7 confines. 1 id.
Costas del ñaar. 440
MootaSas 411
Kios..:, 4ia
'Lagunas id.
Climas .,., 41S
Estación de invierno id,
DíTision territorial j producioMS.. id.
Comercio...... ...••..;.. ..-.«.... 414
Cantón de Barquisimeto id,
id. deQuíbor 418
id, del Tocayo id.
id. de Garora 420
id. de S. Felipe 421
id, deTaritagua. id.
Tabla de las posiciones, terrenos,
oscUtos y población.. .......... 425
Tabla de la altura de los cerros. ... 426
id. de los rips de 4» órdea. id,
raoTiNciÁ DB cono.
Situación, estension y población... 4dnr
Límites y confines. :..;.... id-
'Costas del mar.. -..-..-. 426
Golfos...... ; 430
Isias; : ; . -. .... . .... ..... . .'.' '.'. id.
Montañas. ;..,... 451
Ríos;... : 432
Lagunas ...,..* id.
Clima... ¿ ; ;........ 433
Sstacion de invierno id.
División territorial j produciones . . 434
C¡omer«io.*«»%«»«^.b»k»».b id.'
Cantoa d6 Coro;. ;;.....'*... ;.!».. 4U
id, dePnragnaná 436
id. deS. Luis 4S»
id. de^Cmaarebo 440
id,- de Costa arriba 441
id, deCftsIgna 44B
Tabla de las posiciones, esclavos ,
terrenos y población.. 448
Tabla de It altura de hM eertoi» ... '446
id, de les rios de 4*^fden¿ id.
> < c
PROYIHCIA m MJÜ(AC4I90. . ■ i
Sltuaoion, es tensión y población ... 44T
Lfroites y confines. ,', '. id.
G«)sUsdel mar 4l9
Golfea -.'. éo
lelas i V. 451
Montañas......... ...i ;¿...» 4S3
Ríos ...i 454
Lagos y lagunas.... • ;......< 455
Gíim^.,.....*^,....i..:,.. 465
Estación de invIeriMj. .» • 466
División territorial y pfodnotones. . 467
Comereii^* <....'*«• «..^...i.v. ' id.
Canm de Mara^ilb». %^^*.. 466
id., de Alta gracia. r. .». .. . «r. . . ^i
id. de PepMái......«..4w.«.< «n
id. deGibraltar id.
id. delZnHa 473
Tabla de las posiciones « esciavoa,
terrenos y población *,,.»**• 4p4
Tabla.de la aUura de los cerros.*... ^6
id. de los rios de 4.o órdei) id.
PKOTINCIA. DB T&UJILLO.
Situación, estensitfn y pobladota. . . 477
Límites y confines ....« í id.
Montañas 478
Rios .;.,.•...'..,.. 479
Lagunas ^ ;.'.. ; • id.
Clima;; ;..;:.:;..;. ;;:;.;;:; 460
Estación de invierno.;...;;.;...^, id.
División territorial y proifitciones^ . id.
Comercio * 481
Cantón de Tnijfllo id.
id. deBocond.. 464
id.- (toCaractae 465
id. de Escuqoe..... ...'id.
— 64T —
TkblAde IM póBicionei, eidaTOi,
* terreno! 7 población 488
'Tlblt de Us attUras de lof cerroi. . . 400
' Id. de l08 riOfi de 4.o 6rden. . . ^ , Id.
PROTIKCIA DB BEÍHIDA.
Situación, estension y población. . . 491
IknitM y confines..* •• id,
MonUñas 403
Ríos 49S
Lagunas 494
Qima.. ; «, 49k|
Estación de invierno. , • • » id,\
División territorial y producionss.. 496 <
.Comercio Id.
Cantón de Herida 497
id, de Mucuchíes 499
id. delEgido 800
. id. de Bailadores..... 901
, id, delaGrita ., «0i
id. de San Grisl6baL 805
id, de San Antonio id.
Tabla de las posiciones , escla?Qs ,
terrenos y población. ...«..*...« 504
; Tabla de la altura de los cerras. ... 806
. id, de los rios de4.o 6rden«.... id,
PROTIHGU PB .BABÍRAS.
Situación, estension y población. . . SOS
límites y confines.,. id,
Hontañss .....' 609
Ríos.....; id.
Lagunas. - 61 0
Clima id.
.Estación de iBTlerae*.. •««... id.
División territorial 813
Comercio id.
Cantón de Barinas 818
id. de Obispo 816
id, de Guanaro « íd.
id. de Ospino 817
id. de Aranre 818
id, de Pedraza id.
id, de Nutrias 819
id. de Guanarito 890
Tabla de las posiciones, esclavos,
terrenos y población 83S
Tabla de la altara do loi eerrot. . » •
id. de loft rios de 4.o 6rden id,
PHOTIHCIA. DB APUEB.
Situación, estension y población . . • 838
Limites y confines*. •••.... id.
tfontaftas •• 896
Ríos \ id.
Lagunas 537
Clima ..: 1.:... 529
Estación de invierno 550
División territorial y producionos. 531
Comercio id.
Cantón de Achaguss «..^ 852
id, de San Fernando;. ... .^ 8CS
id. de Mantecal 534
id, de Guasdualito id.
Tabla de las posiciones , esclavos , ,
terrenos y población 836
Tabla de los ríos de 4.° orden. » . •• 898
9B0VIBGIA DB BABCBLWXA.
Situación, estension y población... 830
Limites y confines ...«. id.
Costas del mar • 540
Islas.. 843
Montañas 543
Mesas 844
Ríos 547
Lagunas».» '.. 848
Clima id.
Estación cA invierno ié,.
División territorial y produciones. . 849
Comercio* « ....^. <-.... id.
Cantón de Barcelona 850
id. dePfritn 583
id. de Onoto*^.. 885
id, de Aragua ¥í.
id, deSanMateo id.
id, deSan Diego 684
id. del Pao id.
id. de Soledad 888
Tabla de las posiciones, esclavos,
terrenos y población 8(f6
Tabla de las aUoras de los cerros. . 858
id. de los ríos de 4.o orden id.
StlUBClon, estension y poblatlon...
Límites y confínes
Costas del; ms^.. «J. ...^•^. *.«« ....
Golfos , ,
Islas
llontañas '.','.'.
^ios
Xagnnás '....'...,... J
Clima. .' ... 1 ..'.'..'.... .'
estación dé invierno . ....'.',.'. ^ ... .
piúsion territorial.
Comercio
Cantón de Cumanl
id, 'de Xüumanacoa .*«•••••
id, de Cariaco •
id.' dé Carúpano
id, de Rio-Caribe
Id. deGüiria
Id, de Aragua.........
id, de Maturin
id. de los Caños
Tabla de «liS poelciofies , tftdarés,
terrenos y población.. ^,
ITabla de la altura de los cerros. . . .
id. dé los rios de 4.o orden
PHOyiNCXl VB VABGiRirA.
situación, e&tension y. población...
dlimileay confines »
Costas del .mar .»». ..; . . .
Jilas i
Jlbntañas .^. .....:.;*...»• .
JÜlOS .. vf 4 . V» <•*.«•;•« . V. • * *<*'■*'» A f* *'*
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Jgftacion de invierao »...,.». id.
(^gmefcío.'. ....,.,. 1^
^^nlon de la AsuucIqu. . . , , . . id.
idV del Norte 600
Tabla de las posiciones , esclavos ,
• terrenos y población 603
TtbU do )aa aHuias 4a los ^TTm» • OM
.T«bU .de ;p5 áQ& dQ 4^ M«B. v. «.. id,
PROVINCIA -DB «triTAirA.
lniua«ieBi e»t«itsioii y pobiabion ... 605
•tímiies 7 confines 606
Costas del mar 608
'Islas. 609
IVontañas. 610
Ríos 614
Lagunas.. 616
Clima : !' 617
i&Aaeion de tüVierno 618
División territorial 620
Comercio ; id.
Cantón de Angoíitura . : 621
id. de Piacoa 627
id. de Vpata id.
id. úe Calcara. 628
id. de Rio-Negro 630
Tabla dé' tas posiciones , esclavos ,
terrenos y pol^lacipn. • AM
"l^^bla de La altura de los «erros. . . . 636
^. de los rios de 4.0 orden • 6Wr
id. de ios caños del delta del Ori-
, . . .....
ñoco..., .• #40
id, de la f undacion.y ppl}laciQn da
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