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Full text of "Resúmen de la geografía de Venezuela"

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INSTITUTO 
CULTURAL 
VENEZOLANO 
BRITÁNICO 


Mc^FLlH 


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Juoqif 


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RESUMEN 


DE    LA 


geografía  de  VENEZUELA 


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RESUMEN 


DE  lA 


geografía  de  VENEZUELA 


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POft 


A«IJIITI1V  CODAZZI 

FORMADO  SOBRE  EL  MISMO  PLAN  QDB  EL  DE  B4LBI 
T  nCUN  LOS  CONOCIMIENTOS  PRÁCTICOS  ADQUIRIDOS  POR  EL  ADTOR 
EN  EL  CURSO  DE  LA  COMISIÓN   COROGRÁFIGA 
QUE  PUSO  Á  SU  CARGO  EL  GOBIERNO  DE  VENEZUELA 


parís 


IMPRENTA  DE  H.  FOURNIER  Y  GOMP'*, 

C4LU  DS  SAIHT-BUaiT  ,  II*  7. 
4844. 


ADVERTENCIA. 


La  geografía  física  es  toda  obra  del  autor :  solamente  para 
la  clasificación  de  los  vegetales  ha  consultado  la  estimable  obra 
de  D.  Ramón  de  la  Sagra  y  las  noticias  suministradas  por  al- 
gunas otras  personas ,  que  están  nombradas  en  su  lugar.  Por 
lo  que  toca  ala  clasificación  de  los  animales,  ha  sido  en  partq 
dirigido  por  los  señores  Roulin  y  Berthelot  y  por  el  Museo 
Mejicano,  de  donde  ha  sacado  la  descripción  de  casi  todos  ellos. 
Los  escritos  de  Depons  y  las  apuntaciones  del  autor  han  sido 
su  guia  en  las  noticias  que  da  sobre  los  vegetales  que  se  culti- 
van en  el  pais.  Las  descripciones  de  las  costas  se  han  tomado 
del  derrotero  español. 

En  la  geografía  política  se  ha  ausiliado  con  las  obras  de 
Humboldt  y  Depons ,  para  lo  antiguo ;  con  la  de  Balbi ,  para 
la  etnografía,  y  con  los  documentos  oficiales,  para  la  organisa- 
cion  actual. 

En  la  geografía  descriptiva  de  las  provincias  solo  ha  consul- 
tado para  los  hechos  históricos  la  obra  del  señor  Feliciano 
Montenegro  de  Colon  y  alguna  vez  la  geografía  de  Colombia ; 
para  las  costas  el  derrotero  español. 

En  fin  toda  le  obra  ha  sido  revisada  por  los  señores  Rafael 
María  Baralt  y  Ramón  Diaz ;  y  el  plan  general  de  ella  aprobado 
por  el  señor  comandante  de  ingenieros  Juan  Manuel  Cagigal, 
profesor  de  matemáticas  en  la  academia  militar  de  Caracas ,  á 
quien  le  fué  consultado  de  antemano. 


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RESUMEN 


D£    LA 


geografía  de  VENEZUELA 


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««•«RAFIA  física 


SITUACIÓN. 

"Venezoek,  ^tnadá  ea  el  estremo  s^teiiUional  de  )a  América  del 
Sur,  está  cómo  á  la  vanguardia  de  ella.  Pertenece  á  la  zona  tórrida 
por  hallarse  comprendida  enire  ^'^  8^  y  -12*  46'  de  latitud  bo- 
i^at.  Su  longitud,  con  respecto  al  meridiano  de  Caracas  es  de  S^ 
f9^al  este  y  de  )><'  43^  al  oeste.  Otrácas  está  69<'  25'  al  oeste  del 
meridiano  de  París  y  67" '4'  4^''  oesle  de  Greenwich. 

•  *  * 

FRONTEÍIA0  NAtCRALES. 

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tjM  ílnmiMÁ  qné  la  üaturaleea  parece  4)aber  destinado  á  Vene- 
cuela ><lo  son4as  %ae  le  liá  trazado  la  políüca.  Una  serfe  de  mon- 
U^s»*q\íe  céiíred  desde  eldodel  Hacha  se  unen  á  las  de  Ocafia'  > 
lOHDJ^a  y  TM'  á  tmiaterfle  ron  U  üOrdlilfera  oriéntefl  de  los  Andes 
«!rái^iii08«»  La  cóhtiovIMtoB'  de  ^  éordíAoni  há6ia  el  sor,  %dsUi 


—  2  — 

el  páramo  de  Aponte  y  el  de  Seja  en  las  cabezeras  del  Guaya  vero» 
separa  las  aguas  que  Tan  al  rio  Magdalena  de  las  que  bj)jan  al  Ori- 
noco y  lago  de  Maracaibo.  Las  crestas  de  estas  montañjis  parecen 
indicadas  por  la  naturaleza  para  partir  límites  entce  Venezuela  y  la 
Nueva -Granada;  así  como  el  curso  total  del  Esequibo  fori^arla 
por  la  parte  opuesta  .tina  ^'rfirioQ  fivi^na^iQrt^^  con  la  Guayana  in- 
glesa. Gerraríase  esfte  «spacSó  4161.^331»  déí  5.  por  los  montes  que 
separando  la  hoya  del  Amazonas  de  la  del  Orinoco^  y  corriendo 
basta  unirse  con  el  páramo  d^  Apante;  pareen  llamadas  á  fijar  las 
fronteras  de  Venezuela  y  del  Brasil. 

•      *  '       !  Mf  ITE$  J«p|¡fTIC¿jS;'     ]..''-.'•'      *  / 

Si  se  ratifica  el  tratado  sobre  límites ,  de  ^  4  de  diciembre  de 
483dj  pendiente  ayn  con  la  Nueva-Granada  j  las  fronteras  oc- 
cidentales de  Venezuela  quedarán  fijadas  por  una  línea  que  se 
imagina  pasar  por  los  puntos  siguientes.  El  cabo  de  Chichibacoa  á 
los  12**  I5M5'^  latit.  N.,  4°  17^  Ah^^  long.  Oc.  de  Caracas/ es  el 
punto  de  pir Wa^ :  c^ht^por-la  .vBÍ(d¡k  l|i  J9eai63|plíi, d:e  Ja  Goajira, 
atravesando  la  sierra  Aceite  y  el  cerro  conocido  con  el  nombre  de 
Teta  de  la  Goajira  :  sigue  por  los  montes  de  Oca  á  buscar  las  cum- 
bres de  las  sierras  de  Perijá,  1  asta' el  origen  del  rio  del  Oro  :  por 
sus  corrientes  baja  al  Catatumbó :  atravesando  este,  sigue  por  el  pié 
de  las  serranías,  cortando  los  .rios  Tara  y  Sardinate  hasta  el  desem- 
bocadero del  rio  de  la  Grita  sobre  el  Zulia  :  allí  por  una  pequeña 
curva,  va  á  encontrar  el  ría  Güarumite,  y  matando  ¡por  >u  oiirso 
bastía  la  quebradj^  d^  la  Ghina>  sube,  por  e3ta  y  va  á  las  cabazeras  de 
1^  de  Don^edro^  Por  sus  aguas  abajo  llega  d  rio  Tacbir^  qoe  $]£- 
v^  dé  línea  l^asta  su  órj(0^B,«y  por  la  cjma  de.la  serranía.^eaeocfUf» 
la  cabezeca  del. Nula,  cpyo  curso  es  el  findevo  hasta«frente  del  i^s- 
parramadero  del  Sararje.  Envuelve  á  oste.  por.todajsu  periferia,  di- 
rigiéndose al  rio  Arauca,  cuyas  aguas  continúan  siendo  la  frontera 
hasta  el  paso  del  Viento,  qiie  qued^  á  <>*"  M^  20^^  latit.  N.,  y  á  2<' 
9^  long.  Oc.  Aquí  se  imagina  una  recta  al  S.  que  pasa  cerca  de  la 
lipMsa.  Tám^ojen  sos  bordes  ooold^a^les^  at|!avkiiQfit^;fí&  Heta 
m^^]  iCQi8Ía4e]^ ,  cort9 lel  Vicbada^.  -p^ia  el ^^^íaFe .^¡(HRca 49?^ 
)Mm4^  aaoo'Giifasiiiqiiia,  el  Inirida  ep.el  ra^a)  ilft A^mii«pte6| 
^  (^%^Ífí^xo^Mtik% 4e  ia  Ih^q»  Ifopiidüf.i(3BD»aA;eii  l«ft<«^^ 


punto  (Uilit.  í'*^'S¡0'  N.,  long.  2©  9'  Oc),  acaba  la  línea  con  la 
república  de  la  Nae.Ta-,Gr¿Ula(^^,  que  consta  da^^ 6  leguas^  siguien- 
do las  síiluosidades  y  contornos  principales  que  demarcan  el  fin-^ 
Aw>  jdel  po9l6ste  de  )a  repiáblicQ^  t        : 

Xaicoitf6ra  oon  el  iq|perio*dAl  Brai^l  «empkia  eft.aqjMlfPttld  y 
.eoEce  por  ¡VTQ  iei^reao  pafi^$aá«  que  foffim.  Ja  sefiaiaoioa  d6  las 
jlgoas  gue  caen^en  nuestro-  lenátotfo  hasta  ü  piedca  ó  gfopieia  áA 
fyn^i  y  sobiia,0l  Rio-NegrOi  Desale,  .cerro,  w  á  Gasear  la  ailkd  del 
aaiío  Maromea  que  qoe^a  en  la iaülad  ^"^  ^\  loag.  0<;  M^  ñW^  y 
^yas  aguas  en  Jaa  cceoi^ntes  <rfreeeai  iOoa.eomii&kaeibn  entre  toa 
nos  Gdbabutfi.y  Bam. :  deade  a^aíiíitfe  Jü^ Uim. ptr los grujffos de 
loa  cerros  Cia§i^.  Imeri,  CIjuai  y  ücHrtttf  lat,  afrsmaado  el  cacnlni> 
que  comunica 4A«v.4ior^ Ifl^ friosrMMrari y .€aal|ííii; .:y  |por ím mm 
Tapira-pecú  ó  Tapíra-pecó  toma  las  crestas  de  ks  serranías  de  Pa* 
rima  5  efe  «gwite  los  cerros  Putuibiri,  Varima,  Mashiali,  Mereva- 
ri  y  Arirgma,  qije  sequen  á  h sierra  depacaraima,^  y  por  esta  cor- 
dillera basta  enccmirar  el  R'npunimi  en 'su  desembocadero  én  el 
Esequibo,  stgliiendo' por  los  cerros  de  Macarapail^ ;  aM'  es  que  las 
aguas  que  vierten  hacia  losados  territorios  quedaü  natotalmente 
divididas  por  las  cumbres  de  las  ahuras  ya  indicadas,  las  fronte- 
ras con^  Árasil ,  sigtnendo  los  mas  pronunciados  contornos  de  las 
sierras ;  recolk-eo  un  espacipde  547  legnos -que  feí^man  ú  lindero  ' 
del  sur*  

í:n  la  toca  delUupununi  (IatiÉ/5?  55'  50'^  y  long.  &  42'  E.)  cer- 
ca  de  los  cerros  áe  Macarapati^  etnpíéza  lá  línea  que  separa  á  Vene- 
zuela de  la  Guayana  inglesa.  Sigue  í>or  la  margen  izquierda  del  * 
Esequibo  hasta  su  confluencia  con  el  jCuyuní :  por  el  curso  de  este 
encuentra  la  boca  del  rio  TuptH^u ,  cuyas  aguas  remonta  :  llega  por 
allí  á  las  cabezeras  del  Moroco,  t  bajándole  va  á  terminar  en  el 
Océano  Atlántico  frente  al  cabo  Nasau  ( latit.  T"  55'  N.,  long.  8<> 
2/  45"  E. ) ,  teniendo  esta  línea  un  e^cio  de  96  legws  si  se  con** 
sideran  las  sinuosidades  prindpaies.  Esta  es  la  frontera  oriental  de 
la  república. 

Por  el  DOPte  todas  las  corvaduras  de  la  costa  hasta  el  cabo  Chi- 
chibacoa  ^  que  es  un  espacio  de  260  leguas,  distancia  absoluta ,  es 
dedr,  sin  considerar  las  ensenadas  paG0  notables,  forman  la  fron- 
tera setentrlonal ,  bañada  por  las  aguas  del  Océano  Atlántico  y  del 
Mar  de  las  AntíUas; 


—  4 


DIMENSIONES  T  SUPERIPICIE. 

Con  los  limites  indicados  YeBCzuela  tiene  ana  figura  mui  irre- 
gular, y  SQS  eontomos  son  de  4  yM^  leguas :  su  fiarte  mas  ancha  es 
desde  la  tíoea  del  Guyuní  (látit.  €»  iV,  loüg.  8»  56^  E.  ] ,  ha^ta 
las  eabezeras  tdel  Táebira  ( latlt.  V  I4^  iong.  S^  59^  O. ),  siendo 
esta  Uoea  de  287  leguas.  So  mayor  largo  es  225  desde  et  cabo  de 
San  Romao  en  la  península  de  Paraguaná  (latir.  ^2^^VN.,  Iong. 
5^  7^  O;  ),'liasta  la  piedra  del  €ucui  sobre  el  Rio-Negro  ( latit.  ^^ 
50^  N-,  Iong.  O».  S(K  O. },  Calculadas  sus  leguas  cuadradas  resultan 
53,051,  comprendidos  los  lagos  y  las  islas  fronterizas  de  la  costa, 
€oya  esteufiíonse^  piMide  dividir  del  modo  siguiente. 

Leguas  eMadrada9. 
Páramos..  .  .  .  .  • 455 

Serranías.   .••...•, »  8,955  {  * 

Mesas.    .......  4 .  +,3l29 

Llanuras, ■■  .  .  22,019  { 

Lagos. 722 

Lagunas  y  ciénagas. 224 

Tercenos  anegadizos..  ;  .  ....  .  •  .  •  .    2,522  i 

Islas 50  i 

^otal.   .  .  ^ .    55,951 


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*  tft'ilIfbréiKíhribfMinMbpr  qne  llii  eiifre  esfa 'yfk cáTcuíada ^ el 
daron  d0  Humboldt^  proviene  de  que  el  límite  coa  la  Nueva-Gra- 
nada Jo.:topa^aqiid  sabio  desde  el^Dliela,  lov  toda  la  or3la  iz- 
<)uien)a  deLOpíooco  y  Alabapo,  y  de  alguna  v&rlacioQ  en  los  valles 
df^  Giicu^a  y  el  estremo  sobre  Rio-Negixr. 

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:  '     MARES. 

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£1  m^r  que  baoa  el  territorio  de  la  repúbliStia  desde  la  peBÍnsala 
áe  la.Goajifa  ha^a  la  Islanle  Trinidad,  fué  llamado  antiguamente 
niar  Caribe,  por  los  indios  i&  est^  upi^b^e. (||ie.  habttattfm  algunas 
cKe  las^  islas  de  su  archipiélago.  También  se  le.  llamó  Qiar  de  Golon, 
en  honor  de  su  Mustre^eseubriéep.  Hei  og  eeúocido  por  mar  de4as 
Antillas  y  y  he  aqui  con  qué  motivo.  Antilla  e¿a  una  tierra  fabulosst. 
^e  las  relaciones  anteriores  al  descubrimiento  de  la  América  sana-^ 
labaa-ea  el  mar  del  iap»n  y  que  eiertes  geó^dos^  eenfundian  eoa. 
H  Atlántida.  Toscanelli  creyó  que  la  Antiliav(que  los  portugutsesl' 
Ibmaban  isla  de  las  Siete  Ciudades)  estaba  separada  del  Japón  pop^- 
uina  distancia  de  2,500  millas.  El  nombpe^dé  Antilia  ó  Antilla  se^- 
dio  desde  luego  á  una  isla  que  se  suponía  eniel  Océano  AllántieOy 
yt  proJbablemente  después  de  los>  viajescde  Co|»n  cA  mismo  nonü)rQ' 
ftté.aplicadb  ¿algunade  las  grandes,  i&lasdescubierias.  por  éh  Bar- 
t^Iomé  de  las  Casas  dice  qf|e  los  portugueses  dab|n  con  preferen-^ 
cia  ei<  nombre  de  Antilla  á  la  isla  £spa3o]a)y.qto  lo  misntú  fiiza' 
Amérko  Yjeispucci  en  la  reIaCion.de.au.segunda.YÍ^f  peco4?Vnem-v 
bre  d^  tintillas,  dado  colectivamente  á  todas  Ifis  islas  del  arcbipiéla- 
gp  americano.^  par^e  una  creación  mndio;ma^  reciente.  A  los  tiem- 
pos modernos  pertenece  tambiea  la  división  de  las  islas  de  estear- 
c)iipiélago ;  en  grandes  y  pequeñas  Antillas.  Bl  mar  que  esti  fuera 
(^  los  límites  arriba  indicados /se  llamó  Océano  Atlántico  desde 

*feja£OLmijI  rfíoaptos ,.  porqne  losqnUgiUííj  sijpaalan  q^e  fu^ra^dei 

Afíedilerráneo:  y  mucho  mas  allá  de  las  Columnas  de  Hércules  ó  Es- 
trecho de  Giüraltar,  existia  una  grande  isla,.á  la  que  habían  dido 
ei  nombre  do  Aftlántida;.  La  estension  total  de  la^  costasfdeiVe&e- 
z|ielaesd6.260  leguas  ;.pero  siguiendo  aproxifiíadam^te-las^isiauo- 
s)dades  de  loa  golfos:,  oabosjy  penínsulas,  ^biija  esta  vaEuadon 
a  522. 

Los  vientos  Aii34o4á9[  nordeste  soplan  de  ^ia^  alternandotde  no- 
(jhe  con  los  terrales.  Los.^rimeros  son  los  vilntosjj^neraleside  los 


Haft»241iaÉ»^ ywU  da  elriionifir«derirom«ii^  i^if^cnUii^y  W 
4Mioeíe»io  69ift  hi9  ÉiÍMBas.  ipasas  qlieies  tohéos  AUnob.  El  céí^ 
h§e  finiB&oldA  di«e  :  «  Las  agiB»  cdüiini  en  etím  Jtat^es  «háicw  «I 
«-  00^  eoft  ttna  rapidi^  igual  á  la  cuarta  parte  de  lá  dé  fes  granl» 
#  difta  li»  de  SarOjM^  Ei  mofimieiitO'  del  Océane^  o^uestD  al  de  te 
c  loÉuaoír  del  flobo  ^  m>>  está  vef<ittniilaiieiite'  lifadoi  áí  este  últiiM 
«  feA¿BU»d^  síae comeo  fenroHaeMQHiiidaeiy  vientos AU»ios ios; p^-* 
c  Umsy  qm  ealaí»  f^kmes  bi^  de  la^ataubfera*,  atrauflu  el  altor 
«c  fr«9G&  émtíoi  aUas  tajli<»Ml«ft  haeia*  el  deoaéor.  A  4a  impafoion  j;^ 
cmeesA  que  «9(06  motM  Alistoi^daa  á la.«Q|7erficie  d¡& losHiaftft'y. 
«  <febe  aÉrMHátse  le  comeiite  ecpikiocsiai'  eiffas  fwiaeiaueB  b»mtef 
a  no'toB'oBi^eaiK'éciisybiémente  ni  *6ff  rs9ié«riii'en,tueÉ«».of>;*Pir 
sus  propias  observácioDes  y  las  de  los  mejores  naise^ltts ;  encoatvé 
que  la  fapidez  de  la  corriente  general  de  los  trópicos  varia  de.  5  i 
8  millas  en  24  horas  ó  de  0^5  i  i, 2  pies  por  segundo.  En  la  costa, 
según  el  derrotero  de  las  Antillas ,  desde  Trinidad  hasta  el  cabo  de 
la  Vela,  verilea  la  corriente  las  islas  fronterizas,  inclinándose  algún 
tanto  al  sur  segui^los/^-^wí  que  forman,  y  corriendo  coa  la  velozi- 
dad  de  milla  y  media  á  corta  diferencia ,  por  hora.  En  las  costas  de 
Guayana  hai  dos  corrienies ,  una  general  y  otra  de  las  mareas.  La 
primera  tiene  por  límitq  12  leguas  de  la  costa  ó  las  9  brazas  de  fon- 
do, desde  cuyo  punto  para  (ierra  se  esperimenta  la  de  la  marea  que 
en  la  vaciante  corre  como  al  nordeste  y. en  la  creciente  va  para, 
tierra.  Las  mareas  no  son  muí  considerables,  escepto  en  el  golfo 
de  Paria  ó  Triste ,  donde  se  elevan  las  aguas  á  causa  del  obstáculo- 
que  encuentran  para  salir  por  las  bocas  de  Dragos.  Las  cosías  de  es* 
te  mar  están  infestadas  de  la  broma ,  especie  de  gusano  que  roe  los 
buques ,  y  por  esta  razón  conviene  embrear  cada' tres  ó  cuatro  me- 
ses los  que  no  estén  forrados  en  cobre ,  sin  cuya  precaución  quedaa 
bien  pronto  inútiles  para  navegar. 

GOLFOS. 

€hieo  gefffós  se fonnaB' encías  eestas  de  te  república.  &  prlnvlpal 
69  el  de  la  provhiera  de  Ikf&oraeaibo,  Ifamddo  golfo  de  Yénesuefíi  d  Saeo» 
de^Maraeaibo ;  está'feftfrádc^^per  tosipettímiMla»  Gotfjiiii'y  F&n<g«aiiá 
y  por  las  eosCÉsée  €«V9'  y  fftaKAíbe  ,  €ietip««dé  kr  estenslMráífr 


540  h  €»  £1  secando  m  magdHad  es  el  efe  Fark  em  la  praráeiidé 
C^uVMOá,  IhiBKido  por  algunos  golfo  Tnste.  Las  d^tas  occklfBtatoi 
de  la  isÍa!de.TnBÍdad ,  las  raeridíoiiales  dA^la  península  de  Paría  y 
las  orieniaiesde  la  piwiiiGia  de  Cun^á  eoñ  las  diurnas  becas  delv 
^an  Delta  del  G^ínoee^forman  sii  circan£eréncia  ^  ocupa&do  uña  es*^ 
tensioade  SOO 1.  o.  Este  golfo  tiene  una  salida  al  naciente^  sigoieD* 
do  á  lo  largo  Ja  costa  meridional  de  la  Trinidad  hasta  el  caboOa-^ 
lea,  y  otra -ai  norte  por  las  bocas  de  Dragos.  £1  iereero  en  tamaño 
es  el  golfete  abierto  de  Coro,  formado  por  las  costas  de  aqudla  pro^ 
vittcia  y  por  la  península  de  Paraguaná.  Este  golfo  se  couiuniGaE  cpji 
el  de  Maracaibo  y  ocupa  6#  Le.  El  cuarto  golfo  es  el  de  Carneo : » 
está  en  la  próviucia  de  Cumaná.  esceitado  entre  las  costas  de.«st» 
y  l^de  lapenínsula  de  Araya  :  tiene  22 1.  e.  El  quintó  es  el  peque*, 
no  de  Santafé,  formado  en  las  costas  de  la  provincia  de  Gutnaná,  y 
solo  cuenta  dos  l.c.  *  -■ 


ESTRECHOS. 

■  « 

Tiene  siete..  El  de  la  boca  de  Dragos  entre  la  Trinidad  y  el  pro- 
montorio de  Paria  y  él  que  se  forma  entre  el  Delta  del  Orinoco  y  la 
punta  de  ícacos  de  la  misma  isla  Trinidad,  que  son  las  dos  entra- 
das  al  golfo  de  Paria.  Los  dos  canales  qué  hai  entre  las  islas  de  la 
Margarita ,  Coche  y  Cubagua ,  y  entre  Coche  y  la  península  de  Cba- 
copala^  sobre  la  costa  de  Araya,  forman  dos  estrechos  entre  las 
tierras  de  Margarita  y  Cumaná.  Otro  canal  se  encuentra  ei^e  la 
costa  de  Barcelona  y  las  islas  Chlmanas  en  el  espacio  que  separa  á 
Barcelona  de  Cumaná.  El  canal  entre  la  isla  de  Oruba  y  el  cabo  S: 
Román  ;  y  úllimamente  la  Barra  de  Maracaibo,  por  lá  cual  se  co-* 
munican  el  golfo  y  el  Jago  de  este  nombre.  *      ^  '  ' 

> 

'  CABOS. 

Siete  también  se  cüenjlan ,  y  los  tomaremos  de  naciente  á  ponien- 
te :  el  promontorio  de  Paria ,  el  cabo  Tres-Pnntas  y  el  de  Mala- 
Pascua,  todos  tres  en  la  península/le  Parift,  provincia  de  Cuinai|á. 
Los  cabos  Codera  y  Blanca ,  en  la  de  Caracas.  El  cabo  de  S.  Romaa 
en  la  península  de  Paraguaná ,  provincia  de  Cor^,  y  el  de  Chichi- . 
bacoa  en  la  península  Goajira,  provincia  deMaraj^ibp. 


PltMÍN^LAS. 


i> 


Siete  igualmente  se  encuentran  sobre  Ids  costas  :  la  penínsüla'de 
la  Goajíra,  cuya  mitad,  según  la  nueva  división,  pertenecí^  á  la 
NucTa-Granada :  la  península  de  Paraguaná  y  otras  dos  pequeñas 
arenosas  en  el  goffete  de  Coro,  llamadas  Punta -Cdman  y  Punta- 
Maragüei,  singulares  por  su  figura  que  imita  la  de  Paraguaná.  £1 
ínorro  de  Barcelona  y  otras  dos  pepínsntas  en  Ul  provincia  de  Cnmá- 
ná  y  una  llamada  Punta-Gorda  ^  que  encierra  el  ^olfo  de  Santafé  y 
Otra  morro  de  Chacopata  que  origina  la  laguna  de  este  nombrel' 
Últimamente  las  dos  grandes  penínsulas  de  Araya  y  Paria. 

•> 

♦  Costas.  * 

.  •  •. .     •    -  ,  '  ' ' 

Desde  el  rio  Moroco  cerca  del  cabo  Nasftn.,  en  U  embocadura  4elr 
ría  Pomaroír,  que  se  considera  actualmente  .como  el  límite,  oriental 
de  nuestra  Guayana ,  basta  la  Península  de  Araya  en  el  golíc»-  de 
Paría,  espacio  de  |201egua93  Itoda  la  costa  es  baja  y  la  mafor  parle 
anegada  y  cubierta  de  arboleda ,  á  veees  pequeña ,  á  vezes  alta  y  en 
grandes  espacios  ocupada  por  intrincados  manglares ,  los  cpalesr 
dan  pd.so  por  distintos  canales  á  las  aguas  del  rio  mas  grande  de  la 
república ,  el  Orinoco.  Sigue  la  costa  meridional  y  setentríonal  de 
la  península  de  Pma<;  cubierta  de  serranías  altas  y  rota  £re(^en-. 
temente  por  un  gran  númer<;^  de  ensenadas  que  formaa  .distintos 
vallecitos  regados  y  fertilizados  j[)or  los  ríos  y  arroyos  que  sedes« 
prenden  de  los  cerros.  La  costa  seteniríoual  de  la  península  de 
Araya  que  se  une  a  la  otra^  e$,  sin  embargo,  desigual  y  presenta 
otro  aspecto.  Sus  cerros  mas  bajos  y  desprovistos  de  vegetaeipn ,  á- 
vezes  se  alejan,  á  vezes  se.interrumpen,  se  pierden  ose  avanzan  coa 
puntas  escarpadas  que  bate  la  no^r^  mientras  que  playasárídas  se. 
interponen  ea  varías  partes.  Las.costas  meridi^ales  de  esta  nitsma. 
península,  ofrecen  varías  Itermo^as ensenadas  que  sirven  de  puer»> 
tos  escelentes  dentro  del  golfo  de  Cariaco.  Las  de  Cumaná  que  sir- 
ven de  barrera  merídipnal  á  este  golfo  son  escarpadas.,  y  las  faWas- 
de  los  ceños  vienen  á. perderse  en  las  aguas,  que  siempre  Jbonan-^» 
ciblesen  aquel  golfo^  pueden  considerarse  como  las  de  w  gcsA 
ptMTto.  Toda  esta  costa  tíene  uQa  esleasiun  de  405  le^aas.  Desde 
Guoianá  basta  Barcelona,  espacio^de  24  leguas,  hai  alguiias.playas 
arenosas  cerca  de  aquellas  doa  ciudades ;  y  lo  denlas^  esiina  cesta- 


^  ♦()  — 

destrozada ;  presentando  varías  entradas,  én  las.qne  se» forman 
pa^rto6  magnftcos ,  hermosas  enSetiaites  y  el  golfo  de  Santj^e.  Por- 
ción de  islas  al  tas  y  peñasc^>sds  avecinan  las  costas,  formando  mul- 
titud de  caúales  de  bastante  foQ<}o.  Desde,  el  morro  avaneado  da 
Barcelona  hasta  el  cabo  Codera^qne  es  una  distancia  de  57  leguas, 
la  costa  es  ée  tierra  baja  ^renojsa-,  ribeteada  de  salinas ,  aguazales  d 
terrenos  pantanqios.  Los  ccrritos  de  Píritu  y  morro  de  Uñare  se  vea 
prominentes  sobre  aijiaellst  oosta ,  y  en  lejana  perfectiva  la  cordir 
Uera  qne  sirve  de  límites  a  las  dilatadas  llanuras.  Desde  el  caba 
Codera  basta  Pucrto-Cabelb)^esteñsion  de  45  leguas^/la  costa  es 
alta,  escarpada;  los  mas  elevados  cerros  se  ven  confundidos  en  las 
nabes  y  sus  bases  empinadas  se  pierden  en  el  mar,  formando  ma- 
cha» radas  ^.ensenada&y  puertos  abrigados.  De  Puerto-Cabello  hasta 
ia  Vela  de  Coro,  espacio  de  kS  legua?,  la  costa  se  aleja  de  la  ser- 
«stía,  y  iotemenlfe  a^uBos  grupos  de^moncafiás'se  presentan  como 
iMaiW'tii^oáiido  al  mar  en  varios  puntos.  El  résto'os  (t^reüd  bajo^ 
aifenoso , » veffes  anegado^  y  cubillo  de  espesos  manglares ,'  á  vezear 
pantaúosé'  eon  pequeña:  arboleda' y  entremezclado  de  ba^as  colinasf 
áridas  y  escarpadas  (¡m  dejan  ver  á  lo  lejos  la  serranía  de  Coro. 
Bna  eadena  de  médanos  nne  después  a  la  costa  la  penín^ki  de  Pa- 
Haguaná,  en  cuyo  centro  se  levanta  el  eerriio  de  Santá-Ana.  En  eP 
<Aá)0'  S.  Reman  la  eosta-  se  realza,  deprimiéndose  luego  como  una* 
CQiínar,  que*  aunque  baja,  sirve  desabrigo  á  ks  embarcaciones' y^ 
firma  vanos  puertos  yensenada»  :  todos  los  contomos  y  prolon^ 
g»d0n'de*8ata^  península  abrazan' un  espacio  de  S^  leguas.  Continúa 
dé9pue»  la  tíerra  baja  y  árida  de  la  costa  de  Cbro ,  sobre  la  caai  se' 
vea  lo'Mlos  unacaééBE*de  cerros  no  mui  elevados.  Únese  esta  costat 
á  los  manglares  y  médanos  de  la  isla  da.  Zapara ,  en  cuyo  punto 
oeoidi»Atar  desemboca  el  lago  de  Hai'aeaibo.  Sigue  la  costa  baja  y 
««Bésa^de  la  isla  de  S.  darlos  y  de  la  peninsuik  de  la  Goajira ,  y 
SDld  mas'allá  de  Cójoro^  se  eleva- enferma  de  espktnada  cortada  ver^^ 
tic^meifte.  Los  grupo»  de  la  sierra  de  (!bímaiia  envían  algunas  dé' 
9Ui  iMíúflieaeioiies  hacia  Punta-Espada  y  cabo  de  Chichibacoa,  en 
donde  tairminií  el  terrhorie  -  ^  la  república.  6Me  éffimu  troza 
consta  de94  le^asy  toda  la^esten^n  de  M  eosta  forma  un  total' dé 
9S2';  eatiéttwmereu  ella 50  ensenada»  y  S2' puertos,  sin  contaf  un 
B&nef&cotisiderable  de  fondeáéerusy  bspueitos  que  están  d^tro^ 
dé  los  grandas' desagüe»,  el  rio  Onuoeo  y  lago  de  nafaetíbo.  Pftfa 
mé]^  fBt^ifwdff 'Si^foñna  Rb  sipúrnta  taWa; 


w 


Bfesa* 


mmm 


de  Us    '^  ■ 


P&OYIROAS. 


Guayioa».. 
GaniaDá«.«« 


V  argarita.  «...^■.•-•. 

Carabobo 

Coro 

ltaracaibo«« ..••• 


¡•B«i 


4 


NOIIBRH 


de  los  puertos  principales  habilitados 

m  . 

EN  CADA  PftOFIHCIA. 


•^•í» 


m^ 


• 


i 


Angostura. •*  * 

Cumaná,  Mitjirin,  Gfitrla^  Rio-  í 

Garitta,  Carúpanp 

Barcelona « . . 

Pampatar,  Juan-Griego^ ...%.. 

Guaira,  Higi^rote % «.. 

Puerto^Cabello: 

La  Vela,  Cumarebo,  Adíeora. . 


Maracaibo. 


^«d 


TOTiA. 


i 

TI 

S 

4 
I 


32 


3 
90 


a 

-.' 

8 
3 
9 
1 


50 


ISLAS. 

Soiir|9^  Qnmei^deT'l  sih^ contar  muitkad^de^isioies' (fue  nKlea^ 
la»  misma®'  i^s.  y  la  cosía.  La  principal  y  mas  grande  de  tedas  er* 
]a>isla  deüapgarita?,  que  lonna  una  de-Jas  pDOvlnciás  de  lar^út» 
büiia.  GeDca  d^  ella  bai  vofios  grupos- de  iMotes  <gi^  parecen  tetío» 
de' dos  estabonee^p^n^gfldsálaigerrania  deCadleass  tragados  por-las 
agua».  ba»J8las  á»  1»  costa  de  6uayana  seiii  casi  todas  uu}resQltttdo 
dor^tenrenos  at^nmulados  por  las  aguas  dBl  Orinoco;  En  las:  costas 
de'CimaBá'  sus  isfa»  detoolaa  que  son  residuos  de  lesrenos  sumer^ 
gidos :  lo  mi«no*ml86de  cooJas  de  la  cosia^e  Barcelona.  Frente  á 
hkée  Caracas^  la  isla  de  la  l^toga ,  varios  cayos  que  la^  lod^any 
d  Ihraflan  Qenliiiáa',  panece  quo.en  otros •  tieH^a  peiteaedoixHi 
éann^p^tenecaa  á  uaa  eaéena  solnnarina  que  desde  Wargarifó-so- 
pnlM^  liáeia'lassientBts  de  Coro.  Se  pedria' admitir  aun  otra  cor^^ 
dWeM.snliiaarina. pásatela  i  la  de  la*c08tá'd&  Caracas;  y  laristo 
iqaa  Sütontnotkdbaque  están  en  la  tni^ia linea  de  las  holandesas 
Ddiaifa',  Gmazao^y '@Dttlia ,  badán  parte  de  cHa ,  acaBando  en  e^ 
cahoCüidntiftcoai  las^isla»  préiamaf  á  P^íerto^beno «y  on> varías 


/ 


QDWMdmy  00  «on  fnm  desmoronamieoios  ec&sfonad4is«|HAr  la» 
a|;ttas,-así  como  las 'q^e  aveciuaDja  costa  de  Coro.  Las  islas  de  la 
entrada  del  lago  de^  Maracaibo  deben  su  origen  á  la^acumulacion 
de  las  arenas  tfaidas  por  el  lago  y  por  la  mar.         * 

Cntidro  de  las  islas. 

Guayana.    .     ...     .     .     .     .     .  •*.     .  12 

Cumaust.     .....'....'...  "f  4 

Margarita.  • 7 

Barcelona •  .     •   -.  -H 

Caracas. 7 

Carabobo .     .     .     ...  4 

Coro ' ÍO 

Maracaibo 6 

Total.,     7f 


MONTA^^S. 

Merecen  compararse  entre  sí  tres  grandes  sistemas  de  montanas 
que  existen  en  Venezuela ;  y  vamos  á  hacerlo. 

£1  primero  es  una  ramiGcacion  de  los  Andes  granadinos  que  en 
Pamplona  se  separan  y  toman  rumbos  distintos,  ün  ramo  corre  al 
norte  próximamente  y  se  dirige  á  Ocafia,  formando  en  gran  par¿ 
sus  cumbres  el  límUe  ocoideñtal  de  la  república  y  disminuyéndose  • 
poco  á  poco/ se  pierde  con  el  noqibre  d^síerra  de'PeriJá  y  montea  i 
de  Oca.  en  la  península  Goajim.  Otro  (es  l^r^ilGipal)  corre  en  la  - 
dirección  del  este  nordeste.  Es  la  parte  alpina  de  la  república  y  . 
forma  una  masa  compacta  y  aneba  que  en  sus  diferentes  alturas^ 
presenta  una  serle  de  páramos  escesivamente  friois  y  cimas  cQbier-  • 
tas  de  nieves  perpetuas^  Distante  ésta  de  la  marina  esta  cadena  dé 
moiítañí^s  y  se  esconden  .á  igual  distancia  de  la  cuiñbre  sus  basas . 
cubierta^  de  espo^^ts  y  desiertas  selvas ,  donde  crece  espontánea* 
mente  el  iheobroma  celebrado  que  produce  el  cacao.  Desde  :e]  |Ȏ^ 
de  la  serranía  el  terreno  se  estiendé  con  un  declive  suave  y  praláo- : 
gado  hacia  el  norte  hasta  las  orillas  del  lago  de  Maracaibo»  Por  el 
sur  se  pierde  en  las  orillas  del  rio.  Apure ,  formando  Jos  basques  y'' 
las  sabanas  de  la  provincia  de  Barinaií.  Nacen  en  la  cumbre  deesia'i 
elevada  serranía  rios  caudalosos  que  descienden  paratetamente  lias*  - 


4a  sñ  pié.  Alií  ea^ieHli  á  ser  niavégahtíff,  y  ésk  presentar  rattdhltts 
en  8Ú  euraO;  los  unos  van  á  perderse  en  el  Apure,  cuyas  aguas  o^mx^ 
al  Orinoco,  mientras  que  ios  otro^ileván  to  s«y»s  ál  lago  de  ]tfá- 
racaibo.  Toda  estagrAa  masa  se  eleva  en-aotl^iFo,  formando  ea^ 
treflanos  y  mesas  qne  el  hombre  podría  aprovechar  y  que  por  des- 
graeia  se  luálan  aun  jaciiltas.  Solo^en  los  valles^eatrates  de  este 
elevada  sfsteaia  se  iy|  el  pats  pobkuio ;  y  aHí  se  cnUívan  el  café , 
las  papas,  la  cebada,  el  trigo,  la  mayor  fiarte,  en  fin,  de  los  ce- 
reales y  legcrmbres  denlas  zonas  t^&filadis.  La  afidrara  inedia  de 
este  sistema  de  moníi^s  es  de  'i  8  leguas ,  sd  lar^fo  de.95  y  ocupa 
unaesfeension  de  '1 .765  1.  e»t^  2^al  grade  eéuatoriaíl  setee  una 
superficie  dé  2.006  de  i^al  dase. 

El  ^gundo  sisteif  a  es  el  de  la  «ora  eestadéra  de  Yenecuela , 
que  cei^  de  'Berquisimeio  y  ¿n  k  moáfifia  del  Altar  parece  «{ue 
se. confunde  om  el  de  los  Andes.  En  este  punto  de  intersección 
en  que  los  dos  sist^nas ,  per  decirlo  así ,  «e  penetran,  aparecen 
^n  un  completé  estado  de  imstoruo  las  c«()^  estratificadtts  que 
forman  el  tetreno  de  lá  piHiviBcia  de  Barqjridmelo,  visabW  so- 
bre todo  eó^  las  c^canías  de  Aguaobispo  en  el  Tocuyo  y  Carache, 
en  Garora  y  en  Duaca. 

€oB  todo,  eete  sistema  se  puede  tea^r  por  absolutamente  dis- 
tinto, pues  ^  compone  de  cadenas  qoe  son  paraleláis  á  la  costa 
del  ai&F  de  las  Antillas  y  -q  uef  corren  ^n  la  dirección  de  este  á  oeste. 
La  m^%  meridional  de  ellas  limita  la  región  de  Ibe  pastos  ¿  los 
Uiim$^  que  se  ésltenáen  basta  las  barraucas  d€4  Apure  y  del  Ori- 
noco. Su  laDg^iBS  de  -tCj?  leguas  s€ft)ré  una  an<^ura  m^^  de  seis. 
£sra  cadena  se  pierde  sabré  ^el  üfiare  en  peqfu^lis  coiiuas ,  y  si- 
guiendo la  misma  d^eccíon ,  eérca  dtel  mar  y  (Mentir  á*  Bareelo^ 
4eja  une  andia  aftra  para  etevarse  «asi  de  repeole  y  lérmai^  1«  so»- 
rania  del  Seügantin ,  seguidamente  la  de*Cuma0¿,  y  perderse  por 
¿Itimo  sobiré^el  galio  de  te^*.  La  mas  setentrional  forma  laisoeCa 
y  stt*vodelaafíreii^dlmier,  mé^oe  desde  ofcabo  Gddera  hasta  fir^te 
i  Onknaoi,  trecho  en  el  eual  pareiBe'  timada  por  las.  agua&.  t)es- 
piMs  vMvé  á  levanlaeBe  en  las  pcaiin^las  de  Aripya  y  Fam  y  coQr 
.duye  en  la  bbca  de  los  Dfirágoe.  Su  largo  visrbte  es  de  \  OO'  legusps , 
su  afiehuta«:médiA  eóom  la  anlteriorj  £nblerran  cetas  dos  cadenas 
•los féHMes4?aites del Tui  y^eAránm/  d liermeso^lago de Vffteindli 
y  los  teri^tto^  mas  pingCles^dr  Bar celoña  y  ^umaúá*.  Sfti  es(os:1#- 
^•«esHsitpftrt^  «hitó^lafecadaráé  Yeiíeaintaf.  donde  «p  cuUlva  el  caté, 


i*4-— 


w. 


.£  Ja  yuca.  IiOs,p.ant08;pc«)imQ9Ales  de  las  doa?eadeiiá&  aa  Hi^  á 

.l^^altura  de  U  lefipn.dalo»  pásasios  íf  uniobo  siéaos.áJa  de  las 

jüBÍevi^s  poppetua^.^  i^jldles  beF>inosoa  fertUkaios  peo*  la  íaduatria  .dei 

kfíPffkise  y  baSados;par  ijaeiifielos^  o«ii|mii  4qs  flaa£06  del^s'  eeii- 

'^ps ,  f{u:fa§  Q«id0fiae.enciíeroaii.to.  mimi|MW       de  la  ipablaekui  y 

4»ilosr.prodacb>s  de  lafopa^ieimda,  eúfma^asteftMonide-^^iidOi.  o. 

f  ,sahre%tiua  B|]p6rfiGÍ0.de-0tra&  2,0O(^  de  la  misma  especie^i 

•   Pna  f ere^ra  cadena  ^  sobmiriiia  ,y iparalélai  lajeosta'de  l^aráeas, 

lempira  en  b  Í9la  de-  Margamta  :pat$t  aparaeer  deapnea  en  la  que 

deciii|4^  de  la  TeirÉiígai;  luego  en  la:  pcovincia  dé  Goro^  últMia&raiite 

en  el  lago  de  Maracaíbo,  donde  <mcto^  Tiette  m  largo  abselato 

i»Mtí  Jegofis  y  tt«iaíuicliiiFa>in^iavdie cíBoa :  la eatensionde  sus 

^purtes.visibles  esde  T^k  aladradas  sahrettBía^8i^rftcÍ0'de2^MO 

;4e igual  clase/  ►    ..     .  .      «• 

Paralela  á  Jas  .Qtra«i  podi^mjQS  auns^uir  laaa  «al  nQrte  una  «uay- 
ta-.ca^cina  tamkien^utoarina^iCiifos  ptttita6.firainiBcáito6fflaleii  á  la 
.avypecficíe  de  A^  aguds  en,  forma  de  i&la$  é'isll^Q9^^aHa«ados  ám  Bd- 
íífÁveíy  -Curadlo  y  Qmba  ;  pareíoe  Gonciuir  en.eabo*  Cttiohéthacoa  de 
la  península  Goajira.  .        • 

'  Ind^p^oÉentede  k)si  yn  .delitos  «e^fosasetota  «i  sUtem»  de  la 
JParima^vqftte  es  «Iterfiaro-de  loa  nuestros;  Dlatinto  de^Uos  ]^tta 
pDfiÍGion  yrC(gi^titl^eB  geológiaa,  domina  sin  rivftl  &x  ia  toayaoa 
j^tria,.La  vaata  regi^  que^ocufis^  se  puedíg  coi^derar  come  una 
isesa  eonveía  prelan^da  de  es|e  á  oeste ^a^.g^^ral  y  p^co  eleva- 
ba. En  la*^al  se  levantan  de Irecho  en  trepUom^nlajIas  moi  esr 
lernas,  otras  <^as  y  estrechas  >  todas  eUas «separadas  ente  si  por 
Jlamtras  cubiertas  de  bosqiQíe  ó  paía ;  algii&at  limpias  y  doscami»- 
•4fis,'>eaftto8'aembradaa  da  palsia'de  marichei  Sal>re«Bt08  dtfoentes 
A^ai209  'se  -devaa  á  y^es  gcopos  dctii^easigigunt^scasv  a«ft  amoi»* 
(ibauados^  oüa  ald^tis  y  desQcdmiAdamQi]É&  .elipamdoa.  •éos^cimas  ao 
Ui^m  i  losimatias' de  las  piéi^fteQpetiMSj»  iiL^aj(iii«uii)€á  de  b 
•10^0»  iría  y  bonascami  dv  loa  f iramM  :;fQoas  j^tán  <;iMEarl«iií:  de 
pasninei»;  la  mdydr  pasle'dn|ffoy»taside.«aisliaoíAn.  Ctoda$<«il|& 
.g^mosatmeiKté  Tartádaa  «se  |yrfiK6nlaii^baj0  latoürna^d^  prámUea^ 
/«liriisaos,  .tosMs  arruinadas*  Q^MrlifteaokmflBídssIrAlias.  Ordíinr»- 
Dlí^ta^oa  lias^iio  Uenaá  sus  »»tmíeiilof  e»  eslasjejs^ta.  escarpas- 
das  :  salto li^  hAMis»é^/lm:.m9Éim^^QM€ii^  pié>^,ieliiaa  m 


9«0 


— :*■ 


neifte  qae  forma  la  convexidad  de  la  .grao  lo^^  t(imando.  diferen- 
tes d^cclitmes  qoB*  determinan  los  obstáculos  qtie  encnenlrau  y 
¿bui  '^k9r.¿  dif^iotm  tdocMiiraB  cMiide&al  itaiiloni»  ^oaerat  «de  este 
suelo  levantado.  De  manera  que  todos  los  ríos  de  esta  región  sin- 

•  •  •  • 

guiar  estin  llenos  de  raudales  6  saltos  de  agua  que  hacen  difícil  y 
peligrosa  su  importante  laagrpmiMt  ^ 

£1  Orinoco  recibe  la  mayor  parte  de  estasag^as  f  las  arrailx^ 
i»i|sigo  al  mar  :  ptras.van  á  aumentar  el  curso  dal  EsejptJÜoo  :  cuft- 
l0fi  fiígiiieiido  otra  <ti]neGÍOB  «e  picardea  m  el  Rio^Nagro  y  van  :ccni 
él  al  Amazonas.  Y  como  «el  primUero^  de  estos  tres  gran^^s  canates 
naluiales  describe  un  .grande  arco  de  círculo.^ai  ¿nnradop  de  la 
mesa,  mui  bien  puede  decirse  que  el  .vasto^territorio  que  abraza  el 
sistemare  la  Parint,  eomprendiendo^mbíen  las  Ouayanas  estran* 
jeras,  exímaosla  inmensa -^oe  Hmfita' por  tmi  ladeel  mar,  y  por 
los  otros  el  Prijioco  ^  el  Amnóíiat,  «njtredBÍ  ligados  pov-el  Casi* 
guiara  y  el  Hio-N^gpo.  .  .       v  .. 

La  estension  de  est^  sistema  em  el  Jeriitojsjo  venezolano  ^ppr  ]<| 
que  actualmente  se  conoce ,  es  die  5.404  1.  c.  sobre  una  superíiQÍe 
áe  ^.000.  Sus  principales  sierras  son  la.de  Pacaraima ,  Mere  varí, 
Parima  y  Tafuc^wé  qie  ieaam  Ja  liwitra'nHnrfdtoBSfl  del  pais  en 
i^na  estension  de  280  Teguas.  ;£n  erinterior  es(á  la.^erra  Rinocote 
.411a  se  une  á  Rpraima ,  las.de  üsopamo  y  Car^pi»  que  .se  ligan  á  la: 
J^  Yariauuy  Maigualida,  ooiTieMto  ^easi  en  la  mediam'a  ék  la  pro^ 
vincía  ea  una  extensión  de  48d  leguas.  Existe  ademadla  sierr;i*de 
fmataca,  casi  paralela  á  la  costa»  y  en  él  interior  las  de  rMaraguaca^ 
Tucamatí,  Vadipú,  Gucbiveroy  Cerbatana,  con  una  muUikud  da 
masas  enormes  separadas  ^nlre  sí.  Casi  lodo  ester,e^cio  censar 
tuye.una  región  de  bosipes  vírgenes.  Allí  la  vegetadott  ü^  presenta 
m-wa  estado  pteiti^Oh:  elándígena  ^aaM  semt^salvqe  y  nobai 
iNI^  caminos  que  fl  eaiio  dévlos  xios. 


■i 


i"' 


^         • 


•  I 


i 


\ 


46 — 


«í- 


r 


TABLA  DE  LOS  PUNTOS  MAS  ELEVADOS  . 

DE  L06.  mffiRUrrSS.SfilTEllAS  »B  OOKBULBBAS  tS   TSNEZ0EL4. 

i 


Es  l¿  parte  alpina  de  Venezuela :  se  compone  de  las  sierras  de  Mérida  ^  Trujillo  y 
graa  parte  dé  la  provincia  de  Bartiuisimetb :  se  puede  llamar  1^  región  de  los  pára- 
mm:  principia  en  las  cabeaeits  del  rió  Táchira  y  termina  en  lainomaña  del  Altar 
solure  el  rjo  Cojede :  su  est«n$}on  es  de  1 ,705 .  leguas  cuadradas.  . 


8ierra  Nevada. 
■uciH^es 
Pan  4».Mvic$x^ 
Santo  Domingo 
Saladé 


3IS1WA  DE  LA  CUMWA  COfTiUSB&A  DB  igSIȖn{LA. 


CkMTd Hiera  dé  la  costa  y  del 
interior  ,  ó  cerdillen 
ma^dkonal  dtedé  el  Co- 
jede basta  el  cabo  Co- 
dera y** boca  del  Uñare: 
su  estension  es  de  981  lé- 

'    gna^  cuadradas. 


Haigultíu...^..' 

Silla 

€arf9... 

Gaculo.  ...<&•... 

Gapaya..; 

Platilla... 

Guaraguaraima. 
Picacho  de  Mir^u 

Pao  de  Zarate.. 


varas, 
^350 

3li6 

S950 

S710 

3000 

3386 

1998 

1930 

1910 


Wieír. 
-ittiOO' 

|630 
3160 
32^ 
1673 
1886 
.1670 
1606 
1587 


Cadena 'de  los  dos  golfos 
Cariaco  y  Paria  6  cordi- 
llera de  Bavjselonay  Cn* 
maná^  desd^  el  Unar^ 
hasia  el  promontorio  de 
Paria  :  su  éslension  es 
de  i73  leguas  cuadradas. 


Tarumifiairi... 
UaraTiÚa.x'** 
Arrettfpuja.... 
Bergantín...... 

CuchlTano 

Tristeía 

Tucuyucual..... 

Guacal 

Trea  Picachos. . 


varas. 
3iÍ5l 

-SOÍOOr 
3079 

•1985 
1866 
1850 
1800 
1800 
1800 


\ 


muir, 
4M9 

1673 

1738 

1658 

1660 

1841 

1505 

1505 

1505 


Grupos  é  islas  de  la  cade- 
na submarina  éeordille-' 
rade  Maracaibo,  Coro  y 
Jtf  argarí la ,  desde  esta  is- 
la.basta  la  sierra  de  Pe- 
rijá :  su  ostensión  es  de 
750  leguas  cuadradas. 


I 


tfaoijiao. . 
Copey. ... 

Pertjá 

Aceite. . . . 
San  Luis.. 
Uision.... 
Empalado. 
Agoaviva.. 
Pedregal.. 


aaras. 
•46M 

1518 

1800 

1035 

1500 

860 

850 

800 

879 


meir, 
1966 

1369 

1334 

857 

13S5 

719 

710 

669 

751 


TABLA  DE  LOS  PUNTOS  MAS  ELEYADQS 

DEL  SISTEMA  BE  LA  PARIMA, 

QUE  OCVPA  TODA  LA  PBOy»CIA  DB  «UATARA  «I  CRA  BSTIHSION  DB  5104  LBGUAI  CüABBABAS. 


r 


PRIMERA  DIRECCIÓN 

DBL  OBIKOCO 

7  separación  del  Casiquiare. 


8I1SIIBA  PABIM A 

Y 

KABAGITACA. 


PRIHERA  INFLEXIÓN 

DEL  OBINOCO  , 
después  de  sa  anión  al  Guaviare. 


SIBEBA8  MAI6UAUDA  ,  CUCHI- 
TERO,  GDACHIHACARI ,  CU- 
NETA, GUATAPÚ,  SIPAPO, 
CBRBATARA  T   8UAPUBB. 


SEGUNDA    INFLEXIÓN 

DBL  OBINOCO, 
despoes  de  su  unión  con  el  Apure. 


SIBBBA8  PACABAIMA,  BIMO- 
COTB  ,  CABAPO ,  IHATACA  , 
UPATA. 


—  ♦•  — 


La  porción  del  tectítorio  venezolana  qne  mas^  abunda  ea  bellas 
mesas  es  la  de  los  llanos  de  Barcelona  y  una  parte  de  los  de  Cu- 
maná.  La  príndfales-  hi  me»  de^Goanipa,  elenria^SOO  faras  s«bi9 
el  nivel  del  mar  y  450  solre  el  suelo  de  las  sabanas.  Un  rio  nace 
Y  corre  en  medio  de  ella  en  dirección  al  nordeste ,  llevando  él 
mismo  ncNübre  de  Guanipa.  £1  anchóle  la  mesa  es  de  cuatro  á 
cinco  leguas  y  su  largo  de  mas  de  50 :  en  alguna^  partes  tiene  muí 
poca  anchura;  pero  se  estíende  tocando  con  otras  mesas  laterales. 
De  sus  escarpados  flancos  salen  40  rios  que  se  dirigen  por  dife- 
rentes rumbos,  llevando  sus  aguas  al' mar  de  las  Antillas,  s^  Ori- 
noee,  al  Delta  de  este  y  ^  gdü»  de  Pada.  Esta  masa  está  apoyada 
por  46  mesas  secundarias  y  adyacentes,  que  toman  los  nombres  de 
los  ríos  que  serpenteaii  en  sus  bases.  Algunas  se  pievden  soave- 
m/Bnte  en  la  llanura,  mientras  otras,  terminan  con  bordes  bien  pro* 
nunciados.  Las  mesasde  Uriea,  Amana,  Tonore-y  otras  deben  con- 
siderarse'como  partes  integrantes  de  la  estensa  mesa  de  Guanipa. 
Sus  altaras  son  de  29#  á  464  varas,  sébue  el  nivel  éd  mar,,  y  de. 
458  hasta. 205  »bre  el  de  las  llanurasqn^  las  amecinaa»  Este  gran 
sistema  de  mesas  originando  rios  de  mucha  agua,  fué  causa  de  que 
en  un  tiempo  se  creyese  que  existia  en  el  centro  detestes  llanos 
una  cordillera  de  montanas  que  se  unía  á  los  cerros  de  Altagracla 
y  Bergantín,  cuando  no  habia  en  realidad  sino  un  gran  llano  sobre- 
puesto á  otro  mayor,  y  que  debe  ser  considerado  en  general  como 
el  manantial  y  depósito  de  aguas  que  alimenta  el  gran  sistema  dfer^ 
los  rios  de  la  llanura.  Su  constitución  geológica,  que.  difiere  en 
cierto jnodo  de  la  de  los  llanos  propiatnente  dichos,  contribuye  á  la 
coaservacfOii,  y  filtracten  de  las  aguas..  Lm  terrenos  de  las  mesas  ^ 
general  se  ooBpoi|eft  de  uaa  arena  i^m^a  die  color  cenikientok^ue 
reposa  sobre  la  greda  que  forma  casóla  totalidad  del  suelo  de  los 
llanos.  Sobrepuestos.^  capas  horizontales,  son  probablemente  re- 
siduos de  aluVioa  qjaaen  una  época  antigua  se  encontraban  unidos. 
Las  aguas  pluviales  tan  abundantes  en  la  estaciona  lluviosa,  pene- 
tran prontamente  esta  masa  de  arena,  y  allí  se  conservan  en  la  esta- 
ción de  sequedad.  Esía  acumulación  de  aguas  subterráneas  es  la 
que  permite  esplicar,  cómo  un  manantial^  llamado  morichal,  ^pé" 
ñas  vJsiUfia.  saUenda  da  ua  gpy^ji  d^l^d^^ 


« 


•tf 


corre  por  aqnel  terreno  are&oso^  un  Tolúmen  cada  vez  mas  consi- 
d^able.  Y  cómo  cuando  se  creería  ver  desaparecer  este  arroyoelo, 
%ra  por«^l  efecto  de  k  evaporación  en  un  clima  que  constantemente 
tiene  una  temperatura  de  28<»  del  centígrado,  ora  por  la  absorción  de 
lattena,  se  te  al  contitrio,  que  á  me<Hda  que  se  aleja  de  los  atasca- 
Mfiros  y  tremadales ^  se  aumenta  de  tal  manera,  que  uno  de  aqne- 
Sos  manaatíftles  que  apenas  merece  el  nombre  de  moncha!,  á  las  42* 
teguas  se  faneé  un- rio  navegable  para  pequeñas  embarcaciones.  Sl¿ 
gttieDdk)  el  ciirso^e  uno  de  estos  airroyos,  se  reconoce  que  el  ter- 
ZOM)  arenoso  en-^e  reeorre  le  suministra  constantemente  el  agua 
que  filtra  eSa  mas  ó  meaos  abundancia  llegando  x;on  mucha  ar- 
dua callea  mui  divíct^,  suave  al  tacto  y  que  da  á  estas  aguasf  un 
eoior  blanquecino. 

En  ks  ttanoins  aHas-de  la  provínéia  de  Cbrácas,  se  eleva  un  grupo 
de  cerrítos ,  que  tienen  los  nombres  de  Titiríjí,  Macho,  Magdalena 
y  Tofu^pano.  Batees  el  mas  elevado  y  solo  4iene  5-10  varas  sobre 
el  nivel  del  mar,  y  200  sobre  las  sabanas  :  de  allí  se  original)  vallas 
mesas  que  sedifígen  bada  el  Orinoco  con  los  nombres  de  Requena  ,^ 
Acacai,  Baoríneses ,  Mereyal,  Mmana  y  Chivata ,  cada  una  de  mas 
de  45  legtts  ée  largo  eon  un  ancho  de  una  ó  dos.  SlHS  costados  es- 
V.  tan  generalmente  en  Horma  de  barranca  que  nombran  farallones  y 
se  elevan  70  varas  "sobre  la  Iláimra,  que  tiene  490  sobre  el  nivel' 
del  mar. 

Ea  lapcovtecta  de  Guanana  hai  una  gran  mesa  que  pcvpa  pre*- 
ctaamente  las  saAianas  en  donde  loa  capuchinos  catalanes  teni(m 
can,  tedas  sas  50  misimKS  llamadas  del  Caroní.  Está  encerrada  e»* 
te  eidedinne  meritt>ñardé  la  sierra  Imataca  y  un  terreno  éscar- 
puiOf  ddl»etid  náee  erria^Tumári,  qoe  despides  reeorre  toda  h 
mesa  ppr  su  medianik.  Este  terreno  está  ^vado  552  vanftr  sobre 
éí  nivk  del  mar  y  acabm  de  drcundar  la  mesa  por  el  naciente  los; 
grvpos  de  4i^ech»a ,  Gnas^ti  y  Nmia,  y  per  el  poniente  los  cerri- 
ios  que  se  eslíenden  desde  Slmta  Clara  hasta  S.  Ünto^o,  dividiendo 
las  aguas  del  Cffivat  de  las  dd  Yumari.  En  este  espacioso  terreno , 
que  tiene  mas  de  20  leguas  de  ancho  y  otro  tanto  de  largo  ^  se  ele- 
van multitud  de  cerros  qjue  hermosean  el  paisaje, 

Hai  ademas  42  mesas  en  eCns  parajes  de  la  república,  cuyos  de- 
talles se  encontrarán  en  la  descripción  de  las  diferentes  provincias 
á  que  pertenecen. 


--20  — 


METÉOROS. 


No  tiene  TOÍcanes  el  territorio  de  YeneAielü.  Iai|iloiNamente  se 
lia  dado,  por  algunos  misioneros  el  nombre  da  yolean  de  la  Esme* 
raída  á  unas  llamas  qae  á  la  entrada  ó  salida  de  la  estadon  de  las 
«guas  se  suelen  ver  sobre  el  cerro  del  Duida.  Esta  luz  cambiado 
lugar,  viéndose  ya  en  uno  ya  en  otro  punto  de  la  cima  de  la  mcm- 
tana.  Humboldt  cree  que  este  fenómeno  puede  provenir  de  emana- 
ciones gaseosas  é  inflamables  que  desde  una  gran  profundidad  sa- 
len á  la  atmósfera  por  entre  las  hendeduras  de  las  peñas.  Iguales 
llamas  salen  de  la  roca  Guaraco,  que  está  frente  al  Duida  sobre  la 
margen  izquierda  del  Orinoco^  cerca  de  la  separación  del  Casi- 
quiare. 

'  En  la  gruta  del  carro  Cuchivano ,  en  la  provincia  de  Gumaná  j 
se  ha  observaído  el  mismo  fenóm^o  y  también  en  las  llanuras  de 
aquella  provincia  y  las  de  Barinas,  donde  una  llama  que  corre  por 
sobre  la  paja  de  la  sabana  sin  quemaría ,  es  conocida  oón  el  nombre^ 
de  luz  del  tirano  Aguirre^  y  stlpone  la  gente  ignorante  que  es  el 
alma  de  aquel  mal  hombre ,  que  vaga  por  allí  sin  descanso. 

Otro  fenómeno  luminoso  conocido  con  el  nombre  de  farol  de 
^Maraeaibo^es  una  luz  que  todas  la$  noches  se  ve  del  lado  del  mar, 
coíno  en  el  interior  del  país ,  á  mas  de  40  leguas  de  distancia.  El 
sitio  en  que  este  fenómeno  se  presenta  es  un  terreno  cubierto  de 
bosques  >  pantanoso  é  inhabitado  en  las  orillas  del  Zulia  y  ^tcsl 
de  su  boca.  Es  como  un  relámpago  continuado,  y  su  posición  tal , 
<  que  situ^o  casi  en  el  meridiano  de  !a  boca  del  lago  de«Maracaibo ; 
dirigo'á  los  nave^ntes  como  un  ktvo, 

tJitimameqte ,  en  la  cueva»  del  cerríto  de  Monai  en  In  provincia 
de  Trujillo ,  haí  tufos  inflamables  que  espantan  á  los  que  no  los 
conocen ,  poniendo  fuego  á  una  mezcla  gaseosa  que  está  constante- 
mente acumulada  en  la  parte  superior  de  la  caverna. 

HOYAS   HIDROGRÁFICAS  Y   RÍOS    J>RliVClPAI<ES. 

La  estructura  de  los  Andes  de  laNiieva  Granada,  su  ramifica* 
cion  en  Venezuela ,  la  cordillera  meridional  del  sistema  de  te  costa 


-^  24  — 

de  Caracas  y  la  configoracioo  del  dilalado  de  la  Parima  ,  formSfn 
una  inmensa  hoya  que  ocupa  la  mayor  parte  del  territqríOy  estén- 
dijpndose  dentro  deldeia  república  veciqa  de  la  Naeva  Granada. 
£1  máximan  de  depresión  de  la  boya  está  en  Venezuela  y  lo  recor« 
re  so  principal  rio^,  el  Orinoco.  Este  es  el  canal  natural  para  co- 
municarse de  un  estremo  á  otro  del  país,  y  sus  grandes  tributa- 
ríos  facilílan  á  largas  distaneías  otros  canales  no  menos  interesan- 
tes, mientras  que  el  brazo  del  Casiquíare,  arrojándose  bácia  Rfa<- 
TiegrO;  abre  aquella  yia  famosa  que  conduce  al  Amazonas  y  propor- 
ciona una  dilatada  navegación  hasta  el  (He  de  los  Andes  de'  Pasto, 
de  Quito ,  del  P«rú  y  de  Bolivia. 

'  Por  todas  partes  desciende  de  los  cerros  y  cordilleras  muche- 
dumbre de  rios  que  riegan  los  valles,  refrescan  los  llanos ,  hume- 
decen las  selvas ,  y  ramiñcándosc  de  diversos  modos,  fertilizan  un 
suelo  favorecido  por  la  naturaleza.  Nacen  y  corren  4047  riós  én  el 
éstenso  territorio  de  Venezuela ,  sin  contar  con«doce  mui  cauda- 
losos que  bi^an  de  la  Nueva  Granada  y  caen  al  Orinoco.  Este  re- 
cibe 456  :  desembocan  directamente  al  mar  250  :-caen  al  golfo  y 
lago  de  Maracaibo  420  :  alimentan  el  lago  de  Valencia  22  :  desa- 
guan al  golfo  de  Paria  90 ,  al  dí  Cariaco  54  :  lleva  el  rio  Cuyuni  al 
Esequibo  OT,  y  conduce  el  Rio-Negro  al  Amazonas  56.  Por  lo  es- 
puesto se  percibe  que  la  geografía  física  debe  dividir  el  terreno  en 
'  ocho  hiyas  hidrográficas  con  los  mismos  nombres  de  los  i:pcipiea- 
tes  respectivos.  , 

•  HOYA   DEL  ORINOCO. 

La  descripción  de  esta  grande  lioya  á  la  que  pertenecen  otras  mui 
^considerables ,  no  puede  hacerse  con  precisión  y  claridad  sino  prin- 
Gipiai^o  desde  el  origea  del  Orinocp,  y  siguiéndolo  en  su  curso  por 
este  gran  valle.  Solo  así  podia  darse  una  idea  general  de  la  eonfi- 
gurupion  hidrográfica  de  un  suelo  virgen  y  salvaje ,  en  su  mayor 
parte  desierto  y  desconoeidi^ 

.Por  los  redentes  viajes  de  M.  Sehomburgck,  se  sabe  positiva- 
Bienté*que  las  cabezeras  del  Orinoco  no  e^n  donde  se  habia  acos- 
'  tumbnido  situarlas.  £1  nombre  de  un  río  Varhna  que  cae  á  otro 
Uaiopado  Parima  con  el  cual,  le  confundían ,  ha»do  tal  vez  la  causa 
de  aquel  error.  Estos  ríos  van  ambos  á  formar  el  rio  Branco ,  y  son 
m  brazo  mas  oecidantal  y  mas  grande.  Cerca,  pues,  de  las  cabeze- 


—  M  •• 

véÜA  Pawaa  )iAe  MUwiiie  si  pftciBitgalo4el  Oraioeo » ea  el  !»■ 
gar  ea  que  la<«Mra  JPamja  se  une  á  k  de  Tajj^apieó  6  Tapki^eeá. 
Sepia  las  aítiuns  de  las  otn¿  sienas  medidas  en  el  sistema  de  rntrnt- 
tanas  de  la  Parima ,  la  did  poato  ea  qoe  nace  ^  Orinoco  no  pnede 
eseedec  de  4900  taras  sobre' el  aivel  del  mar.  £i  Orínoeo  perma* 
neee  descaiUNádo  4esde  so  naeimiento  hasta  el  raudal  de  Ooadiai^ 
bos,  ^^'que  l^s  embarcaciones  no  (peden  pasar  de  este  ultimo 
pmiio,;  ^0  atendiendo  á  la  peca  agua  que  se  encuentra  antes  dd 
raudal  y  en  el  raudal  núsmoj  no  debe  suponérsele  hasta  sdU  ur 
corso  deicoas  de  25  leguas^  comj^endiendo  las  Tueltas  del  rio.  £1 
primero  que  llegó  á  aquel  punto  fué  el  Capitán  K^jtn  Francisco  ftH 
YadiUa,  comandante  que  fué  del  Castillo  de  S**  Carlos,  próúma- 
mente  á  mediados  del  siglo  XYIII.  Mas  abajo  del  saudal  y  sigoiendQ 
«1  curso  del  Orinoco  tiene  este  menos  escollos,  y  sigue  su  primexa 
dirección  del  oeste  noroeste  hasta  la  Esmeralda,  recorriendo  44 
Jl^uas.  Allí  endei^^za  al  poniente  por  espacio  ile  7  leguas ,  hasta  el 
.pupto  en  que  despide  nu  brazo  hacia  Rio-^Negro.  Los  decUtes  quet 
tienen  de  la  sierra  Parima  y  de  la  de  Tapirapicó  y  Unluran  ^n  k 
causa  verdadera  de  que  el  Orinoco. siga  esta  dirección  que  es  la 
mi^ma  que  trae  desde  su  origen.  Cn  medio  de  dosdecüYes  hidro- 
gráficos que  se  hallan  fin  sentido  opuesto ,  se  ve  que  está  la  mayoar 
profundidad  en  donde  corre  el  recipiente  ccostun^  el  Orinoco.  £1 
uno  de  estos  decUvessc  dirige  de  noite  á  sur^  y  está  fbrpadopor 
las  sierras  Parima ,  Mei ,  Curichana  y  Maravaca ,  ocupando  650  1. 
c.  por  las  cuales  corren  diez  ríos,  do^  principales  que  son  el  Ocamo 
y  el  Pa<Iamo.  El  otro  declive  de  sur  á  norle  está  formado  por  Jas 
sierras  Parima ,  Tapirapicó ,  Unturan  y  una  débil  altura  que  arroja 
esta  úllkna  sierra  y  eoQchiye«obre  el  Orinoeo  cm  el  eerro  Pava  y 
roea  Guaraeo.  La  esl^isíande  este  declive  es  de  550  1.  e.  ¿lorrfla 
por^l  otros  diez  ries^  el  prin^pal  delQs,C]:yiles  es  el  Ha  vaca.  Bn 
el  panto,  pues,  de  la  oálebre  bifurcaelon  del  Orínoeo,  este  tieae 
deearso  75  leguas  y  ^a  enriquecido  feen  el  emé^4e  agía  qve  le 
han  tributado  20  rios  prinqipales ,  ó  iBej6r»diehd^  em  Inda  el  agua 
que  cae  ataahoaente  en  una  estaEision  de  4050 1.  c. :  una  lancera 
parte  de  estas  ^igvas  va  á  ftio^Negí»  por  d  brazo  Casiquiá^e.  Ella 
separaren  -se  e£eetúa  en  un  terreno  elevado  selo  ¿57  varas  sobre 
el  nivel  del  mar,  en  ktil.  ^"^  ^  y  h)ag.  O""  b&^  al  ^sle  del  naádlstio 
de  Caracas.  El  aaoho  dd  Ortaoeo  es  de^^ftOO  v«ras  y  el  éel  Caaí- 
^iaoscte  110  ; Jatprefaiiylidad mayor  dé  a^aaltes  de  40  piea  yda 


DeJijrenu^ffGasiqíiiare  para  examidlirlo  en Jtej^fir  éé  lite-B|qjH»y 

al  OMtevoroesle,  y  dMfnies  fi^erüftras  2i  al  wr-noroeste.  Si>s4e«»- 
díT«  lo  aeoofitaiL,  «n  en jta  «Sarfor  4eprMioa  oofre  éf  rio :  ri*€to«> 
dm  4e  laÉsfdkofdt  tes»  «i  cdiffm  éñ  vüi  eaHaii  ^ee  á  f«e«l  té* 
(pwtekmrta  dAimnle  «la  séhoi;  ^eptraarib  ^  trflMiBioi 
éel  AliÉ^p»  éeüwM  Orinoco ,  ;  «IT  esta  Ufiea  no  liai  «tro«  eem» 

tonniM  iaMlta ,  ettya  «tÉMÉflm  «á  dé  4M  )«giM  ctfaáMdit.  0 
deeiíiire4telaéfro0ba«s«d4e  ana  lief a  lffinBada{N$ri#s  cerros  *Gi»- 
Mfa,  iMtammmti,  M^vtvmí ,  Yao  y  NetÉi ,  y  por  tos  de  Qite«e<» 
T^ta ,  Man^paea  y  fhiída.  Sa  ladiaadoft  <ei  easi  de  aorte  á  «ar  y 
por  «Ha  omneía  diez  fio»  y  dtiea  loalldsiquetaa  á  «frmr  al  Orioavo 
lasag«»T«ea9id»s«aiiaae6láDaioiide  94ftl.  c;  'd  prlaelpal  d» 
«ates  é^mtgjSm  as  «1  Cmmsmmmsi. 

Gaaad»  al  OHaoce  tl^a  «trea  4e  la  boca  dd,  tia  Vaalmari  c^ 
«ayor  de  li»  tritartarlas  ^ne  deidaadea  *deia  parte  taartdiaaai  da 
la  Parte»^)  ,laeroe  diveetmoN«6ál  imaímMb  por  to  tagaae,  laqpa* 
Mdo  dartaméÉte  del  dMfit^  reiisa^  y  corta  de  la  aemmk  ¥aca«> 
nad  y  de  it^  eo^atradedhé  ééi^  de  la  ealjpa  que  laedki  catre  el 
Oriaaeo  y  el  4tá^po.  Por  eela  |Mfrte  redbe  al  OHnaca  etto^eüía 
las  aguas  de  dor  casas  que  recofea  la  de  «ii>eii[^aeto  éa  40  1.  ic« , 
al  paao  q«e  for  diofueslo  le  aaea  lis  aguas.de  to  groada  lioyá  del 
Yentiiari,  fenaada  fw  laaaenaalae  Miigaaiiida,  GaanMfÉí,  Vadij^ 
Yacaaiari^  CbífoHa ,  da  a«a  |iáfee ,  y  de  la>atm  fNir  las  de  Cari- 
diiani ,  ^hiwpmo  ^  Caaof a ,  CaeÉmñacitfi  y  í^wk,  e«ta  lioya 
aciqya  im  espado  de  ISOt^i.  «.^  eíeaÉode  las  oadas  mrteaat  Ori^ 
Doeo  par  medíoHe  dos  rios  y  dsB  aaiaa.  Las  a^aas  qaa  eaea  ea-al 
lasto  de  afael  grande  eqvado  toma»  44<«bs  qae  ao»  tttlHttam& 
4d  VaateacL 

La  faRMNi  fraide  ioiaiiea  del  Oiteaoo  se  eéseláaieai'saeaB* 
«ueaoáaaoB  el  «mfme :  talit;  4^  4^  90^^  ta#l.  í^  V  i^'^  O.^á 
27S  viras eelMe  ^ mvei  del  mar.  IHf  el  OmMwa  é«la!al^(MiV 
ragaa  de  leaéndias ,  se  preseata  después  de  ana  earso  de  195  legaas^ 
«OB  el  ^Q  aaMnea  de  égna  qae  le  baa  'stiaitoisirado  44  riasy 
^Mtídaddecüai;  ^9i»&íis  eea  toda  elifaa^iae  cae  ea  aM  «aiper- 
ide  de  $4M  1.  c.  da  Jas  eaaleí  ya  asi;úi  dedaoMas^Mt  perla 


—  24'— 

piH6  qaeewTcspoDde  i\n  agaasque  y«b  per  d  G^Müiare  al 
4e0aet)[e  de  Rio-Negro. 

El  Gttavíarc  y  que  nace  de  la  falda  oriental  de  los  Án  des  de  Saa- 
«iafé,  oerca  de  S.  Juan  de  los  Llaoos^  báck  la  Seja  y  el  para* 
lao  de  Aponte,  tiene  un  corso  de "200  leguas,  calculando  por  las 
.sinuosidades  un  tercio  ñias  de  la  distanda  directa.  Si  se  atiende  á 
las  muclias  yertientes  que  recibe ,  se  observa  que  recoce  las  aguas 
que  caen  sobre  la  superficie  tle  5,600  leguas  cuadradas  pertene- 
etentes  á  la  Nueva-Granada.  En  el  territoríe  nuestro  reúne  Its  aguas 
de  un  deelive  de  sur  á  uOTte^lTamiado  por  la  colina.  b«Ja  que  costea 
el  Oriooco  y  que  se  une  al  cerro  Maguasi.  Desde  este  punto ,  un 
terreno  lijeramente  elevado  sigue  dividiendo  las  aguas  que  van  á 
Kio-Negro ,  de  las  que  caen  al  Guaviare ,  pasando  por  el  estred^) 
de  Yavita  y  Pimichin  y  realzándose  en  los  cerros  Guatavi  y  Cuna- 
piari,  de  donde  desciende  después  al  raudal  de  Manuerico  sobre  el 
hiírida.  Esta  boya,  ó  mejcnr  dicho ,  declive,  que  solo  acarrea  aguas 
negras  y  transparentes,  está  sangrado  por  siete  rios,  siendo  los 
principales  el  Inírida  y  el  Atabapo  :  allí  es  en  donde  se  pueden  for- 
Bdar  diversos  canales  de  conaunicaeion,  desde  estos  rios  basta  Ato- 
lero. Las  aguas  que  caen  en  esta  ostensión  de  800  1.  c,  las  recibe 
el  Guaviare  con  aumento  de  las  que  suministran  iOO  1.  c.  del  ter* 
Titorio  granadino ,  conducidas  por  el  Inírida ;  de  manera  que  al 
«ncontrarse  el  Orinoco  con  el  Guaviare  lleva  ^tc  último  toda  el 
agua  que  cae  en  una.niperfieie  de  4,800  1.  c. 

Examinemos  ahora  la  naturales^de  los  tres  declives  que  son  la 
causa  de  esta  gisande  inflexión  dé  dos  podarosas  corrientes. 
:  La  cordiüwa  lejana  de  los  Andes  de  la  Noeva-Granada,  cuyas 
cimas  se  aproximan  á  la  región  de  las  nieves  perpetuas,  no  se  eleva 
•de  repente  como  un  moro  sobre  un  plano  horizontal;  al  contrario, 
esta  gran  masa  desoansa  sobre  bi»es  estensas  y  ^tfstenidas  por  ter>- 
renos  altos  mas  ó  méúos  íncUnados ,  cuyos  dédives ,  como  una  es- 
planada,  se  pierden  insensiblemente  á  larga  distancia.  El  agrupa- 
•  miento  que  forma  el  sistema  de  k  Parima  eleva  sus  mazixos  mas  ó 
menos  prismáticos,  sobre  una  llanura  ba|a  comparativamente  á  las 
Jlanuras  de  los  Andes :  sus  declives  son  mas  cortos  en  razón  de  su 
menor  altura,  y  llegando  á  determinada  distancia,  encuentran  con 
el  declive  opuesto  de  la  coitliUerado  la  Nueva-Granada.  La  línea  de 
intersección  de  esto»  dos  planos,  iaclinados,  en<la  cual  está  el  máxi- 
mun  de  la  depresión  del  terreno ,  debe  naturalmente  hallarse  mui 


/  íj-  -   j^  —  -•  i 


~  25  ^ 

• 

lejos  de  los  Andes  y  nmi  cerca  de  las  faldas  barrancosas  de  la  Pari- 
ma.  Las  aguas  acumQla4as  en  aquella  depresión  de^  terreno  son 

4acgo  impelidas  IjjifÜA  el  norte  por  un  tercer  deo||re  que  aunque 
débil  ^  es  suficiente  para  separarlas  vertientes  deiOrihooo  de  las 
que  van  á  tributar  sus  aguas  al  pofleroso  Amazonas. 

J^pues  que  las  aguas  del  Guaviare  se  unen  á  las  del-Oriopoo, 
signen  al  norte  la  linea  trazada  por  «Ja  naturaleza.  El  Orinoco  ya 
con  doble  volumen  de  agua  se  abre  paso  por  los  terrenos  mas  ba« 
JOS,  desImySndo.y  rompiendo  cuanto^encuentra;  así  es  que  algunos 
oeg^itos  qife  se  elevan  en  la  orilla  izquierda  de  este  río;  pertttMcen 
al  sistema  de  la  Parima  que  le  demora  á  la  ¿tra  banda.  Esta  dispo* 

'  sidon  del  terreno  es  cansa  de  que  los  mayores  desaguaderos  que 

«caen  al  Orilleó  sean  los  que  recibe  del  pontéate ;  pótque  viniendo  ■ 
de  partes  lejías,  recogen  nfftyor  cantidad  de  agua  que  aquellos 
que  bajando  de  la  f^ima  se  encuentran  lu^go  con  el  Orinoco  que 
rodea  Ja  básenle  esle  sistema,  describiendo  uiía  línea  casi  semicircu- 
lar. Si  el  curso  del  río  no  fuera  interrumpido  en  su  nueva  dirección 
por  otros  declives  y  pudiese  constantemente  seguirlo;  iría  ádesem* 
'  bocar  á  la  mar  por  Pilerto^CabelIo.  Pero  á  58  leguas  de  su  unión 
con  el  Guaviare  encuentra  S9  camino  obstruido  por  las  rocas  gran^ 
ticas  y  descarnadas  que  hacia  aquella  parte  avanzan  sJgunos  grupos 
de  la  sierra  Parima.  Esta  es  la  región  de  íos  glandes  raudales  :  allí 
b1  rio  rompe  y  destroza  cuanto  se  le  opone ,  aDrténdose  paso  por 
entre  los  peñascos ;  pero  se  ve  forzado  á  inelinar  su  curso  bada 
el  nor-nordeste. 

Otro  dique  igual  al  anterior  formado  conv>  ¿I  por  un  estremo 
destruido  de  la  cordillera,  vuelve  á  atajarle  el  paso,  y  aunque 
vencido ,  determina  finalmente  al  norCe  el  corso  del  río.  Por  esta 
dirección  va  á  encontrar  el  caudaloso  Meta  qi^e  baja  de  la  Nueva- 
Granada,  veríficándose  esta  feunion  S4  leguas  mas  abajo  de  la  em- 
bocadura del  Guaviare.  En  esle  intermedio  redbe  la^  aguas  de 
una  grande  planicie-occidej^al ,  cuyo  mayor  desagüe  es  el  Vicha- 
da, de  aguas  oscufits.  Este  rio  tiene  su  origen  en  las  llanuras  ^ue 
están  á  la  falda  de  los  Andes  granadinos,  y  en  aquel  territorio  re- 
coge las  aguas  de  900 1.  c.  y  las  de  1  (K^  en  el  de  Vengúela.  £1  nesip 
de  la- planicie  que  se  considera  limitada  por  el  Guaviare  y  el  Meta , 
está  compuesto  de  tierras  llanas  ó  sabanas,  también  de  Venezuela^ 
las  cQales  declinan  sensiblemente  deT  oeste  al  este.  Forman  estas 
tíerras  parte  del.giaa*decUve4]e  los  Andes  y  arrqjim  sobre  el  Orí- 


Boeo  |wr«inll»sle>ilile3Í0B  ,^Dda  d«g«8  que  ese  ea  maMeih- 
sioa  de  0M^. «.  SI  ifua  46  entro  de  ^btím^íém  es  de  caelor  ir 

«f4kiiiii,  f  ^^W^  1^  ^^  ^  ^^^(^  t^A-  ^ 

Por  la  fArte  ae  laJttioia  bujaa  Im  «gus  de  4os  huyas  que  w  ' 
estienden  hasta  «1  twmM  ^  Saite-Boiía',  Ihnltad»  por  los  cenw ' 
qiie4i?id9ii  «la  grtiMte'bof a  del  ^«iit|iari.  Uaa  «s  de  900  1.  c.-^ipe 
teagQttnpor  «oitioiátB  y  bwiAmxs  eattos^^^  cta  agmsvc^as  y  btaiH 
cas,  «e&¿>  «I  ^pttpo  el  prhKifttl  de  ellos. 

La  olnr  krfsi  ée20i  l.c.  d^searga  por'iemitFO  fi^óai!k)s,  eotm 
tos  canto  el  mas  woM^  es  el  €ataníapo,  de  ^agín»  aegf as. 

£1  Meta  ntee^H  taÜTddá  mn^díQmil  4ie  lea  i»i^  de  la  Ntieva« 
CUtmada  y  debe  m  origeii;á  dos  tíos  que  tejaa  de  loa  páraiMS  de ' 
dínagaBa yde'ia  Sotsap».  Cuasdo  llega  al^ciawgicotefoeogidoftt*   * 
lodad  agsa;<pie^erieiiiia  eatensioi^bSjé^di.  c.^e^tre  las  eoaléi 
«olo«hai  220  de  ¥eB«Baetai.  Mas  adiajo  de  H  coiÉhien^  del  Meta 
ee  preaeiila'^  diriuoeo  Bia|e6taoso?ppr  m  «aelraní  y  pfslttiididad. 
Todas  las  ügaas  |fhifMa$  qoe  se  met^sa  ^e^m  esleMiOB  de  8,50O 
1.  c.  perteBecici^ ai  territorio  granadkfo,  le  ^aii  sfdo  tribotaditt 
por  el  iaitida,  «lYíebada ,  el  toamie  y  «I  neta  y  }^fim  1.  c.  €e   ^ 
tierras  de  'Cvayasa  faaa  desapiado  lei}  él  por  nfodlo  de  6S'  «tas  f 
40e«ids,^«eofilnroon  elpiodscto  de  4#01.  e;  de  la  proviacia 
4e  Apure  qve^son  tiKib«tfirfts  del  Meta. 

Per-treee  Iegi»s  <;oire«í  Oriiioeo  M1V.  E.  bMta  d  fomoso  estre* 
ifco  del^mragoaa*:  «lli  vaehre  al  imdeate  y  eadeceza  después  al 
aorie  hasta  cerca  de  £abruta,  por  espacio  de  21  4/2  tegtiaS;  to**'^ 
asaado  loega'ia^vla  del  aaeiaale  qoe  ai^deja  siao  ea  h  aiar. 

Desde  la  desembocadura  del  üela  basta  d  firente  de  Cabruta  y  ^ 
fde  €aieara^  caéa  d  Oriaoéo  por  sa  r^ia  d^redlfa  las  agaa§  s<^ 
iH«ateB4e  aiia«aaperfide  de  ^rras  Igml  á  ^98  I.  c.  que  ^n  las 
^e  eoiiqpreadte  «aa  boj«  Toraiada  por  h»  serranías  de  Chivapori  y 

« 

-Gerbataaa.  Odio  Tk>s  y  eaa^  caüossirvea  de  cansas  á  este  de» 
^agüe.  *  •  % 

:  Por  la  W|filé9da  ^tieae  el  Oeiaoeo  <aa  aiftaéiJlo  cOnsídfrable  de^ 
bidé tftfito  á  ka  agaas'que  caen'eaaaa  at^eifcie  de  4 ,0#0 1.  c.  ea 
^1  territorio  graaafliao  y  qae^ajaa  perla  ppOTtaciá  de  kptre,  conm  ^ 
á  las  qae^eovroBponden  á  4  jlM  I.  o.  de  esta  laistaa  provincia.  To^ 
das  las  agoA^  de  «ata  gi»ade  Ilaaara  mitraa  ea  el  Ovlnooo  por  siele 
desa^vaderes ;  neado '^  pfiaeipato  el  áTaaea  y  el  Ca^aaapavd* 
En  segaidi^^i^nieel  rio  Apare,  ^oe  tieoeM^it^anea  eípáraaio  del 


BataUoa,  al  aw  4b  la  tirita.  lAému^  alU  Dribaiite;»  y  m  (ama  «i 
nambí»  de'Á¡Hne  hasta  que  llMaftdo  á  Jas  UaonraBse «ae  cofi al 
Saraza  qfie  Ue?a  sa  corso  de  MmMinH&riiiada.^  Corre  paialab  al 
lleta  poMa  orilla  set^riaBal  del  dectifede  los^ndes  granadinos , 
sigiiíeDdS  la  Ibiea  en  qne  aquel  gran  plano  se  inters^  oeu  loa  da 
las  cordilleras  de  iMrida  y  Caracas,  ¿ám^  que  no -*mo  recoge  laa 
agaas  que  caen  en  la  [)«»?ii¡6ia«de  su  nombfie,  sino  las  que  le  enyim 
las  faldas'  merídiottates  de  aqueUa&aorditkras  pof  medio  de  450 
sios  y  miiltítod  de  quabcadas  y  ca£os  que  sirvMi  de  d^sagooicros  i 
una  si^rficíe  de  4^-4  4é  1.  c.  El  Ajlure  entra  por  cuatro  difeientcB 
aaaales^ü  el  OriBaoo^  tani^do  ptB  frente  á  Calcara  ledas  las  agmis 
que  anoünistra  una  anperflcié  de  9,506  L  c.  del  ^territorio  grana'* 
diño  :  da6,000  délas  proYtneiaftde  ApnrefEarinas,  fláiida,  Xca« 
jyiD)  Barqüisiineto;  Carabobo  y  Caracas  y  de  6,480  así  del  «ístama* 
de  ia  Psoima  coma  de  otras  tierras  de  la  prmnoia  de  Gaayana^ 
•badeade  «tré  todas  un  total,  áe  2^  ,790  1.  c.  que  tilbntan  aaa 
aguas  al  Ocinoeo.é^ra'fannarse  algnna  idea  dé'fa  gran  corpniaaetat 
de  esle  rio,  debe  tañerse  presante  que  una  «uorta  parte  de aqoe» 
líos  estenses  tafrUerios  está  en  la  región  dadlas  lluvias  eeuatorialea, 
4ande  pueden  caer  cada  a&o  40bO  pulgadas  de  agua.  Sí  se  adapte 
qne  en  el  resto  caigan  72  pulgadas,  se  tendrán  74  par  (énmao 
medio  de  te  llatias  en  las  21 ,7S0 1.  c.  que  fomian  la  grande  boya 
dd  Oriaooo.  Mpónganse  perdidas  por  k  evaporación  y  tttvaeioa 
dos  terceras  parias  dd  tdal  de  ias  lluvias  y  se  verá  aae  siempre 
<pied«i  20  puedas  de  agwi  que  todo  aquel  inmenso  territorio  trl- 
4Mitaal  psiaoeo.  . 

La  seginida  grande  inflexias  Je  este  río -está  ya  deoMSda  frantaii 
Caieara  en  la  latit.  7*»  98^ 55^^  hmg.  O""  27^  25^^  O.,  á  75  vanas 
solMre  eLliivd  áá  mar.  Las  eétahoes  Hanan»  de  la  proviilda  4e 
Apure  tienen  «un  declina  que  deaoieBde  de  lea  Andes  de  la  Nueivah 
-Granada,  del  lado  de  Pamplona,  en^direosiaoñeil  este.  Hállaose  estas 
llannffas  eontenídas  ento«el  lleta  f  Casenare  por  al  sur,  y  eutveél 
Apure  y  el  Safare  :pir  eP  norte.  Los  declives  de  lá&aardSlerBs  de^ 
Mérida  y  Caracas  s^rolongan  hasta  pacderse  enlas^barrancasdal 
Apinre,  siguieBdoet  uno  la  dmociondel  nardaste  al  ^ureste^baata 
-enoontnr  al  ünbanie  y  la  Portuguesa ,  y  al  olio  la  de  notle  á  sur,  , 
>aiilFe  laiPortngMsa  y  el  rio'Quáneo.  En  la  boca  del  Apure  aon-- 
dpye«el  plana  suweamle  bnihiado  que  viene  de  las  Andes,  peao 
sigue^Lde  lá  e<»^eta.inecídiomd>da  Caracas  que  «orre  patal^  á 


—  2é  — 

la  costa.  Este  terreno  qne  se  va  realzando  en  forma  de  eq>laiiada 
hacia  la  serranía,  impide  al  Oridoco  seguir  su  rombo  al  norte  :  no 
puede  tampoco  segoir  a!  poniente'^por  el  declive  de  los  Andes;  se 
ve ,  pueS;  forzado  4  cambiar  la  dirección  al  naciente ,  entibe  el  final 
déla peque^  escarpa  de  la  Parima^  y  el  de  la  serranía  de" Caracas. 
El  moi^imnm  de  depresión  del  terreno  eslá  en  Tas  sabanas  de  Cal- 
cara ,  en  donde  el  rio  efectúa  su  último  cambio  de  ruta ,  comple- 
tando así  una  linea  semicircular  al  rededor  del  sistema  de  monta- 
ñas de^la  Parima.  Desde  Gabruta  corre  hacia  el  naciente  por  espacto 
de  56  leguas  hasta  el  raudal  de  Camiseta  en  la  Boca  del  Infierno , 
donde  hace  una  pequeña  vuelta  al^norfe  para  volver  á  tomar  luego 
su  primera  dirección.  En  este  transito  tiene  ya  una  legua  deancho 
y  recibe  de  la  Parima  las  aguas  que  le  envían  dos  hoyas;  la  de  Cii- 
chivero  y  la  del  Caura.  l3  primera  inclinada  de  sur  á  norte  está  for- 
mada por  la  serranía  de  su  nombre  y  las  de  Cerbatana  y  Chivapuri; 
encerrando  una  superficie  de  SM 1.  c.  que  desaguan  por  el  Cuchi- 
vero  con  dos  nos>'ta  segunda  está  inclinada  de  suroeste  á  nordeste 
y  tiene  una  estension  de  ^,626  1.  c.  £1  Caura* es  el  rio  principal 
de  esta  hoya  y  á  él  caen  otros  20,  sin  contar  los  pequeños  que  se 
dirigen  rectamente  al  Orinoco.  Está  circundada  esta  hoya  de  los 
cerros  de  Cudiivero ,  Mato ,  la  ¿ierra  ülaigaalida  ,  Maschiati ,  Me- 
revaH ,  Arivana,  Payayamú ,  Para ,  Turupa,  Arabo,  Chanaro  y  los 
que  concluyen  en  la  fioca  del  Infierno.  Por  la  izquierda  recibe  el 
OrÍDOco  las  aguas  de  una  parte  de  los  llanos  de  Casacas  y  Barcelona; 
esto  es ,  de  todo  el  territorio  contenido  entre  la  mesa  de  Uberito , 
k  sierrita  y  el  borde  de  la  montaña  de  Tamanaeo  basta  las  cabe- 
seras  del  Manapire.  Poco  mas  alláde^la  vuelta^del  Torno  indina  el 
Orinoco  su  curso  al  este  nordeste ,  y  después  de  haber  hacho  un 
camiifo  deonce  loguas  por  aqualla  dirección ,  se  «ncuentra  frente  á 
la  capital  de  la  Goayana  ,  llamada  en  su  fundación  Saoto-Tomé  de 
Guayana.  El  uso  ha  instituido  á  este  nombre  el  de  Angostura,  por 
M  circunstancia  de  hallarse  la  eiudad  situada  en  un  punto  en  que 
el  ño  se  eslrcücba  hasta  reducirse  á  8fó  varas,  que  es  la  cuarta 
fapte  de  su  anchura  ordinaria.  -^ 

•  £1  nacimiento  del  Orinoco,  según  las  observaciones  hechas  p(H" 
M.  Scl^mburgck  en  sus  recientes  viajes ,  está  en  el  mismo  merí-> 
díano  en  que  se  halla  fundada  la  ciudad  de  Angostura*  La  distan- 
cia d,e  norte  á  síít  entre  ambos  puncos  sería  de  424  leguas,  y-si- 
.goiendo  el  curso  de  las  água8deH>riiK)e0;deS45.  En  el  medio  del 


rie  hái  un  orinómetro  natural  que  Uamm  la  Pieékñ  ékl  «ledio^ 
y  sirve  para  medir  el  agua  que  pasa  delante  de  Angoatura.  Le  he- 
mos dado  este  nombre  por  imitación  á  io&  n^lómetrai.' Si  en*  la 
BMD^ante  ^1  Orioaco  (ornamos  60  pies  por  término  medio  de  su 
profiíndHad ,  dos  pies  por^flÉí  yelozidad  en^cada^segundo  y  2,0d0 
pies  por  su  anchura  ^resuUará  que  pasan  por  delante  de  Angosta- 
ra 240,000  pies  eubksosde  agua  por  segundo,  TólÚ0»en  igual  al' 
que  lleva  el  Ganges  j^n  su  creciente ;  debiendo  observarse  que. mas 
abajo  de  Angostura  recibe  todavía  el  Orinoco  al  Caroní ,  qne  sale 
de  la  Parima,  y  es  el  mayor  de  sus  tributarios.  Siguiendo  el  Ori- 
noco hacia  el  nacieute^  vuelve  luego  á  ensancharse.  Doce  leguas 
mas  abajo  de  Angostura  ( frente  al  paso  del  Mamo )  concluye  una 
boya  de  la  proviocla  de  Guafaoa ,  formada  por  los  cerros  que  se- 
paran la 'del  Caura  y  los  que  pasan  por  la  Paragua  y  Tocoma.  Esta 
hoya  inclinada  4^sur  á  tiorte  tiene  600 J.  c.  y  las  lluvias  que  caen 
en  ella  san  conducidas  por  trece  canos  y  otros  tantos  rios,  siendo 
el  mas  considerable  de  estos  últimos  el  Aro,  que  recoge  las  aguas 
de  otros  diez. 

Del  lado  izquierdo  recibe  también  el  Orinoco  las  aguas  que  caen 
sobre  la  provincia  de  Barcelona  en  una  ostensión  de  400 1.  c,  deslio 
laiuesa  de  UVcírito.hasta  la  de  Hamo.  De  51  ríos  que  cruzan  "este 
terreno,  once  caen  al  Orinoco  después  de  haber  recogido  las  aguas 
de  los  demás.  Las  aiebas  acarreadas  por  las  corrientes  que  bajan 
de  la  mesa  de  Cucas^o  forman  una  gran  barra  en  el  punto  de  Ma- 
mo, donde  tiene  el  Oriooeo  555  leguas  de  curso.  Sigue  el  rio  (k 
nádente  por  espacio  de  once  leguas,  aunque  en  la  isla  de  Fajardo 
que  está  frente  al  desembocadero  del  Garoni,  tuerce  «li  poco,  al 
este  nordeste.  *'  ; 

t^o  queda  indicado,  el  Garoni  és  el  rio  que  lleva  al  Orinoco 
mas  aguas  del  sistema  de  la  Parlma.  Su  hoya  ocupa  un  espació  de 
2,800  1.  c.  deterrenos  donde  la  lluvia  anial  se  puede  viduar.en 
90  pulgadas.  La  primera  inclinación  de  la  hoya  es  de  naciente  ji 
poniente  y  después  de  sur  a  norte.  Está  limitada  de  un  We  por 
toda  la  serranía  qne  divide  las  vertientes  del  Brasil  de  las  que  van 
.  al  Guyuni,  por  la  sierra  Pacaraima,  por  la  de  Roraima,  qne  se 
une  éespties  á  la  de  Rinoeote,  y  por  las  de  Garapo  y  U^pamo,  que 
terminan  e^  las  serranías  de  Upata  y  Guayana  la  Vieja.  Por  el  otro^ 
lado  terminan  la  hoya  del  Garoni  las^sierras  Payuyamú,  Arabo, Cha- 
ñare y  los  cerros  de  la  Paragua  y  TocofUa  :  46  ríos  y  multitud  de 


---  II  ^».  u 

-teDni  f  elPiíaptt  as  t^vlamo» 

Bdr  lajearte- is^etdarae&be  el  Orinoco  lis  afjua&de  usa  escta 
estmisiDií  de  50  L  c  de  bt provincia  da  Gumaró  ^.por  iiiedi(kd»iiQa 
ri66.  iUiittiilaé«KoofiÍid8TaUeiiiente'sifiieoebo  legttas'c^^^  al  E.  S, 
fi.  hasta  ñeale  á  Gnayatta  la  Viaja,  ^M  toaree  al  £.  N.  B.  y  coo»- 
*  liuiía  el  aspafiió  de  ooee  leguas  recibiendo  por  medio  de  cinco  dos 
la&agms  de  nn  declire  de  70  L  ik  que  forman*  las  serfaaks  de  Inmr 
laea.  Xambie»  por  el  ktdo  opuesto  le  entras  dos  riassde  la  proiia- 
(áa  de  GuoMOiá.  £1  Orinoeo  entónces^ha  re^^rrído  587  leguas;  y 
«sí  por  la  grim  masa  de  sus  aguas  como  per  la  configuración  diél 
tttcreno ,  se  eosancha  considerable  menta  fiüente  á  Piacoay  S.  Ra*- 
hel  da  jfonancas,  donde  se  abre  ftK'mándo  las  grandes  islas  ée 
la  Tórtola  7  la  éa  Yaya  y  tres  mas  pequaSas  que  estiMi  frente  i  Bae- 
raneas.  Su  anchura  es.de  puatro  leguas,  y  altf  e^jggieea  el  Yértice^ 
su  Delta,  el  eual  ocupa  una  estensiim  de  700  1.  c.  Multitud  de  ca- 
ios  formados  por  las  aguas  del  C^inoco  ó  por  las  que  caen  sobre 
las  tierras  del  mismo  Delta ,  cruzando  en  varias  senados  aquel 
gran  paisa^^adO;  forman  un  comfdíoadoLlItbmntode'lBli^y  yan 
•'^li^Nies  á  descai^urse  en  el  Océano  áem  al^o^o  de  Parí». 

Ño  es  estrado  Tsr  tanta  inmensidad  de  aguas  dirigirse  por  difi- 
ceoRles  camiuea  para  llagat  al'  mar,  pues  que  no-steudo  ssHScieiHe 
para  delenerfiís  la  eievaeioii  de  los  teneuoa  dreuafécinos^  pasan  se- 
bee ellos  buGoanda  por  todas  partes:  un»  salida.  Ei  Orinoco  aquí  ba 
f'^eeogido  ya  las  agui»^  [Curiales  de  4  2)610  L  c.  del  territorio  de  la 
Gaayana,  de  9^500  4el  de  la  Nueva-Ciranada  y  de  7,400  de  las 
JMOviiiciaa  de  Vaaeaasida,  quo  hacen  mi  total  de  29,020  \,  c, 
^  El  férlice  del  Delta"Se  encuentra  en  la  latit.  S"*  27^  If .  y  en  loiíg. 
5?  AV  d^  B,  de  Cttcácas.  Bsté á  la  aHwa  de  20  iti^aa sdife  el  nivel 
Jké  mxc,  áé  cual  dista  en  linea  reata  SO  leguas.  A  una  y  media  le- 
ffBmé»^.  Ri^^  do  iavrancas  se  aparta  e^  etíio  Macaréo*,  el  cual 
§  9MS  leguas  iHrfo{a  la  niitad  dosuaa^suas^porel'^^iiM)  Ménamo;  Este 
qaie  daseoÉma  e»  el  golfo^Triato ,  siguiendo  lar  orilla  dd  docKifode 
las  »esaa  que  se  elevan  en  tes  llamiras  ds  isdreslaaa  y  Cuniai|á,  re- 
cibo laff  aig«M»  quo  caen  cm  «oaealeBsiantte  700^  l.c  oondiRiAis 
por  Toriea  ríos  y  caitos,  Bnéntna  qué  é  la  derecha  envía  mn^^- 
eloa  4a  pamticadinm»  q«o  lodaa  aa  eammáom  entra  ü.  Bla  dispo- 
sfeion  de  las  9%wm  hace  qom  p«e^  oonsijterarsa  eUMteemtto  dld- 
dido  en  ch»  partes :  la  una  que  llamurano^^nperlarú  oeddefital, 


r*      -^ 


^_  KA  * 

M»  (^  «w 

maolaX ,  entre*  «sta  y  ú  Oiíqqod^  La  frimficau  redbo  \m  «gtu»  de 
Mafiueo  y  opiiuitca  eoa  «s^ por  todas^ pactes,  anéniím-qna  la  otra 
las  reeibe  del  Orinoco  á  medida  que  se  avanza  hácit  la  mar,  y  no 
tiene  comunicación  co»^  la  oftrar  parle  del  Delta  smo  por  medio  de 
na  arrastradero.. 

^  Siguiendo  el  ^cnrso  de  la  gran  madre  del  Orinoco ;.  á  las  trece  le- 
guas del  punto  én  qBe  se  apacta  ^1  tronco  printipal  dd  Delta,  en- 
contramos otra  Tez  el  rio  sin  interposición  de  islas  ,■  bien  espacioso 
frente  á  Sacnpana,  teniendo  mas  de  legna  y  media  de  anciio;  pero 
a^oco  se  abre  en  dps- grandes  brazos  llamados  Sacupana  é  Imataca. 
Aquel  envia  aguas  al  Delta ^  y  el  último,  que  es  mas  profundo, 
recibe  las  que  bajan  de  las  tierra»  de  la  Guayana*  A  las  ^6  leguas 
está  otra  yez  el  río  unido  én  un  solo  cu^po ,  y  de  ú\i  hasta  punta 
Barima  se  cuentan  diez  I^uas.  Encesta  distancia  de  59  l^uas  re- 
cibe aun  laf  aguas  de  580  L  c.  que  son  parte  del  dedico  de  Ima- 
taca y  qjue  desaguan  por  me<lio  de  ooho  ríos.  Van  adamas  directa* 
mente  á  la  mar  por  diferentes  ríos  las  aguas  que  caca  en  un  ^pacio 
de  200  Le. 

La  boea  del  Orinoco  desde  punta  Bar^na»que  estáá  los  8^  W  ^W 
latit.  N.  y  á  las  7^  2^  long.  al  E.  del  merídiano  de  Caracas,  hasta 
la  punta  N.  E.  de  la  i^a  Nuina,  latit.  8»  5^  58'',  long.  6«>  45'  \  O", 
tienaseis  y  media  leguas :  tománddapor  la  puttta  N^-E.  de  la  isla 
Cangrejos  tendría  cinco  leguas ,  y  si  se  mide  desde  punta  Sabaneta 
hasta  la  punta  N..  E,  de  la  isla  Araguao,  entonces  sería  su  boica  de 
•14  leguas.  Ciertamente  esta  última  podría  tomarse  por  la  gfande 
«oibocadura  del  Orinoco  y  la  de  punta  Bsurima  ¿  Gangrejes  por^  la 
boca  grande  ó  de  Nayíos, 

Aquí  pues  termina  este  rio  que  tiene  su  rango  entse  los  de  se^^- 
do  orden  del  globo  entero.  Es  tan  grande  ooo»>  eLGánfes  de  la  In-^ 
día ,  el  quinto  rio  del  Nuevo-Mundo,.  el  tercero  de  la.  América  me- 
ridional y  el  primero,  de  Venezuela.  Su^cufSQ^total  es  de  426  leganf, 
de  las  cuales  40^  sen  naKgaUee»  Coadiice  las  aguas  q^ái  40i»  jies 
\  mas  de  20^0  riachuelos  reciben  de  una  superficie  de  30)8041  In- 
icias, cuadradas. 

Esta.  gcaodSa  heija  de  U  ,000  L  e.,.  contando  las  2ia  q^  daaa- 
gnaa  cerca  <fel  Orinoco  i  \%  Bsuir,  es  mas  grande  wa.  vea  y^edia 
que  toda  la  Francia  y  dos  que  Esj^Sa^  y  llueve  ea  dk  ]tri|»le  casti- 
dad deagua  qjie  ea^ueUa»  Desemboca  al  gpsuidesOeéaio  per  47  ea- 


•       -  53  - 

nales  sobre  nna  esteBsion  de  50  legnas  de  costa  desde  punta  Baríma 
hasta  boca  Yagre ,  que  es  la  mas  occidéntaí  de  todas,  y  se  encuen- 
tra en  la  latit^^^"  50^  25'^  y  en  ia  long.  40o  35^  50^^  al  1^  de  Caracas. 

HOYA  DE  CUrUNI. 

El  río  Guyuni  es  el  común  riscipiente  dé  las  aguas  de  esta  hoya 
por  todas  partes  cerrada,  menos  por  el  oriente,  hacia  donde  cm*- 
re  el  rio  á  depositar  en  el  Esequibo  el  caudal  que  le  ha  suministra- 
do una  estension  de  5,500  1.  c.  Otras  í  99  1.  c.  tributan  sus  aguas 
á  varios  ríos  que  por  separado  las  llevan  también  al  Esequivo,  y  en 
en  el  termina  esta  hoya,  que  está  formada  de  un  lado  por  las  sier- 
ras Gocoi ,  Roraima,  Rinocote,  Supamo  y  parte  de  la  Pacaraimai 
y  del  otro  por  las  montañas  del  Yuruari  y  la  serranía  de  Imataca. 
Los  principales  tributarios  del  Guyuni  sqq  el  Masaruni  que  lleva  las 
aguas  de  500 1.  c,  el  Yuruari  las  de  400  y  el  Sibauri  de  200.  El  to- 
tal de  los  terrenos  que  desaguan  al  Esequibo  es  de  5,699  1.  c.  en  las 
cuales  corren  92  rios  conocidos  y  400-  riachuelo^,  pudiéndose  asegu- 
rar §|]e  en  estos  parajes  caen  anualmente  90  pulgadas  de  agua. 

j^'-Ja  boca  del  Guyuni  á  la  del  Esequibo,  en  el  Océano  Atlántico, 
no  lejos  de  la  colonia  de*Demarari ,  hai  una  distancia  de  ^  7  leguas. 

HOYA   DEL  RIO-NEGBO. 

El  Rio-Negro,  llamado  por  los  indios  Curana^  que  significa  n^- 
grOy  viene  del  territorio  granadino  con  el  nombre  de  Guainía  y  se 
fórqa  en  un  terreno  desconocido,  en  selvas  que  están  mui  distan- 
tes de  la  cordillera  de  los  Andes. 

.•  Por  el  volumen  de  sus  aguas,  comparado  con  otros  ríos,  se  puede 
.graduar  que  lleva  el  producto  de  2,000  1.  c.  cuando  entra  en  el 
territorio  de  Venezuela.  Sus  aguas  son  Q$treihMani&nte  negras ;  su 
•  dirección  de  poniente  á  oriente,  hasta  que  en  Maroa  tuerce  al  S.  S. 
O.  y  encuentra  en  su  curso  el  brazo  Gasiquiare.  Entonces  pierde  el 
nombre  de  Guainía  y  se  llama  Rio-Negro.  Esta  unión  y  mudanza 
de  nombres  se  efectúa  en  la  latit  2<>  y  long.  O**  59'  al  O:  del  meri- 
díMio  de  Garácas,  en  un  terreno  elevado  solamente  215  varas  so- 
bre el  nivel  del  mar.  El  ponto  en  que  el  Gasiquiare  se  aparta  del 
Orinoeo  está  á  557  varas  de  elevación,  de  manera,  que  descendien- 
do en  un  curso  de  72  leguas,  la  diferencia  de  aquellas  dos  alturas 
que  es  de  -124  varas,  represen teiia  por  término  medio  de  bajada 
poco  mas  de  cinco  pies  por  legua  ó  20  pulgadas  por  milla. 


—  »  — 

Signe  el  Bie^Negn)  el  bhsiqo  rumbo  del  S..$.  O.,  y  á  las  tres  le- 
guas de  curso  pai^  pqr  d^anke  del  paeUo  de  S.- Carlos  ^  frente  al 
cual  se  descubran  lo6.  restos  de  una  antigua  fortaleza  :  desde  allí 
hai  once  legua?  hasta  la  piedra  ó  glorieta  del  Qocui ,  que  se  tiene 
por  término  prpfisional  entre  Venezuela  y  el  Brasil :  de  este  punto 
se  cuentag  otras  .QBce' leguas  basta  las  fortalezas  brasilenses  ei^ 
S.  José  de  Marabltonos. 

Para  llegar  de  S^  Carlos  al  Amazonas,  siguiendo  eleurso  del^lo- 
Negro,  es  necesario  recorrer  un,espacío  de  500  leguas  ó  poco  me- 
nos, y  otras  tantas  desde  la  confluencia  de  estos  dos  ríos  hasta  ^ 
Océano. 

La  hoya  del  ftío-Negro  en  la  parte  de  Venezuela  e^tá  demarcada 
por  el  terreno  realz%|p  que  separa  las  aguas  del  Inírida  y  del  Ata- 
l^apoiíasta  el  Casiquiare  :  de  allí  por  las  colina»  que  unen  las  ser^ 
r^ias  de  ünturan  y  Tapí repicó  con  los  cerros  Goai,  Imerí  y  Cupí, 
-y  en  íin  por  losjterrenos  realzados  que  desde  la  piedra  del  Cocui 
separan  las  aguas  que  bajan  á  Venezuela  de  las  qye  se  dirigen  al 
Brasil.  Esta  parte  de  la  hoya  del  Rie-Negro  tiene  una  superGcie  de 
850  1.  c.  y  son  negras  todas  las  aguas  ^ue  tributa  al  rio ;  el  cual 
recibe  ademas  aquella  j[)arte  de  las  del  OriHoco  que  le  lleva  el  Ca- 
siquiare y  muchas  negras  que  este  canal  recoge  en  un  territorio  de 
•I  .200  K  c.  Si  las  aguas  que  el  Casiquiare  saca  del  Orinoco  se  esti- 
man como  el  produelo  de  500  1.  c.  se  tendrá  que  el  Amazonas  re- 
cibe por  el  Rio-Negro  todo  el.tributo  de  2.550  1.  c.  de  un  territo- 
rio de*Venezuela,  en  el  cual  se  puede  valuar  en  ^00  pulgadas  la 
lluvia  que  cae  todos  los  años*  Estas  aguas  son  llevadas  por  36  rios 
y  60  riachuelos  ó  caños,  y  á  ellas  deben  agregarse  las  suministra- 
das por  una  superficie  de  2.000  1.  c,  que  ha  recogido  ya  el  Cuai- 
ma, de  la  Nueva-Granada,  al  entrar  en  Venezuela.  Asi  .es,  que  al 
salir  de  este  último  territorio ,  lleva  todas  las  aguas  recogidas  eii 
una  estensiqn  de  1.550  1.  c.  y  es  un  rio  tan  importante  como  el 
Guaviare  cuando  se  reúne  al  Orinoco» 

HOYA  DEL  GOLFO   DE   MARACAIBO.     . 

£1  lago  de  Máracaibo  tiene  214  leguas  de  circunferencia,  cal- 
culando solamente  sus  ensenadas  principales ;  y  ^  2#  si  estás  se 
esclusen ;  ocupa  una  superficie  de  700  1.  c.  En  el  gran  valle  cuyo 
centro  ocupa  se  recogen  las  aguas  que  caen  de  las  serranías  de  Ocft* 
üa  y  Perijá  por  la  parle  occidental ;  de  M  Jrida  y  Trujillo  por  la  ád 

9,  CIO««  ' 


■o- 


—  »  — 

^ttées  4  }ft  pro^«ift  de  PavnpltMsa  «n  li  N#^ii<^tAd<H  ái  Mé» 
fiel,  Tmjilld  r  l&nicti^  e¿  YeñcaMda,  «^b  éb|0«Ml9é^ iewm^ 
ftilStts  q<oe  fes  dan  k  formtt  de  ana  bepradnra. 

Tres  declines  bien  prontrneiad^s  def  oeste,  smftí^  éwtm  pút 
itB^cTio  de  ^  id  rm  y  kW  rlavhtieléB,  todl[9  his^  «gaüs  ^  «!«  escenk 
síon  de  2.900  1.  c.  de  Venjpsoela  y  <^  400  de  hi  Naé^-draonda. 
#  ¿"estas  se  renneñ  las  que  é^ée&tím  whté  el  diIsbio  lage^  sie  ten- 
drá q^m  las  agtBH»  que  cacen  en  l^á  soferfieie  íguat  a  -í.é^O  k  e« 
iHesenibocáiit  á!  gDHe  iite  Maracaffee».  Ef^^^ase  i^te  éesagie  pof  im 
bocas ;  dos  peqneñas,  que  son  ]os  caños  de  Paij^na  y  Olibor,  f  etrsf 
gpáSftée  éb  ámrsMmée  a^dfmf  sifMia^  enti^  2aj^a  f  la  isla 
díB' San  Carlos. 

Los  prineípaks  fribut^ros  éél  lago  siE^n  ei  €a«M«iiibo,  ^ue  llBta' 
k$  agnas  ée  cin«  «teaslonf  de  73#  1.  e. ,  d  Zaliá  és  44l#;  el  Ma^a^ 
faw^  250^  y  el  Esealaült  dé  SO^.  Caen  adetüas  e»el  golfo,  ^e  esí^ 
é  estremo  sisfónariovial  de  es^  hfyyá,  k»  agms  de  «ttaeíip^(^e 
dé  20#  1.  e.  de  Usi  peníifstila  Géajíra  y  fos  d^  3^0*1.  e.  de  la  pro-' 
t^iá"  de  Cony :  ft^  q%re  bate  aseendei!^óde8  Icí^  terrenos'  qfue  vierteii 
4\st  la  htffti  ¿  4.1^  1.  cr. 

Debe  teñera  p^séiíite  que  en  las  tíeitas  is^  merMHonales  caeffi 
ánnalmente  86  ^/2  pnljgadas  de  agua,  y  c»  Bafs  dd  setentrion  52,  y 
contestas  son  motiles  qtre  acjuellas^sé  ptrefcn  cafeeíar'ft  pulga- 
das por  término  tíiédlo,  ^ue  es  tres  ve^es  asas  de  fo  qUellne^e  etr 
xCspaila. 

les  vQ^lés  de  kfÉgsA  son  nn  f ecMf^  eirevlar  túitmá^  por  moa- 
laias  de  éífereü^  altura».  Al  norte  tos  eerros  d»  te  cadenea  d«  ln 
e^a  tes  separan  del  mat :  la  eiMrdiUerá  meridlov^  por  el  lado 
opuesto  parte  sus  límites  con  iM- pandea  ItaMffa»;  y  taffioa  friqpotf 
de  colinas  bastante  elevadas  para  determinar  el  curso  de  las  aguas, 
los  cierran  hacia  et^sté  joeste  como  diques  trasversales :  por  con- 
sicae»d»d#e8la  eatraordkNffk  fiOtfigttÁete  áá  mmmo,  los  ría- 
ekoeto»  de  \m  valles  de  Anigtta  forjan  m  %kkmm  fttvtieilar^  ikir 
rtgbeadi^  su»  oatBieAtes  bá<ia  utla  bond^a^Mb  i^fi^ftda  por  toda¿ 
pmfie»}Y  m  ba&aate  iftaapw  ninpmt  saUda^  se  reunea  en  un 
Jfi^iolfnór,.  Sotiletídis  ittí  á  la  t^e&m  «linettcia  dolai  cívapora-^. 


S4t  yira»flokm  el  wn#éei  mar^  liiii#  ra  p«rlBietr»2SI^  legnas^T 
«Mfft  ima  flipertcle  d»  tt  1.  e.  Tl«i«  tamMe»  92f  istas^  dé 
las  cotíes  algunas  'son  meros  peftaseds ,  y  ée^  tt  ríaetneips'  ^uie  ht 
eaen  el  'mas  considerable  es  el  de  Aragna.  El  área  de  les  terreudos 
de  las  provincias  de  Carabobo  y  Caracas,  que  por  su  configaracion 
•dnágonMOí  ^  «afeáJifBe  natoral^  áe  Yaleneia ,  es  de  ^  leguas  cua- 
énámj  qve^m^as  á  ks  22  de"  ht  ^uper§eie*de4  lago,  jiáñ  á  toda 
li  koya  -lOt,  sobre  las  euales'  eaeé  airaalmenlíe  ?2  pullsadas  de 

aOTA  DBL  GO^FQ  OS  CARJAOO. 

Al  goTfo  de  &riaco  lo  delinean  la  península  de  Araya,  las  playas 
de  Cumaná  y  costas  de  Mariquital  /concluyendo  aj  oriente  eon  ios 
terrenos  bajos  y  pantanosos  de  Cariaco.  De  las  tierras  meridionales 
^orientales  del  golfo  sé  descuelgan  54  rios^  el  mayor  de  los  cuales 
^  el  Neveríi  que  tiene  su  origen  en  Ttrumiquiri ,  cerro  el  mas 
grande  de  la  provincia.  A  la  opuesta  banda  de)  norte  no  hai  nín- 
giin  río.  Las  legnas  cuadradas  de  unos  y  otros  terrenos,  todos  de  la 
provfncaa  de  Cumaná,  alcanzan  á  ^65.  En  una  parte  de  estas  tier- 
ras puede  estima  se  la  lluvia  anual  en  $0  pulgadas,  mientras  qae 
en  Ja  otra,  que  es  mayor,  no  bajan  de  70,  así  es^  que  debe  valuarse  en 
4(6  pulgadas  el  agua  que  cae  en  la  generalidad  de  este  territorio. 

QQTA  pEL  GOUSO  DE  PAAU^ 

■  tf 

La  parte  meridional  de  la  cordillera  de  la  península  de  Paria  der- 
r{ima  sixr  aguas  en  el  golfo  de  este  nombre.  La  serranía  que  se  une 
á  aquella  y  divide  las  vertientes  de  la  hoya  de  Cariaco  basta  la 
^mbre  del  lorumiquiri,  descarga  en  el  mismo  golfo  y  el  con- 
junto de  estos  terrenos  delínea  la  parte' setentrional  de  la  boya  de 
Paria.  Las  faldas  de  la  mesa  de  Guampa  que  n^iran  al  mediodía^, 
sirven  de  límüe  meridional  de  fa  hoya,  y  otras  meses  ligadas  con 
aquelfe  fiOtt'eomo;diqués  trasversales  que  sé  unen  al  pié  de  la' ser- 
ranía del  Tormniqulri,  formando  así  su  término  occidental. 

Estos  terrenos,  casi  todos  de  la  provincia  de  Cumaná,  escepto  una 
pequeña  parte  de  la  mesa  de  Gnanipa ,  perteneciente  á  la  provincia 
de  Baredofta ,  formafi  upa  estensron  de  604  I.  c. ,  en  las  cuales  hai 
90  ríos  y  mas  de  200  riachuelos  que  recogen  y  llevan  al  goTTo  las 


n 


—  M  — 

aguas  que  caen  en  aquellos  terrenos,  püdiiNldo  estimarse  la  HoVinr 
en  70  pulgadas  porlaño.  Los  maypres  ríos  de  esta  hoya  son  el  Giia* 
rapíche,  al  cual  tributan  sus  aguas  40dl.  c.|  y  el  Guanipaqoe  f^ 
coge  las  de  un  territorio  de  225.  "    .  ^ 

VERTIENTE   AL   MAR. 

Tirando  desde  la  península  de  Paraguaná  una  linea  que^trayic^ 
la  sierra  de  $.  Luis  de  Coro,  que  siga- después  hác^a  lál»  altas  saba-^ 
ñas  de  Taratarare  y  continúe  por  los  cerros  que  dividen,  los  llano» 
#de  Carora  de  los  del  Cenizo,  y  en  fin ,  por  las  cumbres  que  s.e  di-, 
rigen  hacia  Aguaobispo  y  el  páramo  <!|e  las  Rosas,  se  encuentra  la 
línea  tnas  occidental  del  declive  de  la  cq^ta,  y  al  mismo  tiempo  la 
mas  internada  hacia  el  sur.  Los  cerros  que  diviéen  el  valle  del 
Tocuyo  del  de  Barquisimeto  y  las  colinas  que  se  estienden  hacia 
Duaca,  y  luego  retroceden  hasta  cerca  de  Urachiche  en  las  sabanas 
de  Parra ,  dirigiéndose  después  á  los  cerros  de  INirgua ,  trazan  1^ 
linea  oriental  de  estos  terr.enos,  euyos  declives  de  sur  á  norte  van 
á  perderse  en  el  mar  de  las  Antillas.  Las  serranías  de  Nirgua,  Mon- 
talvan ,  Puerto-Cabello,  Ocumare  y  Caracas  presentan  unas  cuestas 
rápidas  y  cortas,  también' de  sur  á  norte ^  hasta  frente  á  lalBibrade. 
Calía ;  entonces  se*  ensanchan  á  causa  de  los  cerros  que  forman  los. 
valles  del  Guaire  y  del  Tui  y  que  determinan  la  hoya  de  Valencia. 
La  cumbre  de  la  cordillera  del  Pao  de  Sárate  y  de  Altagracia  limita 
^1  declive  de  los  terrenos  cuyas  aguas  van  á  la  mar  conducidas  por 
el  Tui.  £n  la  montafia  de  Tamanaco  se  ensanchan  aun  mas  las  tier- 
ras hasta  el  cerro  Tucusipano ,  situado  entnedio  de  la¿41anurasdel 
cantón  de  Chaguaramas,  y  de  allí  el  declive  se  une  por  unas«iesas 
á  una  peqtteña  sierra  que  está  en  medio  de  las  sabanas  y  da  orígep 
al  rio  Uñare.  Entonces  las  mesas  de  Pariagyan ,  Cachipo  y  los  bor- 
des de  la  de  Guanipa  figuran  el  resto  de  este  declivio,  ^ue  se  une  al 
cerro  de  Jurumiquiri  y  se  pierde  casi  frente  á  Cumaná  para  fenecer 
Qn  las  penínsulas  de  Araya  y  Paria.  £1  total,  de  este  territorio  que 
desagua  directamente  al  mar,  tiene  una  superficie  d^  2,9071.  c.^ 
pudiendo  admitirle  ,  según  las  diferentes  localidades,  que  por  tér- 
mino medio  eaen  en  él  72  pulgadas  de  agua  todos  los  anos.  Sirven 
de  desagüe  á  estas  tierras  250  rios  y  mas  de  400  riachuelos,  sien- 
do los  mas  importantes  el  Tocuyo,  que  recibe  el  tributo  de  550  L 
c;  el  Unjire  que  recoge  las  aguas  de  400  y  el  Tui;  por  dofide  descar- 
gan las  de  250.  ,.      *    ,      ' 


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TABLA  BE  LSS^RIOS  9E  VBHUWUJL     ^ 

-     im  t',  as  t  Mv  ékoa. . 

Las  Isogras  y  sistema  de  semina  á  quá  pertenecen,  sos  legaai  de  em^  de 
navegación  y  las  coadradas  de  los  terrenos  qoe  vierten  en  ^Hos  sus4iguas. 


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.Apure.y.. 
hGuavtare. 
-!<>.  fineta..*.... 
<Gan>n{.... 
['Guyuni.... 
^>6uainia . . 


tit»f»  • 


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/Caara.  ..?.... 
'Ar^oa«*  ••«*•• 

^Guarieo 

Inírida 

Paragptf.  ^^w^, 

Yeotuarj 

asarani.»... 

Boéooó 

Portuguesa. .. 

T0CU70 

Yiditiita .' 

Gapanaparo.». 

Gaparro 

Stapa 

Guanare 

Guanipa 

Vuruarj..^..; 
Caiiqül'are*... 

Tigre: 

OrUucQ...«».. 
Ujctlaoto.  .«.*.. 
S.Bomingou.. 
Zulla 


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Orinoco. 

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Rio-^egiEi. 

Orüiocn. 

Id. 

M. 

M. 

írf. 
Cuyoni. 
Ihlnoco. 

U. 

.Al4maf. 

•Oriiioeo» 

Bio-Hegm. 

Orlttoeow 

P«ria. 

Guyunl. 
Rio-ISegro. 
'Orinoco. 

fd. 

Jtf. 

Id. 
Maracaibo. 


^STpIAB 
d*  ««minias 

partenaceQ. 


ti 


Farlaia. 

Lérida. 

N.-Granada' 

Tarima. 
Id. 


I K.  «Granadal 


4 

i 


"l^arlma. 

19  .^ranada. 

Be  la  >nosfta, 

TY.-'^rBDada. 

•JPartaia. 

1». 
Vé«lda. 

Xtf. 

H^. -Granada» 

lü. 

^aiétida. 

IParlma. 

4IIé»ida. 

J>ela»coaia. 

Parima. 

Id. 

De  lateosta. 

m. 

MéÜda. 

m. 

N.-Granada. 


t 


» 


•  t^ 


CONTINíJÁGIOBr  Bl  U  TABLA   ^ 

DE  W^W)S  ^  VENEZUELA  DE  1%  »>,  T  3m-  ÓEMN. 

Xas  hoyas  y  sistema  dte  serraitía  á  que  pertenecen,  sus  leguas  de  cu^o^de 
navegación  y  las  cuad««das  de  los  t'érrenoi  que  TÍerten  en  ellos  sus  aguas. 


éaosN 

á  ^ae 
perla* 
oeeen. 


NOMffiEUB 

d«U)» 
-]ROS* 


Sigiapo. 

iPiínipKi*  *•    • 
Afiot..^...  ... 

2o,     /  Suripá. 

4€p^de»i 

Gtt  ;tumbo«.  .A 

sMitare*  «^^  •  <  •  •  • 
CuchíTero....; 


IMHIAi  BB 


Cw, 


I 


I 


f*      4  «L*  •   • 


Pagu^ 

^ttfuni....... 

Ganagná 

Tuy. 

MoUtan...,^... 

Paciüoniv" 

Masparro 

Morichal-largo 

€nive 

S.uapure. ..... 

YQavfti>o«....« 

Agu^xfi.  ...... 

Soeuy 

«lealante 

li^itaca 

Havaca.  ...■•.. 


m 

Si 
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60 
60 
60 
40 

66 

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60 

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29 
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tBGDAS 

cuadra* 

KrrepQji 

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760 
700 
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135 
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406 
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4  qa«  ' 

pcv  loncccp  • 


"Or^iiooo.  < 

id. 

ja. 
Id. 
U. 
Haracalbo'. 
OrinoM. 
H.       ' 

Orinoco. 

Cuyuni* 

Orinoco. 

Id. 

Id. 

Al  mar. 

Paria. 

Maraeaibo. 

Rio-Negro. 

Orinoco. 

Id. 

AI  mar. 

Orinoco. 

id. 

.  MaracailK). 

Id. 

Orinoco. 

Id. 


d«  MiráoSa» 

&  qtt« 
pertenecen . 


^afhnt. 

íRL 

/d. 
0e  la  costa. 
Mérida.    1 


N.-Granadar 

id. 

Psrfma.  ; 

Herida. 

anafSBsa. 
Herida. 

Id. 

Delacosta.i 

46* 

Id. 

Parim^. 

Herida. 

De  la  cosía.  I 

#elteosla.j 

Parioui. 

id. 

Herida.  •] 

Id. 

'  Parima. 

Id»" 


Los  rios  de  4^  orden  se  encontrarin  detalladosisn  las  pcoaiiiüas. 


I 


40  — 


•* 


'  LAGOS   Y  LAGUNAS. 

Dos  hermosol^  lagos  tiene  Venezuela:  el'de  MaracaibO;  notable 
porsd  grande  estension,  su  pcorimdidad ,  la  multitud  de  rios  que 
recibe  de  todls  partes  y  finalmente  por  las  inmensas  selvas  que  le 

*  fe 

ro.1eau.  Las  cuales  brindan  al  bombre  cultivador  con  todas.Ias  ven- 
Xajtks  de  una  tierra  feraz  y  virgen,  á  cuyos  bordes  pueden  llegar  los 
buques  á  cargar  desús  variadas  pfoduccioncs.  Es  también  notable  el 
de  Yalengia,  por  su  elevación  sobre  el  nivel  del  mar,  por  su  feliz 
posición,  sus  pintorescas  perspectivas  y  sus  ricas  y  frondosas  tierras, 
alimentadas  por  la  constante  evaporación  de  sus  a^uas. 

Las  lagunas  son  innumerable,  sobre  todo,  en  los  llaijps  ,^pero 
la  mayor  parte  suelen  secarse  al  fiit.del  verano  ó  es|^clpn  seca.  Sim 
jembargo ,  las  hai  que  conservan  constantemente  sus  ttgqas.  Las  mas 
importantes  por  su  tamaño  son  en  número  de  204 ,  dé  las  cuales 
^e  bablará  al  tratar  separadamente  de  las  provincias. 


PROVINCIAS. 


KUMBBO 

DS  I,A.GUBA<: 


Margarita 

Giimaná..'*.*. 

Barcelofta 

Caracas 

Barquifimeto.. 

^oracaibo 

Herida 

Apure 

Guayana...... 


mr'mm 


Total... 


I 


tm 


4 
90 

*7 


M7 


i5& 

5 
5S 
43 


904 


■BBHB 


KOMBRt: 

DB  LÁ  PBINCIFÁL  LA«fW4  DE  CADA  PROVINCIA. 


Arestín  ga ,  que  divide  la  isla  en  dos  partes. 

Guacasonica ,  que  comunica  con  e|  rio  Morichal* 
largo  7  es  navegable  por  goletas. 

Kamo ,  en  la  que  descargan  varios  rioa  y  ella  de<- 
sagua  en  el  Orinoco  /  acarreando  muUitad  de 
*  arei^ns.  .... 

Tatarigua,  hermosa  y  riquísima  «n  pezes,  comu* 
nica  algutias  yezed  con  la  mar. 

Ciénaga  de  Cabra,  cof  as  exhalaciones  son  mal  m- 
ñas. 

* 

Laguiteta-grande,  hermosa ,  en  la  que  entran  «ba- 
lan^lfas  y  hacen  peaca  considerable. 

Ijlguoilla  i  célebre  por  el  famoso  urao. 

Cabullarito,  no  mui  profunda,  pero  rica  en  pezes. 

Basiba,  en  donde  antes  había  una  misión  y  hoi 
/sirve  para  la  pesca  de  tortuga.        ^ 


an 


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^  -  CLIUAS. 

La  tomperatara  bo  puede  aquí  determioarse  con  precisión  ni  por 
UQatitn)}  ni  por  k&  altura  $(A)rc  el  nivel  del  mar;  porque  sufre  coqs 
trasles  partiealáreí  en  muchas  partes  que  están  en  1a  misma  latitud 
y^ltnra.  Bsta  diferencia  de  digaas-se  encuentra  tanto  ealas  graneles 
cadenas  de  la. serranía  como  ép  ]{8  ^spadosas  llanoras  que  están á 
.sus  pies  :  lo  mtnitfo  sucede  en  Ja^  inmensas  selvas  de  los  terrenos 
bijos  f  en  ías  dilatadas  costas  que  están  bañadas  poc  el  mar.  Las 
eaasas  de  este  fenómeno  están  «n  la^  mismas  ser ranias^  que  {knt  su 
4ÍBposicion  seeqpuentran  espuestas  á  ser  recalentadas  pochos  rayo$ 
•#oIaare&  del  mediodía,  é  á  recibir  las  fuertes  brisas  que  viraendela 
«Bar  fresaas  y  aftrgadas  de  vap¿*es  acuosos ,  -ó  bien  en  las  mismas 
.brisas  que  llegan  secas  y  calientes  por  agrandes  llanos  que  ^an 
«travesado.  En  las  llanuras  está  también  la  causa  de  las  diferen- 
cias del  clima ,  pues  algunas  reciben  directamente  las  brisas  del 
Océano  que  refrescan  su  atinósfera,  mientras  que  otras  &o  ttaceu  sino 
«qnilibmrse  y  apenas  modificar  el  calor,  al  paso  que  lasmas  lejanas 
redbeo  los  vientos  que  .(^an  pasado  ya  sobre  terrenos  arenosos*  y 
daprovtetos  de  yerbas  y  adquieren  un  calor  tal,  (^  cada  ráfaga 
.parece  salir  de  un  horno.  También  encías  seltas  pueden  boscaase  las 

•  cansas  de  las  mutactones  de  la  teróperatura  :  unas ,  recibiendo  los 
viqoílos  regulares  modlGean  con  ellos  su-cafor,  otras,  abrigadas  por 
las  altas  montañas  no  esperimentan  glande  alteración  de  los  movi- 
laientosatíbosféricos.  Hállaose  algunas  situadas  en  parajes  de  eterna 
calma,  y  regadas  por  ríos  caudalosos  que  mantáenen  la  frescura  del 
4ire ,  mientras  que  otras  en  terrenos  ingratos  no  reciben  sino  aguas 
llovedizas  que  absorben  los  vientos  cálidos  y  secos  del  verano. 

Por.  último,  las  causas  de  esta. diferencia  de  climas  s6  hallarán 
también  en  las  costas.  Aunque  situadas  estas  casi  en^l  mismo  pa- 
ralelo y  al  nivel  del  mur,  están  sujetas  á  influjos  locales  que  mo- 

'  dificaa  sensiblemente  d  temple  del  site.  Azotadas  unas  vezes  por 
las  brisas  del  mar ,  otras  abrigadas  de  1«»  rbosques  ó.  de  las  altas 
montafias!|  no  pocas  sujetas  á  la  reverberación  ardiente  de  las  fal- 

.  das^peñascosas  de  la  cordillera  litoral ,  presentan  tantas  dlbirencias  * 
cuantas  son  sos  posiciones.  Los  terrenos  Acos  ó  pantanosos,  áridos 

•  ó  cubiertos  de  TegM9^n,^ue  están  á  barlovento  de  cada  costa ;  la 
«Myor  ó  menor  oblicuidad  con  que  son  estas  batidas  por  las  brísúB 
húmedas  y  frescas  de  la  mar,  y  la  presencia  ó  ausencia  de  los  tar* 


f  rales ,  son^causas  todas  qne  iaflajen  poderosamente  en  su  temn^ra- 
tnra  y  salubridad.  ^ 

JVmiíacieKdo  «l)fltecefeMi  M  M^  d^  «sUs  etea^s  locales , 

jpepfliéeraneqx»  el  türttoríe  de  ¥«MnKla  dIvMo  en  tMs  £«B^Íte 

len^raÉaras ,  se^fHi  mm  dUéreátoe  tüiiras  8il>mél  irfyél  4e4  ««r. 

>¿6ta6  tM6  .«HU»  «e  fnedea  clasü^,  rtgaiendo  la  étíkoumaéaa 

Uarüda  im<A  fm,  «i  ttmns  !($«««  tenfiada^y  eilíéas. 

Eo  las  latüades  ^  t«  á  #«  ^  eaeMolna  enVeiüaaelalasjaltaii.» 
«as  aeradas,  &  ]ím\UMeti»tá(tl9ié  mmw  ea^^iesa  áias  4,9^  m- 
ims  sobce  ^1  urTcá  dÉl  muí,  ^xmq^e  «b  tieiapos  «iterasos  méim. 
4errefá«e  basia  lai  Sy4M  van»,  desde  ya  sm  feraiaM»let.  im 
poHitaa  Mas  ttorada84ela«rdpera  4e  Mecida,  esfcwa  á  S.47t  ^w- 
sas;  pero  desde  k»  f  «94$  cesa  l«da  ^e^Mwñ  ^^l^.hm ünvageaf 
la^aigas  se «freeen «Igunus^efesá la  vista,  esooniídas kiaje  el4iielo 
-é  rocMea  par  la  mme,  A  ia  altumi^lcba  se  «ftanüeae  el^teména- 
tfo«BKt%cihdo  0flÉBe  2*  f  9*  oabee  )0. 

Na  ea'ittQ^o  la  áateoi&dad 4d  Imo  onanta  ^  influjo  de«»irieslo 
iiawio  y  ^latgBBfdidoy^  jbp  «ce  nciaadwa  ^  la^qne  dcüMie  «mih 
^qmttas  aitncas  >d  desMoaia  de  iosigcaii^es  vegetadas,  iiadéaMas 
:id  josissia  tíeaipp  iaitaMtabtoa  pwa  el  iiaaibre.  fiata  «ona-fría  a^^ea- 
itíeaAe^dMde  2.¡m  ítiate  ZJiSd  wrasaobDe  el  mnel  del  fiiar,*y  « 
tawpeealMi  se  .eneoeulra  eatve  -1)9^  y  t^M  4eMii¿melro  ssa^f  ■ 

14»  aiemts  ten^tladas  efofiena  desdeia  aliara  ie  S.MS,  varaa^ 
dbijtti iiaal%  7e«.  n  €$\&r  4)adia  eslae  48»  y  «<>  $0.  En  eala  4l#a 
611.^116  la  lempeinliifa  es  4podepada,  se  puede  <escogcr  á  'VokHMadi 
4l<eÑoia  aniego  «I  gvato,  á  ila  jcaetttmkie  é  á  la<sakid  de  ^da  te- 
di  vidno,  así  üofflofil  deBarrolle  de  eaai  tedas  las  i^airtas  4Ílile8«! 
faombve  ,*  eiHpe  las  eijoám  iml  mvxiáu  qw  «no  pueden  pro^rar 
iiiera  de^slis  Üniátes. 

Xas  üerfas  eaKdas  están  desde  7#d  varü  Meta  el  nivel  del^fliar, 
cy  en  «lias  marca  ^al  lermóoMre  de  ^9^M  &  27''  S9..  No«s  aseeálao 
este  calor,  peso  su  «eeMn  onüapsief  conalante,  los  mnafliaa  q9e 
aelevQQtande  los  lierreiies panlaaosas  ,  la.putréfoaeion'iáe  las 8«a> 
taneite  vegetales  é  k^lnmadiarian  de  las  grandes  selvas  y  noáat» 
inisiera  cargada  4e  hiidiedad ,  desarrollan  en  «n  esla  aaaa  fiebrcs 
«os  ó  menos  periiielasas ;  espeeMneaie  «n  aipi^lds  •piHitaa«eii  qaie 
Iftinataraleni  ha  desplagado  toAo  éí  hí^o  ée  ia  iPe§i¡adoa  aoaal^ 


r "  » 

?<^finnte  füteMee  á  ia  Tt^gm  dd  TianÉ»  foé  foitíf^MaBmm 
prisüíto ,  ffe¿9M  w«áo  cisQl»  de  ki^éDWi  del  tal  y  dd  aM?i» 
«esto  de  fai  tie^'  «e  dWfe  de  este  á  «Ate^ttñwMB^re  «íte 
tñeiit»  «B  «oa  lOsa  cea'fie^J^  |n  maánm  JaJüdci,  Uéauee 
«Miil»tcpi«lewíofei»0nff;,  |wrq<te  ee  eicpciito  «i  teefwmdeB  bmik 
ves  :  el  wtmlae  de  fkfttos.^UMHite  te  de  pér  «er  «ottiftale  4»- 
IM  ie^lrdfiei^  y  w  lM<MlM<de  V«DeMRd^4BS4»AMié»  «wt«l  de 
brisas.  Este  es  e]  viento  que  áeiat  c»  «1  fAÍs,  flnrlimowdn  mk  prnt^ 
4  neiie,  «s  déüc,  del  ivoideite;  difiíklo'aw  fcwrtn  de^  qiietfe 
ásete  y  «sffripBSláBdMe  «n  «i  -afto  firiodo»lMMi  asfiOidoB  qm 
WD  fueiacidos  per  la  mafyor  é^Deaer^fieUneia  del  sd.  lEs  ^«^^t 
€rta  to  censa  de  WMtos  «ik»%t0tMNin9s  fitie  «sÁrteB  «■  ia  «bi^mi 
délostFáfíeoB,  laUínfioM,  4S0BeQiite  ooiielJMinÉred«l^ 
ia  «wa  omél  de  «ersvie.  ^erifiease  la  ytjama  «inndo.  d  «»l  eflUí 
«B<cfl/7Y^;li^4stfd9i0ei!^y«stÓBokte  motos  .fBjai^lefpasMi  «»- 
lieimr  y«e^,dfeBda<€»tpe8eftjie4)ráiimiiio.^fll4ileiBp»ieB  90 
«e  mftiáBiefAmi  liief^  tedas  aeeminiuidas  ée  toieta.  flai  día^ 
«onqve  oomiicllies,  ^en  foe  oo^aiíe  «»a  «gota  de  ^^tñi,  «mdoieed»- 
vanaraeste  «uistuEte  y  -cepiesa  la  limria.  Por  -«i  «ÜimAí  apnnliQA- 
#0,  fiiede  estalAeceise^pM  6Bf fna  «Mpaeada  M  por  >áiñwo »• 
di»  lees  hcnaik^a  tto^a  «ada4ia,  >oayemiD*eiBla  oadtnaiWHawBite  fsr 
iWttMMy«DiiHidMSfarieapffJaii&dK.iA«Btam  b^ 

ffwio  es  0Q«id»^elialk'el«iri:báina4d1^t$f^  |Í0áaaprteof»m;^Bn^ 
tAnees  «e  ^eiftalftaa  4es'mntes  dei^  pvtet^  N'.IL  yáaBÉfaáea« 
mtfev^Éifmm  mA  ifjseseesdtí  tL  7.  fi^^  (K,  ¡aieiideiMS  IfscnenÉv 
«B  smeiDlNNB  y  dioieBailaie  cpie^  febmÁ  y  mana.  Ea  dM«s  jb^ 
ees  ^nélen  4»er  4aiii]»ien  tflgims  iteiMaB ,  a»»  itan  Inaalea  tecfino  lis 
^1  in¥iei!iM]> ,  ewJOCTJa»  eoB  elaiaHShge^eaioffag,  y  no  se  fialifr%a 
HNroho  de  las^oeélas  adetftco.  Borilo^di^iie  seontíie  em  cofiecimienlD 
f«e  el  ^ieir^'l^  Venenela  *es  en  l«s  ««eiesde  ^1  á  aoliiliK^ 
-m  les  GaiOes  hai  mas  ealer  per  ja.aproíinid«0i«i dd  jeLial  ibemlfie- 
«ie  tiop^l  y  la  eesaemí  de  las  fapiísas,  reeniplaaadas  per  tlasfoolnaB^ 
^r  tos  molos  ic&Mos  del  «md^odk.  En  los  «tas  «ais^onas,  ^ae 
wa^  deiPQSiiiie,  %m  tnáaesioalw,  ipw  estaar  «nléBoes  el  so1«mÉ 
lMmrisferi^a«Miii1,  y  seglar  los  iáeadhfeiiBE«BBft3|iae:rieaBP 
trion.  Estos  vientos  ó  brisas  soplan  entre  las  nueve  y  diez  de  la 


?* 


—  A  -^ 

Sanaj^-Aamentanao  de  faena  á  pro^rél^n  que  el  sol  sé  lerapta  sobre 
el  horizonte,  y  disminuyendo  en  razón  inversa ,  de  manera)  que 
cuandd  &le  astro  está  en  el  meridiano ,  entonces  está  el  Vientb  (^r- 
9^  del  n^xiÉciuñrde  su  fuerza ,  cesando  casi  del  todo  cuando  liega 
ai  ocaso.  A  corta  distanciii  de  las  tierras  catma  de  nocife  la  brisa  de 
Atar  y  es  pe^aiiáacaia  pbr  el  viento  terrál^  que  proviene  del  enfria-» 
miento  desigual  de  las  agys  y  á^  )^  tierras.  Esta  alternativa  se 
veriOca  todos  loB.dias ,  á  escepcion  de  aquellos  en  que  soplan  Iqs 
•inent#s  fuertes  del  Borte  ó  del  fur.  1^  primeros  se  esperlmentan 
desdf  octubre  haSla  n^ano  y  los  segundos  en  julio,  agosto  y  setieót'- 
*  kre,  que  soo  k»  meses  mat  lluviosos. 

9  El  iet^ü,  que  corre,  del  interlbr.de  las  tierras  há¿la  el  mar,  se  es- 
.tablece  4ntes  de  media  noc^e  y~ sigue  kasta  la  salida  del  sol ,  y  aun 
algo  mas  tarde,  mediando' eWe  diíterral  y  la  brisa  un  esfpacio  de 
algimas  horas  en  qué  se  esperiment^  calma  completa.  Solo  las  cos- 
tas.de  Guayana  son  una  escepcion  de  esta  regla :  nunca  hai  en  ellas 
terrales  ni  otros  viesios  que  los  que  generaliaente  se  elperimentau 
en  los  trópicos,  opn  esti^  mutaciones  :  en  enero,  febusco  y  mano 
los  viéitas  soplan  d^l  N.  al  £.  N.  E.  y  él  tiepipo  e$tiá<;laro.  En  abril, 
jnayo  y  junio  son  del  E.  al  S.  E^  En  julio,  agosto  y  seti^nbre  no 
hai  #as  que  calmas  y  turbonadasi^^e  llevan  los  vientos  del  S.  al  S, 
•£.  JPor  úHimo  ,*  en  octubre ,  noviembre  y  c^iembre  jiai  lluvias  no 
•mni  (uertes  y  el  eiélo  está  por  lo  común  nublado.  En  la  estaciogí 
seea^  que  es  desde  enero  basta  marzo,  los  calores  sojí  raui  fuertes  : 
•%n  la  húmeda  son  continuos  y  mui  «ecios  los  agji^aceros  y  las  iKh 
nadag.  En  la  provincia  de  Giiayana  llueve  conslderabl^ínente,  y  loa 
repentinos  y  vlolento|.chapirrones  de  la  zona  tórrida  dan  mas  aguas 
iea  un  día  que  las  lluviaade  Europa  curséis.  En  las  demás  parte&de 
•j^enezuela  sucede  lo  líiKmo;  sin^emba^pgo  de  que  hai  puntos  4m 
qtte  la^ilttvia  es  menos  abundante  que  en  lo^  selvas  de  la  Guayana^ 

¡Durante  la  estación  lluviosa' hai  un  intérvtlo  que  anteeede  ó  su* 
cede  al  dia  de  S.-Jüan,  en  el  eual  cesan  los  agualBkros.  Esta  inter- 
rupción del  in^^ernoy^que  dura  j^egularmeñte  uifiríes ,  se  denomi- 
na en  el  pai&  el  veranito  de  S,  Juan,  En  la  elevada  cordillera' son 
<casi  constantes  las  lloviznas,  sobre  todo,  después  de  la  salida  del 
.sol..  En  los  páramo»  cae  freeuentemente  granizo  y  nieve  en  lugar  d^ 
^gua,  y  casi  siempre  está  cargada  la  atmósfera4e  una  niebla  espesa 
-que  ee  disipa  ordinariamenletlesde  media  noche  basta  la  salida  del 
fol.  ,  ' 


—  45  — 


»  En  las  descripcidnejij^  cada  provineia.  se  haUari  de  sos  ^^ren* 
^es  climas  ^6  las  épocas  de  las  Iludías  y  de  sns  efectíDS.  \ 


ASPECTO  FÍSICO   DEL   PAÍS. 


\  Como  entramos  en  el  mar  llamado  de  Colon  en  los  primaros 
tiempios  de  I%con9nista,'aéBtinios  penosamente  alBirtado  el  ánimo, 
al  pensaren  la  injusticia  con  que  la  superofaesia  de  u&.aTénloreira 
t  el  indolente  desenldo  de1o«na<9<}naIes  privaron  al  Nuevo-Mundo 
del  noitabre  de  su  ilustré  descubridor.  Nf  aun  este  p^Heño  mr 
pudo  conservar  por  mucha  tiempo  aquel  débil  leslimoniodo  Ingra- 
titud de  los  contemporáneos  de  €oIon,  pues  lu^go  ae  le  imposo^-y^ 
hoi  se  le  conserva  el  nombrede  mar  de  las  AhíUIos.  Hallase  Me 
encerrado  como  un  Mediterráneo,  entre  las  costas  del  eontinente 
por  el  O.  y  el  $.,  y  considerable  cantidad  de 'islas  coHodias  con  la 
denominacioade  grandes  y  peque&as  AnfiUas^  qiie^n  grupos  alinea-^ 
dos  forman  una  barrera  ti  oriente  y  setentríon.  Habitaban  estas 
antes  de  la  conquisU  u»  crecido  aániero  dé  tribus  salv^^  sin 
ninguna  industria,  sin  culto  y  casi  sin  faogaf ;  peroboí  se  ven  lle^ 
ñas  de  indiíviduos  de  diferentes  naciones  europeas  que. han* llevada 
allí  el  cristianismo^  las  ciencias,  la  agricuHvra  y  oteas  artes  :  que 
han  convertido  los  desiertos  en  hermosas  ciudades,  en  campSs  li^jj^ 
labrados,  y  que  pueblan  con  sus  bajeles  aquellos  mares  que  eli  otm 
tiempo  soló  surcaban  las  piraguas  de  los  caribesantro^fagoat  Goaii^ 
do  la  Espa&a  velaba  codiciosa  sobre  las  colonias  para  mantenertatf 
incom||p.icada8  con  el  resto  de  la  Europa ;  cuando  á  ningún  estnm* 
jero  lé  era  permitido  penetrar  ni  aun  llegar  á  aquellas  tieri^s^)!^  * 
que  apenas  se  conocía  la  existencia  por  el  oro  de  sus.mteas ;  Vene- 
zuela debió  mucho  al  vecindario  de  aquellos  estabieeiiniento»^dft 
la^islás,  recibiendo  en  cierta  manera,  de  contrabando,  k'iniuiA* 
dé  Y  eMmpulso  de  una  civilización  mas  adelantada.  Convertidas 
aquellas  4slas  en  iaetorias  de  los  pueblos  mas  induatrioses  y.maa. 
cultos  del  antiguo  continente,  puede  decirse  que  la  Eutopa  se  ha-< 
bia  acercado  á  pQoasí  leguas  dé«la  costa  fínkie,  y  le  trasmiiía  ücH- 
mente  ton  sus  preciosos  artefactos  el  producto  aw  mas  pceciósp^e^ 
sus  luzes  y  de  su  filosofal.      ^         . 

Cuando  jse  obserya  c«>n  alguna  atención  el  flH)do  eomci  están  colO'v 
cadi^  los  dos  grupos  de  cerros  que  componen  la  isla  de  MaijgaiÜa^ 
la  fttuacioa  9e  1^  de  Qqííb»  y  Cabagu«  ^:^QMc|fe.del:  «^  que.se- 


pM»  «fMift  4»  1»  0Mii?>  y  A  pM»  tand»  4e  «My  «eonii  Mt«n(- 

lio  parte  de  la  tierra  firme,  y  que  fué  desprendido  por  efecto  de  al-^ 
gnn  fuerte  sacadiooieDto  (pM  preeipít¿  una  parte  al  fondo  de  las 
aguas.  Los  grupos  de  los  Testigos,  la  isla  Sola,  los  islotes  de  los 
fattes  j  la  isk'dc  k  Tctiv^a,  parece»  tmááen  mtos  d«  tíerri^ 
qm  íwfícm  müHmgiílif  ^w  itorf  N.  te  grupos  de  tes  í^^iI^és^íUs, 
k4)«ekiila^  ks  Seques  y  la  isla  de  Aves  se  de|as  iper  coem  pustas 
^  mta  nteta  covéiHeoa,  euy|.asli^  peakíaii  revean  en  aquef 
«pick  o^qMNlo  koi  pof  -tos  amnes.  f«l  fes  ft^ma  estas^  «ks  di^ 

thrt^C.i-.d.»«ltdl«q«„«i«  4  I»  «  «-l«^,  I, 

mm  em  k  a^hEmkr^ée  Caro  por  k  peak  <k  Tteaen,  la  oti»  esa  k 
|M<B9iik  de  k  Ckajfara: 

&  eski  íshs,  q«e  forman  como  una  bmrera  m  kmie  de  la'eoe- 
Isá  Jde  VeMSttek,  bal  inui  ricas  saliiias,  críase  en  ellas  ía  yerba  €9^ 
ckihíj  tan  útü  para  k  fabtiicaeioD  de  toa  erístaleSy  abuadan  en  mo» 
ehas  las  torlu^u,  y  ev  la  de  Aves  se,  reoaen  ininkos  peores  mari<^ 
aoa  á  paner  soa  faueyoa  qwe  pny?een  de  mantenimiettlo  á  las  gentes 
pdk*es  de  laa  Uaa.  La  Ifeuigaríta,  Umf  conocida  y  codidada  e»  otro 
Ikmpo  pórl»  bermasas  pedias  qoe  llevaban  sm  nmnbre,  eis  bol  la 
kk  mas  impártante  qne  posee  k  repóMica.  Su  vent^joáa  posicioa 
Imf^qfie  «i  eik  se  eslafaieelesen  los  espaieies  c^de  muí  al  prín* 
aípio  ;*p6ro  st  eatónem  ks  slrnó  de  punto  de  apoyo  para  descubrir 
Y'MHlekr  ^««BlkeBle,  mas^krde  la  covnrtíefun  sus  valerosos  ba* 
m^mntLWámmM cmm  el  c«at  estralló  k Espalk d  mas 
naDttfnsoy  iáaa  aguerrido  de  cuantos  efúrestos  armé  para  fprímir 
klüknrtad  americana.  No  existe  ya  k  pesca  de  )>erks  qm  k  dio 
iank  cekbfüad^  annque  suelen  todavk  obtenerse  algunas  mui 
iMrpiosaa.  En  fes  primeros  tkmpos  de  k  eotiqukta  eran  tan  abuñ- 
daittts  en  eMkk  y  en  la  de  Cubagua ,  que  atmdos  á  k  iHtiqía 
iBicBos  isomenianles  y-aventureros^  fundaron  una  dudad  con' el 
■OBÜveéa  Nl^va^édis.  Mas  larde  quedó  esta  abandonada,  cuan-* 
da  laaperks  en^aaron  á  escas^s^,  y  abara  ^re  sus<eoslás  y  ld& 
de  i^aya  tíenmi  ks  habttanks  de  Ikrgarita  y  Gmpiá  una  riqueaa 
mns-eipetít^a  é  inagotable  en  k  abMdante  pesca  de  la  Hsa.  En  dk 
consiste  el  príndpal  mantenimiento  de  sui  v^nddrks,  quedáj^ 
4de8  un  gran  ufbiñnfe  que  estra^sa  pkn  Tos  puisrtos  de  k  coste  Ár- 
melo pira  ks  Aslttks.' 

Jiapro|i¡nánd^atoa  mm^é  k  oasla  iManEÉMmos  eon  alguna  aim- 


—  #í  — 

doa  los  coUot  d«  Facia  y  da  Gaiiaco,^  cree  t^i^ODOcer  eas^baxu 
«i  efecto  de  na  saciidiimes(a,  c|ii6  roaipieiido  las.  tierras  dio  paso  é 
ma  irropaon  Tiolenta  .del  Océano*  áud  está  eon&rioada  esta  sos- 
l^cba  por  la  tradicioo ,,  paes  selueiita  ^ue  en  el  siglo  xv^  cuando 
Crístóhai  Colon  visitó  á  Paria  en  su  tercer  viaje,  hablábanlos  indios 
4e  aquella  ^an  catástrofe  como  de  un  acoolecimiento  muí  reciente* 

Las  islas  que  arednan  las  costas  altas  y  peüasoosaa  de  fonnacio- 
oes  iguales  a  las  cadenas  interrampidas^  y  que  parecen  residuos 
del  terreno  desaparecido;  las  diferentes  foentei  termales  que  b^o* 
tan  á  la  orilla  y  dentro  del  mismo  golfo,  elevando  la  temperatura* 
del  mar  por  espacio  de  m«iia  legua  coadrada ;  el  petroleum  que 
cubre  la  superficie  de  aquel  senp,  estendiéndose  a  grandes  distan* 
<3aSy  QLs  mncbas  aguas  termales  bidrosuICáricas ;  las  mina^.  de  pez 
Mastica,  á  vezes  inundadas ;  los  peñascos  que  en  cordillera  asoman 
sobre  las  aguas  desde  la  costa  firme  .basta  la  punta  mas  merídionqi 
de  la  isla  de  Trinidad,  las  Bocas  de  los  Dragos  y  la  dirección  y  cons- 
trucción de  la  serranía  de  Paría  y  Triflldad ,  todo  hace  creer^  que 
la  tradición  indígena  era  cierta  y  no  mui  remoto  el  sqpeso*. 

Mirando  bácia  el  cabo  Codera,  se  recáxnoce  la  cadepa  de  monta* 
Sas  que  allí  termina  y  que  antiguamente  debió  estar  unida  á  la  p^- 
lúnsula  ^  Araya,  aunque  acjuel  grande  espacio  tragado  por  las  aguaar 
»o  presenta  uiogunos  restos  de  su  antigua  existencia.  No  menos 
dignii  de  adidracion  es  Ja  forma  que  ofrece  la  península  de  Para- 
guana,  apenas  unida  por  un  cordón  de  médanos  á  la  costa.  Las 
a§na»  termales  que  conserva  «n  el  cernió  de  Santa  Ana  y  su  mis- 
ma figvra  ^  dan  á  conocer  que  es  un  resto  preservado  en  las  revo- 
liidones  que  lia  sufrido  esta  parte  de  la  tierra. 

£1  golfo  de  Maracaibo,  que  eo  lo  antiguo  llamaron  los  conquista^ 
dores  de  Yenesuela^  á  causa  de  la  semejanza  que  creyeron  encon- 
trar entre  Yenecia  y  las  habitaciones  construidas  por  los  indios  en. 
medio  del  agua,  da  también  señales  patentes  de  haber  sido  origi- 
nado por  el  mismo  gran  trastorno,  que  bundiendo  una  estension 
considerable  de  terrenos ,  lo  poso  en  comunicación  con  las  a^nas 
4el  Océano.  La  |M>»cion  de  este  lago  al  estremo  occidental  de  Yenc- 
zoela  y  en  las  puertas,  por  decirlo  así,  de  la  Nueva- Granada ;  sus 
opstas  fértiles  y  abundantes ;  sus  ríos  caudalosos  y  ricos  de  precio-. 
SM maderas;  todo,  en  ün^  hace  que  Maracaibo  esté  llamado  á.ser 
U110  de  los  puntos  mas  florecientes  dd  comercio  nacional.  La  raza 
Ceros  y  guerrera  de  los  indios  Qoajiros  ocupa  la  periínsula^de  su 


—  4S  — 

nombre^  y  los  natumles  oomervan  'su  primitiva  indepeadencia,  A- 
bida  únicamente  á  sa  valor.  Al  estrema  oriental  de  las  costas  de  la 
república  se  encuentra  el  inmenso  delta  del  Orinoco,  habitado  de 
los  Guárannos,  raza  de  indios  dócil  y  apacible,  que  coúserva  tam* 
bien  su  independencia ;  pero  que  la  debe  solamente  al  suelo  cena- 
goso en  que  se  halla.  Quizás  estos  pantanos  y  terrenos  anegadizos 
en  que  los  naturales  se  ven  forzados  á  vivir  >obre  los  árboles,  seráa 
álgun  día  como  los  terreno^  cultivados  de  la  Holanda ,  el  emporio 
de  la  agricultura  y  del  comercio. 

*  Las  costas  de  Venezuela ,  tatito  por  la  seguridad  de  sus  puertos 
como  por  la  tranquilidad  del  mar  que  las  baña ,  y  por  las  escelen- 
tes  maderas  de  construcción  de  que  están  cubiertas,  orrecen^  los 
navegantes  muchas  mas  ventajas  que  las  de  los  Estados*Unidos; 
así  lo  asegura  el  célebre  viajero  Humboldt.  Es  diKcil  en  otra  paile 
del  mundo  encontrar  tantos  surgideros  en  un  espacio  de  costa  igual^ 
y  posiciones  mas  á  propósito  para  el  establecimiento  de  puntos  mi- 
litares. El  estenso  golfo  de  Cariaco  se  puede  considerar  como  un 
grande  y  abrigado  puerto,  capaz  de  contener  todas  las  escuadras 
de  Europa  reunidas ;  teniendo  en  su  $eno  la  laguna  Obispos,  que -es 
uno  de  los  mas  hermosos  puertos  de  la  América. 
^  £1  puerto  llaftiado  de  CAibellOy  para  significar  la  mansedumbre 
de  sus  aguas ,  es  digno  de  particular  mención ,  así  por  su  natliral 
abrigo,  como  por  la  facilidad  que  en  él  tienen  los  buques  de' ar- 
rimar á  la  tierra. 

Mochima  es  uU  puerto  desierto,  pefo  bello  y  grande,  con  fondo 
proporcionado,  costa  limpia ,  dársenas  naturales ;  teniendo  salida  7 
entrada  franca  con  la  brisa.  Se  le  considera  como  el  primer  puerto 
de  la  América  del  Sur,  y  aun  como  uno  de  los  mejores  del  mundo* 

4i0s  bosques  cercanos  á  la  mar  y  las  mismas  costas  abundan  en 
maderas  preciosas  y  de  construcción,  que  pudieran  dar  abasto  á 
muchos  astilleros. 

En  una  distancia  absoluta  de  260  leguas  de  costa,  hai  5^  puer- 
tos, 50  ensenadas  y  thuchos  fondeaderos  con  buenos  anclajes  en  to-' 
das  estaciones ,  siendo  esta  la  causa  de  que  en  el  día  sea  tan  difícil 
contener  el  comercio  ilícito.  Mas  esta  desventaja  que  se  hace  viva* 
mente  sentir  ahora  por  la  falta  de  poblaciones  en  la  costa ,  será  al- 
gún *dia  uno  de  los  elementos  mas  pódeipsos  de  ^  prosperidad  dé 
Venezuela.  Nada  es  el  daüo  que  actualmente  sufre  el  pais,  en  pfo- 
porcios  á  las  grandes  ventajas  que  Irecibirá  desi^aes.  No  sucede 


—  49  — 

ti^  como^'én  otros'puntos  de  la  Am¿ri^  qne  ídolo  tienen  nna  que 
otra  TÍa'para  su  comercio.  Venezuela  eu  esta  parte  está  fayorecida 
porlánatutaleza  :  todas  sus  costas  tienen  pueftos  y  entradas  fáci- 
•les/y  en  lo  interior,  canales  naturales  para  su  comunicación. 
-  Lasix»stas  provistas  de  ricas  salinas,  abudantes  también  en  pes- 
ca ^  tan  variada  cómo  delicada.  Allí  no  se  conocen  las  tempestades: 
-sus  mares  siempre  bonancibles,  apenas  indican  con  un  grueso  olea- 
je cuando  algún  furioso  huracán  ba  devastado  los  campos  y  su- 
mergido los  buques  y  hasta  las  poblaciones  de  las  Antillas.  En  va- 
rias partes,  cuando  ningún  viento  arruga  la  superficie  de  las  aguas, 
son  estas  de  una  trasparencia  tan  sorprendente  que  se  distinguen 
ias  rocas  y  las  arenas  á  una  profundidad  considerable.  Y  cuando 
désfues  que  ha  pasado  el  sol  por  el  meridiano,  llegan  á  acumular- 
■^e  densas  y  opacas  nubes  cargadas  de  electricidad,  este  aspecto  ame- 
nazador del  cielo,  solo  anuncia  al  piloto  acostumbrado  á  frecuentar 
estos  mares,  un  soplo  de  viento  que  apenas  le  obliga  á  amainar  el 
velamen.  Tierras  felizes,  llenas  áé  esperanzas,  donde  hizo  Dios  sua- 
Tes  y  apacibles  los  vientos  y  las  aguas,'  puro  y  sereno  el  cielo,  fe- 
cundo el  campo,  dulces  y  hospitalarias  las  costumbres. 
^  Rápidamenterecorridas  las  costas,  pasaremos  á  las  zonas  del  in- 
terior. 

ZONA  AGRICULTOR  A. 

Ningún  páis  de  América  tiene  tan  marcadas  sus  zonas  como  es- 
te. La  primeca  que  se  nos  presenta  es  la  de  las  tierras  cultivadas: 
la  segunda  la  de  los  pastos  y  la  tercera  la  de  los  bosques;  presentan- 
do, como  dice  Humboldt,  una  imagen  perfecta  de  los  tres  estados 
de  la  sodedad  :  la  Vida  del  salvaje  que  vive  en  las  selvas  del  Oií- 
noco,  la  del  pastar  que  habita  las  sabanas  y  la  de  los  pueblos 
ugríeéltores  que  residen  en  los  vaHes 'altos  y  al  pié  de  las  mon^ 
tonas  de  la  costa.  Empezaremos,  al  describir  esta  última,  con  el 
mismo  Humboldt  que  dice :  «  Cuando  un  viajero  que  acaba  de 
«  llegar  de  Europa  penara  por  la  primera  vez  en. los  bosques  del 
41  Sur- América ,  la  naturaleza  se  le  presóla  bajo  un  aspecto  ente-- 
«.  lamente  nuevo.  Los  objetos  que  le  rodean  le  traen  á  la  memo- 
€  na  aquellas  pinturas  trazumas  por  escritores  célebres  que  bab 
«  examinado  Jas  orillas  del  Misisipi  en  las  Floridas  y  otras  de  las 
«  rejones  templadas  del  Nuevo«Mundo;  pero  mui  pronto  percibe 


li  fiA69  6ÍD9  en  BM^io"  de  k  soaa  t^niday  ni  taio^efi^  eo  osa  de 
.«  te  islas  ^ceidefite^  sino  en  a»  fastísimcy'  eantkiíeata  deade  todo 
«  es  íigifflmtado :  las  nlai^aiift;  los  ríes  y  kt  misadek  f^etadoo. 
«  Si  la  bellesa  de  uaa  eseens^  puteresea  le  CGamm^^^  es  kay^ble 
«  deintr  las  varias  emockMies  que  o&a^iL  su  imapiadiC» ;  apésas 
«  puede  dísiuigiiir  kK  fue  mas  escita  sa  sorpresa,  ú  el  pceliiiido  »» 
.  ft  leacio  d»  aqueHas  soledades ,  la  belloxa  ifidividflal  f  d  ooatrasle 
»  de  las  f^nnas  ó  el  TÍgor  y  firescara  da  la  vida  Yoptai  qua  earaa- 
«  terina  el  clima  de  losr  trópieos.  Casi  se  puede  decir  qae  la  tierm 
«  agobiada  ha|o  el  peso  do  la»  plaatas,  bo  1«8  permite  safidenle  ea- 
•  pació  para  desen? olyerse.  Los  troneos  de  ks  árboles  estóaealer»- 
ft  méate  ocultos  bajo  vmá  espesa  alfombra  de  verdura;  y  si  etof^ 
i  ehidoe^  el  pipers  y  el  ptübm^  faesoü  dodadosfluneate  traspla»» 
c  tados/bastadaapara  cubrir  una  vamaMa  eirtensioad#tiei?ra.  Por 
a  esta  reu&ioa  singukr  taato  los  boaques  eoBio  loa  eo^tados,  ya  de 
«h  las  rotas  ya  ée  las  moats^s ,  eariqueceB  los  donaiaios  de  la'  na- 
tt  turaleza  oi^ánica.  Estas  ¿lisaMia  lianm  qae  serpesteaa^  por  k 
«  tierra ,  suban  hasta*  la  cima  de  lo»  ác boIeS|  y  pasando  del  uno  al 

0  otro  ascieadea  á  la  altura,  de  aias  de  cien^pies.. »  Rápido,  veiida- 
dero  y  hermoso  cuadro  escrito  por  mano  maestra;  mas  sia  en^ 
bargo,  allí  no  vemos  sino  lo  grandioso  y  j^éllo  cbifio  tierra  salvaje: 
son  las  impresiones  que  eV  europeo  reaibe  al  contemplar  por  la 
primera  vez  una  tierra  virgen  y  potente,  distinta  en  el  aspecto  y  en 
la^prodaedoaes  áñ  aquella  que  haivistadesdesu  iitfá»ciai;;  iaipre- 
sioüea  tistato^sias  proftmdas  y  ani^te^s  ewuit^realian)  te  ideas  da 
los  táen^pos* primitivos,  qlie  se  «nea  en  samanta  ate peMipaa di 
k  craacioB  an  sv  pureza  oríg^ned* 

Bepoiia  no  vadlas  en  sostoiser  que  aiagnna  párfe  dÉkk^iaiéfica  á 
eüst^uier  ktlGBd  que  sea  poedu^coüipai^une  con:  esto  tefeitilida¿| 
vavicMkd  y  riqueza.  Efeetávaaieate  es^así ,  7  para  bian  wpsñtím  ea^ 
to  es  preciso  miravio  bajo^l  asista  veaiieca*  Noqaereitiaivpittkf 
etMdm  idéate ,  eoacetódes  per  iijoaginaáoaes  esift^ciaifts  k  fuea» 
M  de  eaüMíaBi&o^;  ni  instÉter  qatiaaiaa  tepeay^te»  TraCsremiM  ú 
de  bosqueiar  te  adelaJitea  qae  estés  en  el  óafea  da  te  p^ogMoi 
bttmaaos  :  las  nMjoras  qde  deben  espü^cva  da  uaa  pobtedan  qreí* 
atete  en  un.  pna  que  posee  graadas^vealti^aalnrate  ¿  la^madifiK 
aieioües  predsas  que  redbiré  la  (imA  de  maüo»  de  k  diSi«uáoa 

1  keidtimr»  FaofiQramaosy  por  (oíAt^  destirü#  tofMoideamaiai 


íáÉifitíM»  <p^é  i»tátt  G&ti*  eufH^HHrs»  y  te  rentaja»  parciales  de  cáék 
«áa  ,^r  i^recamos  esüi»  métodb  el  mas  sencillo  y  clhro  ^  á^  la  V€!2 
^e  el  imito  eoiii|>attt))e  con  Ibá  límites  estrechos  db  estáf  obra. 

(a  oQUmerd-  qae  sínrede  barrera  meridional  al  mar  de  las  An- 
tfb»  afea-  en  toda  III  Ibngftúd  dé  la  costa  sns  íktdas  escarpadas. 
■cKshife'  de  eUas  están  constantemente  batidas  por  las  olas  del  mar 
T'elri»  llenen' á  perderse  á  poca  distancia  de  sns  orillas.  De  tockis 
tstas  altares- bajan  iíds  á  la  sombra  de  espesa  y  lozftna  vegetación*^ 
^á^  medid»  qoesei^ande  Fas  enmbres  empioa(]^s,  se  abren  y 
cnsancban  kiB  estribes  de  Id  montaña,  dejao'do  valles  mas  ó  menos 
i&cliitaddft^  masó  méa^  espaciosos ;  todos  útíles  para  el  cultivo  de 
tocaSa  d(»  a^car,  del  árbol  del  cafó  y  mui  especialmente  del  que 
pvodiice  la'  estimada  almendra  del  cacao,  qne  por  sn  calidad  y 
AttBdnndá  6Bcede  á  las  mej(>res  conocidas.  Cada  valle,  pues,  tiene 
ra  rio,  sino  navegable,  capaz  de  dar  los  riegos  necesarios  ¿  todas 
las  kad«idas  qne  aÜí  se  pueden  formar.  Desde  que  la  cordillera 
s^  aleja  de  la-  orilla  dd  mar,  presenta  grandes  planos  inclinados  ^ 
4lQelfficafA9s  pop  las  agnas  que  se  desprenden  de  las  altas  cimas ,  y 
Ittite  aifudlos  como  estas  están  ocupados  por  selvas  que  hace  im- 
fienetmiblM  sa  Injosa  vegetación.  Cuanto  mas  se  internan  los  cerros, 
t^to  masr  se  estienden  las  hermosas  llanadas  en  que  el  hombre 
aniFno  ha  heeho  resonar  el  golpe  del  hacha.  0  viento  dominante 
qae  pasa  sebre  la  vasta  ostensión  de  los  marei?,  chocando  contra 
isffg  enormes  masas ,  deposita  en  ellas  las  partículas  acuosas  que 
Vivaba  en  tormade  vapor;  y  por  su  medio  se  eonservan  la  frescura 
yknmedady  tan  necesarias  á  la  vida  vegetal. 

A  cnalqnier  parte  qne  se  dirija  la  vista^  causa  admiración  el  aS' 
pectb  ée  aquellas  sdedades  incultas ;  pero  vestidas  con  todo  el  lu- 
je de  mía  ttaturaleasa  vigorosa.  Allí  se  encuentran  mil  especies  de* 
ataderas  preciosas,  el  ineienso  blanco  ó  gris,  olorosísimas  resinas 
y  gOBOas  mni  estimadas ,  bálsamos  de' aromas  y  virtudes  en  estre- 
no variados  y  útiles ;  miel  en  abundancia.  Difícil  si  no  imposible 
le  es  al  boabre  i^netrar  en  aquellos  bosques  tupidos  de  malezas  j, 
f  apenas  es^dado  atreverles  por  alguna  parte  ó  medirlos  con  lá 
yttíA  desdealgnn  punto  distante  y  elevado. 

Lffserraaíaque  en  algunas  partes  tiene  flancos  escarpados,  en 
elta»  conserva  planos  s<4Nrepuestos  en  escalones ,  presentando  me- 
sftif  40  m  eltear  dÜMosO;  en  el  que  prosperan  el  café,  el  añil ;  el 


n 


—  52  —  ^ 

4 

algodón,  la  c^a  de  azocar  ytambm  el  cacao.  Si  se  sube  á  las  eiii&> 
broa,  se  admiran  las  varias  ramificaciones  paralelas  y  trasversales 
.quedan  origen  á  inCnidad  de  hondonadas  y  TalliBs,  donde  está  hoí 
Ja  masa  de  la  población  y  de  la  agricultura.  En  estreúio  bellas  son 
lias  perspectivas  que  cada  punto  presenta.  Hileras  de  cerros  peladcfi 
i  vezes,  á  vezes  cubiertos  de  monte,  foromn  agradablesvcontrastes 
con  los  pocos  campos  labrados  de  los  valles ,  los  cuales  se  presen- 
'  Jtan  matizados  con  los  diferentes  tintes  de  verdura  que  dan  el  maiz,. 
k  caña,  la  yuca ,  el  añil ,  el  algodón  y  otros  muebos  frutos  de  cul- 
tivo. Cada  uno  de  estos  valles  está  regado  como  se  ha  dicho  perdi- 
gan riachuelo,  cuyo  curso  se  distingue  á  lo  lejos  por  la  mayor 
frondosidad  del  bosque  en  sus  orillas :  y  mientras  que  estos  ofre* 
cen  un  color  casi  uniforme  de  un  verde  mas  ó  manos  oscuro  y  á 
vezes  salpicado  por  algunas  flores,  otros  grupos  de  bosques  alinea- 
dos hacen  ver  que  deben  su  existencia  á  la  industria  del  hombre. 
Compónense  estos  de  búcaros  { eretryna )  cuya  sombra  tupida 
defiende  las  plantaciones  de  cacao  y  de  cafe  contra  la  estremada 
fuerza  del  sol  equinoccial,  y  contra  la  violencia  de  los  vientos  tem*  ' 
pestuosos.  Las  diferentes  flores  de  que  se  cubren  al  mismo  ttempd» 
que  se  desnudan  de  sus  hojas  verdes,  dan  un  medio  fácil  para  dis- 
tinguir las  diversas  clases  de  bucare,  en  aquellas  mazetas  rosa<hs  ó 
naranjadas  que  matizan  la  campiña.  Por  otra  parte  se  ven  cuestas 
rápidas  é  inclinadas,  á  vezes  medio  cubiertas  por  las  nubes,  y  en 
uno  que  otro  punto  de  sus  faldas  el  syrco  estrecho  de  cafetales  sin 
sombra,  porque  allí ,  la  natural  templanza  del  clima  hace  inútil  el 
ausilio  del  bucare  [»*otector.  Contribuye  también  á  embellecer  y 
variar  el  paisaje ,  la  vista  de  pequeñas  llanuras ,  ya  verdes  como  la 
paja  lozana  que  las  cubre,  ya  amarillentas  cuando  esta  se  halla  de- 
secada ó  marchita  por  el  rigor  de  la  estación ,  y  ya  ennegreóidas 
por  el  fuego ,  cuando  las  yerbas  han  sido  quemadas  para  acelerar 
a  reproducción  de  los  paslos.  Én  medio  de  estas  praderas  natura- 
les, en  «scaso  número  y  sin  orden,  se  descubren  algunos  grupos  de 
árboles  frondosos  ó  de  verdes  platanales  con  que  el  labrador  rodea 
ó  avecina  su  humilde  habitación  y  de  cuyos  copiosos  frutos  hace  su 
principal  mantenimiento.  Si  se  pasa  de  valle  en  valle ,  si  de  una 
cumbre  se  sube  á  otra,  siempre  el  p^tisaje  será  variado  y  pintoresco, 
aunque  debido  mas  á  la  naturaleza  que  á  los  esfuerzos  del  arte ; 
pues  las  tierras  desmontadas  y  cultivadas,  son  insignificanles  en 
comparación  desaquellas  que  están  cubiertas  auo  con  so  ropaje  {vi- 


^ 


—  55  — 

odfivo.  Los  tíos  ó  drrof os  qtie  abundan  en  f o^  esUi  zona ,  sifren  '- 
para  regar  los  plantíos  en  la  eftlacion  del  veraoO;  y  pocas  vezes  sa- 
len dé  madj^e  entteinpo  de  1as:|(raqdes  Uaviís ;  porque  coffeupor  '- 
eauces-muí  profundos  qae  ellos  mismos  se  has  labrado  y  que  nada 
deben  á  k  mano  del  hombre.  De  ordinario  se  ?on  cerros  pelados 
con  maficbas  de  verdura  que  empiezan  con  las  cañadas,  y  que  á- 
medídrijue  estas  adquieren  h^bodura  y  ensanche  para  contener  las 
capas  vegetales  que  arrastran  las  lluvias,  forman  paSos  de  selvas 
que  aumentan  en  razón  directa  del  crecimiento  deharroyo  y  de  la ' 
estensiQn  de  sus  vegas.  lPor  todas  parles  se  descubren  montañas- 
myéB  árboles  pandeen  pegados  á  las  rocas,  y  se  elevab  corpulentos 
en  medio  de  un  verde  easi  negid,  cerrando  y  entretejiendo  sus  co«^ 
pas  de  manera  que  impiden  la  entrada  de  los  rayos  del  sol.  Estos ^ 
varios  aspectos  del  terreno  se  encuentran  también  en  el  declive 
que  va  bácia  las  inmensas  llanuras,  y  varias  hondonadas  fértilísimas 
H  y  desiertas,  presentan  todas  k^.  ventajas  que  pueden  ap^ecerte  en 
tierras  de  un  clima  templado. 

Ríos  caudados  descienden  casi 'paralelos,  y  abriéndose  paso 
por  las  grandes  cañadas  de  la  cordillera  meridional ,  se  avanzan  al 
sur  en  la  zona  de  los  pastos.  Colocado  el  vlajefo^obre  aigub»  punto 
elevado  y  dkígiendo  sus  miradas  hacia  aqueHas  inmensas  dehesas,* 
no  puede  seguir  con  la  vtstfl  el  curso  de  los  ríos ,  porque-el  calor 
levaqta  vVpores  que  produci^n  una  ilusión  singuiar.  Dé  repente  pa-^ 
re^  trasformarse  la  llanura  «n  ub  vasto  mar  sin  horizo'iU^,  que 
solo  cesa  cuando  el  sol  va  declinando  ;  siendo  perfecta  la  ilusión 
*  pefque  confundido  con  el  cielo,  iiene  para  eKobseiwador  el  movi* 
^  miento  .jíbratorio  de  las  aguas.        ^  :  ^ 

Desde  la  región  de  las  tierras  calientesf  se  pasa  por  una  grada- 
don  imperceptible  á  medida  que|^  sube  hasta  llegar  á  las  templa- 
das. Álliiel  clima  tiene  la  frescura  agradable  del  otoño  en  Europa' 
y  los  campos  os|entan  siempre  el  lujo  de  la  primavera.  El  trigo  y 
todas  las  semillas  del  antiguo  continente  se  desarollan  ron  yigor,  y: 
en  cualquier  tiemfio  del  año  están  verdes  los  caq^pos  y  Iob  árboles 
llevtt  flores  y  frutos ;  pero  á  medida  que  pasai{ios  hacia  las  regio- ' 
Be8%as ,  la  tierra  se  empobrece,  la  vi||etacion  és  mSsjlébil  y  los 
^boles  ya  mas  pequeños  no  son  sino  meros  arbustos.  La  falta  de 
utt  calor  vivo  y  oenstanle ,  la  rarefacción  del  aire  á  tan  grande 
elevadon ,  una  atmósfera^si  siempre  n^ulosa  y  cargada  de  hu- 
medad, y  los  vientos  que  allí  soplan  con  fuerza  estraordinaria,  son 


ta^.,  siao  qite  almyciaUi»  ál  hemtoe  d^^iiel  oiifiiadesabiiido.4i»» 

^0  algunas  ca^s^  encnentoan  si  pié  de  lospárfimos,  aE*doBd6 
culüvaa  el  trigo  jr  ias  papas.  Ellas  sirven  de  lasíio  á  los  qué  4ekw 
akrav^iur  estas  pasos  peUgf^^os^  7  s«s.babi(sftites  coogH^ioieiiMOS  da 
la  .ti€»r>ra ,  avisan  al  caminanie  que  inoante^nt^tase  €Oiitimmr>«)i. 
viije  cuando  la  .natupaleza  se  opone., Suele  allí  decirse  qae  elpér 
ramo  está  brwto  ú  9u  cwnbre  se  ¿alia  eqvjielta  ^  nubes  Mane»» 
y^ikegr^s,,'Qi4e46^  ¥«Q  CQrj^\c&niina  voíocidad  estraoFdínaria^. 
dÁ^ecekMtes  opuestas ,  ó  bien  íormanii^  reisit]yyiii«s  ^e  precigitail 
Ifart^  de  ^Uas  en  jas  bo^donadas  inm^ta^^ y  c«i«^d»  se  of  eieierto 
riunor  ocasiMiado  por  el  iñento.  Eíftas  señales  ao^rapsmadastpor  na' 
íÚQ  inten«Dy  indican  aliriiytefio  que  es  mala  Ja  ooasíein  para  inten- 
tar ^1  pasiú^  >pelig«o$o  de  la  montaSa.  Ordinaaianienite  es  de  medía 
niocbQL  al  am^kp^cer  iciMuido  se  es^en^ée  la^juhiaa  .de  tdqueUos  m^s^.  , 
elevados  y  mas  espuestos  á  los  malos  lí^Qipoa«  IMÍuolips  «ion  los  fi^ 
sos  m  gue  sesei^beaveoe  ij^^mitláainesite  el  ^d^ina^  y  en^ónofis  el 
Imai^  ^un,  poQp  "dói^l  ao  ^^ede  aeabar.  de  pcisanlo  y  p^eie  e»41 4 
sp  f  Q^iüiB^,  poeQs,4e^xstiK&]i  a«i  imiinHiéiiienfte  m  vida.  (Sesdelairir 
(úra  de  los  i^ácamos^^deljínte^  «e^nAra  fa¿^  la  r^éaid^to 
nievces  |]i^[|>etui^.  gUa  es  fia  ii¥iá|fu$  4&«.leiM8tf^ÍBjifim^     &fr  * 
rqpa  y^;iuq  4ejía  asolación  ^esfiantoa  de  Ao^^Uwas  i^ahr^. 

Todo  ^a^uel  ,gr^  .a§rn|>ainien||^  de  |»£oos  bffladps,  4e  4empe8ti»^ 
sf»s  |)áráín0s  ó  d«  ciuiaiaa*e6  blancas,  per  la  e9taGi$»n  ^as^snae  de  Í4^ 
nieves,,  cepeda  «í^«  ^  «grandes  4Q^és  mbH»rl0i(de  íMtjsspfmf . 
solitario  bosque  que  se  pierde  al  norte  y  al  sur  \  bacía  ¡el  Jag»4é 
Mar^aoaibo  y  al  iPíq  ^v^^  ^e&íea  4el  >p«r a.  j>esdje  Ja  base.liasta.la 
cima  se  eleva  cd  terregiomi  anfiM|lFn ,  ^t  tad^s  parles  in^to  f 
c^  ricas  Selvas.  Tan  «alo  ¡enaAdó  por  la  ^M^^aíon  {alta  i^Eto^pw» 
el  desarrollo  de  las  plantas^  ^  en^pieziaaa  a  desüiiNir  li^peftasaos, 
y  aun  ej^t^cc^  se  ven  algmias  tierras  ^nl^re  fUanas,  'déhilm6ñt&  ^«ea* 
tidas  (porcia  yerbi^y^h  a^punos  «arbusA^.^  en  ¡1^  cuales  no  laltaii' 
sitios  apareistes  ipara  «1  oultivQ  del  tpigo,  de  la  -cebada  \  de  Jtas  |N^  • 
pas  y  aun  j¿d**cdfé^  .si  se  c^M^oge*  lo  JÍiás  b%lo  4e  las  cariadas.  %m  ' 
aciába  rae  ven  ci^xd^r^s  i|l^vAdas  q«ie  oi^ce  ^\  f^ait^m^.  ^¡^M , 
una  (^uta  de  be¿as  Jar^ja^  ^^ubjertas  de  «un  p^  enavt  de  e^lü^; 
blanquiQcin^  La  virtud  '^ue  ti^ne  de  eüitar  ^«Híaior  si  ae  -W^aa^ 
s^bEe  l^ipiel^  k  JAftOP  de  un  uso  ja^ui  ix\\  .para  los  vi^aa^ 


u 

f 


— M  — 

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ias«<»  iiJÉi^p •jpJMMftBas  o  i^giM;  ÚBimtÉm  deewiii»«i 
euandoj'  mientras  que  «épm  mas  avadas  rcuptanieocn  «orno  erte* 
tiáas,  porlpi^gim^iigeladas  -qne  UBtMten,  ó  por  loa  gnlfMS  de 
^aBcéiokHM»  jpoadSiBiea  da  ios  pnacipieios  :  ira  cielo  ^^a  dejado  j 
chtto  y  fa^aaooBO^Y  airablada  :  un  siA  eoya  liu  docilitada  bo  tieso 
lar  fiMsa  ^oeeeaaría  para  'derrotk  las  mmt»  ^e  p^|ietiiam«ilo. 
e&mehfea^  4as  eáspMas  píraividales  mas  elevadas  :  el  aspecto  dé* 
calas  de  mi  tílMieo  Tespiandeeieiite;  ó  iáen  osomrecidas  por  la  ioter* 
posléoB^loo  ?af#f08 ;  y  ea  fin  ^  losdifcretiles  j«e§os  de^a  luz , 
^pieoea  aMMitettiido  ana  ««be  denM  ptofecla  8«  B»ab^  mhre  ol 
vafiO;  ora^líbceide.oi«tiiini]os  Itftoe  respiandeoer  la  opüna  iiimo^ 
diata  0011  cralacimes  rápidas  Mfitñ  sniilipiieaa  estos  cuadros ;  todo  ^ 
oetaitnlMi|ffi  &  dar  ail  paisaje  una  soledad  y  «n  léanlo  «ndefiBíblea. 
Bntre  a^^nas  aoasas  oBoraaes  y  detBodas,  sac^OB  deseabrirae al^ 
gasosespanÍMOs  caiispos  soosbrados  (le  tpigo,  cuyas  espigas  lo  baooD 
diitÍB0Mr  de  Itf;  piurtas  qfne  aq[KHBita&eimiei|te  cubroo  las  fddas4o 


Esta  zona,  qne  coi^ene  casi  todas 'lai  pfesioiies  almosféricas  eti 
900  .^  haoi^  .pliede  ^nnr ;  od  la  qjse  l^s  dado  eseoser  la  lem- 
pantoBanq^in  ^  '^leliiiitad,  4laBde  ^oDa  msi  ealwM^sar^h^sta  aquella 
en  ifaokwÉiíaBoaat  loe  Molos,  y  en  la  que  un  solo  día  le  basta  pava 
pasar  de  «b  esteeDao  el  otro,  esAa  «fve  Mamaooos  jsona  (igric^ltom., 
Ctaí^dewMddaiifcajo  d  aj^nei^tode  ia  satobddad  ,  su  clima  eelá  <en. 
estremo  calamniado.  En  rasaaediaaasalliiras coosor?»  an  tempe^ 
nmoBto  «aaf»y  y  ñ  eb  Jas  |iaidis'ba|as  y  «n  afa£Ha6<«i  q«e  los  á>os- 
qens  Bio  bsB  sidiHtaiados,  halaílgoaas  caloBitnras,  debido  es  esto  al 
doblo  incwmnkiiÉe  de  todo  pais  síb  cultiiFo,  eBbiertode  paotaaos 
Y' can  ana  tierra  eilida  y  luitaeda  :  ta  ttfla  de  árbdes  nuevamente 
boiba  e»  la  qae  «spoBe  mas  la  sal«d  de  tas  bomiMñes  ;  porq  jc  el  * 
s^desoBVudve  oniéaoeslos  mtosnms  qae  exhala  un  terreno  forma- 
do de  MtoB  de  vegetales  epie  se  haa  ido  acnmalando  por  espacio 
de  flEHi4M)s«ígJos',  peMMCste  pdigio.  eiiste  solo  en  1os  primeros 
aftas,  y  kts  ealentaras  tercianas  qae  ocasíoaan  son  mas  inoomoda<* 
qae  peftgvosas.*  Las^klealtas  son  aquí  mni  raras  y  los  europeos  ro- 
dea lie^dosá  los  lugares  habiiado8/*Se  aclímataii  al  cabo  de  poco 
tkoipo  y  goaaiB  de  salud. 

Sdbopáos  abora  éae  ojeada  gfflieral  «obne  los  tcrronps  vírgenes 
desde  4el  faMo  dé  Paria  hasta  el  de  Maracaibo.  Las  mimlanas  de  la 
panÚMli  doMariaesIte  <^slda8íei4as ;  pooo  es,  por  ta»to,  ék  coi* 


tifo<n  ^s;  núii cuando  todo  estilidffidOj  CÉdateoteada  lendÉra 
la  t^taja  de  embarcar  allí  mismo  sus  frutos. 

J^s  selvas  entre  el  Guarapkhe  y  la  cordillera  que  divide  las 
aguas  que  caen  al  golfo  de  Cariaco,  apéoas  liaif^ algún  cuHiro  ejt* 
los  Talles  de  Guacarapo  y  Coicuar.  Guando  todas  ellas  estén  sem^. 
bradas  de  liacícndas;  cuando  estén  cultivados  el  valle  de  Garipe,  la  • 
¿fontana  que  riega  el  rio  S.  Juan,  la  que  costea  el  golfo  entre  Gua* 
rlquea  y  Tunapui,  los  cerros  de  S.  Bonifacio  y  de  Puncéres^  y  los^ 
bo^ques'^entre  Aragoa  y  el  Guarapiche,  |  qué  de  cuantíosastprodac-. 
ciónos  no.^ldrán  de  e$(06  terrenos,  tan  aventajados  por  el  dima  y . 
la  bondad  de  ^a  tierra  y  la  facilidad  de  embarcar  sus  frutos  1  Las 
^bocas  del  S.  Juan  y  del  Guar^ebeno  estarán  desiertas  como  boí,  ? 
y  los  terrenos  anegadiKOs  trasformados  en  tierras  labradas  tendrán  > 
en  medio  de  ellos  ciudades  ricas  y  comerciales.  Lo  mismo  puede 
decirse.de  los  que  están  en  las  faldas  opuestas  del  Turimíquiri,  de- 
donde  se  trasportarán  las  cosecbas  al  Guan^icbe  {ittr  caminos: de. 
carros,  formados  por^  la  natofaleza  en  aquellas  hermiMas  iotieeaa 
qué  están  al  pie  de  la  serranía. 

Barcelona  y  Cumaná  tfiNien  próximas  á  sus  puertos  laa  tierras 
de  cultivo,  y  de  consiguiente,  fácil  el  embarque  de  sus  prodaota. 
Los  golfos  de  Paria  y  de  Cariaco  estarán  un  dtá  llenos  Be  buques 
que  irán  á  cargar  los  frutos  de  aquellas  costas,  boi  casi  iniíabitadas, 
y  entonces  las  dos  provincias  solas  producirán  tantatcuanto  al  pre-^ 
senté  da  toda  la  república  y  ocho  veces  mas.      • 

Las  montanas  do  Tamanaco,  de  G'iftribe  y  de  Guanape  ü^en  en: 
el  rio  Uñare  un  canal  que  les  ha  proporcionado  la  misma  natura- 
leza ,  y  sus  terrenos  ilanos,  propios  para  caminos  de  bierro  fadJi*. 
tan  llevar  á  la  costa  (Mas  las  riquezas  de  unos  terrenos  TÍrgeaies». 
*Las  fértiles  é  incultas  tM'ras  entre  Ucbire  y  Riocbico,  están  todas^ 
ellas  frente  á  la  mar  y  con  la  vantiga  de  climas  cáydos  y  templa* . 
dos.  Mas  productivas  serán  algún  dia  ellas  que  lo  son  ahora  los 
valles  todos  del  Tul  y  Aragua.  ,La  rica  y  grande  montaña  que  se  e9r. 
^tiende  desde  Rioehico  hasta  Cancagua ,  toda  plana,  regada  y  fertí-* 
lizada  por  las  aguas  del  Tui ,  que  la  enriquecen  con  las  tierras  gra*» 
sas  de  los  hermosos  valles  qué  xecorre ,  podrá  dar  mas  que  todas  < 
las  haciendas  actuales  del  Tui  y  de  los  valles  de  Aragua;  tenienda 
lafacilidad.de  embarcar  sus  cosecbas  en  el  mismo  rio.  AquieHas 
haciendas  que  están  hoi  mas  arriba ,  para  entonces  tendrán  cami*', 
noe  carreteros  que  llevarán  los  frutos  al  punto  de  efl|j)arq«e>  en 


—  87  — 

« 

dónde  los  recadran  los  boqqes  de  vapor.  Los  ceihros  entre  los  Ik* 
nos  y  las  sabftoas  dé  Oosmáhe  ,^abora  eñleramente  desiertos,  esta^ 
rán  Ilesos  de  haciendas,,  y  la  rlqoeza  oacioual  hábra  pioporeioiía*' 
do  caminos  para  comunicarles  cofi  el  Tui.  Otro  tanto  sucederá  con 
respeeto  á  %s  montañas  do  Ci^pigua ,  coyos  habitantes  aproreeha* 
rán  llí misma  via,  y  los  df  Gaptya  y  Caríepe,  otra  que  está  aun 
mas  cerca  del  mar  y  que  vendrá  á  ser  tan  hermosa  y  cómoda  cnan- 
to hoi  es  solitaria  y  penosa.         ^ 

Los  puertos  desiertos  al  rededor  del  cabo  €odera  serán  en  aqne^ 
Ha  época  concurridos ,  y  allí  habrá  un  emporio  de  las  riquezas  de 
las  montauas  qne  en  nuestros  dias  se  ven  incultas.  En  lu^ar  de  las 
chozas  de  los  pescadores^  se  eneontrarán  ri^as  y  opniéntas  ¿i^a"» 
des.  Las  costas  poco  cultivadas^ de  Caracas,  tienen  en  cada  punto' 
nn  puerto ,  facilidad  j  convenieDcia  para  sn  comercio.  Todo  lo 
que  puedan  dar  los  valles  altos  oo  necesHará  pasar  á  la' costa ;  por-  • 
que  su  población  misma  lo  consumirá ;  sin  embargo,  la  naturaleza- 
previsora  parece  que  ha  roto  la  cordillera  en  la  abra  de  Gatia,  para 
que  el  Jipmbre  con  menos  trabajo  pueda  llevíar  á  la  costa  los  fírutos: 
dé. su  industria.  El  puerto  deCatia,  despreciado,  s»  trasformará 
én^dades  futuras  en  usa  población  mercantil*  * 

En  fin,  la  sola  provincia  de  Caracas  tiene  tantas  tierras  suscep^ 
tibies  de  cultivo ,  cuantas 'hai  aetaalmente  labradas  en  toda  la  re- 
púbfiea  y  aun  nueve  vezés  mas.  * 

Desde  Caráttis  hasta  Puerto-Cabelló,  las  montañas  incultas  que 
eiisten,  poco  tienen  que  hacer  para  RtviP  á  la  orilla  del  mar 
sus  producciones.  Los  valles  de  Aragua  tan  ricos  ahora  y  que  son' 
^nscepin)Ies  d« 'mayor  adelanto,  coaiido  se  tnmben  las  selvas  que* 
en  eHos  existen ,  ii^en  otro  camino*' trazado  por  la  abra  de  Agua** 
caliehte.  Tiempo'  vendrá  en  que  los  buques»  de  vapor  navegarán 
por  el  lago  de.  Valencia,  llevando  iis  pródncbiones  deL  contorno  á> 
losiferro-carrRes  que  las  trasportarán  á  Pnerto-Cábello.  Paira  en- 
wnces  la  nación  se  habrá  proporcionado  los  medfos  de  comuni- 
car con  H  costa  los  fértiles  valles  de  la  serranía  de  Nii^ua,  que' 
ahora  está  casi  yerma  por  falta  de  buenas  caminos. 
•     Las  mentidlas  del  Yaracui,  S.  Felipe,  las  de  Aroa  y  las  Titcacas,  - 
solo  necesitan  cultivo  para  producir  todo  lo  quetierras  cálidas  y: 
templadas  pueden  dar;  y  aquellos  «ríos  que  las  atraviesan  y  su 
apiaxirácion  á  la  mar  les  dan  ventajas  considerables.  Ellas  solas 
pttSkai  tununistrar  el  doble  de  los  ürotos  que  se  recogen  en  la 


oAreeeQ  «i  fumak  ÜMfijv*.  Slste  hétmm  tÍ^  saKcssUe  pütitfi 
Vi«BHr  ifnib»  I»  oHeolM^  «de  a^fmiias  «ompm;,  7  las  fartes  ptah 
flEMt  ie  tm-miéktm  «eiétt  crazadtsr]^  «í&bmos  que  «oovimiiQai  el 
ne  Qm  la  «lana ^*^  rCiarp  f  «rta  <spn  ia  Hiar«  I»ds»'1as  ikmtm 
iaciilto  y  úm^tttm  M  «sto»  tea»  «itaeáa^  eiÉáiiees  cidtivtflai, 
y  ia Jiaoaa;  -««Meta  dg  la^imaQia4eCkac»^£mjBBtr6lasiennLY 
el  Tocuyo.  Efbermoso puerto  d^ChichuúfEk±i,i]ilabiteáoii]K^!a 
tandea  ass  ai^Bas  eaÉüectas  de  iinfiiee  y  «em  ws  «dilas  ¿abrá  4ina 
cítftdad  9íieeca«líl  ^a%  «I  tíeoifD. 

fiarqvÍMieto  taMká.dosr vías  eúnodas y  «aptasfffira  üe^ari  la 
macj^íámáas  4e  las  oartaa  <|ffrÍHH  ie  brii]|é«a  «oa  «l>8teaidQ6  {mr 
teaneoisdesárlMieB,  y  «nasMBiaiía'paata»osa^r  ios  deivasBea^e  )m 
apwk  £1  Yacaeuá  7  d  Acoa  coe?ertjüto  «n  <caaaifi&,  «er¿&  nasFegaf? 
doB  for  kB|ltt8<de  >vi^^  r.  |^of  Abiva  hafacá  ^3nx>H6anHles  i|jae  af e»* 
masanba  moparte^eaos  soUtadoa;  tam^  ^i^eaes  iRaa  estráios  ^e  loAa 
la  ^e  tb»seL*miÁ  calíivadoi^n  la  fnódueia. 
V  FeíoiA  «vtoior  naéa  es  «awioiftrftoiQKi^de  to^eapandieas  ^pe 
preraet^áiatipajlses  deaieetes  fue  ekou«4Mi  el  lago  de  Maraoai^ 
bo : pareoe  que  la ProfMesaida iiaáoteoirio  esta graiuaBata éeaptt' 
para  ^OfíBsatb&^íuSais  á  1«b  1isn»sqae  aatéú  al  pié  de  dbs  flama  ü- 
taa  «cordikiraftée'ilii^íMlo  y  jMiátMa^  vqmjos  á«Qto»s  e»  AiMoa  de*ea«' 
Imanadas,  yian^  á  perdShe  en  las  oiUaf  éa  «ste  ^msíto  é  éski^^máe] 
kfijQu  A^bnkábk  es  solidada  te  gcau  fealdad  ée  estas  cosaareas, 
su  artaMÍQB  «pKDdigiasaef ^^fofld^ud^  ríos  caudalosos  <fue  |^  liek 
9HL  06ila6  $íwák»^é!ti^^ijl^jámxm-qú»p^  todas  fintea  iein^ 
dona )  «ee  ^^uedeaa.iaiooi^er  tempfflxtliiiBa  ^immoiwéía^^á  4BiiaIquieni 
pHMl«GoiiaQ  de  lEurofH  6é&  áxoAriea^  ideadedifaJlir  goe  aitsasaliis^ 
talos  fttimQia  jenipeatMosoai  las  w(vesf!«9aliMs.  St«e  refteioua:^ 
qp»  afiteas  oáhetaao  líis  ¡^ayasiMl  áago  nims  esautaa  liaeteiidas.; 
qm  afine  JU}»étes«eastas  se^kallw^iiiMaífíoUacianeaNde  utegu»  as** 
taRsa,  y  qm,  A )Xmío  del  jKais^  Auute  íes  s^vealre  ^láAol  de  casao^ 
aaiiaUa  flillerasieilift  jiieullo^  «s  vanArá  ^^^naeicDÍeiitoáeiía  que 
Maracaibo  debelar  i&u  l€$.iíe«||W  i^mdeKsa^^tfnndo  anta  fiobla»r 
ci«a  aclafa  7  foafMireíoiHRia  á  .su  «^laoMi^  «epaisaesr  ^«ítkto Je 
tfdn  fOts  «BiÉi^as.  Pnsa  «Éb^Q&es  las  amlaBS  de  Méddi  y  l^tpl», 
9aB  se  mÜsaBéom  báéia^iel  li^)i»oMm4ar  {larsí  sfllasvn fwotai" 
t#  omafiEáa  ycpesitaiÉyer  ^ue  d^da itoia  ia  psdeteultisiada  :bo»eaia 
npiytlka.ta8.i9a6dMatafty£M^^  lriauyV8ii|rHpmfcm 


• 


•.í- 


-^  M  — - 


«. 


«BBfeatoi  métím  i»\mikfi  tefe»  aowmiéttto  fMBatflensr  ia 
Í9kttm^áim>mH¡^Mia§0 ;  7  «ste  j^bkrto  4e  asñüiílQd  áe  tu* 
qnes  ée  lajuslnB  M«i»iai^,'ra*i  eambiar  ai..«ps  puertos  to  99* 
4iQcUi»  te  Ja  Miéofflritsa  Em^  pvtjm  iralfit  é^m^w^málKiXdL 
y  por  lel  'Om  4a da  Aíei*ra<igcañidini.  Ip^fae  las  wtílas  miemm 
dfiisLmmmd&ífíBHnyHcm.,  podrá  inrjriU  omBo  i^mfluifidofar  obI 
luwpQQsa  piOblafiMNa  ^  imhrá  émitmio  en  las  altas  tienas  vui  c]i- 
ma  lmi||M«^.«9a  í^JntMta  fritaa^vera.  las  itldeas  ^ne  apenas  1»* 
ttm  jnmAeorfis^^  seráü  QBt¿8ces  cwdaA^a  Ju^ttaias  ^  TI908  pe^ 
petorioB  y  f(HM»ÉHiotas  fila  gQtti»a'e!i«]iÉfimpfiraiiifiBto4elksiD- 
80;  de  todas'las  comodidades  ée  ia  etMa^  <fe  tudas  k>s  fteeeros  de  ia. 
sMíediídSifJa^ktaiieiade  ft|«eUas¿  la  cotía^ecá  mas  corta,  per- 
qsie  iatméí  ^rnáam  carmleiías  ^^re  el  MuMMdbiesyial  Metatan,  iei^ 
tceTi^Ho  y  el  lago^  De  ím  «rrillas  del  ¿alia  fia  <€rMa,  se  Iten» 
rm  ÍB»ímmaidmét  Isis  valles  de  Gumita  y  de  S*  <iri8lál»al  7  kaata 
el  pújelo  de  Tet^i»  ^sibre  el  «DrüMfte. 

La  gran  montaaa  de  S.  Camilo  enteramente  ^deaietita  7  can  mil 
seA»  Y  tí^  4»áaiaD^«e  h  atraviesa^  di^á  ao  pradiicW»  inaiar  eaan- 
d&  ^  de«Baa£ada  y  cultivada  del.  que  jdbora  cinde  k  riea  api^ 
cid^aid^la&^^Bffies  del  IM  y  de  jkragaa  reasódoa.  TeareansdÜi* 
das,  lenfíadas  y  fríos  8e««pieslraa  «a  los  icerias^  en  to  qmk^ 
y^ea  hs  Ihfmm,,  y  la^chos  rias  ciegattiy  fertüisan  afaallas.,  Ua^ 
iMbüiáiaMr  ¡aa'attí^iiiito  de  JtarienAas,  pueblas  y  pB«u»^  c»* 
iam99«  AfUÍ  iwla  al  j^liik)  ^oe  eapataias  das  riosíKta;^«gaJdes,  al 
aalia  >f»e  aa  bada  Maraeaiboy  ¡A  Uáhaa^e.liáBÁa  é\  ^aaea*  tm 
iiiailktaaa'dieS.  i¡¿ínilo  seda  la  mano  coa  ¿¡a  leaiéaai  de  Tiospaco^ 
epdoadev]Uií^>asp«ilMaa  teplaaáa  del  ^eacap.  Mordiese  xeatei  par 
aa  saft«?ie  dedü^^ea  ia^ 4teMr#  i^itienta»  é%  gan^os^  ccttca» 
das  7  fertilizadas  por  ríos  caudalosos ;  siendo  de  notar  .fae  ^afíie^ 
lias  sabrás^,  qm$  iwián  papte  ea  U  aa^A  calai*esa,  fiarte  en  la  tem- 
plada,  sféaaa  paeden  \m  .tisanátacse  par  les  m^las  camiinos..^^ 
sato  aatáá  babadas  por  las  daeaos  «de  seis  .oka^as  miaecablaa* 
Guando  la  pablaaioQ  defiia€aite  eatas  teaiaitaois  vif^aesj»  «uajidoatof. 
QflUI^  las  'eriUas  d^  ^s  ^^aid^fl^aas  léás ,  pr^seatará  oip&  a^iaeta 
9^pid  pmf  y  ib1  amaina  fieagoso.iitte  43onduoe  á  las  «ato vadlas  tds 
XMrida),  «acsá  fiéflMida  yae  áiará  m  cmrasyas  qoe  aitatf|iiKráa«a 
pocas  tesas,  JaHiike  ^l  pnaaMUe 0a. ae  baceta  Yj»m  dó^.  itas  lios 
navephkauíie'CoadMB^n  al  Apare  «y  id  Orkiaeo  ofirasea  á  indas  ios; 
pwidiii^  de  Vibk'É^mí  miék&  iáfittea^  y  las  biiqsicsr  da  .fapar  aa- 


nrantarin  todas  éstas  grandes  vias  que  se  íntrodíiceii  hasta  el  pié 
de  la  serranía  de  Marida',  para  esportar  de  allí  yelíite  vézes  mas 
prodactos  qvk  los  qvt%  da  bol  la  agrlcaUora  de  toda  Veoezueta. 

Por  «4ltnio/los  bosques  ÍQcaltos  de  los  terrenos  qi|0  están  á  las 
faldas  meridionales  de  las  serranías  de  TrajíHo  y  BarqnisimetO;  tie* 
nen  lo«  mismos  conductos  para  dar  salida  á  sus  frutos ;  es  decir, 

•  ríos  que  sirven  de  canales,  entre  ellos  el  mas  importante  es  la  Por- 
tuguesa. Los  costados  desiertos  y  sin  cultivo^tlé  aquella  cordiUeíaj 
presentarán  una  mnchediimbre  de  haciendas  y  aldeas,  cuyos  habi- 
tantes, huyendo  del  calor  escesiTO  de  la  llanura,  habrán  huscado  en  ] 
las  partes  mas  elevadas  un  elisia  templado. 
£special  recuerda,  merece  por  su  ventajosa  posición  y  4a  jnontaña 

'  áfi  Turen,  habitada  apéaas  por  algunas  familias,  pero  que  labrada  y 

-  poblada  con  el  tiempo,  hará  á  la  vez  el  cambio  de  sus  produccio- 
nes por  el  abra  de,'Barquisimeto  y  el  río  Yacacai*con  Puerto-Cabe- 

'  lio,  y  por  el  caño  Turen,ia  Portuguesa,  el  Apure  y  el  Orinococoñ 
todo  el  interior. 

Para  que  no  se  crea  exajg^rádo  este  cuadro  de  la  futura  prospe- 
ridad de  Venezuela,  basta  considerar,  que  en  la  que  aquí  llama- 
mos zona  agricultora^  apenas  hai  50 1.  e.  de  culüvo  permanente, 
al  paso  que  restan  por  rozar  y  cultivar  4.500  I.  c.  de  montanas 
vírgenes  que  darían  un  producto  noventa  vezes  mayor  que  el  do-*, 
tiiri.  EsUi  zona  bastaría  para  mant^er  con  mucfan  comodidad*  maft- 
de  7,000.O0iLde  habitantes,  cuando  apénaVtiene  en^l  dia  650^060 
personas  regadas  sobre  una  estension  de  8.757  1.  c,  que  vienen  á 
estar  en  razón  de*poco,paas  de  74  por  legua*  No  necesita  mas  que' 
tener  una  población  proporcional  á*lf»4e  España ;  es  decir,  de  900 

^  almas  por  cada  legpa  cuadrada,  para  dar  un  producto  mayor  que' 
el  indicado. 

A  fin  de  que  á  un  golpe  de  vista  se  pueda  formar  idea  de  los 
esculos  emitidos,  se  presenta  un  estado  comparativo  de  los  terre* 

'  nos  rozados  y  labrados ,  de  los  que  aun  están  por  cultivar  en  cada 
(irovincia,  y  por  complemento  una  demonstracion  sobre  la  zona 
affricultora,  que  se  estiendé desde  la  costa  hasta  los  llanos,  ocu- 
pando una  superficie  de  8.75Y  1*  c.  £1  largo  mayor  de  esta  zona, 
desde  el-promontorio  de  Paria  hasta  las  cabezeras  del  Táchira ,  es 
de  240  leguas  tomadas  en  línea  meta ,  casi  de  naciente  á  poniente. 
Una  mitad  de  su  anchura  tiene  de  ^  O  á  4  4  leguas ,  y  la  otrft  de  A^ 
á  45  de  N.  á  S.  ó  de  la  costa  hacia  los  llai^»  &ta  faja  egotiene 


;  -  61  - 

Vibrios  eq[>acibs  iMfcs  para  lj|8  crías  y  también  algnnos  pantos  in- 
caliiVables,  á  cansa  de  lo  escarpado  y  peñascoso  del  terreno  y  de 
la  destemplanza  del  clima.  Lm  siguientes  cuadros  darán  la  demos- 
tración. « 


euABao 

HELOS  TraitEBíOS  CULTIVADOS,  DE  LOS  QUE  HAH  SmO  ABANDORADOS 

Y  DE  LAS  HIERBAS  TUlGENBS. 


«03IBRB  DB  LAS  PBOYINCIAS. 


nÚMBRO  DB  LEGUAS  CUADRADAS 


en  cttltÍTo. 


Caracas .' 

Carabobo 

Barquisimeto * 

Coro , , 

Maracaíbo 

Trujillo 

Herida 

Barínas.. ^ 

Apure 

Barcelona 

Cumaná....... 

tfargarita 

Tota) 


44.    6 
5.    9 


6. 
f. 


1 
7 


I.  9 

S.  O 

4.  4 

5.  8 
0.  4 
t.  9 

3.  S 

4.  1 


coltivadas 

7  otras 

sDcesivamente 

abandonadas . 


I 


49.     4. 


ISO. 
96. 
40. 

fia. 

48. 
fi4. 

75. 

8. 
48. 

50. 

7. 


qac  no  están 
cnltÍTadas. 


800. 


470. 
210. 
930. 
330. 
i.MO. 

eo. 

470. 
480. 
300. 
70. 
400. 
» 


4.600. 


Nota;  Se  ban  comprendido  en  este  cuadro  por  ser  insignificantes  varios  pun- 
tos culiirados  que  pertenecen  i  la  zona  pastoril. 


i 


TfBMOBTWLACtOV 

DB  LAS  DIFEBBHTES  CLAMS  DE  TERREftO  MS  LA  ZOBA  A6BMI7LTOBA. 


Terrenos  actualmente  cultivados  y  otros  sucesivamente  abando- 
nados  

Montañas  vírgenes 

Terrenos  llanoa  útiles  para  cria  de  gananado  mayor 

Cerros,  terrenos  quebrados  y  llanos  para  cria  de  ganado  menor.. 

Páramos  y  cerros  escarpados  no  susceptibles  de  cultivo . . 

Lagos,  lagunas  y  ciénagas 

Islas  útiles  para  pesquería  y  salinas 

To'al 


C0*D>ADA8. 


800. 
4.5Ó0. 

883. 
4.U4. 

983. 

908. 
80. 


8.757. 


—  »  — 


zo^x  M  to§  ^mm. 


si  tan  ^álide  encontramos  la  primera  sona  qae  casi  igml»  en 
estension  á  la  monarquía  prusiana,  no  se  debe  arañar  que  la  se- 
gunda esceda  íin  poco  á  esta.  Parece  un  gran  golfo  qiia  se  ioiro- 
^  dace  en  lo  interior  de  las  tíeti^a»^;.  es  uii  mar  de  yeii)a  que  por  io- 
ih»  parle»  form»  h^rímite ;  a»  uir  wM^is&rimo^  eemdo  por  hs 
cordMJjerasr  7  tos  iammisas  telvasde  la  Guayana;  es  la  verdadert 
Vegiofr  de  los.  ganados  qoe  altí^  multiplican  casi  sin  los  cuidad* 
d«l  hombre ;  es  ei-  gran  criadera  que  proporciona  á  la  2ona  agri- 
cuUora  losi<  animales  útiles  para  el  traimjo  y  las  carnes  para  sus^ 
tentó  de  sus  habitantes.  Su  porción  central  oñrecerá  alpn  dit 
iguales  ventajas  á  las  generaciones  futuras  que  desmontaráa  las 
grandes  selvas. 

Los  llanos  son  un  campo  perenne  de  instraedon  guerrera  para 
sus  intrépidos  moradores.  Acostumbrados  desde  su  juventud  á  doi- 
mar  el  potro ,  á  luchar  con  el  to^o ,  á  pasar  á  nado  los  ríos  cau* 
dalosos  y  á  vencer  en  angular  combate  al  cahnairyai'tigre,  loi 
llaneros  se  acostumbran  á  despreciarlos  peligros.  Guando  la  guerra 
los  distrajo  de  sus  ocupaciones  ordinarias,  el  enemigo  los  en» 
contró  ya  soldados  aguerridos.  Ayudados  dé  un  temperamento 
robusto  Y  habitando  bajo  un  clima  mas  bieu«eal|irosa  que  frió  ^ 
sus  necesidades  son  mui  pocas  :  en  paz  ^  la  soga  de  asilasar  f 
el  caballo  ;  en  guerra,  el  caballo  y  la  lanza.  Prácticos  del  ter- 
reno y  con  la  movilidad  que  les  proporciona  su  lijero  equipaje, 
los  hombres  de  los  llaoos  ntf  paeém  servenddos  sino  por  hom- 
bre» de  kHPlInios^  y*  Yeoeni^  tiene- «t^aforiiariiiiiieíaaa^flabtnas 
y  en  el  pecho  áe  sus  hljofs  valerosos ,  él  vms  ñra»  Mearte  éoi 
la  independencia  nacional . 

No  se  crea  por  esto  que  la  zona  de  las  crias  es  un  estéril  arenal  ¿ 
una  tierra  sin  agua,;  ni  que  sus  habitantes  son  pueblos  nómadesi 
con  tiendas  portátiles.  Al  contrario^  es.  uu  suela  fértil  y  bien  pro^ 
visto  de  agua.  Bái!  ciudades,  villas ,  pueblos,,  y  hatos  diseminados! 
por  los  esteúsas  llanuras  :  dos  navegables  las  atraviesan  en  dlle«* 
rentes  direcciones,  y  tos  ganados  vagando  en  medio  de  aquelIasB 
dehesas  en  una  entera  libertad  vienen  á  reunirse  en  determina** 
das  épocas  y  por  los  esruerzosdel  hombre  en  los  lugares  destinado^ 
j^asftlos  rodeos.  Áotes  de  HAS  na  había  en.  esta&.^abanas  siotíl 


U  Tocaya'  foe  hablan  feFm«i«eido  ¡tor  loveto  tíeiipo^  «nía 
Jiltó¥a'Graiiaá&  ^  fui  ^  ytlmOKx  q«e  emno  i  J«b  Um»^  algoa 
:fpDBd»  vaeiHS»  ((«6  t«tt¿^de  CdPO  j  del  Tocwfav  Eitat  Ikaacas  no 
mtam^^  pff«sei^0 a^pidto  mifeiflaiáad  meaótoiia  y  fiastídldmar: 
íiesm^  Mft  YaiíifiiaiW9  y  penpeetívas  agiadables*  Mo  en.  todas  ellas 
ü  mfre  el  esiiüt  aiMeasader  de  )m  retraes  bajas,  pues  en.  cleatoa 
fftaJe&eKi  besluitemeiile  modlfiewfe  ki  toi)feFati»%  pee  Gsyosas 
taetfes  y  y  ana^e  hai  alfaaoa  lugares  espinstosii  ka  fiebres  iof- 
táfMlcateSj,  e^jee  lo  gStefü^  seeo  el  aire  f  el  clima  salodabft, 

laa  mbmsB  de  Gomaná  y  Baioelo&a  se  dividen  en.  dos  clases 
íAm  BMHtiadas :  ka  de  Caraca»  y  Carabobo,  en  tres  mal  diferentes 
de  aquellas  :  las  de  Barinas  son  distintas  de  las  anterím^es :  las  de 
Ajgtwe  tioita  sua  earaetérea  farlicukirea :  las  de  Guanana ,  en  tn , 
ae  düereneiaaf  ooBsidefablemefite  de  todtos  las  menékmadas  y  entre 
ai  IBÍSBH&  tienen  notables  variedades.  Do  manera ,  <|He  se  paede 
di9eír^  que  cada  §rande  poreion  tiene  un  tipo  particular4^o1^^*^ 
ÜBfue  de  las  ésmas^  y  sos  faeeioaes  priacipides  meceeen  ser  desp 
eritasw 

Bn  li»  j^aviacias  da  Bareeiona  y  Cumaná  ocupan.  ^  osntco  de  las 
llanuras  una»  mesas^  ¿pidas i  desprovietaa  de  grande»  vegetales', 
donde  el  vifitíeAi  moriria  de  sed  si  uo  llevase  agua  consigo.  Sus  su»- 
j^rfima  planas  etíé&  cubiertas  de  capas  de  ar^a  en  la  que  nace 
una  pi^  fallida  y  poco  nolritiva.  ]&ia  lypsna  absorbe  todaa  las  agu^ 
Ikfvediaas ,  las  cuaiet  se  inárodieeii  ea  to  ialert<^  de  las  mesas  "y 
fior  'sus  bacdea  filMa  después ,  daado  atíf^  á  multitud  de  ríeew 
fie  esioS)«  udfr  mtum  hicia  el  &.  hasta  <a^  al  OcInoeD ;  otroB  dir»- 
gíéBdoae  al  E.  se  pieréeiH ea  el  golfade  Patia;  y  otiios^  en  fia^  iúh 
mnida  lo  yia  áel  N.  sm  tribuluáos  del  mar'  de  las^  Aatittas»  Lae 
'  sabaaae^qua  esriai;  tá  oráKte  de  estas  metfis  entre  ellaa  y  el  delte 
éA  Ociaoeo,  tiaatti  sM^e  Uft  aspecto  verd%  y  abundanda  da 
aguaren  laaque  ereeen  afnipadas  las  paknas  de  morlelie.  Estaa 
pkméaa  gtfe  viire  ^  fuaflia  ^  guii»  al  viajero  sediealo^)  ^sm  ^ 
ciaito  da  eaceaítrar  á^  pié  una  agua  d)Bira»y  agradd^le ;  peroieopa 
aif  lerraia  ea  quecraoea  es  iúsadot  y  cenagosa ,  ao  serla  prudanfis 
iateiita*.d  paao  «fe  los  atorieAofaf .  fia  dips  se:  oeuoeatiaa  las 
pnndéspraadpaliBWrtfe  en  la  erti^Bion  seca  del  Teiafla.  A  ftof&í^ 
4fto  cpas  laa  si^anaa  están  mas  tamedíatíis.  al  dslto  ó»la  laaie,  eoOr 
semoL  ana  fteatua  te  iat^piÉlos;  asi  r^gegxé  te»  Uufías  $m 


en  ellas  ons  frecuentes,  como  por  efecto  de  las  iüuBdadones.  Las 
sabanas  que  están  al  occidente  de  las  mesas,  se  componen,  en  parte, 
de  peqoeSos  teirenos  realzados  4  mesitas ;  en  parte ,  de  llanuras 
cubiertas  de  chaparrales  y  también  de  grandes  espacios  limpios  con 
algunas  palmas  de  hojas  en  forma  de  abanico.  Mui  pocos  moricha- 
les se  encuentran  por  aquella  parte  y  los  caños  y  rios  no  son  abun- 
dantes de  agua.  Raro  es  el  punto  que  atli  queda  anegado :  en  las 
mesas  ninguno ;  pero  en  las  llanuras  mas  próximas  al  delta  el  agua 
cubre  una  grande  estension,  obligando  entonces  los  ganados  á  bus- 
car un  asilo  en  el  declive  lenio  y  suave  dé  las  mesas.  Cuando  en  las 
sabanas  orientales  se  goza  de  frescura ,  las  occidentales  están  suje- 
tas á  una  temperatura  mui  elevada  y  en  las  mesas  el  calor  es  casi 
insoportable. 

"En  las  provincias  de  Caracas  y  Carabobo  hai  tres  distintos  aspec- 
tos mui  marcados  en  sus  llanuras,  cuyo  declive  general  es  de  N.  á 
8.  Desde  que  se  deja  á  la  espalda  la  serranía ,  empie^  una  serie 
de  colinas  y  terromonteros  cubiertos  de  paja,  que  vistos  desde  una 
eminencia  parecen  olas  del  mar  cuando  está  agitado.  Mas  adelante 
una  galera  peñascosa  corre  paralela  á  la  serranía,  y  en  varios  pun- 
tos está  abierta  para  dar  paso  á  los  ríos.  Después  se  distinguen  de 
distancia  en  distancia  cordones  de  peñascos  paralelos  á  la  galera,  á 
los  cuales  se  da  el  nombre  de  petríles,  y  tan  alineados  que  parecen 
obras  humanas.  Mas  allá  se  pierden  las  llanuras  en  palmares ,  en 
matorrales ,  en  algunas  mesas  pedregosas  ó  llanuras  con  bancos  y 
en  pocas  sabanas  limpias.  Siguiendo  la  línea  central  hada  el  S., 
en  dirección  de  la  boca  del  Apure,  presentan  las  sabanas  otras  dos 
variedades  ."las  del  alto-llano  al  oriente  y  las  del  Baúl  al  occidente. 
En  ambos  se  elevan  como  islas  en  un  mar  de  yerba;  allá ,  los  cer^ 
ros  de  Tucusipano,  Macho  y  Magdalena ;  acá ,  los  de  k  galera,  del 
Baúl,  de  S.  Bartolo  y  de  Cbarco-aisul :  aquellos  son  formados  por  * 
amontonamientos  de  enormes  peñas ,  compuestas  de  una  mukilud 
de  pequeñas  piedras  pegadas,  que  representan  una  especie  de 
•mosaico  mui  particular  :  estos ,  de  una  greda  parda  oscura , 
mezclada  de  cascajo  y  en  forma  de  pezón.  Las  sabanas  próximas 
<&  Tucusipano  son  elevadas  con  varias  mesas  cubiertas  de  pie* 
4ras  menudas,  algunos  palmares  y  varios  motíehales  que  les  sirven 
de  adorno  y  para  aguada  de  los  animales.  Tienen,  sobre  todo>  una 
disposición  particular  en  lá  superOcie  del  suelo ,  que  brinda  facili- 
dad p»a  hacer  lagunas  ariificiales  eadoiHle  no  las  hai  naturales  { 


—  65  —    ^ 

mientras  que  ea  las  Ilaaaras  inmediatas  á  los  cerritos  del  Baúl,  no 
hai  mesas  sino  sabanas  bajas  y  mochas  de  ellas  limpias  ó  con  gran* 
des  palmares,  algunos  esteros,  ningún  morichal^  vadas  hermosas 
lagunas,  ños  y  caños  que  conservan  aguas.  En  las  primeras,  en  la 
estación  de  las  lluvias  hai  pocas  partes  inundadas  y  en  las  segundas 
solo  algunas :  aquilas  desaguan  en  el  Orinoco ,  mientras  que  estas 
lo  hacen  en  el  Apure.  Pero  en  todas  ellas  el  calor  es  sofocante  á  cau- 
sa de  venir  ya  el  aire  calentado  por  las  mesas  de  Gumaná  y  Bar- 
celona, y  pasar  después  por  llanuras  casi  desprovistas  de  agua. 

En  la  provincia  de  Barinas  los  terrenos  de  cria  tienen  faccio* 
nes  distintas  de  las  anteriores.  Las  faldas  de  la  alia  sierra  de  Mé- 
rida  y  de  los  páramos  de  Trujillo  y  Bafquisímeto  se  pierden  á  un 
tiempo  sobre  las  sabias  de  Barinas/ y  entonces  un  declive  suave 
del  N.  O.  al  S.  E.  se  dirig^sobre  la  Portuguesa  y  el  Apure.  Cauda- 
losos ríos  bajan  de  la  elevada  sierra  y  lodos  casi  paralelos  siguen 
el  mismo  declive ,  limitando  de  este  modo  las  sabanas ,  que  todas 
tíenen^por  confínes  el  pié  de  la  sierra,  por  una  parte,  el  Apure  ó 
la  Portuguesa  por  la  otra  y  á  sus  costados,  ríos  casi  siempre  nave- 
gables, con  orillas  fértiles  y  hermosas  vegas,  útilísimas  para  el  cul- 
tivo.* Así  es  y  que  el  habitante  de  esta  vasta  provincia  puede  ser 
agrieuUor  y  criadora  la  vez ,  con  la  grande  ventaja  de  poder  em« 
barcar  sus  frutos. entre  las  mismas  haciendas.  Vista  una  de  aque- 
llas sabanas  se  han  visto  todas,  porque  todas  llevan  el  mismo  tipo. 
Desde  que  se  deja  el  pié  de  la  cordillera,  no  se  encuentran  ya  cer- 
ros de  ninf^na  clase  y  la  vista  se  pierde  sobre  la  ostensión  de  aque- 
llas llanuras  cuyo  horizonte  se  confunde  con  el  cielo.  Los  montes 
que  están  á  las  márgenes  de  los  rios  parecen  altas  paredes  de  ver- 
dura ,  y  en  medio  de  estas  Qtras  pequeñas  oasi  paralelas  cubren 
unos  caños  que  sirven  para  desaguáis  las  sabanas  en  las  épocas  de 
las  grandes  Üuvias,  recogiendo  y  llevando  las  aguas  á  los  rios;  pero 
como  estos  se  encuentran  con  el  Apure  represado  por  el  Orinoco,  en 
tiempo  de  las  lluvias  no  pudiendo  descargar  con  toda  libertad  ,  se 
hinchan  y  refluyen  hacia  los  canos.  Estos  salen  entonces  de  madre 
y  se  desparraman  por  las  sabanas,  cubriéndolas  de  agua  que  sube 
algunos  pies  en  sus  partes  centrales,  y  que  solo  deja  descubiertas 
las  laterales  ó  mas  próximas  á  los  rios  y  algunos  bancos  que  ape- 
nas el  ojo  observador  pupde  reconocer.  Mo  duran  todo  el  invierno 
estos  derrames,  sino  el  tiempo  en  que  fuertes  y  seguidos  aguaceros 
han  caido  con  igualdad  por  todo  el  territorio.  Tan  luego  como  el 


.   .        _      «0      — 

Apure  paede  recibir  las  aguas,  qüedaredncMa  la  inandadoa  á  aque^ 
lias  sabanas  mas  bajas.  Pocos  palmares  se  ven  en  estas  llanuras^  a!- 
gomae  manchas  át  bosques  que  se  pierden  en  un  horizonte  oscurir, 
y  muchos  esteros  que  cubiertos  de  agua  en  el  invierno ,  conservan" 
imsto»  frescos  en  el  verano.  Espacios  limpios*  se  estienden  hasti 
perderse  de  vista ;  mientras  que  en  las  partes  laterales  se  presentan 
unas  barreras  que  parecen  colinas  lejanas,  na  siendo  sino  los  bo8<* 
ques  que  sirven  de  adorno  á  los  píos.  Las  riberas  de  estos  están  po*- 
bladas  de  aldeas,  caserías  y  hatos  cuyos  moradores  buscan  allí  se«* 
guridad  contra  las  inundaciones ;  sombra  y  frescura  que  dan  los 
árboles  contra  *el  rigor  del  dima ,  una  tierra-  fértil  para  sus  sien»^ 
bras,  y  una  pesca  abundante  de  que  hacen^su  principal  manteni* 
mienío.  El  maiz  y  la  yuca  les  dan  un  pan  sustencioso ;  y  mas  variado 
«1  suculento  plátano ,  que  se  reproduce  porsi  mismo  y alcauza  uua 
vid^  mayor  que  la  del  hombre  sin  necesitar  de  sus  cuidados.  La  poi- 
blacion  crece  con  asombro  &  las  márgenes  de  estos  ríos,  por  la  facr» 
fídad  que  hai  allí  de  procurarse  los  medios  de  subsistir.  En  aquellos 
ftigares  el  calor  está  modificado  por  la  frescura  que  comunican  ák 
noche  los  vientos  de  la  serranía ;  los  cnales^  suelen  enfriar  mucho 
mas  que  en  otras  partes  la  tierra  calentada  durante  el  dia,  y  tam- 
bién por  la  que  dan  las  aguas  y  los  bosques  de  los  grandes  ríos 
que  atraviesan  por  todas  partes  las  sabanas. 

Las  llanuras  del  Apure  no  tienen  comparación  ninguna  con  to- 
das las  descritas  hasta  aquí :  es  una  tierra  tan  igual  y  plana,  que  su 
descenso  no  se  percibe  ni  en  el  curso  de  las  aguas  áHt  rio  Apure 
que  las  costea  por  una  parte,  ni  en  el  del  rio  Meta  que  les  sirve  dé 
bofde  poria  otra ;  pues  el  menor*  viento  de*  E.  6  la  menor  crecida 
del  Orinoco  lashace  retroceder.  Estas  sabanas  son  el  estremo  dd 
declive  de  la  gran  cordillera  áe  los  Andes  de  Pamplona,  que  se  d^ 
rige  de  poniente  á  naciente.  Ni  ur  peñasco,  ni  una  piedra,  ni  un 
cascajo  se  encuentra  en  estas  planicies :  arena  y  greda  es  todo  lo 
que  entra  en  su  composición.  Sabanas  limpias,  siempre  verdes, 
siempre  frescas  y  de  alta  paja ,  cubren  una  inmensa  estensi«m  :  el 
nivel  casi  perfecto  de  todas  his  partes  de)  terreno  Ms  asemeja  tanto 
á  la  superficie  del  mar,  que  á  su  vista  ocurre  el  pensamierrto  de 
que  en  tiempos  remotos  f  iMiron  niveladas  por  la  estación  perenne 
de  las  agua^.  En  medio  de  aquel  océanu  de  verdura  sucede  al  via- 
jero lo  que  al  navegante  cuando  empieza  a  descubrir  las  velas  de 
un  buque  que  asoma  sobre  e\  horizonte.  Algunas  matas,  que  son 


p^eBotrfpii^dA  árbotos,  pafieeen  nares  á  la  velay.pMlueetttQ» 
m  1<9lloM.  el  efecto  de  estas^.  Otras  vezes  la  masa  yajporosa  esleodUtUr 
em  la  aliDifMera»  da  á  las  mbana»  el  asn^cto  mísino  de  un  mar  le«« 
ja«B^  9ie.  siiiB^ve  á  igual  ditlasda  pareee  que  huye  delaatp  d^  - 
TÍajiece. 

L&uitfMixiádaddeiaqBriloa  IlaHos  ea  doode  todo  parece  iomófil!^ 
nftdijftde  tet  io^oiMatiei  aoaqoe  tsiste*  Los  ganados,  caballos  j 
m&\ae  se  cckoi  y^amUiplican  cea  una  íeeUidad  sorpreodeate.  AlJtf 
nOíQeceúlaiii^enHigttft  modo/ los  desvelos  del-  hombre^  miéotra» 
qpift  ea  laaeins  sabamiSy  abaodaiites  áe^  moscas  á  causa  doilot- 
hoe^oss,  d  cshdor  debe  cuidar  OMieho  loa  veden  nacidos  espuestot- 
ékset  TÍetimaa  da  los  giuaQOs,  cuando  el  oaibiigo  no  ha  llegado  m 
deiÉrizarse.  Pance  regla  general.en.  estos  Haitos,  que  eoanto  ma& 
bosques  ¿^matomles  se  encuentran  en  ellos,  tanto  mas  abunda  aUí 
d  gusano;  y*  euanAo  mas  grande  y  limi^ia  de  árboles  es  la  sabana, 
m^s  aerados  están  por  insectos  dañinos.  En  este  último  cas» 
estí^  lasiéel  Ap«re,  en  que  apañas  tienea  los  rios  algwios  ribetea 
»  de  aMBÉe  nalOy,  esinido  ca  Hiucbas  partes  enteramente  limpias  son 
oeiUas.  Coa  mas  razoaqneien  loss  riosLSucede  esto  en  los  canos.  Bai 
¿los  bondesde  algunos  uá.peq>ueik>  y  angostetmantecito  y  en  otros 
úmfXe^pa^oualBS  mas  levados  que.  un  hombre  á  caballo.  Los  ye-«> 
^ados  se  veo  pastando  por  aquellas  soledadesen  rebaños  nuniepo* 
sos,  y  los  chigttres  eft  sociedad  y  á  vezes  por  docenas  á  la  sombra 
de  algunamata  en  las  oriUas  del  agua.  Un  prodigioso  número  de 
cumanes  tendidos  sobre  los  arenales  de  los  rios,  están  siempre  ca-» 
IcBtindoee  at  sol  con  su  aneha  boca  abierta. 

El  aspeeto  d&  la  tierra  ta»  uniformemente  nivelada  ojrece,  shi 
eadiaii^  algunas  pequeSas  desigualdades  causadas  por  los  mé- 
damos  y  bancos:  Aquellos  son-  unos  terrenos  un  poco  arenosos,  que* 
^  ele?aa  algunas  varas  sobre  la  llanura,  mientras  que  los  otros' 
soft  de  greda,  alzándose  pocos  píes  sobre  el  nivel  general.  Difícil  es 
conocerlos  si  no  se  examinan*  bien  sus  bordes ,  que  las  mas  vezes 
son  io^erceptibles  á  la  vista ,  como  no  sea  en  la  estación  de  las' 
lluvias;  porque  enlónees  los  médanos  y  los  bancos  quedan  en  seco 
cumida  el  resto  do  la  sabana  está  cubierto  de  agua.  En  est^i  mé- 
danoft  y  bancos  esláa  los  pueblos ,  los  oaserios  y  los  hatos  que  se 
eneoeatraa:  á  distancia  de  muchas  l^uas  unos  de  otros,  y  allí  es 
donde  se  refugian  les  ganadas ,  porque  las  aguas  ocupan  las  partes 
mas  b^a8«  ÁlU  se  emBmMffo,  sútkicntes  pastos  para  el  tiempo  que 


—  68  — 

dart  la  esiacion  inTernal,  mal  penosa,  sin  enribargo,  para  el  ^i- 
'n^doy  para  el  hombre,  por  ei  aumento  de  calor,  la  falta  de  la 
brisa  y  el  número  consideróle  de  insectos.  En  el  verano  no  falta 
•-abundante  pasto  fresco  y  agna  en  los  ríos,  caños  y  lagunas ,  fre- 
cuentados siempre  por  tantas  aves  que  llegan  á  cubrir  sus  orillas  y 
la  superficie  del,  agua.  Los  galápagos,  morrocoyes  y  cachicamos 
ofrecen  platos  delicados  á  ios  habitantes  de  los  Llanos,  y  asítni^no 
la  variedad  de  pezes  que  allí  se  encuentran.  La  brisa  del  £.  y  de 
£.  N.  E.  sopla  con  violencia  y  aumenta  su  fuerza  añedida  que  el 
sol  -^be,  disminuyéndola  á  proporción  que  el  astro  declina ;  pero 
como  estos  vientos  empujan  por  ddante  de  sí  las  capas  de  aire  ya 
recalentadas  por  las  mesas  de  Barcelona  y  las  llanuras  de  Caracas,, 
llegan  á  estas  sabanas  con  ráfagas  abrasadoras.  Desde  diciembre 
hasta  febrero,  está  el  cielo  constantemente  sin  nubes  y  es  muí  raro 
que  alguaa  se  presente;  pero  la  atmósfera  constantemente  oscu*^ 
recida  por  el  polvo  y  unos  torbellinos  de  este  movidos  por  cor- 
ríenles  de  aire  que  solo  existen  en  la  superficie  del  suelo,  aumentan 
éí  calor  sofocante  del  aire,  a  Hacia  fines  de  febrero  y  principios  de 
«  marzo,  (dice  Humboldt)  es  menos  intensa  el  azul  del  cíelo,  el 
«  higrómetra  indica  poco  á  poco  mayor  humedad,  las  estrellas 
(^  suelen  estar  empañadas  con  un  líjero  velo  de  vapiures ,  su  res- 
«  plandor  es  menos  tranquilo  y  planetario  y  se  v^  centellar  de . 
«  cuando  en  cuando  á  20*"  de  altura  sobre  el  horizonte.  La  brisa  se 
«  va  haciendo  menos  violenta- é  interrumpida  por  calmas.  Luego 
«  se  acumulan  nublados  hacia  el  S.  S.  £.  que  parecen  como  mon* 
<i  tañas  lejanas  de  perfiles  muí  fuertemente  señalados :  de  cuando 
a  en  cuando  se  desprenden  del  horizonte  y  atraviesan  la  bóveda 
«  celeste  con  una  rapidez  que  no  corresponde  á  la  debilidad  del 
«  viento  que  reina  en  las  capas  ioferiores  del  aire.  A  fines  de  marzo 
«  se  observa  la  región  austral  iluminada  por  algunas  esplosioncillas 
«  eléctricas  que  son  como  unos  resplandores  fosforescentes  circuns- 
«  crltos  en  un  solo  grupo  de  vapores.  Desde  entonces  la  brisa  pa* 
«  sa  frecuentemente  y  por  muchas  horas  al  O.  y  al  S.  O.,  y  esté  yá 
«  es  un  signo  seguro  de  las  lluvias  que  empiezan  en  Apure  y  sobre 
(i  el  Oiánoco atines  de  abril.  £1  cielo  comienza  á  empañarse,  desa- 
«  parece  el  color  azul  y  se  estiende  un  velo  pardo  en  todo  él.  Al 
u  mismo  tiempo  se  acrecienta  el  calor  de  la  atmósfera :  bien  pronto 
«  no  haí  ya  nubes  ano  densos  vapores  que  cubren  la  bóveda  celeste. 
«  Los  monos  aulladores  comienzan  á  hacer  resonar  sus  ecos  lamen- 


» 


-  -  -^ 

■I 


i 


tf  • 


~^69  - 


i  tosos  miic|K>  antes  del  amanecer.  En  fin ,  el  aspecto  de  cíelo ,  la 
«  marcha  de  la  electricidad  y  los  chubascos  anuncian  la  entrada  de 
«  la  estación  de  las  llavias.  »  A  la  vista  de  estas  señales,  emf^ie^ 
sa  el  llaiiero  á  moyer  sus  rebaños  para  sacarlos  de  los  bajos  «que 
▼an  á  cnbrirse  de  agua ;  bien  que  el  ganado,  sea  por  instinto  ó 
por  costumbre,  emprende  por  sí  solo  la  Mirada  hacia  sus  inver- 
naderos, tan  luego  como  los  primeros  truenos  ó  las  primeras  llu- 
vias indican  el  cambio  de  la  estación. 

En.el  invierno  es  cuando  el  Orinoco  crece  considerablemente  y 
sirve  como  de  represa  al  Apure,  él  cual  no  puede  desaguar  con  faci- 
lidad por  no  tener  una  velozidad  y  volumen  capazes  de  abrise  palo 
por  entre  el  raudal  que  se  le  opi^.  Hínchase,  pues,  y  no  p!|«    ' 
diendo  sus  bordes  contenerlo ,  sale  de  madre  y  redunda  por  todas 
partes.  La  represa  que  hace  el  Orinoco  al  Apure,  la  ejerd^  este  so-    • 
bre  muchos  de  sus  tríbufarios ;  así  que  la  causa  principal  de  las  * 
crecidas  de  los  ríos  de  los  llanos  es  debida  á  las  crecientes  del  Orf^    * 
ñoco.  Entonces  es  cuando  el  bajo-Apure  presenta  las  inundaciones 
del  bajo-Egipto :  sus  sabanas  ofrecen  el  aspecto  dé  grandes  lagos  con 
islas  en  medio.  Espacios  hai  de  50  leguas  de  largo  sobj^seis  ó  siete  '* 
de  ancho,  que  están  cubiertos  de  40  ó  '1 2  pies  de  agua ;  otros  son  ..  ^ 
menos  profundos ,  pero  siempre  lo  bastante  para  ser  gravados  ea 
todas  direcciones  por  las  piraguas,  canoas,  y  bongos,  que  en  aquella 
estación  sustituyen  á  los  caballos.  El  ganado  que  no  ha  tenido  tiem^i 
po  de  recogerse  á  los  invernaderos,  corre  mucho  riesgo  de  ahogac» 
se  j  y  si  por  acaso  llega  á  guarecerse  en  aquellas  pequeñas  islas, 
«s  ordinaiiamente  pasto  de  los  tigres  que  van  allí  también  á  bus- 
car un  asilo.  Puédese,  sin  embargo,  cuando  se  tiene  práctica  del 
terreno,  comunicar  á  pié  ó  á  caballo  de  un  hato  á  otro,  aiínque 
siempre  con  mil  riesgos  por  los  caimanes,  los  tembladores  ó  torpe- 
dos y  las  rayas;  y  aunque  en  estas ^avesías  hai  frecuentemente'  • 
que  nadar  grandes  trechos  que  ocupan  los  estenas ,  ^los  Caños  y 
los  imi,  en  otras  partes  es  absolutamente  necesario  embaircarse, 
como  ^cede  entre  el  Apure  y  el  Arauca  y  desde  ¿ws  abajo  de  S. 
Femando  hasta  el  punto  del  Jagual ,  entre  Arichuua,  Gunaviche  y 
Caiiben.  Tirando  una  línea  desde  S.  Femando  hasta  la  boca  de 
Capanaparo,  siguiendo  el  curso  del  Orinoco  hasta  el  Apure  y  con- 
siderando este  rio  como  una  tercera  línea  que  llegue  al  mismo  S. 
Fernando^  encontraremos  un  delta  j^teriorá  420  legwts  del  mar; 


_  70—      ■ 
-ieadmeno  Ufet^áfico  qae  6e(tuii'fltinri>ol¿t,  oütce  poc«s  e|eii^Ios 
4o  el  antiguo  mtindo. 

'  Toando  la  credcnto'ba  dcaozado  todo  «m  incremeiito,  lejanías 
•CBbarcacJones  el  álveo  4e -los  rioe,  que  ala  deswnl^  4e  prolon- 
far  el  camino,  aneo  el  «ibstácDlo  de  las  oorrientesy  el>peli^de 
'-Ins  árboles  que  arn«li«a ,  y  se  entniD  i>or  tnedio  de  las  «rbatns 
cuya  agoa  estancada  M  eiitenuneole  clara.  No  mcede  lO  misma  ea 
laelierfas  del  Allo-Apore,  pnes  aunque  liaoen  graddes 'llnnnw , 
dirandadas  é  inmeiKOs  esteros ,  sin  embaoge ,  loe  bancos  'y  méda- 
nos iireporoiómni  caininoB  para  transiUr  y  iniiohos  mae  lagares 
<yara  el  refugio -de 'los  animales',  entre  les  coaleehti  un  gran  Di- 
eres ,  producen  gran- 
ar, qee  esáSnesde 
m  las  iDtmdaeioDes, 
caBos  qse  van  dismi- 
ú  ealor  las  baoe  «va- 

i'por  ttposas-grandas 

K^ilas  galeresY  pre-- 

nte'MKajonHdo  entte 

mível  y  ns  plaajoíes 

idas  «las  •«n  >eirotlin- 

iae  <de  Oammá,  jOu- 

,  AaiimesasBltas,  la 

-nayoriparle  arenosas,  cayos  declives  vienen  á  pCid^se  sófora  erie 

lie^  femando  algunas  revés  á  sos  bases,  ptonieies  que  en  jas  (M- 

cientos  sonoeupadas  por  las  Bgua§.  A  Ja  opuesta  'ribera  .-«sidedt, 

«n  la  de  'la -GaaiyanB ,  el  aspevto  de  las  sabanas >da  i  comtcrqae 

perteaeeeo'Ql  sratcma  de  la  Parina,  en  tododirer*nte'deIa«a>ni- 

.itíade'CBráctt.y  de  Herida.  Tampocastm  iguales  áias  del  Canuií, 

qae  ana^oe  batieu  parte  del  sieiema  de  la  sernorfa  de  Imalaca  qae 

«fiHuasratnifieacionde  li  <V^ima ,  sen ,  'sin  embargo ,  de  un  aspee-  - 

)to  'tétadmente  dtétinto.  las  del  Caroní  son  mas  fl*eseB8  y  de  me- 

j^rasipastos ,  rciultendo  las  Teutajas'deiteBGivá&lremeB(jlad«e«en(i- 

-110»  lanferazes  gwxkIos  irlDes  de  Aragaa.  Baáa  en  'tAa  llnora 

.jgw'se'eleía  900  yans  Mbre 'Bl>sÍTeÍ4el.nMr  itaipvnpMltTaes 

,]Mloraca  T  «nibili  iaiiafuso  poMos^irv4iK«ü9(eH«iiM«s,«ft- 


*  ••  i; 

i  .  * 

—  7+  — 

linasy  boifiMKálkB ;  rkvs ,  morlcbafles  y  jabant^llfiqíiaft  7  ^Bámém^ 
tes  de  agua^  las  'Caales  no  se  ínunáan  á  p^ar  de  *qm  NiaeTé  mas  % 
sALí  que  en  otras  partes ;  á  cansa  de  su  aproximación  á  la  m»r  y  á 
las  grandes  selvas ,  coyas  evap<HracíoBbes  llevan  los  ^vientos  del  ,E.  N« 
'£.  Las  otras  sabanas  qae  acecinan  el  Orinoco  ordioarjameaie  em- 
piezan  por  grandes  mesas  deyadas ,  qne  á  primera  vista  parejean 
iguales  á  las  de  Barcelona;  pero  se  observa  qae  en  ella*  la.pen« 
penetra  el  suelo  y  las  rocas  d^nndas  y  de  formas  capnchosas  ^oa 
cetros  agnfpados  en  dístihtfs  direccicmes ;  se  ven  asomar  per  todas 
partes.  En  las  mesas  de  Barcelona  no  hai  sino  sseaá  ó  ttina«gn0(la  . 
compacta ,  y  sus  bordes  son  ^mos  frecuentemente  escarpados ,  for^ 
mando  una  especie  de  farallones  :<  en  estis  otras  son  raros  esm 
enormes  barrancos ,  y  las  mesas  se  pierden  suavemente  en  llannras 
mas  ó  menos  elevadas ,  que  alternan  con  tierras  bajas  muí  cstensas. 
No  siempre  se  ve  en  ellas  la  ar^a^  y  soloiel  granito,  se  presenta  á 
flor  de  tierra.  Los  ardores  del  sol  están  áHi  mitigados  por  los  vien- 
tos del  £.^  qne  nevando  la  temperatura  suave  ée  los  vatros  M' 
mar,  reciben  amn  nnevos  grados  de  freseura  al  pasar  ^r  Jos  bos- 
ques muiestensos,  sobre  las  aguas  perennes  de  los  moricbalesy 
sobre  varios  rios  caudaleeos.  * 

"Suceden  a  las  mesas  hermosas  sabanas  cortadas  en  diferentes 
direcciones  por  una  mnltitud  de  aguas  e^rrientes  ^  que  c^i  todos 
pasan  sobré  rocas  granítidas  que  están  al  nivel  del  terreno.  '    . 

Salen  de  en  medio  de  Ja  paja ,  grandes  lajas ,  enormes  peñascos 
y  aun  cerros  de  figuras  raras  que  al  parecer  formaban  en  otros 
üempos  parte  de  la  cadena  de  montañas  destruida  hoí  día.  Otros 
cerros  se  presentan  tatf  desordenadamente  esparcidos ,  que  no  es^ 
posible  conocer  la  dirección  principal  del  sistema  á  que  pertenecie- 
ron. Aguas  dulces  de  admirable  trasparencia,  corren  por  todas^ 
partes ;  blancas  algunas  y  superficiales,  otras  oscuras  en  profundos, 
pozos,  comunmente  habitados  por  enormes  culebras  de  agua  que- 
ba^n  su  presa  de  un  toro  ó  de  uncaballo.  Estas  tierras  de  pasto- 
no  se  inundad  ysolo  unaque  otra  parte  baja  llega  á. ser  cubierta 
por4as  aguas  en  la  estación  del  invierno.  Desde  Calcara  hasta  'la 
tegi(m  de  los.  raudales  os  igual. ía  fisonomía  del  pais,  boi  (olal*  • 
mente  desierto^y  solo  recorrido  por  los  t^res  y  otras  fieras.  Nubes 
de  grandes  jnurciélages  salen  al  anochecer  de  los  intersticios  de  las  «^ 
rocas  á  bij^scar  en  las  fruías  el  alimento  necesario  á  su  subsíljlencia,  a 

Estas  verdadofias  soledades  son  rara  vez  visitadas  por  algún  viaj^o  « 


—  72  — 

ó  pon  algunos  indios  cazadores.  No  hai  en  lo  interior  viviente  al- 
guno de  la  raza  linmana^  y  s(^o  cerca  del  Orinoco  existen  algunas 
pequ^as  poblaciones ,  distantes  entre  si  días  enleros  de  caminp; 
siendo  mas  fácil  la  comunicación  entre  ellas  por  el  rio  que  por  tierra. 

Esta  Eona  apenas  tiene  590,000  almas  que  están  én  razón  de  45 
por  cada  legua  cuadrada ,  cuando  podría  mantener  una  población 
de  mas  de  6,000,000,  dándole  solo  700  almas  por  cada  legua  cua- 
drada ,  cálculo  mui  bajo  sí  se  considera  que  cada  rio  ó  caño  pro- 
porciona vegas  grandes  y  fértiles  para  ^1  cultivo  del  maiz,  del  plá- 
tano y  de  la  yuca,  y  qne  las  sabanas  dan  carne ,  queso  y  leche ,  sin 
contar  con  la  caza  abundante  de  venados ,  chiguires,  váquiros ,  ca« 
•chicamos,  galápagos ,' terecayes ,  morrocoyes,  multitud  de  aves 
acuáticas  y  la  inmensa  cantidad  de  pezes  y  tortugas  que  suminis- 
tran los  ríos  y  los  caños. 

Aquí  termina  la  grande  zona  de  pastos  que  se  estiende  de  E.  á  O. 
200  leguas ,  desde  el  pueblo  de  Barrancas  en  el  vértice  del  dejta 
del  Orinoco ,  hasta  el  desparramadero  del  Sarare ,  en  los  conQnes 
de  la  Nuevt-Granada ;  teniendo  de  S.  á  N.  casi  ^00  leguas,  desde 
cerca  del  Vichada  hasta  la  serranía  del  Pao  en  la  provincia  de  Cara- 
bobo.^  Ocupa  el  todo  una  estension  de  9,000  1.  c. 

Las  oíüco  especies  de  sabanas  de  que  se  compone  la  zona  de  las 
crias,  están  diMribuidas  entre  las  provincias  del  modo  siguiente. 


1            • 

* 

• 

Comaná  v  Barcelona. . 

w 

Altura  inedia 

sobre  el  nirel 

del   mar. 

Lé|;oas 
cuadradas. 

S40 
180 
190 
130 
145      -^ 

1.979 
S.973 
1.500 

4.936 

Gtrácas  y  Garabobo 

JPaiU*sS*'  ••■■#••*•*••■•--*---->->>- 

Apillre 

* 

Guayana.. •••*. ,,r - - 

* 

Total...  . .............. 

9.000        1 

r 

^ 

\ 

A 

^  75  — 


ZOHk  DE  IOS  BOSQUES. 


Recorramos  ahora  Tai  tercera  zpna  de  Venezuela  ó  la  zona  de  las 
selvas,  tan  grande  por  sí  sola  en  estension  como  las  dos  descritas. 
En  ella  se  encuentra  la  naturaleza  en  su  estado  salvaje.  Los^bordes 
de  lois  ríos  y  las  selvas-  antiguas  ofrecen  los  grados  mas  bajos  de  la 
elvilizacion  humana  :  pueblos  cazadores  y  los  primeros  ensayos  de  - 
la  vida  agrícultora.  En  estos  inmensos  bosques  e^a  donde  ios  intré- 
pidos conquistadores  bascaban  el  imperio  Tabuloso  del  Gran  Patilí, 
la  magnífica  residencia  de  Manoa ,  con  sus  palacios  cubiertos '4e 
placas  macizas  de  oro  del  lago  imaginario  de  la  Parima  que  la  cir-. 
eundaba,  en  cuyas  aguas  se  reflejaba  la  imagen  de  los  sunlu0A)sr 
edificios  de  aquella  ciudad.  Quimera  halagüeña  que  sabian  alimen- 
tar los  indigestas  para  deshacerse  de  sus  incómodos  huéspeées,  in« 
ternándplosmas  y  mas  en  la  tierra  adentro  en  busca  de  lo  que  no  * 
existia.  Er^  un  fantasma  que  llevaban  constantemente  d^ante  de  /* 
sí,  sin  poderle  alcanzar,  y  que  dio  origen  á  las  espediciottes  memo- 
rables de  Ordaz,  de  Herrera  y  de  Spira  en  la  tierra  clásica  del  D%* 
rado  deRaleigh. 

Desde  las  costas  de  la  Goayana  empieza  esta  gran  selva,  y  la  na- 
ción Guarauna  ^  la  primera  que  se  nos  presenta,  conservando  sm 
independeucía  en  el  Delta  pantanoso  del  Orinoco.  Hacia  las  selvas 
de  la  sierra  Imataca,  en  parle  anegadas,  ep  paiie,  cruzadas  de  caños  ^ 
Y  ríos  navegables,  vemos  las  mas  barmosas  maderas  y  las  mas  úti-  » 
les  al  hoj3{bre.  Scio  la  raza  indígena  recorre  aquellas  fK)lttarcasr,  vi- 
Tiendo  doJa  pesca  y  de  las  frutas  silvestres.  Mas^allá  de  la  Sierr^" 
Imataéa  se  estiendé  una  tierra  víifgen  y  desconocida  hasta  cerca  del 
Cufuui.  MiAtañas  desiertas  cubren  aquel  eqpacio  apenas  «habitado 
en  las  orillas  de  losarlos  por  la  tribu  ieroz  de  los  guaicas  y  otros  que 
aun  no  olvidan  la  persecución  de  los  españoles ,  cuando  unidos  es- 
tos á  los  holandeses  salían  á  robar  indios  para  hacerlos  esQlavop^     . 
Mas  allá  del  Cuyuni  la  selva  es  aun  totalmenjie  desconocida,  y  solo 
por  algún  rio  se  introdujeron  vanos  aventureros  en  busca  de  es* 
clavos  hasta  las  cabezeras  del  Caroní  en  la  sierra  de  Roraima. 
,   En  las  óriUas  de  los  ríos  se  encuentran  hombres  ferozes  de  dife- 
reates  tríbus  que  contuvieron  la  persecución  sistemática  practicada 
por  los  frailes  misioneros  contra  los  naturales.  También  se  hallan 
errantes  en  unas  saban'aús  dilatadas  que  hai  entre  aquella  sierra  y 


~  74  — 

la  de  Rmocote ,  á  la.qtie  rodean  grandes  é  impenetrables  bosqtes,  ^ 
algunas  tribus  valerosas  ^^ueliaQv&abidedo&ader  su  independencia. 
La  pesca,  la  caza  y  las  frutas  c^ínponen  sos  aumentos.  Las  riberas 
dd  €aroDÍ,. cubiertas ide  eorpidei^tos^árbúlás  yoioriiiesiaa^ede 
glfiíito,  presentan  raudales  peli^roBos.;  (pero  eslosfiKE^  'pudieron-sfir* 
mde  j^arrcra  á  las  «spedicixmeft  ^spoestas  por  losfcailes  caqpQcbi'-  "^ 
nos,  para  apoderarse  con  las  aflatas -i^n  la  raano  y  purtoaáio  deJft 
sorpresa 'de  ios  'indios»acliiragolas ,  barinagotos  y.amnacoios  ouyas 
restos  aon  esístea^ 

■Par  las  sdWas  ^i^  costean  eVrapagna^elntrfldiijo^en  oti^.  tíem*- 
po^  el  capitán  Antonio  Santos  :  atra^só  en  a(]pselia  dirección,  k 
'Merra^aearaima  y  pasó  al  río  Branooy  allago^Aviará,  en  basoa 
del  D^ado.  En  la  misma  línea  se  4iiaBzaiPC»i  también  :loattDÍsiona*ii6y 
y«6rca  de  la  sierra Pai^amma. tenia  el  gdbierno «de  Guayauaua 
puesto f!^e  llamaban  Quirior  f>  Qrioly  ahora  desierto,  y  s(A>iki 
raza  in^gena  se^iseñoraa  devanas  comarcas  en  lascoales  el  cacao 
nace  sBvcstte. 

lasríbUras  del  Gavra,  donde  hubo  en  otro  tiempo  algonas  mh- 
ajimes  establecidas ,  también  se  hallan  desiertas ,  7  soioi^lgonos  dfi 
qps  puntos  son  visitados  por  los  que  se  emplean  eai^ocogerilatito- 
fmfíimarafmy  tan 'estimada  en  elcom«roio. 
.^JS0t^«ia  sierran  la  Cerbatana,  coostantemeüteM^idNatta.deini-' 
,b^8  oléctricas ,  7.1a  ^erra  Mai^alid|/\áYen  tdbns dóciles, *cQfn 
easiis  eátán  defóndUNis  ccp  empalizadas.  Si  pesamos  dairegíon  de  las 
erttaratas,  eulramos  on  a4pelteMelfffis del  Sipapo,.«i(dai£de;los:pri* 
meros .misio^^os,  dando  4;rédito^  los  esonlos  de  los  indios,  sb-. 
laston 4a nación  délos  rayas.,  hombres 'qnie  teakm  la^boea>6n^ 
ombligo^  És  tambian  mas  allá(dejpqaeUo84§rando»ica]idal«s  €0n3fi 
losibneaias'jreligioiosflítiiábaB  los  pueblos  qné^temaniía  ojo  enime- 
dio'de  la  frente  y  otros  eon^oGibtKa  de  perro*  állms  wordaderameDÉa 
ttdmÍFQble  ia  ramificaclonMe  tos  grandes  arios  y  aqo^  sísiemá  }de 
agm^^negras  t<io  mnpiB'iBiecto,  ffiiénlni^<(|ue'eaiaB  étoG»  agms 
llenan  el  aire  iitibes€e  >fiinotidos  ^''mosqUos ,  de  <Ma  y  üeaooba. 
^Sxk  aquelli^  selvas  viren  indij9s<dÓBtIes  :  los  napoyas  ,4ost|^aaoaB-| 
}ofr.maisos  y  otros ,  láeilesde  redonir ;  los  eovtes  ip««de  decirse- qoe 
están  en  lostprimeroB^ensa^asi^eite^'BgeksllneaysemlaBí^  71a», 
d  i|tílaro  ^  ú\  -algo&i&..:En  «esta  'JfBieBtos  ^se^mmeslFaii^fisam 
umbolicas  ^esmt^^^s  «n  las  wcfts^y  ri^  áüaeree&oiftdejj/ma* 
Unaü^  :pet9oaiqeinitDló|k»><deik.'ieAiéi»úi  bárbant  equinoenvi. 


■.^  —  w  — 

.^^^8  peSas  i^ián  sobee  el  Gaáqidare ,  «n  él  Es^qoibo  y  rio 
Branco.  ^rpreiideiite  es-en^estos  lugares  el  eitligse  de  ríos  ea«d»-^ 
4  losos,  ^e  pcesentaii'una  comunicación  espedilaeiítre 'millares  de 
4egBi^>  por  lafamoba'bifQFCtoiou  'del-Orinoeo  que  reúne  la  hoya 
46'este  rio  con  la  del  A^OMisotias,  por  medio  del  Cc^qomre ,  eanal 
«laAiBral  de  70  kg^as  de^tego  t  ^tan  aaclio  «hbo  eli  'Rta . 

IBn  los  bosques  del  Oiiuoéo,  cérea <de bus  cabezeros/estím  aque- 
les indios  guaiaas>  de  eslatuBa  ipequena  y 'de  uneolor.'oa»  blanoo 
»  ^e 'Contrasta  slfigularmeate  con  la  tallaiatta  de  Jos^carilies  7  con  el 
tJolor  <de  cobre  tȎvfo,  tprqiHO^de  las  otras  tribus.  {Fambieb  thr^ii 
alU  aquellos^íerba9»guahaQrlbos  queeo  d  raudal 'deeu'SoinbFe  em- 
tlmeion  al  cajeta»  iBobaditia.  EaíltL  tribu  está  boi  imii  ^mimada 
fior  la  pers^CuaioQ  encarnizada «^quc  le  bace  la  dé  ^los.maquiritares 
ifiam  robarle  bus  b^os  que  Uewin  éwpiies  á  vend^  á  la  colonia  !>e- 
meFaid  en  cambio  de  herramieulas^  cuentas  Üe  nidrio. 

Xas'Sólfas  producen  la  sarapia,  él  maní,  el  pncherí;  él  caucho ; 
da  zarza^-pacrüla ,  la  Tainilla ,  losgraiides  afaaaendnwK  y  él  cacao; 
'K  la  Taataih#ya'det  Yeatqari  domioa  lanaeicmt&squíritareque  se 
fledi«a<á  la  a^riculttiFa.  En  todas  estas  sehvas.]]acen  mas  de  mil 
«plMitaft^útUes  ^  bálsamos  y  arpjuas  deseoDocidos  y  elaQaTaenre^qae" 
-«U-d'CWare^  uno  de  los  véasenos  mas  mortíferos  :  esaqnella  una 
verdadera  riqueza  vegetal  en  lugares  aun  no  bien  espkirados,  qjOie 
el'bombre  «¿v^e  qpófiasosáatrái^ar  por4ápiffi»  puntos  y  que 
.solo  las  vfieras  recorren  en  -todas  Affeeoiones. 

Busca  en  Tace  el  viajero  cuestos  vastos  desieittDS'el  poder  anlí- 

gDo  de  los  ijoaneti^anos,  la  aolfopofagia  de  los  'goaiponavis,  las 

MKRteitíasde  los  caráiKsy  ettcouierciai  aetividlid;  .que  ios  hko'lla- 

asiar.»por  on  .giiati  viajero  los  ^khares  del  NuevcNJttundo.  Peto 

•  4lada de ^esÉoenevieDtra,  ¿ino Testos  miserable^  de  unos, «eoBltinib^ 

mas'lranKiBas'enlos  Divos ,  yon  la'roza  caribe 'inaceion  y.*nulidad. 

iinlodanipanesfse  iwn  las  veli^ilis^e  lae  antíguaamfisiooes'eon  al- 

fi;iHiDs  hombres  btamsos  <en  tugar  de  'los  Icailes;  y  vaa^ios  ind^s 

.^dáoUés  y  somisos  que  trabajan  ^pera  ^procararse  vesÜdos  ''y  pmen- 

•tarse  ^^tiales  ¿aquellos  en  el^esiorior,  aái  aomoflo  son  delante  .de  Ja 

i  riel.  ¥aiDo  faai|ftraeo«ieionei5,'tert|iinóse1a>gaepraqiie  se^hada  eon- 

:(aa<l8S(tvifa«s'ei^i%ldas  por*')as(orillasde>les^os*óeo  lassdhras: 

-m  lei5<tlnDȇ'lb  vlda^^^jcialpor  medios  tgusves  yceipios.  La:trompe- 

vifadelíBo^tilo  yamoNBoeiia  como  v^a'Cosa'sa|;fada'vÁrvieBdo  ehova 

'¿•ilo^itia  sB8;biílles  y^diveniofi^s;  y  el  li:alo  ánraenle  de  los.^e 


•> 


ñ*- 


-^  76  — 


* 


trafican  ood  Ijs  indios,  irá  con  el  timnpo  redaciendo  á  naa  vida 
meaos  penaba  la|  tribus  que  se  iiailan  aun  en  la  iufaácia  de  los 
progresos  humanos. 

El  viajero  encuentra  por  todas  partes  árboles  gigantescos  de  ro- 
bostas  y  estendidas  ramas  cargadas  de  espeso  follaje ,  cuyas  enor-^ 
mes  raizes  se  prolon^n  casi  á  flor  de  tierra  en  t#das  direcciones ,  ó 
bien  bajando  desde  la  altura  de  diez  pies  sobre  la  superficie  del  ter- 
reno, se  ramifican  al  rededor  del  tronco  formando  con  este  tantos 
rectángulos  cuantos  son  en  número.'  En  otros  árboles  se  apartan^ 
las  raizes  á  la  misnut  altura ,  en  forma  de  triángulo^ ,  y  parecen 
como  gruesas  tablas  pegadas  al  pié  del  tronco^  Una  multitud  de 
plantas  purá^tas  de  formas  variadas  y  flores  caprichosas  ,  cubre  los 
grandes  árboles  desde  su  base  hasta  sus  ramas  mas  elevadas  :  estas 
se  ven  otras  yezes  espesamente  ^tretejidas  por  el  CoHaje  de  las 
pintas  trepadoras,  que  serpenteando  ora  por  el  suelo,  ora  remon- 
tándose á  las  copas  y  pasando  de  una  en  otra ,  enredan  todo  el  bos- 
que y  le  hacen  impenetrable.  Ademas  del  embarazo  que  oponen  los 
bancos  cuyas  raizes  flotantes  se  agarran  gpr  todas  partes  á  la  tier- 
ra ;  contribuye  mucho  á  hacer  casi  imposible  el  tránsito  por  Iqs 
bosques ,  una  maleza  mui  cerrada  j  grandes  grupos  de  aloes  espi- 
nosos, semejantes  á  las  plantas  que  producen  la  pina  y  á  los  que  lla- 
man mayales. 

Variado  y  gracioa»  es  sin  djida  el  aspecto  de  e^^s  bosques.  Los 
árboles  mas  antiguos  están  vestidos  con  el  lujo  y  IsTlózania  de  una 
multitud  de  plantas  nuevas  entretejidas  con  sus  ramas  6  arraigadas 
en  ellas,  ó  que  suben  y  bajan  en  líneas  espiples  al  rededor  del 
tronco ,  y  arrojando^uego  muchos  festones  con  sus  bellas  flores  en 
forma  de  campanillas ,  ofrecen  en  un  solo  pié  mil  formas  vegetales.  - 
Allá  donde  el  bosqqts  es  menos  espeso ,  se  encuentran  cantidades^ 
innumerables  de  pequeñas  rocas  que  solo  se  elevan  de  quince  á 
veinte  pies  sobre  el  suelo,  y  que  parecen  monumentos  escondidos 
en  aquellas  agrestes  regiones ,  á  vezes  en  forma  de  pilares  ó  torres 
armiñadas ,  ó  bien  como'  túmulos  6  como  mazizos  prismáticos.  A 
su  alrededor  prosperan  diferentes  palmas  cuyas  hojas  en  forma 
de  plumas  caen  elegantemente  y  medio  cubren  aquellas  rocas ,  al 
paso  que  troncos  espinosos  de  corpulentos  árboles  y  otras  palmas 
de  figura  elegante  y  elevada ,  parecen  puestos  allí  de  piM)pósito  pa- 
ra servir  de  adornos  sepulcrales*  En  lo  mas  cerrado  de  la  montaña 
se  alzan  rocas  graníticas  de  color  negro  ó  pardo  oscuro ,  raras  por 


—  77  — 

sus  íonnas  y  de^uidas  de  Tegetacion  algunas ,  otías  sdo  en  sa  ci*  ' 
ma  adornadas  de  palmas  y  oirás  plantas  éoloca^as  sin  orden ,  que- 
dando descubierto  el  resto  dH  la  roca.  En  muchas  se  presenta  lo 
mas  alto  de  ellas  como  ruinas  de  antiguas  fortiflcadones  entremez* 
dadas  de  grupos  de  verdura  ó  de  alguna  palma :  en  otras  parecen 
cúpulas  que  se  cifran  sobre  una  lujosa  vegetación  desarrollada  á 
los  flancos  de  las  rocas ,  á  manera  de  bosqueciilos  que  reposan  so- 
bre las  copas  de  aquellos  árboles  agigantados  de  la  antigüe  selva ,  ^ 
con  SO  y  hasta  120  pies  de  altura  :  hermosas  y  bellas  palmas  que 
se  elevan  á  ^  00  pies ,  contribuyen  á  suav»ar  algún  tanto  el  aspecto 
sombrío  de  aquellos  lugares  y  el  de  las  figuras  de  los  pélaseos  y' 
cerros  que  asoman  por  todas  partes  colocados  en  desófden.  Aquellas 
tierras  cubiertas  de  una  capa  de  hojas ,  esconde  fácilmente  enormes 
serpientes  venenosas,  en  gran  cantidad  y  de  diferentes  especies.  A 
este  inconveniente  se  añade  la  incomodidad  que  resulta  de  marchar 
sobre  una  tierra  húmeda  y  floja ,  resultado  de  lá  imperfecta  descom- 
posición de  las  materias  vegetales,  las  cuales  presentan  durante  la 
noche,  estraordinarias  luzes  fosfóricas  :  diríase  que  todo  el  suelo 
está  cubierto  de  un  manto  plateado  á  semejanza  de  la  via-lactea. 
Troncos  de  úrboles ,  hojas  y  cuanto  está  allí  forma  cqmo  un  ciefo 
estrellado,  y  se  creerla  ver  la  imagen  de  los  ^tros  reflejada  sobre 
un  lago,  si  las  copas  tupidas  de  los  árboles  no  formasen  por  enci- 
ma una  bóveda  oscura  é  impenetrable.  Esta  ilusión  se  hace  aun 
mas  brillante  todayía  por  la  luz  viva  de  grandes  cocuyos ,  que  vo- 
lando en  todas  direcciones  producen  el  mismo  efecto  que  la  caida 
de  pequeños  aereolitos. 

Si  la  contemplación  de  las  formas  elegantes  y  gigantescas  de  la 
nattkral^a  entre  los  trópicos,  es  propia  para  elevar  el  alma  é  ins- 
pirar proftndas  reflexiones  al  viajero ,  no  es  menos  cierto  que  el 
sentimiento  poderoso  déla  propia  conservación ,  afecta  penosamente 
su  espíritu  cuando  en  una  nocie  oscura ,  en  medio  de  aquellas  in- 
mensas seKas  llenas  de  serpientes  venenosas ,  oyendo  los  pavwosoft 
gritos  del  jagdar  y  sin  mas  esperanza  de  ausilio  ^ue  el  que  le  pue- 
de prestar  la  dudosa  humanidad  de  los  indios  salvajes ,  se  pone  á 
considei^  la  gran  j^uma  de  pefigros  que  rodean  y  amenazan  su  dé» 
bil  existencia.  Para  llegar  á  aquellas  selvas  no  puede  tomarse  otro  - 
camino  qiíe  el  curso  de  los  ríos,  que  como  ramas  de  un  grande  ár- 
bol cuyo  tronco  es  el  Orinoco,  se  reúnen  todos  en  él.  Poro  tambiea 
allí  le  esperan'  los  peiifros  de  los  raudales ,  en  los  cuales  es  preríso 


—  7ft  — 

pasaf  la  ¿ubtecadéii  sobre  peñas  anonloiiada»,  ¿  p«r  etlwhos  j- 
rápidos  cajiaWy  ó  hie»  6leyarla.i  Mena  do  cicles  por  peqpm^ta 
cascadas,  ooo  al  temor  cootiiuio  de  ^¿dacse  siaella  en  aqóallosxi»*' 
siarf  08«  No  es  esto  todo :  á  cada  paso  se  teme  ser  atacado  pM^  loa 
indios  erranüs ,  cayas  fleclias  «»^eitei»^  qnítaii>  la  Yidaen^l  cop»- 

!#>  eqpacb  de- 4  5  miMtos ;  y  si  se  a^mga  ei  tonneiil»  iQoeaaato  qw 
cansan  las  pieadarts  de  las  moef  altos  y  elj^m^  doraale  al  dia ,  y 
ifii  de  \^i»zim€udos  en  todo  el  enrso  de  la  noche ;  1»  falta  toM  da 
raeorsos  pava  reponer  los  bastimentaa^  si  por  desgram  liega»  ¿ 
agotarse  los  que  sa haii>  iiavado,  y  la  perspectha  de  un  hxwrible 
üfesanq^o^e»  el  caso  mm  pos^^le  de^  seetaiaoado»  por  algiua  eafer*' 
iBedad ,  caaaáb^se  está  toda  el  dia  espaasla  al  sol  asásmle  y  á  te- 
llnvias  ábQaéSfiles,  respiváadose  un  aire  hámada  ¿  inibcto ;  se  Ytríi 
con  cuánta  razón  dice  Bomboldt  al  hablar  de  aceites  regiones  d^ 
niMYO-MimdO' «  qne  alK  ctfói'  se  aeoslumbra  uno  á  mirar  altiombva 
«- cornil  B^  esencial  al  orden  dela^natovaleza.  La  tiesra  está  sobros 
«  cargada  de^  vegetalts^;  nada  detiene  eli  Hbretanmento  é  progresa 
a  detestes ,  allí  donde  una  iamensa  cafia  de  tierra  manífeela  la  no 
a  intemnipida  áceioa  d»  las  luerzas.  oirgánicas.  Los  caimnaes  y  loa 
«•  boas'  son  lioadvefios  del:  rio^^:  ei  jaguar,  el  pecan ,  la  danta  y  loa 
a  raoBOs  atraviesan  los  montes  sin  temor  y  sin  riesgo ,  y  se  eslable-^ 
eccyr  ea- ellOs  oamo  en  una  antigua  heredad.  Este  acetada  nns' 
•  naturaleza  Itena  de  vida  en  qoe  e^  hombre  «a es  nada,  tiene  aip 
«  ^0  de  estrato  y  de  triste.  A  la  YÍ9la>  del-  Océano  y  de  las  arenas 
«  det  áltíea  sa  aaestombra  nflo  eon  Ivabn^o,  aanqne  en  aqneüns 
«  lugares  en  que  nada  recuerda  nuestros  caaspos ,  nnesiroa  bos*-- 
r  ques  ó  noeslros  nos  no  admira  tanto  la  wta  soledad  que  so  atia- 
«  msa. » 

Mas  da  hr  mUad  del  territodo-  da^  la  repáUica  está  oea^iade  por 
la  zona  de-  loé  bosquies,  y  está  apenas  habitada  por  alfanas  fami- 
lias cri<rfla6 ,  eerea  do  2,0M  indios  'Vedneidos  y  aproximadafin^te 
49>,^M  independientes  q«»  viven  regado»  sabré  la  inmensa  «^Mr* 
ficiede  ^9,244  i.  c.  El  total  pnes,  de  4^,  Od(^  afanas  esparcidas  en 
aqueHaa  sdedades  estaría  en  razón  de  paeo>  mas  de  das  por'Cada  le* 
gua  cuacada.  Guando  las  in&Hgraeiones  y  las  geaeradones  fulares 
empiezan  á  rozarlas  grandes  selras  y  el  Ínteres  mercanül  Uamedlií 
cada  dia  nnevos  colones,  entonces  será  coaja^o  cadibiarán  de  aspecto 
estas  solitarias  regiones  qne  el  hmnbre^Qantto  apenas  b»  reeovrid» 
pop  al  cara»  db  Ipa  rioa  principales*  » l\a  se  otea  ^  dieé  HuBíb^t  7 


—  rs  — 

m q«e ios; ^Mto^^MdÜKñm hteedo. y^em  acunas  fmt^  niiiÍ6«ei# , 
mmnamMmóékfB^VbstML  d»  utosqiiilo»  poeden  poii^  obstáGoJo^á 
tf  liSifVogiaeMff  d^  cttUífO'en  las9abiras;€l«<0tiayaoa  :  agvftt^denioa 
m  <ioa*  «1  hóflibpe,  como  h»  smeaiMia  en  tedas  pnrites' y  en*  todos 
«  tí^BpoBi,  camMuidot  la^  snpvrfieie  óaí  ssmto ,  eaaible  tambíei»  M 
m  cQimié^mkm^é»  bt  atmiaiMBt  y  los.ñiBeoltoa  cesarán  Umt  pnnte 
0ti  eoaméo  4»sapumx3m  loa  ví^  árboles  ds  Iob  mónleB ,  y  cuando 
«  eB>«slas'reg90Mi3  s»  i^taft  los  fÍ0s  poblados  do.  doáa^»  y  aJitafis 
«cytk9  Itearis  «nitífidttSv  y  euliisrtaS'  <fe  ea8erifts^ydo  haláao^ 

S^afNia  tliftdOBÍnta>ket  poodKi  nniitoiior^ÓHiodaDMttienfrd^ 
•W,^^>^^  ^  bd>^Mt«s«  I  Q«é'  espeetáettl0  ta&.  gcaado  p^eseatAf* 
rfrei^dflces^ol  Otkujit»^  y^^ícml^^ücifú  díe  usa  gni»  proqpieFi^d 
t«»d6»a !'  LÓ8  tirreaofir  atora  ioundadios  «ií  d  delta,  s«¿a  oono 
te  bc^llB  «anif^És  d«i  la  IMaudaí :  ]as.oosta9d»8ior  tas*  enlape  aqiiHil 
yellüdiiocí»,  prodüoípá&dMiflKlastas  €osecfaas«  La&soitas  limitadas 
por  la  sepraofe  Inatao»  y  Rinoeote  darán  solida  á  sus  frstos  por  oí 
Giif»i,  surcado  oiióflces  por  i)«M|«e&  de  vapor;  ooaado%ora>apér 
n»  lo  vewnen  los^isidlos  salvajo&eíaisas^  cCébilos  ctmehas.  hos  hos* 
ífam  étí^  &mmt  y  Baragsa  hoi46  difiieil  navogaenm  por  sús^^i** 
pmm^vmsáúes^  tsttÉjrin  caiiilQOs  carreteros  y  ríos  navegables  pura 
fievar  si^riqueeas  al  OriBO00^«  El  €a«fd  rebosairá  en  preduccHMMS 
eHlBHiMeB  y  tesará  eaaaiaos.  die  careos  para  coffiwioar  con  las^  ea^* 
btunss^cM  Boíhbo^  detYesliMrí  y  el  rim  Pattma,  braaa  príod* 
pid  del  rio  Braaeo.  Ta  para  emí^tem  los  grandes  raudales  de  AttK 
res- y  Miópnre  seré»  obstáculos  nm  peqiaeios  para  k  ioteresaafle 
iMivegaciNr  ^oe  oonmnca  el  Orínoco»  con  el  Amazonas  por  el  Ca^ 
fB«n^.  Eir  les  s^Harios  rtos  Nieta  ^  Yidhtda ,  Guavíare  ó  (uíridaí  se 
croiaráfi  mi  hmjam  ie  vapor  qm  eoaéufitrin  los  ofegebos  ée  eo* 
mereio  de  wm  §tdm  pelladoa  aMmentaáa  pw  aqaellafi  coanarGas 

.  baibftadÉ  al  preséis  por  idgunos  centenares!  de  iiuiids  ferozes  y 
errante»^  El  Yentsarl  y  tedas  los  nos  fue  caen  en  la  parte  aílba  éal 
Gringo  y  en  el  Gasiquiare*^  tesdrá»  sus  ríb^as  cubiertas  de  adi-» 
vos^monúilores.  Ek  Río-l^ro  de  vefe  en  cqsvbSo  visUado  por  algu- 
nos especuladores  pobres' ,  s^á  ealánfios  un  canai  importaste  para 
el  comercio  inlerier  de  las  tierras  meridionales  de  Venezuela  y  de 

*  la  Mueva-Granada  j  S.  Fernando  de  Alabapo^.la  Esmeralda ,  Pimi- 
chin,  Marq^ ,  S.  Carlos ,  lavPiedra  Cücui  ^  Mavaca ,  Santa -Bárbara, 
la  boca  Sipapo  ^  Haipure  y  Atures,  serán  puntos  mui  importantes 


—  80  — 

en  el  alto  (Miioeo ;  y  en  ellMgOy  los  de  Carichana,  Calcara,  boca 
deí  Gaora ,  Caroni  y  el  f artice  del  delta.  La  ciudad  de  Angostura, 
única  pAlatíon  rica  que  hoi  existe  en  aquella  parte  de  laGoayana^ 
que  está  mas  bien  en  la  zona  de  los  pastos  que  en  la  de  los  bosques, 
debe  su  incremento,  no  á  las  inmensas  tierras  que  recorren  el  Ori- 
noco y  sus  principales  tributarios ,  sino  al  tráGco  con  los  pueblos  de 
los  Llanos  y  principalmente  con  los  de  la  proTincia  de  Barinas. 
Qiandp  sus  relaciones  se  estiendan  por  toda  la  gran  zona  de  los 
bosqties  convertidos  en  haciendas  y  labranzas  por  la  iodustria  bu* 
mana,  Angostura  debe  ser  una  ciudad  mui  importante  ^«y  mas  im- 
poi^ite  que  ella  y  laas  rica  la  que  se  establezca  en  el  delta  ó  cer- 
ca de  la  mar.  Entonces  se  conocerá  también  la  ventaja  que  resulta 
á  los  pueblos  que  se  funden  mas  arriba  de  las  cataratas,  de  poder 
comunicar  con  el  Amazonas  por  el  Casiquiare  ó  pe»*  el  río  Atabapo 
qm  se  unirá  á  poca  costa  con  el  Rio*Negro  por  medio  de  un  canal 
artiGcíal.  Para  llegar  á  las-  tierras  occidentales  de  la  grande  boya 
'  del  Amazonas,  se  preferirá  el  eamioo  mas  corto  del  (tinoco ,  y  por 
él  saldrán^  la  vez  producciones  de  la  Nueva-Granada  y  del  Brasil. 
Pero  aun  sin  esto,  las  selvas  de  Guayana  reducidas  á  cultivo ,  pue- 
den dar  por  sí  solas  240  vezes  ma&irutos  de  lo  que  en  el  dia  se  re- 
coge en  toda  la  república.  Si  &e  considera,  pues,  que  la  zona  que 
hemos  llamado  agricultora  tiene  bosques  vírgenes  que  pueden  dar 
den  vczes  mas  productos  que  los  actuales^  se  percibe  que  con  el' 
tiempo  estos  montarán  á  540  vezes  mas  de  lo  que  ahora  se  iogcdí  en 
el  pais.  Se  ve  que  solamente  las  dos  zonas ,  ó  mejor  dicho ,  sus  tier- 
ras susceptibles  de  cultivo ,  pueden  cómodamente  sostener  una 
población  de  50,000,000  de  almas.  Aun  puede  hacerse  snUr  esté 
aumento  probable  á  64,000,000  que  es  el  doble  de  lo  que  hoi  tiene 
k  Francia ;  porque  ademas  de  ser  doble  la  ostensión  de  Venezuela, 
sus  terrenos  son  mas  ferazes;  por  la  naturaleza  del  clima  dan  do- 
bles cosechas,  y  se  siembran  en  ellos  plantas  que  rinden  en  un  es- 
pacio igual  á  un  terreno  europeo ,  cantidad  mayor  de  frutos  nece- 
sarios al  comercio  y  á  la  vida  del  bombre.  ' 

Las  ^  8,2 1 4  1.  c.  de  que  se  compone  la  zona  de  los  bosques  pue- 
den dividirse  y  clasificarse  del  imáo  siguiente. 


—  «4 


■eiB 


Cerros  pesarosos  no  cultivables 

Cerros  pari^  crias  de  cabras  y  oyejas.,  . ^. 

Sabanas  en  lo  interior  de  las  seWu  para  cria  de  ganado  nayor.. 

Lagnus  r  ciónasas.. ; .« 

Terrenos  anegadisos  incuUif aleles : . .  .^ ^ 

Terronos  desmontados  y  cnlüvados  por  los  indios 

Montañas  vírgenes  susceptible»  de  cuUíto 


Descrito  ya  el  aspecto  general  de  Yeoezuela,  solo  resta  dar  algu- 
nos pormenores  que  se  colocarán  en  la  deseripcion  de  las  proTincias 
respectivas :  pero  antes  no  estará  de  mas  indicar  la  situación  de  las 
ciudades  y  villas  cabezeras  de  cantón  por  medio  de  cuadros,  para 
poder  de  provto  comparar  sus  alturas  respectivas  sobre  el  nivel  del 
mar,  y  su  temperatura.  Estos  cuadros  facilitarán  tanto  mas  el  para^ 
leloy  cnanto  q^e  están  formados  de  un  modo  que  abraza  ciertas  fa- 
jas de  terrenos  que  por  su  posición  están  espdestos  mas  ó  menos  al 
calor,  á  los  vientos,  y  á  aquellas  causas  generales  que  tanto  in-r 
fluyen  en  la  temperatura  de  un  pais.  Se  encontrará  la  tabla  de 
aquellos  puntos  que  están  cerca  del  mar  y  espuestos  á  los  viento^ 
del  norte  :  la  de  los  que  están  eu  medio  de^a  cordillera,  y  la  de  los 
que  al  otro  lado  miran  á  las  abrasadoras  llanuras  ó  están  situados  eü 
ellas.  La  reglón  d^  los  páramos  tiene  la  suya  así  como  la  zona  de  los 
pastos  y  la  de  kte  bosques.  Otra  tabla  bacc  ver  la  temperatura  á 
di/erentes  altaras  seguri  la  calidad  y  posición  de  los  terrenos ;  por 
último  dos  cuadros  comprenden  la  temperatura  de  l^s  9gua$  dulce» 
de  los  ríod,  lagos ,  lagunas  y  de  las  saladas  próximas  á  la  costa 
del  mar. 


p.  «Boa. 


6 


'-J> 


TABLA  COMPARATIVA 

De  la  teñperatuifa  de  las  ciudades  y  villas  cabezeras  de  cantón  qoe  éStáken 
la  costa  del  mar  de  las  Antitias ,  ó  próximas  á  ella ,  con  la  altura  respeitdva 


sobce  él  nivel  del  mar. 


' 


NOMBRE 

de 
LOS  ¿ÜeABE»» 

IIM 


<•« 


Guaira 

Rio-Chico. ... 

Ocumsre *>... 

Puerto-Cabello..... 

Barcelona 

Wrilu 

I  Cumaná 

Campano ".• 

Güiría *... 

Cadaco •... 

]li»-Ganbe.......w 

Ufammiibo 

San  C&rloB  de  2ulia. 

Gíbraltar 

Alta-Gracia..../... 

Coro 

Gosta<- Arriba » 

Gumarebü 

Paraguaná «-... 

(j88^ua*  *..••.••>.•.> 
Aiuiicioii**  ...:..•%.• 
Nortea ...4^. 


Altará 
en 


iO 
10 

s& 
s 

16 
119 

20 
iO 
10 
30 

i 

11 

48 
29 
1*0 
40 
15 

5S 
M 

109 
S9fi 


Altura 

< 

en 


Mayor 

grado 

d»eal«f. 


O 
8 

ai 

3 

13 

99 

17 

8 

8 

Í5 

6 

9 

40 

24 

8 

33 

13 

44. 

40 
{06í 
filV 


,31  67 

51  It 

31  11 

31  67 

28  89 

31  94 

30  56 

31  11 
3t  11 
tb^  86 
31  II 
28  89 
28  33 
31  II 
31  11 
31  11 

38  a» 

U'  11 

Si  l|í 

ft  89 

98  ^ 


Uajor 

grado 

de  frtiv. 


»  86 

23  33 

19  44 

21  11 

23  33 

2^  89 

25  33 

23  33 
93  33 
25  33 

23  m 

24  44 

2^  (So 

23  33 

23  33 

23  33 

23  33- 

25  83r 
25  85 
33  35 
23'  89 


■■■■B 


I. 


g.§8 


■k 


29'  n 

27  50' 

25  28 

26  11 

27  50 

26  59 

27  64 

26  95 

27  22 
27  2i 

98  or 

Vff  92 
26  67 

26  67 

27  22 
27  29 
27  22 
26  il 
2T:  29 

97  99 
26^   ti 

98  It 


la iL 


1 


NOTA, 


Si  máximmn  de 
mhr  ha  sido  toma^ 
do  entre  las  97  3  de 
la  tarde  y  elwáxi- 
mum  de  frió  entre 
las  4  y  5  de  la  ma- 
ñana, generidmen- 
teeaiawltetonse- 
ca  y  en  el  princi- 
pio de  la  lluviosa  y 
siempre  en  el  espa- 
oTo  de  9  á  8  dias 
cuando  menos.  Las 
observaciones  fue- 
ron béChts  con  el 
termómetro  de  Fa- 
renheit  y  en  la  re- 
ducción iil  centígra- 
do se  ha  elevado 
basta  la  leg^ilda  de- 
cimal. 


r^  íSp  'r— • 


TAflLiL  CeaKPÁHA^'CWA 

dialli tempentdmde ksoiwiiileB 7  viltaos ^aOMÍsent  d« caunoii  qué'eMflii  éír 
laft^vÉHet  é'  ea*  medio  dariu  sen9iiia&  coiLla  aMn»  MÍBplielfi»«p  sobré  el> 
niYel  del  mar. 


NOMBRE 

LOf    LÜaABBS. 


•  ••)>•■  tk  •  • 


'Bxureüu;,.,, 

Santa  Lucía 

Ocumare 

Gaacaguau. •«•. 

Yiotoite 

Tamem 

HartciiU 

Cara 

Valencia 

Hirgoa..... 

■Hitalbtn 


I 


SinLilft. 

Méridt... 

■ucuchies 

BSido 

Bailadores 

GríU 

San  Crí8tó]¡{al 

Lobatera 

San  Antonio 

Tn^Ulo 

Carache.. 

Boeonó 

Baenqne 

Barquisimeto 

Sin  Felipe 

Taritagua 

Toq(^o 

Qoibor. 

Upaút .' 

Sin -Fernando   de 
Atibapo.V 


Alliiral 

Taras. 

■■■■■■• 


4.044. 


255 

6f6 


51» 

no 


so» 

767 
t.97t 


luUt 

».0« 
IwTttfr 

Í.O0K 

't'.sat 


ft4« 

Í.51S 

987 


5T»' 

7» 
«O 

175 


iStvra 

en 
inctvM. 


ifayor 


M» 
8U 
58B 
480 
2)5 
76 
5f5 

451 

549 


780 
689 


f.64» 
§.588 
4.90» 
1^748 

4'a500 

ou 

4.157 
818 
8111 

4.518 
898 
599: 
99» 

54ft 

6n 

6fiA 
551 

930 


99  98 

95  89 

97  78 

99  44 


98  89 

93  98 

98  78 

98  06 

99  44 
97  78 
95  00 
95  M 

97  78 

98  87 
90  M 
le  .85 
90  89 

90  00 

91  44 
95  89 
85  OD 
85  89 


ti  80 

90  86 

99  98 

87  78 

87  76 


«7  91 

98  89 

97  78 

97  78 


18  .87 
9Q.  56' 
94.  41 
95    89 

95-  89 
95  53 
19*  44 
90    00 

19  44 
18    89 

90  00 
18  55 
18    55 

91  41 
9»    99 

II  7a 

15  5S 
18^  44 
17'  78 
18  88. 
18-  89 
18  89 
90^  86 
90  86 
18  44 
15  89 
tO>  56 
9r  99 
95  56 
9*  44 
9»  89 
98*  85 
95    55 

93    89 


»  3 


19 

88- 
94^ 

96 
98 
98 
95 
93 
93 
94 
95 
91 
94 
94 
94 
47 
15 
li 
18 
1» 
91- 
90 


49: 
18- 
91- 
98 

98^ 
9t 

9»! 


45 

94 

45  < 

67 

41 

11 

33 

80 
17 
89 
67 
95 
45 
45 
99 
97 
87 
49 
79 
89 
85 
94 
94 
49 
93 
89 
50 
87 
67 
56 
11 
56 


95    84 


NOTA. 


El  miiiaiiuiu^e 
calor  ba  sido  toma*, 
doentre!a8  9  75de! 
la  tarde  7  el  máii- 
munr  tle  fHo  entre 
las  4y  5 de  la  ma- 
ñana 9  genecalmen- 
te  en  la  estación  88- 
ca  7  en  el  principio 
de  la  lluviosa  y  siem- 
pre en  el  espacio  de  |f 
9'  á  3  dias  cnando' 
ménos^'  Las  obser- 
raciones  füerOnii»7 
chas  con  el  fcerai6- 
metro  de  Farenheii 
j  en  la  rednocional 
centígrado  se  ha  ele- 
Tadcr  baatt  ti  segun- 
da^deeimal. 


, 


-_  84  — 


TABLA  COMPARATIVA 

9     t 

Da  la  ■«9iQ|)enliura  de  las  ciudad  y  villas  cab«Etícas  de  c»Cob  .qaé  están  «li 
la  entrada  de  los  Uanog  y  en  los  llanos  mismos ,  con  la  altara  respecÜía 
sobre  el  nivel  del  mar. 


NOMtoB 
-        dr 
•LOS  EÜOAKBS. 


? 


OhMgosramas 

Orí  tuco 

San  Sebastian 

Galaboio 

San  Garlea • . . 

Pao. .' 

Oiioto .' 

A  ragua  Camanet'. . . 

San  Mateo 

San  Diego 

Pao  de  Barcelona. . 

Soledad 

Araifua.. 

filaturin 

Barrancas,  ........ 

Períjá...!.., 

Carora.  ....,••.... 

Harinas....^ 

Obispos. 

Guanare. 

l)spino 

Guanarito 

Nutrias 

Araure.^ ; 

Pedraza 

Achaguas, 

Guasdualito 

Mantecal. 

San  Femando ., 

Angostura 

Piacoa 

Cajeara ; 


seSBHBHai 


Altara 

en 
^aras. 


208 
373 
450 
120 
2«2 
343 

50 
135 
177 
153 
150 

52 
354 

If 

20 
127 
415 
482 
166 
172 
437 
143 
140 
288 
388 

too 

308 

180 

80 

69 

36 

•  75 


Altura 

-en 
meteos. 


Ha|ror 
grado 
4m  calor. 


^p 


170 

313 

576 

100 

177 

243 

42 

95 

148 

97 

425 

43 

296' 

9 

17 

106 

'S45 

152 

439 

444 

11» 

120 

117 

199 

334 

84 

170 

109 

67 

58 

22 

6^ 


31  11 

29  44 

29  44 

36  67 

81  II 

31  41 

28  33 

29  44 

30  56 

31  11 
SJD  56 
51  94 
«»  44 
30  56 
81  67 
30  56 

30  do 

81  H 

'51  41 

30  56 

30  60 

31  ti 

32  22 

29  44 

81  ftl 
85  56 

82  22 
85  56 
85  56 
'BO  ^ 

30  86 
39  44 


Mayor 

grado  . 
de  frío. 


28  00 
36  11 
S8  89 

26  11 
25  56 
25  56 
36  II 
36  11 
25  06 
2(  11 
23  89 

23  89 

24  44 
24  44 

23  89 
34  U 
2»  56 

24  44 
34  44 

24  44 
34  44 
34  44 

27  78 

28  56 
34  44 
80  00 

25  56 
30  00 
30  00 
25  33 
36  67 
33  89 


S  ej  -íP' 
V  •  « 

s  ^- 


38 
Í7 
27 
81 
28 
28 
27 
27 
37 
26 
27 
27 


27 
27 
37 
27 
27 
27 
38^ 
37 

sr 

30 
37 
37 
82 
28 
82 
33 


^fiOTA 


06 

78 

67 

39 

34 

34 

22 

78 

78 

11 

23 

93 

94 

50 

78 

5D 

78 

76 

78 

62 

50 

78 

00 

50 

78 

18 

89 

78 

78 

78 

63 

67 


,  El  máximiam  dé 
calor  ha  sido 
do  entre  las  2  y  3  de 
la  tarde  y  el  máxi- 
mum del  Trio  entre 
las  4  ^  5  de  la  ma- 
ftana ,  geralménte 
en  la  esladon  seca 
y  en  el  principio  de 
la  lluviosa,  y  siem- 
pre en  el  espacio  de 
2  á  3  dias  cuando 
menos.  Las  obser- 
vaciones fueron  bo- 
chas coa  el  termé- 
metro  de  f  arenlieU 
y  en  la  reducción 
al  centígrado  se  ha 
elevado  hasta  la  se- 
gunda decimal. 


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TABLA 


De  la  temperatura  de  las  aguas  dulees  de  los  principales  lagos, 

lagunas  y  ríos  de  Venezuela, 


[ 


NOlfBRE 

de  los  >• 

LAGOS ,  LAGUIIAS  T  RÍOS. 


Grados 

de  latitud.  N. 

ea  que  se 

midieron. 


Lago  de  Maraca^* . . 
Lago  de  Valencia.  . . . 
Li^uoa  de  Tacarigua. 
Lagaña  de  Sinamaica 

Lirguna  del  Zulía 

Laguna  Guataconica 

Laguna  AresUnga '. 

Ríos  GataUínibo ,  Zulla  y  Es- 
cala nte 

Ríos  Tocuyo  y  Limón 

Ríos  Tui  y  Uñare 

lUos  S.  Juan  y  Gutrapfehe. 
Rioa  llf  orichaHargo-  y  Tigre . 

Iftios  Guarido  y  Pao.. 

Riosi*ortuguesa  y  Gojede.. 
Ríos  Guanana  y  Boconó. . . . 
Ríos  M  asparro  y  S.  Domingo. 

Ríos  Ganagná  y  ftaripa 

Ríos  Caparro  y  Uribaníé . . . 
RíOI  Apure  y  Araoca..^^  \\ . . 
Ríos  Meli  y  Gapanaparo  . . . 
Ríos  Gáura  y  Guchirero.... 
Ri09  Gulfcyiare  y  vichada. . . 
Ríos  Inirida  y  Atahapo. . . . . 
Ríos  Negro  y  Pacimoni» . . . . 
Ríos  Casiquiare  y  Siapa. . . . 
RiosGunucunumay  Padamo. 
Ríos  Ventuari  y  Slpapo. .  ^ . . 

Rióf  Páragua  y  Oria. 

Ríos  Caíroní  y  Cuyünl. . . . . . 


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90 

8»  é    9'> 

9»  á  10? 
10° 

9»  á  90  W 
8»  á  9»  80' 
8"  á'9^  50' 
8»  á  80  3(K 
8«^  á  8<»  50' 

7*  á  7»  30' 

7*  á  8* 

00  4  70 

70   4  go 

5«  á  4« 
i"  á  ao 
50  á  4» 
5»  á  4» 
40  á'50* 
IP»  á  60  * 
0*  á8o  ^ 
V  A  $• 


TemperatuM 
del   agua 

por   el 
centigrade* 


25.5  á  26.6 
95.     á  95.5 

16.6  ái7. 
96.'  á96.6 

25.5  á  26. 
26.     á  96.6 
26.'  á  26.S 

26.    á  26. 
26.    a  26»6 

26.6  á  27.7 

96.5  á  27.7 
96.6«á  37.7 
26|6  á  27.7 
25.    á  2ai 

á  26.7 
4  27.7 
é96. 
á26. 
á  27.7 

26.6  á  27.2 
25.8  á  Í6.6 
25.     á  '26. 

24.  &  24.4 
23.8  á  24.4 

25.  á  24.4 
23.8  á  24.4 
23.8  á.24.4 
23.    á  25. 
24*..   k  2flí.« 
27.2  á  29.4 


!&SttS9Se 


UOT^Í, 


rili 


26. 
96. 
25. 
2S. 

27. 


Las  obseryaciones ! 
han  ildo  hechas  en 
nnehotpvntot  y  du- 
ran le  semanas  entoe 
ras  en  las  diferentes 
navegaciones  de  los 
rios  y  lagunas ;  todas 
á  distintas  horas  y 
épocas,  tejiendo  cui- 
dado de  conciliar  las 
obsenraciones  ,  para 
«btener  el  conoci- 
miento mas  aproxi* 
mado  de  la  tempera- 
tura media.  La  mayor 
parte  en  las  bajas 
aguas  y  muí  pocas  en 
las  ¿recientes. 


0    •• 


V". 


TAfiUf  * 

De  la  temperatura  de  las  gguas  del  mar  tomada  en  la  superficie  ,- 
;  «Dlk  pwte;  bondt  y^ttatnui .léjoa^de  laico^ta. 


<' 


DB  LOS  PÁBÁJW. 


«*•* 


BnelgoUodePairía....;..* 

Bu  el  golfo  de  Cariaco 

En  las  eostas  de  Bafcétoaa  j  CliaatiA.' 
En  las  costas  de  Garác&s^y  Garabobo.. 
En  las  costas  de  Coro  j  llaraoaibo.. .. 


temperatura 

media 
del  centlgr*. 


.96.  8. 
S6.  6. 
ss;  6. 

94.  7. 


■  Generalmente  crece  de  4  á  K»  él  se  pone  el 
termómetro  en  la  paite  en  que  el  pgua  tiene 
dos  6  tres  pies  de  protTuaáidád. 


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NOTA. 


*iMP 


Las  obervaeiones  Mn 
sido  hechas  en  muchas 
Mrtftt  do  lili  inisTtn  coi'j 
tas  á  diferentes  horas,  y 
en.  distliilasiiipooas ,  pero 
se  ha  tenido  esto,  presente 
para' formar  la  tabla  que 
eski'ftandada  sobre- mas 
.  de.  tOOtoliie  woetonea  íp». 
fueron  hecbas eoa-el  ler* 
mómetro  de  Farenheit  y 
reducidas  al  centígrado. 


^y£G£TALES• 

Esceptuaadó  solo  el  'Nuevo  reino  de  Grftnada  y  los  países  Mtiiflh 
dos  en.el  eimador ,  ningano  de  los  -de  la  América  antes  espaüdla 
ofrece  tanta  eopia  y  variedad  como  Yenezuelayenlas  producciones 
*  del  reino  vegetal.  Plantas  útiles  al  comercio,  otras  que  el  lujo  y  los 
aitiguos  hábitos  han  heeltf)  necesarias;  .cuáles  preoiosas  pafa^Ia 
c«ra  de  las  dolencia^  himiMas;  y  na  número  consídka'ábletie  te 
qoe"  sirven  para  et  cqmvn  aItmentO;  hateen  H^íáima  la  jffom;  auii 
no  conocida,  de  la  tierra  venezolana.  Esctsanren te  instruidos  los 
viajeros  antiguos  en  las  ciencias  naturales^  se  dieroia  poco  á  l^s  in- 
vestigaciones botánicas  y  zoológieas  .^mas  se  aplicaron , al  oonoci^ 
niiento  de  los  mínerades,  yconttodo/mDg.iitíaroitiíoB  ^ettteta  he-i 
cha  perillos  ex|Bte  de  )as  que  encierrannestro  paSs,  teniéo  siem-^ 
pfe  como  poco  rico  en  esta  parle.  Sin  ios  trabajos  de  algunos  sa- 
bios estranjeros  que  ;en  ié{K)cas  mui  recientes  visitaron  ]os  países 
equinocciales ,  llevado?  .da  .su  amor  .á  jias.cáencias,  Venezuela  hu^ 
bíera  permanecido  tan  deseonécída  ¿ría  fii]ropa.cuUaie<9&aks«0í^ 
giones  mas  distantes  de  Ta  Oceánia  ó'd^  Mitee.  í^o  pofqi»^*»  niñS 
gun  tiwttpe  hiyin.ialUido.flipiáradaflMbJigal^^ 


]ilAI>Ue»^.|«lPá  'teiát  con  A«r  reí  ^  p«is .  baja>todiM  r  aoe  itafUeM*  £1 
suítB  Añdai^u  (pot^^ifoiplo ,  en  tu  Hwtorm  aaliirál  y  indral  :d0  Iw 
Indias,  líi&'é  eouQíúBirmnchds  ptentee  iodigeims^  las  qiieeik.su.'to&* 
po  se  habían  aclimatado^  Varios  intiiierfi^  y  aniíoales,  y4a8.eaUdiie  i 
des  generales  ^1  país  ;.|iep»  suolira  «no  es^  an  Miado  científiao  y 
e^  mtti  léjos.de  «atístettr  á  los  •sabios ,  queboí  la  eoBsnUaD.mtn 
pof  Qiiríosídad  gue por  prayeebo.  Bi^ líempospailarktres  D.  Joii^e 
Jpttti'y  *P*  Antonio  «Ulloa  bieieron  .de  orden  «d^I-gobiaüna  jaspañol 
qn  viaje  á  Amériea.  A  niiigaiio  mejor  que  áestos  doathombres  mt-< 
bios  hubiefa.jmdído  darae  el  eñcar>gpo  de  formar  i^Leuadró  fisko  dn: 
las  hermosas  regiones  hispano-americanas.;  pafO)ni  tuvíeroatíem* 
po  para  tan  vasta  empresa ,  ni  fué  su  objeto  ^principal  la  ciencia: . 
Fueron  enviados  mas  bien  como  pcsqoj^dores  políticos  que  como 
esploradores  de  la  naturaleza ;  y  la  exactitud  y  juicio  con  que  des- 
empeñaron su  peligroso  encar^o/hace  sentir  que  no* dedicáronles-  '^ 
dusifamante sus  talentos á  objatosde  mayor  utilidad  para  él  gé^- 
nero'huaiano.  .Á  ntas  de  que,  ningnno  de  ealas  beneméfíta^  aspa-  • 
ñoies  visitó  siquiera  el  pais'-veneíolano.  La. pobreza  proverbial  de- 
este exí  punto  ¿ -miücf ales,  apartaba  *deél:la  atención  debgobieniQy 
ataaidatada-for  las  riieas  i  comarcas  de  M^íoo  y?del  Perú.  Vendada 
tan  «ieita-y  genera),  que>ao  solo  es  apiieable-á.las:ckncÍB8  oalnmp. 
les,  sino  á  los  trabajos  purdmente  geográíeos  que  acaso^reqoianen) 
ni6i»0S'tieia|K)  y  raenrsos.  Poique  sise^eséeptúanlas.hennosaseaivt 
tas  ihidrográficas^  hechas  an  lostúllimos  üempos^porFida^ycCbnr»*' 
ruca,  no  eiíste  n^sgmr  trabajo  deresta.espeoie,  porlo  menos  eaw9»«' 
cidodel  pvblico,  que  fuese  mandado  baBarideOfieíO'porieLgqi^er-.^ 
n^tespaaal  :;y  sia^eseapcion.,  níagnno  puram«ftt8*tóregaAfBfX);> 

DubemospiM  á  ios  trabajos  del  señor  .fiaron  de^HaBÉbaUtda* 
claiiioacioii  de^miei^as  plantas  aos  preciosas.  Ni  d^e  olvidanr^ 
al: señor 'Bonpfauad  <pie»ioaoompaftó«n'^8n*intereBainle:viaje:á  faB(i 
fliliittes.Qqolnoíniia1esy^]ii.«l  sabiO'boossingauU'qiieieomo»  bqláBica*, 
y-qnímico  «hadado  ^á  eoncner  h!  ftierza,  riqueza  <y  tipliaacioft  á^ 
mnsIrasiniBforBsprodittoioiies  agrarias,  y  finalmente  al  seiior.Ro«»<; 
lin  qie  ^on  Mbil  observadon-y  diestrisímo  {^cel  ha  enriqumdo^ 
losfoatiálogos  eifropeos'con  variedad  de  imuestrasde:ios*mdS'bell0B  - 
iBdivhlaos ^el' TéuM)' aniñíai  anevteano.  Stguieado  lospasos  de^es^* 
tiB:  liwulai>s>  evBáiifnt)e^.arMbOfioso  y  modesto  «venezólanp,tlo«íá'> 
Mai^^^^MÉrgasj  e^aooMo^yatari  el  m^ndorsi^^o  por  sos  trabajos-eD 
las  ciencias,  ^ha>elasiÁcaÁ5>m«i(^splaMU[r^^ue: se  ocüfltavtyn'á  la*^ 


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observadon  ée  sos  ^redieisésores.  t)6^  tqdas  Atas  daiMcat^éft  y  4e 
tt&a  larga' Hita' (Te  maderas  con  que  tíos  ha  faYéreddo  el  «eMr  Fe^ 
lieíaBo  MoQtñWgro  ColjtiQ  >  formamos  el  jedaci^o  cuadrQ  dé^pro*' 
7  doeoioaes  vegetales  que  ofr^emos  ^  público. 
:  No  se  puede  dividir  la^ vegetación  p«r  climas;  poes  lo  cálibo  , 
Vm  ó  templado  de  estos,  no  «frece  escalas  safieiendes  para^gra- 
'dfiar  con  pr6d$i#n  los  principales  vegetales.  Estas  escalas  son  \^ 
difereoteS'  aHnras^á  1]ue  se  encnentraii  los  terrenos  sobre  él  nti^M' 
Uel  mar ;  y  por  eso ,  separán<|pnos  de  ima  división  general  que  en 
otra  parle  bemos  becho  de  las  temperaijgrasde^  nuestro  suelo,  se* 
guir^odos  aqueflas  eselusivamenijp. 

DEL   NIVEL   DEL    MAR   A   ^  .200    VARAS. 


»' 


•^    • 


Desde  los  bordes  del  Océano  basta  la  altura  de  -1 .200  varas 
Hace  y  medra  la  grande  y  hermo^  familia  de  las  palmas,  llama» 
das  coa  razoq  por  -un  célebre  esqritor ,  los  príncipes^  del  reino 

^  vegetal ,  y  por  lo  menos ,  con  las  q^e'^ningun  otro  puede  compe- 
tir  en  la  variedad  de  productos  útiles  al  hombre.  Solo  tres  de 

.  sasínctividuos  forman  escepclon  á  esta  regla,  pues  oo  se  sosli^ 
nen  sino  eñ  alturas  mayores  y  mucho  mas  considerables.  Uno  és 
el  palmiche  de  los  cerros  de  €aripe  y  de  la  Cimarronera  :  nade  á 
•l;500  varas  y  sa  tronco  de  tres  ácnatro  pulgadas  de  dfimetro*se 
eleva  hasta  la  altura  de  20  pies  :  en  ailiUas  sirve  de  luz  á  los 
indios  de  Caripe  cuando  penetran  en  la  cueva  d«|  Guácharo  á  ca* 
zar  li|s  pájaros  nocturnos  de  este  nombre.  El  s^nndo  es  la  pal- 
ma de  la.  cf ra  ( ceroxylonanéUeola )  que  Humboldt  j^ncoolró  en 
la  m^ntaila  de  Quindio,  creciendo  en  una  aliará  varia  de  '2.098 
vari»'  basta  5.5S4  :  vegeta  también  en  la»  mpmtaSals  de  Mérida 
<fit  miran  ai  lago  de  Maraeaibo ;  y  le  viene  su  ñouáb^e  tulgar  de 
Japera^que  mana  por  .encima  de  Ja  coftesa  y  que  loSiiodígena^ 
de  a^uéllaf$  regiones  usaban  desde  tiempos  remotos  para  alum- 
bmrse.  En  fin,  la  palma  r^al  que  es  una  especie  de  oreáú(m 
'*^«'4)  y  que  crece  en  la  altura  de  2,200  varas;  árbol  gigantesco 
cuyas  formas  maje^luosas  lo  colocan  enUre  las  mas  bellas  palme*^ 
ras  del  Nnevo-Aílundoi,  Casi  .nunca  está  sola :  á  m  pilé  ó  c«^  do' 
ella  se  mantiene  por  lo  común  una  paltnape^e&a  q«6  p(^  s«t 
c^figur^cion  es  l)ama4^:^%Hde  la^lpd^ ;  a«bÍMU>  hüspkte'qu^^ 
hace  resaUar  ma^  la  {leri^esura  4e  fu-  ortosal  eomp^üera. 


•   <* 


n¡lef?n^t^8  palmas  adoriiMi  los  declivios  de  las  oerátll^ras,  las 
•espesas  selvas  de  las  orillas  de  los  ríos  y  las  vastas  Uaouras  cubiertas, 

jr  de  altos  y  socalentos  pastos.  Nacen  y  viven  estas  en  altunts  yarite 
basta  la  de  K  •20iP  yaras ,  que  como  ya  hemos  dicho ,  es  el  limite  su* 
perior  de  su  vegetación;  y  si  bien  reservamos  sa  enumeración  para 
Á  catálogo  que  se  pondrá  al  fin  de  1a  descripción  de  los  vegetales, 
no  podemos  menos  de  mencionar  aquí  algunas  cuya  falta  seria  de 
gravedad  en  nuestro  plan  general.  La 'primera  de  ellas  por  su im- 
|M>rtanc>a ,  ya  que  no  por  su  hermosura ,  es  aquella  que  en  su  eu-*.. 
tusíasmo  llamaron  los  misioneros  j)(iii  ie  vida;  la  que  también  sa . 
dice  $agu  de  lo$  indios  guárannos ;  la  palma  moriche ,  en  fin; 
(coctía  mauriiiá)  cuyo  nombre  recuerda  al  hombre  americano  la 
lecundidad  con  que  favoreció  naturaleza  el  suelo  de  su  patria.  Crece 
desde  el  nivel  dpi  mar  hasta  la  altura  de  800  varas ,  en  los  terreno^ 

-  húmedos  y  cenagosos.  Guando  en  los  calores  del  estío  se  seca  todo  . 
-en  derredor  de  este  árbol,  hallan  al  pié  de  él  los  yiajeros  aguas'  ' 
siempre  frescas  que  se  escapan  de  venas  subterráneas :  la  parte  mas 
tierna  de  su  cogollo  sirve  de  hortaliza  al  iqdígena ;  del  renuevo  lani- 
bien  saca  cuerdas  con  que  forma  sus'  redes  y  sus  camas  colgantes. 
HantenimieiVto  regalado  es  antes  de  Mzooarso  el  fruto  de  susrací^ 
mos  j  y  maduro  sirve  para  hacer.aceite  ó  javon  ú  horchaUfs  qúa  ei^ 
dulza  con  la^iel  de  las  abejas.  Con  las  hojas  secas  de  esla'  planta^ 
«ubre  el  indio  su  choza ;  eon  las.  tiernas  forma  esteras ,  fabrica 
sombreros  y.  mantas,  velas  parp  sos  embarcaciones.  El  tronco  en- 
cierra* en  su  parl^  superior  un  jugo  azucarado  de  que  hace  vino :  de 

*6l  saca  tablas  y  aun  algunas  vezes  embarcaciones  pequeñas.  Un  ti)-  ^ 
jido  natural  qpe  envuelve  el  racimo  del  fruto  antes  de  madurarse  y 
'«irve  junas  veaes  de  gorro  á  los  hombres  y  otras  de  faldelasá  las  mu- 
feces  casadas..  La  palma  qie  no  fructifica  suministra  una  médula - 
barini^a  que  llaman  jjfnnema ,  de  la.cual  hacen  pan  y  usan  cogu) 
menestra.  Podrida  esta  médula  sobre  el  árbol ,  produce  unos  gusa- 
iios|;rneso$  y  blaQ(^  que  comen  los  indios  caribes  como  una  cosa 
««quisita.  Tales  son  en  4K)Apendio  los  benéficos- usos  de  esta  planta, 
(011  que  parece  quiso  Dios  poner  la  satisfacción  do  toda3  lo&nccesid^.- 
4^ del  salvajede  América.  *  - 

No  son  menores  los  qne  al  hombre  civilizado  proporciona  en.  el 
liioral  el  coco  {lodoipeaj  i  no  en  valde  conociendo  sus  ventajas  se 
liA  dedicado  i  culUvarlo  con  esmero  en  estos  últimos  tiempos.  En 
Iiiie9tr|it  Ihuiuras  bai  hoaqoes  inmensos  de'la  sola  clase  llama<i|a 


4 


^^  '  palitta  abttiiido',  cuyás-hojas  sirvieii  panr  caMr  l&s'CiBaB;  fo9'  eogo- 

I  »      .  llo8*pM^bacw9ombrero0'ydtroncofUra'foiuarlos'<w 

■\      ,    latos.  Abondai)iisifim'68  en^  Rio>>Negro  la  llamada  'dtiqtilcMqiti^  Ign 
"*  eaal  «oba^amialaieiite  «iias^  barbas  negm&fias  een  <qa»  haoeír  lós^  in- 

dios sus  famosas  cabullas  y  oaMas^dástieoS)  ineomiptíbles  y  Hjeros, 
^  si- bien  algo'Yohimíbebos  por  lo  ^ueso  d«  lás'hebraB.  La  palma  ya^ 

guaes tan'ffttimdátite'ea lassélvas* ,  en  tas^Uamiras y  en  los cetfro», 
* quéfonna  en  oc^one^- escalaos* bosques,  á  bs  quo^con  razón  po^ 
'  HanHjarse  o/ltuara»  am^fican&s.  De  la  parle  mas  tierna*  de  sos  renut- 
''▼ososan  los  indígenas  como'bortftlita;  sirven  sus  hojas  secas  para 
^  ^  lechar  Jais  tiabttaciones,  para  hacer  cestos ,  sorafoi^t)S  y  cabuTfas ; 

k  tlsmpo  qtíe  el  tronco  oírecouna  especie  dé  tela  ó  cedazo  natural 
^uese.usft  para  las  filtraciones.  Dos  clases  de  aceite  da  esta  palma 
\  anualmente  en  la  estación  del  infierao :  uno  que  sirve  para  el 

..       alumbrado  y  seestrae  de  la  cascara  de  la  fruta,  otro  que  dala  carne* 
^       de  esta  y  se  apKea  al  mismo  uso  cuando  no  lo  comen  en  liígarde 
manteca.  La  palmar  chaguarama  crece  salvaje  en  las  llanuras  que 
solo  están  de  ^00  a  509  varas  sobre  el  nivel  del  mar ;  pero  fiasicb 
L  trasplantada  á  la  altura  de  \  .400  por  puro  adorno ,  á  causa  dé  sus 

!  ' ''4brm^s  elegantes  y  majestuosas-:  elevases  frecuentemente  mas  de 

^  '2K^  varas",  y  tan  solo  puede  comparársele  con  la  pHiiguao  ($  pir^áo 

t  que  nb.ce  mas  a!lá  de  las  grandes  cataratas  del  Orinoco  y  se-man- 
\  Hene  á  la, altura  de  1 90  hasta  400  varas  sobre  el  nivel  del  mar.  Su 

L  tronco  espinoso  tiene  25  varas  ^is^alto ,  sds  hojas  tienen  la  fioñrma  <fe 

plomas,  delgadas,  ondeadas  y  rizadas  hacia  la  punta;  prodtaoe 

'^    enormes  racimos  de  450  á200  fruías  farináceas,  amarillas  comd 

la  yema  del  huevo ,  algo  dulce  y  iiotritiv«  y  que  se  couie  como*  el 

plátano  y  la  papa ,  siendo  alimentD  tan  sano  coofoagradaMe.  No  je 

*  cansan  núñca  los-  indios  y  los  criollos  d»  alabar  lo»  beneícliis  dé  avie 

wbol  mtfgm'fico^  que  como  dice  HumbiMr,  podría  llb»arse)»i¿Mlt 

\  méipcotan. 

£1  cucnrito-vaágiai  y  el  seja  t^eneulá  frota  parecida  al  aibaí^ 

^0^  coque  y  sus  penachos  reclosy  etogantet  se  elevan  sobre  un  frooso 

%  de  50  á  5R  varas  de  aftttra .  Púoden  aimsíintH^se^  al  bMuoso  gtuM» 

oredoxa  ó  palma  real  y  son  plantas  áociflble&c(mio*ol^  mmohe  f  k 
yagua.  Propordonanr  eomid&s  y  l^gos  iaiti4iivos  eseeléiate».  Sus 
hojas  ó.  mas  bien  sns*pahnas  llenen  una  cHpsDdfltt'tan  pefpéadfe»- 
hu^etí  su  juventud  como* en  su  «vleao'dMmillO'^aola  qM^las  pMh 
tas  en  este  último  estado  se  encorvan  feBerélq^u«ñQraianM^I  utas 


ÜefiBOSO).  tíarao.n^  frasco' penacbo.  verde..  UrgK>  aaria.emiinerar  las 
4iíér6Dt6a  clasa»  de  palmaque  axisten  en  niie»trO' fecundo  suelo  : 
baatalo  diolio  pararformapeidea^  de  la  abundan^a^y-utílidad  de 
.aste  árbol  benéfico,.  ouniasdisUntas  familias'  bepnoseaa  nuestras 
llanuras  y  selvas.  Garaclerizan  ellas  de  un  modo  mui  partícnlar.^1 
lerreno  venezolano  :  no  son  como  en  los  desier4os.del>África,  gfu- 
pos  solitarios ,  habitadores  de  uno  ú  otro  oasis  qne4e  vez  en.cuaiN 
4o  varía  la.  baste  unifonnidad  de  aqueÜos  maces  de  arena  ;  aqn/ 
.  Biieb]án'.es[iaeios  inmensos  de  terreno ,  templan  en  ,los  calores  del 
estío^los  rayaos  abrasadores  del  sol  tropical  y^en  la  ^tacion  lluviosa 
cuando  todo  se  inunda,  tienen  el  aspecto  de  un  bosqpe,q|jie  sale  del 
•enodelaasfuas. 

Sobre  los  bordes  del  Océano  y  del  mar  de  las  Antillas  y  en-  el" 
4elta  pantanoso  del  Orinoco  se  nutren»  los  mangles  {rhisaphoñi 
.  mang(e)^^  la  familia  de  las  coprífoleáceas :  los  liai.  encarnados  y* 
.  {nietos  {avicennia  nítida).  Fórmase  la  planta  de  numerosas  raizes 
.  j^e  levantándose!  algunos  pies  sobre  la.  tierra  se  uneay  componen 
un  tronco-  ^^leso  y  fuerte,  útil  para  la  carpintería*  De  ^te  y  de  las        ^ 

0 

jamas  brotan  renuevos  semejantes  á  la  jarcia  de  un  buque  ;  tos     ,. 
cuales  caen  á.  tierra,  toman  raiz  en  ella  y  forman,;  por  decidlo  así , 
oirás  tanta»  maromas  que  en  un  espacio  de  muchacireunferencia 
afinían  el  árbol  en  medio  de  los  aguacales.  El  icaca  (^firisobalü" 
ñus  étnico) ,  es  un  arbusto  que  orece  espontáneamente  cerca  de  la 
orilla  del  mar  formando  espesos  matorrales ,  cai^gados  de  frfita^ 
blancas  y  rosadas  de  un  gusto  agradable,,  y  de  las  coates 'se.baeen' 
ascelenAes  conservas*  Las  uvjgis  de  costa  (cocüoloba  wifera )  na- 
¿ea> silvestres  en  las  playas  marítimas,  en  tanta  abuadaacia  qSe 
4^arecen  pequeños  bosques.  En  medio  de  las  lustrosas  y  redondas 
bfjas  se  de^ubren  multitud  de  racimos  sem^aatcs  á-  la  uva  nt^gra 
•  4e  E«ropa'4B¿andD  está  madura,  y  tienen  un  gusto  mui  agradable. 
fil:  venenoso  manzanillo  babitaí  el  litoral  y  aun  se  interna  en  los 
bosques.:  su  nómbne  botánico  es  (hipomane  manúinelia]de  la 
'.Iftmilia  de  las  euforbiáceas.  La  fruta  tiene  la  figura  de  una  peque- 
.  ila4naasa9a,  y  es'tan  olorosa  coino  las  mejores  de-EucoDaj.peroiel 
jm^rudeate  que  llevado  de  tan  engañosa  apariencia,  las  comiera , 
recibifjíi  la  muerte.  Sn  sombra  misma  es  nQCÍva,,piies  así  4e día 
como  de  noche  produce  el  efecto  de  liinchar  las  f^rtes^q/aa  han  par- 
lo del^aíre  ambieiite.. « 
Tawbieuea  lasiOriHaadei.mav  y  basta  4a  altura  da  4  f200:  vacas 


A 


\    ' 


~  96  —  " 

Yegeta  lá  gran  t'tírba  de  ios  eirius,  la  biguera  de  la  India  ó  cardo* 
nes,  qne  sé  elevaii  hasta  cinco  yaras  de  alto  en  fprma  de  candela- 
^  bros:  Sa  tronco  es  tan  doro  qoe  de  él  se  sirven  para  la  oonstroe- 

^  cion  de  las  casas :  sus  brazos  espinosos  de  diíererentes  formas ;  pero 

elevándose  todos  rectamente  hacia  et  cielo,  son  en  las  llanuras  de 
Coro  y  en  varios  distritos  de  las  de  Barquisimeto,  dorante  el  vera- 
no, el  pasto  común  de  los  numerosos  rebaños  de  cabras  que  allí  se 
.  mulUj^lican  con  asombro.  Este  mismo  u^  tiene  entre  otros  la  fa- 
XK^ilia  de  las,  tunas  o  cactus  con  espinas  y  sin  eltes.  Sobre  esto 

r  planta  de  diferentes  formas  y  alturas  y  que  crece  en  ocasión^  basta 

tres  ó  cuatro  varas,  se  cria  espontáneamente-el  precioso  insecto  de 

r*  la  cochinilla^  que  hace  la  riqueza  de  una  parte  considerable  del  tw* 

I»  ritorío  de  Méjico,  á  tiempo  que  se  descuida  totalmente  so  cultivo 

^    en  Coro,  en  Carera,  en  Maracaibo  y  Barcelona,  donde  generalmente 
se  encuentra.  Tanto  los  cactus  como  los  cardonales  forman  en  oca- 
siones bosques  impenetrables ,  mezcladois  de  mimosas  arborescen^ 
tes  de  la  familia  de  las  leguminosas :  tales  son  el  cují  ( mimoia 
^,  temesiana)  de  madera  torcida  pero^oi  sólida,  y  otra  de  sus  cla- 

i  -.       scs  llamada  vulgarínente.  ct^^de  atvma ,  menos  común  y  como 

'  el  otro,  útil  par4  horcones,  dfentes  de  máquinas  y  curvas.  Eusten 

también  las  mimosas  fructescentes  ó  sensitivas  :  ktf  de  Cumaná  de 

copa  esférica  {humilis )  4e  tres  á  cuatro  pies,  la  pelita  de  Calabozo 

^  y  la  dormiens  de  Apure,  qne  tírven  de  verde  alfombra.  Una  ter- 

^  ,    cera  parte  de  la  provincia  de  Coro  y  porción  n»  pequeña  de  las  de 

Maraeaibo,  Barquisimeto,  Barcelona  y  Cumaná,  están  generalmente 
cubiertas  de  esta  sola  vegetación  dentro  de  la  cual  viven  en  soeie- 
Sades  numerosas,  el  chigüichigne ,  de  la  familia  de  las  afumai, 
los  mayales'  de  la  familia  bromelia-caratas  que  ocupan  gnuides  ^- 

¡  pacios  impenetrables  por  las  púas  de  sus  hojas  y  la  ¡^oiimidad  de 

las  matas,  el  magfiei  cocui  ( mdguesis)  cuyo  vastago  ó  pitreo  car- 

^'  gado  de  flores  ,se  eleva  mas  de  diez  varas.  De  esta  planta  estraen 

en  la  provincia  de  Coro  un  licor  es]^rltvos<^de  muchas  aplicacioii^ 
'  medicinales  importantes,  mas  fuerte  y  acaso  también  mas  agrada- 
'  ble  que  el  -aguardlinte  comon.de  la  caiia ,  y  del  cu%l  hacen  los  ha- 
lavtontes  de  aquella  provincia  gran  comercio.  Así  como  este ,  pros- 
pera abundantemente  el  m^eí  cocuisa  ó  mas  propiamente  pita  , 
{cocuisa  aloe )  en  los  cerros  calizos  hasta  la  altnnr  de  2.<^00  ¥a- 
ras  sobre  el  nivel  del  mar.  Lo  haí  con  espinas  y  sin  ellas,  y  tienen 
^us  hojas  varios  usos.  Las  hebras  deque  'están  llenas  sirvan  para 


» 


s 

—  97  — 

hacer  cuerdas  ó  tejidos  ordinarios,  en^Tiu(«stra  tierra^  que  en  otras 
hacen  telas  y  aun  encajes  de  ellas  :  machacadas  se  aplican  con  buen 
éxito  para  la  cura  de  las  llagas  y  cangros.  A  la  altura  de  2.500  ' 
varas ,  poco  mas  ó  menos ,  se  sostiene  agarrado  á  otros  árboles  el^; 
maguei-parásito ,  en  cuyas  hojas  rolladas  á  lo  ancho  y  de  hechura> 
de  cuña,  como  las  de  toda  su  familia»,  bailan  constantemente  agua^» 
en  abundancia  los  cazadores  ó  viajeros. 

La  pina  (bromelia  ananas) ,  de  la  familia  de  las  bromeliácea^^ 
crece  siempre  aislada  entre  las  gramíneas,  y  silvestre  al  pié  del 
Duida  y  otros  cerros  de  la  provincia,  de  Cumaná.  Esta  planta  bella 
por  la  simetría  de  sus  formas,  produce  un  fruto  amarillo  ó  morado, 
coronado  de  hojas  plateadas ,  de  los  mas  esqutsitos  por  su  sabor  y 
aroma. 

En  la  región  de  las  palmas  crecen  corpulentos  y  hermosos  el  ta- 
marindo ( tamarind/us  indica ),  de  la  familia  de  las  leguminosas^., 
cuya  fruía  sirve  de  regalo  y  remedio,  y  la  cañafístola  (caparís)  de^ 
que  encontró  Humboldt  50  especies  y  cuya  fruta  tiene  también 
aplicaciones  medicinales.  A  la  misma  familia  pertenecen  el  algar- 
robo {hymencsa  curbaril)  de  fruto  harinoso,  madera  compacta^ 
.útil  para  máquinas ,  y  cuyas  raizes  producen  una  goma  escelente- 
para  charol  y  usos  medicinales  :  el  alcornoque  ( bawdichia  vir^ 
gilioides)  áe  mtdera  superior,  aplicable á  las  máquinas,  incorrup* 
tibie,  y  cuyas  raizes  se  usan  en  la  cura  de  varias  dolencias ;  y  el 
dividive  { caulteria  tinciorea)^  cuya  madera  es  propia  para  obras 
de  torno  y  la  fruta  mui  usada  en  el  curtimiento  de  pielop. ' 

El  cascaron  majomo  (securidosa^ pubescens) ,  árbol- de  madera 
.  mui  compacta  y  único  que  en  escelencia  puede  competir  con  la  ve- 
i^.  Del  árbol-  de  aceite  ó  eopaibo  llamado  también  cabima  (copayf- 
fera  officinalk) ,  se  estrae  por  medio  de  incisiones  hechas  en  sa 
corteza,  €fi  j^imoso  bálsamo  de  su  nombre^  que  sirve  para  curar  laS' 
heridas ,  precaver  del  tétano^  aliviar  de  otras  muchas  dolencias. 
Abundante  á  la  par  qué  útil ,  crece  silvestre  en  las  selvas  y  sobro 
todo  ea  las  de  Maracaibo  y  d^  Orinoco.  El  guamacho  (ynga  pun- 
gens )  da  un  fruto  agridulce  y  hojas  medicinales.  Hai  también  ea 
Yenezuela  árboles  colosales  de  la  misma  familia  de  las  leguminosas, 
tales  como  el  saman  (saman  acacia ).  Admirable  es  el  de  Güere , 
bajo  cuya  sombra  puede  reposar  un  batallón  en  columna  :  el  diá- 
metro mayor  del  ramaje  es  de  72  varas  y  el  tronco  tiene  4  ^  de 
circunferencia.  La  jigua  {geoffrea  superba)  abunda  en  Rio-Negro 

^        P.   CBOG.      ^  '-7 


^ 


—  98  — 

y  proface  iib%  almendra  aceitosa  contenida  en  una  cascara  inerte 
qne  fígnra  nn  erizo.  La  pasa  de  Río-Negro  {geúffrea  hredemeyeri) 
•  árbol  igualmente  corpulento,  produce  una  fruta  do  cascara  mas 
fuerte  y  mas  aceitosa  que  la  anterior.  Los  bucares  (erythrina  ve* 
Ji^tina^  e.  umbrosa  y  e.  dubia),  llamados  Tulgarmeate  auauco» 
peonía,  espinoso  y  liso,  notabks  por  su  altura,'  por  la  prontitud  de 
su  crecimiento  y  por  la  sombra  benéOca  que  prestan  al  café  y  al 
cacao. 

La  ceiba  ( bomhax  seiba )  de  una  altura  gigantesca  abunda  (ks^ 
de  las  regiones  mas  bajas  hasta  mas  arriba  de  2.000  varas. 

A  la  fai^ilia  de  las  malyáceas  pertenece  el  guásimo  (guásima  uh 
mifolia )  que  abunda  en  los  países  cálidos  y  cuya  fruta  sirve  de 
mantenimiento  silvestre  á  los  ganados  y  bestias.  Tanto  ella  como  la 
<M)rteza  del  árbol  sueltan  después  de  machacadas  un  mucilago  que 
bebido  es  eficaz  remedio  para  las  insolaciones  f  tabardillos  de  hom« 
bres  y  animales. 

A  las  de  las  verbenáceas  pertenece  el  maría  (pétrea  arbórea) 
á^ol  siempre  recto  y  de  madera  escelente  para  arboladura  :  no 
tiene  mas  ramas  que  las  de  su  copa  esférica ,  lin^la  en  estremo 
cuando  se  viste  de  sus  flores  rosadas. 

El  jobo  (spondea  Intea)  es  de  la  familia  de  las  terebintáceas, 
resinoso,  de  madera  frájíl ,  de  fruta  aromática  y  alimenticia ,  que 
fermentada  produce  una  bebida  agradable. 

Debe  colocarse  el  piñón  [jairopkfi  curcas)  en  la  familia  de  los 
tithymelca%.  Sirve  la  almendra  de  su  fruta  coiA)  emético  y  pur- 
gante y  también  da  un  escelente  aceite  para  el  alumbrado. 

Este  uso  y  el  de  laxante  en  grado  superior  tiene  el  tártago  hi- 
guerote  (palma  crisii)^  de  la  familia  de  las  euforbeáceas.  El  emén 
tico  crece  silvestre  en  forma  de  arbusto  hasta  la  altura  de  tres  va- 
ras :  su  fruta  en  el  estado  de  madurez  es  del  tamaño  de  una  cereza 
y  de  la  misma  figura  que  la  del  piño»;  y  la  almendra,  que  e»  una 
pepita  blanca ,  es  la  que  se  usa  como  el  emético  en  la  medicina. 

£1  totumo  ( cresceneia  cugete ) ,  d^  la  familia  de  las  soláneas , 
produce  frutos  de  diversos  tamaños  generalmente  redondos  ú  ova- 
les. De  ellos  se  sirven  la  gente  pobre  y  los  indígenas  para  formar 
vascas  de  toda  especie,  platos,  cucharas  y  otros  utensilios. 

Crece  con  profusión  en  todo  el  territorio  venezolano  la  vera  ó 
palo-sano  ( zigophilum  arbareum )  de  la  familia  de  las  zigofíieas ; 
árbol  colosal  que  se  eleya  hasta  50  varas  y  puede  dar  quillas  de  25, 


—  99  — 

siendo  su  madera  incorraptíble,  la  mas  fuerte  que  $e  conoce* 

Superior  i  este  es  el  granadillo  {bucidá  capifata)  de  la  faoñlia 
de  mirabolanos,  de  que  bai  dos  clases^  uno  negro  y  otro  pardusco, 
ambos  mui  buefos  para  obras  de  torno,  y  de  una  madera  que  por 
su  dureza  compite  con  el  bierro. 

£1  carato  {genipa  americana)  de  la  familia  de  las  rubiáceas  es 
un  bello  árbol  de  bojas  largas,  lustrosas,  d^  fruto  parecida  al  nís- 
pero y  de  cuya  semilla  cáustica  bac^  uso  los  indígenas  para  for- 
loarse  en  la  piel  una  especie  de  enrejado,  negro  ^obre  el  rojo  con 
que  se  pintan.  £1  paraguatán  {maerocuemium  tinctorium )  de  la 
misma  familia,  produce  una  bella  madera  rosada,  propia  para  eba-  \^ 
nistería  :  su  corteza  da  tinta  roja  y  podría  ser  un  articulo  ioi^or- 
imte  de  comercio. 

£1  cbaparro-sabanero  ( curatella  americana ) ,  de  la  familia  de 
las  dileneáceas,  cubre  los  llanos  altos  y  produce  bojas  tan  ásperas 
que  se  emplean  para  pulir  las  maderas^y  el  carei.  £1  cbaparro-maA- 
teca  {byrsanima  ehrysophilla),  de  la  misma  familia,  produce  una 
madera  color  de  almagre^  que  tiene  la  propiedad  de  arder  como 
una  vela- 

£1  cotopris  [melicoca  olivceformis)  y  de  la  familia  de  las  sápin- . 
dáceas ,  es  un  árbol  elevado  de  hermoso  ramaje  y  aspecto  propio 
para  decorar  grandes  parques  y  paseos  :  su  fruta  agradable  da  uní* 
licor  vinoso  bastante  aromático  :  crece  con  lentitud,  es  de  mij^ha 
vida  y  carga  de  una  manera  asombrosa. 

Por  incisiones  bechas  en  la  corteza  se  saca  el  jugo  del  árbol  san- 
gre-de-drago que  sirve  para  tinta,  y  tiene  aplicaciones  medicina^  r 
es  corpulento  y  abunda  en  las  serranías  bajas  y  en  las  selvas  de  las 
llaneras.  Del  árbol  llamado  murciélago ,  en  la  serranía,  de  JNkgua 
se  estrae  el  mismo  jugo ;  y  allí  abunda'tambien  el  cándelo  que  en. 
otras  partes  llaman  árbol  de  la  manteca  y  cuajo  en  algunas ;  se  !»• 
cree  de  la  familia  de  los  sapoteos  y  tiene  propiedades  mui  particu- 
lares. £ntre  la  corteza  y  el  tronco  se  encuentra  una  materia  seme- 
jante al  sebo  que  sirve  para  alumbrar  :  de  la  fruta  se  hace  una  be- 
bida semejante  al  cacao,  tostándola  primeramente^  y  se  estrae  de  ella 
nn  aceite  útil  para  el  alumbrado. 

El  árbol  candelero  {aralia  capitata),  de  la  familia    de  las   , 
analláoeas,  es  una  planta  bella,  que  serviste  de  ramas  horizon- 
tales. *  • 

£1  árb^dq  leche  (galactodendrum  utile)^  de  la  familia  de  las  * 


1 


r. 


—  400  — • 

Qrtíceas,  se  llama  tamlüen  palo-de- vaca.  Crece  en  grupos,  tiene 
las  hojas  grandes  y  venosas,  y  da  por  »cision  un  jugo  blanco  nu- 
tritivo semejante  al  de  la  leche  de  vaca,  pero  mas  espeso.  Según  el 
análisis  de  los  Señores  Boussingault  y  Rívero,  contiene  agua,  una 
materia  análoga  á  la  materia  gaseosa  de  la  leche  de  los  animales,  y 
cera  en  abundancia.  Esta  última  parece  idéntica  á  la  mas  pura  de 
abejas  y  por  este  respecto  el  árbol  de  leche  merece  ser  objeto  de 
industria.  Si  el  licor  se  une  al  algodón,  sirve  para  alumbrar,  dan- 
do una  luz  viva  y  de  mucha  duración.  Existe  en  las  provincias  de 
Caracas,  Carabobo  y  Maracaibo. 

El  lechoso  ó  papayo  americano  ( cancha  papayo ),  da  una  fruta 
sabrosa  :  sus  hojas  se  emplean  en  lugar  de  jaboa  para  blanquear 
los  encajes,  muselinas  y  zarazas.  El  árbol  de  pan  [carolmea  prin- 
ceps) produce  una  gran  fruía  redonda  donde  están  encerradas  mu- 
chas semillas  semejantes  á  la  castaña  y  que,  como  estas,  se  comen 
y  son  nutritivas.  Se  encuentra  también  en  Venezuela  un  árbol  lla- 
mado castaño  [artocarpus  incissa  F),  de  hoja  y  forma  diferentes  de 
las  que  tiene  el  que  con  este  nombre  sa  conoce  en  Europa.* Es  co- 
pado y  hermoso  y  echa  flores  gigantaícas  como  de  media  vara  de 
diámetro  :  contiene  cada  una  de  estas  diez  pétalos  de  ocho  pulga- 
das de  largo  y  dos  de  ancho,  un  pistilo  é  innumerable  cantidad  de 

I  estambres :  su  color  es  rosado  que  por  degradación  pasa  á  amarillo. 
Pridüce  una  fruta  parecida  á  la  del  carolinea  princeps  y  sus  cas- 
tapas  se  asemejan  en  el  sabor  á  las  europeas.  La  fruta  de  burro 
[uñona  aromática) ,  de  las  anóneas  es  ej  guaruchi  de  los  indíge- 
nas, el  cual  se  eleva  en  algunos  parajes  á  20  varas,  tiene  figura  pi- 
ramidal y  su  fruta  está  reputada  como  poderoso  febrífugo  :  llá- 
maula  malagueta  en  algunos  parajes.  El  catigúire  (anona  manirote) 
es  de  la  misma  familia  y  tieae  una  fruta  agradable  pero  muí  no^ 

*  civa. 

E.n  la  familia  de  las  meliáceas  primoregia ,  el  cedro  negro  ( ce- 
árela  odarata ) ,  es  una  clase  de  árbol  de  las  mas  abundantes  de 
nuestros  bosques.  Algunos  suelen  pasar  de  54  varas  de  elevación 
y  cinco  de  circimferencia.  Son  muí  comunes  en  las  selvas  del  lago 
de  Maracaibo  y  clasifican  las  gentes  con  diferentes  sobrenombres  su 
madera,  según  lo  mas  o  menos  subido  del  color,  la  abundancia 
de  resina  y  el  arqjpa  qué'despide.  El  cd\y^ho  [swietenia  mahagoni)  " 
lleva  su  troíco  á  20  varas  y  tiene  de  tres  á  cuatro  do  circunferen- 
cia :  su  madera  es,  sin  embargo ,  mui  inferior  ala  de  los  de  Haití 


r' 


—  Í(M  — 

y  HondoraSy  escepi^en  Río-Negro ,  donde  se  encuentra  de  esce- 
lente  calidad  y  aun  superior  en  lo  compacto.  El  cahobano  de  Bar- 
qniftimeto  (crotón  iucidum  ?)  es  igual  á  la  mejor  caboba  de  aque- 
llos paises  y  la  circunferencia  de  su  tronco  pasa13e  cuatro  varas. 

El  caracoli  (rhinocarpvis  excelsa)^  de  la  familia  de  las  burcerá- 
ceasy  árbol  mui  corpulento  en  algunas  provincias  y  de  madera 
superior  para  buques  de  gran  calado  y  para  la  construcción 
civil. 

« 

En  la  Mnilia  de  las  ienutremáceas  el  carnestolenda  ( bombax 
gossipyum) ,  árbol  de  corteza  medicinal  y  cuyo  enorme  (ronco 
aplican  para  canoas  de  una  sola  pieza. 

DE   200   Á   2.000   VAIUS   PE  ALTLRA. 

* 

Desde  200  hasta  2.000  varas  d^  altura  sotee  el  nivel  del  mar  » 
nacen  y  medran  arbola  gigantescos  dé  la  lamilia  de  las  amirideas.  ^ 
£1  caraña.(am^¿^  caraña]^  de  resina  bien  conocida  por  «us  mara^ 
villosos  efectos  en  las  heridas,  es  árbol  que  se  eleva  con  fcecuencia 
á  58  varas  y  abunda  en  las  montaos  de  la  provincia  de  Marida  ^ 
«  y  sobre  todo  en  las  de  Guayana.  £1  cedro-dulce  [ysim  altisim^) 
del  que  se  distinguen  tres  clases ,  según  lo  mas  subido  del  color  de  ^ 
su  madera,  que  es  escelente.  El  cedro-blanco  de  Rio-Negro  [amy' 
ris  altisima)  que  se  eleva  basta  44  varas  y  cuya  madera  >  ^  ún 
lindo  color  amarillo  después  de  seca,  se  usa  para  muebles  y  paraJa 
construcción  civil.  El  yastfate  (ysiea  cuspidatá) ,  árbol  corpuknto 
que  se  eleva  hasta  5 i  varas,  de  hernioso  ramaje  de  madera  esce- 
lente para  construcción  naval  y  de  color  semejante  á  la  del  brasil. 
Este  árbol  tan  apetecido  por  su  hermosa  tinta ,  crece  en  abundan- 
cia en  el  pats  de  los  guajiros  independientes ,  y  aun  se  encuentra 
en  otras  partes.  El  tacamahaco  (ysica  tacamahaca),  de  resina  úti- 
lísima para  la  cuca  de  las  herf^Jas  y  para  oirás  varias  aplicaciones 
medicinales,  produce  una  madera  de  muí  buena  calidad,  ^uida  la 
resina  de  este  árbol  á  la  del  caraña  y  aljgarrobo  la  usan  los  indíge- 
nas de  Rio-I>Iegro  para  componer  unos  hachones  con  que  se  alum- 
bfan.  El  tacamabaca,  que  también  dicen  curucai  los  indios  del  Ori- 
noco, es  de.  un  grosor  enorme  :  abunda  en  Cnniauá,  y  es  tan  común 
'  en  Guayana,  que  los  indígenas  se  sirven  de  la  corteza  para  formar 
sus  piraguas  álfeauoas  portátiles.  Para  eüo  la  estraen  perfectamente 


ñel  tronco  sin  romperla^  enrollan  y  atan  su^slremos  eon  bejofo^ 
y  al  rededor  le  pasan  otro  grueso  qae  áGrman  de  distanda  en  dis- 
tancia por  medio  de  otro  mas  delgado.  De  este  modo  qneda  for- 
mada una  embarcación  que  no  tiene  de  espesor  mas  de  cuatro  lí- 
neas, y  en. cuyo  centro  colocan  dos  palitos  atravesados  que  amar- 
ran al  bejuco  de  los  bordes  para  impedir  que  estos  se  -doblen  6 
tnan.  Algunas  he  visto  capazes  de  diez  personas,  y  para  Impedir 
-  que  en  las  puntas  se  introduzca  agua,  suelen  poner  barro  en  uno  y 
otro  estremo.  Héaquí  pues  una  corteza  que  por  su  lijere^ía,  con- 
sistencia y  estructura  proporciona  al  salvaje  medios  fáeiles  para 
recorrer  los  numerosos  rios  de  Guayana,  interceptados  á  cada  ins- 
tante por  peligrosos  raudales  que  no  permiten  el  paso  de  las^ca* 
noas«  Si  el  tránsito  de  tierra  es  corto,  el  indio  se  echa  al  hombro  su 
embarcación  ;  pero  si  es  de  muchas  leguas ,  la  deja  en  el  bosque  y 
.  pasada  la  catarata  dispone  en  méi^os  de  media  hora  una  concha 
semejante. 

El  maní  (maronobea  eoccinea) ,  de  la  familia  de  h»  gutíferas  , 
es  un  árbol  colosal  de  58  varas  y  de  madera  propia  pata  la  cons- 
*truccion  civil.  Hácese  algún  comercio  con  su  reciña  amarilla. 
:  £1  mamey  [mammea  americana)  mui  apreciado  por  su  madera 
'S^or  su  ff  tifia  agradable.  ,,. 

Pertenece  á  la  familia  de  las  leguminosas  el  orore  ( inga  ligus- 
tma)  árbol  corpulento  y  espinoso ,  de  hermosa  copa  y  madera  de 
.mak  calidad  :  produce  una  escele  nte  goma  y  se  sirven  de  él  para 
úñT  sombra  al  café ;  llamante  también *paují  y  ahoga*gato. 

Hfli  también  otro  paují  (anaeardium  oeciSentale)y  pero  este  es 
ife  la  familia  de  las  terebintáceas,  de  madera  amarilla  oscura  mui 
propia  para  muebles  y  obras  de  torno.  El  higueron  (ñcus  glabratá)^ 
xhp  la  familia  de  las  urtíceas  ;  es  un  árbol  elevado  de  tronco?recto  y 
^  25  ó  mas  pies  de  circunferencia  :  da  una  madera  lijera  propia  pa- 
ra en^rcioues  y  desús  enormes  raizes forman  bateas.  De  la  misma 
familia  es  el  árbol  mora  (morus  tintórea)  ^  coodCido  también  con  el 
nombre  de  moral  de  tintóreos  :  es  mui  abundaí^  en  las  tierras 
bajas  ;  pero  su  tinta  es  de  poc%  provecho.  El  yagrumo  [ceeropea 
peltata )  y  el  malapalo  {Jictts  devdrocida)  son  de  la  misma  familia : 
la  madera  del  primero  es  escelente  para  formar  canales  ;  el  seguft- 
do  es  un  árbol  corpulenta  que  da  el  caucho  y  de  cuya'.€orteza  ha- 
cen sacos.  También  hai  un  árbol  llamado  seringa  ó  caucho,  de  cuyo ' 
tronco  estraen^los  iudios  gran  cantidad  de  goma  (jfie  venden. á  lus 


tiabitipites  (IM  Brasil;  los  cuales  la  pnr^k^tn  é  iattoAigicm  m  los 
macados  de  Europa  goq  el  ao»l»re  de  goma  elásHea. 
.<^&  la  familia  de  las  eoforbeáceas ,  el  yació  [hevea  ffuayanesis ) 
se  eleva  54  yara^  y  da  tao^bieii  eauü^ho  :  atribuyese  á  la  mezcla  de 
SU  jugo  lechoso  mü  el  árbol  euriMioa  k  formaeiou  del  daptíeho  j 
sustancia  qjie  sirve  p^ira  la  elabiiracioii  del  cautcfao  negro  ó  braa^ 
de  que  bac^  comercio  en  Rio-Negro  y  con  el  cual  calafetean  la& 
jeDftbarcaeiones.  £1  javillo  de  la  mifj^  familia  (hura  orepiians),  d^ 
«norme  tnance^  sirve  paraa  canoas^y  botaos,  sacándose  algunos  ele 
•I  2  varas  de  largo  y  5  de  ancho  :  da  una  leche  cáustica,  es  de  asa* 
dera  lijera  y  lo  llaman  también  árbol  del  diablo. 

£1  pendare  [eitharexilum  einereum)  de  la  Humilla  de  Jas  verbe- 
náceas,-es  un  grande  árbol  abundantísimo  en  Rio-Negro,  el  cual 
prodyace  una  leche  p^fsúosa  que  emplean  los  indios  como  cola  y  aun 
eomo  barniz. 

£1  barba-de-tigre  s^ele  crecer  hasta  4a  altura  de  70  pies,  y  so 
'trom-o  y  ramas  están  salificados  de  penachos  de  espkas  crgese  quer 
es  de  la  familia  de  las  verberideas. 

Dn  árbol  colosal  hai  en  la  provincia  de  Cumaná  llamado^guarapa 
(bauhima^obtmifolia)  y  es  eiscelente  para  construcción  de  buques. 

£n  la  familia  de  las  lauríneas  el  volador  ( giroearpus  america" 
nm)  es  un  árbol  corpul^lo  cuya  madera  es  propia  para  construc- 
ción naval :  de  su  tronco  se  hacen  enormes  canoas,  y  bateas  de  sus 
raizes.  El  sasaíras  {pcoiea  yavicensis)  adquiere  hasta  seis  varas  de 
circunferencia  y  da  una  madera  amarilla,  resinosa ,é  incorruptible, 
^•que  aplican  para  cascos  de  piraguas  y  embarcaciones  miiyoref ,  y 
cuya  raíz  y  corteja  son  mui  medicinales.  El  laurel  sasafras,  varie- 
dad del  anterior,  es  de  tronco  re^to  que  se  el^  hasta  16  varas , 
de  madera  mui  .usada  en  las  embarciones  en  que  se  navega  desde 
Rio-Neg^o  hacia  el  Amazonas  y  el  Orinoco.  En  la  misma  famil^  se 
enéuentra  el  guariman {cryptoearya  camelilla),  especie  de  canelo 
fiíui  aromático,  aunque  po  tanto  como  el  de  Cetlan,  y  de  sabor  aígo 
diferente;  su  fruta  es-^mui  estomacal  y  se  conoce  con  ^quel  nombre 
«n  el  Orinoco,  con  el  de  caneliUa  en  otras  partes.  El  canelo  [cor» 
leap  winteranm]  produce  hQjas  tan  aromáticas  como  el  canelo  de 
Ceilan,  siendo  c(mocido  desüe  la  conquista  con  el  nombre  de  tuer- 
co-deUTocuyo.  El  aguacate  (lanrus  persea)  es  ile  la  misma  fan^iliaí. 
Se  conocen  de  él  varias  clases  importantes  :  de  su  fruto  mui  apete- 
cido y  gustoso  se  saca  aceite ;  s^  madera  de  color  rojo ,  mas  ó. me- 


1 


^ 


4  • 


4        '  ♦ 

—  104  —  * 

fios  sal)idOy  es  escoleüfe  para  máquinas  y  obras  de  torno  ;  yla  cor- 
teza drvc  para  teñir,  dando  un  color  medio  entre  amarillo  y  ro^fy.  La 
marima,  árbol  corpulento  y  hermoso,  de  la  mas  grande  uiilidad  j^a 
el  salvaje,  es  del  alto  Orinoco.  Tiene  una  segunda. corteza  del  grueso 
ide  dos  líneas  ,  tan  estoposa  y  unida,  que  sirve  de  manta  á  los  in- 
-dios  y  con  ella  hacen  vestidos  que  los  preatrvan  de  las  lluvias.  Es 
^anta  su  abundancia ,  que  hacen  comercio  de  esta  corteza  con  los 
vcriollos,  los  cuales  ia  usan  cotoo  estopa  para  calafetear  las  embar- 
-caciones  en  que  se  navega  por  los  rios  de  la  Guayana  y  para  empa« 
<quetar  los  chiucliorros  que  compran  á  los  indios. 

En  t<;^a  esta  zona  de  grandes  vegetales  es  donde  se  eleva  á  mas  de 
40  pie^3e  altura"  la  guadua  [bombusa  guadua) ,  que  es  una  gra- 
míne£^  arborescente  á  la  que  nada  iguala  en  elegancia.  La  forma  y 
disposición  desús  hojas,  le  dan  un  carácter  de  movilidad  y  liie- 
rcza  <)ue  contrasta  agradablemente  con  la  altura  de  su  tronco  liso 
^reluciente  :  ettá  generalmente  inclinada  h4cia  el  borde  de  los  ar- 
royos ,  y  se  agita  al  menor  soplo  del  viento.  Así  la  describe  Hum- 
boldt,  y  añade,  que  el  bombu  y  el  helécho  enarbol  son  entre 
todas  las  formas  vegetales  de  los  trópicos  las  que  mas  sorprenden 
la  imaginación  de  los  viajeros.  La  escorzonera  [craniolmia  annna)^ 
es  de  la  clase  de  las  gramíneas  ,  cuya  flor  blanca  tiene  de  seis  á 
ocho  pulgadas  de  largo.  Los  cortus^  los  maranta  y  otras  plantas . 
de  la  familia  de  la  caña  de  India ,  crecen  en  las  cordilleras  á  una 
altura  coBsiderable ,  cuando  cerca  de  la  costa  solo  prosperan  en  los 
terrenos  bajos  y  húmedos.  Lo  mismo  sucede  con  los  siiuzes  {kermes 
si^  caMenaifolia)  que  focman  zarzales  en  las  orillas  del  Apure  >  la 
Portuguesa  y  otros  rios ,  parajes  estos  apenas  elevados  \  00  varas 
.  «obre  el  nivel  del  mar;  al  paso  que  á  2000  varas  hai  árboles  que 
adornan  los  cerros  ,  y  mas  abajo  á  600 ,  los  valles.  La  caña-brava 
Qljata ,  es  una  gramínea  colosal  que  tiene  el  porte  del  jdonax  de. 
Italia  y  la  describe  Uuutboldi  bajo  el  nombre  de  gynerium  :  es 
útilísima  para  la  construcción  de  casas  .y  hacen  de  ella  cestas  ,  se- 
bucanes y  manares,  especie  de  sacos  y  cedazos.  La  bambusa  lati-^ 
folia  del  alto  Orinoco,  Casiqulare  y  Rio-Negro,  es  una  planta  social 
como  todas  las  de  la  familia  de  las  nastoides.  Construyen  también 
con  ella  cestas.  Los  nudos  ó  mas  bien  separaciones  interiores  del 
tronco  proporcionan  escalas  y  facilitan  de  varios  modos  la  fabrica- 
ción de  muebles  que  hacen  la  riqueza  del  salvaje.  El  carrizo  es  otra 
clase  de  gramínea  social  y  gigantesca  de  nuestras  altas  montañas , 


.!« 


¿w  40^  — 

coyos  grandes  tobos  proporcionan  ventajas  al  viajero^  Casado  se 
corta  la  cana ,  cada  separación  conliene  agaa  dulce  y  fresca  :  los 
nudos  están  á  distancia  de  una  vara  uno  de  otro  é  incomunicados 
interiomeiite  ;  el  diámetro  del  tobo  es  dé  tres  pulgadas,  propor- 
cionando un  escelente  caldero  para  caldos  y  otras  bebidas  calientes, 
poes  colocado  con  agoa  en  medio  del  fuego,  no  se  quema  ni  se 
rompe  y  hierve  tan  proiitamente  como  ona  vasija  de  boja  de  lata  : 
puede  servir  para  mocbas  vezes.  Las  cerbatanas  del  Orinoco  [ca^ 
rice)  canas  da  4  5  á  4  7  i»es  de  largo  sin  nodo  alguno  y  perfectamente 
rectas,  diindricas,  lisas  por  dentro  y  por  fuera.  Sirven  para  cassar 
pájaros,  soplando  por  eltes  con  fuerza  púas  dé  palma  macanilla.  La 
pequeña  flecha  asi  despedida  adquiere  un  alcance  de  mas  de 
80  varas.  Los  botánicos  no  han  visto  todavía  esta  plañía  monoco- 
tiledona ,  pues  las  cañas  que  se  conocen  son  las  que  los  indios  del 
interior  van  á  vender  á  la  Esmeralda ,  de  donde  piaifin  á  todas  par- 
tes. Los  heléchos  arborescentes  empiezan  en  la  región  de  las  palmas  ^ 
á  i  .200  varas  de  elevación  y  cesan  á  -1 .879  :  él  número  total  de 
estas  criptógamas  gigantescas  sube  hasta  25  especies  según  Hum- 
boldt.  £1  helécho  {cyathea  speeiosa)  tiene  en  solo  el  tronco  de 
22  á  24  pies  de  largo.  La  calagoala  es  un  hel^ho  fpolipodium 
erossifolium).  El  bijao  (helic^nia  bias)  es  ona  planta  moi  apre- 
eiable  de  cuyas  grandes  hojas  se  sirve  el  indio  para  formar  suacj^r- 
racas.  Muchas  vezes  viajando  este  por  lugares,  desprovistos  de  estfi 
planta,  hace  un  rollo  de  esas  hQjas  y  las  lleva  colgadas  á  la  «spalda 
para  hacer  un  paqueno  cobertizo  donde  rinde  la  jornada .  Estas 
^ojas  tteuen  dos  pies  de  largo  y  como  uno  y. medio  de  anchc^:  están 
eiü)iertás  de  una  especie  de  polvo  que  las  hace  impenetrables  y  sin 
romperse  ,  conservan  su  fresura  y  flexibilidad  por  m9&  de  una  se- 
mana. El  platanülo  ó  yerba  arboresc^e  (mnséoeo) ,  de  hojas  lar^* 
gas  y  lustrosas  se  eleva  hasta  1 4  á  4  5  pies  de  altura  ,  y  sus  vastagos 
suculentos  están  unidos  como  los  rastrojos  de  las  caias  que  se  en- 
cuentran en  las  regiones  hÁijoadas  de  la  Eftjppa  austral. 

En  las  altas  montañas  las  yerbas  suculentas  se  elevan  de  8  á 
40  pies  de  altura,  cuando  en  las  zonas  templadas  apenas  formarían 
ell^s  un  césped  sembrado  de  flores.  Los  musgos  y  liqúenes  (mttsi-'  * 
frótidosH  de  la  familia  de  los  criptógamos  son  alli  tan  comunes  en^ 
Jos  árboles  como  en  el  pais  deLnorte ,  y  su  vegetación  está  favore- 
cida por  la  humedad  deljaire^y  la  ausencia  de  la  luz  directa  del 
so\  j  observándose  constantemente  que  por  la  pajpte  del  norte  se 


T  * 


liftlhn  en  j&syor  caalMad  y  mas  hemoeos.  iM  patos  y  átmneoUum 
son  plantas  parásitas,  coyas  oarroosa»  y  Ivcienles  ksjM  tienen  á 
Teses  mnches  pies  ée  largo.  DIriase  que  los  mat^eciihd&nes  pará- 
sitos reeraphiEan  entre  los  (rópnos  el  nma^e  y  los  UfMDes  de  la 
zona  boreal. 

A  la  aitnra  de  400  Taras  se  eneaentvan  en  Jas  botines  aa^nitos 
fennaáos  de  irn  tisú  de  seda  snspen^Mos  á  los  árboles ,  y  esta  es  Ja 
seda  süTestre  del  país ,  la  cual  aim^e  de  un  b^lo  Imtoe  es  avi 
áspera  al  tacto.  La  misma  profnedad  tiene  ana  e^ptede  de  bolsas  4e 
igual  dase  goe  se  encuentra  en  las  previndas  de  Bmínas  y  Tm- 
jiUo ;  obra  de  imdtHnd  de  insectos  y  qoe  tiene  na  pié  de  iairjo  y 
t>tro  de  oircnníérenoia, 

DE  200  A  5,5$0  TARAS  DE  AI.TURA. 

Desde  dOO  basta  ^,580  Taras  sobre  el  nÍTel  dd  0ytr  está  com- 
prendida la  zona  de  las  plantas  febrífugas ,  cuya  corteza  tan  esli- 
mada se  encuentra  en  machos  árboles  de  diferenlos  espedes ,  alga- 
nos  de  los  cuales  Tegetan  á  on  lÚTd  muí  bajo  y  hasta  sobre  ios 
bordes  del  marf  pero  los  Tetdaderos  ehinchoiiis  ereeen  entre .<8£5 
y  5,9M  Tsvas  de  eleTucion.  Seenoacntran  tires  e^des  de^okia 
^cMHéiieate  calidad  en  las  montanas  de  la  proTinda  de  Caracas^  en 
las  de  Carabobo ,  Tocuyo^  Mérída f  Triijillo.  La  yirtudde  la  quina 
se  conocía  por  los  indígenas  en  i636.  La  descubriáua^eorregidor  y 
dos  jesuítas  la  lloraron  á  España  ea  464^ ,  genervikándose  aUí  su 
tiso  4  mediados  ^del  siglo  xvii ;  d  bien  basta  "1 682  ¡no  %&  biso  lyi- 
filico en  Europa.  £1  cuspa  [bomplaniia  trifoliaiieii) ,  de  la  familia 
de  lasdiosmeas,  tiene  la  corteza  febrífuga  y  tnasamai^  <^e  la 
quina.  Es  d^mismo  ári)ol||iie  se  llama  euspane  eniGomaná,  y  4am- 
bien  Corteza-ée-Angostura.  Vegeta  desde  400  btsta  600 'Taras  de 
altura  y  es  taiita  su  abundancia  en  laproTinda  de  Gumaná,  y  so- 
bre todo,  en  la  de  Guayana ,  que  se  encuentran  bosques  enteros  de 
solo  esta  planta.  No  menos  de  dniHruba  especie  febdfugadd. géne- 
ro cavüi.  ^ 

£n  d'  cantón  Rio-Ñegro  abunda  la .copana  {pauUmiaeupmna) 

de  la  familia  de  las  pindaoeas  carbol  pequdio  pero  mui  pablado,  ¿e 

'^caya.fmta  y  cáliz  se  saea  una.bebjda  amarga  y  estomacal  y  t»abien 

el  esáveto  ó  pasta  que  llamea  gaarain,  que  protece  un  ixsUo  y 

firme  iínte  aiqaríllo.  Déla  misóla  familia  es  el  paca^ro  {sapindus 


% 


~  IW  — 


st^&nariá)  coya  corteza  y  lo  esterior  de  «la  fntta,  'que  es  se^á  y 
redonda,  es  osada  por  les  indígenas  en  Isgarde  jabón.  A  la  misma 
elase  pertenece  el  mamón '( meHoocva  biju^a) ,  de  faei||06a  copa  f 
fruta  agridulce,  propio  para  deeor«r  parques  y  ízaseos  pero  de  mi& 
madera. 

El  diaparriUo  ^ff^xomtfBO^rigida)  de  la  familia  de  lasTabááseag, 
es  ]¿te  madera  roja  escelenle  para  toda  clase  de  cobras  de  carpin» 
iería. 

El  árbol  d^  nieve  {chitmaníes  tetmnia]  de  la  teaiia  délas  jaz- 
míneas ,  es  propio 'de  la  Guayana^  da  flores  blancas  aromáticas  y 
im  fruto  color  de  violeta.  De  la  misma  fanñlm 'ies  éí  -guayabo  dB 
monte  [ckiamantes  compacta)  de  madera  roja  asómente  para 
ruedas. 

£1  guayabo  {pscidHim  pi>mmi/erum)^.áehí  fmMík  denlos  mir- 
ios ,  produce  fruías  dulces  ó  agrias  :  aquellas  se  comen  y  son  de 
las  mas  estimadas  de  América ;  con  las  otras  ^  bacen  conservas 
delicadas  conocidas  y  apreciadas  basta  en  Europa.    *  ** 

El  limoncillo  ( ecdiptkranUt^  pañieulaia )  de  la  ;mi8nia  famMia , 
es  de  madera  amarilla  pálida,  esceVenle  para  embutidos  :  se  conoce 
tina  díase  con  espidas  y  otra  sin  d&s;  esta  última  es  inferior  en 
calidad. 

£1  brasilete  [hecastophyllum  duhium) ,  da  una  madera  propia  . 
4  para  bongos  y  es  de  la  fomOia  de  las  legumisl^sas.  A  ella  también 
pertenece  el^s^úriie,  especie  de  aeasia  fétida^  qiie:tambi0n  pro- 
duce madera  compacta  y  útil. 

El  palo-cmdela'mísm^  f^rmilia  [brownBa  gfrandwsps) ,  árbol 
hermoso  de  tierras  frescas  y  cálidas,  llamado  tambitxi  rosa-de- 
montana  por  el  color  de  su  gran  flor  piramidal. 

EÍ  guamo  es  de  esta  familia  [ingalucida]  ^  de  bermosa  eopa/ 
bellas  flores  y  vainas  peludas  que  contienen  «emiUas  envueltas  en* 
üha  pulpa  suave  y  azucarada  :  se  conocen  varias  clases ,  y  entrjB 
ellas,  una  propia  de  tierras  frtas.  Sirve  este  árbol  para^dar  sombra 
al  café.  Pardillo  : Cambien  de  las  leguminosas,  madera  escelente 
para  muebles;  es  el  qUercxH  caris  de  Linneo.  La  sampta  ó  ya]^ 
[dipteris  odorata  ]  de  la  misma  familia ,  originaria  d^  los  bosques 
i^e  ht  Ouayan^ ,  árbol  elovado  y  beimoso ,  cuya  madera  sirve  para  ^ 
muebles  y  su  fruto  mui  aromático  ^se  «sporta  para  perfumería. 
"Él  nazareno  (himcenea  floribunda)  madera  compaxstá  cotor  de  vio- 
^tij  {mpia  para  embutidla  y  máquinas ,  lo  misino  q«e  el  piz 


«  ' 


—  408  — 

[cUüca  astragarina)  color  rojo  oscuro ,  de  cayo  árbol  se  sacan  es- 
celentes  tablas.  Es  también  de  la  familia  da  las  leguminosas  el  uta- 
pe  (bahuiiHa  ntultineria).  Su  madera  es  muí  compacta  y  notable 
por  su  corteza  elfi|stica  de  que  se  hacen  buenas  amarras  eortáodola 
en  listones, 

'J^tre  las  gutíferas  está  el  mamei  (mammea  americana)  ^  apre- 
ciado por  su  madera  y  su  fruta  delicada  y  olorosa. 

Mameicillo ,  de  la  familia  de  las  myrtineas  de  madera  rojiza  ¡ 
propia  para  tablas  y  construcción  civil. 

£n  la  familia  de  las  zapoteas  está  el  níspero  ( achras  zapota ) ; 
es  de  hermosa  madera  rojo-oscura  y  árbol  que  da  tablas  de  gran 
tamaño  y  fruta  mui  delicada.  Los  nísperos  de  Margarita ,  Cumaná 
y  Maracaibo  dan  unihito  grande  y  de  sabor  esquisito. 

£1  onoto,  de  la  familia  de  las  biiiueas  (biíctí  orejana)  árbol  mui 
estimado  entre  los  indios  por  el  color  que  les  suministra  para  pin« 
tarse  y  de  cuf  a  semilla  de  un  color  rojo  se  hace  ya  comercio^  usán- 
dola en  los  guisos. 

£1  guaricamo  de  la  familia  de  las  verberldeas  (bryana  coceinea) 
llamado  en  Apure  guackamaeá,  de  un  veneno  activísimo.  Si*ise 
ll^n  á  usar  sus  ramos  sirviéndose  de  ellos  como  asador,  á  la  ma* 
ñera  que  se  acostumbra  en  los  Llanos,  causa  una  muerte  violenta 
¿  los  que  comen  la  carne. 

£1  caujaro  [caréUi  dentada)  ^  es  de  la  familia  de  las  borrajitto-* 
saSj  de  canon  recto ,  frondoso ;  da  una  madera  pMuiea ,  útil  para 
construcción  civil.  Parece  que  pertenecen  ala  misma  familia  los 
árboles  conocidos  con  los  nombres  de  pardillo^^negro  y  pardillo- 
amarillo  :  dan  escelente  madera  resinosa  que  aplican  á  muchas 
obras. 

Se  halla  en  la  familia  de  las  íiliáoeas  el  cedrillo-majagua  (mun- 
tingia  calambura  j,  de  madera  blanquecina  apreciada  en  la  cons- 
trucción civil.  Se  conocen  otras  tres  clases  denominadas  cedrillo- 
horcón ,  escelente  para  muebles ;  cedrillo  de  hoja  menuda,  superior 
para  tablas ;  y  cedrillo-hurel ,  lUil  para  construecion  civil  y  el  que 
mas  engruesa  de  los  tres,  llegando  á  adquirir  $u  tronco  hasta 
•i.8  pies  de  circunferencia.  El  majaguo  (hibiscus  tUiaceus)  es  otra 
especie  semejante ,  de  que  se  conocen  dos  clases.  De  la  corteza  se 
hacen  cuerdas,  lo  cual  es  un  articulo  de  comercio.  De  la  misma 
familia  es  el  trompillo  ( /ce^ta  hirtella) ;  su  madera  es  rosada  pro- 
pia para  obra^  ie  torno  y  para  máquitas.  El  copei  {clusia  alba)  de 


grandes  flores  de  ninfea.;  árbol  cuyas  raizas  tienen  8  pnlgadas  de 
diámetro  y  algunas  salen  del  tronco  á  ^5  pies  de  altura  sobre  el 
suelo.  £1  caimito  (chrysopht/lum  caimito)  da  una  fruta  muí  ape- 
tecida. 

De  la  familia  de  las  corimbiferas  es  la  tara  (%erbesina  heliau" 
thoides),  árbol  de  tierras  altas,  de  madera  redonda  y  hueca  y  de 
mucha  duración.  £1  incienso  (frixi  n&n/o/m),  arbusto  resinoso 
de  flores  que  despiden  un  olor  de  estoraque. 

£n  las  rosáceas  está  el  angelino  (homalium  Posemosum) ,  de 
trooco  recto  y  hermosa  copa.  De  este  árbol  haí  tres  clases  denomi* 
nadas  angelino  Ó  aceituno,  angelino-laurel  que  engruesa  hasta 
4  Yaras  de  circunferencia ;  y  angelino-roble  que  es  el  mas  elevado 
y  de  mejor  madera ,  bien  que  todos  la  dan  buena  para  máquinas  y 
piezas  de  grandes  dimen^pnes. 

De  la  familia  de  las  btgnóneas  es  el  araguanei  {bignonea  penta^ 
phylla )  y  una  de  las  producciones  mas  útiles  de  nuestros  bosques» 
De  este  árbol  se  conocen  cuatro  clases  y  el  que  mas  engruesa  es  el 
araguanei-amarillo  :  todas  son  de  mado'a  compacta  y  adecuada 
para  máquinas,  obras  de  torno  y  todas  las  que  se  esposen  á  la  hu- 
medad. £1  apamate  es  otra  especie  de  bignonea ,  pero  de  mayor 
frondosidad  que  el  araguanei  :  es  árbol  mas  corpulento  y  de  su 
madera  se  sacan  buenas  tablas  que  serian  mui  útiles  empleándolas 
en  pisos.  £1  roble  blanco  [tecoma  pentaphilla) ,  el  roble  amarillo 
[ehretia  burreria)yY  el  roble  de  olor  (chelone?)  :  sus  maderas  sOtt 
buenas  para  máquinas.  El  cbacarrondai ,  hermoso  p«r  la  variedad 
de  sus  visos ,  semejantes  al  carei  :  se  ignora  á  qué  familia  p^- 
tenece. 

La  otoba  ( myristica  otoba ) ,  de  la  familia  de  las  myristéceas , 
árbol  que  produce  la  nuez  moscada  :  se  encuentra  en  las  provincias 
de  Guayaría ,  Cumaná,  Mérida,\TrujilIo  y  Barquisimelo. 

Lapesgua  (gaultheria  odorata),  de  la  familia  de  las  eyceas, 
de  hojas  aromáticas ,  especialmente  cuando  se  secan  :  se  conoce 
otra  variedad  llamada  pesgua-macbo  {gaultheria  coccínea). 

E\  guacito  [melasi<mo  xanthostuchU)  6  chaparrobobo  sirve 
para  usos  medicinales. 

La  befaría ,  cuyos  troncos  están  divididos  en  un  gran  número 
de  vastagos  frágiles  y  casi^  verticilados.  Las  ojas  son  ovaladas ,  lan* 
ceoladas ,  blancas  por  debajo  y  rolladas  hacia  los  estreñios.  Toda 
la  planta  está  cubierta  de  pelos  largos  y  viscosos ,  deá|)idiend«  mi 


Je 


olor  reñiioso  mm  a^raAible.  Las  abeja»  ykilaii  sua  hermosas  flores 
yuFpúreáa,  qoe  son  tan  abandanies  como  eu  todas,  las  plantas  al- 
pinas. Así  la  deseribe  fiumboldt^  quien  la  encontró  en  la  Silla  de 
4  Caracas )  y  de  la  cual  hai  en  casi  toda  la  serranía  eleyada. 

£1  árbol  earap^  solo  encontrado  en  la  provincia  de  Guayana  ^ 
da  uu  aoeite  reconocido  «célente  específíco^'para  varias  dolencias  | 

1^  y  sirve  también  para  alumbrarse. 

I    '  El  juvia ,  uno  de  los  majestuosos  árboles  de  los  bosques  del 

Nuevo*Mundo  ^  empieza  á  encontrarse  á  dos  jomadas  al  £.  de  la 
Esmeralda  s<^e  el  OriiHM;o.  Es  el  beriholletia  que  Laet  llama  ta* 
toche^  y  hace  mención  del  drupa  que  encierra  las  almendras^  dán- 
dole el  tamaño  de  una  cabeza  humana.  Dicen  que  es  tan  grande  el 

'  peso  de  este  fruto  y  que  los  salvajes  apenas  se  atreven  á  entrar  en 

'  los  bosques  sin  cubrirse  la  cabeza  y  las  espaldas  con  un  broquel  de 

madera  mui  sólida.  La  almendra  es  gustosa  y  de  ella  se  saca  un 
aceite  eseelente.  El  árbol  no  tiene  en  general  sino  dos  ó  tres  pies 
de  diámetro ;  pero  su  altura  es  de  4  M  á  4  20  pies ;  sus  ramas  no  se 
elevan  hacia  el  cielo;  están  abiertas^  son  largas,  casi  desnudas  hAcia 
lá  base  y  cargadas  sus  puntas  de  espeso  follaje  :  necesita  \  o  años 
para  dar  las  primevas  flores ,  y  estas  aparecen  desde  Gnes  de  marzo 

i  ^  ha3ta  principios  de  abril.  Las  frutas  maduran  á  fines  de  mayo  y 

*  algunos  troncos  las  conservan  hasta  el  mes  de  agosto,  cayendo  por 

sí  solas  cuando  están  en  perfecta  sazen.  En  menos  de  50  ó  60  dias 

i        ^  el  juvia  forma  un  pericarpio,  cuya  parte  leñosa  tiene  media  pulgada 

de  grueso  y  cuesta  mucho  trabajo  cortarle  aun  con  buenos  instru^ 
mentes ,  facilitándose  su  abertura  por  una  tapa  natural  que  tiene 

>  -»  en  su  parte  superior.  Humboldt  dice  :  «  Nada  conozco  mas  á  pro- 

«  pósito  para  hacer  admirar  el  poder  de  las  fuerzas  orgánicas  en  la 
«  zona  equinoeml ,  que  el  aspecto  de  estos  grandes  pericarpios 
«  leñosos ;  por  ejemplo  ,  del  coca  de  mar  lodoicea  entre  los  ma^ 
u  nocotiledones  y  del  bertholletia  y  el  lechytis  entre  los  dicotíle- 
«  dones.  » 

La  vaiiHUa  (epidendrum  vainilla) ,  planta  de  fruto  aromático , 
trepadora  ,  busca  los  terrenos  incultos  y  húmedos  cubiertos  de  ár- 
boles grandes.  Se  encuentran  en  los  bosques  de  todas  las  provin* 
cias ,  pero  (Coa  mas  abundancia  en  los  de  Guayana ,  Caracas ,  Gara- 
bobo  y  Barquisimeto  y  Trujillo.  La  vainilla  podria  esportarse  en 
gran  cantidad ;  pero  poco  la  benefician.  l)a  una  vaina  de  \\  ó\2 
pulgadas  d^  Isvgo.  Desde  los  bordes  del  mar  hasta  la  región  alpina 


á  2,A^  ymns,  es  la  zona  en  fue  yegeta  e^ta  estitnable  planta» 
En  los  basques  de  Guayana  se  eáeaentra  süyestre  el  plátano 
{masa  paradisiaea) ;  pero  aun  está  en  duda  si  habrá  sido  plantado 
por  algttnas  tribus  de  las  muchas  que  suelen  cambiar  de  lugar. 

En  la  Gimyana  también  se  eiKuentra^l  bejoco  mavacure  ^  pro^ 
bablemeaée  un  strychos^  que  produce  el  famoso  yeneno  curare 
een  que  los  indios  preparan  sus  flechas ;  el  palo  kiraguero  tiene  «n, 
jvgo  vegetal  estremadamente  viscoso  que  se  une  al  mavacure  para 
que  se  pegue  el  veneno  á  las  flechas  :  se  emplea  el  mavacure  frescc^^ 
ó  seco  después,  de  algunas  semanas  de  prepspado.  El  jugo  del  be- 
juco recien  cogido  no  está  considerado  como  Venenoso»  Se  raspan 
oen  un  cochiUo  ramas  de  mavacure  de  4  ó  5  líneas  de  diámetro  , 
y  quitada  la  oorleza  se  machaca  bien  y  se  reduce  á  hebritas  mui 
d^gadas  sobre  una  piedra  cóncava.  Siendo  amarillo  el  jugo  vene- 
noso ,  toda  la  masa  toma  el  mismo  color  y  se  echa  á  filtrar  en  agua 
fría.  Las  gotas  que  caen  de  la  filtración  es  el  licor  venenoso ,  pero 
sin  fucÉrza  hasta  que  se  reconcentra  por  la. evaporación  que  se  efec- 
túa en  un  vaso  de  greda.  Según  el  gusto  mas  ó  menos  amargo  s^. 
conoce  si  la  concenlfacion  por  el  fuego  ha  sido  ó  no  escesiva.  No 
hai  peligro  alguno  en  esta  evaporaeion,  y  el  curare  no  es  peruicioai» 
sino  cuando  entra  en  contacto  con  la  sangre  :  como  el  jugó  del  ma- 
vacure no  es  bastante  espeso  para  pegarse  á  las  flechas  ^  se  pone  en 
la  infusión  el  jugo  vegetal  del  kiraguero  para  dar  cuerpo  al  veneno. 
Tales  son  los  procederes  descritos  por  Humboldt,  que  los  presenció. 
Las  grandes  ayes;  como  la  pava  de  monte,  heridas  en  el  muslo, 
muere  á  los  2  ó  5  minutos ,  á  los  6  ó  7  un  mono ;  son  necesarios 
40  ó  ^2  para  que  muera  un  cerdo ,  y  á  los  ^5  espira  una  persona. 
Los  SS.  BottssingauU  y  Boulin  han  hecho  varias  esperiencias  qu^ 
han  probabo  que  la  sal  no  puede  s^r  considerada  como  un  contra- 
veneno del  curare ,  y  la  opinión  de  estos  hombres  ilustres  debe  ha- 
cer muí  caulos  á  los  que  se  fíen  en  el  remedio  de  la  sal  ó  de)  ¿ugo  . 
de  la  caüa  dulce ,  puestos  sobre  la  herida  y  bebidos  inmediatíi- 
mante. 

INiopo  {acacia  niopo]^  mimosácea  de  que  los  indios  estraen  su 
tabaco  herbáceo.  Recogen  las  largas  vainas  de  esta  acacia ;  las  ha- 
cen pedazos,  las  humedecen  y  dejan  fermentar,  y  cuando  los  gra- 
nos ablandados  empiezan  á  ponerse  negiios,  los  amaaan  como  una 
pasta,  y  despnesde  haber  Qiezclado  harina  de  yuca  y  cal  de  coudiá 
de  una  ampularia  ó  cpacx)!,  ponen  toda  la  masa  al'fuego  vivo  so- 


r* 


—  H2  — 

hxe  unas  parrillas  de  madera  mui  dura.  Cuando  la  pasta  se  endurece 
toma  la  forma  de  tortillas  que  se  reducen  á  polvo  Qno.  El  salvaje 
para  servirse  de  este  polvo  la  coloca  sobre  un  plato  de  madera  de 
^  á  6  pulgadas  de  ancho,  y  tomando  con  la  mano  derecha  el  man-- 
go  de  este  plato  aspira  y  sorbe  el  niopo  por  medio  de  un  hueso  de 
ave  con  dos  conductores ,  cuyas  eslremidades  se  apoyan  en  las  dos 
yentanas  de  la  nariz.  Este  hueso,  que  es  de  las  piernas  de  las  gar» 
zas^  tiene  7  pulgadas  de  largo;  sin  él  creería  el  indio  no  poder 
l%)mar  el  tabaco.  Esta  operación  descrita  porHumboidt  se  ve  ana 
en  el  dia  entre  los  salvajes,  no  solo  los  otomacos,  sino  los  guahibos^ 
•  los  yaruros  y  otras  tribus  de!  Orinoco. 

£1  tabaco  {nicociana  panienlata  y  ni€Ocian&  gbttinosa)  en- 
contrado por  Humboldt  en  estado  silvestre ,  no  habieado^sto  las 
ofVas  dos  calidades  que  sa cultivan  en  Europa  nicociana  mbuqo, 
nicociana  rustica.  \ 

El  barbasco ,  raíz  de  piseidia  erythrina^  yaqulna  armiUaris}^ 
galega  piscatorum  ,  y  otras  especies  de  philiantas ,  con  que  los' 
indios  y  criollos  embriagan  ó  adormecen  los  pescados  en  los  caños, 
lagunas  y  rios  cuando  sus  aguas  quedan  escasas.  Es  sorprendente 
la  actividad  de  este  jugo  que  haee  flotar  á  millares  sobre  el  agua 
los  pezes  de  los  cuales  se  hacen  salazones  ^  ó  bien  los  secan  al  sol  ó 
al  fuego.  Este  veneno  no  hace  niugun  efecto  en  los  caimanes  y  tor- 
tugas ,  mientras  que  en  los  torpedos  ó  tembladores  disminuye  su 
virtud  eléctrica  hasta  debilitarla  casi  del  todo. 

El  bejuco  del  guaco  (micania  guaco)  <|ueg¡y^  S''.  Mutis  ha 
hecho  fan  célebre,  y  que  es  el  remedio  mas  eficaz  coíftra  la  morde- 
dura de  las  culebras ,  abunda  lanío  en  las  selvas  bajas  y  altas  como 
en  las  sabanas  y  serranías.  Lo  hai  de  dos  clases,  blanco  y  morado, 
y  se  preGere  este  último  como  mas  eficaz ,  y  su  jugo  sirve  para  la 
cura  de  varias  enfermedades. 

La  raiz  de  mato  (cerbera  Ihevetia] ,  de  la  familia  de  las  apoci* 
meas  es  un  escelente  antídoto  contra  el  veneno  de  las  cuhsbras. 

En  las  gttandes  alturas  vive  el  pancratium  undulatum  ^  lirio 
hermoso  y  de  mucha  fragancia. 

Desde  el  nivel  del  mar  hasta  5,400  varas  de  elevación  los  limo- 
nes prosperan  perfectamente  ,  dando  flores  olorosas  y  fruto  mui 
agrio. 

Los  árboles  cuyos  troncos  esceden  dev25  ó  25  varaá  l!!e  alto ,  no 
pasando  la  elevación  de  5,229  varas,  y  pre^jenfün  casi  siempre  los 


.»     * 


I 


9    ,  "      •  ' 


efectos  dd  oloño  y  primavera  á  la  yez^  despojándose  de  las  hfti« 
yiejas  y  revistiéndose  de  otros  nuevas. 

Las  enredaderas  ó  bejucos  que  enlazando  con  sus  ramas  éar^- 
mentosas  los  troncos  de  los  árboles,  suben  hasta  la  copa  de  los  mas 
elevados  ,  presentan  por  todas  partes  sus  espinas  en  forma  de  gan* 
chos  ó  barrenas,  y  bajando  en  seguida  á  la  tierra  ,  se  lian  al  rededor 
de  otros  árboles  y  entretejen  de  tal  modo  las  selvas ,  que  las  hacen] 
impenetrables  en  muchos  puntos.  Arriba  de  2,000  varas  de  altura, 
bai  una  clase  de  bejuco  que  llaman  de  agua,  esti emodamento^jú- 
goso ,  de  2  pulgadas  de  diámetro  y  mui  blando.  Guando  se  corta 
caen  de  él  algunas  gotas  de  agua  y  si  se  desprende  enteramente  del 
tallo  principal,  entonces  la  parle  separada  puesta  verticalmente  des- 
carga una  cantidad  de  íaigna  clara,  fresca  y  dulce.  Una  vara  de  a^e 
bejuco  da  una  botella  de  agua.  Esta  planta  es  mui  útil  para  los  que 
se  ven  obKgados  á  atravesar  montanas  desprovistas  de  agua.  Hal 
bejucos  de  todos  tamaños,  mui  útiles  para  la  construetíon  de  las 
casas  de  palma,  pues  con  ellos  amarran  y  afirman  las  maderas.  Los*" 
bai  desde  6  líneas  hasta  6  pulgadas  de  diámetro.  Por  último ,  el 
bejuco  cadena  es  notable  por  la  forma  que  le  da  su  nombre ,  por 
su  grosor  y  solidez. 

Arriba  de  5,250  varas  los  árboles  son  raros  y  los  que  se  encuen- 
tran no  son  corpulentos  ni  elevados  como  debajo  de  este  nivel ;  de 
allí  en  adelante  prosperan  todavía  los  granos  de  las  zonas  templadas, 
encontrando  un  suelo  propio  y  temperaturas  adecuadas  para  des- 
arrollarse. 

DS  400  Á  5,450  VARAS  de  altura. 

Desde  2,400  hasta  4,950  var^s ,  es  la  región  de  las  plantas  al- 
pinas y  la  de  gran  variedad  de  yerbas  y  raizes  medicinales. 

A  2,652  varas  las  mimosas  pierden  su  sensibilidad ,  y  hasta  esta 
elevación  vegeta  la  zarzaparrilla ,  planta  mui  útil  para  las  enferme- 
dades siQlíticas.  Se  encuentra  en  abundancia  .en  la  región  cálida 
desde  400  varas  sobre  el  nivel  del  mar  :  la  mas  estimada  por  sus 
propiedades  diuréticas  es  la  zarza  smilax  sifilítico  de  Rio-Negro 
y  el  Casiquiare ,  de  la  que  se  hace  algún  comercio. 

A  la  altura  de  4,000  varas  cesan  los  arbustos  alpinos  y  solo  se 
ven  las  gramíiieas  cuya  región  se  cstiende  hasta  4,^50  varas.  La 
nieve  cae  de  tiempo eñ  tiempo  en  este  espacio  entre  4,000  y  4,950 

V.  GBOa.  s 


•        ^    m     \ 


^  -  —  414  — 

Toras  de  elevación^  El  clima  frió  y  constaoteiiMite  húmedo  de  estas 
'  alturas  batidas  por  an  vieoio  destemplado ,  las  hace  inhabitables. 
DesOe  que  cesan  los  grandes  árboles  aumentan  los  arbustos  qne  se 
tostíenen  hasta  4,000  Taras,  y  ^  terreno  está  cnbierto  de  una  yerba 
menuda  y  fina. 

Desde  5,200  Taras  hasta  4,900  es  la  región  de  los  páramos  en 
«que  cae  granizo  y  nieve  :  esta  es  la  morada  del  frailejon  (espeletia 
fraUexon) ,  cuyas  hojas  velludas  sirven  muchas  vezes  de  abrigo  á 
los*  viajeros  que  la  noche  sorprende  en  aquellas  regiones.  Frotan* 
dose  las  manos  con. las  hojas ,  y  cubriéndose  con  ellas  la  cara  y  los 
pies ,  se  adquiere  al  momento  el  calor  necesario  en  tan  helados  cli« 
mas.  El  Sr.  Boussingault  dice,  que  de  esta  planta  se  estrae  por  in- 
cisión una  trementina  superior  á  la  de.¥enecia ;  y  seria  de  desear 
que  los  que  habitan  cerca  de  los  páramos ,  sacasen  utifídad  de  un 
ramo  de  industria  que  la  naturaleza  les  ofrece  en  grande  abundan- 
cia en  medio  de  aquellas  soledades.  Al  lado  del  frailejon  y  solo  á 
la  altura  de  4,200  varas  vive  un  arbusto  de  tronco  corto  y  carbo* 
nizado ,  que  se  divide  en  una  multitud  de  ramas  cubiertas  de  hojas 
coriáceas  y  de  un  verde  lustroso. 

A  4,950  varas  desaparecen  enteramente  las  plantas /an^rd^a- 
mas.  Desde  este  límite  hasta  las  nieves  perpetuas  las  plantas  hepá-- 
Heos  y  ligúenosos  son  las  que  cubren  las  rocas,  á  vezes  escondidas 
bajo  la  nieve  por  mucho  tiempo,  á  vezes  cubiertas  por  hielos  que 
las  hacen  ver  por  trasparencia. 

.  A  la  altura  de  ^,450  varas  las  nieves  son  perpetuas,  sien^re  re- 
lucientes ,  menos  cuando  están  envueltas  en  nubes  ligeras  que  sue- 
len elevarse  hasta  9,900  varas ,  mientras  que  las  nubes  densas  cu- 
bren casi  constantemente  los  terrenos  que  el  caminante  tiene  á  sus 
pies ,  pues  estas  se  mantienen  desde  la  altura  de  \  ,800  hasta  la  de 
4,400  varas  S(d)re  el  nivel  del  mar. 


i 


~445  — 


PLANTAS  QUE  WSCPEm  DE  BASA  A  LA  A61IGIJLTURA  TElfl20LA|IA. 


GBMBiXKS. 


AiTOz..« Orizasaüva, 

■ais.. Zeamais. 


I  Millo Sottehus. 

I  Trigo TtiOcum  (gwtivum. 


HAIZB9  HÁRIHOSáS. 


Apto  6  Arracteho 

Batatas. Convolvulus  batatas. 

Capachos 

Tuca. Tatropha  maníkot. 

Lairaes Maranihaf 


Mapuey..» ' 

Ñames Pitcorea  alaia,  O.  «a** 

Uva.  D.  hdbifera* 

Papas Solanvm  tuberosum^ 

Sulú « Uarantha? 


FRÜT08  HÁE1N0808. 


•  r 


Árbol  de  Pan  • CaroÜnea  princeps. 

Castaño Ártoearpus  incissa  ? 

Charo 

Plátano Musa  paradisiaca. 

Plátano  dominico Musa  regia. 


Cambare  morado* . • .  •  Musa  rosacea.- 

Gambure  chieo Musa  coccínea. 

Moricbe Palma  mauriíia 

[flejÉuosa, 
Pichiguao Palma  vmlosoíon. 


SEMILLAS  COMESTIBLES. 


AioDjoli '. Sesasnm  oriéntale. 

Alverja Lathyrus  salivus. 

Chícharos Pisum  saílvum. 

Frijoles Phaseolus  vulgaris. 

Garbanzos Cicer  arietlnitm. 


Jadías Phaseolus  nanus» 

Maní Arachis  hipogea. 

Qaiiichoncbos Dolichos  labiad  ? 

Quimbombó Hibiscus  suctdeníus, 

iTapiramo Phaseolus. 


TEKDUaiS. 


Brécoles Brassica  olerácea  la* 

ciniata  viridis. 

Gol ..,.. Brassica  olerácea. 

Golñor Brassica  olerácea  do- 

trytis. 

Espárragos Asparragus  saliva, 

Voricbe  cogollo. . . . .  •  Palma  mauritia  flex. 


Navos Brassica  hapus. 

Pahnito Oredoxa  regia. 

Rábanos Baphanu»  sativus 

Remolacha. BeÍMi  vulgaris. 

Verei^enas Soianum  melongéna. 

Zanahoria Daucus  corroía. 


ENSALADAS  T  SALSAS. 


Acederas : . . .  Oxí&is  acetosa* 

Afo .» Allfwn  saíivum. 

Jff Capsicum.'^YaHat  es< 

pedes. 

Albahaca Ocymum  basilicum. 

Anís Aneíhum  fomiculum. 

Apio  de  España Apium  graveolens. 

Berros Sgsimbrium  nastur* 

nium. 

Borraja Borrago  officinalis. 

Calabaza Cucúrbita  pepQ. 

Cebolla Allium  cepa. 

Ghalota Sucios  eduiis. 

Chicoria Cicorium  endivia. 

Culantro Coriandrum  sativum. 


Espinacas. 
Lechuga . < 
Me|orana . 
Mostaza. . . 
Onoto.... 
Orégano .  < 


Otoba  6  nuez  moscada 

Pimiento.... «... 

Romero 

Tómales 

Verdolaga 

Vinagrera ^- 

Yerba  buena 


Spinacea  olerácea, 
factuca  sativa. 
Oriffanum  majorana, 
Sinqpis  júncea. 
Bixa  oñjana. 
Or^anpm  majoranoi* 

MirisiMctí  otoba, 
Capiscum  annwn, 

Solojntm  HcopenicuuL 
Portulaea  olerácea. 
Oxális  cornuta, 
Mentha  ititiva. 


FRÜTAB. 


AgQicale Lanrtts  persea. 

Anón.- Anona  squamosa. 

Cacao Theobroma  cacao. 

Caimito Chrysophillum  caini' 

to. 
Gañt-físlula Caparis, 


iSamto Genipa  americanom 

Tüardonei. < CMus, 

Catiguire >• Anona  nufídroéc 

Cerezas  6  oemerucho..  Malpighiajmnieiffflia. 

Chirimoya. Annona  AMWoMltaito, 

Chiguichigne •• .  •  Bromclia 


—  Í46  -- 


Cidra... 
Cfrueras» 
Gocor.». 


,f%. 


GotoperU 


GocurUo.^ 
Gupana ..• 
Fresas . . . . . 

igua 

ranadí? . » < 
Granadilla. 


Gpimo..... 

Goamacbo* 

Gimpátena 

.  Guanábana  cimarrona, 
"gayabas  ^.,.,..1... 
' Guayablta  al  sabana. . 

Guariman 

Htgo...\ 

Icac6 • 

iobo « 

LechoiQ...... 

Lima..  ...'...I 

Liraon 


CUrus  medka, 
Spondias. 
Lodoiceu,— Cocos  mu- 

cifera 
Melicocq.=Oliv€e  for- 

mis, 
Palma. 

Púuftinia  cupana. 
Tragaría  vesca. 
Genffred  superna. 
Púnica  grana  tum,  * 
Passiflora  ^^drangu- 

laris. 
fn^a  lucida. 
Inga  pungens, 
Annona  muricata. 
Annona  {palusíris  f) 
Psidium  pomiferum. 
Psid  um  hyriferum. 
Cryptocarya  canelillá 
Ficus  carica, 
Chrisobaianus  icaco, 
Spondia  lútea. 
Caricha  papayo, 
Ciírus  iimeía. 
Ciírus  limonum. 


Limondto #  Limonia  irifoliata,  ~1 

Mamey  colorado Lacuma  bonplandia. 

Mame  j .^ . . . . .  Mammea  ojnericana. 

Mamón Meíicocca  hijuga. 

Mango I Mangifera  domesíica. 

Mora Moras  cetíidifoiia. 

Melón Cucumis  meló. 

Naranja  de  Cbina.....  Ciírus  aurantium. 

Naranja  agria., Citrus  vulgaris  ? 

Nísperos Achras  zapata. 

Parcha Passiflora, 

Parcbita * Passiflora  ?  —  Varias 

especies. 

Patilla  6  Sandía Cucúrbita  citrullus. 

Pina Bromelia  ananas, 

Poma*'rosa Jambosa  vulgaris. 

Sapote Sapota  mammosa, 

Sapoie  de  culebra Lucuma  serpentaria. 

Sapote  negro Dyosptros  ootusi folia, 

Sarapia.. Dipteris  odorata, 

oejt:* .,,,,,,,,,,,,,,,,  rttima. 

Tamarindo Tomarindus  indica. 

Tunas Ficus  cactus. 

Uvas  de  cpsla Coccoloba  uvifera. 

Uvas  de  E«iropa Viíis  vinifera, 

Yuvia Bertholletia  excelsa. 


P£1HTAS  QVE  SE  COLTITAN  BN  6RÁNDB   PAftA  LA  EBPORTAGION. 


Algodón Gossipium  uniglandu- 

,  losian. 

AU\ • índigo fera  íincíoria. 

Cicao Theohroma  cacao. 

Café Coffea  arábica. 


Cafia  dfe  azúcar Sacharum  oficinale. 

Coco Lodoicea  {cocos  muci' 

fera). 
Tabaco Nicoíiana  tabacum. 


APLICABLES  i  L08  TINTES. 


Aguacate taurus  persea. 

Añil  cimarrón IikMgofera  citisoides. 

Añil  de  Qnatemala  ...  índigo  fera  disperma 

{íincíoria). 

Azafrán Carihamüs  tinctoria, 

Brasilf Coesalpina, 

Gereypo  ., 

Gbacaranday 

Chica ;.... 

Gonopia 

Capaoa Paullinia  cupana. 


Manaca*.. 

Marvi 

Mora.. Mortf^  tinctorea. 

Murciélago 

Onoio Bixa  orejana, 

Paneque  

Panillo 

Paraguatán 7« .  Maerocuemium  tincto- 

1  rium. 

Sangre  de  drago 

Zapotero 


^  OTILES  POE  SUS. ACEITES. 


Ajonjolf Seíamum  oriéntale, 

A!guacate Laurus  persea, 

Garapa. ..%»..  «^  »••... 

Coco i, Lodoicea  (cocos  muci" 

*  fera). 

Gopalba  ¿  Gavima ....  Copayfera  of^cinalis, 
Gigaa  ....*....$..>....  Geofírea  superba. 

Maní * Arachis  hypogea. 

Maraña .»»..... 


Mirasol SBlianihüs  nnnuus. 

Piñón Jatrophtt  curcas. 

Pasa  de  Rio-Negro....  Geoffrea  bredemeyeri. 

Seque Palma, 

Tártago,  Balmacristi. .  Ricinus  communis, 

Yari 

Yagua Genipa  americana. 

Yuvia.  I Bertholletia  excelsa, 

Sasafras Ocoíeajavicetisis. 


APLIGABLitS  PAHA  COBDELBRÍA  T  TEJIDOS. 


Algodón 


. . .  • Gossipium ;  varias  e§' 

^  pedes. 

Gaña  brata «...  Gynerlwn, 

Ceiba Bombax  ceiba,  B.  pen* 

*  tandrian.    » 

GdcniM ,»,Cocui8csipiloe, 

Ghiguicbigup «...  Bromelia, 

Cbiquicbiqne - .  Palma, 

Mi^agua *  I Hibiscus  tiliaceus, 


Marima . .« 

Matapalo Ficus  devdrocida. 

Moricbe Palma  maurilia,      *' 

Palma  común  óiBba- 

trico . Chamétops  ttwnilis. 

Plátano Musas  [todas  las  espc* 

ciesX, 

Onimbombó Bibistms  sculentus. 

Yagua Genipa  americana. 


—  ^n  — 


PtANTAS  QUE  SIRVEN  PARA  EL  ALIMENTO  DE  LOS  ANIMALES  ¥  VARIOS  jySOS. 


YERBAS  DE  PASTO.' 


Abrojo Tfibulus  cisíoides. 

Bejuco  de  concbila....  Clitora  teruaia^ 
Bejuco  marrullero....  Phaseolus  vexilatus, 

Berdolaga Portulaca  olerácea. 

Borraja Borrago  ofíicinalis. 

€anutiUo tómmelina  communis. 

Cafia  brava Bambusa  arundina- 

cea. 
Carrlzillo  de  monte . . .  Graminea. 

Carrizales Varias  clases. 

Carrizo Gramínea, 

Cardones. .  .> Cirius, 

Chicorea 

Casupo ^,  Elicottia, 

Enea 

Escoba  amarga Argyrocheía  bípinna- 

íifida. 

Gamelote Varias  clases. 

Grama  de  tarias  espe- 
cies  Gramíneas. 


1- 


Gaanasna... 

Junco  de  ciénaga .%.,, 

Malva  común 

Malva  blanca 

Maiojo 

Millo 

Pata  de  Gallina.. 

Pira * 

Rabo  de  zorro... «.... 

Sanguinaria 

Solú  silvestre 

Sensitivas  ó  adormide- 
ras  

Tomates  silvestres . . . . 

Vinagrera 

Yerba  fina 

Yerba  de  quines...... 

Yerba  lechera 

Vljao 


Eliconias, 

Melochia  piramidale. 
Walleria  tndica. 
Zea  mais, 
Sonchus? 
Gramínea, 

Sacharum  ravenae, 
lecebrum  lanatum. 
Miiraníha  T 
Mimosa  húmílls.  Mim. 
dormíens.  M.peliía, 
Solanum, 
Oxalis  comuta. 
Agros  lis. 

Panicurñ  allissimum, 
Euphorbia  írichotoma 
Heliconia  bihos. 


HOJAS  DB  ARBOLES  QüB  COMEN  LOS  ANIMALES. 


Abou t .  Atmona  squamosa. 

Bucare EryíhYyna  umbrosa. 

Caña  del  alto  orio^eo..  Bambusa  laíifolia. 

Ceiba Eriodendrum  anfrac- 

íuosum. 

Gagf. Mimosa  íernedana. 

Guacimo Guásima  ulmi folia. 

Guadua Bambusa  guadua. 

Mamei  colorado Lúcuma  b'onplandi. 

Mango ,,,,,,  Mangifera  domes lica. 


Piñón 

Platanillo 

Plátano,  todas  las  espe- 
cies  

Roble  blanco......... 

Sabuco  blanco........ 

Tamarindo 

Ya  grumo  macho 

Yagrumo  hembra 


Jaíropha  curcas, 
Musüceo,     • 

Musa, 

Tecoma  pentaphila, 
Sambucus  nígra. 
Tamarindyis  indica. 
Panax  longípeialum, 
Cecropia  peltata. 


FRUTAS  QUE  GOMEN  LOS  ANIMALES ,  ESPECIALMENTE  LOS  CERDOS. 


Aguacate 

Árbol  de  pan 

Castaño 

Caimito 

Caruto 

Chiguichigue 

Ciruela 

Cogí 

Fresas 

Guamo 

Guanábana 

Guasimo 

Guayabo. 

Guay abita  de  sabana. . 

Icaco , 

Jobo 

Lechoso....'; 

Lima 

Majagua 

Mamón ,\ 


Laurus  persea 
Carolinea  princeps. 
Artocarpus  incíssa. 
Chrísophillúm  cainiío 
Genipa  americana. 
Bromelia.- 
S^ondias. 

Mmosa  íemesiana, 
Fregaria  vesca. 
Ingct  lucida. 
Annona  múricata. 
Guásima  ulmifolia. 
Psidium  pomiferum, 
Psidium  pyriferum, 
Chrisobalanás  icaco, 
Spéndia  lútea. 
Caricha  papayo. 
Ciirus  límela. 
Hibicus  Uliaceus. 
Melicoea  b\jaga. 


Mamey Mammea  americana. 

Mango Mangifera  domestica,, 

Meíon Cucumis  meto. 

Mora Morus  celíiáifplia. 

Naranja  agria Citrus  vulgarís. 

Naranja  dulce CitryíS  auraníium. 

Níspero AChras  zapóla,    . 

Oloba Mirisíica  otoba, 

Palma  i^l Oredoxa  regia. 

Patilla  ó  sandias Cucúrbita  citruUus. 

Pina Bromelia^  ananas. 

Purbio 

!  Roble. Quercus. 

i  Sapote Lúcuma  serpentaria. 

i  Sarapia Dipteris  oUorata. 

Seje 

Uvas  de  playa Cdccoloba  uvifera. 

Yagua Getüpa  americana, 

Yagrumo  macho Panax  longipetalum. 


ÚTILES  POR  SUS  GOMAS  Y  RES  ÑAS. 


Algarrobo. Hymencea  cwbaril. 

Anime < 

Árbol  de  leclíe  ó  de  va» 

ca Galactodendrum  uíile 

Bálsamo  de  Qrora .... 

Caote 

Cuídelos  6  manteca..  • 


Caraña Amiris  carona. 

Copey Clusia  alba, 

Chiripity 

Cuaco 

Curbana Canella  alba,  * 

Daguiparo 

Estoraque  ........... 


~  411  -* 


Fraylejon Espeletia  frailexon, 

Gmrifue».... 

IncioDso Trixi  nerifólia. 

JtTO 

JiTillo Hurd  crepUans, 

Jobo Spondia  tutea, 

Kiragiiero 

■atapilo Fiau  dendrocUa^ 

Mará 

Mkria 

■apera.'. 

Orore Inga  ligustina. 


Palma  de  la  cera Ceroxylon  andücoleu 

Patomero 

Pendare Ciíharexilum  cin«- 

reuiR. 

Peraman 

Sangre  de  drago. 

Seringa  ó  Caucho CastÜlea  elástica  f 

Supire.... 

Suelda  con  suelda. .  •  •  • 

Tacamahaco. . .  ^ Jalea  taeamahaeai 

Taeio. »...  Bevea  guayanensig, 

Sasafraa Ocotea  Javicensis. 


APLICABLES  PAEA  CURTIMUNTOS. 


Gortidor 

IMTidire Coulterta  tinctorea. 


Guayabo  silveatre. ....  Psiditm  pomiferum» 

Mangle  blanco.. Aviceiria  nítida. 

Yapo 


▲PU€AHLB8  PARA  USOS  HBDICIMALSS  ¥  TBMBKOS. 


Alcornoque Bowdicha  vlr0liode* 

Barbasco •  Piscidia  erithryna, 

Calaguala Polipodtum  craisifo^ 

lium. 

Caña-fistula Caparis, 

Canelo  ó  luercodelTo- 
cuyo. . . , Winteranusf 

CaneUUo  ó  Guariman.  Criptocaryacanelüla, 

Carapa 

Cocuy Mague»¡$, 

Cocuisa Vocui9a  aloe, 

Copaybo Copayfera  ofíicinaUs, 

Cuspa»  Gupare,  o  cor- 
lexa  de  Angostura. . .  Bonpíandia  trifoüata. 

Gapana Patuina  cupana. 

Doradilla.. 

Emético  vegetal 

Escorzonera Craniolaria  annua. 

Fruta  de  burro  d mala- 
gueña . . . .% ünona  aromática. 

Guaco Micania,  guaco, 

ttuachito   6  chaparro  ire¿a«/omo  xanthos* 
bobo tuckis. 

Goamadio. Inga  pungen», 

GCuiricamo  ó  Guach»- 
macá hryana  coceinea, 

Guásimo Guásima  ubntfolia. ' 


Jobo. ,.,,,, 
Kiraguero. . 
Manzanillo. 
Mavacure . . 

Níopo 

Ñongué... 


Spondia  lútea. 


Otoba. , 

Palo  crut 

Pasaña 

Pepita  de  todaeqiecie. 

Pesgua < 

Pesgua  macho 

Piñón 

Pucherf •... 

QuiAa^ 


Raiz  de  mato < 

Sagui 

Saúco  blanco 

Sarapia 

Simarruba 

Tacamabaco 

Tártago  6  paknacrisU. 

Vainilla 

Zarzaparrilla^ 


Ácada  niopo, 
Stramomo  datura  OT' 

borea, 
Myrisiica  otoba, 
Brownea  grandicepim 


Gualtheria  odorata, 
Gualtheria  coccínea 
Yatropha  curcas. 

Chineónos,  —  Valias 

especies, 
Cerbera  ihevetia» 
Palma. 

Sambucus  nigra, 
Dipteris  odoráta» 

Isica  tacamahaca, 
Ricinas  communis, 
Epidendrum  vcúnUla. 
Varias  especies. 


MADERAS  APLICABLES  A  DIVERSOS  USOS. 


Laurus  persea. 

Bow^Uehia  virqiliodes. 
Mymenasa  curbaril. 


Acata ^. ...... 

Aguacate.... 

Afilrique 

Alcornoque 

Algarrobo 

Aoumose 

Angelino .1 .  Homalium  racemo$um 

—  .  aceituno  .... 
•—      laurel 

—  roble 

Anime. 

Apamate 

Araguaney 

—  amarillo... 

Aragtnfo 

Árbol  de  leche  6  palo 

de  Taca 


Bignonea, 

Bignonea  pentaphglla 


Galactodendrtmutile, 


Árbol  de  nieve. 
Árbol  de  pan. . . 
Asta  blanca;. . . . 
Barba  de  tigre.. 

Bio 

Birole 

lUrubiro. ...... 

Brasilete 


Chionantes  tetranáa, 
CaroUnea  princeps. 


Bdcare  anauco 

—  plonia  espinoso 

-  -     liso 

Cachicamo..... 

Cafla-fístola 

Cándelos 

Candeiero 

Canelo  ó  tuerco  del  To- 


Heeastophykm  du^ 

bium, 
Ei-ythrina  velutina, 
Bnfihrina  umbrosa' 
Erytkringí  dubia. 

Caparis.  —  Varias  ei- 
[pecies. 
Arabia  capitata. 


I 


4«  — 


COTO ,Ci>rt€XWinterttnutt 

Canelón 

Canalete 

Canilla  yenado 

CanU 

Caobo ..rSwieíenia  mahaganL 

Caobano^  ••«... Crotón  lucidum  ? 

Caimito ChrytophUkum  cainUo 

Caramacate 

Caruto Genipa  americana. 

Cardones Cyñus. 

Caracoli nhinocarpii^  excelsa» 

Caneatetedaf Bombax  gossipium* 

Caraña ^ Amiris  carañai. 

Carapa. •••• 

Carian 

Carnpal*  ..«.••• 

4SaataJlo Ártocarpus  incissa  ? 

Catiguire ^nnona  maniroie. 

Cascaron  majomo. . . .  ^ecuridosa  pubescens, 

Caujaro. . ,. «  Cordia  dentada. 

Cántaro..^ 

CaTimbo 

Cedrillo  horcón 

->     hoja  menuda.. 

—  laurel 

—  au^gua*. .....  Mun  tingia  calambura. 

Cedro  amargo., f,  Cedrela  odorata. 

—   dulce Isica  Síltissima. 

-^  blanco  de  Rio-Ne-  Ámyñs  alílssima. 


EÍpiBO 

Flor  amarillo j^ 

Fruta  de  burro  6  ma- 

Gaf**!^** Vnona  áromaika^ 

Gásparilio...'. . !  1 ! !  i !  1«* 

Gígua... Geoffrea  supAa. 

Granadino. Buctda  capttaia» 

Guachito,  6  chaparro  Jir«{/» romo  xafi(Ao«(M^ 

^•>oJ>o- chi9, 

boadua.,. Bamlntsa  guadua, 

buamacho . . . .  * inga  pungens, 

Sr"*""? Inga  lucida. 

Guamita 

Guarapa Bacchitüa  obtutífoUtL 

Guarataro ^ 

Guarica 


Ceiba.. 


fSfo. 


Cereypo 

Cerbatana.... 
Chacuarama.! 
Chaparro..^. 


—      manteca..... 

ChiparriUo 

Chacaranday 

Charo 

Chupón «.. 

Chica 

ClatelUno 

Copaybo 

Copey 

Cotopría 

Conopía 

Congrio 

Cororiocho 

Goroba 

Cubaro. 

Cucbaro :  .. 

Cucurito  6  radgiai 

Cugí 

—  de  aroma 

Cnynbi 

CuyoTiae 

Cumare 

Cupi 

CuquiriCa 

Curbana  

Cnrume 

Cureo 

Curari 

Curtidor 

Cual 

Derego 

DlTldífe 


Bombax  ceiba,  B,  Pe- 
tandrum, 

Caricie» 

Pulma. 

Curaíella  americana. 

Birsonima  ehrysophü- 

la. 
Pelicourea  rígida. 


Copaifera  officinatit. 
Clusia  alba. 
Melicoca  oMmeformis, 


Palma. 

Mimosa  íemesiana. 

Mimosa, 


Calophyllum  cupi, 

Palma. 

Canellaalba? 


Caulteria  tineforea. 


Guarimaiia6  canelilla. .  ^rypiocarya  canelUla 

Giiariquen  ....*. 

^uásimou Guásima  ulmifoUa.   h 

Guatacare 

Gualamare 

Gualabo 

Guayabo . . . : Psidimí  pomiferum. 

Guayaba  de  monte . . .  chioSintes  compacta. 
biíayacan Guaiacum  sanctum.  G- 

J  Guaya ofíicinalts: 

Higueron ficus  glabrata. 

Hpeso  pescado 

Incienso jrixis  nerifolia,  ♦ 

Indio  despudo 

Jabillo.óárboldeldia- 

, ,  blo Hura  crepiíans. 

Jaque 

Jebe ; 

Jobo Spondia  lútea* 

Jopo 

Kiraguero 

Laurel  sasafraa .......  taurus  ? 

—  mulato Laurus  f 

Limoncíiio Caliphrantus  pamcu-- 

iMa. 

Macanilla Palma. 

Macomo 

Ma?uvire 

Majagua Hibiscus  íiliaceus. 

Manaca 

Uangle Bhisophora  mangle. 

—  blanco Ávicenia  nitida. 

•^     prieto Ávicenia  tormentosa  ? 

Manzanillo Bippomane  mancinel- 

»      2a. 
—        manso ]p 

Hanf Moronobea  coccínea. 

Mamón  . . , Melicocca  bijuga. 

Mamey ,..,.  Mammea  amerieana,. 

Mamelcill^ Ardisia  coriácea, 

Mapora..!?., 

Mapurite Acacia  fétida. 

Maria Pétrea  arbórea,. 

Marima». 

Mará 

Maracca 

Mariguaco 

Hasaguere ^..,,  * 

Mata  palo Ficus  deudroMa, 

.Mergo 

(Morado . 


•i 


I 


—  H20,— 


'  Uora. , Morus  Uncíorea,  Mo- 

ru*  ceitidijhlta. 

Morich((.^ . .  . : Palma  maurlíla 

Murci^ago [flexuosa. 

Nazareno Himamea  floribunda, 

Nlfia-..»'v i^. 

Níspero. Achras  zapóla. 

.  OCBtofi 

"^Onolb Bixa  orejana, 

Orore  ó  aboga-gato. . .  Inga  ligtisíina, 

Dtoba Mijrisíica  otoba. 

Palma  real Oredoxa  regia, 

—     de  cera Cero^lon  andícola. 

'-'     abanico,  ó  co- 

mon Chamerops  humilie. 

Palmiche. Varias  especia. 

Pala 'oruz Brownea  grandiceps, 

—   blanco 

Paneque ; .  ^        , 

Paralure....: 

'  Paraparo Sapíüdus  sapénaria. 

Pardillo Quercus  caris. 

—      negro.: , 

Paraguatán Matrocuemiwn  iinfito^ 

rium. 


Parupire 
Pauji 


iP 


^ÁHacfordium  occiden^ 

-  •  tale. 

Paaa  de  Rio-Negro. . . .  Geoffrea  bredemeyeri, 

Pendare. . . . .  ^ Cátharexilum    cine- 

[reum. 

Piehtgaao ^ . . .  Palma  melocotón, 

Pinayeie 

-Pinaciento «... 

Pifión Jafropha  curca9\         , 

Pirita. Palma. 

Piz Dalca  €istragarina. 

Poclieri 

Puy 

Parba  o  purbio 

~¡aiebra  luicha Svartiaf 

Juaio 

Iool$  de  olor Chelone  f 

•—     amarillo.  .....  Ehretia  hourreria. 

•*    blanco Tecoma  pentaphiUa, 


Saman Saman  acoda. 

Sangre  de  drago 

Sangrilo.... 

Saguá 

Salado 

Saquisaqui....: T 

Sarapia  ó  Jape Dipieris  odoraía, 

Sauces Bermesia  casíenaifo^ 

lia. 

Suelda  con  suelda 

Sema » 

Seje ; Palma. 

Seringa  ó  Caucho Casíülea  elástica  f 

Simbradera. 

Tacamabaco  6  Curucay  Mea  tacamahaca. 

Tamapire  ji. 

Tamarindo Tamfirindus  indica. 

Tara , Verbesina  helianthoi-' 

.^    des. 

Tarare 

Temare Palma. 

Teñan.... ^    * 

Tigrito 

Timites  . . , .  # Palma* 

Tintín 

Toco 

Totumo Creceneia  cugete. 

Totumillo 

Tripa  de  perro 

Trompillo •.  Lüstia  hirtella. 

Vera  o  palo  sano Zigophillum  arbo- 

revan. 
Volador Girocarpus  america^ 

ñus. 

Urape Bahuinia  multineria. 

Yació Hevea  guayanensis, 

Tacifate Isica  cuspidata. 

Yagrumo Cecropia  pelfata. 

—       macho Panax  longipetalum. 

Yagua Genipa  americana. 

Yema  de  huevo 

Yurí 

Yuvía Bertholleiia  excelsa. 

Zapatero 

Saiafras Ocotea  javicensis. 


9 

PLANTAS  QUE  SE  CULTIVAN  EN  VENEZUELAi» 

Las  plantas  cultivadas  tienen  zonas  menos  estrechas  y  menos  ri- 
gurosamente limitadas.  £n  la  región  de  las  palmas  los  indios  culti- 
vaban antes  del  descubrimiento  de  la  Costa-firme ,  y  aun  cultivan 
'lioi ,  el  plátano ,  la  yuca,  el  maiz ,  el  cacao ;  y  mas  arriba  de  esa 
región  las  papas  suministraban  y  suministran  todavía  un  abundante 
alimento. 

£1  cacao  (theobroma  cacao]  de  la  familia  de  los  biteríáceos^  que 
se  encuentra  silvestre  en  varios  bosques,  se  hizo  uno  de  los  prin- 
cipales alimentos  para  los  españoles,  como  lo  babia  sido  desde 
tiempo  inmemorial  entre  los  indios  mejicanos,  que  lo  preparaban 
en  una  infusicm  de  agua  fria.  £1  precio  de  \  50  nuezes  era  un  real. 
£1  gusto  por  el  chocolate  pasó  después  deja  conquista  á  España , 
en  -1522 ,  dondften  poco  úea^  le  usaron  tan  generalmente  como 
en  América.  Se  puede  decir  que  entre  los  españoles  se  ha  hecho 
una  necesidad  que  aun  precede  á  la  del  pan.  Los  frailes  de  aquella 
nación  lo  introdujeron  en  Francia  en  -166^  y  Alfonso  de  Richelieu 
|ué  el  primero  que  lo  tomó.  Crece  y  prospera  ventajosamente  desde 
pocas  varas  del  njvel  del  mar  hasta  la  altura  de  652  que  es  su 
límite  superior,  y  solo  puede  vivir  bien  en  la  región  cálida  entre 
k  temperatura  medía  de  27°  5d  y  25<^  56.  «El  chocolate,  dice 
a  Humboldt ,  igualmente  fácil  de  llevar  y  de  emplearse  como  ali* 
«  mentó ,  contiene  una  gran  cantidad  de  partículas  nutritivas  y  es- 
«  timulantes  en  pequeño  espacio.  Se  ha  dicho  con  mucha  verdad 
«  que  en  África  sin  el  arroz ,  la  goma  y  el  aceite  de  sbea  el  hom- 
«  bre  no  hubiei^  podido  atravesar  los  desiertos  :  en  el  Nuevo- 
•  Mundo  ebchocolate  y  la  úor  del  maiz  le  han  hecho  accesibles  las 
«  tierras  elevadas  de  los  Andes  y  los  vastos^y  desiertos  montes.  » 
£1  árbol  vegeta  tan  vigorosamente  que  la  flor  sale  aun^  de  los  tron- 
cos y  de  aquellas  partes  de  raizes  que  la  tierra  ha  dejado  descubier- 
tas :  sufre  con  los  vientos  del  N.  £.^  aunque  estos  no  hagan  bajar 
mas  de  un  grado  Hi  temperatura.  Necesita  de  un  terreno  no  mui 
espueslo  al  N.  y  oerca  de  los  rios  ,  para  que  en  tiempo  seco  puedan 
comunicar  á  la  tierra  la  frescura'  de  sus  aguas  y  que  reciban  eui 
tiempo  de  lluvias  la  superabundancia  de  estas.  Se  da  la  preferencia 
al  terreno  .qse  puede  recibir  del  rio  los  beneficios  del  riego  ,  sin 
temer  las  inundaciones  de  las  avenidas.  Es  una  dé  aquelljis  plantas 


á  la  que  ofenden  los  rayos  del  sol ;  necesita  una  sombra  conveniente, 
que  la  prot^a  de  estos  rayos  sin  privarla  de  su  calor.  Para  este 
efecto  se  sirven  del  búcare  y  del  plátano  :  este  la  abriga  durante  los 
primeros  dios  y  después  aquel ,  que  dura  tanto  (»mo  el  cacao.  Las 
lluvias  violeAtas  que  caen  irregularmento  de  diciemi>re  á  mayO| 
éespues  de  la  estación  invernal  son  mui  peijudiciales  al  cacao..  La 
ipcande  humedad  no  es  favorable  al  árbol  sino  cuando  aumenta  pro- 
gresivamente y  sigue  án  intorrupdoa  por  mucbo  tieinpo.  Si  en  la 
«staclon  de  la  sequedad ,  las  hojas  y  las  frutas  nuevas  se  mojan  por 
im  fuerte  chaparrón  ,  el  fruto  se  cae  del  tallo.  Si  la  cosecha  del 
cacao  es  una  de  las  mas  mciertas  á  causa  de  los  funestos  efectos  ée« 
las  malas  estaciMies  y  del  gran  número  de  inseetos,  pájaros  y  cua- 
drúpedos que  devoran  la  mazorca ;  si  este  rsmo  de^agricultura  tiene 
la  desventaja  de  obligar  al  cultivador  i  esperar  seis  u  ocho  a3as 
para  el  fruto  de  su  tt^ajo ,  y  de  producir  un  artículo  mui  difícfl 
de  conservar ;  no  debemos  olvidar  ^g»  las  {rfaotadones  de  cacao  no 
exigen  tantos  trabajadores  como  las  de  otros,  artículos.  Un  hombro 
basta  para  cuidar  4  ^OÓO  árlioles,  que  un  ano  con  otro  pueden  .pro- 
ducir A  2  luieg^  de  cacao ,  y  esta  planta  continúa  produciendo 
hasta  la  edted  de  50  aüos  en  los  terrenos  de  la  c<^,  y  de  50  en  los 
del  interior  :  en  aquellos  necesita  7  años ,  y  S  en  estos  para  empe* 
zar  á  producir.  Bai  algunos  lugares  bajos  y  fértiles  y  con  mucha 
liame<faKl ,  en  que  fructifica  á  los  6  años,  aunque  á  los  4  dé  algunas 
mazorcas.  En  Rio-Negro,  donde  llueve  considerablemente,  es  adulto 
ti  quinto  año. 

Constantemente  se  madura  y  se  coge  el  cacao  ;  pero  tiene  dos 
^ooas  de  cosedia  principal ;  una  por  S.  J<Km ,  en  junto ,  y  la  otra 
á  fines  de  diciembre  que  es  la  mejor.  La  apuorea  necesita  cuatro 
aieses  para  llegar  á  su  perfecta  madurez. 

Las  nMjores  plantadones  se  hallan  en  las  provincias  de  Caracas 
7  Carabobo  á  lo  largo  de  las  costas ,  desde  el  Uñare  hasta  el  lara- 
cui.  En  el  interior,  en  los  vjilles  de  Cúpira ,  Rio-Chico,  Guapo , 
Cancagua ,  Curiepe ,  Tul ,  Santa  Lucía ,  Santa  Teresa ,  Ocumare , 
Orítueo ,  Cüigñe  y  valles  de  Aragua.-te  la  provincia  de  Barqui^ 
meto,  en  S.  FeUpe,  laritagua  y  Aroa ;  en  la  de  Maracaibo,  al  es- 
tríalo dd  lago ,  en  Gibraltar  y  Zulía ;  eo  la  de  Mérida  en  el  Cha- 
ma, Escalante  y  S.  Cristóbal ;  en  la  de  Trujillo,  eñ  el  valle  de  Pocé 
y  eü  Pampanito ;  en  la  de  Barinas  en  Pedraza ;  en  la  de  Barcelonai 
«n  Caipiricual;  en  la  de  Cumaná ,  en  la  costa  de  Paria,  en  S.  Boni* 


9 

—  IK  — 

faciO;  en  Cariaco ,  en  Guacarapo,  I^gnaraparo ,  Garápano  y  Rio^ca- 
ribe.  El  cacao  de  Orüoco  se  considera  como  el  de  príaiera  calidad ; 
después  los  de  Gúigúe,  Caacagaa^.  Gapaya  y  Gúpira.  Cos  comercian- 
tes de  Cádiz  dan  el  primer  rango  al  cacao  de  Caracas ,  decaes  del 
de  Socobusco. 

A  mediados  del  sigk)  XYII,  tranquilos  poseedores  los  holandeses 
de  la  isla  de  Curazao,  despertaron  por  su  contrabando  la  industria 
agraria  de  los  haMtantes  de  las  costas  inmediatas  ^  y  el  cacao  se 
hizo  un  objeto  de  e^rtacion  en  la  provincia  de  Caracas.  Se  ighora 
lo  que  pasaba  relativamente  al  j^tnlocto  de  esta  planta  antes  de 
•1728,  época  del  est^feciúoiiento.de  Ja  compañía  de  Guipúzcoa.  £1 
solo  dato  estadístico  que  se  conoce  es  que  la  esportacion  del  cacao 
de  Caracas,  apéoas  subia  á  príncipos  del  siglo  XVIIl  á  50.000  fa- 
negas anuales.  Desde  ^750  á  4748  la  copipañia  envió  á  España 
858.978  fanegas ,  que  hacen  un  año  con  otro  47.700.  El  precio  de 
la  fanega  cayó  en  4752  i  45  duros  cuando  se  habia  vendido  antes 
á  ^6.  En  4765  el  cultivo  aumentó  tanto ,  que  la  isportacion  subía ' 
á  85.659  fanegas.  En  los  documentos  oficiales  tomados  de  los  pa- 
peles del  ministro  de  Hacienda,  sobre  el  comercio  de  Caracas ^n 
4797,  la  cosecha  se  computaba  en  455.000  fanegas  de  cacao, 
S5.000  de  las  cuales  eran  para  el  consumo  del  pais,  40.000  para 
otras  cotonías  españolas ,  77.000  para  España  y  45.000  para  el 
comercio  ilícito  con  la3  colonias  francesas ,  holandesas ,  inglesas  y 
dinamarquesas.  Desde  4789  basta  4793,  la  in^port^^ion  desde 
Caracas  á  Espala  fué ,  un  año  con  otro ,  de  77.4  4  9  fanegas  anua- 
les, délas  cuales  65,766  we  consumieron  en  la  Península  y  41 .95$ 
se  esportaron  á  Francia  ,  Italia  y  Alemania. 
4  Se  graduó  por  Humboldt ,  según  los  datos  que  tenia ,  que  Iai9- 
seeha  anual  de  las  plantaciones  de  Venezuela  de  4800  á  4806, 
último  período  de  la  paz  intenior,  era  lo  menos  495.00#  fanegas  á 
440  libras  españolas,  de  las  cuales  asignaba  á  la  provincia  de  Ca- 
racas que  eomprebdia  entonces  las  de  Carabobo  ,^  Barquisiraeto  y 

Coro .- 450.000 

A  la  de  Maracaibo,  que  contaba  con  las  de  Mérida 

yTrujillo >    20.000 

AladeCümaná 48.000   *. 

A  la  de  BsHTcelona 5.000 


^.» 


»•   . 


.1» 


Total    495.000 


% 


•* 


—  424  — 


Estas  equivalen  á  2i^225.00a  libras. 

Segaii  la  memoria  del  ministro  de  Hacienda ,  del 
año  de  4  8#0  y  la  esportgcion  hat  sido  de  •     •     .      6,498.051 

A  lo  qn^  se  debe  agregar  el  consumo  del  país ,  que 
pues  tiene  actualmente  una  población  igual  á  la 
de  la  cpoca  calculada  por  Humboldt ,  y  consu- 
mirá las  mismas  55.000  fanegas  que  él  graduó 
para  el  consumo  iutefior ,  que  hacen     .     .-.      5,6$0.000 

Se  puede  poner  para  el  comercio  ilícito  la  misma 
caotidad  que  aquel  sabio  calculó  (4  5.000  fane- 
gas),  que  hacen      . ^  ♦-•     •      4,650.000 


Total    4^,778.054 


Se  puede  decir,  pues,  que  es  la  mitad  de  lo  que  se  recogía 
antes  de  la  guerra  de  la  independáicia.  En  esa  época ,  es  decir  , 
-/  en  4  810  j  habia^cerca  de  1 6,000.000  de  árboles  de  cacao  y  actual- 
mente no  hai  ardt>a  de  8,000.000. 

f  En  una  fanegada  antigua  española  de  470  varas  por  cada  lado , 
igual  á  20.750  metros  cuadrados ,  se  pueden  g^duar  (por  termino 
medio  de  la  diferencia  de  los  terrenos )  ,  4 .456  árboles,  dándoles 
5  varas  de  uno  á  otro,  que  darían  un  producto  medio  de  46  fane- 
gas de  cacao  :  á  21  pesos  estas  producirían  556. 

Según  el  producto  de  la  cosecha  sobreindicada ,  estarían  en  cul- 
tivo 6.77d  {anegadas,  y  aumentándoles  4.221,  i  causa  de  algunos 
terrenos  malos  ,  plantas  viejas  y  otras  que  no  producen ,  «starian 
en  cultivo  en  toda  la  república  ^, por  solo  esta  planta  ,  4  \  .000  fa- 
negadas. .^ 

£1  cacao  es  lo  que  en  otro  tiempo  dio  m%s  celebridad  á  la  agri- 
cultura de  este  pais :  su  cultivo  disminuye  á  medida  que  aujnenta 
el  del  café,  elj^el  algodón  y  el  d^\  aif&car,  y  su  marcha  es  del  oeste 
al  este.  No  solamente  e»  el  cacao  importante  cf^mo  objeto  de  co- 
'  mercio  esterior,  sino  taiftbien  como  alimei^to  del  pueblo.  El  con- 
sumo interior  aumentará  por  consiguiente  cpa  la  población ,  y  es 
preciso  iesperanzar  en  que$o$  propiciaros  de  esta  hacienda  encon- 
trarán mui  pronto  nuevos  fomentos  len  los  progresos  nacionalesl 

£1  plátano  ftnusa paradisiaca))  de  la  familia  de  las.musáceaa, 
llamado  también  higuera  de  Adam  á  cáu^  de  la  magnitud  de  sus 
bqtas ,  se  encuentra  en  la  India  y  en  la  América*^^  la  veiHadera 


/    V 


I 


-r  425  — 


planta  de  pan ,  y  nac^en  todos  los  terrenos  que  tienen  ^  fqpo  dg 
humus  ( tierra  vegetal  qq.e  sirve  de  cuhierla  ^  por  decirlo  así/  á 
nuestro  globo).  No  se  necesita  qne  sea  muí  profunda,  pues  las  rái- 
zes  del  plátano  son  tan  pequeñas  y  corlas ,  que  apenas  se  agarran 
de  la  superficie  de  la  tierra ;  lo  que  espone  la  planta  á  caerse  eú 
los  fuertes  vientos.  Se  pasan  4 1  meses ,  desde  el  diatque  se  planta 
el  renuevo  del  plátano  hasta  que  la  flor  foriiía  racimo ,  y  para  lle- 
gar á  su  madurez  necesita  cerca  de  2  meses;  de  manera  que  la  co- 
secha se^|i^c%de  á^á  ^ 5  meses  det^pues  de  la  plantación.  Se  d^be 

^.graduar  q«^  ai  nivel  del  mar^  en  una  temperatura  mediado  27^  p2, 
necesitado  meses  :  á  la  alatura  de  700  varas,  con  una  tempeiratiira 
media  de  25<>  56,  9^/2  meses ^  á  U96  con  la  temperatura  media 
de  22<>  36  ,  rejO[uiere  4  I  meses  y  los  que  se  dan  con  mui  poca  uti- 
lidad á  2.800  varas ,  en  una  temperatura  media  de  16*" ,  necesitan 
45  meses.^  * 

Desde  que  Ja  planta  empieza  á  florear  tiene  ya  su  pié  una  por- 
ción de  pjeioños  ,  que  al  rededor  del  tallo  herbáceo  se  elevan  á  dife- 
rentes alturas^f  y.  tan  luego  como  el  racimo  está  formado,  fa  hai 
otras  plantas  floreando,  ñu  grandes  como  la  principa).;  de  manara, 
que  consequlivamente  van  creciendo  y  reproduciéndose ,  y  llegado 
el  fruto  .al  estado  de  sacón ,  se  corla  el  tallo.  Este  suministra  des- 
pués ,  pu4ricndo3e  en  el  lugar  en  que  nació,  nuevas,  malcrías  que 
den  vigor  á  las  fuerzas  orgánicas  de  la  vida  vegetal/ 

Es  digno  de  particular  mención  lo  que  el  S.  i^oussingauK  ^  que 
ha  residido  mucho  tiempo  en  América  ,  dijo  delante  del  Instituto  de 
Francia  sobre  eáíte'Tegetal.  tEl  plátand  es  el  fruto  mas  útil  ala 
«  zona  ecuatorial ;  es  la  base  del  sustento  de  fos  habitantes  de  las 
II  .regiones  cálidas.  Entre  los  trópicos  su  cultivo  es  tan  imgortante , 
«  como  lo  es  en  las  zonas  templadas  el  de  las  grann'neas^  plantas 
«  farináceas.  La  facilidad  de  su  cultivo ,  el  poco  espack)  que  ocupa  , 
«  la  seguridad  y  abundancia  de  las  cosechas^  la  variedad  de  alimen- 
i  tos  que  el  plátano  procura,  según  Iíb  diferentes  grados  de  mjdu- 
«  rez  y  hacen  de  esta  planta  un  objeto  de  admiración  para  el  viajejo 
«  europeo.  Bajo  un  clima  en  que  éfliombrc  apenas  llene  necesidad 
«  de  vestirse  y  de  abrigarse,  se  le  ve  recoger  sin  trabajo  un  alimento' 
«  tan  abundante  como  sano  y  wiado.  Á  la  cultura. del  plátano 

^«  se  debe  sin  duda  el  proverbio  que  tantas  vezes  he  oído'  re- 
«  petir  por  todas  parles  entre  los  trópicos  :  Ninguncf  muere  de 

^  «  hombre  en  Ámériea  :  pitabra  consoladora  que  jamas  he  visto 


I 

j^étgfet^Ast.  Ea  la  choza  mas  pol»*e  te  recibe  hespiialidady  y  «e 

•  da  ée  comer  al  qne  tiaie  hambre. »  Cada  racimo  tíese  de  50  á  4  M 
y  aun  mas  piátanos.  El  S.  Crawford  que  residió  mocho  tiem|M>  es 
el  archipiélago  indiano ,  dice  que  ana  aranzada  inglesa  de  4(^26 
«letros cuadrados,  puede  contener  455  árboles  del  famoso sago  de 
la  India  ,  qa#darian  mas  de  8.000  libras  de  harina  al  aik).  Este 
producto  es  eomo  tres  vezes  el  del  trigo  en  EnrqMi  y  coma  dos  Te- 
ses el  de  las  patatas  en  Francia ,  según  lo  ha  demostrado  el  S.  Hom- 
bpIHt,  Pero  el  plátano  produce  sobre  el  mismo  espaeio  4p  tierra  j 
]gaas  sustancia  nutritiva  que  el  árbol  del  sago ,  pues  el  §.  Boussin-  -^ 
^auH  ha  probado  en  la  misma  memoria  leída  al  Instituto ,  que  un 
platanal  cultivado  en  su  presencia  en  el  valle  del  Cauca  (Nueva 
Granada),  le  habia  dado  por  cada  -100  metros  cuadra(k)s  4*255 
libras,  lo  que  haría  para  una  fanegada  de  28.900  varas  cuadradas, 
•I 02. 462  libras,  cuando  el  árbol  del  sago  en»superfíciekual  daría 
44 .295.  'Spmando  un  término  medio  paca  toda  la  república,  dire- 
mos que  en  una  fanegada  pueden  caber  5.214  plantas ,  dapdo  para 
cada  una  9  varas  cuadradas.  Al  rededor  de  cada  árbol  nacen  otros 

'  retoños  formauado  grupos  ,  entre  Jos  cualet  hai  á  vezes  5  ó  4  tallos 
echando  simultáneamente  sus  racimos  ;  sin  embargo ,  tomaremos 
por  término  medio  dos  racimos  anuales  en  cada  planta,  y  solo  con 
25  plátanos  cada  racimo ,  tendríamos  460^550  plátanos  ú  805  car- 
gas de  200  cada  una ,  que  darían  el  pan  cotidiano,  sin  ningún  tra- 
iMyo ,  á  75  personas  durante  un  año ,  á  razón  de  6  plátanos  diarios 
para  cada  una ;  teniendo  la  ventaja  de  propasar  el  pan  solo  arri- 
mando la^fruta  al  fuego,  pues  do  este  modo  esk  poeos  instantes  q&eda 
asada  y  lista  para  comerse.  Existen  platanales  de  mas  do  80  anos , 
produci^do  abundantemente  sin  que  la  mano  del  hombre  les  hay^t 
hecho  ningún  beneficio ;.  pues  por  su  sombra  y  muchos  renuevos  no 
permite  el  plátano  que  se  desarrollen  otras  plantas.  La  fruía  del 
plátano  después  de  cortada ,  dura  verde  mas  de  una  semana,  en  se* 

«  gttida  va  tomando  un  color  agiarillento,  y  entonces  es  mas  gustosa  ' 
y  mas  dulce ,  hasta  que  á  los  4  2  ó  4  5  dias  «injj^za  á  ponerse  ne« 
gruzca  ;  llegado  á  este  estado  Hftfruta ,  es  tan  dulce,  que  se  come 
cruda ,  y  asada ,  ó  coippuesta  de  otrosmoéos  :  es  de  un  sdbor  esquí* 
sito ,  sana  yjitftritiva<  Hai  variedles  de  plálano :  el  jdominico  (re^ 
gimrumphj  masdéljgado  y  delici^o;  el  cambute  {musa  sapietin^ 
tiumJ¡mxS^f^q\xenOy  y  tan  dulce ,  que  generalmente  se  come 
GCHUO  fruta  agradable ,  y  verde  se  usa  «n  la  oUa  como  hortalíz%      ^ 


I 

—  4»  — 

E&  k  zona  edieote  ereee  el  piátaoo  coa  una  loünfai  «ombniBa 

y  arriba  de  700  varar  fraettfioa  yenUiiofiaraeBte  basta  4 .4  90,  en  nua 

tonperalvra  media  de  27<»  55  á  22»  25.  A  4.704  yá'as  en  mía 

temperalara  de  4  O"*  22  se  cultiva  en  algmios  pan^ ,  en  oaiadas  á 

cnbierto  de  los  vientosy  eqfwestasal  mediodía,  y  llega  hasta  2.00O 

varas  en  una  temperatura  media  de  4  9  <> ;  pero  se  arrastra  lánguida- 

mente  á  2.592  varas  sobre  el  nivel  del  mar ,  y  no  madara  á  2.754 , 

en  ntía  temperatnra  media  de  46*..  Hai  una  variedad  del  plátano 

que  se  llama  cambare  morado ,  pequeño ,  y  da  frnto  á  la  altura  de 

2.800  varas ,  en  una  temperatura  media  de  4  O"" ;  mas  no  con  tanta 

lozanía,  y  su  vida  es  poco  duradera.  El  S.  Boussingault  en  la  misma 

memoria  presentada  al  Instituto  >  dice  :  «  En  la  estación  seca, 

«  cuando  el  ci^o  conserva  sú  pureza  meses  enteros ,  y  ninguna  Uu* 

o  via  baja  á  templar  la  sequedad  de  la  tierra ,  se  observa,  sin  em- 

i  bargo,  al  rededor  del  plátano ,  un  Ételo  bumedecido  que  parece 

«  h<d>er  sido  regado  por  la  noche.  Esto  es  debido  á  la  irridadon 

«  noctiirna  de  las  hojas  hada  los  espacios  celestes.  En  efecto ,  la ' 

«  esperienda  enseña  que  su  enfriamiento  respecto  del  aire  am- 

«  bienle,  equivale  á  5  ^  4  5  del  termómetro  centígrado ;  y  por  tanto, 

«  parte  del  vapor  acuoso  contenido  en  la  atmósfera  se  condensa  y 

«  deposita  eti  las  boja$  de  la  planta  y  baña  después  su  pié  cayendo 

«  bajo  la  forma  de>  grandes  goteras^  n 

Por  los  diferentes  lugares  en  que  abunda  el  plátano ,  y  por 
aquellos  én  que  escasea  se  puede  considerar  el  término  me^io'^de 
sn  predo  4  reales  la  carga  de  200  plátanos,  ün  bombrg^  necesita 
44  cargas  para  un  año ,  á  razo^  de  6  plátanos  diarios,  lo  cual  le 
hace  un  gasto  total  de  5  4  /2  pesos  ó  22  francos  por  alto ,  y  en  igual 
tiempo  la  fanegada  producirla  404  pesos.  El  S.  Boussingault,  dice 
que  á  peso  igual ,  «ree  que  el  trigo  es  mas  nutritivo  que  el  plátano/ 
pero  piensa  que  este  es  mas  sustancioso  que  las  papas.  Por  último^ 
se  puede  considerar  que  fres  décimas  partes  de  la  población  sir- 
viéndose de  i^íálano ,  en  lugar  de  pati,  consumirán  5,449.622  car* 
gas;  que  al  valor  medio  de  4  reales,  darán  una  cantidad  dé 
4 ,559.84  4  pesos^  y  se  habrán  empleado  para  este  culti?o  SM^i^ 
negadas,  á  las  cuales  se  pu^d^n  aumentar  4 ,445 ,  por  los  terrenos 
no  bien  cultivados  ^  callejones  etc,.,  lo  que  hará  5.000  ^negadas 
de  tierra  en  solo  platanales.  *        * 

El  vMíit^fmaiz  zea) ,  es  una  planta  americana  que  Colon  encon* 
Iró  cultivada  cuando  descubrió  la  Costa-Firme  en  su  tere^  viaje 


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de  4498;  pero  se  ignora  de  qué  parle  de  Amériea  es  originaria. 
Hacia  tiempo  que  se  discutía  sobre  este  punto,  cuando  qaedó  la  cues* 
tion  no  hace  muclio  decidida  perun  bráfilense  mui  instruido  que 
envió  a!  S.  de  Satnt  Hilaire  unas  muestras  que  erecian  sin  cultivo 
en  las  misiones  del  Paraguai.  Las  flores  hembra^  de  este  maiz  es- 
tán bien  reunidas  en  espiga  ,  como  las  del  conocido ;  pero  presen- 
tan la  particularidad  de  que  cada  flor  parcial  está  cubierta  de  telas 
viscosas  semejantes  á  la  de  las  otras  gramíneas.  Desde  áutés  del 
desubrimiento ,  las  mujeres  indígenas  prep^ríban  el  pan  de  maíz  , 
moliendo  entre  dos  piedras  los  granos  hervidos  de  antemano  para 
ablandarlos ;  en  seguida  hacían  panes  de  aquella  masa  y  los  ponian 
á  tostar  sobre  un  platón  de  tierra  puesto  al  fuego :  aun  en  el  día  lo 
benefician  del  mismo  modo  los  indígenas  y  los  criollos ,  y  ningún 
adelanto  se  ha  hecho  en  una  manipulación  tan  usual  y  necesaria  , 
en  la  que  se  emplea  mucho^iempo.  De  la  semilla  de  esta  planta 
hace  el  indígena  sus  bebidas  espirituosas ,  fermentando  el  maiz  y 
endulzándole  con  el  jugo  de  la  caña  de  azúcar.  Los  criollos  también 
hacen  lo  que  llaman  carato  y  bebida  mui  agradable  ,  de  que  se  usa 
como  horchata.  El  pan  de  maiz  es  de  primer  necesidad  en  las  pro- 
vincia de  Margarita ,  Coro  y  parte  de  las  de  Carabobo ,  Barqufsi- 
meto  y  Caracas ;  así  es ,  qae  se  hace  sentir  la>'j^scasez  de  las  cosechas 
cuando  por  falta  de  lluvias  se  disminuyen  en  algunas  partes;  bien 
es,  que  prontamente  suministran  el  maiz  necesario  las  comarcas 
dond^Ja  cosecha  ha  sido  abundante ,  pues  no  se  ha  visto  que  haya 
deoíia^Sfllft  sequedad  ó  humedad  en  lodo  el  pai&  á  la  vez.  La  falta 
de  una  cosecha  demaizjiunca  seria  una  calamidad  ,  porque  la  yuca  ^ 
y  ei^látano  pueden  siempre  reemplazarla  con  sobrada  abandancía. 
Desde  el  nivel  del  ma  hbasla  la  región  de  las  palmas  ,4^90  varas , 
crece  lozano  y  jogoso  :  arriba  de  esta  altura  su  producto  y  sutigor 
disminuyen  gradualmente.  A  la  elevación  de  5.^  60  varíi^  según 
M.  Boussingault  y  se  cultiva  el  maiz  en  Bogotá ,  aun  en  ui^  tempe* 
ratura  media  de/i  4  "^  á  |5^ ,  necesitando  6  meses  para  producir ;  y 
arriba  de  9.200  ya  no  escuUivable.  En  el  lími(e  inferior ,  en  una 
temperatura  de  27  ^  á  22^ ,  necesita  3  meses  para  producir :  en  ei 
límite  superior  9ntre^24  <»  y  20^  de  tc]$fpieratora  media*,  4  meses , 
estoes,  «inaaUurade'^.400á2.UiO  varas,  y  nías  arriba,  6  m^es; 
Jodoel  año  se  puede  lener  maiz  ,  y;  de  eslo  es  una  prueba  evi- 
dente el  habef  siempre  malojo^  ó  sea  el  mttizsembradMUui  unido 
omo  ae  hace  con  el  trigo ,  di  manera  que  no  puede  espigar  conve-* 


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Bíeiitoineiile  para  dar  ^^ftdes' majorcas  y  si  para  <}Ke  fa  planta 
Tenga  á  ser  jocosa  y  nalriüva  á  fin  demanteaer  con  ella  ios  caba.- 
líos,  muías  y  amos.  Ha| ,  sin  embargo ,  dos  cosechas  al  ano ,  «119^.  - 
llamada  de  verano  y  la'ó'ra  de  invierno.  La  primara  se  recog»  «^ 
enero  ó  febrero  y  la  otra  en  julio  ú  agosto.  El  maíz  mi  general  se- 
coge  á  los  4  meses  de  baberlo  sembrado ,  á  los  5  sí  es  de  una  coi- 
lidad  que  llaman  paiío»;  y  en  los  lugares  donde  se  siembra  sola- 
mente inaiz ,  se  hacen  cuatro  cosechas  de  este  último  y  tres  del  prl** 
mero.  Las  tierras  fér tiles  de  Venezuela  hacen  elevar  la  planta  á  mas 
de  5  vari|^ ,  con  cuatro  ó  cinco  mazorcas  grandes.  En  las  tierras 
menos  jugosas  se  levanta  solo  á  2  varas ,  y  generalmente  tiene  dos  ó 
tres  mazorcas.  En  las  tierras  ya  cansadas  ó  muí  elevadas,  produce 
de  una  á  dos  y  mas  pequeñas,  y  la  planta  solo  se  eleva  á  4  4  ¡2  varas 
£1  cultivo  del  maiz  emprobece  el  terreno ,  y  prospera  en  las  tierras 
virgenrs,  lijems  y  búm^to:  le  convienen,  sin  embargo ^  casi< 
todos  ios  terrenos,  siempre  que  haya  humus  en  ellos  y  sean  sufl- 
clentemente  removidos  ó  preparados  al  efecto.  Se  puede  graduav 
sin  exageración  que  la  cosecha  del  maiz ,  en  los  terrenos  mas  férti<- 
íes,  produce  por  un  almud  de  sembradura  560;  en  los  terrenos  de 
calidad  media  240,  y  en  los  inferiores  444 ;  lo  que  daría  por  tér-* 
mino  medio  258.  Un  almud  se  siembra  comunmente  en  un  espa« 
eio  de  28.900  varas  cuadradas,  (la  fanegada  es  igual  á  20.754 
metros  cuadAidos)  producto  estraordinarío  si  se  considera  lo  que  da 
el  maiz  en  Europa  en  los  mejores  terrenos,  y  también  lo  que  pro- 
dudé  en  Méjico  y  en  los  Estados-Unidos.  La  abundancia  con  qvfó 
se  da  este  cereal  hace  que  su  predo  sea  ínfimo,  siendo  así  ({ue 
en  los  valles  de  Aragua  soto  cuesta  8  reales,  ó  4  francos  la  faneca. 
Con  tres  de  estas  pnede  comer  una  persona  durante  un  aSo,  á  ralon 
de  culero  arepas  "h  panes  diarios  de  m^m  libra  cada  uno.  Per6  se 
debe  graduar  por  la  generalidad  de  la  reptíiblica  el  predio  medio  de  • 
24  reales  ó  42  francos ;  es  evidente  que  con  la  pequeña  cantidad 
de  9  pesos  ó  52  francos ,  tendrá  una.  persona  asegurado  el  pan 
anual ,  y  una  fanegada  sembrada  proveri  i  458  personas  y  pro- 
ducirá «¿coHivador  4  422  pesos,  calculando  dos  cosechas  alano. 
Pongamos  que  4/40  de  la  población  se  sirvan  de  pan  de  maiz,  se 
necesitarán  4,454,408  fanegas  al  aSo.  Si  se  atiende á  la  cantidad 
que  se  gasta  en  el  mantenimiento  de  animales  domésticos ,  caba-^ 
Uerias  y  acémilas  ^  lo  que  se  siembra  en  malojales  y  lo  que  se 
pierde^  no  será  exagerado  el  montante  de  2;0OO.000  fanega^» 

P.  6B0«.  .  9 


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^qae  se  espetíien  en  el  tarrUmo ,  eseeplo  aguaos  4dlos  foe  roetai 
trasportarse  á  las  ootoi^as  Tecinas  varios  cai^Bfinitoa.  Para  poéer 
€ar  esta  cantidad  se  neeesitas  2.409  fanegadas  en  calUyo;  á  las 
<nii^s se pned^  agregar  \.B9^  por  los  terrenos  mal  coltivados^^ 
«fue  por eaoaados dan  poco ;  loque  daría  un  total  de 4.000  fane- 
gadas empleadas  en  el  cultivo  dd  niaiz. . 

La  yuca  (jtxiropha  man^t)  que  han  cmltiviado  y  cultii^an  lo-r 
4ayia  los  indios  salvajes.  Es  ptonta  cuya  raiss  es  necesaria  al  babí* 
taiite  de  los'bosques  &k  sus  largas  incursiones,  sea  para  atacari 
Jos  enemigos ,  sea  para  visitar  las  aadones  amlfias.  El  pm  que  se 
hace  de  la  yuca  dura  muchos  meses ,  y  su  pMo  peso  le  hace  pii^ 
rífale  á  otro  cualquiera.  Bita  planta  tí^ie  su  raiz  en  sazón  á  los 
O  meses ,  en  los  lagares  no  mui. elevados  de  las  serrmiifts ,  y  en  los 
llanos ;  en  las  partes  lluviosas  de  Rio-Negto  ,*  necesita  alto  y  me- 
dio ,  y  en  lá  serranía  elevada  la  estraen  %  los  dos  ados ;  porque  pa^ 
rece  que  á  esta  época  ha  llegado  á,su  completo  desarrollo  sin  pa* 
saroe  á  un  estado  leñoso ,  lo  que  sucedería  si  se  dejase  mas  tiempo 
bajo  la  tierra.  Prospera  desde  el  nivel  del  mar  basta  la  altura  de 
A  A  96  varas ,  temperatura  media  de  22"*  56.  A  mayor  altura  dísmi* 
nuye  progresivamente  ^  producto :  pero  seencuentra  en  corta  can-^ 
tidad  en  el  cantón  de  liucuchíes  á  2.800  varas ,  en  una  tempmi« 
tura  media  de  •!  6  '^ ,  y  neceáta  año  y  medio  para  empezar  á  proéu* 
air,  mientras  que  á  la  de  4. «1 96  es  al  año,  y  en^  región  mas 
biya  hacia  el  nivel  del  mar ,  tan  solo  á  los  -1 0  meses.  La  lentitud 
delasicoseebas  de  la  yuca  en  las  selvas  húmedas  de  la  Gua<|áaa  , 
ej^ce  umt  benéfica  influente  en  las  costumbres  de  los  indios ;  por 
esta  circunstancia  están  Obligados  á  permanecer  mas  largo  timbpo 
en  un  mismo  sitio ,  lo  que  les  fija  y  apega  al  stfelo  q«e  euUivnn. 
De  la  yuca  hacen  >el  mañoco ,  esto-es^  una  harina  de  esta  raíz ,  tos- 
toda,  lá  cuíd  conservan  por  muchos  alosen  saquüos  dé  mariitia. 
Bi  sus  largas  peregrinacioiies  usan  de  esta  bacina  desliéndola  en 
agua  ó  caldo ,  lo  que  la  hace  erécer  eonsiderabJemente ,  formando 
una  sopa  espesa  quedes  da  sufioieiite  jiutrimie&to,  pues  dias  ente- 
ros están  con  dos  pequeños éotumas  de  esta  harina,  medida  equí** 
valente  á  lo  que  puede  eneermir  el  puño  de  nna  mano  regala.  Dos 
clases  de  yuca  se  cultiven ,  y  parece  tan  semejantes  una  y  otra  en 
sus  hojas  y  raíz ,  que  muchas  vezes  se  confundid :  una  es  la 
yuca-duloe,  muí  agradare  asada  ó  cocida ;  la  otra  es  la  yuca-amar-  ' 
ga ,  que  solo.se  emplea  en  hacer  e\  casabe ^  tortas xk  5/4  delibra 


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¿efeso ,  OMS  é  mésm*  La  f mca-amarga  sia  la  necesaria  pñipaFai 
^OQ  f  haoe  el  ^ecto  de  un  venetto ,  ,7  para  estraerlo  se.  le  raifa 
•una  pequeña  tela  qiie  cubre  la  corteza,  se  reduce  á  liariaat4a  pulpa 
'de  la  raíz  frotándola  sobre  un  rallo  de  hoja  de  lata,  y  poni¿di>la* 
en  prensa  por  24  horas  en  unos  sacos  largos  y  elásticos,  hechos  de 
Tarillas  de  caña ,  conocidos  en  el  país  coa  el  nombre  de  sebucanes^ 
filtra  por  ellos  un  agua  que  es  el  líquido  venenoso.  Seguidamente 
|»asan  la  harina  por  un  manaren  tamiz  de  caña ,  y  hecho  eslo,  ya 
la  harma  está  en  disposición  de  ser  estendida  so^e  un  bvdare^ 
especie  de  platón  de  tkrra  aigOsCOQvexo^  bajo  del  cual  está  el  fu(^o. 
£n  pooos  instantes  se  cuece  la  torta,  y  caliente,  la  retiran  y  poüen 
iá  secar  al  soL  Lo  largo  de  esta  manipulación  es  causa  de  que  eL 
precio  sea  de  un  real  por  cuatro  tortas ,  una  de  las  cuales  es  mas 
•fue  suficiente  para  el  pan  de  una  persona.  A  la  entrada  ó  salida  de  - 
las  aguas ,  en  una  vara  cuadrada ,  suele  ordinariamente  sembrar^ae 
una  estaca ,  la<;aal  da  las  raizes  suGcienles  para  estraer  una  torta. 
En  una  íanegtda  pues  de  HO  varas  se  pueden  sacar  por  término 
medio  49.206  tortas,  dando  por  cada  dos  de  ellas  tres  matas.  Esta 
£atttidad  suministraría  el  pan  á  55  personas  en  un  año',  y  cada  una 
^gastaría  W  \¡2k  pesos  ó  46  francos  á  razpn  do  cuatro  tortas^por  un., 
real.  £1  cosechero  recibiría  un  producto  bruto  de  6^  pesos ,  y 
ademas  ,  puede  sacar  un  escelente  almidón  que  es  el  único  que  se 
consume  en  el  paisy  se  vende,  término  n^edio ,  á  un  real  Ja  lih^a. 
£n  una  fanegada  podría  sacar  400  que  le  darían  50  pesos  y  el  pro- 
ducto total  seria  entonces  de  659. 

Supongamos  que  2/4  O  de  la  poblacioii  se  siryan  de  yuca  por  pan ; 
iendríamos  pue$  207.029.460  tortas,  que  costarían  2.475.521  pe- 

/'sos,  y  ademas4.50S. 400  libraste  almidón,  que  producirían  55S. 550 
pesos.  Este  producto  lo  darían  5.9^0  fanegadas  á  las  cuales  se  les 
puede  aumentar  por  las  diferencias  de  terreno,  cultivo,  etc.,  tn454 ; 
serían  por  consiguiente  5.000  fanegadas  de  tierra  empleadas  en  esta 
sola  planta.  ^  ^  ' 

Las  papas  (solanum  tuberosum )  es  uno  de  los  vegetales  emi- 
aentemente  útiles  al  hombre,  que  la  América  ha  dado  al  viejo 
mundo.  Cuál  fuese  su  pais  originario,  ha  sido  cuestión  largo  tiempo 
agitada  y  sobre  la  cual  el  barón  de  Humboldt  no  pudo  pronunciar, 
porque  en  ninguna  pATte,  en  sus  viajes,  habia  encontrado  las  papas 
silvestres.  Sin  embargo ,  hace  pocos  años  que  la  cuestión  ha  sido 

r  resuena  por  el  envío  de  unos  tubérculos  á  la  Sociedad  de  Agricífl- 


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—  432  - 


tura  de  Londres,  de  una  forma  redonda,  prodecentes  de  ana  loca-^ 
lidad  de  Ja  república  de  Chiie»  en  donde  eran  abnndantfsimos ,  y 
qne  cultivados  han  dado  otros  tubérculos  en  todo  semejantes  á  lo^ 
'  qve  se  producen  en  Europa.  Posteriormente  el  seüor  Bertero ,  via- 
jero tan  intrépido  como  insíraido,  ha  encontrado  en  abundancia 
las  papas  silvestres  en  varios  parajes  de  Chile  y  principalmente  en 
las  cercanías  de  Quíllota.  Las  papas  se  cultivan  en  ios  terrenos  cer- 
ca ,^e!  lago  de  Valencia ,  tan  solam^ente  á  la  altura  de  550  varas  en 
una  teip^)cratora  media  de  25<^.  En  la  serranía  costanera  á  i  .200 
varas,  temperatura  media  2P,  se  dan  mui  hermosas  y  se  recogen 
á  les  4  i/2  meses.  En  el  ramal  de  los  Andes  que  pasa  por  Mérida, 
^crece  vigorosamente  desde  4.200  hasta  5.000  varas  sobre  el  nivel 
dd  mar,  en  una  temperatura  media  de  45®,  y  necesita  para  produ- 
cir, de  6  á  7  meses,  y  á  2.200  varas,  en  una  temperatura  media  de 
-1 8*  50  ,  solo  5  ^  /2  meses. 

Este  tubérculo  requiere  un  terreno  silíceo  y  abundante  en  bu- 
mus  para  mejor  prosperar  :  no  le  convienen  los  de  arcilla  dema- 
jiado  compacta  ni  de  calcáreo  puro :  el  terreno  mas  conveniente 
es.  aquel  que  está  compuesto  de  arena  y  tierra  vegetal,  en  propor- 
siones'>tafes,  que  la  humedad  uo  forme  jamas  un  terreno  con  lodo 
ni  pegajoso. 

Si  se  compara  el  producto  que  da  esta  planta  en  las  provincias 
de^  Mérita  y  Trujillo  con  las  de  Barquisimeto ,  Carabobo  y  Caracas, 
y  se  toma  un  término  medio,  se  puede  asegurar  que  una  fanegada 
produce  :24.000  libras  de  papas  que  es  el  doble  de  lo  que  dan  en 
Francia ,  y  ese  terreno  suministraría  durante  un  año  el  pan  á  cerca 
de  44  personas  ^  á  razón  de  5  libjras  diarias ,  y  le  vendría  costando 
medio  real  al  dia  ó  23  pesos  al  año,  lo  quedaría  un  producto-anual . 
de  4 .000  pQ^os  aUcosechero,  habiendo  dos  cosechas  al  año.  En  una^ 
fénc^Qda  hai  4 1 6.600  plantas  que  dan ,  término  medio,  4  4/2  li- 
bras  cada»  una^  y  en  un  año  dos  cosechas.  Supongamos  que  If  I O  de 
la  p(n)lacion  se  sirva  de  es(a  raíz  como  pan,  á  fin  de  poder  compa. 
rar.mas  fácilmente  el  consumo  que  se  hace  de  ella  en  el  pais,  en 
cjase  de  verdura,  y  tendríamos  405,428.000  libras  que  darían  un 
valor  de  2,474.282  pesos.  Este  producto  se  conseguiría  en  un.es^ 
pació  de  2.4  48  fanegadas,  á  las  cuales  se  pueden  agregar  por  dife- 
rencia d«  terrenos,  etc.,  85^ ;  resultarían  5060  fanegadas  emplea- 
da§  en  este  cultivo ;  y  cioi lamente  el  cálculo  no  es  exagerado  si  se 
considera  el  consumo  que  se  hace  en -el  país.  En  Euripa,  y  fx^í**- 


I 


—  Í55.  — 


sai&ente  en  la  Alsacia,  en  una  temperatara  media  de  1 8^  2,  se  ¿üen- 
tan  ^66  días  del  tiempo  de  la  siembra  al  de  la  cosecha  de  la  papa. 
En  B«golá  200  días,  temperatura  media  -14®  7  ,  á'nna  altara  de 
5,460  Taras.  En  Pinatura  cerca  de  Quilo  275  dias,  en  una  tempe^ 
rainra  medía  de  4  í°.  ;     ' 

Este  es  el  lugar  de  mencionar  otras  raizes  que  están  cultivadas 
en  toda  la  república  y  que  también  se  encuentran  silvestres  en  las 
montabas  vírgenes^  que  ocupan  todavía  mas  de  la  mitad  del  terri- 
torio. Y  son  :  los  ñames,  que  crecen  hasta  tener  mas  de  un  pié  de 
diámetro  ;  en  terreno  igual  dan  mucho  mas  producto  que  las  pa- 
pas, tanta  sustancia  nutritiva  como  ellas  y  sirven  en  el  país  como 
e.<^celente  verdura.^los  apios ,  que  se  usan  del  mismo  m^o ,  son 
tan  apreciables  eomb  las  papas,  y  producen  en  igual  y  mayor  can- 
tidad. Los  mapneyes  y  capachos  son  raizes  qtie  podrían  hacer  el 
mismo  o^io  del  pan  ;  pero  de  ellos  se  hace  el  uso  que  de  los  ña- 
mes ;  y  úmo^roente  las  batatas  de  la  forma  de  las  papas,  harinosas 
como  ellas,  pero  de  un  gusto  mas  agradable  y  verdaderamente  dul- 
ce. Todas  estas  raizes  útilísimas  para  el  hombre,  que  sirven  de  pan 
y  de  legumbres ,  podrán  aun  ocupar  en  toda  la  jeQÚblica  una  es- 
tension  de  4.650  fnnegadas  y  su  valor  bien  se  puede  calculür ,  á 
razón  de  200  pesos  cada  una,  en  950.000  pesos.  #  ^ 

El  coco  ( lodoicea  cocus  mueifera) ,  planta  indígena  y  que  por  ' 
sus  inmensos  productos  ha  sido  reducida  al  estado  de  cultivo,  ha- 
biendo plantaciones  considerables  de  esta  palma ,  en  las  provincias 
de  Gumaná  y  Maracaibo,  casi  al  niv^l  del  mar.  Crece,  sin  embargo, 
en  tina  altura  de  700  varas,  temperatura  media  de  27**  55  á  25**  56  ;  ^ 
pero  se  advierte  que  es  mucho  mas  frondoso  en  las  cercanías  del 
mar  que  en  el  interior  y  en  los  terrenos  elevados.  Para  sembrar  el 
coco  ^e  le  busca  bien  maduro,  y  se  le  cubre  cm  tierra  :  se  le  riega 
consftmtemente  y  a  los  tres  meses  nace :  de  lo  contrario,  está  sin 
brotar  hasta  ocho.  Cuatro  ó  cinco  meses  después  llega  á  la  al- 
tura de  -1/2  pié,  habiendo  echado  tres  6  cuatro  ramas  foliáceas. 
£1  mejor  tiempo  para  trasplantarlos  es  en  la  estación  lluviosa,  por- 
que  la  planta  recibe  la  nutrición  abundante  que  requiere.  Se  siém-r 
bra  á  la  distancia  de  8  varas  uno  de  otro,  poniéndolos  en  hoyos  ci- 
lindricos de  dos  pies  de  profundidad.  A  los  cuatro  años  florecen  y 
un  año  después  de  la  primera  flor  dan  fruto  y  siguen  dándolo  por 
60  ú  80  años,  creciendo  basta  la  altura  de  20  á  50  varas.  En  los 
terrenos  aefios  no  producen  sino  al  cabo  de  ^10  años,  pero  esto  es 


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raro/  A  )a  altara  de  700  varas,  eft  no»  teir^ieratiira  méán  dfe  28^ 
50«,  cía  i  los  6  año»;  este  crecimiento  rápido  es  tanto  mas  nttlable 
cuanto  ^oe  los  otros  árboles  de  palma,  go«do  el  moríche  y  el  somr 
b#ero  {mauritimfiexu^sa  y  cotipha  teotorum)^  cnyayidii  es  mmi 
largsr,  á  vezes  no  suben  5  ó  6  varas  en  60  años.  Cada  raeioio  da  por 
lo  regalar  ^  2-  cocos,  que  se  ifecogen  caatfo  4  cinco  vesses  al  afto ,  y 
sia  embacgo,  no  tddos  se  auidaraii,  padiéndose  calcular  50'  ntt^es 
pet  ano,  que  prodvcea  4  botellas  de  acdle  vendidas  cuando  menee, 
á  2?  reales  cadar  una.  Hai  en  la  co^  del  gcdfo  de  Cariaco  y  de  la  ^o** 
vincia  de  Maracaíbo  haciendas  de  muchos  miles  de  árHoles,  Una 
faasgada  eonJtendria  452  áil)oles  de  coco  que  dari«ri  un.  producto 
amial  de  4^2  pesos  con  mui  poco  costo.  £1  ápbc^de  coco  da  frut^ 
en  abu^dandar  haaia  que  I!)^a  á  los  50  ó  40  ai#B,  después  de  esta 
edad  el  producto  se  dismíuuye ,  y  un  tallo  de  casi  80 ,  auuque  da 
mui  poeo  producto,  no  está  del  todo  estérií.  Doscledesde  aceüe  se 
socan  de  él ;  uno  blanco  y  cristalino  y  otro  mas  oscuro,  EÍ  primero, 
se  obtiene  rallaado  e^  coco  fresco  y  estrayéftddle  la  leché  por  com- 
piesion ,  se  pone  esta  ea  a^a  y  se  cuece  :  dejásdola  asentar  du- 
rante una  ndche  pvodoee  un  aceite  bknco.  £1  otro  se  hace  sacando 
el  agua  éek  ooco  y  dejándolo  puddr,  \o  que  sucede  en  tres  4  ouateo 
di^ ;  entóneos  se  recoge  la  médula  oleosa  y  se  pone  e&  paibis<al  sol, 
éslraiydndo  el  aceite  que  sube,  el  cual  puesto  al  fuego  queda  pat:^-* 
ficado  y  encestado,  d^  venderse.  Del. mismo  aceite  se  hace  escelente 
jaboU)  y  es  de  esperaisse  que  pronto,  se  descubra  el  modo»  con  que 
en<  Inglaterra  endurece  el  aceita  de)  coco,  en  términos  de  hacer 
4elas  mas  duras  que  las  de  sebo  y  esperma ,  cuya  lu£  es  tan  bdla 
quo  sobrepeja  á  la  de  es^s.  El  Sdlor  Boussingault  dice,  q^  es  muí 
ptobable  que  no  s^  el  aoeite  el  que  se  midurece  dkétftamente,  si* 
no  el  a^ile  benefteiaA»  reducido  prim^ty  á  jabón  y  detraes  estf'ai^ 
dos  lod  ácidos  grasos  como  eV  ácido  estéríco  qwt  entra  en  ía  codito* 
si£jon  de  casi  todas  las  materias  grasas.  Ea  ef  dia  es  empleado  este 
ácido  para  fabriearlas  bugías  que  sostíiuyeii  eoii  ventaja  á  las  velas 
de  esperma  y  de  oera^  Las  velas  pcepasadas  con.  este  ácido  estérieOí 
soa^:^ni  fr^iiesy  traspareates  :  paoarenfiediar  este  iucoBveaieñte, 
se  le  aiMe  como  nao  ó  doe  por  cienlo  de-  verdadera  erara.  La  pre«> 
parncioB  de  estos  ácidos  grasos  es  euiel  dia  objeto  de  unajabrica» 
cto  initfensá  eB>fittropa»    ^ 

Sstá  probado  qde  una  hacienda  de  coco  da  actualmente  mas  pro- 
d««to  eu  Cuvdaná  j  Maracaib»  que  una.de  igual  OBtenMOu  de  oa«f 


f 

1^^  y  con  ki  (^idmifare  de  tener  siempre  buen^  cosecha  :$mtrah 
tejO)  pues  los  cocales  de  una  hacienda  dan  todo  el  ano  frntos  eo  es^  ^ 
tsfdode  ser  recogidos ;  beneficiados,  no  solo  sirven  para  el  consumo 
ée  la  pd>laoiiHi  sino  que  se  hace  ésportadon  al  estranjero,  de  mas 
de  5$.000,pe6os ,  según  consta  de  la  Memoria  del  presente  año  y 
del  ministio  de  Hacienda.  Si  graduamos  que  en  toda  la  jpepüblica 
baf a  5^.000  familias  que  usan  de  este  aceite  á  razón  de  tres  bo*^ 
teiias  al  mes,  bariaii  4,260.000  al  año,  cuyo  producto  seria  de 
345.000-pesos ,  que  unido  á  55«000  de  esportacion  haría  un  total 
de  3^.opO¿J^ste  yalor  (^responde  á  4,400.000  botellas  de  aceito 
que  seria  la  cosecha  general,  la  cual  se  produciría  en  99b  fanega» 
das  de  tierra,  a  las^.que  se  deben  aumentar  por  árboles  mui  viejos 
ú  otro^que  aun  no  producen  305  fanegadas,  y  entonces  tendría*- 
mos  un  total  de  4.300  empleadas  en  este  cultivo. 

£1  tabaco  (nicotiana  tabacum),  planta  que  los  españole»^  e^oon* 
toron  ea  k  pminci»  de  Tabasco,  cerca  de  Yucatán.  Heroandií  ; 
Toledo  fué  el  primero  que  la  envió  á  la  Península,  y  su  cultivo 
pasó  luego  á  Santo  Domingo,  á  las  demás  Antij|las  y  á  los  paises  del 
Borle ;  en  fin  llegó  á  eonoe^^  en  toda  la  Europa.  En  1777,  por 
oédula  de  94  de  junio,  Carlos  111  mandó  establecer  el  estanco  en  Iff 
provincia  de  Venezuela  ;  pero  tan  solo  en  abril  de  \  779  quedó  iss*  ^ 
iablecido  en  forman  Fué  en  \  T84  que  el  químico  español  Pedro  Verás» 
tegui,  recorri^do  el  occidente ,  observó  el  uso  que  hacian  de  los 
ambires^  perfeccionó  su  ekiboracion  y  enseñó  á  mezclar  el  uroo  de 
k^lagona  de  Mérída  y  á  aprovechar  el  tabaco  inútil.  En  2  de  agosto 
del  mismo  año  quedaron  comprendidos  ea  el  sistema  del  estanco 
el'  mo  el  chimó'  y  el  nrao.  Por  los  estados  comparativos ,  desde 
Vt^\  hasta-ISOf,  resulta  que  un  año  con  otro,  la  renta  habia 
prodoádo  mas  de  medio  mülon  de  pesos  líquidos.  Después  de  esta 
época  empeló  la  revolución,  y  en  ^guida  las  convulsiones  polílicae 
que  cierlameste  no  hacían  prosperar  la  renée.  En  el  decenio  dé 
•M2I  á  4^31  dio  á  razón  de  474.570  pesos  de  producto  líquido. 
£1  Congreso  de  4SS2  abolió  el  estanco. 

Según  la  Ittemoria  del  miBistro^de,Hacienda ,  de  4840,  se  \m 
esportado  fuera'  del  territorio  en  tabaco,  un  cagllal  ^e  mas  dn  ^    • 

dTOO  pesos  en  la  cantitad  de  J  .269  quintales,  que  viene  á  estar 
á  razón  de  4  9  pesos  la  aiyoba ;  todo  este  tabaco  es  de  la  provin* 
eia-  de  Barínas,  pues  el  de  las  ^emas  se  consume  en  el  pais. 
\  Esta  planta  ne$e«ita; '  para  su  cultivo  una  tierra  grasa  y  hú'^ 


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zo«la  faé  éh  40H  iS  «úntales :  en  4  805  «iháó  á  2SiiMl ,  f  al«te 
siguiente  de  -1 804  solo  «dcanzó  á  ^.565 ,  proviniendo  eeU»  rápidan 
wíaciones  de  Ift  mayor  ó  vmoor  demanda  del  írntiB«  El  ano  dé 
4^859',  aegun  la  memoria  del  minislro  de  Hacienda ,  teé  de  27.dOfl 
quintales,  qoa  daban  un  valor  de  2d4J28  pesos,  q»e  ^me  i  scs 
á«  razón  de  casi  H  O  ^/2.el  qaintaU  A  la  esportanion  se  le  pnede  an*» 
mentar  para  el  oonsnmo  del  pais ,  para  alnmhrarse ,  4  libras  pot 
familia  al  año  ;  qne  serian  5.000  quintales.  Ademas,  por  ks  hn»» 
macas ,  lienzos ,  eord<me|^  ele.  se  puede  graduar  para  una  cuarta  % 
pacte  de  la  peblaoion ,  deducidos  los  indios  47.007  quintales ,  que 
baránuB  total  de  50.000^  los  cuales  puesloyá  10  ij2  pesos  dacias 
nn  valor  de  Sfi5.000.  Este  proéuclo  se  snearia  de  4-.#00  fanegadas,, 
y  si  se  pene  igual  esleusíon.  deierreno  por  los  que  son  mal  cultiva^ 
dos  ó  por  los  que  hayan  per^do  sus  cosechas ,  se  tendean  2U)00  fii«< 
negadas  empleadas  en  la  pianta  del  algodón.  I^as  grandes  ptonta^ 
dones  de  este  fruáo  eséán  ealoe  Valles  de  Aragua  en:las  orillas  deb 
Lago  de  Valencia ,  sobre  el  ünaie,  en  el^olfo  de  Gariacoiy  en  M»» 
raeaibo,  á  pesar  4fe  que  se  oulttra  en  todaJarepUblica ,  con  mas  ó;  { 
astees  abmidaBda. 

Deade  el  niveldel  mar  hasta  la- altura  de  4 .572  varas  en  Seoon£ 
de  TmjtllO',  en  una  temperatura  media  de  49o  25,  se  da  el  algo^ 
don',  pero  necesita  9  meses  para  producir.  En  la  temperatura  me^ 
dia  de  27o 52 al  nifel  del  mar^  da  á  los  6  4/2  meses  :  á  700  varas 
en  una  temperatura  media  de  25"*  56  necesita  7  meses ,  y  7  4/2  ¿ 
14 96.  varas  de  altara  en  una  temperatura  media  de  22""  56.  ün» 
fimegadapuede  producir  por  término  medio,50  quintales,  q«e  da^ 
niip  OD: producto  brntode 525  pesos. 

Enumerados  k»  planeas  americanas  que  se  cultivan  con  buew 
éxito  en  el  pais ,  es  tiempo  de  dar  á  conocer  las  que  so  han  traid» 
de  otRoslugares-,  y  que  aclimatadas  en  Yenesuela  hacen  una  part9 
interesante  de  su  agrícultam;  El  café ,  lindo  aii)us(o  de  la  fami^i» 
de  las  rubiáceas  (eaffea  ambieaj.  En  46i9  fué-  intreducidt)  en 
Francia :  una  libra  en  grano  tostado  costaba  4  20  francos.  Esta  planltf 
M  llevada  en  4  727  á  Santo  Domingo ,  p^veníente  de  Martinica. 
Eff474l^  había  algunas  pocas  plantas  sin  mayor  culüfo,  no  se  sabe 
«•venidas  de  Cayena ,  Martinica  ó  Santo  Domingo.  De  esta  época 
i  i 4 760  filé  UMit  poeo  el  aumento  qne  recibió.  En  4784  D.  José  An** 

fonio  l^lobedano,  cura  de  Ghacao^;  después  obiepo  de  Oeayana, 
concibió  el  proyecto  de  un  establecimienio  formal,  y  habimidb 


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j^IbMoí  9i.M^ ^  qu»  reeofl^  <n^  vw«a  k««9ta«,  se  perdió b 
iiutyo$.par4e.  Parw^clwyiagc  samiUeves  segna  elmitoda  de  las  Án- 
tiihs  y  togr¿  dákOdO-  pie»  «a  el  m^r  esUdo!i40  1««bu[«i>9  ^T^  ^^ 
toda.  sig!Íie9»tt  al  HMsaio  tíenpio  E^.  Bártotomé  Blanfe  y  el:  presbi*- 
ttíto-Sy*  PedsaSej».  Gift  ^  qtMiqwnlb  de  i78$.á  ^7dd  se  sacaren 
paia  el  pneplo  de.  lar  Guaira  955;  (foiiilato^  86  libras,  y  en  el  de 
«ITM»  479^8eesA^j^roD^6.94)d>qaiaMes.'i2  bim  GomeiUMH 
rqiB  las  plaaiacieiie»  %a  i79é  e»  loe vallies  de  idragua  y  e»  el  nusmo 
aile  1*  esforiaeíim  tetal  de  Veoesuda  fué  solemeDte  de  4.849» 
quiíiMes  2i  Htoas»  y  eiir  4^8  de  61). 7-4 5  enlátales  55.  libras  y  se: 
raeogiereiii  iOO^OOOt  en  todeVenezeela.  iidiisimeiiáese  hen  eq^or» 
tadPy  segott^  k*  memoria  de  i84a>  d^  mieisún»  de  Haeiepde, 
248«8i65  quinUiles^  qpie  dao  uii  Talos  de  2,255.959  pesos  que  equi- 
vale á  cerca  de  45  peses  el  qjweiek  Si  adnítímos  qae  una  sesta. 
parte  de  la  población ,  -^no  comprendidos  los  ÍDdi§eBaft  salyíqes , 
conrame  á  raae»  de  2i  libras^  ftensueles  per  persona.,  daria  un^'' 
pfodueto  de^55.704  quíntales,  que  unidos  á  la. esportaeioii  ofrece» 
^iao  para  la  cosecha  general  de  1»  repúMiea»  2^4,567  ,  que  repre- 
8«itaft  uea  eanlidad  de5^59íK57f  pesds  produieidos  per  li6,97^  .4  53 
ivboles  frutalestde  café.  Oeopau.efltes  51.20-2  fanegadas,  y  si  se  le 
aumeotaii^^  los  cafeialas  vMje6^^  iiusespletes  é-  impradectivos 
4998,  habría  en  ettltivo  5.009  teagadas  de  tierra.  Las  mas  gran* 
das  p1an|adeiieft  están  en  los  railes  4e  Acagna ,  Tui ,  PBrgua ,  N»* 
gutra,  TruííHo  y  Barínae,  aunque  genectlmeiile  se  cultiva  en  todos. 
loa  pamg<A  irigo  elevados  de  la  rapufaéica  y  tanbien  en  lesearos  de 
lai  costa ,  en  donde  se  pensaba  que  ta  ataídsfeiu  marítimai  le  era.^ 
perjoí^ial.  S«Mmüe  iAfariorseencaentiraá  2S^  ^arasea  Ocumaie; 
eu  donde  la  teoiperalwe  medi»  es  de  26"*  44 ,  y  se  ete?»  basta. 
%M^-  ten^peralura  media»  2i  ^ ,  ^nque-  puede  darse  lia8l#'2.725 ,. 
en-  una  temparatoa  macUa  de  48  <"  50w  BU  «na  fanegada  se  planlmi 
5^50^^  áiMbs :  Imh  áe  estoe  adultos  que  dan  de  4  6  a  20  libras ;  sin 
embarga,  genenainuBte  solé  predtteen»4  4 /2  ó  2^  ó  5  libras ;  paro  to-> 
mando  por  témúnamedio^'t  4/2:tibrapor  ár^ol,  pnodaicíríe  70(lttin* 
taies  onye  Talor  á  45>pe60B  serie  de  9éO;  A. los  5  aítosse  coge  abun* 
dente  coseche  y  dmttila  planteeien  eorcftde  59.  Desde  octubre  hasQi  ,^ 
dioíend>itt,  segnn.  los  kiSBraa  mas  é  ménae  cálidos,  se  empieza  á  re»  ^ 
eejer  el  grano  del  caíé,  y  oadu-ceseoba  se  hace  en  tres  tlanapós  por- 
quelko.  todos  lea  gamae  se  maduran  i  la  yes.*  Esta  árbol' no  florece 
haeta  los^dbaañoa  j  sq  iae  aeloisoiisíste  24  faotas*  Las.  Uiwias  que 


ft 


•  r 


F-  * 


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-*  410  — 

caéoi  al  tiempo  dé  la  eflorescencia ,  la  falta  de  agua  por  los  riegos 
artificiales  en  los  terrenos  J^iíjoS)  y  una  planta  parásita,  nueva  es- 
pecie de  coranthus  qiiig  se  fija  en  las  ramas ,  daña  mucho  al  árbol 
del  café.  Esta  planta  pide  (for  predilección  una  tierra  nueva  un  poco 
elevada ,  en  donde  la  frescura  y  las  lluvias  templen  el  calor  esce- 
síyo  de  la  zqq^  tórrida ,  á  cuya.accion  resiste  poco.  En  los  valles  de 
tierra  caliente  se  ponen  las  erytrinas  ó  búcares^ara  dar  sombra  á 
las  plantaci^iies ,  y  tan  solo  en  los  cerros  elevados  no  se  hace  uso 
de  la  sombra.  No  le  convienen  absolutamente  las  tierras  de  una  ar- 
cilla dura  ó  las  arenosas  y  lijeras  ;  sobre^na  cama  de  marga  , 
líerrarblanquecina  y  gredosa ,  se  observa  que  la  planta  crece  lo* 
zana , «aprovechando  el  poao  terreno  úiil  que  tiene  al  rededor,  pero 
tan  luego  como  quiere  estender  sus  raizas,  encuentra  estorbo  por 
lo  compacto  de  la  tierra  y  se  muere  á  vezes  antes  de  dar  las  primeras 
cosechas  ó  después  de  estas. 
Gaña  de  azúcar  fsacharum  officinale)  Las  primeras  cañas  que 

>  llegaron  al  Nuevo-Mundo  vinieron  de  las  islas  Canarias  y  á  estas  se 
«nviaron  de  la  Sirilia  que  las  había  adquirido  de  la  India.  Esta  es 
la  antigua  caña  que  se  conoce  en  Venezuela  con  el  nombre  de 
criolla.  Sus  hojas  son  de  un  verde  oscuro ,  su  vastago  mas  delgado 
y  mas  abundantes  los  nudos.  Hai  otra  clase  que  es  la  cai&  de  Ota- 
hiti,  de  un  verde  mas  claro  su  vastago ,  mas  grueso ,  alto  y  suca¿ 
lento  ,  y  toda  la  planta  anuncia  una  vegetación  mas  lujop.  Esta 
caña  se  debe  á  los  viajes  de  Bougajnville ,  Cook  y  Bligh  :  el  primero 
la  introdujo  en  la  isla  dé  Francia  de  donde  pasó  á  Cayena,  á  la  Mar* 
tínica ,  y  desde  \  792  al.  resto  de  las  AnUlias.  De  la  ish  de  Trinidad 
pasójá  Caracas  y  de  allí  á  Cuenta  y  á  S.  Gil  en  la  Nueva  Granad^g^ 
Se  ignora  que  haya  degenerado.  Tiene  la  ventaja  de  producir  una 
tercera  parte  de  azúcar  mas  que  la  criolla  y  de  dar  una  cosecha 
mui  considerable  diñante  40  años,  en  tierras  de  una  fertilidad  or- 
dínariá  y  por  t5  ó  -1 6  en  un  terreno  fértil,  méniras  4]ue  se  necesita 
volver  á  plantar  la  criolla  de  dos  en  dos  i^os,  en  un  terreno  roc« 
d^no  y  de  cinco  en  cincel  en  las  tierras  mejores ;  teniendo  ademas 
^^'^   '  *r     la  propiedad  de  acomodarse  á  varios  temperamentos  mucho  maa 

^^aijb  que  la  qriQlla.  Hái  una  tercera  especie;  la  caña  morada,  llamada 
caña  de  Batavia  ó  de  Guinea :  es  s^uramente  indígena  de  Java ,  en> 
donde  se  cultiva.  Sus  hojas  son  de  un  color  de  púrpura,  y  muí 
anchas;  la  prefieren  para  el  rom.  A  la  caña  no  le'convi^e  sinó^un 
clima  cálido ,  y  no  todos  los  terrenos  sirven  para  su  cultivo ,  tales 


f  ■ 

—  444  — 

son  los  demanádo  hámedos,  los  cerros  y  los  llai^os arenosos.  Neee-' 
sita  de  una  tierra  fértil ,  en  ya  capa  productiva  sea  y  cuando  piénOs^ 
de  un  pié  de  profnndidad.  También  se  necesita  qne  la  tierra  sea 
ÜTÍana  y  floja,  porque  las  tierras  gredosas  ó  arcillosas  en  qué^i- 
I(cil9iente  iltra  el  agua ,  no  dan  sino  cañas  mezquinas.  Por  prefe> 
reoda  requiere  un  terreno  graso  y  ceniciento  ;  esta  dob^  calftad 
da  mucho  asúcar  y  mui  biíeno.  Las  cañas  se  plantan  en  tablones  ó 
cuadros  de  á  -160  varas,  escogiendb  para  ello  la  época  en  que  se 
esperan  las  aguas.  Estase  observa  mas  particularmente  en  los  l)i* 
gares  en  que  no  hai  facilidad  para  el  Ti$go ,  y  en  donde  la  hai  se 

'  siembra-lodo  el  año,  eligiendo  d  tiempo  mas  fortuno  para  poder 
eensegutr  un  orden  progresivo  en  la  madurez  de  la  raism^ ,  á  éa* 
el  que  todo  el  año  se  pueda  moler  coa  provecho*  La  cañSl  se  planta 
.á  la  distMida  de  una  ó  dos  varas,  según  estén  pobres  ó  ritas  las     á 
tierras ,  pues  cuanto  iqgis  jugos  nutritivos  conserven,  tanto  mas  de-     ^ 
ben  estar  apartados  tos  cogollos  de  caña  que  se  siemlN'en.  Estos ,  á 
los  45  ¿«4  8  días  hacen  aparecer  nuevas  plantas  ^  qooá  los  4^  me- 

i  ses  ,  con  €0||a  diferencia ,  comienzan  á  florecer  y  dos  ó  tres  meses 
depiles^  háflan  en  perfecta  madurez.  Hai,  sin  eníbargo ,  lugares 
ef^qi^e  la  caña  se  corta  al  año  y  en  otros  á  lós  4  4'p-46  meses*  Al 
niyel  del^ar ,  temperatura  media  27®  52^  necesita  p&ra  estar  en 
madurez,  44  ipeses :  á  700  varas  temperatura  media  25*^  56  ,  42 
me^es  :  é'4 .2Q.0  temperatura  niedia  25*,  44  meses,  y  á  2.'4<)0  tem- 
peratura medía  4  9  * ,  4  6  meses.  El  grueso  y  aKUra  de  ht  asíM  va- 
rían considerablemente :  las  hai  que  tienen  de  alto  c««a  de  7  varas; 
p^o  por4o  general  son  de  4.  Tafibien  varia  mocho  la  mntidad  de 

.  azúcar  q^e  c^ntien^*;  estrayéndose  de  6  á  45  centésioias  partes  de 
su  peso.  Enguanto  á  la  altura  sobre  el  nivel  del  mar  se  reputa  el  ^ 
'mejor  terreno  entre  20  y  4 .209  varas ;  en  una  temperalvra  de  27-<» 
á  25''  centígrados.  A  la  altura  de  2.400  varas  hai  cañas ,  pero  no  se 
puede  estraer  de  ellas  azúcar.  La  duración  media  de  esta  planta, 
consilterados  los  diferentes  terrenos,  se  puede  graduar  de  cinco  años. 
El  producto  de  un  tal^Ion  de  40a^aras  en  cuadro ,  sé  calcula  por 
téniDíno  medio  eó  500  pesos;  sea  cf'ue  se  saque  aguardiente ,  ó  bien 

^papelón  ú  aaúcar.  En  una  fanegada»*  habrsi  como  tres  tablones ;  e& 
dedr^  un  producto  de  900  pesos  6  de  7.500  libras  de  azúcar.  Para 

.  sacar  el  cálculo  d^  lá-  covseeha  general  de  It  caña^  en  aguardiente  , 
azúcar  y  papelón ,  no  se  ha  de  hacer  uso  de  los  guarismos  que  pre- 
senta la  oontribueion  estraordinaria  sobre  la.caña'^  Aegu^^nte,, 


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^  9146 


la*poblaeitai  (%pe  seria ,  sui  contar  los  indios  «ali^|6S|  ée  i  48.7et 
{Morsoaas)  ooBsumieaedíariein^te  4  onzas  ée  a«&cir  ó^peton^  lo 
^u^formaria  la  cantidad  éd  Á20  libras  ai  aio  por  cada  inditidaou 
Para  fao(Hdaá4el  os^uk)  lo  red^otreoios  á  soto  4(^0  libras.  £8  ;piicb 
icUto  qWb  ^  aeoesitaria  una  carga  de  200  pam  dos  ipersonas  qm 
liaría  al  ano  por  lo  6  *  parte  de  la  población ,  74.S04  cargas/  que 
á  8  pesos  ,(éraÚBO  «oedio,  darían  ¡i^^M2,  pava  cn^o  tuIot  seiiui 
A  necesarios  0MS  de  4 .003  iablones  de  catta.  Sapougames  también  que 

«n  6  ^  de  la  .población  coiuyuma  mensval^aeate  4  botellas  de  aguar- 
diente por  iodi¥iduo ;  esto  baria  poco  m^s  de  7.4S8  «af^as  de  80 
•  J)Otells|S  ai  Mes«)qiie  al  ano  serian  80 .256  cargas  fue  á  8  péaos  darían 
'Qn  valor  de  7-14.048;  ^para  cuyo  {irodocto  se  aeeesltarian  2«580 
staUones.  Ademas  y  «e  ban  esportado  en  aguardionto  foera  del  paii, 
|)or  na  yalinr  de  65.074  pesos ,  qm  seda  e^prodoeto  do  otros  2i5 
tablones  ,  ó  7.875  cargas ;  lo  que  fcurmaria  nn  lolal  de  4 ,576.004 
pesos  que  se  sacarían  de  4 .586  tablones  sembrados  de  eaH^  en  toda 
ja  república.  Para  estos  serian  necesarias  4 .528  toiegadas  á  las  qnor 
se  debe  aiunentar  por  diferencia  de  terrenos ;  calles  etc.  072  mas 
quebarian  um  4otal  áe  2.500  fanegadas  empleadas  en  tablones  é¿ 
cana  de  artcar. 

El  aSil  (indigqffera  Uneibria)  fué  traído  á  Yenezoeia  en  4  777. 
B«  Antonio  Arvide^  á  iastanda  de-^).  Manuel  Clemente  ^  hi;so  ve^ 
BÍr  de  üuaiáiíalala  semilla  del  Índigo,  y  tambi^  p.  Pablo  Orreor 
dKm,  -sugeto  do  grandes  eonocimientos  on  esta  clase  de  agriettltora. 
Se  realizó  el  primer  establecim^Dla.en  la  jwrisdicoion4e  la  Yic« 
leria;  pqro  no  bidiiondo  tenido  la  emipresa  eli^ito  f<ie%e  espera-  , 
-  ba  y  ira^adtenoa  la  plantación  á  los  sitios  de  Gúei  y  Tapat«^ ,  gsl 
la  jurisdierion  de  Maracai ,  ámáe  la^cn  colmados  sus  deseos ,  y 
de  donde  «e  envió  la  semiüa  á  las  demás  provincias.,  de  modo  quo 
desde  el  a£k>  do  ^  702  basta  el  de  4  708  no  bajé  la  esportadon  anual 
de  'este  género,  de  ttn  imUon  de  Mt^^s,  que  prodnráo  jin  total  do 
4  9200,000  pesos  fuertes.  S6igii|  la  memoria  del  minislro  de  Ha- 
cienda, del  presente  ano,  ee  encuentra  iaai  solo  una esf ortacíon 
de  4^,590  libras ,  de  un  valor '%  571,577  pesos ,  4ue  es  casi  la# 
flsítad  de  k>  que  se  recogía  anteriormente ,  sin  incluir  la  canti- 
«dad  que  puede  sMir  de  conlrabando.  Se  puede  calcular  quo  la  en- 
secba  geneml  de  Venezuda ,  uniendo  el  poco  eonsumo  que  se  hace 
pura  pt98  orAnarias,  es.de  Í6I0  Ubrt» ,  q«e  Jbwú|n  460,000«  A 


•^ 


* 


—  «luí  — 


..  1 0' vento  teritn  un  <v«Aor  die  CTTS^OO  p««08  preineidos  por  S7B  <1W- 
negá^to,  á-lasemiles^  lespUMle  aumestar  iffaal  número  por  lo 
que  te  piqrde,  laque  hark  por tcdo-^ete  arlíettlo  >\  ,4  50  fanegadas. 
La.  planta  éel  añil  mas  qoe  oda  al^na  enpobrece  el  snelo  donde 
se  QültíTa  por  mochos  al&os.  Las  tierra»  de  M araoai ,  Tapatapa  t 
Tnrmero  se  consideran  oomo  gastadas,  y  no>es  del  todo  así :  bai 
algunos  pnotos  qne  1q  están  ;  pero  la  sansa  de  la  din^nniñon  de- 
aüil  es  popqne  el  agricultor  se  aplka  con  mejor  éiito  ,  y  mas  prt>- 
baJoiUdades  al  cultivo  de  la  eafia  y  del  calé.  Sin  embargo,  no  fal- 
'  Jan  grandes  espacios  cubiertos  de  añil  en  Tnrmero  y  Waracai  : 
campos  estensos  se  «ocuentran  en  S.  Sebasti^  de  los  Reyes ,  en  la 
prottncm  de  Barínas  y  algunos  otros  pantos  de  la%  de  Caracas  y 
Carabobo.  Esta  planta  requiere  una  tierra  Itjera  y  un  clima  cálido, 
el  twreno  limpio  y  bien  eseorrido ;  gprque  la  humedad  que  favo^ 
"rece  á  otros  plantas  hace  perecer  el  aniL  Si  se  pudiase  culti?ar  en 
lugares  llanos  y  estendidos  qUe  estuviesen  al  abrigo  de  la  serranía, 
garantisados  á  la  vez  de  los  vienifss  demasiado  fuertes  y  del  dama-^ 
siado  ardpr  dalwl,  se  enoonUraria  la  {^antaen  la  posicton  mas  fa- 
wrable  á  so  naturaleza. 

En  un  tmrreno  fuerte  sufre  por  la  frecoenoia  de  las  Iluviap,  y  sus 
bojas  aunque  mejor  nutridas  en  apariencia,  mas  anchas  y  ma%. 
negras ,  coatienen  sin  emhargo ,  relativamente  á  su  volumen  y  ta* 
milío^  mqpha  menor  pjnrtp  colorante. 

En  un  terreno  mediocramente  lijero  necesita  de  ^as  ri^o  esta 
planta;  parece  lener  menos  fuerza ,  pero  su  yerba  da  prqporcional- 
flttote  mas  fécula.  No  convienen  al  aüil  los  terrenos  que  están  en 
declive.  Se  cultiva  en  gran  cantidad  y  con  buen  éxito,  siempre 
que  la  estación  sea  pro]»cia  y  áe^e  100  varas  sotare  el  nivel  d^ 
mar,  en  una  temperatura  media  de  25<>  50  hasta  7^0  yaras ,  en 
«na  de  25^  56 ;  en  la  primeVa  necenta  dos  meses  y  en  la  segunda 
tres  p«ra  estar  en  estado  de  ser  contado.  En  pequeüos  plantíos  K>  h^ 
vialo  á  la  aUora  de  •!  ,496  á  una  t^mperaturfi  de  22«  S,  pero  necesita 
tres  meses  y  medio  para  estar  en  sn  perfección,  áfun  á  4 ,800  varafth 
se  encuentra  en  ciertos  poicos  de  la  {{rovincia  de  Mérida ,  en  un 
estado' inculto  y  silvestre  ;  pero  parece  que  no  sirve  para  estraer 
>  unta.  ^ 

El  af&il  de  Caracas  está  reputado  on  los  mercados  europeosigual, 
y  á  vexes  superior  al  de  Guatemala.  Se  planta  cemun^iente  á  5  pul- 
gadas de  profuiifiidad  y  á  72  pies  de  disttmcia  en  buen  terreno , 


•" 


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—  Í44*  — 


pero  ú  este  es  de  calidad  iuferíor,  iiO  palglkdas.  Es  inútil  sembraf  ^ 
campos  de  añil  ¿  no  ser  qae  llueva  :  la  tierra  debe  haber  recibido 
agua  ó  si  no  la  lluvia  debe  seguirse  inmediataoiente  después  de  la 
siembra,  j^ués  de  otra  suerte  la  simiente  se  calienta  y  pudre  ^  per* 
'diéndose  todo  el  trabajo  que  ha  ocasioi^do.  Al  cabo  de  tres  meses 
el^oil  está  en  estado  de  cortarse  á  una  pulgada  de  tierra.  £1  cor- 
tarlo ^s  arriba  retardarla  los  pimpollos  del  segando  corte  ó  ioh- 
pediría  su  crecimiento  completamente.  En  cuanto  á  la  cosecha  no 
es  como  las  otras  plantas  .que  se^pera  la  flor  ó  el  fruto ;  en  el  añil^ 
lo  que  constituye  el  objeto  del  cultivo  >  es  la  hoja ,  que  contiene, 
las  partes  colorantes  que  se  deben  estraer  por.  medio  de  la  fermea*  * 
tacióñ.  Es  ne^sario  pues  escoger  la  ^^a  eii  que  tiene  mas  de  es- 
taS;  y  parece  que  ha  de  ser  al  tiempo  de  florecer :  mas  tarde  darla 
muí*  poco  aBil.  Por  «1  color  vivo  y  oscuro  que  tienen  las  hojas  y 
!^  viso  blanqueáno  como  terciopelo  que  las  cubre  y  conoce  el  agri«* 

cultor  laf  época  en  que  debe  cortar.  Aseguraf.que  si  en  este  estado 
cae  un  fuerte  aguacero  al  ftñily  las  hojas  pierden  el  viso  blanque- 
cino y  la  llanta  da  entone^  mui  poca  materia  colMante.  Ordina- 
riamente soempieza  á  cortar  cuando  aparecen  las  primeras  flores, 
f     Se  co^a  por  segunda  vez  ^  los  45  ó  55  dias^  seguida  de  otra  ó  mas, 

*  Jbasta  que  Ja  planta  degenera ;  es  decir,  en  las  tierras  buenas  hasta 
el  in  del  segundo  año ,  en  las  mediocres  al  fin  del  primero.  La 
planta  después  de  cortada  d«be  Hevarse  in||ediatament€^á  los  ^on- 
^He$  para  la  í^brlcaciq^  del  añil.  La  primera  fermentación  se  hace 
prdinariaQiente  entre  5  j  ^  2  horas  á  lo  sumo ,  y  al  cabo  de  otras 
48^e  pasa  al  segundo  tanque  en  donde  se^bate  de  6  á  8  horas  ^^y  •. 
enióncis  se  deja  aseirtar  cerca  de  20.  En  seguida  hacen  salir  el 
^u^,  quedando  en  el  fondo  el^il  que  sacan  y  lo  ponen  en  cola- 
dores de  Ueuxffpor  eierto  tiempo.  Después  le  pasan  i.  los  asolea- 

*  d^os ;  que  son  unas  tablas  largas  con  pequeños  bordes  y  en  ellas  se 
hace  la  c|jsecacion  al  aire  ,  impidiendo  que  se  mojé  ó  se  serene^ 

,  Una  fanegada  ppiede  pr^ucir  por  término  medio  800  libras,  que 
precio  de  10  reales  harían  4,000  pesos  pues  se  corta  dos  veses  al 
éño  ,  dafndo  así  dos  cosechal  que  comunmente  se  hacen  en  la  esta- 
cioo  lluviosa.  *«  ,  ^ 

^  El  trigo  [Triticum  cestivum).  Este  cercaban  necesario  en  EUf^ 
ropa  encuentra  en  Venezuela  i^^  mjoltitud  de  esplanadas ,  masetas 
y  valles  de  jrande  estension,  ^^fceptibles  de  su  cultivo^  mas 
como  casi  allí  mismo  hai  terrenos  adecuados  al  ^éj  á  la  caña  ^  al 


*« 


♦ 


-^  ^45  — 


diiil,  al  algodón, -aUplátafio,  al  maiz  y  á  una  porción  de  plantas 
que  sustituyen  el  pan^  ha  sido  la  causa  de  que  el  trigo  no  haya  to- 
mado un aomefito  considerable;  sin  embargo,  hai  cantones  enteros 
cuyo  único  pan  es  el  trigo,  tales  como  Mcrida ,  Mucuchíes ,  Egido , 
Bailadores,  Grita,  S.  Cristóbal,  Lobatera,  Trujillo,  Carache,  Boconó, 
Escuque;  Tocuyo  y  Quíbor.  h 

Vemos  también  en  los  valles  de  Aragua,  en  los  cantones  de  Tur- 
mero  y  la  VictoTia ,  campos  de  trigo  mezclados  con  las  plantaciones 
de  café,  caña  dulce  y  plátano.  Esto  también  se  ve  en  lostanlones 
del  Tocuyo,  Quíbor,  Escuque,  Boconó,  Carache  y  S.  Cristóbal. 
Dtesde  la  altura  de  650  varas,  en  una  temperatura  media  de  21°  50, 
hai  algunos  grandes  campos  de  este  cereal ;  pero  se  cultiva  con 
mas  abuiídancia  á  la  altura  de  2,000  á  2,800  en  una  temperatura 
media  de  ^8°  55.  Cesa  su  cultivo  á  5,500;  parece  que  no  se  da  ab- 
solutamente á  5,900  en  una  temperatura  media  de  9°  50.  Las  co- 
sechas no  son  tan  abundantes  desde  600  á  700  varas,  como  en  la 
región  mas  alta  hasta  cerca  de  2,800.  En  la  parte  baja  se  puede 
considerar  generalmente,  como  lo  estimó  el  sabio  Humboldt,  que 
upi^ fanegada  producia  cerca  de  la  Victoria  de  5,000  á  5,200  libras 
de  trigo  ,^siendo  este  producto  dos  vezes  mas  de  lo  que  dan  los  paí- 
ses del  norte ;  pero  en  las  partes  mas  elevadas ,  da  comunmente 
mas  un  55  por  ciento ,  y  sin  exageración  se  puede  calcular  por 
tévmino  medio  4,000  libras  por  fanegada.  Se  siembra  en  diciembre 
y  se  eoge  á  Jos  80  dias  á  700  varas  en  una  temperatura  media  de 
25o  50  :  á  los  100  dias  á  la  altura  de  1 ,500  varas  en  una  tempe- 
ratura media  dé  2\^  50  y  á  los  4  meses  á  la  altura  dé  1,800  v^ras 
en  una  temperatura  media  de  18o,53.  Una  fanegada  puede  sumi- 
nistrar el  pan  á  17  personas  durante  un  año  á  razón  de  240  libras 
cada  una ,  que  vendrían  á  costar  24  pesos  por  individuo ,  y  al  cul- 
tivador producirla  400  pesos.  Se  puede  calcular  que  el  trigo  que 
se  recoge  en  las  provincias  de  Mérida,  Trujillo,  Barquisimclo ,  y 
el  poco  de  los  valles  de  Aragua,  puede  servir  al  consumo  de  60,000 
almas,  le  que  daría  un  producto  de  144,000  quintales  ó  144,000 
sacos ,  que  á  1 0.  pesos  harían  4 ,440,000  pesos ,  y  este  seria  el  va- 
íor  de  la  cosecha  general  de  este  artículo ,  para  cuyo  producto  ne- 
cesita ocupar  una  ostensión  de  5,550  fanegadas  á  las  cuales  se  pue- 
den aumentar,  por  pérdidas,  malos  terrenos,  etc.  870  fanegadas 
mas,  lo  que  haría  un  total  de  4,400 ,  que  ocuparla  el  trigo. 

Aquí  es  el  lugar  do  hablar  también  de  la  cebada  que  se  da  esce* 

P.  6X0G«  10 


\ 


.« 


—  Í46  — 

tente  y  se  caltiya  hasta  5,400  varas  de  altara  en  una  temperatura 
medía  de  i  4^.  Con  bastante  abundancia  se  siembra  en  las  proyincias 
de  Mérída  y  Trujillo.  :.     . 

Debemos  también  hablar  de  los  diferentes  granos  y  menestras 
que  se  encuentran  cultivados  en  todas  partes  y  que  dan  un  pro- 
ducto tan  estraordinario,  que  se  prefiere  dar  de  comer  álos  peones 
de  las  haciendas  grandes  cantidades  de  estas  nutritivas  legumbres , 
en  lugar,  de  carne ,  aunque  esta  tiene  un  precio  equitativo  en  el 
mercado.  No  es  posible  dar  con  estension  un  artículo  detallado  so- 
bre cada  uno  en  particular  por  falta  de  datos  suficientes  ^  y  bastam 
decir  que  terrenos  enteros  que  podrian  estar  cubiertos  de  café , 
aijil ,  caña  ,  cacao  ó  algodón,  se  ven  tapizados  de  fríjoles ,  judías 
alverjas ,  tapiramos,  quinchonchos,  garbanzos^  lentejas,  chícharos, 
mijo,  arroz  sulii  y  anís ;  plantas  que  dan  un  producto  cuando  me- 
nos de  un  50  ,por  uno.  Sin  exageración  se  puede  graduar  que 
560,000  almas  de  toda  la  población  ccTnsumen  40,000  fanegas 
diarias  de  estos  granos ,  que  seria  á  razón  de  un  almud  ó  la  duodé- 
cima parte  de  una  fanega  para  50  personas.  En  un  mes  consumirían 
50,000  fanegas  que  subirían  á  560,000  en  un  año;  lo  que  saldría 
á  razón  de  una  fanega  por  persona,  cuyo  valor,  en  término  medio, 
se  puede  graduar  á  8  pesos  la  fanega ;  valor  total  de  2,6S0,000 
pesos.  ^.  • 

No  se  debe  pasar  en  silencio  la  auyama ,  mui  usada  como  verdu- 
ra, y  también  las  calabazas  y  frutas  como  melones  y  patillas  de  que 
seliace  gran  consumo.  Todas  estas  frutas  no  dejaráa^e  ocupar  una 
estension  de  2,000  fanegadas  aludido  á  que  una  gran  parte  de 
ellas  se  siembra 'en  medio  de  otras  plantas;  sin  embargo,  pondre- 
mos 5,000  fanegadas  cultivadas  para  estos  artículos.  Daremos  un 
valor  medio  del  producto  de  cada  fanegada  en  500  pesos  y  calcu- 
laremos solamente  sobre  las  2,000 ,  lo  que  sería  un  total  de 
-1,000,4)00  de  pesos  por  estas  diferentes  cosechas. 

Resulta  por  la  descripción  de  todas  las  plantas ,  que  debe  haber 
en  cultivo  en  la  república ,  J55,000  fanegadas  de  470  varas  por 
cada  lado,  y  como  se  debe  presumir  que  haya  una  cantidad  de  ter- 
renos recientemente  rozados ,  que  todavía  no  producen ,  otros  con 
plantas  que  necesitan  algunos  años  para  dar  fruto,  muchos  cultivos 
de  malojales  que  sirven  para  el  consumo  de  las  bestias;  y  última- 
mente j,  para  no  escasear  en  esta  clase  de  cálculo,  dónde  mas  que 
menos ,  se  le  pueden  aumentar  2&,700  que  harán  un  total  de 


9 


^447  — 


77,760  fanegadas,  que  hacen  precisamente  50  leguas  cuadcidas  dé 
6;666  4/5  varas,  iguaTes  á  las  de  20  al  grado  ecuatoríaL 

Los  terrenos  rozados^y  cultiyados  en  toda  la  república  son  500  le^ 
gnas  cuadradas  9  de  las  cuales  solo  una  décima  par  le  es  trabajada, 
por  la  generadon  presente  y  le  produce  lo  necesario  para  su  sub- 
sistencia ;  los  nueye  dédmos  desmoBtados  lo  habrían  sido  anterior^* 
mente  por  esta  misma  generaoieB  y  per  las  pasadas ;  yisi  tomamos 
tan  solamente  200  anos  desdé  que  empezaron  los  grandes  desmon^ 
tes,  tendríamos  que  un  año  con  otro  se  habrían  desmontado  y  aban-' 
donado  sucesivamente  dos  leguas  y  un  cuarto  por  ano.  Esto  no  es 
estraño  si  se  considera  qae  los  cultivadores  de  maíz  cambian  cada; 
dos  ó  tres  años  de  lugar  para  sus  siembras,  tanto  para  evitar  las 
escardas ,  cuanto  para  obtener  mayor  cosecha ,  pagándoles  con 
usura  los  gastos  del  desmonte  que  llaman  roza,  los  frutos  menores 
que  siembran  en  los  maizales.  También  hai  otra  causa  que  no  ha 
influido  poco  en  la  destrucción  de  los  bosques  vírgenes,  y  son  los 
fuegos  que  anualmente  sedan ,  sea  en  las  rozas  para  destruir  los 
árboles  tumbados ,  sea  á  las  sabanas  para  quemar  las  yerbas  viejas. 
Estos  fuegos  cuando  penetran  en  las  selvas  vecinas  hacen  iSmensos 
daños,  y  al  cabo  de  algún  tiempo  quedan  grandes  espacios  destruí- 
dos,  ó  solo  con  pequeiu)s  árboles  que  parecen  restos  de  terfenos 
desmontados. 

Para  dar  una  idea  comparativa  del  cultivo  venezolano ,  hemos 
formado  la-  siguiente  tabla ,  y  por  las  últimas  partidas  hemos  'gra- 
duado solamente  la  mitad  de  lo  que  se  feíbia  calculado  para  los 
apios  fríjoles ,  etc. ,  etc. ,  y  con  todo  tenemos  un  valor  de 
25,752^797  pesos  por  la  cosedui  de  4  8i9. 


.^ 


*\ 


TABLA  DEMOSTRATIVA  de  las  plantas  de  caltívo,  su  duración,  m  clima,  sus 

estas  en  1889,  e)  valor  correspondienteli  el  número 


NOMBHE 

de  Ut  plantas 
cnltiTadaa.  ' 


Cacao. 


Altnfli  «n  raras 
sobM 

el  QÍTel  del  mar 

eo  qáe 

prosperan. 


Niríl  del  mar. 
áess  Taras.... 


Plítaho... 


Haiz. 


lYüCA. 


Papas. 


Cocos. 


Tabaco  — 


Algodón.  . . 


Café. 


Ca»a 
di  azucab.. 


AÑIL 


Trigo. 


Nivel  del  mar. 
á  700 raras.... 
á  tl96 


Nivel  del  mar. 
á  4196  varas... ( 
de  UOO-k  2100^ 
ÍS900 


Nivel  del  mar. 
áll95 


á  S50  Taras... 

álí(K) 

¿2200 

áSOOO 


NItcI  del  mar. 
¿  TOO  raras . . . 


Nivel  del  mar. 
¿  700 varas... 
¿1196 

¿saoQ 

— T 

Nivel  del  mar. 
¿   700  raras... 

¿1196 

¿1573 


¿*9S5  raras... 

á  700 .... 

de  1196  ¿2500. 
«  S7s5 . . .  •  4«  . 


Kirel  del  mar. 
¿  700  raras... 
¿1300 


¿   100  raras... 

¿  700 

¿1196 


¿  6S0  raras... 

¿1300 

¿1800 


Temperatara    ^«Tiempo  medio 
inedia        | 

que  necesita 

la  planta 

para  producir. 


de  sos  limites 

por  el 

termónielro 

ceniigrad. 


27«». 

39. 

85». 

So. 

«7». 

32. 

45». 

56. 

aa*». 

56. 

97».  St. 
32*».  56. 
10»¿31o 

14<ȇl5o 


970.  32. 
22».  56. 


6  llStfios. 


9  meses. 

9  1/:i  meses. . 

11  meses. 


90  días. 
llOdias. 
120  días. 
180  días. 


104iieses. 
12  mese^. 


23».  89. 
2I<».  SO. 
*$•.  50. 
i&*,  00. 


120  días. 
láOdias. 
165  días. 
310  días. 


270.  52. 
*5*.  56. 


«7«.  32. 

25*».  56. 

22*».  56. 

18*».  80. 


2T».  52.    í 

28*».  86. 

22<».  56. 

19*»  23. 


26*».  11. 
25».  56. 
91'' ¿22o 
18*».  50. 


27».  52. 
25*».  56. 
95*».  00. 


27*». 

00. 

25*». 

56. 

22*». 

56. 

23*>.  50. 
21*».  50. 
18*».  S3. 


5  años. 

6  años. 


150  dias. 
170  dias. 
180  dias. 
225  dias. 


6  1/2  meses. 
7  meses. 

7  1/2  meses» 
9  meses. 


94  meses. 

95  meses. 
98  meses. 
36  meses. 


11  meses. 
19  meses. 
14  meses. 


2  1/2  meses. 
•  3  meses. 
8  1/2  meses. 

SOdias. 
lOOdías. 
120  días. 


,        -     I 

Número        I 

■ 

de  plantas  que 

caben 

en  una  fanegada 

de  170  varas 

eo  cuadro. 


f156¿rbote8. 


?613  plantas. 


98,00«.  plantas. 


98,900  plantas. 


t16,6ü0  plantas 


452  ¿rboles. 


88,900  plantas. 


..p*> 


28,900  plantas. 


SSOO^rboles. 


98,900  plantas. 


57,800  plantas. 


Tiempo  medio 

de  la  dnracion 

de  la  planta. 


40  añoa. 


60  años. 


Planta  anual. 


9  años. 


PUntaannal. 


60  años. 


Planta  anual. 


3  1/9  afitos. 


45  años. 


5  años. 


1  1/3  años. 


tí. 


Planta  anual. 


Prodoeto  atedio 

de 

cada  planta  en 

un  afto. 


1  1/4  libra 
por  ¿rbol. 


50  pl¿lan08 
por  planu. 


238  por  uno  de 
sembradura. 


Una  torta  de 

casabe  de  3/4 

libra  de  peso  y 

1/4  de  onza  de 

almidón. 


4  1/2  libras, 
cada  planta. 


4  botellas  de 
aceite. 


5  plantas  dan 
media  libra 
seco. 


6  plantas  dan 
una  libra  ne- 
ta. 


1  I/I  lib.  par 
¿rbol. 


10/1 00  partea  de 
azúcar  tomadas 
del  peso  de  la 
caña. 


72  plantas  por 
una  libra  de 
tinta. 


37  por  uno 
de  sembra- 
dura. 


Apios,  ñames,  mapoyes,  capachos  y  batatas  dulces  pueden  dar  un  producto  bruto  como  loa  antecedentes 
Fríjoles,  taptramos,  garbanzos,  alrerjas,  chícharos,  quinchoncboi,  cebada,  arroz,  anís,  mUo ,  «uyanuí, 


•  • 


prodactos^us  yalores,  número  de  plantas,  el  de  las  cosechas* y  la  cantidad  de 
defanegací|5  necesarias  para  estos  cultivos. 


¡■a 


Valor  medio 

de  los 

productos 

de  las 

plaolas. 


SI  pes.  la  fan. 
de  ISO  libraf. 


S  cargas  de  apO 
plátanos ;  una 
por  un  peso. 


Productos 
medios  en  frutos 

al  sño, 

de  una  fanegada 

de  170  varas 

en  cuadro. 


i6  Tanegadas 
6  1760  libras. 


9  pesos  la 
íanega. 


4  tortas  por  un 
real, }  el  almi- 
dón un  real  la 
Ubra. 


3  libras  por 
medio  real,  ó 
4S  libffts  por 
un  peso. 


t  r.  la  bot.  de 
aceite  6  4  de  es- 
tas por  un  peso 


48  pesos  el 
quinul. 


10  1/2  pesos 
el  quinlal. 


13  pesos  el 
quinul.  . 


8  pesos  la  car- 
ga de  dos  quin- 
Ules. 


10  reales  la  l^b. 


40peso8elsac9 
de  100  libras. 


160.550  plata, 
nos  6  803  carg. 
de  200  una. 


474  /anegas. 


19,206  tortas 

y  400  libras  de 

almidón. 


48,000  Ubuf. 


1808  botellas 
de  aceite. 


58  quintales 
6  5800  libras. 


KOquñttales. 


70  quintales. 


113  1/2  cargas 
de  puDolon ,  ó 
agudraiente  de 
9  quid  tales  una 


800  libras  de.      i<wmrM»«ft« 
lini»  1000  pesos 


Valor  medio 

de  los  productos 

de  «na  fanegada 

en  un  año, 

en  pesos. 


886  pesos. 


401  pesos. 


1422  pesos. 


Múacro 

de 

cbsecbas  medias 

^« 
cada  planta' 

en  un  año. 


Goseaba  general 
en  ÍS99,    ' 
en 
toda  la  república 


2  al  año. 


Todo  el  año. 


Dos  al  año. 


60{*  pe^os  de 
casabe  y  50 
del  aoaidon. 


1003  pesos. 


452  pesos, 


1044  pesos. 


525  pesos. 


910  pesos. 


Una  al  año. 


Dos  al  año. 


Todo  el  año. 


Una  al  año. 


11,778,031  li- 
bras. 


3,119,622  car- 
gas. 


Valoren  pesos 

de  la  cosecha 

general 

I 

al 
precio  medio. 


2^278,850. 


2,000,000  fa- 
negas. 


207,029,460  tor- 
tas de  casabe  y 
4,308,400  libras 
almidón. 


103,128,000  li- 
bras. 


1,400,000  bote- 
llas de  aceite. 


1,560,811/ 


6,000,000. 


Numero  de 
fanegadas  que 
pueden  estar 

empleadas 

estas  plantas. 


11,000. 


»,000. 


2,173,521. 
538,850. 


9,173,776. 


350,000. 


31,268  quin- 
tales. 


Una  al  año. 


Una  al  año. 


900  pesos. 


Unta. 


400  librl»; 


400  pesos. 


Todo  el  año. 


50,000  quin- 
tales. 


354,567  quin- 
tales. 


171,315  cargas 
de  papelón ,  a- 
guardienteode 
azúcar. 


^2,82^ 


525,000. 


3,309,37  !• 


4,000.' 


5,000. 


8,000. 


1,800. 


1,000. 


2,000. 


5,000. 


1,376,094. 


Dos  al  año. 


Una  al  año. 


460,000  libras. 


440,000  sacos 
de  100  libras. 


de  9SS  pesos  la  /anegada «*9. . 

calabazas,  meloDcs,  patillas  y  otras  trntu  á  500  peso»  la  fanegada. 


TOTAL. 


575,000. 


2,800. 


1,150. 


1,440,000. 


1,390,000. 
1,500,000. 

15,752,797. 


4,400. 


4,680. 


•  • 


1 


^OTA.  El  plátano  da  hasta  2,800  va^as  en  una  temperatura  de  16»  y  neo^ 
lita  15  meses ;  peio  es  de  poco  provecho  su  cultivo.  Con  la  yuca  á  la  misma 
altura  sucede  lo  mismo.  La  caña  á  2400  varas  en  una  temperatura  de  i^ 
na  da  azúcar,,  y  el  a£il  á  1800  varas  no  da  tinta. 

Las  observaciones  de  tempeíatura  han  sido  hechas  con  el  termómetro 
de  KaMnheit  y  en  la  reducción  al  centígrado  han  sido  elevadas  hasta  la 
•  decimal.  Para  las  alturas  sobve^piotpiosperan  las  dilMontas  pláoitas  no 
habia  sino  una  6  dos  observaciones  por  cada  una ,  y  para  poder  llenar  las 
flemaa  me  he  servido  de  la  lei  presentada  por  el  sefter  Bousaingaull  en  una 
imemoria  al  Instituto,  de  que  el  tiempo  que  las  plantcu  necesitan  para  ll$- 
ffor  á  su  madurez  está  en  razim  inversa  de  sus  temperaturas ,  y  el  cál- 
culo ha  salido  tan  exacto  con  las  que  tenia  ..que  no  deja  ki  menor  duda  de 
(íiue  en  sabiéndose*  la  temperatura  media  de  un  lugar  y  el  número  de  días 
que  la  planta  necesita  para  perfecctonane,  se  puede  sadier  para  cualquiera 
otro  punto  mas  ó  méuos  elevado  cuántos  dias  le  sean  necesarios. 


V' 


4 


f 


Aui^que  Venezuela  pertenece  ala  región  equinoccial,.  genet^I- 
mente  considerada  como  la  patria  del  oro  y  de  la  plata,  no  se  co- 
nocen, sin  embargo ,  ricas  minas  de  estos  preciosos  metales ,  y  sí 
pequeñas  cantidades  del.  primero  esparcidas  por  varias  venillas  de 
cuarzo ,  plata  sulfureada^  azul  de  cobre  virgen  y  galena;  pero  está 
en  duda  si  estas  diferentes  sustancias  metalíferas  no  son  acaso  de- 
masiaáo  pobres  para  que. merezcan  ser  trabajadas.    .       *" 

Al  tiempo  dé  la  conquista,  á  mediados  del  siglo  XVI,  se  hicieron 
tentativas  desde  el  cabo  de  Paria  hasta  el  de  la  Vela,  internándose 
en  el  interior  para  investigar  de  dónde  venia  aquel  metal,  precioso 
hallado^or  los  primaros  navegantes  entre  los  habitantes  de  la  costa, 
y  del  cuar  se  servian  para  sus  adornos.  Bien  se  supo  entonces  en 
Coro,  Curiana  y  Caucheto  que  aquel  oro  venia  de  la  serranía  de  Cun- 
dlifamarca;  pero  sin  embargo  de  eso  todo  el  territorio  de  Venezuela 
se  vio  esplorado  con  codicia.  Fué  en  ^  554  cuando  Damián  del  Barrio 
de  orden  del  gobernador  Juan  de  Villegas,  descubrió  la  auna  de  oro 
,  de  Buria  en  la  serranía  entre  Nirgua  y  las  sabanas  de  Londres,  ló  cual 
dio  origen  á  la  fundación  de  Barquisimeto  y  de  Nirgua. ^£1  mismo 
Villegas  en  1552  descubrió  otra  de  oro  en  la  colina  de  S.  Pedro , 
en  la  misma  serranía  cerca  del  rio  que  hoi  se  llama  S.  Pedrilo.  Pero 
estas. minas  fueron  sucesivamente  labradas  y  después  abandonadas 
según  algunos  pretenden,  por  un  derrumbamiento  de  tierras  que  hizo 
perderlas  vetas ;  pero  lo  masi^problable  es,  que  lo  fuesen  á  causa  dé 
haberse  agotado  las  venas  principales,  por  hallarse  divididas  en  los 
terrenos,  no  presentándose  los  métales  sino  en  pedazitos  coa  las  mas 
engañosas  apariencias.  En  4560,  Francisco  Fajardo  descubrió  las 
minas  de  oro  de  los  Teques ,  y  Pedro  Miranda  en  el  mismo  (mo  ^ 
dedicó  al  beneficio  de  ellas,  dejándolas  después  al  mismo  Fajardo 
por  temor  á  los  indios  que  á  poco  mataroaá  todos  los  que  estaban 
en  las  minas  y  destruyeron  el  establecimiento.  En  4  575  el  capitán 
Gabriel  de  Avila  encontró  la  misma  mina  de  oro  que  fué  llamada 
de  Nuestra  Señora,  mientras  Fajardo  descubría  otra  cerca  de  Sj 
jSebastian.de  los  Reyes.  En  45S4  se  fundó  la  ciudad  de  S.  Juan  de 
la  Paz  sobre  el  Tul,  probablemente  en  donde  ahora  está  Aragüita,, 
b  cual  flortció  mucho  por  lá  riqueza  de  las  minas  de  oro  de  Apa  y 
Carapa,  destruyéndose  y  despoblándose  á  los-  dps  años,  por' la  insala* 
bridad  del  clima,  y  ac^d  también  por  haberse  agotado  las  vetas  au- 


{ 


—  452  — 


riferas,  comoes  presumiUe  sucediese  iguahnentéten  las  de  Nuestra 
^Sepora.  Finalmente  en  los  Manches ,  Baruto  (quebrada  de  Tipe], 
se  ben^ciaron  algunas  vetas  auríferas  que  se  abandonarousin 
duda  por  el  poco^  producto  que  daban.  Pedazitos  de  oro  y  oro  en 
'  polvo  se  han  encontrado  en  el  territorio  déla  serranía  de  Güigúe , 
en  la  de  S.  Juan  de  los  Morros,  en  el  cerro  de  Chacao,  en  el  rio 
Jurvari  m  la  Guayana  y  en  los  cerros  de  la  Encaramada.  Alonso  de 
Oviedo  ^^de  Barquisiuieto,  desaubrió  antiguamente  en  Cocorote  una 
mina  de  cobre,  antes  riquísima  en  oro.  Enire  Aroa.y  Nii^ua  cerca 
d^  Guanita,  en  la  montaña  de  S.  Pablo,  se  han  descubierto  algunos 
minerales  de  plata.  Se  encuentran  también  algunos  granos  de  oro 
en  lodos"  los  terrenos  montañosos  entre  el  rio  Yaracui  y  las  ciudades 
de  S.  Felipe,  Nirgoa  y  Barquisimeto,  particularmente  en  ^  rio  de 
Santa-Cruz ,  ea  que  los  indios  orpalleros  han  recogido  algunas  ve- 
zes. pepitas  d  granos  del  valor  de  4  á  5  pesos  fuertes.  Varios  g^ní- 
fos  se  dicen  haberse  descubierto  en  tiempos  atrás  en  la  provincia 
de  Coro.  Parece  que  el  oro  no  se  encuentra  en  verdaderas  vetas  en 
las  rocas  de  txúca  esquita  y  de  gneiss,  sino  diseminado  de  una  ma- 
nera c^si  imperceptible*  en  toda  la  masa ,  y  filtrándose  las  aguas^" 
* 

reúnen  los  granitos  esparcidos  :  siendo  así  serian  infructuosos  to- 
dos los  ensayos  de  elaboración.  En  estos  últimos  tiempos  se  ha  eu- 
conlrado  una  de  plata  en  Bailadores,  provincia  de  Mérida,  sin  con- 
siderar, muliidud  de  otros  puntos  en  que  se  han  hallado  algunas 
cuantas  piritas  y  pajitas  de  oro ;  pero  todo  esto  no  prueba  absolula- 
mente  que  este  pais  contenga  minas  de  estos  metales,  bastante  ricas 
para  ser  labradas,  quedando  en  problema,  si  con  el  tiempo  gozarán 
sus  habitantes  del  lustre  transitorio  que  dan  las  minas.  Es  mas 
probable  que  seguirán  viéndose  ampliamente  indemnizados  por  las 
producciones  preciosas  é  inagotables  de  un  suelo  que  por  razón  de 
su  fertilidad  y  estension ,  será  la  residencia  de  la  felizidad  ;  y  eso 
precisamente  cuando  los  paisos  que  tanto  se  jactan  de  sus  minas 
no  presentarán  mas  que  escombros ,  minas  y  escavaciones  terreas, 
monumentos  melancólico^  de  una  antigua  opulencia. 

Minas  de  estaño  se  encuentran  en  diferentes  parajes  que  descu- 
brió D.  Alonso  de  Oviedo,  ve<;¡no  de  Barquisimeto,  y  se  beneQciaron 
mucho  tiempo  por  cuenta  *de  la  real  hacienda.  Sacaron  de- ellas 
grandes  porciones  que  se  cqndujeron  á  España  para  la  fundición  de 
la  artillería,  y  después  las  empeñó  el  rei  en  40,000  pesos  á  D.  Fran- 
cisco Marios ;  vecino  de  Caracas^  que  las  ehbaMonó. 


t 


9* 


Las  minas  de  cobre  de  Aroa,  en  la  serranía  de  S.  FeÜpe,  hace  mn- 
cbo  tiempo  que  están  beneticiándose  :  es  un  cobre  rojo  de  nna  cali- 
dad escelente  y  aun  preferible  á  los  de  Suecta  y  de  Coqniípbo  en 
Chile.  Fueron  largo  tiempo  descuidadas  y  de  nuevo  beneficiadas  por 
el  zelo  y  cuidados  dcD.  Antonio  Henríquez.  En  ^800  produjeron 
cerca  de  ^500  quintales  de  cobre.  Actualmente  están  beneficiadas 
por  una  compañía  inglesa  que  anualmente  esporta  el  cobre  en  bruto 
á  Europa  ,  de  donde  viene  labrado.  En  el  año  anterior  de  Á  858  sie 
esportaron  70,550  quintales.  De  este  mismo  metal  hai  mintfS  en  las 
provincias  de  Coro,  Carabobo,  Barquisimefo  y  Mérida,  que  aun  no  lian 
sido  beneficiadas.  En  la  de  Caracas  hai  en  Tucutunemo  y  en  la  ser^ 
ranía  del  Pao  de  Sárate,  y  están  en  el  mismo  caSo.  Indicios  de  hierro 
ocráceo  y  magnático  hai  en  la  cordillera  del  litoral,  en  fas  de  Coro^ 
Barínas,  Barcelonaj  Cumaná,  y  en  el  sistema  de  la  Paríme  en  mu- 
chísimas partes.  Existe  una  mina  de  plomo  en  el  Tocuyo,  de  la  cual 
se  han  sacado  muestras  escélentes. 

Minas  de  carbón  de  piedra  hai  en  las  provincias  de  Caracas,  Ca"^ 
rabobo ,  Mérida  y  Maracaibo,  y  una  riquísima  en  la  de  Coro. 

En  LagnnHIas ,  pueblo  de  la  provincia  de  Mcrida ,  se  encuentra 
la^famosa  mina  de  urao  en  una  laguna  cuyo  fondo  eslá  lleno  de  un 
carbonate  de  sosa  particular,  análogo  al  que  se  encuentra  en  Trona 
en  África  :  es  el  sesqui-carbonate  de  sosa  de  los  químicos ,  segün  lo 
ha  analizado  el  Sv.  Boussingault.  Esto  lo  sacan  los  indios  zambu- 
lléndose á  4  ó  5  brazas  de  profundidad  y  lo  mezclan  en  el  tabaco. 
Estaba  beneficiada  por  cuenta  del  Estado,  y  ahora  por  la  del  go- 
bierno provincial,  dando  anualmente  un  producto  regular. 

Minas  inagotables  de  mene  ó  pez  mineral  hai  en  las  provincias 
de  Mérida  y  Coro,  y  sobre  todo  en  la  de  Maracaibo.  En  este  último 
lugar  se  siryen  ^e  él  para  embrear  las  embarcaciones  que  surcan  el 
lago. 

Fuentes  de  petróleo  existen  abundantemente  en  la  de  Trujillo  y 
de  Cumaná.  La  rica,  salina  de  Araya,  que  fué  reconocida  en  ^  499 
por  Alonso  Niño  cuando  visitó  aquellas  regiones  siguiendo  las  hui 
Has  de  Colon,  Ojeda  y  Américo  Vespucci,  y  que  antiguamente  oscító 
los  zelos  de  los  ingleses ,  holandeses  y  otros  poderes  marítimos ,  si- 
gue produciendo^onsiderablemente  :  es  una  mina  inagotable  que  no 
necesita  casi  ningún  trabajo  por  ser  la  sal  mui  pura.  La  real  admi- 
nistración de  Araya  no  data  mas  que  desde  el  año  de  1792.  Antes 
de  este  tiempo  estaba  en  manos  de  pescadores  indios  que  fabricaban/ 


y» 


1^  fOMgianaali  ga^mtojp,  |^aguA>^  goUenio  la  mo- 
éerada.saina de 500 pesos.. Las saUnas de  Arayaprodaieroaalgo- 
Merm  en  1799  y  &000  dmos  ea  limpio.  Salinas  hai  ademas  ean  la 
.provincia  de  Barcelona  y  en  la  de  Gomaná.  La  pcovincia  de  Cará« 
«6as  posee  algunas  omi  hennosas  -en  los  Re|nes.  La  qne  antigua- 
mente  existía,  en.  la  isla  de  Tortuga  ti&  destruida  por  orden  del  <go- 
^  .biemo  espaik)! ,  temiendo  qne  alli  se  estableciese  alguna  potencia 

.nstniojera;  y  qne  le  sirviese  de  pnnto  para  hacer  un  comercio  ili- 
oto  con  la.  tierra  firme.  Finalmente  las^proviacias  de  Margarita  y  Go* 
.coy  Maracaibo  tienen  abundantes  salinas :  estaúltimasobre  todo.Mi- 
f"  ^»s  de  azufre  sin  benefidacse  existen  en  las  provincias  de  Cuman^t 

.Barcelona,  Coro  y  Mérida.  £n  la  de  Gumaná.«e  encuentra  azavach^, 
y  tierras  pri|^as  para  fabricar  la  porcelana  en  la&de  Gumaná  y  Gara- 
cas :  granates  en  el  cerro  de  la  Silla.  En  toda  la  cordillera  de  Vene- 
zuela, tanto  la  costera  como  la  int^ior,  se  bailan  escelentes  crii^ 
«  tales  de  roca,  pizarras,  mármoles,  granitos,  yeso  y  cal  en  abundan- 

I  tísLy  y  solade  estas  últimas  se  hace  algún  uso. para  las.íabricas. 

I        *  Últimamente^  cantidad  de  aguas  termales  aparecen  en  todo  el 

.pais,  tanto  en  las  serranías  como  al  pié  de  ellas ;  pero  aunque  úti- 
les para  vaips  enfermedades ,  apenas,  hacen  uso  de  ellas.  Las  mas 
,  cálidas  son  las  de  las  Trincheras ,  cerca  de  Valencia,  en  la  Quebrada 
I  de  iguacaliente :  las  encontró  el  Sr.  Boussingault  á  97*,  y  fuera  de 

los  manantiales  de  Urijino  en  el  Japón,  que  se  asegura  ser  de  agua 
pura  y  estar  á  \  90*  de  temperatura,  parecen  ser  las  mas  cálidas  del 
mundo.  Contienen  según  aquel  químico  un  poco  de  hidrógeno  sul- 
furado y  depositan  silice*  Las  aguas  termales  examinadas  por  el  mis- 
I  .mo  Sr.  Boussingault  son  las  de  Onoto^  cuyo  calor  es  de  44^  ^,  y  casi 

de  agua  pura*  Las  de  Mariara  estaban  á  64<'  y  se  componían  de  sí- 
lice, de  gas  hidrógeno  sulfurado  y  algunas  partículas  salitrosas.  Las 
mas  particulares  son  las  de  Coro,  en  la  Quiva,  cerca  del  camino  que 
va  al  Pedregal,  en  donde  se  elevan  dos  masas  blanquecinas  en  for- 
ma de  semiesferoides,  una  sobrepuesta  á  otra ;  la  mayor  es  de  SO 
Yaras if< la- menor  de  44.  En  el  diámetro  de  ellas  se  encuentran  mas 
de  40  hoyos  que  semejan  á. platos  convexos,  los  cuales  se  elevan 
algunas  pulgadas  sobre  la. masa  principal,  y  en  el  centn>  hai  dife- 
rentes hoyos  de  varios  tamaños  llenos  de  aguas  pajizas,  verdosas^! 
blancas,  negras,  cristalinas  y  turbias4  de  sabores  y  olores  distintos, 
cuya  temperatura  varía  en  casi  todos  ellos,  desde  5^  5  hasta  66*  6 
del  termómetro  centígrado. 


» 


499  ^i> 


ANIMALES. 

< 

Para  completar  el  cuadro  físico  de  Venezuela,  iremos  cooside-» 
raudo  los  difereutes  animales  qjjie  y'wen  en  los  bosques,  en  las  lla- 
nuras ;  en  las  cordilleras ,  en  las  aguas  del  mar,  ^  los  lagos  y  ríQS , 
colocando  separadamente  los  que  están  reducidos  al  estado  domés- 
tico. Describiraados  los  primeros  dividiéndolos  en  mamíferos ,  aves, 
pezes,  reptiles,  crustáceos,  insectos,  moluscos,  zoófitos;  y  los  se- 
gundos en  ganado  vacuno,  lanar,  cabruno  y  de  cerda,  en  cria  de 
caballos,  mulos  y  asnos^  y  últimamente  de  aves  domésticas. 

MAMÍFEROS. 

óKDBir  flB  LO»  cuAnmuaraf • 

£1  araguato  {simia  ursina),  del  género  de  los  aluates,  vive  m 
sociedad ;  hembras  y  maches  tienen  una  larga  barba  y  su  color  es 
^  jdeonado  mas  ó. menos  oscuro :  el  pelo  áspero  y  largo ,  el  tamaño 
del  cuerpo  2  4  [2  pies  sin  la  cola :  se  reúnen  á  aullar  en  las  c0|>as  de 
los  árboles.  Entre  ellos  hai  siempre  uno  que  canta  como  maestro  de 
coro,  y  generalmente  se  distingue  una  voz  mas  baja  que  después  . 
de  uDT  largo  rato  es  reemplazada  por  otra  de  diferente  tono ,  á  que 
jre$punden  todos  alborotando  los  valles  y  las  selvas  con  sus  desagra-* 
.ddUes alaridos.  Por  lo  coamn>  después  de  amanecer  se  oyen  sus  ge- 
joidbs  bronces  y  tristes;  también  antes  de  anochecer  y  con  mas  fre- 
cuencia cuando  quiere  mudarse  el  tiempo.  Si  algún  cazador  los  per- 
sigue ,  buscan  las  ramas  mas  elevadas  de  los  árboles  y  se  sitúan  de 
modo  que  estén  siempre  encima  del  cazador,  á  quien  arrojan  orines 
jeseremento  con  un  tino  estraordínario.  Las  madres  llevan  entón- 
aos í¡as  hijos  sobre  la  espalda  para  ponerlos  en  salvo. 

La  marimonda  {simia  belzebuth ) ,  del  género  dejos  áteles.  La^ 
hai  de  dos  especies,  una  de  cara  negra ,  los  pelos  de  la  cabeza  lar-^ 
fosy  eríj^dos,  el  hocico  mui  prolongado  y  las  ventanas  de  la  nariz 
íOxA  anchas.;  el  color  del  cuerpo  es  de  un  negro  sucio,  el  vientre  ^ 
blanquecHio  y  las  patas  y  la  cola  negras.  Con  esta  se  agarra  y  de  ella  . 
diestra  y  admirablemente  se  sirve  para  coger  las  cosas  que  no  pue- 
de alcanzar  con  las  manos.  Estas ,  los  brazos  y  los  dedos  son  ihui 
largos,. Se. bal^jAcea  sostenida  por  las  manos. y  la  cola  ^  es  muí  tí- 


I 


<-.  iU  — 


mida  y  camina  mucho  sobre  las  patas  de  atrás,  llevando  los  brazos  y 
\%  cola  leyauíadds.  Otras  hai  que  no  tienen  erizados  los  pelos  de  la 
cabeza  ;  su  color  es  oscuro,  el  yíentee  rojizo  y  la  cara  menos  fea. 
Todas  (ienen  comparativamente  á  los  demás  monos,  un  vientre  hhr 
abultado.  El  largo  de  esta^parimondas  es  de  una  vara,  y  son  mui^ 
delgadas. 

"^El  caparro,  del  género  de  los  lagoíhrix  :  mono  grande,  grueso  y 
forzudo.  Tiene  2  í  /2  pies  de  largo,  fuera  de  la  cola  que  es  gruesa  y 
del  mismo  largo,  con  la  cuííl  agarra  fuertemente.  Todo  él  es  de  co- 
lor*de  ceniza  y  el  pelo  snave  cual  si  fuera  de  seda ;  la  cara  es  triste, 
negra  y  pelada ,  con  alguna  semejanza  á  la  humana.  Este  mono  es 
mui  pesado  en  sus  movimientos  y  tiene  tal  destreza  en  la  cola,  que 
de  ella  s&^irve  con  gran  tino  cuando  no  puede  alcanzar  con  las  ma^ 
nos  las  frutas  ú  otra^cosa.  Duernoe  mucho  y  es  múi  goloso;  cuando 
Vi;  la  comida  se  endereza  sobre  las  patas  de  atrás,  con  saltos  y  mo- 
vimientos estiende  las  manos ,  dando  a  la  vez  gritos  estraordínarios. 
Hai  otros  caparros  de  color  de  avellana  y  con  las  mismas  cuali- 
dades. 

El  capuchino  (simia  chiropotes)  áé\  género  de  los  sajous ,  tiene 
la  cara  pelada  y  negra  y  el  resto  del  cuerpo  con  pelo  negruzco,  lus- 
troso y  mui  negro  encima  del  lomo,  cabeza  y  cola ;  este  pelo  parece 
peinado ,  y  separado  á  propósito  desde  el  cráneo  hasta  la  cola  por  la 
mitad  del  lomo  :  el  rabo,  que  es  uno  de  sus  bellos  ornamentos, 
por  lo  grueso  y  poblado  se  asemeja  a  un  penacho.  En  la  cabeza  tiene 
el  pelo  recortado  como  los  frailes,  y  desde  las  orejas  \e  sale  una  bar- 
ia hermosa  que  le  llega  al  pecho  ;  y  cofuo  su  cara,  orejas  y  garganta 
están  sin  pelo,  parece  precisamente  un  fraile  capuchino.  Son  ferozes, 
inquietos  ,  y  se  domestican  con  mucha  dificultad. 

El  machango,  del  género  de  los  sajous,  mono  común  que  se  en- 
cuentra en  todas  partes ;  su  cara  es  de  un  color  aplomado,  el  lomo 
y  costados  pardos,  las  patas,  pies  y  cola  mas  pscuros.  Este  mona 
tiene  el  pelo  poco'largo,  hace  muchos  gestos ;  es  tímido,  gritón,  sobre 
todo  en  el  estado  doméstico  y  cuando  ye  la  comida. 

El  machin  (naova  vapari )  del  género  de  los  sajous,  tiene  pelo 
gris  y  cawr  azulada  con  tes  órbitas  y  frente  blancas  como  la  nieve. 
Este  animalilo  es  tan  dócil  como  feo  y  se  domestica  fácilmente. 
Gusta  dé  pasearse  encaramado  sobre  otros  animales,  como  perros, 
cerdos,  gatos  etc.,  de  los  cuales  es  mui  amigo. 

La  mona,'  del  género  de  los  sajous ,  tiene  cabeza  reSonda,  lá  nariz 


r 


f 


cbata/el  hodeo  certo,  tos  labios  n^i  espaoMTos,  edloñátdaseB  las 
asentaderas  y  la  cola  levantada  sobre  el  esptarazo,  á  vezes  Utas  lar- 
gft  que  el  cuerpo.  Las  monas  se  rennen  en  tandadas  numerosas  pa- 
t9L  ir  á  devastar  tos  jardines  y  maizales  que  están  cerca  de  los  bos- 
f  ues ,  y  mientras  que  alguilas,  colgadas  de  los  árboles  ó  cotocadas 
sobre  los  peñascos,  están' d*  vigía  para  observar  lo  que  pasa,  las 
Otras  pillan  todo  lo  qoe  pueden  llevar  á  cuestas.  Sw  mui  desconfia- 
das y  huyen  del  bombfe  :  las  bembí^  paren  uno  ó  dos  bijo^  á  los 
cuales  crian  poco  mas  ó  menos  como  lo  hacen  los  racionales.  Tienen 
mucho  cuidado  de  los  reden  naf^os  y  tos  defienden  de  los  animales 
ferozes.  Cuando  se  les  domestica  pierden  su  vivazidad,  destreza  é  in- 
teligencia. Comen  de  todo^  pero  prefieren  los  alimentos  endulzados. 
Arriba  de  5000  varas  parece  que  no  existe  ninguna  clase  de  monos. 
•  £1  lili  (simia uiurea)  del  género  de  los  saimires ,  es  onó  de  los 
mas  lindos  de  su  espede.  Los  que  viven  en  el  rio  Guaviare  no  tie- 
nen arriba  de  ^2  pulgadas  de  largo ,  pero  los  del  Casiquiare  solo 
cuentan  6.  Tienen  la  cara  pelada,  y  es  blanca  con  una  man6ha  pe* 
quejia  negra  azulada  que  les  cubre  la  boca  y  la  i^riz.  Los  tftíes  mas 
elegantes  en  la  forma  y  de  color  mas  hermoso ,  viven  en  las  oriltos 
del  Casiquiare ;  los  que  habitan  el  Gnavikre  son  difíciles  de  domes- 
ticar. Ningún  mono  hai  que  tenga  la  cara  mas  semejante  á  la  de  un 
lüñp  que  el  tití :  la  misma  espresion  de  inocencia'  ia  misma  son- 
risa maligna ,  la  misma  prontitud  en  pasar  de  la>alegría  á  la  tris^ 
teza :  sus  grandes  ojos  se  bañan  de  lágrimas  ea  el  instante  en  que 
se  ve '^obrecógidopde  temor.  Es  tímido,  delicado  y  afecto  á  comer 
insectos ,  especialmente  aranas.  Su  color  es  ceniziento ,  cob  rayas 
mas  oscuras,  ¿  bien  de  un  varde  amarillento.  Se  alimentan  de  fru- 
ías ,  de  vegetales  é  insectos ,  y  se  les  amansa  con  facilidad ;  pero 
conservan  sícanpre  enemisi^d^ntra  loa  gatos.  Hái  también  algunos 
bliidco%y  otros  casi  verdes  qiui  lindos. 

Los  macacos  ó  micos ,  del  gnnero  de  los  ^is.  Su  cara  no  tiene 
casi  pelo ,  y  es  4o  color  pardo  oscuro ;  .pero  tiene  patillas  mediana- 
mente largas  y  negras.  Losojos  son  pequeitos,  vivos  y  redondos,  los 
labios  casi  negiios,  el  pelo  y  el  auerpo  pardo ,  daro  debajo  del  Vien- 
tre, y  mas  oscuro  ce  las  |>%tas,  cola  y  loip&o.  Su*^pequ«ñez  y  gracias 
acompañadas  de  una  vivazidad  cstraordioaria,  tiacen  que  esteaoi* 
mal  sea  considerado  como  uno  de  los  monos  mas  graciosos.  De  es- 
te género  los  hai  casi  negros  y  otros  de  un  blanco  sucio. 

£1  caranegra  ( simia  mehnocephalt^ ,  dd  género  de  los  bra-* 


t 

dives^^f  mi  aaiiMtqfa«'ti9m'9l  Jiocieo  agnnritoT-meío,  lafhMm 
te;  Jarlaifo^de  la  cara  y  ^  liMieo  del  mismo  edor ;  el  pelo  efi  m^ 
Hb  pertes  ^coite  y  Íleo.  ISl  coiét  gei^^ral  de  la  parte  snperíer  M 
eoMrpo  esdemrgris^senízíeiito  un  poco  oeenro,  y  li  pirata-del  pekr 
lemáaa  en  mm  tíata  leonada  ipas  fcMártemenie  marcada^sobre  el 
Ittna;  la  cn^  de  u»  gris  claro.  En  m  niM^nniento  es  esta  masosetkra 
^e  en  la  punta ;  los  costados  de  les  miembros  son  del  mismo  cck 
lor ;  el  cuelle  y  vientre  de  an  blanco  parb.'f^te  animal  habita  los 
bosqnes  de  la  Goayana,  y  se  alimenta  como  los  monos,  con  fratás 
raiñs  y  iiojas ;  es  muí  ágil  y  Ti?e«ebfe  los  árboles.  Tiene  baen  ca« 
ráeter ,  no  haee  gestos  come  los  monos  y  carece  de  su  petulancia : 
les  indígenas  lo  cazan  pam  comer  su  carne. 

La  Tiodila  [simia  lugem)  del  género  de  los  caliithrex ;  anima^ 
Vflo  que  tiene  el  pelo  suave ,  lustroso ,  y  de  un  hermoso  negro.  Su 
cara  está  cubierta  de  unaespeeie  de  máscara  en  forma  cuadrada  y 
de  un  color  Maneo  asolado  qae  le  cubre  los  ojos,  la  nariz  y  la  bo-^ 
^.  Es  un  mono  muiraro  y  delicado  que  se  encuentra  en  la  orilla' 
derecha  del  Orino<^ ,  en  las  montaüas  graníticas  detras  de  Santa 
Bárbara,  y  también  habita  cerca  de  S.  Fernando  de  Atabapo. 

£1  cararayada,  del  género  de  los  nocthores;  mono  nocturno  que 
duerme  de  dia  ¡H>r  no  poder  soportar  la  laz.  Su  color  és  cenbiienlO', 
y^l  cuerpo  cati*del  tamaño  del  caparro  con  una  raya  negruzca  en 
k  cara.  De  noche  estcuando  busca  su  aKmeaito.  Tiene  la  fisonomía 
triste  y  abaüda ,  sus  movimientos  son  wudio  mas  lentos  que  los  dd 
eaparro.  .  /.  * 

£S  oMnbi)  dd  género  de  los  nocthores,  es  otro  mono  neetnrao» 
de  un  color  ofcnro  y  la  cara  casi  negra  y  muí  tdste  :  su  cela  tiene 
poeo  pelov  Bstá  continuamente  sentado  con  la  cara  entre  las  pier«. 
stts,  la  colá  enroscada  al  rededor  del  cuerpo,  y  dttrmimido  -iodo 
el  dia.  , 

£1  chucuto  y  mono  de.  cola  certa*  Lo  hai  pajedo  y  cenlsiento  os- 
eare ;  d  pelo  no  es  mui  largo  ni  áspero,  la  cara^lgo  negra  al 
rededor  de  los  ojos ,  que  son  graadesry  Tedondos«  Tienejj^oca  ytve^ 
ca  t  sediHüestica  ^  es  leo  y  parece  poeo  inteligentes 

.   ÓaSiBN  DB  liOS  0ABllÍK0ÍBH>e.  i  .  . 

£1  muFcaílago,  flue  es  tipo  de  laiamilift'de  los  cheriopieoMÍy  cam 
aÍToro/tiffi&e^^Jueif^  de^^oa ratón  y. la  nicEoJM^a  gue  le  fi»y^  de 


t 


áHdeofftíra&tanMmlatariA.  Lo»lniilé  carias  dttes^;  mm'^#b9 
muitieiien  de  froto  y  otras-  de  «raectos ;  estas  tilCimas  drapa»  k^ 
sangre  de  los  animales ,  y  dé  ellas  una  es  mas  graade  y  otra  HM» 
peqttefia.  La  primera  tiene  en  el  hocico,  arribaje knaf4¿;  una^ 
especie  de  membrana  levantada  y  las  orejas  mas  grandes;  ealaqw 
cbnpa  la  sangre  de  los  caballos ,  burros ,  malas  y  ganados.  La  otra 
mas  pequeña  es  la  qoe  ataca  al  hombre  coand*  di»rni0  y  general- 
mente  en  las  estronidades  :  mientras  estrae  la  sangre,  bate  üjera^ 
mepte  las  alas ,  produciendo  una  frescura  que  impide  sentir  d 
ardor  de  la  herida.  « 

El  erizo,  dé  la  familia  de  los  insectívoros^  tien«  de  6  á  40  pi^ 
gadas  de  largo,  la  cabeza  lomo  y  costados  eobiertos  de  espinas,  pe- 
cho y  vientre  de  un  pelo  suave  y  fino ,  Uis  patas  cortas  Y  pelada» 
oon  cinco  dedos  largos  y  separados  en  cada  pié,  la  cola  larga  y  tatf 
cubierta  de  espinas  que  apenas  se  le  ve.  Vive  en  loszaitales,  «#• 
alimenta  de  frutas,  raizes  é  insectos ;  pemÉmedendó  de  día  en  stf 
madriguera  y  haciendo  sus  correrías  por  la  noche.  El  erizo  se  de<¿ 
fiende  haciéndose  una. bola,  y  cubre  todo  su  cuerpo  <íe  agudas  puas^' 
logrando  así  cansar  á  sus  contrarios.  Produce  de  tres  á  cuatro  hijo» 
del  todo  blancos  y  sin  púas.  Antiguamente.se  creia  que  este  animal 
mamaba  las  yacas  y  las  mordia  ^  pero  la  ccDifiguracion  de  su  boca 
hace  imposible  este  hecho. 

El  oso  negro,  del  género  ¿del  oso,  tiene  casi  «las  mismas  costum- 
bres de  la  especie  europea ;  es,  sin  embargo,  menos  feroz  ;  su  all^ 
mentó  consiste  principalmente  en  frutas  y  otras  producdonés  v^e-^ 
tales,  no  atacando  los  pequeños  cuadrúpedos  si  no  se  ve  forzado  á' 
ello  por  el  hambre ;  se  alimenta  también  de  pescado  ,  y  la  mi^  es« 
su  comida  favorita.  Trepa  sin  dificultad  á  los  árboles  y  atraviesa* 
fádimente  los  ríos  á  nado;  S)a  piel  ea  mui  suave ,  y  se  domestica' 
con  fadlidad.  Se  le  encuentra  en  las  selvas  del  Apure  y  de  la  Guaya-» 
na  y  también  én  las  de  Perijá  y  Mérida  desdé  5  (M^  hasta  2;(MM>  va- 
ras de  altura  sobre  el  nivel  del  mar, 

£1  zorro  negro,  del  género  de  los  ratones,  hace  su  morada  en  el 
hueco  de  los  ái1>oles ;  sé  alimenta  de  maíz,  caSa  de  azúcar  y  toda* 
dase  de  fruta ;  come  también  carne  y  particularmente  ostras  quo* 
abre  con  una  admirable  destreza.  Este  animal  tiene  cerca  de  2  pieaf 
de  longitud ;  el  pelo  de  la  piel  es  espeso  y  largo,  negruzco  en  la  su*  • 
perficie<*y  gris  inteiiorménié :  la  cola ,  que;  tiene  un  pié  de  largo ' 
está  poblada  y  marcada  regularmente  con  círculos  aegros.  Como' 


I 


—  ^60  — 

está  armajio  de  prras,  puede  íádlmenle^epar  á  los  árboles ;  aada 
obUeaameDte.  Se  le  paede  ^mans^  eon  facilidad  y  tiene  buen  na- 
tural ;  pero  es  tan  iDali{[DO  como  el  mono,  eu  estremo  sensible  al  mal-  , 
tralo  y  no  ohida^la  persona  de  quien  lo  recibe.  Su  piel  sirye  para 
bacer  sombrero^. 

£1  zorro  guache,  del  género  coatis,  es  del  taniaño  de  un  gato,  al< 
go  mas  largo ,  d^  col#r  gris  form^o  de  blanco  y  negro ,  Ja-^abeza 
agij^da  y  d  hocico  n^ro,  la  cola  Iltrg^  y  poblada^  y  trepa  bien  por 
los  árboles.  ^. 

La  comAdreja,  del  género  pgtois.  Las  señales  que  distinguen  esle 
cuadrúpedo  son  la  longitud  de  su  cuerpo,  las  patas  cortas  y  la  íleii- 
bUtdad  del  movimiento  :  así  puede  seguir  su  presa  por  los  escon- 
drijos i^§í^  estrechos  y  pi^fundos.  Es  sanguinario  y  feroz,  pero  co- 
no su  subsistencia  es  precaria,  puede  Yi.?ir  sin  comer  por  mucho 
tiempo,  y  si  la  casualidad  lo  eonduce  á  4onde  Inri  abundancia,  des- 
truye todo  antes  de  saMsfacer  su  apetito  ,  y  chupa  luego  la  sangre.  .^ 
Su  longitud  sin  incluir  la  cola  es  como  fie  7  pulgadas ;  el  color  de 
unurojo  pálido  sobre  el  lomo  y  los  costados,  blaoco  en  el  vientre  y 
pecbo.  Al  acercarse  la  noche  sale  de  su  agujero  y  espía  al  rededor; 
de  los  corrales  de  las  granjas.  Destruye  los  ratones ,  ratas  ^  pollos  ^ 
pichones  y  conejos,  y  cjftapa  los  huevos  haciendo  un  agujerito  ásu 
estremidad. 

£1  buron  del  género  putois  es  un  apimal  que  sale  de  noche  de 
sn  cueva  ;  su  color  es  amarillo  pálido,  los  ojos  encarnados',  oldr 
fuerte  y  desagradable.  Se  domestica  fácilmente  pero  es  irascible  y 
]|iuerde  con  fuerza  :  sirve  para  la  caza  de  conejos ,  mas  es  preciso 
poüede  «in  ^ozsd ,  porque  si  no ,  coge  el  conejo  por  el  cuello ,  le 
chupa  la  sangre  y  en  seguida  se  duerme  en  el  vivero.  Se  le  alimenta 
con  gan  y  leche ;  es  de  dhm  cálidos ,  y  Cgando  está  en  libertad 
bace  su  gu^ida  bajp  las  rai;ses  áf  los  árboles. 
.  £1  mapurite^  del  género  de  las  muffetas,  parece  que  es  la  especie 
ma^equens^  de  las  tres  ó  cuatro  conocidas  con  el  nombrip  genérico 
e  muffetas.  £1  fondo  de  su  color  es  blanco  amarillento  con  una 
banda  parda  desde  la  cabera  hasta  el  lomo ;  la  punta  de  la  cola 
blanca  y  los  pelos  de  esta  tan  largos  como  los  de  todo  el  cuerpo ; 
el  pecho  y  .vientre  pardos.  EstCL  animal  despide,  ^e  una  especie  de 
bolsa  que  tiene  junto  al  oriíiicio,  un  licor  mui  fétido  que  se  esiiende 
con  rapidez  á  gran  distancia,  y  es  lanjíesagradable  que  xepugna 
aun  á  los  perros^  los  cuales  hqyen  de  este  animal  en  v^z  ဠ perse- 


J 


—  «I  — 


guirle.  El  licor  es  su  única  defensa  cuando  se  ve  acemeUdo,  y  bas- 
tan algunas  gotas  para  infestar  el  aire  ambiente  y  hacer  huir  á  sus 
perseguidores.  No  se  encuentra  en  la  región  fría. 

Nutria  del  género  de  las  lutras :  este  mamífero  tiene  el  cuerpo 
largo  y  grueso,  las  patas  cortas^  los  pies  palmeados,  la  cola  chata , 
los  ojos  abultados,  las  orejas  cortas  y  las  barbas  fuertes ;  su  piel  es 
pardusca  y  bastante  estimada.  Este  animal  es  casi  anfibio,  vive  de 
pescados ,  nada  con  mucha  facilidad,  duerme  de  dia  y  no  va  á  la 
pesca  sino  por  la  noche.  Zambulle  mui  bien ,  y  puede  permanecer 
mucho  tiempo  en  el  agua. 

El  zorro  es  del  género  del  perro.  Lo  hai  colorado  y  pardo  ^  y 
abunda  en  todo  el  país.  Durante  el  dia  se  mantiene  en  sus  madri- 
gueras ;  su  caza  principal  es  por  la  noche,  y  hace  presa  de  los  ani- 
males mas  pequeños,  particularmente  de  las  gallinas.  Devora  tam- 
bién el  pescado  como  todo  alimento  animal.  Es  difícil  que  caiga  en 
los  lazos  que  se  le  tienden  ,  á  causa  de  la  mucha  astucia  con  que 
frecuentemente  hace  inútiles  las  precauciones  del  cazador.  Este  se 
ve  obligado  á  perfumar  sus  lazos  ó  trampas  con  incienso  y  otras 
sustancias  cuyos  olores  disimulen  el  del  hombre. 

El  jaguar,  del  género  de  los  gatos  es  el  mas  grande  y  formidable 
de  los  del  Nuevo-Mundo.  En  él  ejerce  la  misma  tiranía  que  el  ti- 
gre ó  el  leopardo  en  las  regiones  cálidas  del  antiguo  continente. 
Haí  jaguares  de  7  pies  de  largo  desde  el  hocico  hasta  el  nacimiento 
de  la  cola.  Este  animal  tiene  bastante  fuerza  para  tumbar  un  toro, 
pero  la  presencia  del  hombre  le  intimida.  £1  jaguar,  llamado  vul- 
garm^te  tigrej  hacia  grandes  estragos  en  los  ganados.  El  mucho 
precio  de  su  piel  le  hace  ser  cada  vez  mas  raro  en  los  paiscs  pobla* 
dos.  Sus  costumbres  y  hábitos  son  los  mismos  que  se  observan  en 
los  demás  de  su  especie.  Espera  su  presa  en  lugar  oculto,  salta  so- 
bre ella  con  fuerza  y  le  quita  la  facultad  de  huir  ó  resistirle.  Algu- 
nas vezes,  instigado  por  el  hambre,  se  aventura  á  atacar  al  hombre ; 
pero  rara  vez  si  le  encuentra  prevenido.  Trepa  por  los  árboles  con 
admirable  destreza,  nada  con  la  misma  habilidad  y  puede  arrastrar 
su  presa  hasta  su  guarida,  aunque  sea  un  buei  ó  un  caballo,  para 
satisfacer  su  hambre  sin  temor.  Hai  tigres  negros  con  manchas  que 
resaltan,  del  mismo  color  :  son  mas  sanguinarios  que  los  otros  y  se 
encuentran  solo  en  las  selvas  de  la  Guayana ;  mientras  que  la  otra 
clase  vive  en  lodos  los  bosques  del  resto  del  pais  y  abunda  consi- 

P.  6S0G.  II 


\ 


4lcráUMÍMÉi  «D  loi  de  la  Gnafana.  Sa  carne  esUaiioa  jni^i^ 
•fltl^iléa. 

Pantera,  del  gébero  de  loa  galoa.  £d  la  parte  elevada  4e  Jas  ser* 

'  molas  de  Nliigiia,  A§iiaeaiieDte  y  Ferija  existe  b1  tigre  panteca.  Sas 

manchas  sos  aias  oaeMidas  ^pe  las  del  jaguar  y  mayor  su  yoraaidid. 

Se  ecmKa  en  ]o  mas  profiiiKio  de  los  Jl>06qBes,  de  donde  no  sale 

sino  euftiido  le  obliga  el  hambre. 

OBza^  del  género  de  los  gatos.  Es  una  pequeña  pant»:^  que  no 
es  fenez  ^t^  eunvdose  cree  mas  fotfte.  Tiene  moa  desarrolladlos 
los  órganos  de  la  vista  y  del  oido  y  ye  mucho  de  noche. 

£1  leoQ  ^feiisdi€color)j'úét  género  de  los  gatos,  aftímal  tan  feroz 
cofiM  el  Jaiguasr,  devora  su  presa  y  no  la  deja  hasta  que  no  se  ha 
saciado.  Si  cncpentra  muchos  animales,  los  mata  todos  antes  de  sa- 
tisfacer su  lAmbre.  Corre  velozmente  y  sube  á  los  áEÍ)oles  con  mas 
lijereza  que  el  jaguar ;  pero  es  perezoso,  y  coando  está  harto  no 
alaca  al  hombre  á  no  ser  que  le  halle  dormido.  Su  carne  es  flaca  y 
tiene  un  tufo  desagradable.  Abunda  en  la  serranía,  desde  la  altura 
de  5. Oto  basta  4.800  varas  sobre  el  nivel  del  mai*. 

£1  gato  tigre,' del  género  de  los  gatos,  llamado  también  gato-cer-* 
vante  ó  cunaguaro.  £ste  animal  tiene  como  4  pies  de  largo,  se  pa- 
rece al  gato,  pero  su  cola  es  proporcionalmente  mas  corta  y  su  piel 
mas  bella.  Esta  es  rojiza  adornada  de  manchas  negras  de  una  for- 
ma oblonga  sobre  el  lomo  y  los  costados,  redondas  sobre  las  patas 
y  ej  vientre.  Es  escesivamente  feroz ;  pre6ere  la  sangre  á  la  carne, 
por  lo  cual  es  mas  destructor.  Vive  en  la  misma  región  de  los  leo- 
nes aunque  se  le  encuentra  en  las  selvas  de  la  Guayana  á  solo  500 
varas  sobre  el  nivel  del  mar. 


> 

6RDEK  DB  LOS  VARSVPIOS. 


El  rabo-pelado,  del  género  sarigues,  es  poco  mas  ó  menos  del  ta- 
maño de  un  galo.  La  liembra  tiene  una  bolsa  á  manera  de  alforja, 
en  la  que  encierra  sos  hijos  hasta  que  están  capazos  de  buscar 
por  sí  su  alimento.  Su  color  es  blanco  sucio,  su  pelo  de  dos  espe- 
cies :  d  del  cuerpo  suave,  largo  y  blanco  por  debajo,  pardo  en  la 
punta  ;  en  la  cabeza,  cuello  y  demás  partes  corto.  Tiene  un  círculo 
pardo  al  rededor  de  los  ojos ;  las  patas  de  un  color  de  avdkaa , 
las  barbas  largas  de  un  blanco  ro^ ;  su  cola  es  mas  corta  que  el 
cuerpo,  desnuda  de  pelo,  y  solo  se  le  ven  algunas  cerdas  que  sal«i 


f 


eultalafi  eseastiUas  blancas-cj.neJa  cubren.  D^MTioa  de  di»  y. caza 
de  nocbe ;  vi¥e  sobre  los -árboles  y  ea  los  agujeros  de  sus  troncos  f 
ae  alimeota  de^najaríUoS)  cuadri^edos,  .insectos  y  aun  frutas ;  ataca 
los  gallineros  y  hace  destrozos  considerables.  En  cauliverio  esia* 
dolmite.y  no  muestra  diq;>osicion  álafauíiliaxidad. 

£1  ratón  de  monte;  del  género  sarigues,  es  un  animal  xm  poco  ma» 
grande  que  una  rata  y  vi^e  sobre  los  árboles;  se  sirve  de  su.  cola 
para  sostenerse  en  ellos.  Con  la  misma  se  sujetan  los  hijos  del 
lomo  de  la  madre,  la  cual  se  los  lleva  consigo  á  ia  menor  alarma. 

£1  lirm),  del. género  sarigues,  es  un  animal  anfibio  :  lo  llamaa 
también  pequeño  perro.  Es  lindísimo  y  vive  en  los  ríos  y  las  ciéna* 
gas.  Su  pellejo  está  cubierto  de  un  pelo  corto  mui  suave  y  de  una 
belleza  rara.  El  color  es  blanco  y  negro ,  de  una  simetría  tal ,  que 
comenzando  desde  la  cabeza,  forma  una  cinta  de  pelo  negro  que  se 
abre  en  forma  de  semicírculo  del  ancho  de  una  pulgada,  y  á  dos- 
dedos  de  distancia  sigue  se^u^f^,  tercero  y  cuarto  orden  igual. 
Como  estas  rayas  son  negras  sobre  un  fondo  blanca,  contribuyen 
mucho  á  la  belleza  del  animal.  Su  pequeña  cabeza  tiene  barbas  co^ 
mo  d  gato ;  los  pies  traseros  son  membranosos  ;  la  cola  ( con  la 
cual  agarra  como  ios  monos )  absolutamente  sin  pelo  desde  la  mi- 
tad hasta  el  estremo.  Este  animal  tiene  el  vientre  dividido  en  dos 
pedazos  de  pellejo  que  abre  y  cierra  tan  herméticamente,  que  ape- 
nas se  puode  reconocer  la  abertura.  Estas  partes  están  cubiertas  de 
un  pelo  corto  y  suave  :  con  días  la  hembra  cubre  hasta,  seis  hijos 
que  lleva  dentro  del  pellejo* 

« 

ÓRDBN  DE  JUMS  ROBDOUBS. 

La  ardilla,  del  género  de  los  de  su  nombre,  es  un  gracioso  anima- 
lilO;  agrada  á  la  vista  por  la  elegancia  de  sus  formas,  la  vivazidad 
de  sus  movimientos  y  gentileza  de  sn  disposición.  Aunque  es  natu- 
ralmente bravio ,  se  familiariza  mui  pronto  con  el  cautiverio ,  y 
aunque  tímido  recibe  con  gusto  las  caricias  de  las  personas  que  le 
alimentan.  Vive  ordinariamente  en  los  bosques  y  hace  un  nido  có- 
modo sobre  la  cima  de  los  árboles,  compuesto  de  hojas  de  musgo. 
Baja  rara  veza  tierra ;  su  alimento  consiste  en  frutos,  y  en  pájaros 
á  vezes.  El  color  de  la  ardilla  es  de  un  pardo  vivo  que  tira  á  roji- 
zo ;  el  pecho  y  vientre  son  blancos ,  las  orejas  están  adornadas  de 
tufos  de  pelo ;  sus  ojos  son  grandes,  negros  y  vivos.  Se  sienta  para 


—  U4  — 

eomer  y  lleva  con  las  manos  el  alimento  á  la  boca.  Hai  ardillas  de 
un  color  gris  negruzco  mas  difíciles  de  domesticar.  Estas  ultimas 
suelen  verse  hasta  la  altura  de  5.000  varas  sobre  el  nivel  del 
mar. 

La  rata,  del  género  de  los  ratones,  es  una  especie  de  las  inas  per- 
judiciales al  hombre.  Se  multiplica  con  una  rapidez  tan  asombrosa, 
que  un  solo  par  en  dos  años  puede  ser  el  origen  de  medio  millón 
de  individuos.  Felkmente  sus  numerosos  enemigos  impiden  esta 
espantosa  multiplicación.  Las  ratas  llegan  á  ser  tan  grandes  algunas 
vezes,  que  hacen  frente  á  un  gato  7  le  fuerzan  á  retirarse.  Sus  mor- 
deduras son  temibles,  su  índole  atrevida  y  en  ocasiones  se  destruyen 
ellas  mismas.  Parece  que  este  animal  ha  pasado  de  Europa  á  Amé- 
rica introduciéndose  en  los  navios. 

El  ratón  ^  tipo  de  su  género,  es  un  animalito  que  está  estendido 
por  toda  la  tierra  en  gran  número.  Sus  enemigos  son  también  nu- 
merosos y  fuertes,  y  no  tiene  medio  de  resistirlos.  No  se  ha  estin- 
guldo  por  su  gran  fecundidad,  pues  en  cada  cria  produce  de  3  á  í  O 
hijos  que  nacen  sin  pelo,  y  al  cabo  de  ^5  dias  pueden  subsistir  por 
sí  mismos.  Su  color  es  gris  de  hierro  y  los  hai  también  blancos  con 
los  ojos  encarnados.  Parece  haber  sido  introducida  la  raza  también 
por  los  navios  de  Europa. 

El  perro  de  agua,  del  género  myopotames  ó  covias,  casi  se  con- 
funde con  la  nutría  en  la  forma  del  cuerpo.  La  cabeza  es  como  la 
de  un  perro,  pero  el  hocico  es  casi  redondo  :  las  patas  cortas  y  los 
pies  palmeados  :  tiene  las  orejas  como  el  castor  y  las  barbas  fuer- 
tes. Es  anfibio ,  vive  de  pescado  y  se  nutre  también  de  yerbas  y 
frutas.  Se  pasea  por  tierra  no  lejos  del  agua,  nada  con  la  mayor  fa- 
cilidad y  se  le  ve  levantar  su  largo  cuello  mirando  por  todas  partes, 
zambulléndose  después  y  permaneciendo  mucho  tiempo  en  el  agua. 
Vive  eu  cuevas  que  hace  cerca  de  los  ríos  y  allí  deja  sus  hijos,  á  los 
cuales  nutren  las  madres  hasta  que  están  en  estado  de  seguirla  por 
tierra  y  i)or  agua.  Abundan  en  Ibs  raudales  de  Atures  y  Maipures 
en  el  Orinoco  asi  como  en  el  Guaviare  y  el  Inirida.  También  sue- 
len^veric  algunos  que  se  confunden  con  la  nutria ,  en  el  Apure  y 
sus  ríos  tributarios. 

El  puerco  espin,  del  género  de  los  coeudous ,  es  de  dos  pies  de 
largo  y  algunas  de  sus  púas  tienen  á  vezes  cerca  de  5  pulgadas  de 
longitud.  Su  color  es  gris  que  tira  á  negro,  resultando  de  una  mez- 
cla de  blanco ,  pardo  y  negro ;  la  parte  superior  de  su  cabeza  y 


f 


endlo  tkaie  nna  m«lliM  de  edpi9as  que  poe^e  ^riisar  ó  plegur  á 
VOliiBlad.  El  pelo  del  hocico  y  miembros  es  mni  corto,  las  poas  ó 
picas  que  cubres  el  lomo  son  mas  largas  hacia  el  medio^  terminaiir' 
do  en  punta,  y  marcabas  alleroativaaiente  con  aniLtos  negros  y 
blancos.  El.  puerco  espin  se  mantiene  ordinariamente  aoostado,  pe- 
ro se  levanta  cuando  se  encoleriza^  Duerme  casi  todo  el  día  en  su 
solitaria  madriguera  y  sale  por  la  noche  á  buscar  el  alimento,  que 
consiste  en  vegetales,  raizes  y  frutas.  Es  pacifico ,  nada  familiar  y 
muestra  apenas  una  sombra  de  inteligencia. 

£1  conejo,  del  género  de  la  liebre,  es  un  animal  que  tiene  las  pa- 
tas cortas,  la  forma  redonda,  el  color  leonado  ó  de  un  gris  meascfa* 
4o  de  rojo  y  el  pelo  corto ;  vive  de  raizes  y  abunda  considerable- 
mente. Bai  conejos  todos  blancos  y  otros  con:mancbas  negras;  sus 
jNitas  son  mas  largas  que  las  manos,  d^  suerte  que  mas  bien  salta 
^ue  anda  :  es  notable  por  sus  costumbres  dulces  y  su  estrema  fe-^ 
cundidad.  La  mayor  parte  hacen  sus  vivaos  en  los  bosques  en  que 
habitan ;  tienen  las.orejas  largas,  la  cola  corta,  y  viven  cerca  do  7 

anos.  

:  £1  chigüire,  del  género  cabíais,  es  un  animal  anübio,  que  tiene 
él  hocico  de  un  carneroy  el  pelo  tosco,  espeso  y  de  un  pardo  amar 
rillento,  la  cola  tan  corta  que  apenas  se  ve ;  se  alimenta  de  vege^ 
tales ;  es  tímido,  vive  en  manadas,  sale  ordinariamente  de  noche, 
si  bien  se  les  ve  de  dia  en  las  orillas  de  los  caños  y  ríos  tendidos  á 
la  sombra  de  espesos  arbustos.'  Nunca  se  aleja  del  agua,  á  la  que  se 
arroja  al  menor  peligro  que  le  amenazo ;  de  tiempo  en  tiempo  saca 
la  cabeza  fuera  de  ella  para  poder  respirar  y  se  le  ve  nadar  también 
eta  manadas.  Algunos  suelen  domesticarse.  Se  le  caza  no  tanto  por 
8u  piel,  cotno  por  su  carné  que  se  usa  en  los  dias  de  abstinencia* 
El  chtfdire  se  encventraen  Indas  las  sabanasyipeto  eón  mas  abun-^ 
dañera  en  las  de  iptire,  Batínas,  CaJrahóbo  y  Caricas. 

Elácortto,  del  género  cobayos,  es  un  animal  denlos  inas  fecundos; 
se  llaina  támbkli  conejillo  de  India.  Se  cree  que  un  par  puede  prb* 
dudrihas  de  SOO  ea  un  ^o  :  su  'color  es  blanco  varúfdo  de  mancháis 
negras,  amarüias,  naranjadab,  etc/ROey  deterioárt  todas  las  tíustan^ 
das  que  eácüeñti^.  Aunque  eseneiáliñé&te  i^ni^ro  /  atáea  taiftt* 
íáeñ  las  BÍaderas  y  yerbas  y  es  de  natural  mui  dutos'y  jlímido.  •  > 
: '  El  ag^iii  ó  acore  de  monte;  del  fénero  agulís,  abtaihi>en ) kys  boft> 
^es-,  <eQliBas  y  liados',  h^ieAdo  rara  vez  vivacoft^'pirqutB  ptiafiew 
los  tii|ed)s'deJos  IrolMps  do  los  áfclielea.  <:wre(«&a:Y«loiidadidani4> 


«5:-^ 


\ 


—  44$  — 


do'graiideB  Mitos  oonra  ht*líeim,  á  la  qu^'se  Mtm^'en  la  liÉaMit 
y  inaradel  oido.  Se  afímenCa  ^eraíze»  y  frntaa,  prefirienik»  teséííi 
Tena»  especies  de  palmeras.  Gome  oarne  y  pescado,  y  lleva  ooo 
maBOS  el  atímeatoá  la  beca,  sentándose  pani'Ooaier.'En  sus 
tos,  feeimdidad  y  delicadeu  de  su  carne  «e  semeja  al  conejo.  Seria 
«nm  conTeníente  que  se  le  reáajieee  al  estado  doméstíoo,  pueadh^ 
t&  entonces  un  producto  seguro ,  tanto  mas  cnanto  que  su  piel 
es  mui  fuerte.  Cuando  se  irrita,  ataí^a  coalas  manos,  y^enténcea 
suele  caérsele  parte  del  pelo  que  eriza. 

La  lapa,  del  género  pacas,  habita  en  los  bosques  particnlarmente 
it  1»  ot^Ha  del  agua  en  miringueras  que  ell»  misma^construye ;  m^ 
"da^  ntvi  bien,  su  voz  se  semeja  al  gruñido  de  un  cerdo^  se  alimenta 
^6  naiees  que  desentierra  con  el  hocico ;  su  oaraa  es  mui  gostosa^i 
tole  de  noche  para  buscar  el  alimento,  que  consiste  en-  raices  veg^ 
tales  y  fhitas,  y  devasta  las  plantaciones  de;  cana  de  azúcar.  Tiene 
eemo  2  pies  de  largo,  los  ojos  pardos,  la  punta  de  to  neriz  Begniz<> 
ea ,  el  color  taoiiádáy  subido  sobre  el  lomo  y  los  costados  marcadi9S 
con  cuatro  ó  cinco  bandas  longitudinales  formadas  de  manchas  blan*- 
queeiuas  ojaladas  ;  es  blanca  por  el  petho,  vientre  y  mejilliais.  Haí 
-alguna»  especien  que  son  partías ;  su  cameles  tierna  y  parecida  á  ht 
-éel  lechonciílo.  Abundl» este- animal  eea la* cueva  del  Guáchurodé 
h  provhacifi  deCumaná,  á  la  altura  de-4'.490*vara8^obre'el  nivel 
^el^mar. 

Xa.peiett,  típo^^^tetro,  8srim:amoial>tpe'teme:;diíiO:yílft 
Uma  :  «i>voz>so.deja^  rasa  ven  oíradn^dia,  pevo  d».9W8faeiti(Bi6  «i 
taiiento»«gudi>y)'i«etiflMro!:  de. tiempo  en..ti«ttpo.parecei|iite.pro^ 
rumpeen  un  «f  prolongado^-Se  le  halia:^cpiitinuaflMiite.8olNre'rlds 
láaeMes,  pnliCípal^l•ñi»i<dlD»e^ylq$nnio.  ^egiia  se  dieé,:ba}a  de- 
jándose éter  de'tos  4rboi»  éüañdoiiÑe  copiidisriaBthflías  dBi«» 
4m::  sehamvnto^^sín  eáibcrgO)  lalsaQaspeMEaa^qne  bá|anibiei»ffb 
•iMiávboles.  L&poMÍon  áus'fiEHiigiBisa  dé«itDSflBímatlés(e8il9tde^^ 
4av!en:ti0ffra  i^iesfluní  ttMfiniíiáiOfjagaBB|dDi4c.lMnf  boiifff  «éfpaml» 
qne.estámpnyaBdia«faréB.:£a  ÉoMpi^aeioDy(e|  mefÉmÍBnM:do^iil 
«qnebétO'pinuBbéB  .q«o«sfn¡e«in  úejotifi8tuhav'fin»x»(iJU9artQ  da 
ai»'liijo.*6Q  Mfiloios  mas Jargobtn  itiemyo  do<irio^  y  á*v¿to  5&ifs 
te:  inísiOwdMnirf  4:8 '  htMs  ■•a^dú8;oLo¿iai»tmkiwlbpag«fabp<Éragi 


f 


son  mai  lentos  y  mucho  mas  en  tierra  por  la  estmctnra  de  su 
coerpo.  En  la  parte  elevada  de  la  serranía  no  se  le  encuentra^  por- 
que parece  que  no  existe  este  animal  á  mas  de  i  .200  yaras  sobre 
d^aWeldel  Oeáitie*  ,    '      " 

^Eltcachieano^  del  fineio  Mms ,í es «neuadrápedo  del  tamaiO) 
de  Júmpesm  pe^Mfto  ^ufonnda  en  las  cabanas ;  típoe  el  cuerpo  en* . 
bieitO'  de  una*  'conifla  gnameoida  de  eseamas ;  dos  grandes  piezas . 
csbiepi  su  lemof^  rabadUla,  entre  las enales  se  hallan  bandas  de 
iwamas  hmib  péqueüa^.  No  tíene  malidaalguna,  p«ro  hace  daño  en 
los  jaBdiaes/  comiéndose  les'inekMies,  pala4as:y4»tffos  vegetales.  Ho^, 
ppede  tr^pai?  ni  saltar  y  cerro  regnlannente.  Para  coger  el  cachi-. 
eamoeS'pisecásoinarabarsobreél  de  frente,; pues  las  escamas  de  la 
eabeaa  nojíepetmitett  ver  hada  delante  sino  por  los  costados.  Vive. 
en<  coeveasnuii  profundas'  y  dispuestas  dcr  modcK^^el  agua  no  le. 
pef^udifiue.  £n  la^madrigoera  se  hincha  de  modo  que  es  ditíeil  sa- 
carle y  pero:  ponúéodole  un*  dedo  ó  cualquiera  otm  cosa-en  el  orifr* 
cío,  iameditta«<?n/re se  deshincha  y  aesaca. 

El  oso  (ialmero>y  del  gteero  komiigperoS).  tídBe  4  pies  de  longi- 
tud» la  eob  de  5  pies  de  Un^^  oobiertade  peloS' lisos  y  lai^  que 
íentíin  eomauDa  palma,  y  la  eabeaa  estrecha,  los  <<3>ios  p^neAos  y/ 
nebros,  la>  beca  sumamente. pequeia ,  la  leugua  inui  larga  y  re- 
donda, losvpies  Yi  mavios  armados  4e  uñas  y  la»^de  delaute  mui  lar»; 
gae  y 'capazes^de  beiir.  Xodo^  ^pelo  está  saezeiado  de  nsgro-jy» 
Uhttoo),  .se. jiianjiiene  de  hovnigasf. pastee  ^e  eoio  vive  eu  le»4 
para|ear  ettdQS><  pajMttBHlaflDaeateenltlas  siMnal^ 

£1  oao^melero ,  dd  gánero  hoimtgiieros,  e^de  un  color  ^sncsKi 
müento,  mas»chiiv;«i  k parte  supener* de )a.oalM{i,<y>la,panlep. 
ialbñer  del-úueqiOsClasbiMigraí;  Mane^iceiva  de  3;piisrdeJafgOytla> 
uaben  eoala'yau^iíitKia'no.pasa  deunípié»  ÜMoaia^mítí  y^oHab 
éalMihide unarigHBiMigaMdiwiryaBa dasaabriK laa eabnenus  sin^la*-^ 
moRdBíla)r^daduraRde.laaabi¿as^élas*q)*e(pifliaD||  Ma.píelldflufts 
yrckbietta^de'iMlhs^  V'inis  en:  las^  n»ntaftas)yfipaiiBs  .pooo^  haiñtacto 
dBila  JsoMi caUcntB :  suele  afíaianlanB.de(pi9tfrfl|os'yEatQnesj}lae»o 
lR:maÉ9bsaii;á los-iiiioleB ,  AMme^diaBde'dbiqiefdenoeheíyfattr 
dáanalieBisÉnD  liblilidndbdeéÍ8i|>fei4ueílD« 


.    •  ) 


< 


— -IM  — 


ÓEDBlC  DB  L08  PACHIDBUIBS. 


La  váquira,  del  género  del  cerdo,  es  una  especie  de  cerdo  pe- 
queño y  sin  cola ;  so  color  es  gris,  el  lomo  y  costados  negros  con  al- 
go de  pardo  á  los  lados  de  la  cabeza,  cerca  de  las  orejas.  Sus  barba» 
son  laquas  y  compoestas  de  cerdas  negras ,  que  tiene  también  sobré 
los  ojos  :  el  hocico  es  blanco.  Las  váquiras  van  en  tan  numerosas 
manadas,  qae  algunas  vezes  llegan  á  mas  de  mil  individuos  de  fon- 
das edadeS;  que  atraviesan  inmensas  ostensiones  de  terreno.  Si  tie- 
nen que  pasar  un  rio,  la  que  va  á  la  cabeza  se  detiene  un  instantey 
Juego  se  arroja  al  agua. y  es  seguida  de  todas  al  momento.  Cuando 
ven  alguna  cosa  que  les  alarma  ,  se  les  oye  un  castañeteo  en  los 
dientes ,  se  paran  y  eiaminan  el  objeto  de  su  temor.  Si  algún  cal- 
zador se  aventura  á  atacarlas  cuando  están  reunidas  en  gran  nu- 
mero, le  rodean  y  le  hacen  pedazos  si  no  logra  subirse  á  algún 
árbol  para  sustraerse  á  su  venganza.  Abundante  es  en  las  selvas  de 
la  Guayana  y  en  toda  la  parte  cálida  y  templada  del  pais. 

'  La  váquira  de  collar^  del  género  del  cerdo,  es  igual  en  la  forma  á 
la  anterior ,  pasa  su  vida  en  los  bosques  y  anda  apareada  ó  en 
pequeñas  piaras.  Sé  alimenta  de  vegetales  y  raizes  que  se  procura 
hozando  la  tierra ;  come  también  pescados  y  reptiles ,  y  destruye 
muchas  serpientes.  Se  oye  su  gruñido  á  una  distancia  considera- 
ble. Tiene  una  glándula  colocada  en  jnedio  de  los  ríñones  con  la 
que  arroja  un  liquido  iafecto  á  los  que  la  persiguen.  Tiene  cerca 
de  &  pies  de  largo  y  una  raya  amarillenta  ró<lea  su  cuello.  Se 
mansa  con  fecUidad  y  puede  vivk  ei|  el  estado  doméstico.  Su 
carne  ^s  buena,  pero  fá  momento  de  matar  la  váquira  es  preciso- 
^piitarle  inmediatamente  .  la  bolto ,  porque.^e  \o  contrario  no  se 
podría  comer.  Se  encuentra  este  an«nal  ea  las  llanuras  y  sabauaa. 
ekivadas  ha^  la  «Hura  de  2.400,  varas  sobre  el  nivel  del  mar.    : 

'  la  dMta,  del  género  tapir,  tiene  como  6  píes  de  largoi  Su  colnrr 
er  moreno  oscuro ;  bkwco  puro  los  lados  del  labio  inferior.  Tionéi 
«na  banda:  á  loiargo  del  nadmieato  de  Jas  crines  y  al  jr6deéMr:de; 
las  orejas  ;  el  pelo  es  corto  y-  la  piel  mui  gruesa;  La  oabezatermi'^ 
na  en  un  hocico  ¿  especie  de  trompa  cubierta  de  pelos  del  mismo 
eolor  que  el  resto  del  cuerpo.  Vive  solitaria  en  lo  interior  de  los 
bosques  y  á  las  orillas  de  los  ríos ,  y  huye  de  la  vecindad  de  los 
hombres.  Se  alimenta  de  vegetales,  es  de  un  natural  tranquilo  y  no 


f 


— 469  — 

aUca  al  hombre  sino  en  propia  defenia.  Se  amaiiai  y  8i|f]e  á  sil 
amo  con  doeilkUd.  Sn  carne  es  escelente.  La  danta  se  eacaentra  en 
les  llaoos  y  en  la  serranía  elevada, 

ÓSDBM  DB  LOi  ROMIHAHTU. 

.  £1  venado,  del  género  de  los  ciervos,  es  cuando  pequeño  de'u» 
color  leonado  mosqueado  de  blanco ,  cuyas  manchas  pierde  á  me- 
^da  que  crece  y  y  al  año  se  le  ve  leonado  rojizo  :  debajo  del  pecho 
y  de  la  cola  es  blanco.  Su  asta  crece  á  proporción  de  los  años  y  su 
OAyor  altura  es  de  dos  pies.  Es  estremadamente  vivo ,  habita  los 
bosques  y  las  sabanas,  en  las  cuales  suele  vérsele  en  manadas.  No 
se  sirve  de  sus  astas  para  defenderse  y  sí  de  sus  pies  :  la  hembra 
00  tiene  cornamenta  ramosa.  Este  animal  come  fratás,  yerbas  y  re- 
mievos  de  los  árboles.  Se  retira  á  lugares  ocultos  para  rumiar ; 
üeae  el  oido  y  el  olfato  mui  finos.  La  hembra  pare  uno  ó  dos  cer- 
vatillos. Se  amansa  fácilmente,  pero  no  se  pueden  poner  juntos  dos 
machos,  piurque  se  combaten  hasta  morir.  Los  bal  de  varias  especies . 
y  entre  estas  unos  eaieramcate  Mancos  con  las  mismas  calidades. 

6bDSH  di  los  CBTÍGBO0. 

£1  manatí ,  d^  g^n^roi  lamentino,  es  anfibio ,  herbívoro  y  nada> 
9B91Í  bien ;  poro  np  puede  arrastrarse  sobre  la  tierra  con  facilidad, i 
aunqiké  tiene  la  costumbre  de  arrimarse  al. borde  para  nptrirse  .4o. 
yerbas  y  de  la  cortesa  de  los  mangles»  Es  de  ^  O^á  -1 5  .pies  de  largo^ 
y  su  color  gris  ceniziento.  Tiene  un  buen  natural,  los  cyos  peque-. 
]|es  y  está  obligado  á. salir  frecuentemente  á  flor  de  ^ua  para  po- 
der respirar»  Su  eaero  es  m^s  grueso  y  eqp^o  que  el  del  l^uei  y.  su., 
carne  tiene^.gpsto  de  la  d^  este ;  la  grasa  es  abundante  y  liüLpara 
el  Alumbrado :  suele  pesar  de  500  á  804  Ubnis,.  Este  animal  jtienedps 
pef^ueltofi  braios  ó  aletas  irregulares  si»  división  de  de^os  ni  de 
uílas.  La  hembra  «Melé  llevar  en  sus  brazos  dos  hijuelos,  qu^  geno* 
i^ibnente  son  luN94>ca  y  macho  :  los  estrecha,  contra  el  e^ t<iw^  y 
los  piulre  de  imia  leobe  grue^  basta  que  pueden  seguir  á  la, 
madre.  Hai  muchos  manatíes  en  el  lago  de  Maracaibo,  enet  CMri«t 
ñoco  y  en  algunos  de  los  ríos  que  caen  á  este. 

La  tonina,  del  género  de  los  delfines,  tiene  como  9  á  40  pies  de 
largo  y  2  de  diámetro ;  su  color  es  negruico  en  el  lomo  y  el  del 


\ 


ó  dos  hijos  que  cria  con  cuidado  lU«iníbloB!«B(aaa>akatas  wáimíi  m 
están  débiles  :  ejerdtalos  en  nadar ,  juega  con  ellos ,  los  defiende 
con  valor  y  nunca  los  ahandana¿  Sejfttimenár.de  pezes,  príndpal- 
mente  de  torácicos.  Abunda  en  el  mar  de  las  Antillas  y  en  el  At- 
lántíoó  :'  hm^BB  naweiiis9s>  ee^vem^n)  loe  »s  Afrare^y.  Maood. 
Bbí^  €ruanaie>y  d^Aáibag^ ^hay—wiía» t— Mwsy  sedadft'si im^ 
bfán  ll^|[add  att¿]»iiiflatendo¿por  et  ttrÍBO0o.<iibien'por  «eLA^^ 


II  ífisetn:  ó(cliacal0te ,  et.iBiBiliéL ^ig|iBtiMciKH|iie' mlSiza^  ow 
1» ballena  y.lÍ6|sa  á.4aMr'40:plB8ad&  laigoy  mas' de  4Qide  elwiii»-* 
íeceaBta!:<8U  eriKaa*  ocupa;  la 'inatota  parte  de  la  masa  tétal.  Iste"' 
c^oBOies^  de  .naftvral  fan2  y  ivuir  terrible  ;.8in;  «nbargo  esdi^Blr 
deia^  penevmqoít  d^ bofiii»ney  ponfae^suLgraaaiesperout  y  él  émbsr 
qo»  tieníe  eon  cebes  demadiadoi  poderoso»  para^^e  aifuetna  anuí»' 
tfe:loBipolígiiw<qoeliai>en^<8u>peN9Ba  MiüttnJiiesimsimaces.fá't^e^ 
ras  40:lesPii«i«nib8ndafda&'«imev6iaB.  No  iMK» 
VLK^ deidfos.^qatdé^bacrado'^eniks oMMi^oUDeiUidiiee  y^la  bwar 
del  Uñare,  causando  tal  putrefacion,  que  infectó  todo  el  aire  de 
aquellas  comarcas, 

£1  narval,  llamado  pez-espada ,  tiene  de  20  á  25  pies  de  largo ; 
m  fsrma'es  ot^i,  carece  dé  ^eotes)  peponie  lá>iiiaiidíbuki  superior 
Icsalé'ma  pua^déiiueso  >que  »0'teja^de74  tO  pies  de  Mgo*  Goff 
ék  Étaca'á'SUs^eneniigos^iiF  «esoeptuar^lli  bsüeiia»,  AtraTesáiidMiMí 
dtcverpo.  £a  fúemi'celique'^lardeBelBUP^es^liiyVqvepaMtBa  enél 
cáseo  dé  hiB^enlbareaéíbwM.  Estapua'^n^de^vn'maflF  pBeftrfUle  al 
d^Méfliitte/ perqué*  jamas-' 96  imne  amariHo*.  Hki^  bastantes  dé  ellw 
sobre  nuestras  «osto  y  piíiMsipáttneikle'^a  las  de^ilaraoáSbo;. 

TFode^^estes-  eetáoeo&«paMemá>  prüaientMriMa  ^tl6'd§bicMn>^ei(«K' 
oeoer^á^  Ibi^Ms,  pisl^él  *  examen' pmebttlO'eittti««6.<l^é0(M8^«-' 
ron  por  les  pulinonesj  lo-cval  te&^bBgaá  8álli^^e>tiMÉpó>ett  lie^plff 
SQt^reflasnperfleiedél^agcm»  para' tomar  el'iíre'fieeesatíoiá^la  eon^ 
servvemck  dd  kr  #fe/8ií'eaBgre  es'cáli^liBf/^uMfíVH^ 
r'ias'meífb^  e9iéán'pr0tl0tas<^  mi  aparéfeéxafiíiálrío'í^ 
maMiÉK>9. 


f . 


f 


—  *n  — 


AimUUSS  COADEÚnSOOS  DOMÉSTICOS. 

Eaflmeoados  los  animales  cuadrúpedos  q]aer  se  crian  sUyestres  en 
el  país  y  yiyen  independientes  en  los  estensos  y  espesos  bosques , 
paflaremoft  en  reyista  los  que  el  hombre  europeo  ba  introducido  y 
domesticado  sacando  de  ellos  inmensociiieneficíos.  Para  poder ,  en 
elerto-BMde>  dar  una  idea  aproximada  del  producto  de  la  cría,  ha 
sido  necesario- hacer  un  trabajo  prolijo  sobre  la  pobladcm  dedicada 
á  eUsi,  y  ademas  iada|;ar  el  número  de  indiyidnos  ^ne  consumen 
iál  O'  cual  e^peoie, ;  ikiico^  medio  do  Uegar  al  conocimiento  del  con- 
suno de  cada  Qnay.piu»ude.ahlayerignar^  los  datos'  estadísticos 
emitidos  ea  esla  obra  coinciden,  coa  k>  que  del  cálenlo  resulta. 

fiai.  pueblos,  que  comea  solamente  carne  de  cabra,  otros  de  esta 
y.  de. pescado.;  cuales  carne-  de,  reses.y  de  las  otras ,.  mientras  mu- 
idlos, aonntren  dasob  peseado^  carne  de  cerdo  y  mucha  cazería* 
£n  iOin^.poblatíones.enteras  halqiae  yiyeade.una  mezcla  de  todQ% 
Bor  tanto,  desp.ues  de.nn  maduro  examen  apopido  en  los  conoci- 
mientos práctixx)s  que  tenemos  del  país  y  en  las.  noticias  adquiridas 
en  todos  los. pueblos  y  luganes^  se  han  lormado  los  siguientes  ro* 
aúmenest 

•éh  dedicados  á  la  agricultura ^12.489 

1^  dedicados  á  la  cria 244.976 

dedicados  al  comercio,  artes >  etc.,  etc.  •  .  •    235^^.4'68 


a 
loo 


Téuii  .  .  ,  •   w^ims 


JMUoi  iiukpetíáieniós* 


*■    4 


\ 


52.4f5 


•¡^  aplicados  á  la  agricultura.  ....  276.50 

•iK^iaflkialteiiiteittEÍa.  ...i.  .....•.«    .7 JIM 

1^  'apl|óadt>K¿üai:pnc»  y)onBa% «  JAtLMXii 

Total  general.  .  •4>.g....<..  .•MffjMK 


\ 


—  478  — 

Retúmen  de  la  pobkteion  dividida  según  sus  alimentos. 

•^  comen  carne  de  ganado 285.604 

ró  comen  cabra  y  carnero A  89.069 

•¡^  comen  carne  de  cerdo .  ^  89.069 

•Po  comen  pescado.  •  •  •  • 94.557 

~   viven  de  caza •  •  •  94.55T 

7^  comen  legumbres,  queso,  leche 94.557 


Tolal. 945.548 

A  mayor  abundamiento  se  ha  formado  el  estado  que  sigue  para 
que  se  vea  el  número  de  animales  que  según  los  cálculos  del  autor 
había  en  cada  pronncía/en  los  anos  que  estuvo  trabajando  en  dlás 
para  bacer  los  planos  corográficos  y  dar  al  gobierno  las  noticias  mas 
exactas  posibles  sobre  la  estadística  del  pais.  Mas  como  estos  datos 
se  han  conseguido  en  diversas  épocas,  ha  parecido  conveniente  re- 
ducirlos todos  al  año  de  -1 859 ,  teniendo  presente  las  perdidas  su- 
fridas en  los  diferentes  puntos,  por  guerras,  pestes,  ó  mudanzas  dé 
animales  de  unos  lugares  á  otros.  Estos  estados  ademas  de  servir 
de  basa  á  la  riqueza  pastoral,  tienen  la  ventaja  de  dar  á  conocer  ló 
que  existe  en  cada  provincia  y  en  cada  zona,  de  ub  modo  aproxi- 
mado, por  haber  sido  imposible  calcularlo  con  certeza  en  yista  dé 
la  falta  de  datos  oficiales  y  metódicos  sobre  estos  puntos.  El  pais , 
recien  salido  de  una  lucha  larga  y  sangrienta  que  lo  trastornó  y 
consumió  todo,  carece  de  casi  todas  las  administraciones  que  en  las 
naciones  cultas  y  ricas  se  ocupan  en  la  formación  y  arreglo  de  la 
estadística  general^  basa  indispensable  de  todo  buen  sistema  guber-- 
nativo  y  económico. 

....Los  cálculos  que  haremos  sobre  el  consumo  de  los  anímales  pro- 
barán cuánto  se  acercan  á  la  verdad  los  resultados  ya  enunciados» 
Ellos  servirán  en  tiempos  venideros  para  conocer  el  progreso  ge* 
neral  de  la  cria,  y  estimulará  á  los  encargados  de  la  administración 
de  las  provincias  á  formar  sofafre  basas  sólidas  unas  averiguaciones 
cuyo  objeto  es  dar  á  conocer  la  riqueza  de  un  pais,  y  los  medios  de 
aumentarla. 

Antes  de  presentarlos  estados  yloscáteialotindioados^^a#$tará 
de  mas  dar  una  ideado  los.ganaAav»qarmftianeB.lla'¿i[k¡ca4^  la 
rflvoludon^  y  ío  que  quedó  después  de  22  años  de  una  guerra  san- 
grieáfá  y  desoladora«  •  .•     i      '      ' 


f 


—  475 


£1  Sr.  Deponsí  que  habitó  mocho  tiempo  eo  Caricas ,  y  cayos 
infonnes  estadísticos  son  por  lo  general  exactos »  eompatjó  qae  el 
número  de  ganado  vacuno  sabia  en  aquellos  inmensos  llanos,  desde 
la  boca  del  Orinoco  basta  el  lago  de  Maracaibo,  á  4.200.000  ca- 
bezas ^  á  480.000  caballos,  á  90.000  malas ;  haciendo  subir  ei 
yalor  que  producían  aquellos  ganados  á  5.000.000  de  francos.  Si 
reflexionamos  que  esto  se  graduó  para  el  año  de  4804,  en.  el  de 
4  84  2 ,  que  fué  la  ¿poca  eo  que  empezó  á  ser  desastrosa  la  guerra , 
podía  haber,  según  la»  reglas  de  la  duplicación  que  mas  adelante 
se  yeráu,  en  ganado  yacuno,  4.800.000  caberas;  en  caballos, 
450.000,  y  270.000  malas.  Por  los  informes  adquiridos  en  los 
lugares ,  después  de  la  guerra ,  habria  quedado  á  lo  sumo  en  cada 
provincia ,  en  ganado  vacuno  lo  que  sigue  : 

En  Apure 200.000 

—  Caracas 45.000 

—  Barínas 40.000 

—« Barcelona .  40.000 

—  Carabobo 5.000 

—  Cumaná , 4.000 

—  Guayana. 4.000 

—  Maracaibo 3.000 

—  Mérida.  •    .  . 2.000 

—  Barquisimeto 2.000 

—  Trojillo •     •     .     .  4.600 

—  Coro  y  Margarita 0.000 


.■•i»»»»»»^— ^■•■•^•""■^^ 


Total 256.600 


El  Apure  fué  el  semillero  de  la  reproducción  del  ganado  :  allí 
ocurrieron  de  todas  partes  á  comprarlo,  y  en  él  día  se  tiene  ya  el 
número  de  2.086.724  cabezas.  Las  muías ,  ademas  de  la  destruc- 
ción de  ellas  en  la  guerra,  sirvieron  á  los  patriotas  para  procurarse^ 
armas,  municione.^,  víveres  y  ropas,  trasportándolas  al  estranjero; 
y  ademas,  en  los  últimos  años  de  4853  á  4857 ,  la  peste  devoró 
lo  que  se  habia  aumentado.  Por  ló  que  toca  á  los  caballos,  fácil  es 
imaginar  cuántos  se  consumirían  en  una  guerra  tan  larga ,  y  cuán- 
tos se  destruirían  en  aquella  misma  época  de  la  peste ;  fué  en  tér- 
minos ,  que  muchos  ha^qs  quedaron  sin  un  solo  caballo. 


\ 


ESTADiSTIGII 
de  loB^gamAosy  aaioidMNto'eña  de  VeneEO^,  dMéidBB:piNr:aDnas,  hecha  «É 


Alio*. 


1884 
1888 
i88» 
48» 
48S5 


1884 
18S1 
1888 
18S8 
1819 


I89IT88 


NOMBBE 


BB  LiJvPBOmiOUf. 


Gabácaa. i «..  ...^.. 

Gababobo ..«.«•... 

Barquisimbto « « . 

BABÍHA8 

AruBB , 

fxméxL 

BAB€BL0NA 

Ck>BO .....' 

Maboakita... «...#.... 

MáUOA... , 

Twonujo 

Mabacubo 

GUATANA  

Total 


BB  la  ¿OKA  A6BIGULT0BA. 


Oaaado 

TI 


GaB¿0A8.«..>« 

GABABOBO.* » 

Babquisiiibto 

BaBÍB  A8 

AVIMUI^.......*..».»....^  ...,•• ...... 

Gomaba 

1889  /    Babcrloba » 

COBO 

JSUtflABZTA.. •.... 

IttBIBA ;.. » 

T^anuj}.., 

Kabacaibo 

GüATANA... 

Total 


19,189 

8,985 

13,187 

» 

» 

9,4&4 

1,884 

4,110 

309 

5,799 

4,588 

11,825 

» 


71,743 


L«MZ  7 


47,j 

4,330 
175,907 

» 

40,587 

•  TS66 

900,500 

15,n0 

21,471 

6,915 

63,884 

» 


516,880 


Mal». 


4,453 
M09 
2,584 

» 

762 

72 

800 

a» 

4,900 

700 
181 
» 


11,820 


Caballos. 


4,651 
1,752 
3,319 

» 
1,068 

340 
1,286 


587 
939 
470 
» 


14,065 


Boma. 


9,958 

5,888 

14,026 

» 

» 
1,851 

554 
7,105 

864 
1,660 

445 

500 

» 


41,646 


Godoi, 


16,000 
14^000 

19,000 

B 
B 

a»ooo 
i>ooo 

5,000 
900 
9,000 
1,000 
1,900 
» 


68,ftO0 


ESTADÍSTICA  CALCULADA 


38,264 
22,632 
29.651 

» 

» 

4.964 

3,168 

16,440 

544 
34,374 
26,328 
52,006 

B 


927^768 

■BHCBBaí 


54,520 

8,906 

10.755 

2,418 

527,721 

5,168 

» 

» 

» 

» 

18,544 

1,334 

1,032 

144 

802,000 

1,600 

27,576 

104 

127,026 

4,500 

41.490 

4,200 

224,291 

■    "724 

» 

» 

9,302 
3,504 
6,658 

» 
1,868 

680 
2,80% 

618 


1,454 
1,880 


MU,«8f 


_ 


29^090 


31,718 


19,906 
11,796 
28,042 

» 
■  » 
2,564 
1,106 
28,490 
637 
8,800 
2,670 
5,587 
» 


108,690 


96,000 

18,000 

24/X)0 

» 

» 

5,000 

S,000 

9,000 

9,000 

9,000 

5,000 

8,000 

» 


106,000 


f 


BNERAL 

Kerentes  años  y  calculada  d«ypM  |Ai:a  isab^r  loc^i^eliftbmfel  año  de  1839. 


II 

BN  LA  ZONA  PA9T0EIL. 

• 

• 

TOTAL  GEKBRAL. 

Oaiuido 
▼acuno. 

Lanary 
cakmao. 

MslM.  : 

CiabaUes. 

Bam>8» 

1 

COTdot* 

Ganado 
taoano. 

* 
Lanar  y 

1 
VttíéM. 

CdMain» 

Borros. 

Cerdos  • 

05,i»^ 

54,47<> 

*  » 

3^658 

15,977 

8^kÜ$ 

18,000 

222,554 

51,430 

8,291 

18,628 

18,378 

34,000 

66,600 

3,350 

1,090 

5,670 

1,940 

14,000 

75,585 

6,670 

2,299 

7,422 

7,838 

28,000 

» 

» 

» 

» 

)) 

» 

18,187 

475,907 

8,584 

3,318 

14,026 

19,000 

173,604 

10,606 

8,751 

47fÍ43 

7,081 

45,008 

f73,'608 

10/166 

5,T61 

17,li4« 

7,051 

45,800 

100,800 

1,515 

3,383 

3M8D. 

3^83» 

30,«0O 

3Q9&680 

1,M5 

3,383 

3f,59D. 

3,099 

30,000 

34,68S 

3,487 

310 

1,870 

730 

6,008 

57,lj57 

• 

3,694 

972 

3,938 

3,084 

9,000 

149,913 

«,o«^ 

967 

8,109 

2,917 

13,000 

150,797 

5,591 

1,059 

8,449 

3,471 

18,000 

» 

» 

» 

» 

» 

» 

4,110  ' 

200,500 

860 

1,286 

7,108 

8,000 

» 

» 

» 

» 

» 

» 

309 

15,776 

58 

365' 

864 

900 

» 

»• 

» 

» 

» 

j» 

3,739 

31,171 

ijoao 

887 

4,660 

3,000 

» 

»i 

A 

» 

» 

» 

4,388 

6,915 

700 

%9 

445 

1,000 

» 

» 

» 

» 

» 

» 

11,835 

63,884 

484 

470 

300 

1,300 

54,814 

3,757 

148 

778 

628 

1,000 

54,814 

2,757 

• 

148 

778 

688 

4,000 

183,146 

59,530 

42,?567 

69,436 

24,790 

446,000 

958,859 

576,410 

24,187 

83,501 

66,436 

179,100 

>ARA  EL  AÜO 

1859. 

• 

406,844 

38,340 

3,000 

6,877 

8,428 

30,606 

445,108 

72,770 

11,906 

16,279 

38,831 

86,000 

118,800 

4,488 

1^080 

3,780 

3^000 

30,006 

441,483 

14,878 

5,508 

7,304 

44,776 

38,000 

» 

» 

» 

» 

» 

» 

29,^51 

527,721 

5,168 

6,638 

28,043 

34,000 

517,813 

31,818 

3y000 

8,300 

9,500 

138,507 

>517,8ia 

81,818 

8,000 

8,300 

9,500 

136,507 

404,800 

3,030 

800 

7,2  0  0 

3,200 

40,000 

401,600 

3,050 

800 

7,aQ0 

5,300 

40,000 

60,680 

5.497 

868 

3,373 

4.500 

14,000 

65,024 

33,981 

4,702 

3,141 

3.664 

19,000 

398,436 

10,050 

1,834 

16,318 

5.834 

44,000 

801,594 

41,083 

1,979 

48,898 

8,942 

17,000 

t* 

V 

-» 

». 

» 

i» 

.48,440 

802,008 

4,600 

3i)S7S 

38,430 

9,000 

n. 

» 

» 

>> 

ft 

541 

27,578 

104 

618 

637 

^000 

» 

» 

» 

D 

» 

34,374 

127.026 

4,800. 

^323 

8,300 

9,060 

» 

» 

» 

» 

» 

26,828 

41,490 

4,200 

1,434 

3,670 

5,000 

» 

» 

» 

'» 

» 

53,006 

224,221 

724 

1,880 

5,597 

5,000 

54,814 

3,7W 

148 

778 

628 

2,860' 

.  34,8U 

3,787 

4M« 

778 

628 

8,000 

1,858,856 

85,465 

10,310 

48,448 

34«887 

286^587    MM,7U 

4,91A,84i 

38,338 

!r8,164 

140,507 

• 

868,507 

< 


I 


—  ne  — 


\ 


DE  LA  CRIA  DEL  GANADO  TACÜNO. 

£1  bnei  no  existia  en  América  y  faé  introdaeido  por  los  españo- 
les. Por  la  estadística  babia  en  4859  la  cantidad  de  2,086.724 
cabezas  en  las  tres  zonas  del  pais.  La  sola  provincia  de  Caracas  que 
contaba  el  mismo  año  con  una  población  de  242.888  iqdividaos 
ba  consumido  &2.489  reses.  Esías  haa4>agado  derecho  en  las  ren- 
tas municipales,  y  á  ellas  se  deben  agregar  cuando  menos  2.5H 
que  se  bán  matado  en  los  batos  para  el  uso  de  los  propietarios  sin 
pagar  derechos  :  tendríamos  pues  un  total  de  45.000  en  un  año. 
Según  esta  proporción  deberla  el  resto  de  la  repúbUca ,  deducidos 
los  indios  independientes,  hacer  en  un  aAo  uu  consumo  de  '1 65.440 
reses.  Para  averiguar  si  este  cálculo  es  exacto,  debemos  tomar  los 
resultados  que  dan  los  estados  que  anteceden  y  encontraremos 
que  tres  décimas  partes  de  la  población  comen  i»urne  de  reses.  Pon- 
dremos para  cada  individuo  42  onzas,  lo  que  baria.8.564  arrobas 
de  25  libras  al  dia  ,  y  en  un  año  5,405.960.  Demos  por  término 
medio  á  cada  res  4  8  arrobas,  y  resultarla  para  este 

consumo 472.442 

Se  han  esportado  en  pié.  ,  .  •  • 8.949 

Se  han  esporlado  en  carne  salada 55  i 

To!al 48Í.752 

Si  en  logar  de  tomar  la  proporción  que  se  acostumbra  en  el  lla- 
no, de  que  4 .000  cabezas  producen  400  para  vender  anualmente, 
se  toma  una  menor,  es  decirj  tan  solo  de  90  ,  resultarla  que  debe 
haber  en  toda  la  república  2,049.244,  resultado  que  casi  coincide 
con  la  estadística.  . 

Otro  düo  no  menos  curioso  é  igualmente  útil  nos  conduce  al 
mismo  resultado.  De  las  2,086.724  reses  supongamos  que  dos  ter* 
ceras  partes  sean  hembras,  á  causa  del  gran  consmno  de  los  ma- 
chos, tendríamos  el  número  de  4,594.448,  de  las  cuales  quitada 
la  mitad  por  las  terneras  y  novillas  que  aun  no  paren ,  habría  eu 
vacas  ó  novillas  que  paren  695,674.  Deduciendo  un  tercio  por  las 
que  suelen  anualmente  quedar  sin  producir  (regla  mui  constante  y 
conocida  en  el  llano)  quedarían  en  estado  de  producto,  465.585 
reses ,  que  producirán  oivos  tantos  becerros  ó  becerras ;  pero  aun 


f 


—  177  — 


estos  no  todos  llegan  á  lograrse,  y  comunmente  tiene  el  ganadero 
una  pérdida  del  -10  por  ciento  que  serian  en  este  cálculo  46.558. 
Queda  pues  un  producto  neto  de  446.955  cabezas,  que  suelen  lla- 
marse de  hierro  arriba ,  es  decir,  que  han  llegado  basta  la  época 
de  poderlas  marcar  con  un  hierro  caliente,  lo  cual  se  ejecuta  al  año 
de  nacidas. 

Los  ganaderos  para  saber  el  número  de  sus  ganados ,  multiplican 
el  numero  de  herrados  por  5,  y  el  producto  les  da  el  de  la$  cabe- 
zas que  tienen  en  sus  rebaños.  Sirviéndonos  de  la  misma  regla 
multiplicaremos  416.955  por  5 ,  y  el  resultado  de  2,084.675  será 
con  mui  pequeña  diferencia  el  mismo  número  calculado  en  la  es- 
tadística. 

De  lo  espuesto  se  deduce  que  bal  un  producto  de  446.955  reses^ 
y  tan  solamente  un  consumo  de  4  81 .722.  Claro  es  pues  que  sobran 
anualmente  255.245,  á  las  cuales  deben  unirse  las  que  van  sucesi- 
yamente  pariendo,  k  los  4  años,  á  pesar  del  consumo  actual  de  la 
población,  el  ganado  duplicará  su  número,  pprque  este  período  de 
4  años  es  mui  conocido  del  llanero ,  y  para  él  es  una  regla  que  na 
falla,  salvo  por  la  peste  ó  la  guerra. 

Si  analizamos  mas  las  cifras,  nos  conducirán  á  otro  cálculo  bien 
notable  sobre  el  producto  de  la  leche  y  del  quesa 

De  las  446.955  vacas  paridas  que  conservan  su  cria  durante  un 
año ,  y  que  pueden  proporcionar  leche  suficiente  para  la  fabrica- 
ción del  queso,  se  deben  quitar  2  décimos  (85.586],  por  las  que  se 
dejan  espresamente  sin  ordeñar ;  otros  2  décimos  que  anren  sola- 
mente para  el  consumo  de  la  leche  y  del  pichero  ( comida  favorita 
de  los  llaneros) ,  de  manera,  que  solo  quedan  6  décimas  partes 
,  (250.4  58)  para  el  queso. 

£1  ganadero  suele  dividir  en  tres  trozos  ordinariamente  las  que 
destina,  á  este  On ,  y  va  relevándolas  durante  el  año  queseando  en 
el  verano  y  en  el  invierno,  según  que  los  pastos  proporcionan  abun* 
dante  leche  á  las  vacas,  de  modo  que  se  debe  calcular  por  término 
medio,  que  bada  una  de  ellas  puede  dar  75  libras  de  queso  al  año. 
A  razón  de  40  onzas  diarias  durante  4  meses  producirían  750.474 
arrobas. 

Supongamos  ahora  que  5  décimas  partes  de  la  población,  es  de- 
cir, 472.674  personas  comen  queso  á  razón  de  2  onzas  por  dia  :  se 
necesitarán  pues  2.565  ar^óbas  diarias,  y  en  un  año  862.&9b.  Ade- 
mas se  han  esportado  por  las  aduanas,  4,276  arrobas ;  lo  que  hace 


{ 


—  17»^ 

nn  totd  do  8M^774 .  Se.  áAe.  tembíea  deducir  la  omlídaá  4e  ^fM- 
80  de  «abra  y  ovi^qoe»  como  mas  adetaale  se  veci^dá  sam  prodwto 
4e  85.520;  quedaapws  de  queso  de  vaca  7S5*45^4 ,  que^aom 
corta  diferencia  la  eaatídad  calculada. 

Ecr  último^  se  puede  graduar  qne  las  S3,5S6  vacaa  qjne  se  des?* 
iiaen  puramente  para  la  leche  y  pichero  den  á  razón  de  2  iMiteHas 
diadas  cada  una  duranie  6  meses ;  baráa  en  o^aSie  ,50^#4S.960i. 
De  estos  datos  reai^Ua  qne  se  puede  saber  con  la  mayor  afroiuma'- 
'4áoi^  posible  el  pioducto  de  ia  cria^  el  cual  seria  coim>  sigme .: 

472.442  reses  consumidas  á  H  pesos  una.  .    •1;896.862 
9.280  reses  esportadas  á  48  pesos  una.  •  .       474.054 


404.722  Total      2^7^«l 


746.498  arrobas  de  queso  á  4  peso  746.498   I 
4.276  arrobas  esportadas.   .  .      4.947 


50.04  8.970  botelfas  de  leche  ¿  ^/4  de  real  una.  .       OS^.OOST 

Total      5JWJ54 


Este  producto  está  en  razón  de  peso  y  medio  por  cabeza  en  ge* 
neral,  y  calculadas  por  término  medio  cada  una  en  6  pesos  de  ca- 
pital;  daría  este  una  renta  brut^  de  50  por  0/0  anual. 

P0  EA  CftU  DBEi  GANAIK>  LANAR  T  CABRXmO. 

£1  carnero  fué  introducido  ppr  los  españoles  y  la  cabra  tawbien ; 
pero  parece  que  esta  última  es  de  la  raza  africana  yeoida  de  las  i&» 
las  Cjanarias«  Resulta  de  la  estadística  que  debía  haber  m  4  859 
la  cantidad  de  4 .94  0.542  cabezas  de  cabras  y  carneros,  de  la  cnal 
se  deben  considerar  la  mitad  hembras.  Ja  cabra  da  5  crJa&  alaio  y 
en  cada  parto  pare  dos  cabritos,  hembra  y  macho.  La  OYeja  da  2 
partos  al  ano  y  un  cordero  solo^  siendo  mui  pocas  las  que  pareaf 
dos.  Se  mueren  muchos  de  los  unos  y  de  los  oíros,  sobre  toda ) 
cuando  los  rebaños  llegan  á  ser  numerosos.  Se  puede,  pues,  por 
termino  medio ,  reducir  la  totalidad  á  das  partos ,  y  cada  parto  á 
uno  solo  que  llegue  á  criarse,  lo  que  en  un  ano  dará  un  produelo 
de  ^  ,91 0.542 ;  ei^ctiimente  el  doble  ai  no  seconsuíniese  una  parte 
por  el  hombre. 


f 


•IW*' 


rara  saber  lo  que  es  este  coosumO;  reem*amos  ^  eslado  y  vere- 
mos que  2  décimos  de  la  población ,  es  dedr^  -1^9.069  individaos 
eoaMiteMie'4e>cAiaw  kmlK»éñtmDmfíc^b9É»  por  año  p^rai  ea^- 
da  iiAO^  lOfW'luiíia  nm  oaaMma^anvaii de ^.512.552.  Ademas  se 
huie^K^Dtadai  laeeoloiiia»74IT;  q«éal80,.p«eS;  eomo  aumento  de 
la  4riaiW7»A8&,.qae:á  ]o»3i  alto»  pmdiacM  la  dvpHeaoioii  ade* 
mas  det  osMwnwí  úd  fmhto. 

Sk  {mwiñéÉmm  ahora*  que  de  lais  9ISS.4  76  madres^  que  pvedén- 
coDSinnii* m erím,  kumttaá smmistre laleobe soAetente para eiep» 
to  «flMomo  ée  los  cHadnres ,  y  para:  in  fabríeaeion  de  queso  ( la* 
otea  mitad  de  477.5§5  qnedn  sia  ordeñar  ]  podremos  fácilmente 
calaidar  i&,eaBfídaiide  este  prodado^  teaotaadopor  término  442060' 
que  sifuea  pasa  saoie  Isehe»  €ada  4  eabias  pueden  dar  una  bot^a 
diaria  y  6  da  esias^  anaalibea^  deqoaso,  lo  qne  en  un.  año  daría 
S^líSA  flivobas  aaleniuido  <pie  sotamente  en  4  meses  se  saque 
lecbe.  parai  estectsMeacioft,  «Ufa  prodado  se  consume  tedo  en  el 
pais. 

las>5{b$2yi eabraaraataateadaaiaa la  lecftie para bdwr,  y pott<^ 
dremas  efrua  aia  anitaüante^  iMÁJiWI  boteias  que  no  hacen  en 
la  jgcnsmar  praBomaataa  S mascaba  leehí^  qne  se  consume  toda  en 
los  mismo»  Uigaias^ 

Qe  lo  expuesto  se  dadnos  cobl  la  mas  grande  aproximación'  el  va- 
lor de  aata  eaia  delmodb  sígoiante : 

4.512.552  cabras  que  se  comen  á  4  peso  una,  •      4.52.552 
707  cabras  esportadas  por.  » •I'.444 


4.5li5.20O<  Total      .    455.696 


» -■ » »i 


82.520  arrobas  de  qjieso  á  4  peso.  ......         S2.^20 


4.494j8ft7  botaUaadailaelie  á4/4dereid.  .  .  .         46.74'4 


Total      4.642.750 


Este  producto  está  á  razón  de  mas  de  6  reales  por  cada  cabem 
en.geaaEaK.St  cateolamaft  qaa  d  término  medio  dei'«api4al  de  un 
rebaño  sea  de  4  4/2  pesapor  cabem»  tnidasmos  4|ae  eate  dará  un 
50*  por  eiaoloj  aaual..IÜe>  aa  baeakadada  la  kuut  parque  bai  poces 
carneros  en  proporción  á  las  cabras. 


{ 


DE  LA  CRIA  DEL  GANADO  DE  CERDA, 

Los  cerdos ,  que  hacen  parte  de  los  anioMáes  de  cria,  vinleroii 
también  de  Europa,  aunque  nuestros  bosques  tengan  váquiras  que 
son  de  la  misma  especie  que  ellos.  No  debiendo  pasarse  en  silen-* 
cío  su  cria  y  he  hecho  todo  esfuerzo  á  fin  de  poder  fijar  su  número 
mas  aproximado  en  cada  provincia.  Por  la  estadística  resulta  que 
en  la  república  había  en  ^859,  562.567  cerdos.  Consideráronos 
la  mitad  como  pequeños,  es  decir;  484.257  ;  la  otra  mitad  la  di- 
vidiremos  en  dos  partes  iguales  90.626  machos,  y  otras  (antas 
hembras ;  sacando  de  estas  últimas  un  tercio  que  oe  paren ,  que- 
darán pues  para  la  procreación  60.446.  Cada  una  de  estas  pare 
dosvezcs  al  ano,  en  cada  parto,  término  medio,  suele  tener  & 
lechoncillos  y  produce  hasta  los  45  aüos.  Pero  dando  por  supuesto 
que  solamente  lleguen  á  conservarse  tres  en  cada  uño,  tendríamos 
en  uQ  ano  562.496,  que  darían  el  duplo  sin  el  consumo  de  la  po^ 
blacion. 

Por  el  estado  de  esta  resulta,  que  dos  décimos  comen  carne  de 
cerdo,  y  estableceremos  que  diariamente  sean  40  onzas;  senece*' 
sitarán  pues  para  189.069  individuos  4.726  aírrobas,  y  en  un  año 
4 .724.990.  Si  damos  por  término  medio  á  cada  cerdo  dos  arrobas 
de  manteca  y  cinco  de  carne ,  veremos  que  para  suministrar  esta 
última  se  necesita  544.998  animales ,  y  siendo  el  producto  de 
562.496^  quedarían  sobrantes  en  un  ano  17.498  por  aumento  de 
la  cria ;  los  cuales  unidos  á  los  pequeños  que  están  progresivamente 
en  estado  de  procrear ,  tendremos  que  á  pesar  del  consumo  espre* 
sado  solo  necesitan  un  año  entero  para  llegar  á  duplicarse. 

La  manteca  del  cerdo  se  consume  en  toda  la  república ,  y  se 
puede  graduar  que  7  décimos  de  la  población  ( 66 1 .758  personas) 
consumen  anualmente  á  razón  de  una  arroba  por  individuo;  y 
como  fijamos  para  cada  animal  dos  de  manteca,  se  ñecesitarian 
550.869,  que  es  con  corta  diferencia  lo* que  se  calculó  para  el« 
consumo  general.  Todo  eso  nos  hace  conocer  la  aproximación 
equitativa  con  que  calculamos  el  número  de  estos  animales  en  la 
estadística. 

£stos  datos  nos  llevan  también  á  considerar  el  producto  de  esta 
industria,  calculando  término  medio  por  cada  animal  que  se  vende 
5  pesos ;  darán  en  un  año,  los  544.998  consumidos^  un  valor  de 
4 .724,990  pesos. 


f 


4Si  — 

Si  se  calcóla  qde  d  capital  gieneral  sea  de  2  pesos  fot  cábela^ 
tendremos  que  esta  cria  da  un  prodado  de  mas  del  4  00  por  dentó 
anual  á  sus  daéil«s. 

DE  L.4   CRI.Í  DE  CABALLOS   T  HULAS. 

£1  caballO;  animal  el  mas  útil  para  el  hombre,  sirvió  lie  espanto 
á  los  indígenas  en  tiempa  de  la  conqnista ,  porque  creian  qoe  él  y 
el  gioete  eran  un  solo  animal.  Ni  este  ni  el  mulo  se  conocían  en 
el  Nueyo-Mundo.  

£1  caballo  es  el  solo  animal  que  comunica  por  la  generación 
sus  buenas  ó  malas  caalidades.  La  yegua  lleva  4  2  meses  el  potro  y 
á  la  edad  de  4  5  á  4  8  años  ya  no  concibe* 

Por  la  estadúlic^  debía  haber  en  4859,  78H68  caballos  y  ye- 
guas. Gradltto  qué  el  número  total  de  59.S58  muías  que  se  encuen- 
tra en  la  misma  estadística  se  divida  en  5  partes  y  que  dos  deettas 
se  unen  á  la  cria  de  cat>allos,  la  otra  á  la  de  los  burros.  Según  esto 
son  26.226 ,  que  se  agregarán  en  el  cálculo  á  los  caballos  y  darán 
un  total  de  404.5^4^  entre  mutas,  caballos  y  yegoas.  De  esta  suma 
se  debe  quitar  un  tercio  como  peqnefios.  Quedarán  74.596  gran- 
des, y  de  estos  considerando  muías  una  tercera  parte,  solo  tendría- 
mos 47.751  que  consideraremos  como  caballos  y  yeguas.  Este  nú- 
mero dividido  en  dos  dará  25.865  yeguas,  de  las  cuales  se  debe 
aua  quitar  una  tercera  parte  que  no  paren  ;  quedan  pues  solamente 
45.9-10  que  producirán  otros  tantos  hijos  en  un  año  (caballos  y 
muías ) ,  de  los  cuales  se  le  debe  deducir  uaa  pérdida  del  5  por 
ciento,  que  son  en  este  caso  795.  Nacidos  y  herrados  serán,  pues, 
44.t45,  cuya  mitad  se  puede  mirar  como  hembras. 

Con  este  producto  y  bajo  las  bases  antedichas ,  esta  cria  duplica 
en  muías  y  caballos  á  los  5  anos  y  medio.  El  número  de  animales 
herrsídos,  multiplicado  por  7,  4  representará  coA  mucha  euctilnd 
al  criador  el  numero  4e  caberas  que  tiene  de  estos,  animales,    i 

Sin  perjudicar  pues  á  la  cria  se  pueden  vender  42,000  al. año  á 
50  pesos,  que  darán  im  producto  bruto  de  460.000.  Si  calculamos 
que  el  capital  general  sea  de  20  pesos  por  cada  animal  iodistinta- 
mente ,  tendríamos  que  este  producHria  el  22  por  mn\»  s^  coasi- 
deiar  el  aumento  de  la  cria. 

DB  LA  CRIA  DE  LOS  BURROS  T  HULAS. 

£1  asno,  antanal  doméstico-,  llevado  por  los  españoles  á  la  Amé- 


4» 


\ 


tmánm  une  i^eaBde  y  htítamo  •que»  Esvopa. 

De  la  estadística  resalta^  qoe  hai  un  uúmemjóeA^.WIf  álos 
qne  debemos  unir  por  razón  de  la  cría,  la  tercera  parte  de  las  ma- 
las que  se  encuentran  en  dicha  estadística,  cuyo  número  será 
'éfi.442 ;  así  teadremoei»  tetal de  4 K.6I9 eadbeeK.'Qvifedaa este 
h lerceía farte ueno  peqneilOB ,  qoedatáe  4iS.44^||randes,  ¿de 
lae  aiaies  nbii$«peDie8  una  dédm»  aparte  4e  melas.  Tefldrsntea, 
pues,  92.472  burros  y  burras,  cuya  mitad  conMertraaiea «ceBio 
.toaabn»  y.de  eilasameercera  portea  4$j96i  qoe  «o  paren.  Con 
ella  nvestüo  AUttlsiaiiiuKKO'será  de  S4.7t4,  ^foe  Úm  «b  un  afilo 
otros  tantos  hijos,  sea  de  la  raza  de  berro  ó  de  raela,  de  les  euales 
hat  ordinftriaflMttle  una  pérdida  del  5  perck»t(^*f4.IMd).  Qaeda* 
fén  por  CMsi^HíeBte  pera  4ierrer  MAM,  de4e^e  eepúede  étti- 
Év  mkád  iiemiiras  y  mitad  roaebos.  "^ 

fiágniendo  esta  regla,  se  obserra  qee  á  leedes  efios  f  tmeseese 
üieBs^ee  la  doi^ieacioii  de  la  erta,  y  les  dosílet  de  «lia  pueden  ¥«n- 
jdsr  29,000  «somates  ya  berros  deaoto;  que  peí*  «e  Iénfilii0í«ie- 
áb  de  42  peíos  eedauneie  produee»  «i  «rafordeStt.OOO  peses. 

8¿  celeelaaMs  que  d  capital  de  4  SS>04'9  Mirres  y  utulas  (térmi- 
■Ottedie)  sea  de  e  pesos  *p<Mr  cebe^ ,  lendrenos  que>  produeuria 
leeoelmeBle  á  ram  de  peco  mes  del  29  por  eiaote. 

Ne  ae  bao  puesto  ett  eueftle  lee  eebeiles  ^pw  ee  Becetüee  en  e^ 
les  reiaeliesy  peeqne  teinpoee  se  han  ealeuMe  lea  buffot  que  son 
ípudiq^iisdbles  #n  la  cría  de  lae  yeguas,  y  «uey  oero  secempeiisan. 


lyU  XA  CRIA  DE    VARIAS   ATSS. 

Seerian'4MMbíen  mdMftid  de  «tes'^eaiéstkus^que  ay«»dan  sobre 
wnsera  i  la  subeisteueia  de  l|t  pMacioB ;  pero  estes  eou  demaeia- 
do  mmerosae  pera  poder  dar  de  ettas  aq«t>«Hi  Idea  Áveesslancfa- 
Qfc,  aunque  ee puede  aseguear q«e 4a «ria  de  gidlimie ,  paternas, 
pi^  y  payes  es  ano  mas  predac«ka  ^piele  de  les  eendek,  es  deet^ 
qoe  da  me  del  4#0  por  «lento  de  bi^Mido.  Sí  graduames  sdla- 
uaeoteq^s  ei»  teda  la  repdbUi»  baya  SO^.eoOpetseRee  que -comen 
diariamente  un  cuarto  de  estas  aves,  eeneoei^itSffiatí-'Se^. 099  al  día, 
y  al  año  7,500.000  ,  que  á  dos  reales  término  medio  ^  darían  un 

produelo  d^  Í.$25;000  pesos. 
CdenlandD^  Uimbi0nqwrt'dl}bledeeeeudamt9M(  4(99^99  per^ 


f 


—  Í85  — 


sosas)  coasameo  diariamente  2  hneyos  por  cabeza,  resaltarán 
^O.MO  dtarios  y  en  un  aSo  ^f ^.SOO.000  fue  darían  un  valor  (i 

estése  la  otra-^mtHad  resultaría  nn  producto  general  de  2.993Í0OO 
pesos,  que  es  mas  de  la  mitad  de  lo  que  rín«Je  actualmente  etí  to- 
da la  república  la  cria  de  ganado  Tacaño  y  cabruno,  y  dertaminte 
con  mucho  menores  gastos. 

Indicadas  ya  todas  las  produciones  de  las  crias,  se  puede  itsu- 
tth?  s«  ¥ak>r  coiBersigiie. 

Ganado  Taícuno. S.TSTHSI 

Ganado  cabruno  y  lanar 4.642.730 

Ganado  de  cerda 1.724.990 

Gabaüos  y  andM.  ..%...*.  *m.é0O 

Barros  y  muías.    ...••.••  548.000 

Gallinas,  palomas»  patos  y  paivos.     .     .    •  2.993.000 

Totafl^eDSTal      40,923.851 

Quedan  aun  dos  animales  que,  aunque  no  producen  yentajtt  en 
^«Mm,  80»  de  «Mt  fraaáe  nlíMftd  al  iMÉbre  :  el|fale  y  ei  f^rro 
llevados  también  de  Europa.  El  primero  es  el  único  de  esta  especie 
que  se  ba  podido  hacer  útil.  De  dia  tiene  alguna  dificultad  par» 
ver,  porque  se  le  contracta  la  pupila  demasiado  con  la  luz  ;  pero> 
al^oerearse  la  noche  goza  de  nna  escelente  vista.  Sus  bigotes  tie- 
v¡m  «na  grande  senáhütdad  y  le.  sirfen  para  «segurarse  de  la  pro- 
ñmdMad  ée^le-queeMnlne. 

En  eottilo  al  perrey  todo  el  mundo  conoce  su  amor  y  su  fideli- 
dad, y  mui  pocas  personas  saben  apreciarla.  Su  mas  ardiente  deseo 
es  agradar  á  su  amo  y  es  feliz  cuando  recibe  de  el  una  caricia.  En 
América  no  lo  había,  y  cuentan  los  historiadores  que  los  indios  solo- 
tenian  perros  que  no  ladraban.  En  el  dia  no  se  conocen ,  y  es  muí 
probable  que  fuesen  zorros  domesticados  como  los  que  suelen  en- 
otmtrarsé  redavis.  1M»S  tléfiéo  casi  la  misma  figura  del  perro,  y 
HteelfosaeoiMtinífMran  servirse  adtgtmos  indios  para  caiztin 

Para  mejor  inteligencia  de  las  produciones  de  las  crias  se  han  for- 
mado los  siguientes  estados  que  sirven  para  compararlas  entre  sí,  y 
ademas  dos  caadros  que  pueden  ser  útiles  á  ios  criadores,  porque 
establecen  ciertas  reglas  peculiares  á  este  ramo  de  industria  sobre 
un  número  dado  de  animales. 


\ 


CUADRO  que  representa  la  cantidad  de  ganado  vacuno ,  lanar 


CALIDAD 

de 

ték  cari. 

JNámero 
de 

animales 
existentes 
en    1839. 

N&aaro 

de  los 

nacidos, 

calculados 

en  1839. 

COIVDHO   OniBaAL  DB  AimULBS 

BK  1839. 

Número         JNámero           Total 
de  animales          de                   , 
consumidos     animales 
en  el  país,     esportado?,     anímale*. 

MikMro 

que  queda 

para  él  as* 

neato  déla 

cria  fg»  1839. 

Ganado  Tacuno. . . . 

9.086.790 

416.935 

179.443 

9,880 

181  .Til 

* 

S35.313 

• 

Cabras  JO  ejas.... 

1.910.341 

1.910.349 

,1.313.589 

707 

1.513.380 

397.063 

Ganado  de  cerda.. . 

363.507 

362.496 

344.998 

» 

344.998 

17.498 

Producto  en  dinero  del  ganado  vacuno  en  un  año. 

Reses  consumidas ps.  1.896.862 

Retes  esportadas »     171.031 

Qaeso  consumido »     746.198 

Queso  esporudo »        4.9fir 

Leche  consumida »     968.00S> 


Total ps.  5.757. t3l 


NoTi.  La  cria  de  ganado  ráculo  produce  anaalmente  nn  3o  por  ciento»  calcnlando  el  capital 

de  6  pesos  por  cabeza. 


Producto  en  dinero  del  ganado  de  cerda  en  un  año. 
Cerdos  consumidos ps.  1.734.990 

Nota.  U  cria  de  cerdos  da  mas  del  too  por  xoo  de  producto  anual,  considerado  6  dos  pe«os 
por  cabeza  el  capital.  Las  ates  dojnésticas  dan  aanmas  del  100  por  100. 


f 


y  cerdos,  so  consumo,  esportadon  y  sus  productos  awialeg. 


Término 

déla 

aapBcaciMi 

dekM 
— imnics. 

Precio  me- 
dio de  los 
'  animales 
vendidos    6 
consumidos 

P&OD 

Arrobas 

de  qneso 

consumidas  ■ 

en  el  pais. 

ocTo  DSL  Qmráo 

BH  4838. 

Ambas           ToUl 
de  qneso            de 
esportadas,      arrobas. 

Prado 
medio 

en  cada 

anoba 

de  queso. 

1  peso. 

Cantidad 
de  botellas 

de  leche 
consumida 

en  x839. 

.  Precio 
medio 
deles 
botellas 

de  leche. 

4afi0i. 

10  pesos 
en  el  pais 
y  18  pesos 
y  6  reales 
en  el  es- 
iraojero. 

740.198 

4.S76 

750.474 

80.018.080 

'A  de  real 
por  botella 

S  afios. 

4   peso 
en  el  pais 
y  1  peso  y 
3  reales  en 
el  estertor. 

8s.no 

» 

tt.aao 

1  peso. 

1.494.857 

V4  de  real 
porbotella 

■ 

1  afto. 

5  pesos. 

» 

• 

R 

» 

» 

» 

Producto  en  dinero  del  ganado  lanar  y  cabruno 

en  un  año. 

Cabras  y  OT^  consumidas 9......  ps.  4.IHS.56a 

Cabras  y  OTC^s  esportadas »  4.444 

Qaeso  consumido -^....f    n  89.00 

Leche  eonsamida..... »  46.714 


Total ••  ps.  1.049.730 


Nota.  la  cHa  de  cabras  y  ovejas  produce  anualmente  nn  3o  por  ciento  calculando  d  capítol 

á  peso  y  medio  por  cabor. 


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Numero 
de  madres  que 

dan  toda  sn 
lecha  i  la  tria. 

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Número 
de  madras  que 
pueden  dar  sola- 
,   mente  leche. 

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Numero 

de  animales 

que  se  pueden 

conterrar. 

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Numero 

de  animales 

que  mueren 

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Número 
de  animales 
que  nacen 
en  un  año.  - 

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AVES. 

ÓIDBN    DB    I.A8    ATB8    DB    AAPIÑA. 


AVES    DIURNAS. 

Familia  de  los  buitres. 

Gavilucho  (vuUur  barbarus).  La  parle  superior  de  esta  ave  es  de 
un  moreno  mezclado  de  gris,  sus  alas  y  cola  de  un  gris  ceniziento, 
la  parte  mas  alia  de  la  cabeza  de  un  t)]anco  sucio  ;  una  banda  negra 
rodea  sus  ojos  y  parte  de  cada  lado  del  pico.  Esta  ave  une  i  la  anda- 
zía  y  crueldad  del  águila  la  vorazidad  a^iuerosa jde  los  buitres ; 
prefiere  la  carne  viva/ principalmente  la  de  los  cuadrúpedos  que  no 
pueden  resistirle ;  hace  presa  de  los  conejos^  cabras  ^  cerdos  y  ana 
de  los  becerros.  No  produce  mas  que  una  cria  al  año  y  forma  su 
nido  sobre  las  rocas  mas  elevadas  é  inaccesibles.  Puede  resistir  al 
hombre  por  mucho  tiempo.  Se  les  empieza  á  encontrar  con  sus  ni- 
dos á  2.250  varas  de  altura. 

Samuro  {percnoptere  uruba).  Es  indolente,  voraz  y  exhala  un 
olor  repugnante ;  prefiere  la  carne  que  e^tá  corrompiéndose  y  los 
escrementos,  y  en  ello  hace  un  gran  servicio  á  los  hombres,  des- 
embarazando la  tierra  de  objetos  cuyas  exhalaciones  pestilentes  in- 
festarían la  atmósfera  :  por  esta  razón  no  se  le  mata.  Anda  en  ban- 
dadas y  hace  su  nido  en  cuevas  sobre  las  rocas  mas  elevadas  é 
inaccesibles ;  da  una  cria  al  año  y  los  hijos  nacen  blancos.  Tiene 
mucha  vista,  y  su  olfato  no  es  tan  fino,  que  desde  mui  lejos  perciba  el 
olor  de  un  animal  muerto.  Se  eleva  mucho  en  el  aire,  pero  su  man- 
sión es  en  las  partes  cálidas,  y  no  habita  ya  á  2.000  varas.  En 
Bogotá  se  encuentra  á  2.800.  Sigue  la  marcha  de  los  ejércitos  para 
aprovechar  los  restos ^el  ganado  que  se  mata;  así  es  que  un  cam- 
pamento está  siempre  Heno  de  estos  animales. 

Hai  un  samuro  de  color  blanco  sucio ,  con  alas  pintadas  de  ne-^ 
gro  y  el  pescuezo  colorado,  que  llaman  rei  de  los  samuros  (vuliur 
papa).  Tiene  este  nombre  porque  los  samuros  por  temor  le  ceden 
el  lugar  cuando  se  arroja  sobre  algún  cadáver  que  hayati  comen- 
zado á  devorar. 


40» 


Familia  de  los  halcones. 


t 


Aguilote  ( falco guayanemis  ?) :  especie  peqaeña  de  águila.  Vive 
solitaría  con  su  compafierar,  bace  siempre  su  nido  en  la  cima  de  los 
árboles  elevados  ó  sobre  la  punto  de  las  rocas.  Se  alimenta  de 
eame  palpitante  y  lleva  de  la  misma  á  sus  hijos.  Esta  ave  vive  mu* 
dio  tiempo  y  es  capas  de  pasat  taM«eiBiiits  sin  comer,  lo  que  po- 
cos animales  podrían  resistir.  Habita  arriba  de  2.250  varas. 

Garicari  {fakobrasiíimiií^:  MvpsfnAsv  pero  capaz  de  remon- 
tarse en  el  aire  con  gran  rapidez  y  de  caer  sobre  la  presa  con  la 
mima  imperiosidad;  Le  sirven- de  pasto  los  ratones,  Ibs  reptil^, 
lo&paJaríñwBP  f  asn  loa  insectos.  Yife  s(A^  y  apareado^  se  mñiHene 
solms  la  éauk  ét  há  árboles  é^  éaXw  casafr,  y  rara  ver  ataca  los  coiv 
raba  en  ^pié  estáte  las  aveS"  domésticas; 

Gimlan  {falecf. :  es  fiiei>te,  acüfo^  y  atrevifo ;  lamayor  parte  del 
tiempO'  lo  pasa^eseafamado  sobre  h»  ramas  de  un  árlx^  6  en  los 
tedld»  áb  tas^easa»* ;  ^^^^  '^^  consltoye  su  mdb  y  se  contenta  con 
el  "pt im«ro  fue  IkaHa;  Ctiaaidb  liifaenAra  muete,  el  macho  cuida 
de  los  peiivelés  bssliar  ^ost  eslés'  pueiÉui  proteer  á  su  subsisten- 
ciar.  Se  le  pueée  amansar,  maniftséa  una^  grande  afición  á  su  amo 
y  puede  fácilmente  aplicarse  en  auxilio  de  ios  cazadores^  para  coger 
pieais  pe<|ueillL&.  Persigúelas  paternas  separadbsr  de  sus  bandadas; 
se  aumenta  áe  carne  pal^^nüs  ,  busca  Ibs  pajaritos  y  pollitos , 
caecomo  «na  maza eobre-su  presa- y  lá  airdbata  con  r&píder.  Tive 
en  ia»  par^  cflUáff  y  templadas» 

AVES  BR  RAPIÑA  NOCTURNAS. 

Fkm'Ñia  delns  cerufess. 

Mochuelo  (sirüo  cayennemis^  :.sealimanta.da  pequeSos  cuadrú- 
pedos, pajaritos  y  reptiles.,  Es.uaa^ave-toffpeiíaa  sadedumbra  coa 
la  claridad  del  dia  y  no  hace  sus  corisirías.  sino  un  poco  ¿olea  de 
nacer  ó  después  de  puestorclsol :  en. el  Jiesto  de  la  noche  elakjQuae 
de  su  vista  es  igual  al  da  las  demás  aves^durante  el  dia. 

techuza  ( &tnx  mexicana )  :  habila.  ea  los  subterráneos  y  ea  los 
agujeros  de  ios  troncos  de  los  árboles  ó  en.  los. lugares  oscuros  é 
inhabitados.  Jamas  se  le  ve  durante  el  dia ;  mas  en  to&momiffltoa 
de  la  aurora  y  el  crepúsculo  busca  su  presa ;  se  alimenU4aardi«^ 


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Das  i.  jPuMpQr,  ff,  p#«MlQf(  4e  ¿iferwtefciiyfirtM>  9»  ^xmámoL  9ifpi^ 
ñas  yezes  á  entrar  en  los  patíos  de  lasJbMWJiii4at  f  JVÉeMte  lo»  po- 
Dos  luisjta  d^jy^s^mmoe  pflÍB«MiSi.JS«i  grita^nodanvíaipaiioeal 
geniUiOi iMtimeií» éa  iiMfc piTaoBa  iqoíMLiBflÉáaiidwguidOi  U  M 
de  varias  especies^  Mti^  i^ímaiot;.  iMust  wfvia^  * 

dKDKR  ]»r  LOS  aomaienis. 

Pamifía  dé  tos  denttrósiros, 

6»Í0haro :  páj#ro^ A^t«riii9r fue* sola att eníBMBte^ akla» mftn>> 
faíkis  de.  Garipe.  y  eii  abHodaMía  «rti^^iotm  en  la  gcaA  coeva 
qoe  lleva  s«  nofnbjrev  £1  plwiejf  tiene  jm>  etiar  emtaSo  elacoié 
parda  oacnr»)  BMudMida  coi^  rafee  y  i9«9l€»  negf»D;  ia  eabeet, 
las  alas:  y  Úncela  están  ieeh^nedaiB  derfie^aeiae  namclMa  Uamou 
con  un  ribete  negf» ;  m  iafvnflo  es  pac»  smyoir  qaa  ri  4s  nna 
paloDUit  $«  se9it)kiA9  iüisie  y  sps  séf*  püqiüter/y  andes  no  fat^ 
den  seperiai^,  la.  i|^pi;esioil^  do;  h.  loe^  El  píio:  es.  eode»;  eneoEvado 
y  armado  de^áeelee  debles»  i^o»  indkfs  de  Guipe  ^  por  la  fiesta 
de  $«  Jnaa  imJ^  wlbree4e  tas«  peíneles  4»  estos  pájaras:  pera 
estraer  la  ff^m^m  es  un  peeo-  UqeidiK,  (iespeifl»teiy  eín  olor  f 
tan  pniu  qne  dura  i»as  íb  m  mo  m  bus»  estado.  Las  nidos 
están  en  los  huecos  de  la  cueva  y  particularmente  .en.b»  de  h 
bóveda,  Gste  pájiíiQ  vive  ¿  )ii:  allmit  día.  mea  de^  -l'*iM;  vares  y  se 
manüene  de  la  fruto  del  árhal  fMfy^á»  «¡te.  abumia  ea los  bos^ 
ques  de  les  cirros  di^  Cari|^,  y  aeieiper  ta  noehe  vaies  b«3ea  de^ 
ella. 

Sauce.  PequeSo  pajavo  de  ootoe  vepde  sido  per  íendHia  f  ama- 
rillo, claro^p^  debajo.  Cania  wms>  lee.canartee^  asAa  en-  baada* 
das  y  se  conserva  ea  janiaa» 

Píoo  de  pMita*  Pájaro  da  un.  eeior  Qentaevle,  peqoeilay  apnsN* 
ciado  solo  1^  sit^  caotO'  %9a  es  ai;iadable*  Se  aeosinmbra  fieU»-* 
mente  á  la  iauta. 

GiKuüatá.  AvB:  peq«ie&8  de  liadoa  celares ,  laní  nta^  alegre  y 
cantadora ;.  se  la  tiene  en  jaula  por  b  melodía  de  s6  leaaAa* 

La  paraulata  ( iurdtis.^..,) ,  (^  puede  enerar  en  pariMo^.can 
el  arrendajo,  poi^  el  canto,  silva  pfirfeeUsoeale  apeeadiendo'  reta- 
zos de  música.,,  peca  no  es  imitadora  del  canto  día  otros  aniaia*» 
les  :  su  color  es  ceniziento  claro  y  no  tiene  n^da  de  MUo»  Oat  otea. 


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—  492  —     - 

clase  mits  oscura  qoe  canta  mas  y  á  la  qae  gusta  el  aj{ ,  nendo 
por  esto  qae  la  liaman  ajicera. 

Azalejo.  Pájaro  del  tamaño  de  la  paranlata ;  pero  m  canta  bien 
y  su  color  es  un  axnl  celeste  lindísimo ;  la  hembra  es  de  on  azul 
sucio.  Va  en  bandadas  y  gusta  mucho  del  plátano. 

Gálgulo  ó  Querrequerre.  Este  último  nombre  es  lo  que  pro- 
nuncia en  su  canto ;  es  mas  pequeño  que  una  paloma ,  su  color 
de  los  mas  bonitos.  La  cabeza,  cuello,  pecho  y  vientre  son  de  un 
verde  claro ;  las  alas  son  por  encima  de  un  hermoso  azul ,  las 
plumas  mas  grandes  de  un  verde  claro,  y  negruzcas. 

£1  arrendajo  (turdus)  :  tiene  un  hermoso  canto  y  la  particula- 
ridad de  imitar  el  de  todos  los  animales,  aun  el  rebuzno  del  asno. 
Su  color  es  negro  brillante,  el  pico  negro  ribeteado  de  amarillo, 
los  ojos  negros  con  un  círcalo  amarillo.  Este  mismo  color  lo  tie* 
ne  en  la  cabeza  de  las  alas,  en  el  vientre ,  muslos  y  tronco  de  la 
cola.  Se  Je  mantiene  en  jaulas  y -ya  domesticado  puede  vivir  suel- 
to y  entrar  por  sí  solo  en  la  jaula.  Forma  su  nido  de  uña  paja 
mui  fina  y  suave  que  teje  en  las  ramas  delgadas  de  los  árboles 
mas  elevados,  quedando  colgados  en  forma  de  botella^. 

£1  conoto  es  un  poco  mas  grande  que  el  afrendajo  é  imita 
también  el  canto  de  otros  animales ;  pero  es  hediondo  y  su  color 
casi  igual  al  del  arrendajo,  con  sola  la  diferencia  de  que  el  ne- 
gro tira  á  pardo. 

Siete-colores  (tanagra  septieolor).  Wjaro  pequeño  y  lindo  que 
lleva  esa  misma  cantidad  de  colores  en  todo  su  cuerpo,  y  particu- 
larmente se  distingue  por  la  belleza  de  los  de  la  cabeza,  que  pa- 
rece un  bordado  de  seda.  Todos  estos  colores  son  vivos  y  bri- 
llantes y  es  lástima  que  no  se  le  pueda  domesticar. 

£1  verdecito  {tanagra)  es  uno  de  los  pájaros  mas  particulares 
y  lindos  que  se  encuentran  en  Rio-Negro.  Su  color  de  un  azul 
brillante  tirando  á  verde  y  todo  tachonado  de  unas  manchitas 
menudas  de  un  azul  subido  :  tampoco  se  puede  domesticar. 

'Cardenal  (tanagra).  Pájaro  pequeño  y  lindo  de  solo  dos  bri- 
llantes colores.  Las  alas ,  cola  y  lomo  son  de  un  azul  que  tira  á 
negro,  lo  demás  del  cuerpo,  encarnado;  la  cabeza  negra  con  un 
cópele  encarnado,  el  pico  y  las  patas  negras. 

£i  negro-colorado  {mnsicapa)^  del  género  de  los  hormigueros, 
es  un  pájaro  lindísimo  por  sus  colores  encarnado  y  negro ;  este 
último  parece  terciopelo» 


1 


—  495  — 

£1  Ya^acabó  es  (amiiien  ua  pájaro  del  género  de  los  honni- 
güeros ,  que  en  su  canto  triste  pronuncia  k  voz  que  le  da  el 
nombre  :  suele  cantar  también  de  noche,  y  en  los  bosques  parece 
una  Toz  humana. 

Yinotinto  (cotinga  pampadour),  del  género.de  las  cotingas.  El 
nombre  indica  el  color  de  este  pájaro  que  es  lindo  y  no  muí 
grande  :  abunda  en  Río-Negro. 

Cucarachero  (regulus),  kse  mui  pequeña  de  un  color  aleona- 
do con  pintas  menudas  negras  y  blancas;  está  siempre  en  movi- 
miento ,  se  revoletea  entre  las  ramas  y  trepa  por  todos  lados.  Se 
alimenta  de  insectos,  gusanos  y  semillas.  Sus  huevos  son  del  ta- 
maño de  un  garbanzo,  su  canto  se  asemeja  al  del  ruiseñor ;  vive 
«n  tierras  cálidas  y  en  serranías  elevadas. 

Campanero  {ampelis  caranculta) ,  del  género  de  las  cotingas. 
£s  del  tamaño  de  un  cuervo ,  su  pluma  blanca  como  la  nieve  y 
«ncima  de  la  cabeza  tiene  un  tubo  espiral  de  mas  de  2  pulgadas 
<le  largO;  el  cual  es  de  color  de  ébano ;  pero  está  variado  de  plu- 
mas blancas.  Este  tubo  tiene  comunicación  con  el  esófego,  y  cuan* 
do  está  lleno  de  aire  toma  la  forma  de  una  flecha ;  mas  cuando 
está  vacío  se  queda  en  estremo  lacio.  Por  esta  especie  de  trompa 
arroja  el  animal  un  grito  tan  claro  y  fuerte^  que  parece  el  so- 
nido de  una  campana  y  se  oye  á  disi ancla  de  casi  una  milla. 

Trompetero  (caracina  scutaía).  Del  mismo  género  de  las  co- 
tingas :  sus  colores  son  hermosísimos  y  su  cank)  tiene  algo  del 
'nombre  que  lleva. 

El  gallito  de  Rio-Negro  [pipra  rupieala)^  es  de  un  color  ama- 
rillo naranjado  y  la  cresta  de  plumas  del  mi^mo  color  tiene  en 
el  estremo  una  especie  de  cinta  color  de  canela  claro ;  son  mui 
lindos  estos  pájaros,  y  pelean  entre  sí  como  los  gallos,  erizando 
las  plumas.  Se  encuentran  muchos  en  los  cerros  de  los  raudales 
de  Atures  y  Maipures  y  también  sobre  el  Yentuari. 

Familia  de  los  tissirasiros. 

Aguaitacamino,  del  género  de  las  golondrinas :  pájaro  noctur- 
ao  que. sale  á  los.caminos  después  de  anochecer  y  antes  de  ama- 
necer; tiene  un  vuelo  corto  y  l>ajo  que  parece  que  salla  ei^vez 
de  volar ;  en  aquella  ho:a  se  procura  su  alimento. 

La  gioJendrina  es  una  ave  que  no  necesita  viajar  mucho  como 

F.   CEOO.  13 


~v»4 —  V 

IkMOD  «n  la»  olms  {NiH6s<idel  m«ado,  Mpiti  k8^«ÉlMi«nBs ;  pues 
^qui^Diicasi  omistanies^porel. calor.  DestcuyeiknncheS'iiisccte.'de 
jqoe  h«€eo4a  principal  aitnMiito.  Gonstrayen  fo&sUosca  le»c«as 
habitadas  y  en  los  agujeros  de  lo6  peñascos.  Hai  una  especie  foe 
llaman  iijerata,  mas  graikley  de  cola  Jatfa  qne  aeabre  en  dos  como 
unas  tijeras. 

EL  pico  de  tijeras :  es  una  golondrioa  de  arar  que  tuela  peluda 
á  las  aguas^  surcánd^as  con  la  parteinferíor  de  so  picoa  fin  de  ase- 
gurar los  peiecillos  que  encuentra  en  su  camino. 

Familra  de  los  conirostres. 

Trupial  (icterus)  del  género  de  sa  nombre  ;  pájaro  mui  canta- 
dor, de  un  color  amarillo  de  oro  euia  cabeza  y  iodo  el  cuerpo ;  las 
puntas  de  las  alas  negras ,  y  su  parte  superior  k)  mismo  con  usas 
plamitas  blancas  que  forman  una  pequeiSa  lista  ;  patas  y  pico  ne- 
gros y  plumas  negras  en  la  cola.  Guando  canta  eriza  las  plumas  ide 
lodo  el  cuerpo.  Hace  su  nido  en  los  estremos  delgados  de  las  ramas 
délos  árboles  mas  elevados  y  lo  deja  tloiar  libremente  para  que  no 
puedan  cogerlo  las  serpientes  y  otros  animales  que  lo  buscan  para 
devorar  los  piebones.  Está  en  forma  de  botdla  y  la  entrada  se  en- 
coenlra  de  un  lado  en  el  lugar  que  principia  el  ensanche  del  nido. 
Vive  en  fimilias;  y  así  es  que  un  árbol  es  como  una  poMadon :  po- 
ne la  hembra  de  4  á  5  huevos. 

Gonzalito  (cacique)  pájaro  casi  igual  al  turpial^  omiscdo  la  dife- 
retieta  de  tener  el  color  amarillo  mas  subido  sin  el  blanco  en  las 
alas,  y  mía  mancha  negra  debajo  del  pescuezo ;  caniabien  y  bace 
unos  gorgeos  mui  largos.  La  hembra  no  es  tan»  canAaéoea  oomo»  el 
macho :  Tiven  en  familia  y  forman  el  nido  comojos  trapíales. 

Viudita  (vickta),  pájaro  pequeño,  todo  negro  y  brillante  eomoun 
raso  con  una  lista  blanca  al  rededor  de  la  cabeza ,  en  la  partea  su- 
perior de  las  alas,  en  sus  puntas  y  en  la  cola ;  lleva  copete,  es  viva 
y  alegre,  pero  su  canto  no  es  agradable. 

Ganar io  (fringilla  granatina) ,  es  un  poco  mas  grande  que  eF 
de  las  islas  Ganarías  y  su  color  de  un  amarílio  mas  subido.  Luego 
que  ha  escogido  su  compañera,  la  ayuda  á  la  eeostruceion  del  nido, 
reúne  con  ella  los  materiales  necesarios  y  cuidan  ambos  de  la  súb- 
síslencia  de  la  familia. 

Tolditos  (orioltts  niger)j'peqne^m  pájaros  <|ue  van ^n  grande 


; 


^ntvo  "■   ' 


kaadvias  ,<di»r«l8Bdoio8ftaiDpiM  de  omm ;  la.eolor.es  dd>un  ü^- 
gro  oambiMile  q«e  lefl^  iodos  los  .iHS08<ilel^acero  ft>rimido. 

Pamiliü  denlos  tentHr&stros. 

m 

Tacasilo  de  montana  (merops) ,  peqoeito  pájaro  de  «n  verde 
tltornasolado  y  oabeza  grande ;  se  masliene  de-frutas  é  insectos.  Haí 
otro  de  diferentes  colores  mui  vivos  y  brillantes ;  su  fioo  y  patas 
son  encarnados. 

Tacnsito  (trochUtes)  de  variasespecies  por  su  (amafio  y  cotores. 
Todos  son  atornasolados  y  el  fondo  verde  de  varias  gradaciones; 
)os  hai  dorados,  azules  y  color  de  fuego ;  todos  ellos  según  están  he- 
ridos por  la  luz  representan  diversos  visos  que  centellean  el  fnego 
^e  los  rubíes  topacios  y  esmeraldas.  Son  mas  bonitos  que  las  mari- 
posas y  andan  de  flor  en  ílor  chupando  eln^tarcon  sus  largos  pi- 
cos, sosteniéndose  entre  tanto  en  el  aire  con  el  ráf4do  movimiento 
de  sus  alas.  Si  son  notables  por  sus  colores ,  lo  son  también  por  su 
estremada  pequ^ez  ;  algunas  de  estes  avecillas  con  so  nido  pesan 
un  cuarto  de  onza.  Este  está  formado  del  algodón  de  ceiba,  y  los 
huevos  que  ponen  en  él  son  mas  pequeños  que  un  garbanzo. 

Colibrí,  ave  de  las  mas  pequeñas  y  de  plumas  mdi  hermosas :  no 
es  posible  mantenerla  en  jaula  á  causa  de  la  dificultad  de  procu- 
rarle el  alimento. 

Carpintero  {pims  robustus)  es  de  un  color  blanco  con  pintas 
3iegi:a$>  Ueva^uit  copete  encarnado,  el  pico  y  rías  patas  negros.  Los 
bai  da  varias  clases  y  todas  ellas  trepan  por  los  árboks  que  agu- 
jerean con  la  fuerza  de  su  picO;  haciendo  un  ruido  tal^  que  á  vezes 
parece  que  se  desprende  la  rama  de  un  árbol.  El  nido  lo  hacen 
jredondo>  en  los  troneos  de  esdos,  abfi^idolos^con  tos  picos  y  Jos 
|M6s,  y  la  íámíUa  que  allí  crian  mo  ae  dispessa.  Se  alimenta  de 
av^pas  y  frutas. 

El  piapeco  (fomphufiu^)  llaioado,  tambí^  tueaa,  diostedé ,  ó 

pico  de  fraseo.  6e:dteeata  defrialas,  ataca  ttinbien  los  pajjarillos 

¡y  .coge  lQ»teievoa  de  los  nMas.  Vada  bajo  y  en  línea  recta  ;  se  ven 

an^grqpoa de  8  ó<40  posadosaofeHrela cima  4e  los  árboles  ims  «1- 

..to»  CooM>  oalieüB  la  lengua.  Swble^  cogo  m  presa.eon  los  lado9  é 


~  496  — 


t 


la  ¡yanta  del  pico,  la  arroja  al  airo  y  la  redbe  en  el  garguero.  La 
parte  superior  del  cuerpa,  el  vientre ,  ala$  y  cola  son  negros  ;  el 
bnchC;  cuello  y  mejillas  de  un  amarillo  naranjado^  algunas  blancas 
con  rayas  naraojadas  ó  bien  encarnadas ;  la  piel  pelada  que  rodea 
los  ojos  es  encarnada  ;  una  línea  negra  separa  el  pico  de  la  cabeza 
con  una  banda  triangular  amarillo-pálida ;  la  parte  superior  del  pi- 
co es  azul  claro ;  los  iris  de  un  azul  brillante ;  las  patas  tiran  á  gris ; 
las  uñas  negras.  Se  amansa  fácilmente  y  toma  el  alimento  de  la 
roano  :  cuando  vuela  lleva  el  pico  horizontal.  De  esta  clase  se  co- 
nocen cinco  distintas  y  entre  ellas  dos  que  tienen  el  pico  mas  del- 
gado ;  habita  hasta  2.000  varas  sobre  el  nivel  del  mar.  Hai  tanta 
abundancia  de  ellos  en  Hio- Negro,  que  los  indios  se  sirven  de  las 
pocas  plumas  de  estas  aves  ( las  que  tienen  en  el  pecho  coloradas  y 
amarillas)  para  todos  sos  adornos  y  para  los  Qecos  de  los  chin- 
chorros que  se  fabrican  allí  para  vender  en  Angostura, 

Samurito  (cro/opAa^a  ani),  pequeña  e.peciede  cuervo,  pero 
hediendo  como  los  samuros ;  son  negros  y  viven  en  bandadas ; 
muchas  hembras  ponen  en  un  mismo  nido.  Comen  toda  clase  do 
inmundicias  y  particularmente  las  garrapatas  de  los  ganados  y  ca- 
ballos. 

Garrapatero  (crotophaga  major?).  Es  un  pequeño  pájaro  con 
copete  de  color  pardo  oscuro  y  el  víeqtre  amarillo  pajizo ;  se  man- 
tiene costantemente  sobre  v\  lomo  de  los  aiiimales  que  están  pa- 
ciendo y  los  limpia  de  las  garrapatas  que  tienen  en  el  cuerpo,  ha- 
ciendo de  eslas  su  principal  alimento,  así  como  de  los  gusanos  y 
larvas  de  insectos  que  se  hallan  bajo  la  epidermis  de  los  bueyes  hasta 
el  momenfo  de  su  metamorfosis.  Pónese  este  pájaro  sobre  el  lomo 
del  buei  y  le  rompe  la  piel  con  su  pico  para  sacarlos,  viniéndole  de 
aquí  el  nombre  de  pica-buei :  es  pájaro  útilísimo  por  este  respecto 
Á  los  ganados. 

La  guacamaya  rosada  {ara  maracaná)  es  43ña  hermosa  ave  que 
vuela  en  bandadas  y  siempre  aparejados  macho  y  hembra.  Se  posa 
sobre  las  ramas  superiores  de  los  árboles  mas  elevados  y  se  alimenta 
de  granos  y  de  frutas ,  preli riendo. la  de  las  palmas :  también  gusta 
de  los  granos  del  café  y  hace  mucho  perjuicio  en  las  plantaciones. 
Hará  vcz  baja  al  suelo  á  causa  de  la  longitud  de  su  cola  ;  se  ie 
amansa  fácilmente,  pero  no  habla  sino  con  miicha  dificultad  y  gri- 
tando  repite  la  palabra  ara ;  lo  cual  ha  sido  origen  de  su  nombre. 
La  Itembra  hace  su  nido  en  los  troncos  de  los  árboles  viejos,  y  pone 


1 


— 197  — 


dos  huevos  blancos.  Las  bai  coloradas  con  alas  amarillas  y,  azules^ 
amarillas  con  alas  azules  y  coloradas  [ara  rauna] ,  y  de  un  azul 
tirando  á  verde  con  atas  coloradas  y  amarillas  (ara  militar),  pero 
todas  ellas  de  igual  tamaño  y  con  las  mismas  costumbres. 

Catana  azul  [psittacus  acamil).  Especie  de  loro  pequeño  de  lin- 
dos colores  y  formas ;  las  bai  vr rdes  con  la  cabeza  azul  y  las  alas  de 
diferentes  pintas,  otras  con  la  cabeza  verde  y  la  cola  y  alas  de  va- 
rios colores.  Hablan  mucho  y  su  voz  es  mui  agradable  :  habitan  en 
Rio  Negro. 

£1  calzoncillo,  loro  mui  pequeño  del  famaño  de  los  pericos  (psit- 
tacus maipures)y  tiene  sietecolores  lindamente  distribuidos;  negro, 
azul,  verde,  naranjado,  amarillo  claro,  colorado  y  color  de  canela. 
Silba  mucho  imitando  el  canto  de  muchos  animales  ;  entre  otro3 
el  grito  de  los  monos.  Estos  pájaros  viven  en  bandadas  en  las 
selvas  de  la  Guayana  y  son  mui  apreciados  por  sus  escelen  tes  cali- 
dades ;  porque  ademas  de  sus  formas,  colores  y  canto,  son  dóciles, 
graciosos  y  mui  cariñosos  con  los  que  los  cuidan. 

El  perico  {toni-ete)  tiene  la  forma  del  loro,  pero  mui  pequeño : 
es  una  tribu  numerosísima  en  que  los  hai  de  varias  calidades.  Van 
en  grandes  bandadas  y  en  su  vuelo  hacen  una  gritería  estraordina- 
ría.  Los  hai  amarillos  con  las  alas  verdes  y  coloradas,  todos  verdes 
y  la  cabeza  de  un  color  amarillo  sucio,  de  un  verde  claro  hermoso 
con  picos  y  patas  blancas,  y  otros  mucho  mas  pequeños  de  un  verde 
lindísimo  con  alas  azules  y  vero'e  mar.  En  fin ,  oíros  de  un  verde 
subido  un  poco  mas  grandes.  Todos  ellos  se  pueden  domesticar  : 
hablan  un  poco  menos  los  de  las  alas  azules. 

Loro  (psittacus).  Su  color  generalmente  es  de  un  verde  hermoso 
con  pintas  amarillas  ó  coloradas  en  el  tronco  de  las  alas  y  en  la 
cabeza :  la  cola  y  el  resto  de  las  alas  tienen  plumas  variadas  de 
amarillo,  colorado  y  azul.  Se  domestica  fácilmente  y  aprende  á  ha- 
blar. Los  loros  van  en  bandadas  y  cuando  caen  sobre  un  campo  de 
maíz,  (o  destrozan.  La  cotorra  es  roas  pequeña  y  habla  mucho  mas; . 
tiene  el  pico  blanco  y  el  color  verde  mas  claro.  Los  loros  de  Rio- 
Negro  son  mas  grandes,  de  un  color  verde  amarillento  y  mas  tor- 
pes para  hablar. 


—  49a  — 


ÓRDBR  DI  LAS  GALUNIcEAS. 


! 


PaDji  de oopete  {craxaleoior).  Este' especie  tiene  oerca  de  5  (úes 
de  largo,  sO'COpetei  es  espeso  y  las  plumas  están  risadas  en  las  pon* 
tas.  Esnegco  en  esta  parte,  la  cábela  y  dcoello  blanóos  oon  la 
pmnta  de  Iss-  plumas  negrasy  el>resto  del  coerpo  pardo  color  de  avei- 
llana,  mas  claro  por  debajo ;  el  pico  y  patas  son  de  un  gri9  eeñoh^ 
úeñiOi  Esta  aye  vive  en  los  bosques ,  se  amansa  fácilmente  y  se  la 
podría  reducir  al  estado  doméstico ;  su  carne  es  mui  suculenta  y  á^) 
un  sabor  agradable ;  soplíria-al  pavo  siendo  mas  fuerte  y  teniendo 
la  carne  menos  seca  que  él.  Atendida  su  fría  tranquilidad,  se  puede'» 
decir  que  esta  ave  ó  no  ve  el  peligro  ó  no  quiere  hacer  algo  por  eyi" 
tarlo  cuando  se  halla  perseguida  por  los  catadores*  Se  le  encuentra . 
diundantemente  tanto  en  la  tierra  caliente  como  en  la  templada* 

Pauji'de  piedra  (craxpauici).  Su  cabeza  y  cuello  están  oubieiw 
tos  de  plumas  corta»  que  tienen  la  aparienda  de  un  terciopelo  nen 
gro,^  el  resto  del  plumaje  es  de  un  negro  brillante  oon  un  viso* 
verdoso ;  tiene  blanco  el  abdomen  y  es  del  mismo  color  debajo  de 
la  oola  ;  las  patas  son  enoarnadbs  y  el  iris  pardo;  el  pico > es  de  un 
oueamado  brillante  y  la  prominencia  que  le  domina  es' de  color  de- 
pizarra.  Esta  ave  vive  en  grandes  bandadas  que  se  posan  sobre  los 
árboles  y  hacen  el  nido  en  la  tierra.  Ordinaríamente  se  encuentraní 
en  los  bosques  de  la  serranía  en  que  no  bai  muetio  calor.  Suelea 
hftbilar  de  4).  200  varas  para  arriba.  La  hembra  conduoe  sus  pollos 
«orno  las  gallinas^  Se  alimenta  de  gusanos  é  insectos,  pero'prefiere 
las  fruías  y  vegetales.  Se  amansa  fácilmente  y  puede  reducirse  ai: 
estado  doméstico,  pues  su  carne  es  buena  para  comer  y  se  psorece  á 
la. del  pavo. 

Pava  de  mcmte  {penelopecumanensis).  Es  el  ave  mas  grande 
de  su  género,  pues  tiene  cérea  de2  f/2  pies  de  largor  El  color  de  la 
superficie  de  sucuerpo  es  negro  intenso  ó  bronceado  con  un  reflo*^ 
jp  verdeó  aoeitiinado  ;  la- plumas  de  la  oabeaa  foitnanuna  ejpede 
^copete  que  el  animal  puede  bajar  ó  levantar  como  qtiiere  ;  la. 
mayor  parte  del  cuello  y  el  ipecbo*  está  mesquenda  de  blanco ;  cada, 
pluma  tiene  un  ribete  del  mismo  color  ;  las  mejillas  están  desnu** 
•das  y  son  de  un  color  violeta  purpurino.  El  iris  es  pardo  rojizo ,  el 
pico  negro  y  las  patas  encarnadas.  Debajo  del  cuello  tiene  una  piel 
de  una  escarlata  brillante.  Esta  ave  abunda  en  la  Guayana  y  su 
carne  es  mui  buena. 


1 


^m^ 


Guacharaca  (parraffuas).  Ave  que  vive  en  bandadas  y  su  canto 
dice  la  palabra  de  su  nomÍBre:.efi«ad*iemi^íeia  áx^ntar  en  los  bos- 
ques en  donde  se  mantiene,  las  demás  bandadas  responden  inme-* 
dlalaiiieDle  fonfHvndé  una  gntwía»  eslra#vdfi»fia^  E»  mas  grande 
quitiuiia  gallina^  su  color  p^ffdo  osooMi^aeeitfiMda  y  coDícola  y  pa*- 
taB^argM ;  saltaide  rama  en  ramay  corre  nmebo  en  elisu^loj  pop>^ 
qtM»  su  Toelo  es  algo  pesado*  Se  1^  puede  reduein  fácümonte  al  es** 
Mo  doméstioo,  y  es  su^carne  de  ungiteto  agradable. 

Paloma  (^timto^/Métf).  Éntrelas  numerosas  ares  «de  esta 
género  debe  colocarse  la  paloma  de*Rio^égro  como  una  de  las 
mas  bellas.  Los*  colores  <]e!roacbo  son  mas  virosque  los  de  la  bem<^ 
bra  :  la  cabeza-de  un  color  azul  con  tornasol  morado,  el  pico  patas 
yojl^  eaeanmdos ;  el  pecho  color  de  vioo  tinto  con  yisos^enoanuK 
dos  y  amarillos,  el  lomo  color  de  avellana  claro ;  el  pesou^o  blanco 
y  negro  muí  brillante  ;  las  alas-  y  cola  de  unicolor  de  avellana  os- 
curo con  cintas  blancas  y  negras.  Su  longitud  es  de9  á  40  pulgadas* 
ysn  canto  no  es^tan  triste  como^  de  las  otras.  La  paloma  monta» 
ñera  tiene  el  segundo  logar  y  la  turca  y  la  poneha  el  tercero.  E^ 
numerosa  esta  espede  en  todo  el  país  y  hai  individuos  de  ella  tan 
pequeiios  como  lindos.  Escepto  las-  tres  primeras  que  van  solas  ó 
apareadas,  las  demás  so  encuentran  en  numerosas  bandadas,  su  car-» 
ne  es  muí  delicada  y  apetecida.  Llimanlas  tórtolas  (columbatur^ 
twr)  y  las^liai  de  varios  colores^  lo  mismo  que  las  que  se  designan 
conocí  nombre  de  palomita  de  collar  (columba  risona). 

Codorniz,  llamada  vulgarmente  perdiz  (colinsj.  Tiene  el  lomo* 
pardo  ondeado  de  negro  y  un  poco  bMnqueetno  sobro  los- ojos.  Es^ 
comida  mui'deHcada.  El  maeho^leja  oír  un  canto  que  se  imita  con« 
uu  pito  para  coger  la^  hembra ;  estaponede  '1 4  á  4  8  huevos :  con»^ 
truye  su  nido  sobre^latierra  con  yerbas-y  hojas.  El  macho  no  ayu- 
da á  la  hembra'cn  estfe'trabajo  y  se  queda  allí  parado  oomo  un» 
centinela  ;  pero  se  junta  con  ella  para  conducir  y  proteger  la  cria¿- 
Los- perdigones  eeban  á  correr  luego  que^  nacen ,  y  la  madre  tlMie 
con  ellos  mnetio  chidado  y  manifiéstala  mayor  ternura; 

Tigana Esta  ave  es  de  un  pié-delargo,  sus  oolores'son  gena- 

ralmento  pardo  rayado  do  negro  y  las  patas  amarillas.  Soamanstf*' 
fáéilmeiitey  litfipia'laaeasas'do  los  dnseetos' y  sabandijas*  Tteno^el^ 
pescuezo  largo, i  e9té' siempre  triste  y-camioa-con  lenttittd  y  ca«^ 
téltti 


—  200  — 


ÓftBBR  DI  LOS  ZAHCÜDO0. 


t 


Grulla  {grus  americana)  y  de  la  clase  de  los  caraivoros.  Esta  her- 
mosa ave  que  reuoe  á  la  elegancia  la  variedad  de  los  colores,  se  e&- 
cuentra  en  abundancia  en  Rio-Nej^ro  ;  tiene  2^/2  pies  de  alto.  Sa 
pluma  es  negra  con  reflejos  azulados  sobre  el  cuello  y  espaldas;  loa 
primeros  guiones  de  las  a)as  son  negros^  pardos  los  otros.  Dos  man- 
chas blancas  y  grandes  realzan  el  fondo  de  su  manto  ;  una  orejera 
ancha  de  un  hermoso  blanco  en  las  sienes  y  de  un  encarnado  vivo 
sobre  las  mejillas  envuelve  su  cabeza  y  desciende  hasta  debajo  del 
pico  ;  una  toca  de  pelo  negro  y  espeso  cubre  su  frente,  y  su  copete 
bastante  tupido  de  color  de  isabela  termina  en  un  ramilletito  ne- 
gro en  cada  pluma ;  su  iris  es  blanco ,  el  ¡hco  y  las  patas  negras. 
Esla  ave  es  de  un  natural  dulce  y  se  acerca  al  hombre  con  confian- 

• 

za;  en  S.  Fernando  de  Río-Negro  eslá  domesticada  y  come  en  los 
corrales  con  las  otras  aves.  Se  posa  en  las  ramas  de  los  árboles 
para  dormir  y  se  alimenta  de  semillas,  yerbas,  insectos  y  gusanos. 
Guando  canta  se  percibe  un  fuerte  sonido  en  su  vientre  mui  dife- 
rente  del  canto;  es  sordo  y  profundo,  y  parece  que  sale  del  ano.  Se 
remonta  mucho  en  su  vuelo  y  siempre  viaja  por  los  aires  en  gran- 
des bandadas  formando  un  triángulo  isóseles. 

Gallito  de  monle  (psophia  crepiians).  £s  un  pájaro  de  bonita 
presencia,  casi  del  color  de  la  guacharaca,  del  tamaño  de  una  ga- 
llina. £1  pico  es  verde  y  encarnado,  su  plumaje  hace  un  vj^o  acei- 
tunado ;  las  patas  son  coloradas  y  verdosas.  Canta  levantando  el 
pescuezo  y  hace  sentir  un  sonido  doble  como  el  de  la  grulla.  Se 
amansa  fácilmente  y  come  con  las  demás  aves  de  corral.  Parece  que 
tiene  antipatía  á  los  niños  á  quienes  persigue  á  picotazos  por  los 
pies.  Vuela  mal,  corre  lijero  y  vive  ai  pié  de  los  árboles.  Su  carne 
es  buena. 

Garzones  {mycteria  americana),  de  la  especie  de  las  garzas  rea- 
les. Tiene  debajo  del  gargüero  un  depósito  en  que  recibe  el  agua 
que  traga  con  los  alimentos,  en  lo  que  se  asemeja  al  pelicano.  Su 
cabeza  no  eslá  cubierta  de  pluma,  pelo  ó  pelusa  y  esta  desnudez  le 
da  de  lejos  la  apariencia  de  un  pedazo  de  madera ;  los  ojos  sin  pár- 
pados ni  apéndices  parecen  embutidos  en  la  cabeza  y  la  hacen  toda- 
vía mas  disforme ;  su  pico  se  compone  de  dos  largas  piezas  huesosas 
con  las  que  hace  un  gran  ruido  cuando  las  limpia.  La  parte  supe* 


J 


204  — 


rior  de  ias  alas  es  negra  con  un  reflejo  azulado ;  el  vientre  blanco* 
Tieneias  patas  largas,  íft^s  y  yerdosas»  los  maslos  del  mismo  co- 
lor y  sin  plomas,  asi  como  el  cuello  que  es  todo  negro  con  un  co- 
llar colorado.  Se  le  encuentra  ordinariamente  á  las  inmediaciones 
de  los  sitios  pantanosos ,  vive  solitario,  se  mantiene  mucho  tiempo 
sobre  un  pié  como  las  grullas  y  se  alimenta  de  pescado,  quedes- 
truye  en  gran  cantidad.  Es  del  alto  de  un  hombre  y  no  se  ve  sino 
en  las  sabanas  á  las  orillas  de  los  caños  y  esteros.  Es  ave  de  tierra 
caliente. 

Gayan  [tantalus  lucnlator).  Especie  de  garzón,  pero  mas  peque* 
ño.  Vive  en  bandada.^».  Su  color  es  negro  y  blanco  y  su  carne  es 
buena  para  comer  :  tiene  las  mismas  costambres  que  el  garzón. 
Todos  los  años  se  ven  grandes  inmigraciones  de  estos  animales  pro- 
venientes del  Brasil ,  á  la  salida  de  las  lluvias ;  pero  no  se  sabe 
que  regresen  ó  emigren  para  otra  parte. 

Garza  morena  (árdea).  Ave  pescadora:  se  mantiene  en  los  ár- 
boles cerca  de  los  rios ,  en  las  orillas  de  estos  y  en  la  de  los  caños 
y  lagunas.  Descansa  frecuentemente  sobre  un  pié.  Su  color  esceni- 
zienlo  y  su  carne  ofrece  una  comida  escelente  y  abundante,  porque 
es  ave  bastante  grande.  Vive  en  tierra  caliente. 

Garza  atigrada  (árdea).  Se  halla  en  la  Guayana  en  las  sabanas 
solitarias,  frecuenta  las  orillas  de  los  rios  y  caños,  y  se  alimenta  de 
ranas,  serpientes  y  otros  reptiles.  Espía  su  presa  con  el  mismo  aire 
melancólico  que  caracteriza  á  toda  esta  familia.  Construye  su  nido 
sobre  la  tierra  y  pone  7  ú  8  huevos.  Se  amansa  algunas  vezes,  pero 
se  oculta  entonces  en  todos  los  rincones.  Hace  la  guerra  á  los  rato- 
nes con  tanta  destreza  como  un  gato.  Esta  ave  tiene  como  2  4/2 
pies -de  largo  y  el  plumaje  de  su  lomo  y  alas  es  de  color  terroso 
con  muchas  rayas  trasve^^ales  y  pardas  ;  la  cabeza  y  el  cuello  son 
algunas  vezes  mas  pálidos  y  las  marcas  oscuras  tienen  mas  bien  la 
forma  de  manchas  que  de  rayas ;  el  vientre  es  blanquecino  cruzado 
por  las  mismas  bandas  morenas. 

Garza  blanca  (árdea).  Ave  triste  y  de  poca  industria ;  pasa  su  vi- 
da en  las  orillas  de  las  lagunas  y  rios  en  unión  de  muchas  otras , 
contenta  con  sus  ranas  y  pezeciilos ;  es  mol  flaca  y  su  carne  no 
sirve  para  comer.  Hai  entre  ellas  algunas  rosadas  con  plumas  muí 
finas. 

Pájaro-baco.(  Aero»  butor).  Especie  de  gar^  de  color  leonado , 
se  mantiene  habitualmeiUe  escondido  ett  medio  de  los  Juncos  y  yer- 


—  2M:^ 


\ 


ba»  aooálíeiS)  inmébü'yd  pico  levantaéy^  al- oídlo.  Calido. etata»-^ 
cado«  98  d]»fie&4e  con*  valep  y  daiá-sasvenenAgoaíQertMí  pioatlAM ; 
piro  tiene  un  terror  pánieo  ¿  losaMMirot^  de  1m  cuales' hiife..Sfc 
e» per^e^ido;  bwsca logar  para  eteooderse^ pemeado lacahMa eat 
alfana  parte  oenlta^  le  parece  eetar  en  salvo  amiqne  el.  reato-  áA. 
caerpo  esté  deseabterto.  Eatónee»  le  atacan  con  foría  loa  samaioa 
y  en  esta  díspasieioa  es  Wctíma  de  ellba*  Dorante  la  nodie  hace  oír. 
una  espede  de  gmmido  iúgobre  y  se  nntrei  da  insectos,  límala^  ra«> 
ñas  y  pequeños  pescados. 

A4oaral>an  cabezón*  (carandnaéj.  Esta»  ave»  van  siempre  aparea- 
daa,  se  maniieaen  en  las  praderías  para  boacar  en  ellas  los  gusanos 
y  tíenen^espelonea  en  las  ala».  Sti  color  es  oentziento  y  el  vientre. 
blffiíOD  con  maneha»  negras  ea  el  cuello  y  ala»;  ciertas  plomas  la' 
salen- de  la  cabesa  tiradas>en  forma  de  cola  hacia  atras.  Estas  aves 
son  de  noche  como  una  centin^aique  al  nienor  ruide  edian  nor 
fuerte  diillido  y<se  alej^  dél.$iiío  ;  so  vuelo  ea  corto-  y  algo  pe- 
sado. 

Pato  cuchara  (|9Ai^a/«a  olata^.  Esta  ave  debe«i<Dombreá  la 
forma  de  su  pico  ;  su  tamañoes  poco  masó  menos  como  el  de  las 
garzas  y  su  pico  tiene  mas  de  8  pulgadas.  El  color  de  ella  es  todo- 
bJaneo,  si  bien,  hai' algunas  de  un  rosado  pálido;  los>  pies  son  ne- 
gl«s.  Freéuwilan'los  pantanos  rodeados  dé  árboles,  soreles  cuates 
haceu'SU  nido  escogiendo  los  maa  elevados.  Se  alimenlan  de  pesca- 
ditOí^^  reptiles  y  gusanos,  m*.  pico  les  da  la.  facilidad  de  buscarlo»  en 
el  fangOi  Cuando  están  en  peligro  ó  enec^erizados)  tiaeen  cast«me-* 
tear  con> preeipitacimi<  sua maadümlas  y  este esel único  son  que se^ 
Itfoye; 

Gsu9a(y{pmraja9ani^?)i  fis^db  un  color  casiano  con  pmta»  mes- 
nadas blancas  y  va  siempre  apareado.  Su  pico  es  largo  y  un  poeo 
encorvado;  su'canto^gudoy  de  su'smido  se  origina  el- nombre  que 
llena.  Gritan*  mueho  de  noi^e  y  también  cuando  vudbtn ;  se  maa*- 
tienen  en  los  enteros  de  las  llanuras,  nutriéndole  de  pe8eadill09>y 


b' 


Ásmea'ipalamiBScUíiemmíUáli^  Esrunaave^triste  del  tamaño  de  un 
pa90';:peiH»»n  carae'al  tacto^pareoe  toda  esponjosa.  Su^solores-ne-^ 
gPú  y  biaaeo*;  llene-espaelas^  en  loaettcneatnoa  de.larala»  y  de  laa 
patas ;  su  canto  es  triste,  su  vuelo  corto  y  no  mui  elevado.  Se  le  eor- 
cuentra  constautemaiiteeni  las  sabanas  y  en>  leK> logares  panteíosos 
Uamadl>s'esteK084<  Bá  ttóü^aoMAióaile:  y  Hm  habafti  osla?  estidft >ea¿ 


; 


—  2»»:  — 


oióelta  Adeudad  f  hacen,  de  nodie^sobt^  toáO|  oír;  s«  oanto  qüe^fle- 
asemeja  al  rnido  de  nna  voz  muí  fuerte. 

(Mlioeta'  da  ajgna  {fWiewmartiniea).  Su  longilüd  es  de  un 
pl¿,  sü  p\m  asnaríllo  en.  la  ponta  y  rojo-  en  el  naelmiento ;  lar 
frente  del  mismo* eolor  asi  como  las  patas;  todo  el ^ plumaje  par- 
do escaro,  miH'eno  verdoso  por' encima,  blanquecino  por  debajo; 
una  línea  blanca  guarnece  las  alas.  Vire  d^  pescadüos  y  yerban 
aonáticas»  Como  este  gallUo  tiene  la»  alascorlars,  vuela  poeoyUe- 
Tia  los  pies  colgando.  Nada  poco  también  y  p^manece  oculto  en- 
tre las  caüas  y  juncos-;  frecuenta  la»  lagunas  y  su'  nido  colocado 
á^la  orilla  del  agua  está  constmido  con  pedazos  de  caña  y  juncc» 
entrelazado»;  ta  madM  deja-  el  nido  todas  las  nodies.  Los  hait 
de  diferentes^  tamaños  y  de  distintos  colones ;  pero  todosr  con  lasr 
mismas  costumbres.  Tienen  un  espolón  en  el  encnentro  de  las 
alas. 

Flamenco  ó  pi]9Toso\á^O'(phoBniúopteru9  ruber).  Habita  las^ 
orillas  dd  maren'bandádasque^aiimentan'deineduseos  y  pescadi^ 
tos ;  mientras  hacen  su  pesca  metiendo  la  cabeza  en  el  agua,  una' 
de  ellas  está  de  centinela  para  advertir  del  peligro  en  caso  neeesa**' 
rio.  El  color  es  todo  rosado ,  y  como  son  altos  y  se  mantienen  en  ba- 
talla en  las  orillas  del  mar,  inmóbilés,  atentos  á  su  pesca ,  de  aquí 
sin  duda  les  vino  el  nombre  de  soldados;  La  hembra' construye  su 
nido  en  medio  de  los  pantanos,  elevándolo  desde  4^  pulgadas  hasta 
2'pies,  semejante  á  un  cono  truncado )  cuya  cima  está  hueca :  pone 
en  él  dos  huevos  queempollá  manteniéndose  á  horcadillas  sobre  el 
itído.  Se  domestican  fácilmente,  pero  entonces  pierden  süs  bellos 
colores  y  se  ponen  casi 'blancos  :  parece  que  el  agua  salada  le  hace 
falta  é  influye  poderosamente  en  el'coloridode  sus  plumas. 

órDBir  0r  los*  aguáticos. 

ZomhuWiáor  (podiceps  americanus).  Krc  que  no  vuela  pero' 
que  nada  con  mucha  facilidad ;  cuando  es  perseguida^  sesumerge  en 
el  agua  y  no  saiet)fra  vez  sino  á  mal'  \kv^w  dlstanda^déllügar  de' 
sfiinmersion.  Sé  mantiene  en  lós-lágos'ybacesu  nido  en  los^jun^ 

COS. 

dotáa-  [earb&f :  espédedc  pato  que  •vlre.en  bandadas  en  los  laígoy ; 
sn-colOres.'pardO'Oseiiro  easitnegro  ytiénolás4iiiraiasKK»tifmbres^dé^ 


—  204  ~  ^ 

los  palos.  Por  su  modo  de  mirar  eon  la  cabexa  leTtBtada,  par^eee 
una  ave  estúpida ;  se  mantíeoe  largo  tiempo  en  los  árboles  Teeiuosal 
agua. 

Cuervo  {platus?).  £sta  ave  vive  en  el  agua  y  se  mantiene  tam- 
bién como  los  alcatraces  en  los  árMes  :  los  hai  de  agua  dulce  y  de 
agua  salada ;  ambos  son  negros^  estúpidos  y  muí  voraces.  Nadan  ma- 
cho mas  que  vuelan ,  y  cuando  son  perseguidos  se  sumergen  y  salen 
lejos  del  lugar  de  su  inmersión. 

.  Alcatraz,  ó  Xococo  {pelicanas  fuscas) :  pájaro  grande  que  habita 
las  costas  del  mar.  La  envergadura  de  sus  alas  es  de  casi  9  pies.  Se 
balancea  lijeramente  en  el  aire ,  y  cae  como  un  plomo  sobre  el  pes- 
cado de  que  hace  su  presa.  Se  reúne  algunas  vezes  en  bandadas  para 
pescar,  llena  el  saco ,  que  tiene  debajo  del  pico ,  y  se  va  en  seguida 
á  digerir  con  comodidad  sobre  la  cima  de  alguna  roca  ó  sobre  las 
ramas  de  los  árboles.  La  bolsa  que  tiene  puede  contener  á  lo  menos 
40  botellas  de  agua.  E!s  mui  voraz  y  come  de  una  sola  vez  tanto 
pescado  como  seria  necesario  para  la  comida  de  4  personas.  Ge- 
neralmente suelen  volar  casi  al  nivel  del  agua  y  solamente  se  ele- 
van mucho  en  las  tempestades.  Reposan  y  á  vezes  duermen  encima 
de  las  olas. 

Pájaro-bobo  {sula).  Este  pájaro  se  llama  así  {)or  su  grande  es- 
tupidez, pues  se  deja  coger  con  la  mano  sin  tratar  de  huir  ni  defen- 
derse ;  no  puede  emprender  su  vuelo  sino  hallándose  á  cierta  altu- 
ra, de  la  que  parte  para  asentarse  sobre  el  mar  y  cazar  los  peze- 
cillos  que  nadan  sobre  la  superficie  del  agua.  Apenas  deja  las  ribe- 
ras. Las  islas  desiertas  están  llenas  de  estas  aves. 

La  gaviota  [procellaria  puffinus)  es  una  ave  pequeña  que  se 
mantiene  en  grandes  bandadas  en  las  playas  desiertas  del  mar  ó  de 
losrios.  En  la  arena  es  donde  deposita  sus  huevos  y  cuando  alguna 
persona  pone  el  pié  en  aquellas  playas,  se  alborotan  todas  las  gaviotas 
con  una  gritería  estraordioaria  y  en  lugar  de  huir  revoletean  sobre 
la  cabeza  de  las  personas  y  se  lanzan  contra  ellas  para  picarlas,  pu- 
diéndose entonces  malar  hasta  con  palos. 

Pato-real  ( anas ) ,  Su  mansión  es  en  cenagosos  ancones,  en  lagu- 
nas y  esteros;  construye  su  nido  con  pequeñas  ramas  en  la  horquilla 
de  arguQ  árbol ,  pero  mas  comunmente  en  el  hueco  de  un  tronco. 
Son  numerosos  sus  huevos,  pues  llegan  á  una  treintena  en  cada  cria» 
La  hembra  se  sirve  del  mismo  nido  durante  muchos  años;  nunca 
va  en  compañía  sino  de  tres  ó  cuatro^  y  se  amansa  fácilQiente.  £i» 


; 


205  — 


del  tamaño  del  pato  doméstico  y  mucho  mas  hermoso ,  á  causa  de 
)a  belleza  de  sus  colores. 

Pato-carretero  (anas).  Ave  de  paso  que  va  siempre  aparejada ;  el 
macho  es  ud  poco  mas  grande  que  la  hembra;  su  color  es  pardo 
oscuro  con  pintas  blancas  y  negras ;  su  carne  es  muí  buena.  Si  se 
roa(a  la  hembra ,  el  macho  ni  siquiera  intenta  huir^  pues  se  queda 
cerca  de  ella  de  manera  que  da  {figaral  cazador  para  cargar  y  volver 
á  tirar.  Se  encuentra  en  las  playas  y  en  los  esteros.  Se  mantiene  de 
pe^caditos  y  también  suelen  comer  una  yerba  llamada  carretero; 
pero  entonces  su  carne  tiene  mal  gusto.  Es  fácil  de  domesticar.  Sus 
emigraciones  son  cuando  el  Orinoco  comienza  á  esperimentar  las 
primeras  crecidas,  es  decir,  después  del  equinoccio  de  la  primavera ; 
se  dirigen  entonces  en  bandadas  á  la  región  austral  hacia  el  S.  S.  E. 
Abandonan  el  valle  del  Orinoco  para  pasar  al  de  las  Amazonas ,  ún 
duda  porque  la  profundidad  de  los  ríos  por  la  creciente  de  las  aguas 
y  la  inundación  de  las  playas  les  impiden  coger  los  pezes ,  ios  in-^ 
sectos  y  ^os  gusanos  acuáticos.  Cuando  van  hacia  el  ecuador,  están 
mui  gordos  y  sabrosos ;  pero  cuando  regresan ^  que  es  en  setiembre, 
es:án  flacos ;  entonces  se  bailan  acompañados  de  los  gavanes,  los 
cuales  ofrecen  un  alimento  escelent^. 

Pato-comun  (anas).  Los hai  de  varias  especies  y  tamaños  en  las 
lagunas,  esteros  y  caños ,  y  lodos  de  carne  mui  sabrosa  y  mas  esti- 
mada que  la  del  pato  doméslico.  El  agua  es  en  parte  su  elemenlo  ; 
su  modo  de  andar  es  lento  y  embarazado ;  su  voz  mui  desagradable. 

Güires.  Patos  pequeños  y  mui  gordos  cayo  g^ilo  es  güiriri  que 
repiten  á  menudo ;  así  es  que  se  conocen  también  con  este  nombre. 
Su  color  y  tamaño  distintos ,  pero  en  general  son  pardo-oscuros  con 
manchas  blancas  y  negras ;  su  forma  y  costumbres  como  la  de  los 
patos.  Viven  en  grandes  bandadas  y  se  mantienen  regularmente  en 
las  lagunas  y  esteros  en  que  pueden  pescar.  Son  mui  gordos  y  su 
carne  mui  gustosa  ;  abundan  considerablemente  en  las  sabanas  de- 
siertas entre  el  Araiica  y  el  Meta  y  los  hai  en  toda  la  república.  Se 
pueden  domesticar  fácilmente  y  se  encuentran  en  este  estado  en 
Caracas  á  la  altura  de  -i  04 1  varas  sobre  nivel  del  mar. 


\i 


im — 


JLVES  DOMÉSTICAS. 


\ 


PafáMMal  (.pao'iírktaius)  de  la  ckfie  deilas.gayiaáeeas,  fiíta 
Jwnneaa  ave  esoriguiaria  del  Asia ;  la  hembca  aimqiie  liene  la  crMia 
y  oolaidonio  elmaelio,  na  Ueae  tan  brUkintos  «olores  ;.pone  de  5  á 
^  huftfos  bUmqueoinos-en  un  paraje.ocDUo  fraca  q«e  el-rnaabo  no 
te  vea,  perqué  de  ioienlalos  remperia.  Tardan  los  pichones  25.  á 
;30  días  en  salir.  Los  payos.reales  blanoo8:no  s^  oomunes.  Sus  ojos 
son  yisibles  sobre  la  «(ila.por.una  sombra  lijera.  £stAs  aves  se  en- 
.cofintran^ea  Asia  y  África  ^  peco  ks  mas  hermosas  se  venen  las  Ua- 
nnras'de  la  india  y  á  las  iomediadones  del  Ganges.  Los  romanos 
;las  buscaban  mueho  y  la  Biblia  dice  que  Salomón  las  iriijo  del 
Oriente.  En  los  üempos  de  la  caballería  se  servia  un  pavo-r«al 
asado  y  adornado  de  sus  plumas  sobre  61  que  hp  ^b^lleros  presta- 
lian  juramento  de  haeer  algunos  .grandes  hechos  de  armas,  y  dicho 
juramientoerasa^rado p«ra ellos.  £n el pais prospera^ bien  yse,tíe- 
.ne  solamente  por  lujo. 

Pavo  ( meleagris  gallo-pao ).  Esta  ave  de  la  familia  de  las, galli- 
náceas, originaria  de  la  América  setentrional ,  no  ha  sido  eanoeida 
en  Eufiopa  hasta  mediados  del  siglo  xvi  en  que  la  introdujeron  Ids 
españoles.  Aunque  desde  pequeño  teme  el  frío,  vive  en  grandes  ban- 
dadas en  lasselvas  del  Canadá^  que  están  cubiertas  de  nieve  las  Ues 
.cuartas  parto  decano ;  ^  mas  fuerie  alli  que  en.el  estado  domés- 
tico y.pasa  basta  «40  libras. ^u  ^ttm^je>masiiermoso  es  de  un  ^m 
osenro  y  goarneoido  en  las.  estcemidades  de  las  .plumas  de  un  bri- 
llaotecolor de^oDO. :El  pavo «e  encoleriza Dáeilmenie  y  persigue  á 
picotaaosios  inuehaeosy  los  perros ;  pero  un  gallo  le  hace  ewrer. 
Cuando  él  ha  heobo  huir  el  ob»ieto  de  su  aversión,  desplega  «en 
.orgi»Uo.8a4>ltimajey  hace  la  rueda  .como  el  pavón,  dt^jaiklo  oir  un 
iaoniáo  deapeobaeioQ.:La  hedibra  pone  ^8  ¿  20  huevas ^e^enUa 
al  fin^H),  el  que  los  r^o^ria  por  no  estar  privado  de  ella:;  y.es 
tal  su  per^ev«ianmf«»i  eneubrirloSy  qoemuchas  veoes  se  muere  de 
hambre  sobre  ellos.  En  Venezaela  prospera  bien  y  se  cria  en  todas 
partes  con  mucha  ventaja. 

Pato  (anas  aquatico).  Esta  ave  es  taii común,  que  creemos 
inútil  hacer  su  descripción.  Parece  que  en  Europa  no  fué  conocida 
antes  del  descubrimiento  de  la  América  y  de  donde  se  juzga  que  trae 


; 


4m 


sa  origen.  Se  cria  en  mucha  abundancia  en  todo  el  país,  dando 
grandes  ventajas  á  sos  criadores. 

Ganso  ( anas),  de  la  familia  de  los  palmipedos.  Los  gansos  sil- 
vestres emigran  y  yan  á  pescar  en  iovierno  á  los  paises  del  medio- 
día-^n  que :hidlMi  aguas  quemo  eslán  lidiadas.  Yáiete»  «q  bandadas 
iomiiedo  des  Uiftaaniafaradas ,  ^de  múio  «que  haeoí  un  ájipitoff n 
cuyo  véctiae  va  «n.maelio.  £1  s§aiMo4om46lico  es  de  la  miama  es- 
^^e  y  Uega  á  ser  iUn  objeto  de  grande  .utílidad  por^us  pliiiBas,  pe- 
lusa, carne  y  grasa.  En  Venezuela  apenas  hai  alganos,  á  pesar  de 
que  prosperan  perfectamente. 

Pintada,  gallineta  ó  gallina  de*Guinea  (numidia  meleagrü). 
Ave  orígiiíada  de  África  y  pcirapalméate  deLpais.de  iirgel ,  de  la 
jámiliatdeias  galUnáreas.  La  pintada  tiane  la  cabeza  sin. plumas  ^  Jtas 
•barbillas  earnoaBis  debajo  de  las  mirillas ,  la  cola  coria  y  ¡una  pvo- 
minencia  huesosa  encorvada  hacia  atrás  sobre  el  cráneo.  Se  llamaba 
aalifiuainHile  gaUina  de  Mdeagxa  ó  de  numidia.  Los  romanos 
ila  JÉisfiaban  para  Ja  -mesa  y  costaba  caro.  Su  voz  esaliilloaa  y  desa- 
gradable. Guando  se  amansa  y  domeatica,  afecta  sin  embargo  electo 
imperio  s^re  las  dornas  aves  companeras  <de  eselavilvd  y  ae  hace 
tiBiar  de  los  patos.  Las  halen  Venezuela,  donde  ptoapecan. 

El^lo  [pkasiasms  gaUus )  de  la  famüia  de  las  gálUnácaas;  es 
el  primero  que  se  ha  bocho  servir  á  las  necesidades  de  la  vida,  ^ttn- 
gun  animahmanifíesia  mas  valer  y  oi^lo ;  sultán  en  medio  de  su 
serrallo,  ledeiende  con  res^neion  y  canta  su  viotona.  £1  ounbate 
degaUfos  es  usa  diveráon  «un  ini los  pueblos  civilixidds.Losvgaüos 
salv^es  de  las  costas  del  Ihialabar  wn  AOgDas  y  amadUos^.y  sus 
huesos  oaeideS'SOD  negros  como  el  ébano ;  se. han  vislo<a]f^os  de 
dios  Itaeer  frente  á  on  gavflan  y  foizarle\áretit«'se«  La  eiria.dalos 
«gallos  y  gallinas  es  considerable  an  el  país ,  en  donde  ccece  y.piios- 
perá  con  ventajas  insMnsas  de  toda  la  pobladon. 

La  paloma  (calumba)  qve  todos  conoeen^  es  de  ikucias^ de  las 
gallináceas ,  abunda  sMicbo*en  el  pabj  ias^hai  desdtfeimtes.coto- 
ve»y>8on  íaii  mansasy  feenndas  cómalas  qiie  viven  en;|>leiia  libecfead 
«a  los  bosques.  £n>  todas,  partes*  ex^tcn  «óasdenatos  animáteS; 
«mbolodeia  temara. 


—  20g  — 


\ 


PEZ  ES. 


La  clase  iamensa  de  pezes  se  divide  nataralmente  en  dos  seríes  : 
pezes  oseosos  y  pezes  carlilaginosos;  los  cuales  difieren  entre  sí,  no 
solo  por  la  naturaleza  de  su  csqoeleto,  sino  por  on  gran  námero  de 
caracteres  diversos.  Los  colocaremos  en  estas  dos  grandes  series. 

SERIE  DE  OSEOSOS. 

Mero.  Uno  de  los  pescados  mas  sabrosos  y  que  mas  abundan  en 
nuestras  costas ;  no  tiene  escamas,  es  de  un  color  aplomado  y  cre- 
ce basta  5  pies.  Se  cogen  muchos  á  la  entrada  del  lago  de  Mará- 
caibo. 

Pargo.  Pasa  por  el  mejor  pescado ;  fiene  una  escama  rosada  y 
blanca  y  se  cogen  muchos  en  toda  la  costa.  Se  hace  una  pesquería 
de  ellos  en  el  lago  de  Maracaibo. 

Yagre.  Pez  mui  grande,  que  abunda  en  las  orillas  del  mar,  tiene 
una  cabeza  enorme  y  ancha  boca  con  dos  grandes  barbas  qm  le 
salen  de  ella ;  ^s  escelente  pescado.  En  los  ríos  del  interior  los  iiai 
liasta  de  6  pies  de  largo,  sobre  to  Jo,  en  la  provincia  de  Barínas.  Su 
pesca  es  abundante,  como  también  en  el  lago  de  Maracaibo. 

Liza.  Tiene  un  brillo  de  plata  s<^re  la  su(>erfície,  que  está  real- 
zado por  visos  de  azul  de  acero;  sus  mandíbulas  están  guarnecidas 
de  dientes,  las  escamas  son  anchas,  la  lengua  blanca,  lisa  y  gruesa, 
üu  hueso  estraordinariamen te  delgado ,  cubierto  de  escamas  y  ea- 
corvado  como  una  podadera ,  se  estiende  desde  el  cuello  hasta  el 
ano.  Las  pectorales  tienen  la  forma  de  una  lioz  y  son  grises  cchuo 
las  otras  aletas;  tiene  un  pié  de  largo.  Abunda  considerablemente 
entre  la  costa  de  la  península  de  Araya  y  las  islas  de  Coche,  Cuba- 
gua  y  Margarita.  Es  una  de  las  grandes  pescas  de  las  provincias  de 
Cttraaná  y  Margarita,  en  las  cuales  anualmente  se  emplea  una  can- 
tidad de  hombres  y  {pujeres  quS  establecen  rancherías  para  salar  y 
secar  el  pescado  en  las  islas  de  Coche  y  en  la  costa  de  Araya.  Este 
se  vende  en  toda  la  república  y  se  lleva  también  á  las  islas  vecinas 
de  las  Antillas.  Tiene  cantidad  de  huevas  que  se  salan  y  secan  al  sol 
y  con  las  cuales  se  hace  un  gran  comercio.  En  el  lago  de  Mara- 
caibo hai  mucha  abundancia  de  liza,  aunque  el  agua  es  dulce* 


; 


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Sábalo.  P^  grande  que  se  cc%e  en  abundancia  en  las  costas  de 
Cumaná  y  en  el  bajo  entre  esta  y  Margarita ;  sos  huevas  son  enor- 
mes y  de  todo  se  bace  mucbo  consuaio.  Este  pez  se  encuentra 
abundantemente  en  el  golfo  de  Maraeaibo.  En  los  ríos  de  los 
Llanos  hai  lambió  un  pez  sábalo  bastante  grande  >  y  particular- 
mente en  la  provincia  de  Barínas. 

Lebrancbe.  Pez  abundante  en  las  costas  y  sobre  todo  en  las  de 
Cumaná  y  Margarita,  del  cual  se  hace  buena  pesquería.  Parece  que 
una  de  sus  mansiones  principales  es  en  la  laguna  del  Uñare,  donde 
procrea  considerablemente  y  á  determinado  tiempo  salen  de  allí 
grandísimas  emigraciones  que  remonlan  contra  la  corriente  y  cer- 
ca de  la  cosía,  cayendo  en  seguida  en  manos  de  los  diestros  pesca- 
dores margariteños.  Lo  mismo  sucede  con  otro  pez  llamado  jurel 
que  se  encuentra  en  abundancia  junto  con  el  lebranche  en  ia  lagu- 
na de  Tacarigua  que  está  cerca  del  mar.  En  el  lago  de  Maracaibo 
hai  mucha  cantidad  de  estos  pezes,  á  pesar  de  que  el  agua  es  dulce^ 
no  salada  como  en  las  lagunas  de  Tacarigua  y  Uñare.  Este  pez  se 
halla  en  (odas  las  costas  del  pais. 

IA  pez^cofre,  de  la  familia  de  los  ostráceos,  está  revestido  de  una 
costra  oscura  que  lo  cubre  enteramente,  y  de  la  cual  toma  el  nom- 
bre. Comunmente  tiene  poca  carne,  pero  de  buen  gusto. 

Dorado,  Pez  humoso  por  sus  colores  que  le  dan  el  nombre.  Se 
le  halla  siempre  en  cardumes ;  y  se  cogen  con  anzuelo  mediante 
pedazitos  de  trapo  blanco  que  se  dejj^en  hacer  mover  constantemen- 
te, sobre  todo  si  se  hace  la  pesca  en  un  buque  á  la  vela  6  en  un  bote, 
pues  suelen  seguir  á  los  unos  y  á  los  otros.  Son  de  mui  buen  gusto 
y  los  hai  de  mas  de  vara  de  largo. 

Rayado.  Pez  de  color  brillante;  está  en  la  mar,  lleva  cintas  ne« 
gras  y  un  ribete  blanco,  el  fondo  naranjado,  y  su  carne  es  un  csce- 
lente  bocado.  Se  encuentra  en  nuestras  costas ;  pero  hai  otro  raya^ 
do  sin  escama  en  todos  los  ríos  de  los  Llanos,  mucho  mas  grande 
que  el  del  mar,  pues  llega  á  tener  cerca  de  4  pies.  Su  fondo  es  apio* 
mado  claro  con  rayas  trasversales  negras  ribeteadas  de  uü  color  par-^ 
do  oscuro.  Su  pesca  es  abundantísima  y  se  hace  bastante  comercio 
de  él  por  lo  sabroso  de  su  carne. 

Valentón.  Otro  pez  grande  que  se  halla  en  todos  loa  ríos  de  la 
zona  pasloríl  y  del  cual  se  hace  abvndante  pesca. 

Morocoto.  Pez  que  se  encuentra  en  gran  cantidad  en  todos  los 
•rios;  así'  como  el  bocachiea  en  toda  la  ostensión  del  lago  de  Ma- 

»•  SKOG.  4^ 


t 

racaibo ;  tanto  del  uno  como  4el  ^»  se  ihace  wkl  adñiiidaiite 
pesca. 

£alLe^-vieja.  Este  pez  se  encuentra  «n  todas -nuedtvaaiCOsta»oaa 
el  nombre  de  yieja ;  se  alimenta  de  mariscos;  por  encima  del  cuer- 
po es  de  nn  amarillo  oscaro  rayado  de  azul ,  mas  daro  soÉre  los 
costados^  y  llega  á  ser  gris  debajo  del  TÍentDe*  Sa  longited  «ade 
cerca  de  7  pies.  Tiene  el  nombre  de  baliesti^Yieja  por  la  naturaleza 
de  su  silvido  que  se  asemeja  á  la  voz  de  una  persc»ia  debilitada  por 
la  edad.  En  los  ríos  y  en  el  lago  de  Mara»;aibo  hai  um  pez  seme*- 
jante,  pero  map  pequeño ,  sin  listas  y  de  un  color  aptomado  :  iU^ 
manle  viejita: 

El  carif'e  es  un  pez  gramle  de  que  se  hace  buena  pesoa  task  éi 
lago  de  Maracaibo  y  en  toda  la  costa.  Es  una  comida  escelante ,  :tie- 
ne  el  vientre  de.  un  color  plateado  y  el  lomo  cenisiento  08C4MI^ 
Esle  pez  es  casi  redondo  en  su  forma ,  pero  «s  largo  como  de  mu 
vara. 

Pnerco-es{nn  marino.  Bebe  su  nombre  á  las puas  daqve  eslá  alo- 
mado ;  cuando  se  irrita  puede  binchar  su  pi^.  £1  lomoes azul ,  Ids 
lados  y  el  vientre  blancos ,  las  aletas  corlas  y  cubiertas ^deiiianehas 
pardas,  y  el  cuerpo  lleno  de  otras  negras.  Se  le  ve  en  naMtradeoa** 
tas.  Su  hígado  es  venenoso  y  se  le  oc^eooii  anzuelo.  Áoépeaseélal 
cebo  dando  vueltas  y  revueltas  al  rededor ;  lo  muerde  y  'lo  arroja 
inmediatamente,  mas  viendo  que  permanece  tranquilo^  vuelve  á)¿l 
y  le  engulle  con  el  anzuelo.  Cuando  se  ve  cogido  entra  en  fmroffy 
eriza  las  espinas,  hincha  el  vientre  y  procura  herir  todo  lo  fue  se 
le  acerca.  Como  estos  medios  no  le  salvan  y  recurre  á  lá  astucia  : 
acuesta  sus  espinas ,  recoge  el  cuerpo  y  se  hace  ieiible  como  up 
guante.  Viendo  sin  buen  éxilo  este  segundo  securso ,  toma  su  ac- 
titud defensiva  y  redobla  su  rabia ;  sus  vigorosas  espinas  le  cubren 
de  tal  modo  el  cuerpo,  que  no  se  puede  co§sc  con  la  mano  y  es  me- 
nester aguardar  á  que  se  muera. 

Guabina.  Pez  abundante  en  todo  el  país.  Su  carne  es  buena  me- 
nos la  de  la  guabina  que  vive  en  el  lago  de  Videncia,  quees  insípi- 
da ,  lo  mismo  que  la  de  los  vagres  que  allí  habitan,  Hai  usa  espe- 
cie de  sardina  de  mas  de  un  pié  y  mni  espmftsa.  Esta»  traa  clases 
son  las  solas  que  dominan  en  aquel  lago.  Bai  sardinas  enlodas  par- 
tes y  mui  hermosas ;  las  de  la  mar  no  aoa  tan  grandes  como  las  del 
ÍQgo  de  Valencia,  sino  pequeüas  como  las  de  Europa  y  4e un  gusto 
tan  bueno  como  el  de  aquellas.  Habiéndeae  beclie  aigonaaealMV 


f 


Qes  eo  bftrrilos  por  v^irias  penónos,  aalieroa  tan  gustosa^ comQ 
las  preparadas  en  Europa. 

Aguja  de  mar.  El  hocico  de  este  pez  es  largo  y  puntiagudo ,  su 
cuerpo  y  cola  son  tan  delgados ,  que  por  eso  tiene  el  nombre  de 
aguja;  sus  dientes  son  pequeños,  fuertes  y  colocados  de  manera  que 
los  de  una  quijada  entran  en  los  intervalos  de  la  otra  cuando  cierr^ 
la  boca.  Por  encima  del  cuerpo  es  de  un  negro  azulado^  Ips  costa- 
dos de  un  verde  mezclado  con  reflejos  que  tiran  á  azul,  el  vientre 
dal  bla^ico  mas  puro ,  las  aletas  grises  y  azuladas.  Tiene  por  lo  co- 
mún 2  pies  de  largo  y  solo  pesa  4  ó  5  libras.  Su  carne  es  seca  y 
flaca  y  no  sirve  sino  para  cebo  en  la  pesca. 

Caribe.  Pez  bueno  para  comer;  los  mas  grandes  tienen  casi  un 
pié ,  abundan  considerablemente  en  el  Orinoco  y  los  rios  que  á  el 
caen  ;  tiene  dientes  triangulares,  agudos  y  afilados ,  la  boca  ancha , 
devora  los  pezes  pequeños  y  es  sumamente  sanguinario.  Si  una 
gota  de  sangre  sale  del  cuerpo  de  una  persona  ó  de  un  animal,  en  el 
instante  de  pasar  un  rio,  se  reúnen  millares  de  estos  pezeS;  no  á  chu- 
par la  sangre^  sino  a  arrancar  pedazos  de  carne,  no  temiendo  en- 
tóneles á  nadie. 

La  perdona  ó  el  animal  que  por  su  desgracia  atraviese  un  rio  con 
alguna  úlcera  ó  pequeña  incisión^  llegará  al  otro  lado  con  el  hueso 
descubierto.  El  nombre  de  este  pez  le  vino  de  los  Caribes  ó  Caní- 
bales, comedores  de  carne  humapa.  El  hombre  del  Llano,  obligado 
á  cada  instante  i  pa&ar  nadando  Iqs  anchos  rios  de  aquellas  co- 
marcas, teme  mas  a  esle  pequeño  pez  que  al  calman  ó  la  anguila  eléc- 
trica que  llaman  temblador. 

Gymnota  ó  torpedo.  Anguila  eléctrica  que  se  encuentra  en  las 
lagunas,  aguazales  y  rios  de  la  zona  pasloril  y  délos  bosques.  Ella 
hace  sentir  fuertes  conmociones  semejantes  á  las  que  causarla  el 
golpe  de  electricidad,  al  que  quisiera  cogerla  ó  al  animal  que  se  le 
acercase  para  devorarla.  Esta  conmoción  se  trasmite  al  pescador 
aun  pormedio  de  la  cana  con  que  la  pesca  :  á  vezes  los  animales  que 
pasan  por  algU4  rio  y  soi^  tocados  por  el  temblador  quedan  de  tal 
modo  entorpecidos,  que  mochos  se  atu)gan,  y  esto  puede  también 
suceder  4  una  persona. 

Anguila.  Pez  de  aletas,  sin  espinas;  tiene  la  forma  prolongada 
cQjsm  la.i)fUebjra,  envu^ltii  en  una  piel  gruesa  cpy^s  escamas  soq. 
casi  im^ceptibl^s.  No  Ujsne  j^eUs  en  el  vieatre,  y  como  sus  aga- 
lli)i^  ^;»(áa  mejor  resguardadas,  re»dta  que  puede  v^vir  algún  tiem- 


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po  fuera  del  agua.  Es  verdosa  por  encima  y  plateada  por  debajo ; 
habita  en  todas  partes  en  el  algua  dulce;  su  carne  es  un  poco  indi- 
gesta pero  mui  buena. 

Doncella.  Pez  escelcnte  que  abunda  en  el  lago  de  Maracaibo  y 
sobre  todo  en  una  lagunela  que  queda  eu  la  parte  occidental  de  las 
orillas  y  que  lleva  el  nombre  de  ese  pez.  También  se  encuentra 
abundantemente  en  todos  los  ríos  que  tributan  sus  aguasal  Orinoco^  y 
compite  en  la  bondad  de  sus  carnes  con  el  payaro  que  vive  en  los 
mismos  rios  y  un  pez  de  espada  que  se  baila  en  los  de  la  provincia 
de  Barínas,  especies  que  no  se  encuentran  en  el  lago  de  Maracaibo. 

Gallo  marino.  Habita  sobre  las  costas  de  la  Guayana  y  también 
se  encuentran  algunos  sobre  las  de  Cumaná  y  Caracas.  Su  longitud 
escomo  de  8  pulgadas;  se  alimenta  de  gusanos^  de  moluscos  y  de 
otros  animalitos  marinos.  Su  carne  es  estimada ;  este  pez  tiene  el 
cuerpo  plano,  de  un  rojo  plateado,  las  aletas  de  un  gris  claro,  las 
mandíbulas  guarnecidas  de  dientes  mui  pequeños^  su  pupila  negra 
y  el  ííis  pardo  plateado. 

Pilólo.  Este  pez  déla  familia  de  los  scomberoides,  debe  su  nom- 
bre á  que  comunmente  se  le  ve  con  el  tiburón,  á  quirn  parece  con- 
ducir á  los  objetos  de  presa.  Su  cuerpo  es  largo  y  cubierto  de  ban- 
das trasversales  con  cuatro  púas  sobre  el  lomo  ;  tiene  un  pié  de 
largo  y  su  carne  es  buena. 

Volador.  Pez  que  habita  en  nuestros  mares.  La  cabeza  y  el  cuer- 
po son  escamosos ;  tiene  una  fila  longitudinal  de  escamas  debajo 
de  cada  flanco  y  aletas  pectorales  deescesiva  magnitud,  tales,  que 
pueden  sostenerle  algunos  instantes  en  el  aire.  De  este  modo  escomo 
procura  escapar  de  la  vorazidad  de  otros  pezes  que  le  persiguen ; 
pero  no  puede  mantenerse  mucho  tiempo  fuera  del  agua  y  aun  en- 
cuentra en  el  aire  nuevos  enemigos  que  hacen  presa  de  él. 


SERIE  DE  CARTILAGIKOSOS. 


Tiburón.  Del  género  de  los  squales  (perros  marinos),  espanto  de 
los  navegantes,  el  mas  feroz  y  el  mas  formidable  de  los  monstruos 
marinos.  Tiene  seis  filas  de  dientes  planos  y  triangulares  que  pue- 
de levantar  ó  retirar  á  voluntad ;  el  color  de  su  cuerpo  es  cenizien* 
to.  Como  el  tiburón  tiene  la  boca  por  debajo,  se  ve  forzado  á  vol- 
tearse para  poder  devorar  su  presa,  lo  cual  le  impide  ser  mas  des- 
tructor. Nada  con  la  mayor  velozidad;  sus  aletas  y  cola  están  dota- 


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das  de  una  fuerza  muscular  estraordíDaría.  Sigue  los  buques  con 
la  esperanza  de  alguna  presa,  y  si  algún  marinero  cae  al  agua,  e^ 
luego  víctima  de  eate  monstruo.  El  tiburón  llega  á  tener  50  pies 
do  largo  y  algunas  vezes  pesa  hasta  1000  libras.  Está  estendido  por 
todos  los  mares.  Tiene  de  oocbe  un  brillo  fosfórico;  su  piel  es  gra- 
nujosa y  sirve  en  las  artes  bajo  el  nombre  de  lija.  En  Venezuela  en 
lugar  de  eso  se  usa  la  hoja  del  chaparro  para  pulir  las  maderas. 

Peí-sierra,  del  mismo  género  de  los  squales.  £1  nombre  le  viene 
del  anna  terrible  de  que  está  provista  su  cabeza,  formada  de  una 
juateria  cartilaginosa  mui  dura.  Su  color  es  casi  negro  por  encima, 
degradándose  hasta  llegar  á  un  color  blanquecino  debajo  del  vien- 
tre. Este  animal  se  atreve  á  pelear  con  la  ballena ;  sus  combates  sQa 
írecuenl^aente  mortales  y  el  pez  sierra  rara  vez  es  vencido.  Su 
longitud  es  de  cerca  de  45  pies  y  la  sierra  tiene  cerca  de  6.  Se  ven 
muchos  sobre  nuestas  .costas,  y  bal  también  en  los  ríos  de  la  pro- 
vincia de  Apure  un  pez  que  nombran  sierra. 

Luna.  Pez  de  los  mas  notables  por  su  forma;  habita  el  Océano  y 
el  liediierráneo  y  bago  todas  latitudes.  Su  color  es  negro  sobre  el 
lomo,  sus  costados  y  vientre  de  un  blanquecino  mui  brillante,  par- 
ticularmente cuando  está  espuesto  á  los  rayos  del  sol  :  por  la  nee 
che  despide  una  luz  fosfórica  que  le  hace  parecer  como  la  imagen 
de  la  luna  reflejada  en  el  mar.  Tiene  algunas  vezes  hasta  4  2  pies 
y  mas  de  largo  y  ancho,  y  pesa  frecuentemente  hasta  500  libras. 
Le  conocen  en  nuestras  costas  con  el  nombre  de  manta. 

Raya  de  mar.  Este  pescado  es  el  mayor  de  su  especie,  su  carne 
es  firme,  blanca  y  sabrosa;  llega  algunas  vezes  á  tener  un  gran  i^r- 
mino;  es  moreno  por  encima  y  blanco  por  ddÍMijo ;  comunmente 
se  le  halla  en  alta  mar  y  solo  por  temporadas  se  le  ve  en  las  costas : 
algunas  tienen  el  peso  de  200  libras.  Se  alimenta  de  pezes  á  los 
cuales  hace  una  terrible  guerra .  Sus  huevos,  diferentes  de  los  demás, 
tienen  la  forma  de  un  cojín  largo  guarnecido  en  los  dos  estremos 
«on  una  espede  de  filamento  ó  cinta. 

Raya  de  agua  dulce.-  Es  de  la  misma  figura  de  la  otra  pero  mas 
pequ^;  las  mayores  no  tienen  arriba  de  2  pies  de  ancho  y  pesan 
20  libras.  En  la  arta  tiene  una  poa  con  la  cual  es  diestra  en  herir  á 
los  que  la  pisan.  Ser  mantiene  siempre  en  los  logares  fangosos,  so- 
bre todo  en  los  ríos,  caños  y  lagunas  de  los  Llanos,  escondida  toda 
en  el  barro  ¿arena.  Las  hai  también  en  la  orílla  del  mar  y  su  pi- 
cada produce  al  momento  binefaaion  y  «nos  dolores  agudisimos  que 


-  Sil  — 


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hsíceñ  desesperar  al  paciente  por  mucho  tíempo  :  esmúi  temida  por 
todos  la  picada  de  este  animal. 


REPTILES. 


ÓRDBH  DE  LAS  TOftTTlGÁS. 


Torttr^  de  mar.  La  hai  de  dos  especies  en  MwdnB  ntres :  la 
eareta ,  cuya  carne  es  mal  sana  y  los  huevos  Mh  bosaos,  es  4a  ^ne 
produce  el  earef ;  come  yerbas  tanto  dentro  del  agsfa  eome  flie«^ 
de  ella.  La  otra  no  produce  carei ,  pero  sn  «amo  es  buena  pidPa 
comer,  así  como  sus  hueros,  de  ios  cables  se  «ica  mttdio  aeeHé. 
Bai  tortugas  que  presan  390  ó  400  libras ,  y  la  hembra  pone  m  ^l 
mes  de  abril  frecuentemente  mas  de  400  bnoms  qtie  eolierra  eb 
la  arena ,  dejando  ai  sol  y  al  aire  el  cíodado  de  dar  á  Iva  los  vi- 
vientes cuyo  íelo  encierran* 

La  tortuga  aratis  de  agnad^ke  abunda  nmeho  en  el  rloDrtAoco^ 
donde  tienen  ciertas  playas  en  deteinmiadas  islas  á  donde  anrnlk 
ikféute  Tan  á  poner  sos  huevos ;  lo  cual  da  logar  i  que  todos  los 
4díos  se  haga  en  aquellos  sitios  una  cosecha  oonsidterable  de  Ihio- 
TOs  j  reduciendo  la  mayor  pEsrte  á  aoeite  y  de  que  se  baoe  comercio 
4n  Angostura.  Las  tortugafs  del  alto  Orinoco  y  Casiqviare  pmtenstes 
huevos  en  febrero  y  omrzo ,  y  para  las  del  bajo  Orinoco  se  abfeb 
las  pisyas  el  49  de  amr«o ,  es  decir,  que  se  empieza  el  beneficio 
-de  estás  m^nas  de  huevos  que  están  en  las  Islas  de  Gücurupará , 
Barraguan  y  Panaruma.  Bstas  tortucas  no  son  tan  grandes  cmno 
las  del  msr,  su  carne  es  eseetente ,  sus  bncTOs  sabrosos ;  ordkiarla- 
nieoté  pesan  mas  de  200  libras  y  ponen  de  80  á  -1^  huevos.  Hat 
también  algnnas  en  el  bajo  Apure,  en  el  Melé  y  en  el  Arauca,  cérea 
de  su  eonfluetícia  con  el  Orinoco. 

El  terecai  es  una  especie  mas pequoiade  tortuga  qne se  e»- 
je«fentra  en  el  Aptfre  y  otros  ríos ,  pero  abundimtemente  bo^  en  el 
Guaviare ,  donde  se  hace  uno^grau  eosecha  cto  Iraevos  para  «ciimfer- 
Jos  y  estraer  de  eHos  aeoite.  Ponen  también  en  las  pltyas,  y  (»or 
enero  y  febrero  se  hace  la  C0secha  :  (üs^  tereeat  pesa  mm  de 
^5  libras  y  pone  dé  46 «  24  huevos^ 

Et  galápago ,  especie  de  tcnrocaj  un  poco  inas  pequefto.  Oi^iM- 
riamente  vive  en  las^af^ttas  y  en  «il!g«m<Ai  túb»]  p^sa  Í0  UbrM7 


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219:—^ 


pone  má  {finí  ciaMad  de  InieTOi.  Sti  oum  lu^^es  la»  delieada 
ottni  ia  M  tar0ecu 

£i  meüroooí  otiptrO)  q$íé  Wegíí'é  tenes  días  de  2  fues;  tiene  ana 
CMBS  patdMea  coa  maoobte  «gnn  de  nacha  thaelría  y  realzada 
mt  todm  aos^eootonaoft*  Es  a»  plato  delicado  y  afaaoda  ooaaiáBca-' 
UiBieiiie  en  los  Haiios«  Eo  lo»  gruiées  catores  de  la  eatacioü  seoa 
Ée  ocallan  tejo  laa  piedras  dentro  de  agajeros  que  haeen  ellos 
Biliflios  j  Y  paion  de  e^  mo^  sm  tomar  aliafeeato  algooo  hatta  qoe 
Bolan  qod  la  famnedad^de  las  prím^aaafoas  penetra  ea  la  tierra. 

La  iiioMea  en  oira  clase  do  morroeoi ,  mas  cbata ,  im  poco  mam 
pequéis,  sos  manchas  menos  r^evadns  y  méoos  bella.  Tieoe  como 
el  morrodoi  la  vida  estremadamente  daca  y  se  haee  de  sa  escekate 
come  un  caldo  muí  nombrado.- 

ÓRDBN  DB  LOS  LAGARTOS. 

Familia  de  lo9  coeodritos. 

61  eaiinan^  reptíl  llamado  también  aligátor,  se  distingue,  por  sa 
hocico  attcbo  dHttso  >  pies  medio  ^sopalmados ,  sin  dentellones  ;  y 
{lor  la  disposición  de  sos  dieaies  desiguales  en  el  largo  y  grueso. 
Vi?o  en  los  píos  ,  caños ,  esteros  y  lagunas  que  no  están  arriba  de 
700  ¥ai:aft  sobre  el  nivel  del  mar.  Permanece  inmediato  á  las  orí-- 
Has  entre  dos  ^iioas^  en  esfedacion  de  los  aaimato  que  Uegan  á 
hebcr ;  de  estos  mui  pocos  se  le. escapan  ciiando  los  ataca.  Este  an* 
fibio  no  mede  comer  debajo  del  agua  y  sale  á  tierra  para  devorar 
su  presa.  Los  bai  de  mas  de  22  pies  de  largo  >  no  tan  abundantes 
los  machos  cfomo  las  hcmbrasy  porque  parece  qoe  se  matan  entre  sí 
en  la  época  desusamoriss.  lifk  caimán  no  entra  en  la  pubertad  basta 
los  ^  O  anos  y  entonces  tiene  8  pies  de  largo  y  pudiéndose  admitir 
que  los  de  mas  de  22  pies  üenen  á  lo  menos  28  anos.  Este  animal 
aUca  do.dos  modos ,  con  la  boea  y  con  k  cola  :  en  el  primer  caso 
se- pone  aleoatado  de  la  presa  para  moderla  ^  no  pudiéndolo  hacer 
de  íreote^  y  en  el  segundo  se  acerca  á  ella  de  costado  también  y  da 
un  gran  golpe  con  la  cola  que  pi  iva  de  sus  ^ntidos  á  la  perso^m  ó 
auMMl^  y  eoiónees  loa^rra  y  zamballeal  leudo  del  agua  para  abo- 
farlo y  acabarlo  de  matar.  CasiBdose  fliata  um  hembra,  se  le  sacas 
loo  liuefos  que  »o  tienen  la  cascare  dnra ,  y  cocidos  y  secos  son 
«na  comida  regalada,  no  solo  para  el  indHmna  sino  también  parai 


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otras  persfflias ;  en  Mancaibo  los  oomeo  modio.  En  d  Apare  se 
caza  d  caimán  de  yarios  modos  para  cc^er  sos  dieDles  y  sobre  todo 
la  manteca ,  con  la  cnal  se  alumbran  loo  llaoeoos»  En  d  Orinoco 
los  indios  otomaoos  y  yararos  eomen  el  caimán  á  pesar  de  so  olor 
á  almizde ;  sn  grasa  se  emplea  en  las  fricciones  contra  el  reama*» 
tísmo.  Ponen  sus  huevos  en  las  playas  de  los  ríos,  y  de  ellos  saien 
vnos  caimancíios  qne  al  momento  se  dirigen  por  instinto  háeia  d 
agoa^  en  donde  la  madre  los  protege  leniénddos  siempre  arrimaáos 
á  las  orillas  durante  tres  meses,  para  que  no  sean  decorados  do  los 
otros  animales,  y  sobre  todo  de  los  machos,  que  suelen  comérselos. 
El  caimán  tiene  la  costumbre  de  salir  al  sol  á  catentarse ,  pero  no 
se  aleja  mocho  del  agua.  Se  qoeda  entonces  como  on  gran  tronco 
de  árbol,  con  la  boca  abierta.  Ciérrala  coando  está  llena  de  moscas 
y  las  engulle. 

Los  que  están  en  los  lagos  suelen  salir  f  or  las  sabanas  coando  las 
aguas  les  faltan ,  á  buscar  canos ,  ríos,  ú  otras  lagunas.  Sos  mar- 
chas las  hacen  de  noche  y  siempre  en  la  dirección  del  agua  que 
huelen  á  muchas  leguas  de  distancia.  Caminan  con  gravedad ,  na- 
dan con  suma  rapidez  y  corren  con  lljereza  en  línea  recta  :  pero  no 
pueden  cambiar  de  dirección  sino  con  dificultad  á  causa  de  la  dls-^ 
posición  en  que  están  las  vértebras  de  so  cuello ,  lo  que  hace  fádl 
el  evitarlos  torciendo  la  dlreecion.  Este  animal  tiene  moehos  ene- 
migos y  en  las  orillas  del  Apure  y  del  Oritioco  hai  llaneros  é  indios 
bastante  atrevidos  para  atacarlos  cuerpo  á  cuerpo  y  bastante  dies- 
tros para  darles,  la  muerte.  Los  lugares  en  que  mas  abundan  son 
los  llanos  del  Apure,  á  pesar  de  que  no  faltan  en  las  detrás  llanu- 
ras. Los  ríos  en  donde  se  ye  mayor  número  de  ellos  estendidos  so- 
bre las  playas  son  el  Orinoco,  el  Apure  y  la  Portuguesa. 

La  baba  es  una  especie  de  caimán  mas  pequeño  y  no  tan  feroz 
como  este.  Su  carne  es  mas  tierna  y  mas  gastosa,  según  k>  aseguran 
los  indios  que  la  comen  ;  los  huevos  son  también  mas  delicados , 
y  la  cascara  de  estos,  del  tamaüo  de  un  huevo  de  gallina,  es  de  un 
blanco  color  de  perla  y  labrada  tan  simétrica  y  menudamente,  que 
es  cosa  particular.  Hai  babas  en  el  lago  de  Valencia  á  546  varas 
sobre  el  nivel  del  mar. 

£1  lagarto,  de  la  familia  de  su  nombre,- tiene  la  cabeza  y  d  cuer- 
po chatos ,  los  ojos  gruesos  con  pujólas  que  se  contraen  á  los 
lados ;  sos  párpados  son  mui  cortos ,  se  retiran  ^toramente  entre 
k  órbita  y  el  ojo,  y  desaparecen ;  su  lengua  es  escamosa,  y  vive 


; 


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de  in^toB.  Sq  pid  es  como  «fia  escamUla ,  k  cambia  todos  los 
^os  «n  la  prínia?era ;  la  cola  tiene  pliegues  eiroolares  y  vuelve  á 
salir  ó  crecer  caando  se  corta.  Vive  entre  las  piedras  y  muros  es- 
puesto? al  sol ,  y  los  hai  de  varías  dimensiones  y  colores  mas  ó  me- 
nos sabidos  y  variados ;  todos  ellos  los  comen  los  iodios. 

La  iguana  es  como  un  gran  lagarto;  su  cola  y  cuerpo  llegan  á 
tener  hasta  cerca  de  5  pies  de  largo  ,■  de  los  cuales  la  mitad  es  cola. 
Tiene  un  pellejo  que  le  cae  desde  la  punta  de  la  quijada  hasta  «1 
pecho,  casi  semejante  al  del  buei.Una  cresta  tiene  en  la  cabeza  que 
le  sigue  después  por  todo  el  cuerpo  colmólos  dientes  de  una  sierra 
basta  perderse  sobre  la  mitad  de  la  cola.  Los  ojos  tienen  mucha  vi* 
Tazidad  ;  la  cabeza  es  la  del  lagarto  y  los  colores  tambieD  los  mis- 
mos. Las  hembras  son  mas  pequeiias  y  de  un  verde  mui  claro ;  po-^ 
nen  mas  de  kO  huevos  á  la  vez ,  en  agujeros  que  hacen  en  la  arena 
ó  terrenos  próximos  á  los  ríos.  Los  huevos  y  la  carne  de  este  reptil 
tienéu  agradable  gusto ;  la  carne  es  blanca ,  del  sabor  de  la  de  ga- 
Uina,  y  de  ella  se  eoúsume  bastante  por  todas  las  gentes  del  campo, 
llaneros  é  indígenas.  Mantiénese  este  animal  en  los  árboles  y  por 
medio  del  silbido  lo  entretienen  hasta  que  con  un  palo  ó  caña  le 
pasan  un  lazo  al  pescuezo.  Parece  que  se  divierte  de  tal  modo  con 
aquel  sonido  ,  que  aunque  se  le  toque  no  se  mueve.  Luego  que  se 
les  pasa  el  lazo  al  cuello ,  se  tira  del  animal  con  fuerza  y  se  le  ar* 
ranea  del  árbol.  SI  la  Iguana  se  ve  perseguida,  corre  con  presteza  , 
y  si  encuentra  un  rio  ó  laguna ,  se  arroja  al  agua  y  allí  permanece 
mucho  tiempo  sin  respirar  al  aire. 

£1  basilisco ,  reptil  tan  célebre  en  otros  tiempos  y  cuya  mirada 
se  decía  que  causaba  la  muerte^  es  un  animal  inocente  que  vive  en 
las  orillas  del  agua.  Llega  á  tener  de  5  á  4  pulgadas  de  largo  y  su 
carne  se  come.  Aliméntase  d«  insectos  ;  la  piel  de  su  garganta  está 
floja  y  tiene  una  cresta  escamosa  que  puede  servir  de  aleta  para 
nadar. 

El  cotejo  es  de  la  familia  de  los  geckotiens ,  su  color  amarillo 
con  rayas  negras  y  una  longriudinal  blanca  sobre  el  espinazo  ,  el 
vientre  blanco  con  las  patas  largas.  Son  nocturnos ,  comen  insectos 
y  andan  por  las  paredes.  Estos  no  los  comen  los  indios  y  dicen  que 
su  picadura  da  fiebre. 

El  camaleón ,  símbolo  de  los  lisonjeros  que  aprueban  todas  las 
opiniones  y  se  doblan  y  amoldan  á  todos  los  genios ,  porque  se  ha 
ereido  que  este  animal  no  tiene  color  propio  y  que  siempre  toma 


\ 

el  de  los  objotos  intiiedüto.  Puede  vWir  como  Idganos  otror  lagar* 
tos  VB  aüo  siii  eam&r,  ki  que  dio  lugar  á  la  frase  vMr  como  el 
eamalean. 


teMN  MI  LAS  IBBPISHTM. 

«El  boa  coaBirietor^  llaaiado  culebra  de  agua,  luta  4&  las  mas  te^ 
mibles  culebras  que  babitan  esie  país.  Abundan  en  la  Guayana ;  att 
cuerpo ,  cuyos  colores  é^tán  variados  de  gris ,  aioarUlo  ^  negro  y 
rojizo  y  lleva  sobre  el  lomo  ou  dibujo  en  cadena  que  i^grega  á  la 
bermosfira  la  fuerza :  esias  cualidades  le  batí  valido  un  culto  entre 
los  salvajes.  No  (lene  veneno^  pero  ciñe  y  destruye-sii  presa  eon  su» 
tortuosos  pliegues  y  la  enpdie  al  instante « /cualquicm  que  sea  su 
Toliunen ,  para  satisfacer  su  apetito  voraz*  Atgunoe  boas  tienen  de 
30  á  ^  píes  de  largo*  No  se  le  encuentra  arriba  de  1  ^416  varas  so-* 
bre  el  mar.  La  presa  la  baee  siempre  en  el  agua ,  en  donde  babita^ 
Tiene  una  fueria  tal^  que  contiene  á  un  toro  siempre  qm  pueda  asirse 
eon  la  cola  ^-i^ana  rama  ó  tronco.  Agarra  el  bodi»  del  toro  y 
no  lo  deja  por  masesfwsrios  que  este  baga^  batiéndose  y  dando  sal** 
tos  para  escaparse  del  monstruo,  hasta  que  exhausto  y  «f  oviado  del 
dolor,  se  somete  á  ser.  víctima^  Bnténces  el  boa  lo  cine  con  su  enor-* 
me  cuerpo  y  lo  comprime  tanto  que  le  da  muerto  para  engullif  lo 
después.  Su  ancha  beca  tiene  dos  órdenes  de  dlenlts  en  cada  man- 
díbula. Se  sacan  de  la  parte  musculosa  del  lomocnerdas  de  guitarra 
preferibles  á  les  de  loi  intestinos  del  tttonoalnato» 

La  traga*  venado  4s  «na  culebra  bmií  grande  de  mas  de  1$  piee 
de  largo ,  caai  con  los  mismos  colores  que  el  boa ,  á  no  ser  que  los 
tiene  todos  mas  brUlnatos.  Se  mantiene  en  tierra  y  en  los  arbolea 
f  sus  presas  son  animales^  como  el  venado^  que  le  gusta  mucho « 
de  donde  seguramente  trae  su  nombre;  también  se  traga  los  demás 
que  sean  mas  pepenes  qae  este.  Cuando  se  ha  tragado  na  venado, 
si  tiene  cuernos,  led<^  la  eabeaa  fuera  de  su^asqoeresa  boea,  y 
entonces  se  ve  al  reptil  como  hinebado  y  en  un  estado  de  entorpe- 
cimiento ,  sin  poderse  mover  hasta  que  4a  cabeza  dfl  vraade  eae 
por  la  putrefacción.  Esta  culebra  tiene  los  dientes  eomo  el  boa  y 
es  (an  vora^s  como  él.  Si  el  vedado  no  tiene  astas,  «mpleía  á  tnagsrlo 
por  lacabesa. 

La  macawrel  es  una  culebra  ignal  á  la  tn^a^venade  «on  la  mlfiM 


1 


Jigofa  y  ms^múbfmy  tUfonMNMbM  bq!»  ea  ^e^iio  érete  kAiO 
como  ella. 

iM  outebtft'€emd>el  9é  la  mas  teonUe  4a  asía  ^l^eoie:;  Uapi  á 

'teaer  6  pías  xla  Iar9a  y  A'Si  f>iii«aciaf  dei  airciMiféreii«ia.  to  ookt  ta»- 

Jiiiaa  an  lo  que. fe  líélna  oKeidiel ;  te  4ica  fae  eaila  aSo  echa  mo 

■laa,  la  oierlo  eñ-qaeM  hlin  viflo  «oa  2  y  haMa  6  da  «Uto ;  eaMaim 

«Aüv.  focarte  ^  alaftizele ,  y  «acierra  uAtaoMo  morlal  an  las  cfdiili- 

Mos.  Par8ae«|ia  .«usiojaB  eentsUean  y  en  booa preíanta  «Iw  frande 

taibarlara  ,  tieaíB  -Ia  teftgna  negra  «dividida  an  diaa,  y  d*  ruido  ^(*e 

hace  con  sus  cascabelases  a«i 'semejante  ai  que  se  Incía  al  esine^ 

far  un  per,gBnnDo,  yae  {raadeoír  á%B  pasos  dedístaneia,.  A  fuesar 

del  aviso  que  esta,  sonido  pro|iDraioBa,  es  nnii  diUtcil  avilar  «I  lar 

-  pimío  si  aepesa  arríasaéo  á  rila.  Cuando  ^easaénay  aaa  mavíMnoitos 

-aen  lentos ;  abanda  mécto  en  tos  Itanos  y  su»  iabitaoiancs  prefa- 

jridas  son  las  ovevas»  Se  mantreneB  easondidas  enlae  las  altea  piq^, 

yailí  se  eocuentran  ordinaríaniéiiteanraiUadaB^  peroaoo  la  eatfSHi 

levantada  paca  poikne  defender  aas  fécümenle.  Lo  íveHe  éel  «a- 

-lar  las  bace  emmder  ée  día  d  bisoar  Ingves  eetebríos  y  fresaos  ; 

y  por  ia  tarde  eospiesan  á  Milirde  sus  asaondr^os  casando  parte  de 

toaiaehe,  y  alaaiaseeer  es  labora  segura  de  enoontian^las  :  abundan 

mi  üedas  partes ,  menas  en  ias  'sevraaías  mui  elevadas. 

La  mapaaaru  ea  una  ealebra  mui  veneaon  cuyos  ealoras  fomln 
onacadesa  de  negro  y  amaritlo  en  laparteauporiar^  y  en  la  inferior 
tícDe  un  amarillo  que  degenera  sémiManeate  en  blanco  :  encii&a 
es  oMSo  un  oaeno  pintado  p^o  por  debelo  liene  dos  Inieras  de  es- 
camas movibles  ^ue  le  faeüilan  andar  eoa  aiuafa»  agíüdad;  así  <es 
fue  está  confinada  eomo  la  culebra  mas  lijeni  y  da  las  ans  atre- 
vidas para  atací^  ai  bombee.  Abteda  an  lodos  ios  parajes  calientes ; 
m  mantiene  de  frutas  y  gMa  de  las  §ua79d)a$  y  las  parchas. 

llapanare-rabo*lnlo.  Galebra  de  la  misraaclaae  pero  mas  grande; 
le  dan' arte  Hiuibre  porque  atiene  la  eola  mat  delgada  y  sos  péÉttts 
laasbian  aiai  paqueias  ;  ea  Mi  otwA  y  -veneoasa  como  la  atra. 

CoÍ6l>ra>4igrc ,  de  la  misina  clase ;  tiene  eseama»  por  dakijo  y 
está  pintada  con  manchas  .eaá  iMgras  sobre  un  isndo  vavdoto  y 
Manqueaiao  Muía  aba|o^  tirando  á  colar  de  pitarra.  Cuando  esta 
aatabaa  «stá  irritada  y  se  dispone  á  nmvder ,  levanta  la  parte  infé- 
.«ar  de  su  eaerpo  y  alza  la  eabaaa  basta  la.altura  de  media  vaaa : 
aügaamslieam  mas  de  n  píes. 

iMa.  Cukin«i}a2|Ma^laifo;  tinni  eanoHifc  par  deiai^  ca- 


\ 


lar  yelde  oecmro  oon  nmnchas  inegntees^  amuilks'y  perdis  :  es 
de  la  misma  familia  de  las  mapanares* 

M acanrel  de  caatro  narízes :  culebra  de  la  familia  de  las  mapa- 
nares y  con  los  colores  de  la  trama-veoadó  macanrel.  Su  loogítod 
es  tan  solo  de  poco  mas  de  nn  pié ;  se  la  disüngne  por  un  p^r  de 
eneróos  móviles  ó  eminencias  encima  de  los  ojos.  La  cabeza  es 
chata  casi  como  la  del  sapo ,  y  representa  en  el  hocico  la  flgura 
de  4  narices ,  de  donde  toma  sn  nombre.  Es  muí  venenosa  y  tó 
dice  qne  la  persona  6  animal  picado  por  ella  cae  inmediatamente 
al  snelo :  tan  agudo  es  el  dolor  qne  ocasiona. 

La  cnlebra«-sapa  ó  voladora  tiene  cerca  de  dos  pies,  la  cabeza 
mnl chata ,  color  pardo  y  el  resto  del  cuerpo,  por  encima,  de  un 
amarillo  oscuro,  marcado  con  grandes  manchas  redondas  y  negras; 
el  vientre  es  de  un  blanco  amarillo.  Cuando  quiere  morder  se  en- 
coge de  modo  que  representa  la  figura  de  un  sapo  ,  de  donde  le 
viene  el  nombre.  Al  atacar  se  estira ,  y  es  tan  atrevida  y  feroz , 
que  persigue  á  vezes  por  mas  de  200  pasos  lanzándose  á  morder. 

Sabanera.  Culebra  mui  grande  de  un  color  amarillo  por  debí^ 
y  amarillo  verde  por  encima.  Tienen  algunas  mas  de  40  pies  y  ca- 
ipinan  con  una  velozidad  estraordinaria  y  ondeándose  por  todo  su 
cuerpo  y  teniendo  una  gran  parte  de  él  levantado  á  mas  de  4  pies 
de  altura.  Esta  culebra  no  es  peligrosa  y  se  encuentra  en  abundan* 
cía  en  las  sabanas,  de  donde  tomó  el  nombre^  sin  duda  por  el  modo 
de  caminar  en  ellas  mirando  á  todas  partes. 

Sobadera.  Culebra  larga  y  no  maligna,  de  color  verdegal  sobre  la 
parte  superior  con  una  lista  negra  sobre  el  lomo  y  el  vientre  de  un 
verde  manzana  mui  claro  y  brillante.  Llega  á  tener  hasta  6  pies. 
Llámanla  sobadera  porque  su  maldad  consiste  en  dar  grandes  lati- 
gazos á  las  personas  ó  animales,  por  medio  de  su  larga  cola,  sea 
que  esté  agarrada  á  un  árbol ,  sea  que  se  encuentre  en  el  suelo. 
Brinca  desde  mui  lejos  sobre  el  objeto  que  la  irrita,  fustigándolo  con 
una  rapidez  estraordinaria ,  persiguiéndolo  constantemente  apo- 
yando su  cabeza  sobre  el  suelo  y  balieúdo  fuertemente  la  cola.  Esta 
culebra  se  alimenta  de  pezes  y  reptiles. 

Yiejita.  Culebra  que  tiene  las  mismas  piulas  que  la  tigre,  con 
la  diferencia  de  que  no  tiene  sino  2  pies  de  largo.  Su  veneno  es 
mui  activo.  Suele  vivir  eo  las  quebradas  secas  y  entre  las  piedras. 

Culebra-bejuco.  Reptil  que  tiene  la  forma  y  el  cdor  del  nombre 
que  lleva;  no  ataca  si  no  se  le  toca.  Suele  estar  en  las  ramas  de  los 


; 


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árboles  y  caando  anda  por  el  suelo  se  tiende  como  nn  bejuco.  Hai 
una  amarilla  mucho  mas  delgada  y  de  la  misma  fonna  y  que  llaman 
híladilla  :  dicen  que  su  picada  es  mortal. 

Culebra  de  dos  cabexas*  Tiene  cerca  de  uno  i  dos  pies  de  largo^ 
las  dos  estremidades  de  su  cuerpo  son  de  igaal  grosor ,  tiene  los  ojos 
escesivamante  peqoeños  y  cubiertos  por  una  membrana  ;  seis  esca- 
flias  anchas  cubren  la  parte  superior  de  su  cabeza  y  el  cuerpo  está 
Heno  de  pequeüas  escamas  cuadradas.  Se  alimenta  de  lombrizes , 
escarabajos  y  otros  insectos  ;  derora  sobre  todo  las  hormigas  que 
en  numerosas  legiones  hacen  grandes  daños  á  los  sembrados.  Gomo 
esta  culebra  tiene  la  facultad  de  andar  hada  adelante  y  hacia  atras^ 
puede  penetrar  en  los  retiros  subterráneos  de  las  hormigas,  gusanos 
y  otros  insectos.  Ella  es^capaz  de  escavar  la  tierra  mas  qae  ninguna 
otra  culebra,  siendo  so  piel  mui  flexible  y  sus  músculos  mui  fuer- 
tes. No  es  venenosa. 

Víbora.  Llega  á  crecer  hasta  5  pies ,  su  color  es  amarillo  mar<» 
cado  con  manchas  negras  ;  se  alimenta  de  pequeüos  animales  y 
nunca  ataca  al  hombre  ni  á  los  grandes  cuadrúpedos,  á  no  ser  que 
se  le  toque  6  irrite ;  en  este  caso  se  enfurece  y  su  m<M^dedura  es 
peligrosa ,  porque  tiene  en  cada^lado  de  sus  mandíbulas  4  dien- 
tes como  de  5  lineas  de  longitud.  Estos  dientes  son  blancos , 
diáfanos  y  agudísimos  y  se  Its  llama  dientes  caninos.  £1  veneno  está 
contenido  en  unas  vejiguillas  colocadas  de  uno  y  otro  lado  de  la 
cabeza.  Oprimidas  estas  vejiguillas  por  el  movimiento  de  la  man- 
díbula ,  dejan  escapar  el  licor  mortífero,  que  atravesando  por  el 
diente  dispuesto  naturalmente  á  darle  paso ,  filtra  en  la  herida.  Se 
dice  que  el  tabaco  las  mata. 

Culebra  común ;  mui  distinta  de  la  víbora  por  los  bellos  colores 
con  que  la  naturaleza  adornó  todo  su  cuerpo.  Existe  la  culebra 
coral,  cuyo  nombre  le  viene  de  su  color  que  es  encarnado  con  ani- 
llos negros  :  es  mui  ven«iosa« 

Todos  estos  reptiles  abundan  en  la  parte  cálida  y  disminuyen  á 
medida  que  se  eleva  el  terreno  hacia  la  reglbn  fría. 

Sapo  verde.  Reptil  de  la  familia  de  los  escuerzos  ;  se  encuentra 
en  las  cavidades  de  las  rocas  y  en  las  hendiduras  de  las  paredes. 
Su  color  es  blanco  lívido  marcado  con  manchas  por  encima  del 
cuerpo,  rodeadas  de  ufi  drctilo  negro  yjrecuentemente  reunidas 
mticbas  de  ellaa ;  su  cuerpo  está  salpicado  de  terrugas  lívidas  sdbra 
el  vientre ,  yerdes  sobre  las  maiuH^as  y  encamadas  en  los  iukft 


\ 


"gatos.  Exilala  m  coerp^iNi  ol«r  Uáíé  eavidoMlá  ifviiade,  y,  eott» 
ei  sapo  eomuB  V  derraHU  nn  iHmiQC' mas  e«rf09if«>  qae  el  de  este. 
Su  respiración  ya  acompasada  de  una  hiDcbaaeii  ea  la  tMica. 

Sapo  comadn».  Este  géaacD  de  sapo  batiHa  en  ofimas  mas  eáU- 
d«6  y  ea  parajea  paatanosos :  tieae  el  euarpa  durta^  los  ejoa 
peqv^os  y  mai  separados*  Es  el  mas  grande  de  teidos  los  coiioo»- 
dos,  pues  los  kat  que  tieaen  seis  ú  oobo  palgadas  de  luigoy  k  ó  ana 
de  ancho.  Se  le  ta  dado  «ste  nombce  parque  i  medida  que  ii 
kembra  pene  loa  huevee,  ü  los  reeage  y  lle«a  cobre  el  temoliaste 
qoe  están  pnóáoms  á  siacer.  En  este  mouMuito  as  aeen»  ai  afaaj^ 
los  coloea  en  eUa  oaa  precaadon  fiara  qae  poeda»  dasarrottaxae» 
oaamas  faeüidad.  Otra  partíettiaridad  no  menos  noiaUeee  advierte 
en  estos  sapoi  y  es  la  de  caaiar  en  coro  «ooipoeste  de  45  ó  mas 
iadividaos,  y  fiareoe  que  hai  nooq^e  hace  de  matttro  deeapílla 
s^un  la  igualdad  con  que  empiezan  y  terminan  sa  concierto ,  no 
veriicándoaa el  oirá  uno  solo  ¿ntes  ó  después  (tel  eiyfesado  eoro 
que  comumneate  dora  de  6  á  8  miiiutos. 

Pipa.  Eite  reptii  de  la  inúlÉa  de  los  siq)Ofl  es  de  color  aeeitiiiuido^ 
la  hrailMra  es  mas  grande  que  el  anaabo ,  tenteodo  e^oa  de<5  pul* 
gadas  de  lanso.'  Cuando  ia  hembra  ha  pMsto  los  ImovoSi  el  «»ftcbo 
Ips  esUendt  sobre  el  iemo  de  aquella ,  cuya  pid  se  hincba  y  -forma 
«na  espede  de  oeWttas.  El  caler  dftia  tnadre  los  ba«e  nacer  y  p^r 
vece  qoe  salea  de  sa  lomo.  La  caroa  ée  este  sapo  no  es  maléfica ; 
los  indtes  y  sobre  todo  tes  otomaees ,  la  comen  con  i^acer. 

Raaa.  No  tiene  poséülas ,  y  sai  mas  largas  las  palas  que  las  dd 
sapo.  Es  mvl  lijera ,  fuerte,  henite';  de  un  hermoso  verde  por  en* 
cima  y  blanco  ó  amarillo  por  debajo ,  condos  manabas  negras  á  lo$ 
kdos  de  la  eabeaa ;  ios/Ojos  son  de  edor  de  oea.  Aig«»as  pensonas 
sa  divierta  en  conservadas' e»  oo  fraseo  grande  de  cristel  n^edía 
lleno  do  agoa  y  una  pequeña  ewaia  ^  á  te  lar|$o  de  Ja  ewil  la  raoa 
sobe  ó  baja  según  que  el  tiempo  debe  aer  bueno  ó  •mate  :  os  Wá 
baróqietro  vivinite. 


MOI^ÜSCOS. 

Calamar.  Molasco  que  §^  eaapentra^eil  laufistri»  aodasi  derpaiM 
un  licor  negro  y  su  esmeros  «Qteida  oso<thmte(  4^  Ik&tlme^' 
se  puede  áioar  el  colar  Uampidoaspéau-  «    r 


/ 


Cara«fil*estJX)iDi>o.  tfahnco  4pm>8eiei>fl<MmtBi  stiiise  nofiítftts  eos» 
tas ;  los  bai  de  mas  de  un  pié ,  y  lo  graeso  de  la  comía  baceier^er 
que  el-  aniíiMl  dflbe  n?ir  iiacli*  tiempo,  fil  cétocáe  ella  es  Uaico 
perdenUra  yen  la  acertara  tiene  uiiieolof  da  mía  i)as(aote  vtTa, 
la  parte  bUmoa  de  esta  coneha  sirve: para  éib«jar  ootto  sobr^e  d 

Guarura.  Otro  caracol  que  alcanza  á  «n  pjé  de  laif  o ;  so  es  (ail 
grueso  como  el  anterior  y  sirire  ¿  loe  arrieros  para  tooar  á  manera 
de  beeina.  Los  Hiayordepnos  de  las  bacíendas  junea  »so  4e  «ste  oa*» 
'raool  para  llamar  á  los  trabajadores. 

B«F0ao>.  Caracol  peqvelío  ^^iiya  abertara  es  mas  ancba  que  lai^ga 
y  llene  la  fi^rma  de  una  inedia  Inna.  El  animal  se  arrastra  dejando 
liuella  de  un  humor  yíseoso ;  tiene  uno  ó  muobos  pares  de  cuer- 
neeitos  mui  movibles  y  dolados  de  una  gran  sensibilidad.  Estf 
anknol  es  bueno  para  comer  y  la  eoncba  sirve  fiara  ilnmínadones. 

Garaceles.  Bajo  este  nombre  denoaMnaai  en  elpans  to<ks  ias  con^ 
€iias  que  se  encuentran  en  las  onUas  del  mar  y  de  las  lios*  Haí  «n 
sinnúmero  de  varaedades  por  sus  oalofles ,  i^ras  y  (amaHos.  E& 
la  península  de  Paraguaná  se'«Dcnenlran  las  especies  mas  bellas 
eon  que  se  hacen  flores  primorosas.  Bai  «afanos  delamiamaágiira 
y  color  que  las  foojas  de  rosa  y  se  encuentran  de  todas  dimensiones* 
Se* bailan  earaoolitos  tan  pequeiios como  un  grano  de  mijo,  ven- 
ces y  rosados ,  aplomados  j  pardos  y  blancos. 

Almeja  de- mar.  Se  encuentra  en  abmdanoia  en  ks  costas  y  ef 
animal  que  Qonüene  es  booaido  delieado^       .     ^ 

Chipichipi.  Pequeña  almeja  que  abunda  «a  las  costas  orientales 
de  la  repúbüca  y  de  la  quese  hace  oonsiderabio  pesca ,  pues  es  un 
manjar  escelente,  preferible  á  cualquier  oteo  mariseo. 

Venus.  Condba  sóüda ,  bastante  gcoesa;  se  halla  eon  freeoencia 
en  las  orillas  del  mar ;  se  enüerra  en  la  arenad  poco  profandidad, 
de  modo  que  puede  salir  de  ella  fácilmente;  cambia  de  lugar  con 
la  ayuda  de  su  pié,  y  tiene  tambíei^la  facultad  de  saltar,  golpeando 
el  agua  repetidas  vezes  con  sos-yalvas*  Su  concha  es  mu  i  buscada 
por  sus  bellos  colores. 

Ostra.  Concha  biyaka,  sift  pié;  su  capa  está  guarnecida  de  una 
fila  doble  de  franjas  ,  sus  conchas  tienen, una  cliarucla  sin  dientes 
y  están  compuestas  de  hojas  que  seseparan  con  facilidad.  Se  Bjan 
á  las  rocas  y  aun  unas  con  otras.  En  los  manglares  se  ren  también 
agarradas  hs  >oetms.á;las  latizesy  ramos^  y;abeimdaomiiebo  en  núes- 


—  224  — 


\ 


tras  costas.  Muerta  la  ostra^  k  condia  se  abre.  La  ostra  veiáe  es  un 
bocado  esquísito. 

Ostra  de  perla.  Se  encueatra  ch  los  bancos  ootsa  de  las  islas  de 
Margarita ,  Gubagua  y  Coche  y  en  la  punta  de  Araya.  Los  ostiales 
producen  la  perla  redonda.  El  animal  yive  9  ó  ^  O  anos  y  al  coarto 
la  perla  comienza  á  mostrarse.  En  ^  0.000  conchas  no  se  halla  á 
á  vezes  una  perla  de  precio. 

Broma  ó  tarets.  Célebre  por  los  danos  que  hace  perforando  la 
quilla  de  los  buques ,  las  estacas  de  los  diques,  las  esclusas  etc.  Es 
un  molusco  cuyo  cuerpo  tiene  la  forma  de  un  gusano  largo^  eubterto 
de  una  capa  tubulosa  abierta  en  las  partes  superior  é  inferior.  Su 
concha  está  compuesta  de  d6s  válbulas  romboidales ,  pero  es  mui 
pequeña  y  solo  cubre  una  parte  de  la.  capa.  Parece  que  trabajando 
por  la  estremidad  de  la  concha ,  á  manera  de  barreno ,  el  animal 
taladra  la  madera  sumergida  y  hace  el  agujero  en  que  se  mete.  A  me- 
dida que  se  introduce  va  tapizando  la  escayacion  de  una  materia 
calcárea,  de  suerte  que  en  breve  se  aloja  dentro  de  un  tubo  pétreo 
que  á  primera  vista  bien  pudiera  tomársele  por  una  segunda  con- 
cha. Como  este  molusco  ataca  la  madera  desde  pequeño ,  la  abertura 
esterior  de  su  cueva  es  mui  estredia  y  pero  creciendo  y  desarrollán- 
dose á  prqwrclon  que  se  interna ,  aumenta  progresivamente  la  ca- 
vidad que  va  haciendo.  Dos  tubos  que  tiene  en  la  estremidad  pos^ 
terior  de  su  cuerpo  están  aproximados  á  la  boca  de  la  cueva,  y 
por  uno  de  ellos  da  entrada  al  agua  y  respiración  necesarias  á  su 
vida ,  permanecilhdo^iem{Nre  con  la  boca  para  abajo  y  él  ano  hada 
arriba.  La  broma  común  llega  á  creeer  oomo  6  pulgadas.  En  algu- 
nos puertos  los  buques  que  no  están  forrados  en  cobre  no  pueden 
permanecer  mucho  tiempo  en  ellos  sin  que  ios  inutiiizen  estos 
gusanos.  Es  indispensable  carenar  las  embarcaciones  cada  dos  ó  tres 
meses  para  evitar  los  daños  de  la  broma. 


INSECTOS. 

ÓIDSH  DB  LOS  COLBOVTSaOS.  i 

Cantárida.  Especie  de  mosca  grande^  verde  dorada  que  sirve  en 
la  medicina. 
Escarabajo.  Hai  una  gran  variedad  en  el  tamaño  >  el  color  y  la 


/ 


—  225 


forma  dé  sus  cuernos  y  todos  son  muí  comunes  en  los  bosques  y  lla-f 
nuraS;  en  tierra  caliente  y  templada.  Los  hai  también  con  visos  de 
oro  de  diferentes  estructuras.  Viven  de  orugas  y  aun  de  caraco- 
lillos. 

Cocui  de  mon(aila.  Se  encuentra  en  los  bosques  y  precisamente 
en  los  árboles  mas  elevados.  Tiene  cuatro  alas ,  las  dos  primeras 
mas  gruesas ;  el  color  general  de  este  insecto  es  verde  claro  atorna- 
solado y  notable  su  cabeza  por  la  protuberancia  que  de  ella  sale 
eomo  una  prolongación  de  la  frente.  Los  bai  de  mas  4e  2  pulgadas 
de-largo  y  su  cabeía  despide  una  luz  tan  viva,  que  con  des  de  estos 
inseclos  se  pedriaíeer  en  la  oscuridad. 

Cocul'-de-cana.  No  es  tan  grande  como  el  anterior  ni  tiene  aqudla 
protuberancia ;  su  color  es  un  negro  pardusco,  y  de  noche  produce 
el  efecto  de  dos  luzes  no  mui  vivas  que  le  salen  de  la  cabeza :  cuan- 
do vuela  se  le  ve  en  medio  del  vientre  una  pequeña  lista  color  de 
fuego. 

Gusanito  luciérnaga.  Se  encuentra  todo  el  año  en  los  caminos, 
sabanas  y  campos  cultivados.  El  macho  al  revolotear  deja  percibir 
unas  lu2es  mui  vivas ;  la  hembra  no  tiene  alas  y  está  oculta  bajo  la 
yerba  durante  el  dia,  y  de  noche  despide  una  luz  brillante.  Este  in- 
secto tiene  un  color  negruzco. 

Yaca  de  S.  Antonio.  Insecto  mui  común ,  cuerpo  medio  esférico, 
corselete  mui  corto  y  de  un  color  encarnado  moreno ;  mui  bonito, 
con  muchas  pintas  negras  en  las  cascarillas  que  cubren  sus  alas. 
Estos  insectos  viven  sobre  las  plantas,  no  andan  lijeros,  pero  vuelan 
con  rapidez  ;  se  alimentan  de  pulgones  y  se  pegan  á  las  hojas  para 
trasformarse.  Si  se  les  toca ,  echan  una  gota  de  color  amarillo. 

Cucaracha  de  montaña.  Es  de  color  verde  y  sus  alas  reducientes 
forman  visos  cuando  vuela.  Es  de  la  misma  forma  de  la  cucara- 
cha común,  pero  mas  grande  y  no  es  hedionda.  Se  nutre  de  vege<- 
tales» 


ÓKDBll  DB  LOS  ORTOPntOS. 

Tara.  Insecto  que  vive  de  plantas  y  yerbas  y  que  suele  verse  en 

numerosas  bandadas.  Muerde  con  fuerza  y  aun  puede  romper  ia 

piel  del  hombre  con  dos  dientes  mui  duros  y  gruesos  que  tiene.  La 

disposición  de  sus  palas  le  da  la  facilidad  de  saltar  mui  lejos  y  pue- 

p.  cio«.  ^' 


—  22Í.—  \ 

daeoa.8ual«9  Inmiareiitas  volar  mmdU/^  íMímé^  wrioR  m-^ 

lorw. 

Grillo*  Los  hai  de  iwrias  eafetm^  y  todos  eHo»  sritaa  €Qii  faoíli- 
dad  atento  que  sus  patas  posteriores  son  mas  largas  que  las  oinnh. 
Este  insecto  vive  ^  los  eam|X)s  y  easas ,  bace  un  graa  oeocuio  de 
yeriHifi  y  plastes;  las  hembraa  poneiii  sha  tuievas  en  la  tiaira: y  sa 
canto  e»  un  ebillido  muí  agudo  y  moliBlo. 

Cucaracha.  Insecto  de  cuatro'  alae,  oblongo  y  Mpaseo  eon  dos 
cerdas  langas  e»  la  cabeaa  y  otras^  dos.  atas:  groMa»  y  oortaa  ealii 
coUu  Se  iiiaAti«ie  en  los  logare»  oálides ,  pone  on  aeie  baef  o  lar- 
go en  las  hendiduras  de  las  puerto»,  Tentoaasó  paMdca :  eada:lHie?o 
tí€üe>  una  separación  de  celdas  y  de  osda^c^a  sate  unKdieMadtti 
£s4q  anioales^  fétido  y  vu^  ptáacipakiienle  de  noGhe^  altineBlá»^ 
dose  de  toda  elase  de  ooeiestibleaque  eneuontnu  Deoktufe  h»  yartá»* 
do»^  y  papeles^  Bai  una  (dase  qne  ¥iv»  dehajo-  de*  líerva :  eata  mu 
tiene  alas  y  se  encuentra  también  en  los  bosques. 

Gbiripa,  De  la  misma  especie  de  la«iicaraeha«,  pem  mas  peqneiía 
y  lüstreea.  con  Ja  misma  hediondez  <|ae  laianlerior.  A  la.  altura  de. 
2ú^  varas  no  se  encueotran  estos  animate»  ineomedaa  y  <ftpie'*> 
rosee,  que  aola  con  moeho  aseo  pueden  deaterracse  de  lasibabáta- 
cienes. 

Caballito  del  diablo.  Insecto  que  tiene  las  quijadas  y.  mandibulaa 
córneas^  los  ojos  ea  general  mui  grandt^,  y  las  alas  mui  anidas  ea 
situación  vertical.  Es  mui  carnívoro  y  vuela  con  mucha  rapidez. 

Comején,  termite  ú  hormiga. blanca.  Es  un  inaaeto  quecon.pro^ 
piedad  pueda  llamarse  minador,  pues  no  adelanta  ub  paso  sin  cu*- 
brirse  con  una  bóveda  de  tierra ;  asi  es  que  fornm  un  camino  cur 
biertoy  poréi  marcha  en  todas  direcciones^  estendiendo  ramales  por 
do  quiera.  Destruye  los  papeles,  pergaminos,  cueros,  lienzos  y 
maderas  dulces  con  una  prontitud  estraordiuaria ,  reduciéndolo 
lodo  á  polvo.  Trabaja  dia  y  nodbe  y  sale  siemiNre  de  los  lugares  hú- 
medos, sube  por  las  paredes  y  árboles  mas  elevados,  siempre  lle- 
vando su. camino  cobierio.  Tiene  de  5  á  4  líoeas  de  largo,  su  color 
es  blanco  con  cabeza  oacuira;  tiene  6  pata»,  casiiua  lijero,  ei 
cuerpo  es  redondo,  el  pellejo  tan  delgado  que  4  k  menor  frotación 
se  deshace.  Los  nidos  de  estos  animales  están  en  tierra ,  en  ios  ár^ 


f 


—  227  — 


boles  y"  ea  la^i.  ipadera«  viej^,  y  forman  uiu^  especie  de  eolmem^; 
pero  toda  de  tierra  ,  es  decir ,.  una  cantidad  numerosisiipai  da  fí^ 
quenas  celdas  en  <)ue  depositan  sn^  huevos :  ooiBa  las  abejas^  Pl' 
rece  que  tienen  sus  trabajadores.  £$  mui  difícil  sa  destrnccioB  j  f 
para  preservar  los  archivos ,  ropas  y  mercancías,  ei  preciso  servirse 
de  madera  de  cedro  amargo,  de  la  cual  huye.  Ba|a  la  altara  de  7^ 
Taras  hace  los  destrozos  indicado»,  pero  algo  loas  arriba  iolaataea( 
las  maderas,  y  á  -1200  v^as*ya  no  se  encuentra  e^terpiefueno  anir 
mal  destructor, 

ÓJUIBH  PR  LOS  HIVBSQBTSaOS. 

La  abeja  es  una  de  las  grandes  obras  de  la  creacioQ..  Produce  la 
miel  y  la  cera  que  receje  de  las  flores.  La  actividad  y  el  aáeo  reinajiíi 
en  sqs  colmenas.  Un  enjambre  se  compone  de  la  reina ,  machos  y 
operarías  ó  neutros.  Los  primeros  sirven  á  la  reproducción  de  la 
raza ,  las  ultimas,  así  como  los  artesanos  y  labradores ,  alimentan 
las  otras  clases ,  construyen  los  edificios  y  cuidan  los  gusanitos.  El 
número  de  machos  varía  de  200  á  4500,  el  de  las  d)reras  de  -1500 
basta  23  y  aun  50.000.  Las  celdillas  tienen  la  forma  de  vasitos  ex¿r 
gonos^  y  su  reunión  forma  el  panal  cuya  regularidad  es  siempre  ad* 
mirable.  En  llegando  el  momento  de  poner  la  hembra  los  huevos, 
es  el  objeto  de  los  cuidados  mas  asiduQs,  Pone  sus  huevos  en  las 
celdillas  mas  pequeñas  y  de  ellos  salen  los  operarios ;  los  segundos 
son  para  los  machos  y  los  mas  grandes  para  las  hembras.  Nacidos» 
los  huevos,  van  muchas  vezes  al  dia  las  operadas  á  darles  una  es-. 
pede  de  papilla  que  ellas  vuelven  de  su  estóipago. 

La  cera  de  ios  enjambres  de  América  es  mas  difícil  de  blanquear 
que  la  de  las  abejas  domésticas  de  Europa.  En  América  la  proximi- 
dad de  las  haciendas  de  caña  perjudica  mucho  á  las  abejas :  estos 
insectos  muí  ansiosos  de  miel  se  anegan  en  el  zumo  de  la  caña  que 
los  pone  en  un  estado  de  inmobilidad  y'eipbríagiiezr  cuando  lo  chij^- 
pan  con  esceso. 

Avispa.  Tiene  una  parte  de  la  industria  de  las  abejas ,  vive  en 
sociedad;  tiene  costumbres  salvajes  y  busca  siempre  la  guerra  y  el 
pillaje.  Se  sirve  del  aguijón  como  de  arma  ofensiva  para  atacar  los 
animales  mas  débiles  ;  hace  su  nido  en  el  interior  do  la  tierra  á  la 
profundidad  de  medio  pié.  Sírvele  de  entrada  un  conducto  tortuo- 
so de  una  pulgada  de  diámetro  y  tiene  el  cuerpo  pajizo  con  zonas 


—  228  —  \ 

negras.  Hai  una  calidad  de  avispa  que  hace  so  nido  casi  redonda 
en  las  ramas  de  los  árboles,  compuesto  de  una  greda  mui  fina  ,  y 
se  encueotra  también  en  los  pequeños  arbustos  de  las  sabanas. 

Abejarrón.  Demasiado  conocido  por  los  estragos  que  hace  en  la 
c-ampiña  ;  vive  en  los  árboles  cuyas  hojas  destruye  rápidamente.  Su 
larva  con  el  nombre  de  gusano  blanco  roe  las  raizes  de  todas  las 
plantas.  Inmóvil  la  mayor  parte  del  dia,  vuela  por  la  larde  de  ár- 
bol en  árbol  con  su  monótono  zumbido.  No  vive  mas  que  una  se- 
mana y  no  se  dej(i  ver  sino  por  espacio  de  un  mes. 

Pegón.  Especie  de  abeja  un  poco  mas  pequeña  que  la  común  ;  es 
negra  y  vive  en  sociedad  como  las  avispas.  Pasando  cerca  de  sus 
colmenas  ó  en  tocándolas,  se  lanzan  todas  contra  la  persona  y  en  el 
lugar  que  pican  allí  se  quedan  pegadas  haciendo  un  zumbido,  por 
lo  cual  se  les  ha  dado  el  nombre  de  pegón.  Lo  mismo  hacen  con 
los  animales,  que  los  temen  casi  tanto  como  á  las  avispas. 

Cigarrón.  Es  una  especie  de  abeja  grande  que  se  alimenta  del 
néctar  de  las  flores ;  habita  en  agujeros  que  abre  en  las  maderas 
con  unos  dientes  que  tiene  á  manera  de  tenazas  curvas.  Los  hai  ne- 
gros y  amarillos  con  alas  trasparentes.  Cuando  vuelan  producen 
un  zumbido  mas  fuerte  que  el  susurro  de  las  abejas.  Está  armado 
de  un  aguijón  y  su  picada  produce  un  dolor  agudo. 

El  tábano  es  un  insecto  de  las  alas  separadas,  la  Irompetilla  lar- 
ga y  esterior,  las  antenas  divididas  desde  cuatro  hasta  ocho  anillos; 
las  larvas  parecen  gusanos  largos  sin  patas  y  casi  cilindricas  con  la 
cabeza  escamosa,  y  cambiando  de  piel  para  pasar  al  estado  de  ninfa. 
£1  tábano  tiene  la  forma  de  una  mosca  gruesa  que  vuela  zumban- 
do; atormenta  los  caballos  y  bueyes  agujereándoles  la  piel  para 
ohuparles  la  sangre. 

Bachaco.  Hormiga  colorada  de  cabeza  grande  y  dos  pinzas  en 
la  boca ,  con  las  que  agarra  las  hojas  de  las  plantas,  las  cuales  des- 
truye para  llevar  á  sus  mansiones  subterráneas.  Hacen  escavacio- 
nes  que  parecen  canales,  y  en  ellas  se  encuentra  multitud  de  gran- 
des celdas  en  donde  depositan  los  hijos  en  medio  de  una  cantidad 
de  pelusa  vegetal  que  se  llama  yesca  de  hortnigaSy  igual  al  noli  ó 
yesca  de  la  Nueva  Granada.  Esta  materia  es  escelente  para  estancar 
la  sangre ;  hervida  en  salitre,  es  una  de  las  mejores  yescas.  Conos' 
de  muchos  pies  de  al  tufa  forman  las  tierras  sacadas  de  los  subter- 
ráneos de  estos  insectos  y  en  ellos  hai  tres  clases  de  individuos  ; 
machos^  hembras  y  neutros.  Yiren  en  sociedad  formada  de  neutros^ 


/ 


—  229  — 

y  luego  que  los  machos  y  hembras  adquieren  sus  alas,  salen  del  hor- 
miguero. La  fecundación  se  verifica  en  el  aire ',  muchos  mueren  en 
seguida  y  las  hembras  que  deben  llegar  á  ser  madres  pierden  sus 
alas ;  unas  van  á  formar  nuevas  colonias  y  otras  detenidas  prisioneras 
por  los  neutros  de  la  habitación,  ponen  allí  sus  huevos.  Se  alimentan 
los  bachacos  de  materias  animales  y  vegetales  y  muchas  vezes  des- 
truyen la  ropa  que  encuentran  en  las  iiabitaciones.  Gustan  mucho 
de  sustancias  dulces  y  son  la  plaga  de  los  jardines  y  de  la  agricul- 
tura. En  una  noche  destruyen  un  jardin  entero.  Los  lugares  por 
donde  pasan  quedan  tan  trillados  como  un  verdadero  camino,  y  los 
bai  de  mas  de  medio  pié  de  anclio  y  de  largo  muchos  centenares  de 
varas.  Los  indios  de  Rio-Negro  comen  el  bachaco  que  se  denomina 
culón,  por  lo  grueso  de  la  parte  posterior  que  está  formado  de  man- 
teca pura.  Los  recogen  en  la  época  de  la  fecundación,  enciérranlos 
en  saquitos  de  marima  y  ahumados  los  comen  estendiéndolos  sobre 
el  pan  de  casabe. 

Hai  otra  clase  de  hormiga  grande  y  negra  que  llaman  de  leña, 
porque  suele  habitar  en  tierra  y  mas  frecuentemente  en  los  troncos 
de  los  árboles  podridos.  También  hai  una  amarillenta  con  la  ca- 
beza negra  que  vive  del  mismo  modo.  Muliitud  de  especies  mas 
pequeñas  existen  y  muchas  mui  bravas,  cuyas  picadas  dolorosas 
suelen  dar  calentura ;  tales  como  la  pica-y-huye  y  otras  llamadas 
cazadoras  que  se  quedan  pegadas  cuando  pipan  y  al  separarlas  es- 
traen un  pedazo  de  cutis.  Enfin,  otra  existe  que  se  mantiene  en  los 
cujíes  :  al  tocar  las  ramas  de  estos  árboles,  caen  á  millares  sobre 
quien  los  mueve  • 


ÓftDSir  DB  Ij09  LBPIDOPTBHOS. 

• 

Mariposa  pavón.  Este  es  el  género  mas  hermoso  de  todos  los  in- 
sectos y  al  que  la  naturaleza  ha  dotado  de  mas  ricos  adornos.  El 
oro,  la  plata  y  las  esmeraldas,  todos  los  colores  posibles  mezclados 
con  un  arte  admirable,  brillan  á  porfía  sobre  sus  anchas  alas. 
Pasa  su  vida  en  los  jardines,  alimentándose  del  jugo  de  las  dores 
que  chupa  con  su  trompa. 

Mariposa  del  tabaco.  Este  insecto  no  se  encuentra  sino  sobre  es- 
ta planta.  La  larva  es  verde  con  marcas  laterales  en  cada  seg- 
mento, rodeadas  de  un  círculo  de  color  purpúreo,  cuyo  xnaliz. 


—  230  — 


\ 


cobre  tambieu  la  espina  codal.  Sas  ate  son  de  un  color  osear» 
con  rayas  blancas. 

Mariposa  de  colas.  Tiene  las  alas  adornadas  con  dentellones  ne- 
gros sobre  nn  fondo  amarillo  claro.  Cada  ala  tiene  una  cola  qne 
es  la  prolongación  del  dentado  negro  que  rodea  las  alas. 

Semirámis.  Esta  mariposa  se  encuentra  sobre  las  cañas  de  azú- 
car; es  muí  notable  por  las  largas  colas  que  terminan  sus  alas 
Inferiores ;  tiene  cerca  de  4  pulgadas  de  ancbo  -cuando  estas  se 
bailan  abiertas. 

Son  innumerables  las  variedades  de  estos  bermosos  insectos, 
tanto  en  las  mariposas  diurnas  como  en  las  nocturnas,  y  de  ellas 
podrían  bacerse  numerosas  Colecciones. 

ÓADSlf  DB  LO»  ■BMIPTBROS.  .^ 

Gimex  ó  chincbe  del  bosque.  Este  insecto  vive  sobre  las  plan- 
tas, se  alimenta  de  orugas ^  despide  un  olor  desagradable;  es  de 
colores  muí  vanados.  Da  este  insecto  como  40  hijos  á  la  vez  y 
la  bembra  los  conduce  como  una  gallina  sus  pollos.  Siguen  elW 
los  movimientos  de  la  madre  que  no  los  deja,  parece  protegerlos 
y  mueve  las  alas  para  alejar  al  enemigo  que  se  acerca  á  su  la- 
mília  :  el  macho  es  el  que  eila  teme  mas.  Luego  que  los  pe- 
queños han  adquirido  bastante  fuerza,  son  abandonados  por  la 
madre. 

Ghinclie  común.  Se  encuentra  en  los  lugares  templados  y  cá- 
lidos pero  no  se  ve  este  fétido  animal  en  los  Crios.  Todos  le  co- 
nocen ;  parece  una  gai  rapata,  sale  de  noche  para  chupar  la  san- 
gre á  las  personas  que  duermen  y  es  mui  diestro  en  retirarse  y 
esconderse  cuando  se  le  busca.  Lo  hai  coa  especialidad  en  las  ca-^ 
mas  y  pone  muchos  huevos  cuya  destrucción  es  algo  difícil.  iJno 
solo  de  estos  animales  es  capaz  de  infestar  en  poco  lienipo  una 
casa  entera.  Se  le  encuentra  hasta  la  altura  de  ^.502  varas  sobre- 
.«1  nivel  del  mar. 

Cigarra,  fiisecto  cuyo  pico. parece  salir  delcueílo;  el  macho  se 
distingue  por  su  canto  penetrante  y  monótono ,  que  proviene  de  un 
órgano  situado  en  la  cavidad  de  su  vientre.  La  hembra  ¿iene  un 
taladro  con  que  hace  agujeros  en  las  ramas  de  los  árboles  pajca  de* 
positar  en  ellos  sus  huevos ;  la  larva  que  de  estos  sale  és  blanca. 
Deja  su  nido  para  sumirse  en  la  tierra.,  donde  «e  alimenta  derdizes : 


/ 


~  ^4  — 

se  cambia  despaes  en  ninfa,  y  yiye  asi  en  la  tierra  durante  un 
año. 


ÓRDBN  DB  LOS  BHIPÍPTBEOS. 

Ck>chioilla.  Se  halla  en  la  provincia  de  Barquisimeto ,  en  Coro ; 
£arora  y  eepcade  Barcelona,  pero  no  es  un  objeto  de  cuUÍ¥«  y  de 
£oa2ercio  «orno  en  Méjico.  De  este  insecto  se  saca  el  bello  coler  «o- 
aoeido  con  el  nombre  de  carmín,  de  que  tonto  se  usa  en  Ja  pin- 
Uira.  £ste  animal  se  £ja  sobre  los  árboles  en  una  época  detemii- 
nada  del  ano ,  los  machos  parfi  metamorfosearae  y  las  hembras  |Nira 
loda  su  vida;  parecen  |)equenas  agallas.  Despaes  de  haberse  jun- 
tado, las  bembras  ponen  sus  huevos,  los  coUcan  en  la  piel  deisu 
vientre,  se  secan  y  sus  cuerpos  forman  «toa  cascarilla  que  encierra 
los  hjsem&.  La  coclúnilla  que  vive  sobre  el  nopal  es  la  q«e  preáuce 
éi  .mas  bello  encamado. 

Pulga.  Insecto  de  calor  pardo  con  la  mbeza  vellosa  ^y  pequéis. 
£1  hocico  grueso  y  agudo ,  é  pierneclllas  y  en  cada  una  5  coyvn- 
iucas  diversamente  articuladas ;  tiene  cierta  espede*  de  muelle  mui 
delgado ,  pero  tan  fuerte  fue  j)or  su  jnedio  da  un  sallo  20  lüeses 
jnayor  que  el  tamaño  de  su  cuerpo.  Abunda  m  los  paises  4e«i- 
plados  mas  ^e  en  los  cálidos  y  fríos. 

Pulga  de  ni^ua  {pukx p&netran^).  Insecto  ée  mjénos  de  aiedia 
línea  de  largo  y  mni  ^parecido  á  la  pu^a,  de  la  cual  se  diferencia 
en  tener  blanca  la  |»arte  posterior  de  su  ouerpo  y  la  boca  ^a^a 
de  una  tron^pa  tan lacgacome  Jdí  cuerpo.  Se  introduce -eo  los pieside 
las  personas^  «n  donde  dcfiosita  sus  huevos,  q«e  avivándose  inoie- 
diataofeente. causan  comezón:,  y  si  no  se  sacan  |>ronto^  «i^ece  basto  5 
líneas  áéb^o  del  ciítis.  En  este  estado  ya  el  insecto  es  verdosn  y 
produce  delores  agudos  é  inflamación  en  la  parte  4ai'qtteeslá.>Si 
no  se  saca  i  tiempQ,  se  multiplica  é  imposibilita  de  fadar  á  k  per- 
sona. Los  cerdos,  monos  y  ^perros  son  atacados  por  estes  in&eotosN  á 
los  primeros le$  son  mas  látales,  porque» hasta  suelen  posárseleS'ien 
Ios-pezones  de  las  tetas,  y  comoles  causa  dolor  nosejirestaniádar^de 
jnamar  áisus  lechoncillos,  los  cuales  se. mueren  de  hambre.  Les  «no- 
nos y  perros  suelen  >sacárselas  diestramente  ^oü  los  dientes.  -Serob- 
.aerva  ^ue  en  los  liigares  salitrosos  ao  bai  de  esta  plaga,  í^W4iim  á 
te  4dtiiraí  de  ^«4  00  vairas  sobre  el  nivd  del  mar. 


—  252  — 


ÓRDBN  DB  LOS  DIPTBftOS. 


\ 


•  Mosquito.  Insecto  bastante  conocido  por  sus  picadas  y  obstina- 
ción. Nace  en  los  lagares  húmedos  y  después  de  haber  sufrido  su 
metamorfosis  habita  en  el  aire.  Las  picadas  producen  irritación  en 
la  piel.  Los  bai  en  abundancia  en  el  Orinoco,  arriba  del  estrecho 
de  Barragiian ,  y  sobre  todo  en  los  raudales ,  en  la  Esmeralda ,  en 
una  parte  del  Casiquiare  y  en  el  Guaviare.  Estos  animales  aparecen 
á  la  salida  del  sol  y  sé  retiran  cuando  se  pone.  Hai  también  zancu* 
dos.  especie  de  grandes  mosquitos ;  estos  se  encuentran  en  el  Ori- 
noco abajo  en  el  delta»  sobre  los  ríos  Apure,  Portuguesa  y  sus  tri- 
butarios y  generalmente  en  todos  los  rios  de  la  zona  pastoril ,  en 
los  logares  húmedos  y  pantanosos  del  lago  de  Maracaibo  y  de  los 
ríos  que  caen  á  este.  Los  zancudos  están  en  movimiento  mas  de 
noche  que  de  dia/  picando  fuertemente  con  su  grande  aguijón.  Hai 
otra  especie  aun  mas  grande,  pero  menos  perjudicial ,  que  se  en- 
cuentra en  los  bosques  cerca  del  mismo  lago ;  esta  pica  de  dia. 
También  hai  el  jején,  mosca  pequeña,  ó  simulie,  Tenenoso,  quede 
dia  se  encuentra  en  los  lugares  húmedos  y  en  los  rios  de  estos.  Los 
hai  que  se  salen  al  amanecer  y  se  retiran  cuando  el  sol  calienta  : 
otros  se  aparecen  al  anochecer  y  duran  pocas  horas.  El  único  re- 
medio que  hai  para  estos  insectos  tan  molestos  es  el  viento,  y  tam- 
bién el  humo.  Es  de  notarse  que  en  los  rios  de  aguas  verdosas  hai 
menos  cantidad  y  en  los  de  aguas  negras  no  existe  ninguno  de  es- 
tos tormentosos  insectos  que  á  vezes  impiden  hasta  el  comer.  En  el 
lago  de  Maracaibo  suelen  verse  nubes  de  otras  clase  de  mosquitos 
que  se  llaman  bobos ,  porque  no  pican  y  su  número  es  tan  grande 
que  parecen  nubes  opacas  y  estensas  que  se  pasean  por  la  super- 
ficie del  agua.  De  estos  suelen  verse  algunas  vezes  sobre  la  playa 
del  mar.  A  la  altura  de  2.000  varas  está  uno  libre  de  esta  plaga. 

Moisca  brava  ó  carnicera.  Se  parece  á  la  mosca  común ,  pero  es 
algo  mas  gruesa  y  de  un  color  negro  con  bandas  grises.  Busca  la 
carne  de  que  hace  su  alimento ;  es  vivípara ,  hace  sus  larvas  vivas 
y  estas  producen  grandes  daños  en  hs  colmenas.  Hai  otra  mosca 
grande  de  un  verde  luciente,  que  apenas  se  posa  sobre  la  carne 
cuando  espele  una  cantidad  de  gusanos  que  crecen  prontamente. 
Estas  son  las  que  depositan  gusanos  en  el  ombligo  de  los  animales 
recien  nacidos,  á  los  que  si  no  se  curara  de  pronto  con  la  cebadilla 


1 


--  2S5  — 


86  morirían  ;  lo  mismo  sucedería  coa  las  heridas  de  los  animales  sí 
nna  de  a^vellas  abundantes  moscas  llegara  á  depositar  sus  gusa- 
nos en  ellas.  Otra  mosca  hai  mas  terrible  todavía,  la  cual  suele  agu- 
jerear la  piel  de  las  personas  ó  animales  y  debajo  del  pellejo  nace 
un  gusana  peludo  que  á  medida  que  crece  da  dolores  agudos,  bin- 
ebándose  la  parte  sin  nuestra  ninguna  de  abertura.  Afortunada- 
mente estos  no  abundan  mucho.  Por  último,  las  moscas  comunes , 
insecto  incómodo  que  se  encuentra  en  todas  partes,  ensucia  con  sus 
escrementos  las  telas,  dorados,  etc.;  coloca  sus  huevos  en  donde  de- 
ben vivir  las  larvas  y  estas  no  dejan  su  piel  para  metamorfosearse, 
sino  que  se  endurecen ,  forman  una  cascara  que  encierra  el  insecto 
y  con  el  calor  nacen  pronto.  Las  hai  todo  el  ano. 

ÓRDBN  DB  LOS  PARÁSITOS. 

Piojo.  Animal  asqueroso  que  se  alimenta  de  la  sangre  humana 
y  de  la  del  cerdo :  es  de  color  ceniziento  oscuro  y  de  sustancia  mas 
dura  si  habita  en  la  cabeza,  y  mas  blanda  y  de  color  casi  blanco  si 
habita  en  el  cuerpo.  Son  mas  comunes  desde  la  altura  de  2592  á 
5497  varas  sobre  el  nivel  del  mar. 

Piojo  de  pichón.  Este  insecto  parece  alimentarse  sobre  las  plu- 
mas de  las  aves ,  ya  de  la  materia  córnea  de  aquellas  ó  ya  de  la 
zuarda  que  se  les  pega  y  las  preserva  de  la  acción  del  agua.  Comun- 
mente se  le  halla  debajo  de  las  alas,  en  los  sobacos  y  cabeza  de  las 
aves,  multiplicándose  hasta  el  punto  de  enflaquecerlas  y  aun  cau- 
sarles la  muerte.  Este  animal  tiene  el  cuerpo  mui  estrecho  y  largo 
con  el  abdomen  informe. 

Piojo  de  gallina.  Es  mas  pequeño  y  redondo  que  el  anterior,  de 
un  color  ceniziento,  hace  enflaquecerlas  gallinas  y  multiplicándose 
'  considerablemente,  no  deja  otro  recurso  que  quemar  el  gallinero  y 
'   bailar  con  frecuencia  las  aves. 

Piojo  de  burro.  Es  amarillo  y  pequeño,  ataca  los  pollinos  en  la 

estación  lluviosa  y  les  ocasionaría  la  muerte  si  con  tiempo  no  les 

cortasen  la  lana  del  lomo  en  donde  se  depositan  con  mas  abundan* 

'  cía.  Los  aguaceros  que  caen  entonces  diariamente,  son  suGcientes 

'  para  aniquilar  esta  ptaga. 

Garrapata.  Insecto  sin  alas  con  6  patas  que  se  agarra  fuertemente 
á  las  personas  y  animales ;  en  estos  se  hincha  tanto  chupando  la 
iangre,  que  pierde  totalmente  su  figura  y  parece  entonces  un  grano 


—  154  — 


\ 


de  garbftDE»  (MBiiídslQ,  f  <e8«t«aiid»  foc  ú  «Man 'se  ete.  fia  «na 
plaga  temMe  falta  Im  anhnaias ,  ponfae^aeftos  kitNriiicea  niMhas 
^  las  orejas  eeattevándaks  oaaMnwnnnte  «mi  ettIerisaAad  ^i^e-les 
hace  plc^r  ó  peréor  estas ,  oitéBtras  ea  el  lOMrpft  te  f  ngckMe  Mía 
aaroa  geaeraL  iHal  iMa  dase  pefuciía  «fue  JhMMin  «tojamMoc,  ipar- 
iqae  este  inseol&es  eoknraidoyMNÍ  fieqtt^a;  ^se  fega^oiM Jfa#ff- 
rafaia  y  haeo  <na$  mal  qñe  «ila.  iiaiipiáiíAMe  «n>b  agaa^de  tataoo 
y  ottia&do  a  Jos  aráuries  icea  «1  «atrnte  de  <Minfit9«iaeiett  id  Mo- 
fiíeftlo  todas  las  g am|>atas  -ó  «cohmidilas  t^e  4iaiieA. 

éWMK  OS  LOS  WiHAVODWk 

Gongolocho.  Su  color  es  negro,  amarilioó  pardo,  liene  multitod 
de  patas,  habita  en  las  casas  y  los  bosqoes  y  en  el  suelo  ó  debajo 
de  las  hojas  se  mantiene  enrollado  como  un  ovillo.  Ordinariamente 
sale  de  noche,  y  si  aJgaoo  le  toca  reúne  las  patas  y  ^  ijueda  Jumó- 
bil. 

Cienpiés.  Lo  hai  de  dos  ecypedes ,  ano  negro  y  otro  amairiUento  ; 
al  primero  se  mantiene  en  los  bosques  y  crece  mas  de  un  pié  de 
largo :  el  otro  está  generalmente  en  las  casas  y  solo  creced  liga- 
das. $a  picada  causs^on  dolor mui  agudo;. se  hiAcJuí  la|iarl8 Mórbi- 
da y  produce  calenluca.  Mantiéoese  deánsectos. 

évaii  sm^áB  AMUkÁáA, 

Grande-araña.  Aifimal  asqueroso  «que  se  enoueatra  en  los  1k)s- 
qnes  mas  solitarios,  muí  grande  y  gruesa,  y  su  picadura (Caasa  ter- 
ribles fiebres;  abunda  en  la  Guayana. 

Arana  atroz.  Esta  e^ecie  es  de  an  tamaño  mediano;  los  cuatro 
ojos  de  en  medio  forman  un  cuadro  y  los  dos  laterales  jinalÍQca 
oblicua.  Se  mantiene  en  los  agujeros  de  los  paredones  viejos,  jas 
hendeduras  de  las  puertas  y  ventana^,  y  forfiia.ttn  nidd  cilindrico. 

Araña  común.  Habita  en  las  casas,  bosques  y  cao^paa^  hao^^su 
tela  cilindrica  y  vive  de  las  moscas  que  coge  en  alku 

Araña  tetracauta.  Es  ferruginosa  con  cabeza  calorada,  iicgueiyí; 
las  patas  de  color  de  sangre ;  el  abdomen  tiene  casi  la  figura  de  una 
media  luna.  Hai  de  esta  misma  figura  plateadas  y  doladas  mui  lin- 
das. 

Galeoda.  Tiene  cerca  de  i  $  lineas  4e  la^go^  eamoi  Jifeaeni^  jpe- 


I 


—  .255  — 


luda ,  un  poco  cenizlenta  y  rojiza ;  sus  antenas  son  un  ^ocq  mas 
largas  que  las  primeras  patas  y  las  mandíbulas  velludas  terminadas 
en  pinzas  encorvadas  y  dentadas. 

Tarántula.  La  fama  de  esta  araña  estaba  mui  estendida  en  Euro- 
'  pa  á  causa  de  los  síntomas  terribles  que  según  se  decia  el*an  las 
consecuencias  de  su  picadura;  está  sin  embargo  probado  que  -tiene 
jnui  poco  ó  ningún  veneno.  La  que  se  conoce  en  el  pais  con  este 
nombre  es  de  una  picadura  muí  fatal  en  el  casco  de  las  bestias , 
pues  lo  pierden  si  no  se  curan  en  tiempo. 

Araña-peluda.  Grandísima;  se  encuentra  en  los  bos^es^  está 
cubierta  de  una  pelusa  blanca  y  su  picadura  es  venenosa* 

Arañila  de  la  playa.  Mas  pequeña  que  uiia  hormiga;  jsoío  se  en- 
cuentra en  las  costas  de  la  península  de  Paraguaná;  «s  de  colbr  de 
chocolate;  apenas  se  siente  su  picadura  y  solo  por  síntomas  mor- 
tales se  conoce  que  uno  ha  sido  mordido  por  este  insecto.  Si  no  se 
aplica  inmediatamente  tma  ^an^fa^  fa  persona,  se  vuelve  loca  y  á 
vezes  muere. 

Alacrán  6  escorpión.  \ive  en  la  tierra  debajo  de  las  piedras , 
corre  con  velozidad  levantando  su  ccüa  ¿  orqulTladas ;  esta  llene 
6  nudos ,  el  último  de  los  cuales  prolongado  hacia  arriba  en  puúta 
ic  sirve  de  aguijón.  Tlahita  en  los  países  cálidos  y  los  liai  de  dos  cla- 
ses^ negro  y  amarillo;  este  es  mas  venenoso  y  su  picada  causa  los 
mismos  efectos  que  la  del  cienpiés.  La  alacrana  pare  una  porción  de 
hijos  que  lleva  sobre  el  lomo  durante  algún  tiempo,  cuidando  con 
esmero  de  su  conservación. 

<  ¿HDBH  jw  xos  caosacicfos. 

Cangrejo,  Tieiie  5  ptres  dejuitas^  y  las  primeras  de  cestas  tarfl^- 
naa  en  pinzas ;  es.mas  ancho  que  largo,  vive,«i  tiecras  húmedaí  y 
se  esconde  en  agujeros  que  hace  debaja  de  üerra.  Se  nutre  de  siis- 
.tancías  vegetales  y  es  nocturno  ó  crepuscular.  Su  carne  es^ligrosa 
en  los  lugares  donde  hai  manzanillo  ^  porque  -comen  mucho  esta 
fruta  venenosa.  Ha>  cangrejos  úe  mar^  de  agua  dulce  y  ótro^  que 
viven  en  los  Jtosques  y  montañas. 

«Camarón.  Su  carne  es  mui  delicada  y  agradable  a)  gusto.  Es.jde 
un  color  verde  bronceado,  mas  cuando  está  cocido  os  de  ha  encar- 
nado  claro.  Se  pei^ca  en  las  orillas  del  mar  J'de  }os  rios.,  «n  los  li«e- 
.  eos  de  las,piedras. 


—  256  — 


\ 


Langosta.  La  de  mar  es  mucho  mas  grande  que  la  de  rio ;  habita 
en-las  hendiduras  de  las  rocas,  y  lo  mucho  que  le  crecen  las  patas 
de  delante  le  obliga  á  andar  de  lado.  Las  hembras  llevan  los  hue- 
TOS  pegados  á  unos  filamentos  debajo  de  la  cola.  Este  crustáceo 
es  muí  eslimado  como  alimento ;  cocido  cambia  su  color  verde  en 
rojo, 

Caracol  soldado.  Este  animal  se  apodera  de  las  conchas  vacías 
para  hacer  su  habitación  ea  ellas;  como  tiene  el  abdomen  tierno  y 
membranoso,  en  vez  de  una  cabierta  sólida ,  como  todos  los  ani- 
males de  esta  clase ,  se  aloja  en  las  conchas  univalvas,  y  sogun  va 
creciendo  va  buscando  otras  mas  grandes.  Ordinariamente  es  de 
4  pulgadas  de  largo.  Si  se  les  despoja  á  muchos  de  ellos  de  la  con- 
cha dejándoles  una  sola ,  se  la  disputan  con  encarnecimiento. 

ÓADBM  DB  LOS^AHRLIDOS. 

Ssmguijuela.  Es  mui  sensible  á  los  cambios  atmosféricos :  se  agita 
cuando  el  viento  sopla >  se  esconde  en  el  cieno  cuando  el  cielo  se 
cubre,  y  si  hai  tempestad,  sube  á  la  superficie  del  agua.  Habita  en 
los  estanques,  ciénagas  y  arroyos.  Se  aplica  mucho  en  las  inflama- 
ciones. 


ZOÓFITOS, 

Estrella  de  mar.  Tiene  el  cuerpo  chato ,  formando  un  disco 
del  cual  salen  cinco  radios  principales ,  y  la  boca  está  colocada  en 
el  centro  de  ellos.  Loa  radios  tienen  por  debajo  un  surco  longitu- 
dinal y  una  infinidad  de  agujeros  que  dejan  pasar  los  pies ;  el  lado 
opuesto  está  guarnecido  de  pequeños  tubos  que  el  animal  estieiíde 
cuando  está  en  el  agua  y  sirven  para  estraerla.  Se  alimenta  de  in- 
sectos y  de  pequeños  crustáceos. 

Erizo.  Se  alimenta  de  mariscos,  rompiéndolos  con  sus  vigorosos 
dientes  que  en  número  de  cinco  están  bien  engastados  en  una  espe- 
cie de  mandíbulas  guarnecidas  de  muchos  moluscos ;  tiene  la  boca 
en  medio  de  la  superficie  inferior  y  el  ano  en  el  punto  opuesto;  es 
del  tamaño  y  forma  de  una  manzana,  y  su  carne  es  agradable. 

Medusa.  Tiene  forma  orbicular  mas  ó  menos  convexa;  boCá  de 


? 


—  257  — 


color  rojo  en  el  centro  y  una  multitud  de  apéodioes  cornudos  con 
que  coge  los  animales  de  que  se  alimenta,  tales  como  gusanos,  in- 
sectos, molnscos,  etc.  Su  cuerpo  es  fosfórico  durante  la  noche,  aun* 
que  parece  que  esta  calidad  está  subordinada  á  la  voluntad  del  ani- 
mal, pues  se  ha  observado  en  el  mismo  individuo  el  paso  del  estado 
fosfórico  al  de  opacidad,  y  vice  versa.  La  marea  los  echa  diariamente 
en  todas  nuestras  costas. 

Fragata.  Zoófito  de  diversos  colores,  y  sobre  lodo,  rosado  y  blan- 
co; es  como  un  cuerpo  oblongo  hinchado  que  lleva  encima  una 
membrana  tendida  que  le  sirve  de  vela,  y  así  se  le  ve  flotar  sobre 
las  olas.  De  esta  hermosa  y  brillante  qiembrana  tomó  sin  duda  el 
nombre  de  fragata^  y  abunda'tonsiderablemente.  Grandes  cantidades 
de  ellas  son  arrojadas  todos  los  dias  á  tierra  por  las  olas. 


\ 


:KS9ffS9SKP^sigfei9e 


«B.4K>]iAVIA  IPOliITICA. 


E9TEN8ION  T  NUENSIOHBS  ANTIGITAS. 

m 

Dejamos  detalladas  las  fronteras  qne  una  larga  y  pacfflca  pose- 
sión entre  naciones  limftrofós*.  han  acostombrado  respetar;  y  en 
esto  hemos  segnido  la  opinión  del  sabio  Humboldt ,  qne  asegura 
haber  tenido  en  sus  manos  los  mapas  manuscritos  trazados  en  lis- 
boa  y  Madrid,  y  haber  hecho  un  estudio  particular  de  la  grande 
controversia  diplomática  sobre  las  operaciones  intentadas  por  la  co- 
misión de  límites ;  así  es  que  en  la  demarcación  de  las  fronteras 
políticas,  está  especiflcada  toda  la  línea,  de  acuerdo  con  los  mapas 
y  la  obra  de  este  célebre  viajero,  esceptuando  solamente  en  la  em- 
bocadura del  Rupununi,  ^ue  temos  toottdo  por  raya*  pues  según 
los  últimos  viajes  del  S.  Schomburgh,  allí  está  la  sierra  de  Mara- 
capans  de  que  habla  Humboldt.  ^fl  hubiéramos  podido  hacer  otra 
cosa,  atendida  la  imposibilidad^de  penelmr  en  territorios  ocupados 
con  puestos  militares  por  ]ps  ingleses  sobre  el  Esequibo  y  por  los 
brasilenses  sobre  el  Rio-Negro^  Sin  embargo,  si  se  atiende  á  los  tra- 
tados celebrados  entre  España  y  Portugal  en  -I  °  de  octubre  de  ^777 
y  en  ^4  de  marzo  de  4778,  en  la  embocadura  del  rio  Apóporís, 
latit.  4"  46^  S.  y  long.  2°  45'  O.,  deberían  coincidir  las  fronteras 
de  Venezuela,  Nueva  Granada  y  el  Ecuador ;  y  si  fuera  así,  la  línea 
recta  que  parte  límites  entre  la  Nueva  Granada  y  Venezuela  por  el 
meridiano  del  Paso  del  Viento,  vendría  á  dar  dos  leguas  mas  abajo 
de  la  boca  del  Apóporis,  en  la  catarata  de  Gupatí.  Entonces  segui- 
ría por  el  río  Yupura  ó  Caqueta  abajo  hasta  la  laguna  Gumoapí  ó 
Gamoupí  (en  algunas  cartas  Marachí)  de  donde  se  dirigiría  al  N. 
hacia  Loreto  ó  hacia  la  boca  del  Cababuri  sobre  Rio-Negro.  En  se- 
guida todo  el  curso  del  Cababuri  serviría  de  lindero  basta  su  cabe- 
zera  en  los  cerros  de  Archívaquerí ,  donde  se  encontraría  la  línea 
que  divide  las  aguas  del  Mararí  y  Castaño ;  aquel^  tributario  del 


? 


— 25t  -^ 
f  eiie^^Éli  iiaia.  Ffi^  eila  bu« va  demaecuiNK-  iMÉrk'  qoe- 

raí»  ioft  dies:  y  sri»  etlabteráiíttttaflu  fofidute 

el  siglo j&fi»^d«ide  S.  ioaá  ée  Mtravilsaoa>,  •»  dbnde  tioeii  sa 

puASiOi  oiiUlae;.  bafita  el  imHib!  de!  Lorete. 

SHa^atíÉiufe  a  lo^ciiike  ditfe.al^S^.  toé  Mamieftftestnepo^  seca'etwio 
del  interior  que  fué  ea  la  BC|iékiiea  de  GoléÉiiHa^  ea  so;  tomo  !<>  de 
la  Historia  de  la  Revol ación,  el  límite  hacia  el  naciente  seria  dis- 
tinto del  demarcado,  pues  quedahÍA^aarel  rio  Esequibo  en  lugar 
de  la  boca  de  Moroco,  y  siguiendo  aquel  hasta  4'*  50^  laiit.  N.,  en 
el  promoák)  debtieMboindiiniiilati  SUmmit  y  del  Rop«mini  se  era* 
zaplft.ei{Eae9Úbo  basoMdo^  l«a  aendiltea»  detaiBilwiyas  d^  ealeno 
y  deiiltipttuiiiii;  Segakia  hiego  las  ámaB.á$i  la  eooilileDa-  die  Ttt» 
mumuaqne,  que-  por  lo»  úHíiobi^  viajes  d«l  Sk.  Sebombui^  debe 
ser*  CacawaynM,  y  por  uii.reteoeeaa  iriaá  la.de  Vasara  que  según  el 
misiDO'^iíeiio^son'losraioiiÉn  dvAíinajettDe  PeRgheate^  ürsato  y  la 
sieitaGttiQCOii*  eadoubitianeasii  orl^ev  alTwotáty  diRupaovnl. 
SigiáaBAalnogo  alN..h¿da.ellago«AanMÓj.taiK<élal»roen'la  fábula 
del  Boma»,  toiiiaria¿ la  linea  aobre  la&caÉinraB.det  MaHd.  y  de  allí- 
segwiaipor  lai  sierca.dePaeBraiiBaiqafiitliirida'  )dsí  ttibuitarios  del 
rio-Bfianoo  y  dall€anMií..Esia  eapaeio  aerki:  di^^OO  K*  c.  que  ha- 
bría que  disputar  á  cuatro  oaflíonBa^limitiofes^  la  Inglesa^  la  bolán- 
desfty  lafrancesa  y  labra»len»e^;'oada(iina.d8  las  cuales  tendría  sus 
prelenaíonea  sobwuBiptis  dosoonoeído  y  sdo  pisado  por  los  ludios 
indc^ttdieoles.  üUiaitmettte,  oon  raspéele  sLla  I^va  Granada  so 
obsocra-  que  el.b2»Dn)  de  QumboiáLfija'^l  limites  en  el  río  GalaB'- 
cala  ,  arreglándose  sin  dudaá  las  oariaBide^PidÉlgo  que  baoen  cea^ 
cliÁt  allíila  pro¥ÍBda.de  RÍ0»&uBfaa^.del  mís»o  modo  que  en  el  de 
PuBla^Esgadft.  la.  de  Macaoaiho ,  dsnomioiando  el>  país  intermedio 
prwinda:  Qoajmt,  De  loque  se  in&ere<iaeo8(B;  segua^,  no  per« 
teneda  á  aínguno  de  los  dos  goÉ^iemo»  limítrofes^;  pero  si  se  atien- 
de á  oinos-antone»  que  Imn  eserílo  sobre  VeAosoela,  oomo  Oviedo^ 
se  ^e  qofi  el  rei.ceiicedió  á^lós»  pnwMMis  deseuiMídores  el  terreno 
desdo:  Maracapana.  baatateL  cabo  do  k;  Vela: :.  aaíi  también  fueron 
estoalo».líinite9.del;aGneiidaiiiieiiéo  doloi^BelMure^  y  erigida  Vene- 
zuefaDen^^  protiocia,  también.  coastrvóaqnBl  tcfrítorío.  Corrobora 
estatidea  lo  quo  escribió  ebcélebre<  gnmadino  losado  Caldas  sobre 
la  geografia  de  sa  paísiyqtte  publifi¿.^^el  Semanario  dü  4808*  Las 
mismas  palabras  reprodujo  la  Gaceta  de  Gobierno  de  Colombia, 


—  240  — 


\ 


eaSI  deiiiarzol822,ii*24yyl]abluidodel08Un¡te8de  laÑoeft 
Granada  dice  así.  •  Toca  en  la  cordillom  de  Cácatay  batea  las  ca- 
t  beseras  del  Táchíra  ,  agoe  sa  cano  hasta  sa  embocadara  en 
f  S.  Faastíno ,  alrafiesa  basta  las  montañas  de  los  Motíioiies  y 
t  Guajiros,  y  siguiendo  estas  Ta  á  terminar^en  el  cabo  de  la  Yda.  • 
Débese  respetar  la  opinión  de  este  sabio,  porqoe  oonoda  la  mate- 
ria, era  granadino  y  escribía  para  sn  patria. 

POBLACIÓN. 

Pocos  años  baoe  qne  se  carecía  de  datos  aproiimados  sdbre  la 
población  de  Venesaela,  pnes  áunqae  se  habían  hecho  algunos  es- 
fuerzos para  formar  empadronamientos,  el  temor  de  ser  alistados 
para  el  servicio  militar  ó  para  el  pago  de  contribaciones,  obligaba 
á  los  babiíantes  de  los  campos  y  aun  á  los  vecinos  de  las  pc^lacio* 
nes  á  huir  de  ios  encargados  de  aqad  ramo;  y  los  padrones  eran 
siempre  arbitrarios.  La  paz  y  el  orden  qne  han  sucedido  á  los  tn- 
multos  de  la  goerra,  han  desterrado  aquel  temor,  resiableciendola 
confianza,  y  aunque  los  resoltados  de  la  operadon  disten  algo  to- 
davía de  la  verdad»  por  ser  muí  difícil  recoger  los  nombres  de  tan- 
tas personas  que  viven^uera  de  los  poblados,  con  todo,  los  errores 
no  pueden  ser  ya  de  mucha  consideración. 

En  cuanto  á  los  indígenas,  tampoco  se  habia  penetrado  hasta  aho- 
ra con  este  fin  en  los  terrenos  que  ocupan ;  pero  los  trabajos  de  la 
comisión  corogrifi^ja  qqe  ba  empleado  tres  alios  en  recorrer  las 
partes  desiertas  del  pais ,  ^do  habitadas  por  ellos,  dan  una  idea 
ba^nte  aproximada  de  su  número. 

La  población  de  Venezuela  según  todos  estos  datos  es  de  945.548 
almas,  y  se  puede  dividir  en  blancos,  indios,  razas  mistas  yescla*- 
vos;  bien  entendido,  que  el  número  de  estos  últimas  consta  de  los 
ocasos  y  que  como  se  ha  dicho,  está  mui  aproximado  el  de  los  in- 
dígenas independientes.  En  cuanto  á  las  otras  clasilicaciones,  ha  si- 
do mas  difícil  conocer  el  número  de  individuos,  por  no  haberse  e^ 
presado  en  Jos  empadronamientos  diferencia  alguna  de  tas  casias 
mistas.  Sin  embargo,  el  que  ha  recorrido  durante  diez  años  todo 
el  territorio  de  la  república,  en  trabajos  análogos,  debe  merecer 
alguna  confianza  en  los  cálculos  debidos  á  sus  propias  observacio- 
nes, para  determinar  estas  variedades  de  la  población  ;  he  aquí  sa 
resultado. 


/ 


—  244  — 


Indios  independíenles 52.4^5 

Indios  redacidos  de  raza  para  y  de  GOfitombres  mas 

suaves 44.000 

Indios  redacidos  ya  con  las  costumbres  y  usos  del  país 
y  con  ciertos  caracteres  de  familia  que  los  hace  distin- 
guir  ^55.000 

Blancos  bispano-americanos  y  estranjeros.     .     .     ,     260,000 
Razas  mistas  de  europeos,  criollos^  indios,  raza  africa- 
na y  mezcla  de  mezcla 4i4,l5f 

Esclavos 49.782 

945.548 


Población  de  Veneznela  en  la  época  de  la  revolución  según  el 

Sr.  Humboldt, 


too 

H 
I  ou 


'-^  Indios  raza  pura  cerca  de -120.000 

^  Esclavos  raza  negra 62.000 

~  Blancos  nacidos  en  Europa ^  2.000 

,Vo  Hispáno-americanos,  criollos,  blancos.     .     .     •  200.000 
1^  Gastas  mistas  de  mulatos,  zamb(ls,  mestizos  y 

mezcla  de  mezcla .  406.000 

800.000 


r.  GEOO.  49 


-.tt^ 


\ 


ESTAJDO  de  la  poMaoioii  «dml  distribuida  por  provinctes. 


Afios 

p«dr»na 
miento.    . 


1838 
itBtt 

1857 
1837 
1837 
i837 
1837 
1837 
1838 
1838 

«8nr 

YS38 
1837 


PROVINCIAS. 


Caracú 

Carabobo 

Barquisimeto 

Coro • 

Maracaibo 

Trujlllo 

Herida 

Barínas 

Apare 

Barcelona- . .  •  y* .  • . . . 

Cumaná 

Margarita 

Guaraná 

Total.  ^ . 


Saperficw 

en  leguas - 

de    ao  at 

gi*dD 

itfrial. 


679 

78S 
011 

9.7180    i 

362 

907 

1.994 

1.860 

1.115 

1.463 

37 

30.149 


Población 

absolata 

comprendí- 

dM  la« 


S4S.888 
96.967 

11S.755 
40.476 
4S.83S 
41.788 
62.116 
109.497 
15.479 
Sa.105 
50.671 
18.805 
56.471 


35.951 


945.318 


Población 

relativa 

por  lesna 


85.4 

445.7 

144.1 

fi.0 

15.4 

123.7 

68.4 

51.9 

8.3 

45.1 

3A.6 

494.7 

2.2 


26.3 


d« 

csdafoc. 


34.^9 
4.064 
2.381 
1.46S 

565 
1.371 

698 
1.458 

158 

841 
U4U 


608 


49.782 


I 


Parecerá  estraño  que  la  población  haya  aumentado  tan  poco 
desde  el  principio  del  siglo  xu  en  que  aquellas  regiones  fueron  visi- 
tadas por  Humboidt,  que  ha  sido  el  primero  que  las  ha  dado  á  co- 
nocer bien  al  mundo  civilizado.  Graduó  que  en  ^  800  podría  tener 
Venezuela  780.000  habitantes,  y  cuando  estalló  la  revolución 
800.000  á  lo  mas.  Si  de  aquella  época  á  esta  hubiese  habido  paz 
en  tan  hermoso  pais,  alcanzaría  la  población  á  cerca  de  millón  y 
iDedio.  Fúndase  esta  suposici^  en^que  según  el  aumento  que  ha 
tenido  la  de  algusas  provincias  en  los  anos  de  paz,  se  puede  tomar 
por  periodo  de  su  duplicación  el  espacio  de  56  años,  que  daría  un 
aumento  de  0,028  anuales.  £1  comandante  de  ingenieros^  primer 


/ 


~  145  — 


profesor  de  la  academia  de  matemáticas  de  Caracas,  ha  hallado  que 
la  pobladon  debe  duplicarse  ca^  i  8  ali<^ ;  pero  como  sus  cálculos 
reconocen  por  basa  los  datos  estadísticos  que  suministra  el  circui- 
to de  la  capital,  que  es  una  de  las  partes  mas  sanas  y  mas  avanza- 
das en  civilización  en  toda  la  república,  hemos  creido  que  com- 
prendiendo la  generalidad  de  las  tierras  debiamo'^  doblar  la  esten- 
sion  de  aquel  período,  y  así  lo  demuestra  también  la  comparación 
de  la  población  de  ^825  con  la  de  ^859.  Al  efecto  unimos  el  si- 
guiente cuadro. 


-  S44  — 


1 


POBLACIÓN  general  de  YeneEoela  pan  conocer  su  aumento, 
comprendidos  los  indios  independientes. 


1 

I 


NOMBRE 

de 


LAS  PROTIMCIÁS. 


POBLACIÓN 
en 


POBLACIÓN 

en 

1839. 


Caracas. 

Carabobo 

Barquisimeto 

Coro. s... 

Uaracaibo  (5000  indios). 

TrigiUo 

Herida 

Barínas 

Apure  (9000  indios) 

Mai  garita 

Gumaná 

Barcelona 

Guayana  (35,000  indios). 


166.966 
74.317 
85.557 
SI .678 
30.0U 
39.551 
41.687 
87.179 
S4.333 
14.690 
35.474 
36.147 
56.3ia 


DIFERENCIA  BH  14  AÑOS. 


En  OMS. 


942.888 

75.922 

96.967 

99.650 

119.755 

97.198 

40.476 

18.798 

49.839 

19.788 

44.788 

19.937 

69.H6 

90.499 

409.467 

99.318 

15.479 

» 

18.305 

3.615 

80.671 

15.497 

89.405 

16.056 

96.474 

5.164 

En  menos. 


! 


Total 701.633  945.348 


952.659 


8.854 


8.854 


BBSUHBH  DB  LOS  «DIOS  BH  1839. 


En  el  cantón  de  Úpala 8.600 

En  el  de  Gaycara. 9.180 

En  el  de  Rio-Negro .19.890 

En  el  de  Angostura 9.100 

Enelde  Piacoa.... -    9.500 

En  el  Delta 6.670 

En  Apure 9.an 

EnlaGoajira ^...  .9.000 


Total  cbbbbal 59.4 15 


CÁLCULO  DB  LA  DOPLICAaOH  ItOE 
ES  i  BABOH  DB  0,058  AS  VAL. 


De  1895  á*l839  faai  14  años  :  mul- 
tiplicado pues  0,098  por  14,  dará 
1,399  y  mulüplicando  la  pobiadoo  de 
1895  por  este  numero  j  cortadas  las  ül- 
liraas  tres  decimales  resultari  976,6'i3 
que  es  casi  la  población  de  1839,  j  po- 
dría ser  exacta  sin  la  peste  qae  deso- 
lé el  Apure  deste  1839  hasU  1838, 
haciéndola  perder,  en  lugar  de  au- 
mentar. 


/ 


—  215 

Según  la  regla  establecida  en  el  coadro  qiie  precede,  e)  añe  de 
I  8d9  debía  haber  sido  la  población  de  i  .404.800  almas,  sin  contar 
)a  emigración  y  comprendiendo  los  indios  independientes.  Como 
solo  tiene  Venezuela  en  el  aíio  espresado  945,548  habitantes,  re* 
sulla  un  déficit  de  458.452  personas,  el  cual  espraia  aproximada- 
mente los  estragos  de  la  sangrienta  guerra  de  la  independencia ,  las 
víctimas  del  terremoto  de  4812  y  lo  que  han  devorado  las  epide- 
mias de  1 81 8 ,  la  mortandad  de  1 825  en  los  valles  de  Aragua  y  la 
de  i  852  á  1 858  en  el  Apure.  Para  un  déficit  de  esta  naturaleza,  era 
preciso  que  hubiesen  sucumbido  262.000  personas  en  aquellas  di- 
versas calamidades.  A  la  guerra  sobre  todo  debe  atribuirse  la  parte 
principal  de  tan  espanto-»a  mortandad,  no  tanto  porque  los  ejérci- 
tos fuesen  numerosos,  cuanto  por  el  modo  cruel  de  hacerla,  dego- 
llando á  tüdos  los  prisioneros  y  aun  á  los  vecinos  pací  ti  eos  sin  es- 
ceptuar  edad  ni  sexo.  En  consecuencia  de  este  sistema  horrible, 
conocido  en  el  país  con  el  nombro  de  guerra  á  muerte^  las  pobla- 
ciones enteras  emigraban  con  los  ejércitos  y  unos  eran  consumidos 
por  el  hambre  ó  las  enfermedades ,  y  otros  eran  víctimas  del  can* 
sánelo  ó  de  las  fieras  en  los  bosques.  Comarcas  enteras  cultivadas 
y  ricas  quedaban  convertidas  en  yermos  :  el  fuego  consumía  las 
habitaciones,  todos  los  «hombres  eran  soldados  ó  andaban  fugitivos 
por  los  montes.  INo  seria ,  pues  exagerado  suponer  que  200.000 
personas  perecieron  en  la  guerra  de  la  independencia,  y  que  las 
62.000  restantes  sucumbieron  en  el  terremoto  ó  fueron  victimas 
de  la  peste.  Y  como  el  aumento  que  en  27  anos  debieron  producir 
aquellas  gentes  si  hubieran  existido,  alcanza  á  4  61.200  almas,  evi- 
dente es  que  la  población  de  Venezuela  hoi  seria  de  4.506.255, 
que  son  560.845  mas  de  las  que  realmente  existen. 

Se  ha  dicho  que  la  población  total  de  Venezuela  en  4859  es  de 
945,548  y  que  su  territorio  alcanza  á  55.954  1.  c,  en  las  cuales 
no  se  cuenta  un  espacio  de  6.000  1.  c.  que  tal  vez  se  disputará  con 
el  tiempo  á  las  naciones  limítrofes.  Según  estos  datos  corresponden 
26,5  á  cada  legua  cuadrada,  que  son  menos  de  tres  individuos  ó 
2.9  por  milla.  Considérese  ahora  que  la  Inglaterra  tiene  257  habi- 
tantes por  cada  milla  cuadrada,  la  Francia  208,  el  grande  impe- 
rio de  Rusia  57,  y  se  formará  idea  de  la  población  de  Venezuela. 
Ni  el  África  misma  tiene  tanta  desproporción  entre  sus  habitantes  y 
su  territorio,  pues  Trípoli  desierto  cuenta  5,2  por  cada  milla  cua- 
drada. La  América  toda  tiene  4 .258.444  U  c.  y  en  ellas  una  pobla* 


N 


\ 


cio«  de  S9  mStones ;  demafien  que  tocan  á  cada  HiiUa  caadrada 
55  indiTidüos  de  difere&tes  razas,  segan  el  resunen  aiguenle. 

PMacum  de  la  América  ^  general,  sacada  de  la  Geografía 

^  de  Balbi 

Blancos  europeos  ó  descendientes  de  europeos  esta- 
blecidos en  América •  44.600.000 

Indios  americanos  indígenas 40.000.000 

Negros  ó  africanos  sin  mezcla,  esclavos  y  libres.  7.400.000 
Razas  mezcladas  de  negros,  blancos,  indios,  mu- 
latos, mestizos  y  zambos  y  mezcla  de  mezcla.    •    .  7.000.000 

TotaL     .     •     59.000.0(N) 


ETMOG  RAFIA. 

Á  pesar  de  sa  pequeña  pc^acion,  Venezuela  es  una  de  las  par- 
tes que  frecen  nuiyor  aúmero  de  puebles  dHérentes  que  hablan 
distintos  idioflMS. 

Según  el  apreciidb4e  Atlas  Etnográíko  de  Balbl  (del  cual  nos  ser- 
vídéoi  para  la  dasücacíon  de  tos  pueblos  según  sus  lenguas )  se 
haUan  en  toda  la  Amériea  458  lenguas  y  de  ellas  resultan  mas  de 
2.000  dialectos  en  mía  población  de  40  millones  de  indios.  Hum- 
boldt  calculó  que  antes  de  la  revolneioo  babia  en  Venezuela 
4  20.000  iadios  de  raza  pura,  y  como  á  este  mimero  corresponde- 
ría, según  los  dates  amsríores,  seis  lenguas  y  24  dialectos,  resulta 
comprobado  nuestro  aserto,  pues  en  realidad  se  hablaban  44  idio- 
mas, de  cuyas  variadenes  y  combinaciones  resultaban  450  dialee- 
tos.  Otra  cosa  notable  en  América,  y  sobre  todo  en  Venezuela,  es 
que  las  razas  indígenas  forman  apenas  una  coarta  parte  de  la  po- 
blación total  del  IVueye-M undo  y  que  esta  proporción  baja  todaríá 
en  la  antigua  capitanía  general  de  €arácas  á  una  sesta  parte,  según 
lo  estimó  el  Sr.  Humboldt  en  la  época  enunciada. 

Procuraremos  hacer  la  cla^cadon  de  los  diferentes  pueblos  que 
fueron  hallados  en  Venezuela  según  sus  lenguas  respectivas. 

La  familia  Car^e-^Tamañaco,  asi  llamada  del  nombre  de  esas 
dos  naciones,  comprende  las  lenguas  de  las  tr!bus  siguientes. 

Caribe.  Hñcion  mui  numerosa  en  otros  tiempos,  cuando  por  su 
audaiia,  porsns  empresas  gu^reras,  por  su  espíritu  mercantil  ejer- 
cía una  grande  influencia  sobre  el  Tasto  pats  que  se  estíende  desde 


f 


el  9émdဠ iiasCa  las  AátiÜM.  DomioalMi  sobrii  todo  el  ¿«no  dtl 
baijo  Orinoco  y  oéupaba  todas  las  [xeqaei&as  Antillas.  Los  Caribes 
del  ceiitiaente  so»  los  indios  mas  robnslos  y  ^^  >^toe  que  allt  se 
conocen  y  aonf  ue  «s  otros  tiempos  hicieron  tráfico  dé  esclavos  y 
íuesencnielesy  feroiesen  sus  incursiones,  no  eran,  sin  embargo^ 
antropófa^  como  sus  hermanos  ^e  habitaban  his  pequeias  An- 
tillas, en  quienes  esta  costumbre  era  tan  común,  qué  con  alusioa 
á  ella  se  hicieron  sinónimos  los  nombres  de  CanibaleSy  Caribes  y 
antropófetffos. 

Los  Ttiapocas  y  Cuneguaras  que  habitaban  las  llanuras  entre 
Caripe  y  Maloríií,  se  cree  que  hablaron  dialectos  de  la  lengaa  ca- 
ribe, lo  mismo  que  los  Yaos  de  la  Trinidad,  los  Guachiris  y  los 
GnariveSj  tribus  todas  en  el  día  confundidas  con  la  población. 
Homboldt  piensa  que  los  PurugotoSy  Avárigotos  HiripiripaSy 
pueblos  que  antiguamente  ocupaban  el  país  que  estuvo  tan  largo 
tiempo  bajo  la  dominación  caribe,  podrían  ser  tribus  perlenecíen-* 
tesa  esta  hermosa  raza. 

En  el  era  los  restos  de  ella  están  reducidos  á  las  riberas  del  bajo 
Orinoco-,  y  sobre  todoá  la  provincia  de  Barcelena.  Loshaí  tambiea 
que  conservan  su  independencia,  como  los  Vayamaras,  en  las  e^^ 
bezas  del  rio  Paragua,  y  cuyo  dialecto  probablemente  es  caribe; 
los  Arecunas ,  cerca  de  las  cabezas  del  Caroni  y  los  que  ocupan  las 
orillas  del  Goyunt  y  sus  tributarios,  que  según  Humboldf,  parecen 
también  restos  de  aquella  raza. 

La  antigua  residencia  de  los  Caribes  era  en  las  cabezera»  del  Ca- 
roni y  sobre  el  rio  Caris,  en  las  llanuras  de  Barcelona.  Los  JUria^ 
parís  eran  de  rara  caribe.  Los  Chaimas ,  nación  numerosa,  ocu- 
paba las  montanas  del  Cocoílar  y  del  Guácharo  y  las  riberas  del 
Guarapiche,  del  Areo  y  del  Caripe,  en  la  provincia  de  Cumaná.  9a 
lengua  tiene  una  grande  semejanza  con  la  tamanaca.  Los  pocos 
restos  que  se  encuentran  de  esia  raza  están  ya  reducidos  y  la  mayor 
parte  se  ha  mezclado  con  la  masa  de  la  población,  conservándose 
apenas  en  algunos  pueblos  algo  de  sus  facciones  primitivas. 

Los  Cumanagotos ,  nación  muí  numerosa  que  habitaba  las  Ha» 
nuras  de  Barcelona ,  cuya  lengua  era  también  hablada  por  los  Pí- 
ritnsy  Cocheimas,  Chaeopatasj  Tapncuares,  Es  mu4  probable 
que  el  idioma  de  estos  últimos  reconociese  eT  mismo  origen  de  la 
lengua  cumanagota ,  mui  rehcionáda  con  la  tamanaca.  Todos  esta 
pueblen  están  hot  confundidos  con  h  población. 


—  2«  — 


1 


Los  Palenques  y  Chiarives  vivían  cerca  del  Uitare  en  la  moB* 
taüa  qne  aun  Jleva  so  nombre,  en  la  provincia  de  Caracas.  Estas 
dos  lenguas  así  como  la  cumanagota  y  la  de  los  Cocbaimas ,  según 
Humboldt  están  entre  la  (amanaca  y  la  caribe,  aproximándose  mas 
á  la  primera.  No  se  encuentran  boi  individuos  de  aquellas  razas  en 
su  estado  primitivo  y  sino  mezclados  con  la  población  criolla,  y  solo 
una  que  otra  familia  conserva  sus  primeras  facciones. 

Los  Pariagotos  habitaban  en  la  península  de  Paria.  Su  lengua 
parece  un  medio  entre  la  lamanaca  y  la  caribe  :  están  confundidos 
con  los  demás  babítantes. 

Los  Tamanacos,  nación  en  otro  tiempo  mui  poderosa,  está  boi 
enteramente  destruida  :  algunos  restos  de  ella  se  hallan  mezclados 
con  los  Panaresy  Ojés,  6  Ejes,  Ayanos^  Guaiquires  y  Parecas  que 
viven  en  las  cabezeras  del  ^chivero  y  el  Suapure.  Unos  pocos  Guai- 
quíres  se  encuentran  en  S. Fernando  de  Cachicamo,  reducidos  á 
poblado  y  con  bastante  mezcla. 

Los  Vara-MucuruSy  los  Varacas ,  Pascibis,  los  Paireres^ 
Acherecotis,  Avaricotis  que  vivían  sobre  el  Cuchivero  han  desa- 
parecido, lo  mismo  que  los  Güirigúiripas  j  Vochearis  que  babi* 
taban  á  las  orillas  del  Caura,  no  existen  y  solo  algunos  restos  de  las 
naciones  estingtt¡dasdelosi4r¿9Uii5,  Pariagotos,  Güirigüerípasj 
Paudacotos  viven  reducidos  en  los  pueblos  del  cantón  de  Angos- 
tura, Todos  tenían  y  los  existentes  tienen  un  idioma  poco  mas  ó 
menos  relacionado  con  la  lengua  tamanaca.  Esta  se  hablaba  en  tres 
dialectos  principales  :  el  malano  pnli^p  y  estendido,  el  carataima 
y  el  cuchivero. 

Sobre  las  riberas  del  Caura  hai  restos  de  los  Arinacotos  y  tribus- 
de  Arimacotos  y  Cudupinapos ,  cuya  habla  es  una  mezcla  de  ca- 
ribe y  tamanaco. 

Los  Guáyanos  habitaban  entre  Angostura ,  Yuruari  y  la  sierra 
Imataca ,  precisamente  en  donde  se  fundaron  las  misiones  de  los 
capuchinos  catalanes  llamada?  del  Caroní.  Son  los  que  han  dado  el 
nombre  á  la  Guayana.  Ellos  con  los  Caribes,  Guaicas,  Aruacas, 
Barinagotos  y  Arinagotos  forman  actualmente  la  población  del  can- 
tón Upata ,  ya  algo  mezclada  con  los  criollos  que  los  han  visitado 
y  que  habitan  entre  ellos ;  pero  no  tanto  que  no  queden  general- 
mente con  sus  primitivas  facciones. 

Los  Guárannos ,  casi  todos  independientes ,  viven  en  el  delta 
del  Orinoco  y  aun  sobre  los  rios  que  entran  al  Océano ,  bajando  de 


/ 


^  —  if  9  — 

la  sierra  Imataca.  £^  nación  que  se  comp(me  toda  de  marmoros 
y  que  vive  sobre  árboles,  traGca  con  los  pueblos  inmediatos  y  la 
Isla  de  la  Trinidad.  Muchos  de  ellos  ban  salido  de  sus  selvas  y  ce^ 
nagales  y  están  reunidos  en  varios  pueblos  def  cantón  de  Piaeoa 
en  Guayana.  También  los  hai  en  los  canos  de  la  provincia  ide  Cu- 
maná. 

Los  Guaiqveries  de  la  isla  de  Margarita  y  de  Gumaná  hablaban 
un  dialecto  de  los  Guaraunos;  pero  en  el  dia  están  mezclados  to- 
dos con  la  población  y  aun  han  perdido  enteramente  su  antigua 
lengua. 

Los  Aruacas  que  viven  sobre  el  A  toparan  y  el  Mazaruni  es  una 
nación  feroz  y  guerrera  que  habitaba  las  pequeñas  AiHillas  antes  de 
los  Garibes  y  que  conserva  todarvia  su  ind^endencia.  Algunos  que 
es(aban  en  la  provincia  de  Cumaná  ya  se  encuentran  confundidos 
en  Ja  masa  de  la  población. 

Los  Arecunas  i  que  viven  cerca  de  las  cabezeras  del  Garoní, 
tienen  uu  dialecto  al  parecer  de  la  lengua  de  los  Aruacas.  Losiáca* 
vai  que  están  sobre  los  ríos  Sibaroni  y  Pulavo  hablan  un  idioma  pa- 
recido al  de  aquellos  y  mui  verosímilmente  de  origen  caribe. 

Los  Gandules  que  habitaban  las  costas  de  la  provincia  de  Ga- 
rácas  eran  de  la  familia  Garibe-Tamaco. 

Los  Caracas  j  Teques,  TaramaynaSy  Chagaragotos  ^  Merego^ 
tosj  Tarmasy  Mariches  y  Arbacosy  naciones  todas  populosas, 
bárbaras  y  guerreras  vivian  en  el  pais  que  fertilizan  los  ríos  Tui  y 
Guaira  Hoi  están  destruidos  en^rte,  y  en  parte  confundidas  con 
la  población.  Aunque  se  baya  perdido  enteramente  la  lengua  que 
hablaban  aquellas  tribus  numerosas,  se  puede  inferir  de  una  cir- 
cunstancia fácil  de  observar  que  era  un  dialecto  de  la  caribe,  y  es 
que  la  sílaba  gua  entra  en  la  composición  de  casi  todos  los  nom- 
bres que  se  conservan  de  ríos ,  sitios,  fruías  y  aun  de  muchos  in- 
dios en  todo  el  territorio  que  está  desde  la  boca  del  Tui  hasta  las 
sierras  de  Nirgua  y  Barquisimeto  y  el  rio  de  Guanaro.  Gorrobórase 
esta  idea  con  la  inspeccion.de  varios  cráneos  hallados  en  los  valles 
de  la  serranía ,  en  los  cuales  el  ilustrado  profesor  de  medicina , 
D'.  José  María  Vargas ,  ha  creido  reconocer  Iqs  caracteres  de  la  raza 
caribe. 

Hablaban  una  lengua  común  con  la  de  los  Gumanagotos  los  Tu- 
musas  y  Quiriquires^  que  vivian  en  los  valles  de  Ghupaquire  y 
Gúpira.  Se  han  encontrado  no  hace  muchos  aiíos  algunas  familias 


\ 


eÉ  los  t>osques  que  cobren  la  serrai>ia  entre  Gotera  y  la  montaSa  de 
TaiDaivaoo.  Los  restos  de  estas  tribus  se  han  mezclado  con  fa  po- 
bladon. 

\lvian  en  los  valles  de  Aragna ,  lago  de  Valencia  y  sns  iomedva- 
ciernes  los  Taeariguas ,  Archas ,  Meregotoe ,  Ajaguas  y  Muca* 
rias,  Sa  lengua  debe  haber  sido  la  misma  que  hablaban  los  indios 
de  Caracas,  y  como  e>(os ,  la  han  olvidado.  A  pesar  de  estar  ente- 
ranemente  mesclados  con  la  población  de  aquellos  Talles ,  muchos 
conservan  unas  facciones  indígenas ,  algún  tanto  modificadas,  pero 
fáciles  de  conocer  á  primera  vista. 

Entre  el  Oritaa)  y  los  Tisnados,  en  las  llanuras  de  las  provin- 
cias de  Caracas  f  Carabobo  vivían  los  AmmbñS^  Guarióos^  Chi- 
ripas j  Güires  y  Aiapaimes :  han  desaparecido  todos  ellos  por  ha- 
berse meidado  oon  la  población  y  solo  uno  que  otro  individuo 
tiene  facciones  de  la  raza  primitiva  :  del  mismo  modo  está  perdida 
su  lengua  y  no  se  sabe  qué  dialecto  hablaban  ;  aunque  es  mui  pro- 
bable que  fuese  de  la  gran  familia  Tamanaco ,  pues  de  estos  habia 
en  el  alto  Llano  en  donde  conserva  su  nombre  una  estensa  montaña. 
También  los  halna  en  el  Baúl. 

Los  Curaguas ,  Amaybos  y  Baranem  vivían  sobre  la  Portugue- 
sa y  han  dejado  solamente  algunos  restos  confundidos  con  la  pobla-» 
clon,  que  nada  sabe»  de  su  lengua  primitiva.  Se  encuentran  en  Ca- 
maguan  y  el  Baúl  y  es  probable  que  liablasen  un, dialecto  de  los 
Cunagnaros,  bermanos  de  los  de  Maturin  que  vivian  sobre  el  rio 
BoeoBÓ  y  cuya  lengua  era  un  dialectcfde  la  curibe ;  lo  mismo  que  la 
de  los  Caiquetias  y  Atisaeuymm  que  vivían  sobre  et  Apure  y  cuyas 
rasas  estáa  enteramente  mezcladas  con  la  población. 

los  Guabaribos ,  saeíon  de  homfjres  belicosos  y  casi  blancos,  á 
quienes  asi  com»  á  los  Guaicas  ba  dado  renombre  la  actividad  del 
Cítrare  con  que  envenenan  sus  flecbas.  Habitan  eerea  de  las  cab^- 
zeras  del  Orinoco  y  en  el  dia  están  tnui  maltratados  por  los  Maqui* 
ritares  :  tienen  una  l««gtta  distinta  de  las  anteriores. 

Los  Qniriseamm»  ó  Ririshanas  son  vecinos  de  los  anteriores  y 
doDúnan  en  la  sierra  Parima  entre  las  eabezeras  del  Ocamo  y  del 
Oiinoco :  son  lérozes^  y  parecen  de  la  misma  famüra  de  los  Guaba- 
ribos. 

ios  Guaicas  en  ^to  tiempo  eran  un»  de  las  naciones  que  como 
loa  Guáyanos  y  Caribes  estaban  reducidos  por  los  uHsioneros  del 
Carooi.  Aun  bai  muchos  restos  viviendo  en  el  nmmo  sitio  dooíe 


/ 


— »l  ^ 

estaban  las  aásicmesy  miéniras  qoc  en  los  rios  tribiilarios  det  Gu- 
yuBt  eiisten  aon;  independientes  algunas  tribus  ferozeay  guerreras 
que  son  temidas  por  los  mismos  Caribes  del  Esequíbo.  Parece  que 
los  Guateen  pequeños  y  blanco»  que  vif  en  cerca  de  ios  Ouaharibo» 
y  snbre  el  Ocamo,  Mataeona  y  Marictii  baMan  una  lengua  seme- 
jante á  la  de  los  Guabaríbos. 

Los  Gncthibos ^  nación  numerosa,  nómade,  sucia  y  feroz  que 
Yive  errante  a  lo  largo  del  Meta  y  enlre  el  Orinoco  y  el  Vichada. 
Estos  indios  impiden  á  los  viajeros  dormir  en  tierra  en  las  riberas 
del  Meta  y  del  Orinoco. 

Los  Chiricoas  que  habitan  en  las  sabanas  del  Apure  y  también 
entre  el  Meta  y  el  Vichada  hablan  un  dialecto  de  la  lengua  de  los 
Guabtbos. 

Los  Otmnaeo$ ,  naeion  miserable,  feroz,  sucia  y  de  las  mas  em- 
brutecidas, presenta  el  fenómeno  Osiológico  de  comer  todos  los  días 
y  durante  muchos  meses  cantidad  considerable  de  una*  greda  javo- 
nosa  que  ellos  llaman  pof^,  sin  que  su  salud  se  altere.  Los  pocos 
que  bai  reducidos  á  vivir  en  poblado  ,  ya  no  usan  la  greda ,  pero 
es  mui  común  en  los  Yaruros  escoger  una  satítrosa^u  que  suelen 
lamer  los  ganados. 

Los  Chtamas,  nadon  tan  sucia,  estúpida  y  vagabunda  como  la 
Otomaea.  Entre  el  Apure  y.^  Orinoco  bai  algunos  restos  insigntfi- 
cantes ,  mezclados  de  tal  modo,  que  nq^es  posible  reconocer  en  dios 
el  primer  tipo  de  la  familia  ;  sin  embargo,  siempre  dejan  conocer 
algo  de  su  (erigen  y  de  su  estupidez :  su  lengua  es  un  dialecto  de  la 
Otonoca. 

I>e  los  Guacuaras  no  se  eonocen  en  et  día  sino  algunos  restos 
en  los  pueblos  de  las  sabanas  de  Caracas  cerca  del  Orinoco ;  pero 
mxÁ  modificados  por  su  mezcla  con  los  ^rioilos^  con  quienes  viven  : 
parecen  per teneoer  á  los.  Otomacos. 

■  Los  Y&rur&t  ó  Yoapines^  tribos  indefcndientes  que  viven  de  la 
pesea  y  casa  en  las  sabanas  del  Apure  sobre  el  Sinameo ,  Capana* 
paro  y  el  Orinoco.  En  otro  tiempo  formaban  una  naeion  potente  y 
numerosa  en  las  riberas  del  Apure ,  del  Orinoco,  y  sobre  todo  cérea 
de  Caieara  y  en  la  boca  del  Goárico.  Aetualmeaite  están  reducidos 
á  pocas  familias.  Estos  indios>  eran  lámeses  por  su  deslresa  ed  eazat 
los  jagoafes  y  euyaa  pJM^cs  vendían  á  los  españoles.  Hablan  la  lengua^ 
de  tos  Betoyes. 

La  familia  de  los  Yaruros-Betoyes  que  babitaban  e»  loa  llanos 


252  *- 


\ 


de  Gasanáre  y  del  Apuré  y  cayos  restos  existen  esparcidos,  tenían 
iiua  lengua  peculiar  de  la  que  los  Situfas  y  Airicos  hablaban  un 
dialecto. 

Los  Gyros^  Gayones  Cherecherenes^  Dazaros,  Cucaros^  Amai" 
bo&  ,  Tobaros  y  Atisacaymas ,  que  habitaban  entre  el  Suripá  ,  el 
Apure  y  Portuguesa  han  desaparecido  ó  están  mezclados  con  la 
población  :  algunos  restos  aun  existen  en  Santa  Bárbara  y  otros 
puntos,  y  parece  que  su  lengua  era  la  de  la  nación  Yarura-^Beloy  ó 
un  dialecto  de  elia ;  pero  todas  estas  tribus  están  de  tal  modomez* 
ciadas  en  la  población  de  la  provincia  de  Barípas,  que  no  es  muí 
fácil  reconocer  sus  descendientes. 

Los  Taparitos  hablan  con  una  eslraordinaria  rapidez :  algunas 
de  sus  Iríbus  mui  ferozes  \41rcn  en  la  hoya  del  Gaura ,  en  unas  sa- 
banas cerca  del  Nicare ,  llevando  en  lugar  de  guayucos  ó  faldetas 
una  pequeña  (apara ,  fruto  del  crecencia  cugete»  Su  lengua  parece 
ser  un  dialecto  de  la  Yarura. 

Los  Manitivitanos^  nación  antropófaga,  guerrera  y  feroz,  aliada 
de  los  portugueses ,  habila  las  orillas  de  Rio*Negro.  Hacia  fines  del 
siglo  XYiii ,  bajo«u  jefe  Gucui ,  los  Manitivitanos  dividían  con  los 
Marepisanos  la  preponderancia  del  poder  sobre  Rio-Negro ,  y  eran 
los  rivales  de  los  Guaipunabis  sobre  el  alta  Orinoco.  Penetraban 
de  tiempo  en  tiempo  en  este  rio  para  cagar  hombres  que  bacian 
esclavos  y  vendían  á  los  portugueses  ó  mataban  para  servirse  de  su 
carne  como  alimento.  En  él  día  hai  pocos  de  esta  nación  en  las  mi« 
siones  :  se  les  llama  Maravitanos  y  son  los  mas  inteligentes  de  todos 
los  indios  :  van  ya  vestidos  como  los  criollos  ,  conservando  sin  em- 
bargo su  lengua  y  hablando  la  mayor  parte  de  ellos  la  espa- 
ñola. 

Los  Marepisanos,  vecinos  y  rivales  de  los  Manitivitanos,  á  los 
cuales  bajo  sus  jefes  guerreros  Imú  y  Gajamú  disputaron  cerca  de 
la  mitad  del  siglo  xviii  la  superioridad  política  sobre  las  pequeñas 
naciones  independientes  de  los  portugueses  esparcidas  sobre  Rio- 
IVegro.  Ya  no  existen  Marepisanos  en  la  parte  de  Rio-Negro  perte- 
neciente á  Venezuela ;  pero  sí  se  encuentran  en  la  parte  del  Brasil. 

Los  Cheravichehefias  ^  que  se  dice  hablaban  la  misma  lengua  y 
Yivian  sobre  el  Guainía ,  han  desaparecido. 

Los  Barias^  nación  numerosa  de  la  Guayana  portuguesa.  Hai 
algunas  familias  de  ellos  en  los  pueblos  del  cantoo  Rio-Negro^  mui 
dóciles  y  dados  á  la  agricultura. 


; 


—  255  — 


Los  BanibaSj  tríbn  de  la  Guayana  portuguesa^  habitan  en  los 
pueblos  del  Casiquiare.  Gustan  de  vestir  bien. 

Los  Vaupes  viven  sobre  el  ücayari ,  tributario  del  Rio-Negro  : 
son  aliados  y  amigos  de  los  indios  Ucanavis.  Estos ,  los  Azanenes, 
Macuenes  y  Manivas,  que  viven  sobre  los  rios  tributarios  del 
Guatnía,  hablan  una  misma  lengaa  con  diferentes  dialectos  perte- 
necientes ai  parecer  á  los  de  tos  Manafivilanosy  Marepisanos. 

La  familia  Saliva  ^  nación  agricultora ,  en  otros  tiempos  mui 
poderosa  y  estendida  y  todavía  mui  numerosa.  Su  antigua  morada 
parece  haber  sido  en  las  orillas  del  Vichada ,  Guaviare  y  entre  el 
Meta  y  el  Paute.  Los  Sáliws  gustan  mucho  de  la  música.  Desde 
tiempos  mui  remotos  se  sirven  de  trompetas  de  tierra  cocida ,  de 
cuatro  ó  cinco  pies  de  largo  y  con  muchas  partes  gruesas  y  angos- 
tas que  se  comunican  entre  sí  por  medio  de  pequeños  conductos. 
Estas  trompetas  dan  un  sonido  mui  lúgubre.  En  el  día  viven 
estos  indios  por  el  Meta  ¡  en  la  prosincia  de  Gasanare,  territorio  de 
la  Noeva  Granada. 

Los  Atures ,  ración  guerrera  y  poderosa  ya  casi  estinguida,  pues 
hace  medio  siglo  que  no  se  le  conoce  sino  por  los  sepulcros  de  la 
caverna  de  Atanrlpe  ,  en  donde  se  conservan  los  esqueletos  en  ma* 
pires,  esi)eclede  cestas,  y  en  vasos  de  tierra  pintados  con  crte. 
Iguales  sepulcros  bai  en  el  cerro  de  Perepereme. 

Los  Qftaqíias  ó  Mapoyes  viven  sobre  el  Orinoco,  entre  el  es- 
trecho de  Barraguan  y  el  raudal  d#^nta  Borja.  Son  de  la  misma 
fáraiiia  que  los  anteriores. 

Los  Macos  y  Piaroas,  nación  numerosa ,  agricuUora  y  de  cos- 
tumbres dulces  que  vive  independiente  entre  el  Sipapo,  el  Cuchi- 
vero  y  el  Orinoco.  Sneten  traliear  con  los  criollos  y  son  aseados  en 
sus  habitaciones.  Algunas  tiitjus  de  Macos  viven  eii  las  orillas  del 
Ventuari  y  del  Padamo. 

Los  Guainares  ó  Guiñaos  de  las  cabezeras  del  Púdamo ;  los 
Ma^itsi  ,  Maióngcong  y  Quevacu  que  habitan  las  cabezeras  del 
Yentoari  y  las  orillas  del  Merevarí;  hablan  la  misma  lengua  ó  dia- 
lecto de  los  anteriores. 

La  familia  Can^erc-^Maipure  ^  nombre  compuesto  de  dos  na- 
ciones. 

Los  CavePe  ó  Cabres,  enotro  tiempo  numerosos,  potentes  y  guer- 

fepos,  diipiitaron  á  los  Caribes  el  domino  del  bajo  Orinoco.  Después 

•  lié  lií  §r«n  derrota  sufridji  por  aquéllos  antrop¿fagos  conducidos 


—  %u  — 


\ 


por  $a  jde  Tep ,  6B  la  Boca  4el  Infierno,  pwioeaa  randlil  Uamado 
antiguamente  de  CanaiseUi ,  <|aedanHi  tan  destruidos  que  en  ade- 
lante no  se  habló  oms  de  ellos.  Hdí  sin  embargo  ajguoas  faunilias 
que  yiven  en  los  pneblos  de  Rio-Negro.  Usan  vestidos  f  se  dedican 
á  la  agrícnltura  y  á  la  construcción  de  erajMrcaciones, 

Los  Guaipimabis  eon  de  la  misma  íamilia  :  nacían  anfropóliaga 
aunque  la  mas  culta  de  todas  las  que  viven  sobre  el  alto  Orinoco. 
Estos  indios  detuvieron  los  progresos  de  los  Caribes  en  sus  regiones 
¿hicieron  sobre  el  Guaieía  una  guerra  eslenninadora  á  los  Manití- 
vitanos  sus  rivales.  Los  Guaiponabis,  originarios  de  las  riberas  del 
Inirida ,  conducidos  por  su  iqíolo  4  jefe  Macapú  y  por  su  sucesor 
Cuserú ,  ejercieron  bada  mediados  del  siglo  xviii  k  superioridad 
sobre  todos  los  pueblos  del  alto  Orinoco.  Crucero ,  otro  jefe  de  los 
Guaipuoabis,  abaiidonó  el  Iníf  ida  y  con  su  horda  f«é  á  fijarse  detras 
de  las  moo  tañas  del  Sipapo. 

Los  Etenamos.  íerozes  que  habitan  entre  el  Mariate  y  Gamaoi 
son  descendientes  de  la  horda  de  Crucero  y  se  hacen  respetar  de  los 
Ifaquiritares,  que  no  se  atreven  áaiacarlos  en  sus  regiones  defendi- 
das de  raudales  y  peñascos ,  en  donde  saben  apostarse  ventajoea- 
mente  para  defenderse.  Cuserú ,  amigo  de  los  espaikrtes,  se  esta- 
bleció con  los  suyos  en  S»  Fernando  de  Atabapo ,  en  la  época  de  la 
espedicion  de  Solano,  y  de  reí  que  era,  pasó  a  akalde  de  aquel 
pueblo.  Sobre  el  inirida  esiáo  los  restes  de  los  Guaipunabis.;  pero 
ya  no  son  antropófegos  :  n^antieoen  tráOco.oon  los  babítanles.  de 
S.  Fernando  y  se  pueden  pasar  sus  raudales,  por  no  estar  ya  defen- 
didos como  en  tiempo  de  los  Caribes^ 

Parenes^  pueblo  antropólégo  que  Im>  debe  confudifse  con  los 
Parecas  ó  Paravenes  del  rio  Caura.  La  leii§«a  de  los  Pereaes,  es  un 
dialecto  de  la  maipure :  actualoieQte  nis  se  sabe  su  mocatkó  ya  no 
existen  sobre  el  territorio  de  Venezuela. 

Los  Maeipiuresp  nadon.  del  alto  Orínoco^  en  otvo  tiempo,  fuerte  y 
numerosa,  bol  casi  estinguida.  Los  Avaaos^  Gañeres,  PaveriuBs, 
Guaipunabis  y  Chii:qpa^  np  bable^n.^ino  dialectos  de  bkdgiia  de 
los Maipures ,  mas  dulce  que  el  idioma  ayanoi.  Dos  fandüasno mas 
existen  de  to4^e$ta;ra^|.yestón  mezeladas.  LosJIonaiioitiíy  Ca^r^ 
Puipitenes ,  dé  la  familia  Maipure ,  han  desaparecido. 

ÍMPanqresqv^  xiv^n en  las i^í^ifis  del  rio  IWo  y  cu  la  ser- 
ranía de  Ci|chivero ,  d^jaM  eoiM^  por  suctaagiia  iqvepert^Moen  á 
la misn^ ifuniUa.  Tienen, W^mi^Bii  f  tiu»  eam-.esláa  ci^^siidÉdae 


/ 


-i-  »5 


46  empaUradas,  preMitaüdo  la  mitrada  da  dlü,  pmdifOifertiiQa- 
doft  y  cubiertos  de  palma. 

A  esta  inisiiia  faisília ,  según  tradácioQes  recogidas  en  ios  misnios 
lagar6$,  pertenecMn  las  ^tribus  ^e  los  EcuanabiSt  Civitenés^ 
Cruainimaneses^  Berjfpaqmnavi^,  Avimam^  Deesanas  y  Amoi- 
sanas ,  las  cuales  TÍvian  entre  el  Casiquiare  y  el  Rio^egro,  y  fae- 
ron  perseguidas  y  destruidas  cnaado  ím  portogaeses  hacjan  el  trá- 
fico de  esclavos  en  aquellas  oomarcas. 

Acka^um ,  nación  nómade  y  estúpida ;  su  lengua  tiene  alguna 
afinidad  con  la  de  los  Maipures.  Están  confoadidoscon  otros  indios 
del  Apure. 

Maquiritares ^  nación  casi  blanca,  numerosa  y  agricultora  que 
vive  sobre  el  Padamo,  Cunucunuma  ^  Ventuari  y  los  tributarios  de 
estos.  Hace  la  guerra  á  los  Guabso^ibos  y  Guaicas  para  robar  indios 
é  indias  pequeñas  que  llevan  á  Demerari  á  vender,  y  mas  comun- 
n^nle  á  los  holandeses ,  en  cambio  de  herramientas  ,  cuentas  de 
vidrio,  espejos  etc.  Humboldt  creyó  encontrar  en  »i  lengua  una 
mezcla  de  Maipurey  Caribe,  Los  Maquiritares  son  en  el  día  los  mas 
preponderantes  ea  el  alto  Orinoco, 

Los  Arivianos ,  Au^rianos  y  Yocuras  hablan  un  dialecto  del 
mismo  idioma. 

Los  Carasicanas  que  vivían  antes  sobre  el  Mariata  y  Manapiare 
están  ahora  en  ^1  Mapichi  y  Yavitari,  donde  siembran  un  poco  de 
algodón.  Son  aliados  de  los  Maquiritares  y  hablan  ua  dialecto  medio 
entre  el  de  estos  y  el  de  los  Macos. 

Los  Uuiscas ,  de  quienes  hubo  alonas  tribus  dependientes  en  el 
territorio  de  Venezuela,  formaban  u^  nación  poderosa  que  habi- 
taba en  las  llanuras  de  Cundinamarca.  Dos  jefes  los  gobernaban 
simultáneamente.  Una  especie  de  ponlíílce  que  residía  en  Iraca  era 
objeto  de  la  veneración  de  los  peregrinos  y  de  ellos  recibía  ricos 
presentes.  El  oCro  era  el  saque  ó  rei ,  y  tenia  su  morí^da  ea  TuQja , 
siendo  tributarios  siuyos  los  zipas  ó  principes  de  Bogotá.  Los  Moscas 
y  los  Muiscas,  adoraban  el  sol  como  los  peruanos,  y  habían  hecho 
tales  progresos  en  la  civilización  ,  que  después  de  ellos,  de  los  Meji- 
canos ,  de  los  Zapotecas  de  los  Queches  y  de  los  Kachigueles,  se  pue- 
den considerar  como  los  mas  cultos  del  Nuevo-Mundo.  ; 

Los  MucmhieSi  YurioagMos  ^  Escagiíeyes  ^  Miyuses%  Triea- 

.  gua$ I  Tápanos f  Mocobos^,  Mucunches,  Uambunes^  Chamei0% 

MmímiU0S,  hmnios^  Aviamos  y  Mm%iftíeSi  que  Juthitfibafi jel 


—  a»e  -- 


\ 


Tpm6  DMiaUiloso  de  Méiída,  hafotaban  dialeetos  de  los  Mttiscas, 
en  cuya  lengua  fallan  los  sonidos  correspondientes  á  las  letras  b , 
d ,  z.  Así  lo  acreditan  todos  los  nombres  indígenas  que  conser- 
van los  lugares  de  la  provincia.  La  principal  masa  de  esta  po~ 
blacion  está  compuesta  de  aquellos  naturales  que  boí  hablan  la 
lengua  española  y  no  la  de  sus  antecesores.  Sus  facciones  son  tan 
semejantes  á  las  de  los  puMtlos  de  la  provincia  de  Tanja ,  que  no  se 
encuentra  diferencia  alguna.  Los  Timotes ,  Tastos ,  Escuques  y 
Cuicas  que  habitaban  la  provincia  de  Trujillo,  estén  en  el  mismo 
caso  que  los  de  Marida  :  su  lengua  debia  tener  un  origen  común  : 
en  el  dia  están  enteramente  mezclados  con  la  masa  de  la  pdl>lacion. 

Los  Goajiros ,  nación  numerosa ,  feroz  y  guerrera  que  en  otros 
tiempos  contaba  mas  de  60,000  individuos,  boi  está  reducida  á  poco 
mas  de  -18,000.  Tienen  relaciones  comerciales  con  los  ingleses  y 
holandeses ,  son  buenos  ginetes*,  crian  ganados  y  cultivan  algunos 
pedazos  de  tía:'ra  :  manejan  perfectamente  el  fusil  y  las  flechas. 
£stds  las  usan  envenenadas  y  la  mayor  parte  de  ellas  con  la  púa  Top- 
inada del  hueso  que  la  raya  tiene  en  la  cola ;  el  veneno  es  tan  mor- 
tífero, que  de  los  que  llegan  á  ser  heridos  pocos  se  salvan  y  el  mayor 
número  muere  en  horribles  contorsiones  y  dolores  agudísimos. 

Los  Cocinas  están  sometidos  á  los  Goajiros  y  hablan  un  dialecto 
de  la  lengua  de  estos ,  lo  misaio  que  los  Sabriles  y  Cucinetas, 

Los  Zaparas,  Aliles,  Tarnanares^  Bobures ^  Toas,  Quiri- 
guiresy  Carates  y  Alcoholados  ,  naciones  y  tribus  que  habitaban 
al  rededor  y  en  las  orillas  del  lago  deMaracaibo  y  rio  Sticui.  Algu- 
nos restos  eiListen  todavía  en  la  laguna  de  Sinamaica ,  Lagunilla  , 
Moporo  y  Ticaporo ,  en  cuyos  lugares  hai  varias  familias  reunidas 
que  viven  en  chozas  elevadas  sobre  horcones  de  vera  en  medio  del 
agua.  De  estos  pueblos  anfibios  se  cuenta  que  para  hacer  la  caza  de 
los  patos  comenzaban  por  ecliar  al  agua  muchas  taparas.  Cuando  las 
aves  acuáticas  se  acostumbraban  á  la  vista  de  aquellas  boyas ,  toma- 
ban los  indios  otras  semejantes  en  que  metían  la  cabeza  después  de 
haber  practicado  dos  agujeros  proporcionados  para  los  ojos.  Con 
este  artificio  se  acercaban  á  los  patos  unas  vezes  á  nado  y  otras  ca- 
minando ;  pero  siempre  con  disimulada  lentMud ,  como  si  la  tapara 
fuese  impelida  por  el  vienlo  ó  la  corriente ,  y  ya  entre  ellos ,  los 
iban  tomando  por  las  pa^ás  y  sumergiéndolos  en  el  agua  para 
asegurarlos  |X)r  la  cabeza  á  una  cuerda  que  tenían  atada  á  la  cin- 
tura. La  lengua  que  aun  conservan  estos  inuNos  parece  un  dii^lecto 


f 


—  257  — 


de  la  g(M¿ir^  ó  de  ^^  origen  común  con  ella.  El  objeto  verdadero  de 
vivir  en  medio  del  agua,  no  es  por  la  insalubridad  del  clima ;  copio 
algunos  han  creido ,  sino  para  librarse  de  la  plaga  de  zancudos  y 
jejenes  que  abundan  mucho  en  los  terrenos  circunvecinos  sobre- 
cargados de  una  lujosa  vegetación. 

Los  Motilones  eran  una  formidable  y  numerosa  nación  que  ha- 
bitaba un  vasta  territorio  sobre  las  fironteras  de  la  provincia  de 
Santa  Marta  y  entre  Salazar  de  las  Palmas  y  Tamalameque  ,  pro- 
bablemente Qd  la  montaña  de  Borotarc,  cerca  de  Ocaña.  Estos  indias 
infestaban  los  caminos  que  conducían  á  los  establecimientos  españo- 
les y  sobre  todo  á  los  situados  en  las  montañas  de  Pamplona  y  Ma- 
rida, é  ínterceplaban  la  navegación  del  río  Zulla.  S.  Faustino  fué 
erigido  en  el  lugar  que  ocupa ,  para  atender  á  la  persecución  de 
estos  indios ,  los  cuales  se  hallan  tan  destruidos  en  el  día^  que  se 
Ignora  la  lengua  que  hablaban.    * 

Los  Jiraj aras j  Nirvas,  Cuibas^  Tocuyos  y  Güeros,  Gayones ^ 
Omocaros  y  Yanaconas  ocupaban  la  actual  provincia  de  Barqui- 
simcto  y  la  serranía  de  Nirgua ,  en  la  que  los  Jirajaras  y  Nirvas 
hicieron  una  vigorosa  resistencia  á  los  españoles  que  allí  se  esta- 
blecieron para  trabajar  las  minas  de  oro  de  Buría.  Las  dos  últimas 
razas  fueron  enteramente  destruidas :  las  otras,  que  prestaron  au- 
silio  á  sus  opresores  así  para  la  conquista  como  para  las  espedí- 
clones  qué  hicieron  en  busca  del  Dorado ,  se  han  mezclado  de  tal 
manera  con  la  población ,  que  apenas  conservan  algunas  facciones 
indígenas.  Es  mui  difícil  graduar  si  hablaban  algún  dialecto  de  los 
Caiquelias  ó  de  los  que  habitaban  los  valles  de  Tacarigua ;  bien  que 
parece  probable  que  pertenecían  parte  á  estos  y  parte  á  aquellos ,  si 
se  atiende  á  los  nombres  indígenas  que  aun  conservan  varios  pa- 
rajes de  aquellas  comarcas. 

Los  Caiquetias  pohhhan  la  mayor  parte  de  la  provincia  de  Coro, 
y  fueron  ellos  los  que  ayudaron  á  los  conquistadores  en  sus  des- 
cubrimientos del  interior :  siempre  fíeles  y  leales ,  sirvieron  á  los 
españoles  como  bestias  de  carga,  llevando  al  hombro  los  bastimen- 
tos a  lejanos  lugares.  Los  Guaranaos  de  la  península  de  Para- 
guana,  los  Topuros  de  la  serranía  y  los  Baraures  hablaban  cierta- 
mente la  misma  lengua,  si  se  atiende  á  las  facciones  generales  de 
aquellos  habitantes  y  á  los  nombres  que  conservan  los  diferentes 
lugares. 

Los  Baraures  (\m  vivían  en  el  cantón  actual  de  Araure,  los  Tu- 

P.   GBOG.  |. 


\ 

—  1238  —  ^ 

fxtriguas^  Duriguas  7  Tucariguas  que  habttat^an  el  pate  entre  é! 
Cdjede  y  la  Portuguesa  ^  debían  hablar  lá  misüía  lengua  de  los  de 
la  provincia  de  Barquísímeto,  á  jcausa  de  ta  identidad  de  nombren 
que  se  conservan  en  muchísimos  parajes. 

JKACIOttES   eSXRANJEAASk 

Atraídos  por  la  grande  utilidad  que  sacaban  de  )o^  rescates  y  de 
la  pesca  de  las  perlas  ^  fundaron  los  españoles  en  líil^Ia  de  Cnba~ 
gua  una  ciudad  con  el  nombre  de  Nueva-Cádiz.  Al  principio  pros- 
peró tanto  la  colonia,  que  en  4509  sacaba  de  allí  el  tesoro  real 
45.000  ducados  por  solo  el  quinto  que  correspondía  al  erario. 
Una  lei  de  \  505  permitía  hacer  esdaros  á  los  indios  Caribes ,  bajo 
pretesto  de  que  eran  antropófagos.  Desde  entonces  todo  el  que  pudo 
armar  un  buque  se  hizo  pirata  para  saltear  Caribes ;  y  á  sus  ojos 
todo  indio  fué  Caribe.  Esto  atrajo  gran  concurrenda  a  las  costas  de 
la  Tierra-firme ,  formó  parte  de  las  utilidades  de  los  habitantes  de 
la  Nueva-Cádiz  y  produjo  también  en  45H  otro  establecimiento 
en  las  costas  de  Cumaná.  Mas  tarde  fué  abandonada  la  Nueva-Cá- 
diz ,  cuando  escaseando  las  perlas  y  los  indios ,  no  hubo  nada  que 
sustituirles  en  la  miserable  isla  de  Cubagua,  donde  hasta  el  agua 
dulce  era  preciso  llevar  del  rio  de  Cumaná. 

La  ciudad  de  Coro  fué  fundada  en  4527  y  después  comenzaron 
los  españoles  i  poblar  en  el  interior.  Ya  desde  el  año  citado  de 
4505  se  habían  llevado  á  Santo  Domingo  los  primeros  esclavos  afri- 
canos :  mayor  introducción  de  ellos  se  hizo  en  4  5 !  4 ,  y  en  1 54  7  per- 
mitió Carlos  V  llevar  4.000  de  aquellos  infelízes  para  sustituir  i 
los  indios  en  los  trabajos  del  campo  y  de  las  minas.  De  esta  ma~ 
ñera  j  desde  que  los  españoles  comenzaron  á  establecerse  en  el  con- 
tinente,  llevaron  á  él  la  raza  africana ,  sin  dejar  por  esto  de  hacer 
esclavos  á  los  indios,  gue  habían  nacido  para  la  servidumbre 
según  la  opinión  del  obispo  español  Quevedo.  Permitió  en  4  527  el 
emperador  Carlos  V  que  se  e^lavizase  á  ios  indios  que  resistiesen 
ala  conquista  ;  pero  en  4550  prohibió  esta  iniquidad,  porque  los 
conquistadores  hostilizándolos  y  maltratándolos  hacían  nacer  la 
resistencia  que  les  daba  el  derecho.  Debióse  en  parte  este  acto  de 
Justicia  del  emperador  al  zelo  infatigable  y  piadoso  de  frai  Barto- 
lomé de  las  Casas,  que  consagró  todos  sus  esfuerzos  á  reparar  los 
males  qae  la  codicia  de  sus  compatriotas  hada  á  los  sencillos  indios ; 


F 


«liüMfa  m^tiemM^^ml»»^  y^Aewiu&qte  afüdado  |>or  Jos  reln 
§iM«6ilBJti  anta  itf  Smto  Dao^ga.  Pem  tambíeQ  es  cierto  (¡be 
^  ítkl  «se^vo  lie  Ciésas  ^or  'f«Mi^0er«  ios  amerlNmBos ,  le  Uz» 
ii|jti«l0  eott lo» Mldird^s  <te  África,  pift^s  por  tii»rar i  los  iodios  4e 
sm^potiMades  |^»9iiao  la  coQUouacm  del  traifieo  de  esclavo» 
«MloaySiH^aíidiéQAiafiAalgUH  tíempo^gipr  tí  nuofetieoesipaaoUimé^ 
ie%.4e  Ci^iiéi^.  Junio  ^es  decir  en  este  higar  ^  f  oe  «i  ¿áeo  la  esc^a** 
litada  «s  na  ^^tv  4»al ,  el  earioier  Baturajomnte  huBi^DO  do  lot 
«qfsMM  y.  ta^eoQsliittle  frotoecion  <|iie  éaa  dado  sus  le^es  á  loa 
eMavos^  lian  oiiabBhRÍdo  wmbo  i  aüviar ,^  4rwte  coadicioa* 
:  Eú  d  eebeo  de  ^é^-añea»  desde  fel^rero  de  -1745  hafta  agesto  do 
473^^  m  iiitnodQjertmi»i'ia  aola  j^roYÁaciodeCavécaa  f794  escla- 
lioa. l^'\^  dé&s  aí^níeales  desden  de  iio¥ÍeA)J^e  de  ^.730  ¿A7  do 
obrH  de il^ alcansó  la  ialirodficeiiHi  á  54S6  aCrkmiofi ;  y  para  q«o 
Mójese  ^1  el  em^éeA  6 OO  el  mcaero  de  esolavoe  qm  talcttló  el  h^ 
Bon  de  MftfiíbdMf  >  eFa{)reeis0.ftte,  «n  ego  con  otro^  liiil)leaeQ  en* 
tntdo  en  VeneEiteiA  de  20  á  S2  mil  oftiicaiios»  SegiM  cd  citado  ttmn- 
Mdfe  los  esdafos  ea  tieio|io  de  la  revoluciott  i^aiaqwman  las  ^ 
{Mffijeside  k  fKiUaúoii.  Ddwioos  poea  «ftlcalnr  ^oe  hatía  éfttoiv- 

oéb ..«..«....  ^ «...    62^<MH1 

So  aiii&eiito  progtésño ,  «egvii  las  basas  eatiUecidas  y 
ddbkiferos:27.aiDS^  •  «..».••••«,•,..*    Á^^^Z 

Total 78,652 

6i  odttitjiBoa  qoe  to  peiíte  y  la  guerira  baa  costado  á  Ve- 
afmela  V$y%^  ^noms^^  la  pérdida jM-opordooal  de 
loa  osdami. será  de^  «^.«.^«^^.^t^....    22^44# 


DeUdn  pues  eitetir 56,^92 

Solo  existen. *  .  •  .•  i^,7^ 


^mmé»'tfm*^r'm0mm 


Déficit,  .  •  •  *  •       6,4^9 

Según  se  demuestra,  el  número  df  49,782  siervos  que  bal  en 
toda  Venezuela ,  es  de  poca  importancia  con  respecto  á  la  pobla- 
-á&aif  y^coüo^  f^^iea  M  jpróMUdo  iNigw^osiWieAte  la  introduc- 
«toQ do eaclaivos^  ylaieide44deociiibrede4l$0iia,ffatifi€adoolffa 
é^i9Ai^  doetovaüdoKfateaá  loa  hijos  do  las  esola?ias^  tasiiUa  que 
en  un  espacio  que  so  fiiedo  osoedof  d«  ^íkiiSkm^  h^ibiá  d^dd  de 
4iMriftO9diiiritadeiiVfitt(9ii0k*  *> 


I 

■ 

De  la  introducción  de  las  razas  enropea  y  afrteaiit  y  de  sü  anión 
entre  sí  y  con  la  de  los  indígenas  de  América,  ha  resaltado  poblado 
el  país  de  hombres  blancos,  negros  y  color  de  cobre,  con  todas  las 
tintas  intermedias  que  pueden  ser  efecto  de  la  mésela  de  aquellos 
colores  y  de  stís  diversas  combinaciones.  Así  también  se  inv^staroit 
denominaciones  mui  variadas  para  clasificarlos.  Llamóse  mulata 
al  hijo  de  blanco  y  negro;  mestizo  al  de  blanco  é  indio ;  zambo  ai 
de  indio  y  negro.  Tercerones  y  cuarterones  eran  aquellos  que  se 
acercaban  mas  que  los  mulatos  á  la  raza  europea  y  saltoatrás  á  los< 
que  se  alejaban  de  ella  por  alguna  nueva  mezcla  con  el  co^or  afri- 
cano. Ni  se  limitaron  las  diferencias  á  los  meros  accidentes  de  la 
piel ,  sino  que  de  muchas  combinaciones  resultaron  formas  mejor 
desarolladas,  individuos  mas  vigorosos  y  bellos  que  sus  padres,  y  á 
veses  también  mas  despejados  de  entendimiento  y  mas  capazes  de 
cultivar  con  fruto  las  ciencias  y  las  artes. «  ¿  Por  qué,  dice  Lavayase, 
«  los  individuos  que  nacen  de  un  africano  y  de  un  indio,  tienen  mas 
a  fuerza  física,  mejores  formas,  mas  entendimiento  y  energía  mo- 
«  ral  que  los  negros  6  indios?  ¿Por  qué,  aunque  el  blanco  es  sa« 
<r  perior  en  fuerza  física,  intelectual  y  moral  al  americano  indígena, 
«  son  los  individuos  nacidos  de  la  unión  de  un  blanco  con  una  india 
«  inferiores  en  las  cualidades  físicas  y  mentales  á  los  zambos  ?  ¿  Por 
«  qué  se  distinguen  los  mestizos  en  general  por  su  bella  presencia , 
(jc  por  una  Gsonomía  agradable  y  por  la  dulzura  y  facilidad  de  sus 
c(  disposiciones?  ¿Por  qué  es  el  hijo  de  blanco  y  negra  superior  al 
<(  zambo  en  entendimiento  é  inferior  en  fuerza  física?  ¿En  qué 
«  consiste  que  cuando  esta  variedad  de  color  se  mezcla,  sus  deseen*» 
Q  dientes  son  notables  por  ana  constitución  mas  robusta  y  vigorosa 
a  y  por  una  energía  natural  mayor  que  la  de  los  individuos  naci- 
«  dos  en  el  mismo  clima,  de  padres  de  sangre  europea  ó  africana  sin 
«  mezla?  Los  que  entiendan  la  naturaleza  de  la  mezcla  de  razas,  po- 
li drán  responder  á  estas  cuestiones. » 

RBLIGIOX. 

Desde  que  los  europeos  se  establecieron  en  Venezuela,  casi  tó* 
dos  los  habitantes  de  este  pais  profesan  el  cristianismo,  y  tan  solo 
un  corto  número  de  pequeñas  nacio^^es  de  indígenas  independientes 
ostán  abandonadas  á  sus  estravaganoias  religiosas. 

Las  tribus  indígenas  que  habitan  el  Carooi ,  las  de  los  rios  trübU'» 


f 

torios  dd  Cuyünii'del  Veoitiari,  alio  Orki^eo  y  áei  toírida ,  coBfto 
]b$atttígiios  peE^9 ,  ton  adoradores  de  las  fuerzas  de  la  naturaleza. 
Llamabao  al  buen  principio  Cachimana  :  Manifau  es  el  grande 
espíritu  que  arregla  ks  estacíotíes  y  faforece  las  cosechas.  Al  lado 
deGaetñinaiia  hai  un  mal  principio,  Jolo^KiamOy  menos  poderoso 
^poro'mas  astuto ;  y  sobre  todo ,  mas  activo  que  el  primero^.  En  las 
riberas  del  Orinoco  no  existen  idolus^  como  sucede  entreoirás  tribus 
que  bao  permanecido  Celes  á  los  primeros  cultos  de  la  naturaleza ; 
jpero  el  botuto,  trompeta  sagrada,  llegó  á  ser  un  objeto  de  venera- 
don.  Para  ser  iniciado  en  los  misterios  del  botuto  y  llegar  á  ser 
piache  o  adivino,  era  preciso  tener  costumbres  pura$  y  ser  celiba- 
•tarío.  No  había  mas  que  un  pequeño  número  de  aquellas  trómpelas 
sagradas. 

La  mas  antigua  y  célebre  era  la  de  la  colina  situada  cerca  de  la 
confluenda  del  Tomó  y  del  Guainia  ó  Rio-Negro.  No  éra  permitido 

'  á  las  mujeres  ver  el  instrumento  maraYÜloso,  y  se  les  escluia  de 

-todas  las  ceremonias  del  culto.  Sí  alguna  tenia  la  desgracia  de  ?er 
el  botuto,  le  daban  muerte  sin  piedad.  Humboldt  recogió  estas  par- 
ticularidades de  las  tradiciones  que  se  conservan  entre  los  indios; 
p^o  en  el  día  la  tal  trompeta  sirve  en  los  bailes  de  todos  los  pue- 
blos del  Goainia ,  y  este  instrumento  no  es  otra  cosa  que  un  palo 

-  hueco  de  cuatro  pie»  de  altt  y  de  madera  sonora.  Golpeando  el 
suelo  con  él,  despide  un  sonido  fuerte  y  tétrico  á  la  vez. 

Es  cosa  notable  que  casi  todas  las  tribus  tienen  la  idea  de  un  ser 
supremo  que  lo  gobieriía  todo  por  el  ministerio  de  un  espirilu 
bueno  y  por  el  de  otro  espíritu  malo.  Creen  también  en  la  inmor- 
talidad del  alma ,  suponiendo  que  cuando  muere  un  indio  va  á 
ciertas  lagunas  á  renacer  en  el  vientre  de  una  monstruosa  ser- 
piente. Esta  los  introduce  eii  un  lugar  delicioso  donde  no  se  hace 
mas  que  bailar  y  embriagarse.  Otros  creen  que  el  indio  reposa  en  el 
mismo  campo  que  cúUtvó  durante  su  vida;  pero  todos  están  de^ 
acuerdo  en  que  el  alma  no  puede  estar  fuera  del  cuerpo  sin  comer.. 

•  Losfunemlés  se  hacen  de  diverso^ modos;  ó  bien  se  entierra  el  ca- 
•dáver  con  víveres ,  ó  se  deja  desecar  en  mapires  suspendidos  á  lor 

arboles  ó  én  las  casas  al  humo  y  al  fuego;  mientras  que  en  otras  se 
pone  el  cuerpo  én  el  rio  para  que  salga  comido  por  los  pequeños 

^ipescados  nombrados  caribes ,  y  entonces  sus  huesos  se  ponen  en 
cestas  y  se  cuelgan  en  las  casas.  Otros  enfin  se  entierran  con  perfu- 
mes y  varios  bálsamos/  y  al  cabo  de  ua  ano  se  ^^ü  los  huesos,  que 


éé  les  papi^tes.  Fer»  getter>im0iii»  fariMn  toda  In  «d^h^  te  gtd- 
ttir;  baitor  y  bebw. 

Lo»  babitftfiteis  de  eiertes  iiaci«iie»«iite6dBl  smatteeeriftlia  ée  tai 
«ñas  y  emp iesaii  á  gritar  com^  si  Horasmi'  á  tas  ¡lamflutea  wmaBlm}^ 
i8ta  griterk  cesa  c&motia^pmm  á  de^untar  el  dia.E&a^fnnaateilHilB 
los  piaches  ó  encantador»»  hacen  las  Tases  ámméésá»,  dftías  tieaen 
aditiflos.  Nó^  faltaii  indtas  que  se  represenleii  i  Dtar  en  figam4B 
evlebra  ó  de  sapo;  pero  lomas  ofdiimiita^  asá  osmo  W  ma»  Mlnnd, 
es  reooQOcer  en  el  sol  él  ser  que  dispensa  ¿la:  tüerra  tos  bienes  y  tas 
soales,  la  abnndaneia  dis  la«  GOseGlia»y  la  escases  de  las  UiMrita^. 
Los  eelipses^  de  la  Inna  prodaeen  una  gran  ceastnroaoidn»,  porfoe 
los  creen  una  señal  de  enojo  provocado  por  la  debilidad  ^  lai pecan 
6  ki'  cobardía  d<9  los  indios;  Para  aplacar  el  agtro  tona^i  ka- anuas, 
focan  los  instrumentos  de  gnerpa>y  cortan' ó  arranoaasárbeiesean 
otras  pruebas  de  fuerza  física  y  de  acUTidad  :  las  BUij«res  dan  gmn- 
Éas  vozes  tirando  al  aire  maíz,  yuca  y  otra»  cesas  basta  que»  apad- 
gnada  la  luna  y  pasado  el  eclipse ,  todos  aquellos  estcemos  de  dolor 
.ee  convierten  en  alegría  y  la  escena  se  termina  eon  unbaileu  Entre 
*los  Tamanacos,  refiere  Humbold^  que  se  conserva  la  tradimon  de 
*qne  en  tiempo  de  las  grandes  aguas  iban  skis  padres  en  canoas-para 
libertarse' d6  una<  inundación  que  cnbriaitodaa  las  tieiras^  Enton- 
ces, dicen,  que  lasólas  del  mar  batían  contra  lás-reeafi^le  k'Bnea- 
«nmada.  Esta  idea  no  se  presentaiaisladainente  entre  lo»  Tamanacos, 
sino  que  hace  parte  de  un  «stema  detradieoionesthistóriea»,,onyas 
nociones  se  hallan  esparcidas  entre  los  Maipmtes  de  las  grandes  oa- 
vtaratas,  los- indios  del  rio  Erefalo  que  desagua  en  eLGíittray  entre 
jtodas  las  tribus  del  alto  Orinoco.  CuandOisepregunta  á  los  Tama- 
sacos  cómo  ha  sobneviviéoel  género'humanoá  aquel  suoesoe^Jra- 
^oniinario  ó  edad  del  agua  de-loa  Mesieanos,  raspoBden  «  que- un 
;«  hombre  y  una  mujer  se  salvaren  en>  lo  Mo  de  wl  njsnte  llonado 
>e  Tamanacú,  situado  en  Ií»  orillas  del  Astvterú  (¡boi  Oi»hürero)iy 
if  que  habiendo  arrojado  tras  air  per  encima  de  8u»<»lMBiB.er<^to 
«•  de  la  pahna moriche  [imauritiü )  viéiion» nacer  de^les.hnesost  de 
«  este  fruto  les  hombres  y  lae  mujeDes  q«e  pebtanmide  nue^cr  la 
«  tierra.  »  «  Hé'  aquí,  aiíade  Hnmltoldt,  en  toda  simpliádad,  y 
entre  pueblos  salvajes ,  una  trbdtccioa'  qnn  losígniego»  han  adonuir 
do'  con  todos  los  encantos  de  la  imagaacm. » 
A  algntias  legues^de  la  Enoaramadase  flinra^en  aedieide  la^sa- 


r 

^.    ^^^^^  _^ 

baña  una  peña  llamada  Tnpümereme  ó  Roca*Pintada,  qne  presenta 
figuras  de  anímales  y  pinturas  simbólicas.  Hállanse  gerog1i6cos  se* 
mejantes  debajo  de  la  Encaramada  cerca  de  Caicara,  sobre  el  Ca- 
«qniare  y  eotra  e^  -y  el  Orinoco.  Sé  en^uentrin  á  vezes  estas 
figuras  á  una  altura  considerable  y  sobre  murallas  de  rocas  solo 
accesibles  conandamios  mui  elevados.  Cuando  se  pregunta  á  los  in- 
dígenas de  qué  modo  se  ban  podido  esculpir  aquellas  figuras «  res* 
]K>nden  sooríéndose ,  y  como  contando  un  hecho  que  solo  un  es- 
trasilero  puede  ignorar,  «  que  en  la  época  de  las  grandes  aguas 
« iban  sus  padres  en  canoas  basta  aquellas  alturas. »  Otros  tieneá 
por  tradición^  como  en  el  Casiquiare  y  el  Sipapo,  que  Dios  hizo  en 
ial  cerro  á  los  hombres  ^  en  tal  otro  á  las  mujeres ,  en  algunos  Io$ 
tigres ,  los  monos,  las  culebras,  los  rayos,  las  nubes,  los  truenos. 
Por  cada  uno  de  est^s  cerros  tienen  una  especie  de  respeto  ó  ado- 
ración singular. 

Últimamente ,  diremos  algo  de  los  matrimonios  que  no  tienen 
nada  de  religioso  entre  los  indios :  son  simplemente  fiestas  de  bai- 
le y  embriaguez^  á  la  conclusión  de  las  cuales  el  padre  da  la  hija  al 
novio;  y  este  está  obligado  á  pagar  algo,  sea  en  pescado,  cazeria  ó 
trabajo  al  padre  de  la  esposa ,  la  cual  debe  ciegamente  dar  la  mano 
al  esposo  ó  mas  bien  amo  que  el  padre  le  destina.  Este  no  conserva 
4iutoridad  alguna  sobre  los  vatones  y  sí  una  absoluta  sobre  las  hem^ 
bras.  Se  deben  esceptuar  de  esta  regla  los  Guajiros,  porque  allí  kt 
autoridad  eslá ,  no  en  el  padre  ^  sino  en  los  abuelos  matemos ,  pu«s 
dicen  que  aquel  no  puede  asegurar  que  sean  sus  hijos. 

Algunos  maridos  suelen  cambiar  por  un  determinado  tiempo  sus 
muieres  por  otras;  pero  vuelven  á  tomarlas  al  espirar  el  término^ 
sin  que  haya  enkre  ellos  la  menor  dificultad.  Hai  otras  tribus  como 
hs  caribes  en  donde  el  adulterio  es  castigado  de  muerte  :  los  dos 
adúlteros  son  sacrificados  por  el  pueblo  en  la  plaza  pública.  Gene- 
ralmente ealas  demás  naciones  el  marido  ofendido  toma  su  ven- 
4$anza  sobre  la  mujer  del  ofensor  y  en  todos  casos  la  venganza  es 
igual  á  la  ofensa. 

Por  la  lei  hai  libertad  de  cultos  en  Venezuela,  y  cada  cual  puede 
profesar  públicamente  la  religión  que  mejor  le  parezca.  Sin  em- 
bargo ,  la  masa  general  de  la  poblacipn  es  Católica  ^apostólica  ro- 
mana,  religión  introducida  por  los  conquistadores. 


\ 


—  264  — 


GOBIERNO. 


Cuando  se  descubrió  la  Costa-Firme  se  puede  decir  que  los  es^ 
paSoIcs  encontraron  una  sola  clase  de  gobierno ,  que  era  el  abso- 
luto, aunque  paternal,  de  los  Incas,  Cipas,  reyezuelos  y  Caciques. 
£n  Venezuela  no  habla  sino  repúblicas  con  jefes  á  vezes  electivos  i 
Tezcs  hereditarios.  Algunos  reunidos  formaban  confederaciones ,  y 
por  lo  común ,  la  mayor  parle  ?ivia  bajo  un  gobierno  patriarcal 
cuyos  jefes  no  gozaban  sino  de  una  autoridad  mui  limitada.  Al 
guerrero  más  valiente,  al  cazador  mas  hábil  y  animoso  elegían  estas 
tribus  por  jefe.  Aun  en  el  día  este  espíritu  de  independencia  se 
conserva  en  las  tribus  que  no  están  sujetas  á  los  nuevos  habitadores 7 
y  con. razón  Depous  dice  «  que  el  hombre  qu«  vive  de  la  caza  ó  la 
o  pesca  no  se  cree  feliz  sino  en  el  fondo  de  los  bosques,  sobre  las 
u  costas  del  mar  ó  c^rca  de  los  rios  :  allí  sus  semejantes  no  le  dis- 
o  pntan  las  frutas ,  las  aves  ó  los  pezes  :  su  aislamiento  hace  su  11- 
«  queza.  n 

Los  primeros  conquistadores  fueron  bien  recibidos  en  todas  par* 
tes ;  pero  abusando  de  la  sencillez  de  los  indios,  dieron  lugar  á  guer- 
ras continuas  que  n»od¡Gcaron  su  índole  y  sus  disposiciones  natu- 
rales, sufriendo  tantos  cambiamientos,  que  no  se  conocen  ya  estos 
indios  por  el  mismo  pueblo.  La  mayor  parte  de  ellos,  perdida  su  li- 
bertad, pasaron  á  ser  siervos  de  los  conquistadores.  A  los  mas  es- 
forzados de  estos  se  les  daban  por  premio,  encomiendas,  que  eran 
ciertas  fracciones  de  territorio  conquistado,  cuyos  indios  estaban  so- 
metidos á  pagar  tributo.  La  encomienda  fué  declarada  inalienable  y 
como  unida  á  las  cualidades  personales  del  titulado,  por  diferentes 
leyes  cuya  ejecución  fué  confirmada  por  la  de  ^5  de  abril  de  1629. 
No  podían  alquilar  ni  dar  en  prenda  á  los  indios  que  tenían  bajo 
sus  órdenes,  so  pena  de  perder  su  encomienda.  El  producto  del  tri- 
buto de  los  indios  no  podia  pasar  jamas  de  2.000  pesos  fuertes ;  so 
asignaban  pensiones  sobre  los  demás  según  la  orden  del  rei  de  50 
de  noviembre  de  4568.  En  Gn  ,  las  encomiendas  fueron  dadas  por 
dos  vidas,  es  decir,  pasaban  del  padre  al  hijo;  después  pasaban 
á  la  corona  y  los  indios  venían  á  ser  vasallos  directos  del  reí.  En 
-f  687  cesaron  las  encomiendas ,  quedando  los  indios  sujetos  solo  al 
régimen  de  las  doctrinas,  donde  no  estaban  de  antemano  sometidos 
al  de  las  misiones  que  se  establecieron  en  4656.  En  4751  se  for* 


^  265  — 

mó  la  capitanía  general  de  Caracas  que  comprendía  todo  el  terri- 
torio que  hoí  forma  la  república  de  Venezuela ,  y  estaba  dividida 
en  intendencias,  corregimientos  ó  subdelegaciones,  alcaldías,  en- 
comiendas doctrinas  y  misiones.  El  jefe  era  el  capitán  general^ 
también  gobernador  y  presidente  de  la  audiencia'  real ,  y  dé  todos 
los  tribunales ,  menos  los  de  comercio  y  del  tesoro  público.  Estaba 
igualmente  encargado  de  toda  la  parte  militar  y  de  las  relaciones 
políticas  del  pais.  Duraba  en  el  empleo  7  aSos  y  recibía  9.000  pesos 
por  aüo.  Cada  provini^ia  tenia  un  gobernador  particular  cuyo  ejer- 
cicio duraba  5  años.  Conocía  en  primera  instancia  de  todas  las  cau- 
sas civiles  y  criminales,  y  para  dirigirse  en  los  negocios  contencio- 
sos, tenia  un  jurisconsulto  que  llevaba  el  título  de  asesor,  nombrado 
y  pagado  por  el  rei. 

Vino  por  Gn  la  épooa  de  la  emancipación .  El  4  9  de  abril  de  ^  84  O 
y  el  5  de  julio  de  48M  ,  serán  siempre  memorables  en  la  historia 
del  pais.  Una  nueva  organización  se  le  dio  entonces,  formando  una 
república  federativa  compuesta  de  las  diferentes  provincias  y  paises 
que  se  habia^n  adherido  al  nuevo  orden  de  cosas ;  pero  este  no  duró 
mucho  tiempo.  El  terremoto  de  4812  y  la  invasión  de  Montevcrde 
en  el  mismo  año,  hicieron  sucumbir  la  naciente  república.  Sin  em- 
I)argo,  en  1815  Bolívar  y  Marino  libertaron  el  pais  que  mui  luego 
volvió  á  perder  su  libertad  por  los  esfuerzos  deBóves,  quedando 
sometido  al  antiguo  régimen ,  hasta  que  en  1816  Bolívar  empren- 
dió recuperarlo  con  solo  250  hombres,  y  al  fin  lo  consiguió. 

En  1818,  tomada  la  provincia  de  Guayana,  se  instaló  en  Angos- 
tura el  segundo  congreso  venezolano;  pero  como  1a  mayor  parte 
del  territorio  estaba  ocupado  por  los  beligerantes,  se  puede  decir 
que  el  gobierno  de  los  patriotas  era  puramente  militar.  La  campaña 
de  1819  que  libertó  casi  toda  la  Nueva  Granada,  dio  origen  ala  re- 
pública de  Colombia,  compuesta  de  la  capitanía  general  de  Caracas, 
del  vireioato  de  Santafé  y  de  la  presidencia  de  Quito.  En  1821  se 
proclamó  en  el  congreso  de  Cúcuta  la  nueva  república,  y  á  fines  de 
1825  ya  ni  en  Venezuela  ni  en  el  resto  de  Colombia  existían  sus 
opresores :  la  antigua  capitanía  general  formaba  cuatro  departa- 
mentos de  la  gran  república.  Finalmente  en  1 850  se  disolvió  este 
inmenso  cuerpo  político  y  volvió  á  sus  antiguas  divisiones,  formán- 
dose tres  repúblicas  denominadas  Ecuador,  Nueva  Granada  y  Ve- 
nezuela. 

Esta  última  se  constituyó  definitivamente  en  la  dudad  de  Valen- 


—  2M  — 


\ 


€h  en  d  aikK  d»  -18S0.  Su  gobierno  se  coeapone  de  tres  graadeg  pó- 
deles :  legislativo,  ^ecutivo  YJf^dicial,  y  todos  emanan  directa  é 
uadiredaEieBte  de  la  Yoluotad  del  paebfo» 

£a  cada  pfiiro(|aia » cualquiera  que  sea  so  población ,  se  forma 
la  asamblea  parroquial  cada  dos  años  ^  el  dia  ^'^  de  agosto»  Esta 
asamblea  coya  duración  es  de  ocho  dias,  está  presidida  por  el  jues 
de  la  parroquia  acompañado  de  cuatro  coijuezes.  Allí  van  á  votar 
lo&  yenfiaolaoos  mayores  de  21  anos  y  dueños  de  una  propiedad  raíz 
cuya  renta  anual  sea  do  50. pesos,  ó  tengan  una  profesión,  oGdo  ó 
industiria  útil  que  produzca  -1 00  pesos,  sin  dependencia  de  otro  en 
dase  de  sirviente  doméstico,  o  gozando  de  un  sueldo  anual  de  1 50 
pesos.  £1  sufiragío  eoosiste  en  nombrar  el  número  de  electores  quj^ 
corresponden  á  cada  cantea.  Los  registros  de  los  votos  se  remiten 
seUados  á  la  autoridad  civil  del  cantoQ|  y  esta,  asociada  al  consejo 
muttidpaJl ,  proeede  al  escrutinio  de  todos  los  votos  :  aquellos  que 
resultan  con  mas  número  quedan  nombrados  constitucionalmente 
electores. 

El  dia  V  de  octubre  de  cada  dos  anos  se  reúnen  los  colegios  etee- 
torales  que  duran  ocho  dias.  Para  ser  elector  se  necesita  tener  25 
anos,  ser  dueño  de  una  propiedad  raiz  que  reditúe  200  pesos  anua- 
les^ ejercer  alguna  industria  que  produzca  500  á  gozar  de  400  p^ 
SDs  de  sueldo  ai  a£io.  Los  electores  durao  dos  años,  y  ellos  nombran 
el  presidente  del  estado^  el  vicepresidente,  los  senadores,  los  repre- 
sentantes, los  suplentes  y  los  miembros  de  las  diputaciones  provift- 
Óales*  £1  Bambcamiento  de  ks  dos  primeras  autoridades  se  remite 
ala  cámara  del  senado;  pero  los  otros  quedan  deOnitiVamente 
Bombrados  en  el  colegio  electoral. 

£N''  de  noviembre  de  cada  ano  se  reúnen  las  diputaciones  pro^ 
^lincéales  en  la  capital  de  su  provincia.  Las  sesiones  duran  50  dias 
Y  pueden  pcorogarias  por  40  mas.  Toca  á  ellas  proponer  al  pod^ 
^ccoiivo  la  terna  de  los  gobernadores.;  á  la  corte  suprema  de  jus- 
üda  ks  de  los  magistrados  de  las  cortes  superiores  :  informar  á  la 
cámara  de  represéntenles,  de  las  infracciones  y  abusos  que  se  hayan 
cometido  contra  la  conatitucion  y  leyes  y  vigilar  el  exacto  cumpli- 
süento  de  estas.  Denuncian  al  poder  ejecutivo  ó  á  la  cámara  de  re- 
presentantes los  abusos  y  mala  conducta  del  gobernador  y  demás 
empleados  de  k  provincia.  Presentan  temas  á  los  gobernadores  para 
el  nombramiento  de  jefes  de  cantón  y  para  el  de  los  empleados  de 
la  administración  de  las  rentas  provincialefti'  Hacen  con  propordoa 


f 


tal.  ffai<iy  toüH  dit  ^^im  j  tüBMéft*  Mg|ibtoawÍMfi«Bite»praffi»' 

loque  sea  por  el  biei)  y  alMi4i44artepMm«i».  Lardaftaemtdelis 
<ifiiliiail piwi<<>Éil<D e» de 4 fcnofty se  naiie^w  fiar  stedeada 
4kk  Ha»  oft  diputalii  ewibmfb  per  eate  átndo»» 

M  p^dec  legiskkltve' és. e( €anf(9ttS0* wietaNiV fuaw reaae el, 4ia 
ai^4eeB«mde€aAi'aíbvdí»6eefeMáaé4crediiv«ie%ktfia,  énraaiD 
an  atsMoe»  IMMiaa'  f  fodúteMatfpioMgir  39  aiasiÉ.  fisto  enerpo  m 
.^m^imtétsémdMmtmy  a»>de  y^prayeg^gwÉ^  y  otra  de  msm^ 
iá8r«5«  Se  tate  M  4aa  pofieadtir  pfpTÜMáa  y  da  te  otras,  uno  ptr 
caifa  SdJÜQr-alnías^  ll«ms4  aína  em  asa  InwaMMs ,^D<yváiiiaaa 
]^  mNaA  te^cáamasiaada  doa  aiaa  yp^déando  aec  mtkípám»  11 
eoogreso  Haca  eir  aaeratgiiay  peifitoaioB»  1»  eiascte  és  prasMettle 
y  vicapBaBidaaie*  de  Ix  rápúJbliNi^  y  admite  éM  snsí  iieiitíiiaiaBw  La 
«áaiara>  de  rapresanimitea  ?ei  tas»  aciiaacÍMieft  eea^ra.eata»  das  dias 
iÉBd»iiatie8y  eenára  llia  BMarnteoe  del  coiMejade  estaday  k»  diría 
-eorfer  saprenÉa^.  y  deelai»  n»  Int  6^  no*  ivgar i  lar  íiamiactaa  de*  eanaa, 
aw  pe^weíar  de  las  atetbsciaiiea  prepiaa  de*  lo»  tpíhoiiales  d)e  paaA" 
«ia.;  fia  9ásátv^  del  senado  svataaistar  y  tasei^MD  lo»  iaeoms  mieía- 
éas>  &i  \m  cañara  de  vepreseatántea^  é  ioaeiipairaade  ea  aa  s^ai  la 
eerte avprema,  seateaeíadBfiíiiliTaiiienla.  Gonrasponde  á  la  <áan<a 
de  representantes  yelar  sohvela'ittveral^  de  ka  rentas  nadosaleS; 
aiuniíiar  las: eiieala9>  da  la»  gaafoa  pélriieos-  qae  el  ejaentivaí  debe 
pnaaeptar  attMÉneaie.  Em  «ualeafBKra^  de  lae  do»  cámffl^s  ^  y  solo 
4^propttBri)a.  de  mam  BneBabraa^  pne^n  laüer  00196»  ka  kyes»  y  d»- 
eMUsm,  asepip<ninnd0  ka;  «pie  a8l)aM«$eii  fB^HMlo&  enya-  áiIctaÉsia 
pertMUBeo'á  la  de  Dapree^irtantes.  Toda  lei  debe  ser  discwtídfr  tre9•Te- 
-na<en  eadaicámar»,.  y  sandeBada,  pasa«  ai  <jeeatif¥o»qH»lai  manda 
éamfiíát  é^  hi  objeta!.  EBték  príaMir-Gasa  Imite  fveraa.dlB'leij.ev  el  se- 
fiiiié»T«aÍ!«e  ákt  cámara  qiA  k  peopiBo  pasa  considerar  de  nniew 
al  protesto  y  ka  obffedoDea ,  y  ss  ka  haiUirt' Awdadaa,  maBdaid  ar- 
^ihor  el  pvof«ato.dllaeáiiiaiadeierí§flik,.»j!iicío>de  laa.dea  tei«e- 
raa  partea  ée  loa  atkaaluoi  pvosaitoff,  no  balkre  ftmdadaa  ks  aJbje- 
ekii^  pasaai  eoa^dlas  al  f^oyeeto  á  katra  eámara.  Sk  estoeatyeie 
fnBiadBalaa:ebiaQía&ea  del  cjeavÉiiio,  qiaeéari  el  paoyacta  avefaífa- 
do  ;  pero  si  las  dos  terceras  partes  de  los  miembros  presentes  de  la 
aspÉada  eáfliaaa<  eslMvieMii  de  aa«ento  üm  kr  otaa ,  ei>  q«e  lui  son 
fMiwfcdBaikfcobjeeBMMa  dM  tjfMikiio^  ae  dafoio^é  )»sée:al  pesgealQ 


y 

^ra  qué  lo  mandé  ejecutar  como  leí ,  sin  que  tenga  arUtriopara 
'Oponerse.  Últimainente,  si  pasados  diez  días  fiados  al  ejecolif  o  pnra 
mandar  ejecutar  ana  My  no  la  defolviére  con  ras  objedoues ,  ten** 
drá  fuerza  de  lei  y  sera  proclamada  como  tal. 

El  poder  ejecutivo  está  á  cargo  de  un  magistrado  con  la  deñomn 
nación  áe  presidente  de  ia  república.  Dura  solo  4  aüos  en  sü  des- 
tino y  no  puede  ser  reelegido  siflo  4  años  después.  Tiene  tres  secre- 
tarios que  eKge  él  mismo  y  puede  destituir  cuando  quiera  y  non^ 
t)rar  otros ;  uno  del  interior  yjustieia,  oivoáe  giterra  y  marina^ 
y  otro  de  hacienda  y  relaciones  esUriores.  Por  conducto  de  ellos 
'iM)cn  darse  las  órdenes  del  {w^sidente  ;  son  responsables,  y  sus 
órdenes  no%  obedecen  péT  nmgUDa  autoridad^  si  son  contrarias  á 
la  constitución.*  En  ciertos  casos  arduos  é  importantes  debe  consol- 
'4ar  el  presideoffe  la  opinión  de  un  consejo  compuesto  del  yicepre- 
sidente  de  la  república,  de  un  ministro  de  la  corte  suprema  de  jus- 
ticia designajdo  por  ella  misma,  de  cuatro  consejeros  que  nombra  el 
>  congreso  y  de  ios  tres  secretarios  del  despacho.  Toéa  al  presidente 
.  de  la  república  conservar  la  paz  y  seguridad  del  estado ,  hacer  eje- 
-  catar  las  leyes,  regir  las  fuerzas  de  mar  y  tierra ;  pero  para  mandar- 
las en  persona  necesita  el  consentimiento  del  congreso;  lo  misino  que 
'  para  llamar  la  milicia  al  servicio  ó  para  decretar  la  guerra  á  nom- 
bre de  la  república.  Con  el  voto  consultivo  del  consejo,  puede  con- 
Tocar  estraordíDariamente  el  congreso. 

'  El  poder  judicial  de  la  república  reside  en  la  corte  suprema  de 
justicia  compuesta  de  cinco  juezes,  y  son  atribuciones  suyas  conocer 
en  ciertas  ocasiones  de  las  causas  que  por  responsabilidad  se  for- 
man á  los  secretarios  del  despacho  y  también  de  las  que  tanto  á  es- 
tos como  al  presidente  y  vocales  del  consejo  pueden  seguirse  por 
delitos  comunes.  Decide  en  las  lilis  contenciosas  de  los^plenipoten- 
*  danos  o  enviados  estranjeros,  cuando  lo  permite  el  derecho  púUi- 
<  co  y  con  sujeción  á  los  tratados,  y  en  las  que  por  re^nsabilidad 
se  inicien  á  los  agentes  diplomáticos  de  la  república.  Resuelve  las 
controversias  que  se  originan  de  contratos  celebrados  por  el  ejecu- 
tivo. Oye  los  recursos  de  queja  contra  las  cortes  de  justicia ,  ó  ea 
particular  contra  alguno  de  sus  miembros,  y  le  toca  también  cono- 
cer de  la  nulidad  de  las  sentencias  que  aquellas  pronuncian  en  la 
última  instancia. 

Tal  es  la  estructura  del  gobierno  actual ,  que  por  su  encadena- 
nuieBlo  hace  dimanar  todo  de  la  vohutad  nacional ,  espresada  por 


f 

ellii}De  flíerdciode.los  filfraga9left.iNircoqiiilBíto7  y  dei^t  de|a» 
electores,  diputados  pfomciaks,  rffi^tenUuite&y  aenadore»,  hasta 
los  altos  fuoeicHMints  de  la  re|iabUea«    > 

Si  faola  armooía  y  zurdea  se  ve  m  eate  gobtemo  /no.  $»cede  (I9Í 
^A  los  «le  los  indios  indep^dientes  qtte  aim  ;exis4eii  éu  el  torito^ 
rio.     . 

La  naeioD  3é  los  Guajiros,  qoe  habita  ea  la  península  de  e^i» 
Rombre,  está  dividida  en  varias  tribus  que  llamaa  pareicdidadles , 
y  cada  «na  obedece  las  órdeiMS  do  su  cacique  ó  Jefe.  No  se  sabe  pr^ 
cisameDte  el  número  de  estos,  perosí.que  son  hereditarios,  aunque 
siempre  se  necesita  el  consentimiento  de  los  principales  de  la  tribu 
para  investirle  de  la  autoridad  de  jefekF^^Yiven  entre* ellos,  casi  en 
continua  guerra  por  la  mas  leve  cosa  que  suceda  á^uno  de  su  tribu» 
y  mas  á  menudo  por  causa  de.reses  ó  caballos  qu6  eriau  y  que  entre 
ellos  se.suelen  robar.  Hai  muchos  oupítanes  que  son  los^que  eondu^ 
cen  los  varios  grupos  á  la  guerra,  y  siempre  residen  entre. ellps  con 
sus  ÍMuilias. 

Los  Guárannos ,  que  viven  en  el  delta  del  Orinoco,  estén  maa-r 
dados  per  ^5  capitanes  que  dirigen  su  tribu  como  mejor  les  parece 
siempre  aeonsejándose  con  los  mas  viejos.  Entre  ellos  tienen  una 
especie  de  federación  para  defenderse  recíprocamente  en  ca$o  .4v 
ataique. 

Los  Caribes,  que  viven  sobre  el  Caroní  y  en  las  selvas  del  Cuyuni, 
no  eligen  á  sus  jefes  sino  eo  sus  asambleas  generales  cuando  van  á 
la  guerra.  En  tiempo  de  paz  cada  familia  se  rige  á  su  antojo  y  no 
conoce  otra  supremacía  que  la  de  la  naturaleza.  Tienen  sin  embarr 
go  capitanes  que  son  los  prJDctpaks  de  cada  horda,  y  son  los  qu^ 
los  llevan  á  la  guerra  bajo  la  dirección  del  jefe  que  se  reservan 
nombrar  ;^ero  no  se  dejan  dirigir  en  nada  por  estos  capitanes. 

Los  Otomacos  tienen  jefes  á  quienes  obedecen  en  tiempo  de  paz  y 
de  guerra,  y  son  hereditarios.  El  cacique  ó  jefe  destina  diariamente 
cierto  número  de  sus  vasallos  para  que  vayan  al  dia  siguiente  á 
cazar  ó  pescar  para  toda  la  tribu,  y  así  sucesivamente  por  turno. 
Todo  lo  que  seJogra  en  caxa  ó  pesca  se.  deposita  en  la  .pucrla  del 
cacique,  el  cual  lo  distribuye  dando  á  cada  cabeza  de  familia  la  can- 
tidad proporcional  al  número  de  individuos  que  tiene  ;  asjí  es  que 
esta  naeíoQ  no  compone m^  que  uña  numerosa  familia,  que. ase- 
gurada su  subsistencia ,  pasa  los  días  enfcstines  y  daaaas. 

los  Yaruros  tienen  el  mismo  método  y  susjefes  so»  hereditmos^ 


1 


Los  Goaipunabis  tienen  cadfves  «fi»  njgoii  cmHh  liitas ,  !y  <k^ 
lf«  eXIm^kmii  aliama :  «a*  tieedítatios  tieÉipr«:f»e  fo  iiHÜia  no 
dageiMte  :  «d  ^sÉw^qvstsá^  «dmd, a«  reteaa  yamUnn  4ilro; 
pero  á  este  no  le  obedecen  sino  cuando  hai  guerra ,  6  en  sus  cooi^ 
íbmeB  parlioahM» ;  par  lo  ¿eaias.%e  ri^s  «aáa  ímáíkí  defnr :sL 

Los  Mt^TÜtiM  tMtten  oadifnes  4«itq«kMieS'á«pieBdM  lüs^«i|piÉ»* 
flM^  q«e so» «omej^év defraudes  fiwrtlli».  SiiImíHIw  'SiiBle  ont 
grtin  léderadofi  pam  áokmá&P»é^  olrali  aifiimnB^  y  atacar  ¿km 
Üi^^faibmixm^m»  vivenMfputi  «léefla. 

Los  Guafalfyes  «rraiolos  Iíümíi  jofos  qoo  tos  cai^emí  en  «as  cqp* 
F0ri»BS  y  teasa.  IiMekMido  ««lie  4A^ 

Los  ftaroas  iImM  eapífiuMS'elweilvot  ém  mustie  las  iiií8ffi»lánii« 
Has ,  y  aéemas  fcmi$fm&^e»»  ■muíími  cierto  nim«PO  黫sl0B€i^*^ 
tttnes ,  ^ue  SM  iMiwdltafiís. 

Los  Gaabaribos  parece  que  tienen  sus  jefes  electivos  ;|«no«iÉo 
sO  sabe  por  ifl^eni^s  é&  loa  Miq^iiílaMs. 

Los  Armacas^  tfa»fioo  tm  }eié6  «tnolífos  en  4ídmpo  4o  ¡^  y  «de 
guerra.  Aéeisas'cada  trib«1i«iio«apitincB4|Qo  leadkngofty  oüitoo 
^e  hacen  pi»rt«  cte  las-eiecclooesde  ios  fiaieii|«im». 

Las  demás  tribus  no  tienen  sino  los  mismos  gobiernos,  eo  9WN 
M  todos  flrai  ^M^ernalosy  y  la  jAToatad  ^inmaeitra  gran  anspeto  á 
loo  atio^Mios ,  Ido  <mal«s  os^tt  %iioargadoB<cteiiarrarlopas«doy  las 
taoontédnHentos  que  merecen  Irasmltirse  do  ^neracion  en  igeno* 
Toeíoii,  pues  no  tienen  otro  medio  «qoe  «I  do  to  tradimon  para  per-^ 
|)Otokr  dertos  jieelios ,  accionas  ó  gif«fraa  aaemoraljlos. 

TfiUfm  müffmat  ^¡ue  mven  o»  las  selmi  f  BObatM»  4e  Vene- 

■ 

UN  M  iOAi;mr#Ér  áf  «i»-]na€»Py  MonrmcM  ote  €oi?|M^iii4 

'  CurimHífu»^  -^  SolMio ^  rio  Savma  :  han  loaido  ^piÜBé'Mi 
•le»  dota  Esmovalda  y  loibmdknios.  ^  gotenndorde  átaifaBa^ 
general  fl^eas ,  le^  ftm  «a  'oe^pilaii  9ioUa4or{iO&.IMi.  ák»  «attínn^ 
J«fiis«4écÍ«i'yaNHi^iUcfis     ^    «    «*    .«.   ^>^  -^    .      <  MB 


f 

Suma  anterior ^60 

Curu€hupMo9.  ^  S^ÜRfe  d  vio  <üiets«  tai  nsfits 
de  los  anlerídlñ^/  .^'.«.^^.v^v.         -lé^ 

6«<atfjnfna^'$.  —  Sobre  el  rio  ÍDÍrida.  Tienen  bue* 
ñas  labranzas  y  hai  dos  puebiecitos  que  trafican  con  los 
baftitai^tes  de  S.  Fernando  de  Atebft^*  Las  mujeres 
UeTan  fustaft  tereiade  f  los  iioiid^Mñefe  mi  gpaKyveo  :  se 
pintan  de  aztil,  ^m  easus  etláii  Iríen  hecba^  eonaorrim 
toésivía  una  «^oMa  eftbivFta  ée  cuero  áe  tigre  y  muí 
bien  tejida  eén  uttt  «ipecie  ée  «aitndMfe ,  pura  éofen- 

derse  de  lasfl«(^i.     .     •     .« 240 

Maquiritafm.  ^  En  te  lafOiía  CaÁIl.  Vivem  des» 
nudos  con  g^y^co;  las  mujeres  t&anea  m  deUmal 
de  cuentas  de  o»  pile  «Miiroéo  por  adorno  y  en  sus«a* 
sas  están  sin  él*  Estos  indios  iraÉeaa  tom.  los  de  Síinta 
Bárbara.  .•.»•.«.•*««•.  50 


INDIOS  QUE  YIVfiN  SOBb£  UIS  RÍOS  QUE  TX£K£M 
AL  ORlNOCd  ffOR  bi.  l^AAtE  «Bl»  OfiSTE  £N  £1, 
CANTÓN   BK^^BGIlOé 

Guahibos.  —  Viven  errantes  sobre  el  Vichada  y  el 
Meta,  se  mantienen  de  las  frutas  de  las  palmas  y  de  la 
caza ,  comen  culebras  de  agua ,  son  ferozes ,  altaneros 
y  difíciles  de  fijarse;  van  desiyidos  y  solo  con  un  pe- 
queño guayuco  de  marima.  No  tienen  casas,  y  viven 
bajo  enramadas.  Se  pintan  con  la  chica,  que  es  un  co- 
lor de  ladrillo.  Ün  capitán  de  esta  nación  se  ha  estable- 
cido con  su  horda  cerca  del  raudal  de  Guahibos ,  y 
ayuda  con  sus  indios  á  los  transeúntes  en  el  paso  del 
raudal  de  M'aipürej  en  donde  ya  no  Vivé  casi  nadie.  La 
mayor  parte  de  estos  indios  tienen  el  pelo  negro ,  no 
mui  grueso  y  de  un  crespo  suelto ;  toman  mucho  ni<ípO.  .4  ."ÍOO 

Ámorua. — '  Viyen  sobre  el  rio  Vichada ,  tienen  al- 
gunas labranzas ;  son  suaves  y  afables  y  se  dedican  á 
Ja  pesca  y  lá  caza. SOO 


Sigue  ^  suma 5.480 


[ 

—  212  —  ^ 


INDIOS  QUE  VIVEN  MHIRS  LOS  lUOS  QCB  CAEN  DEL 
NORTE  T  DEL  ESTE  AL  OAIKOGO  EN  EL  gInTON 
RIO-NEGRO.      . 

Suma  anterior.     .    , 5.4  SO 

Macos.  —  Sobre  los  ríos  Panrgddoi  y  ADav^i.  Se 
dedican  á  sembrar  yuca,  iíame y  pláUmo ,  Ueoea  bue- 
nas rancherías,  son  dóciles  y  iraOcan  con  los  cnoUos*  i  80 

Piaroas.  —  Sobre  los  ríos  Calaniapo,  Sipapo  y  lo^ 
que  caen  á  estos ;  tienen  labra  nza|  y  buenos  ranebos 
con  mucho  aseo,  son  sociMes  y  todos  llevan  guayueo  : 
trafican  con  los  t>oeblos  de  Atures  y  Mi^pures ;  tienen 
muchas  gallinas,  patos  y  cerdos,  y  hacen  mucbo  casabe. 
Algunos  se  habían  establecido  sobre  el  Oftnoco,  pero 
los  Guahibos  les  quemaron  sus  casas  y  labranzas  y  se 
volvieron  á  los  montes •      2.000 

Mariani.  —  Sobre  el  rio  Samariapo  ;  son  como  los 
anteriores  y  suelen  venir  á  pescar  sobre  el  Orinoco.     .         460 

Macos.  —  Viven  sobre  el  '^aptehi,  tributario  del 
Ventnari ,  y  sobre  el  Padamo ;  no  trafican  con  nadie, 
pero  son  afables  y  cultivan  la  tierra 900 

Etanamos.  —  Sobre  el  Mariala  y  Camani  que  caen 
al  Yentuari ;  son  ferozes ,  guerreros  y  no  se  comuni- 
can con  nadie.  Su^  mujeres  van  desnudas  enteramente, 
y  se  pintan  de  negro. 4.400 

Averíanos .  —  Son  fáciles  de  rtíflucirse,  vi\en  de  la 
pesca  y  caza,  tienen  algunas  labranzas ,  no  trafican  con 
los  criollos.  Sus  mujeres  van  sin  guayuco  y  solo  cuando 
se  adornan  las  casadas  se  ponen  un  delantal  de  una 
cuarta.  Viven  sobre  los  ríos  Mataza,  Amáname  y  Yamo 
que  caen  al  Cunucuiiuma .     •    ^      -i  .600 

Curachicanas.—  Iguales  á  los  anJeriores  :  viven  so* 
bre  el  Mapichi  y  YaYitari,  son  trabajadores  y  siembran 
algún  algodón. 600 

Avirianos.  — Viven  sobré  el  Puruname,  cultivan 
la  tierra,  sus  mujeres  van  desnudas..   .     .     ,     .     .         450 


Sigue  y  suma.    .    .    •    •    -10.170 


f 

—  273-  ^ 

Suma  anterior.    •    •    »    1 0.-170 

Yócuroi. «-  Estáa  sobre  el  Yao  y  son  d5mo  los  an- 
teriores          -ISO 

Guainares  6  CruinaoSé  —  Sobre  el  Gontinamo  y 
cabezeras  del  Padamo :  enltivan  la  tierra  y  tienen  bue- 
nas casas ;  ]as  mujeres  llevan  un  pequeño  delantal 
cuando  se  adornan,  y  se  pintan  de  colorado.     .     •     •         ^00 

Guaicas,  —  Son  mas  blancos  que  los  otros  indios, 
viven  en  el  Ocamo ,  Matacuna  y  Manaviche ;  algunas 
tribus  de  estos  son  aliadas  de  los  Maquiritares  y  otras 
de  los  Guaharibos ,  dos  tribus  que  se  bacian  la  guerra 
en  ^858.     .     ; 4.200 

Guaharibos.  —  Son  ferozes  y  guerreros ,  viven  en 
el  raudal  de  este  nombre  y  en  el  Orinoco  arriba;  no 
usan  embarcaciones  sino  conchas,  y  viven  de  la  pesca  y 
caza  :  sus  mujeres  van  todas  desnudas 4.400 

Quirisicanas.  — Vecinos  de  los  anteriores,  dominan 
en  toda  la  sierra  Parima,  éntrelas  cabezeras  del  Ocamo 
y  del  Orinoco ;  son  feroies  y  están  en  guerra  con  las 
otras  tribus  vecinas 500 

Maquritares.  —  Viven  sobre  el  Ventuari  y  sus  tri- 
butarios, sobre  el  Gunucunuma  y  Padamo  y  los  que  caen 
á  él.  Estos  hacian  la  guerra  á  los  Guaharibos  en  4858, 
para  robarles  los  indios  pequeños  que  llevaban  á  vender 
á  Demerari ,  y  mas  comunmente  á  los  holandeses  en 
cambio  de  herramienta  y  cuentas.  Las  mujeres  van 
desnudas  y  cuando  se  adornan  se  ponen  un  pequeño 
delantal.  Traflcan  con  los  criollos  de  S.  Femando  y  son 
mas  blancos  que  los  demás  indios,  escepto  los  Guaicas.      5.540 

mOIOS  QUS  VIVEN  SOBRE  LOS  RlOS  O^B  CAE.t  At 
CASIQUIARE  T  GDAINÍA  EN  EL  CANTÓN  DE  RIO- 
NEGRO. 

Mandavaeoi.  -*<-  Viven  sobre  el  Pacimoni,  cultivan 
ta  tierra  y  trafican  coa  los  bFasüenses.    .....         eeo 

Barias.  —  Sobre  d  rio  fiarüña  :  enltivan  I9  tierra. 


ueysuma.    .    «    .    47.700 


»•  «ce.  ig 


\ 

,     ,     .  Smmtí^anterior.   .    .     .    -17.760 

Una  tribu  se  habia  e*l úblecido  en^k^baiB»  éSb  H&mimi 
mu  el  Ga^quiare ;  pero  el^sarampioq  lo^  hizo  Tolveí:  á 
sus  montas.  .     .  ••    •   -.    .    .    .  -•     .  ^.'   -.    .        ^^00 

con  los  br«Htt6B8e8«  .    •     .     .     .     .     ••".••         *54M) 

Tapiros.  T-S<)bro^6}€c(»taH0,  iiüMtano  d«l^lda^  : 
trafican  tambiMí  ^n  los 'brasileofles >-•         ^^0 

Yabanoa*  —  Sobre  Torvaca  aflvieiite  de  Idupa :  sMi 
como  los  anteriores «...         4^ 

Azanem.-^  Yiven'sobre  el  Onaiiiáiy  AqBio  y  Meaüe 
«M; 'están  desnudos  y  solo  cqn  nn  pequeñq  guayuco  ; 
suelen  traficar  con  lo»  indios  de  Hafaa •     .        ^500 

Macnenis. -^^hre-^l  rio^de  este  noariiiffe :  s«i  eoftio 
los  anteriora.    •    .     .     •     .     ••••..•         4SM) 

total •     .     ^9.42t) 


INDlOBfQÜE  "VIVEN  EN  EL   CAN1M»N  f^E 'GAIfiMllA. 

Paitare».  —-  Yiyen  en  las  cabeceras  delCuchiverO': 
son  dóciles  y  cultivadores.     ••...•..         *U90 

AyamanoSy  Guaiquires  y  Parecas.  —  Viven  sobre 
el  Gbivapari  y  Soapure :  son  como  los  anteriores.  < .     .      -i.MO 

Mapoyes  y  Piareas.  — Descendientes  de  los  Sali- 
vas, viven  sobre  el  Auyacoa  y  Parguaza  :  son  afiy)le8j 
cultivan  la  tierra  y  tienen  regulares  labranzas.  - .  -•         d#0 


Total.     . HW^ 


INDIOS,  QUE  TI  VEN  EN  ^BL  CANTÓN  BE  ^ÁlS60«7U|k^. 

Panares.  —  Sobre  el  rio  Mato  que  cae  al  Caura ; 
cultivan  la  caña ,  el  algodón ,  el  plátano ,  la  yuca ,  el 
Hame  y  ki  Mata* 'i«s]BMfj6r«>v»f Indas -desi^^ 
ilMo  cuaqdo.se  .casan  se  poBMüigaByaaó..  •;    *    .     ;        ••'2ffo 

Tapani^^^^  >Hvcb  «n  el  «ia1W¿aSB,  íbrilmMio^«l 


Sigu^^si^íma 200 


c:  .         .s 


f 

^^^Smntpmkifior 200 

Gaura;  soñ^m^j ffii^réras  :  eii'lQgar^de ^gtitfftieo 
ambos  sestosHlle^da  nAa- tepai4ta  ,^Wm  de  la-^éHay 
^{M9Éca  y  tieneo  algunas* pequeñasJabraneas.      .     ,     .        >^#90t 

CaduíHmipés¿^-*^'^im^  vtféllo  «á*  vMr< «ntre  él^Bre- 
MMo  y  Caura)  después  de  haber  estado  largo  tiempo  en 
las  cabezeras'dePVfetttirtfrij-btiyendo^deldS'útteioiiertM. 
Son  feroííés  «y'^QWStos,  vifen^de^Ia  eata-y  JébÉani^és 
ílWk'ras.    .......     .     ....     ...     .     ,     .        ^#0 

Arinaéóf^s  y  ^Ammeút&s.  — 'Sen'déíálles ,  ^dltnran 
%l{>IátaDo,  la-yuea,  la  caña  y  la  batata ;  •tienén'^Ménfts 
rancherías ;  las  tnojeres' van  desnudas  y  solo  exaudo*  se 
casan  se  poften  tm'guaytico*de"^lres  dedos  d«  ewchol*  Vi- 
ven en  las 'eaiíéteras 'del  tw^Cattra. 4*4 

'^Hayoncong^  Quevaeu  y  Mavitzr.  —  De  las  cSibe- 
zeras  del  tJawa^se^wer'ifferevári'y  áígcrnos  sbbf  e~las 
delVentuari  :fettt'éWio^}ós^tert6res ^- S^ 

— '      *  Total ^.900 


«     ♦     » 


INDIOS  QUE  TIVEN   EN  EL   CANTÓN   DE  UPATA. 

Guaicas.  —  Están  sobre  los  ríos  Macapa  y  el  Ca- 
murán,  trHlii(^fiosi#éPcbyütii.'<^tat  naeton"  e^féfOry 
guerrera  ;(líi8  tCaríbe^^preéat^n  si^tü^e  éMr  enf^z 
con  ella.  9li$*itttf}éi^si  tdti^4l«án6dft»  e6n  *tíDc -pé^u^Ko 
Ittantal  de  cuentas.-  YHreD>de-la  pesca  y  caca  y*tienén 
algunas  ptfqiNllils^alHNiíMiss  "IftiMiM^ 
ftMíaS^  plátano..    ,    .     .     .     .     ....     ...     'fíStfÓ 

^TCimaragotos.  Viven  sobre  el  CaKQanata,  que  desem- 

hafi  al  Yuruán  :  son  ferozes  como  los  Guaicas  y  viven* 

lo  mismo 400 

Cachirégdtkuk^  éi^^VMán^ltítrM  tñ'fm^ú'j  leerte- 
íugiaron  á)lDSPiilM\Y«»ii«n''f ^CiMüittv  ;'^80riiM^ 
y  cultivaniilfaasri  tárenme.  .    •    :    .     .....        11V> 

taSa  de  Gá^UD  ^4Mbl^glfÉ(^sfcfilgf^^ 


9 


tSÍi0áif  suma.    .    .    .      2.9M 


I 

.  —  276  — 

.     .  Suma  anterior 2.900 

del  Caroní,  calüvan  la  tierra  y  viven  de  la  pesca  y  ca- 
za. Algunas  tribng  de  esta  misma  nación  viven  en  las 

oabezeras  del  Carona    . 600 

Barinagotas.  —  Viven  cerca  de  las  cabezeras  del 

Garoní 400 

Arecunas.  -—  Viven  en  las  cabezeras  del  Garoní , 
sierra  Roraima  y  sos  inmediaciones.  Se  mantienen  de 

la  caza  y  (cultivan  la  ynca .800 

Acavau  — Están  sobre  el  Sibaroniy  Patabo  :  son 

como  los  anteriores , 4$0 

Aruacas,— dación  feroz  y  guerrera  que  vive  parte 
en  el  rio  Atoparáo ,  parte  en  el  Sibarona  y  Mazaruni ; 
llevan  un  guayuco^  tienen  pocas  labranzas  y  viven  de 

la  caza  y  pesca. ^,500 

Caribes.  —  Están  sobre  los  ríos  anteriores ,  el  Ara- 
sari  y  Guyuni;  y  también  algunos  sobre  el  Garoní  y  va- 
rios de  sus  tributarios ;  tienen  algunas  labranzas.  .     .      2.000 


Total.     .......       8.400 


INDIOS  QUE   TI  VEN  EN   EL  CANTÓN  DE  PIACOA. 

Guaicas^  —  Se  encuentran  sobre  el  Goainía  :  Jas 
mujeres  van  desnudas  y  solo  con  un  pequeño  gnayaco. 
La  pesca ,  la  caza,  el  plátano  y  la  yuca  provoen  á  su 
subsistencia. 500 

Guaraunos.  —  En  las  or|Uas  de  Barima ,  Amacuro, 
Arature  y  Aguirre ;  como  los  anteriores.     ....      2.000 

Total 2.500 


Guárannos  y  Mariusas. -^yisea  en  el  delta  dd  Ori- 
noco y  son  todos  marinos.  El  pescado  y  las  fruias  de 
las  palmas^  particularmente  laf  del  moriche;  hacen  su 
subsistencia.  Sus  raoi^berías-e^in^tre  grupos  4e  pal- 
mas elevabas  del.wirfo  á  ciiisa.de. Las  crecianiefr  del 


&0»t  y  suma. 


I 

—  277  -^    - 

Sunla  anterior.    .    • 
rio.     .     .    .    •    , •    .      6.670 


Total  de  la  provincia  de  Guayana.     .    .    \^  .040 

Guajiras^  —  Habitan  la  península  qne  les  da  nom* 
bre,  lacnal  hace  parte  de  la  provineta  de  Maracaibo¡: 
son  coltí^adores  de  maíz,  frijoles,  yuca  y  nn  poco  de 
caña;  pero  generalmente  se  dan  á  la  cria  de  ganado, 
caballos,  molas  y  cabras.  Son  guerreros  valientes  y 
diestros  en  manejar  el  arco ,  el  fttsil  y  el  caballo ;  no 
permiten  que  nadie  se  introdnica  en  sn  territorio  y  sn 
número  se  gradúa  en  -18.000 ,  la  mitad  de  los  cuales 
pertenec^ian  á  la  Nueva^Granada  y  la  otra  á  Vene- 
zuela  9.000 

Yaruros,  Chirieoas^  Guamas  y  Otomaeos.  —  Vi- 
ven en  las  sabanas  del  Apure  sobre  el  Sinaruco,  Gapa- 
naparo,  Orinoco  y  Meta ;  no  tienen  labranzas  y  se  man- 
tienen de  la  pesca,  de  la  caza  y  de  las  frutas  de  las  pal- 
mas.  2.575 


Total  general 52.415 


ADMINISTRACIÓN  POLÍTICA. 

Los  naturales  del  pais  no  tenían  antes  del  descubrimiento  dívi- 
sbn  política. ni  administración.  Consistiendo  toda  su  riqueza  en  la 
pesca,  la  caza  y  un  miserable  culUvo;  siendo  por  otra  parte  in-  . 
mensa  la  comarca  que  habitaban  y  ofreciéndoles  esta  en  abundancia . 
los  medios  de  subsistir,  no  habla  entre  ellos  límites  designados.  Sin 
embargo,  los  que  eran  pescadores,  ó  cultivadores^  tenían  determi- 
nados parajes  ea  donde  residid,  á  las  orillas  de  los  ríos  ódel  mar, 
y  aquello^  que  vivían  de  la  caza  recorrían  ciertos  bosques  ó  llanu- 
ras que  consideraban  como  propias :  unos  y  otros  tan  solamente 
erai>  inquietados  por  ciertas  naciones  cuya  superioridad  y.  valor 
tenían  avasalladas  las  demás  de  un  modo  bárbaro  y  despótico.  So-, 
bre  las.  costas  del  mar  los  Guajiros,  los  CaiqueUas,  los  Gandules, 
los  Gumanagotos,  los  Guar^unos  y. Cardes  eran  los  de  mas  influjo» 


Estos  últimos  tenjao.  atafiUadafi  te^^ibos  á  derecha  é  izquierda 
del  baj^ Orinoco.  Los  Cabres,  numerosos  y  yaiientes ^  les  disputa- 
ban la  supremacía  y  les  hacian  una  guerra  continua. 

En  et  alto  Oriooca  los  Guaipuí^abis  fbirm^ftn  la  nacionr  prepon- 
derante y  mas  guerrera  y  los  Maravítanos  mandaban  sobre  el  Rio- 
Negro  y  hacian  U  goeUrará  estos.  £0  el^jnfttiiet  de)|as^«€tlfftta  dev* 
Guayana  habla  naeiéiies^niiBierosfts,  eeno  lOsMa^iiritafetf, Salivad,, 
Guáyanos  y  Guaieas<  £a  lai  Uviiiias  lo»  G«ahibas ,  Yaiwaa^  0^ 
macos,  Ghiricoas  y  Guamos.  En  la  setiinj»  ekwtdtt  lo»  GuíaM  yi^ 
Mucuchíes  :  domíoahMf  al  pié  de  eUai  los  Motilaue»  y^  Gjros  .9011; 
eran  los  mas  poderosas.  Ka  el.lag^dé  liaraaaito  loa:Beb«reaff  Zér? 
paras  eran  prep#adaraiiles<  Lo»  GayMie»  y  Girajaraa  ea  la»iceraHi 
nías  de  BarquisioMlay  Caratebo  erauílos^Me  iarriUeai  Los  ArlMtK. 
eos,  Teques,  Caráeaa  y  AforiQh«Síenlai黫m«d&la<oalli  é^iGuiem^, . 
así  comwlos'Tumusas  y.Quiriquires  en  las  montañas  del  Tui  ^  eraiti 
numerosos  y  guerrero»  :  asMammé  k)».rh»wits,ajiJ<»s»nrairfa»da^ 
Cumaná.  En  las  Uaatftasidt'esláa,  dO)€áiá«aafy  BdiinaaidaníMbMi  ; 
tribus  numerosas^y  paeaoe  fo»  todafi  fnitabaí»  auhyugjErfaiyaria  ptt^n 
derosa  nación  do- las  GaribeiK 

En  -1511  ios  religiosos  domijiicos  GonJleray  Gaicé  salieron,  de  Jai 
Espaüóla  para  predicar  en  Cumaná  el  E?ang/eUQ,,y  fueron  bien  reci- 
bidos 4íiM  4os  indios. 

En  -1515  el  primer  pueblo  que  se  fundó  fué  en  la  isla  de  Cuba- 
gua  con  motivo  de  la  pesca  de  perlas ,  surtiéndose  de  agua  en  el 
continente. 

En  \  520  se  concedió  al  Padre  Casas  la  conversión  de  los  iiH 
4ígeiia»dél  ^ottMeMe,  desdé  Pttriá  itfetteite  hlnta  toear  wt'  M^ 
límites-de  la  pretlneia  dé  Santa^  Marta.  Ett-  el  «élf^  de  aaotefé  b»-^ 
bia  eltló6C0»'im'  coütanlode  religiosos  démimcos  y-  en  aqvfel  afM»* 
ínerlMr -destrtiíáctt  yasésinadoa  lo»  fMled,-  eAre|M^e^alÜ  de^esérdene»' 
comüMafréft^  p«elfe^de  OlilriTMln']N>^ull^AloflM►^}edai^Miai» 
•de  CtHiggárf  O«tttpofttadé  séiMfe^el'rí^  dé  GMmhjp,  hoí  MaM»^ 
nár^  á'  nMdto  legua  dé^soboea,  el  pHcner  puebky  dep  la  oostaidé" 
YeneiMá  que  lland  TOlédo  c»  •{  mi .  FVié  ei»  seguida  dtotfidg  pott^ 
105  iHiH^eiiastf 

Eft  4829  síé  eofleedi6  á  tf ar^&lo  imaMbos,  oidorde  la  ttpaiéfa/ 
el  podérjieMar  iaüsAa  dé  la 'Margarita,  y^tamfcfíeii  se^bhío-asiánl»' 
GonjyiegeOÉbatieropafraiifMr  piidicae  descubrir  TpoMarefrla  porte  > 
compittidlda^tre  el^cal^tia^ ».  iiteía»^  el  di»  la»  velé'. 


f 

iniliBO  aüO'teMó^  sa«oafgG  J«aii:de  AiDpées,  poM^rlas  islaede^ 
CanlNi,  abo(áOrak(Biy  Cvfaiae  y^BmiaYve^  hoí  Bonaire.  A^in  di» 
impedir  los  escesos  que  cometían  los  negoeíaate»  de  ht  Esp^iMa,  e^ 
saskMHMsioiiee'SolMre  la  cesto  de  VeiieEoelaj  coa  eVobjelo  de  es- 
claTiBir  4  losiüéígeiiaftj  la^audMDda  anloráó  á  Am^úes  para  íobk 
perjKrl^,  ceM^seJ^ró  Inego^qve  fundó  la  ciudad  de  Coro  ceni»- 
amistad  del  cacique  Manuare ,  aunque  na  tema  faeoUaées.  pmtft 
poWiri^aieltoiit'na^o» 

Llegado  el  año  de  4528,  concedió  Garlos  V  á  los  alemaBesBelnp»^ 
res4ft'  oenqttittr  Y^  poMísma  de  la  parle  de  Venezuela  situada  enlra 
lostCabea  MavaeapiAa,  al  orieiitey  y  el  de  la  Yala  al  occidente,  au* 
toritéadéloa  para  nombrar  gobeitiadares  con  el  titulo  de  adela»' 
tachíf  y  concediéDdolea  esclavisar  á  los  iodios  que  no  se  les  sorae* 
tiefMi;  pero  sujetos  eUoa  mismos  á  la  intervención  del  religioso- 
dominico  Montesinos ,  qua  fué  electo  protector  de  los  indígenas» 
Noniibi^ron  gebopnador  y  teniente  de  la  conquista  á  Ambrosio  AW 
fingaiL*y  Bartolomé  SoiHer. 

En  4550  se  prohibió  esclavizar  indios  y  se  dieron  á'  Diego  de 
Or4az  26<^  leguaside  (erritoao  desde  el  Maranon  hacia  las  comarcas 
dehfaaéo^  los  Beteares.  Ordaz  llegó  el  misma  afio  al  Maranon  y 
navagó*  baoia  Paria  como  territorio  incluso  en  su  Jurisdicción ,  en 
donde  se  posesionó  de  una  casa  fuerte  que  habia  levantado  indebi- 
dameataelMgobepnadop  da  Trinidad^  Antonio  Godeño,  y  dejando  en 
ella^t-guaiHueíaft  suiclente)  entró  en  eltOrinoco ;  pero  solo  en  4  556 
fuó'<»iaodo  se  fundé  la  primera  población  en  la  vasta  Guayana  :  se 
llagió^ganlo  'Vemas  y  foé-en  donde  hoí  está«l  puerto  de  las  Tablas, 
frenáosla  isla  d«  Pajarda,  en  e)  Orinoco;  pero  quedó  destruida 
en4i59di|)orloabi^andéseBdel^B8equibo  y  Demerari;  mandados  por 
Adriana  Sanse». 

Mñi9${  laaterritociosdaGueyana,  GumanáysusdependeAciaa 
pevIavecíflMa^'VJramato  del^Nuevo  reino  de  Granada,  y  Guayana 
bate  4(7ia  ^ita^  «Di4a  á  Comaná. 

fio  <lid9ii  Ita^^omareas  da  Maracaibo  qno  dependían  de  Venezue^ 
la^lu^agpégBUSQaVmismo  vireinato,  uniéndolas  á  Marida  qae  eraÜl 
capital:  d»u^a  piovioda  granadina  desde  la  conquista.  Maracaüvo 
poFiSa  poiíaioo  llagó  ¿  sop  capital  del*  gobierno  de  su  no^bre^  y 
Méfidttdtpendenoia  de^élt 

En  4718  se  unió  á  la  Nueva  Chranadala^nsvinaia  éaOaráoaaf  * 


«<< ' 


I 

—  280  — 

soM^peod^iems,  hasta  qoe  eailü  qiieéó  formada  la  eapteniar 
general  de  Yenc^ela ;  su  territorio  iio  compradla  entonces  sino    * 
las  proyincias  qae  hoí  son  Goayana;  Comaná,  Baredona^  Caricas^ 
Carabobo,  Barqaísimeto  y  Coro. 

£u  ^777  se  anió  á  la  capitanía  general  de  Venezuela  la  provin- 
cia de  Maracaibo,  que  entonces  compradla  los  territorios  que  ae« 
tualmente  forman  la  provincia  de  aquel  nombre  y  las  de  Marida^ 
Trujillo,  Barínas  y  Apure. 

En  -1787  se  formó  la  provincia  de  Barinas,  qae  comprendía  di.   - 
Apuro  también. 

Después  de  esta  última  época  quedaron  las  provincias  de  la  ca- 
pitanía general  de  Venezuela  distribuidas  asi :  Caracas,  Cumaná, 
Guayana,  Barínas  y  Maracaibo.  A  esta  comarca  debe  añadirse  la  isla 
de  Margarita  que  tenia  un  gobernador  particular,  y  la  de  Trinidad 
que  pertenecía  á  la  jurisdicción  de  la  capitanía  general,  hasta  que 
vén  -1797  fué  ocupada  y  retenida  por  los  ingleses. 

En  i  81 0,  época  de  la  revolución^,  fué  erigida  Barcelona  en  pro- 
vincia y  confirmada  por  la  junta  suprema  en  -i  8H  •  Suicedió  lo  mis- 
mo á  las  provincias  de  Mérida  y  Trujillo. 

La  provincia  de  Coro  fué  erigida  por  el  gobierno  español  en  -1 84  5^ 
pero  no  se  puso  en  ejecución  la  real  orden  sino  en  4  84  8  por  el  ge*  ' 
neral  Morillo.  Fué  confirmada  después  por  el  congreso  de  Colom-    . 

bia. 

La  lei  fundamental  dividió  la  república  de  Colombia  en  tres 
grandes  departamentos,  Quito,  Cundinamarca  y  Venezuda;  los  que 
ponia  bajo  la  autoridad  de  jefes  denominados  vicepresidentes* 
Mas  el  congreso  constituyente  reunido  en  Cúcuta  el  año  de  4824^ 
hizo  con  aquellas  tres  grandes  secciones  una  sola  r^ública  y  sub*' 
dividió  el  territorio  en  doce  departamentos  :  Venezuela  contenia 
tres  denominador  Orinoco,  Venezuela  y  Zulia.  El  congreso  constitu- 
cional de  4  824  erigió  las  provincias  de  Apure  y  Carabobo  y  dividió 
el  pais  en  cuatro  departamentos,  i  saber :  el  de  Venezsela ,  que  - 
comprendía  las  dos  provincias  de  Caracas  y  Caubebo,  cuya  capital 
era  Caracas.  £1  del  Zulia,  que  se  componía  de  las  provincias  de 
Coro,  Trujillo,  Mérida  y  Maracaibo ;  la  ciudad  de  este  nombre  era 
la  capital.  El  de  Orinoco  ó  Maturin,  que  lo  formaban  las  provincias 
de  Barcelona,  Cumaná,  Margarita  y  Guayana,  siendo  la  capital  Cu- 
maná.  El  de  Apure  que  se  componía  de  las  provincias  de  Barínas  y 
Apure,  tiendo  por  capital  á  Barínas. 


I 

Por  fia }  en  4  850  se  disolyió  la  república  de  Colombia  y  vo1tí¿ 
el  territorio  á  sus  tres  grandes  y  antiguas  divisiones*  £1  ^  Vene* 
znela  se  snbdividié  en  '1 3  proYineias,  creando  la  de  Barqviameto , 
estas  en  88  cantones  ó  distritos  municipales  y  aquestos  en  S23  par- ' 
roqnias  que  comprendían  multitud  de  yedndarios.  I4  mayor  parte 
de  las  provincias  llevan  el  nombre  de  su  capital.  Guayana  y  Mar- 
garita conservan  el  originario  de  su  territorio.  La  de  Apure ,  tan- 
célebre  en  la  guerra  de  la  independencia ,  se  denomina  así  por  el 
rio  que  la  costea,  y  la  de  Garábobo  recuerda  el  campo  glorioso  en 
que  se  dio  la  batalla  que  afirmó  para  siempre  la  independencia 
del  país.  Los  cantones  llevan  los  nombres  de  las  ciudades  ó  villas 
que  son  sus  cabezeras,  y  las  parroquias  el  de  sos  pueblos.  En  estas 
hai  dos  alcaldes  que  se  relevan  por  tiempo,  duran  un  año,  y  son 
los  órganos  del  jefe  político  del  cantón.  Este  lo  es  de  los  goberna- 
dores y  preside  los  concejos  municipales  que  están  en  las  cabe- 
zeras  de  los  mismos  cantones.  Estos  cuerpos  tienen  á  su  cargo  el 
gobierno  económico  de  su  respectivo  territorio. 


I 


-^a«í-r 


ESfkWf  qn»*demueitw  lit^  ee/tBmñxm-áé  cada  provhicíat ,  el  aAnero* 
dehaMtMfi^  0Í»4)QttpveiiáÉ«;los4i]diO§'íiid«peiidieiite8,  ei>def«« 


4»PflM«  f obj 


«n  'l«f«a»  ^'    «D 


cn»4r»dM 


uftMNMK^*  •  •  •  * 


S^Sti* 


Barquiílmeto. 

Coro 

Maractibo . . . 

Tn^iUo 

Mórlda 


Barinas< 


Apure 

BareeloiMu... 
Gamaná 

Vargaríia.... 
Gaayana 


ToUI. 


78a 

9,780 
368 
907 

1,984 

1,860 
l,tt» 
1,463 

10,149 


'ii 


8S,9S1 


119,755 
40,476 
83,839 

44J88 
69,116 

108,407 

13,104 
39,103 
80^671 

18,803 
15,431 


9 
9 

9 
9 
9 


9 
9 
9 

9 
9 


8|J 
6 

9 

9 

9 

3 


899,883 


1 

3 

3 

1 
1 


46 


16^jftuiácjMt<Maiita,  Vüta»»,  Chía-  ^? 
reaaí.,,  Sia,  LupJ^QcyflBfjp^ 
GafucHgua ,  Riocinco ,  Chrrlu- 

Tormero ,  Haracal ,  Gura^  5. 
SWWftlHn.4r>Cal|J|ftiw-,. 


6 
6 
5 
4 
8 

8 

4 
8 
9 

9 
8 


f 


NQHIIft- 

del<» 


I. 


;' 


88 


Cabello,  riirgua,  Montalban 

StCáftoMT-lva* 
Barquisimeto,S.  Felipe,  Yarí- 

tagua,  Carora  Tocuyo  y  Quí- 
bor. 
Coro,  Gostarriba,  Gumarebo, 
Paraguaná,  S.  Luis  y  Gasigua. 

Maracaibo ,  Perijá ,  S.  Garlos, 
Glbraltar  y  AlUgracia. 

Trujillo,  Garache,  Boconó  y 
Escuque. 

Mérida,  Mucuchíes,  Elido,  Bal 
ladores,  Gríla,  S.  Cristóbal, 
Lobatera  y  S.  Anlonio. 

Barfnas,  Obispo.  Guanare,  Os- 
pino,  Guanarito,  Nutrias,  A- 
raure  y  Pedraza. 

Achaguas,  Mautecal,  Guasdua- 
lito  y  S.  Fernando. 

Barcelona,  Píritu,  Onoto,  Ara- 
gua,  8.  Mateo,  S.  Diego,  Pao 
y  Soledad. 

Gumani,  Gunnanacoa ,  Cariaco, 
Garupaoo.  Gttiria,  Riocaribe, 
Aragua,  Malurin,  Barrancas. 

Asunción  y  Norte. 

Angostura,  UpaU,  Piaroa,  Cal- 
cara y  S.  Fernando  de  Ata- 
bapo. 


I 


ADMINISTRAGIONBllfeJIAfilEIVDA. 

I4b  tribus  ¡Ddígenas  no  tenían  ningjOQid  cla^  de  ado^niatasuiioil , 
y  entdonde  no  había  propiedhd-ni  riquaia^epa  pajabrá  do  era,CK)fr 
nociia.  Los  primeros  conquietad^resi  atravesaron  el  país  en  buspa 
de  ofD,  y  cuando  lo  conseguían  se  hacia  entre  ailos  una  división  prci- 
pordonal ;  hasta  que  plántadiBis  ía»()ria)flfiM  p|ohUflk>ne6  s^empeyó 
á  dair  orden  á  la  admiflistraoíMi;. 

EA  ODiipaMiMmoii^  ea^id^rapénas  haMapi«»ysyog^'<wW)FÉ»> 
sobre  úim  imniensa  estension  dA<69#t|i  que  biiiidi|lift,á  toAtg  0Qineit\ 
contrabanda^.  el  gobie«Bái«  español  nf  {M»dk  €i|í9(»llU^'i]l«d«Alfsam^ 
fic¡e»t«».ptr»^b«oer  lrnHe'á>los.g^t#s,  aunc|aa»  la^^adÉlMi^Uaf^l<>%^ 
fuese  simple  y  sin  muchos  empleados }  aá  es ,  que  de  Uéj^m  veoiluQL 
á  Venezuela  anualmente  dos  terceras  partes  del  dinero  necesario 
para.cut^jpír  lo$  g^lQS.  £;icapi^9A$eo^i»Ji<re«m4i.la,viaieln{H)4€ir^ 
militar  y  administraUvOi  hasta,  que.  el  ampiMto  de  laAteniradAMi^l 
á  conocer  que  er»  tiempp  dedax.rc^laa  á«Ia^jc6oU«piUdicft«.i^  ai»7^- 
mentó  sucefiiyameate-elnúmemd^eJui^tddoSyjttA.i???  &&iiMta)4t. 
una  intendencia. cuya  aiflorjdad  s«.  e$ite];i<Uá,á  .ta^^U.aa(!it»ma^!§er^. 
neral.  Los  gobernadores  de  las  provincias  eran  delegados  del  inten- 
dente ,  determinaban  todos  los  gastos  ordinarios ,  pero  no  podían 
autorizar  estraordinarios  sin  el  concurso  del  intendente.  En  todas 
las  aduanas  principales  había  un  contador  y  un  tesorero ;  y  existia 
un  tribunal  de  cuentas. 

El  siguiente  estado  dará  una  idea  exacta  de  las  rentas  y  gastos 
en  tiempo  de  la  capitanía  general ,  reduciendo  los  pesos  fuertes  á 
pesos  del  pais^  y  despreciando  las  pequeñas  fracciones. 


1.  / 


] 


{ 


—  2«4  —    - 

ESTADO  de  la  renta  y  gastos  de  todos  los  ramos  de  la  intendencia 

de  Caricas? 


Renta 

Gastos 

BáLáHCB 

liquida  ¿» 

AROd. 

todas  la« 
eoDtríbo- 

de 

de*- 

NOTA. 

_ 

cíones. 

toda  clase. 

faTorable. 

favorable. 

Peaoa. 

PMm. 

Pesos. 

Pesos. 

No  está  comprendida  en 

1793. 

1640,955 

4,979,479 

259,234 

este  esUdo  ni  la  renU  de  las 

Í7M. 

i,98M14 

%049;B7S 

97^1 

buias  qve  montaban  anual- 
mente á  32,500  pesos,  ni  la 

1798. 

1,805,910 

l,987,MS 

195,595 

de  la  yenta  escIuslTa  del 

1790. 

1,737,SÍ8 

1,511,559 

495.666 

tabaco,  qne  se  eleraba  á 

975^009  pesos  netos  de  gas* 

1797. 

1,435,988 

2,357,954 

951,969 

tos. 

Del  precedente  estado  se  deduce,  que  un  año  con  otro  quedaban 
en  favor  del  rei  mas  de  700,000  pesos  de  la  capitanía  general  de 
Caracas.  Para  que  se  conozcan  las  fuentes  de  donde  dimanaban  las 
rentas,  presentaremos  el  estado  general  que  tenia  el  gobierno  es- 
pañol en  los  últimos  años  que  precedieron  á  la  revolución. 


I 


_  —  285  — 


RAMOS  DE  RUNTAS. 


Tabaeo » 

Aduanas <..<«..<« 

Alcabalas ,.....,... 

QaiDtos 

Papel  sellado '. 

Cotnpotleion  j  Tenia  de  tierras 

Tributo  de  los  indios « 

Derecho  sobre  miel....* , 

Derechos  de  pulperías*. 

Derecho  de  lanzas 

Medias  anatas  de  empleos 

Oficios  Tendibles. 

Salinas....,....; 

Diezmos  y  vacantes. 

Mesadas ,  medias  anatas  eclesiásticas. . . . 

Anualidades 

Bulas  de  Cruzada • 

Gorreoa. 

Confiscaciones  7  eomisos , 

Pasos  de  rioy  peiges 

Masa  común  de  real  Hacienda  ó  rentas 
que  no  lenian  ramo  particular 


Total. 


I.  ■    ■ 

ttN   PB808. 


m 


700,000 

^400,000 

400,000 

40 

30,000 

1S,€00 

90,000 

93,000 

30,000 

4,000 

10,000 

8,000 

14,000 

130,000 

15,000 

12,000 

96,000 

95,000 

4,000 

300 

999,465 


3,978,795 


5P^ 


I 


En  tiem^  de  la  repábliea  de  Oolombia  se  insertó  en  una  Gaceta 
de  Gobierno  del  mes  de  noYiembre  de  4  828 ,  un  estado  limado 
por  el  S'.  Rafael  itefenga ,  sobre  la  baóenda  nae^al ;  y  por  lo  qne 
respecta  á  Venesnela  se  ye  que  sn  pro^hKto  fné  de  2>401l.5«9«06 
y. svs  gastos  iteran  de.  •  « .  •  .  •    4,879.954.80 

Había  por  consiguiente  ún  déficit  de  pesos.  •    •   •    2,4|7.56S.74 


^  »  ■     -  • 

Las  notas  que  acompañaban  el  estado  bausán  ver  los  de^ndyines 

que  reinaban  generalmente  en  la  contabilidad  ^  y  las  Jtaltas  que  se 

babian  encontrado  en  cada  administración. 


''Separada' VeDezabla  de  Colombia;  uno  de  los  primeros  j^sosqne 
dio  foéf »r¿iiiMMrr  su  iadministracjoa .  y  balancear  con  pru<]teQc¡a  sus 
gastos  ^ma-  m^  reittas  :  esto  se  debe  al  congreso  constituyente 
do  ^830.  Se  organkó  de  modo,  que  las  imposiciones  nt>  fuesen 
directas  ñ¡  sobre** Ias|  personas  ni  sobre  los  bienes ,  y  que  iédirecta- 
diente  fi%y«sen  sobre.  ia&  producciones  .da  .los.uiMB-'^t*de  los  otros. 
Desde  a^uvMa  épocé*las*FeD(fts»marclian-eoni]n''«<^éfMo  dflmirable 
y  bajo  tnMVtema  sitiplvrfpreeiso'cmicufren'pelffectamentfe  á  cum- 
plir su  objeto.  Todc^s'Iós  anos  el  ministro  de  hacienda  presenta  las 
cuentas  al  congreso  y  pide,  las  saiiia^rpra«wpaM(>a&4eii»s  gafetos  para 
el  año  ff#nidero.  Sl.una.guerra.ú.ot«o>tai$OBtoeiiirieolo  imprevisto 
fuese  caoítf^de  que  las  •rentos  no-  eubms^  'él'prestEpttesto  j  toca  so- 
Islmente  á'la  cámara' de*  n^esi^tantes  establecer  el  impvesto  es- 
traordinario  que  déi  lo  necesario  para  amortizar  ó  cubrir  el  déficit 
ocurrido.  $i  el  nue^  impuesto  es  sobre  kiBiini^ovlMísnes'ó  espor- 
tdciones^debpais ,  to|caia  recaudación*  «•  lo»  «dmlttlsMdores  de  a- 
dttana.  Bi  íes  sobre  i  productos  •internos,  entontes  pertenece  á  los 
administradores  de>fehtas  próylnciales.'  Tanto  los  unos  eomo  los 
otros  dirigen  sus  cuieñtas  y  reciben  su  i19pulso.por.e8te  respecto, 
de  la  toMNWÍa  genefal,  las  administraciones  4e  janana  sott  en  nú- 
nléro  de^n«ce,  de  llis.€uaks>hai*o0lio'prffl<^tes,^7 'sbn ,  la  Guai- 
ra, Pu^to-Gabel lo  {Angostura,  ^Maracaibo,  Dimana;  Barcelona, 
coro  y  MaFgarita  :  las  ciaco«s4a^báItei?aa&  san  Carúpano ,  Maturin, 
H^uerote,  Adícora|y  Gumarebo.  Todas  ellas  reciben  susi  órdenes 
da' la  tesorería  genetal,  y  esta  concentra  toda  la  contabiliiad  cada 
tilmestr4«.£Uribunal  de  fiamas  la  revisa,  y  sus  fallos  son  inapela- 
bles. 

^Enlas'lreí^  fRTOVinctas'tial^  en  cada 

viiM,{ry^.eato  4ia«6ite4adilrai|^Í!«»9i»ifÉ(iiQ05SiiM  aüiMiMlama 

.><W^Y^iiiagta»<ija»<ti>ai()>toiitiilgi,|Wyta<>»  güer- 

X  Mim^en  si}4)¡Miri«éNkf«aiai»apMéa  fíHwin'tfatBtiHiqülna 

>  Wíta<«rli9^  C9^  pro.viqcíalea  y.naeioaales;.f  iwciteoMMa^ifíAeii 

las  ttuiUdades  que  resultan  de  las. cuentas  que  deboi  estar  cm  el 


Los  administradcNres  de  aduanas  principales  y  subalternas  tienen 

*nMi'tl«M]ci^jo;^lo»ide'Ms  tencas  tfe  las  provincias,  un  lauto,  pw 

^Mito^iObfeMá  r^^etiMacloa ;[  y  cuando  en  casos  estraordiaaUos 

lienen  que  recaudar "por^l'tesoro  pAíllioo  los  impuestos  intáriores, 


f 


redben  de  este  ud  tanto  por  ciento  yidírlgen  sosicuentas  á  la  teso- 
ráría  general ,  coma  también  las  anokles.r^^tívks  á  stjb-pvoviaqía. 
T^os  los  años  las  diputaciones  provmciales  exaininan  las  cuentas 

-^é  wip  adiiatrtpadswa  y  esteblteea  fca  gastwj  ¿'Impuestus,  nupu*» 
d^ndo  ni  los  concejos  municipales, bi'^^losjefe^  políticos,  ni  los 

. .  g(t)érnadores ; '  hacer  ínas  gastos  ¿e  Ids  presupüeétos  j.  y  méuos  ^r~ 
d^ar.el  ma&  pequeño  Jmpu^itOi^*D6>^^ste  modo  cééarprovifi^  Mbe 
aihialn6a46-«us«Mn<«B'ty>M^9nllS&>^  lós^Ctíálés  sd  pü'Blicán  detállti- 

'^ametítiB /'y''1^ 'ini)Ht)n*eiít^^*«adaT6fem«iKirtcutso6.;  enio ^^m 
han lüvérlido  las  rentas  Y  cuáles  son  láS'^progresdsqtveise'hacen. 

iHai  también  una  administración  de  ¿orfeos.  taf'gétféfál'eáta  en 
la'  capital  de  la  república  y  depende  de  la  tesorería  general,  ea 
ddnde  todo  se  centraliza.  Existen  igüakaente  ottcesAuÉmaUnoá»^ 
nes  pritícipalés  y  tréítita*  y  útie ve  siibattéftitts ,  qae^  reeiben  -siféMD 
ó  comisiones ,  y  de  eiste  modo  en  toda  la- república' Y'^n'l^^'dtfec- 
clones  prihcipáles ,  haí'  comunicación «^«isvida  de.  na  puoéo- abollo 
tobas  laá  S^gmatías,  y  étítre'CáJrácas  y  la  Guaira ¡dM^efés  ál'ldfáí; 
ndiéntras  que  en  otros  lugares  trasversales  solo  cédiai^'ÍS  dias. ) 

r  \Lsl  inspección ,  pues ,  'de  los  encargados  de  recÍbíiv4a9Teiii«s<Mi* 
clónales  está  confiada  á  los,  jefes  poíítrcós,' a  los'gOUétMá^loiréfi  j'á 
la*  tesorería  general ,  y  por  último  á  kliMiS'fiVVeroís  juezes  en.  elí tri- 
bunal de  cuentas.  Y  como  lo^ detallen  tF«ben'estar-ePfeglfiK]o»áÍISs 
presupuestos,  las  diputacione&.provkíeiAles ^en  in  resi^ttva.^ro* 
yiicia,  y  la  cáiBara-4e»fepre0NitMte$  en  el  congreso , -son 'tos  ^^ 
aj^hnMHui-ió  desapniebaD  1m¡fsá^m  y  Ipoñen  así  eüséllo  al  ramo  mas 
doSicado  é  intereMPtflMi»wi*egii>id>> 

'  lAMtk^^ue  se-Mbededóndeí^pMviénett  las  renltas  nacionales,  no 
oAará  de  mas»fr«Mii4tr«H#etopt4«B  hmios  que  fcs  producen ,  y  86 
tendrá  de  esté%i#Ékr<4Pf!^rtm|Mffi!ito  He  un  año  j  sirviéndonos  áel 
ültiflitl^e^  ^  839  /ytlsfinfáHrotm 'detalle  de  sus  gastos.  Tanto  ifetos 

'"COtaolas  rentas  están  necesariamente  sometido^  á  todas  la/fazes 
^Meas'dén^tado  y  se  hallan  espuettos  á  todasHas  vicisitudes  de 
dée««iWfcry*p1ÍTJ«|^  del  cotoercio  ó/de  la  na- 

ción. 


/ 


, .  •  •  • 


t 


—  a»  — 


INGRESOS. 


Importación. 
Esportadoo. 


Impuesto  lobsidiaro  por 
iñaportacion 


Impuesto  subsidian)  por 
eH»ortacion .'.... 

Almacenaje. 

Prácticos. 

Patente  de  buques 

Toneladas I 

Deredio  de  tránsito .. . . 

Correos» 


TOTAL. 


Corte  de  maderas  pre- 
ciosas  


Derecho  de  Tenia 

DesiUacjon    de    aguar- 
diente   

Papel  sellado ;.... 

t  Décima  parte  de  rentas 
municipales 

Impuesto  para  gastos  de 
justicia 

Salinas 

Contribución  por  des- 
cuento á  empleados.. . 

Contribueion   estraodi- 
naria  sobre  la  caña. . . 

Miscelánea. 


PesM. 
1,003,489,84 
178,069,46 

108,709,76 

t»,907,«S 

761,51 

6,018,00 

70,00 

35,737,40 

a,05f,67 

.  IÍ,45SI,78 

Sl,6i 
896,12 

35,899,99 
84,06i,75 

31 ,309^09 

95,459/)9 

73»33!li,79 

18,790,98 

17,633,57 
5,842,34 


TOTAL  eBHniL.... 


GASTOS. 


Interior 

Guerra 

Marina..... 

Relaciones  esteriores... 

HteleiHta. ! »"««''^- •  •  ^  »»«M*,n 
f  imprevistos.  21,232,91 


TOTAL. 


P49MS. 

399.609,02 

372,297,20 

88,888,26 

15,440,75 

287,847,68 


Total  de  gastos  de  la  administración. 

Crédito  público, 

Esterior Ps.      160,000,00 

Interior 50,000,00 

Crédito  público  esterior. 

A  cuenta  de  las  remesas  á  Inglaterra  se- 
gún la  lei Ps.  88,000,00 

Crédito  público  interior. 

Iiíteresesde  la  deuda  consoli- 
dada de  Venezuela 1,792,10 


954,055,51 


210,000,60 


90,892,10 


Intereses  de  empréstitos...  Ps.  86,427,58 

Suplementos  de  gastos  es- 
traordinarios  de  güera  de 
188541836 51,491,28{ 

Gasiosdel  afloeeonémieo  an* 
tortor..... 1I/M4V37 

Soeldoi  devengados  por  ios 
empleados  de  jastieia  de 
1836  41838 98,354,06 


218,518,96 


l,727,176j80 


TOTAL........ 

■ 

Se  debe  pagar  un  empréstito  en  efecUfo, 
que  monU  á. Ps.  146,235,34 

Se  debe  á  algunas  adminis* 
traciones 16,068,20 


4,472,958,87 


172,S1M4 


TOTAL  GimAL. 


I,6484t77,4l 


I 

—  289  — 

Había,  pues,  un  sobrante  de  76,899  pesos  y  39  centavos.  En  las 
rentas  sobreíndicadas  no  están  comprendidas  las  de  las  trece  pro- 
vincias ,  las  cuales  se  puede  calcular  ascenderán  á  cerca  de  un  mi- 
llon  de  pesos.  Dedúcese,  pues,  que  la  renta  actual  es  igual  ó  poco 
mas  de  la  que  se  sacaba  por  el  gobierno  español ,  y  so  puede  con- 
siderar sobre  manera  aumentada,  si  se  atiende  á  que  no  hai  alcabala^ 
á  que  el  (abaco  es  libre  y  no  de  osclusiva  propiedad  del  estado,  á  que 
los  indios  no  pagan  tributo,  y  á  que  las  bulas  de  Cruzada,  diezmos 
etc.  están  abolidos;  lo  cual  daba  casi  un  millón  y  medio  dq  pesos. 

Si  se  ban  demostrado  las  renías  y  gastos  de  la  nación  ,  es  indis- 
pensable dar  á  conocer  los  empréstitos  que  contrajo  Colombia,  y 
que  después  de  la  separación  de  las  tres  repúblicas,  convinieron  en 
dividir  la  deuda  y  tomar  cada  estado  la  parle  que  le  correspondie- 
se. La  convención  para  este  arreglo  se  reunió  en  Bogotá  y  fué  con- 
cluida allí  el  23  de  diciembre  de  1834,  por  medio  de  los  ministros 
plenipotenciarios  S'  Santos  Michelena ,  por  Venezuela ,  y  S'  Lino 
de  Pombo  por  la  Nueva  Granada ;  no  habiendo  concurrido  el  del 
Ecuador,  los  dos  dividieron  la  deuda  en  i  00  unidades,  de  este 
modo : 

Venezuela 28^/2 

Nueva  Granada 50 

Ecuador 2M/2 

400 


■I 


(ornando  por  base  la  pobladon  respectiva.  El  primer  empréstito 
fué  contraído  el  45  de  mayo  de  4822,  con  Hering  Graham  y 
Powles,  de  Londres,  y  ascendía  la  suma  en  libras  esterlinas  d 
2,000.000. 

Venezuela.  .  .      570.000  \ 
NuevaGranada  4,000.000   J  2,000.000 
Ecuador  .  •  •      450.000   ) 

£1  segundo  empjréslito  se  celebró  en  45  de  mayo  de  4824  con 
B.  A.  Goldsmilh  y  compañía,  de  Londres,  y  montó  la  suma  á 
-4.750,000  libras  esterlinas. 

Venezuela  .  .  .  4.548.595 b45J 
Nueva-Granada.    2.512.975        )   4.750.000 
Ecuador.  .  .  .      99^.579» 05) 

t  ».  CKOO.  ** 


f 

k  Venesmela,  pues,  tocó  pac  el  pcimero  y  segundo  cpipné^tto^  la 
cantidad  de  1*.  ^  ,888.595»^  5  %  ^ue  á  ra^^on  de  5  p^o^  faertea^  li- 
bra esterlina  hacen  de  los  pesos  sencillo^.del  pais  6.20,  cent*  Y  por 
consigaiente  una  deuda  de  ^^.698.049  y  95  cen(.  C^gcth^f^^^  ^^ 
Yenezuela  ratificó  este  convenio  en,  26  de  juUo,  el  de  la  Ójuj^^a  Gi^- 
nada  en  25  de  agosto  y  el  del  Ecuador  en  26  de  noyiemhce  de  i  837; 
y  el  cange  de  las  ratificaciones  se  efectuó  entre  Yenezuela  y  la  N^e- 
ya  Granada  en  7  de  febrero  de  4858  y  en  22  del  mismo  entre  los 
dos  dichos  estados  y  el  Ecuador. 

Tiene  ademas  Yenezuela  una  d^uda  doméstica  contraída  en  tiem- 
po de  Colombia^  y  la  parte  que  le  h.a  correspondido  por  sus  28  4/2 
unidades  de  7.2^  7.91 5  ps.  y  4  2  c,  que  unida  á  la  deuda  estranjera 
fpriQa  un  total  de  49,2^^.965  y  05  cent.^  igi^ales  á  76,875.860 
francos  y  20  céntimos*  La  deuda  dpméstic^  ó  del  iotcrior ,  dentro 
de  pocos  años  podrá  ser  pagada  con  las  tierras  baldías  y  los  rezagos 
de  la^, rentas  de  diezmos. 


ADMINISTRACIÓN  DE  JUSTICIA. 

La  razón  del  mas  fuerte  era  la  justicia  entre  los  indígenas  :  cada 
cual  procuraba  con  sus  armas ,  la  astucia  ó  el  veneno  vengarse  de 
las  ofensas  recibidas.  Hombres  desnudos^  sin  tierras  propias,  sien- 
do todas eUas  del  primer  ocupante,  ríos  sin  número  que  les  pro- 
porcionaban pescado  en  abundancia^  selvas  inmensas  que  les  brin- 
caban con  toda  especie  de  cazaría»  di&cilmente  4a,ban  lugar  á q^e 
hubiere  pleito  ep^tre  aquellos  gentes,  y  cn^^d^  ocui^ria  1q  decidían  por 
la  fuerza.  Los  caciques  ó  capitanes  podían  cua^ndo  n»as  conciUa^  la 
paz  ;  pero  no  tenianr  autoridad  para  castigar.  Si  uno  era  muerto, 
los  parientes  vengaban  la  sangre  matando  al  que  mató,  ó  en  caso 
de  no  encontrarle,;  en  cualquiera  de  su  familia  ó  de  su  tribu  ejer- 
cían la  venganza,  costumbre  que  aun  existe  entre  los  indígenas  in- 
dependientes y  que  llaman  ellos  vengar  la  sangre. 

La  administración  de  justicia  en  Yenezuela  se  resentía  de  lenti- 
tud y  vanas  formalidades  que  hacían  interminables  Jos  pleitos ;  así 
es,  que  ninguno  ó  muí  raro  se  terminaba  ante  los  primeros  j«ezes 
en  menos  de  un  año  de  continuos  pasos,  gastos  é  incomodidades  : 
mucbos  duraban  tres  y  aun  cuatro  anos.  Los  juezes  de  primera  ins- 
tancia en  lo  civil  y  criminal  eran  los  gobernadores  de  las  provin- 


f 

-Li- 
cias ,  sus  teqlenM  gol)eniAd(»res  y  las  alq^Idies  0i:<]iQdrÍQs  de  yitl^s 
y  ciudades,  que  siempri^  fueron, dos ,  y  cuya  juri^iccion  se  estén- 
dia  á  todo  el  distrito  del  cabildo,  Estos  y  los  alcaldes  de  partido 
que  solo  ejerctan  la  jurisdicción  pedánea  para  las  causas  menores, 
«ran  los  únicos  juezes  en  cuya  elección  tenian  Iqs  pueblos  alguna 
parte,  aunque  remola  i  pues  eran  nombrados  por  los  cabildos.  Ep 
•1 787  se  estableció  la  real  audiencia  y  cancillería  de  Venezuela,  cuyo 
primer  regente  fué  D.  Antonio  López  Quintana ;  habia  también  tres 
oidores  y  dos  fiscales,  teniendo  ademas  cada  una  tres  relatores,  dos 
escribanos  de  cámara  y  un  alguacil  mayor  que  gozaba  de  los  ho- 
nores que  los  oidores  recibían.  Era  este  un  tribunal  supremo  que 
representaba  al  rei,  y  en  la  mayor  parte  de  las  causas  no  babia  re- 
curso alguno  de  sus  sentencias. 

Los  congresos,  de  Venezuela  se  han  esforzado  en  corregir  los  de- 
fectos de  la  administración  de  justicia  española  ;  sobre  todo,  en. ar- 
reglarla de  modo  que  los  pleitos  se  decidan  en  el  ms^s  breve  tieío- 
po  posible,  y  últimamente  se  ba  nombrado  una  comisión  que  forme 
los. códigos  nacionales.  Por  las  leyes  anteriores,,  ep  la  república  no 
hai  ningún  iuero  :  todos  los  ciudadanos  son  iguales  ante  la  lei  >  y 
por  esto  es  menos  embarazosa  y  monstruosa  la  legislación  actual. 
La  justicia  se  administra  en  toda  la  estension  de  Venezuela  de  una 
manera  uniforme.  En  todas  las  parroquias  los  alcaldes  son  juezes 
de  paz,  pronuncian  definilivan^énte  enjuicio  verbal  en  los  nego- 
cios cuyo  inleres  principal  no  esceda  de  20  pesos.  Conocen  tam»* 
bien  en  juicio  verbal  pero  con  la  apelación  para  ante  el  alcalde  mas 
inmediato,  de  las  que  esceden  de  20  y  no  pasan  de  50.  Conocen  en 
juicio  verbal  asociados  de  hombres  buenos  de  las  denoiandas  cuya 
cuantía  esceda  de  50  y  no  pase  de  -1 00  pesos,  y  con  apelación  á  los 
juagados  de  arbitramento.  Sumarian  álos  delincuentes,  lospersi<> 
guen  y  aprenden  para  remitirlos  al  alcalde  mas  inmediato.  En  las 
cabezeras  de  cantón  los  alcaldes  conocen  por  sí  solos  de  las  deman- 
das civiles,  sobre  negocios  cuyo  interés  no  esceda  de  1 00  pesos.  Sus- 
tancian las  causas  de  que  debe  conocer  el  tribunal  de  arbitramen- 
to^ lo  mismo  que  las  que  correspondan  al  tribunal  de  primera  ins^ 
tancia  en  los  cantones  donde  este  no  resida.  Conocen  por  sí  en 
segunda  instancia  de  las  demandas  en  que  se  interponga  apelación 
de  las  sentencias  pronunciadas  por  los  juezes  de  paz.  Últimamente 
proceden  en  negocios  criminales  á  la  formación  del  sumario,  á  la 
prisión  del  reo,  su  confesión,  etc.  Los  juzgados  de  arbitramento  se 


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—  2^2  — 

componen  de  los  alcaldes  y  de  los  arbitros  nombrados  por  las  par* 
les.  Conocen  entonces  de  las  demandas  civiles  cuya  cuantía  en  sa 
acción  principal  pase  de  ^00  y  no  de  500  pesos.  Conocen  en  juicio 
yerbal,  á  prevención  con  los  juezes  de  primera  instancia,  de  todas 
las  deroandas  por  injurias  de  palabra  ^  escrito  ó  hecho  en  que  no 
haya  erusion  de  sangre  ó  grave  contusión.  Últimamente  conocen  en 
segnnda  instancia  de  los  negocios  que  hayan  sido  sentenciados  en 
primera  por  los  juezes  de  paz  asociados  de  hombres  buenos,  pasan- 
do de  50  y  no  de  4  00  pesos. 

Hai  tribunales  de  primera  instancia  en  los  circuitos  judiciales , 
llamados  juzgados,  desempeñados  por  un  solo  juez  nombrado  por 
el  gobernador  de  la  provincia  entre  las  personas  que  indique  la  dir 
putacion  provincial,  y  dura  4  años  en  sus  funciones,  pudiendo  ser 
reelegido.  Conocen  de  todas  las  causas  que  no  estén  por  la  lei  atri- 
l^uidas  á  otros  tribunales,  tanto  civiles  como  criminales.  Conocen 
en  primera  instancia  de  las  causas  de  hacienda  pública,  y  en  se* 
^unda  de  las  que  principian  en  los  tribunales  de  arbitramento  y 
se  le  remiten  en  apelación.  Conocen  de  los  reclamos  de  invalida- 
•cien,  dirimen  las  controversias  de  competencia  entre  los  juzgados, 
alcaldes  y  juezes  de  paz^  y  tienen  otras  muchas  atribuciones  para  la 
l)uena  y  pronta  administración  de  justicia. 

fiai  cortes  superiores  de  justicia  ,  cada  una  compuesta  de  (res 
ministros  juezes  que  se  denominan,  presidente,  relator  y  canciller. 
Ci>nocen  en  primera  instancia,  previa  la  suspensión  decretada  por 
el  poder  ejecutivo,  de  las  causas  contra  los  gobernadores  por  res-»- 
ponsabilidad  en  el  ejercicio  de  sus  funciones,  y  de  las  de  los  juezes 
de  primera  instancia  en  el  mismo  caso.  Conocen  en  segunda  ins- 
tancia de  las  causas  civiles  y  criminales  que  principian  en  los 
juzgados  de  arbitramento ,  y  asimismo  de  los  reclamos  sobre  in« 
validación  de  juicios.  Por  último  conocen  de  los  recursos  de 
fuerza,  de  competencias,  dudas,  etc.  Hacen  ademas  el  recibimiento 
de  abogados  y  los  mandan  inscribir  en  la  lista  de  estos. 

Existe  una  corte  suprema  (que  es  el  último  tribunal )  compuesta 
^e  cuatro  ministros  que  se  denominan,  presidente,  vicepresidente, 
relator  y  canciller.  Esta  corte  reside  en  la  capital  de  la  república^ 

Hai  cortes  marciales  compuestas  de  los  mismos  ministros  de  las 
superiores  y  suprema ,  con  agregación  de  dos  jefes  militares  de  la 
clase  de  coroneles  y  generales,  los  cuales  son  nombrados  cada 
4  años  por  el  poder  ejecutivo. 


—  295  — 

fiai ;  en  fio ,  eu  todas  las  capitales  de  provincia  y  en  la  Gaaiiti , 
Paerto-Gabello.y  Carúpaoo,  un  tribunal  de  comercio  compuesto  de 
un  juez  y  50  conjuezes.  Este  tribunal  se  reúne  cada  tres  meses  j 
decide  de  todas  las  causas  que  se  hallan  en  estado  de  verse,  el  dia 
en  que  abre  sus  sesiones  por  el  orden  en  que  se  hdyan  sustanciado. 
La  elección  de  juezes  y  conjuezes  se  hace  en  junta  general  de  agri« 
cultores,  comerciantes  y  criadores  vecinos  de  la  provincia.  El  dia 
4 .®  de  diciembre  se  convoca  y  cH  5  del  mismo  mes  de  cada  aüo  sa 
celebra  la  junta.  El  juez  dura  dos  anos  y  los  conjuezes  igual  tiem-- 
po ;  pero  cada  a&o  se  releva  la  mitad.  Por  la  leí  de  ^  O  de  abril  de 
•18549  puede  cualquiera  pactar  lo  que  le  parezca,  pues  ella  le  da  fa** 
cuitad  competente,  y  también  puede  sujetarse  á  este  tribunal  aun- 
que el  asunto  no  sea  comercial. 

En  cuanto  á  la  organización  judicial,  el  territorio  de  la  repúbli* 
ca  se  encuentra  dividido  en  cinco  distritos,  como  lo  espresa  el  es- 
tado siguiente ;  y  por  lo  que  toca  á  los  crímenes  que  se  cometen  m 
el  pais,  dos  cuadros  que  le  siguen,  sacados  de  la  estadística  judicial» 
darán  de  ellos  una  idea  mui  completa. 


! 


—  294  — 


ESTADO  que  manifiesta  la  organlzacioQ  judicial  de  la  república 

en  1830. 


DISTRITOS 
JUDICIALES. 


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NÓMBaO 

de  ias  pro  tí  ocias 

de  que 

*•  tótñpontn, 

>«iÉtllMMItoi«iirf^M«llta 


(Cumaná... 
Guayan».. 
BarceloftB. 
Margarita. 


fl^  Distrito 


Caracas. 


'(^arabobo .... 
ttt  IHsirifio  .  »u ,-, .  I  Biar^ulüinidto. 

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It*"  Distrito 


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—  297  — 


ORGANIZACIÓN  ECLESIÁSTICA. 

Antes  del  descubrímiento  tenían,  y  aun  ahora  tienen  los  natu- 
rales Piaches  ó  adivinos,  que  son  médicos  y  sacerdotes  á  la  vez.  Pro- 
noslican  la  paz  ó  la  guerra,  si  será  un  año  de  escasez  ó  de  abundan- 
cia ó  si  babrá  mucha  pesca.  Se  hacen  pagar  bien,  de  manera,  qu€ 
sin  trabajar  tienen  lo  necesario  para  vivir.  Eran  mirados  y  todavía 
lo  son  entre  las  tribus  independientes,  con  una  veneración  supers* 
tíciosa.  Su  influjo  equivale  á  un  poder  absoluto,  del  que  sin  em- 
bargo no  abusan.  Sus  prerogativas  son  muchas.  La  mas  notable  es 
la  que  ofrece  mejor  regla  para  juzgar  de  las  otras  :  tienen  un  de- 
recho positivo  é  indispensable  á  las  primicias  matrimoniales,  en  ca- 
so de  casamientos  adoptivos  ó  supernumerarios. 

Descubierto  el  Nuevo-Mundo,  el  papa  Alejandro  VI  por  sus  bu- 
las  de  ^495  y  ^50^,  trasmitió  á  Fernando  é  Isabel  los  dominios 
directos  y  los  dominios  útiles  de  la  América.  La  Santa  Silla  no  po- 
día comunicarse  directamente  con  las  Indias  españolas  sino  para 
los  casos  de  reserva.  Todos  los  otros  actos  pontiGcios  debian  ser 
dirigidos  por  el  papa  al  rci  de  España.  Este,  pues,  tenia  escíusiva- 
mente  el  patronato,  en  virtud  de  las  bulas  de  los  papas  y  particu- 
larmente la  de  {{  de  julio  de  ^508.  Asi,  desde  el  descubrimiento 
del  Nuevo^undo,  la  propagación  de  la  fe,  la  fundación  de  las  ciu- 
dades y  villas,  la  construcción  y  mantenimiento  de  las  iglesias^ 
eran  únicamente  obra  del  rei,  ó  el  resultado  de  Ips  gastos  del  te- 
soro real.  Según  este  derecho  constante,  no  se  podia  fundar  en 
América  ninguna  iglesia  catedral  ó  parroquia  ,  ningún  monasterio 
ú  hospital,  sin  el  permiso  espreso  y  directo  del  rei. 

En  4  de  junio  de  4552  eligió  obispo  de  Coro  el  emperador  Car- 
los V,  estando  en  Medina  del  Campo,  á  D.  Rodríguez  de  la  Bastida; 
y  en  465^)  el  obispo  D.  Juan  López  Agurto  de  la  Mala  trasladó  á 
Caracas  la  catedral  de  Coro,  dedicándola  al  apóstol  Santiago ,  per- 
maneciendo sufragánea  de  Santo  Domingo  hasta  que  fué  erigida  en 
metropolitana. 

En  -1777  se  creo  un  obispo  en  Mérida,  sufragáneo  de  San  tafo , 
que  se  formó  en  la  parte  occidental  de  la  diócesis  de  Caracas  y  en 
la  parle  oriental  de  la  de  Santafé  de  la  Nueva  Granada.  En  -1790 
se  creó  el  de  Guayana,  sufragáneo  del  de  Santo  Domingo,  que  com- 


prendía  esla  proviticia  y  las  d^e  Cumaná  y  Margarita.  Las  rentas  de 
los  obispos  eran  asignadas  sobre  los  diezmos. 

En  4501  Fernando  Y  obtuvo  en  propiedad  el  diezmo  eclesiás- 
tico qce  se  hizo  ceder  por  el  papa  Alejandro  VI;  para  evitar  de  este 
modo  el  influjo  (}ne  !a  SE^nta  sede  llegare  á  tener  tbh  el  tiempo  én 
los  dominios  de  América.  Del  total  del  dlé^tno  tomaba  el  rei  ün  üCh 
noveno  :  tina  cuarta  parte  del  resto  correspondía  á  los  bbi^pbs , 
otra  cuarta  parte  'al  cabildo,  según  las  dignidades  que  tenia  :  lo  que 
quedaba  se  dividía  en  nuete  partes  y  de  ellas  tomaba  el  rei  una , 
cuatro  los  curas,  dos  para  el  'sagrario  de  ta^  iglesias  Catedrales,  dos 
para  la  fundación  de  beireficios  y  hospitales  en  las  ciudades ;  villas 
y  parroquias. 

El  de  Mérida  isolo  recibía  la  cuarta  parte  del  honorsirio  del  de 
Catácas,  y  el  de  Guayana  tina  asiguación  de  4.000  peéos  fttertes. 

£n  1 805  fué  erigido  el  de  Caracas  en  Metropolitano ,  éiendo  él 
primer  arzobispo  el  D'  D.  Frantisto  Ibarra,  y  entontes  los  de  Mé- 
rida y  Gutiyana  dependieron  de  él. 

En  -1652  se  estableció  el  método  de  misiones  y  una  gran  parte 
del  país  estaba  sujeta  á  gobieru)3s  monásticos.  Los  capuchinos  ara- 
goneses ocupaban  gran  i^rte  de  la  pirovincia  d^  Barcelona  desdé 
•16^2.  En  ^656  estaban  también  en  la  de  Cunianá,  en  ^65^  en  gran 
parte  de  la  de  Caracas,  eéteiidiéndose  diespues  á  Apure  y  fearínas , 
y  últimamente  efatraroh  en  Marataíbo  en  ^687.  En  el  Orinoco  ha- 
bían entrado  y  formado  misiones  diferentes  rciigiosos^  como  éan- 
delarios^  franciscanos;  observantes ,  j^uitas  y  capuchinos ,  y  todos 
desocuparon  la  tierra  phr  no  poder  Subsistir  en  día ;  hasta  qué  en 
•1724  seis  capuchinos  catalanes  fueron  á  formar  las  misiones  qué 
después  se  nombraron  del  Caroñí.'En  n54  se  fijaron  por  el  gobér* 
nador  de  Cumaná  los  límites  á  los  capuchinas,  desde  la  mar  ba^tá 
la  angostura  del  Orinoco :  á  los  padres  observantes ,  desde  Angos- 
tura hasta  la  boca  del  Cuciiivéro.  y  á  los  jesuítas  desde  allí  hasta 
lo$  confinen  con  la  Nueva  Granada. 

Después  de  la  espediciofa  de  "Solaiio ,  que  fué  en  4756,  el  rei 
encargó  á  los  capuchinos  andaluzes  el  territoñb  compreridido  desdé 
Maipure  hasta  Rio-Negro ,  dándoles  los  pocos  pueblos  establecidos 
por  los  misioneros  observantes. 

61  -1 4  de  diciembre  de  1^1 9  espidió  el  corigreso  trn  deéreto  en 
que  espulgaba  á  todos  los  capuchinos  adictos  á  la  causa  i^eal ,  y 
convirtió  sus  coíivetitos  en  Instituciones  dé  educatcion. 


—  ¿99  - 

El  28  de  julio  de  1 82 1  fué  suprimido  todo  convenio  de  regu- 
]ar«$  q^  eiililai^  ídAiob  de  óobo  religiosos*  El  14  de  éétobre  áel 
mismo  ftko  decreté  til  eoitgfeso  qbe  los  clérigos  delaten  svboHli- 
nados  af  ^oder  éWit.  En  Oii ,  ün  decreto  M  'miéoio  ednigreso  ié  4 
de  enero  de  í  8^*2  ,'ordenó  proveer  a  las  vacantes  en  los  capítulos , 
de  no  acordar  ningún  beneficio  sin  la  autorización  previa  del  poder 
ejecutivo ;  que  los  arzobispados  y  obispados  estarían  vacantes 
hasta  que  se  hubiesen  terminado  las  negociaciones  con  el  papa ,  y 
que  los  clérigos  secuffires  ée  Goionibia  serían  independientes  de 
toda  influencia  estranjera. 

En  ^824  la  lei  de  22  de  julio  declaró  que  la  república  debía 
continuar  en  el  ejercicio  de  los  derechos  de  patronato  que  los  reyes 
de  España  se  arrogaron  sobre  las  iglesias  n>etropolitanas ;  catedra- 
les y  parroquias  en  esta  parle  de  América. 

£1  gobierno  venezolano,  ejerciendo  de  hecho  el  patronato  de  los 
reyes  de  España ,  queda  en  posesión  de  los  derechos  de  estos ,  es- 
presos en  la  bula  del  papa  Alejandro  VI.  El  gobieruo ,  pues,  viene 
á  ser  cabeza  de  la  iglesia  y  dueño  de  nombrar  para  todos  los  obis- 
Irados,  prebendas  y  beneficios,'  sin  mas  dependencia  de  la  corte  de 
Roína  que  para  su  sanción.  Se  acordó  antiguamente  que  el  Santo 
^adre  no  tuviera  comunicación  directa  con  la  América ,  sino  por 
el  conduelo  dei  consejo  de  Indias,  y  que  lodos  los  breves,  bulas  y 
dispensas  fuesen  remitidos  á  España  para  recibir  la  real  aprobación 
antes  de  pasar  á  América.  El  gobierno  de  Vetiezuéla  exije  los  mismos 
aerechos  y  así  lo  ejecuta  su  clero.  En  virtud ,  pues ,  de  tales  con- 
cesiones ,  pertenecían  á  la  corona  los  diezmos  vacantes  ^  los  subsi- 
dios y  demás  productos  de  dicho  ramo ,  y  por  eso  el  congreso  ele 
4855  abolió  los  diezmos  el  16  de  abril  y  fijó  las  sumas  necesarias 
para  la  manutención  de  los  obispos ,  dignidades ,  clero  etc. 

La  república  está  dividida ,  en  cuanto  á  lo  eclesiáslico,  en  la 
forma  siguiente.  El  arzobispado  de  Caracas,  compuesto  de  las  pro- 
Tincias  de  Caracas ,  Carabobo ,  fearquisimeto  y  Apure.  El  obispado 
de  Mérida,de  la  provincia  de  este  nombre  y  las  de  Trujillo,  Coro¿ 
Maracaibo  y  Harinas.  El  obispado  de  Guayana ,  la  provincia  asi 
llamada  y  las  de  Cumaná,  Margarita  y  JBarcelona.  Caracas  es  la  seile 
del  arzobispado  y  Mérida  y  Angostura  la  de  los  obispos  sufragáneos. 


\ 

—  500  — 
£1  arzobispado  de  Caracas  tiene 

(Jna  población  de    .    .     .     465.7^  4  con  -i  87  parroqaias 

£1  obispado  de  Mérida  .    .     290.709  con  -176         id. 

.  £i  obispado  de  Guayana    •    -156.510  con  460        id, 

TOTAL.     892.955  coa  525  parroquias. 


ORGANIZACIÓN  MILITAR. 


Empezaremos  con  lo  que  dice  M.  Depons. 

«  La  defensa  de  las  antiguas  provincias  de  Caracas ,  Maracaibo^ 
<i  Barínas ,  Guayana ,  Cumaná  é  isla  de  Margarita ,  estaba  conGada 
«  al  capitán  general  residente  en  Caracas.  Los  gobernadores  parti- 
d  culares  tenian  el  derecho  de  tomar  provisoriamente  todas  las  me- 
«  didas  que  las  circunstancias  indicaban  ser  necesarias  ;  pero  de- 
«  bian  dar  cuenta  al  capitán  general  y  ejecutaban  definitivamente 
«  sus  órdenes.  A  primera  vista  parece  que  todas  las  provincias, 
«  obi'ando  bajo  un  mismo  plan^  debian  hacer  nna  defensa  mejor 
«  entendida  y  mas  eficaz  que  si  cada  una  obrase  separadamente. 
«  Esío  seria  efectivamente  cierto ,  si  ellas  hubiesen  estado,  sufi- 
<f  cientemente  cercanas  para  poderse  socorrer  mutuamente;  pero 
ü  la  inmensa  distancia  que  las  separa  no  permitía  la  reunión  de 
«  las  fuerzas  comunes  sino  con  macha  dificultad  y  lentitud.  Habria 
r  sido  mas  ventajoso  que  cada  gobernador  hubiese  podido  seguir 
ó  libremente  el  impulso  de  su  honor  y -sus  talentos ,  en  lugar  de 
«  hallarse  obligado  á  esperar  las  órdenes  de  un  capitán  general  dis- 
«  tante  cien  leguas  de  las  provincias  mas  próximas ,  y  de  temer  su 
«  desaprobación ;  si  la  cuenta  que  se  le  daba  no  justificaba  bas- 
«  tantemente  lo  que  se  habia  hecho  por  via  provisoria. 

ü  La  tentativa  que  un  enemigo  podia  hacer  sobre  esas  provin- 
«  cias  ,  debia  naturalmente  ser  por  mar ,  y  por  débiles  que  fuesen 
«  sus  medios  marítimos,  habrían  sido  siempre  superiores  á  los  que 
«  debian  proteger  las  costas ,  no  teniendo  España  por  toda  defensa 
«  sino  algunas  embarcaciones  destinadas  á  impedir  el  contrabando 
«  y  que  una  sola  jíragata  habria  derro  tado.  No  habia  nada  que 
«  esperar  por  mar;  veamos,  pues,  la  reiistencia  que  podían  oponer 
«  por  tierra. 


I 

—  301  — 


DEFENSA  DE  LOS  PUERTOS. 

«  Maracaibo  estaba  separado  de  la  provincia  que  se  llamaba 

•  Venezuela,  por  el  lago  de  su  nombre  y  por  monañas  desiertas 
a  que  ocupaban  un  espacio  de  mas  de  60  leguas ,  enlrc  Maracaibo 
0  y  la  primera  ciudad  de  la  cual  pudiese  esperar  socorros ,  que  era 
«  la  de  Trujíllo,  y  para  obtenerlos  era  necesario  el  consentimiento 
«  del  capitán  general  cuya  residencia  estaba  á  mas  de  4  00  leguas. 
«  Esta  ciudad  no  debia ,  pues,  contar  sino  con  sus  propias  fuerzas 
«  para  rechazar  al  enemigo.  Un  solo  fuerte  defendía  la  entrada  de 
<i  la  Barra  y  una  batería  la  entrada  de)  puerto.  Sus  milicias  forma- 
«  ban  5  compañías  de  blancos  y  4  de  gente  de  color. 

«  Coro  á  50  leguas  al  E.  de  Maracaibo,  no  tenia  para  su  dé- 
«  fensa  sino  un  pequeño  fuerte  en  el  puerto  de  la  Vela ;  pero  la 
a  esterilidad  de  sus  costas  y  la  pobreza  de  sus  babitantes ,  liacian 
«  la  mejor  defensa  de  este  país. 

ff  Puerto-Cabello  sin  contradicion  era  el  puerto  mejor  defendido 
«  de  la  capitanía  general  de  Caracas ,  á  50  leguas  al  E.  de  Coro. 
o  Un  fuerte  construido  con  bastante  inteligencia  como  solidez ,  si- 
tf  tuado  en  una  isla  al  N.  E.  de  la  ciudad  y  cubierto  de  una  gruesa 
ff  y  numerosa  artillería ,  hacia  la  defensa  principal.  Sus  fuegos 
9  se  cruzaban  aunque  de  lejos  con  los  de  los  fuertes  situados  al 
«  O.  sobre  el  cerro  de  la  Vigía.  No  halia  guarnición  fija  en  Puerto- 
tt  Gabello.  El  regimiento  de  Caracas  enviaba  en  tiempo  de  paz 
«  una  compañía  que  se  relevaba  todos  los  años.  En  tiempo  de 
fl  guerra  se  duplicaba  la  tropa  de  línea  ,  reforzándola  con  las  mili^ 
ci  cías  de  Vale  ncia  y  de  los  valles  de  Aragua. 

«  La  Guaira,  sitr.adaá  25  leguas  al  E.  de  Puerto*Cabello,  estaba 
«  destinada  á  defender  la  rada  y  á  garantir  la  capital  Caracas ,  do 
«  la  cual  dista  mas  de  tres  leguas.  En  este  puerto  se  han  desplegado 
«  g(  andes  medios  de  defensa  para  hacerle  un  baluarte  de  Ja  capi- 
n  f  al.  Erizado  de  fuertes  y  baterías,  parece  desaliar  al  enemigo  mas 
«  temerarío.  La  agitación  continua  de  su  rada,  tan  incómoda  para 
(t  el  comercio ,  era  en  caso  de  ataque  ventajosa  á  los  españoles. 

•  Todo  parecía  anunciar  que  con  buenas  tropas,  no  solo  se  podía 
«  impedir  un  desembareo,  sino  destruir  las  mas  fuertes  escuadras ; 
«  y  aun  cuando  el  enemigo  fuese  dueño  de  la  Guaira,  le  quedaban 

•  grandes  obstáculos  que  vencer  para  llegar  á  Caracas. 


f 

—  502  - 

«  La  ciudad  de  Barcelona ,  á  50  leguas  al  E.  de  la  Guaira ,  tiene 
«  en  el  Morro  un  pequeño  fuerte  para  proteger  la  entrada  del  río ; 
«  pero  muí  insignificante,  porque  en  Pozuelo  bai  fondeadero  y  buen 
« lugar  de  desembarep. 

«  La  ciudad  de  Cprn^náf  i^^  leguas. al  £,  d^  Qarceloi^,  tiene 
«  un  fuerte  ex\  buena  posicioq ,  aobra  una  colina  en  la  parte  orieu- 
<(  tal  de  la  ciudad,  y  babria, habido  algunos  obstficulos  en  cum  4e 
«  desembarca*  También  bsibi^  una  batisria.  en  l^  hoia  del  ría, 
«  frente  ^1  fondeadero.  Formaban  la  gii^rniciou  5  camp^E^fii^  4fi 
«  frofia  de  lío^a  y  las  milicias  con^puestas  de  '1 4  compañías  <|e 
«  blancos.,  do$  de  artiUería ,  dos  de  caballeriai  -11  de  gente  de  cqr 
.«  iqr^  5  de  iof^interia  de  i^ifi^Of  y  una  o^a4ia  de  artillería, 

«La  isla  de  Mar^rita ;  silbada  4^2  leguas,  al  N.  de  Cuioapá  , 
«  estaba  clpfendida,  (\or  la  na^raleza  y  por  una  con^pania  de  tropas 
•  dp  línea,  4  com|i^aías  de  infantería  d^  liailicias  4e  blancas ,  UQa 
1^  de  artillería  y  4  compañías  de  gente  de  calor.  Tenia  ademas  unos 
«  fuertes  que  dominaban  la  capital  y  otros  dos  pequeios  en  lo^d^ 
t  pi]^er(a3  principales. 

(i  Ango^mra^  á  i£0  leguas  de  Cuiuana ,  calculanda  la  distancia 
ik  por  el  caipino  del  mar  y  del  rio ,  el  cual  tiene  sv^  boca  á  85  lefias 
«  de  la  ciudad  de  Angostura.  Es(a  se  bailaba  defendida  por  las  for- 
1^  talezas  de  Gi^yana  la  Yii^ja ,  donde  babjia  dos  fuertes  4e  ai^tiguii 
«  construcción  que  estaban  á  52  leguas  de  Angostura.  £sta  ciudad 
v  teQía  up^  pequeña  fortijKcaciou  de  la  parte  de  tierra  y  un  fortip 
«  al  urente  sobre  la  orilla  izquierda^ 

n£Si£i|^ARC9  COBRE  I^j^  COSCAS. 

«  Todo  lo  que  se  acaba  de  decir  se  refiere  solo  á  la  defensa  de 
<i  los  puertos  de  mar ;  pero  en  el  caso  de  un  desembarco  sobre  las 
a  costas,  es  suficiente  comparar  la  estension  de  estas  mismas  costas 
<c  con  la  población  de  las  provincias ,  para  formar  idea  de  la  resis- 
«  tencia  que  encontraría  el  que  emprendiera  una  invasión.  La  ra- 
«  zon,  ilustrada  por  la  esperíencia,  eslá  bien  lejos  de  mirar  los 
«  fuertes  de  las  ciudades  marítimas  como  esencialmente  útiles  á 
«  la  defensa  del  país.  Su  conservación  y  las  guarniciones  de  todas 
«  estas  for{a1ezas  cuestan  enormes  sumas  en  tiemjM)  de  paz.  Ellas 
«  deberían,  pues,  cuando  menos,  garantir  el  pais  en  tiempo  d^ 
«  guerra  de  los  insultos  del  enemigo ;  pero  todo  lo  que  pueden 


I 

«  tf^e^k)  á  algfiimi6^Aia»  d«  4ts(«|]^^4e  oWm^  Si  wa^  coavaoeion 
o,  s9grd4a>e£toblQ^ese  m  4^09^0  d[e  D««9Í0U€^ ,  puraque. nin^iia 
(|  inva^km  s^  hi€iie«e  «loo  pw  lo^  Iqgsir^forvtifiQd^W,  o  bien  qve 
«  ]«^  opstafi  no  p^^$iBQMlBe;iíi  otrpí  punten»  4q  4cj0^iab»rGo  sino  los 
«,  puertos,  no  bai  duda  q«iei s^  dab^ia  ei^tónc^ eiE^enr  todo  de 
«  los  foerles,  baterías  y  redactes  que  estuviesen  en  buen  estado 
V,  y  hiei^  aerTtdos*  Feí^o  en.ui#  cofsjta  cuyos  puertos  foi^tifl^dos 
f  están  á  €fO  y  ^  ao  lpgua$  distai^te^  e^trei  sí ,  y.  en^  doiode  en  ^s 
%  intervenios. baí  multitud  d^  ríos,  fop^e^^ros,  radas,  ensenadas 
«  y  playas  cómodas  para  desen^rcar  to4a  la  gruesa  artillería  de 
ft  los  puertos  de  mar,  d^  eual^vúer  modo  quejeUa  afia  ^tíspuesta, 
«  no  so!api^^te  es.  inútil  sino  nodiya ,  porq^$  retiene  para  so  guar- 
«  da  artilleros  y  tropsi^  que  no  pu^n  qtti(ar«e  4el  lugar  en  el 
«  caso  que  un  deseipbarcQ  ijeQutada.  en  un  |i«»nto  aislada  de  la 
«  costa  bici^e  su  socorro  indispensable» 

«  Por  la  r^alucion  q«e  l|«  sufrido  ja. (¿ictic^^n  la  guerra  que  se 
«  ba  becho  al  fln  d^l  újma^  sigl^ ,  la  má&ima  dei  no  dejar  c^ras 
ii plazca  f Minies ^  ba  desaparecido^  del  mifu^inodo  que  1«  de 
«  procurarse  una  retirada  áníes  ded^r  /(k  batMa,  Las. victorias 
fi  de  los  ejército^  franceses  Mnprobadc)  tamló^  1^  bondad  de  esta 
«  reforQ(ia;  adop^<pa  poi^  l^s  cajiitav^es:  ^^  valientes  y  mas  espieri^ 
ft  m^entadps  de  la  Eurc^.. 

a  Si  este  nu^vo  método  se  apl^^a  át.pais^^s  como  la  Europa,  sem- 
«  brados  de  ciudades  en  doi^e  el  arte,  se  ba  «postado  para  bacerlas 
<x  inespngiuables ,  ¿  con  cue^ota,  ma^  rabión  no  {¥¥irá  aplicarse  en  la 
«  invasioadf.  un  pais  <|ue,  no  tiene.  soJ^^-e  l^co^a  sino  algunas  for- 
«  üficacioAes. situadas  á  grandes  distanc¡A&  las  unas  de  las  otras  , 
^  y  q\ie. nece^tan  casi  meses  enf^eros  para  comunicaj:^  entre  sí? 
«  Atacar  los  pu^rto;s  de  mar  ^eria  4ar  la  preferencia  á  puntos  en 
%  donde  tpdo§  lo^  medips  de  del^jo^a  ^stáa  rettnido4 «  y  en  donde 
«  necesariamente  los  ol^láculps  spn  mas  grandes ;  mientras,  que 
«  desembarcando  á  alguna  distancia ,  no.  bai  que  temer  ni  artille- 
«  ría  ni  mucbas  tropas.  El  deseipbarco  se  encuentra  necesaria- 
«  mente  protegido  por  los  mismos  navios  de  la  espedicion ,  que 
«  dirigiéudoise  eu  seguida  á  cruzar  delante  de  los  puertos,  atraen  y 
«  mantienen  alií  las  tropas,  y  disminuyen,  por  consiguiente,  la 
«  resistencia  queesperimenlaria  el  ejército  destinado  á  la  conquista, 
« si  esta  división  de  fuerzas  no  tuviese  lugar.  De  este  modo  el  ene- 


I 

—  5*4  — 

«  migo  peneira  ca  las  tierras ,  aumenta  cada  dia  sus  fuerzas  con 
«  nuevas  conquistas,  y  cortando  la  comunicación  del  interior  con 
«  los  puertos  ya  bloqueados  por  la  escuadra,  tos  obliga  á  rendirse 
i  á  discreción  por  el  hambre,  sin  que  le  cueste  uñ  solo  cartucho. » 

Tales  son  las  reflexiones  bien  justas  y  meditadas  que  dejó  estam- 
padas en  su  obra  M.  Depons,  á  las  cuales  es  preciso  añadir  algunas 
ideas  mas. 

El  primer  objeto  que  indujo  á  los  españoles  á  fortificar  algunos 
puntos  de  la  costa,  no  fué  ciertamente  el  de  defender  un  pais 
desierto  é  inculto  entonces  y  habitado  solo  por  indios  desnudos  y 
por  fieras  ;  fué  su  intención  poner  á  cubierto  las  primeras  colonias 
de  las  invasiones  que  en  aquellos  tiempos  hacían  los  temibles 
Filibusteros.  Las  pocas  riquezas  del  interior  venian  á  acumularse 
á  estos  punios,  que  eran  almacenes  y  depósitos,  y  allí  también  llega'- 
ban  las  mercancías  europeas.  Un  pais  nuevo,  cubierto  de  espesos 
bosques ,  y  conocido  tan  solo  por  los  naturales ,  no  presentaba  sino 
uno  que  otro  camino  que  frecuentaba  el  hombre  blanco.  Puestas 
pues  á  cubierto  la  entrada  de  estas  únicas  vías,  parecía  entonces 
asegurado  el  interior ,  y  las  baterías  y  fuertes  protegían  los  depósi- 
tos del  pillaje  de  los  ladrones  de  mar. 

Un  segundo  objeto  no  menos  importante  para  la  España  tenían 
estos  pocos  baluartes  levantados  en  las  orillas  del  mar  y  tan  distan- 
tes entre  sí:  era  para  que  en  caso  de  un  levantamiento  contra  el  po- 
der de  España,  los  adictos  á  esta,  las  tropas,  las  armas  y  muni-* 
clones  tuviesen  unos  puntos  de  apoyo  ínespugnables  para  los  hijos 
del  pais ,  que  privados  de  los  medios  de  poder  batir  murallas  arti- 
lladas y  sin  los  conocimientos  del  arte  de  atacarlas,  debían  necesa- 
riamente hacer  infructuosos  todos  sus  esfuerzos.  Los  españoles,  en- 
tonces dueños  de  la  mar,  podían  entre  sí  comunicarse ,  proveerse 
de  víveres  en  las  islas  vecinas,  combinar  ataques  sobre  toda  la  lí- 
nea á  la  vez ,  recibir  por  mar  todos  los  refuerzos  que  podían  llegar- 
les y  con  ellos  atacar  en  muchos  puntos  ó  concentrarse  en  uno  solo 
é  internarse  en  el  país  para  obrar  en  combinación ,  á  fin  de  apo* 
dorarse  de  lo  perdido  y  someter  á  los  rebeldes.  En  cualquier  evento 
funesto  siempre  contaban  los  españoles  con  muchos  puntos  de  apoyo 
donde  replegarse ,  allí  formarse  de  nuevo  y  de  nuevo  entrar  en 
lid. 


u< 


-r  503 


Dé  IiAS  fortificaciones  de  la  costa  en  el  estado  actual; 

t     ■  '     .  .  .         ■        '        • 

!Si'aiitíguainen(e  aquellas  fortificaciones  no  hnpcdkn  nn  dt^sem-^ 
barco  ó  invasión ,  y  solo  servían  para  proteger.  los  almacenes  tJel 
comercio  y  tener  pnntos  de  retirada  para  contener  los  pueblos  que 
qnisíesen  sacudiré!  yngo  de  los  españoles,  en  él  dia  servirían* rae 
nos  para  irbpediir  la  invasión,  porque  bai  mas  vías  abiertas  para  in-'  • 
trédneirse  en  el  interior,  y  en  este  se  encuentran  mas  medios  para 
subsistir  un  ejército.  Algunas  baterías  con  artilleros  bastarán  én  los 
jmeftos  para  contener  un  áfaqne  de  piratas;  porque  no  consfdefa- 
raos  aqnellos  como  pnntos  de  apoyo  para  operaciones  inilitares  rili 
como  depósitos  de  almacenes  de  guerra' y  ínueho  meno^  aun  como-* 
fortificaciones  que  puedan  proteger  el  país  en  caso  dé  aíaque,  sien- 
do fácil  probar  que  son  ahoi*a  tan  perjudiciales  como  fueron  óíiles^ 
k  Fos  españoles  en  la  guerra  de  la  independencia.  Estableceremos . 
algunos  príncipios  que  nos  conducirán  paso  á  paso  á  la  prue1»a  del 
aserto. 
-  Nada  diremos  de  las  revolncíones  que  desgriciadamente  pudie- 
sen turbar  la  paz  de  la  nadon ,  porque  \ú  vemos  lejanas  y  bajo  un 
punto  de  vista  consolador^  teniendo  por  máxima  que  el  éxito  de 
toda  revolución,  en  gobiernos  populares,  depende  absolutamen- 
te del  consentimiento  general  de  la  opinión  pública  y  no  de  la ' 
fUér!s&  armada  ni  de  la^  fortalezas.  Se  ba  visto  en  América  y  en 
Europa  qufe  esta  ffláximá'*es  verdadera.  En  Francia  en  ^850,  en- 
Venezuela  en  ^853.  En  el  viejo  mondo  era  un  pueblo  contra  un 
rei  con  fortalezas  y  ejércitos  que  le  eran  fieles;  el  pueblo  sin  em-- 
birgo  venció  y  espuísó  al  rei.  En  el  Ñuevo-Mundo  eran  tropas  con' 
for'féíefeas  éontra  un  gobierno  republicano ;  pero  el  pueblo  vendó 
y  espulsó  ^  los  rieUeldes.  Acordémonos  que  ttídos  los  puntos  fórtifi-' 
cádos,  esceptuando  uno,  estaban  en  manos  de  los  insurgentes,  todo ' 
el' ejército  y  marina ,  con  pocas  escepcloncs ,  estaban  con  ellos  y  por'^^ 
dios :  todos  los  parques",  almacenes  y  cajas  nacionales  mas  impor- 
tantes estaban  en  su  poder.  En  fin ,  el  gobierno  quedó  destruido  al 
primer  golpe  y  roía  la  unidad,  quitándole  la  cabeza  con  fe  espul- 
sfoñ  del  presidente  y  vice-prcsidente  da  la  república.  Pues  con  todo 
esto,  la  revolución  no  se  logró,  y  si  rs  cierto  que  corrió  sangre,  lo 
es  también  que  los  sublevados  sucumbieron  á  la  opinión  general 
del  pueblo ,  que  casi  en  masa  se  levantó  para  defender  sos  derechos 


—  3iM — 

y  dio  nneros  días  de  gima  al  esclareddo  genial  Páez,  que  antes  de 
la  deportación  det  presidente  Vargas  foé  elegido  por  este  para  que 
emprendiese  el  restablecimiento  del  orden  oonstitocional.  Gloria 
eiN»a¿iiiio  Y  otralA  Várgaa  por  íq  paemioii  y;aolirt0'en.8l.noa- 
bnaníaitto :  áPáea  por  la  pronla^ej^oeiieíoadaiui  enm^o^en  qfie. 
demostró  tanta,  viiiad  como  andaiia^  tanto  palriotism*  como  h^ 
mm.  En  esta  ocasión  adquirió  un.  tiaM^re  isservada ¿pocos  de  los*. 
fundadoMade  la  repóbliea  ;pues  !♦  cupo^  UtdKha  de  salvarla  de  la« 
anarquía ^»1,  despotade baher ayudado  ádefendarladelainfa^ 
sioii  eatrato^Nsa  :  dcd»le  pvea4e  giMvrflra  y  de  ciudadano^ 

Sí  es,.p«ea,  la  nMioría  qiie  iodignada  se- levanta  por  el.  uUn^fa 
qpe  á  sttSi  l^es  se  i»ogara  ¿,q9ien  podrá  ountenerla?  Ella  se  dari 
H^  {orma  de  gobíeroa  que  qpiara^  y  auaqfie*  los  soldados.  06upea^ 
nuidMis  forliieus  no  podrán  oprimir  la  mafi^ia^  sino  por  pocos  an«> 
Bréalos  y  al  alcaoie  de  su. catión,  Si^es^nna.  f^Mxdon  que  quiene  na^ 
poae^  sus  €apri€ho0«a)i|aia<j  «laraestá  que  laanayoriabamsucuoH^ 
blr  la  pacte- uaBaoc^  ;si;esta'iieBeenisu  poder  íortaleEas ,  iuyrá dei?>^ 
ramar  mas  sangre,  pero  su  caida  será  inevitable,  será  mas  ruidesa,. 
y  su  castigo  ma»  tra^midu  sarvirá^de  saJudahleicjiímf^  paranwa- 
tener  en  la  futuro  la  pública  U^aaqniUdadv 

Por  tanto^  no  exanoáiíaienios  baja  este  puAto  de.  vista,  lasrfertilif*': 
cacUmeai.^no  por  la  aecmria&  que  puedan  ser  á  la  defsnsa  del* 
ipais. 

El  estado  actual  del  erario  na  permite  ahora  ni  le  permitirán 
basta  de  aquí  á  alipinos  siglos  que^nuestcas  costa»  estóa  erisadas  de 
forlifícaciones,  asi  coma  están  llenas  de  puertos  y  fondeaderos.  Los^ 
|K)Gos  de  estos  ^e  tienen  alguno»  tuertes  o  castillos  están  eonstrui- 
•dos  de  modo  que  no  pueden^frir  im  bambardsoj.  ni  el  tesoro  pú- 
blico está  en  disposición  de  ponerlos  al  atoigo  de  esto  j,  y  si  lo  es^ 
tuviera  >  mda  babria  liecbo  con  fortificar  una  entrada  y  dejas  mu- 
chas abiertas.  Si  encerramos  nuestros  elemeatosdergaerra  en  este 
obras  antiguas^  la  mayor  parte  arruinadaay  todas  insuficientes  par^. 
un  ataque  que  le  hiciese  una  potencia  marítimai,  nos  esponemos^i.. 
perder  todo  en»  un  día.,  quedando  ún  medias  de  poder  resistir  ola 
invasión  del  enemigo^  Pero  si  estos  elementos  están  en  lo  interior 
y  precisamente  en  los  puntos  estratégicas  dei  pais,.  no  serán  presa . 
de  Diogjana  poteocia  consoló  una  espedicioo  marítima  :  necesitará 
combinarla  con  una  terrestre  y  e&ta  tendrá  q\}e  arrancápnosloe  de 
las  manoS;  pedio  á  pechO;  y  no  co»  la  superioridad  de  su  artilteria. 


rmMWitM  iiptimnwnai,  itt«riéeiiii9^qiM0aM  dí^ptfdMMi^pMDH 

dvciir  «L  mwMK  tMoipii^  «d  afe9ta  ¿aanadaéo)  #bi  «i  aapiÁn  im 
iUMtra»ibabí(aiile$i,.4««  babiaii:«pm4aaQiMU«i  liahtaita»)9Ma|^^ 
nabte»  » i  laS'  pedgia  6u<w4er  fwacwiniittlc?  lotfitf  á  loa  iotHppaap 
cnaiidoiiM  vjanMiafaiQainatídai>pav  lasseipaftalaa.aoii  awai<y  amsaiiK' 
lea  que  daeoeaoqíao^i  Adevm » a»  eaoa^  vháoaiaaaiittoMiM^ 
loíg^  u  pmrtfli4a;a|Mii»«i0'a.«aflaliiir  lipid^mite  üa  al  faüma»! 
4al  naia  €iia  asásantanaiáft  iíirpBaiiéidaí  _  aaotiltiíaMit  t  dasatii^ft:/ 
Ito  iud»mliigaiR  4laacafla«Maay.y  da^it  %  conaidaiar  aiwitaa  nawin  p 
fiaÍM  00  eMlariii»aatA4a9loi^rirf0>ailMfliDfi*, 

P«r»  «Ifaaaai  loiaaiaacaria^^  aad«  bibria  bacho.noi  aftasadmeoH 
foadaaa  eavM^a  oiMliaa  fmtíím^  Hm  iMaiaa»  maqcliar  al  imf^. 
tam  v^n9QimhmB^9i§^qfimmmmb^]m  paMl^y  Boriairaailflai 
WBÍmm^  vmm  mmo  á  laa»  aiaadrifaní  ^aoi  aa  a»  taaini ,.  p«»Mi 
id^cia*  a«  Meatfa»  wm^xm  laapaaiianí  de  teraar^aa  atláa  ertatAui; 
oai9lto9aa^«ottlaaiarinMaihaaaias'3  paia  %uae  eaaM,.  piMsiao  I* 
fiarja  nadiiNa'  coa  aitoaa  igutaa.,  perqM  üoflalaoa  caniínaa  ao  Iv 
gaaiiHliaiaai  haaot  UKi^detaiaiinMrttaa  arliUeiía. 

6atl#  ai|HMal^sedad»oao  daa  aauaaoBancíaB :  Ja  wm^  ífm^fmm 
aaaleiier  el  fobiam»  I»  aéniaaaaaDtiaalas  faatalazaa  aataalet ;  A 
d<d)a.M|iaMr  eaialanifN^dakaíCtAdBdMKiaiqíi^aitáo  haUíaanJag 
^  imalasafia».  aaataiiaiteY  delind^  alra^fiáe{)ara.«BaagM^ 
^ikaitaRior  hiiiai^íofeab^iavle8.ea  ka  aetoal  fmmaMí  paíi  satf 
i»  iiapciiprittta  del  BusiB»  f  d  pecboidaf  au  yjoa* 

aa»  a*  DBfBM^  Mir  pa». 

Por.  tefua  aolacades^tehiáyisftoícnfaiAttiU  saaé  detodar  Ma 
costas,  y  bien  se  puede  decir  imposiUeaB  al  asladaí  ^sante;  «á 
fnes*,  salo  el  iiil«r¡áMr  esifiíisaept&te  dé  defensa*  Deade  que  «aeiie- 
OMgp  baya  di8iej»baF^o  e»  onalquier  punto*  y  se  Jba^  iaiaodaei4t 
«a las  tíerrasi ^es^á  eaputealo á  ser alaeado. á  cada  insianie.y  sia»*- 
Ifte  ea  pontos  veot^osoa  pasa,  lea  deba«H*es  y  peajadlaialea  i  loa 
íairaseiaeB.  JUi  aaaoo  de^  e^  aa  elanL  £1  paas  tiaaa  tras  aanaa  bíea 
mafcadea  que  eorreK  ea  toda  sti  esleiiaían  paiafelaa  á  la  oaaÉa-  ¿a 
primera  es  la  zona  de  la  agrtcuiUva^  enaadade  ateay  eaaarpadaa 


t 

imnaám,  alprnas eortes  Itinmas ,  shüteséM»  f  en  "gMéral  mr 
¡NOS  q«ebi«do  y  nonlaoso  :  hé  ttqoí  la  príiMni  linea  de  defensar 
apoyada  co  la  .segunda  que  es  la  zona  de  his  |)astm.  EMe  país  ttfé^ 
Ikno,  cortad»  por  ríos  y  caitos,  con  grandes  palmares  y  cq^cios* 
inineDsos  desprovistos  de  vegetales,  con  lugares  <pie  te  Inüddan.  y* 
sus  ríos  generalmente  anebos  y  profundos ,  fbnnan  la  segnndalínea ' 
i^Miyada  sobre  la  zona  de  los  bosques ,  terreno  inmenso  habUado- 
seio  i)or  fierat  é  indios  salvajes ,  qne  sin  embargo  ofrece  algunos 
caminos  por  ios  ríos  navegables :  esta  es  la  tercera  línea.  Sobre  es- 
tas treb  grandes  fajas  puede  obrar  con  inmensa  ventaja  en  leda  la* 
eBieosioadel  territorio,  porque  poeos  tildados  (y  si  digonlogun  en- 
r^[ieo,' no  me  equivoco  )í ,  podrán  marcliar  entérrenos  escabrosos  y 
subir  con  mayor  prontitud  sobre  cerros  empinados,  como  lo^  pue^ 
de  liaoer  el  babitante  do  la  primer  toqa ,  sobremiinera  ajptói  para 
delBiiderla:  por  el  conoómieoto  ^U4  liene  do- los  lugares,  la  eos* 
tambre  de  su.  clima  en  el  que  suelo  hacer  4  6  leguas  al  día  sin  mo- 
loatarae^  y  soteo  todo,  el  tipo  endispararel  fusil  eon  que  está  acos- 
tnmbnido  á  malarias  aves  al  vuelo  y  en  la  carrera  á  las  Oeras.  Eh 
la'  segunda  zona  eneootraooMs  el  campo  del  bomb^lliii^i^.  So  cli- 
ma abrasador  no  le  molesta^  el  caballo  cansado  lo  reemplaaa  con 
otro  salvaje  al  instante^  la  carne  sin  sal  es  satánico  alimeoio,  tos- 
MfS'0ias  grandes  oo  le  impidan  el  paso,  y  oon  su  catello  iiace  hasta 
39  leguas  al  dio.  La  destresa  en  mamejaiAe,  el  eonocimanto  de  los' 
lugares:,  su  audaiia  y  su  modo: de  alaearv  sorprender  ó  relnunse,  le 
ba^n  lemible  y  acaso  invencible^  £u.  la  tercera  loaa  eao(Mitramo& 
lias  iitidtos  salvajes,  que  se  unen  á  los  del  pais  cuando  la  guerra  se* 
enciende  :  así  lo  hicieroii  en  la  déla  iodependeñcta  y  así  lo  barian» 
en  caso  semejaote,  siendo  los  mejores  ausiliares  en  aquellas  selvas, 
en  donde  no  liai  otro  camino  que  el  .conocido  por  ellos.  Allí  es  el 
non  plus  ultra  de  cualquier  ejército  :  tiene  que  detenerse  por  falta 
dé  camino ,  por  falta  de  Yireres  ^-áüeniiK)  que  los  defensores  en* 
«lentran  los  unos  y  los  otros. 

Nunca  .llegareu>os  á  quedar  reducidos  á  esta  ^llima  Irníea.  Seria 
fircoiáo  que  el  enemigo  pudiese  cubrir  cada  legua  cuadrada  con  una- 
fuerte  división,  y  esta  que  estuviese  bien  atrincherada,  porque  do 
lo  contrarío,  correrla  riesgo  á  cada  instante.  Abora  bien  ¿con  qué 
■e  alimasiaba  tanta  gente?  Cuanto  mas  numerosos  son  los  ejéreltos , 
eotí  BUis  dificultad  encuentran  modo  de  subsistir,  y  si  son  pequa-^ 
nos,  pronto  llegan  á  ser  destruidos. 


—  ¡m  — 

Elpvebto  que  deei^a.QaQaervtr  tn  libertad^  ne  peroitle  que  le.pri- 
j^endeella  ;  el  pueblo  que  qlúere  deSendcr  sus  hogares  y  sa,  hé- 
flOr,  no  es  Yoooidapor  ningúa  poderiitiiBáBO  i  s»  lo^taraLi^eáiidrlo 
á  ia  miseria  y  pero  do  someierió  al  yugo  :  lei  enemigo  reeonrerá  •! 
paiS)  pero  no  mandará  eo  el :  no  será  dneSo  sino  del  terreooqne 
4)isa.  Caaodo  la  oaeioo  en  masa -se  letanle^  bal  más  finensa;  de 
la  que  se  neeesUa>  y  tiene  ademas  fórmkiables  ausiliare»^i)w:le 
ayuden  á  la  defensa.  El  clima  solo  dará  razón- de: asa  (mrera  p4H 
te ;  la  otra  quedará  al  eargo  de  nuestríos  malos  caminos ,  de  las  as- 
aras montanas,  de  los  ioíseotos  y.atin  de  las  fratás  que  ayudarán 
á  ia  causa*  nacional.  Queda^rá  por  último  una  .tercera  parle  qqe^jie 
disputarán  las  balas  y  las  lanzas.  Nuestros  oerros  escarpados  y  tupi- 
aos de  bosque ,  nuestiros  llanos  áridos  ó  anegados  y  nueotraés^esiw- 
las  é  inimfeB^as  selvas  valen  roas  que  mil  fortalezas  en  imestras  dite- 
ladas costas.  Estas  que  pcescülañ  innumerables  ptintos  de  desem- 
barco á  un  enemigo^  ofrecen  también  otros  tantos  á  los  amigos  qée 
nos  proporcionasen  armas  y  municiones ;  bien  que  no  habria  gran 
consumo  de  ellas,  porque  con  solo  las  marchas  y  contramarchas 
seria  lo  bastante  para  concluir  con  el  soldado  europeo,  en  un  clima 
abrasador,  húmedo  y  no  muí  sano  para  aquel  que  al  desembarcarse 
debia  esponerse  á  las  penosas  fatigas  de  una  campaña,  en  la  que  por 
todas  partes  veria  el  enemigo  sin  poderlo  nunca  alcanzar,  y  que  no 
lo  dejaría  dormir  una  sola  noche  sin  molestarlo  ni  alarmarlo ,  da- 
ñándole y  matándole  hombres.  No  podria  contar  con  que  una  ba- 
talla campal  asegurase  su  conquista  porque  sus  masas  no  podrían 
marchar  como  en  Europa,  su  artillería  no  tendría  caminos,  sus 
caballos  á  los  pocos  dias  estarían  inutilizados  solo  por  el  efecto  de 
los  pastos.  Tendría  que  seguir  unas  columnas  que  los  atraerían  á 
los  desiertos  ó  sobre  serranías  empinadas,  y  desapareciendo  delante 
de  ellos ,  solo  sabría  la  noticia  de  que  estaban  á  mucltas  jornadas 
atrás  ^  ó  bien  las  veria  al  frente  en  otro  cerro  mas  elevado.  Esta  es 
la  guerra  verdadera  que  el  pais  debe  hacer,  porque  es  la  que  no 
puede  soportar  el  soldado  europeo  y  la  que  asegura  al  venezolano 
iun  triunfo  cierto  y  ventajoso  con  poca  pérdida ,  pues  no  tiene  que 
temer  el  clima ,  los  elementos ,  ni  las  escabrosidades  del  terreno.  A. 
lo  cual  debe  añadirse  que  conoce  palipo  á  palmo  el  teatro  de  la 
guerra,  y  que  en  él  jamas  se  le  podrá  forzar  á  aceptar  un  combate, 
á  tiempo  que  el  enemigo  estará  espuesto  á  recibirlo  á  cada  ins- 
lante. 


M  te  MpiMiMi  4iát  MtiktímmUB  mhaéhcím  «•  mnmi  ra 
-€MuifaiiB,  QsanMúj  Ifargnto^  Gantoto^  MttnMllM) ;  «stando^pm- 
tisioiiiimmite  éopriniíte ias «de  <iafáe»,  B«ur#ékiiM  t  "COKo.  fiii 
••deontmi  comanáanle ésl^eaélíllo  ^Mettát^nlftíBami de^MÉFi- 
'«ilb».  »U  fMPia  iieniMiiiDte'fa»  ieftIÜ  éti  Mmttdlo>M  la  itepáüliiga 
lÉolaasdénd» á  &4K  MÜadM,  dtsüiMdM eMre  Mamcftifce ,  FiMflo* 
CiitoQllo,  ValeMia,  CoHwtiá  y  GMyana,  y  >ttDO6^eB40Btaeament«s 
-ée  muida  4d  Marnaiiita  y  kpv»e. 

La  Aiei«a4eia'iiad(Ni  r«po«a  iolil^e  la  «¿ft^a  ^q^ia-^o  fli^de  d» 
léoi^leneft :  la  itmivaj  qUe^wtá  IMnada  á  baeérloa  sarvieloB  qii& 
'#B  iNiedeii  neteslMr  m  Uetope  de  pa,  ynioiiMa  de6#l5iQdi^ 
-AtMRde  arlttlerfe,  iiiAmtería  y  eabifiüMrfa  :*la  otve-es  la  de  f^ertm, 
-%Qe  0B  la  i}«e  dabetmareliar  en  «MD-de  «Mitfiíeek»  iminrídr  o^taqtte 
-^ÉleHer ;  su  i>d»en>  weiende  á  «;f98  4fi8k  idue»  de  tuém^MoM^ 

Ldb  do6  estados  aígvietttasdanltt  «na  idea  ism  éipceflataneiada 
A  eslM  féenas^ 


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N(KA.  ia  major  D«r(e  de  lof  cuerpoi^  coaojpañfas  sueltas  y  medias  compafiías  ya  organin» 
doi,'c8e0den  del  «ñínimuii  defuersa  qme'^  el  i>eila«ienilo>«n  las  firereaelMief  M  art.9; 
iNiro  jc»)culánd»U>g  todos  coa  elmioiniuiii .  resulta  c^ue  Ja  milicia  nacional  orfanUada  hasta 
M  en'  la  i^púbnca  aseleodo  á  «5^669  bottibres ,  del  modo  ligoiente  : 


InCMaitii •••  ifi^iT 

CabaUería <683  . 

{i^rlüferk »SIS  '< 

]i|fflAto#ia «•,«» 

.     CaJi)aUena «...      7,i00 

'I    ÁrtmeHa — 


^15 


f 


EDUCACIÓN  PUBLICA. 

«  La  masa  general  dé  los  vcDezolanos  estQTO  sumida ,  dice  Res- 
« Irepo ,  en  la  ina$  profunda  ignorancia  cerca  de  tres  siglos ,  ó  0r 
«  todo  el  tiempoquo  \o^  españoles  dominaron  este  pai$.  Los  indios, 
c  los  esclavos ,  los  labradores  y  arlesanos ;  es  decir,  los  cuatro . 
«  quintos  de  ia  población  y  no  aprendian  á  leer  porque  eran  raras 
« las  escuelas  primarias,  que  solóse  encontraban  en  algunas  villas 
a  y  ciudades  populosas.  Acaso  el  gobierno  español  en  todo  el  tiempo  . 
«  de  su  dominación  no  dotó  una  sola  escuela  de  las  rentas  reales. 
f  Las  escuelas  primarias  que  Cristian  estaban  dotadas  por  los  ca- 
~tt  bildos  ó  por  fundamnes  que  backn  los  particulares  para  la  eda- 
•  cacion  de  sus  hijos. »  El  Repertorio  Americano  se  espresa  sobre 
^esta  materia  asi :  «  No  entraba  en  nuestro  sistema  de  educación  la 
'4  esgrima,  la  danza,  h  equitación ,  la  música,  la  natación  ni  el 
4  dibujo.  Un  velo  impenetrable  nos  encubría  14s  idiomas  eslrau je-  '- 
jk  ros ,  lá  química ,  la  historia  de  la  naturaleza  y  de  las  asociaciones 
«  civiles,  una  sombra^scura  nos^eparaba  del  coQocimiento  de  nues- 
«  tro  propio  país,  de  nuestro  plaaota  y  de  la  mecáatea  general  del 
«  universo ;  no  teníamos  la  menor  idea  de  las  relaciones  que  Jiga- 
«  ban  al  hombre  en  sociedad  y  á  las  sociedade&.eBtre  sí.  En  suma, 
«  ño  se  enseñaba  nada  de  cuanto  el  hombre  necesita  saber.  .  ^ 

«  Como  no  estaba  en  los  intereses  del  gobierno  el  ilustrar  la  - 
«  fueoto  dé  doñdé  lá  sociedad  recibe  sus  mejores  impresiones,  ni.- 
«  prelparar  á'gozes  puros  é  intelectuales  á  aquel  sexo  tierno^  cuyos; 
«  encantos  pudieran  contribuir  tanto  á  la  virtud  y  á  la  dicha,  no 
«  se  trataba  sino  de  hacerle  conservar  durante  todo  el  tránsito  de  la  . 
« cuna  al  sepulcro,  la  frivolidad,  la  inconstancia,  los  caprichos  y  ' 
«poco  juicio  de  la  primera  edad.  Ensenarla  á  manejar  la  ¡aguja,  , 
o  inspirarle  el  gusto  al  adorno;  he  aquí  á  lo  que  estaba  reducida  la  ' 
u  educación  de  nuestras  mujeres. 

«  Viciada  así  la  fuente  que  debía  dar  ciudadanos  útiles  á  la  pa- 
« tria,  no.se  encon traba,  por  todas  partes  en  América  mas  que  disipar 
«  clon,  falta  de  costunlbres,  inagcion  perezosia,  galantería;  y  el 
trestranjero  instruido  y  sensible,  al  mismo  tiempo  que  hacia  justi- 
xiíkilialéótó  iiatural ,  al  carácter  ameno,  franco  y  hospitalario 


—  545  — 

i  del  hofiftbre  afaerioano ,  se  afll§;ift  al  yer.  su  misera  cmidicion  io*- 
« cial ;  efecto  iodo  de.losprinópiosdapoilitíeaquedi^ed  srg'oi'vi 
«  han  gobernado  eslasregHMiesi »       . . 

Mas  con  todo,  áprineifáos  del  siglo  presente  se  faideróa  alanos 
^adelaotoaen  la  educaoieift  pábliea.  En  4696  se  fandó  en  €arácas  al 
«eminaríopor  el  llustrisioio  frai  Antonfo  González  de  Acoüa,  y  io 
-acabó  el  obispo  D.  Diego  de  Baños.  En  4722 .  el  A  9  de  agosto,  fue 
•autorizada  por  el  papa  la  fundación  de  la  unitersidad  dé  Catáeas , 
<;reada  por  Felipe  V  en  el  año  anterior ;  mas  no  tuvo  logar  su  Ittai^- 
guracion  hasta  el  N  de  agosto  de  4725.  Ix)s  estatutos  fueron  apro- 
hatám  por  el  reí  el  4  de  mayo  de  4  727. 

Antes  de  4  800  Mérida  tenia  en' colegio,  y  en  4S04  el  vioerector 
fué  enviado  á  Caracas  á  solicitar  el  establecimiento  de  una  univer*- 
«idad,  en  donde  los  habitantes  pudiesen  graduarse  ^n  verse  obli- 
gados á  ir  á  Santafé  ó  á  Caracas  ;  pero  itOfMftdo  obtmierlo«  En  tíifó 
real  cédula, espedida  por  Gártos  lY  á  coiisvíUá  del  svpreflio  consejo 
de  ludias^  eDupareoer  fiseal-^  y  qne  esiétia  en'  Garáae^  (i  lo  menos 
¿ules  de  la  irevolneioo)  se  prohibió 'el  estabiecimiénl&xle  la  uñivier- 
«idad  de  Mérida;  porque  &.  M.  no  coBsidek*aba  cenvWente  se  lii^ 
ciase. general  la  ilustración eu  América:.  Con  tbdo  éa'4ft#2  se  conta- 
ban en  ehcolegiO'dé€imeas  64  pensionistas  yy  402  éaterqos.  Había 
doce  cáfodras,  dos  de  filosofía)  cuairo  defteotogía'^  dos  de  contio- 
versia,'  uóa  de  filosofía:  nwFal ,  una  de  teología  positiva ,  ufaadc 
dearecho  civily  una  de  derecfaé  eanónico  y  una  de'mediclna.' 

El  gotóeróode  Colombia- habla  ya  designado  les  bienes  de  los 
«onyéntos  para  l&edocadpn  de  la  jnfentvd,  y  d  i^bremíD  dé  Ye- 
nezoela  ^lieého  despvés  todos  losiesfuerzos  para  que  set  dHtsMsx  la 
enseñanza  en  la  masa  de  Ja  poMacien,  y  al  eívoto  ha  estiablecido  ya 
once  eolegfbs-entoe  €utnaiiá  y  Valenoia/Guanare ,  Barquisimeto , 
Tpcoyo  ^  TrujillD ,  Coro^Mapaealboy  Gnaféiía,  Margarita  y  Cala- 
bozo. .  -        -••.••  ■'•  •  •-.  .  :•."•':'. 

Exislen  las  umvehsidadés  de  Caracas  y  Merida  ^  naontádas  bojo 
un  pié  «mi  difecente  decoino  las  tenia  el  gobielrno  español.  Tam- 
bién |iai  iitia  academia  militar,^  la  que  se  enseña  las matémiücas 
en  todo&.sii6:raiiios;la  fortüeaoioQ,  fitrtslleríay  dibujo,  elci^  que 
..viene  á  8er«n.i^aétel  deíaícialfes.ilusiradoa.  Los  estaUoeímieoios 
privadoadeedttoaoÍEín.qup  enasten  en  Caráeasj  soíiddsxokigioa'^oc 
4obrepiijaD>á  h»  qiíe  han  de  este  giénero  en  toda  1a¿  república,  el 
-colegio:  dé' .la  Ift^eiModéncia'y  elde  la  fsa ;  jaitanas  dos'basaa  de 


í 

«duGuibn  :{Mira  imli» ;  mxná  ftím  »ccigidas.  la  ^MpBogémi^ie  rntuéUof, 
fonnada  baoe^peeo  üanfo^  .  bá  «pediéomia  ítei  «obra  Jlaa  «gaiid« 
primarias,  á  fiu  de  que  no  baya  paiV0q«ia'«iii>e«ta>miti6aon, -jpvfls 
«ueata  toda  la(r6piÚiiíeB:««  «oíd  iiifll«éd|io  «anik  aMvela /por  cada 
:4i4 ,  onaPEid»  k  fUiem  ^^Otanada  ancata  «no  por  aaia  M.  ^Vardad 
•6s  que  de  525  paifOf{ms)bai  4^1)4 ¡aín.itiiigiiii «estabtotimíieiito ipú»- 
Meo  de  iostnicdion  itrimárta.  Ei  ieitodo^qoetse  pone  al  fio  de  >aate 
atUeuio  dará mndMilisiainiasifiíaeta^ipor  aalar  formado  «tpresa- 
meBle  por  k  ámtcdon  de^etiudios ,  «cayos  (trabajos iJiaria  pronto 
«OBpcer  aa  sutilidad  en  ioda  Jatrepúblíoa.  Pero  átítes  de  tevolinar 
este  articulo,  es  indispensable  Iranmitr  aquí  Ío  que  W  iDepons 
•díoe  ien.su  obra  sofaiDe.'la(iiplltiidifce!faiB.vaiieKOlaBoe  para  lasoien- 
xiaa. 

fiiLa  vefdftd  es-^ueJas  fiEi0yo6'de^Cosla4Ffr]Be  tiauen  oliespiritn 

«  yíto,  penatnitítey  saa  nios>awcepttbles.de  apüeaeton  que  los<erío- 

^a  Uq6  fnaneeaes.  Son  áiÜMioses  á  esémmB  foatttaaa;  ^modalas  ty  >«&- 

^  Uiae ,  en  fa»  ajeceioiosille .armas ,  de>equllafiae*y>de  4anM ,  an 

•a  nonsica  y  «dibujo ,  matarías  de»ei»io«idas  .tu  ^su^téucaeion ',  mas 

a  por  «18  adeiatttos^an'laaiaacnebis  y  por  hif  jEocfUdad  que  damuas- 

€  tnm<jen:a|meader4jalid»caGboíaitil,  pQade:jfi«9Hna^iie*80h><  dalla  á 

•  i  sus  dtapoalaioMS  wia¿di«aflioo  qi»  laaijoanduzaaalieouocimianlo 

•  deiCiertafi,matarias(qite>liaKMtBeliaB  las^ideaa,  foroMnuel  |uicio^y 

a'ODltivaBtáliaHleiiilíHiianto.  Hasta  afavaa  laiateeacíonide  loserio- 

« líos  espáñsi»  tba  pattie ipado  ^de  las  ¡préoeapueiones  >iiaeion«leB 

^.q«B  baaian  anrar  eaatldsiden  toda  lo  qae  no  eDa.de  >aa>aacion. 

>«  Estaban  en:b  Éitíma  peíaaasion  detque  jm>  iiabia'peBaamienljOs 

;« íjüatoB,  piioaÍpÍDBia<Sltdas,jiBaBal  aana»  ainoaeaii»(lasiaapaitolesyy 

f  *  qae  par  iuaacoooafctaebeía  jBatnraltiiorpodfeninénnB  de  fordar  sus 

a  pradttockuea  maadáadolasicom  fas  /de  q^hob  paiaes.  (Faso  se  :baae 

«aabora  iumi:tclÉKrjaTOliicioD  en  iUs  iopUiionea,  yitodaranuada  >q«e 

«  la  generación  que  va  á  reemplazar  la  que  está  en  su  ocaso  ,#fr»- 

^la  cera  al  nanadot^orppeQdidoeLespectáealoHdatiBBa  aaljcwa'moral, 

>c  producida  por  ktoaiiionidfl  bsabádurktnaeíoiMii  oan  la  parle 

^a  áttl  d€tios<pHnatp(a6  de  otros  pnd^tos^  iBuJafedto  ,etada  la  juve»- 

^[iudeapamlla,  i  peDetfada.de  ia  áaiiiiáiaoeiaide^tt  ialaaaokKi,ipvo- 

a  eom:  ÍB8tfttlraeiefreadoi<oan  avades  laa  obraaiA»  p^íMe  «atranfaros* 

4íPaoos>sonios.íéfeaa5iqna  ao  bigeiua>qittnidaDaitoadiieif'él)f«aa'-' 

t«  cas  y  ai  toglas  íáui  aalo^eLisaiDatfeo  «fe  iad  áffenáairia^  ¡MmoAo 

jiifflaBrieBjte&aBHaa>piMrdiiMbrib4ne|latjMiiBMi|i^jpa^ 


—  3Í5  — 

«  primero.  No  piensan  como  sus  padres,  quecreian  que  la  geografía 
«  era  una  ciencia  superfina  y  que  la  historia  del  género  humano , 
«  refiriéndonos  lo  pasado,  no  nos  ilustra  para  el  porvenir.  A  sus  ojos 
«'hoi  reconocen  en  él  comercio  una  teoriá  digna  de  mas  honor  del 
«  que  hasta  ahora  le  han  hecho  los  esj)año]es,  y  ja  no  es  mengua  e3- 
«  tudiar  las  reglas  de  aquella  profesión  y  y  adoptarla  como  oGcio.  » 
Cuando  se  escribía  esto  en  M  804  ,  ciertamente  que  no  se  profeti- 
zaba ,  sino  que ^sa .veía  la  macchauieila  nacioii.  Si  volviese  ahora 
Depons  á  aquellos  paiBes,  le  sorprendeiKan  los  progresos  que  se  han 
becho.  Yeriacultivar,  y  producir  ópiqíos  frutos  á  las  ciencias  y  las 
artes  ;  vería  prosperar  la-agricultura,  el  eomercie  y^ki industria  ; 
i^erm  adelantos  en  las  inat«málicaS|:ymodatfsmui  cultos.  El  dibujO; 
la  músíca^latequttacion  yia  danzs|,  ramos  de  utilidad  y  de  adorno, 
«Ipasecerian  á  su<fi$ta  cullivaios  «bu  tanto  guéto  como  esmero. 


«•  « •• 


de  las  escuelas  primarias,  así  públicas  como  privadas  que  existeo  a 


Babceloh*.... 

BAlQCISIaiTO 


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enezaela,  con  varios  datos  qae  maDifiestan  el  estado  de  este  ramo. 


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ESCUELAS   FV9L1CÁS. 


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4,893 
198 
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1,002 
103 
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407 


219 


8,095^ 


*■■ 


—  5<«  —       .       .  ' 


ooMBaao. 

A     la    í\Aí»»An     Aák     IaA     AS||A9&/jMt¿  V^||^V||a1^^   *Al^Mr2^«¡A    JI^^M^^ 

pais  una  nadon  qae  pudiese  llamarse  comerciante :  esta  era  la  ca« 
ribe,  á  quien  el  célebre  Bumboldt  di¿  el  epíteto  de  Bukhares  del 
r^uevo-Minidir,  por  sos  eiiiyicuiH  gnelrreras  }  pur  su  aelifllKld'ci^ 
ttDWiai.  CsülíneaB  el  gén^a  de  sa  eomerda,  jEóoLeSr  adivinado 
entre  tribus  todasdesnndasiy  sin  otras  necesidMes  que  la  de  co- 
mer |  y  esta  la  satisfacían  cdn  la  pesca  y  caía  4|ue  les  ofíecfan  en 
abundancia  los  ríos  y  lals  selvas.  Sin  embargo ,  lea  hacían  faltai  loa 
ctfoneffparspintarse^y  partíknfermenfie  d  coURild(^  q|a#  habla  lidb 
introdncidc^por  ios  (Skríbes ;  eilos  eran  los  yandedbres  del  eoUry 
traficabaa  tambiemcon  los  venenos,  piedras  de  taríoi  colores,  fer* 


cadones,,  esteras,  guapal  y  Oabnilas  de  morlche  para  sna  ehlncbor- 
ros.  Tódi^s  esUis  objetosi  sertian  á  su  especnfaclon ,  y  asitnismé  U 
Étíf,  S!lt»taiNili  qne  lo»iiidio8|(Miien<ciial  si  (basa  Skúcnr,  y  oon  eUa 
f  algnor  oroueni  pedazos  también  hadan  comencié  b»  iidioa  de  QoíO 
y  Bal quisimelo.  A  este  tkiñco  sucedió  el  de  la  y^nta  de  e$claYO^  en 
cambio  de  fierramiedtas,  es^ós  y  cuentan  de  yldrlo,.  desde  que  It)s 
«sropeiB.ltedaran  á  faH  coitab  de  Venetuftbi.  Los^Oarilkt  faneían  por 
eso  lejanas  incursiones,  asi  como  en  el  interiorada  M  Gubyanai  los 
Manativilaoos  y  lo^  Guaipudabis.  Vendian  á  los  infelices  i(idios  que 
iMnpnettdian' ed  hs< selvas' ó  eirsos  haibftadonesl,  y  los*  compraban 
tasHBdpaíioki  y  ptrUoüíeses  <}ue  hacían  «rte  infamo  tráfico*  En  45M 
prohibió  el  rei  de  España  que  se  esclayizase  á  los  lidioé ,  poitque 
desde  i  505  Labra  f  rotnuígado  una  lei  en  la  qi^e  eni  permitido  á 
iliPespiillotew  hnean  eüAayos'átiadbt  los^ameiícaneB  fue  fuesen  de 
origen,  caribe. 

£1  comercio  de  Costa^^Firtie,  y  sobre  todo,  eli  de  la  provincia  de 
Caracas,  se  redilda  |friadpalnítente  á  la  pesda  de  perlas.,  Las  islas 
át  Maigarite,  Cnbagna,  Coche;,.  Punta-teayat  y  lai  boca  del  rio  del 
Hacha  eran  célbbreb  en  el  si^Io  xti.  A  príndpiob  de  la  conquista  la 
isla  de  Coche  prodipcra  cada  mes  el  valor  de  ^50i0  marcos  de  perla. 
£1  ^íaU)  qjnoloi^clfifiialiss^  dlelrpei  socaba»  del  prodoeto  de  tas  pee* 
las  subía  á  4  5.000' ducados,;  que  según  el  valor 'del  lUetal  cuaque- 


DHJMJBW»  tmii*i>Mn>  f MM^qpMrél^  mldr  ie  k&fcria»  bastareis  aik> 
de4^3#  ««hia  w  ai*  <oaí<»M^ái»a<MM>lh4ai«ai«  Fasa  joagar^c^ 

y  Génavüif  deb^maav  aattwiaiHna»>ti»?  a»  «l^«íilIle  poríodo  todas  la» 
miaM^e  JMmaíaa  aala  dfkbvi  2^ebttiM4a  daraa  y  ^Ele  hr  flota  d« 
Oiwudo  ^aaeaía M  aqBidtoa  (Moapé^nai  iwa,  (Rorqna  caai  oortama  • 
caBea>^ da  2.IHMI  laarcoada:  i^iaiai^  Lat^paiias«aEair  ta«ta ana i»lieitaf^< 
daa^  cuaatA  ^ve-al  liiía>aii¿ia(f  atf  babiatintrodiMÍdo»efi  Ensopa,  por 
daa  iwtea  diaaiatiialiBaitUí' o|Niotáaa<  Bnr  OaBUümUtíe^eB  donia: 
loa^  Paleologpa  faatoha»  leaUda»  aabiaoM-dé  litlos^la  perlas «,  y  pote 
GraBAda^.  aoiidMiciaida  loaFaye^  aaanoa^  ^ua'daipiegabav'  tw  m 
coate  lodo  al  Iv^ oaiealal.  te  ptrlaa  daii  (Maala  fie^t^refaiini  álaa: 
deJuaiéiioa';:  paro^  la^eaaHdaii  de  laaiiklÜMaa  ao^arr  inaaoír  poaoí 
daspoeadal  desoubriiMAto' daü  NiiÉW-tttaiMkh  Xaitttí  en  Ifidk  co*  * 
mo «a* Eapaikb I» isla  de> Cotafta  emi «l» oi^toáe  fiMafam  espeean 
1aiioiiaa*mereABtfleai  Lai||e«ia)da'Uiafieffla»dfaBiMlttf6  oápídaioaDle^ 
liáeift<fiiie»-del  ñffio  )^ip  y  4e9D]i;diae  Ltfety  IwÉbi»  oeiad»  áirte»  de^ 
H%%.  MimimiséA  ée  k»i  MlatíaMav  «Mr  iaáUvbM  oa»  DsnRsha: 
exaotitod  laa^pariaa aoA» toat^ y th oaolmeiü^Dtó de diamaotea dia» 
mioofOMMi  ia^  pesaa^di»  i^  perlaa-de-CSkibtlpM.  Áh  aMoaa  fiemp»  laa 
ostras  que  producían  las  perlas  se  hicieron  mas  esoasaa,  popqiÉi  aa 
pcapagaciair  baUa  akJo  k^pedída^par  h^iipradorilf  destcooeton  de 
miUanas  de  eoncbasi 

Guando  ealo«9^aeedía.,  ti  ialieitMr  de  laa<  Mrraa  daba  mui  peen*. 
Laa  práinoiiaa«oloB08'erao>  uao&coa^istbdbres  qoenor  badán  olía 
cosa  que  recorrer  el  paáa  en^  todas  diiieoaíoaes  en  bvaca  de  oro.  Sia 
eiubar^iXuaidoya/iM^dcttafeiida^ eOBiieMk>de  las perlaa,  temos 
en.  i^M  la  árdqn  para  que  «uaataiaatie  vkiiiese  ¿  Borhuraia  por 
coauia  da  loa  tecMOB  ua  barco*  de  EaM^p»  >  pn^eodo  alediDdere-^ 
cho,  cardado  de  aian«aBÍn)iiealaa*y  JoeveadarrÍM,  SaoelM^BDiedio  íüé 
qpíeii  ob(«ve»de«la  ocx^le  da  Sapaaai^aqiael'periiDiso^,  y  se^  puede  de* 
cir  que  estosi  vm^  fae]ioa<  laa^paioiems.  pekiiúooe»>  oiercaiitües  da 
la  Uefica  firtuedeVea^aaelai  c«»  la  aiadre  piina^ 

Las-  boteudea^  esjabloeidoa  aa*  Gacazao  eaeilaroa  ea  f654  á  los 
babitaaiea.de  Oarieaa<  á  dledíearae  á  lo»  trabajos  de  la  agrioaltura. 
Pronto  comenzaron  á  esportar  cacao  y  pieles  ea  canlidades  suficien* 
tes  para  baeev  traficaron  los  holandeses,  de  quienes  recibían  gé- 
neros europeos  qiM  neeeiüaban  los  colonos.  £1  tráfico  aumentó  de 


f 

td  mod^^  que  laworiMifoW  jasgó  qn»  éát  úkÉfb  éé  hsummltr 
publicóse  na  deereta  rapnnnéiiddfe ,  yseftitaroii  dos  nátíns^esde 
España  cargados  de  géneros  para  la  colonia,  sobre  los  éfiál«s  se  pu- 
sieron derechos  ébQrmes.  Los  holandeses  á  eofRéeoéiicia  ñé  esto , 
cemensaron  á  baeer  un  comercio  de  contrabando ,  y  "(^ncRan  tan 
barato,  que  les  era  imposible  á  los  comerciantes  españoles  poder 
competir  con  dios.  No  contentos  los  contrabandistas,  quisieron  te- 
ner en  la  costa  un  punto  para  sus  operaciones,  y  al  efecto  eligieron 
el  lugar  que  hoi  ocupa  Puerto-Osibello.  A  las  cliozas  de  pescadores 
que  ea  aquel  sitio  había,  añadieron  I09  contrabandistas  holandeses 
otr^  habitaciones  que  hicieron  construir,  y  permanecieron  síllí  por 
tiAto  tiempo,  que  mas  bien  parecía  aquel  punto  una  dependencia 
da  la  o^nia  de  Guraiao  que  no  un  logar  sujeto  al  gobierno  d& 
£spana«  Como  aquel  punto  iba  tomando  importaircia^  las  antoría- 
des  espáni)las  intentaron  sojetarleí  á  la  obediencia,  valiéndose  dé  la 
fuerza;  pero  bailaron  tan  decidida  resistencia,  qne  renunciaron  á  ' 
}¡L  empresa^  y  desde  entóaees  l^erto^Gabello  vino  á  ser  el  pm»(o  de 
Reunión,  de  un  populacho  Hoencioso  y  desmoralizado.  Por  ultimo , ' 
á  principios  del  siglo  pasado  sus  habitantes  fueroof  rédocidbs  á  la 
leí  y  al  orden  por  las  fuersas  navales  de  la  compania  guipuzcoa- 
^úy  qqe  á  la  sazón  empezaba  á  entrar  en  relaciones  con  las  provin- 
cias de  Venezuela. 

Habiendo  tratado  de  renovar  sus  especulaciones  en  4790  los  co- 
merciantes españoles,  no  hicieron  mas  qne  incitar  el  espírtlu  de 
actividad  dé  los  holandeses,  los  cuales  abarataron  en  todo.  Por  este 
tietópo  el  producto  anual  de  Caracas ,  f  olament^  en  cacao ,  era  de 
65.600  quintales.  La  estraceion  por  las  aduanas  reales  subia  á 
24.000,  detsu^rtie'qüelos  holandeses  recibían  los  44.000  quintales  ' 
reslantés  en  los  navios  que  hacia¿  el  contrabando.  La  corle  de  Ma- 
drid., notando  esta  diminución  én  susrientas,  y  resolviendo  poner 
fin  al  trato  con  los  estranjeros,  recurrió  á  confiscación  de  propie*- 
Híaáj  i  maltas  y  castigos  sobre  las  pembasque  «fiíesen  descubiertas 
habiendo  el  contrabando  con  los  holandeses.  A  p?sar  de  estas  me- 
didas cl  tráGco  ilícito  continuaba,  y  no  siendd  suficientes  los  mediosí 
adoptados  para  impedirlo,  recurrióse  al  espediente  de  formar  una 
compañía  que  monopolízase  en  la  capitanía  general  todo  el  comer- 
cio de  ingreso  y  de  esportacion. 

Esta  compañía,  establecida  por  una  cédula  de  Felipe  V  en  4728, 
se  componía  de  vizcaínos  que  podian  dedicarse  al  comercio  sin  per- 


— OÍ  — 

jjQ^<Ngr  de  i]|ii|gii^;nod«  sa  nobleza.  Le  era  yero^de  msi^f-Mh^ 

J09  mo^i  Yeaezuela  dos  navios  de  4^  á  50  eaoonesy  cargados  de 
.prodactos  espaSole»  que  debían  ser  desembarcados  ea  el  puerto  de 
la  Guaira.  Los  primeros  buques  que  despachó  la  compañía  saUe* 
rDn  en  n50  del  puerto  del  Pasaje ,  época  en  que  el  coronel  D.  Se- 
bastian García  de  la  Torre  era  gobernador  de  la  provincia ,  y  el 
S^  D.  Msrlia  de  Zardízabal  comandante  general.  El  rei  aulorisó  á 
la  compañía  para  que  sus  buques  cruzasen  desde  la  boca  del  Oii- 
Qoco  hasta  Rio-Haciía,  podiendo  apresar  lodos  los  buques  que  en- 
contrasen por  la  costa ,  oc^upados  en  hacer  el  contrabando ,  y 
reforzar  el  cruzero  con  los  buques  aprehendidos,  si  lo  tenia  por  con- 
Texüeute. 

£n  ^754  la  compañía  obtuvo  el  permiso  de  enviar  á  Venezuela 
los  navios  que  ella  tuviese  á  bien  despachar,  efectuando  sus  cam- 
bios pn  San  Sebastian  ó  en  el  Pasaje ;  pero  el  regreso  debia  tener 
lugar  en  Cádiz  para  pagar  los  derechos.  La  compañía  tenia  los  dos 
tercios  de  los  productos  de  las  presas ,  por  hechos  de  ^atiabando  ft 
y  el  otro  tercio  era  de  la  tripulación  del  navio  aprehensor^  Las  mer<A 
cancías  pagaban  los  derechos  de  entrada  en  Caracas  y  se  vendían. 
Lo$  cargamentos  de  cacao  debían  enviarse  a  España ;  pero  si  el 
buque  no  podía  trasportar  todo ,  les.  era  permitido  á  los  factores 
remitir  el  resto  á  Vera-Cruz.  La  compañía  se  comprometía  á  pro^ 
veer  de  mercancías  y  víveres  no  solo  á  Venezuela  sino  también  á 
€umaná,  Margarita  y  Trinidad.  £1  gobernadar  de  Caricas  en  su  Ca- 
lidad de  juez  conservador,  tenia  el  derecho  de  decidir  sc^re  todo  lo 
que  correspondía  á  la  compañía  :  pero  esta  podía  apelar  de  sus  de- 
cisiones al  consejo  de  Indias. 

En  -1742  la  compañía  se  hizo  dar  el  monopolio  del  comercio  de 
la  provincia  de  Caracas  y  en  1749  estalló  la  revolución  capitaneada 
por  el  caraqueño  Joai)  Francisco  León,  fundador  del  valle  de  Pana- 
quiere.  £M  9  de  abril  se  presentó  León  con  gente  armada  á  las 
inmediaciones  de  Caracas  y  el  20  entró  en  esta  ciudad  pidiendo  la 
disolución  de  la  compañía  de  Guipúzcoa ;  pero  el  éxito  fué  desgra- 
ciado, pues  aunque  por  lo  pronto  se  le  ofreció  la  estincion  de  la 
compañía ,  según  sulicítaba ,  se  le  declaró  luego  traidor  y  su  casa 
fue  arrasada  y  sembrada  do  sal.  La  misma  compañía  obtuvo  ea 
4752  el  monopolio  de  la  provincia  de  Maraeaibo.  Esiee  privücgíos 
escítaron  un  desagrado  tan  general,  que  el  gobierno  delerminó  hacer 
modificaciones^  Se  convocó  una  asamblea  compuesta  de  ua  q¿- 


c 

»*Í|{tHI' A^  stf^tob  9^  lli  c<)]Dp8fl&  Y.  ^  CAHÍTttcHiféff  'oÉl  pdih. 
Ssla  asemblca  lera  ]^n^dlda  por  él  gcjj^erfiador  gt^tveiral  y  ttt  ^k 
se  tnifé  de  IQtf  e!  ptetíú  M  caeao»  Lq|^  que  f«tKi«abáti  tettái^  ál 
-p^ó  eoüTettido;  tenisii  derecho  éee^tí^r  á  £spliirá  élt^to'db  ^ 
«lefeedfaift  en  natíos  de  la  compañía^  para  qüis  alK«e  reüdiese  por  Üa 
'jprbpía  (Jneirtsu  M^có ,  Santafé ,  Santo  Domingo ,  Pítétto*ltíco , 
Cuba  y  fos'Mas  Canarias,  la  vieron  eomo  inies  ia  libertad  dei^car 
4e  Yenetnefe  el  cacao  necesarit)  para  su  conStttnb.  £1  gobierno  de 
la  proTiñtiia  aprobaba  previamente  los  preíbios  -de  los  artículos  pro- 
Tenfen^  de  Europa. 

La  compañía  ^^mpleaba  paráimpedtf  el  contrabando  -t  O  embar*- 
caciones  armadas  todas  con  86  cañones  y  tr^>uladas  con  51^8  bom- 
bres ;  babia  ademas  ^0^  guardacostas  en  tierra.  Los  gastos  anuales 
de  e^te  «envicio  montaban  á  aOt.OOO  pesos  fuertes. 

Baje  la  in§uiracia  de  la  compaMa  la  eéportacion  del  cacao  tomó 
un  grande  incremento  én  la  provincia.  La  cosecha  de  este  artículb 
f  fué  evolaadc  en  ^^MO  quintale's  el*  afio  de  1755/  y  en  4765 
^mont6  á  4 40;659  quintales.  Cerca  de  ésta  época  la  compañía  con 
menoispreeio'  de  sus  deberes  habia  béCho  él  comercio  con  los  es^ 
tranjei'61  y  et  contrabando  con  los  holandeses  de  Curazao.  Este 
diBérden  produjo  séídíB^WDton,  y  poco  desperes  el  ministl'ó  éspafíol 
unió  ios  puertos  de  América:  al  comercio  de  la  Península  y  por  Ids 
■raglamentOB  de  42  de  otJiubre  de'^TTS ,  llamados  del  comercio 
itfr^,  quedaba  disuelva  la  compañía  guipuzcoana,  á^la'que  sucedió 
ktdeTilipiuásbajo  diferentes  reglas;  pero  esta  también  cesó  éu 
4780  por  las  reales  órdenes  de. 9  de  jnriío  de  47Y9,  habiendo  du- 
rado el  monopolio  el  espacio  de  50  años/  " 

A:  (wnaecuetfcia  de  la  tólima  gueí^ra  dtei  silglo  xrm;  el  rei  abrió 
los  puertos  de  Amética  á  los  estranjeros  iel  -i  8  de  noviembre  de 

4701 ;  maa^tá  orden  fué  rerdcadaí  el  4^  de  febrero  de  48O0.  Por 

>  < 

un  decreto  del  capitán  general  y 'del  intendente  de  Caracas,  fee 
ooQCédlÓQQ  20  de  mayo  de  Í804  la  apertura  de  los  puertos  á  los 
60tranjé!*O6  hasta  fin  del  año,  ó' la  éporCa  de  la  pdü^  durando  6  mé- 
aes'esloi  permiio/  La  decadencia  ^heral  de  las  ihanufóc^tura^  ¿e 
Españja ,  qué  obligó  lá  los  negocfauíes  á'  (ómar  tos  géneros  de  Ids 
•oíros  Ipaíatesf  para  provwr  d  las  colonias;  fué  causa  de  que  tuviesefn 
f»e  pagar  «oíwnaes  ctereolios  á  la  mbtTÓ|)dll ,  y  otros  todavía  mayo- 
res oualidé  Ifépiill  las  inet^e^éHás'a  su  ddsIfuD :  á^í  es,  ^e  áil- 
•t«$.del^redbiil2tó  el  üómerciátile  por  metíbr/'él  pirecib 'de  tós  artícú- 

» w^    -.ti      %  i  . 


SQútklor  Áo'  pañk  tnénM'dé  séttffr  y  dtei^it  úá't^strfrftti  de  eoátM^ 
Kdndó  ()cié  siétíspre  salía  en  faVor  del  estrdiijé^  qtiift  uo  vi^ndüaflriM 
^e  por  metálico ,  f  tais  isks  vecitídl^  mglesá^  ^  UentrMes  etkti'  láÜ 
^úe  fógf aban  e^tas  ganancial.  '      '        ''    ^ 

£1  coiif)er(^io  directo  se  liallaba  en  uh  estado  ^e  hngtiilfex  t)of 
las  muchas  traban  que  tedia  y  por  la  rivalidad  de  los  poderes  néú*^ 
frales,  pubs  la  metrópoli  apenas  enviaba  mas  délo  que  pód^  jLar 
por  sí  mi«na ;  no  mncho  mas  qué' frotas  secas,  lotíí  mili  IrifeWdi:'; 
quincallerías,  hierro,  aguardientes  catalanes,  vinos^,  aceité,  sédaá 
(astas  de  Barcelona ,  escabeches  de  afun  y  otros  artículos  semejan'* 
tes  de  poCa  importancia.  Los  géneros  holandeses  y  alemanes  totíS^ 
nuaban  entrando  por  sus  vius  antiguas  ^  dMosas.  ¿Ifoitádo ,  eúáié 
estaba ,  el  coíUercio  directo ,  várittba  macho  por  las  tMsüudés  dé 
iá  guerrii  ó  de  la  paz.  Mientras  doraron  las  úMma^  guerras  ,  sé 
reducia  á  pequeños  faluchos  que  sallan  de E^lía  cargados  ^epá^ 
p^rá  hacer  cigarros ,  que  el  amerk^HO  esfMñóf  ^HñMétéñ^^  eMÉé 
itno  dé  lós'^ríctriíos  éemas  lojo fyára  él,  pajgaín'é» á  Vetes 40  dHVüé 
por  la  resma.  A  este  artículo ^liao  Agregar'  afgbnos  agüat^ent«a 
Mancos.  Si  llegaban  tales  embarcaciones,  retomabaü*  cargadas  dé 
feacao  comprado  á  f5fesos  ñiertés,  el  ciAl  Vendían  á  442  en  M 
Península.  Sin  etnbargo ,  est&s  Roerán  pé^uíelMi»  a*r)^iítttra9  qué 
ííó  tenían  el  carácter  de  comercio ,  sino  de  lotcflrfÉs.      <    . 

Casi  todb  el  comercio  de  las  provi^ias  de  Cat^cttsr  con  Ta  metró¿ 
poli  se  hacia  por  el  puerto  de  la  Cuaira ,  <)^e  á  pesar'  de  su  mtít 
radia,  disputó  por  mucho  tiempo^ con  otros  puertos  lá  Véñteja  dé 
estar  mas  frecuentado,  la  razón  era  p<yrqtte  en  las  fnÉdiedtacfoiM 
de  Caracas,  en  donde  son  más  abundantes  las  producciones,  no  té* 
nian  otra  yentá  sino  isn  Ici  capitial ,  Iti  queá  su  turtío  úo  üas  podM 
ésportar  á  otro  paraje  qtíe  i  la*  Gtiafra;  y  como  'la  pbblacioú  dé 
aquella  dudad  éotisükdiiátoiáis'anMibs  de  iie(íé90dad ;  'eohMdídlid  f 
Itíjb,  él  cbmercíanle  ballabér  éü »tt  ititéfe^  él  fVée«é¿la#  el  puéHd: 
A  consecténcia  dé  esta  cireu&staé^tt,  f  uérto^CaMfo,  <)ue  estaba  tt 
30  leguas  á  sotavento,  iro  ie  eonsiOeral^a  nutíica  como  puerto  éé 
embarque  sino  para  los  drtíetüór  ^ue  mn  iniáédiacf^nes  j^rodüten 
y  parte  ée  \ós  correspémMfentes  á  los  valM^  AUlglta,  VsA^toi»'; 
S.  Carlos,  S.  Felipe  etc.  Si  acaso  sucedía  también,  que  el  producto 
natural  aumentaba  de  tal  suerte  que  escediese  el  valor  de  los  géne- 
ros importados  por  navios  europeos ,  los  comerciantes  iban  á  la 


( 

Goftíra  pvm  dispoo^  de  sos  earpmea(os ,  de  los  cuales  no  podían 
aperar  biiena  veota  en  otro  paraje,  y  después  iban  á  Poerto-Ca* 
bello  á  cargar  en  retomo.  Maracaibo ,  Cumani  y  Guayana  recibían 
cada  uno  dos  ó  tres  boques  de  España ;  pero  en  Maracaibo  no  po* 
dian  obtener  en  cambio  sino  café  ,  cacao  y  pieles  de  venado ;  en 
Cumaná  algodón  y  un  poco  de  café ;  en  Guaymiales  productos  4|ue 
Uevabaii  de  Barinas,  Barquisimelo  etc.  por  el  rio  Apure. 
..  $alo  una  tercera  parte  de  ios  cargamentos  que  solían  llegar  de 
la.Peniosula ,  particularmente  los  que  se  espedían  de  Cádiz,  donde 
se  formaban  las  tres  cuartas  partes  de  las  espediciones  para  Vene- 
zuela, consistía  en  mercancías  nacionales,  y  muí  frecuentemente  no 
componían  mas  que  la  cuarta  parte.  Lo  demás  consistía  en  géneros 
^straojeros  ,  que  el  comercio  de  Cádiz  estraia  de  diversas  partes  de 
Efuropa  y  que  se  naturalizaban  por  medio  de  derechos.  La  Francia 
abastecía  para  este  efecto  cerca  de  la  mitad ,  Inglaterra  cerca  de 
una  cuarta  parta  y  las  ciudades  anseáticas  el  resto,  escepto  algunas 
gasas  que  il)an  de  Italia.  Los  catalanes  eran  los  que  formaban  en 
V^ezuela  el  iQQaycHr  y  mas  rico  cuerpo  de  comerciantes ;  eran  acti- 
iros  ,  emprendedores  y  unidos  entre  sí.  Cuando  llegaba  algún  car- 
gameptp^  veinte  de  ellos  se  hallaban  quizá  convenidos  para  su  com- 
pra*  Trataban  de  sacarlo  de  las  manos  del  vendedor  lo  mas  barato 
posible  de  un  modo  particular.  Como  eran  los  únicos  capitalistas , 
y  que  no  tenían  competidores ».  uno  de  ellos  en  el  primer  día  de 
yeni|i  ofreeia  en  nombre  de  los  que  se  habían  asociado  para  este 
efecto  :los  precios  en  que  haK»au  convenido.  Si  los  rehusaban ,  al 
4ia  siguiente  iba  otro  y  ofreda  menos.  El  sobrecargo  se  hallaba 
embarazado  al  ver.  que  no  alzaban  el  precio,  y  frecuentemente 
ocurría  que  disponía  de  sus  géneros,  vendiéndolos  con  menos  valor 
de  lo  que  le  habían  ofrecido  al  principio.  Del  mismo  modo  alzaban 
diespues  el  precio  de  los  géneros  de  retorno,  sabiendo  que  el  bu^ue 
tenia  que  VQlver  en  cierto  tiempo.  De  manera  que  se  podía  decir  de 
ellos  quC)  manejando  solos  el  importante  ramo  del  comercio ,  eran 
unos  verdaderos  monopolistas  que  casi  seguían  haciendo  en  el  país 
lo  qiieiiites  habia  hecho  la  compa&ía  guipuzcoana. 
'  Itft  aportación  de  la  compañía  se  puede  calcular  un  aíío  con  otrq 
diesde  4750  en  que  empecé  hasta  4740  que  estalló  la  revolución  d^ 


—  525  — 

Jaaa  Francisco  León ,  en -I^SOO^OOOp* 

De  ^49  á  4790  qae  la  compaüía  qaedé  'di'- 

snella,  se  puede  calcular  un  año  con  otro  en  .  2,000,000 

En  los  años  de  4793  á  ^96 5,439,682 

En  los  años  signientes  dé  1792  tásta  4800  2,043,424 

Últimamente  antes  de  la  revolución  de  4840  4,776,500 

En  el  año  económico  de  48$8  á  48^  •  .  .  5,374,488  34 

.  La  revolución  que  hizo  Vcficzaela  ha  Ir^ido  glandes bieo^i^ jal 
oomcsrdo  :  ya  este  no  .está  eiiv  manos  de  ano^  pocos  monopolislas : 
eada  individuo  puede  dediowse  á  los  negocios  mercantiles  y  to- 
das las  naciones  pueden  concurrir  á  los  mercados  venezoiariot.  i)é 
este  modo  bal  competencia  y  de  ella  reaulian  venia^  en  la  compra 
y  venta  délos  artículos  necesarios  y  de  los  productos  del  país. 

íii  esprilsíon  de  los  españoles  produjo  nuevos  bienes  á  la  socte-» 
dad  venezolana.  Sus  bijos  se  vieron  obligados  á  entrar  desde  luega 
en  una  carrera  que  juzgaban  baja  y  no  digna  de  ellos,  y  de'este^ 
modo  abrieron  un  vasio  campo  á  las  especulaciones  mercantiles^, 
ao^olamenle  en  los  puertos  de  mar  y  ciudades  principales,  sino  en 
el  interior  del  país.  En  esta  carrera  hai  multitud  de  bombres  que 
se  ban-enriquecido  y  hecbo  un  nombre  en  la  sociedad  por  sus  em- 
presas ,  actividad ,  cálculo ,  acierto  y  viveza  en  las  especulaciones 
que  permite  el  pais. 

Para  dar  una  idea  exacta  del  actual  comercio  de  Venezuela^  véanse, 
los  estados  que  se  ponen  á  continuación  de  este  artículo ,  sacados^ 
de  documentos  oficiales ;  y  por  lo  que  respecta  á  lo  esportado  an- 
tes de  la  r/evolucipn  de  4840,  eslamp^inos  uno  que  servirá  paira 
formar  un  paralelo  con.  el  de  4837^  que  fue  publicado  en  uno  de 
los  periódicos  de  Caracas.  .... 


i 

mncIA  sobre  la  essfirt§4^m  *  Fim»^  ^*<^  ^  ki  vf^lwtion 
4f  tW^»  -con  l^  (Í4,  oñp  ^^^P'Mi^  4«  1^9$  ^^  t9d7^ 


. £iipoytA«t6fi  cMes de  íSiiO* 

Patos  fuertes. 
'  it<l,4M  fanegas  de  eacao  á  f  2  pesoar  50  centavos.  .  .  .  1,€83^,<N)0 

^  A^fim  paeas  de  ülgoáenf  á  fü  pes^i.  .........     48i^0M 

SP^eflO  quioiales  deeafé  á  1^  pea».  ....  .>  .  .  .     86O«É0 

l^jPOiy^M  UiNra3  4ltí4ffiU.áli>6aQ^oeiilevo«.  .  «  .  ^  .  ,  U2M^^O0(i 
;  l^^yW  lU»i;«i^  de  .veoilla  á^e^atam.  ....  ^  ...  .        7,.5(90 

l€OiQIM^  ^i^  d^  «arva^aFnllü  A  .9  c;entavQS  ,,....        1^,000 

t?i(í,(M».cjwo^íi4  pejid. ...  .  .  ,  ,.,.  ,  ,  ,  .•    130>000 

g!90,W0  ciw^jQs  i  1  cealavo., .        2,00p 

C;,000  ipiíl^^  y  caballos  4  30  pesos.  ...........     180.000 

'    ¿18,000  resesá  12  pesos.  . , 216,000 

''  800,000  libras  íe  cobre  á  10  centavos.    .......:       80,000 


|»n»MH    III       IJH 


ToUL  ,  .  .  4,77§,50Q 


• 


r 


Esporiacton  de  1836  d  1837. 

Pesos  fu$rles« 

Bi,089  fanegas  de  cacao. 875,032  15 

"''38,784  pacaá  de  algodón.  ...'.........*.  616,943  08í 

'^l*e,S48  qnintafei  de  calífte.  .............  1,65^,908  36 

^Mr¡mS  litwras  de  añM..  . .502,4^79  OS 

ill,550  cueros , •  .  .  *  247^3^  Mí 

1,205  muías  y  caballos.  .  • 104  028 

7,912  reses 148,087 

2^450,000  mineral  de  cobre  . 34,040 

20,431  quintales  de  tabaco  en  rama 256,213  10 

230,000  cueros  pequeños 109,733 

Azúcar  y  papelón 53,979  31 

En  yaríos  otros  artículos 335,823  63 

Total.  .  .  .  4,943,597  05 


—  SK  — 


COMPARACIÓN  dd  movimiento  mereaniil  habido  y  derechos  de 
liodeí^»i^mlmtñ4BÍmtí9éüUm., 


De  1829  á  1S30 
be  18310  á  1831 
De  1851  á  1832^^ 
De  1832  á  1833 
fie  1833  á  1884 ' 
De  tm  á  1835 
pe  1835  á  1836 
Pe  1836  á  1837 
De  1837  ¿  1838 
De  1§38  ¿1839 


•       * 

oyimiento  mercantil. 

Derechos  de  adu 

5,587,104 

— 

978,909 

4496,183 

— 

737,796 

6,215,017 

— 

1,156,997 

6,319,962 ' 

— 

1,145,128 

€I,60O;C94 

n- 

l,0g8,648 

6,8SÍ6^881 



996,042 

7,179^51 



830,588 

9,619,075 



1,259,929 

7,314,191 



1,027,268 

$,m,i^r 

ÍS¿ 

1,416,257 

GéMPAkÁCIOH'dé  los  f^eeios^m  <|tie  réMian  estimados  lo$  einto^ 
frnios  prineipedés  en  M  difer^tés  aduanas  de  la  república  en  el 


Algodón.             Añil.      Cueros.  Cacao. 

qql.                   lib,     "  uno.  fan, 

ít^  Gaaira 14                i  41  2  81  18  41 

Puierto-*G<ri[>ello^,  .  .        8  33  .  1  28  1  91  14  97 

Maracaibo 15  84.  1/2      1  1  57  14  53 

Goayana ^1  77            1  OT  i  81  11  84 

Coro 1^  '   to  1  50  41  05 

Barcelona t  .  12  22  VS     f  51  .  2  28  15  01 

Gunlluiá» 12  08            nr  2  06  14  30 

Oanipano «...,.,  10                »  1  06  12  25 

Maturici. 9  13  1/2.  .  ^!  1  1$  7  50 

Güiria.  .  ......        9  13             »  1  71  10  94 

W^nerote.  .....       d                 *  2*51  16  8ft 

Stan  Griego. .  ;  .  .  »                  »'  »  jo 

Riocaribe d                 o  »  10  36 

Cvampii^..  »  ...  .  n                D  I  21  9    . 


Café. 
qql. 

11  98i 

9  36 

8  05 

•&     ■' 

9  81 

)» 

99?l 

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11  67 

9 

11  60 
10 

^?^ 

••,     i»  •'    'i 
..  I      o*' I 


t 


—  52S  — 


GOMFÁRACiOSM  nmoimiéa^  «cnroalti,  y  M  total  if«  dffvdbot  tfr 
rada  aduana  en  los  dót  úUimns  «6ol.  Moateleiít  * 


La  Guaira De  57  á  38 

De^38  K  39 

Puerto-CabelJo ....      De  37  ¿  38 

De  38  á  39 

Guayana .      De  37  á  38 

De  38  á  39 

Ifaraeaibo De  37  á  38 

De  58  á  39 

Coro. De  d7  ¿  58 

De  38  ¿  39 

Barcelona.  ........      De  37  á  38 

De  58  á  39 

Cumaná De  37  á  38 

De  38.^  39 

Maturía.  . De  37  á  38 

De  38  á  59 

Garúpano De  37  á  38 

De  58  á  39 

Gñiria De  57  á  58 

De  58  á  59 

Bioearibe(l) De  57  ¿  88 

De  38  á  39 

Higueroie De  57  á  SI8 

De  38  á  39 


Juan  Griego.  ...... 


De  37  ¿  58 
De  58  ¿  59 


MoT.  mercanhíl. 
3,641 ,84i  05 
5,165,470  32 

1^,596.7»2  29 
l,885,Íbt  16 

606,767  33 
688,573  12 

696,596  27 
774,905  54 

160,430  20 
289,253  70 

178,929  41 
295.176  50 

167,760  60 

118,876  81 

249,134  81 
272,724  57 

108,515  25 
94,114  37 

112,806  12 
64,016  18 

21,925  21 
40,062  82 

27,9S7  30 
28,741  97 


Der^duM. 
585,082  72: 
774,930  €S 

116.419  2$ 
197,344  62 

129,594  30^ 
171,201  2a 

105,3^  68 
115,179  67 

15,397  55 
44,907  02 

M,527  48i 
42^14  64 

17,9S6  76 
25,140  77 

11,664  5a 
19,158  36 

9,919  5Sr 
11,657  03 

6,500  27 
5,635  3S 

445» 

1,271  76 
2,065  08 

c 

i,4%4  58 
1,009  521 


"(l)  Mi  en  este  año  ni  en  él  puado  ha  enviado  datos  estadtstieoi  el  admlnMrá** 
dor  de  la  aduana  de  RiocarilM.  Los  derechos  se  han  sacado  por  las  relaciones  de  la 
tesorerfa.  =-_--rr       . 


t 

—  529  - 

Adteorad) •     De  37  á  38 

De  38  á  39 

Cumarebo  (2). De  37  á  38 

De  38  ¿  39 

Pampatar •  .      De  37  á  38 

De  38  á  89 

» 


O 

» 

900  94 

JD 

B 

32,1069  87 

628  72 

7,944  50 

92  40 

7,354  81 

127  25 

COMPABACION  de  la£9porta€%an  hecha  en  los  tres  úliimos  años 
délos  5  frutos  principaUé,  los  precios  medios  en  qu$  han  sido  es» 
timados  y  el  valor  total  de  cada  uno» 


* 

De  1^36  á  1837  : 
De  1837  á  1838  : 
De  1838  á  1839  < 

Algodón 
38,741  qqs. 
32,601    B 
28,498    » 

A  ai  ti 

« 
áP«.l5  91 
¿    B  11  44 
á    B  10  33 

616,259  08 
372,201  59 
294,078  64 

De  1836  ¿  1^7 
De  183?  ¿  1838 
De  1838  á  1839  : 

Añil. 

447,734  »*; 
383,820  B 
428,390  B 

á 
á 
á: 

B    1.12  1/4 
»    1  12 
»    133  1/2 

302,479  03 
427,508  40 
571,377  41 

Cueros 

• 

« 

De  1836  á  t837  i 
De  1837  á  1838  : 
De  1838  á  1839  : 

111,424  n« 
121,603  B 
139,140  » 

Gaoao. 

á 
á 
á 

»    2  22 
B    1  93 
B    2  05  1/2 

247,079 
240,576  28 
283,091  04 

De  1836  ¿  1837  : 
De  1837  ¿  1838  : 
De  1838  ¿  1839  : 

60,620  fgs. 
52,911  B 
60^088  B 

á 
á 

n  Í4  14  1/2 
B  14  05 

p  U9B  1/2 

858,593  90 
743,652  78 
951,570  40 

De  183»  á  1887  : 
De  1837  á  1838  : 
De  1838  á  1839  : 

Gafé. 
166,335  qq$. 
174,864  » 

2l8,9t8  B 

á: 
á. 
i: 

B    9  98 
B    907 
B  1030 

1,659,794  36 
1.586,633  86 
2,255,509  0» 

(f )  Tampoco  lia  enriado  daloa  el  adminfitrádor  de  Alícora. 
(s)  El  adminiítradoi^de  Ganiarebo  no  enrió  datoi  el  afto  anterior. 


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INDIJSTRIA. 


Es  un  grande  error,  dice  Balbi ,  bastante  esparcido  en  Europa , 
d  considerar  á  lodos  los  indígenas  de  América,  no  convertidos  al 
cristianismo  ,  con:o  errantes ,  viviendo  de  la  caza  y  de  la  pesca  y 
privados  enteramente  de  las  artes  mas  indispensables  á  la  vida  so« 
cial.  Los  indios  de  Venezuela  que  se  conservan  independientes  ofre- 
cea  generalmente  el  aspecto  de  naciones  embrutecidas  ó  que  mar- 
chan lentamente  en  el  camino  de  la  civilización.  Muchos  de  ellos 
son  la  imagen  verdadera  de  lo  que  eran  500  anos  atrás,  cuando 
por  la  primera  vez  fueron  visitados  por  los  descubridores.  En  las 
selvas  de  la  Gu^yana  todavía  se  encuentra  un  gran  número  de  hom- 
bres y  mujeres  desnudas  sin  otro  ornamento  que  el  cuerpo  pintado. 

Sin  embargo,  sabemos  que  muchas  tribus  del  Orinoco  y  de  la 
costa  cultivaban  maiz ,  raizes  diversas  y  algodón ,  del  cual  sabian 
hacer  unas  telas  ordinarias.  De  la  palma  moriche  sacaban  unas  he- 
bras que  les  servían  para  sus  chinchorros  y  también  para  pescar. 
Casi  todos  ellos  sallan  hacer  vasijas  de  barro ,  porque  en  muchas 
partes  se  encuentran  restos  de  esta  fabricación  indígena.  Sabían  es- 
traer de  las  hojas  del  árbol  chica  unas  pastillas  coloradas  con  que  se 
pintaban  el  cuerpo,  y  con  las  mismas  hacian  geroglíGcos  sobre  sus 
vasijas.  La  estraccion  del  veneno  curare  proveniente  del  bejuco  ma- 
vacure,  es  invención  de  ellos.  Esta  operación  es  tan  química  como 
la  de  estraer  el  veneno  de  la  yuca  amarga  y  hacer  de  ella  un  pan 
sustancioso  que  se  conserva  largo  tiempo.  También  se  debe  poner 
á  su  lado  la  confección  del  tabaco  que  llaman  niopo  ;  y  no  es  menos 
de  admirar  el  método  con  que  sacaban  la  fécula  del  moriche  y  el 
modo  de  formar  su  harina  de  pescado  para  la  estación  lluviosa  que 
no  daba  lugar  á  una  pesca  suGciente.  Bastante  ingeniosa  es  la  ma- 
nera con  que  hacian  las  conchas  ó  canoas  de  corteza  de  árbol  y  tam- 
bién la  fabricación  de  las  de  madera,  hallándose  privados  del  hier- 
ro. Una  piedra  ó  un  hueso  les  servia  de  hacha  ó  de  otro  Instru- 
mento cortante,  y  el  fuego  les  ayudaba  para  la  pronta  construcción. 
Sus  arcos  y  sus  flechas  estaban  bien  trabajados  :  lo  mismo  sus  ma* 
canas,  que  eran  de  una  madera  dura  y  pesada.  Sus  rodelas  eran  de 
admirarse  por  la  forma  y  enlazo  de  los  bejucos  que  cubrían  con 


-  $Í4  — 

cueros  de  manatí ,  de  danta  y  de  tigre  para  defenderse  de  las  fle- 
chas. La  construcción  de  sus  casas  indicaba  inteligencia ,  y  no  ma- 
cha ignorancia  en  la  dispoeteídft  <ie  sus  fortificaciones  de  pah  á 
pique  en  puntos  defendidos  aun  por  la  naturaleza.  Las  mantas  que 
sacaban  del  palo  marima  y  una  especie  de  camisas  para  ponerse  á 
cubierto  de  fos  mo^uitós  y  de  las  lluvias ,  són  obrds  Tan  curiosas 
como  otras  semejantes  que  hacen  de  la  palma  moriclie.  Los  quipos 
que  los  Caribes  hablan  porfeccíoñado  y  que  se  encontraron  támbíeii 
en  el  Perú,  eran  unos  nudos  que  servían  á  aquel  pueblo  guerrero 
y  comerciaule  para  tjfasmitirse  las  noticias.  Las  cerbatanas  eran  (iar- 
rizós  cilindricos  y  largos  que  servían  para  la  baza  de  pájaros.  Laá 
esteras,  cestas,  talegas  y  sobre  todo  las  guapas,  especie  de  cesta 
casi  sin  bordes  pero  labradas  primorosamente  con  grecas  eh  líneas 
rectas  combinadas  de  diversos  modos.  Los  colores  que  sacaban  dé 
los  óxidos  dehierro  y  magnesia,  especialmente  ocres  amarillos  rojos 
y  aplomados  :  el  barniz  del  algarrobo  con  que  cubrían  sus  pinturas 
en  vasos  cocidos  en  medio  de  un  fuego  vivo  :  sus  instrumentos  de 
música,  trompetas^  botutos,  y  unas,  canas  de  diferentes  gruesos 
y  tamaños,  á  manera  de  zampofia  :  por  último,  el  mádo  de  bacer 
él  pan  de  maiz  que  aun  se  usa  por  todos  los  habitantes  de  Veue- 
zuela^  así  como  el  de  lá  yuca  amarga  ó  de  la  dulce ,  son  cosas  todas 
que  indican  mucha  inteligencia^  y  bastante  industria  en  su  estado 
salvaje. 

Los  ade!antos  que  han  hecho  los  que  viven  todavía  en  los  bosques 
de  la  Guayana  se  reducen  á  llevar  un  guayuco,  ó  faldeta  que  usan 
por  honestidad ,  pero  muchas  mujeres  van  sin  él  y  otras  llevan  una 
especie  de  delantal  de  un  pié  en  cuadro  tejido  de  cuentas  de  vidrio, 
formando  líneas  rectas  combinadas  con  mucho  orden  y  gusto.  Usan 
ya  del  hacha  y  lúachete  para  construir  sus  casas  y  embarcaciones 
.qne  haoen  de  un  solo  tronco.  Tejen,  en  fin,  bellos  chinchorros  de 
moriche  y  á  esto  se  han  limitado  sus  progresos ;  mientras  que  los 
Guajiros  que  están  en  la  costa  y  entre  la  Nueva  Granada  y  Vene- 
zuela, tejen  buenas  hamacas,  hacen  grandes  mantas  con  que  se  cu- 
bren á  estilo  de  los  antiguos  romanos,  tienen  crias  de  ganados,  mu- 
las  y  caballos,  se  han  hecho  escelentes  ginetes  y  manejan  bien  las 
aripas  de  fuego^  q:ue  aprecian  tanto  como  sus  arcos. Vemos  ál  mismo 
tíempo  que  los  Guárannos ,  moradores  del  delta ,  en  continua  co- 
municacion  con  los  nabiíanLes  del  pais,  no  han  hecho  oíros  adelan- 
tos que  usar  dd  hacha  y  macheta  para  poustruir  sus  embarcaciones 


I 

y  cúferirse  con  aígutios  vestidos  mui  lijerps  para  precaverse  mejdr 
de  la  plaga  (fe  zancudos* 

los  diferentes  ramos  de  industria  solo  han  comenzado  á  tomar 
algnn  incremento  después  de  la  revolución., Él  sisteina  español  no 
era  propio  para  dar  impulso  á  la  industria ,  porque  esto  era  con- 
trario á  sus  intereses. 

La  imprenta,  manantial  de  ilustración,  se  halla  hoí  en  Yene»- 
zuela  en  igual  grado  de  adelanto  que  el  que  ,tienea  los  buenos  es- 
tablecimientos de  este  arte  en  las  naciones  mas  civilizadas*  La  agri^ 
cultura  empezó  a  fomeníarse  en  tiempo  de  la  compañía  guipuz- 
coana ,  por  haber  sido  cotonees  la  época  en  qUe  hubo  nías  esporta- 
cion  de  cacao;  pero  nías  tarde  se  reemplazó  ep  parte  esta  planta 
con  el  añil ,  el  café  y  el  algodón ,  y  en  el  dia  las  praniaciones  de  es- 
tos frutos ,  las  de  caña  y  de  tabaco  reciben  mejoras  que  las  llevan  á 
su  perfección.  £1  azúcar,  los  aguardientes  y  los  tintes  son  artícu- 
los de  que  provee  la  industria  del  pais  para  un  gran  consumo  in- 
terior  y  para  los  mercados  estranjeros.  Destruidas  las  crias  desde  la 
guerra  de  la  independencia ,  han  prosperado  ya  de  una  manera 
asombrosa  por  medio  del  mejor  cuidado  que, se  les  da,  sacándose 
también  mas  ventajas  que  antes  del  esquilmo  de  los  ganados.  Se 
fabrican  telas  ordinarias  de  algodón  y  lana ,  algunas  mui  regular- 
mente labradas.  Se  tejen  mantas,  chinchorros  de  cocuisa  y  algodón, 
y  hamacas  mui  bien  adornadas  de  flecos.  Los  indios  reducidos 
de  Rio-Negro  hacen  con  tanta  laboriosidad  como  primor  chinchor- 
ros de  moriche  que  pintan  de  varios  colores  y  adornan  vistosamente 
con  plumas.  De  cocuisa  ó  pita  se  hacen  alpargatas,  cuerdas,  cabes- 
tros, aparejos  de  enjalma  y  sacos  ordinarios ;  y  de  la  palma  chiqui- 
xhiqui  se  saca. una  Gbrá  de  que  se  hacen  cables  para  embarcaciones. 
En  el  páis  hbi  fábricas  dé  sombreros  de  lana,  seda,  paja  de  Jipi- 
japa y  otras  materias  como  palma  y  cogollo  de  caña.  Dan  manteni- 
miento en  abundancia  para  el  consunto  interior  y  de  las  Antillas 
las  pescas  de  Margarita,  ¿umaná,  lago  Maracaibo,  lagunas  de  üna^e 
y  Tacarigua,  las  de  los  ríos  Orinoco,  Apure,  los  de  la  provincia 
de  Barínas  y  otros.  A  esto- se  agrega  la  caza  c^  chigáireS)  oaya  carde 
se  usa  en  los  dias  da  cuaresma.  Para  el  alumbrado  hai  ya  fábricas 
de  velas,  y  se  estracn  esceientes  aceites  del  coco  de  la  pal(^  yagua, 
de  la  semilla  del  tártago ,  de  huevos  áa  tortuga  en  el  Orinoco  ;  el 
mismo  uso  se  hace  de  la  gra^  de  caimán.  E¿a  Rio-Negrofiíe  cons- 
truyen buenas  embarcaciones^  y  en  Maracaibo  naves  para  sülagD-y 


—  556  —  '^ 

para  la  mar,  preferibles  á  caalesqaiera  otras  por  la  bondad  de  sos 
maderas ,  y  por  su  estnictnra  que  las  hace  fuertes  y  Teleras.  Dan 
grandes  productos  las  minas  de  cobre  de  Aroa ,  las  de  urao  en  La- 
gnnillas ,  las  de  sal  de  Gnmaná ,  Margarita ,  Barcelona ,  Los  Roques, 
Puerto-Cabello,  Coro  y  Maracaíbo ;  ana  de  mene  en  Maraeaibo  y  otra 
de  carbón  de  piedra  que  empieza  á  elaborarse  en  la  costa  de  Coro.  Se 
fabrica  jabón ,  gran  yariedad  de  quesos  muí  gustosos ,  chocolate , 
dulces  y  conservas  de  toda  clase.  Hai  muchas  tenerlas  de  suela  y 
cordobán ;  y  las  talabarterías  dan  obras  útiles  por  su  solidez  y 
comodidad.  Existen  buenas  alfarerías  ordinarias  de  mano  y  torno  y 
fábricas  de  ladrillo  y  tejas. 

En  fin  hai  talleres  de  sastrería  y  zapatería ;  herreros ,  carpintea- 
ros,  albañiles ,  plateros,  ebanistas ,  hojalateros ;  y  los  trabajadores 
en  carei  mejoran  cada  dia  sus  respectivas  arles.  Todas  ellas,  ora  las 
de  primera  necesidad ,  ora  las  de  comodidad  y  lujo ,  adquieren 
progresos  con  admirable  rapidez. 

Recorridas  velozmente  las  fuentes  de  la  industria  venezolana,  no 
estará  de  mas  dar  un  lijero  detalle  sobre  algunas  de  que  se  tienen 
datos  que  pueden  conducir  á  un  resoltado  mui  aproximado,  por  lo 
que  toca  á  sus  productos ,  tal  como  el  pescado. 

Por  el  estado  calculado  sobre  el  modo  de  subsistir  la  población, 
resalta  que  -1/10  de  efla,  sin  contar  los  indios  independientes,  es 
decir,  94557  individuos,  viven  de  pescado,  y  dando  á  cada  uno  40 
onzas  diarias,  tendríamos  855,708  arrobas  en  un  año,  que  á  2  pe.^os 
una ,  término  medio ,  daría  una  cantidad  de  .  .  .  -1 .71 0.4^  6  ps. 
Según  la  Memoria  del  ministro  de  Hacienda ,  se  han 

esportado  en  pescado -1 1 .986 

En  tortugas -1.055 

Total.  .  .  .     4.725.457 ps. 

Por  el  mismo  estado  resalta  también  que  otro  décimo  de  la  po- 
blación se  cálcala  qae  come  solamente  cazería ,  y  si  se  les  da  tam- 
'bien  á  razón  de  -10  onzas  por  persona,  tendremos  855,708  arro- 
'  bas  en  un  año,  que  á  4  peso  darían  855,708  ps. 

El  jabón  que  se  fabrica  en  Venezuela  produce  una  gran  cantidad, 

>  y  se  podría  calcular  aproximadamente  á  real  cada  mes  por  persona, 

.  lo  que  daría  casi  millón  y  medio :  si  el  medio  millón  fuese  de  jabón 

'  estranjero ,  resoltará  que  en  el  pais  se  fabrica  un  millón  en  este 

artículo. 


—  557  — 


Los  sombreros  de  paja/Tas  hamacas,  las  (elas  ordinarias  de  algo- 
don,  las  mantas  de  lana  ^  la  loza  ordinaria  y  las  cnerdas  son  cosas 
que  se  consumen  mucho ;  pero  difícil  seria  dar  un  resultado  de  ca- 
da una  en  particular ;  y  después  de  muchos  cálculos  hemos  estable- 
ddo  el  siguiente  estado ,  el  cual  da  á  conocer  el  numero  de  los  in- 
dividuos dedicados  á  este  ramo,  y  lo  que  aproximadamente  pro- 
ducen los  brazos  útiles  de  esta  parte  de  la  población  en  su  relpect^ 
va  provincia.  Calculando  500  dias  de  trabajo  á  medio  peso  diario, 
asciende  á  4  4 ,654 .700  ps.  que  yendrian  á  ser  á  razón  de  4  50  pesos 
por  persona  útil ,  y  por  el  total  de  la  población  dedicada  á  este  ra- 
mo, 49,48. 

ESTADO  que  representa  el  número  de  individuos  que  se  estiman 
ocupados  en  cada  provincia  en  las  manufacturas ,  artes ,  empleos , 
ejército ,  marina  y  pesca  en  1889 ;  el  número  de  brazos  útiles ,  y  su 
producto  en  un  año. 


IfOMBRB 


»■ 


LAS  PKOVniCUS. 


d«  individaM 

caknladlo* 

«ncadcpMTÍatíi. 


Caracas 

Garabobc... ...... 

Barquislmeto 

Coro • 

Martcaibo 

TrvyUlo 

Herida 

Barínaa. 

Apure.... 

Barcelona. 

Gumaná 

Margarita..  ....... 

Guayaiía.... 

Total 


60.7» 

1B.IS8 

S.0I6 

IS.486 

13.486 
ai. 740 

27.974 

a.  sai 

7.S15 

is.aos 

6.406 
6.174 


NmiMfo ' 
d«  brasM  útiles 

en 
cada  provincia. 


i38.4eS 


90.780 
8.080 
9.486 
S.688 
3.786 
3.788 
7.846 
9.484 
818 
8.608 
8.067 
8.488 
9.084 


Producto  de  cada 

individuo  ÚCI» 

á  raxon  de  4  realea 

diario*  porJoo  dlae 


77.678 


8.109.800 

1.949.000 

1.494.400 

404.760 

867.780 

867.780 

1.066.900 

4.368.600 

180.980 

390.780 

760.080 


808.100 


pi.  11.684.780 


r.  «ioa« 


I 

u 

i 


i 

I 


í 


í 


■'!..  I_L  ■**'""'*'''    ^  •*  "  •I  *  J' 


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l-    i 


^  •■,4  «  J  d  4  »  •  ■  «I  -i  • 


¡tli^lIPíl» 


i 


iiü'fir^fii! 


l»ÍlliÍÍ»'l 


i 


i  M  :  ii  i  M  !  ni 

i  ;  i  i  li  i  i  i  i  :  i  ; 


i  ;     I 


i  ■:  i  i 


i  i  i  i  i  i 


i 


ESTADO  que  representa  el  número  de  ¡ndividuos  de  cada  provineUi 
^«eapaAMen  )ft  etfcr,  y  de  tes  braxos  útíles  para  el  trabajo,  c(m  et 
yükutfptt  teS'  coneipoiidei'ki '  piopoi tAonalBMnte  á  los  prodtDRtOB 
bnitos  de  la  cría  en  1839. 


mmsBmBmmmaBmma^steU 


PROYINGIAS. 


Gar&caB 

Carabobo .... 
Barquisimeto. 

Coro 

Xancaibo  ... 

TniJlUo 

Herida. 

Baifiu» 

Apure 

Barcelona.... 

Cumaná...... 

Margarita.... 

Guayana 


'i 


* 


**«•*< 


Nómero 

d«  iiidÍTÍ4ao« 

calcttladot  «^ 

etda 

'    ■       .    . 
proTincia. 


mm 


6»7I4 
6,113 

7^85 
S6,t»i 

S,745 


mmmm 


m 


10,1» 
1,<(WD 

e,trn' 

13Sd 

s,tnt 

<,1SI 

US 
311 


Valor  de  las 

|iroducioii«a  da 

cna  qoe  cWtt»* 

p#aderid  al  nú* 

Mero  de  braaoe 

útiles  en  cada 

proTÍncia 


Námerode 


at^niL 


en  la 

actoaUdad 

ocupan 


i;«5,t9r 
«06,tcr 

1I4;9BS 
Ho,TW 
J7»,ST« 

1,68B,WS 
317,411 

1,181,498 
8l9,SVr 
f  SI,3Sf 
103,234 


mm 


t; 


3SS 


9» 

Ub 

093 

m 

1,119 

l,0S8 

103 
3f 

116 


r 


—  SM  — 


ESTADO  qae  repremiU  d  lalor  total  de  las  ^ 
indnitria  reafaolana  y  d  númoo  de  brazos  útiles 
lioeía. 


de  la 
cada  ft^ 


TBOnñCUB. 


Caribobo..... 
Birqaidmoto, 

Coro , 

lltraetibo«««*( 
Tirapo...... 

Mérídt. , 

Baríuf ,...., 
Apure  ...•»•  I 
llaroebma....^ 
€¡iiiiiuiá.....i 
lUiiirita...^. 
Gnayaiía..... 


JtWm  ^nH    ^P^^R^P 


▼alor  total 
4ela 


8^411,780 

fl,40A,H6 

S,497,I97 

8,M0,»5 

643,161 

S,7S6f345 

I,O1S,08S 

8tt,18» 


48»M^Me 


HÚMTO  total 
debí 


ei^iBi 
sa;9M 

87/n6 

.I3,«a 
lo^sn 

90,671 

56,496 

4y366 

17,866 

16,890 

6,101 

8,136 


mm^mam 


—  544  — 


EESUMEN  de  los  productos  de  la  indastria  venezolana  eñ  1839. 


GALIDAB 

déla 


niuncro 

ó» 

indhridoos 

caknladiM 


prariacU. 


Agrieiritora. . 

Crta. 

Arioiif  itíc*  •  •  • 


Totales. 


Namcro 

d« 
brasM  átil«s 

en 
cada  ramo. 


tiS,4S9 
§44^976 
S85«MS 


808,960 


BaaoBáHi 


157,457 
81,855 
77,678 


Valor 
proporcional 

4  cada 

individuo 

en  general  en 

pesos. 


Valor 

proporcional 

4  cada 

indlvidno 

ólil 
en  pesos. 


Valor 
déla 


8i,5 
44,85 
48,48 


198,790 


54,tS 


487  55 

4SS    80 
450    a 


188  84 


85,798,797' 

40,985,851 

11,651,700 


48,330,548 


por  «1  último  estado  que  antéele  se  ve  qne  la  población  del 
pais  (esclayendo  los  indios  independientes)  liabria  producido 
48.550,548  :  tocarían  pues  á  cada  nno  indistintamente  á  razón  de 
54,45. 

Será  curioso  á  la  vez  que  útil  saber  aproximadamente  lo  que  gas- 
ta cada  individuo  en  vestir,  comer  etc ,  á  fin  de  hacer  una  compa- 
ración con  el  producto  general  de  la  industria. 

Después  de  muchos  cálculos  minuciosos ,  hechos  sobre  los  diver- 
sos gastos  en  vestuario  de  las  distintas  clases  do  la  sociedad,  y  según 
la  edad  de  cada  individuo,  hemos  venido  á  sacar  uu  resultado  ge- 
neral en  esta  forma. 


40.000  íe 

idividuos  gastan  400ps.    . 

•     « 

4,000.000. 

20.000 

•i— 

50.   .     , 

»     4,000.000 

50.000 

.— 

25.    •     • 

750.000 

40.000 

.. 

40  1/2.  . 

420.000 

50.000 

•«• 

8     .     . 

400.000 

400.000 

-^ 

.       6.    ,     . 

600.000 

450.000 

— 

4.    .     . 

,  • 

.     0,600.000 

200.000 

— 

5-   .     . 

600.000 

292.955 

■ 

1.    .     . 

ps* 

292.955 

m2M^ 

5,662.955 

—  u^ — 

Por  esta  d^Qo&trackm  se  pii«d«  ^  puos^  calcubr  ím  ^  IM»  de 
vestuario  y  ropa  de  ca$a  iodistintaioeate  p^ra  oada  individua^^^ 
la  suma  de '6; 54  al  aSo. 

iiMiáiyHcas  del  país  pueden  éat  en  terasordiiiariü^smtai^ 
chinelMrrqB  y  iiamacas  los  662.95?;  quedajciai^^pnes,  5  miUoms 
q— <it  mpawi  4et  estrMijaw). 

.  táff  lo  |ue  respecte  á  in  e<múda,  tsnemastMoi  irfii'Mflli#s 
sobre  las  prodticdóDes  de!  país  y  de  los  eomestibles  que  yieoen  d^I 
estranjero  ^  Ibs  cnáTes  nos  conducen  á  uq  resultado  que  eM  en  at- 
moAia  perfects^  qab  las  oon^chas  d^atandas^.  .te  »u«m«: 


CONSUMO   DE  TEMBZtlELA. 


^wy^^^W** 


ArtMíM»^^ 


Plátano* 
Maíz.    • 
Casaba 
Kapa9»  « 


I*' 


.  pesos    -1,599.8^1 
.    3Ul73.Si¿i 


A-'      -• 


•<         * 


GaBAdo  yacano.   • 

Came^ .  (  Cabras.  ,   .    •    . 

Gerdos«      ,     .     . 


1rr:!rí  «aaíerfe t53.T68 


y  av«f-.  i 


f '  A^ea^em^kae  y  teetes.   !»,9W;60« 


Cacao.   . 
Café.  •  . 


•    ^ 


464  J  52 


JÜeorei  I  Aguardiente.    ;    .    .    .    —7^4.048 
e^.      j  Papelón  y  azécar.      .    .        598.072 


9m^^ 


Qoesow 
Leehe^ 


558.54  8 
984.807 


V^022 


4í|M4.i»4 


5,87=1.^0 


4,IÍ7.452 


4,912.120 


4,,»li.525 

Legumbres  de  to^a  clase  y  mtfiestras.  .      4,M9.00O 

Sigueyjmma.    .      WUmA^^ 


DiWiQS 


AoeMe  de  coca. 

—  de  yagua^ 
Tabaco.  .  . 
Algodoa  y.aiUL 
lúm.  .  ,  • 
Loza  ordinaria. 
y<d«s  46l  pai». 


209.00Q 
240.000 
8.000 
1^000.000 
Í00>00« 
flS.OOO 


j».440,455 


2,045.1^00 


Total  de  objetos  del  pais.     •     . 
En  comestibles  estranjeros  Jabón  y  "fetos 


Total  en  pesps. 


•    • 


4,90avM# 
2S^9Sd.43S 


Esiajartida^pnes y  estaría  en  razón  de  52^42  por  cada  indi- 
jldao. 

Para  el  manteniiniento  de  caballos ,  molas,  asnos,  cerdos  /ga- 
Ulnas ,  paros ,  patos ,  etc. ,  se  puede  graduar  en 
manrymalojo 4,900.'0#9 

Por  las  Übricas  y -la  oomposidon  de  haciendas 
en^todaia  república. 3,000 .000 

'Para''berramieittas ,  máquinas ,  t»rros  muebles 
f  otros  objetos,  médicos,  mecKdnas,  etc.,  inchiseB 
4,900¿090  que  Tienen  del  estranjero 2^IH)t:000 

(Sastos  püblicoB  del  gobierno,  ejército,  maffiMí , 
congreso ,  diptitaciones ,  gobernadores  y  adminis* 
tracion  en  general 3,0>M.90<^ 


piii  1^1 


•^— wwtpw 


TiJtelep  pesos.    .,    *    42,000.000 


De  esta  partida  tocarian  á  cada  individuo  de  la  república ,  es- 
cluMos  lesMdios'iindepeiidieotes,  45, 


B i gttto general  seria , pues, :«Mioi«ígaa,. 

MMuirio  de  cada  uno. ,«  .     .6,5éps.hlillRl.  «  %t%m>Ma 

UmUA          ^             32y42  msiñ^kn 

«MtM  diversos         -^    .    43,45  A%S%Mm% 


-qpdtal  por  persona.    .    .82,49 


46.6^6.066 


—  544  — 

.Si  la  renta  kidiistríal  es  de. 48.550.548 

Los  gastos  generales  de 46.646.066 


Hai  un  sobrante  fayorable  de  pesos.      •     •     .      -1 .74  4.282 


Repartido  este  sobrante  entre  toda  la  población,  tocarían  á  cada 
persona  -1 ,92,  lo  que  prueba  que  el  país  marcha  de  una  manera 
ventajosa ,  pues  haí  un  sobrante. 

Los  cálculos  precedentes  nos  conducen  al  conocimiento ,  si  no 
exacto,  á  lo  menos  el  mas  aproximado  posible  de  la  cantidad  de 
contrabando  que  se  hace  en  la  república. 

Yernos  que  para  el  vestuario  se  necesita  en  mer- 
cancías estranjeras 5,000.000 

Para  comestibles,  jabón,  velas,  etc 4,500.000 

Para  diversos  objetos 4 ,500.000 

Total ps.     8,000.000 


Si  el  pais  necesita  para  su  consumo  general  8  millonies,  y  se  in- 
troducen durante  el  espacio  de  4  años  solo  5,750.00.0  de  mereci- 
das un  año  con  otro,  daro  está  que  faltan  4,250.000.  Sopongamos 
que  baya  un  bene6cio  general  de  80  por  ciento  sobre  el  valor  que 
anuncian  las  aduanas  y  el  precio  á  que  después  se  venden  en  se- 
gunda ó  tercera  mano ,  nos  darían  5,000.000  y  siempre  faltarían 
750.000  pesos.  Esta  suma  nos  representa,  pues,  el  valor  que  debe 
pasar  por  las  aduanas  y  que  se  ba  introducido  por  contrabando. 
Veamos  ahora  las  mercancías  y  el  dinero  que  ha  entrado ,  la  ga- 
nancia que  puede  corresponder  sobre  el  precio  estimado  en  las 
aduanas  á  los  introductores  y  los  derechos  que  deben  dejar  al  era- 
rio; el  resto  lo  deben  estraer  en  frutos  ó  dinero.  Los  siguientes 
cálculos  aclararán  la  materia. 
«  • 

Entran  por  las  aduams.      .    .    .    .    .      ps»    5,757.000 

Ganancia  de  los  introductores  de  50  p.  O/o  sobre 

el  valor  estimado  en.h»  aduanas.    .     .    .    •    .  4,427.400 

Contrabando  ,  calculado  en •    •  750.000 

Ganancia  de  4  00  p.  O/o 750^000 

Muero  entrado ....••  900.000 


Total 7,284.400 


t 

—  545  — 

Es,  pnes,  evidente  que  esta  eanOdad  debe  iaHr  ea  Anero  ó  firo- 
to6 ,  menos  lo  qae  se  deja  por  derechos  y  comisiones. 

En  frutos  del  pais  y  prodacdones.  .  •    ».  •    •  4,640.604 
Se  debe  aumentar  un  valor  de  4  O  p.  O/o  sobre 
la  cantidad ,  que  siempre  se  pone  de  m¿nos  en  las 

facturas 464.060 

Por  Gomisioines  de  importación  y  esportacion.  .  200.000 

En  dinero  esportado  por  las  aduanas.    .    •    »  452*000 

En  derechos  de  importación  y  esportadon.  •    •  4 ,44  6.256 

Total.  .  ,.  .  .  6,852.920 
El  contrabando  en  la  eqportadon  sma.  ,  •  .  454.-180 
Suma  igual  á  la  anterior ps.    7,284.400 

Este  contrabando  de  454.480  se  baria  en  toda  la  república  en 
la  esportacion  de  dinero;  y  en  cuanto  á  producciones  del  pais  s^ 
ria  el  cacao  sobre  las  costas  de  Paria ,  el  pescado  sobre  las  de  Itfar- 
garita  y  Cumaná  y  pieles  en  las  costas  de  Coro. 

El  total,  pues,  de  contrabando  en  la  importación 
seria  de 750.000 

En  la  esportacion,  de •       454 .4  80 

Total.    .     .     .    ps.      4,284.480 


MB 


En  cuya  cantidad  el  erario  público  seria  defraudado  respecto  de 
los  derechos  de  aduanas ,  en  mas  de  500.000  pesos. 

Considerada  la  industria  veneíolana  y  M  gastos  generales  de  los 
ittdKvidws  de  la  saciedad^  np  seria  dittcil ,  eon  ks  bases  ya  estable- 
eidas ,  dar  una  idea ,  si  no  cabal ,  á  lo  menos  la  mas  aproiimada 
posibte  ae^rca  del  valor  de  todos  los  establecimientos  de  la  indus- 
tria rural.  Se  halla  esta  dividlda^en  el  pais  en  dos  grandes  sistemas, 
el  del  cultivo  de  los  campos  y  el  de  fo  cria  de  ganados. 

Para  apreciar  el  valor  del  .primer  sísCema,  era  preciso  conocer  el 
de  las  haciendas  y  plantaciones,  y  para  conseguirlo  -  hemos  tomado 
por  base  gsneral  25  fanegadas  para  una  hadenda  de  cacao ,  y  en 
proporcióiiea  diierenles  el  número  de  fanegadas  que  hemos  gra- 
duólo necesarias  para  d  cultivo  de  cada  fruto ,  á  fin  de  que  se  le 
pueda  dar  d  título  de  hadenda  y  ptantadm.  A  cada  una  de.estaa, 


.j<l<Pntoi.iiai»if»4yltiiiwrf»^4^  lalor  de  sos 

tierras, catti^^oMM^v,  llfamUM f ^enwiionU».  De  esle  jdoA» 
lodo  lo  cultivado  en  Veoezaela  queda  dividido  en  partes  propor- 
€¡eBiíles*7€ada«utta  de  estas  üpwisoiita  qom  «ifMlIlqiieda  «el  total 
en  que  se  estinwrfa  fainüriá-dí^l  oirtlk»#n  la  rspÉMica ;  no  Jia- 
biéndose  incluüo  él^i^Sf  #ef<»  <gilftfaflv  pvpqw  Ho^ert-delioasa , 
nllampevo  el  de  los  animales,  porque  estos  se  hallan  4»mpfWMÍidos 
en  la  paHe  quetrala^  Itstrito^aa^gonei'ai.  ^mítiaasf  una -eva* 
loaelon  dé  las  erias^  era  noeoiartDMs^aootwla^^liwi latas- y^  «oáihe- 
mes^erVido  de-  un  pík^^i^iAA^máuimy  ussv^aeir^  aqattun 
hatorsaaTf^oippuesto  de  mil  cabauü  de  ganado  vacuno  y  que  tenga 
dos  leguas  de  tierra^  su  casa,  corrales,  enseres ,  y  bajo  este  supuesto 
^  en  diferente»  proporckmes, %€mo»'dMéÍdo4es denasmiInMiles 
dQ«i»íac.|Mrar podar  estimar  mas  fácilmento*U.firjia  en  genei:aL 

Estopes  ha  parecido  el  único  modo  acertado  de  calcular  la  pro- 
jpedadinuaj  de  )taOfB«o^lii.  ¿as  Jímmus  tMfK>faHi<».en.aiie  lo  bemos 
IimdadO|.haUai:áftiicit^iHmtraii^  joi:9t,pDrrdiwauias  ^.ora^H)!^ 
eiagenoida»,  aepin  Jas  .diversas  xnaoficas  de  yer  4e  oada  uup.  i  pero 
los  mismos  que  las  cecbMau  bahi^án  decaofesar,  qiio  en  seoiqípiles 
indagaciones  beotta  biediO:dosiúeo«s :  aoo,  j^r^entar  el  modelo , 
la(INMi(a9';f>or  decirlo  asi,  que  deben  seguir  en  cuanto  al  lo^daj/gis 
qiie>quiaron  dedicarse  á  averiguaciones  estiidisticáa;^  Áisa^  ofre- 
car  nn  eitfmalo  á  fas  autoridades  y  i  los  particulares  para  estudiar 
el'pab  y  4jár  de  tin  modo  mas  esaeto  las  propiedades  que  consti- 
tuyen la  riqueza  y  fnensa  de  las  naciones.  Conocemos  mui  bien  lo 
#miaihü  fttiiiilMrflIiiiiirtaalMtiétita^  i  Attada  Jatost^su- 
dísticos  no  henmm^iú^htmwivmk^fm  caéMirttI  siíaianaaiiia^ 
iHhi»  imsmmimmmm  ItowaagiajádaasfaMaaieBtablniias  Jfiíusstos 
rilMilaMin(jh«MaiinJwf  bo  Msm  iáhm  queaDáÉfRfBMr^ifBoinf 
ÉSm.}iiiímk)i>^Mgtímmx\mbiá%  Mnapidia,.yjaa  dnueaparviriqÉi 

Jhk  iawiiapMWi<aij<taaoMMí  ii«mi>«áatiaéMMaisÉaHttlMnaslai 
de  la  eoftmmín^^pottímé 
i¥aüliiiiaMMidicÉie»<É»iipM^|<ai,  nm^úitm  oilaÉloatpi  IMIan 

<B»  *aini>attiiMia«MinaiauM>ni  aakipisdo^  tanflsrto*  La  !*«• 

mmm^.iáúm  dhjjjaasmtiwdiaiiitiaüiafcniéaiea  Man  dtfii» 
5ieni»w « 9  Mft»  luMwlriÍ0  je»i^Ml#ak  i^^ 


f 


t' 


Y  tanto  mas  líenos  penlsii^  «B'vuestfe  é«e»^pro|rféllo ,  ^tnto 
que  ét  sabio  D.  Ramón  de  la.  Sagra ,  m  ra  obra  sótiiro  H  isla  S$ 
Cuba  (fmrfe  'agrteomo-estadíitica^)^^^  seg^uidf  il  imUnu»,  m^todl 
hipolMeo  «eon  justo  y  general  Aplauso* 

"ijas  cnadges  que  'Siguen  darán  una  yímeXBtí^  de  la  propiedaf 
rural 4e  Vn^zuela ,  dividida  #n  agrariaiyv}9oairia,  cuyo  valor  to^ 
tal  ascicmde  i  90,087.848  pesos,  iguafe9L44a64,354 .272  francos^ 

IQSTM^  dtmostrativD  de  los  terrenos  vsljdfos  qaekal  en  cada  previa- 
el  autor,  euando  levantó  los  mapas  corojyráfíoos.de  las  provincias. 


If^a.  JBn  Váracaibo  eft&n  comprendidas  700  leguai  cuadradas  del  lago  que  na 
ei  Üem,  lo  mismo  sucede  con  el  lago  de  Talencia,  lagunas,  etc. 

Terretioif  vatíUos. 

tin  la  zona  pastoril »       I.MO 

Bn  la  ion«  agrlenUora »     lO.OfiO 

ToTix. .  .^., .  1.  Ct    9^,S4a 


>mfrmmmn^»m 


MIawmapagtorü. »       v.eee 


Total Le.   14.480 


CD&mO  DKMOSnáTITO  de  b  rique»  agnrit  de 
lepreMOUr  el  número  de  htdendu  j  plüitadoBe*  qw 
y  geneial  de  lu  Utfiu,  ptantM,  GHU,  «idau  j  euetei 


II  dqiie  M  uianm 
«ber  en  h  repabUcí, 


i>  M  VUA  midnret  6  ruiuc»». 


Por  lo  que  M  ntunU  de  Itwr*  por  etdi  taielendi,  cilleí,  pitlof ,  ele.,  r  porlM  terreM*  «n  eri 
UToqnenunopradnoaDá  nnmdeSDpemliDoegidt 

N   lasnutOrmuilti  16,900 biuepdu en cuIUto 

UO    lef;im  cultlTidu  anteriormenle,  7  en  U  ■ehulldid  en  ntírt^at  Mm  boaque*,  TtHi— rln 

i  B  pem  la  ruaiadt  hacen 

1,3M   legDU  de  terrena»  IneullM,  qoeUMendiMiMr  que  euin  UDuyor parle  en  le*  mqfan 
p*ri||ei  de  li  iDiu  igilciillDnl  I  pcHUItncgada 

ifiU 


'Pí 

n 

En 

UCOTM 

Ka 
planlu. 

T 

En 
enierec; 

TOTAL 

de  Ii  rlqaeu 

MMVUO 

IHSBO 

Bí,9« 
m,9M 
TS^OOO 

ís.-m 

49,»1» 

in^ooo 

«B,7eo 

S8,«S0 
131,000 

iM^aBO 

»   •       s,»» 

«,mo 

13,SU,4tO 

9BS,aOD 

.   ».»« 

ss,faa 

i,-res.m 

«,900 

WI,000 

>       > 

■        • 

•      • 

807,000 

W,»00 

MMHW 

TOTAU 

i».us,m 

•,MT.I« 

tO(tT,»U 

- 

TOTIL 

„„j4j 

«.MT.Oll 

•un,M> 

GSñOtl0^lyWt&StttS!tPfft*éB  te  ^  tf^iHsnt  p0RtaaAi  de  ViÉnnsiMiá « vil  'éÜraB'ttT' 
poder  representar  el  número  de  hatos  y  rebaños  que  puede  haber  en  la  lepobliea 
'  pueuu  j  ^enena  ue  ueiias^  auuuaKB^  vasaS)  cornuea  j 


«i^HÜ^Mai^MIII^ 


11  CRi. 


Ganado  Taca- 


£:   M 


kgnalpor 


6  t'V^tttt  fiaiAlliilo 

vebáfto.        M  0«oik    ó 


Ju 


¡Bañado  de  eer- 


CabaHoifmii- 
la«......... 


Sorrof  y  ma- 
lai ,.... 


n/i 


SK     . 


jGainnakfpálos 
parof,  eic 


iiealet. 


'a  legua»' 


4/SI%ua. 


46faaegaiir 


440 


pmdé  legí 


i/W  de  leg^ 


SOO 


400 


M 


400 


1  fanegada.  5  ps.  la  i 


tjjlQll' 


800 


TjLLoii  w  li»  usBm^mmtoMr 


I 
f 


di' 

üane*. 


mr 


80 


80 


lOQ 


80 


90 


980 


1^ 


SM 


lai/si 


818        «O 


4|D 


88  '       » 


ilO 


180 


Total. 


1,006 


fltt 


tüMO 


i 


Í0  4/i 


Loa  terrenos  deMbanas  aue%lán  sea  en  la  4>na  pastoril,  ó  bien  en  la  lonaiagricultora^  y  que 
■8  WMa  en  este  eáleaio,  tenieoda  sin  em8argaü8iMos,  sepueimV'tduar  áaHn  de  toooe 


por  legua 


Xatal.;.. 


f  ««I^A^a^».*) 


I90TX.  De  estaltsgiisrltti  dgunas  de  la  zona  de  la  agricuUvra,  poi  ieite<re«88€8toe|i8tt' 
crianza  de  mímales,  y  se  pueden  resumir  de  este  modo,.; 


Itt  tazona  agrlwilwni ;  lerrMwr á  pfep^tuipan-cl'c«tttw,1eg!wt.- . .• . . ^ I4888 

£n  las  zonas  pastoril  7  de  agricultura,  terrenos  para  la  cria -. . . .  .j» 0,819 


«MMi 


mmmmmmmam 


ToUl.. 4.. ,...^..^11,480 


asigna  un  detenninado  número  de  tierra  y  animales  á  las  diversas  crias,  A  fin  de 
con  arreglo  á  la  estadística  general  de  1839 ,  y  de  este  modo  demostrar  el  valor 


lÚMBBO 
de 

bato» 
6  rebaftos 

en  la 
rtpúblíea. 


9,087 


3,83t 


7,4S0 


2,087 


5,190 


40,000 


S0,S65 


ds  leguai 
coadndái 
«mplmdaf 

en  la 
criansa^ 


4,174 


t,910  SB,1Cg    '        9,86S,7S0 


861/i 


909 


986 


6  I/i 


6,649 


9,970 


9,619 


fjttíítummkL'm'tMiiMñt^á^é'íMM^m^fmá'Mií^m 


En 


En 
animales. 


ifMrivriMHMWM  mmmmmmmm  íimmm«mm* 


l,6S9,600 


34,600 


104,M)0 


1<»,400 


99,991 


3,313,191 


fl,IIS^ 


m,m 


.    3,O8t,O0O 


4,9S8,800 


1ÍS,000 


Eneans 

,      r. 

conalet* 


En 


enseres. 
»   ■     • 


•$/M¡ltÚlf 


929,269 


%i%m 


19,105 


': 


908,700  90S,700 


366,000 


[50,000 


19,573,850 


9,169,969 


» 


133,000 


468,185 


TOTAL 


mmtmmmmtmi 


iiMHIlOí. 


3,496,994 


l,lSi,IOO 


9,698,900 


l,'i30,909 


904^991 


Total. 


94,891,865 

894,000 


98,148„865 


Nota.  En  las  sabanas  de  las  zonas  pastoril  j  de  agricultura  pueden  Yivir  10  millones  de  re- 
es  ,  caballos  r  muías,  y  si  no  bai  pestes,  en  1849  deberla  haber  la  cantidad  y  aun  mas,  según 
■8  reglad  establecidas  sobre  la  duplicación. 


—  552  — 

BESÚMUf  GBNBIUL  DB  LA  BIQCEZA  AGRARU  DB  VENEZUELA 

ES  4859. 

£1  valor  de  los  terraiof,  ptantas,  cams,  etc.  ps.  64.974 .955 
El  valor  de  los  tenenos,  animales,  cana,  etc.  .    25.4 44. 865 


Total.     .     .    .    90.085.848 


■  / 


La  agrkidtiira  ha  producido  segun  los  estados 

anterieces. 25.752.79f 

Lo  q«e  da  eon  fsspeeto  al  capital  ob  40  per  o/o* 

La  criaha  piodacido  segun  los  estados  anteriores    iO.925.846 

Lo  que  da  con  respecto  al  capital  un  45  p.  O/o* 

Total  ps.    56.678.643 

Si  ealcolamos  qne  la  agricoltara  tenga  un  gasto  annal  de 
25  por  O/Oj  le  quedará  libre  un  4  5 ;  mientras  que  la  cría  tendrá 
un  45  por  O/o  Y  le  quedará  Ubre  un  40 ,  que  es  mas  del  doble  de 
la  agricultura;  pero  con  todo,  está  espuesta  á  mayores  riesgos 
que  esta. 


GEOGRAFÍA  BK  IíAS  FROVIUTCIAS. 


PROVINCIA  DE  CARACAS. 
SITUACIÓN  ASTRONÓMICA ,   BStBNSilON  Y  POBIiACiON. 

£&la  pro  viada  se  eocueolra  en  la  latitud  boreal  d^sde  7*^  58^ 
hasta  ^O""  40^,  y  tomando  por  primer  meridiano  a  Carácfis,  su  ca- 
pital, tiene  2<*  8'  al  E.  y  0°  57^  al  O.  Su  figura  se  puede  considerar 
como  un  octágono  irregular  trazado  por  líneas  curvas ,  que  encier- 
ran dos  zonas  diferentes ,  una  de  serranía  y  otra  de  llanos  :  la  pri- 
mera con  una  costa  peñascosa,  escelentes  puertos  de  mar,  valles 
ricos  y  fértiles,  montañas  habitadas,  colinas  ora  cultivadas,  ora  de- 
siertas, cerros  áridos ,  incultos  ó  escarpados;  climas  cálidos,  tem- 
plados y  frios ;  terreno  todo  que  se  puede  llamar  centro  de  la  agri- 
cultura y  comercio  de  Venezuela :  la  segunda  presenta  estensas  lla- 
nuras; mesas  altas,  espaciosas  ó  pequeñas ;  sabanas  elevadas,  bajas 
otras,  cuáles  desprovistas,  cuáles  abundantes  de  agua  en  verano ; 
pequeños  bosques,  grandes  palmares  y  una  vasta  selva,  toda  de  un 
clima  cálido  y  sano.  £1  má&imun  de  largo  de  este  territorio  es  de 
cerca  de  60  leguas  de  N.  á  S. ,  y  de  ancho  de  E.  á  0. 62.  Tiene  2,829 
leguas  eaadradas  de  las  cuales  se  gradúan  503  baldías;  y  siendo  su 
población  de  242,886  habitantes,  estái^ estos  en  razón  de  85,4 
por  cada  legua  cuadrada. 

IJIUTES  T  CONFINES. 

Confína  esta  provincia  con  otras  cinco,  que  son,  Barcelona  por 
el  £.,  Carabobo  y  Barínas  por  el  O.,  Apure  y  Guayana  por  el  S.,  y 
por  el  N.  con  el  mar  de  las  Antillas.  En  la  punta  de  Aroa ,  entre 
Cuyagua  y  Choroní ,  empieza  el  límite  con  la  provincia  de  Carabobo 
en  la  falda  que  del  cerro  de  la  Meseta  viene  á  la  mar,  y  sigue  por 
él  hasta  la  cumbre  de  la  serranía  llamada  de  Ocumare,  que  es  la  de 
la  costa.  Tuerce  hacia  el  cerro  de  Ocumare  y  baja  por  otra  falda 

F.  GKOO.  is 


-  554  — 

que  se  pierde  ea  el  lago  de  Valencia,  en  el  punto  de  la  Cabrera; 
aquí  atraviesa  el  lago  rectamente  aVS.  á  encontrar  el  cerro  deYu- 
ma^  por  donde  pasa  el  camino  de  Magdaleno  i  Gaigüe,  ioclina  en  se- 
guida al  S.  O.  á  buscar  las  cabezeras  del  Rio  Caicara,  y  por  entre 
Cerro-Azul  y  el  valle  de  Manuare  va  al  origen  del  rio  Círgua,  el 
cual  sirve  de  límite  hasta  su  desagüe  en  la  Portuguesa.  En  este 
punto  concluye  el  lindero  con  Carabobo  y  entra  el  que  separa  á 
Caracas  de  Barínas ,  e»  decir,  el  rio  Portuguesa  hasta  su  confluen- 
cia con  el  Apure.  Aquí  parte  límites  con  la  provincia  de  este  nom- 
bre, 6ig«l9udo  el  curso  del  rio  J^urekista^e' Ungí  a  tributar  sus 
aguas  al  Orinoco.  Empieza  entonces  el  lindero  con  Guayana  demar- 
cado por  el 'Orinoco  inistno  hártala  boca ^det  SiiiAtB/^gufiefido  las 
aguas  de  este'ilo  hasta*  su  orfgéñ ;  ydéspoed'loínaiklo  el^ctimodel 
ITnare  aguas  abajo,  se  recorre  la  linea  divisoiia  eonía  provincia,  de 
Barcelona. 

COSITA  DEL   HAK. 

'  Desde  d  morro  de  üñ^re  ba^a  el  cabe  Qtiit^ ,  la  t&tí»  totíre  al 
O.  IncTinándose  al  N;  por  espacto  do '2§'l«||^s :  tí)48f  estiHflra  baja 
*  mui  aplácmda  y  limpia,  'de  ñiddoH]tie*patU'IIU«eiir  nobai  nece- 
t-éldad  de  cítra  gttia:  qtie  el  e^cMd^Ho.  líM^ftttflM^deBiglief^te  y  el 
*'rfel  Carenero/ dfetahte*  eirtré  8Í^2  léguay/so»  los^üBtee^que?  bai'en 
'*  é^e  tret^hó  dé  cesta ;  pero  á  1a4at*gQi  ñ&íaé^  effa^  se^pocde  Ibndíear 
'  por  el iMidérO'de titdtasí  que  tíünis^toft^^» al^lideMié laembar- 
-  catión.  '  • 

^  E:í  cabo  Codera  esr  u»  1ÍW»%^totíf  Téd<«ldov  «^'N*.'  «teí^tel,  y  a 
'dlstdücia  de  una  ítílfí^  s^e  «lüa'letí^á  de  tiMii  baja  t  ten  limpia 
que  á  medio  cable  de  ella  hai  40  braza9^<M  'leiM^^diaiKnia.  Bsta 
lengua  forma  por  su  parte  occidental  un  hermoso  fondeadero  lla- 
mado Puerto-Corsarios;  qtte  á  dosnaibtode  tierra  tiene  8  brazas  : 
su  fondo  es  de  arena.  Desde  aquí  hasta  el  fondeadero  de  Chuspa, 
'Hdigtante  Megtias ,- Irf  cdstaf  tiene  alWcáfeíf y^cot-re* al  O-  N. O.  Este 
'  '  fbndeadérai^^  btré  no  ygMnde ;  f  {Mn^areiitrftf  m  éVmlúfXi  -  necesita 
' 'éresdatiíéiHó.'Eki  1á  ^fifa  dH'F«<ile'e^0eliiyé%^seinida  de  Glius- 
"'  t)a,  t  d«ideWllirt8tá^'ft»<l«»dW)*  dé^í^ 

'costa;  en^Mdá  éllA ^éfnHedé  fi»ÉdédHimeMa'AU]Hif  á'%tro  de  mos- 
'  •'  quelé;  En-'ésté-espíBfd^  é^ii'te ^eíWeirirdasf  de  CáWaflgfelm- ,  T«ttsaiia , 
''^  éariietó  y  Antre.      ■  ;  ••  , 


No^tse  pñ^é  déttr-q««4a*€kiáira-seft  Hu^p«efr4(Hii^M»vida^«kié 

qne^¿^al't>.yPi]iita^€ar»baUeda  alE. ;  por  co&slgineiité}  no  ésii 
al  abrigo  del  -I''  y  4^  euitdraBte,*  y  la  bpisa^de^E.^  que-ec^staaite'* 
mentereina , "trae  HMicho  maride lo¥a*.  Para  6t<k€ir  que  los  bu^jes 
se  atraviesen: áieHaeiiatido  el  YieBto-eak&ay  se  amanratt eoi^codera 
á  popa^  teilAda  atO.  !-9d^diid<>e9'debiieii  téoedeno  y  á  un  oable-de 
"fíerraliai  5  brazas.  En  este  fondeadero  rara- vez  se-esperimentíL 
-otfo  vi^to€|ue'ld4»¥isa;peroH»ii6le  haber  coptos  iQlerviaioside  m«h> 
lOtt^l  O.j-en-euyo-easose  pasa  iaedderli  áf««»^  Apén«Blifti>temtlé9; 
pefo^íHNirboiiáda9'del  6¿  El  en  la  e6Ueí«ii44iviid8avl^Jtodo  «atoee 
^e•Hge,  queatmque^la'Gaaira  B0  sea  por  la  naturaleza  deM^alun 
puerto  ó  fondeadero ;  lo  es  por  sttdima,»  ftm%  todavía  po|q«o  §a 
aquel  pmrto  do  eorren  riesgo  las  embarf  aciones  ni  aun  con  vientos 
fuertes. 

•  Desde  el  fohdeadero  de  la*  Ouaira^ sigue  la  eosla  al.  O.,  bastante 

limpia  para  poder  atracar  á  una  milla  hasta  elpuerto  de  Choroiri, 

atante?  4  4  leguas  :  en  este  espacio  están  la  ensenada  ^e  Catfa  y  los 

*Kmeftéeitosi  de  Oriearo  y  de  la  «Gruz.  A  poca  dlstanteia^  de  Chofoní 

está  la  punta^de  Aróaén  las  faldas  del  -cerro  de  ia  peseta,  donde 

tefmtnsl  la  costa  déla- provináa  de  Caracas. 

ISLAS. 

•  •'  '  : 

*Tevtaga'eé^f*>B^8' grande  ^  e^tá  ¡en^lfiíierlilHniodQ  la  laguna^  de 
-fjnare,  á:461eg0a^5fttNkideta>co6ta,  481egoa6^0;deM»pgawta^ 

44  al'IV.'  N.  ÓJéelmoftor  de  Bar^lona  y  56  de  la  Guaira  .^1%*»  mas 
ide  44egiias  de  E.  á  O.  y  2átf  N.  á  S.J«u%strQmid«d.ori€át»l  asta 
-^Hena  de-eset^Ues  ásperos  y  eíté^ile^^eíale»  «nafar  A  fvera*  A  la  parte 
'^élS.  E. '6é  hiatiai  una  rada  de^fiiguna  e^^oaodidad  para  lasembar- 
^'^mikmtesy  Y ^^  «itti  írmúmísAa 4^ mercaderes'  en  los- mesesde 
^  mayo  y  agostO/'C»  queriban  á  .-eoger  wh  Esta  46la  está  desierta  é  in- 
»«€iilta,  pero  era  «wi-^abueíante»  en  sal ,  «la  cwal  ^e -saeabai  de  «na 

laguna  que  dista  200  pasos  de  Ja^ttiar. 

En^lafiMe  éel*«|edMUa:tiei^«ii<pe«ftopeqiieio  y  alguna  agua 
>dále&y  aunque  poca  :porae^i>la4$la  está  pobláNte  de  árboles ;  pero 
'bada  et  oriente  se  balla-des^uda  y  no* produce  knas  que  yerbas. 
-^Hai- cabras  y  nMoliai^twtugas':  estaa^últimas^ -salen  á  la  playa  íde- 
'.fdsitar  8U6vi«evos¿^:Fct4ft^3i4^del  Nv^stá^el  ca^yo  Águila  quemsta 


t 

nedia  milla  de  la  oosiba ,  y  el  cayo  fierradura  que  brma  qoo  ^esta 
«o  canal  de  una  roüla,  cayo  pa^  no  debe  emprenderse  con  graa«- 
des  embarcaciones.  Al  poniente  bai  otros  cayos  llamados  l^ortugnir 
líos,  circundados  de  im  plaoer  de  poco  fondo. 
.  Orchila  se  encuentra  en  el  meridiano  d^  cabo  Codera,  distante 
de  él  2d  leguas ,  y  otras  tantas  al  N.  N.  O.  de  la  Tortuga  y  á  2(8  al 
N.  N.  E  do  la  Guaira.  Presenta  la  configuración, de  una  media  luna 
y  está  inmediata  á  otras  islas  é  i^tes  separados  entre  ^í  por  estro- 
chos  canales  cuyo  paso  es  mui  p<^igro$o.  £1  mar  es  mui  profundo 
en  la  costa  S.  O.,  la  cual  parece  tajada  á  manera  de  una  pared. 
Cerca  del  estremo  occidental  liai  una  playa  de  ar^ia  limpia^  frente 
á  la  cual  se  puede  fondear  al  abrigo  de  las  brisas.  Esta  isla  es  baja, 
á  escepcion  de  los  cabos  al  E.  y  O.  que  son  mui  allos,  y  en  los  cua* 
les  abundan  el  arbolado,  los  pastos,  y  sobre  todo,  la  yerba  orchila 
útilísima  para  la  fabricación  de  cristales.  Lo  demás  de  la  isla  es  ári- 
do y  ofrece  poca  vegetación;  está  escasa  de  agua,  y  los  únicos  ani- 
males que  se  hallan  son  cabras  monteses  y  lagartos.     . 

Roque,  isla  pequeña  y  desierta,  40  leguas  al  N.  N.  O.  de  la  Or^ 
chila,  y  28  leguas  al  N.  IN.  £.  de  la  Guaira.  Es  notable  por  una  alta 
jnotttaña  de  piedra  blanca  situada  á  «i  extremo  del  O.  £1  centro  de 
esta  isla  es  bajo  y  cubierto  de  yerba  ;  el  estremo  del  E.  ^stá  muí 
arbolado,  pero  se  inunda  en  tiempo  de  marejada  :  en  la  estremi* 
dad  del  S.  se  halla  una  fuente  de  agua  mui  fresca,  de  sabor  alumi- 
nóse. Los  Roques ,  pequeño  grupo  de  islas  desiertas  que  están  al  O. 
y  S.  del  Roque,  todas  pequeñas ,  bajas  y  mui  arboUdas  en  sus  cos- 
tas; están  cubiertas  de  mangles  de  tres  ^pecies,  rojo,  negro  y  blai- 
co.  Se  navega  fácilmente  y  coa  seguridad  por  en  medio  de  estas  k- 
las,  del  O.  al  S.,  puea» reinan  constantemente  los  vientos  del  £.  y 
del  N*  Este  grupo  se  levanta  sobre  un  arrecife  peligroso  para  la  na- 
T^acion  :  tiene  8  leguas  de  naciente  á  poniente  y  4  del  mediodía  al 
setentrion.  Las  dos  islas  mas  grandes  están  al  S.  y  se  les  conoce  con 
los  nombres  de  Cayo-Grande  y  Cayo  de  Sal.  Estos  cayos  están  á 
24  leguas  de  la  Guaira.  Tal  nombre  caifa  se  da  en  las  Antillas  á  la 
islas  bajas,  rocas  ó  bancos  de  arena. 

Las  Aves  son  dos  grupos  de  cayos  é  islilas  que  se  levantan  sobre 
dos  distintos  arrecifes  que  se  denominan  Ave  de  Sotavento  y  Ave 
de  Borlo  vento.  Distan  entre  sí  4  leguas,  bailándose  la  segunda  á 
8  leguas  al  O.  del  Roque  y  28  al  N.  N.  O.  de  la  Guaira^  Están  ha- 
bitadas por  una  infinidad  de  aves  que  pcNoten  sus  huevos  en  la  arena^ 


porque  las  islas  están  casi  desprovistas  de  árboles,  no  habiendo  mas 
que  algunos  naranjos  y  limones.  Viten  en  elfós  varios  pescadores 
holandeses.  La  principal  tiene  I  4/4  leguas  de  largo;  es  mui  es* 
trecha  y  está  rodeada  de  rocas,  en  las  cuales  nau/ragó  laescaadra 
francesa  dfel  alnnrante  d'Etrees  en  1678. 

Farallón  Centinela.  Es  un  islote  que  se  encuentra  al  N.  del  cabo 
Codera  y  cáS  á  distancia  de  4  leguas  de  este.  Parece  un  navio  á 
la  vela ,  es  mui  limpio ,  y  por  la  parte  del  N.  como  á  dos  tiros  dé 
fu^il  están  dds  piedras  ahogadas  que  forman  entre  ellas  y  el  islot<j 
iin  canal  tle  mocho'  fbndo. 

MONTARÍAS. 

'      •  •#    J 

La  cerdillcra  del  litoral  es  la  mas  elevada ,  y  sus  mayores  picos 
«on  NaigUafá  y  la  Silla  de  Caracas ;  el  primero  á  5.5^0  y  el  último 
i.  5  J  46  váidas  sobre  el  niveF  del  mar,  del  cual  distan  en  línea  reofá 
4  4/2  leguas  ó  -lO.OCyO  vai^s.  Esla  cadena  forma  un  si^éma  aparté 
que  se  confunde  con  el  de  \6^  Andes  cerca  de  Barquisimeto.  ^ 

En  el  cerro  de  la  Meseta ,  á  inmediaciones  de  Choroni ,  empieza 
la  serranía  que  corresponde  á  esta  provincia ,  y  presenta  picos  que 
se  alzan  progresivamente  de  4 .555  á  2.525  varas ,  que  es  la  altura 
<del  cerro  Pahnar.  Hasta  aquí  la  cordillera  es  una  sola  masa  con 
dos  declives  bien  pronunciados  ;  uno  al  N.  hacia  el  mar  de  las  An^ 
tillas ,  <>^tro  al  S.  hacia  ellago  de  Valencia.  El  ancho  de  este  trozo 
de  cadena  es  casi  de  6  leguas ,  y  su  largo  de  30.  Del  Palmar  Ba-> 
len  dos  rdmos  paralelos ,  Mamados  Cerro  dé  Carayaca  y  de  Agua- 
negra  que  se  pierden  cerca  de  la  mar ,  en  la  abra  de  Catia ,  donde 
parece  cortada  la  cordillera.  Sus  alturas  rm  pasan  arriba  de  ^  .60# 
Taras^.  Del  mismo  modo  se  desprenden  otros  dos  ramales  con  los 
nombres  de  Higaerole  y  de  la  Cocuisa ,  que  dirigiéndose  nno  al  E. 
y  otro  declinando  un  poco  al  S.,  se  ramiGcan  de  diversos  modos  y 
dan  origen  á  los  cerros  de  los  Téques  de  San  Pedro ,  del  Carrizal, 
del  Hatillo ,  de  Paraéoto  y  Chafayabe ,  aparando  las  agus»  del  Tuí 
de  las  del  Guaire.  Teti^inan  en  S^nta  Lucía  y  dan  origen  á  muchos 
valles ,  entre  ellos  Caracas  ( el  mas  notable)  y  el  que  antiguamente 
sé  llamó  de  la  Pascua  ,  que  hoi  nombran  sencillamente  el  Valle, 
Las  cimas  que  mas  se  elevan  están  entre  Í.600  y  1.982  vffraS.  Los 
rios  Guafre  y  Tui  limitan  esta  masa  de  la  serranía,  que  desde  d 
(^Imar  se  dirige  al  S.'E.  hacia  Sania  Teresa :  su  largo  es  de  4  2^  le- 


1 

IBM  Y  8tt  aBebiira  iMdia  d#^6.«De6df9  «I  atea  44i€alt»aig8ela.€er* 
faaía  eostora  «leváttdoae  á  sn^  iaayor  alium  6ft  ta^  Silla  y  el  Pieacho 
deNatgvatá ,  da caya* falda meridifaal sa)e.uft^di^e qaa^ciitnr»^! 
YaHe de  Caráeafi por  la partedei aacteala  y rseuna á44«6rraaia dal 
Hatillo,  en  el  punto  en  qoe-el  rio  Gtta»re>sa>ve-Í0ftad#áakrii!8t 
BB'-pasasiibterráfieo  deMaa&da  2M  varas  para'dkigifiealT^ibJja 
visla  da  la  €ae?a  en  qm  se*<pr6€i{Hta<el  rio  y  l»4^igpiraciott^a4t 
sarranía,  bace  pausar  qa«i  en  tiemjptta- reiuotoa-el- valla  dé  Gasáeaa 
p>dria  haber  sido  Halago  alfiao  q«a  sa^sacó  laag^  ^a-laa^gnaa 
se  abrieron  un  paso  en  la  parte  mas  débil  4e.la>aw^ui^»^La«|ttiNQ% 
pues  y  de  los  cerros  del  Hatillo  con  el  dique  llamado  Cerro  del 
Auyamal ,  da  origen  á  la  serraaí;)  de  los  Maricbes  que  queda  liml* 
tada  por  el  Guaire  y  el  rio  Cancagua  por  un  trecho  de  -10  leguas 
bafita  Aragütta  y  una  dfiolH»ra  da  2-4  /2.  lAi^ervimiaiwiiAf  la«.ca9ta , 
jdespues  de  Naígnalá, .  ettsancha  sua  baaes'  nMridi#Bates  y  daspíAa 
bersos  ramaksqueíorniaii  loa  valles d^^ftafaffa^^Giiatiffe ^  Oa^ 
piyay  Curiepe  preseoiattdo'^obFe  42  lapias^arila^g^  ima^aiietiam 
media  do'^r  Enel  €atK)Coderai<^noliiye>de  «€^eiHa  la^cendillai^ 
4a ia  costa,  y  lasque  acierta  di8laniáase'>iBí^se99Ír-la'<lire«eíoD 
de  lacaya*,  es  lacordiUera-del  ifttériai^,  foiHíaada^*{]^r' un^raaial 
del*m¡smo  sistema ^-que^ se despreade é^l  cerra^-de-Tuattragvaaü 
la^provincia  de  Carabobo ,  y*  corriendo  paNikla  a^^^anraBÍa^aJa 
oa8ta>  separa  las  Uaauraa  de  lesrieaa  vattes  da^  Toí^y^'Affagliak 
finios  carros  de  Yuma  y  da  Mauuare' comiaiM  la  raya^iyisona 
caá  la^p^ovineia  d<^Cambabo,:y  desda- aqfí«i||p^aareaiaa'á(€agBtr 
la«opdUiera  del  iateríor.  J)espiiasrde'6»rmaF>'las:Y^las^'da>  Tfí^aíMif 
«tima,  se  abroen  dosr^^najea:  unoiqua^sa  faNií^eoiifidevaUar 
BMUte eD la  yiUade  *C^  ,  .dcjaiAdo  WM< anabá «abra-^^ sa  vuelva 
luego  pri^resivao^e^te  á  ievawtar  >  dtaigién^a'fiJeaíipre  g^<|aoian4a 
basia  poderse  en  el -morro  del  ^kiarO)  «^bra  eMimile'^.4a^la^lprai^ 
yincía  de  Caracas  coi^  la  de  Bareelana.  Sus  p«ftliaa'|]psei&HQiafadoa 
es4a&en)lapierra>G«ard{fna'<la  -i.^fS  yaiiiS):y:<an^lasNc«^4^4a 
jfatouitay  Al4agGa€Íade>4.893  y  4«85ai  S^aifaMaa^setaiMtoicnsrt^ 
desagvwtíb  al  Tui¿4a  tnar  ,'miéatf«S'kaorieMa|es4a«ltooeft,i^l:*Guáh 
rieey .al  Uñare ^ ^aado  origapá- varios^ va^tl^Sffériila^ ^iharmasna*^ 
mim  trechode  47  leguas^  teniendo  la.^sarraoía'f^iieralo^eoia  dda 
li^f  bo«  £1  valle  del  Tui  está  alevado-25(^  vavfis  frauia  i^Qowmm  \ 
]al  jiaso  q^  el  4al  Guirica  está  4  085*  freair  á  $.  ¡SeiNOtúwa»'^  ^ 
.    Sl'OtroraHkal'^ua seabrrcavea- dafllicasipraiaayfe^^iaeaoii^^d 


—  559  — 

S.  S,  .£U  9  .se.  eteya,  d^xepeute  ea  Cecro-Azu),  y  en  el  de  la  Platilla 
2.077  y  2.2í>6  vara^,  y  reb^áado3e  depues  y  á  vezes  interrum- 
piéndose por  un  e^paclQ  de  8  legqa&  con  urv.ancho  de  4  ,  concluye 
cerca  de  Camatagua,,  uníj^ndoee,  en.  el  cqrro  de  la  Virgen  ¿  que  es  . 
el  estremo  oriental  de  la  Galera  :  esta  corre  paralela  al  mismo  ra- 
ma] que  Yiene  do  la  provincia  de  Garabobo  j  como  una  estrecha 
muralla  pefiascosa  que  sirve  de  último  límite  á  las  estensas  11a- 
nui;as*. 

De  la  cordillera  del  litoral  caen  directamente  á  la  mar  29  ríos  , 
cada  uno  d^  los  cu(^les  forma  un  valle  que  puede  regar  con  sus 
agi^Sk  Por  la  parte  meridional  caen  Á  O  ríos  al  lago  de  Valencia  y 
22.Í1I  rio  Tui,  formando  .cada  cyal  un  val^c  delicioso.  El  Tui  es  el 
principal  rio  que  corre  en  medio  de  las  dos  cordilleras  de  la  costa 
y  del  interior.  De  esta  última  recibe  /1 7  y  2  van  al  lago  de  Valencia. 
El  Tui  nace  en  los. cerros  de  Tamaya  y  Maya  :  tiene  un  curso  de 
55  leguas,  recibe  59  rios  y  multitud  de  riachuelos,  y  empieza  á 
ser  navegable  enir.e,Aragú¡ta  y  Santa  Lucía  pof  espacio  de  24  leguas 
has' a  la  mar.  Esí^e  rio  está  llamado  á  ser  el  canal  que  llevará  los 
frutos  de  todas  las  selvas,  hoj  incultas,  que  se  hallan  en  la  serranía 
y  al  pié  de  ella,,  por  donde  corre  el  rio. 
'  De  la  cordillera  del  interior  van  también  directamente  á  lámar 
-15  rios,  y  5  caen  al  Uñare  que  los  lleva  también  á  la  mar.  Con- 
duce el  Guárico  al  Apure  25 ,  al  p.aso  que  7  van  á  la  Portuguesa. 
£n  los  llanos  se  originan  1 5  que  descargan  al  Uñare ,  al  Suata  y 
alQfinQco,  el  principal  de  los  cuales  es  el  Manapire  que  nace  en 
la.montana,  de,  Tamanaco.  El  rio  jnas  iniportante  que  se  dirige  al 
S.es  el. Guárico^  9i1e.se  origina  .eula  montana  de  Manuare  y  desa- 
gua, en  el  OrinpCQ  cerca  de  la  boca  del  Apure  ;  es  un  rio  de  se- 
gunda pr^en  en.  los  de  la  república  j,  tiene  ^24  leguas  de  curso  y 
60  d^  navegación,  pudiéndose  ir  embarcado  por  él  hasta  mas  ar- 
riba di^  CalaU^zo^  :  en. invierno  pueden, subir  las  embarcaciones 
mucho  mas  arriba  de  Camatagi;a.  El  Orituco  es  otro  rio  importante : 
li^ne  rango  de,2'j  orden  en  la  república,  su^curso  de  71  leguas, 
SOde.las  cuales  son  nayegables :  nace  eula  serranía  de  Altagracia^ 
qfie  hac^,p^f  le  de  la  del  inlerjor.  El  Manapire  es  otro  de  2^  orden  ; 
na^e  en  I^  cordillera  del  interior  ep  la  moniafia  de  Tamanaco,  tiene 
unpursade  63  leguas  j  S0Í9  ^ 2  navegables^  De  los  que  se  dirigjen 


—  ^60  — 

al  N.,  el  mas  imporlanfe  es  el  ünare,  del  qoe  se  hablará  en  la 
provincia  de  Barcelona  ,  por  partir  límites  con  ella.  Tiene  pues 
esta  provincia  5  ríos  de  2. <» orden,  uno  de  5.®  y  141  dé  4.*  orden, 
sin  considerar  mas  de  500  quebradas  6  riachuelos. 

L4GOS    y  LAGUNAS. 

Lago  de  Valencia.  Parte  de  este  hermoso  lago ,  llamado  antigua- 
mente de  Tacarigua ,  pertenece  á  esta  provincia,  desde  la  punta  de 
la  península  de  la  Cabrera  hasta  el  cerro  de  Yuma.  Esfa  pequeña 
porción  solo  contiene  5  leguas  cuadradas ,  quedando  en  el  terrl- 
'torio  de  Garabobo  las  ^7  restantes.  Tiene  este  lago  25  leguas  de 
circunferencia :  su  figura  es  oblonga  j  con  casi  9  leguas  de  E.  á  O. 
y  4  de  N.  á  S. ,  frente  á  la  hacienda  de  Yuma ,  que  es  la  parte 
mas  ancha.  En  las  5  leguas  cuadradas  que  pertenecen  á  esta  pro- 
Tiqcia  está  la  isla  Cagúire,  que  tiene  una  milla,  el  islote  del  Zorro 
de  méuos  de  media ,  dos  peíiascos  de  algunas  cuadras ,  llamados 
Hormiga  y  Gotúa ,  y  la  peña  la  Hormiguita ,  entre  aquellos  dos 
peñascos.  La  profundidad  media  del  lago  es  de  15  brazas  y  en  los 
lugares  mas  profundos  tiene  57.  Su  altura  sobre  el  nivel  del  mar 
«sde  516  1/4  varas.  De  la  provincia  de  Garácas  caen  al  lago  ^2 
rios  con  5  bocas.  Las  aguas  del  lago  son  salobres.  Solo  hai  en  él 
tres  especies  de  pezes :  guabina ,  vagre  y  sardina ;  no  hai  caimanes, 
sino  algunas  babas.  Las  aves  acuáticas  como  flamencos ,  patos , 
cotuas  ,  güiriríes  ,  gallinetas  y  gallitos ;  ofrecen  una  escelente  ca-  ' 
zería. 

La  laguna  d-;  Tacarigua  se  encuentra  entre  la  boca  vieja  del  Tui 
y  la  del  rio  Machorucuto  ,iseparada  de  la  mar  por  una  lengua  de 
tierra  ,  que  da  paso  á  las  aguas  saladas,  no  estando  su  boca  tapada 
por  las  arenas  que  acumulan  el  flujo  y  reflojo  del  mar.  Tiene  15 
leguas  de  circunferencia  y  ocupa  una  superficie  de  8  1.  c.  Está  di- 
vidida casi  en  su  medianía  por  una  lengua  de  tierra 'y  un  islote  á 
flor  de  agua  :  la  parte  occidental  toma  el  nombre  de  Ensebada  del 
Guapo  y  la  oriental  se  subdivide  en  dos  partes  por  una  isla  ane- 
gí^da  :  llámase  la  una  Ensenada  Grande  y  la  o!ra  Ensenada  del  ' 
Marapatal.  Hai  oíros  islotes,  pero  todos  anegados ,  y  solo  sus  man- 
glares asoman  en  la  superficie  de  las  aguas  que  están  al  nivel  del 
mar,  y  cuyo  fondo  en  su  mayor  parte  e^  bajo,  no  escediendo  de  4  bra- 
zas los  sitios  mas  profundos.  Las  orilfas  de  esta  laguna  están  inunda- 


dafl.  £a  eilds  está  el  pajerto  de  Palmita ,  frecaentado  por  los  pesca- 
dores del  Guapo,  el  de  Santa  Gmiz  por  los  de  Cúpiraj  y  en  su  boca  se 
halla  nna  poblaeion  perteneciente  á  Rio-Chico,  que  toda  se  dedica 
á  la  pesca  en  la  misma  laguna,  abundante  en  lebranche  y  mojarra, 
róbalo ,  liza ,  pargo ,  vagre,  chema  y  sábalo.  Solamente  6  grandes 
quebradas  caen  á  este  estanque,  que  tiene  de  largo  4  4/5  leguas 
de  E.  á  O.  y  2  4/5  de  N.  á  S.  Guando  se  suele  abrir  la  boca  de  la 
laguna ,  sale  de  ella  gran  número  de  pezes  que  toman  el  rumbo 
hacía  Barcelona ,  y  al  p^sar  entce  Gomaná  y  Margarita  caen  por  lo 
jcomun  en  las  redes  de  los  pescadores  de  aquellos  parajes. 

Laguna  de  Uñare.  Está  situada  entre  las  bocas  de  los  ríos  Uehire 
y  Uñare,  separada  de  la  mar  por  una  lenguado  arena  que  produce 
escelente  sal  en  sus  orillas,  siendo  su  mayor  profundidad  de  5  va- 
ras. Es  mui  estrecha  y  larga,  y  tiene  de  £.  á  O.  cerca  de  4  leguas, 
y  2/5  de  N.  á  S.  Su  circunferencia  es  de  8  y  tiene  5  1.  c.  de  super- 
ñcie.  Caen  á  ella  los  ríos  Chavez,  Cántaro,  Purguei ,  Tocuyo  y  la 
quebrada  de  Caracarache.  Estas  aguas  comunican  por  el  caño  Pes- 
quería al  Uñare,  y  este  á  la  mar,  cuyas  aguas  saladas  á  marea  lle- 
nante penetran  por  el  Uñare  á  la  laguna.  Abunda  esta  tanto  en  pe- 
zes,  que  los  habitantes  del  vecindario  del  Hatillo  están  enteramente 
dedicados  á  su  pesca,  ayqdados  de  los  vecinos  de  Clarines ,  en  la 
provincia  de  Biurcelona.  Las  orillas  de  la  laguna  son  áridas  y  salitro- 
sas :  en  el  verano  se  seca  mucha  parte  de  ella ,  alejándose  cada  vez 
mas  del  pueblo  de  Uehire.  De  esta  laguna  salen  anualmente  gran- 
des emigraciones  de  pezes  j  que  remoutando  la  costa ,  van  á  los  ba^ 
jos  entre  Coche  y  Cubagua  y  á  la  costa  de  Cumaná,  en  donde  los 
cogen  los  pescadores  de  aquellas  provincias. 

Laguna  Encantada.  En  ella  tiene  su  origeg  el  Rio-Chipo  :  es  un 
grande  estanque  producido  por  las  aguas  de  varías  quebradas  que.s.e . 
desprenden  de  los  cerros  de  Urape,  situados  en  la  coirdillera  del  in- 
terior. El  rio  sería  navegable  con  pequeñas  embarcaciones  hasta  la 
laguna,  pero  su  cauce  no  está  limpio  y  en  el  dia  solo  ofrece  5  le- 
guas de  tránsito  á  los  cultivadores  de  sus  fértiles, vegas,    . 

La  lagun^  Taign^iguai  se  forma  en  los  terrenos  antiguamente 
ocupados  por  las  aguas  del  lago, de  Valencia.  Parece. que  el  rio  de. 
las  Min^s  que  viene  de  la  serranía  al  poniente  de  la  viUa  de.Cura /. 
después  de  perderse  por  mas  de  una  legua^  aparece  de  repente  por, 
medio  de  un  caño,  y  forma  esta  laguna  que  desagua  en  el  lago  de. 
Valencia  por  el  caño  Diaparo. 


t 

Lagaña  Palmananitía ;  laí  mn%  grande'^oe  eiMo  €»  lift  MnopaB  de 
Caracas.  CilínTÍerao«omiiiiieaeettel0^iiioo»pov'Wi  p6qiieilO'eiHlo> 
y  cuando  está  ilént  ocupa  nn  espacio  démaa d^'U)giia  y  «MÓia-de'. 
largo  Telina  de  anchb/ 

Las  lagunas  Gtíamo ,  Ganadoty  MtfrareiK^  conse^ai^  siéaipre  sua- 
agoas^  son.  grandes  y  están  «n(re  PalHiamMia  y'«lri#lfaMipÍN>al; 
fiíide  la  escarpa  de  1á  mesa i^añrtesa. 

U  lágnna  Oarobaestá  «nlre^Manapire  y  Idi  eerrilM  déiCa^nHa.: 
mantiekie  sierapre'égvm  y  ^  ba9(«nl«'gniad#i\ 

Cerca  de  la  boca  dé  Ottaritlco  faat  ^natro  Itguiia^  daMoka  ids^. 
qtnérda-de  este  rio,  lascnales  conservan  1)a4aa(eag«a,  saalMrma- 
sas  y  están  llenas  4é  a¥«s  acuáticas. 

Enia  isla  de  A))iiriio  liai  cuatro  li^ionas' grandes,  honéat^ríéas: 
en  pezes  y  dyesycon  grande  'abnndanciaf  dc^cUgMres.- 

CUMA. 

El  clílna'  deiá  pro^írieiÉ  dévCaritas^d^bé  coosidairaivae-sanA^  en  • 
generaK  Sus  düMadas  'llannras  -no  snfi^n  ^^lires ,  ni  >á  la  •  entrada  * 
ni  á  lá  salida  dé4as«g«as^'  y  sas^iabilsnies  goea»<dei sakid;  La  gran' 
selva  da  Tamnnacoyiaf' montaña  de  los  Ofitresson  sanas/ lo  mísiDO  > 
qnela  de;6MPÍIie.  Los  grandes  bosques  de  esla^  provincia- no  son 
enfermizos,  esceptuando  los  de  algjunas  partes  bajas  y  anegadizas, 
como  los  dé  Csrpaya ,  Odriépe,  Rio-Chico-,  Gtiapo-,  TfecariíHMi  y  C6^ 
pira,  en  cuyo^  lagares  screlen  dsfr  calenturas  tercianas  ^  emanadas  > 
de  un  clima  cálido  y  -faúáiedo  y  dé  las  exhalaciones  de  los  pantanos» 
Cuando  se  desmonten  estas  selvas «f  se  dé  curso  á  las- aguas,  caan 
biará  su  clima ,  que  atfn  en  el  estado  actual  no'  es  peligroso,  pnes 
en  los  logai'es  sobre-indicados  iiéi  grandes  poblaéiones  y  cereadé- 
ellOs  ricas  y  beltes  haciendas. 

Ett  \á  costa^l  mar  el  paisicsisano ;  tan-  solo  en  nnoqneotro' 
pnnto  suelen  á  vezesdar  algana sfit'bres, debidas  á  las  anegaoione»^ 
y  estas  son  muí  raras. 

En  la  serranía  todo  es  sano  y  de-  un  temperamento  d«eoiis(ante 
primavera.  iJOs  valles  son  salubres,  y  cada  una  de- ellos  tiene- 
dimas  variados,  seguu  sus  dfferentes^levactoncs  sobre  el 'nivel  dd 
mar,  haliáádose  en  todos  un  caldr  moderadt»  6  una  flreicura  delt* 
tíósa. 


—  s»  — 


ESüAGlCKf   OlIrlJVflfifilU». 


En  esta  provincia  empiezan  las  lluvias  eu  mayo,  y  en  la  costa» don 
raa  hasta  oclobre;  después  siguen  unas,  lloviznas  llamada&nor/^i,^ 
qj^e  comienzan  en  .diciembre  .y.  acaban  en  enero.  £nlos.yalJe&.q]]Lá 
están  entre  la  cordi-Ueradc  la  costa  y  Ja  del  ¡nleck)ir,.aQ«bft  ^l  uk'n 
viemo-en  octubre,  y  uBO-ifue  otro  af;pacero  delo6jaox:te&,siu«iaUieir 
gar  al  Tiii  ó  al  lago  de  Valencia. 

En  octubre  cesan  las  lluvias  en  los  llanos  ^  los  cuales  nunca  que- 
dan inundados  en  la  parte  que  se  llama  Alto-llano ;  si  se  esceptúan 
varias  p^tneñés  sabanas.  Tampoco  suceda  esté  en  lá  part)e  norte  de 
las  llanuras  de  Calabozo ,  donde  apenas  se  cubren  á  medio  pié  de 
agua  algunas  sabanas  bajas.  Hacia  el  sur  de  Calabozo,  el  terreno  es 
yt-mul.  bajaTlosiiod  tioárieoy .  Tbfi8ck>6>  Ctcglia^y-Porlu/^venf  que 
jtotagot»  60  eh  ApiHref  so  saltii  déunmáfieppoD  la^represftquef^olDtf 
esttí/á  ^ansfttiíc  Iaid:crecteat6s:d6l.'graiide«0iÍB6fx^i'£s(ós7Í08riiñjUBi» 
dlMí]í<ctttáft4fts  lani)fy<nnparte  de* Ji^^abanM^áamediáias  ¿  ellóis/  for^ 
SMndOíTgratt'niMBeffOfdé^esIem  q«nR6afa)¿s6í6e<ntn  enJoffiáirtedél 
¥tt»iio^  y^imocliM^  idlfli6HC(Msc9J»i£Ícemgi^  Codoieimio*  El  bmé 
aMaMeée  estose^fOs^eflteirde^CaiBigoiw,  jCOfenag«is41egQi]^de»«> 
drJa  I^rtagttesií  a4  Guwiuoí)  yttaaiíhbDáaft  >  qveseaMctsItao  icamwfii 
c*  iMofats  pactes^^-parar.  ptderlésiatniTesafi.  Lo  *  mismo  ?  sucede  em 
lmrÉ^níi3iqo»¡eai(áacmrcdíée*í»\  b<Mfl»^eJo».f  i»et!Ohi¿gaa>y  'Tiseim 

"  ía  esl«0HmnikliÍBin6FD6^iiace;peff0ios.1o8)eamiiia6fqiuea^^ 
fliKilaaao^  coBierdted6f.báiQ{'Tirí/.lafi^doiCapa|[8^  Ouriépf,des.«Pita*ij 
ses^  LtfftftijOy  dUBOiapr)  (]^pD)^Cbp)la::^Micaff^l.^£a:^lasiCllliav 
sinba«iim  lado4aÉrtpiolnB(!k),'q«e<á;yesÉB  JasiBaiaa'iienettdifii^^ 
tad  en  salir :  los  demás  terrenos  sondespejados, ysiiüráiiáto  nfl>«s> 
taDr!mfféé.'  En  'los.  Ihüweo'SiifredaiiMotmHÜdadi;  de*  tener iqtt»f)etar 
tevaüés^y  rmi  ntdeí^  f  Jsdgoitas'veMff^ .trecim  110 fieqtieaMr'dé 
gmmfM^\9éút^  i  iQíémtuB  ;«8  ttfaOTit«iÉtoe«aeepteKalgiraa»^p«c[ii«? 
nasípniiee/ 

■ 


—  564  — 

97  parroquias  y  4-17  grandes  vecindarios,  en  que  se  cnltiva  café  , 
cacao ,  añil ,  algodón ,  tabaco ,  caña  de  azúcar,  maiz ,  arroz ,  algún 
trigo,  yucas,  plátanos,  cambures,  alverjas,  papas,  apios,  ucumos^ 
frijoles,  caráotas,  quincbonchos,  auyamas,  lairenes,  capachos,  ma- 
pueyes^  ñames,  toda  clase  de  hortaliza ,  y  las  frutas  de  tierras  cáli- 
das y  templadas  que  sirven  para  regalo  del  hombre.  Consta  la  po- 
blación de  242,888  habitantes,  que  se  pueden  dividir  de  este  modo : 
$0/4  00  que  se  dedican  á  la  agricultura,  25/4  00  á  las  crías  y  25/^  00 
al  comercio,  artes  etc. 

CIUDADES  y  VILLAS  CABEZERAS  DE  CANTÓN. 

CANTÓN   DE  CARACAS. 

Cadicas,  en  otro  tiempo  capital  de  la  capitanía  general  de  esle 
nombre,  io  es  ahora  de  la  república  de  Venezuela  y  de  la  provincia 
de  CaráeJB».  Se  encuentra  en  la  latitud  40^  50^  W^y  y  en  la  fongitod 
%%^  2h%  al  O.  del  meridiano  de  París  ,  y  ^V  ¥  45'^  al  O.  d«l  dé 
Greenwich,  á  4 ,044  varas  sobre  el  nivel  del  mar,  en  una  temper»* 
tara  media  de  4  9^  45  del  ceotígcado.  Fué  fundada  por  Diego  Losada^ 
en  4567,  en  el  mismo  punto  en  que  Francisco  Fajardo,  vecino  de 
Margarita,  fundó  en  4560  on  hato  de  ganado ,  llamándose  entonces 
cA  lugar,  Valle  de  San  Francisco.  La  ciadad  recibió  el  nombre  ée 
Santiago  de  Lean  de  Caráccu  ^  que  no  podo  conservar,  quedan** 
dolé  solo  el  indígena  de  Caracas^  porque  así  se  llamaban  los  nato^ 
rales  de  aquellas  comarcas,  que  tantos  esfuerzos  htderonpor  edd- 
servar  su  independencia.  Tenia<  la  ciil(kd  por  annaSiUn  león  psté$ 
rampante  en  campo  de  ]]|ata,  dy^ual  llevaba,  enlr&sus  bracos  una 
venera  de  oro  con  la  cruz  de  Santiago,  y  por  timbre  una  eorooa.coii 
oinco  puntas.de  oro.  ;        > 

£1  suelo  sobre  que  está  fabricada  esta  capital,  sé.incliAa  gra*^' 
dbalmente  al  Gnaire,  río  que  se  aumebta  con  las  aguas  de  ioa  ^B^ 
vamos  á. nombrar,  vadeable  en  (odas  ^estadones ,  laéníM  despoea 
de  grandes  lluvias.  Otro  declive  conduce  al  E.  hasta  el  rio  Amoaeoy 
sobre  el  cual  está  conslrnido  un  hermoso  puente.  Este  doble  decli- 
ve del  suelo  contribuye; ála^salubrídad  de  la  población.  El  Caroata^ 
riachuelo  que  se  atraviesa  por  otro  puente ,  separa  el  barrio  de  S. 
luán  de  la  dudad  j>ro{9anMM4^  ilichaí  El  Catuche  corre  casi  por  su 
oeftlro  y  sus-a^^ ,aHfliedt8Ri<ria&'ineiite9 pilleas  y  particiilmref;^ 


Raonidos  estos  rios  al  Goaire»  baüan  el  fértil  valle  de  Ghacao,  Jor- 
m^dp  por  la  prolongación  del  de  Caráeas,  que  concluye  en  Petare 
en  la  caeista  pelada  de  Auyamas,  mientras  al  estremo  opuesto  se 
puede  decir  que  principia  en  Anlímano.  £1  rio  Guaire  corre  pQr 
este^ valle,  que  esta  á  966  varas  sobre  el  nivel  del  mar,  del  cual 
dista  en  línea  recta  solo  dos  leguas ;  pero  se  interponen  las  mas  a|- 
.t^  serranías  de  esta  provincia,  las  cuales  por  la  parte  del  N.  pre^ 
.senlan  hacia  la  mar  y  un  enorme  precipicio ,  frente  á  Garaballeda , 
ocasionado  por  el  pico  oriental  de  la  Silla  (elevado  5.1 46  varas  so- 
bre el  nivel  del  mar)  del.que  solo  dista  una  legua  en  línea  hori- 
zontal. 

£1  rio  Guaire  nace  en  el  grupo  de  las  montañas  del  Palmar,  que 
es  un  nudo  de  donde  salen  y  en  donde  se  ramifican  algunos  cerros 
que  originan  diversos  valles,  entre  los  de  Garácas  y  del  Tui.  £1  Guaire 
que  baña  el  pié  de  la  capital  de  la  repúbUca,  se  forma  cerca  de  las 
AjuntaS;  por  la  upion  de  los  dos  rios  S.  Pedro  y  Macarao.  Hasta 
Antímauo  .el  valle  es  estrecho  y.  algo  tortuoso,  pero  desde  allí  se  en- 
.  Sancha  y  lleva  una  direcion  constante  de  poniente  á  naciente,  cor- 
riendo el  rio  por  su  medianía  hasta  la  cuesta  de  Auyamas  :  allí 
tuerce  al  S.  £.,  se  abre  un  paso  subterráneo  en  la  serranía,  y  se 
precipita  por  una  cascada ,  siguiendo  después  por  entre  dos  enor- 
,,mes  murallas  de  cerros  á  buscar  el  rio  Tui ,  al  cual  se  une  mas 
abajo  de  Santa  Lucía.  Al  examinar  este  valle  tan  bello  y  variado 
por  las  x^asas  de  campo  y  haciendas  que  lo  cubren ,  por  las  flores^ 
frutas  y  grupos  de  árboles  distintos  que  lo  adornan ,  no  se  oculta , 
sin  embargo,  al  observador,  que  una  gran  parte  de  los  terrenos  que 
están  al  pié  de  la  Silla,  son  residuos  de  este  cerro  ;  que  acarreados 
por  las  aguas  en  el  trascurso  de  los  siglos ,  se  han  ido  depositando 
por  capas ,  formando  un  terreno  inclinado  hacia  el  Guaire.  A  la 
derecha  de  este  rio,  aunque  la  serranía  es  mas  baja  y  menos  pen- 
diente, presenta  en  pequeña  escala  la  misma  distribución  del  ter- 
reno. Los  riachuelos  que  atraviesan  la  ciudad,  ó  aquellos  que  fuera 
de  ella  corren  por  el  valle ,  presentan  orillas  mui  altas  y  ^carpa^ 
das,  cuyos  surcos  profundos  son  debidos  á  la  rapidez  de  las  aguas  ^ 
cuando  después  de  fuertes  lluvias  descienden  de  la  alta  cima  del 
Avila  y  de  la  Silla ,  y  van  á  caer  á  su  antiguo  lago ,  ahora  trasfor- 
mado  en  valle  pintoresco,  cerrado  por  todas  partes,  y  con  una  sola 
abertura  subterránea  que  parece  minada  por  las  aguas ,  las  cuales 
antes  de  abrirse  este  paso  debian  quedar  estancadas  en  el  mismo 


—   UQO     — 

'yMe*,  fonnandiniti' hermoso  hgo  en  medio  de  "áltas^  semtüiasf.^  Lt» 

^dos  dmas  Tédotídas^dé*  la'SfHay  se  Ten  de  Carácas^  como  mtii  {(ró]^- 

iEnas-á  Iseitkdad ,  estando  -shrembargo  á  k  distancia^de  40^:900 

'Tara?  j  ma»  elevadas  ^iioe^et  ^odo  del  teotro  deia-'chidtld^.fi05 

'Taras.  Se  res  casi  bajo  los  mismos  ángulos  de  deracion  qtieel^ico 

*de' Tenerife  desdeel  pcrerto  de  OrotaTa.'  La*  primera  mitad  áéí 

monte  está  cubierta  de  yerba  corla,  y  despaes  una  anfcfaa  faja^^e 

'árboles  siempre  Terdes  eíñe  los-eostados  det  cerro  iia^ta  cerca'de^ni 

cumbre  :  allf  cesan,  y  masas  de  rocassé'leTSiitanretí  formaHlcM- 

pulas."^  Privadas  esl^s  de  tegetaeion ,  -^sis  flancos  pdádos  aumentan 

la  altara  aparente  del  cerro,  que  en  la  templada  Europa*  apenas 

'llegaría  á  tos  Hmites  déla  región  ée  las-  nievcs'perpctmis;''Eih«sta 

^montana  tiene  constantemente  á*  la  vista'el  habitantchd^^átáea^la 

altara  de  fas  otras  dos  cajpltafes  que  con  ^na  íbrmarotf'la  antigua 

"Colombia ,  es á  saber ^i^nt^á^ Bogotá  y^Quito  \  fat prlmerr conoío 

^á  ir  altura  del  pico-mas  Itlto/  y  la^otra  359'^raras  ma»wríba. 

'  Caracas  es  laTesidencía  del  poder  ejecutÍToy  del'jüdkfáfj  y'tflí 
'  también  sercuneantrainrente  por-el'  períMo^de  tresmeies'istpo- 
^ der legislativo , tompuesto  de unacánaaradc^eníidores^y titra'de 
'representantes,  firmando  umbas  el  congreso nadonal.^Harmna 
corte  superior,  y  es- la  sede  del  arzobispado. 
-  En'  4  766*  la  poblarcion^e  "Caracas  y  del  hermoso  ralle  en-ijuc 
"^la  está  situada  ,  strfríó  una- crtfel  epidemia  de  viruelas^  eñ^que 
t perecieron' ñÁ% lüil  personaren 4a ^dad  solamente'.  Besdc aque- 
t  lia  época  memorabiese  ha" hecbo-tan- general  1^  inoculación  j-que 
^^^toüboldt  dfce4^!QH»erlÉ  iél  Tisto-ejecttterr'sin  dtrtteHio  dé^iormM- 

*  eos;  El  gobierno  ida  aclualmente  lapropagadon^de  la  vacuna;' y 
en  las'^ndes  poblaciogeS'bar esmero  en- mantener  elpuff-necesa- 

'  rio.  En  el^ño  de'4860  la  poblacfon*de*€arácarera^de  '^W^'A- 

*mas;  Bespues'dela  sal!dade'Htfftibbldi(que  toé^naqtíell«"époc8), 

riguió  aumenptando  4a  pobhtetony  se^gradufeiba  en' f^ditOi^- almas 

"cuanda*  aeaeéió  et  terremoto  de  í 812 ,-  que  brzo  perecer  cerca- de 

■  42;M0  personas  bajólas-ruinas'  de  los^dificios*.  Los^acontéeiíliien- 

4 -fos' políticos  queban  sucedido  á  aquélla  catástrofe  j  banr  fed«íddo 

-el  número  á SS^.^dOO ;  pero  eslas  pérdidas ,  como 'dice^elmisíio 

*  fiumboldt,  s^ff-mui  pronterepai^adasj  si  d  pais  enestremoféftii 
y  comerdanle ,  de  que  Caracas  es  d  centro ,  •  tiene  la  IfeHiÉidad-de 
gozar  de  alguBos  años^de  reposo  y  tlenttatsáftia>áéttiiuis^riMfon. 

'  Hai  en  Caráea#M6^  4glé8lftS',  ^ee4aipreÉd!do9  é-'üaiívejitosj  4Mh)S 


V 


-  ~í567  — 

WMtWBalwiiten-5 d»«moiy«8,  ifi^tonel^ deinihf^ ;..la$  reatas.de 
•esleaéUiaio^.y  Mit«Mi7«iit08iDiísDM>f  Jbaa^do>siipriaüdoS(  y  d^ti- 
DadUftei|«ella|  y  loe^düMMo^pam  k  eckwaeioq  publka*  Ea  lugar  de 
fraUes^^se^v^'hoÁ  i^eooiver  yor  k)«  dausJUQsmoabríUaatQ  juventud^ 
^•dattdo^tos^iaA  liellaft«s^niiiK8s  á^f  fMMkes  y  á-sirpairia,  pprsas 
preeoxe&'laletttDS:  yooBStanle  ^pliea€iao,«.£l'Sr  Felidano  Monieiije- 
gro  ColoD  ha  cooverlido  la»  v^ja^ipaaedes  de  S»  FfaB€Í$€o  en  ua 
beniiosoy  útil  «stabkoimkatodc  «duoaoioa^eoD  el  nombre  de  Co^ 

fej|fiO''J»tfa^/nfi{6fi0mfeiimarqiief»se^  Ádlí.mismo 

el  getteipoo  iiaee  4roedifi<ar  i^waéú^ga  ifel^mismo  «on véalo  para 
desüoarlo  á  la  enseñanza  pública.  Cuenta  Caracas  una  uniyersklad^ 
un  4e»inteÍ9)  >iiaA  «keademia  militi^r  ^^tras^de  pintura  y  másica , 
vUnaseaeoelas. -públicas  y/<K>1egio&  particular es^  entre  los  •cuales 
mareee&paftkitíar  meaemn  el«eolegio'dc  la  Paz, 7  dos  de  ninas : 
en  elksMfie  aprenden  todas<Ja&  oateiHasique  ae  enseñan  en  Europa 
enf  esuibMfiíiíéatos  sfm^ntes.rfiai'fiocíedade^  palrióUcas,  de  agri- 
c«ltora  y  de  «niigradoii ;  cmco  improB^as;  que>  pueden  competir 
CM)n  4as^ui^peaS;  yoiroa  taaio^^eriódicos  que  circulan  por  todala 
república  y  se  envian  al  estranjero.  Caracas  tiene  un  teatro^:  8 
puentes  que atravíesiiniosrio^y  ^  pkuas.grandesi  y.^  pequeñas.  La 
mayor  tiene  450  veca^  pDrnsadáiadOi  y  al  r^dedor.deella4uurmachas 
pequeñas  tíendas  de  géoeros  y  víveres»  Bstaj  ^za  eslá  bien  egipe- 
dfada  y  es  ei- mercado, geiMrs^  pre^visiO'  de  legun^resi  íruias^xar- 
nes ,  pescado ,  oaflería ,  ote  ia  cal^d#al  y  atoada  á.ain  lado  dcla 
pial»,  noUtene  niagvnasifiietría. «Al.'liraiitede este^ftilifieioseestá 
eooclivyeiido  di  fidacio  niitni|Npal$*de  arquitectura' moderna ;  y  en 
otro  lado^quedan  el  palacio  «r^zobispul  y  el  seminario.  La  segunda 
pksa  es  latdel  .tenplo'dolaí  Candelada ,  rodeada  de  unabakius- 
tt^da  de^ihienrov  Amiqüe  la  plaza^no  etíi  enipediisíía^,  su  sueloarci- 
lioso  mezclado  de  arena  es  un  pisotail  btíeno  4ineiar  que  el  de  la 
piedra^  Lal.67e8ra^'fiesa'e9la  deS.  Pablo  .vsuúnica  regularidad 
ea;i5UvíorBiaan]adiiaday  ymu  úbícoí  adorno  una/fnente  que  esiá  en  el 
/medio.  La^iglasiaide  S]  PaMo  está jcn/otia  esquina.. Los^otras  placas 
Ben^laf  WnuUd;  Si  iactnio  ^  S.  Láearo,  la  Pastora  y  la.de  S.  Juan, 
i'flias  grande  q«fe''lasi  anteriores  j  pero  de  ana  iomuuírregular  y  sin 
empedrado. 

LaSeal4es-deGtffáca9;'4mDO'las;de  todas  las  dudados -modernas, 
están  en  lútea  recta^de-S  k  40  varas  do>aiMlu>^  empedsadas,  y  cor- 
tándose en  áDgu)O'i^00t0/  isla  eslatinica  iregolaridad  y  simetría  de 


—  568  — 

la  capital ,  ciudad  bien  construida  bajo  otros  reapedoa.  Las  casas 
son  espaciosas,  bien  edi8cadas,  de  buena  apariencia,  y  algunas  tie- 
nen pisos  altos :  Humboldt  las  encontró  demasiado  elevadas  para 
nn  pais  sujeto  á  temblores.  Las  casas  de  personas  que  gozan  de  co- 
modidad, están  bien  amuebladas,  y  por  lo  general  en  todas  iiai  mu- 
cho esmeró  para  adornarlas  con  un  lujo  que  con  frecuencia  no  está 
en  proporción  con  la  renta  del  dueño. 

Sbnon  Bolívar,  héroe  de  la  América  del  Sur,  nació  en  Caracas  el 
50  de  Julio  de  H795,  y  murió  en  Santa-Marta  eN7  de  diciembre 
de  -i  850.  Allí  reposan  las  cenizas  del  Libertador  de  Colombia,  Perú 
y  Bolivia. 

Como  esta  capital  no  puede  tener  todavía  aquellos  monumentos 
y  obras  públicas  que  poseen  otras,  por  estar  aun,  digámoslo  así,  en 
la  infancia  de  su  vida  política,  sera  mejor  darla  á  conocer  bajo  otro 
punto  de  vista,  y  al  efecto  nos  serviremos  de  las  mismas  espresio- 
nes del  ilustrado  y  célebre  viajero  Humboldt,  que  la  visitó  en  -1 800. 
Ciertamente  que  si  la  viese  en  el  dia  ,  la  encontraría  mui  distinta 
y  no  la  hallaría  inferior  á  una  ciudad  europea.  He  aquí  sus  pala- 
bras : 

«  Dos  meses  hemos  permanecido  en  Caracas  M.  Bonpland  y  yo, 
a  habitando  una  casa  grande,  casi  aislada,  situada  en  lo  mas  emi- 
«  nenie  de  la  ciudad.  Desde  lo  alto  de  iina  galería  podíamos  des- 
«  cubrir  al  mismo  tiempo  la  cima  de  la  Silla,  la  cresta  del  Galipano 
«  y  el  risueño  valle  del  Guaira ,  cuya  rica  cultura  contrasta  con  lo 
«  sombrío  de  las  montañas  que  la  rodean.  Estábamos  en  la  estación 
«  de  la  sequía,  en  la  cual,  para  mejorar  los  pastos,  se  pone  fuego  á 
«  las  sabanas  y  al  césped  que  cubre  las  rocas  mas  escarpadas.  Si 
a  teníamos  razón  para  estar  satisfechos  de  la  esposicion  de  nuestra 
«  vivienda,  todavía  lo  estábamos  mas  por  la  acogida  que  nos  daban 
«  los  habitantes  de  toda  clase. 

«  Aunque  yo  he  tenido  la  ventaja  que  pocos  españoles ,  de  haber 
«  recorrido  sucesivamente  á  Caracas,  la  Habana,  Santafé  de  Bogo- 
« tá.  Quilo ,  Lima  y  Méjico ;  y  que  en  estas  seis  capitales  de  la  A- 
«  mérica  española  mi  posición  me  ha  puesto  en  relación  con  per- 
«  sonas  de  todas  condiciones,  sin  embargo ,  no  me  tomaré  la  liber- 
«  tad  de  pronunciar  sobre  los  diferentes  grados  de  civilización  á  que 
«  se  ha  elevado  la  sociedad  en  cada  colonia.  Mas  fácil  me  es  indicar 
<  los  diferentes  grados  de  cultura  nacional,  y  el  objeto  hacia  el 
a  cual  se  inclina  coa  preferencia  el  desarrollo  de  las  facultades  in- 


«  J^ja  un  mismo  piuito  d^  ykia.  »     ' 

i(  Me  ha  pujido  que  en  MéjicQ  y  Bogotá  hai  unii  tendf^nda  de- 
i  cidida  por  el  estadio  protoido  de.li^.iáeiicii^;.  ea.  Quito  y  ea 

<  vUma  mas  isaato  por.  las  letras,  y  por.  todp  io  que  puede  lisonjear 
«  uua  imagmaciim  ardiente  y  viva;  eala  üiiMMaa  y  Caracas  mayor 
«  conocimiento  de  las  relaciones  poUüeas  de  las  oacioues,  y  miras 
«  mas  estensas  sobre  d  estado  de  las  colonias  y  de  las  metrópolis. 
«  La  multipUoacion  de  comunicaciones  con  el  comercio  de  Europa» 
«  y  aquel  mar  de  las  Ao^tillas  que  hemos  descrito  como  un  ipedi- 
«  terráneo  con  machas  blocas ,  han  influido  poderosamente  en  el 
4  progreso  de  la  sociedad  ^  en  la  isla  de  Cuba ,  y  en  las  hermosas 
.«  provindas  de  VeneEuda  :  en  ningana  parte  de  la  América  espa- 
«  ñola  ha  tiunado  la  civilización  un  aspecto  mas  europeo  :  el  cre- 
«  cido  número  de  indios  cultivadores  que  habitan  en  Méjico  y  en 
a  el  interior  Je  la  Nueva  .Granada,  da  á  estos  vastos  países  un  ca- 
c  racter  particular,  acaso  mas  explico;  pero  en  la  Habana  y  en  Ca- 

. «  rácas ,  á  pesar  de  la  población  de  negros ,  se  cree  uno  estar  mas 
«  cerca  de  Cádiz  y  de  los  Esta^los-ünídos  que  en  moguna  otra  parte 
«  del  Nuevo-Mundo.  » 

c  Como  Caracas  está  situada  en  el  conlift^nte,  y  su  poblaciones 
«  menos  móvil  que  la  de  las  islas ,  se  han  conservado  también  las 
«  costumbres  nacionales  mejor  que  en  la  Habana,  y  aunque  laso- 
«  ciedad  en  aquella  no  ofrece  unos  placeres  mui  vivos  y  variados , 
«  seesperimenla ,  sin  eoobargo  en  el  interior  de  las  familias^  aquel 

<  sentimiento  de  bien  estar  que  inspiran  la  franca  alegita  y  la  cor- 
c  dialidad,  unidas  á  los  modales  de  la  buena  educación.  • 

El  Qlima  de  Caracas  es  hermosísimo ,  ppara  dar  una  idea  mas 
exa<fta  UQS  serviremos  del  mismo  Humboldt  que  lo  describió  así : 
.  i  La  poca  estension  del  valle  y  la  proximidad  de  las  montadas 
«  del  Avlta  y  de  la  Silla,  dan  á  la  situaciou  de  Caracas  un  aspecto 
«triste  y  severo,  sobre  todo,  en  aquella  estación  del  año  en  que 
«  reina  la  temperatura  fresca  en  los  meses  de  noviembre  y  díciem- 
«c  bre;  pero  este  aq^o  melancólioa  y  el  contraste  que  se  observa 
«  en,  este  tiempo  entre  la  serenidad  de  la  mahana  y  el  cielo  cubier- 
i  to  de  la  larde,  no.  se  advierten  en  medio  del  estío.  Las  noches 
c  de  junio  y  julio  son  claras  y  deliciosas ;  la  atmósfera  conserva 
«  casi  ^in  interrupción  aquella  {iureza  y  trasparencia  propias  de 
i  las  alturas  y  de  los  valles  elevados^  un  tiempo  quieto^  eqi  tanto 


I 

«  temperatura  desigual.  En  esta- «^ilefe^*  d^  ^sfili»  M"  MfMtti  fle 

'«  daáo9^^sÍali6^B68^^Hif«^áiti^iiM»dis!e»ei«^.  » 

«  ^erpetiia ,  pile»  9e  halla  ^  Uidirs  pm^  ¿  «lédfii  ñSénéb  }tttcft^ 
"« áülera  deía^ AtMi4rie«  eqirittMcii»!  entihS' 4M f  il^#<^ IbMei» é^th- 

•  tadoB'.  En  e<tN!t(^  ¿qué  nayei^'dtelkftt  pu^peéirM'fpmht  de 
«  «na  teopenttJMi'fao  se^sMtieii^dttr^^  ^  etttt)e'lSO*'f  t0% 
«  f  de  no^He^eiHrefé»  f  ^  f  que ftnfiai^ce  igoan&istile'lk  végé* 
«  flKmtt éel*pfátiii»i, del uaM^o, dél'árM M (Mf¿^,  d^tnanntno, 
« déi- afbatioaque  y  dé!  ti«rgd^' Per 6Bta'  rasan,  uii  eserittor  natíí^ 
« irai'eempard  la*  afl««eioft4e  cbrátsas;  áh  I»  é^  paraíso  ferrettal  ,7 
«  reeonoeeéii  el  hmmmj  }06  Uírmitea  cpte^e  áfeeftíénr,  to»etiÉt]fo 
«fiiMPdel  paralaa*.  »• 

i  E^de'Mmim  <)«ié^tiií  cfitiifrte»  t^dbtiiAiídO  seft^aiéMh^t^tííé  (ata 
«  ifleofisUsite  r  n'arhiblé'  :<  kié  hab^éiités  ée^  Ga^áea»  ^  qlHéíM  fe 
4f  qtie  en  úii  áii^fti»  dk^«»«ii' tafias  efttiBH^ié«é!f;  y  ^  lo^  ti^^>s- 
^  áós  de  uiía  á-ófréhsé  Ifiérifleaft  c<»ti  la^oikyidt  ]pf ec^itlrdMl.  MudiA» 

•  yezes,  especialmente  en  el  mes  de  enero,  laüoefce  ctitá  ten^á.- 
.d  ttiía  wedte  c*  da^^^lJ»,  es  síígülda  dé  trt  día ,  dtmwité  éfifttóf,  el 
i  t^nnóihetró  ^e  tiíáiitiéfél^  é  la  soKibCa  ^b^  ^  aéW  hmt^tibiíh 
^éécfñini,  Y%Am  lüíÉbd  d»!  sé  e^ttorilí^teirfettipef^ilífttí  de 

•  <r  t8^  y' 2í4^r 

t  tú  Catatas  soii  muí  at^undántos  fas  fhitítis  en'  ibr  tres  tnésé? 
«  de  abril ,  mayo  y  Juoio  tlas^  tronadaiTteticn'siettipíreáéf  lado  dkl 
«  este  y  sudésié;  de  f  etare  y  dé  Valle.  Eti  las  regronéd  bkp^  de  Ifts 
«  trópicos  tío  cae  granife  ,  pero  cm  Caracal  se  ver  graíñtíé  eádá  kua> 
I  tiD  ¿  clncdáfios,  y  autt  se^  bá  tisto  en  váHlss  todarfa  itíiís  ¿itjbif, 
r  ctiyd'fóHÓa^iTO,  cnandd%é'o(1^e(;e,  Üate  utiü  Tirrs0ni»«iM  éh  el 
9  pueblo.  I^caldk  de  Itts  aewrfitos  eáttíéiios  rtirtrentifeti6SdtrWt[üe 
«' etgi^ntzó  eu'Ia zona  (órfidaáSocftdésas sofire'^rfaitetdliK  mat^, 
«  á  pesardelá'ffeeutínciádei&frfltíaíJás.  1  ^ 

■  aKlMiTúíraft«scóydtífciéí<d;qilé*aca^ 
« tamftl^  á!  lá  ótrttb^rdé  h^  'tyrddúccfotiieir  eqiíilideétiifeíf  f  ^b^'e^ 
«  db  aiúcartie  cttiúyd  eoff  Itt^ff  étlto,  nutr  éít  altaras  qtte  é&óéáák 
o  í  Ta  de  Catata,  péró  se  pt4fieré  di  yane'(á  causa  dé  W  ééi|Cir¿d¿d 
u  ¿^1  estioy  d^  riftetio^p^dfegdsdtpdtst^ld'délrftbo!  de  etíé,  cafo 
'ü9^^míf^e')^&%Mtiiltitm  ésr  dér  ^IWte  tá]i^.  tttíttiio 


f 

«  allá  de  Chacao  ofrece  el  aspecto  mas  risueño  y  alegre.  Et  ptátaao^ 

HT qtié se  t^  én  léts  i^tatitsd^nies  alredlMtof  de  !a  ctitáad',  ño  ejs;  el 

>giraii'pÍitano  Uarlbn,  shioeficanifrave  y  dominico  que  exigen  tná- 

'«^ikos  calor.  Losmas  sabrosos  ananás  sód  lo^de  Barata^  dbbEótjpe» 

«  drado  y  de  las  alturas  de  Baenayista  en  el  camino  de  la  tlt;toria; 

^difliida  nntiajém  sttbe  por  Ik^rtmerá  Ve2  al  valle  de  Caracas,  se 

r  ve  agrádcft^Temente  sorprendido  d^encontraír  al  lado  del  árbol  de 

r  ttíSY  del  plátano,'  h«  hortaliÍEa^y  legumbres  de  nuestros  patstes, 

'f  fa  fresera,  l&s  tifias  y  cásl'  todos  los  árboles  frtitálefií  de  nuestra 

c  «ona  tempílada :  \tó  srantanas  y  los  mefocotones  mas  estimador 

ir  Yienéu  dfe  Nfacarao  ó  de  la- e^tremidéfd  occidental  del  valle;  donde 

«el  membrillo  es  tan  común  que  se  ha  becho  casi  salvaje.  Las  con- 

(( Aturas  de  mangana ,  y  sobre  todo,  la  de  membrillo ,  son  mui  bue» 

«  cadas  en  un  país,  dónde  se  cree  qué  para  beber  agua  es  nece- 

«  sárib  escftar  la  sed  comiendo  algunos  dulces.  » 

Cairfteas  es  ét  centro  dé  un  gran  córaercfio ,  qu.e  hace  no  solamente 
con  todíi  la  provincia  sino  con  las  de  Cárabobo)  Barquisimeto  y  grííü 
partfe  dé  las  de  Apure  y  Barínas.  jA  la  provincia  que  mas  comercio 
*ace  con  fas  naciones  estranjíeras,  y  ?üs  fralo¿  principales  son  taba- 
VsQ,  añjt,  cató,  cacao,  algodón,  zarzaparrilla^  cueros  y  otros.  En  Car- 
racas es  dondi  mejor  se  trabajan  los  adornos  de  oh)  y  plata  y  los 
liu^bles  para  las  casas ,  pudlendo  cotñifetit*  con  los  que  viaoeü  del 
extranjero. 

£1  cantón  de  Caracas  tiene  las  parroquias  siguienteid :  en  la  ciu- 
dad capilar,  taCatedrat,  Santa  Rosalía;  í.' Pablo,  Attagracia,  Can- 
fleljiria  y  s;  Juan  :  fuera  ^e  la  capital  las  que  fbrman  los;  pueblos 
ífe  Cliacao,  Vlilte, Vegá^  Anlimano,  >facaríio,.  fk  Pedro,  Teques,  C^r- 
ítaíT^  S;  A^ttípib,  S^  Diego  y  Para¿9to.    . 

Oj^MTON  VE  LK  GUACIA. 

-  i  '  .1  '  ■  ■  »    .' 

La  Guaira;  d¿dlaft'q\to  sfe  encuentra  Ü  li<>rift4  AJmar,  puerto 
de  la  capital  y  el  primero  de  la  república.  Está  situada  en  un  terre- 
no estrecho  y  desigual ,  ééStt  gftmdes  eéítos  que  no  le  dejan  ota 
\j$ta  qpe  la  del  mar  de  las  Antillas.,  Dista  de  Caracas,  en  linea  recta 
t  ifcgua  y  2/5,  y  por  0!  qaniino  5  f/2.  Eá  et  segundo  ptíerto  regulv- 
ñ^^nt&forttficadQ  qu^  U^ne  el  pai$ :  i^i^  érdíi^  estfi  ent^rainente  dc^ 
'iQHttado  y  soló  se  cuida  de  M  murallas  qué  miran  á  fa  mar,  én  cuyas 


I 

bóvedas  perecían  millares  d^  licímf»  mt  la  ¿gcip»  4^  ]1^  ginarra  4<  In 

independencia. 

Las  casas  y  otros  edificios  están  bien.constraidos;  solo  Uen^  dos 
calles  de  E.  á  O.;  está  dominada  por  la  batería. d^l  cerro  Colo^ 
rado ,  y  las  fortificaoioni^s  á  lo  largo  del  mar  e$tán  bien  disppe^tas 
y  conservadas. 

La  Guaira  es  menos  una  rada  que  un  puertQ  donde. el  mar  está 
en  continua  agitación :  los  buques  sufren  la  acción  del  viento,  las 
corrientes  del  mar,  el  mal  anclaje  y  la  broma.  Los  cargamentos  se 
hacen  con  menos  dificultad,  atendida  la  proloJigacion  del  muelle , 
en  donde  pueden  atracar  las  falúas.  Los  negros  y  mulatos  Ubres  que 
llevan  los  frutos  á  bordo  de  los  buques  son  una  clase  de  hombres 
de  estraordiuaria  fuerza  muscular  :  atraviesan  el  agua  á  medio  cuer- 
po, y  lo  que  es  mas  admirable  es  que  nada  tienen  que  temer  délos 
iiburones  que  tanto  abundan  en  aquella  rada. 

£1  calor  es  escesivo  durante  el  día  y  á  vezes  también  de  noche  ^ 
j  con  razón  se  considera  que  el  clima  de  la  Guaira  es  mas  ardiente 
que  los  de  Gumaná  ,  Puerlo-Gabello  y  Coro,  porque  en  aquel  se 
sienten  menos  las  brisas  del  mar  y  las  rocns  talladas  perpendicular- 
mente  abrasan  el  aire  por  el  calórico  radiante  que  exhalan  después 
de  puesto  el  sol.  Del  examen  de  las  observaciones  hechas  por  Hum- 
boldt,  resulta  que  la  Guaira  es  uno  de  los  puntos  mas  cálidos  del 
litoral  del  NuevorMundo  y  de  la  tierra  en  general;  sin  embargo, 
tenemos  puntos  en  las  llanuras  del  Apure  en  que  el  calor  escede  al 
4e  la  Guaira.. 

Este  puerto,  aunqqe  pálido ,  es  sano  :  las  epidemias  no  reinan 
jalli  como  en  las  Antillas,  y  si  en  i797  y  4798  hubo  una  enorme 
mortandad  en  Filade^a,  Santa  Lucia  y  Santo  Domingo,  no  se  debe 
estrahar  que  en  aquella  ¿poca  hubiese  fiebre  amarilla  en  la^Guai* 
ra,  habiéndola  llevado  allí  un  bergantín  procedente  de  los  Estados- 
Unidos. 

Las  parroquias  de  este  cantón  son  la  Guaira,  Maiquetía,  Ca* 
.rayaca,  Tarma,  (lacuto,  Garaballeda,  Naij^uatá  y  Carguao* 

La  villa  de  Petare  está  situada  en  una  pequeña  altura ,  á  la  orilla 
del  río  Guaire,  entre  la  quebrada  Loro  y  el  rio  Caurimare,  que  tri- 
butan allí  misino  sus  aguas  al  Gúairei  La  posición  de  Petare  es  bella: 


—  575  — 

domina  todo  el  valle  del  Guaire  y  á  lo  lejos  se  ve  la  capital  de  la 
república  :  su  aproximación  á  esta ,  los  terrenos  fértiles  que  tiene 
en  su  territorio;  un  clima  delicioso  y  sano,  su  posición  en  el  cami- 
no que  conduce  á  los  valles  ferazes  de  Guarenas,  Cancagua^  Capaya, 
Rto-C!hicO;  y  los  cultivados  cerros  de  los  Mariches,  lo  hacen  un  pun« 
fointerésíañte. 

Las  parroquias  son  Petare^  Barut^  y  Batlllo. 

.  .         .      • 

»  ■  • 

CANTÓN  PE  GUARENAS. 

■ 

La  villa  de  Gnarenas  está  situada  en  un  valle  mui  hermoso,  so- 
bre una  altura  á  cuyo  pié  corren  la  quebrada  de  su  nombré  y  el 
rio  CurPupao,  que  unidos  forman  el  rio  Guarenas,  el  cual  baña  y 
fertiliza  el  rico  país  por  donde  pasa.  la  villa  es  regalar,  goza  de  ua 
temperamento  sano  y  agradable ;  por  su  posición  domina  los  cam- 
{N)8  que  la  rodean  sembrados  de  haciendas  y  cazerías ,  y  por  todas 
partes  le  proporcionan  bellas  perspectivas  los  cerros  que  la  circun- 
dan. Se  encuentra  en  el  camino  que  conduce  á  los  valles  de  Santa 
Lucía  y  Santa  Teresa  por  una  parte ,  á  los  de  Caucagua,  Capaya  y 
Rio-Chico  de  la  otra,  con  los  cuales,  así  como  con  la  capital,  hace, 
comercio. 

Sus  parroquias  son  dos  solamente ;  Guarenas  y  Guatire. 

CANTÓN  DE  CAUCAGUA. 

La  villa  de  Cancagua  está  situada  en  una  mesita  barrancosa ,  á 
poca  distancia  de  la  cual  corre  el  rio  de  su  nombre  por  una  ancha 
abra  circundada  de  cerros  cubiertos  de  bosi^ues.  Se  encuentra  á 
menos  de  una  legua  del  rio  Tui,  que  aquí  es  ya  navegable  y  puede 
conducir  los  frutos  hasta  la  mar.  Los  terrenos  fértiles  que  contiene 
8U  valle,  los  grandes  bosques  que  aun  quedan  por  desmontar  en 
parajes  próximos  al  navegable  Tui,  hacen  de  esta  villa  un  punto  in- 
teresante para  el  comercio  y  la  agricultura ,'  gozándose  én  ella  de 
im  temperamento  cálido  pero  sano. 

Sus  parroquias  son  Caucagua,  Afagüíta,  Tapipa,  Panaquire  y  Ga- 


i. 


I 


la  villa  de  :Rk>-Chioo  eat¿  sitiiada  á  la  orillaidel  rip  dem  AOis^ 
bre  en  un  terreno  Imijo  cerca  de  la  mar,  de  la  cual  dista  rpoco  aaw 
de  una  legua  en  linea  recto.  So  clima  es  cáUdo»  hilmedo  y  4  ^^^es 
enfermizo.  La  frondosidad  de  los  terrenos  qne  se  cultivan  en  este 
cantón,  su  aproximación  á  la  mar,  en  cuyas  costas  pueden  fondear 
buques ;  su  cercanía  á  la  laguna  de  Tacarigua,  riquísima  en  pezes, 
casi  en  la  boca  del  rio  Páparo  por  donde  b^jan  las  pftodqcoíooes  ilel 
territorio  de  Cancagua,  en  el  camino  jque  va  á  Barcetona  por  ím 
Qosla,  y  los.mucbos  terreóos  vk^enes  y  fértiles  que  enderca,  Imea 
gue  el  .punto  de  Rio-Cbico  sea  interesainte  pam  la  agricuUura  jM 
comercie. 

rSus. parroquias  son  Rio-Chico,  Coriepe^  XacarigiMi,  Giiapi)»  C4» 
pra^  Ucbire ,  Sabana  de  (Jcbire,  Guanape  y  Xiuaribe* 


GÜNIBOÑ  DBVilIf'ni.feüQiá. 


La  villa  de  Santa  Lucía  está  situada  en  un  fértil  valle  imnado 
por  el  Guaire.  Su  temperamento  es  cálido  pero  sano.,  y  se. goza  de 
una  bella  perspectiva ,  si  de  alguno  de  los  muchos  cerrítos  que 
tiene  próximos  se  pasea  la  vista  hacia  las  montañas  que  encierran 
el  valle  y  sobre  el  valle  mismo.  Su  posición  es  interesante  por  las 
invehas  haciendas  de  qi)e  están  cubiertos  ^1  v^lle  y  los  cerros  j,  y 
Jo  será  todavía  inas  cua^do  se  desmonti^n  las  ig^ades  jsdvas  qiifi 
|iene  en  sus  li^nedi^iones. 

JLas  parrogtui^s  son  Sania  Laciía  y.Saala  Teresa. 

.]ya  villa  d^  Qqum^re  estáMtMada  an  nnfi4abanii>alta,^l  tpi¿^3^ 
tentrional  de  la  serranía  del  interior.,  y  á.|MHa  distancia  del  Toú 
Sp)Pi)sicíon  elevadA  la  «iiace  dominar  una  ^^rs^e ^^teosion  dejas 
llanuras  cubiertas  de  haciendas  que  están  á  naciente  y  poniente^  j 
también  descubre  las  vegas  cultivadas  que  demoran  al  N.  Esta 
población  se  halla  cerca  de  los  caminos  que  atraviesan  los  llanos, 
y  casi  en  las  faldas  de  aquellas  grandes  serranías  que  los  separan 


íerazidad  y  buen  clima  C0Dxl4<in  4i,  ¿paiM9^.M»defi0i»oto  f'Wlr 

los  fragosos  caminos  que  cruzan  las  sierras  se  hallen  en  vat^ioih^ 
todo  para  facilitar  su  tránsito ,  entonces  será  mas  impcirtante  esta 
villa  j  que  por  su  posicioa.lM:ijMA  cop  xvüJ  ;rjentajas  al  comercio  y  á 
la  agricultura. 

..bi»(pa»N)4MMiAfi'eale  oMitimMii  Qenmare.} ü.  fjrtnoíseo  ,<M- 
rifaM ,  (teha  f  lisaia. 

i».  eiii4a4  Aq  la  Vlptcim«0t¿  (¿ronndad»  c»ú  ¡por  4odAs  pavte» 
demlixiasaiAm^vT  {>or^eUa'pa9a  tel.  pequeae  Piiaobuelo  CalaaíObt' 
qn<^d€!samboea<6R.ei'lio  Amíf^,  -el  mial  /d^  «aeibive^á  los  £értUe& 
vaUes.'j^r  4andeicoi3Pd»  fistos irisaenos  «mi&pos  «e  desoubfen  des/to 
k^f«^eiKi:cue^  dpi  GaW^rio  Moía^iQl. :  es  un  «asto  Tospa^ji^í 
cu]iúesM»4eiaEdinoB9!plaiitaciofie6„  árl)ol£5  «il^esti^,  'Oafi^riasf; 
aUwyi#  Por  ia ^parte  del  $.  y  ia  del.S.  £«  se» eMvnB tos  aUasmoiR^* 
ta]ktt4e4aiPalina»  Gíttwainia,  TisHra  f  €uii^j^,:Q9itwiidá¿»dQs^^^B»^ 
df  ÍQ:qMe>Akaa^  h'Ni^i  ty^aiillAado  Jas  jiwiWBas-H<4Hi9aa.^6fi«a 
de-la  Viotopia^  ea(CtteQtra4a'di¥Í«ioa  de  las «aguasque ^an  al  ^io»' 
Aff^ua^9  alcoalílps  conduce  allag^de  'ValoBiúa ,  ó  bien  eonF^UMea 
SQilii^  dfmeala,  jpeotbióndoliis  ^  Tpi  '4»aiia  rlteníarla»  á  Ja  mar*  fl¿ 
affiírtawbiaa<,  4ue<eKawnaado  tlascaestas  i^eeinas^y  i^us  decli\iea 
peiipeo^iottlaKefty  j^fie  ¡salea  oai&o  óteos  tantos  j^romoatoffios  em  Ja 
Uaotuea.,  se  dkscuiMran  oa  mis  &Pinwi  he  ««liguas  oiritlas  deriagp 
l]amido4e  Taiearif^at  balde  ^al«iKeia.^£ailas< cercanías  de  la  Nie* 
loria  se  jMte  Oa  laloíiilaridal  .y  ida  q«ie  á  A  ^Uufa  :de  ^^  laem 
sobre  el  nml  Idel  loa»* ,  se  :h«lknieamfios  jde  itrigaman^ladiM  don 
plantaciones  de ^arácar ry  café. (Dos  viasde  aomereio «pasan  por  Abl 
Victoria :  el  camino  de  Valencia ,  de  los  llanos  de  S.  Carlos  y  fia- 
riñas,  y  el  camino  de  la  villa  de  QuxAf  de  los  llanos  de  Caracas  y 
de  Apure  ;  el  uno  casi  costea  la  orilla  setentrional  del  lago,  el  otro 
pa^a  p<NrJataiitig«aT^illa'aíieiHdiaaal  abaudoAadapor.ias  a^a^ir 
eabi^r.ude'iinalazaoa  vegataai0n^'SiTiea*oaiesia,  MaSfrÁsa  aun<a» 
la*-^ue  onbKe^a^aerwMa  de  dan^e  m  onigipaa^el  Avagaa-y  el  ^íi0 
Tigre,,  trihataffiode a^iial^  €íí»ras deatei^os^^cM i|ii;tei»parameDli> 
deU^kísot,  tofranmB  aaH  mnUay»  |iara^aolai>iaa.qHieiM9<4e4iqiHiA. 


á  éesnMtotáf  laraliUgoas  selvas  qtiie  sé  éstieiMÍéii  desde  iás  caiézérá»' ^ 
del  Aragna  basta  el  nacimiento  del 'TÍri.' 
La  Yíc&oria,  el  Conseja  y  S.  mteo  fénnan  hiir  patr0<ftiias  dé- 

estévanloD. 

'  .■.■''' 

CANTÓN  DK  TDRMERO. 

« 

'  La  Tilla  de  Turmero  se  baila  ntuada  eo  vak  valla  q^a  «e  eoont- 
nica  con  el  Aragua ,  á  la  falda  de  la  serranía  de  la  eofita-y-  en  la ' 
confluencia  del  Guaire ,  el  Paya  y  Turmero,  los  cuales  forman  el 
río  de  esle  último  nombre.  Un-  ediíióo  cargado  de  adornos  es  sa 
iglesia ,  la  cual  está  en  la  plaza  mayor ,  situada  en  el  centro.  Fué 
en  otro  tiempo  la  residencia  de  un  gobernador  general  ¿elosi  valles 
de  Aragua.  Los  terrenos  que  están  cerca  de  esta  ciudad  y  de  foda 
la  parte  llana  del  cantón  se  hall&n  cubiertos  de  haciendas,  planta-  - 
cimies  y  caserías.  Es  uno  de  los  distritos  donde  bai  mas  pobla* 
'  cion  acumulada,  viviendo  de  Ya  grati  fertilidad  de  aquellos  valles.' 
AHÍ  se  encuentran  varios  samanes  dé  un  grueso  estraordinarío ,  ^ 
pero  ninguno  igualal  famoso  de  Guere  ,  iajo  cuya  sombra  piféde  - 
reposar  con  desahogo  un  batallón  en  columna.  La  mayor  parte, 
ó  por  mejor  dedr,  casi  toda  la  serranía  está  inculta.  La  prosperidad 
de  esta  villa  se  debe  mas  á  la  agricultura  que  al  comercio ,  pues 
su  posición  algo  apartada  del  camino  principal ,  la  priva  de  un 
tráfico  mas  activo ;  sin  embargo ,  cuando  la  serranía  esté  cultivada, 
será  mayor  la  importancia  de  Turmero,  pues  en  consecuencia  d^  ' 
su  aumento  en  agricultura,  obtendrá  mas  ventajas  en  el  comercio, 
el  cual  es  mui  favorable  en  el  dia  á  la  parroquia  de  Gagua,  por  ser 
esta  mas  central,  y  bailarse  colocada  en  la  parte  plana  que  han  * 
abandonado  las  aguas,  i^que  es  de  un  fertilidad  asombrosa. 

E¡í  temperamento  de  esle  cantón  es  sano  aunque  cálidO\. 

Son  sus  parroquias  Turmero,  Cagua  y  Sania  Gruz. 

CANTÓN  DÉ  MARACAI. 

La  ciudad  de  Maracai  está  situada  en  Una  hermosa  llanura ,  ré-^*' 
gada  de  aguas  qne  se  dirigen  de  la  serranía  de  la  costa  al  lago,  del"' 
cual  dista  méoos  de  una  legua.  Es  una  poblaefoii  mni  alegre,  y'.si  * 
se  sube  á  la  altura  del  Galvario,  se  presenta  al  espectador  una  de ' 
las  bellas  perspectivas  de  paisaje  :  la  vista  del  lago  con  muUitcid  de  ' 


rm  étf  éllbé^  {  W  éeri^s  de  (Süi^e ;  Ttímá  y  los  qne  están 
pt^niiiios  á  la  abra  dé  la  tilia  é&Ciirá,  los  de  fucattíñemo  que  se 
uoeii  ft  latafidá  lejana  <)ue  va  al  Páóde  Sárateyse  ven  ead  azules:  ' 
las  (^rSlÉs'del  ía^o  setnbradás'deplahteciones  y  lideiefidas,  i  unas  ' 
cnftfrtas  sabaiías  eo  que  sé  erialn  ganados  y  éaball^  V  ba^en  tíu  eoiH 
traste  singular  ccn  los  terrenos  cubiertos  de  una  alta  y  espesa  vch 
gelacr^n.  Las  casas  regadas  éü  toda  la  esteimión  que  áleaUía-laTisfa, 
las  diferentes  degradaciones  del  yérde  qtie  presenta  !a  variedad  do  - 
terlrend^  cUfltivadiis  dé  café,  cafta  dulce,  algodón  y^afill;  krs  faldas^ 
meridionales  de  la  serranía  dé  la  costa  ,'qii'e  seí-avan»in  de  distati-  * 
cía  en  distancia  cfn  la  plániéie  qué  en  tiéni{Mis  i^emofos  debian  oca- 
par  las  aguas  del  fógo ,  tddo  contribuye  á  formar  la  vista  mas  bella 
y  pintoresca  de  un  variado  paisaje.  Guando  estén  cultivadas  las" 
selvas  que  se  encuentran  en  la  serranía  y  otros  puntos  que  están  ál 
pié  de  ellas ,  cuañado  un  camino  coinódlo  aeoite ,  por  dectflo  á^ ,  la 
distancia  al  puerto  de  Choroní,  entonces  tomará  Maracai  mayor 
incremento  del  que  basta  abwa  debe  á  la  agricultura  y  al  co- 
mercio que  bace  con  las  poblaciones  de  los  contornos. 
-BI  elbsia  de  Mflrrácai  es  caliente,  seco  y  sano. 
Las  jpsArroquias  son  Maracai  y  Cboroní. 

CANTÓN  DE  CURA. 

La  villa  de  Cura  esfá  cerca  del  rio  Tticutunemo  en  el  punto  en 
que  esté  vdltea  báeia  el  llano.  El  rio  presenta  después  de  su  origen 
el  fenómeno  de  perderse  enteramente ,  basta  no  dejar  por  muchas 
leguas  vestiglo  alguno  de  sos  aguas ;  pero  de  repente  se  le  ve  brotar 
por  todas  partes  en  á  punto  que  llaman  cimborro,  y  sigue  entonces 
sü  cdrso  como  los  demás  ríos.  La  "villa  de- Cura  está  fabricada  sobre'  * 
un  terreno  árido  y  seco  en  la  grande  depresión  que  forma  la  cor-* ' 
dfliera  del  interior ,  dejando  una  ancba  abra  para  poder  pasar  de 
los  fértiles  y  amenos  valles  del  Aragua  a  los  ésténsos  y  tristes  llanos  - 
que  van  á  perderse  sobre  el  Oriiifocó  y  el  Meta.  En  esta  grande  ' 
abra  se  ^videñ  las  aguas  qiie  corren  hacia  él  lago  ó  hacia  las  * 
llanuras. 

^  Los  cerros  calfoos  que  rodean  la  villa  de  Cura^  impiden  que 
tenga  esta  una  vista  mas  a^rádaljle';' sin  embargo ',  hacia  el  E.  se 
désfctibre  et  vallé  de  Ttteutoúeíaó  Heno  de  haciendas ,  y  al  lado  ' 
opuesto  el  valfedto  por  donde  corre  él  Ttó  de  las  Minas ,  el  cual  se ' 


I 

p^r  toMaiVíft  «itaada.  «i  .Jo  ^iwr^^  vfoe  "«iMidwie  4  W^^Um?!;  A 

La  ciudad  de  S.  SebMtíaift'dA  'lofitRepea  m  oaft^e  la«i  «iis<«iití- 
gaas,  y  su  construcción  tuyo  4K%eE  4eto'iTQ6iicift.giii^lw4>íii.de 
existir  una  mina  de  oro  en  sus  contornos.  Está  situada  en  una 
cuesta  por  cuyo  pié  corre  el  rio  Guaneo  y  una  quebrada.  Su  situa- 
ción es  agradable ,  y  la  vista  de  unos  pequeños  cerritos  que  están  al 
N^;  cAQipiiestos  de  4in  AaJG¿feQ,griiHido.CQni»>6l 4e ios-MiotiiOsile 
S.  Jnan,  le  4ftn  Jin^fi^p^eto  ipiatoreico  djei  oMsnO'iiMido  que  ^sw 
caceos  ^si  todos  en iociaa  4e  pan  áBMÚC9T,f  «cubiertos  ^e.giwmi-* 
imS'Coii^giiQas.ioaiuibaa  dol)08q«a6Ulo6«  fiufi-fio^lexan^ea  todto 
dv^eccioiMs.  JDidgse  q4ie'WÍeroo4ii«vse.á  «ur 

8e,«stiend«o  en  loailaoos  y^^  (tuyas  falda«  Qowee  >el  xiQ-G/aUmo  íQH 
dip^ioD  aljíitGÍeiite,  :ii0/iaiti  l^os4e  ia4úudad. 

Xos  tecr^ds^fue^fttátt^  vedodpréa  $iaS(alrastiaii*«eJi8il|mLiWlí: 
onttmdofi  de;  wü^  y  :gr«ides  fOspaeíts  xubiectflis  .d»T#^j^  p  ana. 
sembrados  aie^^oasitas  que  dag>^;PAÍsaóe  «ooa  iV^i^iia  ^gj^dabl^  El 
C9Uv^.eaá  en  4^  viüles  dsü  intAclojr  ^m,  la^J»9Ía  g^p^m^am  1^ 
Talles  del  Tui  del  valle  de  Guárico. 

Xa  situjaciop  deeata  jiptigua  qi^d^d 'asobee hsI  4MHWA04P«  i^.al 
AUo- Llano  yiJos^riiQoaiUilldStdeJHritii^^  la-taifiun^wnUt^^Wf^ 
eiaite ,  llamadora  fffi^^emT  «por  la  fia]ii»bfÍ4a4  d^  su  {ülm^  i>wwaL 
aioQr4U6.3ns Miiitafit<«iiMpmi  ü ftepb%jp.ff .MgBrtt»jri»|wi|li^'gpi» 


«p*  ESSL  —i 

posiciones ,  es  dedr ,  casi  á  la  entrada  de  los  llanos ,  y  al  pi¿4e  Jt 
serranía. 

Cerca  de  la  dudad  ha!  una  cneva  particular  por  su  figura  y  las 
diferentes  estalactitas  que  tiene  ^  Varias  de  las  coales ,  reunidas  á 
las  estalagmitas  han  formado  algunas  columnas  mui  curiosas,  divi- 
diendo d  subterráneo  en  distintos  salones.  t.nüñiz ,  parrdgufa  de 
e^  cantón ,  se  han  hulládo  huesos  de  mastodonte ;  lo  que  prueba 
Que  en  tiempos  mui  remotos  existia  en  estos  paisés  aquél  granAe 
anímsíl ,  cuya  raza  ha  desaparecido  enteramente. 

Componen  este  cantón  fas  parroquias  de  S.  Sebastian,  S.  Cád- 
m!ro ,  S.  TYancisco  áe  Cara/Camatagüa ;  Carmen  de  dura,  Para- 
para y  Orthí. 

•  .        -  »  •  *  ,      . 

'CaiiiM  m  cNMOcou 

, .   .. 

ta  vffla  de  iMtiico  está  «itualBa  entre  la  qu^aSa  dé^Témemni^ 
y  él  Vio  de  sunombre  ,  en  tm  llano  fértil  al  pié  de  hisemim'at|Qe 
éepara  los  vafles  idérTui  de  las  Ilamjras.iSu  posidíon^laliaceftfté'* 
resante :  se  hafffa  en  un  temperamerrto  ¿áMdo^mrotáíluaalife ;  'pór 
ittia  parte  tiene  Ihnursis  pai^h  t^a,  ^orfaotra^osquesparaél' 
ciíftí vo.  sus  "terreniis  producen  frttlos  9e  un  aroma  esquisito ;  liPte» 
son  él  cacao  y  cá  isñaico.  l^Tposidon  áe  Witttco  üo  es  pintowsea^ 
pero  vista  desde  la  altura  del  camino  que  faldea  los  cerros  ,^af a  ñ^ 
á  la  villa ,  la  perspectiva  es  agradable.  Ef  ^urso  del  rio  üo^idtca 
una  vegetación  casi  negra  y  Hitii  elevada ;  las  tierras  lAmdar se 
ven  de  tatíos  ccAores  segnn^hrs  pfattladones,  á'favéí  qfoe  ^encimar 
de  la  cumbre  de  varias  colinas  se  distingue  un  horizonte  lejano 
de  sabanas ,  y  por  otraifiwpte^  bosgiies  HMK^tps  que  se  pierden  de 
vista. 

fLasanauMa'Se^levaal^nopte.de  la  vi)la'er«iiidaa^i^^i^^><i<^f  T 
en  lejaiw  <vi«t4-.^4e^^mtwen  los  i^ei^ro&^e  4|is^  ^  de  Carapfi.  Nd^ 
mo^ibo  clx^ttUijifoviUfft4ie^Ye^^edor4e4a*vil^:pero  e^^rbas^anto 
el  qm9^j^»lh»ie/¿ím(^9»  L^fua^bieia  i^l  S^^^iguiafido  Ja^^^w^ 
del  X)ritaco,  jfpor  el.  IS,  f^áotem»  en  ei  vaUe^de  Alt^aeia.iCfMnda 
esta  villa  atenga  fw  bosqp^  desmpntados^^j  abierto  j^n^ioaniao  al 
Xui^  ;entónqaS;  j^seseiitai::^  joívo  .aspeela^.fuaQueea  el  >dia  -os  ua 


iaís  parroquias  de  este  cantón  son  Oiriitico,  Álfógracta,  Lezama  y 
tagnai/        • 


■• . .  •  I 


CAJSTON  tXE  CHAGUARAMAS. 

.  T,La  villa  de  Chaguaramas  está  construida  sobre  un  llano  árido  y 
;eco.:  dos  pequeñas  lagunas  son  las  aguas  que  tienen  sus  habitantes 
en  tiempo  de  verano.  La  posición  de  este  pueblo  es  buena ,  por 
cuanto  está  en  el  punto  en  que  se  reúnen  dos  caminos  que  del 
llaino  van  á  la  serranía ;  pero  la  falta  de  agua  y  de  terrenos  de  cul- 
tivo  en  sus  inmediaciones^  hará  retardar  sus  ^rogresos^  Dedicados 
á  la  cria  todos,  los  habitantps  de  Chaguaramas ,  pasan  la  mayor 
parte  del  tiempo  en  sus  hatos,  y  por  esl^  está  casi  siempre  desierta 
aquella  villa.  Si  para  fundar  esta  población  se  hubiese  escogido  un 
lugar  en  las  orillas  del  OrítuiU,  hoi  estaría  mucho  mas  adelantada; 
bien  es,  que  Chaguaramas  es  una  de  aquellas  poblaciones  que  aun- 
que de  poca  apariencia,  tiene  ricos  propietarios  de  ganados^Quyos 
rebaños  crecen  admirablemente  en  unas  llanuras  que  llevan  fama 
de  ten^r  esceleAtes  pastos.  Hai  en  este  cantón  ¡>s^rro.qiiiasqi|e  está]) 
l^^^nadas  á  prosperar  prontamente  como  el  Chaguaramal  y  el  Potj:eroj^ 
qae  tienen  tierras  de  cria  y  de  labor,  y  el  rio  IJnare.que  facilita  eí 
Vavyo^te  de  sus  producciones.  Demontada  la  montsm^  de  Tamf*- 
naco,  tendrá  otra  perspectiva  el  valle  de  la  Pasciia^  f i  se  funda  60bra 
ék  rio  Tamanaco. 

£1  temperamento  es  cálido  pero  sano. 

Las  parroquias  son  Chaguaramas »  Pascua ,  Tucupido ,  Chagua- 
ramal,  Potrero,  Santa  Maria,  Altamira,  IguanayJEf^QO  y  Cabrqta^ 


CANTOlf  DE  CALABOZO. 

'  La  villa  de  Calabozo  debe  su  ftíndacion  á  la  coioipt^íá  gnipúz- 
cdana ,  á  principios  dél  siglo  xvm.  Su  aspecto  eá  agradable  y  sir 
íglTesta  mui  regular;  el  clima  es  escesivamente  caluroso,  aunque 
templado  por  las  brisas  del  Ñ.  K.  En  la  estación  lluviosa  está  es^' 
puesta  Calabozo  á  grandes  inundaciones  que  casi  interrumpen  la 
comunicación,  pues  se  estienden  por  las  vegas  del  Guárico  y  por 
hs  sabanas  inmediatas.  También  caen  rayos  con  frecuencia,  lo  cual 
hizo  que  el  Sr.  del  Pozo  tomase  lá  precaución  de  hacer  circundar 


—  58Í  — 


)  .« 


\  « 


la  villa  con  pararayos,  algunos  de  los  cuales  existen  aun.  Los  edi- 
ficios son  tutelaos  j  hkn  eonstruidosv  y  todo  u^íca  m  asta  población 
un  adelaiito  rápido.  Se  ha  establecido  un  coljagio^  y  piarece  que 
este  punto,  en  medio  del  llano,  entre  el  Apure  y  la  serranjía,  ven- 
drá á  ser  un  centro  de  ilustración  en  aquellos  inmensos  desiertos. 
La  residencia  de  ricos  propietarios  de  ganados,  en  el  camino  prin- 
cipal que  de  los  valles  va  al  Apure,  hará  que  Calabozo  sea  siempre 
una  ciudad  importante  para  el  comerdo  y  la  cria  de  ganados.  Sus. 
habitantes  ricos  y  de  costumbres  dulces,  reducirán  á  costumbres: 
Iguales  á  los  llaneros,  que  solo  necesitan  mas  contacto  con  las  gen* 
tes  civilizadas,  y  un  poco  de  ilustración  que  está  en  el  interés  de 
los  ricos  de  aquellas  comarcas  proporcionarles.  Las  vegas  del  Guá-. 
rico  ofrecen  lugares  útiles  al  cultivo,  y  también  los  hai  en  muchos 
otros  puntos ;  la  pesca  y  la  caza  dan  abundantes  alimentos.  Hai  en 
las  cercanías  de  Calabozo  unas  aguas  termales  en  cinco  vertientes , 
rodeada^  de  un  pequeño  bosqtiecito  de  algarrobos,  á  600  varas  del 
rio  Guáríco,  mbt^  una  mesa  Uiüpía  y  bonita. 

Las  parroquias  de  este  caaton  son  las  siguientes;  Calaboso  y  Án- 
geles^  Trinidad , Cadvarío,  S(»abrefo,  Barbacoa,  Bast£0>GuardHlí- 
naja;  Camaguany  GuayavaL 


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d&d'  Óo  mí  tienu ,  fciTtnw  Hlnss>  pobntftn  iteohttit',  iMitiTa,  boodM 


,  r     1 

lat  eantones,  so  altura  sobre  el  nivel  del' mar,  su  temperatura  media,  cali- 
de  omiM,  esclaiM#ÜBlMefairkia^^afilat  ii  ia;  pcmrkiilaiTjp  te  Is^Mp^tMcii, 


—  884  — 


TABLA. 

t  m  •  ■ 

BB  hkMhTVMk  BB  tOS  CBBAOS  I»  U  FBOTtlfCrÁ  BE  GÁBiCAS. 


Kombres,  Yaras, 

Ghoroní 1S55. . .  • 

Tamaya 4449.. . . 

ftlñtr.. .'. • . .  "BK,. . 

Áylla 1781.  .. 

Silla 3146.... 

NaiguaU 336Ó...« 

Cares S9iiO.... 

Cacalo. 9710. . .  ¿ 

Capaya 9000.... 

Buenavista aooO. . .. 

Cocuisa. -IdS!»*** 

Higuerote 1944.... 


Serranías. 

de  la  costa. 
...  id. 

....     tff. 

....  id. 
...  id. 

I  •  •  •    -pww* 

....  id. 
.,.  W,      ' 
....  id.. 
....  id. 
....  id.     . 
...  id. 


ft^^^t 


»     . c . . ■     Vw. 

Anauco  y  Guayabo.  4600 id. 

MariclieB... 4300 id.' 

Aragüila 1330.. kt    - 

AltoGüaime 4251 \.  id.    ' 

Agaaa«gr4. .......  4600.........  id.    . 


Nombres.  Varas.    Serranías. 

Platilla S2S6. .  del  interior. 

Cerro-Azul.... 2077 id. 

trmti.:..:. i704 fd. 

Morros  de  S.  Joan .. .  4183.......  id. 

Abra  de  los  Llanos .. .    710 id. 

Pao  depárale.......  1910. id. 

Guaraima 4998 id. 

loma  de  Hierro.....  4S00 id. 

BoDcador 4750. id, 

Consumidero.. ;.....  1368 id. 

Loma  del  Viento....  1655 id. 

Cerro  Palomita 1895 id. 

t6olfiM 1565 id." 

Guanape 4550 id. 

Onáre... 49N)0 id. 

Morro  <|e  S.  Sebaslian  4190 id. 

Galera 680...  del  llano. 

tucutiiMUio 910.. id. 


TABLA  Q£  tX)S  RÍOS 

ti         .     é  . 

DE  4*"  ÓBDBN  ]^.  LA:PBDyilfG^A  DB  CitBÁCAS. 


Nombres.        Serrantií.  Studesa^. 

Choroni de  la  cotia.    A  la  mfXf 

Chepe..... 


id. 
id. 
id. 
id. 
id. 
id. 
id. 
Mamo id..». ...y.  id. 


Xofbi.. .»••«..... 

Maya 

Cagua 

Petaquirito....... 

Chichiriyichi id, 

Orlcaro. id 


id 

le». ........ 

id 

id 

id......... 


'*. 


Bio-Scco id. 

Maiquelía td..«....¿. 

Guaira id 

Macote. id.,': 

S.  Julián.... id..» 

Bio  Grande id 

Cría id 

Ifaiguatá id., 

Camburí id. 

Cares id., 

Anare '.  id., 

Caracas id., 

Osma ^  id„ 

Tuasana ,.  id. 

Uranoa.,. ,„,,,.,.'.  id.. 

Chuspa id., 

Aricagua td., 


id. 
id. 
id. 
id. 
id. 
id. 
id, 
id. 
UL 
id. 
id. 
{£ 
id. 
id. 

id. 
id. 


N&hlMres.        Serranía,  ^desagüe. 

Pié  CtM^ ......  d«Ja  cosu.  Lago  de  Y** 

lencia. 


S.  Jatt  ó  Ta^tap». .  id.». . .    . 

Bieiiio «...  id....... 

Tucúpido i  id« 

BUrmi* «.....#'*•..  id^..... 

Tormero id. 

Paya... id 

Guaire., ..*..  id 

Guaipao id.- , 

Tigra id. 

Aragua id.. 

Calanche del  Interior. . . 

TocoEon ,,t  td...,..b, 

Minase  Diaptro....  idi 

fácau ^ id 

Guare I Ut 

Mosia 4 idi 


id. 


Tarma ^....^ 

Súcula •' ^  id'..., 

YÜre.V.  ."■..".  ► . .  i .". ,'.  id.. . , 

UgfHio». .../id... 

Guaire de  la  cqpu 

Macarao ...........  id, 

Caruata id, 


•*■* 


id.      ' 

id.    , 

id. 

id. 

id. 

id. 

id. 
id. 

id. 

id. 

id.    '^ 

id. 

id. 

la.m«r. 

id. 

id. 

i^  r. 

id. 

id.     ' 

uL     • 

id. 
id. 
id. 


—  S85  — 


Nombre*        Serranía,   Su  desagüe. 

Catuche de  la  cosía. ...  i  la  mar. 

Anauco... id,.,.. id. 

Valle id W. 

€aurimare id id. 

Goairita id id. 

Taguacita del  interior id. 

Taguaza id id. 

Cancagua de  la  coala id, 

,,  id, 

,,  id. 

,,  id, 

,.  id. 

..  id. 

..  id. 

..  id. 

..  id. 

..  id. 

..  id. 

..  id. 

..  id. 

..  id. 

..  id. 

..  id. 

,.  id, 

.,  id. 

..  id. 


Guarenas id 

Arismao id 

Guairita id 

Curopao id 

Guatlre id 

Pacaragua id 

Cblrmita id 

ChutpiU id 

Macaíre id.  .... 

Cuira id 

Apa id 

Panaquirito id 

Sapo id 

Merecure de  la  costa. . . 

8.  José del  interior. . 

Capaya de  la  costa. . . , 

Aramina id 

Curiepe id. 


Guapo del  interior id. 


Guaya id. 

Batatal id, 

Mactaurucuto id, 

Bio-Chico id. 

Guarebe id. 

Bucaral id. 

Cúpira id. 

Chapaquire id. 

Vchire id, 

Chacacual id, 

Chavez id. 

Cántaro id, 

Purgüel id. 

Tocuyo id, 

Chirgua id. 


Camové...^ id. 

JHanuare id. 

Tormenta id. 


....  id. 

....  id, 

....  id. 

....  id. 

....  id. 

....  id, 

...  id. 

...  id. 

.,,.  id, 

...  id. 

...  id. 

...  id. 

...  id. 

.,,.id. 

hoya  del 

Orinoco. 

...  id. 

...  id. 

...  id. 


Tisnados id id. 

Piedra id id. 

Manapire id id. 

Tucutunemo id id. 

S.Juan id id. 

Pagüicilo id id. 

Pao id W; 

Carate id id. 

Garamacate id id. 

Suata id id. 

Loro id id. 

Cagua id id. 

Gamalagua id id. 

Taguai id id. 

Tinapui id........  id. 

Cura id id. 

Paya id id. 

Buche id id. 

Parapara id id, 

S.  Antonio id id. 

Quesípo id id. 

Guaromen id id. 

Macaira id id 

Memo.... id id. 

Guaya id id. 

Guaritfeo de  los  llanos. . .  id, 

Mttcapra del  interior....  id. 

Pascua de  los  llanos...  id. 

Santaclara id id, 

S.  Isidro id id. 

Espino id id, 

Iguana id id, 

Aracai id id. 

Suau id id. 

Chivata id id. 

CbiTaliea id id: 

Ipire id ¿  la  ] 

Santa  Inestf id id. 

Coporo id........  id. 

Quebrada  Honda. ...  id* ....>. .  id. 

Tamanaco del  interior id. 

Guaribe id Id. 

Aragua id id. 

IGuanape id id. 


aas 


.  GfiOG, 


ss 


—  58e  — 


PROVINCIA  DE  GARABOBO. 


SITUACIÓN  ASTBONÓHIGA,    ESTENSION   Y   POBIíACiON. 

Esta  provincia  se  encuentra  en  la- latitud  boreal  de  S^  Á  4^  hasta  4  0^ 
35',  y  en  la  longitud  de  (y^  45'  basta  ^*  48^,  al  O.  del  meridiano  de 
Caracas.  Su  figura  se  puede  llamar  un  paralelogramo  representado 
por  lineas  curvas  que  encierran  dos  zonasmui- marcadas  :  la  serra- 
nía y  los  llanos.  Tiene  la  primera  puertos  de  mar,  valles ,  terrenos 
fértiles^  algunos  ingratos,  otros  desiertos,  cálidos  y  templados,  úti- 
les para  la  agricultura  y  el  comercio ;  la  segunda^  por  sus  pastos, 
sirve  parala  cria  de  ganados,  caballos  y  muías.  £t  máximum  de 
largo  de  este  territorio  d^  N.  á  S.  es  de  47  ^/2  leguas,  y  de 
ancho,,  de  E..  á  O.  2-1  4/2 ,.  teaieBdo  la  mitad  de  osle-  ancho  en  la 
parte  mas  estrecha.  Las  leguas  cuadradas  de  superficie  son  679, 
no  comprendidas  47  que  ocupa  la  parte  del  lago  de  Valencia  que 
le  corresíwnde,  y  hai  también  88  leguas  cuadradas  baldías.  La  po- 
blación total  es  de  96. 967 habitantes^  que  está  earaioa  de  4 ,45  por 
cada  legua  cuadrada. 

LÍMITES  Y   CONFINES. 

Confina  «sla  provincia  con  otras  cuatro^  que  son)  Caracas,  Rati- 
nas, Barquíslmeto  y  en  u%  pequeik)  punto  con  la  de  Coro.  En  la 
punta  de  Aroa,  entre  Cuyagua  y  Choroní,  empieza  el  límite  c(m 
la  provincia  de  Caracas,  descrito  ya  en  esta,  y  que  termina  en  la 
boca  de  Chir-gu^  sobre  la  Portuguesa.  Aquí  principia  el  lindero 
con  la  de  Barínas,  Las  orillas  de  la  Portuguesa,  aguas  arriba^  hasta 
la  boca  del  caño  Igúez,  forman  la  línea  divisoria  ;  después  sigue  por 
el  Igúez,  y  á  poco  deja  este  para  continuar  el  curso ^  aguas  arriba 
del  Guanare  viejo ,  en  dirección  al  poniente  hasta  el  punto  de  la 
Yeguita ;  aquí  tuerce  el  límite  al  IV.,  poruña  línea  que  atraviesa 
la  sabanas,  á  pasar  cerca  del  Picadero,  y  acaba  sobre  la  Portuguesa 
junto  al  hato  llamado  Mapurite.  Sigue  después  otra  línea  indeter- 
minada por  la  montaña  de  Turen,  que  va  á  pasar  por  las  inmedia- 


—  58T  — 

cíones  det  vecindario  de  Santo  Domingo ,  y  de  aqsí  otra  na  méttos' ' 
indeiermiDada;  hasta  dar  en  fa  boca  deCanjartlo  qnedesagtia  en  él 
Cojédes.  Este  rio  es  entonces  el  lindero ,  hasta  frente  del  cerr^  P^ 
tiguado  qne  atraviesa  la  montaña  del  Altar^  preeisamente  cerca  del 
camino  que  de  S.  Carlos  va  á  Barqnislmeto,  en  el  paso  de  la  Boca. 
Hasta  este  punto  llega  la  raya  de  la  proviDCia  con  Harinas,  y  em« 
pieza  la  divisoria  con  Barquisimeto.  El  río  de  la  Boca ,  ¿Gojédea, 
signe  marcando  el  lindero  hasta  donde  se  jnnta  el  Ho  de  Barq^ian 
meto  con  el  Buria  ó  S.  Pedrito  :  entonces  sirve  este  de  límite  hasta 
las  labranzas  de  Nuarito,  que  quedan  frente  al  cerro  que  da  orifje^ 
al  rio  Yaracui.  La  cumbre  de  este  cerro  divide  el  territorio  y 
el  rio  Taracui ,  ya  formado ,  sirve  de  raya  divisoria ,  casi  hasta  sa 
derrame  al  mar.  Allí  acaba  la  división  con  la  provincia  d&Barqub^ 
simeto^  y  en  esta  misma  boca  del  Yaracui  principia  y  se  puede  de^ 
cir  que  acaba  la  raya  con  la  de  Coro,  pues  solo  en  la  boca  del  rie 
está  en  contacto  por  un  espacio  de  menos  de  una  l^na. 

COSTAS   DEL  MAR. 

Desde  la  punta  de  Aroa ,  en  las  faldas  del  cerro  de  la  Aiesela , 
continúa* la  costa  al  O.  con  inclinación  báeia  el  Si,  la  distancia  de 
2  leguas ,  hasta  la  ensenada  de  Gata  :  toda  ella  es  mm  limpia  j  m 
puede  atracar  á  una  milla,  y  Baéaos  si  se  quiere)  habiendo  b«Qn  an* 
<^1aje  en  la  ensenada  Cuyagua.  La  ensenada#de  Cata  tieat)  vadia 
milla  de  boca  y  otro  tanto  de  saco.  En  la  punta  oriental  hai.QQ  ia^* 
lote  casi  pegado  á  día,  y  desde  él  baja  para  el  S.  haata  el  londa  dft»  • 
la  ensenada  donde  desagua  un  rio  con  veril  de  poco  foado ;  por  la 
demás ,  la  ensenada  es  limpia  y  su  fondo  oe  27  á  5- brasas ,  que  a» 
hallan  á  cable  y  medio  de  la  playa. 

Al  O.  de  la  punta  occidental  de  Gata,  y  á  2/5  de  milla,  ettá  la 
punta  oriental  de  la  ensenada  de  Ckmmare,  que  ofreoe  también  mu  > 
buen  fondeadero  :  de  dicha  punta  oriental  sale  para  d  N.  C  un 
islote,  que  forma  f^sv  de  medio  cable  de  ancho,  y  tan  limplo^y 
acantilado,  que  el  menor  fondo  es  de  7  brazas.  Esta  ensenada  es 
bastante  aplacerada,  y  el  escandaUo-es  buena  guia. 

A  casi  una  legua  del  islote  de  Ocumare  está  la  punta  oriental  de 
la  ensenada  llamada  Ciénaga  dé  Ocmnare,  que  noes  maS'qaeiiaa 
abra  de  tierra  anegadiza ,  que  sale  de  la  costa,'  y  que  enlra^bi^ . 
fondos  de  arrecifl?»  íbrma  un  canalizo  come-  dv^nneaMe  y  mediou 


—  388  — 

de  ancbO;  en  el  que  hai  desde  -15  hasta  5  brazas.  Este  fondeadero 
es  muí  malo  y  solo  capaz  de  embarcaciones  de  cabotaje. 

Media  legua  por  el  O.  del  morro  de  la  Ciénaga  de  Ocumare,  que 
está  en  la  punta  occidental ,  se  encuentra  el  puerto  de  Turiamo  ^ 
que  es  escelente  y  capaz  para  todo  género  de  embarcaciones.  En 
sus  puntas  esteriores  tiene  una  milla  de  abra,  y  luego  angosta  hasta 
quedar  en  2/5  de  milla  :  de  N.  á  S.  y  en  todo  él  se  hallan  como  20 
brazas  de  fondo  de  lama  y  arena  :  al  N.  O.  de  su  punta  oriental 
haí  un  islote  á  distancia  de  un  cable. 

Desde  el  punto  de  Turiamo  para  el  O.,  y  á  distancia  de  5  leguas^ 
está  Puerto-Cabello.  Esle  pedazo  de  costa  es  limpio  y  se  puede  atra- 
car á  una  milla  :  hai  destacadas  varias  islas  que  están  al  E.  de 
Puerto-Cabello  y  se  puede  navegar  por  entre  ellas. 

Puerto-Cabello  es  un  canalizo  formado  por  varios  islotes  y  len- 
guas de  tierra  baja  de  manglar,  en  el  cual  es  preciso  entrar  á  la  es- 
pía, y  se  amarran  los  mayores  navios  al  muelle ,  sin  necesidad  de 
plancha  ni  tabla  para  bajar  á  tierra.  Este  canalizo  tiene  su  boca  en 
una  ensenada  mu  i  espaciosa^  resguardada  de  las  brisas,  y  es  de  es- 
celente fondo  desde  Á  2  hasta  -1 5  brazas,  lama  arenosa.  En  5  brazas 
se  está  bastante  cerca  de  la  playa ,  que  no  es  buena,  por  tener  al- 
gunas piedras :  el  mejor  fondeadero  es  E.  O.  con  la  boca  del  puerto, 
y  como  á  5  ó  4  cables  de  ella.  Este  puerto  es  el  carenero  de  todos 
los  buques  mercantes  que  van  á  la  Guaira,  y  el  paraje  donde  in-^ 
Yernao,  y  así,  ordinariamente  las  embarcaciones,  luego  que  dejan 
8U  cargamento  en  la  Guaira ,  van  á  Puerto-Cabello  para  estar  mas 
resguardadas,  repararse  de  las  obras  que  tienen  que  hacer  y  tomar 
parte  de  su  cargamento  de  retorno ,  volviendo  á  la  Guaira  para 
acabar  de  cargar.  ^ 

La  costa  de  sotavento  ó  del  O.  de  Puerto-Cabello  forma  una  gran- 
de ensenada  llamada  de  Tucacas,  en  la  cual  hai  varios  islotes :  en 
ella  se  atraviesa  la  brisa,  lo  cual  la  hace  algo  peligrosa. 

En  la  boca  del  Yaracui  que  está  á  6  leguas  de  Puerto-Cabello , 
termina  el  límite  de  la  costa  de  la  provincia  de  Carabobo. 

ISLAS. 

Solo  tiene  cuatro,  sin  considerar  muchos  pequeños  islotes  y  pe- 
ñascos que  se  encuentran  sobre  la  costa ^  á  barlovento  de  Puerto- 
Cabello.  De  estas  islas,  tres  están  al  N.  de  dicho  puerto^  entre  este 


—  589  — 

y  el  de  Borburata^  no  mui  lejos  de  la  costa,  y  la  otra  al  poniente  de 
Puerto-Cabello.  Las  tres  primeras  se  llaman  Isla  Larga^  Santo  Do- 
mingo y  Alcatraz ,  en  medio  de  las  cuales  y  á  su  rededor  hai  fon- 
deadero. Estas  islas  son  pequeñas;  bajas^  con  poca  arboleda,  y  una 
úe  ellas  tiene  una  laguna  salada  en  el  medio.  La  cuarta  se  llama 
€ua¡guasa ,  frente  á  la  boca  del  rio  de  su  nombre :  está  siempre 
verde  y  á  vezes  sirve  de  lugar  de  paseo  á  los  habitantes  de  Puerto- 
Cabello  ;  es  pequeña  y  se  halla  cerca  de  la  costa. 

MONTANAS. 

La  cadena  litoral  de  Venezuela,  se  puede  decir  que  se  confunde 
€on  el  sistema  del  ramal  de  los  Andes  que  se  desprende  desde  Pam- 
plona y  se  pierde  en  la  abra  de  Barquisimeto.  El  rio  Cojédes  y  el 
Buria  que  le  cae,  dividen,  en  cierto  modo,  el  terreno  de  los  dos  sis- 
temas, en  la  montaña  del  Altar. 

La  dirección  de  la  cordillera  de  la  costa  que  allí  se  llama  de  Nir- 
gua  toma  primero  hacia  el  N.,  y  la  cumbre  del  cerro  Tucuragua 
es  el  punto  de  partición  de  los  dos  ramos  que  se  estieñden  á  formar 
el  pais  montañoso  de  Nirgua,  y  las  altas  paredes  de  la  costa,  por  una 
parte ,  y  de  la  otra ,  la  cordillera  del  interior  que  sirve  de  límite  á 
ios  llanos  y  encierra  el  hermoso  lago  de  Valencia,  los  valles  de 
Aragua  y  del  Tui.  El  ramo  principal  se  dirige,  como  dijimos,  hacia 
el  N.,  formando  el  valle  de  Nirgua,  dominado  por  el  picacho  de  este 
nombre  y  por  el  cerro  de  Santa  María,  elevados  ^  .920  y  4 .895  va- 
ras sobre  el  nivel  del  mar.  Desde  aquí  sigue  la  dirección  del  N.  E., 
inclinándose  á  Puerto-Cabello ,  arrojando  varios  ramales  á  su  iz- 
quierda, que  forman  pequeños  valles  mui  fértiles,  los  cuales  van  á 
perderse  en  la  pestífera  montaña  limitada  por  la  costa,  el  rio  Yara- 
cui  y  el  de  Aguacaliente.  Este  último  corre  por  cierta  abra  que  es 
como  una  cortadura  en  la  serranía  llamada  aquí  de  la  costa,  y  por 
la  cual  se  puede  hacer  un  buen  camino  carretero  para  la  comuñi- 
cadon  entre  Valencia  y  Puerto- Cabello.  A  la  izquierda  salen  tam- 
bién diversas  hileras  de  cerros  que  forman  los  valles  de  Montalban^ 
Chirgua  y  otros  pequeños,  cuyas  faldas  se  confunden  en  las  llana- 
das que  están  entre  Carabobo  y  el  Tinaco.  El  mas  alto  cerro  es  el 
Torito,  de  ^  .468  varas.  Después  de  la  abra  de  Aguacaliente,  la  ser- 
ranía de  la  costa  sigue  arrimada  á  la  mar  hacia  el  naciente,  y  sus 
basas  se  pierden  á  vezes  á  poca  distancia  de  las  orillas  del  agua ,  á 


f 


I 


« Teses  en  Its  aguas  mismas,  ea  ferma  «le  altas  paredes^  hasta  el  cer- 
ro de  la  Meseta  que  sirve  ée  Umite  con  Ja  proviticia  de  Caracas.  «Los 
•49erres  oías  altos  de  este  trozo  de  cadena  ^  son  las  Tetas  deHUaria  > 
de  4 .6^  ¥ar<a$,  y  Patanemo  de  4  .^30. 

£1  otro  ramal  qne^le  de  Tucnragoa,  cerro  elevado  4200  vasas, 
se  puede  Uamar  secundario  :  signe  su  rnmbo  al  nádente^,  sedismí* 
Jiuye  considerablemente  en  las  Palomeras,  tuerce  prím^amente  al 
IV.  E.,  después  al  N^,  y  tomando  el  rumbo  del  naciente,  levanta'€as 
cumbres  y  va  á  formar  la  cordillera  del  Pao ,  que  viene  á  quedar 
paralela  á  la  de  la  costa.  Su  mayor  altura  es  en  Cerro-Azul  de  Gúi- 
güe ,  que  es  de  4 .420  varas ,  y  se  une  al  límite  de  la  provincia  de 
'Caracas,  en  el  cerro  de  ¥uma,  cnyaa  faldas  -se  pieideu  eu  el  lago  de 
Valencia,  miéntras<qne  lacuatbre  del  Palmar  elevado  4.050  vai^s^ 
da  orí^B  al  val4e  de  Tacasurama. 

Aquella  pared  peñascosa  que  Hamau  galera  de  S.  Carlos  y  4é[ 
Pao ,  se  puede  considerar  como  la  antigua  costa  del  juar  de  yerba 
qme  -ofrece  la  vista  de  los  llanos.  Se  origina  en  las  sabanas  de  San 
Carlos,  por  medio  de  vaiius  cerrítos  aislados  y  trasformados  des^ 
poes  en  una  estreclia  hilera ;  corre  paralela  á  la  cordillera  dd  inte- 
rior, y  sus  mas  elevadas  cumbres  no  esceden  800  varas  de  eleva-^ 
don  sobie  el  nivel  del  xaar.  En  esta  furovincia  va  hasta  el  río  Cbir- 
^ua,  que  nace  en  el  cerro  situado  al  respaldo  del  valle  de  Tacasn-^ 
xoma. 

De  la  cordillera  de  la  costa  van  di-rectamente  ak  mar .24  rios^^fne 
dan  origen  á  otros  tantos  valles,  ya  anchos  y  largos,  ya  es^%cbo6  y 
cortos,  pero  que  todos  pdtden  ser  regados  pw.  medio  de  eUos  :  /nin- 
guno es  navegable ,  si  se  esceptúa  el  Yaracui ,  por  el  cual  puadien 
Irajár  las  .producciones  de  Barqutsimeto.  Las  aguas  qne  se  descnel- 
.  igan  de  la  parte  meridional  de  la  serranía  de  la  costa  y  de  la  de  Nír- 
.  :jguay  toman  dos  direcciones ,  una  hacia  el  lago-de  Valencia»  ^a 
.Atravesando  los  llanos  hádala  Portuguesa*  Las.primeras  ««eatan  S 
xlos ;  el  principal  aunque  peqseno  es  el  de  Valencia*.. Las .sc^§«»das 
22  rios ;  el  principal  de  los^uales  es  el  Cfairgna^^  que  loma  ^x^i^a 
en  la  serranía  de  su  «nombre^  cae  al  Pae^  pasando;  por  i»Da.4ibr<afde 
esta  serranía  y  desagua  en  la  PortogiiGfia ,  siend»  navega&lr  iMf ta 
cerca  de  la  viUa  del  Pao  mismo* 


f. 


—  sw^  — 

CMi*  odfdiHertí  qae  llaiDaiiiQ$  d«l  interior,  «e  desfsreodtt 20 
ms ;  y  escoplo- 4  (|ue  vaa  el  l«go  de  ¥«kiicía,  ios  dm&n  descMfgan 
Mi9;ag|]aftieo  la fartjoguesa.  £1  mas  grande  deeUes  w^AxorkiC^ir' 
9U<fiie«ífv0  de  f»T«  di/V4SOfta,eon  la  j»rovtaciade€amcaa,f  se 
<iNrigí«a  «I  d  oenro'del  Painiar ,  que  encierra  ti  frilt  de  Twwn- 


£1  prioeii^i  |J0  4e  eflta  previncja  es  d  Cnjédes  y  que  lo  íoraa  el 
fMrfde  BarqiiísJBMto,  el  etial  al  uairsea]  de  fivia  (qué  v<rdad«ra«- 
waole  debía  Ihunafae  rio  de  Nirgna)  tona  el  nomlire  de  rio4e  la 
Boea  j  faaata  qpe^eroa  del  pueblo  de  Ccjédes ,  adqskre  eribi  aom* 
irte ;  'oao  ¿I  va  i  presealar  ««s  ajms  á la  iPoriitgiieea.  A  4'4e9aas 
.abajo  del  piioblode€oiédes,«ael  p«a4o  ]laf»idoAg«fieai,«ii^eza 
.á iSer  oavagable iiasia  su  deseinbocaditfía.  £8te  río,  el  prínaeio  en 
la  províaeia ,  4ieae  su  rasgo  en  los  de  .segando  óideo.  en  la  vapú- 
bUreá»  míéatitts.que  los  demás  no  son  <á  ano  de  ieroer  lórdmi^  El 
número  total  de  los  ríos  de  este  (erriiorío  es  de  74^  de  4°  ónéen , 
.«Btise  los  enales  uQo,de  2«qne  es  el  €ojádes,ain  eonsMemriBnltitad 
<tde  iqnehBadbs-ó  mebnelos  en  námero  de  mas  de  1#0. 

LACOS  T  LAGUNAS. 

El  lago  de  Valencia  ^  Jlamado  antiguamente  por  Ins  ándígeiqas 
Xacarigna^  lOstá  á  la  altura 4e  M\7  varussohre  el  nivel  del  miV, 
y  la  jmte  inas  baja  del  >fondo  á  4^0.  A  este  lieroMiso  eat^whque 
debm  los  ricos  vnlles  de  ixngiia  sn  gmn  férUídad^  fnea.  su 
constante  evtaponMsioo  fdr.eiporcioaa  aqneUa  bumodad  neoeaeiáa  íl  la 
vida  vegetali  dándole  vigor  para  sn  desarcollo  y  mitigando  la  fti^rza 
dnl«>l  .de  los  ijc^ks».  Está  árenndado  de  cerros ;  al  .N«  josté^  la 
Meseta ,  Mariam ,  Ttelamo  y  Oeumace  y  Pataaemo  le  sepaJW^Ae  la 
oosíta  del  xnar  de  ks  ántiUa^  :  al  $.  Guacamaya ,  Ynnia ,  iktro- 

..A«d  y  Queipa  lo  «írvan  debalnacto  eootra  los  viontos  abrosadpres 
4e  Jos  alanos,  y  wmos  gr^es  de  eelmasdeleraiinan  el-onvsn  de 
las  apiaa«cer«MDudo<el<»r€Niíto  jpor  el  E.  yfM>r  el  0^  iios  iQianhii^los 
4e  ios  uraUosido^^kffaina ,  en  nóoftevo  ido  M .,  Aumentan  (^¿««fiqne 
.  timieja  leiins  de;  oiif«rftiiá#  y  12  Mas  i^n  eUa.  i«a.fHdHi$Jipaidoiasta8 
«os  la  iala^l  Boceo,  qn^  ti«iae  2  ftm¡Knsi4e  Joirgo ;  la  ido  Ja  ¡Gnlibra 
jque  oíanla  inMdia  l^na ;  lasi  do  Gaifujoe  y  Otajaw^  ^  de  matiiiiUa 

t  .Mdaiuna ;  i^bandMugne ,  ^nn  #000  jum-  patnona  iqno  eataa ,  /Uírtible 

ofMiro«(ftttarn^pBoa 


82  varas  sobre  la  superCcie  del  agua.  Menos  de  media  milla  tienen 
las  de  Brojita ,  Cura ;  Homo  y  Zorro ;  algunos  centenares  de  raras, 
Cabo-Blanco ,  Vagre ,  Araguato  ^  Pan  de  Azúcar ,  Fraile ,  Cucara- 
cha ,  Hormiga  y  Cotúa.  Hai  ademas  las  peñas  llamadas  Vagrecílos , 
cerca  de  la  isla  del  vagre ;  los  Monacillos ,  que  son  dos  peñascos  á 
las  inmediaciones  de  la  isla  del  Fraile;  el  de  Cucarachita,  cerca  de 
la  Cucaracha ;  la  Hormiguita ,  entre  la  Hormiga  y  la  Cotúa ,  y  por 
último ,  la  peña  que  queda  frente  á  la  Cabrera.  En  estas  no  está 
comprendida  la  hermosa  laja  que  se  levanta  sobre  un  fondo  de 
granito  ,  entre  el  morro  de  Guacara  y  el  islote  de  Cabo-Blanco  , 
cerca  de  dos  varas  sobre  la  superficie  del  agua ,  casi  perpendicular 
en  forma  de  una  gran  mesa  cuadrada ,  perfectamente  lisa  y  del  es- 
pesor de  mas  de  dos  píes  ,  pudíendo  considerársele  como  un  ni- 
lómetro  natural ,  al  cual  solo  falta  marcar  los  pies  y  pulgadas  para 
que  indique  exactamente  el  aumento ,  ó  mas  bien  la  diminución 
anual  del  lago. 

La  esperiencia  de  casi  un  siglo;  ha  probado  que  no  es  constante  el 
nivel  de  hs  aguas^y  que  falta  ya  el  equilibrio  entre  el  producto  de  ja 
evaporación  y  el  de  las  aguas  que  alimentan  el  lago.  La  vista  del  suelo 
del  pasoxie  la  Cabrera  y  el  déla  vuelta  del  Auyamal,  prueban  que 
hasta  allí  llegaban  las  aguas  y  que  la  península  de  la  Cabrera  erajin- 
tiguamente  isla,  así  como  el  morro  de  Guacara  y  los  cerritos  próxi- 
mos á  este  pueblo.  Lo  mismo  se  observa  en  el  terreno  que  medía 
entre  Valencia  y  GQigüe  y  en  los  montecillos  que  se  elevan  en  me- 
dio de  la  llanura  que  está  al  E.  del  caño  de  Camburí ;  de  los  cuales 
algunos  como  la  isla  de  la  Negra  ó  Corotopona  de  los  indios ,  han 
conservado  el  nombre  de  islas ,  estando  en  tierra  firme ,  loque 
prueba  bastante  que  ]¿s  aguas  se  han  retirado  mucho  desde  el 
tiempo  de  Oviedo  ,  quien  en  su  historia  publicada  en  Á  725 ,  da  al 
lago  Á  4  leguas  de  largo ,  que  igualan  á^^/^  ác  las  actuales  si  las 
A  A  eran  de  las  de  5.000  varas  conocidas  en  el  pais ,  y  asegura  que 
distaba  solo  medía  legua  de  Valencia.  Actualmente  se  halla  el  lago 
á  dos  leguas  de  esta  ciudad  y  su  mayor  largo  es  de  9  leguas  de  20 
al  gradó.  Antiguamente  para  ir  á  GúígQe,  se  pasaba  por  las  tierras 
de  los  Aguacates ,  por  las  cumbres  se  iba  al  valle  de  Noguera  ^  y 
por  la  cresta  de  la  serranía  que  mira  al  lago ,  se  pasaba  á  aquel 
pueblo ;  lo  cual  prueba  ,  que  los  terrenos  hoi  cubiertos  de  hacien- 
das y  caserías ,  estaban  entonces  oícopados  por  las  aguas.  Hai  otra 
prueba  en  los  documentos  de  los  indios  áá  pueblo  dé  los  Guayos^ 


—  5^5  — 

€iiyo9  egidos  bácia  el  lago  se  estienden  una  legna  que  llegaba 
basta  la  misma  orilla ,  cuando  bol  pasa  de  4  millas.  Gomo  el  ter- 
reno que  rodea  el  lago  es  sumamente  plano  y  liso ;  resulta  que  la 
diminución  de  algunas  pulgadas  en  el  nivel  de  las  aguas,  deja  en 
seco  un  yaslo  trecho  del  suelo,  cubierto  de  limo  fértil  y  de  des- 
pojos orgánicos.  A  me£daque  el  lago  se  retira,  los  labradores  ade- 
lantan hacia  el  nsevo  borde,  y  á  la  retirada  progresiya  de  las  aguas 
se  deben  las  hermosas  y  ricas  campiñas  de  S.  Joaquín ,  Guacara  y 
los  Guayos,  Valencia,  Gtigüe,  Magdaleno,  Santa  Cruz,  Gaguay 
Maracai ,  plai^adas  de  tabaco ,  ca9a  dulce ,  café ,  añil ,  cacao ,  al- 
godón ^^  maiz ,  plátano  y  toda  especie  de  verduras  y  frutas.  La  pro- 
fundidad media  del  lago  es  de  45  brazas  y  los  sitios  mas  profundos 
no  tienen  mas  de  57. 

La  superficie  de  los  terrenos  ,  cuyas  aguas  van  al  lago,  es  de 
86  1.  c.  y  y  como  en  ellos  caen  anualmente  72  pulgadas  de  agua , 
resultaría  que  si  en  un  año  no  hubiese  filtración  ni  eyaporacion 
(cosa  imposible) ,  se  ensancharía  el  lago  cerca  de  una  legua ,  y  se 
alargaría  mas  de  5 ,  batiendo  sus  olas  en  los  cerrítos  de  S.  Joa- 
quín ,  al  pié  de  Maracai  y  cerca  del  morro  de  Valencia ,  reconvir- 
tiéndose en  islas ,  la  Gascabel ,  la  Negra ,  la  Gabrera ,  el  morro  de 
Guacara  y  los  cerritos  cerca  de  este  pueblo  :  el  terreno  de  Gdigüe 
formaría  otra  vez  parte  del  lago.  Este  es  el  resultado  de  machas 
nivelaciones  barométricas,  ejecutadas  en  la  circunferencia  del  lago, 
que  es  de  25  leguas ,  tomando  de  punta  á  punta.  Sus  aguas  son 
salobres ,  mantienen  constantemente  unatamperatara  un  poeo  mas 
baja  que  la  del  aire,  sin  duda  porque  una  masa  de  agaa  tan  con- 
siderable no  puede  seguir  con  igual  rapidez  las  mutaciones  de  la 
atmósfera  y  porque  recibe  el  lago  arroyosj'rios  de  las  montañas  in- 
mediatas, flai  abundancia  de  pes^ ,  pero  solo  de  tres  clases ,  cuya 
carne  es  blanda  é  insípida :  y  son  la  guabina,  el  vagre  y  la  sar- 
dina. Seria  de  desearse  que  se  pusiese  en  ejecución  el  proyecto  de 
poblar  el  lago  de  las  muchas  calidades  de  pezes  que  se  dan  en  los 
ríos  que  atraviesan  los  llano»  y  que  las  tortugas  y  terecayes  viniesen 
á  ser  habitadores  suyos.  Es  bastante  notable  que  en  él  y  en  todo  el 
sistema  éesús  tritatarios  no  haya  caimanes  >  á  pesar  de  que  este 
peligroso  animal  abunda  á  pocas  leguas  de  alU,  en  las  aguas  que 
caen  al  Apure  ó  directamente  alnnir  de  las  Antillas;  solo  hai  algu- 
nas pequeñas  babas,  especie  de  caimán  que  no  es  leroz. 

Es  también  notable  la  calidad  del  tenreno  de  los  contornos  del 


lnfD^M  haa  fcnawpaéo  fas  ^gms ,  el  Mil  MálliM  ie  ptfHííos 
canusaks bkacos,  q«e  cmi  oo^^M  ff«r«tta«spMie46 liemqüe 
füsáBHM^s,  <»fo  folvo  fin  liftJscvUflMlile,  qBeii«oe  el  afecto 
de  iosfei«4e»áe  la  iMvplea ,  y  lüi  iiiiirfiifci  ■MÜ^fl^peBrafJMrjqae 
'Doprofemí  4elaciHMltt,flnoHwbÍMi4el  áaeeeler^eéaiála  ea 
elfa^pMS&UéiMMbkikfnnÉdadMQnttMddi^paM  en 

émáe  él  vife,  MieaMeine ,  7  redaoido  á<foho  tepenapüble , 
pmaie  ser  la  «a«sa  de  la  uno  •waeían  q«mniiiyrimfii^  «gando 
iae  peqwiasfMliciilis.de  «¡«eHúeafttel pWeío  Imaww ; ¡panqué 
n#  «aeede  lo  mumOitm  el'éMreae^pM  4iee>MMlio  XwBfo«stá 
ahaadeaado,  «uHWfie  lea  pactos  ó>siHrAragaMBlDsqiie.4ia«B«flDlor 

'  hlsa^aoriao  á  ia  t«rm  no  4l^a  la  amsot  áeda  ^«eMiriiMBino 
caracol  pulverizado. 

i  Los  &refi.  fiovsfiíiipoU  y  Riviaro  tea  wnaMaHi  «1  ^agaa  del 
JU^o,  y  «aeoBliiiraa^iae  kam  ^^tí  de  cagtiaaaéeáe  aosa  y  deíaiag- 

nssía  ^  «de- muríate) de  sosa  y  de^^ailMe  y  eaobeaate  ée  eaL 

ia  wto  del'to9e.«s  píaiol«sQaa  Jas  Jalas  «0Q«sas.M6SB{eBtte^tas 

/4e  folUje,  iS9B  fii^ablsttieate  iMBcaaMs,  y  mSlaaesdbB  srauaesnti- 

*isas>^e  ^«ViA  911  ias'«nllas  ó  atearósaa  «d  la^o ,  H»oipletm  la 
^peupectiva*  tas  ansiitaaas  ^«e  lo  «draamiaii ,  idu  ai  paíafeüiDa 
visla faniada  y'baltoi  Uu  qoe^iattaan  friáas ^láaia cía— dioto  , 
.«8^«iibffei4as4s  psjaeaft  JcaMhaside4MH^p»^i]eeauiiaalia:coii 
J#  ssc^^del  iemoa  y  los  fiBaGÍMs«leiaMdas  ide  la  semak.  Xas 
4fm'üemHí  sasáridas  vastes  al  salasÉríoa ,  sao  por  lo'^aaiaisias 
iniadesas,(aiMfaesw»kB:ialÉatt^flaiiiBia»  oaibiertas  de  graasáMtasqae 

vfiUieaatetiOi6o«»»inti]B»'lnacara.  B«mMdteeee.q«eaáfcin- 
<ñpí».dd  iaia^  «oaádo  elaal  eKá  en s«.dédía»ciaD «ascicttMal , 
:las>ODestasqtte  oadea^^  á  \^iAmm^  Crvacara ,  S-iiiquiw  ydHamcai 

'  astin  «toasadas  for  los  nf os^sM  aei^  niirfalrasqws  las  qfiM^aeiía- 
.yan  al  iadoop«estodal;is@o  eaiae  tos  J^gamAes,  ^SAigÉe  y  itaida- 
laaa  ^  irecibeB  «aai.tos  mates  <fae«HÉPaQiei  ai  «aHe  por^A  jÉsa  de 

!  Agnacntieate  o  ^eitárbola,  na  ^aípeifaD  aÉrmesa>^Iás9a>7«gtte 

^i^está  íiapiwfaaile  4e  ^fipsrest  asaaaas. 

.  iaaicaraaiitts  del  tegoi^io  aaftinri  saaaaaiaaaBaÉdaíiMÍ  «aattsa* 
.iqaadsd ^  fieafne  rmlámtai  dipiínilasi aplasJMk «tt^istíilA^aaaiieno 

'f4^(|aMsto^  laaaivsaefhuaKfias* 

k  ia  ffnaviaisaide42aréi»«f«itaMM^ 
lago,  y  eaaiaa  km  mu  ásla^<wi6l<^^:4as.|itisffafl  ftiHiagri^ 
,  .aiaigadawste<tei»yJcadefiiiii^o>*aat»  los 


'  'iÉaf»r«iidii]i«itieae'4  le9at8,'dedde'kieii8eB«^ 
:  hwám  i  la  ¡had^nda  4e  Vuwa. 

IfwSii&fasimis  M  esfeoeairattca  Im  Uanas^tieí  P«o,  S.  hartos  y 

el^ftasl/^e-nrren  fialia  beher  tesanianleacii  la  «stcmeu-de'^ñe- 

'  Mi»:;  HMMbi9«e^eeaii  y^ms  eaiiscrvM  MMJif  uaft  4  pen^^su-taMiSo 

«fl'tnf>^l]eao7^qlte  no  fasa  de  200  á  «M  varas;  y  BO^meroaen, 

'  «por  Aaalo^  <oaa:  paf4íeaiar  «eooioB. 

CUMA* 

:£i  4e  Jqi.pDdviaoia  4e  Car^bebe  «s^^oaerakaeBite  «ano.  Sua  faar- 

rttafiaa'lkQftfastii&ftufrfiiii  tebres,  stts  seri»fiías^)zaQ-da«aotaia 

'  teaiipiada  y  de  «Hia  coaAmitie  inimavera  ;  ten  ae46'cerca  4a  la^ooita 

f«efQa«iMUra«ii  éeoiple  «ai  iUAO/'eB  laaüia»taoafr.i|4ie  bafliA»el 

Morón ,  el  Alpargaten  y  el  Urama  baslB  «1  YftDMii»  Jtista-wowltjía 

suele  llamarse  de  Sania  María  ó  de  S.  Felipe.  Ciertamente  que  no 

hai  en  ella  ua  temperamanU)  saladable,  paro  ^  insalubridad  no 

es  peligrosa,  y  solo  en  la  estación  de  las  lluvias  suele  haber  allí  al- 

rfMaaK)«lenliin&.  TaaluagateíMtto^^  éei^U  iparte'iMi|«  y  ««agada 

r4eia  sehra  f  «a^aiibo^ar  tosvcrfias'CnlúeriattamrfiMaddiiaftla^^ 

lM)90(adoa,  fa  cd  dima  asiüslanto  y  nodebea  tcasnrse  lastlabnes. 

(A  Yezes  «oeieii  «steB  opareoer  en  jia  mala  «del  Ma  de  tfétanrtMcr  y 

>1?iiriama ;  petado  ée  Ma  csaaera  pfciodíea  y  peU^posa^  puos^en 

•  'teios  efllaa:p«nlos  iiai  tehitaeteaes  y .paMUoscpie  ip4#aii  coaAeaéos 

-6af4BédR)«deai9«dtofH^aJidas>4Soledaii^    riMitteiite:aéoniadaf^r 

ana  inCnidad  de  grandes  y  variados  vegetales. 

MTJWEMiN   HE'  tBmSRffO. 

En  la  parte  de  la  serranía  de  Nirgua  el  invierno  empieza  en  mayo 

y  acaba  en  noviembre  ;  en  la  |)iarXe  montañosa »  hacia  la  costa , 

empieza  en  abril  y  dura  hasta  setiembre  :  en  la  llanura  y  demás 

.  (j^Biest^da  la  aarrapía,  'desde  pctnaipios  4e  91990  ftia^a  iufs  de 

(AJ|0MH^ba«a$  qvMlan  íiiatidadas;maaadbi(ia  4t\  ^má\  ^  ^m  4fliu- 

^tett'se  temaftcalero&9  ifiaaihMSiaispraeeDtaa  eBtáÉcaaHM  abco 

Aim  fcMDOK  y  las  paMe6««l«fada6'«»li%  laosid         y  tafg^Ara^áel 

.)iIlBe^d.pé6íde^tayd8Ja  édBoL  TaíÉasleaiBBaKí dpáwnaHa- 


—  596  — 

nas  están  de  nado  eu  la  ¿poea  del  ioYÍerno^  y  ^^  nns  razón  los 
ríos,  de  manera  qoe  se  hace  fastidioso  el  tránsito ;  pero  á medida 
qne  la  Portuguesa ,  que  es  el  rio  que  recibe  todas  las  aguas  de  la 
ilanura ,  puede  entrar  en  el  Apure  6  salirse  de  su  canee;  bajan  los 
caños  y  rios  y  quedan  con  poca  agua  ,  desaparecen  con  la  fuerza 
del  sol  los  esteros  y  solo  subsisten  con  agua  algunas  pequeñas  lagu- 
nas. Pocos  dias  de  buen  tiempo  bastan  para  poder  atraTOsar  en 
todas  direcciones  unas  sabanas  que  en  muchas  partes  eran  antes 
intransitables. 

Los  caminos  de  la  serranía  son  buenos  aun  después  de  fuertes 
lluvias ,  pero  no  sucede  así  en  aquellos  cubiertos  de  espesos  bo^ 
ques,  que  por  lo  general  se  ponen  tan  fragosos,  que  á  vezes  no  se 
puede  pasar  por  ellos  sin  esponerse.  Duran  los  barriales  y  atasca- 
deros mucho  tiempo  después  de  las  lluvias ,  porque  los  rayos  del 
sol  no  pueden  penetrar  y  dar  calor  al  suelo  y  que  está  cubierto  de 
una  espesa  bóveda  de  verdura. 

DIVISIÓN  TBRaiTORIAL  T  PRODUCCIONES. 

La  provincia  de  Garabobo  se  divide  en  7  cantones ,  con-l^s  nom- 
bres de  Valencia ,  Puerto-Cabello ,  Ocumare ,  Montalban,  Nirgua^ 
S.  Garlos  y  Pao ,  que  tienen  ^5  parroquias  y  90  sitios  ó  grandes 
Tedndarios.  En  este  territorio  se  cultiva  mucho  café ,  cacao ,  algo- 
don  j  caM  dulce,  f  abaco,  maiz ,  yuca ,  plátano ,  cambare ,  ñames, 
arroz,  fríjoles,  tapiramos,  oeumos,  quincbonchos, apios,  carao- 
tas  ,  alverjas ,  papas  y  repollos,  toda  clase  de  hortaliza  y  delicadas 
frutas. 

El  total  de  la  población  de  esta  provincia  se  puede  dividir  de 

te  modo,  ^  que  se  < 
al  comercio ,  artes  etc. 


este  modo,  ^  que  se  dedican  á  la  agricultura ,  -j—  á  la  cria  y   *  * 


I  oo 


COafERCIO. 


Después  de  la  Guaira,  Puerto-Cabello  es  el  mercado  mas  fre- 
cuentado por  los  europeos,  los  norte-americanos,  los  habitantes  de 
las  Antillas  y  de  algunos  puntos  de  la  Costa-Firme,  recibiendo  to- 
da clase  de  mercancías,  y  exportando  café ,  cacao,  añil ,  cueros , 
•azúcar,  algodón  y  tabaco.  Tiene  comercia  esta  provinda  con  la  de 
Barquisimeto,  recibiendo  cacao,  café  v  cueros,  y  dando  en  cambio 


—  597  — 

dinero  y  mercancías ;  también  con  la  de  Barinas ,  de  la  que  redbe 
aüíl,  cueros,  cacao,  burros  y  cerdos,  y  en  cambio  devuelve  lo  que 
da  á  la  de  Barquisimeto.  El  comercio  con  la  provincia  de  Apure  e» 
de  ganado,  queso ,  sebo ,  cbigüire,  pescado ;  enviando  á  ella  sal, 
dulce,  casabe,  plátanos,  aguardiente,  maiz,  arroz  y  toda  especie  de 
mercancías.  IJltimamente,  de  la  provincia  de  Caracas  se  recibe  di* 
ñero  y  toda  especie  de  mercancías,  dando  en  cambio  maiz,  casabe, 
menestras,  aguardiente  de  cana,  cordobanes  y  dinero. 


CIUDADES    T    VILLAS. 


CANTÓN   DE   VALENCIA. 

Valencia ,  capital  de  Garabobo ,  única  provincia  que  lleva  el 
nombre  de  una  batalla  gloriosa.  Así  se  llama  el  campo  en  que  se 
decidió  la  entera  independencia  de  este  pais ,  su  irrevocable  eman- 
cipación de  la  metrópoli  y  la  destrucción  del  poder  español  en 
Costa-Firme  ;  alli  espiró  una  dominación  de  tres  centurias,  adqui- 
rida por  el  crimen,  mantenida  por  los  abusos  y  defendida  en  una 
lucha  sangrienta  con  cuantos  medios  sugiere  la  nialdad  ayudada 
por  el  poder  y  animada  por  la  venganza.  Valencia  fué  fundada  en 
•1555  bajo  el  gobierno  de  Yillacinda,  por  Alonso  Diaz  Moreno,  y  es 
•12  años  n)as  antigua  que  Caracas.  Se  encuentra  en  la  latitud  de 
ÍO**  -lOM  V^  y  en  la  longitud  ^o  9/  ^tf  al  o.  del  meridiano  de  Ca- 
racas, á  565  varas  sobre  el  nivel  del  mar.  ^encia  ofrece  algunos 
recuerdos  históricos.  Lope  de  Aguirre ,  llamado  el  Tirano ,  bajó 
del  Perú  en  -1 56^  por  el  Amazonas ,  vino  á  Margarita  y  de  allí  se 
introdujo  por  Borburata  á  los  valles  de  Aragua.  Cuando  entró  en 
Valencia,  proclamó  la  independencia  del  pais  y  la  deposición  de 
Felipe  11.  En  los  tiempos  de  su  libertad ,  se  vio  elegida  capital  de 
la  república  en  dos  épocas  mui  memorables  en  los  fastos  de  la  his- 
toria, después  de  la  proclamación  de  la  independencia  en  '1 8^2,  y 
en  4  850,  cuando  regenerándose  Venezuela,  se  separó  del  resto  de 
Colombia.  Valencia  está  colocada  de  las  primeras,  en  el  número  de 
las  ciudades  que  no  eseusaron  sacrificios  por  la  independencia,  y 
entre  muchos  rasgos  de  vsjjor  heroico  que  puede  presentar  al  mun- 


—  5f « 

d(KiMM  BMiBií^siBcim^de  BU  k  polüica  y  dta  eafl^  OQpdte;krs  ríg»«* 
roJtBsÜio»  g»tottida»eii^  i  »IA¿  Pisarán  miieluiagiMiQncioBcs^á&Ut 
qm  e^lft  beBemériía  pal>te€Mn,  llamaás  antes  k  CüimímÍicU  itaí, 
por  escwleneia,  s»  reeobi^de  las  malas  qve  le  kizo  «ii£pir.sii.deGÍH 
dide  aiBor  i  la  liberted  y  los  f  encvoma  sacrifieioa  de^  si»  y|os.  La 
nuevafefleraetoa  proba  el  «iío  de'4855  que  eraiiiiBato  «s^la  .d 
Talor^  y  que  do  oedian  á  sos  fiadres  en  amor  á  la  bberlad^  poea  «■ 
puñado  de  jóvenes  se  defondió  beróícaniOTte  contra  Im  .mejona 
tropas,  hasta  que  fueron  libertados  del  sitio  que  sufrían. 

La  ciudad  está  fundada  en  un  terreno  llano,  pero  que  tiene  dos 
declives,  uno  de  E.  á  O.  y  otro  de  N.  á  S,  y  ambos  van  á  concluir 
en  las  orillas  del  rio  de  Valencia.  Estos  declives  son  mui  suaves, 
y  se  puede  decir  que  la  ciudad  ^stá  sobre  una  hermosa  esplanada 
que  se  encuentra  á  la  entrada  del  valle  que  baña  el  rio  de  Valen- 
cia y  que  empieza  al  pié  de  la  serranía  de  Puerto-Cabello.  Las  ve- 
ga^  del  río  ofrecen  basta  la  falda  de  la  serranía  de  la  costa  terrenos 
útifes  para  el  cultivo  ;  pero  después  el  resto  se  compone  de  sabanas 
que  se  estiqndcn  no  solamente  en  la  hermosa  llanura  sino  también 
que  arropan ,  por  decirio  así ,  los  dos  ramales  que  vienen  de  la 
gran  cadena,  uno  de  los  cuales  se  conoce  con  el  nombre  de  Cerros 
de  S.  Diego  que  presentan  una  cuchilla  en  forma  de  dientes  de  sier- 
ra; otro  coa  el  nombre  de  Cerros  de  Guataparo  que  es  una  fila  mas 
unida  y  que  se  eleva  sensiblemente  a  medida  que  se  aproiiima  á  la 
serranía ,  mientras  que  aqqel  se  rebaja  considerablemente  y  foram 
él  portachuelo  de  S.  Diego  :  queda  este  casi  E.  y  O.  con  la  abra 
de  Aguacaliénte,  la  cualdivide.absolutamentela  serranía  de  Nírgua, 
y  Chirgua  de  ta  de  Puerlo-Cabellp  y  Ocumare.  Por  esta,  abra  que 
C(»Tcfuce  á  la  costa ,  peftelra  todas  las  tardes  un  viento  fresco  del 
mar,  que  se  estiende  después  sobre  los  valle$  de  Aragua.  La  direc- 
ción primera  es  hacía  los  Agpacates,  tan  luego  como  sale  dé  en 
medio  de  los  cerros  que  forman  el  valle  de  Valencia ,  y  allí  depo- 
sita las  partículas  acuosas  que  ha  llevado  de  la  mar ;  así  es,  que  en 
aquel  punto  suele  llover  mas  que  en  Iqs  opuestos  y  la  serranía  pre- 
senta una  vegetación  mas  lujosa.  Esta  barrera  de  cerros  que  se 
opone  al  viento,  lo  hace  torcer  hacia  el  lago  y  de  allí  se  diriíge 
siempre  hacia  los  cerros  de  Güigüe  que  tienen  una  vegetación  ro* 
busta  y  verde,  cuando  al  opuesto  los  de  Guacara  y  S.  Joaquín  tie- 
nen sus  cuestas  peladas  y  casi  desnudas  de  grandes  vegetales.  Eil 
el  punto  en  que  ía  ciudad  está  construidsl ,  se  avanzan  dOs  cerros 


quQKmiflioaApeniM  de  ios  dosnannbi  ámaUlos  :  e)  <»iaitiAvs«t' 
Uama  el  Morro,  cubierto  de  una  hermosa  vegetacioi^;  en  la  ««al  «a 
desnktvtt  enomas  peüaseoscakácQOs;  el  opuasto-cs  en  forma  de 
pezBD  ^  lapiEadO'aQkmeate  de  paja,  co» medio  de  la  cual  se  elemí 
las  gcandet hojas  del  akifi<eueDÍ  y  toiatgoeTásIagofrde  «asieres. 
£1  -rif^desGnbe -ua aree  al rcdedar de  la eiodad  y  lieoe  impneBle 
hermoso  que  hizotonslniip  el  geoefal  llorido  Goeiido  TaieBcía  era 
sa  cuartel  general*  en -1 820. 

E$U  dudad  eatá<  per  todaa  parles  rodeada  de.hennesaa  'Ihmiirat. 
coa  alia»  gremÍBeae>  y  ea  medio  de>ellas  no  Daltan  peqveilee  bes- 
queriUes  qne  adornan,  loseajtos  que  his  ataravieBan*  SI  se  esti^ide; 
la  Tísla  al  N«)  se  rea  los  cerros  de  Pinrto*Cabello ;  en  parte  llenes 
de  gnmínaaa  y  en.  parte  de  espesos  bosques  y  sobre  los  coalas  se 
ele¥anJa3  Tcftas'de  Hilaria ;  abS.  si*  sedhnge  á  maforéislatteki, 
coQieai^n  losc^rres  de,  los  Agualates  y  (íaelpa  cubierlos  de  selw 
vas^  y  losd&NagoeFa  tapiaidosde«yeriMiBO0A  manebas  de  verdura ; 
miéaU*as.qoe  al  ponieüte.  laaiaidas  de^nna^serrania  pelada  se  diH-< 
gen-  bácte  CaiabofaO;  dejando  nn.  boriionte  iodelermiaado  qve 
ocalta  aquellos  campos  gloriosos.  Al  oriente ,  la  serranía  uo-enlmi  • 
la  vasta  eiSaaaion  q«e:oeBpa!«l;  hermosa  laga  qve  desde  algnaa 
peqadki  caáneneía  se  deseabreeBilodft  sa  bellesa ,  y  los  cerros  de> 
GñigOe  y  loa  dé  Magdaleno'se  ven<  asóles ,  termin«Bde  la  perspeo- 
Uva  los  de  la  Victoria  que  se  confunden  entre  el  ciclo  y  un  horl^ 
zonte oscuro.  La  posición  de  Valencia  es  bella  por  sí,  y  sobremanera 
interesante,  tanto  para^tt^asporiarsoairalos  al  mejor  puerto  habi- 
litado (del  cual  disla  solamente  8  leguas  por  v\  camino  del  cerro) 
cuanto  porsuaprosiaiacien.al  lago>,  coyas  tierras  foiriíKámas  son 
el  granero  da  taspra?  lodasde  Carabobo  y  Camas*.  Si  le  es  ntílf- 
sima  la  iamediaicidná)  estos  terrones ,  lO'  esean  mas  la  de  las  ser- 
raniasveóiias 'que  proporcionan  puntos  cvllivables^y  de  que  sabe^ 
el  cullítadODaproasebanet  Ne  salarorate  merece  Valeaeia  ser  epie- 
ciada  pQc«su  clímft<y  i8«4ecrcnoy  staeitsailísntipor  saposlclon  ee<* 
meotíalL^Todole  que  viene  del  inteiÍDr  del  peisfaira'SSP'embareade 
por  "Pnertoi^CidiellQ ,  paui  por  Valeneia*^  Casi  ledos  los  caalenes  de 
las  pionanaade  Bacinas  y  Baiifaisimeto  hasas-sacemerofo  pasan- 
do por  Valeaaia^  y  todoa  los  cantones' del. interior ^de  la  provincia 
misam  tienen  qne  pasar  pee  allL  S^s  habüíalss'  en  náiaero'de* 
4  6,0áN>ae  dedican  Al  :tnibaíOf^  y  sobre^toda^  á  la  agrimiUitra  y  al 
conwcíQv  y  so  índoaüda  ha  hooho^oaoibhur  e»  pocas<i^los  los^bos* 


—  400  — 

qaes  en  haciendas  y  los  escombros  en  grandes  y  cómodas  casas  que 
hermosean  la  ciudad. 

Valencia  tiene  un  colegio  y  Tartas  escuelas ,  y  nna  primaría  es 
la  mejor  de  la  provincia.  Hai  un  beaterío  de  carmelitas  donde  se 
ensefian  á  las  níilas  varias  materias  que  forman  su  educación ,  y 
una  escuela  destinada  esdusivamente  al  bello  sexo ,  la  cual  corres- 
ponde bien  á  las  esperanzas  de  los  padres  de  familia. 

£1  clima  de  Valencia  es  mui  sano,  el  cielo  puro  y  sereno ;  y  el 
calor  es  refrescado  por  las  brisas  que  vienen  de  la  hermosa  abra  de 
Puerto-Cabello  ó  que  pasan  por  el  valle  del  Tui  ó  por  el  pintoresco 
lago  de  Tacarígua.  En  la  misma  abra,  en  el  punto  de  águacaliente, 
hai  unas  aguas  termales  que  se  consideran  las  mas  calientes  del 
mundo.  En  el  cerro  de  Guacamaya ,  próximo  á  la  ciudad,  existe 
una  cueva  mui  singular,  y  no  pequeña,  que  es  debida  á  la  descom- 
posición de  la  cal  de  que  se  compone  el  cerro.  En  ciertos  parajes  la 
ciudad  está  infestada  de  bachacos,  hormigas  destructoras  de  la  zona 
tórrida,  que  viven  en  ámade  hai  una  tierra  gredosa  colorada,  y  sus 
escavaciones  á  vezes  son  tan  grandes,  que  parecen  conductos  sub- 
terráneos. 

# 

Valencia  es  cabezera  del  cantón  de  su  nombre  :  la  ciudad  se  di- 
vide en  dos  parroquias ,  y  hai  ademas  las  que  forman  los  pueblos 
de  Gúigúe,  Tocuyito,  Naguanagua,  S.  Diego,  Guayos,  Guacara jr 
S.  Joaquín. 

CANTÓN  DE  PUBRTO-CABELLO. 

Puerto  y  plaza  fuerte  en  otros  tiempos.  La  parte  fortificada  for- 
maba una  isla  que  cociunicaba  con  el  continente  por  un  puente 
levadizo.  A  consecuencia  de  la  revolución  del  año  de  \  855,  fueron 
demolidas  las  fortificaciones  de  la  ciudad ,  y  solo  ba  quedado  una 
batería  que  está  á  la  entrada  del  puerto  y  el  castillo  de  6.  Fer* 
nando,  ó  Libertador,  hoi  desartillado  y  sin  guarnición.  El  puerta 
es  escelente  y  debe  su  nombre  á  la  exageración  que  hicieron  de  la 
constante  tranquilidad  de  sus  aguas  y  de  su  abrígo ,  los  primeros 
que  lo  visitaron,  diciendo  que  los  buques  podían  estar  seguros  en 
él ,  anclados  con  un  cabello.  Fué  fundado  en  su  origen  por  los  tra- 
ficantes contrabandistas  que  visitaban  aquellas  costas,  los  cuales  por 
convei^rles  hacer  clandestinamente  sus  desembarques,  evitaban  lo^ 
puertos  nms  frecuentados^  y  eligieron  por  punto  de  sus  operaciones 


—  40Í   — 

el  sitio  en  que  actnaiineiite  se  baila  la  ciudad.  En  aqoeHos  tiempos 
Borbnrata  era  el  puerto  de  Venezuela  y  habla  allí  una  población 
cuando  en  Poerto*Cabello  solo  existían  unas  chozas  de  miserables 
pescadores;  en  el  dia  es  viceversa.  Este  puerto  es  el  mejor  de  estas 
costas,  si  se  esceptúa  el  desierto  de  Mochima.  La  bahía  es  ancha  y 
hermosa,  cómoda  y  segura ;  puede  dar  anclaje  á  toda  una  armada ; 
está  defendida  contra  todos  los  vientos.;  la  tierra  que  la  rodea  al 
S.,  al  E  y  al  O.  está  tan  felizmente  dispuesta  por  la  naturaleza,  que 
nada  siente  de  la  impetuosidad  del  viento  del  N.  £.  tan  común  en 
aquel  mar.  Las  agitaciones  que  continuamente  prevalecen  con 
mayor  ó  menor  violencia  en  los  mares  del  trópico ,  ni  siquiera  la 
tocan,  y  antes  se  diría  que  era  una  laguna  que  un  puerto.  Las  ondas 
nunca  perturban  la  tranquilidad  de  su  rada.  El  anclaje  ,  que  nada 
debe  al  arte,  es  tan  cómodo,  que  los  navios  mas  grandes  pueden  ir 
junto  al  muelle  y  cargar  ó  descargar  sin  ayuda  de  barcos.  Puerto- 
Cabello  es  el  primer  lugar  que  se  ha  dedicado  á  ornatos  públicos 
y  de  utilidad ;  tiene  un  hermoso  muelle  y  una  plaza  pintoresca 
frente  al  puerto.  La  ciudad  presenta  del  lado  del  mar  un  aspecto 
risueño  y  agradable  :  Montañas  cubiertas  de  vegetación  y  coronadas 
por  las  Tetas  de  Hilaria  forman  el  fondo  de  la  pintura.  Cerca  de 
la  costa  todo  es  estéril ,  blanco  y  sumamente  iluminado,  mientras 
que  el  parapeto  de  montañas  está  revestido  de  árboles  de  espeso 
follaje  que  estienden  su  frondosidad  hasta  la  tierra  morena  y  pe- 
ñascosa. 

Un  acueducto  de  5.000  varas  de  largo  conduce  á  la  ciudad  las 
aguas  del  río  S.  Esteban.  Antiguamente  Puerto-Cabello  estaba  di- 
vidido en  dos  partes ;  la  interior  resguardada  por  una  muralla  ar- 
tillada, y  la  esterior  abierta ;  pero  en  el^ia  forma  una  sola  y  va 
progresando  cada  vez  mas.  Este  puerto  es  el  depósito  de  las.  pro- 
vincias de  Carabobo,  Barquisimeto  y  parte  de  la  de  Barinas. 

£1  clima  de  Puerto-Cabello  es  menos  cálido  que  el  de  la  Guaira. 
£1  viento  en  aquel  punto  es  mas  fuerte  que  en  este ,  mas  frecuente 
y  mas  uniforme.  Las  casas  no  están  fabricadas  sobre  rocas  qne  ab* 
sorben  el  calor  del  sol  durante  el  dia  y  lo  despiden  durante  la  no- 
che.  El  aire  circula  con  mayor  facilidad  entre  la  costa  y  las  mon- 
tañas de  Hilaria.  Dos  cosas  son,  sin  embargo,  necesarias  en  Pn^to- 
Cabello ;  una  el  mantener  un  buen  fondo  á  su  hermoso  puerto , 
procurando  que  no  se  llene  de  tierra  ni  de  arenas  acareadas  por 
las  aguas  que  descienden  de  los  cerros ,  y  la  otra  impedir  que  los 

P.  QBO«.  M 


laanglw^^-csláaá  bMteir«ii(t>  M  Begoeü  i  émmiít  mmwmmpe^ 
lUeotos^  ^e  tegift  perder  ia  Étfaibrídad  de  ^|m  f om  «qnel  fwoMtu 

wmoiesáeisaim^^fvt  Im  agMs,  ó  Meas  per  ios  ardoiea  «tel  ^ » 
produoeB  eaiaMiickmea  que  {Medéo  áat  ealmiteras  rntermileiitos,  y 
así  misaie  puedea  originarlas  aqaeUos  terreóos  ftte  ^nedaR^ne* 
gldos  eotre  Poerte-Cabello  y  Berborala.  Hai  nigoaas  sattsas  «enea 
éa  Paorto-Oabelle ,  q«e  se  beñefídaa  anualmeBle ,  datido  unía  sal 
4e  eopwmi  ma\  blaaca^ 

Las  paiVoqAías  de  este  oantea  seo ,  Pttsrto>-€abdto,  fiimgtusa>. 
liorea ,  Berboraia  y  PatueoMb 

La  vUla  da  Qco&Qare  está  situada  es  un  valle  fertilbimo  y  frott^ 
doso,  formado  por  ei  rio  de  sa  iiMQbre,  ea  cayas  F<f  as  está  platt^ 
luda  la  pobkNHon.  Una  tieita  llaaa  y  líea  se  estiende  cablerta  de 
vegetadon  hacia  la  orilla  del  mar,  coytis  playas  distaii  solo  dio^ 
miilas.  AlU  está  el  peerto  IJiamado  de  Ocamare ,  que  es  na  esoe* 
lenle  fondeadero,  memorable  porque  efi  1S46  hizo  en  él  su  se-^ 
ganob  desembarco  el  general  Bolívar ;  con  un  pniíado  de  vafien- 
In  para  liberiar  su  patria.  Por  el  poniente  uAos  cerros  eleyados  y 
adornados  de  un  espeso  follaje  de  agigantados  árboles ,  casi  se^mieír 
á  los  del  valle,  cuya  estrechura  y  tortuosidad  no  presentan  vítñ^ 
gnna  bella  perspectiva  al  S.  j  sino  una  alta  y  enorme  masa  de  ne- 
gra vegelacton ;  mientras  que  al  oriente  les  contrafuertes  déla  ser>- 
Kmía  se  avanzan  para  dar  una  vista  algo  esteñdlda  pero  mtii  trtf!'- 
larme  :  por  allí  se  encn^tran  valles  fera^sescon  hermosas  liaciea- 
te  que  todas  tienen  la  ventaja  de  poder  embarcad  sus  frutos  á  la 
orilla  del  mar,  dd  cual  distan  poeo. 

.  El  temperamento  es  cáiido  pero  aftgo  refrescado  por  los  vienfos 
M  mar.  En  dertas  apocas  suele  haber  al^funas  calenturas  debidas 
á  los  tirrrmios  eenagósois  y  á  los  bosques  que  Hcfnei  barloveuto, 
peto  eso 'AO  >eB  Ti^ueníte. 

Las  parroquias  son ,  <Oeumate ,  Cata  -,  <%fegiia  y  Td^Bitíto. 


-*  4110 


cAHVeN  DB  mh^oirA. 


ía oíuéad  de  NívgMy  ó  Niraa  delCoNido,  «b  ai«i  aiiti|g«a.  tel 
Mbitanles,  hauy^r  forte  goite de oelor,  oibta?ieiioB del  reí ^ li< 
Udd  de^e^  y  /aa/e»  ffOiátl^s.  Fu4  fondada  en  f  SKIS  sobre  M 
feüqcRiB  die  la  cisded  de  las  f^itoas  y  abanéraada  per  «I  capíMí 
iüego  f  anida.  Bxisftw  n«i  poco  tiempo  y  sm  taariadoves  m  rMh- 
giqpon  «a  Barqoimieto ,  á  oaosa  de  la  mvwíob  de  loa  iodiüs  ii»« 
áetes.  DesfMies  volvió  á  pd>tairki  el  capitán  Diega  Rdmero  co«  coli^i 
nos  de^ la  raivcbería  de  tas  nuias,  eíkAh^^  «n  téeamio  del  gobn»* 
Mdor  Collado,  trastriéndola  al  r¡0  Nii^gva  con  el  wfflkbna  de  N«eirtf 
}ei'ez ,  que  tampoco  subsisiéó  por  las  hoatíttdadesde  tos  indígenaSi 
SEDO  basta  el  2^  de  ^  568.  Eq  A  5^  de  orden  del  goberoador  D. 
Pedro  POAce  de  h^úskj  la  voütM  á  leedificar  Jttan  de  Mota :  espera 
Baent^  esta  los  mismos  contratieoifios^  hasta  cp]e<»  -1628;  con  el 
general  esterminio  de  los  Jiraharas,  la  pobló  el  gobernador  D.  Juan 
de  Meuéses  y  Padilla  en  la  parte  donde  hoi  permanece  con  el  nom- 
bre de  Nuestra  Señora  de  la  Victoria  del  prado  de  Talavera  :  su 
posidon  es  en^on  llano  alto  y  pÓFOtovesco ,  circiindado  de  cerros , 
en  ei  cual  serpentea  'd  río  de  su  Bombre. 

Las  cimas  del  cerro  de  Santa-María  y  ei  picacho  de  Nírgaa,  íor*- 
man  una  barrera  peñascosa  y  de  difieil  aoceso,  mientras  que  la  vista 
de  otros  cerros  que  se  ven  en  todas  diceeciow»  dan  al  paisaje  tiii 
a^>epto  rísaeio. 

So  cuma  es  fresco  y  saludable,  y  los  calores  de  la  zona  tórrida  so» 
áiiigados  per  los  vieolos  que  desdenwton  de  las  serraníae  cffounwBi- 
oins.  Cuando  lasisekas  y  vtilesiqve  hüitapaten  yermos  ,eal¿n  des«^ 
mentados  y  «ubiertos  de  poblaciones  y  fafaeieodas ,  «atónees  esta 
viUa  podcá  florecer,  y  su  posíeieii  lerá  tanto  mas  interesante, 
coai^  qse  estará «B  el  camlbo^ae dobeür  de  los  vaUos  deS.  Pa^ 
Mpe  áilos  dé  WMenela. 

Las  pamiqtiiaB  de  oie  anüott^son',  Mi^gsa ,  ItaiMila ,  Cabria  y' 
Xaría. 

UviUadeMoalalbaAeatá  sitoada  alfJ¿de^«i)«m)e,.#o  w^ 
Uftiiora  á  la  oriJla  del  rio  de  su  nombre.  Por  mía  firisM 


—  404  — 

le  sinre  de  barrera  para  que  no  lleguen  á  este  delicioso  Talle  los 
Tientos  que  han  pasado  sobre  las  montadas  pestíferas  de  la  costa^ 
mientras  que  al  frente,  en  lejana  perspectiva ,  se  Ten  los  cerros  pe- 
lados que  se  estienden  en  dirección  á  S.  Carlos,  y  á  los  costados 
mas  próximos  se  elevan  las  cimas  del  Talle  de  Gtrgna  y  mas  lejanas 
las  del  de  Nirgua.  £1  buen  temperamento  de  Montalban  y  sus  fe- 
razes  terrenos  le  bacen  un  punto  interesaote ;  y  si  bien  ahora  tiene 
pocas  tierras  cultÍTadas ,  le  quedan  inmensas  seWas  que  se  pierden 
sobre  el  mar  y  que  una  Tez  desmontadas  harán  cesar  las  calenturas 
tercianas  que  allí  suelen  dar,  por  los  derrames  de  los  rios  y  por  una 
TÍgorosa  Tegelacion  que  impide  que  los  rayos  del  sol  sequeo  los  ter- 
renos pantanosos.  Guando  aquella  tierra  TÍrgen  y  fértil ,  en  la  que 
se  puede  decir  que  casi  prospera  sin  trabajo  el  café ,  se  halle  sem* 
brada  dé  plaotaciones  y  haciendas ,  Montalban  será  entonces  una 
ciudad  populosa,  donde  se  gozará  de  un  clima  dulce  y  saludable. 
Las  parroquias  de  este  cantón  son,  Montalban,  Ganuao  y  Drama. 

CANTÓN   DE  SAN   CÁKLOS. 

La  ciudad  de  S.  Garlos  se  encuentra  cerca  del  rio^de  su  nombre, 
en  una  hermosa  sabana  con  colinas  cercanas  que  le  sirTen  de  ador- 
no y  son  las  que  dan  principio  á  la  famosa  barrera  de  los  llanos, 
llamada  galera,  que  se  estiende  paralela  á  la  cordillera  del  inte- 
rior, costeando  las  sabanas  de  Garabobo  y  de  Caracas  hasta  perderse 
sobre  el  Guárico  cerca  de  Gamatagua.  En  lejana  perspectiTa  están 
los  cerros  que  forman  la  serranía  de  Nirgua  y  los  que  se  dirigen  á 
formar  la  del  Pao,  llamada  serranía  del  interior.  S.  Garlos  está  si- 
tuado en  el  desembocadopo  del  camino  de  la  serranía  y  en  el  que 
conduce  al  occidente  de  la  república  y  á  las  sabanas  de  la  provin- 
cia de  Barínas  y  las  del  mismo  cantón,  que  le  da  una  grande  im*- 
portancia  para  la  cria  y  él  comercio.  Los  edificios  de  esta  ciudad, 
las  iglesias  que  tiene,  indican  la  riqueza  de  sus  antiguos  habitantes : 
en  el  dia  se  está  levantando  de  los  males  que  le  causó  la  guerra  de 
la  independencia ,  en  la  caal  sufrió  varios  sitios  y  fué  uno  de  los 
puntos  mas  frecuentados  por  los  ejércitos  beligerantes.  En  sus  cer- 
canías hai  buenas  tierras  de  labor,  y  tienen  fama  sus  naranjas  dul- 
ces que  abundan  sobre  manera ,  y  de  ellas  se  hace  un  grandísimo 
comercio.  El  cHma es  cálido  y  sano;  pero  á  vezes  está  sujeto  á  fie- 
bres provenientes  de  varías  lagunas  que  tiene  en  sus  inmediaciones. 


—  405  — 

y  de  los  derrames  del  rio :  estas  forman  barrizales,  de  donde  sue- 
len elevarse  miasmas  que  los  vientos  llevan  sobre  esta  interesante 
ciudad  j  la  cual  es  grande ,  hermosa  y  bien  dispuesta. 

Las  parroquias  de  este  cantón  son  S.  Carlos ,  Tinaco,  Tinaquillo, 
S.  José,  CaramacatC;  Cojéáes  y  Lagunitas. 

CANTÓN   D£L   PAO. 

La  villa  de  S.  Juan  Bautista  del  Pao  está  en  mía  sabana  alta,  cir- 
cundada de  cerritos  de  paja ,  y  cerca  del  rio  de  su  nombre.  Al  N. 
forma  perspectiva  la  serranía  que  conduce  á  Valencia  y  á  las  'fér- 
tiles orillas  de  su  lago ;  al  S.  la  galera  peñascosa  que  sirve  de  bar- 
rera á  las  bellas  sabanas  de  este  cantón ;  al  poniente  los  cerros  no 
le  dejan  libre  la  vista  de  las  llanuras  que  se  estienden  entre  la  ga- 
lera y  el  cerro  de  Tiramuto;  pero  al  oriente  una  ancha  abra  entre 
la  misma  galera  y  la  serranía ,  se  pierde  én  lejana  vista  hacia  los 
cerros  que  se  dirigen  sobre  la  villa  de  Cura,  y  se  elevan  considera- 
blemente en  el  cerro  de  la  Platilla.  La  situación  de  esta  villa  á  la 
entrada  del  llano,  en  el  camino  de  Valencia  y  en  el  que  va  al  Baúl, 
la  hace  importante ,  sobre  todo  á  causa  de  la  cria  de  ganados ;  y  su 
rio  navegable  para  pequeñas  embarcaciones,  aumenta  las  ventajas 
de  su  posición.  Su  clima  es  sano  y  mui  cálido ;  pero  es  refrescado 
por  los  vientos  que  casi  siempre  dominan. 

Las  parroquias  son  solamente  dos :  la  del  Pao  y  la  del  Baúl. 


TAQLA  GOMPARATIYA  de  las  po»c¡0nes,  astrónonúeas  de.  las'  cabezeras  de 
sus  tierras,  terrenos  baldíos,  población  absoluta,  relativa,  hoiQbres  de  amsOf 
que  se  cultivan  para  la  esportacion. 


NOMBBB 

da 

LIS  CABEZAS 
DB  CkNTON. 


BM^ 


.1     I.    I      íl   I    II 


rtn 


AUura 
sobre 


pitammmmf^ 


POSIGIOir  ASVIOHÓMICA. 


mm^immm'm 


w  alvUCln  ••••••••  •• 


Fveslo-CataBlla.  *. 


Ocamare 


HligUa*  ••■•••■•••• 


ÜMalbaB. 


San,  Garlos.... «... 


Pao 


Islai  da  Baarlp- Ca- 
bello  


Latitad 
norte. 


♦Oo.  W,  ifí 

¥i.  99.  M). 

10.  27.     », 

II.  59.  10. 


Longitud 

E.  ÚO. 

del  tBffidiaao 

de  Caracas. 


4*.  7,  80.  O. 

Oo.  tto.  20.  a 

f.  36.50.  O. 
I«..98.0.  O. 


9.  30.  90.  1».2I.51.  O. 


9.  ».  50. 


i)».  88.60.0. 


el  nivel 

del  mar 

en  Taras. 


■ü"9i"*" 


505 


25 

920 
800 
242 
249 


» 


Tempe- 
ratura 
media 

del  ter- 
mómetro 
oenti» 
lirado. 


25.  89. 
29.  ftl. 
25.  28. 
2f.  67. 
21,.  05. 
28.  34. 
28.  S4. 


CALIDAD  Bfe  LOS  TBBmiNOS 
DB  QUE  SB  COMPOHBN  L03 
CANT0MS8  BK  L.  G. 


o 
a 


« 

Q 


o 


«6 


4 


6 


8 


SS 


1       80 


» 


» 


» 


j> 


» 


95 
tSI      » 


» 


» 


Total 242 

I 


e^ 

55 

« 
2 


» 


306 


2V. 


V. 


42 


•  o 


17 


» 


» 


» 


B 


17 


TI  O 


88 

78 

157 
970 


679 


íb 


mtones,  sa  altura  sobre  el  nivel  del  mar,  su  temperatura  media,  calidad  de 
Idavos  9  distancia  á  la  capital  de  la  proTÍncia  j  de  la  república,  y  los  frutos 


is 


P(»|ilÍC10«  •  MB  Ut»  aAMCOllW* 


9^ 

15 
90 
90 


88 


Toul 

población 
en  18S9. 


40.325 


VoMkíoii 

rdátlira 

pot  légat 

caadracla. 


'Hombres  ' 

para 
U»  arma». 


Mámero 

total 

4e 

esclavos. 


m 


481 


6.189  t03 


i.  847 

6.839 

8.8S8 

SI.8S9 

18.414 


96.977 


87 

186 
80 


3.800 


800 


100 


700 


600 


t<800 


1»300 


.•w— -^» 


146 


9S¡m¡fm9S 


i^mr^^ 


1.969 

4t4 

.886 

•50 
967 


6.800 


•4.460 

MaáBBSssm 


l>l9ȇllOM9 

PB   I4li   CA.JI70; 


4  la  capital 
•del* 


proviDcui. 


A.  la  capital 
i-epóblica. 


8   V. 

í  Vi 

17  V* 
4& 


29  V. 

55  V* 
49 

38  Vi 

«  V* 

**  Vé 


JTRUTOS 

QDB  aacooaír 

para 

I»4.1Mr0ftTAa0flb 


Gafé,  cacao,  añiL  taba- 
€»,caiUfc7algotfon. 

Cacao,  café  y  cafia. 


€acio  y  jcatt. 


Cacao,  café  7  ca0a.. 
.Cacao,  caCé  y  calU. 


IPocoeaetojeafé. 


Caña. 


—  408  — 


TABLA  DS  LA  ALTÜBA  DB  LOS  CBBBOS  DE  LA  PBOYinCIA. 


Nombres.         Varas.       Sarranlas. 

Tacuragoa ifOO Nirgoa. 

Madera..  ..¡ ins id. 

Picacho. 1990 id. 

SanU  MaHa f896. M. 

Temerla 4908 id. 

Cbirgna. 1094. id. 

Hilaría iMO Cosía. 

Paerlo-Cabello....  1595 id. 

Palanemo 1630. id. 


Nombres.  Taras. 

Taríamo 1490. 

Ocumare 1890. 

Tiramulo 1900. 

Queipa 1936. 


SerroMiaM» 

....  Costa. 

id. 

..Interior. 
id. 


AzuldeGOigne....  1490 id. 

Palmar 4S50 id. 

.Toma 800 id. 

'Galera  del  Pao 800 Llano. 

¡Galera  del  Banl....    800 id. 


TABLA  DE  LOS  BIOS  DB  4®  ÓBDEII  DE  LA  PB0Y1IVGLA. 


Nombres.      Serranías.      Desagüe. 

Coyagna delacosla...  álaoiar. 

Cau id fd. 


id. 

Ocumare id. 

Turiamo id. 

Pataoamo id. 

Borborata id. 

8.  Esteban id. 

Goaiguaza id. 

Agua-caliente id. 


id. 
id. 
id. 
id. 
id. 
id. 
id. 


Sancbon delfirgua id* 

Morón id id. 

Alpargatoo id id. 

Capa id id. 

NariDjo id id. 

Canuao id id. 

Urama id id. 

Cocote id id. 

Temerla id id. 

CaouaTilo id id. 

Cabria id id. 

Taría id id. 

nirgoa id ^Orinoco. 

Nuare id id. 

8.  Pedro id id. 

Tacuragua id id. 

Burd..... id id. 

8.  José del  inlerior id. 

Mapuej id id. 

Camoruco. id id. 

Tinaco deNirgua id. 

Bejuma. id id. 

Tamanaco id id. 

Tinapú del  Interior id. 

Aguirre id id, 

Macapo id id. 

Oruje id id. 


Nombres.       Serranías.      Desagüe. 

8.  Cirios de  Nirgoa. .  al  Orinoco. 

Aguirre id id. 

Montero id id, 

Argoaoo id id. 

MonUlban id id. 

Onoto id id. 

Tigre Id id. 

Tirgua id ...  id. 

Taya id id. 

Tacoao id id. 

GhirguaóPao id id. 

Paito del  interior. id. 

Guataparo...  deNirgua id. 

Tinaquillo id id. 

Orupe id id. 

Para del  Interior id. 

AragOita.. id id. 

Naranjos id id. 

Pacaragua. id id. 

Prepo id id. 

Caimán id id. 

Gaimanello id •  id. 

Cbirgua id id. 

Valencia de  la  costa. ...  al  lago  de 

Valencia. 

Cúpira id id. 

8.  Diego  ó  Guayos,  id id. 

Vigirima id Id. 

Turiama  6  Guacara,  id id. 

S.  Joaquín id id. 

Cura id id. 

Mariara id id. 

Cano del  inlerior id. 

Palmar id id. 

Calcara •  id Id. 

Güigüe id id. 


—  409  —      . 


PROVINCIA  DE  BARQÜISIMETO. 


SITUACIÓN  ASTRORÓMICA,   ESTBNSION  X  POBLACIÓN. 

Esta  proYincia  se  encuentra  de  los  8®  47^  á  los  -1 0^  46  de  latitud 
boreal,  y  en  la  longitud  de  A"*  25^  á  5<^  2b\  al  O.  del  meridiano 
de  Caracas.  Su  figura  representa  un  triángulo  formado  por  lineas 
curvas  :  en  ellas  encierra  toda  especie  de  terrenos,  cálido,  templado 
ó  frío.  Valles  ferazes  útiles  al  cultiyo ,  montanas  espesas  y  desiertas^ 
cerros  pelados  y  áridos,  llanuras  estériles  ó  con  pocos  pastos ;  teiv 
renos  todos  que  sirven  para  la  agricultura,  para  (a  cría  de  ganados^ 
particularmente  del  cabruno  que  abunda  en  esta  provincia ,  a^ 
como  para  la  de  caballos  muías  y  asn<^.  El  máximan  de  anchu- 
ra de  esta  provincia  es  de  40  leguas  de  E.  á  O  ,  y  otras  tantas  de 
largo  de  N.  á  S.  Las  leguas  cuadradas  de  superficie,  son  782.  0/(^, 
de  las  cuales  cerca  de  449  son  baldías.  La  población  total  es  de 
442.755  habitantes,  que  están  en  razón  de  444  por  cada  legua 
cuadrada. 

LÍMII^ES  Y  CONFINES. 

• 

Confina  esta  provincia  con  otras  cinco,  que  son,  Carabobo,  Co* 
ro ,  Maraeaibo ,  Trujillo  y  Barínas.  En  el  paso  de  Cojédes ,  en  el 
camino  que  va  para  S.  Carlos,  empieza  el  límite  del  E  (ya  descrito 
eñ  la  provincia  de  Carabobo),  el  cual  va  á^rminar  en  la  boca  del 
l^racui.  Aquí  empieza  la  frontera  con  la  de  Coro ,  por  una  línea 
indetermmada  que  atraviesa  una  nootaña  desierta  y  anegadiza,  y 
va  á  buscar  el  rio  Aroa  cerca  del  desembocadero  de  la  quebrada 
Minapano  :  toma  aquel  rio  arriba  hasta  el  Tablero  :  allí  tuerce  al 
N.  á  buscar  las  cumbres  de  los  cerros  de  Salsipuedes  y  Agoalinda  : 
vuelve  al  £.  siguiendo  los  cerros  desiertos  de  Aguaclara,  S.  Feman- 
do y  Guaca ,  que  separan  las  aguas  que  van  al  Tocuyo  y  al  Aroa 
hasta  el  cerro  de  Curarigua ;  y  en  este  lugar  vuelve  al  N.  por  la 
quebrada  ida.  Cararapa,  deqpues  el  rio  Tocuyo,  agua^  arriba  hasta 
Camayatá.  Aquí  sirve  de  raya  el  cerro  de  Sigoa  aguas  vwtíentfes^  y 
encontrada  la  quebrada  Aguanegra,va  j^v  «Ua  hasta  tomar  la  cuift* 


bre  de  los  cerros  del  Buco  ,  Carrizal,  Danta ,  Quiqui ,  para  llegar  i 
las  cabezeras  del4iíf>. tasagme/MHri^O^ qañ'^  ie^^  a  O.  Al  llegar  á 
este  punto  ,  vuelve  la  frontera  al  S.  S.  £.  por  los  cerros  de  las  sa- 
banas de  Taratarare  que  dan  oogen  al  rio  Dichiva ,  el  cual  sirve  de 
linea  divisoria  hasta  doade  cae  la  quebrada  del  Degredo.  Sigue 
entóncet.te.«ftfa  por  tM^euM^e^ di»Hb«aifa>el i<iMlitt4ito  Casire 
basta  encontrar  el  rio  Sicare  :  en  este  panto  termina  el  límite  con 
k  provhicia  de  Coro  'y  por  un  corto  trecho  confina  con  Ititie  Mará- 
^eaibo  por  tes  cumbres  desiertas  que  dan  origen  á  tos  rios  Sicare  y 
^Santa  Bárbora.  En  las  «abejeras  deestetftrmo^  empieza  ei  lindero 
<ee»  la  provlnela  ée  Tnyjllfe,  por  toéas  las-  cumbres  délos  cerros 
ifm  ^íden  las  aguas  ff«e  vaib'á  los  IlUoes  ^1"  Cenfao  y  de  Mt)nai , 
iMttta  «lemtpftp  Y^s  e«rros  ée  Parajá^  fw  cuyas  ^eunibfes  se  H^a  á 
Ja  q«e4^a^  de  Villágafi,  y  se  sigue  esta  aguas  abajo ,  abaste  encon* 
HüM  te  de  A^a^Hispo,  y  por  esta  se  catfiinéa  la  ^ea  tomande  desi- 
-j^oes  la  quefe^a^  de  ^tes  MMiJbs  ha^-  su  origen.  E^  este  punte 
'^FU#^el  liudere  al  $,  aguas  ^evi^tes^  á  temar  el  páramo  ile  tea 
IWiisas ,  el  <M  Jábew  y  el  de€tf¥ÍBAbú ;  <ieaH4  á  Sagúes  y  al  páf «ne 
itt  les  Reaaties  :  aquí  lerfiataa  €en  la  previueia  de  Tropte  y  sigtié 
%k^  laiúiaa.  la  niyur  toüift  iaS'OWHifcrea  de  un  rameáel  párauíd 
en  dirección  al  E.  N.  E.,  costeando  la  quebrada  de  Gualques^qué 
va  al  río  Guanaro ;  atraviesa  este,  y  casi  en  la  misma  dirección,  el 
límite  va  por  las  cumbjse&^de  ujios  ceim^  ditsiertos ,  á  encontrar  el 
rio  Portuguesa,  que  pasa  siguiendo  la  misma  linea  hasta  el  cerro 
^pftB  de  Qi^ggm  at  -Maéi.  inilá  «ügiie  §0r  k  quAbraib  Hmmi»  la 
Ra(^  9fW»  abaj^  iMSia  «I  jtíp  llevador.  Pam  eati^  rio  pai^aubir.  m 
k^.4mi^fmk  AbIM. Ji.  4).  i  ift-^iMbí»  A»;b jietmw%i  yí^er  aala, 
K0Ha»:^istteAftefc,.  4t9aif  Ü  íídA^im  ba3t&  c««68íiie  te  loíiáiinmott  4a 
tairioft'ilieanfad'ldSaaé.  iSa.«stt  panAei^ehe  áílüisaffir  ias^JOM»* 
^r|9s  éi  dMde  umá»  dosisifiii.éiieaiy  Sanare  :  j» >  ¿Mgs  fwr  irta 
llMta*'iH9Soiitoir fCÉtMifo  íMi^uaAa  <qne>aÉatiúaÉi Un  «MHtefi&del 
UtNri^  e^iel«>a.tt!.tf  BoíMh  /eutíd  ^asejéf&icaaífto  «gMianill 

•m  pKdb  éioÍDsqaipif  «ate  poíáBémm^liímmtmmmiAÉmít^imi^ 
ffmifm^  ^m  átelurtÉnte  tnygatiwiw  ^#o^«»tefcjyiÉMii  iteiliila 


kk  muñm^m  de  laa  piodaeilloMB  ú^h^  jHro^faohi ,  llwffcüü 
Mharttda»  á  taei{tgbCalMllo ,  7  tecMÉidet  por  1»  qéhimi  tía^Iip 

£1  fama»  4»  Gahiibb&  i|ae  se  «bw  i  la  attiía  éR  4y2M  tahis 
sobre  <ei  niirel  ád  mar,  harne  pwle  ée>  la  gran  cadena  de  los  AodeB^ 
fte  dasdePtinploiift  desprendeawkiamo  qme  wneilwnuir ki 
altoBairaAkde  Méeide.  Es  el  pnatemeB  eleíadode  est^proviiiciti. 
y  en  él  se  origina  el  TocwfO ,  no  él  aws  ||v&MÍe<*»efl^teTrilovlo* 
£1  páramo  se  divide  en  dos  ramos  paralelos  cerca  de  Guaitó  :  el 
mas  elevado  corre  al  N.,  formando  sucesivamente  los  páramos  del 
Jabón  y  de  las  Rosas ,  y  baja  ca«i  de  repente  la  mitad  de  su  altura 
cerca  de  Agjoaobispo ,  de  donde  aj:;roja  ua  ramal  sobre  Garadit'  T 
sigue  bácia  Barbacoa  :  sus  mas  altos  picos  se  elevan  2;649>  itaca^ 
Qerca  del  sitio  de  HatoarrU^a ,  punle  en  que  se  abre  en  dos  rami'^ 
ficaciones ,  una  fue  se  pierde  cerca  de  Gan)ra  >  y  la  otra  cercai4i9f 
^enales^  formando  el  valle  feraz  de  Cvcarigua  del  LeaLQ  seguodo 
ta  disxniAnyendo  de  altura ,  ¿  medida  q«e  se  aleja  d^l  punJ^  Al« 
partida,  en  Guaitó,  y  frente  i  I0&  Htmwcaro^,  di^ja  su  paraMiwiia) 
coa  e]  4>tx:o  ramal  y  se  dirige  al  N.  £.,.  formando  811&  ba^es  mMi^' 
iaie&lpft  vaUes  de  Cbabas^uea,  Portu^esa  ^tAcaipgtia  y  Bi^lai^^ 
miéntjras  que  los.  occidentales  forman  el  país  montateso  que  ef^ 
^ntre  el  Tocuyo  >  el  Guéxm  y  el  Sanare  y  el  fijabiffo ,  en^ee9i\aA4<l' 
también  el  valle  del  ToQq¡;o ,  lajianada  de  Quábor^  el  vallio  de  Saih- 
^i^ímieto ,.  y  rebajándoae  ^n  la.abca  de  Sarare ,  pceoenÉa  en  ^ntmi 
iimiedíaejuMoes.  y  ea  la  montana  del  AJtar  el  #onto  de  inteEseeeJMh 
del  sistema  de  los  Andes  con  el  de  la  cordillera  de  Venevtiela).  Sif<*> 
IKce.q9^  eot  ^Btopn)vi»cia.9e  4¡»aa  enGontca4í>iloft4oa6Í6teii>a9'de 
^U)ntofiasyealaa,4wca«^a9•d4'4CH^oh«spQ,,<;waQbe^Xjl^^  99f^ 
qnísínieiKX^  Caror^  y  Puaea.^  ventea  ua  aom^Mo  estado  4#  traiH 
torno  I9&  eap^aa  aatratífieadaa.;  asi  es  qi»e  e«  esita^peoYínm  es  díK^ 
cil  seguir  las  líneas  de  las  cordilleras ,  pues  en  todas  ellas  bai^nüit 
especie  de  confusión.  La  serranía  de  S.  Felipe  está  como  aislada  | 
y  con  la  de  Nirgua  encierra,  yy>¿WiiJo  así,  el  valle  mas  fértil  de 
este  territorio ;  pero  un  ramo  que  ta  hacia  Duaca,  á  vezes  ínter- 

deM<c«Éí^ívtiior  flomteiM  «ss^  '(Mwra«ii(>pleM^ipeco^l0¥édi^^ 


—  4«  — 

coüctaymi  sobre  el  Tocuto,  eerca  de  la  quebrada  Carapa.  Uaeose 
aquí  con  los  cerros  que  Tienen  de  las  Tucacas,  paralelos  íl  la  costa, 
como  haciendo  parte  del  sistema  de  la  serrtmKÍa  de  Coro  y  que  pare- 
ce pertenecía  á  un  eslabón  que  debió  existir  en  tiempos  remotos , 
paralelo  al  de  la  costa  de  Caracas,  ó  que  bien  puede  aun  existir  en 
un  estado  submarino. 

De  esta  serranía  de  Coro,  que  se  estlende  báeia  las  altas  sabanas 
de  Taratarare,  sale  un  ramo  en  dirección  á  Caracbe,  qué  encierra 
los  llanosf  poco  fértiles  de  Carera,  y  siguiendo  por  los  cerros  de 
Parrajá ,  parece  que  se  confunde  allí  con  el  sistema  de  loe  Andes , 
el  cual  avanza  también  un  ramal  hacía  Carache. 


RÍOS. 

Tres  direcciones  llevan  las  aguas  de  esta  provincia ;  la  mayor 
parte  de  ellas  van  al  mar  de  las  Anlillas ,  conducidas  por  25  ríos , 
el  principal  de  los  cuales  es  el  Yaracui,  navegable  y  útil  para  tras- 
portar los  productos  de  los  fértiles  valles  de  S.  Felipe. 

Mayor  que  el  Yaracui  es  el  rio  Tocuyo;  pero  aunque  recorre  un 
grande  espacio  en  este  pais,  no  empieza  á  ser  navegable  sino  cuan- 
do confina  con  la  provincia  de  Coro,  y  entonces  ofrece  el  mas  largo 
curso  de  navegación,  de  manera  que  aquí  debemos  calcularlo  como 
perteneciente  á  ella.  Hacia  los  llanos  va  la  segunda  dirección  de  las 
aguas ,  llevadas  por  -1 4  rios  al  de  la  Portuguesa ,  el  cual  pertenece 
á  los  de  segundo  orden  de  la  república.  Nace  en  este  territorio,  pero 
es  insignificante  en  él ,  y  su  descripción  debe  colocarse  en  la  pro-* 
yincia  de  Barínas.  La  tercera  dirección  de  las  aguas,  que  es  la  mas 
pequeña  ,'va  hécta  claran  lago  de  Maracaibo  conducida  por  el  ria- 
chuelo Sicare. 

£1  número  total  de  los  rios  es  de  58 ,  sin  considerar  multitud 
de  quebradas  ó  riachuelos,  que  en  tiempo  de  verano  están  casi  to- 
dos secos ,  y  en  invierno  foroian  torrentes  que  pronto  bajan  y  se 
secan ;  así  es  que  en  muchos  de  ellos  sirven  sus  cauces  de  ca- 
mino. 

I.A6CNAS» 

.  La  diénaga  de  Cabra,  que  está  en  un  terreno  bajo,  entre  Carera 
y.Rprbaieoas^  es  la  única  que  m^ereoe alguna menctcm  en  eslapro-^ 


—  4^5  — 

• 

YiQcia,  De  los  cerros  que  están  al  pouieiíte  de  Barbacoas ,  sale  un 
rio  que  viene  á  formar  esta  ciénega^  la  cual  está  adornada  de  vege- 
tación en  sus  orillas ;  pero  el  calor  sofocante  de  este  territorio,  las 
plantas  herbáceas  que  cubren  las  aguas  y  los  árboles  que  están  eu 
sus  orillas  y  forman  un  conjunto  de  exhalaciones  malignas,  que 
provienen  de  la  descomposición  de  las  materias  vegetales  ;  por  esto 
están  desiertas  las  orillas  de  esta  ciénega ,  y  aun  se  teme  el  pasar 
por  sus  inmediaciones. 

CLIMA. 

£1  clima  de  esta  provincia  es  generalmente  sano ,  y  tiene  paríes 
de  un  temperamento  templado ,  en  donde  se  da  el  trigo  y  las  pa- 
pas en  abundancia.  Es  la  parte  montañosa  del  país ,  en  la  cual  se 
elevan  páramos  de  un  frió  escesivo,  que  no  están  habitados ,  y  solo 
dos  malos  caminos  los  atraviesan.  Los  lugares  bajos  son  por  lo  ge- 
neral mui  cálidos,  y  sus  tierras  ingratas,  si  se  esceptiian  las  féiftiles 
selvas  del  Yaracui ,  Aroa  y  Moroturo ,  que  por  su  gran  cantidad  de 
vegetales,  y  la  mucha  humedad  que  reina  en  ellos,  hacen  estos  lu- 
gares malsanos.  Sin  embargo ,  existen  allí  algunas  poblaciones  que 
se  aprovechan  de  la  estrema  fertilidad  del  suelo,  sin  que  para  ellas 
sean  peligrosas  las  fiebres. 

ESTACIÓN  DE  INVIERNO. 

Las  lluvias  empiezan  en  abril  y  mayo,  siendo  mas  continuas  y 
abundantes  en  junio,  julio,  y  agosto ;  en  setiembre  y  octubre  dis^ 
minuyen  sensiblemente.  En  la  parte  seca  y  estéril  de  esta  provin- 
cia, qne  es  una  grande  estension  del  cantón  de  Carura,  y  otra  pe- 
quena  de  los  de  Barquisimeto  y  Quibor ,  están  obligados  los  habi- 
tantes á  recoger  las  agaas  en  estanques  durante  el  invierno ,  para 
servirse  de  ella  en  verano.  En  la  serranía,  los  caminos  son  regula- 
res en  la  estación  lluviosa ,  y  solo  en  las  selvas  se  forman  algunos 
barriales.  La  parte  árida  prontamente  se  seca ,  pero  en  la  llana  y 
cubierta  de  bosques,  se  hacen  casi  intransitables  los  caminos. 

DIVISIÓN    TEBRITORIAL. 

La  provincia  se  divide  en  6  cantones^  con  los  nombres  de  Bar- 


«prnlMeta^  ¥«lhigu»  ^  ffMípeí  OaAtr,  Dieay»  rCammi»  q«^  ij». 
a«i  lodos  96  fMtroifwtt  y  da  msíateíM^  cm  h»  dalo»»  ^t^ 
t%>,  «ift»  etea*^  imük,  aül,  {Mimo^  f«oi,  oMawi»,  pt^^s^  ^ 
tatat^  icaáea,  ocuMs,  al^odoA,  «afta  Meo,  abei^aa,  ítíi^koi,  §»» 
hnzog^  osraotas,  aírala  ^w^  anís,  eeha4a,  «Debas  ajo^y ^eb»^ 
Naa^  variedad  de  vendaras  f  fsmimu 

£1  total^  la  poblaaíoii  de  esta  pre«inda  se  p«ede  dWidir  del 
modo  sigaiente  :  45/400  que  se  dedican  á  la  agfiesHwa,  ^409 
á  la  cría  y  25/4  00  al  comercio^  artes,  etc. 

GOXERCIO. 

Con  1t  proviiíeia  de  Coro  ^  oomereío  e»ttn  mtíifo^  «ataycndo 
Mnttidad  eoiisid«nd)le  de  sai ,  géoerosy  leaa,  y  Uef«Bá»eift  oanbÍQ 
cveros,  vb^,  papelones,  aaócar,  censertas,  hadiia,  cebollas,  ajos, 
meDestr^Sy  muías  y  bmros.  Gen  la  províada  de  Garabobo  se  baos 
ordftaríamente  en  Puerte-Cab^lo,  üerando  á  este  ponto  cacao,  calé 
y  caeros,  y  rmbíeBde  ^nero,  efectos  áe  mercerías,  quincalla  y  s«r* 
tidos  de  bodega.  Con  Caracas  se  faaee  el  •comercio  eniriando  iüH,  cor»- 
d<AMitMS  y  meaesferas ,  y  recibiendo  mercancías  secas  y  efectos  de 
bodega.  £1  tráico  oon  la  provincia  de  Barínas  se  hace  Ileivando  i 
Gaanare  harina,  sal,  papelón,  cordobanes,  ajos,  cebollas  y  algunas 
frazadas,  y  recibiendo  dinero,  cueros  y  algún  ganado  vacuno.Tambien 
se  comercia  con  las  villas  de  Araure  y  Ospino,  recibiendo  maiz  y 
menestras  en  cambio  de  ajos,  cebollas,  chinchorros ,  zapatos ,  cor- 
dobanes y  suda»  Este  comercio  se  estiende  hasla  Barínas ,  Gaana- 
fito  y  Nutrias,  á  cuyos  lagares  llevan  iodá  espede  de  obras  de  za« 
palería,  talabartería,  chinchorros,  bamaiCas,  lienzos  del  país  y 
abonos  f  eneros  estraínjeros ,  trayoodo  de  retomo  pescado ,  carne  ^ 
gattado,  queso,  sebo,  oabaUos^enül» 


CmDAl>eS   ¥   VlImhAB. 


•»■■»■ 


CANTÓN  DE  BAAQmSlMBTO. 


La  ciudad  de  Barquisimeto ,  aunque  una  de  las  mas  antiguas , 
Mn^vteo^á^r  oapbal  do  provincia  el  ailo  de  1^90 ,  {mtenneieiido 


éaksilai  de  Gacabóbo^  y»fM^QftiMDté¿ teidfl'OiiiéiQs^  Si li»< 

ptimeus  qvm  m^tm  'Ae  ^s«^la  á  los  w&tHfltstaámiBB ,  evoidowN 
Hfíado  de  €^kx,  iba»  á  J^usciar  en  tierras  éescmioeida»  k  csniM  )f»( 
hulosa  dd  ^Dorado.  Bairq^&ktieto  y  laaiiracfDe  condoceá  tos^lhoios 
de  Baríoas;  mnebas  vezes  sirvienDsi  ée  pniiéo  de  remioA  -^é^f^t»* 
tid)a  á  las  atrevidas  y  kjanaft  espedicioBcfr  de  los  oasteHanq».  B» 
'l'$l{2  fundó  estta  ciudad  d  fobermtét»'  J««ín  de  Viliiégas ,  IknaáiiiH 
dola  Niie^a  Sege^vút^  pena  dejar  vtiieukpdo  en  ella  el  nemiiredeisil 
patria  :  ftfé  edifte^da  ea  el  süio  cpie  se  UaíBaa  el  TejiBHr,  y  deepua 
se  la  mudó  ú  lugar  q^iie  liei  ocupa,  en  tiemfio  del  gebersadeit 
Mauzaneda.  Barquisimeto  está  simada  en  la  latitud  N.  9<>  há^  W^y 
y  eia  la  loQ|;ititd  2**  ^2^  52,  al  O.  del  meiidiano  de  Caracas,  á 
625  varas  sobre  el  nivel  del  mar,  dd  cual  dásta  22  legnas-tín  tínea 
necta. 

En  esta  ciudad  tuvo  su  trágico  fin  Lope  de  Aguíire.,  liaiÉado  d 
Tirano^  natural  de  Oñate  en  lafitroviAcsi  de  Gaipázcoa.  Lne^» 
que  se  vio  abamdooado  de  sita  moírañones^  mató  á  su  propia  Uja  , 
para  evitarle  ia  alrenta  de  que  la  llamasen  bija  de  un  traidor,  fil 
maestre  de  campo  Don  Diego  García  de  Paredes  logró  apreliencter 
á  Aguirre,  y  le  hizo  matar  por  los  mismos  maramnes* 

En  48t2  Barquisimeto  fué  casi  destruida  por  el  terremoto  que 
anL'utnó  á  Caracas,  pereeiendo  casi  toda  la  división  patriota  que  se 
hallaba  en  aquella  ciudad ,  á  las  órdenes  del  corcmel  Diego  Jalón. 
Fuéj^nlo  oeofttdo  varias  vezos  por  las  partes  beligerantes,  wttscf* 
tras  doró  la  guerra  de  la  independencia ,  y  casi  en  su  mismo  re«* 
cinto  hvbo  acciones  mui  sangrientas. 

Barquisimeto  se  halla  ventajosamente  situado  solare  nüa  llanada,, 
en  la  reunión  de  los  caminos  que  v^n  áias  provincias  oceidentalesí 
y  valles  del  Tocuyo,  portma  parte  ;  por  otra,  ^rten  ée  eUa  viaiS' 
de  comunicación  para  la  provincia  de  Coro  y  los  fértiles  campos 
de  Yaritagua,  S.  Felipe  y  Aroa,  á  la  vez  que  allí  también  se  juntan; 
los  caminos  ^ue  ylenen  de  las  llanuras  de  Carábobo  y  0ar!fnas^  y 
de  la  serraoái  deNángoa  :  todo  estabaee  qfoe  Barquisimel»  sea  mt) 
punto  interesante  p^rn  fk  aomcrci^),  la  agrieoHoia  y  las  oiias;  Loa» 
altos  barrancos  del  rio  q«e  correal  pié  de  la  ciodad  dan  i  esla  tm 
afecto  ptetoiüeseo,  J^r  todas fwrtes  la  vMaes  faennoia': 
al  S«  se  vofol  rico  valle  pof  donde  eeire  el^Ho,- 
cieodaS)  y  limlMido  por  dos  bitems  de 6eitoa>  d windosí  itno^  oMi' 


ettUertbs  de  plantaciones ,  ó  coir  mandbas  de  bosque  que  animan 
el  paisaje.  Al  poniente,  varios  cerros  lejanos  y  aislados  ocultan  las 
llanuras  estériles  de  Quibor  y  el  valle  fértil  del  Tocuyo ,  que  tiáae 
sus  serranías  cubiertas  de  campos  de  trigo  y  de  cafetales.  Al  N.  no 
se  descubren  las  planicies  poco  habitadas  é  ingratas,  que  se  dirigen 
hacia  Duaca,  porque  varias  colinas  de  mediana  altura  impiden  que 
se  vean,  mientras  que  otras ,  que  aparecen  al  naciente ,  ocultan  los 
campos  variados  en  perspectivas ,  que  están  entre  la  montana  del 
Altar  y  el  pais  de  Yaritagua.  En  el  último  plano  de  este  cuadro  se 
miran  en  medio  de  nubes  las  cordilleras  que  esconden  los  valles  de 
Nirgua ,  y  la  abra  que  indica  la  posición  del  riquísimo  pais  de 
S.  Felipe. 

En  las  basas  de  la  serranía  de  Nirgua,  donde  terminan  las  saba- 
nas de  Londres,  y  en  las  selvas  del  Altar,  es  el  lugar  donde  existie- 
ron las  minas  de  S.  Pedrito  y  de  Buria,  las  cuales  dieron  origen  á 
la  fundación  de  Barquisimeto  y  Nirgua.  Fué  también  en  aquellos 
cerros  que  apenas  se  ven  azulados ,  donde  se  refugió  el  negro  es- 
clavo de  Pedro  de  Barrio,  nombrado  Miguel,  que  unido  á  otros  ase- 
sinó en  una  noche  á  los  mineros.  En  aquel  monte  construyó  un 
pueblo  atrincherado ,  se  hizo  llamar  rei ,  y  coronó  por  reina  á  la 
negra  Guiomar,  en  quien  tenia  un  hijo  pequeño ,  que  fué  jurado 
principe  heredero  ;  creó  oficiales  y  ministros  ,  y  nombró  obispo  á 
etro  negro  que  en  las  minas  llamaban  el  Canónigo^  el  cual  levantó 
iglesia  y  celebraba  pontifical  diariamente.  £1  nuevo  rei  tuvo  el 
atrevimiento  de  sorprender  de  noche  á  la  Nueva  Segovia ;  pero  fué 
rechazado ,  y  Diego  de  Losada  salió  con  gente  del  Tocuyo  y  unido 
á  los  de  Segovia  marchó  sobre  el  rei  Miguel ,  le  derrotó  y  mató ,  y 
la  reina ,  el  príncipe  y  los  demás  ,  volvieron  á  su  antigua  esclavi- 
tud. Estas  selvas ,  hoi  desiertas ,  convidan  á  un  establecimiento  de 
colonos ,  que  no  busquen  las  antiguas  minas ,  sino  que  beneficien 
la  mas  segura  que  les  preséntala  naturaleza,  en  una  tierra  virgen 
y  feraz. 

La  posídon  de  Barquisimeto  hace  gozar  de  todos  los  vientos  á 
^ta  población.  Se  puede  decir  que  está  en  una  mesa  despejada ,  y 
auiíque  por  todas  partes  la  vista  presenta  cerros,  estos  mismos  son, 
{lor  decirlo  aáí ,  los  conductores  de  los  vientos ,  .porque  como  no 
están  en  lineas  continuadas,  sino  separados  á  diferentes  distancias, 
dan  libará  que  las  brisas,  remolineando  entre  sí,  lleguen  con  mas 
fuería  á  templar  los  ¡calores  que  debia  haber  en  Barquisimeto.  Los 


417 


«ieaios  del  19.  JE/son  los  m«B  «oaiteiites  :  vieam  dd  mar^'y  e»* 
trando  por  el  Talle  en  que  corre  el  Yaraecü^  pasan  luego  por  la 
montalía  de  Santa  María  ó  de.San  Felipe ,  reputada  enfermifa,  por 
la  multitud  de  plantas  que  allí  se  pudren ,  por  la  falta  de  sol  que 
penetre  en  una  espesa  bÓTeda  de  vegetacidn ,  por  las  initndadones 
de  los  ríos  debidas  á  la  caída  de  los  árboles  vi^os ,  que.  obstruyan 
sus  cauces ,  y  por  la  falta  de  brazos  que  desmonten  esta  selva..  Sin 
embargo,  no  van  miasmas  pestilentes  áBarquisimeto,  y  si  algunos, 
como  es  natural ,  acarrean  en  su  paso  los  vientos,  al  chocar  estos 
con  los  cerros  de  S.  Felipe ,  cambian  de  dirección  bácia  los  del 
picacho  de  Santa  María  y  deanes  van  sobre  los  d6  Yaritagua ; 
así  es,  que  estas  dos  serranías  están,  en  las  parles  batidas  por  estos 
vientos,  húmedas  y  cubierta^  de  una  asombrosa  vegetación,  en 
cuyos  lugares  quedan  depositados  los  miasmas  que  pu^eran  llevar 
los  vientos  del  N.  E ,  y  puriOcados,  diremos  así,  vienen  á  refrescar 
la  mesa  de  Barquísimeto ,  los  llanos,  valles  y  caestas  que  componen 
las  cercanías  de  esta  ciudad. 

Las  llanuras ,  cubiertas  de  ricos  pastos ,  ofrecen  la  facilidad  de 
criar  toda  especie  de  ganado.  Los  cerros  elevados  producen  esce- 
lente  trigo,  las  cuestas  café  aromático,  y  los  valles  esqotsito  cacao 
en  abundancia  ;  las  planicies  se  cobren  de  algodón ,  de  añil  y  de 
los  granos  y  frutos  que  sirven  de  mantenimiento  á  la  población. 
Si  se  ven  algunos  cerros  estériles ,  si  se  encuentran  llanos  áridos , 
no  están  desiert(¿,  y  antes  bien,  pacen  en  ellos  muchos  rebaños  de 
cabras  casi  sin  necesitar  de  los  cuidados  del  hombre.  La  cria  de 
asnos,  muías  y  caballos  es  escelente  é  inmejorable.  Pero  también 
se  hallan  cuestas  de  mucha  estension ,  cubiertas  de  un  espeso  bos- 
que, y  también  planicies  dilatadas ,  en  4onde  las  altas  copas  de 
sus  robustos  árboles  forman  un  manto  de  verdura  negra  que  las 
cubre.  Desiertas  todas  ellas,  apenas  transitadas ,  convidan  algunas 
vezes  á  sacar  partido  de  su  gran  ferazrdad ,  si  la  masa  enorme  de 

'  vegetales  podrídos  no  hiciese  exbalar  de  aquellos  lugares  un  aire 
malsano  y  enfermizo. . En  una  parte  de  este  territorio  se  ve,  sin 
embargo,  formarse  una  población  cerca  dé  las  minas  de  cobre  de 

'  Aroa ,  cuyos  habitantes,  atraídos  allí  por  la  especnlacicm  y  el  ín- 
teres ,  se  han  hechosoperiores  á  los  peligros  del  clima,  y  una  gran 

-palote  de  los  terrenos  inme^tos  está  ya  desmontada  y  sembrada  de 

¡plantas  útiles  al  hombre ;  pero  ésta  es  como  un  grano  de  arena  en 
une  snlti  ,^piies  solo  éilas  montanas,  por  su  maravillosa  fertilidad. 


fodriltt  Jí9it  la  «Émteitte  áé  Mh  la  fbUiekMi  «e  «eaMMh. 

toicMal  áft  a^rqiüuMlD  tíeM«aB  caías  kitiicoiisiMMat.,  y  al 
flaQtiiaiaa«i¿laa«aJwl(»aÉ0ngiilar.lai«aaelaiíftf  fiarías  ewoe- 
iaa  f«ra  la  adaoaciatt  de  la  Reatad*» 

EtíA  ctadad  es  cabeaera  del  cantoo  príneipal  y  mb  fianrogaífs 
MU,  fiarífiíiiimato,  Cabudare,  Sarara,  iUar,  Baria,  Saataitosa, 
JHiaca  y  Babara. 

« 

CANTÓN  0K  QGÍBOa. 

iia TiUa  €b  Qoibor  «siá  süméaan  tm  Hano árido,  aeea y iüi^í 
lantilado,  enkfe  éas%aahrada3^tte  ao  SMDiaiatDoii  a§iia  luficJaaAe 
á  1a|ifii>laoi0i> ;  y  á  aoiaer  (fue  esÉe  pnáo^  se  baUa  aunado  en  d^ea- 
miao  ^m  «ODdooa  al  occiáenla  y  i  jtoq^isiioelai ,  ana  babttaol!^ 
aiimea prasper^iaq*  £a  esie  eapton  ^9. man  oamarosas  rebaiíos  de 
cabras  que  eatátt.-ett  uo  tenrcuo  e^ril,  pero  adecuado  para  ellas. 
Tan  solo  en  la  serranía,  en  donde  está  la  parroquia  de  Guiúro^  bai 
lenrenos  moi  férüles  y  de  «a  temperteeoto  frasco  y  sano,  üi  país 
está  divkUda.en  dos  clases  de  terreno,  «na  de  llanos  estériles  y  ca- 
lientes ,  pero  útiles  para  la  cria  de  cabras,  barros  y  molas,  y  otra 
4e  lugares  montaüosos^  cubiertos  de  vegetaiciioii  y  Uwplaidos,  ipi- 
les para  sembrar  trigo,  papas,  café  y  caña. 

Las  parroquias  son  Qoibor  y  Cublfa. 

CANTÓN  DEL  TOGUTtO. 

« 

La  eludad  del  Tocuyo  fué  fimdeda  á«itas  ^luo  BauqfiíaiM^ta,  por 
luán  de  Carbajal,  á  fií^s  de  ^  ^45,  ialituláadola  Njaestra-^Señora  de 
la  Concepción.  Está  situada  en  un  beemoso  TaUe,  cérea  del  rio  de 
aa  QOBibra :  el  terreao  ti^oe  un  declive  báeia  tes  vegas  b(^mi09as 
4e  aquel,  producido  por  las  eoestoaqua  tiene  al  orieBle.  Cstas,  par 
ftu  altura  cubren  la  vista  de  la  sobarbiavosdieiiatdaias  An^es,  á»cuyas 
4alda$  está  el  pueblo  de  Sanara  de  un  tanperamanto  fraseo  y  b«r- 
moso.  Xampoce $9  pueda  v^e^»  á ¡e^Madaila aarMoiavd puribto'dal 
Gipáiaco  ^e  cata  en  medio  de  ells.  Iodo  aila  paia  na»tan<W:ae 
^la  sepobrad^  4e  trigo,  papas  y  ciCé,  y  suriettoMl  rada  loa  fliaaiM- 
4PfiT  h'm»  Si  vúfüJm»  ai  pouianki,  wa.fdtasaimaí^ifi^'BaajpKa- 
.faAbí  ^P  te  ciial  le  de9i2ubaen  baatadaafasasidaslis  faaUlaídaBMUÜp 
nm^nn  caippo^.s^  diitiftgi»ip  JífisplMláasi»  irigo  y  éij^pM»  fdas 


logares  donde  so  ven  paciendo  las  muías  y  caballos.  Esta  bella  pers* 
pectiva  nos  oculta  otra  mifiityq^  «tettiBl  lindo  yalle  de  Gurari- 
^ua  del  Leal ,  y  las  hermosas,  sanas  y  frescas  alturas  de  Barbacoas, 
pais  de  k  quina  y  del  trigo^  y  eo'  el  que  el  írío  se%aoe  sentir.  Si 
tflriraflMM  al  S.,  dos  filas  de  eerros,  al  pareeer  uoidas,  pero  cuyas  á^ 
jBas  haeen  pereAbir  la  divisiün ,  y  que  se  pierden  en  la  atnósfera ; 
Indledn  la  direecien  de  los  Talles  de  los  HmnucBroS;  á  donde  el  rio 
¥oe»yo  deseieode ,  luego*  que  deja  los  páramos.  Estas  elevadas  mo- 
les donde  el  fraüejon  yegeta,  y  donde  d  hOBHl)fe  no  se  otrere'á  ha- 
I^Har,  no  son  Ti&íbles  desde  el  Tocuyo  »i  tampoco  él  alto  peSon  de 
los  Bumueaipes ,  que  parece  vfñn  pared  enorme  y  etevada,  que  in- 
dica la  aprolimacion  de  los  caminos  que  ran  á  las  provincias  de  oe* 
ddeote^  y  el  que  se  dirige  á  las'Hanuras  de  Barfuas  por  los  eleva- 
dos valles  de  Ghabasquen.  Si  Tolvemos  'la  vista  áW.  miíamos  óm 
paredes  de  oerros  casi  desprovistos  de  vegetaeion  '.en  medio  de  ellas 
corre  el  rio  y  en  un  fondo  lejano  se  pierde ,  indicando  sin  em- 
bsó'go  la  direodon  que  lleva  bada  las  áridas  Hanuras  de  Carora. 
La  ventajosa  posición  de  esta  eiudad ,  es  -el  estar  en  un  valle  sano, 
y  en  el  camino  que  de  Barquisimeto  va  á  las  provincias  de  Trojillo 
y  Méñda,  y  tener  por  todas  portes  (errenof.  üliVes  para  lá  agriculi- 
lura,  algunos  para  crias  y  todos  salubres,  frescos  y  aun  ñrlos ;  muí 
IKMros  'bai  calidos  y  solo  una  pequeSa  parle  es  enfermita  en  el  liú- 
do valle  de  Curarigua  del  Leal.  £1  trigo  de  este  países  de  ios  me- 
jores que  se  oovooen,  y  sus  bsibit^teslo  cultivan  muebo.  y  lo  es^ 
portan  á  los  Hamos  y  al  resto  de  la  provincia.  De  tona  de  oveja  se 
lÉbrioan  mantas  y  otros  paSos  de  que  baoen  oomerdo ;  aaí  como  de 
los  producios  de  sus  tenerías  ^  y  Mwt  toda  de  la  ssA^  en  términos 
<de  baberse  beoho  los  veudedores'eschnivia^le  este  artículo  de  prt«- 
UMraiieoesid(Él,4ueestra#&  dt^kprovúieia  de  Coro/ Bale  espirita 
de  especulación  data  desde  mui  atrás,  pues  un  habitante^el  Ta^ 
euyo,  Gnelábal  lUidrígnes,  ffé  el  pñmero  que  logr¿  introducir 
ganado  em  SMiaM  y  en  los  Hanoi,  on  4^4^. 

'Hai  eu  Ifr  eMad  del  Toeufo  uu  colegio,  y  esoiielas4u  primeras 
letras. 

Las  parnoquiasde^e  eonslu  wle  4|istoft  s4Ui :  Toe«|fD,>SaBare, 
Guarió»,  fi(iaMHMN>-tfltp,  H«flMiearo4iafo,  CbaíbasviOD)  BiarÍNíeoa#) 
y  Curarigua. 


4M  — 


CAHTON  ra  CAROBA. 


La  ciadad  de  Carora,  fundada  ea  4572  por  Diego  de  IMoatesi  de 
.órdea  del  goberaador  Diego  Mazariego»  es  uiia  de  las  ciudades  una 
autígaas.  £1  Morere  es  el  único  río  qae  pasa  por  eslos  oontornoi  j 
y  es  tan  pequeño^  que  en  la  estación  de  sequedad,  apenas  da  la  su- 
.ÜGÍente  agua  para  el  consumo  de  los  habitantes.  La  ciudad  está  bien 
.construida,  y  todo  indica  en  ella  el  orden  y  bienestar  de  que  goian 
.sus  moradores.  La  situadon  de  Carera  solo  debe  á  la  naiuralea 
„an  aire  puro;  el  terreno  es  seco  y  está  cubierto  de  plantas  espino- 
sas, como  cují,  cardones  y  tunas. 

Se  encuentran  en  aquellos  lugares  dos  especies  de  cochinilla  silves- 
tre, tan  hermosa  como  la  mistica,  pero  la  dejan  perecer  en  la  planta. 
Haí,  sin  embargo,  en  el  cerro  deGuacamuco  un  temperamento  fres- 
co, una  vegetación  rica,  en  la  que  se  encuentran  bálsamos  odoríferos 
y  gomas  aromáticas.  Los  cerros  que  esconden  el  valle  de  Gurarigua 
y  los  altos  de  Barbacoas ,  son  de  un  clima  templado,  y  sus  faldas 
ofrecen  terrenos  útiles  al  cultivo.  En  mayor  número  los  haí  en  la 
plana  y  vasta  montaba  de  Moroturo,  atravesada  por  el  rio  Tocuyo; 
pero  los  miasmas  que  ailí  se  forman  impiden  el  poder  habitar  en 
aquella  selva.  La  cmiveniencia  y  la  industria  de  los  vecinos  de  Ca- 
rera no  los  indina  á  objetos  de  agricultura ;  ellos  prefieren  dedi- 
carse á  la  cria  de  caballos,  mulas«  asnos,  ganado  vacuno,  ovejas  y  ca- 
bras, y  los  terrenos  que  ocupan  estas  crías  son  cálidos  aunque  sa- 
nos ,  menos  las  llanuras  de  Gadidbe  y  Cazire ,  que  aon  enfermizas. 
La  atención  y  actividad  que  emptean  los  habitantes  en  sacar  partido 
de  lad  crias ,  hace  el  élg^  de  ellos  y  y  considerados  bajo  el  aspecto 
ée  su  industria  y  laboriosidad ,  son  superiores  en  esto  á  muchos 
puebles. 

IXki  vecinos  príncipates  vivetí  del  producto  dis  sus  ganadosi  y  otros 
ganan  su  vida  benefiü^iaado, los, pieles,  de  Jas qlte hacen  calísado , 
mootorasrétc. ,  que  se  vended  en  muchas  provlneiaa  4e  la  república. 
También  se  tejen  hamacas,  y  se  hace  buen  jabón. 
.  Esto  cantod  ^nsta  délas  parroquias  siguientes :  Carera,  Burere, 
Arenali»,^.Ar^lfie,  Rio-Tocuyo,  Ssquisique,  Sr  Miguel  y:  Moroturo. 


—  w  — 


CANTÓN  DE  SAN  PELIPB. 


Béee:  poco:  ma»  de  ua  siglo  qae  la  emi^  aetnal  d^  S»  Felipe  bó  - 
8^  ooníoeb  con  otro  nom^e  que  el  de  aldé«  de  Cocorote;  Sm  em-^ 
bai!gQ>  alraidorpor  la.fertíliáad  del  tecsreáofomcbos  carnarios  y  áL-? 
gooos  naturales  de  los  dhUrttos  veciaoa^  se  estableoteroaalli,  y.  hit 
oompaikk  jsolpaascáana  «onMruyó  alinaoenes  en  áq^el  pqoio,  con  «K 
objeto  de  comerciar  en  el  interior.  Desde  ^ionce^^  insudó  i  de '!»••* 
peetoí  efita  villa :  casa^mai  hermosas  y  calks  focmadss.OQaFegidat. 
rídad  oc^upatoD  el  logar.de  ks  cabanaa  qoe  eataban  deaQrdeoada**^ 
ipenle  agrupadas. 

£ste  cantón  eslá  regado  por  dos  ríos  piineípales ,  el  Yacaoii  y  el 
Aroa :  por  aquel  bajan  las  embarcaciones  á  la  mar,  cargadas  de  las 
producdmes  de  ogricultora  de  losValles  de  S¿  Felipe  y  Yaritagua  y 
mientras  que  por  el  otro  se  esporta  el  mioecal  de  cobre  en  peda- 
zos d^  piíedra  para  la  Gran  Bretafta.  Pe$os  torreóos  bai  tan  ferazea 
comp  los  de  este  distrito ;  pero  tienen  la  desventaja  de  estar  en  pa- 
rajes mal  húmedos,  y  por  el  gran  número  de  plantas  son  casi  im- 
penetrables :  están  anegados  por  los  riachuelos  que  los  bañan ,  y 
hallándose  espueslos  á  un  escesivo  calor^  hacen  desenvolver  mias- 
mas debidos  á  los  pantanos  y  putrefacción  de  las  plantas,  con  per- 
juicio de  la  salud  de  los  que  en  ellos  se  establecen.  Sin  embargo, 
cuando  se  aumente  la  población ,  cuando  empiezen  los  desmontes 
á  barlovento,  irá  la  tierra  componiéndose  y  los  colonos  se  avanza- 
rán progresivamente  de  la  costa  á  los  valles  de  S.  Felipe  y  de  Aroa , 
donde  una  pobladon  laboriosa  cultiva  el  cacao,  el  café,  el  ^il,  la 
caña  dulce  y  el  algodón.  La  atniúsfera  de  g.  Felipe  seria  en  estre- 
mo sana  si  no  soplasen  los  vientos  del  N,  £« :  ellos  son  los  que  á 
vezes  llevan  miasmas  que  suelen  hacer  enfermizo  el  lugar  en  cier- 
tos tiempos,  en  que  hai  mas  caatidad  de  materia  vegetal  en  putre- 
facción en  la  montaña  vecina  que  baña  el  Yaraeui. 

Las  parroquias  de  este  icuiton  aoa  :  S,  Felipe,  Cpcor<>te>  Guama , 
Albarico,  Aroa  y  S.  Javier. 

La  villa  de  Yaritagua,  situada  en  un  llano  hermoso  y  fértil,  goza 
de  un  temperamento  sano,  aunque  cálido,  Su  posición  le  da  la  ven- 


—  411  — 


toja  de  poder  traficar  con  S.  Fetipe,  Barqoisimeto,  AroayNirgoa. 
Las  hileras  de  cerros  qoees  freos»  aJnwesav  yara  llegar  á  estos  dos 
pontos,  están  en  perspectiva  y  en  toda  sa  bdleía.  Los  qoe  separan 
efcniiedgW>rg>a»siii  ífgáiídsl  y<ofc6Btto>deqi>espea»Ysi<SBh 
fte  yente  hémfm ;  «¡¿nlÉBs  fÉe  ios  ^iis  nhpTin^  jMb  és  Asaay 
OBÜff  inláütosde  granáans»  j  nb  mü  dtMábJomwb  y^aénwü»' 
BÉn' caüÉM» 4«e  les  stomeMí ,  pero  isa- flngsMM  leriao9MB 
j^snasos.  No  MI  «f  los  esateM^qne  oéniKseeniS.  MMpvyilapv' 
q«iriaieta^  ohIms  ItaMs  y  eortfos.  M  Tállb  éBl  priasero  na  y«  ea^  Ib*- 
dftso^eslBMioH;  pené  lab  aermr  qan  1%  slvf en  diB  burera^loM^ 
ean,  y  i  gran astaacia dnaancMi  laanefaa' dm  enMartad^esp^ 
sos  bosques  por  los  cuales  corre  el  Yaracai ,  dirígMñdasval  alat  f 
ennina  la  vista  n  liariaante  anliiagto  #ff  vapores,  ^i  as  Mía  esta 
jirtspMiva,  na  lO'  es  alénas'la  qm  se  ^lige  i  fca^jwrtaseta.,  cmpá 
mite  d<!ta  «ntenver  á  lo  M}as  foseóme  qaa  le  sii^vaadé  Uirilai 
eott lis  Hamnaa.  fiAasie  eanto»  iMl grandes  espacian  4e  mufono' 
plMMdas  de* eafé',  eaosé  y  odia  éüee.'  Bl  oRina  es  saladaMe; 

Laspairro^niasmi :  iMtagoa,  tfratMblie,  Gbtfeaeoa  y  Cuan*. 


TABLA  COMPARATIVA  délas  podckines  asirónoiiiieasde  lascabe9Bens4eIo6 
tionras ,  terrenos  baldios,  pobladon  absoluta,  relativa ,  hombres  de  armtt »  esda- 
tiyan  para  la  esportadon. 


HOüiniB 


SB 


DB  CANTÓN. 


POMCIOH  AsnoiíAncA. 


Latitud 


Altan» 


Lonptttd  O. 

del  meridiaiio 

de  Caracas. 


Btrqnltiiiielo. 


Qoibor 


•••••• I 


Tocayo,  «•«..« 


9^.w.\v*.  i-.is'.a'' 


9.  36.  es       3.  S5.  87 


9«  ai,  99 


I   Gtron '  9.  49.  40 


BiaFeUpe....  io.  90.  ii 
Tariiagua 9.  57.  oa 


3,  91,  SS 


t.  54.  08 


I.  59.  95 


1.59.  30 


•obra 
el  nivel 
del  mar. 


Ta«p«-  CALIDAD  DI  UM  ISABnOS  DB  «QB 
ratnra  1  *■  COMPONIH  LOS  CJÜROSIS  BX 
^^^.^  LMUA8  GÜADBADAS. 

delter- 


9» 


1» 


754 


415 


974 


376- 


toTAL. 


cniíi- 
^rado. 


951».  80   98 


99.  14    tf 


95.  56    19 


97.  78 


99.  67 


96.  67 


499 


54 


9 
8 
S 


Va 


V. 


57 


994 


o 
8 


5t   á     -S 


»    169  •/, 


»    4« 


9    195  7, 


159 


»      74 


9 


9 


9 


s 

0 

ka 


465 


SI 


446 


446 


T91 


cantones ,  su  altura  sobre  el  nivel  del  mar,  su  tempwatnra  media,  calidad  de  sus 
voB » distancia  ¿  la  capital  de  la  provincia  y  de  la  república ,  y  los  frutos  que  se  (BuI- 


NAOMTO 

d«  I.  e, 

qtie 


baldlM. 


so 


64 
10 

10 


140 


fOBLAClOír  1»  LOS  CAMTOH». 


ToUl 

población 
•n  4880. 


US» 


Y. 878 


S8.977 


tf.SiT 


18.940 


IS.SSO 


1IS.7S5 


Población 

reUtWa 

po»l«fiic 

c«a4nida. 


517 


810 


104 


99 


IM 


S60 


144 


Hombrás 

úúhn 

pan 


9:m 


TOO 


a.aoo 


a.ooo 


1.600 


•1.800 


10.600 


Numero 

do 
«tdavoa. 


700 

01 

47« 

869 
690 
970 


9. 


MSTáüOtAS 


A.  U  capiUl 

date 
provfawte 


7.  Vi 

4    - 


A  te  eapiur 

date 
rapübliea. 


TO  Va 
«9  V« 

-  «      • 

54  % 

•  •  ■ 

70  Vi 


frutos: 

qVB  M  C1IX.TXT4IÍ 

para 
Lk  IfrORTACHNk 


Gafia«oM«o»oaré7 

Gifércafia. 

Ofé,  cacao,  cillt  y 

•  •  • 

Café^  eaoao  y  eals« 

Cacao,  cafia,  «aH  y 
alUL 

4;;aaao,  caftaycaft. 


—  41«  — 


TABÚ  DB  hk  iLTUBA  ÓB  LOS  GBUOS  DB  tk  PBOYIlfCIÁ. 


Nombres^         Yaroi,     Serranías, 

(SiTimbl ^.  ^b...  de  Trujólo. 

lainm v.  4f««^»^«^  M. 


VAH. 


Agua-Obifpo  . . .  .«r. 


•••«'••^•»  Iv* 


Nombres.       Varas.        SerraniaSm 
ühabuqueiL...  ^0...    ^eínmacaroi. 
Sanare. wwn^Bi.  tMS#^  iJtyiumMjwttr 
Zancudo. ISOO Ü^ 

Diuca  •...v...»  1S80.» Id. 


VAWJLJDB  LOS  BilOS  DE  4*^  ÓBDBN  lÉt  lA-^^BOl^llICttiP^ 


Nombres.        Serranias.    Desafíe. 

CHUMM|U6fl'. ....  HttUUéá-  11011110801* 

rof.        ** 
^ChilNHi|iiMMi^.  •% . «  Ü  «^.  •«...•  4d. 
Saguaz............  Trujillo..4....  id, 

Biiciiet^4*vN»r^..»..  id «^^ •  df... . «  ld# 

Morador. déO^ino..-.^....  id.' 

Acarigua ddBarquiíi- 

niéfb  •'.'• .  *• .  r«  iv** 
Bio-ClarO' «..  id «....  id. 

Claro 4..  Id 4....  id. 

.  VoelUi «..  id 4....  id. 

DflfVm  •  .V «.. 'Id.  ....4..V.   ift. 

BarquIsiffiÑífó....^..  id «....  id. 

'HM^viarQiVWA  •  it* •  MI* iflf*  . 4 •••  .  Mib 

Caracul del9irgaa..«.  alamar. 

ünchtehe. ^  S.  Felipe^ . . .  id, 

Chiajurero. «..  id...,.«»...  id. 


Nombres.        Serñinias.   Deéagüe. 
^^^....i....  SrB.Y8R||fir...  tytaSF. 
Albarlco..(. ib ^,  id. 

Carabobo.' ÉL ^  id. 

La Cnis. •  ^. •  «w% •  • .  tt. .«««^«....k  idv^ 
Yumare..j...  deüai^turo.i....^  id. 

Gurarigua< . . .  del  To4ajo %  id. 

MoV^ífo.. . « .  •  r  Se'fjar^ra  ^k*»*»  •  • .  .^  0^- 

Bucaret......  deCarlcbe v  id, 

Cailehe ..».,»  d»Jirájiara>% . . . . rf.  id^' 

Castre.. .tf ,.,  V .,.y^*id. 

Santa  BárlUra tí 4,  id. 

DinnVa. ••»....  dbCotv. •'..*.  ....v  ÁIL 

Baragaa.4 Id •<.  id, 

CnH9re..tf..««ww^..  M..v^....k.id^ 

Tuy «••«.  deMdk'otnro.....*.  id. 

Sicare....k....  deJMbart *,  id^ 


^  í»^ 


PROVINCIA  DE  CORO. 


£$ta  froYÍncia  se  encveiitia  d0  -10^  5^  ¿  ^3^  9^  W^  de 
faof  ealy  |i  ea  la  longiicid  de  'I  M  8^  52^^  á  4»<»  22^^  al  0<  del  meridi^ 
na  de  Caracas.  Su  fignra  es  muí  irregiriar^ri  eansar  de  k  jiwfaflih 
de  Para^UAQiy  del  largo  eerd^»  dexaédaoosgne  la^eoeadettaiJ^ 
tierra  ,  firme.  Su  terpeoo  e%iéú\p  «eria^  el  mas  infisate  de  teda  lib 
costa  de  Venezuela,  si  no  fu^ra  modificado  por  las  ricas-seka»  ^kk 
están-  entre  el  Yaraeui  y  el  Tocuyo,  entre  este  y  la*  sierra  die  CesOv 
£n  aquellos -parajes,  cain  desiertos^  hai  calles  r¿co6y,coliaafrfei!aae% 
llanuras  y  ei^rrof  cubiertos  de  mía  lozana  iregetecioa,^  ^pe  haeea 
un  contraste  singular  <con  los  terrenos  áridos  y  secos  cubiertos  40 
lunas^  cardones  y  cajíeS]  y  eon  los  cerros  pdados^  y  calizos,  en^  ^laar 
sobiesale  la  planta  del  m^guei.  Si  la  parte  cubierta  de  seli^fr  m^' 
«scasa  de  población,  estaos  mucho  mas  numerosa  en  la  parte-aiídt' 
f  seca,,  donde  se  crian  cuantiosos  rebaños  de  cabras  y  de  ov^ii^a^ 
buenos  caballos  y  muías,,  y  un  número  no  .gaqueüio  de  ganado  m«^ 
cuno 

£1  juáxjmun  de  ancbura  de  esta  loromcia  i  es  de  62  leguas  da 
£•  á  0«,  desdela  f unta  de  Tücacas  basla  el  caño  Oribono^  y  deJN* 
i,  SL,  desde  el  cabo  de  S..Romanr  hasta»  el  rio  DidiiTa^  42  leguaü 
Calculada  1&  superficie,  tiene  941  K  c*,  de  las  codes  bai  cérea  da 
2S5  baldía&.^|K)blacÍQn e&  de  ÁÁX¿í7Q  almas*:  sus^babitantes estia 
OK  ra^ou  de  43l.p^.  cada  iegiM^  cuadrada^ 

LUilTES  r  CONFINES^      ^ 


•ü&áñmeOk  HufmmimÉm  JiMiwiiiuiiiuij  Bifci|teia»|j^jteiÉitit^ 
no,  y  contÍDiia  por  este  hasta  llegar  á  los 


.4Mlte«éBiM  M»kiri|Hiaiir)óiite«MM. 


• 

c 


COSTAS  DEL  MAR* 

Desde  la  boca  del  Yaraeni  hasta. la  pufttade  lacaos»,  la  costa  es 
baja,  con  algunos  manglares,  dejando  una  playa  estrecha  entre  es- 
tos y  la  mar.  Tres  islotes  salen  afaera ,  llamados  cayo  del  Norte  y 
cayo  del  Sor  y  cayo  del  Medio.  La  punta  de  Tncacas  está  formada 
per  nna  tierra  anegadifa  y  de  manglar,  que  sale  de  la  tierra  alta 
«orno  á  una  milla.  Al  E.  Iiai  un  cayo  tendido  llamado  Sombrero , 
tfoual  forma  con  la  costa  un  canal  de  poco  menos  de  una  milla  de 
andio,  y  aunque  tiene  12  brazas  de  fondo,  está  obstruido  de  bajos, 
y  es  ademas  peligroso  por  los  arrecifes  que  tiene  la  costa.  De  la 
punta  de  Tucacas  continúa  esta  baja  y  sembrada  de  arrecifes,  que 
salen  á  distancia  de  media  milla  de  ella,  con  varios  islotes,  basta  la 
boca  del  puerto  de  Chichiriviche,  que  dista  de  la  punta  mas  de  una 
legua.  Este  puerto  está  formado  por  tierras  bajas  de  manglar,  y 
'aunque  se  halla  al  abrigo  de  todos  los  vientos,  y  tiene  un  fondo  de 
7  brazas  de  fango,  es  algo  peligrosa  su  entrada  por  los  arrecifes  y 
iMijos  que  bai  en  ella,  á  cuyas  inmediaciones  están  el  cayo  de  Sal 
y  el  cayo  Borracho,  rodeados  también  de  arrecifes. 

Desde  el  puerto  de  Chichiri viche  corre  la  costa  como  al  N.  N. 
O.  la  distancia  de  6  leguas  hasta  la  punta  de  S.  Juan  j  y  toda  ella 
contifiáa  aplacerada,  en  términos  de  cogerse  ^S  brazas  á'4'mlll2^ 
de  tierra.  La  punta  de  S.  Juan  forma  por  su  parte  occidental  j  tina 
grande  ensenada  de  fondo  tan  bueno  que  á  una  milla  de  la  playa 
solo  ha!  5  brazas.  Al  N.  O.  de  dicha  punta  existen  dos  cayos  qué 
se  llaman  del  N.  E.  y  de  S.  Juan.  £1  fondeadero-está  al  i.  O.  de 
este  cayo ,  dejando  caer  el  anda  sobre  el  número  de  brazas  que 
convenga  al  calado  de  la  embarcación. 

Peide  ia  pnU  de  S.  iuaii  oéne^la  caün  ímm  al  ü.  (L  .la  dis- 
méá  di  iMa  de  1 0  iegnas,  tota  laipoota  dil^SuBwro,  y.  toda  eUp 
m  agbNíNRida  r  <Unpi«k»  €«iefi  da  panta'  éétíkmto  ae*  fofeai  wm 
«Mta  MMiiMJada  foco  (méú ;  casi  oo  daiiailií90fde»sla  Wsa  é4ai 
|iii|lMMJiflM»p)iMAei*i>  '-    ^  -'"  ' 

'uV¡».h^fmán^f¡§mm%:  ^mmkk  icMta  msk  »l.faiiüiÉü»:ifeniin«ii 
TMÍiajinÉqridi^ilMiít»to  íjrtuiwla Jehlfc  IMtiée  ^Med  ^  diilnaiii 
^Utapaa  ;;ti4a 9lhits.Un9iájm^9átíi90mmáv  ¿iMédia  tegua ^ 
si  te  ^aiere^  sin  mas  43iMdado^auiaii<tlf<witi<tlln¿4^«ac^ 


*tra  el  paerlo  dé  Cémarébd  en  ^ta  cbsta,  áe  la  caal  sé  le?alilaii  vav 
tlM  cerros  de  doBde  se  descubre  la  iliar. 

La  ensenada  de  la  Vela  de  Coro ,  tiene  fondeadero  ^  y  para  dirí- 
•gtrse  á  él  no  hai  necesidad  de  otra  guia  que  el  escandallo,  pues  el 
fondo  es  roui  aplacerado  y  limpio.  En  la  parte  oriental  de  esta  en- 
senada está  el  pueblo  dé  la  Vela  de  Coro ,  y  como  media  legua 
-adentro,  y  al  £.  de  él,  el  pueblo  del  Carrizal.  Casi  á  igual  distanda 
al  O.  de  la  Vela  desagua  el  rio  de  Coro.  La  Vela  es,  pues,  el  puerto 
principal  de  la  provincia,  y  dista  de  la  ciudad  capital  poco  mas  dé 
dos  leguas. 

De  la  boca  del  río  de  Coro  roba  la  costa  repentinamente  pat^ 
el  N.  O.  -1/4  al  N.,  formando  una  cadena  de  médanos  de  arena , 
que  tiene  61/2  leguas  de  largo  y  de  una  á  media  de  ancbo,  unien- 
do la  península  de  Paraguaná  con  la  tierra  firme.  La  costa  oriental 
de  la  península  continúa  al  N.  por  espacio  de  5  leguas  hasta  la 
puntado  Arícula  :  toda  es  muí  aplacerada  y  á  40  millas  de  ella  se 
cogen  las  40  brazas.  Arícula  es  un  pequeño  puerto  para  el  córner^ 
do  de  cabotage.  Desde  la  punta  de  su  nombre  corre  la  costa  al  N. 
N.  O.  la  distancia  de  casi  6  leguas,  hasta  la  punta  de  Tumatei ;  de 
aquí  sigue  4  millasal  O.  N.  O.  hasta  el  cabo  de  S.  Román,  que  es'fa 
parte  mas  setentrional  de  la  península.  Cerca  de  este  cabo  está 
Puerto  Escondido ,  y  Otro  mas,  nombrado  Bajabaroa  :  ambos  son 
buenos  fondeaderos.  En  la  península  se  levanta  el  cerro  de  Santa 
Ans,  que  se  ve  á  gran  distancia  desde  la  mar. 

Del  cabo  de  S.  R^man  corre  la  costa  como  al  S.  O.  un  espacio 
de  4  leguas  basta  la  punta  de  la  Macolla,  aplacerada  y  limpia ,  pu* 
diéndose  atracar  en  ella,  sin  mas  precaución  que  el  escandallo.  Esta 
punta  y  la  de  Espada ,  que  está  en  la  pen^psula  Guajira,  provincia 
de  Maracaibo ,  casi  E*  y  O.  con  la  primera ,  distan  entre  sí  -17  le- 
guas ,  y  forman  la  entrada  del  golfo  de  Venezuela  ó  de  Maracaibo» 
En  este  golfo ,  y  en  lo  mas  al  S.  de  él ,  desemboca  el  gran  lago  de 
Maracaibo,  que  solo  ofrece  una  boca  navegable  y  capaz  de  embar- 
eaeione» de «40  pierde  calado,  porque* forma  barra  am  que  tío  hai 
rmM  d»  4-2  'piea  de  ágtia. 

De  la  punta  MáceHa  (que  es  un  escelenle  puerto)  basta  punía 
€Miéf  ]^  oaala>  oarre  M  Sw  &  O. ,  y  de  alM  eí gue  easi  a1'9  <  basta  piír^ 
la  Cafféon.'fi*  toda  olii  ie  p«éde^  «fondear ,  pues^^es-  cMa  Hmpía  f 
aflMiMili> pero  lé^ptniof  naejures  ito lots ^aqtie^ ,  pul^rtólier»- 
iMsa  y  <9egar» ,  f  la^enieitada  de  Ayana,  que  es  un  esee^ente  fon^ 


paerto  Goaranao,  donde  mi  Im  ¡momi  wm^  4e  mi  Ani^Vif» 

iMxynio  dttl .oNritt»  de  niédaiios  fi^  im^  la  jM^ímpiT^la  «mií» 
Por  a«to  fonficmiciiMi  «e  foriaa  aqpí  «a  irtfo^U^  lai|ieiuiM«Jia(f 
Ja  oosta^i  el  c«al  qi^eda^^eqrado  al  E.  por  el  ialmp  de  xnídaaM,  f 
^Wtoal  O»  ^Ue  pqnln  Cardoa  f  póiUa  Saiárida.  Frente á esll» 
jpoeblo  la  co&ta  ,está  ciwsidecada  c<h»o  w  poeclPt  amfue  ne  4^ 
jnaa  Que  ana  rada. 

Desde  Sasárida  hasta  el  c^úoo  Oríbono,  la  costa  corre  en  dirección 
4  O.  S.  0«;  por  -14  leguas»  teniondo  iMurapcoaesctirpadoa :  todit  es 
mui  apkucersulaff  y  se  puede  fondear  doiimh  ^joa  de  ella. 


Goiivoe. 


Esta  proviQc;ía  tiene  ooo  qoe  es  el  tercero  en  magnüjid  deJos  d? 
la  república*  Tiene  60  leguas  cuadradas ,  y  se  le  llama  gotfete  de 
Coro.  Esta  abierto  háoia  el  poniente,  coiQttnicaado.con  el  golfo  d^ 
4laracAibo,  que  es  el  mayor  de  todos.  U  entrada  del  goUéte  de  Cp- 
jno  se  baila  entre  la  punta  Sasárida  de  la  costa  finue ,  y  lia  |>|}Ata 
£aJcdon  4e  la  peAÍnsuIa  de  Paraguauá :  la  distancia  de  una  á  otm  es 
4^  6  l^iiuas.  Este  golfo  tiene  14  leguas  de  largo  y  6  de  aocho ,  con 
púa  circunforenqia  de  42,  á  oausa  de  doe  peqaelias  peluiQsnIas  q«# 
se  avanzan  de  la  costa  al  golfo,  coa  la  particularidad  de  asemejafae 
4P  su  %ara  á  ia  de  Pacagjuauá»  Este  golfo  tiene  mucho  fondo  y 
iBitá hian af lacmido ;  paroosr^de  la  coi4a  y  delistmude  méda* 
jioa  es  preciso  londear  4ínui  afuerar  Los  vientos.que  aquí  doBiÁnaii 
;^iau#u4el  N.  igt  y  «i«^ifote  ^  aliubcigo  de  Iqs  del  N*  Q.  Todo -él 

aa  inieda  «awdaiar  ^mo  H«  iniu0n0Ok  poepta. 
Ufi  vm  grau^fPiSau.a»  UNvmw  4a  iftisi^cawdw  gmitüni 

de  islotes  y  peñascos.  La  principal  es  la  ís|ai4a  ^IvfiHlf t^r^lÉP  fHÉi 

m^  gaUaledaCaí^,  autre  las,piiniaa.(iaHiiM  y  M§fñ§mm  y^^ne 
aa^ai^UandbitaAalrgpUata^a^ifaRiua  da  patpaüía'ianÍMülaftniMW 

dasimháifia  el  rio  dn  Aisoa.  ¡uiaMid^ásu^  In&jmnluraaidn^ftvfti^dÉl 


éM'Y  Bmmb»y^0inm^  ^mlím9^vikiM  mMáBAf^ftá^tínsk- 

buena  calidail.  IJtttaWQMíD^;  ka4iQ»jQ%l^(9i]<)S«;«p«piijntil»fimi^ 
á  la  punta  de  S.  Juan ,  llamado  uno  del  Nordeste  y  otro  de  S.  Juan, 
distan  entre  sí  dos  millas.  Esto^^ti^en  un  terreno  poco  elevado,  y 
están  circundados  de  arrecifes.  Cerca  del  primero  hai  yarios  cayos 

La  fljemra  de  Codo  ó  de  «.  Iiui»  ^  el«v#.  #ft  m64ÍA  4«  ih^  fHKráMía 
tiasU  jla  altoi'a  de  ^.$01^  .vaoa^.sQbrt^i  Aiy«l  dal  mm,  kgmwknm 
«u  GUiMbre  una  llima^  ii^^flar  y  c^B^e^  4e  ^UMMBli.^»4iltai- 
ci^  de  doQ^Q  m\f^  ^  ra^os ,  ««ta  «1 N.  £.  üK)  m  c)imioi»f«Ado 
su  altura  bftBto  Cutnarefeí^,  !^»»qil0  se  <U«^9  «1  $.  &  fiAUlto  ia- 
.  mtídkmm^  de  üifeneoriuea^se  po»^  piwlela.QW  ^el  pAm^o,  j  ¥a-á 
lerumiT  e«  el  4;enco  de  Pirttu>  «eirea  del«  «Q«ta,  £n  la  pacte  oeoH 
ámíAl  de  te  Uaiiada,  «o  diMáj9>s^e««i4entost  Ui  pairatuM.de  íGuií- 
iD^giNt,  «e  e)e^^  un  pieo^mn  esKe.u^iiriH'e  i  4^$0  taoM  dé^filtiui», 
del'eual  sutaii  de«  pamid«s  peqveioe  «sd  alJif»  y  otro  al  &.,  miéB- 
tras  que  m  tareero  xnaa  largo  m  4irffe  al  ponidiiie  io^ando  ios 
QQri^QSt4e}  P^egal ,  VAdiro  >  tteoe  ?  i9»l^i;^a.^4(9al40l  lona  Ata 
por  d^nde  pasa  eilrk>  $.  huhq^^miiiá^é.  h  moit,  y  «Q^fioBt»- 
ehuelo  por  doude  pasa  ^  ^awAt»  %oe  49^lte^miri  ^Á'^ft^kb, 
£^ie  pais  moQtai^  e»  d0pq^r4tm:s(  ^  U^i»  ¿.9M  iiaraís)  y  >de 
una  estructura  singular,  pueai«8iíqir:i)aMa]|fi.«|.4iiriiia(á  io«iftr, 
en  dirección  al  N.  O.,  mientras  otros  forman  un  óvalo  que  encierra 
las  alia  sabanas  de  Taratari^re^  Aü^  corren  casi  paralelos  dos  ra- 
males bajos  y  mui  interrumpidos ,  que  se  dirigen  á  la  costa,  y  de 
€ODai§iiÍQülo 4á» isiarro  de  S.  Ims.  ¿I  «aé  pM»  flll>i¿  'A»taip«rro- 
qiiia éé  Apnlwia,  Jénmaia:  léiBÉirtaiiit^aiO— rb,  l8nia>liBda4N 
jpaopooiagnjttoéft  €iÉiyi»a  Y  ApwUHwa'ie  ii»WMt3flf  «Maf», 


—  mi  — 

«Biélices  tuélre  i  servir  de  luya  per  el  Itdo  opuesto ,  diñfiendo 
^■8ftglMeqiieTaiíhieia«lN.alrloTocQyo,  y  háda^is;  aldeAroe, 
lemiimodo  en  la  pasta  de  Toeacas  y  puerto  de  GliMikivMie*  E»- 
'tos  pequeüo9  ramales  bajos,  i  Teses  interrampidos^  dep^iden  de  la 
.sierra  de  Coro  ya  desorita :  parecen  todos  estremos  de  la  cadena  snb- 
^mariifo  que  corre  paralela  á  la  ¡costa  de  Caracas ,  cayos  residbos  se 
ievantan  en  la  isla  de  lá  Tortuga  y  en  la  de  Margarita. 
,*      •  ' 

RÍOS. 

Caen  al  golfo  de  MaraoMbo  -1 2  ríos,  y  á  la  mar  -16 ;  todos  mucm  y 
corren  en  la  provincia,  sin  fertilizarla,  pues  la  mayor  parte  de  ellos 
se  secan  en  verano,  y  solo  oonservín  algunos  pozos  en  diferentes 
puntos,  menos  los  que  salen  de  la  sierra  de  S.  Luis,  en  los  cuales 

-corre  siempre  agua,  aunque  poca.  El  principal  de  estos  es  el  rio 
Hitare,  formado  por  los  ríos  S.  Luis  y  Pedregal ,  y  desagua  en  el 

'  golfete.  El  mayor  de  los  que  van  al  mar  de  las  AotHlas  es  el  río 
Güeqoe.  Bai  ademas  dos  ríos  navegables,  uno  el  Aroa,  que  tiene 
su  origen  en  la  provincia  de  Berquisímeto,  en  el  cerro  de  Duaca , 
y  corre  en  este  lerrítorio  por  espacio  de  -12  leguas,  y  otro  que  es 

-mayor,  y  qae  está  entre  los  de  segundo  orden  de  los  de  Venezuela, 
m  él  Tocuyo,  que  se  forma  en  la  misma  provincia  de  Barquisímeto, 
en  el  páramo  del  Jabón ,  cerca  del  de  las  Rosas ,  teniendo  sus  ma- 

'  nantíales  á  44  05  varas  sobre  el  nivel  del  mar,  y  96  leguas  de  corso. 

-Sí  {fonem  (M'oporeional  su  dedive  estaría  en  razón  de  cerca  de  45  va- 
ras por  cada  legua.  A  este  rio  le  caen  40  que  se  oríginan  en  la  co- 

-marca,  llevando  las  aguas  de  otros  4  O  que  se  forman  en  la  próvln- 

.da  de  Barquisiineto.  E^Tocuyo,  poes,  ofrece  en  la  provincia  de  Co- 
A)  44  legoas  de  navegación ,  y  las  montaiías  que  él  baña ,  son  los 
iemmm  mts  fértiles  de  la  provincia. 

LAGUNAS. 

t 

■ai  valias  laguaw  éa  aguas  salobres  en  d  Istino  de  mátenos 
f«e«ieila.«08taooB  la  pei^nwkide  Paraguaná.  kátms»  entre  Co- 
lacitft  y  IftSMttIafta  de  Omria  «xittea  varias  ciéM^s  que  mt^Usn 
«MMTW  if te  Mtlmnao;  f«i9  m  peqvellas  y  de  poeo  imwm. 
T«ios4ai/balÉtailai4al»eilita,  dasáe  Cwiardiio  basta  losconmies 
da  MQncaílo,  •tímkm,  i  aípsipii  éa^mn  anÜéhUes  pata  «soi  d«r4is 


—  45«  — 

personas  y  de  loa  ABmerosos  rebeik»  de  cabras ,  porqae  los  ríos  ge- 
oeralmente  se  secaa  en  aquella  parle  de  la  provincia ;  así  es^  que 
en  donde  bal  una  casa ,  hai  también  una- laguna  que  se  llena  ea 
tiempo  de  las  lluvias,  y  que  por  lo  compacto  de  la  greda  no  filtra  y 
eonserva  el  agua  en  la  estación  seca. 

CLIMA. 

£1  clima  de  esta  provincia  es  en  general  cálido  y  seco,  pero  sano* 
En  la  sierra  de  Coro  solamente ,  se  encuentra  un  temperamento 
fresco  y  delicioso ;  en  las  demás  partes  donde  hai  serranía ,  el  cuma 
es  cálido  y  pero  nunca  malsano.  Esto  proviene  de  la  poca  elevación 
de  las  cumbres,  cubiertas  de  gramíneas,  las  cuales  siendo  general* 
mente  calcáreas  impiden  el  crecimiento  de  las  plantas ;  eütre  las 
pocas  que  hai  hi  mas  abundante  es  el  aloe  cucui  de  que  se  saca  buen 
aguardiente.  Hacen  escepcion  de  esta  regla  los  cerros  que  están  de 
la  parte  de  Acurigua  y  Macuruca,  los  de  la  montaña  de  Omuria  y 
los  que  costean  el  rio  Tocuyo.  Todos  están  cubierto»de  una  fuerte  y 
lozana  vegetación ,  bajo  un  clima  húmedo  y  cálido ,  y  por  consi- 
guiente algo  enfermizo.  Sucede  lo  mismo  en  la  parte  llana  cubierta 
de  bosques  y  pantanos ,  cercana  á  la  mar,  entre  las  bocas  del  To- 
cuyo y  del  Aroa,  donde  el  clima  no  es  mui  sano  :  á  pesar  de  lo  cut! 
aquel  distrito  no  tiene  una  población  pequeña.  En  ciertas  épocas 
suele  haber  fiebres  peligrosas. 

ESTAaON   DE  INVIERNO. 

La  estación  de  las  lluvias  empieza  en  la  parte  mas  oriental  en: 
setiembre,  y  dura  6  meses  con  bantante  inTerrupcion  de  días,  IhH 
viendo  mui  poco  en  la  segunda,  ea  proporción  de  lo  que  llueve  en 
la  primera ,  porque  allá  el  terreno  es  seco ,  estéril ,  y  acá  está  hú- 
medo y  cubierto  de  vegetación.  El  ponto  de  división  entre  estas  dos 
calidades  de  tierra  está  en  la  serranía  de  Gumarebo.  La  calidad  del 
suelo,. arcilloso  y  eompActo ,  en  la  parto  occidental,  hace  que  las 
aguas  no  peaelren  en  él,  ó  bien  qu0  se  pierdan  en  terrenos  desmcnro* 
nadiws  V arenotoa,  lo  tmi  causadla  esterilidad  de  a§iielios  parajes. 
No  sneedeasí  en  la  parle  oriental,  donde  «e  formao  grandes  barría* 
les^.  y.  en  piecioe  puntos  eslensoe  dwc^s  ^^  ba^en  incómodos 
lo|€8n^BO$^necesitándalke  de  embaiMMküQ  en  algunos  lugares.  Estos 

P.   OBOfl.  M 


üerrenos  tienen  sabanas  en  qne  se  cria  ganaéo  Tacmio,  y'miámíígQííñ. 
van  á  la  mar ;  pero  el  poco  dedWe  del  suelo  y  tas  confínas»  «gm» 
producen  este  efecto  qne  cesalan  Itrego  como  pasa  «I  hivienMK 

DIVISIÓN  TBmvraiñMnL. 

Se  divide  toda  la  provincia  en  6  cantones ,  con  los  nombres  de 
Coro,  Paragnaná,  S.  Lais,  Cumarebo,  Costa-Arriba  y  Gasígna,  los 
ciMles  tienen  56  parroquias  y  26  grandes  v^cindavios,  en  dondn-se 
QoHivaniaiz,  yuca ;  plátano,  cambure,  café,  cacao». algodón, cana 
dnke,  frijoles,  caráotas ,  anyamas,  sandias,  verduras  y  írutaa. 

La  poblshaion  de  esta  provincia  se  puededüvidir  del  modo  siguien- 
te :  a5/.^  00  se  dedkan  á  ja  agricultura,  Áhji  00  á  la  cria^  y  20/1 0.0 
al-eomercio,  avtos,  ele. 

COMERCIO. 

Esla  provincia  hace  su  comercio  cou  la  de  Maracáíbo  y  con  1a 
de  Barquisimeto ,  especialmeDLc  cou  las  ciudades  de  Carora  y 
Tocuyo  :  con  Puerto-Cabello,  en  la  provincia  de  Carabobo  ;  y  con 
las  islas  holandesas  Curazao  y  Oruba,  sostiene  un  comercio  activo, 
eaviando  á  estas  últimas  pieles,  papelón,  piálanos,  maiz,  hamacas, 
caballos,  burros,  muías,  cabras,  ovejas,  sal,  lana,  queso,  madera 
y  algún  cacao;  recibiendo  en  camlío  dinero  y  (oda  clase  de  .mer- 
cancías. Recibe  de  la  provincia  de  Barquisimeto  cueros,  suela, 
papelones ,  azúcar,  conservas,  harina ,  cebollas ,  ajos ,  menestras , 
burros  y  muías,  dando  en  cambio  sal,  género  y  loza  :  á  Maracaibo 
saweuKÍan  hamacas,  queso,  chivos  y  almidón,  recibiendo  mercancías 
diíarenles.  ^ 

CLUDAJDES   Y    VISÓLAS. 


CAimHT  tm  GOAO. 


•%e  eiodad  descaro ,  Mgwéo  rtisUbteei&Miito  dmémfet^Mifskfm 
etí  9a  9ieiTa¿Mnni'/ñiá  fudod»  ea  éfta3,«ei.  ^&ide>jiiiiQ.,*to^ 
S(miti*4mi)[yl«riMw  H(mió*pDP  ínsm^  ámpén , jqw  QBD>e0.  lmoi«» 
bres de0enll»rvó^É»la  eostaCsm» y  ae eMUeoíé «lool^ l«|flaci«» 


con  \^  í«to9  «dffttfiíttfl»,,  y  ^^atíim^wmtíki'  ma  i^9&té0^Bm>'.  f  : 
Sajito  JtanN;<^^  Amia  te  casM  4e  «p«iofr  jaspa^^ 

taha  JasoiMtaiimaxia,  y  fv»  vkdtáda  6&  4  4r9i9  f)0r  el  prímier  einqpeo 
qaé(Hi9iió  4  este  prá ,  CtkléM  Guerra  ,  el  oiñá  tcafieó  ota  to;  : 
ñatearles  «nel  pseaje  en^doade  éespues  ee  fvndó  Ja  dkidad,  reí- 
ciUsñdo  Reídlos a^oa'OFo.^  foeéó  en  Cúcdana  '(ciae.aeí  seii»<- 
maim  ia  Herrar)  eon  aolo  &5  hombres,  por  ^aek)  de  Molías.  . 
Cmndbaepsesentói ▲«fiíee elieayQí%«e  MMiitmre,  id  «as  {loderoao 
de  la  namn  Caáqsetia,  venia  ccmdoeido  en  4ianaeapor  otros  eft«> 
cifuaS;  ysaoBaipaííadoide  ^fdOtaobks,^  E\  oegal»  del  «aeiqne  ai  es^ 
pafifil  iaé  ^6¥aluaé»  en  4i.04it  f«Bos,  y  se  lúze  una  perpetua 
aüeansa*  ¿aiMs  acpMlte  indias  ialtaran  i  «hs  promasas,  y  por  so. 
laaitad  síenpae^stoviarG» 'libras  de  tribsto  y  éemeras.  £a  4SÉdS, 
llag&^'adeliiitad&  y  jgebejrBtdorde  lat^ooqaíeÉM  qaase  bkíefiat . 
pfiT  lafomBfisfiía  itiaoiana  .ée  los  Bekanes ,  Ajatoosío  de  Alfia|er, 
cmi  su  iaidffiÉe'geBfiral  fiartolosné  AiUter,  .«fiibosalema&es  ,  con 
'400  españoles,  enlrc  eUos  ímmk6BfUM§^sj  ÍHn»bres«ables ,  j. 
Jjian  de  impúes  eoteegó  S  mando  y  se  mkó  á  iSatito  Dtmas^cK 

£Qfi9  filé  pw  largo  4kmipo  b  eapital  del  país  (^ne  «e  Uaüó  Ve« 
ñúsnela ,  y  en  |S¡56  í1q§&  á  día  el  obispo  D.  Jüao  Rodis^oes^  pro* 
oedenle  ée  Pnerto^Rico. 

De  Coro,  y  eon  tí  M«lie^do  Ids  ¿idiAS  de  «qa«ttaa«eo»ai«a&y-ae 
eiipMAdiemuí  kskicHrsioiiesbácia^l  lago 'de  Uatftcaiba,  tofliena:) 
d^  Pei^  y  vü\e  de  Upar.  De  allMambian  Jor^pe  delkpira,  Ittool» 
FedePBiaan  y  felife Une  aalj^son  á  sus  lejimas ^áadkiojÍMisen  rri 
iatei4or  del  paia,  «ftfbusea  del  Dosado.  E^,  piaé,  Gsiro eo  aqvel 
tiem^  la  eseala^e  (odas  las  empatas 'Okas  memorabtes,  y, no  ea^ 
capó  «de  /la  oodim  de  los  eorsaiios  <iogle8As ,  pues  en  -1  h$7  ea  te 
aoobe  éA  7  iie«atí0&y)iievda6eniburci^#a  y  al  fomper  el  alba  el<^ 
^«s^cafon  k  mudad 9  se  apodeiwpfi  de  día,  la  sapiearoo  y  «a 
hteiec^  m§«r  ^00«a  peaosv  pam'iio<qaemarla. 

£a  i  ^7^  lí.  Juan.  P^meaid ,  nembeado  por  el  foí  .^gio^arnador  y 
4»ipitatt»pnfiFal  de  la.prov4Bda,. trasladó  la  capitol  á  €aráeats^  y  mi 
ii$%^  el  obispo  /Fr..  Juan  MamaiúHo ;.fijó  «u  neaideftek  ardbitrwriar 
mentemí  ai^yaaUa  €Íadad^á)esdemi&óiieas«mf«eé  ¿deasi^'GDiio,  f. 
GAféeas  i  elevawOp  la  mtíjgaa  eBfiM  4e  Veaesfieia  no  Uogé  A 
lmiar«lnii^o  4dia|sro«inGia.basta^<$(b5  «eii  ^e  AiéemiMb^Wt 


—  45^  — 

tal  por  el  reí ,  mas  no  M  considoada  gobio  proTincia  sino  eir 
•I  ^  8  en  que  el  general  Morillo  puso  en  ejecneion  la  real  orden. 

La  guerra  desoló  enteramente  á  Coro ,  donde  duró  hasta  ^825. 
Era  tal  la  miseria,  que  sus  habitantes  perecían  de  hambre.  No  ha«- 
bia  una  oveja  ni  una  cabra  :  no  existían  caballos,  malas' ni  asnos, 
mucho  menos  ganado  mayor.  Pasadas  aquellas  calamidades  empe-- 
laron  los  habitantes  á  comprar  algunas  cabras  en  Carera ,  y  tan 
arruinada  estaba  la  provincia  qae  cuando  se  decía  que  un  individuo 
tenia  yarías  de  estas,  se  le  tenia  por  afortunado,  y  si  Uegsüba  á  po- 
seer un  par  de  burros ,  se  le  estimaba  hombre  rico.  Mas  por  la  es- 
tadística de  bol  se  puede  juzgar  lo  que  puede  la  industria  de  los 
naturales  de  Coro,  aun  cuando  el  pais  en  gran  parte  sea  mui  esté- 
ril ,  pues  espacios  de  mucha  estensioD  están  culáertos  de  higuensi 
de  la  India  ó  tunas,  de  cactus  6  cardones,  de  mimosa»  arbórea 
centes  ó  cujíes  ;  con  todo,  en  el  trascurso  de  ^6  ados  se  cuentan 
existentes  en  la  proyincia  802.000  cabras  y  ove}^,  46.440  cabe^ 
zas  de  ganado  vacuno,  9.000  cerdos,  28.420  burros,  4 .600  muías 
y  2^572  caballos.  Esto  solo  puede  también  dar  una  idea  de  las 
ye:itajas  que  ofrecen  las  tierras  venezolanas. 

La  ciudad  de  Coro  está  situada  en  un  llano  estéril  á  40  varas  so- 
bro el  nivel  del  mar,  del  cual  dista  media  legua,  leoiendo  á  mas  de 
dos  el  puerto  de  la  Vela  que  le  queda  al  E.  N.  E.  La  escasez  de 
agua  hace  que  los  habitantes  estén  obligados  á  irla  á  buscar  á  una 
legua.,  al  rio  de  Coro,  y  la  necesidad  ha  obligado  á  formar  un  grande 
estanque  cerca  de  la  ciudad ,  en  el  cual  se  recogen  las  aguas  lio* 
yodizas.  Se  trata,  sin  embargo,  de  conducir  el  agua  á  la  población 
por  medio  de  un  acueducto,  haciendo  una  gran  represa  en  el  rio, 
lo  cual  produciría  un  gcan  beneficio  á  aquel  pueblo ,  que  goza  de 
un  temperamento  sano  aunque  cálido  y  seco.  Está,  sm  embargo^ 
refrescado  por  las  brisas  del  E.  y  N.  E^  que  hacen  soportable  el 
calor,  tanto  mas  fuerte,  cuanto  que  por  todas  partes  la  ciudad  está 
rodeada  de  terrenos  secos  y  arenosos.  Su  posición  en  una  tierra 
plana,  la  priya  de  bellas  perspectivas  ;  con  todo,  desde  ella  se  des- 
cubre la  sierra  de  S«  Luis,  donde  un  dima  tinnplado  y  una  pr4ma- 
yera  constante  ha  hecho  que  se  establezcan  las  mejores  haciendas 
de  café,  de  caña  y  toda  clase  de  hortaliía.  Al  otro  lado  de  esta  fértil 
«erra  se  estiende  hasta  tocar  en  la  provinda  de  Barquisimefo,  en 
el  cantón  de  Carera,  un  terreno  seco,  estéril^  quebrabo  y  con  hile^ 
ras  de  colinas  que  se  ramifican  de  diversos  modos ,  cubiertas  de 


_  «  457 — 

pocas  yerto,  abundando  en  ellas  d  aloecncni,  qvte  da  un  licor  espi- 
rituoso y  de  bato  gusto,  del  cual  se  hace  un  comercio  interesante. 
Eslad  plaiilas  se  piledea  llai»ar  las  verdaderas  fcüBCÍendás  naturAles 
que  suplen  á  las  de  la  caüa  de  asacar.  De  la  parte  del  órlenle  unas 
eelínasi  de  poca  elevaeioa  impiden  la  vista  de  los  cerros  de  Gnma- 
lebo,  á  cuyo  lado  opuesto  s^estiénden  los  terrenos  mas  pingües  de 
la  provipima ;  pero  malsanos  por  los  derrames  dé  los  ríos  y  la  es- 
pe$ura  de  las  selvas ,  en  un  elkna  caluroso.  Estos  bosques  que  lor- 
man  la  montaüa  de  Ornaría,  los  valles  de  Acurigua  y  Camorreo  y  la 
aelva  que  bafia  el  Tocuyo ,  y  mas  allá  d  Ároa,  están  casi  todos  de- 
flierios,  y  solo  atravesados  por  algunos  malos  caminos  que  conducen 
á  la  provincia  de  Barquisimeto.  Entre  estos  y  la  n^r,  hai  heripo- 
sas  sabanas  de  abond¿ites  pastos ,  en  las  que  se  elevan  algunos 
perritos  ó  colinas*  donde  se  cria  ganado  vacuno  que  en  tiempo  de 
las  lluvias  está  obligado  á  refugiarse  en  buicím»  pvntos  sobre  los 
terrenos  altos. c^iertos  de graiiiínfiis¿  Al  opuesto  lado,  biela  el 
poniente,  una  Uanara  árida  se  estienée  hasta  el  lago  de  Maracaibo ; 
las  tunas,  cardones. y  cujíes  casi  son  las  linicas plantas  que  se  dan; 
pero  una  numerosa  pofoladon  habita  este  vasto  pais ,  cruzado  de 
caminos ,  con  aldeas  y  crecidos  rebaños  de  cabras  y  ovejas,  muías 
y  burros  en  gran  número.  Sobre  estos  terrenos  áridos  se  elevan 
pequeños  cerros ,  en  cuyas  cumbres  encuentran  los  habitantes  la- 
gares propios  para  sus  labranzas.  Unos  cerritos  de  arena  con  algu- 
nas plantas  que  solo  nacen  eil  las  orillas  del  mar,  impiden  que  este 
se  vea  desde  la  ciudad  de  Coro.  Estos  cerritos  forman  un  cordoa 
de  médanos  por  la  parte  del  N.,  que  se  esliende  por  el  prolongado 
estrecho  de  Paraguaná,  península  particular  por  su  forma,  de  cayo 
centro  ^  levanta  el  cerro  de  Santa  Ana.áToda  ella  está  poblada ,  y 
contiene  muchos  rebaños  de  ganado.  La  posición  de  Coro  cerca  de 
la  mar,  próxima  á  las  salinas  de  Mitare,  é  inmediata  á  las  islas  ho- 
landesas, le  dan  alguna  importancia  comercial. 

Es  falsa  la  idea  de  la  pobreza  de  Coro  :  la  circunstancia  de  ver 
tan  poblada  la  parte  mas  estéril ,  cuyos  moradores  poseen  rebaños 
numerosos  qde  les  proporcionan  bastante  comodidad,  es  una  prue- 
ba evidente  de  que  hai  riqueza  en  esta  provincia.  Rara  es  la  fami- 
lia que  no  tiene  un  corto  número  de  cabras,  animales  que  fácil- 
mente se  mantienen  con  las  plantas  grasas  y  espinosas ,  y  las  grar* 
míneas  que  producen  aquellos  terrenos.  La  escasez  de  lluvia  es 
propicia  á  h  propagación  de  estos  animales  que  aHí  se  reproducen 


'£ai»;iNrtydMiqii*ítlÉi'.iifciiüo  :titl|i«i  la 
.  fltitt.lo»eitaiifae08rliM8l89faelMi.«ÍiadQidt<te 
tarde  se  kt  ansátint. jpsni leitniir teMlit;  fi  kMMÜMi  lípMite 
m  refiteila  mkamtfttuMh  dttpttM'd»]!»  eM  s^ét  MMifM  al 
gwaéb  y  4oe  wi  fNMMrfof  J«»«HiVoi)  Jto  «feetfM  (fe  M»e«Ha- 
é&é  éük  iMnbM.  Adema  d#  dur  een  I»  «ame  r'l#(ft«^  ttlüaeotos 
gwtesaa,  lasfMe»  d«  Iweaibr»  íútmHt  M  «rtfeitK»'^  amiiéfcio 

«fe  lIMiM  «littdsd  f  eOlWNÉN»» 

En  1»  eoHni»  s»  dto  ali>adaiH»  MWéfctfj  dfe  HMrii-  ?  tf  atBWon 

praspeni.bMD  ea  alRMí)»  jpMli»*d«  la^  «vranii  ^  f  4le^#8#!k!een 

iaa  mcyetai  haaiaeM  d<  lli»Mniel«.Laeriad««iMM#^  níiiM»^  «ios 

'  f  ganada  vaaaod  «Ihaii»  á  ilfflteUai»l»Mt«Mii  Md#  14  fie.  ¡Meden 

Mcetitar.eft  m  ettiáo^nmAÍQr  jiwiiui  4» «hid  f  d»^  tüeeiüli- 

dadaa  fw  paadafl  apeteha  pwre»  pmr  amofldr  <i«aqitíift  f  Míe- 

ga«.  ea  el  awodir  —  f—wlhw,  , 

14I8  parft)^Éiaa(da  dBte^  eoüMr  <«*,  dw/^l»  íMi,  OvrMI  ^ 

.  tiwmhm%f  kutáit^r  lftiirti»i>>  IfctiwtT  IftMWin^ 

caaiffos  Dfc'  paaiasiraiiá». 

La  \illa  de  PoebkHlVttevo  e^  situada  ea  iiaa.  maMla  ea  el 

centro  del  caaton ,  y  á  poco  maa  de  3  leguas  de.  la  BUff»  La  vkia 

de  varias  colinas  impide  ver  ierminar.por  todas  .pactas  su  temto- 

rio ,  en  las  orillas  del  mar  que  lo  circunda,  méaoa  por  uaa  pacte  y 

en  donde  una  lengua  estrecha  de  arenai  cobáecta  de  tui.cosdoade 

medaños,  la  une  al  litoral.  Sin  embaí^^  el  cerra  de  Saiita\iiia^  en 

jfSiTVd  desnudo  de  vegetación^  en  part€  cubierto,  de  eUa9.coii.§raiides 

pénaseos  que  salen  del^entco ,  se  presenta  ea  toda  sa  belleaa.  &a-> 

l)icndo  á  la  cumbre  del  cerra  en  donde  se  elevan  en.  forma  de. pi- 

sámide  unas  paredes  peñascosas |»  la  vista  domina.f9r  todas. pastes 

el  territorio  de  este  cantón,  y  se  perciben  sus  Umíies  blanqueados 

.,  poff  las  olas  del  osar,  ó  biea  cauüuadicse  coaellas  eu'el  tosnoute. 

Hacia  el  N.,  el  cabo  de  S.  Eoman  se  ve  psomiasnta  sabva  la  líarra 

^,  Jbaja,  y  las  olaa  se  rompen  al  oriente  ceatca  k)s.anrea¡fBSrdel'pe- 

^aeno  puerU»  de  Áxwüsif  miéntcaa  al  o^iesto  lada  mu»  ecliaas 

^  impiden  ver  loe  fondeaderos  de  los  Taquea  y  de>l&aaUiMida  Qta- 

^  lanao.  Volviendo  la  vista  al. Si,  ea  toda^aa  esfenaioHp  sa  descubre 

^ :  el  golfele  de  Coro ,  lo&monteeilLos  de areDa^aa-fioma^  oaoBfWte 

,•  njien  el  teirreoo  ¿la CmUfüm»*, ^.doade  iiasol diHaiafcrftBlí^  y 


é 

J». i)#liSQ]<mili»wo.  «mpaítoa'eh  aire  y  no.d^iia  ver.  la  sen^aQia-  ele 

Coro,  sino  como  una  sombra  oscura  que  se  confunde  con  el  cielo» 

llipiii4^l^ei(Q€Íaihg«kel8St,.no  aa  descubre  ni  un  rio,.QÍ  ui)  arro^ue- 

-to^l^'Siip'bMi^o^.eAle^JiolaB-  icesipoj^os  de  a{||ia  .perenne.,. sírviéa- 

dwáh  la)pttbta<M<»li4  A»  estan^^oea  arliOciales  ó  de  pequeñas  lagunasu 

,£ai A9l^  petüÍAfialcb  fistá  laxka. salina  de  Guaranao ,  á  donde  vienen 

ooudiAa*  lioqui^  ¿  ow^  de  sal,  Hal  oteas  salinas  en  los  Taquea.^ 

''Üvi^j^yAnMmQ,f  Aríoula  y:  Tiqni»  £n  Jax^osla  del  Q..se  encuentran 

-£0clM/^35  fiar«i,  y  hsi  eaella. unos lin4iks  oacaQole& de  q^ue  se  bac^ 

.ftWiftrciOrjE.BíW'  ser  allí  el  úmoQ  lugv  donde  se  hallan  en.  todo 

YettCRueUy  .y  £6^  usaohpara^foimar  coa  ^los,  flores  artificiales.  Cer- 

'«a^del  «ei:rQ<.de  S^nta  Ana  bal  múias  de.  hierro «  a^fre  y  aguas 

.twnftl«s«,, 

I-aii  üfiEQiyMai^^de.^  icaniau  son^  FoebloriXui^yD^,  Baraihé^  Ene- 
'ilityM(avMciruVj^ptji.'Aina..y  Yadacaq^úia^ 

' .  ■    ''  ** 

CAPgrON*  DE   SAN  LUIS. 

ia.  vüla.,da.&  Lukestá  situada  en.  el  flanco  meridional  db  la 
sierra  de  su  nombre,  en  lugar  estrecho,  como  colocada  en  anfitea- 
tro ,  pasando  por  medio  de  ella  una  quebrada ,  cuya  agua  sirve  á 
los  habitantes  y  da  origen  al  rio ,  que  unido  al  del  Pedregal  forma 
el  Mitare.  Aunque  espuesta  al  calor  abrasador  del  mediodía ,  está 

.SU  lejpperatura.refriescada  por  su  elevación  sobre  la  sierra,  tenien- 
4a  una  vista  hermosa  hacia  los  terrenos  áridos  que  al  pié  de  ella 
st^&tiendenal  Subasta  confinar  coa  la  provincia  de  Barquisimeto. 
Colinas,  estendidas  en  .todas  direcciones  se  confunden  en  el  horí 

.;mnteefiu^^un  cielo  oscurecido  por  el  polvoftrine  se  eleva  de  los  ter- 
i;#nos ^ecoscuhiectos  de  planXas  espinosas ,  en  donde  los  vecinos  se 

.  8ii;ven  de  estanq^ue&.  para  ellos  y  sus  rebaños.  Pero  si.  se  vuelve  la 
TÍsM^aL poniente,, los  cerros  del  Pedregal  se  ven  en  el  horizonte  en 

.lejjína.perspecLLva7  lo$  cuales  esconden  las  selvas  que  se  pierden  jen 
9I  ,la4$a  de  M§j:a<Qaiba,  mientras  que  al  oriente  la  sierra  misma  de 

^,S«  rLiiis.jQubce  las  montanas  desiertas  de  Omuría.  que  terminan 

^jsoiu^e^el  tria.TocayQ»..Al  N.  las  cimas  de  la  sierra  cubiertas  de  pe- 

.lí«VB<i0ik]j, de. 4xaa. fresca  vegetación.,  ocultan  la  hermosa  esplanada 
d^Cttr.ima(n47,y  ios  terrenos  cultivados  que  por  toda  la  cumbre  j 

.^H^üflj^^dfts.  est^n  (»ih|^U)&4a  planteciones  de  café ,  plátanos ,  al- 


—  44©  — 

godon ;  maiz ,  yuca,  caBa  dulce  y  toda  cla^e  de  veréunis  y  meiiesp- 
tras. 

Los  terrenos  de  este  cantón  son  MrtHes  fisanos  en  lá  parte  de  la 
sierra;  sanos^  perolbidos ,  en  la  parte  plana  ó  cabierfa  de  colinas 
pedregosas  de  poca  elevación.  En  ;^tas  hai  varias  aguas  lennales 
en  diferentes  puntos,  y  la  muí  particular  entre  la  Golva  y  el  Cardón, 
donde  se  elevan  en  lugar  desierto  dos  semiAferoídes  8ol>repuestos 
uno  á  otro,  que  se  alzan  á  45  varas  sobre  el  nivel  del  terreno  en 
que  reposan.  Allí  hai  40  bbyos  que  se  asemejan  i  {Hatos  convexas 
de  varios  tamaños,  y  estantiempK  llenos  dé  aguas  pajizfts,  verdo- 
sas, blancas,  negras,  criiiblinas  y  tflrbias,  de  olor  y  sabor  distin- 
tos, variando  su  temperatura»de  5^^  5  basta  56"*  6,  del  termómetro 
centígrado  :  todos  ellos  están  en  un  corto  espacl<v  cuyo  mayor  áiér 
metro  es  de  50  varas  y  la  masa,  se  compone  enteramente  de  una 
materia  blanca,  petrificada  y  stn  úinguna  vegetación.  A  su  pié,  de 
una  parte  bai  un  terreno  cubierto  de  yerlKi  siente  verde', 
pero  es  un  atolladero  todo  él ,  mientras  que  al  opuesto,  reposa  so- 
bre el  declive  de  una  oolina  estéril^  cubierta  de  tunas ,  cardones  y 
cujíes.  ' ' 

Las  parroquias  son,  S.  Luis,  Cabiire,  Pecajca,  Águalarga,  Pedre- 
gal y  Curimagua. 

CANTÓN   DE  CUUAREBO. 

La  villa  de  Cumarebo  eslá  situada  en  una  alta  esplanada  irregu- 
lar, que  forma  el  declive  de  dos  cerros  que  la  dominan ,  y  en  ella 
se  goza  de  una  bella  vista  del  mar,  cuyo  borizonte  lejano  se  une  á 
la  bóveda  celeste.  Las  ^colinas  que  se  estienden  al  N.,  cubren  el 
puerto  de  Gumarebo  que  dista  una  legua ,  y  varios  cerritos  con 
caserías  que  casi  tocan  los  bordes  del  mar,  bacen  la  perspectiva  to- 
davía mas  pinloresca.  Al  oriente  un  ramo  de  los  cerros  de  Gumare- 
bo que  se  pierde  en  la  ensenada  de  Ricoa,  sobre  la  mar,  impídela 
vista  de  las  bellas  sabanas  que  bai  entre  el  rio  Oúeque  y  el  Capa- 
daré ,  que  aunque  se  inundan  en  invierno,  presentan ,  sin  embargo, 
unas  colinas  á  propósito  para  recoger  allí  el  ganado  vacuno  que  se 
cria.  Por  la  parle  del  poniente,  los  mismos  c-erros  de  Cumar^)0 
ocultan  la  perspectiva,  que  seria  hermosa  si  se  pudiese  ver  el  puer- 
to de  la  Vela  de  Coro.  Por  el  N.  unos  cerros  con  grandes  peñascos, 
cubiertos  de  vegelacio»,  no  dejan  descubrir  l<»  valtes  fiirtiles  pero 


—  441  — 

enfermln)»,  de  Acarigoa  y  Maeonica.  La  sitnacion  de  esta  yiSh,  en 
lagar  sano  y  bien  ventilado,  en  el  camino  qne  de  Coro  ya  á  Pner- 
tó-CabéDo ,  y  no  mal  distante  de  la  mar,  i  donde  pne^  eondodr 
sas  finios,  con  terrenos  fértiles  y  bellas  sabantis ,  la  bacea  intere- 
sante para  el  caltivo,  la  cría  >8n  comercio  partíciilar.  Dos  agoas 
perennes  bañan  ytertíllzan  el  terreno %n  ^e  está  átaada  la. villa , 
'^  dos  cerros  coatignos  á  la  aplanada  sirven  de  escalente  ponto  de 
apoyo  para  defender  el  pneblo ,  y  entonces  nn  peqne&o  cerrtto  en 
qne  está  censtroida  la  Iglesia  y  qne  domina  la  plaia  viene  á  sor  la 
mejor  posición,  y  casi  una  ciodídela.*^^ es  qne  en  tiempo  de  la 
guerra  de  la  ind^ifdencia,*)[>ndieróiK«llí  sostenerse  por  mocho 
tiempo  los  patriotas,  rechizando  coatinaamente  los  atai)pes  infroc- 
tuosos  del  enemifo. 

Las  parroquias  de  este  cantón  son  Gomarebo ,  Pirita  y  Bara- 
bara.  ^ 

CANTOR  DB  OOSTA-;AllRIBA, 

0 

La  villa  de  S.  Bligoel  del  Tocayo  está  sitoada  en  an  llano  ane- 
gadizo á  la  orilla  dol  rio  del  m^smo  nombre,  distante  oifa  legua  de 
la  mar. 

Aunque  su  posición  está  ep  un  terreno  bajo,  que  en  la  estación 
lluviosa  se  aniega  por  todas  partes,  quedando  apéiyis  en  seco  el 
lugar  en  que  está  fundada,  sin  embargo,  su  aproximación  a  la  mar^ 
en  el  camiqp  que  de  Coro  va  á  Puerto-Cabello  y  á  las  minas  de 
Aroa,  cerca  de  un  rio  grande  y  navegable,  con  sabanas  en  sus  cer* 
canias  y  selvas  vírgenes  que  se  estienden  á  derecha  é  izquierda  de 
las  orillas  del  rio  Tocuyo.,  hasta  confinar  con  la  provincia  de  Bar- 
quisimeto ,  le  dan  una  importancia ,  que  creceríi  con  el  tiempo , 
cuando  aquellos  terrenos  se  desmonten  y  se  cubran  de  haciendas  y 
plantaciones,  que  podrán  enviar  sus  frutos  á  la  costa,  por  el  canal 
natural  del  rio  Tocuyo.  Será  entonces  cuando  el  hermoso  puerto  de 
Chichirivichi  se  poblará ,  por  la  concurrencia  de  los  buques  qae 
alli  se  dirigirán  á  cargar  de  los  frutos  de  unas  tierras  virgenes  y 
esteosas.  Aonqpe  aea  malsano  el  actoal  dima  de  la  mayor  parte  de 
estas  comarcas ,  por  la  acomolacion  de  materias  vegetales  que  in- 
fectan*el  aire,  este  mal  cesará  luego  que  se  corten  los  árboles  viejos 
de  los  bosques  de  que  están  cubiertas  aquellas  tierras,  y  entonces 
vendrán  estas  á  formar  la  parle  mas  agricoltora  y  rica  de  la  pro- 


ifi0lfiidr€»a^  esÉaadiiDáisffiiíGnteiriiCpíérift'lMir^ 

nnÍKÍBc«to7  cnÉUHia.dttsaia  kmwi.^ieélilMM»i^  <)p^  rntum^-  te 
aUriM  jarcies  aklNdf»  dititefíifttfifiatfiíi  «i(ArQir^eiliiní>a^^ 

tie»{»^neiMi4ft>laK»náM-iAi(«a{iM(r  *t«  |»ié  ^nirfrMp^pwr  te4e 
cacao 7  e$ílméB,^míém*Il3Daaámu4en9í^^ 
ttáámt^,  qiietcsláii&oeDHréi  hb JMcterdtelr Técmwn  jPítfWimkm»  «1 
'«tf)miit»áilai»iiaqoaiidar^apof  qoeíaiiíaiicírdriiKf^lfiíacIqaMdAd 
sotaaoeiitBf  in  kttótaaHmámbéB  pilíJBiÍQíi^twlita,;)íHUHii  ftaniilimn 
y  dligiiaMMCaiasiihrif«ulniiWBi  I  fcflMuiíirwnft  <|tie>»atei>t4ftimte8itCBH»- 
itMicníiDfVMsatf  paa^vB  lito«BmiAá'QolMittMkte  ^«Imi^MiG* 
Cas  |H#aphw  ékmm  iiiü—i  «■iik.lÍíi«eVítefr{ifl«Q|i* »,  Qéth 
dare,  Jacora,  Garorita  y  Tocaeas.  ;, 

CANTÓN   DE   CASIGUA. 

La  villa  de  Cas¡g«Mv9ltii|Mi»«i  m  ll{tt»  ávido  y  seco  á  solo  ona 
legua  de  la  mar,  de  cQya  perspeoUva  le  priva  su  poca  elcvadon , 
goza ;  sil}  embargo,  de  fó  vista ,  aunque  lejana ,  áe  fós  cerros  que 
vienen  de  las  alfas  sabanas  de  Táwl^raTe,  y^^  tos  que  costean:  el 
rio  Palmar,  que  le  sic^e  de  limite  con  el  cantón  de  AUagracfe  en 
tá' provincia  de  Matacaíbo.  S\i  posición  en  el' camino  que  vade€oro 
¿  Maracaibo'es  \á  única  ventaja  que  tiene,  pues  sus  habitantes  es- 
tán obligado^  á  servirse  de  lagunas  artificíafes  para  poder  beber 
agua  en  verano  y  sufúinistrarTa  a  sus  crecidos  rebaiKis  dt?  cabras. 
En  este  pueblo  se  fabrican  fas  mejores  hamacan  d^  algodón  de  toda 
la  provincia.  Afgunas  pequeñas  salibas  ofrece  aquella  tierra  árida, 
y  en  los  cerros  mas  cescanos  se  hallan  terrenos  propios  para  cuitf- 
var  maíz,  algodón  ,  yuca,  frijolees,  crfPaotasy  auyamas;  mientras 
que  en  otros  cerros  calizos  se  da  la  planta  del  cocui.  A  pesar  de  fa 
mucha  esterilidad  dé  este  cantón,  tiene  mas  f^abrtanítés  que  ef  feraz 
de  Costa-Arriba,  porque  ef  díma  es  sano  y  fas  crias^  f  tierras  de 
calCIvo  que  hai  en  él  proveen  desahogadamente*  at  mantenfmíeiKb 
de  su'pobfiacion. 

las  parroquias  son  Casigua ,  S.  FélRr,  BbnflíS,  Dttbajuro,  €apa- 
tárida  y  Sasarida. 


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TABLA  CXHiPAR  AUVA  áe  las  posidonei  aitroiiómieas  de  las  eabeser»  < 
de  sus  tierras,  terrenos  baldios,  poblaoipn  absoluta,  relativa,  hombres  del 
firatos  que  se  ciiltí?aii  para  la  esportaciMi. 


d" 


LAB  CABBiaAf 
DE  GiLirrON. 


WHv  ••••••••••••• 

Pingainá 

StnLois....^..^.. 

Comarebo 

GoiU-Arriba 

Gaiigot 

Illas 


ponaoH  iBTAOsóincA. 


Latitod 


aorU. 


4<oiif  it«d  O. 

del  narMUADO 

a»  Cartea. 


AltWM 


•laifvl 
4tlaar. 


i|o.  %kf.  SS. 
II.  5S.  90 
11.  9.  91 
II.  96.  45 
11.  1.  0. 
II.    i.  80 


a*.  47'.  Wf 
S.  4.  50 
fl.  51.  SO 
9.  96.  5 
I.  98.  O 
8.  88.  80 


40 


707 


909 


15 


Total.. 


ratara 

madia 

dalter- 

nonalro 

caati- 

(rada 


CALIDAD  DI  LOS  TBBKVHOS  »Í 
Qül  8B  COMPORTO  LOS  GÜh 
TOnS  BU  LBSÜASCüADRADÜ^ 


t7«'^91 


97.  99 


94.  45 


96.  II 


97.  99 


97.  99 


e 

I 

i 


i 

B 
2 


897, 


108  V, 


18 


95  7* 


148 


5017. 


A 


Va 


a 
S 

s 

Q 


56 


11 


a 
o 


80 


97 


100 


114 


¿I 

L 


itt 


85 


380  54 


811 


eantanes,  sa  altma  sobre  el  idrel  del  mar,  ea  temperatma  media,  calidad 
fj  esdavos,  distanda  á  la  capital  ^e  la  provincia  y   de  la  república,  y  los 


üaasas 


POBIrACIOH  Vñ  LO0  CANTOHIS^ 


9 


Total 

d«Ia 
poblMíon 
en  l8Se. 


9.196 
6.087 
10.817 
3.S76 
5.0Í0 
6.080 


Población 

rvlativa 

por  legua 


40.476 


76 
6» 
57 
65 
32 


Hombrea 

útites 

pam 

la»  ariDM. 


700 
40O 
800 
S50 
550 
800 


NdnafO 
do 


MSTAHCIAS. 

9B  ftoa  cAiToiria. 


5.800 


304 


4  U  capital 

do  la 
provincia. 


13 


79 


31 


too 


7  Vd 


38  *U 


Í8,  Vé 


1.465 


k  la  capital 

dala 
TOptUilica. 


aBKMIBBSeS 


.  riilJTOS 

QVib'ilí   CVtTlTAjr 

para 
LA  B8P0RTACI02I. 


«.  Vi 

"♦  IV6 

101  V« 

«5  Vé 
184 


Algodón  7  café. 

JügOdOD. 

Cafia  7  café. 
Cafta* 

Cacao,  difé  7  caña. 
Algodón. 


—  446  — 


'nCBCjnXB'LA'líJ«TtJBA  inTtOST'ClBBOB^te'XA.'YllOVniCSl. 


Nomhres. 


Yartu.     Serranías. 


»'« 


Agna-TiTi 8D0. deCioro. 

Pedreml..... flí5....««..««^'<rf. 

8iemr9.1mh....  iM Itf. 

^pliuuuli.« 1160 ^tff 


'1Ü4LBA  DS.  IX)»  9;0SÍ  BE  4*"  ÓADEN  PE  14.  Bi0¥II!qCIA. 


2fofn&re#. 
CiBimrcpQM.<fct>isA«  *■* 


Farol.      SemaUttf^ 


Tacura 600 id, 

Gapsdaro*  ■  ^M«Hw••  #  40Q^m  •  im«*  «»«#  ui4» 

H>uatdiiiu 750 U, 

■liioii -900..^...»,..  fif. 


Nombres,  SerreoHtts.  "DMQffte.' 

£Qr0......« deCoro áHamar. 

Seco .}  id •.  id."' 

Sigumba ii %.  id. 

Acnrij^ua  •••••••■••*  mí*  —^  •••'••  «^  •  id. 

Motara i4 .....*.  id. 

Omuria. .  •viw«(«Mti»«  id.  «.i»»*  «<>«•  «(>  •  id.  i 

Upipe m t>.  id. 

GOeque.^ id h-.  id. 

Gaidie .'. ; . .'  id»  •**■ h>  •  id. 

Agaide tí 4..  id, 

Capadarc*  •  •  m^mk*  v*  ^*'»  •  %^  •  4*  •  id* 

Tuquere Ü. ^..  id. 

Diiamurja «  Id.».. ««..  id» 

Xlürlma Id .h.  Itf. 

Gaaidima Í2 i({. 

Rio  de  ]Qfidta9Hb>  ' 

dios id 4..  id. 

Agua-negra |d Id. 

Goaea. delaftlisioo (d. 


S.  Fernando. . «.  de  la  Hision.  á  la  mtr. 

Agaa*clara. ...*... .  id,..p Sf. 

Ghlquichiqne.^ id,,,^ id» 

AngfiilÉ. .^id..^ id, 

Aroa • . »  de  S.  Felipe. .  • .  •  •  id» 

8.  tai9<M. de.^G0ro •^.  idl 


Pdftegal id 

MiUre id....... 

CkiAoreí 'id 

Gabca. « id 

SaiáridK **•  aid. . «. . . . 

Gapatarlda id........ 


id, 

id. 

id. 

id. 

id. 

id, 
Agoa-Tlyt. ........  id. ..*....,..•  Id*. 

Borojó; .,.id..M id.' 

Maticora id idL 

4€(isulM«*...*»...<.v{id. «M...  idi» 

Palmar id ..  idi 

DiíJhiTil id id. 


r 


ñe#(í€iA  m  mmiíCífám. 


SITUACIÓN  ASTRONÓMICA,  KSTBN8ION  Y  POBLACIÓN. 

MEáta  pfóvlncia  se^eiiai©Dtra«lft  'hlliittdlMweaA^'S*  *íi'e5a'^ 
á  líí«46^  y.en  la  longitud  fle^'W'áe»  ^l^rf O, >del  meriélaWD 
dé  Catácas/Sa 'figura  «pvesGíilap#64iffiáffli6Qile^la«ée  ii»>iiáiii8riDi6v 
cuyohueco  1o fonaa  él -lag© ,  W  «iial  recoge 4a» 'agna^^  eítet«^- 
rtlit^ioT  las  de  dlgúttosolww.  Ferqian  -él'  «üdo 'deísta  provkwfia 
tcrrenos4Bf?fSrtos  y  seeo»,  otras  féuiílcsy  líien  ícgádos^ifte  ríos-;  ^sttba- 
naB'pawi%  cría  de'gttiiadés;'flleíraiifes tío  wuia)tes,'yHdda»dflM«p- 
tas;  selvas inmeiisas  y  yermas;  ter#UotíOi'etí>fíii,  «f^e-eottltene  gra»- 
dB»lagüBas  y^ciiHjaga8,iél!fa»s^tt«s  y  erfefiMizos/cttlktos,  tito»- 
dosyalg^tto* tMiíf^dOB etí las  eorüffieras «f»e #rwfl 4e líasHte'CO» 
otras  provincias.  Ertees-^ílpais-ett^a €l*«ittt)r^oelde aplieawe á 
la'v^  di  comercio,  á  'ha  agri«tí!l»ra  y  á4a«-'ci*ías. 

'  El*míttoffm*de**largo^de»este  ^Erríloño^s^eíKÍUflgiias  de  N.4 

S.ífJcltiywdoia  parte de%pefnfíwufft«iitfjica,  y^deanélie  de^.  4 
O.  Tf8.  la  SBperftcie  «msta'de  'STW  h  c,  'eoifirpreüdidas^^lító  W»- 

deílago.  ' 

La  población  total  es'dei'Í7,^8W  ^afcfftaníes ,  fi«é'€<?fími-  en  Taton 
de'^5  porcada'legtia'cuaárada.  ... 

Confina  esta  provincia  con  otras  ^seis,  que  son  CMO  ^rlti^Uo  ^y 
Mnnda^'y  eonda^Nnaia  Srafiada  0n  Jtiéima'dclt6p»raiiici«sr  i»ffaor 

i)aiAe  el  fledioiQliiciiMiacaafie^a  miacoítoiattgBmmaf  iWfiMwáa 
por  ndUi  la  ^eaínnlib  €á]i|iM,.4Ér«désa  la2áaDra4áiBeite.^]pasa^r 
el  «flviDidB  ilalfffte'YpardMinBaitas  d8iaDB.^:'y  fa^ 
de&  flioiMdaflai&idél  lia«Uft.¿«ffilaaHpt¿«b  paíftce^thalla  ffntMo 
por  das'dofim  üfidqfniíiiMftta&^fifín^ 

pacte  de^düiprawbiaaiáe  Rk>-JlaolHu^ibda»tafi«iBiikiMB3dedasie^ 
dafteajé'qiiaairiBrtáudiBB'ja^aK^  di«*  : 

chaigroódntb^  yiéBBp««l  aÉradíieótiiidiril»d||iiailii^-]0afta. 

La  misma  sierra  de  Perijá,  siguiendo  las  crestas  que  dan  orágao. 


—  448  — 

á  106  nos  Palmar,  Apon ,  Negro  y  Santa  Ana,  oon  (odas  las  respec- 
tivas yertientes,  siryea  de  raya  diyisoria  hlMa  llegar  á  las  cábese- 
ras  del  rio  de  Oro;  entonces  el  corso  de  este  es  el  lindero,  y  en  su 
desagüe  al  Catatumbo  empieza  el  limité  con  la  provincia  de  Pam- 
plona. 

Aqní  es  incierta  la  demarcion ,  y  se  presume  que  sigue  casi  al  £. 
S.  £.,  por  una  montaña  desconocida ,  y  al  pié  de  los  cerros  que  son 
estribos  de  la  serranía  en  donde  nacen  los  rios  Tara  y  Sardinete  : 
atraviesa  estos  dos  rios  y  va  á  encontrar  el  puerto  de  la  Grita  que 
está  en  la  boca  del  de  este  non^bre,  el  cual  desagua  en  el  Zulia* 

Terminada  la  linea  que  marc^  la  frontera  coa  la  Nueva-Grana-* 
da,  por  la  proiáncia  de  Maracaibo,  sigue  la  raya  que  demuestra  los 
límites  entre  esta  y  la  de  Marida.  Esta  raya  es  el  mismo  rio  Zulia 
abajo  baste  la  boca  del  caño  de  la  Ciénaga  de  Orope-Grande,  y  de 
este  punte  se  dirige  por  montanas  4esierlas  casi  al  £,,  basta  en- 
contrar el  estremo  meridional  de  la  Ciéoeg¡a-Grande  de  Umuquena : 
de  allí  al  Puerto  de  Escalante,  de  este  á  la  ciénega  de  Onia,  por  la 
parte  del  S.,  y  en  la  dirección  de  los  enjutos  va  al  rio  Chama,  que 
at^viesa.  Corrp  después  al  N.  £.  para  encontrar  el  caüo  los  Monos; 
sigue  este  hasta  so  desagüe  en  el  rio  Mocuepe ,  vuelve  casi  al  na- 
ciente atravesado  los  rios  Guaci,  Guama  y  Pino  ó  Capaz,  en  la  boca 
del  rio  Chimóme.  Entonces  retrocede  al  S.  S.  E.,  y  sigue  por  este 
rio  arriba  basto  el  pié  de  la  serranía  del  páramo  del  Salao.  En  este 
lugar  tuerce  al  N.  E.  y  al  E.  siempre  ai  pié  de  los  cerros,  atrave- 
sando por  montañas  desiertas  el  rio  Juan  de  los  Rios ,  la  quebrada 
Lanuda  y  el  rio  Torondoi,  en  la  boca  de  la  quebrada  del  Mene ,  los 
de  Capió,  pueblo  la  Sal  y  Chururí.  Entra  ahora  á  lindar  con  la  pro- 
vincia de  Trujillo. 

La  raya  va  al  pié  de  la  serranía,  ai  N.  N.  E.  atravesando  los  rios 
Moiapá,  Alguacil,  Arapoi-Grande,  hasta  las  quebraditas  que  están  en 
el  camino  que  de  Chirigüé  va  á  Gibraltar.  Aquí  la  línea  se  aparta 
de  la  serranía,  y  por  una  selva  intransitable  se  dirige  casi  al  N.  N.  £., 
atravesando  todas  las  aguas  que  encuentra  y  tombien  el  camino  que 
de  fietjjoqoe  va  al  lágo^  dos  leguas  mas  abajo  del  paso  del  Sequion, 
y  siguiendo  siempre  por  montanas  desiertas  llega  al  rio  Motetañ  ó 
Cenizo.  De  aquí  busca  la  conauencia.de  las  quebradas  Pahna ,  Ne- 
gro y  Juncal  con  el  rio  Pai^U ;  entonces  este  rio  sirve  de  raya  baste 
su  cabezera,  y  allí  empieza  la  división  con  la  provincia  de  Barqui- 
simeio. 


—  449  — 

Las  cumbres  desiertas  que  dan  origen  al  rio  Berberá ,  que  va  á 
los  llanos  de  Carora  y  el  rio  Sicare  que  corre  al  N.,  sirven  de  línea 
hasta  el  punto  en  que  esta  serranía  deja  abierto  un  paso  al  Sicare 
para  correr  al  lago  de  Maracaibo. 

En  este  lugar  empieza  ya  á  lindar  con  la  provincia  de  Coro,  y  el 
término  lo  demarca  la  serranía  de  las  Pinas  ó  del  Empalado,  aguas 
vertientes  al  lago  hasta  las  cabezeras  del  Palmar ;  entonces  sigue  la 
línea  hasta  el  caño  Oribono  y  por  este  continúa  hasta  la  mar. 

COSTAS   DEL   MAR. 

Desde  el  caño  Oribono  hasta  la  punta  occidental  de  la  isla  de 
Zapara,  la  costa  es  baja,  cubierta  de  algunos  manglares  y  de  méda- 
nos de  areaa.  Allí  queda 'interrumpida  por  los  bajos  del  golfo  que 
corren  por  una  legua  al  O.  S«  O.  hacia  la  isla  de  Bajo-Seco,  esten- 
diéndose al  N.  de  ella  mas  de  media  milla ,  y  siguiendo  una  entera 
en  la  misma  direcden,  se  eiu^uentra  la  barra,  que  es  muí  difícil  co- 
nocer sin  mucha  práctica.  En  la  misma  dirección  O.  S.  O.  siguen 
los  bajos  de  Boca- Vieja  por  mas  de  una  milla,  terminando  casi  N. 
y  S.  con  la  boca  del  caño  de  Punta-Manglar.  Lo  que  hace  mas  di- 
fícil la  entrada  por  la  barra  es  que  la  mar  rompe  sobre  todos  los 
bajos,  pero  bien  examinado  se  verá  que  en  donde  está  la  barra  allí 
es  mas  hondo  y  no  bal  rompiente.  Para  buscarla  se  debe  pasar  á 
cable  y  medio  de  los  últimos  rompientes  que  vienen  de  Bajo-Seco. 
Este  bajoes  una  isleta  de  arena  que  apenas  tiene  200  varas  en  todas 
direcciones;  está  mas  de  una  milla  distante  de  S.  Carlos  que  le  que- 
da al  S.  E.,  y  como  al  E.;  el  antiguo  castillo  de  Zapara  que  está  en 
medio  de  médanos  en  la  pimta  occidental  d^a  isla  del  mismo  nom- 
bre. Eeta  tiene  unos  mangles  mni  altos  y  por  fuera  de  ella,  en 
6  ó  7  brazas  el  fondo  es  de  lama  dura  mezclada  de  arena ,  y  es  en 
donde  debe  fondearse  en  caso  de  necesidad ,  advirtiendo  que  debe 
hacerse  con  un  buen  ajuste,  porque  es  mni  fuerte  la  brisa  en  este 
paraje. 

Después  de  la  barra  de  Maracaibo  sigue  la  costa  de  la  isla  de  S. 
Garlos,  cubierta  de  médanos,  y  en  seguida  las  de  Sinamarica  y  la 
Goajira,  que  forman  la  ensenada  dé  Calabozo  hasta  el  pnerteclto  de 
Cojoro.  Allí  se  eleva  la  costa  en  forma  de  esplanada ,  cortada  verti- 
cahnente,  rebajándose  después  cerca  de  las  lagunas  Cucineta  y  de 
W  TttcácaSy  en  la  que  hai  muchos  arrecifes  próximos  á  sus  émbo- 

J*.  GEOG.  OA 


—  4S0  — 

otilaras.  Yuelve  á  realzarse  cerca  del  cabo  Espada  ba^  el  cabo  Chí- 
cbi^acoai  dejando  ver  las  serranías  de  la  peninsala  Goaj^a  y  los  f  i*^ 
eos  de  las  sierras  Cbimare  y  Aceite  que  se  elevan  en,  el  interior» la.t 
costa  es  limpia  y  aplacerada ,  de  modo  que  el  escandallóos  boalar, 
gliia.  En  el  cabo  Cbichíbaooa,  termina  la  costa  de  Yenezuebí}  y  ff^ 
roce  que  debia  ser  en  el  cabo  de  Ja  Vela,  ponto  qoe.sieaqp^e  ha  w^ 
vido  de  término  á  la&  fronteras  de  este  ^ais. 

GOLFOS. 

Maracaibo  posee  el  principal  gplfo  de  la  república,  el  mismo  que 
diá>  nombre  á.todo  el  país,  Uamándolo  Ojedade  Vemmaij  é^e^fiaBS 
dei^  Vemwií^.  pero  sujoomboe  aoiigno  em  Co^mioi^ak  ¡«a  e&tva^ 
da^á  oli^  deBoimnada  i^Algaraiioto  Sapaée  Mmmoáho^  ieii¿loi^ 
mada  pon  la  punta:  Macotfa  de  la  peoíulula  de  Pafagutrná^j  la^punl») 
Hf^da  de  la  pe»ins«^Goa^ra«  Las  des  caelAsde  e8las.pliiBmtla^i 
la^ .  de  C^co  y  Mai  ioaibo^,  ^mnxk  al<  míente^  pMtenin  y  ambriiá*  i 
e\  golfo,  cuyo  largores  de  28t  h^gmkj  y  15.^  aoabo^:  «liciaénnfo*»! 
rQ9€ia  tieso  9^^ y  450  i.  c-.  su  siiperScia*.  Su  dlreiee«iii  es^^^B^  A 
N«  Q.f  y  en,  «o  estreno  mefidtouateslá  la  boes  deMi^de  Marse* 
caibo.  k  lasroo^ado  tpdo?#ste  §alfo  se  ftued«t  aiJM|cal^.siaJ^eM^) 
liafiM  í^^pr  <5'  ó  6.  brozoB  de  of  na, 

A  .medida  queso  alausa  al  S»,  l«mala<  barrea  de  Manacaibo,  aea^> 
qiia)6e  veaga4e  la^puataMs^liaótdaladeE^ada,  el  fondoícKattdt^ 
nw|W^tprppei»ianateeitt6,  y-«9vta  eoavenjeote  no  atacan  k)0os(a  de  í 
la lwm<  do:noelH^.  sioio  atmMAaiSQ  ómaotoi^rse  en  bordeará  4  ^.y 
g^m  de.eUailiasía^  qoe.acHipe  el  diai.Lrs  hrisaami  este  gelíé;  aoftr 
ítmm  y  vioiiea  deliN.  ^,.E. »  lo  cual  ea  causA^^tcett  la  barias y^^ 
d^as.iJostaimeridioQal,  baya  aiempreinai^ampollada^m  tsiaamni 
pfdigpym.  una  bandas 

Im  pteamic  e^  díolia  batiu  se^  veeifiea  en  ios^dns  de  eoüQiíatiaiii) 
yopoMíe^iá  iasc|^.4/4  d^la4»fde,  y  en  aunas  FtJM  sjtbetla  «aieaí 
de  2  á  2  4/2  píes.  La  barra  tiene  en  en  su  mayor  agua  42  pieSítoUfi 
tiemiiofdafafiísaft  y  á^v^eaes  niaaea>IOi'iiieM  *  agnai  quafsoBi;maifi», 
süiemAitijOQlubae  yuoit^bfe..  Jbat  eiabaioaemnes  q^'aBt>peligift> 
pue^ipeiNmpor  oaMi'bMrft.).  doben^se^  de  ií  fáeasifdrcaMb.  NdWj 
IHie4a'eiilmr<;ain  pfédkM^  yasiíi  luogo^que  se  baile  la  ^nbarcaeíoa:} 
N^i»S.  n»a;ó  raaéiiia^eoft  el  eailt)}oS>  CéitoS)  y  ea«5^4y¿bEaiM4i^^ 
agm^idebe^ttOMiter  al  makik  ipaeaeiiO.  :haal«;  jeonari^  A¡%%.  düte^ 


—  4M  — 

cujo  fondo  se  verá  ya  la  pompiente  de  mar  en  k>9  bajos^  ea  vm  \{f 
nea  como  del  O.  N.  O.  Por  dicho  fondo  de  4  ^/2  brazas  se  opntl- 
nuarápor  el  0«>  orzando  ó  arribando  según  con  venga,  para  conserr^ 
TUrlas  basta  qjaedar  mas  adelante  de  los  últimos  rompientes  y  en* 
tónces  se  estará  próximo  á  la  boca,  y  allí  ^  manteniéndose  sc^ra. 
biNrdos  oortos,  se  esperará  el  práctico. 

Navegando  con  rumbo  á  la  barra  y.  lo  primero  qjue  se  descubre: 
por  ser  lo  mas  alto  de  aquellas  inmediaciones,  es  la  isla  de  ToaSii. 
q;ae  está  como  al  S.  del  Castillo  de  S..CárloSj  y  á  ella  se  deberá  po- 
ner la  proa  hasta  descubrir  los  castillos  y  BaJo^Seco »  gabernándosa^ 
como  se  ha  dicho.  Es  mui  esencial  el  conocimiento  de  la  situacioD* 
de  la  boca  de  la  barra  que  está  al  O.  del  meridiano  del  castitío  de 
S.  Garlos,  porqioe  de  no  tenerlo,  es  seguro  que  creyendo  eslar  entre 
Bajo-Secoy  la  costa  del  E.  donde  se  baila  el  t^asUUo  abandonado  de 
Zapara,  se  en^penaria  sobre  los  bajos  para* emprender  la  entrada  y 
seria  un  prodigio  no  perecer.  Los  buques  que  paseo  de  iO  pies  de> 
calado,;  deben  entcap  en  la  pieamar,.para^evítap  el  menor 4o  ]ue  que 
les  hiciese  perder  el  timón;  en  cuyo  casoseria  inevitable  uf^iijiufea^^ 
gio'por  la  estrechez  del  canaU 

La  salida  de  la  baura  hasta  franquearse  de  loe  bajos-de  elia;:  debe 
iiacersé  con  práctico  :  al^  salir  el  golfo  no*se  necesita  ya  de  instruc*  . 
clon  particular,  pues  aunque  debe  hacerse  sobre  bordos,  sepuede* 
prolongar  sin  mas  cuidado  que  el  escandallo^  Bsdeedveptir  que  en 
este  golfo  es  general  el  llamarse  el  viento  al  N<.  ó  mui  pr^úmo'  á 
él,  á  las  4  ó  5  de  la  (arde,  por  lo  que  conviene  mucho  estar  á  dicha 
hora  en  las  cercanías  de  la  costa  occidental  para  tener  bordada  biea^ 
lai^a  al  E.  IV.  £. 

ISLAS. 

Desde  el  cabo  Chichibacoa  para  el  N.  75»  E.,  y  á  distancia  de 
jom  de  6  l^asy  están  los  MoQJes  del  Sur,  que  son  dos  islotes  mui 
pequeños  y  sumamente  limpios;  de  modo  que  á  medio  cable  de 
ellos  se  puede  pasar  sin  cuidado  alguno.  Como  al  N.  de  estos  y  ^ 
distaneia  de  una  legua,  hai  otro  que  se  llama  el  Monje  del  Este^que 
tambiea'es  mui  limpio,  y  eomo  al  N.,  y  á  distancia  de  casi 6  le^- 
gpas,  hai  otro  grupo  de  7  islotes  que  llaman  los  Monjes  del  Norte « 
los  cuales  tienen  arrecifes ,  y  noeonvicne  atracar  á  ellos  amenes 
de'Una  milla  de  los  freus  que  forman  los  Monjes:  del  Norte  erntl 


—  452  — 

del  Este  y  |Ios  del  Sur :  los  qne  estos  forman  con  la  costa  son 
mni  francos  y  limpios,  de  modo  qne  no  hai  el  menor  riesgo  en 
la  navegación  que  se  haga  por  entre  ellos.  Estos  islotes  están  de- 
siertos, y  solo  habitados  por  las  aves.  Todos  los  comprenderemos  en 
nn  solo  grupo. 

La  isla  de  S.  Garlos  es  la  mas  grande  que  tiene  esla  provincia  so- 
bre la  costa  del  mar,  pues  de  otras  que  hal ,  se  hará  mención  en  la 
descripción  del  lago  por  estar  dentro  de  este.  Tiene  la  isla  de  largo 
7  leguas  y  de  ancho  4/2  :  su  terreno  es  todo  arenoso  cubierto  de 
playas  áridas  por  la  parte  del  N. ;  mientras  que  al  S.  una  vegetación 
siempre  verde,  compuesta  de  altos  manglares,  cubre  toda  la  costa ; 
en  el  interior  hai  una  porción  de  médanos  formados  de  las  arenas 
levantadas  por  las  brisas  fuertes  que  allí  reinan.  Crecen  las  uvasí 
marinas  y  algunas  gramíneas  salitrosas  de  que  gustan  mucho  las  ca- 
bras, animales  que  se  crian  bien  allí.  Cuando  hace  calma  en  esta 
isla,  hai  en  ella  muchos  jejenes  y  zancudos,  que  desaparecen  solo 
con  la  brisa  ,  reinante  generalmente  en  estos  parajes.  La  isla  está 
formada  por  el  caño  de  Paijana ,  por  donde  sale  parte  de  las  aguas 
del  lago  :  no  es  mui  ancho,  está  cubierto  de  manglares ,  y  los 
terrenos  de  sus  inmediaciones  son  mui  pantanosos.  En  la  punta 
oriental  de  esta  isla  está  fabricado  el  castillo  de  S.  Carlos  y  cerca 
de  él  unas  casas  en  que  habitan  las  familias  de  los  prácticos  que  allí 
residen  para  hacer  salir  y  entrar  los  buques. 

Cerca  de  esta  punta  se  levanta  una  isla  baja  cubierta  de  man- 
glares ,  casi  toda  anegada ,  llamada  isla  de  los  Pájaros :  tiene  poco  ^ 
mas  de  una  milla,  y  forma  un  pequeño  canal  con  la  de  S.  Carlos, 
por  el  poniente,  y  otro  al  oriente  con  una  isla  mas  grande  llamada 
del  Pescadero,  que  tiene  #erca  de  una  legua ;  pero  estrecha,  anegada 
y  cubierta  de  altos  mangles. 

Estas  dos  islas  y  la  punta  del  castillo  de  S.  Carlos,  forman  un 
canal  con  el  estremo  occidental  de  la  isla  de  Zapara  que  queda  al 
N.  de  ellas ,  distante  media  legua.  La  isla  de  Zapara  es  baja  y  cu- 
bierta de  manglares  mui  altos,  con  muchos  médanos  de  arena  des- 
provistos de  vegetación  en  el  centro  y  la  parte  occidental.  Forma 
esta  isla  el  caño  Oribono  que  no  es  ancho,  está  lleno  de  manglares, 
tiene  dos  hermosas  lagunas  y  es  una  de  las  bocas  del  lago.  El  Ori- 
bono y  el  Paijana  solo  pueden  ser  navegables  con  pequeñas  em- 
barcaciones, y  al  llegar  á  la  mar  tienen  también  su  barra. 

Zapara  tiene  5  4/2  leguas  de  largo  y  4  de  ancho ,  y  en  su  parte 


—  455  — 

occidental  exist^todavia  el  antiguo  castillo  de  este  nombre,  aban- 
donado en  el  día :  allí  fué  donde  los  filibusteros  se  burlaron  de  los 
españoles,  cuando  pretendieron  estos  inapedírlcs  la  salida  del  lago, 
después  de  haber  saqueado  á  Maracaibo,  Gibraltar  y  Trujillo.  £1  ca- 
nal para  ios  buques  grandes  se  hallaba  entonces  arrimado  á  la  punta 
occidental  de  Zapara  y  del  castillo  de  este  nombre,  que  actualmente 
queda  mui  apartado  de  la  costa,  y  el  canal  que  existe  hoí  solo  puede 
servir  para  pequeñas  embarcaciones.  En  aquella  época  no  se  babia 
formado  aun  la  isla  de  Bajo-Seco. 

£n  esta  pequeñli  isla  cubierta  de  algunos  mangles,  lagunas  y 
playas  de  arena,  construyeron  los  patriotas ,  después  de  haberse 
apoderado  del  lago, -un  pequeño  fuerte  que  en  el  dia  está  arruinado 
por  haber  sido  fabricado  sobre  un  terreno  arenoso,  sin  solidez  y 
sin  tomar  aquellas  precauciones  necesarias  cuando  se  trata  de  fa* 
bricar  cosas  sólidas  sobre  un  suelo  sin  consistencia.  Era  preciso  ha- 
ber pensado  ante  todo  en  consolidar  el  suelo,  y  en  lugar  de  un 
fuerte ,  cuyo  peso  era  enorme ,  hacer  construir  baterías  cuya  posi^ 
cion  no  debia  tampoco  ser  en  el  lugar  donde  se  situó  el  fuerte.  La 
isla  tiene  menos  de  una  milla  y  dista  de  la  de  Zapara  4.575  varas 
y  2.816  del  castillo  de  S.  Carlos.  En  la  primera  distancia  hai  un 
cordón  de  bajos  que  forman  la  parte  N.  del  canal  por  donde  pasan 
los  buques,  y  en  la  segunda  distancia  todo  es  de  mucho  fondo,  por 
ser  el  canal  principal  por  doods  corren  las  aguas  á  la  mar.  De  Ba- 
jo-Seco á  la  barra  hai  5.855  varas  y  el  canal  es  estrecho.  La  isla , 
pues,  de  Bajo-Seco ,  es  como  un  punto  avanzado  frente  á  la  gran 
boca  del  lago  de  Maracaibo ,  que  debe  considerarse  entre  la  punb^ 
del  castillo  viejo  de  Zapara  y  la  del  castillo  de  S.  Carlos,  cuya  dis- 
tancia es  de  5.500  varas.  # 

Todas  estas  islas  están  formadas  por  las  acumulaciones  de  las 
tierras  que  acarrean  las  aguas  del  lago  y  las  arenas  que  mtfeven  las 
del  mar,  y  en  el  encuentro  de  la  corriente  del  lago  con  el  oleaje  de 
las  aguas  saladas,  se  han  formado  con  el  trascurso  de  los  siglos  las 
islas  S.  Cárlosy  Zapara  y  Pájaros ,  Pescadero  y  Bajo-Seco ;  esta  es  la 
mas  moderna* 

II0NTA!(AS. 

La  antigua  serrama  de  Hotos  que  separa  las  agnas  que  caen  al 
la^o  de  Maracaibo^  de  las  que  van  al  valle  de  Upar;,  y  que  fué  atra- 


—  454  — 

tesada  por  los  primeros  conquistadores^  es  la  que  se  tlama  sierra  Sfi 
'Perijá;  eslremo  de  un  ramal  de  la  gran  cadena  de  ios  Andes ^  que 
«e  desprende  desde  Pamplona  hacia  el  N.^  y  termina  en  las  sabana 
de  la  península  Goajira  en  los  montes  de  Oca.  Esta  serranía  es  la 
mas  alta  de  la  provincia  de  Maracaibo^  á  pesar  de  que  sus  cunpffores 
no  se  elevan  á  mas  de  ^.500  varas  sobre  el  nivel  del  inar.  Toda 
día  está  desierta,  y  solo  en  sus  faldas  cerca  de  Pcrijá  se  encuentra 
alguu  cultivo.  Tiene  45  leguas  de  largo  desde  los  ^lontes  ,de  Oca 
hasta  las  cabezeras  del  rio  del  Oro  que  cae  en  el  Catatumbo,  porque 
ele  allí  á  Pamplona  pertenece  á  la  Nueva  Granada.  La  otra  cadena 
que  cierra  por  el  oriente  el  gran  valle  en  cuyo  centro  está  el.tago 
de  Maracaü)0;  es  la  cordillera  de  Siruma  y  del  Empalado.  E^ta  sirve 
delimite  con  la  provincia  de  Coro,  y  sus  cumbres  desiertas  y  cu* 
Inertas  de  vegetación  se  elevan  á  850  varas  sobre  el  nivel  del  mar^ 
Tareco  que  estos  cerros  pertenecen  mas  bicQ  al  sistema  de  la  ser- 
ranía de  Coro  y  cis  una  de  aquellas  grandes  cadenas  que  han  sido 
interrumpida^  por  las  antiguas  revoluciones  que  ha  sufrido  el  jglo- 
1)0.'EI  punto  de  interstcccion  del  sistema  de  los  Audes  y  el  de  la  co^a 
de  Caracas ,  es  en  la  provincia  de  BarqUisimeto,.  cuyo  .trastorno  se 
observa  todavía  en  donde  el  rio  Sicare  pasa  por  entre  los  cerros 
para  venir  á  los  llai^os  de)  Cenizo  á  tributar  sus  siguas  al  gran  lago» 
Allí  termina  la  pequeña  parle  de  serranía  que  por  este  lado  tiene 
ItfaracarbO;  cuyo  largo  es  de  52  leguas  hasta  donde  se  pierde  cerca 
tdeias  orilias  del  rio  Palmar.  La  isla  de  Toas  que  está  próxima  á  la 
boca  del  lago,  se  presenta  como  un  residuo  de  la  niisma  cordillera 
ée  Siruma,  tragada  por  las  aguas  6  hundida  cuando  la  catástrofe 
redujo  á  golfo  el  terreno  que  existiera  entre  la  costa  de  Paraguan4 
y  la  Goajira.  El  cerro  fie  Santa  Ana  en  aquella ,  y  la  Teta  Goajira 
en  esta^  son  restos  de  una  cadena  que  se  prolongaba  hacia  la  Or- 
chila.  Asimismo  los  Monjes,  pequeños  islotes  que  se  elevan  en  m^ 
dio  del  mar  en  la  línea  de  las  islas  de  Oruba  y  Curazao ,  pareceii 
también  las  puntas  de  cerros  sumergidos ;  que  en  tiempos  remoto$ 
formaron  una  sola  cadena  con  aquellas  islas  y  las  sierras  de  Chi-^ 
mare  y  del  Aceite,  entre  los  cabos  Chichibacoa  y  el  de  la  Tela. 


RIOP. 

Todos  los  irios  de  esta  provincia  ciaen  al  lago  de  Maracaibo ,  j. 
€ste  lleva  sus  aguas  á  la  mar.  No  tan  solo  recibe  las  de  su  territo- 


—  455  — 

tíory  skiolaS^áé  Barqfiiisrhneto,  Trttjííío,  Méridü  y  hasta'de  la  pW)- 
•íittcia  de  Pattrj^ímo  perténedente  á ia  Ntrc va  Granada.  Nacen  y 
«oraren  por  este  territorio  4*0  tíos,  e!  priodpal  de  los  cuales  potáu 

•navegación  dé  22  leguas  y  por  los  terrenos  de  sus  inmediaciones  , 
-es  el  Soctii,  rio  de  los  de  tercer  tSrden  en  la  repúWica7de  ^5  ife- 
gtftá  ée  ctrrso.  Pero  si  cons^ideramos  tacbfoíen  los  ríos  que  nacen  én 
las  provincias  mencion;rdas,  el  teiritorio  dé  Maracaibo-está  bañado 
Y^fertilizado  por  S5  de  ellos  y  roas  de  i  00  riachuelos.  En  este  caso, 

*<fl  prhicipal  viene  á  ser  el  Calatumto,  de  los  de  primer  orden  eta 
"^Cftezuda ,  con  0^  leguas  de  curso  y  40  de  navegación.  Sigue  defe- 

'^pfBts9  A  Ztilia ,  de  igual  categoría,  con  66  leguas  de  curso  y  44  de 
iMfvegacfon  ;  Itrego  el  lüfotatan,  de  los  de  tercer  orden,  con  un  curso 

^ie  55  leguas  y  ^6  de  navegación ,  y  el  Escalante  con  4  i  de  curso 
y  25  die  navegación.  Todos  estos  ríos  están  cubiertos  de  una  asom- 

"i«tosa  vegetación  ,  pero  todos  ellos  corren  por  terrenos  que  suelen 

^t^bitt  las  aguas  en  las  avenidas  y  muí  pocos  de  estos  quedan  eñ- 
tóncés  en  seco,  si  se  esceptúan  aquellos  que  están  en  las  partes  dis- 

'^tes  del  lago. 

LAGOS  T  LAGUNAS. 

DI  pria^l|i«íl  la^o'^e  toda  Yéniezuela  es  «1 4é  Maracaíbo ,  semé- 

JttÉte^  «d  mediterránea  ^e  agua  dulcie.  Gipodadanlo  vfi^s  serra- 

VÍ9B :  la  d^e-  Merida  que  se  ^eva  hasta  el'  limite  de  las  nieves  pef- 

-píBltms  en  >el  eéstrettio  de  k  provfftcia,  for  !a  imrte  del  S.;  por  el  £. 

iás  ée  Sframa  y  Efnpfatafdo  y  al  O.  lars  de  Ocaiía  y  Perijá ,  íducIio 

-üiaft  4)ajas ,  las  enaies  van  dísttfnctyendo  grádualmeñte  hasta  per- 

diNTse^^eerca  de  la  <co^a ,  las  tffias-  en  kis  ^renvos  áridos  de  €oro , 

las  otras  en  las  sabanas  de  los  salvajes  Goajiros.  Todas  ell^s  for- 

'afilan  «na  línea  casi  ciréulat  q«eréppefee«ita  la  figura  detinafier- 

'«vchim,  ctiryo-dtáttieUro  deE.  á  O.  es  de  7%  leguas,  al  paso  ^e 

-m  íAeiflura  é*tuada  hacia  la  costa,  sofe  Üene  5^.  Su  lírrgo  dfe  H. 

?i^.  es  de  60  leguas.  Casi  en  él  centro  dfe  esta  grande  hoya  edá 

'^  hermoso  lago  de  Maracaibo,  ctiya  supierfitie  es  de  ÍOO  1.  e.  fér 

medio  de  5  declives  diferentes* que  vienen  dlel  S.,  del  E,  y'drf  d. 

^tvcoge  las  aguas  que  anualmente  caet!  "en  los  lcrr<*nos  circtfiírvfe- 

éinos,  los  cuii\»es  por  sa  coníigurácion  y  posición  desaguan  en  esla 

•liaBUfa.  Esftos  terrenos  pertenecientes  á  la  provincia  de  Maracaibo 

(yuMKáios  ^e  ellos  á  las  de  Pamplona,  Méfida,  TrojiHo  y  una  pe- 


—  456  — 

qoeña  parle  á  la  de  Barquísimeto,  forman  un  coojOQto  de  4.0ÍK) 
].  c*  que  es  la  cuarta  parle  de  España*  Hai  páramos  de  5.000  ya- 
ras  de  altura,  de  donde  emauan  aguas  que  descienden  precipita- 
damente á  la  llanura ;  esta,  aunque  larga  y  de  un  declive  suave, 
las  precipita  con  fuerza  al  lago.  No  sucede  así  en  las  partes  late- 
rales ,  cuyas  mas  altas  cumbres  son  de  4 .500  varas  en  la  sierra 
de  Perijá  y  de  850  eu  las  del  Empalado. 

Si  se  calculan  las  aguas  llovedizas  que  anualmente  caen  en  tan 
grande  estension,  y  se  considera  que  aquellas  que  no  se  pierden 
en  la  filtración  y  evaporación  van  á  acumularse  en  el  espacto 
central  de  la  herradura ,  no  sorprenderá  que  allí  exista  un  lago 
de  tan  grandes  dimensiones.  Por  las  esperiencias  hechas  en  el  cas- 
tillo de  S.  Carlos,  en  Maracaibo,  en  Gibrallar  y  en  Mérida,  sotee 
la  cantidad  de  agua  llovediza  que  cae  en  un  espacio  y  en  un 
tiempo  dados,  resulta  que  anualmente  en  los  dos  primeros  luga- 
res, caen  52  pulgadas,  mientras  que  en  los  dos  últimos  son  86 
-1/2.  Como  aquellos  son  menores  que  estos  en  superficie,  se  ten- 
dría por  término  medio,  que  en  todos  los  terrenos  que  desaguan 
al  lago  caerían  anualmente  78  pulgadas.  En  los  que  rodean  el 
lago  de  Valencia  caen  72  :  en  Vera- Cruz  68  ,  y  en  S.  Carlos  de 
Kio-Negro  1-12.  Dado  que  la  mitad  de  las  aguas  llovedizas  se 

.pierdan  por.la  evaporación  y  filtración  antes  de  llegar  al  reci- 
piente, conuiq,  que  para  nuestro  intenío  es  ahora  el  lago  de  Ma- 
racaibOy  siempre  tendr|a|uos  59  pulgadas.  Si  este  estuviese  encer- 
rado como  el  lago  de  Valencia;  se  veria  que  la  cantidad  absorbi- 
da por  el  calor  no  e$tá  en  proporción  con  la  que  conducen  los 
rios  que  desaguan  en  el,  y  se  conoceria  el  anual  aumento  de  las 
aguas  en  el  lago  de  j^acaibo ,  así  como  se  observ^a  la  diminii- 

.  cion  en,  el  de  Valencia. 

£1  lago  de  Maracaibo  lleva  diariamente  una  gran  cantidad  de 

.  agua  á  la  mar,  por  una  boca  de  5.500  varas,  desde  la  punta  del 
castillo  de  S.  Carlos  hasta  la  punta  mas  próxima  de  la  isk  de  Za- 
para, Y  por  las  bocas  de  Oribono  y  Paijana,  caños  de-poca  anchura; 
pero  también  introduce  la  marea  una  cantidad  considerable  deagua 

Jalada  suspendiendo  el  curso  de  la  dulce^  cuyas  osciiaci(^s^e  h|- 

.  cen  sentir  hasta  las  e^lrepaida^es  d^l  lago.  Las  agpas  salobres  que  iio 
llegan  pomu^mcnle  mas  alia  de  Maracaibo,  suelen  pa$ar  adelanle 
hasta  la  punta  Icotea,  cuando  hai  grandes  mareas  y  vientos  fuertes. 

,Es  estrfioi'dtnar^a  la  violencia  con  que  entran  y  salen  las  aguas  ;j 


—  4W  ^ 

para  maijor  iiiMigencíaj  daremos  algana  idea  4e  ello,  determia^n- 
do  al  mismo  tiempo  la  anchura  del  canal  prúoKÚpaí  por  donde  pa* 
san  los  biiqae^. 
De  S.  Carlos  á  la  barra  hai  8.651  yaras ;  el  ancho  del  caaal 

..  frente  á  S.  Garlos  ^s  de  i  .900  varas ,  frente  á  Bajo-Seco  de  4  759  ^ 
y  de  allí  bástala  barra  de  700  á  800  yaras.  El  ancho  de  la  barra  es 
de  6100  varas  y  la  p^rte  mas  baja  es  un  espacio  de  50  á  40.  Entra<)o 
un  buque  en  la  barra  con  todas  sus  velas  y  por  el  canal  indicado , 
camina  U  millas  por  hora,  cuando  méoos,  que  hacen  61/2  varas 
por  segundo.  Si  damos  al  buque  por  la  fuerza  del  viento  una  mi^r- 
cha  de  8  millas,  habría  una  corriente  de  2  pies  por  segundo  que 
entraría  en  el  lago,  igual  á  la  corriente  del  Orinoco  después  de  pa- 
sada la  boca  del  Apure.  Sin  embargo,  este  caudaloso  rio  hace  cono- 

.  cer  el  flujo  del  mar  á  85  leguas  en  el  interior ,  siendo  la  marea  en 

Ja  Boca  Grande  ó  de  Navios  de  2  á  5  pie^ ,  y  de  2  á  5  es  la  de  la 
boca  del  lago.  Las  aguas,  pues,  del  de-Maracaibo  conservarán  un 
aerto  equilibrio  que  no  pueden  mantener  las  del  lago  de  Valencia ; 
con  todo,  su  fondo  debe  disminudr,  aunque  con  lentitud,  lo  que 
$erá.mas  visible  en  las  orillas  por  la  gran  cantidad  de  tie^^ra  que 
anualmente  acarrean  los  rios  ea  sus  avenidas. 

Este  lago  ioinó  el  nombre  del  cacique  jefe  las  tribus  ^tablecí- 
das  en  sus  costas  >  cuando  fué  esplorado  por  los  buques  de  Alünjer 
en  ^529.  Tiene  la  figitra  de  una  guitarra  y  no  la  de  una  redoma, 
como  basta  ahora  se  ha  dicho.  Su  largo  de  N.  á  S.  es  de  40  leguas 
desde  ¡Bajo -Seco  hasta. la  ensenada  de  la  Boy^a,  al* oriente  de  la 
boc^  del  ZuÜa.  En  el  estremo  meridional  desde  la  Mochila  de  Gü* 

.  bralLar  hasta  la  ensenada  del  ZuHa,  hai  24  leguas  :  en  su  medianía 
entre  Laguneta  y  Misoa  47,  y  en  donde  empieza  el  brazo  de  la  gni- 
tarra  ó. ^1  verdadero  canal  del  lago,  que  es  en  punta  Icqtea,  iip. 
4  4  /2 .  £1  cuerpo  de  la  guitarra  tiene  pues  26  i  ¡%  y  el  ^razo  45  4/2. 
La  cirpunferencla ,  sin  contar  las  ensenadas ,  es  de  420  legras ,  y 
comprendiendo  las  sLuposidades  principales,  244.  Este  lago  ocupa 
un  espacio  de  700  1.  c.  A  no  ser  por  la  diQcultad  de  la  barra  y  los 
bajos;  del  Tab|a^q,  podrían. navegar  en  estelaga  buques  dealtp  |]^(f- 

.  do.  Las.ori|las  son:b£yias  y  el  terreno  vi,ene  declinando  suaveme;^ 
hasta  cierta  distancia  debajo  d^l  agua,  en  donde  de. repente  fariña 

.  un  barrap^o.  Rj^corramos  ahora  el  terreno  de  est^s  costas  4eside  ja 

;  isla  de  S.  Carlos.,  .  ,  .    ,, 

.    Esta  i^la  está  en  par^e  anegada  y  cpbierta  d0  mangles  y  en  parte 


puede  prosperar  allí  :  en  la  punta  mas  mental  A^tÉlalaHttti'^l 

-<i0tille>de  S.  Cai^l^,  para  ^édéná«r  k  «iRriída  Mla^o;  ét^sSío 

f^ja&a  separa  «sta  Ma,  f  déiíá^sü  4KMfti^fts(tli'^l'^ltf(^D*es^Gioy(a 

«legada  •con  sék)  «tnaof^  ;'ma»  adentro^  <haíí'  temnos'calyferlas  ie 

«iénagas,  eaeallesy  ]a'héi«#«i  iagMa^ée^Banüiea :  !a'i^la^«ílte 

( fiombree^tá  atoada  «a  9Da'víd(csv'fhtDtfi%  YB^^^'^^^^^o^'c^nre 

-^  rio  Limón  ^ftie  caef  á  dieba  lagttna/scimtMrado^por  tatias  tegnas^e 

'labraBMs  7  caserío  :  st»  ofíftesdangraúdánmos  plarMros^totíífrra 

^  íárt^y  pero  algo  «MormtKa.  El  terrenoes -cenagoso 'Cfn'sir'nitiyor 

farte, y  en d tafíwror  cs^ áe tm  asperón- f4»|é,  poco  TairoraMeá ía 

vegetación.  En  la  costa  del  lago  efiílá  la  pairro<}ma  de^W^an,  y  en 

frente  se «lera-en  ja^msenadía  de  OraM  ki'  fsiár^  Toas^  la  alfeifa 

de  80  varas  :  nHí  Imi  mliwde  cal  y  de^caH^on  dé  piednr.  ^(H^- 

|an4ia^  MaracaH^o  fá  isoirta  está  balittadft ;  laü  granee»  'cocátes^pisl 

r  terreno  esllafto,  ciltéiil,<;on^iif%tt&tos,^éftanetesiY^<'*'^^^ 

laclara  A)to  y  Bajo  :  etiti  la  Sállna'^tícd,  ^ 've^ílttdatib  de  te^<- 

Hada  y  varias  otras  isafinas  escd^les.  A4  f^nte  y  apénas^sobre^^l 

nivel  del  agua  se  ye*fa  i^a  ^^(álaflelAcov  Wa  'altaestAanada ,  en 

'féitta  de  colina  aplastada,  se^diHgeálliMrákcailbo,  fbnnala  enhenada 

'flei  pnertode  esíta  e^fiíaA  y  cotttinéa  iiast^  ponta "de  fdhnasifel 

:  Oeste  eiHloude  se  p^ei^e.  fodoes  im  contihnu) caseHo  :  tdtededér 

€el  piterto^tán  los  Battcos,  tccreo^títido  y  fihiloreseo  ^Oos^ttabi- 

laltttes déla  capitfd  :  las  orlYlas  tist&n  'séntf^radas^  A&^amdes  cocales 

flUiñss  ^e^iorlalitas ;  la  cofína  cñbietta  de  cabras  y  ^yréjas,  Ifts  tn- 

naes, -cardones  y  'Ciijfes  sfnt  lasplánlas  qne^tí  tegH;an;  el  terreno 

«5  nn  asperón  rojo  y  i^o  osmtro;  pedregoso,  aboirdafrte  en  6\iio 

>€e hierro  : ^observan cantidafdée mafderas petrificadas.  LdS redti- 

€ari0s de^as üaiíadas  Altas,  Bajas,  Adentro  y  Afltera  están  eneile 

impsáOy  y  4  á  6  leguas  mas  al  rnferior,  la  ilanitra  que  oeapaín' tos 

tedndarios  .del  Jobo  Alto  y  Bajó  y  del  Ancón,  ijiie  esdttstvattrentte 

se  dedican  i  la  cría  del  ganadtnracnno  f  cabruno;  Bn  la  punta  de 

Müías^  del  Oesjte  exiiste la parroq^iade la tüí^da,  y  aquí  se  ne en 

'ttda  ^ueélension  el  hermoso  lago  cuya»  orillas  se  («renden  de  tilta 

y  el  borñonte  del  agna  se  «confnnée  con  la  bóveda  teleste.  ^  fresde 

eáfa  panta  hasla  te  bocas  del  rio  Palmar  es  on  espado  Rano  án 

colinas  y  cubierto  de  bosques,  su  terreno  arcilloso  ailefna  con  el 

arenisco. y  ofoeeeeseelente  tierra  para  el  colthio,  y  mas  :fli»lentro  una 


montdíta  espesa  de  donde  se  sacan  preciosas  idáderas.'  Eistá  será  1á 
parte  que  mas  prontamente  se  desmontará  por  la  aproihnacion  al 
lio ftlmar,  por  sn  clima,  la  poca  di^noia  que  haiáiacapitafl;  y!a 
mnt^ha  p</b]acion  de  la  Cañada  para  consegnir  jornaleros.  Mtío 
Palmar  hasta  la  boca  de  iSanla-Cmz  es  un  terreno  tpie  se^onspoiie 
de  i>anoos de arenay  arcíHa mezclados  oon  las  partículas  de  todTe* 
getales  podridos  :  hai  sabanetas  de  asperón  y  tnncbas  ciénagas ;  asT 
68  que  presenta  up  terreno  con  potreros  para  los  animales  én  vera- 
Do,  tierras  de  cultivo  y  n)ad^ras  de  construcción  :  mas  adentro  i 
4  legijas  están  los  sabanas  de  Sartanejo  y  de'Perijá,  ncas  y  atnm- 
dan  tes  en  pastos  y  aguas.  Desde  aquí  empieza  la  costa  á  ser  liien 
enfermiza,  particularmente  en  el  invierno,  y  hasta  aquí  es  liat)ita-' 
da.  De  Santa-Cruz  á  la  boca  de  Rio-Negro  está  desierta,  cubieita  de 
montaña  fértil^  pero  que  se  aniega,  y  mas  adentro  á  4  leguas  de  ht 
costa,  se  elevan  las  tierras  y  se  encuentran  los  llanos  del' Apon  y  de 
S.  FeTipe  con  escetJentes  pastos,  bien  regados  y  en  donde  j^cemu!- 
típiá  de  ganado  vacuno,  caballos,  muías  y  burros.  £1  rio  Negro 
será  uno  de  aquellos  que  verán  mui  pronto  sus  oriTlás  cubier-^ 
t^s  de  bs^cüendas,  por  la  ventaja  que  ofrece  á  la  agricultura  y  á  to 
crias,  pudiéndose  ademas  esportar  los  frutos  por  agua.  Del  rio-Ne- 
gro hasta  la  ensenada  del  ZuHa,  todo  es  país  anegado,  cubierto  de 
basques,  encale^  grandes  ciénagas  y  lagunas,  y  se  estiende  muchas 
leguas  adentro :  después  sigue  uúa  montaña  desierta  y  desconedda 
que  termina  en  las  alturas  de  la  sierra  de  Motilenes  que  divide  la 
provincia  de  Saota  Marta  :  este  grande  espacio  será  el  último  que  se 
poblará  y  su  terreno  bajo  va  elevándose  anualmente  por  el  limo  que 
en  capas  depositan  las  aguas  de  los  rios  Saniana,  Catatumbo  y  Zu- 
ña. Esta  es  la  parte  mas  rica  en  pescado,  ^s  costas  to  ^bs  desiertas 
ofrecen  escelentes  ensenadas  y  bajos  para  la  pesca  :  en  ellas  apearas 
se  encuentra  una  que  otra  playa  para  establecer  las  ranchería»  da 
los  pescadores  que  concurren  todo  el  año,  introduciéndoseed  ha 
lagunas  del  interior,  abundantísimas  en  pezes.  flai  dos  iélotesen  ti 
boca  dé  la  Lá^neta,  otros  dos  en  las  puntas  Otogá^  de -Gongo  y  h 
isla  de  Damas  cercaré  Catatumblto,  y  tres  en  la  boca  delKritttbai. 
El  rio  Gatatuftibo  y  el  Zafia  ofrecen  á  los  haliitaiites>delo6  vafiie*^ 
de  Gúcuta  un  cana!  natural  para  llevar  sus  firotoscon  poco  costo  ^ 
puerto  de  Uaracaifoó,  V  sus  orillas  afgun  dia  íonnarán  tm  caserío 
continuo.  £n«l€atatumbo  está  la  parroquiadel  ¥ñw;  y  en  ka  flor* 
queta  hai  un  grande  vecindario :  por  ^'ZttKa  arriba  se  encuentran 


—  4«0  — 

varias  haciendas  y  algunos  peqneKos  gropos  de  casas.  Los  bosques 
presentan  la  yegetacion  mas  lujosa  que  se  puede  ver.  Desde  la  en- 
senada del  Zalia  hasta  la  punta  Santa  jtfaria,  el  terreno  es  cenagoso, 
compuesto  en  su  mayor  parte  de  vegetales  podridos  y  convertidos 
en  tierra,  alternando  con  bancos  de  arena  y  arcilla.  Por  varias  le- 
guas adentro  está  anegado  por  los  muchos  ríos  que  riegan  y  se  der^ 
raman  por  la  selva,  cubierta  de  árboles  preciosos  tanto  de  tinte  co- 
mo de  construcción. 

La  parroquia  de  Santa  Rosa,  los  vecindarios  de  Guaci  y  Pino  se 
comunican  por  agua,  lo  mismo  la  villa  del  Zulia  que  está  sobre  el 
Escalante  :  este  es  otro  rio  lleno  de  haciendas  y  labranzas  :  tiene  la 
porroquía  de  Santa-Cruz  y  el  puerto  de  Escalante,  punto  en  donde 
los  de  la  Grita  y  Bailadores  embarcan  sus  frutos  para  trasportarlos 
á  Maracaibo.  Estas  montañas  son  de  una  fertilidad  asombrosa.  Desde 
Santa  María  basta  Boscan  es  una  serie  de  caserías ,  haciendas  y  la- 
branzas, y  se  hallan  las  parroquias  de  S.  Pedro,  Bobure,  y  la  ciu- 
dad de  Gibraltar  :  tiene  algunos  terrenos  anegados,  pero  la  mayor 
parte  útilísimos  para  el  cultivo.  Posee  muchas  clases  de  madera  de 
tinte  y  construcción,  y  sobre  todo  unas  tierras  en  su  interior  aun 
vírgenes,  cuyos  enormes  árboles  denotan  su  grande  fertilidad :  al- 
gunos caminos  que  van  á  la  provincia  de  Mérida  las  atraviesan.  La 
estación  de  las  lluvias  es  la  mas  peligrosa  en  esta  costa  que  nece- 
sita grandes  desmontes  y  buenos  desagúes  en  los  rios  para  cambiar 
su  atmósfera  cargada  de  miasmas,  producidas  por  la  putrefacción 
de  los  vegetales.  Desde  la  Mochila  de  Gibraltar  hasta  Moporo,  la 
costa  está  toda  anegada,  y  por  varios  caños  se  iutroducen  las  em- 
barcaciones pequeñas.á  las  bodegas  de  la  Seiba,  Seibita  y  Moporo, 
un  poco  internadas,  de  donde  salen  caminos  que  después  forman 
uno  solo  para  la  provincia  de  Trujillo  :  las  dos  primeras  son  dos 
pequeras,  parroquias  :  ppseen  terrenos  de.  aluvión,  sobrecargados 
^  tierjra  vegetal ;  lo  frondoso  del  bosque,  su  esp^ura  y  el  tamaño 
de^us  árboles  indican  lo  rico  de  estos  terrenos  que  las  fiebres  y  los 
insectos  hacen  poco  habitables.  De  Moporo  hasta  Mjsoa  es  un  ter- 
reno feraz  bañado  por  las  aguas  del  Motatan  y  por  las  que  vienen 
^elos  llaojO$del  Cenizo.  Los  indígenas  de  M^poro^  Tomocoroy 
Uisoa  viven  en  el  agua  como  sus  antecesores  i  sobre  la  madera  do 
]rera  establecen  sus  rs^ncherías,  para  evitar  la  mucha  pl^a  de  la 
orillas,  y  esta  clas^  de  palo  llamado  de  hierbo,  resiste  y  con  los  años 
$e  petrifica  en  el  agua.  E^n  la.  costa  se  ven  mudiios  caserías  y  sa^, 


—  46Í  — 

habitantes  se  dedican  al  corte  de  las  maderas  preciosas  que  eiisten 
en  las  selvas.  Esta  parte  pronto  progresará  si  se  hace  nayegable  el 
Motatan ,  y  sus  orillas  podrán  cubrirse  entonces  de  haciendas  y 
aldeas :  de  aquí  se  va  á  los  llanos  del  Cenizo,  á  los  de  Gárora  y  k 
la  provincia  de  Trujillo.  De  Misoa  hasta  el  rio  Benítes  es  un  terre- 
no anegado  en  las  orillas  y  algunas  leguas  adentro,  y  solo  habitado 
por  los  indígenas  de  Lagunilla,  que  forman  parroquia  con  el  puebla 
viejo  de  Misoa.  Viven  en  el  agua  y  se  dedican  al  corte  de  las  made-' 
ras  de  tinte  y  construcción  que  existen  en  abundancia  en  la  gran 

m 

ciénaga  de  Lagunilla.  En  el  interior  es  una  montana  desierta  y  pes- 
tosa  por  la  que  atraviesa  el  camino  que  va  á  Ciruma  por  las  Pinas 
y  á  los  llanos  del  Cenizo.  Desde  Benítes  hasta  punta  Icotea  cambia 
de  aspecto  el  pais  y  puede  admitir  cultivo  sin  mucho  peligro  del 
clima,  pero  el  terreno  no  es  tampoco  de  tanta  ferazidad.  De  la  pun- 
ta Icotea  hasta  punta  Leiba  es  un  terreno  de  asperón  con  arena  y 
pedregales ;  vuelven  á  verse  los  cocales  en  las  orillas  del  lago,  las 
tunas  y  cardones  mas  adentro  :  allí  inmediato  hai  un  continuado  ca- 
serío y  la  parroquia  déla  Rita.  En  el  interior  hai  una  montaña  ári-* 
da  y  seca,  bañada  solo  por  el  rio  Mene  y  el  riachuelo  Abrare,  cuyos 
derrames  producen  ciénagas  y  barrancos  cerca  del  lago.  Una  rica 
mina  de  mene  en  forma  de  laguna  hai  en  esta  costa  cuyos  habi- 
tantes se  dedican  á  la  cria  y  cultivo  de  cocales  y  hortalizas.  Cerca 
de  punta  Leiba  está  la  isla  de  Burros  en  donde  se  estableció  un  la- ' 
zareto,  y  allí  cerca  el  islote  de  los  Pájaros^  que  están  al  naciente  del 
puerto  de  Maracaibo.  De  punta  Leiba  á  punta  de  Palmas  del  Este  es 
un  caserío  hermoso  y  continuado,  sembrada  la  costa  de  cocales :  se  ve 
en  medio  de  ellos  la  ciudad  de  Altagracia :  el  interior  es  tin  terreno 
árido  y  seco  en  que  prosperan  mucho  las  cabras  :  hai  también  al- 
gún ganado  vacuno.  De  aquí  salen  caminos  para  Coro  y  Ciruma.  De 
punta  de  Palmas  hasta  el  Ancón  es  una  colina  pedregosa,  aplastada 
con  algunos  arbustos  y  la  playa  tiene  varios  cocales,  encontrándose 
diferentes  hatos  de  cabras  :  de  allí  al  caño  Oribono  es  un  terreno 
bajo  arcilloso  y  anegado  en  donde  está  la  gran  salina  de  Iturre.  Viene 
después  la  isla  de  Zapara,  toda  ella  desierta,  en  gran  parte  anegada, 
y  del  lado  del  mar  con  médanos  y  arenales  :  en  su  estrefmo  occi- 
dental están  las  ruinas  de  su  antiguo  castillo.  Frente  á  ésta  isla  y  al 
costado  de  la  de  S.  Carlos  están  las  de  los  Pájaros  y  Pescadero,  cu- 
biertas de  mangles  y  anegadas :  por  último  entre  S.  Carlos  y  Zapara, 
como  de  punto  avanzado  está  la  isla  arenosa  de  Bajo-Seco  con  al- 


gpnoftarbustoay  en  tarias^iatles  anegida :  tiene  «na  fórtiflcaiiiea 
BUMlema  ya  üuitilizada*  Antiguamente  el  canal  de  la  barsa  coniai 
arrimado  á  Zapara  y  aun  actualmente  se  ven  los  restos  de  este,  por 
d  cnal no puedenpasar  sino  pequeña» embarcaciones^  teniendo «at 
la  barra  5  pies  y  de  4  O*  i  4  SI  el  canal »  Al  estramo  de  la  isla  de  Bajp* 
Seco  y  aorimado  á  la  costa  de  S.  Cárlos.bai  un  estrecho- canal  de 
pooa  agua,  por  donde  en  otros  tiempos  entrábanlos  bu^ea  cuan- 
do aun  no  eiistía  la^isla  de  Bajo-Seco  que  se  fué  formando  eon  e£ 
cnrso  del  tiempo,  con  las  arena»  que  iban  acumulando  las  aguas  del. 
mar.  Hasta  puntar  de  Palmas,  es  decir,  4  leguas  de  Bi^Po-Siaco»  toda 
es  agua  salada :  de  allí  á  Maracaibo  es  algo  salobre;  .pero  de  niiH 
gpnmodo  mala,  en  calidad,  escepto  duruite  los  vientos  fuertesdel 
N»  en  loa  meses  de  febrero^  maiso  y  abrlL  Aquellos  neyuelven  deí 
tal  modo  las  aguas  qae  no  se  pueden  beber,  y  entonces  los  hab^ 
tantes  se  sirven  de  pozos  de  bastante  profundidad,  cuyas  aguas  na 
son  mui  sanas.  Los  ricos  tienen  cisternas  que  reoogan  las  aguas 
plaviales.  En  mayo  suelven  á  ser  dulces  las  aguas,  porque  empiezanT 
las  avoiidas  de  los  ríos  del  interior^,  que  desaguan  al  lago  pop  60  bo^ 
eas  y  60  de  caños,,  condadendo  las  de  una  superOde  de'4»000  le* 
gpascnadradaS)  en  las  cuales  se  fonman  -lOürios  y  400  quebradas 
conocidas^  Estas  aguas  se  ramifican  de  diversos  modos  corriendo 
oonmas  ó  menos  incUnadon  en  distiutaa  dicecdones ;  y  ya  unién- 
dose, ya^  formando  ciánaps  y  lagunas,  ya  dividiéndose  en  brazosy 
Timen  á  pagar  su?  tributo  al  gmblago. 

La  laguna  daSiaamaica.es  una.de  las  mas  beUas  queüeáie  esta 
provincia  :  semttra  á  ella  poc^  el  rio  Socui  y  al  cabo  da  2  leguaase 
presenta  como  no.  circulo  de  aoa*arboleda  siempre  verde,  toda^de. 
altos  mangles qiie.sa  ven  salir. delsenode  lasaguaa  sostenidos  por 
su»  numerosas  raises.  En  medio.de  la  laguna  se  elevan  varias  po- 
bladones  de  indigenasxion  sus.  casas  cubiertas  de  enea  y  fabricadas 
sobmestacas  á  pocos'pies  sobre  el  nivel  de  las  aguas,,  babiendopam 
este  efecto  escogido  las-  parajesren^querbai  bancos^de  arena  y  poco» 
fondov  Estos  indiosdesc^endientes^de  le&aatiguoa  babilantes4el  lago 
conservan  el,  modo,  da  edificar  de.  sos  aalecesocea,  y  de  aqpii  luvo^ 
origen  el  dar  el  nombre  de»peqpena  Veneeia  á  esta  comarca;  nom- 
bra qpe  despoea  se  estenéió  á  todo  d  territorio  que  bdocnpa  lar 
república^  A  ladecechaide  esta  hermosa  laguna«hai  un  caño  fiave?- 
gable con  peqoeñas^canoasj.ehcual. condace  á  la  pacroquia  de  Sin»?  • 
malea;  mas  hada. el  jX.  baLotrop^qvieftopoDelcual  sepnedairal 


ci|ÍHesta  4b  em^  da  la;  anal  se  únmkt  ¡mpa'  cubcb  las  casas  y  para- 
baoor  aitesas^JEale  aneal  tienfi  5.tog||ia»r46  largo  y  da  4  á  2  deancha*, 
Eiiveasialefol^'dala  c^taiOrÍMitolAe:6fita  la$^  desemboca  d 
rk^Secat  ^oaallí  «a  llaiBaFdalUaH>aw  Ge  Bavfi^l^  y  ¿madldagoa 
se  sube  por  él,  haciendas  y  plantaciones  adornan  sas^ ricas  oriHafl^:, 
pefosBO/mni  l¿j06>da  aUasal.N».y.iá.S.  halgamde$.c¡éi)agas  Uam»- 
dus  del  liai^*  qjaa^tieDea.da  4  á  5  legifuis.  fistasjí^iáBagf^aestáa  cih' 
b¡fictaadey^rt>as.afii}átíca&>yabimdaa^>caKi8CÍa%  SiH^terrenoa0Ír^ 
cimvacúiosesl^uii.  llenos- de  mangles  qn»  par  al  N;  se  unen  al  ^n^^ 
da^anaalda  SiaaBiaica.i^  por  el  &  é  onos^terroaos  cubiertos  «te  <ar<<- 
bu^taa  y:  algunas  sabanetas».  La  laguna  de  Sinamaina  tiene  2.1eg9aa ' 
dalaciQ>y  Dinas  iantastáe^aaoho.:.  su  abondanoia  en^fiie^is  bace^^e- 
allí  r^esidaii  losiodios^uenoaealiaienlan*deotra«asQ.;^'SU:posicíoQ 
en  medio  del  agua  les  facilita  la  pesca  y  los  lil^eria  de  Jas  picadu«<* 
raade  losrinaa%ui|oaff]e  abuodaa  sotvamaneri  encías  coslas^uie- 
ffada£L 

La  laguneta  de  Bernal  queda  en  la  costa  al  orieuta  da^Berijé^  Y: 
eniiM«deiH3«tbQ«attlos)riajilb^k»Sk  i«M  fS^  lfQada5(qga)6alor- 
DMiU: enlas aabanaa'qii^reatán «eraarde  fíeríiá;  ábundaiaurpeieayy 
está  bi«nfabri§*dak 

Qtm  llamada  la  bagnoata^  se  -  encuentra  eq  lamitadde  la.  casta, 
oofttdenlali^fcil  la^^  r.tíesa.dos' bocas- por:  donde  pueden  ^(lar  ba- 
landfOB»  y  |)eqiioSas- goletas^  Laf.Lagwatatienadfi  anobooercarda 

4  iaguai^  y  5'dal»Bo«.  £aHa:C6sta,occádenta}  estarla  ensenada  daNlas 
D<«a0tf}aaqna>porrunL€ane  sap  comunica:  á  ki  laguna»  del  Garasro»^^ 
So  pmsdo^tambfe»  aabir  «nbaroatoaV  cano.  Manatíes  y  al  ^icEobo. 
qtt%a(hcofliuni«Btt  canJa  lagunac J)]^Q  liaiiiie}/,daagpas  negifiB^4o^ 

5  lagoaa  de  largO'y  maa  de  4  4/2^  da  aneliO).  Na^naui Jj^da.  esta  se- 
baUa  otm  grau  laguaavti&viihda^  también  da  JuanoManual,  cuyas 
aguaaso»  blancasií 

Bara  iciéelfo  as  fojttiíaa^aftti^ desda  el!lagO!  pos  la^aiBeaada  da^ 
GoagO).  y  per  «¿  nb'ftrayef  aalk  basta  dar.  oalif  la  laguna' qiietiene^ 
casi  5  leguas  por  cada.f^aMw^e^lodaft^bttiafeutídanGkrde  peses; 
pamiios^iilhÉ  aatát^aneg«i^fi1f  esidi£ítílenuai|irte  uu:  lug^  seoo, 
paradbaÉMÉcáan  laipeÉiumaL. 

Ofed|)iiai^da:laiiagBiMAa^<ártpiiea>dilta!ieia)  estala  eikémda-ákbla- 
guBakdr;dlag¿  qua^tíeaa  lllaa^4»'le||lla^y^  ea  riea  m  peses^  Ger^oa  de^ 
estabsa.^btfar }at.eiMtmimá»t€smm  poelarisQalae pm^da enlrar al 


—  464  — 

rio  Bravo  para  ir  á  la  lagaña  de  Joan  ManneT,  de  qne  iiemos  habla- 
do. A  legua  y  media  se  encuentra  la  boca  del  rio  Negro  que  es  un 
brazo  del  Gatatumbo,  y  subiendo  este^  á  menos  dé  5  leguas  se  ha* 
lian  á  derecha  é  izquierda  dos  lagunas,  la  del  Norte  y  la  de  hs  Gar- 
zas, la  primera  con  mas  de  2  leguas  en  todas  direcciones  y  la  t&lfti* 
ma  mas  pequeSa. 

*  La  laguneta  del  Zulla  es  la  mas  grande  que  tiene  la  provincia^ 
aun  cuando  así  no  parezca  por  los  árboles  caídos  que  hai  en  ella,  y 
los  muchos  juncos  y  encales  que  salen  de  sus  aguas.  Tiene  -10  1^ 
guas  de  largo  y  5  de  ancbo  :  está  formada  por  las  aguas  que  derra- 
ma el  Gatatumbo,  por  los  caños  Blanco  y  Guasimal  y  también  por 
las  aguas  de  la  selva  plana  que  está  entre  el  Zulía  y  el  Escalante. 
Desemboca  al  lago  por  medio  del  río  ¿irimbai,  y  al  rio  Escalante 
por  el  caño  Represa.  A  ella  no  pueden  ir  sino  pequeñas  embarca- 
ciones, porque  no  es  mui  honda. 

Aquí  es  el  lagar  de  hablar  de  las  grandes  ciénagas  que  tiene  este 
territorio,  las  cuales  forman  casi  un  semicírculo  al  rededor  de  la 
laguneta  del  Zulia. 

A  poco  mas  de  legua  de  la  boca  del  Zulia  ó  Escalante  está  la  pun- 
ta de  Aguacaliente,  y  á  su  frente  en  el  interior  de  la  selva  existe  la 
ciénaga  de  este  nombre ;  parece  que  sus  aguas  tienen  en  efecto 
una  temperatura  mui  alta.  En  los  fuertes  calores  se  ve  constante- 
mente en  este  lugar  un  relámpago  sin  esplosion  que  suelen  llamar 
los  navegantes  el  farol  de  Maracaibo,  por  estar  en  su  meridiano 
y  el  de  la  barra.  Tiene  esta  laguna  cerca  de  media  legua.  A  poco 
mas  de  una,  hai  olra  del  mismo  tamaño  qne  se  comunica  también 
con  el  lago,  y  que  se  lenombra  Boyera.  Tres  leguas  al  N.  de  esta  se 
encuentra  la  ciénaga  d^anta  Bárbara,  que  por  un  caño  se  comu- 
nica con  el  Escalante  y  por  otros  con  la  gran  ciénaga  del  Ghamaque 
le  queda  al  oriente,  á  poco  mas  de  media  legua.  De  N.  á  S.  tiene 
4  leguas  de  largo  y  5  de  E.  á  O.  Desagua  por  5  ríos  y  un  caño  al 
gran  lago.  Tiene  cuatro  islas  en  donde  desemboca  el  Ghama,  y  una 
porción  de  árboles  caldos  acarreados  por  las  corrientes  hajd  sido  la 
principal  causa  de  formarse  esta  gran  ciénaga. 

Al  O.  de  ella  está  la  de  Ooia,  producida. por  el  río  de  este  nom«- 
bre  :  tiene  tres  islas  y  el  resto  está  cubierto  de  ^Itas  gramíneas  y 
plantas  acuáticas.  Desemboca  al  Escalante  por  5  caños,  tiene  ^  1^ 
guas  de  largo  y  5  de  ancho.  Casi  al  poniente  de  esta,  y  á^  leguas  de 
distancia^  está  la  .gran  ciénaga  de  Morpturo,  formada  por  vanos  ríos  ^ 


—  465  — 

la  cual  tributa  sus  aguas  al  Escalante  por  medio  de  5  ca&os. 

Al  O.  de  esta  con  un  poco  de  inclinación  al  N.  y  á  distancia  de 
7  leguas,  está  la  ciénaga  de  Motilones,  formada  por  los  derrames 
de  las  selvas,  comunicándose  por  un  caño  al  rio  Zulia. 

Al  N.  de  esta  se  encuentra  á  4  leguas  la  de  Mariana,  que  tiene 
2^/2  leguas. 

Al  poniente  de  la  de  Mariana  y  como  á  2  leguas  está  la  de  Balder- 
rama,  que  tiene  A  leguas  y  dista  una  de  la  lagtineta  del  Zulia  qae 
ya  hemos  descrito.  Estas  dos  ciénagas  son  las  únicas  que  no  tienen 
comunicación,  y  están  formadas  por  las  aguas  de  las  grandes  sel- 
vas que  se  estienden  á  derecha  é  izquierda  del  Zulia. 

En  la  parte  occidental  del  lago  bai  también  algunas  ciénagas  que 
merecen  nombrarse,  lales  como  las  de  los  Potreros,  del  rio  Palmar, 
la  de  Quiriquiri,  Garcita,  Bbca-Vagre  y  Gucuitos. 

En  la  parte  oriental  está  la  gran  ciénaga  de  Lagunillas  que  ocu- 
pa cerca  de  5  leguas,  toda  ella  cubierta  de  yerbas  acuáticas  y  mu- 
chos manglares.  También  existen  cinco  ciénagas  formadas  por  el 
rio  de  Tamare;  las  dos  de  Temblador,  así  llamadas  porque  sus  ter- 
renos se  hunden  al  menor  peso;  y  últimamente  la  de  Mene,  forma- 
da por  el  rio  de  este  nombre,  y  en  la  cual  hai  una  mina  ábuiKlante 
de  este  mineral.  ' 

Hai  ademas  una  ciénaga  cerca  de  la  ensenada  del  Gallinero  y 
una  en  la  boca  de  Abare,  llamada  de  la  Seiba.  Todas  ellas  están 
siempre  llenas  de  aves  j  y  producen  junco  en  abundancia  para  la 
fabricación  de  esteras. 

> 

CLIMA. 

• 

£1  clima  de  esta  provincia  se  puede  dividir  en  dos;  uno  cálido  y  se- 
co, otro  húmedo  y  malsano.  El  primero  se  encuentra  en  todos  aque- 
llos terenos  que  por  su  aridez  apenas  producen  algunas  plantas  ca- 
nosas. Por  la  descripción  de  las  orillas  del  lago,  se  puede  ya  venir  en 
conocimiento  de  los  lugares  que  son  salubres  ó  enfermizos.  Sin  em* 
bargo ,  se  puede  decir  que  las  orillas  del  lago  y  las  tierras  que  1q 
rodean,  cubiertas  de  espesas  selvas  y  terrenos  ánodos,  son  todas 
ie  un  clima  enfermizo ,  pero  á  medida  que  el  terreno  cesa  de  ser 
anegado  y  sin  bosques,  se  encuentra  un  temperamento  sano.  £1  calor 
seria  escesivo  si  no  fuera  refrescado  por  las  fuertes  brisas  del  N«, 
que  según  hemos  dicho  tienen  lugar  en  febrero ,  marzo  y  abril.  £s- 


—  466  — 

tas  son  reemplazadas  por  los  Tientos  del  S.  en  los  meses  de  mayo^ 
fiitto,liflk>r  agfiíBto^  ápoeaMen  ^e  son idtdtes fas  agttas  en  todo  él 

ESTACIÓN  DE  «MH^ICRNO. 

En  los  cantones  de  Maracaibo  y  Altagracia;  situados  «eiy;a  de  k 
<eotoi^  ée  ah  terreno  ¿rido  y  leco^  Vttme  poeo  «n  mayo ,  y  en  los 
iaps«s  de  Mío  7  agosto  es  veramo;  Tuélve  á  tlorer  en  setiembre^ 
netobre  y  iiovi«mbPe,  y  en  los  d^nas  meses  faai  Quedad.  No  sn- 
^éivde  asot  es  el  estreno  liel  la^  4oB4e  suele  Uo^ er  <lesde  el  mes  db 
mayo  hasta  oelffbré  f  en  los  deaa«  meses  tío  faftán  aguaderos.  Debe 
.oiptritair  poderosamente  á  «sUns  11»vias  la  g^an  masa  tfe  h  ev^apo- 
Meion  diaria  del  lago.  Acnmtfiados  en  la  atmósfera  eslos  vapores 
son  empujados  por  los  victos  káeia  el  estremo  del  lago,  y  atraídos 
-ftiSí  ipwrias  inoMsisas  «elvas,  se  detienen  y  desdenden  en  lloiias.  En 
ios  lugares  en^qne  desemboca  el  Catalwmbo,  parece  qvttse  acomti¿- 
lan  mas  frecnentementa  los  chnbaseos  y  tñlí  el  t]Hiem>^y  les  telám'^ 
pagos  asusta»  continuamente  al  fNifegante  :  parece  <]tie  la  mfateña 
eléctrica  está  concentrada  en  aquello»  parajes,  en  les  cuales  se  ob<^ 
'MTva  todas  ]M  noebes  un  fenómeno  1  ominoso  qne  es  como  un  re- 
lámpago que  de  tiempo  en  tiempo  enciende  el  aire.  Desde  la  mar 
«e  mira  como  si  estuviese  sobre  la  ísfe  de  Toa»  qtte  está  casi  en  el 
OBérídiatto  dé  la  bairra  de  Hí araoa4i»o  :  pasa  sobre  fas  bocas  del  Cata- 
itiflibo^,  y  «ípve  de  gaia  á  los  marinos*  ¿Será  acaso  d  diespreridí* 
miento  del  gas  hidrógeno  en  las  grandes  exhalactonesde  los  panta- 
nos que  ocupan  un  inmenso  espacio  cerca  de  las  bocas  del  Cala- 
tumbo  ? 

El  viento  del  E.  es^asi  constante  :  todas  las  madrugadas  sopla 
de  kw  2  á  las  7  de  la  maSana ;  calma  entonces^  y  entre  las  S  y  las 
-H  r^na  el  viento  del  «.  en  los  meses  de  mayo  á  agosfomncbas  ve- 
im  basta  la  tarde,  y  vuelve  i  whnar  hasta  las  «4e  te  noche  qué 
m^  la  bdsa  entre  el  N.  y  N.  N.  E.  En  ios  meí?es  dé  setiemtré  y 
«t«lwe  baí  muchas  calmas  y  á  vezes  teínan  vientos  delN.  O.  Entré 
MiiiimiiDe  y  dioieííibre  empiezan  las  brisas  del  N.  E. ;  pero  siempre 
eainhn  ilespoes  d^^nedla  noche  y  son  reemplaíáldas  de  madíogada 
«a»  «I  viento  del  Si,  hasta  qne  estando  eJi  sol  muí  efevado  sobre  ét 
tom¿die"se  présenla  de.  nuevo  la  brisa.  • 

Eti  loís  m  síís  de  marzo  á  octubre  los  ealoreá  son  éscfeiYOS.  Cüán- 


w 


— .4*7  — 

I,  • 

do  hai  calmas ,  son  insoportables  á  causa  de  la  reverberación  de 
los  arenales. 

DITISION   TERRITORIAL. 

Se  divide  esta  provincia  en  5  cantones,  que  son  Maracaibo,  AI— 
(agracia ,  Perijá,  Gibraltar  y  Zalia,  que  comprenden  ^  9  parroquias 
y  50  vecindarios,  en  iDs  ctidles  se  cultiva  cacao,  arroz,  cocos,  plá- 
tanos, maiz,  ynca,  calabazas,  café,  algodón,  cafia  de  azúcar  y  hor- 
talrias  de  tófla  especie. 

Él  total  de  la  poblacfot  de  ésta  provintíia  sepíeíle  dividir  dfel 
táodó  signtetite  :  4B/1 00  que  se  dedican  á  la  agrlclittura ,  ^  5/4  00  i 
las  mias  y  40/100  al  córtiercio ,  artes,  éie.  Tenia  ésta  pt'ovincía  eh 
-ISáffj  el  iráinepo  de  54^6  eitíbattacíones  para  trasporte  de  tropaáí, 
y  toas  íie  1700  eiitre  bbtígos,  botes  y  rafncih&s'que  ííavegan  poir  fel 
lago,  á  los  que  si-damos  5  individuos  por  cada  eínbarcacion,  tendre- 
mos 6000  entregados  á  la  navegación.  í)e  éstos,  algunos  ííon  pesca- 
dores y  otros  conductores,  cuáles  criadores,  agricultores  y  navegíiii- 
•tesálavéz. 

Las  naci(mes  que  concurren  al  mercado  de  Maracalbo ,  son  los 
Estados -Unidos  de  Norte  ^América,  los  dinamarqueses  ,  principal- 
mente deia  colonia  de  Santómc»; ^  Inglaterra,  Francia,  Alemania  <y 
HolanJa ;  para  las  cuales  se  esportan  no  solamente  las  producciones 
del  país,  ^0  también  las  de  los  fértiles  valles  de  Cúcuta  pertene- 
cientes á  la  Nueva'^ranada.  Las  provincias  de  Mérida  y  Trujíllo 
traen  á  Mas^eaibo  sus  frutos  ^ara  venderlos  alli.  Los  artículos  que 
salen  de  este  puerto  son  :  añil,  cacao,  caféf  azúcar,  miel,  cera,  som- 
,i)rerps<de  p^ja^  cueros,  algodón  y  ^alo  de  tinte^  y  se  introduce  to- 
da ¿lase  de  mercancías  secas  y  caldos  ;■  efectos  que  después  se  llevan 
i  las  lirovincias  indicadas.  Se  hace  también  un  pequeño  comercio 
^coii  el  caat^  <^$igua  de  la  prevíacia  de  Coro.^  y  es  de  bamacaif^ 
jqii€SO)<3abita8  y  aimidon.  I^  Mérida  y  Trujillo  se  recibe  café,  cacao^ 
3)apelQi)|  miel^  azúcar,  conservas,  mantas,  pellones,  tabaoo,  pHa  y 
«verdasv  y  se  da  en  cambio  sal  ^  inercancias«ee$is  y  ^Idos.  De  los 
afiles  de  QÚGUte  b^a  priAci|>alfae]ite  el  cacao  y  se  lleva  á  ellos  «all, 
ftoda.clase  de  mercancía^i  UeoJ|e%  etc<.De  los  valles  de  Upar^  de  la 
|)rovíncia  4e  Santa  Marta ^  se  «straen  ganados»  • 


—  468 — 


CIUDADES   T   VILLAS   GABEZERAS   DE   GAJTrOir. 


CANTÓN  DE  MARACAIBO. 

La  ciudad  de  Maracaibo  debe  sa  nombre  al  cacique  que  domina* 
ba  en  el  lago  cuando  por  la  primera  vez  esploraron  los  europeos 
este  punto  de  la  Gosla-Firme.  En  ^  499  Ojeda  y  Yespucci  entraron 
en  el  golfo  de  Maracaibo^  llamado  por  los  indios,  de  Coguibacoa; 
pero  los  descubridores  le  dieron  el  nombre  de  Golfo  de  Venecia, 
y  de  esta  denominación  resultó  el  diminutivo  Venezuela  ;  así  es 
que  Maracaibo  es  la  cuna  del  nombre  de  esta  república.  El  lagar 
que  boi  ocupa  la  ciudad  es  el  mismo  en  que  Alfinjer  en -1 529  cons- 
truyó varias  casas  y  formó  un  depósito  de  mujeres  y  ñiños  que  de- 
jó con  escolta^  mientras  él  iba  á  recorrer  las  orillas  y  rios  del  lago, 
haciendo  prisioneros  á  los  infelizes  indios  que  envió  en  seguida  á 
Coro,  vendiéndolos  como  esclavos.  Ea  1574  fundó  la  ciudad  el  ca- 
pitán Alonso  Pacbeco,  dándole  el  nombre  de  Nueva-Zamora,  des- 
pués de  una  guerra  de  5  años  que  sostuvieron  vigorosamente  con- 
tra él  los  indios  Zaparas,  Quiriquires,  Atiles  y  Toas  que  residían  en 
U  circunferencia  del  lago.  En  4595  Gibraltar  fué  fundada  por  Gon- 
zález Pina  Lidueño.  Despoblada  poco  después,  fué  reedificada  por 
Juan  de  Chazarreta.  Destruida  de  nuevo  por  los  indios  Motilones  en 
el  año  de  \  600;  lo  fué  también  por  el  pirata  VOlonais  en  A  665  y  5 
años  después,  es  decir,  en  4668,  sufrió  el  saqueo  del  pirata  Fran- 
cisco Gramont.  * 

Gibraltar,  por  lá  fertilidad  de  sus  tierras ,  era  en  aquella  época 
mas  rica  que  Maracaibo,  en  donde  no  habia  sino  unaschozas  de  pes- 
cadores. En  este  punto  fué  donde  el  filibustero  Gramont,  después 
de  haber  saqueado  á  TrujíUo  y  cuanto  encontró  en  su  paso,  supo 
que  la  escuadra  española  estaba  fondeada  en  el  Tablazo  para  im- 
pedirle la  salida.  Formó  entonces  con  uno  de  sus  buques  un  biuló 
y  salió  del  punto  de  Maracaibo  con  viento  y  marea  favorables.  Gon 
el  bruló  incendió  una  de  las  fragatas  españolas,  mandada  por  D. 
Alonso  del  Campo  de  Espinosa  y  tomó  las  otras  que  estaban  á  la 
salida  del  Tablazo.  Después  de  una  estratagema  mui  singular  hecha 


—  469  — 

al  comandante  del  Castillo  de  Zapara,  pasó  sin  recibir  ningnn  daBo. 
Hasta  el  año  de  4678  Maracaibo  dependió  de  Caracas,  fué  des- 
pués agregada  á  Mérida ,  y  por  último  vino  á  ser  capital  de  la  pro* 
yincia. 

Los  jesuítas  tenian  un  col^io  en  Maracaibo,  <}0e  fué  suprimida 
poco  después  que  la  orden,  y  con  él  cayeron  también  los  estableei-* 
mientos  de  instrucción  pública  que  había  en  la  provincia.  Maracaibo 
ha  presenciado  una  de  las  batallas  navales  mas  célebres  que  han 
tenido  |ugar  en  la  guerra  de  la  independencia ;  los  generales  Pa*> 
dílla  y  Laborde  mandaban  las  fuerzas  beligerantes.  Allí  concluyó 
sus  incursiones  el  atrevido  Morales^  quien  tuvo  por  fin  que  capitu- 
lar para  abandonar  el  pais  que  fué  el  teatro  de  sus  hazañas  y  de  sa 
elevación.  La  ciudad  está  situada  en  la  latitud  40''  44^  N^  y  en  la 
k»gitud  4''  44^  al  O.  del  meridiano  de  Caracas,  á  44  varas  sobre 
el  nivel  del  mar,  del  cual  dista  7  leguas.  Está  fundada  sobre  un. 
terreno  arioso,  y  su  clima  es  seco  y  cálido.  Su  temperamento  es 
todavía  mas  caliente ,  porque  el  viento  allí  es  demasiado  suave  y 
nada  regular,  el  terreno  no  está  regado  por  ninguna  corriente  y  la 
lluvia  es  escasa.  ,     . 

Los  meses  de  julio  y  agosto  son  serenos ,  á  menos  que  el  viento 
del  S.  interrumpa  su  calma ;  á  este  viento  llaman  el  destructor j  á 
causa  de  su  malignidad.  Se  observa  que  cuando  los  vientos  son  mo- 
derados el  año  es  lluvioso,  y  cuando  son  violentos,  seco.  Maracaibo 
está  sujeto  á  tempestades.  El  trueno  rompe  la  nube  con  una  esplo- 
sion  terrílica  y  el  rayo  cae  y  consume  lo  que  encuentra.  Sin  embar* 
go^  no  se  esperimentan  aquellos  huracanes  que  visitan  con  frecuen-^ 
cía  las  Antillas. 

Las  lluvias  copiosas  que  traen  estas  tempe^des,  formau  un  tor- 
rente que  atraviesa  la  ciudad  con  una  rapidez  inconcebible^  cau- 
sando algunas  vezes  graves  perjuicios. 

La  parte  principal  de  la  ciudad  está  á  la  oríHa  de  un  pequeño 
golfo  que  tiene  2  millas  de  largo,  y  sé  estiende  hacia  el  poniente.  La 
otra  parte  está  construida  sobre  una  eminencia  al  N.,  mirando  al 
lago,  que  allí  tiene  5  leguas  de  ancho.  Desde  esta  parte  de  la  ciudad 
se  goza  de  una  vista  hermosa  sobre  el  espacio  de  $gua  «n  que  na-^ 
y«gan  las  embarcaciones  que  vienen  ó  van  á  la  villa  de  Altagracia, 
que  se  descubre  á  lo  lejos  sobre  la  ribera  opuesta.  Esta  sirve  de  lí-« 
mite  al  paisaje  que  parece  salir  del  seno  de  las  aguas,  formando  su 
fondo  los  cerros  azules  del  Empalado  que  se  pierden  sobre  el  rio  Pal* 


^  470  — 

mar.  De  la  otra  parte  de  la  ciúdad^  se ^za  de  otra  vista  mas  bell^ 
todavía,  sobre  el  pequeño  golfo  que  sirve  de  puerto.  Los  buques  que* 
a!fií  se  Ten  andados,  Ibs  botes  que  atravdesao  en  todas  direcciones^ 
la  orilla  opuesta  sembrada  de  grandes  cocales  á  cuya  sombra  bd^ 
moltUttd'de  casitas  de  recreo,  lindas  y  bien  distribuidas,  una  colñía 
pedregosa  con  algunas  plantas  áe  eactm  elevados  que  se  descubreili 
sobre  el  fondo  de  uncíelo  puro  y  sereno ;  lo  iluminado  de  la  parte* 
superloii  de  esta  escena,  y  lo  sombrio  de  la  inferior  que  está  al  niirei' 
del  agua,  forman  una  oposición  hermosa  y  pintoresca. 

*  Bl- lugar  en  dónde  empiesa  la  ciudad  se  llama  punta  deMaracsii- 
bo;  aquel'donde-  el  golfo  comienza  se  denomina  punta  dé  Aríet», 
y)«n  ft-ente  se  baila  la  pUfHa  de  Santa  Lucía,  á  2>mififts  d^dtstancllít 

'  Bti  Maracaibo  bai  bastantes  casas  construida» eon<  n^ucho  gusto  ;- 
pero  en  medio  de  ellas  suelen^  leerse  otras  cubiertas  de  enea  qe» 
presentan  un  contraste  singular,  no  muí  agradable- ala  vista  :  silp 
embargo,  la  oonstruocion  se  mejora  y  van  desapaced^tdo-Mis  habl^ 
tadones  de  poea  solidez  y  comodidad;  Las  calles  que  se  estiendM 
perla  ofHIadel  lago  ofl^eeeuunaperspeeti  va  agradable.  Gisno  ÚM^ 
parle  de  la  ciudad  está  sobre  una  pequeña  esplanada  cuyo  deblive 
síB-estiende  bácia  eMage,  se  ven  los  edificios  como  en*  anfiteatro,  mi- 
i^ndolos  de S^.  á  N;,  y  á  los  dos estremosde  laeltfdad ,  ua^lerreno' 
bárraiicoso  sembrado  de  pequ^as*  casitas  con  algunos  árboles^,  éá^ 
un  carácter- particular  al  paraje. 

*  Maracaibo  tiene  un  eolegk)  y  varia»  escuelas,  entre-oíras  una  di^ 
ndfttiiea;  Depons  dice  que  en  Maracaibo  se  ven  jóvenes  laní^^ored* 
dos  por  la  naturaleza,  que  la  mas  tijera  instrucción  elemental  dei-i- 
arrolla  sus  facultades,  lo  que  no  se  consigue  cq  Europa  sin  un  laf • 
go  estudio  y  sin  buenot.  maestros.  En  Maracaibo  bai  mucha  afición 
¿^ la  música,  particularmente  en  las  mujeres,  que  genendmente  to- 
can el  harpa. 

A  pesar  del  continuo  y  escesivo  calor  que  se  siente  ei^  Maracaibo, 
éste-  lugar  es  sano ,  libre  de  epidemias^  y  luego  que  una  persona  se^ 
Ma  aclimatado  en  él,  conserva  inalterable  su  salud ,  tan  bien  ó  me^ 
jor  que  en  otros  parajes  donde  el  calor  es  minios  ibtenso  y  bai  nra^ 
FBeHí^)»  para  réfk*e8caFse¿  En  julio  y  agosto,  cuando  el  áireeslá  muí 
OfiUonte,  el  preservativo  mas  común  contia  los  malos  efeefo»  dHiF 
cliooa  es  tomar  bailoe  fttseuentes  e»  el  lago,  la-cfiales'  una  oastumn 
]|i«e  tan  general,  que  á^todas  horas  bai  gen  te  bajándose  á  susiorllta»^ 
principalmente  de  madtiiiígadli«  Eft  c^iapartedéMago  no-bat  animti^^ 


M^paaU)0,  e^  ialiresante  por,  »u  po&ieioft  geográics^,  sea.  que»  «^^ 
efHd^íd^ce  fcama  pi}Alo  mUitor  y  dd^coo^ftceio,  biea^conio  da  agci^i^nT 

,  £$  el  al»  izqpierda  de  la  defeasa  de  la  repúbiiot;  y  el  qi»e  poMari 
sOrlaga  aniena^  dei  flanco  á  laNiieYa^Grasada  y  á  las  proviaciaa  d^ 
Coro^  y  Bar^Wiúiaeto,  de  íreaie  á  laade  TrujiUo  y  Mérida,  y  puediet^ 
alUUma^^de.sevesilasd^ioas. 

Maracaibo  es.el  depósUo  de  las  produocioiies  de  sus  pwMas^  el  dft ; 
la&^pFOvineiaS'del  iafteríoc  y  el  de  los  (ertilos  valles  da  CúcaIi^  paf  t0<- 
Decientes  a  la  Naeva-Oranada.  Los  buqaes  de  Bnm^  y  daAaiéiisiiK 
taq^ie»  deposita»  al)i  stts  mereaocíatf  qp^tfiedenama»  de^iHips 
en  todas  direcciones  por  los  pueblos  y  provincias  indieadas>  de  iMn. 
do  que  Maracaibo  es  un  verdadero  emporio. 

Con  dificultad  se  encQQlcará.  eu  Venezuela  una  vegetación  faa 
lujosa  como  la  de*  estremo  del  lago,  en  donde  parece  que  la  tierra 
eatá'  agaviída:.  cob:.  el  pesa  de  «Dmnes  y  otKrpuleutot  4fl)oIe&  que  ja* 
miiiilBiOv8tdof  tooadofr  por  d^heoriM».  CkMBde  uaa.  miflauroia  emi^ 
gcffGÍoa;  hábáfee  .eato»'  piuf|É0i  tereenes^  entónve»  se  disiparáa.  loi«< 
nitasKias  qua^to»  baaen  boi*  ioaviKfbrefr)  y  <d  agrícullo«  podtá  recv*^ 
bi«  lo»biique»de>£iirofM  ytéeflfMnharloften.9u.miaqia^íiaeieada.  iái< 
neo^dad  es  q]M>eatan.lMrllabát^Bte»déraeCa}paI1leide^l«go,  déJto»< 
Vafi  ]d»pi(fifaick)Sváa8iuJiiiiastoi%á>fa  capitel  ^t  » la.  parte  mna  poi^^' 
bládli  r  T  ^^  ItiGBO  qoBle»  offieaer  uhhi  abliBda»te?  posea ,  Im  iagtios. : 
desde*  jénanas  áidedinaesfiíálli  B«re(pieíaiit'  y  ¿sop.pM»!»  uncís  a»** 
catates  itia»ineR>»^.  nadadóne»  y  iMiBQB. 

SlosdOiBJiiiee  hw|BBs>que!  iiay^ifMi  eu  Ib»  ooafes  veeioos  seioofofit*» . 
ti*uiSjeu:fl|v:MaraaaibO)  el  eud  posean wntBja^peeiilfBres  para laioatts^i 
tra«6iontna«aU 

Las  parroquias  de  este  caatoa  son,  Maraaaífao*,  SúsamaioB,.  Mojanr* 
y  la  Gaaada. 

CANTÓN   DE  ALTAGRACIA. 

hm  TÜhft  dé  Alta0raB¡«»aftái  nluada.eii  Im  métt»  atieniai  del  lugOf, 
i4lflaiHaft'di8lÉttleAel  flM».  i»  díÍH«iiÉ«ftgr»|Mt'4e0OíMibaa^q^í 
eiriaianihs  oríMia« del» agua,  hpeispictnardvrlodastaoealar.efMftaBjip' 
CaTflobvé  (fljdbp^lacittdaéda  Sianuaibacf  diiaitoabiftiliiiiÉaMhítT 


—  472  — 

esta  TÍOa  ana  Tbta  agradable  é  interesante.  Mirando  al  S.  se  des- 
cubren á  lo  lejos  las  colinas  qne  se  estienden  desde  la  punta  de 
Santa  Luda  hasta  la  de  S.  Francisco,  bajo  un  délo  puro  y  sereno ; 
mientras  que  al  opuesto  hacia  el  N«  se  confunden  las  aguas  con  ét 
cielo,  y  una  atmósfera  oscurecida  por  el  polvo  impide  Ter  la  tierra 
baja  de  la  ensenada  del  Mojan  :  la  isla  de  Toas  se  eleva  en  medio 
de  las  aguas  como  cubierta  de  un  velo.  La  parte  estéril  de  este  can- 
tón es  la  que  está  habitada  y  algunos  puntos  de  las  orillas  del  lago/ 
lo  demás  se  halla  casi  desierto.  Guando  las  montañas  de  Siruma  es- 
tén cultivadas,  entonces  tendrá  mas  importancia  esta  Tilla  de  la 
que  en  el  día  tiene,  ya  por  la  salubridad  de  su  clima,  ya  por  su  in- 
mediación á  la  capital. 

Las  parroquias  de  este  cantón  son,  Altagracia,  Rita,  Gabima,  La- 
gmiilla  y  Siruma. 

CANTÓN  DE  PERIJÁ. 

La  villa  de  Perijá  es  el  único  pueblo  que  tiene  este  cantón.  Está 
situada  sobre  una  pequeña  elevacÍMi  rodeada  de  una  hermosa  sa- 
bana, desde  la  cual  se  ve  la  sierra  de  su  nombre  y  varias  colinas  que 
están  al  poniente.  Al  E.  la  vista  se  pierde  en  las  sabanas  de  Sarta- 
nejo,  mientras  que  al  S.  unos  cerros  azulados  >que  se  divisan  in- 
dican la  dirección  de  la  cordillera  que  viene  desde  Ocs^a  y  i  cuyos 
pies  están  los  llanos  del  Apon,  ricos  en  ganados.  Al  N.  impiden  al- 
g«nos  arbustos  que  se  vea  la  montafta  fértil  que  costea  el  rio  Pal- 
mar, la  cual  se  eatiende  hasta  el  pié  de  la  serranía  que  separa  el 
valle  de  Upar  de  la  proyincia  de  Maracaibo.  Pocos  son  los  terrees 
cultivados,  porque  la  cria  de  ganados  es  la  principal  riquesa  de  los 
habitantes.  La  villa  de  ^rijá  va  prosperando  por  las  ventajas  que 
le  ofrece  su  posición  en  el  camino  que  va  al  vallo  de  Upar,  á  Mara- 
caibo y  las  tierras  de  cria. 

CANTÓN    DE  GIBR.VLTAR. 

La  antigua  ciudad  de  Gibrallar  esla  única  población  grande  que 
hai  en  la  parte  meridional  del  lago,  bien  que  en  ella  hai  mui  pocos 
habitantes.  El  terreno  es  mui  úül  para  cacao,  d  coal  crece  espon- 
táneamente en  las  selvas ;  así  es  que.  en  este  distrito  se  hallan  las 
minores  plantaciones.  U  posición  de  Gibraltar  ala  orilla  del  lago. 


—  475  — 

es  bella,  está  en  la  dirección  del  camino  mas  corto  que  pnede  ha- 
cerse para  ir  á  Marida,  con  una  montaña  al  S.  que  se  estiende  hasta 
la  a^ta  serranía,  toda  desierta  y  dé  una  fertilidad  asombrosa ;  está 
bailada  por  muchos  ríos  qne  descienden  de  las  cordeleras  á  tribu- 
tar sas  agnas  al  lago.  Cuando  aquellas  tierras  tan  ferazes  estén  des- 
montadas y  cubiertas  de  haciendas  y  de  pueblos,  entonces  será  Gi- 
braltar  otra  ciudad  :  será  un  punto  de  comercio  y  estará,  menos 
espuesta  á  las  fiebres  intermitentes  causadas  por  los  derrames  de 
los  rios  y  por  una  vegetación  viciosa. 

Las  parroquias  son  Gibraltar,  S.  Pedro ;  BobureS;  SeibaySei- 
bita. 

CANTÓN   DEL  ZULÚ. 

La  villa  de  S.  Carlos  del  Zulla  está  en  la  ^árgen  izquierda  del 
rio  Escalante,  en  medio  de  un  terreno  cubierto  dé  bosques  que  no 
le  dejan  otra  vista  que  la  del  río.  Sin  embargo,  su  posición  á  la 
orilla  de  un  rio  navegable^  que  puede  llevar  todos  los  productos  de 
las  haciendas  que  se  vayan  formando  en  el  interior  de  unas  tierras 
fértilísimas  é  incultas,  podrá  ser  de  alguna  importancia,  cuando  se' 
desmonten  las  grandes  selvas  que  hai  entre  el  Escalante  y  él  Zulia. 
Su  clima,  á  vezes  enfermizo,  se  mejorará  con  los  cultivos,  y  las  ha-^ 
ciendas  productivas  que  boi  cubreú  las  orillas  del  rio  tendrán  en- 
tonces un  mérito  tanto  mas  grande,  cuanto  mas  aumente  la  pobla- 
oíon. 

La  distancia  de  S.  Carlos  al  lago  es  de  8  leguas,  y  pueden  su- 
bir en  este  espacio  y  aun  mas  arriba  embarcaciones  regulares.  Este 
rio  sirve  de  canal  natural  á  las  producciones  de  las  haciendas  de 
Bailadores  que  están  al  revés  setentrlonal  dfla  cordillera,  y  con  el 
tiempo  vendrá  á  ser  una  ciudad  comercial  y  rica  por  sus  produc- 
ciones de  agrícultura.  Los  inmensos  terrenos  de  este  cantón,  que 
se  estienden  entre  el  rio  Santa  Ana  y  el  Catatumbo,  y  entre  este  j 
el  Zulia,  estarán  llenos  no  solamente  de  haciendas  sino  de  pueblos 
y  ciudades  que  no  serán  inferiores  en  comercio  y  agricultura  á  las 
mejores  de  la  provincia,  porque  estarán  en  el  camino  que  va  á  los 
valles  de  Cuenta  y  á  la  sierra  de  OcaSa.  Los  buques  de  vapor  sur- 
carán aquellos  rios  para  recibir  las  producciones  que  darán  aque- 
llas inmensas  comarcas ,  habitadas  boi  solo  por  fieras  é  insectos. 

Sus  parroquias  son,  S.  Carlos,  Santa  Rosa,  Santa  Cruz  y  Pilar. 


TMfL/L  CCAfiMEAWA  de*  ia  partdo»  álteDiBÓMk»  (tete  cabezeras  di 
daflb  flb  «n  túnraB ,  texamiaá  IfaMÉ»,  pottMíoBabBOliitBs  rAtiva,  homlrtf 
y  los  fclaa  f  aa  aa  oniüaafc  |Mra.  Aq»  «if^artaiiiinii.. 


aOHftB 

de 

Hq^iqiQIK  jM^aOH^lUC^ 

Aitaraf 

T^pnfMrar  Cl^^mm»BLOSTBBIlM 

tura         ^'  Q^  8B  coiiPOn^ 
.-^    .  feOfrO^TOHB  mr  L.C/ 

LA9  C^OZBIUS 

DK  CANTÓN. 

Latitud  * 
norte. 

* 

Longitud  0. 
de  Caracas. 

el  nlfBl. 

)  düLnac. 
en  varas. 

d«|«fr^ 

oeníi- 
grado. 

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la.||0«ia«illí^4p  w  90i|iUi»<4P9^  ^  >^nfH  difri8imi.i|«mie6orUif  V^wisii^ela. 


it;on,  su  altura  sobre  el  uiye|,  del  mar,  s^  tempratmra,  /^pedia^,  cali- 
armas,  esclavos,  distancia  á  la  capital  de  iaproviucia  y  de  la  república, 


■veaaa 
bm«ro 
»  1«  c. 


«Idias. 


POBI.ACIOH  DI  LOS  GÁRTOüBS. 


Total 

d«U 
población' 
en   1839. 


990 

150 

400 

80 

800 


4490 


96.881 
4.790 
3.097 
5.094 
5.110 


» 


49.889 


Población 
*  relatHrft 

por- 
•    1.  t» 


79" 

5^ 

97 

5- 


ip,4- 


Hombres 
atik» 

pora  1*S' 
arinaa. 


i 


t'.900- 

3D0 

800- 
300i 


«I 


9;7C!p. 


Número 
de 

■   •  -   *  ■ 

esclaroi. 


4a 


I 

«5 


WBss^m 


Wft^ 


DISTANCIA 

9|(ifOf'cA.irToirBa. 


A  la  capital 
proTÍnetfe. 


: 


•' 


561 


S 

i8 
55 
40 


A  la  capital 

d«U 
Mfiiiblica. 


FRUTOS 

^git  i^fiütiTan 

para. 

LA  BSpÓetÁciOH. 


•13$ 'Vi" 

•  *      •  ■  ■ 

•  «  •       •  •  « 


y  I,  .  .  I    I   „-r-¡rjgjn 


Cocof^eafi». 
,     caifa.  IL 


,  Caté  V.  cácáo,nJ|go« 
don. 

OtféyCicto... 


*  •  »  • 


: 


) 


. . ""m  'u  >  i .  .  > .« I?.»!  "i  1  w  ■      ";■■  ■  u'  H I « j .  ,i!^r^!^^7T^frrr?r?m 


—  ne  — 


TABLA 

DE  LAS  ALTUBÁS  DE  LOS  CEBBOS  DE  LA  PBOVINCIA. 

Nombres,         yaroi.      SerrtmUu, 

Isla  de  Toas....!...     80....  Haracaibo. 
Empalado 8S0....  Sirama. 


iVomdre». 

Sierra  de  PerQá.. 

TeU  Guajira 

Sierra  Aceite 

.  iSOO... 

1                    ...  a 

4<»S.... 

....  Perijá. 
...  Guajira. 
id. 

TABLA 

DE  LOS  BIOS  DE  4''  ÓBDEN  DE  LA  PBOTIItClA. 


Vombrts*      Serrania,       Sudeiagüe. 

Totoli Periiá LagodeKa- 

raeaibo« 

Gnazare id id. 

Soeoiiito id id, 

Tbaas id ttf. 

GuayabiU id id.     ^ 

Ij^a id id. 

Tapial id fd. 

Palmar id W. 

Santo  Grillo.......  id id. 

Guerbo id ;.  id. 

Naranjo id id. 

Naranjito id id. 

Sin  Juan BnlaSabana id. 


San  Ignacio id... 

Apon Perijá. 

Cogollo id.., 

Hncoa id... 

Aponcito id.., 

Argnaco id.. 

Wo-Negro idé.i 

Aricuaaá id,. 


id. 

id. 

^. 

id. 

id. 

Id. 

id. 

id. 

Santana... ..*... ..  id....  ...*•  id. 

<k>neepeion....  Laguna id. 

Manatfee id id. 

Bobo id id. 

Bravo id id. 

Oro ; Pfcrijá 7..  id. 

Tara Salazar id. 

Sardinate id id. 

Negro id id. 

GaUlumbito id id. 

Birimbai Laguna id. 

Cmuqnena..  Giénaga Moro- 
tutu id. 

Morotuto id id. 

GoBeha Qénagadel 

Chama id. 

Cedro id id. 

Gareiu id id. 

Mueojepe....  de  Herida id. 

Goacf id id. 

Guanta id id. 


id. 
id. 
id. 
id. 
id. 
id. 


Hombres.       Serranieu       Su  desoífüe» 

Pina de  Herida....  Lago  de  Ht- 

racaibo. 
Santo  Cristo.  •  Bn  las  selyu 
deunrio..... 

Gongo id 

BIjao id 

Culebra id 

Basabe.. id 

San  Pablo id 

Torondoi....  deMérida.. ......  id. 

Gapiú. ...;..  deln^lo.......  id. 

Bosean id id. 

Gbioruri id id. 

Sanearlos id id. 

Uto. id id. 

Buenaylita id ..id. 

Poco id id. 

Gaus. id id. 

Cberegfie ».  id id. 

Sequion id •....  id. 

Carillo. ....  En  los  llanos 

del  rio  Metalan id. 

Tomocoro »«••.•.•  4(t»* ••••..*•*  id» 

Ceuta..... id id. 

Juan  Guillen id id. 

Barrúa» id id. 

PaujL deJirajara id. 

San  Juan id id. 

San  Pedro id id. 

Baya id id. 

Bio  Claro id id. 

Sicare id id. 

Hisoa Empatado id. 

Pueblo  Viejo id id. 

Ahorcado id •  id^ 

Parante, id. id. 

Chiquito id id. 

Temares Sirama id. 

Benites id id. 

Mene id id. 

AbrarOk.. ••......  id id. 

Palmar id, id. 


n 

4^ 


—  477  — 


PROVINCÍA  DE  TROÜLLO. 


SITUACIÓN  ASraONÓmCA,   ESTENSION  r   POBLAClOir. 

Esta  provincia  se  encuentra  de  los  8*  28^  á  los  9^  42^  de  latitud 
boreal ,  y  en  la  longitud  de  2^  59^  á  5<*  4 1^  al  O.  del  meridiano  de 
Carracas.  Su  Ggura  se  asemeja  á  la  de  una  alcarraza ,  es  la  luas  pe- 
quena  después  de  Margarita,  y  si  se  esceptúan  las  nieves  perpe- 
tuas, tiene  todas  las  presiones  atmosféricas  en  que  el  hombre  puede 
vivir,  desde  las  regiones  mas  cálidas  hasla  las  mas  frias.  Encierra 
teirenos  propios  para  cultivar  todas  las  producciones  de  tierras  cá« 
lidas,  templadas  y  frias;  y  en  estas  tres  especies  de  climas  se  en- 
cuentran terrenos  propios  para  la  cria  de  ganados.  De  valles  ame- 
nos y  fértiles,  se  pasa  á  hermosas  y  dilatadas  sabanas,  de  colinas 
frondosas  á  cerros  cubiertos  de  gramíneas;  de  los  campos  de  trigo 
i  la  región  en  que  solo  vegeta  el  frallejon.  Si  tiene  partes  habitadas 
en  los  flancos  de  sus  serranías,  en  otras  se  ven  cuestas  desiertas  y 
cerros  revestidos  de  una  lozana  vegetación.  Por  todas  partes  se  en- 
cuentran prados  y  sabanas  con  rebaños,  valles  y  cerros  cultivados, 
selvas  y  páramos  solitarios. 

£1  máximum  de  anchura  de  esta  provincia,  de  E.  á  O*  desde  el 
rio  Gburui:í  en  el  pié  de  la  cordillera,  hasla  las  cabezeras  del  rio 
Botonó ,  es  de  20  leguas ,  y  su  largo  de  N.  á  S.  de  25  i  ¡2  desde 
las  cabezeras  del  río  Barate  hasta  las  del  Paují.  Sus  leguas  cuadra- 
das son  562,  de  las  cuales  hai  66  baldías.  La  población  consta  de 
44y788  habitantes  que  están  en  razón  d^ -1 25,7  por  cada  legua 
cuadrada» 

iímixss  t  cosfimes. 

Confina  esta  provincia  con  las  de  Barquisimeto,  Maracaibo,  Ma- 
rida y  Barínas.  El  límite  del  E  está  ya  descrito  en  la  provincia  de 
Barquísioielo ,  y  los  del  O.  y  del  N.  en  la  de  Maracaibo.  Linda  por 
el  S.  .con  la  provincia  de  Mérida ,  y  en  pequeña  parte  con  la  da 
Barcias.  En  Jos  b^sqiiea.del  riaChiirurí,  que  están  al  pié  4e  la  cor- 
diltera^  empieza  eljimjjte  que  demarca  el  mismo  río  hasta  su  orí- 


gen;  de  allí  se  atraviesa  el  páramo  de  la  Sal ,  y  la  quebrada  de 
Tafajes  lo  delinea  eo^a^g^Mla  toasta  »a  desag&e  eu  el  Motatao.  £n- 
tóoees  sigae  por  una  loma  que  está  al  O.  del  pueblo  de  la  Mesa 
hasta  la  cresta  de  la  serraDÍa  pftnwpal,  que  separa  las  agaas  que 
yierten  al  Santo-Domingo  de  las  que  caen  al  Motatan.  Por  aque- 
llos párame» '^'la  raya  basta  <el  dé  TttíSStílH»  ,'^  d^^eiEfte  al  páramo 
de  donde  nace  el  río  Barate.  Aguí  termina  la  provincia  de  Mérida 
y  empiézala  de  Bafrhias. 

For  la  cuinbi^e'tfel  páramo  de  Caldera  Ta  el  límite  dWltorio  faa^ia 
él  de  'Kiqaitao ,  y  emónces  sigue  por  la  cum'bre  de  una  serranía 
'ijue  se  dirige  bacía  el  llano;  por  la<^be2m*a  de  la  quebrada  Assufbe, 
l>aja  á  encontrar  el  rio  de  Boconó,  lo  atraviesa ,  y  por  unos  terre- 
ólos quebrados  va  al  rio  Auns,  que  sigue  aguas  arriba  hasta  stis  t^- 
bezeras  :  estas  se  bailan  en  el  páramo  de  los  Rosarios,  en  donde 
empieza  la  raya  con  la  provincia  de  Barquisinieto. 

«  ■  ... 

•         •  t  »    * 

la  serranía  fie  esta  provincia  bace  paMe'del  gran  rttfiíal  Ae  10s 
"lUndes  que  desde  Pamplona  se  firige  él  N.  £.  sobre  Mét^.-IEÍ  pé- 
ramo  del  Yoícan ,  elevado  tóOO  varas  stíbré  el  nivel  del  tiÉir ,  per- 
teneciente á  ano  de  los  ramos  que  salen  de  la  sierra  de  Mérida ,  ^ 
une  por  el  N.  con  el  de  Tuñame,  de  iguaT  altura.  Be  cada  uno  safe 
una  cadena  y  ambas  se  dirigen  al  N.-fi.  casi  paralelas,  y  encierran 
tí  cantón  de  Boconó.  La  mas  meridional  es  la.  mas  alta  y  ^^ceim- 
pone  de  lOs  páramos  Niquitáo,  €alderay  Rosarios,  Bfsnáá  y  Jábüya; 
ik  este  -último  se  tme  la  cadei^a  setentrional ,  en  iá  cuaV  estin  k^  "pí- 
tamos  Tetas,  Linares .  Atajo,  Tonocó  y  <:abimbú,  de4ondeisdén 
ránales  al  N.  N.  O. ,  formando  un  país  tneñíaüoso  cou'vatteB  bícos 
y  ferazes.  De  estos  pM'amos  nace  una  cordillera,  que  en  pai^  if^ 
para  el  cantón  de  Trujillo  del  de  Carache,  y  atravesándooste  últi- 
mo territorio,  se  une  á  4tata  sei^a&ía^fíiarÜene  del  páramo  del  Ja- 
bón, en  el  punto  llamado  Hato-Arriba.  El  páramo  del  Jabón  es  una 
prolongación  del  deCabim'bú,  y  sus  chnas'dirigi^aldsi^hAtéi  íéí^., 
lie  rebajati  eoiisidtrabléinéiíte ,  safiendor'de  los*]&iitté!ri!é^%^|^É^ 
tnés;rmm-de  sas  cumbtes  mas'altas  cte  tá  dé'  i^áoM^,  ^^ifHrik 
"tMoyúm.  tkü  sigue  disminuyendo^  tiene  soSáuftftttel.íilS  éa4\ 
puñt¿  de'  Baio-ÁTrfba ,  en  donde  incihia  trl^f/ff  jfl^'sepíirJÉlBtítts 
liaúosdé  Monái^  hn  de  Cadiche.  Pcff^  lin  i^bi^«)aw 


se  cotnanica  á  unos  y  otros,  y  tomando  allí  la  cordillera  el  nombre 
de  J ¡rajaras,  separa  los  llanos  del  Cenizo  de  los  de  Carera.  En  el 
pnnto  en  que  se  originan  los  ríos  Jirajaras,  Panji  y  Sania  Bárbara, 
tfFaioa  la  pv'td  q«e  cerf^^pendehá  TruJiUd^  si  We«Ja  eer^Wera, 
¿irígiéiidMe  mniiiya  al  N«,  ¥a  álornatte  to  «eriwi  qm^^áfñéim  las 
Jerrenós  de  Maracaibo  y  Coro,  ya  deserilos-^  a^oallat  pf mnci^li. 
Todayía -tiene  Tn^iUo  oárj  ramal  sm  iia|^Qrt«Bte¿>^iieipejrtelieae 
.también  á  la  .serranía  de  los  Andes.  EH^Kzaeo  el  fárasa^-deJa  $4) 
úe  -cuyosflancos  sale  la  cufista  de  Mfkovttí  A  del  iPir^aetoelo^  y;de 
Mié  «una  cadena;  de  cerros  que  pasan  al  wwa^  da  llendafa.,  pei^ 
diendose  en:  la  c^nfloeneiadel  rio  Momb0y  i;on  el  Alofafaa ;  méat 
tras4]tte  ^  ramo  del  páramo  de  la  Sal,  sigaiendd  paralele  al  dea^ 
crito  bacía  el  N.  se  abre  en  dos;  uno  se  acaba  s(d^j*e  fietíjOí^e  y 
el  otro  cerca  de  Yalera ,  en  una  mesa  hermosa  llamada  Saoana-Lar- 
ga,  antiguamente  nomb^da-Saltana  de  les  Truenos. 

E\  principal  rio  de  esla  provincia  4s  el  Alotatan.  Gsie  nace  ea  el 
páiamo  ele  Mucuchíes,  en  la  provincia  de  Marida,  f  sedbe  easi  to- 
das Usaguas  del  terxitorío de  Trujilla  por  medio 4e  46  triboteri^^ 
Tiene  rancio  entre  los  da  3®'  óiden  de  Y^eaueiaí  suemso  es^ 
•5p  leguas^  -1 8  de  ellas  en  la  provincia  de  Maracaibo;  su  naveg^eían 
es  de  26 ,  de  las  cuales  con^spopidea  solo  ocho  á  la  de  TrwjiUo» 
Van  á  caer  ademasen  la  pfovinc^i  de  Maraibo  44  rios^T  ^si  todos 
ellos  eniran  separadaxnenle-  al  lago;  de  manera  q/M2S  «trítotiA 
^susa^uas  á  la  grande  liof  a  de  Mai'acaibo.  A  la  del  Oriaoaa  ^m^é$ 
ries  ^ue  se  abren  paso  en  la  serranía  y  se^^brifenf  ett  m^Dle-cuer» 
po  á  los  Llanos  de  Barínas,  icon  el  nombre* de  rio  B^cmió,  h^no$ 
pues  de  la  proTÍnda,S9n  en  Mttme«>;^  6€,  todos  de  A^  é^n  y 
j]!as  de  80  vmÜB^xiidQB  ¿ipiebradM  abandoatoi  de  i^oav 

Ninguna  tiene  esta  provincia  digna  de  describirse,  pues  solo  hai 
una  mui  pequeña  en  donde  se  origina  el  rio  Momboy,  que  pasa  por 
Mendoza. 


i:... 


—  4*0- 


CLIIIA. 


El  fTima  de  esta  provincia  es  maí  variado  y  sano  en  general , 
aunque  üene  partes' enfermizas  en  las  llanuras  del  Cenizo  y  en  las 
de  Monai.  Estas  sabanas  bellas  y  ricas  en  pastos  y  cubiertas  de  ga- 
Bados ,  son ,  sin  embargo ,  propensas  á  dar  calentaras.  Lo  demás 
del  país  es  salnbn^  y  se  goza  de  todas  las  temperaturas  que  uno 
puede  desear.  Tiene  terrenos  cálidos  con  vegas  ricas  cubiertas  de 
iiaciendas.  Cerros  de  varias  alturas  con  espaciosos  lugares  en  donde 
ne  encuentran  climas  calientes  y  Crios.  Allí  bal  valles  fértiles  y  ber- 
mosos,  y  en  un  día  se  puede  pasar  de  un  calor  fuerte  á  un  frió  in- 
tenso. Pero  las  cuestas  que  miran  al  lago  son  enfermizas. 

ESTACIÓN  DE  IliVIERNO. 

Empiezan  las  aguas  en  mayo  y  duran  basta  octubre,  i  pesar  de 
que  en  los  páramos  las  bai  casi  todo  el  año  y  las  nubes  descienden 
hasta  los  valles  bajos,  que  están  como  encerrados  por  las  cordilleras. 

En  la  época  dd  invierno,  el  tránsito  de  los  páramos  suele  ser  pe- 
ligroso; sobre  todo  eu  la  cadena  mas  meridional  que  mira  á  las  di- 
latadas llanuras  de  Barínas.  CaandO  estalla  una  tormenta  en  aque- 
llas elevadas  cimas,  pone  en  peligro  al  viajero  ^  para  quien  no  bai 
otro  refugio  qtie  descender  de  ellas.  Los  caminos  en  general  no  son 
malos  en  la  estácioh  lluviosa ,  aunque  se  hacen  barrizales  en  las 
partes  cubiertas  dé  bosque.  Sucede  también  que  cualquier  riachuelo 
ó  quebrada  crece  tan  repentinamente,  que  el  caminante  se  detiene 
y  se  ve'  forzado  á  esperir  algunas  horas  hasta  que  bajan  aquellos 
torrentes,  iii  iilviernó  los  peores  caminos  son  los  que  conducen  á 
Granare  y  á  los  pueblos  del  lago  de  Maracaibo^  haciéndose  tan  pan- 
tanosos ,  qne  con  dificultad  pueden  transitar  por  ellos  las  muías ; 
pero  esto  sucede  en  los  territorios  pertenecientes  á  las  provincias 
limítrofes;  Barínas  y  Maracaifoo,  á  causa  de  lo  plano  y  bajo  del  suelo 
y  de  las  espesas  selvas  que  lo  cubren. 

DIVISIÓN  TERRITORIAL. 

La  provincia  se  divide  en  4  cantones  que  son,  TrujillO;  Carache, 
Eduque  y  Boconó ;  los  cuales  contienen  23  parroquias  y  mas  de 


40^V¿ciádftrib8 ,  doiide  se  oolliva  eaeao  >^ftfi^  ^^  dAfii^^iri|^,  A- 
gbdoü ,  cebada ,  papas « {üááuios ,  ynea,  ttafa|>alv^jas,  gaiQ>a9KEos> 
t»i^uita8^y-.mtialafabiipatti^>y  fivrtaik  •     •>    • 

£1  toltal  de  k  pdtíaddií  de<ii^ipravio«id;«6^^0d64íjridír  del 
mtoád  úgniétí^  t  59jf^  00 :  que  se  dedteaa  4  la  agiioaltoca ,  't  5/4  0« 
i  teerla  y  3>^4!0<l  d  eaiÉMVCfa)  y  artes,        :    .  ,>  . ,       . 


COMtfftilQ; 


r ' 


Esta  pcofineia  hace  su  oomertio  pk^incfipalmtíite  con  la  de  Ma^ 
racaifoo,  Uetaidacaeao^  café.,  oQUsecias  y  ftzúef%  y:re<ábíeAdo  ^ 
cambio  méñsancías -de  teda/)te$e  i  lieoi^es  y  sal^.  Cosier&ia  tomhifiíi 
em  Guanaucé  yBaiína/»)  enviando  ¿e^eindadosoifé,  niea#Mi*a% 
azúcar,  papetanes  y  bariúa,  y  recU)ieiidade:ella9ip»a4a,  arroz  fia 
vezes  caoaa:  De  ^«freía  y  el  Tocuyo  v^eiJb^, obras  de  trabar lieris.^ 
z^HÉos  y  jaboÉ,  dando  en  cambio  €acaa.^<ca(é,  cueros^  reses  y 
malas.  ;       •,  . 


.v-^ 


CIVD^ABtá    Y    y  ILOTAS.  •' 

-   •• 


j  1 


CANTÓN  DE  TRVÜILLO^ 


La  dudad  deTfujBlo  es.  la  capitaldeJa  proviuoia  ^ue  con  su 
misiDo  nombre  M  erigida  en  ASÍ  i  :  su  iarritoiio  ocupa  el  antiguo 
distrito  de  los  indios  Guiasr  descubierto  en  -i  $4?  potr  al.co«ittdor 
Diego  Luis  Valido,  que.iba en bu8i»:de  u]^:núna4e  Qiofue  se 
deda  había  en  él ^alle  dé  Booauóy  en  dondeÍQs.natura]ea.ciilt¡?abQiE 
el  algodón.  Qn  el  aiode  -I dM; Diego  García  f!ar41e&  enátó  emel  te»- 
rítorio  de  k^s  Cuieas,  y  enEsciKpe;  €«rGa4d  MotaiaU,  fundó. la  ciu- 
dad áe  TrujUlo;  pero  al  afio.  signianla  8iitifkri>»la  oiudad  loe  indios, 
porque  sft  Yierou  maltmtados  ^por  loa  espMbdea,  y  García  Paiédes , 
que  estaba  en  el  To^uy»,,  marcha  sobro  TruiiUü  y  lib^tp  ííúmM^ 
dA ,  bien  ^e  tuvo  que  abandonaciel  lirg V  y  ffatiiarsiu.KnrfiSí59 
Pedro  Rw,  de  órdeá  dd  gobernador  GutiéDm  de  laPeña^árepebl^ 
á  TnqiHo«&-el  ñusnan  lugai^fx^ii  el  n^wbtQ  (¡^  MirabdLAii leste  ano 
fueren  révaoados  lo8:peéeres  dadtís^.RuiZ'y  s6i4fSpach«Km^uevos 
titeos,  al  tmu^i&á0T  díiáiKM 
volvió  á  dar  ¿la  poblaeioñ  el>.nflnibffe  dé  J^u^  ^^y  A  poeo  ti#mp9 

P.  OB06.  ^ 


lii¿  MMMfe  étílM  fli»^»plWíi.4^l^HW^4ftJQ^^,^¡^i^^ífcfiMm 

ea  dos  baadcs,  y  giando gob€ii>ri»;etltoiiíidfl  támú^mméi 
lÉ»oíiiiadÁJaSriM«.difckt  l&'wwtot»»hobfi»fci>i-6raad%tedtwie 

ras  y  los  tigres  qae  devoridiMulo»  gmmhstt  te  eiUifriecíói4fiS|MQi 
la  ciudad  &  leguas  oías  abajo,  sobre  el  rio  Motatan ;  pero  la  hume- 
dad^ los  tigres^  las  calebrasy.lastboraiigas,  foeroa  causa  de  aban- 
donar aquel  punto ,  después  de  muerto  D.  Pedro  Ponce  de  León , 
aaeesat  de-  Büraaita^  y  la  dudada»  «miMiaéiitBdaPM  ob  valle 
áeflMifaii»;  iiia0<par  lo  cáM#f  béiiiado*dil.fiílwuMibm 
iii«diiica>al  l«§ar  daada  boiaiistai  BwMg^yaJarfifflHgmdad  .dabsür 
manwrfé»  Im^mmMBmiilm  y  aaiüoMe  ét^if^swíi^ámoi^ímkúr» 
tíboMli»  en'^tuiéloay  paettea»  haMlBfila%  y  UbfáéiW'pHiGL  aiodad 
•opuléiita  per  el  grafr  tWieíaiod^wis  tfqtoi^ieiyaciatowte  dasea» 
taé)  del(eml4iabitt^aBdaa^li»l<d»eaL4oá}fiyiB^é»i)q^  Huaiiás 
todo  anunciaba  que  esta  dudad  llegaría  á  una  prospérídad.ablLlá-f 
otties ,  frustráronse  tan  balagüeñas  e^^anzas  á  consecuenda  del 
saqueo  que  sufnó^ant^fif^  pv  ej^  fjpM^f^B^ísco  Gramout ,  que 
quemó  y  destruyó  aquellas  suntuosas  fábricas.  Mucbas  de  las  fami- 
lias que  pudieron  escaparse  fueron  á  dar  á  Mérida ,  donde  se  esta- 
bleciermi.  La  dudad  de.'EffllMt^  <a|^^hi94a  entre  dos  cerros ,  es 
mui  burga  y  estrecha ,  y  tiene  un  declive  mui  grande  que  Tiene  á 
pefdarse<wn»darl«aiiíi|gasid^^i9aiS9  Jaeinük  Mi»f  Utanaferiabai 
una  lüfsmniaxd^pifel  4¡^  44W  hüwtas#^Stt  teiíipniwn  wÉajBa.joiwib»» 
iHgu»«y>en  4l>ae'goia  da  im  aihi' puro ;.  paoo^aL  apÉa<)  aunquOidam 
ytwnpaBMituv  aalé»4ttp(nguaébfde  pairi<Éiiii|»nMtfn6  ipwpuyim 
Au«»piptra»»  las>ouid¿|^yinvae»paií»^  átl^saluá^.aHifaisAaft  y 
«msaatdeüBiMndadaa.  ]aApaBCiiíaida.<iiaeiaM^,ffluapMk&dCtf  vat» 
na  saín»  al  uiaifcdll  laaivii»  givi  dada»  baUaaupenyaidáiror.itaii 
aaiBunaa^eiibuq^ebpaii^i  y^aita^la^samnítbdihdaNifelMae.djia 
Ifiaai^  s»  Aía^var  so>^  •■<  daaa  oMadM  B&tavHiiwcawbias^eQ 
dhttpdéaam^  fi  diétiiida^6x4  lagaasf  wguauinti  aalqpaMhlQL  d» 
Slstai  km^y  elawdat2ilHMr  Yana^.y^aéiabaaiemnMlaa^BMwiucikD 
ysuN^«|]^,gM#ieNpiaÉi*a0^ua4asrg8iiaril*ifl  JÉMÉspiy  MWIk»  lu? 
via]oa»la»ftli»attiiiavíÉt»9W|««rit409^^ 
«toíaigum»,  fimiida  a»  Tiq}illo>ifll  m^Á^'jmJMmimi  4a  MM^* 
liatido^p  eny»iiBsdi»^aaáwg  IflB^haiaiteea'dtf  uwii  qta 

PIT' espasíai  de.I  alh».liaUii dasoaado  la.  aangee  aa  Yaiieauala y 


afligido  to.]hqaia)yM^^.T#9ito  .bii&MrTf^o^ 4mdA3#r«r  ei|, 
45^ «leí ionio d^AHÍ^fi^^ dei^a (JeJav^etT^.Á  t^M^.QmOí^* 

Slse^subetl  lps^.^fMfi<;».  ojüía  sé{)ai:aa  «stáxiodad^a^.Ia.  TíUa^4e., 
&)ooiiá|,  se  gpza  4€f  usa:  .^ísy^udel  idosá  «uaiui^hacA  tjheoq^pQ^fimci^f , 
claro.  Ai  S.  se  presenta  una  elevada  oadena.de,j|^jíi^iiiuMy;,i^n:  d^ 
reina  eowiml^vfmiti^m yJfipi^ifiriQ.y  deatánp^       0sÜQ:QciiUá  tas 
inmejisasL  Uanpras^  |de  Barína&^jpecQ.  da  realzit  aL  henEooso'  i:aIlQ  de. 
B4^n¿,  rodeado  de.  pwrainos^, 

Lostios  Booonój!  Buyi^ate  se,yejQ,SQfp€iiü;eai:iK)^  el  valleoomp  hh-- 
los  plateados,  y  unidos  de^ues^  se  prec^)¿taii(oc.i]juialbra.^tJrecba^ 
^ee^^^jDQkouna  cpiAadapa  ei^  I91  sa:xaQj[su.Aii  N.  se  ,defieul>r0n 
vftrlos cevrQs qiie  ca^paralelos  se4iiigen  á  k)s.UaQo&de!Í(€e»i8^^^ 
escondiendo  entre  dios  valles  ricos,  poblados  y  amenos,  b^adoji. 
por  los  ríos  Momboy,  Motatan ,  Jiménez  y  Mocoi.  También  se  divi- 
san de  aHi  los  sitios  de  Velera ^  1^  mesa  de  Betijoqne,  las  bellas  • 
planicies  de  Escoqtie,  y  las  frondosas  monlaSas  desiertas  qtie  der- 
raamn  sits  v»f4ipto  ea  cd^Jagp  do  Maxaf6^u|)0^,Ejl  {tais  mcittto&oso 
de  SaAta'A|ii^.Y  6íq]aisaVilPW4^^ vifita^d^  losv^les  de  Ban;pai^ 
Meja^j  CoiipsfMú^i^yr^lafaobe,  y.síriase^^ 
riUento  enljre  o^rDs,  y.  eaiwaiJiondQimda  lDs«lIdi^.dfíMoQaL,. 
laíéiiUia^^ ea  lejaiMu  pen^aotiiia  l0%^itQs  4ie  ^ Jlraj£M:at  1-  lo»  glandes 
llanos  del  Gewosii^iiiieDdea^.  ^^^\  faorkonteu  Lasiierxas  derisatori 
puntosr  deserítes  daArantiwar,  emmh^v  ^1 J  en ^^jefo^c^i todas 
las  fNTOdil^^ói^'de:  1^  8im  táiiá#;:f  miii^^  dA  la^t  WMSf  ton'** . 

Bl  lrig|()i<^0m«l»ttSr4bii«dftnte^»y'^pa^ 
calo  d^.  c^^oiar^aeratHF<9u.7lu9lUei>r 6^:01]^     :  ojüM^  -^utos*.  iai^ 
agrí«i»Ucirta/  lyo  es  f»i^ipi^|9(miweion  ^:a|(¿io».Qri^t8aBidoftsíOar 
baJios^pHtof^y  pi^l^fWipvj^f^atffyi^fiea^ 
ne«)sde  aUi/SOU^fm^  gji(M^^y<:8ii^;áarBfriaaft  fps^os^^qpe  «una^'as- 
logaies ;  <G(m  ^\9i9»^  IM^ricaa  saagM>tAioarios.  yiíaaiiti»;.*-  $»  baeoa ; . 
taanUeft^tU  b^iw^Mü»  y  4«lc«&wok driíodos ;  r  ^^  raices  de 
ini«sMa;  pnarr^m^át  la>aiitepeien«jfh'#pBi6bi^  iasivetea 

da  e&m:  qmi^íeixmn  d^  te  fm^m.  ^  MMifmhnm^,  d#l  oorii. 

trWj  9H04^criaíA^flto89Ch4l^rr^alw4fllei|e9wfi 
25rJ«gii4#  ^rb^d»,  M^aoaUNH»  b»  MM^ 


TÓ,  tanto  para  los  cereales  de  las  zonas  templádíáisí  como'pa^á.Ío$ 
frutos  tropicales ,  la  bondad  de  su  clima  en  l'a^  mnchas  serranía^; 
la  cantidad  de  selvas  que  aan  quedan  por  desmontar,  todb  con- 
curre á  hacer  esperar  grandes  progresos  én  esta  pequeña  "proviiicla 
cuando  su  población  llegue  á  ocupar  y  cultivar  todos  los  terrenos 
susceptibles  de  producir.    '    '       '         /'  " ' 

En  Trujilto  habia  un  convento  de  franciscanos  y  of ro  de  domf- 
nicos  que  se  han  convertido  en  establecimientos  de' educación,  apli- 
cándose sus  rentas  al  mismo  objeto.  Hai  un  colegio,  varias  escuelas, 
una  capilla  y  un  monasterio  de  religiosas  dominicas  qué  trabajan 
con  primor  muchas  curiosidades  de  mérito.  .'•... 

Las  parro()úias  die  este  cantón  son  ^  Trüjfílo',  Saní  Jacinto ,  S¿h 
Láíaro ,  Burero ,  Quebrada-tiónda ,  Jájó ,  t^ampánito  y  Fámpan- 
Grande.  '        ■ 


CANTÓN   D£   B0C0NÓ« 


La  villa  de  Éoconó  sé  encuentra  en  u¿  hermoso  valle,' Vico  por 
sus  tierras  y  producciones,  y  elevadó4572  varas  sobre  el  nr^^eldel 
mar.  Está  rodeada  de  elevados  párateos  cuya  altura  sobré  él  vallé  de 
Boconó  és  de  mas  de  4  900  varas.Estos  parámosse  denominan  Volcán, 
Caldera,  Niquitao,  Rosario,  Cábimbú,  Tónocó,  Atajo,  linares, Tela  y 
Tuñame.  Hacia  elS.  E.  baja  el  rio'Bóconó  y  al  N.  E.  el  Burate,  re- 
ciblendó  ambos  en  su  curso  multitud  de  quebradas  que  descienden 
de  los  páramos,  regando  y  fertilizando  todo  el  territorio  hástá'qué 
se  unen  cerca  de  la  villa ;  entonces  forman  una  inmensa  playa  peli- 
grosa en  su  paso,  porque  d  teírenó  se  sume  en  tát!ar¡íaí'ífe,  y  di- 
rigicRdo  sus  aguas  al  S^  en  un  solo  cuerpo ,  se  abre  paíso  per  los 
páramos  Niquitao  y  el  Rosario ,  y  va  á  llevarlas  al  rio  Portuguesa , 
con  él  nombré  de  Boconó ;  ño^qtté  ferCIRíaf  una  gran  parte  de  las 
llanuras  de  Barfnas.  Este  valle,  quese  compone  de  (errónos  adecua- 
dos al  cultivo  de  trigo,  cebada  caña  ,!café,  algodón ,  ^tátítá'Os)  pa* 
pas^  maíz,  alverjas,  garbanzos,  yuca^  etc.,  todo' bajó  un  clima  mui 
sano,  no  dejará  de  adelantar  mucho,  teniendo  abiertas  las  vias'jfjara 
una  prosperidad  venidera,  cuandid  Ifts  Selvas  que  miran  á  tas  llaíitt- 
ras  está)  desmontadas  y  tiíia  poblácíéift  horneros^  haya:  cbti^rtifdd 
el  camino  que  debe  conduoif  los  hab'itstntes  de'Guanare  á  \ai  Orilla 
del  Motatan,  donde  embarcaftlán  tas  prénaucclones  de  la  séiranfe  q\io 
aun  tienen  inculta.  Graüdes  sértin  éüt(ÍliéÍ8lttü  tidélaiiK^  (fá  Boconó 


.    i^  SWWaiiias  d€(  este  ie^M<>a.fi<>^:?<><ÍPttpf:  Jps^ 


.'il     '.'.      t'        I    •       •♦  •.  .,'     í  \*:'       >   ;,    ....      •      Vi'  / 


« 


í. ;  1 M  bHí  4le  C«f#Pte/^tá  al  Jiié  de  la  sgrr^  de  Agoa6bís{i9,;<gi^ 
,58^pWí3^.^|tr9.vip(ía.4p,9afqttisimclo  déla  deTrujyip.  }ji  ba$^e.lr.J?|o 
{ qtte.y^i^  $i|;ibOi9p^i:^,  1^  t^peremeato.es  delicioso  y  sai^^^.f/Q^la 
.  «eri^^a^qn^  |a  .^^i^i^  clii^  templado»  y  irlos.  ÁlS.ce, inicia 
,  WP^tPár^ixic^.a^iBprci  €#y.i|e]U)s:ea  oiebli^^.miVlPa^  que  aJÍ;i^^ía 
^s^rr^pí^  4ae;d^sdp.  AjK«aQbÍH>o.$e  esUende  bácia  Bato*^£^)i»  y^ 

,pi^ésepUi ei^ todfk subpUeza.  Sola iiaa pequeña  piarte,  de.eite t^i>- 
aorip.^^pferjB»Í?^.^a  laj|,%n»rfi&  <|e;||<fi^i.  Ep  €*.fiueWjí  íeSaftfa 
^j^^p§fteiw9i^|eí  g^íe^canton  ,,íje  n^ai^dó  ,ei:i©r  iiojí  j^ájpW^ , 

que  auq  p>0,>^^iv  teYHÍ^fl%  «a  ijJfWW  ^Crl^lentovifita  ei|trie.||9- 

. ;  iiU  pÍMla)<«,|iciCi^i¿phe^,j^elcawi^  pyittc¡palpor/í<>ft4e  Jc^msl- 
.;te^;*!^qs;l«.qw>iy;ÍWl?^de,Ja8  proñiuilaí^dj?  Mórid^.  y.Tí^iiaiq, 
. wY  §e.4if  ¡^[^Jiácií^  l?s.^;»^5quiffli;^t^  (;^raJM*íííyftaríic^.yK«4- 
,sífn  Wíe  #  i4é  4^  .la(  W^im^,pufi5te,de  lj>  seirí^í*»  li^fi^  «í^  ^í?  J»- 

.iP%íft«8lP»«:*ía,affifi«ítSfift  y,líftí9r»siP9y  |»  G^raaf^4^.#  ?W  ÍSW- 

*^^^*  r'í'^*  *  \  i  • " ►  ''  ;-  2/'  '  01     -"i'M  .'  •       -  *.  •  j  5  *    •  ,Í)Í1'  '  í'U 

y  Siquisai,  ..;,^,:.'  ^  j  .  ,s,,\^ 

CANTÓN  DB  ESCDQüE. 

*  • 

La  villa  de  Escuque  se  encuentra  en  una  bella  planicie  formada 
por  el  declive  de  un  ramal  de  la  serranía  que  se  dirige  por  Beti« 
joque  bácia  el  lago  de  Maracaibo^  perdiéndose  en  las  selvas  baña- 
das por  el  Ghirigüé.  El  rio  Escuque^  formado  por  la  unión  de  loa 
ríos  Colorado  y  Blanco ,  baSa  el  pié  de  esta  villa  ^  cuya  situación 
alta  y  despejada^  le  proporciona  un  temperamento  sano,  refrescado 
por  las  brisas  que  descienden  de  las  serranías.  Hicia  el  S.  la  vista 
^e  recrea  sobre  un  terreno  quebrado  que  se  pierde  i  las  orillas  del 


Pero  nada  es  comparable  á  ia  de  que  se  goza  desde  el  lugar  imib- 
1)nrilél>otienMi , ^n el  «Mi»» '^^tai Béfijoq^e'. 'Bié'iM se^es- 
cobre  todo  el  llano,  la  parroquia  de  Valera ,  el  corso  del  9M:IÍo(6* 
tan,  y  Sabana-Larga  qoe  se  mira  como  ona  espaciosa  mesa  en  me- 
dio de  cerros.  Al  lado.ip«Ml»«eTeK«i»?Ma  so  estension  los  lla- 
nos del  Cenizo,  las  selvas  y  serranías  qoe  le  rodean,  y  en  f<»ma  de 
^flfii  Hk  MécarelHserriyOoBqQistóite,  «n  «tf^Méhrs'^JeiíMneritran 
' «toiís  ftgins  temida  que'^ena  «aMlms  "y  ^eáfieiiési  ^A  Ik  %qifittiia 
^4ál  tajoAflo^tie't^  á  BétQoqfae ,  "se  WfA  «eérl^^MMdb,  ^  ^1  «nal 
•"«siét  HUBÉ-Biiaa'ie  ^IrAéo ,  <doiK>ekle  ^^cm  él'«oiilbl^  ^'<K^^^i^^ 
-^lombktne  ^  por  '%aftferse  ^deseó^ieito  %  tfiÉá^ld  ^Müe  %e  ^e^NM , 
"^ooé  tiempo  ^despties'qttéUs  árütas^répoMieantó  tM$o^(A^la  pi»- 
^%HÍa.^fiste  aí6eitei  flavÉiilÉÉf^rifa^,  dMffl^'^^li^     f^StosiNe 
'tm  ^lor  WBsagtaoaMe.  T}iH«%iii'Yas^iffffÉ8^ie'*cíiie^HiMiiD'een^^{i^^ 
t  les  4e  ñ^f  ^  la^^ebf^  fr^^Mp^^ise^é-* 

'MxieittfíitHmuAitis  ^bdi'bóHontó  dé  ago#iiirtf ffis  ^MÉM>Íé.  * 
•  ^%é¿'MkMtos%Mllés^(te  M8  iMáéB%t  tík^^mm  /tanáM  ^ 
ferentes  valles,  en  climas  cálidos,  templados  y  fríos  en-^éjÉlMpera 
-^ÍH^^PeeAMó ;  ^1  ^fS/M  MiféVItt'  c«ttft>éMée;>Bk(^^llés  nliM 
tt»i^^osí  lA^ik'^  feI<!ÍMt«*ifa^fegAtei!ii 

110  wa*ttíw  sMm^  el  '^Mua,  Y  cS'^eNiíf 'TuiraMrar  BÉduqtieieMí'  ^^chmdo 

janaéo,  cabras,  ovcijas,  malas  y  caballos. 
dosayLaMesa. 


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I 

TABLA  COMPARATIVA  de  la  posición  astronómica  de  las  cabezeras  de  can- 
tierras  ,  terrenos  baldíos,  población  absoluta,  relatiya,  hombres  de  armas ,  escla 
tí?an  para  la  esportacion. 


NOMBRE 


OB 


LAS  CABBEKRAS 
DE  CANTÓN. 


P08IGI0H  ASTSOllénOA. 


Latitud 
•orte. 


Long-itod  o. 

del  meridiano 

de  Car&cai. 


Tn^iUo. 


Canche S».  8^  lO'' 


8®.  81'.  o 


8«.  y.  C 


9.  61'.  48" 


Bícuque 8».  88'.  ao"    3.  20'.  58" 


Aituraa 


aobra 

el  nirel 

del  mar. 


Booonó 4«.  44'.  O" 


90.   82'.  O 


980 
1.480 

967 
1.879 


ratora 
medía 
del  ter- 
mómetro 
centi- 
Cn^ado. 


92o.  24 

19.  19 

91.  59 
18.  93 


OALmüim  UM  muraos  db  qbb 

aB  COMPOMBH  LOS  CAKTOMBS  BH 
LB0ÜA8  eVAniADAS. 


Total. 


i 

a 


«8 

6 

36 


6i 


i 


wtm 


i 


. 


H  SP 


8 
8 


68 


mimm 


lao 


32 


44 


86 


46 


179 


88 


987 


ton  ,  su  altura  sobre  él  nirel  del  mar,  sü  temperatura  media ,  calidad  de  sus 
«ros  y  distaneia  ¿  la  capital  déla  provincia  y  de  la  república ,  y  los  fimtos  que  se  eul- 


^       - 1      *    • 


'Núiner» 
de  L.  c. 

qite 
se  cveea 
baldías. 


POELÁCIOH  1>B  ¿09  GAütdáttT. 


•   •  •  • 


Total 
deía. 

« 

poblacii^o 
en  18S0. 


»••«••• 


as 

6 

80 

8 


66 


11.883 

1 


PoKIacroii 
reliaVfV^ 


.  piifi4n4M. 


i      i 


líombrés 


|a«jrouv. 


«t**     ««■•»( 


'^üméro 


138 


*  :  vaci 


1S.19&,  7A.. 


10.9S7 


44.788 


•  •  •  •  • 


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1B9 


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lia  capital 
;  del»  •  • 
proTíffcif, 


ií.  8 


á,'la  capital 

déla 
.f^pdblica 


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M 


Gaña,  café,  cacao  y 
•  CiHáYcaté;  • 
..CaJUi».eafói  eácaoy 


'*Cafiv;.ckré;'<^cao]r 
•••al0odota. 


•O'- 


. .. » . J.    r. 

. . . .  •(••i.  " .■[■  ■  ••' 


7^ 


♦     «    •     <     •  • 


íO 


•   •   ft  t  •  • 


—  4Í0  — 


TABLA 


]>B  LAS  AliTUHAS  BB  LOS  ^f¡BM9.  I>B  14  f  HOYIHCU. 


Ncmbrei,     i  Yaroi.     fimraniai\ 


Caldera. ♦« 

VlfPnlA*  •«•  •••fa   4)f*90  v***"  ••••    "V* 

Rosario ^.iitío tá.  . 

JdboB ;.  4l<lt.-«%..w»>4t<- 

tÍNnMiMI.M..^.  4»fOO...«. Id.   I 

Cabimbu**  •••••  é^^l^Mir <-•■#•  r«» 'M*.  • 
Tofiame 1.  i^iOO. ..:...  Méridi. 


Tetaa^... '.......  4,800...,!..  Tripulo. 

Aii4o*i..4 ,  iilno.......^.  id.    . 

tVteoéó  #...... ./ai*. ,.....^  id.   • 

AgMO-Oblqft;..^  SM^.;.: id.    ' 

Méndosaj... Sjhx) ^  id. 


tw,  >««     •     ( 


XABI.A.U>B  IjOS  fI08  BB  4^  ÓUBN  pM  hk  n|DTIRCI4. 

Nomkr^.      MgndfiUu.      MMgie. 


^otnftlVí^     jlBrroMliu.  '  b9Mg^\ 

rácaibo 
VonAoi «•TTt^fflto  .•!••.•  id. 

ColcM^Ab... i.,  id j....  tí, 

Qniwcí  •MtM^«.(«»  dd«9iii«*i«.r«.i^     ? 
A]¿fMMÓU'.S)i»«»...  4*»  "id*.  •••«••••  w.     I 

Arapof...; L.  id «....  id.     ' 

Foe«. |..  id |....  id. 


BacBaTitU.«»«.^..  i<it.*«*i»*.*  id, 
Miquimbos  ....^..  id I....  id. 


Gaof.. 


i(f. 


id. 


Sequion. id id, 

Boeonó id Orlnoeo. 

Bnnii...... id id. 


Stnlaeiiio 

* 

I 

l»IÍillo.é,. 

Mocoi...].. 


T?"^ 


*••* 


Carache. I.... 


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« ir^ara. «I ■••..*•  ••  w*.........^  fu* 


Monai id, 

PaoJI id. 

l4Mlle|nM..«.««.*  id. 


id. 
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riiitfUiis^^dMi^Iii  <i»<<i»yttyfeiiiÉtiiiii>tiftett'íiii^ 

,  fáífiiQ^^^^'^Hígtímw  ik%ííi;fHmiéúik^^%}mií&áÍíÁií^ \'  leal- 

en  que  se  alzan  cerros  nmiñeáili^^mílklSméímám^ 
regadas  por  rios  y  ocupadas  por  selvas  de  una  T^etacton  admirable. 
£1  agricultor  encuenlra  lupcii^fMpios  para  (oda  clase  de  cttlÜTOi 
y  el  criador  parajes  laui  úiiks  para  ^ado  Yaenuo^  cabras,  ov^^as, 

■iittin/ipM^iinii  tiiW|iiifti^iit||ii>iMiqiliiiiit^^ 
dtai  i»ilijiiiilmwii  Ép-  hiiWMBhit¿-^aaÉtá¿*<ilii  Mi  ¥tÉfmetifk» 

>a»WI  lfMBttafaiii«&bÍM(at>4iÉi«íl)^^ 

I  Ja  flUdl  altei*  4Érito  Mto  4éé  MlliÍ%éil<¡«líii#Bi0t¿«Ml|b. 

^i|P^^^él|prfg^h>lli^^^^■M^^l#^ 


?i 


encontrar  los  páramos  de  Granate  y  Santo  Domingo ,  y  por  los  pi- 
cachos de  estos  bu»^  ^ri^  Gaf  a{[ii4,^pf)dt;  «el,  punto  en  que  había 
un  puente  :  sube  después  por  una  cuesta  desierta  y  ya  á  tocar  en 
los  páramos  eleyados  de  Apurer^^^oconó  y  Don  Pedro ,  en  donde 
nace  el  (^r];^^  Entonces. s^e  continúa  por  el  pprsódf  esteno  hasta 
la  boca  del  Dorado,  que  demarca  la  raya  aguas  arriba^  hasta  el 
^braz^i^e  y^y^i  490^0  0OTmca,>Q^:4  D/ribaiita^  d^ode  tannina 
Ja  pripyiwift  de  QairÍQas  y  ^nitm.  la  de  Apireu  Atraifmdci  ^  Uríbante 
;  1^  eiM^n^e)  rio  Borga«  y  «^  )m^: $n  f^lvmraiai^Y^idQJtea 
^^ví$ori^,fq|itre,i[a9  dos  pp^qyiiveias.  Aqni  empieiva  IJUftOAtern^vQufa 
{¿ii^K^^Ccifv^  toofiitt^niíiíteli(iswadía,qiie.da 

> yi^titm  ¿  los^^sjQW  mm  4l  ^T^rbes  ».bas(^  U«|iui:i laaxabeier^ 
.4et  Tá^!Ura£.y,{i9r  fl^le^iirm.oeníMaúd^á  ln  w^bmdaide.Dpa.f'fdnf  1 
por 49. (<;nal  «¡gua  la.mya.y. Jq^^ por  Uk  qmiln»UM Ufibüf , 

^  NWWftfNQ»  ;)mili  m^^mif^^M^i^infi  iG;4momto»»mi.^fiy94uiaio 
¿,ppr  .upa.ippsto  apnra,ii  va.  i  fbuscar  )aJ)oca.dditm  .daJa^iOrite 
>m.i^4e\  2;iilíA,:dmi^4|inioúiiAi9L4im¡te  ^ftJa;4tfovii|QÍft4eiPatt* 

¿BlA(l%í:T.C0mÍe9WtMide'MÍai»€aÍlM»'  ii:!-.!  '-.yVi-n  unKh  ;•'  '^h'i'.  h-. 
.'•{  •  ,5í,'';f:  i;*;  .  ;i.t;  ji  Lili   >)•  "i /I  "í  s.)'»  •:;»i  f/|íJ*Ji;  ;  •••'u  ^  .>ii  '  •^'I.'-'í- 

jO'-  liií  »!J  ">>'>  í;í>  ».  «i}..-.|  «n  i|oiifjdfKaf>'i  Kitíi  ;riü...'í  'ío-U.-ii»  ,.  U 

La  serranía  de  este  territorio  pertenece  tod^iJddanal.idfldlos 
.Íp¿b^'«a^,4e9#.8NW)MW  a)JH^.E.iD$Llimttflr;dfi  mama 

nuando  al  S.de  S.  GrúiMói  Vftf^all^aMidOM^RNfMíiM^ 

rr4ei«^ft4J^ifft  (yilK«s  «4)mel  i^iMd  MflM4an|o.a9iiffei«tta 
ya  el  pais  muchas  cadefti^  iy.ligu()i%PÍ>WtiiPft>eaje|^cb  küiliwip- 
cion ,  para  mejor  inteligencia,  desde  la  Sierra-Nevada  de  Marida , 
cuyos  picos  cubiertos  j(!|d.J^y^.^^Dy  se  elevan  de  5.466  á 
5.479  varas  sobre  el  nivel  del  Océano.  Esta  sierra ,  la  mas  alta  de 

;>^a  iimf>Mlíi»lMkDe9^m4i9i4^  ébil^^ttifxaa«>Aidfr* 

-.44^1^9  9afíB%:Plflli}M^i)fi»aJi  Sv^Q\  It^miPkt^ieiékjémiimMh' 
.mmA^:1Í¡^^  WW  a%»i|i1  Jrtrtüraity^Ni  Anl^nip  átínfá  Uiámm- 

.,*sf4^miúm^^Ahm4inmík  x^á^  mkmi  .^anUa  lia  *i 


Doh'Pédró,  irica¿aá;  Culata'^  YégálUá/ifigárá^  fiinofCaóaaguá  f ' 
Molino ,  salen  Varios  ramales ,  cálsi  paralelos  eütre  sí,  y  tambied 
exi'  dirécdoñ  al  S.  0^  formando  los  talles  hérmosÁós^- sanos  ^  pin*^ 
tóbeseos  de  Airlcagaa;  Mncnpati,  Mucachachi/ Gapnri,  Gnaracbe  f 
Fhegófíerd  y'^téndose  ál  misino  tiempo  el  ramo  masséténtrioñiit' 
al  parama  déí  PortacfaéeKi.  Este  páramo  ^vMé  tos  vafíéí  de  l¿ 
Grita  y  Bailadores  y  se  une  á  óim  cadena  de  cefrosi,  'qn'e  corriendo 
también  ál  S/O',  encierra  e^tos  valles  y  los  de  Tádhá ,  Lóbatera  y 
S.  Cristóbal  ^  perdiéndose  sns'fsildas  en  las  espejas  ^lyas^  desiertas 
que  se  estiéiidén  basta  él  lago  dé  Maracaibo.'  E^  úitíínó  ramal 
que  es  el  mas  sefontrionaY  de  todas  >  y  que  «n  su  medianía  da  paso 
al  rio  Chama  poruña  'abra  m«i  estreclNty  se  dirige  al  N¿  de  Mérídai 
En  él  se  alzan  los  páramos  CnoliUlá; 'Conejos/ $alftdo,  Culata  y  Paii 
d«  AKÚcar,  devéfldose'algtfn^  á  masdtf^tr.OíOO  varas.  En  esté  ptinto 
se  le  ane  ia  cadeiW  trasversal  qtie  sale  dé  la  Sierra  de  Herida  en 
dirección  al  N.  £;  fen  día  se  bailan  los  páramos  Alto  del  Frailé^ 
Santo  Domingo,  ylfttcbclifes,  que  unidos  á  los  otros  ya  descritos^ 
encierran  los  deliciosos  valles  de  Macumbá,  Mucnjtin,  la  mesa  de 
Mérida ;  lás  campiñas  del  Ej/láor'y  de 'la  Mesa^  Laganilla ,  S.  Juan , 
Cbignárá^  Jajf,  y  el  del  Ghamá ;  írio  qoe  éorre  por  una  gran  profun- 
didad y  con  una  rapidez  estraor^n^a^  pasando  por  la  abra  que  i 
le  da  entrada  á  la  hoya  de  Maracaibo. 

De  esta  cordillera  de  páramos ,  comprendida  entre  la  Sierra- 
Nevada  y  Pan  de  Azúcar,  salen  cuatro  ramales  bada  el  N.  E ;  el 
mais  meridional  sirve  dé  barrera  á  las  llanuras  dé  Barínas,  y  va  i  ' 
unirse  al  páramo  del  Volcan ,  en  la  provnieía  de  Tmjfiló ,  encer- 
rando Wvdles  elevados  y  fríos  de'  Santx)  DOmingOV  lá  Píédray 
Pneblo^NuevOi  Otro  que  corre  paralelo  y  s^uné  ai  páramo  dé  Tu- 
ñame ,  encierM  el  valle  de  Timotes ;  y  otro  también  paraleló  que 
va  al  páramo  de  la  Sal ,  rodea  en  parte  el  valle  feraz  de  Mendoza 
en  la  provincia  de  Tmjiflo ,  á  la  vez  que  sus  faldas^  setentríonales 
descienden  ^  la  espéka  selva  que  va  hasta  GibraKary  sobre  el  lago 
de  Maracaibo. 


RÍOS. 

M  •  \  _ 

'  ••  •    •  •       .  •  í  •  *  *    ' '  •      •  *  .  '     :  /    1 

Del  país  «nontaüeso  de  Marida,  que  es  la  partedfAia  de  Veilé-  ^ 
zuela,  nacen  75  rios,  55  denlos  cuales  se  dirigen  á  la  hoya  del  Orí-  * 
ñoco,  atravesando  las  hermosas  Ilaníinas  ite  Barlnas*  Tr^  de  estos  ; 


ii»f80»bt9.«Q  taii(i(ivJNpM^U<««mlMk  0%  igual  ^m  m^iiUth 
d^  de,b  Mmoteaii>^4ft  I«  Gril«i»i  t\  «mi  iteiiftl4if«iM4t^«i^ 

cunda  tí«ii«,t4^|i«.á<4  jMAi^^Mip»^  nor^  pwUe  iMtorlir  |M!l« 
U)is.d«aiia^4rí(íi»,i^ar$€ii^9ffi^^       ¿tur.  HiMvaarde  BKBtuft4 

dfi  2M  4a/9l^d^ó  mÁiMioi^^ 

p<)rit(4^Pi9r^49fgíMAe$«}tM^  . 

LagmiiVa ^ MWNHdA füihlftaatPteafe  iiti[e«  #Uitíiii» SMOfi de 
tic^i^,  sq^tiMia'iqíiii  mmif^^  ^m  caohawta  dk»  aoNt  fiarticvlar, 
samjltttf  4i  qja»  sUrMTUMMt  ^'Saana^  m  ÁAitea. :  en  el^iitf ^fttf» 
eafíM«tef4^«i9iktd^)^iM«M«ftv.9^l^  mMudMái  ittnif 
suiganllb  S«  ^^iiii«toa)€»4i^ag¥NM  é  ^W  im^^  sibMiit  «reí  del 
m^^  tí^m >I44M  T^(mde|lai^:,.3^élr4iucho:y  d^S ¿«  pías  de 
peeluMUikNl,  V«af  Br(^d#)#Ua:«a(é  sac^i^otmlleia.  deijDiieoa  y 
eiiaalea  y  8oto^U99t!tafQini  iiasle  ;tíe  da.  ésta  se. 

estrae  el  urao  y  también  se  sacaría  de  las  otras  si  estavÚNttft  d«qie^ ' 
jadas  y  con  agaa. 

Es  fácil  limpiarla  y  mas  fácil  aun^nservarle  el  agua,  elevando 
un  dique  para  contener  las  pluviales  é  impidiendo  que  los  indios 
se  avvav  ^  ^ItelpaiaiMgir  a«9MraÉM;/Ihtot!Mi|WiKta  «pVcadli 
al..AM)u»^serfM2i-  iiim>  dilhaiMÉi«lr)a««ir.4ua^^^  noc  ta 
para  la  wumr^mmM  JüimnáiL 


DBm  lA  ililllKiiwiir'""-*'  "^  miin««>l     .  . 


gp»  á  kídinwi,  ¿¿4790  Y,ara9^..E? j>eqji^jaia.peiio  taír  grofuada  qua 
no.scLfepedií  íí^UÍeíWj  ¿^  elí^.  sáié  i;n  arrOYQ  ,^. origen,  doIriQ  Santo 

BaritoffP^QL  facilitar  4  tc^;rM  d^,  sq^  friitp^  sil  Afiure  y;  al  OjcW 
noca.  *    . 

AljiédiB  ldiSeKra^%^(!$i:c^.a0l  caminaré  va  d^  Jaj[i  á  S:  Pa-» 
ÁrO|,eotr€iÍoj$.ijÍ[>9JSi^^  <;a(i^az^  halunala^na  form^a  por  Imi 
agpsde  dos  qp^rad{,&9,  j^ce[r:<ia4^1  rjo  Mu^u^f^e,.  en  la^,se.lVas  que 
se  estiendei)  l^ícja.  el  l2^$)i^  baloíras  dos,  que  Ü^sf^  d^gaframacle- 
i^^foima^aspoif  los ijemxpa^ de  aquel  rio!:  c^dafUi^a  ti<^ne  cf^rc^ 
deunajegu^  '     .     . 


CLIMA. 


£1  clima  dé  lá  provincia  yaríá  según  Tas  áUurás  dé  los  lugares  y 
ja  esgosiotoi:  d^  qllos, al  H,.  ó  sd  S,  ^e,  la  ^exranji^  6^,^n ,  su  cf^ntco , 
loqu)e  fiac^  variar  los^gi^dps  ie  i^r,,^un  cuapp/^llp!^  la^misipa 
ele-vatíQU  soJaj;e  el  nivel  dd.waic;  s|A^^bar:gp,.5e  (jubile  decií  que 
eu  general  goza  la  ^oy'mci^i^  Héfiá^  de  tejpppraníento^  jnas  bien 
fresco^^tei9plad(^,o.  frios^-qjjü^caU4f>^^£st^^,  v^  sei^^u^traioi 
en  las.selvafi  im&ft^ii  maúj9inaft.^d  opijiqaalds,ininedi$iicio^  ¿4 
lago  de  Mar^^fiaiba;  e;Q,Jaiqfia  saJljmftO:4Á.S/3i|i  qwílo,.y,  sobre 

el  Uribanle.  Las  demas^^jartqa  SQixJodaft.^aJW  j;;.ea  m.  sojc^  dia  se 
puede  pasar  del  frío  mas  intenso  á  un  calor  moderado,  y  siempre  en 
lugares  salubres  bellos  y  pintorescos. 

.  .  .      •  .  • 

Ea  ^ti  |)£p«in«fiei»(ue3ian..  las  llJujia&eii:«ljQi^<^de.mar«0;  ydur 

rau  ba3(a.ud^f^ji^utu*erei^«^  ^ípdp  tes.apa(&ib¿jan4.ea  torjeenites 
aojare,  todo,,  CU). j|uai<uT..Agpsltaf  £n  los^dema^  m^se?  ^^aJt^M^^idia  fr.e- 
(ífmA9^  li^^m  i  W^9^  nM»os^.coBÍosas.  Qm  ú^vf^x^  Mmm  en 
l^s7l^iiH^Q^bai'QB^eU«s>«M.c»^  q};a  saie.de  los, 

gf^di^  b(«iiWfi^  qi^^i^s^  fAl4a8  df^  ^.9^^'£^.|  y  ^.  los. 

Yíei^o^rf^ewir.eii  jEf)Sp^4#>0£i|)e^  d^> 

uM»^%%ÍMNye«te»fQi(!41a^c^^  elvSpl^.f^noii^naift  4  l«^A(ars^,. 

S^  0li^MfY%.9$l«;^<áll4í|^^(iÍ^R^ 

c  a  los  terrenos  bajos,  no  se  ve  etííÁs^f^  ^,m^Ñm^f^^^%^% 


~496  — 


»    I 


¿abre  todo  el  pais.  Los  eaminos  de  los  paramos  son ,  sin  embargo , 
buenos  á  cansa  de  la  rapidez  óon  qué  desciend^i  las  agnas  y  de  la 
desnudez  de  los  cerros;  pero  en  la  parte  en  donde  hai  selvas,  aun 
cuando  puede  transitarse  por  los  caminos,  suelen,  estos  tener  pasos 
difíciles;  así  son  los  que  de  los  valles  del  Chama  pasan  á  Barínas  ó 
al  lago  de  Maracaibo,  y  los  de  las  laderas  del  mismo  Chama.  "Estos 
últimos  son  peligrosos  por  la  estrechez  de  la  senda,,  los  derrumba- 
deros y  el  gran  precipicio  en  cuyo  fondo  corren  impetuosamente 
las  aguas  de  aquel  rio.  Este  en  una  distancia  de  4$  leguas  (desde  el 
páramo  de  donde  sale,  elevado  5060  varas) ,  hasta  la  hacienda  de 
Estanques  en  donde  tuerce  hacia  el  N.  para  durigirse  al  lago  de 
Maracaibo,  tiene  una  diferencia  de  4548  varas  de  nivel,  que  está  en 
razón  de  254  varas  por  cada  legua  de  distancia  directa. 

DIVISIOM  TERRlTORIAXi  T  PAODüCaONBS. 

Se  divide  esta  jiífovincia  en  8  Cantones  que  son,  Herida,  Mucu- 
chiés,  Egido,  Bailadores  Grita,  Lobatera,  S.  Cristóbal  y  S.  Antonio, 
que  tienen  56  parroquias  y  60  Vecindarios^  en  los  cuales  se  cultiva 
cebada ,  trigo,  arroz,  maiz,  tabaco,  café,  cacaoj  algodón,  añil,  ca- 
na, plátanos ,  yuca,  papas ,  apios,  alverjas,  garbanzos  y  toda  clase 
de  menestrias  y  frutas.  La  población  se  puede  dividir  del  modd  si- 
guiente :  55/^00  se  dedican  á  la  agricultura,  40/400  á  la  cría,  y 
55/1 00  al  comercio,  manufacturas,  artes,  etc. 

GOUERaO. 

El  comercio  principal  se  hace  con  lléra«libo ,  de  donde  se  recibe 
toda  clase  de  mercancías  secas ,  licores  y  sal,  dando  esta  provincia 
en  cambio  sus  producciones,  que  se  embarcan  por  el  rio  Escalante 
ó  el  de  la  Grita,  ó  bien  se  llevan  por  tierra  por  el  camino  de  Escn* 
que.  El  comercio  con  la  provincia  de  Barínas,  se  hace  con  su  capital 
y  con  Pedraza,  llevando  de  Méridá  harina,  papas,  menestras,  azúcar 
y  manubcturas  del  pais ,  y  retomando  de  aquellas  cacao,  arroz  y 
ganado.  A  la  provincia  de  Apure  se  lleva  harina,  aguardiente,  sal, 
ajos,  papas,  cebollas  y  alverjas,  estrayendd  de  ella  ganado,  que  cam* 
bian  en  los  valles  dé  Cüéuta  por  mercancías  aecas,  caldos  t^^  > 
efectos  que  se  introdüííéá  también  por  los  lláúos  mas  meridionales 
de  las  provincias  de  Barínas  y  Apure.   ^^ 


^7  — 


CIUDADES   T   VILtAS. 


CmtON   DE  lláRIDA. 

La  ciudad  de  Herida,  capital  de  la  proYiocia  de  su  nombre,  fué 
fondada  en  -1558  por  Juan  Rodríguez  Suárez,  bajo  el  nombre  de 
•Santiago  de  los  GaballeroSé  Bodriguez  era  natural  de  Mérida  en  la 
proTincia  de  Estremadura,  y  siendo  vecino  de  Pamplona,  en  la 
Nueva  Granada,  fué  encargado  de  la  esploracion  de  la  Sierra  Nevada 
y  de  la  conquista,  de  los  indios  Timotes.  Mérida  se  halla  en  la  lati- 
tud de  8^  ^0'  N.  y  en  lajlongitud  8^  58'  20'^  al  O.,  del  meridiano 

.  de  Caracas,  en  una  hermosa  mesa  elevada  '1 97^  varas  sobre  el  ni- 
vel del  mar.  Dos  rios ,  Mucujun  y  Alvaregas,  recorren  casi  de  N.  á 
S.  el  pié  de  la  mesa  y  van  á  caer  á  un  t^cero  (el  impetuoso  Cha- 
ma) que  pasa  a]  estremo  de  ella /de  E.  á  O.  La  mesa  queda  de  este 

.  modo  rodeada  por  tres  ríos  y  solo  hacia  el  N.  está  unida  á  una  alta 
serranía  de  la  cual  es  un  declive.  Esta  hermosa  ^  planicie  tiene 
5  leguas  de  largo  y  de  ancho  5/4  de  l^ua.  Forma  un  declive  mui 

.pronunciado  hacia  el  S.  y. otro  suave  al  S.  O.  y  sus  barrancas  son 
xnui  elevadas  y  pendientes.  Desde  esta  mesa  se  goza  de  la  hermosa 
vista  de  la  Sierra  Nevada  que  queda  al  S.,  elevada  5479  varas  so- 
bre el  nivel  del  mar  y  5,508  sobre  el  suelo  de  la  ciudad.  Los  pi- 
cos de  esta  sierra,  coronados  de  eterna  nieve,  las  grandes  masas  de 
(granito  que  salen^de  sus  flancos  cortadas  perpendicularmente  y  la 
gigantesca  n[iol«  que  forma  esta  majestuosa  sierra^  le  dan  un  aspecto 

.  imponente.  Sus  blancas  cimas  á  vezes  cubiertas  de  nubes,-  á  vezes 
relucientes  con  los  rayos  del  sol  ó  envuelti^  en  niebla  que  los  hace 

.  aparecer  y  desaparecer  en  pocos  instantes^  todo  concurre  á  dar  á  la 
siei^ra  un  carácter  bello  y  sorprend^iiie. 

Por  todas  partes  se  miran  cerros  mui  eMo^  que  se  (úerden  en  le- 
jana perspectiva^  y  solo  dejan  ver  la  abertura  principal  por  donde 
i^orre  el  Chama.  Los  ricos  valles  del  Egido,  las  vegas  del  Chama,  el 
país  pinloresco  de  Bailadores,  los  fértiles  campof  de  la  Grita,  los 
sitios  poblados  q]qe  recorre  el  Tórbes;  todo  queda  cubierto  por  los 
altos  páramos,  en  medio  de  los  cuales  hai  valles  h^fposisimos  y 
parajes  que  convidan  á  residif  en. ellos.  Ai  Jadp  opuesto  hacia  el 

,napjeate  no  se  pu^de^  ver  las  b.9JiIas.c^pin9s  que.  e$.^  cerca  del 

P.  6B06.  S^ 


Chama ,  ni  los  pueblos  situados  mas  allá  del  páramo  de  Santo  Do- 
mingo, y  menos  auB'MlBkél  IV.  lat  atlas  «cimas  que  cnbren  las 
inmensas  selvas  que  se  pierden  sobre  el  gran  lago  de  Maracaibo. 

Mérida  faé  erigida  en  proyincia  en  ^  8^  ^ .  Habiéndose  declarado 
en  favor  de  la  independemáa,  <sq|MiriBijwc  )de  Maracaibo  á  que  per- 
tenecía :  tiene  en  un  cerro  cerca  de  ella  una  laguneta  que  se  llama 
él  monte  út  las  ^ores,  por  \m  itiucÉiis^e  ^producen  kisirbéJes  y 
llantas  qtie  la  pueblan  :  posee  tdtt^íea  aguas  minerales  «alientes  y 
tiú^a  fieffa  amarina  que  Vfe  nn  eelor  negro  ^€A>T«saHiHile.  Iktoaéaa 
tas  pl^amtas  tn«did&af«s  y  bai  miicbas  gomas  y  resinas  apreoiabfes. 
$5  mní  curioso  ret  prejqfyem  en  un  mfísmo  «lek)  el  pÜtano,  el 
maiz,  la  c^Üa  dcdce,  el  trigo,  las  psfm  y  la  cc^da. 

la  thrdad  de  Herida  sufrió  tñ  IMÁ  el  mismo  terremoloque 
d^estfuyó  á  tuenca;  y  m  4S12  fué  aminada  por  d  del  26  de 
marzo  que  destruyó  á  Caracas ;  pero  tolviS  á  reconstruirse  y  ahora 
está  mas  poVtada  que  itítes, 

Anf  iguamente  baMa  en  eMa  ciudad  des  "pin^idos  que  se  t)díiA>fti 
encarnizadamente,  y  esta  desuKiíoii  «ufiKi  4as  famffias  intuia  mu>- 
cbo  contra  ios  progresos  de  la  ftí^ám ;  mas  batiendo  t^esado 
aquel  mal,  tfn  el  día  adelanta,  y  prospmM  «us  'V«dB<»  á  fetvor 
de  h  pas;  y  !a  xrrmottía.  Guaneé  Herida  tenga  «na  p^Koée  tumi- 
Igracion ,  ó  que  la  población  eredente  desmonte  la  grandes  selvas 
que  miran  "hacia  el  lago  de  Üforacaübo,  entonces  sevá.  esta  ciu* 
dad  la  reádencia  de  ticos  proptetaríos ,  que  'faafflarin  en  un  clima 
delicioso  y  sano  todos  los  placeres  qtle  propordofta  la  sociedad,  los 
habitantes  dicen  que  iñ  d  frto  ni  el  callar  se  baoen  ^enfir  alK  en  «n 
grado  capaz  de  incomodar,  y  <que  ptieéen  llet^  wAs^tarmente 
vendos  jle  lana  ó  de  seda ;  pero  no  p&eiem  negar  que  las  vanaeíi»- 
nes  del  tiempo  ^n  tan  &ptdas  y  seniles,  qfoe  á  menudo  cansan  en- 
ftermedadcs.  f emen'd  oriento  éfH  O.  'que  «nunca -sopla  sin  dejar  algu- 
nas señales  de  su  malignidad;  pate^-queesloprerviMie  de  qne)és 
Vientos  íM  K.  que  pasan  por  4a  gran  wé"^  ^aüñtda  por  til  €bama  , 
4esde  el  lago  de  Iforacafbo,  se  fntfoducen  por  la  abra  por  donde 
píi^a  d  mismo  tio  y  dioeanéo  c<Hitra  la  serranía  de  Gstánques,  re^ 
fluyen  %km'él  E.  ipcnrel  valle  áá  nifemui!!hamay  vfBnen  Iftsla  Ai- 
tída,  Hevaí^  en  1SU  t«n(o  erigimos  de  los  m^a^mas  ^que  eilials»  aque- 
llas «*tí(8  d«lertas.  Shi  ^eitíWirgo  ,ite  tmcde  aéegurtr  ^e  !a  Kswwa 
«principal  de  alg^áft  íusigaÉficantes  ^énÉie^kdeis ,  «stá  mas  blai 
'«u  lo  variaMe^  tiel  diteumpde»  ^  ^tsduesfda  se  ieíperttneriliiB  tu 


tin  mismo  Aa  fes  ÍRters^s t^ímpera'taras it\tís i^tró  e^t^dtme^'iie^ 
Europa.  "Con  todo,  d  teropcrameirto  es  sano  y  fresto,  pues  el  termó- 
metro baja  hsÉídí  M<^  del  centígra^do. 

las  iltiTias  son  alHindaiites ,  y  ^^  podría  dedír  que  darán  éasi 
lodo  el  año ;  pero  las  mas  fuertes  de  ellas  caen  en  la  época  del  in- 
vierno. 

Mét^tda  es  la  sedB  de  tm  obispado,  tléfne  Seminario,  un  eolegio , 
varias  eseuáas  y  un  convento  de  moiíjas  que  liacen  obras  de  pri- 
mor. Hai  una  catedral  y  varias  capíña's. 

los  merideños  tienen  ba^tahte  perspicazia ,  profundidad  en  sus 
ideas  y  aftcion  á  la  literatura.  Ninguna  clase  desdeña  el  trabajo.  La 
agficuHirra ,  las  erias ,  las  fábricas  de  varios  géneros  de  algodón  y 
lana,  que  por  su  baratura  son  preferidos  1  los  europeos,  consíti- 
tuyen  sos  ocupaciones  prirídpailes.  Entre  las  fábricas  hai  algunas 
de  alfombras  de  lana,  adornadas  de  flores  y  tenidas  con  coloréis  cié 
vegetales  de!  país,  taü  vivos  y  pentrnnentes  como  los  de  las  mejores 
ffibricas  de  feíropa.  la  agricultura  produce  trn  x^afé  de  ios  mas  es- 
qufsitos,  y  cfu  tan  grande  abOndancia  los  frutos  necesarios  i  la  vida, 
que  aun  los  tíans  pobres  tienen  lo  necesario  para  vivir  holgada*- 
meftte. 

Mérida ,  en  fil[i>  por  los  terrenos  ricos  que  posee,  por  su  cliiiia 
sano,  por  su  posición  casi  en  el  centro  de  su  provincia ,  en  el  ca- 
mino que  va  i  las  demás  de  la  república ,  será  algún  dia  una  de 
las  mas  ílorecientes  «Tudades  del  interior,  ctiando  la  riqueza  de  los 
particulares  haya  proporcionado  caminos  para  facilitar  el  tránsito, 
y  que  los  grandes  bosques  estén  cobáartos  de  haciendas  y  pobla- 
ciones. 

Las  ptTPoqufes  «de  este  «entoft  «on  :  ÍMégda ,  Horro ,  Aricagua  ^ 
P«í€ft)lo ^uevo ,  IfocueMolii ,  Mucútfii,  Asequfe^  Tabai  y  la  Punta. 

la  ^hi  4é  ^99máiáe»  es  ia  ^as  elevaba  en  todo  el  territorio  de 
Voaesiiiilii.  t^ú  isiluaéa  M  ]plé  de  los  pirainoS  Santo  Domingo  y 
Muc^hios,  «etca  de  las  <ítiXkÁ  4el  Chama  ^  ten  una  llanada  que 
forma  el  dedt^  4Íe  una  aJIa  seitanfíaiiiie  ée  une  «I  páramo  de  Pan 

E6tá  pobfocion  ^á  rodeada  de  cerros  e1eva(!lo^  los  cuates  depea- 
det  á^las  iiU^a»  de  pársffim  que  ieft«i6rrran  el  talle  deil  rio  Chama, 
.y  4«e  «1  r^  Bépamn  (as  trg^ra^^  is^m  i  i»té  rio ,  ie  hé  iqüe  van  i 


—  500  - 

la  gran  niontafia  que  termina  en  el  lago  de  Maracaíbo.  Al  S.,  sepa- 
ran las  que  se  dirigen  al  Chama  de  las  que  se  precipitan  hacia  las 
hermosas  llanuras  de  Barínas.  Al  E.,  se  efectúa  la  separación  de  las 
aguas  que  van  en  opuestas  direcciones  al  lago  de  MaracaibO;  con- 
ducidas por  el  Motatan  y  el  Chama.  ' 

En  este  cantón  todo  es  grandioso  é  imponente  en  cuanto  á  los 
cerros,  que  llegan  casi  á  la  región  de  las  nieves  perpetuas,  las  cuales 
cubren  allí  muchos  picos ;  pero  todo  es  pequeño  y  triste  en  cuanto 
á  la  vegetación.  Arbustos,  gramíneas  y  frailejon,  es  todo  lo  que  se 
ve  sobre  aquellas  grandes  moles ,  heladas  y  barridas  por  vientos 
fríos  é  impetuosos.  Si  las  cimas  de  aquellas  soledades  están  incul- 
tas é  inhabitadas ,  sus  flancos  ó  sus  bases  tienen  campos  dilatados 
sembrados  de  trigo,  papas,  cebada  y  menestras,  y  en  los  valles  que 
se  forman  en  medio  de  aquellas  masas,  hai  pueblos  cuyos  habitado- 
res gozan  constantemente  de  un  temperamento  frió  y  sano.  Los  pá- 
ramos de  este  cantón  son  :  Mucuchies,  Pan  de  Azúcar,  Tapias,  Sa- 
lado, Santo  Domingo,  Alto  de  Fraile,  Granate,  Volcan  y  Tuuame , 
cuyas  alturas  son  de  4,420  á  5,060  varas  sobre  el  nivel  del  mar. 
Los  caminos  que  atraviesan  estos  páramos  conducen  á  Mucuchies , 
por  donde  también  pasa  el  camino  principal  que  va  á  las  provincias 
de  Trujillo,  Bar^uisimeto,  Carabobo,  Caracas  y  Coro ,  y  á  los  de- 
mas  cantones  de  Mérida. 

Este  cantón  se  compone  de  7  parroquias,  á  saber :  Mucuchies, 
la  Piedra,  Timotes,  Pueblo- Llano,  Chachopo,  Santo  Domingo  y 
Mucurubá. 

CANTÓN   DEL   EGIDO. 

La  viHa  del  £gido  está  situada  en  una  mesa  llena  de  quebradas 
que  facilitan  riego  á  \&  tierras  cultivadas  que  se  encuentran  desde 
el  pié  de  Tos  cerros  hasta  las  orillas  del  Chama,  que  pasa  á  poco  mas 
de  una  legua  de  esta  población.  La  vista  es  bella  y  pintoresca  :  al  S. 
sé  ven  los  altos  cerros  que  ocultan  las  elevadas  mesas  de  Asequias  y 
iPueblo-Nuevo  y  se  miran  los  picos  de  la  Sierra  Nevada  que  majes- 
tuosa se  alza  sobre  todo  lo  que  la  rodea.  Al  N.  se  levanta  una  ser- 
ranía en  anfiteatro,  en  parte  cultivada,  en  parte  denerta,  á  cuya 
espalda  los  páramos  de  los  Conejos  y  de  la  Cuchilla,  cubiertos  de 
gramíneas,  sirven  de  barrera  á  los  vientos  que  pasan  sobre  la  mon- 
tana desierta  y  que  acaba  sobre  el  lago  de  Maraca|bo.  AlE.  se  pre- 
sentan  en  perspectiva  los  cerros  que  formaii.Iíi  mesa  dp  Mérida,  y 


—  50Í  —  ^ 

al  O.  otros  cubiertos  de  alguna  yegetacion,  detras  dé  los  cuales  es- 
tá la  famosa  laguna  del  urao.  En  tbdo  este  territorio  sé  goza  de  di- 
ferentes temperaturas,  desde  el  calor  escesivo  basta  los  páramos 
helados!  La  parte  cálida  cubierta  de  bosques  es^enfermiza^  la  tem^ 
piada  mui  útil  para  el  cultivO;  y  la  fría^  auuque  desnuda  de  vege- 
tales, es  mui  sana.  Guando  se  desmonte  la  gran  selva  que  está  en 
la  parte  setentrional  de  la  serranía,  cuyas  aguas  descienden  al  lago 
de  Maracaifco,  y  cuando  Ia$  veredas  que  boi  existen  sé  haúeñ  con- 
vertidas en  vías  cómodas  para  el  comercio;  el  Egidó  seráunptticlilo 
que  prosperará  en  agricultura  y  comercio,  p(^  la  bondad  de  su  eli^ 
ma  y  de  sus  aguas,  su  inmediación  á  la  ca{>itai  y  su  situación  éa 
el  camino  que  va  al  lago. 

Este  cantón  consta  de  6: parroquias,  queson,  Egido>  San  Juan, 
Lagunilla,  Ghiguará,  la  Mesa  y  Jají. 

CANTÓN  DS  BAILADORES. 

f 

•  .  f  ■■  ' 

La  villa  de  Bailadores  está  situada  en  una  de  las  bellas  posicio-* 
nes  de  la  provincia  de  Mérida. 

Se  puede  decir  que  está  casi  al  principio  del  valle  bañado  por  el 
Mucotuyes  y  que  por  su  attura  lo  domina  eq  toda  su  estension.  Dos 
grandes  hueras  de  cerros  cubiertos  de  pajasi^ven  de  barrera  al  an- 
cho valle  que  se  ve  sembrado  de  haciendas  y  plantaciones.  Estas 
hileras  impiden  que  se  vean  los  valles  elevados  de  Guaraquey  Pre« 
genero,  de  la  parte  del  S.,  y  de  la  del  N»  los  que  bañan  el  Esca* 
lante  y  otros  ríos.  Al  E;  un.  páramo  cubierto  de  fraitejon  separa  el 
valle  profundo  déla  Grita,  y  las  nubes  que  ccmstftntecaeiile  reedr*» 
ren  aquellas  cumbres,  dan  al  cielo  un  a^cto  sombrío  y  tristCi 
mientras  á  la  parte  opuesta  un  sol  deslumbrante  ilumina  el  valle 
en  toda  su  estension ,  y  los  cerros,  perdiéndose  en  un  horizonte 
claro,  apenas  se  ven  de  un  color  azul  que  se  confunde  con  el  del 
cielo.  El  temperamento  de  Bailadores  es  sano ;  posee  este  cantón 
terrenos  cálidos  mui  productivos  en  que  se  da  tabaco  escelente,  ca- 
cao, caña  y  plátano,  y  otros  fríos  en  que  abundan  el  trigo,  la  ceba- 
da y  las  papas.  Por  un  puerto  que  hai  en  el  rio  Esi^ante  se  fad* 
lita  el  trasporte  de  las  produciones  de  este  cantón  al  lago  dé  Ma- 
racaibo,  y  cuando  sus  malos  caminos  estén  compuestos  y  sus  gran- 
des selvas  desmontadas,  vendrá  á  ser  el  distrito  de  Bailadores  una 
de  aquellos  en  que  se  construirán  suntuosas  ciudades  de  ricos  pro« 


pieUrios  qpe  goiario  en  mx  dioui  fresca  j  saqo  de  toda^  las  (xh 
nifdidade»  de  la  tid«» 

JLas  parroq¡aía&  s^n^  Baüadore»  C  ^e^a  del  cftnUm,),  «tro  fiair 
l%toes,  y  GiMirmpe». 

LaciiiAidd#  te^  GsiUeetá  soWe  «oa  pe^feit;  «ms»  iMUmidií  ^ 
f^p^ri»  por  la  tese  4»  w  eerv»^  el  eoal  diviée  dea  rm  fie  f9> 
uoea  al  pié  de  )a  ibíínd^c  etndadr  Eala  q^edfi  c«n0  e»  «na  caía- 
fffleada  de  aerraüia»)  ^e  d^  a)  piía  vn  we  teiile  f  seeal^ríir 
á  primera  \ista ;  pero  examinando  la  variedad  de  la.perfp^etiva^. 
lo»4fl|raBOS  cnUifadea^iiese  ye»i^0»OypeQdie«t«ade'lo»eervi»6yó 
bien  en  ias  vegas  de  los  ríos  lo$  varioi  gmpds  de.  wtéon.^gm  ao^ 
bresalen  en  medio  de  las  gramíneas,  las  diversas  formas  de  las  cum- 
bres y  los  tres  valles  p<»r  donde  eoi^»  Ion  rios  Venegará,  Valle  y 
<xrita,  se  obtiene  un  cuadro  de  aspecto  variado  y  particular.  Esta 
•ciudad,  eati  U^ÜMtk  llamada^  ¿  se»  una  de  fcta  que  prosperarán 
cuando  sus  selvas  que  miran  hacia  el.  lago  é^  MaiiMaibo  y  1o»IIík. 
m»  4f  iNilteiS))  mHük  detfQfofitadfiH;  dos  eenduotot  úmá-  tómodos 
tandrán  »b»  taibítaoiofl  para  dar  Imj^so  &  sa  ^o«ll»ray  oaiomr' 
mi :  por  ma  parto  el  rio  dúfá  f  pot  d  etol  se  puado  k  batíAiíA 
lagp  de  Maim»ifad)j  y  pot  otfti  el  UriUboiite.^  que  puotk  eotoducir 
kftiHt  el  ^iooeei^  fca  Grita: oott  Jbwanpg «anmos ^mat  k ílmymet^ 
too  do  laa  (HMtaoo  y  Teieo  ^  datia  4  tus  babtoile»  facüidad  para. 
tüt^portaf  loa  pDedoéoaoa  do  lo»,  iersooos  bol  víii^eo  f  yonoaoi. 
<  ÍMipoiiSf«ioato%Ift'€Má^Srogii9ewy  i. J^^ 

< 

'  la  villa  d^.  Lobatara  está  spinada  sobro  uoa  loosita  i  la  orilla  4eb 
^ I>ebalor#,  en  «n  Uteronoq^obrado^ qpe lo  praporcsoaa}  «n om^ 
bargp^  cabello  pon^pocitrai  Al  S.  doesjlapobkm^ii.bai  oiia  eolÍM 
m  qo^  la  segara  dctlvojia  do  Tórhos  y  otra  al  M«  900  la  dilúdedo 
lin.  HaiHiras  q^  se  pierden  sobro  ol.rip  do4a  Crtta ;.  4  B*t  Mioiaa 
liU  diia.  sorrap^  qiio  so  ono  al  páraioodeí  J^rta^bii4^  y  a)  O4  vm 
bBfíiía  do  aerros.qQo  iorpido  la.viita  de  la&npf»  y{bo«Eii€ooa.fidtol 
^  CÚ€«lta«  M, poiÍQÍQ«b do  oHa* villa  cerca  del  puerto  de  Jasí^CiiiasiM 
^al> calino  qnj»^ va  i  S.  Cria^ba)^, qo  loui  l^jos  da  Cfí^ai  h 


—  505  — 

hace  nn,  punto  de  esaalá  para  el  íp(Hiiercia,  bi^n  sea  para  fas  pro- 
ducciones que  vienen  del  interior ,  ó  bien  para  las  qqe  se  estra!-' 
pn  de  Maraetibo.  £1  temperamento  es  fresco  y  sano,  con  tierral 
p>|iiii  piit  loi  ffotí  do  i»ÍM<  oáUdoo  y  tttptoto»  y  pw»  k^w» 
4&  ganado  taonDo,,  cal^a^y  q^r^as^. 
IxrtMlQIfti^  Goiiatit«ei^n  y  San  Jugo  son  laij^ro^uias  de  este 

■ 

Bstá^$i£fiada  k  vitlá  4e  S.  Cristóbal  sobre  una  colina  llana,  por 
cuyo  pié  corre  el  río  TOjrbes^  gomándose  ^  d^  un  cTln^a  sano  atm^ 
qpe  eíilidcN  Ea  u^o^ioi  pnablo»  «ifl(Qeptíb|es  mas  prontamente  de 
progresos,  por  su  ventajosa  posipon  en  la  fntrada  de  Üos  Llanos  y 
ceroa^e  les  Yalle»ii6  Giicute.  Su»tíem»  $on  a<áefl«a|a&al  ettlfii^ 
YO  de  laa  producciones  de  paisea  cálidos  y  templados  ^  y  á  la  cria 
de  gpnados ;  la  flicflidádide  coinerdar  con  los  llanos,  cotí  STáfa- 
caibf)  y  Pamplona»  aon^drcimptakicias  que  llamaai-eate pueblo  ¿ser 
uno*  de  los  mas  iioiportanles  de  U  provincia 'de  Mértda.  Al  N.  tiene 
el  diatrito  <fe'T^b^)  e^bk^rto  de  |ilairtaiDÍQ|}«a ;  al  S.  se  dUat»  ol 
Talle  del  Tórbes  sobre  la  montaba  pestífera  de  S.  Gantilo,  riquM* 
ma  en  producciones  naturales ;  el  E.  una  4Ca  sét'ráñía  ctfbiéMa  d^ 
robusta  Y^gef^cioii,  baqe  na  con  traste,  con  tinque  esti  al  O.,  solo 
tapitada  de  gramíneas.  lias  crias)  el  comercio  y  la  agilcultura  son 
306  Ba¿vii0s  que  tiaseesté  entoit  pva/soí  a^kuOos  f otucos.. 

las  parroquias  son,  S^  Grístóttal,  Táriba,|  Guásimo  yfGapacbo. 

CANTÓN  DE  SAN  ANTONIO. 

I;b  yila  de  S.  Antonio  está  situada  al  pié  de  un  cerro,  sobre  una 
Uanada  ettoea  dri  m  Tácbi^a  qjae  sirve  de  frontera  con  la  Naeva 
Granada.  Al  otro  lado  de  este  rio  están  los  ricos  valles  de  Gúcuta. 

El  pueblo  de  S.  Antonio  está  llamado  á  ser  un  punto  de  gran  co- 
mercio con  la  nación  granadina,  cuando  alli  se  establezcan  capita- 
listas de  Maracaibo  con  sus  almacenes.  Por  alli  deben  pasar  los  ga- 
nados que  vienen  del  llano  para  el  QODsumo  de  las  poblaciones  de 
la  [urovincia  de  Pamplona,  y  alli  también  pueden  reunirse  ios  ne- 
gociantes que  especulan  con  los  producU»  de  una  y  otra  provincia. 

£1  clima  de  este  cantón  es  sano  aunque  cálido. 

No  bai  mas  parroquia  que  la  misma  cabezera  del  cant<m« 


TABLA  COMPARATIVA  de  la  posición  astronómica  de  las  cabezeras  df 
sus  tierraS)  terrenos  baldíos,  población  absoluta,  relativa,  hombres  de  armas, 
qiie  se  cultivan  para  la  esportacion. 


mmatams 


11.  F    un 


ismaemmmitmmémaaímsi^ 


aMrictBBMBfiBaat! 


NOMBRE 

de 

LAS  CABBZBRAS 
DE  qANTON. 


Herida. 


VaciMkíéf 


POSICIÓN  ASTKOHÓMICA. 


Latitud 


norte. 


Egido 


I 


Bailadores 

GriU 

8«oCri8i(^bal...... 

lK>baiera *  •  • 

Saa  Antonio 


So.  w. 


8.  ao. 


8.  10. 


7.  57.  25. 


Longitud 

al  O. 

del  meridiano 

de  Caricas. 


7. 

49.  40. 

7. 

3^. 

7. 

42.  20. 

7. 

8S.  25. 

?•.  58'.  20" 
5.  ái.  SS 
4.05.    O 
4.  43.  40 

4.  54.  40 
5t  i9-  SO 
5. 17.  40 

5.  85.  SO 


Altura 

sobre 

el  nivd 

del  mar 

en  Tiras. 


Tempe-'l     GAtlDAD  DB  LOff  TBBlOHOff 
rttara 


« 


i971 
2983 
1441 
2091 
1194 
1093 
1560 
980 


media 
del  ter- 
mómetro 
cent¿- 
l^rado. 


17*.  92. 


DB  ^^B  8K  COMPONEN  LO» 
CitNtÓÑES  BN  L.  C. 


o 
a 

o 
C 


S 

B 

m 

h 

•>« 


6 


15.  .97.      3 


11.  67. 
18.  49. 
i8.  72. 

21.  39» 
20.  95. 

22.  24 


Total. 


37. 
79 
98 
10 


6 


35 


I 

E  . 


415 


» 


4 

II 

4 

1 


9i     » 


59 


50^ 
160 

7$ 
8 


244 


89 


557 


I  I   ii^«««>" 


Niiirl    h 


» 


» 


)) 


16     » 


Q 


á  * 

oJ| 


X» 


» 


6 


456 


423 


86 


139 


8 

277 

» 

99 

» 

14 

1 

» 

S 

47 

907 

cantón ,  su  altura  sobre  el  nifel  del  mar,  su  temperatura  media,  calidad  de 
esclavos  9  distancia  á  la  capital  de  la  pravincia  y  de  la  república,  y  los  frutos 


Número 
d«  1.  c. 

se  cr«en 
baldías. 


36 
34 

46 

75 

100 

90 

I 

S 


SOS 


POBLAaOH-  DE  LOS  CARTONES» 


Total   ' 

déla 
población 
en   i8S0. 


Población 

rdatÍTa 

por  legna 

cnaUrada. 


13.0» 
5.680 

10.010 

^6.705 
9.8U 

10.797 
5.7:J9 
3.90O 


_. 


68.416 


Hombres 
ütiles 

•  « 

para 
laa  armas* 


77 
«6 
217 
48 
S5 
lio 

173 


68,4 


9sa 
400: 

800 
800 

700 
800, 
S50 
30Q 


Kómero 

total 

de 

cíoUtm. 


^P«B 


aasm 


4.700 


■kJi 


26 

88 

4tO 

197 


75 


698 


DISTÁlidUS 

SI   IiOS  CAVTOITBS. 


A  la  capital 

deUr- 
péoriacia. 


6  V* 

«^6 


80  Vé 


»  V* 

30  Vt 


A  la  capital 

déla 
repnbltea 


FRUTOS 

<tVS  Sa    CDURTAV 

para 
LA.  ESPORTAUOH. 


• 


firmimmmmm 


w  v« 


434   Vi 


ím  V« 


«o  Vé 


u  ^k 


m  V6 

169  V« 
176  V* 


Cacao,  caña  y  café. 


Gtfta,  eaeao  7  café. 
Café,  caña  y  oMaa 


Gafé,cañaycaeto. 


GafiU,  afttl,  café,  cacao 
y  algodón. 


Caña,  añíL  café,  cacao 
y  algodón. 

Gaña,  añil^  eaf¿,  cacao 
y  algodón. 


smaBsaatt 


iai« 


—  S06  — 


TABLA  BS  LA  ALTURA  DK  LOS' CUBOS  DB  LA  PBOTmCIA. 


Mrtfli.  tu 


Notá^res^        Yarat,      Serraniat. 
A^nat •••••••••#•  ^o80* •  «^ •  •> «j*  wL 

4IMHHÍQB»*  •«■•.••  •  Bfo4M»««^«  •«••  IcL 

IPoiiachuelo....^.,  ■|Nfl      i  M» 

HollM«.««i*...^.  8,790.. .« kf. 

Caoaguá ••  fl^09¿..  «...••  M. 

■igñé ^.  4,M0 ^•.  M. 

Taño. M 4»ooo...« id. 

Culata  Vegallla...  ^^-MOi.*..,.^.*,  14 
Aricagat 4,090 id. 

^^VIK  r^^^^Vk  ••••«•    fly^WW  •»•.••••     Hm 

Teladero 8,810...» id. 

BMUBárbii»^...  3^,819;,. «....,,  tíL 

Bocambooo  . . .  .^ .  4,190 id. 

Apure 4j5i0. .,^.  id. 

Siem  Nefada  en  so - 

pafo 8^110.. .« id. 

Pie«ek»del*Btor- 

nNenda 8»ie6 id. 


Nomhres.       Yaras.        Serranías» 
ro  de  ti  Sierra 
NeTads: — «^•;i,m«*,  «iJMrid 
Alto  del  Fraile...  4,900 id. 


míBio •..^4,atO,.»..^,..  W^ 

Vteadko  de  Stnfo 

BmbIo$o. 4,M <i. 

Grauíe 4;ri». id: 


Picacho  de  If  nen- 

cMto.it 9|099I........  id. 

PandeA|[úcar....  4,9S0 id. 

CNMa.. ^.. ••««•.  4^800Sk«. ....*.  idk 

Salado... 9^000 id. 

Conejof  •....^...  \WU^ i^» 

Gaehilla 4700 id. 

Taplaa \9¡0 id. 

LaSal 3,9M. m 


TABLA  DB  LOS  tlOS  DB  4t  ÓBDBM  DB  LA  PBOTIHGIA. 


Nombres.      Serranias.      Desagita 

<fc>int> >*..>*  de  Heridlo.  la|[9d»M|u 

racaibo. 

Vaei^lHii... •».....  id..«> id. 

AWaregas*. id Id. 


Nueslra  Sefiora.... 

Gapiirf 

KIo-lfegru........ 

9.  aiif^el ......... 

Ilucuchich(. . .    . . 

Giacaolá «... 

Canagui 

Kucombofllo 

AU|uiii6.  •  •  «^  •  •  •  «4  • 

Aricagua 

Mocupatf 

Dorado 

IfaTay 

Pescuruj 

Capai 

Perdido. 

Goacf 

Frió 

Cimomó 

Mocnepe 

laandeloaBioi... 
Negro 


■A*  .••••■•..  •    Kl. 

» .  .  .  «*,•  .   MI. 


id..... 

id Orinoco. 

id id. 

.a.  • . .  .^  i . . . .  to. 
id id. 

MI ....^.  .....   10* 

id.  ..•••ft....   id. 


id. 
id. 
id. 
id. 
id, 
id. 
id. 
id. 


id. 
id. 
id. 
id. 
id. 
id. 
id. 


id. 

id. 

id. 

id. 

id. 

id. 

......  id. 

lago  de  M  a- 
racaibo. 
id. 


Nombres.      Serranias.      OesaffBe. 

Gopnrl deMériilfe..  lagod9*|fa^- 

ncaibo. 

Gnaraqno «....  id..^^ y,. 

Fuga id id, 

S.  Antonio id «  id. 


Bibo id. 

SamparolB id. 

Cboruli id. 


Orinoco. 
,.  id. 


'»»»•««  %  rw 


«•   Mh»«»» 


id. 

id 

id. 

id. 

id. 

id. 


Bi9>6raD|le*Av.4...  id,^. 

Bíadaog^ id... 

Valle.... id... 

Agoadía  ..••«..*,..  id... 

Venegará. id... 

Angaravecha id... 

Salamoniito id... 

S.  Sebastian id... 

Guaramilo id... 

Lobateríta id... 

Lobatera id... 

Mocoiies id... 

OnU id... 

Culebrilla id... 

Tegüines id... 

Guaniries id... 

Tirap«Jé id... 

Gaqaitire id... 


>*• 


qicaibo. 

id. 

id. 
id. 
id. 
id. 
id. 
id. 
id. 
id. 
id. 
id. 
id. 
id. 
id. 
id. 
id. 
id. 


Nombres.      Serranias,     Desagüe, 
Umaquena. . .  de  Herida. .a  llgp  de  ]||a- 

Guarumitas........  id id, 

PaTtai id id.- 

Morototo id id. 

BoeoDó . . .  «.^^««^  f  •!%■  Id*.  %r*  «M»»^^  id.. 

Carire...: id..........  m; 

Tarbes id Oiiaoeo. 


Nombres.      Serrantas.     Desagüe. 

tbipamarí.^  ^ .  4p  Kérida Orlnooo, 

Frle^. .............  id id. 

Táehira id lagodeHa- 

racaibo. 

M^pá id id. 

Tor(yiidai'»*#^AM..i.  ld••«^Mk•....^  id. 

Páujr. %d:. id. 

Agujlaa id iid. 


sSs- 


PROyiNCiA  BEJBARiNÁS. 


SITUACIÓN  ASTRONÓMICA,   ÍSTENSION  T  POBI  ACIÓN. 


«  •  •  •  • 


Esla  provincia  se  eacaentra  entre  6^  46^  y-  9<*  %V  de-  latitud  bo^* 
real  y  ea  la  longitud  de  O*»  56'  50^'  á  4«  SO'  50''  al  O.  del  meri- 
diano de  Caracas.  Su  figura  se  puede  considerar  como  un  trape- 
zoide curvilíneo.  Su  lado  superior  que  es  el  mas  largo  lo  forma  la 
cadena  de  los  Andes,  el  inferior,  mas  corto ^^  lo  traza  el  célebre 
Apure,  el  lateral,  mas  pequeño,  lo  determina  eí  rio  Uribante,  al  pa- 
so que  el  opuesto,  mucho  mas  grande,  lo  figuran  los  ríos  Gojédes  y 
Portuguesa ;  demarcación  que  seria  exacta,  ano  ser  por  el  ángulo 
entrante  que  forma  la  raya  para  escluir  de  esta  provincia  la  parro- 
quia del  Baúl.  La  mayor  parte  de  este  territorio  lo  componen  her- 
mosas sabanas  bañadas  por  ríos  cuyas  márgenes  son  susceptibles 
de  cultivo.  Cuestas  escarpadas  con  declives  suaves,  proporcionan  á 
los  habitantes  lugares  frescos  en  que  prosperan  las  plantas  que  ne- 
cesitan de  un  clima  templado.  Valles  hermosos  se  encuentran  en 
los  flancos  de  la  serranía,  y  bosques  vírgenes  cubren  grandes  espa- 
cios sobre  los  cerros  y  al  pié  de  ellos.  Mas  arriba  de  la  región  tem- 
plada hai  parajes  frios  que  terminan  en  paramos  yermos  pertene- 
cientes á  las  provincias  de  Mérida  y  Trujillo. 

£1  ancho  mayor  de  esta  provincia  es  de  44  leguas  de  N.  á  S., 
desde  las  cabezeras  del  río  Abro  hasta  Nutrias,  y  el  largo  de  E.  á 
O.  de  86>  desde  la  boca  de  la  Portuguesa  hasta  la  del  Burgua  en  el 
Uribante. Sus  leguas  cuadradas  son  -1.994,  délas  cuales  se  calculan 
4.005  baldías.  La  población  es  de  409.497,  y  sus  habitantes  están 
en  moa  de  54,9  por  cada  legua  cuadrada. 

LÍUIJES  T  G0NFINB8. 

Confína  esta  provincia  con  otras  seis  que  son :  Mérída,  TrujillOi 
Barquisimeto ,  Carabobo ,  Caracas  y  Apure.  Las  f rpnteras  de  cada 
una  se  encuentran  ya  descritas  en  su  respectiva  provincia,  menos 
en  la  última  que  detallaremos.  En  la  boca  del  rio  Burgua  que  está 
sobre  el  Uribante,  empieza  el  límite,  y  este  último  río  sirve  de  raya 
divisoria  hasta  su  desagüe  en  el  Sararé.  De  la  unión  de  estos  dos 


—  8*9  — 

I 


ríoB  se  forma  el  Apure;  el  cual  divide  las  dos  proyiacias;  hasta  qne 
se  encuentra  con  la  Portuguesa  donde  teraúaa  la  provincia  de 
Apure. 

MOKTAfÍAS. 

lina  parte  del  declive  oriental  de  la  cordillera  de  los  Andes  que 
forman  en  este  país  las  montañas  de  Mérida  y  Tnijillo  y  y  otra  de 
las  de  Barquisimeto^  son  los  únicos  cerros  que  hai  en  esta  provin- 
cia. La  cadena  corre  en  dirección  del  N.  E«  y  la  cumbre  del  páramo 
de  Don  Pedro,  cuya  altura  es  de  5.900  Taras ,  es  uno  de  los. pun- 
tos que  llegan  á  la  región  fria  de  los  paramos.  Los  declives  de  los 
de  BocambocO;  Apure,  Sanio  Domingo,  Granate,  Caldera,  Niquitao 
y  Rosarios,  que  miran  hacia  los  llanos,  son  las  tierras  de  mayor  al- 
tura que  hai  en  este  territorio  y  el  punto  mas  elevado  es  el  de  Gra- 
nate ,  de  4.7^5  varas.  Del  páramo  de  los  Rosarios  sale  un  ramal 
que  se  dirige  hacia  la  abra  de  Barquisimeto,  disminuyendo  su  altu- 
ra hasta  casi  perderse  cerca  de  Sarare. 

.    RUIS. 

Todos  los  rios  de  esta  provincia  desaguan  en  el  Orinoco  por  me- 
dio del  Apure.  Son  48  ,  que  se  forman  en  las  provincias  de  Mérida, 
Trujülo  y  Barquisimeto ;  59  que  nacen  en  su  territorio  y  lo  riegan 
y  fertilizan  desde  su.  origen  hasta  su  fin.  Bai  8  ríos  de  2**  orden , 
5  de  5ff  y  57  del  4®.  El  principal  de  todos  y  el  mas  grande  de  esta 
provincia ,  es  la  Portuguesa ,  que  se  origina  en  la  serranía  de  Pañr- 
quisixneto,  Heva.Bdo  el  curso  de  N.  á  S.,  y  al  entrar  en  las  llanuras, 
tuerce  al  .E«  y  se  pone,  paralelo  al  Apure ,  uejando  entre  él  y  este , 
los  ríos  -Boconó  y  Guanaro,  que  son  también  de  2^  orden  y  nacen 
eA  las  pco^vindas  de  Trujillo  y  Barqufsimeto.  La  Portuguesa  tiene 
66.  leguas  de  navegaebm,  Boconó  53  y  Guanaro  50,  atravesando  las 
sabaÉas  y  á  .vezet  cambiaado  de  nomtee  y  tomando  disthtas  direie- 
cionesi  £1  üiibante  y  el  Caparro,  son  ríos*de  ^  orden  que  se  for- 
jQsaa  por  el  eoicmno  de  otros  muchos  en  la  provincia  de  Mérida : 
al  entrar  en  esle  territorio  scm yan^vegal^les,  y  proporciónfan  cada 
bno  4  4  lega»  de  navegadon.  £1  Suiipá  y>el  Santo  Domingo  son  áe 
igfml  árdcA ;  aquel  se  osU^  en  la  provinda  y  este  en  lá  de 
Mérida.  El  uno  tiene  54  leguas  de  navegaoioa  y  rt  otro  i^;  el  pri- 


ittfeA)  éoslea  unai  "ftíM  Ht%en,  Áe  la  qne  Mi  ¿gtm  Üa  et  canal  na* 
HMl  tmra^pGirCHristts  fhrodncdofies,  ndéntiraft  qoe  él  segando  sirve 
de  puerto  á  la  ciudad  de  Barínas ,  atento  qne  las  embarcacbmes 
llegan  hasta  Toruno,  distante  poco  mas  de  4  iegaas  de  aquella  ca- 
pital. Los  ríos  de  S""  orden  j»  «1  iM|Mirro,  Pagüei  y  Canagaá,  to- 
dos nayegables  de  29  á  50  leguas ,  y  nacen  en  el  territorio,  menos 
^'Mm»  ^  «eiema^ii  «l^k  MArída,  slrtltfndo  de  canal  á  los 
IuJMm^s  ée  PisArafea,  pam  tmsportttr  im^escdeste  cacao.  A^mas 
4a  loa  ST  tías  de  4*  Man , -ifiéAe  esta  pre¥in<»a  toas  de^CfO  que- 
4mdas  é  riaiAMMlosqte  serian  tn  los  talles  de  !lragua  otros  tantos 
tioa. 

lAGOS  T  XAOÜNAS. 

fia  ios  primeros  ninguBO  tiane  la  provincia.  TMas  lagunas  pe- 
tpMias  se  farniao  «a  «us  llaanvas,  y  de  ellas  unas  se  secan,  otras 
^eoMarvaa  agwi  en  teraoia ;  peno  nfaigona  mer  eee|»ar(icei!ar  men- 
ción. 

iaiiKA. 

Tras  4i6tíia^  üaao^séa  ^cdTMraía*  £1  uot  irib  aaa  taparea  dosier- 
Ios,  ^  ofcro  tfttnylaáft  en  panijes  f^oo  iMMtirios ,  f  el  aUtno  eétliflo 
que  comfwmit  4a  f9^  «las  pablada.  (Sin  oaibio^^  «otro  las  iieta- 
paraiiiifas  aálUktt  y  foa^  se  «nauealgan  dtoas  ééUámm  áatfwiw- 
.tas  gsadDs  da  aU«f%  &abtítéA  éodlmmmálMé  delaaemdiía  q«e 
tema  «1  ipiais  JBOHtaiíosó  de  Il4rida|  Tri|p»fMP^piÍKiiialOw  Todas 
estos  dadives»  CTcalaa^  iMisas^eia  gewaafa,  aüás  espuertas  á  tos 
vieiilas4tátidaa  diiü  fc.  y  M  £«,  qea  han  puado  ya  par  atAre  to- 
adas las  IkMiraaqie  tensa  ea¥aBaíoalaáa.£ona  do  te  y 
an  edar  -as  «My^  qaBd^veaa  «DaMisaMal  igiBi  altara  >eB«l 
^dealtw  ¡junio  «u  m  iáda  él1a9»>d»3rsnMdba.S«a0ds  jo  uril- 
»aatt<it>rttes»wiitssqwi#<BÉ¿a  iispwatuiá)iaafieirtaa  éai3L^ 
fr^sU aa 4a  oipÉ ife ^Mama^ftan fnla dfe If  amÉiúi  «a  aaiéea* 
Jteta  aiad  Ér  f»i«iáiaas.,.«iMenÉráad0Si[4a  trsjrtnte  alU  y  lauía 
arta  M  ^  asfladaí  y  náte  ^«ae  «stte  rialíiijÉ  éiiealas  ^viattÉa. 
Saean»  ate  ^aohama,  vswénetiaéaéb k3raila  teawÉHAaa  de 
Xícapaaof  4e  Mraft;  feoa  sasminiíila  >  ei^^áwps/4a  wcuMrtw 
desda  tanga  ii  eaosa^la  alto» 


■■iifwhMtsalinMliÉ  (Mfom  -^Béí  ««iMto  ttNlMi^  if  il  Ik^r  iQ 

éiflnni4d^ttsHBntaéi,  YMf«ifeiidDisahiilft,  deposüa  «Kí  kis 
Mrtwft»  i»>iwfc  iftiilpy;  yJw  «yí  qtt»  loon  «1  e««o  ^  tos  ^ 
{^  MftMi  imateto  sd«»4te  fioi|Mo  y  S.  CanÉlo*  MroHit 
ywlg  lis  idea  w  M^sar  nietos  tetfHwtflmltMiila^MiiUífla  ite 
S^f'dlipe,  ylMMBdo  émfm%  «düirttrti  irwitbo  «íéms  HiftifatdM  oe- 
JCiilBrtato4»ii«g»«riaéteWtg«a,  iMnRi«eB4íf«od«i  «l^.^foo- 
mnlo  k  wamMik  ¡M  íAltar,  y  AaNMÉbooilidftal  tlano.  D4(w9h4<i6 
-f«rlftcinénte4eidre«^Tiie«»44f:.  ypaM«er«É4elte^  «dft 
KQ^bt  éi«m ,  MNnle  4|f e  «Mbn  ila8*Miira8  <M  -Cejédes  ^«eda  de^ 
tenido  el  yienlo  qae  Tiene  de  Barqnisimeto ,  y  ittfMta  «AIÍ  la  bu*- 
ifieitNi,  %a4«i»  «rigen  ¿  la  «elfaéeltoeft^eiÉre  el^^éAes  y  el 

'Sl'dliaia<4&«lta6  séhmm  wriwwdtBiítfte  eaffcittiaü,  ptmpqae^sdiii 
*9iHMre  Vr'smíaovhhmmm^  y-^ennAa*  vSs^'SMvaitW'CXiMei^aB^ciei^rafflmCtaD 
sdB<s«nfi,á  |É6ár  #aN]iiea]fW66fimt«6  4até1ltts<e^áii  ^|etos  á  c»- 
'liüfttttUKiy  H' vmsa  'ñe  4os  paattanus  tie  Iob  i4ea  ^pie  «d^ffioniR  i.  t>inio^ 
'«^fttd,  otiy«9  iiii0itMs«e  ]%e^%i  1[>tísa  «genera!,  ^na  de  las taosasy 
quizas  la  única  de  derlas  calentaras  que  en  ^eftermimiáas  épocas 
suelen  afligir  algunos  pueblos  de  este  territorio,  es  el  encontrarse 
ellos  en  la  dirección  de  la«oontaite  4tel  ¡ú»  impregnado  de  los  va- 
pores producidos  por  la  putreraccion  de  los  vegetales,  que  encuen- 
IHi  ^  *ptm  p9t  las  ^^agas ,  treme<late  y  fnntaoos.  fin  la  «erranía 

flai  iRIlflMs  WfliOa  j'Tr0SO9S« 

tMo^iMl  «i  lwri«PD»4 §3út»étm%fé  y <dita  Imm  úykm^m ,  y 
en  junio ,  julio  y  agosto  son  tan  copiosas  las  lluvias^  qae>«Q«i  dfa 
<m.iU9í9^9g9k4inmif&M^ré^iio^  *«n  <seis.  CsCa  es 

«fiaáa  te iJwmm'pAadlpatm  qob  hmm  «saMr 'de. «uAfe los  ríos ^ 
los  cuales  se  estienden  por  las  sabanas  bajas  é  inundan  grandes 
espacios.  Causa  es  también  Ja  4MtíS inundaciones,  el  hallarse  en 
esta  época  de  tal  modo  crecido  el  Orinoco ,  que  su  velozidad  unida 
«é«»|HU>A  ^9Qldhie&4ÑiQe  ¡tfé^JA  Épaife  m  'pñeiftide^nnf  ar  todas  las 


—  Wí  — 

ellas.  El  aamefito  cdmecaúro  de  estts  agMSy  f  Its  erillts  bajas  del 
ipare ,  impiden  qne  todas  Tayan  al  Orinoco ,  por  lo  cual  salen  de 
su  canee  é  inundan  las  sabanas.  Esto  mismo  sucede  en  los  ríos  de 
harinas  que  caen  al  Apure ,  el  cual  sirriáodoles  de  represa ,  les 
obliga  a  salir  de  madre.  Hai  entonces  yarios  caminos  trasversales 
casi  intransitables ,  ó  por  lo  menos ,  con  gfandes  trechos  cubiertos 
de  agua  á  mas  de  tara  de  profundidad,  y  cerca  de  las  alturas  algu- 
nos riachuelos  suelen  detener  por  un  día  ó  mas  tiempo  á  los  tran- 
seuntes.  Los  caminos  que  pasui  p(tf  el  |»¿  de  la  cordillera  son  bue- 
nos ,  y  generalmente  transitables  los  que  condueen  de  un  pueblo 
á  otro;  pero  hai  ciertos  parajes  poco  habitados  en-^que  es  casi 
iniposible  pasar  de  un  punió  á  otro ;  bien  es  que  ton  pocos ,  y  que- 
dan cerca  del¿  Caparro ,  edtre  este  río  y  el  Uribaute  y  cerca  del 
Apure  y  la  Portuguesa. 

-  Luego  que  el  Orinoco  emptesa  á  bajar ,  van  también  descargán- 
dose el  Apure  y  los  rios  que  en  éi  desaguan ;  las  sabanas  se  secan  ^ 
conservando  agua  solamente  ciertas  lagunas  y  esteros  coya  eva- 
poraciott  progresiva  hace  que  muchos  qued«i  absolutamente  secos. 
Esta  es  la  estatíon  en  que  se  encuentra  mas  pkga  de  xancudos  en 
las  orillas  de  los  ríes ,  solare  todO;  de  los  que  están  ménqs  espuestos 
á  los  vientos;  pues  solo  cuando  eslos  soplan  queda  libre  el  aire  de 
tan  molestos  insectos, 

DIVfiSIOfN  TEiOllTmilAL. 

•  I 

*  ' 

Se  divide  es(a  provincia  en  8  ^nntonesy  á  saber :  Baríoas,  Obbpo, 
Cuanare,  Ospino,  Araure,  Pedraza,  Nutrias  y  Guanarito;  los 
cuales  contienen  62  parroquias  y  70  sitios.  En  este  territorio  se 
culiivacafé,  cacao,  (dgodon,  maíz,  caüa  dulce,  añil,  tabaco 
escelente,  plátanos,  yuca,  ñame ,  ocomos,  quinchoñchos ,  batatas, 
cambures,  fr^les,  caráotas  ,  arroz  y  gran  variedad  de  frutas  y 
verduras. 

£1  toíal  de  la  poblaciofi  se  puede  dividir  de  este  modo :  40/100 
á  la  agricultura,  55/400  « laería  y  25/100  al  comei^io,  artes  ele. 

comcié. 

Comercia  esta  provincia  con  Angostjara,  Uevwi^o. café,  cacao , 
eueros^r aftU^  maderade^ooostruecioni  acfos^ algodón^  maiz,  azú- 


car ,  papelón ,  papas ,  garbanzos ,  alverjas ,  snela  ^  yerbas  medici- 
nales ,  cebadilla ,  aguardiente ,  caernos ,  muías ,  yeguas  y  ganado ; 
recibiendo  en  cambio  mercancías  secas  ,  loza ,  jabón  ^  ron  ,  vino, 
ginebra,  queso,  aceite,  vinagre  y  sal.  A  Caracas  y  Puerto-Cabello, 
llevan  de  esta  provincia  añil ,  cueros,  cacao,  burros,  cerdos  y 
ganado  vacuno  ;  recibiendo  géneros  y  efectos  de  bodega.  El  comer- 
cio con  Barquisimeto  se  h|^ce  recibiendo  de  aquella  provincia 
sucia  ,  cordobanes ,  zapatos ,  chinchorros,  hamacas,  lienzos,  sacos, 
yerbas  medicinales ,  cebollas,  ajos  ,  cabullas  ,  conservas ,  cobijas, 
efectos  de  talabartería,  garbanzos,  azúcar,  papelones;  dando  en 
cambio  maíz,  fríjoles,  arroz,  queso,  pencado,  chigúire  dinero  y 
ganado.  Del  Tocuyo  se  recibe  harina,  algodón,  frazadas,  dulce, 
sal ,  cordobanes  ,  ajos  y  cebollas;  devolviendo  por  esto,  cueros  y 
dinero.  De  Boconó  (de  Trujillo)  se  recibe  harina ,  cebadilla,  carao- 
las  ,  alverjas  ,  garbanzos,  azúcar ,  repollos ,  papas  y  yerbas  medici- 
nales ;  dando  en  cambio  géneros  y  dinero.  Se  envian  de  Mucuchíes 
á  Barínas  yerbas  medicinales ,  papas ,  alverjas  y  harina  ;  devol- 
viendo ganado ,  cacao  y  pescado.  Con  Marida  el  comercio  se  hace 
enviando  de  esta  papas,  alverjas,  garbanzos,  azúcar,  harina,  con- 
serva, pellones,  zaleas,  mantas  y  hamacas;  devolviendo  cacao  y 
ganado.  En  fin ,  con  el  Apure  se  comercia  enviando  á  Guasdualilo^ 
y  Acbaguas  cacao,  azúcar,  zaleas,  pellones,  mantas  y  hamacas; 
retornando  en  cambio  ganado.  A  San  Fernando  se  suele  llevar  lo 
mismo  que  á  Guayana ,  recibiendo  de  allí  ¡guales  efectos  que  de 
los  dos  lugares  anteriores;  así  es,  que  debe  considerársele  como  un 
punto  de  escala.  Al  resto  del  Apure  se  lleva  maiz,  arroz ,  pellones, 
mantas  y  azúcar ;  recibiendo  en  cambio  ganado  vacuno. 


CIUDADES   Y   VILLAS. 


CANTÓN   DE   BARINAS. 

La  ciudad  de  Barínas  es  la  capital  de  la  provincia  de  su  nombre, 
erigida  el  año  de  -1787;  habiéndola  separado  del  distrito  de  Mara- 
caibo  á  que  pertenecia.  Los  progresos  que  hizo  en  pocos  años  el 
territorio  de  Barínas  (al  que  entonces  correspondía  también  la  actual 

P.  GEOG.  33 


—  5U  — 

provincia,  dé  Apuro)  y  la  facilidad  conque  podia  ser  invadida  por 
los  rios  navegables  que  desembocan  en  el  Orinoco ,  fué  ló  que  in- 
dv^'á  delerminar  la  creación  de  esta  provincia. 

La  ciudad  de  Barínas  fué  fundada  en  -1576  por  Juan  Andrés  Va- 
reía ,  en  la  cumbre  de  un  cerro  inmediato  al  origen  del  río  Santo 
Domingo.  Llámesela  al  principio  Altamira  de  Cáceres,  eu  honor  del 
gobernador  t^rancisco  de  Cáceres :  después  se  recdiOcó  sobre  una 
meseta  nombrada  Meromy  en  cuyo  lugar  se  la  denominó  Barínas  ^ 
por  el  nombre  del  territorio.  Más  atormentados  Iqs  habitantes  por 
los  insectos ,  cambiaron  otra  vez  de  puesto  y  se  situaron  en  una 
llanura  ,  lo  cual  fué  aprobado  por  el  rei. 

Barínas  progresaba  considerablemente  ;  pero  la  guerra  de  la 
independencia  ha  detenido  su  prosperidad  por  muchos  años.  Ade- 
mas de  haber  sido  esta  provincia  un  teatro  de  guerra  á  muerte ,  la 
capital  sufrió  un  sitio  ,  y  fué  tomada  ,  incendiada  y  saqueada  por 
los  realistas  ;  así  es,  que  ahora  está  levantándose  de  sus  ruinas ;  si 
bien  parece  que  va  logrando  rápidos  adelantos.  Este  paiS;  por  su 
posición  geográGca ,  por  los  grandes  rios  navegables  que  lo  riegan 
y  los  terrenos  adecuados  al  cultivo  que  hai  eu  sus  orillas,  puede 
llegar  á  ser  de  los  roas  interesantes  por  su  agricultura,  crias  y 
comercio.  Ninguna  provincia  de  las  que  están  en  la  zona  pastoril 
posee  las  ventajas  que  la  de  Baríuas.  Al  Ñ.  íe  queda  una  elevada 
serranía,  que  le  proporciona  tierras  útiles  para  los  diversos  frutos 
que  se  quieran  cultivar,  desde  el  calor  mas  fuerte  hasta  el  frió  mas 
intenso ,  y  de  distancia  en  distancia  rios  que  corren  casi  paralelos 
entre  sí,  desde  la  cordillera  hasta  el  Apure,  proporcionando  cana- 
les naturales  para  la  esportacion  de  los  Trulos  que  producen  aquellas 
fértiles  riberas.  Al  N.  se  elevan  como  en  anfiteatro  las  grandes  gra- 
das que  conducen  ¿  los  nevados  páramos  de  Santo  Domingo  y  de 
Granate.  Una  alta  mesa  cubie;  ta  de  gramíneas  se  presenta  primero, 
y  detras  de  ella  las  cuestas  que  se  suceden  unas  á  otras,  hasta  que 
la  elevación  de  las  mas  próximas  impide  ver  las  que  les  siguen  y 
los  picos  de  los  páramos  helados  y  desiertos.  Hacia  el  S.  una  espa- 
ciosa sabana  orillada  por  las  vegas  ai1)oIadas  del  Santo  Domingo, 
forma  horizonte,  no  pudiéndose  medir  con  ia  vista  su  estension 
que  solo  concluye  sobre  las  lejanas  barraocas  del  Apnre^  Al  E. 
anima  la  vista  la  serranía  que  se  dirige  al  N.  E.  perdiéndose  en  los 
vapores  que  salen  de  las  sabanas  y  cuestas  calentadas  por  los  rayos 
de  un  sol  deslumbrante,  mientras  que  al  O.  unos  cerritos  inipiden 


—  MS  — 

la  perspectiva  de  lá  misma  serranía  ,  piieslas  sabanas  no  péi^mí- 
ten  ver  sino  cortos  trechos  de  sus  terrenos  uniformes:  lá  rare^ 
facción  del  aire  se  opone  á  que  se  vean  eti'  toda  su  extensión. 

Ya  hemos  dicho  que  ninguna  provincia  tibné  las  ventajad  de  ésta  : 
sus  habitantes  pueden  ser  cultivadores  ,  criadores  y  comefciaiites 
á  la  vez^  y  lo  que  es  mas  particular,  residiendo  al  mismo  tiempo  en 
un  solo  lugar.  Las  orillad  délos  riós  sóif  táii  feraces,  que  producen 
abundanVenáente  cacao ;  añil,  algodóíi;  (abdcó,  itíáfZ;  plátabo  y 
yuca.  Saliendo  de  las  vegas,  las  sabanas  inmediatas  están' cubiertas 
de  frescos  pastos  y  en  ellas  se  crían  numerosos  rebarSos  de  ganado. 
Por  último,  el  mismo  rio  á  cuyos  bordes  esté  la  casa  de  habitación^ 
STve  de  canal  para  llevar  frutos  y  traer  mercancías.  Pocos  rios  de 
Venezuela  (ienen  tanta  abundancia  de  pezes  como  los  de  la  provin- 
cia de  Barínas ,  y  de  esle  recurso  vive  una  gran  parte  de  la  pobla- 
ción que  habita  en  las  orillas  de  aquellos  ;  así  es  ,  que  casi  lodos 
los  pueblos  de  este  interesante  lerrilírío  se  encuentran  establecidos 
en  las  barrancas  de  los  rios ,  que  son  ciertamente  roui  caudalosos, 
porque  salen  también  de  las  mas  elevadas  sierras  de  Venezuela , 
cuales  son  las  de  Mérida  y  frujillo. 

Dos  grandes  selvas  tiene  esta  provincia;  la  de  Ticoporo  que  se 
liga  por  la  serranía  á  la  de  S.  Camilo  y  la  de  Turen  que  casi  se 
une  á  la  del  Altar,  sin  considerar  la  parte  de  la  serranía  desierta 
y  cubierta  de  selvas  en  una  estension  de  mas  de  $0  leguas  de  largo. 
Cuando  los  valles  de  esta  serranía  estén  cultivados  y  habitados  , 
cuando  la  gran  montaña  de  Ticoporo ,  regada  por  muchos  rios  y  en 
la  que  nace  silvestre  el  cacao>  esté  rozada  y  poblada,  y  la  de  Turen 
reducida  á  plantaciones  y  haciendas,  entonces  será  esta  provincia 
una  de  las  mas  ricas  por  sú  cria^  produciiones  y  comercio. 

Barínás  posee  un  colegio  eñ  Guanafe ,  y  tiene  varías  escuelas. 
Sus  habitantes  se  dedican  a  empresas  níef cantiles  y  agrarias,  y  sus 
ganados  se  aumentan  prodigiosamente.  La  peste  ha  destruido  las 
bestias  cabalfares  y  miitarés  con  qxíé  áé  cuidaban  los  ganados,  y 
los  habitantes  de  esta  proviácia  han  sido  los  primeros  en  saber  con- 
servar sus  crías,  con  tanto  aclérío,  q;ie  los  numerosos  rebaños, 
en  lugar  de  alzarse  por  falta  dé  caballos  para  conteñeríos,  se  han 
amansado  en  términos  dé  dejarse  conducir  á  los  rodeos  por  gente 
á  pié. 
La  ciudad  de  Barínas  es  faniosá  en  los  mercados  europeos  por  la 


calida'd  de  sa  tabaco  saperior,  bien  que  el  de  Camanacoa  sea  pre- 
ferible. 

El  clima  de  Barinas  es  sano,  aan  cuando  en  la  estación  de  in- 
vierno suele  haber  fiebres  en  algunos  pueblos  de  este  cantón:  pa- 
rece que  provienen  de  los  parajes  anegados  por  los  derrames  de 
los  rios. 

Las  parroquias  son  :  Barinas,  Coroso,  Pagnei,  Totumal,  Caroní , 
Toruno,  Palma,  Santa  loes,  Santa  Lucía,  San  Juan,  Quebrada 
Seca  y  Barinitas. 

CAKTOÜC   DE  OBISPO* 

La  villa  de  Obispo  está  situada  en  un  llano  hermoso  y  culiivado , 
cerca  del  caño  de  su  nombre ,  teniendo  á  2  leguas  el  puerto  de 
Caroní  sobre  el  rio  Sto.  Domingo  que  facilita  la  navegación  con  el 
Apure  y  el  Orinoco.  Casi  todo  este  territorio  se  compone  de  llanos 
espaciosos  cubiertos  de  gramíneas ,  en  que  pacen  numerosas  vaca- 
das. Las  orillas  de  los  rios  ofrecen  vegas  fértiles,  úiiles  al  cultivo 
de  la  caüa,  del  añil,  del  algodón  y  del  tabaco  ;  mientras  que  al  de- 
clive de  la  serranía  de  Trujillo,  la  tierra  casi  toda  desierta,  propor- 
ciona parajes  para  café,  que  allí  se  da  escelen  te.  Tiene  esta  villa 
las  ventajas  de  estar  cerca  de  Barinas ,  de  tener  próxima  la  serra- 
nía, y  de  poseer  un  puerto  sobre  un  rio  navegable,  pudiendo  de- 
dicarse sus  habitantes  á  la  cria,  á  la  agricultura  y  al  comercio.  El 
clima  es  cálido  y  á  vezes  hai  calenturas  producidas  por  los  derra- 
mes de  los  rios ;  pero  no  son  periódicas  ni  generales  en  el  terri- 
torio. 

Las  parroquias  son  :  Obispo,  Yuca,  Barrancas,  Masparro, 
Pueblo  Nuevo,  la  Cruz,  el  Real,  S.  José,  Sabaneta,  Mijagaal, 
Santa  Rosa,  Libertad  y  San  Lorenzo. 

CANTÓN   DE  GüANARE. 

La  ciudad  do  Guanare  fué  fondada  por  el  capitán  Juan  Fer- 
nández de  León,  en  4595,  y  según  Oviedo  en  4609,  Está  situoda 
en  una  hermosa  llanura  al  pié  de  una  colina ,  en  medio  de  dos 
riachuelos,  y  á  una  legua  de  distancia  se  halla  el  rio  de  su  nombre. 
Es  una  de  las  ciudades  que  estando  en  la  zona  de  los  pastQs  mas  han 


_  5n  — 

prosperado  en  la  provincia  de  Barínas.  Las  fábricas  de  sus  casas 
indican  un  adelanto  progresivo.  Si  consideramos  la  situación  de 
Guanaro  por  lo  que  respecta  á  la  agricaitnra^  veremos  que  en  la 
parte  occidental  posee  tierras  sumamente  fértiles.  La  parte  eleva* 
da  del  territorio ,  compuesta  del  declive  de  la  serranía  de  Barqui-* 
simeto,  y  el  valle  del  rio  Guanaro  son  de  esta  clase ,  y  sus  selvas 
riquísimas  convidan  al  desmonte.  Si  miramos  á  las  partes  orien- 
tal y  meridional ,  encontraremos  llanuras  espaciosas ,  cuyos  pastos 
parecen  destinados  por  la  naturaleza  para  la  multiplicación  del  ga- 
nado. Por  consiguiente ,  á  esta  especie  de  especulación  es  á  la  que 
se  inclinan  los  habitantes  de  Guanaro.  Su  mayor  riqueza  consiste 
en  ganado  cuyo  número  es  considerable.  El  cacao,  el  café,  el 
añil ,  la  cana  y  el  tabaco  son  sus  produccnmes  principales  de  es* 
portadon ,  con  la  ventaja  de  estar  cerca  de  dos  embarcaderos  y  sea 
en  lá  Portuguesa ,  sea  en  el  Guanaríto ,  que  no  es  otra  cosa  sino 
el  rio  Guanaro.  La  ciudad  está  éki  la  encrucijada  de  los  caminos 
que  van  al  interior  de  las  sabanas,  á  la  eapitul  de  la  provincia»  á 
los  valles«de  Ghabasquen,  Omucaro  y  Tocuyo,  por  una  parte,  por 
otra ,  los  de  Boconó  y  Xi'uJiHo ;  y  últimamente »  en  todo  el  camino 
que  conduce  á  las  provincias  de  Garabobo  y  Garácas ,  y  á  las  de 
Barquisímeto  y  Coro ,  lo  que  hará  ser  siempre  interesante  este 
punto  para  la  cria,  la  agricultura  y  el  comercio*  Hai  un  colegio; 
y  la  ciudad  está  bien  coaatmlda ,  en  un  temperamento  sano ,  aun- 
que cálido. 

Las  parroquias  son  :  Gnanare ,  Tucopido ,  Boconé ,  S.  Rafael , 
María^  Maracaí  Papelón  y  San  Üigael. 

CANTÓN  DE  OSPINO. 

La  villa  de  Ospino  está  Mtuada  al  pié  de  un  cerrito  á  la  orilla  M 
rio  que  lleva  sa  nombre.  Su  posicioA  es  bella  y  saludable ,  aunque 
caliente  su  clima ;  pero  tiene  la  desventaja  de  estar  algo  desviada 
del  camino  principal  que  de  Barinas  va  i  Barquisimeto  y  á  Va- 
lencia. Esto  queda  compensado ,  sin  embargo ,  con  la  circunstancia 
de  componerse  este  distrilo  de  un  suelo  fértil ,  dividido  en  dot 
partes.  La  una  está  en  la  serranía  que  se  presenta  á  la  vista  bada 
el  poniente ,  en  formas  variadas  y  pintorescas ,  y  en  ella  bai  luga- 
res propios  para  diferentes  producciones ;  esta  es  ia  que  divide  el 
territorio  del  Tocuyo  >  teniendo  un  camino  que  atraviesa  la  ser» 


—  518  — 

raniay  v^  al  DH^eblp  del  jarico.  La,Q(r^^^ue  esia  p^yor,  se  com- 
pone dej^nd^s  sabaojas  ^ab^^daótes  ^e  ,RasU)S  y  a^,  ^  tierras 
útíles.al  misino  üen)po  pai:fi.^l  (tuitivo ;  (|$í^5  que  sjd  yeo  gr^ucir 
en  esle  (ejrritQCÍp  el  cacao  y  ^1  ea.Cé.  Hai  a^pí  ajbii/oi^ntes.qfi^  de 
cerdos ,  y  jen  ainguna  parte  de  la  r^públii^  s^  eocaentrao  ea  mayar 
número  y  mas  gordos.  De  elJQs.se  hace  yja  qoQi^cio  cqqs^erable 
con  las'p|rovincia$  de  Carabobo  y  Caracas. 
Las  i^r^oq^í^  sfya  :  Ospino.y  Aparicjp,^. 

ClkSfOVI  /JDB   AHADEJi. 

La  villa  de  jkraure-está  {>laAi6ada  en  un  llano  abierto  jrl  pié4e 
una  peqiMíla  galera,  teakado  á  menos  demedia  milla  la  paño- 
quia  de  Acarigoa ,  coa  la  que  fomavá  nn  solo  poAio  con  el  iiem- 
po.  Tiene  ia  ventaja  de  ballarse  á  -5  .leguas  üel  cafio  iHirigiia^ 
navegaMe ,  que  oonduoe  al  rio  Sarare ,  este  al^Cesjédes  ^  que  cae  á 
la  PórUigiiesa ,  ^1  cn^  desemboca  ^n  et  Apure ,  y  este  ékimo  al 
Orinocct;  de  manera,  que  desde  e^ta  vüla  se  puede^ír  embarcado 
hasta  Ango>tnra.  Si  á  esta  ventaja  se  agrega  {a  de  justar  en  la  en- 
€ruci|áda  de  los  o^iminos  que  van  por  esta  proviocfa  y  la  de  Apure 
á  las  de  Barquisimeto  y  Coro ,  y  ¿  Its  de  Garabobo  y  C9racas,  se 
conocerá  la  posición  interesante  de  Araure ,  que  tiene  ademas  la 
fértil  selva  de  Turen,  casi  >toda  inculta,  fosee  ierrenos  b^os  y 
lierroosas  sabanas  en  que  se  crian  numerosos  rebaños  de  ganado. 
:  £1  cacdo  /  e(  café ,  fa  cSiia ,  el  ajÜA  y  el  tabaco  se  dan  esceleiUes.  CI 
clima  es  sano  en  todo  este  territorio  y  sofo .  en  ia  monteüa  d0 
Turen  suele  habei^  fiebres.  Esta  villa  es  la  patria  del  intrépido 
Pápz,  actual  presidente  de  la  rioplblica,  y  cejrca  de  ella  se  dio  la 
célebre  batalla  de  Araure  que  libertó  toda  ia  provincia  de  Barínas 
en^Hío. 

La^  parr(k[u{as  sen  :  Araure,  Acárlgua ,  AguaUabcft ;  $.  Rafael^  ' 
Misión*;  SabaoeU  y  HrUu.'  ^ 


C^j^TpN   DE   PEDRAZA. 

la  ciudad  de  Pedraza  fué  fundada  en  H9{  por  Gonzalo  Pina  La* 
•dueño,  que  así  la  llapió.  dándole  el  nombre  de  su  ciudad  natal  en 
Estremadura.  Fué  situada  al  nléde  laserraqía.  pero  cu  J  614  los 


r 


—  519  — 

Indios  Giros  la  destrayeron ,  y  ée  reconstruyó  en  el  lugar  actual 
por  el  capitán  D^íego  de  Luna.  Está  se4>re  «na  hermosa  9aA)aDa  eei^ 
ca  de  la  orilla  del  río  Cana^.  fis  miOf  de  fes  terrüarios  en  ^|ue%BÍ 
mas  teiilaf  as  para  «4  <;ultlto  de  tierras  templadas  fHas  y  eallanla^. 
En  estoéitiflw  Mestiéndefagran  scfhraéeTIcopQi^que  tiene  SOle^ 
gnas  cuadradas*,  está  bailada  por  multitud  de  ríos  y  en  ella  nace 
sllyestre  el  cacao.  El  clima  #8  alM  pNíKUM^  ¿«capsa  de  los  pantanos 
que  forman  las  aguas  en  sus  crecientes,  y  por  la  espesura  del  bos- 
que ffWfWiédií  Ja  anHadi  da  knim^os  del  «qU  i  paoa  4íMi^ía  ú$ 
Pedtma.es  1»  iia?#9iMA^miCM^iiiáf  piirálpii^denbaMri^ 
prx^^on^Hmes  4  ApwWt  ¥  P^^  MUiptitiite,  baala  A«pisltira.  Sna 
b^lijtentaf ü Mton-i laa^tMHaiia)  ^^a^har  lodfi  al  ealüw del 
capao fucr!sefda<a«ad£»t«; ianriiita aliaül^al «alé» el  tlgftiiün  y  to 
capa.  .800  {HH4iMHaíaiifl»>de,eale(0t«ii«i.  l}iaM4aba«És  .«vi  ««IUiki 
parAáa«ria.y«Mutfai9d«<«UaS'aa  oafami.'de  agna.Miila  eatawmiiUiiC' 
vioaa.  Sin.eniMi^,.p<H'ja04Msifiiafi,  EedMna.aS'.^  «aictoa  isalNte* 
pero.aaM;  io^  la«biefiiMhi^4a  KMltanb.aí>^a0ea|itiíaii laifwte 
de- 1^  .meaéalía  de  iTicwwa  i^  liia^ñehlai4|iiB  estáu  >aoiina  .41  Ufi* 
bantc,  eo Joaenatoa aa6teti^al>er^l^aba^ayiB^pwa^««len■l 

Las  paiiamiaa jea ;  faéraiay  Ct^i^Blá».  flao^gaá»  Mm^  Baadíat 
Mamporal,  Santa  Bárbara,  San  Miguel  y  Guaca. 

CANTÓN   DS   NUTBUS. 

La  ciudad  de  Nutrias  es  una  de  las  mas  comerciantes  del  río 
Apure  después  de  San  Femando.  Esta  es  eJ  depósito  del  bajo  Apure, 
y  aquella  lo  es  del  alto.  Está  construida  sobre  un  Uano  que  se  inunda 
y  á  una  milla  del  Apure,  donde  está  el  puerto.  En  invierno  es  mui 
malo  el  camino  que  eslá  entre/ este  y  la  ciudad.  Su  bella  posición 
geográfica  hace  que  se  le  pueda  llamar  el  puerto  general  de  la 
provincia  de  Barínas,  y  cuando  esta  haya  llegado  á  la  prosperidad 
á  que  está  llamada,  Nutrías  será  una  gran  dudad  comerciante.  La 
principal  riqueza  de  los  habitantes  de  este  cantón  consiste  en  gana- 
do, y  las  bellas  sabanas  que  tiene  parece  que  favorecen  sobre  ma- 
nera las  criaa ;  sin  embargo,  no  Taltan  tierras  de  labor  en  las  orillas 
de  los  ríos,  y  sus  vecinos  las  cultivan.  El  clima  de  esta  ciudad  es 
cálido  y  algo  enfermizo,  y  tiene  algunos  parajes  espuestos  á  calen- 
turas ;  pero  la  generalidad  del  territorio  es  caliente  y  sano.  Las  fie- 
bres que  atacan  á  vezes  en  este  lugar  son  debidas  á  los  derrames  del 


—  520  — 

Apare  y  á  los  |Niiitano6  que  eslán  cerca  de  la  dudad^  sobre  todo 
los  que  se  eacuentran  á  barloTento  de  eUa* 

Las  parroquias  son :  Nutrías»  Dolores,  la  Gnn,  Jobo,  Santa  Ca* 
talina,  Santo  DomiogO;  San  Jaime,  Guadarrama  y  San  Antonio* 

CANTÓN  DC  GDANARITO, 

La  Tillare  Guanaritoestá  en  las  orillas  del  firtil  río  de  Guanare 
que  le  sirte  de  cand  para  llevar  ras  produciones  al  Apure  y  al  Ori* 
nocoy  tanto  en  niTÍemo  como  en  fülmo.  Con  difiouHad  se  encontra* 
rá  en  toda  la  proyincia  un  río  tan  poblado  en  sua  oríllas  eomo  este» 
y  tan  abundante  en  pezes.  Los  platanales  duran  mas  de  80  ailos  y  el 
rio  nunca  deja  de  suUmiistrar  escalente  aKmenlo  á  los  babitantes» 
los  cuales  se  dedican  al  cultivo  de  aüil,  caña  y  a^odon.  Sabanas 
bermosas  con  machos  ganados,  hacen  también  la  riquem  del  pais» 
y  Guanarito  por  su  posición  hace  comercio  con  todo  el  interior 
de  las  sabanas  de  su  territorio.  El  clima,  aunque  cálido,  es  sano,  y 
solo  en  algunos  estreñios  de  este  cantón  suele  haber  fiebres. 

Las  parroquias  son :  Guanarito»  Morrones  y  Sabana  Seca. 


«    t 


TABLA.  COMPARATIVA  de  la  potiáon  BAroaAmica  de  lu  cabezas 
dBBOstiwns,  terrenoa  baldíos,  pobladon  absoluta,  rdatira,  hombres  dci 
frutos  que  le  cultivan  para  la  esportaeiou. 


9 

|toii,  su  altura  sobre  el  nivel  del  mar,  su  tempecalura  'nedia,  calidad 
^y  esclavos,  distancia  á  la  capital  de  la  provincia  y  de  la  república,  y  '' 


rrr 


^t.  c. 


fetdtM. 


»OBLÁCIOH  pp  LOS  cahíces* 


Total 

población 
en  4880. 


90 
«49 

9 

47 


ip^i  mtmmmmmmmm. 


11.397 
SI  «101 


40.SOS 
15.078 

S.tlS 
18.6») 

4.S86 


109.497 


Población 

rtlatWa 

por  lagoa 

cnadrada. 


53 
90 


no         jaoo 


118 

94 

8 

46 

43 


54 


boabre» 
ddles 

PfrA 
las   arma*. 


ISOO 
1900 


500 

800 


41.100 


Kd  micro 

d« 
et  clavos. 


S3FSWr^^33F 


I.OS   CA|ITO>.0b 


IS7 

m 

489. 


idOO  197 


89 
17 


4  la  capital 

dala 
provincia. 


^tnmm^ 


k  la  capital 

dala 
repdbUea. 


para 


98 
96 


r- 

15.?/<         W-*/< 


»4  V* 


1.458 


68  <»/«.. 
105   ?|tf 

9«  V« 


G«9M«aftil,  offéfCtllt 


•        .  ■ 


id. 

*  •  • 


Gtc«ojcÁfé. 
Cacao,  ital^,  a]godoft,{ 
M. 

n 

Cafia ,  aftil  j  algodón. 


■^nnnRi«p***<«nMH 


—  524  — 


TABLA  DB  LA  ALTUBA  I>B  LOS  CEBBOS  DB  LA  PBOYIIVCIA. 


Nombres,         Yaras.      Serranía», 

Don  Pedro........  3000 Venda. 

Bocambooo 4190. id. 

Apure 4Sao. id, 

Saoto Domingo....  4700. id. 

Granate. 4715. id. 


Nombres,  Yaras,     Serranías . 

Caldera 4848 Trujilto. 

NÍ4|UÍUo 4480. id. 

Sarare * 9900 Barqulsi- 

meto. 
Zancudo IMO. id. 


TABLA  DB  LOS  BIOS  DE  4"*  ÓBDEN  DE  LA  PBOYINCIA. 


Nombres»       SerratUú$,     DesagüM. 

Tanre Herida..».  Orinoco. 

SanUBarbara id id. 

Pedrasa  la  Vieja....  id id. 

Currílos id id. 

Capitanejo id id, 

Meno. id id. 

Zapa id id, 

Miday id id. 

Bautni id id. 

Socapó id id. 

Bombú id id. 

Tieoporo ^...«.  id id. 

Azul id...,', id. 

Curbatinaito. ......  id..* id. 

CurbaU id. id. 

BscagSei id id. 

Bomb6.....« id id. 

id id. 


Hombros,      Sorfonias,     AMogSM» 

Tuca TrujUlo Orinoco. 

Galderilo id id. 

Anua id., id. 

Tucopido id id. 

María Barquisimeto id. 


llorador id. 

Toco.. id* 

Caro id. 

Taunó id. 

Are id. 

Bombis id. 

Bombón id. 

Guache id. 

Bocoi id. 

Acarigua id. 

Caro. id. 

Sarare id. 

Turen id. 


id. 
id. 
id. 
id. 
id. 
id. 
id. 
id. 
id. 
id. 
id. 
id. 
id. 


—  525  — 


PROVINCIA  DE  APURE. 


SITUACIÓN  ASTRONÓMICA,   BSTENSION  T  POBLAaON. 

Esta  proTincia  se  encuentra  en  la  latitud  boreal  de  5^»  55'  á  7°  55', 
y  entre  las  longitudes  de  0^  -17'  al  E.  del  meridiano  de  Caracas 
Y  5^  9'  al  O.  del  mismo.  Su  figura  se  puede  asemejar  á  la  de  un 
caimán,  cuya  parte  superior  la  delinean  los  rios  Uribante  y  Apu- 
re, la  inferior  los  ríos  Nula,  Arauca,  Meta  y  Orinoco.  La  mayor 
anchura  de  esta  provincia  es  A^  56  leguas  de  N.  á  S.,  tomando  del 
meridiano  de  Santa  Catalina  al  desaguadero  del  caño  Machiacare 
en  el  Meta ,  y  el  largo  de  E.  á  O.  desde  la  boca  de  Cabellare  en  el 
Orinoco,  hasta  las  cabezeras  del  Nula,  de  Í^O  leguas.  Es  el  terri* 
torio  mas  plano ,  á  la  vez  que  el  mas  bajo,  el  menos  cubierto  de 
grandes  vegetales  y  que  apenas  tiene  algunas  leguas  dé  cerros.'  To- 
do es  una  planicie  que  forma  horizonte,  cubierta  de  altos  y  sacu- 
lentos  pastos;  es  la  verdadera  región  de  los  ganados  <}ue  viven  casi 
desdeñando  los  cuidados  del  hombre.  Tiene  ^  860  leguas  cuadradas 
de  superficie,  y  de  ellas  cerca  de  690  son  baldías.  La  población  to- 
tal es  de  ^  5,479  habitantes  (entre  los  cuales  hai  2,920  indios  redu- 
cidos y  2,575  indios  independientes),  que  están  en  razón  de  8,5  por 
cada  legua  cuadrada. 

LÍMITES  Y  CONFINES. 

Confina  esta  provincia  con  otras  6  que  son  :  Caracas ,  Barínas  y 
Mérida,  con  las  de  Pamplona  y  Casanare  d^la  Nueva  Granada  y  con 
la  de  Guayana.  De  un  ramal  de  la  cordillera  de  Pamplona ,  sale  el 
rio  Burgua ,  cuyo  curso  hasta  su  confluencia  con  el  Uribante ,  de- 
marca la  raya  divisoria  con  la  provincia  de  Mérida.  El  Uribante  y  el 
Apure  sirven  de  límite  con  la  provincia  de  Barínas  hasta  la  boca  de 
la  Portuguesa ;  de  allí  hasta  la  del  Apure  linda  con  la  providcia  de 
Caracas.  El  Orinoco  y  después  el  Meta  hasta  el  punto  del  Aposta- 
dero mas  arriba  del  cerro  Pelado ,  sirven  de  raya  divisoria  con  la 
'  Guayana.  Una  recta  que  va  derecha  a!  N.  basta  el  Paso  del  Viento, 
sobre  el  Arauca,  después  este  rio  aguas  arriba,  hasta  frente  al  des- 
parran[)adero  del  Sarare  y  rodeando  este  hasta  encontrar  el  ño  Nu» 


—  526  ~ 

la ,  y  por  último ,  este  rio  hasta  sn  origen ,  es  la  frontera  con  la 
Nae?a  Granada  éñlá  protiúcia  dé  Cásanare.  Del  origen  del  Nafa 
hasta  el  del  Burgna  por  teda  la  cresta  de  la  serranía  que  vierte  sos 
aguas  al  Uribante,  se  demarea  la  raya  divisoria  con  la  provincia  de 
Pamplona  i 

á 

Un  ramal  de  la  cordillera  de  Pamplona  qne  se  dirige  hacia  eí  E.^ 
terminando  en  un  espeso  bosque,  llamado  por  los  indios  la  Gran 
Montaña ,  es  la  única  pequeña  parte  de  serranía  que  bal  en  el  Apu- 
re, y  bien  se  podría  decir  que  no  la  posee  esta  provincia,  porque 
aquellas  faldas  nunca  haá  sido  transitadas  por  entes  racionales ,  y 
S0lo  se  descubren  como  una  isla  azulada  sobre  un  inmenso  horizonte 
verde.  Hasta- el  pié  de  ellas  han  llegado  algunos  indios  del  Polvero^ 
pescando  por  el  rio  Nula  en  canoas  pequeñas,  y  no  se  tiene  otra 
relación  que  la  que  ellos  dan  y  lo  que  la  vista  indica  sobre  las  ca- 
bezerasde  aquel  rio.  Su  allura  medida  desde  el  I^olvero,  que  es 
una  distaucia  de  20  leguas,  dio  H50  varas,  suponiendo  una  re- 
fracción ordinaria  de  4/14  de  arco. 

Es*  de  notarse  que  en  las  sabanas  desiertas  entre  el  Gapanaparo 
y  el  Meta,  moi  cérea  del  Orinoco,  se  elevan  algunas  colinas  como 
d  mmite  de  Parare,  la  galera  de  Sinaruco,  los  cerritos  de  S.  Anio- 
nio,  los  cuales  parece  que  mas  bien  pertenecen  al  sistema  de  la  Pa- 
rima,  lo  misino  que  los  ceriitos  que  están  entre  el  Meta  y  el  Gua» 
viare  en  la  ribera  izquierda  del  Óriboco  y  hacen  parte  de  aquel 
fiM'sistesMi.  Esocfituaiido ,  pues,  los* indicados  terromonteros, 
en  el  resto  déla  protiBcia  del  Apure  no  se  enobentra  ninguna  pe- 
IfifieadM. 

£1  principal  rio  de* esta  provincia  es  el  Apure,  de  los  de  -i ^or- 
den OB'los  de  Venezuela ,  férmándose  de  la  unf^a  del  Uriban^e  y 
4el  Sarftíe.  El  primco'o  nace  en  la  sierra  de  Inferida,  y  se  forma  por 
eleoneursddeis  rioa  de  aquel  territorio  y  muchos  riachuelos,  pro- 
yirmiMMido  á  testo  provincia  44  leguas  de  navegaci^mj  EÍ  Sarare 
lielH^'su  or^en  cerca  de  la  ciudad  de  Pamplona  en  la'Ñucya  Gra- 
nada, y  solo  en  las  grandes  crecientes  envía  algunas  agaas  á  su  an- 


—  527  — 

tígoo  caace ,  siguiendo  en  el  dia  ia  ma^or  cantidad  de  ellas  al' río 
Arauca,  per  medio  del  desparramaderó  llamado  del  Sarare;  es  rio 
de  2^  orden  y  en  este  territorio  tiene  22  leguas  navegables.  Desde 
que  estos  dos  nos  s^  juntan  y  las  aguas  loman  el  nombre  de  Apure 
que  no  pierde  hasta  su  confluencia  con  el  Orinoco.  El  Apure  ti^ne 
^  88  leguas  de  navegacioii  y  2^  ^  de  curso  total,  desde  sus  cabezeras 
eñ  la  proyincia  de  Marida.  Este  rio  recibe  todas  las  agUasde  la  pro- 
vincia de  Barínas  y  parte  de  las  de  Mérida,  TrujillO;  BarquísimfetOy 
Carabobo^.  y  de  la  misma  provincia  de  Apure.  De  esta  caen  á  él  5 
rios  que  se  forman  en  la  llanura  y  2  en  la  serranía.  Dé  ios  der- 
rames  del  Apure  se  forman  6  rios  que  dan  origen  á  varios  caños  y 
estos  comunican  á  otros  5  rios  producidos  por  los  derrames  de! 
Arauca  que  es  el  segundo  rio  de  este  territorio>,  y  es  también  de  2* 
orden  en  los  de  la  república.  Nace  en  la  provincia  de  Pamplona  por 
el  rio  Arauquita  y  las  aguas  del  Sarare  que  se  le  unen  en  el  des- 
parramadero  de  este  nombre^  ofreciendo  á  la  provincia  de  Apure 
-140  leguas  de  navegación :  va  á  desembocar  al  Orinoco.  El  tapana- 
paro  es  otro  rio  de  2**  orden  y  él  5**  de  esta  provincia ;  se  forma  en 
las  llanuras  de  Casanare  en  el  grande  estero4e  Cachicamo,  presen- 
tando 50  leguas  navegables.  Baña  esta  provincia  per  uñ  trecho  de 
52  leguas,  el  rio  Meta,  uno  de  los  mayores  tributarios  del  Orinoco, 
que  vienen  de  los  Andes  de  la  Nueva  Granada.  Tiene  puesto  de  -I  ^^  or- 
den en  Venezuela,  y  es  navegable  por  espacio  de  ^72  leguas  hasta 
el  pié  de  la  cordillera  de  Bogotá,  á  20  leguas  de  esta  capital»  El  to- 
tal de  los  rios  de  4*^  orden  que  bañan  esta  provincia  llega  i  22,  y 
sus  aguas  van  á  la  grande  hoya  del  Orinoco.  Tirando  una  línea  des- 
de  la  boca  del  Capanaparo  en  dirección  á  S.  Femando,  resulta  que 
todo  el  terreno  que  queda  al  oriente  de  ost^Unea,  enlí'e  el  Diinoco 
y  el  Apure,  se  denomina  con  razón  Bajo-Apure,  porque  ía  poca  ele- 
vación del  suelo  ha  dado  lugar  á  que  las  aguas  se  abrán  muUitud 
de  canales  que  forman  una  especie  de  delta  interior,  cuya  hidrogra- 
fía es  de  las  mas  particulares. 

La  principal  por  la  ventagas  que  ofrece  de  abundanlísíma  pesca 
y  también  por  su  (amaño,  es  la  laguna  de  Gabunarito,  4e  2  leguas 
de  ancho  y  ca3Í  4  de  Urgo.  Muchas  islas  adornadas  de  una  gigan- 
tesca vegetación  se  elevan  eii  medio  de  las  aguas  :  se  comunica  esta 


—  528  — 

lagana  con  el  Orinooo,  y  la  forma  el  rio  GabaUarito  originado  por 

por  las  aguas  del  Aranca. 

El  desparramadero  del  Sarare  es  todavía  mas  grande ,  pero  me- 
nos profundo  y  menos  rico  en  peses.  Esta  laguna  está  entre  el  Sa- 
rare y  el  Arauquita  y  tiene  de  4  á  2  leguas  de  ancbo.  Los  terrenos 
lajos  entre  estos  dos  rios  han  dado  lugar  á  que  se  forme  este  gran- 
de estanque.  Las  aguas  del  Sarare  que  no  podía  contener  su  cauce 
por  el  aumento  de  las  arenas  acarreadas  en  el  trascurso  de  los  aüos^ 
y  por  haberse  aglotnerado  árboles  caidos  y  arrastrados  por  la  cor- 
riente^ han  sido  la  causa  de  que  saliendo  de  madre  el  rio  se  eslieuda 
sobre  un  terreno  bajo  y  lo  aniegue.  Aumentándose  anualmente  el 
obstáculo,  ha  formado  un  enorme  dique  que  solo  pueden  pasar  por 
encima  las  aguas  en  las  grandes  avenidas ;  asi  es,  que  el  resto  del 
año  la  corriente  ha  abandonado  su  antiguo  curso  y  se  dirige  por  el 
desparramadero  al  rio  Arauquita,  que  desde  luego  toma  el  nombre 
de  Arauca  por  el  volumen  de  agua  que  diariamente  le  entra  del  Sa- 
rare ;  volumen  que  antes  iba  al  Apure.  Hai  cerca  de  esta  laguna  otras 
tres  que  tienen  de  4  á  2  leguas,  formadas  también  por  los  mismos 
derrames. 

La  laguna  del  Término  es  notable  por  estar  en  el  límite  de  las 
llanuras  de  la  Nueva-Granada,  por  su  tamaño  y  por  los  buenos  pe- 
zes  que  se  encuentran  en  ella  :  tiene  5  leguas  de  largo  y  -I  ^f2  de 
ancho ;  la  forman  los  derrames  del  rio  Gapanaparo. 

La  laguna  Baratera  es  digna  de  mención  por  dar  origen  al  rio  áe 
Matiyure  que  desemboca  al  Apurito  frente  á  la  capital  de  la  provin- 
cia. Esla  laguna  existe  por  las  aguas  del  caño  Aricbuna  que  inundan 
el  espacio  de  terreno  bajo  sobre  que  ella  está.  Tiene  Á  legua  de  an- 
cho y  2^/2  de  largo. 

La  laguna  de  los  Mdios^  casi  circundada  por  los  cerritos  de  Ara- 
guaquen,  es  bella  y  su  posición  pintoresca.  De  un  lado  están  los 
cerritos,  de  otro  una  hermosa  sabana ;  y  una  espesa  selva  encierra 
los  otros  dos.  Aquí  hai  siempre  agua  y  la  caza  es  tan  abundante 
como  lo  son  también  los  tigres. 

La  laguna  de  la  Merced  es  otra  que  merece  mencionarse ,  por 
la  cantidad  de  pezes  y  por  tener  un  Vano  llamado  de  la  Mina,  que 
se  comunica  con  el  Orinoco. 

Las  lagunas  que  dan  origen  á  los  rios  Sinaruco,  Sinaruquito,  los 
Indios,  Claro  y  Clarito,  son  todas  bellas  y  ricas  en  caza!  Varios  mé- 
danos de  arena  que  se  estienden  á  grandes  distancias ,  como  aiu- 


Ilíones  que  dejaroa  las  agías  cuando  se  retir^oo  de  fq9ellas  ,.pla- 
uides,  son  los  que  alimentan  estas  Jagfina^,  y  la  fiUraeíoavContinaa 
de  las  aguas  que  ban  caído  sobre  grandes  lerr»^^  apeoosos,  en  la 
estación  de  las  lluvias,  bace  los  efectos  de  un  manai^tial,  acumu- 
lándose en  los  puntos  mas  bajos,  de  los  cuales  se  originan  ríos  cu* 
biertos  de  moricbales,  cu^os  bordes  son  casi  siempre  de  un  suelo 
que  se  buQde  al  oienor  peso. 

Todavía  bal  42  lagunas  mas ,  cuya  enumeración  seria  larga  y 
fastidiosa;  sin  embargo,  se  debe  decir  que  cada  una  tiene  de. una 
á  dos  míllasy^que  en  todas  bai  mucba  caza^  que  nunca  se  secan  y 
que  sus  aguas  tienen  de  I  á  2  varas  de  profundidad. 

Innumerables  son  las  pequeñas  lagunas  que  se  enc^^entran  en  este 
pais,  pero  la  m;ayor  parte  se  seca  en  la  estación  del  verano  en  que 
el  sol  calienta  tanlo  las  aguas,  que  llegan  á  la  temperatura  de  la 
atmósfera  y  están,  por,  consiguiente,  sujetas  á  una  fuerte  evapo- 
ración. 

GUMA. 

£1  clima.de  la  provincia  de  Apure  es  sano  en  general,  y  solo  se 
consideraba  espuesla  á  calenturas  aquella  parte  anegada  que  se 
aproxima  al  Orinoco;  pero  desde  ^  852  basta  ^  858,  ba  sido  aQigido 
todo  el  pais  por  una  fiebre  espantosa,  la  cual  ba  becbo  perecer  cer- 
ca de  9.000  personas,  que  bacen  -i  .500  anuales,  sobre  una  pobla- 
ción que  era,  en  -1825,  de  24,555  almas ;  quedando  abora  redu- 
cida á^  5.479.  ¿  Causarán  estas  epidemias  las  gpandes  selvas  de 
S.  Camilo  y  Tímocoro  que  están  al  poniente  del  Apure?  ¿  Serán  las 
materias  podridas  de  los  vegetales  de  aquellos  inmensos  bosques,, 
que  llegando  á  cierto  grado  de  fermentación  producen  una  atmós- 
fera pestilencial?  Se  debe  tener  presente  que  la, epidemia  empezó 
por  los  cantones  de  Guasdualilo  y  Mantecal,  que  están  en  la  direc- 
ción de  los  vientos  que  vienen  del  O.,. precisamente  donde  existe  la 
gran  selva,  de  la  cual  no  están  lejos.  £1  segundo  año  atacó  en  el 
cantón  de  Acbáguas  y  el  tercero  en  el  de  S.  Fernando,  preserván- 
dose entonces  esta  villa  que  no  está  en  la  dirección  de  la  gran  sel- 
va. También  es  digno  de  notarse. que  estos  vientos  del  pniente 
soplan  precisamente  á  la  entrada  de  aguas  y  que  en  esta  época  es 
cuando  se  ban  presentado  con  fuerza  calenturas  paludosas  y  ma- 
lignas áia  vez. 


n 


Acfoafmeiile  ha  eMiiéo  el  bmI;  y  e8<  ds^^tpownt  que  voHoi  á 
jjozftf  aqoel'  pah  46  so  «itttgtt»  fsfobriiMi)  htstftí^pM  ot»  #1  aimo 
^eliiefiípo'Ytteltttii  hs  maleria»  orgéBieas  de  1m  graidce^  bos^im»á 
emanar  mi  aire  peatfletteial,  6i  e»'q«e  ellas  han  Mo  la  «a»»  de 
ias  últimas  e|>hieiiiia$. 

Se  pQede  asiga^ar  cftielto  nanwaaie  kpetmmm»  te»  mas  eUi- 
das  de  Venezuela,  y  la  razón  está  en  qne  las  eap«'4e'aitto<»iidttd- 
das  por  los  vientos  de!  6.  N.  E;,  qBe  relna«  gesemÜiieitl^eD  ve- 
tana,  han  pasado  por  las  mesas  arenosas  éa^CmmnMly  fiáreébyM  y 
'  desptiespor  fas  ITanüras^  secas  y  por -los  terrenos  pedMgoees  de  Ca- 
rracas; demanelra,  qnellegaBreealentadosal  Apnre^laarever- 
'hei'aetones  deaqníell^  lefireflos.  Las  sabanas  pHinas^el  Apure, 
-desprovistas  dé  aHos  vegetolesqne  ler  deu  sombra,  atiserhi^  tanto 
^k^r,  que  i  pesar  del  desahogo  noeMmio,  l»tfet*ra  f  el  ake  no  fie- 
Dctí  lugar  de  f^esearse^AislMentente;  desde  fo^ékí  nodhe  hasta  ti 
nacimiento  del  sol.  La  teiQperatura  se  mantiene  á  55^  cent^^radoa, 
si  á  las  5  de  la  tarde  se  coloca  el  termómetro  á  la  sombra  de 
una  mata  ó  grupo  de  árboles^  y  é^  pies  de  altura  sobre  el  terreno. 
En  la  estación  lluTÍosa,  citando  el  cielo  nublado  reflqa  el  calor  ha- 
cia fa  tierra  y  eesan  enteramente  las  brisas,  sube  el  termémetro  á 
la  Sémbraf  á  39.5^.  Bn  la  noche  baj[a  solamenle^  4^*  &  9«'á  lo  sumo. 

ESTACIÓN   DE   INVIERNO. 

'  Desude  ^Imi^^  dieteftrbre  basta 'el  éé  febreroestéel  ei«lo  eosrs- 
laútefflente  sin 'nubes ,  y  si  apateee  afgtlita ,  e^nn-  f^émeno  que 
llaiiiá  la  atetíbkni  dé  los  habitantes.  Laforiáa  dé)  E.  y  del  E.  N.  E. 
sopla  Con  vioTéttcia.  A^princlpios'  di  mano  se  var  haelenáo  méios 
violenta,  é  interhRirpIda  {lor  calnito ;  y  i  ities  dá  attíMB^la  hrisa 
pasa  fí'écu^temenledeFO.  a!S.  O.  Señal  esiestasegura  de  las  llu- 
vias qtie  empiezan  i  fines  de  abrH,  y  su  mayor  fuerza  es  e»  junio, 
julio  y  agosto  :  la  cantidad  Óé  agua  es  condderaiifle ;  baldías  en 
qíie  no  cae  ttfla  sofá  gota,  otrofáen  que  Viene  poi^  lüfervalos  y  oíros 
en  que  estíKré^áiite  la  líüviá.  Las  aguas  qtie  eaeír  producen  gran- 
des a  veuldad^  éh  tói^  riós*,  f  corneó  eútónées  05  g^ieral  laltovía  en 
toda tá  gfándé Ií6ta  dfilOirhioc^, e^t^se  Itífna  demasMdoy'represa 
el  Ajiíiíre,  él  cúa'f  {íródtÉce  el  íbfeíao  efecto  en  los  ries  íque  le  cami; 
'  y  esta  é^  fó  cati$a  dé  saUr  todes  dé^  rnadt^,  anegando  los  terrenos 
bajos  de  sus  inmediaciones.  El  alto  Apure  forma  grandes  lagos  y 


—  554  — 

«píamente  los.baaoos  se  eUrm.Z  ó  ^  pie$  9e^ve  la  iottQdacion.  El 
bajo  Apure  pfesei^t^i  9A  mar;  cubriéndose  aquel  espacio  de  4  á  S 
varas  de  agua,  á  cuya  superficie  solamente  asoman  la  cima  de  Io$ 
mas  altos  árboles,. y  los  médanos  en  que  están  Jos  batos  colocados. 
Gnlónces  es  cuando  los  babiiantes  del  Apure  no  remontan  con  sus  ca- 
nosas por  los  cauces.de  ]gts TÍOS;  sino  por  medio  de  las  sabanas,  para 
evitar  la  violencia, de. las  corrientes  y  el  peligro  de  los  troncos  de 
árboles  que  eslas  arrastran.  En  noviembre  es  transitable  el  alto 
Apure  y  todo  el  bajo  á  fines  de  diciembre,  y  basta  llegado  j(nayo  se 
puede  andar  por  todas  partes;  mas  en  junio  ^s  difícil  ya  en  q\ 
^Ito  Apure,  casi  imposible  en  el  bajo^  y  en  julio  están  las  aguas  en 
«u  máximum  de  altura.  Sin  embargo,  esto  no  impide  que  el  llanero 
vaya,  no  diré  á  lodos  los  lugares,  pero  si  á  la  mayor  parte  del  país, 
escogiendo  los  baneoá,  las  st basas 4«(poc«agaa  y  á  vezes  otras  en 
que  el  agua  no  llega  sino  á  la  cincha  del  caballo ;  aunque  se  ve  cons- 
tantemente obligado  á  pasar  por  los  mas  pequeños  esteros,  canos 
ó  ríos,  á  nado,  con  la  silla  sobre  la  cabeza. 

Se  divide  esta  provincia  epi  4.caalon^  oon.lp$.  nombréis  d^eA^^bá; 
guas,  S.  Fernando,  Mantecal  y  Guasdualito,  que  contienen  22  par- 
roquias, 16  grandes  sitios  y  ^'3. parajes  de  indios  OtoinacQ$  y  Ya- 
ruros. A  las  orilias.de  los  rJQs  y  canos,  en  dp^de  e^tán  las  j)QbÍftcio- 
nas,  se  ap^ovecbam  tos  bs^Uijta^t^  do  los.|^p^ni]^;jDqsq^e^,q|ti^  bai 
m  ellas,  cpmo  del  único  (^#:eaQ  ad^quado  áJa?^r|cuUura«  AH^'sp 
QuUivamai?,  yuca^  plátanQSt<^^<i^^;  ^tcumos,  carapLas>  ínÍQ|e^^ 
arroz,  cana  dulce,  bai^i^tas  y  auywas.       ^ 

La  población  se  puede  dividir  del  modo  siguiente  :  20/IjOQ.^  la 
agricultura,.  60/lC^  á  la  qri^,  y  210/400  á  las  artes,,  cofper^io,  ^ic. 

El  comercio  coa  Mérida  ^  hi^Qp  llevando  de  Apure  ganado,  en 
cambio  deharina,  aguapdie^i  ajos,;  pa{)aS;  cebollas,  sal  y. alverjas. 
A.  la  villa  de  Aranpa  de  la.proviiiiQla.de  Gasan^re,  se  envía  lo  que 
3e  recibe  de  S,  GrisiAb^K  jp  .c^^io  de  dlne;:o.,  bestias  y  ganadu. 
Con  la  provipc;^  d¡^..B;M'i[Q4^^,n^^ia  á^,io  díi^cirPí  Cib^lio^  mu- 
la»,  ganado,  queso,  gra^a^.tp^tiigas,  pescado  y  ^uero  ,  por  dulce, 


u::  532  — 

aguardiente,  géneros,  herran^ientas,  zaleas,  pellones,  mantas,  ba- 

É 

macas,  sal,  cacao,  café,  plátanos  y  maíz.  De  la  provincia  de  Cara- 
bobo  se  envíao  géneros,  aguardiente  y  dinero,  devolviendo  qaeso^ 
sebo,  ganado»  bestias  y  chigilire.  A  Caracas  se  lleva  de  Apure  que- 
so, chigúire  y  ganado,  en  cambio  de  dinero  y  mercancías.  Con  la 
provincia  de  Guayana  es  bastante  grande  el  comercio,  recibiendo 
de  Angostura  toda  clase  de  mercancías  secas  y  licories,  berramien- 
tos,  loza,  sal,  jabón,  velas,  muebles  y  barina ;  dando  en  retornó  cue- 
ros, fríjoles,  manteca  de  tortuga,  cerdos,  maiz,  arroz  y  muías.  De 
la  provincia  de  Barcelona  se  recibe  dinero,  dando  muías,  caballos 
y  ganado. 

> 

€ 

CIUDADES    Y     VILLX8. 


CANTÓN  DE  ACHÁGDAS. 

La  villa  de  Acháf^nas  toé  en  so  origen  una  BSÉisioa  fundada  por 
Fr.  Alonso,  en  •1774.  Lleva  el  nombre  de  los  indios  que  babiiaban 
entonces  la  grande  isla  formada  por  el  Apurito,  y  limitada  por  este 
y  el  Payara,  brazo  del  mismo  rio.  De  estos  indios[solo  quedan  algu- 
nas familias.  Acbáguas  es  la  capital  de  la  provincia  de  Apure,  eri- 
gida en  A  824,  perteneciendo  antes  á  la  de  Barínas.  Qaiso  el  congre- 
so colombiano  dar  una  muestra  de  gratitud  al  pais  en  donde  se  ha- 
bla siempre  estrellado  el  poder  español,  elevándolo  al  rango  do 
provincia  con  la  denominación  del  rio  caudaloso  que  la  separa  de 
las  otras  llanuras,  decayó  rio  toman  sus  habitantes  el  nombre  de 
apúrenos. 

Las  hermosas  llanuras  del'Apure  son  poco  útiles  para  la  agricuU 
tura,  pero  brindan  con  inmensas  ventajas  para  la  cria  de  ganados. 
Se  puede  llamar  con  razón  el  semUlaro  de  estos,  porque  en  niogun 
paraje  se  multiplican  tanto  como  aquí,  necesitando  menos  de  los 
cuidados  del  hombre.  Despucs  de  la  desastrosa  guerra  de  )a  inde- 
pendencia, los  demás  llanos  de  la  república  babrian  perdido  su^ 
crias,  si  el  Apure,  por  las  previsivas  medidas  del  general  Pácz  que 
dirigía  allí  la  guerra,  y  por  haber  sido  áiftes  que  otros  puntos  li- 
bertado de  ejércitos  enemigos,  no  hubiese  mantenido  las  suyas  en 
regular  estado ;  así  es,  que  de  aquí  salieron  el  ganadO;  las  mutas  j 


—  555  — 

caballos  para  todo  el  resto  del  pais.  En  tiempos  anteriores^  do  ba- 
bia  en  estas  soledades  sido  venados  y  chigúires,  y  Cristóbal  Rodrí* 
guez,  habitante  del  Tocuyo,  fué  el  primero  que  en  -1548  tuvo  la 
feliz  idea  de  enviar  á  los  Ilaaos  de  Bannas.el  ganado  espaüol^  in- 
troducido de  Coro  y  del  Tocuyo.  Este  fué  el  que.se  multiplicó,  y  en 
el  día  es  una  de  las  fuentes  mas  ricas  de  la  industria  venezolana. 
En  las  sabanas  del  Apure  vive  el  ganado  en  plena  libertad  en  me- 
dio de  las  manadas  de  venados  y  chigüires  y  numerosas  bandadas 
de  cerdos  qne  se  bao  sustraído  del  estado  doméstico  y  viven  erran- 
tes por  aquellas  soledades.  La  posición  de  Ácháguas  sobre  un  rio 
navegable  con  tieiraa  de  labof  ao  muí  mos  del  Apure  y  cop  .ricas 
sabanas  á  su  alrededor,  seria  muí  interesante. para  otros  países; 
pero  no  para  los  pueblos  qne  están  en  estas  llanuras,!  en  las  cuales 
se  bp^sea  solamente,  al  atravesarlas,  la  dirección  majs  corta,  por 
que  su  tráfico  consiste  en  rebaüos ;  para  cuya  conducción  se  prefie- 
ren las  tierras  sin  montes  pi  poblados.  Acbáguas  viene  á  ser  un 
punto  importante  solo  para  los  que  deben  pasar  por  allí  p^ra  ir  á 
los  batos  q«e  estén  en  aqiMUa  dke«eioii.  Sin.íembacgo,  cuanddi  las 
«sabana^qne  están  del  otro,  lado  del  Araoca,  hacia  el  Meta,  se  bai> 
Uen  enbiertft^  dé  ganados  y  (KAlaetonas,  enl¿iiQes«á«há|iaaf;foM 
tomar  mayor  incremento ;  pero  no  tanto  temo  las  .vIHaS'sitQadas  en 
las  márgenes  del  Apure  y  ett  las  vías  menos  larga»,  para  llevar  los 
ganados  á  las  partes  mas  pobladas  de  la  «orranía  y- de  la  eosta. 

Las  parroquias  de  este  cantón  son  :  Acbáguas,  Santa  Lucía,  Gua- 
£imal,  Apurito,  Banco-4iargo  y  San-Antonio^ 

CANTÓN  DE  SAÑ  FEUl^ANDO. 

Laclndad  di  S.  Fernando  estiá  situada  cf#lá  oriHa  'derecha  det 
fío  Apure,  cerca  de  la  embocadura  de  la  Portuguesa,  uno'  de  lois 
ríos  mas  interesantcíft  déla  provincla'deBéríifrasj'Su  pesiHon  geo- 
gráfica es  vefttfljo^ítríftta  para  el  eomcfrein  V  álM  se  ^tepotítun  todas  las 
predu(x^oneá  de  ?a(  vflíCapríryincfoMile'&arfoas,  atife^  la  escala  para 
la  de  Angoslura^  aiU  vieríen  las  nyeréaneías  de  GaráeaS,  alN  con-- 
entren fodos los com()raNlorés de  gtrna^-delí  Alte^aoe *y^^^ 
provincias  de  Barcelóiia't  Oüttaná^,  f  «11/;''nrilHat<itfeMe  haMude, 
eslá  la  Itdve  del  ifo}ó  AfMire.  En'esti^>eán(io«  eiMe  el  ^lta>  interior 
que  fonnan  lo^Hus^Apui^^r  ATaéMy  hurtes  de  éo<i^ar  ^  Orinoco,  y 
mú  esta  ^térritcM^k»  (amblen  se  eiiodfeniran'éahlnMiiett^  verdes 


—  W4  — 

con  ricos  pastos,  abandantes  en  ganado,  y  otras  del  todo  yerman 
mas  atlá  del  Cunatiche,  hasta  las  orillas  del  Meta.  Es  tal  la  impor- 
tancia de  San  Fernando,  (]iie  qifemado'por  Tos.patriotas,  rcrraeió  de 
sus  cenizas,  y  Tueltoi  qnemar  en  18^36  pornna  (hccíon  destracto^ra, 
vohió  á  aparecer  reediflcado. 

Las  parroquias  son  S.  Fernsmdo,  S.  Jttan,  Ariebana ,  S.  Raíáet^ 
Ciinaviche  y  Carlben« 

La  tiHa  del  Maiit^Beat  eiti  atWad»  softve  ma^ábaná-  bermoaa  é  Va 
&if\kí  del  fio  Gtfleiira.  So  teú^raffientoeálido  y  sano,  ba  aídc»  o^ 
líDBÉttieiite  alterado  por  ««a  epídeoifa,  leiiya  cansa  podría  deefn^ 
que  no  es  local,  éino  emanada  ilela  moiyliÍla"de'$.  Gatiiilo.  Sabanas 
Mcbas  y  estensas  con  algunas  mátaa  y  estevas,  Ávidldas  por  caff^» 
y  rios^sombireados  por  flfetea  de  monté,  tale»  #oii  las  faeetones  tfe 
«sle'pais,  qaeeatá'IMüafdo  á  piAoipei^i^  anas,  anaudia  Ibb  sabaiAs^ 
^léaliirM  qiüatiiMiiíbécía  eP6.>Miiii  «ilblirt«rd»i|tHiaiiaB  y  anmotí'- 
üdaa^laa  piribtaciónea  46  la  c6sia yde  ia^aetráflia,  pi»seiitéAeea«e 
mMmtJmim al  camlffo  M  emáetéo^ qaoifRidráa  haeor  las  pt^a»- 
tbMiaa  dé'MÁfMay  CamiM^. 

LaapairMRffilM  de ii8lotaatoiiÍBDft4  MftQtflwl,  RiacoiiMttaido^  I»- 
depeiÉkiiM  7^690  rVéMste. 

CARTIHf  »E  O0AISbÍlilíl>TrD. 

I^  Tilla  de  GuasdiMlitoeatá  «i^ada  «a  un  llano  circundado  de 
esteros  y  terrenos  anegados  ,  á  media  legua  del  río  Sarare ,  sobre 
:€mm  eriUasfMé^.fUierlo  4e  k <l?«rÍQ»4f«  4  do»4é^ Ih^  «n  ca- 
«MalaaMierafMlariftaikf  Aügoltiiaa.  A  <poeo  mas  día  4  leguaa  bMt 
^S.  queda  la  villa; d0:Afa««a  p«is(aMetete/i.te;Nwi»rGmi)adi¡^ 
.lardada  «a;  te4HNMa4ei^qlMi4»l^río»4elfma«ii^4^  dia.flMiiSefm 
«Ana  CiiAasdiialitó  ea  el  imtlosinfr  pttf4a  pwfwctoiiar  -  caá  -itfttMjft 
i«a.n^ai«^afeílaiqvei»n«^«i4a'ipUk^  lí  )áa;|l4iM».d0  GMawr#;.  in 
fftasiaioa  4e^ieMe^;ponla>8«ia  mi^  parque  «aié^anaL 

fmmf^f  Jkado  ae.candcaea  toaiHiaadfs4to>Tattoáda^^lamrrar 
iBÍa  d«t  MáMa  ff.  Mrtipiqaa»  B«lria^da8«i:mi»9Tf^  oerca  deaaa 
'^mmi^ riíA^aitaiaSa,  qnaf nate^Ha/s^^mMaeriiif» aamara- 
MPObinm» ,:  fíüadttalita  leitó  jiwiid^j  áittfttfaraiMqüwdo  «taeUa 


—  535  -. 

esté  desmontada,  y  su  clima,  enfermizo  por  la  aproximación  á  la 
«tifa,  «e'candrfoteQTDiia^riQí'peMacbn,  ique<^tÍftiiMráftt\él  kigtr 
qttelHÜ  oc8^4t  iiilla«!iA4M|UMMÍa  á  ¡qms  atlá/  4«^tii  ca^^l^  cMi 
en  los  oonfines  cob  láliMeiqMifttiMRlft  Y«Biimit«fe(o<a»aÍAiMk4e 
Araucd;  que  se  encuentra  en  igual  posición,  hace  que  ella  sea  el 
refugio  de  muchos  malhechores,  y  seria  del  ínteres  de  ambos  go- 
Jbiernos  tener  siempre  allí  pequeinias  guanActooes  que  iftákma 
iaj>oyar  lasautorídades,  para  impedtriineiestDS^piinios  lejanosj  casi 
«[ilos<lesiertDS'sirran  detsüa  i^persQoas  inmorales  y  delincuentes 
4e  ambas  repúblicas. 

Lasparn9qim»soii :  fíuaidtiaKlD,  Ptknariio,  Goaslitucieti/VAtofi, 
Polvero  y  Trinidad. 


^    k 


•        •    é  # 


TABLA   GOIIPARAUVA  de  la  poiicioD  astmnómMa  de  Jas  eabezens 
dad  da  tus  tierras ,  terrenos  baldíos,  poUaeioii  absoluta,  relatÍTa^ 
y  los  frutos  que  se  enltivaa  para  la  eaportack». 


HMBU 

LAS  CáMZBKAS 

ns  cásvoy. 


Aehéguaf. 


PO0ICIOJÍ  ASTROBÓMIGA. 


Latitnd 
aorto. 


8ta  Fernando 


Manleetl... 


GoaidoaUlo 


7»  ty  IV' 


7.  53.  II 


7.  U.-16 


Lonptvdal  O. 

del  meridúmo 

4é  CoitM» 


Altaras 


d  DtTel 
dUoiar. 


*•   O»   •« 


0.  35.  90 


f 1.  43.  SO 


S.  43.  80         3.  4S.  8 


100 


80 


ISO 


tara 


del 

móflpatra 

eenii- 
grado. 


CAI.IPAP  PE  LOS 


DI    QOB    8B     COVP«DÍ 
LOS  CAflTOHBS  MX  LC. 


o 
c 


s 


Sa»78      908 


39.  78 


39.  78 


VOTAt. 


300 


4f8 


441 


1468 


D 


o    ae 

C    C 


«   <s 


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80 


480 


45 


80 


S 


3S8 


18 


34 


9S 


t» 


500 


IW 


Xn  la  poblackHi  se  comprenden  h»  indioi  redocidoa,  eomo  signe  : 


Canten  de  Achásnas 

Id.    de  San  Fernando • . .  4!U10 

1^.    delManlecal 670 

Id.    de  Gaasduallto 450 


Total...  ••  9940 


Iinton,  su  altura  sobre  «I  iiiyel,del  mar,   sa  temperaturii'  media,  cali- 
e  armas  ,  esdavos ,  distancia  á  la  capital  de  la  provincia  y  de  la  república, 


■BBaMlB 


mm 


mm 


(úmero 

Ae  1.  c 

que 

t6  CTC6U 

baldías. 


490 


aoo 


aoo 


too 


690 


POBLAaOX  »■  Mi  CAXT0KB9. 


Total 

de  la 

población 

en   1839. 


4.M3 


s.ns 


3.063 


9.915 


15.479 


Población 

tdaiffa 

por 

t.  c. 


11 


11 


6 


16 


8,8 


Hohibras 
útíles 

pafa  las 
armai. 


Nómero 

de 
esclarot. 


900 
400 
2S0 
950 


1.100 


94 

83 
55 
16 


]lI9Ti)ICU   . 

DB   XiOS   CknrOMMS, 


k  la  capital 

deU 
provincia. 


15 


wVé 


W/í 


íU 


A  la  capital 

déla 
Tepüblíea, 


a*i 


85 


90 


IOS  Vi 


I»  V, 


FRUTOS 

que  ae  caltiTan 

para 

LA  MtMXACIOH. 


Nada. 
Id. 
Id. 
id. 


Hai  (amblen  indios  independientei  Taroroa»  Otómaeoa,  Chfriooia  y  Gnanioa,  como  sigue : 

Cantón  de  Aehágus..».. lOOO 

td*    de  San  Femando.  ••......    478 

Id,    del  Mantecal. , 900 

Id.    deGaasdualilo » 

Total 9S75 


—  558  — 


TAMUL  VrtM  mtm  Mt  4^  éVBBH  t^S  %k  «PB0V11II» A. 

Ifambre,     Serromia,      Sméétagü^      Namkrt,        Serratiia.   SudesagMe. 

Nula Pamplona Oilooco.  Atamaica....  derrame  del 

aeHnis*»»»*^iMP4immHB»»«B»*Mh  *     r 

GuarlÜGo id id.       :  Apurilo derrame  del 

Gal^nVa  •«•*•••••  •  f0«  •«»»•  •v#«'4K* 

Matijure id M. 

ArickiiM*..'..  derrame  de 

Turumte. id •..  id. 

caires id M. 

dInllHv***.  Ailerrmedal 

Arauca ,..  id, 

Ara§flíta»»»»>*^>>«  i<t>.«.« »«*••.** JdL 
Cabullarilo. id ,..  id. 


t 

'Payara............  id Id. 

'Canorero derrame  del 

f  tAjpWMft  ^•••«*^  id- 

CouaTiche...  deUi  salaoM.— .  id. 

Rl<heiiro id id. 

lUoClarilo « M. 

^inaruco. id id, 

.Binamqttito id id^ 

LotUdloi. id id. 


I         ' 


•      ■  » 


.,  I, 


—  SíW 


FAOViNfilÉ  (DE  Béft^BbONá» 


«TTüACiÚrN   ÁStíiOVÓlílCA,   líSTlBlWlOír  t  WTBÜAtílOÍÍ. 

JBMft  ^li)^ifilft«e  ininiOitrt  de  7«  48':á  id^  IdO'  de  ^latíHidibao»- 

'SONi^  él  í Otinoeo,  T  -^Q  ((n'iná  se-ipÉif de  to  ickmr  cte  .lis  /Éotüdi^ 

t|géii»do:teásltt'i|»d'te»6áifta>l)í^  *& 

^MM%o<v  costeo Jbainmf«r  8ÍiK^«adé£.  é^0«  csti:bafie,i4iieüene 

^¿&4«|^sf$,  MiéiiltiB^cp]e>«n>ei>«mtro«olo:ll8Bft^d7ien  1» tciíaa  M 

'f >whák'9í^  Nv  i-S.mét  «15  QegDitv  fiweptiK^im  fiíja^dc  cñtm 

4«R  tléelMiiikaacMtaiy  efrlaxfitescéceiKiiKDtnií^ieirenpé  úiíto  M»ili 

r«lcit<ltiv^ 7'«a te i|»e ksbabtosieftiieinn.siis  «ejotietlMtiiqidai, 

lo*¿raais^^>sion  éUiMrafas  coo^sraiideá  Bmsá^  iettwo  Jtado  fn^a  csíbi 

de  ganado,  caballos  y  muías,  cuya  superficie  contiene  Á  \  55  leguas 

cuadradas,  de  las  cuales >aiiíei*«a  de^tó  baldías;  y  calculándose 

una  población  de  52.405  almas,  están  en  razón  de  45.4  por  cada 

fjffuéwcii^icadft* 

■*  -  ♦  -  *  J     ■         !  '  * 

GoafiM  eÉla<(lrtyviiKi»ooii  Ifts toas ^^í^m, Cateábalo., Gm- 
:mmk  al;£.  y  al  ;&  fikiaiaM.  ioi  riasrUMBey  Soala  k(  sifataDf4e 

la  A  .Gacéoas,.fHBáBáo^l»iíiMda<uafliicidieamká  \9tMm  de  lQ«daa 
iriai,  Qno  ét  \m  ««alt»deBeiíAa€a  a)imr  4a  Im^áaAUa^iy  lel  o«ao4l 

QnÉaco;  eala  fio  sirve  de  láníte  al  ^.f:aMéiktraavqac  itl^ft.  «s^el 
:iiiaRáe  teuáÉiaiaa^l^aiile  ata  isteiiaclií0ida;«»<ri  OffiD^e#,'da#r 
rjaBbMa:al)  wm.dB  toiPozos  ;ial  ooakJiaala  .su  arídao  Wft  404k^ 
-éMk  en  Gaiottiá,  y  de  alU^  y<»c  ma  ama  4a9ÍMl9i  vcoece  Ja^^ú^a 
cenJ^l^ottaule  estaMadaikÉ^ oihaaenadM  ri0 ¥a^0»  yífiíü^wi* 
iasleafa^éliatlatméefiagde  en  al  MeéeM-Uno^  al  aoai^agW 

cffnte^  as  .^  Jioiite  lasiada  boaa  dat  BM^OaiQ;,  ^  m&m^  ^«^ 

alrw^tdeirspirbaeteTaii  enteca  ipm  «alé  auto  mala  da  au  aoHil^r^. 

Jfta  aqtiíiairkitea  ábosaark  boenderAritiiiiMfifie»  QVrioiigre^  11 


—  540  — 

GaaDÍpa,  y  ese  Morichal  demarca  la  diyision  basta  su  cabeiera.  De  este 
punto  se  tira  otra  línea  para  buscar  el  origen  del  río  Tonoro  en  la  me- 
sa de  MondoDgo,  y  este  rio  es  en  seguida  la  raya  basta  k  boca  del  río 
Tacata  sn  trilratario.  De  esta  boca  se  tira  otra  recta  casi  al  N.,  que 
atraviesa  la  mesa  de  Rapio  y  de  Capacho,  terminando  sobre  el  río 
Amana  en  la  embocadura  de  la  quebrada  Carapa.  Esta  es  el  linde- 
ro basta  su  origen ;  de  allí  hacia  las  cambres,  agoas  vertientes,  se 
buscan  lascabezeras  délos  ríos  Tucuyucnál,  Tristeza  y  Amana,  que 
salen  de  los  cerros  de  sus  nombres  y  del  Monía ;  este  ultimo  está  IL 
gado  con  el  alto  cerro  de  Cumanácoa  ó  Tnrimiqnire.  DealU  tuerce 
la  raya  al  poniente  por  las  cumbres  de  la  serrranía,  aguas  vertien- 
tes, hasta  encontrar  el  cerro  Arrempuja,  que  da  origen  al  río  Que^ 
recual;  por  unas  cuchillas  va  hacia  el  cerro  Lambedero,  y  bajando 
al  N.  N.  O.  se  dirige  á  encontrar  él  rio  Neverí  en  el' punto  llamado 
Guayabo.  Aquí  io  atraviesa  y  sube  la  cresta  de  la  serranía  que  eos- 
tea  el  vafie  del  Neverí,  va  á  los  cerros  de  Gonoma  y  por  sus  altuite 
baja  á  la  mar,  fronte  i  las  islas  Arapos  pertenecientes  á  Gumaná. 
,  •.■•.•..    í'- 

I  '  cdstXÍs  mi,  If ík. 

.  ■      »       I  •  .    •  ,  •      • 

Cerca  de  punta  Gonoma  empieza  la  costa  barcelonesa ;  toda  eKa 
^  es  limpia  y  hondable,  y  puede  atracarse  á  dos  cables  sin  riesgo  al- 

[  guno.  Al  O.  de  punta  Gooioma  y  á  distancia  de  2  millas  está  la  de 

Pertigalete,  y  entre  las  dos  se  forma  una  hermosa  ensenada  en  que 
bai  -1 5  brasas  de  agua  á  uu  cable  de  la  costa :  el  fpndo  de  esta  en- 
senada es  de  playa  de  arena  en  que  desembocan  dos  rlachudíos  : 
toda  ella  esimui  limpia  mém»  la  parte  oriental  que  tiene  arreSci&s 
como  á  un  cable  de  la  costa.  En  ñ^nte  de  esta  ensenada  y  como  a 
5  cables  al  N.  de  la  parCl  de  Pertigalete,  está  la  costa  meridional 
lie  la  isla  de  Monos  ó  Guaracáro :  todas  las  riberas  de  ella  son  mui 
üii4>ia6  y  acantiladas,  á  su  parte  ;del  N.,  como  á  dos  cables,  sale 
un  farallón  rodeado  de  arrecifes,  al  que  no  se  puede  atracar  á  me- 
nos de  medio  cable  y  el  freo  en  (re  dicho  farallón  y  la  iáa  de  Monos 
e$  mui  limpio  y  tiene  28'  brazas  de  agua;  También 'es  mui  franco  el 
{mso  que  forma  la  isla  ooui  la^  costa  y  bai  en  él  de  oO  á  55  brazas 
•de  agua  en  su  medlaiiía  y  aun  casi  el  mismo  fondo  cérea  de ias cos- 
tas de  la  iftta.  A  noíedia  !e|(ua  al  0^  de  la  púata  de  P^tigalete,.  está 
'la  de  (kianta,  y-entre  las  dos  ferma  la  costa  una  emsoBada  llamaida 
'dePeríi¡gale(e,ilenK^'dé  la  cual  bai  varioa  islotes»  Eoelli^deseéi- 


—  544  — 

boca  un  riachaelo  qae  tiene  arrecifes  en  la  parte  occidental  de  la 
ponía  Pertigalete,  y  otro  arrecife  ó  bajo  fondo  está  en  el  centro  de 
la  ensenada. 

Al  O.  de  punta  de  Guanta  y  á  una  legua  de  distancia^  está  la  de 
Berganün :  entre  las  dos  y  como  á  una  milla  de  la  primera  se  en- 
cuentra la  ensenadita  de  Guanta^  en  cuya  boca  bal  varios  farallo- 
nes é  islotes  que  forman  freus  mui  angostos,  aunque  mui  limpios  y 
bondables.  Dentro  de  la  ensenada  bai  desde  46  basta  9  4/2  brazas 
qUé  se  cogen  á  medio  cable  de  la  costa  :  en  el  frontón  occidental 
de  la  ensenada  bai  un  arrecife  que  sale  como  á  dos  cables. 

La  punta  del  Bergantín  está  rodeada  de  arrecifes  que  salen  cemo 
á  un  cable  y  se  estienden  al  S.  cerca  de  una  milla  :  al  S.  O.  de  ella 
sale  también  ub  islote  con  escollos,  que  no  deja  paso  franco  entre 
él  y  la  punta,  desde  la  ciial  sigue  la  costa  al  O.,  haciendo  una  en- 
senada llamada  del  Bergantín,  cuya  costa  meridional  es  mui  sucia 
de  arrecifes  y  un  placer  de  poco  fondo  que  diesde  ella  continúa 
orinando  toda  la  costa  del  O:  basta  el  morro  de  Barcelona.  Este, 
morro  es  utia  tierra  alfa,  tendida  N*  S.  de  una  milla  de  ostensión  y 
liinda  á  lá  costa  por  un  istmo  6  leaagua  dé  arena  mui  estrecha  que 
tendrá  uba  áiilla  de  largo.  Laclístancia  que  bai  del  morro  de  Bar- 
celona á  la  punta  del  Bergantín  ^  es  de  4  4/2  millas  y  la  costa  que 
roba  para  el  S.  forma  una  grande  ensenada  llamada  de  Pozuelo:  En 
todo  este  pedazo  de  costa,  íque  es  de  playa  de  areiía  y  tienda  mui 
baja,  sale  el  placer  de  poco  fondo  <3asi  una  milla  al  man 

La  costa  occidental  del  morro  de  Barcelona  es  sucia,  y  debe  atra- 
carse como  á  dos  cables.  Desde  la  punta  N.  de  dicho  morro  hasta 
la  punta  Manricia  que  está  al  S.  de  él^  bai  cerca  de  4  miHas,  y  la 
costa  que  es  de  playa  de  arena  y  mui  baja,  roba  para  el  E.  y  en  ella 
desemboca  el  rio  de  Barcelona,  formando  un  gran  placer  de  fango 
arenoso.  Por  este  rio  suben  embárcacioíies  pequeñas  hasta  la  ciu*- 
dad  de  Barcelona  que  dista  una  legua  de  la  mar.  Esta  ensenada  es 
el  puerto  de  aquella  capital,  y  para  fondear  en  ella  no  bai  necesi- 
•dad  de  otra  guia  que  el  escandallo.  Desde  el  fondeadero  de  "Barce- 
lona corre  la  costa  ai  Ó.  con  alguna  indinacion  al  $.  la  distancia 
de  mas  de  40  leguas  hasta  él  morro  del  Uñare,  en  donde  está  el  li- 
mite de  esta  provincia  con  la  de  Caráca$  en  la  boca  del  rio  Uñare. 


—  Itt'- 


ISLAS. 

'  .       .i  ,   ,    i    ' 

Ea  €#U..OGirt%^i  9ÍettmA^ ^rn^Mm  4e.qp»<pJMi>fcahMft,Mi>ii> 
4(íw^ioná$  ella,  bal  ^liia  gf9ncle«  41a9u4a»4«^Eii»uiaf  j  tos4aiir 
loaoas  yh^fiamfibA*  ú,^0da|Sfaade4Q.halla«l  Q«  daiitíslM^ 
la  Carnea  QiP«d(iiital ^  qm  «stá.  ea  «I  i^fitoriQ  4e:  h  itr^simmrAf 
€iuM»i»¿>  da  4tte  te  l¿bl^rá  ea'aii:di9WW»oii*Qw  astli  i«l9^9M9^ 
forma  ua4mal,4«  ii^wlla:l<iria4a«iM)hO;,  frtaa  UiiiiJi^.ip%i<^ 
Iiaí^qe4ar  necpuurdOfi  i»aaipj«dra  abogada  qiiw^.  estáiOWHit  i  dos 
^lea  .al  B*  4e  la  Ruato.  «iri^^lal^  4e  ,la«  Ficiida  ;  asu  i4a  (mm 
0¿.^> ^. 6..Nv.E. cdopia 9mAi^ tíena  poao.ipaa da imu^tíAla^^ 
asieHiM^a(.aiif  costas  isan  mii'lifNP^^  Y^al  .N.  día  m  fisj^amo  ^ríepr 
4ai  üett^  da»  larai)Meí9».Qo«»(a  aji  &  Q.  'l'/4  a4  Q«  da  luJgJaqdftipwii 
(da,  Y  ádiaiaüoia :d9 iiiAadaJl^ua>  asü, l^.PiM»daisegaDda«'4fi^ -m 
m»  i^<d^iS«ac9e.cír^larv  qiJia.^aadcá  lr6s^aaUeSldawlamMj  h 
cM»t«^>wi»«biairi«N  Gmm>a)H$,>64t(Qf  daelto»  yni;iBsta^ia.d0^iiiii 
49ilia^  aMá  ^iObíioimír  4il  R*>  ^pe^^Mia  Míta,>JBiaiio^^fpa:  \§i§mf 
.QMr«k.é,icmb4aiiia  liiapia  ;:ai  0«  de  ella  y  i  diatanaía  d^^d^  jm«- 
lia»  etstíí.  la  Iguala  fWQtajL  ^  Ja  CAwapa  s^iUKlai  la  -eual-aaiwe 
£,  o^«  y^iAajbáew^e^lasaatído.oiaade^ui^         :  también  a  jam 
Umpiar  y^ljt««.«t',E.  dos ialalea?  widral  Q^: : lal^  (k  f  %4iNc;aMaa 
de  ia  punt^aap4e»(al'd«JaiQIÉiiafUtia^giM4«i^ 
fihwMUbgraaia,  ia^m^líalaHis  4a  to^i^  íFtagutorvy'^HitrfMií  fapfor 
«MiíA&ia»»  qoaieaeaal)  E;  Q^»^tti  vm^^  la§»ta*  Ai  Qw  «da^aUa»^ 
it]iaereterde«i]riUa^.aatá.Ia  QbiaiaRaideli^^.  uióda  ¿ilai^niaw 
«madef  padiia  bftja4deiaQaa«  y.iiiedna  q«e  aale  fiaran '^<  4 «ad^ 
jiúUa  Uw\^  éBi  lo  Olas  sataailmiial  da  JíaXamnia^  ciMihnNala 


iüifo  <y  aiiianadi0i4el^lne«)dailaa'  éaajiafaiay.M  a»  uttufkm  'BartMfg 
has!0ifeb8'j)i«i€<nrtai4iitaMiUda  la  iiiw>j?awiaiitelde  k^fhiiniiip 
4el  G.  nifatoaAlay  al  &  de toioaa ariaalalrde  laiCbúnanatgci^da» 
•afila.Mi|{biaiftiiaéil#.,>qiiMa8ii}mayar^leiiaten^  tíA.Q^ 

úmB4b^iDj¡kB.  Belasifilaj£armi4aa  paaos.ó  eanalea^  «ata  ^;^^m» 
4a  cuna»  ^jioaiide)  aoBm^eiOe^dno 
lama,  y  iQtro*al;8.  cao  h  pmiAM,  BergmiUii,  de^oiediaiaBállaidP 
ancho  y  también  muí  limpio.  Entre  laChimana  grande  y  la  del  S. 
hai  varios  islotes  mni limpios.  Reuniendo  los  que  hemos  dicho  de 
las  Picadas  y  Chimanas,  se  concluye  que  estas  islas  y  sus  islotes 


«itiftJskto«lKnfe«aé  fiíi.§é»  f  ¡oii  MeMUiAi  tíflBttlipHL  ^y  jm^  «o 

MtalKfomatkHM«}iMof«liíi^^ 

lte|Hfti  pam^abMiJli'&é>fi0ttiift8tteMi)  4fifi9ll»eDAt)pMMlf%  42011 

hai  Bioi  pocDetoáa  -     '  .}i 

Todas  estas  islas  son  peñasoosas  y  algo  eleyadas ;  muí  pocos  ve- 
getales cubren  su  superficie,  f -pai^eoes  restos  de  la  cordillera  su- 
mergida que  en  otros  tiempos  se  unía  á  la  del  Bergautiu.  Las  dos 
ietat'dei^idte^  ei«áii^liñiitaíul!Spuflldaí>teiesla  BifadM)%  iiajas  y 
tuiiitgtw  damhilwhí, .  jjrtan  «ualMtoUikpMsál-O^^iiiidHfeden) 
deitüeateáv  BitiaíMi»  f¡0mai^A^^Q.\yájmmai^umifáínr.  caire 
iüdMJad^uiil/püQí.q«i  mmfmeil^ifmrkm  aiir  üIím  i J|MI>  sata  de 
anate»lsto'yiídi4itt4iaie«a«liiÍHlt  ^ttccbo. 

.     .         '        .     i.     '    ■■       •  .  •■     ■ 
La  serranía  llamada  dei  interior,  que  es  un  ramal  de  la  d^»  Ca- 
ráeis^  piitoiHnniaar  «««Isevio  daMüMO»^  fiOBfvtí  aUíiqueda  to- 
tataaem»; tHterwmplÉs  pat»  tt^paatideasite  i!Í6^.  c«fÉ  .nbtra^oe^- 
d^uM^ioéduat  pl4éi(i4«m»,mi4iilraaiia5«Qriefit«l|»aaa<ei^ 
estea^saliaa^  W9*«liaM«a  da^di*-iMai^  f  taffarti^ 
tu-y  Pamitatai  píidülido»  miiUdas  cmlaa  ItMiuKaa^  par  una  par- 
lej  y  €«mt^  laiiMMi.p(Híi*olMi^ 

La>siériwM>IMifaBítiii>se  Remulla  da.  iaepaiitei>8iiftalli8«  lías- 
ete §|raiMte.  gBi|tiiiafaowt  f»r :tejp>r»a»iQt»  áüwria»,  qufiíias  la 
iiie»oi4é«t«l>daik^  pimiMlai  (ttjo^  IMga  á 

%4iSmsmaii  «a^paiW^eilNiíjiaiqitiia^^iia  astáiLiu  aa.{Hwrii»iia  de 
Comániv  Pri^fiaiifaiiiinti  itoiiwmilas^apoal  Sk  &  ^  olfOjal  &  .0* : 
^r{M4«Mf^id'fn0di»^ruiM4ihAa»^  y>«aift  aíbiialMia^de  las 

meMsytimliüio  au  bait^i  muiwa  aÉhrBiel«i»abddt jowr;  el  otro 
r^Ka  tofe  esiié»driíBoigMiilg>T  ai  ^wBt jdeíaatantonAi»  elevado 
SJf^  ^mw  seiM  Ai  niral'M  mat^  oMiidtéiiteaft  áflapuei  eou  un 
terFenoaraat«aM)<qttefa^pief!io8nalipiiiitodtt'(^  ^^ 


—  144  — 

Sábana  de  Goaishamáj  7$aMmú¡A  ceiroda  kttempiti/^^  i|«m  luiee 
parte  del  Pionía,  sale  na  ramal  que  dÍTÍde  las  agaasque  caea  al 
Néverí  délas  <qiieTaaf<ála<ifiar^  perdiéndoa^en la ftaiid^'abraiqae 
separa  esta  oarilliera)  ItaiiHida  del  Ber|aotla<64»Ban»toiia;  á»  les 
cerros  de  Pirita  y  Faraidáta.  'Ealos  últimoi  It^hmm^  ooBriderado 
mas  bien  como  ü  tna)  dela<ceiMlera^el4nleríeírde€)ipráe»,  qae 
eomo  una  prolo&gadwi^  de-eibi^i  á  caosa^  de  la  notaUe  íüfternipcioii 
qne  se  observa  eereaidéBareelena ;.  pevo  niakk  .la  tamí^aotógisa- 
mente,  se  debe ccttsideaf rodeno iioasdla.dadeÉíaüqiie^ngQefaaata 
perderse  ea  la  provind»  de  jCOaMBa,  ea  el/g»lA>  'Mste,  y  msñV^  á 
aparecer  en  la  parte  meridional  de  la  isla  de  Triitídad. 

'    '  .  •  ,      • 

£n  las  otras  províndaa  Ho  ae  h&heebo  na  ai^^todb  especial  de 
mesas,  porque  se  habiia  rodaéido  i  .mnaaioaailas  sui  mi^yeriale- 
res;  pero  no  sucede  así  eon las  de  .esla>  porquera  ella  fceauoi  un 
sistema  paiticalar  éinkaresante,  el  oaai  aeestwde  hada  la  pío* 
vincia  de  Gumaná  por  el  £•  y. bacía  la  de  Garáaas  por  el  O.  £n 
lugar,  pues,  de  hablar  en  aquellas  profincias  de  las  mesas  respec- 
tivas que  se  unen  al  mismo  sistema,  lo  haremos  en  conjunto  aquí 
para  que  mejor  se  pueda  comprender  y  apreciar  su  total  desar- 
rollo. 

j^jo  dos  aspecto^  diferentes  se  presenta  .eLlensno.  á  la  yisia^de 
quien  atraviesa  las  hermosasJlanuras  deBarcejboaa;  forman  el  nao 
Iffis  sabanas,  el  otro  las  masas.  Aquí  la  oonfiSuvacioa  djoJ.  suelo  y  la 
variedad  de  su  si^)wficie  están  mejor  proaiifteiadas  que  en  niafu- 
na  otra  parte  de  los  llanos  de  Vengúela*.  AL  pié  m^dioaal  de  la 
sien  a  del  Bergantín,  que  en  su  cumbre  tkae  una.  milita,  elevada 
'i  .895  varas  sdbre  el  nivel  del  mar ,  se.. ve  estendessí»  la, mesa  de 
Úrica  que  i(xm&  uasolo  cuerpo  cmi  laade.Sabus.y  Alondaago  yo^n 
la  dilatada  de  Gaanq».  La. dirección  geaieisal  d^lsi$(ejm4e  laf  laa- 
sas  corre  S.  S.  O;,  y  constituye  el  puato.de  partición  de.  las  i^uas 
que  se  dirigen  hacía  el  Orinoco,  el  litoral  de  JBaroel9Qa.y  la  provin- 
cia de  Gumaná.  Ininediátaá  laparte  ooiid^atal  d^ la m^^  de  Gun- 
nipa;  una  elevación  de  un  terreno  üoaibado,.ca^i  i9ipA)?ceptiblja  á  la 
vista,  forma  una.'eresla  ^e  se.  une  á  una  Xija  ba^tpi(e  eslrecba  de 
rocas,  llamada  la  Sierra  ó&ierrita,  lacual»  princÁpiaf^do  e^  elcerrito 
de  Buenavista,  sigue  la  misma  direócien  del  S.S.  O.  hasta  concluir 


—  545  — 

en  las  aguas  del  Orinoco  en  laroea  de  Monrieur  Ignacio,  casi  fren- 
te á  las  Tentanas  del  Canra.  Del  mismo  cerrito  de  Buenayista  salen 
en  la  direccicm  del  poniente  en  el  territorio  de  la  provincia  de  Ca- 
racas unas  eontracnestas  de^sabanas  alias  qne  terminan  en  los  cer- 
ros Tkirijí,  Macho,  Magdalena  y  Tucusipano  :  este  es  el  mas  ele- 
vado, annqne  soto  tiene  540  varas  sobre  el  nivel  del  mar  y  200  so- 
bre las  sabanas.  Las  mesas  de  üríca,  Amana,  Tonoro  y  Gnanipa, 
qne  están  en  las  provincias  de  Barcelona  y  Gnmaná,  formando  una 
sola  masa,  tienen  de  290  á  464  varas  S(Hi>re  el  nivel  del  mar^  y  de 
4  58  hasta  205  sobre  el  de  las  llanuras  inmediatas.  La  ostensión  del 
sistema  de  las  grandes  mesases  de  470  leguas,  45  en  las  de  Barce- 
lona, 54  en  la  de  Caracas  y  54  en  la  de  Cumaná.  La  dirección  ge- 
neral de  ellas  es,  como  decimos,  S.  S.  O. ;  pero  bai  otras  muchas 
que  van  al  S.  y  S.  O.,  tomando  los  nombres  de  los  rÍQ6  que  bañan 
sus  bases.  En  los  límites  del  territorio  de  Barcelona,  las  mesas  que 
se  dirigen  hacia  el  de  Cumaná,  demoran  ál  E.  y  al  S.  E. 

Pero  si  basta  el  S.  de  este  sistema  solo  se  encuentran  mesas  que 
se  pierden  sobre  el  Orinoco,  no  sucede  a^í  hacía  el  N.,  donde  no  ' 
existen  mas  que  sabanas  con  chaparrales,  algunas  palmas  y  gran- 
des campos  de  carrizo ,  los  cuales  ocupan  inmensos  espacios  que 
antes  es^ban  coitf vados  por  loa  indios,  y  que  se  han  vuelto  saba- 
nas. Parece  que  aquí  !a  tierra  no  tiene *slnó  una  capa  delgada  del 
humus  que  alimenta  los  vegetales ;  pero  que  puesta  una  vez  en  cul- 
tivo pronto  cesa  de  producir ,  porque  la  alta  gramínea ,  llamada 
carrizo^  se  apodera  del  puesto  y  crece  vigorosamente  en  él.  Se  pue- 
de casi  asegurar  que  en  los  "puntos  en  donde  hat  carrizales  han  cul- 
tivado maiz  los  antiguos  ó  ios  modernos  iridios  de  la  nación  Cu- 
managola,  que  era  la  mas  numerosa  de  lasque  habitaban  esta  parte 
del  pais  :  en  el  día  casi  todos  ellos  están  confundidos  con  la  masa 
de  la  población  y  solo  algunas  familias  conservan  el  tipo  originarlo 
de  so  raza.  En  la  parte  de  las  mesas  viven  aun  los  restos  de  la  po- 
derosa nación  Caribe  que  cultiva  la  yuca  y  vive  de  la  pesca.  Es  cu- 
rioso ver  un  pueblo  en  otro  tiempo  errante  y  formidable,  ahora 
afecto  al  suelo  y  sumiso ;  un  pueblo  diferente  de  todos  los  otros 
indiosr,  por  su  fuerza  física  é  intelectual  que  ha  hecho  tan  pocos 
adelantos  hacia  la  civilización.  Sorprende  ciertamente  ver  á  las 
puertas  de  Barcelona  hcmbres  con  él  pelo  cortado  como  los  frailes, 
pintados  de  onoto,  con  un  pedazo  de  tela  azul  turquí  que  les  cu- 
bre de  la  cadera  a  la  rodilla,  mientras  que  las  mujeres  se  presen- 

P.  GBOG.  ^ 


Ua  ettierameait  detaodat  coa  éL  eaerf^  iiiiUd«  ck  roj^  Wñrnméo 
on  siemí^  guayoc»  é  iakMM  d«  4  polgAdas  de  mék^ 

£ft  €ÍertaB>«ate  im  ^«rtraate  partieotor  ver  á  lo6  Omiaiiag^los 
qaB  f ifen  al  &.  4e  iaa  meem ,  veatiáea,  baUasdo»  el  espefiel.  y  qme 
aipéoas  se  distíngueB  de  loa  eríoUoe,  cmuado  al  fi.  lea  Garibea  des^ 
QiidoB  y  hablando  so  lengM,  «o  bao  perdido  el  tipo  de  íaoaite» 
Parece  que  los  primeffOSy  mas  sumiaes,  se  baa  m^aelado  mas  íadl- 
túeuie  con  sos  c<»iqoistadores,  ouéAtra»  qoe  loa  segondoe,  bms  al- 
taneros, bao  evkado  la  meieku  Si  se  eocoeotraii  al  N.  ó  ai  S.  del 
pooto  de  partición  de  las  agoaa  ( qw  aqoí  lo  foroMi  el  síateíaa  de 
las  mesas )  cooUrasles  sorpreodenteaeift  ta  aeres  y  en  loa  tenrew>s^ 
no  se  debe  estraüar  que  se  eDcnentren  tanubien  en  las  aipaae*  ios 
ríos  qoe  dependen  de  aqoel  sítteoMi)  y  que  van  bácia  éí  S.  ó  al  E.^ 
son  abundantes  de  agoa;  lamas  se  secan  ^  y  nweboe  de  ellos  son 
inagotables,  pudiéndose  casi  deeir,  qoe  apenas  se  conoee  ea  ao- 
mentó  en  la  estacioB  Uoviosa,  pues  no  bai  aYeiiid«a  de  loertes  Us- 
vías.  De  los  qoe  van  al  N.  ó  al  O.  se  secaonaigran  parte^  ó  que- 
dan las agoas emposeadas.  Solo  dossoa  na? fgables^  y  ea  el  tieo^ 
de  las  llovías  crecen  tanto,  qoe  á  vezes  salen  de  madre;  sin  em« 
bargo,  todos  provienen  de  la&  mismas  mesas  en  donde  tañan  orí- 
gen  ;  pero  la  diferencia  está  en  qoe  ios  uoos  vjanen  acompañados 
basta  su  desagüe  por  mesas  laterales,  mientras  los  otros  lo  «tan 
solaviente  por  sabanas.  En  estas  mesas  está  la  causa  de  la  forma- 
ción de  ^  00  ríos  que  bañan  las  tres  proviiidas  de  Barcelona,  Guma- 
ná  y  Caracas, ^usa  que  antiguamente  se  creyó  eiistir  en  ana  gran 
serranía  qoe  imaginaron  atravesando  las  ilanocas  y  uniéndose  á 
los  cerros  de  Altagracia  y  del  Bergantm.  La -constitución  g^élogi«a 
de  las  mesas  difiere  ciertameate  de  las  dornas  Uannras :  se  compone 
de  capas  de  arena  eimeotadas  con  greda,  o  de  arena  sola  mezclada 
á  vezes  con  guijarros. 

La  soperficie  es  perfectameníe  plana  y  muí  pocos  los  4ecli  ves  de 
los  bordes  que  estén  bien  pronunciados;  así  es,  que  de  las  aguas 
que  caen  en  abundancia  en  la  estación  de  invierno  sobre  la  grande 
estansion  de  las  mesas ,  ni  oaa  gota,  puede  decirse,  tiene  tiempo 
para  descender  á  los  pantos  mas  bj^os  y  dirigirse  á  los  rio3 ;  por- 
que la  arena  chupa  ó  absorbe  esaa  misnuis  aguas,,  las  cuales  pene- 
tran hasta  llegar  á  un  puato  en  qjie  no  bal  sino  greda  apcillosa)  du- 
ra é  impenetrable*  Se  ve  que  tanto  la  greda  como  la  aoeaa  están 
por  capas  horizontales,  ys^^e  diría  que  en  tiampps.  remólos  fueron 


depositadas  por  toa  agMs  ^pt^oubrian  nuestras  grandes  llanoras,  y 
qte  M,  acaaaíiiMaa)  sirT^n  aliora  para  depositen  las  aguas  pluvia-- 
les,  pre^erréiidolaB  de  ids  etetos  de  Ja  «rva^ef  aeíon  y  úrvieiido  de 
iFerdederos.iBaBaaotíÉle8»  Gucndo  se  m^&  con  ateocion  ua  peqneíío 
bílo  de  a>;ua,  que  sale  de  ua  terreoo.  paalaaosO)  semJ^do  de  pal- 
ma moriche,  se  recoDoce  que  el  suelo  arenoso  sobre  que  corre  le 
envia  constantemente  agua  per  flUfracon,  lo  cual  se  ve  patente- 
mente en  los  bordes  de  las  mesas  laterales,  por  los  cuales  penelra 
casi  al  nivel  del  agua.  Hé  aquí  la  razón  por  que  en  lugar  de  perderse 
por  el  efecto  de  la  evaporación  en  un  temperamento  de  28^  á  5S*, 
ó  por  la  absorción  de  las  arenas,  sucede  todo  lo  contrario :  el  vola* 
men  de  agua  aumenta  tanto  y  con  tal  rapidee,  que  muchos  mort- 
chales  á  las  ^  O  á  4^  leguas  de  su  origen  son  ya  ríos  navegables.  Hé 
aquí  también  la  rafon  pir  que  los  ríos  que  ran  hacia  el  mar  de  las 
Antillas  se  secan  y  no  so  i  navegables;  porgue  se  originan  en  la» 
mesas  y  después  corren  por  terrenos  que  n«  tienen  filtraciones^ 
mientras  que  los  que  van  al  Orinoco  ó  golfo  de  Paría,  tieii«n  mesas 
laterales  que  les  acompafian  en  su  curso  y  les  entían  censtanle^ 
mente  agua  en  abundancia.  No  será  de  estraüar  que  en  ette  gran 
sistema  de  mesas  se  formen  ^00  ríos,  pues  su  desarrollo  en  ifts  tres 
provincias  de  Barcelona,  Gumaná  j  Caracas  es  de  7^^  leguas  cua-^ 
dradas. 

Ríos. 

Tres  distintas  direcciones  llevan  las  aguas  de  esta  provincia :  par- 
te va  al  mar  de  las  Antillas,  parie  al  Orinoco  y  parte  se  dirige  á  la 
provincia  de  Camena.  £1  principal  rio  es  el  Uñare,  el  cual  se  for- 
ma de  dos  qiuebradas,  una  que  nace  en  el  pueblo  de  Pariagnan,  y 
otra  que  sale  de  Mata-Bedonda,  reuniéndose  al  pié  del  cerrito  de  Bue- 
navista,  para  (ornar  el  nombre  de  Uñare»  Este  rio  tiene  puesto  entre 
los  de  3»'  orden  de  la  república,  su  curso  es  de  5^  leguas,  con  2fS 
do  navegación.  El  río  ]>i«veri  es  el  segundo  de  la  provincia ;  pero  en 
la  república  es  río  de  4«  orden.  Nace  del  Turimiquire,  cerro  el  mas 
allO'de  li  catáilhift  de  BiroiliiM  y  Cumanl.  Las  embureaeioaes  de 
cabofai«#éle9Mi  tete 4  4/4  legaas^ loioafroeos  hasta S.  Diego,  cuya 
diiteacit  es  á^rü  kguM,  y  ka  ums  pequeños  Mben  hasta  el  Guaya- 
bo -12 1/2  legma  mas  Mrrtt».  El  rio  f9»  tiene  H  navefaUes ;  él 
Cari  45)  e)  Gvamptty  el  Tigre  y  ]iÍQricfaHl«-Lar90)  de  que  se  hablará 


—  MS  — 

en  la  provincia  de  Garnaná,  ofrecen  aquí  10  leguas  de  navegación 
los  dos  primeros  y  5  el  último.  Goenta  esta  provineia  88  ríos,  de 
]os  cuales  27  van  al  mar  de  las  AnHIhis,  40  al  Orinoco  y  24  á  la 
provincia  de  Cumaná  :  de  estos  solo  8'  salen  de  lamm  del  Bor- 

gantin  y  80  del  sistemado  las  mesas. 

ÜAOUNAS.      . 

La  principal  es  la  de  Mamo ;  su  fondo  no  es  mucho  por  la  gran 
canlidad  de  arena  que  acarreau  las  aguas  de  los  rios  Mamo,  Merei, 
Pesquero  y  Gamoruco  que  caen  á  ella  :  es  abundante  en  pezes  y 
sus  bordes  conservan  todo  el  ano  un  verdor  estraordiDario  :  se  co- 
munica al  Orinoco  por  la  boca  del  rio  Mamo  :  tiene  de  largo  4  le- 
guas de  E.  á  O.,  y  casi  una  de  IS.  á  $.;  ocupando  cerca  de  &  de 
superücie.  Viene  después  la  laguna  de  Garapa ,  que  aunque  pe* 
quena  ,  es  rica  en  pezes.  La  de  Guariaparo  ó  Gurioparo  es  algo 
mayor,  tiene  mas  de  una  legua  y  abunda  en  pezes.  La  de  Anache 
contiene  en  stt«eno  algunas  islitas^  y  es  frecuentada  por  los  indios 
de  Ganastoque  hacen  en  ella  abundante  pesca.  Tiene  una  legua  de 
ancho  y  una  y  mediado  largo.  Estas  tres  lagunas  se  comunican  con 
el  Orinoco.  Hai  ademas  otras  dos  pequeñas  cerca  del  rio  de  los  Po- 
zos,  próximas  al  Orinoco,  y  una  en  el  riachuelo  Amana  que  cae  al 
rio  de  este  mismo  nombre. 

CLIMA. 

El  clima  de  esta  provincia  es  por  todas  partes  cálido,  pero  sano, 
y  solo  en  la  sierra  del  Bergantín  hai  algunos  pantos  frescos.  £1  ca- 
lor de  las  mesas,  á  ocusa  de  la  reverberación  de  las  arenas  y  la 
fa'ta  de  vegetales  que  den  sombra  al  suelo,  es  abrasador.  Guando 
en  las  sabanas  que  están  al  N.  de  estas  mesas  la  temperatura  me- 
dia es  de  29^,  en  las  mesas  alcanza  á  32°  del  centígrado. 

£ST ACIÓN  DE  INVIERNO . 

La  cesación  de  las  brisas  y  tos  frecuentes  esplosiones  elMrkas 
son  dos  fenómenos  que  ináicaa  la  entrada  de  las  lluvias,  las  cuales 
vienen  á  fines  de  abríl.  Gnanto  mfls  llueve  en  esta  pro^inícia,  tattto 
mejor  se  encuentran  hs  paftesmeridlonalesy  oriéntale»  qtté  de* 
penden  del  sistema  de  las  mesas,  porqae^como  afqúeHas  son  Fufares 


—  549  — 

altos  y  de  arena^  qaedari  los  camifios  transiUbles  y  solamente  se 
suele  encoBtrar  algún  río  abundante  de  agua^  pero  por  pocos  instan- 
tes. Siendo  cortos  los  declives  que  llevan  hacia  las  honduras  las 
aguas  llovedizas,  penet^ra  la  mayor  parte  de  estas  y  filtran  por  las 
arenas  de  las  mesas  de  que  se  compone  este  territorio,  esceptuando 
solamente  los  terrenos  limítrofes  al  Orinoco,  que  se  aniegan  perlas 
crecientes  de  este  gran  rio.  INo  sucede  así  por  la  parte  del  N.  ó  del 
O.:  allí  las  lluvias  suelen  caer  un  mes  después;  y  cuanto  mas  abun- 
dantes son,  mas  pantanosos  é  incómodos  se  hacen  los  caminos,  por 
la  calidad  del  terreno.  Los  caños  que  hai  que  pasar  están  entonces 
de  nado,  y  los  ríos  necesitan  de  canoas.  Estas  llanuras  se  pueden, 
sin  embargo,  atravesar  en  todas  direcciones  en  la  estación  lluviosa. 

DIVISIÓN  TERRITORIAL   Y   PRODÜCCIOHES. 

Se  divide  esta  provincia  en  8  cantones  que  son  :  Barcelona,  Pí- 
rítu,  Onoto,  Aragua,  S.  Mateo,  S.  Diego,  Pao  y  Soledad,  con  49  par- 
roquias y  29  grandes  vecindarios,  en  los  cuales  se  cultiva  cacao, 
café,  caña,  algodón,  maiz,  yuca,  plátano,  fríjoles,  judías,  alverjas, 
apios,  Sames,  ocumos,  mapuei,  papas,  ortalizas,  cocos  y  frutas  es- 
celen tes. 

£1  total  de  la  población  se  puede  dividir  así :  55/iOO  dedicada  á 
la  agricultura;  50/100  á  la  cria  y  4  5/^  00  á  las  artes,  comercio  etc. 

COMERCIO. 

£1  puerto'principal  está  en  la  ensenada  de  Barcelona  y  al  abrigo 
del  morro  de  este  nombre,  en  el  cual  fondean  los  buques  menores . 
que  vienen  de  Santónias,  Curazao,  TrinidáR,  la  Guaira  y  Cumaná, 
mientras  que  los  de  cabotaje  de  estos  últimos  puntos  ó  de  otros  de 
la  costa  se  introducen  por  el  Neverí  hasta  la  misma  ciudad.  Impor* 
tan  toda  especie  de  mercancías  secas,  caldos  y  efectos  de  bodega, 
«sportando  los  pocos  frutos  del  país.  Con  los  cantones  de  Orituco 
y  Rio-Chico  de  la  provincia  de  Caracas ,  se  hace  comercio  de  sal, 
gaiMido  y  qoe^,  reeibieiido  caeao  y  café.  Del  cantón  de  Chaguara- 
mas se  recibe  ganado,  queso,  sebo  y  dinero  en  cambio  de  sal.  A 
Caracas  y  Maturin  se  envían  queso,  cfieros^  ganado  y  molas,  en 
cambio  de  mercancías  y  efectos  de  bodega.  Se  llevan  á  Angostura 
los  mismas  artículos  y  ademas,  aguardiente,  papelones,  casabe,  me- 


—  850  — 

neslras  pescado,  pMtonos,  sombreros 4e  ptja,  oerdos,  maíz  y 
Con  el  Apare  se  comercia  tomando  los  gañidos  al  conlado. 


CIUDADES    Y    VILLAS. 


CANTÓN    D£   BARCELONA. 

La  cindad  de  Barcelona  es  la  capital  de  la  provincia  de  sn  Boai^ 
brc  :  eslá  á  la  entrada  de  las  hermosas  llanuras  qne  sedilataa  báeia 
el  OrinocO;  haciendo  parte  de  la  zona  pastoril  de  Venezuela.  Estas 
sabanas  fueron  atraresadas  por  la  primera  Tea  en  4$5$por  M 
hombres,  al  mando  de  Álderete  y  Martin  Nieto  que  desde  Oriapaii 
( que  debe  ser  cerca  de  Barrancas  en  la  provincia  de  Cumaná  ) 
fueron  á  dar  al  Tocuyo ;  marcha  sorprendente  y  atrevida  si  se  con- 
sidera la  gran  distancia  y  las  numerosas  tribus  guerreras  que  ha- 
bitaban aquellas  llanuras.  Bien  hicieron  ver  esos  indios  su  valor, 
cuando  los  prhneros  conquistadores  quisieron  fundar  pueblos  en 
sus  propias  tierras.  En  4  5§9  se  levantó  en  el  slüo  del  Sadado,  á 
poca  distancia  del  Neverí,  la  ciudad  de  Santiago  de  Jos  CabaUeros, 
por  el  gobernador  de  la  Nueva  Andalucía  D.  Diego  Zerpa»  Cuando 
quiso  introducirse  en  el  interior  eon  5(H)  Hombres,  íué  ataonio,  ven- 
cido y  muerto  junto  con  4  80  de  los  suyos  en  Gamomoo  ó  ol  Carri- 
zal, á  ^4  0  16  leguas  de  la  costa,  por  los  indios  Cnmanagotos  y 
Clmcopatas.  A  poco  cayeron  estos  sobre  la  ciudad ,  la  cual  pudo 
sostenerse  por  14  días  hasta  que  un  refuerzo  venido  de  Margarita 
hizo  retirar  á  los  indios,  y  los  ^pañoles  tuvieron  que  reembarcar- 
se. El  capitán  Garci  González  en  i579  llegó  hasta  las  Ajontas  de 
Chacopata  ( hoi  el  Juncal ),  viniendo  de  Caracas,  pero  tuvo  quoie- 
tirarse  sobre  el  Uñare. 

Eu  1585,  Cristóbal  Cobos  después  de  haberse  baiidoeon  el  cali- 
que  Apaicuare  y  hachóle  prisionero,  fundó  la  ciudad  de  ApalcMre 
que  llamó  S.  Cristóbal  de  los  Cbmanagotos.  D.  Jaatide  liarottn 
-1591  trasladó  la  población  de  Apaicuare  al  litio  de  los»  OiMiaftagD- 
tos,  cercano  á  Barcelona.  En  46>97,  D.  Joan  Urpio,  'Oat^dffa,  fm- 
cipió  á  fundar  la  Nueva  Barcelona  al  pié  de  Cerro  8m^  z  solo'dtfró 
S5  a^os  en  aquel  sitio.  Finahneote,  en  -167^,  bajo  «1  fobiemo  de 
D.  Sancho  Fernández  de  Ángulo,  fué  Barcelona  trasladada  al  Idpr 
que  hoi  ocupa.  Esta  ciudad,  que  dié  d^^pues  m  noaaAiffa  itcéaila 


—  5SÍ  — 

provincia,  eé  dkse  que  cmitaba  y«  en  f  790  una  pofolaeion  de  4  6.000 
almas  y  ea  480O  pasaba  de  46.000;  pero  en  el  día  apenas  tiene 
6.000.  En  -1844  liegé  á  ser  provincia  independiente  de  Ciimaná.  Se 
encuentra  la  ciudad  en  la  latitud  40*  6'  58^^  N.  y  en  la  longitud 
2»  20^  y^,  al  E.  dd  meridiano  de  Caracas.  Su  decadencia  se  debe 
escludramente  á  les  horrores  de  la  guerra :  sus  casas^  sus  calles  y 
8US  plazas  fueron  cinco  vezes  el  teatro  de  las  escenas  mas  san- 
grietas  de  la  revolución.  AUi  perecieron  heroicamente  sus  defen- 
sores sitiados  en  una  casa  fuerte,  y  aun  en  el  día  se  ven  con  vene- 
ración aquellos  escombros  por  el  pasajero  que  medita  sobre  la 
suerte  de  los  valtentes  que  pelearon  con  tanto  denuedo  y  constancia 
para  libertar  su  patria.  Barcelona  recuerda  con  orgullo  que  ha  ser- 
vido de  tumha  á  sus  tiranos,  aunque  tenga  que  llorar  la  muerte  de 
sus  propios  hijos.  La  -posición  de  la  ciudad  en  llano  elevado  4  6  va- 
ras sobre  el  nivel  del  mar^  del  cual  dista  cerca  de  una  legua,  no  le 
proporciona  ninguna  perspectiva  agradable.  El  rio  Neverí  pasa  por 
la  ciudad  ;  y  al  N,  se  ve  elevarse  sobre  los  matorrales  que  circundan 
la  capital,  la  isla  peñascosa  de  la  Borradla.  Al  E.  alguos  cerros  im- 
piden que  se  vea  en  toda  sa  hermosura  la  sierra  del  Bergantín,  y  al 
O.  se  descubrcíi  los  de  Puerto  Santo;  mientras  que  al  S.  el  bosque 
del  rio  ittlerc<*pta  en  parte  la  vista  de  la  ancha  abra  por  donde  se 
pasa  á  las  bellas  y  ricas  flanuras  regadas  por  multitud  de  ríos,  va- 
riadas por  la  configuración  del  terreno,  pobladas  de  ganados  y  por 
todas  parles  cruzadas  de  caminos  que  conducen  á  los  hatos  de  los 
criadores  y  á  las  villas^  parroquias  y  pueblos  que  esián  esparcidos 
por  las  sabanas,  en  todas  direcciones.  Las  pocas  tierras  cultivadas  se 
hallan  cerca  de  la  ciudad  «en  ios  valle»  de  Bergantín  y  Capiricual , 
y  aquellos  son  ios  puntos  en  que  hai  mas  tierras  sua^plibles  de 
cultivo,  á  pesiir  ée  que  en  ai  éiñ  la  generaífdad  de  la  población  se 
dedica  á  la  cria,  que  aunque  con  mas  trabajos,  les  da  grandes  pre* 
áuctos.  hn  otTM  tlemyoB  e»a  ^e  ol  punió  á  que  se  enviaban  can- 
tidaáes  4e  taeajo  y  se  embarcalMH»  muJas ;  pero  en  el  día  no  se  faaea 
ai  lo*  ano  ni  io  otn>. 

TIeae  Bareeloaa  neas  saliaat  eael  Morro  y  la  playa,  á  las  eualee 
fieaeo  aaiialmeiile  loa  iaéios  Caribes  á  trahajar  algunos  días  panr 
vmhkf  cu  pago  im  poco  éeasA.  Hoi  úif^B»  aiiaerales  frías  y  caliVa- 
las  ea  las  parroqaks  de  Bargaatia  y  8.  DIega»  y  tabre  todo,  das  ea^ 
Uenlaa  sulfáreto,  aa  media  del  rio  üfev^ri,  cerca  4e  S.  Dtega,  que 
htalan  oonclaotoaMiile  aia  perder  iu  teiaperalura. . 


—  552  — 

La  ciudad  de  Barcelona  no  puede  hacer  el  comeroio  sino  con 
una  pequeña  parte  de  su  territorio,  pues  al  S.  tiene  á  Angostura  y 
el  curso  del  Orinoco,  por  donde  se  proveen  todos  los  que  están  en 
las  Uerras  de  las  mesas.  Maturin  por  el  naciente  envía  mercancías 
á  las  partes  limiírofes,  y  la  provincia  de  Caracas  por  el  poniente  do 
deja  de  facilitar  á  las  de  Piritu  y  Onoto  toda  clase  de  géneros  y  ví- 
veres ;  de  manera ,  que  solamente  le  queda  un  corto  círculo.  Siíx 
embargo,  su  aproiimacion  á  la  mar^  en  el  camino  principal  de  la 
costa,  su  inmediación  á  las  tierras  útiles  para  el  cultivo,  y  la  faci- 
lidad de  comerciar  en  todos  tiempos  con  el  interior ,  le  dan  una 
ventaja  considerable  que  la  bará  con  el  tiempo  prosperar  mucho. 
Tiene  una  i|¿lesia  y  un  puente  de  madera  sobre  el  Neverí,  y  bai  va- 
rias escuelas.  Los  Padres  Observantes  fundaron  en  esta  provincia  en 
menos  de  20  años  (de  1661  á  1680 )  ^6  pueblos  de  doctrina,  que 
pagaban  un  tributo  á  la  corona  de  España ;  y  ademas  se  establecie- 
ron Á4  pueblos  de  misiones  con  las  dos  villas  Aragua  y  el  Pao.  Los 
Caribes  independientes  quemaron  muchos  de  estos  pueblos  en  1 684 , 
•1697  y  1720.  La  viruela  ha  hecho  también  grandes  estragos  en  di- 
ferentes épocas.  En  4792  había  49  pueblos  de  misiones,  habitados 
por  6.495  almas  y  46  de  doctrina  con  8.460.  La  tierra  cultivada 
por  los  55  pueblos,  era  en  aquella  época  igual  al  espacio  que  ocu- 
pan 6.554  almudes  de  sembradura  y  habia  4  895  reses. 

Las  parroquias  son :  Barcelona,  Pozuelo^  S.  Diego,  Aragüita,  Ca- 
piricual^  Bergantín^  Pilar,  S.  Bernardino,  Curatacuiche,  Caigua  y 
Carito. 


CANTÓN  DE   PÍRITU. 

La  villa  de  Piritu  es(&  situada  entre  cerros,  á  la  orilla  de  una 
quebrada,  distante  una  legua  de  la  mar,  en  donde  está  el  puerto 
llamado  Piritu  al  cual  solo  van  embarcaciones  de  cabotaje.  La  igle- 
sia situada  sobre  una  allura,  al  pié  de. un  cerro,  es  una  escelenle 
poyicion  que  domina  toda  la  villa.  Era  el  antiguo  convento  de  los 
Badres  Observantes  en  el  cual  residía  el  capitjalo.  Aquí  hicieron 
consiruir  al  pié  del  cerro  un  pqso  profundo,  al  cual  se  baja  por  una 
escalera  para  obtener  agua  cuando  escasea  en  el  pueblo*  En  verano 
tienen  los  habitantes  que  servirse  de  pozos  que  están  fuera  de  la 
villa  para  proveíase  del  agita  necesaria  á  los  míos  domésticos.  Este 
punto  es  sano  y. se  hace  algmi  oomercio<eofl  eltuieeior.  Los  tenre- 


—  855  — 

nos  de  estos  cantones  son  propios  para  el  cultivo  del  algodón,  teq- 
uiando presente  que  en  lo  general  llueve  mucho  aquí  de  mayo  á 
octubre,  y  que  en  noviembre  y  diciembre  caen  con  frecuencia  unas 
lluvias  que  llaman  fortes. 

Los  pueblos  de  este  cantón  son ;  Piritu,  S.  Miguel,  S.  Francisco 
y  Clarines. 

CANTÓN  DE  ONOTO. 

La  villa  de  Onoto  está  situada  en  un  llano  cubierto  de  bosques  y 
gramíneas  á  la  orilla  del  rio  Uñare,  que  no  le  deja  otra  perspectiva 
}  que  la  vista  de  sus  aguas.  Las  bellas  sabanas  que  están  en  sps  cer- 
'  canias  son  mui  útiles  para  la  cria  de  ganado,  á  que  generalmente 
se  dedican  los  vecinos.  £1  estar  rayano  este  canfon  con  la  provincia 
de  Caracas,  en  donde  hai  pueblos  que  tienen  terrenos  útiles  para 
el  cultivo^  le  da  alguna  importancia  para  el  comercio ;  y  el  rio  nave- 
gable que^forre  á  lo  largo  de  su  territorio  le  sirve  de  mucha  utili- 
dad para  el  trasporte  de  sus  productos. 

Las  parroquias  son  :  Onoto,  San  Pablo  y  San  Lorenzo. 

CANTÓN   DE  ARAGCA. 

La  villa  de  Aragua  es  una  de  las  mas  interesantes  de  esta  provin- 
cia :  está  situada  en  una  sabana  á  la  orilla  del  rio  Aragua.  Su  posi* 
cion  en  el  centro  de  las  Itanuras  de  esta  provincia ,  en  la  encruci- 
jada de  muchos  caminos  que  conducen  á  todos  los  puntos  de  ella; 
pudiendo  comerciar  con  Barcelona,  Angostura  y  con  los  llanos  de  la 
provincia  de  Caracas  y  de  Cumaná ;  en  un  clima  caliente  pero  sano, 
en  medio  de  ricos  pastos  que  alimentan  un  gran  número  de  gana- 
dos; son  todas  circunstancias  que  deben  favorecer  esta  población 
para  que  prospere  y  adelante.  Sus  habitante^,  casi  todos  ricos  pro- 
pietarios, contribuyen  al  engrandecimiento  de  la  villa,  que  está  lla- 
mada á  ser  mui  importante  en  estas  llanuras. 

Las  parroquias  son  :  Aragua,  Margarita,  Chaparro,  Cachfpo, 
Santa  Ana  y  San  Joaquín. 

CANTÓN  DE  SAN  MATEO. 

La  villa  de  S.  Mateo  está  fundada  sobre  vm  llano,  cérea  de  la  la- 
guna que  aumitiitra  agua  á  sos  habitantes.  Mc^  mui  1^  de  eKa 


—  851  — 

está  él  rio  Prespuntal,  et  cual  toma  orí^n  en  la  mesa  de  Salas  que 
hace  parte  del  sistema  de  la  de  Gvaoipa.  Sus  terrenos  son  aparen- 
tes para  h  cria  de  ganados^  y  en  la  dorania  bal  tierras  útiles  para 
el  cultivo.  E>e8de  las  mesas  que  están  en  hs  inme^adones  de  fia 
flHa  se  goza  de  la  beUa  rista  de  la  serranía  del  Bergantín.  Et  dfma 
aunque  cálido  es  sano.  Se  puede  comerciar  con  Barcelona,  y  en 
todas  4as  estaciones  del  año  se  llevan  sus  ganados  á  los  llanos  de 
Matorin  en  la  provincia  de  Cumaná,  donde  se  pn^rciona  la  ven- 
tea de  venderlos  para  las  colonias  estranjeras.  Puede  de  consi- 
guiente comerciar  con  la  misma  facilidad  con  la  capital  de  su  pro* 
vlucia  que  con  la  villa  de  Maturio. 

Las  parroquias  de  este  cantón  son :  S.  Mateo^  Quiamare^  Santa 
Rosa,  Úrica  y  Ghamariapa, 

CAJíTON  D£  SAJS  DIEGO. 

La  villa  de  S.  Diego,  llamada  de  Cabrutica;  está  situada  en  una 
hermosa  esplanada  á  la  orilla  del  rio  que  lleva  su  nombre.  Tiene 
una  vista  bella  hacia  todas  partes,  pues  las  sabanas,  en  forma  de 
variadas  colinas,  se  elevan  sobre  la  llanura  y  realzan  el  paisaje.  Los 
varios  grupos  de  árboles  que  se  ven  en  ellas^  hacen  un  bello  con- 
traate  con  las  graouaeas  qite  las»  cabreo*  Ko  mui  l^os  se  esUeode 
hacia  el  Ofíaoco  la  sierrita  que  loma  va  origen  en  Buenavisia,  de 
doode  nace  el  Suata  y  sa  fe«na  el  Uñare,  k^taiuimAo  esta  estre^ 
faja  de  roca^sobre  el  DíÚDoceu  £1  podar  oomoaáe^  ficÜBMüte  en 
Guayana  por  madto  de  «ato  rio,  es  una  de  \m  venUjas  del  canloa 
de  S^  Di^gP»  cajo»  tenreQQs  son  pcopÁo»  para  la  eriade  gfUMide»»  La 
mitad  de  este  canti^n  se  «oiBpiHMft  sin  embargo,  fie  iwsas^áfid^ 
que  se  pierden  sánbre  «l\>riadeo,  y  eufos  pasUM^  no  eon  buenos.; 
peJTO  en  cao^Uu  tiene  eeoelentes  potreros  carca  de  \m  oriUas  del 
Quemo  riou 

Las  parroquias  son  :  S«  DlegO;  Suata,  Santa  Clara,  Guaiciipa^ 
Sania  Crtiz^  Uberito  y  Gwaasto.. 

CANTÓN  DEL   PAO. 

La  villa  del  Pao  está  situada  en  una  pequeña  mesa  á  la  orilla  del 
rio  Catuche  y  cérea  ád  de  su  nmibre  que  nace  en  la  mesa  Gmni» 
pa.  Annqve  la  oabeiera  eslé  á  <listatt€ia  de  42  leff^as,  deade  aqai 


—  555  — 

pueden  ya  bajar  embarcacioa^s  por  el  rio  Pao  al  Orinoco.  Dos  gran- 
des ventajas  tiene  este  canten ;  la  una,  el  poder  Ueyar  á  Angostura 
las  producck»ies  que  dan  las  vegas  del  río,  por  el  rio  mismo ;  y  la 
otra  el  ^pw,  ettafodo  «aiévr  iva  Uimnm  i  Im  mmm  yonium,  «• 
áieU  á  los  c»r«os  poder  ir  «o  sobmente  basta  el  Oúmco^  sino  tam- 
bién al  cantón  de  ülaturin  en  la  provincia  de  Cumaná.  Solamente 
en  estas  mesas  se  vea  grandes  carros  cargados  de  las  producciones 
del  país,  atravesando  las  dilatadas  sabanas  todo  el  año^  porqueeUaa 
son  verdaderos  caminos  carreteros  formados  por  la  naturales 
misma. 

Las  parroquias  de  este  cantón  son  :  el  Pao  Eariagnan,  Tapirtre, 
Uucura  y  Boca  del  Pao* 

CAMT(»7  DE  SOLEDAD. 

La  vBla  de  Soledad  está  consfruida  sobre  las.  barrancas  del  Orí* 
ñoco,  frente  ala  ciudad  de  Angostura,  que  se  presenta  en  perspec- 
tiva en  toda  su  belleza.  La  vista  de  esta  ciudad|  el  majestuoso  Orí* 
DooO;  la  P^na  del  Medio,  que  se  levanta  '•obre  la  s«perOcie  de  las 
aguas,  las  embarcaciones  que  atraviesan  el  rio  y  los  buques  ancla- 
dos ala  opuesta  ribera,  todo  contribuye  á  dar  al  paisaje  una  gran 
belleza.  Estooantoft  tiene  uñ  rio  navegable,  que  es  el  Caris,  en  el 
cual  se  embarcan  las  producciones  que  se  dan  cerca  de  aquellas  ri- 
beras. Sus  grandes  mesas  le  proporcionan  caminos  carfeleros,  y- la 
posición  déla  villa  cerca  deGuayana  la  bace  interesante  y  prospe- 
rará ;  pero  jamas  llegará  á  rivalizar  con  la  ciudad  de  Angostura. 

Las  parroquias  son :  Soledad,  S.  Vicente,  Mamo^  Santa  Bárbara, 
Tabaco,  Can,  Merecural  y  S.  Pedro. 


TABLA  COBIPARATIYA  de  la  posición  astronómica  de  las  cabezeras  de 
sus  tierras,  terrenos  baldíos,  población  absoluta,  relativa,  hombres  de  armas» 
que  se  cultivan  para  la  esportacion. 


NOMBRE 

da 

LAS  CABBZSRAS 
DE  CANTÓN. 


Barcelona. 


Piritu. 


Onoto. 


Aragua. 


San  Blateo. 


San  Diego« 


Pao. 


POSICIOH  ASTBOHÓMICA. 


Latitad 


norte. 


Soledad.  • ••• 


Islas  de  Barcelona. 


Id. delai de  Piritu. 


10».  6'.  M" 


10.    5.    I 


9.  31.    3 


9.  34.  58 


9.  45.  SO 


8.  16.  30 


8.  38.    O 


8.    8.  58. 


LongitadB. 
del  meridiano 


AUor« 
en   Tirtt 

sobre 
el  nÍTel 


Tempe- 
ratura 
media 
del  ter- 
mómetro 
centí* 
de  Caráeas.    I  del  mar.  I    grado. 


8*.  ««y.  5" 


1.  55.  3 


1.  80.  58 


3.  16.  Id 


3.  40 


2.     1.  25 


2.  16.  50 


3.  19.  II 


16 


119 


50 


OALIBAD  DB  LOS   TBRRKNOS 

DB  QDB  SE  GOMPONBlf  LOS 
CARTOHSS  BM  L.   C. 


o 
s 


27*.  80. 


26.  89. 


27.  22. 


135        26.  94. 


177       27.  78. 


152        26.  11. 


186       28.  84. 


82       27,  92 


» 


»      I        » 


21 


20r 


80 


Total. 


«m 


64 


180 


181 


45 


» 


» 


« 
S 

o 
O 


ii 


21 


83 


» 


125 


768t 


233| 


I 

E  . 


Q 


85 


15 


T 


o  2 
§1 

fe"? 

Q  m 


» 


20 


» 


9 


7 

4 

12 


120 


97 


e 

0 


Q 


^   P 


o  — .o 


» 


8 


108  T 

Mt 
35 

246 
167 
190 
185 
187 


24 


1158 


cantón ,  su  altura  sobre  el  nivel  del  mar ,  su  temperatura  media ,  calidad  de 
esclavos,  distancia  á  la  capital  de  la  provincia  y  de  la  república^  y  los  frutos 


mero 
de  1.  c. 

que 
se  creen 
baldías. 


2S 


8 
53 
50 
72 

70 

38 

» 


283 


POBLACIÓN  DB  LOS  CÁMT0MB8. 


m 


Total 

déla 
pobliicion 
en   1839. 


10.780 
4.121 
4.58!» 

1S.992. 
6.957 
3.888 
S.8S& 
5.924* 


» 


52.103 


Población 

reUtWa 

por  legua 

cuadrada. 


07 
113 
14 
57 
42 
SO 
21 
21 
» 


45, 


Hombrea 
üiiies 
para 

la»  araas. 


900 
400 

400 
1.200 
500 
500 
500 
400 


Bi 


4.400 


■^■■■a 


Homero 
de 

«aclavos. 


43 
65 
512 
139 
37 
57 
23 


941 


DMTINCIÁS 

DI  I.OS  c&HTOirn. 


k  la  capital 

de  la 
proTÍacia. 


s  Vi 

18-Vtf- 

10 

48  V« 


59 


32 


v¿ 


Vi 


h.  la  capital 

deU 
república. 


58 

49  Vtf 
48 

€0  V* 
66 
7«    Vi 

OS  Vi 


FRUTOS 

QOB  as    CULTZTAV 

para 
LA  BSrORTACIOÜ. 


Cacao,  caña ,  café,  al-, 
godon  y  cocos. 

Algodón  7  tabaco. 


Id»    y  caña. 


Gaña  y  tabaco. 


rd.       Cacao,  café, 
algodón  y  tabaco. 

Gaña  y  tabaco. 


Id. 


Id,  y  cacao. 


9ttmmiffm 


■■■■I 


. 


—  558  — 
TABLA 

DE  LAS  ALTURAS  A  LOS  GEBBOS  DE  LA  PBOYINGIA. 


N<mbrei.         Varoi.      Sarrñntas. 
Ptonía M50...  del  B«rgan- 

ArraBpoJa 919» id. 

XaraTiüt MQD W. 

Tristeza 489D iU. 

Taeoyucal 1M0 tf. 

BerganÜD «  tM5....**«    id. 


Nombres.  Yarat.       Serranias^ 

Horro  de  Barcelona.  1(3..  de  Barcelona. 
CermPawMilaU...,  444...  de  San  Ber- 

nardino. 

Cerro  de  Hrtlo. ....  800 de  Pirita. 

Mesa  de  Vrita «64 de  Mesas. 

—    de6«anipa...  800 id. 

^   d«10rki«oo...    60 id 


TABLA 

DE  LOS  BIOS  DE  4''  ÓBDEIT  BB  lA  PBOTINCIA. 


NeTcri. . . . 


Serr4íniM.       Su  deiagü» 
Bergantín á  la  mar. 


Rarleaal id, 

MarsTüla id. 

Querecual id, 

«inas id. 

Cborro-Trio id. 

Gapirieual id. 


U. 

U. 

«. 

>•*.••.  M. 
U. 

tu. 

Pretpu&tal Mesas tí. 

Ocopia id. Id. 

Gaprafera id*...* tí. 

Limón id tí. 

Seco id id. 

Guarió id id. 

Tonoroporo id Id. 

Orooopicfae id^..* id. 

Mapuei id id. 

Ghiguapo tí tí. 

Güere tí id. 

Mería id id. 

Caico  Seco. id ad. 

Misacantada tí tí. 

Merei id *..  «, 

Cachipo id tí. 

Maco Cerrito  Guaya- 
can  ... 

Suata Si 

Lindero id... 

Mapire « . .  id..., 

S.  Gerónimo id..., 

S.Diego id.... 

Cabrutica id..., 

Aribi Mesas... 

S.  José id.... 

Pao id.... 

Pariaguan tí.... 

Guaicupa. id,.., 

Catuche id.... 


....  m. 

el  Orinoco. 
....  id. 
....  id, 
....  id. 
....  id, 
....  tí, 
....  id, 
....  id, 
....  id, 
....  id. 
....  id. 
...  id. 


Nombres»      Serranía.       Su  desagüe. 


Perro Mesu.. 

Aguaclara tí... 

Algarrobos fd... 

Riesitos id... 

Hamaca. id... 

Tapirire id... 

Moquete. id... 

Caria id... 

Venlazon id,,. 

Carapa..«.» id... 

Canoa ,,,.,  id.,, 

Gbuapire id... 

Carrfcilo tí... 

Limo ,,,,,%.,  id.,. 

Colmenas tí,,. 

Coritas tí,,. 

Peñas..., idm.. 

Carapunchin id,,. 

Palatnbra id.,, 

Cucasano. ; id,,, 

Camoruco » . .  id.., 

1  i.8i|Uorv  ...••.«..  la*.. 

Meréi id... 

Mamo .•«•••...»..  tí**, 

Cbuiuto id... 

Pozos id,,, 

Orítupano id... 

RioSeco id... 

Chife id... 

Pando id.,. 

Jaime id.., 

Areo id,,, 

Claro id... 

Yayo id,,. 

Amana.......  Bergantín 


Tristeza id. 


al  Orinoco 
....  id. 
....  id. 
....  id. 
....  tí. 
....  id. 
....  tí. 
....  id. 
....  id. 
....  tí. 
....  id. 
....  id, 
....  id. 
....  id. 
....  id. 
....  tí, 
....  id. 
....  id. 
....  id. 

...  id. 
....  id. 
....  fd. 
....  id. 
....  id* 
....  fd. 
....  id* 
....  id. 
....  id. 
....  id, 
....  fd. 

...  tí. 
....  tí. 
....  tí. 
....  tí. 
...  golfo  de 
Paría. 

...  tí* 


—  559  — 


Nombres,      Serraniai,      Desagüe, 

Tacuyucual....  Bergantin  . . . •  golfo  de 

Paro. 

Úrica id id. 

Rapio id id, 

TacaU id id. 


Nombres.      Serranías.     Desagüe 

Santa  Rita Bergantín  .»..  golfo  de 

Paria. 

Tonoro id...    ....  ¿d. 

Goporo id...    ....  id. 


saatatetBmdiaím 


—  «60  — 


PROVINCIA  DE  CUMANA. 


SITUACIÓN  ASTRONÓMICA,  ESTENSION  T  POBLACIÓN. 

Esta  provincia  se  encaentra  entre  los  8^  9^  y  •!  O*»  4  4'  'de  latitud 
boreal ,  y  entre  los  7^  54^  y  5*  ^2'  de  longitud  oriental  del  meri- 
diano de  Caracas.  So  figura  es  tan  irregular,  á  causa  de  las  penín- 
sulas de  Araya  y  Paría,  que  no  hai  con  qué  asemejarla.  Su  terreno 
se  debe  considerar  como  dividido  en  cuatro  zonas :  la  primera  es  de 
serranía ,  bañada  por  una  multitud  de  ríos ,  formando  hermosos 
valles  con  terrenos  de  cultivo,  y  con  puertos  sobre  los  golfos  y  el 
mar ;  la  segunda  se  compone  de  mesas  altas  regadas  por  morichales 
que  forman  grandes  ríos,  los  cuales  casi  todos  desembocan  al  delta 
del  Orinoco,  proporcionando  una  navegación  íáeil  en  el  interior: 
la  tercera  consiste  en  sabanas  hermosas ,  escelentes  para  la  cria  de 
ganados ,  que  todo  el  afto  tienen  agua  y  verde  pasto  :  la  cuarta  se 
compone  de  tierras  que  se  aniegan  ,  cubiertas  de  bosques  espesos, 
habitados  por  fieras  é  insectos.  Climas  frescos  y  sanos,  otros,  cálidos 
y  enfermizos  y  muchos  cálidos  y  sanos,  tal  es  el  temperamento  de 
esta  provincia.  El  máiimom  de  largo  del  territorio  está  en  la  direc- 
ción del  N.  O. ,  desde  la  orillado  S.  Rafael  de  Barrancas,  sobre 
el  Orinoco ,  hasta  la  punta  Escarsero  en  la  península  de  Araya  y  es 
de  64  leguas.  Su  largo  tomado  de  N.  á  S.  desde  las  Barrancas  de 
Fajardo ,  sobre  ^  Orinoco ,  hasta  el  cabo  Tres  Puntas  en  la  ponín- 
sulade  Paria,  es  de  50  leguas.  Su  mayor  estension  de  E.  á  O.,  desde 
la  punta  de  Araya  hasta  la  punta  de  la  Peña ,  frente  á  Trinidad ,  es 
de  28  leguas.  Las  leguas  cuadradas  de  este  terrítorio  son  4465,  de 
las  cuales  hai  cerca  de  407  baldías ,  y  contando  con  una  poblacioiK^ 
de  50,674  almas,  están  en  razón  de  54,6  por  cada  legua  cuadrada. 

LÍMITES   Y   CONFINES. 

Confina  esta  provincia  con  las  de  Barcelona  y  Guayana.  Ya. en 
la  descripción  de  la  primera  está  delineado  el  lítnite  con  ella ,  y 
por  lo  que  toca  á  la  segunda ,  la  demarca  el  rio  Orinoco ,  desde  la 
boca  del  rio  de  los  Pozos ,  hasta  el  vértice  del  delta ,  donde  se 
aparta  el  caño  Mamo.  Este  caño  hasta  su  desagüe  con  el  nombre 


de.toeacVagre  en  el  géUúA^  Psria  fotmá  la  iíiiea  Afisoria  cod  la 
]HY>?hicia  de  Gnayaaaí. 


u. 


COSTAS    DEL   MAR. 

« 

fimpiexa  la  costa  d&  la  provineia  eo  la  be«a  mas  occidental  del 
delta ,  -fse  es  la  llamada  VagjM ;  toda  etia  es  .baja  j  anegadiza , 
abierta p<H:  un  gran  número  de rioa  y  eanos  ^¡m desagnandeütro 
del  golfo  y  de  le%  enales  ü  mas  Uimdable  y  frecaeoiado  ts  el  Guara* 
piche,  por  donde  se  navega  y  comercia  en  el  interior  con  goletas  y 
^EnharcacioneemayiNres.  Después  dé  pasado  Güiiia  la  oosla  i|iMd^ 
mas  elevada  y  como  destrozada,  con  porción  de  pequeñas  enhenadas 
basta  la  boca  grande  de  los  Dragos ,  formada  por  la  isla  de  CbacaF- 
ebaciire  y  la  costa  firme.  La  punta  masaalíeote  de  dMacoata,  al*N. 
y  E.  y  forma  un  islote  alto  y  escarpado  llamada  >el  Morro,  Desd§  él 
continúa  la  costa  para^el  0.^  con  alguna  iaféiüsqa  pata  ^S.  por 
espaeio  de  6  leguas  hasta  la  ensenada  de  Mejillones  ,  desde  la  cual 
roba  un  poco  al  N«  basta  el  cabo  Tres  Puntas,  que  dista  cómo  H 
leguas.  Toda  esta  tierra  es  alta  y  de  serranía  y  la  «osta  sumamente 
limpia,  pues  á  una  mlUa^bai  de  20  4-40- brazas  de  aosna  kmoea. 
E^  este  espacio  e^án  Puerto  Viejo ,  Puerto  Nue^o ,  ^iUfaleta  y  la 
ensenadita  de^ Chapare.  A  d^ leguas  se enouentra.la  ensenando 
Uñare  quQ  olrece  un  buen  fondeadero  al  abrigo.de  las  brisas ,.  y  en 
él  desembioea  un  rtachuelo.  La3  pi|ntas.de  esta  ensenada  iionen  va- 
ríosislotesry  arrecifes.  Desde  alii  hasta  el.  cabo  Mala  Paseua  sigue 
la  i^slaál  O.,  por  una  distancia  de  mas- de  6  hpuaa;  toda  es  muí 
liippia  y  á  una  milla  se  encuentran  8  brasas  dafondo«  £n  ellateslán 
el  puerto  S;  Juan.y  laen9^iada,G!herepare.Dtsdeel  cabq  Mala.Paseua 
sigue,  la  costa  al.Q.  por  ^  4/2  .teguas  hasta  el  monro.de  Puerto 
Santo :  este  morro  está  unido  á  la  costa  por  unaiengdela  baja  de 
arena.  Cecea  de  este  al  peiiaietttei  existe  ua  isliste  llamado  también 
do  Puerto  Santo  y  al  otro  lado  de  dicha  lengüeta  bai  fondeadcio  al 
abrigo  de  lai>risa  con  fondo  de  5  á  6  brazas :  aquí  se  encuentra  la 
ensenada  áe  Cs^néoiés  y  la  villa  de  {lio  Caribe.  Desde  el  morrío  de 
Pnerto-'Sattto^  corre  la  costa  al  O.i  S.  O.,;  casi  ^os  leguas  <  alif  está 
la  ponia^de  i^pian  Váziyis^  q«^  íbrpa  una  ensenada  coi' l^dea* 
derode  6  á  .7  brazast,  al<  ábñgo  de  las  ^r^.  Su  ééia  ensenada 
dis^mboca  on  riodondíe  pnede  hacerse  aguada  ,  y  enel  Pééídéo  oe- 
eidenlnl  de  ella  bal  in  islotjoo  <dn  dondetestá'la  Wlhi  de  <4i^pano> 
p.  sBoe.  w 


al  O.  dt  la  ovtf  y  á  2  iHuUm  estáa  la  punta  y  JuarrdfialiBaav^lpK 
tiene  también  un  islote  inmediato.  Desde  |wala  y  JDOlro  Salim» 
corre  la  costa  limpia  con  yarios  faralloncitos  pegados  á  ella,  hasta 
el  morro  Blanco  que  dista  una  l^gua.  Die  allí  para  el  O.  corre  la 
cosía  hasta  la  ensenada  de  la  Esmeralda,  distancia  de  4  leguas,  en 
]a.cttal  eiltalasisasaBadas.d»  Lehrancbey  Gaírrapatas.^oad(MiÍ9lo- 
|eB..Eá  morro áe. la  Esneralda  es  «a  is'ote#«paiiad;0  d«  biioata  pw 
«a..cafialiao*  emamúe  medio  cable.  Entre  LfbrftiM^hery  mono  E&* 
naralda  4iai  ooo»  iehie$  baslattta.fofira  ideóla  €/mlA  llamadas.  Gar* 
rsHPoitaft..     ..  r.  .'.     ' 

ifííp  i^./0*  del  morraidel  la  £sm»ml^.le.foniMLiiB)abgraQile  aaaa- 
nada;  pero  etíá  obsir4iida<  por  un  (dacer  de  íondo  muí  desigual , 
«abaa^el  .cual  se  lea^náan  ties  idote& .  Se  puede  Jondear.,  sin  em^ 
1411190  ^aiabríga* y  cecea^dal morro.  I>eesta.eDHaadajbas|ia'iafiufi(a 
^>  mno  del  MauaoUlo,  distancia  de  casi  ^  leguas  i.bai  f  laecr.qne 
aalf  cono  na  tf  rokiáfiaiiUa  ¿  euslaailiuna  anaan^  Ja)  peri».aLisbrittda 
toda  poTioL  plaaer«  Ai  (X  dé  elia^sí^pe  ia  coala  aiolliiafNa)iiiiala  la 
pti«ia¡d0  OiürapotUBO » .distaaeia  de  f  4/21  leguas.,  desdcula  £aal 
aia^iifiTffi  ittu  iplaeer.df  raaluea  miU¿i  al  i>i.  E.  .  . 
.  ÁittiHi  ieona  dafnia  puata^astá  Ja  (anata,  eaitacpadá  y  alia  ^  peno 
i^ada  a^.oorxavGoittD  al  Ni  jt^  y  imai  tava.yi  attiegadíBa  ppr  caá  oua 
faigua^  ea.doBida¡&a4evaiiíft'e|jw0it>a(4e£bafMp«tejqao  foaaajuiia 
poqla  saUaote  de  caaldos»  imiáa^* 

'  £Qiiai<JuándiaBOs4eiS6oj!ro.4e  Cbacopata  se¿kaikui.  la  pmMas 
Oiéeataieftda  la.iiiaude  MargaFüa  que  forman  coa  ia.coetaittn  casal 
da  caes  ^laffaaa ,  e»  medio  del  cuai  asCáu  las^áslas  de.Cooba  yt^u-* 
higwfl»  perieufleíento  á  la  provioda  de  'MicgarHa^ 

.SteJeiJa  püttta  ómaiiríade  ^CbaoopataieoEre  (a^ipita  al.$.  locw 
maulo  una-gcaaié  eiiaeBadaí.eiiIaq|iefistála  itfiíkkác^^aribeaf  el 
tíkÉ^eo  dd  Lotes.  ^        > 

..i)aye.aUí*itoiÉ*e'id  iccBlaal  O;  bastan^*  pan^aeonbealO'algnaaK 
Jwotet'basla.ieliiÉODria  déla  Paña  que  dista 4  Eagvaa^  y  desda  esta 
btij^ifdgo  fttraiclr^obaata  punta  Gocda»  ia.osal  .íamna^unaiense*^ 
9ftdeiihiipbya¿>y  tíeccaimúi  baja  baatá  ia;|)Qnttd6oíiiaadiia^.GHa- 
HMW^lM > fwrmida  poc.un.pedaEodeileoitea  eioaiyaiíl^.yaiUo^  4|ii« 
sfi)QfiffAtaa9bf]ifeíy«itiewa  biya.).  q»fdaoda^«slado.  par  elU:  mel 
Mi^  l  mAmk  i«ue¡^  easeiiadá..hai.  uaa  (Huiáke  «escarpada  do 
^Mi4)í(;(W44  e>t«AsioQ  ^  llamada  de  Ja^  Aunas,  fetaenaanria  inane  mas 
^\ í%^ ikt»^ñ id« ipmta  Cyeniai:  laide. iC¡aobiu.,Dé  tquí «cobünía . k 


«•í 


.*•>.  •:,»  . 


y^deaúiva  ¿  pmilük'áf a ^  ^Mfst»  toda  ba}a  y  playa  dé*  airear;  ^ 
^lMid0  eiláD'laa  fomonaaallaa^tjk^  Araya^  fisrtac^ta  de^i^faifaéohtH 
BinttoiiwiA  S.  ^.  Av.  lá  di6ta«iíeia4e  2  m'rMad  hast»  )a  poma  de 
FMdras, qw^etíá itonaidapor  el  extremo  oecidéntíil  del  cerrt)  de 
fiuaianaohe.  La  piiiila  foraia;  uá  frootoa  de  meála  nilHií,  y  ^ego 
seántemíMla  tieito  alia  dél^oenrroiy  en  su  putfta  rtias  n^eridioiial 
está  el  lugar  del  San loario  del  Nuestra  Smom  de  Agdasanla.  1.a  ee^la 
«gueHel  attmb  tnmbo  del  Si. Si  fi  Hasta  la  punta  dM  Bañrf  1^0)1 , 
pasÉero'd^'pé^yaúdeavéiía'baja)  después «setfrpádiá  p('r(>  tioéla'liin'^ 
pía ;  eafella^seíorm^la'etisenadtái  de  Araya,  en  duya 'punta  meft^ 
diaaifiliqtíe  éa  (irhieiiiai'al-  oerpo  esdarpude  del  B&ff^n  /liftMa^  ikt 
castillo,  cuyas  reliquias  aun  existen.  •  ! 

La  coait  sí^e  al  8;  E.  á  la  pmtadél  Canel,  y  óMónec'ése  dtf'fge 
al'Bb  Si  E.  por  ^ds¿>5  leguas  liaMat  la  pmitaf  de  Aréáas ;  qat  as  la 
meridioMd  d«  «tá  cosCa  y  Ut  sttelpfriotial  d^^l  golfo  de  Garíéco.  &ñ 
la  i  (mota:  meriiiwiÉi^eakárel)nioilo«detkvnaná.  I^dfa.  punía  es  V!é 
acena.fmi¿l)ajaiy  deadeetta  sale  yará' el^O.  y  9.  ñmplaeerftn 
aoao<yade^.q»edef>ratola($e  paaa  de'(4'á'5t>i«zas>  y  de  esta' pno^- 
(«BAidadJbastftbararv  £1  veri^del  plaefar  «qtie  desdé  lapu^rté  corre 
plirA'Oi'»Si  y  ^'  mantiene  fu  «i '|>egadtf  ala  c^a ,  forina'cen  eHa  la 
bofii  dei  tfo.llittaiiáres  ^  desda  ta^snal  fa  sirftóndo  fára^el  S.  O.  y 
yieinwia  eolpinilái.I^édtBa.  La  pobtoeibn  y  daisfdfe^e  (kráiyaiiS'esi- 
tírr^á  éa^iiemlaMa/det>a:pullla'  y  á  etflla^  déFHd'I1ái)zai)áfe^v  1^ 
14 laja delierveno y  mas  «epeade'la'pdaya  hal  uafa'pbblaeiofi^'de 
ioétea  sa^amdaidéila  de  Ctfoiai^  pot<  elmeneidnadb  rio.  El'fdiideap^ 
déroeitácKlalTrettlaióia)  O.  de  la«bocá  áelHo.^De  la^pntiM'^ 
Piedras  continúa  la  coala  casi  al^.'  pm^'^p'^s  dé-  mk  legcra-;  tfnas 
vezes  escarpada  y  otras  con  playa  de  arena  hasta  Puerto  EsoendidO; 
que  es  una.  ensenada  que  hace  la  costa  y  tiene  como  media  milla 
«otí  5  tm»n4e:foádi»  aaí  M<  tñlM^wki 

.    Desfie4a4MBta>écoidfOial  de  Puerto  Esde^Mb  <X!ftre  la  c6l9(«^l 
(O.  I  esetriwdái,  perb  lii&piaf')]Mitía;puiiUde^€ai«ifHáiiQi1t6.  D^íi^uí 
f^lfOiovro  yi[ígíai4e'  MothfMM 't(ai'S/4<dé  náW^)  y  eMm\k  áM  íc 
iomlaiiiié'gtgtidíi  y  biih*ncm.eiiMiiada  cowfénifodt^fide  4$  tr^^ 
4ihr4ziA,¿ii»nesdeua'Cal>te.^ékí>eoBtái  -      '< 

lafVigúitde  ModwnddfsyíliaicoHie'alO.  SiiOMmOi  tengfÉdfa^dk 
itierra  ^eesílaqiteffonm  la^ylafilaorlbnláldáíipiímc^'ife  Méciilmá, 


calas  ó  enseaadas  qiia  soa  iiiias  dánenat  naliiraks^  con  pn^to» 
clonado  fondo  qoe  no  p«sa  de  -15  brasas  ot  liaja  de  5,  i  un  cable 
ó  cable  y  medio  de  todaa  si»  costas :  eatas  son  en  so  mfor  parlé 
moi  limpias  ;  de  modo  que  con  .solo  el  cuidado  de  pasar  i  cable  y 
medio  de  todo  lo  visible ,  se  va  libre  y  separo  de  enalqeier  rle^« 
Las  dichas  calidades  y  la  de  tener  la  salida  y  entrada  franca  coft  la 
brisa  .9  baoen  qne  sea  el  primer  puerto  de  toda  esla  América  y  que 
se  le  tenga  por  uno  de  los  mejoras  del  mando. 

Como  á  nna  milla  al  O*  de  este  poerto  está  el  de  Ifonare  que 
también  es  ipoi  hermese :  en  todo  él  se  baila  fondo  de  45  á  5  bia* 
za^  que  se  cogen  á  medio  cable  de  sus  riberas :  estas  son  limpias , 
sa  boca  es  espaciosa ,  y  se  pnede  entrar  y  safir  de  él  con  la  biisa  y 
á  coalqnier  hora. 

La  pnnta  ocddental  de  .este  puerto  se  llama  cabo  Manare  y  y 
desde  ella  corre  la  costa  como  al  O.  S.  O.  media  legna  hasta  punta 
Tigrillo.  La  costa  continúa  bajando-al  S.  y  E.  casi  ana  legua  y  des- 
pués vuelve  para  el  O.  4/4  S.  O.  rasi  dos  legoas  hasta  panta  Gorda. 
Es  el  fondo  de  esta  ensenada  que  se  llama  de  TigrlHo,  está  un  ca^ 
nalizo  por  el  cual  se  comunica  con  el  puerto  de  Mocbima.  Hai  en 
esta  ensenada  5  islas  llamadas  Venados  y  hs  Caracas»  Al  S.  de  la 
punta  Corda  y  á  distancia  de  una  legua  está  la  punta  del  Escarpado 
Rojo  y  las  dos  forman  ia  boca  dol  golfo  de  Santafé.  D^e  esta 
punta  baja  la  costa  al  S.  y  luego  sigue  al  O.  la  distancia  de  casi  una 
legua  basta  la  purta  de  la  Cruz.  Como  al  O.  N.  O.  se  halla  k  isla 
mas  oriental  de  las  Arapos ,  distante  carca  de  una  legua.  De  la 
planta  de  la  Crui;  signe,  la  costa  al  O.  hasta  cerca  de  ponta  deCo* 
noma  y  toda  es  limpia  y  JiOQ4able.;  aUi  termina  el  tenitcnrío  de 
Cumaná  y  eqipif  za  la  costa  del  de  Barcelona. 

GOLFOS. 

Entre  la  isla  de  Trinidad  y  la  costa  firme  está  el  gran  golfo  lla- 
mado, de  Paria  ,  q«,e  ofrece  segnrb  abrigo.en  las  embarcaciones , 
pues  se  puede  fondjear  en  coalqui^  p^rte  de  él  sin  el  m^nor  ri^o 
y  por  el  número  de  brazas  que  acomode.  Se  diría  que  este  golfo 
d^  su  existencia  á  una  .catástrofe ,  pues  la  isla  de  la  Trinidad  está 
indicando  que  en  otros  tiempos»  báciá  parte  de  continente  ^jy  lasii^ 
las  entre  esta  y  Paría  son  como  reitbs  del  terreno  sumergido.  Se 
caHra  á  es(e  gran  golfo  por  dos  canales ,  uno  al  N.  y  otro  d  S. :  el 
del  N.  está  dividido  en  varios  boquetes  por  algunas,  isla^  ^  y  en.el 


—  5é5  — 

S.  hai  un  islote  el  caal  despide  bajos  fondos  de  piedra  que  son  pe- 
ligrosos. En  la  costa  occidental  de  la  isla  está  Puerto^España^  que  es 
su  capital  y  en  este  punto  se  reúne  todo  el  comercio  de  importación 
y  espoTtacion.  Nada  seria  mas  fácil  que  entrar  en  el  golfo  de  Parla , 
bien  fuese  por  el  N.  ó  por  el  S.  y  navegar  deutro  de  él ,  si  las  cor- 
rientes que  se  esperimentan ,  dftoianadas  no  solo  de  la  corriente  ge- 
neral que  en  toda  la  costa  de  la  Guayana  se  dirige  al  N.  O. ,  sino 
de  otra' particular  qué  causan  las  mareas,  no  presentasen  algiin 
estorbo,  que ,  aunque  pequeño,  es  menester  precaverlo  con  el  co- 
nocimiento del  efecto  que  causan  en  los  diversos  puntos  de  él. 

Ed  estos  parajes  la  estación  de  las  lluvias  es  desde  julio  basta  no- 
viembre, en  que  las  brisas  ó  vientos  generales,  sobre  ser  mui  cal- 
mosos, llaman  al  E.  S.  E.  y  S.  E.  En  los  restantes  meses  sopla  la 
brisa  fresca  del  N.  E.  6  E.  N.  E. :  esto  y  el  haber  dos  bocas  para* en- 
trar en  el  golfo  de  Paria ,  induce  á  preferir  en  la  estación  Ilufibsa 
la  del  S.  y  á  entrar  por  la  del  N.  en  la  seca. 

En  la  costa  occidental  de  la  isla  de  Trioidad  puede  hacerse  agua- 
da en  muchas  partes  de  ella,  desde  punfa  de  leacos  hasta  la  de  Brea, 
cuando  Ih  marea  sube  y  va  el  agua  en  la  dirección  del  S.  O. ;  y 
'  cuando  baja  en  la  del  N.  E.  Del  cabo  de  la  Brea  hasta  Puerto  España 
sigue  la  marea  la  dirección  de  la  costa  con  cortisiiba  diferencia ; 
esto  es ,  se  dirige  al  S.  cuando  la  marea  llena  y  al  N.  cuando 
mengua: 

'  La  entrada  del  N.  dé  este  golfo  tiene  4  bocas  llamadas  de  Dragos, 
las  cuales  están  formadas  por  tas  islas  Monos,  Huevos,  Ghacacba- 
cáres  y  la  costa.  La  boca  de  Monos  es  muí  espuesta  á  calmas  á  cansa 
de  la  grande  altura  de  sus  costas  y  porque  siendo  angosta  larga  y 
tortuosa  -está  llena  de  remolinos :  es  acfe§ias  la  única  que  tiene  ba- 
jos ;  causas  (odas  para  que  no  sea  frecuentada. 

En  la  boca  de  Huevos ,  cuando  la  marea  mengua ,  sale  el  agua 
con  tfna  velozidad  de  media  legua  y  mas,  pero  en  la  creciente  casi 
está  parada  ;  esto,  y  el  ser  la  taas  corta  de  todas,  el  hallarse  á  bar- 
lovento de  tas  otras  dos  siguientes,  y  el  ser  enteramente  limpia,  la 
hacen  mirar  á)mo  la  mas  propia  para  salir. 

En  la  boc*  Navios  sale  siempre  el  agua  en  la  creciente  con  una 
^velozidad  de  media  legua  y  en  la  menguante  hasta  de  4  millas  :  es 
mui  limpia  y  ¿u  establecimiento  se  efectúa  á  las  5  horas  y  59  mi- 
nutos. Lá  entrada  por  ésta  boca  es  solo  asequible  cuando  la  marea 
■  llena ;  pero  eh  camWo  es  la  mas  propia  para  salir. 


Sa  la  boca,  grande  sale  eb  agaa  entiMtrcía  ymúfHe)citá  menor  ve- 

JozkLad  que  par  las  otras  tr^  ;  y  m  la  creeiente  queda  ccisi  parada:; 

e$  (ambieo  basUate  UiD|Ha  y  su  anop^Hud  permite  bcM^dcareoiuo  ae 

quiera  ;  esta  es  la  oías  íreeuentada  por  Ia$  ein(bareactoit«8  qae  \sm 

.al  Gqarapiche.ó  á  Gñíria  y  su.costa. 

En  oiuguna  de  la^  4  bocas  se  batía  fondoá ^í^bcazi» eanieiIiD 
4e  sus  canales,  y  eoa  todas,  6seeptuandoJospi|fl(o$>^e$e^etf.e»la 
jdart»  marcados  con  escollos,  puede  atacar  uo:  navio  Ua$Utoi;ar  oda 
&«9  penóles  eu  las  orillas.  ' 

La  eolrada  del  S.  tieoe  ttmbieu  4  eauale$.  El  prijüerD  «^«(^ne 
formaH  la  punía  xie  Icacosy  un  bajo  que  bai  at  Oide  eltaádistan- 
cia  de  inedia 4UÍUa,e)  cual  de IS.  ¿O.  Ueue Cbmo^dos'cables de^- 
teBsiou  y  i  4/2.brja^6  de  agua  sobre  piedra  :  ek  can»!  ttefle  iOi>ia- 
2a».  La  eorrieate  en  ^te-  cana)  se  dirige  nl^,  fO/em'la^i«teie»le, 
cosí  una  YieJUxüda4  de  2  1/2  initlas  yalN.p.tea'lava^í^^te  cotila 
de  5^/2.  '       .  '  " 

El  segundo  Manal  es  el  formadia  por.diqiio  bajo  de  piedra  y  ua 

ptStcer  de  cascajo  y  piedra  que  d^mora.al  M:  O.  sobre  d  cuai:bai4^ 

'  brazas.  Su  esleosioo  es  de  5/4  de  miila:  en  díreccio»  N.  (K  S/E,  Las 

eorrtenles  f Q  este  canal  ticneía  ca^i  H  n&isina  ijifeeciou  qué  eú  el 

anterior,  ym  ancbura  sera.de  una  fpiUa. 

El  tercier  canal  ea  «1  forn^ado  por  diebopbcer  y  ^I  isk)te  áel  Sol- 
dado y  sus  arrecifes  y  bajos  del  S.  y  del  S.  E.  Este  cañal  tenBrá.de 
osteaaioa  de  E.áO.  dos  millas  est^smsj  y  en  «u.n^iod.tnefttas  y  de 
^'á  7  ep  los  costados.  Las  aguas  con  en  edta  creciente  al  O.  4/4  S. 
>0«  con  yoK^idad  de  5  -1/2  mijias  y  en  la  vaciante  .a)  N.  O.  y  0/N. 
.0.  coii  lado  4  y 4  ^/2, 

.  '  El,  cuario  eanat  es  el  firmado  por  el*  islote  Soldado  y  ^  eaxktíneikte.^ 
Tiene  de  estensioa  4  millas :  sQ  corriente  se  dirígo- siempre  al  N^O. 
ú  O.  N.  O.  con  velozldad  de  4.  1/2  á  5  millas,  en  ifte#4o  del  carval  y 
áInmediacioQfs  del  Soldado ;  peroá  t/;^  milla  de  ia.  costa  .^mejsu 
vekojtidad  st^lo  es  der  1  1/2  á  2  millas. 

.De  todo  lo  didio  resulta,  que  en  cualquier  tiempo>i5e  puede  en* 
trar  en  el  golfo  por  las  booas  del  S.,  y  ^un  da^noi^,  como  esta  sea 
clara :  que  la  mejor  boca  4s  la  primera,  oo  solo  porqüie  fsti  á  bar- 
lovento, sino  porque  con  una  simple  orzada  so  ircrt>dsa  todo*«l«íe9fO 
que  bai,  especialmente  en  marea  vaciante,  pues  que  se  pu^de  pa^r 
á. menos  de  cable  de  punta  de  Icacos  de  la  costa  de  Trinji^ad^ 

Las  costas  de  Paria  pf e^sieatan  ua  terreno  i^itbi^to  de  seimiifti 


~-1 


—  M%  — 

eott^nib  «f^etiaáoii  éaüibresa  :  fw  dias  caen  <5 1  ríos  al  golfo^^fon- 
manck)  vaMes  Éemmaoajy  bit«Ébs:.piie«les*payta  embareacioiue^.per 
qboias,  edireaBenins,  baduidis  y  piiebém»  Lto-oostas  del  Go^rapií^ 
éhe  y  de-las  booas^i^  ddte  del  .Osiioeo  soq  al  odétararío :  Icrveute 
bajos  y  anagados.,  «Qbéentoado'beaqiMs  st^üatiofiqHe  dajaB'^apéaas 
peiGÜMr  kU'bocasrde'tosiiosf  eaflo&y  ed  námeraée-iihpor  lif^s  «oa- 
tía  nsí  aisgolf o.  las  sguaa  áe  -lO  no»;  aaí  omdo  por  S  tkMaasée  M 
óátosdebMte  eavláélt  iQríMco  tina  *  gtan  parte  de  las  suyas  al 
CKoane.  lia» marease» el-. ^Ifo,  báck éataa  costas,  se  eUrrafiíaadM) 
yjBubenüafitaáO  ó  übphés.  £1  %(AkyJáme29  leguas:  de  E.  i  O.,  'U 
4q  Nv  á(S.  eo  su  ma^or  ancboKay  y  8d,de  csronaCereacia.  Se*  cbaatt- 
nica  con  el  delta  del  Otáaóco  par  idscaiosPedeiniáles^.Majeiaaia'y 
Yagre ,  y  con  el  interior  de  las  provincias  de  Guayana  y  Cumaná 
por  ios  caños  S.  Juan ,  los  rioaTloapai ,  Mapaei ,  Goaoipa  y  Goa- 
rapiclie. 

£1<^1Í6  da»  €arítt80)pfÍBQipia(ea:la8  puÉnta^de  Ornaaná  y  de-Aré- 
aasdé  lapiniustaki  deAcáya^  entra -lasi  caulas  hai  ttoa  dislMiera^e 
4  miái9B.  íPttceceiiae  ddbe  au  exisleaciá  i>  un  rompiiDienlo  dé  tierras 
acoaii>adado<de  n&aairro{icieii  del*  Ooéano,  catáitrcfe  qite  n(»esfnQi 
aiptigua;  pues  su  meÉioiaaise  oaaaervabaientre  loa  indios' bastñ' Enes 
*del  siglo  X¡V,  y  .16  dsenta'^oe  ea  larépóea  del  teroer  f  iaja  ée  Gás- 
tdbabColali ,  :ia$iddlí9aoffli  kabiaban-de  etla  eoeio.de  aa  aeoaled- 
aaanterjmtti'iacieiita.  ti^te  golfo  cpie  iien«  aaanaaüalss  cdi^ntt^y 
submarinos,  se  interna  al  E.  ^  ^  -1/2  leguas  y  en  su  mayor  aaupIMad 
Heue  tr0s.  datáamm  siiis  fliareas»  i  las  iafuaas  4e  €ai(íaai>  y  Ctam- 
fMMta;  te  ntéamá^nmm  eü  de  24  Wguas-:y  fte^paade^oiiiiar  ^seiüb^n 
glande  y  abfifadaí puerto,. padiéndaBei dar  üaado  eii>ettalqttiir  paste 
da  éAiy  pB9  llegAjsutpfOfíaááidad  Biayohllasla  87  inásás.  itas^esatis 
ssu:  nioi  iüu{das  :y.  puede  aitraaarta  á  H  /2  tkiléa ,  aréaiis^ai>«st)réi20 
Qttevtíikly  e»*<ldade;:estraalM«dosa»bBtfaíiaiitta»,  sbifonéo  esipaeo 
Y  soto  aitnne.paqairpBqiu«fiafseailKarcacisi|es::La  cusía  merMioaal' Ja 
forman  unos  cerros  cuMeclres  de.hal»laei¿aás<y  bacieaidas,  esn mdl- 
litud.jcl&ce«Ble»iqAe  daa'«i  paiiai&Ma>wta  pMóMscé:,  tfiíáñtras 
«1  opueiNai,  rtfaa.<^séavpe6QscaBa  y  ealiMl^ii» 
(broMidas^  por  las^agaas  éñ  nisaMJgollb.  La  (OaSf  es  <el'  pumeMfsl- 
Mera,  easi:redoiido:popd  péqueík> ;  ia  otra  la  lagaan^Cl.icaf  cplcí  pn^ 
jreee  una  koya.nim  neduci^*;  tíísi»  despms  lagiaia  Crárider-ó  )l^l 
OWspOique'mereaeuQa  psrücaiar  jMsawiion  :  sé  fifUM  as  e^iMf^ 
dÉMfia;  sa  oaslaiMaDpaÉtey.p«uái43MileAiun4aspc€to  y^       é 


imponente  y  la  embdtaMn  algiMias  feqw^mixia¿  Tiene  de  looé^ 
de  9  á  20  brazas  tan  ümpio  y  acantilado,  que  paraaavsepr  en  él  ao 
hai  que  dar  resguardó  mu  que  á  lo  visible.  Tkoevaa  legna  de  £. 
O.  y  mas  de  milla  de  N.  á  S.  La  última  boca  es  la  de  la  laguna  de 
Gnacarapo,  de  usa  lepia ;  pero  solo  sir«e  pan  la-péica» 

£1  golfo  de  Salitafé  se  Interna  bada  el  £<  €imio.2.1egfia8 :  soscos- 
tas  son  muí  limpias  y  su  Sondo*  de  20  á  50  brazas.  La  baroera  del 
N.  es  escarpada  y  peñascosa  y  ai  paso  qae  la^del  S.  e&  llana  y  baja 
cubierta  de  manglares  por  los  cuales  desembocan  5  ríos  loecsunles 
forman  otros  tantos  valles  que  so  eneoeatEsanen  medie  dedas  ser- 
ranías cubiertas  de  una  espesa  vegetación.  £1  ancho  del  gdfo  esde 
mas  de  una  milla  y  su  circanferencia  de  6  leguas. 

* 

ISLAS. 

La  mas  glande  de  todas  es  la  qoese  -eiiotteatra  ea  el  goUe  de 
Paria  ea  la  boca  del  Guarapiche  :  tiene  &  leguas  de  largo  y  5.deaa- 
cbo.  Al  S,  de  ella  está  la  del  Yagre  separada  por  an  cañad  .que  tiene 
mas  de  legua  y  al  N.  £.  las  dos.denomiaidas  Areaay  Aniica ;  la 
primera  de  2.  leguas  de  largo  y  laaegunda  de  una  mitad  mas  pe- 
.quena«  Todas  eUa&  son  bajas  y  cubiertas'de  arb^eda  en  pasto  y  efl 
.parte  de  arena.  Un, bajo-  fobdo  tienen  en  el  lado  oriental  j.  perenal 
opuesto  hai  canales  pox..doade  pueden  pasar  peqaenas  embasea- 
cienes. 

La  isla  de  Yeoados  ique  está  cerca  de  la  boea  deLcio  Chipa,  en 
el  mi&mo  gotfo^  tíeae  1  ^  /2  leguas  de  largo;  e&  tamicen  miii  Jh^  ; 
pero  entre  ella  y  la  eosta  hai  an  canal  boadoj  nüairas^que  pea  la 
parte  orienlal  existe  aa  bajo  que  se  estiende  muchas  l^uasalnera. 
Al  S.  de  ella  y  cerca  cí^  la  costa  están  las  dos  islas  de  Guanipa  ^ue 
se  hallan  en  la  boca  de  este  rio ,  y  entre  ellas  y  la  costa  hai  paso 
para  lasiemhareacieoes  quede  la  bocada  Guanipa  suelen  ir  á  la 
boca  del  Yagre  en  el  delta  del  Orínoco. 

£1  islote  de  Patos  que  est¿  ea  la  dineockm  de  la  boea  grande  4e 
Dragos  y  varios  islotes  cercanos  á  la  costaiy  ai  promontori0.de  H- 
:  ria^  son  altos  y  escarpados  y  taadbien  deaerlas,  como  todas  ka  islas 
.«delgolfo/ Ademas  délos  islotes  enumerados  en  la  desoripeton  déla 
coala,  hai  unas  islas  grandes  entre  el  puerto  hermoso  de  Mociama 
y  -el  golfo  de  Saolafé ,  llauMdas  las  Caracas :  están  en  la  ensenada 
del  TigrillQ*  La  prinMia  ó  del  £.  sellan»;  de  Yeaados ;  ta  seguada  ó 


4kl  medioie  UaiBftCttrmiMtE.  y  !«  tirOihi^,  (Sanca  del  O.  Shs 
costas  aoB  nMtbMnipíaB'yiBolo  la  punta  N.  4e>lA  de  Venados,  que  ie 
llaoNidet  Qamfanatío,  despide- á  laa^sma  paite  nna  Piedra  qfne 
sale  «SBid  á  na  eaüe  de  ella.  Todds  los  pasos  6  ftrem  que  forman 
dícbas  islasientrení  f  «on  la  costa  €mirsotfliMMas para  cnal^^iera 
clase  de  buques ;  yannqne  aignnos  sean  algo  estrecÉK»,  hai  en  ledis 
ellos  senda  proporcionada  á 'dejar  caer  nna  anela*  én  caso  de  neee- 
sidad.  De  lo  única  ^ne  bal  qne*  resgnaidMse  es  de  un  bajo  de 
piedra  llaasado  é»  Canicas  qne  se  balia  algo  al  N.  0. 4e  la  Caraca  del 
E.  y  á-disiaoeia  de  ana  mWkn  lai^. 

MONTARAS. 

•  » 

£1  cerco  del  Tnrimiqnire  se.presenla  oobierto  se  socnlentos  pas- 
tos hasta  la  cima  redonda,  elevada  485(^  varas.  Allí  sobresalen  dos 
picos  revestidos  de  una  espesa  vegetación,  eaya  all«ra  sofc^  el  ni- 
▼d  del  ma^  es  de  2.454  taras*  Esta  grafti  mesa  «stá  en  el  eieniro  de 
la  sertank  dé  Omaná  y  BasoeioBa,  llamada  del  Bergantín  ^  y  se  debe 
coBaidanr  como'nna  l^oiongaeíon  de  la  cordiHera  del  interior  de 
Caracas.  La  granee  abraqncdeja  esta  al  Sj  de^nareelonQ,  de  2  ái5 
leguas ,  cuyo sui^ se  lerátita  60  varas  sobre d  ffivelde las^agoas 
del  mar  de  las  Antillas,  ¡Muía  creer  que  k  mesa  del  Bergantín  'ño 
baria  parte  del  sistena  dotla  eeidíHen  de  Gai'áeas-qne^pafecefeiMi- 
clúir  en  el  cerro  de  Paranlata.  Pero  si  se  echa  una  ojeada  sobre  ks 
costas'del  cabo  Codera  y  sobfv  te  de  la  panfo^nla  de  Arayay  Parla 
y  las  de  laésl»  de  l^rinidad ,  Tiene^l  momento 'á  la-  fmaginacion  la 
idea  de  si  en-  fieaapos  semotea  femaban  aqneltas  costas  una  soSa 
eadeiía^  qne  miagrañoalástniCa  ha  hecho  snmergir,  las  islas  Borra- 
cha, Cbimanas,  Picoas^  Caracas,  y  laade  lA bocas d.eEN*ágos parecen 
restosdaaqnel  nanfiragio.  Si  pudo  haber  tan  gfande  interrupclooren 
la  cadena  pnMpal,.no«8^  aátntrarse  laéopeesfcsnó  inlerropeíon 
de  pocas  legoaa  en  la  cadena  dd  interior,  il^bia  en  maches  pnntbs 
cenaqnolla;  y  así-,  la  eonstdaramós  como  nna  prolongadon  de  la 
delJaterior^dn  Caracas^ 

Al  Si  de  los  píeaobQS'del'l^iriaiKpiire  salen  dos  hllefas  de  cernes 
paralelos  qne  forman  el  valle  estrecho  y  largo  por  donde  corre  al 
poniento  el  Nev^rú  La*  meridional  se  pierde  cerca  de  Aragnita,y  la 
setoikianalá  las  inmedwcéone^dePeauelo  en- la  proviada  dtíMr- 
cekMuu  Ur  primara  dirige  varkMi4»nijiÍ09finl:N.  Ibrttando  d  valle 


^misi  dkiipo  MftiratiüicsKáQfiwikl  )6.v(dgind0RJM«^fiatoanmálliflfe 

nasa  )efr«];«iQftiá  9mAr9<0\  .^;^iM/IMiÉiqÉÍRt:ijée':]»ián»ii»*- 

(fw!  fffoUilgjÚMlMetfor  jéipim  4e  4<*igiHt»ÉáBÍa  £i  iNh^ct^iuniíto 
ait^iTO  de'])asLagiiiMs<,.clenwelo"l;<«fOO  ^^vm^hifaiin  Amáñeos 
ramales d^ u«a(osJa«i«tKi«ift ; ««nofootmi  al  feokaie ^ifanoaiid^la 
barsata:  lotf  nflioaaTítlal  ^^aMondeCasíai»  y  ífMi4l¿all«0e<Wí)(kWMiá: ; 
el  otro  ramo  se  dirige  al  oacíenie'V  fáiáríOHMi?  elnéif MeoMÉtce  del 
P«rgatoriO;  el  célebre  del  Guácharo  y  la  elevada  y  piotoresea  mesa 
del  Guardia  S.  Agustín ,  cu^  «<mfigciJ*acíon  parece  indicar  que  en 
oíros  tiempos  era  un  lago  alpino.  Esta  serranía  encierra  con  otra 
qiM  ^i«MidafeBk)«Ía,:«y»{qiierfl»4B|a'HMiill^  i]dL[r«nn»|Éire, 
ki5 ^H)a»*ile«^  fl^ramaoo ,  Gntaatogwtoa.iy'tOalípe^'SÉteioifeáíllMis 
IparaMais  a6rpMrrieiy«obie'M<^!Mli»^S.  iiiatt,(«iireaKJbAá:lMv^ 
Canp»^  4«»  «sMhoe  nt irMiaiiiM  háeiBi/UHttL,  Amci^  6nDBi«^  irra- 
(pm  y  UuBcéras  vf^ft  al  «mmicafytoitoiiflBtila  la  miniad 
defnlii^TOrdparí(«tV(M»)mftHíaoad«Bníi«Érid  «ÉaeiiMfitt6riáÍMaatde 
lá  islaíy  y  toito-ftaiM  d»  élla^aa  élmmíi^ vu'iseiAm;  de cfAedaas  ¡que 
'e3i»(e>iiletej(>>M  agsay  éeídbfla  cusía  firmé 'bacila  Mi «  La  ovni- 
Meaai  «aa^ütMlriMMrl  fteaio  ai^fiieUadle.GuÉitia;  «Biel.iteffooi<ieS. 
Boaiferái  ¿útttnaiWMiiiaii  á»laaaa»a»JaÍ)niaiiH!á  Si,  k^ásúm»,  ém- 
píée  Oft  laflMil,  nqu6^daacaii»M«éa*ttnr.s«iHKfft9Í0  imé  ímineilas 
e()rf09fl«  lo^.pi^MÉiiilarávrPBrH^  éejaodo^almatíHÉteualvflriledito' Ca- 
riaco y  la  lagUiía'tQflniifMiMr;  «i^'praienl&UáKdti  fliíaMrspe^^  lai  Im- 
gona  Btttia^iMl.  (fttmU  á^Cwaatft  a»*difaarfiOiiAaiife^pkey.da'4il6 
ywB$de'^Um9¡imimm  aat*^(X)fidilAtftt>caA»i»ipeímHe4«'l»  pt^ 
M^anlia  de  ^af a,,  ¡laMciél  ^Hít&  sacáBaiduef  ée  I&  Aardütaca  de  la 
eoM^ée  €i9ititmyti^  ^ifnídé  enm)  dabO'iOtídeB»  y  nnaNejé'apa- 
itf«dff<«R  iai  ¡teB<liiiiaiéerAiiaya^gigHÍerid»tfi>^  ÜeiMnf  y^iahiiaBio 
á  qiijBdijr  «mlfiWiBtpiUti  an'iatfééafcsidpftgágéa,  »fMpat'"""r  >»r 
liUim»  veaaolto^iski.ida^jKmiM.; iáiiiaofdílMa.;e0ci«^ yaneiS. 
y  por  el  N.  multitud  de  valles;  pero  los(«Éft;giPMáa»iaeiii.lQB-ide 
Y4igiia|apa«0'  y  Sal^a  iIfftMyf4ir:«Bii)Mie^>Gaaéppari  y Ai«-€aribe 
l^ofoti^a.  - 

£1  cerfa/da^Meapirei|«wqce?tf»iii|Éfi.toaa><eiMri/qitteM 
aflrtíUorM/kiiiklílilwkfc^fdítfíainittatMM^  Iftemia) 

de  foimaeíM  pfiimilif%  f  q^unee(iisri)B9ii  JÉdn^Míitfda  d  omi- 


batían  sns  bases,  por()ji6  siaeste.^ibftiii^o'aíl  biMap  ^íOMi^im 
golfo»  de  Paria  y  de  Cariaco.  De  este  dique  sale  un  ramal  al  S.  que 
se  pierde  cerca  de  Guariqucii;,  encentando  por  una  parte  el  valle  de 
GuaearapO)  y  dando  origen  al  opuesto  al  de  Cok»ar  y  otros. 


«1M< 


/'i; 


Pe  la  fOfdiUeía  Itoada  del  .Beig8P(i»^ll  4»iCiiim|in^«alflib4:42 
tm  dei  .4.''  órden^V  deii^  <eiiai0B  40)  ¥iiard«reoMlk^e(r¿ ila:  mw , 
siendo  el  principal  d^4^Up^lrMai)Pltt«|es6'GQ(io 

Parta  van  los  aguas  (^  |ianti«0<MI4dp  ¡lí^xia».;  ^A  HW^MtooeiMle 
de.ellostes^el  Si.  Im^y m  i^^^'mif^M*m^iéí(&(m  MMm^j 
permiite.s»Ur  .por  jél.b«qu«»(akffíiíar^f  >qw^ 

.pficío.de.i4!liífii^,y^,py|^;SÍ'S99m^fm     :ii.:..  - 

saje»  2A  nos  tAqrt)í«n  4a  4 .  ""ióftlsi^,  ^l4»fikWffMl4^^^^itoac€M^ 

ci  Uracpa  y  e).Ti|t)$i»«f^qii^  Uw«i^el  j^ 

ciony  5.0la0gQiidC(.  .    í    ,     i : 

Últimamente.^  del.  d«lla  kéi^irQmo^m^mffm  ff^imtfmíá^im  5 
oanosaDavegj^kis,  ^u^y^^s  i%i^»tpi«iHPni  ds^tfié  J^f»;  r^fte»^  «Mos 
•esel  ^oaSo  .Goacgi^po «  giMi^rfiiece  -|}7f  Hi9ia»)4«  M^ñiogpieMif  .»n 
agnas.(^«eidaa»  Los  o|nc)»{pBafMOMi|im'l#ito  el»a8o  ««f^gacMii  pora 
peqoenasi  embascattion^s,  yy  ^l^  s(|q>>  AliMWay-  f^^)&i'íjMfaito, 

Guaran  y  Guama]j,.§»ei  d^{i4^  "i  7  y  ^.^« 
£t  total,  pites,fde  lo»iri0Sfd&>4'^4kd«aHeaf(l^':l7é);im(C0fifí4erar 

.mnllitiid  de  dacliaeliss.da.fqiiiiQha  ag»a.>ea%]^'9l«§ií^  ^taif^i^ 

viocia  tiene  adex;aaa  dos  i4o#iqiie  son^cpiípideya^^Ms^^coflWhii^'y  4r- 

den  de  la  repúhiica.;fii  Guripa,  da;  7i&  l^f^as^t  o\m¡»'^f.2A  ¡de 

.nainega^ian.  Nacerán  larIneaa^d(S.aa  mm^a  ^  itsriipiía  «n^^el  gMfo 

de  Fa0ia  ;  «I  Q(ro>es^«liti«|iiif^«€Hi  7^1egi;ia»'da.ai|^^y44ffle  ilfUV- 

lacio»,  al  cHa¡l.tiea^  10 «igen en.laJ^ma^pno^miaía  ly.^  m^Sutato 

de  Ja  expresada  rsiiesa.,^      .  ...     <        >. 

Entre  ios  rios'  da  S.*"  orden  hai  ftambian  4oa,  %«a  son  el  'Oiiairsai- 

piche  y  el  Moiicbal  Lacgpi.  fil^primeprp  aa^a^as  19A  «BriTO-^e'  la  ía* 

^na,  Ikné  Jdu  cvrso.de  54  legiwa  y  23  danatagaaion^  Eksagimio 

aa  forma  eo. la  mesa.de  su  nombr^rcorcajlif  jfig<iaa¥iPiap<ia«te^^ 


92  para  buques  minores ;  siendo  ademas  d  límite  poi^  el  estremo 
Meridional  de  las  sabanas  de  este  territorio. 

LAGUNAS. 

.  La  lagima  de  üfMnavista  6  de  Gampona  se  enenentra  circundada 
decerrosioBiediirtosásasorillasporelN.  yS.jYporel  E.á4  4/2 
le§^a  de  distancia ,  al  paso  que  al  O.  está  el  abra  del  golfo  de  Ca- 
rneo. Las  'agMs  ifom  deseiefiiden  de  los  cetros  cuando  llueve  y  las 
que  llevan  los  ríos  Casanai;  Gedello  j  Aguacafiente ,  son  las  únicas 
faoooBservawlali^iitia,  la  cnal  parece  mas  bien  una  bella  prade- 
fia,  parqM  aesí'toda  ella  estieobferta  de  alta  enea  Y  espeso  junco. 

^m  oríMm  toft  aMoasas  en  leda  eM,  "f  pw  el  eanñtio  que  va  de 
Cariaco  á  Gasanai,  por  casi  4  4f2  legua  bal  un  terreno  tan  bueco 
qoe  al  ^paisar  sobre  él  o^  d  camfntiate  resonar  sus  pasos  como  si 
pisase  sobre  una  gran  bdvcfda.  Eli  los  bordes  de  est&  laguna  se  en- 
^cncnMa  laMibiBi»  IttnAídoS'de  baber  arrojado  áHi  fa  tierra  materias 
bitun^inosas.  La  laguna  tiene  4  4/2  légná  de  E.  á  O.  y  2"  de  N.  á  S. 
€on  naa  circiaiieraMn&  de  <(  4  ff .  Se  comunica  por  un  cañb  llamado 

-  lía  Gampoea  es»  ki'iagiina  de  Cariaco,  circundada  dé  bosques.  Sus 
bordes  llenos  de  mangles  se  ven,  á  causa  del  ff<ij^ y  reflujo  ^  alter- 
satiiíaniMite  cubiertos  por  el  agua  ó' fuera  de  ella/  espüestos  á  los 
at^ores  del  sek  Pf&r  «slO;  7  por  4a  bbuiydancía  de  materias  vegetales 
#n  pvlraficeiOi  produce  uáasí  eíbafaciones  perniciosas  á  la  salud. 
La  kigona  de'Cariaod  comdttka  {k>r  ínedio  del  nüsmo  rio  Campona 
al  golfb  de  Caríaeo :  tiene  una  legua  de  N.  á  S.  y  oirá  de  Ei  á  0.  con 
%  de  circunfereueta,  en  parte  cubierta  de  junco. 
Deia  laguna  de  (Jampona  bacía  elS.  1?.  2  4/2  leguas;  está  la  la- 

*''fUna  de  Putucoad.  Sos  bordeas  dst&ñ  al  pié  ié  los  empinados^  cerros 
de  Savácal  por  la  parte  del  N.;  alOlla  montaña  que  se  tine  al  cerro 
de  Meapire  ;  al  E.  otra  hacia  la  abertura  dífel  valle  de  Guacarapo  y 
Meia  ei'IS.  una  «ílva  anegada  yatascosa,  ^r -dónde  entran  á  ía  la- 
guna varios  rfos  que  ifác^'en  los  CerMs  de  S.  Konifado  :  tiene  de 
largo  2  4/5  leguasy'una  de  ancho,  yS^dc  circóiifei^éfacia.  Aquí  se 
forma  el  caño  de  S.  Juan,  y  aunque  distante ^2S  leguas  del  golfo 
Triste,  se  siente ló  yybstante  la  marea  hasta  fa  laguna;  de  modo 
-qtie  el  cerro  de  Máil^ü^  es'd  fitíícb  obstáculo  ^tíe  Bai  para  que  las 
aguas  del  golfo  de  faria  no  se  comuniquen  con  las  del  goTto  de  Ca- 
riaco. En  la  sierra  que  le  sirve  de  dique  bai  una  multitud  de  fuen- 


tes  termales  bidrosQlCúreas  y  un  terreno  hneoo  cuya  eoneavidad 
parece  estar  de  E.  á  O.,  qae  en  Jos  gjrandes  terremotos  de  4766  ha 
Yomitad^asfaltos  enyueitos  en  petróleo  visooso»  Se  encuentran  tam* 
bi^  minas  de  azufre. 

La  laguna  de  Gaarapiebe  se  forma  p<Hr  les  dernuaies  deisglw  rio : 
tiene  iftuiidfuH  mA.<if«n  9^^^  ^  tirano  y.ni  aiafait  calidal'se 
Ya  por  el^^cAftQ.ColomdO;  que  4ebi<^ -ser  >eo:olro  Hcüipi  el  etue»  ¿éí 
Gu^arapiebe*  Esta  la^uüA  tieiÉe^  leg«asd&-NUá  S^  y^j»  tenta^de 
E.  á  O^f  i| de circi}¥xferei»(sia..£a éj»  tai nmahatepltatas 4$mm 
y  jjineoj)  y  ^rbpW.  que  pareen  iibiiaiiegato*  , ' ; 

La  laguf^  C^pm^ej^  jperca  .4e  Mantria,  jH  mlmlumé^j  etsl-na^: 
dpnda ;  tiene  .w^  Uigiia  de ;  Mma^^  f  bai  m  «Ua  «ielio»pti»f* 
las  orillas,  oireces>:uHilt^<iinbf a.  delieioM',  y iSe^pttfUM  f«e>eo««» 
nica  cQ¡í^  el  xio  Guawí^  por  ^m  p«9iietto  eailOf<pa  «eHa  iieae;  p^nr 
nadie  baj^ido  trmi^te.í.^ama  di)  ios  e8t«rbM>de  palo»€fádo8 
qpe  ^aei^euentr^B^  y  fm  1^  i^Bsp  dd  bosque. 

La  laguna  M«^uai;e  a»  vfm  pittfueííd  p^ms^  uMQoioMte;  MeanF 
solo  media  .l^ua  de  Jafgo..y  mvedia  miUa.de  Bimbe« 

^^^  .un^^tioplar*  mmeíoB  iadts  OuMWMdoi»  que  permiie 
una  escelente  naviegnms  á  lat  balaudM  y  yctquaiat  golalas  qfm 
4es4e  Trinidad. yieikeii  |pr  el  qapSiaManamO'á.tiaiearéOBios^  Manos 
de  Maturin.  Es f^i^rtemente  hecm^so  Ver  enfi^sdiode^uaUídMafli 
naYegar  los  buqipes  soibpe  ^m  ^g«ft  iapaeibto  w^mémhtéB^üMio^ 
sos  árboles.  Bai  muchos  pezes^  y  el  rio  Meríebal.Lai|^  juministea 
agpa  á  esjta  iagiinifty.0iiya  ftir<suaferciocJúi  ea*de^^/i  legiiasiéeanitio 
y  4  i/2  á  5  de  largo.  í 

Las  lagunas  de  Yocore ,  Aguaverde  y  Guaritico  ti^ea  4  4/^  k^~ 
gua  cada  una,  y  en  ellas  entran  embarcaciones  por  la  comunica* 
(ion  que  tienen  con  los  caSqs  del  imsmo  Q.oq|ke  que  salen  y  eniiaii- 
en  Manamoy  brazo  del  Orinoco,  uno  de  los  canales  principales  del 
dí}lta¿  .♦..      ♦..  .      '  ...    : 

L^ laguna»  Sembosa,  CWmohppie  y S^  Antomosen «avefl^UMr 
tainbt|3n^  pamt  emtatrcaeioÉee mañoca,  tan  liiago.xa»o  ^1  Ori^ 
noeo  se  iroffuesaréfiaimda^  caiúa  OamiCfiapo,  eonelntaal  se^xi^ 
munica. ;  .'':.  '  v-J--;       -  :i'>i      ^    ■■  »     ' 

Multiiud  de  otrasi  pequeSas  lagOMA  edaleBf.  ;co«servia  ^la 
mayoRpaTtede8«&la8mia;'>pao)S«i  tan  pe9nííiie.i|a»fB»flMDeeei| 


—  «« 


•    » 


£1  temperamento  en  esta  proTinda  varía  rfagMÉrtsenfe ;  ¡mes 
en  Ja  piBÉAolft  áváfiy^ieaieilliiit»^  auto  f^iie^xi^  mléi^tta  ^r^ieteii 
ladefi«iriai«s  oalÍBnle,lita*d<l<r?Wip»tePi»  Siieederfe 

miin»afmi  ftw  ¿h— tus-;  rtpwniaóii'Cfctláiii  f  •mms,  oft^aMr^enpünCts 
á  baAtíitaraa.  fio  loa  italltodétevarreiii  ae  obecrvá  el  nüsiaüo  fen^ 
nafta  ^ioftW  aiintaMiy.  ft-oaáost,  otro»  iftalsatioa  y  dlidbs'.  JBsIo 
depende ,  en  parte,  dafifa» émnaúom^é^ llfti  agittis^^^Miiociy,  an 
pafie^  JaÉiianÉDÜ»  «a  loalrtoa  t  ifts  «apMB  MM  ^^ft^guérfain 
ajiagi^M»  T  ^MMnmMk  1»  aoj^oílifen  4^«a  ae'  eÉHkMlrati  «lartoa 
pwaini  fa>  tiwiwrAjlMrtifveiiio^lánwaoíii  'p<^<iw<^a:  Faro  en  -gjiMentf 
kríptOMMÍÉ  dé^iGMVMáiaB'flaM'f  ma  piMrM^  iMftrmkl^  «é  <]^den 
aMiBanm.'Ua)aiÉHHid»l^to'éa^8Mftfé/eíftteBl^  áMBUfefiCnras 
por  la  acumulación ^«VDoAiaeOss  yerl»Éa  iMlrÍM#,  V  flMHíNM^  que 
8Bf  eftgaA»<  y>  iai^ar  f\wt'4^  a^ia  salga  ün  ^)l^  'fiífidiy  á  que  se 
unen  las  exbalacíMeaideéaaipflaítinioaydateselta^kmiiéaéas. 
'  faniart^adar'iaaiawmi  y  lis  del  "^sé^WtíSíimé'f^  las  Husmas 
aww  n  lialaaiisaÉali wi^aaMafr'en  éiafcog  tniiiéü;      ' 

La«  wmmáMlMm \é^ Uí layma^ IHltoctttf  y'de  ra4'<d^'€áriaco y 
tflHplia^^  «alia  aspMaia»  á  «rtaWWaaY  tftgitWéti  las  orHfáa' del 


mar,  fresco  ea  la  serranía  y  valles  altos  y  nHi  anfacáaie  oá  tas 


t  ... 

«  I 

Es  mu  i  variada  en  esta  provincia.  En  las  inmediaciones  drCo- 
naóá  y.  ittil«>pMÉíitÉla<de  Umii^inÉfíí^im.ímff^mmiÚf^^^ 
map} f  y  dfwyihattQ  aitiaiabKBv  :ila9iñwia  p^tj^v  at^^pfts^'  «p»»  en 
ekjoaatdniéei^liffQaQawHi.^  Haiiiarafó^^  lliwvé  ea^ñnyv'^lwio,  cesM 
las  aguas  en  julio  y  agosto  y  vuelven  á  seguir  hasta  finesHléM^ 
aieolbfa;  4D:4of  caHÉain  éiu6aaiipafló;,'  Qi^rir>ytilio'  Gáfibef ,  «m- 
|»agaw>tfltt)mgffy  jfc  wp  ihirtaf  ga»ulK»qIjfflBpi?«g>eff'>oa^iigr<w  P^ 
todo  noviembre  y  diciembre,  y  en  la  parte  mas  próxinM^aiMpil^* 
Paria ,  duran  por  todo  enero. 


£v>rtxiirtdiiidii|lm9é»t6iiilei  pasta  mohlMosaiiíeaeif'Bortes  qM 

pieBaB  d  MvierDO  i^inesude  mai^  y  flan»  ¡bértaí  octubre :  sígoeii' 
después  los  nortes  que  duran  hasta  enero. 

BSi  í.mñfú^  >  ptte»)  úeiimkignoM^  «ladnosi^ae eo«ilooeiiid«i  €a- 
rápano  árCJuím  ó4)iealiáéia:Siy  B«iiía«Í0Ó'P<ii<'lá-%ÉOB4|ifi«kd«  Sania 
María  áe^úpe  y  AniijKÍpayM>  poflpénMB&kis-é  méémééoiii  Los  de  l09^ 
llanos  de  Aragua  y  Maturin  son  transitables:  solamente  algunos 
rios  ó  caños  suelen  impedir  el  paso  por  algunas  horas.  Las  mesas 
presentan  siempre  o^i^l^qte^cai^ii:^  S^  lo^U^^s  bajos  desde  Gua- 
ñipa  hasta  el  Orinoco  ,  entre  el  delta  y  las  mesas  ,  forman  grandes 
espacios  bajos.  Eotóncei  se^bfti;^  «ij^po^t^mente  <i|i transitables  y 
este  es  el  riguroso  invierno  que  deja  iocomunicado  el  tránsito  entre 
laB^aJMiiia94a^MaÉiríB'y4a$>áidiTalieaea«  '    -'i   ; 

.  WVtóltW    TERIBÍi'ttmilehi 


•i»  • 


Se  divide  toda  la  provincia  en  8  cantones  quer^tté^aiJosaioliiteQV 
deíaa^odádes  yiiriilas*dj&!sa9íoalMHér«a;cU&ioiiiitfai80D rjQnaouMiáy 

Cffiíniaiiaflfiflb^  Qaciacoif.Gari^painiv  Ri»f'Ckriijf&v^£^a>>^^^^9^^ 
MakurtQ  y  losCtaos>^  ^ctíaBeiiwai^  ibnraftnñst.TüsMÉ  4é  pania^i 

quiaa  y  2S^  graadfts  ^eeiiiáHiáiis^/.eis  t^/OiifiéeáÍBd<«tiltáni>«acao  y  ca^ 

fá,  Ganavdiiloeí^..»t9tidiidj^  «aüáiv  pats^'  yflcav>piálBiiBa[¿  itea^^.ia^; 

aaj9aaB>iMUfli06,.aféo6i^aiaa^.|cdb<ili&sit^#n^<^^ 
L$  pobiaclon  xki  esl*  f[»iKtiabia>  ss  paladé  iJiaidiri  delaaaitoí  sin 

g«fletti£  :  4  3/l>0É:  saidedicaíi  á>  la  aifgnoriMAia  dfij[4  M>áíük'<)na;  t^ 

.  •€iiaafi¿ándeúB«  eámercia(ÉaDáteaael«ia^  kstííuái'Bíit¡.Á9^^tmstv 
Maaprtíflivy  'las  .ci^lofii^,  ¡k/amiéL  áí^éstaii.pflanAflk  isal«.  poimidi^v 
omík  ;  algidaii»,  «aaü»  deókia^icadafiL^itadiaaabv  alpotjaülffjeafé  ( 
recíANflHdO'iiieDeanK^fsatas  })ebtí»sídmbodag^  )1  hammioata^^toi 
pncvtostde  Carépaiio^iRii»jí;adte  vy(4]ínr  €iiH^ 


• 


f 


—  8M  — 

bace  especialmente  con  la  flercana  Triiidadé  tMvrin-liaM^oaiiicreio 
también  con  esta  isla  y  las  Antillas ,  en? íando  á  eUas  ganado ,  ca- 
ballos y  malas  que  se  embarcan  en  el  cafio  S.  Jnan  9«n  caiyo  Celo^ 
rado,  que  es  el  Gnarapicbe  ó  S.  Bafael  de  Banráncvis  ;  y.  con  áa- 
goslura  y  la  Trinidad  en  donde  ae  embansan  muchas  molas  y 
ganados. 

En  fin  f  esta  praviaoia  es  la  que  tiene  mas  costas^  pneptos  y  ppa- 
los  dtTetsos  para  el  tráfico ;  así  es,  qne  lá  facilidad-de  los  embar* 
ques  y  la  inmediadon  de  la  isla  de  Trinidad  eseitan  al  oontiiabaodo . 


CIUDADES    T    VILLAS. 
CARTOir  DB  OHMAlfÁ. 

La  ciudad  de  Gumaná  es  la  mas  antigna  de  todas  las  de  la  Costa- 
Firme,  y  es  capital  de  la  provincia  de  su  nombre,  llamada  antigua- 
mente  Nueva  Andalucía.  Las  costas  de  esta  provincia  fueron  las 
que  primero  descubrió  el  inmortal  Cristóbal  Colon,  en  su  tercer 
Tiikje  el  año  de  Á  498. 

Gonsalo  Ocampo  en  4520  fundó  á  media  legua  de  la  emboca- 
dura del  rio  Cumaná  { hoi  Manzanales )  el  pueblo  llamado  de  To- 
ledo, y  en  4521  de  orden  del  aloHrante  p.  Diego  Colon,  salió  de 
Espaüa  Jácome  Castdlon,  llegó  al  ManinMes  y  levantó  la  fortaleza 
principtada  por  el  Padre  las  Casas,  dando  i  la  ciudad  el  nombre  de 
Nneya  Córdoba,  síloándola  en  d  paraje  en  que  ahoia  está..  Desde  1 521 
fué  considerada  como  capital  de  la  provincia  de  Nueva  Andalucía. 
En  15i^  se  arruinó  la  forta)eia  de  la  boca  del  rio ,  de  résnl^s  del 
gran  terremoto  que  siA^ió  á  las  1 0  de  la  mañano  del  1 J*  de  se^ 
tiembre ,  en  que  el  mar  se  elevó  20  pies  sobre  el.nivd  ordinario  , 
babiéndose  notado  que  las  aberturas  de  la  cordillera  brotaron  aguas 
negras  y  salobres  ,  impregnad^  de  vufre.  Cumaná  está  situada 
en  la  latitud  10»  27^  52^^  N. ,  y  en  la  longitud  2"»  54^  58^^  al  £.  del 
merilfeno  de  Caráeas  á  2^ .  vacas  aabre  el  nivel  del  mar»,  en  un 
terreno  «eco ,  á  las  orillas  del  Miaianáres,  al  píé-dte  una  cfpsia 
desnuda  enxlonde  ^stá  fabricado  el,  antiguo  castillo,  de  Sst  Antonia, 
á  70  varas  sabré  él  4pr«  0e  la  icindad.á  la^playa  bai  unamülade 
distancia ,  y  es  un  Uano  árido  y  aéoo^^ue  llaoian^el  Salado*  rto  ^ 
necesita  un  examen  mut  prpfnmdO'del  plano  iap^fcáifloa.  dé  Ifuidipt» 


dad  de  Ciiihaiiá ,  para  convencerse  que  en  otro  tiempo  las  aguas 
cubrieron  todo  el  terrend  impregnado  de  muriato  de  soda ,  por 
donde  corre  el  Manzanares ,  y  que  el  grupo  dé  co]inas  i  que  está 
arrimada  la  ciudad  tío  era  antiguamente  sino  una  isla  del  golfo  de 
Cariaco. 

El  Manzanares  divide  en  dos  partes  la  ciudad  :  una  playa  árida 
y  salitrosa  la  circunda  ,  y  solamente  las  orillas  del  rio  esiáu  cu- 
biertas de  vegetación  y  sembradas  de  charas ,  pequeños  lugares  de 
recreo. 

En  la  falda  que  forma  la  colina  del  fuerte  de  San  Antonio^  se  en- 
cuentran las  ruinas  del  antiguo  castillo  de  Santa  María,  u  Es^  como 
((  dice  Jiumboldt/uná  deliciosa  posición  para  los  que  quieren  go- 
«  zar  al  ponerse  el  sol  del  fresco  de  la  brisa  del  mar  y  del  aspecto 
«  del  golfo.  Las  altas  cimas  de  la  isla  de  la  Margarita  se  presentan 
«  sobre  la  costa  peñascosa  del  istmo  de  Araya;  hacia  él  O,  las  pe- 
a  quenas  islas  de  Caracas,  Picúa  y  Borracha,  recuerdan  la  catás- 
«  Irofe  que  despedezó  las  costas  de  Tierra-Firme.  Esíos  islotes 
«  parecen  obras  de  fortlGcacion,  y  p.ir  el  efecto  de  1^  refracción, 
«  mientras  que  él  sol  calienta  con  desigualdad  las  capas  inferiores 
«  del  aire,  el  Océano  y  el  suelo,  sus  puntas  aparecen  elevadas  co- 
«  mo  la  estremidad  de  los  grandes  promontorios  de  la  costa;  el 
«  liómbre  curioso  y  observador  se  complace  en  seguir  durante  el 
Gf  dia  estos  fenómenos  inconstantes;  ve  á  la  entrada  de  la  Doche 
«  sentarse  ó  volverse  á  colocar  sobre  sus  bases  estas  masas  pedre- 
«  gosas,  suspendidas  en  el  aire;  y  él  astro  cuya  presencia  viviCca 
«  la  naturale7?a  orgánica  parece',  por  la  inflexión  variable  de  sus 
«  rayos,  imprimir  el  míivimienlo  á  la  inmóvil  roca  y  hacer  ondéa- 
te das  las  llanuras  cubiertas  de  áridas  arenas.  ^ 

Las  orillas  del  rio  Manzanares  son  niui  agradables  y  asombradas 
por  árboles  agigantados;  sirven  á  los  liabitantes  de  Cumaná  de  re- 
creo y  de  lugar  para  refrescarse.  Allí  de  día  y  de  noche  los  niños  y 
los  jóvenes  pasan  una  parte  del  tiempo  en  ct  agua,  y  de  boché  fa- 
milias enteras  van  al  rió  a  bañarse. 

Ilumboldl;  dice  :  a  £1  puerto  de  Cumáná  es  una  rada  que  podria 
«  recibir  las  escuadras  de  la  Europa  eiifera.  T^odó  el  golfo  de  Caria- 
«  co,  de  íque  hemos  hablado,  ofrece  un  escelente  ancladero.  El 
«  gfande  Océano  no  es  mas  calmoso  ni  pacificó  en  ¡as  costas  del 
«  Pera,  que  él  mar  de  las  Antillas  desde  Poerló-CabellO;  y  pa'rtlcu- 
« larmente  desde  el  cabo  Codera  hasta  h  punta  de  Paria.  í.ós  hu- 

P.  OBOO.  9T 


i  racaofis  de  ím  khi  AalBIas  jamas  sehaceaaoilirejí  eatosjNtf^íes 

•  en  qae  se  navega  en  ehalvpas  sin  eaUerta.  » 

«  La  dudaé  colocada  al  pié  de  mía  árida  eoliaa  osCá  domina  Ja 
«  por  'uD«€asliho.  Niugona  torre,  ningiiD  campanario,  sífana.iiie- 
«  dia-naranja  que  pueda  hacer  llamar  la  atención  del  viajaron  pe^ 
«  ro  sí  machos  tamarindos,  cocoteros  y  palsieros  que  se  eloTaa  por 
«  encima  de  laa  casas,  cuyos  lechos  son  aaoteas.  Las  Haniiras  que' 
i  la  rodean,  sobre  todo  las  del  lado  del  mar,  ofrecen  un  trisie  a»- 
«  pecio,  lleno  de  polvo  y  árido,  mientras  que  una  votación  fresca 
«  y  vigorosa  hace  reeonocer  desde l^yos  las  tortuosidades  del  rioque  • 
«  sépala  la  ciudad  de  los  arrabales.  La  colina  del  inerte  de  S.  An- 
«  tonSo,  aislada,  desnuda  y  blanca,  despide  una  grao  masa  de  loa  y 
«  un  radiante  eolor  %  esta  colina  esta  compuesta  de  grietas  cuyas 
«  capas  codtienen  petrifícaoiooes  pelaginosas.  A  lo  l^os  y  hada  el 

•  S.  se  ||kH)looga  una  vasta  y  sombría  cadena  de  montabas  qae  son 
«  los  altos  Alpes  calcáreos  de  la  Nueva  Andalucía^  sobremontados 
«  de  escalones  y  otras  formacioties  mas  recientes.  Bosques  majcsiuo- 
«  sos  cubren  esta  cordillera  del  interior  y  se  ifnen  pof  un  valle 

•  poblado  de  árboles  á  los  terrcfnos  descubiertos  gredosos  y  salitre* 
«  sos  de  las  inmediaciones  de  Cumaná.  En  las  playas  marítimas  y  rn 

•  el  gol (b  se  encuentran  bandas  de  garzas  ráaíes  pescadoras  y  alca- 
«  trazes  de  una  forma  muí  pesada  que  surcan  como  el  cisne  levan- 
a  tando  sus  alas.  Se  ettcueniran  cerca  de  las.  casas  millares  de  bni- 
«  tres  ffaUinasos.  Ln  golfo  (|ue  comiene  manantiales  calientes  y 
a  submarinos  separa  las  rocas  secundarias  de  los^peñasoos  primitt- 
«  vos  esquitóse^  de  la  peníiMla  de  Araya.  ¡Una  y  otra  costa  están 
«  babadas  por  un  mar  pacífico  de  un  color  azulado  y  blandamente 
a  agitado  por  el  mismo  viento.  L^nciclo  pu<  o  y  seco  que3clo  ofrece 
9  al  ponerse  el  sol  Agunas  lijeras  nubes,  descansa  sobre  el  Océano, 
«  sobre  la  península  detprovista  de  árboles  y  en  las  llanuras  de 
«  Cumaná,  mientras  que  en  las  cumbres  de  las  montanas  d^  inte- 
«  rior  se  ven  formarse  tempestadas,  aeoniulanfe  y  resolverse  en 
«  copiosas  lluvias.  De  este  lÉodo  es  como  eta  estas  costas  y  al  pié  de 
«  los  Ánde%  cielo  y  tierra  ofrecen  grandes  oposicionas  de  serení- 
«  dad  y  nieblas,  de  aaqu^dad  y  chubascds,  de  desnudez  absoluta  y 
«  verdor  sin  cesar  renaciente.  Las  rogones  bajas  del  Nuevo  GonH- 
«  neme  difie/eo  tanh»  de  las  regiones  montuosns  del  itlterioi:,  co- 
i  me  las  llamiraB  del  bipo{;gípto  dii'ierende  Jos  llanos  ó  meiMas 
« elevlidas«  »  . 


liimmn  |iiMMraki.fmn  Mmfo  ée^ht^üñakoBi  üt  IÍ8nrai.leiDÍ»|ó 

Viitomblof ;  y-  ^éÁ  dendécitsibnkáe  4)T^liié  de  BiMl«9MraÍMi|ké, 
ea.3^iHla  taM.todaitnniidBflo¡4s4«  ^»!M»>Bir»4|  td»«fo»U)  A^  IM^ 
y 'd i9>áí. enafcode  ^MS^ibvba  tanliliiMs, 5  «i «Mino- ka»  mh» eFv 
42  de  abnl  de  Mi^^  <}ne  biio  «sln^<  «»  Iqs  <tdífl«KB;  ^eiD  vkk^ 
saaepte'deiiiiipinatperwfia,  A^oaacada  I(»»4iitidil08'aft»el9i<de  ios 
tef lindóles,  CJMOñnivoüin»  bueaosaditíoíoa^  'fH)da»lpk»oaMseslái» 
Gon9(iifiMdMi  muí  i^eraoitiite,  «y  aé»i)iijaft,  ¥ÍéMkMa^ll§iMtos  ni$ 
liabitoBtes  á  Morífieae  teibrilem  á  J^fsegurMad. 

Ea  esta  chidad  krí  >iift.€<ii«gb  y  varjas  esciMlsf  para  Ja  «dúo»- 
ciondeia  jit«9«iiid.  ^Qilieii8Ín».«fiBa.>J9teiía,4]Mrni9na)  y  habia 
do»  oonvaoloa^upaf  nuilasjtp  6Í.dMi««^éa  dmiJ^ifasA lQ*«B^tüa»- 
oa  púMc».  Ci»ti  ciudad  esnalaMr p*r ila  ^aceíaf  y  artaboidad  de 
«VI  «tiüNi,  'iQ-ooalyaenÍQMid»  qoBMri  'iaiOD  eaiá  teBqriid«|ior  los 
^Dto$  ma^ílHliOi.  ;£»  4a  punía'  da  Afay»  oataa  de  Guaaaoá  4stá  la 
famosa  aaüaadaámyayeQlacaBlliaeaaisvQ)  taotodel^[Ba4]a'llat)a 
que  te  JUBlai  la^^lar.ttiaa  lápade  te  IJaottra,  soma  deliagaa  del 
laarque  anUii^p^p.eftaaiea.ó.aeoiiiiíaaaaaiiéaielJaja  «e  hallafiate- 
«aeidoidel viente. Daaía'ia:{NpBÉa.áa}j|*a|ft isa^taa kidaia de  €al- 
bagi|«, Imr^VmimvImMihir^Hiltí,  ke aMMadal  aa«tiMada^Saa^ 
tieg^  ai  eerroiderk  .Virta-  f^.M^vfsmlmym/^úi^^k 
sensible  ia  mámn^^^kmm  daldtorflHün^ 

•JEate^ffawiWiat  i^é.h^i^ixvimmÉímlmmifA  aaa^üráe -^attevo 
el  yugo  español,  resistiendo  en  48^3íÁ  iantffxHaajaai-iBéaier^ede 
Monteverde.  La  capital  ba  sido  tomada  varias  vezes,  y  sus  calles^ 
plazas  y  hasta  las  paredei  4b  <vi$^  ^fW^J»^  sido  bañadas  con  la 
sangre  de  inocentes  víctimas  que  no  pudieron  sustraerse  á  los  bor- 
rares da  la)§HaH»á  BwwHa, 

Lae  paycpfnipifdaljoaaÉaicayiiti  oiWi  s4lfaMaad^  S>  JaeH;  Santafé, 
Maiiqoilai^  IlaaáeMFe  y 


La  viUaída£aiMMeaaL>aiÉ¿ailBBáa>eBiMi^Afalíl^  alBlwaaBa:llia- 
«D  w  iDMMKQr4ftAoaur¡flr¿  i\aaiaa^piia  f  b  jÉaai  ihÉyoa  eptafaa^c»- 
Jid»<etÉ^<liBttMliMria•«aiMa^  fMoattiojMianBMailítgai  44|s 


—  s«o  — 

ángalos  entrantes  y  stlieiileft  de  los  cerros,  cortados  perpendicular- 
mente^  indican  la  antigua  costa.  Por  todas  partes  bai  bellas  pers- 
pectivas :  al  S.  los  altos  picos  del  TurínMquire,  las  elevadas  paredes 
del  Gocbívano,  las  puntas  dé  Guaca,  GuTon  y  Tres-picachos,  y  la 
lejana  cascada  del  río  Lajo,  cabezerá  del  lionxanáres,  que  se  preci- 
pita por  peñascos,  presenta  una  vista  variada  é  imponente.  Al  N.  la 
barrera  de  cerros  arbolados  que  separan  del  valle  de  Cumanacoa  el 
bermo60  golfo  de  Cariaco,  contrasta  con  la  pelada  mesa  del  Coco- 
llar  que  queda  al  naciente  y  se  apoya  por  una  parte  á  los  flancos 
del  Torimiquire  y  por  otra  al  cerro'de  las  Lagunas.  Este  se  une  á 
la  cortina  que  mira  bacía  el  golfo.  Por  el  poniente  se  presenta  una 
abra  casi  perpendicular,  cortada  en  los  cerros  que  es^án  roas  alld 
del  pueblo  de  Arena ;  ella  y  la  vista  del  suelo  de  la  serranía  no  deja 
la  menor  duda  de  que  en  tiempos  remotos  se  abrieron  por  allí  paso 
las  aguas  que  ocupaban  la  planicie  que  hoi  circunda  á  Cumana- 
coa, la  cual  tiene  de  E.  a  O.  mas  de  5  leguas  y  2  de  N.  á  S.  :  en 
ella  se  reúnen  6  ríos  cuyas  aguas  van  por  aquella  vía  bacía  Cuma- 
Dá.  Aquí  seda  ún  tabaco escelente  por  sus  calidades  y  aroma,  del 
cual  se  bace  un  gran  comercio.  También  hai  aquí  una  gran  cueva 
en  d  cerro  de  Cuchivano,  de  laeúal  se  han  visto  salir  llamas  ó, 
mejor  dicho,  un  gas  inflamable  que  se  ve  brillar  á  240  varas  de  al- 
tura. Hnmboldt  cree  que  la  descomposición  del  agua  en  la  marga 
de  pizarra  que  éslá  llena  dé  piritas  y  contiene  partes  hidrogenas , 
es  una  de  las  principóles  causas  de  este  fenómeno ;  en  el  día,  cu- 
bierta de  una  espesa  vegetación ,  no  se  conoce  tal  fenómeno. 

Las  parroquias  son :  Cumanacoa,. Aretnas,  S.  Fernando,  S.  Lo- 
renzo, Aricagua  y  S.  Antonio.     -  • 

4. 

CANTÓN  I)B   CAKIACO. 

La  ciudad  de  Cariaco,  que  antiguamente  se  llamaba  dé  S.  Felipe 
de  Austria,  fundada  en  4 600,  sufHó  mucho  en  su  principio  por  las 
incursiones  de  los  Caribes  :.e^á  sitaada  en  un  llano  cerca  de  fa 
falda  del  cerro  de  Catuaro ,  á  la  orilla  del  rio  Cariaco.  El  golfo  de 
este  mismo  queda  á  4  -1/2  legua  de  distancia  casi  ál  N.  O.  La  laguna 
llamada  también  de  Cariaco  queda  al  IV.  á  media  le^ua,  y  al  N.  C^ 
la  llamada.de  BUiroaJvisla^  Cámpóna  está  i  «na  legua.  Cslá  lieñc  5 
de  largo  y;4  4/21  de  ancho.  Se  oomuaieá  £on  la  otra  y  bon  ^el  golfo 
por  el  cdüo  CampOM.  Tambisn  queda  en  esto  .territorio  la  laguna 


Putucaal  separada  por  el  cerro  Meapire.  Mui  fériiles  son  los  terre- 
nos cercanos  á  estas  lagunas ;  ¡tero  por  las  mochas  plantas  que  hai 
eo  ellas  y  los  manglares  de  las  orillas  hacen  que  los  terrenos  veci» 
nos  sean  prepénsos  á  dar  calenturas  intermitentes.  Los  demás  para- 
jes de  este  cantón  son  sanos  con  tierras  vírgenes  útilísimas  para  el 
cultivo.  Son  de  una  fertilidad  asombrosa  las  que  forman  el  valle  de' 
Guacarapo,  por  donde  hai  la  proporción  d^e  embarcar  los  fititos  en 
el  rio  S.  Juan,  que  lleva  sus  aguas  al  golfo  de  Paria ;  así  es^  que* 
este  territorio  puede  llevar  sus  producciones  á  aquel  golfo  ó  al 
de  Cariaco.  En  este  cantón  hai  también  aguas  calientes  hidrosul- 
fúreas. 

Las  parroquias  son  :  Cariaco,  Casanai,  Guacarapo^  Catuaro,  Saifla 
Cruz,  Santa  María  y  Chiguagua. 

CANTÓN   DE  CARÚPANO. 

La  dudad  de  Carúpano  está  á  la  orilla  del  puerto  de  su  nombre, 
situado  sobre  el  mar  de  las  Antillas.  Un  valle  longitudinal  de  2  le- 
g«as  le  demot^a  al  S.,  rodeado  de  cerros  cuya  perspectiva  es  pin- 
toresca. Al  otro  lado  de  estos  están  los  valles  poblados  de  Tinapni 
y  Pilar  y  los  fértiles  bosques  de  Coicuar,  bañados  por  ríos  que 
proporcionan  embarque  para  el  golfo  de  Paria ;  que  está  mui 
cerca. 

La  posición  de  este  territorio,  que  ofrece  á  sus  habitantes  la  fa- 
cilidad de  trasportar  sus  frutos,  sea  al  mar  de  las  Antillas  ó  al  golfo 
de  Paría,  es  una  de  aquellas  ventajas  útilísimas  en  un  pais ,  cuyas 
tierras  son  de  las  mejores  para  el  cultivo.  Grandes  selvas  cubren 
todavía  la  parte  mas  rica  de  vegetación  y  la  iiás  cercana  al  golfo , 
y  solo  el  temor  de  las  fiebres  por  los  terrenos  anegados  que  bal  im- 
pide que  allí  se  acumule  una  numerosa  población.  Solo  necesitan 
estas  comarcas  ser  desmontadas  y  cultivadas  para  cambiar  de  as- 
pecto y  ver  pobladas  unas  tierras  vírgenes  que  apenas  tienen  algu- 
nos habitantes. 

Las  parroquias  de  este  cantón  son  :  Carúpano,  Carúpano- Arriba, 
S.  José,  Rincón,  Pilar,  Tinaput,  Tinapuislto«  Coicuar  y  Guari«> 
quen. 


5»  — 


«MrMm  M  MOi*>CMMB. 


dond«  estítití  peqiMte  puesto  de  mi  mmbrQ^  £1  m  €aiibe  qua 
pasa  por  k  poUaekMi  airve  de  •teniAdft  ¡iMliaral  dmií  «baila  f  «i^apro 
v^rde,  fue  ooniraala  admÉraUeoMale  coa  los  paHaacoa^desiiadoa  de 
la  ^osta«  La  ilM  md&am  ddt  mar'^uo'aeiiíardoá'lansftdistoiioiai 
muéndoae  m  W»on4e  al  «íolo,  ooftivasAft  Umbíap  aiofoiaDaieat» 
con  la  perspectíva  de  «loa  corrot'  oatérttes'^iie  por  4od«  faiteo  ro>- 
deán  la  pequeQa  llanura  sobre  qae  está  sentada  la  población.. 

Lao  tierras  de  euNi vo  se  esütñi&k  por  la  peaáiíaiila  desteto  ¡qfae 
tiene  multitud  de  puntos  para  cultivar  ««atiotos,,  «eo  €»  el  ffiUo 
de  Paria,  sea  en  las  costas  del  mar  de  las  Antillas ;  de  manera  qae 
se  puede  decir^  que  cada  pUatacioo. que  está  «n  aquella  montañosa 
península  tiene  á  su  puerta  el  embarcadero  de  sus  frutos. 

Eq  la  sabMia  ^e  YagiMTiyaso  tei  im  imoerM  4oeal  Y'toühim 
oaa  lagmna  di»  aí$iia  salida  eo  doMlo  exiateii  ^mides^eáMea  fni 
solo  f e  eneveairn  en  la  mae  ¿tn'to»<rke^e  oacü  áeUa^^peroc» 
dicba  laguna  m  cfee  que  «ef  sttlüeiiráaea  la  cettHinitaeiiMi  «od  «I 
mar,  ponqué  famgwMi  ser  mili  profiiiida«^ 

Las  {Nirroqjttias  6eft4l¡o*HCitibe  f  Yagnaraparo* 


•I. 


l^  ciuidUd  de  Cdkia.QBt^i  la  oiáHa  dfi.w]e^'*^^t#flir»wi  }oa 
pla<ie  ^1U>  que  ^eübaefi  ei^fj^iferParia,  ai^nloiel^isivo^jeatietel 
pilarlo  de  «^daottbr^;  tíie«»e>por  parapocllt^Tel^giilfapMaPMi,  i^kkí 
de*  TrkMdad^  y  l|i:pafta^eQ»a.^oala<da4a  piw><Mwilw  di^  eariaiba^ta  faía 
l^oei^de  lo»l)rágiWiJ>aiiw»ote4o^^iMeaiearo»iift|iiWejíiytdead^  etta 
ia;eo«la  di&qetoivtfa^e.flaetae«wlíaiidatiaau^il§imrapaBQi>A^^ 
qaa'ad9«Ba0  laa>wMla^;del-«ei^ylw»earro»>yie-aatqi^^  delfaa 
de  ellos,  cubiertos  de  una  fresca  verdura,  forman  un  eaadwtpite»* 
r<M#v.(adalwfeíe»d.ak|  ^oadoi  talk^i^  lia<ia-4ia»|WKa  fara>  ewbaacar 
gnaiifeatop;  f 'lA^him«iÍa(«iea>ita  Ma de.TriiiaM  atraaequaf. «ar- 
cado ventajoso  para  ellos.  Posee  aguas  termales  cerca  de  la  coelat 

Las  parroquias  son  :  Gñiria,  Punta-Piedra ,  Zorro  é  Irap;). 


—  M$  — 


(JA^TWl  .9JP  AJ^AGÜ^v 


ta  ^iUa  de  Aragaa  omnanesa  está'  situada  en  el  decHte  mer^ 
dlional  de  la  serranía  de  Carfpe ,  cerca  del  ño  de  $a '  nombre.  Por 
todas  partes  está  rodeada  de  colinas  caMhreas  que  impiden  la  vi^ta 
de  la  dilatada  llanura  puc  tiene  ^l  S.  y  los  empinados  cerros  <|ue  se 
levantan  ^1  O.;  solo  los  picos  piramidales  del  de  ChltiqQiré  se  de- 
jau  ver  sobre  la  n^esa  dePuncérés.  Eú  en  este  cantón  terrenos 
propíos  para  la  cria  y  la  agricultura.  Aquellos  están  en  las  sabanas 
qne  se  esUenden  n^as  allá  de  Guarapiche,  y  estosen  la  serrana  que 
contiene  los  amenos  valles  de  S.  Francisco  y  Guanaguaua  y  el  her- 
moso de  Garipe ,  antigua  resid^ehí  de  los  Chaimas  y  después  áé\ 
capítulo  de  los  Padres  Observantes.  En  este  territorio  está  la  oéle«- 
bre  cueva  del  Guácbara^aiñp^^.PQr  su  .qpn^uracion,  por  su  lon- 
gitud y  anchura,  y  en  particular  por  la  calidad  de  pájaros  noctur- 
nos qne.habitan  eo  cjla^  los  pual^  le  bai)  dado  el  npinbre  que  lleva. 
Los  indios  consideran  esta  cueta  cómo  una  mina  de  grasa  de  cuyos 
producios  se  aprovechan  aduatmente  en  el  náes  de  junio ,  cogiendo 
lo$  picbones*;  cuy^i  grasares  slry&>para  sazonar  sus'manjares  durante 
et  atÍQ.  Corre  per  esta  cueva  un  riachu^o  de  5á  8  varas  de  ancho, 
po(;o  protVindo.  Se  puede  dívfdtr  et  subterráneo  en  9  grandes  rama- 
les ;  el  principal  tiene  ^5  varas,  está  compuesto  de  petrifléacfones 
antiguas ,  habitado  por  guácharos,  y  en  parte  baíiádo  per -el  rftf,  en 
p^rte  DO  pii^s  este- corre  fjor  uñaviasubttnrineai  ta  entrada  es¿e 
31  varas  de  ancho  y  t^  dé  alto ;  et  terreno' va  subiendo  y  disnii- 
onyendo  de  H  á  t2  en  altura  y  anchó,  su  extremo  está  á  ^25  varas 
mas  elevado  qué%!  vesliíbiito  déla  cueyaj  Et  se£uuA>fama)  es  dé  ^f9 
de  I  á  5  yaras  d»  antbo  y  de  !^  á  5  de  alto .  Se  baj^  para*  \r  i'  él  deblendb 
caminar  casi  siempre  por  él  rhichueló :  se  compone  de  una'^^  greda 
arcillosa  etidurecida.  Ests^  paiHe  está  ^n  aves  ni  njngun  otro  viviente 
y  sin  petrificaciones.  £1  tercer  ramal  tiene  153  varas  de  largo ,  t8 
de  alio  sobre  1 4de  aneho^  y  después  se. estrecha  hasta  no  dar  p^so. 
Se  sube  para  ir  á  él  y  esh  mansión  de  Tá^  lapas  y  Tá  "parte  fnas  b^ 
lia  y  sorprendente  del  tfubterráneo.  Las  (tetrffiraclotoes  son  ren- 
dentes y  briflantés  y  se  pueden  observar  todas  sus  edades,  jutrí  eá 
presencia  del  eapeetadtor  ^  reh  caery  petrtÜcarse  •fas  gotas  que 
fdMman  después  las  bellas  y  variadas  estalagmitas  v  estaláctldas  que 
la  adornan.  •  ■ 


£1  total  de  la  coeva  es  de  -1285  varas.  Paede  considerarse  como 
una  maravilla  de  la  natoralexa ,  Ja  primera  de  Veoezoela  y  la  mas 
estopenda  Genocida  en 'las  rocas  calcáreas.  Cerca  de  esta  coeva  se 
da  4|1  famoso  tabaco  del  Guicbaro,  mui  estimado  en  todo  el  país. 
Se  da  también  en  el  valle  de  Gai  ipe  un  café  de  aroma  esqnisito.  La 
posición  del  valle  en  un  logar  fresco  y  sano,  las  grandes  selvas  que 
le  rodean,  sn  inmediación  al  caño  de  S.  Jnan,  á  donde  paeden  su- 
bir goletas,  hacen  este  punto  uno  de  los  mas  interesantes  para  una 
grande  inmigración  que  habite  Iqs  bosques  que  cubren  los  cerros 
de  S,  Bonifacio  y  de  la  Cimarronera  y  el  estrecho  valle  por  donde 
corre  el  rio  Caribe. 

Las  parroquias  de  este  cantón  son :  Aragua ,  Caicara,  S.  Félix , 
Goanaguana^  S.  Francisco  y  Caripe« 

CANTÓN   DIS   MATÜAIN. 

La  villa  do  Maiurin,  célebre  en  la  historia  de  la  revolución  por 
los  diferentes  ataques  que  b^  sostenido,  se  encuentra  en  una  sabana 
entpe  el  cano  de  su  nombre  y  el  rio  Guarapiche  que  le  proporciona 
navegación  para  pequeikis  embarcaciones  hasta  el  punto  llamado 
caño  Colorado,  distante  8  leguas  en  lin^a  recta.  Hasta  allí  pueden  ir 
goleias  grandes :  dista  este  punto  del  golfo  de  Patia  7  leguas  en  lí- 
nea recia  y  por  las  vueltas  del  rio  hai  -1 5  leguas  de  Maturin  al  caño 
Colorado,  -14  de  allí  á  la  boca  del  Guarapiche  y  2  4/2  para  estar 
fuera  4^  los  bajos  de  punki  de  Arena » teniendo  de  24  á  30  pies  de 
aguü  el  canal  del  cano  Colorado :  este  no  es  otra  cosa  que  las  aguas 
dial  Guarapiche  que  en  tiempos  antiguos  se  fueron  por  aquel  caño. 
La  villa  de  Maturin  es(^  llamada  á  proeperar,  tanto  por  sus  hermo- 
sas sabinas  como  por  las  tierras  de  labor  que  tiene  cerca  del  golfo 
de  Paria ,  en  la  serranía  de  Puncéres  y  las  selvas  del  S.  Juan.  Este 
caño,  canal  natural  como  el  Guarapiche,  sirv/e  para  el  trasporte,  no 
solo  de  sus  productos  agrarios  sino  de  los  gans^dos  y  muías  que  de 
aquí  en  pocas  horas  salen  al  golfo  d^  Patria. 

Maturin  es,  pues,  uñ  puotq  comercial  y  de  grandes  ventajas  para 
la  cria  y  la  agricultura.  Haí  en  este  cai^on  minas  de  azufre  en  Gua« 
yuta  y  Puncéres,  s^  marina  y  br^den:f)tí4a  y  guajada.' 

Las  parroquias  son  :  MatifriUi  Pun^é^es,  .Chaguaramal|  Areo , 
Santa  Bárbara  y  Aguasay. 


—  585  — 


CJMIOfi'  AE.IiOS  QAftOf. 


í 


La  villa  de  S.  Bafael  de  Buráncas  es  la  cabeasera  de  este  nuevo 

noeo,  ireate  á  la  isla  de  layí^  cerca  de  Piacoa  é  inmediata  al  delta 
de  aquel  gran  rio,  puede  llegar  á  ser  con  el  tiempo  una  ciudad  lm« 
pwteBte^.lM»  Mies  y  esteasas  sabanas  que  posee  conservan  en  el 
v^ran<>  pastas  verdes,  y  sus  buenos  potreros  sír^n  pnea^ncerrar  en 
ellos  los  gnnados  y  nulas»  gue  se  destinan  i  las  Antillas ;  de  ma*- 
ñera  que  cuando  los  demás  Uanos  de  CarácaH,  Carabobo,  Apure  y 
'iMnas  8#  vean  obligados  ¿.ueader ^m  p— dei  i  —  pwsin  ínfimo^ 
los  criadores  de  esta  provincia  pueden  vender  los  sayos  con  un  va- 
lor doble  á  los  estranjeros  de  las  cdonias  vecinas ,  que  por  estar 
mas  cerca  Irán.á  proveerse  allí  de  carnes  y  aniáiales. 
Las  parroquias  sotf  Barráaeas,  Tabasco  y  Uradoa. 


I     '•• 


•    '  •  .  .» 


t 


( 


TABLA  COMPARATIVA  de  la  pesidoii  as^nómica  46  las  eabezeras  de  »] 
tierras,  terrenos  baldíos ,- poiWttifflou fftsdUtta- ^ -relatiyay  hombres  de  armas,  c«^ 
se  cultiTan  para  la  ei^portaclon. 


mmaitmmmmmmtmí 


NO 


DB  LAS  CÁBBZBftA9 


DB  CAHIIIM. 


GuOMDá..... 

GomaMCoa. 

Cariaco 

(iarúpaDO.... 
Rio-Caribe.. 
Gfliría....... 

Aragua 

Maturin 


I . , 


POilCIOll  ASTBORÓMICA. 


HorlB. 


m 


Lakgitvá  al  ^. 

[ 


I 


mmm^mtm^í 


«oo.  arr.  51". 
10.  snr.  45. 

10.  30.  ». 

40.  44.  iO. 

40.  3i.  SS. 

9.  58.  15. 


Altan* 

en  ▼•!«• 

sobre 

I 

1 
eLQÍT«L 


m 


Traip*- 


del  ter- 
mómifllr* 


mm^mm 


1      IUMniA»tBV<lQíB^HHniKHOS  DI 
QVS  ftS  CpilPOUBir    ^OS  GAM- 
'  TmiBS'nt^lJnVKSCVAOBAIUS. 


II  s 


9»  54'  08"l      aq 


8.  97.  90 


3.  46.  35 


3.  84.    8 


4.  59.    3 


8.  36.  40 


..    9.  44.  SO.        3.  2».  10 


I 


Barrancas 

Islaa  de  Gamaná 
<(l.  deCarúpano 
id.  de  Matarin. 


S.  97.  30. 


» 


o 


5.    7.    O 


80 


10 


10 


354 


11 


90 


» 


» 


Total 


«Má^ 


97°.64 
94.  ÜS 
97.  99 
96.  95 

96.  95 

97.  99 

96.  94 

97.  60 
97.  78 


,  *.  f .  'í- 


m 


e 

9  Va 

40 


ít 


» 


^  Va 


465 


955 


Va 


49 


» 


9 


» 


Va 


» 


l> 


781 


480 


50 


» 


48 


87 


36 


40 


98 


«'/. 


46 


5V= 


905  V. 


9 

c 
•o -3 


40 


95 


44 


0 


40 


35SVa[«V. 
I 


i 
1 


9#V. 


440 


[i  ,  su  altura  sobre  el  lúiA  del  mar ,  tu  tmwntani  'media  ,  eaHdai  de  sos 
m  ,   distanda  á  la  eapital  de  la  profinda  ;  de  la  renúblieat  y  los  tnM  qae 


8 

I.Mt 

15 

5.m 

150 

7.861 

150 

A.am 

» 

» 

» 

» 

» 

» 

41S 

B0.«74 

•    •   •    •   •    • 


*  • 


•       *J        ■■••■• 


.  i 


f   »  * 


}f. 


—  588  — 
TABLA 

DE  LAS  AtTUaAS  DE  LOS  CEBAOS  DE  LA  PBOYINCLi. 


Nombrei. 


Varas,      Serranías. 


Puncéreí . 


MaDicoarei....*..    Z8fi».,,^p*^.iif, 

TeUs de  Cariaco. . .    4fg. Id. 

Piéo de  (!áriaco  . . .    499.......«..  <(|. 

Pico  del  E..^ ttto.'. .'...«..  id. 

9*  «lose  ■....•••••  •    vu^.. «•#••••• 'M* 

Puerto-rato 710 ;..  Paria. 

Meapire.. 406 «..id. 

Cattiafo...... '.!...    480,, QMtocwjCbirMPiira 176S. 

Pico  Santafé iSO fergamin. 

Ywriniil^^,^»^^  4aOttM.«^*f  «4d.'  •  » 

Brito 1700 »..  id. 

Tataracual 1499 ;..  id. 

Tres  Picacbofti.,..  I800..*....u.  id. 

Culón 1796 ;  Turumi- 

^ire 

Goacat 1800 i.,  id. 

Gnclii vano... •. ^.. *.  1866.. -f •..!..  <d.i 
tlanoTiimiii^iire  4860 id. 


Nombres.  Varas.,      Serranía», 

1461 Tttimmf** 

qvire. 

Purgatorio  .......  ft9i...'. id. 

Quácbaro— •M'^^.*  4780..........  id.    - 

S.Boiiiraeio.^..^.  4800 Carip^* 

lleia«É«d4   . 

Sao  Agusti|i..*.«  4144... •.«^•..  id. 
Cimarronera  ..«««.  IMMlL .  *^«  •  .-• « •  id. 


id. 


liOO Puncéref. 

Cerro  CambnraU..  1700 Tunioii-t 

!         ■        <  <|ttire. 

Periquito. ..fc 4376 id. 

Uano  Coool|ar....    HSf &J. 

Laatagunaf. 1400 Cariaco. 

MariciQlUl 440#L «. 

l|DpQlikl6..«...<»^*    68$....^....  id,* 


i     . 

TABtA 

DB  LOS  BMM  DE  ^  4bDBN*»E  LA  PUeVlMCiÉ  DE  COlfAÜÁ. 


/^otM^rea.  •      Sekankts,      Desagüe. 
Putucar ....    TnriAniquIre. . . ;  golfo  de 

Carlaoo. 

K^^O  ..«...*•.«  f  ••*  I  MI.  .«  ...a..  «     lu. 


Guasduas id 

Cnrlbe..*.-.'....»»^.  'id, 

ArénM -. id. 

Aricagua .Hd. 

■id. 


AgnaMaMMK  .... 

S.  Juan ¡fd,... 

Mamanáret . « 'id.... 

Cedefio Ber|antin. 

Tataraoaal -...'id.... 

Taraeaal id..». 

Norucual ...... . . .  'id. . . . 

Colorado. id,... 

8antaf6 id.... 

Qoeiepe c|nriaco. 


Gairfailal ;M..., 

TonanUl.. id..., 

Guaracayal id,.., 

HariquitáL íd,.'., 

Tarabaeoa... id.... 

Caehiamare id,.., 

Brito Bergantín. 

Caneamore.......  id.,,, 


Ui. 

.  id.   '• 

.  id. 

.  id.    . 

.  id. 

.  id. 

^id. 

7id. 

.  id. 

alamar. 

.  id, 

.  id. 

.  id, 
golfo  de 
Cariaco. 

.  id. 

.  id. 

•  id. 

.  id. 

.  id. 

.  Id. 

.  id. 

.  id. 


,  WflUlrgi.       r54rrafi|aa.  , .  Deságñe. 
Éacarapana....  Bergantín....  golfo  de 

2uaraDactae.....*r^  id..>..^.'.'..  tíí,        , 
ondanillo..' id,,\ i  lámar. 

qoluá.; ."id..;....;...  id. 

Bordonea...* Id.< id. 

Golor<|do...  Ta|:ii|;niqutre..«.,.  golfo  de 

*  Paria, 

^tarapiche.;...  Cariaad. .......  id. 

CocoIAr....*TttrMiiqufre..;...  id. 

CapirieuaL.k  Cumanac^a id. 

éuata^l...« id..'....^..  id.       , 

Aro 4......  id id. 

Cliaearaeual* id.: UL 

>ejuc«....|....;.  id..., id.      •' 

f arrancas  .J......  id.,', id,  > 


^tte... •.-....>.<,<•*  id... 

Aragua 1...  Caripe*. 

HanailT!».  •!...*•«  ^..* 

Ouayuu....'. id..; 

Üuncérea...^ id..'« 

IPotreró^..........  Ú..'. 

Orocuare.... id... 

Arénu id... 

LaCnu id... 

S.iuan........  Meapire 


id. 

id. 
id, 
id, 
id, 

id: 

id. 
id. 
id, 
id. 


>i^tt 


—  589 


Hombres:      Serttmias.  '   Desagüe. 

Catuaro Cariaco. :..;:  golfb 

Paria. 

EspDga . ; . . . ; .- : .  .*;  té: ;  ¿ . : . :  .v.  id, 

Juan  Antcmiv . : . . ;  id; .:.;;; ;  .\  id, 

Domingof :...;.;»;  id. ::,:;:, ."'id. 

Caribe  .;.......,:  id..........  id. 

Tomphital €¡aripe........  id. 

Hacha. ......' . . .  Cariaco .......  id. 

Gu^carapo...:...,  fd.:.< id. 

Caripe  -. Cartpe. ;  .....id. 

Asagua id id. 

Arguigua id id. 

Yaguanía Gan&paiio  ......  id. 

.Grande id id. 

Mercmare id id. 

Coiguar id id. 

Mapuey.... id id. 

Sabacual id id. 

Tinapui id. id. 

Pricantal Cariaco golfo  de 

Cariaco. 

Corumontal id...  id. 

Colúa  ............  id Mái'-' 

Oricaro id. id. 

López id «.  id. 

Cariaco id id. 

Santa  Cruz . . .  Purgatorio id. 

Guácharo id id. 

Potoctiá id id. 

S.Juan id ..*.  id.  . 

Aguacaliente...  Meapire id. 

Godeño id id. 

Casanai id ..id, 

Catuaro.;....: —  id golfo  de 

Paria. 

Rio  Grande. . .  Hio  Caribe. . . ...  id. 

Santiago id id. 

Concepción id id. 

Caslilto id id. 

A  uafría.. id id. 

Dcsparramadero. . .  id id. 

Rio  Seco id id. 

Yagiiaraparo....  Paria id. 

Viejo id id. 

Aruco id id. 

Arauoa id id. 

Chacipal fd id. 

Jobo id id. 

Purgatorio id id. 

Moran Id... .id,    . 

Siete  VuelUí id id. 

Rio  Grande id id. 

Chiquito id id. 

Irapa id id. 

Güinima id id. 

Palma,. id.„ id. 


Nombres.      Serranías.      Desagüe. 

át\iSoM.:., ,.:.:..,.  id...::.:....  id. 

GaáraKUártf.;..;,  PiíHá..;....  nolfo  de 

Paria. 

Goanágaána......  id....:......  id. 

Gualat))itíáré..;;..  id.......*.;.,  id. 

GOaratoas.........  id..........',  id. 

Tinapuiciló..:  Carúpano......'.'.  id, 

Pilar id id. 

Chagiiaranas.:.:,,  id,...:..'..,,  id. 

Gaararoare......*.    id id, 

Sanu  Isabel. ...  Rio  Caribe id. 

CaraUl id id. 

Cherepare Paria.......  alamar. 

Cangoa id id. 

Popul id id. 

Rio-Caribe id id, 

Mauraco id id, 

Churupare id id. 

Puerto  Santo id id. 

Carúpano Id id. 

Amana Bergantin golfo  de 

Paria. 

Areo id id. 

MapirltOrf Mesas..., id. 

8.  Juan id id. 

Pinal id id. 

Caris id fd. 

Tonoro. Id id. 

SanURiu id Id. 

Tácala ,..  id. id. 

Rapio id id. 

Tigre . .  id,,,,  delta  del  Ori- 


RioSeco..........  id. 

Areo... id. 

$.  Jaime id. 

Pando id. 

Chive.... Id. 

Aritupano id. 

Aribi.. id, 

^tíio,..9, id. 


ñoco. 
..  id, 
..  id. 
..  id. 
..  id. 
,.  Id. 
..id. 
..  id. 
..  Id. 


Quebranta Paria., golfo  de 

Parla. 

Siblsa. id id. 

Vara id..., id. 

Yaguaro ,  id Id. 

Cacao fd.. ......  alamar. 

Pava. id fd. 

Puerio  Viejo fd f..  ié. 

Castaño id fd. 

Caldero fd.... ,  fd. 

Angelóla id... fd. 

LaCruz id ,...,,  id. 

Tacarlgua fd fd. 

Chuao id fd. 

Cumaná..... id id» 


nomibrei*     Mnamlai.    Mt^gU. 
Choptre JParia á 

tigtUto i(f i<{. 

Guaeueo .«•  id id» 

8. lian.... ...:...  U....« ül. 

Tunidtt»... fif.... id. 

Bi4«. lóai déludel 

Orinoip. 

Yáfo....; M... .;......  la. 

ftiflHvi Id*. id. 

*     *  ■ 

i»  ... 


Itmar.UniMii 


•A*- 


Id. 


Orinoco. 

.•«  Id. 


Hom>eoL«.....« 

TuiMSt  (..«•««.M  Id. . > »m » >w . »  Id. 

UKifta....;..:.^  Id OrimMD 

MuMpra M  id id. 

Gtuufuapo...  dslOcfaioeo,..^..^  id» 

Gnaiitfeo..  •..«.•.•.•«.  Id Id. 

6u«m.....*<^.«.»»  Id .«..  Id. 

6iUiMl.«..».»MK*4<i id. 


^mwicáá^  m  mmimtéé 


Ésía. provincia  se  encuentra  Se  los  \(Í^i\^W^  a  los  4f®  S'  45^' 
de  latitud  N. ,  j  entre  2p  40'  y  5«  9MS^  de  longitud  oriental  del 
meridiano  de  Caracas;  pero. si  se  consideran  los  grupos  de  islotes 
y  las  islas  que  hacen  parte  de  la  mismTi  provincia  ,  aunque  casi 
todas  estén  desiertas,  veoios  entonces  la  parte  mas  meridional  de  la 
isla  de  GocBe  estar  en  40<^  46' .y  la  punta  mas  setentrionál  delaJsla 
Blanquilla  en  4  ^'^  55^  Esta  se  encuentra  por  sXi  costa  occidental  á 
2^  25'  al  E.  del  meridiano  de  Caracas  y  el  grupa  de  los  Tesügos.á 
3**  54'  al  E,  del  mismo  meridiano.  Su  territorio  se  debe  dividir  en 
dos  partea,  la  una  compuesta  de  islas  casi  tbdas  desiertas ,  y  la 
otra  de  la  isla  mayor  que  es  la  qiie-  constituye  la  verdadera  pro- 
vincia de.Margarita*  Caeslahai  tierras  fértiles  é  ingratas^  aquellas 
cultivadas  y  estas  cubiertas  áe  cabras  que  .procrean  prodigiosa- 
mente ;,pero  todo  el  territorio  es  de  un  teiílperanteBto  tan  sano^  que 
allí  no  existen  médicos  ni  boticarios.  El. máximum  de  largo  de  esta 
isla  es  de  '1 2  leigna$«  desde  la  punta  de  la  Ballena  basta  punta.  Aré- 
Bas  en  la  direceion  de  E.  á  O,  y  de  N.  i  S«,  desde  el  morro  y  cabo  de 
la  isla  hasta  punta  Mosquitos  tiene  oasi  6  leguas. 

Lasieguas  cuadradas  de  este  terijtorio  son  57 ,  en  las  cuales  hai 
5  de  islas  separadas  de  la  Margarita  ,  de  ellas  5  leguas  baídlas  y  y 
teniendo  una  población  de  i8,505  habitantes^  e^n  en  raxon  de 
494^7  por  cada  Icigoaxiiadnida. 

m ' 

^Jbnsm  y  Gosf  uuEs, 

Como  esta' provincia  es  una  ísla^  y  tiene  ademas  otras  que  ha- 
cen parte  de  su  territorio  ^  se  debe  ¿lecir  que  está  rodeada  por  el 
mar  de  las  Antillas ,  .y  fue  no  tiene  otros  limites^  siendo  las  costáis 
de  la  provincia  de  Cumaná  las  tierrafs  mas  cercanas* 

# 

COSTAS  OBI*  .MAB. 

Del  cerro  de  Matasiete  se  ésllenáe  Qna  bAsé  hacia  U'mdt^DaflHidtt 


punta  de  la  Ballena,  que  casi  está  en  el  meridíiQO  del  morro  de 
Ghaeopata  de  la  provincia  de-  Gomaoa.  -DésAe  ella  corre  la  eoafa 
como  al  N.  N.  O.  la  distancia  de  casi  5  legoas  hasta  el  eab»  de  la 
Isla,  formando  el  frontón  del  N.  E.  de  ella,  que  es  limpio.  Dead^ 
dicho  cabo  corre  la  costa  aS  S\  O.  hasta  punta  de  h  Gallera  qne  dista 
2  legnas  y  también  es  limpia.  De  esta  pouta  corre  á  )a  de  Mada- 
Libre  al  S.  O.  nna  legua;  y  entre  las  dos  se  forma  una  grande  en- 
senada con  un  placer  que  sale  del  centro  de  ella  cenca  de  una  milla. 
Aqui  se  halla  el  pueblo  y  puerto  de  Juan  Griego  en  el  fondo  de  la 
ensenada.  Desde  María- Libre  á  la  punta  de  Tuna ,  distantes  entre  si 
4  leguas ,  se  forma  una  grande  ensenada  de  mas  de  6  d^  costa  :  esta 
es  la  parte  mas  baja  de  la  isla,  y  vista  á  cierta  dísiancía,  parece 
ocupada  por  la  mar  y  tomo  si  estuviera  la  isla  de  Margarita  divi- 
dida en  dos.  Toda  la  ensenada  es  limpia  y  no  hai  sino  el  phcér  qae 
circunda  la  costa,  que  sale  cuaddo  mas  media  milla 'de  ella. 'De  ía 
punta  de  Tuna  al  morro  de  Robledar  hai  5  leguas,  y  va  casi  al  O. 
-1/4  al  S.  O.  :  la  costa  es  toda  limpia  y  puede  atracarse  á'  dediá 
milla.  De  Robledar  á  punta  Arenas  hai  casi  2  leguas  eti  dirección  al 
S. ;  toda  la  costa  es  limpia,  y  el  ptacer  de  poco  fonído'  sale  como  á 
media  legua.  El  frontón  de  punta  Arenas  es  la  parte  mas  occidental 
de  la  ista  y  al  N.  O.  de  él  á  distancia  de  casi  2  leguas  se  halla  el 
veril  oriental  de  un  placer  de  piedra,  cuya  menor  agua  es  de  5  bra- 
zas :  está  tendido  N.  E!  S.  O.,  casi  ^ma  legua  :  allí  estaba  uñó  de 
los  bancos  de  la  gran  pesca  de  perlas.  El  cabal  entre  fó  co^ta  y 
este  placer  es  ipui  anchó  y  íranco  y  sü  mayor  agua* desbrazas 
aíena.  .  ' 

Volvamos  á  la  punta  mas  orienta!  de  ta  Isla  de  donde  comenza- 
mos la  descripción  de  la  cosía.  Al  Si  O.  de  la  punía  de  Ballena  ,  á 
4  i  /2  legua,  está  la  punta  de  morro  Moreno,  y  entre  las  dos  se  forma 
una  espaciosa  ensenada  en  cuya  ^arté  setentrionaí  está  el  pueblo 
de  Pampatar.  Casi  en  la  dirección  de  las  dos  puntas  y  medianía  de 
ella  está  el  islote  Blanco ,  mui  limpio ,  y  puede  pasarse  sin  riesgo 
alguno  entre  él  y  la  tierra.  En  toda  la  ensenada  se  fondea  én  S  y  O  . 
brazas  arena  á  distancia  de' 2/5  de  milla  de  la  plaza.  Este  fondea- 
dero con  brisas  frescas  del  S.  puede  ser  algo  espuesto.  Desde  morro 
Moreno  corre  la  costa  al  S.  O.  f/4  al  S.  la  distancia  de  2  leguas 
hasta  punta  Mosquitos,  y  enxte  las  dos  se  forma  una  ensenada  en 
cuya  parte  N.  está  el  pueblo  Porlamar.  La  cosía  entre  esas  dos 
puntas  es  sucia,  y  no  debe  atracarse  á  menos  de  2  millas^  sucediendo 


IoiDiimo«m*lft«tele«i0io  al  O.  KN^Me  psp^Mo^f^iMftiMUí: 
punta  GMsen»,  4íilttMÍ6i<i#  iiM.d^  ^^gp^s»  e^rpee^Bi.E.O,;  es 
sqeU  y  de^piader-  da^púedfa  qfiá^stíie  i  upa  miUa^  De  aW  n»ba  te 
co^  al  N.  MiÜ  nnaMfc  M  Paio  que  disj^  oiro  tafia,  y-cl^gfw^  va 
como  al  O.  N.  Q.,  casi  5^  leguas  baala  pf  a|9  4o:  Ar4paso,%ue,  CO190 , 
ya  beoNis  ikhfii  es  la  inaa  a0dda11tal.de  la  ida  :  U>da  asta  ooai^  ea 
tan  auoía  eotto  la  aiKerwf . 

■ 

LaBlaoquill^  C8táá^9  le^asalISi,  O, del  puerlode  Juan  Griego, 
rieae  5  leguas  de  circunferencia  y  abunda  en  lortq^s.  La  habiian 
algunos  pescadores  :  sus  costas  soq  uiui  limpias ,  á  escepcion  del 
frontón  del  S.  0«  que  tlepe  varias  piedras  lo  mi^nio  que  algupas 
puntas  por  la  parle  del^O.  y  que  la  punta  mas  seleotrional.  En  la 
parte  N.  O.  hai  fondeadero  desale  20  brabas  que  se  ];iailan  i  una 
milla  de  la  costa  basla  7  ú  8  que  se  cogen  á  5  cables  de  ella,  y  todo 
el  fondo  es  de  arena»  En  la  costa  del  O.  y  como  en  la  medianía  de 
ella  ,  en  una  enseaada.de  pbya,  bai  una  casimba  ó  pozo  de  agua 
dulce,  donde  se  puede  hacer  aguada. 

Al  £.  de  la  punta  mas  meridional  de  la  Blanquilla ,  y  á  distancia 
de  2  leguas,  empieza  el  grupo  de  islotes  llamados  los  Hermanos : 
son  7  f  todos  ellos  mui  limpio3  y  tan  acantilados,  que  en  sus  cana- 
les no  se  cQge  sonda  :  estáu  desiertos  y  sin  agua  dulce  :  parecep 
picos  de  montanas  submarinas  qu^  asoman  sol^r^  la  superficie 
del  mar. 

Al  N.  £•  del  puerto  da  Pampalar  y  á  dis^nciade  46  leguaa,  e&tá 
el  grupp  de  pequeñas  islas  llamadas  Ion  Testigos,  taml^íen  en  nú- 
mero de  7  con  algunos  otros  Xarallon^^s.  Se^ucuentrau  eo  el  meri- 
diano d^l  i|Aorro  de.P|iertO;Saato  ^  ^  la  provincia  de  Gumaná ,  dis- 
tante de  él  42  4/2'k\guas»  l/ii  pasos,  eotce  los  islotes  son  francos  y 
limpios ;  pera  ao  ^si  toa  que  forman  los  farallones  por.  ser  mui  es- 
trechos :  á  todos  estoa  isl^te^  se  puede^ atracar  i  i  cables,  menos 
al  mas  setentrional  que  tiene  arrecifes^  coiQp  ¿media  milla  en  con- 
iorno«  Ent^e  estos  islotes  bai  fondo  de  arena  sobre  el  que  s^  puede 
dejar  caer  el  aufla  en  C940  de  necesidad.  El  islote  jpriiicipal  lla- 
mado Te^tigp^-Grfuideestá  prolongado  ei^Ja  direc(^|pp  N..O*^.  E.  y« 
en  ^\e  s^ntjdo  tiene,  jméi^os  de  upa  legua*  i^n  su  parte  S..0.  bal 
buen  fondeadero  .abrigado  <i|f  las  brisas  desde  9  basta  -{."[^razas 

P.    QEOQ,  SS 


arena  grnesn.  Etotre IM  TMHj^y  ^^ coatefe haNt aiHda),  fmts. 
«de  élites,  coittoá  casid  legtiás,  M aiiir%fa»filaoar/dir>aaainicoft 
tMi<k>do  5  i  6  braaas  qmd6ba  avilaM  'OW  enlMcaaíMtt  i^tidds; 

A  S'teigiiasarf?.  E;  4e  ia  piiflM  niaa  setentrioÉal  Í^ltfiiiai||afMi 
*qti^  es  el  asarro  y  cabo  de  la  iah,  esf^  ^'  |;ra^'d&  iMo4es-llliaiados 
los  Fraüés ,  de  los  cuales  el  ñaa  neHdtonal-^s»  el  mar  glande.  8an 
también  en  número  de  7 ;  limpios  todos,  iMáitea  el'iiiaa'seieDldo>- 
val  y  rodeado  de  afrecifes  qoe  salen  como  á  2  cables  de  él. 

Al  N.  £.  del  Testigo-Grande ,  á  diataaciade  4  leguas,  está  la  is- 
Hta  de  la  Sola^  mai  limpia :  le  qjoeda  el  grupo  de  los  Testigos  al 
E.  á  5  leguas.  Los  pasos  entre  los  Térffigos  y  la  S(ñh,  entre  esta,  los 
Frailes  y  Margarita ,  son  tait  rfanoos?,  que  cfn  cualquier  tfempa  y 
con  cualquier  buque  pueden  omprendersi?. 

Eli  el  canal  que  forma  Ta  isla  d'e  Margarita  ron  h  costa  d^  Cutnaná 
liai  dos  grandes  islas  y  la  mas  orit|ntal  Hamadti  Coób#  ,  y  lü  oeeí- 
deníal  Cuagua  6  Ctfbagua.  La  isla  Cócbéf  e^'baja  y*áHtfa ,  está  ten- 
dida casi  N.  O.  S.  E.  y  cercada  de  ptacer  depíedray  attecifes  que 
sulen  de  sus  puntas  N.  O.  f  S.'E. ,  como  medfa* legua,  de  modo 
que  forma  dos'pa?os  ó  canates,  el'  del  N.  co^lti  iéla  Margarita  que 
en  su  menor  amplitud  tiene  2'tíññit9  yrl'del'S.  qtic  f&nna  con  la 
costa  de  igual  anchura.  Por  cualquiera  de  estosdds  ranales  se  puede 
pasar  francamente ',  pues  bai  mui  buen  foiiíte  en  que  se  puede  de- 
jar caer  una  ancla,  y  aguantarse  sobre  ella  conlo  en  un  btien  puerto. 
Etí  otroff  tiempos  habla  cu  está  hla  pesca  dfe  perlas,  prro  en  él  día 
no  se  cogen  sino  tortugas  y  pezes  que  "se  safan  para  el  continehte  y 
las  islas  vecinas.  Tiene  2  leguas  de  largo  y  una  en  su  mayor  an^ 
chura.  Los  pescadores,  que  ocurren  eb  gran*  udAífírb  todo  el  año, 
ó  se  srrreti  del  aguif  trafdd  de  Margarita  ó^de  la  costa  de  Cümaná , 
ó  hacen  casimbas  que  dan  una  agua  safóbre. 

l^  isla  de  enagua  es  algo  menor  que  la  de  Coche*:  'corre  casi  E. 
O.  tiene  un  bajo  y  arrecife  que  salen  á  una  milHi :  há  costas  dé9 
Ñ.  y  del  S.  son  nmi  limpias  y  én  $ü  froritotí  oecidÉutáriMii  pljioer 
de  piedra  que  se  avamía  en  el  mar  comoi  f/3  de  mBfc.  Esta  isla 
forma  también  dos  canates*,  tmo  a!  N.  con  lá  feht  d)^  Margarla  y 
otro  a!  ^.  con  lá  Costa-Flrmfe  1  ambos  son  mtif  f i^rtfcos  y  la  parte 
mas  angosta  éñtfelá'isla  fMsr^ñfítsi'itífím  übas  á&légútí.  La  isia 
está  inculta  y  tiene  ma$dé'5'leftmrdé'crrc«ríifón»ida.  Eñ  otros 
tiempos  se  hacia  en  sus  rostas  -una  abmtdanfte  pesca  de  perlas  que  * 
atraia  muchos  comerciantes ,  y  esto  tmé  causa  de  que  se  fundase 


-  tgh  - 

'  .        •  -     ■  • 

iülen  ^S^S  un  pueblo  q.ue  se,  llamó  la  Nuev3  Cádiz  y  que  turo 
ayuíitamieoto.  eu  j527.  Sus  habitantes  11evaI)aQ  del  cootinente  el 
agua  para  beber ,  p^ro  desde,  que  se  abandonó  lá  pesca  quedó  des- 
4rui<Ia  la  ciudad  y  desierta  la  islaí. , 

MONTAÑAS, 

•  ••       "t  •  .  •  ■ 

*  > 

r 

El  cerro  de  Copei,  que  es  el  mas  aúo  del  cantón  capital ,  forma 
dos  valles,  al  E,  el  de  la  Asunción  y  al  S.  lí.  el  del  Espíritu  Santo. 
En  la  costa  que  está  freiife  á  este  ulfimo  se  descubrió  una  pesca  de 
perlas  en  1558  ,  ló  cuál  dio  importancia  á  Margarita.  El  cerro  Co- 
pe^  se  presenta  escarpado  al  lado  del  S.  mientras  al  N.  se  prolonga 
-en  forma  de  colina  terminando  en  el  morro  y  cabo  de  la  íslü  y  ofre- 
«ciendo  en  sus  declives  un  terreno  úlil  para  cultivar  algodón,  lAaiz, 
fríjoles  etc.  Al  oriente  de  estos  cerros  se  elevan  el  de  Malasiete  con 
Ires  picachos  cuyas  bases  se  pierden  en  la  mar  por  el  oriente  y  al 
poniente ,  en  una  llanada  larga  y  «strecha  que  separa  sus  bases  del 
de  Copei.  Unas  pequeñas  colinas  pedregosas  están  al  rededor  de 
^titi|ttt«t  jMtú^f  yj04i««  M-€9tiiwéeU'de9d«'Pai4«iimtil«sila4«H«ta 
Mosquitos.  Lo  demás  es  llano^  estéril,  cuhwiili^die^t«a»a  y^JMwíi^iQSv 
y  todo  este  terreno  descrito  es  que  el  pertenece  en  el  dia  al  cantón 
capital  ó  de  la  Asunción. 

La  parte  occidental  del  cerro  Copei  forma  el  valle  de  S.  Juan , 
y  .en  su  cumbre  y  fal4as  el  terreno  ofrece  ventajas  al  cultivador ; 
así  es  que  toda  ella  está  sembrada  y  Ifena  de  plantaciones.  Los  cer- 
ros Guatoco  y  Picúa  son  como  grandes  estribos  del  Copei ,  (¡uú  se 
estíenden  al  poniente.  Lo  mismo  se  deben  considerar  fós  que  existen 
entre  la  villa  del  Noríe  y  el  pueblo  llamad^  Pedro  González  :  am- 
ibos ramales  vienen  casi  á  encontrarse  etí  Juan  Griego.  Entre  S'a- 
íbana  Grande  y  Aguaverde  se  levanfan  unas  calinitas ,  que  cos- 
teando la  parte  meridional  de  la  laguna  Arestinga,. acaban  en  Tos 
cerrilos  de  Jas  Tetas. 

Depfi.es  de  jiija  grande  depresión  de  5  leguas  se  eleva  otra  masa 
compacta  nombrada  cerros  de  Ma(9nao ,  con  4  picachos  bieii  pro- 
nunciados qiie  sil]  embargo  no  forman  valle  y  sus  bases  se  pier^n 
ea  la  costa  del  mar  ó  en  la  laguna  Arestlngá.  Estos  cerrps  incultos 
ppr  Ip  ingrato  de  sju  terreno ,  tienen  ^n  sus  faldas  algunas  chozas 
de  criadores  ae  cabras  q€e  aquí  prosperan  ventajosamente. 

Al  examinar  los  cei  ros  de  Margarita  ,  las  isla§  que  la  rodean ,  el 


—  W6  — 

bajo  fondo  entre  ella  y  la  costado  Gamaná,  lo  destrozado  de  esta,  la 
posicioQ  de  la  isla  de  la  Tortuga ,  la  conOguradon  de  los  cerros  de 
la  punta  Tiícacas  en  la  proYÍneía  de  Coro  y  de  toda  U  aenranit  de 
esta  liasta  el  golfo  de  Ifaracaibo ,  la  identidad  del  terreno  de  Marw- 
garita  con  el  de  Coro,  la  igualdad  de  las  plantas  que  se  eneaentratt 
en  ambas  provincias ,  todo  hace  creer  que  en  otros  tiempos  estu- 
Yíeron  unidas  estas  tierras  al  continente  y  fué  una  cadena  de  cer- 
ros paralelitA  la  actual  de  |a  costa  de  Caracas,  cuyos  residuos. se 
muestran  en  ks  islas  indicadas. 

Mas  al  IV.  los  Hermanos  y  Blanquilla  que  se  encuentran  ei^  la 
misma  liuea  que. Orchila,  Hoques,  Aves,  Donaire,  Curazao ;. Oruba, 
península  de  Paz^aguaoij  sierras  Chimare  y  Aceite  de  la  península 
Goajira,  demarcan  una  tercera  jcadena  paralela  á  las  oirás  que  pa- 
recen  destruidas  por  la  misma  gran  caláslrofe  que  liiio  desaparecer 
las  demás  tierras. 


AiOS. 


Cnati^  ritetHiflo»  de  •paca'  ae«i  tí«n0  esto  isla ,  el  n^jQMTidbtos 
cnaleteseldeltXfMohm.  ..  >  5 


:«. 


LAGUNAS. 

La  laguna  Areslinga  tiene  una  abertura  a  la  ítíar  a  Una  legua  af 
poniente  de  los  cerritos  de  las  Tetas ;  y  esta  laguna  dividiría  en' dos  ' 
partes  la  isla  de  Margarita,  si  un  istmo.de  'Á  'r/2  leguas  de  largo  no 
la  uniera.  Este  istmo  tiene  en  lo  mas  estrecho  70  varas :  su  anchura 
media  es  de  200,  y  esta  elevado  en  algunas  partes  de  4  á  5  varas 
sobre  el  nivel  del  mar.  En  varios  puntos  los  médanos  se  alzan  á 
lilas  de  20  varas.  La  laguna  tiene  3  Irguas  de  largo  y  4/6  de  aneho ; 
es  poco  profunda  y  sus  aguas  son  saladas. 

La  laguna  de  los  Marites  (iene  casi  una  legua  de  N.  á  S.  y  mas 
de  una  de  E.  á  O  ;  se  comunica  por  una  boca  con  el  ifiar  y  abunda 
en  pezes. 

Hai  una  que  aunque  pequeita;  merece  mencionarse  :  es  la  nom- 
brada Salada,  cerca  de  Juan  Griego,  en  donde  se  refugió  un  puña- 
do de  patriotas ,  escapados"  del  fuerte  de  Juan  GHego,  sléüdontlf^ 
vilmente  asesinados. 


—  $97  — 


Glllf^. 


El  dHDi  es  c¿li<)o  pero  sano,  y  cvaadoalgim  margariteüo  se  en* 
ferma  en  Cosla^Fkme,  ré§reaa  á  su  tierra,  y  eile  cambio  es  siifr* 
eienle  para  sanarle* 

BSTAOON  DB  INTIBRAO. 

A  fines  4e  mayo  Hnere  mi  poco ;  en  jnnk) ,  j«Kf  y  agmfo  es  ve* 
l»no;  Tuehre  á  llover  en  setiembre,  <|vee8  la  época  del  invierno 
en  esta  isla ;  pero  las  agnas  no  son  Un  abundantes  «omo  en  la  €oi« 
ta->Firme,  en  términos  qoe  los  babílanies  hacen  sos  grande»  sieoí* 
bras  en  octubre.  En  noviembre,  diciembre  y  enero  caen  los  ñor* 
tes,  pero  estos  también  son  mmi  débiles  y  generalmente  hat  esca* 
ses  ¿B  agoa  para  las  coftecbas.  Los  caminos  son  bnenos,  paes  dea» 
provisto  el  terreno  de  grandes  v^^etaies,  pronto  se  seea  por  la  faena 
del  sol; 

nivisioÑ  náarróaiAL. 

SeiNide  lá  peofincia  en  éss  eantenes  qno  son,  üMÓefén  y  Not» 
te:  tienen  -I  ft  parroqnias  y  otros  tantos  veeindarias ,  en  los  enaies 
se  cultivan  eafé,  calle,  maii,  ynca,  plétanos,  fríjoles,  lames,  neo- 
mos,  caeos,  algon  cacao  y  vsfrías  frutas. 

La  población  de  esta  provineia  se  puede  dMdir  asi :  5d/Í00  ^ine 
se  dedica  á  la  agricultura,  45/toe  á  la  cria  y  58/l#0  al  eomereio, 
pasea,  iCtc. 

8e  hace  con  hs  provincias  doCmnaná,  Baréllona  y  Caritas,  ca« 
la  Ma  de  Trinidad  y  1m  eolodias  de  Barlovenlo ,'  Rearando  á  elfos 
pencado,  caf^,  iimacaa,  galKnasy  fartugae»  y  trayendo  mercan* 
nías -seets,  lieeres  y  ViveresL 


.  '        '  •  i  '    I  ' 


CAfnon  ps  tf\  AsuncioK. 


>      '  .       í  o  |.:  ¡'     ■ 


La  dudad  dte  la  Asundbn  e$ti  situada  en Hd  vallédiio  fbnúado 
por  el  riacltiielo  de  sü  nonlbré,  cuya»  vegas  cubiertas  de  vtshÜiira, 


GOQfrastan  admirablemente  con  los  cerros  pelados  y  redondos  que 
casi  circundan  la  ciudad,  en  uooideJos  cuales  se  ye  el  antiguo  cas- 
tillo que  la  dominaba.  Est^  la  ciudad  á  1 29  v^ras  sobre  el  oivel 
del  mar,  del  que  dista  una  legua  por  el  lado  de  Gqacuco^  doadv 
desemboca  et  riachuelo ,  teniendo  el  puerto  de  empalar  a  -I  4/5 
de  legua. 

Este  puerto  es  el  pvíilflífiAl  i^h  t9ltyy<#^tá  defendido  por  un 
viejo  fortin.  La  Asunción  es  capital  de  la  provincia,  se  eocuentra 
en  la  látltod^N.  f4*U'  5^^  éa  léteti^tod  S**'*'  }íBíf''á\0.  ^éeH 
rMaffe^ ^' ominas.  La* Mctrgailta-  Pilé'd«9ei!ibiefl)a  per  Ooldá  a»< 
l€jrc«ervl*jé'en  IfWt  |íem  Orfelfibal'^itert»  wa  ü%o  ile^es  pmA 
p<ir''tthi'(9la  Y  la^Ae'f5uagiia  y»TeeffM<}  las  priffieras  perlasrqve  ftre>- 
rtw  dM' N««Vo£>1IMÉdb  á  fi)iirefii.  La  feMa'de^  ^elffas  <l9  C^a^mi 
MM'^iie  e«M  paií(o'<Btíse  ^éotti^^^hf^iye^mé  cíe^  basltiilé  i«np«f^ 
ttftcíá^-He  m«fiH%  que  eti  eí^étta*  épeea'^argarfla  letefondwi  ^ 
él;l£n  ñ^smi  meGWcüill^  4  Wtfette '  vKilili»»;  -dlñw  tf»  la  l^spcHi 
ñola,  que  poblase  la  isla  de  Margaiita  y  levantase  una  fort^l^Mr; 
y  al  siguiente  año  se  peri^Uió  al,  y^^QX  dQ  Guagua  poder  esta- 
blecer  en  Coche  ganados  y  labranzas.  La  deca  lencia  de  la  Nueva 

GfMiE,  faMnÉn e;i  4au>i>»f»» > éa  |iáM»<«4i  Mt^f^a^  M  iiri- 

ri;^jQiifciÉiiffNI»"ál  IftiMÉÉlw.fMNfla  fittfifl.fmert^dlel  üapárto 
Santo,  en  Margarita,  fué  ciM^tlrtmirfQteáiMiíii^ 

n>i¿pini}pi8t»  é«|iM5  v^  liáli)  icle  ^gatttdcK  M.tliliii^fi^  4900  ^tí 
existe  la  capital  de  la  república.  En  ^56t  desembarcó, <4ptft49 
Aguirre  en  la  ensenada  de  Paraguachí ,  que  bol  se  conoce  con  el 
nombre  del  Tirano.  Prendió  sff  góberródor  D.  Juan  de  Villandran-- 

IMri)#s,^rJlMMÍJpifdp,4tVviaf Mt^il  0kMmÍ/9f  f  ^iOü^t  ^  iH^ 
iafi^a(ttcíiH;i»ttf8»  |«ft9M8  f^tA$fti^NtaMfl»4iam't('rf)|ti4^^| 
George  Somers  saqueó  la  isla  de  Coche ¿fyfiA^^{^4íífi{ht4liíífÍll 
destruyeron  los  esiablecimientos  do  Margarita.  En  esta  isla  hicie- 
ron sos  hijos  prodigio#4U  iMHof'  pMmMM  el  yugo  de  los  espa- 
ñoles y  se  vieron  la  mujeres  qi^udif  i  la  defensa  casi  á  la  plir  de  los 
hombres.  Bellas  páginas,  gloriosas,  reserva  la  historia  á  este  pueblo 
heroico  que  supo  resistir  a  lós  esfuerzo^  ae  sus  opresores  y  conser- 
jv  Bn  Ips^^eiBgf]^  )l^SJ4»t^f)litf)$o|lau^§Wí^^J<(.l•^qta^l,¡^^ 


Margarita  por.su  posición  cerca  del  coDlinente,  está  como  de 
avanzada  de  él ;  y  sii$  íh^oi»  y  i^nMMí^en  del  territorio  una  cia- 
daüela. 

SÁ  fcrfMsia:de»!laB^|i«l)laf'(|ue  Ivímcícmit  tMibne^ilo  m:  hade  ya 

ICOÉ  I^IMÑICto  •il.fltlS  CO9|lS,:«I.C«ÉriM0,  «Ift 4lklllÍÍaB^IIMI''de 

p»tetiprQftMela  fí(|0ei»d«'»ipirlliglHlf«lii4aMef«que«0ff  r|^ 
.  per  iairépláos  i) me  y  ^fiaiioai^  y  ge  (han  ^^leobo  *ÍBÍii^(»  wM  4a 
.giHfrade  taliodépéiMleiloáú 

St^DC'^Mflipiteirídos  füilaMBéirfiefMdtB  nUatt^^tTMom 
pocDá  IbgAt»  dt  mIiívo  }  %ii%\»  ItatiMto  MHresiéritot  oim  «Mwir^ 
poiaa».  oelUlmre8';>w^  ^por  esa  la  Wlfta  en  k  awvftttia  de  'G^i 
éerrcHMSP^enpu  fepÍüídaRÍ>fs^  MldMte-jpaia  fvoieer4foiui  p«íMiialÉli 
de  48  Jii0<  hábiaíiilfá.  La  AsaiieMn  <«^la'  icildMM;i|i  4e)  «obMM- 
•dar  :  íltléía  «ii/capfeálo  dflVeooUilQt ,  «otMOftido'  acÉ«»MiiK6'«ti 
imlágíft/liat  adtaiasMMi mtmH 4# pMMjóé ^fin iaii«Mi»fBHe§^ 
-^rt»|Miia  Y  »pf  .ftdtaHáe  <rio$  ,^estéi4o8ÍlitÍ>toime»oMigii«  ¿«0f>flf«e 
.de!eatmifD«.  liidéaiés  |l*  tefMiodiaaeíoiM»*  ^émtaii  4é  í9»^0tm 
lériiks^ift  pdUiiiM  0a»cMi<i'4Nm  fi«fioli4  ártfttiM»  y^fieSéa.  M 
tMMi  m'.fe^ftpMt^  fcfeii«auMBtwiiái',  tu«fM  0a«:*|iabttaiÍ0»^ 
:aiin  BaM;¿«itt«iiihfiBRKá^  4db  éesétei'lyidiKtria^ttttMiceloA.  fiti 
eitavIaiieriiveiéMslMnts  f«r4tt  «tM&iMsiiMde  |aí  aom. 
>  .La6'vpfEitaéMAsy«nnélf{Mpdpitiiit^ 
í|liPta.^iifeffc'¿s»'lMmitín  M.  ia  iriH»  dte  jQocba  ><|«e^pMMwe»»íAI 
ipMihJM,  Ltaahfgirtleftoi  lÉíi  iÉ^i\iiwiwfCi>i<slat  |ÍMei»s'T  ^^ 
de  ^000  personas  de  ambos. Hifiy  é0étiá9ieé9¿mMk^j^mfMí 
lürotnUdaéaéirto  pn*  ^a.áiMlfc1e.,a>rtl»n:  inuratai^WMl  «Udia 
una  red  de  200  varas  de  largo^  y.^hara^stMiiee^VÉtiiül J  ikMl 
no  saquen  4  O  ó  12  quíntales  á  lo  menos.  La  ^  contiene  tanto 
pescado  en  ocasiones ,  que  tienen  que  cortarle  los  lazos  para  dejar 
escapar  los  pezes ,  pues  de  otra  suerte  no  podrían  nunca  sacarla  á 
tierra.  Se  cogen  diferentes  clases  de  pezes ,  siendo  la  liza  el  mas 
común. 

Las  salinas  forman  otro  objeto  de  lucro  para  Margarita ,  pues 
sirven  para  las  salazones ,  y  dan  la  escelente  sal  de  espuma. 

La  población  se  aumenta  considerablemente  en  esta  isla ,  y  gran 
parte  tendrá  que  pasar^l  continente,  pues  sus  tierras  apenas  dan 
ahora  lo  necesario  para  sus  habitantes. 

Las  parroquias  son  :  Asunción,  Robles,  Fampatar,  Porlaroar, 
Espíritu  Santo  y  Paraguachí. 


—  690  — 


CAHTOÜ  DtL  KO&TB. 


Lt  ciodtd  del  Norte  «stá  ikntdt  á  la  iHora  de  252  yaras  en  an 
llano  que  fa  laacmiiéleaMait  dHBkMtfesdo  J»eia  al  pvato  de  fe 
laar  en  donde  eaií  al  lagania  pvarte  da  la  isla  naart^nido  JnaD 
Giiago,  del  aual  diaui  5/6  de  liegna.  La  posieion  da  esta  ciíadad  es 
bella  y  pintoresca;  por  ana  parte  el  decÜYo  del  Talle  deja  Ter  la 
grande  estentíon  del  mar  Carilie  y  cnyo  horixonte  pnroce  anido  á  fa 
bóveda  edesle  ^  al  opuesto  nunbo  se  descabre  la  vista  del  cerro 
mas  elevado  qoa  cobre  la  «apílal  de  la  isla ,  en  el  coal  se  goza  de 
lui  clima  inénoa  cálido  y  de  nna  vis4a  por  todas  partea. sorprén- 
dante. En  la  9  por  donde  qníera  que  se  vuelve  lik  vista  bai  cerros 
allí  enteraniente  desnudos ,  aquí  veatídos  de  pija  y  mas  idlá  ador- 
nados de  bosque  ó  cubierCú^  de  plañías  cultivadas ;  y  lodoa  domi- 
nando 1^  Uannra  sembmda  de  caseríos ,  cuyas  habitantes  recao^ 
dau  con  placer  qne  las  huestes  jto  Morales  y  de  Morillo  no  llegaron 
á  pisar  sas  h^gafea,  En  asta  territorio  se  encnenira  la  gran  laguna 
Arestíngn»  que  apenas  queda  asfiarada  dd  mar  por  una  eatredia 
<;¡nta  de  médanos^  y  al  opoasto  as  eleva  el  earro  de  MacMiao  con 
picos  agudos  y  peiiaseosos.  Soa  cuestes  áridas,  cubiertas  de  plantas 
espinosas  y.  sirvan ,  sin  embalgo ,  pan.  la  cría  deeabras  que  abun- 
dan consideraUeaieate^  k  este  caáton  pertenece  la  ida  Zanquilla 
y  el  grupo  de  los  Hermanea,  máénims  las  oKm  islas  se  oansideran 
canso  d^endientea  del  ioanton  eapítai. 

Lis parrnqntei.san :  Notie ,  TaflBfiguai  Itum Griego ,  S«  Joao ^ 
MtooGonaáteny 


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•  i    #  ^  .  ^ 


TABLA  COMPARATIVA  de  la  posición  astronómica  de  ias  cabezeras  de  at 
tierras ,  terrenos  baldios,  población  absoluta,  relativa,  hombres  de  armas,  esét 
tivan  para  la  esportaclon. 


NOMBBB 


»■ 


posición  ASnonÓMICA. 


LAS  CABUnUi 
DB  CANTÓN. 


Latitud 


norte. 


Altura» 
«■    Taras 

sobra 


Longitttdal  B. 

del  neridlanol  el  lúrél  I 

centi- 


Tempe-  |  CALIDAD  DB  LOS  TBRKBXOff  DB  QQB 
SI  GOÜPOIBK  LOS   CAJITOniS  0 

..  LB6UA9  CUADBADAS.  \ 

media 

del  ter- 


de  Caracas. 


AftmcioD 


Norte. 


U^.  f.    8" 


lio.  5'.  81" 


del  mar. 


grado. 


8«.  7*.  88" 


IS9 


98».  if 


8.    3'.  16'' 


S9 


Total. 


'.  11     8 


BH 


ton  9  su  altura  sobre  el  nivel  del  mar»  su  temperatura  media,  calidad  de  sus 
vos ,  distancia  á  la  capital  de  la  provincia  y  de  la  república ,  j  los  frutos  que  se  cul- 


MdiDcro 

d«  1.  e. 

que 

s«  creen 
baldlM. 


«MMMMWMtakMNMMHMMiMi 


2  V. 


Va 


POBLACIOM  DB  LOS  CAHTOIWI. 


ToUl 
déla 
poblaáon. 


i) 


8*3SS 


9965 


18.90(1 


Población 

relativa 

por  íegnaa ' 

cuadrada!  • 


^- 


Hombres 

ütilea 
'  para 
las  armas.  |  esclavos. 


«96 


416 


4.947 


DISTASQAS 

rt Ir'. 

A  le  eapital 


A.  la  capital 


provinaa. 


república. 


H     mam 

f  -  •■«■a* 

para 


"*^^^''''**^^*    xí^rtPORTlClOH. 


700 


800 


1.803 


186 


91 


éÍIi       -JP  ^ 


tt7 


»  Vd 


93 


95  Vé 


Gafé ,  caña ,  oocot  7 
cacao. 


Gafé,  caña  y  ooeof . 


TT 


—  604  — 


láBLÉL 


BB 14  $Mmmk  MI  iM  « WMt  MI  hk  wm^mw^ 


ífómbrti.      Taras, .      8erra$Ha$.    I      K&mkres,        Vara$,      Serranías. 
ltS4...r..l  tfirsariU.fCopel •  fSlt. Vargtrttt. 


TABLl  MI  tOf  líos  Bl  4*  <ku>lll  DI  Vk  PAOYinClÁ. 


HiMiifrret.      S^oñtoi,      B$$ñgMe.\     Hamkraa.      S&ffoMeiM*     Bambas, 

AsandoaJ Copel.. ..••••  al air.w.  fciii .«I!»pei. ....••.  «Inur. 

Upirtotetta....,  id H.     iTacarigna.. id id. 


t 


b 


«r  <Í» 


PROVINCIA  m  Géktkm. 


'*       ■» 


#      • 


'aH:«AQQH  Affg^mámfk  w^vmon  T  fonación. 

•  •  •  t . 

• 

Esta  proyu^w  80  eo,  ciientivii  íp,  í<>  8'  á  JO^  2'  de  latitud  N.,  y 
ettire  2«  9'  al  O.  y  S^  45'  al  E.  del  meridiano  de  Caracas,  Su 
figura  eg.flioi  irrtfular,  encierra  terrenas, generalmente  cilidcMi^; 
algunos  frescos^  ninguno  frio^  pocos  secoS;  mochos  húmedos^,  sanos 
en  ^rañ  parte  y  otros  enfennizds.  Esl^  país  es  el  mas  imponente  y 
majestuoso,  así  como  es  e(  mas  grande  y  desierto  de  Venezuela.  Es 
la  patria  del  gran  lago  fabuloso  de  Parima,  de  la  ciudad  suntuosa 
del  Dorado ;  es-  ia  tierra  <iue  dio  nombre  á  todo  el  yasto  territorio 
de  las  Guafanasi  por  los  indígenas  que  habitaban  entreel  Caroníy 
la  sierra  Imataca ;  es  él  pais  por  donde  corre  uno  de  los  mas  gran- 
des ríos  del  globo j  separando  del  resto  de  Veneiuela  y  casi  circun- 
dando un  Tasto  territorio  erizado  de  serranías  escarpadas,  con  lla- 
nuras cubiertas  de  frescos  pastor  y  bosques  inmensos ,  habitados 
por  tribus  salvajes  de  usos  y  costumbres  diferenteS|  que  represen- 
tan la  infancia  de  las  sociedades. 

Kl  máumttn'de  E.  á  O.  tomado  desde  la  boca  del  Gnyuni,  en 
el  Esequibo>  hasta  el  punto  del  Apostadero,  en  el  rio  Meta,  tiene 
una  ostensión  de  241  leguas.  Su  ancho  de  N.  á  S.  es  de  -150,  desde  la 
mitad  del  cano  Matoraca  (por  donde  en  invierno  se  va  embarcado 
del  Gababuri  al  Barima  y  Pacimoni)  hasta  la  villa  de  Calcara  sobre 
el  Orinoco.  Tirando  una  diagonal  en  dirección  del  S.  O.  al  N.  E.^ 
desde  el  punto  en  que  coincide  la  línea  Avisoria  con  la  Núeva- 
(]rauada^  el  Brasil  y  esta  república,  que  es  en  las  cabezerás  del  rio 
Mamaci,  hasta  punta  Barima,  en  la  boca  del  Orinoco,  hai  una  dis- 
tancia de  235  leguas.  Calculadas  las  leguas  cuadradas  de  esta  pro- 
vincia, resultan 20.1 49,  enorme  ostensión  comparada  con  las  demás 
provincias  de  la  república,  porque  todas  ellas  juntas  solo  tienen 
15.802  leguas. cuadradas;  así,  pues,  la  área. de  Guayana  escede  al 
resto  de  Venezuela  en  4347,  y  se  puede  decir  que  esta  provincia 
os  tan  grande  como  las  otras  doce  que  componen  la  república,  y 
ademas,  un  espacio  igual  al  que  ocupan  las  de  Caracas,  Carabobo, 
Barquisimeto  y  TrujUIp.  Sería  todavía  mayor  la  cstensión  de  Guaya* 


oa  si  96  comprendiese  en  sus  límites  el  territorio  entre  el  Apóporis, 
el  Yapara  y  el  Gaamogí  .49fi^iit«r  ^imffXk^Ui  Cababari,  segan 
los  tratados  entre  España  y  Portagal.  Entonces  se  anmentaria  con. 
5.600  legaas  qae  ocapan  los  biasileuses.  También  aamentaría  so 
eslension  si  se  tomasen  por  límite  las  cabezerasdel  Esequibo  y  del 
Rapananíf't  MftrfáW  eété-  tá^  qtie  Wptiisít  'i  la^Méliilnrveciaas 
2iii'00«  Saneando  este  número  con  el  anterior  se  tendrá  ana  área  de 
dOOO  ].'  c.  que  Kabria  qne  reclaknar/lb  que  Ifartk  <^tie  está  j^rovin- 
cía  faese  una  vez  y  dos  tercios  más  grande  que  él  restó' dé  la  répt!- 
b'lica.  Pero  si  tan  grafrde  és'ést*¿  pais,  su  pKoMadon  Wmtii  escasa, 
y  puede  estar  en  páraTéto  con  la  peqtie!íá  íslk  dé  Mirgarife,  qué  solo 
tiene  55  líeguas  cuadradas  ;'bien  entendido,  que  tío'secomprettdefi 
en  el  cáTcuIó  fasLÍríbus  de  ididíós  qne  víVen  en  una  satvátóTtiáépen- 
dencia. 

De  las '^.í  49  se  íelíen  cónsícleW  46t*o(Ítf  recorfíd&s  y'ociipátlás 
por  tribus  independientes ,  que'  viven  delS  pesca  y  <fé  lá  máftitaí 
harinosa  de  la  palma  :  por  asociaciones  p^üeBás,  qne  cúlRvan  la 
yuca  y'erplatáno  a  ló  íárgo  dejas  riberas  tfé' los  rios,  peádindo  y 
cazando  en  las  lagunas  y  seívas;  por  ttri)us  féróze^ ,  que  v^gan  en 
las  sabanas,  man  (emendóse  de  las'friíhaisfeílVéstrés  que  tés  propor- 
ciona la 'gran  familia  de  ías  palmas,  y^tfé'fá  caza  dié'váfías  especies 
deanimaleSf  £|  número  de  lodos  esíóá  indfós  pué(!í¿  áscén(térá 
4^.040  j.pobl^íon  que  esfaria  en  razoíí  d¿  ¿erca  Set^lj^'pórh- 
gua  cuadrada  dé  ías  recoixiáas  per  ellos.  Éltesto,  fcíabltaiíb  t  cono- 
cido por  fcís  vecinos  3e  ía  jGuayaná  ópórttidí^fetias  ciVflfeados,  es 
un  espacio  de  4149  I-c.,,y  ascendiendo  süpobfócfón  á  ÍSj45Í  (de 
la  cual. la  nútad'soii  indíos)j.,esfafiáñ  én'  faíoú  dé  5  ^f2'por  cada 
legua  cuadrada.  €   ..     . 

Renpicudo  las  dos  jcantláaáes  de  leguas,  y  Iá¿  dÍJS  cféí  baíiámtes , 

'•f  ''i  '^».  "  r     ■  , 

no  aicao'/arian  entóneles  sino  á  2.Í  por  legua  cuadi^dá.  Dé  fe  can- 
tidad de  20,  Mí  se.  gradúan  l9:4656a!días.  *''    ' 

"»••'*  •  ;  /■-    '  .      '  '       ;  .  ■  *  *         •  j. 

,      ;        himJMSX   COIS  FINES» 

••       •     •        *        •  »    ,  ■    •      '    {    ^  ■  '      .♦ 

'  '    .  ■'.•'•. 

Confina^  esta  provincia  conJal^  de^Cumatiá^^ftálPcélonáí,  tfáráéas  y 
Apure ,  y  ademas  con  terrenos  desierto*  de 'laf'PírieVá  Granaba  del 
imperio  del  Brasil' y  d¿  la  fiuayana  íngléia¡  "' 

Desde  la  Boca  del  Vagre^'  la  mas  óccí^eñítat'JÍéíf  grati  ildltá*'(iM'tí)ri- 
noco;  va  el  límite  por  todo  el  caño  Mandmo  basta  C^tcü^dd  fikrriln- 


Ofev»#co'hafl»lái  mühméom  áá  9k>iérMs(fliBoA<^  atfdttide  ter^ 
mina  It'  fít«i4iiÉhp4^  Cviiaiiá^imiftaQP  iáid»  incdkifln;  SL'«urto 

'  déi  OrteQeO'dénMMC-Uir0f(i'4ei^»f^  Imta 

la  boca  del  Saata^  en  c^ff^ipm^eMífá^iáMiáatlká^tC^ 
misnu)  Orinoco  delinea  siempre  los  límites  con  esta  provincia  hasta 
la  beca  del  rio  Apure.  AlliBjOippidMnr  l4>p^<((^ftn>ine8  con  la  provincia 
de  este  nombre ,  siguiendo  el  curso  del  Orinoco  hasta  la  boca  del 
M«tft :  €St»^o  *vé<d«ipcMi  éki  MiMmfLháséLdiifmÉ^  Ummáé  el 
ApMtaác^,  wmr^tt'M^M  Qmf9t4áéo.  UÉüi  mctAtqmi^iske.ét 
m^Mítimaf  ApOMdeio  ^knigv  Í|o<«^  aVXh><W>dvOaMi),  va^  al^S. 

I  por  terrenas'  siWaJái  r  ámméádm^  p«C*iiiiÉNBt«ft.ái  b  N»Ta 

Gramida  j  atMrftesa  el  VioNéi^  d-  rte  €««»»  nfwdktteiila<  mas 
arrtla  úéioál»  tíiMiM^M,  ciMaiHÍ0kportnttadsl»jgMfl¿e!  iala  ám»* 
naYtBBi.  Be^pufeft  «igtiifeÁdf^tsieiMpfe  et-itaínBO  ibandialiot^  la Jima 
craza  el  fuiiMa^eo'  el^  rMidil<MainÍMHicov  ei  Ctoinfarwfii'faoca»  dd 
caito  Napiarí)  y  t«rarfii»^ai  iM-^afewas  de'  ütoaachíj  tpasaadQrjpar 
las  de  r9aqaiefii>é9imp«aa/:En.4lofi§tprdabi|f^^ 
frofUenr  eofl^el  mparid^  dal  Botaü'^  p«rHi]iten«i»}<finibad(rva*á 
dar  á  la  piedMi  Ceevt,  pvsMiAcrpQiite  oatonat  diriA<|iHD ^yTainD) 
que  caen  al  Guaiuia  y  por  las  de  Gimié,  f)GaioiF»Yiaaa^.MbnÍ4mare 
que  desHttbMaM  al  riOrUfitiiiMi  ^o  lifámá  .ItanMidtt  taubiea  Ii^iiá. 
Atra?esaDd(ve^-Ri9-fle§ros;  flMinte  á  k(  piedttdd  £i<»clii^.ya.por  un 
terreno  étBtev^  áUt  fiilta!ÍMM:caÍíii  Malta  nn^:  que  ai  Mt  uetmMes 
del  rio  Cababui4  rdeib»'part«'d^'«Í09^gM»y'tai  «iivte  al  Baoia. 
Desde  allí  sigue  \^'\kim^»  U/^-i^mpm'áé  Iss^ieoron  Oipi',  Imerí, 
Gnai  y  UovrttsiA>,'«trañreMMéoel  daoiimiqaa  eofnviáa  pr^  tierra 
el  río  Mftparif  eéi»  «1  €aatáno^;  y  for 'Idr'sierw'Ta^peeó'ipiQa  las 
crestas  úé  ia'serranfe  défarlofai  efttsegtiiSii  .'pls»pilr'U>a^GefI:or 
Putttíbii^,  VárioMÍ/JIfásMM^  Mét«taHif  AriVao«f  q«e  sa  ao^^áJa' 
sierra  de  fteararma ,  y  p6r'esitt>eéi^íWqrQ>4a9Mi  'iMMíbntas  r  ^« 
hasta  eo«ónmiP«l*fMp<}fi«iiA>en>s«id^6«t)lNiiiadie^  aa^at  foé<fttílMP, 
pasando  pof'los';c(H*ros<  ^MafWBápaas^  wá  'm^^  (fanilaa^apnis  qve 
vierten  háehrfor^t  téfrfiUkies»,  cftte^htn-Áaianíiihaala^dliSdidaa 
por  la^  cumbos  dfi  laS'isiWiitts^tditoadAs*  AM^taíia9iirla.lraiitara 
con  el  fifrasiT  y  entra  ki  dér  la  Gitat^iM'kfglsía; 

ht  línea  se  deoMfta  por ^  fti*  márgei  ^i2({itlarchi40M:»iqtfílio  basta 
sutonAnencia  con  el  Glvyiftti:  P^'i^ ootvoéaestairio va á eoet^n* 
trar  la  boca  del  rio  Tupurú^  cuyas  aguas  remontan.  Se  dirige  á  las 


láBiko,  to«to  «I  id»  !**•.«•  tofc««<W'i»íw»iwi.Afw 


jK»oai  «A». 


le¿a  <•  «»Ae  ,«•  Ihut  ««bo  Mili».  Fwnte  «««**•»  «PíWMMxa 

la  boca  del  «io  lldwiCD,  qiieeg  el  «mito  4e  1*  Gw»*-  D*»»»*  "" 
.«e  M«  al  N.  I»  «Mi»  b*ia  f  MB  «Weda.  harta  U  poBta  Q»c»lc8, 
.,ae  86  dtttiBgo.  por  famar  ■•..eawwid»  «I  S.  f '««W  al  O.  uoos 

cocal»  iwi  atoa  qaeaw  loa  iM**^  JM«»  M«*«te  cotíapQ- 

blada  e>  k»  dam»  de  Mai^ea.  D«^  difita-íW*  W  «1 W.  íl.  .0. 
y  N.  O.  huta  mmta  Caaima ,  «iak»  boosi  Wjo  rewM»oqm»ento  es 
iutenMota  para  le»  «|»  bajean  k  boe»  pande  del  Orinoco,  por 
no  haber  «Iro  puto  doadefioder  balkar  coa  «eiwidad ;  y  sn  con- 
figuracioaea.to6«|«ltocaWe,.iio  solo  par  lastrada  é  ebwíoe  pre- 
sente, SIDO  por  trea  eaniloa  ó  mogotea^w  m «tísUb  Üerr»s  aden- 
tro cooio  al  S.  O.  ai  el  día  e»  Maro-  .  . 
Al  N.  E.  4ee«ta  beea,  ««oá  5  letiM,  ae  halla  na  placw  de 

areoa  ima  de  2  í/í  braaas ,  y  PM*  «i»*rlo  «e  debe  te»er  cuidado 
de  no  baiar  de  lu  5  hram  de  tan*.  Deíde  la  boca  de  Cuaima  M- 

«oe  ona  costa  de  arboleda  pareja  5  rasa  «w  «e  eatjende  como  » 
legM»  al  N.  O.  ea  ^ne  «I  halla  la  pauta  Mooomoco :  á  esta  sigue  a 
costa  de  Sabaaet.  qoe  se  dirige  al  O.  «w  4  leguas ,  también  d« 
arboleda  pareja  mas  rasa  y  rnéao»  hondaUe  %w  la  W«*KÍ»r .  La  isto 
Cangrejos  tiene  en  sa  ponta  mas  N.  y  E- M  placer  de  color  de  cafe 

molido  tne  se  estíende  6  lega««  por  sa  parte  del  E.  y  como  2  fOi 
la  del  N.,  el  «wl  baee  peligreea  U  entolda  al  rio,  poesentre  «¡I  y.la 
costa  de  Sabaneta  se  forma  la  barra  de  1»  Bw  gnude  iiel  Orinqí». 
cuyo  fondo  en  b^ja  mar  es  de  í  5  pies  y  de  16  en  pleamar ,  lama 
suelta.  La  barra  tiene  5  leguas  de  N.  i  S.  y  algo  penes  de  E.  a  O. 
Desde  la  pnnta  de  Sabaneta  sigiM»  la  costa  de  arboleda  pareja  roas 
alta  que  la  anterior  con  dirección  al  S.  Q.  como  5  legua!»,  y  remata 
on  la  punta  de  Barima  ,qw  mw  de  tirmía»  á  esta  costa  fieguida, , 
pues  desde  ella  se  forma  »l»a  grasde  ensenada  en  <i«e,  se  i.iitfiF,»a 
el  rio. 


La  coéla  que  sigue  desde. la  isla  de  Cangrejos  pera  sotavento  et 
bien  distinta  de  la  anterior,  rasa ,  toda  quebrada:,  formando  dife** 
tientes  bocas  por  donde  desaguan  los  canos  delOrinocOj  capazessoto 
para  etníbaireaciones  pequeñas  que  tengan  prácticos,  pues  están  He- 
nos de  placeres  de  arena  peligrosos. 

Para  los  que  quieren  recalar  á  la  boca  grande  del  rio ,  recono»^ 
cida  que  sea  boca  Guaima,  y  no  bajando  de  4  á  5  brasas  lama  >  s^ 
seguirá  basta  que  punta  Burima  demore  al  S.  ^/4  al  S.  O.  y  se  baríl^ 
rumbo  sobre  c^  en  demanda  de  la  barra,  sin  dejar  de  sondar  pard 
conservar  et  fondo  de  lama,  aunque  sea  á  costa  de  poco  agua,  pñe^ 
es  preferible  barar  en  esta  que  esponerse  á  caer  sobré  el  placer 
de  arena  dura  de  la  isla  Cangrejos.  Si  se  cogiere  esta  calidad  de 
fondo,  se  girará  para  el  S.  basta  recobrar  el  de  lama  :  de  estemodo^ 
se  srgufrá  aproicimándose  á  la  punta  Barima ,  j  cuando  se  esté  cue- 
rno á  2  leguas  de  ella  se  avistará  por  sotavento  una-  isla  grande  de 
arboleda,  que  es  )a  de  Cangrejos  y  se  empezará  á  aumentar  de  rondi>^ 
por  haber  rebasado  la  barra  basta  coger  5  brazas»  En  esta  situacioii» 
se  gobernará  del  S.  O.  ^/4  al  S.  al  S.  O.  -1/4  al  O.  ptramantener  lar 
medianía  del  canal ,  en  inteligencia  de  que  si  se  cogiese  menos  de 
5  brazas  lama,  habrá  sido  aconchado  el  buque  sobre  la  costa  firme 
y  se  deberá  hacer  rumbo  mas  al  Q;  para  volver  á  la  medianía  del 
canal.  En  toda  esta  costa  hai  mareas  mui  vivas  y  regulares ,  que  se 
dejan  sentir  en  el  rio  hasta  Imataóa,  pequeña  parroquia.  Cerca  del 
establecimiento  de  ellas  solo  s  e  observa  por  los  prácticos  quettenen 
4/5  de  menguante  á  la  salida  de  la  luna. 

Desde  esta  boca  se  estiende  el  delta  ó  desagñe  del  Orinoco  hasta 
lo  interior  del  golfo  de  Paria,  quedando  esta  porción  de  costa  iu* 
útil  para  todo  tráfico  y  navegación,  pues  n(^es  mas  que  un  laberiiilo 
de  islas  bajas  de  fango  y  anegadas  en  la  estación  de  las  crecientes; 
sin  embargo,  diariamente  entran  por  Macarco,  Cocuina,  Pedernales^ 
Mahamo  y  Vagre,  goletas  y  balandras  del  porte  de  45  á  50  tonela- 
das que  trafican  con  Trinidad. 

ISLAS. 

llene  esta  provincia  un  gran  número  de  islas  que  forman  el 
delta ;  pero  no  consideraremos  como  islas  de  U.  costa  sino' las  de 
Cangrejos  y  Cangrejitos,  que  están  en  la  embocadura  occidental  del 
Orinoco ,  las  cuales  son  bajas,  la  una  mui  pequeña  y  la  otra  coíl 


—  I 


t 


una  estension  de  casi  legna  y  medía.  En  la  costa  entra  la  boca  de 
Cuaima  y  punta  Mocomoco  ;  hai  dos.tslitas  bajas  llamadas  de  Co-* 
Toctiro.  Cira  hHta  existe  en  la  boca  de  tfucnina ;  el  islote  llamado 
Hedoiido  está  en  la  boca  deMacareo  :  entre  la  boca  Capare  y  Cu- 
TíOltía  hai  otra  baja,  y  frente  á  la  de  Pedernales,  una  llamada  Pes- 
quero. A  la  salida  de  la  boca  de  Manamo  bai  dos  isíita's,  llamadas 
ik  Pfatb  y  á  causa  de  un  mineral  que  allí  se  encuentra  que  es  ana 
pirita  de  hierro ;  y  otras  dos  islas  pequeñas  en  la  boca  de  Vagre  ; 
ninguna  dé  ellas  es  habitable. 

UONTAfÍAS. 

Los  grupos  de  las  montafiías  de  la  Taritiia  están  enteramente  se- 
*ffa  rodos  de  las  demás  serranías  de  Vcncznela.  Es  un  sisfema  aparte  . 
-y  totiilnaente  distinto,  qtie los  geógrafos  conocen  con  aquel  nombre. 
rilo  es  una  cadena  contínuada  sfcio  un  agrupamiertlo  irregular  de 
ition tafias  separadas  nnus  de  otfas  poi*  planicies  y  sabanas.  Se  ven 
largas  y  estrechas  htlefas  con  cimas  peñascosas  y  corladas  en  pris- 
itaftií  informes  qie  van  en  diferentes  direcciones,  y  que  de  rrpente 
^  pierden  fen  fas  espesas  selvas.  Cerros  alios' y  unidos  en  grupos 
desjordenado^,  con  Taldas  rápf<íás,  con  cimas  desnudas  que  parecen 
tMminar  fas  llanuras  qne  los  circundan,  J  en  ¿üs  bases  se  ven,  co- 
i»o  arcliif>ié!agos  de  islas,  formados  por  nnas  inmensas  penas  aisla- 
idts  y  -agudas,  otras  redondas  y  muchas  destrozadas,  todas  de  un 
«sdlor  negro  y  sin  vegetación  ^  que  se  estienden  á  grandes  distancias, 
dejando  en  duda  si  aquellos  son  restos  debidos  á  la  descomposición 
lenta  de  las  aguas  ó  mas  bien  á  ahamíentos  parciales  ó  generales 
proteidos  pett  las  eclosiones  subtertáneas  que  hayan  levantado 
fa  stapet'Qcfe  de  nuéstri  planeta.  Promontorios  pequeños  asoman 
sus  penas(X)$as  cinras  sobre  tos  mas  altos  árboles,  como  monumen- 
tos  escondM<1s  en  los  bosques ,  otros  mas  pequeños  aun  quedan 
"WfuWOs  bajo  un  espeso*  follaje.  En  las  sabánaá  se  vén  esparcidas  pe- 
ñas enormes  quebradas  y  amontonadas  uná^  sobre  otr<-)s,  que  á  lo 
léj  os  parecen  reliquias  de  monumentos.  Al  considerar  las  sabanas 
y  bosques  de  la  Guayana,  parece  ique  se  están  mirando  las  ruinas 
de  una  antigua  c  inmensa  ciudad,  en  la  que  el  tiempo  solo  ha  con- 
k»  rvado  algunos testo^fnfon^s,  por  lo  que  con  dificultad  se  puede 
per  tíbirla  verdadera eSfnyctura  y  configuración  de  los  destruidos 
edificttOB^  y  m^nos  aun  la  distribución  de  las  diferentes  calles.  To- 


4» 


'4o  es  desorden  j  tonfti^ion  €n  el  sistema  de  las  iDontaüas  dé  'la 
PitriÉna.  ^n  embargo,  éxaminaodo  con  caidado  sos  masas,  analí- 

'lando  sus  ramiBcaclooes  principales,  se  adquiere  tm  resollado  qtle, 
«i  no  da  una  idea' exacta  dee^e  soelo' trastornado^  aclaira  á  tóme- 
nos sn  distribución. 

Par  litemos  este  inníenío  espacio  én  tres  grandes  trozos  que  lo- 
nmremós  )pov  el  curso  mismo  det  caudaloso  rio,  que  casi  en  semi- 

^fXíUlo  baña  el  terreno  que  los  contiene. 

Denominaremos  al  primero  de  esWs  trozos  primera  dirección 
(tel  Orinoco  y  "reparación  del  Casiqviare,  En  este  íerr(*no  la  sier- 
ra Parima'es  la  mas  larga  y' corre  en  la  direccfon'del  N,  N.  O.  [íor 
50  leguas.  Al  estremo  del'S.  e^tá  la  n'erra  Tapirapeeó  y  al  opuesto 
N.  los  cerros  Variraa  y  Masliíaii.  Su  mas  alto  punto  es  el  Piitubuire 
de  i  .49*2  varas  medido  por  Mr.  Schoraburck.  Sale  de  la  sierra  Tía- 
piraprcó,  la  de  Un  turan  que  se  pierde  sobre  el  Siapa  ó  Idapa.  Los 
^rroíde  Üeumsiro  facilitan  un  pasaje  por  tierra  para  comunicar  el 
rio  Castaño  con  el  Mararí,  tributarlo  del  Padaviri  en  el  territorio 
brasHenite :  los  cerros  ücuttjsiro  con  loí  de  Gnai,  Imerí  y  Cujh'  se- 

-  paren  las  aguas  que  eaen  á  nnestro  territorio  de  las  que  van  al  del 
Brañl.  por  un  espado* de  45  leguas. 

La  sierra  Mei  y  elcerro  Samtfro  parecen  unirse  aonque  separa- 

•^dos,  á  los  dcr  Darieapa,  Mapaya,  Idaya  y  Parimoni  que  con  una  hi- 
lera de  carritos  forman'  los  esttremos  declives  del  terreno  por  donde 
corre- d  braio  Casiquiare. 

Loscerros'QuIíjuirlfM,  Gua>aba,  sierra  Maraguítca  y  cerro  Düi- 
da  parecen  un  gran  ramal  que  está  dividido  por  el  Orinoco.  (!erba 
de  la  separación  del  Casiquiare  el  cerríto  de  Cameronara  con  los 
ceñiros  6euinabt,  Maguas!  y  una  protongjda  colina  que  después  ^e 
«leva  én  los  certos  Ouasacavi  y  Guanapiare,  delincan  las  cfnmbi'es 
que  separan  las  aguas  que  caen  al  Casiquiare  y  Rio-Negro  dé  fas 
qiie  tan  al  Oñnoco  y  Atabapo,  presentándose  á  larga  distancia*  y  én 

' 'dirección  al  •$.  los  cerfos  Saquira,  Mavicurey  una  colina  entró  «el 
Ataba^  y  -él  litírida.  El  pinito  mas  elevado  de  citas  masas  eíel 
ÍHéraguaca  de  8 .  0<)6' varas. 

El  segundo  troxo  lo  llamaremos  primera  inflexión  del  Otinocüj 
la'euál  ae  eféctiia  después  de  su  Union  con  el  Guaviare.  La  míais 

^  larga  cordillera  es  la  de  Maiguaffda  que  corre  de  E.  á  O.  y  despties 

tdé&  á  N.  por^tFfeguas,  tomaiido  éf  nombre  de  serranía  Goelii- 

*ieny»]t  la  cabesrm  deeste  Ho.  eorre'en  ¿egufda  ál  N.  0¿  y  dIesjMies 


~  «12  — 

al  N.  por  50  leguas,  formando  loa  cerros  de  Ualo  Hilaria  y  Pastora 
y  termlnaado  cerca  de  Ja  boca  del  Caara,  Casi  paralelo  al  curso  del 
Orinoco  aunque  en  l^ana  disUncia,  vemos  las  masas  separadas  de 
los  cerros  Cochamacaríy  Qyeneveta  Mariveni  Yao,  (laneva^  Aeiía 
que  terminan,  en  la  serranía  de  Guamapi,  cerca  de  las  cabe^ras 
del  Gucbivero«  Paralelos  á  estas  masas  tenemos  los^cei  ros  Yacapa— 
na,  Nefia,  Yumari,  serram'as  Mapicbí,  Guayapú,  Vadipú  y  Gerba* 
lana,  que  parecen  una  sola  bilera  aunque  destruida  en  Yario$  pua«* 
tos,  y  que  acaba  en  Calcara,  después  de  recorrer  una  dii^cia  de 
80  leguas,  Olro  ramal  paralelo  tambieq  y  mas  confuso  que  los  an- 
teriores ,  se  puede  decir  que  costea  el  Orinoco  :  sus  ma^  grandes 
masas  son  Siquita^  Quecanjuma^  Calilumini,  Ovana,  SipapOi  Cu^ 
navana,  Calaniapo  y  Pena,  siendo  en  este  ramal  en  donde  están  los 
grandes  raudales  del  Orinoco^  llamaos  Atures  y  Maipures.  Aeba- 
jindose  luego  Jos  cerros  y  subdividiéndose  en  pequeños  é  innume* 
rabies  cerritos  formaa  las  serranías  de  Santa  Borja^  Caricbana  y 
Barraguao,  terminando  en  la  Urbana. 

£1  (ereer  uozo  lo. llamaremos  seguuda  inflexiim  del  (kinoco 
la  cual  se  efectúa  después  de  su  umon  con  el  Apure.  Los  cerros 
Merevari  que  obligan  al  Gaura  á  bacer  casi  un  semicírculo,  Jos  de 
Araba  y  Paya\^mú  que  se  unen  por  el  N.  á  la  sierra  Maigualida^ 
{arman  el  gran  raudal  del  Caura)  llamado  Arare^luri^  mientras  ai 
S.  se  unen  á  la  sierra  Pacaraima,  mediante  el  cerro  Arivana.  Aquí 
es  el  portaje  6  arrastradero  por  doode  se  puede  pasar  por  tierra 
del  rio  Parima  que  cae  al  rio  BrancO;  al  rio  Caura  que  deseizd>oea 
al  Orinoco.  La  sierra  Pacaraíma  corre  casi  40  leguas  al  E.  :  diri* 
giéndose  en  seguida  al  S.  E.  por  24,  retrocede  casi  al  S.  por  20j 
y  volviendo  al  E.  termina  después  de  una  cadena  de  \%\  leguas, 
en  los  cerros  de  Macara^ns,  en  la  boca  del  Rupupuni  sobre d  Ese- 
quiho.  Paralela  á  ella  están  los  cerros  Oris ,  Qirapa,  la  sierra  de 
este  nombre  que  se  ramiílca  al  N.,  la  de  Usupamo^  la  -si^rá  de  Ri-* 
noeote  que  se  ramiCca  al  S.  con  los  cerros  Irutibub.,  Arnacarima, 
Jtfarinia  y  sierrra  Aoraima  que  da  origen  al  rio  Garoní.  Esta  sierra 
se  une  á  la  de  Pacaraima,  y  de  ella  salen  varias  hileras  desconoci- 
das que  se  pierden  sobre  el  Esequibo  y  el  Cuyuni,  entre  las  cuales 
se  conocen  las  sierras  Camoran,  Yeoamo  y  Arimagua*  El  largo  4e 
esta  interrumpida  cadena  se  puede  gr:adiiar  de  i  00  leguas^  una 
tercera  mucho  mas  nncUa  que  la  descrita,  peromui  iatecrumpiday 
con  cerros  esparcidos  en  de^órd^^^.es.la  que  se  Cimoce  con  el  noad)re 


—  615  — 

de  cerros  del  Orinoco  y  sierra  de  Üpata  é  Imataca.  Las  cerros  Ur- 
bana, Tacato,  Tnragna,  Arimacarl;  Torupa;  S.  Félix ,  Topunto, 
Parida,  Pao,  Garaqnefío,  Tocóina  y  Arlmagna^  aanqae  entre  sí  se- 
parados, hacen  parte  de  la  misma  serranía,  qne  mas  nnída  se  maes- 
tra en  la  Vieja  Gnayanay  en  Upata.  Las  sierras  Piacoa^  Merí  é  Ima- 
taca hacen  parte  de  la  misma  cadena,  cuyo  mayor  largo  se  puede 
considerar  de  240  leguas,  desde  el  rio  Caura  hasta  la  costa  del 
Atlántico. 

El  primer  trozo  descrito  es  la  región  de  los  bosques ,  cruzados 
por  aguas  negras  y  blancas.  En  estas  es  la  mansión  de  la  plaga  de 
insectos  la  mas  tremenda ,  en  aquellas  falta  totalmente.  Las  aguas 
negras  son  límpidas  y  trasparentes,  mientras  las  blancas  son  sucias 
y  turbias.  En  las  unas  se  refleja  la  imagen  de  los  objetos  como  si 
estuviesen  vistos  en  un  flel  espejo ,  mientras  en  las  otras  no  se  ven 
sino  confusamente.  Aquí  las  aves  pescadoras  encuentran  donde  ca- 
zar :en  las  negras  es  al  contrario ;  así  es,  que  en  sus  orillas  no  se 
ven  aves  y  sus  aguas  están  llenas  de  boas.  En  esta  ^región  Hueve 
casi  toda  el  aio ,  y  nunca  sopla  el  viento ,  así  es  que  las  hojas  de 
los  vegetales  están  en  continua  calma.  Los  pájaros  se  encuentran 
alU  adornados  de  plumajes  mas  bellos  y  d^  colores  mas  vivos  que 
en  ninguna  otra  parte ;  los  monos  son  muí  variados  y  lindos,  los 
animales  monteses  en  abdndanciá  y  los  jaguares  y  tigres  negros  se 
enseñorean  en  aquellas  selvas. 

El  segundo  trozo  es  la  región  de  los  raudales  y  allí  se  ven  en  toda 
au  belleza  los  isfectos  de  las  aguas  y  la  naturaleza  en  su  estado  pri- 
mitivo. Las  sabanas  cercanas  á  estos  raudales  presentan  las  varieda- 
des mas  completas  desde  la  creación  de  los  humus,  musgos  y  plan- 
tas grasas  sobre  las  peñas  puras,  hasta  las  plantas  mas  bellas  y 
frondosas  del  reiuo  vegetal.  Este  terreno  ea  una  mezcla  de  sabanas, 
prados  y  selvas ;  hai  viento  abajo  de  los  raudales  y  calma  arriba  de 
dios  :  allá  se  navega  á  la  vela ,  acá  se  desconoce  semejante  recurso. 
Indios  pacffieos  y  cultivadores  habitan  la  orilla  derecha  del  Orino- 
co ,  al  paso  qne  la  izquierda  la  recorren  tribus  ferozes  y  nómades. 
Las  cavernas  de  los  cerros  se  encuentran  llenas  de  esqueletos  hu- 
manos; las  rocas,  ée  serpientes  enormes,  y  las  selvas,  de  ferozes 
ti|;res ;  mientras  que  los  árboles  están  cubiertos  de  pájaros  de  todas 
clases,  que  viven  en  medio  de  familias  numerosas  de  monos. 

El  tercer  trozó  es  la  región  mas  habitada ,  y  en  donde  se  hace 
mayor  comercio  de  todas  las  llanuras  de  la  república.  El  rio  propor- 


-  6*4  —  . 

ciooa  con  sus  brisas  la  subida  contra- la  corríei^e,  j  e^t^  4t|«iUpi  la  . 
bajada  de  ios  buques.  Uua  larga  y  eslr^oba  fa^  de  ü«rra%.e>.Ia  ba^ 
bitada;  otra  aociía  y  poco  conocióla,  ^s  1»  desinfla,  ^o  tfioniHi. 
sobre  la  sierra  Pacaraima;  es  la  región  de  las  ^andc^i  selva»  ep 
donde  hai  uoos  parajes  ventilados  y  otros  de  eterna  calma ;  en  unos- 
llueve,  abundan  teniente,  en  oíros  apenas  cesa  de  lover.  Las  fieraí^ 
tienen  allí  su  pacífica  morada,  y  el  indio  no  está  visitado  [(or  niiigua  . 
blanco  en  sus  tranquilas  soledades.  La  faja  estrecha,  casi  toda  ella^ 
es  i;egioa  de  pastos :  el  indio  civilizado  vive  al  lado  del  crÁotllo,.  ^1 
comerciante  pone  eo  movimiento  su  industda  y  el  criador  sa<^ 
ventajas  de  sus  rebafios. 

RI09. 

£l  principal  rio  de  esta  provincia  y  de  toda  la.  F€y[»úi4i«a  m 
el  Orinoco,  que  tiene  puerto  entre  los  de  2*"  ordena  los^d^I 
mundo  y  es  el  tercero  de  la  América  meridiouaL  Nace  en.  \9t 
sierra  Parima,  á  uua  altura  qpe  no  puede  esceder  de  1 900  varas  ; 
tiene  su  curso  426  iegpas  desen^bocando  en  el  Atl4nticf»  despipi^dd- 
facilitar  400  de  navegacíop»  lül  Guaviare  y  el  Meta  qvie  oa«j^  ei|. 
los  Andes  de  la  Nueva  Granada ,  son  de  primer  ócd^n.  Ca4a  un^ 
tiene  210  leguas  de  curso  y  de.lüO  á  470  nav«:g{^i)leSh  £1  Carop( 
que  nace  en  la  sierra  Roiaíma  tiea^  18$  de  curso  con  Í6Q  de  na^ 
yegacion.  E\  Cuyuoi  que  cae  al  Gsequibo,  es^tambien  de  primer  or- 
den, teniendu  1  ^  de  (^ursp  y  125  d<.*  navegack>n..Dliinidmenta.,  el 
Guainia  qjne  nace  en  el  territorio  de  la  Nueva  Granada  j  ofrece  72 
leguas  navegables  entre  esta  república  y  Yenes^uela  basta  la  ray« 
con.elBi^sil ,.  porque  de  aUi.prioyor<:;¡or.a  Mavia  una  larga  »a^*< 
gacíon  de  500  leguas  liasta.el  Anvizonas» 

Entre  los  de  Z°  orden,  cfue  vienen  de  la  MuevarGrauada  á  ^ier 
terNlorio,  se  cuentan  el  Inirida  y.  el  Vichada  y  entre  los  ^e  nacfn^ 
y  corren  en  la  provincia  i^e  enumeran  el  Gaura,  Tfir^gua,  YeoUiari^, 
Siají^^  Sipapo,  Padamo,  Aro,  Gudiii^ero»  C«ift^iW>H>^  i  Mi^%aruiii|. 
Yur.ua>i  y  el  famoso  brazo  del  Casinujari  qfi^condiUí^  las^agnas-deli 
Orinoco  al  Río  Negro  y  al  Amazonas. 

De  5*'  orden  ouenta  ^sta  provincia  el  OoMua,  Aial.ap^i  P^t 
moni ;  Suapure ,  lea  varo »  Ainiri»,  Mav«m>  I^ialf^y  Pur^vi-.. 

En  los  de  4^"  orden  b/ii  2212»  s^n  cos^sf^^raj:  mas  d^e  .700  ria?^ 
chuelos  tan  abundantes ,  que  en mtacbos  partes, 4e  1^  ref>ubUi^  ^t 
deno^nnarian  ripSt 


—  615  — 

Como  el  territorio  está  dividido  en  tres  hoyas  hidrográOcas ,  que 
son  las  del  Orinoco,  Rio-Negro  y  Cuyuni ,  díren^ps  que  en  la  pri- 
mera correa  158  ríos  de  solo  este  territorio  y  500  riachuelos  cojao- 
cidos;  que  en  la  segunda  son  56  ríos  y  60  riachuelos,  y  ea  la  terr 
ce)  a  92  de  los  upos  y  400  de  los  oíros  :  baciendq  todos  un  total  d^ 
286  ríos  y  760  riachuelos. 

Hai  ademas  caños  naveg^ablcs  que  se  forman  en  el  della  deA  Ori- 
noco y  son  6  -prímarlos ,  6  secundarios  y^4  ipas  pequeños ,  de  Ip^ 
cuales  se  dará  al  fin  una  tabla.  Todos  estos  c^os  tienen  bancos  dq 
arena  que  se  Ilamaq  pa^os^  cuyo  número  qujedará  detallado  en  I^ 
tabla  citada. 

Todos  los  demás  c^ños  de  esta  provincia ,  riachuelos  ó  ríos , 
tienen  raudales  y  saltos.  El  Caroní  forma  5  grandes  raudales  y  tre& 
saltos  que  son  Arimagua ,  de  8  varas  ,  Nequiraa ,  de  9  ,  y  Caroní, 
frente  al  puerlo^  de  7.  El  Orinoco  tieije  16  raudales  que  son : 
Camiseta  ó  Boca  del  Infierno,  Carichana ,  Mariimri,  (Jaribeo, 
Tabajc  ó  Sta.  Borja ,  Atures,  Garcita  ,  Guahibps,  Maipures,  Ca-- 
majé,  Nericuao,  Hormiga,  Ají,  Castiilito,  Sta,  Bárbara,  Már- 
quez y  Guaharibos  :  hasta  aquí  es  navegable  el  rip.  Escepto  Atures.^ 
Maipures  y  Guahibos,  los  demás  son  insignificantes  y  se  pasan  faiQil- 
merite. 

Al  de  Atures  no  pueden  subir  grandes  embarcaciones ,  pero  si. 
bajan  con  el  ausilio  de  las  crecientes.  En  esia  época  descienden 
las  que  se  construyen  en  Rjo^Negro  cargadas  de  cables  de  chiqui-^-. 
chique  que  se  venden  en  Angostura  y  sirven  para  comerciar  cpn 
Barínas.  En  el  paso  del  raudales  preciso  desocuparlas  y  llevare! 
cargamento  por  tierra  al  hombro  Je  los  indígenas^  por  mas  de  una 
legua,  para  ¡ue  la 'embarcación  pueda  payr  sin  dificultad  el  ratt^-- 
dal.  Su  descenso  total  es  de  II  varas  en  un  espacio  de  mas  de  un^¿ 
legua  ,  y  sus  pa<os  m4&  reporjibrad.os  son  la  caida  de  Pereperemp, 
el  Salvaje,  Sallo  de  Piapoco,,  Sanlinero  y  Yabarilxín. 

En. el  de  Gujihibos  es  preciso  también  medio  descargar  para  su- 
birlo ,  pero  no  |  ara  bajarlo  :  este  se  pasa  prontQ,  ponqué  tiente  uo  ■ 
solo  dique  que  en  el  invier,no  no  es  peligroso. 

A  un.a  leg  a  se  encuentra  d  de  M.aipnre,  en  el  cual  es  necesario 
descargar  para  poderlo  bajar  ó  subir,  y  está  en  el  mismo  caso  queel.^ 
de  Alures.  Tiene  de  largo  mas.de  una  legua  y  el  descenso  g^ncr^al 
es  de  1 9  varas.  Los  díqqes  naturales  de  mas  fama  son ,  Puri;narípji^ , 
Manimí  y  el  sa  to  de  \sl  Sardina  que  es  el  mas  peligroso. 


—  eu  — 


LAGUNAS. 


La  de  mas  importancia  eo  el  dia  es  la  de  Vasiva  ó  Mandayaca , 
en  la  que  babia  una  misión  en  tiempo  de  Humboldt ;  pero  en  el  dia 
la  isla  en  que  estaba  fundada  se  baila  desierta  y  en  la.  laguna  haí 
gran  cantidad  de  tortugas. 

La  laguna  Macavacape  es  particular  porque  en  ella  bal  Yariaa 
islilas  y  morichales  cuyas  aguas  presentan  un  fenómeno  bien  no- 
table :  las  unas  van  por  el  cano  Itinivini  y  rio  Conoraehite  á  Rio- 
Negro  ,  mientras  otras  por  el  cano  Mé  ó  Del  desecho  van  al  Casi- 
quiare. 

La  laguna  Culimacari  merece  mencionarse  por  las  buenas  ma- 
deras de  construcción  que  tiene  en  sus  orillas.  Su  largo  es  de  2 
leguas  y  una  de  anclio. 

La  laguna  Caripo  comunica  por  dos  canos  al  Orinoco  y  al  C^i- 
quiare ,  cerca  de  la  separación  de  este  brazo ,  pasando  eatre  la  peSa 
Guaraco  y  el  cerro  Pava. 

La  laguna  entre  el  Atacavi  y  el  cano  Chirari  es  interesante  por 
cuanto  en  la  estación  de  las  aguas  se  puede  comunicar  por  uno  j 
otro  al  Atabapo  y  al  Orinoco. 

Lo  mismo  sucede  con  la  laguna  Sárida^  la  cual  se  comunica  del 
Inírida  al  Guaviare. 

La  laguna  Caucagua  tiene  mas  de  5  leguas  sobre  una  de  ancho. 
Se  comunica  con  el  Guaviare  y  es  abundante  en  peses. 

Lo  mismo  sucede  con  las.de  Sesenta^  Macjisagua  y  Surlnariy  que. 
son  producidas  por  los  derrames  del  Guaviare. 

La  laguna  de  Bpcon  sobre  el  Inírida^  y  oiréis  sobre  el  mismo  rio^ 
no^proporcionan  pesca,  ^rque  son  de  aguas  negras  y  solo  tieaea 
grandes  serpientes  boQs, 

La  laguna  Ahota  comunica  por  un  cano  al  Orinpco^  tiene  bnenoa 
pezes  y  tierras  útilísimas  para  el  cultivo. 

La  laguna  Gárlda  sobre  el  Orinoco  posee  buenas  tierras  y  allí  se 
halla  establecida  una  tribu  de  Maiuiriiares»  Lo  mismo  en  la,  la- 
guna Yapacana  que  comunica  con  el  rio  Yao« 

La  laguna  Ubua  es  abundante,  en  pezes.  Tedas  las  nombradas, 
están  en  el  cantón  de  Río-Negro. 

En  el  de  Calcara  hai  muchas  producidas  por  las.  ereoientes  del 
Orjinoco  :  pocas  se  secan  y  en  ellas  hai  mucha  pesca^y.caza;  sobre 


—  «IT  — 

todo  en  la  de  Coroza  y  en  las  que  se  hallan  inmediatas  á  la  Urbana 
y  Caicara. 

£n  el  cantón  de  Angostara  cerca  del  pueblo  de  Pargoei  y  vecino 
al  Caura  liai  una  laguna  que  fué  producida  por  un  terremoto :  existe 
otra  cerca  de  S.  Pedro,  que  tiene  muchos  pezes;  y  las  que  están 
en  las  sabanas  del  Torno  ofrecen  bastante  casería. 

£n  el  cantón  de  Piacoa  se  encuaniran  muchas  lagunas^  sobre 
todO;  en  el  delta  del  Orinoco ;  todas  son  mui  abundantes  en  pezes 
y  en  ellas  sale  y  entra  la  marea.  Las  que  están  al  estremo  del  caño 
Mariusa  proporcionan  en  el  invierno  un  paso  al  cano  Araguaito. 

Las  lagunas  Marieta^  Sacnpano,  Socoroco,  las  de  las  islas  Tórtola 
y  todas  las  qae  están  cerca  de  la  Guayana  Vieja  son  formadas  por 
los  derrames  del  Orinoco  y  conservan  siempre  agua  y  pezes.  Entre 
estas'bai  una  que  merece  particular  mención ;  es  la  de  Casacoima , 
en  la  cual  poco  faltó  para  que  la  tripulación  de  unas  lanchas  espa- 
ñolas tomasen  prisioneros  á  Bolívar  y  á  varios  proceres  de  la  inde« 
pendencia^  entre  los  cuales  estaban  los  generales  Arizmendi ,  Ber- 
mudez,  Soublette  y  otros  que  tuvieron  que  echarse  á  nado  para 
poderse  salvar, 

CUMA. 

£1  clima  de  toda  la  Guayana  se  podría  considerar  cálido  y  sano  si 
no  hubiese  logares  espuestos  á  las  exhalaciones  de  los  pantanos  que 
deja  el  Orinoco  en  su  bajante,  ó  á  los  miasmas  de  ciertas  lagunas 
cuyas  aguas  están  estancadas ,  lo  que  produce  calenturas  intermi- 
tentes^ pero  no  peligrosas.  En  las  espesas  selvas  sucede  lo  mismo  á 
causa  de  la  grande  humedad  y  de  las  emanacipnes  gaseosas  de  las 
plantas,  cuya  putrefacción  está  acumuladsftdesde  tiempo  inmemo- 
rial. En  las  sabanas  del  Orinoco  que  no  están  en  la  línea  deesas  ema- 
naciones se  siente  un  fuerte  calor,  bien  que  se  goza  de  una  atmós- 
fera sana,  tales  son  las  sabanas  de  Upata,  de  Angostura,  Calcara, 
etc.,  en  donde  el  calor  es  desde  27^  hasta  30<»  del  centígrado.  Las 
piedras  ensegreei^s  que  est¿n  en  las  orillas  del  Orinoco  ó  los  gran*- 
des  bancos  de  granito  iiegro  que  se  asoman  en  las  sabanas  espues- 
tosa  los  ardores  del  sol,  se  calientan  tanto  de  dia,  que  al  entrar  la 
noche  se  han  visto  á  5$^^,  y  las  arenas  de  las  playas  á  2  pulgadas  de 
profundidad,  conservar  «n  calor.de  54<>  á  58^  á  Jas  7  de  la  noche. 

Se  dice  oomumn^te  que  el  dormir  sobre  las  piedra»  negras  es 


DMiaaoo :  m*  nb  fiij^o  he*  leftidí^  piiMbm  át  Mto,  y  del  foflajo 
pernicioso  qoe  daa  á  la  luna  llena  sobre  la  salud  de  aquelhis  que 
duemen  «Mi.lft  eartí  et|H|e6ta  i  salnK.  Ptireee  también  que  en 
Akires  y  ÜMpsces  ««e|en*daroal€Otur«s  mas  qfie  en  otras  partes 
y  aa  oree  que  es.  la  reoflío»  de<  un  gran  calor  á  una  humedad  esce- 
siva  del  aire,  y.  tas  exhalaciones  venenesas  qoe  se  elevan  de  los 
desD«<i»s  peftasaas'de  ioaraoMeSi  Hiimtoldt  dfce  «  Las  peiías  ó 
«  rocas  giMiiticasqtteel  Oniioco  baite  períódieamenle  en  las  cafa- 

•  raias  y  ettlM  te  aoúiioiies  4e  i^rioliaiia  y  Sta^-fiárbara ,  son  lisas, 
«  naipras  y  como  baraíMd^s  de  lápiz-plomo  ó  inoHbdena.  La  mate*- 
«  na colef«Ale>iMi>peoelra enia  píedra^e  es  un  granito  con  unos 
i  si-awis.f«6<toaliei|^>algoiiies  cristales  de  afrfibd  a.  Igworo  yo  si 

•  es»  con  ru^a  ¿aki^ena  q«es>e<M)Bstdera  en  las  misiones  del  Orí— 
«  «oco  la  projiifiíidad  de  iaa  poftas  desnudas,  y  sobre  todo  la  de 
t  las  masaaq«eUef«^'Oorteia  de  earbo&o  de  óxido  de  hierro  y  de 
«•  magnesia,  eaneo^va  i'tasalod.  » 

ESTACIÓN    DE   INVIERNO. 

En  los  lugares  próximos  á  la  costa,  en  las  sabanas  de  las  anti- 
antiguas  misiones  del  Caroní  f  enla  parte  entre  el  Cuyuni  y  et 
Esequibo,  empieza  á  llover  desde  mayo  hasta  octubre.  En  noviem- 
bre entran  !éÍ3  nortes  que  doran  hasta  fin  de  enero.  En  las  caboze- 
ras  del  Ganoffí,  en  las  sierras  Rrnocote  y  Carapo  llueve  desde  marzo 
basta  dicienshre.  Apiernas  casi  todos  ios  meses  hai  grandes  aguace- 
ros oorao  sneede  en- las  eabezeras  áíñ  Paraguá  en  la  sierra  Paca- 
raima. 

En  el  cantón,  de  Río  Ne^f  e  Hneve  lodo  el  afto,  menos  en  enerO; 
febrero  y  marzo,  que  es  verano,  en  cttya  época,  no  dejan  de  caer 
algimos  aguaceros ;  pero  en^  los  nieses  de  junio  y  julio  llueve  coo 
mas  íuersa  y  es  la  época  ^verdadera  de  las  grandes  Hutias  eeuato- 
riíalet  y  la  causa  doto  grandes: creeieflftes  del  Orinoco.  Bléctivamen- 
te,  vemos  esto  rio  frente  á  Angostura  quedar  en  su  pleno  hasta  24 
de  agosto,  y  disariimlr  después  progresiyamente ;  pero  con  mas  len* 
titoddelO'^uehaliia'Siibüo  desde  fnesda  malrso  hasta  quedar  eo 
s^máüMBum. 

El  Orliioep,  el  Ventuari  y  el  Atabapo  erapiesani  crecer  i  fines 
de  maezo.  £4  0«avia?e)  crece  40  pies,  et  Atabapo  59,  el  Inírida 
MS>,  á  Vaatmi i'M^y  el  PadasK)  y  el  <ki  nneaBttffla^Sf  f  el  Maraca  26 . 


La  creciente  de  todos  estos  grandes  ríos  qae  concurron  al  Orí* 
HOCO,  fué  medida  tanabiéii  es <3eiiijQi)to'fN«té á  GastillitO;  masar* 
riba  4e\,  VJtíi^)  en  ui  a  peoak  a#i  p!ei>f>eadtrin}w  q^^.'4«'  el^Ha^eiq 
forxqa.4eiC{isiti(>o  sot^r^^iU^u^.  Ul0#M^4pe^]Et^i«4£¿a4(Ke>  ^m 
en  la.üUii^a,cr^e^te  in<lic^ba«5.6  pi^^ea^l  me^fdeei))^^  ¿ppaa  * 
en  qpe.  e^lá  m^»  bajo  el  Orío^ct^ 

Después  ^icpe el  VLcbaddqpe  croce^Q  pie^ y^el^il]^PQ,atn»^u- 
to*  Pa$«4Q^li>s  raiidíries.si^^e  elMfí^4oe<:r«}c«  47  l4  k^v^.ú9 
pii^^La  (inijf.midida4  xoodift.del  €£UAiú|Hve^se4«b^x;^&i(k9r^r.fp>i|»r 
bajante  de  ^  4  varas ;  la  del  iMXv^dfi  8,  las,  d^  Ktíí^jk^fY  d^^Vi^;)^ 
uart  de  6 ;  las  del  Padamo,  Cuntlnamoy  Cunucunnma  de  8  á  9 ;  la 
del  Vichadade7;IadelSipapo4e6sJ<ul^lMetade^4;  la  del  Apure 
de  ^  0;  miéiiti  as  que  la  del  Orinoco  arriba  de  Mavaca  es  de  6 ;  en 
la.oonfiseMífijM  iGuaMM» -de  4®  ;.a)MJo  4<  loirftttdikie8.ih  4<^); 
abajo  áíthpíge  é$M ;  fueote  á^Anfostum^eM :  «si»  pnototfdK 
daé  «üfniíwf e  -lO'vtinBfirbaaia  el  Míb^  con  atgmn»variaeiMie8^  y* 
deaiU  4)atfa  idrajo  86H>>de)4i  Tm»< 

Si«e>nsid»mmeet6«tet  ^qtde»:  cmtitnlds^de  los  ríes  ififotttaríi)» 
ád  i^kiooonf  ao  aecá>estti^  :fmA»  ttm  oomM^sey  taaoPMido  eo 
la  estación  de  las  llovías.  El  Garoní  q««}COiidiiM>«i)  9M»^foUlltecft 
de^il^^  fin»e  §§  piei^  yfii  próán¿íd«i  iiidliii'te'ff«46«gr«éiiar 
eo;  H  ysifia*  £1  PaiBgaa.«iio  de>aii»  gi«iMl¿t  .trilii^ili«s  sí¡¡bé"2S^ 
pies  y  tiene» jttoa  profipiidiéaáiiiHNiia^d*  9í  «avas; 

E^  Gttfaai  i|!ie.4»i0  Mk  B^^qufbO'  cf«O0  92  pies-y  m  pfoftmÜdM 
media  o»  de.-M  ym9$, 

JBor  áltimo  ai  RkhNagro  «rece  $8í  pies  y  M  praf««iii<}ftéiMdili 
es  de  40  varas.  Los  riof^  Siapa  y  Bidamo  er^eea  48^  píes^y^seii  pee- 
íuBiUdad;ai«dia^«s  .áe-S  ¿  46  faras.  £1  Cañmiam  «eeaeSOipíes  y 
su  profundidad  media  es  de  ^1 0  varas. 

GiMJidoilodoa  ealaa;  %cmio%  rías^eatáo  «ii<Mhpiaim*cpaei(ítile)  lina 
parte  considesaUe  da  loa  besqaaa^  y  tafkiAaa  da- eos^orlNaa  «^aé» 
cufataila  de^ina^  da^  ^mén^^  q^a^en  nMCbaa  pap(6B»ii^a»«n€«eti^ 
tra'Oa  doodjb  liaoaK  pié.  jKa aa«ra»qiia  lai&undiicitfh «aa  démv-^ 
chaa  iegnaa  da  aoMlwra,  qée  á  !o  aona  aaaá^  dajoasdia  tegua  ^  fie* 
ro4Wf iao.  quádtn  jaipiai  .mM  Interior  vaiÉMs,  astoiai^ioa  anaga*^ 
das.fkar.las  pequanaa^  oaíkis,  laa  o^alisa  iio  aoeoeiitraa  róaK)4t«)a-^  ) 
guárame!  roaipi0tite> 


—  «16  — 


mvisioii  TsunnmiAL. 


La  provincia  se  divide  en  5  cantones  que  sop  :  Angostara^  Bajo 
Orinoco,  (su  cabezera  Piacoa]  Üpata,  Gaicara  y  Rio-Negro  (sa  ca- 
bezera  S.  Fernando  de  Atabapo).  Todos  contienen  51  parroquias  en 
las  cuales  se  cultiva  maiz,  caña,  café,  cacao,  algodón,  tabaco,  ar- 
roz, plátano,  yuca,  ñame,  caráotas,  frióles  ocumos,  batatas,  ma— 
pueyes,  algunos  cocos  y  muchas  frutas.  La  población  se  puede  di- 
tidir  del  modo  siguiente  :  45/1 00  á  la  agricultura,  -1 5/1 00  á  la  cria 
y  40/^00  á  las  artes,  pesca,  comercio  etc. 

COMBRaO. 

Los  puertos  de  esta  provincia  están  sobre  el  Orinoco  y  otros  ríos ; 
niaguno  tíene  sobre  la  costa  del  mar.  El  principal  es  Angostura, 
donde  coocurren  los  buques  de  mar  y  los  del  intelrior,  por  canales 
naturales  que  sonólos  ríos.  Tíene  comercio  con  Santómas,  la  Trini- 
dad, las  colonias  inglesas  y  imicesas  y  les  Estados-Unidos ;  red- 
biendo  toda  clase  de  mercandas  secas,  caldos,  herramientas  etc,  y 
daadaen  eandHO  froto»  del  país.  ' 

Recibe  de  la  provincia  de  Btrínaa  aftil,  algodón,  café,  cacao,  ene- 
ro^^  astas  y  algunas  maderas ,  y  da  «n  retorno  mercancías  secas  y 
efectos  de  bodega,  beri<aiiiieBtay  embarcaciones,  cables  etc. 

Ito  la  de  Apnre  recibe  cueros,  grasas,  queso,  ganado,  bestias  ca- 
ballares y  mulares,  dando  en  cambio  lo  mismo  que  á  Barfnas. 

De  la  proviAoia  de  Barcel  ona  recibe  lo  mismo  que  de  la  de  Apure, 
y  ademas  papelón,  easaba  y  aguardiente. 

Be  la  provincia  de  Cesanare  de  la  Nuera  Granada  se  reciben  mu* 
las  que  pasan  á  TrmiclSd. 

El  puerto  de  las  Tablas,  cerca  M  CariDÍ ,  sirve  para  embarcar 
los  ganados  del  cantón  de  Upata  y  llevarlos  á  laseolenias. 

En  el  cantón  de  Rio^Negro  bal  dos  punios  que  hacen  un  peque* 
So  eomerdo ,  S^  Fernando  de  Atabapo  y  6.  Garlos  de  Bio^Ñegro. 
Del  primero  salen  pava  Angostura  cuando  el  rio  está  crecido,  lan* 
días,  piraguas,  cables,  chinehoires,  guapas,  cara&a,  pucheri,  zarsir- 
{Nirrilla,  sarapia,  caneUHa,  almendrones ,  manteca  de  terecai,  mo* 
nes,  pájaros ;  en  cambio  de  mercancías  secas,  licores,  herramientas 
y  sal.  También  por  S.  Fernando  de  Apure  se  hace  igual  comercio , 
T  ademas  se  lleva  un  poco  de  cacao.  - 


Del  wtfjaniOy  el  oomeicio  escon  &  José  de  MarafVitaiieB  y  S.  Ga- 
briely  pertenecientes  al  Brasil ;  recibienéamlá,  pnoherí,  zarzapar* 
lilla  y  tabaco ,  dando  en  cambio  mescancfos  secas ,  sal  y  goma 
elástica. 

De  los  indios  de  la  E&mférdda  reeibén  los  babitantés  de  S.  Fer- 
nando de  iltabapo  almendrones /caraña;  saraina,  zarzaparrilb , 
pncherí,  guapas  y  manteca  de  tortuga.  .  . 

De  los  de  Cunucunuma  y  Ventuari  reciben  cascos  de  curiaras^ 
guapas,  yeradas  de  flecha,  casabe >  mañoco,  cerbatanas,  curare, 
chinGborrds,gallínas,. plumas  de  piapoco,  pa^os  vivos  y  empaja- 
dos>  cera  y  paraman.  Lo  miaño  traen  los  indibsdel  Guaviare,  Iní- 
rída  y  Gnaiaía,  y  ademas  monos  y  cauciio* 


CIUDADES    7    VIliLAa. 


CANTÓN   I)£  ANGOSTURA. 


La  dudad  de  Angostura  es  la  capital  de  la  Guayana,  provin^ 
cía  que  tomó  su  nombre  de  les  indígenas  que  habitaban  parte  de 
aquel  territorio ,  y  que  fué  después  estendiéndose  á  todo  el  vasto 
país  que  queda  encerrado  entre  el  Orinoco,  el  Gasiquiare^  Rio-* 
Negro,  Amaxónas  y  el  Atlántico,  formando' una  inmensa  ishi  de  la 
cual  pertenece  gran  parte  i  Venemiela  y  al  Brasil ;  y  pequeSas  por* 
ciones ,  á  los  ingleses.,  franceses  y  holandeses^  los  que  tienen  esta- 
blecimientos coloniales.  En  4499  \icente  Yenes  Pinmn,  célebie 
compañero  de  Colon,  reconoció  la  boca  del  Orinoeo  que  llamó  Rio* 
Dulce  y  que  los  indios  nombraban  UriaparK  JEm  4554  Diego  Ordás 
entró  en  el  Orinoeo  y  llegó  basta  Carichana ;  pero  en  4  555  su  maes« 
tre  de  campo  Alonso  de  Berrera  subió  basta  el  Meta  y  se  introdujo 
en  este  rio,  en  donde  murió,  peloando^eon  loe  indígenas.  En  4576 
ratraron  los  jemitas  Ignacio  Llauri  y  lulian  Yergara ,  y  fueron  los 
que  pusieron  los  primeros  oimientos  de  Santa  Toétas  j  frente  á  la 
isla  de  Fajardo,  en  el  dia  ffaerto  de  las  Tablas ;  pero  su  aelo  evan* 
gélieo  quedó  frustrado  por  la  invasión  de  ios  holandeses  ( á  quienes 
capitaneaba  Adrien  lanson  en  4579 )  los  cuales  destruyeron  la  na* 
cjente  población,  t|9niendo«los  misioneros  que  abandonar  d  pais. 

Don  Anlonio  Barrio  que  hal^a  bajado  de  la  Nueva  Granada  por 


gvas  mas  abajo  del  primer  panto  en  que  se  fundó ,  qne^faíÉdo  la 
pfOvineii  ddrito«éiili6actodepiadtoitei*glá  Wtoé^a^Qranada,  Menos 
.  «11  to  orieiiiüüté.  la  47*1  JM  «MOpréaitMa  e»  Ift'^tMía  «üM- 
ral  de  Venezuela^  mas  penamédA  ateami»  unife^á  ^Cttmaiflá  faü^a 
476§. 

£o  4  5#&  fiK&de  Santo  Toma»  k  prínfotn  es^Mofi^qtte  iMMia 
flor  esta  pacfi&tl  Mrado^  ím  ó«al:iM-'lAeáaz4  «Im  tl-^MM^iel  T«- 
tdm^i  4K4ltéiNi  lám}má9ma»ei9k9m^áSLf^eMWl,m  4eg«llis 
mas  allá  de  la  parroqMÉ  d9>li  fm^amyVkaí^óá^  anílstifUMn^e 
Barceloneta  :  pocos  regresaron  y  moi  escarmentados  por  los  indí- 
genas.   

£n  4  2  de  enero  de  4  61 8  se  apoderaron  los  ingleses  ^  cóndacidos 
por  Walter  Realegh^de  SMo^osmb^  qm  dakQdló>  valerosamente 
con  pérdida  de  sn  vida  el  bizarro  gobernador  Palomeqne.  Realegh 
sa  jueó  y  quemó  aquel  estabiedmiento.  -Un  año  después  Femando 
Berrio  reedificó  en  el  mismo  lugar;  y  en  4764,  en  tiempo  del  go- 
l>ecaador  iK-Jooftiiii^  Mcmat»  deJfffidiaa^iaefriQépfé  éMnaOrnir 
SaotaTomas^dc  la. Nueva €M|tnav  enlapas maHafribatea^el 
lugaf  entqae^aeüíalfflBnie  axiafte ;  ffer»^nokiyodié»<»a«Dr^r  aa 
nombre  porser  dematiadoiaifo»,  y^ieanstítuyó  ri^de  Am^astun. 
ElecUvaineaiei  aval  ponla»«»  que  «e  <áMo6  la  Mdad,  $e  aogoata 
4Í  Orinoco^ii  solo  tia«e'S95  vaaaa^fipaiftte  á'k)s^aalit«aaliariin!iBa*de 
S.  Gabriel  y.S<  Rafael ,  y  44^411  «n  e4  giaíli  patea' d<»  lé  ^laniada, 
ecrea. del  efliliafcadero'daligaaa^a^ :  «ns  ^rtba  ó^mas  •abisj»)  au 
aii£biar«e»da  AiSif^é-¥.ñ(^  ^áTMJEmmttüo  MaSti^ehO'StflevaBfa 
iin.fMOttac^de'^aB%mtf  aoiMiiea^  eoyoe  lados 

4itad(»s  penPf>idíe«iarmai<6  €iape«'eotéli  lüse  fma:|»«r«i(Mi  de  pe- 
«aa  aa»auu>aadaa'ó(espan)ldto^q«e!a9aBW»'«a  latfmatapias'avs 
Agiidaa  y  apíoflMriaa^^Bbavaa*  Lamfflar4a*lapliii^4esnuda;qiie^ila- 
man  la  JPiedra.|M-Medi«^  e9lá>adaraada  de«tt  paqutíbe^  áiM  ^9«e 
las  creGÍe|ites4ift|iaa;pa4id#  arrancar*,  iiar  las  i^M»^«tfdi^o  en 
aquella  pwi^laa|ig«aa4iirbíi6'A  ^  aaeaatváa  bajanteaj  ÜMm  Ids 
habiUotes  ^de  Anttwlua»  ^fti  ^iiíiiaetf «wg»»  nitural  qjáé  Mm  éxac- 
Umente  la  allwt  ée  laa  dáier«il«é  cgeciiiw»  a4  «uno  'ée  lo  f«e 
dismiavyen  düaiiipiaaiek»  afMiu  J^ia^MatiófKdl^lMareriaBtas 
cubrir  del  lodo  tata  «lafca;  perotyi>rs«ateiahiise^oaÉa«Bf9ie  el 


máximiiía  á  qaf  «e  bao  itavMdr  ta»  mam  ásbre  irt  ihciide)  rio  étk 
la  bajante  ó  verano  es  de  30  á  Sd^iesi  altara  «iiortiie,  sise  cottt^ 
para  el  anchoa  Orinoco' y  su  prDfmdifbá  media ,  qae  en  este 
punto  se  debe  estíoiar  eo  #d:ptto  :ée  oantígoíénte  66  enortt^'Ia 
masa  de  agua  qte  á  cada  insltoté  |ML$a.por  «Itet  puntd^  tiendo  tMilá 
bajante  240*000  pies  eábkbslper  sagondo ,  fialúMmJgiMii  al  ^ 
lJe?a  el  Ganges  ea^^u  oneomée. 

Solo  en  4728  inUrodojeroD  les  eaporbáaíés  cstalá0c«  el  prfúief 
ganado  vaeuoo  (loBiávdok)  de  laprofimia  ée  ConNmá )  qtae  de^- 
pues  prosperó  ba«ieiid0lasríqilea»s<de  ka  mlsiiMliM-dtfel  GAroni.De 
Asgostora  salió  en  4770  «el  eapítaki  AAtoni»  Santas  Ae'  la  Puente , 
remontó  je}  Paragna ,  éiraveeók  'serrMik'«ki  PiseafafiM  ^He  llanió 
Químiropaca,  bi^ó  por  el  río  Parima^  fvé  atlago^\lni>aeó/ desprendió 
por  el  rio  Braneo,  sobióel  Aio-Nefro  y  el  Oásiquía^é,  y  per  el  Ori- 
noco abiyo  Yirivióal  Inglur  deeursahda»  Acéaiygffet^tffctfijiete  at  ddpi- 
tan  Bárrelo  en  4-77#  ;ijiiiilQsr««bieíon'el  Qa«ra  y  «rt^reiFato,  atra- 
vesaron la  BÍísrra  Majgii»aUda,  fcajaronpor  el-Manaptüi^  áV  VeAt«afí, 
y  atravesando-  las  tierras ,  fieron*^  la'Bsmemlda.  fisie  tatttfno  qtfe 
debía  servirá  la  eomunlaacíon'^de.  lo&astaiiMinrielllés'lflel'€ftiti^ 
con  los  de  la  itsme^da^litéaseititadoipor  4^f^Mes  lÉil^tares,  en 
una  esiiusion  de  mar  de  BO  Icigtstas.  'Los  hidioi-ee  ^íablánadtl^Hdo 
á  los  espsftoles.  pam  ttbertarse^de  las  peiveaiomMBde  le^<€atlbes ; 
mas  se  dis§4is(arontpor  e)  meA  trato  *  que- iMoaéms^  buiílpédids'léfr 
datmn,  y  en  una  sola^noelie;  >áUévnii9nD''bi)m^]»tiiisitMilOdoe'lm 
puestos,  los  quemaron  y  defollareii  las solltodt)» ,  e^eapaado  mili 
pocos  que  dable r^w  la  vida  á  la  bifmani^tlád  M  algunas-  miij^es. 

La  ciudad  doAagosluiiavsta  edSfictféaieoHio-en'atiátedtro,  en  la 
pendiente  de  una  coliiia ,  en  parle  desnadar  de  re^<iac¡on<:S«M  enf- 
iles son  paralelas  al  curso  éel<  rio.  Yariaii  date  están  eoQsIfaidasreii 
la  r>  ca  pelada^  son  altaf>  cómodas  y  la  HMiya»  parta  de  piedr;i,  <oya 
oonstruecioa  prueba- que  lois  babitan^sr  ,00  femekk  tnirénMas.  Sfn 
embargo,  en el.^ran  temblor  der47'66tqtiedeattiasid'áCiinid«á j  el 
suelo  granítico  deila&-doa  orillaa^M  )Dmaaa> -faé^aftaió  basta  léis 
rauda'es  de  Atiures  y  ^]ai(>ures*  M^Sm  de.eséaá.rawMesee^^ieiiten 
temblores  alguua^  vexesi  que  selímilmiJa  madre  del  alia  OriíAorro 
y  de  Rio^Negro :  parece  que  dependen  4etitr  cento'Yelcáisfoexltfe*^ 
rente  del  de  las  islas  Caribes.  Los  misioneros  ^  Yavilry  íSí  Pemande 
de  Atabapo  dyeron  á  fiumlteklt  ^ne  en  i7dft  hubaTíelatttoa  tem- 


-•14- 

blores  de  tiem  ailre  al  Gm?ían  y  Rio-lfegrOj^  y  les  curies  no  se 
|MX>pagaroa  «1 N.  hacia  lfeípore$. 

Angostara  se  encaeotra  ea  la  latitud  N.  de  8*  8'  44^',  y  en  la 
longkad  3"*  9^  kV  al  E«  del  meridiaDO  de  Caracas,  á  laaltara  de  6^ 
varas  sobre  el  niTcl  del  mar ,  del  cual  dista  por  d  río  83  leguas* 
Hasta  aquí  llegan  nafegando  á  la  vela  bergantines  y  goletas,  á  de- 
positar las  mercancías  qne  se  derraman  despoes  por  el  interior , 
por  medio  de  los  canales  natorales  qne  ofrecen  los  ríos ,  por  los 
cuales  bajan  en  retomo  los  productos  del  país  que  se  acumulan  e» 
este  punto,  verdadero  almacén  de  los  llanos  de  Veneiuela. 

Angostara  es  la  única  ciudad  de  esta  república  que  tiene  un  edi- 
ficio elegante  y  á  propósito  para  mercado  púbiioo  i  imitación  de  los 
Estados-Unidos,  pero  proporcionado  á  la  población. 

En  lodo  el  ano  el  calor  no  es  tan  escesivo  como  debería  serlo ,. 
estando  fabricada  la  dudad  sobre  la  roca  Yl?a,  cuyo  color  negro  vi\i^ 
sorbe  los  rayos  del  sol  y  despide  después  un  calor  que  sería  su* 
focante,  si  no  fuera  refrescado  por  los  rientoaireguiaTes  que  vienen 
de  la  mar,  y  si  el  aire  no  estuyiese  también  modificado  por  la  fres- 
cura  de  las  aguas  que  riegan  este  vasto  pais  y  la  espesura  de  las  sel- 
vas que  h)  rodean ;  asi  es,  que  el  termómetro  sube  pocas  vezes  ar- 
riba de  30*  y  baja  de  noche  de  2-1*  ^^  á  23«  33. 

En  todo  d  Orinoco  se  mira  como  perjudicial  á  la  salud  la  acción 
que  ejercen  sobre  la  atmósfera  las  capas  de  tierra  negras  y  pedrc- 
gosas  enardeddas  por  los  rayos  del  sol,  que  en  Angostura  abundan 
sobre  manera ;  sin  embargo ,  Humboldt  creyó  que  se  debía  temer 
mas  á  las  aguas  detenidas  en  las  lagunas  y  anegadizos  que  se  es- 
téendeo  por  detras  de  la  ciudad  hacia  el  S.  E.,  y  ciertamente  algu- 
nas vezes  suelen  las  calenturas  afligir  la  población ;  pero  se  observa 
que  alaron  por  16  genefel  á  la  gente  pobre,  que  come  con  demasía 
frutas  y  se  baña  con  esceso  sobre  aquellas  rocas  qne  deben  en  gran 
parte  contribuir  al  mal.  Las  brisas  son  aquí  mui  regulares  desde  el 
mes  de  noviembre  basta  el  de  mayo.  En  el  resto  del  año  se  hallan 
interrumpidas  por  calmas  mas  ó  menos  frecuentes,  mas  ó  meaos 
largas.  Las  tempestades  suelea  venir  en  los  meses  de  agosto ,  se- 
tiembre y  octubre,  y  son  producidas  por  un  viento  que  dura  foco , 
pero  cuya  vinlenem  casi  iguala  á  la  de  los  huracanes,  y  por  lo  co- 
man termina  en  lluvia. 

En  este  territorio  el-^  general  Piar  ganó  la  célebre  batalla  de  San 


Félix  eHI  de  abril  de  ISÍT/viclorla  qne  después  proporcionó  la 
toma  de  Angostura,  y  en  esta  misma  plaza  el  héroe  de  S.  Félix  fué 
sentenciado  por  un  consejo  dé  guerra  compuesto  de  sus  mismos 
compañeros  de  armas  y  fusilado  por  él  críiñen  de  conspiración.  La 
mayor  parte  de  los  proceres 'de  la 'independencia  se  reunieron  en 
esta  ciudad;  cuya  posesión  aseguró  para  siempre  la  emancipación 
de  toda  Venezuela.  Efectivamente  unos  inmensos  desiertos  cubrían 
las  espaldas  de  los  defensores  de  la  liberiad,  y  el  Apure,  uniéndose 
al  Orinoco,  presentaban  juntos  una  estupenda  línea  militar  que  ame- 
nazaba por  todas  parles  el  resto  del  territorio  y  al  mismo  tiempo 
cubria  los  llanos  mas  abundantes  de  caballos  y  ganados  :  elementos 
con  que  se  prolongaba  la  guerra  para  llevarla  á  todas  partes  del  ter^ 
r¡ torio  venezolano.  "  •  • 

En  Angostura  se  reunió  el  segundo  congreso  de  Venezuela ,  cuando 
casi  todo  el  resto  del pais  había  caldo  sucesivamente. bajo  la  domina- 
ción espaiiola.  Un  puiiiado  de  patriotas  lo  componía^  pero  estaban  á 
prueba  de  la  constancfa,  del  valor  y  del  desinterés.  Allí  el  20  de  no- 
viembre de  ^818 ,  dieron  la  célebre  y  solemne  declaratoria  de. Ja 
emancipación  deVenezuelja,  y  en  medio  de  los  aprestos  de  la  guer- 
ra se  dictaban  también  leyes  benéficas  á  la  sociedad.  Las  selvas  del 
OrÍDoeo  vieron  eniónces  por  la  primera  vez  los  tipos  déla  ¡mprvn/;^ 
que  dirigidos  por  los  Zeas  y  Roscios  propagaban  por  todas  partes  e! 
fuego  de  la  libertad.  En  aquellas  soledades  se  organizaban  las  huestes 
repubíicanas;  y  el  indígena,  arrancado  del  estado  salvaje  al  estado 
monótono  de  las  misiones,  se  vio  de  repente  incjorporado  en  iasGlas 
libertadoras;  y  lanzado  en  iina  carrera  nueva,  para  él  desconocida^ 
Estos  fueron  sin  embargo  los  elementos  con  que  el  héroe  venezola- 
no, Simón  Bolívar,  emprendió  libertar  la«I\ueva  Granada  ^  cuya 
gloriosa  campaña  siempre  hará  época  en  los  anales  de  las  naciones. 

En  las  selvas  de  Guayana  retumbó  eH7  de  diciemb  rede  ^849 
la  primera  salva  de  artillería  que  anunció  la  creación  de  la  vasta 
república  de  Colombia ,  á  consecuepcia  de  las  espléndida»  victorias 
conseguidas  en  aquella  memorable  campaña. 

Antes  de  -177^  Angostura  no  tenia  comunicación  directa  con  la 
metrópoli :  ea  ese  año  fué  cuando  algunos  comerciantes  enviaron  el 
primer  barco  á  Cádiz ;  y  desde  de  entonces  se  estableció  un  cambio 
direqto  de  mercancías  con  los  puertos  da  Andalucía  y  Cataluña.  Las 
1>ocas  del  Orinoco  tienen  una  ventaja  sobre  todas  las  otras  partes 
de  Venezuela  :  ofrecen  la  mas  pronta  comunicación  con  la  Penín- 


wáU.  n  viaje  de  Cádi»  á  pnnl»  Biriiiia.te.|iaoa  á  fem  ep  48  ó  30 
im.  U  ^TqeUa  i  Evropa  es  de  $9  á  55,  EsUndo  est^s  bocasi  l>ar- 
loveolo  de  todes  bs  isla9j  I09  oavíos  de  Angostara  pueden  jnante- 
oer  un  eomemo  mas  lucrativo  con  las  islas  de  las  Antillas  que  ooo 
la  Guaira  y  PuerUhGabellOi  ;  así  socede.  Con  respecto  al  comercio, 
el  mas  activo  es  el  de  la  provincia  de  Barínas^  aunque  puede  decirse 
que  Angostura  trafica  con  todos  los  llanos,  no  lamente  de  Vene- 
zuela sino  ta^ibíen  de  la  Nueva-Granada.  Por  el  Arauca  n^nooian 
barcos  bástala  villa  que  lleva  el  nombre  de  este  rio :  otros  se  intro- 
ducen por  el  Meta  y  el  Casanare  y  proveen  á  los  babllantes  de 
aquellas  llanuras»  y  remontando  aun  mas  el  lleta,  van  basta  el  pié 
de  los  Áudes^ranadinosá  llevar  las  producciones  europeas.  Coando 
la  población  aumente  en  estos  ríos  y  cuando  la  riqueza  territorial 
sea  mas  grande^  entonces  recorrerán  estas  vías ,  que  la  naturaleza 
ha  trazado,  buques  de  vapor^  que  llevarán  por  todas  partes  los  pro- 
ductos de  la  industria  europea  para  cambiarlos  por  los  de  la  agri* 
cultura  y  cria.  Nada  diremos  de  las  grandes  ¿ías  que  proporciona- 
ráQ  i  las  generaciones  futuras  el  Orinoco ,  el  brazo  del  Gasíquiare 
y  el  Eio-Negn) ,  porque  entonces  mas  allá  de  los  raudales  se  habrá 
también  establecido  una  inmensa  población  y  otra  uo  pequeña  ocu- 
pará el  delta  y  las  costas  próiimas  á  la  mar.  Cuando  aquellos  tiem- 
J>os  lleguen,  Angostura  será  un  punto  de  escala ,  pues  cerca  de  la 
mar  estarán  los  grandes  depósitos  de  las  cuantiosas  producdones 
que  podrán  dar  unas  tierras  vírgenes  y  tan  estensas  como  el  resto 
de  la  república.. 

Si  el  lago  de  Maracaibo  se  puede  considerar  militarmente  lia- 
llando  como  la  izquierda  de  Venezuela ,  las  bocas  y  deha  del  Ori- 
noco Torman  la  derecha.  Allá  la  llave  del  lago  era  él  castillo  de 
5.  Carlos ,  aquí  las  fortalezas  de  la  Vieja  Guayana ,  Obra  del  siglo 
x\i,  y  que  aun  aparecen  en  tos  fuertes  destinados  para  te  defensa, 
llamados  S.  Francisco  y  el  Padrastro.  Si  como  punto  militar  es  inle- 
resanle  Angostura ,  lo  es  también  como  punto  comeidal,  y  ticao^ 
vendrá  en  que  lo  sea  para  la  agricultura,  cuando  las  selvas  del  fia- 
ragua  estén  desmontadas  y  las  sabanas  desiertas  que  bai  entre  alias 
y  la  ciudad  se  encuentren  pobladas  dé  ganada  y  crmadas  porca- 
luinos  carreteros ;  cuando ,  en  fin,  la  grande  tioya.del  Canra ,  eá 
donde  crece  espontáuea  la  sai*apia  aromática,  e$té  habitada;  sos  ri»> 
cas  selvas,  convertidas  en  bacieiidas  o  plantaciones.;  y  las  OriHaa 
desiertas  de  su  rio,  coa  villas  y  pueblos. 


Las  pannijém  é&^^tKm  «MHM^on :  ánptiiira ,  iOcaoopMi^yWld-' 
maWD,  BoilNMi,  lMla«a,  4i  PMn.  IHiisím  ,  S.  Mito ,  HiwpMt 

cautoh  vel  hajo  orijioco  '6  fiacoa. 

La  "vitla  ée  TlieM  -mtíi  «Hiüéft  en  4iim  és|$laBi«48  'o»  irnfl  'lejos  ár 
ttft  Imoo  del  Miioco  namiid#4l6'Pi«oaft  tamliieii.  SsfKnteíon  eerea 
áe  Mlc  fio,  ^9«(i  tev«Q66  cenaoos  para  «i  icafléí^  y  ^arri  la  cria  y 
ooa  la'vaolafaiéa  poáer  tfftl«ar  eon  Trltildad,  ie  dan  bástanle  fm- 
psrtanda.  á  feut  éé  q«e  por  <a  poca  población  qne  tiene,  fio 
aofamftzaa  qne  suelan  ser  los  4en*eflk)6  de  qae  se  c<lmpooe  ,'se  re- 
tallará al«a  s«  fMHPa  prosperidad.  WMlés  poder  dedr  hasta  ^oé- 
panto  podrá  Hsgarooii  al  tíeoipoo^  enfgtiwidéciftíanflo  de  este  país^ 
pues  fas  tierras  del*dMla  del  Oiinooo  podráa  alegar  á-ser  tan  rate^^ 
resantes  oono  hm  lo  -son  fas  de  Holrada,  y  los  rerrenos  entre  la 
sierra  Imataca  y  la  mar  presentan  todas  las  yentajas  de  un  Hsan* 
jmtiporfomr,  tolos lupmi InMadéspor la  ««don Ouarocma/^ine 
weMis  en  aqsoflos pantanos  y  teinlfladiAes,>serén  convertidos  por 
las  geaer^stoüos  ftiniras  «n  hermosas  »baeiendas  y  plantaciones , 
cuyos  habitantes  embarcarán  sus  frutos  en  las  orillas  dolos  misinos 
eaik^quese  veíi^MtUMilmeflíle  daiMios  ysdlo  pobMos'por  onjam* 
hrss  de zanmidos  y  nosquüos,  hHiai9«tes  no eesande^atormoniar 
sino  coando  el  iteolo  los  díspoMa. 

Las  parroquias  son  :  Piacoa,  Santa  Catalina  ^  Sacupana ;  Pede* 
nales,  Guayana  la  Vieja  y. Fugas. 

OAlfrOM   0S   UrA1>A^ 

<ta  viUa jdo  -Vp^l^tMi  mk jatunhmtm^A. wkam  ckoandada  de  <x>* 
iínac^  y  carsosiqiiftjj^  ledas- pofles'in'dflBiiiiia.ipeffspecttfia  v«r«éa, 
m  trwif  QioiiMÉD^^BMWicéMa^  y  soliaa  iodo  oaao.  Im  lamnosde 
eMa  tencuso  saaAasi'M  se  ceneoea  aiia«Btdotellaa.iÉao  «n  grasdes 
itasaii,  f  «CM  ai»  líMpiaeali.Mla  émétaáa^odmiq/amf  varias  pro- 
^mim^íM  Icwwpaa^^naartáii^préMf  é4a  ^tíHiá  mi  tos^itiaaJ^ 
UwT átUai ;  m el  dtalsiiRSM  navios Aipauiíinei tseninju  InWan 
faadado-dis4W.fiMimss :  caMá  aomeíaitaan?  laig9rerJta»éctíoa  para 
la  arfa  cmo  pata»  el»eadti«»dÉl'Caié^  del  eÉOM».detalgttdoo,^de¿hi 
cafedaJiúttrjidaLaiui^  yjallí.la«dáaa;B«ataipatttáiMa  to^pn»^ 


ciosa  plañía  de  la  qniat*  Están  las  liüras  mtscladas,  de  manera 
que  se  pueden  sacar  ventajas  para  la  ecia  y  U  agrículivra  á  la  yes  y 
dejar  allí  útiles  establecimientos  que  puedan  formar  la  riqueía  de 
sus  habitantes.  Si  en  lugar  de  frailes  hubiera  habido  una  sociedad 
emprendedora  con  {os  medios  que  ellos  taiyaa ,  estarían  en  el  dia 
estos  lugares  bajo  otro  pié.  No  se  crea  que  los  indios  reducidos  i 
las  misiones  se  debieron  á  los  esf ucnos  de  afneUes  misíoBeros.  Faé 
á  los  colonos  que  habitar  en  el  país  desde  4  &76  á  A  724,  á  quienes  se 
debió  la  reunión  de  los  indígenas^  pues  en  aquella  época  los  misio- 
neros caudelarioa,  observantes,  jesuitas  y  capuchinas  todos  liabiaft 
venido  y  desocupado  el  pais  oomo  lo  especifica  Fr.  Félix  Targa  en 
una  relación  escrita  en  i  795.  Solo  al  cabo  de  un  siglo  y  medio  que 
los  colonos  militares  se  mantenían  firmes  en  Santo  Tomas,  pudüe-* 
ron  los  capuchinos  catalanes  fijarse  en  el  Caroní  con  lo$  indios  Guá- 
yanos, que  habia  siglo  y  medio  estaban  acast«mbrado»á  tr^^r  coa 
los  españdes  y  á  ser  protegidos  por  ellos  con|Lr|i  los  ferozes  Ca- 
ribes, r 

Cuando  «na  poUaeioi^  industriosa  ocupe  partei  solamente  de  esta 
vastísimo  territorio ,  Upata  seváuna  villa  mui  impostante  por  sa 
situación  en  el  oamioo  que  condoee  al  gran  canal  doicnmereio  que 
es  el  Orinoco. 

«  Las  parroqmas son  :  üpata,  AUagraeia^S.  Miguel,  Caroní,  Ca* 
ruaobi,  S.  Antonio,  Cari,  Cnpapoi ,  £anla  María,  Mmar,  Mamo, 
Carapo,  Guasipati,  Tnpuquen ,  TomareoM»  y  Pastora. . 

CANTÓN  DE  4ZAiaaRá; 

La  villa  de  Calcara  est4  en  MjOrilla  denscha  del  Orinoco  al  pié 
de  una  colina.  En  mecuo  del  rio  se  levanta  una  isla  cubierta  de 
árboles,  aiempve  verdes ,  la  «nal  impide  la  vist»  del  pueblo  de  Ga- 
brata  que  está  %Ja  parte  opuesta.  'Dosi  largos  eaiules  tema  el  rio , 
cada  uno  de  una  milla  de;aafho^  fin.  este  panto  «1  Ortnoeo  eambia 
el'CWBO  qne.taaiade  S.  a tf *en  d  de^ü.  El Mlai»uetesia  vMa'cepca 
de  la  boea  .cM.Afmcei,  iOn  la  eriUa  de  un  gran  rier  en  que  pueden- 
navegar  grandes  embareaciiaMr}y.eL.po8sor4efrenoa  «tüMmos  de« 
pasto  60n  QÍrQaaataamas;qMja.Éaoáp  siempre  un  «punto  inténsame 
para  el  comercio  y  la  cria.  Las  tierras  de  cultivo  que  tiene  esle 
terriu>rio aslátt.dem<^8iado lejanas;  sin^ embargo,  ooantdolaprtda* 
cion  crecienie  ocupe  las  sabanas  desiertas  hoi,  se  fprmarán  osmi* 


nos  carreteros  para  el  trasporte  de  ]os  frutos  que  en  el  dia,  por  las 
distancias ,  no  se  podrían  enltiyar  con  provecho.  En  el  cerro  del 
Tirano  y  en  la  roca  Tecoma  se  encuentran  figuras  simbólicas  tosca* 
mente*  eseolpfieis,  repraibntando  «n  sol  y  qq  «Btñial  grande :  puede 
ler  tlttplr.  A  aigünvs  leguas  de  hi  EncKrftfiMdii'SeMíl^v»  en  fais'sa- 
btoas  la  peiai  de  Tepumereme  (roca  piíHads')  q^  Dllreee  tgoras 
éeaohttalety  ^íniures'tiBfalólkas,  semejante»  á  lade  Gaieara.  Loi 
fieos  M  ccarrc^ée  fiai^ra^an  ,  aiakidos,  f  susNcuestás  escarpadlas  ^ 
de^rovlstaa  de  Vegetalifs,  ledén  un  carsoter'inipóneiitv:  Estás  for^ 
ufas  raras  eran  migadas  oetnd  l«r  almdtis  y  antiguos  jete  de  Ik 
tribjft  de  ios  Otofldaeos  y^en  iMt^oeFras-^oe  exfsleii  en  este  cerro 
8d  encuentran  muchos  esqueletos.  Aquí  el  Orinoco  es  'célebre  por 
la  famosa  y  abundante  pesca  de  lat  toí^tuga ,  ypM  la  cantidad  de 
mosquitos  que  de  aUí  pAra  arriba  oscurecen  chaire.  Anuahheiile 
en  las  playas  de  Para:riBBMi,  Barragoáa  y'GucunlnipafoseTeiiiien 
los  indios  que  vienen  á  recoger  los  hñgffrw^'  Les  de  It  Urbana  es* 
tan  encargados  4e  eoslodiarias,  eomo  deseoMlimtes.de  los  antijiuos 
OtomaMso».  El  40^  mktm  se  tíurm  lat  phytí9  en  a^éHas  tres  is* 
las.  Seeofmi  aeUwdwwiBfto  4. ««^  botijas  ée  snnaleca  de  29  bo^ 
trttas  cada  una;  se  Be6esltan^5«#M huevas  {Nvacadá éoti|a«  La» 
tortugas  poaen  de  M  á  420  huevos ;  pero  iQmamnfB  por  támiBO 
medio  4§Q  :  de  ^saté  nésMTo  hi^eiarta  pavte  se  pierde  y  rompe-,  y 
otra  emrtii  parle  la  cemes'  y  seetfh  pan^Henir i  sos  tasas  las  iodM^ 
ReiBltaria,  P«Ms;  qae  pata  pmdaeir  te  4;  900'  batí  jas  era  prédte 
que4O0«OdO  tortugas  (cuyo  |ieso4aea4  et  de  SO^^Oquinlales)  salla* 
sen  á  poner  4  O  miHanes  da  itaeaesren  aaio  aquelhs  tres  playas.  Si  se 
caleak  la  que  penen  en  otraa  pariéshasiá  eerca  de  la  fooea  dd 
Orinece  /  e»  uaa  eilenfíaii  de  casi  a^OAs^pas  depekilaripin  anaal* 
BieaterSIO  'mülAaes  4i  -huevea  en  las  playaá  del  Orineco.  Anual* 
mente*  en'  ittgott^ra-aa  feoMUai  ias'ph^  y  él  rematadet  perdbe 
el  dédmo  de  le  dssaelMK  En  -este  eantaa  se  «aeoenlran  muchea 
aMHwH<es»4»les  qMf  «seeada  tma  «raa  caatidaA  dé  tnaateta* 

Se  haHa  lamhie»afai  el  famase  esiteehp  de  ilai¥agu4ti  f  el  de 
CaaHIlitO)  qaé  eaanii'ballo  y  parÜMar  ;^M  naistno  modo  q«e  pía« 
toresea  el  niégale  4e  la-Geeaiaaw  Per  «Mme «lia  les'raudales  pe«* 
quelk)s'de-  MeriBMfi^  GáribeU'  tMufé^^^cuyea .fiases  fto<aon  Mí* 
diesw  ••■...-•• 

Las  parroquias  son  Caieira)  CueHvenS;  Aitagrittia>y  UAamik. 


^Mmon-ím  KYQMFfeéK^. 


Li-  viHH  de  SI 
OríMeo^é a mHhra átf álittmeni y aM i» oubMq  edeano d#:e9e# ti» 


«te  descctoea  por  leguir.  Bh  tiktapé  d^im  griiiifi  cwKtem»  qvm§M 
hi  YÜIft^ra  imv'Mrá  wiMa  dr  aaf  p«piifSI»'«Éar ((ii€rifcb)6ri»M9 
con«^eá  al  Atatopo.  G»  InM,  piífliifMW  é  wiifWfte'  W'  inmm  á» 
eMa»  ti^  cHidaiMot  rioi;  ti  Alabifto  éitatur  «  «iHi  üifaMid» 
Mil  hffffa-s!]  eoraoreat^y  wúM^mlMmiímé»  iiiagado9<  ElikmHm» 
aaff69e«(areBrtoda  m  éfttt0miwt,fiaf(le#M»  Migada  y  mmmñMm  «9 
pievdeiraH  aüsaguas.*  A4a'lé|a^  aeimim^^ardal  Mnowftiirifcffov** 
fuBiJMm  edtr 4nMiiya»aiaw dé-  prtteicaa »y  caaMr  «p»  fMiaatt  asiíi 
d<A  Mtto-dál'ria;  fca»fiinl«Nis{>alnü  vadiiMideiCMIiaa  la»4^^pMl^ 
46^  f  de  Ima  tgHirfIgflirteiaat,  «daa  «I  fKiiia}ir*«iit'iapaelrfafHetrii«f. 
Enlfr«abilMiaiaMie'4nl«vfi«i#iiao«iaiió'«^yaAn.1l^^      ^^44^ 
-wa  pn^fwi  da  fioPisgÉanaiqaa  aa^rngtfetfp  sim  smfn^iÑm  ^im^m^ 
^ymmú^s9¡ínl$\U0t^isméB^miKMáf  iMMmdé^aviaadail^á  éf  per 
aNSaaíqvIsmv  €ila  ^aém  RaoMr  )M»al*faMnrliéMbaa  Miaaa  fü 
fabdardab^jd  MiiiMxlf{«iiaie'pMHial:aaiAf9iaa»al  áai^ 

fíy«a<fe  ñ^Étmm  <dl0'alMaBl>íaTég>ia¿  f<r(a»  miiw  uiaitili»iÉ  4^*4» 
iM^tafM^db  ^V44:  d  NymÉaa  y  iw§n  -M  ali  laUMra  ^eé  mubim 
'  m%m»^iémhéé  l#  wpi¿iiiaÉi<é»iMpil»iifBaiái<ila  villBrxjtfÉ  laa íom» 
dtoa'#qaiyaiiÉfciav  y^yÉH/  dfe <i«> qÉe^nwt: j  (a»  «iiila«l&  aott'  «n^ 
aIMdé  daaiaÉ'Vllla.Ha^lta  aaÉtaa  «aaN^  nfumimMkmttbfífméi^ 
atfmwtdaÉ^^1o'qwliiél«pif«l»«ltaMiaMea^  da  aaia 

mMtm,  9/9§é¡mfms^kiémtifteMíhié^  anlaRékÉb/  tm>ta(^dir 
destierro  y^'imliiAMs^  IMiv  tofünMoÉ  éa^ptagi  yie^jéaaartia»  al 
atra  d\»  día  y  dfe'iMM$M€.<CNaiVD^«Éiai<}Mf«^^  p«e- 

üyhiBa  fér  aatalÉiMÉí^miadlIatiaa  a»  aa  dn|MaédBi^«M» 
lwna>d>iyipdaMíff  atiWfcfti.  uwaOaiiitaitoi  <»  adMÉaiir^ánRm  tü^ 
fu  flHirtatii  dtit  Düiiaaiiy;  ]i9H»iadars#pdaiifc  iiaíaigiímtetmilT*^dt 
los  Andes  de  Pasto,  da  Qaito^dél  Perú,  de  Bolivia  y  de  todo  el  vWl» 
impatl^'M  Hááá  iMMoaveiviM/efeifapMÉ  y  ^te^ta?iapÉ1iltiU*^  la 
Plata.  £n  esfe  cánion  deoe  tamMcii  so  origen  el  OiinocO;  na  muí 


télm  dfét  rácr¿r$rde  (TuaKíl^ós :  éf  pifotmr  qittsr  Ife^d  á  ^tei  tviiAt . 
filé  ercflpüan  BóbádÜl^,  cojoiaadáiite  <ier  caátiflb  <fe  SI  ejfM'«a 
fíW.  Sobre  e!  rio  GoaTlarre  ^e  bace  anaalmentié  titia  cOMcha:  esftt- 
t^iidá  de'tii^tüs'  áé  ietetíá,  h  CdaA  entpfeta  étt  etttnv  t  <lwa  fúido 
él  ffiés  élfébiñeftf,  ri0eoj(fóiidó$r mcm  de  3M  botijas  dfe^í  boeEfflts 
eada  ima.  Para'  bacer  una  botija  ñtfneceátdtí  i'O.if^  baeYO»:  tos 
ferécayí»  pottea  de  t6  i  24,  y  tomando  pO¿  tímrino  medio  !ÍI, 
dfedtaeiefidó  Qtia  euarla'parto  gne  «e  comen  y  íseean  peí'  b»  íñém, 
86  necesí^  4tíe  20f).ü00  terecayes  (ccryo  pesotcánlesiáe'^MO 
qulolate»),  rengan*  á  poner  anaabaientr  eir  laf  dfrefeBles'phiTas 
del  Guaviare  4  millones  de  hueros;  y  si  ctfenlainos'igaaft  néfliero 
dé  tos  cfoe'poifeiren  los  cailos,  lagañas  y  otros  nos  ^  res«rito:ian 
mas  de  400i(H)€^  terecayes,  ^  el  Guaviare  bal  eamanea  en  atan- 
d^nria,  pero  m)  se 6iiiem*flrtran^ lortégaa  lesftas'.t»' bailan  eor$a^dí»la 
boca  del  Gasiquiare,  arriba  de  la  Esmeralda,  y  sobpe  todo^odo^'bi' la- 
guna de  Mandavaca  en  la  qno  se  benefician  20  botijas  anualmente^ 
En  el  randal  de  Atures  abundan  sobre  manera  los  perros  de  agua^ 
aunqne  se  encuentran  también  en  muchos  rios,  pero  en  ninguna 
parte  en  mayor  número  que  en  los  raudales,  á  causa  de  la  facilidad 
que  les  presentan  las  cavernas  y  huecos  de  las  penas  para  poner  en 
salvo  sus  hijuelos. 

En  fin,  en  este  territorio  es  donde  se  encuentran  esas  aguas  ne- 
.gras  tan  notables.  Humbokil  dice  :  «  [«as  aguas  negras  y  blancas 
«  esiámian  estraordinariamente  mezcladas  en  los  bosques  y  en  las 
«  sabanas,  que  no  se  sabe  i  qué  atribuir  la  causa  de  su  color.  Las 
4  de  Atabapo  son  puras,  agradables  al  paladar,  sin  olor  ninguno^ 
«  oscuras  por  reftexion  y  algo  amarillas  por  trasmisión.  Lo  que 
4  prud)a  la  esirema  pureaa  de  las  aguas  |egras  y  su  Umpiezn,  es  su 
« trasparenda  y  la  claridad  con  que  reflejan  la  imagen  de  Ibs  obje- 
4  tos  que  las  rodean.  Los  mas  pequ^os  peses  se  distinguen  á  20  ó 
f  30  pies,  y  muchas  vezes  se  ve  hasta  el  fondo  del  rio^  El  verde  de 
«  la  imagen  reflectada  parece  tener  en  ellas  el  mismo  color  que  el 
«  dbjeto  visto  directamente,  i  Añadiré  que  hai  color  de  café,  ver- 
dosas y  muí  negras,  y  q«e  ea  estas  últimas  las  arenas  son  tan  blan- 
cas como  la  nieve.  Ninpift  zancudo,  mosquito  ó  insecto  semejante 
vive  en  estos  ríos,  y  solo  unos  que  otros  en  las  aguas  verdosas.  Ilai 
poca  pesca  y  ninguna  ave  pescadora  :  tampoco  hai  caimanes  y  sí 
grandes  culebras  de  agua  y  muehas  toninas. 

La  villa  de  Atabapo  será  siemfpre  de  una  grande  importancia  por 


_  «52  —  • 

m  bolla  posioioQ  geográfica  y  sobre  todo  'cuando  los  desiarlos  se 
jyaeblen  y  los  buques  de  vapor  remonten  el  Goaviare.  Las  orillas 
de  esta  rio  están  cubiertas  de  una  tierra  en  estremo  productiva. 
ltí$  ricos  bosques  del  Inírída  y  todos  a^ uellos,  en  in,  que  cubren 
una  inmensa  ditaucla  al  lededor  de  este  iateresante  punta,  concur- 
rirán allí,  que  será  un  gran  mercado,  residencia  de  ricos  propieta- 
rios y  navegaiUes.  Aquí  en  este  cantón  es  también  la  región  de  los 
mas  grandes  raudales  Atufes  y  Maipures,  que  abora  sirTen  de  es- 
torbo al  pequeño  comercio,  pero  á  las  generaciones  que  poblarán 
estos  inmensos  desiertos  les  será  mui  fácil  bacer  desaparecer  los 
obsláculos  que  bol  impiden  el  paso. 

'  Las  parroquias  son  :  S.  Fernando  de  Atabapo,  BaUasar,  Yavita, 
Pimicbin,  Maroa,  S.  Miguel,  Tiriqoin,.  S.  Carlos,  Solano,  Buena- 
Yista,  Santa  Grus,  Quirabuena,  Esmeralda,  Santa  Bárbara,  Mai- 
pujre  y  Atures. 


^ 


tV 


TABLA.  COMPARATIVA  de  la  posidon  astronómica  de  las  eabezeras  de  los 
dad  de  ms  tierras,  terrenos  baldios,  población  absoluu,  relativa,  bombra 
j  tos  frutos  que  se  cultivan  para  la  esportacion. 


1 

1 

s 

1 

i! 

K 

100» 

M 

. 

m 

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10 

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SIOB 

(ISI 

31 

wa 

etfjM^i» 


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mmmmmm 


im*N0MaHK!»Bg 


Mómero 
de  1.  c 

que 

M  craeo 

ImIcüm. 


MMitMOH  Mi  LOV  Q4IIT0inBI. 


Temit 

dala 

pobliwríon 

en    1830. 


1700 

8946 

787 

8806 


1M85 


8.011 
10*1617. 

ii.tao 

4JMi 

sa.07» 


56.431 


sm*i 


PdKracíon 

f«latÍT« 

por 

I.  e» 


9 

•6 
i 

t  V» 


HombrM 
para  las 


NuiD 

4» 


V 


800 
MO 


spHsaaBMk 


960 


l.pOQ 


>t. 


160 


jLla  capiul 
da-ia- 


Ál»  capital 
¿felá     • 


.F¡ 


vn 


>  *  «  * 


V 


31 

66.?/* 


Lf  HMMMIBOI. 

MHaaikai^ 


m  Vf    CMH,  un  tMMO  etfé, 
i   uetoraMwioii. 

.  j.., 

M  *¡i    tMt^  tabaco  x  café. 


196  Ve    Café,  cafia,  tabaco  7 
algodoo.. 


M^f- 


Galht  y  cftfc. 


906  7tf    Gaña,  café  7  cacao. 


^UaMbMH 


«  « 


íi   rntif  f  11    «^fl  Wif  n.ifiii-i    ■■■•■¿i 


Están  tambie»  cmwigMdmt  m  ,\k  ptikiu/kmrím  Indidytedjyandiaim 
Mi.aliiúaMrBftM8ig«i: 

f laniofi  A9ip»tw  «*'»"** •••    t.100 

...       . .  ■  aB*.  <  fiacoA»«w«««*-*.*^.  ..•«».■  8>47v* 

...   M#-iri>aia.....^.. ..«...;;..   #.66» 

Itt.'tUiloira.... .....; 9'.isy 

r<t«    Sao  Fernando . . « lO.Oít'o 


Q6  vHWVn^Pv  ^^IWS 


«  •     •  » 


Total....  41.040 


• 


I 


—  656  r- 
TABLA 

JOt  lA  ALTUBA  OB  SOS  (CIEBOÉ  BS  LA  mOTtirClAl 


CAHTOH  DB  AHGOSTUMÁ. 


Piedra  San  Felipe.  465..,.  delOrínooo. 

eutiea S35 Paraguay 

Toconia. 

.  id. 
,  id. 
.  id. 
.  id. 
.  M. 
.  id. 
.  ftf. 
Carapo. 
.  id. 


Budare MQ. 

Pao fioe 

Terronal 400.. .j 

Viiiiea m» 

6.  Mateo... 885 

Tonoro 1180........ 

Guafqviniaia 8W 

Carapo  del  Para- 

gua itSO id, 

Oria  6  Pápelos. . .  1000. id. 


"  Wdm&fc*.  Varas.      Serranías, 

AIgarpbo,«..v**<t*'  3I0......  Pwagua  y 

TocoiM. 

id. 

id. 


Ghanaro SOCO id. 

Pairatana 700 Paraguay  Gorarupa.........  «00 

Tocona.  Tacuio latfS 


San  Lorenzo £30 

AlTadooea 500 

Garapo   del  Coru- 

mo 660 id. 

Araguatos ,635 id. 

Parida 936 id. 

Caraqueño 6S5 id. 

Topunto 535 id. 

MaUtigre 450 id. 

Botado >35 id. 

Paraguaculo j995 Turagaa 

Arimacare |4t0 id, 

BtBU «...  4080.. .* H, 

Tucusiroba .800 ^id* 

id. 


Blaneo 505. 

Goroba ^ 610. 

Torre 760, 

Tigrera 860. 


id. 
«d. 
id. 
id. 


Vrbani |S70. 

Hwra 1800. 

Tucuragua 9S00. 

Negro 4S00. 


id. 
id, 
id. 
id. 
id. 


OAlfTOS  DI  UPAVA. 


Nombres,  Varas. 

Guaritoco 750.. 

Terrecai 780... 

GaraUl 850... 

Croparemo. . . . . . .  610... 

Perepo 760... 

Oroytujmá 760... 

HapiMTile ( 

Panano 610 

Algarobo 760, 

Mayor! 606 

Trapiche 595 

Guacarapo 630. 

Cbírica 690 

Peluca. 700 


Serranías. 

«...  Upata. 

id. 

id. 

.....  id. 

id. 

id. 

iá, 

...id. 

..  id. 

. .  id. 

..  id, 

..  id. 

..  id. 

Imataca.' 


'.*•  •  •  •  •  «j  •  • 


Nombres.         Varas.     Serranías. 

Guarguabayme . . .  780. Imataca. 

Gfieyse 655. 

Payiapa 800. 

Imauca 85S. 

Nuria 850. 

Cumamo 780. 

Telrepe.... 6Bé. 

Pastora «.«...  700. 

Gayguao 835. 

Aveehiea. :....«..;  940. 

SanlaGriu 710. 

Chaguaramas,....  830. 


id. 

id. 

id. 

, id. 

id. 

id. 

id. 

id, 

id. 

id. 

id. 

Carichapo.v  •••«»••  <^ ^-^ 


CAHTON  DK.CAICAKA. 


Nombres.         Varas» 

Pastora 930... 

Bóchela. f 1380... 

Hilaria 1300... 

Matos 3S35... 

GuchiTcro 600... 


Serranias. 

Guchivero. 
....  id. 

id. 

....  id. 
....  id. 


Nombres.          Varas.      Serranías.. 
Roca  Pintada.....  377..  >..   Cerbatana. 
Auripa  6  Encara- 
mada.  380 id, 

Santa  Fé 400..: id. 

Urbana 285 id. 


—  657  — 


Nombren»  Yar^s.      Serranías. 

Baragiun 9M. Cerbata» 

na. 

Marimarula*......  371 id. 

Mogote  Gocaisa .. .  i80 id. 

Carichana,... sao id, 

CAHTOM  DI 

Nombres.  Varas*      Serranías. 

Santa  Borja 900. . , , . .  Parguara. 

Yachaco 230 id. 

Payara S40 id. 

Vniana 696 Aluref. 

Cachicamo 565 id. 

Tambor 330 id. 

Gallina 575 id. 

Gundaminare 370 id. 

Samariapo 780 id. 

Samisa 800 id. 

Cuadrado 1000 Sipapo. 

Camumini 4347..... id. 

Canavano ,2351 id 

Sipapo 2492 id, 

Ovana 3403 id. 

Jucamari 2700 Mapichi. 

Picos  de  Siqulia . .  t600 id. 

Maripare 750/ id. 


Ifombres.         Yaras.      Serranías. 

Gabtlan. SM GerlMiU- 

iw. 

CerbaUna 1580 id. 

Hanapiare 4306.... id. 


Nombres.  Varas.      SerraniM^ 

Mono.......: 600 Mapichi. 

Mavi^ri 650....,  Guaiafltví^ 

Pajarito S50 id.  .» 

Saquira «86 ÜL     t 

Canapiari ^  iBO^ «!.«*•' 

Guasacavi 800 idí    .» 

Nevía 3300 id.     ' 

Guarental 600 id* 

Cuchamacavi 3Kao«  • . . . .  CucIiíim- 

eavi. 

Ipacana 9S30 N«fia. 

Quioau.. V  9700....  .Marafltiaea/ 

Duida *  3960 id. 

Picacho 9600 id^ 

Maraguaca 3900 «.td. 

Peñón  Maraguaca.  3000 M» 

Zamqro 3800 id.     < 

Yumariquin i950 idr 


TABLA.  DE  LOS  BIOS  US  4''  ÓBDEIf  SE  LA  PBOYINGIA. 


Nombres.        Serranías.      Desagüe. 

Manaviche Parima Orinoco. 

Matacuni Yarínu. -..••...  id. 

Yarima.. id id. 

Yatamú Quiquivílza id. 

Cundaoama. ...... .  id id* 

Arapani «...  id.. id. 

Mahame... id...^ id. 

Paramú Cuaaaba id. 

Guricanama...  Maraguaca <  id* 

Puruniama id «  id. 

Cabirima id id. 

Guapo........  ...  id...........  id» 

Sodomi id id. 

Tamatama id id. 

Tamo id id.* 

Amanama  ........  id*.... id. 

Malaxa...^ ..id id,  • 

Geheta CoiuraB.. ..••••  id. 

Yumariquin id. •.....•  ..i  id. 

GuantfO id...........  id, 

Haturaca.» •••  id id. 

Siripisi id id. 


Nombres.        Serranías.^^    Besagile.', 

Malapiri Uaturan  ,,.,,  Oriaooo.^ 

Gua...... id id. 

Pamoai..... id RionKe- 

Curamttni..,......\id... •.*••..•'  id. 

Casiano......  TapiPtpecó id. 

Caimán. ..t id id. 

Tarira id id. 

Cunueunu  ..••«*••  .id.. id. 

Turvaoa id id. 

Cachetaineri  . . .  Im6ri id. 

Moreje ád id^ 

Guajavaca •  id id» 

Baria id id. 

Ichevfloi MagoaaL id. 

Gonoroehite....  Sabanas id. 


PimicJiin...... . .  jGuáMcaTi.. . < 

,Tomo.^....t  GoiloadeGuK 

\  ...  aiyé 

'Aquio id 

Naquieni •  id •••< 

Memacbi id«..*»..^ 


id* 

id. 
id. 
id. 
id. 


SíKnniai. 


GoantiTl GuaMCtTi id, 

TeiiiU..*«.»^,.jáilH -^^ 

AUcMi JiipMtU.^...  44. 

Panmaoie...  Cuchimaetri id. 

lao lao ki, 

VarlbeDÍ Haribeol.....*.  iá< 

Mapichi Mapichi id, 

Qiic>1iaiiiacaTÍ ni. 

X<y<¥ii...%.'v.^  id, 

laTilwi...^..*.jfii«japú»r  «*•>..  -id. 
1M|>Ú éi. 

Minipiírí       >  JJiBMBapí id. 

I  •  •  •  •  ^Bai^^MiiiHa*  *  w « •  ^w* 

Cuwf» GaneTa id. 

<Q«M«aba -M. 


••••« •»< 


4íuMi|«ii4lia M. 

Pantos... ...... 'Varna.. « id. 

QucJniiBa.-.  .^ .  Yvnari. Id. 

Masa»  . .««•••».  MfalU........  id. 

Maia9oiN«i. •..»•■  D6M|voa. ...<••..  'iid, 

Cunama— « « . « ^^^KmMtmmm, .•.,,  fd. 
OTaBS  ^«r«r«i>.'.-a*«».  YMHan. ••••.• -id* 

Gaayapú Guayapú id, 

Gataniapo Galaniapo iá,' 


Avaet* 


id. 


LjnailW'*«»*»«**  »«  *aB«  »•  0'wm  r»  .  « 

iBarl id 

lflBlÚ«~» •*«•»».•....   id-... •••... 

NIcare id 

Thfttire Tnragua 

TaMM» « ^ 

Tacna.... Id 

Urbaai ,,.  fd 

Pii6VlȣabeHe..*.  id. 

Caoi Id 

Purgvei id 

Pao...... id 

Turapa iá 

Turupa..... iá,,,, 

Curumiitopo. .  Gunacopa- 

.na 

Marípkhe ^ 

Comuriea iá 

I»alabra..... iá 

Guatlpap«..^..r...  id 

Guanipe  .#«,.....  id 

Real<jorMi«......  id 

Arisa.-.  .*.••••  •'.  •  wnragua. ....... 

Güeche Para 

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Tuparo Sabanas. 

Tomo «,.««.  iá»*,,.^ 

MeteU id 

Bdagna id 

pBfKB6BÍ Parantraimit 

AtiMi  4d...... 

Gb(vapurí.«»..« 

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AopHM Parguaia... 

Pargawft, »»,#>.  4d.#.«. 
HorMa»*  •*»••«#•'* .  •ti*«  • » .  ««i^c* « 4da 
Tortai^*  ••«••••  •«•  4d.r«>.>«  ^««9. » «itt. 
ChaiMpa  .^^.  £afÍ«aBa»  «••*•«  id. 
GuadtanM....-CiioMvMPO*«r«.^<  tf. 

Sipao.*.*..* Haloa*.* «.*..*,«  id. 

HUana««»w.>».Nr... ••d.« •««« y...  id. 

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Ganancua  ....  JleimrasL«...*«id. 
BmcttiBi— ■«^■^»-jid— » «»■■■.■»■■  4d. 

Pareta ..w*.  id id. 

TapMana.«««^«....,iid».«« . »..».»«.  .Id. 
ÁTenima  . .  ^«^.«.  «.id.*.  •.  .««^  id. 

YarcaJbai ^..^  id id, 

Ayacwii^.w.......^  id. -..^*  id. 

Vailnt .----.------.  id id. 

Adama « .  MaifMlida  «. ««« .  id. 


S.  José 


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Tapaquire id,,, 

MaiMires Id 

Curlapo id 

Tirgna..... -...%..  id.,.,, 

Orooopialie^-. .-. .-.-.  4d 

ifarvaatavi^^<ir.r.,...  Id...^ 

Cándalas ia.-.*.'.^».'^.  <id .- .  .•«  .-.-.•.  • . 
isiiaiaBiraM#»*.^.F^.  #•  >id ,  ^i^»*,*», , 
ComMai.^*»...'.'^.'.  Id«. «,..««•. 
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Gonyo....-..,...^....  id.^..-.  .i... 

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mnííbix»,      BevTímlas,       l^eéaffie, 
Vio  .r«  ••.•«•  Kfyvyvné* a •  rr  Srinéca. 
AraicttqA^..  SaotraiiM...<...«  id. 
4ii#ciyrfta  ••«<»•••« «  «•««^  •«■•••  •«  i0« 

'Goquenam 'Kunliua M. 

Yaroani id Id. 

Tama ttlnocote id, 

CarayareDetebofa. .  M 'fd, 

'Cunnte..... id ~M. 

Uriman ^  id,.^ ,  id.- 

Gapur6 ••••••• ««tf^  idm »* •  •  •  •  •  •  M. 

«jarapo •■«••••••■-■  lu ••^••••••»  «ci* 

Csupamo UinfMino id. 

Acuniini id id. 

Tama Upata , .  id, 

Pfiludia^.. •'».«.  Id......^...  id. 

Chigaacara Id <...  idí 

Urape U.**.; id. 

Gurí fd id. 

Garatupan «  Id.  .<• .  • id» 

Tunapul ..«.•  itf.  » id. 


Taguachi ti. 

Upata. Id. 

Plaunales td. 

Guanape id. 


m*  •  »*  ,  •-• 


'•'••*▼»••» 


Casacoima id,,.»*.,,,. 

Conorolma id..r«.«.*.. 

Herí id. 

Aguirre id«.... ».«;•• 

Acure 4d^^...... 


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^mnkrtf.     .Srrpfíiaf.      Defagfle. 

•yams, .». .« "iftitaea. . . .  al&sequi- 

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fiatgúio..«^ .,>.«. ^  m td. 

vflpvn ••«••«. t***  9 ..*•••..*•  Id. 
UipA-*  •«•Mi  .<*•«»..  ■  V, ,»,...,, .  id. 

Guarm ^ id, 

GonoOM Id id. 

^'WMHWMBW' »■••••.•*  •    'Wrt-v»'»  •-.-»'V««    Su. 

Tocuyo...... V...'.  Id *..  id. 

GDarampin W id* 

Raranun. «v..*^.**.  Id» ••«•«•#••  id. 
Paragnayaira  *^...  Id.,..>^«^.  id. 


.  Sürínama td* . ..  »«.•..  id 

Dos  Brazos '«. -<d«....^.«-. .  Id. 

Aratore id.,, id, 

Amacuro «.  "Id». •«»«•«■••  id, 

Birima...  id<. «..•»...  td. 

>wiiaiiBa».i. .•>. •«  ,M  id. •«•.». »  ala  Biav», 

Moroco.  ...«<••...  id Id. 

Yuruaii. .  ,.^.^,*.  iéL^.^  él  Vsegu^ 

bo. 
OronAla^.  .»••»..•  Id»  •■••••»•»«  •  id, 

Garicbapo id id. 

CtMianOh^ ^  id,.», id, 

Gnanvre. id id. 


aiacapa. . *^ . .« •  é« .  ■0...*».«.y«  tu* 
Marawacan».  »< » «^  •  Id.  ••••*•«.••  4d, 

Tupurá. Id.... id. 

Atecblca Uaa^ama. ......  id. 

Hinnic......  JtioDcol^ Id. 

Gamuran......^.,..  Id id, 

Gamarate ,..  Id id, 

Paliiarup4 ..*«.•..  id. ..a......  id» 

QiLfirtnafa. . .v. .»..  id.^..... »-mi.  id, 

uTapO  .•«v*.*»**^  .  fu ...»«..••.  ttt. 

MauBa  »«..««.»•..•.  as. .  • »« . .  t « •  tu. 

vvUBBImí.  •■•.  ...  m0.  Ht. ......  c*<.   tcl. 

Yenano... ••..•••  Id». .««.....  Id. 

GttiripuL.....  Arlinagua id, 

Tuoioo6«.^.t.«..  Id Id. 

0unF4Cbi« «a •••••«.  id id, 

ünarui ,.»..  Id id. 

Gurustri.... Id id, 

Taseoai .«.«•»•.«..  id «  id, 

Gofltciira..»«.«.r«.  id id, 

COCCllBQO. ».«••»•  •.  V  id.  .,,.,.,.*  td, 

Guariini.r.»« id Id. 

Arayarú...^...  Aomlma id. 

Gaco id Id. 

üiiya  ..A.* %A •••*•• .  IB. «••••»•*•  •  tu. 

Rapa PacaraíBUu. id. 

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Bouro...^...  •••.  Id.»«»« Id. 

SJparoni  ••^. •...«■  io. ..••....•  *fa> 

Maurava Id Id. 

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Primarios.Secuiidariot. 


Tardaríoa. 


—  641  — 


TABLA  comparativa  de  las  capitales 

de  provincia  para  conocer  su 

población,  la  época  de  su- ||ip]|^f||  ^y  la  de  su  erección  en  pro- 

vincia. 

» 

NOMBRE. 

POVnuAvHuEV» 

m 

•  .  •    •    ■»  > 

• 

DB  Lie  fvvmk^mt, 

1 

|«  L/^  9mMf«||v. 

Garicai.s    •  *.    •    «  •; 

•ift:OW 

i  ' 

• 

■    *Hws   -^ 

Yalencii..' 

16.000 

1555 

'11»4   '  ' 

Barquisimeto.  «    .    ,    . 

4$«OpO 

^55S 

.*fw 

Coro.  «  -*  i» '  0   ^   »    ^ 

é>im 

llifiS 

*      4915   .>< 

'•HAMáaiH»   .;.•.? 

'  «4.000 

«^1            J 

W78 

Trujillo.  .    .  ..,  ^   .    ,^ 

4.000       . 

1568           j 

.     4*tl     . 

Herida    .    •    .    .  w  • 

^m 

11658 

:*ftil 

Barfnas.  .....    J 

%.im 

<i576 

«787 

Achaguas.    .... 

d.ooo 

1774 

I83S 

Barcelppa    , ,  .    ,  ^   ^ 

6.000 

1.657 

1811 

CumMiA.;,    ,  ^   ♦   >    ., 

•8,.aoo 

Am    . 

1531 

i 

«MÉfgiMta    t   .  *.  ^    .i 

^,^69         < 

403Í 

1811 

Guayana. .,..,,     ^ 

,    .   4.00P 

157^ 

1768 

■,  ,  .,  • 

j     {    .  \-y 


Jt 


•I 


FIN. 


P.  GEOti. 


41 


ERRATAS. 


Página  »,  Unea  nr,  En  logar  da  II  fiM,  UtaM  4^ 
M.     It,    M.     SO,        id.        &  Tomé,  fóa#«  Smlo  Tomii*  ^ 

W.     »»  W.      «t       tó.        44e,tóM«l»,       .  .., *., 

itf.     88,    id.     18,        M.       Uriunle,  l^i»e  QriiMnie. 

Id.     -«I,   M.      8,       Id.        AragoftCnnianeM,  ¿^o^tfártgiMU 

« 

Id.  34,  id,     IS,        Id.        Aragua,  léase  Aragna  Guinaiieia.           , 

id.  84,  ML;     88,        Id.       'W^^Sy  léase  W.9^ 

id.  198,  Id.     18,'*     9d.        mafabasUii^oM. mar  baila. 

id.  148,  Bn  la  Unea  é0l  eacao  dlee  18  fanegadaí^  Moae  18  fimegat. 

id.    148,   Vq  la  Hnei^ del  ubaco  die» «  filaiiUs  dan  jn^dif  libca,  imaiJto 
una  libra. 

id. '  SS9,  línea  14,  En  lugar  d«  Tvniaearaque ,  léase  tmmómqiae., 

id, '  980,    id.     88,         id.       ,  286.000,  léase  889.008. 

id.  T  900,    id.     96,       .id.       .    99.M8^  l^oi»    40.080. .... 

id.     |!fO,    id.      n,   ,..^,       ,    86.199,  lda««    «1.871. 

id^    950,    id.     90»        id.       .    8.44^  léase     T.800. 

id.   189^    Bn  la  población  do  Oarácaí ,  en  lugar  de  <8.81S,  fiase  48.548. 

Bn  loa  aaéiat^  do  Garáeas ,  en  logar  de  8.000,  Maae  8.781. 

Bn  ol  total  de  la  ^ladon  de  la  proiIncU,  ea  logar  do  140.106, 
ié<r9é  919.888. 

Btt  el  total  de  esclavis,  en  logar  de  844M7,  léase  84.490. 

id.    406,    En  los  esdaTos  de  Valencia,  en  lugar  de  1.960,  légi^f^  il^m^    . .  „. 
En  el  total  de  esclayos  de  la  proTÍncla,  en  lugar  de  4.480,  léase 
4.084. 

id.    455»  ¿fR«a    8,  Bn  logar  de  primer  6rdon,  léase  aegundo  ¿rdon. 

id.    468,    id.     17,        iJ.        oálido  7  seco,  léase  cálido  j  aano. 

id.    539,    id.     10,        id.        %9Ut  léase  im. 


/ 


ittsssssm 


^^ 


^ecs 


«^ 


índice. 


<^m* 


geografía  física, 

Sitaacion •  1 

Fronteras  naturales id. 

lámites  polfticos ; 3 

DimensioB  7  superOcie, 4 

Estado  de  los.  diferanies  terrenos . .  5 

llares  .»»«•.»;<.'..  p*4...v......i  6 

>a»tf0f.. .,..i,...« .¿  7 

Estrechos 8 

Cabos,.. -r»*«k*«».^«;.i,.,V« >'  M. 

Penínsulas »»•....•«,....;  9< 

sosias  **•••  ...... ..'iif.aiá». •.••••  t  *w< ' 

Estado  de  los  puertos  |  ensenadas. •  ii ; 

Islas. * .^,.  id. 

Montanas... «««..««.  •*.... i2 

Tabla  dQ  los  cerros  mas  elevados. .  16 

Mesas 18 

Metéoros 90 

Hoyas  hidrof ráflcas  j  rios  princi- 
pales .,,,.,..... id. 

Hoya  del  Orinoco ii 

id,  delCuyuni. 33 

id.,  fiel  Rio-Negro id, 

id.  de Maracaíbo. 35 

id..  dQ  Valencia 34 

id.  dQ  Cariaco as 

id.,  dq  P^rla id. 

Yertiente  á  la  mar *.  96 

Tabla  de  las  hoyas  h idrográficas. ...  ^ 

id,  de  los  rios  de  Venezuela. ....  88 

Lagos  y  lagunas .., 40 

Climas.... 41 

.Estaciones  y  Tientos , .  •  43 

Aspecto  físico  del  país. 45 

Zona  a^ricultora.. 49 

Cuadro  de  los  terrenos  cultivados  y 

sin  cultivar 64 

Cuadro,  de  las  diferentes  clase»  de^ 

terreno  de  la  zona  agricoltora. ...  id. 


Eona  de  los  paifbs. . .  u* . .iV. . ..r^^t 

Cuadro  tfe  las  eütenston  délfes  salMh 

'  ñas.. .V 4 .... . •••.•• '• . 

Zona  dertos  bOiq«es.v....-.v. ...;.. 

Cuadro  tle -fara  dtfereiMes  elases  de 

los  terrenos  de  la  zona  de  los  bos^ 

ques...... 

Tabla  de  las  temperaturas  (fe  las  ckk- 

dades  y  villas  que  están  en  la  cosiá 
del  mar. • ; ^ .' 

Otra  de  Tas  que  estin  en  medio  óm 
la  serranía 

OIra  que  está  eh  la  elltrádií  y  éá 
medio'ée  los  litaos.....: .'• 

Otra  d»li  temperatura  de  los  páft« 

tll«t:..(<.«..*.*«.».i«i..«.¿...iW. 

Otra  4e  laJetiiMnutnw  de  las  saba- 
nas...« n •• 

Otra  de  la»flelfM. k 

Oiradeloacerju)a.n..«. 

Otra  4e  las  aguas  de  los  rios  y  lagu- 
nas*  .......f... 

Otra  de  las  aguas «iel  mar.. « 

Yegetalesi...* .« i. 

id.  ^  del  nivel  del  mar  á  1200 

varas 

id*     de  900  49000  varas  de  al- 

.  .        tara.. 

id,     despoásaao     i<i....  .' 

id..     dQ400Á{U30.      id.i,.,. 

Planta*  que  sirven  de  base  á  la  agri^* 

cultura  venezolana..  ;.*....•'.... 

.PUintAS.que  sirvan  para  el  aumento 

de  los  aBimales  y  otros  esos. 

Maderas.aplic^ble^.á  diversos  usos.. 
Pantas  qye  se  cultivan  ««  Vener 

^ueU, ,,.... ...<»..«...«« 

CacaPi  .S.U  cultive  .....*.  j.  « •  .i*>* . .. 
PlaianQy     id...*.»**  •««•••  ••>*...«• 


73 
1S 


81 

83 
83 
84 


9r 


89 

90 

id. 


Maiz, 


id. 


101 
106 
113 
'   i 
113 

117 

118 

j 

111 
id. 
494 
197 


—  644  — 


•üt  ^ 


M. 

Papú,        id. 

Coco,         id. 

Tabaco,     id 

Algodón ,    id 

Gafé,  id 

€aña  de  Azúcar,  su  cuIUyo  . 

Añil,  ID  CUllÍTO 

Trigo,        id 

^Irasj^Iantas,  legumliff^,^^,» 

TabU|,f|g|ivMirf^HrA4e^,»|j|iiiV^ 

-  cuIUvo  T  cosecha  ceoeral , 

dinerales  ..^•. ......  t  •.»<•  ».5  ^  > ,  .,< » •  ^  • 

id*     ¿rú^u  f)e  l^^s.^^ij^uip^- 

id,    <j^Ío8.(^j:nf\;grai|*. 

id.   deloj|ppi^)ipV>#** 

id.. .  áe  los  xaedoros  • . . 

id.    á%  iúB  edeptailos. . 

id.  delospacbídamua 

M,   de  los  rttiBéBanlM. 

M.  dekngeiétftÉi.o. 

ADiiiitliiiCM«MpedQ0  dí9Mé»ae«L. 

AlTisioa  dAUuipfibljtcioiiei.porjiif 

ocut>arifttiHi«  «■«>>.«>.■..  . 

id. —  4M»aittalijneiüof  •...•« 

Ustadistica  geaecal  d£ÍM  aoánalee 

'"domósücos •««••.... «, 

Cria  4f^4aiiado  vmuao  » 

•^d.  dft  Uo«r  ^  £atuuu)0  «^ 

Jd.  da  cerda*  ^.••. 

.dtf.  dfi.  caballos  7  JouUs 

id.  dBiws .^i.y 

Jhiadra  da  los  imanado»,  .laeuno,  ca- 
•^■NMO  de  «oda  i$  sits  prdy 


i4' 
id. 

id. 

id. 
id. 


131 
IS3 

155 

140 
143 
144 

^* 

4^ 

Id' 

S«8' 
462= 
463 
466 
J68 

id.\ 
MM' 


472 

km; 

id. 
4«0 
4il 
18S 

i 


f''í 


•  t 


íid.  ..der  los  efeialloe,  ñlos  ^ 

buiros '. 

Bsladb  ^eoih|iawnivo  del  {Mrodaeio 

>»         delOOaeabMatdtfctli^ldf, 

■Hilift  y  4MIT08. . . . ;.  k  V  .*; . 

" ' '  id.  .  d&  g«Ma«o  vaeiMo,  oJAruno 

'•  '         ydeetA-dá -.. 

Ares  de  rapifia  diurnas: ....'/.;.;.' 
'^üd.      ■    id.  •  noo(HriKis.i.««4.'.' 
•^\ld.    évdeo  de  los  «fonioiié».  < . . . . 
'lid.-      id.  •  d6>toa  tgepaddwes.  «k. 


184> 
186 

487 

188 

4^, 

A9i 

4db 


"Mi»'  98* 

id.       id.  de  los  zancudos 

id.       id.  de  los  acuáticos 

Ares  ^mésticas 

^y»'f 

id.    serle  de  oseosos 

id.     id.  de  cartilaginosos 

Reptiles  orden  de  las  tortugas. 

id.       id.    óe  los  lagartos 

Moluscos 

Insectos  orden  de  les  'coleópteros. . 

id.       •  id:    de  -los  oropteros  . . . 

id.  •  '  idi   de4o8«evroptero6.. 

id.  •  •  id.  de  loe  himenopte- 
ros 

id.        id*  4e  4os  lepidópteros. 

id,    •    id.   4le4os-béfl»pter<o6.;. 

id.       •  id,   de  los  Fhipipteros . . 

id.        id.    de  los  cUptoros 

id:        id,   de  los  -papásUos .... 

id,   ■    id,   de-los.miriapodea . . 
*   id.        4d.    d« jaranas 

id....  .  id. .  de  Jos- crustáceos.. . 

id,       .id.  delos«oélidos 

id.        id.   de  tos  zoófilos ..... 

GEOGRAFÍA  POLÍTICA, 

Estention  y  diMaeostonet  aMlgiMs.. 

•íóblacioB ...........  k ».  X  .• 

Estado  4e  la  poblaoion 

id.. .  4M)aiparetiva  con  los  Indios.. 

FebUeioB  -general  de  América 

Etnografía  de  los  naturales 

Kaciones  estranjeras  introducidas. . 

Seligion  antigua  y  -aetuil -.  .• 

4&obíeroo-aRtiguo    -id.».. 

Tribus  indígenas  ^e  viren  en  las 

selvas-de  la  Goayana.  I ; 

AdmÍRittraeiOfl  política 

Estado  de  la  división  -peUliea,  sena- 

^  dores  y^  representantes 

Administraeionile  ^acteniía 

Estado  de-ht  •intendencia  de  Gai^- 


900 

903 
906 
908 
id. 
919 
944 
915 
918 
929 
9»i 


ié. 

406 


id. 


cas- 


vi- f 


u< 


.V- 


M 


idl  '^  ios  itafEíeé'  amíguoit  de 
•  •  •  renta-.' .•.■.•.-.•.-. .  .•.-, ........ 


1240 
943 
944 

146 
id. 
BK8 
968 
«Í64 

9fO 

9T7 

289 

985 

984 
985 


administración  dejviaUcií^t, .*,..*  290 

^9tadode  laorganizaci.^jD  judú^l.,  294 

id,    de  los  deliips  y  pen^*.., , ...  295 

iQrganizacioQ  ecl^i^jlc^. ,.,.,,..  i  297 


•  •••  *,• 


300 


w. 


id. 


id.  militar..^f«,.^ 

Defen^A4e  .Uw  puertos»., , . , ,  i 
.^se'mbarcp  «obre  1^  «mUis*  ...... 

«#QrtiQc90laR«g  ««¡(i4«l<)»  de  l«s  «08*- 

ítag... .,,..,.,... .,...,..., 605 

Defensa  del  pais 507 

Cuadro  de  la  milicia  nacional 3i  i 

rpducAc.i«ir  páJ^ti^a. , .  / «   si2 

QiacIrQ  4e  l9S  e^spuejas  y  iuveniuid..    M6 

»Ck>m^X£Ío... ..>.,.,.. 316 

-Aoticla  .comparativa  dje  la.e8porta«* 

cioo.eD  iSiOy  i837 «6 

€jDmparacion  del  jnoyimiento  mer* 

.     .cantil de  1830a  1839....    317 
xle  los.precios  úe  ios  piin- 

.  clpal£s.actículos S97 

.  del  .movimieiilo  meroaii- 
4ii  0n  iQs  ijlimos  años  ...    628 
.fistado  del.müTímientodel  comérm- 
elo y. sus  prodoetos  de  4888 

á4830. 550 

IIOYkiúenio.m6r€ai>til  de  las  adua- 
•  -    ■  oaa  Y  SB8  producios  de 

4858ái838 331 

Estad»  de  la  naregacion  en  el  co- 

mevoio  íHterior. 332 

Industria 353 

.&tado  de  ios  individuos  ocupados 

en  las  artes ,  empleos  ele . . .    337 

id.    eú  la  agricultura 338 

id.    en  la  cria ^.,,    9^19 

.  id.    del  valor  total  de  la  indu^- 
tria  venezolana  por  prqxif^T 

cia 

{^súmen  de  los  producios  de  la  ijgir 
j^duslrias 

^{istos  de  vestuarios  de  los  ven^^To^r 
zolauog.,,,,...,..... ^,,^, 

Consumo  de  la  comida  j  otros  ^- 

tos  de  los  venezolauos. $44 

^ylado  de  los  terrenos  baldíos  ^,  .«  344 

Cíiadro  de  la  riqueza  n^af Ja. .  ^» . . ,  348 

, .  id.  id.  pfiípjuaij^a*,..,  349 


GEOGRAFÍA  m  JM  «WWNUAS. 


340 


M 


itf. 


.     .  PROVINCIA.  DB  q^|l4£^. 

■    ■   ■         • 

ükuacioo,  .eatensioi  f  pdblaeíoÉ . . ,  353 

vUniites  y  confioei.. .  ^. .......... ,.  id. 

Cesta iiel.inac.. «.....« 354 

Islas.. •.....•..^« ^,.  SK5 

Montanas. ,,,,  357 

lUos, 359 

tagos  y  lagunas.... «^o 

Clima , 362 

Estaoioii  de  invierno 363 

División  territorial  y  produciones. .  iíj. 

Cantón  de  Caracas 3^4 

id.    de  la  Guaira 371 

id.    de  Petare 573 

id.    de  Guarénas- . . .'.'. 3X3 

id.    de  Cancagua ..'....  i^. 

id.    de  Rio  Chico 574 

id.    de  Santa  Lucía ;..  id. 

id.    deOcumare id. 

id.    éelaYtctéria...; 5T5 

id    deTurmero ;.• 876 

id.    deMaraeat id, 

id.    de-Cura ; 377 

id.    de  San  Sebastian 378 

id.    deOrituco.- 387 

id.    de  Gbaguaramas 380 

id.    de  Calabozo '  id. 

Tabla  de  las  posiciones,  terrenos, 
eselaves  7  pebladon  de  cada 

cantón 385 

id.    de  1^  altura ;..  384 

id.    de  los  rios  de  4°  orden id. 

PROVINCIA  DE  GABAlSOBO.. 

giluacion,  eslension  y  )?p|iU«oii^,.  j^ 

J#|mites  y  confines ,.,«.,.  4, ».  id. 

Cpstas  del  mar  r ..... . ..... . ... ...... .  ♦,  .W 

Was W8 

Ríos ^ 

l-ígos  y  lagunas. ,.  3^ 

Ciima t . .  V  .•  •  5^ 

£f tacion  de  invierna. . « . . . ^  .^ . ,  ^ .,.  id, 

DivisÍQAl«/;rit(»rJ¿miK)dlK¥M»Qft*^  ^OS 


\1 


—  6H  — 


Cantón  de  Valeaeia t 997 

id,   de  Puerto €abdlo 400^ 

id,   deOcumare 40f 

id.    deNtrgua 403 

id.    deHoDUlban id. 

.     id.  defi.Cárloi ^.^ 4M 

td.  delPao.^. /....é..  405 

Tabla  délas  posicionea,  terrenee, 
eadayos,  y  población  de  cada 

cantón 406 

id,   de  las  alturas  de  lo»  cerros. .  406 

' Situación,  estension  y  población. . .  409  ¡ 

Lfmiles  7  confines.  1 id. 

Costas  del  ñaar. 440 

MootaSas 411 

Kios..:, 4ia 

'Lagunas id. 

Climas .,., 41S 

Estación  de  invierno id, 

DíTision  territorial  j  producioMS..  id. 

Comercio......  ...••..;.. ..-.«....  414 

Cantón  de  Barquisimeto id, 

id.    deQuíbor 418 

id,    del  Tocayo id. 

id.    de  Garora 420 

id.    de  S.  Felipe 421 

id,    deTaritagua. id. 

Tabla  de  las  posiciones,  terrenos, 

oscUtos  y  población.. ..........  425 

Tabla  de  la  altura  de  los  cerros. ...  426 

id.  de  los  rips  de  4»  órdea. id, 

raoTiNciÁ  DB  cono. 

Situación,  estension  y  población...  4dnr 

Límites  y  confines. :..;....  id- 

'Costas  del  mar.. -..-..-. 426 

Golfos...... ; 430 

Isias; : ; .  -. .... . .... ..... . .'.' '.'.  id. 

Montañas. ;..,... 451 

Ríos;... : 432 

Lagunas ...,..* id. 

Clima...  ¿ ; ;........  433 

Sstacion  de  invierno id. 

División  territorial  j  produciones . .  434 

C¡omer«io.*«»%«»«^.b»k»».b id.' 


Cantoa  d6  Coro;. ;;.....'*... ;.!»..  4U 

id,   dePnragnaná 436 

id.   deS.  Luis 4S» 

id.   de^Cmaarebo 440 

id,-  de  Costa  arriba 441 

id,   deCftsIgna 44B 

Tabla  de  las  posiciones,  esclavos , 

terrenos  y  población.. 448 

Tabla  de  It  altura  de  hM  eertoi» ...  '446 

id,  de  les  rios  de  4*^fden¿ id. 

>  <  c 

PROYIHCIA  m  MJÜ(AC4I90. .  ■        i 

Sltuaoion,  es  tensión  y  población ...  44T 

Lfroites  y  confines. ,', '.  id. 

G«)sUsdel  mar 4l9 

Golfea -.'. éo 

lelas i V.  451 

Montañas.........  ...i ;¿...»  4S3 

Ríos ...i 454 

Lagos  y  lagunas.... • ;......<  455 

Gíim^.,.....*^,....i..:,.. 465 

Estación  de  invIeriMj. .» •  466 

División  territorial  y  pfodnotones. .  467 

Comereii^* <....'*«• «..^...i.v.  ' id. 

Canm  de  Mara^ilb». %^^*..  466 

id.,  de  Alta  gracia. r. .». .. . «r. . .  ^i 

id.   de  PepMái......«..4w.«.<  «n 

id.    deGibraltar id. 

id.   delZnHa 473 

Tabla  de  las  posiciones «  esciavoa, 

terrenos  y  población *,,.»**•  4p4 

Tabla.de  la  aUura  de  los  cerros.*...  ^6 

id.  de  los  rios  de  4.o  órdei) id. 

PKOTINCIA.  DB  T&UJILLO. 

Situación,  estensitfn  y  pobladota. . .  477 

Límites  y  confines ....« í  id. 

Montañas 478 

Rios .;.,.•...'..,..  479 

Lagunas ^ ;.'.. ;  •  id. 

Clima;; ;..;:.:;..;. ;;:;.;;:; 460 

Estación  de  invierno.;...;;.;...^,  id. 

División  territorial  y  proifitciones^ .  id. 

Comercio * 481 

Cantón  de  Tnijfllo id. 

id.    deBocond.. 464 

id.-  (toCaractae 465 

id.    de  Escuqoe..... ...'id. 


—  64T  — 


TkblAde  IM  póBicionei,  eidaTOi, 

*   terreno!  7  población 488 

'Tlblt  de  Us  attUras  de  lof  cerroi. . .  400 

'  Id.  de  l08  riOfi  de  4.o  6rden. . .  ^ ,  Id. 

PROTIKCIA  DB  BEÍHIDA. 

Situación,  estension  y  población. . .  491 

IknitM  y  confines..* ••  id, 

MonUñas 403 

Ríos 49S 

Lagunas 494 

Qima.. ; «, 49k| 

Estación  de  invierno. ,  •  • » id,\ 

División  territorial  y  producionss..  496  < 

.Comercio Id. 

Cantón  de  Herida 497 

id,    de  Mucuchíes 499 

id.    delEgido 800 

.    id.    de  Bailadores..... 901 

,     id,    delaGrita ., «0i 

id.    de  San  Grisl6baL 805 

id,    de  San  Antonio id. 

Tabla  de  las  posiciones ,  escla?Qs , 

terrenos  y  población. ...«..*...«  504 

;  Tabla  de  la  altura  de  los  cerras. ...  806 

.  id,  de  los  rios  de4.o  6rden«....  id, 

PROTIHGU  PB  .BABÍRAS. 

Situación,  estension  y  población. . .  SOS 

límites  y  confines.,. id, 

Hontañss .....' 609 

Ríos.....; id. 

Lagunas. - 61 0 

Clima id. 

.Estación  de  iBTlerae*.. •««... id. 

División  territorial 813 

Comercio id. 

Cantón  de  Barinas 818 

id.   de  Obispo 816 

id,    de  Guanaro « íd. 

id.    de  Ospino 817 

id.    de  Aranre 818 

id,    de  Pedraza id. 

id,    de  Nutrias 819 

id.    de  Guanarito 890 

Tabla  de  las  posiciones,  esclavos, 

terrenos  y  población 83S 


Tabla  de  la  altara  do  loi  eerrot. . » • 
id.  de  loft  rios  de  4.o  6rden id, 

PHOTIHCIA.  DB  APUEB. 

Situación,  estension  y  población . .  •  838 

Limites  y  confines*. •••.... id. 

tfontaftas ••  896 

Ríos \ id. 

Lagunas 537 

Clima ..: 1.:...  529 

Estación  de  invierno 550 

División  territorial  y  producionos.  531 

Comercio id. 

Cantón  de  Achaguss «..^  852 

id,    de  San  Fernando;. ...  .^ 8CS 

id.    de  Mantecal 534 

id,    de  Guasdualito id. 

Tabla  de  las  posiciones ,  esclavos ,  , 

terrenos  y  población 836 

Tabla  de  los  ríos  de  4.°  orden. » . ••  898 

9B0VIBGIA  DB  BABCBLWXA. 

Situación,  estension  y  población...  830 

Limites  y  confines ...«.  id. 

Costas  del  mar •  540 

Islas.. 843 

Montañas 543 

Mesas 844 

Ríos 547 

Lagunas».» '.. 848 

Clima id. 

Estación  cA  invierno ié,. 

División  territorial  y  produciones. .  849 

Comercio* « ....^. <-....  id. 

Cantón  de  Barcelona 850 

id.    dePfritn 583 

id.    de  Onoto*^.. 885 

id,   de  Aragua ¥í. 

id,    deSanMateo id. 

id,    deSan  Diego 684 

id.   del  Pao id. 

id.    de  Soledad 888 

Tabla  de  las  posiciones,  esclavos, 

terrenos  y  población 8(f6 

Tabla  de  las  aUoras  de  los  cerros. .  858 

id.  de  los  ríos  de  4.o  orden id. 


StlUBClon,  estension  y  poblatlon... 

Límites  y  confínes 

Costas  del;  ms^..  «J.  ...^•^.  *.«« .... 

Golfos , , 

Islas 

llontañas '.','.'. 

^ios 

Xagnnás '....'...,...  J 

Clima. .' ...  1 ..'.'..'.... .' 

estación  dé  invierno . ....'.',.'.  ^ ... . 

piúsion  territorial. 

Comercio 

Cantón  de  Cumanl 

id,    'de  Xüumanacoa .*«••••• 

id,    de  Cariaco • 

id.'  dé  Carúpano 

id,    de  Rio-Caribe 

Id.    deGüiria 

Id,    de  Aragua......... 

id,   de Maturin 

id.    de  los  Caños 

Tabla  de  «liS  poelciofies ,  tftdarés, 

terrenos  y  población.. ^, 

ITabla  de  la  altura  de  los  cerros. . . . 
id.   dé  los  rios  de  4.o  orden 

PHOyiNCXl  VB  VABGiRirA. 

situación,  e&tension  y. población... 

dlimileay  confines » 

Costas  del  .mar .»». ..; . . . 

Jilas i 

Jlbntañas .^.  .....:.;*...»• . 

JÜlOS  ..  vf  4  .  V»  <•*.«•;•«  .  V.  •  *  *<*'■*'»  A  f*  *'* 


Cuma 


seo 

id. 

S6i, 

564 

568 

569 

571 

57^ 

574 

id. 

575 

id. 

576 

579 

580 

581 

582 

id. 

583 

584 

585 

586 

588 

id. 


m 

id. 
id. 
595 

K95 


••*vv »•.  tm 

Jgftacion  de  invierao »...,.».  id. 

(^gmefcío.'. ....,.,.  1^ 

^^nlon  de  la  AsuucIqu. . . , , . .  id. 

idV   del  Norte 600 

Tabla  de  las  posiciones ,  esclavos , 

•  terrenos  y  población 603 

TtbU  do  )aa  aHuias  4a  los  ^TTm»  •  OM 

.T«bU .de ;p5  áQ&  dQ  4^ M«B. v. «..  id, 

PROVINCIA  -DB  «triTAirA. 

lniua«ieBi  e»t«itsioii  y  pobiabion ...  605 

•tímiies  7  confines 606 

Costas  del  mar 608 

'Islas. 609 

IVontañas. 610 

Ríos 614 

Lagunas.. 616 

Clima : !'  617 

i&Aaeion  de  tüVierno 618 

División  territorial 620 

Comercio ; id. 

Cantón  de  Angoíitura . : 621 

id.    de  Piacoa 627 

id.    de  Vpata id. 

id.    úe  Calcara. 628 

id.    de  Rio-Negro 630 

Tabla  dé'  tas  posiciones ,  esclavos , 

terrenos  y  pol^lacipn. •  AM 

"l^^bla  de  La  altura  de  los  «erros. . . .  636 

^.  de  los  rios  de  4.0  orden •  6Wr 

id.  de  ios  caños  del  delta  del  Ori- 

,        . .  ..... 

ñoco..., .•  #40 

id,  de  la  f undacion.y  ppl}laciQn da 

i     .  ..U^.C9PÍUleMleiptroviiii6ia.  «N 


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